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Extrusión

Es un proceso que se utiliza en la industria en el conformado de termoestables y


termoplásticos y el cual consiste en moldear productos de manera continua, ya
que el material es empujado por un tornillo sinfín a través de un cilindro que acaba
en una boquilla, lo que produce una tira de longitud indefinida. Cambiando la
forma de la boquilla se pueden obtener barras de distintos perfiles.
Regulando la presión del aire se pueden conseguir tubos de distintos espesores.

Se utiliza para formar barras, tubos, láminas, de materiales termoplásticos y para


el mezclado minucioso de todas las clases de plásticos y para la producción de
gránulos. La extrusión con émbolo se restringe a casos especiales (como el
PTFE).
Aquí se utilizan tornillos en las extrusoras y el polímero se alimenta a través de
una tolva en un cañón y el tornillo helicoidal transporta el polímero hacia el
extremo con una matriz. El diseño del tornillo es CRÍTICO. Las presiones de
entrada de la matriz son entre 1.5 y 1.5 (con menor frecuencia 70) Mpa.

Inyección

Es la técnica más difundida para crear configuraciones 3-D.


Consiste en introducir el plástico granulado dentro de un cilindro, donde se
calienta. En el interior del cilindro hay un tornillo sinfín que actúa de igual manera
que el émbolo de una jeringuilla. Cuando el plástico se reblandece lo suficiente, el
tornillo sinfín lo inyecta a alta presión en el interior de un molde de acero para
darle forma.
El molde y el plástico inyectado se enfrían mediante unos canales interiores por
los que circula agua. Por su economía y rapidez, el moldeo por inyección resulta
muy indicado para la
producción de grandes series
de piezas. Por este
procedimiento se fabrican
palanganas, cubos,
carcasas, componentes
del automóvil, etc.

Las máquinas con émbolos recíprocos accionados hidráulicamente son capaces


de desarrollar presiones de 70 a 180 Mpa. El plástico se calienta mediante
calentadores externos en el cañón, y por cortante alrededor del torpedo (difusor),
lo cual asegura también la uniformidad del flujo.
Los termoplásticos se calientan por encima del punto de fusión (170 y 120 °C),
mientras que el molde se mantiene a una temperatura menor (90 °C).
Para un termofijo, el cañón se precalienta apenas lo suficiente para (entre 70 y
120°) para asegurar la plastificación. El molde se calienta entre 170 y 200°C.

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