Dramatización

Integrantes:
 Steven Suarez
 Carlos Rojas
 Manuel Navarrete
 Mayckel Mendoza
 Jeremy Alvarado
 Donovan Carpio
 José Huilca
 Jean Mirabá
Tema: El cementerio encantado
Narrador: En el barrio Brisas del Mar, entre las 11h00 de la noche y 03h00 de la madrugada,
no circunda ningún habitante por la carretera, ya que en este lugar se encuentra un cementerio
encantado. Cierto día, Don Felipe le dice a su hijo:
Felipe: ¡Hijo mío, hoy tengo una fiesta en las Vegas, del barrio San Lorenzo!
Hijo: ¡Pero papá, no vengas demasiado tarde, y si lo haces, ven mejor al siguiente día para
que ninguna presencia desconocida se aparezca ante ti al cruzar por el cementerio!
Narrador: En ese momento, Don Felipe se pone su mejor vestimenta y sale rumbo a la fiesta,
eran las 06h00 de la tarde.
Don Felipe al llegar al lugar de la fiesta se encuentra con 3 amigos: Manolo, Bartolomeo y
Romeo.
Romeo: ¡Felipe, años sin verte!
Bartolomeo: ¡Desde que te fuiste a vivir por los rinconcitos de Salinas no apareces por aquí!
Manolo: ¿Es cierto que por donde tú vives se percibe una presencia desconocida?
Felipe: No hagan caso, ni miedo tengo
Narrador: Sin que nadie se percatara, una mano toca el hombro de Felipe y Romeo y se
llevaron un gran susto.
Bartolomeo: Por poco hago honor a mi nombre.
Jacinto: Así está su conciencia, no tengan miedo, ¡soy Jacinto, el que vive ahora en el
recinto!
Vamos muchachos, allí les tengo reservado su lugar para que puedan disfrutar de la fiesta.
Romeo: Ya regreso, voy a traer unas cervezas.
Narrador: En un abrir y cerrar de ojos, entre bailes y bebidas, ya todos estaban casi sin vida.
La borrachera era dueña de la noche, eran la 01h00 de la madrugada.
Felipe: Ya me voy a mi casa.
Bartolomeo: No te vayas, todavía es temprano.
Narrador: Ningún taxi cruzaba por ese lugar y don Felipe empezó su trayectoria a pie.
Antes de llegar al cementerio, don Felipe sintió que alguien lo perseguía.
Felipe: Ningún ladrón me va a robar.
Narrador: La presencia desconocida desaparecía y aparecía en el lugar.
Felipe: Este es el famoso cementerio encantado.
Presencia: ¡Felipe!¡Felipe!¡Felipe!
Felipe: ¿Quién es? ¿Quién es?
Presencia: ¡Hoy será tu fin!¡Quiero tu alma!
Narrador: En ese momento la presencia desconocida se le presentó a Felipe.
Presencia: ¡Ja!¡Ja!¡Ja!¡Ja!¡Ja!
Narrador: Felipe cae de susto, se le va la borrachera y sale corriendo despavorido.
Presencia: ¡Ja!¡Ja!¡Ja!¡Ja!¡Ja!
Narrador: Felipe toca desesperado la puerta de su casa.
Hijo: ¿Qué te pasa papá?
Narrador: Tartamudeando le responde:
Felipe: Tenías razón, la leyenda de la presencia desconocida era verdad.
Hijo: Pasa, toma agua bendita para que se te vaya el susto.
Finamente Felipe y su hijo se ponen a orar y a partir de ese momento son invadidos por el
espíritu de Dios y deciden combatir la fuerza del mal.
Felipe: Las leyendas se transmiten de generación en generación y forman parte de la cultura
de una sociedad.
¡Gracias!