Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
"Para que el proletariado apareciera dotado un retomo a mecanismos similares. Para que
de un cuerpo y una sexualidad, para que su se reconozca la necesidad de la educación
salud, su sexo y su reproducción se convirtie- sexual de forma amplia, no sólo en nuestro
sen en problema, se necesitaban conflictos (en país, han hecho falta una serie de aconteci-
particular a propósito del espacio urbano: mientos que podrían considerarse continuidad
cohabitación, proximidad, contaminación, epi- de los anteriores.
demias -como el cólera en 1832- o aun prosti- Nuevos conflictos (el sida como pande-
tución y enfermedades venéreas); fueron nece- mi a, la prostitución, los conflictos medioam -
sarias urgencias económicas (desarrollo de la bientales, étnicos y multiculturales), urgen-
industria pesada con la necesidad de una mano cias económicas (la imponente reconversión
de obra estable y competente, obl igación de de las economías socialistas, la adecuación del
controlar el flujo de población y de lograr sistema educativo al sistema de producción
regulaciones demográficas); fue finalmente capitalista, el control de la población en el ter-
necesaria la erección de toda una tecnología cer mundo y la promoción de la maternidad en
de control que permitiese mantener bajo vigi- el primero) y tecnologías de control (una
lancia ese cuerpo y esa sexualidad que al fin gran profusión de programas educativos y
se le reconocía (la escuela, la política habita- materiales curriculares sobre educación sexual
cional, la higiene pública, las instituciones de básicamente "preventivos" cuya función anali-
socorro y seguro, la medicalización general de zaremos más adelante).
las poblaciones -en suma, todo un aparato
administrativo y técnico permitió llevar a la
clase explotada, sin peligro, el dispositivo de 2, Los modelos de sexualidad y educa-
sexualidad; ya no se corría el riesgo de que el ción sexual de las clases opresoras
mismo desempeñara un papel de afirmación
de clase frente a la burguesía; seguía siendo el A lo largo de estos tres siglos -con prece-
instrumento de la hegemonía de esta última). dentes históricos que no comentaremos aquí-
De allí, sin duda, las reticencias del proletaria- se han perfilado varios modelos de sexuali-
do a aceptar ese dispositivo; de allí su tenden- dad y educación sexual que guardan relación
cia a decir que toda esa sexualidad es un asun- entre sí.
to burgués que no le concierne" (Foucault, "No hay una estrategia única, global, váli-
1978,pp. 153- 154) da para toda la sociedad y enfocada de manera
A lo largo de todo el siglo XX, se han pro- uniforme sobre todas las manifestaciones del
ducido importantes avances en el reconoci- sexo: por ejemplo. la idea de que a menudo se
miento de la educación sexual. Desde las rei- ha buscado por diferentes medios reducir todo
vindicaciones suecas a principios de siglo, o la el sexo a su función reproductora, a su forma
difusión de los programas en la década de los heterosexual y adulta y a su legitimidad matri-
sesenta con la inclusión de la educación sexual monial, no da razón. sin duda, de los múltiples
en el curriculum como materia obligatoria, objetivos buscados, de los múltiples medios
hasta la gran expansión que estamos viviendo empleados en las políticas sexuales que con-
en los noventa, pero ¿podemos interpretar cernieron a ambos sexos, a las diferentes eda-
estos logros como una prueba de transforma- des y las diversas clases sociales" (Foucault,
ción social o estamos ante una reproducción - 1978, p.126)
haciendo salvedad de las diferencias cualitati- En consecuencia hemos de conocer los
vas- de las características que se manifestaron diferentes modelos de sexualidad y educación
en la centuria precedente? sexual como fonnas de representación social
Un siglo después, las reflexiones de que inciden en la práctica educativa y las con-
Foucault cobran una vigencia insospechada, es secuencias que cada uno de ellos implica para
CURRICULUM, PODER Y SABER 85
la vida cotidiana y nuestra construcción de] dad no resulta suficiente la crítica generali-
concepto de sexualidad. zada a la defensa de la genitalidad, la hete-
Nuestra cultura ha elaborado una serie de rosexualidad o la reproducción, porque los
modelos de sexualidad que explican parcial- mecanismos utilizados y la definición de los
mente la realidad, así como unos modelos de mismos -como puede observarse en la figura-
educación sexual coherentes con los anteriores no se centran ya exclusivamente en estos
que intentan preservar esa forma de represen- aspectos.
tar la realidad. En segundo lugar se presenta la sexualidad
En cuanto a la sexualidad hemos de hablar dependiendo de los instintos biológicos al
de los modelos judeocristiano, burgués y libe- margen de los condicionantes sociales y cultu-
ral capitalista. rales, impidiendo la comprensión del carácter
En primer lugar, por la complejidad y eminentemente social. "Se impide captar la
diversidad de estos modelos, en la actuali- intencionalidad humana y la naturaleza social
de los conflictos que se presentan en la medi- o el vacío afectivo producido por la ausencia
da en que se omiten las distintas perspectivas del amor.
de tales conflictos" (Torres, 1991, p, 101), Pero por encima de las diferencias entre
Como tercera limitación fundamental los modelos descritos en cuanto a los conteni-
hemos de señalar que los tres modelos presen- dos que incluyen y los que excluyen, 10 que
tan una interpretación posible de la sexualidad caracteriza a los tres es una metodología con-
humana presentándola como "la verdad" por sistente en la transmisión de la información
excelencia excluyendo otras perspectivas frente a la construcción autónoma del conoci-
explicativas. la contrastación y el conflicto. La miento, impidiendo dar una respuesta a los
amenaza, el miedo y la represión -a veces de intereses intelectuales de los grupos con los
forma explícita, otras de forma oculta- son que se trabaja y a una sustitución de las creen-
mecanismos de uso frecuente para asegurar la cias y teorías autónomas por las "verdades"
"reproducción del modelo". Asimismo, la uti- que supuestamente representa la ciencia. Cada
lización de consignas como la defensa de la vez que impedimos la reflexión crítica y la
monogamia y la fidelidad -entendida como toma de conciencia del sistema de creencias y
exclusividad en las relaciones sexuales- son representaciones sociales sobre sexualidad de
nuevos mitos que generan errores entre la los grupos humanos, estamos favoreciendo la
población que se percibe excluida de los gru- imposición autoritaria de un sistema de repre-
pos con posibilidad de contraer el sida. sentación que -en última instancia- se yuxta-
En consecuencia, los tres modelos promue- pone al anterior sin favorecer el pensamiento
ven la "homogeneización" del comportamien- autónomo.
to sexual humano contrariamente a la defensa Los estudios realizados para analizar la
de la diversidad y la multiculturalidad. relación entre estos modelos y la clase social
Los modelos predominantes en educación (Barragán, 1988) muestran cómo los sectores
sexual son el tradicional, el preventivo y el más desfavorecidos de la población se identi-
integrador humanista (Barragán, 1989; fican con modelos de sexualidad más conser-
Barragán et al., 1993). vadores y que restringen el comportamiento
Estos modelos se correlacionan de forma sexual humano Uudeocristiano y liberal), así
directa con los descritos sobre sexualidad mismo estos modelos guardan una relación
humana. directa con los modelos de educación sexual.
Su limitación fundamental es el reduccio- Por el contrario las clases sociales más favore-
nismo al que someten la sexualidad humana, cidas optan por los modelos más abiertos tanto
presentando solamente una parte del conoci- en sexualidad como en educación sexual.
miento disponible y excluyendo otra parte -
que necesariamente no es conflictiva- pero
que impediría comprender en su globalidad la 3, El curriculum como selección de la
sexualidad humana como fenómeno social cultura dominante
interdisciplinar.
En su intento de normativizar el compor- Seríamos demasiado ingenuos si creyéra-
tamiento sexual humano se plantea desde la mos que la actual expansión de los programas
abstinencia sexual, la lucha contra la promis- educativos de educación sexual, afectivo-
cuidad y las conductas sexuales consideradas sexual, o de educación para la salud y preven-
de riesgo, hasta la justificación del comporta- ción del sida son el reflejo de la preocupación
miento sexual por el amor y la afectividad social por presentar los conocimientos más sig-
exclusivamente. Para ello se han actualizado nificativos elaborados por las distintas ciencias
y utilizan mecanismos como el miedo, la cul- sociales y que estos conocimientos están al ser-
pabilización, la amenaza, la irresponsabilidad vicio de la libertad y la transformación social.
CURRICULUM, PODER Y SABER 87
los profesores en su puesto de trabajo puedan aprendizaje": Quienquiera que aspire a la cre-
abordar estos retos que esos curricula extensos ación científica, deberá primero renunciar pre-
y complejos les demandarían como profesio- cisamente a aquello que hace posible la creati-
nales. No se puede decir tampoco que la cali- vidad -el pensamiento autónomo- para some-
dad del profesorado mejore al tiempo que pre- terse a los modelos de pensamiento dominan-
dominan esas tendencias. La apreciación de tes en aquel momento en la comunidad cientí-
que se trata de un colectivo en proceso progre- fica e imbuirse de ellos hasta el punto de
sivo de prolctarizaci6n, no sólo pedagógica- incorporarlos sustituY¿llllulu,s a ,su propia
mente, sino también cultural mente, es un manera de razonar. Si no hace esto, ninguna
hecho incontestable (Apple, 1989; Martínez, persona llegará a ser científica y si lo hace,
1989; Ortega, 1989; y Popkewitz, 1990)" estará tan colonizada por la "ciencia oficial"
La proletarización del profesorado implica que le será muy difícil pensar por su cuenta y
además que el modelo que básicamente se está cambiar los paradigmas dominantes, requisito
difundiendo en educación sexual es el "pre- imprescindible para el progreso científico"
ventivo", (Moreno, I 992,pp. 29- 30)
En consecuencia, la clave no está tanto en En la actualidad la ruptura de los paradig-
la difusión de materiales -quizá sirvan para mas dominantes es imprescindible y para ello
tranquilizar nuestras conciencias- sino en el contamos con los grandes avances que han
diseño de estrategias de formación y evalua- producido las ciencias sociales en el presente
ción de programas que promuevan la mejora siglo, la incorporación de la Pedagogía como
continua y el cambio social en vez de "la ren- ciencia crítica a partir del movimiento de la
tabilidad a corto plazo". teoría curricular sociocrítica y el diseño de
Los problemas sociales son suficiente- estrategias o metodologías constructivistas
mente graves como para analizar críticamen- así como un movimiento crítico emergente de
te por qué a pesar de la profusión de iniciati- formación de profesorado y profesionales de
vas no disminuyen los embarazos no desea- la salud.
dos y sigue en ascenso el sida y lo que es más Como consecuencia proponemos una serie
negativo: no estamos logrando la felicidad de principios para la reflexión que nos permi-
humana. tan el cambio.
No nos cansaremos de repetir que la fun- En primer lugar, la ruptura de los paradig-
ción primordial de la educación sexual no es mas dominantes comienza por la reflexión
la prevención sino la promoción de] desarrollo sobre nuestras propias concepciones sobre
sexual integral de las personas, ]0 cual signifi- sexualidad y educación sexual -especialmente
ca aprender a ser felices, fomentar la autoesti- entre las personas que nos dedicamos a la
ma personal, erradicar la opresión y jerarqui- práctica educativa- para tomar conciencia de
zación por cuestión de género, aprender a ellas y no tratar de imponerlas, sean éstas con-
resolver los conflictos de la vida cotidiana en servadoras o progresistas. Potenciar la cons-
vez de excluirlos. En definitiva construir una trucción se opone a la obediencia intelectual.
sexualidad que potencie la diversidad. En segundo lugar, la complejidad de los
fenómenos sexuales y las relaciones educati-
vas exigen un abordaje interdisciplinar, lo cual
4. ¿La utopía como alternativa? exige, a su vez, la utilización de una metodo-
logía constructivista compleja, contraria a la
"Las mujeres y los hombres que aspiran a presentación cerrada e inflexible de objetivos,
dedicarse al trabajo científico se encuentran - contenidos, actividades de aprendizaje o crite-
de manera en apariencia inevitab]e- atrapados rios de evaluación de la forma más simple
en lo que podríamos llamar "la paradoja del posible con la excusa -hoy insostenible- de
CURRICULUM, PODER Y SABER 89