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UNIVERSIDAD DE GUAYAQUIL

FACULTAD DE CIENCIAS MÉDICAS


CARRERA DE ENFERMERÍA

ASIGNATURA:

ENFERMERÍÍA PEDÍAÍ TRÍCA

GUÍA DE TALLER Nº6

TEMA:

PROCESO DE ATENCÍOÍ N DE ENFERMERÍÍA AL NÍNÑ O CON PROBLEMAS


RESPÍRATORÍOS.

ADENOIDITIS Y AMIGDALITIS

DOCENTE:

LCDA. ALÍCÍA DONOSO TRÍVÍNÑ O.

ESTUDIANTE:

KATERÍN CAÍSA CHÍLOGALLÍ.

CURSO: G3

SEMESTRE: SEXTO

CII

2018 – 2019
INTRODUCCIÓN

Este trabajo de investigación se tratara sobre la adenoides y la amigdalitis, las posibles


complicaciones, signos y síntomas, pronostico y tratamiento tanto medico como enfermero.
Las adenoides son un parche de tejido en la parte alta de la garganta, justo detrás de la nariz.
Junto a las amígdalas son parte del sistema linfático. El sistema linfático elimina las
infecciones y mantiene equilibrados los fluidos corporales. Las adenoides y las amígdalas
atrapan gérmenes que entran por la boca y la nariz. Por lo general, las adenoides comienzan a
reducir su tamaño después de los cinco años de edad. En la adolescencia, desaparecen casi por
completo. Para entonces, el cuerpo tiene otras formas de combatir los gérmenes.

La amigdalitis es un tipo de infección que resulta muy común entre los niños pero que
es menos frecuente en los adultos. Esta afección consiste en una inflamación de la garganta y
las amígdalas causada por distintos tipos de virus o bacterias, como los estreptococos del
grupo A; responsables de la provoca la amigdalitis estreptocócica, que es la más común. Este
tipo de bacterias, pueden vivir también tanto en la nariz como en la garganta sin que causen
ninguna enfermedad y se propagan mediante el contacto con las gotas de la tos o el estornudo
de una persona que sí está infectada.

En algunos niños, las adenoides y amígdalas pueden llegar a ser muy grandes o
pueden inflamarse varias veces, causando infecciones constantes, perdiendo su capacidad de
protección y provocando problemas de salud como dificultades respiratorias. Por esto, el
otorrino puede indicar la realización de una cirugía para su extirpación como solución al
problema.
OBJETIVO GENERAL

Determinar las generalidades de enfermedades respiratorias más prevalentes de la infancia


como amigdalitis y adenoiditis.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS

 Conocer los conceptos de amigdalitis y adenoiditis.


 Identificar los signos y síntomas de amigdalitis y adenoiditis.
 Aplicar el proceso de atención de enfermería en niño con amigdalitis y adenoiditis.
 Establecer las intervenciones y actividades de enfermería con respecto a dichas
enfermedades.
AMIGDALITIS Y ADENOIDITIS

El anillo de Waldeyer es un tejido linfoide que rodea los orificios de entrada de la cavidad
nasal y oral en la faringe e incluye las amígdalas palatinas, la amígdala faríngea o adenoides,
el tejido linfoide que rodea al orificio de la trompa de Eustaquio en las paredes laterales de la
nasofaringe, la amígdala lingual. Contiene linfocitos (un tipo de célula inmunitaria) que
ayudan al cuerpo a combatir infecciones y enfermedades.

Las amígdalas palatinas o anginas conforman parte de un tejido de defensa que se encuentra
en la zona de la garganta (tejido linfoide) se encuentra en la parte de atrás de la boca (una a
cada lado de la base de la lengua) y las adenoides se encuentran por detrás de la nariz (arriba y
detrás del paladar).

Tanto las amígdalas como el adenoides colaboran a formar anticuerpos contra las bacterias y
los virus que generan infecciones y que ingresan en el organismo mediante contacto directo
de secreciones (mocos) o por inhalación (estornudos). Este sistema tiene mayor actividad
cuando el niño/a es pequeño (hasta los 3 años) que es cuando se desarrolla la etapa oral de
aprendizaje en la que los bebés se suelen llevar los objetos a la boca.

AMIGDALITIS

La inflamación de las amígdalas palatinas es llamada amigdalitis, esto sucede como respuesta
a una infección. Es muy común entre los niños

Etiología

Se relaciona con la edad, entre los niños menores de 3 años, los patógenos más habituales son
los virus. Prácticamente todos los virus que afectan al aparato respiratorio pueden producir
amigdalitis. Los más frecuentes son: adenovirus, virus de Epstein-Barr, rinovirus, coronavirus
y virus influenza y para influenza. Entre los 2 y 3 años la prevalencia de estreptococo alcanza
un 5-10%, mientras que en los menores de 2 años la cifra se reduce 3-7%; siendo
extremadamente raro en menores de 18 meses. Entre los 5 y 10 años, los gérmenes más
frecuentes son las bacterias, y en especial el estreptococo betahemolítico del grupo A
(Streptococcus pyogenes o SBHGA).
Aunque este proceso patológico puede manifestarse a cualquier edad, normalmente afecta a
niños mayores de 3 años

Es difícil distinguir entre las amigdalitis víricas y las bacterianas únicamente a través de los
síntomas y signos clínicos. Para confirmar si se trata de un virus o una bacteria se requiere
una prueba analítica.

Clasificación

Agudas

Es causada por una amplia gama de virus y bacterias, siendo los factores bacterianos mucho
menos comunes.

Aguda de repetición

También es denominada amigdalitis recurrente infantil, donde existe la teoría del fallo en la
erradicación del estreptococo por el tratamiento antibiótico. A pesar de la sensibilidad que este
germen mantiene a la penicilina, la posibilidad de producción de betalactamasas por otras
bacterias de la faringe puede hacer que la penicilina no pueda erradicar el germen.

Crónica

Ocurre como consecuencia de infecciones agudas a repetición esto puede producir aumento
del tamaño por hiperplasia parenquimatosa. Se trataría en todo caso de un cuadro muy poco
frecuente en el que podrían aparecer microabscesos.

Signos y Síntomas

La amigdalitis se caracteriza por fiebre, odinofagia y malestar general. Los hallazgos clínicos
son poco específicos en cuanto a la etiología de la enfermedad. Clásicamente se han descrito 2
grandes grupos de amigdalitis: bacterianas y virales.

Amigdalitis virales

También se denominan eritematosas. El período de incubación es corto (2-3 días), aparece


malestar moderado y febrícula con inicio gradual. Puede aparecer exudado sin placas, afonía,
ronquera, tos, rinorrea.
Amigdalitis bacterianas

Su inicio es abrupto y causan fiebre de 39-40 °C. Los gérmenes más frecuentes son S.
pyogenes, neumococos, estafilococos y Haemophilus, odinofagia, dolor abdominal, exudado
con placas, escarlatina

También existen manifestaciones clínicas según el grado de infección

Infección Aguda

Consisten en dolor de garganta, odinofagia, malestar, fiebre y escalofríos, disfagia, otalgia


referida, cefalea, dolores musculares e hipertrofia de los ganglios linfáticos cervicales. Entre
los signos destacan la sequedad de la lengua, unas amígdalas aumentadas de tamaño y
eritematosas, exudación faríngea o amigdalina, petequias en el paladar y aumento de
tamaño .Infección Crónica.

Los niños con una amigdalitis crónica presentan halitosis, dolor de garganta crónico,
sensación de cuerpo extraño o antecedentes de expulsión de trozos de tejido malolientes y de
mal sabor. La exploración puede mostrar unas amígdalas de cualquier tamaño.

Los síntomas de la amigdalitis causada por estreptococos varían en función de la edad del
niño. En lactantes suele provocar poca fiebre y espesa mucosidad nasal. En niños entre 1 y 3
años también puede aparecer mucosidad nasal espesa junto a fiebre, además de irritabilidad,
falta de apetito e inflamación de los ganglios linfáticos del cuello. Los niños mayores de 3
años suelen tener mayor afectación del estado general, intenso dolor de garganta, fiebre
superior a 39 ºC, inflamación de los ganglios linfáticos del cuello y pus sobre las amígdalas.
Con frecuencia los niños con amigdalitis vírica padecen a la vez un resfriado, manifestando
fiebre.

Métodos Diagnósticos

Para diagnosticar la amigdalitis se le preguntará al cuidador sobre sus síntomas y su historia


clínica. El especialista examinará la garganta y el cuello del niño, buscando síntomas como
enrojecimiento o manchas blancas en las amígdalas e hinchazón de los ganglios linfáticos.
Es probable que se tenga una o más pruebas para detectar amigdalitis estreptocócica, ya que
puede requerir tratamiento. Puede ser una prueba rápida de estreptococo, un cultivo de
garganta, o ambos. Para estas pruebas el medico utiliza un hisopo de algodón para recoger una
muestra de fluido de las amígdalas y la parte posterior de la garganta de su hijo.
La prueba rápida de estreptococo se hace en la consulta y obtendrá los resultados en pocos
minutos. El cultivo de garganta se hace en un laboratorio y normalmente toma unos días
obtener los resultados.
El cultivo de garganta es una prueba más confiable. A veces, si la prueba rápida de
estreptococo es negativa (lo que significa que no muestra ninguna bacteria estreptocócica), el
medico también hará un cultivo de garganta sólo para asegurarse de que el niño no tiene
estreptococo.
Complicaciones

La inflamación o la hinchazón de las amígdalas debido a la amigdalitis frecuente o continua


(crónica) puede causar complicaciones tales como las siguientes:

 Dificultad para respirar


 Interrupción en la respiración durante el sueño (apnea obstructiva del sueño)
 Infección que se propaga profundamente en los tejidos circundantes (celulitis amigdalina)
 Infección que produce una acumulación de pus detrás de una amígdala (absceso
periamigdalino)

Si la amigdalitis causada por el estreptococo del grupo A u otra cepa de la bacteria


estreptocócica no se trata, o si no se completa el tratamiento con antibióticos, tu hijo tiene un
mayor riesgo de sufrir trastornos poco frecuentes, como los siguientes:

 Fiebre reumática, una enfermedad inflamatoria que afecta al corazón, las articulaciones y
otros tejidos
 Glomerulonefritis posestreptocócica, una enfermedad inflamatoria de los riñones que
provoca la eliminación inadecuada de desechos y líquidos en exceso de la sangre

Tratamiento Médico

 Tratamiento farmacológico
Las pastillas voluminosas no deben administrarse en niños por la posibilidad de obstrucción
respiratoria. Los aerosoles están especialmente indicados para los pacientes pediátricos,
debido a las dificultades que supone en niños el uso de colutorios y gargarismos. Los
aerosoles se aplican en forma de nebulizaciones varias veces al día.
Ante la sospecha de una amigdalitis de origen bacteriano, el médico deberá decidir el
tratamiento con antibióticos.

Penicilina
La penicilina es el fármaco de elección. En casos de amigdalitis grave, se puede administrar
en forma de penicilina G benzatina por vía intramuscular, en una dosis única de entre 3.000 y
1.200.000 UI.
Eritromicina
En el caso de alergia o de resistencia a las penicilinas, el médico suele prescribir como
tratamiento alternativo la eritromicina. La eritromicina tiene un mecanismo de acción
diferente, presenta un buen perfil de seguridad y escasos efectos secundarios. Además, como
posee una gran capacidad para penetrar dentro de las células, consigue unas concentraciones
tisulares superiores a las plasmáticas, por lo que se distribuye en altas concentraciones en
boca y faringe.
Cefalosporinas
Si el paciente presenta resistencia a la eritromicina, se pueden emplear cefalosporinas de
administración oral de primera generación, como cefadroxil, que poseen buena actividad
bactericida frente a bacterias grampositivas. El tratamiento con cefalosporinas puede hacerse
con el estómago lleno o vacío, pero en caso de provocar molestias estomacales es mejor tomar
el fármaco junto con la comida.
Amoxicilina y ácido clavulánico
Ante niños con una infección por estreptococos recurrente, el médico suele indicar la
asociación de amoxicilina con ácido clavulánico. Esta combinación de fármacos puede
tomarse con el estómago lleno o vacío, pero si se toma junto a las comidas disminuyen las
probabilidades de que aparezcan náuseas, vómitos o diarrea.

 Tratamiento quirúrgico
Amigdalectomía
Entre las indicaciones de amigdalectomía, los procesos infecciosos han perdido protagonismo
a favor de las enfermedades obstructivas de la vía respiratoria superior en el niño.
Antiguamente se indicaba de una forma muy liberal la amigdalectomía para tratar los
procesos infecciosos amigdalares. En la actualidad, la mayoría de los casos pueden ser
tratados de manera adecuada con tratamiento médico. Actualmente, en la mayoría de los casos
la indicación es debida a una causa obstructiva.

Sin embargo, la indicación de amigdalectomía por una causa infecciosa no ha desaparecido


completamente, aunque se han limitado los criterios clínicos para dicha intervención, que se
aplica en amigdalitis aguda de repetición.
Se indica amigdalectomía en amigdalitis agudas recurrentes que cumplan los siguientes
criterios:
 Amigdalitis de repetición: más de siete episodios de amigdalitis aguda al año, o cinco
episodios al año en los últimos dos años.
 Complicaciones derivadas de las amigdalitis recurrentes: absceso periamigdalino o
infección de los ganglios cervicales (adenitis) recurrente.
 En el caso de que las amígdalas de gran tamaño provoquen una obstrucción en la vía
aérea durante el sueño, produciendo ronquido persistente y pausas durante la respiración
(síndrome de apneas del sueño o SAOS).

La intervención de las amígdalas o amigdalectomía es un procedimiento quirúrgico y como tal


se realiza con los máximos cuidados para minimizar los riesgos. Es necesario antes de la
intervención un estudio preoperatorio. Debes saber que:
 Las ocho horas anteriores a la intervención se debe permanecer en ayunas.
 Se recibirá anestesia general, lo que significa que la intervención será realizada en
un quirófano, con un anestesista que monitorizará en cada momento sus constantes vitales.
 Se permanecerá dormido, bajo los efectos de la anestesia, alrededor de unos 20 minutos.
 El cirujano extraerá las amígdalas a través de la boca, sin realizar incisiones en la piel.
 El sitio de donde las amígdalas han sido extraídas cicatriza por si mismo en 10-14 días.
 Muchos estudios han demostrado que la extirpación de las amígdalas no influye de forma
negativa en la respuesta inmune (defensas) del organismo. La función de las amígdalas es
suplida íntegramente por el resto de los tejidos linfáticos del organismo.
 En la mayoría de los casos el tiempo de estancia en el hospital es de 5 a 10 horas. Niños
menores de 3 años o con enfermedades crónicas permanecerán en el hospital al menos 24
horas.
 Al alta el otorrinolaringólogo indicará tratamiento antibiótico y analgésico.
Tratamiento De Enfermería

Cuando la amigdalitis es viral y no se indican antibióticos se puede ayudar al niño de la


siguiente manera:

 Realizarle al menos una vez al día una limpieza bucal, con agua tibia y sal, esto ayudará a
bajar la inflamación

Medidas higienicodietéticas
Para aliviar el dolor de garganta del niño con amigdalitis es aconsejable darle únicamente
alimentos de consistencia blanda y no muy calientes; aumentar su consumo de líquidos
(excepto zumos cítricos pues su acidez irrita la mucosa inflamada); evitar su presencia en
ambientes muy cargados, ventilando adecuadamente las habitaciones y no fumando delante de
él, y evitar los cambios bruscos de temperatura ambiental.
Otras medidas higiénicas para prevenir el contagio son el uso de pañuelos desechables y, en
niños mayores, enseñarles a protegerse la boca y la nariz con pañuelos al toser o estornudar.

Pronostico

Los síntomas de la amigdalitis por lo general mejoran a los dos o tres días de iniciado el
tratamiento. La infección generalmente está curada después de haber completado el
tratamiento, pero algunas personas pueden necesitar más de un ciclo de antibióticos.

Plan De Alta

Informar al cuidador acerca de medidas que debe seguir:

 Reposo mientras dure la fiebre.


 Ingesta de líquidos frescos y alimentos según a tolerancia.
 Informar que es importante terminar todos los antibióticos como el medico indica, incluso
si se siente mejor.
 mantener en casa al y no enviarlos a la escuela o a la guardería hasta que hayan tomado
antibióticos por 24 horas. Esto ayuda a reducir la propagación de la enfermedad
 Para mayor cuidado, es importante que mientras sana completamente no incluir en
actividades físicas o llevarlos a la escuela, su sistema inmunológico y defensas en estos
momentos están bajas y pueden retrasar la mejoría
.
ADENOIDITIS

Las adenoides son formadas en el séptimo mes de vida del feto, continuando su crecimiento
hasta aproximadamente los 5-6 años de edad. A partir de los 8-10 años, las adenoides
comienzan a retroceder, desapareciendo totalmente hasta la vida adulta.

Etiología

La adenoiditis consiste en una inflamación de la amígdala faríngea o adenoides, normalmente


de origen infeccioso. Afecta sobre todo a niños de entre cinco años y la adolescencia y es más
frecuente en invierno. Su origen habitualmente es infeccioso, y una de las bacterias más
frecuentes e importantes que suelen producirla es el estreptococo del grupo A (EGA).

Clasificación

 Adenoiditis aguda: se manifiesta con obstrucción nasal, rinorrea purulenta, fiebre y en


ocasiones otitis media. Aunque puede ser difícil de diferenciar de un proceso catarral
vírico agudo, su curso es más prolongado y febril.
 Adenoiditis recurrente: se denomina así a la concurrencia de 4 o más episodios de
adenoiditis aguda en 6 meses, separados por intervalos asintomáticos. Su presentación es
similar a la de la rinosinusitis aguda recurrente.
 Adenoiditis crónica: se manifiesta por rinorrea persistente, drenaje postnasal (“la calle del
moco”, al ver la faringe), respiración maloliente, a veces acompañada de otitis media, con
una duración de al menos 3 meses.

Signos y síntomas

Las adenoides de tamaño normal no provocan ningún síntoma y desaparecen en la


adolescencia sin provocar problemas. No obstante, en algunos niños con infección respiratoria
de repetición, las adenoides pueden crecer, tornándose permanentemente hipertrofiadas
durante toda la infancia.

 Adenoiditis en el lactante: es una infección de comienzo brusco en un lactante que


estaba sano o que presentaba signos de pequeñas rinitis. Su sintomatología es niño fecril
con mas de 39º C de temperatura axilar, una marcada insufucuencia respiratoria nasal que

produce el clásico ronquido adenoideo y persiste en todo momento, sobre todo al estar
acostado.
Tiene dificultad para succionar la leche materna ya que se ahoga y vomita.
La tos acompaña generalmente a estos procesos, siendo por lo común seca, irritativa y sobre
todo postural. Hay desasosiego e insomnio.
En el examen se observa las fosas nasales con una mucosa congestiva y edematizada con
secreciones mucopurulentas abundantes.
 Adenoiditis en el niño de dos a seis años.- Éstas comprenden tres (3) grandes grupos:

I. ADENOIDEOS DE TIPO RESPIRATORIO


II. ADENOIDEOS DE TIPO AURICULAR
a) Otitis media supurada
III. ADENOIDEOS DE TIPO INFECTANTE
b) Infecciones descendentes de las vías aéreas
c) Infecciones de tubo digestivo

I. Adenoideos de tipo respiratorio.- La obstrucción nasal es el primer síntoma que llama la


atención de los padres, el niño respira mal, mantiene la boca abierta y ronca por la noche y no
se suena; parece tener la nariz llena sin poder evacuarla. Todos estos trastornos se acentúan
durante las corizas.
A veces, la facies es tan típica que se la denomina facies adenoidea: boca abierta, labio abierto
retraído, dejando los dien- tes al descubierto, bóveda palatina ojival y dientes mal colocados,
por atrofia del macizo óseo de la cara.
Consecuencias de la obstrucción nasal.-
1. Voz nasal (rinolalia).- El niño pronuncia mal las nasales, dice babá en lugar de mamá.
2. cefalea.- Falta de atención, inapetencia intelectual: un niño que después de
desenvolverse bien hasta los 8 ó 10 años se vuelve hepático, distraído, de comprensión lenta.
Esto le ocurre desde que le han atacado las vegetaciones.
3. Trastornos del desarrollo esquelético.- Tórax retraído, hundimiento del esternón,
raquitismo. Se detiene el desarrollo del niño, el cual deja de crecer.
4. Trastornos reflejos.- Terrores nocturnos, pesadillas, el niño se orina en la cama, etc.
II. Adenoideos de tipo auricular.- Hay ciertos niños que no presentan ninguno de los signos
procedentes, ni la menor obstrucción nasal, pero aquejan trastornos auditivos, cuya causa ha
escapado a la observación.

Sordera intermitente, zumbido, otalgias, a veces muy intensas. Estos hechos inquietan a los
padres, sobre todo cuando la sordera se instaura en forma crónica.
Estos síntomas aparece siempre o aumentan durante las corizas

III. Adenoideos de tipo infectante


Hay niños que en el curso de corizas sufren de adenoiditis aguda con fiebre, obstrucción y
secreción purulenta nasal y faríngea, adenopatías submaxilares y producción a distancia de:
a) Otitis media supuradas de repetición.
b) Infecciones descendentes de las vías aéreas.
Los accesos de falso crup, consecutivos a corizas, a menudo son consecuencia de las
vegetaciones, al igual que las laringitis o bronconeumonías, que tienen el mismo origen.
c) Numerosas infecciones del tubo digestivo, gastrointestinales, de la primera infancia,
cuando no se produce por causa alimenticia, tienen origen faríngeo. El niño no sabe
expectorar, deglute mucosidades sépticas que provocan los trastornos gastrointestinales.
¡Cuántas enteritis, enterocolitis e incluso apendicitis son debidas a la adenoides infectadas!

Métodos de diagnostico

El diagnóstico de la hipertrofia de adenoides lo llevará a cabo el médico Otorrinolaringólogo,


basándose en un minucioso estudio de la historia clínica del niño o Anamnesis, que incluirá
una serie de preguntas dirigidas a los padres sobre los síntomas, como pueden ser:

 Inicio y duración de los síntomas.


 Intensidad de dichos síntomas.
 Presencia de otros síntomas.
 Afectan o no al desarrollo de la vida cotidian del niño, etc.

Dicho estudio se acompañará de un examen físico de la garganta, para confirmar el aumento


de tamaño del tejido amigdalino.

Las adenoides no se pueden visualizar por observación directa de la cavidad bucal, pero
pueden verse mediante un espejo especial que permite observar dentro de la nasofaringe, o
bien a través de pruebas radiológicas.

En ocasiones el médico especialista puede solicitar una serie de pruebas de diagnóstico


complementarias, siendo las más habituales:

Rinoscopia posterior. Se lleva a cabo mediante un fibroscopio flexible, que se introduce a


través de la nariz, permite visualizar la hipertrofia adenoidea y el grado de obstrucción de las
vías respiratorias.

Rinofibrolaringoscopia simple. Se lleva a cabo mediante un rinofibrolaringoscopio, que se


utiliza para valorar el grado de inflamación, obstrucción y aspecto de las adenoides.

Complicaciones

Puede producir con facilidad cuadros de otitis medias bacterianas, o un aumento crónico del
tamaño de la adenoides. Una complicación más rara es la aparición de un absceso
retrofaríngeo, que produce una clínica llamativa con fiebre alta, dificultad para tragar y
aspecto de niño enfermo. Ante estos síntomas se debe llevar siempre al niño a urgencias, ya
que el tratamiento es hospitalario.

Tratamiento medico

Muchas personas con hipertrofia de adenoides tienen pocos o ningún síntoma y es posible que
no necesiten tratamiento. Si se presenta una infección, el medico puede recetar antibióticos o
aerosoles nasales con esteroides. Las adenoides hipertrofiadas sólo comienzan a desaparecer a
partir de los siete años de edad. Como muchos niños presentan complicaciones desde los 2-3
años, esto puede muchas veces significar al menos cuatro años de infecciones de repetición,
dificultad respiratoria, sueño ineficaz y alteraciones en la anatomía del rostro.

El único tratamiento para el adenoides grande es la cirugía, llamada adenoidectomía. Como


las adenoides disminuyen espontáneamente con el tiempo, la indicación de la cirugía tiene
que ser bien hecha, pesando los riesgos quirúrgicos con las complicaciones causadas por la
obstrucción de las vías aéreas.

La cirugía para la remoción de las adenoides es generalmente indicada en niños con


obstrucción grave de las vías respiratorias, principalmente en aquellos de 3-4 años con
dificultades para dormir, con otitis media y/o sinusitis de repetición. En los cuadros más leves,
el tratamiento se lleva a cabo con antibióticos y corticoides durante las crisis
(amigdalitis/adenoiditis), sin que sin indique la cirugía.

Durante el acto quirúrgico para la retirada de las adenoides, frecuentemente las amígdalas
también son removidas.

La adenoidectomía es una cirugía relativamente simple y corta, pero se realiza bajo anestesia
general. El procedimiento lo realiza un médico otorrinolaringólogo. Habitualmente el paciente
queda interno por apenas un día. Si todo sale bien, el niño puede volver a frecuentar la escuela
después de una o dos semanas (se debe evitar contacto con niños con infección respiratoria en
las primeras dos semanas de posoperatorio).

Pronóstico

El pronóstico de la adenoiditis sería favorable si ella no trajera, frecuentemente, tres graves


complicaciones:

 Infección broncopulmonar
 Otitis supurada
 Absceso retrofaríngeo

Plan de alta

Mantener condiciones higiénicas y ambientales adecuadas y una buena nutrición. También se


recomiendan lavados nasales de agua con sal. En niños muy pequeños son recomendables las
gotas nasales de suero fisiológico salino.

CONCLUSIONES

Es de primordial importancia como futuros profesionales de enfermería reconocer e


identificar un caso de amigdalitis debido que este suele ser contagioso dependiendo el
microrganismo que lo haya causado, por ello una correcta valoración en el infante ayudara a
disminuir compilaciones y contagios a otros.

Ante la sospecha de amigdalitis lo más recomendable es acudir al médico para recibir


un diagnóstico certero y empezar cuanto antes con el tratamiento más adecuado.
Normalmente, un examen físico de las amígdalas es suficiente para determinar si el paciente
padece amigdalitis.

Además, existen pruebas complementarias como un test rápido que permite detectar la
presencia de estreptococo grupo A, típico causante de la amigdalitis aguda, o un exudado
faríngeo. Atendiendo al tipo de amigdalitis se establece el tratamiento más adecuado.

BIBLIOGRAFÍA

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 S Moor Head . Clasificación de Resultados de Enfermería (NOC). Ed. 3ra edición
Elsevier. Barcelona. 2014.
Las adenoides son tejidos linfáticos, que La amigdalitis se refiere a la inflamación del
forma parte del sistema inmune para la tejido que forma a dicho órgano (las
defensa del cuerpo contra microorganismos. Las adenoides y amígdalas amígdalas).
pueden inflamarse varias veces,
causando infecciones constantes.

ADENOIDES Y AMIGDALITIS

PROCESO DE ATENCIÓN DE ENFERMERÍA

NOC
NIC
NANDA
DIAGNOSTICO RESULTADOS
ENFERMERO
Etiqueta: Control de infecciones

Actividades
Aplicar precauciones universales de bioseguridad.
Monitorizar signos vitales.
Etiqueta: Riesgo de infección Etiqueta: Severidad de la verificar si el paciente acepta y tolera vía oral
Administración de medicamentos prescritos
R/C Procedimientos invasivos; infección. (Salud fisiológica
Defensas secundarias II)
inadecuadas - Fiebre
- Dolor
- Malestar general
Intervenciones
- Pérdida de apetito
Promover en el paciente una correcta higiene de
manos.
Fomentar una dieta líquida y blanda.
No compartir objetos de higiene personal

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