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TANATOLÓGICA
“ME DOY PERMISO PARA VIVIR EL DUELO DE FORMA PERSONAL EN PAZ, RENOCOMIENDO QUE
TODAS LAS PERSONAS SOMOS DIFERENTES EN EL PROCESO DE SANACIÓN”.
1.- Objetivo del Apoyo Tanatológico ante la muerte:
Asegurar que la persona en etapa terminal sufra lo menos posible. Que se
satisfagan todas sus necesidades físicas, psicológicas y espirituales. Aliviar y
eliminar los síntomas en lugar de curar la enfermedad. Facilitar una muerte plácida
y digna. Cuando la muerte ya sucedió, curar el dolor, lograr que quienes están
sufriendo por la muerte de un ser querido, sin importar, si esta es una muerte
esperada o no esperada: súbita por accidente, crimen, suicidio masivo lleguen lo
más pronto posible a una aceptación para que sufran lo menos posible.
2. Conceptos básicos:
2.1. Autoconocimiento:
Autoconocimiento nos conduce al desarrollo de nosotros mismos, como individuos
íntegros, en cualquier nivel en que nos encontremos. Cuando la aplicamos en
nuestra vida venimos a descubrir el auténtico universo interno, lo cual nos llevaría
a un nivel más maduro y fructífero en el mundo en que vivimos (Alba,2016).
Alba, (2016) refieren en su libro: Las tareas del duelo menciona cinco áreas pueden
desarrollar esta habilidad precisa y está marcada por la observación:
1.- Emoción y motivación:
El primer paso para comprender quiénes somos es saber cómo nos sentimos. El
conocimiento de las propias emociones y motivaciones facilita la consciencia de los
actos y permite la libertad de elegir nuevas estrategias de actuación.
5.- El cuerpo
El cuerpo es otra vía para adquirir autoconocimiento. Él nunca miente, sólo tiene su
propio lenguaje. A veces nos habla a través de sus síntomas (tensiones, cefaleas,
respiración) y nos manda mensajes sobre cómo estamos, qué nos pasa y qué
necesitamos. Mensajes que muchas veces no aprendimos a escuchar.
Conocer, descubrir, entender, responder…
Insight
El "insight" es la capacidad de darse cuenta, es tomar conciencia en forma súbita
de una realidad interior, que normalmente había permanecido inconsciente. Es un
poco como la "palmada en la frente", aunque con un sentido más psicológico. Es
una nueva comprensión, que conlleva normalmente cierta emocionalidad. es el
"darse cuenta" o tomar conciencia. Es conectar una vivencia, una conducta, un
rasgo de personalidad o forma de ser, con su significado y/o su origen, lo que
permite ampliar la conciencia y acceder a un mayor conocimiento de sí mismo
(Neimeyer, 2002).
Determina hasta qué punto una persona tiene capacidad de comprenderse mejor a
sí misma, de hacer conexiones entre su vida interior, su cuerpo y las circunstancias
de su vida. El terapeuta debe conocer en qué medida está desarrollada esta
capacidad en el paciente, y esto permite hacer un pronóstico de las posibilidades
de curación o cambio (Neimeyer, 2002).
Dice un proverbio árabe: “Si un hombre te dice que pareces un camello, no le hagas
caso; si te lo dicen dos, mírate a un espejo». Viene a decir que si hay mucha gente
que coincide en una misma opinión sobre ti, es posible les hayas dado razones de
sobra para que opinen de esa manera. Si no les quieres escuchar, allá tú; pero eso
es lo que proyectas al exterior (Neimeyer, 2002).
Ventana de Johari
Neimeyer, (2002), en su libro Aprender de la pérdida, refiere que es una
herramienta útil en la tarea del autoconocimiento es la ventana de Johari fue creada
por Joseph Luft y Harry Ingman con el objetivo de descubrir a las personas como
se muestran ante los demás y lo que ellos desconocen de sí mismas:
Ejercicio 2
Película:
Que no hacer
Contar tu propia historia
Ignorar, sentimientos o hechos
Juzgar, regañar o tomar partido.
Intentar resolver todo en un primer momento
Tomar decisiones por el paciente
Actuar de acuerdo a sus propias necesidades.
Prometer cosas.
Dejar detalles en el aire
Dar falsas esperanzas
Conceptos claves para la atención
Ocurrida la pérdida, el trauma y la aflicción afectarán directa e indirectamente a
muchas personas. Además, habrá muchos individuos afectados emocionalmente
simplemente porque son parte de la comunidad impactada o porque a diario
trabajan con el dolor y las pérdidas, y quienes podrán informar de sentimientos
perturbadores de duelo, tristeza, ansiedad y enojo; tales reacciones fuertes pueden
generar confusión pues, después de todo, ellos no sufrieron ninguna pérdida
personal.
Traumas relacionados con la muerte
El trauma individual se define como un golpe a la mente o psique que penetra a
través de las defensas del individuo tan de repente y con tal fuerza brutal que uno
no puede reaccionar y enfrentarse efectivamente (de ahí el aturdimiento inicial de
las personas). El TI se manifiesta en las tensiones y reacciones de dolencia y
aflicción que los sobrevivientes experimentan.
El trauma familiar es un golpe a los componentes básicos de la vida familiar que
altera los lazos que mantienen juntas a las personas y deteriora el sentido de
comunidad común. Además, el TF puede romper los lazos sociales que los
sobrevivientes tienen con cada uno y con el sitio donde viven; estos pueden haber
sido lazos que previamente proveían apoyo psicológico muy importante en tiempo
de crisis.
El trauma social se define como la perturbación que la muerte ocasiona en casi
todas las actividades de la vida diaria y las conexiones que estas implican. Las
personas puede que se muden a viviendas temporales, lejos de sus vecinos y de
otros sistemas de apoyo social; puede que se interrumpa el trabajo o se pierda o
que el rendimiento laboral disminuya dramáticamente. Los niños pueden sufrir la
pérdida de amigos y relaciones escolares debido a la re-localización.
El segundo desastre
Los procedimientos que han de realizarse para aliviar los efectos inmediatos de la
muerte han sido llamados el segundo desastre. Los procedimientos necesarios para
llevar a cabo los trámites judiciales y funerarios, solicitar asistencia de los agentes de salud
o del gobierno, solicitar reembolsos de los seguros y pensiones y obtener ayuda de
agencias públicas y privadas está frecuentemente plagado de reglas, prohibiciones,
enredos, retrasos y desilusiones.
El estilo organizacional de las instituciones del estado que ofrecen ayuda suele ser
muy impersonal para un momento en donde se precisa mucho tacto, amabilidad y
atención. Para complicar la situación, las circunstancias especiales de los deudos
(irritabilidad, baja tolerancia a la frustración) frecuentemente complican los
procedimientos burocráticos. Con frecuencia, las familias son forzadas a tratar con
organizaciones que aparentan ser o son impersonales, ineficientes e ineptas, lo que
aumenta su sentido de frustración, impotencia, rabia y desesperanza.
Técnicas y estrategias
Las técnicas y estrategias que se describen a continuación son retomadas por
Neimeyer, (2002), refiere que el duelo es algo que nosotros mismos hacemos, no
algo que se nos ha hecho. El duelo nos da la oportunidad de reafirmar o reconstruir
un mundo personal de significados que ha sido cuestionado por la pérdida.
Herramienta y/o Descripción Ilustración
técnica
CARACTERIZACIÓN Es una técnica narrativa para explorar la
DE LA PÉRDIDA pérdida y el impacto que tienen en la
identidad de las personas. Es un texto
sencillo y breve en donde el doliente se
describe a sí mismo en cuanto al
impacto de la pérdida como si se tratara
del personaje de una obra de teatro.
TECNICAS DE CIERRE:
Es muy importante que antes de concluir una sesión se realice un «cierre emocional» de
nuestro paciente, es nuestra obligación que nuestro paciente se vaya cerrado de la sesión
y para ello podemos utilizar frases tan sencillas como:
¿Qué te llevas de la sesión de hoy?
¿De todo lo que hablamos que puedes aplicar en estos días?
¿Necesitas agregar algo más?
1) Trabajo y juego.
2) Sueño, descanso y buena alimentación.
3) Comunicación con los demás.
4) Ambiente seguro.
5) Comunicación con uno mismo.
6) Ampliar redes.
Pistas para acompañar en el duelo:
Detectar si existe “conducta de búsqueda” y normalizar el síntoma, con
alucinaciones incluidas.
Detectar primeros síntomas de duelo enmascarado, p. ej. presencia de los
mismos síntomas de fallecido; es un proceso de identificación. Realizar
interpretación normalizadora y respetuosa.
Hablar sobre cuándo se produjo la muerte, quién le informó, explorar si vio
al fallecido tras la muerte o en el tanatorio, si asistió al entierro, la
incineración, el funeral y lo que supuso para él.
Hablar ayuda a aceptar la realidad.
Mencionar el hecho de la muerte y lo duro que es aceptarla. De lo que no se
habla “no existe”.
DATOS IMPORTANTES
Pedir que cuente su historia de relación, de la figura del fallecido, lo que hizo,
lo que supuso para los demás. Facilita la introspección y la conciencia de la
ruptura final.
Hablar en pasado al referirnos al fallecido.
Explorar qué se ha hecho con las pertenencias del fallecido. Nos permite
avanzar resistencias, miedos.
Preguntar si visita el cementerio o el lugar en que se esparcieron las cenizas.
Dato importante Descripción
¿QUÉ NO HACER? No digas que lo entiendes, si no has pasado
por lo mismo.
No comparar situaciones ni sentimientos,
aumentan el dolor.
No hables de dios, la persona está
desesperada y normalmente ha perdido la fe.
No decir frases hechas.
No le digas a la persona en duelo que deje de
llorar, debe expresar sus sentimientos.
No digas nunca que la ausencia pérdida se
reemplazará.
Autocuidados
Oblígate a comer lo más sano posible, tu cuerpo también está sufriendo y
necesita que lo nutras.
Si pierdes más de 8 kilos y no puedes dormir más de 4 horas de un jalón…
no esperes…
Pide ayuda
«EL DUELO ES UNA BATALLA, NO PUEDES LLEGAR MAL DORMIDO,
MAL COMIDO Y SIN HACER EJERCICIO»
Y DESPUÉS.
Honra la memoria de quien ya no está a tu lada.
Entiende el significado de su paso por tu vida.
Esa persona, aunque se haya ido no quería que su muerte significara tu
infelicidad.
La muerte acaba con la vida de una persona, pero no con lo que sentimos
por ella.
Tú lo sigues amando y él te sigue amando
Los abrazos también curan
Referencias Bibliográficas
Alba, Payás, P., (2016). Las tareas del duelo: Psicoterapia de duelo desde un
modelo integrativo-relacional. Paidós. México.
Domínguez Mondragón, G., (2009). La tanatología y sus campos de aplicación.
Horizonte Sanitario; 8 (2). Universidad Autónoma de Tabasco, México.
Neimeyer, R., (2002). Aprender de la pérdida: Una guía para afrontar el duelo.