Postura de los filósofos acerca de la educación

Aristóteles: educar es un proceso de perfeccionamiento, este proceso nunca

termina, ya que la educación dura tanto como dura la vida de la persona. Por lo que
el objetivo para Aristóteles era formar buenos ciudadanos con estudios éticos,
políticos y lógicos a través del intelecto, para asumir a largo plazo posiciones de
liderazgo en el Estado y la sociedad, ya que creía que al educarnos somos capaces
de asimilar y aprender conocimientos materializados en valores y habilidades que
producen cambios intelectuales emocionales y sociales; y que mediante la
educación se consigue el desarrollo perfecto del hombre y de la sociedad, lo que
obliga al educador a disponer orientar y acompañar el proceso.

Platón: educar es un proceso de socialización donde el individuo es capaz de

asimilar y aprender, siendo un proceso que le permite tomar conciencia de la
existencia de otra realidad más plena, a la que está llamado, de la que procede y
hacia la que se dirige, por lo que quien transmite la verdadera educación se ve
obligado a superar el sentido común, la forma media de ver las cosas, para decir lo
que hay detrás.

La educación es la luz del conocimiento, los niños deben ser educados tanto en la
parte física y en la espiritual para desarrollar alma y cuerpo, no obligando a nadie a
aprender, ni forzarlos para asimilar conocimientos, solo se debe mostrar el camino,
para que cada quien piense por sí mismo.