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A. J. GREIMAS • J.

COURTÉS

SEMIÓTICA
DICCIONARIO RAZONADO DE LA.
TEORÍA DEL LENGUAJE

VERSIÓN CSPAl'10th Df.

EHRIQUE BALLÓN AGUIRRE Y


HERMIS CAMPODÓNICO CARRIÓN

Bll3LIOTECA ROMÁNICA HISPÁNICA


.EDITORIAL GREDOS
MADRID
SEMIÓTICA. DICCIONARIO RAZONADO .
DE LA TEORÍA DEL LENGUAJE.
BIBLiOTECA ROMÁNICA HISPÁNICA
011Uo10A •oi oAM"sº Ai.oNso
V. PICCIONARIOS, 10 .
A. J. GREIMAS • J. COURTÉS

SEMIÓTICA
DICCIONARIO RAZONADO DE LA
TEORÍA DEL LENGUAJE

VERSIÓN f.SPA'AOLA DE
ENRIQUE BALLÓN AGUIRRE y
HERMIS CAMPODÓNICO CARRIÓN

BIBLIOTECA ROMÁNICA HISPÁNICA


EDITORIAL OREDOS
MA¡lRID
© LlBRAl~IE .HAClÍ·ETTE 1979.

© ·EDITORIAL GREDOS, S. A., Sánchez Pacheco, 81, Madrid,:;"1990, para


·la·· versión española. '

Título original:. Si?.MIOTIQUE. OICT/ONNAIRE RAISONNI?. DE LA


'THÉORIE DU LANGAGE.

PRIMERA ED1C1ÓN, 1982.


Reimpresión, .i990.

1
Depósito Legal: M. 2442·1990.

ISBN 84-249-0851 • i.
Impreso en España. Printed in Spain. .
Gráfica:s C6ndor1 ·S. A., Sánchez Pacheco, 81, Madrid, 1990. -6339.
. PREFACiO

l. Presentación.

El diccionario razonado que proponenios pretende ser Una ,


precisión de las reflexiones sobre la problemática del lenguaje, .
una ..;íntesis -ai menos parcial- de los esfuerzos por conver~.
tir este campo ~el saber en una teoría coherente. Como se
sabe, el proyecto semiótico ha dado lugar, desde hace una
quincena de años, a desarrollos diversos que nos parecen ir
en todos los sentidos: tal vez sea llegado el momento de con~
tabilizarlos, de homologarlos, de evaluarlos. Sin embargo, y
por innovador que, ·a justo título, haya podido parecer el pro-
yecto, intenta definirse éste en relación con la lingüística, situán~
· dose en el interior, al lado o por encima de ella. Ahora bien,
la lingüística, enriG,Uecida ya· por· Una tr'adición más que secular,
se ·había comprometido, al propio tiempo, en la vía de un rigor
lógico-matemático en que la elaboración de procedimientos y
métodos cada vez más depurados iba generando certezas, fre·
cuentemente a expensas de la reflexión teórica, de la indagación
innovadora. Establecer un diálogo convincente entre el laxismo
epistemológico y la tecnicidad metodológica, que se ignoraban
mutuamente, no era cosa fácil.
Una nueva situación se está creando con el · agotamiento
-previsible- de las corrientes semióticas de inspiración me·
8 Semiótica. f!iccionario
tafísica o idéológica, sobre todb con los desar;ouoS: -prome~
tedores- de las investigaciones, referidas (de manera .explícita
o i¡nplfcita) a· los probleinas de la significación, tales co¡no la
semántica generativa, la: lógica anglo~sajona o la pragmática
norteámericana, investigaciones que, pese a su trasfondo epis~
temológico tan diferente, responden, a· modo· de eco, a nuestras
propias y obsth:i:ádas preOcllpaciones. NoS parece, puGs, llegado
el momento propicio pata intentar hacer un esfuei:zo no de
unifi~ci~n, S~no · de homogeneización, instaurando::: -Iio Si.n
algún. prejuici~ un lugar de acercarniento, de comparación y
de ev3.luación. Este diccionario es' una expresión proVisional de
ello.

2. Pt?r q~é; un .diccionariO.


. 'To'do '10 anterior no expllca todavía el haber .elegido la for-
ma de· diccionatio. En efecto, de los' dos; modos posibles que
hay para presentar una teoría -el sintagmático y eJ paradig-
mátic?-, el discurso teórico, a primera vista, parece ser, habi-
tua~ente,· el más apropiado para expresarla;· pero e~to habría
requerido an esfuerzo de estrategia : discursiva desproporcio-
nado, en ·relación con el. fin propuesto. Aunque ¡nás eficaz a
largo: -plaZo, tal present3.ción no habría tenido · cas:i ninguna
~uencia sobre las investigaciones en curso. Persúadidos de
que ún proyecto científico sólo tiene sentido cuando llega a
COnvertirsé en objeto· de una empres·a ..colectiva, eslamos dis-
puestos a sacrificarle ·er:. algo Ja ambición de rigor y éOherencia.
'La forn1a -de diccionario reúne las ventajas y 'ios inconve-
nientes de la. aproxúnación paradig¡nática y de Ja presentación
discontinua. Las ventajas son evidentes: permite eF acceso in~
mediato al conjunto: de la terminología en uso; >facilita la
ulterior introducción de los supJe¡nentos de inforn<.ación que
los progresos de las investigaciones no dejarán de aportar y,
sobré; todo, aut~rlza a· colocar juntos segmentos me.falingüístiM
>"·
Prefacio 9
cos cuyo grado de elaboración y formulación sea muy desigual;
al yuxtaponer definiciones rigurosas, informes sin acabar e indi-
caciones de lugares problemáticos todavía inexplorados. El in-
conveniente mayor·radica en la dispersión alfabética del cuerpo
de conceptos, que dificulta el control de la coherencia taxonó--
mica que se supone subtenderla. No obstante, esperamos con-
fiados que el doble sistema de remisiones adoptado (cf., útfra,
§ 6) hará aparecer afiligranada nuestra principal preocupación:
contribuir -mediante una terminología que a algunos podrá
parecer exageradamente sofisticada, e incluso engorrosa- a la
elaboración de un metalenguaje conceptual riguroso, condición
necesaria pc:ira que cualquier teoría de1 lenguaje acceda al esta-
tuto de lenguaje formal.

3. Un diccionario razona.do.

Pero un intento así 'de coherencia se opone inevitablemente


a la concepción· corriente del léxico especializado~ consideFado
como una lista héterogénea de entradas, donde ·~da una remite
.:.......exhaustivamente- a ·un contorno concep:tual distinto y,'·por
último, a fundamentos teóricos divergentes. La' decisión qu"e
hemos tomado de evitar ese· género de eclecticismo reposa.
ante todo, en la convicción de que no existen, en las ciencias
humanas y sociales, dictjonarios «objetivos». o neutros: la pre-
sencia de los redactores. está allí señalada, quiéranlo o no, por
la selección de los términos introducidos o excluidos, por la
manera de acogerlos y tratarlos. Así las e.osas, más ·vale optar
por la lucidez, explicitando nuestras preferencias y razonandó·
nuestras elecciones.
Esta determinación de· «razonamiento», de reflexión sobre
los conceptos -que, primero, inscribe a cada uno en su con-
texto teórico propio y que, luego, &e interroga· ·sobre su grado
de comparabilidad, sobre la posibilidad de una eventual homo-
logación-, acai-rea riesgos, como es, ante todo, el de eclipsar
10 Semiótica. vf4cionari.o
la origfuruÍdad d~ los aportes teóricos particulares en provecho
de cierta «vía real», hecha de constantes (si bien no:·. de solu-
ciones propuestas; al menos de problemáticas planteiiias) qu~
la teoria. ·del lenguaje ·ha recogido desde hace más ·~ menos
ciento cincuenta ·afies. Persiguiendo un doble fin -tnquietar
al: lector mostrando que no hay ciencia acabada, ~écha de
certezas~' ·y tranquilizarlo, al mismo· tiempo, al obtert'.er cons-
tantes. de objeti"."<?. se~ he::n.os tratad.o de servir, ai·nuestro' .
modo, a una cierta ideología del saber. ·

4. Bricolage lexicográfico.

Tal ~al es, este diccionario se pre~ta a ser juzg:ido tanto


sobre lo· que con#ene como sobre lo qt!-e pasa· por ·alto, y, asi-
miSmo ~ -cUantitativarnente-, sobre sus énfasis y sús insufi-
cienciaS.'; Algunas desproporciones, especialmente en su parte·
semiótica en sentido estricto, parecen justificadas: mi~ntras se' .
lleva a cabo, una:.investigaclóil ·está sometida a su propi~ estra-
tegia~ que. en u11/Ínomento'dado de su recorrido, favorece est~;
dominio o ·.aquell~ 'aprcxh:ri·ación a expensas ~e otros. tfD. ejeni;
pló patente es· !'3. preferencia manifestada, actu~lmePte, con -
respécto al análisis de las organizaciones discursivas -~ de los
textos individuaies, en detrimento de las coherencias ·. taxonO· ·
micas y de los corpus colectivos: nada tendrá de sorprendente
que éste se refleje a nivel tlel metalenguaje y desequilibre, de
estf: modo, la economía d~ la obra. Estos son solamente los.
efectos :de-]as ·oS~ilaciones. paradigmáticas, a la Vez l~gítimas
y enriquecedoras, que segmentan la historia de todá dfaciplina.
No ocurre lo mismo cuando se trata de fenómenos en boga: .
modas filosóficas que sólo alcanzan, por lo general, lá super-
ficie epistemológica sin rePercutit en el hacer científico:: mismo,
e incluso, modas. científicas -si se las puede llamar así- que
se expresan,· por eje¡µplo, ·1'or las preferencias concé:didas a
Prefacio 11
ciertos procedimientos de formalización o a determinados sis.
temas de representación. Jueces y, a la vez, parte en estos casos,
nos es dificil estar medianamente seguros de la solidez de
nuestros criterios de selección. .
Uno de estos criterios es el de operatividad; por él, hemos
,insistido, a veces, en hipótesis .apenas elaboradas o en modelos
de ~arácter local, que parecían haber sido· probados, al instau·
rar tal o cual práctica semiótica ite.rativa o generalizable. Aun
aqtú, la decisión reposa, las más de las veces, en: la intuición,
y la mirada más penetrante no verá sino aquello que quiera ver.
Las exclusiones se apoyan en criterios algo diferentes: · en
este diccionario ciertos conceptos o campos conceptuales se han
obviado, .no porque su iilterés y valor. estén puestos en tela
de juicio, sino porque su integración en la teoría de conjunto
ha parecido difícil, si no imp~sible. La lista de espera -con·
fiamos que sea provisional- está hecha de zonas de sombra
que denotan tanto la inmadurez de ciertos conceptOs como las
fallas 1 numerosas, de nu~tra competencia. El lector convendrá
en que la elección entre el empobrecimiento y la incoherencia
es, frecuentemente, difícil.

5. Lagunas.

Algunas de estas lagunas, tal vez más aparentes que reales,


merecen ser destacadas.
Es el caso, por ejemplo, del Jugar otorgado a la lógica anglo-
sajona. Si parece insuficiente es, de un lado, porque la proble-
mática de los actos de lenguaje ha sido homologada a la teoría
de la enunciación, formulada --como es sabido, bajo la intluen·
cia de las ideas de J. L. Austin- por :a. Benveniste y des-
arrollada, a continuación, cOmo parte integrante de la semiótica
general; y de otro, ·sobre todo, porque sus aportaciones pr~
píamente lógicas no habrían podido ser introducidas sino en
el ámbito de una presentación bastante completa de los len-
12 Semiótica. D'iccionario
guajes JógicoS, lo que, siendo ~erfectkmente legítimP, habrí~.
trastornado la economía general de la Obra. . :~· ·
· ·. SuCede más o menos fo mismo con ta pragmática ~orteame·
ricana; cuyo campo de preocupaciones se corresponde,: en partei
con la,. teoría de la competencia modal désarrollada :por nos-
otros. :~Las razones .. de nuestras reticen~ias son clarai: o bien
su :Problemática: forma parte integrante de la teoría:. del len-
guaje, :y entonces la traducción de sus contribuciont;~s en una
forma··semióti~ . ;cae por su propio pe~o, o bien la pr;agmática
-según su propia· definición- es sólo un apéndice uo semió-
tico de la . semiótica que. utiliza categorías heterog~neas (de
orden psicológico 'o sociológico, por ejemplo), en cuyo caso no
puede 'reivindi'car ~u lugar en un diccionario de semi4tica.
Otrk omisióri,""más .grave tal vez, es la que hace~os de· la
retóridt. Por tratar únicamente teorías del lenguaje vinculadas.
de modo direct<i. a la práctica lingüística con propósito cientí·
fico; n"Os ha sid~: :imposible tomar en consideración 1as teorías
retóricá.s .Y poéti~as· anteriores, ·tachadas -en buena parte;
de etnocentri~mo ··occidental. Una declaración de impotencia,
sobre iodo, por nuestra parte: incapaces de collverti* sus no..
ciones ·; fq.ndamen.tales en conceptos se:mióticos, lo soffios tam~
bién de asignarles un emplazamiento en el dispositivo teórico
general. Impotencia también por parte· de la semiótica actual:
pese a; los. trabajos muy apreciables -pero que distan mucho
'.. de ser. convergentes (principalmente los de G. Genette, del
Grupo' de·· Lieja,. de la lingüística textual}-; parece qúe la se-
miótica discursiva, de cará~ter figurativo, está todavía .J¡>Or cons~
tituirs~. !
Por; último, algunos deplorarán el pequeño lugar reservado
a las semióticas particulares, locales, dedicadas anim¿samente
a descifrar ·nuevos campos de investigación, a elaborar nuevas
disciplinas en el marco· de las ciencias ·del. hombre. El grado
de adelanto observado, muy desigual, de un dominio ~ otro, y
las tendencias céntrifugas -por Jo general metaforizantes~
13
:¡ V'2. ;'eencuentran en esas terminologías especializadas, nos han
·, n d t,,le a la prudencia: en lugar de registrar y de consagrar
a >flo 9 Pe. a veces no serla sino efímero, parece preferible tra·
U... de suscitar un · esfuerzo de conceptualización homogéneo,
aunque por ello deba ser más restringido.
·Desearíamos, en efecto, que este diccionario fuese el lugar
donde se registrasen los progresos de la semiótica, qúe el in~
ventario provisional .de los conceptos por él constituido fuese·
considerado abierto a nuevas y mejores formulaciones.

6. •Modo de empleo• .

.A fin de mantener el equilibrio entre la dispersión alfabética


y la organización taxonómica que le es subyacente y, también, .
para hacer de ellas un instrumento de consulta inmediatamente ,
accesible (que pueda servir, al mismo tiempo, de introducción
más general a la teoría del lenguaje), nos hemos inclinado por
establecer un sistema de remisiones a varios niveles:
- aun· a riesgo de· repetirnos, hemos cuidado de dotar a
cada entrada con una breve definición, incluso ·cuando se en-
cuentra en posición de antónimo o de hipónimo de un concepto
examinado más extensamente: el lector, deseoso de obtener
una información puntual rápida, evitará asf la pérdida de tiem·
po que, a menudo, lleva consigo el perseguir el sentido de una
remisión a otra:
- se ha pretendido que las re!lÜSiones inscritas al final de
cada articulo reúnan las principales imbricaciones conceptua·
les, proporcionando así el contexto semántico del término e:<a·
minado;
- los asteriscos, encargados ante todo de señalar dentro
de cada artículo los términos definidos en otra parte del mis· .
mo volumen, hubieran debido satisfacer nuestra inquietud de
interdefinición, al permitir comprobar la presunta coherencia
14 Se1niótica. DiCcionari9.
de la reflexión teórica, pero nos dimos cuenta iápidamente deÍ
carácter pleonástico de semejante proyecto: a excepción de las
palabras instrt.unentales' y' algunos verbos, casi todos' los tér-
minos de 'nuestro texto se encontraron ·dotados de un ·3.sterisco.
:Restringimos entc:inces el ·empleo de ese signo: sola:µiente e~
utilizado para aludir a los campos conceptuales más vastos que
permitan situar mejor el término definido (o a algurio de sus
elementos ·constitutivos}, Ya sea en un componente -.~utónomo .
de la teorla, ya, sea incotjiorándolo a un lugar epistemológico
circunscrito.
Tal, dispositivo, al inscribir cada término del léxico en tres
cOnfiguraciones .concéntricas, posibilita -en · consecuencia-
una triple lectura del diccionario a partir de cualquier entrada.

7. Agradecimientos.

Si ,bie~. es·t~ di~cionarlo ha sido construido )'ariiendo de


exámenes siste!lláticos y exhaustivos !levados a cabo ,sobre los
textos de un pequeño nwnero de semióticos y lingüi~!as (cuyos
nombres, al aparecer de. manera recurrente, éonstituyen un
· últinici sistema de refeTencias), aspira a ser testimoni9 y ex.pre.
sión de una, fuvestigación colectiva y, anónima: todos aquellos
cuyos ',trabajos e intuiciones han sido utilizados reciban aquí
el,reconÓcimierito de la deuda contraída por sus portavoces.
Los historiadores de la lexicografía: saben muy bien que lo3
ciiCcionarios :se elaboran a partir de o.tras diccionarios: ~l ~ha·
, .sido ,también nuestra 'práctica; hemos ínquirido con prolijidad
en obras próximas a Ja 'nuestra, ,buscando un punto de partidá,
una conftrmación'o simplemente la ocasión de sentar un plan-
teamiento: oponiéndolo' a otro. Nuestro agradecimientó: se dirige,
partictllarmente,', a Ph. Hamon, autor de un primer ·léxico de
semiótica,' quien nos convenció de la necesidad de dar una
form~: «razonada» a nuestra empresa~ Debemos a D. Patte y
Prefacio 15
M. Rengstorf el haber establecido los equivalent.es ingleses de
los términos aquí tratados.
Damos, de antemano, las gracias a todos aquellos que, por
sus observaciones, sus críticas y complementos de información,
quieran confirmar la utilidad de este trabajo.
NOTA A LA EDICióN EN LENGUA ESPAS!OLA

La presente traducción de la obra Sémiotique. Dictionnaire


raisonné de ta théorie du /angage ha sido llevada a cabo res-
petando algunos criÍerios que el lector se servirá tener en
cuenta:
a) se ha mantenido la nomenclatura ·ya habitual en el con-
senso de los especialistas, dentro del ámbito de Ja lingilistica
y la semiótica en lengua española: éste es el caso· de términos
.como taxonomía, adyuvante, lingüística frd.sif;a, exteroceptivo/
interoceptivo, falsación, performance, hipotdctico, bricolage, etc.;
b) otros lexemas («entradas•) difieren de !,os empleados
por ciertas traducciones: nuestro criterio de selección ha tenido
en cuenta, de un lado, la adecuación entre el lexema a definir
y la definición o concepto respectivo y, del otro, I~ coherencia
lexemática del conjunto de ·acepciones inc.luidas en el Diccio-
nario. Así se ha traduCido investissement por «Vertimiento);>
(y no por «investimiento», «investidura:., «invertimiento» o
«carga•, término este último que se encuentra expllcitamente
registrado en el artículo correspondiente); épistémé por •epis-
teme» (no por «epistema» ); destinateur por o:destinador» (no
por ·«remitente»); contrainte por «coerción» (no por «restric-
ción» -que tiene entrada aparte- ni. por «imposición»): con~
jonction, jcmction, disjonction e injonction por «conjunción:r>,
Sl!.MIÓTICA,, - 2
18 Semiótica. })iccionario
«)unCión», «_disjunción» e «injunción», ·respectivamellte (se han
rech~ado «uni4n» y·- «disyunción», ell razón d~ la .fuerte poli-
semia · del primero y la no concordancia del segwido }; faire
po.r ¡hac'er», en caso_s como «hacer emisivo» (se eJ!iCluyen· las
e<iuivalencias de «actO», ~acción» u «9Peraci6n» por 'tener defi-
nicioi.ies independientes en el Dicciot?ari.D); se han: adecuado,
en ciertos casos, Jos. neologismos del francés al español (por
ejemplo, unaifeS. por «~3.rias» -de ;la serie «bin~as», «Íer~
naria~», etc.-.-, ·y no pOr «.imitarlas»: término que, co1:no el fran-
cés ~nita{res, t.:Ólveria ambigua la acepción del metalenguaje
SemiÓ.lingüístic.O; catégorie thymique por «Categorl~ tímica)),
etcétera}; .
. . ,,, ,. : .. .. . .. ' .
: ..
.•
-...
c}; Ja traducción del verbo etre se· hace normalmente por
.a:sé.r»~:: salvo e~ ;los casos en que el .:sentido es· el ·4e «Se;~/
«esta:fi> (por eje.inplo, en tos ·enunciadi;:;s de estado). 'No obstan-
te, ha d<i advertirse que ·el térmmo «ser• alude aqtií sól~ a la
existenci~ en .s~ntido ~emi6tico y, de ningún modo, iri sentido
filosófico·. (u ontológico). Cf. Jos artículos existencia··.semiótica,
manifestación (§ 5), etc.; • . · ·
. . d}!. presentamos .ún apartado bibliográfico. reforencial de
«Obra'.s de los autores» y o~ro de «Obras de otros autores», a cargo
éste de Enrique )3allón Aguirre y el equipo dirigido por Daniel
Patte.' El .fndíce de entradas tiene por finalidad mdicar al lect9r
·la serie de- térirtÍnos :definidos: esperamos que ello le evitará
Ja búSqueda, a• menudo fatigosa, de aquellos que, por una . u
otra r:az6n, no -han sido ~onsiderados. ·

Roque Carrión Wam tuvo a su cargo parte de la primera


redacción en leng-da española y la consulta de tres a:bepciones.
Queremos dejar constancia de nuestro profundo. reconoci-
miento a Jos profesores A. J. Greimas y J. Courtés, quienes con
suma gentileza han resuelto las dudas presentadas y•'han acla'
rado .el sentido· de ciertos· pasajes; igualmente, al profesor
J3ernard Pottier, quien ha contribuido a solucionar. del modo
Nota a la ed. española 19

más apropiado posible Ia versión castellana de algunos neolo-


gismos f'ranceses.

Nanjing (Nankín, República Popular China).


París (Francia), diciembre de 1979.

ENRIQUE BALLÓN AGUllU!E

Hmu.ns CAMPOD6mco CARRióN


A

ABSTRACTO. Fr. abstrait, ing. uso que lo componen corresponden


abstract. - Un término cualquiera, a los actos que constituyen la ac-
perteneciente a la lengua natural o ción. Esto .quiere , decir que una
a un metalenguaje, es llamado abs. acción es un programa narrativo
tracto cuando su densidad* sémica «vestido•, pues el sujeto está alli
es débil (se opone entone.es a con- representado por un actor* y el
creto*), o cuando no contiene semas hacer se encuentra convertido en
exteroceptivos"' en su composición proceso*.
semémica* (en este caso, se opone 3. La semiótica narrativa no estu·
a figurativo*), Se distinguen así, a día las acciones propiamente dichas,
nivel de la semántica* discursiva, el sino las acciones .o:en papel•, es
compcnente abstracto (o teniático) decir, las descripciones de acciones.
y el componente figurativo. Bl análisis de las acciones narradas,
-+ INTEROCEPTIVIDAD, TEMATIZACIÓN. le permite reconoc.er los estereoti· ·
pos de las actividades humanas y
ACCióN•. Fr. action, ing. action. construir los· modelos tipológicos y
l. La acción puede ser deñnida sintagmá.tlcos que: las explican. La
como una organización sintagmáti· extrapolación de tales procedimien·
ca* de actos*, sin necesidad de pro- tos y de taleS modélos, puede dar
nunciarse por adelantado sobre la lugar, entonces, a la elaboración de
naturaleza de dicha organización: una semióUca de la acclón.
serie ordenada,. estereotipada o pro:: ' ACI'O, NARRATIVO (recorrido -),
gramada por un .sujeto competente. P!lR1'JRMANCB.
2. En semiótica sintagmática, la
acción puede ser considerada como ACEPTABll.IDAD. Fr. acceptabili·
el resultado de la conversión* -en té, ing. acceptabülty.
un momento. dado del recorrido ge- 1. La. aceptabntdad es uno de los
nerativo"'- de.un programa.* nana- conceptos no definidos de la gnu:ná.
tivo (simple o complejo). · En el tica generativa". Se apaya, entre
caso de un programa complejo, los otras, en la noción de intención*·
diferentes programas narrativos en (noción discutible y confusa en la .
ACEPTAB!UDAD -ACRON!A

medida' enque implicaría, pOr ejem- ceso de la comunicación;·:de Jas con·


plo, la coucieilcia, Y excluirla, al diciones fisjcas del rece'vtor.. , etc..).
menos,: el discurso · onfrlco), tal y- Se observa que hay aqllí una línea·
como se la vincula, generalrriente, de investigaci6n que no rlepende del
a la comunicación*:-1a intención del dominio semiótico.
locutor· no ·presupon_e sólo la : com- 4. Si se Ja sití'Ia en l.a instancl:a
petencia"' del enimciador•, sino· tam- del enunciatario, la aceptabilidad
bién· la deI enunciatario, capaz de aparece como un juicio epistémico"'
aceptar o rechazar los enunci:ados fundado en la modalidad del poder·
propuestos. Desde este punt9 de vis- . hacer (es •aceptable» ~o eque se
ta, la aceptabilidad 'deberla permitir puede aceptar)>), y los ·Criterios de
definir,'. fundamentalmente, la com- gramaticalidad* y sefuanticidad*
petencia lingüística. · ·· que permitan ejercer dicho juicio
2. Concepto sustentante de ona deberán ser buscados a iiivel de los
competencia· ideal (postulada como enunciS:dos realizados. < .
igual_-paia todos, lo ·ciiaJ.;· evidente- ~ CQMPETENCIA., PERFOR~AN~, ctt...\.
mente, eS ioverificable), la··acepta- MATICALlDAD, SEMANTICIDAD; INTERPRE-
bilidiid·. definC ·también· a··1a perfor- TACIÓN, ;NORMA.
mance*,· Hngüísticá ·que; desde este
punto de· vista, puede entenderse ACRONtA. Fr. achronie,,ing. achro-
como la· generaci6ñ.* y/o el ·reeono- ny. -El término acronfa se opone
cimiento* efectivo de los· enunciados a los conceptos de sinc$nía y dia·
aceptables; así como a las coercio- Cronía*, que designan, Según F. de
nes•~··que··iimit~ el ej.ercicio de la Saussure, dos dimensiones cuasi·
competeilcia del sujeto hablante· y autónomas de la invest~gación lin·
pueden ser de orden externo o in- güística. La acronía sirve para afir~
terno.· :i : . · ··· · · ·' mar el carácter atemporal de las
3." En· la medÍd:i en·· Que se trate estructuras lógico ~ semánticas, al
de hacer operatorio* este concepto~ tiempo· que la no· pertirlencia de la
debe · subrayarse· Su· dependencia, dicotomia saussuriana. :En efecto,
sobre todo, ·de Ja . ]?.el'formaneé: del por un lado, todo es t~roporal .fn
enunciatarlo; Ja ·.ac·eptabilidad~ apa:~ semiótica, comenzando· por el acto
rece;· entonces,""cOmO uri"juiéio' fela- de lenguaje~ pero la · duración no
tiVO .en lUga"·r.'.de ·ca,teg6rléo: 'las fra.~ juega en él ningó.n rol:· ·I.a metáfora
ses· (o IOs ··diScur:sOs) no son O.Cep. «espontánea.. e individuhl · sólo re~
tabtes/inacePtabt~. · sinó· niás o me- quiere un segundo pai:a:.:'ser pródu~
nos acej:itables. Las' ."caUsas "de esas cida, mientras ·que la mi.sma metá~
limiiaciones parciales o· . totalés de fora, inscrita: ~en la· lengua• (tordo
Ja performance son :múltiples y, a ~ aturdir, .por ejemp19), necesita
. veces; extralingillstiC'.as: . de orden, muchos. siglos para impOnerse. Por
pOr ejemplo, psicológico (el Carác- otro Jado, el cálculo JógiCo también·
ter. fini~o de la memoria ,;_incapaz se desarrolla en el · tiehi.po. peto
de ·retener .u:n número elevado de éste no juega ningún rol :en las ope-
gradOs ·de inserCi6n*....:.: · o ·el límite raciones de sustitución qúe en aquél
variable de.Ja ateni..ión)· o fisiológico" se efectúan. En consecuelÍ.cia, desde
(el ruido*, cuando Se trata del pro- el punto de vista de 1a~· teoría SC!~
ACRONlA-ACTANTE

miótica, cabe considerar a las es. se añade, en un momento determi·


· trticturas* semióticas profundas* nado del recorrido, a lo que consti·
como acrónicas, · mientras que Jas tuye ya el actante una vez configu.
estructuras discursivas -más super- rada Ja progresión sintagmática del
ficiales- precisan de la temporali- discurso.
zación*. 3. Definidos· así los roles actan-
-+ SINCRON{A. ciales, morfológicamente (por su
c9ntenido modal) y sintácticamente
ACTANCIAL (ROL, ESTATUTO (por la posición del actante), de-
-). Fr. róle, statut actanciel, ing. penden de la sinta.-<ls* narrativa de
actancial. superficie. Asociados a uno o a va-
. 1. El actante, 3. medida que. va rios roles temáticos* (que estr>~Ctu·
efectuando su recorrido narrativo*, ran el componente semántico del
puede ir uniéndose a cierto número discurso), permiten, al unirse con
de estados narrativos o roles actan· éstos, la constitución de los acto-
ciales que, a su vez, irán definién- res* (como' lugares de convergencia
dose en función de la posición del y de vertimiento de las estructuras
actante dentro del recorrido narra- narrativas y discursivas).
tivo* y del particular vertimiento -+ A"crANTE, N.utrtATIVO (recorrido
modal* que adopte el propio actan- -), PSICOSEMióTICA.
te. De esta manera, el actante.
sujeto, por ejemplo, estará sucesi- ACTANTE. Fr. actant, ing. actarzt.
vamente dotado d~ modalidades 1. El actante puede concebirse
tales como las del querer-hacer, como el que realiza o el que Süfre
saber-hacer o poder--hacer, en estos et-acW,-íii'"dépeñdfCñteñleñte---:o.e
casos, et sujeto asumirá los roles cU3.li:itil'ef otra determinación. Así,
actanciales de sujeto según el que- citando a L. Tesniete de quien se
rer, según el saber o según el poder· toma este término, «los actantes
hacer: roles actanciales que señalan son los seres o las cosas que, por
otros tantos hitos en la adquisición cualquier razón y de una manera
de su competencia modal {previa a u otra -incluso a titulo de simples
su performance*). -Desde el punto figurantes y del modÓ más pasivo-,
de Vista paradigmático, los roles participan en el proceso•. En esta
actanciales pueden ser considerados perspectiva, el actnnte designará· a
como una categotía* (en el sentido un tiPo de unidad* sintáctica, de
hjelmsleviano): constituyen, en efec- carácter propiamente formal, previo
to, un paradigma cuyos elementos a todo vertimiento• semántico y/o
se definen por la posición que ocu- ideológico:
pen en ei. recorrido narrativo. 2. El término «actante• alude a
2. El estatuto actancial define al cierta concepción de la sintaxis*
actante en un momento dado del .que articula el. entmciado* elemen~
recorrido narrativo -teniendo en tal en una serie de·funciones (tales
cuenta la totalidad de su recorri· · como las de sujeto, objeto, predi~
do anterior (manifestado o simple- cado), independientemente de su ·
mente presupuesto)-; el rol actan· realización en las uil.idades sintag~
cial, en cambio, .es el excedente que · máticas (por ejemplo, los sintagmas
ACTANTE

no:oiinal y verbal);. y que considera vacío en que se viertd: las formas


al predicado* comO núcleo del enun· sintácticas y las formas·: semánticas.
ciado. Es decir/ IciS. actantes deben . · 4. Tipológicameri.te, éabe distin·
ser considerados .C!Jmo · términos- guir dentro del discursó 1 enunciado:
resultantes de esa· relación que es 1) los actantes de ta cOP:lunieaclón
la función.:- Ásin'Jsmo, .este con· {o de la enunciación*): el narrador*
cepto de aC.tante·~·pµede ser inter· y el narratario, y también el ínter.
pretado :en el· marco de la gramá. locutor* y el interlocütario (que
tica de los casos (F:illmore), donde participan en el diálogo*:·estructura
a cada caso cabe coD.siderarlo como de interlocución de segu.pdo grado);
representación de ·úna posición aC.. 2) Jos actantes de la nattacl6n {o
tanéial. A este res~o, la grruná· del enunciado*): sujeto/Qbjeto~ dCs·
tlca ·actandal,. de tiPo semió,tico, se tinador/destinatario; d~de el pt~·
presenta col:no una .formulacióll más to de vista gramatical, ~:e. opondnip
abstracta de Ja·: gramática de ·tos aquí los ac:tantes sintácUeos (ins--
casos: situáda a nivel más profuu· <::ritos en un programa~ narrativo
do* y sin estar sometida a una for· dado), tales como el su.Jeto de esta·
ma lingüística frásici, la gramática do* y el sujeto de h8fer*~ y loS
actancial puede des'crlbit la organi: actantes funcionales (o ;;sint:agmá.ti·
zación de los discursos narni,tivos cos), ;:zue comprenden 10.s roles aC::
(a nivel de la sintaxis* narrRtiva, tauciales"* de un recorrido narra.ti~
llamada de.··superíicie), gracias .a las vo* determinado. En relación con
categorías'*'· ' sintácticas funcionales las dos dimensiones~ reconocidas
(sujeto, objeto, predicado, etc.) q':!.:: en Jos discursos1 se distinguirán.
ella misma, explicita para construir· por ejemplo, los sujeto.s pragmáti-
se.· Desde· este pun~o ·de vista, se cos* y. los sujetos cognoscitivos'*
1
distingue de las gramáticas catego· {estos últimos -apii.recen ·: ya sea eo
riales (que se mueven en· torno a sincretismo cOn los sujetos prag·
las clases · morfológicas) o de las máti~os, ya como actol:ps autóno-
gramáticas sintagmáticas (apoyadas mos ..:...en el caso del infónnador•-,
en las clases· distribuclonales), o reconocibles, al menoS¡ corno pÓ.
3. El concepto de actante .t:ene siciones implícitas en ·el actante
mayor extensión, sobre todo en se- observador*). Teniendo .m cuenta
miótica literaria, .. que el. ténnino su pre.Senda por el prócedimiento'
personaje* ·.y, también, que el de de figurativizaci6n* (a nivel de la·
dram.a.tis persona (V, Propp), pues semántica discursiva), el '.actante se
no sólo comprendC· ::i· 1os seres hu· denominará tncllvidual~ d.ual o colee:.
manos, · sino también. a los anima· tivo.
les, los objetos (;_ los conceptos. 5. Todo actante pued.e ser pro-
Además;. el ··térm,in9. personaje per- yectado- sobre el cuadro·~- semiótico
manece·: ambiguo por· corresponder y, así,· encontrarse articulado en,
tatnbién, .. en ·parte, ·.ál concepto de por lo menos, cuatro poSiCiones 'ac·
actor* (en el que Puede realizarse tanciales (actante, antil\ctante, ne-
un sincretismo* d~ ~ actantes) defi· gactante, negantiactante)~:,:Articulado
nido_:como Ja ñ.gtirá y/o el lugar de este modo, el actanté se denO:..
15 ACTANTE-ACTO DE LENGUAJE
mina protoactante• y se transforma tación sintáctica tendrá la forma de
en categoría* actancial. dos enunciados.• -un enunciado de
6. En la progresión del discurso hacer* y un enunciado de estado*-,
narrativo, el actante puede· asun.tlr de Jos que el prlmel-o rige al· se-
cierto número de roles actanciales*, gundo que está en pÓsición de ob-
definidos, a su vez, por la posición jeto del hacer. La representación
del actante en el encadenamiento canónica del acto puede formularse
lógico de la narración (su definí· como una estructura* modal del
ción sintáctica) y por su vertimien· tipo:
to modal* (su definición . morfoló~
gica). Así, el heroe"' sólo se consi·
derará como tal en ciertas posicio·
nes del relato: si no lo fue antes, o bien del tipo:
no podrá serlo después. Fes, .... 01 es, n o,¡1
~ .FUNCIÓN, ENUNCIADO, NARRATIVO
(recorrido -), SINTAXIS NARRATIVA y puede ser reconocida a nivel de
DE SUPERFICIE, ACTANCUL, ACI'OR. la gramática narrativa de superficie.
3. La interpretación de esta. fór-
· AcTO. Fr: acte, ing. act•. mula es simple: el actuar presu-
t. En 1a tradición filosófica que pone Ja existencia de un su.jeto y
se· remonta a la escolástica, se en· se identifica con la modalidad del
tiende por acto .i:aquello que hace «hacer•; produce un estado (o un
ser": ·el actuar es, entonces, iden· cambio de estado) formulado como
tificado con el 11hacer-ser» y corres· la junción* de un objeto con el
pande al paso de la potencialidad sujeto (que puede estar o no en
a la existencia. Semejante defini· sincretismo* con el sujeto del ha·
ción, cuyo carácter intuitivo no se cer). El actuar corresponde~ pues,
nos escapa, es de una generalidad parcialmente a la performance* y
m'qy grande: no sólo todos los presupone una cOlnpetencia* modal.
«acontecimientos11 que constituyen considerada como -1a potencialidad
la trama de los discursos narrati- del hacer. Por esta razón, el ·acto
vos ·son interpretables como actos, se definirá como el paso de la com·
sino que el discurso mismo es taro.· petencia a la performance, cpaso»
bién Un acto, una serie organizada interpretado sintácticamente como
de actos cognoscitivos. Por lo tan· Ja modalidad* de hacer, la cual, a
to, es indispensable disponer de un su vez, es la conversión -a nivel
modelo de representación* del acto, de Ja sintaxis antropomorfa*- del
capaz de ser empleado en el aná· concepto de transformación*.
lisis semiótico y que, eventualmen· ---. HACER, ACTO D2 LENGUAJE.
te, pueda servir de punto de par·
tida para una semiótica de la ac· ACTO DE LENGUAJE. Fr. acte
ción*. de langage, ing. speech act.
2. I.a definición intuitiva del ac· 1. La definición general de acto'*
tuar como «hacer~seri., Jo muestra se aplica al acto de lenguaje (lia-
compuesto por dos predicados en mado también acto ·de habla). Tan·
relación hipotáctica*: su represen· to si se entiende por éJ un <1tomar
ACTO ; DE ·LENGUAJE 26
Iá ··patabfa.1 descritO: y situado en Ja hic et 'nunc- puede ser· visto como·
dimeb.sión· pragmática del discurso, una performance* particular, pre-
·como si se ,le ob~er.va en ·et marco supone :-bajo la denominación ge-
.<epragmáticoi> · de · 13. Comunicación, neral de competencia*...:.~ la exiSteri·
el acto 'de lenguaje puede ser··con- cia ·.de una semiótica ·,en la que
sideradO; ante todo; como un ·hacer participan, íntegra o p_arcialmen.te,
gestual~ significanté; capaz :de ser el enunclador* y ·el enundatario.
inscrito,; en el pai-~digma de ·otros Esta semiótica es, a la .J~.. sistenU,I.*
gestos sori:or_os coinparabtes (can- y proceso* (o discursiyización*)" e
tar, 'silbar; regoldar,, balbuCear... ), implica.et hacerse carg6 de la·. for·
de formal- ·Parte· -corno úno de 'Jos ma* (o del 'esquema*) :§de la ·sUS~
términó~· de una ·categoría semán· tancia* semióticas. El clcto de len-
tica apfopiada (•habiar»/«callarse», guaje no es una creaci4n ex nihilo
pbr ejemplo), de ocupar posiciones a situar· en el comieri:io de Íoda
sintagmáticas divenias en la ' estra- reflexión semiótica: ·es ·ún aconteci·
tegi,a de la comunicaciólt · («tomar miento particular insCrito en un
Ja palabra:t-; «otorgar_ la palabra», Sistema de coerciones* múltiples.
«quitar· Ia•:paiabra», etc.), ·sm que 3. Por otr¡i parte, el '.'acto de len- ·
sea necesario haCer intervenir, en guaje, ·en cuanto hacer,.·se presenta
ningtín :ínémento, .el. contenido pro- como un uhacer·ser/est3n: Jo qué
pio de·.~ lo dicho. A esta actividad da origen al Ser/estar es Ja signifi-
somática* . significante habría·· que cación*. En su as¡;)ectoi_pragmáti~.
reservarle la denominación de ilcto se identifica, entonces,'. con la se-
de habla; podría ser estudiada en miosis* y reúne a los d.Os polos de
el .marco de la cá:tegorización* del la enunciación, el signÚicante* y el
mundo hecha por las lenguas natu· significado*. Bajo. su 2.Specto cog·
rales, y dar· lugar al establecimien- noscitivo, el acto de lenguaje ·es
to de etnotaxonomías comparadas significación:, esto es, pfoducclón y
del habla. En cuanto actividad so- aprehensión de Jas dife'rencias sig-
mátlca,;se inséribe.'en 1a dimensión nificativas. .·
pragmática* de !oS:discursos y debe 4. Pot-··úJtimo, el acta: de Iengu3..
ser tratado en el marco más amplio je puede ser considerado como un
de· la gramática narrativa. «hacer-hacer•, es decir, como u11a
2. Considerado .cOmo un .hacer* manipulación* de un sujeto por
específico, el acto· de lenguaje apa- otro mediante el habla. Evidente·
. rece, ante todo; como un «hacer- mente, no se trata dél problerria
saber», ~es ·decir,· como un hacer · del imperativo y del vo~.~tivo (cono-
que produce 1a·co~junción* del· su- cido desde siempre poi¡. los lingüis-
jeto - enunciatarlo* ·.con un objeto* tas). sino de las propiedades gene·
del . saber. Desde- esta perspectiva, rales de la organización discursiva
para ser eficaz o s;implemente posi- que, reunidas bajo el ~Pelativo de
ble,' presupone un cOnjunto de con- moda1ización del disctirs'o, pueden
diciones semióticaS· que aseguren ser reconocidas como .f0rmas p3.r~
la· transmisión def:objeto de .saber. ticuJares de proE:ramai;'i"6n disctir-
Dicho de otro modo, si todo acto siva (tales, el hacer· pei'suasivo* {)
. de lengµaj~ ocur;r.eP,cial -realizado el hacer tnterpretativo'').;Y. a la vez,
Z1 ACTO DE LENGUAJE-ACTOR
corno formas impllcitas · y presu- actor es una unidad léxica, de tipo
puestas, constituthi::...> de la compe- nominal que,. inscrita en los dis·
tencia modal de los sujetos en si- cursos, puede recibir -en el mo-
tuación de comunicación contrac- mento de su manifestación- ver..
tual y/o polémica. Basta postular timientos* de sintaxis* narrativa
que los sujetos participantes en la de superficie y de semántica* dis.i
comunicación (poco importa si se cursiva. Su contenido semántico
encuentr~n inscritos en discursos propio parece consistir, sobre todo,
figurativos y si pueden ser anali- en la presencia del serna de indivi~
zados como ... sujetos en papeb o dualización* que lo· hace aparecer
4<SUjetos reales», productores ellos como una figura* autónoma det·tutl·
mismos de discursos) están dota- verso semiótico. El actor puede ser
dos de una competencia modal, individual (Pedro) ·o colectivo (la
para que los actos de lenguaje que multitud), .figurativo* (antropomor·
ellos producen como perfonnances fo o zoomorfo) o no figurativo (el
puedan interpretarse como perfor- destino).· La individualización· de
mances modales de orden cognos- un actor está marcada a menudo
citivo, aptas para constituir el ob- por la atribución de un nombre
jeto de una semiótica. de la mani- propio,. pero esto no constituye ne·
pulación. En este ámbito específico cesariamente la condición sine qua
es en el que inscribimos los aná.. non de su existencia (un rol temá·
lisis, aún parciales, de la filosofía tico* cualquiera, t:el padre•, por
del lenguaje (Austin, Searle y, en ejemplo, con frecuencia servirá para
Cierta medida, O. Duerot). denominar a .un actor): Ja ohomás·
5. La problemática que ongma tica*, dependiente de.la semántica
el examen del acto de lenguaje discursiva, es así· complementarla
coincide parcialmente con la pro.- de la actorializaclón* (uno de los
blemática de la enunciaci6n. procedimientos de .la sintaxis* dis·
~ ENUNCIACIÓN, PRAGMÁTICA, éoMU· cursiva).
NICACIÓN. 3. En un primer momento, ·e]
actor ha sido comparado (y opues-o
ACTOR. Fr. acteur, ing. actor. to) al actante*. Desde el punto de
l. Hist6ticamente, el término ac- vjsta comparativo, cuando se dis-
tor ha ido sustituyendo de forma pone de un corpus de cuentos-
progresiva al de personaje (o dra- varlantes se observa Q.ue, por.ejem·
matis persona) en aras de una ma- pJo, un solo actante-sujeto puede
yor precisión y generalización (una encontrarse · manifestado por mu-
· alfombra volante o una sociedad chos actores-ocurrencias. No ·obs-
comercial, por ejemplo, son acto.- tante, el análisis distribucional*,
res).· haciendo posible su empleo así utilizado, pone en evidencia,
fuera del ámbito exclusivamente li· sobre todo, el carácter invariante*
terario. del actante, sin infotmarnos Sobre
2. Obtenido mediante procedí"' la naturaleza del actor. Al' mismo
mientos de desembrague* y embra- tiempo, debe tenerse en cuenta que
gue* (que remiten directamente a el actor sobrepasa los límites de la
la instancia de la enunciacióh*), el frase y se perpet\ia con ayuda de
. ACTOR-ACTORIALIZACION 28

Jas· anáforas* a 10 largo del dis· ~ INDlVlllUALIZACióN.. ~IDENTIDAD, AC·


cutso (o, al menos, de tina secuen- TORlALIZACIÓN.
cia· discursiva), de corúormidad con
el · principio · de 'identidad*. Desde ACTORIALIZACION•. ,Fr. actoria-
luego, el actor deja de ser la varia- Iisation, ing. actorialii:C,iion.
ble'*'. de un solo actante .invahante, l. ·Junto a la tempdralízaci6n y
para asumir, su~ivamente, roles la espacialización*, la·;_ actorialtza~
actanciales* diversos; asimismo, al ción es uno de los componentes" de
ser!' el .discurso 1m . despliegue de la discursivización*. E:1>tá basada,
valores~ semánticos. el actor ,puede como las otras dos, en la realiza·
desempeñar uno o· varios roles te- ci6n de las operaciones de desein-
máticos* diferent~s; . ·: ·. . brague* y de embrague*. El prooo-
· 4. Se llega,· de ·este modo, ·a una dimiento de actorlalizaclón se carac-
definición ··más'· Precisa del actor: teriza por tratar de reÚ'nir los dife-
es el lugar· de ci.):q.vergencia y de rentes elementos de l6S componen-
vertimiento '·de los dos componen· tes semántico y sintáctico paci
tes; el,- sintáctico ;,y el semántico. establecer los actores* :del discurso.
Un lexema; para: .ser considerado Estos· dos componentey, sintáctic:o
actor, debe ser portad9r, por lo y semánilco (susceptibles de S'i:!r
menos,·, de .un rol- actancial ·y un analizados separadamente), lleván -a
rol temático.- Aña:d.iarnos que el ac- cabo sus recorr:idos a6t"anclal y te-
tor'· no,.es ·Sólo· et.-lugar· de: verti- mático, en el plano discursivo, de
miento·.'de· esos roles, sino también . manera autónoma; la ··teunión, tér-
el de sús .iransforril..aciones, pues el mino a término, de aJ. menos ui:i
diScurso ~ cOnsiSte·:·~encialmellte. en rol actandal* y un rgt temático~
el .juego ··de: adquisiciones Y pérdi- es lo constitutivo de 'los actores
das· sucesiVas de \;atores*.. (dotados así de un rnod."f'S oper.andi
·. 5., Sé.· ve,· entonces, aparecer en y, a la vez, de un modus essendíj.
la superficie del te.Xto una estro.e· 2. Cada discurso nal-rativo pÍ"e·
tura* ·actorlal que,·. en el. fondo, es senta una distribuclón_'.·actorlaJ. ·que
una estructura tclpológica: ]0$ dife- le es propia; esto 'se .. :debe a que
rentes .actores del· discurso consti- los valores* pragmáti~"os* puede·n
tuyen .una· ·red.-·de. lugares (\'acíos ser objetivos* o subjCtivos* -pu·
por. naturaleza) ei1 ·que se manifies-- diendo manifestarse bien como pro-
tan· tas' estrocturas·1 narrativas y piedades intrínsecas de' los sujetos
discursivas.... · ' ·· {por ejemplo, «ser po_tente:&), bien
6.·. Desde et.Punto 'de vista: de la como .objetos tematizados indepen~
producción* del discurso, cabe di,s.. dientemente (por ejeni:Pio, «po~
tinguir .-entre el sujeto de la enun- un ejército:o)-, y a qÚe todo rol
. ciación* (que es un actante ·implí· · actanclal puede ser interiorizado
cito,· lógicimente .presupuesto· por (presentándose en sincretismo* con
el enunciado*) y el ·actor de 1a enun- el sujeto) o autonoro~ado (apare..
dación; en' este último ·caso, el ciendo entonces bajo 13.! forma, por
actor será.1 ··por ejemplo; "cBaude-- ejemplo, de ·actores ·· séparados: ·. el
laire• · en.•Cuanto·, de6ni4o por la adyuvante* o et oponente que .sit'w
tótalidad de· sus dis=<>s. ven como representan.res
. .de las es··
29 ACTORIALIZACION-ADECUACION

tructuras modales de la competen- pia del eje sintagmático* del ·1en-


cia de los sujetos, el inforn~ador* o guaje.
el observador* que encaman, por · 2. La semiótica narrativa se ha
su parte, sujetos cognoscitivos* au- visto obligada a sustituir la pareja
tónomos). Por ·esto, la instancia tradicional virtual/actual par la ar-
del recorrido generativo* caracte-- ticulación ternaria virtual/ actual /
rizada, entre otras cosas, por em- realizado, para poder explicar me-
plazar una estructura de actores, jor las organizaciones narrativas.
puede dar lugar a una tipología Así es Como los sujetos* y los obje-
actorial de los discursos narrativos, tos*, antes ·de su junción*, están
de cuyos dos polos, el primero pre• en posición virtual; su actualización
sentarla iµia distribución actancial y su realización* se operan tenien·
y temática variada pero situada en do en cuenta los dos tipos de rela·
·un solo .actor, y el segundo, en cam· clones característicos de la fun.
bío, se caracterizaría por _una or- ción*: la disjunción* actualiza su-
ganización de actores diferentes y jetos y objetos, la conjunción* los
autónomos. Una tipología semejan- realiza. . . .
te se situaría, en c.onsecuencia, en- 3. En esta perspectiva, la actua-
tre una distribución psicologizante lización, como cperación, puede
y una distribución sociologixan,te de corresponder -por efectuarse par-
los actores. · tiendo de una realización anterior-
4' ACIOR, DISCUR.SMV.CIÓN, SINTAXIS ª Wla transformación* que opera
!)ISCURSIVA. la disjunción entre sujeto y Gbjeto;
equivaldrá, entonces, en el plano
ACTUALIZACION. ·Fr. actu.alisa- figurativo*, a la privación'*: según
tion, ing. actu.alization. que, a nivel actorial, el sujeto del
1. · Desde el punto de vista de los hacer sea o nO diferente del sujeto
modos de existencia semiótica, y desprovisto, se tendrá una actua·
dentro de la perspectiva lingüística, lización transitiva* (figurativizada
la actuallzaclón corresponde al paso por Ja desposesión*) o una actuall~
del sistema* al proceso*; así pues, zación reflexiva* (la· renunciación*).
la lengua,.. es un sistema virtual* A un valor* cualquiera vertido en
que se actualiza en el habla*, en el objeto se le llamará valor actua~
el discurso; de la misma manera, llzado en el momento ·coen la
se dirá que un lexema*, caracteri· posición sintáctica) en que éste se
:zado como simple virtualidad, se encuentre en relación clisjuntiva
actualiza gracias al contexto en el con el ·sujeto'.
cual se emplaza bajo forma de se- ~ EXISTENCIA SEMIÓTICA, VALOR.
mema*. Empleada en el marco de
la categoría* virtua1/actua1, la ac- ADECUACION. Fr. adéquation,
tualización es una operación por la ing. o.dequation. ·
cual se hace presente* una ·unidad l. Se entiende por adecuación la
de lengua en u.n contexto 11.ngüís- conformidad qUe puede reconocer·
tico dado: la existencia actual (<iin se entre dos magnitudes* semióti-
praesentialf) asf obtenida, es pro- cas. La adecuación será concebida
,.
'.~
ADECÚACIÓN; AFÍRMACióN ·,·. ' · 30

dÍ? 'fo~a··-diferente, ·según la<" nia- Jir. adquisición es la ft;>"-O:na positiva


neia de enfocar lá. relación entre de la: consecuencla y Qepende, en·
esas m3.gnitudes. · ,,..... · tonceS, de esa figura di§cursiva qÚe
2.- Se hablará de adecUación ver- es la ·prueba. -~
tical ·cUWtao Se postule o exija ·la . -lo Rl?AL?ZACIÓN1 COMONicictdN, CONSE·
conformidad entre dos· niveles dis- CU.ENCIA;'·J>RUEBA. .
tintos .de· lenguaje! entre la' semió-
tica* - objeto y su metalenguaje~
ADY'.fJVANTE. Fr. adjuvant, i:rig.
de· descripción*, entre la ºteoría* helper. - El adyuvante:. designa ·al
cOn.ceptualizada Y el lenguaje for- auxiliante positivo cua'ndo ese rol
mal* que la axiolnati:za, entre las es asumido por un aCtor* distinto
estructuras profulldas* y las estruc-
del sujeto del hacer: _.:corresponde
turas de· superficie*. (aunque el tér-
a un' poder-hacer inq.ividualizado
mino equivalenciá* sea más apro-
piado en ese caso). ·,' . que, en forma de actol;', aporta su
ayuda a la realización;:del progra.
3. se ·reservar~ · el nombre de
ma* riarrativo del sujeto*. Se opp.
adecuación horizontal para la con-
ne, paradigmáticamente,-. aJ. opon_e~·
fonnida:d q"ue pueda · establecerse te* q~e es e=1 auxiliante·: riegativo.
entre el proyecto,.-~ su- realización~
-:> AUXILIANn?. ';.
es decir~ entre la teoría y Stl a'pli-
cación. En· efecto, conio toda :teoría
es arbitra.rla:t (ai· ·no depender de AFlRMACióN. Fr. .~?iffirmation,
los datos de 13. eXperiencia), 1a · exi- ing. affirmation. f1-
genci3. '!de ) adecUaclón, en relación 1. Genere.lmente. 1a:; gramátita
con ella~ se plantea sólo en el mo- tradicional distingue cilatro ciases
mellto ~de ser aplicada. -Por lo de- de proposiciones*: afiimativas, n~
más, la co11Strucci6ri. de U.'1.a teoría gativas, · ínterrogátivas .. e imperati·
apunta a su aplicación: debe ·somC. vas. Mientras que las ·dos últimas
terse, en consecuencia, a ~ertos están orientadas hacia .et interlocu-
postulados· (como '"el principio de tor y tratan de provocar su hacer
empirismo* para i... Hjelmslev) que verbal* y/o somático•, -las proposi·
gannticen, ·par ·ádelantado, las· con· clones. afirmativas ·y negativas son
diciones de su adecuación;· sólo constataciones de existencia,
""-> TEORíA, VERIFICACIÓN, VALIDACIÓN. dirigidas al interlocuto;' cuya ínter·
·. vención no es soJici~da. Por ~o
ADQUISICióN~ Fr~ acqu.isition; ing. general, a estas ·última¿-~se las agru·
acqui.sition. - Situada a nivel figura- pa bajo la designación· :de proposi·
tivo*,- la adquistclón -opuesta para· clones declarativas. (L!(S: primeras
digm.áticamente a la privaci6n*- gramáticas generativas'* engendra·
representa la transform.acl6n* que ban únicamente frases' ¡.IeclarativaS
Ja conjunción*' establece ·entr~ SU· afirmativas, ya que la·; afirmación
jeto*' yr objeto*: por corresponder · era. considerada como la· propiedad
a Iii realización', li adqu,isición se de las frases de base.) Nosotros pre··
efectúa de· modo: 'transitivo -·(atri· ferlmos considerarlas· como enun.
bución~). o reflexi"(O (apropiación*). ciados informativos* (o.'.no modali·
Inscrita en et esquema narrativo*, zados): su producción ·Supone irn·
J •'
31 AFIRMACION • AL~TICAS
plfcitamente un "'Yº digo que>1-, y AGRESOR. Fr. agresseur, -ing. vil-
nada más. lain. - En la terminología de- V.
2. En la tradición de Port-Royal Propp, el agresor es Uno de lOs
se dice que la constatación de exis- siete personajes del cuento mara-
tencia que lleva consigo este tipo villoso, cuya «esfera de acción::io
de enunciado se manifiesta median- comp~nde «Ja ·fechoría, el combate
te la predicación, al ser la cópula y las olras formas de lucha contra
francesa étre (ser/estar*) un instro- el héroe~. Siguiendo este criterio,
. mento por excelencia para la afir- se puede ver en él al anti-donador:
mación. Más o menos con el mismo frente al donador, que es quien
criterio distinguimos, por una par- asegura el rol del adyuvante* y
. te, los enuncladoSJ* de estado*, por- otorga al héroe* la competencia*
tadores de esa constatación de exii;. necesarja para su performance*, el
tencia semiótica y ·caracterizados agresor -homologable al oponen-
por Ja relación de junción entre un te- tiene por_ función esencial ins~
sujeto* y un objeto* (es decir, la taurar la carencia y, por ello mis--
aafirmación~ en el sentido débil de mo, engranar lo que Propp deno-
constatación), y por otra parte, los ;mina el <{movimientoi> del relato: la
en@ciados de hacer* (donde Ja transformación* negativa requiere,
aserción* y Ja negación* son los para sU equilibrio, una transforma-
dos ténninos contradictorloS*). De- ción positiva.
bido a su ambigüedad, nos parece ~ CA~CIA, OPONENTE, OONADOR.
que debe evitarse el término afir-
AL~TICAS (MODALIDADES -).
mación.
-)o ASERCIÓN, JUNCIÓN. Fr. modalités aléthiques, ing. ale-
thiological modalitieS. - Desde el
AFORIA. Fr. aphorie, . ing. apho- punto de vista semiótico, la estruc-
ria (neo J.). - La aforla es el térmi· tura modai llamada alética ·se pro-
no neutro• de la categorla* tim.ica duce cuando el enunciado modal,
que -se articula en euforia/disforia. cuyo predicado es el deber*, se im-
-+- TfMICA (categoría -). pone y rige al enunciado de estado* :
AGRAMATICAI.IDAD. Fr. agram· (que tiene .al «ser/estar" por predi-
maticatité, ing. agrammaticality. - cado). La proyección binaria de esta
A diferencia de la lingüística gene- estructura sobre el cuadro* semió-
rativa* y transformacional, que se tico permite formular Ja categoría
apoya en la c.om:petencia* del enun· modal alética:
ciatario para distinguir lo que es . deber-serxdeber no ser
gramatical de lo que no lo es, se
entenderá por agramattcaUdad la no deber no ser . no deber-ser
imposibilidad de que dos elementos
Cada uno de los términos del cua-
del plano sintáctico estén co - pre-
dro es · susceptible de una denomi-
sentes* en una unidad jerárquica·
mente superior; se trata, pues, de nación sustantiva: '
una de las formas posibles de la nece#dad><. imposibilidad
incorµpatlbilidad.
~ GRAMATICALIDAD, INCOMPAmn.mAD. posibilidad contingencia
ALllT!CAS' ALGÓRITMO 32

Así pu~> ~da térÍnino: m~dal ,pue-- glas apropiadas. Esu;,. saber-ha.ter,
de ser _tratado;· elltonces, como una encontrado en todo tii;O de discur-
estructura*.·. modal . (su definición so narrativo en fornía de hacer*
sintáctica), o como un valor* me-- programático (variable, según el
da! (su definición taxonómica). Si tipo de competencia 4~ los sujetos
bien la lógica ttiodal utiliza exclu· operadores, y capaz ;,:de soportar
sivamente valores modales (o deno- éxitos o fracasos), resitlta cneutnl·
minaciones), · la -~emiótica modal, IizadOI' al explicitarse;)odas las Í'e-
por -su· pa,rte, éonfiere a ca~ den<r glas e instaurarse el ·sujeto opera-
minación- su ·dEifinici6n sintáctica. dor, cualquiera que é_ste sea, lla-
;-+ DEBER, MooAimm. mado autómata*: la :·ubicación y
el buen uso de semejante operidor
· · · ALFABgTo. Fr.· aI.phabet, ing. neutro es una de Iaif condiciones
atphabet. -En metasemiótica* cien· de la cientificidad*. ?.-
tífita, -el alfabeto designa el inven- 2. Es evidente que ·:la presenta-
tario ._. fü:üto 'de símbolos elegjdos ción algorítmica de serles de reglas
para la descrlpción* de un objeto sólo puede hacerse progresivaxnen·
semiótico y' que permltCn la cons. te; en principio, la ·organización
trucción de expresiones*. Se emplea, algorítmica .no puede ~:er conf~'tida
a inenudo, ·en ·este sentido, pero ~e sino a ciertos procedimientos* · de
modo; impropio, ·et. término estmc- análisis.. Así, en semiótica narratl\'a,
tura. La· prlncipál critica que se le los pro~mas* narrativos comple-
puede' formular a. este concepto del jos, por ejemplo, son:.:ya susceP.ti·
metalenguaje* es Iñ. de no _tener en bles ·de recibir una :.'formulación
cuCnta suficientel'.!lente el aspecto · algorítmica. En esta inisma pers·
paradigmático"" de todo lenguaje y pectiva, hemos propui;;Sto consi(le-
representar al, ·alfabeto sólo como , rar como aliorltmo d~'"'. transfor.i:na·
Un simple inven~¡itio no estructu· clón* .a una serie orde"nada de ope-
rado; .. ··.··· racioIÍes que permitan pasar del
"·-"'.'. ~~~tÓ. ·m~16N. estado inicial al estado tina! de un
relato* cerrado. -Cuando un algo-
'
ALGORITMO. Fr. algorithme, ing. ritmo comprende instrucciones que
a!gorithm. · · · prevén el paso, en et··cuadro*,se-
1. Se entiende·: Por algoritmo la miótico, de un térmifjo primitivo
prescripción de urf:·arden* determi- ($ 1) a su contradictorl.O (51) y ..de
nado en la· ejecució'.n de un cohjunto éste, por implicación*; :al contra.rlo
de ·instrucciones explícitas*, con mi· del primero (82), puede ser deno-
ras a solucionar de.rto tipa de pro- minado dlaléetlcO.
blema planteadó. Bn la metasemió-, 3. Se designa, a veces, con ·et
tica* científica, que tiene como tarea nombre de 1ingilisttca::.: algorítprlc:a
representar el funcionamiento , de a una· rama de la lingüJStica que se
una semiótica bajo la forma de un _interesa, particularme;i.te, Por. ia
sistema de reglas,..,· el 31.gorltmo cO.. · automatización de los ,procedimien·
rrespollde a un sab'er*-hácer ~intag. tos de análisis lingüísticos para· su
mático* capaz de Programar, como tratamiento automático': o, de ma·
instrucciones, ~~ ~plicación de re- nera más general, por iOs lenguajes
33 ALGORITMO -ANALIS!S

de documentación y de programa- por tanto, para unir dos enuncia-


. ción. dos, dos parágrafos, etc.
.... l<OOL\. 2. La anáfora se denomina &:ta•
matlcal cuando utiliza, para la iden-
ALTERIDAD. Fr. altérité, ing. ·al- tificación, las categorías* semánti-
terity. - La alteridad es un con-. cas que forman parte de la arma-
cepto* nO definible y opuesto al de. zón explícita de la gramática de
identidad, otro concepto del mismo una lengua natural cualquiera (por
tipo. Ambos, sin embargo, pueden ejemplo: Jos pronombres, el verbo
ser interdefinidos, al menos, por la hacer, etc.) •.
relación de presuposición* recípro. 3. Se da 8.náfora semántica -en
ca. De la misma manera que la sentido restri.ñgido- cuando un tér- ·
identificación permite estatuir la mino condensado (o denominación*}
identidad de dos o más objetos, recobra una l!)."Pansión sintagmáti·
la distinción* es la operación por · ca·anterior. Desde el punto de vista
la que se les reconoce su alte- terminológico, cabe distinguir el
ridad. · anaforlzado (término primero en el
-+ .ÍDENTIDAri, DIFERENCIA•. enunciado, y en expansión) del ·ana~
forl%ante que lo recobra en forma
condensada. Esta misma relación
AMBIGOEDAD. Fr. ambigu.ité, se denominará ca\,fora cuando el
ing. ambiguity. término recobrado (el cataforlzan~
l. La ambJgüedad es Ja propie· te) preceda, en el discurso, al tér-
dad de los enunciados* que presen- mino en expansión (el cataforlzado).
tan simultáneamente varias lectu- 4. La identidad, establecida me-
ras". o interpretaciones* posibles diante el reconocimiento* a la iden-
(sin predominio de una sobre otra). tificación, es una .relación anafórica
2. La ambigüedad puede ser de formal entre dos términos, de los
tipo léx.lco, con los fenómenos de que uno está presente o es actual
homofonía u homografía; está, en- y et otro está ausente, en otra par-
tonces, provocada por el carácter te o en el pasado: én este sentido,
plurisémico de los lexemas•. podrá hablarse de anáfora cognos-
3. La ambigüedad sintáctica se citiva.
manifiesta cuando, a una estructu• 5. La anaforlzacl6n es uno de los
ra sintáctica de superficie•, Je ccr principales procedimientos que per~
:rresponden dos o más representa· miten al enunciador* establecer y
ciones* semánticas. mantener la isotapía* discursiva (las
-+ DESAMBIGUAMIEN'IO, HOMONIMIA, relaciones interfrásicas).
UNIVOCIDAD. ~ REFERENCIA, Rtt'l!RENTE, . 1DENTI•
DAD, a>-REFERENCIA.
ANA.POR.A. Fr. an.aphore, ing. ana-
phora. ANA.LISIS. Fr. analyse, ing. arnz..
1. La anáfora es una relación de lysis - Independientemente de los
identidad parcial que se establece, diversos empleos dadas en la len-
en el eje sintagmático* del discur- gua corriente, el término análisis
so, entre dos términos* y que sirve, designa, en semiótica, desde Hjelms-
SEMIÓTICt.. - 3
ANALIS!S- ANALoG!A

l~, ·el~ :conjunto· de procedimientos _lógica en el funcjonailliento d~ las


utilizados en . la descripción de un lenguas naturales; la óbservancia o
objeto*'.:·. semiótico.. Estos pfocedi· la imitación de los mti.delos ana19-
mientas tienen la "particularidad de gicos -que corresponden al razona-
considerar;· ink:ialmente, al: .objeto miento implícito- se... manifiestan
en .cuestión como un · todo de sig· mejor en la práctiq,_ individual
niñcación''', y tratan de establecer, (disez. p. ej., en lugar·:de dites, en
por un lado, las relaciones entre francés), que en las tiansfonnacio·
las partes "de ese qbjeto, y por otro, nes diacrónicas de las lenguas .. -
entre Jas partes ·y el todo que él Al gei:ieralizarsé el lérmino analo·
constiruye,. continuando ásí, de ma- "gía y. perder su sentid¡) preciso, ha
nera recurrente, hasta el agota- sido D.ecesario · reempl~lo por eJ
mierito del objeto, ·es decir, hasta de homología, ya que la homología
el registro de las unidades mínimas ·sirve para designar ·1a actividád
iridescomponibles. Tal descripción analógica. .;·
es JlarD.ada a veces descendente, en 2. En sentido" lato, ·;la analogf'a
opoSición .a la sínt~sis* !Jamada as- designa un parecido m'ás o merios
cendente. .:-SegÚn ·el nivel· de perti- lejano entre dos o. mas magnitu-
nencia elegido, sori posibles diver- des• ·entre las cuales'; se admite,
sos tipos de análisis: · estarán en el implfCitamente, una diferencia esen-
pláno ; sintáctico, Por ejemplo, los cial. Empleado en setj:)iótica como
análisiS· distribucional* y sintagmá- un concepto no definidO, el término
tico*, y en el .. piano semántico, el ((analogía» puede ser q-t'it en la me-
análisis sémico* o componencial. dida en que la compi:obaciÓn por
-+ PROCEDIMIENTO; CCONTENJDO. analogía es prolongada:· por un ha·
cer dirigido a determ!~ar en él la
ANALOG!A. Fr•. '1.nalogie, ing. an.a.- estructura.
logy. 1. · "3. A menudo se habla de analo-
1. En sentido eStrlcto, la analo- gía a· propósito de las relacicne:s
gía" es'· la identidad* de la relación que un sistema o uri'.:·proceSo se.
que réúne, por separado, a ,dos o mióticos son capaces dé mantener
más parejas de téMninos. El térmi- con su referente* exten:io, es decir,
nO aanalogíait esi· .así, sinónimo de con el mundo* natunit: ·Cuando se
propoi"ción matemática; - ·si, en trata de Jas lenguas naturale:s, .. Ja
lugar :de regisuar· estas re1acicines, analogía es· un problema limitado
se trata· de establecerlas, ·nos en· al estatuto de las op.ornatoPeyas
contráremos :con operaciones cog- (cf. motivaCión*); en Cambio, · apa·
noscitivas, como la 'de que el cono-- rece en el centro de .~los debates
cimierlto de tres términos de una cuando se trata de tas semióticas
propoi-ción de dos parejas permite visuales, donde la icOnicidad* es
detCrminar el cu'arto, operaciones considerada por algunÚs como una
a las ·que;' a menúdo, se les, da el característica de ese i~nero de se·
nombre de i-aZOtÍamlento por ana· miótica. ·· ·
togÍa. ·La· tradici6n. Jingüístici atrl· 4. La analog{a sirve;·'. iS"ualmente,
buye, :desde los neogramáticos, un de plinto de partida P.ara explicar
rol importante a la actividad ana- la constitución y el ~esarrollo .de
35 ANALOG!A • ANTJTES!S

las isotopías* metafóricas, suscep· nitud'* semiótica presupuesta, en


tibles de homologarse entre sí. relación con una magnitud presu·
-+ HOMOLOGACIÓN, !CONICIDAD. •poniente.
-!). LOCALIZACIÓN ESP!r.CIO ·TEMPORAL,
ANCLAJE. Fr. ancrage, ing. an· PRESUPOSICIÓN.
chorage.
l. Se entiende por anclaje histó- ANTI·DESTlNADOR. Fr. anti-des·
rico el emplazamiento, en el mo- tinateur, ing. anti·sender. - Proyec·
mento de producirse la instancia tado sobre el cuadro* semiótico, el
de la figurativización* del discurso, destinador -considerado entonces
de un conjunto de índices esPacio- como proto-actante*- da lugar, por
temporales y1 más particularmente, lo menos, a cuatro posiciones actan·
de los topónimos* y de los cronó· ciales (destinador,· anti-destinador,
nimos* dirigidos a constituir el si- no-destinador, no-anti.(iestinador);
mulacro de un referente externo y la pareja más utilizada, destinador/
a producir el efecto* de sentido anti·destlnador (correlativa a la de
«realidad», sujeto/anti-sujeto), está ligada, evi-
2. A veces se designa también dentemente, a la estructura polé-
con el nombre de anclaje· al esta- mica de los discursos narrativos~
blecimiento de relaciones entre en· ~ DESTIWAOOR, PROTO • Act.\NTE. POÚ·
tidades semióticas dependientes de MICO.
dos semióticas* diferentes (la ima·
gen publicitaria y su leyenda; el ANTI· DONADOR. Fr. anti· dona.
cuadro y su título) o de dos ins- teur, ing. anti-addresserlsender. -
tancias discursivas distintas (el tex- ParadJgmáticarnente opuesto al do-
to y su título): el anclaje tiene pór nador, en la estructura polémica
efecto transformar una de las mag· de los discursos, ' el anti-donador
nitudes en referencia contextual, puede homologarse· al oponente.
permitiendo así eliminar la ' ambi· ~ OPONENTE, DONADOR, roté.aco.
güedad de la otra.
-> HISTORIA. ANTtFRASIS. Fr, antiphrase, ing. ·
an.tiphrasis. -Antigua figura*. retó-
ANTERIORIDAD. Fr. antériorité, rica, susceptible de recibir una de.
ing. anteriority. finición semiótica rigurosa, la ant(."
l. La anterlorldad es uno de los fra:ds corresponde -en el marco de
dos términos de ta categoría* lógi- una unidad sintagmática dada- a
co· temporal anterioridad/ poster:o- la sustitución* de dos signos* que
ridad, que permite -a partir de un poseen al menos dos sernas* con-
punto temporal cero, identificado tradictorios*. ·
tras el desembrague* temporal con ~ ANTfrEsIS, RELl\CIÓN, METÁFQIU.
el tiempo de entonces o el de aho·
ra- construir un cuadro de locali· ANT!TESIS. Fr. antithese, ing.
zación temporal de los programas* antithesis. - La antítesis, antigua
narrativos. figura* de la retórica, puede recibir 1
2. Se entiende por anterioridad una definición más precisa, en se.
lógica la característica de una mag· miótica, como la manifestación*
ANTITES!S ·ANTROPOMORFA

-en el'eje sintagmático""- de la an· ' ten térm.hlos intermedios (cmarl·


tifrasis*. y, ·en cons~uencia, pi-esen- do• / «mujer•), de las~ 'anton1mlas
tar combinados Q.ps· signos* que po· escalares que admitenl, la gradua-
seen1 ·aLmeaos, 'd0S sernas* contra- ción y están relacionad;s· a menudo
dictorios* (o, a ve<;:~s. contrarios'*). con los procedimientos:: de com:Pa-
~ ANTÍFRASIS, REUCXÓN. . ración («grande>/ «meQiano• /«pe-
. . ·."'·
lt ·~: .
queño»; «caliente•/ «tibio¡)/ «frío>).
ANTONIMIA. -: r~~!antonymie, ·. ing. Según · el tipo de reia;Ción lógic,a
antonyiny. · . . . . reconocida entre ellos, 'se hablai'á
l. En leXicologí~;: tradicionalmen- de antónimos contradict~rlos* ( t:sol-
te· se estableC.e opoSición entre las tero• / «casado•), contrarios \ «sii-
relaciones :.de sinOnimia* · -recono- bir• / «bajar,.), redproCos («con1-
cibles entre dos o más lexemas*- y prar1t/ 4'vender:&), etc. &
las de anÍonimia que permiten em· · -+- ESTRUCTURA. '·.
parejar los .términos~ pese a (y por ,,
causa de) Sus diferencias. Dos lexe: 'ANTROPOMORFA (SlNTAX!S
mas pertenecientes a la misma cla· -). Fr. syntaxe anthYopomorphe,
se* morfológica ( «caliente:it / «frlo»; ing. anthropomorphic sjhta.x. - E11
•subir»/ •bajar») se asemejan por oposición a 18. sintaxis ~1ndament;al
el hecho dé ·poSeer cierto número (concebida como opei-aéiones lógi-
de. Sernas* comunes y se distinguen cas efectuadas en el marcode uri
por otros sernas que se oponen en- microuniverso establecido). la sinta-
tre· sí.> xis narrativa de superficie es llama·
2. ASí pues, el -problema de la da antropomorfa, porqiie, una vez
antonimia no es de orden léxico, llevada a cabo la converSión*, stisti-
o,. más ; bien, el plano Jexemático tuye Jas operaciones l"Ógicas por
sólo manifiesta las oposiciones* sé- los sujetos del ]:lacer* J.. también,
micas sub-yacentes: una vez reco- porque define los sujetos{'de estadó*
nocida Ja .. existencia de un eje* mediante su junción. cO'n objetos
semántico .que vincula a los dos en los que se pueden vehir valore;g
lexemas, queda por saber en qué que los determinan. Asimismo, los
consisten las opOSitiones sémicas . conceptos de competencia* modal
que loS distinguen· y si es posible y de performance* que cl.Ja emplea.
constituir una tipología, .de orden sólo tienen sentido si se refieren
lógico, de esas reláciones' opositi- a sujetos humanos. - Aplicado así á.
vas. El 1 problema .dC la antonimia la sintaxis narrativa, el calificativo
léxica no puede ser resuelto fuera de antropomorfo no ti~ne relación
del marco ·de lá reflexión sobre ta con el antropomorfismo,:que ca?c--
naturaleza de Jas t:structuras* ele. teriza a ciertos .discur$i;)s narrati-
mentale's ·de. }a sigilifieación. vos -sobre todo, etnotiteranos- y ·
3; .Las dcfinido~es y las clasifica· que atribuye, a menudo,~ ei estatuto
clones de :las antóñimias· varlan de de sujeto del hacer a-, ºcosas o a
una;:lexicología a otra. Se distin- seres no humanos.
guen,, por ejemplo, ·las antonim!as ~ SINTAXIS NARRATIVA ÍlE · SUPERFI-

. ·~··: . .
polares;",'categóricaS,: que no admi- CIE, PERSONIFICACIÓN.
.
37 ANTROPóN!MO-ARBlTRARIEDAD

ANTROPóNIMO. Fr. anthropo· como sub-componentes de la prue-


nytne, ing. anthroponym. - Los an· ba"'.
tropónimos, como denominaciones ~ Af.>OUISICIÓN, REALIZACIÓN.
de actores* por medio de nombres
propios, forman parte del subcom· ARBll'RARJ.EDAD. Fr. arlJitraire,
ponente pnomástico de la figurati· íng. arbitrariness.
vización. Asociados a los topóni· l. El término arbitrariedad (del
mos* y a los cronónimos*, los an· signo*) es muy . impreciso en la
tropónimos permiten un anclaje* teoría saussuriana, donde designa
histórico dirigido · a constituir el · el carácter no fundado, inniotivado
simulacro de un referente externo (es decir,· imposible" de interpretar
y a producir el efecto· de sentido en términos de causalidad), de la
~reiilidad». relación"' que, al reunir el signifi-
-+ ONOMÁSTICA,. FIGURATIVIZACIÓN, cante* y el significado*, é.s consti·
REFERENTE. tutiva del signo lingüístico. Histó-
ricamente, eSta concepción ha des·
·APERTURA. Fr. -ouverture, ing. empeñado un rol importante y per-
opening. - Correlativa al concepto mitió a F. de Saussure, ·entre otros,
de cierre, la apertura (entendida en fundar la autonoin.ía de Ja lengua*
un sentido siempre refativo) carae· considerada como forma*.
teriza a todo sistema semiótico ar· Si bien no existe ninguna relación
ticulado en el que el número de causal o <1natural• entre el signifi-
posibilidades -ofrecidas por · la cado «mesa.. y el significante «me-
combinatoria*- sobrepase en mu· sa" desde el punto de vista del fun-
cho al de las· combinaciones* efec- cionamiento de la lengua (o de una
. tivamente realizadas: podrá. decir- semiótica cualquiera), es imposible,
se, entonces, que el esquema* de por el contrario, no reconocer la
un universo* semántico es abierto, existencia de una relación necesaria
mientras que su uso* corresponde (S. Benveniste) ··-o pre~uposición*
a Su cierre. recíproca (L. Hjelmslev}- entre e1
-t CIERRE. significante y el 'significado, reJa.
ción denominada función* semiótica
APROPIACióN. Fr. appropriation, (L. Hjclrnslev), cuyo establecimien-
ing. appropriation. - Situada a ni- to (o semiosis) define, en· primera
vel figurativo*, la apropiación carac- ·linea, el acto* de lenguaje,· Lógica·
teriza la posición del sujeto de un mente necesari~, esta relación lo es
enunciado de . estado* cuando ha también desde el ·punto de vista
adquirido el objeto*· de valor por social: los signos de una lengua na~
su propia acción. Se corresponde, tura1, aunque convencionales (otro
pues. con la realización* reflexiva* término propuesto ·por Saussure),
del objeto de ·valor efectuada en no son arbitrarioS, ya que los pro--
cualquier rnoinento del recorrido pios sujetos hablantes pueden ope-
J1arrativo*. Junto a la· atribución*, rar, ellos misnÍos, sustituciones* de
la apropiación es una de las dos significantes o de significados.
formas de adquis1ción que" pueden 2. Et carácter arbitrario, o "1ás
entrar, a título de ·consecuencia*, o menos motivado, de los signos
. -~
. ! ·. : .,.
ARBITRARIEDAD ;XRBOL 38

no· dePende ·de· su·. :naturaieza "di: 6. La cuestic:Sn de la arbitrar.ie-


signo, sirio de su interpretacióU;· dad del signo reaparece, pÓr último,:
es decir, '.·def Sentimiento o· de· la cuando se trata del probl~ma de la
actitud que una cori).unidad lingüís· construcción del metaleri&uaje* (o.
tica o un iñdiv'iduo ln'ántieneri: ffen· de fa metasemiótica): las . Unidades
te a .los signos qu'e utilizan. Se reconocidas y ciCfinidas dui-ante una .
trata aquí, entonces; d~ hechos .me· descripción* semiótica sOn redeS
tasemlóticos · y no seniióticOS. · · · relacionales puras, y las denomina~
3. Otra con.fusión puede evitarse, ciones que se les puede · conferir
si se · sitúa: la problemática de ·1a son arbitrarias. Sin embar'go, si t_al
arbitrariedad del signo únicamerite metalenguaje es aplicado una se· :a
en el marco·· de las. simióticas bi· mi6tica*-objeto, las denom·inaciones
planas*, '.COn· exclusión de las se· elegidas deberán ser ad·ecuadas ·y
0

mióticas ~ ffionoplaD.as* tuyas· unida· comprender el mayor ni.\mero de


des ±níniriias:. de ,mahifestación: no informaciones posibles sob.re la ma-
son ~ign~s·; S.ino SE::ñal~s· (L ..;HjelmS· nifestación*. ·:
lev). . ·. . . · . . . . -')-.MOTIVACIÓN, DENOM_INACÍóN.
4. La Pi-oblemática· .de. lá ·arbitra·
riedad del 'signo, que trata las re· AltBOi.- (o GRAFICA ARBORES.
laciones 'internas en los sisteinas CENTE). Fr. arbre ou gráphe arbo·.
semióticcis, se une a la cuestión, resaent, .ing. tree.
bastante: difer'ente, de las relaciones 1. El ~rbol es una representa·
externas ·entre una semiótica dada ción* gráfica de los resuftados del
y Ia •realidad• del mundo exterior, análisis* (ó de la descripción* es~
o de laS relaciones entre dos· se- tructural) de un objeto ·~emiótico,
mióticas"'! diferentes (el problema del qu_e; se visualizan, sobre todo,
de lo •noniinable11 · en semiótica las· relaciones* jerárquicas y los
pictórica, por. ejemplo). En"· el ·pri· niveles d~. articulación (i:> deriva-
mer caso se trata' · Q.e problemas ción*). Al :Puntd de bifurcación, en
concernientes al estátuto del refe- cada uno· de los 'niveles :·represen-
rente*, en el segundo,. de ta·particu· tados, se le llama nudó* Y está ·
Iaridad de las lenguas* natura· dotado de. una etiqueta*· (símbolo*
les.· , o denominación*), Aunqtie eviden-
S. Paralelamente,· L. Hjelmslev c;ia (debido a Ja contigüidad hori-
introdujo: la · dicotomía arbitrarlo / zontal de los nudos) la~;·ex:istencia
adecuadO•. El ténUino arbitrarlo de reladones que se suPonen exisw
Je sirve 'para.· design\U" a la teoría tir entre die.has nudos eri cada ni-
-y, más concretamente, a ta teoría vel, la representación en~:'foriña de
semiótica"'- en la in.edida en que, árbol no aporta informadón sobre·.
siendo una pui'a cor.strucci6n co- la naturaleza de esas re1aciones;
herente, -no depende· de los datos esto explica la gran dive,i'sidad de
de la experiencia;. pO_~- el contrario,· tipos de árboles y las dificultadeS
cuando una teoría (o·:atguna de sus de su irítcrpretación•. Asf'. pues, e's
premisas) es',' aplicabl~. a los dá.tos importante que las regiaS• de for-
de la experiencia, será llamp.da ade· mación .de árboles sean .,adara.das
cuada {Q ·conforme :?-· su fin). en cada oport"unidad. ·
39 ARBOL • ARCHILEXEMA
La representación en forma de de Ja frase y el postulado de la
árbol da cuenta, de manera gene- binaridad* de las relaciones estruc-
ral, de Ja actividad taxonómica* turales.
que caracteriza, en gran parte, al 5. El árbol puede ser considera-
discurso de orientación científica. do como una de ·Jas formas posibles
Según ·Jos dos ejes fundamentales de representación de un mismo
del lenguaje y los dos tipos de re· objeto semiótico y, como tal, eva-
des relacionales que en él se reco- luado en función de su rendimiento
nocen, se pueden distinguir los ár· y de su simplicidad*. Así pues, una ·
boles· paradigmáticos y los árboles misma fl'aSe, por ejemplo, puede
sintagmáticos. ser representada de manera equiva-
2. Los árboles paradigmáticos se lente con ayuda de un árbol, me-
emplean en el análisis sémico* (a diante el e:tnpleo de paréntesis* eti-
componencial) y en la elaboración quetados O con una matriz*. Tam-
de diversas etnotaxonomías. Repre- bién Ja representación de las reglas
sentan, esencialmente, jerarquías ca- de reescritura* (empleo de la flecha.
racterizadas por relaciones hiponi· significación atribuida a la orienta·
micas"' y vh;ualizan la imbricación ción de izquierda a derecha, yuxta-
que resulta de entrecruzar los cri· posición emparejada de los símj::io·
terios de división. Jos) es homologable a la represen-
3. Los árboles sintagmáticos se tación en forma de árbol.
emplean, sobre todo, para represen· La gráfica arborescente es un útil
·tar descripciones sintácticas*. Las precioso y preciso, que no -debe ser
m'ás conocidas entre ellas -el stem· confundido con un esquema o dise-
ma de L. Tesniere y el indicador* ño cualquiera.
sintagmático de la gramática gene- ~ GENERATIVA (gramática -). RE·
rativa*- manifiestan ya algunas de PRESE.~"TACIÓN, ctASIFICACIÓN',
las posibilidades de usar gráficas
arborescentes. ARCHILEXEMA. Fr. arclziie:ce1ne,
4. En lingüística, en sentida res· ing. archi-Iexeme. - El archflexema
tringido y, actualmente, el más fre- es el lexema* de una lengua* natu·
cuente, el término· «árbol:o se apli- ral estudiada que sirve para desig·
ca a la representación del análisis nar, integrándolo, a un micro-siste-
en constituyentes* inmediatos; este ma taxonómico. En el ejemplo, muy
análisis Je sirve de punto de paI'" conocido, de B. Pottier, «asiento»
tida a la gramática transformado· es el archilexema que comprende
nal, que. lo considera· como la des- los lexemas «Silla», «canapé11, «Si·
cripción estructural, por excelencia, llón», etc. Aunque útil, este término
de Ja frase*. Por se;: una mera re- no es, sin embargo, enteramente
presentación, el árbol no vale lo satisfactorio: por un lado, al ser
que vale la teoría* en Ja que se la taxonomía una· jerarquía*, un
basa la descrli:>ción. En el presente archilexema es capaz de tener otro
caso, el árbol evidencia Jos princi- archilexema de rango superior (por
pales presupuestos. discutibles, de ejemplo, 11mueble» por aasiento•);
Ja teorla subyacente que son. entre por otro lado, existen «archilexe-
otros, el principio de la linealidad* mas» que no forman parte de la
ARCHILEXEMA • ASEMANTICIDAD 40
:.:··
lengua . natural, sino del metalen- vez, combinables. Empleado en esta
guaje* ·empleado para estudiarla acepción, el término <1articutación:.
(por ejemplo, -o:objeto fabricado» parece, a la vez, suficientementé
por (¡tmueble» ). Debería proponerse general y neutro, es d~ir. to me-
un -iérmino paralelo para nombrar nos comprometido en i'elación con
estós «archilexemaS consti:uidos11, Jas diferentes teorías li~güísticas,·..
-io TAXONOM!t\. 3. L. Hjelmslev le di a este tér-
mino ·un sentido más.. restringidO,
ARMAZóN. Fr. armature, ing. ar- designando, con él, el ·..''análisis* de
mature; - Empleado en sentido un sistema", por oposiCi6n a divi·
metafórico por C. ··Lévi·Strauss, el sión* 1 ·que denon;ína al análisis de
término· armaz60 :¡(! sirve para de- un proceso•.
signar un conjtinto· .no determinado 4. Por doble artlcuta~lón, A. Mar·
de propiedades formal~ de orden tinet trata de definir )a especifici·
sintáctico* y/o semántico* que se dad de las lenguas* natµrales frente
mantienen como in,~ariantes* en dos a los. restantes «medió$ de comu·
o más mitos. u·tilizado en otros nicación»: Ia primera·'articulaci6n
campos; este término es sinónimo, se halla situada en el nivel de Jo.~
signos~morf~mas* y la ~egunda, en
a menudo, de estructura"ft (en ·sen-
tido lato). -;~. el de los fonema\*• c:i~e constitµ·
yen los fonnantes* par-4 los morfe-
. mas. Resultado de la aPlicación del
ARTICUI:.ACION. Fr. artiCulation, principio de la combiriatoria1:, .tal
ing. articulation. interpretación no es ·. inadeclláóá,
1. En f0nétí~* se ·entiende, ante sino que hoy parece .'Jnsuficiente,
todo, poi- artic:qlación el fun:ciona- por corresponder, en ~fecto, al e.~·
miento fisi9lógico de los «órganos tado de la lingüística añterior· a !Os
del habla,.· y, además, la capacidad avances recientes de las investiga-
de este aparato fonatorio: de Produ. ciones sintácticas y seX:O.ánticas ..
cir una: combinat~ria de •sonidos
del leniuaje}) necesarios para cons· ASEMANTICIDAD, Fi. asémanti·
tituir el ·plano· de la expresión*. cité, ing. asemanticitY. (neol.). ·-
Seiún la" instanciá* de aprehensión A diferencia de la lingüística gene.
de· los hechos fónicos, se distin- rativa* y transformaciorial, para· la
guen: fonética articulatoria (a nivel que una frase se denomina asemán·
de la emisión). fonética acústica (a tica "cuando· no puede :recibir nin-
nivel de la transmisión) .y fonética guna interpretación* semántica, nos·
auditiva (en el plano de· la recep. otros definiremos la asemantfcldad
ción). -desde un punto de vi~ta operato-
2. Por extensión y de· manera rio- como la imposf~ilidad ci~e
general, la articulación designa toda tienen dos elementos q~1 nivel se-
actividad .semiótica:* del enuncia· mántico (por ejemplo, ·;dos sem"as*
dor* O -si se corisidera· el ~ resul· o dos sememas*) de e$tar presen.
tado de esta aciiVi.dad- toda for· tes*, al ·,mismo tiempo, ·:en una uÍli-
ma de" organización semiótica crea- dad* jecirquicamente S~perlor: en
dora de unidades* distintas Y, a la este caso se trata, por lo tanto, de
41 · ASEMANTICIDAD-ASPECTUAL!ZAC!óN

una de las formas posibles de in- s, s,


compatibilidad.
~ SEMANTICIDAD, INCOMP~TIBILIDAD. aserción negac.ión ·
«SÍ» cno•
ASERClóN. Fr. assertion, ing. as-
sertion..
1. La aserción es, junto con la
(2) t (1)

· negación*, uno de los .dos términos s, ;;,


de la categoría* de transformación*
que,. a su vez, está considerada negación aserción
como la formulación abstracta de otSi»
la modalidad factitiva* {tal como Como consecuencia de la opera-
se manifiesta en «hacer-ser•. o en ción de negación que. transforma 8:
chacer-hacer1> ).
2. La aserción no ha de confun- S.2 en 52, la aserción se presenta
dirse con la afirmación, que es la como la , conminación del término
constatación de existencia* semió- S.z. qu~, e~ lugar de retonVertir a
tica, de orden informativo, y que 51 en S 2, provoca, por el contrario,
puede ser representada -en los la aparición del término S 1• La
· enunciados de estado*- por la re- aserción sintagmática tiene, enton-
lación de junción* · (conju11ción o ces, por efecto actualizar la rela-
disjunción). La transformación -es ción de implicación (si «Si,,, enton-
decir, la aserción y/o la negación-- ces «sf»), con la Condición de que
es, por el contrario, la función* de S sea el término propuesto y S2
los enunciados de hacer* que rigen, el1 término presuponiente. La aser·
sobredeterminándolos, a los enun- dón simple (de la lógica clásica)
ciados de estado (o, en el· caso de ha de distinguirse, Por lo tanto1 de
la manipulación*, a las estructuras la aserción sintagmática (ésta po-
modales del tipo de 1rhacer-ser.., ). dría llamarse también denegación*),
Esta distinción explica el hecho de que establece Ja relación de com-
que sólo se pueden «asertar» ·O ne- plementariedad* entre los dos tér-
gar contenidos planteados con ante- . minos. La diferencia entre los dos
rioridad; permite, asimismo, postu- tipos de aserción (sólo reside en la
lar eventualmente sujetos distintos formulación, pues se trata de cate-
para la aserción y para la afirma- gorías de contradictorios) se vuelve
ción (el hacer de Sr puede afectar evidente cuándo Ja categoría está
el ser de S 2). · constituida por ei eje de. los· con·
3. Paradigmáticamente, la aser· trarios {donde, por· ejcr.iplo, la com-
ción se define como contradictoria* plementariedad de los términos_ no-
a la negación. Sin embargo, a nivel muerte + vida introduce contei:ii_dos .
de la sintaxis* fundamental (o de distintos). . ,
las operaciones elementales efec- -+ AFIRMACIÓN, Nr;GACIÓN, CUAI>stO
tuadas en el cuadro* semiótico), Ja SEMIÓTICO, SI~TAXIS . FUNDAMENTAL
aserción ocupa una posición sin·
tagmática definida y aparece c~mo ASPECTUALIZAClóN. Fr. aspec-
una operación orientada"': tualisation, ing. a.-.pectualit.ation.
ASPEC!UAÚZAClóN · 42
l. · En el to.arco del recorrido ge-. tosi>, 'se está obligado ~ introdutjr
nerativo*; se entenderá por aSpec- en esta configuración* diScursiva Un
tuallzaclón ··1a ubicación -:.en· el mO:. actante-,o~servador, pai:9 el que-:la
mento :· de la -. discursivización- de acción· realizada por un· sujeto ins·
un dispositivo ·de categorías•· aspec- talado en el disCurso aiiarece como
tuales que revelan la presencia im- un prciceso, es decir,::como una
plícita de un actante observador*. umarchal>, uun desa·rrollo». Desde
Este procedimiento parece ser gene- este punto de vista, la aspectuali·
ral· y caracterizar :a los tres cotnpo- . zación• de un enunciado· (frase, se-
nentes: ··actorialización'*; espacializa- cuencia o discurso) corresponde a
ción• y·temporalizáción*, Constituti· · un doble desembrague,~: el enun·
vos de -'los mecanismos del desem- ciadoi:-~ delega en el discurso, por
brague•:· No ·obstante,. únicameii.te un lado, un actante-sujeto del hacer
la aspeCtualizaciórÍ de la temporali- y, por el otro, un sujeto cognOsci·
dad. ha'.: dado lugar hasta ahora a tivo* -. que observa y 'descompone
elaboraciones ConcePttiale'.s que· me- ese hacer transformándólo- en pro-
recen· ser ···reteri.icíaS. -' interpretad3s ceso (caracterizado entonces por los
y' completadas. ,., · :, sernas· de duratividad*:;o de puh·
2. Todo .. discurso temporalizado tualidi:td*, de perfectiVidad* o de
comprende. dos tipOS de vertimien- imperfectividad* -tennii-iado / no--
tos nuevos· que prOducen· estos dos terminado-, de incoatiVidad* o de
efectos -.de sentido: ]a temporalidad terminatividad*). ,._ .
y la aspectualldad. El efecto de la 4. La ubicación de tal estructura
tempoialidad está vinculB:do al em- actancial permite describir las difC·
plazamiento. de un conjullto de cá: ientes' articulaciones* del proCeso
tegoi'ias · temporales que, al d.epen- (o de sus aspectos), pet'o no dice
der 'de' la 'instanciS.: de la enUnci3.- nada sobre ta naturaleZa del prO:.
ción*, ProY~cta sobre ·el enunCiada ceso mismo. Situándota:·.'en ·el tiem·
un·a or&3.nizicióri. temporal de Orden po, se dirá que la· aspectuallzación
topológico;· ·mien ti-as que 'el efecto es uná. sobredetermin~iión de Ja
de . a.Sp_ectualidad resulta del vertí· temporalidad y que el proceso, aun
miento ·de '1as categorías aspectua- siendo: temporal, no es cognoscible
les. que convierten· las funciones* sino gracias a · sus ·aiticulaciones
(ó 'predica.dos} de los enUnciados~ aspectuales. .:''
narrativos en. proceso*. La aspec- 5. La convertibilidad de los enun-
tualidad aparece, entonces, relativa- ciados narrativos (de naturaleza ló·
mente independiente de la ii;i.stancia gica) en enunciados proCesales (d~
de la enunciación. . . . , . . . carácter tempon.1) pei{nite com-
3 . .'. HiStórieamente el aspecto se prender, de manera genei:al, la rela-
intrOduce en li.n~ística · -como «el ción que existe entre las transfof·
punto , de vista spbre . lá acción» maciones diacrónicas* y" sus mani·
capaz de manifestarse en forma de !estaciones temporales ·co históri·
mOrfemas* gramatic3.les autónomos. cas): la transformación ·Cs ·categóri·
Si se qlliere expliciÍ;ar la estructu· ca· (se pasa, por ejeni.pto, de la
ra"' actancial ·subyacente a lá · rha· declinación de dos casos· en et anti·
nifeSta91ón de 1Qs diferentes <taspec· guo francés, a su ausehcia). mieri·
t
43 ASPECTUAL!ZAC!óN -AUTóMATA

tras c:;ue su manifestación temporal mo; (la atribución) representa, en-


se presenta como un proceso (com- tonces, . Ja realizacióti* transitiva*
prendiendo los aspectos incoativo, del objeto, efectuada en cualquier
durativo y terminativo). Tal inter- momento del recorrido narrativo•.
pretación facilita mucho -en el Junto con la apropiación*, la atri-
análisis textual- el reconocimiento bución .es una de las formas posi·
de: las organizaciones narrativas, bles de la adquisición que l'Uede
subyacentes a las formulaciones considerarse. -a titulo de conse-
procesales. cuencia*- como subcomponente de
6. La teoría de los aspectos dista la prueba.
mucho de estar elaborada; · es in- -+ ADOUISICIÓ~.
útil proponer, por ahora, un ' «Sis-
tema aspectuab sin alcance general. .AUSENCIA. Fr. absence, ing. ab-
7. Se entenderá por con.figuración sence. - La ausencia es uno de los
aspectual un dispositivo de sernas términos de la categoría* presencia/
aspectuales empleado para describir ausencia. que articula el modo de
un proceso. Así,· por ejemplo, la existencia semiótica de los objetos
inscripción en él enunciado-discurso del saber• .La existencia a.in absen-
·de una sucesión de sernas aspec- tia,,, que caracte~ al eje paradig-
tuales, como incoatividad 4 durati- mático* del lenguaje, se denomina
vidad --)- terminatividad, a la vez existencia virtual*.· · '
que temporaliza un enunciado de ~ PRESENCIA, EXISTENCIA SE.MIÓTICA.
estado* o de hacer*, lo representa
o permite percibirlo como proceso. AtiTóMATA. Fr. automate, · ing.
Evidentemente, una· configuración automaton. - En·~ ·metasemiótica*
aspectual puede manifestarse den· científica, se denomina autómata a
tro de una frase,· de una secuencia cualquier sujeto operador '(o ((neu·
. o dt? un discurso y, a veces, sólo tro») que posee un ·conjunto de re-
· algunos de ~us sernas serán expli- glas* explícitas cori un orden* coer-
citados. Al sistema aspectual -que citivo de aplicación de las mismas
está todavía sin elaborar como (o de ejecución de las instruccio-
taxonomía de aspectos-, le corres- nes). El autómata·· es,· pues, una
ponden las configuraciones aspec- instancia semiótica construida como
tuales que son sus organizaciones un simulacro del hacer programá-
sintagmtlticaS. tico; puede ·servir, .indistintamente,
-+ TEMPORAtlZACIÓN, .PROCESO, OBSER· de modelo a] sujeto humano que
\".~OOR. ejerce una actividad científica capaz
de Ser reproducida,. ó para la cons-
ATRlBUCION. Fr. attribution, ing. trucción de una máquina, El con-
attribution. - Situada a nivel figu· cepto de· autómata tiene una utili-
rativo*, Ja atribución: corresponde dad evidente, aunque · sólo fuese
a la posición de1 sujeto de un enun- por orientar la actitud del investi·
ciado de estado*, cuando adquiere gador hacia la máxima explicita-
un ·objeto• i de· valor mediante un ción posible del conjunto de proce--
sujeto de hacer* distinto de si mis- dir.1ientos que emplea en el análisis.
AUTOMAtA. A.icibMATICA

. ~ ALGORµMO, . PROCEDIMIENn), CIEN- te*, según que se in.~criba en ·'la


.Tn:iCIDAD•. ,· deixis* positiva o negá:.f.iva •
-) l'ODER. . ·,
. AU:fONOMtA. Fr. autonomie, ing.
autonómy.. , AXIOLOG!A. Fr. a;tjologie, ing.
t~ Eil ·paradig::nátic3.* se btien- axiology.
de ·por autonom;ta la relación* que l. Se entiende, generalmente, por
axlología la teoría y¡o· la descrip-
mantienen dos o más categorías*
semánticas (o dos o más microsis· ción de los sistemas de .. valores (mo-
temas sémicos) cu,ando. no hay en- rales, lógicos, estéticos'>.
tre ellas ninguna presuposición*. 2. En semiótica, se :designa con
La relación entre dos categorías o el nombre de axiología,~ al modo, de
dos· sistemas ·autónomos· es, en con- existencia paradigmátléo* de los
secuencia, de o])Osición* simple, del valores*, por oposicióri a la ideol0:-
gía que aparece como; su orden·a.
tipÓ. o:~··,- O>.. .. .. _
miento sintagmático* :y actaricial.
.2. En sintagmática*, dos piveles Puede considerarse qué· toda ci.te-
del JeÍlguaje se cohsideran a'ut6no- goría* ··semántica,· reprbsentada :en
nios, entre sí, cuá.ndo cada uno po- el cuádro* semiótico (Vida/muerte,
see · una organización estrtictural por ejemplo), es susceptible de ser
propia: entónces, ·aun siendo isóto· axiologizada, debido al: vertimiento
pos*, no son isorp.orfos*~. de Ia categoría timica*'.:euforia/dis-
foria en las· deixis* pOsitiva y ne·
AUTORlZACibN.· Fr. facultativité, gativa. Tales axiOJog!as (o micro·
ing. facultativeness: - La autoriza· sistemas de valores) 'Pueden ser
clón designa a uno de los ·términos abstractas* (vida/muerte) o figura·
de la e3.tegorla modal deóntiea, cuya tivas* (los cuatro elementos de la
definición Sintácti~ es la estructu· naturaleza, por ejempló), y, en la
ra modal no debi!.r·ha::er; · presupa.- medida en que, tanto •en un CaiO
ne la existencia de~la prescripción*, como en otro, se trati,. de categcr
su ténriino contradictorio*. ·rias generales -que pueden ser cQn·
~ DEÓNTICAS (mo4alidades -). : DE· sideradas, a titulo ele hiPótesis* de
BER. trabajo, como universales* semán·
.·, ... ticos- articulables se&Ón el cuadro
AUXILlANTE.. Fr: auxiliant, ing. semiótico, podrán admitirse estruc·
auxiliant (neol.): ~ El auxillante, turas axiológicas e1emé.ntales (de
a
que alude la co:rripetencia"' modal carácter abstracto) y 'estructuras
axtológlcas figurativas. ·-
del sujeto, equivale a la modalidad*
del' 'poder·hacer o 'del· no no.poder~ ~ lOEoLOGfA, ESTRUC'ttifiA.
hacer, ya se manifieste ésta por un
actor* ·coincidente· con el sujeto o 'AXIOMATICA. Fr. dxiomatique,
por· un' actqr difereiite: en este :últi~ ing. axiamatics. - Se te.'.llama axio-
mo · caso, : ~1 · -actor· individualizado mática ·a un cuerpo dé' conceptos
(en su .;estatutO- de awtiliant.e)· se no definibles y/o a· un c.Onjunto de
denOminará adyuVante* u oponen~ proposiciones no demos#-ables a las
45 AXIOMAT!CA

que se declara, por decisión arbi- intentaba verificarlas confrontándo-


traria, como interdefinidas y demos- las con los datos de la experiencia),
tradas. Contrariamente a la prác- la axiomática permite construir la
tica científica tradicional (que par- teoría por vía deductiva*.
tía de un conjunto de hipótesis e -+ TEOR!A, FORMAL, MErALENGUAJE.
B

BASE. Fr. base, ·ing. bas'e; estructuras binarias un Jugar privi·


1. · En gramática generativa, : el legiado en la metodología lingilis·
componente ·de base, qlJe genera tica: la práctica -e:xitos·a- del aco-
las estructuras profundas*, com· plamiento binario e_e l:ás oposicio·
prende:·· a) un (sub-) componente nes fono16gicas . utilizadas por la
categorial* que. incluye a las cla· Escuela de Praga; la -importancia
ses* sintagmátiéas · y morfológicas adquirida por el sistema aritmético
(aplicadas por la gramática -o el binario (0/1) en el cálcUlo automá·
modelo- sintagmática) y, a la vez, tico; la simplicidad oPeratoria del
al conjunto de re2;1as* y aferentes: a
análisis binario frente las estruo-"
b) el léxico*, en Sentido generati· turas complejas; el hecho de qt1e
vista, que proporciona indicaciones toda estructura compleja pueda .I'e;~
sobi-e los rasgos ~iDtácticos, semán· presentarse formalmente como una
i.icos y fonológicoS de los signos· jerarquía* de estructuras binarias,
morfemas*. etcétera. ' · ·
2. La frase de .base (o forma de No hay que confundir' la biriacl·
base) es générada· por la gramática • zación, que es una p·ráctica · lin·
sintagmática y .merced a· ella pue- güfstica, con el binarismo, un p'o!r
den efectúarse las transformacio- tulado epjstemológico según el cual
nes* (que culminan en el emplaza· Ja articulación* o Ja ·.:;aprehensión
miento .de las estructuras de super· binaria de los fenómenos es una
0
ficie*).'.· · de las características .del espíritu
~ G~ERATIVA (gramática -). humano; este postuladéi se ha vin·
culado -con razón o ·sin ella- al
BINARIDAD •.. Fr, binarité, ing. nombre de R. Jakobsbn, que dio
binarism. una formulación binaria: a las cate.
1. Una .estructura* se dicé: que garlas fémicas*, a las qtie erigió en
es ·binaria cuando se define como universales* fonol6gicos de las len·
una relación* entre dos ténninos*. guas naturales.
2. Un conjunto de factores bis· 3. La formulación biriaria seguirá
tóricos y pragmáticos otorgan a las siendo válida mientras 'no se inten-
47 BINARIDAD • BtJSQUEDA

te definir el tipo de relación* que aquellas que incluyen dos planos


une a los términos; ahora bien, el (de lenguaje*) cuyas articulaciones*
propio Jakobson ha admitido la paradigmáticas y/o divisiones* sin·
existencia de dos tipas de oposi- tagmáticas son diferentes; tal es el
ción binaria que nosotros interpre- caso de las lenguas*· naturales.
tamos t':omo contradicción* y con· _,. SEMIÓTICA, CúNFORMIDAD, tfNIVO.
traríedad*. Esta tipología de rela- CIOAD.
ciones nos ha permitido postt.ilar
la existencia de una estructura* BUSQUE.DA. Fr. qutte, ing. que.st.
elemental de la significación más Término figurativo* -que designa
compleja, superando el marco de la . ta tensión entre el sujeto* y el ob·
binaridad. jeto de valor pretendido, y, al pro-
4. La binaridad sólo caracteriza pio tiempo, el despt8.?-.amiento de
a un tipo de estructura: únicamen- aquél hacia éste-, la bíisqueda es
te pueden ser consideradas como una representación espacial, con
categorías binarias aquellas cuya forma de «movimiento• y modo
relación constitutiva sea la- contra· durativo*, de la actualización .(co-
dicción* (por ejemplo, aserción/ rrespondiente a una relación de dis·
negación; conjunción/disjunción). junclón* entre sujeto y objeto), y
~ CUADRO SEMIÓTICO, :CATEGORÍA. más en particular, de la modalidad
del querer*; el aspecto terminativo*"
BIPLANA (SEMióTICA . ....:), . Fr. de la búsqueda corresponde a la·
sémiotique biplane, ing. bi-planar realización* (o conjunción*· entre
semiotics. - Las semióticas bipla· sujeto y objeto).
nas -o semióticas propiamente di· -+ OBJETO, ACJ1!ALIV.CIÓN.
chas, según L. Hjelmslev- son
e
CA:i:>ENA:. Fr. chCiine, ing. s'tring. sentaban como enunciados* con mi
Cadena -o cilden~ h~blada es ~1 tér~ solo actarite (a diferencia de los
mino·· traclicion31.,• corriente, 'Para enunciados fUncionales que estable·
designai el eje siniagmátic_o del len· clan tina relación entr.~ actantes);
guaje*; :tiene la ventaj"a de evocar contradiciendo, de est;:i:. forma, el
el encadenamiento -=-y no la simple postulado general de que no existe
linealidad*".....:. Q.Ue preside:a la orga· relación* si no es al úienos enti'e
nización de este ·eje. •·· . dos términos*. Un nuevo examen
. ->- SlNTAGµ..(TICA, EJE. -que se hizo necesarl~ del con-
. ··~ ...
cepto de enunciado eleinental nos
CALlFICACióN, Fr. qualification, ha permitido asimilar 10s enuncia-
ing. qualification. dos calificativos a los ¡enunciados
1. · En un primer momerito de la de estado (que especifi'Can la íuri.·
investigación, no:3. habíamos pro· dón* del sujeto* y del~ objeto*) ·Y
puesto distinguir dos tipos de pre· considerar, entonces, a" ta califiCa-
dicado*: las callfiéaclones, que se ción como el valor* vertido en el
corresponden con .Jos estados* y actante-objeto. .
determinaciones di los actantes*, 3. En el marco del e,<;quema n3.-
y las funciones* entendidas ·como rrativo*, la calificación .es la conse-
proceso*; en cqyo. cas.), esta oposi· cuencia* de la prueba' calificante*
ción estaría fundada en la catego- y se identifica con la,: .adquisición
ría•. estatismo/ diiµzmismo. Desde de la competencia* modal (o, más
esta perspectiva, el análisis se efec· precisamente, con las modalidades'*
tuaba en dos direcciones y permi· actualizantes* que son. et saber·
tía. deducir -paralela y complemen· hacer y/o el poder-hacer).
tariameilte- un m.Odelo eali.ficatlvo -+ FUNCIÓN, 'ENUNCIADO,·. PRUEBA•
. (de tipo taxonómic0*) y un modelo
funcíonal (de car.4::ter narrativo), . CALIFICANTE (l'RUJ!)IA -). Fr.
eventualmente convertibles entre sí. épreuve qualif:'ant, · ing; qua!ifying
2. Sin embargo.-. los .elementos · test. - Figura discursi\ra, vincula·
calificativos así· rCconocidos se pre- da al esquema narrativo; la prueba
49 CAL!FICV'TE ·CANAL

callfieante -situada en la dimen- torios* parecer/1.10-parecer del. cua-


sión pragmática*- corresponde a la dro* semiótico de las modalidades
adquisición* de la competencia (o. veridictorlas, a Una oPeración*. ló-
más precisamente, de las modalida- gica de negación*. P·artiendo de lo
des"' actualizantes del saber-hacer verdadero* (definido como la con-
y/o del poder-hacer): está logica- junción del ser y del parecer), Ja
mente presupuesta por la prueba negación del ·término parecer pro·
decisiva*. Desde el punto de vista duce el estado de secreto*: a esta
· de la sintaxis* narrativa de super- operación, efectuada por un sujeto
ficie, la prueba calificante puede dado, se le llama camuflaje. Es
ser considerada como un programa'* diametralmente 9puesto ·a la decep..
narrativo de uso, en relación con el ción* que, partiendo de lo falso*
programa narrativo de base (corre&- (::::no-ser + no-parecer) y negando
pondiente a la peifonnance*). el no-parecer, ~a~1ece el estado de
-+ PRUEBA, COMPETENCIA, . NARRAnvo mentira*. En ambos casos, se trata
(esquema -). de una operación de negación efec-
tuada en el esqueffia* de la mani-·
CAMPO SEMA.NTlCO. Fr. champ festación*.
sémantique, ing. sema.ntic field. - ~ VERIDlCTORlAS (modalidades -),
En semántica* léxica, se llama cam- SIMULADA (prueba -).
po semántico (o nocional o concep-
tual, según los autores) a un con- CANAL. Fr. canal, ing. channel.
junto de unidades léxicas conside- 1. Tomado de la teoría de la in-
radas, a título de hipótesis de tra- formación*, el término canal desig-
bajo, como dotadas de una organi- na el soporte material o sensorial
zación estructural subyacente. Esta que sirve para la transmisión de los
noción de «Begriffsfeldl>, tomada mensajes*. En lingüística, el canal
de J. Trler, puede utilizarse, en .el podría corresponder en parte -se-
mejor de los casos, como concepto gún la terminología de L. Hjelms-
operatorio*: permite constituir in- lev- a la su~tancia* de Ja expre-
tuitivamente, y como punto de par- sión*, aunque de hecho está limi-
tida, un corpus* lexemático cuya tado a las semióticas que prlvilé-
estructuración* semántica se lleva- gian la estructura· de la comunica-·
rá <í cabo gracias ·al análisis sémi- ción*.
co*: jugando con la agn?:gación de 2. La clasificación más común
nuevos lexemas* y la eliminación de de las semióticas se hace según los
algunos otros, se puede llegar a canales de comuntcaclón o, lo que
describir un microuniverso* semán- viene a ser lo mismo, según Jos
tico. órdenes sensoriales en los que se
~ SEMÁNTICA. funda el significante* (semiótica
textual, semiótica del espacio, de
CAMUFLA1E. Fr. camouftage, ing. la ·imagen, etc.). Esta distribución
carnouftage. - El camuHaje es una dista mucho de ser satisfactoria:
figura* discursiva situada en la di· conjuntos significantes tan vastos 1
mensió:íl cognoscftiva*, que corres- como el cine, el teatro, el espacio
ponde, en el eje de los contradic- urbano ·son, en efecto, lugares d...
SEMIÓTICA. - 4
CANALcCATAFORA 50

imbricación, de. Varios ie'ngUiijes* lingüístico, en el mome~to de su


de·manifestación; ¿s.irechamente en- realización* en una lenliua natural.
tremezclad.Os· con '.Vistas a la· pro- .Puede, asf, considerarse.9.Ue.en tta..
ducción .de. signi~~cione~ globales. ses tales como, .por eJemplo, . el.a
-+· SINCRE!ISMO'. costurera .trabaja», «Ana.·María está
cosiendo•, «Ana Maria hace costU·
CARENCIA: Fr. mánq'ue. ing.'. lack. ra», etc., la carga seniántiea, aun
l •. _Entre las funci.ones* proppia- desplazándose, se man.tlene cons~
nas, la carericla -asociada al •daño» tante. Este poner entre' paréntesis
(que produce una ·carencia, pero el fenómeno de la ICJQcalizaciÓn*
desde el exterior) . causado por el autoriza a la gramática-*: semiótica
agresor*- ocupa una posición esen- (o narrativa) a separar :1os. compo-"
ciai en· e1 -Proces_o· narrativo, -Pues, nentes* sintáctico y sen:iántico y ·a
al .ciecir del mismo .Propp, es lo que reunir,· en el enunciado._. narrativo,.
da al Cuerito su «movimiento•: la el conjunto de los vertiTnientos se-
partida. del héroe*, su búsqueda* mánticos, con forma de valores"',
y su victoria, permitirán. -en •efec- en el 1lnico actante-objeto del enun·
to--:- que. Ja carencia .sea _éolmada, ciado. de estado*. Esto P.érmite tam·.
el daño feparado. · ·
bién comprender las difCrentes pc--
. 2. En el esquema narrativo canó- sibilidades de semantización del dis·
nico, derivado de Propp, la caren- curso: .las cargas · semáilticas pue-
cia es ·1a expresión figurativa• -de den concentrarse, según· la elección
la disjunción*. inicial entre el suje- del enunciador*, ya sobi"~ et sujeto
. to* "y el- objeto* d~ la búsqueda: ya sobre la función en 'expansión.
la transformación*· ·que opera su -)- VER~~IEITTO SEM00Jé:o.
conjunción* (o la realización*)· jue-
ga un ro1 de pivot_e" narrativo (que CAsTxoo. Fr. punitioh, ing. pun~
permite :pasar de UJ1, estado de ca· ishmenz. - Inscrito en ·~1 esquema
renda a su eliminación) y corres· narrativo* canónico, el ica.stlgo es
ponde a la prueba decisiva* (o per- la forma negativa de la retribución
formance*). · Así - piles, la carencia ,(que, en la dimensión pragmática"*,
no es, propiamente '.hablando, una forma parte del contrato*, explícito
función*, sino un·.estado* que re· o implícito, establecido entre el Des·
sulta, es cierto, de una operación tinador y el Destinatario·sujeto),
anterior de negación (situad~ a ni· por oposición a su forina positiva
vel profundo*)•. que es ·1a recompensa*•.Según que
~ NAlUUTIVO (esq'"1ema :--), 'BÚS· la sanción pragmática n.egativa sea
QUEDA, NE.GACIÓN. \ ' ejercida por un Destina:P.or social
-···..,..,. o individual, podrán distinguirse
.CARGA SE.MANriCA. Fr. chat-ge dos formas de· castigo: ·ia justicia"*
sémantitiue,: ing. semantic charge.- y la venganza*. N ::·•

Convien·e eñ.tellder pClt carga scimán· ~ RETRIBUCIÓN, SANCiót;rf";


tica el '.conjuntO d~ · 1os vertirnien·
tos semánticos susceptibles de ser CATAl'--ORA. Fr. cataPhore., ing.
distribuidos en los diferentes. ele· cataphora. (neol.). - La catáfora,
mentos constitutivo~ del enunciado* al contrario q,ue la anáfora -pero
51 CATAFORA -CATEGOR!A

traduciendo como ella la misma tica * o de toda teoria semiótica*,


relación de identidad* parcial entre la elección de lo que se considera
dos términos inscritos sobre el eje como fundamental determinará ne-
sintagmático del discurso-:, se ca- cesariamente Ja forma de la teoría
racteriza. por el hecho de que el que se desee elaborar.
término vuelto a tomar precede al 2. Simplificando bastante, con el
término en expansión. término «Categoría• ·pueden distin-
. -=> ANOORA. • guirse, primeramente, objetos gra·
maticales denominados también cla·
CATÁLISIS. Fr. catalyse, ing. ca- ses•, de orden paradi~mático (obte·
talysis. - La catálisis es la explicita· nidos por sustitución"' de unidades
ción* de los elementos elípticos que de un determinado· tipo, en la ca·
faltan en la estructura de superfi- dena sintagmática). Se tendrán así:
cie*. Este procedimiento se efectúa a) clases ccll'Íorfológicas» o «par·
con ayuda de los elementos contex- tes del discurso"' (sustantivo, adje-
tuales* manifestados y gracias a las tivo, verbo, etc.);
relaciones de presuposición* que b) clases «slntáctlcas)I o funcio-
mantienen éstos con los elementos nales* (sµjeto, objeto, predicado,
implícitos. Así, tomando el ejemplo epíteto', etc.);
de L. Hjelmslev que propuso este e) clases «sintagmáticas:.. o sin-
término, la preposición latina sin.e tagmas (nominal, verbal).
presupone un ablativo y no inver- El sentido del término categoría
samente: se trata de «la interpola· dependerá, entonces, de las clases
ción de una causa a partir de su elegidas para construir la gramáti-
consecuencia», hecha posible «en ca. Así, cuando la gramática gene·
virtud del principio de generaliz.a•. rativa* dice que el componente ca-
. ción•. El mismo procedimiento de tegorial forma parte de la base*
catálisis puede ser aplicado al aná· del componente sintáctico, entiende
lisis de los discursos narrativos por categorías -las Q.ue entran en
(donde la manifestación de Ja con· su composición-, esencialmente, las
secuencia* de la prueba* p~ite «clases sintagmáticas• (dentro de
explicitar la prueba en su conjunto) las cuales introduce «clases morfo-
y al análisis semántico del dis· lógicas,,,, sin preocuparse de la he·
curso. terogeneidad* entre estos dos tipos
-> EUPSIS, IMPúcrro. de categorías). Las gramáticas cate-
goriales de inspiración 1ogicista (Ad·
CATEGORtA. Fr. catégorie, ing. jukíe\vcz, Bar:Hnlel) operan, por el
category. contrario, con categorías que co-
l. En lingüística, el té:."lllino ca· rresponden a las «clases morfoló·
tegoría se presenta como una de las gicas1>. La gramática actancial* que
herencias más peligrosas de una preconizamos, privilegia -por su
larga tradición que mezcla conside· parte- las 11clases funcionales,..
raciones .filosóficas, lógicas y gra. 3. Con propósito de síntesis, L.
maticales. Por el hecho de que por Hjelmslev define la categoría como
categorías se entienden los concep· un paradigma• cuyos elementos no
tos* fundamentales de toda gramá· pueden ser introducidos sino en
CATEGOR!A • CATEGORIZAC!óN: 52
ciertas posiciones* de la cadena sin· momento es posible hablar, p9r
tagmática*, con exCiusión de otros; ejemplo, de la categoría del génerü
se trata, en consecuencia, de un como articulada en masculino/feme-
paradigma dotado:.de una función nino; pero no, de Ja· ciitegoría dt:.l
determinada. Así, la. categoría, mag· femenino. De forma análoga, no <is
nitud «morfológica», recibe al mis· el sustantivo, por ejemplo, lo que
rrH>· tiempo tina definición sintáctica. se consldera. como un~. categoría.,
La vocal, por ejemplo, es una cate- sino la oposición sustantivo/verbo.
goria: M •
6. Debido a que toda· semiótica*
a) -es el paradigma constituido es una red relacional.· las estructu-
por los· fonemas a, . e, i, u, etc.: . ras* elementales que or8anizan ta-
b) es· definida 'J>Or su posición les relaciones pueden s~r conside-
central en la sílaba. radas como categorías ,Umántlcas:
De esta misma m_anera. es decir, según sea el plano del ~Íenguaje al-
como un paradigma, de valores mo- que ellas ayuden a cOiistituir, 5e
dales* y por su pi:>sición detenni· determinarán categorías ,·sémtcu* o
nada en el recorridÓ narrativo*, es .categorías fémicas*, y .·tanto · uri<\S
como· definirnos el: rol actancial* como · otras pueden ser~. utilizadas
que es una~ categóría' en el sentido como ·categOrias gramaticales ·. Oá. ..
hjelmsleviaño de·· ~te- término. ' entonación* o el orden de las pala'-
4. ·En gramática tradicional, el tér· bras, por ejemplo, son, categorl.as
mino categorías gramatlcales ·com· fémicas o funciones grainaticales} ..
pren_de las tnagnitQ.des del signifi· ... CUSI!. .
cado* que pueden ser· reconocidas
en los · morfemas* flexionales (las CA.TEGORIZACióN. F.r. catégori-
categorías de género, nfunero,· per- sation, ing. categorizatidit.
sona, caso,:·~tc.):. se;· trata· aquf, co- 1. La expresión categó'dzaclón del
mo se ve,: d<! categorías semánticas mundo fue introducida por ~. Ben·
que asumen funcioD.es gramaticales. veniste para designar la/ aplicación
El desarrollo·· reciente ·de las dife- de una lengua* natural~'al mundó*
rentes teorías lingüísticas -que: con- (tal como lo perciben núestros sen-
vergen sobre este punto- ha per.- tidos). En efecto, desdé el puntO
mitido, al mismo tiempo, .reconocer de vista ontogénico1 la párte de las
ta naturaleza semántica de todas lenguas natuiales -y, probablemen-
las magnitudes gra~aticales y ge- te, del conjunto de las semióticas-;-
neralizar· el concepto de categórla. que intervienen en la cO.nstrucción
S. La ·aplk:aci6n rigurosa de la del mundo del sentido c;:,omún, he-
actitud estructural heredada de F. cha Por el niño, e3 sin Auda con·
de Saussure (segÚn .ella, p6r oposi- siderable, aun cuando ~no pueda
ción ·.al atomismo, toda lengua es determinarse con precisión. A este·
de riaturaJeza relacional y Do · sus- rol «informador1> del nlundo, asu-
tancial) obliga a util\zar el término mido por las lenguas naturales,' se
categoría· sólo pa:ta.' designar· las hace referencia cuando se·
diee, par·
relaciones* (es detjr, los ejes se- ejemplo, que la ·.-cond::pción del
mánticos) y no los .. elementos fina- mundo» está determinad& por un
les ·de esas · relacion·es. Desde este· Contexto cultural dado: !Os estudios
1
'
53 CATEGORIZAC!ON • C!ENT!F!C!DAD

de etnotaxonomías ofrecen la prue- dad cognoscitiva*, caracteri7.ada por


ba tangible. - C. Lévi-Strauss ero· cierto número de precauciones deón-
plea, en el mismo sentido, la expre· ticas -denominadas condiciones de
si6n fragmentación conceptual del clentlficid3d- con las que se rodea
mundo: a ella se refiere a menudo· el sujeto cognoscente para ejercer
la lingüística, lo mismo que a la y, más especialmente, para realizar
hipótesis de Sapir·Whorf. Para nos· el programa que él mismo se ha
otros, el mundo del sentido común, · fijado. La actitud científica debe·
informado semióticamente, corres- ser considerada, en consecuencia,
ponde a la semiótica natural*. como una ideología*, es decir, como
2. En otro campo diferente, el una búsqueda* de'l saber, seguida
término categorlzaclón es empleado de la donación* de ese objeto* de
Para designar la proyección sobre valor, o mejor, de la renunciación*
el cuadro* semiótico de una magni- a ese objeto en provecho del Des·
tud* determinada, considerada CO· tinador social. El sui,eto de ·esta
roo eje* semántico: esta proyección, búsqueda -como el de toda bús-
al articular la magnitud, constituye queda ideológica-· está dotado de
una categoría. las modalidades* del querer-hacer
~ FRAGMENTACIÓN, REFF.RENTI!, MUN· y del deber· hacer, y la búsqueda
00 NATURAL, ETNOSEMIÓTICA. toma forma de una deontología*
científica. Lo que distingue la in·
CERTEZA. Fr. certitude, ing. cer· vestigación científica de las otras
tainty. - La certeza es la denomi- actividades cognoscitivas no· es tan-
nación ·del término* positivo de la to su sumisión a una deóntica co-
categoría modal epistémica cuya de- mo el contenido específico del
finición sintáctica sería creer - ser. deber-hacer.
A diferencia de la evidencia*, la 2. La investigación científica se
certeza presupone e1 ejercicio del expresa en forma de discurso cien-
hacer interpretativo* del cual es una tífico, e importa poco si es un dis·
de las consecuencias posibles. curso teinterior,. o .manifestado (oral-
-+ EPrmMICAS (modalidades -) . mente o por escrito). Como tal,
CIE1'.1TtFICA (SIDvtióTXCA -). Fr. puede ser sometido al análisis se·
sémz•otique scientifique, in¡t. scien· miótico que tratará de reeonocer
tific semiotlcs. - Pata L. Hjetms· su especificidad. Se observará en-
lev, es científica toda semiótica que tonces que si, en tarito que hacer
se acomode, en cuanto operación {o cognoscitívO*, se define como un
descripción*) al principio de empi· proceso productor de saber, en
rismo; en función de este criterio, cuanto hacer-saber será sometido a
distingue las semióticas científicas un enunclatario* ocasional y cam-
y las Seinióticas no científicas.
biará -por este hecho- de estatuto
-+ SEMIÓTICA, EMPIRISMO. para presentarse como discurso re-
ferencial* (éste, después de una
CIENTIFICIDAD. Fr. scientificité, evaluación cpistémiCa:, . podrá ser-
ing. scien.tificness. vir de soporte a un nuevo discurso
l. La ·investigación científica es cognoscitivo, y así sucesivamente).
una forma particular · de Ja activi- El sujeto individual de la investiga·
CIENTIFICIPAD :.CIERRE 54

ción se· inserta, en · un encadena- además, ha de estar· dotado d~ un


mientó 'Sintagmático que lo tras·· saber-hacer formulado·· en términos
ciende··y que·se.presenta como·un de ptoCCdimientos y/o:··reglas* sus-
discurso científico social. Por lo · ceptibles de ser Ordenii:das en series
tanto,· este último no se· define co- algorítmicas*,' etc. ·
mti un 'recorrido· histórico (!o que S. Se supone que todas estas pre·
constituiría su interpretación gené· cauciones garantizan et buen fun·
tica), sino como ·un algoritmO* fina. cionamiento del discurSo científico:
lizado a· posteriori, por ser ·ei refe· su examen y su organ.izaci6n .cons·
rencial colectivo -la reconstrucción tituyen una-de las tareas de la épis·
de una empresa ideal. ;,· temolo"gfa* general de'.·:1as ciencias
· 3. La práctica .cientifica, que··aca- y de_ las teorías propias de cada
bamos ·: de esbozár ·muy sumaria- dominio de investigación. Sin .e:m·
mente, tlene uri ·.'punto débil: el bargo·, al no versar liada más que
momento .:y el iügar en .que :·el <lis· sobre ciertos aSpectas·...-de la .éien-
curso individual trata de inscribirse tificidad -las ·condiciOnes · satisEac·
· en el discurso social; el momento en torlas de la coherencia"t del discur·
que es· sometido· a una· apreciación so-, distan mucha de ·resolver, por
. epistémica: ·antes de ser Sancionado . ejemPlo, problemas rilativos a· la
-y declarado ~dignus "intrarl'b. Los adecuación* de los<métodos emplea·
análisis, todavía muy parciales, del dos en relación con .él objeto de
discur'so biológico : muestran ya en cOnocimiento (preocuP'~ción expfe·
este puntO, que 10 esencial; de la sada por L. Hjelmsle~i, en su prin-
intercorinii'1icación entre· los espe· cipio de empirismo*), -!Sobre todo,
cialistas Q.ue trabitjan en programas
parciales consiste en interrogarse
dejan abierta la interrogante de las
relaciones entre et disCurso de des·
...
sobre el grado de. probabilidad* o cubrimiento* y ei de :'la investiga·
de certeZa* de las· resultados obte· ción, entre las· hipóteSis* de natu-
nidos. Este lugar de incertidumbres raleza ampliamente iri'tuitiva* y su
es abarcado por la reflexión teórica verificación*. · ·
sobre~ las condiciones de la cienti· -+ TEOn.fA, METALENGUA.ÍE, EMPIRISMO:
ficidad.
4. Una de estas condiciones con· CIERRE. Fr. clóture;. ing. closing.
siste · en dar al· discurso científico · 1. En el plano semáD.tico, el cle- ·
una foriria tal, qt.ie et sujeto cien· rte puede enfocarse del:de dOs pu.n-
·tífico -instalado . en el discurso- tos de vista diferentes. Desde el
enunciado- pueda . funcionar como punto de vista paradigmático,. to.da
un ·sujeto cualquiera (que, a seme· articulación (o aprovechamiento) de
janza del actan~e~. abarque una un universo* semánticO llevada a
clase indefinida 'de actores* susti· cabo· por una cultura ó una perso-
tutibles) susceptible, por completo, na se presenta como ili realización
de ser reemplazado -por un autó- ·de un número, relativa:mente redu-
mata*, ·Para ·nega:f a eUo, 'debe apli· cido, ·de las posibilida~es ofrecidas
car un lenguaje ttPropio• {o un me-
talenguaje*) cuyQs términos . estén
por la combinatoria*: -se dirá.. en·
torices, que el esquema,* (o estruc·
.•
bien definidos* y ·sean unívocos*; tura) semántico de é.$te univérso
55 CIERRE· CLASEMA

es abierto, mientras que sus usos* cerrada en n;omentos diferentes:


(o sus realizaciones en la lústoria) constituye así un corpus judío y un
constituyen, en todo momento, el corpus cristiano y, por este hecho,
·cierre. Considerada sintagmática· da lugar a lecturas*, algunas veces,
mente, Ja manifestación discursiva divergentes. Del mistno modo, ex-
de un conjunto semántico cualquie· traer un micro-relato inscrito en un
· ra (sobre este punto, la experieucia discurso más amplio, produce -al
de las entrevistas no dirigidas es cerrarlo- una lectura diferente de
concluyente) presenta -antes o des• la que se obtendría de mantenerlo
pués...:... señales de agotamiento cuan· en su contexto,
do no de redundancia*, si se la S. De forma genc1·al cabe decir
pretende conservar. Se reconocerá que toda detención momentánea de
entonces que a todo discurso, al lectura constituye un cierre provi·
ser representativo de un microuni· sional que ha"ce surgir, según la
verso, puede considerársele como mayor o menor complejidad del
semánticamente cerrado. texto, una gama de lecturas virtua·
2. Desde el punto de vista de la les. Sin embargo, esta· «riqueza,. del
semiótica narrativa, el problema del texto no contradice el principio de
cierre se presenta baio aspectos su isotopía* (i;> de su pluri·isotopía).
bastantes diversos. Así, en el campo
etnoliterario se observa la existen-
cia, tanto de clases particulares de CLASE. Fr. classe, ing. class.
discursos («géneros»} cerrados (el t. La clase se define,. en términos
cuento maravilloso ruso, por ejem· generales, como un conjunto de
plo. caracterizado por el restableci· magnitudes* que poseen en común
mientq del estado axiológico ini- uno o varios rasgos distintivos*.
2. En lingüística se entiende, más
cial), como de relatos abiertos (los
aengaños• recíprocos y sucesivos concretamente, por clase un con-
junto de magnitudes que pueden
que se reproducen, por así decirlo,
hasta el infinito). ser sustituidas en una posición*
3. La mayoría de las veces, tos· sintagmática y en un contexto da·
discursos narrativos sólo utilizan dos. En este sentido, clase es sinó-.
una parte del esquema narrativo* nimo de paradigma.
canónico. y este hecho de encon- 3. En gramática, el término 1tcla·
trarse así detenidos y como cerra· se" se encuentra en concurrencia
parcial con el de categoría. Se dis-
dos en un momento dado de ese
tinguen, así, clases (o categorías)!
esquema suspende el desenvolvi-
miento normalmente previsible: en amorfológicasl) (las partes del dis-
curso). «Sintácticas·it o funcionales
este caso, el cierre del discurso es
(sujeto, objeto, predicado, etc.) y·
la condición misma de su apertura
asintagmáticas,. (síntagrná nominal,~'.
en cuanto potencialidad; · verbal, etc.}. ~·
4. El cierre puede ser, igualmen-
te, obra del enunciatario* Oector -+ PARADIGMA, CA1°EGOR1A, UNIDAD.
o anatista). La Biblia, por ejemplo,
si se la considera como colección CLASEMA. Fr. classeme, ing. etas.
de textos,· será sintagmáticamente seme.
CLASEMA. CUSIFlCAClóN

l~ En la· terminología pro~uesta tuyen clases de seres ~9 de cosas


por B. Pottier sC entiende por cla· (por ejemplo: anirru1.'do/inanimado,·
sema el. sub-conjuiito de sernas* ge- animal/vegetal, etc.); cUyas articu•
néricos .. qtie, con .cl semantema* Iaciones varían de un~. cultura ., a
{sub-conjunto de sernas especlfi.Cos) otra.
y el v:imiema* (sub-conjunto de e) Si los sernas gramaticales ga·
sernas connot;:i.tivos'), 'constituye el rantizan la permanencia; de la co·
semema*. municación cuando sei'-, trata del
2. · A•.J. Greimas el:qp1ea el tér- lenguaje ordinario, los S.istemas se-
mino en un sentido algo diferente: cundarios que se deseriVuelven ~,
designa como claseroas a los sernas el interior de las lengua'.s naturaleS
contextuales*, es decir, a los que (tal como el discurso :PO ético) son
son ·:reCurrentes en el discurso y capaces· de instalar cat~gorías el;¡¡.~
que garantizan Ja ·isotopía*. Recu· semáticas.. que le son .Propias; de
rren'tes y localizables como conjun· este mo<lo, liberan -al :-lnenos par·
to de categorías* ·.Sém.icas, loS· cla- .cialmente- al habla, de sus coer·
semas constituyen dispositivos sin· clones ·sintácticas. ·
tagriláticos q"ue · d,epellden de una -+ SEMA, ISO!OP:fA., INDICADOR.
paradigmática y Son susceptibles
de ser ordenadoS en -clases taxonó- CLASIFICACióN; Fr... : classifica·
micas, de donde la."motlvación. par- tion, ing. classification.:;
cial. de su denominaéión. 1. Generalmente se entiende por
Actualmen.te, es~ d.Ífícil :deliffiitar clasificación la repartk:ión de un
el dominio Semántico comprendido conjunto dado de elemeDtos;. en vn
por Jos C:IaSemas. ·sólo daremOs, a cierto númerO de sub-conjuntos CO.
. titulo in~~~?vo, ~gun<t.s sugeren· ordinados o subordinados. La l·e~
cias: . .. . presentación* (según e},'.:sisteroa de
a) Los ciasemas, ·.:Por ser semaS notación elegido) de Jos··:Tesultados
recurrentes~ constituirán, en :princi- de dicha operación se ·denoniinará
pio, categoría,s de: Una· gran gene· taxonomía. ·.i
ralidad: al".inve:nt~arlos, se ·"debe- 2. Como sucede frecilentemCn.te
rian enconti-ar, sobre todo, los con- en semiótica, la cuestión· teórica de
ceptos*. no · dcfiniblés de la teoría saber si hay que dar Prioridad a
· semiótica* (tales CQmO urelación"', los elementos o a las·; relaciones*
utérmino», etc.), así como los s"emas se plantea, igualmente, a propósito
llamados gramaticales (que sirven· ·de las clasificaciones: se. observa a
para cOnstitUir las categorlas 9 las menudo, pór ejemplo, que la des·
clasCs gramaticales); El problema composición de un corijUnto y su
de ··los uniye_rsa.les": del len~aje representación en árbol~'.. obligan a
está. viilculádo a1 'inventario clase- prever -a niveles diferentes- los
mátii::o.: nudos* que sólo son -O(!nominados
b) El inventario ·¡je los clasemas después de clasificados, Y en conse.
comprende, por otra parte, los -rse- cuencia, no son «eiemenJos:J) prime-
mas genéricos» que .:sirven: de mar· ros que se puedan repirth·. Desde
co a la categorización* del mundo esta perspectiva, la clasificación se
-hecha. por el lenguaje- y c0nsti· presenta como una aci~vidad cog.
'
51 CLASIFICAqON · CODIGO

noscitiva taxonómica, como W1 pro- por la aplicación ingenua de este


cedimiento consistente en la aplica- concepto a los problemas de 1a
ción, a un objeto sometido al aná- comunicación (el chino, según la
lisis, de una serle de citegorías fr:i.se célebre de Wíener, es inglés
discriminatorias* cuyo efecto es ac- norteamericano codificado en chi-
tualizar los elementos en los que no) y por los éxitos, efímeros, de
se compone el conjunto y construir, las investigaciones en el campo de
así, la definición del objeto consi· la traducción automática.
derado. 4. La teoria de la comunicación
4- TAXONOMÍA, ELEMENTO, lmLACIÓN. lingüística ha tratado de aprove-
char la oposición código/mensaje*
CODIFICAC!ON. Ver (EN)CODI· (R. Jakobson). lo cual es sólo una
FICACION. nueva formulación de la dicotomía
saussuriana iengua/habla*. Se en·
CóDIGO. Fr. code, ing. code. · tiende, entonces, por código no so--.
1. El término código se empleó, lamente un conjunto limitado de
por primera vez, en la teoría de la signos o de unidades (dependientes
información, donde designa un in- de una morfología•), sino también
. ventario de símbolos* arbitraria· los procedimientos de su disposi·
mente escogidos, acompañ.ado de ción (su organización sintáctica); la
un conjunto de reglas* de compo- articulación de estos dos compo-
sición de las «palabras!) codificadas, nentes permite la producción de
y a menudo puestas en paralelo mensajes"'.
con un diccionario* (o con un léxi- 5. Si se considera a la lengua
co) de la lengua natucal (cf. el có- como una combinatorla* de rasgos
digo morse). Aquí se trata, pues, pertinentes mínimos (sernas y/o fe-
en su forma simple, de ún lengua- mas), es posible reconocer que el
je* artificial derivado. En este sen- inventario de las categorías* sémi·
tido, el alfabeto (con las reglas de cas, por ejemplo, constituye -jun·
ortografía) puede ser considerado to con las regl3.s de construcciones
como un código. semémicas* y de · proyección de
2. En el tratamiento automático isotopías* discursivas- un código
de Ja información, el código se des- semántico cuya manifestación a ni-
dobla en un conjunto de símbolos vel de los signos* lingüísticos es el
con instrucciones que pueden ser diccionario lexemático. En ciertos
aprehendidos por la máquina (cf. casos, se hablará, incluso, de código
el lenguaje-máquina),. y en lo que, parclal para designar un sistema
propiamente hablando,· denomina- sémico particular, especie de sub--
mos· «código automático,., de natu- código cuyos elementos constituti·
raleza binaria (corriente / ausencia vos entran en Ja composición ·de
de corriente), que permite registrar sememaS diferentes.
Jos datos en la memoria, tratarlos 6, Ciertos semióticos llegan a re-
y suTninfstrar informaciones a peti- unir, bajo la denominación de có-
ción. digo, un número indefinido de uni~
3. · El uso del término <icódigoit dades que guardan entre sí una
se ha generalizado en lingüística relación muy tenue fundada en la
CóDIGÓ • COERC!óN . '

asociación,' sin recµnir: para nada ras que él pueda imaginar se des-
a una org¡anizaci6n lógico taxqnómi· arrollan, necesariament.C. en el nlar·
ca subyacente (cf, R. Barthes, en co de. estas coercion~). Desde· el
S/Z). . ·.· punto .de vista modal*_: cabe decir,
·-+ COMÜNICACIÓN, !N~RMACIÓN,. en consecuencia, que la's coerciones
semióticas no dependen.. ni del que-
.C~E.~cibN.. Fr: contrainte, ing. rer • hacer ni dCl deber- hacer d,cl
constraint,· ... . sujeto, sino, más bien .. de un que-
l. Se ·entiende, en general, .por rer· deber· ser. "
coerción cualquier. tipo de traba a 3. Desde la perspectiva semiótica,
la ,libertad ·que sufre un individuo quii.ás · sea convenient~ distinguir
poi- el' ·hecho de': participar. en la dos aspectos en esta nOclón de coer·
vida Social. En mi sentido· más res· ción: el compromiso ·;mismo que
tringido, podrían definirse las coer· caracteriza Ja particip~Ción del su-
clones .semióticas~ cbmo · un conjun· j~to en una semiótica,: y a"quello a
to de .obligaci!:uies1 . voluntarias ·a lo que él se comprorilete al ejer-
involuntarias, conscientes o incons· cerla. ··En efecto,_ .el \.·compromiso
cientes, que-contrae el individuo al constituye ~l presupliesto funda·
participar en tal· o ·cuaí práctica* mental de la eStructura de· la comu·
semiótica. Desde una perspectiVa nicación* interindividual: la dificul·
individualiSta e intencional, la coer· tad experimentada para denominar.
ción es asimilable, de manera me· la (función.fática*. seg'1n, Jakobson;
tafórica, a la aceptación de las «re- ..-amabilidad» o ubenevQ.Iencia», para
glas del juego,.:·, :¡a aproximación ·ciertos lógicos; «Simpatía», para al·
sociOtógica'.del lengUaj'e -en'la tra- gunos filósofos, etc.) muestra clára·
dicióri europea qúe se remonta a ltlente que estamos :en. presen!:ia
Durkheim,;_. la define, Iitóticamente, de un concepto. tal vez indefinible.
"como un .~hech"o· .social».· · . Nosotros lo consideramos ·co.mo
. 2. Si · bien· la participación ·con. contrato• implícito, p~.Osando ciue
tra"ctual del indivlduo en los ejer- una tipología de las relaciones jn.
cicios de las Semióticas construidas tersubjetivas -que vaY~n desde las
(tales.;corrio los lenguajes documen- estructuras* contractuales cbeneVo-
tales o los juegos·cotectiyos) parece lentes» a las estructuras polémi·
.:...al menos · de· pasada- no ser cas*- debería introdti:Cir progtesi·
un· prOblema, no Ocurre, en .cambio, vamente alguna claridaO. en la· com-
. lo mismo. cuando· .se trata de pre- prensión de esa relación 11de hom·
cisar sus·. relaciop.es con las semió- bre a hombre». ..~
ticas naturales*: sin pl~ntearse la 4. Cuando el sujet"o ejerce la
interrogante del 'carácter innato o «amabilidad» semiótici; se compro-
adquiridcf'de las estructuras• semió- mete a practicar urui especie· de
ticas .de base --lo cual no interesa código de buena. cotiducta, J><>co
direélarnente . a · Ja semiótica;_ es importa .s:u nombr~: e\ sujeto debe
forzoso reconocer que el hombre tratar de producir y reconocer dife.
«Vive··. en 'la lengua» y... se encuentra rendas*, postular y apr~hender com·
inscrito en ella, sin poder salir patibilidades• e incompatibilidad~s.
(toda~· las impugnaciones llberado- Las. coerciones semióti~as, así com·
59 COERC!ON - COGNOSCITIVO·

prendidas, se identifican, entonces, tiva sirve, entonces; de transición


con las condiciones mínimas, nece- entre lo figurativo• y lo abstracto•
sarias para la producción y apre- (entre los cuales no existe ninguna
hensión de la significación*, solución de continuidad): se llega
-+ NORMA, CONTRATO, así a los discursos aparentemente
menos figurativos (o caracterizados
COGNOSCITIVO. Fr. cognitif, ing. por otro tipo de figuratividad), a
cognitive. saber, los discursos cognoscltlvoa
1. · En semiótica, el adjetivo cog- (cf., infra, 6).
noscitivo sirve de término. especi- 3. La autonomía de.la dimensión
ficador; remite a diversas formas cognOscitiva se hace más manifiesta
de articulación del saber·i:: produc· por el hecho de que etla desarrollt
ción, manipulación, Organización, re- su propio· nivel de actividades cog·
cepción, asunción, _etc. noscitivas.
2. Jerárquicamente superior a la a) El hacer• cognoscitivo cottes-
dimensión pragmática* que le sirve ponde ·a una transformación* q1*'.
de referente* interno, la dimensión modifica la relaci!ln de un ·sujetb ·
cognoscitiva del discurso se des· hacia el objeto-saber, establecien·
arrolla paralelamente al increm·ento do ya sea tina disjunción*, ya una
del saber (como actividad cognos· conjunción*. Los estados• cognos-
citiva) atribuido a los sujetos* ins.- citivos -o posiciones cognosclti·
talados en el discurso*. Si bien la vas-, obtenidos,: entonces, gracias
dimensión pragmática -con los en- al juego del ser• y del parecer*, se
cadenamientos de acciones• progra- articulan, según el cuadro semió-
madas que le son propias- no re- tico de las modaUdades veridicto-
quiere necesariamente la dimensión rias*, ·en verdadero/ falso/ secreto/
cognoscitiva, no ocurre lo mismo a mentira. En cuanto a la transmi·
lá inversa: la dimensión cognosclti· sión misma del objeto de saber, al
va presupone las acciones pragmá- menos en un primer acercamiento,
ticas, pues se define, precisamente, puede ser calificada de simple: se
por tomarlas a su cargo mediante tratará, en ·.este caso, del hacer
el saber. Por otra parte, la dimen· tnformatlvO* que, teniendo en cuen·
sión pragmática puede, en última ta el esquema de la comunicación*,
instancia, ser simplemente -en un aparecerá como hacer emtslvo• o ,
discurso dado- el · pretexto para como hacer receptivo*. Sin embir·
actividades cognoscitivas, como su· go, la mayoría de las veces -aun-'
cede a menudo en ciertas corrien· que no siempre-, la transferencia ,
tes de la literatura moderna. La de saber está· modalizada desde el
proliferación -en los ejes del ser• -punto de vista veridictorio: con re-
y del hacer•- de los «¿qué sé yo?.,,, lación al eje destinador / destinata·
<:i¿quién soy yo?», i.:¿qué he hecho?•, rio·, se tendrá, respectivamente, el
«¿en qué he obtenido éxito?.,,, etc,, hacer persuasivo• y el hacer· inte'r-·
va pareja con la atrofia de c:lo que pretatlvo• que ponen. en juego una
sucede» del componente pragmático. relación fiduciaria• intersubjetiva.
En los discursos narrativos, la ex· Dada la cstructun contractual• y,·
pansión de la dimensión cognosci· a la vez, polémica• de los discursos·
COGNOSCJTIVÓ . 60

. narrativos. introducir un hacer per· mensión cognoscitiva, ai: del Desti-


suasívo equivale a solicitar el hacer natario-sujeto, efectuado~- sobre io:
interpretativo·· cori~pondiente: en do, en "la· dimensión Pragmática.
la medida ·en que' Iá·•nanación ·haga El Destinador, en efectci se mani·
intervenir ~.dos siljetos -alterna· fiesta al inicio del relatp como· el
tivamente, t:ort sus:: d0s haceres per· que comunica el programa a re ali-.
suasivo ·e <~inter:pre~'.ativo-:-, · podrá zar en forma de contratq~; al ffr1ál,
utilizar, pot ejerilp~o. la estructura ejerce la •andón* cogno~cltlva: re-
de todos coflocida ciUe pone en es· conocimiento* del héroe11' y confu-
ceri.a ·. al embaucador y al embauca· sión del traidor*. En .'·cuanto af
do (swindler- tales), donde las dos_ Destinatario-sujeto, aun cuando . se
posiciones actanciaJes son intercarn· Caracteriza, sobre todo, :gpr el hacer
'!:Hables: y eJ Telato · s.e ·vuelve Ínter·. pragmático, también ~~ inscribe
rninable. Na~uralmeD.te, los doS ha· -debido a su relación Con el Des·
ceres -peZ.SuasiVo, 'C · interpretati· tinador- en la dirnensiOn cognos-
VO- pueden · ser , 3.tribuidOS,' por citiva: ia prueba glorificante* que·
sincretismo"'" a un- mismo y único logra pasar con éxito gfacias a su
actor* (el sujeto de la ·enunciación, poder-hacer persuasivo (configurado
por ejemplo) que ~cumula, enton- por la 'marca"') puede cOn·sideiarse
ces, .. los roles actanéiales de· enun· como una performance•: ~ogn.oscltl­
ciador• y enunciatario. va (que requiere evidentemente la
· b) Se llama sujeto'!' cognoscitivo competencia'* cógnosdtfva corres·
al sujeto que el enunciador· instala pondiente), .
en el discurso y al ·cual dota· de un 4. El concepto de esPacio 'cog•
saber parcial ·o total. ·Dicho "actante* noscltlvo puede explicars·~ partien·
permite mediatizar líi comunicación do de . la definición del· espacio"'
df!l saber entre el. enunciador y el como el lugar de la ma'.iiifestacióil .
enunciatarío bajo formas muy va- del conjunto de las cualidades sen-
riables (según· que se le suponga sibles del muÍldO. En ~fecto, las
saber o ·ignorar m1,1chas o Pocas relaciones cognoscitivas ::entre los
cosas). ·A nivel actorial, el rol de sujetos . -pero también~: entre los
sujeto. cognoscitivo :·pUede mariifes- sujetos y los objetos- S"Qn reJacio-.
tarse en ·sincretistnO con el del ·su- nes situadas "en el espacio (cf. ver,
jeto pragmático"', e · jnversamente, tocar, escuchar, etc.). Cabe, asimis·
el: sujeto · cognosciti~o puede ser mo, decir (teniendo. en. cuenta el
diferente del sujetá' pragmático y recorrido generativo'* del discurso)
dai- ·Jugar·· a~ la apa,rlción de ·un que, en un momento determinado,
autónomo, el infonTiador*; por últi· esas relaciones cognoscitjvas se'· en-
mo,· ·en ciertos caso.$ será· simple- cuentran espaclalizadas y, constitu* .
·mente reconocido ~orno Posición yen, entre Jos diferentes ·sujetos,
al menos implícita_;.:;_":;bajo la forma espacios proxémicos* qtie no son
de Observador*.· · ";:- -···· sino representaciones es¡)~~ia!eS de
e) En el '·marco -.dcl esquema na- espacios .cognoscitivos. '. ~s;f pues,
rrativo· podrá ·o;;on~.rSe -e,n cierto dentro del ámbito· de la :~emióti~.
mod<>:- el I:"ecorridci ·del Destinat3.- discursiva, se hablará di! espado
dor, qu~ ·se ·desenvUeJve en la di- cognoscitivo global estab.I~ido e.n·
61 COGNOSCITIVO • COHERENCIA

tre et enunciador y el enunciatario logia* de los discursos cognoscltl·


como Un contrato implícito carac· vos distinguiendo:
terizado por un saber .generalizadó a) los discursos . interpretzitivos,
en las acciones descritas; este es- como la crítica literaria, la historia
pacio puede ser, a su vez, absoluto en cuanto interpretación de las se-
(cuando los dos protagonistas del ries de acontecimientos, la exégesis,
discurso comparten la misma om- la critica de las artes {pintura, mú~
nisciencia sobre· las acciones relata· sica, arquitectura, etc.);
das) o relativo (cuando· el enuncia- b} los discursos persuasivos, ta·
tario no adquiere el saber sino les como· los de la pedagogía, la
progresivamente). También pueden política o la publicidad;
deslindarse espacios cognoscitivos c) los discursos científicos* que
pardales: cuando el enunciador des- se aplican sobre Jo persuasivo (con
embraga la estructura de la enun- todo el juego de la demostración)
ciación* y la instala en el discurso y, a la vez, sobre lo interpretativo
o cuando delega su saber en un (aprovechando los discursos ante·
sujeto cognoscitivo. riores, considerados, entonces, como·
5. El desembrague* cognoscltlvo discursos referenciales), con el sa-
se realiza de dos maneras: a) El ber-verdad como proyecto y objeto*
desembrague cognoscitivo es la ope. de valor propuesto.
ración por la que el enunciador ~ SA.BER. •.
establece una separación entre su
propio saber y el saber que él atri· COI!ERENCIA. Fr. cohérence, ing.
buye a los sujetos instalados en el cohererice.
discurso: esta delegación*. del sa- l. En lenguaje corriente se em·
ber se opera, entonces, en bene- plea el término coherencia para.
ficio de los ·sujetos ·cognosdtivos. caracterizar una doctrina, un siste-
b) El desembrague · cognoscitivo ma de pensamiento, o una teoría
enunciativo interviene, por ejemplo, cuyas partes ·estén, todas, sólida·
cuando el narrador* instalado en el mente relacionadas entre si.
discurso no comparte con el enun· 2. Negativamente, ' la coherencia
ciador el mismo saber que éste le puede definirse como sumisión al
delega. En ambos casos, la posición principio de no-contradicción, y ptr
cognoscitiva del enunciador, carac- sitivamente, como el postulado que
terizada por las mo"dalidades veri· sirve de base "a la metalógica y que
dictorias de verdadero, falso, secre- se encuentra subyacente a todas las
to y mentira, difiere· de la de los semióticas y a todas las lógicas
actantes de la narració'n o de la del construidas. L. Hjeimslev considera
narrador. a la coherencia como uno de los
6. Teniendo en cuenta la activi- tres criterios fundamentales de la
dad cognoscitiva del enunciador (es· cientificidad de una teoría.
pecificada, entre otros, por el hacer 3. La teoría semiótica* no se
persuasivo) y la del enunciatario contenta tan sólo con una invoca·
(con su hacer interpretativo), se ción a la coherencia, sino que tra·
puede: tratar de esbozar una tipo. ta, ante todo, de comprobarla en 1
COHERENCIA. cofy\)lINACioN' 62

las' descripciones* ·'Y en los mode-- paradigmático (por ejemplo, una


los"ll'. El medio más·.seguro parece clase de primer año de:..ún colegiQ,·
ser ·1a- trariscripci6n.' de la teoría un grupo social en la s9~edad)¡ .. eii.
misma al ienguaJe formal*: el insu· cambio, no es una simple suma de
ficiente avance de la teoría semió-- cardinales, sino que COD$tituye una
tica no permite sino Parcialmente totalidad intermedia enti-e una eoi
este proceder.-· Ba~taría, se dice, lección de unidades y 1:'!- totalidad
también, con verificar la· c0herencia que la trasciende. Depende, en efec·
de una teoría a niv.el de su formu- to, de una división cl~sificatoria,
·lación concpptual, Procediendo es- de una cOlección más val)Í:a y jerár·
pecialmente~. al· .~álisis semántico quicamcnte superior (colegio, comu•
comparativ<? de laS definiciones . de nidad. nacional), divisiQn operada
Jos conceptOs . a los que- concJerna: sobre la base de criterfos-determ.i·
el establecimiento de la red de los naciones que los actores·~ poseen en
conceptos, exhaustivamente interde- común (su campo funcii:inal o sus
finidos, garantiza -de. manera am- calificaciones específicas)".'
plia- su .coherencia. · -+ ACTANTE, PSlCOSEMiónCJ., SOCIOSE·
~ _CIENTIPic_IDllD,. TEOR!A. MIÓTICA. ''

COLECTIVO. Fr.· collectif, . ing. COMBINAClóN. Fr. cd:mbin.aison,


collective. ing. combination.
t. Al ·universo* semántico se le 1. La combinación es 1 Ja fornla·
llama colectivo cuando está· articu- ción constituida por la:"'! nresencia
lado, en su base, :Por la categoría* de vario;i; elemen.tos* y_: :producida
semántica na'tura/cuitura; se le opo- partiendo de una combinatoria de
ne, así, al universo iÚdividual*, fun· elementos simples. Puede conside-
dado · sobre la pareja vida/muerte. rarse que combinaciones:· de dimen·
2. A un actante sé le tonia como siones variadas fÚrman ~1 eje" sin· ·
colectivo si, a p3.i:-tir de -una coiec- .tagmático del Iengilaje ..'..En conse-
cióil de actores* individuales, se le cuencia: con ello, se deSiS:na'rá con
encuentra dotado de Una competen- el nombre de combinaciPn al con-
cia* modal común y/o de un hacer* junto de las relaciones•. ·constituti·
comú:n a todos los actore·s que él vas de una sintagmática '.(relaciones
integra. · del tipo «•.• yr., según L. HjeJmsJeV).'
3. A diferencia del actante indi- por oposición a las relaCiones de
vidual, el actante CQtectivO es, ne- selección u oposición qüe caracte.·
cesariamente, de ·t¡pa·. sintagmático; rizan al e'je paradigrnáticri".
o de naturaleza par'adigmática. Et 2. El término o:combhl~ción• ha
actante cnleétlvo. s~iagmái.lco es el sido introducido por ·1Hjelrnslev
lugar donde las· l,tp.idadeS-actores, para designar Ja ausencia de. pr~~
totalizadas ~1 modo ·,~e los' números suposición entre dos térininoS. La
ordinales, se· reemplazan -por sus- presencia de dos términOs en µqa
titució~ en la ejecución de un solo unidad* semiótica constituye. según
programa (así, Ja suCesión de- los él, una relación sin prtisuposición
diversos oficios en Ji construcción ·M eñtre sus términos.
de una casa). El ac.t:ante Coteetfvo ~ COMBINATORIA, P~SIClÓN.
63 COMBINATORIA

COMBINATORIA. Fr. combina- de combinaciones posibles. Sin etn·


toire, ing. combin.atory principe (or bargo, ha de tenerse en cuenta que
arrangement). el recurrir al principio del orden
1. Derivada del ars combinatoria en el cálculo (para organizar las
de la Edad Media, la combinatoria unidades derivadas) corresponde ya,
se presenta como una disciplina, o en semiótica, a Ja aparición del eje
más bien, como un cálculo mate- sintagmático* del lenguaje.
mático que permite formar, par- 4. Esta capacidad de los elemen"
tiendo de Wl pequeño número de tos del plano de la expresión* y
ele.mentas* simples, un· elevado nú- del contenido* para combinarse en·
mero de con1binaciones• de elemen- tre sí formando sintagmáticas cada
tbs. Aplicada por Leibniz al cálculo vez más complejas, es, a menudo,
de los conceptos, y por ello, consi- denominada función combinatoria
derada por él como la parte sinté- del lenguaje, pór oposición a la
tica de la lógica, la combinatoria función distintiva* (función de opo.
no podía dejar de interesar a la sición* o de selección*) que carac-
lingüística del siglo XX, cuyos lazos teriza al eje paradigmático. Así en-
epistemológicos con la filosofía del tendida, la función combinatoria
siglo xvm son de ·sobra conocidos. se refiere al procedimiento de des·
2. El concepto de combinatoria cripción* «ascendente:11 que va de
está emparentado, en cierto modo, las unidades mínimas a las unida-
con el de generación*, por el hecho des complejas, y se opone al pro-
de que designa un procedimiento de cedimiento «descendente», el de L.
engendramiento de unidades com· Hjelmslev por ejemplo, qu~ parte
plejas desde unidades simples. El de un «todo de significación,. y Jo
producto obtenido se presenta como descompone; por segmentaciones su-
una jerarquía* que corresponde teó- cesivas, hasta obtener los elementos
ricamente a la organización para· mínimos.
digmática de un sistema semiótico: S. El principio de orden -que
en este sentido, puede decirse que pone en juego la linealidad*- no es
la combinatoria de una veintena de el único principio de organización
categorías* sémicas puede producir de las unidades sintagmáticas (en
un nllmero muy elevado (de varios presencia de unidades disjuntas,
millones) de sememas*, ciertamen- tales como la negación francesa
te suficientes para dar cuenta de la •ne ... pas», su universalidad queda
articulación de cualquier universo* cuestionada): en ~eriiiótica, deben
semántico coex.tensivo a una len· tenerse, igltalmente, en cuenta la
gua* natural dada. compatibilidad* e incompatibiHdad*
3,- Introducir, en el procedimien- de ciertos elementos, unidades o
to de la combinatoria, una regla de clases, para con1binarse entre sí.
orden* según la cual las unidades Si se considera a la combinatoria,
derivadas son definidas no sola· no ya como un pi'occdimiento de
mente par la copresencia de los producción de unidades semióticas,
elementos simples, sino también sino como el eStado rest.dtante de
por el orden lineal de su disposi· este procedimiento. se designa con
ción, aumenta aún más el número el nombre de <:ombinatorla slntác·
COMBINATORIA ; COMPARADA (ling. -) 64

tica y/0 de comblnatorla semántica la primera de las ciencias' human;is.


a. la i'ed de relaciones constitutivas Influenciada por la epiS!~me coniún
de las unidades ·sintagmáticas, fun. de la época que trataba de explo-
dada· en el principio de compatibi- rar todo objeto de 'conocimiento
lidad.· en su dimensión tem:Poral, · la· lin·
6. La definición. de variante* com· gillstica se volvió, tamOién. ell"a., his-
· blnatorla,. términd· del análisis dis- tórica: el origen de las lenguas, su
tribucional* que-. .designa una va- parentesco, su organiUción en fa.
riante. com'¡)atibl~ "ZOn un contexto millas, han sido por mucho tiempo
dado, se ajusta a ,Jas observaciones las palabras de consjgna exhibidas
prece4e~tes. · · por estas investigaciones. Sin ·em-
bargo, bajo ese parecet:.teórlco•.cu-
COMENTARIO.· Fr. commti.ntaire, yas deficiencias nó defan de asom-
ing. Commentary. · · brarnos,· se elaboró pro&resivamente
-1. Térni'ino del lenguaje corrien· una rigurosa metodoIOgía compa-
te, el coñientS:rlO.:sirve pará desig- rada: la tentativa de Orden aiq,úco-
nar cierto tipó' de discurso inter- lógico que pretendía re'construir una
pretativo ·"sin pret·ensión científica. lengua indo-europea «Original•; se
2; En cuanto unidad· discursiva, totnó; según la formul<ición que· le
de carácter inter:Pretativo* y· temá· dio Saussure, en•. conS.trucción de
tico*, el comentario· se obtiene por un modelo tipológico• Que hizo apa-
un desembrague* .enunclvo ·o. enun- recer al indo-europeo .::-a nivel· del
/
ciativo i · : plano· de la expresión*~ no ya OO..
.-> U~IDA0. (diS'cursiva).
..... mo un árbol genealógicO, sino como
una red de correlacio.ries formales
CoMPARADA (tINGtl'tSTICA -). que articulan Jos diferentes siste-
Fr. tinguistique comparée, ing. com- mas fonológicos de 1as.'·Ienguas Pa.r-
parative linguistics. · ·; · -ticulares. La interpretación hjelms-
L Sé designa coli: este ·nombre a leviana de este ínodeloj que ve allí
la ·lingüística. del siglo· XIX (antes el resultado de Ja· eláboración de
llamada· graltuidca comparada y/o una tipología genética, :diferente de
·histórica) tal como fue· fundada, al la tipología estructural, debido a
inicio del ··siglo prece-dente, · por las restricciones introducidas a1 to-
Franz Bopp y. Rasmus R.ask, conti- mar en cuenta corpus* formados
nuada ·;en la segunda mitad del por morfemas* (o palabras) de cada
Siglo por··August .Schieicher;y los lengua :;-eriterio formal que susti-
. neo-gramátioos, y· que recibe su for- tuye a li historicid,ad 4e la evalua-
mUtación más acabada de ·F. de ción-, confiere a la. lingüística
Saussure en Jos últimos años del comparada, junto a la ·especificidád
sigló XIX, y ·su evaluación teórica, .de ·su aproximación, -~u estatuto
de . L. Hjelmslev-·:en ·la década de científico característico': .
1940. · ·. ; · · . 3.- La lingüística conlParada no .es
·2¡ Desde et punto de vista 'de la solamente, como algunPs creen, un
historia de las cie~cias, Ja: aparición ·período histórico en· :desuso que
de la llngilistfca ..Comparada marca marcó una de tas ··eta~as del des·
el acceso· :it estatuto científico de .arrollo de la lingüfstic_a, sino . una
65 COMPARADA (ling; -) ·COMPARADA (mi t. -)

teoría ·y una práctica eficaz que ex. ciones entre las divinidades ya no
plora nuevas vías lingüísticas SUS· se efectúen sólo a ·nivel de sus üe-
ceptibles de extrapolaciones hacia nominaciones, sino también a nivel
otros campos semióticos. · · de los rasgos de contenido* que las
-) COMPARATISMO, TIPOLOGÚ.. · definen, prioritariamente, como pun-
tos de intersección de redes semán-
COMPARADA. (MlTOLOGtA -). ticas. Esta hmovación metodológica
Fr. mythologie comparée, ing. com. permitió a Dumézil, ·entre otras co-
parative mythotogy. sas, fundar sólidamente su articu- .
l. La mitología"' entendida· como lación de la ideología de los pue-
el estudio de los nútos ha pasado, blos indo-europeos en tres funcio--
al igual que la lingiiística, del enfo- nes*. ..·.
que genético al comparativo*. Lo 3. Paralelamente, , Uvi ~ Strauss,
mismo que la lingüÍstica compara. efectuando sus investigaciones en
da*,. que, de histórica al inicio, se el dominio amerindio, realizó un
constituyó en metodología fonnai, estudio comparativo 'análogo, aun·
18 mitología no parece poder cons· que no lo presenta de manera ·tan
tituirse · en disciplina con propósito formal o tan abstracta. Ti'abajan~ .
científico, salvo si renuncia en par. do, él también, a nivel del conte-
te, a su aproximación, histórico- nido, se dedicó a dilucidar la orga-
genética (que, sin embargo, ciertas nización del discurso mítico* y
corrientes de investigación conside. mostró, en particular, la posibilidad
ran como la única fecunda). de traducir un mito en otro (o un
2. Entre la perspectiva de S. fragmento de riiito- en otro) gracias
Frazer, que soñaba con una mito- al juego de las ·transformaciones"' C.·
logía universal; y la de algunos in. o de los posibles cambios de códi- :. :·
vestigadores, que buscan el carácter gos semánticos: de donde se des--
único de cada· mito, se ha abierto prende, fundada_ en un sistema de
una nueva vía iritcrmedia gracias oposiciones"', una estructura lógica
a los trabajos de G.· Dumézil y· de subyacente que, al englobar y so-
C. Lévi-Strauss: con ellos, la aproxi. brepasar los límites de los Corpus
mación comparativa se ejerce den- estudiados, remite a la naturaleza
tro de un universo sociocultural y al funcionamiento del crespiritu
determinado en el que se intenta humano~.
examinar todo el contenido ideoló- 4. Recogiendo lo esencial de la
gico sin· pronunciarse sobre lo que metodología ·de Lévi-Strauss para
es propiamente mítico y lo que no aplicarla al análisis! de los mitos
lo es. Así, · Dumézil renovó total- griegos, M. béticnne extendió el
mente las investigaciones en mito- concepto de mitologí<i. al campo de
logía indo-europea, especialmente al Ja cultura; de este tnodo, se ins-
pasar de un comparatismo fonético cribe, él también, ert la perspectiva
(situado a nivel del significante*) comparada y abre, así, en este te-
que conducía a un atolladero, al rreno, el camino para investigacio-
comparatismo semántico (relacio- nes particularme."lte prometedoras.
nado con el significado*}: de ahí, 5. -Estas diferentes exploraciones
por ejemplo, el que las compara- en mitología comparada -y particu-
SEM1ÓTICA. - 5
COMPARADA (ntlt. ·.,..¡. COMPARATISMO . ' " 66

· 1a:.rmeilt~ ·JU, de. ·Lévi·Strauss, cuyo puede tomarse como· ejemplo lo


funda.merito metpdológico está más que eL siglÓ XIX consipera aley fo-
explicitado-o -.. se ·encuentran en·- el nética». Una de esta~~ leyes, en el
origen mismo de .la-.-semiótica fran." camp:o romance, se fo~ulaba corno
cesa que . 1-no ceJ?.a de enriquecerse sigue:. ala vocal latina_·. a, acentuad.ri
con. su contacto,:· · . · : ·· · y libre, se convier.te ~n e en fran··
.. -+ MITOLOGÍA, !:<)_MPA.RATISMO, TRANS• cés11-;y se escribía: la~.·~ [>fr. eJ.
FORMACIÓN/ . 1 Esta formulación rest/me e integr.1
.:1 · . : •· un conjunto de procedi:µlientos corn·
COMPARATIS.MO. Fr: compara· parados: · .< . . '· ..
tisme, · ing: com~~ativiSm. _.. a) presllpone una descripción ho·
·i. El comparadsmo es un con· mogénea de los siste:mas fonológi·
jtlnto ·.. de? proc9~imientos ··icognoS· cos del latín y del fnl~cés que pOsi·
citivos clirfgidos .a:: establecer corre- · bilite la identificació.ii~ de los do!>
laclones:.formales entre· dos o más fonemas en cuanto un.idades Sintag·
objetos SemióticOs -y,· en definitiva; máticas; · · :: · · ·.
a· constituir un modelo tipológico* b): se basa en el reconocimiento
cuyOs· objetos considerados serían de las vecindades coritextuales con·
las variables. Aunque el hacer com· · . sidetadas como condiciones necesa-
~3.rat!vo, típico de ciertos discursos rias ·para establecer I:i correlación;
con propósito científico, pueda con· atañe, por un lado, :~ la poslción
siderarse :-como p·arte del hacer de del fone1na a dentro (de la unidad
orden taxonómicó* ·-en sentido am· de expresión m~s eitensa que es
· plio, se . sitúa, $ih embargo, en un la sílaba (la correlación no ínter-
. nivel jerárquicamente superior, pues viene, salvo si la vocii.l es «libre1>.
presupone -en gi:an medida- los es decir, si dentro de: la sfiabá no
objetos yá construidos por el hacer está. seguida por una'. consonante).
taxonómiCo. · , · y por otro lado, a 13. posición del
2. En tanto qtie.· metodología, el fonema latino dentrO-. de una uni-
camparatismo fue elaborado -apli· dad morfosiñtáctica ·._que depend(·
cándalo al plano de la expresion" del -plano de los· sig"nos -la -pala·
·del · lenguaje- por· la Uniñifstica bra*-, definido y delimitado en
comparada• (llamada también gra. latín por el acento-(só}o las vocalc!-
mática · comparada) del siglo ·XIX. a acentuadas en latín ·Coinciden· con
Fue extendido al- planO del ·cante· la' vocal e en francés).
nido* en mitología comparada*, gra· · · 4. El ejemplo propUesto pone en
. cias a los trabajos· de G. Dumézil evidencia el carácter formal y,_ a. h:i
. y C. Lévi.Strauss~ Su aplicación a vez, acrónico* de Ja C9rrelación · es.
la literatura C.onlparada se deja tablecida: aunque éSta ley hayo
s~ntir todavía:. Do es, sin embargo, sido considerada comQ. Una ley tthis·
imposible que la ·noción de intertex· tóxica», nada en sü · formulación
tualidad*, elaborada' de manera más hace . intervenir: uná · historicidad
1Ígurósa, pueda· introducir el com· cualquiera. Al contraiio, ·esta corre.
paratisrno en semiótica literaria. !ación resiste la coni.Paración con
_3. Para· ilustrar de un modo algo la que puede formu1<1..rse entre ·40~
siínplista el método comparado, sistemas lingüísticos ··:considf:rado~.
67 COMPARATISMO - COMPETENCIA

simultáneamente -entre la lengua (alejamiento de los· pUntos de ar-


de oc y la lengua de oil, por ejem. ticulación, por ejemplo) o intrínse-
plo- y enunciarse como la corre· cas (fenómenos, por ejemplo, de
!ación entre la vocal a del occitano contigüidad que producen la asimi·
antiguo (acentuada y libre) y la }ación o la disimilación). La teori·
vocal e. del francés antiguo. Si a zación de los datos fonológicos po-
estas correlaciones se las designa dría, quizás, permitir la construc-
con el nombre de transformacio- ción de modelos* que, S.plicados por
nes*, se dira únicamente que, en extrapolación al plano del conte·
el primer caso, la transformación nido, darían cuenta de las condicio-
es orientada (al no estar explicita- nes de incompatibilidad sintáctica
das las leyes del paso del francés -concepto bastante cercano al de
al latín), mientras que, en el segun- agramaticalidad* (qúe es una no.
do, es· neutra (o no ·orientada). La ción intuitiva}- y de las incompa·
distinción entre los dos tipos de tlbilldades semánticas correspon·
transformación no prejuzga en nada dientes a la inaceptabilidad (en
su lo~lización espacial o temporal gramática generativa).
que ·depende de un proceso dife· 3, Desde el punto de vista ope-
rente. ratorio, nos contentaremos con en-
~ TIPOLOG!A, COMPARADA (lingüfsti· tender por compatibilidad la posi·
ca -), CX>MPAAADA (mitología -), IN· bilidad que tienen los elementos
Tirn.TEX~UAIJDAD, Ul.ANSFORMi\CIÓN. semióticos de contraer una relación*
(de aparecer juntos en una unidad
COMPATIBILIDAD. Fr. compati- jerárquicamente superior o en po-
bilité, ing. compatibility. · sición de contigüidad en el eje sin·
l. Las numerosas combinaciones* tagmático). ·
producidas por la combinatoria a -)o COMBINA.TORIA, GRAMATICiU.IDAD,
partir de un pequeño número de ACEPTABILIDAD, SEMAm'ICIOAO, INtERPRE-
elementos, pueden ser consideradas, TACIÓN.
desde el punto de vista semiótico,
como unidades de dimensiones va- COMPETENCIA. Fr. compétence,
riadas, ya sea que pertenezcan al ing. co1npetence.
plano de la expresión* o al· del t. El concepto de conlpetenda
contenido*; Su organización se basa -introducido en lingüística por N.
en el principio de compatibilidad, Chomsky- epistemológicamente se
según el cual sólo ciertos elemen- remonta a la psicología de las ~fa­
tos pueden combinarse con cuales· cultadesi> del siglo· XvtI, mientras
quiera otros, c:xcluycndo otras com- que el de lengua* (el concepto de
binaciones juzgadas incompatibles: competencia trata de sustituirlo to-
esto restringe más la combinatoria mando algunos de suS parámetros
teórica. esenciales), "elaborado por F. de ~:
2. Las razones de la incompati· Saussure, remite a la reflexión que \-.
bilidad son difíciles de discernir. el siglo XVIII hizo sobre los «Siste-
La incompatibilidad fonológica pa- mas» y los «mecanismos:x.. Lengua
rece ser la mejor estudiada: ·se dis· y competencia se cotÍsideran dota·
tinguen en ella causas extrínsecas das de una existencia virtual* y ~e
COMPETENCIA 68

opon~ '. (Son ., ló&Ícamente · anterlo. tionar en todo instante~ El aporte


res), una, al habla*, y la otra, a la· innovador de Chomsky:: Jo constftu.
performance*, consebidas como ac- ye, a nuestro entender,:.la udinami·
tualizaciones*· de.: potencialidades zación• del concepto de: lengua qlle
precedentes. Y así :como. la lengua ha permanecido demasí~do estático
saussuriana es el único objeto de en Saussure y sus heréderos: con·
la lingüística, la competencia -des- cebir la lengua como '.un proceso
crita por él lingüista- es la gramá- productor -Y no ya co.mo un esta·
tica* de esa lengua. La diferencia do- cuya competenci3: seria una
de punto de vista aparece· cuando de las instancias orien(adas, co~s~
se , quiere 1precisar.. el o:contk:nido» tituye c.~ertamente un aporte nueyQ,
de esa , instancia· virtual: mientras cuyas . pOsibilidades teóricas están
que, para Saussure, la lengua es todavía lejos de ser aprOvech~d~.s.
esencialmente· un' sistema di: natu· 2. Nótese, sin emba1~go, que· el
raleza paradjgmátiCa*¡ Chomsky' in- examen del «contenido,.. de la eoin.-
siste -por el cohtrariO-, eh su petencla Ungü!stica no ágota el cori·
forinulación de,·¡~ competencia, so. cepto de competencia. :. ~n relación
bre Ia·'capacidad "-de producir· y con la performance qu~ es U1' -ha-
comprender· un ntifnero infinito de cer• ::Productor de enunciados, la
enu'nciados, es· décir, sobre el as- competencia es un saber-hacer, «ese
pecto propiamerlte· sintáctico.*. Tal algo:i> .que posibilita el'.:hacer. Ade-
polarización· es, Si:;i embargo, algo más, ese saber-nacer, ·en cuanto
artificial, pues cierto · número de .. acto en potencial), i>uede separar-
Hng'ilistas de form~ción saussuriana se del hacer al que sp refiere: Si
(Hjelmslev. o Benyeniste, para ... no existe un saber-hacer ·fuanipulador
citar sino a los más conocidos) ya de las reglas de· la graiJ:iática, exfs.
habían reintegrado: el proceso sin· te otro que manipula, ·por ejempfo,
tagmático•· en la ..esfera de la «len- las reglas de cortesíaT DichO :. i;!e
gua••.' La )nsisterlcia de· Chomsky otrO modo, ·la competencia lin.güts-
sobre el fíecho de. que la compe- tica no es algo en sí, sino un casO
tencia consiste en ·producir uun particular de un fenórrieno mucho
número infinito de· enunciados,. nos más amplio que, bajo-: la denolni·
parece ·excesiva: la combinatoria* . na:ción genérica de éOmpeter1cia,
es una historia más viej~ que el forma· parte de la proQlemátiea de
adagio, seg'Ún el cu.al, <tno hay cien- Ja acción humana y constituye al
cia sino de .Jo.· general:.. Podemo$ sujeto como actante*.-. (cualquiera
preguntarños · si'-no es d'el toao ra· que sea el ·campo. en ·:que ella se
zonable limitar las ambiciones de ejerza). Por otro lado¡'. Ia compe-
Ja Sintaxis a uria cOmbinatoria de tencia· -tal como es ·definida por
ciaSes*, ;'· para · enfocar -en·, seguida los chomskianos- es Un saber; es
otros componentes ,:capaces de OCU· decir, , un conocimiento implícito
par su lugar en un momento'dado, que el sujeto tiene d~· su lengua
antes que postular -como hace la (y que fundamenta el .Concepto de
gramática·· generativa*-· un impe- gramaticalidad*): no obstante, se
rialismo sintáctico que las <:empleo observa· que ese ·saber nP: concierne
j~dades semánticas amenazan -:ues· al saber-hacer sino al ~eber-ser, és
69 COMPETENCIA

decir, al «COntenido11 de la compe- petencia constituyen lo que se pue-


tencia considerado como un sistema de llamar competencla del sujeto.
de coerciones (conjunto de pres· 4. Las consecuencias que pueden
cripciones y prohibiciones)... · obtenerse de tal definición concier·
3. La distinción entre lo que la nen a la teoría semiótica en su to-
competencia es y aquello sobre lo talidad. El análisis de los discursos
qUe trata (es decir, su objeto, que narrativos nos ponen en disposición
en el caso de Ja competencia lin- de encontrarnos, a cada momento,
güística se identifica -una vez des· en sus dimensiones pragmática* y
crito- con la gramática) permite cognoscitiva'* con sujetos perfor·
considerar a la competencia como mantes (es decir, que· real.izan se-
una estructura* modal. Nos encon- ries de comportamientos J;lrogra·
tramos aquí con to9a la problemá- mados), que, para actuar, necesitan
tica del acto'": si el acto es un poseer o adquirir, prirhero, Ja com·
•hacer-Ser/estar:11, la competencia es petencia necesaria: el re.corrido na·
«lo que. hace ser/esiar»; es decir, rrativo* del sujeto se encuentra,
todas . las condiciones previas y los así :pues, constituido por dos sin·
presupuestos que posibilitan la ac- tagmas llamados competencia y
ción. Ahora, si se traspasa el pro- performance. De este modo, la .se·
blema de la competencia, del cam- mi6tica asume la tarea de cons·
po lingüístico (vasto pero, sin em· truir modelos de competencia :mo-
bargo, limitado), al de la semiótica, dal que, basados en el análisis de
puede decirse que todo comporta- los discursos narrativos, sean apli·
miento con sentido o toda serie de cables a las semióticas no lingüís·
comportamientos presupone, por un ticas del mundo* natural (en el
lado, \Ul programa* narrativo vir· plano de la «realidad psicosociab)
tual y, por otro, una competencia y capaces de servir de premisas a
particular que hace posible su. eje- una semiótica de la acción*. La ti·
cución. La competencia. así conce- pología de las competencias semán·
bida, es una competencia modal ticas puede ser considerada, a· su
que puede describirse como una or· vez, como una de las definiciones
ganización jerárquica de mod31ida· posibles del universo* semántico,
des* (estará bilsada; por ejeÍnplo, colectivo o individual.
en uri. querer hacer o un deber· 5. Por otra parte, se observa
hacer ·que· rigen un poder-hacer o cómo, en esta perspectiva, el con·
un saber-hacer). No hay que con· cepto de competencia .de comunJca-
fundirla con la competencia semán· clón, elaborado por Dell Hymes,
tlca (en el sentido amplio de la puede ser confirmado y consolida·
palabra semántica, el que se Je da, do: lo que él entiende por conocí·
por ejemplo, cuando se dice que la miento implicito o expUcito de las
estructura profunda de una lengua reglas ·psicológicas, culturales y sa..
es de naturaleza lógico-semántica), ciales, presupuestas por la comuni·
cuya fonna más sencilla es· el pro- cación*, no es sino la confronta·
grama narrativo virtual. Una vez ci6n -contractual* o polémica*-
unidas, estas dos formas de com· de dos sujetos competentes: su
COMPETENCIA - COMPLEMENTARIEDAD 70
competen.cia desi~al; ·positiva o ne- TIVA DB SUP2RFICIE, cl!NÍ!RATIVO (reco-
gativa,. es, de un ·lado, modal (da rrido -), DISCURSO, NA'Rru.TIVIDAD.
lugar a 'laS ·operaciones de manipu-
lación*) y, de otr9, semántica (da COMPLEJO (TeRMINO -)- Fr.
cuenta· de· la comunica'cíón · recfpro- terme comp!exe, lng. ·cámpte..i; term.
ci ·del· saber y de 10s· malentendidos Derivado de la estructura* ciernen·
y ambigüedades). · · ·, tal de Ja significación~ el término
·6. ·· Si se desea inscribir a la com- complejo se define por la rela~ión
petencia en :el proceso ~general de ay.' .• y)), contraída, como consecuen-
la· significación*, hay que ConCebir- cia de operaciones sintácticas ante-
la ·como una instancia· situada hacia riores, por los términos S1 y 5 2 del
lo-" alto de ·ta enunciación*.· El ·SU· éje de los contrarios"* .en el cuadro
jeto de la ~enunc~~ciói:l modaliza las semiótico. El término complejo
estructUras•·· semióticas· y narratí- puede ser positivo o :·negativo, se·
vaS dándoles d. esta'tuto del -deber- gún qu"e domine; a uno u -otro de
ser ·ces decir, corii9 ·un· sistema de los términos contrario'$: que entran
coerciOnes), · y las: asume como un en su composición; La «coexistencia
Saber-hacer, ·como un ··proceso· vir- de los contrarios:o es un problema
tual. Dicho -de otr:o' !nodo, la· com- arduO, heredado de una iarga tra-
petencia modal manipula la com· dición filosófica y religiosa. V. Br0n·
petencia semántica, · al darle, en dal la· introdujo en UPgüístici; al
cierta manera, el. ·.estatuto de acom· reconocer la existenclli::de térmirios
petencia)t y· al tratisformar una gra. complejos en la artic~)3.ción de Ja,s
mática, dada c9rito una descrlp. . categorías* gramaticalf:_s. de ciertas
'ci6n, en __.un sistema norm~tivo y lenguas naturales. El -Problema: de
en. un proceso oP~ratorio. En ~an- la generaci6n de dichos términos
. to a la· competenéia semi."'l:tica mis· no ha· recibido, hasta·; ahora, úna
ma, coi:isiderada Como acontenido:o, solución satisfactoria. ... ·
como -objeto modaiizable y modali- -;i.· CUADRO SEMIÓ11C01 ·itRMINO.
zado, sus :articulaciones se. confun-
den, finalmente, con los niveles*' y
COMPLEMENTARIEDAD. Francés
componentes*· que la teoría ·semió-
tica se ha visto· obligada a deslin· complémentarité,
tarity.
ing. :. complemen-
, . -·, .
dar cuando. ~tiataba de drlr una
1. La complementatj."edad es úna
'representación coherente del reco-
de las relaciones* cori.Stitutivas de
rrido generativo*: .nadá ~mpide, en-
tonces, distinguir una competencia la. categoría* semántiCa que con-
semio-narra:tiva, tomada a cargo Por traen el subcontrario* -Y el contra-
ia -enUnc;iación, y.~ competencia río* .Pertenecientes a. la misma deí·
discursiva y textual;· la enunciación xis*. positiva (S1 + S2l'· O negativa
misma es· definida como. instancia (S 2 + 8 1) en el cuadrj> semiótico.
de mediación q~e permite la perfor- La complementariedad:: se presenta
inance, ·es decir, la ·realización del como un· caso particular· de la: re-
discurso-enunciado. Iaci6n orientada*,· que·.:. va del tér-
~ LENGUA, ACTO, MOOALIDAD1. NARRA· mino presuponiente al ·.término ·px:e·
nvo ~recorrido -) , SINTAXIS NARRA· supues~'(· Para ser complementari.a:,
71 COMPLEMENTARIEDAD • COMPRENS!ON

tal relación ha de ser isótopa• a la COMPONENCIAL. (ANALISIS -).


categoría de la que forma parte: Fr.. analyse componentielle, -ing•.
dicho de otro modo, la implicación*, componential analysis. - De origen
al afirmar el subcontrario ~ ..:sí:i1), norteamericano, el análisis compo-
ha de encontrar el contrario (el nencial está vinculado, por· sus pro-
«entoncesll) como término 'presu· cedimientos taxonómicos, al análisis
puesto de la misma categoría. En sémico, aun cuando se diferencien
tal caso, diremos que la relaciOn tanto a nivel de termino.logía como
de complementariedad integra dos de los objetivos y campos de apli·
té.rmJnos complementarlos. No obs· cación.
tante, la relación misma puede. en _,. s~nco (análisis -).
un· nivel jerárquicamente superior,
servir de término para constituir .. COMPONENTE•. Fr. composañte, 1
una nueva categoría, y en esta ·oca- ing. component. - . Los términos
sión, la relación será llamada meta- componente (co1nposa:nte, de. con·
ténnlno._. con¡;plement3:'"1o· notació·n, más bien, organicista) y·
2. Algunos lingüistas {J. Lyons, componente (composant, de conno-~'.
por ejemplo) definen la complemen- tación, más bien, n1ecanicista), to-~··
tariedad de dos términos por el mados de diversas .disciplinas cien·
hecho de que la negación de uno tíficas, designan indiferentemente
de ellos implica la afirmación, al un objeto semiótico construido -o
menos implícita,· del otro. El ejem- en vías de construcción- cuya or·
plo elegido por Lyons (casado/solte· ganización interna no se trata de
ro) muestra bien que aquí la com· precisar, sino de subrayar su auto-
pl!!rnentariedad corresponde,'· para nomía dentro del conjunto más
nosotros, a lü. contradicción*. vasto en el que se inscribe. Estas
denominaciones se aplican, con fre-
3.. En el análisis distribUcional*, cuencia, a lo que antes se llamaban
la distribución se denomina comple- diferentes disciplinas de una cien·
mentarla cuando dos unidades lin· cia y que, hoy día, se consideran
güísticas no aparecen en ningún como los componentes de una· tea.
contexto"" común. El concepto de ría* (por ejemplo, el componente
complementariedad se corresponde, semántico, fonológico, etc.).
en este caso; parcialmente, tanto
con la definición de Lyons (porque COMPRENSION. Fr. compréhen·
las dos unidades se excluyen mu· sion, ing. comprehension. ·
tuamente; pero también a candi· ·l. En.lógica se entiende por com·
ción de que las dos unidades per· prensión el conjunto de caracteres
tenezcan al misino niVel de deriva· (propiedades, atribuciones, determi·
ción*), como con nuestra propia naciones, etc.) que pertenecen a un
definición: las dos clases*. de las concepto"" y/o que.lo ·definen. Como
que dependen pueden, en' efecto, organización · de ·.cualidades subya~.
mantener entre sí una relación de centes al concepto, la comprensión
implicación. se. opone a la ex.tensión, que enfoca
-)o CUADRO SEMIÓTICO,· I'REStJPOSIClÓN, cuantitativamente el conjunto de
IMPLICACIÓN. los objet~s que aquél abarca.
COMPRENS!óN - COMUN!CAC!óN . 72

2~ .Eri' semiótii::a';:~y ···dent;o ·'de-1a mensaje,, el código• (má_S o menos


lingüístiCa de: in~:Piraci6n saussu- comt1n a los actantes de~la coinuni·
riana, donde .Ja extensión·es ·consi- cación) gracias al cual se. eomu~ca.
derada· poT'el análiS~s com.o·nó per- el :mensaje, y por .últin_io, el ·oon-
tinente,· la ·compre'~ión es identifi- tacto que descansa en ~Un canal*
cable eón la defi¡:Üción* del · cori- físico y, a la vez, ·en una conexión·
cepto, asimilado éste a la denomi- p.Sicológica; a cada unó de estos
nación*.: En' este caio,· resulta legí- diferentes elementos cOrresponde
timo partir·' de la cOmprensión de· una función lingüística.: particuiar,
un semema*, precisando no obstan- respectivamente: emOtiVii (o expre-
te que puede co:Diprender igual- siva*), conativa*, poética*, referen~
mente sem~ .negativos (=las; pro- cial*, metatingii.fstica*, fática*.·
piedades aUsentCS); Por el hechO de 2. Evidentemente~ la!fi funciones ..
que la 'si~cación- reside en la jakobsonianas del lengutije* no ago-
aprehensióri. de las diferencias1 cosa tan .su objeto, y una ,·árticulació'n
que· el concepto 110 admite tradicío-- de este tipo, por más sugestiva que
nalmente en su comprensión. sea, no' fundame"nta una'. metodolo-
~ EXTENSIÓl't. gía para el análisis de: ...Ios discur~
sos: este esquema de seiS funciones
COMUNlCACióN, Fr. communi· es demasiado general '#orno para
cation, ing. communica.tion. permitir una taxonomía :y una sin..
l.· Paralelamente a la teoría de taxis apropiadas y, al mJsmo ti'em.-
la uiforniac.ión* y en estrecha rela- po, demasiado particular, ya que.
ción con ella, se ha ;desarrollado un versa únicamente sobre la comuI)h.
esquema· de la Co_muntcaclón lin- cación .verbal (que no e,xplica. ade-
güística ... que perrr:ianece vinculado más, el aspecto sincrético*), con.
a una perspectiva inecanicista, aun exclusión de todos los otros siSte:
cuando su punto de· partida se mas semióticos. Así, por ejempló;
muestre·: más respetuoso con los este esquema parece conCernir sólo
intercambios int~rsubjetivos. Según al hacer informativo*, 3rticulab!e',
el · psicólo'go Bübier, la actividad según la relación destinador/desti·
lirigüística puede définirse por sus natario; en hacer emisiVo* /hacer
tres funciones*: · exPresi6n• (desde receptivo*; ahora bien, existen otras
el punto de .vista .del "destinador*}, formas de concebir la t.i-ansmisión
llamada ·(desde el' ·Punto de vista del saber, particularmente cuando
del destinatario) y repreSentación éste está modalizado: tal es el caso
(que remite· al refer~nte* o al con- del hacer persuasivo*· y· del hacer
texto*). Este esquefna triádico l:& interpretativo* que . depe~den más
sido empleado· con ·nuevas denomi- de la manipuiaci6n* que \de la «co-
naciones y ·compI~rrientado por R. tnunicaclón». ,_; . :
JakObson. P~t"a.· él, ·.ia··comunicaci6n ~. Resulta claro. por otra parte,
verbal se basa en seis factores: 'el que ·el lenguaje, ademáS:;;·.de comú:- .
dest(nador Y el destinatario, el men. nicaci6n, es también producción de
saje*· transmitido por el uno al sentido*, de significaci6ri*. No se
otro, el contexto (o referente) -ver- reduce a la simple tran~misi6n de
bal o verbaÜzable- del que trata el un saber sobre el eje ~yo•/ .i:tú..,
73 COMUNICACION

como podría sostener cierto funcio- cosas, mediante la Cual el hombre


nalismo; complementariamente, el transforma la naturaleza -es el eje
lenguaje se desarrolla, por así de- de la producción*-, y el de la ac.
cirlo, por él mismo, p6r lo que es, ción sobre los otros. hombres, crea·
con una organización interna: pro- dora de las relaciones intersubjeti-
pia, a la que la simple teorla de la vas que fundamentan la sociedad
comunicación -tomando, en cierto -es el eje de la comunlcacl.ón-.
modo, el punto de vista externo- En la tradición antropológica fran.
no parece poder explicar. cesa (sobre· todo después de ·M.
4. Aunque independientemente de Mauss),.el concepto de intercambio*
Bühler, de Jakobson o de Martinet que comprende esta· segunda esfera
y de toda la corriente ñmcionalista, de actividades, puede ser interpre·
la filosoffa anglo-sajona del lengua- tado de dos maneras diferentes:
je. -con J. L. Austin- comparte bien como tranSferencia* de obje-
con ellos, más allá de una termino- tos* de valor, bien como comunica·
logía y unas preocupaciones· di fe· ción entre sujetós. Las transferen-
rentes, un mismo fin, el de explicar cias de objetos se -·presentan en
el lenguaje como operación inter- forma de adquisiciones* y privacio-
subjetiva; pero esforzándose por. nes* que afectan sólo a los sujetos
integrar en él una porción mayor y constituyen, en la medida' en que
de la· actividad humana;· El acto* toman formas canónicas, sistemas
de habla (11:speech act~, según ·J. R. de relaciones interhumanas; regla-
Searle), que ha sido progresivamen- mentando los deseos y: los· deberes
te elaborado, y, sobre todo, ta prag- de los hombres. Lévi·Strauss ha
mática* (en el sentido norteamerl~ propuesto distinguir tres dimensiÓ-
cano) sobrepasan el límite ·de la nes fundamentales. de estas trans-
mera 4"COmunicación•, al interesar· ferencias ·comunicaciones: a los in-
se por sus condiciones de uso, Y tercambios de mujeres, considera-
aportan -no obstante su termin~ dos como procesos,· corresponden
logia, a veces poco coherente debiM las estructuras de parentesco que
do a una amalgama filosófico# lin- tienen forma de sistemas; a los
güística- una contribución ' nada intercambios de bienes y de servi·
despreciable para el estudio de la dos, corresponden las estructuras
actividad del lenguaje. económicas; a Jos intercambios de
5. Para escapar a una concepción mensajes, las estructuras lingüísti#
demasiado mecanicista · (arraigada cas. Este esquema; muy general,·
en el modelo de la información) o puede evidentemente modificarse o
demasiado restrictiva (atenta a los afinarse: en lugar de pieferente-
parámetros «extra# lingüísticos•) de mente estructuras ·lingüísticas, se-
la comunicación, es · indispensable ría oportuno inscribir ·las organiza·
situar esta noción clave en un con· ciones semióticas más vastas. Por
texto más amplio.· Las actividades otra parte, se deberla sustraer del
humanas, en su conjunto, son ge- concepto de intercambio, las con·
neralmente consideradas como des- notaciones* eufóricas que hacen
arrollándose sobre dos ejes princl· alusión a la «benevolencia» univer·
pales: el de la acción sobre· las sal de los hombres en sus relaclo-
COMUNICAC!óN:; •

nes mtitu:is:· és_.difíCil -si no imt>O- deja de suscitar nuevos. problerr..as


sible-i· establecer la frontera ientre para ·los que todavla ; no se ven
las estructuras colltractuaies~ y las soluciones definitivas. : Señalemos,
estructui-as·potémicas* .que presiden en primer lugar, el d~· la comutll·
la· comunid.ación;. ·~fay que· añadir caclón · partlclpattva: · contrariamen-
que tal concepción de la comunica· te a lo que sucede durante la co-
ción permite una aproximación pro- municación ordinaria :·.-donde la
piamente ,. Semiótica del · pro~lem:-i., atribución* de un obj~to de \raIOr
muy ·diferente ,di :las, afectadas. de es concomitante· a ··una renuncia·
·un lado; .:Pór las teorías económicas, ción*-, los discursos etnoliterarios,
·y de otrO,. por la· teoría·: de .la co- fll0s6ficos, jurídicos (cf. el dere~o
municación.= constitucional) se vale.ti de estrU:c-
·· 6. En lu medida en qtie la ;cOmu- turas de comunicaciórf en las (¡ue
nieación se· Iocalizá entre sujetos y el Destinador trascendCnte (absolu-
que los valores* vertidos. en IOs oh· to, soberano, original,. último, etc.)
jetos Puestos en circulación.<(valo- dispensa valores* tanto:~modales (el
res priigmáticos* o ·cognoscitivos*. poder, por ejemplo) coino descrip·
descriptivos* o inodaleS*) son· con- tivos (bienes materiales) sin renun·
siderados.:_ como constitutivos · det ciar verdaderamente, Sin que su
ser. del·_ sujeto· '{que . se encuentra ser. se vea disminuido. ·EI caso del
constantemente en aumento··o en destinador tras<:endente debe dis·
disininución de su' ser). es evidente tinguirse; sin duda, de aquel que
que el- destinador· y el destinatario otorga el saber; éste,> durante -la
no pueden: , seguir siendo tratados comunicación, transmite un objeto
como :abstracciories; ·,como posicia. cognoscitivo sin que s1.i propio sa-
nes vacías ·de· emisor* y de recep· ber resulte aminorado: esta parti·
tor*; son, por -cl .- contrario, sujetos . cularldad se explica, POrque· el su-
competentes*, tonl2dos en un mo- jeto de la enunciación~ es un actor
mento de su devenir, inscritos cada sincrético"", que integra, a dos ·ac-
lltlO en ·su· prO.pio discurso. Por lo tantes, el enunciador* y el enuncia-
mismo se ·COmptende por qué un tario: dicho de otro modo, él es ·su
diálogo, que apaiece dentro de un propia enunciatariO y recupera a:sí
discurso narrativo; nos parece dar lo que ha dado como enunciador.
una representación más coITecta del 8. Otra interrogante,· aún sin res-
proceso de Ja co:m.Unicación que· Un puesta, es la planteada· Por la dis-
artefacto· construido a partir de 1.a tinción -bastante fácil de recono-
.. estruCtura. de ·.Ja. -comunicS.ción:o cer, pero dif1cil de expl_~e:ar- ent_re
· extra-lingüística: · 'por qué, también, la comunicación recibida: y la Cfl?flU·
nos propo:Oem.Os interpretar un «in~ nJcación asumida. El discurso psi-
terCambiO.'·de,·menSajes:o, al menos coanalítico ha evidenciado la sepa·
en el : plano :. semiótico, como un ración· que existe entra los meca-
·discurso a -dos {o· más) voces. ·. nismos. que aseguran 1a ·aprehensión
7. Esta. «humanización~ de la cb· · ·de Ja significación y ·1as procedí·
·municación, una de las pre:ocupa· mientos, mal conocidoS, que presi-
clones de la' mayOr -parte de -las den su apropiación¡ -su. integración
teorias reCientes en este campo, no en Ja axiología ya e.\:ÍS~cnte. Suc~e
75 COMUNICACION • CONCEPTO

como si el sujeto receptor sólo CONATIVA {FUNCióN -). Fr.


pudiese entrar en plena : posesión fonclion conative, · ing.' ·cona.tive
del sentido cuando dispusiese· pre- fu.nction. ·- En el esquema triádico
viamente de un querer y de un de la comunicación ·verbal propues--
poder-aceptar; dicho de otro modo, to por el psicólogo ·K. Bühler (em-
corno si pudiese ser definido· por pleado y aumentado por R.· Jakob-
cierto tipo de ·competencia recep- son), la función conatlva (llamada)
tiva, que, a su vez, constituiría el es la que concierne al destinatario*,
objetivo primero y último del dis· por oposición a las funciones expre·
curso del entmciador. ·Si asumir La siva* (centrada en 'el destina.dar*) y
palabra. del otro es, en cierto modo, referencial* (relativa a aquello de
ercer en ella, entonces el· hacerla lo cual se h3.bia)::. encuentra, por
asumir significa decir para ser creí· ejemplo, su expresión gramatical
do. Así considerada, la· comunica- en el vocativo o en el imperativo.
ción (como uno se lo imagina un -+ FUNCIÓN, COMUNICACIÓN.
poco apresuradamente) es ·menos
un hacer-saber que un hacer-<:reer CONCEPTO. Fr. concept,· ing. con·
y un hacer-hacer. . · "" · cept.
9. Otro problema -entre otros l. Por ser un \énnino de filoso-
muchos posibles- es· el de· la fre- fía, el concepto cohlleva numerosas
cuente concomitancia (y la cónfU· y variadas definiciones,· pero todas
sión resultante) entre~ el hacer pro- se refieren, más o· rnenos, a magni·
ductor (formulable en · un · hacer* tudes* del significado* (== ideas)~
narrativo) y el hacer comnnlcativo. susceptibles de organizar los· datos
Un ritual es un hacer ·programado de la experiencia.·
que apunta a su propia significa- 2. F. de Saussure· ·empleó. este
ción: la instalacjón·•de: un ·obser· término para designar -en una· pri·
vador (del público,·pot ejemplo) lo 111era aproximación- 'el significado*;
pervierte, no sólo porque -lo trans- cuya única determinación es servir'.
forma en espectáculo, sino también a Ja constitución dei signo* (el con· .
porque el comportamiento· del ob· cepto de .árbol y la. imagen acústica
servado · se vuelve equívoco y se de árbol constituyen el signo «ár· ;
desdobla. La conversación de dos bol:i:o ); luego eliminó ·esta noción en
personas deja de ser lo que es, si beneficio de la forma* significante.
los participantes se saben escucha, 3. Parz. la teoría semiótica;. el
dos. Se trata aquí no sólo ··de ·la término ~concepto~ puede ser man·
problemátic::a de la semiótiCa tea· tenido en el sentido de denomina·
tral*, sino, más ·ampliamente, de la ción* (cuya significación está.· expli·
dimensión espectacular de nuestras citada por la definición*). Explicitar
culturas y de nuestros·signos, toda· los conceptos por definiciones suce-
vía mal conocida y mal abordada. sivas resulta ser, entonces, la prl·
~ INFORMACIÓN, · FACnTIVIDAD, PER· mera tar~ · de toda construcción
SUASIVO (hacer -), INTERPRETATIVO metalingüística* del teórico. Se ·ob·
(hacer -), CONTRATO, DISCURSO; TMPLt- serva, en efecto;·~ que · 1as téorías
ClTO, SOCIOSEMJÓl'ICA.·" q .. • • lingüísticas o semióticas compren·
...
CONCEPTO· CONDENSAC!óN

den··nurne:rosos ·ci:inceptoa :na ·de.fi· de dos o más magnit\i.des* regiS..


nidos: tomados de· ·tas· lenguas na· tradas ya sea en· el inferior de Úil
turales y, .más p.i:rticularmente, de estado* dado, ya como: consecueu·
doctrinas :filosóf.i~s·· a menudo im· cia de· Una transformación* .de wi
plicitas,'P son frecu~temente ·muy estado en otro (cf., ppr ejemplo,
sugestivos, capaces:·. de. abarcar pro- las variaciones concomitantes). La
blemas ,'cruciales, :Pero · no se inte- relación de concomitanc'ia (del tipo
gran, sin)erµbarg~·, ..en la teoría· de 11.y.•• y,.) explica, en se;iniótica n.~­
conj~to~ ·La ·construcción de una rrativa, la copresencia ·'.de dos· 9
teoría,.. .debe 1incluir; entonces;· una más programas* narrativos; en. C"l
fase\ éonceptuaI ~- 'que los ·concep.. riivel de la discursivi:r.ti.ci6n, es tein·
tos serán. reemplacidos por las defi· paralizada y/o espaci~izada eón
nicicines 'Y las '.intei"~definiciones CU· ayuda .. de los procedipl.ientos dC
yos ·elementos . cqli.stitilyentes · son ·localización y de encaja::~ura. ··
más abstracto$ y más
generales que ~ ENCAJADURA, LOCAUZACIÓN ESPACIO-·
TEMFORAI... .
los conceptOs de. orj:gen. En la cima
de·'Semejan.te 'jerarqtúa· conceptual
se encontrarán los conceptos no CONCRETO. Fr. concrét, ing. con·
definibles . ('táles ·como · .zrelación•, crete. .:._ Un término cUatquiera 'Se
1tobjeto•,' .zdescripción:11;· etc.), cons- denominará concreto, por oposic!ón
titutivos'' de .un inventario que· ser- a abstracto, cuando . Sú densidad
virá'· para;. estableCq una axiomá· sémica sea relativamenteietevad~~·
tica*~'·!:-, .::1::· ~ •, ·¡ -+ DEJ'!'.Sil>AD SgMICA, ABS!RACl'O·
4o · Así, pues~- en~ esta · cbnce:Pción
de illspiraclón hjelmsleviana,· el tér- CONDENSACION. · Fr;: condensa-
mino «concepto», eiémento del ·me- tion, ing. condensation. ,..._ La elas·
talenguaje"'•. sirve para denominar ticidad del discurso .se manifiesta
tanto a . ~las clases ·!'.le' objetos Oas por ·la condensación: y,:.· al mismo
unidades semióticaS) •como a los tiempo, por la expansióh: recono-
procedimientos* y los modelos*. En cer* una equivalencia seinántica en-
este sentido ·se· distinguirán,· dentro tre unidades discursivas'.: de dimen·
de .. una :,teot:ía,··-Jos conceptos \[rea· siones diferentes (por e'jemplo, el
les». ·..::.es· decir, integrados' en· la hecho de que el lexema (!discusión•
metasemi6tic3.*·' cientffica..:... de los resuma.- a veces, la unidad discur-
conci?ptoS ·operatorios*· (en el: sen- siva denominada 1tdiáJQgo»), po_r
tido de instrumentales·)' ·que funda- una ·parte.. .imposibilita todo análi·
ment.an--:los" .procedimientos o ·los sis del· ~texto> consideritdo cómo
modelos \qué ·parecen eficaces*, :pero hecho puro: pOr otra parte, obliga
que, al ··no ; integrarse,-, 'nO pueden a· la· semiótica discursiva a elabO.:
ser·· consideiados sino ·como· provi· rar una.jerarquía* jdeaJ 'de formas
sionales.~·, ,.,,,-,,- discursivas constituida P<?r niveles"" ·
,: -+ .TEOafA...:·• !. ··. de análisis de complejid3.d. desigual,
y a considerar el texto manifestado
CONCOMITANCI:A~ Fr. · cancomi- como una (!;nivelación• ~más o me-
tance, ing.> ccnco'mitd.nce. ~·Se lla- nos confusa- de forina~)heter6pla·
ma concoJllltanda ··a la copresencia nas.
17 CONDENSACI<lN - CONFIGURAC!<lN

~ F.USTICIOAO DEL DISCURSO, B.XPAN• trarios* a los que son esperados


SIÓN. en la primera isotopía, etc. Según
su posición en la linealidad"': del
CONDICióN. Fr. condition, ing. texto,· los conectores antecedentes,
condition: - Concepto* no definido que marcan explícitamente el ·.co-
según L. Hjelmslev, pero necesario mienzo de uña nueva lectura, se
para definir la relación de presu- oponeO a los conectores .subsec:uen·
·posición"', el término condición pue· tes, que implican la necesidad de
de ser considerado como la deno-- una retrolectura*: así, por Cjemplo,
mínación de «si» en la relación «Si••• cuando los dos amigos (Maupas-
entonces~. El concepto de condi- sant) son fusilados por los pru-
ción juega un rol determinante en sianos, sus cuerpos caen uno sobre
la formulación de coerciones* se- el otro formando ·la . figura de Ja ·
mióticas. 1tcruz.:it; partiendo de aquí, otra iso-
topía figurativa -relativa a las re-
CONECTOR DE !SOTOl'tAS. Fr. presentaciones cristianas~ puede
connecteur d'isotopies, ingl. isotopic ser reconocida: no solamente la
connector.. muerte (con 1tborbotones de' san-
1. se llama conector (o; a veces, gre») y el silencio anterior de los
embrague) de isotopfas a una uni- dos amigos son comparables a los
dad del nivel discursivo que intro- últimos momentos de Jesús, sino
duce una o varias lecturas"' dife- toda la primera parte del relato

plo, a Ja ucodificación·retórlca~ des- ~:r~o~;o~~~ d:p;~::~d;~:ie y! 1


rentes: esto correspond'e, por ·ejem-

tacada por C. Lévi-Strauss en los comparada, por retrolectura, a la


mitos que se desenvuelven,,· simul- comunidad de los discípulos de.
táneamente, en el <l:Sentido propio» Cristo. ,, J.t·
y en el nsentido figurado•. En el ~ ISOTOPÚ., l'LUR.I-ISOTOPfA, RETRO- f··
caso de Ja pluri-isotopía, el carác- LECTURA, METÁFORA.
ter polisérnico* de la unidad dis·
cursiva que desempeña el rol de CONFIGURAClóN. Fr. configura-
conector hace posible la superpo· tion, ing. configuration.
sición de isotopías diferentes. 1. En una primera aproximación,
2. Desde el ·punto de vista tipo· las configuraciones discursivas apa·
lógico pueden dis~inguirse, · entre recen como especies de micro - rela-
otros, los conectores metafóricos, tos que tienen una organización sin·
que ·aseguran el paso de una isoto- táctico· Semántica autónoma ·y son
pia abstracta* (o temática*) a una susceptibles de intcgi:arsc en uni-
isotopía figurativa*, al estar orien· . dades discursivas máS amplias,· ad- .
tada la relación que une · a estas quiriendo entonces significaciones
dos isotopfas en el sentido de que funcionales que corresponden· al dis-
lo dicho en la segunda isotopía es positivo de conjunto.
interpretable desde la primera, y no 2. La problemática de estas con-
inversamente; los conectores anU· figuraciones está vinCulada a la de
fráslcos, que -manifiestan, en una los motivos*; tal y como se la esta··
segunda isotopfa, los términos con· b1ece, en la tradición metodológica'
CONFIGURAClóN·;_:;· '' · . ·,I • 78

def··sigJo· Xtx,,··en··los'·CanipOs· del Pueden ser asumidas por· un tejido


folkIÓre 1(cf.; J~ Béélier,·; por ejem· discursivo más vasto. · ·
plo). ··de~;historia ácl arte· (cfl Pa- 4. ·No hay necesiclad. 'de incidir
nofskí; ·entre Otro~);. etc.: ttatados en Ja critica de Ja ··te?:ría de 1~
dentro del ·marco de la' '"teoría de influencias» cuyo :proceso se llcvér·
las influencias•;· los 'motivos ·aPare.. a cabo hace tiempo: en ~1 ámbito
cieron como'·:fonna~f narrativas y/o semiótico puede ser sustituida por
figurativas· aut6no.ri1as. y Iri.6viles 1 Ja metodología comparada*, que
capaces de ·pasar d@· una cultÚra a utiliza los procedimientos·de trans·
otra/ · de' ·mtegrarse.: en · Conjuñtos formaciónes* orientadas: · Esto no
más· ·vastoS;'.;Per4i~~o. parcial· o quiere decir que, aun er(el interior
totalmente, ,sus significaciones anti· de un cdiscurso dado (ef discurso
guas.:·.en" b'2neficio de;' vertimientos etnoliterarlo francés, poi.· ejemplo):
semánticos·: desviantes.-:o ·nuevos; la movilidad de los motiVos sea un
los recorrido$ :·así efe:ctUados, cons- hecho· ·reconocido: motivos· tale~
tituyen una' :historia: genei'al de las. como '·et del «matrimonio» o ~1
formas¡ •Los ·cuentos populares de «reparto equitativo• se ,,e'ncuentraü
la Ei:lad Media·:frailcesa; por ejem~ tanto al inicio como eR el medio
plo, ·serlan~: ·desde. este punto de o al fin.al de un cuento y permHen,
vista', una· :colección·. bastante· hete· así, mantener la distin'clón entre
róclita de .formas 'aglomeradas por las estructuras de i-ecepción y ·1as ·
diversas ·.vías,· partierido · de un ·cen· estructuras recibidas. ,_: .
tro :creador· original que se identi· a
s. ~or extraño que pa:i;-ezca pri-
fica.de· tnodo ·natu~ ·con la India mera vista, este .fenómerio no deja
antigua.,,,.:,.,:-.·· · ·. - ··:.·' de ser análogo a los hechos gra.
3. El' punto de vista· histórico, maticales que, en 'otro,; nivel, en-
predominante en aque11a época; es· cuentra la lingÜística frásica. · Pen·
timulaba al·; investigador a intere- samas aquí en la"s dificultades sus-
sarse, sobre todo, por el origen de citadas por la no-conconiitancia, eri
.las formas recono"cidas, descuidan- un gran número .de lenguas na tu~
do · las ·.~estructuras de:' recepción rales, de las clases* morfológicas y
(discursos, obras} .en que veniañ. a sintagmáticas. Idealmente, , puede.
colocarse · las fomias· ··..-prestadas». construirse una gramátiCa catego-
Ahora bien;:e1·· cani.bio'·de ·perspec- rial · operando sólo con· : las clases
tiva· que·. se :·efectuó. después· nos morfológicas*, o por eh contrario,
lleva·. a:. reconocer:,.' ante,. todo, la una· gramática -sintagmática pura
existencia de las formas de recep- que manipularía tlnicatnen.te clases
ción ·-sintácticils ·. y . semánticas- sintagmáticas; pero, en -.l.a práctica
capaces · de recibir, ..en marcos .inva· de una lengua, como el .francés, se
riantes, huevas ~<;>rnlas consideradas ·.encuentran, muy a mentido, al lado
como variables." ·En . consecuencia, de' los ·hechos de coricomitancia
es ·forzoso distingitir, por' una par- (verbo y predicado en e1 caso de
te,-'· las ·eStructuras ·discursivas en· atemer•}, situaciones·· de divergen-
globantes . y, por 9.tra, · las micro- cia gramatical («tener mjedo11) o 'de.
estructuras llamadas motivos, que «desviación» semántica.(~~ «los ves·
'Y
79 CONFIGURAClóN ·CONFORMIDAD

tidos de deporte», <tdeporte11 pierde figuraciones discursivas :Puedan ser


su· sustantividad). Podría parecer inventariadas como estereotipos cu-
que, ·guardadas las proporciones, ya tipología podría emprenderse
una gramática narrativa de tipo (cf. las estructuras contractuales y
sintagmático tendría que compren· modales de la manipulación*)•.
der, como anexo,..un subeomponen· 8. La integración de una configu-
te «morfológico~ que explicase la ración· en el discurso en vías de
organización y los procedimientos producción podría formularse, en
de integración de las configuracio- su procedimiento máS simple, como
nes discursivas. Es así como la 16· la aplicación, durante la enuncia-
gica narrativa, según la concibe C. ción*, de uno de sus posibles reco-
Bremond, por ejemplo,·nos parece, rridos en el recorrido narrativo*
en· sus intenciones profundas, más (o de uno. de sus programas* na·
cercana a una semiótica ~configu. rrativos constitutivos) del discurso
rativa10 que a una semiótica narra· de recepción, de modo que identi·
tiva propiamente dicha.·· ficar un rol actancial* del discurso
6. El estudio de las configuracio· narrativo con un rol temático* (o
nes discursivas está aún por ha· figurativo) -escogido dentro de la
ccrse: constituye, incluso, una de configuración- desencadena la dis-
las tareas urgentes de la semiótica tribución de los roles conñguratlvos
discursiva. Dos clases de problemas en el disPositivo actancial del dis-
se presentan en relación con ellas, curso, haciendo aparecer isotopías*
unos, relativos a: su organización locales o generalizadas.· Una inter-
interna, los otros, a su integración vención de este tipo presupone, se·
en contextos discursivos más vastos. gún vemos, un sujeto de. la enun·
7. Las configuraciones discursivas, ciación dotado no solamente de la
decíamos, aparecen como micro - re- competencia narrcltivá, sino tatn· ·
latos. Ello quiere decir que una bién de una provisión de configura-
configuración no es dependiente de ciones discursivas, acompañado, por
su contexto: puede ser extraída ·y así decirlo, de su «·IÚodo de em-
manifestada en forma de un dis- pleo:o.
curso autosuficiente. En consecuen- ~ MOTIVO, 'SE.\fÁNTICA lHSCURSIVA.
cia, se supone que, el análisis de
una configuración debé reconocer CONFOR.l\1IDAD. Fr. conformité,
todos Jos niveles y todos los com- ing. conformity.
ponentes de un discurso ex:aminado 1. Se entiende por conform1dad,
a través de las diferenteS instancias en el sentido estricto de esta pala·
de su recorrido generativo*. Así, se bra, la correspondencia término a
distinguirán fácilmente las configu- término entre las unidades ya sea
raciones temáticas y también ·las de dos objetos semióticos campa~
configuraciones ñguratlvas (a· las rables, ya de dos planos* o de dos
que se vinculan los motivos). Asi- niveles* de lenguaje, de modo que, >':it
mismo, su manifestación discursiva después de la verificación, las uni- f.F·
presupone ya una organización na- dades de cada rango puedan ser
rrativa subyacente: nada ·de ·asom- identificadas, a la vez, como iso-
broso tiene, entonces, que las con- morfas e isótopas. ·Tal definición
CONFORMIDAD ~CONJUNCIÓN

pei'm.ite determin·ar si se está o no l. En la gramática:·. tradicioñaJ,


frente a· una semiótica manopla.na* la conjunción designa:. una cl~e
{o · un.-·-sistema de símbolos•, en de morfemas• que si.i:Ven para es·
Ja :terminología de L. Hjelmslev); tablecer la relación de,~conjunción»
la .. no-Conformidad caracteriza; por entre diferentes unidades en el pla·
el 'oontrario, a las semióticas bipla- no sintagmático. -Se distinguen ¡;los
nas* (o semióticas propiamente di· subclases: las conjunciOD.es de coor·
chas, según Hjelmslev). dlnaclón y las de subox>'dtnaclón. ·Se
-+ .ADECUACIÓN. . . ,. , puede decir que las Con.iunciones
" ; de sub:'?.rdinación instauran relaCio-
~ONFRON'l'ACióN. Fr. Confron· nes hipOtácticas* entre:enunciados:
tatiOn, ..:ing. ·conf1:óntation. la gramática geherativ<i* y transf9r·
".i. 'Situada a niyel figurativo*, la macional lo explica gi)r reglas ·de
· confrontación está en relación con inserción*. Las conjutlaiones de ·co.
la· posición del· Sujeto de· un enun- ordinación, por su lado, señalan, a
ciado de hacer•, :cuando el objetivo m.enudo enfáticamenté; las relacio-
de su programa* 'llarrativo es con·· nes de combinación* entie las uni·
trario"'- o contradictorio* al del pfo. dades sintagmáticas de un rnisino
grami del anti':.$U~eto. ·La confron- nivel*. · ··
taCión ·;representa así la superposi· 2. Cuando se quier'e definir.· el
ción o el enfrent!ltiuento de-los dos concepto de estructura* e'Iemental
recorridos ':narrativos*· ·propios de como la relación entre dos tép:ni·
cada uno' de los·:sujetos Si y S2: nos, se observa que esta última, la
constituye, ·por eS.to,· uno de. los··pi· relación, aparece como' OOnjunéión
votes* ·del ·esquetn3. narrativo*. y, a !a vez, cOmo diSjunción: :es,
: 2. · La ...-'confrontáción- puede ser al mismo tiempo, una/Í'elación ·de
polémica; :. o~ conti-actuat, y se mani- combinación {del tipó' «y... Y•) ·y
fiesta •en. los reliitos tanto por un una relación de oposici6n* (del Hpo
colnbate (concluyendo con la domi· «O, .• o:ii), y reóne en ,:·su seno la::;
·nación* de un ·sujeto sobre Otro), propiedades relacionales que· d~fi­
como por. un intercambio* o, más nen separadamente Iós dos· ejes,
generalmente, · pór ~un . ·contrato*; · sintagmático y paradigmático, del
esta· disposición permite reconocer lenguaje .. La categorí3. identidad¡
·aos •·cóncepciones;. · sociol6giCas· ·de alteridad, Ja más ·abstracta, ".nos
las relaciones ·interhumanas. (lucha parece la más indicada para deno-
de - clase$·:/ Contrafo"=- social) i y, asi· tar. ·el carácter ._universal* de· la
m"i:Smo, .. dividir· .'Jos ,.,relatos,-· según relación (el empleo d~ Jos términos
este criterio,· en dos·:grandes dases. conjunción y disjunci6n, en esta
3. ·La confrontación :;iolérhica· ca. acepción, patece entonces super-
rresponcle, en el _-plano discursivo, fluo). . •
al primero· de los tres e.,¡unciados 3. En semiótica nal-rativa, con·
constitutivps de la prueba. · v~ene reservar: el no~bre de con·
~ :rowuco, CONTRATO, PRUEBA•. junción para designar.; paradigmá-
ticamente, uno ·de Jos.":dos ténni~o~
CONJ"JÑ,CIÓN.· Fr. conjonctian, (con la disjuncjón*) dé:"la categoría
ing. coniunction. junctón que, en el pla~o sintagrná-
81 CONJUNCióN - CONMUTACióN

tico, 'se presenta como la función* designar la reunión del significan·


(% la relación entre el sujeto y el te* y del sigmficado*:
. objeto) constitutiva de los enuncia- -+ LENGUAJE, SEMIÓTICA.
dos de estado*. Si, paradigmática·
mente, conjunción y disjunción son CONMUTACION. Fr. commuta.~
contradictorias*, no sucede lo mis- tion, ing. co1nmutation.
mo en el plano sintagmático, donde, 1. La com:nutación no es más
según la distribución del cuadro que la explicitación de Ja relación
semiótico · de solidaridad* (=de presuposición*
co~junci6nx· disjunción . reciproca) existente entre el plano
de la expresión* y el plano del con-
no-disjunción .. no:confu~r..1
tenido* de· una semiótica*: por' ella,
a todo cambio en la expresión debe
Ja no-disjunción (aguardar · algo>) corresponder un cambio en el con-
entre un sujeto y un objeto* de tenido, y a la inversa. Así, emplean-
valor debe distinguirse de la con- do la terminologfa de L. Hjelrn.slev,
junción (-o:tener algo»), si existe una correlación* (es decir,
~ JUNCIÓN, una relación <10..•. O•) entre dos
ma:gnitude13:* de la expresión, por
CONJUNTO. Fr. ensemble, ing. ejemplo «cah y «Col•, se debe re-
set. gistrar, jgualmente, una cOrrelación
1. En la terminología matemá- entre las dos magnitudes del conte·
tica, un conjunto es una colección nido 11cal~ (óxido de calcio) ·y «col•
de elementos• (en número finito o (planta hortícola): existe, pues, una
no) capaces de mantener relaciones relación (deÍ tipo <11.y••• Y•) entre las
lógicas entre sí o con los elemen- dos correlaciones situadas en uno ·
tos de otros conjuntos. u otro de los dos pianos del· len-
2. En semiótica, parece poderse guaje.
justificar su empleo s6lo en el sen- 2. La conmutación puede conver-
tido impreciso de universo* o de tise, entonces, en un procedimiento
microuniverso*, .pues la ·acepción para reconocer"' unidades"' discretas
matemática de este término da prio- de uno u oti:-o plano del lenguaje.
ridad a los elementos (o unidades Gracias a ella, la Escuela de Praga
discretas) a costa de las relaciones• pudb elaborar los c.onCeptos de fo-
-lo que parece estar en contradic- nema* y de rasgo distintivo* (o
ción con Ja perspectiva estructural. fema*). Si el r~emplazo de un fone·
pues ésta nunca plantea los ténni· ma* por otro en un contexto deter-
nos antes de las relaciones que los minado acarrea una diferenciación
definen y considera como signifi- de contenido {•caJa/ .. col~), no suce-
cantes únicamente a las relaciones. de lo mismo. al intercambiar una
En nombre de la coherencia*, será variante• de fon"ema por otra (a
preferible, en g~neral, "rechazar el anterior / a posterior, por ejem-
concepto de conjunto. plo): el fonema es una· variante,
3. Sin embargo, a veces, puede una unidad fonológica, con relación
ser útil introducir la noción muy a las variables que son las diferen·
vaga de conjunto sfgntftcante para tes posibilidades de ocurrencias fo-
SEMIÓTICA. - 6
CONMUTACióN • CONNOTAC!óN g;

· néticas. Por otra parte, se -observa instituye po4ría ser tanto hipot.ác
que ,lo que establece· la correlación tica* como hiponímÍ~a*. · Se trata
( o:o... oi:i) en el plano de la expre· ría de un fenómeno tji.ie se ha· pro
sión, entre «hala:o y «pala:i>,' no es curado precisar, en otro lugar, cor·
la diferencia entre los fonemas, sino eI nombre de definición"' .oblicua.
entre los rasgos distintivos·. (o, máS 3. En su tipología ·de las. Slt~il1
precisamente, entre !Os términos ticaS, Hjelmslev ha :previsto wi:
le la ·categoría*" fémica. sonoridad/ clase particular de sein.Jóticns"' con
no-sonoridad). notatlvas. El único Punto comú1
·3. El mismo : procedimiento de entre Ja connotación· .. de concepto·
conmutación, aplitado al plano del (situada a nivel lexcmático) y lo:
contenido, contribu.ye a elaborar lenguajes de connotáCión (que so
los . concepto$ d~ · sema" y de se- bredeterminan los disCursos) residt
niema*. · · en el reconocimiento;·:más bien in
~ PERMUTACIÓN", 'SUSTITUCIÓN, INVA• t(litivo, de una desviación o de Un:·
RlAN17,. VARIABLE. ·· relación oblicua .que existiría entrt
un significado* primero, ci:denotati
·CoNNOTACioN. Fr.. connOtation, VOll, y un segundo sigiiificado «Con
ing. connotation. · nota:tivo». Sin emb2rio, para' po!,;
l. Se dice q'.ue un término es tular la existencia de ·.un plano del
·.connotativo, cuaiido, al designar a contenido"' connotativo, se necesit;·
uno de ·los atributos del concepto. hacer intervenir la ftinción semib
consider3.do des.de el punto de Vista tica (o semioSÍ$11 ) qu~ lo vinc1,1larit>
de su comprensi.On*, remite al con• a un plano de la ex.Presión*. ·:est<
cepto' to!nado en su totalidad (cf. no puede identificarse·. con el plan<.
J. S. Mill). Dado Q.ue el (o los) atri· de la expresión correiacionado COP
buto(s) tomado(s) en consideración el significado denotativo, si no, n.·
depende(ri) de una selección subje- sultaría un solo plano del contc
tiva, O bien de una conveni:ión de nido. También Hjelnlslev pOstuht
tipo social, la c9nnotaclón es un un plano de la expresión que es ya
procedím.iento. dificil de circunscri· una semiótica (una lengua natural
bir: estó explica: la diversidad de por ejemplo). La seihiótica conno-
definiciones .que· ha provocado y las tativa sería entonces una especit
confusioD.es que su utilización ·ha de meta·semiótica de: tipo particu
originado. · · . : lar. ·
2. Desde ·el punto de Vista se- 4. Las dificultades ~·parecen cuan
mántico, 1a connÓtaclón podría. ser do se desea abordar :.e} análisis dt'
interpretada como el eStablecimien· · dicha semiótica connotativa. Par;1
to de una relación entre uno o va· .reconocer las unidades del signifi
rlos sernas... situados a nivel de su· cante copnotativo,· se.- debe proce.·
perficie* y el semema*. del que for- der, · ante todo, a describir la :·se-
man parte y que· ha de ser leído miótica· objeto considerada como
en un nivel. más profundo.. Así, la ((denotatival>: sólo las': unidades .alh
cOnnotación queda empárentada con registt:adas podrán ~ventualmeritc
una figura !'(':tórica bien conocida, ser biValentes y pertenecer a la~
la metonimia*. y la relación que dos semióticas. a la vez.
Luego bay
83 CONNOTAC!ON ·CONSECUENCIA

que tener en cuenta que el rol oe cia de ese contenido: permitiría re··
los significantes connotativos puede conocer, ya de entrada, las princi-
ser desempeñado tanto por los sig- pales dimensiones tópicas donde se
nos"' de la semiótica-objeto como ejerce la actividad connotativa. Una
por las figuras* de sus planos de aproximación soclosemi6tica* (cf. la
Ja expresión y/o del. contenido, así «lingüística externa" de Saussure),
como también por las dos sustan- al elaborar modelos de previsión
cias* que constituyen la forma* (el considerados como lugares posibles
acento de los borgofiones, por ejem- de las manifestaciones de connota-
plo, será reconocido gracias a las ción, ayudaría a circunscribir me-
particularidades fonéticas y. no a jor el fenómeno connotativo y a
Jas fonológicas). Por otra parte, articular, en parte, las connotacio-
todas las unidades de estos dife. nes sociales: encontrándolos en su
rentes planos están lejos de poseer camino, integraría los problemas de
propiedades connotativas. De ello la categorización* del mundo (hipó-
se deduce que el inventario de los tesis de Humboldt-Sapir-Whorf), de
connotadores-significantes no puede las funciones* del lenguaje jakob·
llevarse a cabo sino por extracción*, sonianas, de la tipología de los gé.
procedimiento que para. Hjelmslev neros*, cte. Parale18.mente, la psico-
no es científico. Asimismo, este semiótica* tratarí~ según la misma
autor clasifica las semióticas con- sugerencia de Hjelmslev, las con-
notativas entre Jas semióticas no notaciones individuales. Sólo en una
científicas*. etapa ulterior, podría emprenderse
5. La existencia de connotaciones el camino inverso -el de la expli-
semióticas es, sin embargo, indis.- cación de las formas connotati-
cutible¡ su importancia, gracias a vas.
los trabajos de R.· Barthes (para -+ DENOTACIÓN, SEMIÓTICA, SEM.101.0-
· quien ~la ideología sería, en suma, GfA, .PS1COSEMIÓTICA, :8,0CIOSEMIÓTICA.
Ja forma de los significados de con.
notación, mientras que la retódca CONSECUENCIA. Fr. conséquence,
sería la forma de los connotado-- ing. co'1.sequence. .:... En semiótica
res:io ), ha sido suficientemente pues. narrativa se 1e llama conseeuencia
ta de relieve. La urgencia de una al último de los tres enunciados
teoría de las semióticas connotati· constitutivos de la prueba. Situada
vas es, pues, mayor. en el eje de las consecuciones des·
6. Aunque, en la perspectiva pués de la confrontación* y de la
hjelmsleviana, Ja descripción de una dominación*; la consecuencia -que
semiótica connotativa debe· comen- las presupone- puede ser negativa
zar por explorar su plano de la {en el. caso de ta privación*, que,
expresión (exploración que, gracias según sea reflexiva o transitiva, se
' al principio de conmutación*, está expresará en la rentinciación* o en
encargada de extraer progresiva- el desposeimiento*), o bien positiva
mente la forma del contenido con· (con la adquisición* en sus dos for~
notativo), cabe preguntarse si el mas posibles: atribución*' y apro-
esfuerzo teórico no debe dirigirse, piación*).
en una primera etapa, a la sustan· -+ PRUEBA.
CONSTANTE .co)'¡STRUCCIÓN •' 84

CONSTA.,;\rTE•. P~. · constante, ing. para ir hacia el nivel frlferlor, "dOn.


cOn'stant, ;.;..;. El téi:-mino .constante, de serán separadas las tinidadcs úl·
sinónhµo de invariante*, se emplea timas que son los morf~mas (ejem~
en. semiótica para designa?' una plo: · •cazadora comprenderá · dos
magnitud*· cuya presencia* es la constituyentes inmediatos: <1caza11
·condición necesaria· de otra magni- y «-dori>), Esta forma '::de segmen-
tud. a."' la que está. vinculada por tación ·recurre a procedimientos d~
una· relación*:. La l:onstante es,' en sustitución* y de redUcción*,. ·y
consecuencia,· .. el · término «Presu- presupone todo el apolfte del mé·
puesto» d~ ·una e"structura binaria, todo distribucional*. El !análisis erl
mientras que la variable es el tér- constituyentes ínmediatOs culmina
mino «presuponienie». así en la descripción*._: estructufal
~ VARIABLE, PRESUPOSICIÓN. del enunciado* y pued~ ser rep1:e-
'.·. sentada en forma de átbol* sintag~
CONST¡TUCXONAL · (MODELO mático, o mediante los_ "Paréntesis*.
-); Fr. modtle constitutfrm.nel, ing. Basado, al iguál que 1a: aproxi.nÍa-
constitutive model. _;. La estructu· ciórt distribucion'al, en ·et principio
ra• elemental de" la signific:>ción de la linealidad* (tal como lo :ates·
puede ser considerada como mode- ·ti gua su denominación),:, el análisis
: Jo constitucional, en cuanto que re· en constituyentes inmediatos trj)-
presenta· la ·instán'cia ab' quo del pieza con el problema de los corts·
recorrido generativo*' global. · tituyentes dlscontJnuos (ejemplo: la
~ ES:ffiucrmu., MqDELO, CUADRO SE• negación en francés .-i)e... pas» ).
MiórICO.' Del mismo modo, resulta incapaZ
para explicar los fenóm~nos de am-
bigüedad*. Aunque fuerf~rnente cri~
CONS'~i'.TUYEN'fE. Ff. consti·
ticado, ha servido, sin embargo, de
tuant, ing. constitu(fnt. punto de partida a la· _gramática
1. En 'lingüística se. entiende por generativa* y transformacional que
consUtuyente toda ·unidad* -desde considera -quizás algo :Precipitada·
el· morfema* al .sip.tagma*- inte- mente- que la etapa __ taxonómica
gr:inte de:· una Con.strucci6n más de la lingüística ya está. superada~
extensa.
2. Constituyentes inmediatos (aná- CONSTRUCClóN. Ft..:. construc·
lisis en·-). Des:PueS.. de Bloomfield, lion, ing. construction.
los lingüistas norteamericanos inte· . 1. Si;nón.imo de artificial, lo e<:1n;;·
resadas ' ex{· elabor~r · la parte tu:o· truldo se opone a lo natural cOn
nómica*- de la ·lingüística proceden referencia a la acción d:et hombre
a la· segmetttaci6n*~de Jas frases'en que transforma la natúi-aleza*.
unidades según el orden jerárquico 2. En una acepción rl.1ás restrin·
de los elementos: 'el fraccionamien- glda, el término construéctón désig·
to,· de tipo ·binario"':, parte. del nivel na una actividad semió~ica progra·
superior (el sintagnia nominal y el mada, · situada en el riivel teórico
sintagma verbal; por ejemplo... que y que satisface las con.diciones .de
pueden ser los constituyentes inme- cientificidad'". As!, .pa~· estar eti
diatos de . Ja -~tegorfa antérior), condiciones de describir.., una semió-
85 CONSTRUCC!óN-CONTENIDO

tica - objeto, se está obligado a miosis*) permite describir la exis-


construir 'un metalenguaje* apro- tencia de los enunciados* (frases
piado (que contenga modelos, pro- o discursos) «provistos de sentido•.
cedimientos, etc.). · ~ ·· El término «Contenido• es, así, si-
3. En el plano epistemológico, se nónimo del significado* global· de
opotlen a menudo construcción -Y Saussure, y la diferencia entre los
estructura*: consideradas como in- dos lingüistas aparece sólo en la
manentes, las estructuras requieren manera de concebir la forma* lin-
procedimientos de reconocimiento* güística: mientras que para Saus-
y de descripción*, mientras que la sure ésta se explica por el lazo
construcción es considerada como indisoluble del significante y del
el hacer. soberano y arbitrario del significado que se o:informan» mu-
sujeto científico. E:r;i realidad, tal tuamente y produceil; por la re-·
polatj.z·ación es excesiva y los. dos unión de ambas sustancias*, una
términos pueden ser comparados forma lingüística tinica, Hjelmslev
porque se trata solamente de focali- distingue, para cada uno de los·
zadones,.. diferentes: en el caso de planos del lenguaje, una forma y.
la construcción, el hacer científico una sustancia autónomas; la re-
está considerado desde · 1a perspec- unión de las dos formas de la a~
tiva del enunciador*: en la descrip- presión y del contenido -y ya no
ción, desde el punto de vista del de dos sustancias- constituye, en
enunciatario. Aquí se halla impli- su criterio, la fomia semiótica.
cada una problemática gnoseológi- 2. Esta diferencia de puntos de
ca que trata de la pareja indisolu- vista lleva implícitas consecuencias
ble del sujeto cognoscente y del considerables: Ja ·semiología* es,
objeto de conocimiento. En el mar· para Saussure; el estudio de los
co de la teoría semiótica, la des· «sistemas de signos.,., porque, según
crlpción del objeto -que descubre él, el plano de los signos• es el
progresivamente el orden inmanen- lugar de Ja· manifestación de la
·te* de los significados- se acaba forma semiótica. Para Hjelmslev,
confundiendo con la · construcción por el contrario, el nivel de los
(operada por el sujeto epistémico signos sólo necesita ser analizado
colectivo) de un lenguaje llamado para permitir el paso, más allá de
a describir aquello: en ambos casos los signos, al dominio de las figu-
se trata del hombre y· de su uni- ras* (de los planos ~e Ja expresión
verso significante. · y del contenido): et plano de la
-)- INMANENCIA, forma del contenido que se ofrece
así al análisis (comparable al aná~
CONTENIDO. Fr. canten.u, ing. lisis de las figuras de expresión, ·
content. operado por la fonología*) se con-
1. Para L. Hjelmslev, el conte- vierte, ·por este hecho, en el lugar
nido corresponde a uno de los dos de ejercicio de la semántica* y
planos• del lenguaje (o, más exten- fundamenta epistemológicamente su
samente, de toda semiótica), siendo autonomía. La semiótica de inspi-
el otro, ·et plano de la expresión*: ración hjelmsleviana no se corres-
la reunión de ambos planos (o se- ponde, pues, con la semiología de
e:~º~N_r_E_N_rn_·o_._c_o_NT_._E_x_r_o_·~~~~~~~~~~~;;_~~86
Saussure: .~a no es «sistema». (por* piicitables'* de la enuntjación•, debe
que· es, a la ve:z:, sistema* y. pro- · ser. estimulada.
ceso'*) ·ni tampoco' «Sistema de ,sig· ~ ExPRESIÓN', SIGNUtj.~, ~.
nos:. -(pues. trata con unidades -ca· SUSTANCIA.
tegorías" :sémiciis y· fémicas-;. inás
pequefias Que los .signos. y depen- CONTEXTO. Fr. cOntate, ing.
dientes· de uno u ·otro plano del context.
lenguaje, pero no de los dos a la
vez; como en el caso de los signos). · 1. Se le llama conté.xto al con-
En cuanto al plario del contenido junto del texto~ que -~recede y/o
tomado separadamente, 1a tradición acompaña a la unidad sintagmática
saussurlana ·· desarrolla su estudio considerada, y del que; depende la
en forma de una Jexicolog!a*,· ;míen· significación. El contexio puede ser
tras que los sucesores de Hjeimslev explícito* o llngilístlco,,: o bien im-
harl: podido inscribir allí la semán· pl!cito• ·y, en este e.aso, ·es calificado
tica. . .. _ .·.. . ·: de extralingüístico o slt~aclonal, El
3. El ruu1lfsls del contenido, con· contexto implícito puede ser a"pl-o-
siderado como una técnica de ins· vechado··con vistas a la interpreta.
piración sociológi~a o psico • socio- ción~ ·semántica porqu:e: a) ·si se
lógica, · se iia desarrollado más o _trata de una lengua natural viva,
menos paralelamente a las investi- productora de un texto ilimitado,
gaciones lingüísticas, pero· sin tener eI contexto situacional •,puede siem-
una verdadera VinCuJaclón con ellas. pre hacerse explícito {Hjehnslev);
EI .lingüista no puéde dejar de sen· .b) los elementos implícitos del tex·
tirse contrariado 'por su procedi· to lingüístico son susCeptibles de
miento de. base. que consiste en · ser restablecitjos por homologacl6n'*
aplicar sobi-e el 'te.~to (o sobre un de ese texto con e1 texto no lin·
corpus de textos) tJlla red catego- ,güfstico dependiente dii: Ia semiP:.
rial apriorística que, las más de las tica del mundo* natural.
·veces. no obedece lli siquiera a los . 2. En su esquema .de la coniu-
principio~ de ·organización !6gic·o- nicaci~n*, R. Jakobson;::.pJantea el
taxonómica. Los iritentos de cuaníi· contexto como Uno de· los factores
ficación dé: los datos -tales como de 1a actividad JingülstiCa y lo idCn·
los cál.culos de· frecuencias, ~pró:d· tifica con eI referente· '."(ésta es la
mos a la:· estadística lingüística, o función* referencial dét: Iengu3.je'):
los métodos de «asociación evalua· considerado corno neceSaño para la
tivaJ> {Osgood) que emplea el aná· explicitación del mensaje, el ·con·
lisis factorial- proporcionan única- texto puede ser verb<Íl o verbali·
mente resultados Pardales, de un·a ·zable. -~.
interpretación dudosa. ASimismo, Ja 3. Se entiende por ··Semas• con·
ten"dencia actual dirigida a ~ trans- textuales fo clasemas} "ios setr.as o
formar. progresivamente eJ análisis conjuntos sémicos recurrentes• en
del contenidO eli ull análisis del dis· la unidad considerada y en su con"..
curso, aunque aparezca ·sólo como texto; los semas contextuales for-
el análisis del enunciado-discurso man as! parte de la· ~omposición
o que haga intervenir Jos. d:::.~os ex- de un semema• (al que se puede
87 CONTEXTO-CONTRARIEDAD
comparar con la «palabra en con- l. La relación de contradicclón
texto~). es la relación que existe entre dos
. ~ REFERENTE, MUNDO NATURAL, et.A• términos* de la categoría* binaria
SEMA. asercidn/negación*. Dado que las
denominaciones urelaciones»,. «tér·
CONTINGENCIA. Fr. contingence, mino», (\'.aserción» y· «negacióni> re·
ing. contingency. - Contingencia, miten a conceptos* no definidos ni
en' .:uanto denominación, designa defiriibles, la definición propuesta
la estructura modal correspondien- se encuentra situada en el nivel
te ~esde el punto de vista de su más profwtdo y abstracto de la
definición sintáctica- al predicado articulación semiótica.
modal no deber, y rige al enuncia- 2. La contradicción es la relación
do de estado ser/estar. En el cua- establecida (tras el a¡:.to cognosci·
dro* semiótico de las modalidades tivo de negación*) .entre dos térmi-
aléticas, presupone la existencia de nos, de los que el primero -plan-
la necesidad*, de la que es nega- teado previamente....: deviene ausen-
ción. Término de lógica, la contin- te* mediante esta operación, míen·
gencia es semiótioamente ambigua, tras que el segundo deviene pre-
pues denomina también la estruc- sente*. Se trata entonces, a nivel
tura modal del poder no ser. de los conterúdos* planteados, de
-i' ALÉTlCAS (modalidades -). una relación de presuposición* don·
de la presencia de un término pre.
CONTINUO. Fr. continu, ing. con- supone la ausencia del otro~ y a la
tinuous. inversa.
1. La categoría* continuo/discon- 3. En tanto que constituye una
tinuo, no· definible, hay que contabi- de las relaciones constitutivas de la
lizarla en et inventario epistemoló- categoría semántica, la contradic-
gico* de los términos o:primitivos». ción define los dos esquemas* (S1 -
En semiótica, toda ·magnitud* es 51, S2 • 52) del cuadro semiótico. :
considerada como continua, ante- Los ténninos de cada esquema son ·
riormente al análisis (cf. la (\'.nebu- entre sí contradictorios.
losa» de ·saussure), ya que única· -->- CUADRO SEMI(lTtCO.
mente el análisis permite la cons·
trucción de unidades discontinuas CONTRARIEDAD. Fr. con.trariété,
· o discretas. ing. con.trariety.
2. En semiótica discursiva, la 1. La contrariedad es la reta·
oposición continuo / discontinuo se ción* de presuposición* recíproca
presenta como una categoría aspec- que existe entre los dos términos*
tual que articula al aspecto dura· de un eje* semántico, cuando la
tivo* en durativo continuo / dura· presencia* de uno de ellos presu-
tivo discontinuo. pone la del otro, :e inversamente,
~ DISCONTINUO, DISCRETO, UNIDAD, cuando la ausencia de uno pre-
ASP'ECI'UAI.IUCIÓN, supone la ausencia del otro. · ·
2. La contrariedad es la relación
CONTRADICCióN. Fr. contradic- constitutiva de la categoríi* Semán-
tion, ing. contradiction. tica: los dos términos de un eje
. CONTRARIEDAD -.CONTRATO 88
semántico sólo pu~den ser llamados rigurosa de esta noci~n intuitiva,
contrarios si~· y· solamente .si, el se trata de plantear·- el término
término contradictOrio de cada uno contrato para determbiar progresi·
de· eUos implica él· término contra· vamente las condiciones mínimas
rlo del otro. El: eje semántico es en las cuales se efectúa la «toma
entonces denominado eje de los de contacto» entre loS,. dos sUjetos,
contrarios.'· ' .. condiciones que podrán ser Corisi·
~ CUADRO SEMI~CO, PRESUPOSI~IÓN. deradas como presupuestos del. es-
tablecimiento de la estructura de la
CONTRASTE; Fr. contraste, ing. comunicación* semiótic;:li. En efec.
· contra.st. - CiertOs lingüist~s em- to, conviene reconocer", ·SO capa· del
plean el tCrmino .;contraste para de- contrato, a esta «conl.ullicación fá.
signar ·la· relacióri* .del tipo «y: .. Y'll tica*• que constituye ~<.sobreetiJ.eit·
que estab,lecen· ....::.en el eje shitag- dido :previo de toda: Comunicación
mático- las unii:Jades del mismo y que parece estar hecha, a la vez.
rango, comp¡¡.tibles entrC sf. El eje por una tensión (expectativa* .in·
sintagmático es llamado entonces dulgente o desconfiada) y una dis-
eje de· los· contrastes para distin· " tensión (que es como ia respuesta).
guirlo del eje paradjgmático o eje El hecho de establecer;Ja estructura
de las· oposiciones*. Estas denomi- intersubjetiva es al mismo tiempo.
naciones pu~den. set· homoJogadas por un lado, una apertUra al futuro
con el· eje de 1as combinaclones / y a las posibilidades <;le la acción
· eje· de las selecciones* (Jakobson) y, por el otro, una coerción* que
o Con la pareja funcióri combina- limita en cierta manera la libertad
toria /.función distintiva* Debe no- de cada uno de los sufetos. Propcr
tarse que la· relación de contraste nemos designar con el. nombre 'de
(llamada por L. Hjelm.Slev «rela- contrato hnpUclto · a este conjunto
ción») es únicamente discriminato-- de cuestiones previas-:.:. que funda·
ria* y no prejuzga en absoluto el mentan Ja .estructura intersubjetiva.
tipo de relación particular (por 2. Desde el punto de vista 'se-
ejemplo: solidaridad*, selección o miótico, no parece oportuno tomar
combinación en Hjelmslev) Que las posición en relación '1on las dos
unidades mantien~n entre sí. actitudes ideológicas opuestas que
~ COMBINATORIA> · COMBINACI6~ SIN· considefan a Ja vida social, la tWa,
TAGM.(TICO. , como hecha de enfrentamientos y de
luchas,· y la otra, como ·fundada en
· CONTRATO. Fr. contrat; in:g. con· Ja ccaridad:» (amabilidad) y las c6n-
tract.· . ,. . . venciones «benevolentes11. La apl'.0-
1. En. un s~ntido muY gene"ral, ximación estructural e?(ige, por el
se puede entender· por contrato el contrario, que sean totti·c:1.dos en con·
hecho. de estableCti, de' «contraer• sideración al mismo tie!npo los tér·
una relación ·inter'Subjetiva que tie- minos positivo y nega'tivo de una
ne por efecto nió_dificar el estatuto categoría*; por consighiente, que
(el ser y/o· el parec"er) de cada uno las estructuras polémic;as* (da~
de los sujetos P<:trticipantes. Sin en primer lugar o como"'. resultantes
que · se pueda dar. una definición de rupturas) sean trata~!1S como eJ
89 CONTRATO

Polo opuesto de ·tas estructuras se presenta, en uno de sus aspec-


contractuales (stricto sensu) y am* tos, como la proyección sintagmá·
bas,- además, como parte de una tica de la estructura contractual:
misma organización contractual de el contrato, establecido desde el
la intersubjetividad. comienzo entre el destinador* y el
3~ A primera vista, pueden dis- destinatario-sujeto, rige· al conjunto
tinguirse dos clases de contratos: narrativo, de modo que la conti~
el contrato unilateral, llamado así nuación del relato aparece como la
cuando uno de los sujetos emite ejecución* del contrato por las dos
una 4proposición:. y el otro adquie- partes contratantes: el recorrido
re un o:compromiso"' en relación del sujeto, que constituye la con-
con ella, y el contrato. btlateral o tribución del destinatario, está se-
recíproco, cuando las o:proposicio· guido por la sanción*, a la vez·
nes• y los o:cornpromisos:a se entre- pragmática* (retribución*) y cog-
cruzan. Tal definición, tomada. de noscitiva* {reconocimiento*) del de,s..
los diccionarios usuales, muestra, tinador. Se ve que esta orgaIDza..
no obstante, el carácter modal* de ción sintagmática, fundada en la
la estructura contractual: la "'pro- articulación del contrato, puede dar
posición• puede ser interpretada lugar a un despliegue de unidades
como ·el querer, por parte del su- contractuales, tales como el estable-
jeto 8 1, que el sujeto 82 haga {o cimiento, la :ruptura, ·el restableci-
sea) alguna cosa: a su vez, el «com· miento y· la ejecución· del contrato.
premiso• no es sino el querer o· el 5. El concepto de contrato hay
deber de S 2 de tomar a su cargo que relacionarlo con el de inter-
el hacer sugerido. En esta perspec- cambio*, cuya elaboración teórica
tiva, el contrato aparece como una es obra de M. Mauss. En este caso,
organización de actividades cognos.- el contrato aparece, a primera vis-
citivas recíprocas que provocan la ta, como un intercambio diferido,
transformación de la ·competencia* pues la distancia· que separa su
modal de los sujetos participantes. conclusión de su ejecución ha sido
4. Las reflexiones precedentes cubierta por , una tensión que es,
pueden parecer inspiradas por· al· a la vez, como un crédito y como
gunas preocupaciones filosóficas o un débito, como una confianza y
sociológicas. No es así; se basan una obligación. Pero al considerar
sólo, y en primer lugar, en análisis esto con atención, se advierte, sin
concretos -cjlda vez más numero- embargo, que una simple operación
sos- de discursos, y más particu~ de intercambio de dos objetos de
larmente. de discursos narrativos, valor no es sólo Una actividad
donde abundan descripciones de es-- pragmática, sino que, en lo esen-
trocturas contractuales que consti- · ·cial, se sitúa en la dimensión cog-
tuyen, para el semiótico, la fuente noscitivá*: para q_ue el intercambio
principal de una tipología eventual pueda efectuarse, es necesario que
de las estructuras contractuales. De las dos partes estén seguras de lo
este modo, por ejemplo, el esque- 1rvalioso» del valor· del objeto a
ma narrativo* canónico, derivado recibir en contrapartida; dicho de
de las descripciones de V. Propp, otro modo, un contrato fiduciario•
CONTRATO. CONVERS!óN 90

(precedido a me~u(:io por un· hacer maciones» que, situada$ dentro ·de
persuasivo* , "} · po"r .un' hacer inter· un estado, no deberían ·.,confundir'.se
pretativo* de los dos sujetos) debe con las transformaciones propiamen-
ser establecido · antes de·. la :opera· te diacrónicas* que perturban e1
ción :pragmática pfopiamente~ dicha. estado de la lengua en· ·su conjwlto.
6. Dicho contratO ·fiduciario pue. La metáfora que utiliza, a título de
de· ser llamado e.n1mcivo, si S"e ins· ilustración, es ésta: los, daneses lla·
cribe en ,el discurso~nunciado y mados a hacer el servicio militar,
trata de los ·valores* pragmáticos. aun_que' se «transformen,. en ·mili·
Sin embargo, se manifiesta·también tares, no dejan, sin-em:bargo, de Ser
a nivel de· la estructura de ·la enun· daneses, :
ciación*; entonces se presenta como . 2. Por nuestra parte·, empleamos
un · contrato · enunclatJvo (término ··el término conversión en su sentido
propuesto por·F..Nef) o:como con· hjelmsleviano y lo apUcamos a la
trato de verldlcdón,. por dirigirse dimensión sintagmática.' y discursi-
a. establecer una ·:convención :fidu- va de: la semiótica: eSte concepto
ciaría . entre el .enunciador* . .Y el se encuentra ·íntimamente vinculiido
enunciatarlo r'eferida al estatuto ve- entonces al discurso*;:'.aprehendido
ridictorío (sobre e1 decir. verdad) y definido Como una superposición
del discurso· enunciado. El contra· de niveles* en profundidad. En· efec·
to fiduciario así· instaurado, puede to, este modo de enfocar el dis-
descansar ·en una evidencia* (es curso permite elabora.J:" descri:Pcio-
declr, en una certeza* inmediata), nes autónomas -en lcis, planos sin·
o bien ir precedido por un hacer táctico y semántico- de cada uno
persuasi\lci* (un hacer-creer) ·del de los niveles de profundidad (que
enunciador, al que responde un corresponden· a las diferentes ins·
hacer interpretativo* (un creer) por tancias previstas del recorrido ge.
parte del enunciatarlo. nerativo*), pero no deja de p!an·
-+ COERCIÓN, INTERCAMBIO, VERIDic> tear el problema del ·paso de 'Un
CIÓN, NARRATIVO (eS:quema -h · nivel a otro y de· los procedimien·
· . .• - 1 tos a efectuar con ei ·fin de des-
. · CONVERSióN.. Fr. Conversion; crlbir estas conversionés. Así pues,
ing. conve.rsion. · · ·l el camino adoptado Por nosotros
· 1. L. Hjelmslev emplea el térmi· es inverso al de Ja grainática gene-
no conversión'. para · designar un rativa: ésta elabora, ·"'primero, re·
conjunto de pro·cedimientos que se glas de transformación-. más o me·
corresponden .(gtlardando las pro- nos definidas y, Juego, encuentra
porciones) con el concepto previo algunas dificultades páfa definir la
de .transformacióÍl* de la gramática naturaleza y el númefo de la;s ni·
genúativa~. El lingüista· danés . re- veles de profundidad,· no sabiendo
curre a él para. explicar ·el ·hecho muy bien, por ejempló; dónde ·cad-
de que la lengua, __:7-0 me!jor, un es- herir• la interpretacióil~. semántica.
tado* de Jengua~.)l.o es, o al menos ·Ahora bien, las reglai de conver-
no · solamente, uri3. . estructura está· . sión sólo pueden ser· concebidas
tica, sino_ que cOrriprende también sobre un fondo de eQuivalencia*,
un aspectb din. á~.~Co. laS «transfor· admitiendo que dos o '..'más f0ntlas
91 CONVERSlON • CQ.REFERENCIA

sintácticas (o dos o más formula· sin duda, una de las pruebas fun·
ciones semánticas) pueden estar re-- damcntales de la coherencia de la
feridas a un tópico constante. Hay doctrina semiótica.
que tener en cuenta, además, que ~ TRANSFORW.~IÓN, EOUIVAUNCIA,
la equiValencia no es la identidad*: GENERATIVO {recorrido -). ANTROPO-
es preciso reconocer que ·Ja gene· MORFA (sintaxis -).
ración de la significación, al intro-
ducir nuevas articulaciones en cada CO • OCUR...ltENCJA. Fr. CO·OCCU·
etapa de su recorrido, aporta, al rrence, ing. co-occurrence. - Próxi-
mfsmo tiempo, un «enriquecimien· mo a contraste*, él término co-
to» o un o:aumento)lo del sentido, ocurrencla designa la presencia de,
si se supone que la significación* al menos, dos magnitudes* semió-
no es otra cosa que articulación. ticas, compatibles entre sf, en el
Toda conversión deberá considerar. eje* sintagmático: este concepto,
se, por consiguiente, como una relativamente vago por cuanto no
equivalencia y, a la ve:i, como un precisa la naturaleza de la relación"'
excedente de significación. entre los térrriinos c0-0currentes,
3. Apenas se ha comenzado aún está en fa base niisma del análisis
a reconocer los procedimientos de distribucional*, pues le pennite de·
Conversi.Sn y a establecer las re- terminar los contO{llOS o contextos
glas que los formularían; hasta el de los elementos extraídos.
momento, las investigaciones han
tratado, esencialmente, sobre el CO·REFERENClA. Fr. co-ré.férence,
descubrimiento de los principios y ing. co-refe.rence.
formas de la organización discur· l. La co-referencta ·es la relación
siva. Obsérvese, sin embargo, por que mantienen d0s signos* lingüís·
ejemplo, cómo las operaciones* que ticos (idénticos o ·diferentes) cuan·
versan en tomo a los términos* do, situados en .'.dos lugares {conti·
relacionales -que sirven de base a guos o alejado.s) de la cadena* .
la sintaxis* ·fundamental- pueden hablada, remitcri a un mismo obje.
Ser convertidos, al pasar a la sin- to extralingüístico. ·Esta definición,
taxis narrativa, en enunciados de como se observa, está. ligada a una
hacer* que rigen a l"os enunciados concepción del referente, según la
de estado* (donde las transforma· cual, lo lingüístico consistirla sim·
ciones modifican a las junciones*: plcmente en etiquetar el mundo
disjunciones en conjunciones. e in· natural.
versamente). Por otro lado, en el 2. En la medida en que se diso-
componente semántico. se advierte cia la lengua* natural de la semió-
también que los términos de las tica del mundo• !. natural (excep-
categorías* semánticas se convier· tuando, evidentemente, plantear el 1
ten en valores* vertidos en los ob· problema de la 'intersemioticidad,
jetos sintácticos, y que. éstos -lu- donde el referente' no es sino una
gares semánticamente vacíos- pue· cuestión de correlación entre dos·
den ser convertidos en figuras* y sistemas semióticos), la co·referen·~~ ·
en iconos* del mundo. Elaborar las cia, en cuanto tal, se desvanece y:.;.
reglas de conversión constituiría, deja su lugar a la anáfora. Asf, por
CO-REFERENCIA ·CORPUS 92

ejemplo,;· la· relación -pronombre/ en su manera de determinar la


antecedente· sé· reduce a una, aná· relación entre el sujeto Q.ue conoce
fora sintáctica: si este tipo' de y el· objeto por conocer: el corpus
anáfora puede ser fácilmente inter· es considerado como !'objetivo•~
pretado en. gramática genei'ativa"', como una cosa en sí qUe incluye
no Ocurre lo. mismo en el caso de sus· propias leyes, mienti:as que la
la anáfora semántica (cuando, por epistemología actual conc~de, al me·
ejemplo, una · denOininaclón* recu- nos, la· "llisma importancia al su-
pera. una definición anterior), ..' don· jeto que construye su objeto.
de ningún' índice sintáctico formal 3. Sobre este trasfondO epistemo-
está· presente para justificar la re- lógico, y teniendo en cuenta las con·
lación de.· identidad parcial .entre diciones históricas (desplazamiento
dos· términos¡· además, por lo gene- .del interés de la Iingüfatica hacia
ral, los procedim.ie.i:itos de anafori· las lenguas vivas). se ha ·instaurado
zación · que permiten garantizar la hace poco la campaña «a.nti-eorpus»
isotOpia* discursiva (las relaciones dirigida por los chomslcirinos. Mien·
interfrásicas) son difícilmente -inte- tras se insiste sobre e1 carácter
grables, por deñniCión, en una lin· constructor del hacer ci¿ntífico: la:
gilistica frásica"'. · gramátíca generativa* -qUe se dice
~ REFERENTE. ANÁFORA.· .. proyectiva- se ha propuesto, al
menos en apariencia, inVertir un
CORPUS. Fr. corpUs, ing. 'corpus. conjunto de reglas* qu_e puedan
l. , En· 1a. tradicióri . de Ja lingilis· ser proyectadas sobre un· conjunto
tica 'descriptiva*, Se: entiende· por más amplio de enUnciados °{realiza·
corpus un conjunto finito· de enun- dos o potenciales). Este: enfoque;
cia4os* constituido ·..con ··miras al que otorga prioridad ar metalen-
·análisis* ·que, una vez efectuado, se guaje* sobre la lengua.Objeto~ co-
supone que· ha sido descrito de rresponde a las actuales.j:endenclas
manera exhaustiva y· adecuada~ generales de la ciencia. :Él que Un
2. " Elaborar . el concepto de · cor· «pequeño número de hechos» per·
pus :i-epresenta un intento por· defi· mita construir el modelo* no sos-
nir~ de manera rigurosa; una 1 len· laya · que se trata de 'i.1n corpus
gua* natur-•.,.Í' como·. objeto de Cono· representativo limitado, constituido
·cimiento: las exigenc!.as de exhaus- de manera más o menos intuitiva;
tividad* '{regla· para: constituir Ia tampoco, que los criterios de gra-
colección y pauta para el analista) maticalidad* y de aceptabilidad*
y de adecuación* {condición de la {que contiolan la· proyección de IaS
-llVerdad• del análisis efectuado) se reglas) aparecen tan poco seguros
dan,. allí' cita •para garantizar· la como los de exhaustivf~ad y de
cientificidad de Ja·descripción* (que adecuación a los que córisidera re-
opera sobre las lenguas muertas o emplazar. Lo que, realmente, está.
las lenguas sin· escritura, donde )as eo juego es la evaluación episte-
informaciones· son difíciles" o impo- mológica de dos ·actitudes --eonsi-'
sibles de verificar :.y · completar). derad~ en forma global~· y no un~
Sobre esta tentativa pesan sus pre. querella, un tanto intrascendente,
supuestos positivist.is, reconocibles de palabras: a propósitO del cor-
93 CORPUS-COSMOLóGICO
pus, no hay contradicción de prin- del corpus: en otro lugar hemos
cipio entre los enfoques descriptivo tratado de circunscribir mejor el
! y generativo, tal como lo subraya concepto de representatividad, pre-
1 J. Lyons. viendo para ello doS procedimien-
í' 4. El problema del corpus se
plantea de manera diferente cuan.
tos: la representatividad del corpus
puede ser obtenida ya sea por
do se trata no ya de colecciones de muestras estadísticas, o por satura-
frases. sino de discursos, o cuando ción del modelo; en este último ca-
1 el p'royecto del lingüista no es sola- so, el modelo construido partiendo
mente sintáctico, sino también se. de un segmento intuitivamente ele·
1 mántico~ El corpus, en cuanto con- gido, es aplicado, de~pués, a .otros
cepto operatorio*, recupera sus de. segmentos para Confirmar, comple-
rechos a ser utilizado en el sentido mentar o rechazar, hasta agotarla,
«generatiVista» implícitO; así, puede la información (procedimiento que,
hablarse de corpus sintagmátlcofr evidentemente, se puede comparar
·(conjuntos de textos de un autor) con el de la proyección de las ·re-
o de corpus paradigmáticos (con- glas).
junto de variantes de un cuento), ·-> GENERACIÓN, u1x:IOO, VERIFICACIÓN.
considerando siempre que no son
nunca cerrados ni exhaustivos, sino CORRELACióN. Fr. corrélation,
tan sólo representativos, y que los ing. correlation.
modelos '""-(:OD ayuda de los cuales 1. L. Hjelmslev reserva el nom-
se busca describirlos- serán hipo- bre de correlación para la relación
téticos, proyectivos y predictivos. ~o ... O» existente entre los miem·
5. EI análisis semántico* se en- bros de un paradigma*, por oposi-
cuentra, respecto al corpus, en una ción a la relación* (o relación «y...
situación casi paradójica; mientras y:i>) reservada a la cadena sintag-
que la selección de un corpus limi- mática* (función* es el término ge-
tado,· abierto y representativo de- nérico que las integra).
pénde, para la gramática generativa, 2. Bl ·uso ha mantenido el sen-
de la posición teórica· adoptada de tido más geneÍ-al- del término «rela-
antemano, para el análisis semán- ción:i>: en semiótica, la palabra
tico, se presenta como una· necesi- «correlación• designa, muy a menu-
dad: se trata de describir un cam- do, la relación: entre relaciones,
po* semántico o un ·discurso dado, pudiendo estas"·úJtimas ser consti·
el corpus que sirve de punto de tutivas de paradigmas, o de sintag-
partida para el análisis es siempre mas.
provisional y el -modelo construido -+ RELACTÓN.
es raramente coextensivo al corpus
inicial¡ asimismo, los objetos lin- COSMOLóGICO. Fr. cosmologique, ;
güísticos integrados por el modelo ing. cosmologicat. · ;
se encuentran, en parte, disemina- 1. La división del conjunto de
dos fuera de los límites del corpus. categorías* sémicas que articulan
6. Ollizás no sea imposible ela- el universo* semántico en dos sub-
borar un cierto número de reglas grupos -el de las categorías exte-
táctica_s para una «buena selección• roceptivas* y el de las categotías
COSMOLOGICO ·CREATIVIDAD 94
interoceptiv:as*- nos obliga a con- concierne al recollocimiefito de los
siderar a Ja ··categoría clasificatoria niveles• de profundidad ·en el reco-
misma (la de exte'roceptividad/inte- rrido generativo* del discurso: el
roceptividad.) comó una : categoría componente discursivo figurativo~
clasernática*•.- capaz-' de establecer corresponde, grasso .modo, a la di·
una distinción ·entre dos .clases de menslón práctica previainetite reco-
discursos* '(o entie dos isotopías* nocida, peró sólo conserva una
de lectufa de- un solo discurso). parte ele los discursos cOsmológicos
Todavía •faltaba enéontrar una ter- (que pueden ser figurativos, pero,
minología cuyas denominaciones*, también, temáticos* y. abstractos,
aunque fuesen arbitrarias;· no inco- como cuando se trata, pcir ejemplo,
modaran -por su ca.rácter: alusjvo- de los discursos en ciencias huma~
la ptáctica semiótic:;i.. Siguiendo la nas). Muy diferente es la· distinción
tradición de ·Ampere y de Cournot, entre las dimensiones pragmática*.
se· ha 'propuesto cónsiderar como y cognoscitiva*, consider"adas como
cosmológico el disci,irso o la dimen· niveles distintos y jeráré¡uicamente
sión discursiva subtendidos, en su ordenados, en Jos que s·e sitúan !as
totalidad, :por_ el clasema exterocep.. ·acciones y los eventos di?sCritos poi-
tividad, ·en -oposici6'n" ·al áiscurso o los dist:ursos. · ··
a la dimensión neológicos*, dotad.os 4. Lo cualitativo · costh,ot6gico· se
del clasema interOceptividail: un traduce, en consecuencia", tanto por
medio' P.~ra · distingUir así los dis· lo figurativo como por ··lo praginá·
cursos sobre el -ir:mundo» de los dis· tico.
cursos sobre· el «eSpírltU11, · ~ EXTEROCEPTMDAD, ff,:GURATIVO,
2. Esta .oposición se entronca PRAGM.<TICO.
con otra dicotomía·.proveniente ·de
la reflexión sobre el estatuto de los citEATIVIDAD. Fr. cri~tivi.té, ing.
discursos míticos, :donde· se ha po. creativity.
dido reconocer, baj9 la dimensión !. La creatividad es ·una noción
práctica* del discurso (que cuenta de psicología que N. C.homsky h,.
los '!COntecimientos y: las acciones tradujo en lingüística, dándole una
de· los hombres), una dimerisión definición precisa: la facultad de
mítica*· más profunda que trata, producir y de comprender frases*
bajo aquellas apariencias figurati- nuevas, gracias al carácter recursi-
vas*; problemas abstractos*· que vo"" de las construccio~es sintácti·
comprometen el destino del .hom- cas. La creatividad, así entendid~.
bre y de la cultura en la que vive. debe ser considerada '.éomo una
3. La homologación de estas ·dos propiedad de la comp~tencia d~I
dicotomías ha producido dificulta- sujeto hablante. El carácter opera·
des y ·ha habido que esperar a los torio* dtf· este concepto es, eviden~
nueVos desarrollos· de Ja semiótica tementé, débil o nulo: ciado que las
discUrsiva para ver can más· clari· posibilidades ºcombinatorias* de una
dad. · Actualmente,. pareée que la lengua natural son piácticamente
principal razón de la confusión ·re- infinitas, esto equivale a· decir -más
sidía en ·la no· distinción de dos o menos- que el. .ii:espfritu huma-
problemas diferent:s. · El primero . no» ·es Creativo. En calnbio, basta
95 CREATIVIDAD· CRONóNIMO

con introducir este término en lin- el esquema probable. / improbable


güística para producir estragos en (que admite una gradación), pro-
semiología, estragos que caracteri· ponemos considerar el creer como.
zan a toda clase de excesos psico- Ja denominación, en lengua natural,
Jogizantes. Más bien, partiendo de de la categoría epistémica~
las incom_patibilidades entre cate- 2. En el eje de la comunicación*
gorías" y entre estructuras*, par· (real o «imaginaria• cuando ésta
tiendo de las coerciones que impo• depende del di::;curso interiorizado),
nen las e:µistemes* de naturaleza e1 «creer,. se opone al «hacer-creer1>
social, se podría alcanzar -poco a (o persuasión) y corresponde, en
poco- una definición de Ja origi- consecuencia, a Ja instancia del
nalidad*. . . enunciatario* que ejerce su hacer
2. La creatividad podría, igual- interpretativo*, mientras que el «ha-
rnente, ser concebida como el resul- cer - creer,. es obra del enunciador*
tado de la lengua (social) y del encargado ·del hacer persuasivo*.
habla* {individual): las variaciones Sin que por ello se pueda actual-
individuales (fonológicas, sintácti- mente pretender definir el creer de
cas, semánticas) acumuladas y di- manera satisfactoria, su inscripción
fundidas, parecen poder dar cuenta en el marco del hacer interpretati-
de modificaciones a nivei de lengua; vo, en cuanto resultado y. sanción
las variaciones dependientes de Ja final de éste, permite ya circunscri·
performance* explicarían, así, las bir un poco mejor la problemática.
transformaciones* diacrónicas de la En efecto, el creer no es sólo el fun-
competencia. damento de la· fe religiosa: consti·
-+ ORIGINALIDAD, lDIOLEcro, COMPE· tuye también, entre otras -<::iertos
. TENCTA. análisis . recientes Jo demuestran
bien-. ta instancia crucial del dis·
CREER. Fr. croire, ing. believing. curso científico; ID.ás extensamente,
l. El creer, en cuanto adhesión el hacer-creer, que, como hace'r per·
del sujeto* al enunciado. de un es- suasivo, no puede ser tratado inde-
tado*, se presenta como un acto pendientemente del. creer. constitu-
cognoscitivo regido por la catego· ye una de las formas principales
ría* modal de la certez.a*. Esta ca· de la manipulación*'. Así, la cues-
tegorfa puede recibir, en la actual tión del creer se muestra como uno
literatura lógica y semiótica, una de Jos temas de Ja investigación
doble interpretación: o bien es con· semiótica para los años venideros.
siderada como una categoría alé- -..+ rnsrtMICAS (modalidades -).
tica* (y entonces el creer se iden-
tifica, en calidad de ·sinónimo de CRONONlMO. Fr. chrononyme,
«posibíiid'ad», Con. su téñniñO deber ing. chrononyni. - Al lado de topó-
no ser), o 'bien como una cate- nimo* y de antropónimo'*', algunos
goría epistémica* autónoma, con su semióticos (G. Combet) proponen
término certeza. Partiendo de la introducir el término . cronónlmo
distinción entre el esquema•··posi· para designar· las duraciones con
bte/imposibte (oposición categórica denÓminación propia («día•, «Pri-
que excluye un tercer elemento) y mavera,., «paseOl>, etc.): esta pala·
CRONONIMO ·CUADRO SllM!OTICO %

bra · puede reemplazar con . ver.taja ta seis términos unidós entre sí.
. al término período. Junto coo. loS No obstante, R. Jakobson, uno· de
antropónimos y topónimos, lós cro- los defensores del binarismo, ha
nónimos sirven para· "establecer un llegado a reconocer la existencia·
anclaje* histórico· cuya .finalidad es de dos tipos de relaciOIJCS binarias,
construir el simulacro de url refe- unas, del tipo A/A, caracterizadas
rente externo y :PrQducir el efecto por la oposicjón resultante de la
de sentido:" ·«realidad:.. '· presencia• y de Ja ausencia de un
..4 FIGURATIVIZ!t.CIÓN, 'RE'.fERENTS. rasgo definido; las otras, del tipo
A J no-A, que manifiestan, de alguha
CUADRO (o CUADRADO) SEMIO· manerz;, el mismo rasgo, dos veces
T1CO. Fr. carré sémiotique, ing. se- presente bajo . formas: diferentes.
·miotic squ.0.re. A partir de estas adqujsiciones, re·
l. · Se entiende por cuadro ser..ñó- sultado deJ hacer Jingüístico, se ha
tlco la ·répresentación* visual: le la podido establecer una tipología de
articulación ··lógica de una catego. las relaciones intracategoriales. .
ría* semántica cualquiera. La es· 3. LA PRIMERA GENERACIÓN DE LOS
trlictura* elemental de la significa. TÉRMINOS CATEGORIALES. ~ Basta par·
ción; definida,· en· primera opción, tir de'Ja oposición A/ná-A (tcnien·
·como una reJacióri•· entre al menos do en cuenta que la naturaleza 16·
-dos ténllinos*, sóh;> descansa en &ica de esta relación · permanece
uná · distinción de oposición* que indeterminada) y denominarla ·eje
caracteriza al eje paradigmático del semántico, para darse cuenta de
lenguaje~ en consecuencia, es sufi· que cada uno de tos dos términos
ciente para constituir un: paradig- de este eje es capaz 'de contraer
ma* compuesto de n ·términos; ' sin separadamente una nueva relación
embargo, no permite distinguir, de tipo A(J.: La representación de
dentro de ese paradigma, las cate. este conjunto de relaciones tomar:á,
gorías semánticas fundadas ··sobre entonces, Ja forma de ··cuadro:
Ja isotopía* (el «parentescOll) de Jos
·rasgos .. distintivos* .qtié' pueden ser
reconocidos en éJ. ·Es necesaria una
tipología de las ieJaciones, gracias
a· la cual · Se puedan distinguir Jos
rasgos intiínsecos (constitutivos• de Nos queda por jdentificar, una a
Ja categoría) de aquellos que le son una, estas diversas relaciones:
ajenos.:. · . . a) La primera -A/A-, definida
·2. La tradición lingüística de por ia imposibilidad qué tienen doS
entre·gu'erras ha· iínpi.Iesto· Ja con· términos para estar presentes a Ja
cet>ci6ri'· biri3.ria* .de ·1a categoría. vez, será denominadá relación de
Eran raros los ling\iistas que, como contradJcclón*: es su definición es·
V.· Brandal por· ejemplo, sostenían tática. Desde el punto, de vista di·
_:tr.as las inVestigaciones compara· nárnico, la operación de negación*
tivaS sobre las categorías morfoló- efectuada sobre el . término A (o
gicas- Ja existencia de estructuras no-A) es la que genera. su contra-
multipolares que comprendfa1:1 has.- dictorio X (o ñ"'o:A}. Así, partiendo
91 CUADRO SEMIOTICO '

de loS dos términos primitivos, es


posible engendrar dos nuevos tér·
minos contradictorios (términos de
primera generación).
b) La segunda operación es de
aserción*. Efectuada sobre los tér· donde:
minos -contradictorios (A,'· no· A},
~-~~ relación de contradicción
puede presentarse como una impll·
e.ación"' y hacer apatecer los dos ------ relación de contrariedad
- relación de complementa·
términos primitivos como presu·
riedad
puestos de los términos asertados
Si.-5 2 : eje de los .contrarios
<A:,no··A; no-A:::>A). Si, .Y sola·
mente si, eSta doble aserción tiene·
5; · 51 : eje de los subcontrarios
por 'efecto producir esas dos impli· S 1 • 51 : esquema positivo
caciories paralelas, se puede decir· 5 2 -52 : es"qÓema :ti"egativo
·s
que tOs dos términos pririlitivos · Si· 2 dehds positiva
presllpuesios son los· términos de
una sola y única categoría.y que el
5 2 • 51 : deixis negativa.
eje semántico elegido es constitu·
Queda por esclarecer un último
tivo de una categoría · seinántica.
punto, el de. la existencia de las
Por el contrario, si A no implica categorías binariaS str.icto sensu
no-A, y si no·A no )mplica A, los (cuya relación constitutiva no es la
términos primitivos ;_A y no-A-, contrariedad, sino la contradicción),
con sus contradictorios, dependen tales como, por eje1nplo, aserción/
de dos categorías semánticas dife- negación, Nada se opone a que, de
rentes., En el primer caso se dirá tales categorías, se dé una repre-
que la· operación de implicación es· sentación en cuadro:
tableeida entre los términos (A y
no-!) y (Üo-A y A) es una relación ·.aserción><· . ·.; · ·negación
de complcmentarledad*. J_ ..• J_
e) Lo.s dos términos primitivos
son términos presupuestos; se ca-
racterizan, además, por poder estar
T
negación
.
· ,
T
aserción.
presentes de manera concomitante
(o en términos lógicos, de ser ver· Se nota aquí que la negación
daderos o falsos juntos: criterio equivale a la aserción. Generalizan-
que es difícil de aplicar en semió- do, es posible ·decir entonces que '
tica), y están llt\mados a contraer una categoría semántica puede. ser
· una relación de presuposición* recí· llamada. contradictoria cuando la
proca, o lo que· viene a ser lo mis- negación de .sus términos primiti·
mo, una relación de contrariedad•. vos produce ·implicaciones tautoló-
Ahora es posible dar una repre· gicas. Esta. definición, de orden
sentación definitiva de lo que lla· taxonómico*, satisface Ja lógica tra·
mamas cuadro semiótico: dicional que puede operar sustitu·

SEMIÓTICA. - 7
CUADRO ··sEM!óTICO 98

clones:* en ·.Jos dos ~ sentidoS (no a) Está claro que los: cuatro tér-
orientados). ·reemplazando aserción minos de la categoría no se baltan
por negación o inversamente. En definidos de manera sustancial, sino,
lingüística, .la.' cuestión se presenta ún.icanlente, como ·-puntos· de inter-
de otro mOdo: el discurso guarda sección,·· como extremos de relacio-
allí las ·huellas de !as operaciones· nes: esto responde al principio es-
sintácticas., efectuadas. anteriormen- tructural enunciado por F. de Saus-
te:·: ···1·:: ,,.; sure, seg(¡n el cual «en la lengua,
sólo hay diferencias».
·:~ 1 :··:·'"'«sí~; <1DO•
b) Nótese también que~ partien-
,, t •/'::~,
;:.·.,-11.si-a/i ·:!1•
do. de la proyección de' los contra-
dictorlos, cuatro nuevas· relaciones
han sido reconocidas en el cuadre:
dos. reJaCiones de coÍitrariedad (el
El término «SiP es, por supuesto, eje de Jos contrarios y de los .sttb·
equivalente de .c:si:11," pero- compren· contrarios) y dos relaciones de com-
de, al mismo: tiempo -bajo forma plementariedad (las deixis, positiva
de presuposición ·implícita....:.., una y negativa). ·
operación de negación interior. En· c) Dado que todo sistema semió-
tonces es ·preferible utilizar en las tico es una jerarquía*, resulta pro·
descrlpciories ··-.·semióticas,· incluso hado que las relaciones contraídas
pani ·las•' categorías· contradictorias, entre términos pueden Servir, a su
la representación canónica en cua- · vei, ele términos que. establecen
dro. !. ·· · ' .! " · · · ·.·· .·. entre sí relaciones jerárquicam:enie
4. LA. 'sEG°uNDA GENERACIÓN De LOS superiores (las funciones* que des·
rtRMINOS CATEGORIALES. - Se ha vis- empeñan el rol de · funtivos, según
. to cómo· dos ·operaciones paralelis . la terminología de · L. "Hjeimslev )•
de negación, efectuada$ sobre los Se dirá, en tal caso,· que dos rela-
ténninos :Primitivos, han perlnitido ciones de contrariedad 'contraen ·en.
generar: dos términos. contrad~cto­ t.re ellas la relación de' contradic-
. rlos y c6mo,: en ·seguida, dos im- ción, y que dos relaciones de coñ1-
·plicaciones han establecido i-el2.cio- plementaricdad establecen entre sí
nes de. COmplementariedad, deter- Ja relación de contrariedad. El si·
minando -a Ja vez-· la reI2.ción guiente ejen1plo Hustra, esta consta·
·de: contrariedad que ·ahora puede · · lación:
ser reccinocida entre .Jos dos térmi- verdad
nos prlmitivos. (No nos· detendre- ·"
mos en·t~acer.-paitiendo de la red
ási 'con"stituida, · Ia"s mism.as Opera-
; ciones Que, por lá negación de los
subcontrarios, establece- entre ellos
la· presuposición recíproca.)· Es im-
·portante' saear ahora las primeras
consecuencias· del modelo*· relacio..
. nál así construido. '. .falsedad
CUADRO SEMIOTICO. CULTURA

Podrá reconocerse asf que verdad difícil, pues implica reconocer reco-
y falsedad son metatérmlnos con· rridos sintáctico:S muy complejos, y
tradictorios, mientras que secreto probablemente contradictorios, que
y 1nentira son metatérminos con. culminan en ese género de forma.
trarlos. Los metaténninos y las ca. cienes. · ·, ·
tegorías que ellos constituyen serán 6. El cuadro Semiótico puede ser
considerados como términos ·y cate- útilmente comparado con el exá-
gorías de segunda generación. gono de R. Blanché y Ios grupos
5. LA TERCERA CENE.RACIÓN: DB "IÉR· de Klein y de Piaget. No obstante,
MINOS CATEGORIAU'.S. - El problema el cuadro semiótico depende de la
que queda pendiente es el de la problemática epistemológica susten·
tercera generación de los términos. tada en las condiciories de existen·
En efecto, las investigaciones com- cia y de producción de la significa·
parativas de V. Br0ndal han hecho ción, y a la vez, del hacer meto-
. aparecer la existencia -en la red dológico aplicado a los objetos lin·
que articula las categorías graroati· güístic::os concretos; se distingue,
cales- de términos complejos y por ese hecho, de las construccio-
neutros que resultan del estableci- nes lógicas o .matemáticas, indepen·
miento de la relaC'i6n ey... Y" entre dientes -en cuanto formulaciones
contrarios:· el término· complejo se- de <tSintaxis pUra- del componen·
ria la reunión de los ·términos del te semántico. Toda identificación
eje de los ·contrarios (5 1 +Si), apresurada de los modelos semió-
mientras que el término neutro re. ticos y logicomatemáticos no puede,
sultaria de la combinación de los en esas condiciones, dejar de ser
términos del eje de los subcontra· bastante peligrosa ··
.. rios (51 + ·52). Ciertas: lenguas natu· -> ESTRUCTURA.
rales estarían, incluso, en capacidad
de producir términos complejos po- CULTURA. Fr. culture, ing. cu.z.
sitivos y términos complejos negatl· ture.
vos, según que domine uno u otro l. Desde el punto de vista semió-
de los dos términos que entran en tico,, cabe considerar el concepto
la composición. de cultura como coextensh·o del de
Han sido propuestas diversas so- universo* semántico*, relativo a una
luciones para explicar la formación comunidad sociosemiótica dada. El
de dichos términos. Poco deseosos proyecto de una semiótica de la
de ·añadir una hipótesis más, con- cultura (el.de J. Lotman, por Cjem-
sideramos que la problemática -en plo) está llamado, por consiguiente,
espera de descripciones más preci· a convocar el universo semántico
sas y más numerosas- queda abier. -y, principalmente, sú.s dos coro·
ta. Sin embargo, no se nos escapa ponentes macrosemióticos* que son
la importancia del problema: se la lengua* natural y el mundo* na-
sabe que los discursos sacros, mí· tural- y a tratarlo como una se-
tic os*, poéticos*, etc., ponen de ma· miótica-objeto a fin de construir .
nifiesto una predilección particular una metasemiótica llamada <tCUltu.
por emplear términos catego:riales ra». Una tarea de este ti.po parece
complejos. La solución se ha hecho exorbitante porque corrcsponderfa
CULTU~··"' 100
a la desCrlpción del· .conjunto de fica), dicotomía que J;~ de ser c>.m-
las axiologías,. de :las ideologías y· pleada con precaución;' Es evidente
de Jas prácticas sociales significa,n. que Ja categoría misma es semán-
tes. De ahí· que I!OS limitemos -las tica y cultural, Plle$.; se inscribe
más de las veces- a construccio- inmediatamente en tal o cual con·
nes más modestas , '"-Ctlantitativa· texto cultural: la naturaleza, en este
mente- y,· a '1a ·Vez; más ambicio- sentido, no es la natµraieza en .:;í,
sas -cualitativalnente--. como son sino lo que, en una cultura, es !=On·
Jas descripciones d~ epistemes* •. con· siderado como dependiendo de la
sideradas· como jerarquías de siste- naturaleza, por oposición a lo que
mas semióticos o:como meti:isemió- es percibido como cuhi..tra: se trata.
ticas* .connotativas. entonces, por decirlo a$í, de una na·
2. El concepto de cultura es re· t1:ra!eza culturizada. I!.P.r otro .lado.
· Jativo y, a la vez, universal. Si por Ia categoría natura /'cil.ltura debe
cultura se entiende, con frecuencia, ser considerada comó' una catego-
la .de una comwiidad lingüística au· ría conceptual metalingüística -de-
tónoma, no es menos cierta .la exis- . pendiente de la teorla.-antropológi·
tencia de áreas cu~turaleS que', tras· ca a evaluar en su cbnjunto-' .y,
cendiendo las fronteras lingüísticas, como· tal, posee un válor operato·
a modo de ~ une.' cultura humana rio"' que permite iJ'Jtrqducir las Pri·
plánetaria;' estari~Íl caracterizadas meras articulaciones en }a explora·
por prácticas científicas,. tecnológi- ción de una cultura d:ida.
cas e, incluso, en parte, por jdeo· 4. En este sentido .ies en el que
logías comunes-. .j.Jna ·distinción en· adoptamos la dicotomía levi-straus-
tre tas microsociedades (o socieda· siana~ considerandq.¡. de manera
des arcaicas) y la~ ·macrosociedades apriorística, Ja oposjCfón natura i
(desarrolladas) sirve· de base a dos cultura como eJ. pfimef vertimiento
consideraciones ·diferentes: etnose- elemental del univers:O semántico
míótica* por un lado, y, sociosemió· social (paralelamente a· la categOria
tica* por el otro. , vida/muerte que caracteriza al· u.ni·
3. La antropología de·Lévi-Strauss verso individual), cap~z. por este
ha introducido y'. generalizado el hecho, de servir de uitiversal* que
usci de la dicotonl'fa ·natura/cultura puede ser postulado 21 emprender
(que ·deja: pocas. Posibilidades a la el análisis de cualqtiiet micr:ouni-
oposición : soviética· más reciente verso* de este tipo.
-cultura/barbarie.....: formulada ·¡:,or -')o UNIVERSO SEMÁNTICO, socxost::M16-

Lotman y' que parece · J::?áS especí- nCA.


'
"··.

-:;
D

DEBER. Fr. devoir•.: dalizante que ellas·. comprenden, y


l. El deber. es uno de los posi· distintas, en ctianto a los enuncia·
bles predicados* del enunciado mo- dos que. están "modalizados. . - ..
dal*. Determina y rige un enuncia· 3. Teniendo en ctienta que el
do de· hacer.., o un enunciado· de enunciado modal y el enunciado
estado". El vertimiento semántico regido pueden comprender cada uno
de este predicado no es definible a su contradictOrio, sh categorizará
en sí mismo, si.no solamente en el la estructura modal de deber-hacer·
ámbito de las interdefiniciones de proyectándola· en .el cuadro* semió-
las modalidades seleccionadas con tico y dotando, al mismo tiempo, a
miras a una aixomática*.- En tér. cada uno de los términos* obteni~
minos ·más· simples, o más :filosófi· dos con una denominación apro-
cos, el deber parece constituir jun. piada y arbitraria: :•¡
to· con · el querer* una especie de ·;3
· · deber-hacer ¡;¡ deber no hacer
cuestión previa, es; decir,· las con·
diciones mínimas para un hacer o · (prescripción} V (prohibición) ,
para un estado, y en el plano· de la
producción* del enunciado, una fase no deber ~ohace/>·no dcber·Tt~cer
(permisión) {autorización).
que virtualiza un enunciado de ha- ·
cer o de estado. ·'
2. Cuando, para simplificar, se - El procedimiento de denomina."
·designa al enunciado modal, cuyo ción -que consiste aquí en conver·
predicado es la modalidad del "de- tir una formulación verbal y sin·
ber, con el nombre de «deber.11¡ al táctica en una expresión nominal
enunciado de hacer, con el nombre y taxonómic3.- tiene como efecto
de «ha<:er.11, y al enunciado de esta- transformar, por condensación*, los
. do, con el nombre de· .:estar.- (ser/ dos predicados en ' un solo valor
estar), cabe conslderar al : deber• moda]. La categoría modal, así cons.
hacer y al deber-ser (ser/ estar) tituida, es decir, por denominación,
como dos estructuras modales idén· adopta, como es lógico (con algu·
· ticas, en ·cuanto al enunciado me>- nas ligeras modificaciones), la dis-
DEBER- DECEPCióN 102

posición· de las modalida,,des deón- contrario, a la del pÓder-ser (ser/


ticas* utilizada en lógica; de donde estar), cOrrio lo demuestran ciertas
pued; ·manteriérsete la. denomina- denominaciones corn.u:ri~s que re·sul-
ción de catei:Oría modal deóntica. tan de homologaciones ·semánticas
4. El mismo procedimiento de intuitivas. Así, por ejé_mplo, la ..ne-
proyección categoriiante puede apli- cesidad* lo mismo denomina· al
cársele a la · estnlctura mOdal del deber-sCr (ser/estar) que ñ.J no ·PO·
deber-s'er (ser/estar): · der no ser (ser/estar):,'. Ja irnposibi·
lidad* comprende, a ~a vez, a las
deber-ser deber no sir estructuras modales d~ deber no
· criccesidad)x(imposibilidad) ser (ser/estar) y de 'no poder~ser
(ser/estar). La difereil.cia entre la
·~to d~ber no .se; no debe;·ser dirección lógica y · Ja "dfrección se-
(posibilidad) - (contitigencia).
'.) miótica se ahonda aq'UÍ! mientras
' . .' que la lógica postula :a priori· U..'la
Los ~alores modales denominados disposición alética a base de deno-
son. fácilmente homologa bles· con la ·minaciones; Ja semi6Úca 1 por ,su
dJsposición· de las·, modalidades alé- parte, pretende fundar las denOiTii-
ticas*-~.de. ta. lógica. Se :reservará, nacioneS en Jas definiCiones sintác-
entonces.. para. esta . éategoría el ticas y efectúa, así, distinciones qlle
nombi:.e de ·catego_ría· modal alétlea. parecen dejar entrever ciertas lagu-
: S.. La estructura .-modal del deber- nas de Jas lógicas m<#lales. Sueede
hacer •tiene, -indiScutiblemente, afi. como si, por ejemplo·,· el deber-ser
nidades semánticas con la del que- (ser/estar) -estructur·~ modal vir-
rer- hacer; hasta tftl punto que uno tualizante positiva, más cercana al
muchas veces se· ·pregunta si no sujeto enunciador•- fuese distinto
será posible -.y oportuno- · redu- del no poder no ser (ser/eStar},
cirlas a una soJa,:~structura, modal estructura actualizante"·· que Opera
virtualizante. La. 'dificultad queda por denegación de 1a:s contingen-
vinculada, entoné~s. a la. selección cias y .'que decide sobi'e el obje.to,
que es··necesario OPerar, ya Sea para como Si hubiese dos .valores moda-
reducir . el · déber;hacer al ·querer· les y dos. tipo$ de .·t'riodalizaclón,
hacer, ..o ·á la inversa. Los represen- comprendidos por el único nombre
tantes ··de la actitud psicologizante de necesidad. :)
tenderán a ver en el deber-hacer ~ MODALIDAD, DEÓNTICAS (modalida·
del sujeto un querer (transferido)' des -), ALihICAS {modalidades. -).
del destinador•: los· defensores de
la Jógiéa, · interpretarán más . bien .DECEPCióN. F~. dtception; · ing.
et querer-hacer_ cOjno un deber au- deception. :.:
todestinado. -E'tl ~pe_ra de un reexa- I. La decepción -O-.:.engaño- es
mén global del tilmpo de las mo-- una figura• discursiva .. _que, situa4a
daUdades, es preferible,· sin • duda, en la dimensión cogt)oscitiva, co-
dejar !as cosas en el estado .en.que rresponde a una opet1\ción"' lógica
se encuentran. de negación sobre el.': eje de los
6. La estructura modal del deber. contradictorios* pa,.ece'r /no-parecer
ser (ser/estar) se acerca, por el del cuadro* semiótico .4e las moda·
103 DECEPCION - DECISIVA

Iidades veridictorias*. La negación se presenta como lo que no· es),


-partiendo de lo falso* (definido pero también a lo secreto* (oculta
como conjunción del no-ser· y del lo que es)¡ o en su chacer.-, donde,
no-parecer)- del término no ·.pare-- en efecto, ·ejerce un hacer cognos-
cer tiene como efecto producir el citivo persuasivo•. con relación ·al
estado de mentira*. Cuando esta destinatario.
operación, efectuada por el decep- 2. Como actor•, el deceptor se
tor*, es seguida por una perfor- define también por los vertimientos
mance, la unidad sintagmática asi semánticos que lleva, es decir, por
constituida es llamada prueba de- los roles temáticos• que asume y
ceptlva. La decepción, pues, se opo- que remiten. a la organización del
ne diametralmente al camuflaje* universo axiológico subyacente. Des~
que, partiendo de lo verdadero"' y de este punto de vista, el deceptor
negando el parecer, produce el es-- parece haber recibido contenidos
tado de secreto*: seguido de una contrarios, presentes bajo la forma
performance, el camuflaje constitu· de términos complejos* (ya C. Lévi·
ye,· junto con ella, una unidad Sin· Strauss, insistiendo siempre sobre
tagmática denominada prueba simu- su rol de •mediador.. , había puesto
lada* {es el caso, por ~jemplo, del en evidencia, al mismo tiempo, tan·
~~c~): c:c!~:C~b!f1~e:~:x;~ ~q~;
destinador que, en el momento de
la prueba calificante, se esconde
bajo la máscara del adversario), expresión figurativa* permite, fre-
2. En cuanto forma discursiva, cuentemente, ocultar el uno y/o el
la prueba deceptiva puede recibir otro polo del eje*· semántico sul>-
vertimientos de contenidos figurati· yacente, que asume ~on intenniten·
vos diferentes (¡son numerosas las cias.
formas del engaño! ) que sólo tra· -+ ·DECEPCIÓN. .
ducen los roles temáticos"' que toma
prestado el deceptor. DECISION. Fr. décision, ing: de. '
· ~ VERIDICI'OJUAS (modalidades -). cision. - La decisión denomina a
la estructura modai• del hacer* que
DECEPTO~ Fr. décepteur, ing. es la performance cuando está si-
deceiver. tuada en Ja dimensión cognosciti-
l. El deceptor -término que, en va*: se opone a la ejecución*, ubi-
su origen, traduce el ctrikster• de cada en la dimensión pragmática*.
la mitología amerindia- designa al -+ PERFORMANCE.
sujeto capaz de asumir varios roles
actanciales• en el plano de la veri- DECISIVA (PRUEBA -), Fr.
dicci6n*, Cuando alguien se hace épreuve décisive, ing. decisive test.
pasar por otro (por ejemplo, en un Figura* discursiva ligada al esque-
cuento indostaní un gato se atavfa ma narrativo* canónico, la prueba
con un rosario para hacer creer decisiva -situada en la dimensión
que es un monje budista), puede pragmática•- corresponde a la per-
se& considerado -gracias a la más. formance: lógicamente presupuesta
cara que lleva- en su «S~. remi· por Ja prueba glorificante*, pres u·
tiendo entonces a la mentira* (pues pone ella misma la prueba catifi-
DEC!SIVA- DEFINIC!óN 104
cante. Desde el pllnto de· vista de conceptos y modelos s de alcance
la. sintaxis narrativa de· supeffi.cie, más general, cuyos datos iniciales
la prueba -'·decisiva representa' el sólo constituyen una v~riable o un
programa* narrativo de. base que caso de especie (el ..:corpus,.. que· el
termina en la conjwición* del su· generativista emplea a
cada paSo
jeto* con el objeto• de valor pro- constituye un ejemplo ~e ello) ...
puesto (u objeto de la búsqueda*). -)o INDUCCIÓN, llIFÓ'raSIS, CONS'fR;YC-
-+ PRUEBA, PERFORMANCE.," NARRAnvo CIÓN,
(esquema·-).
DEFINICióN. Fr. di{inition,· in:g.
DEDUCClóN. Fr ~· dédUctioñ; ing. de:finition.
deduction. · : 1. Identificada con lai:paráfrasis*,
1. · Considerado ,.como una serle la definición correspon4e a una Ol)e--
de operaciones·· - ~gnoscitivas que ración metalingüística (~ a su resul·
permiten 1legar a ;Una «conclusión tado) .que va de un téhnino a su
rigurosa», e identificado tradicional· definición {en expansión). o bien de
mente con el silo~smo, el método un sintagma (o de uná :unidad tex·
dedUet!vo se cara~teriza por su ca- tual) a su denominació:Ó*: este nio-
mino udescendent~ que va de lo Vimierito, en doble sentido, está
general., a lo más especial, de la vinculado a la actividad del len-
clase a sus consti.tuyentes, e~c., y, guaje que se sirve de':· Ja elastici-
más particularrileilt~. por su carác- dad* del discurso gracia$ a Ja rela-
ter de construccióli*, que. evita re- ción ex.Pansión/condens~ión.
currir, a cada instante, a los «datos 2. La:· definici6n, en Sentid'o res-
de Ja eXpériencia;.. :""-" · tringido, adopta generalmente'· los
2. Se dístingtieri, ·dos clases de limites de una frase o· de un siD.-
pr~cedimientos dedhctivos: el cate· tagma (nominal o vet-bal). Cabe
górlCo-deductlvo que. establece, des- distinguir, por lo· menQ~. tres. el?-·
de el comienzo, un conjunto de · ses de definiciones en las lenguas*
proposiciones afirmadas Como ver· naturales: las definiciones tsxonó-·
dad eras:· y el prop~dimiento . !lipo· micas, constituidas pot. el conjunto
tétlco ~ deductivo · qUe se contenta de las calificaciones*: l<is defin:iciO:.
sólo· con supone.rlas. como verdade- nes funcionales, que, ~l precis'"6l',·
ras: es."-'en··Ia aétualidad, el proce- por ejemplo, para lo que sirve una
dimiento ·adoptado,· generalmente, cosa,. remiten a su valdr usual (o
:Por la semiótica y la lingüística..::· al correspondiente programa* na-
3. La oposición tradicional entre rrativo en. uso), y las -·definiclon~
áeducclón e inducción, actualmente, por generación que ~plican los
parece estar superada: si bien es objetos por su modo ·;de produc·
verdad que el procedimieD.to deduc- ci6n*. Desde el punto ~e vista se-
tivo preside la construcción de una mántico, la definición d~ un sem~
teoría* y el - estab.Iecimieni:o de su ma* consiste en su desc0mposici6ñ.
economía general, se conoce y se en sernas* y en la determinación
reconoce que Jas operaciones loca• de sus relaciones recípr6cas. Conti·
les;· de carácter .inductivo, son a nuando la tradicl6n, B. Pottier pro-
menudo utilizadas para elaborar Jos pone distinguir· entre-· s~mas gené-
105 DEFINICióN-DE!CTICO

ricos y semas · especi.ficos:·' cuando o no definibles, los postulados, que


la base genérica es muy débil o de- le son indispensables para su arti·
masiado general, de forma que obli- culación y coherencia*. No obstan·
gue a fundar la equivalencia· sobre. te, como repara Hjelmslev, la teo-
los sernas específicos, hablamos en- ría debe· .:llevar las ·definiciones lo ·
tonces de deflntc16n oblicua:·· más lejos ·posible 'e introducir por
3. Como paráfrasis; la definición todas partes definiciones anteriores;
es· científica, o no científica; La pa- · previas a aquellas' (¡ue las· presu-
ráfrasiS ·no· cientffica 1 caracteriza et ponen:o. Los conceptos planteados ·
funciOnamietito cotidiano 1• del · dls. al inicio cómo postulados; ·deben
curso, donde la relación· e'ntre de- por lo menos estar integrados ' en·
nomina'ción y.definición es una·sUn- una red de interdcfiniCioneS que ·
ple equivalencia (identidad* sémica · garantice la coherenCia ·interna del
pardal); en cambio, la paráfrasis sistema: así, por ejemplo, expresión
científica se inscribe· a nivel del roe-- ' y contenido· son' s01idariós*, 'pues
talenguaje* y reclaina una identi- uno y otro· se preS\iponeti siemPre
dad total. "1 · t en la función* semiótica. ' :,
4. En· sentido amplio y ·científico, · -io PARÁ}?RASIS. ' ; ..
la definición se identifica, en última
instancia, con la descripción*: el J?E.lCTlCO. Fr. deictique, inglés
relato, por ejemplo,'· sólo se· define detcttc. . . ' e- • • •

después 'de poner a ·punto el con- 1. A diferencia· d!! las anáforas*


junto de variables y determinar sus (o de las catáforas*) que 'remiten,!
correlaciones. De ahí que, en el pla· dentro del discurso, a las unidades
nO del -trabajo práctico,. la defini· o a los segmentos dados, lvs de!c-
ción no preceda al · análisis; sino tlcos (o i:ndlcadored, para l!.' Ben~
que le suceda. > r.·· ··- veniste) son elementos lingüísticosf··
5. Para L. Hjelmslev, .,la defini· referidos a la instancia de la enun-
ción es una división* del coiltenido* ciación y a sus coordenadas espacio-
o de la expresión* ·de· un· signo*. temporaJes: yo, . at1u1, ahora. Así,
Este autor' propone· distinguir: a) plleden servir de detcticos los pro-
las definiciones formales; que no nombres C(IY01t, <>:tú1>), pero también
tieneri como finalidad (lni agotar la los adverbios (o locuciones adver·
comprensión de los objetos ni taro· bía1es), los demostrativos, etc. Se
poco precisar su extensión, sino trata entonces, como se ve, de la
solamente organizarlos · en correla· enunclaclón* ·enunciada cuYo papel
ción con otros objetos definidos o puede percibirse i través de los
presupuestos como conceptos fUn· procedimientos de desembrague* y
damentales•; b) las definiciones ope- de embrague* que simulan la ins-- · ·
racionales, empleadas a título pro- tal ación o la supresión de una dis-- ·
visorio, y de las cuales sólo algu. tancia entre el ,di~curso-en~tj.a~o
nas,· «eti un ·estado.:mlis: avanzado,· y la instancia de :SU emisión. , :
se transformarán· en definiciones 2. Por otro lado, ha de observar· !
formaJesi> .. .,·. , .. · ~'~ se que el empleo de los deícticos ·r ~.
··6. Toda teoría* comprende cierto permite referencializar el discurso; ·
número de conceptos* no definidos simular la existencia lingüística de ; ·
DEICTICO • DENOMINAC!óN 106
un referente ·externo;· pero, en rea- gación, muy útil pero ·aUn mal de·
lidad,. se trata de una correlación .finido,' envuelve un piocedimíento
entre esta·· semiótica .particular qtÍe de· transferencia de competencia*
es· la lengua* natural· y la semiótica que, mientras precisa lÁs modalida·
del: mundo* · hattiral,· cada una de des* (el saber o el- poder hacer,
ellas con una organización. especi· por ejemplo)· en juego; confiere al
fica. -~: ... sujeto concernido Cierto margen de
....;¡.. ENUNCIACIÓN',-.' REFERENCIA,·. Rl::f'2- autonomía, de orden :Performativo.
REN'.f& ~,- ......' "· .~". En: la delegacl6n ·enunclattva, el
·., ... procedimiento empleado se identi·
DE:tXIs: Fr. dei:Xis~ Íng• .deixis. fica ~ ·menos en pai:te- con el.
1. La -deixis es µlia de las dimen· desembrague* actancial. La delega.
siones*:· fundamentales del. cuadro clón enunclva, ·por su :,lado, parece
semiótiiro• .'Reúne, .:por .la . relación descansar sobre un c'dntrato* im·
de ·implicación*, Uno cie los .térmi· plícito y se emparenta, .a nivel figu.
nos del eje -de. los contrarios* con rativo*, con el don de Ja ca.tripe.
el contradictorio* -4,et. otro término tencia que reglim.enta''-']as relacio-
contrarío. De ahí 9,.ue se ~econozcan nes entre destinador* ·y destinafa·
dos deíxis: una (S 1-S2), dl?llorni- rioo ·· ·
nada poslt.lva; y Ja otra '-(S2 - 51),
denominada negativa, sin que estos DEMARCADOR. Fr.· démarcateur,
calificativos ·conilev¡µi un vertimien- ing. demarcator. - Se l~ da el noñi-
to_ ixiológico: ·éste sólo·· aparece tras bre de demarcador a- ·'Una magni·
la :proyección, en el cuadro semió- tud* semiótica que, resguardando
tico, de la categoría.tlmica* euforia/ su· propio valor, -sirve:< de criterio
diSforia. ·· · para la deUmitaci6n de·,_una unidad
2; En' uñ: relato. dado,· taS-' posi· sintagmática. ·
ciones temporales (ahora/entonces) · ~ SEGMENTACIÓN', DISJUÑcróNo
o e's'pa"cia!és (aquÍ/a!Iá) pueden ser
postuladaS: como deixls de referen· DENEGACióN. Fr. dt.négation,
c1a · a· partir· de lás cuales p'ileden .ing. denial. - Mientras ta negaci6'p.*
'desarrollár:se las ca:tegorl~s tempo- es, paradigmáticamente., lo contra-
rales. aSpe'Ctuales Y.. espaciales. Así, rio* de la aserción, la Operación· de
Jo que se· dé.signa, algunas veces, ·denegación presupone la existencia
como ~·tiempo del relatO"O aparece de un ·enunciado de · :aserción o
comO tui. presente '(identificable Con de negación anterior; envuelve, así
Ja deixis· temporal «entonces)l) · con pues, una perspectiva sintagmática
relai::ión"á.l cual se podrán instalar en Ja que se actualiza·. Ja relación
un· pasado ··y ··un· futuro, conforme de implicación*. . ;
al ·sistema · lógiCo d~ anterioridad / -'> ASERCIÓN:.
concomitancia / pasterioridad. ·
4 CUADRO' 'SEMIÓI:ICO. TEMPORALIZA·· ·DENOMINACióN. Fr/ dinomin4·
CIÓN, ESPl.CIALIZACidM., .. tion; ing. name / namin'g.
1. En los mitos sob~e el origen
. DELEGACióN. :fr. déUgation, ing. del lenguaje, la denoJi?inaclón es,
detega~on . ...;.. El. ~ncepto de dele- casi siempre, considerad.a como algo
107 DENOMINAClóN • DENOTAC!óN

distinto con i-especto a la creación 4. La denominación artliiclal (o


del lenguaje. En efecto, desde el científica) depende 'de :1a constiuc-
punto dt: vista empúico, Ja dencr ción del metalenguaje* y, más par•
minación concierne, en primera lí- ticularmente, del metalenguaje se-
nea, a los objetos del mundo* o de mántico. En este ·nivel, las deno-
la experiencia: afecta· al referente* minaciones escogidas son arbitra-
extra·lingillsüco. La denominación rias* y sólo tienen el valor que les
varía según las Jer¡guas naturales, es dado por su definición previa;
y sirve de base a las clasificacio- sin embargo, cuando se aplica el
nes* propias de una determinada metalenguaje, las denominaciones
sociedad. deben ser adecuadas* (deben com~
2. La denominación puede tam· prender la mayor información posi-
bién corresponder a una forma de ble del material examinado). En
condensación*: entonces fUnciona última instancia, además, serla pre.
correlativamente a la definición* (en ferible, sin duda, sustituir las deno-
expansión). ·•· minaciones léxicas; por stmbolos*
3. Las denominaciones «natura- (letras, cifras, etc.); no obstante,
les" se distinguen de las •artifi- considerando et grado de adelanto
ciales• (o construidas). Las denoml- de la semiótica, el número de estos
nactones naturales, que se inscriben símbolos serla excesivo y perjudi-
en el discurso, dependen del fun. carla la comprensión: por el mo-
cionamiento ordinario de las len- mento, entOnces, las denominacio-
guas naturales: así, un término co- nes de tipo cientlfico quedan semi-
mo (l'.discusión» abarca una forma motivadas. En consecuencia, es ne-
narrativa y discursiva muy comple.- cesario distinguir bien, en el plano·
jas. Si se admite que el universo* del análisis (si es· posible, tipográ-
semántico, abarcado por una len- fkamente), los . térl:ninos construi·.
gua natural, se divide en· campos* dos, pertenecientes . al metalengua-
o zonas semánticas, la denomina- je, de los lexemas* de las lenguas
ción aparece como una especie de naturales, que dependen de las
préstamo interno del que se pueden prácticas· de la paráfrasis* no cien·
·extraer, al menos, dos formas: la tífica. 'f
denomJnaclón figurativa, donde una ~ C\TEGORI7ACI6N, ETNOSEMIÓTICA,
figura* abarca una clase de deriva· ARBITRARIEDAD, MEl'~GUAJB.
ción* abierta (por ejemplo, el nú-
cleo séinico ·«cabeza»,. en· ccabeza DENOTACION. Fr. déuotation., in-
de clavo•, o11cabeza de alfiler,,, .:ca- glés denotation. ,;
beza de un nlástil:i>, «cabeza de 1. Un término se ' dice que e~
adormidera:iio, etc.); y la· denomina· denotativo cuando . comprende una
clón traslativa, caracterizada por la definicióñ* que tiende a agotar un
transferencia de un segmento de concepto desde el punto de vista
discurso (lexema o sintagma) de un de su extensión*' {cf. ·J. S. Mill)it<.:.
dominio s·emántico a otro relativa- así, por ejem\)lq; una unidad lin;:
mente distante («gato:., por «espe-- gülstica tendrá el ·carácter denota·
de de palancal>; cojo de tigre•, por tivo, si integra todas las ocurren-
11piedra preciosa11). cias"".
DENOTAC!ON • DE6NT!CAS 108
2. · Por· ~tensi6~-. la misma. carac- e) la·; ..lengua coti~~ .. no es Un
terística · será atrlb?ida a esos ob· concepto semiótico: a 'fortiori nO
jetos ·complejos que .son las semió- podría identificarse con _et concepto
ticas*~ en· la· medida en que éstas de semiótica denotativa· ;que, toma-
satisfacen ias exigencias del princi· da globalmente como .;Significante»,
pio de empirismo* (y, rhás ,partí· estaría dotada de un significado Que·
cularmente, . al de ,exhaustividad*). haría de ella una sémióhca conn~
Para Hjehp.slev -Y sólo en una tativa (o lenguaje de có'nnotación):
primera.api'oximación-, una .semió- ~ CONNotACIÓN1 SEMIÓ'rl.(;A.
tica : denotativa ···e;~ aquella en la
que ningurio de los planos'*· es una DENSIDAD SltM!CA. ::Fr. densité.
semiótica: si·uno de·los dos planos sémique, ing. semic deti'sity. - La
estuviese, ét-mismof,constituido por densidad sém!ca · pued~ ser deter·
un.·plano de:la expresión*' y' otro minada por el número,·.!más o me-
del Contenido*, la semiótica ya no nos elevado, de sernas*: que entran
podría ser considerada como deno- en la composición de uri, semema*.
tativa. •.. :•: .':. Se trata, entonces, de ün criterio
· 3. ·Tal· deñnición ilo ·agrega nada semántico cuantitativo ci'.ue permite·
a la· de. semiótica biplana* (o se- medir ·el ·grado de abst!-acci6n de
miótica propiamente dicha, ·en la-: un · «concepto». B. Pottier subraya,
terminología del gran lingüista da· que la comprensión* séinica varía
nés)·; También· Hjeltnslev· la aban· en proporción inversa a
la exten-
dona definitivamente. al proponer sión* del uso.
una nueva· distinció_n entre semió- ~ ABSTRACTO.
ticas·. científicas* Y. no cientíñcas*,
en función •de lo · siguiente: · para DEONTICAS (MOD!l:i.IOADES
establecer su definii;:ión de la semió- -}. Fr. modalités déontique.s, ing.
tica,. él ·había·· partido de un texto* deontic modalities. .
ideaI,'1postulando st:f homogeneidad* 1. Desde el punto de Vista semió-
estructural.' Ahora bien, tal texto tico, la estructura moürJ. deóntica
no existe: tOdo teXtO, en tanto que aparece cuando e1
enunci_&.do modal,
producto, depende' ~fe varios siste-- teniendo como predicado' el deber•;.
mas 'diferentes. De ello· resulta ·que: determina y rige el enWlciado de
a) el · texto no plÍ~de -ser. consi- hacer*. La proyección biparizante,
derado a priori como una magni- en el ·cuadro* semi6tiCo·· de esta.
tud* homogénea:: poÍ'.'el contrado, estructura, permite- la formulación
se construye a medida que progre- de la categoría modal deOntica:
··¡·. .
·
sa el análisiS•h en tl.Uición del nivel
de pertinenCia* escOiido; · · · · ·. '· · ·· deber·hacer. · debti- no hacer
:; b) ·una Jéngua* ·natural. no· es
una semiótica. denotativa -y el' dis· no deber ~º hacerxno ~eber-hacer.
curso* manifestado depende de va-
rios ·sistemas. ·a la ·vez (semiótica, cadatmo de los té~ui6s .del cua:
semióticas· connotativas, ·metasemió- dro es susceptible de *ibir una
ticas ·no científicas, .:etc.}: · denominación sustantiva'~:
109 DEONTICAS-DERlVAClON
1
DERIVACION~ Fr~ dérivation, ing.
pr"escri~i6n><. prohibició1r
derivation.
p~rmisión autoritación. 1. En el seritido corriente del tér- -.. ._..
mino -«tener su origen en-· se(:··
Nótese que, en la lógica deóntica, discute, por ejemplo, si· la lengua
el -término prescripción. se: encuen- escrita es un derivado de la lengua .
tra, a menudo, sustituidO poi" el de oral.
obligación. (semánticaroehte injusti- 2. Desde el punto ·de vista mor-
ficado, pues la prohibición también fológico*, la derlvactón, a menudo
es una obligación). '· '· opuesta a la composición (= forma-
2. Quizás sea úiil. subrayar <iue ción de palabras co_mpuestas}, trata
las modalidades de6nticas afectan sobre la distribución de los afijos
(prefijos y sufijos) y se presenta
al sujeto en su competencia* mo·
dal y forman parte de·su definición.
como un sistema de clasificación*
En consecuencia, tio rigeO' ·.el u.ni: de las .unidades léxicas. Asf, por
verso del destinador*. ni la. axiolo- ejemplo, en el siglo XVIII -se elabo-
gía a la que pertenece, transfor- ró, en francés, todo un Iéxioo de
mándola en un sistema de normas: actividades te.enológicas: partiendo
el destinador ejerce un liacer·deber- del nombre de Ja. herramienta (o
hacer, pero no prescribe tal o cual de la materia traQajada). un siste·
hacer. · · ma denominativo Permite designar · : ':
al productor, la actividad produc~ '
3. Puede re~onocers~---u'na .. lógica tora, el proceso y el lugar de pro-
deónilca que repose sobre el dispo- ducción.
sitivo modal surgido· del deber· ha- 3. Sintácticamente, la derivación
cer¡ más generalmente, es, previsi- es una aplicación -O su resultado--
ble una semlóUca deóntlca que tu- de los procedimientos de análisis*
viese en cuenta Ias .relaciones del (para: Hjelmslev) o de las reglas*
deber-hacer con las otras· modalida- de reescritura (t>ara Chomsky) a ·
des*. tales como el saber-hacer o el partir de una clase"; (Hjelmslev) o
poder-hacer. .. de un axioma"' (Chomsky): en et .
~ DEBER, MODALIDAD. .. ,, .: primer caso, la derivación está. ba-
sada en el concepto de jerarquía
DEONTOLOG1A.· Fr. déontologie, (definida ·por Hjelmslev como la
ing. deontotogy. - Por deontología clase de las clases);· en el segundo,
se entiende el siStema de reglas de sobre el concepto lógico de sustitu-
conducta qlle, supuestamente, se ción (que especifica el. cálculo lógi·
observan en el. ejercicio de una co y da cuenta desu carácter·
profesión o de una actividad. En fundamentalmente tautológico: una
1. este sentido se hablará, igualmente, proposición compleja sigue siendo
de ética profesional. La deontolog!a verdadera debido· sólo a su forma,·
clentffica exige en la investigación, sea cual fuere el· valor de verdad
·entre otras cosas, la observación de de sus componentes}.
los criterios de ·cientificidad.· -i- ESCRITURA, ·lERARQu!A, SUSTITU·
~ CIENTIFICIDAD. CIÓN.
DESAMBIGUAMIENTO-DESCRIPC!óN 110

DESAMB.IGUAMIENTO- . Fr.· dé- signos. En este caso, por. ejemplo,


sambigu'fsation,. in'g. disambiguisa- el número de operaciones de desco-
tion.~ -- Con el tér:mino <lesambigtl!l· dificación corresponderá al de IOS
miento se designa el procedimiento* semas que componen eVsignificadc*
de-.eliminar· las ambigüedades léJ:i- de, un ·signo*. . . .. ·-,, ..
caS ··:o 1siiltáctic2.s ·: para establecer 3. Aunque dicha re"Presentaci6n
una lectura* isótopa* de una se- es aplicable a Ia lingüfi:itica frásica,
cuencia discursiva. El desambigua- no lo 'es tanto en la lirigüística d:is·
miento t necesita ·la inscripción,- en cursiva, donde el térmit¡,o descodifi-
un contexto~ ·más .amplio, explícito* . cación será ventajosamente reem·
o explicitabie~ de. la unidad semán.. p!azado por et de inter.Pretación.
ti<::a susceptible· de ".arias Ject~ras ~ CÓDIGO, INTERPR<:"'TAc:t;óN.
a· la ·vez..;.: ·· • · .,1 .-
.-+ AMBICilEDAD, U?\'IVOCIOAD•. DESCiiIPCióN. Fr. :.de$cripti011,
., ing. description. · ·· ·
. DESC,ALIFICACióN; ·Fr. disquali· 1. El término descrl,Pclón se irn-
puso · en lingüística durante el si·
fication., · ing. · disqualificatt'on. · - la
descalificación designa la consecuen· glo :XIX, cuando se estableció. Una
cia* negativa de . lá prueba'*' califi· oposición tajante entre. la lingüfs.
cante (por ejemPlo, la desc3.lifica· tica descriptiva y la lihgüística {o
·ción del rey en el mito de la sobe- gramátjca) normativa, \t'e modo que
ranía).:.:·.'.,.,, · · sólo la primera pudo :pretender ei
-+ CU.IFICANIE (prueba .-:...). '
,. estatuto de ciencia. ·Considerada
sospechosa por Ja liniüístiCa* es·
DESCOÍl!FlCACION. ·Fr. décoda- tructural, debido a stiS presupues-
ge, ing.1· decodiri.g. · · tos positivistas implícitos; cuestio-
t. En la. teoría,. de·· la· informa- nada· desde la aparición de la gra-
ción* la descodificaci6n designa la mática generativa* -aJ. identificai:'Ja
operación· ~. más ·bien, el progra- con 1a descripcí6ri de :.los corpus*
ma· de::' operacioÍles-· que, sirvlén- cerrados-, la lingü!Stica descripti·
dose de un · cód'iio;·: reconoce los va, en cuanto denomináCión de una
elemeri.tos simbólicos* constitutivos aproximación científica;_ ha ido per·
deJ meñsaje* y lós ·identifica con diendo ··Poco a poco S.u razón de
las unidades discié'tas de la lengua* ser, dejando progresivamente d~
a: 'partir de la~ cual el código ha usarse.. . ·
Sid? elaborado. , 2. El concepto de: .descripción,
2: Cuando el ··término crcódigo> separado aSí de una ·metodología
es empleado en sentido lingü(stico, particular. continúa siendo, sin em·
la·· descodi:fÍcación aparece como una · bargo, uno de los con.ceptos* pro·
operación tendente a reConpcer el blemáticos de toda teófía* del· len·
código a partir del .mensaje (Ia len- guaje, · porque sirve pára designar
a
gua* pa.rtir' del liabfa*) y a sepa- la. totalidad, lo esencii:i.1 del. hacer
rar la ·esti-uctura: subyacente (sémi· semiótico científico. Sfruándose en
ca ·o fémica) de los dos ·planos* del la !radición hjelmsle_,::iana -que
lenguaje, ·en función del mensaje considera a Ja descripéÍón como et
que está manifestado a nivel.de los ejemplo, por excelencia"¡ de un Con~
l1l DESCRlPC!óN ·DESCRIPTIVO

cepto no dcfin.ible- conviene reser- tras aplicarle las reglas de reescri·


var el nombre de descripción úni- tura, nos vemos conducidos a darle
camente para· los procedimientos* una interpretación"' sei:nántica y fo- ·
que ·satisfacen los criterios ·de cien. nética. ·; · ·
tificidad*, procedimientos que, a su S. También se Uanla descripción,
vez, habrán de· definirse ·como cla- en el nivel de la oii:0.hiu.ción dis-
ses de· operaciones* ordenadas.·· cursiva, a una secuencia de super·
3. Otra manera de aproximarse ficie"' opuesta al diálogo*, relato*,
al concepto de descripción consiste cuadro, etc., si se postula implícita·
en oponer los procedimientos de mente que sus cualidades forrilales
descrlpclón a los procedimientos autorizan a· someterla al análisis
de descubrimiento*, examinando y calificativo"'•En este Sentido, Ja des-
·ctiestionando al prqpio tiempo el cripción debe ser considerada como
valor heurístico* de los primeros. una denominación proyisoria de Un
Cabría decir en favor suyo que la objeto que está por· definir.
solidez. de la lógica (o de las lógi- -+ INl>l:CADOR, SECUENCIA> UNIDAD ( dÍS•
cas), por ejemplo, descansa en bue. cursiva).
na parte sobre el cálculo ·lógico,
que es un procedimiento de descrip-
ción, sin dejar de insistir sobre el DESCRIPTIVO. Fr. descriptif, ifi·
peligro real de · confundir las téc. glés descriptive.
nicas operatorias (las reglas de re- 1. Con relaCión a· lo~ valores mO-
escritura, las representaciones arbo- dales"', _los valores descrlptivo!i de-
rescentes"', etc.) con el hacer cien. penden de la tercera función* de
tífico mismo. G. Dumézil y designan, por ejemplo,
4. Se considera que · el término los objetos consumibles o atesora.
descripción, utilizado precedente- bles (valores objetivos*), asf conlo
mente, designa un proceso"', una también estados co~o los placeres
actividad consistente en construir o -11estados de ánimo)> (valores sub-
un lenguaje descriptivo (wi· meta. jetivos•). ColTclativamente, h<iy. que
lenguaje*). Las palabras. de este distinguir Jos enuncládos descripti·
tipo, sin embargo, son ambiguas vos (donde se inscriben IoS ·valores
en lenguas naturales como el espa. descriptivos) de los enunciados roo·
ñol, el francés o el inglés, porque dales {que rigen otro enunciado).
sirven, igualmente,· para denominar 2. Si se considera a la teoría
el resultado del proceso, es decir, semiótica* como una superposición
en este caso, la representación aca. jerárquica de lenguajes, donde cada
bada de un objeto enfocado por la nivel superior toma. a su cargo el
descripción. Con esta acepción debe ex~men del nivel inmediatamente
entenderse la expresión, en gramá. inferior, puede denominarse nivel
tica generativa*, de descripción es.. descriptivo al que consigna, bajo
tructural de la frase: se trata· aquí la fonna de representación• semán·
1 de la reptesentación · obtenida al tica, los resultados oh.tenidos al ana-
final ~de · un procedimiento,. según lizar el nivel del lenguaje-objeto· (o
el cual. partiendo de una frase nu. del objeto• semiótico escogido para
1 clear"' propuesta como axioma y ser descrito). ·1•
1
r
1
, DESCRIPTIVO·: DESEMANTlZACióN ll2

. -,>: VALOR,, ENUNCIAOO, . MODALIDAD, NI· descubrimiento... Esto'~ basta para


VEL,. -DESCRIPCI~N, METALENGUAJE.-' justificar las críticas... formuladas
por N. Chomsky en su contra, sin
.DESCUBR~ENTO (PROCEDI· respaldar no obstante ·,.otra ingenui·
MIENTO DE -><fr. proCédure de dad, a saber, que la gr.aµiática pue-
découverie, ing.. 4iscovery · proce- de ser concebida como upura des·
dure .. . cripciónlll.
L Un p1"0Ced1mi.en.to de descubr!· 3. Si ·se invierte la rélación ei;itrc
lniento: es Ja foriq.Ulaci6n expiicita* la teoría* y la práctica.,' debe exigir·
de las "operaciones.cognoscitiv;os que se que una teoría sea ~Plica.ble. ·qqe
penniten la descripción* de un oh-. trate de producir y de .explicitar .los
jeto. semiótico, at,~atisfacer las con· procedimientos de de:Scilbrimiento:
. ·cliciones .de· cient.ificidad*. ,La expli· la aplicabilidad nos ~.rece; jurl.to
citación_ del .. conjuhto de estos pro- a la simplicidad*, un· segundo cri·
cedimi~nfOs . puede' culminati en la terio capaz de fundar ;,os. prt>e:e~­
constitución -de tiria metodología y mientos dti evaluación'.. de las teo-
de: una teOría serñióticas (o lingüís· rías (o de las gramádcas).
ticas). Esta· manera pragmática de 4. Sin embargo, a partir de Jos
plantear el . problema de las rela- anális-is concretos de Jps discursos
ciones '"entre la teói-ia y ·1a práctica de investigación y de descubrimien·
se explica, en parte,· por la actitud to, el semiótico podrá ·:hacerse una
de" Ia lingilística del Siglo XIX (cuya idea más precisa de las operaciones
·práctica· se· ·ha mc;istrado :muy ·efi. que se encuentran íi'Ístatadas . en
caz)· que·· h3.bía: .dejado expresados las prácticas semióticaS ·de carácter
imPHcitamente gra.n pai:te de sus científico. :( ·
procedimientos. .. · ~ PROCEOIMIEl\'J"O, IEC!~A, METODOLO-
2; Entr:!· · ios procedimientos de GÍA<
descubrimiento, que ·datan del si·
glo precedente y que la· lingüística DESEMANTIZACióN. Fr. désé-
estructural ha fo"rmuladO de .mane- mantisation, ing. desemantizatiot:.
ra·:explícita/hay qii.e mencionar, en l. La desemantb:aclón es la pér-
primera línea, las operaciones de dida de ciertos contenidos* parcia-
·seIDneñtaclón*, de ·sustitución·* y de les en provecho del , significado*
conmutación*! éstas explican cómo global de una unidad discursiVa
Ja lingüística ··pudo constituirse en más extensa. Lejos de ser solamen-
ciencia"· al comienzo. ·del siglo :xrx te lingüística (por ejerriplo, ll"mab.r
y, .'además, .fund.~mentan cu~lquier el tiempo»), la desemalitizaci6n• es
tipo de lenguaje lógico. "El ·error de un fenómeno semiótico· muy gerie-
Jos· estruCtura.Jistas· norteamericanos ral: «anudar su corbat.ii111, por ejeln.·
ha sido creer, inrlui"dos por un for· plo, es el significado dé. un proceso
malismo · excesivo;_ que esos proce- gestual complejo, donde los enun-
dimientos ·de· déscU.brimieD.to podían ciados' que lo constitúyen se en·
hacer· las veces de una teoría gene- cuentran desem<i.ntizadOs.·. La rese-
ral · y que,' ·sustituyéndose· a la in· mantización* es el procedimiento
tuidón*, ·p;?nnitlan · concebir· a Ja inverso (por ejemplo, «,~dran, San-
lingüística como 'uDa «máquina de cho, Juego caminamos:·~:lil).
DESEMANTIZAC!óN - DESEMBRAGUE

2. En la literatura· oral, Ia dese- el otro, de la representación actan·


mantización se presenta como Utlo ciaJ, espacial y temporal del enun·
de Jos elementos explicativos de la ciado. Desde otro punto de vista,
«degradación» del relato ·mítico en que haría prevalecer la naturaleza
relato folklórico: numerosos frag- sistemática y social· del lenguaje,
mentos míticos, desemantizados, se cabría decir, asimismo, que la enun·
encuentran allí como simples pro- ciación, en tanto· que mecanismo ·
gramas" narrativos en uso. de .mediación entre ·la lengua*· y el
3. Desde .el punto de vista axio-- discurso*, aprovecha las categorías
lógico, la desemantización es un fe- paradigmáticas de persona, espacio
·nómeno .ambiguo: permite al hom- y tiempo para instalar el discurso
bre vivir reduciendo millares de explícito. El de_sembrague actancfal
comportamientos suyos ·programa- consistirá·entonces en disjuntar del
dos a puros autómatas; pero cons- sujeto· de la enunciación -en una .
tituye, al mismo tiempo, una fuente primera etapa- un· no-yo y proyec-
de alienación (por. ejemplo, el tra- tarlo en el enWlciado; el · desem·
bajo en cadena). brague temporal postula un no.
ahora distinto del ' tiempo de la
DESEMBRAGUE. Fr. débrayage, enunciación, y el desembrague espa·
ing. diset1.gagement. clal opone al lu~ar de la enuncia·
ción un no-aquí.
A.
. Se puede· intentar definir el des· B. Desembrague actanctal.
embrague como Ja operación por la
cual la instancia de la enuncia· 1. Para poder dar una represen·
ción* -en el momento del acto* tación* del mecanismo de desem-
de lenguaje y con miras a la ma· brague, es necesario, ante todo, in·
nifestación"'- disjunta y· proyecta sistir en el hecho de que el sujeto
fuera de ella ciertos términos vin· de Ia enunciación, responsable de
culados .a su estructura de base; la producción del. enunciado, per-
a fin de constituir asf los elemen· manece ·siempre ·"implicito. y presu-
tos fundadores del enunciado • dis· puesto, nunca está manifestado en
curso•. Si se concibe, por ·ejemplo, el discurso-enunciadq (ningún «YO)),
la instancia de la enunciación como . encontrado en el discurso, puede
un sincretismo* de lfyo-aquí-ahora.,., ser considerado corrio sujeto de la
el desembrague -en ·su calidad de enunciación propiamente dicha ni
aspecto constitutivo del acto de len· identificado con él: Se trata: sólo de
guaje original- consistirá en inau~ un simulacro de la enunciación, es.
gurar el enunciado y, al mismo decir, de una enunciación*" enun·
tiempo, por reacción, pero de ma· ciada o referida).
n·era implícita, en articular la ins· 2. Según Benveniste, la categoría
tancia de la enunciación misma. de persona que funj:iamenta el me·
El acto de lenguaje aparece, asi; canismo del desembrague actan-
como una esqujzia creadora, por cial," puede articularse -sin entrar
un lado, del sujeto, del lugar y del en detalles- en persona/no-persona.
tiempo de Ja enunciación, · y por En español, al pritner término le
SEMlÓTICA, - 8
DESEMBRAGUE ·. ·'; 114

corresponden los morfemas persona· que, partiendo, a su :'.:·vez, de un


les «YO»·Y·«túi.' qÚe, en-esta lengua actante del enunciado, ·~nstalará un
nittural,.· · denominan los ·dos ac- segundo diálogo,· etc. 'Así pues, et
tantes* ··de ·ia enuriciación* (enuncia- procedimiento de desembrague, uti-
dor* y· enu.nciátario),· si Se c6nsi· lizado por el enunciador como un
dera que ·la enunciación es ··una componente de su est!ategia*, .per-
estructura· iiltersubjetiva. Al térmi· mite dar cuenta de Ja~ articulación
no ·no-persona le éorresponden los del discurso figurativo ·en unidades
8.ctantes del enun.ciado. · · ' · ;· · . discursivas (de superficie). tales co-
3.. Partiendo dei :sujeÚ). de la mo «relato», «diálogo:1:1,. etc. Aquí se.
enunciación, implícito pero produc· notará Que cada deseriibrague in·
tor ·del entmciado~ Se pueden~ ·pues, terno pfoduce un efecto de refe.
proyectar . (durarite.e1. acto de len- rencialización*: un discurso de Se-
guaje o de. su súnúlacro dentro del gundo grado, instalado :.en el inte-.
discurso) e .instalar en el discurso rlor del relato, produce la impresión
aCtantes de la ·enunciación, o bien , de que ese relato coilstituye Ja
actantes del enunciado. -En el pri· «situación real» del diálOgo; e, in-
mer caso, se opera Un deSembrague versamente, un relato, desarrollado
enunciativo; · en el ·Segundo; un des· a ·partir de un diálogo' :inscrito en
embrague enunclvo~ Según el_ tipo el discurso, referencialiZa ese diá-
de desembrague: u'tílizado, se dis- logo.
tinguirán dos formas discursivas y, 5. Un pequeño probl~ma de ter-
también, dOs grandes tipos de uni- minología se presenta a propósito
dades* discursivas:· 'con el deseni· de la enunciación enunc.íada; insta.
brague enunciativo, se tratará de lada en el discurso. lnst.~lados aquí;
formas de la enunciación enunciada en cuanto simulacros dCI enuncia·
(o referida):. es el caso de los- rela- dar y del enunciatario .-r-preocupa-
tos en «Yo~, así corno también de dos por. la participación en la co-
las secuencias dialogadas*: el des- municación intersubjetiva que es.el
embrague enuncivo distingue las conjunto del discurso (Se trate de
formas del enunciado enunciado (u «yo.11 o «Usted», del «au~tor» o deJ
objetivado}r esto ocµrre en las na~·· «lector» nombrados en el enuncia·.
rraciones que tienen un sujeto cual- do)-, se les llamará, .respectiva-
quiei'a, en los· discursos llamados mente; narrador* y nari.,atario. En
objetivos, etc. · · ; cambio, cuando se trattir .de la es-
4. Reconocer estos siinutdcros, tructura de interlocuci6á'.: de segun:
que son· los enuncindores instala- do grado (eil el diálogo*)~ se habla·
.dos .en el discursQ, permite com- . rá, más ·bien, de interlocutor* P.
prender el fuociOÜamiento · de los interlocutario. ··
desembragues 1nterrí0s (de segundo 6. Un problema comparable se
o tercer grado), trécuerites · en los plantea con respecto a IOS actantes
discUrsos :figurativoS. de carácter li- del enunciado (o. actantes de Ja na·
terario: :partiendo: de una,. estruc-. rración, propiamente dichos). El
tura· de diálogo, uno de los inter- desarrollo de la s~iótlc~ narrativ~·
. locutores* puede, fácilmente, «'ies- nos ha obligado a recono~r la exis· .
emb:íagar~ al desar~Pnar un relato · tencia de dos dimension.~* autónq- ·
115 DESEMBRAGUE.

mas de la narración: la dimensión no-ahora, en el momento del acto


pragmática* y la dimensión cognos- del lenguaje, fuera de la ini>tancia
citiva*; al mismo tiempo, nos ve- de Ja enunciación; esto tiene como
mos llevados a distinguir dos tipos efecto, por un lado, instituir por
de actantes·sujetos. Al lado de los presuposición el tiempo ahora de
sujetos* pragmáticos, se encuentran Ja enunciación y, por btro, permite
en el discurso sujetos cognoscitivos, construir un tiempo «objetivo» par~
ya sea .Productores, ya intérpretes tiendo de la posición que se puede
-de significaciones, y que. aparecen, llamar el tiempo de entonces. Si se
o- bien en sincretismo con los suje· considera . el tiempo de entonces ·
tos pragmáticos, o bien bajo la como un tiempo cero y si, a partir
forma. de actores autónomos (co- de él, se aplica la categoría topo-
. rno el informador*, por ejemplo), lógica
o,· en fin, identificables solamente
como posiciones implícitas (así, el co11co1nitancia/110-concomitancia
actante observador* cuyo rol ha
sido subestimado hasta ahora). El a~terio~ad/ pos~ioridad,
desembrague cognoscitivo* permite
así instaurar una desviación entre es-posible construir un modelo sim·
la posición cognoscitiva del enun- ple del tiempo enuncivo que, en
ciador y las de los actantes de la cuanto sistema de referencia, per-
:narración. o del narrador. mitirá localizar los diferentes pro-
· 7. El concepto de desembrague gramas* narrativos del discurso.
se debe, indistintamente, a Benve· 2. En la medida en que la ins-
niste y a Jakobson, cuyo «shlfter» tancia de la enunciación -tomada
ha sido traducido por N. Ruwet en su conjunto- puede ser· enun·
como «embrague». El término des· ciada y constituir, a modo de simu-
embrague nos parece tanto más lacro, la cstructuní enunciativa del
adecuado_ a la aproximación gene- discurso, el t1'ernpo de ahora. -con·
rativa que va de la enunciación al siderado separadamente- puede ser
enunciado, cuanto más necesaria desembragado· e inscrito en el dis-
resulta la dicotomización del con· curso como. tiempo enunciativo adi-
cepto jakobsoniano: oponiendo al cional: El tiempo de ahbra, así
desembrague el término embrague'* enunciado, se articula; a su 'Vez, se-
(que designa la vuelta hacia· el gún Ja mism~ categoría topológica
enunciador de las formas ya des- y constituye, dentro del discurso,
embragadas), se introduce un poco un segundo sistema de referencia
más de claridaP, en este mecanismo temporal. El empleo de estos dos
elemental y, a la vez, muy com- sistemas de referencia es uno de
plejo. los factores para la segmentación
del discurso en unidades-se<:uéncia.
C. Desembrague iempOral._: 3. Mediante un procedimiento in-
1. :Paralelamente al desembrague verso, las temporalidades enuncivas
actancial, puede concebirse el des· y enunciativas desembragadas po-
. embrague temporal como un proce- drán luego ser embragadas, a fin
dimiento de proyección del término de producir la ilusión de que se

[
DESE.MBRAGUE ·DESEO 116
ia
identifican· coñ... instancia : de la te; existen otras, .·relativas a .los
·enunciación: se trata, eritonces, del volúmenes (del tipo :. englobante/
.embrague*· temporal.::¡~·: · 1. • englobado)· o a las sti:i>erfi.cies (cir-
cundante/ circundado),:! que entran,
D.. D~embrague .eSpacia.I. ; igualmente, en juego. ·1.Es Jamen ta-
l. A::SemeÍanza del desembra~e ble que en la actualidad, cuando
actancial 'o temporal, el desembra- . se habla tanto de lengÚaje espada!,
gue·· espacial ·se presenta como un los logicistas no se haYan ocupado
procedimiento qtie tiene como efec- todavía -hasta donde ·a1canza nueS-
to expulsar; fuera de la instancia de tro saber- de construir lógicas es-
la ~nunciación, al . término no-aquí paciales.
de. la categoría espacial;: as! funda 3. Si se considera qÚ.e la instán-
el espacio 1i:objetivo» del enunciado cia de Ja enunciación ¡?Uede justa.
(el: espacio del allá) y,.. al propio larse en el enunciado tn forma de
tiempo, el espacio.' original ..:-iden- simulacro, el espacio d~ aqui, toma-
tificable sólo con;io . una presuposi- do separadamente, puede ser des-
ción ·tópica..:.. de la enunciación. Si embragado e inscrito eri el discurso
se considera eL-·espacio del allá co- como espacio en\Ulciati'Vo adicional:
mo un ·espacio enl,incivo, ·se Ve que desde ·este momento, podría articu-
tambiél! es pos~b1e· Proyectar el tér- larse según la catégoría topológica
mino aqui .que' simula el .lugar de escogida y daría, así, lugar a un
, la : enuncíaCión; pártiendo ··de'· esta se&undo sistema de ref~rencia pa:ra
pOsjción puede cóxlstituirse tm: es- localizar los programa.$: ·narrat'iv6s.
pacio de aqui, de orden enuncia- -+ EMBRAGUE, ENUNCIACzóN', DISCUI!.•
tivo. . . . , SO, TEMPORALIZACióN, !SPACIALIZACI?N,
2. Se hace neces:µia una Catego· LOCALIZACIÓN ESPACIO:n:MPoRAL.
rí3. que, al'- articular: la espacialidad, -....... ·,.
instituya _:_partieñ.do de estos dos DESEO. Fr. désir, ing. desire.
puntos dC :. referenéia: el alld y eI 1. El d~eo, ténnip9: de ta·. Q~i­
aqrd- do5 sistenl·as espaciales de cologia, doilde con frecuencia es
refe'rencia que peimitan establecer opuesto a Ja voluntadJ no forma
dos redes de posiciones a las que parte -propiamente hablando-· de
podrían ser referido·s los diferentes · la terminología semiótica. Desde el
programas narrativos del discurso punto de vista semántico, puede
espacializado. Dicha cateioria topo. constituir, junto con el' iemor*, una
lógica puede ser cOncCbida, en pri· pareja de contrarios' --Categoría de-
mera instailcia, .c.omo una articula· nominada philia / phoQ}a por ,R.
ción tridiffiensioni'll del espacio que Blanché- en la que el' temor no
compren~e los ejes .. de. l~ horlzon· es un no-querer, sinó. · un querei-
talidad, · de la verticalidad y de Ja contrario. En el plano.: figurativo*,
prospectividad. y ·cuyo pu:aio · de los dos términos· pueden· recibir for-
encuentro estaría r.epresentado por mulaciones diversas: así, por ejeln-
la posición espacial cero: Sin em· plo, el deseo se expreSará, a me-
· bargo, ·es evidente que esta· cate- nudo, por el desplaza.n'.iiento hacia
goría de la dimen.sionalidad*, pro- adelante (la búsqueda*·. del objeto
puesta por nosotros, no es suficien· de vaIOr), lo mismo qtfe el temOr
117 DESEO· DESTINADOR /DESTINATARIO.

se traduce por el desplazamiento a nivel figurativo*, el desposeimien-


hacia atrás (la huida). ~ to representa la posición· del sujetó*
2. La semiótica, lejos d~ negar de un enunciado de estado*, cuan·
la «realidad» del deseo, lo consi- do es privado del objeto* de valor
dera como una de· las l~icalizacio­ por otro sujeto ·de hacer*: corres·
nes de la modalidad del querer•. pande, por lo tanto, a una disjun-
Su propósito sería desarrollar una ción* transitiva* del objeto, efec-
lógica volitiva, ·paralela a la lógica tuada en cualquier momento del
deóntica, donde los ·términos de recorriQ.o narrativo*. Junto con la
deseo y de voluntad servirían para renunciación*, el desposeimiento es
denominar las variables del querer; una de las dos ferinas posibles ·
correlativas a las estructuras se- de la privación, que pueden ser
mánticas más complejas. consideradas, a título de consecuen-
-'> QUERER. cia*, como sÚb-compOnentes de la
prueba ..
DESEQUILIBRIO. Fr. déséquili- -> PRIVACIÓN", PRUEBA.
bre, iil.g. di.sequilibrium: - Están
DESTINADOR / DESTINATARIO.
considerados como en desequlllbrlo,
Fr. destiriateur / disti11ataire, ing.
según la terminología de V. Br"'n·
sender / recei·,1er.
dal, los términos complejos, positi-
1. Desilnador y destinatario (té.r·
vo y negativo, que constituyen el
eje de los contrarios* y de los sub· minos escritos, generalmente, con
minúscula), tomados de R. Jakob-
contrarios*.
' ~ EQUIUBRIO, COMPLEJO (término
son (en su esquema de la comuni-
cación* lingüística) designan, en su
-), CUADRO SEMIÓTICO.
acepción más general, a los dos
actantes* de la comunicación (lla·
DESIGNACióN. ·Fr. désignation, mados también emisor y receptor
ing. designation. - El término de- en la teoría. de la información*,
slgnaclóo. se viene empleando. como pero desde una perspectiva mecani·
sinónimo de denotación* o de refe- cista y no dinámica), Considerados
renCia* -indicando, en este Caso, coino actantes implícitos, lógicamen~
el establecimiento o la existencia de te presupuestos, de todo enuncia·
una relación entre el signo* lingüís- do*, son denominados enunciador*
tico y el mundo* natural (o entre y enunciatario. Por el contrario, si
signos que dependen de dos semió- están explícitamente mencionados
ticas diferentes)- y, asimismo, para y, por este hecho, son reconocibles
constatar una equivalencia* entre en el discurso-~nunciado (por ejem·
dos unidades lingüísticas de dimen· plo, «YO» I «tú11), serán llamados na·
siones sintagmáticas diferentes o rrador* y narrata:rio: Finalmente,
pertenecientes a niveles lingüísticos cuando el discurso reproduce, simu·
distintos. lándola (cf. ·diálogo*). la estructura
-+ DENOMINACIÓN, DEFINICIÓN. de la cornunica"ción, serán llamados
interlocutor* ·e interlocutario. En
DESPOSEIMIENTO. Fr. déposses· estas tres diferentes formas de de-
sr."on, ing. depossession. - Situado nominación se trata, claro está, de
DESTI.NADOR / DEST!NATARI().
una delegación* . realizada :a· par-
tir del destinador y del destina-
ce i.nicifll) y el nes~ador jue:i (y
final). . .
tario. ·· 4. Dada la estructu'ra polémica*
2; Considerados comO actant.es de del. relato, la presencia de un. su·
la: narración, DestinadOr y Destina- jeto'"' y de un anti-suj~'t:o presupºoue
tario (entonces escritos, generalmen- la existencia de un De(i;tinador (D1)
te, con mayúscula) son instancias . y de un anti-DestinadQr (D2):· éste
actanciales.- cara.eterizadas por una eje de los contrarios• 'puede enton-
relación de presÚi:)osici6n unilateral ces desarroJiarse y Producir ·~e
(entre el Destinadoi, término pre- conformidad con ·el criadro* semió-
supuesto, y el Destinatario, término tico-, como · contradii:torios*. dos
pr"esuponiente), qi.ie vuelve asimé· nuevas posiciones aciiinclales: 'las
trica Ia comuniCaci6n entre· ellos; de ño-Destinador {ñ 1 ).-~Y de nO-anti-
paradigmáticamente, el bestinador
está en una re1aclón hiperonín::rlca* Destinador (ñ2). Suce<Íe,. por ejem-
con relacióli al Destinatario, y éste, plo, que D1 desempe~. en la di-
en· posición hipOnímica*: esa asi· mensión pragmática'*, eI rol de Des-
mema· se:,acenii:ia en er momento tinador activo. y perfo'rmante (que
de la sintagmatiZaCión de estos dos comunica los constitúyentes de h1.
actantes, cuando aparecen como su- competencia modal) enel áinbito
jetos ·interesados. én wi solo objeto: de Ja deíxis* positiva, mientras .q1.1e
así sucede, por_ ej~mplo,.en el caso D2 es, en la dimensiÓ~ cognosciti-
de Ja comunicatj.ón* participativa. va•, el Destinador pa~Ívo (que· re-
El Destinador y el .Destinatario son , cibe el saber sobre el hacer· del
·actantes ésb.bles_y·-permanentes de Destinador-sujeto y Ú> sanciÚna),
la narraci,ón, ir¡.dependieritemente de dependiente de la deb:is negativa:
los roles :que, como actantes, de la el Destínador activo es, entonces,
comunicación, pueden asumir (así incoativo, promotor dél movimien·
el·, Destin~tarío-sujeto, .· en calidad to y de la acción (remite a Ja ma-
de destinador, comunica el ·saber nipulación*); el Destinador pasivo
sobre sus propias perfonnances). · es terminativo, y recQ:ge los fi-utos
3. El. Destinador, con frecuencia (en el ámbito de la S~nción*);. sin
planteado como · perteneciente al embargo, no es seguro que esta
universo trascendente•, es el que co- distribución, en el cu3.dro semióti·
munica al Destinátário-sujeto (per- co, sea realmente canónica.
teneciente al universo inmanente*) 5. En el análisis d~~ los rela,tos,
no sólo los· elemeñtos de la campe. algunas veces será preciso distin·
tencia* modal, sino también :el con· guir el destinador ini:tividual -:tal
junto c:Ie los va!Ores ·e~· juego;· es · como se manifiesta en· el caso de
también aquel l:!- quien es comuni· la venganza*- por opoSición al des·
cado el resultado de la perforinan. tinador social, ltamadq' a ejercer la
ce• del Destinatario·sujeto, que le justicia: ambos actantes pueden
corresponde sancionar*. Desde este propóner deberes comPatibles o iri-
punto de vista, se podrá luego opa. compatibles.
ner, en ei marco 'del esquenia na· -)o NARRATIVO (csqueni,a -). NA~R~·

~tivo*, el Destln3dor manipulador nvo (recorrido -).·~··


DESVIAClóN

DESVIAClóN. Fr. écart, ing. gap. trucción de semióticas* múltiples y


l. La noción de desviación está diversas.
estrechamente ligada a la suerte de 3. La introducción, en lingüística,
ta estilística*, en donde a menudo de métodos estadísticos rigurosos
ha figurado como uno de los con· {capaces de reemplazar las desvia*
ceptos fundamentales. Parece haber dones estilísticas de carácter intui·
surgido, en gran parte, de las re· tivo por desviaciones significativas
flexiones de F. de Saus5ure sobre objetiv«mente calculadas) logró ha-
e1 habla* (considerada como el con- cer concebir -por un momento--
junto de las desviaciones individua- la ilusión de un · renacimiento de
les, producidas por los usuarios de las in...,estigaciones estilísticas;· Ello
Ja lengua*): se ha originado así un proverúa de la confusión surgida
equivoco, pues .se ha querido insti- entre el rigor .del ·cálculo estadísti·
tuir, partiendo del habla -que para co, indiscutible, y el de la concep*
Saussure era sólo un cuarto traste- tualización, esto es, de la construc·
ro que permitía definir negativa- ción de los modelo$, con relación
mente Ja lengua, único objetivo de a los cuales la desviación podía ser
la lingilistica-, una disciplina lin· calculada. La desviación significati·
gütstica basada en la apreciación y va en el efupleo, por ejemplo, de
el cálculo de las desviaciones. los adjetivos por tal o cual escri-
2. La noción de desviación está tor, no aparecía como un dato pro-
vinculada, por otro lado, a la de digioso capaz de nutrir la reflexión
norma*: así, la lengua: literaria se estilística. El resultado más con·
definiría como una desviación con vincente -obtenido por el lingüista
rel<tción a la lengua normal, «Coti· estadístico Ch. Muller- es la ho-
diana». Ahora bien, -la normalidad mología reconocida en la obra de
de la lengua cotidiana -que a veces Corneille exitre, ·por un lado, la
se designa, por influencia de ciertas tragedia y la. comedia, y, por otro,
teorías psicoanalíticas, como el sig- entre Ja frecuencia· de las preposi· · .
nificante*- es, tanto desde el pun· dones «a» y .-.;de»: se trata, en este·
to de vista lingüístico como semió· caso, de una constat3.ción sugestiva
tico, una· verdadera aberración. Si, que permite ._por situarse en el
en el plano sintáctico, se busca nivel de los universales*- empren-
aprehenderla y controlarla con ayu· der una reflexión hacia otra cosa,
da del concepto de gramaticalídad* algo así como puede ser sugestivo
(cuya utilización práctica: provoca el establecimie~to de palabras cla-
tantas dificultades). Ja determina· ves.
ción de las anomalías semánticas 4. En ausencia de una teoría se-
(cf. las investigaciones de T; Todo- mántica al menos ilnpHcita, el cálcu·
rov} sólo. puede basarse en una con· Jo de las desviaciones, tal como se 1
cepción particular, positivista, de practica, permanece 3.ún vinculado
la racionalidad. El semiótico sabe, a las concepciones atomistas del si·
por lo que a él respecta, que las gto pasado. Así pues, es preferible~.
lenguas naturales son reservorios, sustituirlo, de acuerdo con la pro-i-'.'
lugares de manifestación y de cons- puesta de M. Mcrleau-Ponty, por el~·
·~:
DESVIAClóN • D!ACRON!A 120

concepto de· deformación coherente Dicha concepción, al asÚnilar la <lis·


de- 1as estructuras;:::concepto a par· tancia entre dos estadó's de IeniUa
tii del;,cual se Puede considetal', a la que. existe entre· ·dos lenguas
atm.que eón.: preciluclones, ·1a: · posi· emparentadas, elimina .ae hecho :la
bilidad del cálcuio de la originali· diacrorúa y permite el :Cjercido-.t;le
dad semántica.·. un comparatismo,. acrónico.
-.+ .EStn.istICA, ORl:GINALmAD SEMilN• 3. En lugar de utilizá.r el ptoce-
TlCA, dirniento, dudoso, con·sistente en
postular a priori· la e.Xistencia de
D:lACRON1A. Fr. diachronie, ing. dOs estados de len~ antes . de
diachrony. conocer las transform'itciones que
1. F. de Sauss4re introdtljo la serian las únicas capaCes de. defi·
dicotonúi:· sincroniá/diacronia para nirlos, ·cabe concebir 1la diacrol).Ía
designar -"dos IiiQdos distintos de en forma de transformáéiones situa·
acercamiento a los. fenómenos lin· das en un sistema senliótico (o en
gilisticos. A. decir ·verdad, sólo . .el una lengua natural), d~jando para
concepto de sincronía le im.pOrtii.ba después el denominar lps pormeno-
a Saussure, ·pues Je· permitía fundar res de estas transformiciones corño
Ja lingüística como estudio de sis· estadtis* semióticos (o -lingüísticos).
temas* coherentes; el téi"múio dia· Dos ejemplos pueden ilustrar esta
cronía ·vino, ·entonces, a cubrir el aproximación.
campo de estudios de Ja ·gramática 4. En el ámbito de ja' Escuela 'de
histórica •. De ·esta. ·manera;· la opo- Praga, R. Jakobson Propuso una
sición. entre sincronía y diacroní~. interpretación -dependiente, seg(m
aúnque · articula dos dimensiones · · él, de la fonología ·.ffiacrónica-
temporales de inVe'stigación, ha sido para los cambios de la forma· <:te
por mucho tiempO considerada ro- la expresión* de las cat.egorías gra.
mo una oposicióri éntre la actitud maticales: se deberían:· a Ia deter·
estructural. y el ptoceder atomista minC:ción redundante dé los morfe·
con respecto .ª loS ·hechos del· len- mas* que los manifiesfan. Así, por
guaje. · · · · .. . . ejemplo, la desaparici6i:\. de las cÍe-
2. La oposic{óri, en un principio sinencias de la decliriáci6n latina
categórica, entre Jos dos términos se explicaría por la ·:·coexistencia
de la dicotomía saussuriana, se ha redundante y prolongada de mor·
ido diluyendo piógresivamente: da- femas superfltios, qu~· denotaban
do que un sistema* semi6tico no se las mismas categorías ·.'gramatieaies
deñne por la sincfunizaclón de los (tales .como los detemiinantes, Jits
elementos· que lo_ ~onstituyen, sino preposiciones, etc.). Ef empleo. de
por su coherencia l,ógica interna, la este sistema enfático scl!µndario lta·
diacronía· podia Ser· interpretada co- bría tenido como efect6 liberar tos
mo· un· co:O.junto ·d6 transformacio- . morfemas flexionales, que se hubie-
nes* · situadas ·y ·i·~onocibles. entre ran vuelto inútiles. .
dos· sisterrlas t9m.ados globalmente 5. Otros lingüista$'' (Martinet,
(o . entre dos est3.dos* de lengua Haudricourt), partiendi:>i del postu.
corisiderados como lugares de ins- lado de equilibrio* (qu'C:' debe man·
cripci6n de dos sistemas distintos). tener todo sistema set!1i6tico para
121 D!ACRON!A ·DICCIONARIO

poder funcionar), conciben el pro. damente, como interlocutor e inter-


ceso diacrónico como transforma. locutario; se distinguen del narra-
clones en cadena, provocadas por dor* y clel narratario en que· no
Ja intrUsión, dentro de un sistema son delegados· directos, instalados
.(el sistema vocálico, por ejemplo), en el discurso; del eounciador* y
de un cuerpo extrañ.o; transforma- del enunciatario, sino de los actan-
ciones que tratan de restablecer et tes de la narración dotados de la .
equilibrio perdido y llegan a cons- competencia lingüística. Así pues,
tituir un nuevo sistema, basado el diálogo se encuentra entroncado
en un nuevo equilibrio. Este pro-- en el esquema narri:l.tivo* por el
ceso es particularmente interesante, sincretismo que contraen los inter-.
pues, en lugar · de partir de los locutores con cualquiera de los ac-
estados de lengua en búsqueda de tantes de la narración.
eventuales transformaciones, descri. 2. El diálogo, en el relato, lleva ·
be primero las transformaciones consigo frecuentemente un encua·
que son las únicas capaces de po- dramiento. El elemento encuadran~
der definir los estados. te, cuya .función principal es seña·
6. · Si se transige en considerar di- lar el acto de habla en cuanto acto
chas transformaciones como ·trans. somático («dijo él», «repitió él,.),
formaciones diacrónicas, no hay contiene con frecue:ncia informacio-
ninguna razón para no conceder el nes relativas al tóPico del diálogo
niismo nombre a las transforma. («con voz emocionada», «nerviosa-
dones que reconocemos -bien es mentt!l>) y debe ser tomado en con-
verdad que a nivel de la forma del sideración en el momento del aná·
contenido*- en el desarrollo del lisis. El elemento encuadrado está.
discurso narrativo: el discurso que constituido por segmentos - réplica
sitúa· sus performances* entre dos entrecruzados que· mantienen en el
estados estructurales -inicial y ter- plano discursivo relaciones anafó-
minal- es comparable, evidente- ricas• (según los parámetros lin·
mente guardando Ias proporciones, güisticos del tipo pregunta/respues-
al proceso lingüístico qUe efectúa ta, aserción/negación, etc.}; en el
una· comunidad lingüística entre plano narrativo, el encuadre ·dialó-
dos estados de lengua. gico, como fenómeno de superficie,
4> SINCRONiA., ACRON:fA, TRANSFOIW:A· puede cubrir programas* narrativos
CIÓN. o ser atravesado por ellos.
3. El diálogo es el simulacro, en .
DIALOGO. Fr• .~iatogue,· íng. dia- el relato, del discurso a dos voces.
logue. No hay nada de extraño, entonces,
1. EI término diálogo designa la en que pueda . ampliarse hasta to- '
unidad discursiva, de carácter enun- mar las dimensiones de un discur-
ciativo-, obtenida por la proyección so literario (por ejemplo, el teatro).
de la estructura de Ja comunica- ·~ DESEMBRAGUE, UNIDAD (discursi~
ción* en el discurso-enunciado. Sus vá.).
actantes -destinador* y destinata-
rio- son entonces designados a la DICCIONARIO. Fr. dictionn~ire,
vez como interlocutores o, separa- ing. dictionary.
DICCIONARIO' D'(MENS!ON . 122
. l. POr ·:dtc:clonru:io se· entiende, ge- DIEGESIS. Fr. dittg&e, ing. die·
neralmente, un· inventario* de lexe- ·gesis. - Por oposición .a la descrip-
. mas* (y; even'tualmentei, · de para- ción* (que prioritariamente depen·
Jex'emas*) de ·una ··lengua* ·natural, de de un análisis califtcativo*), la
dispuestos ·en un · orden convencio- diégesis (del griego: 4~gesis, reJa·
nal (habitualment~ alfabético), que, to) ·-.:-término tomado ·_de la tradi-
tomados:como denOminaCiones*, ·es- ción gdega y aprovetjiado por G.
tán ·dotados de· ·definiciones•··o de Genette""':"' designa el aSPecto narra-
equivalentes: paraSinonúnicos*; · tivo del discurso; en.;. tal sentido,
2.' ·. E:O. ·el ámbito del ·tratamiento esta noción se aproxini<:i. a los con·
automáti~o, el di6clonarlo designa ceptos de historia* y !relato*. Para
la Íista · dé ·unida"des· léxicas -ya co- Genette, narración ·y'.. descripción
dificadas y 'puestas· en la memoria ·constituyen lo ..:narriido,,, distin-
de 'una•'col:nputadora~· · ,.. ··.···:· guiéndose así del <(discprso» (enten·
.3. Cualquier uniVerso* semántico, dido como la manera de presentar
descompuesto en lexemas, puede lo narrado), ·
recibir· la Jorilla de un. dicciOnarlo. ~ NARRATIVIDIID.
Cada lexema,· con.cebido .como una
virtualidad de significaciones, pue- · DIFERENCIA. Fr. différence, ing.
de . constituirse en objeto de UDa difference. - La aprell.!!nsi6n intui-
representa:ción sémica,· distribuida, tiva* de la dlferencla,..: esto es, de
por la· agregación de semas contex- una cierta distancia entre dos· o
tuales"', en otros' tantos recorridos más magnitudes*,· conStituye, para
semémicos*. Los .·semas, necesarjos- la tradición semiótica ·posterior. a
para la descripción ·.de ..-dicho dic- Saussure, la primera c:ondici6n .de
cionario, constituyen su código se· la aparición del sentido. No . obs·
mántico. tante, la diferencia sófo puede ser
~ INVENTARIO., CÓDIGO,' LEXIC0 GRAFfA. reconocida partiendo ~e un fondo
.· ..;•· ;·. 0

de· semejanza que le ;,sirve de 'so-


· · DICOTOMtA. Fr. dichotomie. ing. porte. Así, al postular ·que la clife-
dichotomy. - se· _llama dicotomía rencia y la semejanza,, son relacio-
a una pareja de t~nninos -<lepen. nes* (aprehendidas y¡q: producidas
dientes,·· por lo general; del nivel por el sujeto cognoscénte) suscep·
epistemológico* del metalenguaje- tibles de ser reunidas 'f/ formuladas
que se .proponen· Simultáneamente, en una categoría propi2.·, la de alte·
insistiendo, en la~.l'elación dé c:po· ridad/identidad, se puede constiiuir
sición•· :·que. -pernllte reunirlos. El como Un ·modelo IógiCo la estruc·
ejemplo clásico es. el de· las dicoto- tura* etemental. de la ·.significación.
mías· saussurianas: lengua*'/ habla*, ~ -sEMEJ"ANLA, ALn:ru:oAD.
significante* .¡ ·signlñcado*,. sincro-
nía*/ diacronía*. ·Este proceclimien· DIMENSION. Fr. dithension,_ .ing.
to es caracterlstico ·de Ja ··actitud dimension.
estructural que prefiere plantear las · 1. La dimensión es· -un término
diferencias -comO más· esclarece- figurativo'* espacial tomado de la
doras.:.-.· antes de pasar al examen geometría, y que sirvé; como deno-
y a la definición de los conCeptos. minación para difeTeniFs conceptos
'
DIMENSION - DIMENSIONAL!DAD

operatorios* utilizados en semióti· nes pragmática• y cognoscitiva*,


ca. En cuanto denominación*, está consideradas. como niveli;s distintQs
débilmente rpotivada* y sólo llega y jerárquicamente ordenados en los
a ser sugestiva por el hecho de la que se sitúan las acciones, lo::. even·
calificación que le sea agregada. tos descritos por los discursos.
2. La. dimensión, empleada abso.
Jutamente, sin calificación, designa, DIMENSIONALtDAD. Fr. dimen·.
en el ámbito del modelo* constitu- sionalité,. ing. dimensionatity (neol).
cional, a cada una de las relaciones* 1. La dlmensionaltdad es la ca~
binarias constitutivas del cuadro* racteristica de la .espac·ialidad*
semiótico. Las dimensiones funda- cuando ésta -·es interpretada con
mentales del cuadro son los ejes* ayuda de un modelo taxonómico
(ejes de los contrarios* y de los dimensional, excluyerÍdo cualquier
subcontrarios*), los eSquemas1' (po- otra propiedad espacial. Este mo·
sitivo y negativo) y las deixis* (posi· delo taxonómico eS, a su vez, el
tiva y negativa). resultado de la articulación de tres
3. En el nivel del discurso ma· caiegorias espaciales denominadas
nifestado en forma de signos•, se dimensiones*:· horizontalidad/ ve:rti·¡
entiende por dimensión la "tallait calidad / prospectividad, cuya inter~
sintagmática de las unidades lin- sección constituye una dcfxis* de re-
güísticas. El problema de la dimen- ferencia, que perniite situar, con
sión de Jas unidades se presenta a relación a ella, las diferentes mag1,~'.·
propósito del isomorfismo* de las nitudes que se encuentran en un'
unidades que dependen de los dos espacio dado. Una sola dlmensión
planos* del lenguaje: se dirá, por basta para situar una magnitud
ejemplo, que el fonema* y el se· puntual: dos dimensiones, que cong..
mema* pueden ser considerados co- tituyen un plano,· permiten situar
mo isomorfos por el hecho de su tas superficies; por último, tres di·
estructura, pero no por el h~ho de mensiones Sitúan los volúmenes con
sus dimensiones (en el memento relación al volumen de referencia.
de la manifestación*). 2. En semiótica 4iscursiva, el mo-
4. En semántica, hace poco ·que delo dimensional permite construir
hemos propuesto distinguir la di- -durante el proceso de espacializa-
mensión nool6gica* y Ja dimensión ción* del discurso- un marco de
cosmológica•~ determinadas Por la localización espacial, al identificar
presencia respectiva de los clase-- el punto cerO de la dimensionalidad
mas* interoceptividad y· exterocep- ·con el espacio de ·allá, o con el de
tividad, que sitóan, por tanto, al acá, espacios obtenidos gracias al
discurso (o alguno de sus segmen· desembrague• espacial. ·
·tos) sobre una u otra dimensión: 3, El námero de dimensiones to-
por ejemplo,· 'l<Un saco pesadoit f madas ·en consideración al cons·
«una concienc:ia pesada». En esta truir 'el significante* de una semió-
aCepci6n el término isotopfa* nos tica (o al describir una semiótica
parece preferible. natural*) de tipo visual, puede cons·
S. A nivel superficial de la narra- tituír su carácter e~pecifico: as!, ta ·
tividad, se distinguen las dimens.to- semiótica pl:inarla tiene un signifi·
D!MENSIONALIDAD • DISCRE:rO (·A) 124

.cante bidimensional, mientras~ 4ue 3. En semiótica discuri!va. Ja opq-


la semiótica del espacio* .. utillza. un~. sición continuo/ discontifiuo reapa-·
significante de tres ·dimensiones. rece en forma de ·una'.' categoría·
.. 4~·--; Dado · el rol · ·que juegazi · los aspectual que articula ·~e1 aspecto
procedimientos de representacl4n VÍ· durativo*, de donde el ~.Specto diS:-
suaJ en el desarrollo-de las ciericias, continuo se denominará:·'~terativo o
es frecuente. y normal :que 'los -tér- frecuentativo.
minos dependientes:de ·la dimensio- · 4. En lingüística, los c'onstituyen-
nalidad --tales. --Como:· dimensión*, tes* discontinuos designan morfe-
plano*,:riiveJ*, eje*1 ••:etc.- sean em- mas* cuyos formántes* p.ileden apa-
pleados metafóricamente fuera del recer en dos o varios lugares de la
campo: de ,Ja_ es¡s'ai::íalidad, a condi· cadena, sin que ·la uni'\3.d del sig~
cíón,· por supuesto)._ de ser definidos nificado correspondiente fe vea afec-
en . sus nuevos usos.·. · tada. La negación franc~a ne••. pas'
~ ·-LOC.U.IZACIÓN ~$PACIO-TEMPOR..\L, es un ejemplo de esto: )ella repre-
PLANAR.IA (semiótica ·;.). senta, desde el punto di{ vista dia-
; .:': . ·.• .. cr6nico, un fenómeno de. dett;!rmi-:
DISCONTINUO. ~Fr.. discontinu, nación que permite el pá,SO de utia
ing .. disccnt'lrtu.ous. :. ::; · Cstructtira ·(ne) a otra (pas), inte- .
l. La categoría* ·có'ntinuo/discon- rrumpido y fijado en su :fase ínter~ .
tinuo, como·._ indefinible. que es, for~ media: señalamos esto p·ara sugerir
ma: parte ·del:Jnveritario epistemo- Ja' explicación de casos cOmparables
lógico* de los conceptos: no defini~ en otras semióticas. ··
dos •.··. ~' .. ;.··.. · .· 2,. i. · •• • -> CONTINUO, DISC!tETO, ·'.;\sPE.CTIJALI·
f.. 2.··Con frecuencia· se dice que la ZACIÓN.
proyección de lo discontinuo s9bre
'·~
lo continuo es la primera condición DISCRETO (·A). Fr. dÍScret, ing.
de Ja. inteligibilidad del mundo. La discreet. J· ·
problernática· ... de.· éstá «proyección:. l. Discreto es un co~'cepto no .
depende ·de la epistemología gene- definido y, como tal, ha 'de incluir-
ral, y no :es propia de la semiótica. se en el inventario episté'moiógico*
Para. fijar: Ja·· terminología, no· es de Jos conceptos no· de'6nidos. EJ
intltil "precisar aquí qile, en semió- análisis semántico de· e5te inven-
tica, cualquier magnitud* ·es consi- tario permite, sin embargo, inter·
derada· como continua antes de ·su definirlo, es decir, insertiirlo en 13.
articulación*, es decir, antes de la red relacional de conceptPs compa•
identificación~ ' de las ocurrencias· rables. Así, siguiendo a :.V. Br0D-
variantes . que· permite constituirlas dal, hemos podido inscril:iirlo como.
en clases* (las únicas que pueden una subarticuJación de la:: categoríá·
ser consideradas COJJlO ·. ui;iidades• cuantitativa* de totalida~. consti~
discontinuas). No o9stante, el tér- tuida por la oposición d~i jntegral .
mino . <'!discontinti:o~ es . justificable · (totus) y del universal (cúnnis); la
únicamente .como dfpendiente de la integralidad, a su Vez, searticuI!l
sintagmátiCa; para definir la unidad en discrectón (que caractétiza a una .
semiótica,. es. preferipte servirse deJ magnitud* como diferenté: de todo.
calificativo «discreto~ .. ··r. lo que ella no es) y globa.l)dad (que
125 DISCRETO (·A)· DISCURSIVIZAClóN

permite aprehender una entidad en ras* _.semio ·narrativas y discursi·


su indivisibilidad). vas- rigiendo la organización· del
2. En semiótica,· la discreción discurso antes de su inanifestaclón*
juega el mismo rol que en la lógica en una lengua nattira.I dada (o en
o que en matemáticas: sirve· para una semiótica no lingüística), obJi.·
definir la unidad semiótica, cons· ga a prever los proc'edlmlentos de
truida con ayuda de los conceptos dicurslvb:a<:.lón, llamados a cubrir
de identidad* y de alteridad*. Una -con la semántica*. discursiva- la
urúdad discreta se caracteriza por distancia que separa. a la sintaxis
una ruptura de continuidad con re· y la semántica narrativas (que cons·
Jación a Jas unidades vecinas; por tituyen el nivel de súpirficie de las
este hecho, puede servir como ele- estructuras semióticas) de la repre-
mento constituyente de otras uni· sentación* seinántico-sintáctica del
dades, etc. Ha de observarse, sin texto; esta última, luego de la tex~
~bargo, qÚe, si bien el concepto · tua1ización*, podrá servir de nivel
de discreción es indispensable para profundo a las· estructuras lingüísti- ·
definir las unidades sintagmáticas, cas de superficie (en se"ntido choms.
no basta, en ·cambici, para especifi· · kiano ). Una descripción satisfacto-
car las categorías paradigmáticas, ria del proceso de producción* del
que pueden ser discretaS (posible / discurso representa, en el estado
imposible) o graduadas (probable / actual de las inveStigaciones semió-
improbable). ticas, una tarea que sobrepasa am-
3. En metalenguaje*, discreto es· pliamente sus posibilidades; pensa-
sinónimo de discontinuo. mos, pOr ello, que hay que limitarse
-)- 'rOTAL!DAO, UNIDAD, DISCONTINUO, a esbozar -en sus grandes Iíneas-
CATEGORfA. la economía general de estos pro-
cedimientos y distinguir, tanto como
DISCRIMINATORIA. Fr. discrimi. sea posible, sus diferentes compo-
natoire, ing. discriminatory. - Una nentes: esto, mientras los · análisis
categorfa* sémica es llamada dlscrt. parciales se organizan en una es·
minatotia -cuando se encuentra de. trategia de conjuntO que permita
semantizada* por servir de criterio, una reformulación menos intuitiva
por ejemplo, en el momento de la de las estructuras empleadas y de
construcción de una taxonomía* las operaciones llevádas a cabo.
científica; es lo que ocurre con el 2. Los procedimientos de discur~
emparejamiento en un sintagma de· slvlzactón -llamados a constituirse
nominativo del tipo Determinan.te + en sintaxis discursiva~ tienen en
Determinado, como en el caso de comt'tn el poder. ser definidos como
los clasificadores o especificadores la aplicación de las operaciones de •
utilizados. desembrague* y de embrague* y,
en consecuencia, el depender de la.
DISCURSIVlZAClóN. Ff. discur. instancia de la enunciaci6n. Hay que
sivisation~ inglés discursivfaation dividirlos, al menos, en tres sub-
(neo!.). · componente1>: la a<:torialización*, la
l. Reconocer dos niveles de pro- temporalizaci6n* y Ja espaclaliza-
fundidad y dos tipos de estructu.; ci6n*1 que tienen como resultado
DlSCURS!VlZAC!óN ·DISCURSO

producir- un_ dispos~~vo de actOres* nes, unjdades, operaclonC~. etc.). ;si-


y un. ámbi~o tempor~ y, a la vez, tuados en· el eje sintagulático* del
espacial,,· .d<;>nde _vepdrán · a · i:;lscri- lenguaje*, dependen de 12: teoría. del
·birse los programas* -narrativos pro- discurso. Con relación a -la existen·
venientes -de ·las ··estructuras semió- da de dos macrosemió'Úcas* -el
ticas (o narrativas).· «mondo. verbal», presente bajo for-
3. Incluso en su sentido amplio, ma de lenguas naturales, .. y el «mun~
la discursivización debe distinguir· do naturah, fuente de' ·semióticas
se de la textualización*; éSta eo:ns- no lingüísticas-, el proceso semiÓ.
títuye, para nosot±Qs, una desvia~ tico aparece·entonces·coffio un con-~
ci6n del dis~urso- (en principio .pue.. junto de prácticas discur:Sivas: pÍ"ác-
de operarse ·.Partierido de cualquier tica.s lingüísticas (compol-tamientoS
·instancia -dol' recorrido .generativo*) verbales) y no lingüística·~ (compor-
que tiende ·hacia su· ·manifestación; tamientos somáticos significantes,
y se _define con relación a ella.~Uno· manifestados por los órdenes senso-
de los procedhniento.s de la textua- riales). Considerando sól~ las prác-
lización es la Iinealización'll:, · es de- ticas Iingüisticas, el discurso sería
. cir, la desconstrucción del· discurso el objeto de saber perseguido por
como consecuencia de las coercio-. la llngüistlca discu..-slva. En este
nes de la linealidad del texto, y su sentido, es sinónimo de .. texto*~ .en
reconstrucción en el marco de nue- efecto, algunas lenguas.: europeas·
vas reglas del juego que le son im- que na poseen un equiválente para
puestas. De· elio resulta una nueva· la palabra franco-hispano-inglesa de
segmentación textual que ·produce discurso, se han inclinadP a susti~
unid3des* textuales:, de un núevo tuirla por la de texto y .hablar de
género. La te:xtualiüción ~iene. co- lingüística textual. De Otro lado
mo resultado producir un discurso -por extrapolación· y a' título de
lineal) segment::ido 'en- unidades de hipótesis que parece fecunda-, los
dimensión diferente y .forinulable términos discurso y te~io se han
como" una represi:i:.niación profunda, empleado, asimismo, para designar
susceptible, at pasar.. a !as estruc- procesos semióticos no lingüísticos
turas lingüísticas de superficie, de (un rito, un filme, los dibujos ani-
ser llevada a efecto como un dis· mados, son considerados.· como dis-
curso manifestado.:, · · cursos o textos): .el emPico de es-
·:-r .DISCURSO, GENERATIVO (recorri- tos términos postula la· ·existenCia
do ·..,....), ACTORIAUZACIÓ,r, 'IEMPORALIZA• de una organización sintagmática
CIÓN, · · ESPACIALIZACIÓN, ~ SINTAXIS DIS~ subtendida por este géne'f.q de ma~
CURSIVA, 'r'EXTUALIZACÍÓN. nifestaciones. ·
2. En un marco teórico un· poco
D!SCURSÓ.. Fr. d~s~ours; ing. dis- diferente -pero no coritradictorio
course. con el primer.o- el discurso puede
1. En una· primera aproximación, ser identificado con el eriUnciado*·.
se puede identificar ·Cl · concepto de La manera, más o menos·~implícita,
discurso con el. de proceso* semió- de concebir el enunciado.'(= lo que
tico, y considerar que la totalidad es enunciado). determina·: dos acti-'
de Jos hechos semióticos {relacio- tudes teóricas y dos tipóS de ana~
127 . DISCURSO

lisis diferentes. Para la lingüística 4. Si, por el contrario, desde el


frásica, la unidad base del enun· inicio se postula que el· enunciado-
éiado es la frase*: el discurso será discurso forma una totalidad, en·
considerado como el resultado (o tonces los proceWmientos a em·
la operación) de la concatenación plear deben ser deductivos -ya no
de frases. Por el contrario, la lin- inductivos- y analizar el conjunto
güística discursiva, tal como la con· discursivo en sus partes componen-
cebimos, toma como unidad de base tes. Si, además, un desarrollo ge-
al discurso, visto como un todo de nerativo completa estos procedi-
significación: las frases no son sino mientos, ia teoría seto.iótica acaba-
segmentos (o partes- fragmentarias) ría concibiendo el discurso como un
del discurso· enunciado (evidente- dispositivo en «pasta: de hojaldre»,,
mente, esto no excluye que el dis- constituido por cierto número de
curso, debido a la condensación*, niveles* de profundidad superpues·
pueda tener, a veces, las dimensio- tos, y donde sólo el último, el tnás
nes de una frase). superficial, Podria recibir una re-
3. Cuando se le sitúa en· la pro- presentación* semántica compara-
longación -de las gramáticas frási- ble, grosso modo, a las estructuras
cas, el análisis del discurso trata lingüísticas «profwidas» (en la pers-
de reconocer -y construir- mo- pectiva chomskyana). Desde este
delos de secuencias discursivas con- punto de vista, la gcimática frásica
sideradas como series de -frases- aparecerá, entonces, como la pro-
enunciados. Con este fin, diferentes longación natural de Ja gramática
procedimientos son elaborados ·o del discurso.
propuestos, tales como: a) el esta· 5. Para ser integrada en la teo-
blecimiento de redes de equivalen· ría general del lenguaje, dicha con-
cia ·entre frases y/o series de fra· cepción del discurso exige ser ho-
ses (Z. Harris); b) la formulación mologada, por nna parte, con las
de reglas -de naturaleza lógica o dicotomías ·fundamentales de len-
retórica- de concatenación de fra· gua/ habla, Sistema/ proceso~ com-
ses; e) la determinación de i~ota-. petencia/ performa'f'ICe (v. estos tér-
pías* gramaticales de las secuencias minos) y, por otra, ubicada con re-
(con la anaforización*); d) la ela· lación a la instancia de la enun-
boración de .representaciones más ciación*. Reteniendo el término cOm- :
profundas, que explican las· series petencia* para designar el conjunto
de frases de superficie, etc.· Aun- de condiciones necesarias para el
que pertinent~, tales procedimien- ejercicio de la enunciación, habrá
tos son, sin embargo, parcial~ y que distinguir dos configuraciones
no parecen basarse en ninguna teo- autónomas de esta competencia: la
ría general del discurso: recuerdan competencia semio-narrativa y la
demasiado las tareas de o:construc· competencia discursiva (stricto sen-
ción de parágrafo», inscritas en Jos su). La competencia semiO..narrativa
programas de enseña~za secund~ria, está situada en la parte. superior,
y podrían ir ·seguidas -en la mis- precediendo a la ' enunciación en
ma dirección- por la «construcción cuanto tal. De acuerdo con Hjehns-
del discursol>, etc. lev y Chomsky, se 1a puede canee-
DISCURSO 128

bir COnsÜtuida p¿r_ articulaciones a ras discursivas; el di_s'curso · sería


la vez taxonómicas. y sintácticas -y el resultado de · esta inanipulactón
no ·Como·tina:simpJ~ paradigmática*. de las formas profund~S que ap.or:·
a · 1a manera de 1a .a:lengua» saus-- ·ta un· suplemento de articulaciones
suriana.:..:...; siguie.nd:O a Saussure: se significantes. Puede pi'éverse, é.n·
la puede considet:át dotada de un tonces, un anál.f.sls_ dis(runlvo dis·
estátuto· fras!!ender:i.tal ·(las formas · tinto del análisis narta.tiVo que· él
semio-.narrativas, ·.Postuladas ;como mismo presupone, ·· ·
uñiversales: -px:opias de ·todas las 7. Dlcha concepción del discui-so
comunidades ·lingüísticas y trans- anula la oposición tradiCional entre
lingúísticas-, · se mantienen a tra- el discurso, monólogo (ransfrásico,
vés ·de las traducciones de una len- Y la comunicación, diálogo e inter·
gua· a otra; siendo identificables en cambio frásico. Al deja.i de ser ·una
las semióticas iio lingillsticas). La estructura extraJingüísr.r:a que sir-
competencia ·serni~~narrativa corres.. ve de b2.se a los inteFC:ambios de
pon?e, pues, a lo. que en términos mensajes, la comunicaCfón* se pre--
irresponsableS se -podrla considerar senta com,o una instan9~. un jalÓn,
como ·fornias -clasificadoras y pro- en el recorrido generati¡vo* del <lis--
gramadoras- de int'eligencia huma- curso; . hace. aparecer'ua" solo actQr·
na. La corµpetencia; en cuanto tal, sujeto de la enunciació ; que asume
·puede ·ser· descrita,·· como una:gra- . y proyecta fuera de diferentes
mática* fundamental · del:· enuncia- roles actanciales*, o b_ien una es-
do-discurso, 'anterior a la ·enun9ia- tructura actorial* bipolar, que pro-
ción y presupuesta por ella. La duce un discurso a dos '.)Yoces ("= Ja
· conipetencla discursiva, ·por el con~ {[comunicación"') situado!, en una is·cr
trarlo, está ·':situada en 'un plano topía · semántica homo~~nea cuyas
·posterior: ·-.se· constituye ~el mo• formas sintácticas son @mparables
' me'nto ·de la enunicación .Y rige, al a las del diálogo* inst~ado en eJ.
elaborarlas, las fórinas discursivas discurso. enunciado, he'Cha ya :·la
enuiiciadas. ·~ · enunciación. Además, l¿:· estructura
, 6~ · ~Sta breve. i~flex'ión sob're la de la comunicación no $'.ecesita; e~·
doble naturaleza _qe·: la competencia tonces, para ser comjlrendida ·y
era necesaria pará :-.instalar ·una nue- descrita, de una pragmá!tica* (en el
va acepción y una_ ·nueva definición, sentido norteamerlcano)!'.que le sea
restrictiva:; del é!isCurso. En efecto, exterior: los actantes* :~e la enun-
si· 1a enunciación ·es. segúit Benve· ciación, por asumir una: competenw
niste, la {[disc9rsi~ización» de la cia semio-narrativa que :Jos engloba
lengua. ento;ices ~t discurso es.. jus. y Jos hace participar en _-el universo
tamente, lo· que .. reemplaza a la semiótico, son competerhes por de-
enunciación: si en esta definición finición y «Saben comUnicat'Jlo · sió
de ·Benveniste ·se sustituye el con· recurrir a los parámet:iPs psicoSo-
cepio de. «lengu!l».'j>0r et' de :coro· ciol6gicos. :
petencla semio-narnitiva, la discur- 8. Como el término diSCurso tien·
sivización ·consistiría en hacerse car- de, progr'esivamente, a ·'identificarse
go de las E:structurás seniio. narra· con el de proceso semiótico, e in·
tivas l~ transfor~!u1~Í'~as en estructu· cluso, a designar metonlmicamente
DISCURSO

tal o cual semiótica en su conjunto manece ambiguo. Un dominio se·


(en cuanto sistema y proceso). se miótico puede denominarse discur-
replantea el problema de la defini· so (discurso literario o filosófico,
ción de la semiótica* (Como objeto por ejemplo) antes e independien·
de conocimiento y objeto construi- temente de su análisis sintáctico
do por la descripción). En efecto, y semántico, debido a··su connota··
es necesario considerar que la lin· ción* social relativa al contcxtQ cul-
gilistica se encuentra en el origen tural dado (J. Lotman dirá que un
de la reflexión semiótica, por el texto sagrado medieval es conside·
hechO también de que la lengua* rado por nosotros como literario).
natural no solamente es definida La tipología de los discursos, sus-
.como una semiótica (o un lengua. ceptible de ser elaborada en esta
je*). sino que está considerada -ex. perspectiva, será, pues, connotati-
·plicita o implícitamente-- como un va, propia de un área cultural,
modelo según el cual las otras se. geográfica e históricamente circuns- ·
mióticas pueden y deben ser con. · crlta, sin relación con el estatuto
cebidas. Ahora bien, lá. lengua na. semiótico de esos ·discursos.
tUral, ·semánticamente coextensiva 10. Incluso si se hace abstrac-
a la cultura, cons"tituye un campo ción de las definiciones connotati·
inmenso; nosotros la consideramos vas de1 discurso (según las cuales,
como una macrosemiótica compara. por ejemplo, el discurso literario
ble únicamente con otra que tiene es definido por la literaridad*), el
las mismas dimensiones: la del problema de saber lo que es el
mundo* natural significante; a la discurso -en sentido semiótico--
vez, las otras semióticas aparecen queda en pie. Si se considera a las
como «"minisemióticas» ubicadas o diferentes semióticas desde e[ pun·
construidas dentro de estos univer. to de vista de sus componentes
sos. Los semióticos soviéticos han sintáctico y semántico, se observa
sido, quizás, los primeros en llamar que algunas de ellas -la semiótica
Ia atención sobre eIIo, al proponer literaria*, por ejemplo- son indife-
el concepto, mal definido pero muy rentes con respecto a los conteni-
sugestivo. de «sistemas modalizan. dos vertidos; ·otras, por el contra·
·tes secundarios• para designar es. río, son indiferentes con respecto
tas «minisemióticas:.. que, aun de- a las eventuales organizaciones sin-
pendiendo de las «macrosemióti· tácticas: el «relato femenino• for-
cas», poseen una autonomía de ges· mulado por C. Chabrol, considerado
tión y /o de significación. Se puede como una ·articulación mínima de
decir que el <1:sistema secundario» contenidos, es susceptible de ver-
soviético (metonomia que incluye terse en formas discursivas . muy
el proceso) corresponde, grosso mo. diversas. Dado que todos los con·
do, al discurso (concepto que se ha tenidos, sean cUates fueren, pueden
desarrollado en el contexto francés, ser tomados como «literarios,., el
donde debe ser interpretado como discurso literario fundarla eventual~
proceso que presupone al sistema). mente su especificidad tan s6Io en
9. No obstante, en esta nueva las formas sintácticas que él mane-
eoncepcióh, el término discurso per. .la. Sin embargo, es tal la variedad
SEMIÓTICA. - 9
DISCURSO· DISJUNClóN 130

de las formas, que la seiniótica lite- (cf. la receta deJa sopa·;~au pistou»,
raria se presenta más como un vas· por ejemplo), etc., determinan de
to repertorio de formas ·discursivas antemano el tipo de ciiScurso final-
que ·como Wla estructura sintáctica mente manifestado. De otro lado,
definible: pese a ·la existencia de el lingranaje de los mécanismos de
discursos literarios, con todo '.no se desembrague* y de embrague* :......10s
puede ·hablar •del» discurso !ite- cuales definen la e'nunCiación Como
rario. Por otro lado, si, pensando actividad de producción;..... sólo pue-.
eñ. ºel 1<relato fe:menino» -pero tam· de ser considerado coi:no una ope-
bién en·:los campOs ·semánticos lla- ración selectiva .que elige tales uni-
mados ···"discurso pOiítico•; · «discur- dades preferenciaies y/o tal arreglo
so religioso», etc.-, se puede decir preferenéial de .unidade·s, dentro de
que existen orgini.zaciones · profun- Ja combinatorfa de las unidades*
das. del contenido, formulables co· discursivas que este meC3nismo Pt!!!·
mo· ·sistemas de valores*· o como de producir. En ambos "'&a.sos~ ta'nto
epistemes* (es d.eclr, comO · jerar- si se trata de la coinpetencia semiO.
quías de combinaiorias), estas axio· narrativa cOmo de la Competencia
logias* pueden ponerse de maní· discursiva propiamente· dicha,: ·la
fiesta en ~oda suerte de discursos. produCción de un discú.rSo aparece
Valga decir que.la. tópica semántica como· tlna selección continua de
de Jos -discursos debe ser tratada posibles y se abre. cami.tlo a través
separadarllente de su tipología sin- de las redes de coeréiOnes.
táctica, la cual, cuando . su elabo- -+ ENUNCIADO, COMP~, DISCUR-
ración ·llegue a ser·· más avanzada, SIVIZACIÓN, TEXTUALIZACI~N. GJ;;NERA"l"I•
aparecerá, 'sin duda, como muy ale· vo (recorrido-), SEMIÓTICA, LITERARIA
jada de la actual tipología conno.. (semiótica -), RETÓRICA;; ·
tativa de los géneros* discursivos.
11. Retornando a la instancia de. DISFORIA. ·Fr. dysphorie, · ing.
la enunciación'" qqe es el Jugar de dysphoria. - La disforia es el tér-
la · generai;:ión. del discurso, puede mino negativo de la categoria tí-
declrse que la forma del discurso mica que sirve para valorizar ?.os
producido depende de Ja doble se- micro-universos* semánticos, insti-
Iecclón que en ella se opera. Si se . tuyendo los· valores* -iiegativos, ·y
considera a las estructuras semio- · para transformarlos en: axiolog!as*.
naITativas como eX ··repertorio de La categoría tímica se· articula en
las formas susceptibles de ser eriun- euforia / disforia y comprende, co-
ciadas, la enunciadón selecciona mo término neutro, la ·'á./on.·a.
aquellas de las que tiene nec~sidad ~ T1MICA (categoría~).
para «discursear)): así, la elección
entre las dimensiones pragmáticas* DISJUNCióN. Fr. disfbnction, ing.
o cognoscitivas*· del diséurso pro- disjunction.
yectado;· la opción ·.entre las "formas 1. En semiótica narrativa, se re-
que convienen al· discurs9 de' cons• serva el nombre de dfsjunclón -para
trucción del sujeto (cf. el Bildun.gs- designar, paradigmátic"a,mente, uno
roman) y que son exigidas por el de los dos términos (jitnto con el
discurso de constr"ucclón del objeto de conjunción*) de Ja :~tegoría d~
]31 DISJUNC!óN -DISTINTIVO

junción (que se define, en el plano lógico*. Se trat:i. aquí de una ope·


sintagmático, como Ja relación en- raciJn que establece la alteridad*,
tre el sujeto* y el objeto*, es decir, por oposición a la identitlcación que
cotnO la función* constitutiva de los tiende a reconocer la identidad*.
enunciados de estado*). 2. La distinción puede ser com-
2. Si, desde un punto de vista parada con la diferencia, salvo que
paradigmático,· disjunción y conjun- esta última, en cuanto concepto
ción son contradictorios*, no suce- fundador de Ja semióÜca, se consi·
de lo mismo a nivel sintagmático, dere como la Propiedad del objeto"';
donde, conforme al cuadro* semió- en tal caso, la distinción es el acto
tico cognoscitivo del sujeto* que esta-
blece la diferencia. Así pues, los
conjunción disjuncióti dos términos corresponden a dos

110-disiu11ciónxno-co11i~nción, consideraciones epistemológicas di~


ferentes. ·
--? DIFF.REN'CIA., DISTINTIVO (rasgo-).
se debe distinguir Ia disjunción
{11:no tener algoi>) de la no-conjun- DISTINTIVO {-A). Fr. distinctif,
ción (11.no tener. ya algo»). ing. distinctive.
3. En los procedimientos de seg- 1. Con la expresión rasgo distin-
mentación, el término disjunción se tivo se. designa la figu,ra" de uno
utiliza para denominar los criterios u otro de los dos pianos* (expre-
que permiten introducir lo discon- sión* /contenido*) del lenguaje, con·
tinuo>I" en la continuidad sintagmá- siderada como mfnima según el ni~
tica del discurso. Se hablará, así, vcl de pertinencia* escogido y reco-
de disjunctones gráficas, espactnles, nocida como diferente en relación,
temporales, actorlales, lógicas, tópi- al menos, con otra figura. El rasgo
cas, dmlcas, etc. distintivo sólo tomai:-á et nombre
~ JUNCióN, SEGMENTACIÓN'•. de serna* (en el plano del conteni·
DlSTENSIVIDAD. Fr. détensivité, do) o de fema* (en el nivel de la
ing. detensivity (neol.). - Se le lla· expresión), una vez integrado en la
ma dlstenslvldad a la relación de- categoría* sémica o fémica apro-.
terminante que contrae, en la con- piada. ·
figuración aspectual. el serna* dura- 2. Ciertos lingüistas juzgan útil
tivo"' de un proceso* con el serna introducir la noción de .función dis·
incoativo*. La distensividad se ·opo· tintfva para denomiriar la «capaci·
ne paradigmáticamente · a la tensi- dadio que poseen los ctementos se-
vidad*. · mióticos de diferenciarse los unos
--? ASP!!CTUALrtACIÓN. de los otros, función que carcteri7..a
al eje paradigmático*, por oposición
DISTINCION. Fr. distinction, ing. a la fUnción combinatoria* que es
distin.ction. la de los elementOs situados en el
1. La dtstinclón es un, concepto eje sintagmático*.
no definido y que, como tal, ha de -+ DlSTINCIÓN, C~TEGORfA, COMBINA·
incorporarse al inventario epistemo-. TilRIA,
D!STRIBUCION: DOMINACIÓN 132

DISTRIBUCióN.' .Fr• .distrióution, currir al sentido* como Criterio, está


in8. distribution. . _ ·· fundado en la co-ocilrrencia*: al
· 1. La dlstrlbu.ción ·es el conjunto discernir las relaciones de campa·
de contextos* (o ··entorno contex- tibilidad* o de incompatibilidad
tual) en· que puede encontrarse una entre Jos elementos en: el ej~ sin·
unidad* · reconocida con anteriori- tagmático*, permite establecer cla-
dad.· Si dos o más· unidades ·se en- ses dfstdbucionales, .teniendo en
cuentran en los mismos contextos, cuenta las combinaciones* y las .res-
serán denomlnada·s distribuclonal- tricciones* reconocidas. ·Este tipo de
mente equlvalentes; si, por Cl con- aproximación, de natiirateza taxo·
trario, no'- tieri.E:ri ningún ·cóntexto nómica*, conduc<!' a una· segmenta·
en comúri, s~ dirá que están en ción de la frase y des~mboca en el
distribución complementarla•. Entre análisis de constituyeútes~ inmedia·
estos dos polos, .el caso más · fre· tos (que ha servido de punto de
cuente es, evidentemente,· el de una partida a la gramática·.'·generativcl*).
distribución parcialmente equivalen- 4, Los métodos deli-".análisis dis·
te, tal como se la encuentra en lexi- tribucional pueden utilizarse en se·
cografía, por ejemplo, ·con la exis- miótica, ya sea como ··Procedimi.en-
tencia de la sinonimia* .parcial (o tos de descubrimiento* (partiendo
parasinonimia*) entre lexemas*. del reconocimiento ,de criterios dis-
2. Al mostrar que dos o m~s Uni· . ·criminatorlos* entrC contextos, por
dades son susceptibles de aparecer ejemplo; se pueden inferir oposicio-
en contextos idénticos, la distribu- nes* semánticas y d~~ominar ·13.s
ción permite afidn.ar la existencia categorías* sémicas), Y!} como pro-
de sernas* comuries en el· nivel del cedimientos de verifick:ción* (dada
contenido* . y s~ .. :puede ·proceder, una unidad -fema* o ·~ema*- ¡:ife·
en consecuencia,·: a la reducción* viamente establecida, se puede veri-
semántica. Poi;· lo demás, si una ficar su presencia en ·tal lengua o
unidad·· dada conserva uno o más en tal discurso): el tr<'.tmite se lla·
semas en todos JOs contex.toS posi· mará inductivo en el ·Primer- caso,
bles, se.podrá re:=Onocer su núcleo* y deductivo* en el segundo.
sémico, por oposié;ión a Jos sernas -). LINEALIDAD, CQNSTiivYENTE, SIN•
contextuales* (vari3bles según los TAGMÁTICO, TAXONoM!A.,. orúnm.
sub-conjuntos de Contextos) Que se
encuentran · en «distribu.ción: com- . DlVISióN. Fr. division, ing. di·
plementaria~. . :., vision. - L. RjelmsJeV· emplea e1
3. Con base, ai\ie todo,· en la li· ténnino división para'~·: designar ·el
nealidad del signiJicante*, el anállsls · análisis* del proceso*, .. ·es decir, de
dlslrlbuC!onal (L. Bloornfield; · Z. S. la dimensión sintagmátiCa* de una
Hanis), de. carácter. ·inductivo* y semiótica*, por oposict6n a la arti·
descriptivO, se aplica esencialmente culación {reservada al,· análisis del
a extraer las distribuciones, es de- sistema*). ··
cir, el conjunto de ·contextos en los -). ARTJCULACIÓN.
que. una unidad .' lingilística dada
puede encontrarse. Este procedí· DOMINACióN. Fr. dÓ}nination, in·
mi~nto que evita, ,en principio, re- glés domination. - SiiUada a .nivel
133 DOMINACION ·DONADOR

figurativo*, y en el ámbito de Ja -'> NEUTRALIZACIÓN, CUADRO SEMIÓTI•


estructura polémica*, la domlnaclón co, COMPLEJO (término ":"" ).
caracteriza la posición del sujeto*
de un enunciado de hacer* ·cuando DON. Fr. don, ing. gift.
ejerce su poder-hacer"', volviendo l. El don, figura*· discursiva de
así imposible toda acción contraria la comunicación* de los objetos~
del anti-sujeto. Presuponiendo la de valor, representa Ja transforma-
confrontación* (de tipo· polémico), ción* que da lugar a una atribu-
la dominación es sl!guida por su ción"' y a una renunciación"' conco--
consecuencia*, a saber, la atribución mitantes; en el plano narrativo co--
del objeto* de valor: con estos dos rresponde, pu.es, simultáneamente,
componentes -antecedente y> sub· a una conjunción*· transitiva* y a
sequente- Ja dominación es uno una disjunción* reflexiva*. Se opo-
de los tres elementos constitutivos ne* así, paradigmáticamente, ·a la
de la prueba. prueba* (que implica una conjun-

...
~ COl'U'RONTACI6N, A!R!BUCIÓN, PRUE· ción reflexiva y una disjunción
transitiva). Por lo demás, a diferen-
cia de Ja prueba centrada en el su-
DOMINANCIA. Fi-. dominance, in- jeto· héroe*, el don se inscribe entre'
glés dominance. un destlnador"' y un destinatario.
l.· Dominante se dice del térmi- 2. Una serie sintagmática, com-
no* que, efectuada la operación de puesta de dos renuxiciaciones que
neutralización, se mantiene para impliquen dos atribuciones recípro-
calificar a la -categoría* en su to- cas de un mismo objeto corriprome·
talidad. Cuando, por ejemplo, en tiendo a dos sujetos, puede desig.
francés, la oposición masculino / narse como don recíproco: don y
femenino se neutraliza mediante el contra· don constituyen, así, doS
anafórico ils, se trata de una neu- transformaciones, de las cuales la
tralización con dominancia del mas- · segunda anula Jos efectos de la pti.
culino. mera y restablece el equilibrio"' an-
2. Siguiendo a V. Brandal, se terior. El don recíproco se distin-
distinguen dos variedades de térmi- gue, entre otros, del intercambio*,
no complejo* (que engloba los dos porque el don conlleva un solo ob·
términos contrarios del cuadro se- jeto idéntico; el intercambio, por
miótico): el complejo con dominan- el contrario, precisa de dos objetos
cia positiva, cuando el término do- tomados C<?n10 equivalentes.
minante refleja la deixis* positiva,
y el complejo con dominancia ne- DONADOR.. Fr. donateur, ing. do-
gativa, en el caso contrario. Los nar. - En Ja terminología de V.
términos complejos son resultado Propp, el donador es uno de los
de la tercera generación de los tér- siete personajes del cuento maravi·
minos elementales o simples; esta lloso, cuya «esfera de acción» com·
particularidad en su articulación ha prende «la preparación de la trans·
de interpretarse como efecto de misión del objeto mágico, la colo-
presiones sintagmáticas surgidas en cación del objeto mágico a disposi·
su recorrido. ción del héroe». En semiótica narra-
DONADOR. DllRAT!VlDAD.' -.m
tiva, este rol. -con el del 1rat.odliar• DURAT:lVIDAD. Fr. -!f:Jurativftt, in·
de Propp- es asumido por el tér· glés . durativity. - La; duratfvidad -
mino adyuvante. ·El anti..Qonador1 es un serna* aspectua:i; en el eje*
al que ciertos semióticos han· recu- sintagmático indlca ciue un inter-
rrido, puede. ser, igu.alinente, com- valo temporal, situado . entre el tér-
parado con · el opOnente•. mino incoativo* y el. ·terminativo•,
· -:> ADYUVANTE,: • está enteramente cubierto por un
proceso*. Paradigmáti"camente, ese
DUPLICACION.· . Fr. duplication, serna forma parte de'. Ja categoría*
ing. test dupUcation. - Se entien· aspectual duratividadj puntualidad.
de ·por dupllcaclón la repetición, Un mlsmo interv31o t~mporal pue-
dentrO del esquema narrativo*', de. de ser ocupado poi· magnittides
un mismo· programa* narrativo, con idénticas o comparables, situadas
manifestaciones figurativas* even· en el mismo nivel· <le, derivación~:
tualmente diferentes: se caracteriza se dirá entonces que Se trata de In
por el fracaso del primer programa duratJ.vidad dlsconUnua (o iteratí-
y el éxito del segundo. La significa- vidad), oponiéndola as~ a la duratt.
ción de la ·duplicación es la de én- vi dad continua que sólo caracteriza·
fasis*; el fracaso.·. marca Ja . dificul- a un· único· procese>.
tad de Ja prueba y subraya. 13. im· ~ ASPECTUALIZACIÓN, ).TERATIVIDAD.
portancia · del éxito.
~ TRIPLICACIÓN'~ , PRUEBA.
E

ECONOMlA. Fr. tconomie, .ing. lada, teniendo en cuenta la relación


economy. ruido* /redundanCia*.
1. El término economía remite, ~ DIACRON!A..
generalmente, en una acepción muy
amplia, a la disposición de los di- EFECTO DE SENTIDO.· Fr. e/fet
versos elementos de un conjunto* de sens, ingl. meaning effect. - El
articulable en sus componentes•. efecto de sentldo {expresión toma·
2. De un modo más preciso, se da de G. Guitlaume) es la im<
empleará este término para desig· presión de «realidad• producida)
nar la 0rganización de una teoría* por nuestros sentidos al entrar en'
o de una semiótica*, confonne a los contacto cOn el sentido, esto es,
principios de coherencia* y de sim· con una semiótica subyacente. Se
plicidad*. Al igual que el principio puede decir, por ejemplo, que el
de reducción•, el de economía pue- mundo* del sentido común es el
de ser deducido,. según Hjelmslev, efecto de sentido producido por
del principio de simplicidad. el cncue.ntro del sujeto humano y el
3. En el ámbito de las inveStiga- objeto· mundo. Del mismo modo,
dones d.iacrónicas, se entiende por una frase «cÓmprendidai> es el efec.
economía de un sistema semiótico to de sentido de una organización
el equilibrio* provisorio; susceptible sintagmática particular de varios
de alteración por la acción de Ia sememas*. Así, cuando se afirma,
praxis ejercida en direcciones di· en la tradición de Bloomfield por
vergentes u opuestas; a A. Martinet ejemplo, que el sentido existe pero
le . corresponde la elaboración de no se puede decir nada de él, la
este concepto en lingüística. palabra «sentido• debe entenderse
4. En la teoría de la informa- como «·efecto· de sentido•, única r~·
ción*, el principio de economía rige lidad aprehensible, aunque incapaz
la relación entre la tendencia a lo de ser aprehendida de manera in·
mínimo posible en la transmisión mediata. Dé aquí resulta que la
de los mensajes* y la cantidad de semántica* no es la descripción del
información efectiyamente vehicu· sentido, sino la construcción que,
EFECTO DE SENTIDO· ELÁST!CIDAD 136

aspirando a una 'representáción+, tagmático (introduciendo, así, una


sólo será validada en tanto en cuan- consecución lineal"' en -un eje hóri·
to pueda provocai: un efecto de sen- zontal) y eje paradlgmd.tlco (eje
tido comparable. Situado en la ins- vertical de las conmuta-Ciones* y de
tancia de la réce:Pción, el efecto de las sustitucion~*).
sentido correspon~e a Ia semiosis*, 2. Por eje semánticO·.--se entiende
acto situado en el· nivel de la enun- una relación entre doS términos"
ciación, y a la ·manifestación, que cuya naturaleza lógica :es indeterqli·
es el enunciado-CíisCurso. nada. Se trata de un concepto pre·
-+ SENTIDO, SIGNIFICACIÓN. operatorio que podría sustituirSe.
por ejemplo. al progresar en el á.ná-
. EFICACIA. Fr. ··~ftü:acité, ing. ef- lisis, por el de categpría* sémica
ficacity. . ·· articulada de modo lógi~o (de acuer-
· i. En su uso corriente, la eficacia do con la estructura* ;élemental de
es la capacidad:·.. de producir un la significación).. ::.;
máxiroO d,e res.\tltado con· un míni- 3. El término eje d~igna una· de
mo de esfuerzo (tr,,. del P. R.). Una las dimensiones* del ::,cuadro* se-
teoría* semiótica, y los modelos* miótico; éste compreride dos ejes
que ella pe_rmite copstruir, se dencr fundainentales: el eje ·prlmario (don~
minarán eficaces cuando,. obedecien- de se inscriben los co.ntrarios~) y
do a los principios de simplicidad* el eje secundario (períenecienté a
y economía*, ·:;eari al mismo tiempo los subcontrarios'*).
proyectivos, permitiendo .entonces
prever· y ·describir un gran número EJECUCION. Fr. e.xécution, ing.
de hechos.· execution. - Cuando l~ performau·
2. Hablando cte ."una teoría for· ce -interpretada como· una estruc·
matizada*, se dirá que es eficaz tura modal* del haceY.*- se sitúa
cilando Jas reglas'* ~ue formula sean • ...en la dimensión pragmática*, se. ta
operatorias, es decir, capacés de · denomina ejecuclón, Por oposición
set' eff:ctuadas por un autómata*, a la decisión* (donde lá. performan·
. En los lenguajes formales, se Sabe ce se instala en la dimensión cog.
que el concepto de eficacia sustitu· noscitiva'*), ·
ye, al menos en parte, a los crite· ~ PERFORMANCE.
rios de verdad .
. ~ OPERATORIO•. ELASTICIDAD DEL 'D!SCUR.'lQ.
Fr. élasticité du discouts, ing. elas·
EJE. Fr. axe, ing. axis.' ticity of discourse.
1. A. diferencia~ de L. Hjelmslev, 1. La elasticidad deÍ .. dlscurso es,
para quien· lo sintagmático* y lo probablemente -y tanfO, al menos,
paradigmático están fundados en como la doble articulación*-. una
relaciones* Jó$lCa$ ( uy,,. y»,. UO;., de las propiedades específicas de
oi-), muchos Uri.güi~tas -para· visua• las lenguas• naturales:···eonsiste. en
tizar de alguna manera la oposición Ia capacidad que tiene· ,.el discurso
saussuriana entre re1aci0nes sintag. de nivelar, linealmente, las jeral:'·
máticas y. relaciones asociativas- quías* semióticas y disponer en for·
emPlean las expresiones de eje sin· ma sucesiva los segm~,ntos discur·
137. ELASTICIDAD· ELEMENTO

sivos ·provenientes de niv~les muY nominaciones* (=condensaciones)· y


diversos de una semiótica dada. La de las definiciones*·(":::: expansiones)
producción del discurso se encuen-. lingüísticas. :~
tra, asf pues, caracterizada por dos ~ CONDENSACIÓN, .EXPANSIÓN, PARÁ•
especies de actividades aparente- FRASIS.
mente contradictorias: la expansión
y la coodensadón. ELEMENTAL. Fr. élémentaire, in·
2. Los gramáticos partidarios de glés elementary.
Ja denominada lingüística frásica"' l. El calificativo de elemental se
se han inquietado sobremanera por emplea, en contraposición al de
el fenómeno de la expansión; inter- complejo, para ·caracterizar los as·
pretado _tradicionalmente, a· nivel pectes más simples, reducidos a lo
de las unidades-frases, · en función esencial, de UJl fenómeno. (Cf. la
de las iteraciones debidas a la co- · estructura"* elemental de la· signifi."
ordinación_ y a la· subordinación: cación, las estructuras axiológicas
actualmente; este punto de vista se elementales, el enunciado* elemen~
ha adoptado de un modo más pre-- tal.)
ciso· y, a la vez,· más ·general, en 2. Por otro ·1adó, ha de distin·
lugar del concepto de recursividad*. guirse entre elemental y fundamen-
En· cambio, la actividad de conden- tal: éste especifica aquello a partir
sación, cuyas manifestaciones son de lo cual comienzan las operado.
visibles en la construcción de toda· nes deductivas*, lo que constituye
clase de metalenguajes* (lenguajes el primer nivel* de una teoría*;
documentales, gramáticas, lógicas, mientras que aquél califica la for~
etcétera), hasta ahora no ha sido ma más simple qUe, como tal, pue-
objeto de exámenes profundos. Sin de ser reconocida. en cualquier ni·
embargo, es posible· afirmar -con vel de análisis.
igual razón- que un enUnciado* ele- ~ ELEMENTO.
mental (o una proposición lógica)
es el resultado de una condensa· ELEMENT9. Fr. étément, inglés
ción sintáctica y que· el discurso es elemen.t.
la expansión de unidades sintácti- l. Con el término elemento se
cas elementales. ·" · designa, en general, cada una de
3. Se impone con fuerza · en se· las partes constitutivas de una mag·
mántica la necesidad· de tener en nitud* descomponible. En lógica,
cuenta la elasticidad del discurso, con igual sentido, pero de manera
habiéndose comprobado que unida· más precisa, se denomina elemento
des* discursivas de dimensiones di· de una clase -o de un conjunto*-
ferentes pueden ser ~·econocidas co- ª cada uno de los individuos per·
mo semánticamente equivalentes. La tenecientes a esa clase (o a ese ·
actividad metalingüística, identifica· conjunto).
ble en el discurso, y el fenómeno 2. En una teoría* de tipo deduC.
·de Ja paráfrasis*, considerado en tivo*, los elementos son los prime-·
su Principjo, dependen de esta elas.: ros conceptos*, frecuentemente in·
ticidad del djscurso cuyo ejemplo definibles, que Ja fundari1entan. ·A
más notable es el juego de las de· veces, en esta acepción, se hablará
ELEMENTO ·EMBRAGUE 138

-en semiótica- :de estructura* ele- 2. Según la gramática generati·


mental o de enü.nciado* elemental, va*, la elipsis debe sir. considerada
vaiga la expresióit, fundamentales. como el resultado de 18.s reglas de
.3. Teniendo en· cuenta,· a la vez, supresión* que, gracias a una o
ambos sentidos, ·.es posible llegar a varias transfonnacion~*, suprimen,
considerar al elemento corno una en el plano de· la i)1anifestaCión,
sustancia imposible .. de·. descompo- los elementos presentes en la es·
ner y -en lingtlí.S.tica .o en semió- tructura. profunda. D~de este PUn-
tica- ·como. la. Ut.ridad mínima del to de vista, la elipsiS :. depende· de
objeto considerado. Tal· concepción un proceso más geneTal: et de la
es, evide,nternente;. ·inaceptable para implicHación. :. '
la posición estructural que .la cali- 3. Para que haya elipsis, la ami·
fica de atomista: la relación"' -y sión que la caracteriza/no debe Per·
la.'.catego1i:a* tOmada como red re- turbar la comprensióll·cdel enuncia·
lacional- es la unidad elemental do (frásico o discursi'Vo): ello su·
primera, el elemento que "sirve, des-. pone que las unidades· ausentes pue-
de· esta perspectiva, para designai- dan reconstituirse con···ayuda de los
a cada uno de· 1as· términos* de la elementos presentes presuponientes.
· categoría:.·· El ptocedimiento de i!xpUcitación,
~ UNIOf.O, CUSE, ELEMENTAL, RELA· puesto entonces en funcionamiento,
CIÓN, CATEGORfA, es llamado catálisis pOi: L. Hjelms·
lev. ··~
ELIMINACióN. Fr. élimination, ~ IMPL1CITO, CATÁLISIS.,
ing. elimination. - El procedimien-
to de eiultinaclón es correlativo at EMBRAGUE. Fr. em~rayage, ing.
de ·extracción en el análisis del cor- engagement.
:Pus• y en la elaboración de made· 1. Al contrario que .el desembra·
los'*. gue* (expulsión, fuera .de la instan·
~ EXTRACCIÓN. cia de la enunciación"';··de los tér-
minos categóricos que· sirven de
ELIPSXS. Fr. ellipse, ing. ellipsis. .soporte al enunciado.*);·iel etobrague
L Como figura de la retórica, la designa el efecto de retorno a . la
·elipsis. es la rel~ción eñstente, en enunciación, exigido por Ja suspen-
un texto-ocurrencia, entre una un1· sión• de la oposición entre ciertos
dad de la estructura* profUnda* y términos de tas categcirías de per·
aquella cuya ·manifestación en es· son& y/o espacio· y/o<tiempo,. ási
tructura de. s.uperliCie* no tiene lu· como por la denegación de la ins·
gar; el· elemento .ausente en la su. tancia del enunciado. Todo embra-
perficie.. es, no obstante, identifica. gue presupone, pues, una operación
ble gracias a la i"ed relacional en de desembrague que li:: es lógica-
que se inscribe Y que constituye mente anterior. Cuando, por ejem·
su ,eontexxo..,.,. En ·Un relato, la aCtJ.· pto, el ·general· de Gaúlle enuncia:
'mulación de las -elipsis -como re- ((Francia es un· gran )laís», ope.':"a
marca· F. Rastier- crea,·- muchas un desembrague enunCi·Vo que m·s·
veces, un efecto· .4e «-aceleración». tala en el discurso un sujeto ·dts·
139 EMBRAGUE
tinto y distante con relación a la tivo simple (el enunciador felicita
instancia de la enwiciación. En al muchacho trabajador); en el
cambio, si el mismo persoriaje dice: otro, el desembrague va seguido de
«El general de Gaulle piensa que ...)), un embrague "(el enunciador .se di·
se tratará también, formalmente, rige a sí mismo sosteniendo un
de un desembrague enuncivo, pero «discurso interiOri>), La explicación
completado por un conjunto de pro- de esta segunda lectura no es nada
cedimientos que llamamos embra- simple. La doble interpretación sólo
gue y que, aun cuando queden puede provenir de la existencia, en
implícitos, tienden a producir, en· <{estructura profundá», de dos enun-
tre otras cosas, un efecto de iden- ciados distintos; el segundo enuncia-
tificación* entre el sujeto del enun- do -que instala al sujeto «tú» eD
ciado y el sujeto de la enunciación. lugar del ayo:o pre\'isible- puede
2. Exactamente lo mismo que el ser descrito como un desembrague
desembrague, el embrague se des- implícito que :Proyecta el <rYº"• pro--
compone también en embragues: cedimicnto al que seguirla la sus- ,
actanclal, temporal y espacial. Cada pensión de la oposición categórica
uno de estos procedimientos puede <$.yo,.,/«tú:i:o que permitiría la produc-
ser considerado separadámente, pe- ción del .,;tú». Sinº embargo, dicha
ro a menudo están también reuni- interpretación, coxi ser correcta, no
dos· e instalados de manera conco- es totalmente satisfactoria, al· no
niitante, en sincretismo* (así, por explicar lo esencial: .el efecto iluso-
ejemplo, Jos recuerdos de la pesca rio producido, ·por el que· el «tú"·
feliz en Dos amigvs de Maupassant, enunciado recubre· la· instancia de
evocadós grati:ficatorlamente .cuan- la enunciación. De otro lado, la sus·
do Parls ·se halla en guerra; refle- pensión (o la neT.Jtralización) de la
jan el embrague espacio-temporal oposición categórica ·«yo:i:o/«tú» DO
sincrético). El embrague total es puede ser decidida de manera arbi-
imposible de concebir: serla la su· traria: sólo podría tener lugar si
presión de todo rastro del discurso, se admite la Cxi-stenCia de un fondo
Ja. vtielta a lo uinefable:i:o; pues del común, de una relación capaz de
mismo modo que sólo hay secreto comprender los . dos términos de·
si se puede sospechar de manera la categoría. Ahora bien, este ·fondo
alusiva su existencia o su descubri· común está constituido por el tér-
miento eventual, el embrague debe mino no--yo al que ha habido que·
dejar también alguna marca discur- recurrir para explicar la operación
siva del 'desembrague anterior. primitiva que instjtuye el desem-
3. · Partiendo ·del discurso «des- brague: según este último procedi-
embragado» es como pueden idear- miento, la instancia de la enuncia-
se los procedimientos· de desambi· ción es negada, ·produciéndose un
guamiento, aprovechando las presu- no-yo defuúble como la instancia ..
. posiciones lógicas · del enunciado. actancial del enunciado. Desde este
Así, el enunciado ·del tipo «trabajas momento, el embrague nos parece
bien, muchacho» es · susceptible de poder ii:lterpretars'e· como la dene-
una dobJe ·lectura": 'en ' un· caso, gación del no.yo (término surgido,
se trata del desembrague· enuncia- después de la •prime~ negación,
EMBRAGUE 140
creadora del espacio del enunciado), clón y, a la vez, como.:; un fracaso,
efectuada ·por- el Sujeto de Ja enun- como la imposibilidad .de alcamar·
ciación,· y. que apunta al regreso lo. Las dos «referenciaS»,. con ayuda
-imposiblé- hacia la fuente de de las cuales se trata de salir del
la enunciación. creando la ilusión ·universo cerrado del Jei:lguaje y de
enunciativa, el embrague no detiene aferrarlo a otra exterioridad -la
la operación de desembrague ' ya referencia al sujeto (a 1a instancia
comenzada: el no· yo, expulsado, de la enunciación) y 1~· referencia
puede entonces manifestarse. bajo al objeto (al mundo qúe circunda
la f.orma de uno de los ·dos térmi- al hombre, en cuanto referente*)-:--,
nos· que -comprende: ·:Ya sea como a fin de cuentas sólo llegan a prq-
un «YO» O como uil .i::tÚ~ enuncia- ducir ilusiones: la ilusfón referen··
dos, dejando un margen de juego en cial y la ilusión enunci!\_tiva.
eI interior de las 'coerciones semió- 5; No es, sin duda, oportuno aón
ticas. Este margeri .de libertad pue- tratar de desarrollar urla .tipología
de ser más o menos grande. El uso de embragues: llegará "en su mo-
que. hace M. Butor· del .a:t.isted», en mento, cuando pueda apoyarse en
l.a ·. Modificacióti por· ejemplo, se un número suficiente ··.de análisis
vaie, en el ámbito. P,e la categoría concretos. Al igual que ·para el des·
de la persona -pro:Yéctada fuera de embrague, aquí hay qu,C distinguir·
la enunciación~ de.;Up. recorrido sus· también, entre embrague enunclvo
pensivo prolongado:· el o:yo», ir'..sta- (cf, supra, el ejemplo -del general
lado, primero, en 'e_l recorrido. dicl- de Gaulle) y embrague ·enuhclatlvo
gido a generar el sujeto del enun· (el muchacho trabajadof); entre· el
ciado, se supone qu'e se'transforma embrague cuyo objeto :es retorn:tr
en un · •nosotrOs•,'.:r: _inclusivo ; (que a !a instancia de· Ja entj.ii:ciación y
comprende al ~YO»' Y a los -«otros», el embrágue de segundo: ·grado _:p
equiparable~$ .al «y0i;); para luego interno- que tiene lúgár dentro
pasar -a Uti «Usted10' exclusivo (Jos del discurso, cuañdo el''."sujeto ·q\ie
«otrosi:o en·. cuanto,. inetonímico del se muestra está ya inst(\lado en él .
«no-yo,.);· sÓlamenté··entonces la de.. (cf. los dos amigos de Maupassant,
negación: embragante, aun cuando cuya «interioridad» se" constituye
manifiesta el «usted:&, permite reha· ·al embragar sus recuerd0s): en.tre',
cer el camino en ·sentido in.verso · también, el embrague l1omoeategó.
hasta ese «YO» ya desembragado, rlco (si el desembrague Yel embra.
a
creador de 1 la· UusiÓn enunclátiva. gue que le ·sigue afectan la misma·
4. No:· subestimamos Ias · dificul- categoría de persona, de' espacio o
tadeS que presen'ta 1a constn:icci6n de tiempo) y el embragUe h(;!tero-
de un modelo capaz. ,de. explicar los categórlco (cuando las·' categorías·
complejos procedi:m1Cntos · i."Uplica· desembragante y embr~'gante son
dos. por el embrague. 'Ciertaniente, distintas, como, por ejemplo, en el
otros lo· harán mejo'i· que nosotros. caso de Baudelaire qu~ enuncia!
Por ·nuestra parte, nos atenemos a «yo soy. el camarln.. ,>):,. Contraria·
lo que ·nos parece esencial: el em· mente a lo que sucede .:en el mcr
brague ··se Presenta como un obje- mento del desembrague {cuyo efec·
tivo de la instancia de la enuncia· to es referencializar lo:(: instancia·
141 EMBRAGUE· EMPIRISMO.

desde Ja cual es operado), el em- funcionamiento las modalidades ve-


brague produce una -des-referencia· ridictorias*).
lización del enunciado al que afec- -+ IN.FORMATIVO (hacer -), : CWNOS·
ta: , de esta manera, la descrit>ción CITIVO.
de la naturaleza se transforma en
<iestado de ánimo:a, la infancia de EMISOR. Fr. émetteur, ing. sen·
Marcel (Proust) memorizada (es de· der.
cir, habiendo sufrido el embrague 1. En la teoría de la informa-
temporal) deja de ser una serie de ción"', el emisor, opueSto al recep·
<iaconteciill.ientos~ para· ·convertirse tor*> designa, en el proceso de ·la
en una organización figurativa de comunicación*, la instancia (perso-
.. "recuerdos», etc. No creemos que na, aparato) que origina el men·
los procedimientos de embrague saje*.
puedan agotar la problemática del 2. En semiótica, y· para cu3.lquier
simbolismo; sin embargo, permiten tipo de comunicación (no sólo ver·
explicar, en parte, la discursiviza- bal), se emplea preferentemente, en
ción de los múltiples aspectos de un sentido. casi equiparable, el tér·:
la .¡(vida interior». · mino destinador* (tomadó de R. 1a·
·6. La tipología''", todavía en pers· kobson): en el caso concreto de la
pectiva, de los procedimientos de comunicación lingüística (verbal o
embrague -algunos de cuyos ejes escrita), el emisor es· llamado enun•
acabamos de bosquejar-, unida· a ciador*.
Ja de los procedimientos de desem· 3. Esta diferencia terininológica
brague que le es inseparable,· es la está relacionada con la qüe .se da
única que puede fundamentar la entre la teorfa de la comunicación
definición -y Ja tipoJogfa- de las y la semiótica: mientras que el
uni.dades* discursivas y aclarar con emisor representa una posición va-
una nueva luz el concepto de escri· cía (en una perspectiva esencial·
tura*. mente mecanicista,. que trata de
-+ DESEM!IRAGUE. · instalar puros autómatas), el des·
tinador es un sujeto dotado de una
EMISIVO (HACER -). Fr. fa.ire competencia* particular, aprehcn·
ém.issif, ing. emissive doing.-En la dido en un momento de su evolU·
transmisión del saber•, el hacer in- ción (esto corresponde a un punto
formativo emislvo caracter.iza la ac· de vista más "humanizante•, adop·
tividad cognoscitiva del destinadot*, tado por· la semiótica).
en contraposicióli al hacer recep·
tivo'*, ejercido correlativamente por EMPIRISMO;· Fr. .empirisme, ing.
el destinatario*. En cuanto que poco empiricism.
modalizado -salvo por la afirma- 1. El principio de empirismo es
ción* (como testimonio de existen· . considerado por L. Hjelmslev como
cia)--, el hacer emisivo se opone el criterio fundamental de la .cien-
al hacer persuasivo• (que, al depen·. tificidad'*. de una teoría*. Desde el
der de la instancia dcl destinador, punto de vista gnoseológiCÓ, el lin·
se mueve entre las categorías del giiista danés se muestra, par tanto,
ser* y del parecer*, poniendo así en . contrario a reconocer la primacía
EMPIRISMO - llNFASIS . 142

del suJt!to 'cognosCente (o de las superficies (cf. el probl.e.ma del mar.


leyes del espíritu), asf como··1a del co en semiótica plan.aria) o de vo-
objeto· de conocimiento· (el·'orden lúmenes· en otros voli1menes (en
de las cosas}, postulando -la identi· semiótica de la arquiteC:tura, por
dad de ambas instancias. Para él, ejemplo), Los procedimientos de en-
las ·funciones''" son subyacentes a las cajadura· se encuentran, pues, en
relaciones"!", y las relaciones deben .todas las semióticas ·visuales y tem-
ser conducidas, en el momento de porales y no son exclusivas de 1&
la· ·descripción*, a ,las funciones. La semiótica discursiva verbal.
estructura*· puede deñnirse, en con· ~ toe.un.ACIÓN ESPAérO-TEMl'ORAL,
secuencia, como ifu"Uanente y, a la FOCAUZACIÓN.
vez;'- como· lógica. : ·· ·r!.·
2. Extrayendo .: tOdas .Jas conse- ENCATALIZAR •. Fr. encatalysc.r,
_V

cuencias .de·.est<! ..Prlncipfo, Hjelms- ing. to encatalyze. - Eheataltzar es


lev ·diferencia lá. ieoría del lenguaje hacer explícitos, mediil.nte procedi·
de la filosofía del. lenguaje por es· mientos apropiados, los" elementos~
tar aquélla . sometida al principió de una frase o los ·segmentos de
del empiri::;mo Q:ue le eXige satis· una secuencia ·aiscursiVa que es~-
facer las tres condicione;; -jerár· ban implícitos•.- ·: ..
quicamente·ordenadas- de no·COD· ~ CATÁUSIS, m.rnps1 ~ferro'. ·
tradicción (o' coherencia), exhausti-
vidad y simplici~~· · (EN)CODIFICACIONf:Fr. encoda-
~ COHERENCIA, EXRAUSliVIDAD, SIM· ge, ing, encoding. ·
PI.ICIDAD: l. En la teoría de: -1a informa-
t' ... ción*, la (en}codtfieact6P, designa el
ENCAJADURA. Fr. emboitement, conjunto de las operaciones que
ing. nesting. - 1.3; encajadura es permiten, utilizando un" .código da-
un · procedimiento complementario do, construir un mensaje*.
de la localización espacial o tempo. 2. Este término se einpJea a ve-
·rai,· que d~pende d~ Ja sub-articu· ces en semiótica pax:a, denominar,
lación de la categoría de concomi- aunque sin precisarlas; . Jas opera-
tancia*•. Una · puntualidad* -puede ciones efectuadas en :. Ja instancia
estar en concomitancia con otra, de la emisión (cuya :.complejidad
pero también cOn .ona continuidad aparece a propósito de:los concep-
temporal p éspacial: también pue. tos de acto* de Jenguaj~ y de enun-
den estarlo, parcialmente, dos con- ciación*) .
. tinuidades . desiguales. En el caso ~ CÓDIGO.
de la encajadura ~emporal, Un pe-
riodo está incluido dentro de otro 11.NFASIS. Fr. emph~~e, ing. em·
período y el programa*: nanativo phasis. - Se entiende -por énfasis
se ·encuentra,· en.tonces, doblernénte el vertimiento suplementario de una
localizado.· En cuanto· a la encaja· unidad lingíífstica por 'el serna in~
duia espacial, parece ser más com- tensividad, efectuado ton medios
pleja porque concierne Do sólo a retóricos (por ejemplo, la sustitu·
la inclusión de la·s linealidades, sino ción de un elemento .:·neutro por
también· a la de sciperlicies en otras otro figurativo, reteniendo sólo -el
143 ENF ASIS • ENTONACióN

sema «intensividad») o sintácticos ma imprecisa a la «melodíai. o a la


(mediante los giros utilizados para «modulación» del enunciado oral,
«poner de relieve,., tales como «soy es considerada, por algunos, como
.YO quien .....). La gramática genera· dependiente de una gestualidad...
tiva* trata de explicar las formas Oral de acompañamiento y, por
sintácticas enfáticas apoyándose en otros, como un constituyente* del
las transformaciones., de énfasis, o enunciado, es decir, como uno de
reconociendo el énfasis, a nivel de sus· elementos sustentadores. Esta
las estructuras profundas*, como imprecisión en la · iriterpretación
un «Constituyente de frase" facul- de las unidades suprasegmentaleS*
tativo. de las lenguas naturales de signifi·
cante* oral, proviene del estatuto
ENGA1'1:0. Fr. tromperie, ing. de- ambiguo de tales unidades que son,
ceit. - A diferencia del camuflaje* a Ia vez, articulaciones* reconoci·
tuyo objeto es desplazar al desti- bles del plano de Ja expresión* (por
natario* desde la posición cognos- ejemplo, curva ascendente / curva
citiva* de la verdad* hacia la del descendente} y articulaciones del
secreto, el engaño tiende a llevarjo plano del contenido* con valor gra-
·de la verdad hacia Ja mentira*: matical (sUspensión/conclusión), es
corresponde, entorices, a esa confi- decir, como morfemas* e..:;pecia1es
guración* que es la prueba decep- que organizan 'la sintagmática lin-
tiva. gilístk.a a nivel de los signos... pero
--;> DECEPCIÓN, que dependen de un principio de
articulación muy diferente. Ello ex-
ENGENDRAMIENTO. Fr. engen· plica, por ejem:plo, las razones que
impulsan a la semiótica teatral* a
drement, ing. geri.eratlon. -El tér-
mino engendramiento · se emplea, considerar la · dimensión prosódica
como un significante autónomo, di·
algunas veces, corno sinónimo de
ferente del significante verbal del
generación. texto teatral .
. .!...:). GENERACIÓN,
2. Exactamente lo mismo que el
enunciado puede reducirse a Uil ·
ENTIDAD LlNGtHS'i'ICA. Fr. en- signo... {«sb), la entonación puecle
tité littguistique, ing. linguistic enti· considerarse, ·en "últitna instancia,
ty. - La expresión entidad Jingllis. como un prosodema con las dimen-
tica puede ser considerada como siones de una onomatopeya, de un
equivalente del término magnitud, «grito», o de un «mm..... , despro-
pero limitado tan sólo a las semió- visto de toda significaCión lingilis·
ticas de las lenguas... naturales. tica. Reducida de este modo al es-
-+ MAGNITUD. tado «puroi., la entonación parece,
entonces, capaz de aportar sentido,
ENTONACióN. Fr. intonation, in- particularmente al articularse -se-
glés intonation. gún algunos- en categorías semán·
1. La entonación, que constituye ticas, como euforia/ disforia o apro·
una de las dimensiones de · la pro- bación/rechazo.
sodia* y ha sido· asimilada de for- ~ PROSODl.\..
r_•

ENUNCIAC!óN 144
.:E.NtJNcIACióN.: Fr. énonciation, «discursivización» de JS:-lengua saUs-
ing, enunciation. · ,.· suriana se debe a .s.: Benveniste:
:l. Según los presupuestos episte· entre la lengua* (concel;iida, general-
mológicos, implítjJos o explí~itos, la mente, como una patadigmática*)
enunciadón se défuiirá de dos ma· y el habla*: (ya intei:Pretada por
neras diferentes:· o como la estruc· Hjelmslev como .una !;lntagmá.tiCa.*
tu.fa nO lingÜístiéa' ·.{referencial)· sub- y precisada ahora eri'- su estatuto
tendida por la COinunicaclón.. lingüís· de discursq) era neces"ário, eri efec-
tica, o coµio una.)nstancia lingüísti· to, prever estructuras ·de mediación
ca~ lógicamente pi-esupuesta por la y, asimismo, tantear cómo el siste-
existencia misma del enWlciado (que ma social que es la lengua puede
conlleva tasgos o marcas*}. En el' ser asumido por una~: instancia· in-
primer caso, se J:iab!ará" de «Situá· dividual, sin que por Eso se disper-
ción de comunicacióri», de ~contex­ se en una infinidad dé hablas par-
to psicosociológiCp:1 de la produc- ticulares (situadas fÍlera de to.da
ción de.' los .. ~µnciados, que una comprensión científica;"). El aporte
situación de es~e tipo _(o. contexto innovador de Benve~i.Ste ha dado
referenciill*) permite actualizar. En lugar, es cierto, a nU:merosas exé·
el segundo, al considerarse. que el gesis· de orden metafísico o pSico·
enunciado es el resultado alcanza· analítico, todas las cuales exalta.fl
do por la enunciación, éstá apare- la reaparición inespei-.ada del sUje-
cerá como la instancia de mediación to y permiten rechazj.r Ja cancep·
que asegura la aparición en enun- ción «anónima» del tE:nguaje consi-
ciado-discurso de las virtualidades derado -y aun sin\ considerar-
de la lengua. Según la primera como un sistema colec'tivo de coer
acepción, el concepto de enuncia· ciones. Pero reduciendo las cosas :i
ción tenderá a aproximarse al *de proporciones más mod.estas. no. no~
acto• de lenguaje; considerado siem· parece imposible integrar la nuev:•
pre en su sini,{ularidad; según la problemática en ese-: ámbito ·má_..
segwida; la enunciación habrá de general que constituye la hereri.cfo
concebirse·- como, un componente saussuriana.
autónomo de la ·teoría del lengU.aje, 3. Si se concibe fa. enunciaciór
como una instancia que prepara el como una instancia de mediació1·
paso de Ja competencia* a la per· productora del discú"rso, es indis-
fonnance* (lingüísticas), de. las es· pensable interrogars~ acerca ·de lt
tructuras* semiótícas virtuales que que es mediatizado péfr esta instan
d~berá a~tualizat: a las.. estruct"..;.ras cia, acerca de las estructuras, vir·
realizadas· bajo la· forma ·de discur- tuales que cOnstituyé~ Ja enuncif\
so. Nosotros Optamos por la se· ción «en ascenSo». El Qebate ins.tau·
gunda definición:·.. sin ser- contradic· rada a este propósita·_está Jejas· d'
tOria ·con la te9Ha semiótica q:ue terminarse, y las pQ~iciones .ldop·
propollemos, per'.~ite la integración tadas se reparten eriii-e la afihna
de esta instancia.. en la concepción ción de la naturaleza.=" simpiementt
de conjtihto. · .:· · . · . paradigmática de la :~lengua» {cor
2. La primer3.:' formulación de la lo que, en rigor, pt_Í:eden ·sa.iisfa.
enunciaCión como instancia . de la cerse los fonólogos de estriCta .ob
!45 ENUNC!AC!ON

servancia), la concepción hjelmsle. procedimientos capaz: de instituir el


viana según la Cual el lenguaje es, discurso como un espacio y un
a la vez, sistema y proceso, y la tiempo, poblado por· otros sujetos
actitud chomskiana que ve en ·las además del enunciadoi-, constituye
reglas de formación de las frases para nosotros, por tanto, la com· ·
(reduciendo, a veces, 'la paradigmá~ petencia discursiva ·eh sentido es·
tica a un simple alfabeto*) lo esen· · trlcto. Si se le agrega a esto el de·
cial de la competencia* lingüística, pósito de las figuras* del mitndo y
En cuanto a nosotros, inclinados a· de las configuraciones* discursivas
tener en ·cuenta· las diferentes ins· que permiten al sujeto de li enun·
tancias -dispuestas en capas· de ciación ejei"cer su saber-hacer figu.
profundidad- del recorrido genera· rativo, los contenidos de la compe·
tivo* global, consideramos· que el tencia discursiva -en el sentido
espacio de las virtualidades semió- amplio de este .término- se encon·
ticas {que Ja enunciación· está lla· trarán provisionalmente delineados.
mad;:. a actualizar)· es el lugar en S. El mecanismo de la enuncia·
que residen las estructuras* semio- clón, del que sólo pueden mencio-
narrativas, forma~· que, ·ru actuali· narse -en el muy confuso estado
zarse como operaciones, constitu· actual de las investigaciones- sus
yen la competencia semiótica del grandes líneas, corre peligro de
sujeto de la enunciación. quedarse inoperante, · si no se ins·
4. Por otro lado·, si la enuncia- cribe en él lo. esencial, lo que le
ción es el lugar Conde se ejerce pone en marcha,. lo que hace que
la competencia semiótica, ella mls- la enunciación· sea tin acto* entre
ma será al propio tiempo la ins- otros, a sabe.r, la intencionalidad.
tancia de la instauración del sujeto Reticentes al concepto de intención*
{de la enunciación). El lugar, al (mediante el cual algunos· tratan
que cabe ·denominar como el ego de fundamentar .el· acto de comu~
hic et nunc, antes de su articula- nicación, basándolo en una «inten·
ción*, está semióticamente vacío y ción de comunicar7. ), aunque sólo
· semánticamente demasiado lleno (en sea porque reduce la Significación*
cuanto depósito de sentido): es la ·a la dimensión consciente (¿qué ·
proyección (con Ios procedimientos ocurre, por ejemplo, con el discurso
que reunimos bajo el nombre· de onírico?), preferimos el de inten-
desembrague*), fuera de esta ins· cionalidad que interpretamos como
tancia, de los actantes* del enun- una· ctconc~pcíón del mundo»; como
ciado y de las coordenadas espacio. una relación orientada, transitiva*,
temporales, que Sitúa al sujeto de gracias a la cual el sujeto constru-
la enunciación por todo lo que no ye el mundo en cuanto objeto, a
es él; es el rechazo {con los proce· Ja vez que se construye .a si mismo.
dimientos · denominados de embra· Se dirá entonC()S, para darle una
gue*) de las nüsmas categorías, des· forma canónica, que la enunciación
tinado a cubrir el lugar imaginario es un enunciado cuya ñ.mci6n- pre-
de la. enunciación, que confiere al dicado se denominaría «intenciona·
sujeto el estatuto ilusorio de cons- lidadl>, y cuyo objeto serla el enun-.
tituirse como taJ. El conjunto de ciado -·discurso.
SEMIÓTICA, - 10
ENUNC!AC!óN -)~NUNCJADO L 146
6. Hay.':.'q~~ ·afiad.ir, . :finai~ente, de sentido, dependienté· de la cáde-
tIDa .últinla ·obse"r,Y;i.clón concernien~ na* · hablada o. del 'fex.to esc:rlto,
te a la .enunciación «en descenso»: previa a cualquier análisis lingüís-
en cuánto acto, tiene como efecto tico o lógico. ·'
producir la serniosis* o, pára ser 2. Por oposición a-. la enuncia-
más precisos, la serie continua de ción* entendida como·:.~cto• de .len-
actos seniióticos denominada mani· guaje, el· enunciado ·és el estado
feStación*. El acto de significar se resultante, independielltemente de
tropieza aqUí conJas coerciones de sus dimensiones sintaimáticas (fra-
Ja. sustancia d.e la .expresión*, que se o discurso). As! defiilido, el enun-
le. obligan a instalar procedimientos ciado comprende, cOri frecuencia,
de· textua"Iización~ (unidimensional los elementos que remiten a la ins·
y lineal, pero tarribién. bidimensio~ tancia de la enunciación: éstos :;on,
nal y'. planaria, etC.). Es e_viderite por una parte, lo~ pronombres per-
que la;enunciación, considerada des• sonales y posesivos,· Jos adjetivos
de el . punto de vista del enW1cia 4
y adverbios apredativOs, los deícti-
tario, :opéra en sen"tido· ·opuesto y cos espaciales y .teniporales, etc.
procede, en primer lugar, a la 'abo- (cuya eliminación* petmite obtener
lición de toda linealidad. un texto enunclvo, c6nsiderado · c_o-
7. Una. lamentable confusión se mo desprovisto da 13.S · marcas*., de
observa con frecuencia entre la la enunciación) y, por Otra, los Yer-
enunciación propiamente dicha, cu- bos performativos* {Que son 'los
yo modo de· eiistencia· es ser el elementos descriptivos; de la ellun-
presupuesto lógiCo del enunciado, ciación, enunciados y! referidos en
y la enunciación· enunci~da (o refe· el enunciado, y que·: pueden ser,
rida), mero simulacro que irllita, en igualmente, considerados como triar-
el discurso, el hacer : enunciativo: cas que ayudan.a é:onccibir y a cons-
el <tYO»,· el «aquí» o «el ahora», en- truir la instancia de 111;· enunciación).
contrados en el dtscurso enunci:ido, 3. Toda teoría sintáctica se plan-
no. representan, en absoluto, al su- tea el Problema de ·lá forma más
jeto, al espac.io ·o al tiempo de 1a simple y, al mismo ~iempo, autó·
enunciación. La enunciación enun- suficiente del enunciado y la im-
ciada · debé ser·· Considerada como pone, después, por decisión axiomá-
una sub-clase de enunciados, que se tica*: 'nosotros la uamamos "enun-
ofrecen como el ·metalenguaje. des· ciado elemental*. Es la clase ·ana-
críptivo. (pero no Científico) de la lizable en comPonente:s; sin ser ella
enunciación. . •·· l .· misma componente de'. ninguna cla-
~ ACTÓ DE LENG't1.A.m, DESEMBRAGUE, se (Hjetrnslev); es la f~áse nuclear*,
~C:tA~ , ~Nri:N6oNALIDAD,. ENUN· planteada como ax!orO~ y condición
CIADO. i· ,,, previa de .su desc'ripciÓn*' estructu-
ral (gramática gen:eratiVa*), etc. No
· ENvNc!ADO. Fi-. lnon~l. ing. ut· obstante, se trate de . Hjelmslev o
terance., .· . . ·. de Bloomfield (y de Chomsky). la
l. En et
sentido general de ..10· concepción del enunciado elemental
que es enunciado:11~ se t!-ntieride por se basa en dos prlnciPios aptiorfs.
enun~do toda magnitud* provista ticos: a) sólo hay - ~ forma de
147 ENUNCIADO

enunciado elemental, y b) la estruc· tencia de dos· termas de enuncia-


tura de dicho enunciado es bina· dos elementales: ·
ria*. Estos principios se re.montan a) enunciados de estado.., repre-
."a Aristóteles y a la no distinción sentados como: «F junción (S;O)»;
entre la lógica y la lingüística; no dado que la j\iñción*, en cuanto·
son ni universales ni necesarios. En categoría*, se articula en dos tér-
lugar de una sola forma, elemen· minos contradictorios -la conjun-
tal del enunciado, puede admitirse ción* y la disjunción*- se hacen
-por ser Ubre la elección de los posibles dos tipos ·de· enunciados
axiomas- que existen dos o más de· estado: conjuntivos (S n C?) y
formulaciones canónicas, según la dlsjuntivos (S u 0);
definición Q.ue se dé de la función* b) enundados de - hacer*, repre-
constitutiva del enunciado. Asi, tan~ sentados como: «F transformación
to en lingüística (Tesniere) como (S; O)»; explican el paso de un es-
en lógica (Rc.ichenbach, entre otros), tado a otro. Cuando un enunciado
es posibl~ concebir y postular ·Ull (de hacer o de estado) rlge a otro
enunciado elemental cuyo núcleo enunciado (de hacer o de estado),
sea el verbo (o la función) definible el priméro se denomina enunciado
· como una relación entre actantes* modal• y el segundo, enwiclado
(o nombres propios): la estructura descrlptivo*.
de un enunciado tal será entonces S. El reconocimiento de la elas-
binaria, ternaria, etc. · ticidad* del discurso -con sus fe-
4. Razones, a la vez,· teóricas (de nómenos de condensación* y de ex-
conformidad con la perspectiva es. pansión*- y del principio de iso-
tructural que Postula la prioridad morfismo* sintáctico (en el nivel de
de las relaciones entre los térmi- las estructuras profundas"") que pue-
nos) y pragmáticas (representación de inferirse de aquélla, permite
más satisfactoria del acto* y, de postular el enunciado elemental co-
manera más· ge.'1er..l, de la organi- mo una forma canónica, apta para
··zación narrativa), nos han llevado rendir cuentas de la organización
a concebir el enunciado, ante todo, de los discursos narrativos. Así, to-
como la relación - función constitu- mando como ejemplo el esquema
tiva de los términos - actantes y a de Propp, el enunciado de estado
formularla como: disjuntivo corresponderá a la <tC3·
F (A1, A,. ... ). rencia iniciab, y el enunciado de
estado conjuntivo, a la «liquidación
El siguiente paso (que ·postula de la carencia»: el enunciado de
una relación de· transítividad* y hacer, inscrito entre los dos, expre-
que se basa en el reconocimiento sará el paso del estado inicial al
de Ja posición simétrica de los ac- estado final:
tantes* sujeto y objeto, . situados F ¡s,--> (S, n O)]
aI mismo nivel estructural, y, a la
vez, en la posibilidad de variar el (la función de transformación* está
vertimiento mínimo de las relacio- indicada por la flecha, y la con-
nes) consistirá en plantear la exi.s- junción, por el signo n). Partiendo
ENUNCIADO· EPISTEME 148
de aquí, formular, en términos de AsJ entendido, el enWlClatario no es
enunciados narrati\IOS, la organiza•. solamente el destinata:r:lo de la· co-
ción dÍ!I discurso ,{y las «i:funciones~ municación, sino también el su)~to
de V. Propp deben ser reescritas productor. del discur_So, al ser la
en primer lugar como enunciados «lectura» un acto* de'.Ienguaje (Un
narrativos) conducirá a darle una acto de significar) rnUy simihh~. al
fo.nna sintáctica ~condensada». Sin de la producción, pro'piamente di·
e"rÍlbargo, es evide:O:te que cada enun· cha, del discurso. El 'término «su-
ciado (o cada:siiitagma* narrativo), jeto de la enunciación•, empleado
debido .al procedimiento de sus ti tu· a menudo como sinónimo de enun-
ción*, ·puede reeñlplazarse por una ciador, abarca las dOs posicione..;
serie de·enunciados en «expansión»; actantes de enunciado.\- y de enun·
de modo Q.ue ef'enunciado de hacer ciatario. · ~t .
se·rá, .a veces, reeinplazado por una --+ .::m.STINADO~
serie de tres enunciados llamada
prueba*. Estas Operaciones de sus· E.PISTEME. Fr. épÚ.témé, i~gié~
tituclón marcan ·1os primeros hitos episteme.
para el cálculo ..de los enunciados 1. La noción de eplsteme adrrÚte.
narrativo~. ·. :· · .. .. por lo menOs, dos definiciones 'po-
~ FtJNCI6N, .TRANSITIVIDAO, · ESTA.DO, sibles. Por una· parte, '.puede .-desig-
HACER; JUNCIÓN,. TRANSFORMACIÓN, MO- narse con el nombre.:· de episfeme
DALIDAD, PROGRAMA NARRATIVO, SINTAXIS a la organización jerárquica {situa.
NARRAnvA DE 'SUPERF!CIE, DISCURSO. da en el nivel de la·s estructuras
semióticas profundas~:) de Varios
ENUNcIADOR / ENUNCIATARIO. sistemas* semióticos,:·: capaces de
Fr. énonciateur / ¡Jnonciataire, inglés generar -con ayuda ·:·-de una com-
enúnciator/enunciatee. - La ·estruc· binatoria* y de las reglas* restric·
tura de la enunciación*, corno tivas de incompatibilidad""- el con-
marco. iq"tplicito -y lógicamente pre~ junto de las manifest:iciones (i:ea-
supuesto ,por la existencia del enun- lizadas o posibles) ·comprendidas
ciado, comprende dos instancias: la por estos• sistemas en una cultura
del enunciador y. la del enuncia· dada: una nueva seri~ de reglas de
tario. Se Ilarna·rá enunclador al des· _ restricción debe permitir limitar
tinador* implícito de la enunciación la manifestación a laS estructuras
(o de la «comunicación»), ~stin· de superficie"" efectivamente reali·
guiéndolo así del narrador* -equi· zadas. Es a.si, por ejemplo, como
parable al .ryo:o, por ejemplo- que A. J. Greimas y F. R.a.stier han' in·
es un actante* obtenido por el pro· tentado construir una ·~isteme, Ór·
ce~ientp de desembrague* e ins- gani.zando jerárquícani'.ente Jos sis·
talado explícitamente en el discur- temas semióticos qrie formulan· las
so. Paralelament~. el enunclatarlo relaciones sexuales, SOciomatrimo-
coi-responderá al i:Iestinatarlo impl{. niales y económicas eri el universo
cito de la enuriclación, a diferencia cultural francés tradícJonal.
del narratarlo* (Por ejemplo: «EI 2. Puede, igualmente, definirse la
lector comprenderá · que.•. :o). reco- episteme como una métasemiótica""
nocible como tal· en el enunciado. de Ja cultura*, es. de<,:,ir, como ta
149 EPISTEME • EPISTSMICAS

actitud que una comunidad socio- resolver sobre su inmanencia* (su


cultural adopta con relación a sus ser o su no-ser): el juicio episté-
prcipios signos (cf. J. Lotman, M. mico es, de este modo, una astm-
Foucault). As[, por ejem:Plo, para ción de lo nouménico* a partir de
la cultura medieval, el signo es lo fenoménico* interpretado.
esencialmente metonímico y remite 2. Desde el punto :de vista semió-
a -una totalidad subyacente, mien- tico, puede hablarse de una estruc-
tras que, para la cultura del siglo tura modal epistémlca cuando la.
de las luces, es 11naturab y denota modalidad del creer* determina un
perfectamente las cosas. Es tam· enunciado de estado·(que tiene co·
bién desde esta perspectiva desde mo predicado un «ser»/«cstar>1 ya
donde R. Barthes h~ podido decir modalizado). La proyección de· di·
que el signo saussuriano es ubur- cha estructura en el cuadro* semió-
gués~. La ·episteme, así concebida, tico permite la formulación de la
debe ser considerada, entonces, co- categoría modal epistérnica:
mo una metasemiótica connotativa.
~ OONNOTACIÓ~, SEMIÓTICA. cerlidumbr<:x· ;mprobabi/idad .
(C«:Ct·$et/cstar} (eree:r no su/estar)

EPISTSMICAS (MODALIDADES probabilidad lnctrt;dumbrt


-). Fr. modalités épisté.miques, ing. tno ercl!f no ser/cst~r) (no c:ree1·~CT/es1>1.r).
epistemic modalities.
1. Las modalidades eplstémlcas Es fácil ver que cada uno de los tér·
emergen de la competencia* del minos del cuadro puede ser consi·
· enunciatarlo* (o, en el caso del dis- derado como un valor* modal (ser/ i.":'
curso narrativo, del Destinador* estar denominado) o como una es.- e·
final) que,· después de su hacer in- tructura modal (ser/estar sintácti~
terpretativo*, «toma a su cargo», ca mente definido}.
asume (o sanciona) Ias posiciones 3. Nótese que, a diferencia de las
cognoscitivas"' ·formuladas por el modalidades aléticas*, por ejemplo,
enunciador (o sometidas por el Su· en las cuales la ópo.sicióu posible/
jeto). En la medida en que el. enWl· imposible corresponde a una con·
· dador ejerce un hacer persuasivo* tradicción* que excluye por com·
(es decir, un hacer-creer) dentro del pleto un tercer término, la catego-
contrato* enunciativo (implícito o ría epistémica sólo comprende opo-
explícito), el enunciatario, por su siciones graduales y relativas que
parte, concluye su hacer. interpre- permiten la manifestación de un
taüVo cOn un juiCio CpistéiñíCO (es gran número de posiciones inter·
decir, con un creer) que versa so- medias. Este estatuto pa~icular de
bre los enunciados* de estado que las modalidades epistérnicas no hace
le son sometidos. Si~ embargo, y sino <lar paso a una nueva proble-
este hecho hay que tenerlo en cuen· máticii, la de la competencia epis--
ta, el enunciado que recibe -sean témtca: el jtiicio epistémico no de-
cuales fueren sus modalizaciones pende solamente del valor del hacer '
anteriores- se le presenta como interpretativo que se supone pre-
una manifestación• (un parecer o cederlo (es decir, del saber referido
un no-parecer) desde la cual ha de a las modalizaciones verldictorlas"
EPISTJ;M!CAS-EQUIL!BRIO 150
del enunciado}, sinó también. -en teorla bien· formada. ~~endo del
una medida que:· queda por deter· material (o lenguaje-:objeto) estu·
minar- del ·querer - éreet y del po- diado (considerado coµio nivel _l),
der - creer ··del sujeto episténiico. se puede situar en un Primer lugar
4. El.discurso con propósito cien· el plano de la descripción* (nivel 2)
tífico (en ciencias humanas)· se ca- que es una representación metalin·
racteriza. entre .otras.cosas, por Wla güística del nivel 1, y el de la me-
(sobre-) abundancia de modalizacio- todología (nivel- 3) qL1e define los
nes epistémicas que parecen querer conceptos* descriptivos. La episte-
suplir la careÍlcia de procedimien- mología se ubica en ~· plano jerár.
tos de verificación*; por·otni:parte, quicamente superior (riivel 4): a él
sucede· algo parcialmente semejante le corresponde criticar· y verlfi.1.-3.r
en· las ciencias ex:perimental~s y en la solidez del nivel inetodológico
los discursos de >descubrimiento*, examinando su cohei-'Cocia y mi·
que exp·erimeritai:i~:'difieultadtis para
diendo -su adecuación*: en relac.ión
verificar ~us hipótesis. Así es como con la 'descripción, y e_V:aluar, eni:re
el concepto. de ic'eptabilidad*, ade- otros, Jos procedimieñtos de des-
lantado por l'a: gramática generati- cripción y de descubrimiento*.·.
va*, corr~ponde ·~en su suma a un 3. Toda t~oría desCansa en ·un
juicio epistémico, basado en la mo- número más o menos'.: elevado de
dalidad del poder*, juicio que sólo conceptos no definido$ que se jn-
puede ser· relativo ·(y jamás categó- · corporan a lo que :g-e denomina
rico). · inventario eptstemotó&ico; sin em-
.....+ CREER, MODALIDAD. bargo, la teoría debe:_-.tender a re-
ducir al mínimo el núirtero de· estos
EPJSTEMOLOG!A. Fr. épistémcr conceptos -gtacias, en pai'ticular,
Jogie, ini.· epiStemotogy. a las interdefiniciones: (que· asegu·
l. La i!plstemÓlogfa es el análisis ran la coherencia}- y:· de este mo-
de Jos axiomas*, de las hipótesis* do,· permitir alcanzar·: el mínÍmo
y de los procedimientOs*. incluso epistemológico · indispChsable (cuyo
de los resultadas~ que · especifican principio es que el núñiero de pos-
a una ciencia determinada: en efec- tulados impJfcitos sea' el más débil
to, la epistemología se plantea co- ¡;asible). ·-.~,
mo objetivo examinar la organiza.
-> TEORú., COHERENCIA;.;
cióri y el funcionamiento de las
consideraciones científicas Y apre-
ciar su valor. Así coilcebida, ··la EQUILIBRIO. Fr. t!{¡uilibre, ing.
epistemología no deberja confun· equilibrium.
diise con la .metodología* ni con 1. Anticipado por ia lingillStiCá
la teoría del con.Ocimiento (o gno. diacrónica, el prlncipiO de equill.
seOlogia) ..:...también denominada a brlo, aunque de naturaleza tcleoló-
veces epistemología- que estudia, 5ica, permite explicar -.las transfor.
deSde el punto de vista filosófico, maciones diacrónicas -de- los siste-
la ·relación enµ-e.' sujeto* y objeto*. mas semióticos: intrOducido Por
2. El nivel,¡. epistemológico es Trubetzkoy, ha sido ,asumido por
una caracterísÜcá esencial de toda Benvenlste y Martinet':"- ·
151 EQUIL!BRlO • ESCRlTURA

2. Toda estructura* se sitúa en de la gramática generativa*, dos


un estado de· equilibrio relativa- frases se denominarán equivalen·
mente inestable, como resultado de tes, si mantienen entre sí una rela·
la influencia de factores externos ción de implicaCión* recíproca (por
{y, especialmente, de las tendencias). ejemplo, activo/pasivo).
Si !a comparación de dos éstados* 2. Desde el punto de vista se-
sucesivos. sirve efectivamente para mántico, la equlva.lencla correspon·
preci~ar la naturaleza de las trans- de a una identidad* sémica* parcial
formaciones* intervinientes, esto su~ entre dos o más unidades reconoci·
cede porque el principio de equili- das. Posibilita el anáiisis semántico
brio demanda otro postulado no al permitir la reducción* .de los
definido, a saber: un sistema· des- parasinónimos*,· y al evidenciar las
equilibrado tiende a volver a un diferencias*, nos ayuda a compren-
nuevo estado de equilibrio (idéntico der el funcionamiento metalingüís·
o diferente}. tico del discurso.
3. En la estructura* elemental · 3. En el análisis del discurso, que
de la significación, los términos* de postula varios niveles (según el es-
la segunda generación, según V. quema del recorrido generativo*),
Br0ndal, pueden presentarse o bien se reconocen entre éstos relaciones
en estado de equilibrio (término de equivalencia qxplicables por los
complejo*), o bien en desequilibrio: procedimientos d<i co·nversión* (o de
en este último caso serán predomi- transformac\ón* vertical): partiendo
·nanteimente positivos (término com· del nivel · más abstracto hacia los
plejo positivo) o negativos (término niveles más concretos, nuevos coni~
complejo negativo). El desequilibrio ponentes (antropómorfo, figurativo,·
presupone un recorrido sintagmá. etcétera) se agregan y se desarro·
tico en el cuadro* semiótico (crea· llan sobre un fondo de identidades
dor de nuevas posiciones). constantes.
4. En semiótica narrativa, se ha· ~ IDENTIDAD, CONVERSIÓN, TRANSFOR·
blará de equilibrio narrativo cuan· MACIÓN.
do et esquema se articule por la
estructura del intercambio* o, más ESCRITURA. Fr. écriture, inglés
generalmente, por la del contrato"' writing.
(con su ejecución por las partes l. se entiende por escritura la
contratantes). ·manifestación de una lengua* na-
1
~ 'ECONOMÍA, DIACRONÍA, PREDOMINIO, tural con ayuda de un significante*
cuya sustancia*. es de naturaleza
EQUIVALENCIA. Fr. équivalence, visual y gráfica (o pictográfica).
ing. equivatence. Existe una controversia sobre el:;i.
l. En lingüística, dos gramáti· carácter derivado o autónomo dt:'°
cas* son consideradas como equi. la escritura en ·relación con la ·ex·
valentes si, formuladas en dos me· presión oral: Ios defensores del es·
talenguajes* diferentes, pueden for· tatuto derivado (R. Jakobson, por
mal izarse* con ayuda de· dos siste- ejemplo) se apoyan:en· los datos de
mas formales isomorfos*; a un ni· la historia de la escritura, mientras
vel más restringido, y en el ámbito que la afirn:iación de su autonomía
ESCRlTURA·.ÍlSPACIALIZACióN .¡52

cL. Hjelmslev) modifica las ·investí· tructuras discursivas :·:·del texto, la


gaciones con·miras al establecimien· esc.dtura permanece todavía como
to: de un!i tipolog:ía. · objeto de una comprensión intui-
·2. Una · tipología .de las escritu- tiva y dudosa.
ras, .iún provisioµal, ·permite dis· ~ SOCIO~, EMBRAGUE.
tinguir: entre las: mismas. ties gé-
neros:·· :.· :·: . :1; ·, ESPACIALIZAClóN•. :-Fr. .spatia.li-
a) una ·escritura narrat1va (o sin· sation, ing. spatializ.at(on.
tagmáticii), ·donde cada'' rasgo ·co- 1. ·No obstante el favor de que
rresponde a un enunciado narrativo goza actualmente Ja· 1iOción de es·
(esquimales- e· ind19s de Alaska); pacio"', el e.ampo, seniántico Com·
b) una escritura morfemátlca (o prendido por este tétmino penna·
an:!Htica), en la que a cada grafema nece ambiguo e incie'rto. Diversas
Je ·corresponde un signo- morf'ema semióticas lo utilizan~'~ su modo,
(escrlturas china, egipcia, etc.);. sin que se derive de ello, empero,
e) una eScritura fonem,dca que un esfuerzo de reflexión compara-
establece. la correspondencia entre . tiva y global. "
giafemas ·y fonemas (lenguas occi- 2. En el recorrido gerierativo* :in-
deritales; por' ej~nlpto); La historia tegral, la espacfaJlzacfón apareCe
de~ la'l escritura, ~insuficientemente como uno de los componentes de
conocida; mUestra:·Daturalmerite que la cliscursivización* de·las estructU·
Iós' tipos de· escritura· Cen .estado ras semióticas más prOfundas. La
puro,, -son 'raros Si no· inexistentes. espacializaclón comprende, en Pri·
3,. En senúótica literaria, el tér- mera J!nea, los procedimien'tos de
mino '«escritut'a»; · tomado de ·los localización* espacial, ii)terpretables
Goncotirt, ha sido introducido y po· como operaciones de disembrague*
pularlzado por R:: Barthes. Víctima y de embrague* efectuadas por el ·
de su éxito -....:aprovechado' por· la enunciador• para proyectar fue.ra
critica ·literaria (pero· también por de si, y aplicar en el dis'curso ~ enU'tl·
las otras artes) y, más recientemen~ ciado, · una organización espa;ci3I
te, por la filosofía del lenguaje (J. cuasi autónoma, que sirva de mafco
Denida)-, el conCi;ptO de esq:i.tura para inscribir los programas* narra·
se ha Volatilizado· ·~n buena 'parte tivos y sus encadeoamie"ntos. La eS-
y resulta, a pesar de sus promesas, pacializadón incluye, pc;;i: otro lado,
de .ima eficacia operatoria* muy dé- los procedinúentos de piogramación
bil. ;,_·En cuanto Propjedad dél uni- espacial, gracias a Jos cU'aies se re~-·
versO sociOiectaI•, Ja escritura pue- · liza una diSposici6n Hn.eal de los.
de ser opuesta al estilo* que carac- espacios parciales (obtenidos por
teriza. al universo idiolectal*, aunque , las localizaciones)· conf9rme a la
Ja naturaleza de esta oposición ha programación temporal ·.de los pro-
dado lugar a diversas inteZ'pretacio... gramas narrativos.
nes. Manifestación jterativa Y. este- 3. La localización esp'iicial, situa-
reotipada de las fbrmas literarias da en la dimensión pragmática*
(Ja escritura ciáSica, por ejemplo, del discurso, debe ser. distingujda
puede ser caracterizada p<;>r Ja me- de la espaclallzaelón c9gnoscltlva
táfora), situ.ada a n'ivel · de las es- que consiste en verter ·riropiedad~s
153 ESPAC!ALIZAC!óN • ESPACIO

espaciales (cf. .el .«ver;11o, ·el «escu- geoniétrico (con evacuación de cual-
cbar11, el cidecirll, el «tocar11, etc.) en quier otra propiedad). desde el pun·
las relaciones cognoscitivas'· entre to de vista psicofisiológico (como
los diferentes actantes (entre suje- emergencia progresiva .de las cua·
tos, pero también entre sujetos y lidades espaciales a partir de la
objetos). El análisis discursivo, que confusión original) o desde el pun·
trata de reconocer y ordenar tales to de vista sociocultural (como la
hechos de la espacialidad, · se en- organización cultural de la. natura·
cuentra capacitado, en cambio, pa- tez.a*: por ejerXiplo, el espacio cons·
ra instituir una dimensión cognosci· truido). Si se tienen en cuenta, en
.tiva*, superpuesta a la .dimensión su totalidad, los diferentes empleos
· pragmática pero no homologable metafóricos de esta palabra, se coro·
con ella. probará que la utilización del tér-
4. ·. La nocióri de · espacialización mino espacio · requiere una gran
cognoscitiva introduce la problemá· prudencia por parte de quien tra·
tica de la proxémica*, disciplina baja en semiótica.· .. ; ·· .·. ·
que sitúa su proyecto fuera de la 2. A medida que la semiótica in-
semiótica discursiva. Tratando de troduce dentro de sus preocupacio-
analizar las disposiciones de los nes al sujeto considerándolo como
sujetos y de los objetos en el espa- productor y coino ·consumidor de
cio, en Una perspectiva que no es espacio, la definición del espacio im-
ya la de la· descripción de la' espa- plicará la· participación de todos Jos
cialidad sino la del aprovechamien- sentidos, exigiendo ·tener en cuenta
to· del espacio para los fines de la todas las cualidades ·sensibles (vi-
significación, la proxémica plantea suales, táctiles, térmicas, acústicas,
el problema de los lenguajes ·espa- etcétera). El objeto-espacio se iden~
ciales-. que utilizan las· categorías. tifica entonces, en parte, con el de
espaciales para hablar de cosas· que la semiótica del mundo* natural
nada tienen que -ver con espacio. (que trata no sólo ··las significacio-
~ ESPACIO, DISCURSIVIZACIÓN, DESEM· nes del mundo, sino también . Jas
B:RAGUE, LOCALIZACIÓN ESi>ACIO--TEMl'()RAL, relaciones con· 1os comportamientos
FROGRAMACIÓN BSPACIO·TEMPORAL, ; COG· somáticos del 'hombre), y la -explo-
NOSCI!IVO, PROXÉ.Ml.CA, · ' ración del espacio no .- es más que
la construcción explícita* de ta) se-
ESPACIO. Fr. espace, ing. space: miótica. Sin embargo, la scmlótlca
l. El término espacio se utiliza del espacio se distingue· de la se·
en semiótica con diversas acepcio- miótica del mundo .natural porque
nes ·cuyo denominador común serla trata de explicar laS transformacio-
;·_
su consideración como un objeto nes que sufre la semiótica natural
construido (que comprende elemen- por la intervención del hombre que,
tos discontinuos) a partir de·la e;-t;·. al producir nuevas relaciones entre
tensión, entendida ésta como ·una los sujetos y los· objetos «fabrlca-
magnitud plena, llena, sin solución dos:IJ (en los que se han vertido nue~
de continuidad.. La · construcción vos valores). Ia sustituye -al· me-
del .obj~to-espacio puede= ser ex:a· no:> en parte- por las semióticas
minada, desde· el ·punto de -vista artificiales. ·< 1 .··
ESPACIO' ESQUEMA 154

i :En uÜ Sentido más restrl.Dgido cienes relativas a la:r'construcción


del término, el esPacio sólo se. defi- de la dimensión prÚspC'ctiva, al cén.
ne· por -Sus ' p·ropiedades 'Visuales, tralizar la atención d~ los investi-
Así es ·c0mo la· $Cmiótica ·de la ar- gadores, explican, qu!:iá. en parte,
quitecfura (y, a· veces, . incluso, .Ja un cierto retardo en Ja semiótica
del urbanismo) delimita voluntaria- planaria.
mente ,su Objeto considerando ·sola- . 5. Además de Jos "Conceptos · de
mente las formas, los volúmenes, espacialización* y de:")ocalización•
y sus relaciones recíprocas. Sin em- espacial, la semiótica:· narrativa y
bargo, como conviene tener en cuen- discursiva utiliza también el de espa·
ta. a los sujetos humanos que son clo cognoscitivo*.: explica cómo se
quienes Utilizan los espacios, se exa- ins·criben en el espacl9_ las relac;io-
minan· sus comportamientos prOgra- nes cognoscitivas entré sujetos (ta-
m~dos • Y se los pone · ~ . relación . les como: ver, escuchar; tocar, :acer-
con el"· uso que ellos hacen .del es- carse _para escuchar, etc.).
pacio. Esta inscripción de Jos pro- :.., MUNDO N•.\Ttm.u., F.SPACIALIZACróN,
gramas* narrativos eh los es¡:)acios LOCALTZACIÓN ESPACIO• TÉMPORAL, COC·
segmentados constituye 1a Progra; NOSCITIVO, OESl'.!MBRAGUE.:
mación* espacial, de orden funcio-
nal; ella aparece actualmente como ESQUEMA. Fr. schéiiia, ing. sche·
el componente d-e. la semiótica del ma.
espacio que ha adquirido cierta efi- 1. El término esqu~_ma se utiliza
cacia operatoria*. ··si se ·abstrae su para designar la representación* ct~~
carácter funcional, esta· programa- un objeto semiótico reducido a sus
ción . COrrE.:Spondc,, grosso · modo, a propiedades eSenciales:·
los- modelos de tjistribución espa· 2. · De este modo, L. H}elmslev
ci8.l empleados en los 'análisis de introdujo la expresión'. .de esquema
los discursos narrativos. Iingüísttco como· sustituto de la
4. Con una restricción suplemen- lengua* saussuriana,' Oponiéndolil al
taria, el·-espacio· . s·e encuentra defi- uso lingüístico que reemplaza, ven-
nido sólo por su-trldhnenslonalidad, . tajosamente en su opinión, al Con~
al valorizar .··muy. particularmente cepto de habla* juzgadp como· teó-
uno de sus ejes·o. Ia prOspectividad ricamente insatisfactorio. Esta dico-
(cf. la perspectiva en "pintura), que tomía, apJicada úni~_inente a la$
en. el ·discurso narrativo correspon- lenguas naturales, "puede ampliarse
de a · Ia linealidad* del texto que a las otras semióticas:· en tal caso,
sigue el recorrido del sujeto. Por el esquema (o la formá*, en sentido
su lado, la semiótica planarla* (bi· saussuriano) se opone;:: a la sustan-
dimensional) está·. llamada a expli- cia*•
car, desde una superficie que sólo .3. Nosotros hemoS: · tratado dC'
es. un coitji.tntO ·de configuraciones aprovechar la dicotoniía esquema/
y de lug3.res. ilulninadoS, la instala-. uso en semántica general: si se de-
ción de los procedimientos· que per· signa ·con el nombre de esquerri..a a
miten dar al sujeto (situado enfren- la combinatoria* sémica abierta de
te de .la superficie) la ilusión de un . que dispone una cultura como con·
espacio prospectivo. Las preocupa·· junto de virtualidade's, el término
155 ESQUEMA-ESTILtSTICA

uso servirá, entonces, para denomi~ ración (se trata, entonces, de una
nar la combinatoria restringida y aproximación empírica y trivial):
cerrada, es decir, el conjunto de b) ya como dos estructuras lin·
las combin'aciones (o de las expre-- gUísticas acrónicas*· dependientes de
siones*) semémicas tal y como efec-- una tipología de las lenguas (L.
tivaroente se produce. Hjelmslev);
4. En sentido estricto, se deno- ·c) o, finalmente, como dos esta·
mina esquema, de entre las dimen- dos de equilibrio* relativamente in·
. siones* del cuadro semiótico, a la estables: las tendencias reconocidas 1
que. reúne dos términos · contr<:.dic- en el primer estado aparecen, gra-
torlos*. Se distingue un esquema cias a esta comparación, como so-
positivo (cuyo primer término per- luciones realizadas en el segundo ·
ténece a la deixis* positiva) y un (~. Benveniste). · . · ~;·
esquema negativo (cuyo primer tér- Estas consideraciones lingüísticas "
mino está situado en la deixis nega- pueden, evidentemente, aplicarse' al
tiva). La denominación elegida con estudio de las transformaciones de
ese propósito. es semi-motivada, ya los sistemas semióticos en general.
que alude a la c:,oncepción · de la 3. El discurso y; ·.más particular~
forma semiótica como hecha de ex- mente, el discurso narrativo pueden
clusiones, de presencias" y de ausen- ser considerados como una serie
cias.· · · .. , ... de estados, precefü.dos y/o seguidos
-)o uso,
CUADRO SEMIÓTICO. [Para el de transformaciones*. La represen~
ESQUEMA NARRATIVO, cf. NARRATIVO (es- taclón lógico-semántica de dicho diS·'
quema -).] curso deberá, pues; introducir enun. 4

ciados de estado qUe correspondan


ESTAl>O. Fr. état, ing. state. a las funciones* entre sujetos y oh·
1. El término estado puede ho. jetos, y enuncia<;tos. de hacer* que
Íno10garse al término continuo*, y expresen las transformaciones.
el. término discontinuo, que 'intro- -')o- DIACRONÍA, ENUNCIADO, SINTAXIS
duce en aquél la ruptura, es consi· NAlUlATIVA DE SUPERFICIE.
derado como el lugar de la trans·
formación*. ESTAR/ SER (cf. SER/ ESTAR).
2. Para explicar las .transforma· Fr. étre, ing. being._
ciones diacrónicas*, la lingüística
utiliza el concepto de estado de len• ESTIL1STICA. Fr. Stylistique, ing.
gua· (o estado lingüístico): las trans: stytistics; '
formaciones acaecidas sólo pueden 1. La estlUstlca es un canipó dé
ser descritas si se· postula, de par· investigación inscrito en la tradi 4

tida, la existencia de dos estados de ción de la retórica*, pero que no


·lengua sucesivos. Estos estados de se atestigua, en general y concreta~
· 1engua se definen de diferentes ma· mente en Francia, hasta finales· del-'
neras: siglo xxx. Esta disciplina; al invo-·
a) ya como dos cortes sincróni· car tan pronto ·a la lingüística to-·
cos*, efectuados en la "continuidad mo a los estudios· literarios, no ha
histórica y separados por cierta du· logrado organi7.arse ~orno disciplina
ESTIL!STICA ·ESTILO : 156
1
alltónoma. Inténta'.. en lineas gene- tiéos aplicados a mu"Chbs textos,
raieS, reconocer y clasificar los pro- principalmente desde ·el punto de
cedlm.lentos* ~tltísticos, hechos tex· vlsta del vocabu1ai'lo*· -Y, enton-
tuales '.COmparablés a·· las figuras* ces, estamos frenté a la estllist,lca
de retórica.' Sin 'effibargo,· Ja Jnter· estadística de P." Gira~d-, ya S;(,!a
pretación misma de tales. procedi- prestando fe al «infor-mante-lector,.
mientos es .lo que~·. presenta dificul· (el español o ~el francés medio in-
tades y ·suscita cl)v"ergencias µentro teligente», según M. ·:.Riffaterre).
de .la propia eStilistica:·, ; '·. Incapaz,.,en el estado ~C.tual de .s:Us
a) Los procedirrli~tos eStiHsticos investigaciones, de defiriir la norma
pue:;den estudiarse·· en sincronía y de un· discurso literario_, y, a lu vez,
ser reunidOs en ei · ((siste'ma ·de los decepcionante por los... medfoa;es
medios de'. expf:esió:p. de una lengua resultados que ha obtenido, la esti-
dada»,·1.¡,::sisterna1> que aparece, en· lística de las desviaclÓnes ha sido
tonces, como subyacente a la ma· abandonada por ·sus Propios · pro-
niff!stacióI{·lingüístjca de los fenó- motores que tratan ahora de. ela-
menos ·de· sensibilidad, de afectivi· borar una estilística esb:uctural ·{M.
dad. Se trata, en. este e.isa, de la Riffaterre), más próxi~·¡:i. a Ias. pre-
estliística lingiifstlca tal como ln ocupat:iones semióticas".
· concibe Ch. Ba.IIY. ¡ .. 3. En semiótica, se éalificatán ·de
b) Partiendo . de la. concepción estilísticos los hechos ,.estructurales
dei estilo* ·como «e:Stilo del -autor:., dependientes tanto de Ia forma qel
cabe considerar al conjunto de--10s contenido* como de la forma de la
procedimientos, re~.ertoriados y ana- expresión* de un discu·rso, situados
lizados en· una· obra, como infornui.- más allá del nivel de .. pertinencia*
ción de la «visión del Ili.undoi> de escogido para ·Ia desCripción"", la
su· autor; semejante: interpre·tación misma que, por lo t3nto, no los
da ya una. idea de lo que puede toma en consideraciórl:· En efecto,
ser una estUíst:fca ·. lfterarla (repre· dada la complejidad de;la organiia-
sentada, por ejemplo, por L~ Spit· ción sintáctica y semáritica de Jos
zer). . · . -··textos (sobre toáo liférarios), ·el
2. Estas ·dos consideraciones en· analista está obligado, ·por razorieS
cucntran, i10 obstante, una dificul· de estrategia, a adop!.~lr un solo
· tad· metodplógica inayor a nh~el del punto de vista y ·poñér, así, \.í.ll
reconocimiento* -que no sería ya límite a su descripción, ~dejando de
intuitivo- de los procedimlentos lado -al menos provisionalmente-
estilísticos y de.~· evaluación (que Ia multitud· restante de: .hechos tex*
permita· ·distinguir 16s más signifi- tuates. La froritera entl-é Semántica
cativos,· o ·.Jos máS · •irnportantes1>).y estilística es, en conS~cuencia, de
En estas circunstancias· hace · acto orden operatorio* y nb categorial:.
de presencia una ·eStiJfstica ·descrip- -?- ESTILO, PROCEDTM.IENTQ Emúsnco,
tiva, fundada. ,en .-la' definición del EXTRACCIÓN. .
procedimiento .cOmo · desviación*.
(con· relación a Ja· norma*).· La des- ESTILO. Fr. style, ing. style.
viación =puede. rec:onocerse· ya sea 1. El término ·estllo 'proviC.ne de
por medio de toS \inétodos estadís· la crítica literaria y es e,Hfícil. si .no
157 ESTILO • ESTRUCTURA

imposible, dar una definición semió- gramación* en sentido extenso (es


tica de él. Mientras que en el si- decir, el establecimiento de los pro-
glo XVIII el estilo se hallaba vincu- gramas* narrativos complejos, enca-
lado a una perspectiva sociolectal* minado a la construcCión, la circu·
y correspondía -en la tipología de lación y la destrucción de los obje-
los discursos- al concepto sociolin· tos* de valor, y también a la ins-
güistico de registro*, en 'el siglo XIX tauración de los sujetos i!elegados,
deviene. la característica personal encargados de ejecutar los progra-
de un· escritor y· se aproximá a la mas narrativos anexos) y, por otra
concepción actual del universo idio- parte, la manipulación*, propiamen-
lectal. ··· te dicha (esto es, el ejercicio del
2. En sus primeros escritos,' R. «hacer-hacer» que lleva .a los anti-·
Barthes trat& de definir el 'estilo sujetos a construir y a realizar. Jos
contraponiéndolo a la 'escritura. Se- programas narrativos deseados, en
gún él, aquél sería el universo idio- realidad, por los sujetos). En ambas
lectal regido y organizado por nues- direcciones, la estrategia se apoya
tra categoría tímica* euforia/ disfo- en las instancias de la :Sintaxis* na- ·
ria ( = un conjunto de atracciones rrativa que tratan: la colocación y
y de repulsiones) que estarla sub- el. funcionamiento de 'los recorridos
tendiéndolo. Pero mientras·· la no- narrativos*. Convendría, tal vez,.re-.
ción de escritura ha tenido un éxi- servar el término para la instancia
to de todos conocido, la ·de ·estilo superior y ·última ·de la organiza·
parece no haber sido aprovechada ción narrativa, situando en ella el
ni investigada en profundidad des-
de entonces. .... ~,., ~::~~t~: l~~s q:e0~:án~ep~;1!J:: ~;.
-+ IDIOUi.CfO, ESCRlTURA.·· ·· ·~ plo, ··los recorridos1 narrativos*• o
unidades sintácticas 4e dimensiones
ESTRATEGIA. Fr.· stratégie,'· ing. extensas.;· .,,.,, ,,, ., ,
strategy. •; .,.-')- NARRATIVO (recorpdo -).
1., Tomado, analógicamente, de la
teoría de los juegos, el término es- ESTRUCTURA. Fr. structure., ing.
trategia se introduce poco .-a poco structure. · , · ·· 1
en semiótica, donde ocupa un ·cam-
A. Sentido generai.;' ··.
po problemático, de · contornos to-
davía bastante vagos. Ya de entra- ·l. Sin entrar en-la.<> controversias
da, seria necesario diferenciar la filosóficas e ideológicas que ta no-
estrategia discursiva ·-por la ·cual ción de estructura continúa provo-
el sujeto de la enunciación* proce- cando, es conveniente precisar los
de a la discursivización* de· las es- elementos constitutivos de la defi.
tructuras narrativas- y la estrate- nición de este concepto,· situándola ,!.
gia narrativa que apunta a elaborar en el ámbito de la ling'ii{stica* es;. ·
los · esquemas : narrativos* a partir tructural que ha logrado darle un
de los cuales se puede· prever la carácter operatorio~. Volviendo a
generación de los discursos. '": tomar, en sus grandes líneas,·· la
2. · La estrategia narrativa parece formulación que de ella ha dado
comprender, por una parte, la pro-- L. Hjelmslev, se considerará a· la
ESTRUCTURA 158

estructura· como uri.a ·.entidad :autó· definir ·esta última-, dá:ndole algu.
nonia de relaciones*· internas, cons· rias veces una coloración ligeramen-
tituidas ·en jerarquías*. Para ·hacer te mecanicista (Bloomfield) o feno-
explícita e:Sta deíiniCión, veamás uno menológica (Hjelms1ev) Y. otras ve-
a uno fados· -Sus elemeri..to:S: ces, algo organicista (Benveniste),
·a) tal concepción implica la prio- enriquecen, más bien, los instnt-
ridad otorgada> a las relaciones· en mentos" epistemo-metodO}ógicos sin
detrimento de 'los eiementos*: una~ Perjudicar su carácter oPeratorio.
estructura ·es, "en 'principio; una red 2. Semejante concepCión de la
relacional Cuyas intersecciones :éons· estructura constituye un trasfondo
tituyen Io's '·ténril.nos; ·: · : . ¡ . de la teorfa semiótica*,. una «acti·
b) lar red: relci.cionat,·'· Q.ue· defirie ttid científica» desde Ja que Se dise-
Iii. · estructura, es una ·jerarquía,. es ñan lo's trámites del bi.vestigador.
-decir, una magn·itud descÓmporuOle En sí c6nsiderada, Ja es·~ructura no
en· partes· qUe, al estar relacionadas es la Propiedad específica de Ja· se-
entre sí;:· mantienen relaciones con miótica ni siquiera de :las ciencias
el todo que eilas Cónstitul•en;··';i ·· · humanas tomadas en conjunto; con
e)·· la 'estructura es· un.a entidad algunos pocos reajustes,' podría de-
autónoma, o' io que es igual, ··man· cirse Que se halla · implicada en
tiene relaciones de dependencia y, todo proyecto o empresa con ob·
·al misn:io tiempo, de interdependen· jetivos científicos. Es, sobre todo,
cía con ·el· conjunto más vasto de! la dificultad que ·experimentan las
que forma parte, está dotada de ciencias del hombre al· pasar del
uña organización jnterna que le es estadio de las «opiniones• al de las
proP,ia; .·; -«disciplinas», lo que h3 conducido
· d) Ja~ estructura es· una entidad, a Ja lingüística. -en un momento
esto es, una magnitud cuyo estatuto crítico de su evolución..:'.. a explici-
ontológiCo se resiste al análisis> pero tar Jos principios sobre·, Jos que se
ha de ponerse entre paréntesis, con basa su propio hacer. Añadamos,
·el fin de hacer operatorio dicho por· lo demás, que una: definición
:;
concepto. así de la estructura no es directa-
Así pues, fa cuestión de saber si mente operatoria: de tii;O muy ge-
las estructuras son ··inmanentes* al neral, se aplica a todo· coiljunto
objeto examinado ·o ·si son coi-is. que se supone organizado o que si•
trucciones* resultan~es de · la acti- tiene la intención de organizar. De·
vidad cognoscitiva ·~el sujeto. cog- finida como red relacional, Ja es-
noscente;' ·debe ser· .excluida de Jas tructura alude al concePto de rela-
preocupaciones prOP:iamente semió- ción* Y presupone, pata.· ser eficaz
.ticas, por más. fun~a:mental que sea en semiótica, una tipolO"gia de las
desde el pi:lnto de Vista filosófico, relaciones. Considerada· como .red,
De 1a · misma mariera, · Jos . presu~ no nos informa ni sobre· su anipli_·
puestos , filosóficos que · subtienden tud ni sobre su complejidad: et pro-
la concepción de i'a ··estructura -y blema de Jas organizacioiles estruc·
que se· manifiestan, sobre todo, en turales mínimas, de Jas estructuras
ta manera ·de enfocar las relaciones elementales•, se plantea naturalmen·
entre estructura y función* y de te, pues sólo ellas pueden permitir
159 ESTRUCTURA

· cOmpÍ'ender los modos de existen- y/o de la producción de la signifi.


cia y de funcionamiento de los con- cación"' y, por otro ladó, como un
juntos más complejos. modelo* que contiene la definición
->- RELACIÓN, JERARQUÍA, FUNCIÓN. mínima de todo lenguaje (o, más
generalmente, de toda semiótica'*)
B. Estructura elemental de la sig- y de toda unidad semiótica: Ja es·
iiliicac16n: · tructura elemental se presenta, así,
l. Si se acepta la definición de como, un lugar de convergencia de
la estructura como una ({red rela· la reflexión gnoseológica y de la
cionah>, la reflexión sobre la estruc- postulación epistemológica de una
tura elemental debe comprender, axiomática* ulterior.
ante todo, una sola relación consi- 2. El concepto de. estructura ele·
derada como meramente simple. mental no puede volverse operato-
Al plantear, en el mismo marco rio, mientras no se la someta a
defmicional, que los «:objetos del ésta a una interpretación y a una
mundo» na son cognoscibles en sí formulación lógicas.· Es la tipología
mismos, sino~ únicamente, por sus de las relaciones elementales (con·
determinaciones (o sus propieda- trad~cción*, contrariedad*, comple-
des) y que, por otra parte, éstas mentariedad*) la qtje abre la vía
no pueden ser reconocidas sino co- a nuevas generacionés de términos
mo valores* (es decir, relativamen- interdefinidos y permite dar una
te, unas con respecto a las otras), representación* de la estructura ele.-·
nos vemos obligados a postular que mental en forma de cuadro* semió-
solamente la relación instituye· 1as tico.
«propiedades»: estas últimas, a su 3. Formulada de esta manera, la
vez, sirven de determinaciones para estructura elemental puede ser con·
los objetos y los hacen cognosci· siderada, a doble título, como un
bles. Esta relación llamada elemen· modelo* coiistituciortal: en cuanto
tal*, se presenta, no obstante, ·bajo modelo de organización de la signi·
un ·doble aspecto: establece la «di· ficación (tal es su aspecto morfo-
fercncia~ entre los valores, pero la lógico* o taxonómico) y como mo-
diferencia, para tener sentido, no delo de la producción* (su aspecto
puede sino descansar sobre la «se- sintáctico.,,). En su calidad de es· 1
mejanza:11 que sitúa los valores en tructura · profunda*, · la estructura
relación mutua. Así interpretada, la elemental. establece el nivel de la.
relación; que cimenta la estructura sintaxis* fundamental. ~'.
elemental, incluye ·las dos definicio- 4. La estructura elemental debe;,.·
nes del eje sintagmático* (relación ser considerada, además, como un
(O.y•.• y»} y del" eje paradigmático* lugar de. vertimiento* y 9e (tin • for·
(relación «O .•• o..,) del lenguaje. De- mación» de los contenidos: los con-
finida como la ·relación que esta· tenidos sintácticos . o semánticos
biece, al menos, dos términos~ va· stricto sensu, proyectados en el
lores, la estructura· elemental debe cuadro, son susceptibles de articu·
ser considerada, por un lado, como larse en posiciones previsibles y de
un concepto que reúne las condi· constituirse en categorías* semánti-
ciones mínimas de la aprehensión cas. Así, por ejempio, cualquier ac·
ESTRUCTURA 160

tante*· puede cest?J!ar, y dar "lugar los ·signos-morfemas; pero las cate-
a una .:categorla actancial ·(actante, gorías no lexicalizan aÚí, sino riluy
antiactante, . ncga.ctante,,-· begantiac~ raramente, el conjunta.· de sus tér-
tahte). •.. ..... : · · · • "' • · .- minos posibles: ellas ,presentan en
., s.:·una•categoría sem'ántica, obte- Ja manifestación formas variadas
nida así~ podrá servir de base a un que podrán ser aprehendidas cOmo
conjunto''~ de' sub-.ttrticulaciortes hi~ articulaciones binarias·:.:(masculino /
potácticas• cada vez más finas y re- femenino, por ejempi9). ternarias
cilbrir; .por,:ese hecho,i·un':micro- (amor/odio/indiferencia, por ejem·
universo*' semántico;· generador· del plo);·etc. ··.
discurso. Ciertas ·categorías··' ~abs~ · ~ CUADRO SEMIÓTICO.·.:.
t:ractaS'.' .y: muy· generales- pueden
considerarse,. a título de· hipótesis*. C. Formas estructura1~:.
como ·(universales* semánticos, es 1. Además del sénfido : preciso
decir;. como-· estructuras .axlológicas que acabamos de reconocer al .té,.r..
elementales; 'se dirá, ·entonces, que mino estructura, el . u$o cotidiano
Ja'·categoría vidaimuerte ·artiCuia ha impuesto una· acepc'ión más ge-
tos· universos: individuales*, y la ca· neral que corresponde~ más o n1e-
teg·ona natura/ cultura, .los univer· nos, a
aquella que se atribuye a
sos ·coJectiVos*.· A estas dos estruc· articulación, organizaci6n, dispositi-
turas· elementaleS se añadirá, por vo, mecanismo, etc.,· '!/' que insiste
su · grart · generalid_ad; Ja estructura sobre el carácter relacional -su-
axioiógica figurattva• que articula, puesto o establecido- de los con~
en forma· de· cuadro, · Jos cuatro juntos o de los objeto$ semióticos
<relernentos de la 'µatura1eza• (fue- en cuestión. Así, para· hacer más
go. agua, al~. tierra). clara Ja disposición de::Jos materia-
6. La estructu11t elemental, en les de este diccionario;·· hemos juz-
cuanto rnodelo de ·articulación, en· gado conveniente reunir aquí un
cuentra su princiPaJ empleo· en el conjunto de expresionCS (bastante
nivel de las estriictúras profundas inconexo, de uso comente) dotan-
·y abstrac;tas. AqUí, desempeña ella do a cu.da una de ell3,~ ·de alguñas
el rol de procedh;riiento 9e descrip- explicaciones sumarlas: .y de llama-
ción* (y, eventual!nente, de .descu. .das que permitan profúndizar esta
brlmiento*); ·permitiendo represen- O: aqueJla cuestión.
tar- los: hechos semióticos antes de
su manifestación* (y, en las lenguas · 2. Esl'RUC'rUAAS AC!AN.~ALES Y AC.
·naturales, antes que la lexicaliza· TORIALP.S. - La distinción estableci-
ción*). De este modo, la aplicaci6n da, partiendo de la no~i6n intuitiva
casi mecánica de ·1al modelo a los de personaje* (o dé «Oi-arnatis perR
fenómenos de .superficie, no-: cons· · so na» de V. Propp), eiltre actante*
tituye, .'a' mentido," otra' cosa. que y actor:*' no ha dejado de tener re·
una caricatura de los procedimien- percusiones en el coti'junto de Ja
tos semióticos. NO quiere· ello decir, teoría semiótica. El actante, unidad
sin· embargo, que las articuláciones sintáctica de la grarriática narra·
elementales no aparezcan en·~ la su· tiva de superficie, una· Vez colocá'do
perficle*, a nivel, ·por ejem~lo, de en el recorrido narrad.Vo*, se des~
161 ESTRUCTURA

compone en un conjunto de roles el discontinuo de los estados* (un


· actanciales*; el actor, unidad dis- objeto del mundb es o:negro11 o o:no
cur!'iiva, se ha redefinido como la negrox-, sin transición). Las estruc·
encarnación simultánea, el lugar de turas narrativas así formuladas, du·
vertimiento en el discurso, de por lo rante la disctirsivización* se en·
menos un rol actancial y de por cuentran temporalizadas y reciben,
lo ménos un rol temático*. El dis· por ese hecho, los vertimientos as·
positivo actancial -conjunto de ac· °l)ectuales complementarlos: a las
tantes asumido por la gramática transfotmaciones* lógicas del nivel
narrativa con miras a Ja generación profundo*, les corresponden, enton·
del discurso-· se ha revelado como ces, en el· nivel discursivo, los
no iSomorfo en relación con la or- «cambios» diacrónicos reseñables
ganización actorial' tal corno ella se con ayuda de las categorías aspec-
constituye en el nivel discursivo del tuales (articulando los sernas de
mismo texto (la modalidad del pO· puntualidad*, duratividad*, incoati-
dc.r-hace.r, por ejemplo, se presen· vidad", perfectividad*, etc.). -Esta
tará en forma de un actor indepen· concepción de las estructuras aspec-
diente, como un objeto mágico, o tuales permite, en ·consecuencia, re-
será integrada en el s_ujeto-héroe conciliar la «historia• y la «estruc·
como propiedad intrinseca). Par· turax- y concebir los mecanismos
tiendo de tales observaciones, puede de conversión* d~ las estructuras
hablarse de estructuras actoriales categorlales en estructuras asi;>ec-
caracteristicas de uno u otro tipo tuales (temporales), y a la in-
de discurso: la estructura actorial versa.
será objetivada (y socializada), -+ TEMJ'ORALIZACIÓN", ASPECTUALtZA•
cuando el dispositivo actorial se ca· CtÓN.
racterice por la ubicación de un nú·
mero elevado de actores indepen· 4. ESTRUCTVRAS MODAU:.S.-Un exa-.
dientes; al contrario, será subjetiva· men un poco más profundo de las
da (o psicologizada), cuando el categorías modales (querer, deber,
número de actores presentes en el poder, saber) ha móstrado que su
discurso se reduzca y se resuml:i, al carácter de «-térnúno que rigei. no
máximo, en un solo actor que inte· permite · su formulación indepen~
gre un gran número de roles actan· dientemente del o:término regido~;
ciales (dando Jugar a una dramati· dicho de otra manera, no podría
zación interior intensa, bien conocí· hablarse, en modo alguno, de que-
da en psicoanálisis). rer o de poder, sino solamente de .
--> ACTAITTE, ACTANCIAT. (rol -), ACTO- querer-hacer o de querer-ser/estar,
RIAI.'IZAClÓN, ACTOR. . <le poder-hacer o de poder-serfe..'>far,
etcétera. Como la modalidad.. inte-
3. EsJRUCTURAS ASPECTIIALES Y CA· gra, sobredetermináT)idolo, al enun-
TEGORlAI.ES. - Situada en el· nivel ciado de haCer* o· al enunciado de
semiótico profundo, la gramática estado*, es conveniente hablar, en
narrativa utiliza una lógica ·catego- sintagmática*, de estructuras moda~
rial fundada en el carácter discre- les, mientras que en la paradigmá·
to* de las unidades y, además, en tka las :modalidades pueden ser
SEMlÓ11CA, - 1]
ESTRUCTURA 162

consideradas como catégorias* mo- confrontación ton:ia, a--. menudo,' la


dales. forma de enfrentamiePto -somáti-
·--?- MODAUDAD, co o cognoscitivo-, Pudiendo ha-
blarse entonces. de estructuras polé·
5. ESTRUCTURAS ·NARRATIVAS Y DlS•. micas•, o de estructtiras de tran·
CURSIVAS. - E:Sta 'distinción corres- sacción: en tal caso, fa estructura
ponde a los do.S' -·niveles ·de profun- que organiza e1 discu~so se deno-
didad que nosotrós consideramos minará contractual. EStas dos for·
como las instancias . fundamentales mas, que corresponden, evide,nte·
del recorrido geneiativo* global, que mente, en el Ilivel de· las teorías
culminan en la producción del dis- sociológicas, a los conC~ptos de «lu-
curso. La expresión estructuras na- cha de clases» y de ~contrato. so·
rrativas o, mejo:i:~ estructuras semlo- cfa.l», se encuentran ¡!jhtas en ias
. narrativas~ debe ~mprenderse, en- estructuras de 1 a rñ$.riipulación* .
tonces,· en:. el sentido de est.."<lcturas Por otro lado, la esfrUctura PO!e-
semióticas profundas* (que presiden mico. contractual del Oiscurso con
la ·generación del sentido e inclu· un solo enunciador* Permite com·
yen. las formas. generales de la or- prender e interpretar :la comunica·
gariización del discurso). Se distin- ción ·dialogada* coino,' ·un discurso
guen de las estructuras :discursivas a dos voces. ·
(en sentido . resirlngido), situadas ~ POLÉMICA, CONTRATO~··
en un nivel .. m<\s superficial, . que
organizan, desde . la instancia de la 7. ESTRUCTURAS PROFÚNDAS Y SUÍ>ER·
enunciación*, la discursívización* de FICIALES. - La distinc·i.ón entre es·
las· estructuras narrativas con las · tructuras profundas-t y estructuras
que, por . otro lado y en sentido de superficie* es muy~: relativa, ya
restringido, se de~igna, a menudo, que la teoría semiótica puede pre-
solamente la sintaxis* narrativa de ver en el recorrido gen.'erativo* glo-
superficie: esta ·confusión pro~iene bal -según sus necesfdades- tan-
del hecho de que ciertas «gramá- tos niveles* de profun(Üdad como se
ticas> o «lógicas» del relato, conci· desee. Así, para nosqtros, las ·~·
ben, bajo ·una forma más o menos tructuras discursivas ~Parecen co-
comparable, el nivel más profundo mo estructuras de suhcrficie, ~on
de la narratividad. relación a las estructi.tras semio·
-7 NARRATIVIDAri, SINTAXIS NARRATI• narrativas, más profundas. Sin em-
VA DE SUPERFICIE, GENERATIVO' (reco- bargo, nosotros utiliza.inos esta di-
rrido -). cotomía, sobre todo paia establecer
una distinción entre dps niveles "de
6. EsrnucruRAs Poú:MrCAs Y CON· profundidad, dentro de las estruc-
TRACruALES.-Diferentes análisis tex- turas semióticas {a la~:. que les da-
tuales han tenido :como conclusión mos la forma de gram~tica"'}: entre
-al parecer, gen_eralizable- que .Ja gramática fundamei:l.tal (profun·
todo discurso ~omprende, al menos da) y la gramática narrativa en sen~
implícitamente, una estructura de tido estricto {superficial), una ,de
confrontación* en la que participan, naturaleza lógico-semántica y Ja otra
como mínimo, dos sujetos.. Esta de naturaleza antropoiiiorfa"'. ·
163 ESTRUCTURA· ESTRUCTURALISMO

~ PROFUNDA (estructura -) • SuPER· utilizan los se1nas* heterogéneos


FICIE (estructura de -), GRAMÁTICA, (provenientes de muchos sistemas
GENERATIVO (reCorrido -). sémicoS) ligados, entre sí, mediante
•_p
relaciones ·hipotácticas* dé natur3.-
8. Es!RUcrtJRAS S~ONJ\RRATIVAS.­ leza sintagmática. Esta distinción
É.1 hecho de que· la teoría: semiótica nos parece suficientemente impor-
se desarrotta de ·manera 'progresiva tante para ser mencionada aquí:
y, a veces, sinuosa crea ciertas c.on· quizás ella petmita describir el fun-
fusiones terminológicas. Así sucede, cionamiento de figur!).s* como la
por ejemplo, con el concepto de metáfora* y la· metonimia*, y tam- ..
narratividad* que, aplicado, de· ·par· bién el de la relación .de contigüi- ~·
. tida, · sólo a la clase de los discur· dad. ,, ,, ~-,!

sos figurativos* (relatos*), se· ha re·


velado, luego, como un principio "ESTRUCTURACION. Fr. structtt·
organizador de todo discurso. De ration, ing. structuring. - La es-·
abf Que el contenido de la· expresión tructuraclón es uno· de los procedi·
... estructuras narrativas» se haya mientas de análisis ··semántico que
transformado hasta designar;-· final· comprende, por una parte, lá reduc-
mente -por oposición a las estruc- ción de las ocurrencias semérnicas
turas discursivas-, el tronco· gene· parasinonímicas en· clases y, por
rativo profundo, común en princi- otra, la homologacióri de las cate-
pio a todas las semióticas* . y a gorías* sémicas (o de las oposicio-
todos los discursos, lugar de· una nes semémicas) reconocidas. Apo-
competencia semiótica general. Se yándose en el postulado según el
produce, entonces, una lenta susti- cual el universo* semántk:o es es-
tución terminológica: la expresión tructurable (o es poseedor de una
estructuras semionarrativas va re- estructura inmanente* subtendida),
e~plazando poco a poco a la de la estructuración exige el estableci-
«estructuras narrativas" en ·sentido miento previo. de niveles* de análi-
lato. sis homogéneos* .y' debe incluir la
-+ NA.RRATIVIDAD, GRAMÁTICA, GENERA• interdefinición de los. elementos es-
TIVO (recorrido -). tructurados en · térmirios de relacio-
nes* lógicas.
9. ESTRUCTIJRAS SISTEMÁTICAS Y MOR· ~ REDUCCIÓN, ÜOMOLOGACtÓN.
FEMÁTICAS. - La organi1..ación sémi· .~ ..
ca del universo* semántico adquie- ESTRUC'fURALlSMO. Fr. structu-
re, a primera vista, dos formas ralisme, ing. structuralism.
diferentes: por un lado, la: de los 1. El estructurallsm.o representa,
sistemas sémicos; es decir, sub· ar- en la direccl,ón norteamericana, los
ticulaciones hiponímicas* de carác· finales de la Escuela de Bloomficld
ter paradigmático que comprenden y, en la europea, las prolongacio-
únicamente sernas homogéneos: y, nes del esfuerzo teórico de los tra-
por otro lado, la de los morfemas bajos de las· . Escuelas de Praga y
sémicos que ·aparecen como· orga- Copenbague que se· basan 'en los
ni1.aclones de objetos significantes principios saussurianos. La incom·
(comparables a los sememas*) que patibilidad fundamental entre am·
ESTRUCTURAlJSM.0 -ETNOSEMlóTICA 164
bas, persPectivas :r~di~a en la ma· es la relación* (o la estructura*)
nera de enfocar· ef. problema de la y no los términos* o )as clases*.
significación"':·_ mientras que, para El valor heurístico* del. estructµra·
Bioomfield, la sintaxis ·no es. sino lismo permanece íntegrO · y la acti-
la prolongación de 1.a fonología (los tud que lo especifica es .plenamente
fonemas forman a : los morfeffias, comparable a Ja que ~.!ma a las
los. morfemas a las .frases) -siri. que ciencias de la naturaleza~'por ejem-
el sentido* intervenga en ningÚn plo. - A·)'>artir del movimiento ?S~
mon1ento, el. estrúcturalismo euro- tructuralista, es como la:.semiótka*
peo distiniue, siguiendo a Saussure, ha podido desarrollarse,, 'justo Cn
los . dos planos dél significante* y el momento mismo en G.'ue desbor·
del significado• cuya conjunción (o daba el marco un tanto estrecho
semiosis) produce la manifestación. de la lingüística* ..
Ello explica que los. ataques de N. ~ SEMJOLOG1A.
Chomsky, por . ejemplo, Contra el
formalismo*, no se apliquen a la ETIQUETA. Fr. itiq~'i.tte, inglés
conc:epción .europea. label. - En la represeni~ción meta·
2. · El estrúctui'alismo se presen· Jingüistica en forma de 'á,rbol, cada
ta, ·sobre todo (y, tal vez, equivoca. ramificación se denomirl~ nudo* y
damente -'-V. lengi.ia-), como una está dotada de un~ etiqueta, es de·
taxonomía* a la que N .. Cho:insky cir, de una denominación* arbitra·
parece considerar corno ya acabada ria o de un símbolo*. Los gráficos,
en lingüística; sin e'rnbargo, es evi· en forma de árboles o ·de parénte·
dente que la taxonomía es insufi- sis, sirven generalmente ·para repre-
ciente en la· gramática generativa*. sentar· las relaciones*, m'ientras que
3. Con el nombre de estructura- las etiquetas, utilizadas en uno CO·
llsmo francés se conoce, en general, mo en otro caso, <lesignan los tér-
todo el conjunto de investigaciones minos* estructurales. ·
de. inspiración lingüística, efectua-- . ·~ÁRBOL.
das durante la década de 1960 y que·
tratan los diferentes dominios de ETNOSEMlóTICA. Fr. ethnosé·
las ciencias humanas. A causa de miotique, ing. ~thno-sen1fotics.
sus éxitos, se ha convertido,L.por l. La etnosemlótica no es, a de~·
desgracia, muy -'rápidamente en una ci.r verdad, una selniótica autóno-
especie de .filosofía· a la moda· que", ma -pues entrarla enton,ces en con·
como tal, ha· sid9 atacada, acusada currencia con un campo' del saber
de totalitarismo,· de. estatismo, de ya construido bajo el nombre de
reducclonismo*, etc.;: ·· . etnología o de antropología, cuya
4. En 'cuanto. actitud científica, contribución al advenimiento de la
el estrucru:.-aiismo · .!:onserva su va· semiótica misma' es considerable-,
lor y se, caracteriza tanto por la sino. más bien, un domiriio privi!e·
investigación de las ·estr..icturas ·in· giado de ·curiosidades · y · ejercicie:s
manentes* corno p,ór la construc- metodológicos. Esto se.: debe, en·
ción de modelos*; en ambos casos, primer Jugar, al hecho .4e que la
mantiene el principio· según el cual etnología aparece, entre lis ciencias
el objeto de conocifU~ento buscado sociales, como Ja discipÜ~a más n:
165 BTNOSBMIOTICA

gurosa por las exigencias que ella 3. Al dominio comprendido por ·


se impone y, en segundo lugar. a la etnosemiótica le corresponde . el
que, Consciente del relativismo cul- mérito de haber concebido, inaugu-
tural que Je recuerda sin ·cesar el rado y fundado -al lado de las des·
objeto mismo de sus investigacio- cripciones paradigmáticas que son
nes, ha debido combatir al centris- las etnotaxonomías- los análisis
mo - europeo y re.basarlo, · desarro- sintagmáticos que versan sobre los
llando una problemática de la U1'li- diferentes géneros de· la literatura
versalidad de los objetos culturales étnica, tales como lo:s relatos fol·
y de las formas semióticas. klóricos (V. Propp) y míticos (G.
2. Dentro de esta disciplina, se Dumézil, C. Lévi.Strauss), gracias a
ha constituido un Jugar de encuen- los cuales se. ha renovado Ja pro-
tro entre etnólogos. y semióticos, blemática del .'discurso literario. Si
bajo. el nombre de etnolingüístlca estas investigaciones han pennitido
que, . rebasando la simple descrip- a la semiótica &eneral progresar rá-
ción de las lenguas naturales .exó- pidamente, es normal que ahora
ticas, se ha interesado, desde un ésta quiera devolVer, al menos en
comienzo, por sus partic:ularlda.des parte, la deuda que ha contraído,
semánticas (que se prestaban a surgiendo la posibilidad de nuevas
aproximaciones contrastivas y com- aproximaciones para los discursos
paradas). Posiblemente a la· voca- etnoJiterarlos.
ción propia de la antropología -que 4. La semiótica· etnoltterarla se
quiere comprender las totalidades encuentra, as! puesi: en oposición a
y aprehender los conjuntos signifi- la semiótica literaria* (en el sentido
cantes- se deba el desarrollo de «noble• del término), sin que la
las ·investigaciones taxonómicas: 'la frontera que las separa pueda ser
descripción (y, sobre todo, la ela- establecida de manera categórica.
boración metodológica que ella pre- Entre los criterios que se invocan
supone) de las etnotaxononúas cons- para distinguirlas, hay que tener• en
tituye una contribución importante cuenta los siguientesi: a) !a ausen-
a la teoría semiótica general; .tax.:.- cia (o la presencia implícita) del
nomfas gramaticales primero ·, (por código* semántico en el discurso
ejemplo, el estudio de la ~concep­ etnotiterario, que se opone a su ex-
ción del tiempo» partiendo de la plicitación y a su integración en· el
descripción del sistema de los tiem- discurso literario;· b) el distancia-
pos verbales), luego, taxonomías lé- miento -como en·i otras semióti-
xicas · (descripción de las terminolo- cas- entre Ja producción del dis~
gías del parenteSco, que permiten curso y su ejecución, propia de la
elaborar un análisis componencial* etnoliteratura; e) la importancia de
riguroso: descripción de las truc.o- las estructuras de la enunciación*
nomías botánicas, zoológicas, etc.), enunciada, propia de~ discurso lite~
finalmente, taxonomías connotativas rarlo (que puede llegar, in ex.tremís,
(tipología de Jos «lenguajes socia- hasta la .ctdestrucció.µ del relato»),
les» diferenciados según los crite- se opone a la dilución del enuncia~
rios de se:ico, clases de edades, je- dor* (y de sus marcas) en el dis~
rarquía, sagrado/profano, etc.). curso etnoliterario. Todas estas di-
ETNOSEMlóTlCA·· EVENTO 166

ferenciaS son, sic embargo, sóio ción* del sujeto -individual o co-
graduales y no cuestionan la · exis- lectiVo-, en tanto en ·cuanto ha
tencia de organizaciones narrativas sido reconocida e inten:>i"etada* por
y discursivas comunes. un sujeto cognoscitivo distinto del
5. Por otro lado, son criterios sujeto del hacer*, y, asirñismo, pue-
externos los que · permiten distin- de ser el actante observador* ins-
guir la etnoliteratura -propia de talado en el discurso (et. el testigo)
las comunidades arcaicas (o de las o el narrador*, delegado.·· del enun·
sociedades agrarias relativamente ciador* (et historiador; :.por ejem-
cerradas}-. de la socioliteratura, plo}. Una definición estri;lctural del.
especie de o:sub-li~efatura• caracte- evento nos parece neces.aria, dado.
rística de ·las sociedades industria· que algunos semióticos, 1;.inspirándo·
les desarrolladas. 1 se especialmente en las ...Jógicas de
6. Dado .que· la semiótica fiene- Ja acción, utilizan este t~nnino c;o..
ral autoriza a tratar los encadena- mo si· designase un d\:lto simple
mientos sintagmáticos no lingillsti- y, por decirlo así, <l:natµral•~ par
cos (gestuales, s9niáticos, .etc.), co- el contrario, se ve que el evento
mo discursos o te~tos, el ánibito es una configuración* discursiva y
de aplicación de lá. etnolingíiística no una "unidá.d na~tlva simple~ de
se extiende hacia. ·una etnosemló. ahí !a imposibilidad de . definir el
tlca: Jos análisis, · 3ún poco nume- relato" .:...Cosa que atgutÍos tratan
rosos, de los rituales" y ·de los cere- de hacer- como Una sucesi6n de-:
moniales;, ·permiten Suponer que la eventos.
etnología puede· conyertirse, una vez 2. La semiótica narrativa distin·
más, en el. Jugar priViieg:iado de ::•. gue dos· dimensiones* en los discur-.
construcción de modelos generales sos narrativos: la dimeriSión prag~·
de los comportamiep.tos significan- mática* y Ja dimensión ,CQgnosciti-:
t~. · . va*; la primera es, a veceS, llamada
--+ SEM'.IÓTI{:A, 'LI:rERARIA (semiótica dllnenslón evenJmencJal porque en·
-), SOCIOSEMIÓTICA. eUa se encuentran repres~ntados Y
descritos los encadenamientos de
EUFORIA. .Fr. euphorie, ing. eu- comportamientos sOmátiCos*. Esta
phoria. - La euforia es el término* distinción no es homologable con
positivo de Ja categoría tímica que la que opone, en el análisis de1 dis·
sirve para valorizar·:.Jos microuni- curso histórico, la historia eveni·
versos* semánticos, transformánóo- mencial a la historia fundamental.
Ios en axioJogÍas*; eUfaria se opone La historia eventmenc!.al . pertenece
a disforia*; Ja categoría tímica con- aI nive! semiótico de superficie* y
tiene, además, como término neu-. se presenta como una historia na·
tro~ aforia*. . ~. ~ -·~. rrada que comprende las das di-
· ~ TfMICA (categoría -). mensiones -pragmática ·,y cognos-
citiva- de la sintagmática histórl·
EVENTO. ·Fr. événement, irig!és ··ca, mientras que Ja histCiia funda·
event.· mental se sitúa en el niVel de las
1. En semiótica ·narrativa, puede estructuras semióticas profundas"'."
concebirse ·el· evento como la: ac- ~ ACCIÓN, ITTSTOR!A. .
167 EVIDENCIA· EXISTENCIA. SEMIOTICll.

·EVIDENCIA. Fr. éviden.ce, inglés . EXISTENCIA SEMióTICA. Fran·


evidence. - Forma particular de la cés existence sémiotique, ing. semio-
certeza· -que · es la denominación tic existence.
del ténnino positivo de la catego- 1. Consagrada al estudio de .la .
ría modal epistémica-; la evidencia forma*, y no al· de la sustancia*,
no exige el ejercicio del hacer inter- .parece imposible que Ja semiótica*
pretativo*; se caracteriza tanto por pueda permitirse emitir juicios on- ·
Ja supresión de la distancia entre el tológicos sobre la naturaleza de tOs
discurso referencial* y el discurso objetos que analiza. Pero nada im-
cognoscitivo* que lo sanciona gra. pide que tales objetos estén, de
cias a las modalidades veridicto- alguna manera, «presentes• para el
rias*,. como por convocar aquello investigador y, en cónseCuencla, éste
que está llamado a constituir un se vea impelido a examinar las re-
referente «reaI11. laciones de existencia o Jos· juicios
~ CERTEZA, EPlSTÉMl'.CAS (modalida· . existenciales, explícitos o implícitos,
des-).·· que enctieO:tra inscriios en el dis-
curso; está, pues, obligado a pro- .
EXHAUSTIVIDAD. Fr. exhausti· nunciarse, como mínimo, sobre este
vité, ing, exhaustivity. modo particular de e:dstencia que
1. Vinculada a la tradición huma- es la existencia semiótica.
nista que hace de ella una condi· 2. La teoría semiótica se plantea !
ción sine qua non de la investi· el problema de la presencia*, es ·
gación (en la erudición), la exhaus· decir, de la «realidad,. de los obje-
tlvidad ha de. relacionarse con los tos cognoscibles, problema común
conceptos de corpus*, modelo* y -es verdad~ a la epistemología
adecuación*. En efecto, la exbausti· científica en su conjunto. En este
vidad puede ser entendida como la nivel, puede contentarse con una
adecuación de los modelos elabo- definición operatoria* que no la
rados a la totalidad de los elemen· compromete en nada, diciendo que
tos contenidos en el corpus. Ja existencia semiótica de una mag-
2. A propósito de la descripción* nitud* cualquiera está determinada
de los datos lingüísticos, L~ Hjelms· por Ja relación transitiva* que la
lev integra Ja exhaustividad dentro vincula, al plantearla como objeto
de su principio de empirismo, seña- de saber, con el sujeto cognoscitivo.
lando, sin embargo, que, si bien la 3. Cuando una semiótica dada es
exigencia de exhaustividad está an- propuesta como objeto de saber,
tes que la de simplicidad'\ debe la tradición saussuriana le reconoce
ceder el paso a la exigencia de no- dos modos de existencia: la prime-
contradicción (o coherencia"). Este ra, la e,xlstencia virtual* caracterls·
recurso a Ja cxhaustividad se justi· tica del eje paradigmático* del len·
fica en la medida en que, para el guaje, es una existencia in absen·
lingüista dané.'l, se trata de mante,¡. tia; la segunda, la existencia actual
ner un equilibrio entre los aspectos propia del eje sintagmático, ofrece
deductivo* e inductivo* del análisis. al analista los objetos semióticos •
~ F.MPIRISMO, in praesentia y, por este hecho, P?-·
EX!STENClA SEMióT!CA - B°XPANSióN !68

rece ·más «concreta•. El , paso· del sujetos* y de los objetos* encon-


sistema• al proceso*, de la lengua trados e identificados ell.· el disctll"-
al discurso*, se designa como pro-- so. Se dirá que un sujrto semiótico ·
ceso de actualización*. · e:dste como sujeto sólo.. cuando se
· 4. Dicha dicotomía no era :incó- Je pueda reconocer, al menos, una
moda . mientras había. que conten- determinación: dicho ·de Otro mod{),
tarse con una distinción de prlnci· cuando esté en relación. con cual-
pio entr_e lengua y habla, y ¡ más quier objeto de valor•. ' Asimismo,
adelante, entre competencia y per· un objeto -entre Ios irihumcrabJe~
formance. Un análisis más profun· objetos que lleva consigo un di!>:.
do de estos conceptós (la aparición, curso- es tal objeto sólo cuando
en lugar. del" habla", de las nociones esté en relación, cuando sea «pre-
de sintagmática y., sobre _todo, de tendido~ par un sujeto. ·La función*
discurso) ha evidenciado la autono- es, entonces, la condició"n necesaria
mía y el .carácter .abstracto de las de la existencia de los ·s'ujctos, a.(¡í
organizaciones dis_cursivas, muy ale- como de los objetos. Antes de su
jadas todavía de 13. manera de «es- junción, los sujetos y lOs objetos
tar-ahí» de 1os discursos-enunciados son llamados virtuales y Ja función*
en cuanto ocurrenclas<1-. Estamos, es ·la q·ue los ·actualiza. 'D.ndo que,
pues, obligados a reconocer un ter· bajo el nombre de junción, se re·
cer modo de· existencia semiótica, únen dos tipos de rel~ciones, se
el de la ex:.tstencla :realizada*, que, dirá que Jos sujetos y :ios objeto~·
debido a la· semiosis*, se presenta de valor en disjunción* e.Stán actua-
como la, manifestación* discursiva. lizados, mientras que, después de
S.· Por último, .et·.problema de la la conjunción*, se dirá, Que están
forma de existencia . se plantea en realizados*. Realizando ·su progra-
otro nivel, en el interior mismo de ma.., narrativo, el sujeto Vuelve real
las semióticas consideradas· y, más el valor que sólo era ambicionado
particularmente, en los discursos y él mismd se realiza. ·
narrativos que· son los que descri- -) YmTVALIZACIÓN, ACTUALIZACIÓN,
ben las situaciones y las acci~nes REALIZACIÓN•
.creales». ; Incluso reconociendo que
sólo se trata de· ·Sin:iulacros de ac- EXPANSióN'. Fr. expdhsion, ing.
ciones, en 1os que participan suje- expansion. - Se entiende por ex-
tos «en papel1i-, el análisis exige pansión uno de los aspe9tos de. Ja
que se los trate como si fuesen elasticidad del discurso, .. por opo·
verdaderos: ·una vez descritas sus .sición a la condensación*:. éstas sori
diversas formas de existencia, así dos fases de Ja actividad produc-
como las . de sus actividades, sqn . tora de los discursos..éhunciados.
susceptibles -en efecto- de servir Interpretada, desde el pünto de vis-
como modelos* para una semiótica . ta sintáético, por la coordinación y
de la acción* y de la •manipula- la subordinación, y, máS · reciente.
ción•. mente, por Ja recursividad*, la ex-·
6. Se hace, por ~Jo, m.uy nece-- pansión puede ser comp¿rada con ·
saria una definición ·existencial, de la paráfrasis*: todo lexeina puede·
orde:r:i propiamente $emíótico, d7 los ser recuperado por . una· -definición
J69 EXPANS!óN. EXPRESióN

discursiva¡ todo enunciado mínimo (C. Zilberberg, siguiendo a P. Va-


puede dar lugar, debido a la expan.
sión de sus el!'!mentos constitutivos,
léry). ,.
·~..
a un parágrafo, etc. Tomar en cuen· EXPLtCITO. Fr. explicite, ing. e,x.;.
ta el fenómeno de expansión, posi· plicit. ·
bilita el análisis discursivo, aunque l. En· una primera aproximación,
complica en extremo la tarea del el calificativo explicito parece ser
semiótico. un parasinónimo de manifestado*:
_,,.. ELASTICIDAD DEL DISCURSO, un enunciado. (frase o discurso) se
denomina explícito · en tanto en
EXPECTATIVA. Fr. attente, ing. cuanto es producto de la semiosis*
expectation. (que reúne los planos de la expre-
l. La expectativa puede ser con· sión,. y del contenido* del lenguaje).
siderada como el resultado de la Lo explícito sólo tiene sentido por
temporalización7 , efectuada por la oposición a implícito (lo no-dicho
aspectualidad impetfectiva* de la presupuesto por todo acto de comu-
modalidad* del querer-ser*; ésta es nicación*), cuya expllcltaclón apa-
sólo una definición provisional, pues rece como una de las tareas prin-
Ja conñguración* de la· expectativa cipales de la lingüística contempo-
no· está todavía completamente des· ránea. En efecto¡. tanto las condi·
e rita. cienes llamadas pragmáticas* (en
2. Con el sustantivo expectativa el sentido norteamericano) de la
se designa el signifi~do* de uno enunciación* como las estructuras
de los términos del prosodema en- profundas* del enunciado, dependen
tonación*, homologable a la curva de lo implícito, y su explicitación
melódica de los enunciados' inteuo- equivale -en · este . sentido- a la
gativos. elaboración de. lo~ componentes tun-
3. En la pragmática,. norteame- damentales de la teoría semiótica"'.
ricana, expectativa es un concepto* 2. En el nivel metatingillstico de
no definido que sirve para caracte- la construcción de la teorla, el tér-
rizar, en ciertas situaciones conver- mino explicitación se emplea en el
sacionales, al actante* de la comu· sentido de formalización*: en este
nicación*. . sentido es en el que la gramática
4. En la estética de· 1a recepción generativa* se pretende explícita, es
alemana (R. Jauss), la expresión decir, formulada en ténninos de
horizonte de expectativa -de inspi~ lenguaje formal*.
ración husserliana- denomina la _..,,. IMPÚCI1'0, GENERACIÓN.
previsión de las formas de la orga.
nización discursiva, es decir, la com- EXPRESióN. Fr. ex.pression, ing.
petencia* narrativa y discursiva del expressíon.
lector* que le permite juzgar sobre 1. A partir de L. Hjelmslev, con
la Originalidad,. del nuevo discurso plano de Ja expresión se designa el
ofrecido a su lectura. significante saussurlano tomado en
5. La expectativa permite, igual· la totalidad de sus articulaciones
mente, definir el concepto de ritmo* {como el anverso de una hoja cuyo
EXPRES!óN • EXTEROCEPTIVIDAD 170
reverso' serla ·el significado),: y no -opuesta a las funciohes referen-
en el sentido de ·"imagen acústica:. cial* (relativa a lo que' se habla) y
(como una lectui-a superficial de conativi\*'. (centrada en et destina.ta-·
Saussure autorizaría a ' algunos ' a rio*)- es aquella qÚe, vinculada
interpretar). Et plino de la· expre- directamente al destinador*, <t3.pun-
sión · está ·en relacitSn -de: presuposi
4
ta a una expresión directa de la ac-
ción recíproca· con el plano del con- titud del sujeto con rt.;ospecto a lo
tenido*;• la reunión de ambos en que habla» (Jakobson).·
el acto de lenguaje, corresponde a ....; FUNCIÓN, COMUNICA~IÓN.
la · semiosis*. Distinguir estos dos
planos del lenguaje es, en la teoriz EX'l'ENSióN. Fr. e.xtension, ing.
hjelmsleviana, una ·tarea lógicamen- ext en.sion. - En lógica. tradicional,
te anterior a 13. división de· cada se entiende por exteriSión el .con-
·uno de ellos en forma* y sustan- junto de objetos, realej:; o ideales,
cia*. La forma de la• expresión es, a los que se aplica un ·:elemento de
así pues, el objeto estudiadp por conocimiento (conceptó. o propósi-
la fonología*, mientras que la sus- ción). Debido a ·que los. objetos se-
tancia de la exprc::!ión corresponde mióticos se estudian illdependienfe.
a la fonética*. . mente· del referente*' externo, no es
·2. En· metasemiótica*. científica, acertado hablar, por ejemplo, de ta
con el término expresión se· designa extensión de un semaná.*, como si
una serie de símbolos• de·un alfa- éste pudiese aplicarse a un mayor
beto* dado, obtenido -al aplicar re- o menor número de objetos '"{cf. los
glas de formaci_ón {o de producción) ~asientos» de B. Pottiei;:). En cam-
dependientes de un conjun:c TI.nito bio, puede ser útil contar las o~u­
de reglas. Un semema'* o un· fone- rrencias* de una palabra gráfica,
ma*, por ejemplo,, pueden ser con- pues ellas constituyen su extensión;
siderados como expresiones Consti- asimismo, se evaluará la exterisiéin
tuidas por una serle_ de sernas o de de un· serna* enumerarido los lexe-
femas, si se aplican·· las reglas de mas* (que dependen del «referen-
formación del plano del contenido cfa.l» lingüístico) en dónde puede
o de Ia expresión.. Por «exprésión ser reconocido .. Dicho de otro mo·
bien formada1t se entiende una se· do: en semiótica, los objetos que
rie cualquiera de símbolos que re- definen la extensión de otro objeto
sultan de la estricta aplicación de han de ser de ia mismi naturaleza
las _reglas. que éste. · ·
-+. SIGNIFICANTE, CONTENIDO, FORMA, ~ COMPRENSIÓN.
SUSTANCIA.
=' \'··' '"' ,. EXTEROCEPTiVI~Ati: Fr. "eXté-
EXPR.llSIVA (FTJ¡,¡éróN -). Fr. roceptivité, ing. extervceptivity. .:....
fonction· eipressiv.e, infi. expressive En la preocupación po·r encontrar
fu.nction. ·- En el .esquema-triádico los criterios para clasifi9.~r las ::::ate-
de la comunicación lingüística,· pro- gorías* sémicas que ·articulan · i:l
puesto por: el psicólogo'!<.:· Bühler universo* semántico (considecidO
(adoptado y aumentado por R. Ja. como· extensivo a una cultura* o a
kobson), la función exprésfva una persona humana) •. :cabe recu-
171 EXTEROCEPTIVIDAD • EXTRACCION

nir, de algún modo, a la psicología en el empleo de los calificativos


de Ja percepción. Ssta distingue las semiológico y semántico. Nos pare·
propiedades exteroceptlvas -prove· ce que figurativo"', al hablar de las
nientes del mundo exterior- de los categorías y de los inventarios sé--
datos interoceptivos• -sin ninguna micos de este plano, puede sustituir
correspondencia en el mundo exte- a exteroceptivo y a semiológico.
rior, presuponen, por el contrario, ~ FIGURA. ' .
ta· percepción de los datos intero-
ceptivos- y, finalmente, de los ele- EXTRACCióN. Fr. extraction1 ing.
mentos propioceptivos* que resul- extraction.
tan de la percepción del propio 1. Una vez establecido el corpus*,
cuerpo. Dicha clasificación, por in- le toca al analista retener única·
tuitivamente justificada que pudie- mente los elementos pertinentes en
ra parecer, adolece, sin embargo, el nivel de descripcióri* elegido, des·
·de basarse por entero en criterios cartando todos los otros datos (ca·
y presupuestos extra-semióticos. Por lificados entonces de estilísticos*).
eso hemos procurado sustituirla con Esta selección se efectúa mediante
otra ·ierminologfa y otras definicio- el procedimiento de extracción o
nes: con ·et nombre de ·nivel (o in- por el de eliminadóh*, según qu~
ventario) seniiológico* designamos la parte retenida.,del corpus sea o
el conjunto de las categorías sémi- no cuantitativamente más importan~
cas que, aun perteneciendo al plano te que Ja parte a excluir,
del contenido* de las· lenguas*· na· 2. Para L. lijelmslev, dicha, ope-
turales, pueden aparecer como ca- ración no "es científica porque con-
tegorías del plano de la expresión* tradice, de principio, el proceder
de la semiótica natural* (o del mun· del análisis* (que va del todo a las
do* natural); lo opOnemos al nivel partes o a la inversa). Está claro.
semántico* (stricto' sensu), ·donde en efecto, que estos 1 procedimientos
una transcodificación* como la an~ corren el riesgo de i-eflejar tan sólo
terior no es posible.· Si bien es el punto de vista subjetivo· del des-
cierto que esta nueva definición, de criptor; sin enlbargo, nos parecen
carácter intra·semiótico, nos parece justificables en el pláno pragmático
constituir un progreso, en cambio, y táctico, si se los considera única-
la elección de las denominaciones mente como instrumentos ·proviso-·
resulta defectuosa por cuanto intro· ríos, de carácter operacional*.
~uce.la polisemia* y la .ambigüedad ~ PERTINENCIA.
F

FACTii-xvlnAD. Fr. factiÚvité, Ín- dor se trata de ·«haCer· alguna cosa•,


glés, fac.t,ftiveness. .~ · .. . . . · de tal manera que el sujeto moda-
. l. ·. Tradicionalm~te•. y en una lizado se instituya -después de ese
Prlffiera aproximación, Ja modalidad uhacer- en un sujeto CÓmpetente. ·
factitiva 1se "define como un hacer· El hacer del sujeto modalizador es
hacer; es decir, como una estruc- también, por consiguiente~ un hacer·
tura _modal ·.,conStituida por'. doS · ser/estar; es· decir, una pert'orman·
enunciados* en relación hipotáctica, ce (pero de naturaleza esti-ictti,mente
que cuentari. · con predicados* ¡dén- cognoscitiva*), que plantea, de mo-
ticoS pero con sujetos diferentes do inevitable, el problema de· la
( «haCer de modo qUe el. otro.. ha- competencia cognoscitiva<deJ mismo
ga ... ~)•. : :. . . . ' sujeto modaiitador {esta:·~ompeten.
2.. Dicha definición es notoria- cia consistirá, ante todo:.- en el sa·.
mente insuficiente. 1-!irando sólo el ber* que versa sobre las.".virtuaiida·
enunciado. modaliza~o («el hacer del des de la competencia del sujeto
otrO» ), se observa que no se trata a modali:tar). ·
de un enunciado siµlí>le, .'sino de un 3. Así pues, lejos de- Ser ya una
sintagma: :--0:enominado recorrido simple relación hii:>ertác;ica entre
narrativo~. del· sujeto- .qtie se des· dos enunciados de hac.Cr -com9
·compone,'. a ·su vez, en .una perfor- sugiere la tradición-, el" Campo de
mance* (el •hacer-s"er / eStar:i1 : del ejercicio de la factitivid3.d ha de
otro sujeto). y una. competencia-. interpretar.se como una comunica-
(lógicamente · presuPuesta por cual- é.ión contractual* que conlleva el
quier hacer, munida de una carga traslado de la carga modal entre
modal autónoma). En cuanto al dos sujetos, cada uno de. ellos do-
enunciado modalizador, su hacer no tado de un recorrido narrativo*
apunta a otro hacer -al menos propio. Asimismo, el proPlema de
directamente-, sino a establecer el la modali.zaci6n factitiva abarca ,el
recorrido narrativo del segundo su- de Ja comunicación* eficaz, lo que
jeto y, ante todo. su competencia. nos obliga a tener en cuenta las
En suma, para el sujeto modalita· dos instancias de la· enunciación,
173 FACTITIVIDAD -FATICA

dotadas de un hacer persuasivo'lt y dalidades veridictorias. Los «valo-


de un hacer interpretativo*, garan- res de verdad» ele lo falso, así como
tes de la traslación factitiva. Las es- de lo verdadero, se encuentran si-
tructuras aparentemente simples del tuados en el discurso y deben ser
ejercicio de Ja factitividad (mandar considerados como términos resul-
hacer un, vestido, por ejemplo) se tantes de las operaciones de veri·
desarrotlan, por tanto, en configu- dicción, lo que excluye, por tanto,
raciones complejas de la manipula· toda referencia, (u homologación)
ción. con .relación al mundo no discur-
'-)> MODALIDAD, COMUNICACIÓN, MA.Nl- sivo.
POLACIÓN. ~ VERIDICTORIAS (modalidades -),
CUADRO StMIÓTICÓ.
FALSACióN. Fr. falsification, ing.
falsi.fication. - En el marco de la FATICA (ACTIVIDAD, FUNCION
confrontación entre una teoría* (de -}. Fr. activite, fonction pha.tique,
tipo hipotético-deductivo*) y el o:da- ing. phatic. - Le cabe a Malinowski
·10" del objeto que se presume cog- haber sido el primero en tratar de
noscible, la falsaclón .es un. proce- precisar la noción de comunión fá-
dimiento lógico que completa al de tica: en .::;u criterio, la comunica-
verificación*. Consiste en mostrar ción* de la infornlación, tal como
que existe, al menos, un· caso en se opera duranfe los intercambios
que la hipótesis* propuesta (o el verbales* entre humanos, es un he- t:;.
modelo* construido) no está con- cho secundarlo con· telación al de- ~-­
forme con los datos de la experien- seo de establecer y de mantener la
cia. Cuando un modelo no es vcri· solidaridad intersubjetiva y, ·más
ficable, puede ser siempre sometido generalmente, la cohesión social,
a la falsación, lo que permite juz- que fundamentan 13. comunión fáti·
gar sobre su adecuación*. Asf, en ca, gracias a la cual se puede «ha·
Ja práctica lingüística, cuando un blar de todo y de nada ... A continua-
modelo es proyectivo (capaz de ex· ción, R. Jakobson inteñtó introducir
plicar un conjunto de hechos más este aspecto de coriiunicabilidad,
amplio que aquel a partir del cual formulándolo como una función*
ha sido construido), puede ser fal- particular, la función fática del len·
sado mediante contra-ejemplos (o guaje. Aceptable en tanto en cuanto
contra-casos): tal es el juego al que que trata de una propiedad general
se entregan a menudo los partida- del lenguaje, la función fática pare-
rios de Ja gramática. generativa*. ce más discutible cuando se Ja debe
-+ VERIDCACIÓN.· integrar en la estructura de la co-
municación: en lugar de hablar de J
FALSEDAD. Fr. fausseté, ing. fal· Ja función fática como una de sus . "
· seness. - Se designa con el . nom· funciones, sería mejor decir que es
bre de falsedad . al término com- la intención fát.ica: la que, por el
plejo* que comprende los términos contrario, funda la comunicación,
de no-ser y de no-parecer, situados y que el acto fátlco debe ser consi-
en e1 eje de los subcontrarios den· derado, ante tódo, como un acto
tro del cuadro semiótico de las mo- somático* (Comparable a la mirada
FATICA- FiDUCIARIO (·A) 1(4

o ·a los &e~tos de acogid2 y bienve-- permanece válido, a nti:éstro enten·


nida) y, como ·tai, integiable ·en la der, aunque sólo fues~:-a título de
p'roXérniCa .·(en el:. ·sentido amplio hipótesis* de trabajo, Pues perm,ite
del. término)... .· .•~ comprender mejor loS principios
-+ COMUNI.CACIÓN, PROXÉMICA.; que parecen regir las:~ organizacio-
nes semióticas.
FEMÁ: ~r•. ;henie, ing:·. Phe~~ ~ FONOLOGÍA, FONEMA •. ·

~E~OMENICO. ;~ténoménal,
1. B .. Pottier ha propuesto el tér·
mino fema para designar el rasgo Fr.
distintivp• del plano de Ja expre.. inglés phenomenal. ~ Heredado de
sión*, ·en· Oposición al sema'* (rasgo la tradición escolástica i: (reasumida
del plano del contenido*). Esta nue- . por Kant). el término ~ fenoménleo
va denominación . ~.s más sencilla y -<ipuesto a nouménico•- puede
permitet\ establecei:·· una dJstinción emplearse como sinóni.mo de paJ1!·
útil entre las. unidades de los dos cer (vs. ser*. en el marco de ltJS
planos•: del Iengwije. · · l modalidades veridictod.as*), con .lo
2. sm .embargo, un fema es sólo que el plano fenoménlcó se asimila
el término-resulta"Q.o de la relación al plano del parecer.
constitutiva de un.a·categOría" fér:if· -+ PARECER, MANIFESTACIÓN.
ca: ·por· esto no puede ser conside·
rado como una unidad* mínima, FlDUC!ARIO (·A) . (CONTRATO,
sino en el plano construido· del :rne- RELACióN -) •. Fr. conlrat, rclation
talenguaje*;e. y·. nó.· concierne a nin- fiduciaire, ing. fiducia,Y t;ontract,
guna sustancia* (a ninguna «reali- relation. ·
dad:o), Dicho·. de Otro modo,· una 1. El contrato fiduciario pone .en
categoría: fémica .no es: .otra· cosa juego un hacer persuasii.ro* por par.
que una ·categoría semántica,· em- te del destinador* y, eh competisa-
pleada ·con vistas a. la con.strucción ción, la -adhesión del destinatari9:
del--plano ·de :Ja expresión (o, más de esta manera, si el ·.objeto del
exactamente,;. i:l:e. su: forma). · hacer persuasivo es lcr . veridicción
3. · Este'·Carácter abstracto de las (el decir-verdad) del ~nunciadoi--..;
cate"gorlas fémicas ·permite a ·R. Ja- el contra-objeto -cuyá'. obtención·
kobsOn postular la existencia de tos se da por descontada- ."consiste ~n
universales*- fonológicos (como tam- un ·creer*-verdad que ·~1; enundata.
bién la ; estructura·.· "jerárquica de río otorga al estatuto d,Cl discurso·
estas categorlas): . doce categorías enunciado. En ese caso; ;el contrato
fémicas binarias (tiú.es como· com- fiduciario· es un con°*to enuncia~
pacto/difuso, grave/agudo, etc.) bas- tivo (o contrato de veridiccíón) que
tan . para expuear '-la articulación garantiza al discurso-enUnciado; si
del plano de la ex.presión de todas el contrato fiduciario !¡anciana un
las lenguas· naturales. El postulado
1
progrania"' narrativo en·-:el discurso,
jakobsoniano, a pesar de las diversas se hablará entonces de contrato
criticas'ª las que ha sido sometido .enuncivo.
(las· categorías no· son necesaria- 2. La relación fiduelarla es la que
mente binarias, podrían ser red~fi· se establece entre los :dos -planos
nidas de modo más simple, etc.), del ser* y del parecer*, ~~ando, P<?r
175 FIDUCIARIO (-A) - FIGURA

el hacer interpretativo*, se pasa de natural): así, la figura nuclear*


uno al otro asertando, sucesivamen· abarca únicamente la parte figura·
te, uno y otro de ambos modos de tiva del semema, con exclusión de
existencia. los sernas contextuales* recurrentes
_,. VE.11.lDICClÓN, VER.lDICTORIAS (mo-' {o clasernas'"). Esta concepción de
dalidades-), CREER, EPisffiMICAS (mo~ la figura la acerca a la de Gestalt,
dalidad.es -) .. a la teoría de la forma y de la figu.
ra bachelardiana con una diferencia·
FIGURA. Fr. figure, ing. figure. sin embargo: la figura semiótica
1. El término .figura lo emplea debe .ser considerada como una uni·
L. Hjelmstcv para designar los na+ dad segunda, descamponible ·en las
signos, esto es, las unidades que unidades simples que son los tér·
constituyen separadamente el pla- minos de las categorías figurativa$·
no ·de la expresión*· o el del con· (femas o sernas).
tenido*. La fonología* -y la semán· 4•. En relación con el recorrido
tica* son así, en sentido hjelrnsle- generativo"' global, el nivel* figura·
viano, descripciones de figuras y no tivo del discurso aparece como una
de signos*. instancia caracterizada por nuevos
2. A partir de aquí, es convenien- vertimientos -instalaciones de taS
te restringir algo el sentido de la figuras del contenido- que se so-
palabra :figura. Si se considera que breañaden al nivel abstracto*. Des-
los dos planos del lenguaje tienen, de esta óptica, se tratará de inter· ·
como unidades mínimas, las cate· pretar algunas figuras de retórica*
·garlas figurativas (fémicas y sémi- -tal como la metáfora.*- como una
cas), puede reservarse el nombre de relación estructural Particular que
figuras únicamente para las combi- cubre la distancia entre el nivel
naciones de femas o semas que son abstracto y el nivel figurativo del
los fonemas* y Jos sememas*, como discurso. Una definición asf, aunque
también (en ocasiones) para las di- esté lejos de agotar el inventario
ferentes organizaciones de estos úl- de las figuras de la antigua retóri·
timos. Desde el punto de vista ter- ca, muestra, sin· embargo, la dife·
minológico, cuando se trata de se- rencia de naturaleza existente entre
mióticas no lingüísticas*, el empleo las dos acepciones -semiótica y
de las denominaciones «semema• Y, retórica- de este término. En efec·
sobre todo, «fonema•, se revela evi· to, es manifiesto que los puntos de
dentemente molesto, siendo prefe- vista son diferentes y que, desde
rible hablar entonces de figUras de nuestra perspectiva, es difícil esta-
Ja expresión y de figuras del con- blecer a1g(¡n tipo· de diferenciación f:.·.
tenido. entre, por ejemplo, las. figuras de '-:·
3. En semántica* discursiva pue· ret6ric8. (que serían· propiamente
de precisarse mejor la definición de «estilfsticasi> y corresponderían a
la figura, al reservar este término procedimientos* más o menos este-
tan sólo para las figuras del con- reotipados del enunciador,,.) y las
tenido que correspanden a las figu. figuras del lenguaje tales como las
ras del plano de la expresión de que Bréal se vio obligado a inte·
la semiótica natural* (o del mundo* grar en su sistema para explicar los
FIGURA· FIGURATIVIZAClóN . 176

cambios semáD.titO:S de las lenguas ca es comprender en· ·qué consi,ste


naturales', Por otra parte, se plan· ese sub-componente d,~ la semánti-
tea el prÓblema dC las dimensiones ca* discursiva constitj.tido por la
de las fi&m<is' según que ···se las flguratlvtz.ación de lo$~ discursós y
considere:. -en el caso de los tro- de los textos y cuáles '.Son los pro·
pos- a nivel !eXemá.tico (ligadas cedimientos empleados por el enun-
entonces a una palabra dada de la ciador* para figurativiZar su enun-
frase) o a nivel transfrásico*, dis- ciado*. Asimismo, la. construcción
cursivo: en este segundo caso, las de un simulacro de producción de
figuras_ podrían ~parecer como co- discursos -que llamainos recorrido
nectores* · de isotOpías o, más ex· generativo*- se revela· útil, atmqUe
teDsamente, cOmo·. relaciones enire sólo sea porque perniite establecer
tétminos .·o nivelis, pero perderlan el marco general en qlle pueden tra-
al mismo tiempo su especificidad tarse de inscribir -de· manera ope-
«estilistica11. Por último, las :figuras ratoi'ia* y provisoria, Sometida a· las
de· retórica rebasan, al parecer,· la invalidaciones y recoristrucciones-
problemática de las 'lenguas natu- · los procedimtentos d°C. figuratlviza-
rales::_ el hecho, por ejeni.plo, de que clón de un discui:so 'consideradó,
el· cine conozca metáforas y meto- inicia'lmente, como n~utro y abs-
nimias, .muestra al menos que, en tracto.
el mafco ·del recorrido generativo'* 2. Tal vez convenga dar un ejem·
del discurso, las figuras dependen plo sencilto de. lo que: nosotros en·
del •tronco comtin• semiótico, an- tendemos por figurativización. Pon-
terior entonces . a: toda·. manifesta· . gamos por caso, al comienzo de·, un
ción* en una sustancia* particuJar discurso-enunciado, un. sujeto dis-
de la 'expresión. junto del objeto que es para él
~ FIGURATIVIV.C~ÓN, MErÁFÚRK. tan sólo un objetivo: ·
Su O.
PIGURATIVIZACióN; Fr. figura·
ti;,.¡sation, · ingl. figurativiza.tion. A este objeto -una fnera posición
1. Cuando se -piensa en clasificar sintáctica- se le vierte un valor*
el conjnnto de los· discursos en· dos que es, por ejemplo, la ~potencia,.,
grandes clases; discursos :figurativos es decir, una forma d·e la modali·
y no :figurativos· (o abstraCtos), nos dad* del poder*. (hacer/ser):
darnos cuenta de. que la casi tata- Su Ov (potenCia) .
. lidad de los textos" llamados litera-
rios e hlst6ric0s ''."pertenecen a Ja Partiendo de aquí,.,el discurso
clase·. de los discursos figurativos. puede reanudarse: el programa na-
Bien entendido, ··sin embargo, que rrativo"*-.consistirá en µnir el suj"eto
dicha distinción es. de algtí.n modo, con el ".alor al que a~t.i:nta. No f>bs-
-c:ideal:ll: in te.rita ·.clasificar las for- tante, existen innumerables mane-
. mas (figurativas· y no figurativas) ras de contar una historia. se dirá
y no Jos discursos-ocurrencias. que, que el discurso es ·figurativizado
prácticamente, no presentan riunca cuando el 'objeto sintáctico (O) re-
una forma en .. estado puro», Lo · cibe un vertimiento* semántico tjue
que realmente interesa :Cn semióti· permite al enunciatari~* reconoce':"·
177 F!GURATIV!ZAC!óN

lo como una .figura*, como un «aU· las acciones descritas, de modo que
tomóvib por ejemplo: los lexemas inscritos en el discurso
S u O (automóvil) v (potencia). no instalen figuras semióticas, sino
«imágenes del mundo.-. ya hechas.
El discurso que relate la búsque· Sucede lo núsmo en semiótica pic-
da* del automóvil, el ejercicio y, tórica, donde un cuadro es, natu-
eventualmente, el reconocimiento* ralmente, tratada· como una colec-
por otro del poder que dicha bús· ción de iconos enumcrables que se
queda permita manifestar será un refieren, al mismo tiempo, al mun-
discurso figurativo. do «tal como es~ y al mundo ver·
3. Este ejemplo, a pesar de su balizado. Todo cambia, por el con·
sirriplicidad, muestra bien cómo la trario, si se considera al texto• co-
figurativización raramente es pun· mo culminación de la producción
tual: las figuras df! retórica pueden progresiva del sentido -en el curso
operar, es cierto, en el marco de de la cual, las estructuras y las
un lexema* o de un enunciado*; figuras semióticas se instalan, ras-
lo más frecuente, sin embargo, es go por rasgo, por toques sucesi·
el conjunto del reconido narrativo* vos- y donde el discurso puede,
del sujeto que se encuentra figura- en todo momento, desviarse hacia
tivizado. La instalación de la figura la manifestación~ ya sea bajo una
o11automóvil• afecta al conjunto de forma abstracta•,'ya en una formu-
los procesos* al transformarlos en lación figurativa, sin por ello aican·
·acciones*; confiere contornos figu· zar Ja iconicidad de aspecto chaba-
rativos al sujeto que se convierte cano. También es necesario distin·
en actor*, sufre un anclaje* espa- guir desde ahora, al menos dos
cio - temporal, etc. Se dirá, enton· planos en los procedimientos de la
ces, que la figurativización instala figurativización: . el primero es el
recorridos figurativos* y, si éstos de la figuración, esto es, la instala-
son coextensivos a las dimensiones ción de las figuras semióticas (es-
del discurso, hace aparecer las iso- pecie de nivel fonológico); el segun·
topías"" figurativas. do sería el de la lconizaclón, ten·
4. El estudio de la figuratlvldad dente a revestir de manera exhaus-
está en sus inicios y toda concep- tiva las figuras, a fin de producir
tualización apresurada es, por ello, la ilusión referencial* que las trans-
peligrosa. La principal dificultad formaría en imágenes del mundo.
rc:>ide en el apriorismo implícito, 5. Puede subrayarse, desde ahora,
según el cual todo sistema semió- el rol particular que el subcompo-
tico (literatura o pintura, por ejem· nente onomástico está llamado a
plo) es una «representación• del desempeñar entre los procedimien·
mundo y comporta la iconicfdad* tos de figurativjzación. Como ésta·
como prlmer postulado. Aunque el se caracteriza por la especificación
discurso literario se considere cómo y la particularización del discurso
una •ficción•, su carácter ficticio abstracto (en cuanto aprehendido
no se refiere a las palabras -que en sus estructliras profundas), .se
se supone representan las cosas-, considera que introducir antropó-
sino, ante todo, a Ja disposición de nimos*, topónimos* y cronónimos'*
Sf;MIÓTiCA. - 12
FÍGURATIVIZACION - FILOLOGlA 178

(respectivamente .. correspondientes, cente en diferentes recOrridos figu.


en: el plano de la :sintaxis* discursi- rativos; ello pennite. ,explicar las
va,· a los tres procedimientos coris· variantes. Así, el tema de lo «Sa·
titutivos de Ja diSc;.ursivizació'n: ac- grado• puede ser reprci;entadO pOr
totialización*, · esp2.cialización* y figuras tan diferetltes ·Como las de
temporalización*),. inventariables co- «Sacerdote», «Sacristán~ o aporta-
mo yendo de (o g.enérico (el ..:rciy», estandarte», en cuyo caso, el des-
el .:i:bosque», el «invierno ..) a io arrollo .figurativo de la secuencia
especifico (nombn;s' propios, índices se encuentra afectado; los modos
espacio-temporal~~.· fechado,· etc.), de acción, los .lugares. y .el tiempo
confiere al .texto·.. el grado deseable en que ésta deberá realizarse, con-
de ·reproducción de· ·Jo real. formes en cada Ocasióz;i con la figu-
~ FlGURA, !CONICIDAD, DISCuRsIVI· ra inicialmente escogiQk, serán· di·
ZAcÍ6N; 'GENERATIVO (recorrido·-)~ ferentes los unos de iós otros en
las mismas proporciones. A la 'in·
FIGURATxVo:·- F~:. figuraat.' ing. versa, la polisememia* .de la prime·
figurative . . ra figura colocada puede virtuill-
· l. A diferencia del término figu- mente abrirse hacia num.eÍ"osos reco-
ra ..:....poliséinico-~- del que se deriva,rridos · figurativos corre.Spondientes
el calificativo figurativo sólo S;e em- a temas diferentes: de. ahí el fenó·
plea a· propósito de un contenido* meno de ta pluri-isotopía* que des·
dad'o (de una lengua natural, por arrolla varias significa<;iones super·
ejemplo), Cuando tiene un corres- puestas en un solo discurso.
pondiente en el nivel de la expre- ~ FIGURA, MUNDO NATURAL, Í'JGURA·
sión* de la semiótica natural* (o TIVIZACIÓN, VARIANTil..
del· mundo natur;-.1). En este sen-
tido, dentro del·marco del recorri· FILOLOG1A. Fr. phitologie, i:Úg.
do generatfvo* det discurso, la se- philology.
mántica* discursiVa ·incluye, con el i. Actualmente se entiende por
componente temático (o abstracto), filología el conjunto de procedi·
un· componente figurativo. . mientos cuyo fin es eStablecer un
2. Igualmente, desde esta pers· texto, es decir, su fechado, su des-
pectiva; se entiende por recortjdo ciframiento, el establecimiento de
figurativo un encadenamiento isó- sus val-iantes, su dotación de un
topo* de :figuras,' correlativo a un aparato referencial que·· facilite '1.a
tema* dado. Este encadenamiento, lectura y de un aparato' crítico que
basado· en Ja asociación de las figu. garantice su· autenticidad. Se traJa
ras -propia de un universo cultu- de un trabajo considerable e indis~
ral determinado---es, en p·arte, libre pensable que constituye. µna candi·
y, en parte, consti,eñido, en :t;;t me- ción previa para un ev·entuat aná-
dida eri. que, al c610carse una pri- lisis del corpus*. .·.
mera figura, ésta sóio evoca a algu- 2. Históricamente, la: ·filología ha
.nas, con ·exclusión de otras. Debido jugado un rol particularmente Ím·
a las múltiples Posibilidades de portante al constituirse, desde el
figurativizar un·· úñico y mismo te- Renacimiento, en la prlinera de _Jas
ma, éste puede ericontrarse subya- ciencias humanas. En ·et siglo XIX,
179 FILOLOGlA - FONEMA

el término filología ha servido, pa. 2. Se llama también focalb:aclón


ralelamcnte con el término gramá.. -teniendo en cuenta no ya al SU·
tica, para denominar lo que, en jeto focalizante, sino al objeto fo-
realidad, consideramos coino lin. caiizado- al procedimiento consis-
güística histórica y comparada*. tente en inscribir (o circunscribir),
mediante aproximaciones concén·
FOCALIZACION. Fr. focalisation, tricas sucesivas; . un actor• o una
ing. focaliz,ation. secuencia• narrativa en coordena-
1. El término foc.ali%aclón sirve das espacio· temporales cada vez
para designar, siguiendo a G. Ge- más precisas. Para ello, el enun·
nette, la delegación hecha por el ciador no sólo dispone de las posi·
enunciador* en un sujeto cognos- bilidades ofrecidas por la localiza-
citivo*, llamado observador, y su ción espacio· temporal, sino · tam· 'U·
instalación en el discurso narrativo: bién, y sobre todo, del procedimien· f.:···
este procedh~1iento permite, asf, . to de encajadura gracias al cual .
aprehender, desde el «punto de Vis· puede inscribirse una puntualidad*
ta» de ese mediador, ya sea el con- o una duración en otra duración,
junto del relato, ya sólo algunos un espacio* en .otro espacio.
programas pragmáticos*. Pueden -+ OBSERVADOR, PERSPECTIVA, l.iJCALI•
distinguirse diferentes tipos de fo- ZACIÓN ESPACIO· TEMPORAL, ENCAJADURA.
calización -que es un procedimien-
to de desembrague* actancial- se- FONEMA. Fr. photteme, ing. phcr
gún el modo de manifestación del neme.
observador: éste a veces permane- l. En cuanto unidad lingüística
ce implícito, o aparece en otros ca. del plano de la expresión*, el fone-
sos en sincretismo con uno de los ma es una unidad mínima por ser
actantes• de Ja comunicación (el indescomponibie (o no segmentable)
narrador"', por ejemplo) e con uno a nivel de la manifestación* sin·
de Jos actantes de la narración (tm tagmática (es decir, tras la semi~
sujeto pragmático*, por ejemplo). sis* por la cual son reunidos Ios
Sin embargo, ·ha de notarse. que dos planos del lenguaje)¡ en cam·
. este concepto de focalización, aun· bio, como figura* del plano de Ja·
que agota la antigua noción de expresión, es susceptible de un aná·
«punto de vista» con ayuda de la lisis en unidades más pequeñas, lla-
perspectiva*, no es sino provisional: madas rasgos fonológicos o femas*.
no da cuenta de todos los modos Aunque, en su orige,i, el fonema es
de presencia del observador (por una unidad construida a partir de
ejemplo, en el caso de la aspectua. consideraciones sobi-e el significan·.
lización*). no explica tampoco. la te• sonoro de las lenguas natura·
constitución de los espacios cognos- les, los procedimientos de su ela-
citivos• parciales, caracterizados boración tienen un valor general y
por la presencia -dentro de los pueden ser eventualmente aplicados
programas pragmáticos- de dos a otros tipos de significantes (grá.
sujetos cognOscitivos en comunica· ficos, por ejemplo) y a otras semió·
· ción. tica s.
FONEMA 180

2.· Los lingüistas de la Escuela ferentes y que un mismo fonema


de Praga (N. Trubetzkoy. R. Ja- puede pertenecer a conjuntos .dife-
kobson) y otros, Como A. Martinet, rentes, etc. Se trata aQuí de una
dan una definición· paradigmática* consideración sintagmática, indüe-
del fonema: el piocedimiento ·de rente a las preocupaciones de la
conmutación* les permite constituir Escuela de Praga.
el paradigma* en cuanto clase de S. Estas diversas· inetodologías
fonemas («bar... ""Par•, udar•, «zar... enfocan el análisis del Plano de la
<ilar•, etc., constitµye un paradigma expresión considerado en sí mismo
de consonantes conmutables); éstos y tratan de explicarlo·. ya sea en
se diferencian; luego, gracias a las forma de un sistema•·: fonológico
opo_sicioD.es · paréit\les · reconOcidas y/o, eventualmente, de una sintag.
.entre ellos y que'. se· interpretan mática ·fonológica (la síl_aba puede
como rasgos distintivos* que carac· ser considerada como uil <(enuncia·
terlzan ··a .-cada· fOnema ·particular do~ del "Plano de la expresión}, Si,n
(b ·y p en· «bar• :y _«par1>, se dife- embargo, el problema ;se plantea
rencian· por el rasgo sonoridad/ no de distinto modo si el -plano de la
sonoridad); · expresión es enfocado ·únicamente
3. ~ La ·Escuela de· .Copenhague (L. desde e1 purito de vista del rol que
Hjeimslev, K. Togeby) procede· de desempeña en el momento de la
modo algo .diferente, pues parte de •semiosis, cuando SÜministra los for-
la unidad de expresión máxima que mantes* que permiten: constituir
es la ·silaba, donde identifica los los signos• (y, en primer lugar, los
dos tipos de unidades o de cate- morfemas*). De ahí ·que. la gramá-
gorías* qu~ son. las vocales y las tica generativa* -para: la que la
consonantes 1 y cada una constituye fonología y la semántica son 11.sir·
una clase .de conmutaciones pero vientes» de Ja sintaxis-: no se inte-
no son conmutables' •entrC si (un~ rese por el componente . fonológico
vocal, por ejemplo, no es cdnmu- sino en la medida en que ·éste pue·
table en el mismo contexto con una da suministrarle formantes que le
consonante): el fonema· se encuen- permitan realizar los morfemas Jé·
tra, pues, dotado de una definición xicos engendrados por :.·.el compo-
.paradigmática y, a la vez, sintag- nente sintáctico. Parecerla como si
mática. · la teoría generativa ·PU:diese áho-
4. El análisis distribucional* · lle- rrarse el concepto de fonema al
ga, más ·o menos, a· los .mismos re-. proponer la representación de }QS
sultados ::procediendo al análisis de formantes como matric~s de ras-
las diferentes distribuciones de los gos distintivos, donde cada <(empla·
fonemas: a partir de un corPus* zamiento1:1 del fonema eiitá. caracte.
dado, se trata de reconocer los; con- rizado por la presencia ó la ausen·
textos de cada ocurrencia y de agru- cia de los rasgos fono1Ógicos per-
par 'esas diversas .realizaciones en tinentes. El concepto de ·fonema se
un número finito de conjuntos. Se encuentra oculto pero IJ;O está au.
comprueba, ento:nCes •. que fonemas sente.
diferentes poseen ~~stribuciones di- ~ FONOLOG!A,
181 FONllTICA - FONOLOGIA

FONJ3.TICA. Fr. phonétique, ing. definiciones plantea problemas fun-


phonetics. damentales que conciernen a la teo-
1. La fonética es una disciplina ría semiótica y amenazan con poner
de la Jingi.iística* consagrada al es· en tela de juicio algunos de sus
tudio del plano de la expresión* de postulados. ·
las lenguas* naturales: en cuanto 3. Según la naturaleza de las uni-
análisis de la sustancia* de la ex- dades fonéticas estudiadas, puede
presión, se opone a la fonolog(a oponerse la fonética segmenta! (o
(que examina la forma* de la ex- fonemática) que opera con unidades
presión). Robustecida por un pasa- correspondientes a Ja dimensiones
do muy rico -consiguió elaborar de los foriemas*, a la fonética su·
su metodología en el ámbito de prasegmental (o prosódica) que tra·
la lingüística histórica y compara- ta la materia sonora de Jas tmida-
da*-, la fonética actual se ha re. des sintagmáticas más amplias.
novado completamente gracias, en -+ FONOLOGfA, PROSOOlA.
especial, a los progresos técnicos
que le han ido suministrando un FONOLOGtA. Fr. phonologie, in·
instrumental experimental perfec.. glés phonology,
donado y diversificado. El avance t. Disciplina lingüística que tie-
triunfal de las investigaciones sin- ne como objeto de análisis el :plano
tácticas, como el observado durante de la expresión* de· las lenguas
la década de los años 60, ha permi- naturales, la fonología, en cuanto
tido que se produjera la impresión estudio de la forma* de la. expre·
-completamente falsa_; de una fo- sión, se opone a la fonética (que
nética «tradicional~ y agotada, sien- examina la sustancia* de la expre-
do así que se trata de un campo sión). Elaboración teórica y, a la
vivo de investigaciones, insuficiente- vez, práctica del .aporte saussurla·
mente conocido por los estudiosos no, la fonología puede ser conside- 1
de la semiótica. rada como una de las empresas
2. Según las diferentes instan- más significativas realizadas en el
cias* de aprehensión de los fenó- marco del estructuralismo* euro-
menos fónicos, cabe distinguir: peo; ha servido de modelo a Ja 'J.>1.•.
a) una fonética artlcutatoria o concepción. de la semántica* Jla. ;:··
fisiológica, interesada en los modos mada estructural, y también, a la
de producción de los sonidos del fónnutación rigurosa de ciertos
lenguaje, considerados corno proce- campos de. la antrOpología social
sos de articulación*; (cf. las estructuras elementales del
b) una fonética .acüstlca que tra- parentesco estudiadas por C. Lévi·
ta de dar, en términos de física Strauss). La eficacia del modelo fo-
acóstica, las definiciones de las ar- nológico no está todavía agotada; ·
ticulaciones sonoras; continúa desempeñando su rol en
e) una fonética auditiva que apre- la e1aboración de" Ías semióticas
hende los mismos fenómenos, pero particulares.
a nivel de la percepción. , 2. La fonología opera, principal~
A poco de iniciada, la homologa- mente, con dos clases de unidades
cióÍl de estos procesos y de sus de la expresión: los fonemas o eta-
FONOLOG!A ·FORMA 182

ses · sintagmáticas ·obtenidas por su permanencia e identidad. En esta


connlutación* . pai'~digmática, y las acepción fundamental, la,·!orma está
categorías fémiCás* o categorías* próxima a nuestra coiiCepción de.
semánticas,· poco ··numerosas, que estructura (cf. Gestalt).:
establecen y precisan las relaciones 2. Cuando el concepto. de forma
de oposición entre los fonemas se aplica a los <tObjetoS de pensa-
miembros de cada Uno de los para- miento,., la materia que: ella infor·
digmas. Los fonemas se presentan, ma se encuentra pro&Tesivamente
entonces, como los términos-resul- interpretada -por un deslizamien·
tado de las categorías fémicas, o to semántico- como e1 ,.«sentido1:1,
·mejor aún, como Jos puntos de in- el acontenido:e, el •fon(loi>, y da
tersección de las diferentes relacio- lugar, así, a las dicotomías consa~
nes que constituyen esas categorías. gradas por el uso cotidiano. Desde
Resulta, pues, que el sistema fono- este punto de vista, la palabra far.
lógico (en los niveles fémico y fone- ma es comparable ·y resulta casi·
mática) es una articulación de la sinónima de expresión: el «foncJo:o,
forma de la expresión· y que, en considerado como invariante, es OQ-
ningún lnomento, .se. define por la jeto de variaciones en· ·los planos
sustancia sonora, objéto• de la foné- fonéticCI, sintáctico o estilístico. Si,
tica. Es ·decir, el. ·modelo fonológico por el contrario:• se considera al
es ·totalmente independiente de su sentida como <talgo que ·existe pero
manifestación en tal ··a cual lengua, de lo que nada se puede decir»
en tal o cual semiótica. (Bloomfield). se valoriza :ia forma:
3. La· fonología· ~e divide en fo· sólo ella· es susceptible :de ser so..
nemática· (o fonologia segmental) y metida al análisis iingfüStico (cf. el
en prosodia (estudio de los fenóme· estructuralismo* nortearó.'cricano ).,
nos Suprasegmental~). · 3. En este coni:exto ha·de situar·
-+ FO~CA, FON~~·.FEMA; PROSODIA. se la afirmación de F. de'.·Saussull,
según la --.cual, la lengU~. es un~
FORMA. Fr. fortiie,. ing. ·form. forma re::;ultante .de" Ja 'r"eunión cJe
1. · Los. empleos i:i_iVersos y varia- dos sustancias*. Al no· -ser ni la
dos ·de Ja palabra· .forma reflejan, sustancia «física:e n: Ja . sustancia
prácticamente, toda la historia del «psíquica~, sir,1,) el Jugar de su con·
pensamiento occidental. Asimismo, vergencia, la forma es una estruc-
el estatuto atribuido a este concep· tura significante (cf: Merlau-Ponty):
to en alguna que o"tra teoría se- la independencia ontolóiica de ·la
miótica (o, más limitadamente, lin- forma semiótica, así afinriada, con·
güística) permite rec9nocer con fa. fiere al mismo tiemp'.o 'Un estatuto
cllidad · sus .fundamentos epistemo· de autonomía a ta lingüística (que
lógicos.·En ~eJecto, Iá noción de for- tendrá como objeto Ja descripción
ma ha heredado de la . tradición coherente y exhaustlv;:,::· de dicha
aristotélica un lugar" Cm.inente en. forma). ,
la teoría de! conocimiento:: optiesta 4. La interpretación que da L.
a materia -que <tinforma», a la vez Hjelmslev de la concepción saussu:
que ··forma~, 'el objeto cognosci· riana de la forma pen;nite afinar
ble-, la. forma _es lo que garatitiza el instrumental a la vei:' epistemo..
183 FORMA· FORMAL

lógico y metodológico de la semió- ma Y la sustancia* (excluyendo de


tica. La formulación monista de la las preocupaciones de la lingüística
forma significante (que no se apli- . la sustancia tanto de orden «ffsicoii-
ca, stricto sensu, sino a las cate- como i.:psfquico»), se definió la len·
gorías prosódicas* de las lenguas gua como una forma: así, la lin·
naturales). sin ser cuestionada, ad· güística y, más generalmente, la
quiere mayor extensión al postular semiótica se presentan, en cuanto
la existencia de una forma propia estudios de las formas, como disci-
para .cada una de las dos sustan· plinas formales (con el mismo títu-
cias: la forma de Ja expresión y la lo que la lógica o las matemáticas} ..
forma del contenido deben ser re- 4. Independientemente de los des.
conocidas y analizadas separada· · arrollos de la teoría lingüística, en
mente, antes de su reunión en el matemática.S y lógica aparecieron,
esquema* semiótico. desde finales del siglo XIX, investi·
5. El reconocimiento de sendas gaciones referidas a los sistemas
formas para cada uno de los pla· . formales (llamados también, a ve-
nos del lenguaje ·ha hecho posible, .. ces, lenguajes formales). El carác-
en un marco teórico general, reubi· · ter formal de esios sistemas pro--
car la fonología -estudio de la for· viene, ante tOdo, del hecho de que
ma de la expresión- con respecto se presentan como explícitos*: el
a Ja fonética, estudio de la sustan- sentido escolástico de la palabra
cia (cf. -émico/-ético); también ha «formal• se Opone, entonces, a in·
autorizado a trasponer las mismas tuitivo*. vago, implícito*. Por otro
distinciones en el plano del conte· lado, un sistema formal así e"s con·
nido, abriendo asi la vía a la ela- vencional: se basa en un conjunto
boración de Una semántica* formal. de fórmulas llamadas axiomas, a,
~ ESTRUCTURA, EXPRESIÓN, CONTENI• las que arbitfariamente se las de··
DO, FORMAL. clara demostradaS: se caracteriza
por un alfabeto* de símbolos*, por
FORMAL. Fr. formel, ing. formal. un conjunto de reglas* que permi· ·
. 1. E.n cuanto adjetivo derivado ten construir expresiones* bien for~
de _forma*, formal refleja las dife- madas, etc. Instaura y autoriza, en
rentes acepciones que ha recibido, consecuencia, un cáicuto formal, in·
sucesiva y paralelamente,· ese con- dependiente de toda intervención
cepto. exterior (de toda consideración de
2. Según la distinción tradicional la sustancia). El sistema formal así
que opone la "'fonnai> al «sentidoi> elaborado, enlaza con Ja concep.
(o al «contenidoi>). se califica de ción saussuriana de la forma y se
formal a toda organización o estruc· caracteriza por ser una de las pro-
tura desprovistas de significación*. piedades esenciales de todo lengua-
De esta manera, por oposición a la je*.
semántica, se considera que la ·fo- S. Sin embargo, el sistema for-
nología y Ja gramática son discipli- mal se distingue por su resistencia
nas formales. a considerar que las formas que
3. Desde que F. de Saussure es· explicita y manipula sean formas
ta,bleció la distinción entre la for· significantes. Aparte el uso que se
FORMAL - FORMALIZAC!óN 184

pueda hacef de ·estés sistemas' con ciones hechas en cienci~ humanas


a
miras ·la form'alización de la teo- que utilizan, en · su ihStrumerital
ría semiótiCa, el "problema de su metodológico, procedimiéntos* for-
estatuto· en tanto que Ieniuaj~. no males. Así, la semiótica es acusada,
deja de plantearse. Desde este pun- con frecuencia, de ser f0rmalista y
to de vista, siguiendo a L. Hjelms- de «deshumanizar111 el objeto de sus
lev, cabe. considerar que se¡ trata de investigaciones: realmente, no llega
semióticas monoplanas* (constitui- todavía, en la actualidatj:, a forma-
das únicamente por el plano de la lizar sus análisis y se·:.encuentra
expresión) y que, de manera simi- sólo en un estadio de Preformali-
lar a los. fonemas b y p en 1tbala,. zación. . .
y «pala•· -distinguidos sólo por la· ·3. El formalismo ruSo.· -que de-
presencia'. implícita ~el sentido, por signa las investigaciones. lingüísti-
así decirlo, negativo y discrimina- cas, pero sobre todo literarias, rea-
torio*-, los símbolos de Jos len- lizadas en Rusia en los ·años 2(}......
guajes formales están desprovistos ilustra bastante bien. la ambigüedad
de significación. Pero no es menos del término: acusadas d~ formalis-
evidente :que todo .. lenguaje -y, a mo porque no manifestaban sufi·
fortiOri, toda gramática- descansa ciente interés por el coni:'enido ideo-
en tin conjunto d6 _categorí¡is se- lógico de las obras literarias, estas
mánticas universales· (v. univ.ersales) investigaciones no eran formalistas
y que el . verdaderi;> problema es el en el sentido neutro del término,
de la eliminaciór\ - del se"ntido al pues intentaban circunscribir la sig·
construir- un sistema formal y· el nificaci6n de las· forma;~* (en el
dé no reimplantarlo a destiempo sentido casi saussuriano de esta pa-
con fines de interpÍ'Ctaci6n*, como labra). Hay que añadir que el for·
en gramática generativa*, malismo ruso no es sino una mani*
~ FOR!LA, ':proRÍA, AXIOMÁTICA; :FORMA• festación particular de Üna episte-
L!ZÁCIÓN, I~ACIÓN'. me europea, común en· Ja época:
puede hablarse también ·dei forma·
FORMALI$MO... 'Fr. formalisme, lismo alemán ·(investigaciones sobre
ing. formatism. · el barroco, por ejemplo) o del for·
l. Se entiende por formalismo malismo francés (descubrimiento y
·-en sentido .neutro, "pero a menu- fonnulación ·del arte romano par
do peyorativO- una actitud cientí- Faucillon y sus colaboradores). ~sta
fica que trata .de fcrmalizar las tradición ha sido asumida después
tecrías conceptuales ·a· construir mo- de la guerra, con una exPresión di-
delos* formales P.ara describir ·los ferente, por el denominado estruc~
datos de la experiencia, y, más par. turalismo* francés.
ticularmente, que ein:plea los siste·
mas formales*, basadOs en una axio- FORMA.l.IZACióN. Fr. 'formalisa~
mática~.: tion, ing. forma!izatiOn.
2. El término «fonnalismo111 lle- .1. La formalimclón es' la trans·
ga a 'resultar, a todas luces, peyo- cripción de una teoría eñ un len·
rativc cuando califica las investiga- guaje fcnnal* {utili2and0:: un siste-
185 FORMALIZAClóN · FRAGMENTAC!óN

ma formal apropiado). Presupone, de los sistemas de representación*


pues, la existencia de una teorla Ya apropiados.
elaborada que, aun cuando no esté -+ GENERACIÓN, INTERPRETACIÓN, TEO-
terminada, comprenda ya un cor- IÚA.
pus de conceptos• interdefinidos y
jerarquizados; toda fonnallzación FOR.i\IANTE. Fr. formant~ inglés
·apresurada -procedimiento dema- formant. - En lingüística se' entien·
siado frecuente en nuestros dias- de por forma~te, una parte de la
tan sólo viene a ser una caricatu. cadena d~I plano de la expresión*
rizaci6n.
·2. La formalización, por tanto,
correspondiente a una unidad del f:.
plano de contenido*, ~ que -en el ·
no es un procedimiento* de des- momento de la semkisis*- le per·
cripción*; menos aún -no se sa.
mite constituirse en signo (morfe-
bría por qué razones-; un fin en
ma* o palabra*). El fonnante no es,
si mismo del quehacer científico.
pues, una unidad sintagmática'* del
Al intervenir únicamente en un es- plano de la expresión (como lo son,
tadio avanzado de la construcción por ejemplo, el fema, el fonema o
de una teoría, sirve sobre todo para la sílaba) considerada en sí misma;
probar su éoherencia* y .para com- es, propiamente hablando, <i<el for~
parar dos o más teorías que traten mante de ... ,,: depende del ·uso* y
del mismo objeto de conocimiento. no de la estructura*. L. Hjelmslev
3. La gramática generativa*, que ha previsto, dentro ·de la lingüísti·
se presenta como una teoría forma- ca, t.Ul lugar particulai- para la <tteo-
lizada, no es susceptible de campa. ría d~ los formantes··~ independien~
ración, para fines evaluatorios, sino te de la fonemática y de la rnorfC·
con otras gramáticas del mismo mática. ·
género. No obstante, todo sistema ~ SIGNO.
formal es interpretable*: por eso,
wia vez interpretada y conducida
-por así decirlo- al estadio de una FRAGMENTACION, Francés dé-
teoría conceptual, la graroátiCa ge. coupage, ing. segmentation.
nerativa puede ser comparada Con 1. La fragmentación designa el
otras teorías semióticas y analiza. procedimiento* de segmentación del
dos sus fundamentos epistemológi- texto manifestado en secuencias tex~
cos, así como su capacidad y su tuales, operación que se efectt'ia en
manera de resolver los problemas el eje* sintagmático.
esenciales que se le plantean a toda 2. A veces también se entiende
teoría del lenguaje.· por fragmentación la categori7.ación
4. No dudamos de que la teoría del mundo y/o de la experiencia,
semiótica no está todavía en un efectuada de acuerdo con Ja diver~
estadio que le permita prever su sidad de las lenguas naturales: C.
formalización: reconociendo que se Lévi • Strauss emplea, en este sen~
encuentra en el e.<>t:ado de prefor- tido, la expresión '.lfragmentaci6n
mallzaclón, de lo que· se trata es conceptual• que remite a una orga·
de concentrar sus esfuerzos en Ja nización de tiPo paradigmático. ·
elaboración de su metalenguaje* y -+ SEGMENTACIÓN, ciTEGORIZACIÓN.
FRASE· FUNC!óN .- 186

FRASE. Fr.' phra.Se, ing. sen.tence. 3. No son tanto 1~ &imensiones


1. · Tradicionalmeilte, se define la de la frase cuanto su organizaCión
frase como una, unfdad de Ja cade- interna lo que define y; ·al misnio
na* sintagmática, caracterizada se- tiempo, ·plantea problemas: Ja eS.
mánticamente poi-. la autonomía tructura binaria, .aunqu~ Se rem~ll­
relativa de.· su signl.ficación Y. fo- ta a Aristóteles (con 1a~. distinci6_~
néticamente~ por 'la presencia de sujeto/predicado) y se h<i :manteni-
derilarcadores 'de naturaleza prosó- do sólidamente hasta nuestros días
dica* (pausas y modulaciones frá- (llje!msJev, B!oomfield, :Chomsky),
sicas, mayúsculas y signos de :pun- 'ºº está necesariamente en la o:n8.tu-
tuación). EStá claro que Ja defini- raleza de Ias cosas», y ello tanto
ción· senlántica e~ intuitiva (una más cuanto que la sh;táxis es con-
frase puede compfender varias ui:ú- cebida, actualmente,· como un ten:
dades de. sentido, varias proposicio- guaje construido partierido de u~a
nes) y que los· ·.criterios fonéticos axiomática*, Dicho de Otro modo,
· permanecen. inciertos. Ambas · con- la definición de la estnictura funda-'
sideraciones tiata.IÍ,: en efecto, d~ mental de la frase (su Carácter bi-
especificar Ja frase por algo -dife- nario o teriiario) es ~~ cuestión
. rente a lo que· ella :_es:· una unidad de elección aprlorística. -·Así, Ja dé.-
sintáctica. · terminación de la estructura ele-
2. La Jingilistica estrilctural 'con- mental del enunciado sustituye, en
fiere . a Ja frase su independencia la actualidad, a la problemática de
sintáctica:. Así, para Bloornfield, la la frase. ' ·
frase; aun construida con ·ayuda de -:> ENUNCIADO.
elementOs cOnstituyentes*, nó · es
ella· misma constituyente de nin-· · FUNCION. Fr. fonctioni ing. fu.né-
guria unidad mayor. Por su iado, tion. - Aunque el término función
L. HjelmsJev define. la frase Como es frecuente en lingüística y, más
la mayor unidad sintáctica que po- generalmente, en semiótiCa, se em•
see un carácter iterativo dentró del plea a menudo -incluso.~dentro de
texto• infinito, y li Considera como una tnisma teoría- con, al menos,
la única capaz de ·ser. sometida a tres acepciones diferentes: A) en
análisis._,; Que la ·empresa sea· ascen- sentido utilitario o tnS_trumental;
dente y parta de Jos .elementos mí- B) en sentido Organicista~ C) en
nimos (Bloomfield) o que sea des- una acepción, por último, Iógico-
cendente y proceda" por segmenta· matemática. ·
. ción (Hjelmslev), el resultado es
comparable en ambos casos: la fra. A. InteTPretaclón instruttsentaJ.'
· se aparece como una totalidad que . I. Para A. Martinet, :ia fUnci6'n ·
cubre una jerarqu.fi! sintáctica. En principal del lengUaje es la función
cuanto unidad supe"riOr, infranquea· de comun.Jcaclón, al ser ,el lenguaje·
ble, la frase impon'e sus límites a un «instrumento de coniunicación•.
la gramática · qu_e, .l><?~ este h~o. Dicha concepción que pr'etende ate-
resulta no .ser nadá más ,que 'una nuar el fonnatismo* de;·.1a lingüís-
gramáti~ fráslca. tica* estructural, restriri~e en rea-'
187 FUNC!ON
lidad el alcance de la teotia lin- tiene dentro de ese todo que eS Iá.
giiística {si el lenguaje es comuni· frase. Sujeto, objeto, predicado, por
cación*, es también producción de ejemplo, son denominaciones de
sentido, de significación*) que ya funciones particulares. Aun cuando
no puede ser extrapolada y aplicada el inventario de las funciones sin-
a otros sistemas semióticos (a ;;x- tácticas no tenga en cuenta la je-
cepción quizás de «Verdaderos» sis- rarquía"' de los, elementos (el sujeto
temas de comunicación, tales como y el calificativo no se sitúan al mis-
las señales del códido vial. .. ). La mo nivel de- derivación"), esta di-
Ungüístlca funcional, tal como la mensión de la organizaci.ón sintácti-
concibe MarHnet, es una lingüística ca sigue siendo pertinente y puede
«realista». dar lugar a nuevas reformulaciones
2. En el mismo s~ntido instru- en el marco, por ejemplo, de nues·
mental se· habla de definición fun. tra sintaxis actancial. La misma lin·
clonal cuando contiene informacio- güistica generativa"', que había par·
nes sObre el uso o la finalidad del tido de una división de la frase en
objeto o del comportamiento des· clases"' sintagniáticas, se vio obliga-
critos (cf• ..:la silla ... para sentar· da a reintroducir este nivel de aná-
se~): el análisis semántico de los lisis so capa de indicadores* sintag-
lexemas de este tipo, explicita tanto máticos, en el que el sujeto, por
los valores• de uso, como los pro- ejemplo, es ·definido como el sin-
gramas* de uso que ellos implican. tagma nominal inmediatamente do-
minado por F.
B. '.Interpretación organicista. 3. Dentro del marco de una re·
1. -e. Benver,i.iste emplea el con· flexión epistemológica, ciertos psi·
cepto de función, elemento necesa- cótogos (K. Bühler) O lingüistas (R.
rio -a sus ojos- para definir la Jakobson) han preferido destacar
estructura, en un sentido de inspi· las funciones del lenguaje (especie
ración biológica: «Lo que da a la de esferas de acción que concurren
fotma el carácter de una estructura a un mismo objetivo), cuyo conjun·
es que las partes constituyentes to definiría, de manera exhaustiva, .
llenan una función.:L> Este esfuCrzo la actividad lingüística. Así, Bühler
de conciliación entre estructura y reconocía tres funciones principales
función le permHe reinterpretar la en el lenguaje: expresiva*, conativa•
lingüística diacrónica del siglo xxx; (Appell) y referencial"' (representa·
pero también, justificar la concep· ción*). Disponiendo estas funciones
ción de ta frase* cotno una estruc- en e1 eje de Ja comunicc:.ción*, R.
tura cuyas partes constituyentes Jakobson agrega otras tres: fáttca•,
están encargadas de funciones sin- metallngüístlca* y pÓétlca•. Tal dis·
tácticas. tribución -presenta ' Ja ventaja de
2. Por función sintáctica se en- brindar ·un cuadro de conjunto, su-
tiende tradicionalmente el rol que gestivo, sobre las diferente:;. «proble· !
tal o cual elemento, definido pre- máticas11 del lenguaje: sería arries-
viamente como unidad morfológica* gado ver algo más. Este esquema
(adjetivo, verbo, etc.) o sintagmá- no puede ser considerado como una·
tica (sintagmas nominal, verbal} axiomática! desde la que se pueda~':.
'
FUNC!óN 188

elaborar,· poi- vía .d.i! la deducción*, Se corresponde con la división ·de


toda una teoría' del)enguaje¡ no es la sociedad misma en tres clases
· tam¡)oco · una taxqliOmía de en un· (sacerdotes, guerreros y·· agriculto-
ciados: a lo más, Se Podría ver en res· ganaderos). La· artiQtlación tri·
él posibilidades· de: Connotaciones* pirtita de las funciones· 1deológlcit4
de los menSajes «deriotativosi>, pos· permite atribuir un cam¡,o Semán·
tulaciones de significados*· connota- tico particular (una esfera de sobe·
tivos cuyas marcas se tratai!a · de ranía) para cada una de las funcio-
reconocer en el nivel del discurso. nes, al mismo tiempo qtle establece
La filosofía del lenguaje trata de una relación de jerarquía entre
determinar ·las funciones del len- ellas.
guaje no ya partiendo de una re-
flexión general .sobre su naturaleza, C. Interpretación lóglccr· matem~·
sino a niveJ. del ·actO* de lenguaje, ti ca.
inscrito en el marco· de· la intersub- l. Consciente de la dificultad, si
jetividad. Una ·conSideración prag- no de la imposibilidad, .. de excluir
mática* trataría de constituir·listas totalmente de la lingüística la acep.
de ...:funciones» (del tipo «pregunta», ción organicista de la fu.i::i.ción (que
•deseo•, corden1J, «expectativa:t, etc.) refleja, ·imperfectamente(,es cierto,
que -aun renovando la problemá- el aspecto productivo Y; dinámico
tica de la comunicación- aparecen, de la actividad del leriguaje ), L.
todavía hoy, como tantas otras pa- Hjelmslev -trató de dar a. este tér·
ráfrasis•. no· científicas y no consti- mino una deñniclón lógicci:~matemá·
tuyen un conjunto ·coherente. tica: para él, la función: debe ser
4. En'·: su Morfolcglo. del cuento considerada como ..:la relación entre
m'araviUOso ruso, V: Propp designa das variable.s», y agrega. que esta
con· ei nombre de fl.~clones Jas uni· relación debe enfocarse 'Como una
dades sintagmáticas que perm3.ne- «dependencia que llena ·1as candi··
cen constantes a pesar de la diver- ciones del análisisi>, pueS· participa
sidad de los relatos, y cuya suce- de la red de interrelaciones recl·
sión (en número .de 31) constituye procas, constitutivas de tcida semió-
el cuento. Dicha · copcepción, 'que tica. Tal relación, denomina.da fun.
permite 'postular la -existencia de ción, se establece entre los ·ténninos
un principio de orga~ción subya· llamados funtivos. Así pues, la lin·
cente a clases entetas de relatos, ha güística hje1msleviana es .funcional,
· servido de pUnto de partida para pero en un sentido mu~. diferente;
elaborar· diferentes teorías de la al de Martinet.
narratividad*. En cuanto a la no- 2. Una síntesis de las.' dos con·
ción de ·función; qQe. resultaba- un cepciones de la funcióI) .:t.1a de s;
tanto vaga en ProPP: puede pÍ'eci- Benveniste. y Ja de L. Hjelmslev-
sarse· y ·reformular$6 en términos parece posible para defirur·et enun.·
de enunCiado.s*· naITa:tivos. · · · ciado* elemental: i-eservalldo exclti·
5. G. Dumézil ep-tplea el téni:iino sivamente el nombre d,e'.·. funciOJÍ"
función -par3 expliCa_r la · división para la «función sintáctic:a», deno-
tripar:titá: de.· la ideología de los minada predicado, y desígriando co-
pueblos indo-europeos, división que mo actantes* a otras fun~iones sin·
189 FUNC!óN

tácticas que, en cuanto funtivos, taurarse (o ser reconocida} sino


representan los términos-resultado entre, al menos, dos términos* (en
de Ja relación constitutiva del enun- este caso, entre dos actantes). Aho-
ciado, se puede dar Ja formulación ra bien, los enuÍlciados calificativos
canónica: F (A 1, A2•.• ). Los verti- se presentaban justamente como
mientos semánticos mínimos de la enunciados con un solo actante.
función, asf definida, posibilitan c-1 Una reestructuración parcial de la
posterior establecimiento de una definición del enunciado elemental
primera tipología de enunciados ele- se reveló necesaria, y asimiló los
mentá.lc.c;. De este modo, en un pri- enunciados calificativos a los enun-
mer momento pareció económico ciados de estado"' (caracterizados
distinguir, por una parte, los enun- por la junción* entre el sujeto y el·
ciados · constituidos por una fun- objeto), oponiéndolos a los enun-
ción y, por otra, aquellos cuyo pre- ciados de hacer* ·{que tienen por
dicado sería una calificación* (co- función la transformlición*). Desde
rrespondiente a las proposiciones de esta perspectiva, la función puede,
eXistencia en lógica). La aplicación entonces, definirse como Ja relación
de esta oposición al análisis narra- constitutiva de todo enunciado.
tivo abría el camino a dos· direccio- 3. L. Hjelmslev llama función s~
~es de investigación: mientras que mlótica ·a la relaciótl- que existe en-
el modelo funcional daba cuenta tre Ja forma* de la expresión* y la
de Ia disposición de los enunciados del contenido*. Definida como pre-
narrativos definidos por sus· funcio- suposición• recíproca (o solidari·
nes ( = las ufuncionesJ> en sentido dad"'), esta relación es constituyen·
proppiano), el modelo calificativo te de los signos* y, por este hecho,
permitía describir la manera de ser creadora de sentidq* ·(o, más pre·
de los objetos semi6ticos, conside- cisamente, de efectos• de sentido).
rados en su asPecto taxonómico. El acto de lenguaje consiste, sobre
Sin embargo, la distinción propues. todo, en establecer la función se-
ta contradecía el postulado estruc- miótica. ·
tural, segón el cual una relación*, -). ENUNCIAOO.
cualquiera que fuere, no puede ins·
'•"'

.- '.

G
~· .
-•,
GENERACióN. 'Fl'fgénération, in· métodos genéticos, y rid 'de los ge-
glés 'generaiion.: .. . nerativos. La misma diS'tinción se
1. · El término g'eneraclón designa impone _para el análisis -·aet discur:
el acto· de éngen!il1U', de producir, so científico: mientras que la- hiS~
tanto' en ,·sentidó biológico. como en toria· de una ciencla ~ue traza
sentido. CpistemológiCo. Esta seglln.. sus progresos, ·sus rodeOs y sits
da acepción, de uso corriente en impases- representa uná _aproxima•
matemáticas· (d0nde, por ejemplo, ción genética, el discursO .científico
se habla· de la generación de un se considera .como un :··estado de
volumen o de un número) 1 la intro- ciencia, producido por Un algorit.- ·
dujo N•. Chomsky etÍ lingüfstica y mo"' generador. :.-..
se ha extendido a la semiótica. 3. Introducido en Ungij!stica, él
2. La defiitlclón•. por generación concepto de generación ha: dado Ju-.·
de un objetO semiótico -que Jo ex· gar a la constitución de :una teoría
plica por su modo de producción- conocida bajo el nombre· de gramá-
debe distiniuirse de su definición tica generativa*. (La introducción
taxonómica"' (que, en su forma tra- s'imultánea del modelo transforma-
dicional al menos, lo determina por cional crea, muy a menudo, cierta
el género y la especie). La aproif- confusión entre ambos aspectos teó-
mación generativa se opone radical~ ricos.) La especificación de esta gra-
mente a la aproximación genética: mática como generativa es-tá vincu- ·
ésta considera a la génesis de un lada a dos caracteristicas principa:
objeto cómo situada en la lfnea del les (aquí seguimos de cerca la in·
tiempo y cumpliéndose en· una serie terpretación dada por J; Lyons):
·.de formas sucesivas, por lo general toda gramática puede ser llamada
en relación con las circunstancias generativa, si es proyecti\ra (o pre-
exteriores· que han podido condicio- dictiva) y explfcita*. · ·
nar etdesarrollo. ·Así, el estudio 4. Una gramática es proyectiva
del proceso de ap.re;ndizaje de una cuando un conjunto de reglas*, que· !i
lengua (ó en otro campo, el queha~ describen, de manera e~pU:cit<i. o
cer psic<?analítico) depende de los implícita, un corpus'* lirriit:ado de
.i·
191 GENERAC!óN ·GENERATIVA (gram. -)

frases, considerado como una mues* cificas de Oz- en aplicar al segundo


tra de un conjunto de frases más objeto la propiedad del primero.
vasto, es susceptible de ser proyec· Asf, por ejemplo, si un enunciado
tado sobre este último· conjunto. admite una lectura* y otro enun-
Se denomina predictiva cuando las ciado admite dós, la isotopia* sólo
representaciones de frases que ofre· retendrá, por generatiZación, la lec-
·ce, se·· aplican no solamente a las tura que les es común;
frases realizadas sino también a las 2. De modo más general, la gene--
posibles. Es importante acotar, co- rallzac:tón se define cOino el proce-
mo observa J. Lyons, que la mayor dimiento por el cual se atribuye a
parte de las gramáticas conocidas toda clase* las propiedades o deter-
en la historia de la lingüística son minaciones reconocidas a un núme-
.,generativas,, en ese primer sentido ro limitado de magnitudes*•
del término, a condición, sin em· 3. La generalización es caracte--
bargo, de distinguir la «predicción:t rística de la aproximación inductiva
o Ia previsibilidad debidas a las que se practica, partiendo de la
reglas -que son obra de la ·estruc- manifestación semiótica, con miras
tura {o del esquema"') de Ja lengua- a Ia interpretación*. Según el proce-
de su carácter prescriptivo o nor- dimiento hipotético-deductivo'* que
mativo* que depende del uso*. Una proponemos, la generalización*" debe
gramática es llamada explicita cuan· tomar la forma de la construcción
do está totalmente formalizada*, es de un modelo* jerárquicamente su-
decir, transcrita en un lenguaje con- perior y más extensd que el fenó-
forme a las exigencias de los siste-
mas formales*.
5. Se desprende de ello que una
tan sólo una variabÍe*. El imper-
fecto español; por ejemplo, para

meno reconocido y del que éste es . .

teoría puede ser generativa (en el ser comparado con el imperfecto


sentido proyectivo del término) sin alemán, debe ser interpretado en el
ser, no obstante, del todo explicita, marco de un modelo que dé cuen-
y, por otra parte, una gramática* ta del conjunto .de los tiempos del
puede ser generativa sin ser trans- pasado. El modelo así construido
fOrmacional*: es, especialmente, el podrá luego ser invalidado, confir-
·caso de la teoría semiótica*' que mado o modificado.
intentamos construir. 4. las categorías* empleadas pa-
~ GENERATIVA (gramática -), GE- ra construir dichos modelos serán
• NERATIVO (recorrido -). Hamadas generales, por oposición
a las categorías universales.
GENERAL!ZAC!óN. Fr. générali· ~ INDUCCIÓN, 'UNIVERSALES.
sation, ing. generalization.
l. Seg:ün L. HJelmslev, cuando GENERATIVA (G!UMATICA -).
un objeto (01) posee una propiedad Fr. grammaire gént!rative, ing. gene-
dada y otro objeto (02) tiene esta rative grammar.
propiedad pero también otras ca· 1. Elaborada por N. Chomsky y ·
racterfsticas, el principio de genera· un equipo de lingüistas norteame--
llzaclón consiste -poniendo entre Iicanos, la gn¡mátlca generativa y
paréntesis las determinaciones espe- transforxnaclonal forma un conjun-
GENERATIVA (gram•. - ) ·192

to complejo que es imposible Pre- la gramaticalidad* de ,,Jos enuncia..


sentar brevemente·· sin alterarlo. A · dos, independientemente de su. ~e­
falta de un compendio detallado manticidad"; sólo des}'.)ués, dará a
-que se encontt:ará fácilmente en las estructuras formales obtenidas
otras· obras-, sólo· retendremos las una interpretación* semántica: el
características ·inás destacadas que componente semántico : se encuen-
encuentren. su luil,U' adecuado en tra, así, «adherido» a ·las estructu-
una · aproximación· ·semiótica com· ras profundas*. Se dic;e, por ejem-
parada; , .. · ::· : .. . ' · . plo, que las transformaciones* ·son
2. La gramática generativa ·y reglas puramente- formales que -no
tntnsfOrmacional · se · propone dar provocan -aparte algui:ias variacio-
una descripción* d.e todas ·las fra. nes estilísticas- modificación · del
ses* -realizadas·. ó, ·posibles (vincu- contenido. Este apriori, tomado de
ladas 3. la creatividad* del sUjeto* la lógica -Y según el cual la inter-
hablante}-· de todas las lenguas* pretacióii··. consiste en atribuir ·un
naturales. Se trata, pues, de ··una contenido a wia ·forma'!' _que estaría
lingüística'* frás.ica' (de a1ú "su in- desprovista de él-, _es evidente-
adecuación para· un análisis del dis- mente inconciliable con la apro:xi-
ae
curso*),·· alcancf!· ·universal (pro- macióii saussuriana que excluye la
yecta · obtener los . universales*. sin- oposición «fondo11. y «forma» •.
tácticos,· semánticos y fonológicos, si 4. La gramática chOinskiana es
bien sus ejemplos· :Provienen ·hasta llamada generativa desee un doble
ahora, esencialmente, de las lenguas punto de vista: en . cuanto explici-
occidentales,· sobre' todo del inglés), ta*, porque es forrnul;able en un
que considen:; a:Ia lengua no como sistema o lenguaje forinal*, y en
un Jiecho .social (F. de Saussure), cuanto predictiva (o próyectiva), en
sino como- dependiente de la acti- el sentido de que las descripciones
vidad del sujeto: de do:iide la di- que propone se aplicarl no sólo ·a
cotomía chomskiana performanCe / las frases realizadas sino también
competettcia, que ·corresponde al a las posibles (cf. generiiclón•). POr
punto de vjsta epi.Stemológico ;idop.. otra parte, reintroduce, de hecho,
tado. Este tipo -de gramática ..:...que Ja noción de corpus* a :Ja que pre-
trata el enunciado* pero no la tende, no obstante, evacuar en su
enunciación*- quiere ser ·ta expre- empresa deductiva'* (qué da priori·
sión de Ja. competencia* ideal; con- dad al metalenguaje'* sobre el len·
cebida de manera programática (en guaje- objeto), pues la puesta al ·d1á..
el sentidO O.e la jnformática): · de las reglas se efectúa· necesaria~
3. De tipo propiamente lógico, mente gracias a un corpµs, ·Por más
la gramática genei;:ativa y transfor- restringido que éste sea" (cf. todos
macional se presen~ de modo es- los <11microcorpus»~ que .Jos genera:.
trictamente formal*: es una at>roxi- tivistas· citan en sus débates). LoS
maciónc sintáctica•. que presupone, conceptos de e:xhaustiV.i.Í:l.ad"' y de
al nienos de partida, el rechazo del adecuación*, vinculados''al de cor-
sentido•. Asf, enun. prtmer momen- pus, son entonces abandonados en
to, hace total abstracción. del con- provecho de otros -no: inás segu·
tenido*, pre:endie.ndo explicar sólo ros-, los de a~eptabilidad* y de
193 GENERATIVA (gram. -)

gramaticalidad* que están basados tagmas nominal, verbal) dentro de


en Ja intuición* del sujeto hablante las que se introducen clases mor·
(porque se considera que el objeto fológicas* (verbo, nombre, adjetivo,
lingüístico no es ya empíricamente articulo, etc.) sin que se preserve
·observable). la homogeneidad* metodológica. En
S. Si se deja de lado el modelo cuanto a las clases morfológicas
de un número finito de estados (de mismas, son tomadas de Ia gramá·
tipo markoviano) que el propio tica tradicional, sin ningún análisis
Chomsky descarta -Porque excluye crítico previo: contrariamente a lo
toda jerarquía* y conduce a un ca· que sostienen ciertos gcnerativistas,
Uejón sin salida para el análisis la descripción taxonómica"' en lin·
de no importa qué lengua natural-, güística dista mucho de encontrar·
pueden distinguirse dos formas de se concluida; lo que e.'Cplica, sobre
·«gramáticait en la gramática gene· este punto, una insuficiencia nota·
rativa: sintagmática y transforma· ble de la gramática generativa;
cional; Ja· segunda prolonga a la pri· d) el sistema. de reglas• de rees·
mera sin ser, por ello, de la misma critura y la representación en árbol
naturaleza. están, evidentemente, vinculadas al
6. La gramática sintagmática, lla· principio de la linealidad*, si bien
maaa primero no conte:-ttual, pero Ja parte transformacional del pro-
que luego comprende reglas contex· yecto generativista aporta algunos
tuales (par~. salvaguardar, en cier· correctivos (pero también proble-
tos casos, la gramaticalidad), per- mas) sobre este punto.
mite -mediante el análisis en cons· 7. Debido a que la gramática sin·
tituyentes'* inmediatos- proceder a tagmática se mostraba incapaz de
una descripción* estructural de la resolver por .. sí misma cierto nÚ·
frase susceptible de ser represen· mero de dificultades (constituyentes
tada en forma de árbol*. Dicha discontinuos, cieitos tipos de ani·
desciipción se basa en la serie de bigüedad, relación entre a<:tiva· y·
postulados: pasiva, problemas de concordancia,
a) la frase no puede tener sino etcétera), Chomsky tuvo que recu· ·
una sola forma sintáctica; rrir a otro conjunto de procediriiien·
b) su organización es de tipo bi· tos, denominado gramáUca trans-
narlo: la estructura sujeto/predica- formacional. Desde esta nueva pers·
do, revestida con nuevas denomina· pectiva, el análisis ya no se situa·
ciones (sintagmas non1inal/verbal) rá en un único nivel* de descrip-
y que se remonta a Aristóteles (para ción, sino en los dos planos de las
quien todo enunciado es, en defini· estructuras profundas• y de las es·
ti-...a, de tipo atributivo), es decla· trocturas de superficie*. entre los
rada universal e innata; cuales se realizan las transforma~ 1
c) la derivación* -basada en el clones* (formalmente definidas co-
concepto de sustitución* (del que, mo operaciones que, efectuadas so-.
por lo demás, se conoce el rol que bre un indicador*' sintagmático, lo!..:,
desempeña en lógica)- establece, transforman en otro árbol) qu~..__,.­
como subcomponente categorial" de penniten operar, en las serles a
Ja basé•, clases"' sintagmáticas (sin· transformar, agregados, supresiones,
SEM10TfC,\. - 13
GENERATIVA (gram; -)·GENERATIVO (rec. -) ;-, 194
pennuta~iones, Susti"tucioneS; En· la 2. La. lingüistfca genei-afiva ha -
medida. en· que. ~roo observa J~ propuesto, de modo sucésivo, tres
Lyorur- la· grani.ática transforma· esquemas para repre!¡ent.ir lo q~e .
cional atribuya a Una fra~e· dada nosotros llamamos el recorrido ge-
uria estructura profunda y otra de nerativo. Los dos primeros, de ins:
superficie· (vinculándolas entre si piración puramente sintáctica, des·
sistemáticamente, según reglas), es cansan, sobre todo, en la Q:istinción
plenamente asimilable -eX:ceptuan· de 1as estructuras profundas* y las·
do su aspecto de explicación- a }as de superficie*. Si ·1as estructuras
gram"áticas tradicionales. sintácticas profundas son generadas
-+ GENERATIVO (recdrrido -), GliNE· por el componente de liase*, las:·
RACIÓl'l, INTERPRETACIÓN, TRANSFORMA• estructuras de superficie· resultan
CIÓN, CORPUS; SEMÁNTICA . GENERATIVA, de las operacioncS (formuladas en·
COMPETENCIA, PERFORMANCE!. reglas) del sistema transformacia.·..
na]. A estos dos niveles s~ incorpo-
GENERATIVO· (RECORRIDO -). ran el componente semáÍ1tico (que:
Fr. parcours génératif, jng. genera- trata de la interpretación* semán·.'
tive process. . . tica) y el fonológico (coñcerniente
1. Mediante la éxpresión recorri· a Ja intérpretación fonológica): el
do generativo deSignamos la eco- componente semántico (gracias al
nomía* general de tma teoría*! se.. léxico*, en el sentido· de· los gene·
miótica (o ·solamente Ungüfstica), rativistas) está asociado a las· es·
es decir, la dispO!il9ión, w:ios con tructuras profundas; en cambio, los
relación a otr<>s, de sus componen· componentes fonológico y. fonético·
tes*, y ello desde la' Perspectiva de se sitúan a nivel de las e'sUucturas :
la generación•, lo que equivale· a de superficie. El emplazamiento de
postular que, al. ser, Posible definir ambos componentes no sintácticos
cualquier objeto S!(irti6tico según es Jo que, sobre todo, hace· original'.
el módo de su· pi::-Oducción*, Jos a este modelo estándar y. lo que ;
componentes que intervienen en ese más vivas objeciones ha levantado: .
·proceso se artiCulan ,entre sí seiún La disposición pot la· cual la se-.·
un arecorrkfo:& que va de lo más mántica se encuentra «adherida:& a ·
simple a lo más co1npJejo, de lo Ias estructuras profundas y la fono--
más abstracto* a lo más concrel:o*. logia, a ·Jas estructuras de superfi·
La expresión .«recorrido generativo* cic, se apoya en Ja hip6te.Sis formuM .
no es de uso corrierite: la. gramá- lada por ChomskY (siguiendo a .
tica generativa* emplea, en· sentido Katz y Pdstal), según 1a· cual Ja
similar; el término modelo* al ha- estructura de superficie no es per·
blar, por ejeinplo, d~ modelo .es- tinente* para Ja interpretáción se-.
tándar o del . :niodelo ·ampliado (o mántica y la estructura .··profunda ·
extenso). Pero, con)o. el término no lo es para Ia interpretación
modelo tiene otros numerosos em- fonológica. Desde el puntó' de vista
pleos; hemos preferido preserítá.f" semántico, esto equivale· a decir
bajo la presente rt.íbÍ"ica la proble- que una serie de transfofmaciones
mática de la dispo:;idón general de sintácticas no aportan niniún suple-
una teoría. · mento de significación , (aparte del
195 GENERATIVO (rec. -)

estilístico) y que, en consecuencia, logrado hasta ahora construir una


una forma de superficie es semán· teoría general del len8"1..\aje. . ':lu
ticamente equivalente a una forma 4. La teoria semiótica que trata- ~-·
profunda. Como la hipótesis no está mas de elaborar, aunque de inspi·
probada e, incluso, va Contra el ración generativa, es difícilmente
buen sentido (intuitivo), el modelo comparable a . los mcidelos genera·
estándat' ha sido ampliado por el tivistas, ya que su próyccto es dife~
propio :Chomsky, quien ha acepta- rente: basada en la teoría de la
do ubicar Ja interpretación semán- significación, Persigue dar razón de
tica a lo largo de todo el recorrido todas ta·s senlióticas* (y no sólo
transforrnaciOnal y, rnás precisa- de las lenguas naturales) y cons·
mente, en los dos niveles -profun- truir modelos capaces de generar
do y superiiclal- de las estructuras discursos* (y no frases). Por otra
sintácticas. · parte, considerando que todas las
3. En la lingüística generativa categorías*, aun las más abstractas
norteamericana, el rol cada vez más (incluyendo las estructuras sintác.
importante otorgado al componente ticas), son de naturaleza semántica
semántico, desemboca en una espe- y, por ello, significante:-;, no mues-
cie de paradoja: Ja semántica, un tra el menor reparo en distinguir,
tieinpo excluida, no sólo queda para cada instancia del recorrido
-como se ha observado- en la generativo, subcomponentes sintác-
superficie, sino que llega a «pro- ticos y semánticos (stricto sensu).
fundiiar» :aún más las estructuras 5. Dicha teoria semiótica distin-
profundas cuyo análisis descubre gue tres campos problemáticos au-
niveles de «representación» semán- tónomos, con:-;iderados como luga-
ticos cada vez más abstractos•, acer- res donde se articula la significa-.
cándose a las organizaciones lógi- ción y se construye· la metasemió-
cas ·elementales. Esto conduce· a la tica*: las estructuras semlo ·narra-
semántica* generativa a reconside· tivas, las estructuras discursivas y
rar el recorrido generativo ·en su las estructuras textuales. No obs-
conjunto: las instancias geÍlerativas tante, mientras las dos primeras
más profundas aparecen, desde en- formas pueden ser consideradas co-
tonces ao cual permite ahorrar el mo dos niveles de profundidad su-
concepto de interpretación), como perpuestos, Ja problemática de la
constituidas por formas lógico· se- textualización* es totalmente dife-
mánticas que; sometidas a transfor- rente. La textualización, en efecto,
maciones, generan las formas de como algo que da iugar al texto
superficie; el componente fonológi· lineal (temporal o espacial, según
co que interviene en este nivel per- las semióticas), puede intervenir en
mite Hegar, finalmente, a la repre· todo momento· del recorrido gene-
sentaclón fonética del enunciado. rativo: · no solamente IoS discursos
Este modelo, sin embargo, es sólo figurativos o no figurativos (más· o
aproximativo; la gramática genera· menos profundos, en el marco de
tiva, a pesar de sus investigaciones la semántica* discursiva) son tex-
numerosas y diversificadas, no ha tualizados. también las estructuras
GENERATIVO (rec. -) 196

lógico - semánticas ·más absti"actas por Ja instancia de Ja enunciación*.


(en los lenguajes ·formales*,. por Actualmente, están ellas menos ela·
ejemplo) son textualizadits desde ~el boradas aún que las estructuras se-
instante· en_ que: son qinscritaS» SO• mióticas: tan sólo indicamos Jos
bre papel. Las estructuras textua- componentes en cuan.to dominios
les, .cuya formulaci6n dará lugar a en vías de exploración. Por el mo-
]a represehtación* semántica (capa:i mento, distinguiremos ei componen.
ésta de servir de·nivel profundo a te sintáctico -o sin.taxis dlscursl·
las estructuras lingüísticas genera- va-, encargado de Ja discursivizá..
doras de Jas estructuras lingüísticas ción* de las estructuras narrativas
de superficie, desde la perspectiv·a ·Y que comprende los tres subcoin-
de la gramática generativa}, consti- ponentes de actorialización*, tempo-
tuyen, en consecutincia, un do'minio ratizacióñ* y espacialización* (cam-
de investigaciones autónomas (la pos ya explorados, en p~rte, µor tas
lingüística llamada· textual, 'entre J6gicas temporal y 'esPacial) y el
otras), pero se sit.d3.n -a decir ver- componente semántico :-o semdn-
dad- fuera del recorrido generativo tlca discursiva- con SUs subcom·
propjamente di Cho.. . · : ,. . ponentes de tematizaci4n* y de fi.
6. Las estructuras . semio - narra- guratiVizaciÓn*, "tenden~es a produ-
tivas que constituyen el nivel más cir discursos abstracto·s· o figurati-
abstracto,· la iristancia ab quo del vos. Así pues, con la pl:-oducción c;le
recorrido ·generativo, se presentan discursos figurativos, ·~1 rec.orriqo
como una gramática semiótica y generativo alcanza las ·estructqras
narratlva que ·compiende dos com- ad quem: ello no quieré decir c:í:ue
ponentes -sintáctiC'o y semántico-
todo procesO gelierativO trate de
y ·dos niveles de Pz:ofundidad: una producir discursos figurativos, Sino
sintaxis• fundamental y una semán-
.Que ~te debe ser considerado, se-
tica* fundamental· (en ·el nivel pro-
mánticamente, como· la 'forma más
fundo), unía slntaxfs nan-aUva y una
semántica narrativa: (a nivel de su- concreta y, sintácticamerite, corrio·ta
perficie). En ·cuantó a su modo de más fina de las articulaciones de
existencia* semiótica, estas estruc- la significación; la te.Xtualización
turas se definen por_ referencia tan- y la manifestación del discurso -ya
to al concepto de «lengi.ia:i:o (Saus- Jo hemos subrayado-:- pueden· ínter·
sure y Benveniste) como al de venir en todo instant(! ·:de. Ja gene-
«competencia» nariativa {concepto ración. Así visto, el re"corrido ge-
chomskianp, extendido a las dimen- nerativo es una construé:ción* ideal.
siones del discurso), pues incluyen independiente de (y antc!ior a)" J3.s
no ~ólo, una tax:Oriomía*, sino tam- lenguas* naturales o d.e los mun;
bién el conjunto de operaciones sin- dos* naturales donde ta:i o cual se-
tácticas elementales. miótica puede, Juego, verterse para
7. Las estructuras. discursivas, .manifestarse. ·
menos profundas, se enc:argan de 8. El cuadro siguiente visualiza
dar cuenta de Jas estructuras se- la distribución de los diversos com-
mióticas de superficie y de «poner· ponentes y subcomponeñ~es de ~~~e
las en ..discurso» al hacerlas pasar .. recorridor.: · ··
"}
197 GENERATIVO (rec. -) . GJ!.NERO

RECORRIDO GENERATIVO

componente componente
sintáctico semántico

nivel SINTAXIS SEMANTICA


profundo FUNDAMENTAL FUNDAMENTAL
Estructuras ..
semio·narrativas ntvel de
SINTAXIS NARRATIVA SEMANTICA
superficie DE SUPERFICIE NARRATIVA

SINTAXIS SEMA1'1"TICA
DISCURSIVA DISCURSIVA

Estructuras Discursivízación Tematización


discursivas
actorializa~/
temporalización Figurativjzación
espacialización

·-+ DlSCOR.SO, NARRATIVIDAD.


G?t.NERO. Francés genre, inglés propiedadeS formales específicas. El
gender. estudio de la teoría de los géneros,
1. Con el término género desig- característica de una cultura* (o de
namos una clase de discurso, iden- un área cultural) dada, no tiene
tificable merced a criterios de na- interés sino en la medida en que
. turaleza sociolectal*. l!stos pueden permite poner en evidencia ta axio-
provenir ya sea de una clasifica- logía* subyacente a ia clasificación;
ción* implícita que descansa -en a
se puede comparar Ja descripción
las sociedades de tradición oral- de otras etno- o sociotaxonomías.
en una categorización* particular 2. En el· contexto cultural euro-
del mundo, ya de una «teoría de peo, la teoría de los géneros de la ,
los géneros,, que, para muchas so- época moderna -diferente de Ja
ciedades, se presenta en forma de propia de la Edad Media- parece
una taxonomía* explícita, de carác· estar elaborada según 9os ejes dis-
ter no científico. Dicha teoría, que tintos:
rC$ulta de un relath•ismo cultural a) u.na teoría «clásica• basada en
evidente y se basa en postulados una definición no científica de la
ideológicos implicitos, no tiene nada «forma» y del «contenido• de cier- .
en común con la tipología de los tas clases de discursos literarios
discursos* que trata de constituirse (:por ejemplo, la coinedia, la trage-
a partir del reconocimiento de sus dia, etc.);
G~NERO • GESTUALIDAD 198
b) · una teoria ·:etPostclásica~ fun- rece, más bien, que pUeda definír-
dada en cierta concepción de la sela como gestualldad de enmarca.-
«realidad» (del re(~rente"), que le miento de la enunciación*: las -ca-
permite distingqir··a partir de.aquí, tegorías que puede enunciar s.)n
diferentes ((mundos· ·posibles», 'o en· categorías abstractas* .que ~ornan
cadenamientos nariativos más o me- la form3 ..ya sea de enunCiados mo-
nos conformes a: · Una norma· ·sub- dales {aserción, negación, duda y
. yacente (cf. los · gé'qeros fantástico, certeza, etc.), ya de enunciados de
maravillosa,· realist~, surrealista:, et· cuantificación (totalización, división)
cétera). ·· · · y de calificación (estados de eufo.
· 3. ·Ha de observarse que, at "lado ria' y disforia), o; sóbre todo, de
'de una teoría de loS géneros litera- ·enunciados !áticos* (acogida y re-
rios, el mismo contexto cultural pulsión, apertura al m$do o auto.
'puede servir de- soporte, por ejem- clausura, etc.) que tran'sfonnan la
Pló, para una clasificación de los comunicación en comUnión inter-
géneros religíosOs:. · subjetiva. ,
-+ DISCURSo. 3. Algunos han querido estudiar
la gestualidad como uxj lenguaj~*.
GESTUAiIDAD. Fr. gestuali~é, .in· apJicáridole la fórmula saussuriana
glés gestuality (neol.). . de «Sistema de signos:>:· los signos
1. En cuanto cainpo problemáti- se reconocerían con ayuda de prue.
co particular, la gestualidad no se bas de conmutación• y el sistema
ha· introducido en la reflexión se- sel'"\'irla para los fines de comuni-
miótica· sino de manera progresiva caci6n. Desafortunadamente, los in·
e incierta, y aparece como un do- ventarios de gestos comunicativós
min1o de significaciones circunscri· que ha sido posible cotlstituir (cf.
to y autónomo --;lnalizable en cuan• Jos gestos de los indios· de Norte.
to lenguaje gestual- o como omni- américa) no se han revelado estruc·
presente, desbordaD.do por todos los turables en sistemas: no remiten a
lados las fronteras, todavía indefini- ninguna estructura <1"fono!6gica111 ni
das, de das semióticas partict'üares se deben· a ninguna Ol-ganizaCióii
en vías: de . consti~ción. . · semántica (que no sea )a· de «cen-
2:.·La gestualidád ha sido consi- tros de jnterés,.). En desorden, se
derada -y lo es todavía- como un encuentran gestos de· acompaña-
fenómeno · pa'.ralingüístico* que ten- miento; iconos y, sobre- todo, sin·
dría una función de auxilio en el tagmas gestuales fijos, · desemanti·
ámbito de la ·c0rounicaci6n* inter- :zados· y conven,cionales;. en suma,
subjetiva. E"sta ges~ualidad de acoro.· toda Ja. clasificación Peirceana en
pañamiCnto, que; .con demasiada orden disperso. La e:iciste~cia de uh
ligereza, ·se ha. Jt,izgado ~pobre• «lenguaje gestual,. autóD.omo dista
-porque era incapaz de próducir ·mucho de hallarse asegÜrada.
enunciados desem~"ragadOs* y. de 4. Otra aproximación á· ta gestú"a·
tran.smitir contenid<is objetivos- y lidad· consiste en partir" no ya de
a Ja que se ha .querido reducir a los gestos consideradOs ~ como ~jg.
un simple 1•01 de ~.nf8.sis*, al exami- nos, sino de textos gestlia.Jes cp.a.n-
narla con mayor detenimiento pa- zas folk1óticis, ballets, ri:ómeros de
199 GESTUALIDAD

acrobacia, pantomima, etc.). El in- sólo constituye, finalmente, uno de


terés de este tipo de investigación los aspectos de lo qt~e podría lla·
es múltiple. La aproximación es marse su lenguaje somáUco*. Pero
ante todo analítica: la segmenta- mientras los tc."(tos gestuales, ante·
ción* dcl texto* no impide, pues, riormente mencionados, se presen-
plantear los problemas de las uni- tan como procesos semióticos so-
dades* gestuales de dimensiones máticos construidos (o artificiales),,
sintagmáticas más o menos amplias al lado de ellos, sin duda alguna,
y el de la pertinencia de. lo¡¡ rasgos existel} una o varias semióticas o;na~
gestuales que los caracterizan. No turales¡) que describen comporta~
es de asombrar, entonces, que este mientos humanos programados en
tipo de investigá.ciones llegue, por cuanto prácticas* significantes. El
una parte -en lo concerniente al análisis de los discursos narrativos
plano de la expresión*-, a eviden- nos permite justamente distinguir
ciar la necesidad de un lenguaje de una dimensión pragmática* del dis·
descripción (Ja elaboración de los curso, hecha de descripciones de
sistemas de notación* simbólica de comportamientos somáticos signi-
los gestos está ya muy avanzada y· ficantes y organizadOs en progra~ ·
plantea nuevas interrogantes relati- mas que son, al· mismo tiempo, de-
vas a su coherencia metalingüJ'sti- signados como evCntos para el lec·
ca) y, por otra parte, a plantear tor: dos características mediante
el problema de la significación de las cuales hemos tratado de definir
estos discursos gestuales que se los textos gestuales. Teniendo en
muestran a Ja vez como textos pro.- cuenta esto, resulta que los mode-
gramados -sostenidos, debido a los narrativos construidos para des·
este hecho, por una intencionali· cribir comportamientos pragmáti~
dad* implícita- y como entmciados cos «en papeb, ·pueden ser tras·
espectaculares, producidos en fun. puestos con miras a una semiótica
ción de un observador*-lector y, en «pragmática• natural.
consecuencia, doblemente significan· ó. No obstante, se observará en
tes, para ellos mismos y para los seguida que la «Son1:c'lticidad•, al
demás. igual que la gestualidad, no es un
5. El examen de los textos ges· concepto fácil de circunscribir: «ha·
tuales no sólo permite distinguir blar» o «cantarJlo son comportamien·
Ja gestualidad significante de la tos tan somáticos como «caminar•
gesticulación desprovista de sentido, o «gesticular•. A fin de cuentas, se
sino que también .obliga a definir puede decir que las diversas semió·
la «sustancia gestual¡) como lo que ticas* se encuentran encajadas e.
se expresa gracias a esta materia intercaladas unas dentro de otras,
particular que es el cuerpo humano tanto ·en su estado «natural• (cf.,
en cuanto .:volumen en movúnien· por ejemplo, las diversos rituales
tol), La gestualidad no se limita ya y ceremoniales) como en su estado
a los gestos de las manos y de los ..:construido»·" {teatro, ópera,· circo,
brazos o a la e:r.:presión del rostro; etc.), y que, muy a menudo, nos
forma parte integrante del compor· tropezamos con semióticas sincré-
tarniento somático del hombre y ticas* en las que se trata .de dis·
GESTUALIDAD • GRAMAT!CA. 200
criminar· los eleme~tos constituyen· 2. La glosemática ha desempeña-
tes y sus disposiciones. do un rol estimulante,. pese a no
-+ PRO;iaft.UC\, · PR.t{CIICAS SEMIÓTICAS. haberse generalizado¡ po~ el con·
tracio, la teoría del lenguaje pre·
GLORIFICANTE (PRUEBA.-). sentada por L. Hjelmslev, puede ser
Francés ipreu.ve glorifiante, ingi gio- considerada como la primera teoría·
rifying test. - Figura* discursiva semiótica coherente y acabada: ·ha
vinculada al ·esqllenia narrativo*, la sido un factor decisivo en la forma-
prueba glorificante se sitúa· -a dife- ción de la semiótica en Francia.
rencia de las pruebas calificante• y .
decisiva*, a las que Presupone- en GRA.MA.TICA. Fr. grammaire, ing.
Ja dimensión cogn'oscitiva*•· AParece grammar.
en el relató cuando la prueba 'decisi· 1. . Término antiguo, hásta no ha·
va ha tenido Jugar en·
el ámbito del ce mucho peyorativo (en . la medida
secreto*. En cuanto· perforinance* en que remitía a la granlá.tica nor-
cognoscitiva (y hacer :Peisuasiva*) mativa) y, recientemente; revalorl·
del· s.ujeto, i:inplica ·~ el :·plano zado por la gramática gi:nerativa•;
de la compet.encia* correspondien· la gramática designaba, .. en otras
t"6- un ¡joder-hacer-Saber figurativi- ·épocas, a toda la Iingüísü'ca• y, ac,,.
zado por la marca*. Como sanción* tualmente, sólo a uno· de. sus comfi
cognoscitiva del Destinador*, en el ponentes. Geoeralmente se entiende
marco del componente contractual por gramática la descripción* de los
del esquema narrativo, equivale al modos de existencia y de ñinciona.:
Z.econocimien.to. ·. miento de una lengua* natural o,·
~ PRUEBA, RECONOCIMIENTO, NARRA· de modo circunstancial y amplio,
nvo (esquema -). de toda semiótica*; se observará,
sin embargo, que la aci!pción de
este término varía, coh frecuencia,
GLOSEMATICA. Fr. gtossématique, de una teoría a otra.
ing. glossematics. 2. Si se considera g!Obalmente
1: · La ' glosemátlca.. (del griego que Ja gramática se ocupa de .la
glóssa, lengua) es el ·término pro- ..:disposición de las 'palabras en fra..
puesto por L. HjeJr;oSlev ·para deno- Ses», se distinguirán dos ·dominios:
minar la teoría Iin~tica que ela- la morfología* se ocupa. del estudio
boró en colaboración con su amigo de las palabras* y de las ·clases de .
H. J. Uldá.JJ. Se caracteriza, según palabras, mientras que la ;_·sintaxis*,
su cr:iter~o, por cuatro rasgos espe-- ·se consagra al estudio de )a «dis-.
clficos: a) el pro~dimiento analí- posición . de tas frases». La parte
tico, anterior a (y pre.5upuesto por) respectiva '<fe cada una de ~~~as dos ·_
la síntesis: p) la i~~:Stencia en la ramas depende, en. buena · medida;
forma*; c) el tener en cuenta 'no de las lenguas naturales examina~
sólo la forma de -la.. expresión*, s.ino das. De este modo, los· :"estudios·
tarilbién la del conte.nido*; d) la morfológicos predominan en Ja gra:-
conce:Pción del lenguaje como un mática comparada de las'· lenguas
sistema semiótico más: indo-europeas que pÓseen. ·sistemas
201 GRAMATlCA-GRAMATICALIDAD

casuales muy desarrollados. Por el enunciados'>. Si se ·trata de todas


contrario, la lingüística actual -de las clases y de todos los tipos de
carácter más teórico-, al ftmdar enunciados, ln gramática deja de
!U validez empírica en el native lado dos disciplinas· autónomas: la
speaker («habl<i.nte nativo» de una semántica* y la fonología*. Si, por
lengua no morfológica), privilegia el contrario, se trata de producir
al componente sintáctico. Asimismo, todos los enunciados · OCllfrencias
Ja elección de la gramática genera- posibles, entonces la semántica y la
tiva, al tomar como punto de par. fonología se consideran sólo como
tída la taxonomía* (o la morfolo- simples componentes -adheridos a
gía) elaborada por el análisis dis- la sintaxis..:.. de una· gramática que
tribucional*, y considerar tan sólo abarca la totalidad del campo lin·
las clases*' sintagmáticas con exclu- güístico estudiado. En esta acep·
sión de las clases morfológicas y de ción, Ja gramática se acerca a nues·
las funciones* sL-1tácticas (que, sin tra concepción de semiótica*.
embargo, reintroduce subrepticia- 4. En nuestro proyecto teórico,
mente, v. categoría), no parece muy la gramática setnlótica corresponde
acertada y no justifica las afinna- a las estructuras* semío-narrativas:.
ciones según las cuales el estadio tiene como componentes*, a nivel
de la descripción taxonómica en profundo*, una sintaxis* fundamen·
lingüística estaría superado. Dicho tal, y correlativamente, a nivel de
esto, la construcción de los lengua- superficie*, una sintaxis* narrativa
jes* artificiales {el lenguaje docu. . (llamada de superficie) y una se~
mental, por ejemplo) muestra la mántica* narrativa.
existencia de una relación compen· -+ GENERATIVA (gramática -). GE-
satoria entre morfología y sintaxis: NERATIVO (recorrido -) .
una taxonomía desarrollada deman-
da únicamente el emplazamiento de GRAMATICALIDAD. Fr. gramma·
un número relativamente restringi. ticalité, ing. grammaticality.
do de relaciones sintácticas; e, in- 1. En lingüística generativa*, una
versamente, una red de relaciones frase es llamada gramatical si pue-
sintácticas prolija sólo precisa de de ser descrita por una gramática*
una morfologfa sumaria. Por lo dada: la gramatlcalldad de un enun·
demás, se observa que el uso actual ciado, su eventual agramaticilidad
tiende a confundir, si no a identi· y -entre ambas- Jos diversos gra·
ficar, los tér;minos gramática y sin· dos de gramaticalldad, sólo se re-
táxis. conocen en función de la compe-
3. El sentido de la palabra gra. 0
tencia* del enunciatario* (al esta 8

mátlca varía, por otra parte, según blecer éste un juicio epistémico*),
la extensión atribuida a este con- competencia que es variable según
cepto. Así, cuando se le asigna co- la comunidad cultural a Ja que per·
mo tarea construir un simulacro tenezca («~i estuviese en mi mano
formal, capaz de describir y/o re- ya lo hubiera hecho» es gramatical
producir todos los entJllciados* de en el español cotidiano, y agrama·
Wll\ lengua natural, habrá que saber tical, para una gramática norma 8

lo que se entiende por «todos los tiva).


GRAMATICALIDAD - GRAMEMA 202

· 2 Por gramatiCalidad ·puede en- COMPETENCIA, ACEPTA»IUDAD: NORMA, ÍÜ:-


. tenderse la relación de compatibi- PL!CITO. • ·.
lidad que mantienén dos elementos*
a nivel sintáctico;. gracias a la GRA1dEMA. Fr. irarli'm€me, ing,
cual éstos pueden estar presentes*. grameme. - Ciertos lingüistas {en-
juntos, en una. Unidad jerárquica- tre ellos, B. Pottier) désignan con
mente superior:· es. uno de los cri- el nombre de gramemag· a los mor-
terios para .reconoOOr la aceptabili- femas gramaticaies, en' oposicióÓ a
dad .(sintáctica). a.Sí como. para de- los lexemas (entendidÓs, entonces,
terminar Ja . intfil-pretáción*. coino · morfemas léxicos)·.
~ . CO~ATIBJUr.iAD,: INTERPRETACIÓN, __,. MORFEMA., L.E:XEW..
H

HABLA. Fr. parole, ing. speech. disposición de los elementos de la ·


. 1. En la dicotomía saussuriana, · lengua para construir las· frases;
habla se opone a lengua*, pero no b) el mensaje* (opuesto a códi·
se trata de un concepto claramente digo*} representa, en la teoría de
definido. En efecto, cOmo esta di· la comunicación•, al habla conside-
cotQm1a fue planteada y desarrolla~ rada como prO'ducto del código
da por Saussure para circunscribir (pero sin tener en cuenta el pro.-
mejor. la noción de lengua (único ceso de la producción*);
objeto, para él, de la lingüística), el e) e:l discurso* (oi?uesto a len·
habla aparece, en su origen, como gua), concebido por :g,, Benveniste
una especie de desván nocional CU· como la lengua asumlda y transfor·
ya fuerza de sugestión ha sido, no mada por el sujeto hablante, ocupa
obstante, considerable para los des. en su teoría "un lugar comparable
aITOllos ulteriores de la lingüística. al del habla eÍl Saitssure. Sin em~
La problemática que estaba subya- bargo, su insistencia sobre el rol
cente eclosionó, luego, ·en una serie del sujeto que asu~e la lengua pro- ~l·.
de conceptualizaciones, variables de duce una nueva dicotomía: enun· ;:-:·
una teoría a otra', de modo que el ciaci6n* /enunciado*, dos aspectos
concepto de habla ha dejado, en la complementarios del habla saussu·
actualidad, de ser operatorio*. riana;
2. Los siguientes conceptos pue- d) la performance'* (opuesta a la
den ser considerados como reinter· competencia*) corresponde, en la
pretaciones parciales del habla (en teoría generativa*, al ténnino habla
el sentido saussuriano ): en la medida en que insiste sobre
a) el proceso• (opuesto al siste· su aspecto de realización* (a dife-
ma*), que es, para L. HjelmS:lev, una rencia de la lengua, virtual*): al
de ·las maneras de ser del universo mismo tiempo~ sitúa la actividad
estructurado (o estructurable), y la que forma las frases del lado de
sintagmática• (opuesta a la para· la competencia;
digmática*), definida como ·proceso e) el uio* (opuesto al esquema*)
semiótico, abarcan uno de los as· corresponde, en Hjeimslev, al «me-
pectas del habla, en el sentido de canismo psicofisico:ii del habla se·
,.
HABLA-HACER

gún Saussure y, al lnteirar todo lo función-predicado de un enunciad.o


que en el lenguaje concierne a la modal que rige a otro- enunciado-:.
sustancia, se opone al esquema lin· 3. De acuerdo con las dos di-
güístico considefado como forma*. mensiones de la narratividad* (y de
Así, la ·sintagmatica en cuanto for· Ias actividades que se··.supone des-
ma, se coloca por. este hecho del cribir y organizar), la dimensión
lado del esquema; pragmática"' y Ia cognoscitiva*, cabe
· f) la estllistlca* (opuesta a la lin· distinguir dos tipos Pe hacer: el
gü{stica) busca, .fu:ialmente, aprove- hacer pragmático y el hacer cog-
char todo lo que .en el habla con- noscitivo. Esta oposición, que le
cierne: al uso indiv.idual (y no a la impone ya de entrada como ·una
actividad del enunciador* conside- evidencia, no es, sin :embargo, .de
rado como o:SU:j~f9 hablante»). o naturaleza sintáctica y sólo afecta
incluso colectivo. a los riiveles de lengu<ije más su-
~ PERFORMANCE,: i.ENGUA; ' perficiales; así, el hacei pragmático
-.:. parece distinguirse del· hacer· ·cog-
~cER.· .· Fr~ · fair.e, ing, doing. · noscitivo por la natu~leza sorriá-
1. ·La distinción...,que·hemos esta· tica .y gestual de su ·significante,
blecido entre enunciados,. de hacer por ja'. naturaleza ·de loS vertimiie;n-
y enunciados de ~tado*, aun cuan· tos semánticos que reciben los ob-
do . se ~ refiere intuitivamente a la jetos perseguidos por ei hacer "(los
dicótomía cambio /permanencia, es objetos del hacer pra~ático son
una formulación apriorística y arbi· valores descriptivos, Ctilturales; en
traria que~ perinite construir una una palabra, no modales). No obs:
·sintaxis* nUiativa: de superficie. En tante, el significante :·Somático o
cuanto función·predicado de dicho gestual ·es puesto, a veces, al ser·
enunciado, el· ha"cer. debe ser con· vicio de las actividadeS cognosd:ti·
siderado como la ·conversión*· de· la vas (en la comunicación o en Ja
relación de transformación* en un construcción de objetoS~ por ejem-·
lenguaje sintáctico· de caráct~r an- plo). Por. ello, la tercera funci6i:t*
tropomorfo"".· de G.- Dumézil sigue siendo todavía
2. Si se· acepta la definición -que la que mejor especifica el hacer
nOs patece la · menos restrictiva.- pragmático. .·
de la modalidad* como predicado-ti 4. En la dimensión cognoscitiva,
que rige y. modifica a otro predi~ el hacer narrativo y el hacer comu7
cado (o ccimo un enunciado cuyo nlcatlvo se p.ístiIJguen a nivel sin7
actante-objeto es Otro enunciado), táctico: el hacer comt,tnicativo es
se tiene que reconocer el carácter un hacer.saber, es decir, un h~cer
modal del hacer: se trata ·de un cuyo objeto-valor, a exP.énsas de sU
hacer· operatorio (hilcer-ser) o ma- unión con el destinatario*. es e1
nipula.torio {hacer~haC:er), de un ha- saber. El eje de la comuri.icacióti*,
cer · que construyé, transforma y reconocido de esta mandra, permite
destruye las cosas;· o de un hacer entonces introducir nu'evas dii:¡tin-
factitivo* que manii;>'ula a los seres, ciones -cuya multiplicación no de..
el hacer aparece siempre como la be exceder las . necesidades reales
¡, ' .. . -
205 HACER·Hl!.ROE
del análisis- basadas en criterios mi6:tica (de la que ésta toma, a
semántico-sintácticos. Así, se reco- menudo, bastantes eleinento!>), ·en
nocerá primeramente un hac;er infor· la medida en que -como dice P.
roativo*, definido por la ausencia Ricoeur- articula una teoría gene-
de todo tipo de modalización, como ral del sentido con una teoría ge-
Ja comunicación, en estado (teóri- neral del texto. Debe notarse, em-
camente} puro, del objeto del sa- pero, que el dominio de su ejercicio
bei; después, se le articulará en un es muy específico y, por otra parte,
hacer emlslvo• y en un hacer. re- que pone en juego la relación del
ceptivo* que puede ser, a la vez, texto con el referente*, dedicándose
activo (oir, mirar} o paslvo (escu- en particular a los datos extra-lin·
char, ver). En este mismo eje de güísticos de los· discursos y a las
la comunicación es· donde surge condiciones de su producción y iec-
también -gracias a las modaliza- tura. A diferencia de la aproxima-
ciones: y a las complejizacíones de ción semiótica -para la que, por
los programas del hacer resultan- ejemplo, la enunciación* puede re-
tes- la distinción (que nos parece construirse según un simulacro ló-
fundamental para una tipología de gico· semántico elaborado partim·
los discursos) entre el hacer persua- do sólo del texto-, la hermenéutica
sivo* y el hacer :lnterpretatlvo•. hace intervenir el contexto socio.
S. El hacer narrativo -que co- histórico, incluido el de la compren.
rresponde, en nuestro criterio, a lo sión actual, e intenta -mediante
que impropiamente podría designar· este juego complejo- desprender
se como una ctinteligencia sintag. los sentidos admisibles: presupone,
mática- constituye un campo de pttes, una posición filosófica de re-
análisis y de reflexiones considera- ferencia como criterio de evalua-
ble y abierto, cuyo rol sólo puede ción.
· acentuarse con ayuda de la psico-
logía cognoscitiva. Las primeras HE.ROE. Fr. héros, ing. hero.
aproximaciones practicadas en el l. El ténnirio héroe puede servir
dominio del discurso con propósito para determinar al actante* sujeto,
científico, han permitido distinguir cuando éste se encuentra en una
. en él un hacer taxonómico {con sus determinada posición de su reconi·
aspectos comparativo y taxonómico) do narrativo, dotado entonces de ·
y un hacer pl;'"ogramátlco. los valores* modales correspondien-
~ ·srNTAXIS NARRATIVA DE SUI'ER.FI· tes. El sujeto sólo se convierte en
CIE. héroe cuando está en posesión de
cierta competencia"' (poder y/o sa-
HERMENJ!UTICA. Fr. hennéneu. ber· hacer). En la dimensión prag·
tique, ing. hermetteutics. - La her- mática*. del relato, distinguiremos,
menéutica, en SentiC..o normal· y co· por tanto, al héroe actualhado*
niente (y no semiótico), designa (antes de su perfonnance''') del hé-
por lo general Ja interpretación de roe realizado* (en posesión del ob-
. textos esencialmente filosóficos y jeto de la búsqueda): en la dimen·
religiosos. Se trata de una d.iscipli· sión cognoscitiva*,· opondremos el 1
na relativamente próxima a la se- héroe oculto al héroe revelado (des·
HEROE. HIPO-/HIPEROM!N!CO (-A) 206
pués de la· .salición* cognoscitiva cedimiento de descubrimiento. Es
del Destins.dor, o ·-.reconoqimiento•). entonces la hipótesis (que no es ni
Ello quiere decir que «b~ ·es la verdadera ni falsa, sinQ anterior . a
denomiriación de un estatuto actan- la instauración del proCedimiento'*)
cial* determinado. la que es hewística: JPs procedi·
2. En· sentido restringido, se lla- ·mientas . de descubrimiénto -una
ma· hérÓe -particuJannente, en los vez formulados- pueder,i, a su vez,
estudios: de literatura ·oral o ·clási- facilitar la constitución de nuevas
ca- al ·actante. sujeto tal· y como hipótesis, y el conjunto, constituYe
acaba ·de ser definido, pero dota- la praxis científica. ·
do, además, de· connotaciones* -eu- 2. De modo más genCfa1 y vago,
fóricas*· moralizantes,· oponiéndolo se califica, a veces, de heuristica .a
al ·traidor* (connotado disfórica- una actitud científica: la aproxima.
mente*)r ción estructural, por ejknplo, que
~ ACTANCIAL (rol, estatuto -.), NA- trata, en primera línea, .de aprehen-
RRATIVO. (recorrido -:"'), MORALIZACIÓN. der reia<;:iones* Y, por ello, 'obliga
a prever las posiciones eventuales
HETEROGENEIDAD. Fr. hétéro· de los térmipos* de un.3. categoría*
genéité, · ing. heterogeneity. -,.. Un {términos cuyas manifestaciones no
conjunto* se denÓmina heteroiéneo son evidentes a· primera yista). pue-
cuando sus: elemCn.tOs* constituyen- de -en este sentido- ser llamada
tes tienen propieQ.ades de tal modo heurística.
diferentes Que no· Pueden inscribir- ~ JU'.PÓTESIS, DESCUBRIM.IENTO.
se en una misma ·y única clase*.
~ · HOMOGENEIOAD. HIPON1MlCO (-A) / Hll'ERONt·.
MICO (-A). fr. hypon.ymit¡ue / hiP.é-
HETEROTOPICo·· (ESPACIO - ). ronymique, ing. hyponyrñic / hype·
Fr. espace hétérotdpique, ing. hete- ronymic '{neol.). -Bajo ~¡ ..doble ~·
rotopic. spp.ce. .-.,:opuesto al espa· lificativo de hiponímico/híperonfrñi-
· cio* de referencia qtie es el espacio co, se designa la relación* estab~e-­
tópico (lugar de .. Jas performances* cida entre ia categoría* sémici Y
y dé sus competencias*), el espacio uno de sus términos* Constituyen·
heterotópieo designa los lugáres cir· tes (situado en el eje de los con-
cundantes·. (los espacios de .catrás11 •trarios*). Esta re13ción tiene doble
y de (ldelantel> ), el ·aallá X> {por. con· sentido: lo que aparece como rela-
tn>:itc con el «aquí»/ «ahí,. que ca. ción hiponímica desde el punto de
racti;rlzan ·al espació tópico), vista interpretativo*,· será consi4e~
~ 'IÓPICO (espacio-), LOCALIZACIÓN rado como hiperonímico desde el
ESPAC{O-TI!MP9JUi. '· .. punto de vista generativo (según
el recorrido que media ~nte la iris··
HEURtSTlCA. Fr. heuristique, in~ tancia ab quo y la iii.stancia ad
glés heuri.stic. ·· ~ · ·.-. quem). Desde el punto 'de vista in·
1. Se dice que una hipótesis de terpretativo, hJpónimo esel térmi-
trabajo es heurlstlca cuando eJ dis· no que se manifiesta ell lugar de
curso qlle- la· desanolla tiene Como la categoría sémica e lÍlperónlmo,
efecto p¡-o¿:ucir y 'formular un pro. la categoría que se m3.niñesta en
¡
207 HIPO.HIPERONtM!CO (·A)· H!PóTESIS

lugar de uno de los términos sémi- minos primitivos y la negación del


cos. A través de estas distinciones término contrario (entre S1 y 82).
semánticas, se trata -fundamental-
mente- de la relación de selección"' HIPOTESIS. Fr. hypothe.se, ing.
(presuposición* unilateral, según L. hyporhesis.
Hjclrnslev) tal y como funciona 1. Toda actividad cognoscitiva del
dentro de una única categoría sé.- sujeto se basa en un saber ante-
mica. La relación hiponímica/hipe· rior, implícito o explicito, y presu-
ronímica permite definir la metoni· pone, en consecuencia, cierta com-
mia* en sentido restringido (pars petencia* cognoscitiva. La hipótesis
pro tota), de trabajo aparece, desde esta pers-
. pectiva, como la explicitación* de
HIPOTACTICA /. HIPERTACTI· . esa competencia con miras a la perM
CA. Fr. hypota.:dqu.e/hypérotaxique, formance* proyectadá que tomará
ing. hypotactic/hypertactic. ·la forma de discul:so con objetivo
l. En lingüística, se entiende ge- . científico. En cuanto explicitación
·neralmente por relación hipotáctica planteada antes del discurso mismo
la relación"' jerárquica* que vincula de la investigación, Ia hipótesis de
dos términos situados en dos nive- trabajo puede ser comparada a un
les de derivación* diferentes (por contrato* propuesto al enunciata-
ejemplo, la relación entre principal rio* ( = la comunidad de sabios)
y subordinada, entre determinado y por el enunciador* cuyo discurso-
determinante, etc.). L. Hjelmslev performance se considera que cons·
trató de precisarla, inte11'retando tituye la realización. Es decir, la
la selección* -en términos lógicos- hipótesis no es ni verdadera ni fal·
como la relación entre un tén:nino sa y su valor de verdad sólo apare- ·
presupuesto y un término presu- · ccrá a pasterioÍ-i, al transformar
poniente {presuposición* unilateral). eventualmente los discursos hechos
En· tanto en cuanto que ella es de sobre etla mediante un procedimien·
naturaleza jerárquica, la hJpotaxis to de descubrimiento•. Po1 otro la-
se opone a Ja parata::ds (que no es- do, el saber* ":l el saber-hacer (cuya
tablece ninguna relación de depen- explicitación parciil · constituye Ja
dencia entre dos términos conti· hipótesis de trabajo) no se dan ex ·
guos). nihilo, sino que dependen de una
2. A difer~ncia de la relación hi- episteme* y de diferentes concep- .
ponímica* que define la posición de tualizaciones teóricas. Asimismo, el
los términos sémicos de una sola rol de las teorías explicitas es con·
categorla* vertida en el cuadro* se- siderable en la fonnulación de las
miótico, la relación hiJ;X?rotáctlca hipótesis.
indica las posiciones formales de 2. Se entiende por método hipo-
los términos antes de todo verti- tético ·deductivo el procedimiento,
miento* semántico. Así, en el cua- concerniente a la· construcción de
dro, la hipotaxis podría identificar- una teoría, que consiste en plan·
se, por ejemplo, con la implicación* tear -en el punto de partida-
que es una relación de presuposi· cierto número de conceptos* no de-·
ción unilateral entre uno de los tér- finidos o de proposiciones no afee·
HIPOTESiS - lll~/ÓRIA 208

· tadas por valores' de verdad, ·a ñn cursivas (característicaS de Ja ma.


de que' .el discurso. d~uctivd "de5· nera como es contadá la «histo·
arrolladó desde estos postulados, ria»), el discurso histórico apareCe
llévti a cabo a· posteriori la prueba -a nivel de superficie- como un
de su eficacia, al producir .-.:COmo dlscurso temporalizado* . (donde los
consecuencia·· lógica-·' eDunciados predicados • transformaciones son
que pueden ser considerados como convertidos* en proceso*): En es.te
procedimientos" de descubrimiento. sentido se puede hablar :de anclaje*
Die.ha empresa, frecuente en ·mate:. histórico, entendiendo por ello· .la
máticas 'Y en física, _ha sido recien· inscripción de los programas* na·
temente ·introducida en semiótica rrativos dentro de coordenada·s es~
(L. ·Hjelmslev, N .. Chomsky). ' · pacio • temporales, de cil"I-ácter figU.
~ PROCEDIMIENTO, . DESCUBRIMIENTO, rativo*. "
DEDUCCIÓN•. ·
~ . . ,. 4. Cuando el diScllrSO narrati~o
{cf. supra, § 2) sirve de modo de
· HISTOR.1A. Fr.. histoire, ing. his- articulación a la historil:!, · (en el sen·
tory, story. · - El .término historia tido del§ l), se.le denOmina hb¡:to-
es ambiguo y abarca contenidos rlográfieo (o, más a menudo, histó--
n1uy diferentes. · rlco). Desde· entoilces, ~1 problema
1: Se entiende;·ante todO,"pOr his· de la cientificidád* de dicho discur-
torla un universo* semánticO -con· so -y el de su metalengilaje*, cons·
siderado cómo· objeto• de conoci· truido- no deja de plantearse. La
mient°"'""' cuya inteligibilidad,. pos· lingüística histórica lo ha resuelto
tul ad a la ·priori,, Se basa en· una en et sentido de1 comParatismo*,
articuiáción* diacróD.ica.,. de- sus ele- al interpfetar la diacronla como la
mentos.: ·En este sentido, la historia transformación* lógica .. -reconoci-
puede :ser conside.ráda como una ble entre dos estados*.'.. de lengua
semiótica-objeto :.(o· como un· con· dados-, pero a costa de vaciar· la
junto de s·emióticru? tomadas antes historicidad (o la dimensión tempo-
de su análisis*) cuya aproximación ral) misina. Las tentativas más· re-
está determinada de antemano por cientes, provenientes de la filosofía
ciertos ;postulados.·. lógica, de establecer sedes ordena·
2. Por otra -parte, la historia res· das de enunciados correspondientes
ponde a la descripción de acciones a las sucesiones de eVentos histó--
cuyo estatuto· v~ridictorlo* no es ricos distan mucho de .verse coro--
fijo (pueden ser. declaradas pasadas nadas por el éxito.
y ..:reales:o~ · imagirlS:rias o, incluso, S. Dentro de una tipología gene-
imprevisibles). Desde este .punto de ral de Jos discursoS, :Q.ue corr~s­
vista, la historia débe ser conside- ponde a la semiótica, y ·~n el marco
rada cOmo discurso narrativo {como de los modelos de la n'arratividad*
«relato hlstórico»1 ségún Benveniste, ·que ella propone, es pOsible conce--
o Simplemente «relato:o). bir investigaciones cu.Ya finalidad
3. · Si se distinguen las estruc'.tu· sería determinar la especialiaad del
ras*· semio .. narrativas (en cuanto discurso histórico. Una p·nmera dis--
formasi.'·de ·organización profundas tindón entre la historia evenctal
y generales) y las estructuras dis-- -situada a nivel de la .sintrups* na·
HISTORIA- HOMOLOGAC!óN

rrativa de superficie- y Ja historia operación), aquélla concierne, más


fundamental -concebida como el bien, a la naturaleza <tinrnanente•
conjunto de las transfohnaciones de del material examinado.
las estructuras profundas, de carác*
ter lógico-semántico- aparace, en- HOMOLOGAClóN. Fr. !tomologa-
tonces, como condición previa para tion, ing. homologation. - La homo-
dichas investigaciones. Iogaclón es una ot:ieración de aná~
~ DIBGESIS, EVENTO. lisis semántico, aplicable a todos
los dominios semióticos y que par- .
HISTóRICA (GRAJ\!ATICA-). Fr. ticipa del procedimiento general de
grammaire historique, ing. histori· la estructuración. Debe considerar-
cal gra1nrnar. - La denominación se corno una formulación rigurosa
de gramática bJstórlca ha servido del razonamiento por analogía*. Da-
en otro tiempo, paralelamente a la da la estructura
d<;: gramática comparada, para de- A:B::A':B',
sígna.r la lingüística comparada que
se elaboró, de modo progresivo, a A y A' se consideran homologables
lo largo del siglo .x1x. con relación a B y B'. Desde el pun·
~ COMPARADA (lingüística -). to de vista semántico, dicha homo-
logación no ·puede ~firmarse sino 1
HOMOGENEIDAD. Fr. homogt!- con tres condiciones: a) los térmi-
rtéité, ing. homogeneity. nos, representados por las mayúscu-
l. Un conjunto* se dice que es las, deben ser sememas* • descom- · ·
homogéneo cuando todos sus elé.. ponibles en sernas*; b) los términos~'.­
mentes* constituyentes tienen en A y A', por un lado, y By B', por"'·
común las mismas propiedades. A el otro, han de tener, al menos, un
diferencia del concepto de isotopía* sema común; c) las relaciones entre
-reservado para el análisis interno A y B, por un lado, y entre A' y B',
del discurso-, el de homogeneldad, por el otro, han de ser idénticas y
mucho más amplio y relativament~ reconocibles como una de las rela-
impre<:iso (reconocido como no de-- ciones lógicas elementales (contra-
finible por L. Hjelmslev}, se aplica; dicción, contrariedád, complemen·
sobre todo, a la constitución de Jos tariedad).
corpus*, haciendo intervenir -entre 2. La homologación, así definida,
otras- condiciones .extra- lingüísti- es complementaria, en el análisis
cas. semántico. de la reducción*: un in-
2. En un sentido más restringido, ventario de ocurrehcias* parasino-
la homogeneidad podrá basarse en nimicas no puede sCr reducido a un
la ele<:ci6n de elementos de un solo semema descriptivo sino cuan-
mismo nivel*, de unidades de las do cada una de ellas encuentre su
mismas dimensiones, de relaciones término opuesto (contrario o con-
del mismo tipo (Hjelrns1ev). Desde tradictorio) en el inventario (o los
esta perspectiva, se puede compa- inventarios) paralelo(s), y si cada
rar a Ja pertinencia*: sin embargo, categoría*, así establecida, es homo-
mientras que ésta depende del pun- Jogablc con las otras categorfas de
to de vista del analista (o de su los inventarios paralelos.
SEMIÓTICA. - 14
HOMOLOGACION ••HOMONIMIA 210

3. En· cuanto ·disCiplina irnpUesta · HOMONIMIA. Fr. homdnymie, in-


al ·razonainiento fualógico -cuya glés hotii"Onymy. - La. ·homonimia
importancia para · l~ investigación es la rel&ción de identidad*, situada
no debe subestimal-Se-, la hómolo- en el nivel del sÍitnificallte* y te<;o-
gaci~n es u_n procedimiento general nocida entre· dos o más ')norfemas*
que supera ·1os l!mítes·de la sen1án- o palabras*, cuyos signifii:ados* son
tica (en sentido restringido): se uti- considerados como distintos. Los
liza, por ejemplo, ·para ~stablecer "homónimos pueden ser:-bomófonos
las ·reglas de conversión* entre ni- ( <i:hola» y (tola,.) u .homógrafos
veles*, ]:)ara determinar correlacio- (a:suetdo11: de soldar:; Y· <1:SUeldQ11:
nes en el método comparado*, para remuneración). Dos lexeIDas* se con~·
formular -las coen>iones semióticas · sideran independientes :Y hom6ni~
(sintácticas o setn.anticas).. etc. mos, si sus sememas* ni>. contienen
-+ ESTRUC111RACIÓN, ANALOCL\. una figura* nuclear coniún.
~ l'<JUS10MA.
1

ICONICIDAD. Fr. iconicité, inglés «signos naturales,. cuya imitación·


iconicity, produciría un tipo u otro de semió-
1. Se entiende por !cono, siguien- tica, etc. Es también, al mismo
do a Ch. S. Peírce, un signo* defi- tiempo, negar la semiótica visual co-
nido por su relación de semejanza mo tal: el análisis de·una superficie
con la .:realidad,. del mundo exte- plana articulada consistirá -desde
rior y opuesto a indice* (caracteri- esta perspectiva- en identificar los
zado por una relación' de <{contigüi- signos icónicos y lexicalizArlos en
dad natural11) y, a la vez:, a símbolo* una lengua natural: no es sorpren-
(basado en la simple convención dente, entonces, que la investigación
social). Si se considera · -<:.emo es de los principios de organización
nuestro caso- que definir el signo de los signos así reconocidos, llegue
por lo que no es, senúóticamente a confundirse. con·Ia de su lexicali-
no es pertinente, y que, por otra zación* y que el análisii de un cua-
parte, la semiótica* no resulta ope- dro. por ejemplo, se transforme, en
ratoria sino cuando sitüa sus aná- definitiva, en un ·análisis del discur-
lisis más allá o más acá del signo, so sobre el cuadro. La especificidad
la clasificación propuesta -sin es- de la semiótica visual se diluye,
tar de ·sobra- ofrece poco interés. pues, en estas dos macrosemióti-
2. No ocurre lo mismo cuando cas* que son el m1mdo natural y
el concepto de lconlcldad se cita las lenguas naturales.
para definir tal o cual semiótica 3. Si, en vez de considerar el
-o su plano de expresión*- en su problema de la iconicidad como
conjunto. Reconocer que la semió- propio de las semióticas 'visuales
tica visual (la pintura, por ejemplo, (pues aquf, en ·Jos doininios del cine,
considerada como un caso de espe- de la pintura, de la fotograña, étc. 1
cie} es una inmensa analogía* del el compromiso del debate aparece
mundo* nztural. es perderse en el grávido de consecuencias, sin saber-
laberinto de los presupuestos posi- se por qué el significante visual·
tivistas,· confesar que se sabe que sería más ·dcónico• que el signifi-
es la a:realidad:o, que se conocen los cante sonoro u olfativo, por ejem-
ICONICIDAD- IDENTIDAD 212

plo), Se le formUl~se en' términos ~ SIGNO, IMAG~, REF$.ENtE, FIGU-


de intertex.t.uilidad~ "'(entre semióti- RATIVIZACIÓN, SEMIOLOGÍA. ...
cas conStn¡idas .'!i "semióticas natu·
rales}, Y si se le. ·extendiera a la IDENTIDAD. Fr. identité, inglés
semiótica literaria*, por ejemplo, se identity,
vería que la iconicidad encuentra l. El concepto de id'Cntidad, nó
su equivaleiite bajo el nombre de definible,· se opone al de alteridad*
ilusión referencial*. Ssta puede ser {como <e}o mismo» a <e]O 'otro») que
definida' como el resultado de un tampoco puede Ser definido: en
conjunto de prócedilnientos puestos cambio, la pareja, comó.'· tal, es in·
en· juego para producir el efécto* terdefinible por la relación de pré-
de sentido _«realidad»; aparece, así, suposición* recíproca, Y es indis·
como doblemente condicionada por pensable para fundar la ·éstructura*
la conCepción cultural varlable de elemental de Ja significadón.
la «realidad» y por la ideología rea- 2. Por oposición a ia igualdad
lista aswnida por los . productores que caracteriza a los objetos que
y usuarios de tal o cual semióti¡;:a. poseen exactamente'Ias niismas pro·
La ilusión referencial, Jejas de ser piedades cualitativas, la identidad
un fenórlleno universal,. sOio · se en· sirve p"ara designar et 'liasgo o el
cuentra: eri ciertos ttgéneros» de tex· conjunto de rasgofr (en ·semiótica:
tos, -y ~u 9-osificación. es también sernas* o femas*) que ti~nen en C<:>·
dispareja. y relativa .. Generalizando: mún dos o más objetos. ·As!, cuan-
la iconicidad ..:..aunque engendrada do se opera Ja suspensión de una
por un :conjunto de procedimientos operación categórica -pór ejemplo
semióticos, susceptibles de ser'. for· persona/ no-persona-; el eje• -se·
muladas- no es constitutiva de la mántico que reúne a !Os dos tér-
semiótica; no depende -eomo diría minos reaparece; se enc~entra "valo-
Hjelmslev- de la Semiótica o:deno- rizado, y su manifestaciOn provoca
tativa:<>; !.se fundamenta en el siste- un efecto de· identificación. })e esto
ma de las connotaciones* sociales se desprende que el ·recbnocirnien-
subyaceittes al conjunto de las se- to* de la identidad de dos objetos,
mióticas•.' · : · . .. . . o Su identificación, presupone su
4. Este conjunto de consideracio- alteridad, es decir; un rilínimo sé·
nes nos·: lleva a introducir el térmi· mico o fémico que los -vuelve, en
no iconJzación para . designar -den· primera instancia, distintos. Desde·
tro del recorrido gCIJerativo* de los este punto de vista, la identificación
textos-' la última etapa de la "fi.gu- es una .~peración metalingü.ística*
rativización* del .discurso, donde que demahda con anterioridad un
distinguimós do.s ·fases: Ja figura. análisis* sémico ó férniCo: lejos_ de
ción,. propialnent~ _cljcha, que expli- ser una primera aproximación al
ca Ja conversión* de los temas* en material semiótico, la identificación
figuras*, y la iconización que, to- es una ·operación, entre ótras, _para
mando a su cargO las figuras ya .construir el objeto· semiótico.
constituidas, las doia de vertimien· 3, La identidad sirve~' igualmen·
tos* . particularlzantes, capaces e.e te, para designar el p¡;incipio de
producir la ilusión .referencial. permanencia que permit~ al indivi·
213 IDENTIDAD· IDEOLOG!A

duo permanecer el «mismo~, «per- tica* y sjntagmática*. En el primer


sistir en su ser11 a lo largo de su caso, los valores están organizados
existencia narrativa, a pesar de los en sistemas* y se presentan como
cambios que provoca o sufre. Así taxonomías* valorizadas a las que
es corno nos referimos al concepto se puede denominar axiologias*; en
de identidad cuando se tiene en el segundo caso, su modo de articu-
cuenta la permanencia de un actan- lación es sintáctico* y están verti-
te*, a pesar de· las transformacio- dos en los modelos que aparecen
nes* de sus modos de existencla* como potencialidades de procesos*
o de tos roles actanciales* que asu- semióticos: oponiéndolos a las axio-
me en su recorrido narrativo*; ta logías, se les puede considerar co-
permanencia también de un actor* mo ideologías (en el sentido res·
discursivo a lo largo del discurso tringido, semiótico, de esta pala·
donde está inscrito: en este nivel, bra).
el procedimiento de anaforización* 3. Los valores que participan en
permite identificar un actor en to- una axiología son virtuales* y re-
dos los instantes de su existencia sultan de la articuhÍción semiótica
discursiva. del universo~ semántico colectivo*;
4. Se entiende también por iden- pertenecen, por ello,· al nivel de las
tificación una de las fases del ha- estructuras semióticas profunda$*. ·
cer interpretativo* del enunciatario* Al· verterse en el modelo ideológico,
cuando identifica el universo del se actualizan* y son tomadas a su
discurso (o una parte de este uni- cargo por un. sujeto -individual o
verso) con su propio universo: di- colectivo- que es un sujeto moda-
remos, por ejemp1o, que una joven li:zado* ·por el querer-Ser y, subse-
lectora se identifica con el perso- cuentemente, ·por· el querer-hacer.
naje de Juana de Arco. Entendida Es decir, una ideología puede defi- ·
en este sentido, la identificación no ni:rse (por depender del nivel de las
está todavía suficientemente explo- estructuras semióticas de superfi-
rada. cie*) coi:no una estn1ctura actancial
-)o ALTERIDAD, INDIVIDUALIZACIÓN. que actualiza los valores que ella
misma selecciona en los sistemas
lDEOLOG:tA. Fr. idéologie, inglés axiológicos (de orden virtual).
ideology. 4. Una ideología se caracteriza,
· l. Dada la riqueZa del campo entonces, por el estatuto actualiza-
semántico comprendido por el con- do de los valores de los que se hace:
cepto de ideología y las numerosas cargo: la realización* de estos va~
ambigüedades que resultan de sus lores (es decir, la Conjugación* del
diferentes interpretaciones y defini- sujeto* con el objeto*· de valor) ·
ciones posibles, cabe preguntarse abolirá, ipso facto, la ideología en
si la aproximación semiótica aporta cuanto tal. En otras palabras,· la
algimas precisiones. ideología· es una b~squeda* pema·
2. Así, parece oportuno distinguir nente de valores y la estructura ac·
dos formas fundamentales de orga- tancial que la informa debe ser
... nización del universo de los valer considerada como recurrente*· en
res*: sus articulaciones paradigmá-- todo discur~o ideológico.
IDEOLOG!A ·IMAGEN. 214:

5. Considerada cOmo una instan- ticos* particularizan tes, .. como ·del


cia en el recorrido generativo*' glo- universo colectivo (ar'tic;ulado por
bal*, la organización ideol6~ca Pre- la categoría rratura/cultúra) cuybs
senta los valores · -que asume-- términos dispone a su talante, ho-
bajo su , fonna ·abstracta o .temá- mologándolo con el universo indi~
tica*; Sin embargo, i!l discurso ideo- vidual. ~stas son: desde luego, sólo
lógico puede ser, 'en·: todo· instante, algunas sugerencias, relativas a una
más o menos figUratJvizado* y con- problemática particuJannente ardua_.
vertirse, así: en discursos mitoló-- -+ UNIVERSO SEMÁNTICO.,__ :-soc10LEC!ti,
gicoS'•.. ESTILO, l'SICXISEMIÓTICA. ..
~ .AXIOLOGJA.·
. ILOCUCióN. Fr. iUocution, inglés
!DlOLECTO. Fr. Ídiolecte, inglés i!Iocution. - A diferenc!á de la lo-
idiolect. ..· :· . . cución y de Ja perlocución*, lá il~
l. ·El ldiolee:to eS la actividad se- Cuclón (en la tenninologíá de J. L.
miótica, p'r0ductora · Y/o lectora: de Austin) corresponde a la enuni::ia-
las significaciones·~ --0 del conjunto ción en cuanto que ella ·es
un acto'
de textos relativos á" ella-, propia de lenguaje que influye en las rela·
de un áctor* individual* que par- ciones éntre interlocutor"' e intedo-
ticipa de-· un universo* semántico cutario y puede ser · p3rafraseada
dado. En la· práctica de las len- por un enunciado peiformativo•
guas,.. naturales, las varlaciOnes* in- {por ejemplo: «Lave los'·:platos• =
dividuales no pueden ser muy nu- «Le ordeno que lave los. platos»):
.inerosas ni constituir desviaciones* así sucede en el caso de una orden,
demasiado niarca:das:· abocarían, en de un consejo, de una promesa, de
efecto, a intemunI)ir. la comunica- una pregunta... -en Jos , cuales se
ción*· interindividual. Asimismo, produce un efecto diree.tO al emi.
son, .generalmente, consideradas co- tirios-, a diferencia de ta perlocu~.
mo fenómenos de superficie* que ción, donde, en tales drciinstancias,
afo.::tan, en .. primera línea:. a los se produce un efecto indirecto. Co-
componentes fonético y léxico ·de mo se ve, la ilocuclón, ai--·igua! que
la lengua. ·-En estado puro, el ideo- la perlocución, dependen esencial-
lecto depende de la psicolingü.!stica mente del campo de la ·~amunica­
patológica y cabría identificarlo "con ción* verbal y remiten a la compe-
la noción de autismo.. tencia* cognoscitiva de los sujeto&-
2. Situado a nivel de las estruc- locutores.
turas profundas*, éi problCma del -> ACTO DE LENGUAJE, ~UNCIACIÓN,
idiolecto puede ser comparable a la COMUNICACIÓN,

im~ge, ~g. ~ag~·:


noción de estilo*. Desde esta pers,
pectiva, es posible concebir al idio- IMAGEN. Fr.
Iecto Como el hac"erse cargo, por En semiótica visual la :Imagen está
parte· de' un- actor in_dividual, ~to consjderada como una ·iUudad de
del universo semántico individual manifestación* autosuficiente~ ·como
(tal como 'está.· constituido por la un todo de significación, suscepti·
categorla* vida/muef-te) al que pue- ble de . análisis. Partiertd~ de esta
de dotar~o de. vertimientos hipotác· constatación común,_ se. desprenden.·
215 IMAGEN - lMPL1C!TO

dos actitudes diferentes. Mientras IMPERFECT!V!DAD. Fr. ímper-


que la semiología de la imagen fectivité, ing, imperfectiveness. -La
-referida a la teoría de la comuni- lmper.fectivldad designa el serna*
cación*- la considera, generalmen- aspectual correspondiente al aspee-
te, como un mensaje constituido . to durativo* que actUaliza*, al pro-
por signos icónicos, para la semió- pio tiempo, la ausencia de una re-
tica planaria* la imagen es, sobre lación de presuposición• con el
todo, un texto-ocurrencia (compara· aspecto terminativo*. El aspecto
ble, a pesar de la especificidad bidi· imperfectivo se denomina también
mensional de su significante*, a los no cumplido,
de otras semióticas) que puede ser -+ .~SPECTUAL1ZACIÓN.
explicado por el análisis al con:;..
truirlo como objeto semiótico. Así· IMPLICACióN. Fr. imptication,
mismo, mientras que para la semio- ing. implica.tion.
logía de la imagen, la iconicidad de l. Como todos los conceptos fun·
los signos forma parte de la defini- damentales de la lógica, la Implica·
ción misma de imagen, la semiótica ctón ha dado lugar a interpretacio- ,
planaria considera a la iconicidad nes diversas. Su · aplicación a . la
como un efecto de connotación ve- semiótica có'nstituye una dificultad
ridictoria, relativa a una cultura más: por ello procuramos dar una
dada que juzga ciertos signos 4:más sota definición, confonne con la de
reales:. que otros y que conduce otro concepto fundamental, la pre-
-en ciertas condiciones- al pro- su:posición.
ductor de la imagen a someterse a 2. Considerada como acto de im-
las reglas para construir un «hacer- plicar, la implicación consiste, para
parecer~ cultural. nosotros, en la conminación aserti-
· ...:; IO>NICIDAD1 REFERENTE, VJ:l:UDIC- va del término presuponiente que
CIÓN, SEMIOLOGÍA, tiene por ·efecto hacer aparecer el
término" presupuesto. La relación
IMBRICACióN. Fr. chevauche- prestiposicional es, así, vista como
ment, ing. overlapping. -A diferen- lógicamente anterior a la implica~
cia de la intercalación que designa, ción: el t1si .. encuentra su «enton·
a nivel discursivo, la inserción de ces10 sólo si éste existe ya como
un relatot dentro de· otro más ex- presupuesto.
tenso, la imbricación corresponde --+ PRESUPOSICIÓN, CUADRO SE.MIÓTI~;.
al encabalgamiento de dos secuen· ASERCIÓN. ~
cias• narrativas, de las cuales, la
primera se · encuentra prolongada IMPLtCXTO. Fr. implicite, ing.
(en el plano de los ·contenidos ver- implicit.
.tidos, por ejemplo) sobre una parte 1. Si se considera que lo exptí·
de la segunda (cuya articuiación cito• constituye la parte manifiesta
sintáctica, por ejemplo, queda tam· de! enunciado· (frase o discurso), lo
bién manifiesta y, ·relativamente, bnplidto corresponderá a la parte
autónoma). no manifiesta, pero directa o indi·
-+ lNStRClÓN. rectamente implicada por el enun·
IMPL!CiTO 216.
ciado producido. Lo t?xpliclto ·. del tudes corporales) como ·a las sig-
enunciado aparece como la· parte" nificaciones provenientes ·'.del «Con-
visible de . un iceberg: hasta . tal texto extra-lingüístico;i:. '.·o. de la
punto la · m.fon:llaci6n. vehicuiada «situációnD, esto es, de ··semióticas
implícitamente parece considerable naturales* no lingüísticas"'. Si, por
en toda COJnunicaci6:0... La a:Prox.ima· el contrario, se postula,.-desde un
·ción positivista (qtie ·tendia a tratar principio, que la comuñiCación in~
a las iengi.ias* naturales coma puras tersubjetiva es objeto de una se-
denotaciones* y a la.S palabraS· como miótica sincrética* -en que con.- .
etiquetas transparep.tes · que dejan curren varios lenguajes ·de mani·
ver claro las cosas Q.ue denominan) festación (cf., por ejemplo; la ópera
se encuentra del tod.o comprome- o el cine)-, lo implícito intersemió-
tida por· ias ·investig~Ciones que· in· tico se explicitaría nat1,1r~lmente·
tentan explicitar- )o in'lpl.fdto. : como una red relacional. !mtre va-_
2. Desde el punto de vista se- rias expresiones*, paralela~ y /o en~
miótico, . sólO puede. hablarse· de cabalgadas.
implicito cuando al mismo tiempo 4. Ateniéndose a la· Convención
se postulaJa·_existencia de una rela· de una comunlcacióñ lingüística au-
ción, de una :referencia que vincule tónoma, ·puede tratarse de circuns-
un elemento cualquiera del enun· cribir el campo de lo implícito en
ciado manifestado Con lo que se el sentido de lo no-dichó· verbal o
encuentra·.-fuera· de él,· pero que, verbalizable. El procedimiento co-
por éontenerlo de modo virtual*, rriente de la implicitación ·es lo que·
o incluso actual*, Sea susceptible, se llama la elipsis•; el de" la expli-
por ello, . de · realiuirse con ayuda citación -paralelo e inv"erso- es
de una paráfrasis* (o de un .:com..· · la catálisis*. El ejemplo bien concr
plemento de 'informac_ión). En otras cido, propuesto por L. Éjelmslev/
palabras, lo implícito -en una se- es el de la preposición !~tina sine.
miótica dada- lo es únicamente de cuya sola presencia pernlite expli·
lo explicitable. citar el element6 que se le vincula
3. Para. mayor claridad, se P.uede de modo lógico, elemento. _que pue-
distinguir, de -entrada, lo lmpliclto de ser expresamente definido como
lntrasemiótlco (explicitable en una ablativo·+ categoría de nombre +
lengua natural) .de lo !mplíclto .in- caiegoria de género + raíz.- + clase.
tersemJótlco (donde· el enunciado nominal. En el caso examinado, lo
explicito,· formulado ·en uqa serllió- implícito constituye el conjunto de
tica, remite a un implícito y/o ¡un datos gramaticales que caTacterizan .
explícito que dependen de otras: se. el sintagma en cuestión, reflejando ·
mióticas). No es por simple abstrae· · la o:estructura inmanente=- .de la Ien4

ción como se ha . ~~quirido la cos- gua.


tumbre. de considerar, la comunica- s. COnsecuentemente, se está en
ción* lingüística com0:"¿un objeto de el derecho de generalizar ·.es~a ol>
estudio en sí mismo, al tratar como · servaclón y decir que 10. que es
implícitos ·-o. «SÓbr6-entendidos- válido para lo implícito sintagmá-
tanto a · -los · eleméi:ltos llamados tico•, lo es también pata el eje·
paralirigilisticos* (gestualidad, acti- paradigmático* del lenguaJe·:. asim.is~
217 IMPLtCITO-INCERTIDUMBRE

mo, que todo elemento explicito del po, sintagmáticamente, el enunciado


enunciado -considerado como un «confrontación de S 1 y S2:o, que
individuo de una clase paradigroáti· no tiene necesidad de manifestarse
ca- existe en significación sólo si para que las condiciones -necesa-
presupone implícitamente la clase rias para establecer una serie na-
entera. En definitiva, puede man- rrativa- se cumplan. Es inútil hacer
tenerse que ·toda gramática, en la notar que las consecuencias de Ja
medida en que trata de descriOir aplicación de este procedimiento de
el modo de producción de los enun- explicitación son considerables para
ciados, no es sino lo implícito ex· comprender la narratividad.
plicitado (con n.1.ayor o menor éxito)
de esos enunciados; que las estruc- IMPOSIBILIDAD. Fr. impossibili-
turas profUndastt, por ejemplo, cons· té, ing. impossibility. - En su cali-
ti tu yen lo implícito de .las es true. dad de denominación, la imposlbi•
turas de superficie*, etc. Algo esen- lldad designa la estructura modal*
cial que se debe tener en cuenta: correspondiente, desde el punto de
lo implícito sólo es aprehensible vista de su definición sintáctica, al
como una red relacional y,· más predicado modai de deber que rige
precisamente, como un conjunto de al enunciado de estado no ser/estar.
presupuestos lógicos (O. Ducrot); El deber no ser, denominado im-
es aquí, por este carácter metaló-. posibilidad, es el cÓntrario del
· gico que sirve de base a toda es- deber-ser, llamado necesidad"'. Em-
tructura semiótica, donde podría pleado en lógica, el término. imp~
situarse mejor el concepto de gra- sibilidad resulta semióticamente am-
maticalidad*, mucho más que en biguo, pues designa también la
el «sentimiento gramaticab de los estructura modal de no deber ser.
sujetos hablantes. -+ .ALtrICAS (modalidades -);:
6. Evidentemente, resulta más de-
licado al'licar estas observaciones IMPROBABILIDAD. Fr. improba·
a la dimensión semántica del len· bilité, ing. improbability. -Término
guaje. Sin embargo, el principio contradictorio de la probabilidad*
mismo -es decir la definición de y contrario de la certeza"' en el cua~
lo implícito como presupuesto lógi- dro* semiótico de las modalidades
co explicitable--:- puede ser mante· epistémicas, la improbabilidad es la
nido en todos Jos niveles del análi- denominación de la estructura mo-
sis. Así es, por ejemplo, como la dal de creer. no ser.
instancia de la enunciación* puede -.+- EPIS'IJWIC\S (modalidades -) .
definirse como lo impHcito del enun·
ciado. Un ejemplo trivial, tomado INCERTIDUMBRE.. Fr. incertitu-
de la semiótica narrativa, puede dar de, ing. uttcertainty. -Término con·
una idea del uso práctico que se tradictorio"' de la certeza* dentro
le puede dar a este concepto: el de la categoría modal epistémica,
enunciado* narrativo C!"Vi.ctoria de la Incertidumbre es la denomina~
S1» presupone' paradigmáticamente ción de Ja estructura modal de no
el enunciado implícito «derrota de creer ser.
5 21'¡; presupone, al mismo · tiem- -+ msré.fICAS {modalidades -).
INCOATIV!DAD' INDICE 218
IÑCOATIVIDAD. Fr. inchoativitéi tagmáticos subyacentes, ··resultantes
ing•. inchoateness. - La incoatJvidad de aplicar las reglas sintagmáticas,
es un serna* aspectual que señala e indicadores derivados; obtenidos
el inicio del procesó*: forma parte -por. la aplicación de Una o varias
de la ··configuración aspCctual in- transformaciones*.
coatividad· / duratividad ·¡ termina· 2. Bajo capa de indi¿<ldor sintag.
tividad,- «y su , aparición· en el dis- mático, la gramática generativa re~
curso permite prever o esperar la introduce, con una deilominación
realización'·de la sene entera~ :.. nueva, el concepto clásico de fun-
-+ ASPECIUAI.IZACIÓN. ción* sintáctica; con lo que. el lé.xi·
ce*, en efecto, comprende marca~
INCOMPATIBILIDAD~· Fr. incom- dores sintácticos correSJ)ondientes
patibilité, ing. inco"mpatíbility ..i-La a las categorías* gram~ticales .t~·
incompatibilidad ·puede ser consi- dicionales (nombre, verbo, preposi-
derada · como la imposibilidad que ción, etc.) que no h~ sido, de
tienen ·dos elementos* ·semióticos antemano, objeto de nipgún análi-
Cualesquiera, pa:ia. contraer una· re- sis crítico; por lo ·demás, nótese
lación* (de estar presentes* jtintos que el" paso de las clases* sintag-
en una unidad jefár.quicamente su- máticas a las clases morfológicas
perior o en poslci6~ de contigüidad no está justificado: esta heteroge.
en el eje sintagm~ti~*). La incom- n·eidad* no deja de ser un probierna
patibilidad· es intÍ'<1.~tegórlc.a (dos a nivel de la cohefencia* de la teO:
términos* en relación de contradic- ría.
ción*) .o. bien ex;racategórlca: en 3. Paralelamente a loS marcado-
se
este último caso· :trata de Ja ex- res sintácticos, la gramática gene-
clusión mutua que ;caracteriza a dos rativa ·emplea, en su lé,µco, maf·
microsistema!'; i (séi:nico o fémico ): cadores semánticos, es decir, ca:te·
en latín, ·pOr ejemplo, ad y el abJa. gorías* semánticas (tale~·como ~i­
tivo. se e?>.c1Uyen ·, teciprocamente. mado / inanimado, huinano / no
Pueden distinguirse ·Jncompatlbilida- humano, etc.) que -desempeñan un
des fonológicas, sintácticas y semán· rol de clasemas*. ..
tlcas. 4. S.. Benveniste' JJama indicadar
~. COMPATIBILIDAD, ACEPTABILIDAD, a lo que se designa, generalmente,
AGRAMATICAUDAD, ASEM.>\NTICIDAD•. con el nombre .de deíctico.
-->. ÁRBOL, GENERArivA (gramática
INDICADOR ·(o MARCADOR) '-}. DE1cnco.·
SINTAGM.iS.t"I°CO. ¡::%-. indicateur ou
(marquer) .syntagmatique, ing. syn- lNDICE. Fr. indice, ini. index.
tagmatic marker. · 1. En su clasificaci6n de los sig-
1. N. Chomsky ·da;· indifei-Cnle- nos, Ch. S. Peirce. opolie índice a
mente, ·et nombre d.e ·Ul~~.f!or (o icono* (que pone en juégo una relá.-
m.a:.--cndot1 sintagmático· (phrasemar· ción de semejanza) y .a símbolo*
ker). a 1a descripción*·· estruC.tural (basado en una convención social);
de la frase* y· a su representación* para él, el índice estabiece una re-
en árbol. En este sentido, R. Ruwet lación de contigUidad «n3.tural~ ·vin-
propon7 distÍÍlguir indicadores sin· culada a un hecho de ·~xperiencia

¡
219 INDICE - INDIVIDUAL!ZACION

que no es provocado por el hom· INDIVIDUAL. Fr. individuet, ing.


bre. individual.
2.. Para L. Prieto -que se ocupa . ·1. El universo semántico se de-
del mecanismo de la indicación (ba· nomina individual cuahdo está ar-
jo todas sus formas posibles}-, el ticulado, fundamentalmente, por la
índice debe entenderse, en un sen· categoría* semántica vida / muerte;
tido mucho más amplio, como ..cun se opone, de este rnodd, al universo
hecho inmedi;itamente perceptible colectivo basadO en la oposición
que nos da a conocer algo respecto natura / cultura,
de otra cosa que no lo es»: desde 2. El actante se denomina tndl~
este punto de vista, la señal* sólo vidual, por oposición al actante co-
es, para él, Wla forma par~icut.ar lectivo, que es definido como una
de índice. colección de individuos· dotados- de
3. Si. se admite, con la lingüís· una competencia* modal y/o de un
tica de inspiración saussuriana, que hacer comunes.
la e.xclusión del referente* es una -+- · OJLE.CtIVO, UNIVERSO, ACTANTE,
condición p~evia necesaria para el PSIOJSEMióncA.
ejercicio de toda semiótica, habrá
de reconocerse que el índice -en INDIVIDUALIZACIC)N, Fr. indi-
los dos sentidos antes indicados- viduation, ing. individua.tion.
fonna parte de la categoría de los l. En la tradición filosófica, tn-
no-signos. dlvlduallt.aclón es t1]a realización1> de
4. · Dentro de su concepción del Ia idea general Cn un determinado
relato, R. Barthes ha -propuesto individuo» (Latande). Según Leibniz,
oponer entre sí índice e informante. el principio de individualización es
Mientras que el informante es ~un lo que hace que un ser posea· no
operador realista» que sirve· para sólo un tipo e:;pecifico, sino una
autentificar la realidad del referen- existencia singular, detenninada en
te (por ejemplo, la edad precisa de el tiempo y en el espacio.
un personaje), el índice está cons~ 2. En semiótica narrativa y dis-
tituido por un conjunto de notacio- cursiva, l!l concepto de individua-
nes (relativas, por ejemplo, a un lización forma pllrte de la proble-
carácter, a un sentimiento) que -en mática del actor* -individual (per-
lugar de ser datos inmediatamente sonaje) o colectivo (grupo)- en la
significantes (como en el caso del medida en· que éste se define como
informante)-- tienen sólo «signifi~ la reunión, . en un niomento dado
cadas implfcitos,.: así la descrlp.. del recorrido generativo*, de pro-
ci6n de un paisaje, de un objeto, piedades estructurales de orden sin-
es a veces utilizada para informar- táctico y semántico, constituyéndo-
nos de modo indirecto sobre la se así en «individuo». Otro princi..:
psicología o et destino de un per- pio, eI de identidad, garantiza luego
sonaje. Esta acepción, como se ve, su permanencia y su reconocimien-
se acerca al empleo corriente de la to a lo largo del discurso (en .par-
palabra índice. ticular, gracias a los procedimientos
.-'>' SIGNO. de anaforízación*), a pesar de las
INDIV1DUALIZACJóN • INFORMAClóN 220

trailsformaciones+ de· los rciles ac- estado de lengua le PCrrnite, por


tancial*. y temático*· qué pueden ejemplo, elaborar Jos ~Onceptos de
afectarle. Como la denominación* «subjuntivo> o de uµnperfecto»,
del actor (mediante un aritropóni· éstos no son, sin embargo, genera.
mo* o designándolo. por su rol te- Uzables y no podrían ser aplicados
mático:·· por ejemplo, «el rey:o)' no a otras lenguas o estad6$ de lengua,
·basta para individllalizarlo, es -forM De este modo, la aproximación in·
zoso definirlo empíricamente por el ductiva no parece poder· utilizarse
conjunto de rasgos·· pertinentes que sino -para operaciones.· localizadas,
distinguen SU hacer* y/O "SU sef• de y sus resultados de~ lnscribicie
los otros actores: se considerará en .un 'marco deductivo, de mayor
entonces· la individualización·. como generalidad.
un efecto*· de :st!htido que refleja -+ DEDUCClÓl'J, GENEIW..I?-ACIÓN.
una estructura discriminatoria* sub--
yacente. Como la ·definición leibniM INFORMAC!ON. Fr. i,nformation,
ziana -según· la .. qial la individua· jng. information.
lización se explica. )?Or Ja existencia l. En la teoria. de la ¡nforma<?ión,
singular; determinia.~a en el espacio se entiende por tnfortrJaclón todo
y en el· tiempo- da razón del uni· elemento suscePtib!e de: ser e."<pre-
verso del' actor, perO ·no de su per· sado con ayuda. de wi código*.
manencia, nos sentimos inducidos a Cuando la elección se-·hace entre
considerar· 1a actorlaiización* como dos unidades equíprobab1~, se d!i-á.
un componente autónomo, :indePen- que la información aportada equi·
diente ·de IOs procedimientos de vale a 1 bit (binat'Y dÍgit); Si se
temporalización"':. y espacianzación*. efectúa entre 4 u 8 unidades equi-
~ IDEN'Tl'DA.O, ACTORIALIZACIÓN, ACTOR. probables, la inform~ción será· de
3 o 4 bits, etc: En_. este caso, Ja
INDUCCióN; Fr. inductian1 ing. cantidad de informació.O· medida en
induction . ...'...·La !:aducción es una bits, es igual a log2 del:número· de
serle de operaciones . cognoscitivas elementos consideradoS·: Salvo la
efectuadas durante .. Ja. desC:rlpción• hipótesis de la eqi.tlprobabilidad, se
(o Ja construcción* de un modelo), puede estar frente a contextos de
que. consls~en · en pasar de un com· probabilidad o de improbabilidad:
ponente ·a una clase, . de una pro- desde este punto de vista, se dirá
posición· ·particular -a una proposi· que la cantidad de infQrmación es
ci6n más general, etc. La empresa jnversamente proporcional a la pro-
inductiva es considerada por sus .habilidad de las unidades, disminÚ·
seguidores como la más pr?:tlma a yendo la jnformaci6n con su pre-
los datós de la experiencia y la que visibilidad. .:
refleja mejor la «realidad11. No obs· 2. Toda disminución \de informa·
tante, incluso siendo capaz de des· ción -vinculada a las · coerciones
cribir Un objeto semiótico ·autó- sintagmáticas, a las repeticiones,
nomo,· la inducción rio provee de etcétera, en el marco del ·mensaje"-
una base satisfactoria al hacer com· corresponde a la reduridancia"" a
parativ()~ o tipológico*: Si la des- la que se recurre para redueir los
cripción de una lengua o d~ un efectos negativos del rllido*.
'
221 INFORMACION ·INFORMATIVO

3. La teoría de la información años 50), una influencia bastante


intenta e:s:plicar las modalidades de considerable sobre la lingüística, al
la transferencia de los mensajes simplificar enoJ:,"tnernente· la proble-
(c0mo secuencias de señales* orga- mática; observamos que se sitúa
nizadas según un código"') de un fundamentalmente en una perspec-
ei:llisor* a un receptor*, con exclu· tiva mecanicista que hace, por ejem-
sión de los contenidos* allí verti· plo, del emisor o del receptor ins-
dos: se hace cargo sólo del plano tancias vacías (a diferencia de la
del si'gnificante* cuya transmisión semiótica qu.e considera al destina-
trata de optimizar*. En el dominio dor y al destinatario como sujetos
de la lengua natural. por ejemplo, dotados de una competencia* par-
ha de notarse que lo transmitido ticular e inscritos en un devenir).
es una sucesión de fonemas o de ~ COMUNICACIÓN, INFORMATIVO (ha·
grafemas, y no la significación (que cer -).
es del orden de lo recibido; no de
lo, transmitido). INFORMADOR. Fr. informateu.r,
4. El esquema de la información ing. informant. - El ·informador.
(y el de la comunicación*) com· que a menudo interviene en los re-
prende: a) un emiSor {o fuente) y latos (así, et mensajero que infor·
un receptor (que puede identificar· ma a Edipo de que el hombre a
se con el destinatario*); b) un ca- quien ha matado es su propio padre
nal*, es decir, un soporte material y que la mujer con Ja que se ha
o sensorial que sirve para la trans· desposado es su madre), representa
misión de los mensajes de un punto -en forma de actor* autónomo-
a>otro: e} un mensaje que es una un sujeto cognoscitivo* dotado de
secuencia de señales y obedece a un saber {parcial o total) poi:- el
reglas* predeterminadas. Entre el enunciador* e instalado por él en f'.•
emisor y la transmisión propia- el discurso, en posición de media· ('
mente dicha, · se sitúan las opera- dar respecto al enunciatario.
ciones d~ encodificación* mediante
las cuales se construye el mensaje; INFORMATIVO (HÁCER -). Fr.
entre la transmisión y la recepción jaire informatif, ing. inforin.arive
por el destinatario, las operadones doing.-Bn determinados relatos,
de descodificación * permiten recono- el saber* puede ser simplemente
cer e identificar los elementos cons- informativo: · alguien hace saber
titutivos del mensaje. A lo largo algo y el curso de los acontecimien-
del recorrido de la información, tos cambia.· Se trata de un concep-
comprendidas las opernciones de to operatorio* planteado a la vista
encodificación y descodificación, el del análisis*. Suponemos, por afán
ruido puede intervenir: se intenta de sencillez y econotjl.ía (al menos
restringir sus efectos destructores en un primer momento}. que el
mediante la redundancia. hacer informativo no es modalizado
5. La teoría de la información ha por las categorlas vej:idictorias*, ni
ejercido, en un momento dado siquiera si un enunciado tal como
(sobre todo, en la década de los «La tierra es redonda~ -que parece
INFORMATIVO, INMANENCIA

hallarse·' en ·estado "'Puro- com- INMANENCIA. .Fr. ·.'.~mane'nc~,


porta al menos una · modalizac:i6n 'ing. immanence. .
de afirmación*. Teri.iendo ·en cuenta l.· La autonomía de 1~ lingüística
el esquema de la .comunicación* y -justificable por Ja espeCificidad .'de
sabifilido que concierne a la simple su objeto, afirmada -co.ó·. insistencia
transferenc!ia · del objeto-saber, se por Saussure-:- ha sido/recuperada
preVé en Segtlid'a .que el. hacer h1.- por Hjelrnslev en función del prin-
fonhativo (opuesto al hacer per~ cipio de inmanencia: ar:ser la for-
suasivo* / interprét3.tivo* ci.ue mo.- ma* {o la lengua*', en s~tido saus-
daliza la comunicación del objetó- suriano) el objeto de !:i ,lingüística,
saber) se expresará :de dos maneras debe excluirse cualquier recurso a
posibles·: como enúslvo*. o como los hechos extra-lingüísticos porque
receptivo•¡ el receptivo, a ·su· vez, perjudicarían la homogéneidad de
puede ser considerado como activo la descripción*. ~~
o pasivo (cf., (!n español, las oposi· 2. El concepto de inmanencia
ciones ·del tipo «escuchani- / uo!r:o, participa, como uno de ·.sus térmi-
.. ver» / · «m_irar)) ), nos, en la dicotomia int'nanencia J
-7 ·HACER, COGNOSCITIVO. manifestación; Ja manifestación pre-.
supone'. lógicamente lo Que se ma-
'
lNJUNCióN. · Fr. · .injonction, ing. nifiesta: es decir, la foi-ma semió-
injunction. ·¡ · tica inmanente. La afiimaci6n dé
· . 1; · Se denomina JDjunclón al eje la inmanencia de las -éstructuras
de los contrarios ·:que incluye los semióticas plantea, entonces, un
dos valores -Ja .prescripción* y la problema de orden ontológico, rela-
prohibición.,..- dé lá e:ategorfa modal tivo a su modo de existencia: exac-
deóntiéa.J. .·\ tamente lo mismo que·. antes no~
·2. El concepto de injunción es habíamos interrogado, a. propósito
objeto de dos empleos diferentes. de la dialéctica, Por saber si estaba
Aplicado a ·una axiología* .depen- inscrita «en las cosas,, -~o «en lQs.
diente del universo· trascendente* «espíritus)), el conocimiento de las
(eventualmente· representado, en el estructuras semióticas puede ser
discurso· narrativo,·~ Por el · Destina· considerado ya se3 como una des-
dor*), la injunción -")a transforma cripción* (esto es, como una simple
en un sistema norniativo. Conside- explicitación de las formas inma~
rada, por otra parte, ·como una mo- nentes), ya como una coÍlstrucción*
dalización· particular de Ja · campe· (si el mundo fuese sólo estructura-:
tencia* del,. Sujeto~." la· injunción ble, es decir, susceptible .de ser «in-·
aparece enfrentada a las modalida- formado)) por et espíri~' humano).
des volitivas: la compatibilidad (o, Nos parece oportuno, Para alejai
incompatibilidad), enire_ estas cate- de la teoría semiótica toda querella
gorías modales conj\}gadas, deter· metafísica, contentarnos·:: con em-
mina entonces la. :naturaleza del plear algunos conceptos·· operató-
·contrato ; injuntlvo que el sujeto rios*; !Jamaremos univerSo* semán-
acepta o rechaza .con su Destinador.· tico (el «hay sentido).)~ a toda
~ ,DE6NTTC>.s (modalidades -). : semiótica* anterior a su" descrip-
1
l
INMANENCIA-INSTANCIA

ción, y objetoff semiótico a su ex· po que lo delega. casi totalmente


plicitación mediante un metalengua- en el Parlamento).
je* (o lenguaje de representación*) ~ MANIFESTACIÓN, <:ONSTRUCCIÓN,
construido. · TRASCENDENCIA.
3. Con el mismo criterio, que
pretende evitar cualquier toma de lNSERCióN. Fr. enchássement,
postura ontológica, denominamos ing. embedding.
{de manera arbitraria* y con un 1. En gramática generativa y
vertimiento"' semántico mínimo) eje transformacional, la inserclón es
de la inmanencia a uno de los ejes una operación mediante la cual un
-el del ser*-_ de la categoría de constituyente* de Ja frase nuclear*
Ja veridicción*; al otro -el del pa- es reemplazado por oiro elemento,
recer-, eje de la manifestación: en principio1 una nu~va frase. Se
por supuesto que ulteriores verti- trata, pues, de un procedimiento
inientos podrán dar lugar, por ejem· de sustitucióil* (comparable a la
plo, a interpretaciones de la inma- traslación de segundo grado de L. ·
nencia como «latencia» o como Tesniere) que permite explicar, por
11noumenalidad" (a semejanza de- la ejemplo, la relación existente entre
modalidad del <lquerer» que no es la proposición* principal y su su-
ni «Voluntad'll ni «deseoll', estas últi· bordinada.
mas denominaciones corresponden 2. En semiótica narrativa se em-
a suplementos de vertimientos se- plea, a veces, el término inserción
mánticos). para designar la ·inclusión de un
4. Por otra parte, la op9sición relato* dentro de otro más extenso,
inmanencia / trascendencia puede sin precisar por ello la naturaleza
emplearse para explicar, en el mar· o la función exacta del micro.relato.
co del esquema narrativo*, la dife· En este caso se trata de un em·
rencia de estatuto del sujeto y del pleo metafórico que remite más al
Destinador*. Mientras que el sujeto sentido corriente (insertar un ele-
se encuentra inscrito en un univer· mento dentro de otro) que al de Ja
so inmanente, donde cumple su. re· gramática generativa: parece, por
corrido narrativo* adquiriendo la tanto, Inás oportuno hablar de in·
competencia• y efectuando las per· tercalaclón.
formances* ( 11:realizándose)lo ), una
subclase bastante considerable de INSTANCIA. Fr•. instance, ing.
discursos narrativos sitúa al sujeto instance. -Se entiende por instan·
como Destinatario de un· Destina· cias de sustancia los modos de
dor trascendente· que lo instaura presencia con que el sujeto conoce
como sujeto con ayuda de la comu· y aprehende la sustnncia en cuan·
nicación* participativa (al permitir to objeto de conocimiento. Así,
comunicar los objetos de valor en respecto· a la sustancia fónica, se
forma de dones, sin privarse, no reconocen tres instancias: la ins·
obstante, de euos; tal, por ejemplo, tanda articulatoria, . de ordén fisio-
como la reina de Inglaterra guarda lógico, donde la sustancia es una
su "poder» absoluto al mismo tiem· especie de gestualidad muscular;
JNSTANC!A- INTERCAMB!O 224
Ja instancia acúsUca,· de orden ñ- justificarla. Esta nocióií· nos paree.e
sico, donde es apr'ehendida en for- criticable en Ja medid~ en que la
ma·· oriduíatoria; ··por·· último,· la comunicación es entendida, a la vez.
instancia auditiva, ·de· orden -psico- como un acto voluntario -lo que
fisiológico; donde· se · presenta por no siempre es- y como un acto
medio de· ondas de frotamiehto· y consciente -lo cual depende de
de choquei corpusculares. No deben, una ·concepción psicológica dema·
pues, confundirse ·instancia y sus- · síado simplista dei hombre.
. tancia: ··Ja instancia es una·. misma 2. Por ello preferimOs el concep-
· sustancia que se presenta de dife- to de httenclonalidad,::· de origen
rentes maneras, aun Cuando la co- francamente fenomenológico; sin
rrelación entre las _diferentes ins· identificarse con el concepto de mO.
tancias :_entre los análisis articula· tiVación ni con el de firialidad, i.n-
tcirios Y acú'sticos,_ por ·ejemplo-- tegra a los dos; permite así, con-
sea .dificil de ··establecer. ,En todos cebir· al acto* como una tensión
los -Casos, la ··sustancia parece un jnscrlta entre dos rnodos de exis-
·continuo cuya seITTnentación ,. pre- tencia*: la virtualidad*-:·.Y Ia reali-
senta enormes dificultades. Se· com· zación*. La formulación. semiótica
prenderá, por ·elló, que la ·prueba que habría 'que dar a este concepto
de conmutación* -que recurre al lo acercaría al concepto de com-
significado ·discriminatorio*-;¡ ayu- petencia· modal.
dada por la traDsc-09;ificaci6n* grá- -+ ENUl'tCIACIÓN, COMFEmNCIA.
fica (aunque la invencló'n de la
escritura · presupOne. operaciones de INTERCALACióN. Fr. intercala·
conmutación: implícitas), continúa tion, ing. intercalation, -A vece,~
siendo el medio Íl'iás seguro' para se llama intercalación a la inserción
establecer unidades* fónicas. No de un micro-relato dentro de 'un
hay,· entonces, paf :-qué asombrar~ relato*.
se de las dificultades encontfadas -+INSERCIÓN". ·
cuando se intenta reconocer unida~ .'"·-.
des discretas•. en las semióticas no INTERCAMBIO. Fr. échange, ing.
lingüísticas* {en gestualidad, en pin~ exchange.
tura, por ejemplo): la decepción l. El intercambio es·;· un hacer
de los semióticos demasiado apre- performador que, situa~o en una
surados no tiene parangón sino con estructura binaria -de sbjetos• (e11
su ignorancia de los problem.a·s que la relación «toma y daca»), cons·
afronta la lingüística, aun cuando tituye una de Ias forma$ de la co-
ella ·no siempre los . pregone. municación* o de la. traDsferencia*
~ SUSTANC_rA. de los objetos* de valor:·
2. En cuanto operación recípro-
INJ,'ENCI°óN. ·fr. :intention,. ing. ca que implica los hacr;zis. de 8 1
intention. y de S 2, el intercambio es una per-
l. Para explicar la cornunicac;ión~· fonnance doble, consecUencia de
en su calidad de acto, generalmen· la conclusión -explícita'. ·.O implíci·
te se. introduce el éoncepto de fu· ta- de un contrato*: re'Curre a la
·tendón que parece motivarla y pareja destinador / d~tinatario*.
225 INTERCAMBIO - INTERPRETAC!ON

besde este punto de vista, el esque- semántico (considerado como cO.


ma narrativo* canónico está domi· extensivo de una cultura o de una
·nado por la estructura del inter- persona) puede clasificarse de' acuer-
cambio: el hacer de SrDestinatario do con la categoría clasemática*
co.nstituye el componente ·perfor· exteroceptividad / interoceptividad,
manee*; el hacer de SrDestinador, según que posean o no categorías
el componente retribución* o san· correspondientes en la semiótica
· ción* (positiva: recompensa*, o ne· del mundo* natural. Las· denomina-
gativa: castigo*). ciones de esta categoría, de inspira·
3. Esta operación recíproca· pre. ción demasiado psicológica, fueron
supone la · instalación de actantes reemplazadas, en algún momento,
competentes, cada uno de los cua· por las de semiológicO / semántico,
les representa una posición modal*, Jo que no dejó de suscitar algunas
en relación con el pivote* narrativo ambigüedades. Homoiogando*
constituido por el intercambio. exteroceptividad: interoceptividad::
4. De esta suerte, series ordena· serniológico : semántico ::
das de intercambios pueden cons· figurativci : no figurativo
tituir sistemas de obligaciones y de
coerciones del tipo de los descritos, proponemos designar como no fi.
entre otros, por M. Mauss y C. Lévi· gurativas (o abstractas) a las cate-
Strauss (intercambio limitado / in· gorías interoceptivas.
tercambio generalizado). 2. De ahí que el campo de la
~ COMUNICACIÓN, CONTRAT01 NARRATI• semántica comprendido por él tér-
vo (esquema -). mino interoceptividad sea el lugar
en que se sitóe la problemática de
INTERLOCUTOR / INTERLOCU- los universales* del. lenguaje.
TARIO. Fr. interlocutem / interlo• ~ EXTEROCEPnVIDAD.
cutaire, ing. interlocutor / interlo--
, cutee. -Al reproducir la estructura INTERPRETAClóN. Fr. interpré·
de la comunicación* como un simu· tation, ing. interpretation.
lacro dentro del discurso, el diá· l. El concepto de interpretación
logo presupone los dos actaiites* se emplea en semiótica en dos sen•
-destinador y destinatario- que, tidos muy diferentes, que dependen
· juntos, son entonces llamados in· de los postulados de base a los que
terloeutores o, separadamente, in· se refiere -im¡)lícita o explícita-
teriocutor / lntedocutarlo (para ho· mente- la teoría semiótica en su
mogeneizar el paradigma destinador conjunto y, especialmente, de la
/ destinatariq, enunciador* / enun· idea que se tenga de la forma* se-
ciatario, narrador* '/ narratario). miótica.
-+ DIÁLOGO, DESUNADOR. / DUSTINATA· 2. Según la concepción clásica
RIO, DESEMBRAGUE. que opone la forma al contenido
(al «fondo"") -que lo ·es, igualmen-
INTEROCEPTIVIDAD. Fr. inté· te, de la metalógica de las Escuelas
roceptivité, ing. interoceptivity. polaca y vienesa de lógica-, cual-
l. El conjunto de las categorías* quier sistem·a de signos puede ser
sémicas que articulan el universo* descrito de modo formal*, dejando
SEMIÓTICA.. - 15
INTERPRETACI\)N, · ; ! ·

de ·1ádo .el ~ontenidci e independien- suriano (según el cual todo cambio


temente de:·las .poSibles- «interpre- en el plano de la expresión conlleva
taciones:. ·.de', .esto$ '.signos. ' Si· seun cambio en· el 'plano d,el conteni·
traduce este punto 'de vista episte- do), es discutible. ·por consiguiente,
mológico* en la· termfuología .hjelm- a las eStructuras profundas -qu#!
sleviana, se dirá quC,' cualquier «sis- contienen toda Ja . infonriación ne-
tema de signos». (.y,. por. consiguien- cesaria, ·al menos en : la teoría
te, · cualquier· lengtia natural) ·es estándar- debe. «adherirsei> la · in-:
considerado como un «sistema de terpretación semántica, como, para:
expresión~» ·susceptible, no obstan- lelamente, a las estru6turas -de
te, ·de recibir.· u.na · lnterPretaclón superficie se unirá la futc.rpretacldll
semántica . en una segunda etapa. fonética (con los rasgos fonológicos
Tal es, en líneas generales, el sen- Y fónéticos). La semántJc!i i:nterpre·.
tido que la gramática generativa* tatlva tendrá, entonces, : Por tarea·
da al término en cuestión. · · el elaborar las reglas* de carácter
3.. La tradición epistemológica a sintáctico (es decir, despfovístas de
la que se refiere la lingüística saus- significación) que asignerl a las eS* ·
swiaña· -y,. en' otr:Os dominios, la tructuras profundas una '.i'nterpreta-
fenomenolo&fa ,-de·:.Husserl y la teo- ción ·· seinániica. Estas reglas se
ria psicoanalítica ·'de Freud- es basan en los conceptos:. 'epistemo- ·
muy diferente:. -seg\íJÍ ella, un sig- lógicos de gramaticalidªd* y de
no* debe: ser definido,- ante todo, aceptabilidad*, ya muy piobados, y
por su significación* y postula ~e los procedimientos propuestos (por
manera general- qUe las formas :K:atz y Fodor, por ejemPJo) mues~
semióticas son formas signiñcantes. tran la falta d<; preparación que
Desde esta perspectiva, la lnterpre.. tiene la gramática gene~tiva para
taelón no es ya el hecho de atribuir tratar los problemas de Semántica.
un contenido a una forma que no Asimism9, Ja semántica* generativa,
Jo tendría, sino, la· paráfrasis*· que que postula el carácter . lógico-se~
foi-muta de Otra· manera el conteni· mántico de las formas de' base, se
do equivalente* de ·una unidad ·sig- ahorra el concepto de interpreta~
nificante en· una semiótica dada, o ción. ·
que tradtice* una unidad ·significan- S. Según Hjelmslev, el· ·problema ..
te de una · semiótica en otra: ésto de la interpretación no es· pertinen#
corresponde, por eje'mplo, al ·intel"· te para la teoría semiótica. La dís-
pretante en la teoríá del signo p_ro.. tinción que establece entre et es·
puesta por Ch. :s. Ptirce. í• , quema* (o la estructura) .Y el uso*
4. Para Ia' gramática generativa, (su vertimiento en una sustancia,.,
las tiansfonnaciones* que clltnrlnan cualquiera) le permite ·decir que
en Ja manifestación de las· 'formas ningún sistema semióticO -es; en
de base -en ·cuanto estructuras· de principio, interpretado y'~que, por
superficie*--. son reglas puramente el contrario, todos Jos siStemas son
formales':y' no :acárrean·· modifica- interpretables. El sentido '.·i;Ie ínter~
ciones de contenidO. ·:(a. lo sumo, pretación se acerca aquí -:td que se
introducen variaciOn~ ·estilísticas*): Je da eri. ...las semióticas· ~lam8:das .
esto, "desde e1punto".de vista saus- «estéticas~ (la jnterpretaci_~n de una·
227 !NTERPRETAC!óN - lNTERTEXTIJALIDAD

obra musical o de una' Pieza· de tractuales* que recibe. ·En la medí·


teatro, por ejemplo) y puede defi- da en que cualquier enunciado*
nirse como el hecho de seleccionar recibido se presenta como una ma·
y atribuir un uso a una forma se- nifestación*, el rol 'del hacer inter-
rniótíca. pretativo consiste en darle el esta-
6. Como el Concepto de ·interpre- · tuto de Ja inmanencia* (del ser* o
tación no es pertinente Para las se-. del no-ser).
mióticas dotadas de un plano de 2. La categoría modal .de la ve·
expresión* y de un plano ·de con- ridicción constituye, así, el ámbito
tenido*, Hjelmslev se vio en la ne- general en que se ejerce la activi·
cesidad de examinar la· naturaleza dad interpretativa. apelando a las
de lo que él denomina· lino-lengua- diferentes modalidades aléticas · y
jes» o de los "'sistemas de símbo- solicitando Ja intervención -escalo-
los» (el álgebra, el ajedrez:· .. pero nada o definitiva- del sujeto epis·
también la sintaxis formal; como la térnico. El hacer interpretativo se
de los generativistas): aunque son presenta, entonces, como el prin·
interpretables como los otros sis- cipal modo de funcionamiento de
temas semióticos, estos sistemas se la competencia• epistémica.
caracterizan por el hecho de que 3. El hacer cognoscitivo de inter·
los dos planos de expreSión y con- pretación, susceptible de expansio-
tenido son conformes* y compren- nes*, toma a metludo la forma de
den articulaciones a la vez isomor- programas cognoscitivos complejos
fas* e isótopas* (las unidades que y aun puede abarcar discursos en·
poseen las mismas dimensiones sin- teros (comentarlos, críticas, ciertaS
tagmáticas}. Dicho de otro modo, formas del discurso cient(fico, etc.). ·
Ja interpretación semántica que se -') <:OCNOSCmvo, VIiRlDICCIÓN, VERI·
le dé, reproducirá las mismas ar· DICTORIAS (modalidades -). COMUNI·
ticulaciones y podrá ser represen· CACIÓN, FAClTI'IVIDAÍl.
tada según las mismas regtaS que
12. forma interpretada. Hay aquí INTERTEXTUALIDAD. Fr. i1tter.
una posible definición de los len· textualité, ing.: interlextuality.
ituajes formales* desde el punto· de l. Introducido por el semiótico
vista semiótico. ruso Bakhtine, el concepto de inter·
-4 GEMERATIVA (gramática -}, FOR· textualidad provocó en Occidente
MAt, INTERPRlITATIVO (hacer -). un vivo interés por l~s. procedímien· 1
tos que implicaba y que parecían
INTERPRETATIVO (HACER -). poder servir de recambio metodo-
Fr. faire intel'prétdtif, ing. interpre. lógico a la teoría de las «influen-.
tative doing. cias» en la que se fundaban, en lo~·,
1. Una de. las formas del hacer esencial, tas investigaciones de la•.:·
cognoscitivo*, c.1 hacer interpreta. literatura comparada. Sin embargo,
tivo, está. vinculada a la instancia la imprecisión de este concepto dio
de la enunciación* y consiste en la lugar a extrapolaciones diversas
convocación que el enunciatario* que iban, desde el descubrimiento
hace de las modalidades* necesarias de u,na intertextualidad dentro de
para aceptar las proposiciones con- un mismo texto (por las transfor·
INTERTEXTUALl!ÍAD ·INVENTARIO 228

maciones ·de COD:tenido · que alli se INTUICióN. Fr. i'1iuition, iog.


próc;lucen); hasta · revestir con un intuition. - Defiitida, .: 'en .filosofía,
vocabulario renovado las viejas «in• como una forma de Conocimiento
íluencias» (en el eS·tudio, por ejem- inmediato que no recurre a las ope-
plo, de· Jas citas, Cón o sin comillas). raciones cognoscitivas,· Ja fntulclón
2; La afirmaciób de A. Malraux podría ··"Ser considerada como· JJn
según la cua.l la obra de arte no se componente de la competencia* Cog-
crea a partir de Ja "visiól;l del artis- noscitiva del sujeto, manifeStada ·eh
ta sino de Otras obras, permite el momento de elaboiar la hipóte-
aprehender mejor· el fenómeno de sis de trabajo. Si esta última se
la jntertextualidad: ésta implica, en basa esencialmente en. un saber* y
efecto, . la ...existencia de semióticas · un saber-hacer aiiteriOres, se debe
(o de· oidiscursos») ·autónomas en prever una -intervenciQn específica
cuyo interior se prosiguen· procesos del sujeto, consistente ·en: a) la .fot'-
de constxuccíón~ de reproducCión o mulación de la hipóiesis que la
de transforinación..de modelos~ más hace;.. en cierta manera, adecu~da
o menos· 'implfci.tos. ··No obstante, al objeto de conocl.miento, y b) en
pretender· -comb. lo hacen algu· la certeza* (una especie de eviden·
nos- que hay inter.t.extualldad entre cia*) Q.ue instaura even"tua.Imente· el
diversos textos-Ocurrencias Ctiaiido querer-hacer del sujeto, deseoso de
se trata solamente de estructuras verificar a posten"ori la. hipótesis ya
·semánticas y/o sintácticas comunes formulada. Sin disminuir la jmpor·
a un tipo (o a un «género»} de- dis· tancia del discurso de. ·la investiga-
cursos, equivale· a negar la existen· ción, nos parece indispt!nsabre tener
cia de . los discursos sociales (.y de en cuenta la intuiciórl ..en el análi·
las semióticas que trascienden la sis del ·discurso de desCubrimiento..
comunicación interindividual). _ -+ HIPÓTESIS, ltEURÍSTic:f\.
3. No obstante, :un buen uso de
Ja intertextualidad -Y con ei rigor INVARIANTE. Fr. invariant, inli.
con que Se le px:actica en lingüís- invariant. - Un término se denomi·
tica y en mitología- podríw reno- na invariante cuando Su presencia*
var las ·esperanzas en los estu- es Ja condición necesaria para la
dios de literatura :cOmparada. Desde presencia de otro térinino con el
Saussure: y HjelmSJev, se sabe que cual está en relación* y que es lia·
el .. problema de 'l~s lenguas indo- mado ·variable. Se. trata de una re·
europeas, por ejemplo, no es un formulación dei concepto de. pre:
asunto , de· «familfas:r. sino que de- suposición: .Ja invariante es el tér·
pende de sistemas ·de correlaciones mino presupuesto de 13.: relación de
formales; asimismo, C. Lévi.Strauss presuposición. _,'
demostró muy bien que el mito es ~ VARIABLE, PRESUPOSn:;~óN, 1'RESEN"•
un "objeto intertextual. El compara· CIA.
tismo con miraS::;_ tipológicas nos
parece actuatmentCfel tínico método INVENTARIO. Fr. inventaire, irig.
. capaz de asumir 1as investigaciones , inventory. - Se entiende por. in·
intertextua:Jes. ·· ventarlo un conjµnto de unidades-t<
-+ CXlMPARATisMo, CONFIGURActóN. semióticas que pertenec~n a Ja·riüs·
INVENTARIO· ISOTOPlA

ma clase paradigmática, al mismo ISOMORFISMO. Fi-. isomOrphis·


paradigma. Se distinguen en las me, ing, isomorphisin. - El iso-
lenguas• naturales inventarios J.1mj.. morfismo es la id~tidad* fornial
tados, constituidos por morfemas* de dos o más estructuras* (depen·
gramaticales, e inventarios ilJmlta- dientes de planos o hiveles* semió-
do& de morfemas llamados léxicos. ticos diferentes), reconocible por la
La frecuencia de los morfemas que posible homologación entre las re-
pertenecen a los inventarios limi- des relacionales que las constituyen.
tados es muy elevada en el discurso Así, por ejemplo, un isomorfismo
y su recurrencia constituye, en par- puede ser reconocido entre· las ar·
te, su isotopfa* gramatical. ticulaciones del plano de la expre-
~ CLASE, PARADIGMA, sión* y las del contenido* al homo-
logar: ·:
ISOGLOSA; Fr. isóglosse, ing. i'so- femas : semas : : fone1nas : seme· ,
gtoss. mas : : sílabas enunciados semán:· :
1. En dialectoJogia se llama J:.{nea tic os.
1soglosa a la que circunscribe una
región geográfica, caracterizada por Es evidente qUe \ln isomorfismo
Ja manifestación idéntica de un así no tiene en cuenta las dimen-
mismo hecho lingüístico (fonético, siones* de las unidades del plano
sintáctico o semántico). Al compa- de los siinoS*, en cuyo interior las
rar varios hechos de este tipo, se estructuras de la - expresión y del
observa que las fronteras de su contenido se realizan en el mamen·
expansión geográfica no son aacta· to de la n1<::.nifestación (el formante*
mente las mismas, sino que cons- de un .semema* "está generalmente
tituyen redes de isoglosas que per- constituido por varios fonemas,..}.
miten delimitar, de modo aproxi· La conformidad* de los dos planos
mado las áreas dialectales. del lenguaje permite definir una
2. Este procedimiento podría ser semiótica dada como monopJana*.
utilizado para establecer áreas· se- El isomorfismo de los planos de la
mioculturales y, más particulannen· ex-presión y del contenido lo impug·
te, en_ semiótica etnoliteraria, donde nan quienes sostienen Ia doble ar·
se observa la ausencia de conco- ticulación (A. Martinet).
mitancia entre las fronteras lin· --+. tfOMOLOGACIÓN, •
güisticas y las Zonas de expansión
de las formas narrativas. ISOTOPtA. Fr. isotopie, ing. iso-
3. Incluso, de manera análoga, topy.
se podrla proceder a establecer iso- l. A. J. Greimas toma prestado·
glosas en el momento de segmentar del dominio de la Psico-química el
el téxto, cuando se dispone de va. término isotopía y lo transfiere al
rios criterios de segmentación no análisis semántico dándole una sig~
concomitantes: la secuencia* sería nificación específica, en atención a
entonces comparable a un área de su i:iuevo campo de aplicación. De
isoglosas. carácter oPeratorio, el concepto de
~ CULTURA, SEGl;rENTActÓN,, isotopía designó, en un principio,
ISOTOPlA 230

la iteratividad* -a lo largo de una 3. Posteriormente, el doncepto de


cadena-· sintagmática•-· ~e clas~ isotopía se extendió: eri lugar de
mas* que aseguran al discurso-enun.. desiinar sólo la iteratividad de cla-
ciado su ·homogeneidad. Según esta semas, es definido comb la recu.:
acepción, ·resulta claro que el siJl.. rrencia de categorías séoiicas*, sean
tagma* .;al reunir, al·;menos; dos éstas temáticas* (o abstractas}. o
figuras* -sémicas puede ser éonsi- figurativas* (lo que· ea· ·Ja antigua
derado como el cOntexto* mínimo terminología, daba lugar· a la opa..
que ·permite establecer . una isoto- sición · entre lsotopía semántica•
pía. Así.. ocurre· con la categoría* -en sentido restringido- e lsotopía
sémica que integra lOs dos términos sentlológica""). Desde este punto de
contrarios*: ·teniendo en cuenta los vista y en base a la oposición re·
recorridos que Pueden originar, los conocida -en el marco de Ja se-
cuatro términos de.1 cuadro*_ semió. mántica"" discursiva- exitre el com·. 1
tico serán llamados · isótopos. ,
2. .Considerando el recorrido ge-
nerativo* deJ discur:So y la distri-
bución de sus cOmPonentes, se'.. dis-
ponente figurativo y el componente
temático, habrá que distinguir CO..
rrelativamente entre isotOl>ías ftgu.
rativas, Ias que subtiendcin las con.:.
l
tinguirá la isotop!a gramatical (o figuracion-E:s*· discursivas, :.. e isoto-.
sintáctica, sen.su S"emiótico), junto pías temáticas, sifuadas a. nivel más
con ·la r~rrencia* .de categorías profundo, conforme al:: recorrido
aferentes, de la fsoÍ:op!a semántica generatiVo*.
que· posibilita la Ieétura* uniforme a) En ciertos casos, Ía isotopía
del . discurso, tal como· -resulta de figurativa no contiene :ajnguna ·CO;
las· lecturas ');>arciales de los enun- i:respondencia a nivel teffiático:· a.sí,
ciados que lo constituyen, guiando una receta de cocina, Ubicada en
la solución ·de sus·· ambigüedades~ el plano figurativo y. remitiendo ·a.
·por Ja bósqueda d¿_ una lectura la isotopfa muy general de lo cuJi.
única. Al efectuarse ·1a jwicióri de nario, nd se vincula a nirigÚn tema
los dos componen.tes· -sintáctico y preciso.
semánticO-:; el pialio de los acto- b) En otros casos, por el contra·
res* dará lugar a una isotopía par~­ ria, sucede que a-una isotopía figu.
ticular, ·1a·isotopía actorlal tal como rativa le corresponde una isotopía
se manifiesta gracias a la anaforiza- ·temática: ·así, Ia isotop{a provee·
ción*. -Desde otro punto de vista, dor / con.sumidor es ilustrada por
si se tienen ·en cuenta las dimen· un conjunto de compo"r'tamientos
siones de la isotopía, · aparecerán somáticos del Ogro y de P).ilgarcito;
entre sí. opuestas las iSotopf.as par· éste es un caso muy frecitente que
clales -(tas ·«isosemias» de B.' Pot- atestigua el proceso norfual de la
tier) susceptibles de ·desaparecer en·~ generación" del discurso (como paso
el momento de la co~densa~i6n*· de de lo abstracto a lo figul1ltivo ); se .
. un ·texto- y las .lsotopías globales puede postular, en efectO,'. que una
que. Se ·mantienen cuaiquiera· 'que isotopfa más profunda p~pon~
sea ]~ extensión del. discurso,i te- la isotopía de superficie, y no a ta
niendo en .cuenta su ·elasticidad*. · inversa.

!.í
l
231 ISOTOP!A.

e) Sucede, sin embargo, que a inclican sólo posiciones formales en


vS:rias . isotopfas figurativas no les el cuadro* semiótico y no implican
corresponde sino una sola isotopia ningún juicio de valor). Por estar
temática: las parábolas evangélicas in~crita en el discurso, la isotopía
relativas a un mismo tema son una compleja -aunque de carácter para-
buena · ilustración, como ··también digmático por algunos lados- está
ciertas obras obsesivas de temática vinculada al problemá· de la· linea-
recurrente. lidad* del te;i;:to y el desarrollo de
d) En el caso de la pluri • ísoto-. las dos isotopfas no se efectúa sino
pía"' (que pone en juego a los co-· en el eje sintagmático.
nectores"'), varias isotopías figura- 5. En cuanto en1mciado* que
tivas concurrentes corresponderán, rige a otro enunciado (de hacer o
por ejemplo, a otras tantas isoto- de estado), la modalidad* define un
pías temáticas: en Salut de Mallar- plano isotópico que encuadra las
mé, las isotopías figurativas (ban- unidades de rango jerárquicamente -..
quete, ·navegación, escritura) des- inferior sobre las que versa (cf. el f'.
critas por F. Rastier, se relacionan fenómeno de integración destacado
fácilmente con las isotopías ., temá- por R. Barthes). Así, por ejemplo,
ticas correspondientes (amistad, so- en el caso de las modalidades verlw
ledad/evasión, creación). · dictarlas*, el juego del ser* y del
4, En la comparación se da una parecer* como también las posicio-:
co-manifestaci'ón de isoto:pías, ge- nes cognoscitivas* a las que dicho
neralmente una bi-lsotopía: así, en juego da lugar, detern1inan un plano
.:cEste hombre es un león»;· aparece isótopo interno al discurso. Dado
una categoría clasemática (del tipo que las categorías de verdadero,
chumano y animah•) ·.donde uno y falso, secrdto y nientira sólo cons-
otro término pueden marúfestarse tituyen un sistema de relaciones,
a lo largo de la cadena sintagmáti- los ctvalores de verdad» son relatiw
ca. Se trata, pues, de una lsotopía vos al Universo que ellas modalizan
compleja que se expresará. · diferen- (el mundo del . ..:sentido común• y
temente: · ··:: el de lo ctmaravillos~» que juegan
a) . }os términos pueden estar en en la verldicción*,'. Son muy dife-
. equilibrio*: cuando,· por ejempla, rentes, por ejemplo, en cuanto · a
el enunciado «Este hombre es un su determinación de lo •verdade·
león"' es emitido en una sociedad ro"): se alcanza aquí ·-Ja ctlógica de
afcaica de hombres~leones; los mundos posibles» (un mismo
b) en otros casos, prima el tér- texto puede ser leído sobre isoto-
mino positivo*: cuando, en nuestro pías diferentes), como también el
universo cultural, decimos de al- problema de lo «fantástico» o de
guien· «Este hombre es un león,,, las «utopíasi. con todo el debate de
asumimos totalmente el término la· ind.ecisión entre dos o más lec·
humano y, parcialmente, el de ani- turas posibles.
rnal; 6. Desde el punto de vista del
e) por lo demás, eventualmente, enunciatario*, la isotopía constitu~
el término negativo* dominará Oos ye una clave de lectura* que torna
calificativos o:positivo11 y «negativoi. homogénea la superficie del texto
!SOTOPIA • lTERATIV!DAD 232
porque .permite suprimir las ambi· dad_ de unidades lingüiSticas (ma-
güedades. Puede ocurrir,, $in em.;: riifestadas o no) que pertenecen Ya
bargo, que la desambiguac:ión* se sea al plano de la expré;sión, ya al
haga, por ·así deciilo, al revés; por dcl contenido, o -más .ampliamen-
ejemplo, en el caso de una lectura .te-. como la recurrencia de unida..
.rl.ntertextual~ (M. Arrivé), donde un des lingüísticas (formulación que
texto se encuentra encajado en. un corre el riesgo de introducir con-
discurso · más· amplio. Por otra fusiones}.
parte, puede oet.irrir que difereútes -7 PLURI-ISOTOP!A, CDNECTOR DE ISO-
lecturas sean posible~. sin que esto TOP!As, MEt'ÁFORA, LECrtJRA1 SEMÁNnCA.
las lleve a ser compatibles .. entre
sí. Por últin).o, 3greguemos que en ITERATIVIDAD. Fr. ·... ittratívi'té,
un texto concretot no parece que ing. iterativeness•.
el número de leciuraS posibles sea 1. la iteratividad es ta reproduc-
infinito: simplemente está vincula- ción, en el eje sintagmático*1 de
do al carácter po1Ísémico* de Jos magnitudes* idénticas o_ compara-
lexemas cuyas virtu.3.Iidades de apro- bles• situadas en el mismo nivel*
vechamiento soh finitas. de análisis. Se distingue,". pues, de
7. Te6ricám.ente .:....Como otr~S (M. la recursividad, caracteiizada por
Arrivé, F. Rastiér) lo han subraya- la repetición de las mismas magni-
do . después · de ' nosotros-, nada tudes, ubicadas éstas a niveles di-
impide transponer ·el 'concepto de ferentes de una misma jerarquía*.
isotopíat elaborado y:· considerado 2. · la repetición de l~s mismas
hasta aquí· a nivel .del contenido*, magnitudes situadas dentro de un
al .plano, de la expresión*: .así, el intervalo temporal puede ser api-e-
discurso: poético* ·podría ser -con· hendida .como una ca,racterística
cebido -desde el punto de vista particular de la duracióll: Ja itera~
del significante•-...:. · c9mo una pro- tividad se presenta, entohces, como
yecci6n de redes férriicas* ·is6topas, uno de los términos de Ja· categoría
dond_e se reconocerían simetrías y aspectual que se opone a durativi~
alternancias, consonancias y diso- dad. Quizás sería preferible hablar,
nancias y, finalmente, ,transforma- en este sentido, de duratlv:ldad dfs. ·
.clones signüicativas: de· conjuntos contlnua, oponiéndola a '1a durati·
sonoros.· En esta perspectiva con- vidad continua. · ·
viene situar 'el, punto de vista de -+ REDUNDANCIA, RECURREN:CIA, RE~
F. Rastier, quien ha propuesto de-. CURSIVIDAD, DURA TIVIDAD.
finir :la _isotopía como la it~tivi-

~ !. .
.•.

J
JERA&QU1A. Fr. hiérarchie, ing. JUNCION. Fr. jonction, ing. junc· ·
hierarchy. tion.
l. Para L. iijelmslev, la jerar- 1. Se le llama junclón a Ja rela·
quía, definida como la clase de las ción* que une el sujeto* al objeto*,
clases, es el término que define a es decir, a la h1nci6n constitutiva
toda semiótica. Esta acepción, que de los enunciados* de· estado*. To-
a primera vista parece excesiva, se mada como eje"' semántico, esta
comprende si se tiene en cuenta categoría* se desarrolla, según el
que Hjelmslev postula la unidad de cuadro* semiótico, en
la morfología* y de la sintaxis"'. La co"njunci6n ·· disjunción

n"o-~i~ju1l~~ó~ X no~orifunción
jerarqtúa aparece, así, como al prin-
cipio organizador .:1.:: Ja estructura*
elemental de la significación, donde
la categoría*, en: tanto que un todo, La posición del objeto* de valor
es jerárquicnmente superior. a los en el recorrido sintáctico permite
términos* que la constituyen y que distinguir, por ejemplo, entre dis- ~i·
son las partes; pero también las junción* {el objeto que nunca ha ~:·
relaciones hipotácticas*, esenciales sido poseído) y· no-conjui:ición {pre-
para la sintaxis, son igualmente supone, sintagmática.mente, que el
jerarquizantes. objeto ya ha sido poseído).
2. Debe distinguirse la jerarquía, 2. Se resérva el nombre de Jun·
concebida como organización for- ción sintagmátJca para denominar
mal basada en el principio de pre- una serie de dos enunciados jun-
suposición* lógica, del empleo de tivos ( conjwición y disjunción, o
ese término para designar la rela- a la inversa) que tienen el mismo
ción de superioridad / inferioridad sujeto y están vinculados por una
(o de dominante / dominado) que relación de presuposición* simple.
es de orden axiológico* y se basa Por junc16n paradlgmátlca se en-
en Ja modalidad del poder* (cf., tiende Ja concomitancia"' lógi.camen·
por ejemplo, las tres funciones* de te necesaria de dos ·énunciados de
G. Dumézil). conjunción y de disjunción que
JUNC!óN ·JUSTICIA

afecta a dos sujetos · distintos, in- 'aplicar Ja sanción, dichci':DestinadOr


teresados en un mismo objeto. será llamado entonces juez. ·
-+ FUNCIÓ!i, CON1UN.CióN, DISJUNCIÓN. 2. Se entiende, ~~fuente, por
justicia una forma de .retribución*
JUSTICIA:. Fr. justice, . ing.' jus- negativa (o castigo) eje'i:cida en la
tice. · · dimensión pragmática pOr el Des-
t: La justicia puede designar la tinador social, en opoSición a la
competencia* del Destinador* so- venganza* que es realizada Por un
cial, dotado de la modalidad de! Destinador individual. ··
poder-hacer absolutó: encargado de -+ SANCIÓN, CASTtGO.
L

LECTOR. Fr. lecteur, ing. re,a.. caracteres escritos por la computa-


der. ~ EI Jector designa la instan- dora, etc.
cia de la rec.epción del mensaje o 2. Aunque pos preguntemos si es
del· dis'curso. Aunque cómodo,. este pos1ble una lectura· así entendida.
ténnino no es suficientemente ge- es decir, como reconstitución del
neral:' entra en concurrencia con significante* textual sin recurrir a
auditor* y se presta a metaforiza- su significad O~, debe reconocerse
ciones que pueden ser desviantes que ella es, ante todo -y e$en.cialw
(por ejemplo, aJector de un cua- mente-, W1a semiosis*, U."la activi-
dro•): Tal vez sea preferible, en- dad primordial que tiene por efecto
tonces, recurrir al concepto .· de correlacionar un contenido* con una
enunclatarlo. expresión dada y transformar una
-+ ENUNCIATARIO, LECTURA. · .. cadena* de la expresión en una sin-
tagmática de signos*. De ello se
LECTURA. Fr. lecture, ing. rea- desprende, en seguida, que tal per-
din.g. formance* presupone .una compe-
1. En una primera aproximación, tencia* del lector*, comparable, aun-
se entiende por lectura el proceso que no necesariamente idéntica, con
de reconocimiento* de los grafemas la del productor del texto.
(o letras) y de su concatenación, 3. Si, durante la lectura ordina-
que tiene como resultado transfor- ria, el hacct receptivo"' e interpre-
mar una hoja adornada con sim- tativo* del tector-enuriciatario* per-·
bolos dibujados en plano de expre- manece implícito, su explicitación,
sión* de .un texto*•. Por extensión, en forma de procedimientos de aoá~
el término lectura se emplea al lisis empleados para la reconstruc-
hablar de otras sustancias* de ex- ción del sentido* (informado y
presión dlstintas del grafismo: la mediatizado por el significante),
lectura táctil es practicada por los constituye la tarea , de la semióti~
ciegos que se valen de libros im- ca textual (narrativa y discursiva).
presos en relieve, la l~tura lptica Desde esta perspectiva, se entiende
designa el desciframiento de Jos por lectura la consttµcción* •. a la
LECTURA· LENGUA .236

vez. sintáctica y semántica, del ob· ·pías; sin embargo¡ éstaS quedan en
jeto semiótico que explica el texto- suspenso a causa de su; incomPati-
signo, . bilidad con las secuen~as siguién·
4. · La interrogante, que a menudo tes que tienen por función -entre
se plantea ·a propósito de .1a lectura, otras- el desambiguar Ja secuencia
es la de saber si un determinado poli·isótopa, no dejando subsistir
teito es susceptible de una· sola en el texto global sino· .un ntllnero
lectura, ·de lecturas múltiples o de 'restringido de lecturas ··posibles. A
· . una lectura plural (R. Barthes); se las coerciones inscritas: en el texto
plantea.- sobre todo, en semiótica mismo, se agregan las·:. del medio
literaria"', pues los textos •prácti· soci0-<:ultural circundante: la com·
cos,. (como las 1:recetas» de cocina) petencia textual del lector se en-
o los textos que se suponen mono- cuentra inscrita y condiCionada por
isótópos (textos jurídicos, por ejem· la episteme* que abarca un estado
plo), si bien comprenden -inevita· semiOCQltural dado. ·
blemente- ' ambigµedades• a ; nivel ~ ISOTOP!A.
de los . enunciados, ofrecen. igual·
ment_e, por'"lo ·general, los ·medios · LENGUA. Fr. tangue, ing. natural
pará remediarlas, áI · pi-oponer el tan.guage and / or semiotic systtm
contexto-discurso coino el lugar de ( «saussurian term»·).
su 7 desambi1ruanllento*. Hay : tam· l. Se le llama lengua o lengua
bién ·que· excluir de, estas ·considC:. natural a un tipo de m3crosemi6-
raciones las condídones psicofisio- tica*, cuya especificidad;··si bien pa·
lógit:as variables de 'los lectores (a rece evidente, no se deja definir
las que· se hace referencia, a veces, fácilmente. Calificada de ~natural»,
al hablar. par ejerriplo, del <lSentido la lengua se opone a !Os lenguajes
poético• ·o del «sentido musical• de «artificiales» en· cUanto Q.ue es· algo
tal o tual individuó): ef enuncia- característico· de la «naturaleza hll·
tario* es, por defiri.ición, un .actan- mana», trascendiendo a los indivi-
te*' · conforme· Con · el texto, y no duos que:·la utilizatÍ: se presenta
una· clase inagotabf(i: de actores* in- como una organización · estructural
dividuales. Una Vez dicho esto;. cabe inmanente*, que dominá: a los sµ.-
que un· rmi5mo · ·texto pueda Com· jetos hablantes, incapace$ de cam~
prender varías 1 isofopías* de lectu~ biarla, aun cuando sean capaces de
ra; · pero · afirmar que : existe una construir y manipular leÍtguajes .ar·
lectura plural de los.textos, es decir; tifi:ciales. - Las lenguas tiaturales se'
· que un·' determihado ·· téxto ofrezca distinguen de las demás:· semi6tic3s
un número ·ilimitado de lec~. por la fuerza de su combinatoria"",
nos parece · una hiP~tesis gratuita, debido a lo que se hiL' dado en·
máxime pórque· es inverificab1e. -La llamar 'doble articulación'.~ y a los
impi"esión· de uná·. t.'apertura•· infini~ procedimientos de desetribrague*:
ta del texto la· producen a menudo de ello resulta una posibilidad asi
JeC:ttiraS ·pardaleS: tal o -Cual se-. ilimitada ·para la formaci6n de sig.;.
cuencla del discurso, tomada·· sé- nos* y de reglas relativimente ile:
parad_amente, puede· conllevar,: en xi.bles que rigen la constiueción de
efecto, un gran número de isoto- unidades sintagmáticas .:.:-Como los
LENGUA-LENGUAJE

discursos*- de gran extensión (L. tructuras sintácticas en la defini·


Hjelmslev). Se desprende de aqtú, ción de la lengua.
asimismo, una doble superioridad: 3. Conservando las propiedades
todas las otras semióticas pueden que le son conferidas por· las de..
ser traducidas, bien que mal, en ñniciones (1_) y (2), la lengua se
lengua natural, mientras que lo con· presenta también como un concepto
trario no es posible: por otra parte, sociolingilístico*. Los criterios in· )(·
las lenguas naturales pueden servir trlnsecos que permiten distinguir ¡::··
de base, tanto por su significante* una lengua de un dialecto carecen,
co:mo por su significado*, para la a menudo, ·de coherencia y varían
construcción de otras semióticas de un caso a otro: . tina lengua :na-
(como los ienguajes artificiales). tural (cuya definición también se
Esta tradui:.tibWdad no debería, sin aplica a Jos 11dialectos1>) no se en-
embargo, servir de pretexto para cuentra elevada a la categoría de
postular que no hay significados 11lengua» sino por el ~sentimiento
sino en la medida en que éstos sean lingüístico» propio de la comuni-
nombrables y verbalizables: tal pos- dad. De ahí la tendencia a COllSÍ·
tura reduciría a las restantes se- derar la . jerarquía ·de «lenguas•,
mióticas al estado de derivados de «dialectos», ·«jergasll", etc.. como una
las lenguas naturales y transforma· taxonomía no científica dependien·
ria, por ejemplo, Ja semiótica pic- te de un sistema de connotaciones*
tórica en un análisis de los discur. sociales subyacentes al funciona·
sos sobre pintura. miento de las tenguás naturales.··
_,. LCNGUAJE, SEMÍÓllCA1 SISTEMA,
2. En la tradición saussuriana, MUNOO NAT~
la lengua·, opuesta al habla*, puede
ser identificada como sistema* se· LENGUAJE. Fr. lattgage, ing. · se-
miótico, con exclusión del proceso* miotics (semiotic system an.d pro-
semiótico. Esta distinción, estable~ cess). ··\
dda por Saussure para dar una de· l. El término lenguaje, pertene~
ñ.nición formal autosuficiente del ciente a una lengua natural como
objeto de la lingüística -separán· el español, Se ve definitivamente.
dolo de las contingencias individua· liberado de su cuasi-sinonimia con
Ies, materiales y, más generahnente, lengua" en el siglo XIX, lo que per-
no estructurales-. constituye cier~ mite oponer eJ lenguaje •sem:iótico10
tamente un aporte positivo y deci· (o lenguaje· en sentido general) a
sivo. Desafortunadamente, sin em· la .,Jengua natural». Esta distinción,
bargo, ha permitido, en numerosos que llegaría a ser· de gran utilidad,
Iingilistas, acreditar una concepción vuelve a discutirse,. de nuevo, una
demasiado paradigmática de la len· vez inscrita ep. el oonte:o:to interna~
gua (que se reduce entonces a una cional, en que numerosas lenguas
pura ta."tonoro(a*). La aproximación sólo poseen una palabra, en vez dÍ!
-que no deja de imponerse actual· los ·dos términos ·españoles (o fran·
mente entre los conceptos de lengua ceses): entonces, es neutralizada (se
y de compétencia*- parece exigir dice indiferentemente «metalengua.
la integración explícita de las es· je,. y «metalengua") o reafirmada
I:ENGUAJE ·· .' . ! . 238

pleonásticamente (citando se· opone de los lenguajes particulares per.


.j(lenguaje11 a. «!éngua natural:i>); tenece, en cambio, a las diversas
· 2.' ·.Puede decirse. c¡ue el lenguaje semióticas. No obstante¡,' su tipolO..
es el objeto' de saber del que se gía dista mucho de estar terminada
ocupa Ja' semiótica~.: general ·(o se;· y Jos primeros ensayos s~ basan ~
miología): objeto .qtle no .es: definí· criterios poco segu"ros· y ~·scasamen­
ble en sí, sino soi~mente en· fun. te rentables (así, las clasificaci.ones'
ción ·de los métodos·· y· de los pro- según la <inaturaleza» de'. los sig.
cedimientos. ·que permiten su aná· nos*, en función de su relación con
lisis ···y/o st.i.· construCc16n¡ de• ahí el referente*: seil,n la sustanCia*
que tod.a· tentativa i;le "definir el len- de su significante* o, lo ·que es lo
guaje (como 'facultaci-hum:ana, cOmo mismo, según los canales* de trans·
función. sociat 1 como medio de co.- misión; o, en fin, según fe! ntímero
municación, etc.) refleja una actitud de planos del lenguaje cj'ue entran
teórica que condiciona, a s:u mane· en Ia composición de una ·semiótica
ra, el conjunto de los ((hechos se- dada). Sólo nos detendr'emos aquí
mióticos». Lo menos compromete- en algunas distinciones ,tradiciona-
dor, tal vez, "$erla;~s~tituir el térmi-· les. ·
no lenguaje ·por la ·~presión oonjun· 4. Asf pues, los lenguajes hruna.
to• s!gnifica.Dte:!pal-tiendo del con· nos se oponen a los !~guajes a.ni~
cepto intuitivo de universo* semán· males¡ estos últimos (cuyo número·
tico,: considerado como el mundo es de, más o menos, 600) constitU··
aprehensible· en su. significación yen el objeto de Ja zooSemiótica*.
-previamente a· todo análisis,....., se El lenguaje ha sido cOnsiderado,
tiene e1 derecho de postular la ar- durante mucho tiempo, '.Como una
ticulación* de este universo en con· de las caracterlsticas fundamenta~
juntos significantes o lenguajes; que les de Ja especie humana: ·.-el límite
se· ·yuxtaponen, ·o se ·.superponen entre la comunicación animal y 1.a .
entre sí. Cabe, igualmente, la posi- comunicación humana estaría cons-
bilidad de' tratar de. ~ndicar algunas tituido por ciertas propiedades de ·
características que parecen ·aplicar- las lenguas naturales: tales como
se al conjunto de los· 1enguajes. Así, la doble articulación*,. la elastici·
todos son· bipJanoi, es decir qué lo dad* deJ discurso o el .desembra·
que· los manifiesta no se confunde gue* (que permite <..l hombre hablar
con Jo manifestado:' . la lengua ha- de cosas que no son él mismo). Los
blada está hecha de sonidos, p_ero progresos de la psicolog!¡:t animal
su fin.ali dad. ·no · es hablar 'de 'los y de Ja zoosemiótica ponen .en duda
sonidos; los silbidos .. del delfín sig- las antiguas certezas, reemplazando
nifican otra cosa qu~ ·los rui~os que el concepto de limite por .él de gra-
emite; etc. · Además, todo lenguaje dación. : :~
es articulado: ·al: ser Proyección de S. Se distinguen, igualmente, Jós
lo diScontinuo* ,~en JO -continuo*, lenguajes naturales de loS' lengua~
está hCcho de :diferericlas* y de opo- jes artificiales, al subrayar: .. que las.
siclories* .~;~·' :! •· •·. • 1 ' : · • estructuras semióticas que.'.Presiden
· · 3. Sj bien el estudi~· del IengWije la organización de los pr:úlieros Son
depende de la · ~eor!a. ~emiótica, el inmanent~"' y que ·t'l. sujefO. huma."
239 LENGUAJE· LEXEMA

no sólo participa en ellos como uti- otra cosa que el discurso sobre el
lizador Y paciente, mientras que los lenguaje: es práctica:i:rlente imposi-
segundos son, al contrario,· cons- ble trazar la frontera entre lo lin-
truidos y manipulables por el hom- güístico y lo metalingüístico. En el
bre. Se coloca en la primera catego- otro extremo, todo discurso cien-
ría no sólo a las lenguas naturales, tífico, toda ciencia puede también
sino también a lo que nosotros en· ser considerada: como de naturaleza
tendemos por semiótica del mun- mctalingüfstica.
do"' natural. Sin embargo,· la·· di- --)" SEMiónCA, LENGUA.
cotomía así establecida no es lo
suficientemente franca· como ·sería LEXEMA. Fr. texeme; ing. lexeme. ·
de desear: si la mósica culta es,
por cierto; un lenguaje artificial. y 1. Entre los signos* m:ín.i.IDos
construido, ¿qué decir del ·canto -o morfemas* (moncmas*, en A.
popular, que, poseyendo los mismos Martinet}- de una s"emiótica ma-
principios fundamentales de ·orga~ nifestada, se ·hace distinción, común- .
nización semiótica, parece no obs- mente, entre· los morfemas Jé:tlcos .
tante «natural,.? Sucede 10 mismo Y los gramaticales: Jos morfemas
con la invención de la escritura*, léxicos son, generalmente, llamados ·
que, siendo una construcción arti- lexemas para oponerlos a Ios mor-
ficial, no es sin embargo obra cons- femas propiamente dichos (o gra-
ciente. Los lenguajes artificiales· son memas*, :para: B. Pottier).
numerosos y variados. Se intenta 2. Es fácilmente ~rlticable esta
clasificarlos según el criterio de !=()ncepción del lexema: si el lexema
«transposición» o de transcodifica- en cuanto signo posee un forman-·
ci6n*, de acuerdo con el cual ten- te• que lo delimita en el plano de
drian su origen en laS lenguas na· la expresión*, el contenido* del le·
turales o en las ·semióticas· del xema (o de la palabra, en el sentido
mundo natural, subdividiéndolos corriente) no es autórtomo, pues el
luego como <"<:transposiciones» · del enunciado* constituye un todo de
significante (escritura, morse, brail- significación que no se reduce a la
le; fotograña, ml1sica). del signi- suma de sus :Partes-lexemas.
ficado (ideografía, «poesía• román- 3. Así pues, es preferible, en un
tica de ta naturaleza, etc.),. o de primer momento, corisiderar que el
ambos a Ia vez (lenguajes · docu- lexema atañe únicamente al plano
mentales, por ejemplo). Actualmen- del contenido y seguir llamando
te, parece que no se dan trabajos de morfemas (o mene.mas) a las unida-
conjunto sobre lá taxonom(a gene- des mínimas del plano de los sig-
ral de los lenguajes. nos. En e..<;te caso, el lexema sería ".
6. La distinción entre lenguajes una unidad· del contenido (una figu.- ~t·.
y metalenguajes* es, asimismo, de. ra*, en el ·sentido dc·L. Hjelmslev) f.:'
licada. Toda predicación*· -o, al que, merced a estar comprendida
meno~, la :predicación· atributiva- por un ·formante único, puede dar
puede ser considerada, en : última origen -una vez inscrita en el enun-
instancia, como una operación· me- ciado- a una o más unidades de
talingüistica.' La -paráfrasis• no es contenido llamadas · sememas"'.
'LEXEMA·LEx!A ...

. <·-4.: Son·:posiblés dos·.representa- reúne :-de manera máS .o menos


ciones ·diferentes del . lexema,= según accidental- diferentes s~emas, el
que . se., Je : aprehexi4a , ·durante su lexema se· presenta, más bien, como
realiiacióil *:o en su." estado virtual*'. producto de la historia o:·c:lel uso*,
El lexema se realiza en el momento que como producto de la estruc--
tura*. · ·
de la semiosis*, es decir, de la con·
junción del ·formante y del núcleo"' ~-SE.MEMA.
sémico al que informa; pero su
realización sintagmática · constituye . LEX1A. Fr. lexie, iiig. lexía (neol;).
también su io.scrípclón en ·et enun· l. L. Hjelmslev ha propuesto deo
ciado! d~ éste toma los semas con· signar mediante el término lexía a
textuales* que le permiten consti- Ja primera unidad* Susceptible de
tuirse en- serllema, ·a la vez ,que un análisis* por selección•: es el
seleccionar,· para· él;· el recorrido caso ·de una frase"' capiz de des-
ilnico (o :.10$ ·.varios recorridos, en componerse en principal (o seleccio-
el caso de la plurl-isOtopía*)· de. la nada) y subordinada (seleccionan:.
manifestación. de Ja·· significación:· te).
Así ·pUeS, · . en.. ;cuanto ·virtualidad 2. R. Barthes introdujó el térmi-
-precedente,'. entonces, a Ja eñun- no Jexfa· para denominai. las «uni-
ciación* en el hic et nune-; el lexe- dades de lectura», de diinensiones
ma aparece .como un conjunto de variables, que constituyen: intuitiva-
recorridos discursivos posibles que, mente un todo: se trata de un
partiendo de·Wl·núcleo común, van concepto pre-operatorio qtie funda-
llegando sucesivamente --merced al menta una segmentación"'·'_provisi0-;
encuentro· de'· ·semaS contextuales nai del texto con vistas a: su análi-·
diferenteS-:-: a .otras tantas realiza- sis.
ciones erl forma de_ sememas.~ La 3. B. Pottier elige el término le-
realización ··del .. lexema, como r un xía para designar las unidades del
solo· semema ·particular, define, pltes; plano del contenido* que poseen
su funcionamiento lingüístico. Pero dimensiones variables -Y que van
cada realización pµntual deja en de los simples lexemas "(o:ean») a
suspenso ..un·· co:njunto/ a menudo los sintagmas fijos (o:clavo.de olor»):
. vasto, deS.virtualídades. semémicas intenta reemplazar, de este modo,
ho aprovechadas, dispuestas a· ac- el término palabra*, al que · pa.
tualizarse ·al ·:menor obstáculo que rece imposible dar una definición
pueda! encontrar la realización · li- suficientemente general. É·stas uni-
neal de la significación. La presen- dades -comprendidas poi- Iexía-:-
cia de. estás ·virtualidades subyacen- podrían ser definidas parii.digmáti-'
tes es .Ja qué produce,· como: ~f(!cto* camente: por su · posibltidad de
de sentido; la· •moro'Sidad• o el «es· sustitución* dentro de unii·-ciase. de
tallidoll' de las patabW. lexemas dados {~morir•, .cfallecer•,
! S. El· lexem·a, en coñSecuencia, no «perder Ja vida.11, por ejemplo) -de
es ni · una . Ünidad ·déÍimitada ·'del ahí el nombre de paralexefuas* que:
nivel de ·Ios signos, 'rii una unidad propusimos en otra oca:sión-,. y
del plano ·de! ·contenido propiamen• sintagmáticamente: debidó a una
te dicha. Como con~guracf6n que especie de recursividad*. l~xica, las
241 LEX!A • L!lX!CO

unidades de nivel jerárquicamente durativo* al que se encuentra so-


superior pueden ser reproducidas metida una lengua* natural, y que
a nivel lexemático; sólo el cruce de tiene por efecto transformar un
estos dos criterios podría explicar sintagma, compuesto por morfe-
)as lexías que sobrepasan las dimen· mas* libres, en un ·sintagma fijo
sienes de un lexema. -B. Pottier (o lexía) conmutable, desde el pun-
propone distinguir tres tipos de le· to de vista paradigmático, dentro
x{as: Iexfas simples (lexemas y lexe· de una clase lexcmática.
mas fijos, tales como «caballo,., «an· ~ TÉRM~NO, LEXEMA, l."E.XÍA.
tiConstitucionalD), lexfas compues·
tas (sacacorchos), y lexías complejas L:E:XICO. Fr. lexique, ing. lexicon.
(..-a horcajadas»,«Un recién nacido,.). 1. El léxico es Ja lista exhaustiva
4. La pertin~ncia de los estudios de todas las lexías de un estado
léxicos que ·utilizan la lexfa como de lengua natural. El valor opera-
unidad de explicación y de descrip-. torio de este concepto debe ser
ción, depende, en último caso, de apreciado en función del de lexía,
la definición del lexema (del que, de su capacidad, especialmente, de
finalmente, la lexía es la prolonga- ser tornado como unidad de base
ción) y de su lu8ar en la teoría se· para el análisis semántico.
mántica. 2. El léxico se opone a menudo
-> LEXEMA, PALABRA. a vocabulario, comó un inventarlo
de unidades virtuales del conjun-
LEXICALIZAClóN. Fr. lexicalisa- to de unidades realizadas c;n un cor·
tion, ing. le:xicaliz.ation. pus* (o, lo que viene a ser lo mis-
l. La lexlcalización, dado que mo, en un te.'"'(ta).
todo lenguaje* es una red relacio- 3. En gramática generativa*, el
nal, puede designar la atribución léxico está considerado como uno
de etiquetas léxicas i los puntos de los dos subcornponentes, jwito
de intersección de las relaciones* con el subcomponerite categorial,
que no son otros que los términos. de la base* del componente sintác-
2. Como el plano del contenido* tico. En el marco de esta concep-
del lenguaje está constituida* por tualización, el léxico se distingue
unidades semánticas llamadas se· radicalmente de su definición tra-
memas* -susceptibles· de aparecer dicional (en el sentido 1): forma
en un número más o menos eleva· parte de la gramática* y, por ·Otro
do de lexemas-, la· lexicalización lado, las unidades que lo componen
consiste en pasar del nivel semé- no son Consideradas como unida-
mico al nivel lexemático del dis- des dependientes s6ló del plano del
curso y, más particularmente, para contenido*, sino qué se caracteri•
cada semcma, en la elección del zan por rasgós, a la ·vez, semánti- ·
lexema (ligado a su contexto) den- cos, fonológicos y sintácticos. Aquí,
tro del cual estará llamado a ver- como en otras ocasiones, la defini·
terse. ción misma de unidad léxica resul·
3. En un sentido más restringi· ta problemática. ·
do, la lexicalización es el proceso ~ l.EXÍA, ~A, VOCA.BUL\RlO.

SEMIÓTICA. - 16
. LEXICOGRAF!A ·LINEALIDAD 242

LEXICOGRAF:tAoa Fr•. lexicogra- mé'todos de análisis sd~co* (en


phie, ing.. lexicograPhy. Francia) o componencial (Estadas
1. La lexicografía es un campo Unidos) muestra la te'ndencia a
·de la lingüística aPlicada cuyo ob- transformar la lexicolo~a en Una
jeto es la elaboración de dicciona- semántica léxica, con pfeocupacio-
rios'*. . . nes esencialmente taxonómicas*.
. 2. Como técni.::a, presuPone cier- ~ q:>NTE/'UOO.
ta competencia; COnsistente, ! por
una parte, en un sti.ber-hacef prác- LINEALIDAD. Fr. l~n~arité, ing.
tico e intuitivo qui! se aproxima al Iinearity.
concepto ·lévi-straUSsi.ano de e1brico- l. La linealidad es · u,na de las
lag~:(clasificación alfabética de las características, según S~ussure, de
cs:palabraS», reagrupamiento de los la manifestación* sinta8}nática qe
cs:sentidos», ilustración de los «sen· las lenguas* naturales, pbr la que
tidos» tratados, .etc;); : y que,~ por los signos... -una vez producidos-
otra parte, .exige un saber teórico se disponen unos detrás de otros,
(de.finición de unida:i:les léxicas, tipo. en sucesfón temporal (li!hgua ha~
logia de las 'definiciones y, · lnás bJada). o espacial (lenguá ·escrita.),
generalment~. un~ opci6r¡. en favor 2. Este feri'átneno de Ja. manifes-
de tal o ·cual teoría ·s.emántica) que tación de los signos de Ciertas se-
remite a una semántica* léxica {o mióticas ha sido hi;Postas:iado hasta
a una lexicoJogía* semántica). ser considerado, pOr algunas teo-
rías, como un universal~ del len-
LEXICOLOG1.A. ~r. ·. texicologle, guaje, La confusión más· frecuente
ing. ·lexicology. consiste en considerar ia':)inealid.ad .
1. La lexicología se define tradi- como una propiedad de; :~odo pro-
cionalmente' ·como er·
estudio cien· ceso semiótico o de toda·:.Sintagmá~
tífico: del )é:dco*, ~ pero también tica. Ahora bieri, Hjelmsle:v lo ha
como la reflexión teórlca sobre sus demostrado, la oposición entre los.
aplicaciones en lexicografía*. ~-· -·~ ejes* paradigmático y. sÜltagmático
2. Antes de que Ja semántica* descansa únicamente en una distin-·
fuese reconocida conio componente ción formal: la relacióti· e:o... O•
autónomo de. la gramática* (o· de es constitutiva del éje paradigmáti-
la semiótica*),. la lexicología fue la co; ·1a relación e:y... y,,, del eje sin·
única en ocuparse de los problemas tagmático. Desde esta pe'rspectiva;
de Ja significación en lingüística. por ejemplo, se observa Que Ja se-
Las itlvesdgaciones lexica16gicas se miótica planaria* posee una sintag-
desarrollarori en dos· dir~ciones: mática dotada de una manjfestación.
la lexicología estadística se oci.tpó espacial que no es necesariamente
de· introducir en lingWstica los lné· lineal.
todos de la estadística: · la Jexico· 3. El concepto de lin~~idad, a1 .
logía semántica* inauguró la des· quedar así limitado .._sólb concier· ·
crlpción de los campos* semánticos, ne al plano de los signos y afecta
aplicando alternatiyalnente las con· únicamente a ciertas. semióticas-,
sideraciones ·semasiológicas* y ono- lleva consigo el que las· principales
masiológicas.... La ela~raci6~ de los dificultades (por ejemplo,. la exis-
243 LINEALIDAD

tencia de constituyentes* disconti- la contigüidad con o sin orden- de


nuos, los fonemas suprasegmenta· sucesión del deterµiinante y del
les, las ambigüedades sintácticas y s~t~tantivo), la· linealidad debe dis·
semánticas, etc.) se desv3.nezcan: tinguirse del orden* de sucesión
los dos planos del lenguaje -ex- obligatorio que corresponde a un
presión* y contenido*-, que, deben morfema gramatical (equivalente.
ser analizados ·separadamente, no por ejemplo, a la oposición caM
sufren las Coerciones de la lineali· sual): as{ en .iPedro pega a Pablo»,
dad; no tiene sentido preguntarse, el orden de las palabras funciona
por ejemplo, si los fonemas* o los como una categoría de la expre-
semetnas* (combinaciones de fe- sión, permitiendo distinguir el. su·
mas* o de sernas*) son o no linea· jeto y el objeto.
les: femas Y sernas· no tienen una 6. La linealidad es la propiedad
organización lineal, sino que se:·ma- del texto cuando éste busca la tnaM ~·
nlñestan por paquetes; del mismo nifestación, y la Uneallzación es un :¡_:·
modo, la existencia de textos p:luri- procedimiento necesario cada vez
isotópicos* contradice, a nivel del que se está obligado a manifestar
contenido, la linealidad de la sig- tal o cual nivel de análisis, tal o
nificación. cual semiótica. ESta oPerac:ión, que,
4. El análisis distribucional"', al en el marco del recorrido genera·
situar su descripción en el plano tivo* global, depende de la textua·
de los signos, ha mantenido el prin- lización, consiste en reescribir en
cipio de la linealidad como propie.. contigüidades temporales o espa-
dad fundamental del enunciado*, ciales (según la naturaleza del sig-
permitiendo el examen de lo que nificante* que será ulteriormente
circunda a los elementos y de su utilizado) las organizaciones jerál---
distribución lineal. Por esto se disM quicas, los segmentos sustituibles,
tingue de la glosemática*: mientras las estructuras concomitantes, etc.
que para la lingüística distrlbucio- Así es como, cuando se trata de
nal Ja fragmentación de la frase en tex.tuaiizar los elementos de la gra.
sintagma nominal y- sintagma ver· mática narrativa, se· está obligado
bal se basa en la pura sucesión a poner en sucesión lineal, por
lineal, Ja glosemática reconoce en ejemplo, dos programas* narra.ti·
ello la existencia de una relación vos que parecen desarrollarse al
lógica de presuposición* (cuya maM mismo tiempo, a intercalar un pro-
nifestación lineal es sólo una va· grama narrativo cognoscitivo den-
riable, propia de ciertas lenguas). tro de Un programa narrativo prag-
La gramática generativa* y trans~ mático, a instituir una plurl ... iso-
formacional torna a su cargo el topía* que permita hablar de varias
principio de la linealidad de la cosas .a Ja vez, etc. Desde este punM
frase a la que considera como una to de vista, 1a Iinealización aparece
de las reglas* de la formación de como una coerción que condiciona
árboles*. la organización textual y que de~
S. En cuanto coerción local y termina, de manera negativa, · la
localizable de fonna diferente según competencia* discursiva del enun~
la lengua estudiada (por ejemplo, ciador*.
LINEALIDAD· LINGUISTICA

~ SINTAGMÁTICA, ,.:Drsm:uiocró;¡: ÁR• de una teoría* y de Una práctica


: BOL, .TEXTUALIZA.CIÓN,, • . ' · · operatoria"', disciplina .:que es. la
única, entre las ciencias sociate_s,
UNGtliSTICA. Fr. Unguistique, capaz de poder reiVindicar el nom-
ing. )inguistics. · . bre de ciencia (C. ·Lévi.Strauss).
1: La .lingüística puede definirse J. A partir de un pequeño nú-
como un· estudiO científico -del. len· mero de postulados gez;!!rales, for-
guaje"' y. de las ·lenguas* naturales, mulados por Saussure,. "Ja lingüís-
mientras que.J.a re.flexión' teórica tica estructural ha podido consti-
. sobre el lenguaje' ..{4ue ha de ·inte- tuirse· afirmandO la autonomía de
grarse en la· teoría .semiótica, más su objeto, su carácter. : formal, e
general) se concentra en la natura- instalando procedimienÍds• form."!:-
leza, el funcionamiénto y los pro- les capaces de describirlo. Sin em~
cedimientos. de ,descripción. de las bargo, se distingue de la Jógic'a ·
Jenguas na~urales, :. '.D.utriéndose · al .porque el metalenguaje* que ela-
mismo tiempo. con . los resultados bora no constituye un·) fin en ~í:
de su análiSis. sino qlie se pretende que:.sirva p~ra
2. La lingüística ·actual esla" cul· la descripción de esos Objetos for·
mi nación .. de. un. largo trayecto. his· males (o formas lingüísticas signi-
tórlco y su algoritmo* científico ficantes)· que son las Iéi'lguas na-
está marcado por do.S revoluciones:· turales. La lingüística "estructural
a) · la prin:lera corresponde a la se ha desarrollado de modo pa~­
invención de la escritura* (que hn· lelo en Europa (Escuelas·, de Praga
plica, al menos para ·cierto número '!/ de Copenhague) y erÍ Estados
de lenguas,. un análisis fonemá.tico Unidos (el distribucionalismo -de L.
implicito), hivenciÓn ·que inicia Un Bloomñeld y de Z. S. Harrls). La
período hi$t6rico que se podría gramá.tica generativa* y transfor·
desjgnal;'., geiieralizando, como el de macional (que se ha afirniado local·~
la ·filosoña del lenguaje; · mente, por oposición· al ~Structura­
b) la · segÚ.nda ha dado tuga'r a lismo• norteamericano) se inscribe,
la constitución · de . Ja gramática en general, como u.na tendencia o
comparada (que presupone el aná- una actitud teórica partiéular pro--
lisis previo de la palabra* en mor. longadora de la lingüística (que ya
femas*) a comienzos del. sig'lo xrx: no tiene necesidad del cl3.lificativo·
el período. que abarca, podría · ca- de estructural, pues ella· 10 es por
racterizarse como et de la elabora- definición). ·Sucede lo. mismo con.
ción del cálculo Jingilístíco. Es F. la Hngiiístfca discursiva <iue, awt-'
de Saussure quien, al fonnular Ja que se opone a la llngWstlca frási·
síntesis de Ja Ungii:{Stlca compara- ea•, no está reñida, por' ello, con
da* (desarrollada eri el transcurso su herencia estructural. :· ,
del siglQ XIX y, antes,· denominada 4. Si, en un primer -momento,
gramática comparada e histórica) las tareas de la reflexión -.epist~mo-
y poner. las bases ,teóricas de la 16gica y- metodológica pedían serle
Ungiüstlca estructu~, · marca ; el confiadas a la llagil!stiea. general,
advenimiento de la lingüística como va ello resultando· cada "'.vez máS
a
disciplina científica. dotada la vez difícil por el desarrollo de". que han
245 LINGülSTICA-L!TERARIA (semióL -)

venido siendo objeto campos de 2. Cierta tradidón viene a defi-


operaciones tan amplios y autóno- nir el discurso literario como una
rnos como 19 son la pslcollngüís- «ficción"'• oponiéndolo, por ejemplo,
uca•, la socJollngüístlca*, -·para no a la 1treatidad1> del discurso histó-
hablar de la\ llngfüstlca aplicada o rico; dicho de otro modo, se lo
de las aplicaciones de la lingüística especifica poniéndolo en relación
a dominios cada vez más numero- con lo que no es, es decir, con el
sos.· La reflexión sobre el lenguaje referente* extra-lingüístico: el refe-
se aproxima así a la semiología*, rente del discurso literario sería
. esa ~teoría general de los signos• ttimaginario11; el del discurso -his·
que Saussure anhelaba. · · tórico, creali>. Numerosas investiga-
ciones han demostrado, de modo
!.ITERA.RIA (SEMlóTICA -). Fr. decisivo, que todo discurso conS:.
sémiotique littéraire, ing. literary tituye, a través de su desenvolvi-
semiotics. miento, su propio referente -interno
1. La semlótlca literaria (o· dis- y que la problemática de Ia reali·
curso literario, si se la considera dad debe ser sustituida por 'la de
como proceso* semiótico) es un veridicción*, del decir-verdad pro-
campo de investigaciones cuyos lí- pio de cada. discurso. Es tentador
mites parecen haber sido estable- definir, por ejemplo, el discurso
cidos más. por la tradición que por literario como predicador de lo fal·
criterios objetivos, formales. De ahí so para obtener lo verdadero, como
que no se la pueda caracterizar por mostrador de su · 11parecer11 para
un contenido* propio, como en el comunicar y hacer asumir mejor su
caso de otras semióticas (discursos «Ser». Sin embargo, este punto· de 1
jurídicos o religiosos, por ejemplo): vista conserva todavía rasgos de
es indiferente al contenido que ma. relativismo cultural: se sabe por
nifiesta o, más bien, su plano de ejemplo, que para ciertas comuni- ~­
contenido es coextensivo al univer- dades africana$, el discurso verda· \.':
so* semántico abarcado por una dero es el relato mítico, mientras
lengua* natural dada. En cuai;ito at que la relación de acontecimientos
plano de la expresión, las· «formas cotidianos forma parte del género
literarias .. que presiden su organiza. «relatos para divertirse11. Las varia-
ción, se identifican de manera ge· ciones relacionadas con las ilusio-
neral con las articulaciones lingüís-. nes referenciales dependen, pues,
ticas discursivas, de modo que el en definitiva, de una tipología de ·
discurso literario parece· ser la las connotaciones* sociales y no
mejor ilustracióri del metalenguaje* dicen nada sobre la naturaleza del
no científico, encargado de la orga. discurso que ellas connotan.
nización sintáctica de los signos* 3. Un último criterio, el de la
transfrásicos (de los textos): en figuratividad*, puede ser sugerido:
lugar de definir la especificidad de a diferencia d~ los discursos no-
su discurso; las «formas literarias» figurativos (o abstractos*), como el
aparecen, más bien, como U.'1 vasto discurso científico o filosófico,· el
repertorio de universales* discur- discurso literario puede ubicarse en
sivos. la vasta clase de lo$ discursos figu.
LITERARIA (semiót. -)·LOCALIZACióN 246
·rativos...,·donde:.estará al lado) entre
otros, del ·discUr$o histórico, resul-
rá sino por etapas) ae un meta-
discurso de investigaci~n. o corno
taiido dos formas . discursivas que un postulado a pn"ori ·que permite
vehlculan la transD:i.i'.sión de !a ~· circunscribir por adela:ilµ.do el obje-
tilra. Una dicotomía como éSta, fi- to de conocimiento buScado. Según
gur.ativo / no-figurativo, aun Cuando R. ·Jakobson, quien ha.optado por
teórica (se sabe que nó hay i:ealiza- esta segunda actitud, <l'el objeto de
ciones discursivas «perfectas»), nos la· ciencia literaria no· :es la litera·
parece ·fundada: a la vez que i'e· tura sino la Iiteraridadi>, es decir,
plantea la especificidad det discurso Jo que autoriza a disti~guir lo que
literario (su literaridad*), la amplía es literario de lo no-literario.
a otros ·discursos (mitológicos, fol· . · 2. Ahora bien, la mirada, aunque
klóricos; etc.) y la. saca de su aisla· superficial, que el Iinifuista puede
miento para hacerla participar en aplicar a los textos Uazfiados litera-.
· una tipología general de los dis· ríos, bastará para pe:fsuadirlo de
cursos,¡ · · . · . · ! que lo que se llaman ~formas· lite-
4. La· apertura de la semiótica rarias» {figuras, prOcedi.mientos, o·r-
literaria a los diScursos «SUblitera- ganizaciones. discursivas y/o narra-
riosi> o «no litr;rarios,, plantea nue- tivas) 'no tienen nada de específica·
vos- problemas de ·delimitación. Va- mente flliterario,., pues ellas se
liéndose de crlteñOS extrínsecos, es encuentran en los otros tipos de
posible .distinguir una semJódca ~t­ discursos. La imposibilidad de re-
noUterarla que se:. hace cargo de los conocer la exfstencia ·de leyes o,
discursos· emitidOS 'pol' micro-socie- incluso, de sinipJes regularidades
dades. de tipo arcaic:io (o por grupos que serían propias del discurso
sobl-evivientes) y .una semiótica so- literario ha obligado a Considera! et
c::iollterarla · que estudia Jos discur· concepto de Uterarldad -en el már·
sos sociales (que.·· trascienden las ca de la estructura intrínseca dcl
diferencias: social~S). de las macro- texto- como desprovist0'.de sentido
sociedades" iitdustriales (como ·los y a conferirle, en desqllite, el esta·
. policíacos, .'west~rns, revistas del co- tuto de connotación* soCial {si bien
razón, horóscopos, .. anuncios · «ínti· es ·verdad que ésta varía según las
. mos,., etc.). · culturas y las épocas: ·un texto re-
~ REFJmE.Nn?, romcA, CONNOTACIÓN, conocido como religioso· en la Edad
DISCURSO, · ETNOSEM1Ól1CA1 'SOCIOSEMIÓ-- . Media -J. Lotman·, entre otros, ha
TIC.4., VEROSÍMIL. . ·insistido sobre este purito- es teni·
do hoy como literario):.'·:.esto quiere
. LlTERAR;iDAD•. f:i-. ZittArarité, íng. decir que Ja literalidad debe ser
literariness: ,.. integrada en la probleni~tica de fas
:i. Si se admit~ ·-lo que no es etnoteorias de los géneros (o de los
necesario- que el . discurso litera- discursos).
riO* constituye una clase autónoma -+ DISCURSO. ·
en el interior de t.:na tipología ge-
neril de los discursos, sµ especifi· LOCALIZACION ESPACIO· TEM·
cidad puede ser considerada o CO]llO PORAL. Fr. localisatiott'. spatio4em-
el objetivo último (que no se logra. poretle, ing. spatio-temJ19ra1 locali·
247 LOCAL!ZAC!ON ESPACIO - TEMPORAL

zation. - Las localizaciones espa.. rencias que permitt: · situar espa·


cial y -temporal, tomadas separada. cialmente los diferentes programas
rnente, . consisten en la insgipción narrativos del discurso, unos en re·
de los programas* narrativos den- ladón con otros. El desembrague
tro de unidades espaciales o tempo- instala, en el discuxso-enunciado,
rales dadas, operación q_ue se efec- un espacio del allá, o espacio enun-
túa gracias a los procedimi(".ntos civo, y un espacio del aqtú, o es-
de desembrague*. Se obseryará, sin pacio enunciativo: pueden mante-
ernbargo, que las posiciones así ob. nerse entre ellos relaciones estable·
tenidas son estáticas y sólo re.pre- cidas por los procedimientos de
sentan · los enunciados de estado* embrague". El allá Y el aquí dis·
de las estructuras narrativas¡ en cursivos, considerados como posi-
cuanto a los enunciados de hacer*, ciones espaciales cero, son puntos
deben ser interpretados como los de partida para instalar Ja catego--
pasos de nn espacio* a otro, de un ria topológica tridimensional que
intervalo· temporal a otro. Es posi~ se desprende de Jos ejes de la ho-
ble proponer una representación rizontalidad, de la verticalidad y de
diferente de la espacio-temporaliza. la prospectividad (delante/detrás).
ción de los programa!¡ narrativos, Esto constituye un modelo muy
introduciendo. el concepto de _mo- simple (tal vez, demasiado sirilpie) ·
vbnlento que, paralelamente a la de la localizaci6'n espacial de los
organización locativa de las coorde. programas .. narrativos y sus actan-
nadas del espacio y del tiempo, uti- tes convertidos, gracias a vertimien·
lizarla la direccionalidad de los mo- tos semánticos particulares, en ac·
vimientos. La categoría destinador tares*.
/ destinatario, empleada sólo para 2. Es de notar que la semiótica
determinar un tipo de actantes*, narrativa util~ este modelo de
podría así servir para designar los localización espacial aprovechando1
eSpacios y los tiempos de origen y esencialmente, el eje de la prospec-
de destinación; el hacer* quedaría tividad y buscando instituir un des-
identificado, a nivel figurativo*, con pliegue espacial unea1, homologable
el «devenir» de los seres y de las con el recorrido narrativo* de los
cosas. Hasta ahora, no es sino una sujetos y la circulación de los ob-
posibilidad de análisis: son escasas jetos* de valor. Esto explica, en
las investigaciones efectuadas desde parte, el débil rendimiento de este
esta perspectiva. modelo cuando se trata de extra-
polarlo aplicándolo, Por ejemplo, a
A. LocaUxación espacial. las semióticas visuales (donde las
1. La localización eSllaclal, uno tentativas por establecer una sinta·
de los procedimientos de la espa- xis visual, conforme al recorrldc.
clalización*" (en el sentido general de la mirada del espectador, están
de este término), puede definirse lejos de ser convincentes).
como la construcción -con la ayu. 3. Los espacios parciales, yuxta·
da del desembrague* espacial y de puestos en el eje de las prospecti·
un cierto número de categorías*" se- vidades, se denominan según la
mánticas- de un sistema de refe- naturaleza.' de los aCtantes instala-
LOCALlZAC!óN ESPACIO· TEMPORAL 248
dos y las Perlcirniances*. que ellos mente subterráneo, .subacuático o
cumplen. Así, en la . más ·pura tra· celeste),· y los espacios Paratóplcos,
díción proppiana, . el es.Pacio del donde se adquieren Izj:: competEin.~
cueD:to maravilloso está articulado cias*.
en. espaclo famlllar / espacio . ex·
. tranjero: ·al .primero se le. considera B. Localli:aclón temporal.
· como el lugar original ·donde .se 1. La 1ocall7.ac1ón teinporat es
inscriben, a la vez, el sujeto (na- -junto con la programación* tem-
.nativo) .y el enunciador*. Se trata, poral y la aspectualiza¿ión*- uno·
en este caso, de un espacio del aquí de Jos procedimientos de la tempo-
(o· enunciativo) y el relato comien- rallzación*, es decir; de Ja cons-
za, en. cierto sentid,o, por el .paso trucción de un sistema de referen~
del héroe al espacio del all.tt que cías que, inscrito en ef discurso,
es .el espado extranjero. ·Se ve, no permite situar temporalri:i·ente los di-
obstante, que un <:lispositivo espa· ferentes programas na:n3tivos unos
cial así; propio de · un cierto tipo en relación con los otros.
de étnoiiteratura,· .:no. puede gene- ·2. El sistema de referencias tem-
ralizarse. . '..: ·'.. ·: .. , · . poral está constituido, ··ante todo,
4.. ~ .Sin alejarnos'."deriiasíado· del por wi doble desembrague* tem·
modelo proppiano, hemos propues- poral que instaura en. el discurso
to otra' ·distribución espacial que dos posiciones temporales cero: el
sólo · articula el esPacio · enunclvo tiempo del entonces, o ti~·mpo enuri·
(eJ del allá). Paralelamente a la loca· civo, y el tiempo del ahoril; o tiem~
lizaci6n temporal, en que el tiempo po enunciativo. La cate'iona topa..
cero·(= e1 «tiempo :del relato») es 16gicá., de orden lógico ·Y no tem-
considerado como. ··concomitante a poral:
Ja realización del programa* ná.?Ta· .,,

"'
tivo de base (= la prueba decisiva*, concomitancia / no-concomitancia
en et esquema narrativO*), la·-Joca-
lización espacial .pebe elegir prime- . anterioridad/ pos.terioridad,
ro un espacio · de referencia -un
/
espado cero- a partir del cual Jos es luego aplicada a los dos tiempos
otros espacios parciales puedan ser cero instituyendo, en los. dos casos,
dispu·estos sobre el eje de Ia pros· una red de posiciones temporales.
pectividad. Este espacio de referen~ Los diversos programas;. narrativos
cia se denomina espado tóP.ico, del discurso. son enfonc;es suscep-
mientras , que Jos espacios circun· tibles de ser localizados en relación
dantes (los de' «detrás» y de «de- con este sistema de referencias; Las
lante») se califican de: heterotóplcos. diferentes I6gjcas tempÓrales que
Una sub-articulación-' de1 espacio. se elaboran actualmente aprove-
tópico parece, a menudo, neces:aria chan, con mayór o menOr éxito y
y distingue el espacio utópico, lugar amplitud, esta. concepción de la
donde el hacer del hombré triunfa temporalidad.
sobre Ja permanencia del Ser/estar, 3. Cuando se trata de· .Ja tempo-
lugar de las performanees* · (que, ralizaci6n del esquema ··'.Oaftativo
en los relatos míticos, es frecuente- (relativamente simple), el ti~empo del
249 LOCALIZAC!ON -LOCUTOR

entonces, c¡ue constituye el pWlto presuponiente como posterior. Tal


de localización temporal, se itlen· disposición de los programas na-
tifica con Ia realización del progra· rrativQs en serles temporales de-
ma narrativo de base (o prueba pende de otro componente de la
decisiva*) y puede ser considerado tempora1ización: la programación*
corno el «presente del relato»: es temporal.
desde esta posición desde la que
la narración que antecede aparece c.
como una anterioridad; de donde Los procedimientos de encajadu-
la prueba glorificante* del relato ra, fundados en el concepto de con-
proppiano no es más que faculta- comitancia*, constituyen la prolon-
tiva. Al lado de este tipo de tem- gación y el complemento inmediatos
pora!ización (en que el tiempo .del de las localizaciones espacial y tem·
entonces, en cuanto presente na- poral.
rrativo, se sitúa en el «pasado» del -)o DESEMBRAGUl::, E.SPACIO, ESPACIALI-
enunciador*}, existen también re- ZACIÓN, TEM'PORALIZACIÓN, ENCAJADURA.
latos proféticos o premonitores, que
se refieren al 1'futuroi. del enuncia-
dor. Sin embargo, el futuro, lejos LOCUCióN. Fr. locution., ing. to-
de ser una posición temporal, con- cu.tion. - Por locuclón puede en-
cierne, más bien, a las modalidades* tenderse el acto del lenguaje mer-
del querer-ser}estar o del . deber- ced al cual son Producidos los
ser/estar, por las que el enunciador enunciados* Confon:úe a las reglas
modaliza su discurso; también he- de la gramáticafl y gracias a un .
mos optado por la categoría topo. léxico* dado. Esta noción es inte-
lógica anterioridad / posterioridad, resante sólo en la medida en que
y no por la articulación pasado / -en la tenninologfa de J. L. Aus-
presente / futuro preferida por los tin- se opone a ilocución* y per-
Jogicistas. Los relatos que cubrirían locución*: estas diversas denomina-
el «presente» del enuncia:dor son, ciones son comparables a las de
evidentemente, un engaño; este pre- la pragn1ática* (en el sentido nor-
sente, móvil, no puede servir de teamericano), pues todas ellas tra·
punto de referencia. Los procedi- tan de las condiciones de la comu~.
mientos de embrague* son, enton· nicación lingüística (que remiten a·
ces, los que sirven para crear la la competencia cognoscitiva de los
ilusión de una posible identifica.; sujetos-locutores).
Ción del discurso con la instancia -+ ACTO DE LENGUA.JE, l!NU~CIACIÓN.
de la enunciación*.
4. Cuando se trata, no ya de la LOCUTOR. Fr. locuteur, ing. spea-
temporalizaci6n del esquema narra- ker. - En lugar del término Iocu·
tivo, sino de establecer las relacio- tor1 empleado para designar a los
nes de consecución entre programas actantes del diálogo*, ·se prefiere el
narrativos, la localización temporal de interlocutor que recuerda venta·
consiste en interpretar todo pro- josamente ta estructura interstibje-
grama narrativo -presupuesto como tiva de la comunicitción*. ·1
anterior, y todo programa n~rrativo -+ lNTERWCUTOR. ·'
M

MACROSEMi:óTIC1( :.Fr. inacro· para la lingüística (y, poi extensión,


s'éfftiótique, .ing. macro-semiotics. - en su conjunto, para Ja ·~emiótica),
Proponemos llamar tnacrosemtótica es a la vez el postulado que afinná
a cada uno de los dos vastos· con· la especificidad del objeto lingüís-
juntos* significantes .:...el que abar· tico constituido por la ;.forma*, y
ca lo que nosotros llamarnos mundo la exigencia metodol6gici que ex-
natuni.l* y el de las lenguas* natu· cluye cualquier recurso a· JOs hechoS
rales- que constituyen· el cainpo extra·lingüísticos. Desde kista pers·
de las semióticas naturales. pectiva, la forma · semióti¿a es con-
-)- sa.U:ónCA. siderada como lo que se manifiesta
y la sustancia* es la rn&ni.festante
'".MAGNITUD. ··Fr. :craYtdeur, ing. (o la manifestación) en Já materia*
entity. - ·Se designa con el término (o el sentido).
magnitud. ese ·«hayi> cuya existencia 2. El tener en cuenta ·únicamen."
semiótica se · presU:Poile, · anterior· te Ja anterioridad lógica.::,je la in·
mente al'-- análisis* : que reconocerá manencia respecto de. la :inanifesta·
erf éJ una· unidád discreta, Yi del ción permitió. luego la homologa·
que· sólo se postula la comparabili- ción, un poco avei:ituradÍi, de esta
dad con otras magnltudes del mis- dicotomía con las de m"anifiesto /
mo orden. · laten.te o explicito / imPiicito. La
~UNIDAD. oposición del planb manifiesto "!}.
·.. ...... '· '· del inmanente del Jenguáje ha po.
MANIFESTACióN! -Fr. manifesta- dido aparecer, asf, como;· una for:
tion, ing• .manifestat;on: '.' · · ,.. ·:·.r · mutación hjelmsleviana, asimilable
.•. l. : En -la· .tradición· saussuriána, a Ja ulterior distinción, establecida
más .elaborada.por Hjelmsiev, el tér· por los geñerativistas, entre las es·
nrlno · man1festaclóIÍ; ·integrado. en tructuras de superficie y lS.s estrucw
la dicotomía. manffe'stación / inma- t:Uras profundas.
nencia, serví3. en Primera línea para . 3. No hay, sin embargo"; nada de
hacer resaltar el de inmanencia. El eso, pues la manifestación concebi·
principio -de _inmanencia*, esencial da como un. hacer·Preserite la for-
251 MANrFESTACION • MANIPUl.ACl<lN

rna* en la sustancia" presupone, tonces las estructuras inmanentes


como condición previa, la semiosis* monoplanas con ayuda de un enea·
(o acto semiótico) que conjuga las denamiento de signos biplanos (o
dos formas de la expresión* ·y del de símbolos interpretables). Asimis-
contenido* antes, por así decirlo, de mo, el distingo entre discurso abs-
su realización material. La manif~ tracto y discurso figurativo puede
tación es, pues, y ante todo, un establecerse, ·teniendo en cuenta la
formar el nivel de los signos*, o interrupción (seguida de la manifes-
sí se quiere (y trivialmente), un tación) del recorrido generativo en
postular el plano de la expresión dos momentos· distintos del proceso
durante la producción del enuncia- de producción.
do* e, inversamente, un atribuir el 5. En e! :··.;:·.::o de las modalida·
plano del contenido al momento de des vericijctorias*, el esquema de la
su lectura. El análisis inmanente de manlfe:staclón es el de· parecer / no-
una semiótica es, entonces, el estu- parecer en opOsición (y complemen·
dio de cada uno de los dos planos tariedad} con el esquema de inma·
del lenguaje tomados por separa- nencia (ser / no·ser),, sin que, por
do. . otra parte, estas denominaciones
4. De ello resulta que las· dos impliquen, por ello, una toma de ·
parejas oposicionales inmanencia / postura ontol9gica. ·
ma.nifestacidn y profundidad / ·SU· ---)- INMANENCIA, PROFiJNDA. (estruc-
perficie no son ni homologables ni tura -), SUPERFICIB (estructura de
susceptibles de ser superpuestas. -), VERTDICTORI¡\S (modalidades -).
Los diferentes niveles* de profun-
didad que pueden distinguirse son MANIPULA.CióN. Fr. manipula·
las articulaciones* de la estructura tion, ing. maniputation,
inmanente de cada uno de los dos l. A diferencia de la operación*
planos del lenguaje · (e:i:.presión y (en cuanto acción del hombre ·sobre
contenido) tomados separadamente las cosas), la matiipulaclón se carac-
y que jalonan su recorrido genera- teriza por Se:r una acción del hom· 1
tivo*; la manifestación es, por el bre sobre otros · hombres para ha·
contrario, una, incidencia, u.ria inte- cerles ejecutar un programa dado:
rrupción y una desviación que obli- en el primer caso, se trata de ua~,
gan a cualquier instancia de este «hacer·ser~; en el .segundo, de un~.
recorrido a constituirse en ·un pla- "'hacer·hacer"; estas dos formas de~·
no de signos. Empleando una mala actividad,· de las cuales una se ins·
metáfora, es algo así como una in- cribe, en gi-an parte, en la dimen-
terrupción voluntaria del embarazo. sión pragmática* y· Ja otra en la
Cuando el lingüista analiza las es. dimensión cognoscitiva, coITespon·
tructuras profundas y quiere expli- den, así, a estructuras modales de
carlas mediante un sistema de re- tipo factiÍivO"'. Proyectada en el
presentación* cualquiera, detiene, cuadro* semiótico, 13. manipulación,
fija, en un momento dado,· el re- en cuanto hacer-hacer, da lugar a
corrido narrativo y manifiesta en- cuatro posibilidade.<>:
MANIPULAC!óN 252
. . .. . te el saber*: en la dimehsión cog-·
· : luu:t:r-hacer\ ~J!I" no ~
noscitiva*;"'-le hará entonces saber
.. ·· ·. <.~~t~~.~~~~'.¡\'~.~m~d-~-~) .:· lo .que él piensa de su cOmpetencia
· no hacer no hactir ' no hacer·haier · modal en forma de juicios · poSiti-
(dejar h~} · (llo-intcrvendón) vos o negativos. Así PU.f<S, la per.
suasión según el poder caracteriza
· 2. En cuanto configuración* dis- a la tentación (donde se propone
cursiva, la manipulac~ón es subten- i1n objeto de valor positivo) y a la
dida a la vez por úna estnictura* intimidación (que ofrece un don ne-
contractual .y · una .estructura mo- gativo); la persuasión .· .. según el
dal • .Se trata, en efecto, de una saber es propia de la ptovocación
comunicación* (destinada a hacer- (con un juicio negativo:·,. «Eres in-
saber) en l~ ·qUe··ei 'destinador-ma- capaz de..-..) y de la seducCjón (que
nipulador impulsa 'al destinatario- manifiesta un juicio positivo).
Snanipulado hacia una posición . de · b) El manipulado es ;impulsado
carencia de libertad (no podei 'nO a ejercei' correlativamente un hacer.
hacer), hasta verse obligado éste a interpretativo y a elegir ··necesaria~
aceptar el con~rato propu~sto.; Lo mente entre dos imágenes de su
que·está, pues, -en-juego;· a primera competencia -positiva, ~n eJ caso
vista, es la transfonnación de la de la seducción;, negatiVa, en la
competencia* modal· del destinata- provocación-, . si 'se trata de una
rio - sujeto: si éste, por ejemp!O, le manipulación seg(¡n el saber; o bien
\lne al no poder hacer un deber- entre dos objetos de valÓr -posi~
hacer, estaremos ante Ja provoca- tivo, en la ·tentación; negativo, en
ción o ante· la intini.idación;· si le la intimidación-, si. la .inanipula-
une un querer - hacer entonces se ción se da sobre el po9er. (Bi~n .
tratará, más bien, de seduccióil o entendido que tal tipología elemen·
de tentación. ' . · . · · . tal de las formas de' mariipulación
· 3. Situada síntagmáticamente ·en- no es sino provisorla: esboza, ·al
tre el querer del. destinador* y Ja menos, un eje· de investií:áción.)
realización efectiva · por parte -del 4. En el nivel de la competencia
destinatario-sujeto ·¿el , programa'* modal del destinatario, si se tiene
narrativo (propuesto Por el mani- en cuenta tan sólo la modalidad
pulador), . la . man,ip~Iacióri . actúa .del poder-hacer, se preVén cuatro
sobre·.· la persuasión, .articulando, posiciones:
así, el hacer peZ.Suasivo* · del des-
podU·h'acer: poder no hacir ·
tinador y el .hacer ~terpr.etativo* · · (libertad) ~(indCpendencia)
del destinatario. .. ,
... a)\ El manipulador~ puede ejercer.
su hácer: persuasivo .apoyándose
no pod~··no-ha;erAno·~~der-hac~r
(obediencia) · (~poteDcla)
sobre Ja modalidad "del peder*: . en ,..
la dimensión: pragmática*, propon- Partiendo de esta -Jexitalización·
drá entonces ·al-manipulado objetos -indicada entre paréntesis- apro-
positivos (valores culturales) o ne- ximativa de estructuras "modales,
gativos (amen.azas)¡ en· otros casos, puede proponerse la denOminación
persuadirá af destinatario median- (en nuestro universo soci_ocultural)
MANIPULAClóN ·MARCA
de unas especies de sub-códigos de ción está en sus comienzos, puede
honor que instalaría, de acuerdo preverse, sin embargo, transpcnién~
con lo dicho, la manipulación (des· dala del plano de los relatos al de
de el punto de vista del destinata- las prácticas* semióticas, la elabo-
rio-sujeto}: códigos de la «sebera· ración de una auténtica semiótica
nía» (libertad + independencia), de d.e la mantpuJacJón. (correlativa a
Ja «sumisión» (obediencia + impo- una semiótica de Ia sanción y a una
tencia), del «orgullo:.- (libertad + semiótica de la acción), de la que
obediencia) ·y de la «humildad» (in· se sabe, al menos, el importante
.dependencia + impotencia). La ac- lugar que ocupa en las relaciones
ción que el destinatario.manipulado humanas. Dicha semiótica deberá
realizará, tras la manipulación del poder constituirse a partir del re-
destinador, resulta entonces para corrido narrativo del Destinador*
él un simple programa* narrativo inicial, y tener en cuenta no sola-
de uso, siendo su programa narra- mente la manipulación del sujeto
tivo de base la conjunción con el -de la que acabamos de mencionar
honor (en el caso de una manipu- algunas formas posibles-, sino tam-
lación en el plano del saber) o con bién la del anti-sujeto (con la es-
un objetivo de valor dado (si Ja trategia del ardid que· permite, por
manipulación se apoya en el poder). ejemplo, las operaciones de q;tecu·
5. En cuanto hacer-hacer, Ja ma· peración>>, de fl:infiltración», etc.).
nipulación parece tener que inscri- ~ MODALIDAD, FACTITIVIDAD, · PERSUA•
birse como uno de los componentes srvo (hacer -); NARru.nvo (esque-
esenciales del esquema narrativo* ma -), NAlUlA.nvo (recorrido -).
canónico. Del sistema de interca.ro·
bio* o, más exactarnente, del con· MARCA. Fr. marque; ing. mark.
trato* que se registra, se hace cargo, l. En su sentido más general, la
por as{ decirlo, a un nivel jerár- nt.al:'C8. es la inscripción de un ele-
quicamente superior, .la estructura mento* Suplementario heterogéneo
de la manipulación: en este caso, :;obre (o dentro de) una unidad o
en efecto, la relación entre Destina· un conjunto, y sirve de signo de
dor y Destinatario no es de igual· reconocimiento*. En esta acepción,
dad (como en la simple operación se hablará, por ejemplo, de las
de intercambio que supone dos su· marcas de la enunciación* en el·
jetos de competencias comparables), enunciado*.
sino de superior a inferior; por 2. En lingüística, la oposición
otra parte, la manipulación realiza· marcado / no-marcado .se aprove-
da por el Destinador apelará a la cha en gran medida. La fonología
sanción* del Destinador-juez:; am· emplea el concepto de marca para
bas operaciones se sitúan ·en la di· distinguir las unidades, segím que
mensión cognoscitiva (por oposición estén caracterizadas por la presen-
a la performance* del destillatario-. cia* o la ausencia* de un rasgo dis-
sujeto realizada en el plano prag- tintivo* (siendo b. sonora y p no
mático). sonora, se dirá, desde este punto
1
6. Aun cuando, como se ha hecho de vista, que b está marcada y p
·notar, el análisis de la manipula· no-marcada); la marca de correla~
MARCA • MENSAJE '

clón ·será aquella ·que peimita dis· vez a· los dos amanifes'i,antes,. dcl
tingllir · varios ' paris de fonemas* plano de la expresión* .Y. del plano
(la Serle -sonora bi -d, g, v,; z, que del contenido*. Su preoCupacíóri de
se opone a ·la serle no-sonora· p, -t, un no-compromiso me(afisico es,
k, =t, s)/-En · sintaxis··'frásica, la pues, evidente: los semióticos pue~
marca se utiliza también extehsa· den escoger a su antojo. !.tna semió-
mente pa-ri ··el 'esh1pi~, de· ciertas tica «materialista11 o un.a «idealis-
categorías* gramaticales, tales como ta>.
el -género («labradÓr11, no-marcado; ~ SENTIOO, SUSTANCIA.
«labradora"" marcado) o el nómero
(el singular··es no:marcado, el piu~ MATRIZ. Fr. ni.atrice,: ing. ma-
ral es marcado). ' ·· ".. trix. - En forma de reétángulo di-
· 3~· ·Siguiendo· a V. Propp ·en ··el vidido en columnas y eif. hileras, ia
análisis narrativo di:: ·los discursos, matriz es uno de los posibles mó-
se entiende' por inarca un signo dos existentes para Ia .representa-
material ·-del tipo· de objeto, heri· ción* de los datos del análisis dé
da,: étc.o.;...;. que· atfis'tígua ·a los_. ojos tipo taxonómico*; compatable. a!
del Destinador · qtle :la prueba deci~ árbol* o a los paréntesi~*·
siva*, · cum¡)lida bajg el modo del
secreto*;·. ha· sido efectivatnente re- MENSAJE. Fr. message~ ing. ntes·
alizada por· el héroe*: ··desde este sage. . . · ,.
punto de viSta; el :reconocimiento* l. En la teoría de 1.ii informa-
presupone,· en el esquema narrati· ción*, el mensaje, transmitido d'e
vo*,' la "atribución de· una marca un emisor* a un receptQr* median-
que permite pasar del secreto a la te un canal*, es tma seCuencia de
revelación de ·la ,.'Verdad*. En ·cuan· señales* organizada confOrme a la:S
to signo de· .feconociiniento. Ja inar·
1
reglas de un código*: ·presupone,
ca se inscribe, pues; sobre la · di· así pues, operaciones de codific.~,
mensi6n 'cognoscitiva* '·y pone· en· ción* y· de descodificaci!5;n*. En el
· jue'.go las· modalidades veridicto-- campo restringido de Ia·,:·comunica·
rias'*: · en efecto, ¡¡{marea ·es alo ción lingüística, por ejemplo, el
que parece» en' la posición verldic- mensaje corresponderá al enuncia~
totia del secreto (ser + no-parecer) do*, considerado sólo deSde el pun-
y constituye la condición necesaria to de vista del planO de- la expre-
de Ja transformación del secreto sión* (o del significante~). con ex-
en verdad. clusión de los contenidos vertidos.
~ RECONOCIMIENTO. · · ·2. En el esquema de la .Comunica'.:.
•. f. ;J ·'. ción de seis funciones .:,propuesto
···MATERIA. Fr. matiAre, ing. 'pur~ por R. Jakobson, la diC:otomfa c6-
port.··- Para · desigri?r el mat~riai digo / mensaje puede ser conside·
primero gracias al cual una semió- rada <!Orno una reinterpretación .de
tica ·~ cuanto fOrma* inmanen• Ja oposición saussuriana· · lengua ·¡
te- ·se encuentra _manifestada, L. habla; el mensaje apaiece enton-
Hjelmslev emplea in!iiferenteroente ces como producto del código (sin
los· términos' materia·. o sentido (en que el proceso de prodticción sea
inglés: purport), aplicándolos a la por eso tenido en cuenta) ..
255 MENSAJE-METAFORA

3; La situación del mensaje, como vista} cuya legibilidad resulta siem·


hic et nunc del acto* del lenguaje, pre equivoca aun cuando ella esté
puede reformularse en términos de garantizada por el recorrido clig..
enunciación*: en tal caso,· el men· cursivo en el que Se inscribe (los
saje se convierte en sip.ónimo ·de semas contextuales"', al integrarla,
enunciado y, entonces, incluye al la constituyen en sentema"'). El le- 1
significante y al significado*. xema metafóric.o se presenta conio
~ COMUNICACIÓN. una virtualidad de lecturas* múl·
tiples, pero suspcñ.didas por la dis·
MENTIRA. Fr. mensonge1 · ing. ciplina discursiva, provocando, sin
embargo, un efecto de sentido de
f:
lie. - En el cuadro* semiótico de
}as· modalidades verldictorias, se o:rique-.ta:1> o de o:grosor11 semánticos.
designa con el nombre de mentira (Rosa, puesta en ·lugar de «don·
al término complementario* que cella;I), será leída, evidentemente,
comprende los términos de no-ser como «doncella», mientras desarro-
y de parecer situados en la deíxis* lla por un instante las virtualidades
negativa.· de perfume, cOlor, forma, etc.)
. -+ VERIDICTORIAS {.modá.lidadCs -), 3. Desde el Punto de vista de sus
CUADRO SEMiónaJ. orígenes, la metáfora n0: es, eviden-
temente, una metáfora sino un le··
METAFORA. Fr. 1nétaphore,· ,ing. xema cualquiera; separada de su
metaphor. <·,·'· , : contexto, puede Ser : considerada
1. Propia de· la retórica\· la me· como una figura~·-Cnuclear~) que
táfora designaba una de · las figu• aporta, quizás, en· el momento de
ras* (llamadas tropos*) que <tmtr su transferencia, algunos sernas con·
.difican el sentido de las· palabras~. cernientes a su contexto de origen
Actualmente, este término se em· (pero no el serna contextual vege·
plea en semántica léxica o frásica tal, por ejemplo, en el caso de la
para denominar el resultado de transferencia de f-rosa:1>, aunque
sustituir"' un lexema por otro, sus. este punto es discutible). Este tras-
titución operada sobre un fondo de lado de las figuras lexemáticas ex-
equivalencia."' semántica y. en un plica el que el discurso de recepción
contexto dado. La literatura con· posea la tendencia a desenvolverse
sagrada a la problemática de la en un discurso ·figurativo"'.
metáfora podría· llenar, ella sola, 4. En la Pei'spectiva del recorri· ·
una biblioteca; es ·imposible dar do generativo* del discurso, nos
aquí ni siquiera una reseña sucio· interesa, en piiinera línea, la meta·
ta: nos contentaremos, pues, con forlzaclón (y no la metáfora) en
algunas observaciones relativas a cuanto procedimiento de produc-
sil rpl y a ro funcionamiento en el ción discursiva. R. Jakobson tuvo
marco de la · semiótica discursiva. razón al hacer notar el aspecto pa-
2. Considerada desde el punto radigmátkoff de este procedimiento.
d~ vista de· las «estructuras de re· En efecto, la metaforlzaclón, como
cepción•, ta metáfora aparece como sustitución de un individuo semió--:
un cuerpo extrafl.o (como Una aancr tico por otro, presupone la existen-
malía» en la perspectiva generati· cia de un paradigma de sustitución.
METAFORA · .:.· ·

En este ·sentido, puede dedrse que


1
diante la suspensión de otros semas
todos los sememaS ·de una leOgua de la misma figura) pei-míte Cxpli-
.. que posean, al menos, un serna en . Car, al mismo tiempo, otras «ano•
común (o idéntico) constituyen,. vir- malías• del funcionamiento semán-
tualmente, un Paradigma de tér- tico del enunciado*. El Serna no es
minos sustituibles (ello ·ha permiti- un átomo de sentido sino el tér-
do a F. Rastier afirmar que dicho mino* de una categoría* sémica:
serna iterativo :esta,ba, constituido, por eso~ el procedimieOfo de sus-
por una isotopía*). Sin embargo -y titución -que, en.lugar .tj.e retoma·r.
aquí .. la tesis jakobsoniana resulta el mismo serna, trata de imponer
discutible-, las rel¡3.ciones p'aradig- el sern:a contrario (o contradictorio)
mátiCas sólo tieneri.·. sentido en la perteneciente a la ·misma:· .categoría
medida ·en que ·ellaS1 son justamen- sémica- tiene por · efec~O producir
te creadoras ·de sexi.iido: dicho de una antífrasis* (se dice .~mi mUjer~
otro modo, Creadoras·-por las opo- cita,,., refiriéndose a un·a . persona
siciones ·entre . lo qUe · es retenido mayor; o •reyezuelo•, hablando del
por el discu1'so y lo:que es excluido, más pequeño de los pájaros). Asi·
·en el ámbitó ·de cada .paradigma- mismo, los sernas forman parte de
. de diferencias*, ·to c:ua.1 constituye construcciones hipotácticas* llama-
Ja única manera -de concebir, según das sernernas: sl durante el pro-
·p. de Sa'ussure, la Producción y/o cedimiento de. suStitución, el serna
la aprehensión de la significación*. escogido como operador de ·susti-
Por el contrario, la <!'.función poé- tución es reemplazado pór un serna
'tica:r> jakobsoniana cOnsiste en apro- hipotáctico (o hiperotáctico) perte-
vechar, medianté ·el· procedimiento neciente al mismo semema, el reSul-
de sustitución,· no lqs paradigmas tado de ·. la operación · 'Podrá ser
de las diferencias ·sirio los paradig- llamado metonimia*. (especie de me·
mas de las ·Semejanzas*: es decir, táfora desviallte). l!staS·. no ·son,
consiste, de hecho, ·en la abolición evidentemente, deñniciones «reales•
del sentido (¿no es a esta globaliza- sino indicaciones relativaS a la ma-
ción del ··sentido, a esta -vuelta de nera de formular las resp'Uestas que
la signüicación ·:articulada·· al senti- la semántica puede aportar a Ja
do original,·· a la que tienden · ]as problemática de las figur~$* de re-
«correspondencíasi> baudelerianas?). tórica. ,
Puede. ser que el discurso poético 6. Desde el punto de vista de ·Ja
busque, por sus redundancias, Ja semiótica discursiva. estos procedi·
abolición del sentido; sin einbargo, . mientas · de sustitución . semántica
no lo Jógra ·gracias a,l (o a. causa nos interesan, sobre todo,· en cu~·
del)· eje sintagmáticO* que mantiene to cone'ctores* de ·isotOpías. Si·
la ·significación en buEi,n estado por Ia metáfora funciona norinatmente
medio de la elabol1\ción de · isoto- dentro .del marco de la fntse y pue-
pías :figurativas.:· . . . de ser ·aprehendida· y· de'scrita en
·~·S. . Interpretar.· la ·metaforizaCi6n ese contexto, no llega á ser un
como una'· "sustittici6fl": paradigmáti- hecho discursivo sino cuando es
ca de las 'figuras·.(obtenida, partien· prolongada o «hilada11; : dicho de
do de·' una· base ~érñi~ común, l'll:e- otro modo, cuando. ella. 'cbnstituye·
METAFORA ·METALENGUAJE

1.llUlisotopía figurativa transfrásica. bién de ellas mismas, pues, según


Por eso, los procedimientos de sus- R. Jakobson, poseen una función*
titución paradigmática· a · los que metallngijfsUca. La existencia de
acabamos de pasar revista se pre- multitud de eXpresiones metalin~
sentan come> los enganches de iso. güisticas en las lenguas naturales
topías y, luego, a intervalos regula. plantea, al menos, dos tipos de pro-
res, como los que mantienen o blemas:
·conectan isotopías-, vinculándolas a} de un lado, ei conjunto de
unas a las otras: las isotopías figu- estas expresiones, una vez reuni· ·
rativas· remiten a otras ísotopías das, ¿constituirían un metalengua.
figurativas, o a isotopías temáticas je? Dicho de ·otro modo, ¿posee-
más ·abstractas. Hablando de una rían las carac.tetisticas fundamenta·
isotopta temática considerada como les que definen a una semiótica*?;
isotopía de base, se pueden desig- b) de otro ·lado, la ex.clusión de
nar, según la naturaleza de la co- todas las frases metalingüisticas
nexión -metáfora, antífrasis, me- ¿permitiría obtener , un puro len·
tonimia, etc.-, las otras isotopías guaje de denotación<t?
del discurso como. metafórica, anti- Estas preguntas son difíciles de
frásica, metonímica, etc. responder positivamente. Lo que se 1
-+ FIGURA, ANALOGfA., FOtl'ICA, AHTf· puede afirmar, con cierta seguridad,
¡:'RASIS, ISOTOP!A, CONECIOR DE ISDTO- es el carácter extremadamente com·
P.iAS. plejo de las lenguas naturales, ca- .
paces de contener en· su seno nu- 7+.
METALENGUAJE. Fr: méta[anga.. merosos microuniversos* qil.e·. pro- ~ ,.
ge, ing. metatanguage. - ducen discursos* · diversificados y
1. El . término metalenguaje fue. ·cuasi-autónomos*•. "
introducido por los logiclstas de la 3. Después ·de ·reconocer la ri·
Escuela de Viena {Carnap) y, sobre queza y la importancia de los ele-
·to.do, por los de la Escuela po- mentos metalingüísticos en las len·
laca ante Ja necesidad de o:distin. guas naturales, Z;·S. Harrls postula
guir claramente la lengua.de la que la posibilidad qUe tiene una lengua
· hablamos de la lengua que habla. dada de describirse a sí misma,
mos• (Tarski). El concepto, asf posibilidad que es también la det
creado, fue luego adaptado a las lingüista para construir una gramá-
necesidades de la semiótica por L. tica* corno una meta lengua, median·
Hjelmslev, y a las de la lingüística te materiales situados en la lengua·
por Z. S. Hanis. El morfema «me- objeto. Esta actitud ha dejado,
. ta·• sirve, de este modo, para dis· probablemente, huellas en la lin·
tinguir dos niveles* lingüísticos, el güística norteamericana y explica,
del lenguaje•-.-0bjeto y el del meta. por una parte, una cierta indiferen-
lenguaje. cia de la semántica generativa*, por
2. Basta observar el funciona· ejemplo, hacia la conceptualización'
miento de las lenguas* naturales rigurosa· del lenguaje de descrip·
para darse cuenta de que tienen la ción* que ella misma emplea.
particularidad de poder hablar no 4. :e.. Benvenistc, también, con·
solamente de las «cosas• sino tam~ sidera al metalenguaje como da
SllMIÓTlCA, - 17
·METALENGUAJE 258
lengua de· ·la gramática»; pero las superpuestos, cada iin<t de los cua.
consecuenc_:ias que ~e pu~den ·sacar les -en la tradición de la Escue·
de tal añrrqación .son del todo dife- la polaca- replantea y 'fundamenta
rent~. · Si.. ·. en lugar de construir tres niveles: descriptivo"', metodo-
ex-nihilo nuevas teorías· lingüísticas, lógico"' y epistemológico*; este tu~
se desea asumir plenamente la ·he- timo controla la· elabor<fción de los
rencia de la gramática comparada*, procedimientos* y la construcción
la reflexión sobre las condiciones de de los rnodelos*, mieniras que el
comparabilidad de las· lenguas' -obli· nivel metodológico supervisa, a su
gará entonces · a ·admitir que los vez, el jnstrumental cOnceptual · de
conceptos·· ·gramaticales, empleados la descripción stricto ~ensu. .
para este· .fin, deben trascender ne- 6. Conviene, igualme.fite, mante-
cesariamente .las lenguas naturales; ner alguna distinción e11tre el meta·
-que se comparan; la posibilidad de lenguaje ·y el lenguaje de repre~­
la comparación plantea, por su.lado, tación* del que se vale ...para mani·
el problema de la ·existencia de los festarlo. Es notorio q·ue diversos
universales* del ·:lenguaje. En; este modos de representación -iale·s
caso; el :metalenguaje no puede ser como Ja parentizaciOn*, ·ra represen·
sino. exterior a Ja 'lengua~ objeto; tacióil · en árbol*,·· la reescritura*,
debe concebirse. cOmo ün lenguaje etcétera- son homoiogables, que
artificial·· portador· .de· sus propias sólo son maneras'··diferentes de re-
reglas de construcción. Es Cn este presentar el mismo fenómeno, la
·sentido en- el que se debe interpre- misma «realidad)>, Sucede algo as!
tar el esfuerzo t~ótiCo de L. ·Hjelms· como que estos 'lenguajes de repre·
lev, para· qllieri el·. metalenguaje ·es sentación se encontraran, respecto
una semiótica, es decir, una jerar· del metalenguaje, en una relación
quía*· no de palabras o de frases comparable a la de lcis alfabetos
sino ·de definicioiie"s* susceptibles latino, griego o 3.rabe cOn refereh·
de tomar la forma., del sistema* o cia a la lengua natural. escrita que
del· procesó*· semiótico.· La cons· elios traducen. ·
trucción··j~rárquita.·'culmina ·.en el · 7. La problemátici df:I · metaien·
inventario de los con"ceptos 'liltimos, · guaje, tal como ha sido· resumida
no defirllbJes· (qrie se pueden consi~ aqtú, .,e inscribe en un marco limi·
derar corno . universales hipotéti- tado: sólo concierne a ías lenguas
cos*): una~ axiomática* puedé en· naturales, consideradas ·:como Jen·
tonces cbnstituirse, ·y,:· a partir de guas-objeto, y el metaieOguaje del
ella. la deducción* será· capaz de que se trata es, más o ··menos, co-
producir la ·lingiHstica* ·como un extensivo a la gramática (o a 1a
.lenguaje' formal*, Como ·«pura áJ. teoría gramatical), La ~·Semiótica*,
gebra1>. ·i : •. ;•,: .· en cuanto teoría del cÓ'njunto áe
S. As!·concebido, el ·metalenguaje Jos «sistemas de significaciones»,
se presenta;, entonces;· como un len· no puede sino rebasar este marco.
guaje· de~descfipciÓr{·(en el sentido Es una· constatación q·anal, por
amplio y.neutro· del término). Como ejemplo, decir que las JCnguas na·
tal, puede representarse en forma turaies son capaces de ':hablar no
de varios niveles metaUngUístfcos solamente de sí mismaS·:.sino tam·
259 METALENGUAJE-METATI'.RMINO

bién de otras semióticas (pintura, METASEMIOTICA.. Fr. métasé-


música, etc.). En este caso, ciertas rniotique, ing. meta-semiotics. .-
zonas, dentro de las lenguas' natu. Dentro de las semióticas pluripla·
raJes; deben ser consideradas como nas*, L. Hjelmslev ·distingue las
metalingüísticas · o, más bien, como semióticas connotativas* (no cien-
metasemióticas con relación a las tíficas) de las metasemiótkas (que
semióticas de las que hablan. El son las semióticas científicas); estas
problema de los metalenguaj;::,, :f).C últimas son:
científicos se le plantea a la semió· a) científicas, cuando la semióti-
tica · en concurrencia con el de ta ca.-objeto que ellas tratan es una
elaboración de un metalenguaJé semiótica científica (así, Ja lógica,
ctentffico• (con propósito científico) las matemáticas, la 'lingüística, et·
del que ella tiene necesidad:· El con· cétera): dependen,· entonces, de la
junto de las relaciocies entre la lin- problemática del metalenguaje;
güística y la semiótica general (o b) no científicas,. cuando la se-
semiología*) se encuentra, de este miótica-objeto no es científica: en
modo, nuevamente replanteado. este caso, Hjelmslev habla . de se·
-) NIVEL, REPRESENTACIÓN, SEMIÓTI· miologías*; la metasemiótica no
CA, Ur-fIV"ERSALES .. cientifica corresponde a nuestra de·
finición de Ja semiótica.
METASABER. Fr. métasavoir, ing. 4- SEMIÓTICA, METAUNGUAJE, SEMIO-
meta-knowledge. - A diferencia del LOGtA.
saber que versa sobre el hacer prag-
mático* de un sujeto dado, el meta· METATE.RMINO. Fr. métaterme,
saber es el saber que un sujeto ing. metaternt. - Toda relación*,
tiene del saber de otro sujeto. El tomada como eje* semántico, es
metasaber puede ser transitivo'* constitutiva de una categorla* que
(cuando se trata del saber que S 1 comporta, al menos, dos términos*.
puede tener ·sobre ·el saber de S 2 Sin embargo, la relación, conside-
.relativo al hacer de S 2), o reflexivo* rada en sí misma; puede tomarse
(si se trata del saber de S 1 sobre como término: entonce.<;, al contraer
el saber de S 2 relativo al ha~r prag. una relación con otro término de
mático de 5 1). • la misma naturaleza, se constituye
-:>· SABER. en categoría de nivel jerárquica·
mente superior cuyos términos·re-
METASEMEMA. Fr. métasémCnie, Jaciones serán llamados mctaténni·
ing. metasememe. - A diferencia nos, para diferenciarlos de los tér·
de los sememas*' que comprenden minos simples. Así, las relaciones
una figura* sémica y una base cla· de contrariedad que caracterizan los
semática, los metasememas mani- ejes de los contrarios y de los sub-
fiestan solamente combinaciones* de contrarlos* son metatérmlnos con·
sernas contextuales (cf. a nivel lé· trar:los, constitutivos de una cate·
xico, en espafiol. las conjunciones e:or:ía de contradictorios*. Asimismo,
y, o, los ndverbios relacionales más, Tas relaciones de complementariedad ·
menos, etc.). por las que se definen las deixis*
-+ CONTEXTO. positiva y negativa, son metatér·
METAT!lRMINO -MICROUNIVERSO

.m.lnos cori:tpiem.entarlos constituti· de causa a efecto;· de · .la _parte ·al


vos de una caiegÓría dé contrarios. todo, etc.).
~· CUADRO SEMIÓTICO, CONTRARIE!MD, 2. Interpretada en el marco de
COMPLEMEMTA.RIEDAD. la semántica* discufsiva-, la ·metoni·
'mia es·· el resultado· de un proce-
MltTODO. Fr. méthode; ini." me· dimiento de sustitución,... por el cual
thod. ' '· se reeinplaza, por ejemplo, un se·
l. Se entiende habitualmente pcir. ma* dado por otro seriia hipotác·
método una serie programada de tico* (o híperotáctico), ·pertenecien·
operaciones* encaminadas a obte· do los dos semas en Cuestión al
ner un· resultado conforme a·· 1as mismo semema*. Desdé·;este punto
exigencias de la teoría. En este sen• de vista, puede considerarse a ·la
tido, el ·ténñ.ino método ·es casi si- metonimia como una metáfora irdes·
nónimo: ."del· de próceclimientD'; · los viantell: C. Lévi·Strauss-:hizo notar
métodos~ particulareS, explicitados* que, en el pensamiento mítico, (ltoda
y bien definidos que tienen un valor metáfora· acaba en metonimia»· y
. general,. son asimilables a los pro- que toda ·metonimia es: de natura~
cedimientos de :deScubrimiento*. Ieza metafórica. Su obse.rvación se
2. · La · metodología -o el nivel interpreta fá'cilmente, si'. Se tlene en
metodológico de Ja· .teoriá · semióti· · cuenta el heého de que, en estas
ca_;, consiste, entonces, en el aná· dos figuras retóricas, se produce,
lisis que trata de probar su .co- en efecto, un fenómeno· de sustitu-
herencia* interna, Jos conceptos* ción sobre un fondo de.· equivalen·
operatorios (tales cQmo: elemento, cía* semántica, ·
unidad, clase, categoría, etc.) y los ~ METÁFORA.
protedimientos* (coino la · identifi·
cación, la segmentación, la. sustitu· MICROlJNIVERSO. Fr.· micrcruni-
ción, la generalización, etc.) que han vers, ing. micrcruniverse. - Ante
servido pata producir la represen~ Ja impo.Sibilid.ad con que .se encuen-
tación* semántica de una semió- tra la semántica"" de d_escribir el
tica-objeto. -·La · métodología debe universo semántico en su: totalidad
distinguirse . de Ja epistemología, -en efecto, sería. coextensivo a toda
·destinada: esta última a probar eJ la cultura* de una comunidad etno-
lenguaje-·. metodológico.· · Iingüística-, resulta obligado jntro-
· -+ !EOR!A, sEM16r10., EPrsrm.101.0GtA. ducir el concepto ope~torio* de"'
:~,·
mlcrotmlvers-01 entendiendo por elló
METONIMIA.· Fr. métonimie, ing. un conjunto semántico articulable
metónymy. · en su ·base por una· categoría* se-
1. Tradicionalmeii.te,.· ·ta. figura* mántica (la de vida / muerte, por
de retórica llamada meto~a (q~~ · ejemplo) y sub-articuiablé .. por otras
incluye el · caso más particular de categorías que son hipoD.ímica* -0.
·la sinécdoque) designit el fenómeno hipotácticamente* subordinadas a
lingüístico según el cual una unidad la primera. Este microulliverso es
frásica dada se· sustituye por otra generador de discursos e"n Jos -que
unidad que le está «ligada» {en tma encuentra su expresión ._Sintagmá·
relación de continente a contenido, tica. El concepto de isot9pfa* (en·

261 M l CROUNIVERSO -MITOLOGl'.A f''
tendidO como el haz de categorías dicotomia prdctico / ntitico deja de
comunes al conjunto del discurso) ser operatoria: el nivel. práctico se
; permite establecer la corresponden- identifica con el plano figurativo*
cia entre un microuniverso -y el dis- del discurso, mientras que el nivel
curso que lo toma a su cargo: las mítico corresponde, en 'el recorrido
categorías, constitutivas de ia iso- generativo*, a las organizaciones se-
topía, pueden ser identificadas con mióticas profundas*.
las que articulan taxonómicarnente"' 3. El estado actual de las inves-
el microuniverso. tigaciones en torno á la ti:pología
-:l> UNIVERSO. de los discursos no permite deter-
minar, con certeza,· las caracterís-
·MtTICO (DISCURSO, NIVEL -). ticas propias del 'discurso mítico
Fr. discou.rs,, niveau, mythique, i.ng. considerado como o:género»: Intui-
mythical. . .. . tivamente, parece qtle ese discurso,
1. El calificativo de mítico se a nivel profundo, pone en correla·
aplica a una clase de discurso, per- ción dos categorías ·semánticas re-
teneciente a la etnoliteratura o a lativamente heterogéneas a las que
un nivel discursivo subyacente y trata como si fueran· dos esquemas*
anagógi,co, reconocible durante la de un solo microuníverso*; su sin·
lectura de su nivel práctico (que taxis fundamental consistiría en
se presenta como un relato de ac- afirmar, alternativamente, como ver·
ciones con los actores implicados). <laderos los dos ténninos contra~
2. En su análisis estruct•!ral del rios"' de este universo de discurso.·
mito de Edipo, C. Lévi-Strauss con- -> PRÁCTICO; PROFUNDA (estructura
sidera que Ja lectura del nivel prác- -).
tico (la palabra no es de él) es
horizontal (es decir, sintagmática}, MITOLOG!A. Fr. mythologie, ing.
mientras que la interpretación del mythology.
nivel mítico es vertical, de ·orden 1. Por inltolog{a se entiende el
paradigmático, y permite reconocer, conjunto de los mitos de una co-
por su recurrencia* en el texto de munidad etnolingüfstica dada, o
superficie, una organización de· con- bien una disciplina que busca des-
tenidos* que puede formularse como cribir, analizar y comparar los di·
la correlación* de dos categorías* ferentes mitos.
binarias de sernas* contradictorios* 2. Hasta hace poco, la mitologfa,
ó contrarios*. Esta interpretación en cuanto disciplina, se encontraba
ha permitido ·darse cuenta de Ja atrapada entre las ambiciones des-
existencia, en las Profundidades del mesuradas y apresuradas de una
discurso, de estructuras semióticas mitología universal (Frazer) y la·
. que comprenden una sintaxis* y afirmación de la especificidad de
una semántica* fundamentales; al cada mitología -si no de cada
mismo tiempo, ha hecho perder su mito-, donde las preocupaciones
especificidad al discurso mítico: estéticas no estaban ausentes. La
·estructuras semióticas semejantes constitución de una mitología con
rigen los discursos poéticos, oníri- propósito científico· está vinculada
cos, etc. En función de esto, la a la elaboración de la mi.tología
MITOLOGlA- MODALIDAD · 2112·
comparada' por part~ de G. Dtimé- función táxica, por ·St.!· finalidad
zil (dontln.io indo-europeo) y C. Lévi· transitiva*,· capaz de alca rizar otro
Strauss (dominio ainerindio ),:. - El enunciado tomado como:·bbjeto. .
aProvechamiento 'd6 _Jos instnunen·
· 2. Pos consecuencias se despreri-
tales ·metodológicos,.-- afinados· 1por
den de ·esta situación. Lá primera
las semlótiqi.s nar:rátiva y .'discursi·
se relaciona con la orS:anización
va, eS complementario -Y- tributario
sintáctica "del enunciadó-discurSo.
de las investigaciones comparadas.
Mientras ·que la gramátié:a frásica
considera, no sin razón, cOmo esen-
MODALIDAD. : Fr•. modatité, ing.
modality. ·
cial para el análisis, er-· reconoci-
miento de niveles* de Pertinencia
1; Partiendo de 13. definición tra·
dícional ··.de modalidad entendida interpretados como Jos ,ira.dos (o
como c:lo que modifica el predica· rangos) de derivación*," nosotros
do» de un enunciado, puede conce. pensamos que la existencia de los
birse la tilodallzadón_- como· la pro·· niveles discursivos (o- de. los tipos
ducción de .un enunciado ·llamado de discurso) puede afirmarse en el
modal que sobredetermina . a un plano transfrásico atepd~éndo a la.
enunciado-descriptivo*. La aproxi· recuri"encia* .de las estructuras mo-
· mación inductiva de las modalid~· dales (un nivel modal Sobredeter·
des parece· ·poco convincente:·: los mina a un nivel "descriptivo). Una:
inventarios de los verbos modales nueva jerarquía* sintagnlática pue-
(y, eventualmente, de -las locucio- de entonces postularse c!Omo uno
nes modales.) pueden ser sieihpre de los principios de la of'áanización
discutidas· y varían de una lengua Sintáctica de los enunciados-discur~ ·
natural a otra; es ·razonable consi- so', debido· no solamente ;a Jas es-.
derar -en una primera aproxima- tructuras hipotácticas ql,le unen· a
ción- que las· dos formas de eii.W'l- los enunciados modalizados, sino
ciados"' elementales (declarados ca· también a una tipología de Jas me.
nónicos), o sea: los· enUnciados de dalizacioncs. · ·
hacer'* ·Y los enunci~dos de estado*, 3. La segunda consecuencia. con-
son susceptibles de· encontrarse en cierne, justamente, a Ja tipologla de
la .situación sintácti~ de enunciados las modalizaciones. La perspectiva
descriptivos, o e.."l la hiperotáctica inductiva es poco segura y de una
de enunciados modales. Dicho de generalidad insuficiente; :solamente
otro modo, se puede concebir! a) una aproximación hipoté'tico-deduc."
el hacer mod<ilizando el ser (cf. la tiva tiene alguna esperanza de poner
perfónnance*,· el· acto*); b) el- ser un poco de orden en los inventariciS
modalizando :et ·hace?-. (cf. la com· confusos de las modalidades de las
petencia*); c) el· s~T modalizando . lenguas n~turales. Las 16~cas mo-
el ser (cf. l~s modali<:}ades veridic- . dales, es cferto, son ejemPIO de una·
torias*); y d) el bftCer· modalizando aproximación setriejante:·.; después
el hacer (cf.. las rp.o~alidades facti- de haber reconocido W'l ~mpo m~·
tivas*). Desd'e est'a -perspectiva; el dal problemático, selecciOnan cier":"
predicado modal puede ser defini- tos «valores de verdad•;. -valores
do, de primeras, linicamente por su aléticos o deónticos; por '.ejemplo-
263 '' MODALIDAD
y los plantean axiomáticamente ·co- 4. Está en sus ini.cios la cons-
mo punto de partida de sus deduc· trucción de un modelo que, por
ciones y cálculos. La aproximación interdefiniciOnes sucesivas, permita
semiótica es algo diferente,· porque explicar la estructura modal funda·
se apoya, ante todo, en un número mental, incluyendo · tas diferentes
bastante elevado de análisis con- articulaciones. Los criterios de in-
cretos, situados, además, en el plano terdefinición y clasificación de las
narrativo que trasciende las orga- modalidades deben . ser sintagmáti·
nizaciones discursivas de las len~ cos* y, a la vez, paradigmáticos*;
guas naturales:. estos -estudios han cada modalidad se definirá, por una
·demostrado constantemente·· el rol parte, como Ulla estructura modal
excepcional que tienen, para la or- hipotáctica y, por otra parte¡ como
ganización semiótica de los, .discur- una categoría* susceptible de ser
sos, los valores modales de querer*, representada en el'· cuadro"' semió-
deber•, poder• y saber.., capaces de tico. Así, teniendo en .cuenta el re-
nlodalizar tanto el ser como el corrido tensivo que lleva a la reali·
hacer. De otro lado, la tradición zación, pueden agruparse las mo-
saussutiana, en lingüística (que en dalidades hasta aqUi reconocidas:
filosoña se remonta a .muy lejos), según el siguiente ·diagrama:

MODALIDADES ···VIrtuaÚ~~ntes actualizan tes rcallzantes

exotáctlcas DEBER POl1ER llAtER

endotácticas QUERE!i SABER SER

no desmentida por N. Chomsk"'Y, nos Según la sugerencia de M.. Reng!


ha acostumbrado a ·reflexionar en storf, se designan a,quí como· exo-
términos de modos. de existencia* tácticas a las modalidades capaces
y de niveles de existencia -existen· de entrar en relaciones traslatív~.
da virtual*, actual''. realizada•- (vincular enunciados que tienen s~~..:
que constituyen otras :tantas ins· jetos diferentes), y romo endotác·
tandas que jalonan un·:·recorrldo ticas, a las modalidades simples
-interpretable como una tensión (que vinculan sujetos idénticos o
(G. Guillaume}- que va desde un en sincretismo*).
punto cero hasta Su realización. Así S. Otro criterio clasificatorio, a
pues, la semiótica, aun cuando pre- saber, la naturaleza del enunciado
tenda, a semejanza de la lógica, ins· a modalizar, permite distinguir dos
talar en el centro· de su teoría -por grandes clases de modalizaclones:
una declarac:ión axiomática- una Ias del hacer y las. del ser. Así, la
estructura modal fundamental, man· estructura modal de deber-hacer,
tiene el carácter hipotético de su denominada prescripción*, Se opone,
búsqueda, buscando apoyos empí· por ejemplo, a la de deber·ser, de~
ricos y teóricos para su empresa. nominada necesidad*, pero entre
MODALIDAD -MODELO· . 264

ellas gtiarda:n,: · sfu ·. embarg~,'i· unadelo se emplea en lingüística y, más


afinidad; semántica ,ilTefUtable: en generalniente, en semiótica, donde
el primer .caso, pues, la modalli:a· designa una construcciói;i abstracta
ción, en cúanto rei3ci6n predicati· e hipotética*. a la que s.e.consid,era
va, versa, más' bien, sobre. el sujeto capaz de explicar un conjunto W;i.dó
al que «modaliza•, Yen el segundo, de hechos semióticos.
es el objeto (es decir, el enunciado 2. La construcción d~. los mode~
de estado) el que ,está <t.modaliza~ 'los se realiza en la distancia que
do». ·- Dentro ·de estas dos clases separa el lenguaje-objeto del roeta·
de modalizaciones,. quizá sea posi· lenguaje*. En relación ...con la se-
ble prever no \ soliimente procesos· miótica-objeto, los modelos debe.a
de modalizaclón -formulables como concebirse como representaciones*
series ordenadas de enunciados (una hipotéticas, susceptibles ~e ser con•
modalidad ··actualiiante. presupone. firmadas, invalidadas o ·-falseadas*.
por ejemplo, una ·modalidad .vir-- Por otro lado, dependen'; de Ja teO-
tualizante)-, sino también.de cáicü- ría* semiótica general ;(partir d~
lo de las compatibilidades e incom- la cual son deducidos* Y que con-
patibi!idades en el interior de estas trola su homogeneidad* ·.y su cohe-
serles (et=deber-hacer es compatible renda*: La elaboración Y.1a· utiliza·
con el no poder no hacer, mientras ción. de los modelos se encuentran,
que el querer-hacer no lo es con el así pues, atenazadas eilti'e las e:d-
no saber-hacer). Una estrategia de gencias de la teoría y la necesaria
la modalizaclón es, en estas condi· -· adecuación* al objeto de eonoti-
ciones, concebible y permitiría, eta• miento. Es, por tanto, aqUí, en este
borar una tipología de los sujetos nivel* al que calificamos de meto·
y de los_ objetos (enunciados) mo- · dológico":, en donde se ·-sitúa, en
daliz3.dos. · ' , prindpio, lo esencial del hacer cien-
-). ENUNCIADO, · AJ.tn:CAS (modaJida- tífico*; esta doble Conformidad de
des -),' :DE6Nr!CAS (modalidades -), los modelos es lo que les presta
EPISTEMOLÓGICAS {modalidades-), VI?- su carácter hipotético-deductivo*.
RIOICI'ORIAS (modalidades -} , PACTI- 3. EI concepto de modelo, sin
TIVIDAD, PODER, SABER, DEBER, OUERER, embargo, corre el riesgo· de perder
SINTAXIS NARRA.nYA DE SUPERFICIE.. su consistencia por el uso demasia-
do extendido que de él se hace det
MODELO; Fr. mod~le, ing. m~det. término que lo eXpresa. ·"Así, cuan-
1. En el sentido héredado de la do N~ Chomsky habla de:· tres mo·
tradición clásica, s.é! entiende 'por delos prlneíPa,les en lin&Üístíca (el
modelo lo que es a:pto para'··servir rilode10· de Markov, el ·modelo sin:
de objeto ·de · imita~ión; ~I modelo tagmático y el transformacional),·
puede entonces ser.'. cpnsiderado, ya el ténnino modelo equiV3.Je al de·
sea como u·na forni:~ .ideal preexis- gramática•; asimismo, ¿(íafido Jos
1

t'ente . a tOda: realización más o me- genera ti vistas comparan 'eJ. modeto·.
nos Perfecta; ya eomo·un simulacro stándar o amplificado al -modelo de
construido que permite representar la semántica generativa,: se trata,
un conjunto de fenómenos.· Con rilás bien, del esquema Que repi"e-
esta tiltima acepción ·et término mo- · senta la economía* gene~l de una
MODELQ.MORALIZACION

teoría lingüística y que; por nues-- toda coherencia teórica y, al mismo


tra parte, denominamos recorrido tiempo, de toda significación.
generativo*. Cuando proponemos
considerar como modelo constitu- MONEMA. Fr. moneme, ing. mo-
cional (precisado mediante un de- neme. - A. Martinet ha propuesto
terminante) la estructura* elemental el ténnino monema. para designar
ab quo a partir de la cual pueden el signo* lingüístico ininímo o mor-
deducirse y, progresivamente, ela- fema (en el sentido norteamerica-
borarse los elementos de una mor- no), esto es, la unidad mínima de
fología y de una sintaxis* · funda- la primera articulación (por oposi-
mental, hemos tratado de subrayar ción al fonema*, uri.idad :mínima de
el carácter construido y deductivo la segunda articulación).
de la teoría semiótica,· · ·' -+- MORfPM:..\, ARTICULACIÓ1'f.
4. Si el término modelo, emplea·
do en este sentido muy general, MONOPLANA (SEM!OT!CA ·-).
corresponde, grosso' modo, al con· Fr. sémiotique · monoplane, inglés
cepto hjelmsleviano de descrlpci6n*, rnonoplanar semiotics. - Para L.
los modelos parciales son correla- Hjelmslev las semióticas monopla·
tivamente homologables a los pro. nas -o sistemas de símbolos•-
cedimientos*. La interrogante que. son aquellas que sólo comprenden
se plantea entonces, es la del"«buen un plano"" del lenguaje, o, de que
usol'.- Es evidente que los ·modelos, menos, aquellas en que los dos pla·
considerados como hipótesis sus- nos estarían ligados por tll1a rela-
ceptibles de someterse a la falsa- ción de conformidad.
ción, tienen un rol importante en ~ SEMIÓTICA, CONFORMIDAD.
Ja ·medida en que ellos sustituyen,
poco a poco, a la intuición* del st.r.· MONOSEME.MIA (o MONOSE-'
jeto del hacer científico; pueden, MIA}. Fr. monosétnémie ou mono- ·
igualmente, rendir apreciables ser- sémie, ing. monoseff:emi.a (neol.). _.
vicios si satisfacen la exigencia de La monosememla ·es la caracterís· ·
Ja generalización*, es decir, si están tica de los lexemas* que sólo com-
construidos de tal manera que el prenden un semema* y, eventual·
fenómeno explorado sólo constitu- mente, discursos en los que predo-
ya una variable del modelo capaz minan tales lexemas .. La monose~
de explic.1r todo un · conjunto de memia es Wla de 'las condiciones
fenómenos comparables u opuestos. de un metalenguaje bien construido.
En desquite, la reproducción imita- -+- POLISEMEMIA, METALENGUAJE.
tiva de estos mismos modelos ame- •
naza con transformar ·la búsqueda MORALIZACION. · Fr'. · moralisa·
del saber en una tecnología sin hna- tion, ing. moralization. 1·
ginación; el préstamo y· Ja aplica- 1. Connotación tímica"" de los ac- ·
ción a un mismo objeto de conoci- tantes-sujetos de : la narraci6n, la
miento de métodos heterogéneos* moralización tiene por efecto hci-.
-lo. que es, desafortunadamente, mo1ogar el término euforia con cf·'.·
muy frecuente en la· actualidad- sujeto, y el término disforia con
despojan al proyecto semiótico de el anti-sujeto Qléroe* / traidor*).
MORAL!ZAC!ON • MORFOLOG!A 266
Así concebida,· caracteriza un gran nen las· palabras) o, si -se quiere,.
ntllnero de discursos etnoliterarios. los signos* mínimos (= '.inonemas,
Sin embargo, la ~oralizaciqn pue- en la terminología de A...Martinet)
de desplazarse desde Ja · instancia portadores ·de significacióg, más allá
del texto -hacia· la' del enunciatario*- de los cuales se entra en el análisis
y consistiría entonceS en·· la ,identi· fonológico* •. Desde esta perspectiva,
ficación*- eufórica de este-último con. pueden .distinguirse los-· morfemas
uno de los sujetos. de la narración. léxicos (a menudo llamados lexe-
Este -·tipo,, de·· 'moralÍf:aci~n , parece mas) y los morfemas &r8mattcales
frecuente :en .los discursos sociolite- {llamados, algunas ~eces, grame-·
rarios (novelas policiacas rosa, com· . mas*)._.:
peticiones de-,clclismO, -etc.).· ... ·: ·,·
2. La misma · connotatj6n túñica MORFOLOGlA. Fr•. mq'.phologie, :
puede· versar no ya sOiamente sobre ing, morphology.
las estructuras actant.ial.es ·sino. so- 1. Para ta lingüística 'del siglo .
bre -los coritenidos vertidos yi 'en XIX, ·la morfología y la' -sintaxis:t-
este sentido,; aparece: "como uno ·de eran los dos componentes. de Ia gra· ·
los aSpectos ·del fenómeno más· ge- mática*: la morfología se·.. ocupaba
neral que' es .la axiologización (re· del estudio de e.las .partes del dis·
lati va 'ª las .categorías ·del bien. y curso:&, es decir, de las :unidades ·
del mal, volviendo eUf6rica la deí· con dimensión de palabra'.s.*; la sin·
xis* positiva_ y. disfórica . la deixis taxis estudiaba su organización en

:~:S~~Y ~~s f;::~;~ ~~ P~'::;~:


negativa).
~ 'l1MtcA (c_ategoría .-),·AXIoI.OG!A.
.... ción de tareas ha venido .parecien-
MORFEMA. Fr. morpheme, ing. do satisfactoria, ya que se trataba
·morpheme. ·•· · " · principalmente del estudio de las··
· l. En el sentido ·úadicional; "'el.· lenguas indo-europeas con siste•
inor.fe~a es -la parte, de una pala- mas fie:donales desarrollados, donde·
bra (o de un sintagma) que indica 1as homologaciones entre funciones*
su función* .gramatical (por·-ejem· sintácticas y caracter!sticis morfo-
plo: desinencia, afijo, preposición, J6gicas {predicado y ,verbo, sujeto
caso, etc.); por oposición al seman· y. nominativo, etc.) eran rrecuentes.
tema•, entendido como la· base,_ Jé- Fue el replanteamiento del concep-
xica ·(de .una :palabra);· De fonña . to .de palabra, pero también el des·.
parecida, A•. Martinet reserva el tér-- plaiamiento del interés hacia las
mino _morfema:. para ·.ios elementos lenguas modernas o exótiC.(!.s, lo que
grama¡icales y el de lexema*. para Uevó a la lingüística reciente a eli·
la base léXica: morfenias Y lexemas minar del campo de sus preocupa- ·
constituyen, según él; · la clase · de ciones !i- la motfologia, cO'mo com·
los mOnemas••. -· · '.~· ponente autónomo. · : .
,·i2. -Para· el análisiS· en constitu· · 2. Sin embargo, aunque el tér-
yentes• tnmediato's, "piacticado en mino morfología, pasado P.e moda,
Norteamérica, Jos n)orfemas · son ha ido ·gradualmente desáparec:ien•
las up_idades m:fnima's del .análisis do de la ··literatura lingüística, el
gramatical (u:údad~s que campo- campo probJemátiCo que ~parca no
MORFOLOGlA- MOTIVAC!óN

resulta, por ello, menos actual. Se mente, los que poseea UJJa red re-
trata, ante todo, de las categorías"' lacional particulaimente · densa que
gramaticales, de naturaleza paraclig- bastan con una base morfológica ~:
mática, que se manifiestan sintag- (o taxonómica) reducida: todo, ca..
mática.mente ya sea en los morle· mo si se tratase de un· fenómeno
·roas* gramaticales flexianales, ya en de compensación.
forma de clases constituidas por 4. También, al proponernos- dar
morfemas (preposiciones, conjun- a las estructuras* semióticas · ab
ciones, etc.); también de las cla- qua (punto de partida del recorrido
ses morfológicas (ciertos sintagmas generativo*) la forma de una sin-
combinan, por ejemplo, morfemas taxis* fundamental,: hemos distin·
léxicos y morfemas gramaticales, guido una «morfología• (represen·
dejando vislumbrar sintagmas·· de tada por el cuadro.; semiótico) y
raíz cero y ·sintagmas de .flexión una ..:sintaxis» elementales: la pri·
cero) que se 'plantean para cons· mera, constituida en red taxonómi·
truir las gramáticas · categoriales. ca, permite las operaciones de la
3. Basta comparar superfi.cialmen· · segunda como otros tantos reque-
te algunas lenguas. europeas (el ruso rimientos efectuados· sobre los tér·
y el inglés o, diacrónicamente, el minos de las categorías de base. El
latín y el franqSs) para reconocer · empleo -arcaizante- del término
la existencia de lo que cabría llamar morfología, lejos de significar un ·
lenguas con predominio morfológi· retorno a las concepciones tradi·
co y de otras, -con predominio sin· cionales, está destinado a subra·
tagmático, y para darse cuenta de yar la .i;realidad morfológica» que
que las mismas categorías grama~ ciertos lingüistas 'de Ia · sintagmáti·
ticales -pueden presentarse· ''unas ca quieren ignorar: (hablando, por
veces en forma de flexiones casua- ejemplo,· de cialfabetos» y no de
les, otras veces ·como···morfemas taxonomías). ~
gramaticales independientes,.·o· rea• S. Hay que señalar, con fines úti·
lizarse «prosódicamente,. mediante les, que el .térmirio «morfología»,
un orden* obligatorio de' las pala- empleado por V.· Propp, lo· es en
bras: todos estos modos de presen· un sentido botánico' y no lingüísti·
cia sintagmática son fenómenos de co: su descripción del cuento ·mara-
superficie, que explicitan··las ·cate- villoso ruso, en realidad compren·
gorías gramaticales;- las cuales ma- de de <1roorfologfa»·- sólo un paquete
nifiestan el lado paradigmático del de «dramatis personae» (que al in·
lenguaje. Es interesante compro- terpretarlo, Jo hemos articulado en'
bar,' en relación con esto; que los estructura actancial).
lenguajes artificiales (documentales, ~ CATEGORfA, SINTAXIS.
por ejemplo) pueden repartirse,
desde el punto de vista de su cons~
'
MOTIVACION. Fr. motivation, ing.
trucción, en dos grandes clases: los motiva.tion.
que constan de una «morfologfall> l. En la teoría saussurlana, se
desarrollada, que no tienen necesi· afinna el carácter arbitrario* del
dad sino de un pequeño número de signo (es decir, de la relación entre
relaciones · sintácticas, e, ·inversa· el signiftcan~e* y: el significado*), · ·
MOTIVAClóN·.' · ;,'-· ·'i!''1 ·

negándOse al··mismo tiemp0· su·ca- cas· (/i/ vs* /al), -·Lo'"que Je inte-
rácter motivado.: La ópoSición¡ 'iasf resa al semiótico· no· es :resolver el
formulada, remonta.. en ,última:· ins- problema del origen de :las lenguas
tancia, al problemá · del ·origen de naturalés sino detemiin:ar, con la
las Iengtlas~.; natUr.9.Ies···cuya elabo- mayor precisión posible, los roles
ración se expliCaríá~ según ciertos respectivos de la analogía y de la
filósOfos; por· la «imitación· de Jos· forma ·semiótica en la economía de
sonidos de , la naturaleza; y cuyas los sistemas semióticos. ·;
onomatopeyas ·consti,tUirlari:-los tes- 2. En ·las observacio·rieS prece·
timonios de ello en: ,~·estado actual dentes; Se trata de las 'relaciones
de ·su desenvolvfrníe:hto •.La existen- extrínsecas entre Jos· signos y la
cia . de las :.-onOmatbpeyas ~·plantea, realidad extra·lingillsl:ica .. Muy clife-:.
· en -efecto,·· el. problema de la -analo- rente eS·eI problema de.Ja motiva·
gía"' entre la· sustaricia*· . sonoi-a de ción considerada como una relación ·
la lengua· y"1os.·nlidos o· gritoS'«na· intrínseca entre el signo y los otroS
turales:i>. 1: Las· interpretaciones·: que elementos ·pertenecientes :·a la mis·
se dan sitúan· a la imitación en· el ma semiótica. Ciertos semantistas
nivel. ·de -la ··peréepci6n (cf, ~quiqui· (Ullmann) llegan, inclus,o, · a clasi·
ríqti!•), ·a· 'bien en el de·iá produc- ficar ·este tipo de motivaCiones en!
. ción ·:sonora (.:icarcajear>);: Sin' em- .a} motivaciones fónicas··(donde po· .
bargo, la,·analogía, Q,üe se -sitúa en nen, sin razón, . las onoitiatopeyas;
el· nivel· de la sustancia, es trascen• pero donde podrían orde~arse, por
dicta. en ·el :momento· de,·la elabora· ejemplo, ·las relaciones '.entre los
ción de la·.forma* lingüística:· así, homófonos, las rima·s complejas):
·el canto: del gaUo,' asumible tpor b) ·motivaciones morfológicas (las
cualquier· sistema fonológico, es re. familias de derivados), y c) moti·
presentado por-.formantes* ·que di· vaciones semánticas (reia"tiones en-
fieren de una lengua a.·.oi:ra;-1. asi- tre· o:sentido prOpio,. y ~sentido fi.
mismo, los morfemas o:mótiVS.dos1>, gurado»).-. Se confunden,: en este
integrados en el sistema de Ja ex- ~caso,· dos cosas diferentes': así cla·
presión*, obedecen· .a las coerciones sificadas, las relaciones sqn relacio-
generales ;·de· las ··transformaciones nes estructurales .o:norma1es,., cons-
diacrónicas* ·Y "pierden su· carácter titutivas de la. semiótica lingüística;
de .onomatopeyas. Má.s · interesante y deben ·ser distinguibles de las que·
es la ·posición de P. Guiraud, por·. el hablante (o la comunidad Jingüís-
ejemplo, quien, por encima de· las ~ca) puede tener. Se trata de un .
imitaciones que· sirven para produ· fenómeno metasemiótico, 4e la acti·
cir morfemas aisiad.oS (onomatope- tud que una sociedad ·tiene hacia
yas), evidencia, la eXistencia de es- ·sus signos; fenórnenÓ que concier 8

tructuras morfo-fonOlógicas, especie ne, por· tanto, a una tipología de


de núcleos figurativo$. de· lexemas las culturas* (cf. Lotmann). La ·mo-
(del tipo •tic• ¡ o: tac.>), capaces de tivaci6n; distinguida dé: la. ~nalogía•
producir familias· enteras de· pala· (cf. § 1), debe verterse en .Ja proble-
bras ·y de· articulatla;S, al mismo · mática de las connotaciori~• socia·
tiempo, a.·nivel ·semántico teniendo les: según Jas cul~. eS posible
en cuenta'. las oposici.qnes .fonológi- reconocer o bien una:...te~dencla a
'
269 MOTIVAClóN - MOTIVO

«naturalizar» lo arbitrario, motiván- das en bloqUcs fljos: especies de


dolo, o bien a o:.culturizar:o lo moti·invariantes capaces de emigrar den-
vado, intelectualizándolo (R. Bar· tro de relatos diferentes de un u.ni·
thes). verso cultural dado o, incluso, más
~ AABITRARIO. allá de los límites de un área cU}.
tura], persistiendo,· a pesar de los
MOTIVO. Fr. motif, ing. moti!. cambios de cont~to y de las signi-
t. Empleado en diversas discipli- ficaciones funcionales secundarias
nas (por ejemplo, en la historia del que las vecindades narrativas pue-
arte, con Panofsky) el concepto de dan conferirle.<>. Así, en el cuento
motivo ha sido particularmente des- popular francés. el motivo «tnatri·
tacado por los estudios de etnoli- monio1> ocupa posiciones y desem·
teratura; éstos lo oponen, general- peña funciones diferentes (pudien·
mente, al concepto· de tipo (de do, por ejemplo, constituir el objeto
cuento), sin que nunca se haya po- de la búsqueda de un programa*
dido dar una definición precisa. de narrativo de base, o por el contra·
ambas nociones. Si el tipo es con- rio, servir de programa narrativo .
cebido como una sucesión de mo- . de uso).
tivos que obedecen a una organi· 3. El motivo aparece como una
zación narrativa y discursiva par- unidad de tipo figurativo* que po-
ticular, el motivo es, entonces, see, pues, un sentido independiente
un elemento constituyente que S. de su significación funcional con
Thompson (conocido, entre otros relación al conjunto del relato en
escritos, por su Motifs ]mi.ex of el que se sitúa. Si se considera a
Folk-Literature) definía, en el mejor la estructura narrativa del relato
de los casos, como «el elemento -con :.:.:s recorridos narrativos*-
más pequeño del cuento, capaz de como una invariante*, los motivos
encontrarse tal cual en la tradición se presentan entonces como varia· ¡
popular:r1: a nivel de la manifesta· bles, •y a la iJJversa: de ahí la posi-
ción, sus límites resultan impreci- bilidad de estudiarlos por si JI'..is-
sos,· pues esta ~unidad,,. puede, en mos, considerándolos como un nivel·
última instancia -como io recono- estructural autónomO y paralelo a~:
cen los mismos folkloristas-1 cons- las articulaciones narrativas. Dentro:.
tituir urf micro-relato perfectamen· de esta perspectiva, pueden asimi·
te autónomo y, entonces, entrar en larse los motivos a las configura·
la clase de los tipos.~ dones* discursivas tanto en lo que
2. A pesar de estas' dificultades, se refiere a su organización interna
cabe preguntarse si el reconocimien· propia (lo mismo en el plano se·
to, Ja descripción y la tipologfa de mántico que en el sintáctico) como
los motivos no constituyen un cam.· en lo relativo a su integración en
po de investigación en el marco una unidad discursiva más amplia.
más general de, la semiótica discur. 4. Los folkloristas no han dejado
siva. Se trataría entonces de pro- de observar el carácter migratorio
ceder, sobre el propio terreno, a de los motivos, tanto de una lite-
delimitar y analizar estas unidades ratura étnica a otra o de uno de
figurativas transfrásicas, constitui- sus relatos a otro, como también,
MOTIVO-MUNDO NATURAL iló
a v~ces. dentZ:o d~ un mismo 'cuen~ vidual. A1 igual que la . categoría
to: en el caSo; por ejemplo, en· :que cultura / natura llamada' a desem.,
el sujeto ·y el. antisujeto son suce· peñar el mismo rol en eJ. universo
sivamente sometidos .a una misma colectivo, la categoría vi44 / muer·
prueba*,. o bien cuando el. mismo ti. está dcsprovjsta de . 'cualquier
motivo se emplea para varios pro- otro vertimiento semánti~O.
gramas ·narrativos de uso, situadoS --,). ·VIDA, UNIVERSO, ESIRt!CTURA.
a niveles de -derivación* diferentes.
De· ahí, qWzá.s, la posibilidad de MUNDO NATURAL. Ff. monde
interpretar, en· ciertos" casos, ·la 11ature1, ing. natur.al woria.
existencia de los motivos por . }a l. Entendemos por m~ndo natu.
recursividad*: desde luego,·. esto 'es ral el ctfenómeno» según e1 cual el
una simple sugerenda· en una pro- universo ::;e presenta at hombre
blemática particularnlente ardua (y como un conjunto de J::ualidades
todavía inexplorada) cuya impor~ sensibles, dotado de ciert'a organi- ·
.tancia no es , rnenoS ·decisiva· para zación que permite designarlo, a
un análisis metódico del nivel dis_; veces, como crmundo. del sentido
cursivo de la teoiía· semiótica*.¡ comtín». Con relación a :'ia estruc-
-..;. CONFICURACI6r-.:. ... tura ..:piofunda> del wüVerso, que
.:,. es de orden físico, químico, bio-
MOVIMIENTO.· Fr. mouvement, lógico, etc., el mundo natural co-
ing. movemerit. · - ·un análisis de rresponde, por así decirlo; a su es-
la localización espacio-temporal qUe tructura crde superficie•; ··por otra
se -efectuara en función no sólo de parte, es una estructura : «discursl.
los en·unciados de estado* sino tam· va», pues· se presenta en ':el marco
bién -de los· de haC:"ei:*, permitiría de la relación sujeto / objeto y es
introducir et· concept-0, de movimJen- el 1.1enundado» construido por el
to: capaz· de ser interpretado como sujeto hurnano y descifrable por él.
el paso de Un espacio a otro~ de Así puei>, el concepto de mundo
un intervald temporal· a otro; el natural que proponemos no preten-
movimiento podría · á.rticuiarse en de sino dar una interpretación se-
. función de la direccionaJidad (mo- miótica más geÍleraI. a las i nociones
vimientos que, desde· Un espacio o de referente*, o de conteX:to* extra-
un tiempo de origen, desembocan lingüístico; que aparecen ~n las teO.
en un espacio o en- un tiempo ·de rías lingüísticas en sentido estricto.
destiñaci6n). '.' · 2. El calificativo de na,tural, que
~ LOCALIZACIÓN f.Sf'.AC!O.T.EMFORAI.. empleamos adrede para sllbrayar el
paralelismo del mundo natural con
· MuERTE. Fi. moTt, ing. death. :..._ las lenguas* naturales, . sirve para
Muerte es el término negativo"' .de. · indicar su precedencia con respec.
la categoría vida / muerte~ conside-· to al individuo: éste se inscribe des-
rada como un hipotétlco-universal" de su nacimiento -y seintegra
y susceptible, por esto, de ·ser·uti- progresivamente con el aprendiza·
tizada como una primera articula- je- en un mundo signifi.C:ante he-
ción del. universo* sem~tieo indi- cho, a la vez, de «naturall!za» y de
271 MUNDO NATURAL
o:cultura•. La naturaleza* no es, 4. El mundo natural, exactamen·
pues, un referente neutro, está fuer: te lo mlsmo que las lenguas natu-
temente culturizada («El hombre rales, no debe ser conSiderado como
que haya crecido sólo, ¿sabría hacer una semiótica particular, sino, más
el amor?n ha sido, hasta no hace bien, como el lugar de elabor.?ción
mucho, el tema de un famoso de- y de ejercicio de muchas semióti-
bate en el que las respuestas del cas. Más aún, suponiendo la e.x.is~
antropólogo y del psicoanalista han tencia de cierto número de propie-
sido negativas) y, a la vez,· relativi- dades comunes a todas estas se-
7,ada (las etnotaxonomías, por ejem- mióticas, podríamos tratarlas carpo
plo, dan "concepciones del mundo» una 1nacrosemiótica. Sería preten-
diferentes). Esto quiere decir que cioso querer esbozal' una clasifica-
el mundo natural es el lugar de ción o hacer, jncluso, una simple
elaboración de una vasta semiótica revisión de las diferentes semióticas
de las culturas*. del mundo natural. No obstante,
· 3. Es evidente que las relaciones puede sugerirse desde ahora una
entre mundos naturales y lenguas primera distinción entre las «visio-
naturales son estrechas: las lenguas nes significativas,. y las <tprácticas
naturales informan, puticularmen- significantes», entre Jas significacio-
te, y categorizan* el mundo exte· nes que hablan del mundo tal como
rior, procediendo a su fragmenta- se presenta y las significaciones que
ción. Sin embargo, seria Una torpeza se refieren al hombre tal como. se
adoptar la actitud ex.trema de afir- comporta y se significa con relación
mar que el mundo natural es un a sí mismo y a los otros. Al primer
<1mundo hablado» y que no existi- grupo pertenecen las etnotaxono-
ría, en cuanto significación, sino por mías, las !!;semióticas de los obje-
aplicársele las categorías lingüís- tosll, la de los procesos <:<naturales11
ticas: la zoosemiótica* proveería (la nube anuncia la lluvia, el mal
fácilmente numerosos contra--cjem- olor señala Ja presencia del diablo,
plos. Bastará sólo notar que, con- etc.) y, finaln1ente, ·pero sólo en,
trariamente a las lenguas naturales parte, la semiótica del espacio* que
-las únicas capaces de explicitar busca· todavía su _cátnino. El segun~
las categorías semánticas abstrac- do grupo estaría constituido, al me•
tas (o los universales}-, las orga- nos, por Jos vastos campos semi6-
nizaciones semióticas reconocidas ticos de la gestualidad*, la proxé-
en el interior del mundo natural mica*, etc., y, de modo general, Por
· están determinadas por el carácter las prácticas* semióticas, que son
implícito de dichas categorías. Por los comportamientos más e· menos
otra parte, y sobre todo, el mundo programados. terminados (a priori
natural es un lenguaje figurativo o inmediatamente después) y este-
cuyas figuras* --'lUe encontramos reotipados de tos hombres. analiza-
en el plano del contenido* de las bles como «discursos• del mundo
lenguas naturales- están hechas de natural.
«cualidades sensibles» del mundo y - t SF.MlónCA, :REFElWITE, CATEGOP.rzÁ·
actúan directamente -sin media- CI($N, CULTURA, UNIVERSO.
ción lingiHstica- sobre el hombre.
,-,. ,.i ·,

.....

. "'. N

NARRADOR / NAllRATARIO. fr. ria) al discurso (en sentido restrin·


narrateur / narrataire, ing. narra· gido), tomando como criterios la
tor' / narratee. -.Cuando- el desti· categoría de la persona :(la no~per~
nador y el destinatario del discurso sona caracteriza a la historia, la
están explícitamente instalados en persona -el «YO» y ~ -~tú»- per-
el enunciado* (como el 11.yo>r. y el tenece al discurso) y, Secundaria-
11.tú»). pueden ser llamados, según mente, Ja particular distribución de
ta terminología de: .G. Genette, na· : los tiemPos verbales. ·
n-ador y' narra.tarlo. Actantes de la · 2. Sin entrar aquí en el debate
enunciación* enunciáda son sujetos, teórico -que pertenece· ·a la pro-
directamente deli;:g2dos, del enun- blemática de la enunci"ación*-, has.
ciadór* y del enunciatario y pueden tará con hacer notar simplemente
encontrarse en sinéretism.o con uno que estaS dos formas de discurso
de los actantes d_el enunciado (o de no e;dsten casi nunca. ·en estado
la narración), coinO por ejemplo, el puro; que una conversac\ón se pro-
sujeto del hacer ptagmático* o el longa casi automáticamente en re-
sujeto cognoscitivo*. lato de cualquier cosa,.. y que el
-+ 'Dl?STINADOR f DESTINATARIO, AC- relato amenaza, e.n todo; momento,
TANTE, DESEMBRAGUE. con desenvolverse ·en diálogo, etc.
De ahí que pueda adOptarse sin
NARRATIVIDAD. ·Fr. narrativité, dificultad el punto de viSta de Ge-
ing. na.rrativi.ty. nette, quien, en lugar de :distinguir
1. A primera ·vista;· puede llaroár- dos clases. independientes de dis~
Sele narrath1dad a tina detennina- cursos, vi:?.,· en estos dos: ·"tipos de
da propiedad que caracteriza a ·cier- organización, dos niveles: ·discursi·
to tipo de <Jiscurso*, ·partiendo de vos autónomos: al «relato» consi-
la cual es posible distinguir Jos dls. derado como lo narrado, opone el
cursos narratlvos de los diseursos <:rdiscurso» (en sentido restringido)
no-narrativos .. 1~a1 es, pcr ejemplo, que define como la· manera de na·
la actitud de !t. l3enveniste que rrar el relato. Apoyándon.os en las
opol?-e e~ relato histórico (o histo- distinciones propuestas :¡)9r Benve-
:m NARRAT!VIDAD

niste y Genette, adoptamos nos- vinculado a vertimientos semánticos


otros una organización relativamen- cada vez más fuertes y a articula-
te cercana: el nivel discursivo per· ciones sintácticas cada vez: más
tenece a la enunciación• mientras finas.
que el nivel narrativo corresponde 4. El reconocimiento de una or·
a lo que puede llamarse enunda- ganización discursiva inmanente (o
do-t, de la narratividad Cn sentido am·.
3. Cuando se examina. superficial- plio) obliga a plantear el problema
mente Jo narrado del discurso,· se de la competencia discursiva (na·
observa que implica, a menudo, re- nativa). Los estudios folklórlcos
latos de eventos, de acciones he- . nos han revelado, desde hace tiem·
roicas o de traición, que se da po, la existencia de formas narra·
en él mucho «ruido y furor»: tivas casi universales, que tras·
los relatos,.considerados como des- cienden, en todo caso, y muy am·
cripciones de acciones encadenadas pliamente, las fro'nteras de las
-relatos folklóricos, míticos, litera- comunidades lingüísticas. Aun no
rios-, figuraron, no lo olvidemos, sierido a menudo nada más que
en el origen de los análisis narra· intuitiva, la consideración de las
tivos (Propp, Dumézil, Lévi-Strauss). formas literarias, de los relatos
Estas diferentes aproximaciones han históri<::os o de •,los discursos reli·
revelado ya, bajo la aparienc~a de giosos, nos muestra que se dan
lo narrado figurativo*, la existencia «géneros~ o <ttiposio de discurso.
de organizaciones más abstractas y Todo esto qu~ere decir que la acti·
más profundas, que comprenden vidad discursiva descansa en un
uDa significación implícita y rigen saber-hacer discursivo que no le va
Ia producción y la lectura de este a la zaga, por ejemplo, al saber-
tipo de discurso. La . narratividad hacer de un, zapatero; dicho de
ha ido apareciendo, pues, progre- otro modo; ha de presuponerse ·
sivamente, como auténtico princi· una competencia* llalT8tiva, si se
pio de la organización de todo dis· quieren e."li:plicar la ptoducción y
curs~ narrativo (identificado, en un lectura de los discursos-ocurren·
primer momento, con Io figurativo) das, competencia que puede ser ·
y no·narrativo. Porque, una de dos: considerada · -un poco metafórica.·
o bien el discurso es una simple mente- como una especie de inte-
concatenación de frases*, y enton- ligencia sintagmática (cuyo modelo
ces el sentido que vehicula se debe de existencia, al modo de la «len·
únicamente a encadenanUentos más gua» saussuriana, sería virtual*).
o menos casuales que exceden la S. El reconocimiento de la com·
competencia de la lingüística (y, petencia narrativa permite plantear
más generalmente, de la seniiótica); más claramente la et1estión funda·
o bien constituye un todo de sig· ment.al de la que dependerá la for·
nificación, un acto de lenguaje con ma general de la teoría semiótica*,
sentido, que , comporta su propia la cuestión de la relación de d"e·
organización, y su carácter más o pendencia entre los dos niveles
menos abstracto o figurativo está antes mencionados -el de las es·

SEMIÓTICA. - 18
NARRATJVIDAD 274
tructuras narrativaS .(o mejOr; sé- conciliar, en el ma~co de im"a teoría
mio-narrativas) y ,.eF_: de las estruc- unificada, de un lado, :ia opcióri
turas dlscursivas- cuya conjunción generativa (que, en su formulación
define el discurso en su totalidad. chomskiana, es sólo una teoría del
Si se considera que las estru.Cturas enunciado*.) y, del "otro/· la teorí:i
discursivas d'ependen de la instan- de la enunciación (o piagmática*
cia de Ja enunciación y que esta norteamericana). La graffiática ge.
instaiicia suprema está dominada nerativa* deja, en efeCto,'-"fuera del
por· el enu'nciador'*, productor. de marco de sus preocupaCiones la
los enunciados narrativos, las es- pI'Oblemática de la enunciación (con·
tructuias serriio-narrativas aparece- siderada «extra· lingüisti6a,,). Los
rán, en este caso, subordinadas a análisis de numerosos :·discursos,
las estructilras discursivas, como el·· efectuados por la ·semiótiCa, susci·
producto lo está al proceso produc- tan sin cesar, en los textoS manipu· ·
tor. Pero puede muY bien. preten- lados, la cuestión del ac;to* -del
derse también. lo contrario· -y· es acto de lenguaje, en partk:ular- y
la actitud que adoptaremos,,:_, vien- de la competencia que piesupone
do en las estructuras narrativas el cumpl_imiento del acto. El pro-
profundas la instancia apta ·para blema de la competencia tY de la
1
explicar el surgimiento y 12. ·. elabo- ·performance discursivas (eh sentido
ración de toda signific.ación (y no estricto) concierne, en nuestro cri·
solam~nte verbal}, capaz, asim.iszµo,
terio, a Ja competencia narrativa
de asumir las perforJ:UfillCes narra- (o semiótica) general: en'.Jugar de
tivas y de articular, igualmente, ,tas estar sometida a u~ trtitamiento
diferentes formas de la competen· «pragmático», los modelos de la
cia discursiva. Estas estructuras competencia pueden y deben ser,
semió.ticas -que ~eguimos llaman· primero, construidos a pai:tir de las
do, a falta de un término más ade· competencias «descritas,, en Jos dis·
cuado, narrativas, o ; mejor aún,
semio-narrativas- son, para· nos-- cursos, para luego poder ser ex-
otros1 el depósito de las formas trapolados con vis.tas a una semió·
significantes fundamentales; ellas tica más general de la acciOn* y de
poseen ·una existencia virtual y co- la manipulación*. ·
rresponden -con un inventario am· 6. En nuestro proyecto.· semióti··
pliado- a la ...-Jengual!:·· de Saussure co, Ja denominada narratívidad ge-
y de Benveniste, leDgÜ.i que se pre- neralizada .-liberada de sit· sentido
supone en tOd.a manifestación dis· restringido Que la vinculaba a tas·
cursiva y qu~ 1 ·al mismo tiempo, formas figurativas de los ·.relatos-
predetennina..las cini'díciones de la se considera como el pruléipio oÍ"·;
"'discursivización• (es .decir, las con· ganizador de todo discurso. Cual·
Ciciones del funcionariliento de Ja quier· semiótica puede ser' tratada
enunclaci6n}. Las estructuras semió- o como sistema*, o como proceso*,
ticas -Uamadás narrativas- rigen, y las estructuras narrativas pueden
a nues.tro parecer, las estructuras definirse como constitutivas del ni;
discursivas. - El envite de esta de- vel profundo* del procesO semió·
cisión es considerable:· se trata de tico.
Zl5 NARRATIVIDAD-NARRATIVO (esquema -)

-> DU:ÍCESIS, ENUNCIACIÓN, GENERA· tivo canónico: la prueba podía ser,


nvo (recorrido -), SINTAXIS FUNDA- entonces, considerada como un sin·
MfilftAL, SINTAXIS NAR:RATIVA DE SUPER• tagma* narrativo recurrente, for-
FICH!. malmente reconocible, en el qüe
sólo el vertimiento semántico ins-
NARRATIVO (ESQUEMA.-). Fr. crito en la consecuencia* permite
schéma narratif, ing. narrative sche- distinguir unas pruebas de otras.
me. Los análisis posteriores y los pro--
l. La reflexión sobre la organi- gresos en la éonstrucdón de la gra-
zación narrativa de los discursos mática narrativa pudieron dismi-
tiene su origen en los análisis que nuir, en consecuencia, la importan·
V. Propp efectuó sobre un cor· cia del rol de la prueba, llegando,
pus de cuentos mai:avillosos rusos. incluso, a no considerarla sino
Mientras que la semiótica soviética como una figura* discursiva de su-
de los años sesenta se dedicó, sobre perficie*; lo que no impide que la
todo, a profundizar en el conoci- sucesión misma de las pruebas, in-
miento de los mecani~mos internos terpretada como un orden de pre~
del funcionamiento de los cuentos suposición lógica invertida (del final
(E. Meletinsky y su equipo). y Jos hacia el comienzo del relato), pa· 1
etnólogos norteamericanos (A. Dun- rezca regida por una intencionali-
des) y franceses (D. Paulme} tra- dad* reconocible a posteriori y.
taban de interpretar el esquema comparable a la que sirve para ex· t.!:
proppiano con miras a su aplica- plicar, en genética, el desarrollo{:"·
ción a los relatos orales de otras del organismo. Si, en la actualidad,
etnias (amerindias y africanas), la las pruebas parecen, más bien, or-
semiótica francesa quiso ver, desde namentaciones figurativas de opera-
el principio, un modelo perfectible ciones lógkas más profundas'*, su
que sirviese de punto de partida emplazamiento, sin embargo, las
para comprender los principios de inscribe en los tres recorridos na-
organización de todos los discursos rrativos* que constituyen la trama
narrativos. La hipótesis, según la de un esquema sintagmático de
cual existen formas universales de amplia generalidad. En efecto, ·el
organización narrativa, ha situado esquema narrativo constituye una
las investigaciones de Propp en el especie de marco formal en el que
centro mismo de los problemas de se inscribe el «sentido de la vida•
la semiótica naciente. con sus tres instancias esenciales:
2. MáS que la sucesión de las 31 la calificación* del sujeto que lo
funciones"' (mediante la cual define introduce en la vida, su .o:realiza-
Propp el relato oral, sin que se ción11* por algo que <thace11 y, final-
vean claros sus principios lógicos mente, Ja «sanción:>)* ·..,-retribución
de disposición), es la iteración de Y, a ia vez, reconocimiento- que·
las tres pruebas" -<.:alificante"', de- garantiza el sentido de sus actos
cisiva* y glorificante*- la que apa· y lo instaura como sujeto según el
rece como la regularidad que, si- ser. Este esquema es lo suficiente-
tuada en e1 eje sintagmático, revela mente general para permitir cual·
la existencia de un esquema narra• quier tipo de variación sobre este
NARRATIVO (esquema ::..¡ 276
asunto: consideradO .. a nivel más 4. Por otra parte, se h.i destaca.
abstracto y descoi:npuesto en reco- do que el relato proppiaÍlo poseía
nidos, ayuda a articular y a hiter- una fuerte articulación espacial y
pretar difere.ntes tiPo$ de activida· que los diferentes espacios corres-
des, tanto cognosCitjVas como prag- pondían a formas narrativas dife-
máticas. ·. · rentes (el espacio e,n que se reaU-·
.3. Otras regularidaQ:es, no ya de zan las pruebas, por ejéinplo, no
orden sintagmático silla paradigmá- es el mismo que el espacio en que
tico,. pueden reconoCérse al exami- es instituido y sancionado el con-
nar el esquema d~>Propp; ellaS trato); mientras que los :actantes*.
pueden ser considefadas, en una mantienen··relaciones espeCÍficas con
primera aproximación:; como siñtag- los espacios de los que ¡.dependen·
mas narrativ·qs dfscontinuos .por·
ser (el sujeto, por ejemplo, :no puedé.
proyecciones ·.de categórlas paradig- realizarse sino en un es:Pacio utó.
máticris sobr~ el eje'· sintagmático. pico* y solitario). Esta arliculaci6n
Pero; mientras que las regularida- espacial del esquema natiativo -fl].
des sintagmáticas intervienen en 1a comienzo, hemos considerado que
recurrencia· de los elementos idén· poseía el est;üuto de sintagma na~.
ticos, las regularidades· paradigmá- rrativo discontinuo- ha dado lug~
ticas Son iteraciones·· de unidades a investigaciones que Se prosiguen
con es.tructuriis o contenidos inver- en dos direcciones: de un- lado, el
tidos. Ocurr~ JO níi!¡mo con ]a or- examen en profundidad de: la orga-
gani:zai::ión contractu4J. ,del' esquema ·nización espacial invita a' conside-
narrativo. Las tres pruebas del su· rar la espaciatizadón* como un.,
jeto se encuadran, por así decido~ · subcomponente relativarnéñte autó- i·
en un nivel jerárquicamente supe. nomo de las estructuras*. ·.discursi-
rlor merced a una estructura con· vas; del otro, el reconocirñiento de
tractual: una vez establecido · el variaciones correlativas a Jos espa-
contrato* entre el · Destinador* y el cios· y a los actantes coi;lduce a
Destinatario-sujeto, ·éste pasa por ver, en las disjunciones* y conjun-
una serie de pruebas para cumplir ciones* sucesivas, un nueYo pr:in-
Jos compromisos asumidos y se _cipio paradigmático de la Organiza·
encuentra, .al final, retribuido Por ci6n narrativa. ·
el propio Destinador que, de este 5. Una última próyecci6n para·
modo, aporta también Su contribu- digmática, quizás la más·. visible,
ción contractual. Mirando más ;de corresponde a la relación :reconoci-
cerca, se observa, no. obstante, que ble entre las dos funciOnes' -proppia-
este establecimiento del contrato nas de «carencia»* y de ~lig:uídación
sucede tras una ruptura del orden de la carencia», que, en· <!~finitiva,
establecido (es· decir;· de un con· permite interpretar el rel<i.to como
trato social iinplícito que acaba de una sucesión de dismintiCfones y
ser transgredido): et" esquema na· mejoramientos (cf. los trabajos de
nativo se presenta, entonces, como C. Bremond). A Primera ,."Vista, se
una serie de estabiecim.ientos, de trata en este caso de tener'.~n cuen·
rupturas, de re· establecimientos, ta no ya la actividad de los·:sujetos,.
etc., de- obligaciones .·.<;ontractuales. sino la. circulac_i6n de los .~bjetos'*
NARRATIVO (esquema -)

de valor (los sujetos de hacer* sólo 7. El recorrido narrativo del su·


aparecen como simples operadores jeto, que parece constituir el nú·
destinados a ejecutar un esquema cleo del esquema · narrativo, está
preestablecido de transferencias de enmarcado, a ambos lados, por una
objetos). El esquema de transferen- instancia trascendente* en la que se
cias de objetos puede reinterpre- asienta el Destinador* encargado de
tarse como una sintaxis de la co- manipular y de sancionar al suje·
municación* entre sujetos, única- to de nivel inmanente*, considera-
mente si se definen los objetos como do como Destinatario. La relación
Jugares de vertimientos de valores entre Destinador y Destinatario es
que son propiedades de los sujetos ambigua: ello obedece, entre otras
de estado* y que los determinan cosas, al principio de Ja comunica-
en su «SCfP. ción que acabamos de mencionar,
6. En esta relectura del esquema y la estructura contractual parece
proppiano, el paso decisivo se da dominar el cof!junto del esquema
mediante el ·reconocimiento de la narrativo: la perforinance del su- .
estructura polémica* subyacente; el jeto corresponde a la ejecución de ·
cuento maravilloso no es solamente las ·exigencias contra'ctuales acepta-
la historia del héroe y sus afanes, das y reclama la sanción como con·
sino también.- y de manera más o trapartida; sin embargo, las refa·
menos oculta, la del traidor*: dos cienes simétricas e ·igualitarias que
recorridos narrativos, el del sujeto se establecen, de este modo, entre
y el del anti-sujeto, se desarrollan De!itinador y Destinatario -y que
en dos direcciones opuestas pero permiten tratarlos, en el cálculo
caracterizadas por el hecho de que sintático, como los sujetos S1 y
ambos sujetos se afanan por un Sr- son, en pa.rte, contradichas por
mismo objeto de valor; de donde la asimetría de sus estatutos res-
se desprende un esquema narrativo pectivos: el Destinador -poco im·
elemental fundado en Ja estrUctura porta que sea el manipulador en-
polémica. Observando más de cerca, cargado de ·iransformar por su
esta estructura conflictiva constitu- cuenta al Destinatario en un sujeto
ye, finalmente, uno de los polos ex· competente, o que sea el juez que
tremos -el otro es la estructura establece el poder justo y el saber
contractual- de la confrontación verdadero- ejerce un hacer facti-
que caracteriza toda comunicación tivo* que lo sitúa en una posición
humana: el intercambio más apa- jerárquicamente superior con res·
cible implica el enfrentamiento de ·11ccto al Destinatario. Pero esto no
dos deseos contrarios y el combate basta para definirlo: el halago, por
se inscribe en el marco de una red ejemplo, en cuanto configuración*
de conVenciones tácitas. El dis· discursiva, instala un sujeto 5 1 que '
curso narrativo aparece, entonces, manipula a 5 2; :pel-o ello no im-
como un lugar de representaciones pide que 5 2 sea. poi- definición, je·.
figurativas de tas diferentes fonnas rárquicamente superior a 5 1• Sin
de la comunicación humana, hecha embargo, más que el poder en ejer-
de tensiones y de retornos al equi· cicio, lo que caracteriza el estatuto
librio. jerárquico del Destinador es el
NARRATIVO (esquema -) ·NARRATIVO (recorrido -) 278

poder preestablecido, y por este que la estrategia"" narr3:¡.iva es la


poder conviene, probablemente, d~ que ordena las · combinaciones . e
finir la instancia trascendente en imbricaciones de los rec.orridos na-
la que. lo hemos inscrito. •, -rrativos; mientras que eJ esquema
.s. Resultado de las generaliza· narrativo es canónico ·en cuant~
clones sucesivas a que da lugar la modelo de referencia con respecto
descripción de Propp, el esquema al cual, las desviaciones, las expan-
·narrativo . .aparece, ,pues, como un siones, las localizáciones estrat~gi­
modelo ideológico" de· referencia que cas pueden ser calculada's. .
estimulará, todavía: por. largo tiem· ~ NARRATIVO (iecorrldo -). NARRA;
po, cUaiquier re~exión sobre Ja na· _TIVIDAD, MANIPULACIÓN¡. S,Ú~CIÓN, PER•
natividad-A:. Consecuentemente, .per· FORMANCE, COMPETENCIA, coNnuro, cQ.
mi te . distinguir tieS : segmentos au· MUNICACI~N.
tónomos de la siniáxis. narrativa:
el recorrido · narrativo del sujeto NARRATlVO (RECORRIDO -);
que perform:a, el del Destinador· Fr. parcaurs narratif, ing:· narrative
manipulador _y . el áel . Destinador· path.
juez, .y,· asimismo, P,ennite también J. Un recorrido narratIVo es una
enfocar con:fiadameníe- los -progre· serie .. hipotáctica"" de programii.s*
sos de una ·semiótica de 13. acción, narrativos (abreviados: Í'.JV), sim;
de una senii6tic3. · de la manipula· ples o complejos, es decir, un en-
ción y de· una semiótica de· la san· cadenamiento· lógico en ·que cada
ción. No ·obstante, sería un error R.N está presupuesto. por,· otro RN
imaginar que la simple concatena· presuponiente..
ción de esos· tres recorridos pro-- · 2. Los RN son unidades sintác-
duce una unidad sintáctici de di- ticas simples, y los actantes"" sin·
mensiones más amplias -pero de tácticos (sujeto de hacer· o de es#
la .misma naturaleza que sus cons- tado, objeto) que entran en su
tituyentes- que sería el esquema · formulación son cualesqtiiera suje·
narrativo. Existe -guardando las tos y objetos; no import~ ·qué seg·
proporciones"-, ·entre el .esquema mento narrativo, reconocible dentro.
narrativo y los recorridos nairati· de un discurso-enunciado,' sea, por
vos encontrados, la misma distancia consiguiente, analizable en RN. Sin
que existe entre las estructuras• ac- embargo, una vez inscritos en un
tanciales · de un enuliciado y · las recorrido narrativo, los sUjetos sill· ·
clases sintagmáticas que ocupan tal tácticos son susceptibles de ser
o cual posición ac'.tandal: así,_ la definidos -para cada uno de Jos
configuración discursiva, identifica- RN integrados- por la p0sici6n que
da como recorrido de:. la manipula- ocupen (o que ocupe el RN del que
ción, puede corresponder a ·1a <ifun- formen parte) en el recorrido y por
ción» ·.. del Destinadói-·maniJ)ulador, la nattiraleza de los objetos de
pero también• se la encontrará en valor* con los que .entre'n en jun· ·
el recorrido del sujeto performante ción*. En . una primera '~proxima­
(las reglas especifica~ de este tipo ción, se le llamará rol actancial* a
de reCursividad* está.U lejos de ha- Ia doble definición del act2nte sin·.
berse elaborado);· .·pOdría decirse táctico: por su posición y por su
'··.
Z79 NARRATIVO (recorrido -)

ser semiótico. La definición de su jeto*. Puede ser definido como un


<eser semiótico» corresponde a su encadenamiento lógico de dos tipos
estatuto de sujeto de estado* (en de programas: el RN modal (llama-
jiµiCión con los valores modales* o do también programa de competen-
los modos de existencia*); en cam- cia*) es lógicamente presupuesto
bio, definirlo por su posición en el por el RN de realiza.ción (llamado
recorrido significa que el rol actan- programa de performance*) y éste
cial. además de estar caracterizado se sitúa en l,i1 dimensión pragmá-
por el último RN realizado y por tica"' o en Ja dimensión cognosci-
el último valor adquirido (o perdi- tiva*. El sujeto funcional, definido
do}, integra el conjunto del recorri- por tal recorrido, se descompondrá
do ya efectuado, que lleva consigo eventualmente en un conjunto 'de
el aumento (o la disminución) de roles actanciales, tales como el su-
su ser. Este doble carácter tiene jeto competente y el sujeto perfor·
por resultado «dinamizari> los ac. mador. A su ve:z, el sujeto campe·
tantes y ofrece la posibilidad de tente estará constituido por una .
medir, a cada momento, el progreso serle acumulativa de roles actan·
narrativo del discurso. ciales que se denominarán, según
3. El recorrido · nanativo com- la Ultima modalidad adquirida, su-
prende, en consecuencia, tantos ro- jeto del querer, del poder, sujeto
les actanciales como RN que lo según el secreto* {no revelado).
constituyen: por eso, el conjunto según la mentira*, etc.; en cuanto
de los roles actancíales de un re- al sujeto perfonnador, puede ser . ·
corrido narrativo puede ser deno· victorioso {realizadCl*) o Vencido,
minado actante o -para distinguir- sujeto modaliiado según el deber-
lo de los actantes sintácticos de querer (con miras a la realización
los RN- actante funcional· (o sin-. de los RN usuales), etc. Lo esencial
tagmático); así definido, el actante -es fácil darse cuenta de ello- no
no es un concepto fijado de una consiste en dotar a todos los ro-
vez: para siempre, sino una virtua- les actanciales con denominaciones
lidad que integra todo un recorri- apropiadas, sino en disponer de un
do narrativo~ instrumento de análisis que pcrmi·,
4. Nos encontramos, de este mo- ta reconocer los sujetos móviles,·
do, en presencia de una jerarquía en progresión narrativa, en lugar
sintáctica en que a cada unidad le de los «caracteres)) o de los «hé- ;
corresponde un tipo actancial defi- roes» de la crítica literaria tradi-
nido: los actantes sintácticos, stric- cional; también, en considerar la
to sensu, son los constituyentes de posibilidad de una semiótica de la
los . programas narrativos, los roles acción*, transponiendo la proble·
actanclales son calculables dentro mática del sujeto de Jos discursos
de los recorridos narrativos, mier~­ verbales hacia las prácticas* semió-
tras que los actantes funcionales ticas sociales.
dependen del esquema narrativo* 6. Considerando sólo la compe-
de conjunto. tencia modal de los sujetos, cabe
5. El recorrido narrativo mejor imaginar -teniendo en cuenta las
conocido actualmente es el del su. cuatro modalidades principales-
NARRATIVO (recorrido -J·NA:rURALEZA

una tipología· de los. sujetos com· formances del sujeto- cu'-io •hacer»
· petentes que se fundarla en: la e!ec· lo tranforma en «estal'-se:Í'JI' reconcr
ción de las modalidades que esta- cldo* y, a la vez, en receP.táculo de
blecen tal o cual recOrrldo modal todos los valores que e~te sujeto·
y, a la· vez, sobre el orden de su está en disposición de ienunciar. ·
adquisición. Tal tipología (y Ja con- Que estos dos Destinado~ puedan
tribución de J ..c. Coquet én este · encontrarse en sincretismó"" en nu.:.
dominio es particular.mente intere- merosos discursos, no cambia en
sante) · debería ser luego relativiza· nada ·la problemática. Transpuestos
da, es decir, considerada como un al nivel de las prácticas"" Semióticas
conjunto de dispositivos, variables sociales, estos dos recoirldos na~.
según las culturas*. (é.uya tipología rrativos autónomos -cuya.aprehen-
Sería facilitada por e5te criterio SU· sión es todavía intuitiva-"". Podrían
pJementario). , : dar lugar a una semiótiCa de la
7. El segmento p.erformaÍ:ivo de manipulación* y a una _semiótica
este recorrido narratjVo se presen· de la sanción*.
ta, por su parte, de. dos modos di- ~ ACTANTE, PROGRAMA-' NA.RRATIVO,
ferentes: o bien da lugar a una NARRATIVO (esquema -).
circulación de los óbjetos ya exis·
tentes,· comprendiendO ·valores* bus· NATURAL (SE/,flóT!CA -). Fr;
cados vertidos (la adquisición de sémiotique naturetze, ing.: natural.
un automóvil,- por. ejernplo, vertida semiotics. - Se entiende~ por se-
en valores tales como ~eVasión:11, mlótlcas naturales los d0s vastos
.ecpotenciall}, o. bien, de manera más conjuntos* significantes (o macro·
compleja, neceslta· _:ª'partir de·· tin semióticos) constituidos pd:i·. el muD.~~
valor buscada;- la construcción del do* naiural y' las Jengu3.S* natu-
objeto· en el ··que el·.valor podría rales.
ser vertido {por ejemplo, la. pre- ~ SEMIÓTICA.
paración de la sopa a.u pistou a
partir del valor gustativo previa· NATURALEZA (o NATURA). Fr.
mente pJant~do)• nature, ing. nature. '
. 8. Se prevén otros.: dos reconi- l. La naturaleza designa, ·por op<r
dos narrativos que, actualmente, sición a lo artificial o a :·10 cons· .
están siendo . reconocidos, sin que truido, Jo dado ya o el es'tado en
por e1lo pueda darse· aquí una· for· que se sitúa el hombre desde su
mutación satisfactoria~_ Se trata de nacimiento:· en este sentidó, se ha·
las dos instancias trascendentes* en blará de lenguas* natUraJes o del
relación con el recorrido del sujeto mundo* natural.
y cuya· función es encuadrarlo: la 2. En el ámbito de la ru;itropolo-
primera es la del destinador* ini· . gía estructural, y particuiarmente
cial, fuente de todos los :valores en el del sistema de Lévi~trauss. ,
y, más particularmente, de los va- la oposición natura / cultur~ es di·
lores modales (capaces -de dotar al fícil de definir en la medid~.{ en que
Destinatario-Sujeto de la competen· está inscrita en contextos · socio-·
cia necesaria); la segunda es· la del culturales diferentes, donde·.-designa
Destina~or final -juez· de lis per- una relación entre lo que _,se con·
281 NATURALEZA-NEGATIVO (-A)

cibe como dependiente de la cul- categoría de transformación* (oon·


tura y lo que se supone pertenecer siderada, a su ve:z, como la formu-
a la naturaleza. Desde esta pers· lación abstracta de la. modalidad*
pectiva, la naturaleza no puede ser factitiva). Por otra pari:e, definida
nunca una especie de .dato primige- como una de las dos funciones del
nio, originario, anterior al hombre, enunciado de hacer*, la negación
sino una naturaleza ya culturizada, rige los enunciados de estado*, ope··
informada por la cultura. Es en randa disjunciones* entre sujetos*'
este sentido en el que hemos toma- y objetos*.
do esta dicotomía*, postulando que 2. Desde el punto de vlsta para·
puede articular el primer vertimien· digmático, la negación se presenta
to elemental* del universo semán- como la operación que establece la
tico colectivo*. relación de contradicción* entre dos
~ CULTURA, UNIVERSO SEMÁNTICO. términos de los que el primero,
obje.to de la conminación negativa,
NECESIDAD. Fr. necessité, inglés se convierte en ausente*, mientras
necessity. que el segundo, su· contradictorio,
l. Según L. Hjelmslev, la nece- adquiere una existencia* in · prae·
sidad es un concepto* no definible, sen tia.. ·
pero, al núsmo tiempo, absoluta- 3. Un gran número de discursos
mente indispensable para definir la narrativos parecen privilegiar la
relación de presuposición*'. Esta operación de negación al conside·
actitud es muy comprensiva desde ril.rla como instauradora de Ia na·
el punto de vista de la lógica, para rración (cf. la transgresión de lo
la que la necesidad forma parte de prohibido* y la instalación de la
los conceptos postulablei¡ por de- carencia* en el relato proppiano).
claración axiomática*. Esto no excluye, evidentemente, la
2. Desde el punto de vista se- existencia de discursos de destruc·
miótico, Ja necesidad puede consi- ción.
derarse como la denominación de -+ ASERCIÓN, CUADRO SEMI6n:CO, SIN•
la estructura modal del deber-ser TAXIS FUNDAMENTAL.
(donde un enunciado modal rige a
un enunciado de estado). Está, pues, NEGATIVO (A-) (TJ!RM!NO, DE1·
en relación de contrariedad con la XIS -). Fr. terme, deixis néga.
imposibilidad*, concebida como el tive, ing. negative. - Comúnmente,
deber no ser. En cuanto concepto para distinguir entre sí a los dos
de Ja lógica, la necesidad es semió- términos* del eje de los contra·
ticamente ambigua, pues abarca rios* -S1 y S2-, se. les denomina
también la estructura modal del no término positivo* y término nega.
poder no ser. tlvo, sin ninguna connotación tími·
~ ALfilICAS (modalidades-), DEBER. ca*. La deixis* a la que pertenece
el término contrario negativo es,
NEGACióN. Fr. négation., ing. ne- correlatiVamente, llamada defxis ne-
gation. gativa: ésta incluye el térn~ino sub-
1. La negación es, junto con la contrario S 1 del que, en este caso,
aserción, uno de los términos de Ja sólo se toma en consideración su
NEGATIVO (·A)· NIVEL 28i
deixis de -Pertenencia Y no .:...por el las .categorías* gramaticales (y no,
hecho de que es el contradictorio* por ejemplo, como un térµiino pai:-
·de S 1- su deixis de otigen. ticular de la categoría d~ género).
--> CUADRO SEMlónCO. .· -? CUADRO SEMIÓTIC:C» coMPLEJ"o (tér-
mino -), nlRMINÓ.
NEUTRALIZACION. Fr. · neutrali-
satio11, ing, neu.traÚiation. ~ Se de- NIVEL .. Fr. niveau, inK: Ievel.
signa con el nombre de neutra.J.b:a.. l. Se entiende por nlv~l un plano
clón a la supresión de la oposición horizontal que presupon·~ la exis.:
distintiva* dentro de una categoría~ tencia de otro plano que·Je es para~
'Semántica, capaz de 'producirse en lelo. Se trata de un· sen1ema* figu-
un 'contexto* ·sintagmático dado, a rativo* abstracto* que:, sirve de
condición, sin 'enibargo, de ' que concepto operatorio ·en :.lingüística
exista un soporte 'categórico que y en semiótica, y que se: identifica
defina la unidad. lingÜística concer-- a menudo, en el uso, coii otras de-
nida. Asf, ·pQr ejeffiplo, en danés, nominaciones vecinas, ui.Ies como
la oposición sonoro / no-sonoro se plano, dimensión, rango¡ etc. - Los.
neutraliza en :final dé palabra, pues difererltes niveles pueden enume·
el mantenimiento. '-de los femas rarse o ~valu~rse a partil-: del plano
oclusivo y déntal, ..~prnunes a Jos horizontal sobre el eje vertical, -ya
fonemas ·d y t, permite reconocer sea en el .. ~entido de alttira, ya eri
-a pesar de · la neutralización- el de pr·"JfundidaP,: en · Cste caso,
una unidad·sOporte. ·llamada ai"chi- se hablará de niveles metallngúfs~
. foneÍna. ·La' neutralización se en- ticos (metasemióticos, m:etatógicos):
cuentra, tanlbién, tanto en el plano en el otro, se distinguirán el nivel
de la expresión com.ó en el del con- de las estructuras profundas* y et
tenido (cf. .xellos:i1, ·que integra a de las estructuras · de Superficie*.
.xMaría» y «Juan,,, tras la neutrali· Toda connotación eufóriCa o disfó-
zación de la categoría del género), rica que se agregue, será' de orden
y puede interpretarse semántica- metafísico o ideológico, y como tal,
mente, por lo genera], como Ja ma· no pertinente en semiótica-.
nifestacíón ·del eje*. semántiCo en 2. En la denominada ling:üístici
lugar de utj.o de los. términos*. · estructural, el concepto ' de nivel
-)' SINCRErISMO, SUSPENSIÓN. está estrictamente definfdo: dado
que una lengua natural 'es una se-
NEUTRO (TllRMINO -). Fr.. ter· miótica* y que toda semi~tica pue•
me neutre, ing. neutYa1 term. -·ne- de describirse como una jerarquía*,
'rivado de la estructura* elemental el nivel (para Benveniste): o el ran·
de Ja significación, el término neu- g9 (para Hjelmslev) está:. constituí- ·
tro se define por la rélación "'y .• : Y• do por unidades derivadá.s de un:
contraída, tras operacione's* sintác· mismo grado, definidas pÓr las re·
ticas anteriores, por los términos laciones que mantienen eritre sí (re·
51 y sl situados en- el eje ·de los .. laCiones distribucionales, según Ben;
subconirarios*. V. .Brendal definió veniste) y con las unidades de nivel
este término corño formando parte superior (relaciones integrativas).
de la red relacional- constitutiva de Así pues, el concepto de ·nivel es
283 NIVEL

fundamental para instalar los pro· en un momento determinado de su


cedimientos de descripción* y entra elaboración; y, al tiempo que per-
también en la definición de perti· miten construcciones más definidas
nencia* semiótica: de no dÍstinguir y formulaciones más precisa.<> de
los niveles de análisis -dada la los niveles de representación toma-
complejidad de las relaciones es· dos separadamente, admiten Ja po-
trncturales de un objeto semióti- sibilidad de reducción o de multi·
co-, ningíin análisis coherente se· plicación eventuales del número de
ría posible. los niveles.
3. La gra.mática generativa* man· S. La teoría semiótica* debe ser
tiene la necesidad de distinguir los considerada, a su vez, como un len·
niveles; de ahí que el concepto de guaje, como _una semiótica particu-
nivel de lo real resulte operatorio*: lar: su .examen y su elaboración no
es el espacio que separa el plano de pueden efectuarse sin el reconoci-
las - estructuras profundas del de miento de los niveles, que se tra-
las estructuras de superficie, y· se tarán por separado. Habrá, pues,
concibe como un recorrido genera· que distinguir el nivel del lengua·
tivo*, jalonado de niveles de repre. je*-objeto (un conjunto* significan-
sentaclón cuyo número no puede te, aprehendido intuitivamente, al
determinarse por adelantado. que se le aplicarán los procedi-
4. La semiótica ha ido acercán· mientos de análisis), el nivel des-
dose progresivamente al reconoci· criptivo* (donde, en forma de re-
miento, gracias a sus análisis de presentación semántica, se encuen·
discursos narrativos, de la existen- tra parafraseado el lenguaje-Objeto),
cia de un tronco semiótico común, el nivel mctod016gico* (donde son
inv::.riante e independiente de sus elaborados los conceptos y proce-
manifestaciones* en las lenguas par- dimientos que · -penníten construir
ticulares (lenguas naturales o se· el nivel de representación) y i:.: nivel
mi6ticas no lingüísticas*): de ahí epistemológico* (donde se prueba
que, en el marco dcJ. recorrido ge- la coherencia* del cuerpo de tos
nerativo* propuesto por nosotros, conceptos y se evalúan Jos proce-
se dé distinción entre el nivel se- dimientos C~ descripción y de des-
miótico (profundo) y el túvel dls· cubrimiento).
curslvo (más superficial). Este tron· 6. En semántica, las considera·
co común es capaz, a su vez, de ciones sobre la naturaleza de los
incluir niveles de profundidad di· sernas* constitutivos de la forma
ferente: así, en el nivel semiótico del contenido* nos han llevado a
se distinguirán el 'Plano de las es- distinguir, en el universo signífi~
tructuras semióticas profundas (sin- cante ( = sistema semiótico consi·
tuis* y semántica* fundamentales) derado como la paradigmática del
y el de las estructuras semióticas contenido), el nivel semio16g!co* y
de superficie (sintaxis y semántica el nivel semlintlco* (en sentido es-
narrativas). Tales distinciones son, tricto ): et nivel semiol6gico está
a Ja vez, hipotéticas* y operato- constituido por unidades mínimas
-- -----
_, __ ,,. ___ ,,,_, __ -• __ ... __._
~-
NIVEL-NO CIENT!FICA (s<I)l. - )

las unidades mítiimas de la expre- objetivo envuelve, a menudo, un


sión, y· es, por tanto, distinto del discurso científico dado; que ·el
nivel semántico cuyas unidades de nivcl referencial permite, por ejem-
contenido són abstract'as* y neceo plo, en el campo literariO, justificar
sarias para el funcionamiento y/o la oposición entre Jo ~-i:"eall) y 'lo
la. construcción de toda semiótica. «ficticio~ (según la verid.icción* in·
El uso reserva, cada vez más, el terna de este tipo de. :discurso):
término «nivel» · para el eje sintag- que el nivel cognoscitivo, en fui,
mático de las seinióticas, pudiendo puede volverse prácticamente inde-
entonces ser reemplazado por el de pendiente en los discursos cognos·
componente*: como·· Ia terminolo· citivos*. ·.'
g:ía, hasta hace POC9 propuesta, no 8. En sociolingüística,·:.se emplea
parece ya . adecuada, reslt¡ta · prefe- la expresión nJveI de Ie°ngua para
rible denominar al· nivel semioló- designar las realizaciones de una
gico «componente figurativo» y hl lengua natural, que varían en fun.
nivel semántico <componente abs- ción de las clases o de . las capas
tracto:i> de la forma del contenido. sociales que la utilizan. ¡.Esta pro-
7. En semiótica discursiva será, blemática depende no de una len·
a veces, útil distin~ir niveles dis· gua en· tanto que semiótica, sinO
cursivos que funcionan ya sea como de un sistema de connotación* SÓ-
niveles en el sentido estructural (al cial: el témtlno «nivel» :introduce,
conjugarse y vincul;irse. entre sí de pues, aquí una confusión suplemen·.
manera orgánica), ya de modo" au- taria; el término registio* parece
tónomo, como los discursos*. La ser preferible.
ilustración más simple la tenemos 9. Hjelmslev había d.e niveles
en la organizacióri de Jos discursos para designar los diferentes aspec-
sostenidos en las ci~:gcias llamadas tos bajo los que una ··sustancia*
humanas; en efecto,.ri:iuy a menudo semiótica (sustancia de la expresión
se observa, en este. caso, la presen• o del cOntenido) puede ser aprehen·
cia de tres niveles -discursivos: un dida con iniras a Ja desc¡;ipción. La:
nivel objetivo que d~scribe los ob- sustancia fónica, por ejemplo, será
jetos del saber y las manipulacio- aprehendida, sucesivamente, e.n el
nes que sufren; un· nivel cognosci· nivel fisiológico (el de Ja articula·
tivo, lógicamente anterior al nivel ción), en el nl\1el ac1istlco (físico)
·objetivo y que le es jerárquicamen· y en el rllvel de la ps!cofislología
te superior; por último, un nivel de la percepción: en este sentido,
referencial que viene ·a soportar y el término instancia* nOs parece.
como a justificar· el discurso obje. preferible al de nivel.
tivo; cada· uno de estos tres niveles 10. Los otros empleos ·del ténni·
es articulable. en dos niveles hipo.o no nivel dependen,. generalmente,
tácticamente · vinculados: uno de de su utilización en la 1~ngua na·
constatación y otro· modal*. Bien tural: ··
entendido que Jo -que 113.mamos
aquí ·.«nivel discursivo,, correspon· NO CIENTXFICA (SEMIÓTICA-).
derá a un discurso éomt>leto. 'Per· Fr. sémiotiou.e non scientifiau.e, in!?.
285 NO ClENTlFICA (sem. -) -NOOLóG!CO

L. HjeJmslev, una semiótica es no semántico puede dividirse en dos


científica cuando no obedece al subconjuntos, tomando como crite-
principio de empirismo*. rio la ca.tegoria exteroceptividad ¡
-7 SEMIÓTICA. interoceptividad. Es ésta una clasi-
ficación paradigmática* que permite
NO-CONFORMIDAD. Fr. non-con· distinguir las categorias figurativas*
formité, ing. non-conformity. - Se de las categorías no figurativas {o
llama no--confonnidad a la relación* abstractas*). t,.~'.
existente entre los dos planos (ex- 2. Esta misma categoría -ex-
presión* y contenido*) de un objeto teroceptividad / intei"oceptividad-
semiótico, cuando éstos poseen ar- puede ser considerada, desde el
ticulaciones* paradigmáticas y/o di- punto de vista sintagmático*, como
visiones* sintagmáticas diferentes. una categoría clasemática*, de ca-
·Permite considerar, enionces, este rácter universal, que permite, por
objeto como una serhiótica bipla- el hecho de su recurrencia, distin-
na* (o semiótica simplemente, según guir entre dos clases ·de discursos
L. Hjelmslev). · (o dos dimensiones de un mismo
~ · CONFORMIDAD, SEMiónCA.
discurso manifestado): así, un dis·
. NO LINGV!STICA (SEM!óTICA curso se .dice que es :áooJógico cuan·
-). Fr. sémiotique non linguistique, do se halla subtendido por el cla·
ing. non scientific semiotics. - Se serna interoceptividad, y cosmológi-
califica, a veces, de no lingü.f.stfcas co*, cuando está dotado del clasema
-por oposición a Ias lenguas* na- exteroceptividad. Sin embargo, l>ara
turales (que, de este modo, se ven .ser teóricamente Satisfactoria, la
favorecidas)- a las semióticas* del dicotomia nool6gico / cosmo16gico
mundo natural (como la <(semiótica parece -en el estado actual de las
de los objctosio, la gestualidad*, la investigaciones semióticas- de es-
proxémica*, etc.). caso rendimiento operatorio*, y la
~ MUNDO NATURAL.
práctica semiótica tiende a susti·
tuirla por la oposición entre Jas
NOMENCLATURA. Fr. nomencta. dimensiones pragmática* y cognos-
ture, ing. nomenc1ature. - La no- citiva* del discurso.
menclatura es el conjunto de tér· 3. Et sigo..iiente ejemplo puede
minos monosemémicos* (o bi-uní· ilustrar la diferencia entre los dos
vacos), forjados artificialmente o conceptos operatorios de no figura-
reducidos a la monosememia, que tivo (o interoceptivo) y de cognos-
sirven para designar los objetos fa- citivo (o noológico): el enunciado
bricados (o toS elementos de estos «un saco sucioio se encuentra situa·
objetos) y forman parte de un so- do en la dimensión pragmática
ciolecto. Y comporta sernas .figurativos; el
,_ rtRMINO; SOCIOLECTO. enunciado «una conciencia sucia»
se jnscrlbe en la diriiensión cognos-:
NOOLóGICO. Fr. noologique, ing. citiva: comprende a la vez sernas
noological. no figurativos (aconciencia111) y figu.
NoOLóGICO • NOTAC!óN SlMBóLICA 286
donde pueden desarrOiiarse tanto Ja estructura* y la norma lingüís-
los discurSos figurativos ·como los ticas y.· contribuye a crear una es·
no figurativos. tiiística de las desviaciones*.
-+.. INlEROCEPTIVIDAD, COSMOLÓGICO, 3. La confusión entre:, la norma
PRAGMÁTICQ, o::>GNoSc.qrvo~.. . sociolingüística (cuyo origen y man.
tenimiento dej>enden d~i ejercicio
NORMA. 'Fr. no~é, · ing. norm. del poder político y/o :euitural) y
1. En sociollngüística~ se entien; las coerclones* semiótic'as (candi·
de por norma un modelo construí· . ción de la participación en las prác·
do partiendo de la observación,· más ticas• semióticas de carácter social)
o menos rigurosa, de los . usos so-- lleva a considerar a las lenguas na.
ciales o individuales de una' lengua* turates -a lo cual ayudan ciertas
natural. La elección de tal o cual ideologías- corno amáQ.uinas de
tipo de usos pani. constituir la nor· castración» o como los ·ínstrumen.
ma Se basa en criterios extialin- tos de un «poder fasciSta», Tales
gü!sticos: lengua · sagrada, lengua - eXcesos metafóricos no pueden se\-
del poder político, prestigio litera- tomados en serio.
rio, e'tc. Este conjunto de usos; co.- 4. La gramática generativa* re·
dificado en
forma ae
reglas* -pres- introduce, en cierto modo, la no·
cripciones y-· prohibiciones.::.... a: las · ción de norma con los criterios de
que se debe confoJ:'lllar la comuni· gramaticalidad* y de aceptabilidad*,
dad Jing.üfstica, toma el nombre de Toda una problemática, que L.
gramática* (deno'minada gramática Hjelmslev ha procurado dilucidar
normativa por los tµ.igüistas del si- analizando los conce~~'J.""··de esque·
glo xrx, por oposición a la gramá- ma*, de norma, de uso* y de acto*
tica descriptiva* ·que· sólo trata de lingüístico, reaparece así bajo la
explicar el. funcio!i.amiento de la envoltura de una .nueva . terminolO:.
lengua, excluyendo toda preocupa· gía. Las apariencias normativas de
ción de6ntica). · la gramática generativa_':,son, ade·
2. La necesidad de. uniformar los más, subrayadas con la .utilización
usos, propia de las sociedades mo- de un metalenguaje* que: opera en
dernas (enseñanza, 'administracióD., términos de reglas: es evidente, por
etcétera), impone a_menudo la elec· tanto, que las reglas se dirigen, en
ción deliberada de una norma Para el caso de la gramática '.normatiVa;
constituir (o afirmar) las lenguas al utilizador de la lengua,. mientras
nacionales: asf aparece la noción que en la gramática generativa se
de Jengu·a estándar a la que se trata destinan al autómata* o,. eventual·
de fundamentar en . criterios .esta· mente, al análisis manual.
dísticos Oo normal se identifica con ~ COERCIÓN, D"ESVIACTÓN, :-ORAMA1'lcA.·
la o:media») o de probabilidad (lo l.IDAD, ACEPTABILIDAD, -RETÓlÚCA.
normal Corresponde a lo que es
esperado en. µn contexto dado). La NOTAC!óN SIMBóLICA. Fr. no-
gramática normativa reaparece de tation symbolique, ing. syl1ibolic no-
_nuevo: evitando el empleo de su tation. - La notación stmbóllea que
t"i:tTHit"~tivt'\ nnP ~P. 'h~ vnf':ltn nP.Vo. AmnlP;:i. "'" fnrm~ r1P ur.:di"1mt'I<: C'nn.
287 NOTAClóN S!MBóLICA-NUDO

tras, abreviaturas iniciales, etc.), un adjunción de semas contextuales*,


conjunto de símbolos, sirve para uno o más sememas•. Los semas*
la representación* visual de las uni· constitutivos del núcleo son a me-
dades constitutivas de un metalen· nudo de orden exteroccptivo"": de·
guaje*. ahí su denominación de figura nu·
-+ SÍMBOLO. cJear.
-:)- llNUNCIAOO, FIGURA.
NO-TERMINADO. Fr. inaccompli,
ing. unaccomplished, - Algunos Jin· NUDO. Fr. nceud, ing. node.
güistas llaman terminado / no-ter· l. En gramática generativa... , nu-
111i11ado a Ia categoría* sémica as- do designa cualquier punto de ra-
pectual perfectivt'dad / in1perfecti- mificación del árbol en cada uno
vidad. de los niveles de derivación*. El
-+ IMPERFECTIVIO,\O, ASPECTUAl.IZA• nudo es, pues, la representación*
CIÓN.
de la relación discriminatoria* entre
NOUMENICO, Fr. n.ouménat, ing. dos constituyentes* inmediatos, re·
naumenal plane. - Heredado de lación que es posible reconocer
la tradición escolástica (reasumida gracias a la contigüidad lineal.
por Kant), el l:'.'.:'.,;ino nouménico 2. L Tesniere define .el nudo
-opuesto a fenoménico*- se em- como el conjunto relacional · cons-
plea, a veces, corno sinónimo de tituido por el término que rige y
ser (en el marco de la modaliza· por todos sus subordinados. <iMi
ción veridictoria* del ser y del pa- viejo amigo,,, por ejemplo, es un
recer): se identifica, así, el plano nudo constituido, de un latlo, por
nouménlco con el plano del ser. <iamigo» que es e! que rige, y del
-+ Ss:R, IN.MANENCIA. otro, por <1mh1 y «Viejo11 que son
los términos subordinados; este
NOCLEO. Fr. 1toyau {ou nu.cleus), nudo e~. a su vez, representado por
ing. kernel, nucleus. un sté1nma (o árboi de tipo dife·
l. Se le llama núcleo, frase o rente).
proposición nuclear, a la unidad 3. La diferencia entre estas dos
lingüística m.fnima constitutiva de definiciones de nudo reside en que,
la fra,ser, o a los elementos •primi· para N. Chomsky, el nudo repre-
tivos,. que la constituyen. Debido senta una relación binaria, funda-
a la tradición (que se remonta a da en la linealidad"' del enunciado,
Aristóteles) y también como idea reconocible en cada nivel por sepa-
preconcebida, se considera, general- rado, mientras que, para Tesniere,
mente, que la estructura'* del enun· es un conjunto de relaciones hipo- '
ciado es binaria*: que está com· tácticas"" de tipo lógico que com·
puesta por un sujeto* y un predi· prende todos los niveles de deriva-
cado*, por un sintagma nominal y ción. Así, el nudo de nudos, que,
un sintagma verbal, por un tópico para Tesniere, lo constituye la fra.
y un comentario, etC. se, corresponde -pero analizada
2. En semántica, designamos co· con criterios "diferentes- a Ja des·
mo núcleo a la parte invariable de cripción* estructural de ésta.
un lexema* que produce, por la .... ,(RJJOL.
o
OBJETIVO. Fr. oiijectif, ing.· 'ob· un carácter taxonómico* pronun.
jective. ciado. ·
l. A veces se oponen los valores.• 3. Se entiende por objetivación
objetivos a los Valores subjetivos*, del textt>, en cierto tipo ··de análisis
en la medida ·e1{·qtiti Iós primeros que sólo pretende la descripción
son c'onside:..~ados có.~ propiedades del enunciado, la'• elhn4iación* de
caccidentales», atribuibles al sujeto*. las categorías*· gramaticales {pers~
por la predicación•, mientras · qúe na, tiempo, espacio) que ...rem.iten a.
los segundos lo serían como «esenw la instancia de la enQ.Uciación*t
dales"'. Tal distinción, heredaáa de marcando por esto la pr<isencia, in-
la filosofía: escolástica, corresponde, directa, del enunciador 4entro del
en ciertas lenguas naturales, a Jos eriunciado.
dos tipos de predicación: en espaw
ñol, con ayuda del verbo ctener» OBJETO. Fr. obiet, ing. object.
en el primer caso, y de la cópula - 1. Se designa con el nbmhre de
ase~. en el segundo. . .· objeto, en el marco O.e l~· reflexión
2. El discurso objetivo sé produ· epistemológica. lo pensado (o per·
ce aprovechando ni máximo los cibido), en tanto en cuanto que
procedimientos de desembragUe*! distinto del acto de pensar (o per·
los del desembrague actancial, que cibir) y del sujeto que 'lo piensa
consiste en la supresión de toda (o que lo percibe). Esta .definición
marca de presencia del sujeto enun· -que no es considerable tomo tal-
ciador* en el enunciado* (tal y basta para poder decir que sólo l~
como· se obtiene por ·el empleo de relación*· entre el sujeto Cognoscen-
Jos sujetos aparentes del tipo •es te y el objeto de. conocimiento los
evidente...·•, y de conceptos abstrae· constituye a éstos como i existentes
tos en pcsición de sujetos frásicos). y entre sí distintos: actitud que .
también los del desembrague tem~ parece del todo conforme·a ta apro~
poral, · que permite a Ja predicación ximación estructural de· la semióti-
operar en un pres~íe atemporal. ca. Es en este sentido en: el que se
Tal discurso posee,· .'generalmente, habla de Jenguaje--objeto O de mag- .
289 OBJETO-OBSERVADOR
nitud* semiótica, a la vez que se sujeto delegado inscrito en el dis-
insiste en la ausencia de toda de- curso: estos sujetos son, pues, tra·
terminación anterior del objeto que tados como objetos en espera de
no sea su relación con el sujeto, sus determinaciones, que pueden
2. · Aprehendido así, el objeto no ser positivas o negativas (si son
es sino una posición formal recono- definidos como desprovistos de atri·
cible tan sólo por sus determina- butos enunciados). Esto puede ser
ciones que, también, son de natu- representado en fonna de un enun·
raleza relacional, pues se construye ciado· de estado* tjue indica la jun-
por el establecimiento de las rela· ción"' (conjunción* o disjunción*)
clones entre: a) él y los otros oD- del sujeto con el objeto. El objeto
jetos, b) él, considerado como un -u objeto de valor- se define, en-
todo, y sus partes, y e) las partes tonces, co'rno el lugar del vertimien· ..
y el. conjunto de relaciones estable- to de los valores* (o de las deter-
cidas precedentemente. Resultado minaciones) con los que el sujeto
de la construcción efectuada por eI está conjunto o disjunto.
sujeto cognoscente, el objeto semió- ~ SUJETO, ENUNCIADO, ACTl\NTF., VA·
ti<::o se reduce, entonces, como dice LOR.
L . .Hjelmsiev, a «Plintos de inter-
sección de esos conjuntos de rela- OBSERVADOR. 1 Fr. observateur,
ciones-», ing. observer. ·
3. El procedimiento de desem- 1. Se Ie IJ"amará observador al
brague* permite proyectar fuera del sujeto cognoscitivo"' delegado· por
sujeto cognoscente (o sujeto de la el enunciador"' e instalado por él
enunciación*) y t1objetiv~ esas re- -merced a los procedimientos de
laciones fundamentales del hombre desembrague"'- en el discurso-enun·
con et mundo, y la semiótica* trata ciado, donde está encargado de
de dar la representación* de ello ejercer el hacer receptivo"' y, even·
en forma de enunciados* constitui- tualmente, el hacer interpretativo*
dos por funciones* (= relaciones) de carácter transitivo* {es decir,
y por actantes"" (sujetos y objetos). que versa sobre Ios otros actantes*
En cuanto actantes, los objetos y los progiarnas"' narrativos, dis-
slntáctlcos deben ser considerados tintos de él mismo o de su propio
como posiciones actanciales, sus- programa).
ceptibles de recibir vertimientos, ya 2. Los modos de presencia del
sea de los proyectos de los sujetos observador enel discurso son varia-
(se h<'lblará, entonces, de obj~tos dos:
de hacer), o bien de sus determina· a) puede· permanecer implícito*,
ciones (objetos de estado), no siendo, entonces, reconocible
4. Los sujetos desembragados e sino gracias al análisis semántico
instalados en el discursa son posi- que revela su presencia dentro de
ciones vacías que sólo reciben sus una configuración"' discursiva. Así,
determinaciones (o sus verthnien· por ejemplo, el evento* se define
tos.., semánticos) tras el hacer* ya como la ·acción* enfocada desde el:
sea del sujeto mismo de la enun· punto de vista del observador. Del
ciaci6n (po1· la predicación*), ya del mismo modo, las categorías as-
Sli.MIÓTICA· - 19
OBSERVADOR - OCURRENCIA

pectuales* se explican sólo por la ampliamente manifestad.O, o vice-


presencia del obseivador· .que se · versa. Esta operación está vincula·
pronuncia implícitámente - sobre el ·aa. a las coerciones impuestas p0r
hacer* del .sujeto -:·en el momento la textualización* lineal .de las es-
de su conversión en·- proceso*; ·. ·tructuras narrativas, Q.úe impide
b) "er obserVa:dor.- entra, a Veces, instalar en el discurso dos progra.
en sincretisino con ·o-tro actante de mas concomitantes. El ocultamien·
la comunicación (el narrador* ·o el to debe distinguirse; no obstante,
narratario) o de la narración: la del fenómeno más general constitui-
estructura de la prQvocaci6n, · por. do por el poner en perspectiva.
ejemplo,· es frecuentemente consi· Mlentras que esto último .:no excluye
derada desde el punto de vista del la manifestación parcial ·ele Jos pro.
manipulado (que ejt;!rce, ·al· mismo gra.mas·correlativos de S1 (que apa·
tiempo, un hacer interpretativo so- rece como el oponente*: ..o anti-su-
bre el programa del manipulador); jetCi ·de· Jos programas -de S 1), la
e) el hacer cogrioscitivo del ob· ocultación, al borrar toda manifes-
serVador puede ser reconocido por tación de superficie*, no··Permite fa.
el sujeto .-observado: un nuevo es· lectura del programa 'correlativo.•
pacio cognoscitivO* se encuentra .salvo que éste pueda.;. deducirse
así -constituido,. capaz de ·.trahsfor· como contradictorio* (o ·contrario'~)
mar (de desviar ó de anular) el del programa manifesÍad9; es decir,
programa prlmitivO del sujeto ob· en cuanto que esté implícitamente
servado. Mattre ·Haucbecorne, cuan- presente en un nivel estructural
do se da· cuenta de que es observa· más profundo*. Un ejer'Qpto claro
do en el momento de recoger un de ocultación es el de los· Dos Ami·
trozo de cuerda (Maupassant), ins-- gas (Maupassant) que permanecen
taura· un nuevo programa narrativo mudos ante el desarrollo. ostentoso
de simulación cognoscitiva al «hacer del programa del oficial prusiano.
como si:& ·buscara ·y eÍJcontrara:pJa. 2. ET ocultamiento -q"ue permite·
ta. Una danza folklórica, instalada leei- el programa implícito como
en la escena como espectáculo, deja contradictorio del progra;na corre·
de ser una comunicación* participa· Ia.tivo explícito*- no debe confun-
tiva del actante colectivo y se trans· dirse con la simple in_lplicitación
forma en ún hacer-ver dirigido al que permite reconstituir los pro·
observador-público. ' gramas anteriores no explicitados,
-')- COGNOSCITIVO, .TEATRAL (semióti- merced a l!l relación de:. Presuposi-·
ca -) • COMUNICACIÓN. ción* lógica que los vincula al pro-
grama manifestado. ·
OCULTAMIEN1'0. Fr. occultation. -'). T1!:RSPF.CTIVA, IMPLfCrri:i~
ing. occuttation. .' · ¡
1. En semiótica ñ.arrativa se· de- OCURRENCIA. Fr. occurrence, ing.:
signa como .. ocultaipiento la expul· occurrence. ..
!~óndefu:::Se~~::e~~1~~~:~~*m:~:
1. La ocurrencia es· 1a". manifes·
taclón* de una magnitud*· semi6Üci
rrati.,ío del sujeto S1, mientras que dentro de otra slntagmá.tica*, o la
el programa correlativo de S 2 es magnitud misma considerada en sU
291 OCURRENCIA· OPERAC!óN

manifestación singular. Este térmi· ridad y en la UJJicidad de su mani~


no es de uso corriente en estadística fcstación, cuando se trata de dís·
lingüística, donde se utiliza como tinguirlo del di-:curso · en cuanto
«Unidad de cuenta» para enumerar clase o como modo de enunciación.
un corpus*; mientras que las «pala- -+ RECUR.RENCIA.
bras», clases de ocurrencias, son
unidades empleadas para contabili· ONOMASIOLOG1A. Fr. onomasio-
zar el vocabulario*. Hay que hacer logie, ing. anomasiolagy (neol.). -
notar, además, que las <>:palabras)), Se le llama onomasiol9gía al proce-
·así definidas, no son las palabras so que, en scmántieá léxica, con-
en sentido corriente, pues las for- siste en partir del significado* («con·
mas verbales «ir:11, «Va», «irla,,, por cepto» o «nociónn) · para estudiar
ejemplo, son otras tantas «pala- su5 manifestaciones en el plano de
bras» en sentido estadístico. los signos*; se opone, generalmente,
2. Una aprox:imación lingüística a semasiología.
(y, más generalmente, semiótica), ~ SEMÁNTICA, SEMASJOLOCfA.
que toma como punto de partida ONOMASTICA. Fr. ono1nastique,
el carácter ocurrendal del plano de ing. onomastics. - Desde el punto
la e1':presi6n* considerado en su ma- de vista de Ja organización interna
teriatié'.'ld y que trata de construir del discurso*, puede considerarse a
unidades* lingüísticas sin recurrir la onomásttca -con sus antropóni-
a un metalenguaje*, pone de mani- mos"', topónimos* y cronónimos*-
fiesto aquí sus límites. t.a reduc· como uno de los subcomponentes
ción* de Ias ocurrencias a clases de la figurativización. Suponiendo
de ocurrencias {las «palabrasi>) ne· que confiere al texto*. el grado de-
cesita instalar procedimientos de seable de reproducción de lo real,
identificación*· o de reconocimiento* el componente onomástico permite
de este nivel más elemental* del un anclaje* histórico orientado a
análisis*: dos ocurrencias no son constituir el simulacro de un refe-
nunca idénticas debido a la singu· rente* externo y a producir el efec·
laridad de la pronunciación o del to de sentido <1realidadn.
grafismo; partiendo del plano 'de la -')o Fl'CURATtVIZAC:róN.
expresión donde están situadas las
apalabras», es imposible -piensen OPERAClóN. Fr. opération., ing.
lo que piensen los distribucionalis· operation.
tas- pasar al plano de los signos* 1. En sentido general. se le da
donde se encuentran las palabras* el nombre de operación a la des·
(que son signos biplanos*): así, Ja cripción* que cumple las condicio-
construcción de Ja palabra «ir~. a nes de la cientificidad* (a lo que
partir del conjunto de sus variantes· L. Hjelmslev llama et principio de
palabras, necesita poner en juego empirismo*). Una serie ordenada de
toda la morfología deJ español. operaciones se denomina procedí·
3. El término ocurrencia debe re- miento.
servarse para designar, por ejem· 2. En un sentido más restringido,
plo, como di~curso·ocuttencia, el entendemos por operación -a nivel
disctirso considerado en Ja singula· de sintaxis fundamental- el paso
OPERACióN • OPOSIClóN

de· mi término*· perteneciente .a Ja OPONENTE. Fr. oppq.sant, ing.


categoría semántica ·de un estado. opponent. - Cuando el rol de au~
a Otro (o de una posición en el xiliante negativo es asumidO. por
cuadro* semiótico ·a otra), efectua· un actor* diferente del sujeto de
do mediante una . transformación* hacer*, se le denomina :oponente y
(aserción o negación). !. corresponde, entonces ;..desde el
3. Se opone también operación punto de vista del su]~to-.de hacer-,
a manipulación*, entendiendo por a un no-poder-hacer individualiza-
operSción ·la transfómiación ·lógico· do· ·que, en forma de aCtor* autó-
semántica de la 'acC:.ón dei hombre nomo, obstaculiza la realización
sobre las cosas, mientras que la del programa* narrativo ·en cues-
manipulación cop-e$ponde a la ac· tión. .
ción · del hombre ·~obre Ios otros AUXIl.IANTF., i.DYUVAN~~
hombres.
-)o
¡
-> PROCEDIMIENTO, 'SINTAXIS. FUNDA· OPOSICION. Fr. opposition, ing.
'MB.NTAL.. opposition. . ,
l. En un sentido muy· generai,.
OPERATORIO (Ú OPERACIONAL). et ténnino oposición es .un concep-·
Fr. opé.ratoite (ou ojlérationnel),,b.1g. lo operatorio"' que desiglla la exis:
operational. - El ·calificativo. ope- tencia de algún tipo de relación*
ratorio se emplea c_on tres acepcio- ·entre dos magnitudes*,. suficiente.
nes diferent'es, pero no contradic- como para permitirles su acerca-
torias: miento, sin que se pueda, no Obs-
a) un concepto* o :una regla* se tante. en este estadio, ·decir algo·
dice que sdn operatorios cuando, sobre su naturaleza. El símbolo
aun estando insuficientemente defi· VS* {abreviación del lat1n versus)
nidos y no integrados todavía en o Ja barra oblicua (/) revresentan,
el cuerpo de los conceptos y/o en por lo general, tal relación.
el conjunto .de· las. ie;g!as, permiten, 2. En lln sentido más ·preciso, el
sin einbargo-, ejercer un hacer cien- término oposición se aplica a ta
tifioo aparentemente eficaz; aplica- relación del tipo «o... O» que se es·.
dos a los conceptos, operatorio e tablece, en el eje paradigmáticó*,
Instrumental son, en esta acepción, entre unidades del mismo rango y
casi sinónimos; elltre sí compaijbles. El eje para-
b) a nivel de una teoría ya for· digmático se denomina,. entonces,
matizada*, una regla se dice que eje de las oposfclones (o eje de las
es operatoria cuando es explícita*, selecciones*, según R. Jakobson),·
está bien definida, y \ln autómata* distinguiéndose as:f, del eje sintag-
es· ·capaz de ejec'utarla; mático*, llamado eje de JpS contras-
e) una teOría* -la teoría semió- tes (o eje de las combinaciones*).
tica*. por ejempla-.:-:,~ en su conjun- 3. Para evitar cualquier·. equívoco
to, es· considerada cqmo operatoria hay que mencionar la terminología
si ha· previsto los procedimientos de L. Hjelmslev, quien T~erva ·el .
de aplicabilidiid. · término relación para el: contraste
-)o EFICACIA, ADECUACJó~." y aplica el nombre de cOrrelacióri
.... ~ .
293 OPOSIC!óN ·ORDEN

a la relación de oposición; como -? PROGRAMACIÓN ~PACIO·Tl:MPORAL,


ésta es. únicamente discriminatoria, ESTRATEGIA.
el lingüista danés ha previsto una
tipología de las relaciones especffi. ORDEN. Fr. ordre, ing. order. -
cas que mantienen entre si las uni· El concepto epistemológico de or·
dades paradigmáticas. den, cuyo sentido más general es
~ CONTRASTE, CORREI.ACXÓN. el de una serie ·regular de ténni·
nos*, no puede precisarse sino tras
OPTIMIZAClóN. Fr. optimisation, una serie de interdefinic.iones suce-
ing. optimiz.ation, sivas. De sus acepciones, sólo le
1. La opthnhaclón es la aplica- interesan dos a la semiótica.
ción del principio de simplicidad* 1. El orden designa, por un lado,
a los procedimientos sintagmáticos*. la regularidad de presencia o de,
Puede manifestarse en diferentes aparición de un fenómeno {de una
niveles de análisis: consistirá, por magnitud*) dentro de una cadena
ejemplo, en reducir el número de de fenómenos no definidos. Si se
operaciones* que exige un procedi· la identifica, es.ta n~g~larldad se
miehto de análisis (implicando a vuelve significativa· y puede servir
veces, por e.<>to, 'elegir tal o cual como punto de partida para una.
modelo*}; aparecerá también a pro- interpret<1ción lógico·semántica del
pósito de la elección del sistema de fenómeno recurrente.. El orden apa-
·representación* metasemiótico (ár- rece, de este modo, como el prin-
bol*, parentización*, etc.) más apro- cipio explicativo de la organización,
piado al objeto de anáUsis, etc. sintáctica y semántica, de todo dis-
2. Puede designarse con la expre- curso.
sión optlrni:cación funcional la apli- 2. Sin embargo, para que una
cación del principio de simplicidad regularidad pueda ser identificada
a la programación temporal de un en la cadena discursiva, el fenóme-
programa* narrativo complejo, tal no recurrente debe presentarse, en
como se la encuentra en investiga- cierta manera, como discontinuo*
ción operacional, en lingüística apli· y manifestar -con respecto a los
cada, en semiótica del espacio*, etc. términos· que lo rodean-'- una reta~
3. A veces se habla de optimiza- ción asimétrica y transitiva. Así,
ción estética a propósito de hechos . por ejemplo, Ja aprehensión del rit-
discursivos, como la reorganización, mo* presupone no solamente la re-
de acuerdo con la linealidad* del gularidad de apariciórl de un mismo
texto, de la programación cronológi- fenómeno¡ sino también la presen-
ca del esquema narrativo*. En este cia de, al menos, dos términos dis·
sentido, la optimización debería in· tintos, situados entre sí en un «or-
terpretarse como Ja búsqueda de ·no
dcni> de: sucesión reversible. En
una· conformidad entre las disposi· este sentido se habla del orden de
clones textuales y las estructuras las palabras {en la frase), enten-
idiolectales* .Y/O .sociotectales* de diendo por ello que es pertinente
las que depende el actor de la enun·. y !'iignificativo (en <iPedro pega a
ciacjón*. . Pabloi>, el orden: funciona como una
ORDEN -ORIGINALIDAD SEM.OIT!CA 294
categoria de
la expresión* 'que per· ::e e y, situadas en el eje. _de la verti-
mite distinguir al sujeto del objeto). calidad, se deñnen por :ia relación
El concepto de oid en es, -·en esta topológica que las reúne', y que es
acepción, uno de los postulados fun. una relación simétrica, -Puesto que
darnentales del análisis· distribucio- las · magnitudes pueden· intercam-
oal*: la principal ciitica que puede biar sus posiciones sin modificar en
hacé:rsele; es que. confunde la orlen· nada la naturaleza de su relación.
tación 'lógica Y el ·orden ·del Signi· No· obstante, si al hablar de estas
ficante* .... d0s magnitudes se dice que ax está
~ ·TRANSITIV!D,AD, ORIENTACIÓN, LI• debajo de y», la relación reconocí·
~DAD.·.'· ble entre los términos es asimé-
trica: la magnitud· y s~· .ha conv~·.
ORIENTACidN. Fr. orientation, tido en el punto de partida de una
ing. orientation. relación orientada· hacia . x (rolen.
l. Concepto intuitivo, probable- tras que el orden discursivo va de
mente no definible,::: pero necesario x a y). Ptlede decirse, en consecuen~
para fundar la meta.lógica· o la teo- cia 1 que ia orientación. ~constituye
ría semiótica*, !a Orientación abar· un vertimiento stipiemeniario y res.
.ca, más ·o menos, laS nociones lin· trlctivo ·que se agrega a· la relacióil
güísticas de. transitividaá Y- de . rec- topológica existente. En eSte mismo
ción, y corresponde parcialmente a · sentiao se establ~ la diferencia-
ta de intencionalidad* en epistemo- .ción entre transforinaclón no orlen·
logía. tada (correlación* entre·.. dos unida-
2. Para precisar este concepto, des pertenecientes a doS sistemas"
puede partirse de la_ expresión me· o a dos procesos* diferentes) y la
tafórica de L. Hjelnislev que ve en transformación orientada' (genétka
él «un movimientci .Jógico•· que va o hist6rlca) que ~ irreversible.
de un término que rlge hacia el --+ TRANSITIVIDAD, ORDEN; TRANSFOR·
término regido; este «movimiento» MACIÓ!'l.
puede ser definido por el carácter
e
asimétrico irreversible de la rela- ORIGINALIDAD SE~ICA. Fr.
ción* entre dos térrh.inos* (Ja iran· originalité sémantique, ing. seman-
sitividad va, por ejemplo, del su~ tic originality.
jeto «hacia» el objeto, y no a la 1. La noción de origtnalldad, que,
inversa), Esta interpretación deter- eh el contexto cultural francés, apa·
mina las condiciones necesarias rece hada la primera :initad del
para el reconocimiento* de la orien- siglo XVIII, es muy dificil de deli·
tación, mieritras que. la explicación'" rriitar. Los esfuerzos de.~ la estilís-
que trata de dar lª lógica (por ·«la tica*, que ha tratado de definirla
intenSidad» psicológica del primer como una desviación* respecto de
término o por el impacto de su la norma*, no· son en mÓdo alguno
«hueIJa• en el cerebr.o -B. RuSsell) concluyentes, debido a lá falta de·
resulta muy vaga .'!f menos eficaz una distinción clara de· los niveles*
que la metáfora .d~ Hjelmslev. del lenguaje. La sugerenda de Mer·
3. Un ejemplo ayudará a aclarar leau-Ponty de considerar el estilo
algo esta noción: d'Qs magnitudes como una «deforinación Coherente!)
295 ORIGINALIDAD SEMANT!CA-OYENTE

del universo* semántico -y de figurativa -que articula las cuatro


tratar de reconocer no ya las des- figuras* de los elementos «prime·
viaciones de hechos atomistas con- ros» de la «naturalezaxi (agua, fue-
siderados aisladamente en sí mis- go, aire, tierra)-, debe ser tomada
mos, sino las desviaciones de es· en cuenta y homologada con aqué-
tructuras-, por más esclarecedora llas. En efecto, et aprovechamiento
que sea, no ha tenido repercusiones por un individuo o por una socie·
prácticas. dad, de estos eicn1entos ñgurativos,
2. Dentro de la perspectiva así y su disposición particularizante en
entreabierta, puede intentarse un el cuadro* semiótico (el término
primer paso definiendo la origina- muerte es homologado, por ejem-
lidad -a nivel de las estructuras plo, por Bernanos con agua. y por
semf1nticas profundas*- como la Maupassant con tierra) constituyen,
respuesta específica que un indivi· sin duda, un criterio importante
duo o una sociedad dan a las in· para el reconocimiento de la «de-
terrogantes fundamentales, tal y formación coherente»,
como pueden formularse con ayuda ~ UNIVERSO SEMÁNTICO, ESTRUCTURA,
de las categorías* de vida / muerte IOIOLECTO, SOCXOLECTO, PF.SVJACIÓN.
y de naturaleza / cultura, Pueden
diferenciarse, de este modo, una OYENTE (o AUDITOR). Fr. au-
origfnaJJdad ld:ioiectal*, que especi- diteur, ing. listener. - El auditor,
fica un actor individual, y una ori- como el JeCtor*, designan Ja instan~
ginalidad sociolectal*, que relativiza cia de la recepción del mensaje o
y particulariza una cultura"'. del discurso; uno y otro se diferen·
3. Junto a las dos a.--:ioJogias* cian solamente en función de la
temáticas -individual y colectiva- sustancia'* (gráfica o fónica) del sig-
arriba mencionadas, dentro de las nificante* empleado. En semiótica
cuales podría calcularse la desvia- será preferlbte emplear el términó
ción estructural constitutiva de la más general de enunciatario.
originalidad, una tercera axiología, ~ ENUNCIATARIO.
p

PALABRA. Fr. mot, ing. word. rentes, distintas de las . ·del tiPo
1. Para el semiótjcO, el término indo-europeo en las que la palabra,
·palabra es un decepto'r particular· tomada como unidad de· cuenta,
mente: activo de la .lingüística~ Sin encontraba muy difícilm'ente ele-
poder ·llegar a definirlo, Ios. lingüis- mentas correspondientes.nlá.."> o me·
tas han intentado mue.has veces ex· nos equivalentes: así, en las 1en-
éluir1o de su terminología y de sus guas Jiamadas «aglutinantes• no
preocupaciones: una~ y otra vez ha existen fronteras entre lii: palabra
retornado, can· otros: l~opajes, para y el enunciado, dándose eri ellas las
volver a plantear los· mismos pro- denominadas upalabras-fraSes11¡ por
blemas. el contrario, en Jas lenguas «ais·
2. En liñgü!stica cOmparada*, re- lantes», la palabra se presenta como
sultado de los estudiós efectuados una raíz. La paradoja está en que,
en torno a las lenguas indoeuro- · para demo~t·rar qu~ la paJzbra no
peas, la palabra· se Presenta como es una unidad lingüística .Pertinen.·
un poStulado ·.evidente de las Jen· te y universal, se ha definido justa-
guas naturales. En cuanto tal, era mente a estas lenguas como posee-
objeto de uno de los componentes doras de -o:palabras!) de otro tipo.
de la gramática*, Ia morfología*, Sin embargo, resalta" que. la pala-
que la aprehendía cofno formando bra, aun siendo una unida"d sintag-
parte de tal o cual clase* morfo- rnática, no puede ser aprehendida
J6gica (o parte del discurso), como como tal sino dentro de· una lengua
portadora· de marcas ·~de las cate- o de un grupo de lenguas-·particu-
gor!as* gramaJicales, .como elemen- lares.
to de .base de las combinaciones 4. Actualmente, ciertos lingüist~
sintácticas, etc. tratan de deshacerse del concepto
3. Las dificultades comenzaron · · de palabra proponiendo en su Jugar
cuando, por así decirlo, la lingüís. una nueva unidad sintagmática, Ja
tica se vio. en Ja necesidad de oCU· lexía*: -este nuevo conceptO, opera·
197 PALABRA- PARADIGMATJCO

se evita que la definición de lexía¡ PARADIGMA. Fr. paradigme, ing.


plantee como condición el poder ser: paradigm,
sustituida dentro de una clase de 1. El paradigma está constituido
le:<cmas* (lo que nos acerca de nue· por una clase* de elementos capa~ ~~.:
vo a la palabra como clase mor· ces de ocupar un mjsmo lugar en
fológíca). la cadena sintagmática* o -lo que
S. Otra forma de economizar el viene a ser igual- -por un conjunto
concepto de palabra consiste en de elementos sustitulbles entre sí
construir la sintaxis frásica, no ya en un mismo contexto*. Los ele·
a partir de las clases morfológicas, mentos así reconocidos por la prue·
sino de las clases sintagmáticas ob- ba de conmutación*. mantienen en-
tenidas por el análisis distrlbucio- tre sí relaciones de oposición* que
nal* (o por las divisiones sucesivas el análisis ulterior puede formular
del texto en sus partes, como en en términos de rasgos distintivos*;
glosemática*). Este análisis, que ca· las oposiciones diS:tini::ivas permiten,
micnza por establecer sintagmas* a su vez, constituir sub-ciases den·
{nominal; verbal), llega, en su fase tro de un paradim:na.
terminal, a instalar ...clases léxicas• 2. Tradicionalme.nte, el término
(sustantivo, verbo, adjetivo, etc.) sin paradigma Servía para designar Jos
querer (o poder) explicar cómo se esquemas de flexión o de acentua-
ha habilitado. el paso de las unida· ción de las palabras (declinación,
des de un tipo a las de otro tipo cor:.jugaclón, etc.). Este concepto,
(J. Lyons). De este i;nodo, en gra. Ampliado y redefinido, se emplea
mática generativa*, el concepto de para construir no sólo laS clases
palabra reaparece sin ser invitado. gramaticales, sino también las fono-
6. El hiato que se encuentra lógicas y semá.ntlcas.
entre los dos tipos de organización
frásica -«sintáctica~ y «morfológi- PARADIGMATICO. Fr. paraáigma-
ca»- y que L. Hjeln1slev ha tratado tique, iflg. paradigmatic..
de solucionar dando una nueva de- 1. Cuando los términos de la di-
finición del concepto de categoría*, cotomía sistema* / proceso*, de ca-
se manifiesta, de modo más eviden- rácter universal, se encuentran apli-
te todaV!a, entre las estructuras se- cados a la semiótica, L. Hjelmslev
mánticas y las estructuras léxicas los denomina paradigmático y sin-
(estas últimas aún mal conocidas). tagmático*. Esta dicotomía está
El paso· de las unas a las otras, al esencial y únicamente basada en el
que hemos d.ado. el nombre de lexi· tipo de relación que caracteri1.a a
calización*, bien podría ofrecer un cada uno de sus ejes: las funciones ·
lugar privilegiado para nuevos pro- entre las magnitudes situadas en
cedimientos de generación y de el eje paradigmático son ~correla­
transformación, capaces de aportar ciones11 (disjunciones lógicas · del
soluciones a este enigma que es la tipo <'10 ••• o~), mientras que las que
"palabra». se emplazan en el eje sintagmático
-)o MORFOLOGf.11., ocrmR.ENCIA, CLASE, son «relaciones• (conjunciones 16-
,..,_.,,..,...,f, .,.....,.,..n,.,,tMl>u '!"T'Mtnr.1J.. o-i~s d~l tino cv .. V>). La naraditt~
PARADIGMATICO-PARAFRAS!S

mática se áefine;. e!itonces, cOmo discursos narrativos y, particular-


el sistema seinióticO constituido por mente, en el esquema ·narrativotl',
un conjunto de paradigmas* .arti- ~ PARADIGMA.
culados entre sí por ·relacioiles -dis.:- ·
juntivas: · esto le ·copñere, en una PARAFRASIS. Fr. parapizrase, ing,
primera aproximación, la forma de paraphrasing. '
u.na jerarquía* de carácter taxón6- l. La paráfrasis es una Operación
ntico*. . . , · metalingijística* consistente en fa,
2. La paradigmática - puede ser producción, dentro de un mismo
considei'ada como la reformulación discurso, de una unidad discursiva
del concepto saussuriano ·de len- . semánticamente equivaletite a otra
gua*, con 1a: ·salvedad de que el unidad producida con anterioridad.
sistema hjelmsleviano no eStá ·cons- En este sentidÓ, un pa.rasinóoimo*,
tituido· por simples. corielacio.nes una definición* discursiva; una se-
entre paradigmas y . términos ; de cuencia, pueden ser considerados
1
cada paradigma, sino· por ·correla- como paráfrasis de un le;cema*, de
ciones· entre categorías* (definidas ·un enunciado* o de cualquier otro
al mismo tiempo por su modo segmento discursivo. Esf.a opera·
de comportamiento·· sintagmático). ción es, ·a la vez, una tiaducción*
Mientras· que para Sa.ussure «el en- intralingüísitca y . una expansión*
samblaje de las palabras en frases• (que depende de la elasticidad* del
pertenece al babia*,· la definición discurso).
-a la vez pai-adigmática y sintag- 2. La paráfrasis se presenta como
mática- de la categoría acerca la una actividad «natural" .(es decir,
paradigmática hjelmsleviana a. la no científica) de sustitucl:On* {que
competencia* chomskiana (que con· constituye una de ' las bases del
tiene las reglas de -:..formación de cálculo lógico y lingüístico) y, como
· frases).· tal, concierne a la dimensión para··
3. La semiótica literaria* der,lica digmática* del lenguaje: :-un con·
gran atención a .la proyección del junto de paráfrasis const~tuye, en
eje paradJgmátk:o 'Sobre el eje. sin· cierto modo, una clase paradigmá·
tagmático, procedimiento que, según tica de «frases». Sin embargo, con-
R. Jakobson, caracterizaría el modo trariamente a lo que sucéde en la
de existencia ·de un .gran número constitución de las clases* morfo,.
de discursos poéticos*.· El liecho es Ipgicas, sintácticas o sintagmáticas
que los términos en disjunci6n pa· -donde los criterios· de st+Stitución
radignÍática· pueden ·aparecer ·en elegidos son Ja distribución~, o bieD.
conjunción (cOpre.c;en.cia) en· el eje las categorías* gramaticales recono-
sintagn1ático (de ahí, por ejemplo, cidas con . anterioridad-, Una clase
que_ una antífrasis* pueda manifes· de paráfrasis tiene como denomina·
tarse en forma de antítesis*) •. La dor comón una equivalencia semán·
generalización : y una formulación tica más o menos intuitivamente
más rigurosa de esta intuición ja. poStulada. Así pues, en esta pers·
kobsoniana han puesto en evidencia pectiva y a fin de explicar la se-
el rol de las proyecciones · paradig·' mántica con ayuda .. de~ la· sintnís,
-.1:~•--- -- ~- -----~---·~-- ... _ ·--
PARAFRASIS-PARATOP!CO

tular una gramática de paráfrasis: xemas apropiados ( <1porta-estandar·


una clase de paráfrasis, caracteri· teii¡ •molino de caf~:o.); este término
1.ada por una estructura profunda* entra en competencia con el de le-
única, permitúía generar un con· xía, propuesto por :S. ?ottier. '
junto de paráfrasis correspondien· -+ LEXÍA.
tes a otras tantas estructuras de
·superficie* que resultan del juego PARALINGO!STICA. Fr. paralin·
de las diferentes transformaciones*. guistique, ing. paralinguistic. - Se
Desde una perspectiva propiamente consideran como parallngi.üstlcas las
semántica, se podría obtener un magnitudes* pertenecientes a las
resultado análogo, si se postula una semióticas no lingüísticas• y que
representación* lógico·semántica co- son producidÍls en concomitancia
mún a todas las paráfrasis. con los mensajes orales o gráficos
3. Seria, tal vez, útil distinguir de las lenguas* naturales. Se sitúan,
dos clases de paráfrasis: generalmente, bajo esta etiqueta, 1
a) Las :paráfrasis sustitutivas {o por una parte, los fenómenos de
denotativas*) que persiguen la equi· entonación*, de gestualidad*, de ac·
valencia directa con el enunciado titudes somáticas, etc., y, por otra·
parafraseado; · parte; la elección de los caracteres,~:
b) Las paráfrasis oblicuas (en la compaginación, etc.~ El término;
parte connotativas*) cuyo contenido paralíngüfstica (o, incluso, paralen·
desambigua el primer enunciado guaje) representa un punto de vista
(por referencia al contexto-del enun~ estrechamente lingiiístico ·que, si
ciado o a fa instancia de la enun· bien reconoce la existencia de otras
ciación*). prácticas semióticas, las considera
4. De manera más general, la como secundarlas o accesorias.
paráfrasis debe ser concebida como -+ SINCRETISMO, SEMIÓTICA..
uno de los modos de la producción
y del reconocimiento de la signifi·
caci6n y, más precisamente, como PARASINONIMIA. Fr. parasyno.
el modo paradigmático, por oposi· nymie, ing. Parasynonymy. - La pa-
ción al modo sintagmático que con· raslnonlmia · (o cuasi-sinonimia) es ·
sistiría en su aprehensión en tanto la identidad* parcial de dos o más
que intencionalidad*. lexemas*, reconocible porque esos
-,). ELASTICIDAD na PISCURSO, nmNl· lexemas sólo pueden· ser sustituidos
CIÓN.
en ciertos contextos*. La sinonimia
total no puede postularse nada más
PAR.ALEXEMA. Fr. paralexeme, que a nivel de los sememas*.
ing. parale.xeme. - Se puede deno- -+ SINONIMIA,
minar paralexemas a las unidades
del plano del contenido* cuyas di· PARATóPICO. Fr. paratopique,
mensiones si01tagmáticas*, en el pla· ing. paratopic space. - El espacio .
no de la expresión*, son más am· paratópico -sqbcomponente del es-
plias que las de los lexemas, pero pacio tópico* y opuesto al espacio
que paradigmáticamente* son sus· utópico* (en que se realizan las per~ ·
tituibles dentro de una clase de le· formances*}- es aquel en que se
PARATóP!CO- PERFORMANCE 300
desarroll.in, las prueb~ prep~rato. PERFECTIVIDAD. Fr. ~erfectivi.··
rias o calificantes* y:.,se adquieren té, ing. perfectiveness. - · La per.
las competencias* {tanto en la di· fectivldad es el sema* as~tual que :
mensión pragmática*· conio en Ia· corresponde al aspecto ten::hinativo!
dimensión cognoscitiva*). del proceso* y que acnializa*, 'ai,
~ LOCA~C.róN ESPACIO-TEMPORAL. mismo tiempo, el términO: -presq.
puesto- durativo*. La Qposición
PARECER. Fr. para1tre, ing, seem- perfectívidad / imperfectiVidad es
ing. - Se . Ua.ma parecer al térmi· eri todo homologable a la dicoto-
no* positivo del es<iuema* de la mía terminado / no-termfuado.
manifestación*, .que· depen'de. del -) ASPECrUA~IZACIÓN,
cuadro* semiótico sobre el· que se
encueri~ra proyectada ·Ja categoría
modal de la veridiCciPn. El término PERFORMANCE. Fr. perjorman·
parecer está én relac16n de contra- ce, ing. performance.
riedad con el de ser (entendido, en 1. En la teoría chomskiana, el
este sentidO,· como término positiVO···· concepto de performance :.coristitu·
del esquema de la inmanencia*). La ye una pareja con el de Cqmpeten-
doble Operación, que· tiene por efec- cia* en orden a conforrr.ai: una di-
to la aserción de los términos pare· . cotom{a comparable a la 4é lengtXa
cer y ser, produce ·el término veri· / habla en Saussure. Se considera
dietario complejo llamado verdad* que el térinino performancé abarca
(que caracteriza uri estado d~ cual la instancia de la puesta en ejecu-
se dice que Cjparece• y .. es:. al mis· ción; de la realización* de ·'la com-
mo tiempo).· ·. petencia, en su doble papel ·de pro- ·
~ VERIDicroRtAs .cm04alidades -). ducción* y de interpretacióQ~ de los
enunciados. A semejanza del habla~
PARENTIZACióN. Fr. parenthé· saussuriana que, definida negativa-
tisation, ing. bracketing.. - La pa. mente como todo lo qlle nO perte-
rentlzación, como en1pleo de pa· nece a la lengua* (único objeto de
réntesis, es una forma particular la lingüística), dejaba campo libre
de representación del ·análisis* en a todo tipo de interpretaciones y
lingüística (Y de modo ""general, en especulaciones, la performance es,
semiótica), ·equivalente (homologa· igualmente, equfv()9a y continúa
ble y traducibti;) a J;i repreSenta· siendo motivo de perplejidades. En·
ción en árbol. En este sentido,"cons· focado desde el punto de Vista es-
tituye tilla «escritura•· 'homogénea· trictamente lingüístico, el ·estudio
que no ·debe ser confundida con Ia de Ja performance .presui>Pne el
utilización accidental o específica conocimiento previo de la _compe-
de paréntesis en otros···.Sistemas de tencia (en este caso, de la:. gramá·
representación ..(en grañl.ática gene- tica completa de una Jenguá): ello
rativa*, por ejelnpJo,_ il?s paréntesis quiere decir que es· tan Sólo un·
se utilizan como símbolo* p~ se- proyecto futuro. 'Consideradi como
ñalar el caráctér facultativo de un producción de enunciados o:"en las ,
constituyente*). condiciones reates de Ja coi;nunica-
-) REPRESBNTA<;~ól>l, ÁRBOL. ción~, es decir, como el .cbnjunto
301 PERFORMANCE

de las realizaciones ocurrenciales, la rejilla modal del deber-ser (de


la performance no se deja formu· necesidad* o de imposibilídad*) lla-
lar en modelos lingüísticos: por el mada a filtrar los valores destina-
contrario, exige la introducción de dos a entrar en la composición de
factores y parámetros de natura· estos nuevos «estados ·de cosas• (cf.
leza ex.tra-lingülstica, de orden psi· el concepto de aceptabilidad*),
cológico y sociológico por ejemplo, 3. En general se distinguirán dos
lo que, en consecuencia, destruye· tipos de performances, teniendo en
la unidad del objeto lingilistico. Se cuenta la naturaleza de los valores*
comprende, por tanto, que el cam- a los que se refieren (y que están
po problemático de la performance inscritos en los enunciados de es·
esté cada vez más invadido por tado): las que persiguen la adqui·:
conceptualizaciones en torno al ac- sición de los valores modales (per·
. to* del lenguaje o Sobre la enun- formances cuyo objeto es la adqui·
ciación*, del todo ajenas a la gra- sición de la competencia*, de un
mática generativa* (que es una teo- saber-hacer, por ejemplo, cuando
ría únicamente del enunciado). se trata de aprender una lengua
2. Para la semiótica, la perfor- extranjera), y las que están carac·
mance lingüística se inscribe, en · terizadas por ·fa. adquisición o la
primera linea, como un caso par- producción de valores. descriptivosfr
ticular en la problemática general (la preparación de la sopa au pis·
de la comprensión y de la formula- tou, por ejemplo).
ción de las actividades humanas 4. Restringiendo bastante el sen-
que encuentra descritas en innume· tido, se reserva el término perfor·
rables ejemplares y bajo las más manee para designar a uno de los
diversas formas en los discursos dos componentes del recorrido na-
que tiene para analizar. Así consi- rrativo* del sujeto: la performan-
derada, la performance se identifi- ce, entendida como la adquisición
ca, en un primer acercamiento, al y /o la producción de valores des-
acto* hu1nano que nosotros inter- criptivos, se opone (y presupone) a
pretamos (en mal español) como un la competencia considerada como
C(hacer-ser:i:o y al que le damoS la una serie programada de adqllisi-
formulación canónica de una estruc· ciones modales. En este caso, la
tura modal*, constituida por un restricción impuesta es doble: a)
enunciado de hacer* que rige un se hablará de performance sólo si •
enunciado de estado*. La perfor- el hacer del sujeto se refiere a los
mance aparece entonces, indepen- valores descriptivos, y b) si el .c;U.
dientemente de toda consideración jeto de hacer y el sujeto de estada·
de contenido (o campo de apHca- están inscritos, en sincretismo*, en
ción), como una transformación* un mismo actor*. Se observará, en·
que produce un nuevo oiestado ·de tonces, · que Ja performance narra·
cosas»; está, :::~n embargo, condi· Uva se presenta como un caso es·
cionada, es decir, sobremodalizada, pedal del programa* narrativo: el
de un lado, por el tipo de compe- sincretismo de los sujetos, caracte·
tencia de la que está dotado el su- ristico de la performance, está lejos
jeto performador y, del otro, por de ser un fenómeno general; la con-
PERFORMANCE - PERIODIZAC!óN· 302

· figuración. del d0n*}, ··por ejemplo, 2. Austin reconoce que esta defi-
distingue al destioad.or en ·cuanto nición dada a los verb?s· perfor·
sujeto de hacer y··· cil destinatario mativos se' aplica también'. a expre-
como sujeto ,de estadO. '. 1 · ·~ siones no performativas, \por ejem~
5. La ·performance, considerada plo, en el ·caso de una orden («¡Haz·
como el programa nafrativo del su-· la comida!,.) o de una ·pregunta:
jeto competente y activo (por sí aquí, la forma irnperativa o inte-
mismo), puedC servir de pu:nto de rrogativa constituirla un.' acto* de
partida para una teoría. semiótica · habla. Es por eso por lo. que, aun
de la· acción*: se sabe que todo permaneciendo en el marcO restrin-
programa narrativo ·~s susceptible gido de la comuoicación*. ·verbal y
de expansión. en forn;ia de progra. ·de sus condiciones de : ejercicio;
mas narrativos de Uso que se pre- Austin se decidió a extender su
suponen unos· a otro·s en el ámbito problemática introduciendo los con·
de un. programa de base. Inten>re- ceptos de ilocuci6n* y de, perlocu- ·
tada, por otia· parte, como estruc- ción*.
tura modal del hacér,···la · perfor- 3. Se Observa, sin embÍÍrgo, que
mance -llamada decisión cuando el aspecto performativo -bajo cual-
se sít11a en Ja dimensión cognosciti~ quiera de las formas qt,1e Austin
va*, y ejecución cuando se ubica haya creído reconocerlo-. no está
· en la dimensión pragmática*- per. ligado, en efecto. a una fOrma lin-
mite prever desarrollos teóricos u!· güística particular: deperide esen·
teriores. ··. · · . . cialmente de ciertas condiciones re-
~ PSICOSEMIÓTICA, AC!o, NARRAnvo lativas a la naturaleza del contra·.
{recorrido' -), PROGRAMA NARRATIVO, to* .enunciativo y a la corri.Petencia*
SINTAXIS NARRATIVA DE ~UPE'RJTICIB. ~ · modal de los sujetos implicados en
la comunicación.
PERFORMATIVO (VERBO -). ~ ENUNCIADO, FUNCIÓN.
Fr. verbe performaiif, ing. perfor·
mative verb. ¡ PERIODIZACióN. Fr. ;eriodisa.
1. En ·la terminolo"'"gía de J. · L. tion, ing. periodization.
Austin, y por oposición a los ver· I. La perlodizaelón es 13. segmen-
bos «constatativos» (cuya única fun. tación* de Ja duración, .éfectuada
ción, según él, es· describir una con ayuda de criterjos extrínsecos
situación, una acción,. etc,), los Ver· y arbitrarios. La fragmentación en
bos performativos sedan aquellos ureinosa o «siglosa constfruye así·
que no solamente des'criben la ac- temporalidad.es lineales, p6r oposi·
ción del que Jos utilizá; sipo Que ción .a las tempora!idade_s· cíclicas
también, y al mismO· tiempo, im· que son, :Pbr ejemplo, los· o:años•
plicarían esa acció.n e!l ·sí misma. o los «dias». · '.
Así, las fórmulas uTe aconSejo 2. La periodización desiglla tarii-.
que .•. », «Juro' que •.. »;· t(Te "ordeno bién la conversión* -dtiiante la
que ... :io, realiiarlan 13. acción que programacihn temporal-' · de loS
ellas expresan en el momento mis· haceres* en procesos'!' dura.tivos* y
mo de. la enunciacióx:i.*. ~ .. Benve- su disposición lineal en fUJ}ción del
niste ha asumido esta tesis. programa* narrativo de. base. r..a·.
303 PER!ODIZACióN - PERSONIFICAC!óN

ejeéución de un programa completo modal de no deber. hacer; pre.su·


(la construcción de un automóvil, pone la existencia de la prohibí·
por ejemplo) exige atribuir a cada ción* de la que es el término con-
programa narrativo de uso, un pe· tradictorio*. ·
ríodo calculado en función del re· 2. Cuando en ta competencia*
sultado final. modal del sujeto existe compatibi·
~ TEMPORALlZAClÓN, PROGRAMAC::lÓJl:l lidad entre su qu"erer-hacer y el no
ESPAClO·TEMPORAt.. deber no hacer o el 110 deber-hacer
sugeridos por el Destinador'\ la
PER.LOCUCióN. Fr. perlocution, estructura relacional entre el Des·
ing. pe.rlocution, - Opuesta, en la tinador y el Destinatario-sujeto po-
terminología de J. L. Austin, a la drá denominarse contrato* pcnni·
locución* y a la ilocucióit*, la per· slvo (denominación algo impropia,
locución no está directamente vin- pues ella abarca también la moda·
culada ni al ccntenido* propio del lidad facultativa~), por oposición al
enunciado* ni a su forma. lingüísti· contrato injuntivo*.
ca: se trata aquí de un efecto se· _.,.. DEÓNTICAS (modalidades -}.
cundario, como el que produce un
discurso electoral al suscitar el en- PERMUTACióN. Fr. permutation,
tusiasmo, la convicción o el aburri- ing. pe.rmutation. -:- La permutación
miento; lo mismo, cuando se le · es un procedimiihto* comparable
hace una pregunta a alguien ya sea al de la conmubeiOn, con la dife·
para rionerle en aprietos o ·para rencia de que la relación constatada
ayudarle. A diferencia de la ilocu· entre los cambios que intervienen
clón, donde se produce un efecto en los dos planos del lenguaje, no
diciendo, la perlocución produce un concierne ya a los intercambios
efecto {sobre el ·interlocutor o el entre términos paradigmáticos, sino
interlocutario)' por el hecho de de· a las transposiciones dentro de los
cir. -Para nosotros, la noción de sintagmas*.
perlocución pertenece así, en parte, ~ CONMUTACIÓN.
a una semiótica cognoscitiva* y, en
parte, a una semiótica de tas pasio- PERSONAJE. Fr. personnage, ing.
nes; bajo ciertos aspectos puede character. - Empleado, entre otros
ser comparada a la pragmática* (en lugares, en Ja literatura y reserva-
el sentido norteamericano}, en la do sólo para las personas humanas,
medida en que la perlocución está el término personaje ha sido pro-
ligada a las condiciones de la co· gresivamente reemplazado por dos
municación lingüística. conceptos, definidos con mayor ri·
-+ Acro DE LENGUAJE, gor en semiótica, el de actante y el
de actor.
PERMISióN. Fr. permissivité, ing. -+ ACTANTE, ACTQR.
permissiveness.
l. La permisión es la denomina- PERSONIFICACióN. Fr. person·
ción de nno de los términos de la nification, ing. personification. - La
categoría* modal deóntica, cuya de· personificación es un procediroien·
finición sintáctica es la estructura to narrativo consistente en atribuir
PERSONIFICACióN ·PERSUASIVO (hacer -) 304
a un objeto (cosa, ·tintidad abstrac- · instancia receptora del enunciata-
ta o ser. no humatlo) propiedades rio- uno de los progranias que es
que pernúten· considerarlo comq su- entonces explicitado con" ~plitud,~
jeto, o diCho de otrO modo, en: do- a costa del otro que sólo se mani~
tarlo · de un· prog·rama* narrativo fiesta · fragmentariamente.:.
dentro del que nUede ejercer · un -> PUNTO DE VISTA, F'pCALIZACIÓN;
hacer*. La pers~nificación parece OCULTAMIENTO.
·caracterizar cierto tiPo de discurso
etnoliterario (el cuento maravilloso, PERSUASIVO (HACER -). Fran-
por ejemplo, doñd.e :·se encuentran cés faire persuasif, ing. ;.persuasive
objetos mágic'os, animales que pres- doing.
. tan socorro, etc.). · l. Una de las formas del hacer
-+ RBIFICACIÓN. cognoscitivo*, el hacer .PersuasiVa
está Jigado a la insfanda de la enun~
PERSPECTIVA: F~. perspective, ciaci6n* y consiste en la convoca-.
ing. perspective.. :· ·- ·, . ción, por parte del entmci;3.dor*¡ de
1. A diferéncia del. punto de· vis- todo tipo de modalidadeS*- para ha-
ta que necesita de I~; mediación de cer aceptar, al enunciatai-Jo, el cori~
un observador*, "lá '-perspectiva se trato* ehunciativo propu.ésto y, ·de
basa· en la ,}elacióÚ" enunciador* I este modo, volver eficaz J~ comuni*
·enunciatario y depende· de los pro- cación*. · "· ·
cedimientos de la te,xtualización*. 2. Desde esta perspectiva, el ha··
2. ·Basada en·, la estructura polé. cer persuasivo puede ser" considera·
·mica* del discurso narrativo,· poner do como una expansión --Q.paz de
en perspectiva con"Siste, para el producir programas* narrativos mo-
enunciador, .:én, la· elección que ha dales cada vez más comp'Jejos- de
de practicar. en ·la Organización sin· la modalidad Uamada fattitiva. La
tagmática de Jos prOgramas* narra· factitividad* puede dirigÍrse tanto
tivos, teniendo en cuenta las caer· al ser del sujeto a modaliZar, comO·
ciones de la lineali~d* de las es· a su hacer eventual; bajo' esto·s dos
tructuras narrativas. Así, por ejem· aspectos se estudiará, a._. continua*
pJo, el relato de un atraco' a mano ción, el .hacer persuasivo.
armada puede poner de relieve el 3. En eI primer caso; el hacer
programa narrativo del asaltante o persuasivo se interpreta ··Como un
el del asaltado; asimismo, eJ relato hacer cognoscitivo que trata de
proppiano privilegia el programa otorgar, por intermedio del enun-
del héroe* a costa del pi-agrama ciatario, el ·estatuto de inri1anencia*
del traidor'*". al proceso semiótico (o a: ·cualquie· ·
3. Mientras que la·ocultaci6n :tie- ra de sus segmeiltos) -q~~ no pue·
ne por efecto eliminar totalmente de ser recibido por él Sfno como
de Ja manifestación* el programa una manifestación*-,' y de hacerle
narrativo· del sujeto .en beneficio inferir de· Jo fenoménico* JO nouméo
del programa ,del 2nti·sujeto {o a nico*. A· partir del esqué;na de la
la inversa),. la · pe'r'Spectiva conser- manifestación (parecer / nO-parecer)
va los dos prograrnp.s opuestos, pueden preverse -en una primera
privilegiando -en reI~clón con la consideración- cuatro . recorridos
3-05 PERSUASIVO (hacer -) -PERTINENCIA

capaces de conducir al esquema de PERTINENCIA. Fr. pertinence,


Ja inmanencia (ser / no-ser): par- ing. relevance.
tiendo del parecer se puede «de- 1. Estrechamente. relacionado con
mostrar~ el ser, o el no-ser; a par- los desarrollos de Ja fonología*, el
tir del ncrpar:ecer, tanto el ser como concepto de pertlnencia se ha im-
el no-ser. J:.stos son recorridos de puesto en lingüística gracias a l;o.
ontologi1.ación que se dirigen a Escuela de Praga. Designa, ante
transformar la semiótica en ontolo- todo, la propiedad de un elemento.
gia. Dentro de estos recorridos se Ungilistico (el fonema*)- que lo dis·
construyen los programas modales, tingue de los otros elementos com-
más o menos complejos, de persua- parables y lo vuelve apto, por esto
sión. · mismo, en orden a servir para la
4. En el segundo caso, el de la comunicación {A. Martinet). Esta
persuasión que trata de provocar característica se denomina, enton·
el hacer del otro, el hacer persua- ces, rasgo pertlnexite (:=fema*),
sivo inscribe sus programas· moda· 2. El reconocimic~to del princi-
les ·en el marco de las estructuras pio ,\e pertinencia introduce una
de la manipulación*. Los dos .tipos diferencia de naturaleza entre la
de hacer persi.iasívo tienen, empero. sustancia* fónica, en la que se rea-
esto en común, que la persuasión liza una lengua, y la forma fónica*,
mallipuladora sólo puede montar que atañe a W1a aprehensión de la
sus procedimientos y sus sin1ula- diferencia"' entre dos o más reali-
cros conio estructuras de manifcs· zaciones dadas: de alú 1a distinción
tación que afectan al ser del enun· entre fonética* y fonología. Desde
datario en su inmanencia. ~ entonces, liberado de sus vincula-
5. El análisis discursivo debería ciones con la sustancia, el concepto
poder distinguir, sin mayor düi· de pertinencia ve ampliarse su cam-
cultad, diferentes formas de dlscur· po de aplicación al conjunto de la
sos persuasivos: tanto los que se semiótica.
dan como tates (discursos de con- 3. En este sentido general. puede
vicción y de. manipulación) como definirse la pertinencia como una
los que muestran otro enfoque (la regla de la descripción* científica
búsqueda o la comunicación del (o como una condición que debe
saber, por ejemplo) que, sin embar. cumplir un objeto semiótico cons-
go, implican -jnscritos de manera truido), según la cual sólo deben
más o menos explícita- programas* tomarse en cueO.ta, entre las nume--
narrativos de persuasión, junto con rosas determinaciones (o rasgos dis-.
los modelos de creer* y de actuar tintivos*) posibles de un objeto,
(discursos científicos o didácticos), aquellas que son neces.arias y sufi·
o los que incluyen en forma de cientes para agotar sU definición*;
enunciaciones*-enunciadas, secuen· de este modo, ese objeto no "podrá
das persuasivas 'más o menos autó- confundirse con .otro del mismo ni~ ·
nomas. vel ni verse sobrecargado é:on-deter~
--'? FACTITIVIDA.O, MANIPULACIÓN, VERT· minacioncs que, por ser dlscrlmina-
DICCIÓN, VEROSIMtt!TUD, RETÓRICA. torlas, deben ser asumidas sólo en

SEMIÓTICA. - 20
.PERTINENCIA· PLANARIA (sem. ~J ~·-

un plano jerárquicamente inferior. va*). Del mismo modo, ·.-respecto .a \


Esta definición de la pertinencia la prueba*, la confrontiCión* palé-
que proponemos_ está muy _vincula- . mica puede ser considerada como
da a la concepción·.. de los niveles* pivote narrativo, en la· medida en
del lenguaje (Benveniste),. _así como que es capaz de · traer consigo la
a la idea de. la semiótica*. conside- dominación* de uno de los protago.
rada como una ·jerarquía -(Hjelms- nis tas (la dominación coÍlduce, ·a su
-lev),';. ·. - · . -:<:·. - vez, a la atribución del ·.objeto* de.
4. : En un sentido menos riguroso, valor).. '
pero dídácticament~ aceptable, se 2. En todos los casos, el pivOte
entiende . por pertinencia -la regla narrativo no se descubre".· como tal
.deói:itica, ·adoptad.a 'POr. el semiótico, sino por. la retrolectura,· ·que resti-
de sólo desCribir el Objeto escogido tuye el e}é· de las presúposiciones¡;
desde un úUico .Piuú.O · de vis t.?- (R. a partir del eje de las ·.consecu~io­
Barthes),. no reten~'eiido, en· cOnse- nes (establecido por la;, Programa~
cuencia -cqn miráS a ·la descrip- ción* temporal). El concCPto de pi.:
ción-, sino los rasgo$ que interesan vote narrativo -como -se'. ve- pre~
a ese· punto de vista (que, para el tende poner de manifiesto, sobre
·semiótico, .es'_el de la significación). Una base lógica, una jerarquía* de.
Según este princípici es como se los programas narrativos' ·en el aná·
practicará, por ejemplo, eri un pri- lisis de un relato dado o de un seg-
mer momento, tantO' la extracción* mento de tal relato. ·
(a partir de un corpus* dado). de
los elemento'S* . considerados perti- PLANARIA (SEM!óTié;A -). Fr.
nentes para el arlálisis, como, al sémiotique planaire, ing. 'planar se-
contrario, la· elimillación* de lo.qUe· miotics. - En el ámbito ;de la reor".
es juzgado no pertinente. ganización conceptual a I~ que pro-
-+ rsotoP!A. cede, hoy en día, la serriiótica* ge-
neral, comienza a distiniuirse, den-
PIVOTE NARRATIVO. Fr. pivot tro de las semióticas visüalcs, una
narratif, ing. narra.tive pivot point. semiótica planada que Se caracte-
1; En Ja organización· sintagmá· riza por su empleo de un significan·
tica* de un relato* o de una secuen· te* bidimensional (a dife.J:.encia de
cia"', puede designarse como 'pivote· la-semiótica del espacio*, por ejem·
narrativo al ·programa que ocupa plo, que maneja un significante tri·
un lugar· central entre tos diferen· dimensional). Tratando de estable-
tes programas* narrativos sucesi· cer distancias, al menos por un.
-vos, debido a que acarrea otros 'por tiempo, respecto de las semiologías*
vía dé consecuencia. Así. por ejem· basadas esencialmente en Ja analo-
· plo, la adquisición' dé un saber* gía* y la iconicidad* de lii imagen.,.
(referido· a un ptOgrarna pragmáti- (de las que acaban dando· sólo una
ca*· anterior) puede· .desencadenar, simple transcripción lingüística), la
por la competencia,* cognoscitiva semiótica planatia -que trata, tan·
que instaura, un ;rüevo -.programa to de la fotografía, como :_del afiche,
narrativo (que se desarrotlará en la del cuadro, de los dibujQs anima.
dimensión pragmáti~. o cognosciti- dos, del plano del arquitOCto, de la
PLANARlA (sero. -)-PODER

escritura caligráfica, etc.- intenta uno de los postulados para una de·
ubicar categorías* visuales cspecífi· finición de la semiótica*· (según
cas en el nivel del plano de la ex- Hjelmslcv, sólo las semióticas bi·
presión*. antes de considerar su re· planas* son semióticas «verdade·
la'ción con la forn1¡_¡ del contenido"'. ras»}.
Desde esta perspectiva, el análisis ~ PLANARIA (semiótica -).
de la imagen fija, por ejemplo, no
se reduce a un problema de deno· J:>LURI·ISOTO~!A. Fr. pluri-isoto-
minación (traducción verbal de los pie, ing. pluri-i.sotopy. - Se entien·
objetos 11representados11 que recu- de por pluri-lsotopía la superposi·
rre a menudo a la dicotomia dencr ción, en un mismo discurso, de foo--
ración / connotación) ni a una sim· topias* diferentes. Introducida· por
ple aprehensión de los recorridos conectores* de isotopías, está vin-
posibles, vinculados a la dimensión culada a los fenómenos de polise·
prospectiva (las tentativas para es- memia*: una figura pluri-semémiea,
tablecer una <1Sintaxis visuab con- que propone virtualmente varios
forme ;::l recorrido de la mirada del recorridos figurativos*, puede dar
observador están lejos de ser con- lugar· a lecturas* diferentes y si·
vincentes). El interés de tal empre- multáneas, a condición -sin em-
sa . es poner al día las coerciones bargo- de que las unidades figttia·
generales que la naturaleza de tal tivas no sean contradictoriasi. a ni·
plano de la expresión impone a la vel de la manifestación*.
manifestación de la significación; -+ ISOTOPfA, LECTURA, SEMÁNTICA DlS·
también, aislar las formas semióti· CUR~IVA.
cas mínimas (relaciones, unidades),
comunes a los diferentes campos PLURlPLANA (SEM!OTICA -).
visuales {aquí parcialmente mencio- Fr. sén1iotique pluriptane, ing. pluri·
nados), antes de los postulados ya planar sen1iotics. - Por semlótlcas
establecidos (que versan sobre la :pluripJanas, L. Hjelmslev entiende
iconicidad o sobre la naturaleza de las semióticas biplanas* uno de cu-
los signos visuales, por ejemplo) yos planos* al menos es una se·
que las teorías estéticas o la tradi· miótica (llamada semiótica-objeto):
ción de cada uno de los «géneros~ tal es el caso de las semióticas con·
en cuestión están siempre dispues-- notativas* (que no son científicas)
tas a poner en primer lugar. y de las metasemiótfcas* (de carác· 1
-+ lCONlClOAD, TMAGEN. ter científico).
~ SEMIÓTICA.
PLANO. Fr. plan, ing. plane.-El
plano, término figurativo* espacial, ~}ODER. Fr. pouvoir, ii:g. beingff·
sirve -desde F, de Saussure y L. able (to do or to be).
Hjelmslcv- para designar por se· 1. El poder puede ser considera~
parado Jos dos términos de ja di· do, dentro del ámbito de una teoría
cotornía significante / significado o de las modalidades, como la deno-
expresión / contc11ido, que reúne Ja minación de uno de los predicados
función* semiótica. El reconocimien· posibles del enunciado modal* que
1 to de los planos del lenguaje es rigen un enunciado descriptivo* (de
PODER
hacer* o '16 estado*). Concepto in·
definible, -es· sin eml;:iargo suceptible
de ser interdefinido en un ~istema
de valores modales, ,elegido y postu-
lado axiomáticamen.te.
2. Los enunciados modales están,
·por· definición, destinados a regir.
otros enunciados; según 'esto, dos
estructttras* modales de poder· pue-
den tenerse en cuenta: la· que com-
prende un enunciado de estado, que muestra que una misma·. denomina.
es llamada por comodidad el poder· ción, al tiempo que renl'ite al sis~e­
ser/estar, y la que .tiene por objeto ma de las modalidades aléticas,
un enunciado de. hacer, el poder·. integra dos estructuras rhodates, las
hacer> A· su vez, estas. dos estructu· del deber-ser y del Poder-ser, y es::
·ras pueden ser pfoyectadas en· el tos términos se encuentran de con-
cuadro* semióticQ y producir las ca- tinuo en relación de co.rilplementa;
tegorías modales c9rrespondientes, riedad* (es decir, uno presupone al
por ejemplo: :.·.. otro). J?os tipos d~ intezj'lretaciones
son, entonces, posible..:;:· O bien las
X
· ." 'Podt.r·Ú~/Ulaf' · ¡1odct 1u;. su/~tur
0

modalidades aléticas son términos


(Posibilidad) (contingencia) complejos+ que comprenqen las mo-
no poda ni> s.~r;ut~r
(necesidad)
·u~
'' podt;•SU;tslat' , dalidades del debei y del poder· en
·.(impo~ibil!dadl relación de complementirledad (la
necesidad, por ejemplo> sería un ·
o: no poder no ser que presupone un
podcr·ha&U /;· rwdcr no /"1ür
· . (libcr1ad) ' - / (indepcndcnda) deóer*ser),_~ bien pueden _distinguir-'
se dos categorías. moda:ICS autóno-
n¡¡ poder no ·~u1C:cr~~.11~ podcr·har~r mas y construir así dos lógicas alé-
·· {obedtenda) ·{imp.otcncia)
ticas interdependientes. ~.' · ·, ·
Las·deno~~ac¡on¿.s ~trib~idas a 4. Paralelamente, puede preverse
los· términos de cada una de las ca· la confrontación de las Cstructucis
tegoríaS inódales, amique intuitiva- modales del deber:hacet ·y del Po-·
mente motivadas en' el plano se- der ·hacer. La ausencia de denonti~
mántico, son sin embargo ·arbitra~ naciones comunes no es µienos su~
rías · por definición y pueden, ser gestiva:
reemplazadas sin .ninguna· dificultad
por otras, jttzgadas más aptopiadas.
3. ·Aun cúando sólo se bisen en
la intuición semántica, estas deno- · 1:10 poder no -hactr
minaciones no pueden sino eviden.
<:iar ·las · afinidadeS que existen
entre las estructuras modales ; del no dtbu no lzat:tr )
X
dtbtr·hactr )
(prescripción)

(obediencia}

(permisión)
·
1 deber 1:10 hactr
· (~rohibiclón)

no podtr·lwctr ·
(impotencia} ·

1n~:·.· dtber·hat:~r
(ii.utoriu.clón)
poder·y las del deber*. Así, la con.
frontación. de los cuadros .semióti· · podt1'-hactr · Palier no htu;d'·
cos · del deber·ser y del poder.ser · (libertad) {lndepcndenc!t}
309 PODER· POJ!T!CA

A pesar de la diferencia en. las guir, entre l<is principales funcio-


denominaciones -y, quizás, a causa nes"' <lel lenguaje, la fttndón poética
de ella· misma-, se destaca el ca- a la que define. como «el acento ...
rácter complementario de los tér- puesto sobre el mensaje por si
mino!> que dependen de ambas ca- mismo11. Tal integración de la poé-
tegorías modale...,: parecería que la tica en la lingüística ha podido cla-
obediencia, por ejemplo, valor mo· rificar la conciencia a las investiga-
dal que define cierta competencia ciones poéticas comprometidas por
del sujeto, presupondría este otro el romanticismo; la imprecisión de
valor modal que es la prescripción. este concepto, a su vez, ha pcrmiti·
Más aún, parecería también que la do a algunos reintroducir -bajo un
definición de las relaciones jerá!'· nombre reactuali.-;ado- preocupa-
quicas* de dominante / dominado cionl?s estéticas que no se atreven
tuviese necesidad de tomar en cuen· todavía -cuestión de moda- a pre-
ta esta complcmentariedad modal. sentarse abiertamente.
S. Ello nos lleva a considerar las 2. Desde el punto de vista semió-
modalidades de deber y de poder tico, los textos literarios son ma·
como dos instancias autónomas y nifestaciones ocurrenciaies del dis-
complementarias de la modaliza· curso literario* que depende, a su
ción, una llamada virtualizante, y la vez, de una tipología general de los
otra, actualizante. discursos. Plantear la literaridad*
~ MODALIOhD, DEBER. como un postulado de partida, o la
poeticldad de una clase particular
POllTICA. Fr. poétique, ing. poe- de discursos, es poi:ier el arado de·
tics. lante de los bueyes: hay un fondo
l. En sentido corriente, la poéti- común de propiedades, de articula-
ca designa, tanto el estudio de la ciones y de formas de organización
poesía, como -integrando a la pr<r del discurso que deben explorarse
sa- la «teotía general de las obras antes de tratar de reconocer y de-
literarias:.. Esta última acepción, tern;inar Ja especificidad de un tipo
é¡ue se remOnta a Aristóteles, ha particular. Así. la posición de Ja
sido actualizada recientemente por poética -<::onsiderada como disci-
los teóricos de la «.ciencia de la plina apriorlstica. segura de las ca·
literatura:. (Literaturwi.ssenschaft) racterísticas de su objeto- no es
que se propcnen generalizar lo que, sostenible en cl ámbito de la teoría
durante mucho tiempo, sólo era semiótica. .
. una «etnoteoría» inscrita en el 3. No sucede lo mismo cuo.ndo se
marco de la tradición greco-romana, trata del hecho poético en sentido
y evidenciar, al mismo tiempo, la estricto, es decir, de un campo se·
especificidad de esta forma de acti- miótico autónomo, fundado en et
vidad lingüfstíca. Es así cOmo R. reconocimiento de articuiaciories pa·
Jakobson -con el formalismo* ru- ralelas y correlativas que compro·
so del cual es heredero y· represen· meten al mismo tiempo los dos
tante- sirve de mediador entre la planos -el de la expresión* y el
literatura y la lingüística, al distin-· del contenido""- del discurso. Esta
POETICA · POLSMICO (-A) 310
«dobl~ articulacióD» (en· sentido no POLJtMICO (-A). Fr: polémiqu~,
martinetista) -cuya forma teJaja· ing.· polemic. .
da, distendida, puede ser reconoci· l. A nivel del enUr¡.ciado*, la
da gracias a las regularidades pro- multiplicación de análisis concretos
sódicas de la versificación, y que de discursos narrativo.S: ha puesto
alcanza un grado de condensaciór. de relieve la existencia· de un ver.
exacerbada en la . ·poesía llamada <ladero. principio polémlco sobre el
simbolista (o en .alB:unos ·textos sa· cual descansa la organización narra.
grados)-: no ·basta, sin embargo, tiv:a: la actividad htimana, concebí·
para definir. el diSctirso poético. La da en fonna de confi;.ontacio:Oesit,
célebre intuición j8kobs0niana, se· caracteriza, en grari medida, lo ima.
· gún la cual el discurso poético ce. ginario humano. Aun eil los casos
rresponde a la proyección dei eje en que Ja narratividad* 'na· esté o'r·
paradigmático* en· .el eje sintagmá· ganizada como .un enfrentamiento
tico, ha dado un nuevo impulso .a de dos programas"' narrativos con·
las investigaciones · poéticas · (los trarios*. (o contradictOrios*) que
Gatos baudclerlanbS de R. Jakobson pongan en preSencia up sujeto* y
y · C. Lévi-StrausS- ·así lo demues· un anti-sujeto, ta· figura:·del oponen.
tran): suspender, durante· la lectu· te" (ariimado o inanimZ.do) aparece
·ra, las relaciones hipOtácticas* que ·siempre como una roanifestacióti
rigen el discurso en beneficio de las metonimica del 3.nti-sujeto. Es en
relaciones taxonómicas enfáticamen• este sentido en el que .puede ha·
te subrayadas, ha Permitido prever blarse de la estructuia polémica,
pos_ibles · defiuiciories de unidadeS* propia de un gran número de. dis·
e isotopías:4' poéticas, situadas en cursos tanto figurativoif..como "abs·
los dos planos d·et lenguaje. Al mis· tractos.· ·
mo tiempo, otras ' investigaciones 2. A nivel de Ja enw;iciación*,· la
han evidenciado la existencia de estructura de la comunicación* in-
una narrativa* poética y de trans- tersubjetiva, que se basa en un con·
formaciones* que articulan el dis- trato implfcito entre los ·.participan·
curso poético en sU nivél más pro- tes, revela la ex:istencia' '.·de una ti·
fundo*. Así- se precisa el estatuto pología virtual de las '«actitudesb,
paradójico del ·discurso poético: es decir, de las competencias* mo-
sintácticamente, es Un discurso abs· dales enunciativas, que va de las es·
tracto*, comparable por este hecho tructuras contractuales «benévola!':•
con los discursos practicados en ló- (tales como el acuerdo mutuo, la
gica y en matemáticas; semántica· obediencia, etc.) a las _,estructuras
mente, es un discurso figurativo* y, Polémicas «apremiantes~ (en caso
como tal, garante de una fuerte efi· de provocación o de chantaje, por
cacia comunicativa. No es de extra· ejemplo). ..
fiar, por eso, que el efecto* de sen· 3. En semiótica, el reconocimien·
tido que de alJí se desprende, sea el to de este tipo de estniCtura, pel°"
de Ja verdad,. como cuando se trata mite articu1ar y fonnulir c.on rila·
del discurso sagrado. yor precisión la problemática más
~ LITERARl..\ (Seiniótica ;,_), METÁ· general -propia del conjunto de las
FORA, UNIDAD (poética. -). ciencias sociales- dentrq ·ae la cual
311 POLÉMICO (·A)· POSICIÓN

se oponen dos concepciones casi in- mantener; su justificación atañe


conciliables de la sociabilidad: la más al uso'". Desde el punto de vis·
vida social como lucha (de clases) ta teórico, no obstante, se puede
y competición, y la sociedad funda- considerar que dos o más lexemas
da en el intercambio y la cohesión son distintos pero homónimos
social. cuando sus sem,emas no poseen una
--7 COERCIÓN, CONTRATO. figura nu.dear* común (o no más
de una).
POLISEMEM.IA (o, tradicional· -+ SEMEMA, LEXEMA, l!OMONIMlA.
mente, POLISEfi'iIA). Fr. polysén1é-
n1ie (ou polysémie), ing. polyseme- POSIBILIDAD. Fr. possibilité, ing.
mia .. possibi1ity. - En cuanto denomina·
1. La pollsememia corresponde a ción, la posibilidad designa la es·
la presencia de más de un semema tructura modal que corresponde,
dentro de un lexema. Los lexemas desde el punto de ·vista de su defi·
polisemérnicos se oponen, pues, a nición sintáctica, al predicado mo-
los le;r.:emas monosemémicos* que dal de no deber que rige al enun-
no comprenden sino un solo seme- ciado de estado no ser/estar. En el
ma (y que caracterizan, sobre todo, campo de las modalidades atéticas
a los léxicos especializados: técni- y dentro del cuadro* semiótiCo, la
· cos, científicos, etc.). Sin embargo, posibilidad p!"esuponc la existencia
la polisememia sólo existe -salvo de la imposibilidad*, de la cual es
el caso de la pluri·isotopía"'- en es- la negación. Como término de la
tado virtual ( tten diccionario"), pues lógica, la posibilidad denomina tam·
Ja manifestación de un lexema de bién Ja estructura modal de poder-
este género lo desambigua* al ins· ser, lo cual la· vuelve semióticamen-
cribirlo en el enunciado* donde' rea· te ambigua.
liza sólo uno de sus sememas. -> Al..ÉTlCAS (modalidades -), DE·
2. La lexicografía opone tradicio- BER.
nalmente la polisemia a la homoni·
mía, considerando como homóni· POSICióN. Fr. position, ing. po-
mas los morfemas* o las palabras sition.
distintos por su significado* e idén· l. En lingil!stica, ta posición de-
ticos por su significante*. Según la signa el emplazamiento que un ele-
sustancia del significante, son llama· mento ocupa en la ca,dena sintag·
dos homófonos («baca», sitio en la mática*, y que le confiere ciertas
parte superior de las diligencias y propiedades suplementarias. Así
demás coches de camino; «vaca», pues, erigido en procedimiento ge-
hembra del toro) u homógrafos neral. el estudio de las posiciones
(«pluma», cada una de las piezas de los elementos lingüísticos co~
de que está cubierto el cuerpo de rresponde at de las distribuciones*
las aves: 11p1uma,,, instrumento de qc.e caracteriza a la escuela de
metal que sirve para escribir). En Bloomfield. Tratando de conciliar
la práctica, esta distinción entre un los puntos de vista :Paradigmático
lexema polisémico y dos o más le- y sintagmático (la morfología y Ja
xemas ·homónimos es difícil de sinta.""<is), L. Hjelmsle-9 introdujo la.·

1
1
POSIC!óN ·PRACTICAS SEM!óTICAS 312

noción de· posición en su definición de la categoría* lógico-teÍnporal an.


de la ·categoría* lingüística; terioridad / posterioridad que per.
· 2. En semiótica Poética, el aná· mite construir el rnarcb'.- de locall.
lisis. poslclonal, preconizado por J. zación temporal de lo.s pÍ-ogramas*
Geninasca, ha evidellciado '1a posi- narrativos, durante el prócedimien.
bilidad de ·tm ·estudio semántico de to de temporalización* del discurso.
los textos, bas.adO ,t!n el reconoci· -->- LOCALIZACIÓN ESPAC!O·'t;!MPORi\L.
miento de articulaclopes posiciona· :.:
les (rima*, ritmo*) del significante*. - PRACTICAS SEMióTICAS. Fr.
3. La semiótica narrativa de.fine· pratiques sémiotiques, llig. semio-
el rol 3.ctancial* por su vertimiento tic practices.
modal y, a la vez, por su posición l. Partiendo de la defi:nición del
en el reconido narrativo* del SU· sentido" e o m o intendonalidad•
jeto. Por este hecho,.Ios personajes, orientada {y teniendo eh cuenta
lejos de ser ioamovjbJes y estar de- que las organizaciones Semióticas
finidos de una vez por todas, se· en- se constituyen dentro de ~stas dos
cuentran relativizados: el héroe* o ~ macrosemióticas*: las lenguas* na~·
eJ traidor* no son tales sino en una turales y Jos mundos natürales}, se:
posición nlirrativa de'finida.. les llamará prácticas semiótJcas a
~ ORDEN, SINTAGMA!ICA, 10.s Procesos semióticos reConocidos
1· en el mundo natural y qu~ puedén
POSITIVO (·A) (~RMINO, DEt· ser definidos de modO seinejante a
XIS). Fr. terme, deixis positif/ive1 los discursos* (que son «Prácticas
ing. positiVe. _...;. Los · dos términos* verbales»,· es decir, procesós semiÓ·
del eje de los coniñríós*· -$ 1 y 5 2- ticos situados en las lenguas natu~
se denominan, respecfivamente, po. rales).
sitivo y negativo,;sfn- que por ello 2. Las prácticas semióticas (Que
estos calificativos Supongan una también pueden Cat¡ficarie de so-
connotación tímica*, euforizante o ciales) se presentiin coxiio sedes
.disfodzante. Asimismo, . las dos significantes de comportamientos .
deíxis10 a ·las que pertenecen son somáticos organiza.dos, cuYas rea·
denominadas, de mánera discrlmi· lizaciones van desde Jos simples es-
natoria*, deixis . positiva y deixis tereotipos sociales hasta lás progra·
negativa. De ahí que )os subcontra. maciones de forma algorítmica*
rios*, pertenecientes . cada uno. a (que permiten,· eventualrriente, re-·
una deíxis diferellte,_.se denominen currir a un autómata*). Los modos
positivo ($2) .y negatÍ\:'o (S1) seglin de organización de estos comporta~
la deixis en Ja que estén incorpo. mientas pueden ser analizados co-
rados (y :Q.O P.Or el hecho de que mo programas* (narrativ0s) cuya
sean contradiCtorios* s.eiún su deí· finalidad no es reconocibltt-en tJt.
xis de origi!n). tima instancia- sino a posteriori:
-+ CUADRO .. SEMIÓTICO.·· por consiguiente, se· utiiitij.rán los
métodos y procedimientos _:.del aná-
POSTERIOR~DAD. Fr. poitériori· lisis discursivo en Ja medida en que
té., ing.: posie,:f'ority. - La posterio- éstos se presten a ello. En -.este sen·
ridad es uno de Jos OOs términos* tido, ciertas descripciones :4e ·rltua·
313 PRACTICAS SEMIOTICAS. PRAGMATICO (·A)

les y de ceremonias son bastante independientemente de su posible


concluyentes. - El concepto de empleo a nivel del saber*: los ob-
práctica semiótica abarca, entre jetos pragmáticos son reconocibles
otros, los discursos gestuales* y como valores descriptivos* (tales,
las ·estrategia~ proxémicas* todav(a los objetos atesorables o consumi-
muy poco exploradas. El estudio de bles), por oposición a los valores
las prácticas semióticas, tal vez, re- modales*. En este sentido, la prag-
presente tan sólo los prolegóroen<Js' mática podría ser homologada con
de una semiótica de la acción*. la tciraera función"' de G. Duméxil.
-+ MUN.00 NATURAL, DISCURSO. Es en esta acepción en la que se
distinguirán, correlativamente, el
PRACTICO. Fr. pratique, ing. hacer* pragmático y el hacer cog-
practical. - Se califica de práctico noscitivo*, zl sujeto pragmático y
-durante ·la lectura de un relato el sujeto cognoscitivo, las perfor-
mítico-· al nivel discursivo de su- mances y competencias pragmáticas
perficie* que se da corno una narra- y cognoscitivas.
ción simple de acciones relativas a 2. De ahí, la distancia que sepa-
Jos actores allí instalados, en oposi~ ra nuestra concepción --que toma
ción al nivel mítico* que. más pro- . en cuenta el conjunto de las acti-
fundo y subyacente al primero, at vidades humanas, tnl y como son
ser exPlicitado* aparece corno por- ·descritas en los discursos, articu-
tador de significaciones abstractas* lándolas según la dicotomía prag-
(que articulan las preocupaciones ~nático / cognoscitivo- de la que
fundamentales del hombre y de la se ha desarrollado en Estados Uni-
cultura* en Ja que, vive). Este tér· dos, muy particularmente a partir
mino, susceptible de prestarse a de Jos trabajos de Ch. W. Monis.
confusión, ha sido- progresivamente La pragmática, en .el sentido norte-
sustituido por el de figurativo*. americano, pretende esencialmente
~ COSMOLÓGICA (dimensión -), M!- aislar. las condiciones de la comu-
ilCO (discurso, nivel -), FIGtrnA. nicación* (lingüística), así, por·
ejemplo, el modo de actuar de un
PRAGMATICO (-A). Fr. pragma- interlocutor con relación al otro.
tique, ing. pragmatic(s:). Para nosotros. esta a:pragmática•
1. El ex:..mcn de los discursos del lenguaje, referida a las catego-
narrativos nos ha llevado a distin- rías de su empleo, constituye uno
guir, a nivel superficial, la dimen- de los aspectos de Ja dimensión
sión cognoscitiva* y la dimensión cognoscitiva* -pues, en efecto, con·
pragmática que ·sirve, en cierto mo- cierne a Ja competencia* cognosci·
do, de referente"' interno a aquélla. tiva de los sujetos comunicantes-
la dimensión pragmática, reconoci- tal como ésta puede ser reconocida
da en los relatos. corresponde -en (y reconstruir su simulacro) dentro
líneas generales- a las descripcio- de los discursos.enunciados: asf, el
nes que se hacen de los comporta- hacer persuasivo*· y el hacer intert
mientos somáticos"' significante1>, or- -pretativo* no constituyen paráme--
ganizados en programas y recibidos tros «extra-lingüísticos,. como po-
por el enunciatario* como \l:eventos11- dría darlo a entender cierta concep-
PRAGMATICO (·A)· PREDICADO 314
ción mecanicista de la comunica- ·predicado, tema / rema, :·'tema / in·
ción, sino Que entran totalmente · ten·ción, etc.), se asienta, global-
en el proceso de la comunicacl6n mente, -sobre una oposicii?n semáii.
(tal como es enfoc"ado por la se- ti ca entre «aquello de lo ·que se ha.
miótica), donde el destinador"' y el bla» y «lo que se dicei.>;· Resulta,
destiliatarici; por ejemplo, son suje- pues, que para todas las gfamáticas
tos compétentes y .rlo instancias va- del enunciado (que no .tienen en
cías (como el emisor* O el receptor). cuenta la enunciación), la predlcti~
De esto se colige que, dentro de la dón aparece como uno de los ele·
línea de Ja «pragmática• norteame· rnentos eSenciates del acio de len-
ricana, puede ser éiaborada una gllaje. '
semiótica de la comunicación ureali> 3. La elección aprioríSiica de la
(en cuant9 objeto descriptible), Si naturaleza binaria del enunciado se
extrapola, en particular, los mode- acompaña, por lo general~ de otra
los de la semiótiCa cognoscitiva, re· hipótesis, máo; o menos. Hmplícita,
sultante del análisis de los discur· que versa sobre la uniCidad del
sos n3.rrativo"s. enunciado elemental; es decir, sO-:
~ 'COGNpscrnvo! SABER, COMUNICA-· bre la convicción de que 'todos Jos
CIÓN, DISCURSO¡ lt\CER, . . . entinciados, cualesquiera , que sean,
son redtictibles a una forma ele·
PREDICADO. ·iFr. prédicat, ing. mental única. Es así como la lógica
prediaate.·· · clásica reduce el conjunto de Jos
l. Tradicionalmente se considera enunciados a la forma ;<1;tributiva
al predicado como una de las fun- («Pedro es feliz»). Las t~Orías lin·
ciones* sintácticas coÍlstitutivas del güísticas más recientes -2e1 distri·
enunciado*. Como cla.se* sintáctica, buciona1ismo*, seguido en .esto tan·
el predicado cori'esponde, más o to por la gramática g~nerativa*
menos (sin confundirse), al verbo como por la glosemática-:-.: han tra·
(definido como clase morfológica) tado de. evacuar este problema, ya
o aI sintagma verbal (considerado sea construyendo una sintaxis fun•
como clase sintagmática). El encaje dada en clases sintagmá'ticas, ya
de estos tres tipos ~e unidades lin· desemantizando -o manteniendo
güfsticas, uno dentro de los otros, únicamente·"la relación abStracta· de.
constituye· uno de ·los· proble1nas presuposición*- el ·vínculo que une
más arduos de toda teoría graÍna~ el predicado at suje.to. ·
tical. 4. Situándonos en la línea de L.
. 2. La definición del predicado y Tesniere Yde H. Reichenbach, con·
el lugar que se le asigne en Ja eco· cebimos el predicado como Ja reia-
. nomía del enunciado·. dependen de ciOn constitutiva del enUJlciado, ~
la concepcióil de la estructµra del decir, como una función* .en la que
enunciadO elemental :que cada teo- Jos términos-resultado . soii Jos ac·
ría. lingüística declare axiomática· tantes*; al mismo tiempo,::distingtii~
mente como .verdadera. La concep- rnos dos tipos de enund.cidos ele-
ción binaria más. tef?,az se remonta ment~tes (y dos clases dC· relacio-
a la Antigüedad y, a pesar de las nes ·predicados, constitu.tivas de
variaciones terminológicas (sujeto·./.· esos enunciados}: Jos .~unciados
315 PREDICADO- PRESENCIA

de hacer* y los enunciados de es· gación; se trata, en este caso, de


tado*. una inconsecuencia semántica: si la
-7- CLASE, ENUNCIADO. obligación integra ·tanto la prohibí·
ción como la prescripción, debería
PREDOMINIO. Fr. dotttinan.ce, ser considerada como parashiónimo
ing. don1inance. de injunción*.
1. Se denomina predonúnante el ~DEÓNTICAS (modaUdades-),DEBER.
término* que, en el momento de la
operación de neutralización, se man· :-·~1-4:.SENCIA .. Fr. présence, ing.
tiene para manifestar la categoría'j: presence.
entera. Cuando, por ejemplo, en es- 1. El concepto de presencia con-
p¡i,ñol la oposición del masculino y cierne a la teoría del conocimiento
del femenino es neutralizada por la Y entraña, por este hecho, fuertes
aparición del anafórico «ellos», se implicaciones metafísicas (presen~
trata, entonces, de una neutraliza· cia «en11 la percepción o «revelada,.
ción con predominio del masculino. por la percepción, presencia '"'en el
2. Siguiendo a V. Br0ndal, se espíritu,,, cte.): ·su definición onto-
distinguen dos variedades del tér· lógica debe ser excluida de la tecr
mino complejo* (que reúne los dos ria semiótica.
términos contrarios del cuadro se- 2. Desde la perspecth•a semióti·
miótico ): el complejo con prcdo. ca, se considera la presencia (el
minlo positivo, si el término predo- «ser { estar ahh) con10 una deter-
minante depende de la defxis* posi· minación atribuida a una magni·
tiVa, y el complejo con predominio tud* que Ja transforma en Objeto
negativo, en el caso contrario. Los de saber* del sujctO cognoscitivo.
términos complejos resultan de la Esta acepción, esencialmente opera·
tercera generación de los términos toria*, establecida en el marco teó-
elementales; esta particularidad en rico de la relación transitiva* entre
su articulación debe ser interpreta· el sujetO cognoscente y el objeto
da como efecto de las coerciones conocido, es muy amplia: están pre-
sintagmáticas encontradas en su re· sentes, en este caso, todos los ob-
corrido. jetos de saber posibles, y la presen·
~ NEUTRALIZACIÓN, CUADRO SEMIÓTI• cia se identifica, en -parte, con la
co, coMPtaro (término -). noción de existencia* semiótica,
3. La oposición categorial pre-
PRESCRI:PCióN. Fr. prescription, ser1cia / ausencia aparece entonces
ing. prescription. - Denominación conio una posibilidad de distinguir
del término positivo de la catego- dos modos de existencia semiótica.
ría* modal deóntica, la prcscrlpción Así, el reconocimiento de un para-
comprende, como definición sintác· digma, por ejemplo, implica -al
tica, la estructura modal de deber· lado de un término presente (in
hacer; constituye con su ténnino praesentla) en la c~dena sintagmá-
contrario, la prohibición*, el eje de tica- una existencia ausente (tn
la injunción*. - En lógica deónti· absentta) de los otros términos '
ca, el término prescripción es reem· coristitutivos ·del paradigma. La
plaza.do, a menudo, por el de obli· existencia in abseiitia que caracte-
PRESENCiA • PRESQPOSICION 316
riza al eje paradigmático*; corres- relación de presuposición-· reconoci~
ponde a · una e.Xist~cia virtual*, da en latín entre O.b (presuponiente)
mientras que' la e:xist'encia in prae· y el ab·Jativo (presupuesto): Ja pre-.
sentia, de ·orden sintagmático*; es sencia del ablativo no necesita la
una e,dstencia actual* (se trata 'evi· presencia de ab.
dentemente de los ·modos de exis· 3. Este ejemplo puede. ·ayudar a
tencia de las unidades y de las cla· distinguir Ja presuposic~6n de Ja'
ses sintagmáticas, y no de los de implicación* (que es unª relación
una palabra--ocurrericia · o::reab,. }>Or del tipo. 11si. .. entonces»):' se dirá.
ejemplo, que sólo : manifiesta, en que, en latín, alJ implica el ablatiVo;.
forma de grafía, Iii sUstancia de su entendiéndose con esto QUe ab, 16·
significante). · ' · gicamente anterior, coni¡1,iciona lá.
~ EXISTENCIA SEMIÓTICA, PRESUPOSI• presencia del ablativo. Por el con- ·
CIÓN. trario, el .ablativo presupone ab, ya
que, en cuanto término presupues~
PRESUPOSICióN. Fr. présuppO.. to, es lógicamente ·anterior a ab,
sitian, ing. presupposition. . término presuponiente. Se puede·
l. En la le"ngua. corriente, el tér· entonces decir que los dos' tipos de
mino · presuposición; ·e§· ambiguo, relaciones se orientan* en~ direccio-
pues designa· tanto el acto .de pre- nes · opuestas. Se notará,: :por otra.
suponer cierto tipo dti relación en• · parte, que la relación de. implica-
tre los términos, como también uno ción presupone la relación de pre-
de los términos (el ptesupuesto) en . stiposición que le es anterior; en la
el que finaliza la relación. Utilizado medida en que el ablativo es el tér·
en lógica y en lingüística, este con~ mino presupuesto y, como tal, ne·
cepto ha dado lugar, recientemente, cesario, la implicación «SÍ•.• enton· ·
a desarrollos amplios y profundos ces» puede ejer.cerse pte~amente;
que es- imposible reseñar aquí. Nos si este no fueta el caso, la' implica-
limitaremos sólo a precisar la apor· ción serla aleatoria.
tación · de este concepto para una 4. Al lado de la presuposlclón ·
tipología de las' rela.ciones -funda- simple que acabamoS de mencionar,
mentales. ;• · se reconoce una doble presuposl·
2. Si se ·reserva Ja denominación cfón (llamada también presuposl·
de presuposición s61o para la rela- clón recíproca) en la que los dos
ción*, se dirá que d"esigna la reJa· términos son, a la vez, presupo.
ción que contrae et" t~rmino* presu· niezites y presupuestos. La. ausencia
poniente con el térmiño presupues- de presuposición entre· dos ténni·
to. Por término presupúesto -se· nos les devuelve su autonomía*: la
entenderá aquel cuya presencia* es relación que contraerán eÓtre ellos
la condición necesaria para. la. pre- será, entonces, o bien la d~ combi-
sencia del ·término presuponiente, nación*, en el eje sintagrñático, o
mientras que la· presencia del térmi- bien Ja de oposición, en el e"je para.' ·
no presuponlente no: es condición digmático. . . : .
necesaria para la def.'. término pre- 5. En semiótica narratiVa, la ·re-
supuesto. El ejempJ~. ya clásico, trolectura ciet relato* penliite, por ·
dado por L. Hjelmsk::;, es el de la ejemplo, siguiendo e.I esqU"en1a na·.
317 PRESUPOSICióN - PROCEDIMIENTO

rrativo*, poner -ul día un orden ló- la improbabilidad* como término


gico de presuposición entre las contradictorio y a la · \ncertidum·
diferentes pruebas*: la prueba glo- bre* como término subcontrario.
rificante* presupone la prueba de- EPISTb&ICAS (modalidades -).
cisiva* y ésta, a su vez, presupone
la prueba calificante*. Dicho de PROCEDER ESTILlSTICO. Fr.
otro modo, la lógica del relato está procédé stylistique, ing. stylistic de··
orientada y va desde abajo hacia vice. - Término de la estilística,
arriba, y no inversamente como al· que designa la «manera de operari>
gunos estarían tentados de creer. del enunciador* durante la produc-
En esta perspectiva y desde el ción* del discurso, el proceder esti·
punto de vista de la producción* lístico es reconocible, al menos in·
del discurso narrativo •. la convcr· tuitivamente, a un cierto nivel de
sión* del eje de las presuposiciones superficie.,. del texto. Esta rioción
en eje de las consecuciones -que hace $UyaS las antiguas .figuras* de
caracteriza a la programación* tem· retórica, vinculándolas . a la instanw
peral-, es uno de los componentes cia de la enunciación*. La razón
1
de la performance del enunciador"'. principal del 'fracaso de la estilís·
~ PRESENCIA, CtJAORO SEMIÓTICO. tica ha sido, hasta el momento, la
ausencia de un método -como el
PRIVACióN. Fr. privation, ing. que a toda descripción estroct~­
deprivation.. - Situada a nivel figu- le permite establecer su taxono.lf·..
rativo*, la privación -que se opone mía- para el reconocimiento de
paradigmáticaroente a la adquisi· esos procederes.
ción*- representa la transforma· -+ tsTILfSlICA.
ción* que establece la disjunción*
entre el sujeto"' y el objeto'"' a par- PROCEDllvtIENTO. Fr. procédure,
tir de su conjunción'"' anterior; se ing. procedure.
efectuará o bien de forma transiti· l. En la tradición hjelmsleviana,
va* (desposesión*), o bien de forma se entiende por procedlmier..to una
reflexiva* (renunciación*), Inscrita serie de operaciones* ordenadas,
en el esquema narrativo*, la priva- encaminada a agotar la descripción*
ción es la forma negativa de la con· de cualquier objeto semiótico se-
secuencia y puede ser considerada, gún el nivel de pertinencia* elegido.
a este respecto, como uno de los Tal definición, teóricamente irre-
componentes posibles de esa figura prochable, es demasiado general
discursiva que es la prueba. para ser aprovechada. Asi, el tér·
~ COMUNICACIÓN, CONSECUENCIA, mino procedimiento se aplica co-
PRUEBA. rrientemente a las series de opera·
cienes limitadas y/o localizadas que
PROBABILIDAD. Fr. proba.bilité, corresponden a una instancia, a un ·
ing. probability. - En cuanto deno- segmento o a un micfO"universo*
minación de la estructura modal dados, a los que .se trata de someter
no creer no ser, la probabflidad e.e; a la descripción.
uno de los términos de la categoría 2. Se distinguirán dos grandes
modal epistémica, en donde tiene a tipos de procedimien~os: los proc~
PROCEDIMIENTO; PRODUCCióN 318

d.inüentos analíticos* (o ·descenden· ·sujeto cognoscente ·abord3. el objeto


tes) que parten de un objeto semi6- a conocer, enfocándolo ya sea corno
. tico .Conside·rado coÍno un todo ·y sistema*; ya como proc~. El pro-
tratan de establecer. las ·relaciones ceso semlóticO -que no r.ecoge sino
entre sus partes y' -el todo¡ y. los una parte,. de las detenninaciones
procedlmlen~os sln~éticos (o· a.Scen· del concepto vago de habla*- de-
dentes) que Parten,. "gene,ratmente, signa entonces, en Ja terminológía
de los eleméntos considerados como hjelmsleviana, el eje* sintagmática
indescomponibles, ·reconociendo que del lenguaje y se opone al sistema
forman parte de unidades ·más_ am· semiótico que repn;senta al' eje Pa-
plias. radigmático.
3. En la ºtradicióri norteamerica· 2. En semiótica discurSiva, el tér·
na, se· tiende a ·distinguir los .proce- mino· proceso sirve parii designar
dimientos · de descripción* de los el restiltado de Ja coriver:Sión* de la
procedimientos de descubrlm!ento*, ·función narrativa de hacC'f•, conver-
en dos cJaseS de ·-problemáticas .-a sión que se efectúa gracias a los
menudo ccnfundidas- de orden vertimientos complementarios de
epistemológico: ·los Procedimientos. las categorías temporale~·. y, sobre
de descripc~ón dependen ·de la ·re:. todo¡ aspectuales. Tal pioceso pue-
flexión sobre la construcción de los de, entonces, ser lexicalizado ya sea
metalenguajes* y de los sistemas de en forma condensada* -(un simple
representación* del hacer· científico, verbo, por ejemplo), ya ··en ex.pan.
mientras que los procedimientos de sión"' (frase, párrafo, capftulo, etc.).
descubrimiento plantean problemas ~ SINTAGMÁTICA, ASPECTUAi..tDAD, TE:M°•
relativos al valor de las teorías* y FORALIZACIÓH".
a la eficacia* de las metodologías*. -
4. En esta tlltima. perspeCtiva. la PRODUCC!óN. Fr.
lingüística chomskiaha opone a: los ing. production.
procedimientos de descubrimiento l. En el ámbito de las activida·
·-conSiderados· comó no pertinentes des humanas, cabe oponer Ja pro-
para fundamentar Y' justificar: Ia:s ducción -concebida . como la ope·
teorías gramaticaleS".""" los procedi- ración* por la cual el horríbre traris-
mientos de evaluación, susceptibles forma Ja naturaleza o las cosas-
de estimarse según eI principio de ª la comunicación* refel-ida a las
simplicidad. relaciones intersubjetivas ·Y que, por
~ DESCRIPCIÓN, DESétrnRrMIENTO, ME· este hecho, dependen de la manipu-
rALENGUAJB, REPRES'ENTA.CI6N', SrM?r-1cr· lación* (en tanto· que és.ta implica
DAD. un hacer·creer y un hacer-hacer) ..
2. En semiótica, la prÓducción e.s ·
PROCESO. Fr. P~.o,ces; ing. pro- la actividad semiótica, consideradá:
cess. · . "":". como un todo, y qUe, sitU3.da en Ja
1. Al querer -precisar la dicoto· instancia de la enunciació.n.*, termi: ·
mía saussuriana de .Jengua / habla, na en la formación del enunciado*
L. H)elmsleV ·la. })a· . interpretado (frase o ·discurso). El us.o:
tiene ta.
como un caso particiular de aproxi- tendencia a confundir Jos 'términos
mación más genefat,. .Por et que el de producción y de genel-ación (o·
319 PRODUCCióN-PROFUNDA
engendramiento). Según la grarná· ten diferentes niveles di:. significa-
tica generativa*, la generación con- ción (o diferentes isotopías*). no
cierne a la competencia* del sujeto parece que se pueda reducir la pro-.
hablante (que es, a Ja vez e in.dis- ble1nática de las estructuras pro-
tintamente, emisor* y receptor*); fundas sólo a la ciímensión semán-
mientras que la producción, carac- tica ni tampoco vincular la inter-
terística de la performance"', es úni· pretación* semántica -como lo
ca mente cosa del enunciador*. hace la gramática generativa* es-
3. A menudo se oponen las gra- tándar- únicamente a las estructu-
máticas de producción a las gramá· ras profundas.
ticas de reconocimiento: mientras 3. En lingüística, la distinción
que éstas se sitúan idealmente en el entre estos dos tipos de estructu-
lugar del enunciatario y efectúan el ras -debida a la gramática genera-
análisis de un corpus* de enuncia· tiva y transformacional- hace, evi-
dos, aquéllas adoptan el punto de dentemente, abstracción de los sen·
vista del enunciador y proceden por tidos (1) y (2) antes mencionados.
síntesis*, aspirando a construir las Sólo concierne a la dimensión sin~
frases gramaticales, a partir de los táctica* de la lengua y está fundada
elementos. en la relación de transformación"'
-)> OPERACIÓN, COMUNICACIÓN, GENE· -o de una serie de transformacio-
'RACIÓN, ENUNCIACIÓN, ACTO DE I.E.NGUA• nes- reconocible (y explicable en
JE, RECONOCIMIENTO. forma de reglas*) entre dos análisis
de una misma frase, una .de las ·
PROFU1'.'DA (ESTRUCTURA -). cuales, la más simple y la más abs-
Fr. structure profonde, ind. deep tracta, está situada a nivel profun-
structure. do. Así. pues, no se trata, en el caso
1. En semiótica, las estructuras* de las estructuras de superficie, de
profundas se oponen, habitualmen- frases «reales» o realizadas* y que
te, a las estructuras de superficie* las estructuras profundas fuesen
(o superficiales): mientras que és- sólo virtuales*. Unas y otras depen·
tas dependen, por así decirlo, del den del modelo de la competencia"'
dominio de lo observable, las otras (o de la lengua*) y son tributarias
son consideradas como Subyacentes de la teoría lingüística que las ha 1
al enunciado. Se observará, sin em- formulado y del sistema formal*
bargo, que el término profundidad que las ha explicitado.
está teñido de connotaciones ideo- 4. Esto :oos lleva a decir que.
lógicas por la alusión a Ja psicolo- ambos tipos de estructuras son)!•.
gía profunda y también porque su construcciones metalingüísticas*;:;·
sentido se acerca, a menudo, al de ( uprofundo» y «superficiei> son dos
autenticidad. metáforas espaciales, relativas al
2. La profundidad está, al mis· eje de la verticalidad): sirven para
mo tiempo, ·implícitamente ligada designar, una, la posición de parti-
a la semár1tica y sugiere cierta «Ca· da, y Ja otra, el punto de ·negada
lidadi. de Ja significación y/o la di- de una cadena de transformaciones
ficultad de su desciframiento. Aun que se presenta como un proceso·
admitiendo de buen grado que exis- de generación*, como un recorrido
PROFUNDA· PROGRAMk NARRATIVO 320

gerieriitivo• de·· conjunto¡ dentro del de estado*. Puede represedtarse* de.


que ·cabe:-.: diStinguir ·:tantas etapas las- dos formas siguientes: .'
e hitos cómo ·seá· necesario ·para la
claridad ·ae la explica.cl6n. El· carác-
. PN = F [S 1 -> es, nOv)]
ter puramente· operatorlo* de estos
1
PN '." F (5 1 - . es, u Ov)J
niveles estructurales justifica y per- donde:
mite las modlficaciones'y los replan- F = funéión
teamientos que la teOria se ·ve obli- S 1 =;o sujeto de hacer
gada a introducir: . ¡ S 2 ="sujeto de estado
5. En semiótica, ét empleo · de O = objeto (susceptible de sufrir
esta dicotomía se insc'ribe, de modo un vertimiento semántico en
obligatorio, en- la "teocla gen'eral de "fonna de v: valor)
la generación ·de la .significación y ( 1 = enunciado de hacer ~·
toma en cuenta, esencialmente,· el () = enunciado de estad O·. ·
principio generativo según el cual -> = función de hacer (~ultante
las estructuras complejas son· pro- ·de la conversión* de "Ja trans-
ducidas a partir dé 'e.Structuras más fohnaci6n*)
simples {cf,: la combinatoria*) y, a un~ junci6n (conjunción: a· disjun-
!a vez, el pritlcipio del ..tincreme:µto cióit) que indica el estado ñ-·.
del sentido1t, Por el cual toda eóm-.
plejización de. las estructuras apor-
naI, la consecuencia del ha.·
cer.
ta un complemento de· significación.
Es por ello por lo que cada instan- Observación: para mayor :claridad,
cia del. recorrido generativo debe. ta' función «hacer» está rePresenta~
comprender los dos compo_nentes, da pleonásticamente por. 'los dos
sintáctico y semántico (lo cual está símbolos~ F y -'>·
a punto de ser admitido por la teo- El programa narrativo =debe ser
tia generativa .amplia"9.a). La noción interpretado como un cambio de
de profundidad es rClativa: cada estado, efectuado por un sujeto (S 1}
iristancia de generación :del discurso cualquiera que afecta a Un sujeto
remite a una ·mstancia «más pro- .. · (S 2) cualquiera: a partir del enun·
funda» y así -sucesivamente, hasta ciado de estado del PN conlsiderado
la estructura profunda·_ por excelen- como consecuencia, puedeD recans-
cia que es Ja estructura* elemental truirse en el nivel discursivo ñ.gu-
de la significación, punto ab quo ras* tales como la prueba'"; el don*,
del recorrido generativo. etc.
·~ SuPERFICn?, NIVEL, ÉSTRUCTUJlA. . 2. Una tipología de los PN esta·
ría por establecerse, tomándo en.'
PROGRAMA·· NARRATrvO•. Fr. ·'"Consideración sucesivamente los crl·
progtaffime· narratif,. ing'. narrative terios siguientes:
program. · ' ' a) la naturaleza de Ja ji..inción*:
l. El programa narrativo (abre- conjunción ·o disjunción (cOh'espon·
viado PN) es un sintaiina* elemcin· dientes a Ja adquisición* o::a la pri·
tal de la sintaxis* narrativa de su- vaci6n* de valores);
perficie, constituido pOr un enuncia- b} el del valor vertido:·- valores
do de·hacer* que rige un enunciado modales* o descriptivos*.. (y; dentro
321 PROGRAMA NARRATIVO

de éstos, ·valores pragmáticos* o PN anexo: simbolizado por PN


cognoscitivos"'); {PNa) y reconocido como pertene-
e) la naturaleza de los sujetos ciente ·a un nivel inferior de deri~
en presencia: éstos o bien son dis- vación* (la instalación del sujeto de
tintos (asumidos, entonces, por dos hacer delegado* -ser humano, ani·
actores* autónomos), o bien están mal o autómata- plantea el pro-
presentes en sincretismo• en un so- blema de su competencia*).
lo actor: en este último caso, el PN 6. Del PN de base elegido -es
es llamado performance*. decir, esencialmente del último va~
3. El programa narrativo será, a lor buscado- depende la forma ac-
veces, complcj izado con fines de én· tualizada* del PN global ¡;-..:e será
fasis*, es decir, para· producir el discursivizado, es decir, ante todÓ,
efecto de· sentido «dificultad,., «ca- temporalizado, para su realización*;
rácter extremo:o de la tarea. Dos Se ve, así, cómo un PN se trans-
procedimientos de énfasis son rela- forma en programación operatoria
tivamente frecuentes, sobre todo por la instalación de algunos pro-
en etnoliteratura: la duplicación* cedin1ieiltos de complejización (for~'
(cuando el PN está desdoblado, el mulables en reglas*) .. - Adviértase
fracaso del primero es seguido del que en el nivel discursivo, los PN
éxito del segundo), anotada simbó- pueden ser explícitos* o pueden
licamente PN (X 2), y la triplica- permanecer implícitos*: su explici·
ción* (o tres PN sucesivos que se tación es una exigencia de la sinta·
diferencian sólo por la «dificultadi> xis narrativa de superficie.
creciente de la tarea} indicada por 7. Ya ~e trate de un PN simple·
PN (X 3). o de una serie ordenada de PN (in-
4. Un PN simple se transforma· cluyendo los PN de uso y, eventual~ .
rá en PN complejo cuando exija mente, los. PN. anexos}, el conjunto
previamente la realización de otro sintagmático así reconocido corres~
PN: por ejemplo, el caso del mono pande a. la performance* del sujeto,
que, para alcanzar el plátano, debe a condición, sin embargo, de que
primero buscar un palo. El PN ge· los sujetos de hacer y de estado
neral será entonces llamado PN de estén en sincretismo en un actor
base, mientras que los PN presu· determinado y que los sujetos de'
puestos'"' y necesarios serán llama· los PN anexos sean idénticos al su~
dos PN de uso: éstos son, en cuan· jeto del hacer principal o, al menos,
to al número, indefinidos, vincula· delegados· y regidos por él. El PN,
dos como están a la complejidad llamado performance, presupone
de la tarea a cumplir; se les anota- otro PN, el de la competencia* (el
rá como PN {PNu 1, 2, ... ), indican· sujeto· del ahacer-seri> debe ser pre-
do con los paréntesis, como en (3), viamente ·modatizado, por ejemplo,
el carácter facultativo de la ex.pan· como sujeto del querer·hacer o del
sión. deber· hacer). Desde esta perspecti~ ·
5. El PN de uso puede realizarse va, la competencia aparece como un
ya sea por el sujeto mismo, ya por programa de uso, caracterizado por
otrc sujeto delegado del primero; el hecho de qi.ie los valores busca·
en este último caso, se hablará de dos por él son de naturaleza mo-

S1'M!ÓTICA. - 2\
PROGRAMA NARRATIVO· PROGRAMACióN 322

da!*." .- La P~rformailce presupóne ganizaCión'. espacial en función de


la competencia y, como resultado programas narrativos ~tereotipa.
del encadenamiento ·lógico en'tre dos.
';
ambas, se -desprende:una ·nqeva "uni-
. dad sintáctica que les es jerárquica- B. Programación tempora~ •

mente superior: el denominado._re- 1. La principal caracteOstica de


corrido narrativo:· ·· la programación temporal es Ja con-
-> 0

SINTAXIS NARRATiVA·- DE. SÜPERFI- versión* del eje de las presuposi-


~IE, NARRATIVO (esquema -), NARRA- ciones* .:...que representa el orden
TIVO (r~corrido' -). · lógico del encadenamient.o de los
programas narrativos- en eje de
PROGRAMACióN ESPACIO·TE'l· las consecuciones, dando ''así Iugaf-
PORAL. Fr. programritation _spatio- · al despliegue -temporal Y· _pseudo-
temporelte; ing. spntio~temporill pro- causal de las acciones coritadas. De
gra1nming. ~ Desde ···el ·puntO de este modo, dado un progiama na~
vista de la· producción· del discurso rrativo (abreviado, PN) :..Complejo
y en el marco del recorrido gCne-- (por ejemplo, la preparadón de ·la
rativo* global, las· prograinaclones sopa au pistou), el orden narratiVo
espaclal y temporal· $parecen como consiste en partir del PN : de base
subcomponentes · de · lós ],lrocedi· (atribución· de la sopa ·a los invitá·
rilientos de espacialización* y de dos) y remontar, por una cadena
temporalización* (integrados ellos de presuposiciones lógicas, de un
mismos, a su vez, en la discursivi- PN de uso a otro, hasta llegar al es·
zación*), gracias a loS' cuales -en· ta do inicial (definido por la no exis·
tre otros- s~. efect.ú.a 'la conversión* tencia de la sopa y por· eL·proyecto
de las estructuras· narrativas en es· de su preparación). La programa-
true.turas discursivas .. ción temporal tiene como resultado
invertir este orden y sustituirlo por
A.' Pi:-ogramación espa:C1a1. un orden «cronológico» que dispone
1. En semiótica discursiva,. se en· los PN usuales en consecu.::ión tem-
tiende por programación espacial ·el paral. ·
procedimiento consistente, 't~ Ja 2. Sin embargo, la programación
localización• espacial de los ·progra· temp!Jral no se reduce a Ja simple
mas* narrativos, ·en organizar el en· disposición de los diveros PN en la
cadenamíento sintagmático* de los línea temporal y según la ·Categoría
espacios parci~les. · de anterioridad / Posterioridad. Im-
2. En ser:niótic:a dt!J. espacio*, Ja plica, además, una medida del tiem-
programación espaciat se _efectúa al po en duraciones (introduciendo,
poner en· correlación. los ·compox:-ta· así, la aspectualización* qt,te tran~·
mientas programados de los sujetos fonna los haceres* en Proceso*):
(de sus progr2i.inas narrativos) con todos los PN de uso son eValuados
los espacios segmeniados que elios como procesos durativos*,,para su
aprovechan (cf. co~Q.a· + -comedor: ·inscripción en el progranl.a tempo-
dormitorio + b~o). T.al programa· ral, de tal modo que el aspecto ter·
ción es llama'da · funcional cuan- minativo* de cada ·procesó corres·
do busca la optimi~.C~ón* de la or- ponde al momento de la integración
323 PROGRAMAC!ON - PROHIBICION

de cada sub-programa en el progra· 5. La programación temporal


roa de conjunto. Se trata, pues, aquí -que apunta al establecimiento de
del procedimiento de periodización"' una cronología- no debe ser con·
de los PN de uso en función de la fundida con la programación tex·
re<\lización del PN de base. tual (en el marco de la textualiza·
3. Dado que la temporalización ci6n*) que efeetúa et enunciador*
pone en juego no solamente la cate· obedeciendo a las coerciones y apto·
goría relacional anterioridad / poi· vechando las libertades debidas a
terioridad (que une los PN situa· la naturaleza lineal (temporal o es·
dos en una sola línea) sino también pacial) del texto*. Si está obligado,
la categoría de. la concomitancia por ejemplo, a programar concomi-
(que identifica temporalmente dos tancias como sucesione..<;, dispone,
PN paralelos), la programación tem- en cambio, de un margen de liber-
poral tiene en cuenta la posibilidad tad para reorganizar la cronologia
de programar, en concomitancia* a su modo (operando con anacroni-
dos o más PN. El procedimiento zaciones y disponiendo situaciones
empleado es, entonces, el de la en· en suspenso, por ejemplo). Con re-
cajadura* temporal que permite ins- servas, se podría tal vez hablar
cribir, en una duración más larga, aquí, por analogía, !1e una optimi·
una duración más corta ·a una pun- zación estética (idiotectal o socio-
tualidad*. Un PN instalado en la lectal). ·
.duración, deja un lapso de <1espera11 -)- tsPACitiUZ.,\CIÓN, TEMPORALIZA.CIÓN,
-es· decir, de no·hacer que permite LOCALIZACIÓN ESPACtO-Tf:Mf'ORAL.
ejecutar un PN 2-, o bien faculta
para instalar, paralelamente, un su· PROIIIBICióN. Fr. interdiction,
jeto delegado* (un ayudante coci· ing. interdiction..
nero, por ejemplo) que ejecuta si· t. La prohibición, denominación
multáneamente el PN 2. del término negativo de la categoría ,
4. La programación temporal, así modal deóntica, comprende, como
ejecutada, ofrece una representación su definición sintáctica, la estructu-
croriológica de la organización na· ra modal del deber nO hacer. Cons-
rrativa. Ahora bien, la cronología no tituye con su término contrario, la
es necesariamente racional, pues prescripción.,., el eje de la injun·
comprende, a menudo, sintagmas dón.
estereotipadas programados que se 2. El empleo en semiótica. narra· ·
mantienen tal cual, a pesar del tiva del concepto de prohibición (o
cambio del PN de base. Por eso, prohibido) se presta a confusión.
es posible concebir procedimientos Tras un primer examen del esque· ·
de optimización* funcional de ]as ma narrativo propuesto por V.
programaciones temporales (tal co- Pi·opp, hemos interpretado nosotros
mo son practicadas en la investiga· la pareja de funciones proppianas
ci6n operacional, pero también -to- (<prohibición» vs* «violación» -como
1
davía imperfectamente- en lingüís· una ruptura del contrato* (es decir,
tica aplicada), procedimientos que como una estructura contractual
1 expliciten el concepto de simplici· negativa). Desde este punto de vis~
dad* en sintagmática. ta, la prohibición correspondería al
PROHIBIClóN -PRO~ODJA 324

hacer. f~ctÚiv~*· d;l J.)estinador*~ y posición, Uamada independiente, se


el sintagma ·p·roppiano se presenta. ide·ntifica con la frase sin;:iple) o a
ba como una' estructura de la mani- una unidad que tenga la misma es-..
pulación*. Un análisiS modal más··· tructura pero integrada en la frase
fino permite,· actualm~nte, situar la compleja (donde Iá p:fpposición ·
transgresión de Jo piohibido como principal rige a las proPosiciones
un problema de la competencia* subordinadas). Después dé: L. - Tes-
modal del Sujeto, definiéndola como nil!re y N. Chomsky, la problemá-
una estructura conflictiva,· debido tica de la frase compleja. ha sido
a Ja incompatibilidad de Jas moda- reabsorbida por un mecanismo de
lizaciones del Sujeto por el deber producción frásica único (cf. la in·
no Ji.aCer y ~l querer-hacer, que se- ·· tercalación*). En el plano ·termino-
ría únicamerlte el .resi.iltado ·del ha· lógico, el término «enunciado» reem. ·
cer . manipulador dcl Destinador. plaza ventajosamente tantO al tér·
DichO· de otra manefu, la prohibi- 1nino frase como al término propo-
ción depende, en el ·primer ca'so, sición. ·
del sistema axiológico*- del Destina- 2. En lógica, se entiende· por pro-
dor y, en el segundo, de la organi· posición un enunciado predicable
zación modal de la ··competencia del como verdadero o falso: tal defini-
sujeto·. •. ción es restrictivá (excÍtÍye, por
-+ DEÓNTICAS (moda!Jdades -}. DE· ejemplo, Jas frases interrogativas,
BER. imperativas) y no -permite·emplear
el término proposición como sinó·
PROPIOCEPTIVIDÁD. Fr. pro- nimo de enunciado.
prioceptivité, ing. proprioceptive. ~ FRAS~, ENUNCIAOO.
ness (neol.). - Término* complejo*
(¿o neutro*?) de Já ·Categoría* cla· PROSODIÁ. Fr. pros0dierÍng. pro-
semática· eX.teroceptiv'i'dad / intero.. soáy.
ceptividad, la'· propfoceptividad sir· l. Subcomponente de Iii. fonolo·
ve para clasifiCar el' Conjunto de ·las gía y/o de Ja fonética" (una y otn¡i. :·
categorías sémicas,. que ·denota el son entonces llamadas supraseg.
semantismo* resultante de Ia per· mentales). Ja prosodia se dedica al
cepci6n que el hombre tiene de su estudio de las unidades del plano
propio cuerpo ....De inspiración psico- de la expresión* que exceden las
lógica, este término debe ser reem- dimensiones de los fonema~*. Estas
plazado por el de t!mica, portador unidades suprasegmentates son lla·
de corinotaciones psi'cofisiológícas. madas, por lo general, proSodemas.
-> TfMICA. (c~tego~fa),., EXTEROCEPTI· El inventario de Jas categorías"
VIDAD. prosódicas dista mucho de estar ter·
minado (se incluyen en é1 tcida clase
PROPOSICióN•. Fr. proposilion, de fenómenos, tales como )a acen·
ing. clause •. tuación, la entonación*1 el rUido, las
1. En· gramática tradicional, el pausas, Ja elocución, el ritm-0*, etc.);
término proposfclón se utilit~ para este campo de investigación, toda-
designar a una unidad sintáctica · vía insuficientemente explot~do. po·
autosuficiente (y, entonces; Ja pro· drja ser uno de los 1ugareS· de en"'
325 PROSODlA - PROXÉM!CA

cuentro entre las semióticas poética la estructura"' es el modo de exis-


y musical. tencia semiótica elemental, todo ac-
2. El estatuto de los prosodemas tante es susceptible de ·ser proyec-
no es evidente, pero está claro que tado en el . cuadro semiótico y
no se agotan sólo con la función articulado, así, al menos en cuatro
discriminatoria* que caracteriza a posiciones actanciales (actante, an~
los fonemas. Algunos de ellos apa· tiactantc, negactante, riegantiactan-
recen como categorías sintácticas (la te): con relación a Ja categoría*
entonación, por ejemplo, puede ser actancial que, de este modo, se
considerada como constituyente* de constituye, será llamado protoac-
frase), morfosintácticas (el acento, tante. Se dirá, por ejemJ;>lo, que el
según las lenguas, es capaz de tener sujeto* o el destinador* son proto-
función demarcadora* de palabras o· actantes cuando manifiestan en el
de sintagmas) o morl'ológicas (la· discurso algunas de sus posiciones
acentuación de la primera o de la actanciales, tales como sujeto y
Segunda sílaba del inglés insult lo anti-sujeto, destinador y anti-deSti·
determina, reSpectivamente, como nadar.
sustantivo o como verbo; en espa- --7 ACTANTE, CUADRO, SEMIÓTICO.
ñol la acentuación de la primera o ·
segunda sílaba del adjetivo deter- PROX~MICA. Fr. pro.xémique,
minativo «esta.1>, lo determina como ing. proxe.1nics.
pronombre demostrativo o como 1. La proxémlca es una disciplina
verbo). --o, más bien, un J;>royecto de dis-
3. Su estatuto propiamente se· ciplina- semiótica que trata de
iníótico constituye también una di· analizar las disposiciones de los su-
ficultad, pues los prosodemas no jetos* y de los objetos* en el espa·
parecen ser figuras*, en el sentido cio*, y, más particularmente, el uso
hjelmsleviano de la palabra, es de- que los sujetos hacen del espacio
cir, unidades del plano de la expre· con fines de significación. Asf defi~
sión"', sino, más bien, signos* bipla- nida, aparece como un campo pro-·
nos semi-motivados: así, por ejem- blemático de la teoría semiótica*
plo, en el plano de la expresión, se que abarca, en parte, la semiótica
distingue en la entonación una opo- del espacio, pero también a las se·
sición del tipo curva ascendente / miótic:as natttral"', teatral*, discursi-
curva descendente: esta oposición va*, etc.
se correlaciona con otra, situada en 2. Los contornos de este campo
el plano del contenido y que se pue- problemático permanecen todavia
de denominar suspensión / conc1u· muy inciertos. En una primera
sión. Las categorías prosódicas de· aproximación, ta proxémica parece
ben ser relacionadas con· las cate- interesarse por las relaciones espa- 1
gorías gestuales o pictóricas, por dales {de proximidad, de alejamien-
ejemplo. to, etc.) que mantienen los sujetos
-)o FONOLOOL\. entre sf, y por las significaciones no
vcrbalizadas resultantes. Sin embar·~·.
PROTOACTANTE. Fr. protaac- go, cuando ya no se trata de semits.:.
tant, ing, protoactant. - Dado que ticas naturales (es decir, de compor·
PROXllM!CA-PRUEBA 326
tamientos · ..reales:. en· el mun'do), junción* transitiva* . (o ·atribución)
sino de ·. semióticas artifidales o y una clisjunción* reflex"iVa* (o re·
construidas (teatro, ·liturgia, ritual, nunciación*) y que se inscribe entre
urbanismo, etc.) que pernúten pre. un destinador* y un destinatario-,
ver una instancia de la enuncia~ la prueba es una figura• "-dlscw-siva
ción*; las disposiciones de los de la transferencia* de lOs objetos*
objetos, así como de los sujetos, de valor, que supone, cíe manera
se vuelven portadoras de sentido. concomitante, una conjurición refie-
3. -"La próxémica no podría Satis· :dva (o apropiación*) y tma disjun.
facerse con la 's1mP:Ie ·deScripción ción transitiva (o desposesión*), y
de los di.Spositivos -espaciales·, for· caracteriza el hacer del sujeto.héroe
muladas en términos de enunciados en búsqueda* del objeto de valor.
de estado"; debe enfocar, igualmen· 3. En cuanto conjunciOn refle1d··
·te, los movimientos* de Iós sujetos va, la prueba -a nivel de la sinta-
y los «de:splazamien_tos» de Jos oh-- xis"' narrativa de superficie- co·
jetos; no menos significativos, pues rresponde a un programa"'" narrativo
son representaciones ·espacio·f:erilpo- en qúe el sujeto de hater* y .el
rales de las transformaciones* (en- sujeto de estado* están vertidos en
tre los estados). Pot' eso, Ia proxé· un únicó y mismo actor*. Como dis·
mica 'rebasa los líÍnites que se le junción transitiva, implica ·-al me-
han trazado y se ve obligada a inte- nos, de manera _implícita.:_ Ja exís·
grar, en su campo de análisis, tanto tencia e, incluso, Ja acción" contraria
a los lenguajes gestuales como a los de un anti-sujeto cuya misión es
lenguajes espaciales.::·. · , realizar un programa natrativo in·
4. Independientemente de loS lí· verso: la prueba pone así de relieve
mites que Ja proxémica se fije a s( Ja e.structura polémica* de'i relato.
misma, los procedimi.entos de pro. 4. Desde el punto de vista de SI.!·
xemización deben ser integrados, de organización interna, Ia prueba está ."
ahora· en adelante, en el componen- constituida por Ia concatenación de
te de la semiótica discursiva que es tres enunciados que, en · el nivel
la espacializ.ación. d.jscursivo, pueden eipresarse como ·
-l- ESrACIAUi:ACI6N, GEsTUALIDAD•. confrontación*, dominación* y con·
secuencias* (adquisición*· o priva·
PRUEBA. Fr. dpreuVe, ing. test; ción*): este eje de las consecuciones.
l. EI examen de las funciones* puede ser sustituido por el de laS
proppianas · ha pt'innitido destacar presuposiciones*, lo que ·hace apa·
la recurrenci.i, en e1 cuento mara· recer una especie de lógica «regre·
villoso, de esé sintaITTna* narrativo siva» (la consecuencia presupone Ja
al que corresponde la prueba, b"ajd · dominación, que, a su vez,: presupo-
sus tres formas: pruebas califican· ne la confrontación), cie tal manera
te*, decisiva* y glorificante*, recu· que si, en un relato dadO, sólo ta
rrencia que, al autorizar la compa- consecuencia se mani66ta, é:Sta
ración, garantiza Su identificación autoriza a encataUzar* Ja prueba en
formal. su conjunto. : ,.
2. A diferencia del don* -que S. Si bien las tres pruebas -cali· '
implica simultáneamente una con· ~ti.cante, deCisiva y glorificante- tieo
327 PRUEBA- PS!COSEM!óTIGA

nen la misma organización sintác· sión: la de la interdisciplinaridad.


tica, se distinguen, sin embargo -en En efecto, por poco que se admita
el esquema narrath•o* canónico-, que una ciencia se define por sus
por el vertimiento semántico, mani- métodos de aproximación y no por
festado en la consecuencia: así, la el objeto o el campo de aplicación,
p¡:ueba calificante corresponde a la se debe ser muy ingenuo para pre·
adquisición de la competencia* {o tender que dos metodologías cons·
de las modalidades* del hacer), la truidas separadamente puedañ ser
prueba decisiva a la performance•, consideradas compatibles y homo-
la prueba glorificante al reconoci~ logables, cuando dos teorías lingüís·
miento*. Esta consecución de las ticas y, a fortiori, dos teoríás psi·
tres pruebas (las dos primeras es- cológicas no lo son entre sí, al no
tán situadas en la dimensión prag- poder ser traducidas a un lenguaje
mática* y la última, en la dimensión formal*, coherente y único. Se sabe
cognoscitiva*) constituye, de hecho, que un estudio emprendido por J.
un encadenamiento al revés, según P. Boons, tendente a homologar una
el cual el rec9nocimiento presupone decena de relaciones suministradas
la performance y ésta la competen- por otras tantas ciencias humanas ,
cia correspondiente: no puede ha- y llevado a cabo en una única y
ber prueba glorificante sino para n1isma ciudad bretona, ha revelado
sancionar la prueba decisiva previa, que las disciplinas afectadas obte-
y, a su vez, la prueba decisiva no nían una convergencia máxima en
podría darse sih la presencia (im· una palabra que Jes era común: el
plícita o explícita} d.e la prueba cali· calificativo «importante», signo in·
ficante. falible de un alto grado de la no-
-r NARRATIVO (esquema -). cientificidad d"e tales discursos. Evi-
dentemente, una alianza entre la
PSICOSEMióTICA. Fr. psychosé· psicología y la lingüística no puede
miotique, ing. psycha·semiotics. tener otro efecto que el predominio
l. Conviene advertir, desde el de una disciplina' sobre Ja otra, lo
principio, que el término psicose- cual da Jugar a investigaciones que
mlótlca aquí propuesto, asf como el lo mismo tratan de ·psicología del
· campo que abarca, no existen y lenguaje que de lingüística psicoló-
constituyen tan sólo un deseo del gica.
semiótico. Una semiótica particular, 3. En una primera fase, la psico-
la lingüística, es la única que, desde llngilística apareció como la unión
hace algún tiempo, se encuentra bastante satisfactoria de Ja psicolo-
acoplada a la psicología y constituye gía de las conductas (el behavioris-
la psicollngilistlca, considerada des· mo) y del estructut:alismo norte-
de 1950 como una disciplina aut6- americano, compartiendo, al menos,
nonu1. ambos su asemantismo. El segundo
2. Este acercamiento de dos dis· periodo, qtie se prolonga hasta nues- ·
ciplinas que se han elaborado de tros días, comienza con el adveni-
maner~. ~~~ependiente, -~~~-~~ ~i.~~~; miento de la gramática generativa*
PSICOSEMlóTICA 328
lerante (que tci.ta de.la percepción, del campo vecino al St.lyo, sin con-
de la memoria, de Já:: personalidad, cebir la posibilidad de una colabo-
etcétera). La lingüística generativa ración durable. Esto es particular~:
tenía, ··en. efecto, algo· ,que ofrecer a mente claro en el caso O.el psico-
la psicología:, aunque ;se reserva el análisis: aunque la Traumdeutung·
campo de la· competencia* lingüís- de Freud constituya, con· Cierta an-
tica (cuya deScripcióñ:· constituye la ticipación, Wl notable trabajo de
gramática de lUla lengua), ha cedido análisis .semiótico, y aunque los
a la psicolingi:iística el campo de la préstamos que Lacan· hace a la
performance*. instando definir un a lingüística (y a la semiótica) no
doble modelo de la producción y son desconsiderables, el psiconálisis
de Ja percepción del lenguaje, mo- se considera como un C.:\mpo de
delo que expl.fcaría la· asunción del saber totalizante, capaz de: interpre- ·
modelo de la competencia por el tar y absorber los datos Y'. las pro-
sujeto" hablallte. En ·.esta forma, al blemáticas que encuentra ·en su ca-
igual. que·. F. de Saussure, quien mino. En este dominio no cede'
-después de ·haber definido la len· nada a la semiótica que, segura de
gua* como el único 'Objeto de la su <ianti-psicologismoit heredado de
lingüística- había entregado el ha· Saussure; está pronta a dar «con-
bla*. como pasto a los ipetitos SO* sejos» y ofrecer sus serviciOs met0o.
~iológicos y psicológiCos, N. Choms· . dológicos a todo e1 que llega. Em-
ky se apropia de la competencia, pero, la situación así creada es, qui-
con el peligro de ofrecer su p·er- zás, más juiciosa y clara que la de
formance a las más heterogéneas una falsa interdisciplínaridad: la ·
interpretaciones. «psicología del lenguaje» y Ja «se-
4. Otras dos teorías psicológicas miótica psicológicait, al ser diferen-
-la psicología genética de Piaget y tes, permanecen cada una· en su.s
el psicoanálisis freudiano- no pa- posiciones. ,
recen haber sido suficientemente 6. La semiótica se ve Constante--
aprovechadas por la·. psicolingüísti· mente obligada a invaP,ir el terreno
ca: Ja "importancia:·_:que nos pare- tradicionalmente reservado. a la psi-
ce excesiva- conct:ctida a los pro; cología. Así, en el plano semántico,
blemas del.·<'innatismo» no ha deja· al tener que precisar el universo*
do lugar, o muy P!JCO, para una semántico como un dato añ.terior a
confrontación, . metodológicamente todo análisis, no puede dispensarse
fundamental, de las aproximaciones de distinguir el universo individual*
genéticá (que caracteriza · a esas en oposición al universo colectivo*,
dos formas de psicolOgia) y gene- y debe prever también -a título de
rativa (que es la qu~¡ corresponde hipótesis- las estructuras*, iaxiológi-
a la lingüística dominat:ite). cas elementales (tales como .las ca:
s. En cuanto. a las .relaciones en· tegorías dt.. vida ¡. muerte y de
tre Ja psicología y· la· ~erniótica, pa· natura / cultura) que permiten em"..
recen caracterizarse, : por ambas prender la descripción. Tites uni·
partes, ·.Por certezas epistemológicas versos, considerados corno ?bjetos,·.
., ,.,..,,.t...rlnlAtrl',.,,., ,...,.,. ...,,,... ,,,.i..,..;t....n ,..,.,.,.¡,.... .,,.,. ... ., ....... ...... "' ;...... .,.............
;~ t"~
329 PSICOSEMIOTICA- PUNTUALIDAD

lectivos y dan lugar a articulaciones PUNTO DE VISTA. Fr. point de vue,


particularizantes que son los uni- ingl. point of view. -Con la expresión
versos idiolectal* o sociolectal*. Lo punto de vista se designa, generalmen-
individual y Jo social, lo psicológico te, un conjunto de procedimientos em·
y ·lo sociológico· se encuentran, por pleados por el enunciador* para ha·
este hecho, organizados, según las cer variar el enfoque; es decir, para di-
necesidades de la semiótica, en con~ versificar la lectura del relato -con·
ceptos operatorios. · siderado en su conjunto o en una de
7. En el plano sintáctico, por sus partes- que hará el enunciatario.
otra parte, los recientes desarrollos Esta noción es intuitiva y demasiado
de Ja gramática actandal _:_que evi. compleja. Sucesivos esfuerzos teóri·
dencian el dinamismo de los roles ces han tratado de obtener ciertas ar-
aétanciales"" y la variedad de las ticulaciones capaces de ser definidas,
modalizaciones* de los sujetos- tales como la puesta en perspectiva y
ban llevado a la semiótica a canee-· la focalización. Un mejor conocimien·
bir la u.vida interior» del actor lla- · to de la dimensión cognoscitiva* ·de
mado 1<persona» como un campo de los discursos narrativos nos ha con·
ejercicios sintácticos, dopde un nú- ducido también a prever la instala·
mero bastante elevado de sujetos ción, en el discurso, del sujeto cog·
{sintácticos) coexisten, se confron~ noscitivo llamado observador.
tan, ejecutan recorridos y participan
- PERSPECTIVA, FOCA.LlZAClÓN', OBSER•
en maniobras tácticas y estratégicas,
VADOR..
visión que puede compararse al
espectáculo que se da (con los
acgo:o, los usuper-egoz- y los ((elloz-) PUNTUALIDAD. Fr. ponctualite,
en el psicoanálisis. ing. punctuality. ·
8. Finalmente, queda un campo l. La puntualidad es el sema'*
semiótico todavía inexplorado -que aspectual que ·se opone, paradigmá-
fue tan sólo sugerido por Hjeims· ticamente, al de duratividad*; ca·
Iev:--, el de las connotaciones* indi- racteriza al proceso* por la ausen-
viduales, es decir, de un sistema de cia* de duración. Pu.ntualidad/dura-
connotación (probablemente origi· tividad constituyen, pues, una cate-
nadar de procesos connotativos} goría* aspectual.
paralelo a las connotaciones socia- 2. Desde el punto de vista sin-
les, subtendido por nuestros discÜl-- tagmático, la puntualidad puede
sos y que constituye (un poco a marcar tanto el comienzo del proce-
semejanza de las caracterologías so (denominándose, entonces, incoa·
de antaño) una. tipología inmanente tividad*), como su fin (en cuyo ca-·
de las personalidades, de las mane- so se denominará terminatividad*);
ras de ser, de los registros, de las junto con la duratividad, constituye
voces y de los timbres. Es aquí una configuración* aspectual. La
donde una psicosemlótica que asu. ausencia de duración de un proceso
miese dichas semióticas con su mo· neutraliza la oposición entre lo in-
~o de manifestación sincrética" po- coativo v lo terminativo.
Q

QtJER.E.i .Fr: vouioir,. ing. 1-Vant· ~ bien~


ing.
l. Querer · es la denomin3~ión
elegida para designar a uno de los
, ·predicados del enunciado modal
que rige a un enunciado de hacer*
o a un enunciado de estado*. Com~ Sin em.bargo, mientras las lógicas
la definición de este vertimiento del - que manipulan la modalidad del
predfcado es. imposible, su estatuto deber (la lógica deóntica* y·Ia lógi.
semántico sólo puede determinarse ca alética*) emplean· denomina·cio-
desde dentro de una taxonoinfa de nes ya establecidas por el uso y
predicaciones modales y en fUndOn corresponden, en semiótica, a las
de las organizaciones sintáCticas en diferentes posiciones ocupadas por
que· ·puede apare<;:er. ·El querer, las estructuras modales de la mis·
c;omo el deber*, pcirecen constituir ma naturaleza en el cuadro semi6-
Una condición previa virtual que tico, una lógica voUti·t•::.. (o bulísti·
condiciona la p_roducción de los ca). aunque previsible, no está aún
enunciados d~ hacer o de estado. estudJada como . para suministrar
2. Según el tipO de · ep.unciado su terminología a. las denominado·
· que rige, el enunciado modal de nes serrtióticas. Por otra parte, el
querer· da lÜgar a dos. estructuras psicoanálisls, cuyas preocupacione
·modales designad?.s,.por comodidad, corresponderían mejor ~· ese pro-
querer-hacer. y que~~r·ser. La cate- yecto semiótico, es bien· conocido
gorización• de esas estructuras, ob- por su resistencia a elaborar U."1
tenidá por" su' Proyección en et cua- metalenguaje* con propósito cientí·
dro*. semiótico, peIT.aite prodÚcir fico. Serla deseable que Ja teoría
dos categor".M modales volitivas semiótica tomara a su cargo la ar·
bien: · · .' · . · ' ticulación lógico-semántica de ese
querer-J1qcer:...._ . . 11'."que.re.r no Juicc.t campo problemático.
R

REALIZACióN. Fr. réalisation, (es decir, en la posición* sintáctica)


ing. realit.ation. - Desde el punto en que está en conjunción con el
de vista de los modos de existen· sujeto.
cía*·, la semiótica se ha visto obli· --). EXISTENCIA SEMIÓ11CA, ACTUALIZA-
gada a sustituir la categoría* vir· CIÓN, VALOR, NARRATIVO (esquema -)~
tua1 / actual, por }a articulación
ternaria virtual / actual / realizado, RECEPTIVO (HACER -). Fran·
a fin de poder explicar mejor la or- cés faire réceptif, ing. receptive
ganización narrativa. Anteriormente doing. - En la transrriisión del sa-
a su junci6n*, sujetos y objetos ber*, el hacer informativo receptivo
están en posición virtual*. Con la caracteriza la actividad del destina·
función* juntiva* -y en el marco tarlo* (o del enunciataria*) por
de los enunciados de estado*-, se oposición al hacer emisivo* que Jo
instauran dos tipos de relaciones: ejerce el destinador* (o enuncia-
o bien hay disjunción* entre suje- dor*). El hacer· receptivo -que pue-
tos y objetos (en este caso se dirá de ser activo o pasivo (cf., en espa-
que éstos están actualizados) o bien ñol, las oposiciones del tipo «escu- 1
hay conjunción* (y se encuentran char» / «Oír», «ver,. / «mirar»)- se
realizados). Se entenderá entonces opone, desde el punto de vista mo-.
por realización Ia transformación* dal*, al hacer interpretativo* que~,
que, a partir de una disjunción an· pone en juego las modalidades epis-t. ·
teri.or, establece la conjunción en· témicas* y veridictorias*.
tre el sujeto y el objeto. - Según -+ INFORMATIVO (hacer -).
que, a nivel actorial, el sujeto de
hacer y el beneficiario sean o no RECEPTOR. Fr. ricepteur, inglés
diferentes, se tendrá una realización receiver.
transitiva* (figurativizada por la l. En la teoria de la informa·
atribución*), o bien una realización ción*, el receptor -opuesto al emi-
reflexiva* (la apropiación*), - Se le sor- designa, en el proceso de la
11 .. ...., .. ~ ''e.1n,. ...i>::tll'>'.:idn i::11 tt~lnT t"t'lnn1nit"~rión* l~ in<:t.:lnt"i::i '°'n nnP
RECEPTOR - RECONOCIMIENTO 332
tidO, el receptor . . no es necesaria- tica* ·forma parte del contrato*
mente aquel a qtiien el mensaje -implícito o explícito--;.: establecido
debe ser, finalmente, transmitido. entre el Destinador y el Destinata.
2... En semiótica~ y para toda cla- rio·sujeto), por oposició'n a su for.
se ·de comunicación (verbal o no), ma negativa que es el' ·castigo*.
se emplea, e'n una:· acepción ·seme- -'> RETRIBUCIÓN,. SANCIÓN.
jante, el término '.destinatario* to-
mado de R. Jakobson; en el caso RECONOCIMIENTO •. · Fr. recon.
particular cle la é6nuni.:ación ver- naissa1ice, ing. reconnaissance.
bal*, el receptor: (al que pueden 1. En el sentidO más general, el
asociársele los conceptos de lectvr* t.'.);conocimlcnto es una. operación
y de auditor*) será llamado enun- cognoscitiva por la qué un sujeto
ciatario*. · establece una relación dé identidad*
3. Más allá de .Wla simple cues- entre dos. elementos, de los cuales
tión de terminología, Ja diferencia uno está presente* y ef-Otro ausc~­
entre la tepría de la· comuniCaCión te"' (en otro lugar o en ·el p.asad9),
y el punto ...de vista Semiótico reside operación que implica procedimien-
en que, eti el prüner caso, el re- tos de ideÍltificación que permitan
ceptor representa una posición va- discernir las identidades y las alte·
cía (lo que está -de acuerdo con · ridadesw. Así sucede, por ejemplo,
una perspectiva mecanicista)1 nlien- cuando la identificación· se efectúa
tras que, en el segundo, el destina- por la memoria. ·
tario corresponde a un sujeto do- 2. J. Lyons distingue .las gramá•
tado de una competencia* y apre· tícas de producción* (cofno la grp..-
hendido en: un ··momento dado de mática generativa), de ·tipo sinté·
su devenir, .en una ~ptica más «di· tico (que va de la gramática al
námica:o · (lo que hace resaltar eJ léxico), de las gramlitlcas de reco-
punto de ·vista más <thumanizahte:o nocimiento (o gramáticas descripti-
adoptado por ~a semiótica). vas) que, basadas en er análisis de
un corpus de enunciados, tratan de
itEcrPROCA (PRESUPOsrcroN aislar las propiedades formales que
-). Fr. · pré.supposition réciproque, éstos manifiestan: estos dos tipos
ing. reciproca! presupposition. - de consideración, operando de arrl-
La ·presuposición se dice que es ba hacia abajo o inversamente, son
recíproca cuando Ja presencia* de. juzgados por él Como comple1nen·
cada uno de los términos~ es nece· farios.
saria para la presen.cia del otrd. En 3. Situado en la dimensión cog·
ta terminología de L. Hjelmslev, se noscitiva* de los discursos narrati·
· Cenoinina solidaridad*. ! vos, el reconocimiento es· una figu~,
~ PR.ESUPOSI_CIÓN, . ·' ra"' discursiva que ha Sido a me·
nudo definida, después ·.de Aristó-
RECOMPENSd~. ·Fr. récompease, teles, como un enunciadO informa·
ing. recompense.' - .En el esquema tivo* referido a la trans.formación*
narr3.tivo* canónico; ta recompensa del na.saber en s3.ber*. Sin embar·
es la fonna pasitiva de Ja retrlbu· go, mirando más de cerca. !:e ve
333 RECONOCIMIENTO· RECURSIVIDAD

ignorancia no es, realmente, en un ratlvo del discurso (que se estable~


relato dado; una ausencia de saber ce entre las estructuras ab quo y
sobre los acontecimientos o las co- las estructuras ad quem), de. los
sas, sino un saber que no es «CO· recorridos ten-1ático y figurativo.
rrecto11 (un desconocimiento), un - t GENERATIVO (recorrido -), NA·
saber que consistiría, por ejemplo, RRATlVO (recorrido -), TEM.(TICO, Fl·
en considerar como existentes (en CURl\flVO.
el orden del ser*) cosas que sólo
parecen* (como un espejismo), e RECURRENCIA. Fr. récurrence,
inversamente. El pivote* narrativo ing. recurrencc. - La recurrencla
de orden cognoscitivo, llamado re- es la iteración de ocurrencias (iden·
conocimiento, no es el paso de la tificables entre· sí) dentro de un
ignorancia al saber, sino el de un proceso* sintagmático que manifies·
cierto saber (erróneo) a otro (ver- ta, de modo significativo, regulari·
dadero). - En el esquema narrati- dades que sirven para la organiza·
vo* canónico, · el reconocimiento ción del discurso-enunciado. La re· .
-operado gracias a una marca" currencia de cierto número de ca·
previamente atribuida al héroe- · tegorías* sémk:as, por ejemplo, ins-
corresponde a la ·sanción* · cognos- tituye una isotopía*; la recurrencia
citiva del Destinador: se trata, pues, de enunciados modales en el dis·
de una identificación entre el pro- curso, que rigen siempre, en candi·
grama* narrativo ejecutado por el ciOnes dadas, los enunciados des·
sujeto-héroe y el sistema axiológi· crlptivos (o declarativos), permite
co* del Destinador (que juzga la constituir un nivel* discurslvo mo-
conformidad de la acción del Des· dal autónomo, etc. - El término
tinatario-sujeto). Desde ei punto de recurrencia debe distinguirse, a Ja
vista del héroe, este reconocimiento vez, del de redundancia (que remite
corresponde a la prueba glorifi· indirectamente a una falta de infor·
cante*. mación*) y del de recursividad (que
-+ SABER. especifica Ja recurrencia en tanto
que ésta se efectúa, dentro de una
RECORRIDO. Fr. parcours, inglés jerarquía*, en niveles de derivación*
path or process. - Poco empleado diferentes).
hasta ahora en semiótica, el térmi· -)- OCVRRENCIA, ORDEN, REDUNDANCIA,
no recorrido debería irse imponien· RECURSIVIDAD.
do progresivamente en la medida
en que implica no sólo una dispo- RECURSIVIDAD. Fr. récursivité,
sición lineal y ordenada de los ele- ing. recursiveness. - La recursivi·
mentos entre los que el recorrido dad es una propiedad de las len~
se efectúa, sino también una pers· guas naturales (si no de otras se-
pectiva dinámica que sugiere una mióticas), según la ct.:iat una unidad*
progresión de un punto a otro, gra· sintagmática dada puede encontrar·
das a instancias intermediarias. Es se tal cual, dentro de una misma
así como hablamos, por ejemplo, jerarquía*, en ·niveles de deriva·
del recorrido nanatlvo del sujeto o ción* diferentes (ejemplo: «el color
del Destinador, del recorrido gene· de las hojas de los árboles del jar.
RECURSIVIDAD· REDUCCIONISMO

din de los ·Vecinos»). Según: la gra· materiales estudia"dos,~. reducciones


ro.ática generativá*, la recursividad que permitan establece~ -de acuer-
es teóricament~ jpñnita a nivel de do con el principio <ie pertinen.
la competencia*, pero se encuentra cia*- niveles* homogérieos*" de aná.
limitada -.:.por el !lecho de una ma- lisis: por este hecho, se produce
yor o inenor a.ceptabilidii..d*- en el una pérdida de. sustancia semántica
plano de ·la pei-formance*. - El (que podrá ser asumida.' durante :os
concepto de recursividad está toda· análisis· ComplerñentarioS) a la tn¿.
Vía poco·. aprOvechitdo en semiótica nera <;le como ocurre en botánie<l,
discursiva~ no obstante, es en este · a ·la que nadie podría :reprochar el
marco en el que. ~bría intentar pOner entre paréntesis;·: :en su tf.a.
·describir, por ej~mplo, los moti· bajo, los aspectos estéticos o eéa.
vos*. nómicos de las flores· ·qUe estudia.
-+ EUSTl'CIDAll DEL. nrscunso. 2. Se ve así que la aCUsación de
reducclonismo, a menUdo dirÍgida
REDUCCióN. Fr. rédu'ction, ing. contra la semiótica con el pretexto
redu.ction. · - La reducción es una de que es incapaZ de agotar, duran-
de las operaciones de análisis se- te sus análisis, Ja totalidad de lo
mántico · qlle forma parte del pro· vívido· o de Jo real, no (!S nada per-
cedimiento más general Constituido tinente en el plano cieritífico, pues
por la estructuración. Consiste en esa totalidad presupoii.e, ontolÓgi-
transformar ·un .4l.ventarlo de ocu· camente, el conocimiento de Io que
rrencias* semémicas, de naturaleza es lo «vivido)) o lo «real», Los ob-
parasinontrñica*, Cn una Clase cons· jetantes no se recatan, por su par~
truida y dotada -a Ilivel del lengua· te, de operar ellos mismos reduc·
je de descripción- de una denomi- ciones inadmisibles esta vez, tal
nación arbitrarla* (o semi· motiva· .como lo hace ese critico de las
da). La reducción Do puede operarse Mdscaras, de C. Lévi·Strauss, quien
sino paralelamente a la homologa· termina su artículo diCJendo: «Lo
ción: ésta c.ontrola la pertenencia' de que busca Lévi-Strauss, es a su ma-
cada una de las ocurrencias apun· dre,»
tadas a· la clase por construil"' cate· 3. La semiótica rehóye explicar
gorizándola, es decir, tratando de todo el material eStudiado, todos
reconocer los términos contradicto- sus componentes, pues s6Io retiene
rios y contrarios llamados a formar lo que es pertinente al Objeto q~e
parte de una misma ·estructura que eJla se da; en cuanto a· la percep-
se pretende describir. :· ción «totalizante11-, a ·1a··._«plenitud'!,
-+ ESTI?:UCTURACióN; HOMOLOGACIÓN. éstas no conciernen a Una investí·
gación científica (de naturaleza ana-
REDUCCIONISMO. Fr. réductio- lítica), estando como están situada·s
nisme, ing. redil.ctiO.nism. del lado de las síntesis interpretati-
1. Desde una perspectiva propia· vas de las que ·-10 reconocemos .
mente científica, l.a consideración de buen g:rado- la necesidad se
semiótica - plantea· Ja necisidad de hace sentir paralelamente.
ope~r. en ia manipulación de los -+ REDtlCCTÓ». .
335 REDUNDANCIA· REFERENTE

REDUNDANCIA. Fr. redondance, REFERENCIA. Fr. référence, ing.


ing. redundance. reference.
1. Término de la teoría de la in- 1. En sentido general, la referen-
formación, la redundancia designa, cia dei;igna la relación orientada
para una cantidad de información -la mayoría de 1as veces no deter-
dada, la distancia entre el nt1mero minada- que se establece (o· se
mínimo de señales* (o de operacio- reconoce) entre dos magnitudes*
nes de codificación" y descodifica- cual~squiera. ·
ción*) necesarias para su transmi~
sí6n y el número, por !o general 2. Tradicionalmente, el término
bastante superior, de señales (o de referencia denomina la relación que
va de una magnitud semiótica hacia
operaciones) efectivamente utiliza-
das. Son consideradas como redun· otra no semiótica (=el referente),
dantes las señales superfluas, debi- que depende, por ejemplo, del con·
te.~to* extra-lingüístico. Desde esta
do a su repetición. Sin, embargo,
la redundancia se justifica por el perspectiva, la referencia, que une
hecho de que facilita la recepción el signo* de la lengua natural a su
de los mensajes"', a pesar de la 11referente,. (objeto del «mundo»),
interferencia de los ruidos. es llamada arbitraria* en el ámbito
2. Desde el punto de vista semió-. de la teoría saussuriaoa y motiva-
tico, Ja iteración de elementos da- da* (por la semejanza, la contigüi.
dos en un mismo· discurso parece dad, etc.), en la concepción de Ch.
significativa, pues manifiesta regu- S. Peirce. - Si se .define el mundo
laridades que sirven para su orga- del sentido común como una semió-
tica natural", la referencia torna ta
nización interna: así, el término re-
currencia, más neutro, parece pre- forma de una correlación* entre
ferible al de redundancia. elementos, previamente 'definidos, de
~ INFORMACIÓN, RUIDO, RECURREN:•
dos s~mióticaS. · .
CIA. 3. En el ámbito de 1~ semiótica
lingüística'., las referencias se esta-
REESCRITURA (SISTEMA DE blecen tanto dentro ·del enunciado*
-). Fr. systeme de réécriture, ing. (gracias, en particular, a los proce-
rewriting system. - En gramática dimientos de anaforlzación*), como
generativa* el sistema de reescritu- entre el enunciado y la enuncia·
ra, que pone en práctica axiomas ción* (l?s deícticos*, por ejemplo,
y reglas de construccjón de expre· no remiten a eieme'ntos fijos del
sienes* bien formadas, es un modo ntundo natural; tienen sentido sólo
de representación* del proceso ·de en relación con las circunstancias
derivación* que culmina en una de la enunciación). Cuando la refe-
descripción* estructural de la frase. rencia se instaura entre discursos
Así, por ejemplo, Ja regla de recs· diferentes, se hablará entonces de
critura <i:P ~ SN + SV» debe leerse intertextualidad*.
como una operación de sustitución* ~ REFERENTE, MU.l\.'DO NATURAL,
por la que se reemplaza el símbolo
P por la serle t1SN + SV~. REFERENTE. Fr. référent, inglés
-+ REGLA. referen.t. · ·
REFERENTE. 3Í6

1. Tradicionalmente; se €:r..tiende ser concebida como un~ relación:*,


por referente los objetos del ·mun: es reificada y transformada en un
do «reahi qlle desig9an las palabras concepto -ser hibrldo; ni lingüís-
de las .lenguas* naturales. Como el tico ·ni referencial- cuya exparisión
término objeto se ha mostrado no- integra una clase de referentes:
toriamente insuficiente, se ha recu- b) por su parte, R. Já.kobson, al
rrido al· referente para abarcar las analizar la estructura de Ja comu.rii.
· cualidades, las acciones, los eve.."1.tos cación, introduce el refe.rente ideO:-
reales; por otra parte, como el tificándolo con el conte_xto*: éste,
mundo «re,al» aparece tod.avia muy· riecesario para la exPlicitación del
estrecho, el referente ha de englo- mensaje y aprehensible por el des~
bar también ·.el mun"do .o:imagin&rio», tinatario*, puede ser verbal* o bien
La ·correspondencia término ~ tér- verbalizable (es decir, .-gue puede
mino entre el universo Iingfüstico ser lingüísticamente explicitado*),
y el universo referencial, que está R. Jakobson reconoce, ~ntonces, la
así metafísicamente presupuesto, no e."l:istencia de una función referen·
queda menos incoi:npleta: .Por un dal (que asume el con~t;pto de re-
lado, ciertas categorjas* gramatica- present.:ición de K. Bühler) del len·
les .-Y. sobre todó; las relaciones* guaje: ·el enunciado-disturso, una
lógicas- no tienen~· referente acep- vez desembragado* (puesto en ter-
table; por ótro, aigunos deícticos* cera persona), sirve para la des.·
(los . pronombres ' personales1 por cripción del mundo, es decir, del
eje"niplo).: no Úenen: referente: fijo, referente. ·
ya g;ue. remiten, según la ocasión, 3. · El contexto · ungüís.tícO · -ver·
a objetos diferentes. Esto quiere bal o .verbalizable- reSulta ~sí el
.decir que, :partiendo de 'presupues- lugar de referencia del 'texto, y los
tos positiviStaS conSiderados como elementos particulares de este con·
evidencias, :es imp~sible elaborar texto son entonces lla:rnndos refe·
una teoría' satisfáctciria del referen- rentes: empleado en este:sentido, el
te, ·capaz de explié:ar el conjunto término referente es, pues, sinóni·
de los fenómenos considerados. mo de anafórico*. Es ·aquí y así
2. Sjn en1bargo, !!D ·el marco de como se instaura la problemática
eSta concepción, se inscriben dos de Ja referencia* que aspira a des·
tentativas que han tratado de in· cribir la red de las referencias no
tegrar el referente,· 'la primera en solamente dentro del enunciado*,,
la teoría saussuriana dei signo*, la sino también entre éste· y la ins·
segunda en· la teoría de Ja comuni- tancia de Ia enunciación*.
caciÓn*: · · · 4. Para establecer un· compromi·
a) Ogden Y Richards propOnen so entre Ja autonomía del Jenguajé,
un modelo triangular que pretende proclamada por F.· de Saussure, y
explicar la estructura del signo: el la evidencia del mundo ~realll, cara
símbolo* (o el significante*) está a los positivistas, se hi· tenido, a
ligado al referente no directamente, veces, el propósito de définir el re-
sino por intermedio de la referencia ferente como ·constituido' -.cpor Ja:;
(o el sigriificado*). En esta inter- cosas en tanto que objetos nom·
preta.ción, Ja referencia, en Jugar de bra.dos o significados poi" las pala-
337 REFERENTE
bras» (J. Lyons), e!:I decir, no por rio {con to que la ficción especifi-
las cosas i•en sí,,, sino por las cosas cariii. este tipo de textos). Por una
nombradas o non1brables. Tal acti- parte, Ja imposibilidad de definir
tud no está exenta de 'contradic- el discurso «reab · (cuyos signos
dones: si se admite el principio de corresponderían. a los objetos del
la categorización* del mundo me- mundo) excluye la definición del
diante el lenguaje (cf. :i=:. Benveniste discurso ficticio: estos dos tipos de
y, sobre todo, Sapir-Whorf), es decir, discursos no pueden ser caracteri-
el hecho de que las lenguas natu- zados sino por la ve1idicci6n*, que
rales· informan el mundo y lo cons- es una propiedad intrinseca del de-
titú.yen en <10bjetos» dilitintos, ¿có- cir y de lo dicho. Por otra parte,
mo se pu~de, entonces, para definir todo discurso (no solamente litera-
los signos de los que se cqmponen rio, sino también, por ejemplo, el
esas lenguas, referirse a ese mundo discurso jurídico· o el científico) se
que es, en parte, el resultado de Ja construye su propio referente lnter-
actividad lingüística? no y adopta un nivel* discursivo
5. Otra solución nos parece posi- referencial que sirve de soporte a
ble: consiste en decir que el mundo Jos otros niveles discursivos que él
extra-lingüístico, el del usentido' co- despliega.
múni>, está informado por el hom- 7. EI problema que se plantea,
bre e instituido por él en significa- cuando se quiere abordar el dis-
ción*, y que tal mundo, lejos de curso desde el punto de vista gene-
ser el referente (es decir, el signi- rativo,. no es, pues, el del referente
ficado denotativo* de las lenguas dado a priori, sino el de Ja referen.
naturales), es, por el contrario, él cfallzacfón del enunciado, que im-
mismo un lenguaje* biplano*, una plica el examen de los procedimicn·
semiótica natural* (o semiótica áel tos por los cuales la ilusión refe-
mundo* natural). EJ problema del renclal -el efecto de ·sentido urea-.
referente no es, entonces, sino una Jidad,, o "verdad-, propuesta por
cuestión de correlación entre dos R. Barthes, se encuentra constihti-
semióticas (lenguas naturale~ y se- da. Entre estos procedimientos, cu-
mióticas naturales, semiótica pictó· yo estudio global todavía no ha sido
rica y semiótica natural, por ejem- emprendido, se puede notar, por
plo), un problema de intersemioti· ejemplo, el anclaje* espacio· tem-
cidad (cf. la intertextunlidad*). Asf poral (empleo de topónimos* y/o
concebido como semiótica natural, de cronónimos* que producen la
el referente pierde, entonces, su ra· ilusión de Ja "realidad») o el des.
zón de existir en cuanto concepto embrague* interno (que referencia·
lingüístico. liza el segmento discursivo a partir1
6. Esta postura permite situar Ja del cual se efectúa el desembrague;
problemática del referente de los cf. el paso del diálogo* al relato*,
discursos literarios, que a menudo o viceversa). ·
se quiere definir por la ausencia de ~ LEMGUA, MUNDO NATURAL, CONTEX¡
referente o por la correspondencia TO, ICONTCIDAD, DF.SEMBRAGUE, EMBRA•
,..,,..,, • ..,.,.. ........ ,.,.. ..110
REFLEXIVIDAD· REGLA 338
·REFLEXIVIDAD. Fr. réflexivité, bir, en el nivel metalingüístico, una
ing. reflexivity.-OpUesta a la tran· doble representación*: ·
sitividad, la reflexividad es ·llll con· a) pueden ser considerados como
cepto de s'emiótica discutsiva, em· un· estado* resultante dCi análisis*
pleado para designar el sincretis· Y ser representados comá. una des;.
mo* de V'arios roles actanciales* crlpción* estructural de tipo taxo-
cuando éstos son asumidos por un nómico (P. = SN + SV); .
solo actor*. b) pero el metalenguaje emplea-
· ~ TRANsmvroAD. do puede, de modo equivalente, tra-
tar de construir el simulacro de ese
REGISTRO. Fr. ·registre, illglés hacer taxonómico, representándolo
register. - Para ser Claros y evitar como un· proceso de derivación*:
confusione"s supleme:Ótarias en el en ese caso, la representación ten-
concepto de nivel¡ se reservará el drá entonces, por ejemplo, la forma
término registro . (que en·· el siglo de una regla de reestructura* (P =
XVIII correspondía, en Ja tipología SN + SV). A la relación· de inc!u·
de· los· discursos, al ··estilo*) para sión, simbolizada por ( = ), ~e corres·
denominar Jo que Jos sociolingüis· . ponde la operación de dicotorniza.
tas llaman generalmente nivel de ción con· su ·símbolo (-')):·;:
lengua,· es decir, las realizaciones Los dos modos de· representación
de una lengua* natural, que varían son, entonces, comparables: corres.
en función de las clasés sociales.· El panden a ·las dos acepciones de la
asunto de los registros no está :di· palabra descripción que · designa
rectamente vinculad9~ .a la lengua tanto el hacer descriptivo;.como su
en cuanto sistema semiótico: remi- resultado.
te, más bien,. al problema de .las 3. La formulación de .. ]a regla
connotaciones.*• sociales. subtiende · implícitamente· una es."
· ~ NIVEL, SCÍCIOSEMIÓTICA. tructura* acta.'lcial de la manipula·
ción*, comprendiendo dos sujeto's
REGLA. Fr.. regle, ing. rule. {vinculados entre si ·pOr una réla·
La regla eS la expresión meta. ción de tipo «maestrO:D / aalumno»).
lingüística* de una estructura mo· El problema epistemológico es el
dal deóntica* (en tanto que hacer· de saber qué condiciories de denti· .
deber-hacer) que presupone un su· ficidad* deben ser satisfechas para
jeto cualquiera (o neutro) que da que los dos sujetos de esta estruc-
instrucciones . a otro sujeto (huma· tura modal puedan ser erigidos en
no o máquina) para que ejecute . conceptos, es decir, instalados como
ciertas operaciones cognoscitivas.~- actantes*, a la vez abstractos Y coro·
consistentes, generalmente, en el petentes. Al primero -el sujeto
paso de un estado a otro. . científico- se le supone represen·
· 2. Tal es el caso, por ejemplo, tar un saber*-hacer cierto, y es aquí
del hacer ta."Xonómico* que opera donde se encuentra de nuevo la pro·
la segmentación* de una unidad blemática resumida por L:_ Hjelms~·
sintagmática, como la frase, en sus lev con el nombre de prinJ:ipio de
......... .,tlh, ........ t,,, .. * ;...,..,.,,.,.¡;.,t..... ! ... ., ...... ,.......... ~..: ....... ~*- _, ~--·--'- ..:1-t...- -··-
339 REGLA • RELAC!ON

máquina), en.paz de ejecutar corree.. términos de identidad y alteridad


tamente y de reproducir al infinito reclaman, por su propia definición,
las instruccionc:s recibidas: tal es el la presenci~ del concepto -no defi·
caso del á.lltómata*. nible- de relación. Este último no
4. El hacer taxonómico, repr~ es menos fundamental para la t(';O·
scntable en forma de reglas, está ria semiótica: el establecimiento (la
dominado por el hacer programá. producción* y/o el reconocimiento"')
tico que organiza sintagmáticamen· de las Í'claciones y de las redes
te al primero en series ordenadas relacionales es el que funda los ob-
de reglas, llamadas algoritmos*. jetos y los universos semióticos. La
.-+ NORMA. organización y Ja construcción de
tales objetos o de tales universos
REIFICACióN. Fr. réifica.tion, in· dependerá, entonces, de la tipolo-
glés rc.ificatio1i. - La reificación es gía* de las relaciones, que la teoría
un procedimiento narrativo consis· semiótica elegirá y planteará como
tente en transformar un sujeto hu· previa a su práctica.
mano en objeto, al inscribirlo en 2. Así, los dos ejes* fundamen-
la posición sintáctica de objeto* tales del lenguaje -el eje paradig-
dentro del programa* narrativo de mático"' y el eje sintagmático* -son
otro suJeto. Este programa puede definidos por el tipo de relación
encontrarse sólo en estado de ac· que los "caracteriza: la relación
tualización"' (cf. la problemática de <10 ••• o» (llan:iada oposición* o c0-
Ja «mujer·objeto») o completamen· rreiación* por L. Hjelmslev;. selec· ~:.
te realizado* (cf. la captura de los ción''', por R. Jakobson) para lo ~-·
dos amigos, en el cuento de Mau- paradigmático y .la relación u.y... yn
passant): en este último caso, priva (llamada combinación* o relación,
al sujeto -convertido en objeto- en sentido estricto, por Hjelmslcv;
de su hacer y lo convierte de agen. contraste*, por A. Martinet) para
te en paciente (en una u otra de lo sintagmático.
las dimensiones -pragmática"' y 3. Otra tipología ele las relacio-
Cognoscitiva•- o en ambas a la nes constitutivas de la cntegoría*
Vez). semántica (considerada como uni-
-)o PERSONIFICACIÓN. dad semiótica mínima) se superpo-
ne a la precedente: se trata de las
R.E!.ACióN. Fr. relation, inglés relaciones de contratiedad*, ·de con-
relation. tradicción* y de complcmentarie·
1. Puede concebirse la relación dad*, que, l-epresenta.das en el cua-
como una actividad cognoscitiva dro semiótico, permiten fundar una
que establece, de manera concomi- sintaxis* y una semántica* funda-
tante, la identidad"' y la alteridad* mentales. Están presentes en los
de dos o más magnitudes• (u obje- dos ejes del lenguaje: así, por
tos de saber); o bien, como el re- ejemplo, 1a antífrasis* -figura pa-
sultado de este acto. Sin embargo, radigmática articulada según la con·
tal acepción no es sino una interde- tradicción- aparece como antítesis"'
RELAC!óN' REPRESENTAC!óN 340
lugar de exbluirse, ¡;:oexjsten uno al ·-> FIGURATIVIZACIÓN, NARRATIVIO.\o
lado. del otro. PROGRAMA NARRATIVO, UNIDAD (discur: .
-,)o ESTRUCTURA, CUADRO SEMIÓTICO, siva), DIÉGESIS.
SINTAXIS·FU1'!flA..\UiNTAL.
RENUNClACióN. Fr> renon.cia..
·,RELATO. Fr. récit, ing. narrative. tion, ing. renuncia/ion.·::_ Situada
i.· · Palabra del lenguaje corriente, a nivel .figurativo*, la renunciación
el término relato se: ha utilizado, a carac~eriza la posició~ 'del sujeto.*
menudo, pata dé.signar el discurso de un enunciado de estado* cuandO
narrátivo .de· carácter figurativo* él mismo se priva del ·Objeto* de
(comprendiendo personajes"' que valor: corresponde, pues; a la dis·
cumplen ·acciones*). Como se trata junción"' reflexiva* del 'objeto de
aquí. del ··esquema n3rrativo* (o de valor, efectuada en un; momentO
algún otro de· sus segmentos) ya cualquiera· del recorrido ·narrativo*.
discursivizado .y, por este hecho, Junto con la desposesión*·, Ja renun.
inscrito ·.en coordenadas espacio- ciaci6n es una de las dos formas
ten1.porales; cfertos semióticos defi· de la privación que pueden ser con·
nen el relato -a partir de Propp- sideradas, a título de consecuen-
como. una sucesión tetnporal · de cia*, como subcómponentes de la
funciones* (en el sentido de accio· ·prueba*. ··
nes).: Así concebida, ¡:ie manera muy ~ ACTUALIZACtÓN, PRIVÁCIÓN.
restrictiva (como fifiurativa y tem· ·
· poral), la· narratividad* no conCier. REPRESENTACióN. Fr. représen.·
ne sino a una clase, de discursos. tation., ing. represen.tatioñ: ·
2. Frente a la diversidad de las l. La representación es
un con·
formas narrátivas, se· ha planteado cepto de la filosofía clásk'á que, uti·
la interrogante sObr'i)a posibilidad · lizado en semiótica, inSinúa -de
dé definir el relato simple. ~te, en manera más o menos explícita-
última instancia, se reduce a · una que el lenguaje* tendría ·éomo fun.
frase del .tipo de «Adán ha: comido ción e.<;tar en lugar de ·otra cosa,
una manzana~.· que :puede ser ana· representar otra ((realidad». Sste
lizada como el paso ··de un estado* es. pues, el origen de la Concepción·
anterior (precedente a la ingestión) de la lengua en cuanto denotación*:
a un estado ulterior (que procede las palabras no serian sino signos;
de la .ingestión), operándo con ayu· representaciones de las cosas del
da de un hacer (o de un ptoceso*). mundo*. L3: función* denotativa o·
Desde esta · perspeC~iva, el · relato referencial* del leriguaje Constituye,
simple se acerca .. al. concepto de en Ja terminología de R .. Jakobson,
programa narrativo.. sólo un ropaje más modCrno de Ja··
3. A· nivel de las ·estructuras* función de representación de K.
discursivas, el término relato de- Bühler.
signa la unidad discursiva situada 2. Las teorías lingüísticas y, más
en la dimensión pragmática*, de generalrr.ente, semióticas emplean el
carácter figurativÓ, pbteni~a por término represent.ación d~dole un
341 REPRESENTAC!óN. RETóRICA

semántica, se entenderá la cons· por la que ciertos contenidos* par·


trucción de un lenguaje de descrip- dales -perdidos precedentemente,
ción* de una semiótica-objeto, cons- a menudo en beneficio del signifi-
trucción que consiste, grosso modo, cado* global de una unidad discur-
en unir vertimientos* semánticos a siva más amplia- vuelven a encon-
conceptos interdefinidos y controla- trar su valor semántico primero.
dos, por la teoría* (o en interpre- Así, en Dos Amigos (Maupassant),
tar* Ios símbolos" de un lenguaje la apelación «señori> que los sitúa
formal*)~ La instancia que debe "re- al inicio dcl cuento en su estatuto
cibir una representación lógico. se- social ordinario (y· que está enton-
mántica -estructuras profundas* o ces descmantizado), se emplea al
estructuras de superficie*, por ejem- final, tanto por el oficial prusiano
plo- depende de la manera en que (para reconocer, sin quererlo o sa·
cada teoría .concibe el recorrido ge. berlo, sus altas cualidades huma-
ncrativo* ·global. nas) como por Sauvage y Morissot
3. No obstante, se observa que· -uno dirigiéndose al otro y recí-
un mismo nivel metalingüístico* es procamente-, en señal de recono-
susceptible de· ser representado de cimiento mutuo de su propio valor.
diferentes maneras (árbol, matriz*, ~ oesEMAN'ÍIZACIÓN.
parentización*, reglas* de reescri-
tura, etc.) y que estos diversos RESTRICCióN. Fr. restrlction, in·
sistemas de representación son ho- glés r:estriction.-A diferencia de la
mologables, entre sí tradu~ibies: generalización*, la restrfcclón con-
conviene, entonces, mantener una siste en limitar el alcance o la ex·
distinción entre el metalenguaje y tensión de una regla, de un proce.
sus diferentes representaciones po- di.miento, etc., por medio de cierto
sibles. número de condiciones particulares
-'> '.REFERENTE, METALENGUAJE. de empleo; este término puede ser
comparado con el término coerción,
REPRESENTATIVIDAD. Fr. re- más amplio.
présentativité1 ing. representativity. -> COERCIÓN,
La representatividad, como criterio
de Ja elección de un corpus, per· RETóRICA. Fr. rhétorique, inglés
mite al descriptor ajustarse lo me· rhe.taric. -La retórica (vinculada a
jor posible al principio de adecua- 1a tradición greco.romana -Aristó·
ción, sin tener que someterse a la teles, Quintiliano-, consagrada por
exigencia de exhaustividad•. La re- su integración, al lado de Ja gramá·
presentatividad se' obtiene ya sea tica y de la dialéCtica, en el trivium
por muestreo estadístico, ya por medieval y reasumida en la· ense·
saturación del modelo*. fianza oficial hasta el siglo XIX) se
-7 CORPUS. presenta como una especie de tea--
ría pre-científica del discurso, mar-
RESEMANTIZACióN. Francés re· cada por el contexto cultural en·
sémantisation, ing. rese1n.antizatlon. que se ha desarrollado. La renova·
AJ contrario que Ia desernantización, ción actual de la ret6rlca se explica
la resemantl:zacl6n es la operación por la reaparición, bajo el impulso
RETóRICA:· RETRQLECTURA· .. 342
de la semiótica~ de la prObleniática grándola; en primera línea, como
del discurso.*. Aunque -por razo- .componente estilístico* ~D la semió-
neS. evidentes- no puedan· ser inte· · . tica discursiva y textu~l. Pese al
grados, tales cuales, ciertos' campos interés de la empresa, S:µs peligros
teóricos de la antigua retórica en son evidentes: el inventario de las-
la semiótica ·discursiva, sin ·embar· figuraS -resultado de ~cumulacio­
go cOrresponden a 13.s ¡>reocupacicr nes seculares- no puede· pretender
nes actual¿s y merecen ser eXplo- tener el estatuto de una ··taxonomía
rados. . . · ._ · ... .. coherente; únicamente una revalo-
1. El tomar en consideración -el rh:ación: completa, fundada en la
discurso como un todo, el recono- lingüística, permitirá: incfuirlo en la
cimiento de las ~partes .del discur· teoría del discurso. Est~- reex.amen·
so)> y de su organización sitl.tag· ha sido intentado actualinente por
mática (dispositio) corresponden a el Grupo µ de Lieja q{!:e, apoyán.
nuestras preocupaciones de segn:ien· dose en la teoría lingüistica de
tación'* y de definición de unidades* Hjelmslev, pretende coristituir una
discursivas .(más extensas . que la nueva retórica general. ,
frase"'). No:obstante, definida desde ... ...;,. ·FIGURA, DISCURSO.
su origen como un ·..:arte de háblar
bierÍ», como Un o:arte de pe'rsUad:ir», . RETRÍBUCióN. Fr. r."étribution,
a la retórica· sólo le -concierne 1una ing. retribution. - La ·retribución
clase de· discursos, los discursos es una figura* discursiva·.que, situa."
persuasivos*. ·.Por Otro lado, cOmo da en ia dimensión pfagrnática*,
Ja retórica adoptó como tarea ela· forma parte -a título pe
campo·
borar las areglas· del arte»-; compor· nente- de la estructura Contractual
ta un carácter ·norn:Ú,~tivo* pronun- que caraCteriza al esquema narrati·
ciado (cf. la ·gramática normativa, vo*: constituye el contraPunto ofre·
· que le es paralela). cido por ·el Destinador .al Destina·
2. ··Una parte de .. Ia retórica des- tario ~sujeto, una. vez que éste ha
. cuidada hasta ahora, la inventio, realizado la performance'* conveni·'
merecería un estudio más detel}ido. da (explícita o implícitalnente) en
Despreciada como una suma de alu- el marco del contrato* . 'inicial. Si
gares coffiunesio, cab_rla reexaminar- es positiva, se hablará : de recom·.
la como ·un depósitÓ «en lengua» pensa*; si es negativa, ~e castigo*:
de los principales temas* discursi- en un caso y en el otro, Se·trata de
vos y de las configtjfaciones* · dis- restablecer el, equilibrio*: :narrativo~
cursivas ·más gener·ates, es decir, -+ SANCIÓN. f.{-
como una ~tópicaio o una taxono-
mía semántica fundamental.· . RETROLECTURA. Fral;lcés . rétro- .
3. En cuanto a ia eloautio, es lecture, ing. back-readinff~'. - Si, en
como:: el lugar de una taxoii.omía el curso del análisis shj.tagmático
posible de las figun'!$* de. retórica, :_que opera secuencia* tras secuen·
pero no· según la ~imensión del cía-, ciertos elementos : se· ponen
discurso, sino de la<-frase o de -la provisionalmente entre ·P.aréntesis,
palabra. -Esta. parte es -1a que . se porque no parecen encontrar ar
co-
trata actualmente de remozar inte- mienzo su lugar en la. o~$anizacl6n
343 RETROLECTURA-ROL¡
del discurso examinado, la retrolec. que comprende a los dos planos
· tura, efectuada en función del fin y del lenguaje: un prosodema pone
gracias (en particular) a los co- el énfasis en Ja identidad de. los
nectores de isotopías subsecuentes, significantes sólo para subrayar me-
puede permitirse tomar en cuenta jor la alteridad de los significados"'.
-respecto a los resultados ya obte- La rima establece así, gracias a esas
nidos- los elementos momentánea; uposiciones fuertes;., una organiza-
1nente abandonados: esta «vuelta ción ritmica del discurso poético y
hacia atrásn debe ser reconocida permite prever la construcción de
como una de las formas posibles una especie de sintaxis posicional
de la lectura (entendida, en sentido (J. Geninasca).
semiótico, como la construcción, a -7 PROSODIA, POSICIÓN,
la vez, sintáctica y semántica del
enunciado-discurso).
-+ CONECTOR DE ISOTOPÍAS, LECIURA.
RITMO. Fr. rythme, ing. rhythm.
Cabe definir el rltmo como una
REVALORIZACION. Fr. revatori· expectativa* (C. Zilberberg, siguien·'
sa.zion, ing. revalori.zation. -Des- do a P. Valéry), .,es decir, como la
pués de la realización*· (entendida temporatización* -con ayuda de la
como la conjunción*. entre el suje- aspectuatidad incoativa"'- de Ja mo-
to* y el objeto* de la búsqueda*), dalidad* deI quer~ser aplicada en
el objeto es susceptible de adquirir el intervalo recurrente entre grupos
un nuevo valor* gracias a la moda· de elementos asimétricos, que re-
lidad del saber*; por ejemplo,· si producen la misma formación. Con-·
alguien se dispone a guardar por trariamente a la acepción corriente
todos los medios lo que otro inten- de esa palabra que ve en el ritmo.
ta quitarle, la revalorización. pro- una disposición particular del plano
vocada entonces por el hacer cog- de la expresión*, 'ol:itamos por una
noscitivo*, está unida así a un nue· definición del ritmo que lo consi-
vo querer y puede engendrar un dera como una forma significante
nuevo programa* narrativo. y, por lo tanto, de ta misma natu-
raleza que los otros fenómenos de
RIMA. Fr. rime, ing. rhyme. - En prosodia"'. Esta concepción libera;
semiótica poética, la rlma corres· al ritmo de sus ataduras al. signi·
ponde a la recurrencia*, a interva. ficante* sonoro (lo que, por ejem-
tos regulares. de un segmento de plo. permite hablar del ritmo en'
semiótica visual) e, incluso, al sig-
la expresión* (idéntico o compara·
ble), segmento que, a su vez, forma nificante a secas (lo que, por ejem-
parte de dos formantes"' que abar· plo, permite la posibilidad de reco-
nocer uti ritmo a nivel del conte..
can dos unidades del contenido*
(lexemas) distintas: por esta razón, nido*).
la diferencia semántica se pone en -+ PROSODIA.
evidencia. La rima no es, entonces,
una articulación* particular del pla· ROL. Fr. róte, ing. rote.
no de la expre.c;ión, sino un fenó- 1. El concepto de rol es dificil
meno dependiente d~ la prosodia de precisar, ya que admite múlti·
.. ;,
··. ¡"·

ROL·RUIDO J44

ples ·acepciori"es, de a:9uerdo con sus roles temlitlcos constituyen Ja for.


ámbitos de empleo.· Se retendrá mulación actancial de los: temas o
aquí, a· título comparativo, · sola- de los recorridos temáticos .
mente el punto de vista de la psico-- . .-+ ACTANCIAL (rol, es4\tuto -).
sociologia . que -:.itiliÍa este término TEMÁTICA.
para designar un modelo organizado
de comportamiento; ·ligado . a una RUIDO. Fr. bruit, ing} noise. -
posición detei.-mina.da-_en Ja ·sociedadEl mido, término de la teoría de la
y. cuy~ manifestacldnes son amplia- información, designa todo' aqueilo
mente .previSibles. Pueden, sin du- que provoca una pérdida',.-de la in-
da, relacionarse con es'ta concepción formación en el proceso ::de la co.
los «roles narrativos»; tal como son m,unicación•. Desde el mc\in.ento en·
propuestos· por C. Bremond (aun que el mensaje* deja 1,u fuente
cuando la definición inicial que él. (emisor*) hasta que es reCibido por
da eS inu cho más extensa). ' · el receptor* {o destinatarl~), el .rui·
2. En semiótica narrativa y dis- do puede intervenir en to~o instan-·
cursíva, · el rol tiene un 'carácter te, tanto en la transmisióh misma
mucho: más forma,1, llegando a ser como en las operaciones '.:·de codi· ·
sinónimO de ·((función» (en el sen- ficación* · y descodificacióri*. A fin·.
tido. corriente del téMn.ino): dese- de compensar el efecto nefiativo deJ·' ·
mantizado de modo :Parcial, sólo es ruido --considerado comd ·. impreVi·
empleado con un denn:minante. Así, sible y parcialmente inevit'áble- se
los roles actanclales constituyen' el recurre al empleo de la redundan· ·
paradigma de las po$iciones ~intác­ cia* para garantizar Ja eficacia de
ticas modales que ·los actantes* la comunicación. ;_;
puederi asumir a 10 ~argO del reco. -+ IN'FORMACI6N.
rrido llarratívo*. Par~l~Jamente, los
s
SABER. Fr. savoir, ing. knowing. vas*. De esta mallera, la dimensión
1. La comunicación* puede ser cognoscitiva del discurso se encuen-
.considerada, desde cierto punto de tra superpuesta a su dimensión
vista, como la transmisión del saber pragmática.
de una instancia de la enunciación . 2. Tal retorno a la instancia de
a otra. El saber así transferido.(del la enunciación* permite concebir
que no se puede decir nada, pero sí el discurso propiamente dicho como
aproximarlo intuitivaménte al con- un hacer, es decir, como una acti-
cepto de significación*) se presenta vidad cognoscitiva, o bien como un
ante todo como una estructura tran· ser o un estado de saber. Así pues,
sitiva*: ·al ser siempre un saber el saber-hacer aparece como lo que
sobre algo, es inconcebible sin el hace posible esta actividad: como
objeto de saber. Esto permite ya una cotnpetencia cognoscitiva {que
reconocer, en el desarrollo mismo puede interpretarse como tina <i:in-
del discurso, una dimensión par- teligcncia sintagffiática», como una
ticular donde se disponen los obje- habilidad para organizar las pro-
tos de saber; éstos, fonnulables en gramaciones narrativas}; el saber·
términos de enunciados descripti· ser, como lo· que sanciona el saber
vos*, constituyen los cimientos de sobre los objetos y garantiza la
lo que puede denominarse dimen· calidad modal de ese saber: es de-
sión pragmática*. Por otro lado, el cir, como una competencia episté-
saber se presenta también como un mica*. Según la definición de mo-
objeto en circulación: se hablará dalización que hemos dado, el sa-
entonces de la producción, de la ber aparece como -una modalidad•
adquisición· del" saber, de su pre· de alcance muy general.
· :>encia o de su ausencia (el no-saber) · 3; Si e1 saber abárca, como se !
e, incluso, de sus grados. En cuan· ve, la instanci'a de la enunciación
to objeto, el saber remite a la ins· en su conjunto, el procedimiento de
tancia de. la enunciación donde se desembrague* '(que da cuenta de la
sitúan los sújetos de saber que instalación de las . estructuras de
ejercen las actividades cognosciti- la «enunciación enunciada» en el
SABER· SANC!óN 346
discurso.enunciado) explica la pro- tinador·juez, sobre la <:ónformidad
fusión con que en él se encuentran de los comportamientos ·y, más p:-e.
diferentes tipos de simulacros y dis- c~samente, del programa* narrativ.o
positivos cognoscitivos: se encuen· ·del sujeto* performante, en relación
tran en él, instal3.dos por delega· con el sistema axioIÓgicó* (de jus.
ción*, diversos sujetos cognoSciti· ticia, de «buenas maner~s», de es.
vos, · tales como el narrador* s el tética, etc.). implícito O explíCito,
narr;:i.tario, el informador* y ei ob· tal como al menos ·ha 'Sido actua·
servador*, que pueden asumir posi· lizado en eJ contrato* inicial. Desde
clones de actores'*: autónomos y, el punto de vista deV· Destlnata·
también, entrar -en··$incretismo* ac- ria*· sujeto, la sanción pragmática
torlal con diferentes. actantes"' de corresponde a la retribuCión*: éSta,
la narración · o identificarse · sólo en cuanto resultado, es'."-la contra·
con las posicioóes implícitas. Una partida -dentro· de la ·estructura
vez emplazados en. et discurso, los del intercambio*.....: requerida por la
sujetOs cognoscitivos· ejercen en él performance• que el sujeto realiz.a
actividades diversas;. por· ejemplo, de acuerdo con .sus obligaciones
un ·hacer emisivd*·,. o receptivo* contractuales. Puede s~r · de tipo
simple, o, más a '·menudo, los hace· positivo' (recompensa*) o negativo
res cognoscitivos ;--persuasivo*. e (castigo*); en este últimQº caso, 13.
inter:Pretati.Y.o*- mái(complejo.S, ca· retribución negativa se denominafá
paces He deSarrollar _programas en·
teros- e, inctUso, ::d~. agotar· las di· venganza* o justicia'\ se~n :qu~ e1
castigo sea dado por un ··Destinador
mensiones ·discursivils e:n su ·'con·
individual o social. Estos ·-diferentes
conjunto¡ fulalmente, los sujetos tipos de retribución perrlliten reSta~·
cognoscitivos· pueden ·manipular o~ bJecer et eqUi!ibrio* narra·uvo,
jetos· de saber· (los enunciados de
hacer"' y· de· estado·*), prestándoles 3. En cuanto juicio s~bre el ha·
diversos estatutos: veridictorios-i.-, cer*, la sanción pragmát,ica se opa.
·etcétera. .·>: · ·,.·, ne a la sanción cognoscitiva, juicio
'~ COGNOSt.'I'Í'IVO, :MfilASABER> RECONO- epistémico sobre el ser• . del sujeto
CIMIENTO,· PUNTO DE VISTA. . y, más generalmente, ·sobre los
! . ·:'" · •.:; j ¡ :.' ':.! • enunciados de estado* que éste rige
; ·sANCióN. Fr. sa'nc.tion, ing. sane· gracias a las modalidades veridic·
tion.'· 1 ~.,,· -•· ¡ .... torias• y epistémicas*. (Se podría
' J.:,-r.a ·Sandón· es ·una figura dis- situar aquí el concepto .de acepta·
cursiva, correlativa a la manipuial bilidad*, empleado en gramática
clón*, que,' inscrita en el esquema generativa, que se presdnta como
narrativo*,' ocupa su ·Jugar en: las un juicio epistémico comparable a·
dos dimensiones pragmática* y cog· la sanción cognoscitiva).' - Desde
noscitiva*.. ·Considerando que es el punto de vista del Destlnador·
ejercida "por1.'el DeStinador* ·final; sujeto, la sanción cognoscitiva equi:
presupone ·en él una competencia* vale al reconocimiento* Clel héroe*
absoluta+ :.- • .· · 1• • y, negativamente, a la cozÍ'.fusión del
2. 'La sanclón praimátiCa ·es:· un traidor*. EJ reconocimieD:to por el
juicio epistémico, a .cargo del Des· Destinador es. la contrapa~ida de la
347 SANCION • SEGMENTAC!ON

prueba glorificante* asumida por el · seo», «danza11>, «caza», .:rensueño:o,


Oestinatárlo-sujeto.· etcétera): las denomina.cienes del
4. Si se. transpone a nivel de las primer tipo se dirigen a constituir
prácticas sociales el recorrido Da- una tipología de unidades discursi·
rrativo* c¡,ue es la sanción, se debe vas; las denominaciones del segun·
poder prever la elaboración de una do tipo se dan como restímenes
seroiótica de la sanción (correlativa aproximativos, de orden temático,
a una semiótica de la manipula- que ayudan a hacerse una idea de
ción* y a una semiótica de la ac- la ·economía general del discurso
ción"'). · examinado.
-')o NARRATIVO (esquema -). NARRA- 3. Una secuencia puede ser sub·
TIVO (recorrido -). dividida en unidades* te:'(tuales más
pequeñas (o segmentos) que reve-
SECRETO. Fr. secret, ing. secret. lan asi Ja existencia de una organi-
En el cuadro semiótico de Ias roo- za~ión interna. El fin de esta divi· .
.dalidades : verldictorias, se designa . sión* es el reconocimiento de uní·
con el nombre de secreto al térmi- dades discursivas cuyas dimensio-
no complementario~ que comprende nes no corresponderán necesaria~
los términos ser y no-parecer situa- mente a la fragmentación en frases
dos en la del:x:is* positiva. o en paTágrafos, pero permitirán
~ VERIOIC[ORJAS (modalidades -). resaltar los enunciados o los sin-
SUSPENSIÓN, CUADRO SeMtónco, MARCA. tagmas narrativos subyacentes. - •
Concepto puramente operatorio*, la
SECUENCIA. Fr. séqu.ence, inglés· secuencia no ·es coextensiva al sin·
sequence. tagma narrativo.
1. En semiótica narrativa, se pre· ~ SEGMENTACIÓN:, UNIDAD (textual,
·fiere reservar el nombre de secuen· discursiva), SINTAGMA, IMBRICACIÓN.
da para designar una· unidad tex~
tual obtenida por el procedimiento SEGME.NTACióN. Fr. segmenta-
de segmentación, distinguiéndola así tiott, ing. segmentation..
de Ios sintagmas, unidades narra- l. Se entiende por segmentación
tivas situadas a un nivel más :Pro- el conjunto de procedimientos para
fundo*. dividir el texto en segmentos, es
2. La discreción de una secuen· decir, en unidades sintagmáticas
cia está asegurada por la presencia provisionales que, al combinarse
de demarcadores* que sirven para entre sí (por relaciones del tipd
delimitar las fronteras. La compa· ... y... y»), se distinguen un:i.s de
ración con las - secuencias que la otras por uno o varios criterios de
preceden y la siguen permite esta- fra~mentadón* sin que se sepa, nck.
blecer disjunciones* constrastivas y, obstante, a ·qué nivel de pertinerif. ··
así, 'l'econocer sus propiedades for- da* éstos aluden. Valga decir que
males o sus características semán· la segmentación, de naturale:r.a sin~
ticas nominales !distinguiendo, en tagmática, no permite por sí sota
el primer caso, las secuencl¡,s des- reconocer* las unidades lingüfsticas
criptiva, dialogada, narrativa, etc., o, más generalmente, semióticas.
y en el segundo, las secuencias «pa- Por etlo, en lingüística frásica (y,
SEGMENTACION -SEMA

más específicamente, en. fonología*) de certeza de la operacióit misma


se· convocan Jos procedimientos de ·aumenta con el núm·ero ~e disjun· ·
orden paradigmático tales como la ciones concomitantes. :ifstas, siri
conmutación* y la sustitución*. Este embargo, no se sitüan necesaria·
doble. acercruitlento garantiza la de· mente en el mjsmo lugar, y dos
finición de las unidades propias' de secuencias, disjuntas de eSe modo,
cada nivel del lenguaje. Nótese, ·sin . pueden aparecer a menudo como
embai'go, que Jas unidades obteoi~ áreas de isoglosas* comparables a
Cas por medio de Ja segmentación las zonas dialectales dentrO de una
no son las únicas· unidades. lingilis· lengua. ..
ticas,posibles: existeri.":unidades dis~ 3. Si, 'desde la pe;spectlva de la
continuas (la · negaéión francesa . lectura* o del análisis*, Ja: segmen-
ne ... pds, por ejeinplo)¡ incluso, la tación es una operación que separa
fonología · se ·divide .en fonología las unidades textuales, .: i:iesde el
segmenta? {que se ocupa de los punto de vista del recorrido gene-
foneJl'.las*) .. y· supras.egmental*: (o rativo* podrá ser consideráda como'
prosodia*). · uno de los procedimientoS de tex:-
2. En lingüística discursiva, ¡ la tualizaci6n* que recorta erdiscurso
segmentación debe se:r considerada en partes,";establece y di$pone en.
como ·una primera Urea empírica sucesión las unidades textuales (fra-
que apunta a descOIDponer prOvi· ses, parágrafos, capítulos, etc.), prb-
sionalmente el tex·to* en magnitu· cede a la anaforización*,_. etc., te-
des* n1ás ma.ñejables;··no ·obstante, niendo en cuenta -evident"emente-
las secuencias ·así obtenidas no Son la elasticidad* del discursO.
unidades* discursivas ··establecidas, ~ SECUENCIA, TEXTV/ILIZACI~N.
sino solamente unidades textuales.
La segmentación puede prÓceder SELECCION. Fr. sélectiQ'n, inglés
por~ Ja ,búsqueda de Jos demarcado- selection. - La selecclón es el ter.
reS* (la conj:u,ncióf!. disjuntiva «pe- mino que· L. Hjelmslev atl:ibuye ·a ·
ro.,,, por ejemplo), especie de seña- la presuposición unilateral cuando
les que indican Ja existencia de una ésta es reconocida en la' cadena
frontera entre ·ctos secuencias. P~ro__;· sintagmática*. El uso tiende a gene.
el procedimien~c. más eficaz parece ralizar ese término, 2plicándolo
ser el reconocimiento- de las dis· igualmente a las relaciones· :paradig·
junciones* ca!egoriales; aquí, uno máticas*.
de los términos de la· categoría* -;,. UN'IUTERAL (presuposl~ión -).
considerada caracteriza a la secuen-
cia que precede y el otro, a Ja se· SEMA. Fr. seme, ing. serµe.
cuenda que sigue. Así, se recono- l. El sema designa ComUnmente
cerán . las disjunciones esp~ciales . ·a la «unidad mínima» (conlparable ·
(aquí/allá), terliporales (antes/des·· al rasgo pertinente"' 6 sólO distin·
pués), tímicas* (eufo.ria /disforia), tivo* de la Escuela de Praga) c'le
tópicas (lo mismo / lo otro), acto- la significación*: situado en el pJa· '
riaies <Yo/él),· etc. Et· inventario de no del ·contenido*, corresP'Onde al·
los criterios de segriie'ntación está fema*, unidad del plano de la ex·
lejos de ser exhaustivo, y e1 grado presión*. Manteniendo .el ~.aralelis.:
349 SEMA

mo entre Jos dos planos del lengua- por ejemplo, son denominaciones
je, puede decirse que los sernas son de carácter metalingüístico* a las
los elementos constitutivos de los que conviene dar una organización
sememas*, asi como los femas lo coherente, pues no se trata de sim·
son de los fonemas•, y puede pos· ples paráfrasís* en lengua natural.
tularse -a título de hipótesis*- un ~sta es una ·posición teórica que
sistema semántico para describir el opone entre s[ a semióticos (como
plano del contenido de una semió· nosotros mismosi y semánticos ge-
tica*, comparable al sistema fono· nerativistas, incluido B. Pottier:
lógico cuyas articulaciones consti- para nosotros, el análisis sémico"'
tuyen el plano. de. la expresión. es una construcción metalingüís·
2. El serna ·no es un elemento ti ca.
atómico y autónomo; obtiene su 4. La definición aproximativa de
existencia sólo gracias a la separa· serna como «unidad minima1• del ·
ción diferencial que lo opone a contenido debe ser cuestionada no
otros sernas. Dicho de otro modo, sólo en su estatuto de unidad*,
la naturaleza de los semas es uru· sino también en cuanto unidad
camente relacional y no sustancial; <imínima».
el serna no puede definirse sino a) Teórican¡.ente, es fácil imagi-
como término* -resultado de la nar que la combinatoria~ de una
relación* instaurada y/o aprehendi- veintena de categorías sémicas (nú·
da con, al menos, -otro término de mero comparable al de las catego·
una misma red relacional. Esto es rías fémicas de las que dispone una
reconocer que la categoría sémic:a lengua natural cualquiera) 'pueda
( = categoría"' semántica que sirve producir una cantidad de sememas
para constituir el plano del conte· tal que satisfaga enteramente las
nido) es lógicamente anterior a los necesidades de una lengua natural
sernas que la constituyen y que o de cualquier otra semiótica. Las
éstos sólo pueden ser aprehendi· categorías sémicas, así inventaria-
dos en la estructura* elemental de das, contendóali sin ninguna duda
la significación. Cuando se da' un al conjunto. de los universales* del
estatuto lógico preciso a las rela- lenguaje. En este sentido puede ha·
ciones constitutivas de dicha estruc- blarse de ~~mas en cuanto unidades
tura (contradicción*, contrariedad*, mínimas de significación. Sin em·
implicación*), se determina el con· bargo, se ve que a falta de un in·
cepto de serna y se lo hace opera· ventario completo de los semas
torio*. • «primitivos»,' todo análisis sémico.
3. Como los sernas son sólo tér- seria inoperante.
minos (es decir, puntos de intersec· b) También el carácter «m1n1-
ción y de encuentro de relaciones mo» del serna debe ser entendido
significantes, y no corresponden sino en un sentido muy relativo: mini·
raramente a las realizaciones · léxi· mo con relación al campo de explo·
cas en lengua natural), deben ser ración escogidÓ. Así, en presencia
denominados, durante el procedi~ de una terminología de parentesco
miento de análisis, de · modo arbi· dada o de una clase sintagmática
tr.ario"': verticalidad/horizontalidad, de determinativos constituidos en
SEMA -SEMANTEMA 350

. paradigma ~adO,. el análisis- séini· ganización de las categol:-ías sénti• "


co sólo convocará el número míni- cas homogéneas en jeraiquías* (ba-
mo ·de rasgbs difeiienciales · {o de sadas en ·relaciones hip9núnicas*J;
éategorías sémicas) riecesarios para b) las estructuras mOi'femátlcas
agotar todas las opt;isiciones entre resultan ··de las articulaciOnes inte·
los morfemaS examirlados. Cosa se- grativas de sernas proveriientes de
mejante ocui-rirá át analizar el com· diferentes micro-.sistemas· 'y catego-
·ponente semántico d.C un discurso ·o rías sémicas; aparecen Como figu.
de una cotecci6n de ·discursos.· El ras* ·(cuyos diversos elementos man~
carácter mínimo del serna (que es, tienen relaciones hipotácticas*).
no lo olvidemos, una entidad cons- ·La distinción establecida: por B;
truida) es, pues, relitivo y se basa
Pottier entre sernas genéricos y
en el criterio.· de" la pertinencia* de
semas específicos remite".a la con·
la descripción.· ';
cepción taxonómica y a Iá ·organiza·
'. S. El examen·· de las diferentes' ción sémica; nuestra propia con~
categorías sémiCas permite. distin- cepción de las figuras sé~cas ( cons•
guir Varias ylases de sernas: titutivas de los núcleos* semémicos) ·
, a} Jos serilas figurativos* (o. ex- se refier.e a la organización znorfé·
teroceptivos*} son laS magnitudes* mica.
del plano del cOntenido de las ,len- · . 7.. EI emplazarh.iento de la com·
g'uas* naturales; correSpondén a: los binatorla .sémica produce, un gran
elementos del plano" de Ii · ex:Pre- número de sememas; éstos, sin em·
sión* ·de la semiótica" ·del mundo* bargo, ·no son simples colecciones
natural, es decir, a .. Ias· articul~cio­ de sernas, sino construCciones hi-
nes de Ios órdeñes·.sensorláleS, a potácticas que obe~eceri ,.a un con··
las cualidades_ sensibles del mundo; junto de reglas de formación. Den-
'.. b)...-Ios semas. ab_~tractos~ (o· in- tro. de un semeina se pueden dis-
teroceptivos*)·' son l~ magnitudes tinguir los semas contextuales" (que
del. contenido que ti.Q·.se refieren a el semema posee en. comUn con los·
ninguna exterioridad, sino que, por otros elementos del· eni1n'ciado se·
el contrarío, : sirven . para categori- mántico) y los sernas ·nuCJeares*
zar• el mundo e. instaurarlo en isig- que caracterizan al semema (y,
nificacl6n! tales son, por ejemPlo, eventualmente, al lexema del que"
las categorías, de relaci6n/térmfno, depende) en su especificfdad.
ob}e_to/proceso; ~ sárrco (análisis -), nsmuCTUR~ 1
· · e} los sem'as tímlcos* (o propio- CUADRO SEMIÓTICO, SF.MEMA,
ceptiv0s*) connotan los micro -sis-
temas sémicos según Ja. categoría SEMANTE&fA. Fr. ·séma'nteme, in·
.'t:tuforia/disfor,ia .y, por este hecho, giés sema11teme. ·:
los erigen en sistem~s axioiógicos*. 1. Et término semantema perte·
6. Pueden distinguirse dos mo- nece a una terminología, ~hoy aban·
dos·de organización de los conjun- donada, · donde designaba." Ia base
tos sémicos: · : . ,. -: .. - · léxica de una palabra,. en :oposición
i· a) .. las est:ructura"s · taxonóm!c:<1s* al morfema"* (que comprt'n.de infor·
(o sistemáticas) rePre.sentan la ·or- maciones gramaticales). En esta
351 SEMANTEMA· SEMANTICA

acepción, actualmente es reempla- crónica de los hechos de significa-


zado por morfema l~xico (o lexe- ción, Ja semántica se dedicó -en
ma*). - Cuando se quiere hablar la primera mitad· de1 siglo xx- al
del vertimiento* sen1ántico "de un reconocimiento y análisis de los
. morfema o de un· enunciado*. pre- campos"' semánticos (nocionales o
vio a su análisis*, es preferible uti.conceptuales). A partir de los tra-
lizar el término semantismo. bajos de J. Trier, quien practicaba
2. E.l término semantema ha sido paralelamente los enfoques semasio-
recientemente recuperado por B. lógico* y onorriasiológico*, toma el
Pottier :Para denominar, en su sis-· nombre de lexicología (G. Matoré).
tema,.. al sub-conjunto de sernas* No obstante, esta semd.ntica léxica
específicos que, junto con el clase· mantiene la palabra* como unidad
ma* (sub.conjunto de- semas gené· de base para sus análisis; se une,
ricos) y el virtuema* (sub-conjunto ast, a la hipótesis de Sapir·Wllorf,
de semas connotativos*), constitu~ relativa a la categorización* del
yen el semema*, mundo con ayúda del dispositivo
léxico de Jas lenguas naturales. Esta
SEMANTICA. Fr. sémantique1 in- aproximación cuyo propósito es ta·
glés semf.f.tHics. xonómico•. al carecer clc criterios
l. Opuesta tanto a la pareja !o- dependientes de Ja 'estructura inma·
nética - fonología, como a la sinta- nente del lenguaje, sólo dio resul-
xis (especialmente, en lógica), Ja tados parciales y limitados.
sem:índca es uno de los componen- 4. Hacia 1960, el empleo del mo-
te$* de la teoría del lenguaje (o de delo fonológico* -basado en el
la gramática*). postulado, más o menos explícito,
del paralelismo de los dos pJa.
2. En el siglo x1x, Ja lingüística nos• del lenguaje- inauguró la vía
se ·había ocupado, sobre todo, de a lo que comúnmente se denomina
elaborar la fonética* y la morfolo-- semántica estructural. Al considerar
gía*; en el siglo xx se invierte esa que el plano de la expresión* de
tendencia y la lingüística se encar- una lengua está constituido por se·
ga de desarroIIar, ante tOdo, la Sin- paraciones diferenciat~s y que estas ,
taxis* y la semántica. En efecto, separaciones del significante* deben
s6Io a fines del siglo pasado, M. corresponder a separaciones del sig·
Bréal fue el · primero en formular nificado* (interpretables como ras·
los principios de una semántica gos distintivos* de la significación),
diacrónica ~llamada a estudiar el esta nueva aproximación encuentra
cambio del sentido de las pala- en ello un medio para analizar las
bras-. al adaptar a la dimensión unidades léxicas manifestadas (mor·
social de las lenguas naturales el femas o asimiladas), descomponién·
instrumental de la antigua .:retórica . dotas en unidades subyacentes más
(especialmente, de la tropología) y pequeñas (a veces 11arnadas míni·
de la estilística novecentista. mas): los rasgos semánticos o se-
3. Abandonando la dimensión dia- rnas*. Sean cuaJes fueren los pre-
crónica de las investigaciones en supuestos teóricos de los lingüistas
provec~o de una descripción sin· comprometidos en esta investiga.
SEMANTICA ·. ·.:·
352

: ción (citemos, en dcisorden~ los nom• 'do como una simple pii.ráfrasis .en
.. bres de U; Weinreích, B. Pottier, lengua. natural.
A; J •. Greimas, Apresjan, Katz y Fo- 6. Entre los probleni.as en sús-
. dor) y sin. considerár los reSUltados penso que la semántica está uama.
-más o menos _:Sa:tisfactorio.S.:..:. ob- ·da a resolver, señalemO~ primera.
tenidos individualínente por ·cada mente el de la producción .sémica .
. uno de dloS, no·se-puede negar que Cabe imaginar, te6rican1ente, que
, la semántica estructural Constituye una veintena de categorías* sémic:ls
una etapa decisiva: .sus· logros me-: binarias (consideradas como la base
todológicos han hecho posible: una taxonómica de una combinatoria*)
nueva ·reflexión· sobre la teorúl ·de es capaz de producir algunos millo-
· Ja significación y han abierto la vía nes de· combinaciones ···sl;!mémicas,
a la semiótica. · número ampliamenfe suficiente -a
, 5. 'Tal· cual es, la semántica pa- primera-vista- para abarcar el uni·
rece ·haber ·desechado, actualmente, verso semántico coexteo:Íivo a . una
.los temores· de buen número.de !in-~ ltingua natural dada. Sin hablar d·e
gi.iistas, ·tenlores criStalii.ados en la
famosa fórmula de: :BIOomñeld se·
gún ·la cual el sentido exís'te, · sin
la dificultad práctica para estable·
cer una base de universales* seme-
jante, . otro problema -no menos
1
qi.te por ello nada sensato Se pheda
arduo-:- se plantea cuando se trata
decir·. En efecto, si bien una cierta
·- «materialidad» del significante'* sir- de precisar las reglas de compati-
. bilidad e incompatibilidad" semán-
ve de garante . para la descripción
·científica, el plano· 'del significado* ticas que presiden no solamente la
-que sólo · podía ... presuponerse- construcción de lOs semeinas*, sino
escapaba '"at enfoque positivo. Se también de las unidades sintagmá.
necesitó que" se p:to_dujera" una · re- ticas más extensas (enunciado, dis-
volución en los criterios -al susti· curso). Así pues, el análiSis sémico~
tu ir· las certezas· de una descripción (o componencial) sólo ·obtiene re-
de los (<hechos» del- lenguaje; por sultados· satisfactorios cuando prac-
la idea de que la·Jifigüística es sólo tica descripciones taxonórilicas limi·
· una construcción teórica que trata tadas (capaces de ser extendidas a
de describir· fenóinenos, de otro la estructuroción* de campos se·
modo (y di_rectam·ente) ·inaprehen· mánticos ·más abiertos) Y cuando•
·. sibles-, para· que la -semántica pu- ha de abandonarse la idea de po-
diese ser adi·;;itida Y· reconocida co· der disponer, para la interpretación
mo. un lenguaje construido, capaz semántica; de matrices _·semej3.ntes
: de hablar 4el lenguaje-objeto.· To- a aquellas que la fonol.Ogía puede
. davía es necesario PZ.ecisar que el suministrar para su pr6pia lnter-
··estatuto de la semántica, en cuanto pretación. Finalmente, 1~-' semántica
metalenguaje*, .divide .-.más o me- lingüística (generativa O< lógica, aJ.
rlos ·conscientemente-:-· a "-los seinán· modo de- O. Ducrot)· se:- reduce a
ticos: al tad.O del· pfOyecta ·que exi· explicitar sólo eventuales universa·
· ge un metalenguaje científico aI les. De esta manera, la Sran ilusión
cual nos adscribimos,- el· lenguaje de los ·años sesenta ..::..que creía
semántico es considerado a menu· posible dotar a Ja lingüística de los
3S3 SEMANT!CA • SEMANTICA DISCURSIVA

medios necesarios para el análisis máticas más pequefi.as para llegar,


exhaustivo del plano del contenido finalmente, a combinadones semé-
de las lenguas naturales- ha tenido micas.
·que abandonarse, pues la : lingüís- e) La semántica debe ser g~eral.
tica se había comprometido -sin Como las lenguas• naturales son
percatarse bien de ello- en el pro- -al igual que los mundos* natura-
yecto extraordinario de una descrip· les- lugares de aparición y produc-
ción completa del conjunto de las ción de semióticas .múltiples, debe
culturas, abarcando a la humanidad postularse la ·unicidad del sentido
entera .. y reconocer que puede ser manifes-
7. Para poder superar la fase de tado por diferentes. semióticas a la
su desarrollo (aquí descrito breve- vez. {en el caso del espectáculo, por
mente), la semántica -tal como ejemplo); por '.·esta razón, la semán·
tratamos de elaborarla en el marco tica depende de una teoría general
del Grupo de Investigaciones Semio.- de la significación*.
lingüísticas- debe satisfacer, al pa- 8. En el áinbito de la gramática*
recer, por lo menos tres condiciones semiótica, tal como nosotros la con-
principales: cebimos, se distinguirán dos. com-
· a) Debe ser generativa, concebida ponentes complementarios -sintác-
en forma de vertimientos progresi- tico y semántico-· articulables en
vos del . contenido, dispuestos en dos niveles de profundidad. El reco-
niveles sucesivos que van desde los rrido generativo* del discurso com-
vertin1ientos más abstractos* hasta prenderá, asf, dos instancias semán-
los más concretos* y -figurativos*, ticas, a nivel semiótico o narrativo:
de tal manera que cada uno de los la de una semántica fundamental,
niveles l'ueda recibir una represen- dotada de una representación Jógi-
tación* roetalingüística ·explícita*. ca abstracta, y la de una semántica
b) Debe ser sintagmática y no narrativa cuyos vertimientos se ins- .
sólo taxonómici, tratando,· así, de criben eri los moldes de Ia sintaxis*
describir no las unidades léxicas narrativa de· superficie. La rep¡-e-
particulares, sino la producción y sentación semántico-sintáctica resul·
aprehensión de los discursos.· A este tante es la de las estructuras semió-
respecto, la importancia reconocida ticas, susceptibles de ser asumidas
a los sernas contextuales* en la por la instancia de la enunciación*
construcción de los sememas nos con vistas a la producción del dis-
permite postular la hipótesis* si- curso.
guiente: los vertimientos ·· semánti· ~ CON!ENIOO, GENERATIVO (recorri-
cos más profundos corresponden a do -), SEM.<m!CA FUNDAMENTAL, SE·
las: unidades sintagmáticas cuyas MÁNTICA NAMAnVA, stMANTIC\ DISCUR•
dimensiones son las más extensas SlVA, SEMÁNTié\ GENERATIVA.·
y sirven de base para· establecer
·las isotopías* discursivas; de: este SEMANTICA DISCURSIVA. Fran·
modo, nuevas capas de·vertimientos cés sémantique discursive, ing. di.s·
darán entonces lugar a .especifica· cot~rsesemantics . . ·
ciones de contenidos, descomponien· 1. La discursivizaci6n* de las es·
· ·do el discurso en unidades sintag· tructuras . semióticas y narrativas

Sí:.MIÓTlCA. - 23
SEMANTICA DISCURSIVA .'· , 354
pUede definirse, deSde :ei punto: de ticas cuya compleJidad es variable.
, vista sintáctico,· cofuo un· conjunto De ·este modo, un discurso puede
de ·procedimientos ·.de aCtorializa- aprovechar un reconidÓ temático
éión*1 de temporal~ción* y de es· conVirtiéndolo, sucisivaIÍlente, en di·
pacialización*; paralelamente, del la- versos recorridos figurativos: tal es
. do Semántico, ·nuevos . vertimientos el caso; bastante frecue.nte, de las
-que se intentarán .disponer en va- parábolas del Evangelio; ·otro dis·
·rlos· niveles-· acomj:iañan a· esta re- curso, en-.,vez de disponer en suce.
organizadórl sintagmática; Un ejem· sión los recorridos figurativos, Jos
plo muy selicÚlo ·ayudará a precisar superpone simultáneamente unos a
nuestro : peiisamiento. SuPongamos otros: así sucede en· el caso dé ia
que,· a nivei de las· ·.estructuras na- pluri·isotopía* que da lcigar a lec··
rrativas, existe un programa* narra- turas* múltiples de un solo discÍlr·
tivo a cuyo -actante.Objeto se le ha •so. Igualmente, en este .Oivel se ins-
vertido el valor* ~·itibertád~ · (valor criben las numerosas , figuras*· y
que depende de· Ja estructura mo- configuraciones* discursivas (de ca-
dal del poder); al Ser inscrito 'este rácter,' a· menudo, iterativo y .mi·
objeto como disjuntp del _sujeto, ·et gratorlo) que el discu~So asume:
valor ,,Jibert.ad11 Co.nstituirá el· obje- se trata aquf de un vasto dominio
. tivo del r.ecorridO:. parrativo* del de investigación, todavía·· muy poco
sujeto. Desde· este· momento, la ins~ explorado, que depende de la &.!·
criptión de. ·dicho recorrido éri ··e1 mántlc:a discursiva.
discurso puede dar lugar, por ejem- 3. · En el nivel figurativo del diS·
plo;' a· la espacialización Y• por este curso es conveniente distinguir los
hecho, el recorrido ·1tHbertád» Podrá dos estamentos de Ja figuración y
ser tematizada · como el recorrido de la ·iconizaclón*. Mientras que la
·«evasión». Sin embargo; la evasión figuración consiste en colocar a -Io
sigtie siendo todavía· un recorrido largo del discurso un cOnjunto de
··abstracto*: nuevos vertimientos pue7_ figuras* (cf. las figuras ·hucieares~.
·den · :figuratívizarlo ·al presentarlo, tos esquemas de G. Bache!ard, Jos
por' ejemplo, conlo un embarque dibujos de niños, etc.). la iconiza·
hacia mares lejanos. Se dirá; en· ción trata -en una etapa: más avan·
tonces, ·que un reCorrido narrativo zada- de «vestir!} esas figuras, ha·
'dado puede convertirse,· durante Ja cerlas parecidas a· la ··-~realidad»,
discursivización, o _bien en un re· creando así la ilusión referencial*.
corrido temático~ O bien -en una También en este nivel se emplazan
·etapa uitetior- 'en· .tm~·recOrrido fi· los procedimientos onomásticos•
gurativo"', · y se d~stinguirán, as:l que con Ia antr0ponimi3*, la cro-
-considerando los dos procedimien- nonimia* y Ja toponimia~· correspon·
tos de terna~izaci~h* y· figurativiza· den,· en el plano semárltico, a los ·
·ciÓn~-. ·dos grandCs clases de dis· · tres principales proci:difulentos siri·
cursos: los ·diséursos no' figurativos ·tácticos de la discursiviiación: ··ac-
··(o abstractos) y lqs .figurativos. torialización, temporaliziclón, esPá·
2. La distancia. que separa ~ Jos dalización, · ·.,
dos niveles discursivos es, pues, el 4. En el estado actuar" de las in·
lugar de l~s coil:~e~iones* semán- vestigaciones semióticas";- evidente·
355 SEMANTICA DISCURS. -SEMAN!. FUNDAMENTAL

mente. es imposible poder determi- semánticas; susceptibles de ser ar-


nar con alguna certeza la economía ticuladas en el cuadro* semiótico
general de la semántica discursiva. (lo que les confiere .Un estatuto ló-
Por ello, aquí sólo pueden inilicar- gico· semántico y las ''uelve opera-
se los lineamientos gencr;des de un torias).
proyecto que reposa en cierto nú- 2. En principio, se considera que
mero de postulados: conviene, meto- una sola categoría . semántica es
dológicamente, descomponer el re· ;;uficiente para ordenar y producir.
corrido generativo*. del discurso tras los vertimientos* sucesivos en
(que va de lo abstracto hacia lo cada instancia generativa, un micro-
.concreto y figurativo) en tantas universo* de discurso. :Sin enlbar·
instancias semi- autónomas como go, dos categorías semánticas dis-
sean · necesarias para aprehender tintas, tomadas como esquemas* del
mejor, en cada .etapa, sus modos cuadro semiótico, también pueden
particulares de producción; por generar un discurso innovador (ana.
otro lado, el procedimiento de ge- lítico o sintético-mítico). La existen-
neración en su conjunto, ·y los ver- cia de discursos no clausurados o
timientos semánti~s que se reco- de discursos incoherentes, no con·
nocen. en cada estamento, constitu- tradice tal concepción: asi como
yen otras tantas . restricciones*. y un discurso a dos .vOCes (diálogo")
especificaciones del discurso que se o un discurso a varias voces {de.
intenta generar; el conjunto de op· bate en grupo) puede constituir un
ciones sucesivas y las selecciones único universo de discurso y deber
resultantes podrán servir de base su organización fundamental a una
para una tipología de los. discursos. ·sola categoría {o a una pareja de
~ SEMÁNTICA NARRATIVA, TEMATIZA· categorías cruzadas), un solo dis·
CIÓN, FIGURATIVIZ.ACIÓN, CONFIGURACIÓN, curso manifestado puede ser inco-
GENERATIVO (reco~rido -). herente y depender de varios uni·
versos de discurso. Bajo determina·
SEMANTICA FUNDAMENTAL. das condiciones. puede preverse,

r Fr. sémantique fondantentale, ing.


fundanJental semantics. ·
l. Complementaria de Ja semán·
ti ca narrativa y, junto con ella,
igualmente, el caso de una sola ca·
tegorfa {o dos esquemas cruzados)
que, rigiendo un microuniverso, do-
mine otras categorías que le son
constitutiva del componente semán· subordinadas o sólo coordinadas:
tico* de la gramática semiótica (a tal dispositivo, de forma jerárquica
nivel de las estructuras semióticas), y que hace suyo un universo cultu-
la semántica funda:mentat se define ral dado, será llamado episteme*.
por su carácter abstracto*, pues 3. Dado que un universo* semán-
corresponde -con la sintaxis* fun- tico puede arjicularse. de dos ma·
damental- a la instancia ab quo neras, como un universo individual*
del recorrido generativo* del <lis· (una a:persona,,,) o como un u ni ver·
curso. Las unidades que la insti· so social (una «Cultura,,.), es posible
tuyen son las estructuras*. elemen- ·sugerir -a titulo de hipótesis*- Ia
,, tales de la significación y pueden existencia de dos tipos de univer-
ser formuladas como categorías* sales* semánticos -las categorías
SEMANT; FUND.· SEMANT. NARRATIVA · 356

.de· ~da/muerte: y . de
nattt.ra/cultu· neran .las formas de superficie (el
ra-, ·-·cuya erlcacia ·Operatoria pare- componente fonológico qUe permite
ce incontestabie. · · en seguida dar una representacióÚ.
4; · i.a semáñtica funda.mental. ~pa. fonética al enunciado): .al mismo
rece, en este nivel;· como un inven. tiempO,. la cuestión -espinosa eri
tarlo (¿o una taxdrlOmía?) 'de cate- gramática generativa- de la lnter.
gorías sén:iicas aprovechables por pretación* semántica quedó re-
el "sÚjeto de' la 'enunciación"' Como suelta ..
otros tant~s sistemás axioló&icos'* 2. r:.a exclusión de una· aproxima.
virtuales* cuyos 'VaI9reS sÓJO se ac· ción puramente formal en provecho
tualiian en el nivel ··nattativo, ·tras de una opción realmente semántica,·
sti: Junción con los sujetos. Seme- acerca Ja semántica gen~rativa a Ja
jante estructura axlológica -elemen· semiótiéa francesa. Aun' ·'.cuando el
··tal, de orden paradig'máticO*, puede modelo presentado es ~ún aproxi.
sintagmatizarse gracias a las ope- mativo, puede ser comparado, por
raciones sintácticas 'que hacen efec- ·ejemplo;·'con nuestra propia Con.
tuar a sus térritinos ·recorridos pre- cepcióri del recorrido geTierativo, y
visibles en· el' cu3.d!-O semiótico: la su ·organización de las 'estructuras
estnictura semántica se· encuentra, profundas puede corresponder, en
entol').ceS, apta para· recibir; en·eSte . parte, ai ilivel profundo .de nuestra
plano, una representación sintagmá. gramática* semiótica. ·
tica. · · ' 3. Sin embargo, aun cuando la
-7·- GENERATIVO (reeotrido.. ~); SE• semántica generativa muestra un
'M.tmxo., ESTR.ucruRA (elemental de 1a interés positivo por los universales*,
significaci6n). 'EPISTEME, 'UNIVERSO SE· sus investigaciones pai'ecen, actual-
MÁNTICO., . , '': ¡ -~ ,:: ·: mente, ·muy localizadas: y, sobre
todo, carentes de. una tJbr:ía gene-
sEMAN'rré:A GENERATIVA." Fr. ral de la significación. · Por otr2:
sémantique gén.éraiiye, · ing. genera· parte, a diferencia de ntiestro pro-
tive semantics. : . . . ·i ::; • yecto científico, la seinántica gene-
rativa Parece rechazar {Ó,. al menos,
1.. Cuando la gramática genérati· · acentuar su indiferenciá por) eJ
va* se esforzaba por·' .situar el coro·
metalenguaje* descriptivo:
·.Ponente semántico nO ya s61o. en
el nivel de las' ~tructuras ·p:rofun· ~ GENERAUVO (recorrido~). GENE·
das1 sino a Jo Iargo~de todo el re- RATIVA (gramática --:).
corrido transformaclOnal y, por lo
tanto, por reconciliar sintaxis y ~ SEMANTICA NARRATIVA. Fran·
mántica (al . comienZo, tOtalmente cés sémantique narrativC, · ing. nar·
separadas), la semáritica generativa rative semantics. · ··
invirti6 los· datos del problema al 1. En la economía del': recorrido
Postular que· la inshi.ncja ab · quo generativó*, la semántica narrativa
del. recorrido geni;ni,t~vo* .está cons-- debe ser considerada romo la ins·
tituida por fórmas _'lógico. semánti· tancla de-.J,a actualización* de los
cas a partir. de las cuales, por un valores. En efecto, si er ·1iivel fun·
juego de tránSforina~ones*, se ge-. damental -donde se .inscriben l~
351 SEMAN!. NARRAT.-SEMANTICO (invent. -)

sintaxis"' y la sen1ántka* fundamen· -4 SF.MÍNTICA FIJNDAMEN.TAL, SINTAXIS


tales- está destinado a articular y NARRAT:V..1. DE SUPlmFICJE, ACTUALIZA·
a dar forn1a categórica al microuni· ClóN, GENERATlVO (recorrii:lo -). .
verso* capaz de' producir las signi·
ficaciones discursivas, este universo SEl\'lANTICIDAD. Fr. sémanticité,
organizado continúa siendo todavía ing. sema.nticity. - A diferencia de
el de· los valores virtuales hasta la lingüística generativa* y trans·
que no sea asumido pÓr un sujeto. formacional para la que la semanti·
El paso de la semántica fundamen· cidad de un enunciado* corrcspon·
tal a la· semántica narrativa consis· de a la posibilidad que tiene de
te, pues, esencialmente, en seleccio· recibir una interpretación semánti-
nar los valores disponibles -Y dis- ca (lo que pone en juego una apre·
puestos en et (o los) cuadro(s)'* se· ciación epistémica* del enunciata·
miótico(s}- y en actualizarlos por rio"'"), se entenderá por semantici-
su junción* con los sujetos de la dad -y desde un punto de vista
sintaxis narrativa de superficie. operatorio*- la relación de cc.m-
Mieli.tras que el nivel fundamental patibilidad que mantienen dos ele·
se presenta coma un dispositivo mentes* del nivel semántico {por
axiológico capaz de servir de base ejemplo, dos sernas* o dos seme·
para generar un abanico tipológico mas*), gracias a la· cual éstos pue·
de discursos posibles, el nivel na· den coexistir en una unidad jerár-
rrativo de la semántica es el lugar quicamente superior. Es uno de los
de las restricciones impuestas a la criterios, no solamente. de la acep-
combinatoria y donde se decide, en tabilidad*, sino también de ta in-
parte, el tipo de discur:;o a produ· terpretación semántica.
cir. · 4 COMPATIBJT.10:\U, ACEPTABILIDAD, IN•
2~ El enunciado de estado* es el TERPRETACión.
molde sintáctico* donde se efectíta
el vertimiento de los valores selec· SEMANTICO (INVENTARIO, NI·
donados. Independientemente de la VEL -). Fr. inventaire, niveau sé·
naturaleza del valor -que puede mantique, ing. semantic ínventory,
ser modal*, cultural, subjetivo* u level. - En oposición a1 inventario
objetivo*-, su inscripción en el semioJógico" de Jas categorías* sé-
actante - objeto define, en junci6n • micas que, al depender del plano
con el sujeto, a este último en su del contenido* de las lengua$ natu·
«ser,, móvil, movilizable con vistas rales, corresponden a las figuras*
al programa* narrativo que lo trans· de la expresión* de la semiótica
formará. Si Ja aCtualización de los natural*, el inventarlo semántico
valores erige así los programas na- {en el sentido estricto del término)
rrativos en significación, el recorri· está constituido por categorías que
do narrativo*· constituye el -marco no tienen ninguna relación con el
sintáctico de la acumulación (no mundo exterior, tal como es per~
sólo adicional, sino también "me· cibido, y son presupuestas, incluso,
morial», como Io testimoniará, a por la categorización* del mundo.
nivel de la semántica discursiva, el Para evitar toda confusión termi·
rol temático*) de los valores. nológica, proponemos emplear el
. SEMANTICO (invent:~i: SEMEMA 358
~~~~~~~~'---,..~~~~~~~~~~~~-

calificativo figufativo* en vez de se-- ra tarea de toda aproxiffiación com.


miológico, y· no· figurativo ·(o abs· parativa*. '
·.tracto) en lugar de semántico. ~ DIFERENCIA, IDENTJ.D},D.
-->-. INTEROCEPTIVIDAD.
SEMEMA. Fr. séme.ine, ing. se-
SEMANTrSMo.: Fr;·: .. dmaí1tisme, meme._.
irig. senianticism. ·::- Se desigrla con lo En Ja terminologí¡i propuesta
el nombre de seniantlsmo al;verti· por B. Pottier, el sementa se define
miento semántico, ·antés del análi· como el conjunto : de ; sernas* . Que
sis, en Un morfen;la* o en un enun· puede ser reconocido· dentro del
ciado*. signo* mínimo (o morfema"'). La
. '-+ VER.TlMIEITTO SEµ"ÁNTICO. unidad de significación~ así delimi·
tada, está corupuesta por tres sub-
conjuntos sémicos:. el .¿lasema* (los
· SEMASIOLOéiA~ . F~. sémá.siolo· semas genéricqs). el ·semantema"'
gie,. ing. sen1asiolOgy. - El término (los sernas específic.os)' y el virtue·
semasiología desigrla, en semán'tica ma* ·(los sernas· connOtativos*).
léxica, la tarea dirigida a. describir 2. Con relación a esta· definición,
tas ·significaciones*·· a partir de. !os nuestra propia concep.ción del se-
signos*,.mínimos .(0 lexemas*). Ha· memá ·se distingue en varios pun·
bitualmente,. se oPone semasiología tos funda1nentales: . . · .
·a..-:onomasio!ogía. : ' a) Mientras que Pottier atribuye
, ~ ONOMASibLOGÍA,: S~ÁNTlCA:, al seme1na fa totalidad de los \!er·
timientos* del significa.do* de 'un
SEMEJANZA. F'r-; ressembl(111ce, morfema, .para nosotro.s el semerna
ing. rese1nblance. corresponde a lo que 'en lenguaje
1. La s~ejam:a es la aprehen- ordinario se comprend~·. por «ri<::ep-
sión intuitiva* de' ciert~ afinidad ción..... ·11sentido particul3.r1> de una
entre dos o· más .magnitiJdes* que palabra.· El semema de· Pottier co-
permite reconocer entre ·ellas, bajo rresponde, pues, a nuestro lexeffia*
ciertas coo'diclones .y con ayuda de constituido por un corijunto de se·
pro~edimielltos ·apr"opiados, una re- inemas· (conjunto que .Puede sCr.
lación de ·identidád*. Sin embargo, en última instancia, monosémico"')
la relación de identidad (y la ope· reunidos por un núcleo* sémi·:o
ración d!! identificación que sobren· común. De esta maner~. el lexema
tiende) presupone una:. alteridad!> . umesai. comprende, además del se·
preexistente· (que es la fórmula ca- mema designado por los dicciona-
tegorial de Ja· diferencia). La apre- rios como «superficie plana sopor·
hensión · compleja ·y ..conccimitante tada por uno o varios·'. pies», otros
de la seméjanza y de la· diferencia sememas que pueden ser reconocí·
cOnstítuye, por tanto; Ja condición dos en las expresiones :Como .cpre-
epiStemo1ógica previa : para la apa- sidir la:·mesa», «mesa de escucha1>,
rición de1 sentido. · ' «mesa redonda», «mesá pascual~.
2. · En el plano ·ifituitl\'o, l~ bús· etcétera. El lexema, pues, es -en
queda y el . registr.~ de las semejan· cuanto reunión de seihemas~ et
zas y diferencias definen ta prime- resultado del desarrolló histórico
359 SEMEMA - S!lM!CO

de una lengua natural, mientras que mas abierto e[ problema del vir·
el semema es un hecho estructural, tuema.)
una· unidad del plano· del contenido. c) La distinción así efectuada en·
b) El semantismo* · -común a tre el lexema (unido a su formante)
varios scmemas cubiertos por un y el seinema (unidad resultante de
mismo· fOrmantc*, pero distinto de la articulación sólo del plano del
Jos vertimientos sémicos de los se- contenido) libera al· ·análisis semán-
memas contiguos de la misma cá· tico de las coerciones del. signo* y
dena"'- constituye el· núcleo del permite enco.ntrar, bajo coberturas
scmcma y asegura su especificidnd tcx:emáticas diferentes, contenidos
semántica (cf. Jos sernas específicos semémicos similares o comparables.
de B. Pottier, o semantema).· Este Si se precisa de antemano el ·nivel
núcleo, o figura sémica, es lo que de análisis considerado pertinente
el semema posee como propio;· el y si se opera. alli la suspensión* .de
resto le llega del contexto* (lo más las oposiciones sémicas juzgadas no
a menudo, de la unidad contextual pertlnentes, se podrá pasar de la
mínima constitUida, al menos, por para.sinonimia* de ]QS sememas a)
dos sememas) y constituye su base reconocimiento de su sinonimia., y
clasemática*, Dicho dé .otro modo, a ·constituir, así, clases de sememas-
el semema no es una unidad de (o de sememas. construidos) que
significación delimitada por las di- · reúnen buen número de sememas-
mensiones del signo mínimo; en in· ocurrencias dispersos en el discur- •
manencia --o 'iten Jengua1>, como ~e so y pertenecientes a lexemas di~e­
dice- no es sino una figura sémi- rcntrs.
ca~ sólo en el momento de mani·
d) Por último, el semema no pue-
festarse en et disctirso, esta· figura de ser considerado como una colec-
se reúne con su base clasemática ción de sernas, ·producto de una
(constituida por sernas contextua- pura combinatoria. El semema se
les) y selecciona así un recorrido presenta como una organización sin~
semémico que la realiza como se- t6.ctica* de sernas, y· las figuras sé-
mema, · excluyendo otros recorridos micas contienen a menudo -de
posibles~ éstos se mantienen virtua-
manera implícita- estructuras ac·
les pero pueden producir, en· otros tanciales (por ejemplo, itdar» im·
contextos discursivos, otros seme- plica Ja presencia de, por lo menos,
mas de un mismo lexema. Frente dos posiciones actanciales) y/o con¡
a la descomposición del semema figuraciones* temáticas ( itestettoro·
en: so", por ejCrnpJo, quiere decir «te-
semema = semantcma + daserri.~: ner la respiración anhelosa que
propues~a por PÓttier, nuestro -~n·á. suele presentarse en los moribuQ";!,:.
dos») más o men9s complejas. ~'.
lisis sugiere sustituirla por otra: ·· ·
~ sr:MA, st:MJCO (análisis -).
+
semema = fiiura sé mica base·
clasemática, · · ·
s:aitrco (ANALISIS -}. Francés
dos formulaciones cuyos fundamen· ana1.vse sén1iqtie, ing. se1nic analy.
tos. teóricos son diferentes. (Deja. sis;
. · SllMICO . ! ,,, !; ' 360
1.- El. awil.hds sémlco y el análbis de análisis con la taxonOinfa de Jos
componenclal son, a· menudo,· con- <i:asientos,., se refiere al concepto
juntados,_ a._pesar de sus orígenes .vago· de ucampo de e~periencia11o
,distintos (WJ.O ,"europeo,.el .otro: nor-: cuya fragilidad recono.ce), y la
teamericano). d.e su· evolución autó- naturaleza de los sernas (.:para
noma y .de sus proyectos:. divergen- sentarse•; <i:con brazos», : «con res.
tes (el .Primero .se Oirige a, descrl·. patdo11-, etc.) -que. establecen las
bir- la organización semántica de un distincíones necesarias-:,· ocasicina
campo léxico; . el segundo. a descri- problemas. El riesgo. de :esta apro-
bir JO más económicamente pcsible ximación -sus prolongac.iones, por
Ja terminología del parentesco).· Tie-. ejemplo, .con la ciasifica~iOn de los
nen en común ·el sé._r procediniien· medios ; de transporte, lQ muestran
tos- taxonómicos* qUe. ·tratan. de bien- con·siste en "deslizarse imper,
poner al ...día .la· :.orianización: para- ceptiblemente del ·análisis de un
digmática de los hechos.lingüísticos campo semántico hacia :i,ln campo
en el·j,Iano semántiéo~; para ello, es- de experiencia (psicológica), para
. tabieCen . distinciones·- mediante ras- terminar~ finalmente, en la descrip-
gos . pertinentes~ (oposición . de.. se- ción de un campo de.· l{realidad~
rnas", ezl un·. caso;· .de ~COln.poneR• · (física).·.: ·
tCs» o eiementOs cOÓStituyentes; en 4. como punto de partida; el
el otro). ·' , · . . ·t anáUsls cn.;nponenclat elige·· por ob. ·
2. El análisis ,sénµco puede : ser , · jeto un.; microsistema constituido
, ,. considerado,'. a justo· título, cOmo -dentro de las lenguas natvraieS-:.
ta prolongación del . análisis distri~ por la terminoJogfa del p,arentesco.
bucional*, pero con· :el aporte del El carácter extraño, úni<io de ese.
insti'umentat semántico:· por e}ern· rnicrosistema -cuyo funcionamien-
plo,· una Vez i:stablecida ·-gracias a to sólo es comparable al" 'de la ca.
las distribuciones*- la Clase de los· tegoría de persona-, preSenta pata·
determinantes* del sµstantivo, Será et análisis tantas vcntajaS·: como in·
tratada como un parádígma*. cerra· convenientes. Las principales ven·
do, constituido por_ las sub;clascs tajas, que aseguran homOgeneidad*
que son , los artículOS, Jos deinos· y rigor al análisis comPOnencial,
trativos, ·ios ·posesivos; etc., y que son la ·naturaleza puramente para·.
no· pueden ser -definidas sino pax::· digmática de este código* 'y su ca·
oposiciones sémicas; el .análisis. ul· rácter puramente semántiCo y arbi- ·
terior de estas ·sub-clases, tomadas trario* (el ego, que sirve·ae punto
una a una, penlllte articularias· en de referenci"a a todo el sistema, no
categorías• ·gramaticales; etc.". · · puede identificarse· con ningún ser ·
3. La complejidád aumenta ·cua'n· humano. referencial). Einpleando
.do .'se quiere tratar del mismo mo- apenas un . pequeño núméfo de ca-
do ·a las cla~es abiertas (radiciles tegorías sémicas -con.san.gÍu.inidad /
nominales o 'Verbales): los criterios '"'">alianza. late.ralidad ¡ verticalidad,.
elegidos para delimitar una sub· acerca1niento / alejamiento: (cálculo ·
clase cerrada "de· 1exe·mas · soi1 ·poco de los grados de parentescó), etc.-,
seguros y, a menudo; intuitivos·(asf, el análisis componencial togra cons,
B. _Pottier, quien inaugura este tipo truir un ~odelo taxonórfiico casi
361 S!!MICO-SEMIOLOGlA

perfecto. Pero su inconveniente ma- prendido por estos dos términos,


yor reside en cl carácter restringido se constituyó como ·.tal, antes que
de su campo de aplicación: los in- nada, en Francia· {hacia 1960), en el
tentos de extrapolación fuera de ámbito de lo que se llama el· es-
ese microsistema inmanente -para tructuralismo* francés (alrededor
el estudio de las etnotaxonomias de los nombres de· .Merleau-Ponty,
botánicas, zoológicas, etc., en etno- Lévi-Strauss, Dumézil; Lacan, etc.),
tingillstica- encuentran dificultadeS influenciado -en el. pláno lingüís-
comparables a las del análisis sé- tico-· por los herederos de Saus·
mico. sure: L. Hjelmslev "Y• en menor
5. Et análisis sémico y· compo- medida, R.· J akobson. De 10s dos
nencial -en la medida en que se términos -empleados indiferente-
define como la explicitación de las mente durante bastante tiempo-;..,
relaciones paradigmáticas y el es- el de semiótica se ·vio favorecido
tablecimiento de taxonomías :consi· en cierto momento: se fundó asf
derndas como resultados sólo de la la Asociación Internacional· de Se·
combinatoria*- aparece como una miótica. Pese a esta · institucionali-
disciplina autónoma, con su propia zación, el término semiología -só-
especificidad pero con· un domiruo lidamente implantado en Francia
de aplicación limitado.. La .amplia- (entre los discípulos de R. Barthes
ción de este campo de investigación y, en parte, de A.. Martinet) y en
depende, en iran parte, de los pro- los países latinos-· continuó siendo
gresos de la semántica* misma que extensamente utilizado; sólo hacia
se demoran en llegar: en efecto, 1970, el contenido metodológico de
elaborada a partir del modelo fono· la semiología y de la sern.i6tica se
lógico*, Ja semántica tiene dificulta· diferenció prOgresivamente, hasta
des para introducir en sus análisis volver significativa la oposición de
los principios de organización sin- ambas designaciones ..
tagmática y sintáctica del universo* 2. Cuando se ha tratado de des-
semántico. arrollar el proyecto semiológico en
~ SEMA, TAXONOMÍA, CLASIFICACIÓM, el ámbito restringido de la defini-
COMBINA.TOR,IA, ETNOSEMIÓTICA, SI!MÁN· ción saussuriana (y fuera de todo
nCA. contacto con 10. epistemología de
las ciencias humanas de la época)
· SEMIOLOGtA. Fr. sémiologie, in- -el ~sistema:1 excluye el proceso
glés semiology. semiótico y, al mismo· tiempo, las
l. El término semiología, que prácticas significantes más diver#
concurre con- el de semiótica* para sas: el estudio de los «signos•, ins-
designar la teoría del lenguaje y crito en Ja teoría de la comunica-
sus ·aplicaciones a · los diferentes ción*, consiste en la aplicación casi
conjuntos"' significantes, se remonta mecánica del modelo del «signo
a F. de s.-~ussure, Q,Uien abogaba lingüístico», etc.-, se redujo rápi-
por constituir, bajo esta etiqueta, damente a muy poca cosa: al aná#
el estudio general de los «Sistemas lisis de algunos códigos artificiales
de signos:.. Respecto al dominio del de suplencia (cf. los análisis de
saber (o del querer-saber) com· Prieto, de Mounin); esto hizo apa-
··i'

·, .. '
SEMIOLOG!A ·i.·. .362
r~cer .a .la semiología como una dis..
0

tica* (para las connotaciones seda.


ciPrtna anexa .. de la. tingüística:··· · les) y,. pbr el otro, a la:Psicosemió-
:! 3_.;· No= hay.' que buscar eri ·esta tica"' (en lo referente a las connOta.
formulación=• estrecha las· ' razones ciones individuales). EviOentemente,
del ·impacto decisivo: de F, de Saus.· no fue una infidelidad, sino una
sure· para. et desl!.r~ollo de· los estu- actitud fundamental resPecto a los
dios; semiológicos, :Sino en.Ja teória signos ·y a los lenguajes;- recuérde.
'del lenguaje.·-considerada en su· con- se .el efecto de choquC:;' producido
junto, cuyas· dimensiones fundamen• por la· originalidad de esta tarea ·y
·tales- él ·mismo determinó. Asimis- el resultado casi inmed~ato: reco.
.mo,· _en·'su 'formulaclóri hjetmslevia· hocer el derecho de ciudadanía a
na. (cf:«Elementos· de· Semiologla una semiología así· preséntada. No
de . R.· Barthes; Semántica Estrti.c- obstante, esta aproxin\ªción obJi.
tural de A. J. Greimas), ei saussu· cua al lenguaje daba máyor cabida
rianismo 1 se expresó definitivamen- a la intuición del descriptor (o del
te en la semiología francesa.· Ahora escritor): el significanti;'"' de los
bien; Hjelrrtslev conservó···e1 · térmi- lenguajes de connotación,· por estar
no de Saussure y,. io dotó de' una diseminado a lo largo del discurso,
definición precisa~ entiende por se· inaccesible a toda estiucturación
miólogía la metasejhiótica* científi·· directa, llo podía ser abordado sJno
· ca·cuya semiótica-objeto no es ·cien· por la postulación arbitraria y pre·
tífica: de este modo,_. excluye de la vía deJ. significado*. En Ja medida
: semiología a las . semidtícas; conno· en que· el análisis semiológico, de
'tativas, es· decir/a.los lenguajes· de inspiración connotativa,: .no estaba
· connotación~,.. como;:: a las métase·. ya sostenido por. una imaginación
rniótiCas que tienen "por semiótica· sometida a una rigurosa ·disciplina
: objeto las semióticas científicas (por conceptual, no podía sirlO desembo-
ejemplo, los ·tengu!lf!!S 16g.icos). . car en Ja redundancia. d'e lugares
' 4. · Estas .st:t!l~zas .. :terminol6gicas, comunes, a menos de buscar en
'.fútiles en apariencia, nos parecen, otro lado sus fundamentos: o bien
· sin.'émbargo, necesarias· por serVir en cierta forma de psicqlogía -y
· de punto·· de. referencia: . Permiten entonces se ve a la semiótica • ob·
situar las opciones fundamentales jeto, no analizada, convertirse en el
'··que. han· presidido la diferenci~ción· ..:significa.1te» par.a el PSicoanalis-
· progresiva· entre. semiología y se. ta-, · o bien en cierta" soc:iok1gía
miótica. Así; con·. relación a la defi· -y se ha v.isto a la semiología con~
nicióD hjelmslevianá de la senúola.- vertirse después en la justificación
gía,' la a:infi.delidad11 primera ·de R.. para una teoría d~ · 1as ideologías.
Bartl1es -antes ·de sus Elementos- Si se deja que tos signlficados 'es·
: fue · su interés : por· Ia dimensión cojan libremente sus prp_pios signi-
'contiptativa del lenguaje (cf:.; sus ficantes -y no vemos · Cómo una
'Mitotogias)¡: dominio excluido por aproximación connotat'i'va consc·
Hjelmslev. :de la definición de la cuente podría hacerlo d~ otro ma:-
semiología y. que nOsotras remiti· do-, se abandona el posi.Ulado fun•
_mos, por un lado, a la· sociosemió- damental de la s,emiótiCa, esto es,
'; .,., ,;:-
363 SEMIOLOG!A

la presuposición recíproca del sig· ésta debe ser coherente y adecuada.


nificantc y del significado que cons- No se trata en este caso. como
tituye su fuerza y su especificidad. algunos lo pretenden, de un domi·
5. La ujnfidelidad:n inversa ·-siem- nio improcedente de la lingüística ·
pre con. relación a la definición sobre la semiología, sino de las
hjelmsleviana de la semiología-· condiciones generales en que se
consistió en jnteresarse por Ja me· ejerce toda práctica con propósito
tasemiótica cuyas semióticas . obje- científico. Se ahonda así la fosa
tos eran ya las semióticas científicas entre la semiología -que considera ·
(es decir, Jos discursos científicos que las lenguas naturales sirven.
y las lenguas formales), dominio como instrumentos de paráfrasis
dejado por Hjelmslev. a· los lógi- para describir lris objetos semióti·
cos y a los matemáticos. No se · cos- y la semiótica --cuya primera
trataba, evidentemente, de sustituir- tarea es construir un metalenguaje
se ·entre sí -aunque la diferencia apropiado.
de puntos de vista semióticio·y lógi- 6. El último punto. de controver- ·
co podría eventualmente revelar su sia reside, finalmente, en la evalua-
complementnriedad-, sino ·de ver · ción de las relaciones entre la Hn~
cómo trataban el problema, particu- güistica y la semiología/semiótica.
larmente arduo; de lo's metalengua· · En apariencia, la semiología recha-
jes"' de descripción. Este encuentro za la primacía de la lingüística, al
con la Escuela vienesa de lógica y insistir sobre la especificidad de los
sus prolongaciones anglo~ sajonas sig11os y de las organizaciones que
(que definen a la semiótica como pueden ser reconocidas en las se·
la reunión de los dos componentes: m)óticas no lingüísticas; míéntras ·
sintaxis y semántica) y con Ja E5--" que la semiótica es considerada co-
cuela polaca de matemáticas {que mo estrechamente ligada a los mé·
estudia Ja problemática de·la jerar~ todos de la lingüística. En realidad
quia de los metalenguajes), sólo -y esto es, sobre todo, notorio en
confinna la e:dgencia hjelmsleviana el dominio de las semiótica:; visua;
de una descripción metalingüística les (v. semiótica planaria*}-, la
·«científica». Debe decirse, desde 'este semiología postula, de manera más
punto de vista, que la semiología o menos explícita, la mediación de
(en el sentido restringido que co- las lenguas naturales en tos proce- .
mcn1.amos a dar a· este término) sos de lectura de los significados
nunca i;e interesó mucho por los pertenecientes a las semióticas no
problemas de Semántica, al tratar lingüísticas (imagen, pintura. ar:
la descripción del significado como quitectura, etc.); mientras que }a
una simple cuestión de paráfrasis•. semiótica Ja recusa. A ·partir del
Ahora bien, a fin de escapar a una Sistema de la 1rzoda, Ja más hjelms-
subjeÚvidad incontrolable, Ja pará· leviana de las obras de Barthes
frasis debe estar reglamentada y la (donde para describir Ja semiótica
descripción parafrásica del plano vestimentaria se sirve de la· media·
del significado (de una semiótica} ción de ta ..i:moda escrita»; pero
sometida al análisis: si la paráfra· considera, sin embargo, que es por
sis se reconoce como construcción, cuestión de· comodidad y no d·e
SEMIOLOGrA' s:ÍiMié,ncA .
directiva -.met0dol6gica), , se lleia 1 a el nivel semántico "tiene sólo· en
concebir· la· s-ém.io1ogía de -la pintu-· cuenta las categorías . in"terocepti-
ra, como el análisis del.: discurso vas* de ese universo- nO-s llevó a
sobre :la. pintura. El malentendido operar una rectificación terminoló-
se remonta. a la· époCa en que "!Os gica: · el·' <icomponente figllfativo:ii;•
teóricos de la·· lingüística, como . R. del Wliverso semántico r~mplaza,
JakobsOn, luchando· contra el psi· de modo más claro, al. antiguo «ni-
cologismo d'el - o:pensamiento», ··ex.: vel semiológico»'.
presado por· este «útil» que e,s,,e}-:·
lenguaje, . afumaban .vivamerite :-el SEMIOSIS. Fr. sémios~·s. inglés
carácter indisoluble ··de esas dos . semiosis.
«entidades». Reconocer que. no hay l. La semlosis es la Operación
lenguaje sin pensamiento ni pensa· productora de signos mediante la
miento sin lenguaje, no implica que instauración de una relación de pre-
se deba considerar a las Je:oguas suposición"' recíproca entre la far·
naturales como el único rece:Ptácuto ma* de la· expresión* y la :del con-
del .«pénsamien'to»: las otras semió-- ·- tenido* (en Ja terminología de L.
ticas. no lingüísticas· son iguahnen· Hjelms!ev) o entre el significante*
te lenguajes, es dedr, .formas Sig- y el significado* (F. de Saussure).
nificilntes. ·.Desde entOnces, ·lo «sen- , En este sentido, todo actq* de len-
tido»,· lo «vívido» -'términOs c'on guaje, por ejemplo, ·implica una
los que designamos. por. ejemplo, semiosis. Este término es Sinónimo
Ja : influencia sobre nosotros de las de función semiótica;
formas arquitecturá.tes- son los sig- 2. Por semiosis, igualmente, cabe
nificados de estas fof:mas que un entender la categoría* sérniCa cuyos
metalenguaje· construidO, más o me- términos constitutivos son· la forma
nos adecuado' pero. arbitrario, ·es de la expresión y ·la del contenido
considerado' ca·paz de describir. (sigÍlificante y significado); ·
'-+ SEMIÓTICA, SIGNO, ICONICJDAD, CON:- --.,). SIGNO,, FUNCIÓN.
TENIOO. ,··~: · ~.
SEMió':fICA. Fr. sémiotii:¡ue, ing.
SEMIOLOGICO .(NIVEL -). Fr. semiotics. - El término semJótlca
níveau: sémiolOgique, illg. semiologi· se emplea con diferentes· sentidos,
cal tevel. - En una Primera ·formu- según que designe {A) un3:· magni-
lación· y por· Oposición·· a nivel "se- tud* cualquiera manifestada, a. la
mántico, el nivel semiológico se con- que se propone conocer;. (B) uti.
sideró constitUido poT, sernas* que objeto de conocimiento, tal como
forman· tas ·figuras* nucleares, mien· aparece drirante y despu(S de su
tras que ·el nivel semántico surni· . descrip«ión*, y (C) el conjunto de
nistraba al discurso los sernas con- medios que hacen posible Su reco· ·
textuales*; ·.ambos niveles compcr nacimiento, ·;··
n:fan : el universo significante.· ta·
ambivalencia inútjl del "término «SC-- A. Sem!Ótica-objeta.
mántica:io --el universo• semántico l. Está claro que ta d"Eifinición
es'·identificado·· eon el univerSo sig· corriente de la semiótica cOino «sis·
niñean te tomado en su· totalidad, ·y tema de signos11 no conyien~ al sen·
365 SEM!óTICA

tido (A), pues presupone ya el re- Se entiende por semióticas natu-


conocimiento* de los signos*. Si rales dos vastos conjuntos signifi·
se la reemplaza por «sistema de cantes: por un lado, las leilguas*
significaciones», se introduciría el naturales y, por otro, los .crcontex·
concepto menos comprometido de tos* extra-lingilísticos» que conside-
11significación». Finalmente, si se ramos como semióticas del mundo*
sustituye <1Sistema» -noción teóri· natural. Son llamadas «naturales•,
ca, precisa y limitativa- por con· porque preceden al hombre -éste
junto*, se puede proponer definir a se baña en su lengua materna y es
la semiótica -en un primer mo- proyectado, desde sti nacimiento,
mento- como un conjunto signifi· en el mundo ·del sentido común- ·
cante al que se le supone -a roa· que las padece, pero no las cons-
nera de hipótesis*- poseer una ·or· truye. No obstante, la frontera en·
ganización, una articulación* interna tre lo dado «naturalmente» y lo
autónoma*. Asimismo, todo conjun· construido es borrosa: el discurso
to significante, desde el instante en literario emplea una lengua natu-
que se prevé someterlo a análisis*, ral, las lógicas parten de las len-
puede· ser designado como una se. guas naturales, y en ambos casos
mlót!ca-objeto: esta defi."liclón es se trata, indiscutiblemente, de ver-
totalmente provisional; sólo es vá· daderas construcciones. La semió-
Uda en el marco de un proyecto de tica del espacio* observa la misma
descripción que presupone una me-- dificultad en distinguir el espacio 1
tasemióticai. capaz de asumirlo. Por «construido)> del espacio «natural•:
lo demás, los conceptos de conjun- el paisaje «natural» es, evidente-.
to significante y de semiótica· ob- mente, un concepto cultural y sólo$.!·
jeto no son coextensívos: los resut. tiene sentido con relación al espa~ \·...
tados del análisis mostrarán, a ve- cio informado por el hombre. De
ces, que sólo una parte del con- modo contrario, pues, a F. de Saus-
junto significante es abarcado por sure y a L. Hjelmslev,· para quienes
la semiótica construida, o, por el Jas lenguas naturales son unaS se-.
contrario, que ésta describe más mióticas más entre otras. las len.
magnitudes de las inicialmente pre- guas naturales y el mundo natural
vistas c:Omo formando parte del nos parecen vastos reservorlos de
conjunto significante (v. campo se- signos, lugares de manifestación de
mántico). numerosas semióticas. Por otra par-
2. Estas observaciones prelimina- te, el concepto de construcción*
res, fútiles en apariencia, adquieren también debe ser revisado y revalo-
todo su valor cuando se trata de rizado desde esta perspectiva: en
pronunciarse sobre el estatuto de la medida en que la construcción
las semióticas llamadas naturales* implica la existencia de un Sujeto
y sobre la pertinencia de la dicoto-- constructor, debe acondicionarse un
mia entre lo que es cnatural» y lo lugar -junto a los sujetos indivi-
que es 1tconstruido•; por lo demás, duales- para los sujetos colectivos*
este problema compromete a la teo- (los discursos eµioliterarios o etllO-'
ría semiótica en su conjunto. musicales, por ejemplo, son discur~
SEM!óTICA ·

sos construidos; Ctlalguiera que.iSea ticos aluden al context~ natural;


et estatuto que la antropología g'e- los segmentos gestuales f¿emplazan
hética-pueda .atribuir a los sujetos a los· sintagmas verbal~. etc. En
productoreS de·, dichos 'discursos). segundo lugar, la afirmacjón, según
De acuerdo con euo, ·nos- "parece la cual las lenguas naturalés son las
conveniente sustituir· la . oposición únicas en que pueden ser traduci-
natural /construido· (o , «artificlal:D) das las otras semióticas (mientras
por la de· semióticas__ científiéas /,se: que lo contrario no es posible), se·
mlótiéas no ·clent:íficils": entendiendo explica por dos tipos de razones:
· por sémióticá · cientifiCa -'en ·ei · sen· primero, pQ}que las figuras del mun~
tido extenso···de ese. calificativo- do natural están· semá,.·Úicamentc
una -semiótiCa-0bJeto. Íratada .en
el codificadas en las lenguas natura..-
ámbito de ·.ma · ·teoÍ'Ía· semiótica, les¡ segundo, porque sobre todo·
explicita*·.o implícita*· (la construc· estas últimas son las úntcas capa~
ción .. de ·un ·:lenguaje documental, ces de lexicalizar y ·manifestar las
por ejemplo, -se basa en una teol.ia, citegol.ias* semánticas abstractas (o
aun cuando ésta· sólo Sea débilmen· los universales*) que, genei'a.Imente,
·te científii:a),.';' ··· . quedan implícitas en las: ..otras se·
·-:· .3. Así pues;·· se hace ~indispensa- mi6ticas.·: ·
ble precisar ... el ~tatUto ·de ·es'tas 4. Así las mac;osemióÍicas, len·
macrosemióticas, constituidas por guas y mundos naturales,. son para
..-"Jas lenguas )lattirales y los · mun· nosotros los lugares de ej~'rcicio ·deJ .
dos naturales (éstos 1 en :et sentido.. · conjunto· de las semióticas.. ·
de «natura» ihformada por «cultu· ....,. Ll:NGUA~ MUNDO NA~
ra», lo cual los relatiViza y permite
el em¡)leo·del plural), en:cuyo seno B. TiPotoiía semlótlca.:
se organizan las·semióticas-particu- 1. Si,·en el sentido (A),: ·el térmi-
lares. En primer lugar han de re· no semiótica sirve para designar un ·
gistrarse Jas ·. correlaciones* · ex.is- conjunto significante antes de su
tentes entre ·ambos conjuntos: así, descripción, en una nueva ·.acepción
la afinnación;según la.cual el mun- ·-es -empleado para denominar un
do natural puede ser. .traducido .en . objeto de conocimiento ·en vías de
lengua ·natural, debe ser ·int"erpreta- Constitución o ya constituido: se
da· como Ja· correspoiidencia capaz tratará, entonces, de Ul'.la semiótica·
de establecerse: entre .las unidades objeto considerada ya sea como
dependientes de ambos·· tipos ·de proyecto de descripción, ya como
semióticas· {los· femas* del ·mundo sometida previamente a ariálisis o,
naturai correspond~n. · en el plai.o por último, como objeto construido.
figurativo*, .a Ios··semaS"' de las .len· · Dicho de. otro modo, no se puede
guas ·naturales;'" Jos c9ínportamien· hablar· de semiótica si no hay en.-
tos ·somáticos· son c:QéscritOsi- como cuentro entre la semiótica.Qbjeto y
procesos* lingüísticos,· 'etc.) •. De;elJo la teoria semiótica que 1a·:.~:i:prehen­
resulta · cierta.· i11terp'@etraci61i · de de, la informa y la articula.. ...
segmentos'·dependient~:S de··ambas 2. Inscribiéndonos en Ja tradición.
semióticas, reconocida :'en' el plái:io de L. Hjelmslev, quien· ha,. sido el'
sintagmático: los deícticos* lingills· primero en pÍ"oponer una teoría
367 SEMIOTICA

semiótica coherente, podemos acep- lado, la distribución· segtln la natu·


tar su definición de semiótica: la raleza de· los signos se apoya en las
considera· como una jerarquía*. (es relaciones que esos signos (s!mbo--
decir, como una red de relaciones, los.. , iconos•, índices*, etc.)· mantie·
jerárquicamente organizada) dotada nen con el referente*: al transgre-
de un doble modo de existencia dir el principio de autonomía* (o
paradigmático y sintagmático 0t, de inmanencia*) de las organizacio-
por lo tanto, capaz de ser aprehen- · nes semióticas, establecido ya por
dido como sistema* o como proce- F. de SaussurC, dicho criterio no
so* semióticos) y provista de, al puede ser conservado, pues tampo-
menos, dos planos* de articulación co es pertinente. De todos modos.
-expresión* y contenido*- cuya podemos preguntarnos si cualquier
reunión constituye la · semiosis*. clasificación de este tipo no es pre-
Esta definición no se modifica en matura en el actual estado de prcr
nada por el hecho de que las in- greso de las investigaciones sernió·
vestigaciones actuales favorezcan ticas. ·
mayormente, bajo la forma de aná- 4. La tiPQlogía de las semióticas,
lisis de discursos* . y prácticas* se- propuesta por L. Hjeims[ev en sus
mióticas, el eje sintagmático y los Prolegómenos, es de naturaleza muy
procesos seinióticos; cabe muy bien diferente. Para evitar toda confu·
imaginar que una fase ulterior de sión, primeramente· la expondremos:
la investigación sea consagrada a de modo sucinto y añadiremos lue- ·
la sistematización de los resultados go nuestras propias observaciones.
adquiridos. Esta tipología se basa en dos cri-
3. A estas · características comu· terios clasificatorios: a) la cientifi·
nes, · tratemos de añadir algunos cidad.. (una semiótica se dice que
rasgos más específicos para abrir es científica cuando es una descrip.
la vía a una tipología de las semló- ción conforme al principio de em-
tlc.as. Actualmente se aceptan, im· pirismo*), y b) el· número de pla·
plícita o tácitamente, dos tipos de nos* (de lenguaje) de que está cons·
clasificación: una · distribución de tituida. una semiótica. Se distingui-
· las semióticas fundada en los ca· rán, así, las semióticas monoplanas
nates* ·de la comunicación* y otra, (o sistema de símbolos* en la ter-
basada en la naturaleza de los sig~ minología de Hjelmslev) que son"
1 nos reconocidos.· Sin embargo, nin~ científicas (ejemplo, el á.lgebra) o
guna de las dos corresponde a no-clent{ficas (ejemplos: ·los jue-
nuestra definición de la semiótica. gos), las semf6t!cas biplanas (o se-
La clasificación ·según los canales mióticas propiamente dichas para
de transmisión de los signos (o se- Hjelmslev) que también serán cien-
gún el orden de las sensaciones) se tíficas o no, y· las semlótlcas plud-
basa en la consideración de la sus- plan.as que son semióticas biplanas,
tancia• de la expresión; ahora bien, donde al menos uno de los planos
ésta no es pertinente para una de- es una semiótica (denominada se-
finición de la semiótica. (que es, en miótica- objeto): desde luego, el,
prlmer lugar, una forma*). Por otro caso .en que uno solo de los dos
SEM!óT!CA 368
.. planos ·es ·una·. semiÓtica:..:obj~to es conjunto:· se puede rechazar la teo.
. el más · frecuente.·. Las ·. semióticas ria en bloque y ·no la clasificación
. pluriplanas sé subdividen:: a)· según sola,. ·!: . · ·:
· que ellas· :mismas 'sean, cientíñCas b} Para homologar ia ·-1enninÓl<r
··o no, b) ·según· que.· su·· semiótica· gía, se notará que nuestra· definició'n
objeto sea· cientffi.ci· º'no. Bl si- de -semiótica corresponde, en la ti·
guiente esquema ':rep.iesenta ·.esta úl- pología de Hjelmslev, a 'Ja me.tase-
. ma distribución:· mi6tlca llamada semloIOg!a: · todo
conjtinto significante tratado por la
lt2l116Ueas pl\lrlplamif teoría semiótica se.vuelve.semiótl~.
···'.··~ . .,. e) Las metasernióticas ·Científicas
(no cien ti~) (cicnti&as). ,
dependen de la problemática de los
·. .......
un:tf6tka.1 ·
-'"~
1•
m.e.tiumlóikas


. . metalenguajes*. común a. la lógica,
a laS niatemáticas, a la: lingüística
. •• . ~, · mc1asoiml6tka.ll
M: oloff.u ' denlltlcu · y· a· la teoría semiótica.;,. . · ;. .·
(C:U)'ll kl'llló1k::i-objeto {<:Uy,1 sc:rn161lca-o'bJetO es d) Descartar las· .semióticas mo-
cs.!'º elc.ntl/lca):.- · una s=niótiea clc:ntifiea} noplanas;· consideradas por Hjeiins·
Iev como sistemas de símbolos a los
·A· esta ! clasificación se--1e··añaden que niega el rango de «s~mióticast>,
·dos·: Semióticas·-rnás: una meuise- no deja· de pro11acar dificultades.
mlología ·y·una metasemiót1ea de las La definición que da de. ellas -se
semlóticas · connotativas, · cuyas· ta. reconocerían por la conformidad""
reas respectivas consisten en exa· de los dos planos, su.isomorfismo*
minax-1as semiologías Y' las semió- y su isotopía*, por la corresponden·
ticas connotativas; ·!i< . 1 cia término a. término de sus ufil.
• '5 ... Para comprender,:. interpretar
:' 0 dades- no quiere necesariamente
y ·evaluar dicha ·iipolog{a; són ;nece- decir que· comprenden sólo tm_pla·
. sarias' varias· observaciones: · . no de lenguaje, sino· qui!: se pre~
~~ a) Respecto· a las clasificaciones seotan como una forma* significante
señaladas más.arriba,. la· de·'Hjelms· (en el ·sentido saussuriano . y no
Jev se distingue· ante -todo por in· hjelmsleviano). Por otra parte, po-
·trodudr ·el· criterio .de cientificidad, dría establecerse una distinción en-
es decir, ·pór Ja-'neCesidad absoluta tre esas semióticas monoplanas se-
de disponer ::...:.si se quiere hablar gún el tipo de conformidad reco-
de semiótica~ de· una· teoría* explí- nocida: ·los Ienguajes·.foli.nales* (o
cita, Uamada'a describir; y además, sistemas : ·de símbolos)' ~erian, en
por emplear 'como ·criterio los pla· este sentido, «elementalesn; toma~
nos del lenguaje· (significante*. y sig· dos P<>l'. separado, cada ·elemento
niñeado* tomados gl_ol)almente), cri~ puede ser reconocido en . el .plano
terlo ya inScrito ·en la definición· de de ·la expresión o en el del conteni·
Ja semiótica y,'por eljo, homogéneo do (y se .llamarán entonces «ínter··
(mientras: que la sustancia o ·el ·re- pretables»), pues la distinción entre
ferente introducen ~rlables' ·suple- Jos elementos ·descansa úniéamente
mentarias y heterogéneas). Esto :bos en la simple discriminación""' (lo que
obliga· a considerar la .··tipología pro- permite idmtificar aqueU.os lengua. ,
puesta como parte de ·una teoría de jes sólo en el plano de ~a exp:re-
369 SEMIOTICA
sión); entonces, a los lenguajes for· de los sistemas connotativos, apo-
males· se opondrian los lenguajes yándose en el plano del contenido.
«moleculares» (o semi-simbólicos) Nosotros, en cierto modo, la .hemos
caracterizados no ya por la canfor· esbozado al tratar las connotacio-
midad de los elementos aislados, nes sociales, que se presentan como
sino por la de las categorías*: las taxonomías connotativas (lenguas
categorías prosódicas*. y gestuales, «profanai> y ·.. sacrai>, ..:internai:> y
por ejemplo, son formas significan· «externa:o-, «masculina.. y «femcni·
tes -el «SÍ» y el o:no• corresponden, na=-, etc.) en etnosemiótica*, o como
en nuestro contexto cultural, a la sintaxis connotativas (correspondien·
oposición verticalidad / horizontali· tes a Wla tipología de los discur.
dad-, al igual que las categorías sos) en sociosemiótica*. Las inves·
ret:onocidas en la pintura abstracta tigaciones en este dominio apenas
o en ciertas formas musicales. Asi han comenzado: junto a las conno-
pues~ el compromiso de distinguir taciones sociales existen, según la
entre las semióticas monoplá.nas in· sugerencia de Hjelmslev, connota-
terpretables y las que son sígnifi· ciones individuales (correspondien·
cantes es considerable. --.. " tes, más o menos, a Ja caracterolo-
e) ·El problema (relacionado, por gía antigua y moderna) de las que
lo demás, con et de la denotación*) apenas tenemos una vaga idea.
de las semióticas connotatlvas, ex· f) El uso actual tiende a distin·
cluidas del campo de ·la cientifici· guir entre las. semióticas lingiüstl-
dad, es también molesto. Se adivina cas y las semióticas· no" lingilistlcas,
muy bien que la dificultad para des· al referirse a esos dos lugares pri-
cribir rigurosamente esos lenguajes vilegiados de la manifestaCi6n de
de connotación• reside en· que, si las semióticas que llamamos ...'..tal
se procede a partir de su plano de ·vez impropiamente..:- macrosemJóti-
la expresión, es imposible prever cas: las lenguas· naturales . y los
las connotaciones (cuyo significante mundos naturales. No se puede ha-
será o bien un rasgo de pronuncia· cer esta distinción si no se postula
ción, o bien la elección de· un lexe· -contrariamente a Hjelmslev, para
ma o de un giro sintáctico, etc.) y, quien una lengua natural es una
con mayor razón, proponer su dis- semiótica como Ct:lalquier otra (do-
tribución jerárquica (es· decir, una tada, sin embargo, de un carácter
semiótica· connotativa). Así, las Mi· privilegiado)- un estatuto aparte,,
totogías de R. Barthes, por más in· específico para las macrosemióticas, ·.
geniosas y refinadas que sean, no considerándolas aptas para con-
son sino fragmentos connotativos y tener y desarrollar semióticas au-
no llegan tan siquiera a 'sugerir un tónomas (como lo atestigua, por
sistema subyacente. - Esto nos lle- ejemplo, un buen núlnero de aná·
va a decir que se debe intentar una lisis recientes sobre los discursos
aproximación inversa a· los lengua· jur1dicos, religiosos, etc.). Sin em~
jes de connotación, la misma que bargo, inmediatamente se plantea
comenzaría por elaborar una teoría el problema de transgredir la fron-
de la connotación a partir de la tera _que acabamos de establecer
cual se ·emprenderla Ja descripción con las semióticas slncrétlcas -que

SIOMIÓTICA. - 24
SEMIOTICA 370

constituyen su planÓ de expres1on para elaborar los procedimientos*,


con elementos provenientes ·de· va· construir* los modelos* Y. elegir los
rias semióticas heterogéneas-, cuya sistemas· ·de representaciótl* que ri.:
existencia es evidente. Si la ópera geri el nivel descriptivo*··:(es decir,
o el. cine se presentan, en prin.ci· el nivel metalingüístico !netodoló·
pío, como ejemplos perentorios· de gico*); pero, también, cofno el Iu~
los discursos sincréticos, podemos - gat para controlar la.. hOmogen~i·
pregtintarnos si ·Ias·Iengua:!{ natura·· dad* y la coherencia* de estos pro·
les -y, ·más partfc'ularmente, :ios cedimientos y modelos, a "la vez qUe
discüt:-sos . 'orales- no .conStituyen explicitar -en forma de :.una axio·
tan sólo un elemento1 esencial Por mátic.a*- los indefinibles· y el fun.
cierto, al lado de otros datos para· damento de todo este. andamiaje
lingüísticos* ·O proxémicos"!' de una teórico (que es el nivel ti!pistemO:
comWlicación tanibién: sincrética. lógico* propiamente dicho). Desde
e, g) Por último, pu~'den- proponer· esta perspectiva, "la serríÍ6tica s~
se otras distinciones, considerando entenderá como semiótica general
el· recorrido generativo"'" ·del discur· (insistiendo así en la ex.ig~ncia que
so. De este modo se ·opondrán Jos se le impone para describir la exis·:·
discursos .figurativos* .y los no figu· · tencia y el ·funcionamiento de todas
ratiVos (o abstractos).. y, al mismo las semióticas particulareS). ·o comfr
tiemp01 las scmlótt~':figurativu y teoría semiótica, en·Ia-med.ida que.
no figurativas (dado '(¡ue el discu.r. está llamada a satisfacer las condi·
so es ia aprehensión .de una semió- ciones de cientificidad ptopias di
tica en cuanto, pr~eS9) 1 según el toda teoría*, y por ello eS'· defuúda
nivel. de profundidad' textualiza"do"" como un met'!-lenguaje* (a la vez
y·manifestado*. -'Todas estas dis· metasemi6tica científica y_: metase-
tinciones y 1-eo.rganfaaciones, aun miología, en la termin01ogía de
cuando a veces introducer:. alguna· Hjelmslev) ..
confusión en ;e} campO ·semiótico, ·2. En principio, pueden-elaborar-
deben ser consideradas como signos se varías teorías semiótica.<; -al··
de salud y vitalidad de una semió- igual que, por ejemplo, varias gra-
tica que desea ser un proyecto ·de máticas generativas-: sólo su for· ·
investigaci6n ·y una· 'investigaci6n matización* permitirá eventualmen·
en camino de ·realizafse. ·, .. · te compararlas y evaluarlas unas
-+. PSICOSEMIÓTICA, : soc1osEMIÓTICA, con relación a las otras. Semejante
ETNOSEMIÓ'.tICA, LITERAllIA (semiótica empresa comparativa es, en la ac-
. -), TEATRAL (semiótica·-). PU.NARIA tualidad, absolutamente imposible,
· (semiótica -). pues no existe todavía una teorla
e:. Teoría, semiótica•. semiótica digna de ese nonlbre: por
un lado, se encuentran te~)Iías in·
:i: En el. sentido (B).l,; semiótica tuitivas sin .procedimientos Operato-
debía concebirse -como la superpo. rios* (donde se contentan, -a menu·
sici6n adecuada*· ·de .Una semiótica~ do, con •profesiones de fe!>_ peren·
objeto y de un Jenguaj~ de descrlp.. torias) y, por otro." procedimientos
ción; ahora se la pue4J: considerar; a veces formalizados, pero· que no
al mismo · tiempo, CO!IlO el lugar se basan en ninguna t~tíli explí·
371 SEMIOT!CA

cita. Esto nos autoriza a limitar- mo: la distinción entre las relacio-
nos ' aquí a una breve exposición nes - estados (la contradicción, ·por
de lo que consideramos como con· ejemplo) y las relaciones ·opei-acio-
diclones generales de una teoría nes (la· negación, por ejemplo) le
semiótica, al tiempo que nos refe- permite postular los términos· sím-
rimos a nuestro propio, proyecto bolos · y los · términos· operadores,
teórico. abriendo así la vía para un cálculo
3. La teoña semiótica debe pre· de enunciados*. Sólo entonces, la
sentarse; en primer lugar, por lo teoría semiótica podrá ocuparse de
que ella es, es decir, como una la selección -o de la libre elec-
teoría de la slgnlficaclón. Su prime· ción--- de Jos sistemas de represen-
ra preocupación será, pues, exp1ici· tación en Jos que deberá formular
tar -en forma· de una construcción los procedimientós y Jos modelos
conceptual- las condiciones de la (el cuadro* semiótico o el enuncia·
aprehensión y de la producción del do"' elemental, por ejemplo).
sentido. Así, situándose en la tradi· Estas pocas indicaciones están
ción · saussurlana y hjelmsleviana destinadas solamente a dar una idea
(segúri la cual la significación es Ja general de la empresa que nos pa·
creación y/o la aPrehensión de las rece imponerse en el momento de,
"diferencias,,), deberá reunir todos construir una.. teoría semiótica: es
Jos conceptos que, aun siendo ellos evidente que Jos elementos de nues-
mismos indefinibles, son necesarios tro proyecto semiótico se encuen._
para establecer la definición de la tran esparcidos a lo largo de esta
estructura."' elemental de la signifi.· obra.
cación. Esta explicitación concep- A. A estos rasgos generales de
tual la lleva a dar una expresión una teorla semiótica se añaden ne-
formal de los conceptos escogidos: cesariamente otras opciones, más
al considerar a la estructura como específicas, de las que, sin embar·
una red relacional, deberá formular go, dep(:nderá la articulación de su
una axiomática semiótica que se economía global. La primera de
presentará esencialmente. como una ellas es la forma generativa que,
tipología de las relaciones (prcsu· en nuestra opinión, conviene dar a
posición, contradicción, etc,); esta su desarrollo, entendiéndose por
axiomática le permitirá constituirse ello Ja investigación de la definición
un repertorio de definiciones forma- del objeto semiótico concebido se·
les tales como, por ejemplo, la de gún su modo de producción. Es~.
categoría* semántica (unidad mini· empresa -que l1cva de lo más silf" ·
ma) y la de semiótica misma (uni· ple a lo más complejo y de lo más
dad máxima); la de semiótica in· abstracto a lo más concreto- tiene
cluye, a la manera de Hjelmslev, ta ventaja de pernütir introducir,
las definiciones lógicas de sistema en el momento adecuado, cierto nú·
(relación «o... O•) y de proceso (re- mero de logros de la teoría lingüfg..
lación v.y..• )'i>), de contenido Y ex- tica, tales corno las problemáticas
presión, de forma y sustancia; etc. relativas a Ja «lengua:. (Benveniste)
La etapa siguiente consistirá en y · a la (lcompetencia11o (Chomsky),
empla.zar un lenguaje formal rníni· pero también, a la articulaci6n de
· SEMióTICA- SENTIDO 372

las ·estructuras en niveles según sus posición de los mensajes"'; en el


modos de existencia* virtual; actual caso -más particular de -la comuni-
o realizada.·. ·Así, la generación ·se- cación .ling:üistica, · la s~al podrí3.
miótica de un discurso será fepre~ equivaler, por ejemplo, a esas uni-
sentada· en· .forma de· un recorrido dades del plano de la expresióll*
generativo"' que,comprende un buen · que ·son los fonemas"'.
número de niveles Y de· componen~ 2. L. HjelrnsleV llama señales· a
tes;· estas distincio.n."es, . tal· vez,. son las unidades de manifeStación mí·
s6lo provisionales, operatorias; Pero nimas ·de. las semióticaS . manopla·
permiten_ situar· los. diferentes cam- nas* (ya sean científicas .;.por ejem·
pos de ejercicio de- la actividad se- plo,· .el ·álgebra- o no científicas:
miótica relacionados entre. si;··.·· los juegos).
·. 5. -·La segunda.-dé .t!Uestras·oPcio- 3. Para algunos (L.·. Frieto), la
nes . consiste· en introducir -en la señal entra en· la éategoría más ge·
teoría semiótica ·la -:cuestión de la neral de los índices*: la señal se
enunciación*t. el pOher en discurso especificaría, entonces, pcr ser pro-r.
Ja lengua,·(Benveniste) y .Jas .._c.ondi- ducida para servir de índice (no pOi:
cioneS específicas, explicitables ·-de azar} y para . que aquel a quien va
las··que se ocupa, diferentemente, destinad~ la indicación . pueda re:
la pragmática* . nqr~erlcim.a-, conocerla como tal. Entre.los ejein~
que la .rodean. A las estructuras se- plos invocados más a menudo, ci·
mióticas profundas, . situadas cen ternos las S"eñales . de tráfico y las
lengua:. y de laS qUC:. se nutre la marítimas.
<f:COmpetenci~··. nos :Q:e,Jnos visto con· 4. Si se admite, con la; lingüísti·
ducidos a añadir ta,s estructuras ca de inspiración saussuPana, que
menos profundas, discursivas, tal la exclusión del referente* es una
como se· construyen al= pasar por condición previa y 'necesaria para
ese filtro con-Stituldo· por ·18t instan· el ejercicio de toda semiótica, se
cia de la enunciación. - La teoría debe también reconocer que la se-
semiótica debe ser más que una ñal -como el índice-: entra en la
teoría· del enunciado (como es el categoría de los no-signos ..
caso de la gramática generativa) y ~ MENSAJJ?, fNoICB, SIGNÓ•.
más que una· semiótica de 13. enun-
ciación; debC conciliar' lo que a pri~ SENTIDO. Fr. sens, ing. meaning, ..
mera vista parece inconciliable: ·in-· t. Propiedad común a todas las
tegrarlas en · una teoría semiótica semióticas*, el concepto efe 8ettUdo ·
general. ' ·· es indefinible. Intuitiva o ingenua~
· .-+ CIENTIFICIDAD, TEORÍA,· GENERAT!VO mente, son posibles dos accesos al
(recórrido -) , ENUNCIACIÓN, DISCURSO, sentido: puede ser consid'erado ya
SEMfOLOGiA. . sea como io que permite las opera· ·
•;· :···· ciones de paráfrasis* o dé transco-
SE~AL. Fr. signa!, ing. :signa!.· diticación*, ya como Jo qti~ funda:
l. En la teoría de la .informa· ·-menta la actividad humana en C'.lan•.
ción* "se entiende Por señal toda to intencionalidad*. Antes de su
unh.i;;.d que, obedeciehdo · a ·las ·re- manifestación bajo forma de signifi..
glas de un código*, eiitra ·en la cttm· caci6n* articulada~ nada p0drfa de.
373 SENTIDO. SIGNIFICACióN

cirse del sentido, a menos que se SHIFTER. Fr. s11ifter, ing. shifter.
hicieran intervenir presupuestos me- Sblfter es una palabra inglesa in·
tafísicos de graves consecuencias. traducida por R. Jakobson y tradu·
2. L. Hjelmslev propone una de- cida en francés (y español) por era·
finición operatoria* del sentido al brague (N. Ruwet). Un análisis más
identificarlo con la '((materia" pri- detenido de este concepto, en rela#
ma, o con el «soporte,, gracias al ción con la enunciación*, nos ha lle-
cual toda semiótica, en cuanto for- vado a distinguir los dos procedí~
ma*, se: manifiesta. Sentido es, as(, mientos diferentes constituidos por
sinónin10 de <tmateria:o (en inglés, el desembrague y el embrague.
purport abarca !as. dos palabras): ~ DESEMBRAGUE, EMBRACUE.
una Y otra son emPleadas, indife-
rentemente, al hablar de los dos SIGNIFICACION. Francés signifi-
«manifestante$:. del plano de la ex- cation., ing. signification.
presión* y del plano del contenido*.
El término sustancia se utiliza tam- 1. Al ser la significación el con-
bien para designar el sentido en cepto clave alrededor del cual se
cuanto que es asumido por una organiza toda la teoría semiótica,
semiótica; esto permite distinguir, no resulta sorprendente encontrarlo
entonces, la sustancia del contenido instalado en las diferentes posicio-
y la sustancia de la expresión.· nes del campo problemático que Ja
-+ MATERIA, SUSTANCIA, SIGN1FICA· teoría se propone habilitar. Sólo
CIÓN, PARÁFRASIS, INTENCIÓN. · progresivamente, por el emplaza·
miento de las definiciones y de las
SER/ESTAR. FT. €tre, ing. being. denominaciones que lo envuelven,
Fuera de su uso coi'riente, el lexe- el término significación se encuen~
ma francés etre (en español ser¡ tra fuera de sus posiciones irúcia-
estar) se emplea en semiótica por les, pero consen>a sus empleos pa-
lo menos con tres acepciones dife· rasinonímicos en el uso cotidiano.
rentes: a) sirve de cópula en los Vamos a reseñar algunos de ellos.
enunciados de estado* y adjunta así 2. Como todos los· sustantivos de
al sujeto, por predicación*, propie- esta sub-clase (cf. descripción, ope-
dades consideradas como "esencia· ración, etc.), la sigttlficaclón puede
les.. ; en el nivel de representación* designar ya sea el hacer (la signifi-
semántica, tales propiedades son cación como proceso), ya el estado
interpretadas como valores* subjeti- (lo que es significado), revelandO
vos en junción* con el sujeto de así una concepción dinámica O e.>-
estado; b) igualmente, es utilizado tática de la teoría de base. Desde
para denominar la categoría tnodal este punto de· vista, Iá significación
de la veridicción*: ser/parecer; e) puede ser parafraseada como o:pro-
por último, designa el término posi- ducción del sentido" o como «Sen-
tivo del esquema* de la inrnanen· tido producido11,
cia*: aquf está entonces en relación 3. Se obtiene una primera deli-
de contrariedad* con el parecer*. mitación del campo semántico abar~
~ VALOR, TENER, VI!RIDlCTORIAS {mo- cado por «significación" cuando se
dalidades -). la opone a sentido; es decir, al
SIGNIFICAC!óN • SIGNIFÍCADO 374

resérvar ·este último· térrDJnO ·para todas las acepciones hasta aquí pre-
lo que es anterior a la producción sentadas.
se"miótica: se definirá,· así . pues, la 7. A esta definiciQn axiomatiUn-
si·gni.6.cación como el sentido articu- te de la significación, ·es preciso
1a·do*.. Esto quiere decir que ·el tér- añadir otra, de carácter' empírico,
mino signifi~ació~ sé emplea,: a ve· que versa no ya sobre s'u «natura.
·ces, para designar .i<! «materia,,, en leza», ·sino sobre los medios de
~ sentido hjelmslevjano, peÍ'o esta aprehenderla como objeto cognos.
acepción .debería ser excluida'. del cible. Entonces nos dariios CUC'.ntá
metalenguaje ·semiótico•. : '.;·- .... ; · de que la significación Sólo puede
.. 4._ Junto· ·con el ·de· ·sentido,- el ser aprehendida cuando se la ma-
término significado es t'Odavía uti- nipula; cuando el enuncia'dor, al in-
lizado para denominar la sustancia* terrogarse sobre ella en un lenguaje
del contenido*: . dado que éste_ se o en un texto dados, se··.ve condu.·
viene utilizando ya con vistas !l la cido a operar transposiciones,· tra.
significación y. presupone l_a exis- · ducciones* de un texto a oti:o texto,
tencia de la. forma del .. Contenido, de un nivel de lenguaje a otro, de
el usO del término &igni:fiCa~ión más un lenguaje, en fin, a otro lenguaje.
:.que ·incorrecto es superfluó: LO mis- Ese haCer parafrásico* .puede ·ser
. roo ocurre cuando- -el ·término ,sig- considerado como Ja representación
. ni.ficación . se · emplea: como sinóni- de Ja significación ·en ctianto acto
mo del significado*: del. 'signo o del productor que reúne en ''·una sola
plano del contenido. en general. instancia al enunciatario·intárprete
·. 5.· La .. signifiCaci6n · es .. tambiCn (al no ser la significación· una pro-
Utilizada como .~inóipmO · de · sei,nío- ducción ex-nihito) y at·.enunciador-
sis* (o acto de significar) y, enton· productor. En cuanto actividad cog·
ces, Se interpreta como. la.reunión noscitiva programada; la. significa·
·del significante*.' Y ,del ·significado~ cióri se ·encuentra soportada y sos·
(constitutiva .del si~nO*) .·o ·como ·la tenida por Ja intencionalidad*, lo
relación de presupoSición* recípro- que supone otra manera. de para·
ca qtie define el sigrio · cori.Stituido. frasear la significación.
. 6. Una· vez ·dotados _todos· eStos ~ SEl>.'TIOO, CON"TENXDO, ESTRUCTURA.
empleos - de '·etiquetas :. Seinántlcas (e1ementa!·-de la significa'ci<~n).
-partiCulares, reservam6s· el término
significación para lo. que nos' p"are- SIGNIFICADO. Fr.· sig11ifié, ing.
'ce esencial," a.·saber. Ja «difetenciaio sfgnified. ·
(la producción· y aprehenSi6n 1 de.Ias · l. -En la tradición·· saussuriana,
distinciones) {¡ue· define; según Saus- se designa ·con el n9mbre. de signi~
Sure·; la naturaleza µlisnia:· del len· ffcado a uno de los dos planos* del
Jiuaje. Entendida,· así, ·c9mO el· em·- lenguaje (siendo cI otro et del sig~
plazamiento o como la apréhensión nificante*) cuya reunión .{o ·semio·
dt: las relaciones, la Significación se sis*) durante el acto"' de: lenguaje
jnscribe, en cuanto «Sentido artiCu- Constituye los signos*.' portadores.
Iado11, en la ·.di.cotoi;nJ'.a· sen.tido/sig- de significación*. El significante Y
nificaci6n y,.al mismo' tiempo, com- el ·significado se definen Por la re-
Prende; como concepto' general, a .. lación de presuposición* :r:ecíproca: ·
"I" , •••
375 SIGNIFICADO· SIGNIFICANTE

esta acepci6,1, de carácter operato- 1. Se entiende · por significante


rio*, satisface a la semiótica que se uno de los dos términos constitu-
prohibe todo juicio ontológico so· tivos de la categoría de semiosis"'.
bre la naturaleza del 11:significado». donde son necesarias, en el momen-
2. La lectura del Cursa de Lin· to del acto del lenguaje, dos mag-
· güistica General de F. de ·Saussure nitudes* a fin de producir una ma-
ha dado lugar a diversas interpre· nifestación semiótica. Dicha defini-
taciones del signo. Procediendo de ción es formal: sólo la relación de
manera didáctica, el lingüista gine· presuposición* recfproca (o solida-
brino comienza por representar al ridad*) define, respectivamente, los.
signo como constituido por una dos términos en juego -significan-
imagen acústica {=Significante) y te y significado*- cori exclusión de
un concepto (=significado). -Dete· cualquier otro vertimiento semán-
nida en este lugar; lia lectura tiene tico.
por resultado identificar el signo · 2. Históricamente, y segtln como
con el morfema*" y el significado se lea a F. de S_aussure, se entiende
con el lexema*: esto es reducir a por significante· una de las magni·
muy poca cosa la innovación saus· tudes constitutivas del signo* mini·
suriana. La prosecución de la leo-· mo (o morfema*) -correspondien-
tura conduce a una representación te, en la primera aproximación de
del lenguaje totalmente ' distinta, Saussure mismo, a la «imagen acús-
desarrollada metaforizándola con tica-, o un plano* ·del lenguaje
una hoja de papel cuyo anverso considerado en su conjunto y abar-
sería el significante y el reverso, el cando con sus articulaciones* la
significado, los arabescos que se totalidad de los significados. A par-
encuentran trazados en ella aclaran tir de esta segunda concepción del
cómo debe concebirse la forma* significante saussuriano, Hjelroslev
lingüística. Partiendo de esta segun· -al denominarlo plano de la expre-
da formulación (que permite pene- sión*- lo definió como uno de los
trar en el corazón de la teoría saus- dos planos constitutivos de toda ·
suriana, al insistir sobre et caráctet; semiótica (o de todo lenguaje).
indisoluble de la relación entre el · 3. Puede seguirse a Hjelmsiev
significante y el significado y en el cuando muestra que los conceptos
hecho de que. ambos abarcan la to- de significante y de significado son
talidad del texto y no sólo las pa· intercambiables (dada la relación
labras · tomadas aisladamente), L; formal que los constituye). sobre
Hjelmslev ha retomado la dicoto- todo cuando se trata de semióticas ·
mía significante/significado en tér· pluriplanas*. No sucede así en el
minos de planos* del lenguaje: de· caso de las semióticas biplanas (ta-
. nomina plano · de la expresión al les como las lenguas naturales, por
significante y plano del contenido ejemplo) donde al significante se Jo
al significado. siente, con relación al significado, ·
~ C:ONTJ::MIDO, SIGNO, SIGNIFICANTE. como el plano·externo del lenguaje,
como exterior al hombre, · depen·
SIGNIFICANTE. Fr. sigttifiant, in· diente del universo natural y capaz.
glés signifier. de manifestarse por sus cualidades :
. SIGNIFICANTE -SiGNO 376
sCnsibles.· De· eSte ritodo;· ·ya· sea a ta-significante.o en· la medida en que
niVe! de la·· percepción (audición, la lenglla: cotidiana, tOni9-da en. su
lectura, visión) ·O de la emisión por conjunto, podría servir de'·significan-
·el sujeto que construye su enuncia- te a un lluevo plano· d~l significa-
.. do~ el significante se encuentra re- do; no obstante, esto ·:':sólo seJ:in
ferencializado ·y apareée como· un posible,· de ser las lenguas natura.
dato del mundo. ·'únicamente un les verdaderamente denotativas•, sin
análisis ínás detenido del plano de. · desarrollar dentro de ellas segundas
la expresión. llega á mostrar ~qtfe semióticas· (religión,· del-echo, mo.
el significante es también el resul- · · ral, etc:).. ·· ·
tado de una constrÜcción· de· natu· -} SIGN'IFICAOO, EXPRESIÓN, SIGNO.
raleza .semántic·a. · .... ,- .
.,. 4; ·Este '·aspecto «materi2h> ··del SIGNO. Fr. signe, ing•.. sign.
significante no puede d~üar de su· 1. El signo es una unidad* dei
gerlr una clasificación de·Jas-semió· plano de la manífestaci61;1.*, consti-
ticas'* según Ja naturaleza de la ·sus· . tuida por ·la función* semiótica, es
·tancia'* del significante,· es·' decir, dCcir, por. la relación de, presupa:-
según los órdenes s"erisoriales {o''los . sición* ·recíproca (o ·solidaridad*)
canales* de comunicación) de acuer~ · que iie "estaOlece entre las magnitu-
do · cOn los cuales 'son.: clasificadas des* 'del plano de Ja expfesión* (o
las cualidades sensibles del· mundo. significante*) y del Plano del con·
En este sentido, se: habtai-á de se· tenido* (o significado*) durante el
mióticas visuales, .olfativas o tácti· acto de lenguaje.
· les, ·por ejemplo. ··serp.ejante tlasifi· 2. Para F. de S_aussur~,, que ins~
alción no nos informa, sin embar- tauró la problemática def signo Un-
go, sobre ei modo de existencia y gillstlco, éste resulta de la reunión
de organizadQn del signifi.Cante: las del significante y 'del ·significado (a
lenguas naturales, 1~ ··semiótica mu· Jos que identifica, ·en· una _primera
sical y el 1.enguaje de· los ruidos aproxim3.ción, con la imagen acús-
no· quedan ·suficienteme.nte definidos tica y el ·concepto). Aunque luego;
por :·el significante sonoro qUe ·tie- al ·desarrollar su ieoría, · Saussure·
nen.- en :·común; ·su·.·.: eSpecificidad, tuvo que, depurar estas dos nocio-
incluso en ~te so!O · plano, debe nes (sólo' considera ·al significante
buscarse en· otro lugar: en el modo y ·al siinificado en.. cuanto· que sir·
de articulación* de· Ja .forma* del ven de constituyentes par.a la for·
significante. , . · '· , ma* lingüística, como el anverso y
~ 5. El término significan.te lo Uti· el reverso de una hoja de papel),
Jizan IOs no-lingillstas {pÓr lo gene- el término signO ha sido, común-
ral, en los textos. de inspiración psi· mente identificado durante mucho
coanalítica) para.desigriar la «lengua tiempo -e incluso hoy díá~ con el
cotidi~na:ri (d~nici611_. _sum'amente signo mínimo, es decir, )a «pala·
contusa). Com.o tal, es.te empleo no bra11 o, más rigurosamente,'.· el moÍ--
es . hornoJogable con. la · defuüci6n fema* {o monema*, para A. Marti-
semiótica del significarite: a Jo más, net). En este.sentido es utJlizada la
podría. entonées considerar.se al sig· definición.·comodín de la· Ierigua co-
nificruite como. una· especie de .eme· rno «Sistema 9'.e sig1:}0s.11o; .
377 SIGNO

3. La contribución de L. Hjelms· 5. También existe el sentido extra·


lev a la teoría del signo es doble: o para-semiótico de la palabra s:lg:t.o,
a) al pre;entar el signo como ~ que, a veces, se introduce en la lite-
sultado de la semiosis* efectuada ratura semiótica o lingüística. En
en el acto de lenguaje, muestra que este caso, signo designa comWunen-
la dimensión* de las unidades de te <=algo que está aUí para represen-
manifestación no es pertinente para tar otra cosa•. Empleado en semió-
la definición del signo; dicho de tica, denomina entonées una form.a
otro modo, al lado de los signos de expresión cualquiera, encargada·
mínimos que son Jas «palabrasi>, se de traducir una <=idea,. o una <1:Co-
puede hablar tambiéri de los signos- sa,,.: lo que corresponde al concepto
enunciado o de los signos· discur- de formante*. Este empleo presu·
so; pone una concepción particular de
b) al postular para cada uno de la lengua*: se concibe como una
los dos planos del lenguaje -expre- reserva de «etiquetas• destinadas a
sión y contenido- la distinción en- ser adheridas a Jos objetos preexis-
tre forma* y sustancia*, liegó a pre- tentes, como· una pura y simple
cisar la naturaleza del signo como nomenclatura (Hjelmslev). ·
reunión de la forma de' la expre- 6. La lingüística anglo-norteame-
sión y ta forma de[ contenido (así, ricana, o bien se interesó xnuy poco
en el plano de la expresión, la es- por la problemática del signo, mien-
tructura fonológica* y no la foné· . tras estuvo influenciada por el be--
tica es la que entra en la constitu- haviorismo, o bien -bajo la influen-
ción. de los signos). cia del positivismo- procuró intro-
4. El ejercicio del lenguaje pro-- ducir la noción de referente• en la
duce, pues, la manifestación semió- definición deÍ signo, construyendo
tica en forma de· encadenamientos un modelo triangular para su inter-
de signos. El análisis de los signos pretación (Ogden y Richards, des-
(producidos por la articulación de pués de Ch. S. Pierce): sus tres
t'a~. forma de la expresión y la del ángulos están constituidos por a) el
contenido) sólo es posible si, pri- símbolo (el significante, o el <1:repr6-
mero, se disocian los dos planos sentamen• para Pierce). b) la refe-
del lenguaje para, luego, ser estu- rencia (el significado, o el dnter-
diados y descritos separadamente. pretante• de Pierce), y e) el refe-
En otras palabras, si et. análisis de rente (la <1:realidad-. denotada, o el
la manifestación (dirigido a recono-- «Objeto• segltn l'ierce). Como se
cer y a establecer los signos míni- sabe, la lingüística de inspiración
mos) constituye una··condición pre- saussur!ana considera la ~clusión
. via necesaria, la exploración semió- del referente como condición nece-
tica no comienza verdaderamente saria para su ejercicio.
sino de éste lado del signo mínimo, 7. Et problema del refere'nte ahon-
donde las unidades constitutivas ya da más la fosa que sigue separando
no son signos, sino figuras"', y debe a dos concepciones· de la lingüística ·
ser proseguida paI-a cada uno de y, especialmente, de la semiótica.
los planos del lenguaje por sepa· MíentraS; que el análisis ·de los sig~
rado. nos no es para la semiótica euro-
SIGNO • S!MBOLO 378
: pea sino una 'etapa ·a · franquear un es-tB.tuto autónomo) que, en un
. hacia Ia descripción ·de las rédes de cohtexto sociocultural ¡;fado, única·
articulación •·de las formas, la· se. mente puede recibir una· sola inter-
miótica norteamericana (T. Sebeok) pretación y que, de modÓ contrario
tiende a matear Un tope· en ei -nivel al signo, no admite un 3.ftálisis ulte·
· de ios signos y a·. proceder · a su rior en ·figuras* (por ejemplo: 1a
··cJasificacíón:: ésta se basa, en -gran balanza, · simbolo de la justici.l).
parte, en el tipo de ··relación que el Estos símbolos pueden .ser inven·
· signo mantiene ·eón el . referente tariados,:..pero no constituyen, a de·
· (por ejemPlo, el iCono* se· define cir verdad: sistemas de Símbolos.
por Una relad6n- ·4e. semejanza; -el 3.. En un sentido semejante,.Ch.
índice*, por.. una relación de con ti~ S. Pierce define al símbolo como
güidad unat'µral10f la señal*, por una fundado en una conven°ción social,
relación artificial, etC.). · en oposici6n al icono* _(caracteri·
· ·· 8. Otra distribución -de'. los sig· 7.ado por una relac'jón de parecido
'nos, ·de carácter intrínséco,; parece con el referente*) y al Í~dice* (ba·
···ser posible: los especificarla según sado en una relación de contigi.ii·
, su · pertenencia a .,uno u otro tipo dad «natural11). Por su parte, Ogden.
·de semiótica* (m_ondP'Jana, biplana, y Rli::hards hacen una síntesis poco
· pluriplana)J. · ·-· · ' hábil entre la ·concepción saussU-
' ~ SIGNIFICANTE, ~IGNIFICAOO, . i\RTI• riana del signo"' y la definición tra·
Cut.ACIÓN, Ri::PERENTE, SEMIOLOGÚ, SO- dicional del símbolo: en· su modelo
CIOSEMIÓttCA. · :~' '•· ;,.'~1 · ·~.:;.;.,,;r triangular, el símbolo correspond,e
al significante* saussurlano, la refe·
S1MBOLO.' Francés sym~ote,' in· rencia al· significado*, mientras que
· giés · symbot.' · ... · el referente"' denota la «realidad».
.:, L· Para HjelmsJev, el súnbolo es 4. El término símbolo, cuando
·Úna magnitud* 'de la semiótica· mo· no es empleado ni en lingüística· ni
nopiana•. capaz de recibir"una o en semiótica, admite definiciones
· varias interpretaciones*. Por oposi· múltiples y variadas, tales' como .:ilo
·' ción a las semióticas biplanas*, el·· qtie representa otra cosa ·en virtud'
lingüista danés· reserva _así· el nom· de una correspondencia analógica»
bre d.a sistemas de simbo.íos pani las o «ausencia hecha presencia», etc.
.semi6ticas mono-planas; ·En· cuanto En todos estos casos, su naturaleza
Do-signo, el sbnbolo : se difereñda, de signo no queda -en entredicho,·
pues, del signo, magnitud - de las y las -det~rminaciones complemen·
semióticas bi-' o -pltiriplanas'*'. tarias añadidas remiten. · tanto at.
-,. .2. Puede :emplearse la_. expresión carácter piuri·isótopo* del discurso,
.símbolo molecular --(denominado como a los metanismoS todavía
· también Por· Hjelms1ev, al pai-ecer · maI explorados de Ja' corinotación*,
.de manera irripropiá, símbolo lso- etcétera. En semiótica, pl-ovisional-
raorlo) para ·denominar :....en el· sen- mente debe evitarse el -émp!eo de·
tido que f, de SauSsure da a1 sím· este térrriino sincrético y .ambigUo. :
bolo:- una magnitud ...(eventualmen· 5. En metasemiótica*: Científica~
te inscrita en ·un texto .de semió- el Simbolo es un grañsmO conven-
tica biplana, pero'· poseyendo en él cional (que utiliza figuras_ 2-eométri·
379 S!MBOLO-SIMULADA (prueba-)

cas, letras, etc.) que sirve para de· 1. L. Hjelmslev "'considera a la


nominar de manera univoca* una slmpllctdad como uno de Jos tres
clase de magnitudes*, un tipo de criterios -además de la coheren·
relación"" y/o de operación*. La 'no. cia"' Y la exhausiividad*- de la
taclón simbólica debe ser conside- · cientificidad de una teoría*. A partir
rada como un instrumental viSual del postulado de la ·simplicidad, de-
de representación* de las unidades duce en seguida. los otros dos prin~
constitutivas de un metaleng-uaje*.- cipios -de redtic.ción* y de econo·
En sentido restringido, el término mía*- a los que ha de obedecer
símbolo se aplica, en primer lugar, el hacer científico. · ·
a los representantes de las clases 2. En la práctica semiótica, la
de magnitudes: se dice, así, que un aplicación del principio de simpli·
conjunto finito -de sfmbolos (de la ciclad se traduce pOr la o:simplifica·
a a la z, por ejemplo} constituye ción,., es decir, por la qptlmiz:ación
el alfabeto*' (que corresponde, más de los procedimientos sintagmáti·
o ·menos, a la «morfología» tradi- cos, ·que pueden· nianifestarse ·por
cional). La notación algebraica y la reduCción ·del número de opera·
lógica nos ha acostumbrado a em- dones que exige un procedimiento
plear las letras como símbolos de· de análisis, o por la elección de
clases, reservando las figuras (sig- uno ti" otro sistema de repra...senta·
nos de igualdad, de multiplicación, ción* metalingüfstica, etc.
etcétera) para representar relacio- ~ EMPIRISMO, CIENTIFICIDAD, OmMI~

nes y operaciones; estas últimas, a Z.\CIÓN, PROGRAM1\CIÓN ESPACIO: TEMPO-


veces, se denominan sfr:nbolos ope- RAL.
ratorios. - En et caso de las repre·
sentaciones arbóreas*. los símbolos SIMULADA (PRUEBA -). Fran·
no terminales sirven para etiquetar cés épreuve siniulée, ing. simulated
los nudos* de todos los niveles, ex- test. - Cuando ·c1 camuflaje* (que
cepto el último donde los símbolos, consiste en negar, partiendo de ·Jo
llamados terminales, pueden reem- verdadero*. el término parecer, y
plazarse 'por items léxicos aplican- producir así un estado de secreto*)
do las reglas de inserción léxica; va seguido de una performance"',
Las ramificaciones del árbol, por la unidad sintagmática que se cons·
su parte, son asimilables a los sím· tituye de este modo se denomina
bolos operatorios encargados de re~ prueba simulada. Tal es el caso,
presentar· operaciones de concate- por ejemplo, en que et rol del anti·
nación y derivación*. Así pues, la sujeto es asumido por el destina·
definición hjelmsieviana del símbolo dor" o por su delegado (por 'ejem·
en cuanto magnitud de' semiótica plo: el combate del Angel en la
monoptana (en 1) Se acerca a la de Biblia, ilustrado pQr Delacroix, en
las magnitudes de 1a metasemiótica el que Jac.ob se enfrenta a Dios).
cientlfica. La prueba simulada parece afee·
. ~ SIGNO, REPRESENTACIÓN. tar, sobre todo, a la prueba califi·
cante*.
SIMPLICIDAD. Fr. simplicité, in· ~ CAMUFTJ\JE, vr.RlOTCToRJAS {moda-
glés ·simplicity. lidades -). PRUEBA.
SINGRONIA ·SINONIMIA 380
SXNCRONtA;. Fr: .synchronie, ing. semiótica (o liñgiÚstica) que las
· syn.chrony.: · · · reúna. Así, cuandó el su.Jeto de un
· 1.· El término sincronía lo pro- enunciado de hacer* es ·el ·mismo
pUso F. de Saussure, en oPosici6n que el de un enuuciado Oe estado*
a diacronia, para denominar a· la (tal es el caso del programa* narra.
simultaneidad, comO':·cnterio de re- tivo de .la adquisición*,.'por oposi-
unión (pará estudioS sisterJJáticos) ción a la atribución*, dohde Jos do$
de un conj.unto áe hechos ·lingüís- . sujetos corresponden a actores* di-
ticos que constituyen, así, un esta- ferentes), el rol actancia:l que lo·s
do* de lengUa. ·· · retine es el resultado· de un· sincre-
: 2. La sincronía .hS. sido un con- tismo. -:- En la frase «E.va da u:óa
_cepio- operatorio*, en 1a nledida" en manzana a Adán•, el sujeto frásico
· que· ha permitido fundar el concep. ... Eva)I representa el sincretismo de

!
"to de siStema* lingüístico (conce- los actantes* sujeto y ·destinador.
bido como Üna jerarquía* "relacional El sincretismo, así obfénido, está
cuyo funcionamieiito esiá asegurado ·vinculado al emplazamiento de una
por su propia otgirifa:ación interna); unidad · Hitgüfstica (suje~O frásico)
pero si ha sido útil <para reflexionar perteneciente a un nivel :de genera-
sobre el sistema, no permite, en ción* mis superficial que. el de los
·cambio, -analizarlo. Efectivamente, actantes: se trata, _pues, ·4e un sin·
Ja noción de sincronía.:_es tan im- · eretismo <(a postitlorh~. Por el con:
precisa como, por e)emplo, la de tfario, cuando se define,' por ejem-
presente. · Una metáfora inventada plo, la instancia de Ja eliunciación
por el sujeto hablante en el mO. como el . Jugar de una indistinción
mento mismo de hablar, ¿es un original del «YO· aqu1 • ahorai>, la·
fenómeno de' orden sincrónico o enunciación* debe ser cqnsiderada
diacrónico? Un estado · de lengua como un sincre~sm.o ·.a prlorl:m..
-:-Por lo tanto, una sincronía- dura 2. En un sentido más amplio,
varios cientos de años y comprende serán consideradas s!ncrétlc.as las
transformaciones*. internas '(denomi- semióticas* que -como la ópera y
nadas. conversiones* :por L. Hjelms- el cine- emplean vi.rios ··"lenguajes
Jev) numerosas .y variadas. La "lin- de manifestación; asimismo, la co·
güística actual opera con la acronía, municación verbal no es sólo de
pues el concepto de sincronía' ya tipo lingüístico, pues incluye, igual·
no es operatorio.·· l ·mente, elementos paralingüísticos*
. ~ DIACRONÍA, ACRONfÁ. . (como la gestualidad o la proxémi-
ca), sociolingiiísticos, etc..
: SINCRETISMO. Fr. synCrétisme, -7 NEUTRAUZACIÓN, SUSPP..NSIÓN, SE:•
ing. syncretism. ,.· MIÓTJCA, IMPiiCITO. "·":
f' 1. El sincretismo Puede: ser con-
sidera~o como un .procedimiento (o SINONIMIA. Fr. synonymie, ing.
su i-esultado). ·consiSJ_ente en esta- synonymy.
blecer, por superposición, una rela- · l. Se en_tiende, generalnl"ente, por
ción entre dos (o más) términos o sinonimia i:il· relación de identidad*
categorlas heterogéneas, integrá?ido- que pueden .contraer do:S o m:is.
1os con ayuda de Una magniiud*' magnifudes* (llamadas ent:0nces si;
381 SINONIMIA-SINTAGMA
nóulmas) del plano del contenido*. manifestarse en diferentes lexemas.
Esta relación, entre dos lexemas*, Si se encuentra tan sólo. una para.-
por ejemplo, seria verificable por el sinonimia lexemática, se da al me-
test· de sustitución11-: en· este caso, nos· una sinonimia semémlca.
los dos lexemas · sedan sustituibles ~ SEMeMA, LEXEMA, · .PARASINONIMIA.'
en todos los contextos, mostrando
así- que los sernas contextuales* SINTAGMA. Fr. .syntagme, inglés
(que ·entran en la composición de syntagm,
sus sememas*) son idénticos. Ahora 1. Con el nombre de sintagma se
bien, verificaciones numerosas y que designa una combinación"' de ele·
han sid(.o generalizadas hasta probar mentos copresentes en un enuncia·
lo contrario atestiguan, únicamen· do* (frase o discurso), definibles
te, la existencia de una stnonlmla -fuera de la relación del tipo· v.y...
parcial: dos verbos (.;temer• y «re· y.. que permite reconocerlos- por
celar•, por ejemplo) son sustituibles las relaciones de selección*, solidari·
en ciertos contextos, con exclusión dad* o combinación* que mantienen
de otros. A nivel de los lexemas, entre sf y por la relación hipotáctica*
sólo podría hablarse, entonces, de que los une a la unidad superiot"
para.sinonimia*, y esto corrobora, constituida por ellos mismos. Los
además, la afirmación de F. de sintagmas se obtienen mediante Ja
Saussure, segÚn la cual en la len· segmentación*_ de la cadena sintag·
·gua no hay sino diferencias. mática; el establecimiento de las
2. El problema de la sinonimia relaciones entre las partes y las
se plantea de modo diferente a ni- totalidades segmentables tiene por
vel de Jas unidades semánticas resultado transformar esta cadena
constituidas pot" los sememas*: si en una jerarquía* sintagmática. El
se considera que un lexema puede análisis sintagmático Se agota cuan·
tener tantos sememas como recorri- do los elementos últimos,· constitu-
dos contextuales posibles {o sernas tivos de un sintagma, ya no pueden
contextuales diferentes), entonces, segmentarse ni pueden ser conside·
volviendo a nuestro ejemplo, se rados como sintagmas: el análisis
está en el det"echo de sostener q_ue, paradigmático toma entonces el re·
si bien Jos lexemas «temer» y «re- levo de la descripción sintagmá·
celar• no son· ·sinónimos, existe al tica.
menos un semema de «temer» idén- 2. El concepto de sintagma, do·
tico a un semema de «recelan~ (de- tado de una definición puramente
bido a que ambos lexemas son sus- relacional, es aplicable a todos los
tituibles en una clase de contextos). planos del lenguaje y a unidades
Sin dejar de permanecer · fiel al de dimensión variable. Así, la sfla·
principio saussuriano, Ja semántica ba, por ejemplo, es un sintagma del
puede entonces liberarse de las plano de la expresión, en el que el
coerciones impuestas por la diver- núcleo silábico es considerado como
sidad de los formantes* (que recu- el elemento presupuesto en relación
bt"en los lexemas) y prever la cons- con los elementos periféricos pre.
trucción de los sememas como uni· suponientes. Del mismo modo, se
dades del contenido, capaces de hablará de sintagmas nanatlvos,
SINTAGMA - SINTAGMAT!CA 382
constituidos· por varios entmciados• por este hecho, atemporal y aespa-
narrativos que se presuponen entre. cial) que es la sintagmática; Final-
· sí (por ejemplo, la prueba*). No inente, la· relación ey... Y» es Con-
obstante, _el uso. , más · éxtetjdido fundida con la noción de contigiü•
. tiende a limitar el empleo de. este dad «material», cuando· debe ser
término sólo al dominio sintác.tico: interpretada sólo como ·la co - pre-
en: el ámbito del análisis ·distribu· sencia de magrlitudes dt!ntro de un
cional", el sintagma designa·. los enunciado (frase o disc:.urso ); por
constituyentes'* 1.nmediatos de . la su :parte, la contigilidad: {el orden*
frase que son d~n6minados; respec.. de las palabras) corresponde a una
tivamente, sintagma· nominal (SN} de las coerciones reglamentadas que
y sintagma verbal {SV) •. conciernen al plano de la expresión
~ SINTACM~TICA. (de la fonología supras~gmental*),
Es conocido el papel ertiinente que
SINtAGMATICA. Francés syntag- desemPeña el sincretismo de las no-
matique, ing. :syntagmatic. ciones de linealidad y Contigilid3.d
I.,·Ya· que todo ·objeto cognoscl· en el análisis disti-ibuclonal*.
ble puede ser api'ehendido bajo dos 3. Sobre este telón .'·de fondo;
aspectos fu_ndamentales, como sis- constituido· por la red:· relacion"ai
.tema* o· como p~O*, el tét:.mino de ca-presencia (o de Combinacioo
sintagmática · sirve· para designar nes*), se elaboran las· relaciones
el proceso*!. cuaridri· el objeto en sintagmá.ticas más precisas y más
cuestión es de naturitleza semiótica. coercitivas. Así, Hjeltllslev distin-
En oposición· al· eje parad.igmátfco*, gue tres tipos de relaciones posi·.
·definido '· por · relaciones del . tip<) bles: reconoce, además de la com·
,:«o ..• O» que mantienen entre sí· las binación simple, las rela.ciones de
.magnitudes allí ·reconocidas, el· eje selección*. (donde la pr"esencia de
sintagmático se caracteriza -en una un término presupone la: del otro,
.primera .aproxim~c~ón- como. una pero nb a la inversa) y. 'de solida-
: red de relaciones cie'l tipo «y•.• y». ridad* (en que los dos tt!l-minos se
·. · 2·. · Es necesario insistir en la na- presuponen mutuamente). Esta tl.-
turaleza puramente relacional de la pología elemental lleva, Pues, a rC:
sintagmática· a fin de desambiguar conocer y a formular . unidades•
este concepto que es objeto de con· sintagmáticas (o sintagmas} suscep-
fusiones .lamentables. Identificada a tibles de ser definidas po¡:- las rela-
·veces· con ·el habla* saussurlana,. la ciones que mantienen los elementos
sintagmática está considerada como constituyentes entre elle:s mismos.
la realiz.ación* de la lengua, es de- y con la unidad que los cómprende. ·
cir. dotada de· ún modo de existen· La sintagmática aparece,: así pues,
cia*. diferente, más ·«real~ que .la como una jerarquía* relacíonal, dis:
, paradigmática: ciertálnente, ésté. no puesta en niveles* de d~rivación*
.es el ·caso. Por otra :Parte,. la sintag- sucesivos.
mática a . ml!nudo ' es. definida ·~por 4. Como. todo proceso (iue presu· ·
la. linealidad*,, un simple modo de pone la existencia de 1.lP, sistema ·
. manifestación tempoTal o espacial semiótico, no es posible .hablar de
: de la' estructura lógiCo-relacional (y, semióticas puramente Sintagmáti·
383 SINTAGMATICA - SINTAXIS

cas, aun cuando el discurso ~al­ campo de estudios a otros tipos


quiera que éste sea-, al poseer una de lenguas naturales, se reveló la
organización sintagmática, se ins- existencia de tres tipos de clases,
criba en una intertextualidad"' y se susceptibles de ser tomadas como
encuentre, por lo tanto, en eorrela- unidades del cálculo sintáctico: en
ción con otros discursos. La difi- efecto, junto a las clases morfoló-
cultad para establecer, actualmente, gicas existen clases «Sintácticas» ·(o
una tipología• de los discursos, pro- funciones* sintácticas. tales como
viene· de la insuficiencia de nues- sujeto, predicado, epíteto, etc.) y
tros conocimientos; de esta laguna clases «Sintagmáticas» (grupos no-.
no se podría inferir la ausencia de minal y verbal, determinante/deter-
redes paradigmáticas. minado, etc.) .. Desde entonces dos
-> SINTAGMA, PARADIGMÁnCA, UNEA• soluciones se Ofrecían a los teóri·
l.1DAD, EJE, cos: la primera consistía en·un es-
fuerzo de síntesis (llevado a cabo,
SINTAXIS, Fr. synta.xe, ing. syn- esencialmente, por L. Hjelmslev)
tcu:. para tratar de construir unidades
L En lógica, la sintaxis se opone sintácticas, dotadas de determina~
(y complementa) 'a la semántica. ciones capaces de satisfacer las exi-
En semiótica, 'sintaxis y .semántica* gencias planteadas por la existencia
son los dos componentes11 de Ja de los tres tipos de clases; la se-·
gramática* semiótica.·· gunda, en tomar una opción funda·
2. Desde el punto de vista lin- mental al tiempo de constr,uir una
güístico, tradicionalmente la sinta· teoría gramatical, en favor de uno
:ds es considerada como una de las u otro tipo de. unidades de base,
dos partes (Ja otra es Ja morlolo- sin intentar resolver los problemas
gía"') constitutivas de la gramática: planteados por laS otras clases en
en esta perspectiva, la morfología un nivel jerárquicamente inferior:
estudia las unidades que componen así, se encuentran gramáticas (y
Ja frase* y la sintaxis describe sus sintaxis) sintagmáticas (verbigracia,
relaciones y/o establece las reglas la gramática generativa* que ha op..
de su construcción. tado por las clases distribuciona-
3.. Esta concepción de la sintaxjs les""'· sintagmáticas), las gramáticas
se ha visto trastocada por el cues- categoriales (que operan con las
tionamiento del estatuto de la mor- clases morfológicas) elaboradas por
fología* en la economía ·de una lógicos como Ajdukie,vicz, Bar· Hil-
gramática. En las lenguas indo- eu- lel, etc., y. tas gramáticas propia-
ropeas (de las que se ocupó, prin- mente sintácticas {cf. la sintaxis
cipalmente, la lingüística del siglo estructural de Tcsniere y también
pasado). por ser de tipo· flexiona], nuestra sintaxis actancial).
las clases morfológicas {sustantivos, · 4. Et estatuto de una sintaxis
verbos,' adjetivos,· etc.) teniS.n· un no puede ser determinado sino en
lugar primordial .y podían ·ser.· Con-. relación con una semántica con la
sideradas, sin· irtconvenientes; como que constituye uria semiótica (o una
unidades de. base para las · descrip· gramática). Una observación super-
cienes sintácticas. Al ampliarse el ficial permite distinguir, dentro de
. SINTAXIS

una 'misma proposición, las relaci<>- un conjunto de reglas* Jperatorlas,


. nes semánticas de las·· relaciones las unidades de la sintaxis conci::p-
. sintácticas:. así, en.el 'sintagma ·cel tual se .organizan en una taxono-
respaldo· de ·la·. silla>, o:respaldo• mía* (una especie de ·.-morfología
rige sintácticamente. a v:silla»,· D:tlen. elemental), donde se··efectúan las
·tras. que semánticamente·,sucede a operaciones sintácticas. ·La sintaxis
la inversa. Dicho de Otro modo, las. semiótica que nosotros pi-oponemos
, relaciones· sintácticas (hipotácticas) es actancial (por lo tanto, sintác~
se establecen eritre·. .las· clases' sin· tica, en sentido estricto) .y, a la vez.
. tácticas, independientemente de sus conceptual. ,
vertimientos semánticos : y constitu· S. La · sintaxis, tanto 13 tradicio.
·yen así •una organización (una es· nal como la más recien~e (con su:;
tructura sintáctica) ·autónoma.··- prolongaciones generatiVa y trans-·
Otro problema se plantea ·entonces: formacional), es esencialmente una
saber si· las reJacioneS sintácticas sintaXis de la frase: estudia únic~­
son. de naturaleza $ernántica (si·son mente las combinaciones, ·1as sus-
significantes)'º" Si están despr'ovis· tituciones.. y las equivale"ncias situa.
tas·- de sentido. Aquí·se·oponen· dos das dentro· de es.ta unidad sintag:
actitudes. Las shl,taxls · formali?S se mática . de dimenslones ·limitadas~
·.elaboran· sirl ·ninguna .referencia .. a Sin . embargo, las investigaciones
la significación:· los: símbolos* a, b, sobre la· narrativa* han ·mostrado
. e ·de un ·lenguaje formal* se <listín· no sólo la existencia de organiza·
guen unos de otros ·sólo de manera .ciones sintagmáticás más vastás;
discriminatoria,. y su carácter. dis· trartsfrásicas, sino también su uni·
. creto* se basa en un «Sentido nega· versalidad: estas organi~ciones se
tivoi> (a:no .es ·b). Al igual que la revelan características del conjunto
oiganización \ de· los· fonemas*:· de de las comunidadeS ·etnolingilísticas.
una lengua natural, tina sintaxis for· P_or ·otra· parte, la gramática -trans-
mal puede ·Ser considerada -guar· formacional ha sostenido·· claramen-
dando las ,·respecti'vas ··distancias- te -pero sin sacar todas las con.·
dependiente de' la forma "de ·la :ex;.' secuencias- que a una. frase de
·presión (en· sentido hjelmsleviano). superficie, por ejemplo, :pueden e~
Las sintaxis · conceptuales, por el rresponderle dos o · máS frases a
contrario, reconocen que . las rela· nivel profundo; esto significa que
·ciones sintácticas son significantes las dim~nsiones de la frase no cons·
(esto es, dependientes de ·la forma tituyen límites infranqueables en la.
·del contenido), incluso si son abs· exploración de las organi1.aciones ·
tractas y asimilables a las relacio- sintagmáticas. Finalmente:, la apro-
nes lógicas.- Para··la teorla sexnió-··. xhnación generativa perm'.ite canee·
tica, ·se trata· aqtú ·de ·uná opción bir la sintaxis como una arquitec-
fundamental: mientias que las ºuni· tura de varios pisos, donde cada
dades. símbolos·- de· Una sintaxis:for· uno puede estar dotado de una for~
nial constituyen un· alfabeto*¡ (es mutación s.intáctica ·proPia, de re·
decir,· un inventariO cualquiera, de- glas de conversión* (form.'a particu·
nominado a ·menudo impropiamen· lar de homologación*) que permiten
te •estructura»),' regi~o luego por pasar de un piso a otro. :.Todo ello
385 SINTAXIS - SINTAXIS FUNDAMENTAL

constituye las condiciones · favora. -gracias a los mecanismos de des·


bles para las investigaciones -múl· embrague* y embrague*- en la
tiples y variadas- dirigidas a ela· constitución de llllidades* cliscursi·
borar una sintaxis no ya · frásica, vas cuya tipología y relaciones mu·
Sino discursiva.. tuas deberán ser objeto de inves·
6. El estado de progreso de las tigaciones más profundas. Hemos
investigaciones en semiótica -a:Oá. distinguido tres sub ·componentes
lisis particillares y reflexiones teóri~ en la discursivización: . la actoriali·
tas- nos permite co::icebir a la zación*, la temporalización* y la
gramática semiótica como un pro- espacialización*; en cuanto procedi·
yecto en vias de realización; inclu· mientos, penn.iten inscribir las es·
so si sus diferénteS componentes tructuras narrativas (de naturaleza
están desigualmente desarrollados, lógica) en las coordenadas espacio--
la economía de conjunto y los con· temporales y verter los actantes en
tornos de dicha teoría son bastan· los actores discursivos. Esta articu·
·te precisos. Así, se distinguen en !ación de Ja ·sintaxis discursiva
eua un componente sintáctico y un -aun cuando es sólo provisional-
componente semántico*, cada uno tiene la ventaja de prever el ero·
de ellos formulable en dos niveles plaza.miento de las problemáticas y
·de profundidad. La sintaxis semio- de. las investigaciones a efectuar;
nanativa comprende, entonces, un así, por ejemplo, puede aprovechar·
nivel profundo -el de la sintaxis se la experiencia (y, tal vez, ciertos
fundamental- y un nivel de super· logros) de quienes construyen las
·ficie donde su ubica la sintaxis lógicas temporales para formular,
.narra~iva (en sentido estricto). de manera más precisa, el compo-
~ MOF.FOLOG!A, :FUNCIÓN, GRAMÁTICA, nente temporal de esta sintaxis f,y
GENER.o\TIVO (recorrido -), SINTAXIS evitar, de este modo, el desean·
FUNDAMENTAL, SINTÁXIS NARRATIVA PE cierto de los invesligadores que ven
SUPERFICIE, SINTAXIS DISCURSIVA, SIN• utilizar a tontas .y a locas las cate-
TAXIS TEXTUAL. gorías temporales); asimismo, el
sub-componente espacial constituye#
SINTAXIS DISCURSIVA. Francés ciertamente, un lugar de encuentro ·
syntaxe · discursive, ing. discourse para diferentes aproximaciones re·
syntax. - Debido a que la slnta::ds lativas a la espacialidad, dispersas
dlscurslva está actualmente en vías en el conjunto del campo semiótico·
de elaboración, es imposible fijar (por ejemplo, lenguajes espaciales,
de manera definitiva el estatuto de proxémica, gestua1idad, semiótica
las unidades y de . las operaciories del espacio, etc.) .
que ella comprende. Así, hemos pre· .....)- DISCURSIVIZACIÓN, GEN'ERAUVO (re·
ferido proponer los lineamientos corrido-).
generales en forma de procedimien·
tos empleados, a nivel de la instan· SINTAXIS FUNDAMENTAL. Fran·
cía de la enunciación*, en el· mo- cés synta.x.e fondamentat, ing. fUn·
mento de la producción del discur· damental synta.x. ·
so; ~tos procedimientos que lla· 1. La sintaxis fundamental cons1
roamos discurslvb:aclón, culminan tituye, con 1a semántica* fundamen·
SEMIÓTICA •.- 25
SINTAXIS. FUNDAMENTAL· S:NTAXIS NARRATIVA .386
tal, el nive} profundo de J~· ~á­ 4. Las operaciones slntáctlc3.s
tica* semiótica y ·narrativa. Se la fundamentales, llamad~s transfor.
considera capa+ de deScribir. la pro- maciones*, son de dos tipos: la
ducción, · el · funcidnamiento · y· Ja negación* y la aseición~. Si la ne-
aprehensión· de la.S organizaciones gación sirve, esencialniente, para.
si.ri.tagmátiCas · {llaj:nadas discursos) producir los térnünos j::ontradictcr
que dependen. de las. semióticas tan· rlos*, la áserci6n reúne lOs términos
to lingüísticas como no lingillsticas. situados en los ejes de·. los contra.
·Representa,· pues, la ·instancia·. ab rios* y de Ios subcOntnirios*. Mien·
quo · del recorrido. generativo* de ·tras que el modelo taxonómico --én
esos' discursos. cuanto esquema relaciOnal preexis~
2:· Esta ·sintaxis comprende .un tente- permite circunsciibir el cam..
sub-componente taxonómico* (que po de ejercicio de las :operaciones
coriesponde al alfabeto• ·de las len· (de producción y/o de aPrehensióu
guas formales*)· y un 'sub·compo- del sentido), éstas .se Constituyen
nente operatorio (o sintáctico, en en series no sólo en el ·sentido de .
sentido: estricto}.. Estos ·dos aspec- su orientación*. sino también pór
tos .de una .sinta:xiS dirigida· a des- su capacidad «memorístk:a» (la de.
cribir el modo de .existencia y, a la negación*, por ejemplo,' ·no es una
vez, el modo de funcionamiento de simple negación, sino 12 negaclóD
la .significación pueden . ilustrarse de una· aserción anterior): es éste
con· un·· ejemplo ülgenuo: el térmi- un rasgo esencial que distingue Ja
no «Contradicciónz · .designa, al· mis- sintaxis semiótica de ·la sintaxis
mo_ tiempo, una relación entre "dos lógica.
términos y la negaCi6n de un· tér.. · 5. La: sintaxis funda.mental. así
mino. que prov0ta ia aparición del concebida, es puramente. relacional,
otro. ·· a la· vez que conceptual y lógica~
3. El modelo· taxonómico corres· los símbolos ~ térniino de su taxo--
ponde a las condiciones epistemo- nomía se definen como interseccio--
lógicas necesarias para reconocer la nes de·relaciones; a su vez, las ope~
estnlCtura* e1emerita1 ·de Ja signi. raciones son actos* que ·estableceii
.ficacióri; res. al tieinpo, formulado relaciones,.. En consecuencia, ]a sin·
en términos de lógica cualitativa taxis fundamental es 16gicamente
(o lógica de la· cóillprensión*) y re- anterior a la sintaxis* narrativa de
. ·ci~ ·SU rePresentatj6n* en forma superficie, formulada en términos
. de cuadro semiótico. (otros modos de enunciados* que comprenden ac"..
·de representación. son tambié'.ú: pa. · tantes* y funciones*. ·
sibles); el modelo taxonómico cons-
" -)o CUAiiRO SEMIÓTICO, ASER.cr6N, NE~
tituye, así, Una especie de··espado . GACIÓN, SINTAXIS NARRATIVA DE SUPER·
· organizado: cómprende términos in-
FICI~... GENERATIVO (recorrido -).
terdefinldos en los· que se podnin
·efectuar las operac;iones sintácticas
· que· originan o combinaciones tá:d· SINTAXIS NARRÁnV,\ DE SU·
cas · nuevas ·(térm.fuos derivados y PERFICIE. Fr. synta:ce narrative de
·complejos) ·o series ·sintácticas or· surface, ing. surface narrative syr.:·
·dena.das. .,.., ..-..· tax.
387 SINTAXIS NARRATIVA

1. La sintaxis narrativa de super· dentes y dejamos a los niveles sin-


flcle (o sintaxis narrativa, propia- tácticos más superficiales -tales
mente dicha) es una instancia del como los de discursivización* y tex-
racorrido generativo*, obtenida, con tualización*- el cuidado de prevex;
ayuda de un conjunto de procedi- la integración de las clases morfo-
mientos (formulables en reglas), a lógicas y sintagmáticas.
partir de la sintaxis* fundamental. 4, La segunda opción no es me·
El problema para construir este nos decisiva: se trata de concebir
nivel es doble: se debe prever cuál la estructura sintáctica más simple, 'JI.·
será la forma general de esta ins· para definir así la forma que se f.""
tancia y, a la vez, tener en cuenta darli al enunciado* elemental. Con-
su homologación Con la Sintaxis· trp.rlamente a la tradición que -dcS-·
fundamental, la única que permiti- de Aristóteles- postula la bh)a·
rá explicitar las reglas de conver- ridad* de la estr.Jctura elemental
sión* de la una a· la otra. (sujeto/predicado, sintagmas nomi-
2. Cóntrariamente a la sintaxis nal/verbal), nuestra concepción del
fundamental, que trata de un con- enunciado es relacional: asumiendo
junto de operaciones efectuadas en la herencia hjelrnsleví3.na -pero re-
los términos; la sintaxis de super· firiéndonos· también a TesniCre y a
ficie toma la forma general de una Reichenbach, entre ·otros-, consi-
manipulación de enunciados*. Re- deramos al enunciado como una ex-
curriendo a una imagen analógica pansión relacional del predicado*:
-sólo parcialmente justa-; se po- en cuanto función*, éste proyecta
dría decir que el paso del nivel como términos-resultado de la rela-
sintáctico profundo al de superficie ción, los «funtivos> que designamos
corresponde, grosso modo, al paso como actantes*". El enunciado na·
de la lógica de clases a la lógica de rrativo elemental se definirá, pues.
proposiciones. ' para nosotros, como una relación-
3. ·Construir un modelo sintácti- función' ·entre, al menos, dos ac-
co implica cierto número de opcio- tantes.
nes teóricas (epistemológicas Y me-. S. Esta concepción del enunciado
todológicas) "de las que depende, en elemental permite, entonces, formu-
definitiva, la forma que le será lar el principio en el que se basan
dada. La primera de estas opciones los procedimientos de conversión
reside en la elección de Jas·unidades de la sintaxis fundamental a la sin·
que manipulará la ·sintaxis: míen· taxis narrativa: a las relaciones
tras que las gramáticas categoriales (que constituyen la base taxonómi·
eligen las clases* morfológicas, las ca de ·la estructura sintáctica pro·
gramáticas transformacionales eli- funda) y a las operaciones - trans-
gen las clases sintagmáticas (por lo formaciones (efectuadas sobre esta
demás, prestadas al análisis distri· base) corresponden, a nivel más
bucional); n9sotros hemos optado superficial, los «estados> y los «ha·
por las clases sintácticas (tradicio- cer10, formulados en enunciados de:
nalmente llama.das funciones* sin- estado* y enunciados de hacer•;
. tácticas): las consideramos jerár· los enunciados de hacer rigen a los
quicamente superiores a las prece- enunciados de estado, así como las
SINTAXIS NARRATIVA 388
transformaciones operan sobre las tativos...;. tomará entonces el nom.
relaciones~·· i..• ·' :,t·•· bre de recorrido narrativo* del su-
6. ·La ·estructura, ..constituida por jeto. · ·.. .-
·un ·éÍ:J.unciado '. de hacer · <:i.tle · rige 8. El reconocimiento· de la es.
a un enunciado de-. e.stado, se deno- tructura ·polarizada ·-polémica o
mina programa* narrativo. (abrevia- contractual- del discurso narrativo
do PN): · será. cons"iderada como impone ··a Ja sintaxis narrativa la
unidad elemental* operatoria~·:·. dC necesidad de tener en CUeo._ta y de
-Ja sintaxis*· narrativa. El PN puede · describir la presencia y las relacio-
interpretarse como :un. o:hacet-ser:i> ne;s mutuas de, al menos,. dos suje.
del ·sujeto, ·comO la llamada a la tos con sus propios programas y
existencia senúótica de · un nuevo recorridos narrativos. Esta sintaxis
. «estado de cosas.», como generación aparece como una sintaxis de la
(aprehensible · tanto a· nivel de la comun.lcaci6n-1t entre ·:sujetos (o ~
producción como en el. de la lectu- mo una Sintaxis de transferencia
ra) ·ae un :nuevo o:ser semiótico»;'"" de objetos, donde las adquisicioneS
La distinción que sé establecerá; en pragmáticas, cognoscitivas o modá~
seguida, entre el hacer* pragmático les de uno de los sujeios pueden
y el hacer cognoscitivo, perrajtirá ser consideradas como otras tantas
desdoblar los PN y situarlos l:ien péro.idas para el antl-suJéto). ·
dimensión pragmática ·o en la di- 9. Evidentemente, aquéllas son
mensión cognoscitiva de la narra- sólo formas elementales de la sin~
tividad .. taxis narrativa, tal comó; la canee.
7. Los programas· narrativos, que bimos nosotros eil el. estado actual
pueden ser simples· o·· complejos de desarrollo de las investigaciones
(cuando incluyen, eventualnlente, un semióticas. Aunque todavía mal co·
número inde.6.."lido .de · PN· de uso,
0
nocidas, las fonnas de organización
denominándose entonces PN de narrativa del discurso 'son, por
base), se encuentran. compleji.zados cierto, más complejas, Naturalmen·
aI reconocer los enun.clados modales te, la sintaxis narrativa dCPerá des·
que ··rigen a los enúD.ciados de ha· arrollar las bases teóric"a'S de una
·cer. · Si el programa·.. narrátivo; · en estrategia* de los problemas y re·
Cuanto «hacér-ser=- del sujeto. debe cOttidos narrativos; ello.: ·permitirá
ser .. considerado ·como·. su perfor- manipular las «masas narrativas~.
mance*, Ias modalidades ·.:....como las de dimensiones más extensas y de
"de querer .. hacer o poder~ hac"er- mayor complejidad. El objetivo por
aparecen · corno condiciones necesa· ale.amar parece consistir ·:--euriosa·
rlas para realizar esta performance mente-· en cubrir, ·con ayuda de.
y· constituyen, así, lo· que Se· puede una tipología de programas estra.
denominar competencia* modal del tégicos, la cüstancia. que .Separa .las
·sujeto. De ahí· que tOdo ·PN de· ha• formas ··elementales Ya reconocidas
cer presuponga Ió_iicamente uri. PN del esquema narrativo* (elaborado
modal, así como ·qúe toda" perfoz-. -Por generalizaciones sUceslvas-
maneé presuponga la competencia. como una especie de carien, a par.
Este _programa: ampliado ·: -capaz tir de los descubrimientos· de V~­
de integrar otros elementos· facuI· Propp ). "
389 SINTAXIS NARRATIVA-SISTEMA

¡ 10. Hemos insistido hace poco en le es atribuido (reunión denomina·


f!l. carácter antropomorfo* · de la da semiosis"), el discurso debe so-
sintaxis narrativa que la distingue meterse a las coerciones impuestas
de la sintaxis · fundamental, lógica por la naturale7.a -espacial o tem·
y abstracta. En efecto, que se con- poral- del significante empleado.
sidere Ja concepción del enunciado Entre los procedimientos que de-·
elemental (formulación sintáctica de penden de esas coerciones, mencio·
la relación fundamental del hombre- nemos la linealización*, la segmen·
objeto) o la de los programas na· tación* (constitutiva de las unida·
rrativos que se interpretan como des"' textuales, como son los pará-
transformaciones de las cosas por grafos, las frases), la anaforización*,
el hombre (quien, a su vez, resulta etcétera,
transformado), o que se piense en ~ TEXTUALIZACIÓN, GENERATIVO (re·
la dimensión comunicativa* de Ja corrido -).
narrativa (correspondiente al con·
cepto general de intercambio inter· StNTESIS. Fr. sy11these, ing. Syn.
subjetivo), todo parece mostrar que, thesis. - En oposición al análisis
genéticamente, la .sintaxis narrativa que parte del objeto semiótico a
de superficie es la fuente originaria describlr, considerándolo como un.
de todo proceso semiótico. Mante· todo de significación*, se entiende·
ner estrictamente el principio ge- por síntesis -en la tradición hjelmS·'
nerativo, en oposición a la concep· leviana- los procedimientos que,
ción genética, nos obliga a conside- primero, lo consideran como parte
rar esta instancia como más super· constitutiva de una unidad jerár·
ficial con relación a la sintaxis quicamente* superior o como indi-
fundamental. viduo pertene:ciente a una clase*, y
~ ENUNCIADO, ACTANTE, FUNCIÓN, l'RO- luego buscan -de manera recurren·
GRAMA NARRATIVO, PERFORMANCE, C'OM· te- alcanzar progresivamente la ·
1'EIE:NCI!i, NARRATIVO (recorrido -), totalidad del conjunto donde él se
NARRATIVO (esquema -), SINTAXIS inscribe. Así, los procedimientos que
:FUNDAMENTAL, GENERATIVO (recorrido plantean, de entrada,· Jos elementos
-). discretos* para obtener en seguida
sus combinaciones~ o sus expresio-
SlNTA:X:IS TEXTUAL. Fr. syntaxe nes"', son llamados sintéticos (o, a
textuelle, ing. textual synta.x. -Bajo veces, ascendentes), por oposición
el nombre de sintaxis textual se a los procedimientos analíticos {o
reúne el conjunto de procedimien- descendentes}.
tos de tex.tualtzácl6n del discurso -+. ANÁLISIS,
tal con:io ésta puede intexvenir en
todo instante del recorrido genera· SISTEMA: Fr . .systeme, ing. sys-
.tivo* (nivel profundo o de .super- tem.
ficie, discurso no figurativo o· figu· t. El sistema es uno de los ·dos
riitivo, etc.): Como I::i. textuatir.ación modos de existencia (complementa·
consiste en reunir el discurso (si- río at de proceso*) de los universos
tuado en el plano del contenido*) estructurados o estructurables. L.
con el plano de la expresión* que Hjdmslev da a este concepto un

1
SISTEMA- SOCIOLEéTO · 390

itcance universal:. st.Ípe~: :ho sola- sacar todas las consecui?ncias, a


mente el ámbito de la ·lingüística, veces implícitas, de. esta· reflexión.
sino también- el· de. ·ta· semiótica: 3. Coinó la lengua en Cuanto sis-
aSimismo,· designa bajo· el·_ nombre tema constituye un conjunto estra-
de paradigmática* ai"Sistema semió- tificado, -es decir, comprende dos ·
tico . .. : · ~ . · !·· planos• (expresión* y contenido*)
· 2. A F. de Saussui'.-e." el término. y cada un(r.. de ellos ·hace' aparecer,
sistema le p~ite. d~finir ·el con- a su vez, ·niveles ·de afticulación*
cepto de· leuguá.* (,;,,, «sistema: de (nivel i:le los fonemas* y 'de los fe-
signos'll) en 1!3- ·medida en que, tra- mas*, de Jos sememas"' Y de· Jos
dicionaimehte, · aquél desiina ·Un to- sernas*), se pueden reconQcer sub-
do coherente cuyos elementos ··de· sistemas relativamente al!tónornos
penderi unos de otros. Saussure ha qtie se denominarán sistémas fo·
enriquecido el concepto de lengua· nológico y fémico, sem~mico y
sistema, al considerarlo, ante todo, sémico. 'Así pues, la definición ini·
como un ·conjunto de· campos aso· cial de Saussure, relativa .. a la len·
ciativos (refortnulados actualmente gua como sistema de signos, ·no
en ·términos ,de pa"rádigma*) cuyos concierne al estrato más::· aparen·
térmirios mii.ntienen '..entre sí· «rela- te, esto és, al de los sign9S · morfe·.
ciones asociativas"O; és'f.as pallen ·en .... mas*.·
evidencia las semejanzas· que "1óS'
unen y las diferenéias· que los oPo· SOCIOLECTO. Fr. soci<?~ecte, in·
nen. Cada término de un paradig~ glés socio!e.cte.
ma se "define; pues, negativamente 1. Por oposición, tanto ?J idiolec--
por todo ·.10 que él no es, y se to* (que ·designa las aCtividades
opone así al conjunto de los otros semióticas de un actor individual}
términos; en cambio, et soporte 'de como al dialecto*· (que alude a la
las semejanzas -lo. que reúne todos ... diferehcia -debida a una· reParti·
los términos de un -pál'adigma-: es ción geográfica de .tos ·grupos hu·
apenas un rasgo diferencial con. el manos- de esas mismas 'activida·
cual ·el paradigma en su conjunto des, consideradas desde ·el punto
se· opone· a otro paradjglna. El con· de vista social), el soclolecto carac·
cepto · de sistema quei:la asi depu· teriza al hac.er semiótico en sus re·
rado: la lengua deja "de ser un con· laciones con la estratificación social.
junto de elementos interdependien- Si se considera a las organizaciones
te's para converti:tse en un sistema de una sociedad dada co'mo fenó·
de relaciones (diferenéiales y ·opo- menos extra-semióticos, las· configu.
sitivas). De paso, se ve que' hay dos raciones semióticas -que tes corres·
lecturas posibles de. ·saussure: . Ja panden- constitu:ien Ja f.i± signifi·
primera consiste en registrar y· or· cativa de estas org·anizaciones: di·
ganizar · los concepto~· que sirven cen aquéllo por lo que la ,spciedad,
de punt_o· de partida a su reflexión las clases,· las capas .o gruPos socia·
(por ejemplo, «!á lengua es l.tn ·sis· tes se distinguen unos· de qtros. Lo"s
tema de signos»;' el slgnifi6ante y sociolectos son, así, especies de sub·
el significado son las dos caras de lenguajes reconocidos por lns varia-
uha palabra-si.grio).; ·la segunda, en ciones semióticas que los. oponen
391 SOCIOLECTÓ - SOCIOSE.Mló'J:JCA

unos a otros (es su plano de expre- a sus toletodol.ogías, ha dado lugar a


sión*) y por las connotaciones* so..· jnve:1tig.aciones que se pueden agru-
ciales que los acompañan (es su par sumariamente bajo dos aspec-
p1ano del contenido*); se· constitu- tos principales: a) las investigacio-
yen en taxonomías"' sociales subya- nes refeddas a. las covariaciones de
centes ·a los discursos sociales. El las estructuras lingüísticas y de las
~studio dé los sociolectos depende estructuras sociales, y b) las que
de una disciplina particular, la so- conciernen a la contextura social de
ciosemiÓtica*. la comunicación ling.iiistica.
2. -Las variaciones sociolectales · '' i. El estt!dio de las covariacio-
pueden ser reconocidas tanto en el nes, irreproch:lble en sí mismo, no
nivel d.;: la superficie léxica (cf. las deja de plantear prob!.emas Cuando
nomen<.".laturas*, las terminologías*, se examina más de cct-ca la n.atura-
etcétert~) como en ·el de las orga- leza de las :variables seleccionadas.
nizacio!les discursivas {la escritura* Mientras se ponga. en relación las
es asin1ilable a un hecho sociolec- clases sociales tradicionales (atisto-
tal, en oposición al estilo'll', de orc;lcn cracia, bur&t:.esía, pueblo) por un
idiolec1al). A. nivel de las estructu- la4o y,. por el otro, los registros*
ras~ semánticas profundas*, el uni· de la lengua, la correlación es ge-
verso s,cx:iolectal se caracteriza por neralmente at;eptada ;.::amo utla evi-
. el modo particular de emplear la dencia. Pero· loi critefios utilizados
categori"a. natura/ cultura (dotando para establecer la C'.Stratificación. so-
al uiUverso* semánti~.O colectivo* cial de nuestras sociedades· indus-
con vertimientos hipotácticos espe- tr_iales (tales como los 11modos de
cíficoS) .Y. a la vez, por la articula- vida»: ·comporta1nientos vestimenta·
ción d!! la categorías vida/ muerte, · rios, culinarlcs, habitacionales, etc.)
que le permite interpretar a su mll· parecen depender -para el semió--
nera ei universo semántico indivi- tico- . de prácticas* significantes
dual*: aquí se trata, en defmitiva, pertenecientes. a lo c¡ue él considera
de describir Ja actitud que una ca- como el vasto dominio de las se-
munidad sociocultural adopta con niióticas llamadas no lingüísticas'"':
respecto a las interrogantes funda- su puesta ca corielaclón con las
mentales que le son planteadas. prácticas lingüf~ticas es entonces,
-+ UNIVERSO SEMÁNTICO, SOCIOSEM.IÓ- para el semiótico, cuestión de in·
TlCA, JDIOLECTO, PSICOSEMlÓTICA. tertextualidi:l.d"" semiótica y no de
interd;sciplinaridad sociolingillstica.
SOCIOSEMióTICA. Fr. sociosé- Por otro Jad·u, las estructuras lin-
miotique, ing. socio-semiotics. güísticas que: constituyen la segun-
l. En . el dominio que abarcarla da variable Ge la correlación, no
eventualmente el término sociose- tienen nada que pe.\"'mita conside-
mlótica, sólo la soclolingüistlca pue· rarlas ·como «estructuras•: Jas mar-
de pretender el estatuto de disci- cas, gracias a las cuales se reco··
plina inás o menos institucionaliza- nace el habla de los white collars
da. La. tentativa de acercar dos o el dialecto neoyorkino, son dispa-
disciplinas -la sociología y la lin- ratadas, pues dependen de todos
güístit:a-, hcierogéneas en cuanto los planos y niveles dtd lenguaje;
SOC!OSEMlóTICA 392

·al · no · ser estructurables, -son en se inscriben los problemas': lingilis-


realidad índices dispersos que alu· ticos en un marco semiótiCo más
den ·a otra cosa que a la lengua general. ,..
considerada: a un Ienguaje.·de con· 4. La semiótica (obtigadii. -para
notación* -.social. ., :.:'... ·. · ·-nses:urar: sus primeros pasos- a
3. Observaciones análogas· pueden postular la existencia de un univer·
formularse al poner en relación e: so* semántico, considerado·· Como Ja
contexto social y la comunicación totalidad de las significacioiles pre-
lingüística. La .semiótfca no puéde cedentes a todo análisis} ·se intro-
satisfacerse con el concepto de co- duce inmediatamente en lq:. «Socio·
municación"' elaborado, en el marco lógico» al distinguir -ai::bitraria*
.de Ja· teoría de la ;ntprmación; aquí mente- el universo cotectlvo* del
las -dos instancias de· la· emisión y universo · individual*: ál proponer
de Ia -recepción seríat;i. 'consideradas · iuego, a título de hipótesis; las ca·
como · autómatas*. e~cargados de tegorías* elemental.es de Cultura/
transmitir- informaclO:ne$ neutras. natura y· de vida / muerte -::-ea.paces
La comunicación :Pone._ en .juego . de articular, en un ·primei\'.acerca-
Sincretismos* semiótic'.Os · complejos miento, esos dos universos~. la se-
donde· las actitudes Somáticas, 'la miótica puede tratar. de definir el
gestualidad, la protj.til{dad espacial, soclolecto,,. como la manera especí-
desempeñan un ro1 ·:. 'considerable. fica, propia ·de cada sociedad, de
Sus participantes no S0h autómatas, interpretar y asumir tantó él uni·
sino' sujetos ci:lmpoµ°entes"': las pre- verso colectivo como el ~fniverso
suposiciones y las .\triplicaciones 16"- individual (es decir, de ex¡)licitarse·
gicas que·se :Pueden oQtener al ana- lo que ella misma entiende :por cul-
lizar los mensajes intercambiados, tura y natura, por vida y muerte).
nos los muestran dotados de saber· Por lo visto. esta conceptua}ización
hacer múltiples y en· .posesión de apdorística está destinada'.' a dar
numerosos códigos· CÚlturales. De una representación de la 2ultura*
ahí que nos podamos', :preguntar si identificada con la .·«sociedad en
las infOnnaciones -~nsµficleiltes; sin cuanto significación» y a eXplicar,
duda; pero seguras-:- q1,te nos ofrece al mismo tiempo, una posible tipo-
el análisis del eÍ:tuni;:i.á.do, nO ·nos logía · de las culturas y del retati·
aclaran mejo?- la natúraleza de la \lismo cultural ambiente.
enunciación*. cque los·- parámetros S. La universalidad de la:.cultura
soclológicós, Obtenidos un poco al y las especificidades cultura1és cons·
azar y·en número indéfinido, como titu'yen uno de los objetivOS de Ja
sacados det sombrero de un ·presti· teoría semiótica, que trata de alean·
digitador.- En uno y otro caso -se · zarlos y analizarlos a travéS· de Ia
tiate de las correlaciones estructu- diversidad de las semiótic3.s con~
rales o· del estatuto de Ja ·comuni- temptabtes como axiologías*.·O como
cación- la Coherencia metodológica ideologías* y definibLes como;· mode-
nos parece preferible a las ambicio· los de acción* y de manipul'ación*.
nes interdisciplinarias~ '.y esto con En la medida en que esta'-.distin-
mayor razón pOr cuanto esta cohe- ción terminológica pueda teher al~
rencia será mejor saJVaguardad.a si guna utilidad, se reservaría ·Para· la .
393 SOCIOSEMióTICA

sOciosemiótica' el vasto dominio de ciedad les atribuye: lo que es «rea-


las connotaciones"' sociales, algunas lidad» y lo que es sOlo ~ficci0n1>,
de cuyas dimensiones se indicarán lo que es una. «historia verdadera»
brevemente. · y una «historia para divertlr.11 (cri-
6. Un, nrimer nivel de connota- terios para una clas~.ficacíón de los
ción c~n·~sponde a lo"que podría «géneros» lit<~¡-;;i.rios y para una :ti-
considerarse como ·una o11:epistemo- pología de loS ~mundos posibles»}
10gía mit.ica•. constituida por las dependen de una ontología cultural
actitudes adoptadas por una socie- de orden connotativo.
dad dada respecto a sus propios 8. A esto, es fácil añadir -se
signos (i. Lqtman, M. Foucault) y trate de sociedades· arcaicas o tra-
que se descubren tanto en los dis· dicionales- U'la taxonomía da len-
cursos que hablan de los signos guajes sociale..~. basada en una de-
como eÍ:t aquellos que los analizan cena de categ('rfas discriminatorias
(tales corno «~acro11/«profano», ~ex­
o los interpretan, desde los Ipitos
terno» t «interno», amasculino:. /«fe~
del origen del lenguaje hasta las
menino11, «superior:./cinferiori>, etc.),
más ret:ientes filosofías del lengua-
que abarca una morfología social
j:~. Sabemos, por ejemplo, que los
signos medievales son rpetonímicos estable. El advenimiento de las
microsociedad·!s hace estallar estos
y aluden a una totalidad de senti·
marcos rígidos ·en un gran número
do, que los signo$ del siglo XVllI de discursos sociales (la lengua sa·
son «Daturaies::o, que et signo saus· era, pOr ejemplo, se diluye en dis·
suriano es considerado •burgués» cw;sos religioso, filosófico, poético,
por R. Bii.rthcs. Pueden ponerse en
etcétera) ccirrespondientes ·a los
duda algunas de estas interpreta·. «clubs de usuarios:. con entrada de
ciones, otras pueden enriquecer la pa'go; pero transforma también las
teoría semiótica. Sea lo que fuere, morfologías de connotación Cerra-
ha de constatarse que, en el domi· das (donde !os sujetos hablantes
nio lingüístico, exiS;te una relativa están unidos a sus 1enguajes) en
independencia del hacer cientffico sintaxis: conn~tativas flexibles (cada
propiamente dicho, res.Pecto de las uno es relativamente libre de elegir
Íeorías :ael Signo a las que, sin em- su lenguaje s~-gún las circunstan-
bargo, ese . dominio lingüístico es ci<ls) y, mejor ;.ún, t!U verdaderas
incorporado: sucede ·como si la eStrategias de comunicación, donde
actividad con· propósito cientffico, 1.is cargas co:motativas avCI.1tajan,
al haber alcam.ado cierto margen a merludo, .a los <::ontenidos denota·
de madurez, se liberara progresiva- tivos. Lo que, en la superficie, apa-
inente de las variaciones gnoseoló- rece frecuentemente como una de-
gicas que se suponen haberla fun- mocrntización de Ja socledad por
dado. el lenguaje, .de .. hecho no es o~
7. · Otro nivel de coruiot2ción bas· cosa . que ~a constru~clón de una
tante estrechamente vinettlado . al nueva Torre de Babel, . más . pel.i.-
prlme1'o. parece subten4er los dis- grosa por. dej:\r a la~ personas ia·
cursos y establecer el 'modo y el iJusión de hnblai- una misma y úni·
grado ~e veridicci6n* que una so- ca lengua. · ·',
SOCIOSEM!óTICA. ·si:JBJETIVO 394

9. .Como para colmar ·el vacío te gestos, actitudes, num1ca, etc.).


dejado por el estallido de los len- Por lo tanto, será útil disti..D.guir, en
guajeS y, también, :Por la desapari· este último caso, la comuÍlícación*
ción de toda. literatUra· étnica,· se somática de la comunicadón ver·
desariollan nuevas ·formas senúóti· bal*. ·
cas tendentes a forialecer la cohe- 2~ Bajo. ciertas condici0hes, que
sión social trastoé.ada. Se · manifies. . quedan por determinar (cUnndo ·un
tan en forma de una'.·-sociollteratura relato pragmático -el reiato de .
··cuya· teoría 'de los géneros -(policia· un milagro en el Evani~io, por
les, westerns, revistrut del corazón, ejemplo- se enci.lentra insertado
horóséopos, eíc.) queO.a por elabo- dentro de otro relato más··extenso);
rar; pero, también, por -medio de el hacer somático está relatado (o
semióticas- socio - espectaculares .va- se efectúa) no sólo en ñiñci6n de
riadas (matches, 6riiras', etc.), que un objetivo asignado· (una Curación,
se· aproximan a IoS ,,Qbjetos sincré- por ejemplo), sino tambiéñ·: con re-
ticos compléjos de;"Otros tiempos lación a un actante observador (ge.
(tales' como. la .pees.~ .cantada y nei-almeote implícito) cori~ideradO,
danzada a la ..vez). H* áquí uri vasto como lector e intérprete ~ ·de ese ·"
domi.l'!io que'ila ·sOcio'semiótica;. in- relato (o -d.e ·ese compartimiento)
teresada al iitlsmo tiempo por los erigido en· significación. Este hacer
medios (los media) y·_su finalidad somático, a ta vez pragrrlático y
social, podría encargarse d.e reco- comunicativo, provoca el efecto de .
nocer -y organizar•. sentido •irrealidad» y se· lee en ta
...+- SEMIÓTICA, CONNOTACIÓN,. ETNOSE· d"imensión cognoscitiva* .9-el. dis- ·
MIÓTICA. .. curso.·
~ PRAGMÁ.TICA, GESTUALIDAD~
;/sounknJAD~ ~r; ·solid~rité, in·
glés sÓlidarity. · - L:. Hjelmslev ha SUBCONTRAR.IEDAD. Fr~:.subcon•
introducido el término solidaridad trariété, ing. subcontrariety. - La
para denominar la presuposición subcontrarledad designa, en". el mar·
recíproca reconocida en
-la cadena* eo · del modelo constitucioDal*, 1a
sintagmática. El uso tien~e a apli· relación de' contrariedad* entre los
car, igualmente, este concepto a las .. términos contradictorios* ($1 y Sa}.
relaciones paradigmáticas*. a partir de los dos térmióos con--
'.' ~ *J>RESUPOSIC!ÓN. trarios primitivos (St y S2). Desde el
punto de vista del eje de. lOs aub- ·
,. SOM.<TICO. Fr. somatique, .inglés contrarl01J: así constituido, los tér~
somatic. ·.·:. minos contradictorios son thµnados;
,.. 1. Generalmente, somático ·califi· entonces, subcontrarlos, ·uno con
ca al a'ctor figurativo* .(o personaje) relación al ·otro.
situado y actuando eri ·la dimensión ~ CUADRO SE'MIÓTICO.
pragmática* del discurso. El hacer*
somático es pragmático (Si alude a SUBJETIVO (VALoR -):Francés
una actividad corpQraÍ programada) valeur subjective, ingl. subf&:tive
o.· comunicativo (al ser el,· cuerpo vatue. - Se llaman valores subje-
hwnano capaz de significar median· tivos a Jas propiedades o:sd'.~tancla-
395 SUBJETIVO - SUJETO

les» del sujeto* que le son atrlbui· paz no sólo de poseer cualidades,
das rucdiante la predicación* con sino también de· efectuai· actos. Este
ayuda Lk la· cópula «ser*,,; se opo- sentido le .es cunfer.\do en :Psicolo~
nen a los. valores objetivos, cacci· gia o en· sociología y a 'él se le pue-
dentales,., atribuibles en numerosas den vincular !as nociones de sv.Je~o
lenguas naturales mediante el verbo ha-.blante, en lingüística, y de su~e·
«tener,, y sus parasinónimos. to cognoscen(e-. (o epistémico), en
-,)- OBJETIVO. epistemología. Aunque la epistemo-
logía'· excluye las particularidades
SUJETO. Fr. sujet, ing. subject. individuales ca::;>aces de caracterlzru:
l. Situado en la confluencia de al sujeto en· f'l hi<.: et r:~~nc, sin em-
diversas tradiciones (filosófica, lógi- bar¡;o trata dz. definirlo como un
ca y lli1güística), el c;oncepto de lugar abstrac~oir donde. se en.cuen·
sujeto es de difícil manejo y da tron reunidas las conWciones nece-
· lugar .:t múltiples ambigüedades. sarias para· garan'tizar la unidad del
De ahí oue no consideremos aquí objeto* que et sujeto puede cons-
7
sino tan sólo dos puntos de vista tituir. Semejante concepción funda·
prlncipalt!s desde los cuales este menta la idea que Ja lingüística
concepto es, a menudo, considerado: tiene del sujeto de l;i. enunciación"'
a) Se habla, frecuentemente, del. (o de su simulacro, instalado en el
sujeto como de lo que está csome· discurso).·
tido11 {etimológicamente} a la refle- 2. Ciertos ilngüistas (Tesniete) y
:xión o a Ja observación, como aque- logicistas (Rei(he.ti.bach) han trata·
llo de lCJ que se trata por oposición do de sobrepasar estos dos puntos
a lo que se dice (predicado*). Esta de vista (incompatibles entre sí) in-
es la ac:epción usual en lógica clá- virtiendo la problemática: en lugar
sica: en ella el sujeto es situado en dei partir del ·sújeto para dotarlo,
un enunciado objetivado y tratad.o acto seguido, .de determinaciones y
como una magnitud"' observable, actividades, han postulado la prio--
susceptible de recibir las determi· ridad de la relación"" (<1verbo» ·O
naciones que el discurso le atribuye. <ifunción»)· cuyo sujeto ·no sería
Extrapolar y aplicar dicho sujeto sino uno de los términos-resultado.
lógico a la lingUística tiene resulta- En esta perspectiva, es inútil defi.
dos más o menos satisfactorios: en .nir el sujeto «en sí», pues su valor
efecto, la lingüística se ve obligada está determinado por la naturaleza
a introducir, al lado del sujeto lógi- de la fUnción~ constitutiva del enun-
co, un sujeto aparente (en francés, cig.do*+ ·Asi, una gramática actan-
Il est ~rai que ... ), un sujeto gra· cial se ha afirmado capaz de supe-
matlcal (en «Nada es más bello rar las definiciones sustanciales del
que Jo verdadero», «lo verdadero»· sujeto a las que· relaitviza S'.l esta-
hace de- sujeto lógico y para <1nadaii tuto;
hay que postular el estatuto de · 3. En cl marco ~Jcl ·enunciado
sujeto gramatical), etc. elemental,· el sujeto aparece, pueS,
b) Para otra tradición más filo- como un actante* cuya naturaleza
sófica, el término sujeto alude a un depende de .1a función en la que se

l
"«ser», a un uprlncipio activo»,. ca- inscribe. La aparicióri' de la lingllis-
SUJETO' . 396

tica:-. discursiva Dos· obliga,. no obs· · propio. Esta oposición p~rece tan·.
tante¡ a: postular, ·al lado de, ese to más operatoria"' en cua,iito puede
sujeto frástéo, la:: exiStencia·.de· un describir la existencia de· \'na cate.
sujeto discursivo;· éste, a la ·vez que goría particular de actante:S (llama·
puede ·ocupar en los ·enunciado~ dos, ~ falta de mejores ·términos,
frases posiciones actancitttes di ver--- sujetos Cognoscitivos) qué: el enun- ·
sas {es di!cir, incluso· las de .:n¿,::· dador* delega e instala i..' menudo .
sujeto), logra rna.ritener su identi· en el discurso pragmático (repre-
dad*. a lo· largo del discurso (o. ·de sentados por Jos <tSC:r> que· designan
una . sectiencla discursiva), -gracias a !a opinión pública, por-.'iejemplo,
sobre todo a los procedimientos de o en sincretismo con ciertOs actan·
anaforización'.i-. · tes de la narración, dotados, por
4•. Esta inadecuación entre suje· este hecho, de una saber*; particu-
tos .frásicos y sujetos discursivos .. lar). .
(y, más generalmente, ·entre, los ·ac- 6. La sintaxis* llamada 'nárrativa, ·
tantes de ·los dos tiPos) es ·una: de de la que dependen los sujetos sin-
las rizones, entre otras, Q.ue lleva · tácticos (definidos y clasificádos pro-
al semiótico a darse una ::rePresen- visionalmente así, hasta ·que los
tación:'" lógico-semántiCa .del. funcio- progresos· de la semiótica· discur~
namiento ·del. discuisa, representa:- siva introduzcan distincioD.es más
ción capaz de d~cribir (en· forma refinadas), permite recono·Cer uni-
de enwiciados elementales canóni· dades sintácticas más exteni,\l,s como .
cos), ·a la•vez, los feÚÓmeµo.s frási· _son .Io~ programas~ ·narrati~O~ y ,las.....
cos y Jos. discursiVos. ·A. atnbos ·tiPos · configuraciones* narrativas·.:, No de-
de enunciados elementales .-enun· be ser confundida ·con el ·esquema
ciados de est3.do *. y de hacer*- narrativo* o modelo hipotético de
les corresponde, . en· Consecuencia, una organización general dei la na·
dos tit>OS de sujetos: los sujetos rratividad"' que trata de d.eseribir ·
de estado, caracterizaftos poi- la re- las formas con cuya ayuda el. sujeto
laciórr de junción* c0;l?:Jos objetos* concibe su vida como :proyeCto, rea·
de valor (a relacionar' _con la defini- lización y destino. Dicho·; .sujeto
ción sustanciat forinúlada eri 1-a).; -que se llamará suj~to semiótico--
y los· ·sujetoS, de· h.8.'cer, · de.finid:os · no puede dejar_ de fraccion8.rse pa-
por la. relación de· transformación* radigmáticamente, como todó proto-
(más próximoS a la noción de su- actante*, en al menos cuatto posi·
jeto evocada en 1-b). ..: v•· dones· prev_isibles en el :cuadro* .
·5~ ·p9r otro..:lado, r:éconocer dos semiótico: en efecto, el CSquema
dimensiones diferentes en. tos dis. narrativo se define prlmeramente ·
cursos conduce a distinguir .. entre como una estructura·polémi~+ y/o
sujetos· pragmáticos* y_'. sujetos cog. contractual* que implica t.l' apari~
noscltiVos*; se especifican poi la na·· ción de un antl..sujeto al '.Jado o,
turaleza de los valores*· que .los de- mejor, frente a1 sujeto,· con. el que
finen en cuanto sujeto!) de :estado ha de enfrentarse. Por otri·, parte,
y Por el modo de hacer. -somático el esquema narrativo· prevé .'.-para
y pragmático por una parte, cog- todo sttJeto performador'•- tina ins•
noscltlv~ por la otra- que -les es tancia de adquisición de la :<!ompe-
397 SUJETO· SUPERFICIE

tencia* que es de naturaleza mo- dos·.frases: o:La policíl ha arresta-


dal"*. Según la naturaleza de la do al bandido~ .· ·~r o:El bandídó h<'
competencia de. que están dotados sido arrestadCl por la polida:t -en-
los sujeto~,. se puede prever una ti· tre ,las cuales· se sitúa una trans·
pología d"e los sujetos competentes: formación pasiva_.:., la primera de-
J .. c. Coquet, por ejemplo, anota pende de la estructura profunda y
simbólica1nente los cuatro sujetos la segunda, de 1a estructura de su-
correspondientes a las cuatro posi- perficie; pero en el sentido (1), las
ciones del cuadro semiótico: uyo dos· .. están tten la superficie». Por
+ :>, «yo-~», «Se», 111eso:.; esta tipo- otro ·lado, decir. que estas frases
logía de los sujetos, que se encuen- o:dependc~ de ~a u otra estruc-
tr<! en sus comienzos, se muestra tura significa, shnplemente, que sólo
especialmente prometedora. sus organizaciones sintácticas* -y
-'? ACTANTE, OBJh'"IO, VALOR. no las . propias frases realizadas*-
pertenecen a los tipos estructurales
denominados «profundo» y c.super-
SUPERFICIE (ESTRUCTURA DE ficia11>, y esto; antes de la interpre-
-}. Fr. s_tructure de surfacc., inglés tación fonológica que hará posible
surjace structure. · la semiosist. La superficie no debe,
1. Elegida intuitivamente en fuo.. pue<>, ser confundida con la mani- ·
ción del enunciado que, al comien- . festacióu*. ·
zo, se pi·t:senta como un dato que 3. El concepto de .sll.perfid.e es
ofrece sólo su «superficie.. (bajo la correlativo al d~ .profu.udidad: por
cual se puede encontrar una orga- ejemplo, cuanC:o la seruá.o.tica gene-
nización Subyacente más profunda*, rativa* excluye el nivel ·de las. es·
capaz de dar cuenta de las articu· ...true turas. profundas, al postular eri
lacion~ superficiales aparentes), la su lugar _}a -existencia· de : formas
noción de'' superficie no es una in· lógic.o-seiliánticas genirádoras de los
, "Jención muy feliz: la definición pre- enunciados, al mismo tiempo se
cisa que. ·da la gramática generati- desvanece et concepto de estructu-
va* de las estructuras de superlide; ra de · Superfici1~. · ·
~tá muY. alejada de esta primeni 4. ·· En semJ.óiica, se -·utilizan los
intuición. Ejemplo por ~celencia términ.os .. ~superficie> y o:profundi-
de una denominación* mal motiva- dad• en .. su ~entido r~ativo. pará
da* -pese al reconocimiento del designar, simplemente, el grado de
carácter arbitrarlo de toda denoroi- avance del recorrido generativo* que
i:i.ación....:..., introduce más confusión, va ·de las estructuras* elementales
sobre todo en los medios paralin· de la significación a 41 producción
güísticos que la emplean. del enunciado-discurse. ·Así, el nivel
2. · .La · estruchtra de superficie de la· sintaxi.~· :¡,¡ntropomorfa* es
sólo se define con relación a la es- más superficial que el de las estru.o-
tructura profunda, y una frase es turas . lógico • ·~emánticas subyac;.en·
la forma; que. resulta de una trans· tes; el nivel Í!!D'.ático*, más·:pn:).
fcrroaciónt -o de una. serie de fundo que el nivel figurativo*._
transformaciones- operada sobre ~ NIV.l?l., PROFUNOA (estructura. """.").
su organización profunda•. De estas GEKERATIVD ~recorrido -). :
SUPRASEGMENTAL-SUSTANCIA' 398.
SUPRASEGMENTAL. Fr. 1 ~upra. penso, una expectativa"":.rxie la fu.n.
segmenta!, ing. suprasegmental. ..:.... ción «liquidación de l~~. carencia».
. se· .Jlama -fonología* y/o,. fonética* El procedimiento parece' .. l:nás ñno
suprasegmentales a : la Parte de es- y más complejo todavía ·(:µando, por
tas di.Sciptlnas consagrad.as··a estu· ejemplo, la suspensión d~ la moda•
diar IÓs hecl:los que dependen del lización .' epistémica hacc~j' aparecer~
plano de Ja expresión*, ·-pero que. . en un momento dado,·; un hacer
exceden de los límites de las unida- informativo* neutro, provócando a!f
·des de ~este plana·. (unidades obte- una «inquietudii en el en~nciatario*,
nidas por segmenti.ción*: fonemas* quien queda en Ia ignQhmcia del
. y, eventualmente, Silabas): se itrata estatuto veridictorio del, Saber reci:
de fenómenos taleS éomo, por ejem. bido. En otros caso$ -di de la isO:.
plo: la entonació1Í1'< o la acentua'- topía del secreto*, por~ejemplo-,
ción. ....; La· fonología 'y/o fonética la dificultad está en re@nocer las
suprasegmentalés ~on, más general- marca·s* del secreto, eil decir, la
. mente, llamadas ptGsodia. alusi6n que insin<ia quei-él no·pa•
·-+ PROS®IA. recer esconde, sin embargo, un ser:
es evidente que· sin esfus marcas.
SÍ;PRESióN. Fi; -effacement, ing. el secreto no existiría. ·'.:
eraSing. ·- Ténnino·de la gramática :..+ SINCR.EllSMO, .NEtr!RAUV.CIÓN.
·generativa*, la Supresión ,designa . ·'
una· tiansfonnación~..semejante a la SUSTANCIA. Fr. sUbstilnce, ing:
· elipsis*··(apJicadi .en.:. el dominio de súbstance. ' '·~ '
Ja sintaxis.~icaJ·;, . ~ ':·, · ·.. · · . l. En la terminolo~;í~ •de L:
-+. ELJPSIS1 .'·-' . . : ' .. . Hjelmslev, se entiende j)br· sustau·
cla Ja •materia» · o el «Sentido~··
0
.'
sbSPEN$_~óN•. Ft;_ 'SusPension~ in- cuando son tomados a stV~cargo por

. 'glés' susperrsion. . la forma* semiótica con vistas a ia


·. l. Como figura de la antigua· re- significación*. Efec.tivamcnte, mate-'
tórica, · Ja· 'Stlspensióú consiste en rla* y sentido* (sinónimOs para .el
crear u.ria desviación entre el tópico lingüista danés) no son aprovecha·
del enunciado -desplazado·· al final dos sino en uno de suS ·. aspectos,
· de. éste- y su enuhciado alusivo, en cuanto «Soportesii de: ;Ja signifi.
·situado ai c.omienzo; caciónr para servir de su.Stancla se-
· 2. Para ·la seíñiótica, la suspen. miótica.
'-'·sión."aparece como uno dé !os cre- 2. El «sentido:. accede--a Ja signi-
sortés dramáticos» del disCurso na~ ficación por. su articulaciO:l:i:* en dos·
· rrativo. Aunque su teorla dista :·mu· formas distintas, ·corresPondientes
cho de estar elab9rada:; parece· que a los dos planos* del lenguaje: el
·. ·1a suspensión se manifiesta, ante plano de la expresión""' ~omprer:de
,. "todo, como ·la proyección· de cate- así una forma y una su~'tancla d'e
, 'garlas* paradigmátiCas sobre el eje la expresión y el plano ·'del conte-.
: sintagmático del discurso. As!,· por nido*, una forma y una·.;Sustancia
· ejemplo, cuando la función* ProP- del contenido.
piana: «tteación de la carenda» apa- 3. Respecto a Ja forma· Semiótica,
rece en el relato, produce: un sus- que es una invariante*,.-i'a sustan~.
399 SU~TANCU,: SUSTlTUC!óN

cia semiótka debe 'ser coosk!.erada y de le «lttc'imb~·~11 corno categorías


como una variable*: es decir, una de la /intura llan::.ad.a concreta.
forma puede manifestarse a través· 6. Sin embargo, se debe señalar
de muchas :o.ustancias (fónica o grá. -Hjelmslev mismo insiste · sobre
fica, por ejemplo), mientras aue lo este p'tmto- que la distinción entre
contrario no es posible. A fin de forma y sustauc-:a es totalmente
disipar tod:) malentendido, diremos relativa y depende, en definitiva,
qL'.e una scla ~material> fóci.ca, por del niVe! de pert'inencia elegido para
e3emplo, puede servir de sustancia el análisis. Esta oposicióu, indiscu-
semiótica a muchas formas (len· tiblemente fecunda, no. debería ser
piajes verbal y musical, por ejem- hipostasiada, pues conduciría hasta
pio }; perc esto excluye, para una la distinción de dos · semánticas
sustancia, la posibilidad de valerse -formal y sustancial- inconcilia·
de varias formas a la vez. bles.
4. Una nüsma y furlca sustancia, ~ FORMA, SENTIDO, MA.TERL\, !N"STA..'i·
en cuanto ..:1bjeto cognoscible, <:om·
CI~
prende vadas insta.'lcias* de apre-
hensión y de análisis; asi, la sus- SUSTITUCXóN, Fr. substitution,
tancia de la expresión será aprehen-
ing. suq~~i~~~ion.
dida a nivi~l de la articulación :fisio-
lógica, a nivel ~cústico o a nivel l. Si la conmutación* ~e basa en
de la audición psioo-ñsiológica. Lo el principio, según el c1.1al a todo
mismo suc{.-derá con respecto a la cambio de la ex.p"."esión debe.cor!"es·
sustancia dcl contenido: para abor· ponderle un cambio del contenido,
.darla con (.'Otnodidad, puede consi- · la susUt.uclón pt.:.ede definirse como
derársela .::orno situada en el nivel su contrario, C$tO es, el ·cambio en·
del enunciador*' o en el del enun- tre los miembros del paradigma de
c!;atario. Uno de los dos planos d·~l lenguaje
S. Si, p<1ra Hjelmslev, la forma no supone un cambio paralelo en
es constih.1Hva dei esquema* semió- el otro plano. La ·sll:ititu:;lón :pcr::::ni-
tico, Ja sustancia -entetidida como te así reconocer· las vad.ables* en
"el conjuuto de hábitos de una so- el marco de ~a: estrucnu:a de m.
ciedad- es abarcada por. el con- variancias; también, gracias a ella,
~to de u~o* semiótico (o llngüísti- el problema de !a sinonimia* y de
·ca}. Si se ~"(traen las consecuencias la parasinonimia"' puede plantearse
Ultimas d·~ la concepción hjelmsle- correctam~te en el plano del eon·
viana sobre los lenguajes de con· tenido.
notación*, puede decirse que las 2. El cálculo lógico puede ser
connotaciones sociales no son sino llamadO taut0Ic1gico, precisamente
las articulaciones semióticas de un.a porque se basa· en el principio de
sustancia dada. Bn esta perspectiva sustitución tal y oo:.no es empleado,
se explicarlan así las «Ínterpretacio- por ejemplo, por N. Chomsky en el
Íles» de la sustancia de la ex.presión procedimiento de derivación* :?anl
cWmdo s~ habla del «simbolismo la descripción* estructural de la
SUSTJTUC!óN -SUSTITUIDA

3: En semióti~ J:larrativa -se en· SUSTITUIDA (~RUE)lA -). Fr.


cuentran fenómenos de -sustitución épreuve substituée. - Se entiencie
cuándo se trata, por ejemplo, de por prueba sustltU:ida '<aquella en
la sustftud.ón de Jo:s sujetos (ya sea ,que, por ejemplo, un eiifrcntamien-
dentro del actante colectivo* sfu.· to violento es reempÜj.zado -de
tagmático, cuando sujetos difer;en.· común acuerdo- por ün combate
tes se turnan en la ejecución de un más reducido (la lucha· de·David y
programa* .narrativo único; o bien Golia~, en lugar de sus ejércitos res-
entre dos programas Lattativos co- pectivos) o, simplemen(~, por uno
rrelacionados e inversos, lo que per. simb6lico (una partida _de ajedre¡?:,
mite expliCÜ una ·cínversión de si· en vez de una verdadtira batalla,
· tuaci6n») o de lq~ objetós. en el Mahabarata) o a,,:;.la inversa.
4 CONMUTACIÓN, "SOS'I'lTDlDA. (prue- La sustituclón efectuadá~ no cambia
ba -). ,. en nada la organización narrativa.
-> SUSTITUCIÓN', PRUEBA·;..
T

TAXO!~OM:lA. Fr. taxinomie, ing. 3. · E! análisis del discurso con


taxonon•y. pro:.:-ósito cientifico (en las ciencias
1. La taxonomia, concebida tra· sociales) ha revelado que la activi·
dicionalrr1ente como «teoría de las dad cognoscitiva en él desplegada
clasificaciones1', se aplica actualmen:- consiste, en gran parte, en el Mcet
. te a la clasificación"' misma, es de. :ta."l:onóm.lco: ~·e trata de construir
cir, a lot; procedimientos de organi- ::--c9n ayuda de identijades* y de
zación siStemática de los datos ob- · alteridades* ¡oeconoeidas- objetos
servados y descritos. semióticos (dementas"'. unidades*,
2. Al identificar, un poco apresu· jerarquías*), construcción que 'cons·
radamentoe:, la empresa taxonómica thuye una ve1·daC.era Condición :pre-
cbn cier!¿J. c;oncepción, vetusta, de via para elaborar un metalent;"Uaje*
la ciencia (cuyo fin último sería la científico;· ade..-nás, el examen de
Qbservación y la clasificación de los e.se. tipo. de discursos ha ,mostrarlo
he.chos, como en botánica o en zoo- suficientementt: que r.1 grado de
logía tradicloriales). N. Chomsky se avance en una disciplina cualquiera
rebeló contra la lingüística distri· está en función de :os progresos
bucionat• acusándola de ser sólo taxonómicos ailí . reali.iados. eonse.
taxonómica y de pretender, :median- cuenten1ente, ' la crítica se invierte
te sus procedimientos, ·'micamente y se vuelve contra h. ;Sramática ge-
ia clasificación jerárquica de las nerativa* a la.' que se· reprochará
unidades lingüísticas. Esta crítica sus insuficieucias taxonómicas, su
tuvo en su tiempo marcada reper· falta de: interés por el análisis se-
cusión; sin ser falsa, desC3llsa a la mántico · previl) de los conceptos
vez en una concepción restrictiva, que émplea, ~sí como también su
estrecha,. del Quehacer taxonómico limitado rigor ~n materia de meta·
y sobre la falta de envergadura lenguaje: esta carencia es coexten·
. T AXONOM!A ~TEATRAL · 4-0¡

tivistas dirigidas cóntra el . . análisis cuyas relaciones se to~an únic."'t-·


distribucionai son ..:pertinentes, · se mente en cuenta las o¡)osiciones*
equivocan, sin. emb.irgo, al conside- puramente discrln:iioatotjas* entre
rarla como· wta de::ias cumbres de lexemas del mismo nivel y las 1n-
las realizaciones en lingilística:· 1a clusiones entre le."\:emas ·de niveles
, construcción de modelos. hipotéti- diferentes. Una taxonomúi semejan-
. cos de carácter expiiéativo, sustitul· te es, pues, una clasifiCación que
ble. a los p_rocedimlentos taxonómi· pretende describir un Co.rpus* de
·ces, ha sido extensamente practi· lexemas y que sólo se·aviene a utili-
cada -y con éxito- por la lingüis~ zar como etiquetas* del árbol* (que
tica .compa1·ada*. sirve para representarla)_ ios lexe-
4.· Los procedimientos taxonómi· mas de ese corpus: se trata, aqtir,
cos,. tal como los e-Aaminó :y criticó de una taxonomía léxica.·
Choffisky, fueron aPiicados, de he- 6. A diferencia de las tixonomías
cho, por el. apá!Ísis .distribucional, léxicas, ·tas taxonomías sé.Ó:iicas son
esencialmente, eh et eje sintagmá- jerarquías elaboradas qud. :D.o tienen
tico* del lenguaje:' la· clasificación en cuenta la categorizadón* lexe·
·jerárquica· se basaba allí en la dís· ·mática del mundo, sino···una red·
tribución*, es decir, en el orden de oposiciones sémicas* (0 de ras-
pcsicional de ·las unidades lingüis- gos distintivos*) subyacen~ a la ma-
ticas. Ahora bien, la. ta."<onomía es, nifestación lingüística. Una taxono-
ante todo, un principio de organi- m!a sémica se presenta Pomo una
zación paradigmática* descuidado combinatoria*; de ella, s~}o ciertas
por !os distribucionalistas+· Esto ex-· ··expresiones* (o ciertos nudos, al
plica por qué el análisis sémico"' representarla en árbol) están mnni·
-<>, en Norteamérica, el: análisis festadas a nivel de los signos 1in~·
componencial*- o lós estudios de güísticos: esto le da lii: ventaja.
etootaxonomfas, que· tienen un pr<r -preciosa,· para nosotros-'- de po-
greso evidente. en añtropologfa cul- der servir como modelo* ºpara un
tura!, se han desarfollado fuer-d. de estudio comparativo entre varias
todo contacto con. la· gramática ge- etnotaxonom.fas.
nerativa ·Y transfonnaclonal. Existe ~ a..ASIPICAClóN, ETNosmirÓ'l'ICA, SE•
todo un-conjunto. dé dominios, con ) ··
Jos . procedimientos ~U ·utilizados, MA, muco (análisis - · ...
que constituyen el campo,, propia..
mente dicho, de las· investigaciones TEATRAL (SEMIOTICA ~). Fran·
taxonómicas. cés sémiotique thldtrale, in.g, semio-
S. En etnolingüistica, ciertos an· tics of the theater. .
tropÓlogos norteameiicanos · (H. C. 1. El discurso teatral -en el sen·
Conklin) emplean el , término taxo- tido restringido adoptado· actual;
nomía en sentido restringido, para mente por la "semioJogfa. del tea·
designar Una :jerarci$ paradigmá· tro>- es, ante todo; el textO*, espe- ·
tica, donde ~odos lqs nudos• están cie de partitura dispuesta para· eje-:
constituidos ~r lex~~·. efectiva· .
cuciones variadas¡ ·también,.
. es un.
403 TEATRAi

Uterario. Desde esta perspectiva, la significado auttr.omo, o no hace


:semiótica· teatral forma parte de la ·más que concurrir -<:on un aporte
semiótica literaria"' cuyas preocu· parcial- a la articulación de una
paciones cómparte. La organización significación- común y global? . El
narrativa swbyacentc a la forma día· ejemplo de la semiótica cinemato-
logada, obedece a los mismos prln· gr_áfica, que hipostasía la maoifes.
cipios; sólo la estructw·a discursiva tación vlsual en detrimento de los
de superli.9ie constituiría l,a: especi- lenguajes· que se coarticulan para-
ficidad del texto teatral. lelamente, muestra el co.mpromiso
2. Por ·el contrario, según otra -de esas elecciones previas. - AJgu.
concepcióÍl de la teatralidad tan nas inve.;tigaciones actuales mantie.
exclusiva como la anterior, concier- nen como hipótesis la pO$.ibilidad
ne a la semiótica teatr.U todo lo de construir ei. objeto !eatral que,
que pasa· en la escena en el mo· situo.do a nivei ·de las. estructuras"'
lnento del espectáculo, es decir, to. semióticas subyacentes, po·dría des·
dos los lenguajes de manifestación cribir y/o generar el. espectáculo
que· concUrren a producir. el sentl· manüestado por todo.s:. los lengua·
do, con excepción del texto verbil jes.
inismo; esta aproximación global 4. El término espectáculo que
parece más prometedora ....Sl:o. .. em·... nosotros .. empl~amos p~ra . designar....
b-argo, ne es del todo clara la razón al discurso teatral abarca, no obs-
que justificaría· .dejar de lado uno tant~. un cam;i-:> "Sem\ótico mucho
de los lenguajes de rn¡;u.tifestación, más vasto: además del teatro pro-
el .de la lengua natural.''" píamente dicho, comprende tam·
3. La dificultad planteada es, a bién la ópera .Y ~1 ballet, el circo,
la vez, teórica y práctica: se trata . las carreras, Jos matches, lo~ «es·
de conciliar la presencia de signifi· pectáculos» de plazuela, etc. La de-
cantes* múltiples con Ja de un sjg. finición de ·espectáculo comprende
nificado* ·único. Dic:ho de otro mo-- así, desde el punto O.e vista ínter·
do, ¿hay: por ejemplo, que analizar no,· caracterí!>tiC..~'S ~ales :.como Ia
separadamente pada uno de los len· · presencia de. tµi espacio*: tridimen·
guajes di! manifestación:_. gestuali· sional cerrado, la distribución pro·
dad oral {entonación}, visual {mí- xémica*, etc., !1li;mtras que, desde
micas, lictitudes, gesticulaciones), el punto de viSta externo, 'la defini·
proxémita (puesta en escena de los ción implica la· presencia de un
actores,' de los objetos y los deco- actante .obsei.-vador* {esto excluye
·radas), programación cromática las' ceremonias, los rituales míticos,
üuegos de luces, etc.) y, por últi· por ejemplo, donde la presencia de
mo, el .discurso verbal a:varias vo- los espectado:r.?r. no es necesarla).-
ces, para proceder luego a reunir Asi pues, en la reorganización de su
los resultados obtenidos por esos campo conceptual emprendida ac-
análisis parciales, O bien, hl contra· tualmente por la semiótica general
rio, se debe efectuar un·a segmen· -al ir liberándose poco a poco de
tación* del disctirso teatral comple~ .las Convenciones . y hábitos . anti·
jo en simultaneidades? ¿Cada len· guon, el lugar para una 3enúótica
guaje ~e manifestación posee .un espectacular ~s . del todo indicado.
TEATRAL'·TEMAT.ICO (·A)

·. ·~ PROXá.HCA, · G~ALIOAD; COMUNI• seminada-··de un tema"', s,1:1sceptible···


CACIÓN. ; . de ser·reducida a un·ro1-:temático.
2. Por rol tem~Htco· sC: entiende
TEMA.-·Fr; theme, · ing. theme. . la representación, en foriha actan·
. 1.i'· En serri.ántica* &scursiva, pue-- cial*, de un tema* o de ~ recorrl·
. de definirse· el .tema .como la dise• do temático (el recorridÓ'. «ca:z.ar»,
· rninación, a lo largo; .de los prog:ra~ por ejemplo, puede 'ser cODdensado
mas ·y· recot:rldos. nai-rativos;· ·de ·los por el rol. de «cazador*)· El rol
valores*• que"· ya han :sido a,ctualiza· temático se obtiene a) Pór la re-'
dos.' (es decir, en jUnción"!.: con· los dúcción. de una configura~ión* dis·
sujetos*) por la semántica: narrativa. cursiva· a .un solo recorri4o figura· .
! · 2. Desde el punta de vista '.del tivo* (realizada o reallza'Qle en el
análisis, 'el tema pue\ie ser recono- discurso) e, incluso, a ,rn· agente
éido 'en. forina de un reconido te- ccimpetente que la 'integr~' virtual~
mático, de un despliegue sfu.tagmá·· mente, y, a la vez, b) por:·la deter~
tico de vertimientos temáticos par~· minación de su posición• :'i;n el re-
dales, concernientes a los· diferen· corrido del actor, posici6ii que le·
tes actantes y circunstantes de ese permite al rol temático ~jar· una
recorrido· (cuyas dimensiones co- isotopía precisa (entre· todas aque-. .
rrespónden a: las de Jps ·programas . Has en las que puede virttjalmente ·.
narrativos): la tematización.. opera· inscribirse). - La conjurición de ·
.da poará darse más concentrada en roles temáticos define al aCtor*•
los SU.jetos, los objt;;:tos o las fun. 3. El · concepta de rec8.tegorlza·
cienes, o ·bien más o; menos igual. clón temática, propuesto pQ'r L. Pa·
mente repartida entre los elemen· nier (en sus investigaciones sobre
tos de la estructura \narrativa. semiótica bíblica), puede setvir para
· 3. Si se llega a, ·reunir el seman· designar las ttan:sformac::Íónes de
tismo* diseminado a.·Jo largo del contenido* que sufren los frotes te.
recorrido temático y_::Si se· lo con· máticos (de carácter socio'~_taxonó­
densa "con ayuda de tina· denomina· mico) en un discurso ~~ivo, du·
ción a}:lropiáda, com'.o· conjtinto de rante su desarrollo. Así, pbr ejem·
propiedades del sujeto. que efectúa ple, al ·contrario de ia que OCWTe
ese recorrido (por ejeinplo, el reco- en el cuento proppiano, dOn.de los .
rrido ..!:pescar• resumido en '«pesca. recorridos temáticos de· los·. actores
dor-},:· se obtieJ?,e ·un; ~l temát!Co* están conformes, hasta el ~aJ. con
que no es sino la tematización del sus roles (mefila+i~e los cüales a
sujeto de hacer, d~it de su pro- mentJ.do son denomil).ados:· <i:Padre.,
grama ·narrativo: . :. ·'·.. ··.. ··. · o:hijo.-, «rt::p, etc.), los textOs evan-
-+. 'IEMATIZACióN, -r:&f!..TI.CA. .: gélicas emplazan al inido rotes so-
: (. ' 4
ciales, religiosos o familia"res, Ita·
,. Tl!l\ÚTICO .·(·A). Fr. thématlque, · mados a sufrir en la progresión
ing. thematic.·· , narrativa una «recategbrlzaCi6n• te-
'l. En ef ámbito de l?- semántica* mática ·que manifiesta su se.r· verda.· .
discursiva, ·el recorrido temático es dero en detrimento .de su -.parecer
. la nAarúfestación isótopa*,· pero di· inicial. . .
405 TEl\'AT!CO (·A)· ':'.SMPOl<ALIZACióN

-¡.. TEMA~ TEMA'rlZACIÓN, SEM.-Ú.,'l'!CA contrario, inte"zµretable sólo dentro


DISCURSIV,\, -ROL, ACTOR. de una estruct.ura sintáctica que
::·1.istule la reciprocidad de sujetos
TE.'vlATIZACióN. Fr. thénzatisa· antagónicos (!:uj.:to /anti-sujeto).
tion, ing ... thematiz.ation. . -7, DESEO.
· l. En semántica* discursiva, . la
teroatlución es un procedimiento, TEIVJ.PORA.LIZAClON. Fr. tenipo.
todavía muy poco explorado, que ralisation, ing. tetn.Poratiz.ation.
toma a su cargo los valores* (de_la _
semántica* fundamental) ya actua- 1. Al igual que Ia espacialización*
!izados (en junción* con los suje- Y li actorialización*, la temporali-
tos*) pur la semántica narrativa zactón es uno de los sub-componen-
para diseminarlos, de algún modo tes de la. discw'sivización (o sintaxis
-de maiiera más 0 menos difusa discursiva) y depende, como ellas·,
0 concentrada-, en forma de te· de la realización de los mecanismos
mas* en .íos programas* y recorrl· de desembrague* y embrague* (que
dos narrativos*, abriendo así la vía aluden a la instancia de la enun-
a su posible figurativización*'. la . ciac1ón*). . . .
tematización puede, o bien concen- 2. La té.nlPonllzaci6n cOnsisté: en
. trarse nlás sobre los sujetos*, los un conjunto de procec!imiento:> que
objetos"' o Ias funciones*, o bien, pueden agruparsr. c.n varios sub·
por el co.ntrario, repartirse también componentes. Se distinguirá, prime-
en los d~fefentes elementos de la ro, la progs:am~cl6n temporal cuya"
estructura narrativa afectada. principal característica es. la con·
.2. Procedimiento de conversión* versión* ._del eje de las presuposi·
semántica, la tematización permite clones* (orden lógico del encadena·
también diversas formulaciones, de miento de los programas* nanatl·
manera siempre abstracta*, de un vos) en eje de las consecuciones
ffi.ismo. v~lor. "Así, por ejempJo, el (orden t.empo1'"tll Ypseudo-causal de
valor «libertad~· puede tematizarse los aconteciroier.1tos). P,:.r Otro lado,
. -según _lqs procedimientos de espa- la localiza.cl,ón temporal (o tempo-
cializaci6n* y de temporalización• ralizac.ión, en· sentido estricto) uti·
de la .l¡intaxis"' discursiva:- ya sea liza. )os proce.dimientos de desem-
como .. evasión espacial» (y figura. "orágue Y. embrzgue temporales, seg-
tivizada, en nn estado ulterior, co- menta y' .organiza las sucesiones
mo un éi.nbar(¡ue hacia los mares temporales: así establece el marco
lejanos), ya como «evasión tero- en que se inscriben la.1 estructuras•
poral:. (con figuras* del pasado, de narrativas. Finflln:;ente, la aspectua-
la infancia, etc.). llxación tran~forma las funciones*
~ TBM.t., TEMÁTICA, SEMÁNTICA DIS- nacrativas (de tipo. Ióglco) en pOO:.
CURSIVA. ceses*, evaltiado ?or la mirada de
un actante observador* instalado
TEMOR. Fr. crainte, ing. fear. - en el discurso-enunciado.'
Opuesto al deseo, el temor no es 3:
La tem~ralización · .~ñsiste~
-desde el punto de vista semánti· como su nombre lo indica, en pro-
co- un no-querer, sino un querer• Cucir el efecV• de sentido . "tempo-
TEMPORALIZACióN - TEOR!Á 406
r3.üdadt>, ·ttansfonn2.ndo así una· or- cimiento. Aquí hacemoi\ nuestro t'l
ganizaci60:- narrativa en «historia». pwito de vista de C. Beijlard, quien
~ DESI?MBRAGUE, DISCORSI'VW.ClóN, opone teoría a sistem~:: mientras
PROGRAMACtóN ESPACIO -TEMPORAL; LOCA- que este último sólo se '.somete a la
LIZACióN· ESPACIO.!P..MroR.U., ASPECfUAU· coherencia lógic_a, la · t~'oría exige,
ZACIÓN. ..,, .. además, ser sometida a,)a verifi~­
ción (que corresp"onde, ¡jara C. Bcr·
..tENER... Fr:·~v~ir, i~g.' "t'6' h~Ve.­ nard, a la experimentac(ón). De~').e
El verbo.español_ ~etier (con:io e1 :ver· ··luego,. la noción de verifiéación pue-
~- friíncés . avctt-)':'}sirve. para a tri: de variar de uua teoría;~ a otra, ·se
· buir al .'sujeto* · p'r~piedá.des «accl- la puede sustituir, por ej~mplo, con
dentaleái> .que son' inter:Pretadas -a .los procedimientos de fai.lsaclón* o
nivel de" '1a. i'epreséntaci6n*" semán- las exigencias de adecuáCi6n*: eilr>
tica- ~OniO v~ores* ._objet~".ÓS en no implde que la confrÓntaclón en·
j~Cióri* con .el' ~ujef.o de.. ~s~~do*_• tre lo . . formulado» y lo :~dado,., sea
. .'..;..,, OBJ'Envo. . ,._ ' ".--. •.'.:.:: ;· tina condición sine qua non de toda
.teoría. · ...
.TENSIVID..4.D. Fr. tensivité,. in8:: ·3. El hecho de que· 1~: teoría l'ea
tci;Sivei:teSs (nCol.). -··La· tenslvidad un conjunto de hipótes;s, no justi-
"es· la relación que· contrae ..el sema fica que éstas se· en~~ntren dis-
durativo* de un Proceso* con el persas en conceptualizadones dife-
sbma terminativO*: produce e1 efec- rentes. Muy por el contrilrio, la teo-
to· de· sentido ·«tiosión»; «progre· ría trata de reunirlas en. un cuerpo
sión» .. ·(po'r ejemplo,· ·el adverbio de hipótesis generales, ascendiendo
«casi!>, o la expresión aspectual "ª tan alto (o descendiend"/ tan abajo)
punto de:.). Esta relación aspectual como sea posible, por P.resuposiclo-
determina la configuración aspee. 'nes* sucesivas, de modo que sus
· tual y la dinamiza de alguna ma- postulados tengan en· fi:uenta las
. nera. Paradigmáticamente; la tensi· consideraciones de la .!moseologia
vidad se opone a ·Ja distensividad*. (de la teoría del conocli::nit:nto, en
· ~ ASPECTUALlZACIÓN •. el sentido filosófico deÍ término)
-(así, la teoría semiótica* se refie-
TEOR1A. Fr. théorie,. ing, theory. re a la relación fundamental entre'
l. Habitualmente se entiende por el sujeto cognoscente y el" objeto de
teoría un conjunto~ coherente de hi- conocimiento, y tiende a precisar
pótesis~ suSceptibiés de ser :¡;ome- las condiciones generales' de la apre-
tidas a ·verificación:· hipótesis'\', co- hensión y de ta produccil1n del Sen·:
heienciá* y verlfic:~ción* son los tidoJ- y, a la vez, las';,'.exigencias
términos claves para ·definir el con· de la epistemología*· ciefltífica que
ce¡)to de teoría y,. ;a. menudo, sirven la ayuda a formular esas hipótesis
como · criterio · dC · reconocinrlento últimas· en una axiomátf9a.., simple
para distinguir lo q'ue es .. realmen· (como estructuras* elenientales de
te, teoría de lo qUe se proclama Ja significación, :por ejerqplo, en el
como tal. · · : · . caso de la teoría semiótica). .
·2~ Se considerá· que· una teórla 4. Entre este conjuntO. de hip6~
«da cuenta» de un objeto de cono- tesis no demostrables y ~leclarad;:_ts
407 TEORJA
demostradas (o, lo que es más o ticos que se examinan, analizan y
menos equivalente, el cuerpo de comprueban entre sí. La construc-
conceptos fundamentales no defini· ción de las diferentes lógicas se
bles), y el lugar de conccnu·acíón caracteriza, eipecialmrrnte, por el
de la t<.:(1<Ía con el dato (o su ade- apriorismo axiomático que las hace,
cuación, durante la aplicaclóu), se a menudo, inap'tas pa.-.i. su empleo
·sitúa el vasto taller de la construc- en semiótica.
ción de una teoría. La primera ta- 6. De todo. ello resulta que una
rea, en gran medida intuitlva, con- teoría es un tipo particular de len·
siste en elaborar -a partir de un guaje construido, capaz de ser ob·
objeto planteado como cognoscible jeto de un análi~is se1niótico: se
(en semiótica, el lengu.aje-objcto)- puede prever, por ejemplo, una
un lenguaje de descripción* y, lue- tipología de las teorías según su
go, justificarle con ayuda de un modo de com:trucción. Si se consi-
lenguaje metodológico*; finalmente, d.:!ra a. la teo;:ia como una jerarquía
se tiend1~ a encontrar el nivel epis- de conceptos y d~ciones de esos
temológico* en que los conceptos, conceptos, se reconocerá que ad·
indefinibles, y las hipótesis, no de- quier<:n la forma de sistemas* o
mostrables, deberán ser organizados de procesos*' semióticos: en el pri·
en una: axiomática. Tales operacio- mer caso, la teoría tendrá el aspe<::·
nes hac~n explícita la teoría, dán- to taxonómicn* (los Conceptos se
dole Ja forma de una jerarquía de interdefinen Por especificaciones e
metalenguajes•. Sólo entonces co- inclusiones), ér.i el segun.do, la for-
menzará la segunda fase de la ela- ma sintáctica (o sinuigmática)i las
boración de la teoría, la formaliza· relaciones interconceptuales depen-
ción (es decir, Ja transcripción en derán de la presuposición"'. El paso
un lengua.je formal*): partiendo de de una formulación a la otra se
la axiomática ya formulada, efec- prevé bajo ciertas condiciones: ·la
tuará por deducción un rcconido recuperaCión del análisis distribu·
en sentido inverso, garantizando así cional* por la gramática generativa*
la coherencia de la teoría y com- es un ejemplo de ello. ;
probando su adecuación. Esta se- 7. En (4) hemos presentado la
gunda tarea da a la teoría su esta• construcción de una . teoría como
tuto hlPotétlco.deducUvo. un.a tarea en ·dos tiempos en que
5. Si bien la formalización de la construcclóó Conceptual y meta-
Wla teÓr!a parece un buen medio lingúística ~tán preSupuestas por
para comprobar su Coherencia, sólo la formalización. En la práctica -Y,
interviene; como tal, después, cuan- mis precisamente, en el dominio
do ta teoría está ya conceptualiza· lingüístico- las cosas son mucho
da. Hay, pues, que distinguir entre menos claras: numefosos esfuerzos
la prueba de la coherencia y la de teorización quedan, por lo gene-
construcción coherente de la teoría ral, en el estadip :lnndtivo• de pre-.
'misma; ésta se obtiene mediante conceptualización: otios se detienen
procediinientos de interdefioición en la pre-fonnalizacién; otros, final-
entre Jos concept<>s y por la supef<' mente, colocan el arr.do delante de
posición de los niveles metalingüís- los bueyes: .se precipitan por cons-
TEORlA - TSRM!llO, 408
truir una teoría formal.izada. cui· cJon. A nivel de la sintaxis· semió-
dando muy -poco la elaboración y tica de superficie*, el ·serna temii·
explicltaclón' de Jos· .conceptos. La natividad puede señalar la realiza.
construcción de una teorí3: es una ción* de un hacer*.
tarea de largo aliento: la lingtlística ~ ASPECTUALIZACIÓN.
comparada* .·se ha tOmado nn cen- .l
tenar de añOs, de .Bopp a Saussure, TERMINO. Fr. terme, ing. ternt.
para . constituirse en teoría cohe- l. Si se considera que·,; toda se-
rente. · miótica no es sino una red de re·
~ METALENGUAJE, PORMALIV.CIÓN, m· laciones* (o que una leniua natu.-
PÓmSIS. ral, por e.iernpJo, sólt') es'tá hecha
de diferencias), los términos única.
TERMINADO. ·Fr. accompli; ·ing. mente pueden ser definidos como
accomplished. - Terminado '¡ no- puntos de intersección de'.. diferen..
terminado es otra denominación de tes relaciones. Así, el exanien de la
la categOria* sé.mica aspectual ·per. estructura* elemental de k signifi.
fectividad / imperfectivi.dad. cación muestra, perfectaniénte, que
~ ,l'i.mFECl'lVJDAD, ASP'ECTUALIZACIÓN. todo término del cuadro"" semiótico
' es un punto de intersección de las
TERMINAL. Fr. t~rminal, inglés relaciones de contrariedad*~ de con·
termina!. tradicción* y de comple"inentarie-
l. Se llaman s:lmb~ios. terminales dad*. Por otro lado, la representa·
a los que denotan, después del aná· ción* de una red relaclonál en ár·
lisis sintagmático, las clases* mor· bol* revela que Jos términ(fs corres.
fológicas (o «léxicas~. como nom• pendientes a los puntos de empal·
bre, verbo, adjetivO; etc.) depen. me son, al mismo tiempo, los ..:con·
dientes del último n'iVel de deriva· fines» de las relaciones y las rela·
ción*. ciones mismas que, consideradas en
2. A veces son i1ámadoS ten:ni· un nivel jerárquicamente -Superior,
D.aies . 10s lexemas*·: que, · situados se presentan como ténnhJos (las
en el nivel más bajo ·de una, jerar- funciones de L. Hjelmslev· juegan
quía*' taxonómica* de orden para. el rol de funtivos): sólo ·1os termt.
digmático, se encueD.iran, efectiva· naJes de una taxonomía* .~Son los
mente, :realizados en ..I!i lengua natu· términos en sentido estricto.
ral estudia~~ ..' ·.'. 2. Los términos -puntos· de in·
~ SÍMBOLO;· 'IÉtMIN~. ·· tersección de las relaciones...:.. pue-
den o no ser lexicalizados. .,Ces de-
TERMIÑATIVIDA:ó. Fr. ter:mina· cir, dotados de etiquetas*- que los
tivité, ing. terminativeness. ._ ·La denominen): una lengua natural en
tennlnatlvtdad es un sema aspec- tanto que semiótica, por el hecho
tual que sefutla · la finalización de de ser una combinatoria~. ofrece
un proceso*: forma parte de. la con· inmensas posibilidades de:. Jexicali·
figuración· aspectual "jncoatfvidad / zación, mientras que una semiótica
duratividad /. terminatividad, y su particular sólo aprovecha uÍi peque..
reconocimiento pefulite presuponer ño número. - Así pues, .~a se-
la existencia de toda Ja configura. . gunda definición de término es po-
409 . TJ?.RM!NO ·TEXTO

sible: el término es la denomina· han podido sufrir una recategoriza·


ción* (la etiqueta) de un punto de ción histórica.
intersecc.ión de relaciones (o de un ~ ltR.MINO, NOMENCLATURA, META·
cruce en una red relacional)' den<r l.EN.GUAJE, socroU:cro, TAXONOMfA.
minación efectuada mediante el pro·
cedimiento de lexicalización*. TEXTO. Fr. texte, ing. text.
3. La lexicalización de los ténni· l. Considerado como enunciado*,
nos se dinominará ocnaturah> (en el el texto se opóne al discurso*, se-
caso, po,r ejemplo, de Jas etnotaxo- gún sea gráfica o fónica la sustan·
nomías) o «artificial»; en este últi· cía de la expre.~ión* utilizada para
mo caso, los términos· etiquetas manifestar el proceso lingüistico.
constituirlan o bien una tern1inolo- Para ciertos lingüistas (R. Jakob-
gía* de carácter. met~ingüfstico*, o son), la expresión oral -y, en con-
bien una nomenclatura*. secuencia, el discurso- es el hecho
-r RELACIÓN, CUAURO SEMIÓTICO, ÁlUlOL, primero y la escritura* sólo sería un
LEXlCALilAC!ÓN. derivado, una triducción de la ma-
nifestación oral. Otros (L. Hje!ms·
lev} sostienen, al contrario, que el
TERMlNOLOGtA. Fr. terminolo-
punto de vista genético no es per-
gie, ing. tenninology. tinente, pues una forma semiótica
l. Se· denomina terminología a puede manifestarse pur diferentes
un conjunto de términos, más o sus tandas. . .
nienos definidos, constitutivos de 2. El ténnil'Ío textrJ se to'ma, a
un sociolecto. Una terminología es menudo, como sinónimo de discur-
susceptible de transforn1arse en me· so, sobre todo luego de la interpe-
talenguaje, cuando sus términos se netración terminológica con las len-
hallan .interdefinidos y sus reglas guas naturales que no poseen el
de cons'trucción explicitadas*. equivalente de la · palabra.discurso
2. En antropología se utiliza la (propia del francés y el espafiol).
expresión teunlnología de las es· En tal caso, fa. sMnióti.ca textual no
iructurns de parentesco, a fin de se distingue; en principio, de la se·
distingÚir la taxonomía* de los 'tér· miótica discur!.iva. Lo!> das términos
minos 'lexicalizados {= loS lexemas*) -texto y discurso- pueden ser indi-
-que ·sirven para designar el con· ferentemente'~· aplicados para desig·
junto de los roles que constituyen nar el eje* siritagmático de las se-
la estructura de parentesco en una mióticas no lingüísticas*: un ritual,
comunidad lingüística dada- de un ballet, pue_den ser considerados
áquella otra .taxonomía estructura· como texto o r.omo discursa.
ble a partir del análisis de los dis· 3. L. Hjeln1slev utiliza el término
cursos sociales sobre el parentesco texto par<i de;;ignar la totalidad de
(o de los comportamientos somáti· una cadena i:ii1güística, ilimitada por
cos observados). Ambas taxonomías, el hecho de la productividad del
la de los roles e:-.plícitamente deno- sistema. El ·reeonocimiento y la
minados y la de los roles temáti· elección de las unidades* de-dimen-
cos* implícitos, no son a fortiori siones m~rnas -r~urrentes en el
homologables, pues estos ítltimos texto- permiten analizarlo* y de-
TEXTO-TEx;TUAJ,.!ZAC!óN 410
. '

terminan;. por. eje·mP10, el ·tipo de semióticas de la enunciación y del


lingüística · (o de gramática) que enunciado. :«
podrá ser construida:· si la unidad 6. Cunndo el recorrido :;generati-
recurrente adoptada .es la frase*. vo* es interrumpido, se di( lugar a
la lingüística elaboradá. para descri- Ja textuali.zación* (linealización* y
birla será llamada frásica; elegir el junción con el plano de i3 expre·
discurso* como unidad máxima re· sión*): el texto, obtenido ~ediante
currente del . texto dará lugar a la este procedimiento, equivale a la
construcción de una lingüística dis- representación* semántica : del dis-
cursiva. curso y puede servir -en ~;la pers-
4. El término texto. se emplea a pectiva de la gramática 'generati·
veces ·en sentido restdngjdo cuando va*- de nivel profundo* á las es~
Ja nituraleza del Objeto ' elegido tructuras lingüísticas que ~!generan
{obra : de un escritoi; conjunto de Jas estructuras lingüísticas: de su·
perficie*.
docun:ientos conocidos:o de tesiim°"
nías recogidos) le imponen límites: · -+ DISCURSO, UNIDAD (texttjal), l'EX•
en este sentido, el t~to se convier- TUAUZACIÓN.
te en Sinónimo de. CÓrpuS*.
TEXTUALIZACióN. Fr. te.xtuali-
S. En los sentidos,.' {3) y (4), el sation, ing. textualization.
texto designa· una magnitud* consi- 1. La textualh:acl6n es el.conjun-
derada antes de sU atlálisis* ~ Ahora to de procedimientos, llamados a
bien, sabemos que el análisis pre- constituirse en sintaxis* texit:1al, que
supone siempre la élección de un tienen por objeto formar \m con·
nivel de pertinencia~ .,y sólo trata tinuo discursivo anterior a ·la ma-
de reconocer cierto tijlo de relacio- nifestación del discurso en·~ tal o
nes*', excluyenel o otras.):apaces, tam- cual semiótica (y, más preC~samen­
bién, de determinar.: (sustancia* o te, en una u otra lengua natural),
forma*, sin~is* o seiriá.ntica*, etc.)". El texio* así obtenido, si se mani~
Resulta, así, ··una ·nueva definición, fiesta como tal, tomará lá;. forma·.
según la cual- el texto está consti· de una representación*' semántica·
tuido únicamehte por elementos se- del discurso.
mióticos conformes con el proyecto 2. En cuanto representación se.
teórico de la .descripc~6n*. Es. den- mántica, este texto es indiferente
tro de esta acepción desde donde a los modos de manifestación* se.
se hablará, por ejemplo, del .texto mióticos que le son lógican'lente u!·
enuncivo {obtenido tra.s la elimina- texiores. Asf, por ejemplo, iil texto·
ción* de las •inarcás• de la enun- de una historieta o tira cói-hica re-
ciación*). En este· l"riismo sentido, vestirá la fonna de aJeyend~s». o la
es poSible, a:demás, interpretar el de «viñetas». Del mismo m-Odo, el
.:texto como productividad-» (J. Kris· te."<tO de un corpus etnoliterario
teva), concepto que integra, al mis- será homogéneo, pese al fuu.ácter
mo tiempo, el conjuri!o de opera- plurilingüe de su manifestación, en
ciones de la 'prodUcción* y el de las Ja medida en que, evidentemente,
transformaciones del te.Xto, procu- abarca un área cultural recoÍlocida.
rando considerar las propiedades El texto teatral, por. su parte~ com·
411 TBXTUALIZAClóN

prende 1:1 conjunto de lenguajes de muy diversos de una semiótica dada


manifestación (entonación, gestuali· (nn debate, por éjemplo, puede ins-
dad, proxémica, juegos de luces, cribirse en el discurso con el lexe-.
etcétera) a los que recurre. ma o:discusiónll', pero también me·
3. De esta manera, el texto se diante una frase compleja o una
define en relación con Ja manifesta- secuencia diilogada). ~e trata de la
ción que él precede y únicamente textualización en sentido estricto,
en relación con ella: no es la cul· cuando se saca el mejor partido de
minación del recorrido generativo* la linealidad o se aprovechan las
total, cOllsiderado como paso de lo posibilidades ofre:idas por la elas-
sin1ple··a lo complejo, de lo abstrae· ticidad del discurso.
to._. a lo figurativo*. La textualiza· S. La linealización de . un texto
ción coustituye, por el contrario, debe distinguirse de su temporaliza·
una detención de este recorrido en ción*. Se sabe; por ejemplo, que el
un mornento cualquiera del proceso cálculo algebraico -que no es de
y su desviación hacia la manifesta· naturaleza temporal- requiere ser
ción. Así, cuando se quiere dar una linealizado con vistas a su repre-
representación de uno u otro de los sentación mi?;:olfestada. Sin ir tan
niveles del recorrido generativo. (de lejos, cabe distinguir una programa.
la gramática profunda, de la gramá· ción textual, _9ropiarnente dicha (así.
tica de superficie, de la instancia dos programas* narrativos conco·
figurativa, etc.) se procede, necesa· mitantes serán, neCesariameOte, dis·
ríamentc; a la textualfaación de ese puestos en sucesión lineal), . de la
nivel (es decir, de los datos. de aná· programación:"" temporal (u 'Jtdena·
lisis de ese plano). ción cronolót:ica de los diversos
4. En el momento de. efectuarse, programas): estos dos tipos de pro·
la textualización encuentra cierto gramación dejan, sin embargo, un
número de coerciones y se beneficia margen estratégico para organizar
de las :ventajas que le confieren las los discursos y dependen de la
propiedades características del texto co1npetencia* discursiva del enun·
mismo. La principal coerción pare· ciador*. Por lo demás, algo idénti·
ce ser la linealidad* del discurso, co sucede al aprovechar la elastici·
compensada -de algún inodo- por dad del. discurso: remite al mismo
la elasticidad* de éste. La linealidad tipo de competencia. Estas dos for·
del texto está determinada por la mas de intervención del enunciador
naturaleza del significante* que de· constituyen, .pues, los procedin1ien-
berá encontrar durante la manifes- toS de textualización (en el sentido
tación: será temporal (para las len· extenso de lR palabra). a ios que
guas oro.les, por ejemplo) o espa- cabe añadir, Por ejemplo, la anafo-
cial (escritura, pintura, etc.). La rización~: desde cie!"to ángulo_, pa-
elasticidad del texto se define, a Su recen más o menos coex.tensivos
vez, por Ia aptitud del discurso con las preocupaciones. de ·la anti·
para nivelar jerarquías semióticas; gua retórica*. ·
esto es, para disponer en sucesió·n -+ GENEltATIVO (rc.c<.-rrido -}, LINE....

¡ segmentos dependientes de niveles LIDAD, El.ASTlCIOAD DEI. DISCURSO. .

J
T!M!CA • TIPOLOG1A 412

T1MlCA (CATEGOR!A -). Fran- sin embargo: mientras q\le la cJa·


cés catégorie. ·thymi?J.ue, ing. thymic sificación se dirige a conS.truir una
category. · jerarquía"', la tipología tii!ilde a ha·
l. Categoría* cl:=tSemática* cuya cer que las jerarquías s<;'. confron-
denominación está motivada por el ten entre sí. ·· ·
sentido ·de la palabra thyro_ie .-«hu- 2. Las tipologías puedei"i ser par·
mor;· disposición afe"ctiva de base» dales -cuando déscansa:n en la
{Petit Robert}-, la categoría túnica elección de un pequeño n\ímero de ·
sirve para articular et semantismo* criterios de comparación: (correla·
directamente vincula·d~ a la percep- ciones entre determinadO-.,_tipo de
ción que el hombre tiene de su unidades situadas en un(nivel de
propio cuerpo.·-Entia; corno térmi· análisis dado}- o genera]efl, cuan-
no éOrnplejp* (¿o _neutro*?). en la' do dos o más objetos sen1\ó.ticos se
articulacióri·, de la cátegocla qlle le correlacionan entre·· sí -q~pués é:Ie
es jerárquic.amenie ·superior, la de análisis homogéneos-, teiiiendo en
exteroceptivídad / in.teroceptividad cuenta todas las unidades, todos
empleadá para clasificar el conjun- los niveles o planos semi~ticos. J;n
to de las ~tegorias Sémicas de UD este último caso, el rnodeio tipoló-
unive"rso"' seinántico; gico -al ·integrar a todos iJos obje-
2. · La ·categoría tímica· se articu- · tos correlacionados- da, ·a.1 mismo
la, a su vez, en euforia/ dis/ória . tiempo, la definición"' acabada de
(con aforia .;como. término neutro) cada uno de ellos y permite consi-
y juega un.·. rol ,fun~amental para derar a cada uno como la~' transfor-
la transform.3.ción de los microuni- rnación* del otro, e inversámente.
versos• senlántlcos en axiologías: 3. La lingüística se ha preocupa-
al connotar como eufórica una deí- do, desde el siglo XIX, poi-. elaborar
:xis"' del cuad.ro* semiótico y como una tipología dé las JengÜas natu-
disfórlca, la deixis o¡luesta, provoca rales. Diversos ensayos se han in~
Ja valorización positiva y/o negativa tentado partiendo de cri~erios de
. de cada uno de los términos de la comparación diferentes. EI· más co-
estructura* elemental de la signifi- nocido es el de Ja tipologÍ:i basada ·
cacl6n. en la diversidad de las formulado-
-+ ·PROP!OCEPTIVIDAD, EXn:ROCEPTIVl- nes de Ja unidad morfo-sintáctica
DAD, AXlOLOGfA. · Jlamada «palabra»: las leriguas en
· que la unidad «Palabra*~ Se identi-
TIPÓLOG.tA. Fr. tr,pologie, inglés fica solamente con el r<!'.dicat se
typologyo¡ denominan aislantes: aqtlellas en
1. Por tipología s~ entiende· un que la «palabra» está cOnstituida
conjunto de procedimientos que per- por una simple yuxtapos~clón del
miten: reconocer y e.Stabiecer ·coz:re- radical y de uno o var:iQs afijos,
laciones* ··entre dps ;o más objetos se califican de aglutinantes; aque-
Semióticos o con su resu1tado (que llas, por último, en que .1~ «pala·
toma la forma de jill sistema co- bra» sólo puede ser definida como
rrelacJonal construidb). Este con- combinación del radical y de. las
ceptO puede ser coihParado con el flexiones, son Jlamadas lenguas fle-
de clasificación*, con _una diferencia xionales. La crítica de sémejante

J
·:.

413 TIPOLOGtA ·TOTALIDAD

ti:pologí;i ya ha sido hecha: la defi.


4 se efectúan las performances*) y el
nici6n de :palabra* sobre la que se espacio paratópico (r€se;-yado a l~
apoya, es imprecisa e incoherente, adquisición de !as competencias*):
pudiend_o encontrarse diferentes ti~ al «aqul11 (es}.~acio tópico) y al «allii>
pos de upalabraS» en la misma len· (espado paratópico), se opone así
gua natural. No obstante, esta tipo- el «allá» {o «t:n otra parte») {espa·
logía es cómoda y ha quedado como cio heterotópico).
de uso corriente hasta nuestros días. ~ LOCALIZACIÓN ESPAi:IO-TEMPORAL.
4. Tz!es tipologías pueden deno-
minarst~: estructurales en la medida TOPONIMO. Fr. toponyme, inglés
en que descansan sobre criterios toponym. - Los top.:Snimos, como
intrínsecos y formales, y no tienen desigillt.ción de los espacios"" con
en cuenta la clausura de los inven- nombres propios, fornian parte del
tarios de las unidades comparadas; sub-.con1panerue onomástico de la
se distinguen, pues, de las tipolo· figurativizacióÍJ.. Unidos a los antro-
gías genéticas que, elaboradas por póniu1os* y cronónimos*, permiten
la linbrüística comparada*, implican un anclaje* histórico cuya finalidad
coerciones particulares. es constituir el simulacro de un
5, En semiótica, el problema de l'eferente externo y producir el cfec.
establecer tipologías se plantea par· ·to de sentido"" «realidad».
ticularrfiente a nivel de las cultu· ~ ONOMÁsnéA, FlGURAnVlZACIÓN, ItE·
ras*, tal como puede ser aswnido FERENtt. .·
por 1a··sociosemiótica•; también, a
nivel de los discursos* y de los TOTALIDAD. Fr. totalité, ing. to--
géneros" cuyas clasificaciones, hoy tality.
en uso, se basan en el reconoci· 1. En filosofía, la totalidad es con·
miento de las cormotaciones* socia· siderada com9 uno de los conceptos
les, y i10 en criterios internos, de fundamentales del pensamiento; así,
orden ~strictamentc semiótico. Kant la cla$ifica, bajo la rúbrica
-+ CLASlFICACIÓN, SOCIOSEMlÓTlCA, de la cantidad, entre las doCe cate-
DISCURW, gorías del entendimiento.
2. En semiótica la totalidad pue-
TóP1•:o (ESPACIO .:..¡.Francés de considerarse, ante todo, como
espace. topique, ing. topic space. - un concepto indefinible que depen·
Respecto de un programa"' narrati- de del . inventario epistemológico""
vo dadO, definido como una trans· de los universales*. Sirve, :por ejem·
fonnación"' situada entre dos esta- plo, para definir el universo 11 como
dos* narrativos estables, puede con- la totalidad de Jo qui! existe y para
siderarSe como espacio tópico el definir también, en una primera
lugar donde se ·manifiesta sintácti· aproximacion, el discurso como un
camente esa transformación, y como todo de significación; etc.
espacid·heterot6pico, los lugares que 3. Si se ·1a considera corno for·
lo engloban, precediéndolo y/o su· mando parte de Ja :i.1·ticulación se-
cediéndolo. Una sub-articulación del mántica general de la cantidad*, la
espacio tópico distinguirá, ocasio- totalidad puede ser tratada ya sea
nalmt::nte, el espacio utópico (donde como categOria*" articulable, según

; .:l
TOTALIDAD e TRADUCCION 414
V. Br0ndaI, en dos· ·términos con- dos* naturales, como tarr\bién las
trarios -el ipte~ (iotus) y el uni- semióticas construidas a Partir de
versal (amnis)-, Ya como una sub.. los mundos naturales (la '::pintura,
articulación ·. del prilnero de esos la m'1sica 1 etc.). Por otro;' lado, si
Íénnfuos · capaz de ser formulado las lenguas naturales se ·.~traducen"
como término complejo* que per- unas en las otras, sum.inist~ igual·
mite aprehender la totalidad· bajo mente el material neces~l;io para
dos aspectos a la vez~ como magni- las construcciones metalingüfsticas*
tud discreta, distinta de todo cuan- que les permitan "hablar de sí mis-
to ella no es (unus), y como mag. mas (cf. la paráfrasis*). ···
nitud entera, aprehendida en su 4. Tales consideracionesf. aunque
indivislbilidad (totus). Sin embar- válidas en principio, han cciilducido,
go, ha de reconocerse que la refle- no obstante, a hipostasiar; las len·
xión semántica sobre los universa- guas naturales y a afirmarJ·.3. veces,
les ctiantitativos tcidavía réquiere de manera más o menos éxplicita,,
ser profundizada. que si bien estas últimas .:suminis·
traban los significados, de hecho
TRADUCCióN. Fr." .traduction, in- eran los significados de otras se-
glés translatian. _
mióticas, Y·que éstas, a su .:Vez, eran
t. Se entiende pcir traducción Ja puros significantes (el mi.indo, la
actividad cognosciti~a que opera el
pintura, por ejemplo, sigfüficarían
paso de un enunciad9* dado a otro
enunciado considerado como equi- sólo cuando son verbalizaPles). El
reconocimiento del estatuiQ privile·
valente. giado de las lenguas nat1,i"rales no
2. i.a traductibilidad aparece co-
mo una de las propiedades funda- autoriza a su reificación como lu·
mentales de los sisteinas semióticos gares del «Sentido construido}>: Ja
Ycomo el fundamentO mismo de la significación es, primordialmente,
tarea semántica: .en'. j!fecto, Ja tra· una ac#vidad (o una operación de .
ducción se intercala ~entre el juicio traducción) antes que su resultado.
existencial «hay sentido" y la posi· 5. En cuanto actividad s~miótica,
bilidad de decir aliO .de ello; «ha· la traducción puede descorijponerse,
b1ar del sentido» ~·;· a la vez, tra· por una parte, en un hacer inter•
ducii . y· producir siinificaci6n*. pretativo* del texto ab qup y, por
3. Generalmente se les reconoce otra, en un hacer produ:Ctor del
a 1as lenguas* naturales un estatuto texto ad quem. La distirlción de
·privilegiado Con relación a las otras ' estas dos fases permite "dompren·
semióticas, por ser las únicas capa· der, entonces, cómo la i.Íi,terpreta·
ces de servir de lenguas de llegada ción del texto ·ab quo (o ef análisis
(durante el proceso de traducción) 'implícito o explícito de ese texto)
para todaS · las .Otras semióticas, puede desembocar en la ·~onstruc­
mientras ·que lo contrario .es muy ción de un metalenguaje* Que trata
raro. As{, se dirá ·que las -lenguas de describir, o en ta pr'oducci6n
naturales son las macrosemióticas* (en el sentido estricto del ;término)
a las cuales se traducen esas otra:; del texto ad quem, más ·o menos
· macrosemióticas que ·son los mun· equivalente del primero de'tlido a la
415 TRAIDOR·· TRANSFORMACióN
no-adecuación de los dos universos TRANSFERE..l\1C1A. Fr. tra11sjert,
figurativos*. ing. transfer.
Situadas a nivel figurativo,. las
TRAIDQR. Fr. tra1tre, ing. villáin. transferencias de objetos corr~.spon­
El examen· del cuento maravilloso den, en el plano de la sintaxis*
proppiano ha n1ostrado que éste narrativa de superficie, a las opera.
no es un todo hon1ogéneo, sino, en ciones de conjunción" y de disjun·
realidad, un relato* doble, organí. ción*; como los objetos requieren
zado según una estructura polém.i. la intervención de los sujetos de'
ca*: p<:.ralelan1ente a las pruebas* hacer* y dan lugar, por ello mismo,
realizadao por el héroe*, se destaca a. las adquisiciones* y, correlativa~
otra historia, la del anti~sujeto, el mente, a las privaciones (en un sfa.
trnldor. Desde el punto de vista tema cerrado de valores, lo que se
propiamente sintáctico, el relato in· le da a uno; va en. desmedro de
traduce dos recorridos narrativos*, otro; lo que se le quita a uno, es
opuestos y complementarios {como en provecho de otro), las transfe·
en un sistema cerrado de valores, rencias de objetos pueden interpre-
donde lo que $C le da a uno, se tarse como uu.a sinta,,:is de la comu-
hace eri detrimento deJ otro: lo nicación entre sujetos.
que se le quita a uno, beneficia al ~ COMUNIC:,\p'.ÓN.
otro) -Jos del héroe y del traidor-,
que no se distinguen, en realidad, TRA:NSFOR.i.\1A.CióN. Fr. trans(or-
sino por su connotación eufórica* mation., ing. · tran.sformation.
o disfórica moralizante: de este mo- l. Puede entenderse por transfor·
do, el traidor proppiano, determi· maclón, de manera muy general, la
nado de modo negativo, es plena· correlación* (o su e~tablecimiento)
mente ·comparable a Pulgarcito ca· en,tre dos o más .qbjetos semióticos,
lificado . de héroe y que desempeña tales como.· frases, si?gmentQs tex·
prueb'.3-s deceptivas*. tuales, discur·$OS, sistemas semióti-
....;. SUJETO, lítROE, NARRATIVO (esque- cos, etc. -. Ppr sus origcllcs, en la
ma -). MORALIZACIÓN. tradición europea el iérmi:no trans--
formación remite al comparatismo*
lingilistico, mientras que en et con-
TRANSCODIFICACióN. Fr. trans· texto norteat'lericano se refiere a
codage, ing. transcoding. - Puede los procedi'llientos elaborados en
definirse la transcodlficaclón como matemáticas: dt! ahí, 1as confusio.
la operación (o el conjunto de ope- nes y los m1>lentendidos frecuentes,
raciones) por Ja que un elemento sobre todo· 'en semiótica.
o un conjunto"' significante se tras- 2. Desde cl 'punto de "Vista del
lada (;e un código* a otro, de un
dominio de su ejercicio, se distin·
lenguuje* a otro lenguaje. Cuando guirán, inaependientemente. de su
la transcodificación obedece a re- naturaleza .intrínseca, las transfor-
glas de construcción determinadas, maclones L"'i.tertextuales (estableci-
según un modelo científico, equiva~ das entre dOs o más objetos semió-
le entonces a un metalenguaje. ticos -parU.c~igmáticos o sintagmá..
~ TRADUCCIÓN:, METALENGUAJE. ticos- autónomos*) y las ~nsfor·
TRANSFORMACION. 416

m3cfones intratextUa!es. Estas 111ti- casa del donador: a nivbt superfi-


mas son de dos ·tip.Os: a) las trans- cial es· representada como· una cho--
formaciones situadas a nivel de las za en el bosque sobre ·."patas de
estructul-as* semióticias profundas, gallina, gira y ...se tnu:tsforma:r> en
y b) las establecidas o reconocidas choza; pero, como todas las cosas
entre los niveles profundos* y los permanecen iguales, no git-a.) es su-
de superficie* de un .objeto semió- ficiente para darse· cuc.úta de la
tico; Con el deseo de simplificar y imprecisión e ineficacia ·:de tales
siguiendo el ejempJd- de T. Pavel, «transformaciones»: incluso en una
designaremos a I.as~'.)ransformacio­ perspectiva atomista, no· 'podrían
nes intertex~ales P· :transformai::la-. compararse con los campos histó·
nes (formuládas y. :p'racticadas por ricos descritos, en et siglQ··xrx. en
Lévi-StrausS"':y sus discípulos), a las forma de deyes fonéticas»: .
traúsformaciónes iniratextuales ho- 4. El concepto de transforma·
rizontales g~transformaciones (que ción, tal como ha sido progresiva·
nos toca: definir: infra 5) y a 'las mente elaborado y aplicado por C.
transfonnaciones intratextuales ver- Lévi-Strauss, posee, por el contra.
ticales c-tra'llsfonnadones (choms- rio, un valor heurístico*' 'evidente:
kiana~ y post-cbOnlskianas). Aunque abarca fenómenos ·lingüisti-
3. Entre las transf~rmaclones in- • cos muy complejos y diversos, no
tertextuaies, .hay que· poner aparte, pretende, según declaraclói:i del pro-
en primer lugar, ias transformacio- pio autor, constituir una: formula·
nes proppianas. Después de haber ción precisa y homogén~,, De este
descrito la ¿morfologfa• del cuento· ··modo, podremos dar sólo ~Us carac-
maravilloso ruso, V. Propp trató de terísticas principales. La '. transfor·
reubicar ·su Ino delo narrativo en la mación lévi-straussiana sei· inscribe
dimensión histórica. tratando de re- en el ámbito del com-Pa:ratlsmo*
conocer las transformaciones por lingüístico, del que habría sacado
las que puede pasar en el curso de las últimas consecuencias:
su evolución. Además del carácter a) así el mito, por ejemplo, no
muy discutible de los parámetros se define, según él, ni corno una
de evolución histórica· que propone forma ideal ni como un prototipo,
(lo m"aravilioso es anterior a lo ra· histórica o lógicamente, atlterlor a
clonal, lo heroico a. lo humorístico, todas sus variantes, sino cOmo una
lo coherente a lo incoherente) y que estructura de transformaciones (o
constituyen transfo~clones crien· de correlaciones formales) ·que m~­
tadas*~ las transformaciones descri- tienen entre sí todas las variantes,
tas por Propp son locales (afectan . conocidas o desconocidas, realizadas
sólo a una clase d~ equivalencias o no, de ese mito: la interpreta·
correspondiente ·a. uP, sub-segmento ción freudiana del mito de Edipo
de su .,..función»), aisladas (la trans- es sólo una de las variantés de ese
forinaci6n producldl!,·· ·en un lugar mito y está en· relación .de trans·
del texto no afecta a,. las ot:ras -po-- formación con las otras variantes;
siclones sintagmáticis) y suPerficia- b) definidos de esta mánera, los
les (se sitúan. a nivel. de fas varian- mitos mantienen relacíQ"nes de
tes de SUl'erficie). Un ejemplo (la transformación -en un nh'.el supe-
417 TRANSFORMACION

rior- t~on otros mitos (los mitos cienes elementales. Si se concibe


sobre el origen del fuego «Se trans- el discUrso narrativo -y. tal vez,
forman• en mitos del origen del el discurso · general- como «algo
agua; lOs del fuego culinario en mi- que ocurre•, esto es, como un reco-
tos sobre el origen de la carne con- rrido que neva de un estado inicial
sumible!, etc.) para constituir, final- a tJJl estado final, un algorlt:Ip.o* de
mente, "'sistemas míticos» cerrados transformación debe poder descri-
y circulares (la lectura continua de bir ese recorrido: el discurso apa-
las transformaciones míticas con· recerá, entonces, como una serle
duce al lector a su punto de par- de transformaciones. - Para evitar
tida); toda ambigüedad, reservamos sie.rn-
e) las transformaciones no son pre el término transformación para
ni locales ni aisladas -como eo las operaciones .lógicas horl:ronWes
Propp-, sino concomitantes: la que y 'designamo's' cO.n: el nomPre de
afecta a un segmento del texto (de- conversiones"" {que se aproximan,
pendiente de una clase paradigmá- sin identifiqii::'i>e, a las transforma·
tica de equivalencias*) acarrea, en ciones de tipo chomskiano) a las
condiciones que quedan por preci- reformulaciones verticales de las
sar, la transformación concomitan- estructuras, obtenidas por el paso
te de otro segmento textual (perte- de un nivel qe profundidad semió-
neciente. a_ otra clase d~ ~quivalen­ tica a otro. .
cias); '1a concomitancia registrti.da 6. En el marco tipológico as!
permite, como se ve, prever la posi· constituido, se pueden tratar de
bilidad de una definición formal del situar las t~~sformaciones de la
sintagma* narrativo. gramática genetativa*: si se hace
S. Las transformaciones que, por abstra<:ción de su carácter más o
nuestra parte, reconocemos en el menos formal* y se las considera
marco de la semiótica narrativa, · sólo desde el punto de vista de la
son intratextuales y sintagmáticas: teoría* Conc:;ptual, puede ·decirse
completan, sin contradecirlas, a las que son iniratex.tuales, verticales,
transf<1rmaciones lévi- stra.ussianas orientadas (Vt:in de las estructuras
que son intertextuales pero para- profundas* a las estructuras de su·
digmáticas. Situadas a Oivel de las ·perficie*) y paradigmáticas {se si-
estructuras* semióticas profundas, túan, efectivamente, en el interior
las transformaciones son considera- de esta clase paradigmática que es
das como operaciones* lógicas. En la frase). En cuanto conversión de
el plano lógico-semántico, se defi- las estructuras profundas en es-
nen como el paso de un término a tructuras de superficie {o paso de
otro en el cuadro* semiótico, paso un indicador* sintagmático a otro
efectuado gracias a las operaciones indicador derlvado), las transfor·
de negación* y aserción*; en el pla- rnaclones se presentan en forma de
no narrativo, más superficial, co- reglaS* de reescritlll"..i., que s61o in·
rresponden a las operaciones de tervienen después de· las reglas sin-
conjwtción* y de disjunción* entre tagmáticas ·y ~e e~ectúan en las
sujetos de estado* y objetos* de series producidas por éstas (en la
valor: se trata aquí de transforma- medida en que, evidentemente, ad·
$1:.MlÓTit:A. - 27
TRANSFORMAClóN --l'RANSITIVIDAD 418

miten· :transformaciolles según· su del sujeto al objeto. Cualquidra que


análisis estructural). Se· distinguen, sea ·Ia dificultad para interp:i-etar .y
tradicionalmente, las t_ransformacio-- denominar este concepto 4e .«pro-
nti:s facultativas y ".obllgatarlas de cesoi> -puede ser útilmente ·compa·
tas transformaciones ~·"un.arlas (sin· rado con la orientación* en· lógica
gulares) y biñarlas ·(g'eneralizadas, o con la intencionalidad* ell .filoso-
en el caso de.inserció:d*· y de coor· fía-, In existencia de una i-t.úación '.
dinacióp.), según conci~an a una o •dinámicai> (que "comporte u;i'· mfoi-
dos series engendrada"S. por la ba· mo estricto de vertimiento ·~emá?i­
se*.-las transformaciones choms- tico), constitutiva de todo enuncia-
kianas tienen t,m estatuto difícil de do*, debe ser necesariamente pos-
precisar, y ello es debido a varias tulada como anterior a tod.~ cons-
razones: trucción de la sintaxis acfancial.
a) son reglas · o:Suplementarlas» Si se plantea en primer l'b'gar ta
con reI~ción a.: las :i;eglSs sintagmá. relación de transitlvJdad se'· ~uede,.
ticas· · · en segujda, por vertimient6 com-
b) ' son a menudo de natunJeza plementario, proceder a dis'tinguir
heterogénea {una regla 4Úntagm.ática los predicados de transforniación*
en sí misma, puede convertirse en y junción"', .como también a 1empla-
«transformacional» por,:su posicl6n zar dos formas canónicas de enun-
en la gramática); ciados elementales: los enunciados
e) el orden mismo de las reglas de hacer* y los enunciados· ;de es-
(o su· puesta en algoritmo) consti· tado*. · · · .."
tuye a veces un problema, tal como 2. En el plano discursivo..:,; en el
lo subraya J. Lyons, y se está. obli· que aparecen las estructura.$ acto-
gado a desquiciar las estructuras rlales, el término transtttvO, por
profundas par3. salvagt,4U'dar el sis· oposición al término reflexivb*, sir-
tema transformacional: · ve para distinguir la autonomía ac-
-)o SINTAXIS FUNDAMENTAL, ASERCIÓN, tancial de las actores* respecto de
NEGACIÓ~1 HA<::ER· .. sus sincretÜ;mos* actanClalés. De
este modo, bn la frase «Pedf.o des--
TRANSFRA.SICO. Fr.·: t~ansphra~ plaza una piedrai>, tenemos <,los ac-
tique, inglés transphrastic. - Un tantes*, sujeto y objeto, vertidos
enunciado* se dice .. que es ttans- en dos actores distintos: la relaci~n
frásfco cuando rebasa Jos límites entre los actantes se dirá, entonces,
de una frase*. que es transitiva. En cambio, en el
enunciado «el desplazamiento de
TRANSITIVIDAD. F;r. , transitivité, Pedroi>, los dos actantes ..:,..sujeto
ing. trar1Sitivit1~ y objeto- se encuentran en.y.Sincre-
l. En gramática tradicional, un tismo dentro de un solo act~;>r '(Pe-
verbo Se _dice que eS transitivo dro se desplaza a sf mis~o): la
cuando, en su calidad de: predicado, relación habrá de calificarse · aqui
puede- tener un objetO·:. (o un· com-· de reflexiva. Sucede lo mism'o con
plemento de .objeto); ' djcbo con la relación de saber*: se d~_Opmi­
otras palabras;, cuando: d verbo es nará transitiva o reflexiva . según ·
sólo el lugar de transltjón que va que los sujetos,· entre los ·~ue se
419 Tl<.A.NSIT!VIDAD -TROPO

establece la comunicación, sean o en el esque1na narrativo"' de un


no actores distintos (se distinguirá mismo programa* narrativo, es un
así, por ejemplo, el saber sobre los procedimiento frecuente en etnoli-
otros del saber sobre si mismo). teratura. El programa así triplica-
-+ OIIIEITTAC16N, INTENCIÓN. do se ve, a menudo, sometido a
variaciones* figurativas*, pero com-
TRASCENDENCIA. Fr. transcen~ prende, en principio, una gradua-
dance, ing. tra11scenden.ce. - Dcs4e ción de dificultades que penniten
el punto de vista del Destinatario"' interpretarlo como una expresión
(·sujeto), el estado de trascendencia enfática de la globalidad. La triplica-
corresponde a su participación en ción interviene, generalmente, en el
el ser mismo del Destinador. E.n momento de- la adqilisición* de la
efecto, los relatos populares plan· competencfa,* pOr el sujeto*: es sólo
tean al Destinador como estable· un procedimiento n1ecán1co y no
cido ~n un universo trascendente debe confundirse con la sucesión
(donde se supone que los dones de los. tres programas narrativos
no disminuyen jamás la ttntidad que pretenden obtener modalida-
de los bienes disponibles, postula· des* distintas (las C.el querer·ha.cer,
dos como inagotables), por oposi- saber-hacer y poder-hacer).
ción al Destinatario-sujeto pcrtene· -i- DUPLIC.\CXÓN.
ciente al universo inmanente. Al
mismo tiempo, debido a la asime- TROPO. Fr. trope, ing. trope. -
tría de la relación destinador/des· En retórica*, se entiende tradicio-
tinatruio, la transmisión de los ob- nalmente poe · tropo<; las figuras si~
jetos* de valor entre ellos no obe- tuadas a nivel lexemático, tales co-
dece ya al principio de los sistemas mo la metáfora o la metonimia*~ a
cerrados de valores (donde aquello estas ..,figuras de palabras11- se opo-
que es adquirido· por uno, lo es en nen, entre otras, las "'figuras de pen·
detrl1nento del otro), sino al de la samiento:io (Ütote, antífrasis*, etc.),
comunicación* participativa. «de diccióni: (diéresis, contraposi-
-i- lNMANENCIA.. ción ... ) o cde 'construcción¡> (para.
taxis, elipsis, etc.).
TRlPLICACION. Fr: triplication, ~ 'FIGURA,-MEf,{foRA.
ing. t[iplication. - La trlpUcacl6n,
u

UNIDAD. Fr. unit¿, .ing, unit. nas no se plantean la cuestión del


· 1. "Por unidad semiótica .(o. lin· metalenguaje* cient#ico, o'· a aque-
güística) se 'entiende :Una clase* de llos de e:ntre los lingilistas :Prácticos
magnitud* situada' ·en el eje* sin- que viven confortablemente de los
tagmático* del lengu<}je, construida logros metodológicos de las genera·
con ayuda de procedimientos de clones que los han precedido. En
segmentación* y característica de ' efecto, si existen hoy mue.has teo-
cada plano, nivel o grado de derl· rías gramaticales y si el debate que
vación de ese lengi,i.~je. Las mag· se mantiene entre eUas e$¡ Posible,
nítudes, reconocidas intuitivamente ·es porque, si bien unas y: otras se
como· ocurre.P.cias* pertenecientes a basan, en parte, en· opclOnes que
un n:úsmo texto,' 'deben ser. identl· privilegian tal o cual tipO de uni·
fieadas* unas con otras por. el test dades, todas ellas, no obstante, re-
de sustitución* para ser declaradas conocen comci pertinente la cues·
como variantes* de· una misma y tión de la construcción de· las uni-
.única· clase. Las unid3des-en cuan- dades mismas. ·
to .clases- son eotes semióticos 2. Las unidades son propias de
Construidos* y no dei>enden ya de cada uno de los planos del lengua-
la semiótica-Objeto (como es el caso je: así, los morfemas*, por· ejemplo,
de· las ocurrencias), Sino del meta· son unidades del plano dC los sig··
lenguaje descriptivo. Mientras que nos*, los fonemas, del de la expre.
lis ocurrenc.ias de un texto son, sión*, los Sememas, del plano del
'teóricamente; infinitas en m1mero, contenido. Los signos o «ünidades
las unidades ·clases son .finitas y significantes• pueden, entonces, ser
pueden ser utilizadas:. como elemen- distinguidos de los fonemas y de
tos* Por nuevas operaciones meta- los sememas que, como articulacio-
Jingüi$ticas• ....:. El pl'9Cedimiento un nes de un solo plano del -lenguaje,
tanto complejo, que acabamos de deben ser considerados coIÍlo «UDÍ·
evocar sumariamente.· puede pare- dades no significantes• (o. figuras*,
cer ocioso a aquellos' investigadores en la terminologfa de Hjelnislev). -
en ciencias sociales cityas discipli- Por lo demás, las unidades de cada
421 UNIDAD

plano pos.een wia organización je- aproximaciones ::;intagroática y pa-


rárquica* y dimensiones desigua· radigmática en 1o Conce:niente a la
les; el morfema, signo mínimo, for- definición de las unidades semióti·
ma parte ·de signos más extensos cas, tal vez no "sea imposible mos-
como .la frase o el discurso; el fo- trar la correlación existente entre
nema entra ·en la composición de l¡\s oposiciones parad.igmáticas y
las sílabas, etc. La dependencia je- las dh;tribucione's* complementarias
rárquica de unas unidades con rela- que se hallan en tel eje sintagmáti·
ción a otras forma parte, en conse- co. Tomando de nuevo el ejernplo
cuencia, de la definición de unidad. ya utilizado, se ve" que la oposición
3. El carácter construido de las sonoro / no son.oro, que define la
unidades semióticas nos autoriza a de los fonemas b y p, está vincu-
definirlas como unidades discretas*, lada a la poJ'!i9ión ccintextual de
es decir, ·distintal' unas de otras en esos fonemas (inicialmente, seguidos
:::us combinaciones• sintagmáticas, de una vocal y, eventualmente, de
y capaces de oponerse unas a las la vocal a) y que una posición con-·
otras en el eje paradigmático. Esta textual diferente (final, en ciertas
última característica permite, en· lenguas naturaleS, por ejemplo) es
ton ces, reconocer estas· <:iunidades1> capaz de «neu.tralizar*:o, como se
paradigmáticas, a la vez más peque- . dice, esta opos;lción. En otros tér-
ñas y de· naturaleza diferente, que minos, una sub-clase de ocurren-
son las categorías* (fémicas y sé- . cias·:. variantes· de.· una unidad;· lla•
micas). Efectivamente, la oposición mada variante• combinatoria, pue-
a:b::i.la10 y «pala:o muestra que las de estar dotada de una definición
dos magnitudes no son sustituibles paradigmática que la especifica o,
ni pertenecen, en cuanto variantes lo que viene a ·ser lo mismo, una
libres, a una misma y única unidad- categoría para~jgmática aparecer en
. clase; pero esta oposición, creadora la cadena sintagmática, en distribu-
de una diferencia de sentido, puede ción colnptenientarla. Esta consta-·
interpretarse como debida a la pre· tación puede generalizarse y exten-
. senda dt: la categoría fémica sono- derse a los otros planos del lengua-
ro / no. sonoro: las unidades b y p, je; se comprende, pues, el cuidado
en cuanto fonemas, pueden, en con- de Hjelmslev por dotar a su defi·
secuencia, descomponerse (pero ya nición con la categoría de determi-
no sintagmáticamente) en femas. naciones sint~gmáticas complemen-
Así, el ('.á.rácter discreto de la uni- tarias. Más aún, tal aproximación
dad semiótica· no . implica su inte- convergente -a la vez paradigmá-
gridad. Se ve, por otro lado, que tica y sintaimática- se muestra·
las cate¡iorías son lógicamente ante- fecunda en las investigaciones com-
riores a ·las unidades y que el pos- paradas* {no .s<iláa'"'n.ente lingiiíSticas,
tulado de Saussure, seg(1n el cual.. sino sobre todo mitológicas y· fol.
la lengua sólo está hecha de dife. klóricas, donde el establecimiento
rencias, se verifica de otro modo. de unidades narrativas es particu-
4. Aurique las querellas de las . larmente difícil): muy a menudo un
escuelas hacen aparecer frecuente.. segmento narrativo "ilo puede ser
mente como irreconciliables las reconocido como la transformación•
UNIDAD 422

de otro segmento.. Sino cuando su cas (sujeto, predicado, ele.) com·


sustitución provoCa la transforma· prenden, también, sus prOpias dis·
ción :Paralela de otro'. ·segmento que tribuciones y deben ser i11tcrpreta·
se encuentra vinculádo contextual· das como variantes combinatorias.
mente a él. . · 7. La semiótica discursiv~ no pue·
5. Si se parte deC Principio de la de dejar de encontrarse, en cual-
complementariedad d~ las articula· quier momento de su d*8arrollo,
dones paradigmáticas·. y sintagmáti· con el problema del establecimien-
cas, puede intentarse.:_dar una defi.. to de las un.idades dfscurSivas. La
nición más rigurOsa·-;:de la unidad segmentación del te."'to tiende a es-
poética, : recótiociendO': que, en este tablecer las secuencias*, e.s·. decir,
caso, se trata de t.Ín:á ·unidad sintag· las unidades textuales prQvisorias
má ticá cuya~ relaciOzies hlpotácti- que permiten iniciar el ari'álisis al
cas* (que instituyén" las jerarquías tratar de reconocer allí los,'(i.iferen·
en el 'interior de la ·Cadena sintag. tes modos y formas de org<ihización
mátici) serían puestas entre parén- (que pueden depender de: las es-
tesis en provecho sólci de las rela· , tructuras* narrativas como discur-
cioncs_ paradigmáticas (de tipo taxo- sivas); por su parte, las tÍnidades ·
nóinico ), las únicás· retenidas du- discursfvaS (cuyos límites, et) el pta- .
rante la lectura. La üUidad poética ha de la manifestación, pti.eden o
sería, pues, una especie de énfasis* no corresponder a las unidades de
paradigmático". cuyo· cl'e'cto es ocultar las secuencias) deben ser .conside-
·las relacionts sintakmáticas; esto radas como unidades semióticas que
explicaría la intuición . de R. Jakob· pueden estar dotadas de uña defi·
son, para quien lo poético residiría nici6n formal, conforme a:. las ar·
en la proyecCión del eje paradigmá· ticulaciones del texto estáblecidas
tico sobre el eje sintagmático. por la discursivización* de las es·
6. El problema de las unidades tructuras semióticas (de _.tarácter
de base se hace capital dÚrante la narrativo). Desde este puntó''de vis·
construcción del componente sin· ta. las unidades discursiW.s son
táctico de la gramática* (o de la unidades enunciadas, identificables
semiótica). T(es tipos. de unidades- y definibles por los modos particu-
clase ·-morfológicas, Sintácticas (o lares de Ja enunciación dis'_Cursiva.
.funciones*) y sintagmáiicas (én sen· S. La critica literaria ha recono-
ti do estricto}- puede'h ser elegidas cido -intuitivamente- desde .hace
como elementos para Ia descripción bastante tiempo, Ja existencia de·
sintáctjca, dando lugar'. a tres tipos tales unidides discursivas, .'.-Cuando
distintos de gramática• Sin tomar distingue, por ejemplo, el diálogo*,
partido por ninguna ·de elias; ·será ta descripción*, el relato*,'- el dis~
suficiente hacer notar que el prin· curso 'indirecto libre, etc:· Hasta
cipio de análisis distdt.>ucionat* no donde llega nuestro conocimiento,
está necesariamente Iig:ado a la for· ningún esfuerzo de teoriza'ción ha
ma sintagmática (toma cotrio Uni· sidb todavía emprendido pára do-
dades las clases de distribución) de tar a esas unidades de defiriiCiones
la sintaxis: las clases morfológicaS apropiadas y situarlas en el ·marco
(sustantivo, verbo, etc.}. y· sintácti- general de una descrlpci6n_;'.de los
UNIDAD· UNILATERAL (presupos. -)
dhicursos. Ahora bien, el examen relato, di<ilogo, con1cntario (para
nul.s atento de los procedín1icotos de otrtis y más numerosos ejemplos,
desembrague* y embrague"' -uno ver Maupass2nt de A. J. Greimas).
de los mecanismos esenciales Je la El interés de las lnvcstigaciones en
~nunciadón* y, en consecuencia, de este dominio no consiste solamente
la discursivización- ha evidenciado en la posibilidad <le proceder a un
la posibilidad de establecer una ti· nuevo fracck1r.anlie11lo del texto to-
pologia rigurosa de unldades dis· 1nado en su conjunto: de este mo-
cursivas, tomando como critt:rios, do, las unidades discursivas no
por un lado, los modos o las for· constituyen un dispositivo. lineal,
mas de desembrague y embrogue producido lm sucesión,. sino que
y, por otro, los principales tipos pueden ser consideradas· como
de discurso ya reconocidos. De esta transformaciones de unas. en otras
manera, las unidades discursivas (el «diálogo11 se convierte en «dis-
enunciadas se distinguirán segün su cusión narrada11, el «discurso di·
modo de producción, tal como ésta recto» se l?·ansforma en «indirecto
se efectúa: ya sea por desembrague libre», etc.); en cie:.rtos casos, se le
simple o por desembrague seguido reconocerá ur..a función de referen·
de embrague. ya por desen1brague cializaci6n (d '!relato» que se des·
enunciativo o enuncivo, ya, final· arrolla en ·xdiáJogo,, constituye el
mente, por desembrague y/o em- referente* interno de ese diálogo,
brague actancial y/o temporal y/o e inversamente, el «diálogo» a par-
cspadai. POr otra parte, las unida· tir del cual · s::: desencadena el «re·
des seÍ'án reconocidas teniendo en lato• aparece.. come;. una situación
cuenta que estos diferentes proce- de comunicacióu referencial); así,
dimientos pueden referirse a la di· tal \•e:c no sea imposible tratar de
mensióu prag1nática"' o cognosciti- establecer rc..laci9nes entre unidades
va"' del discurso, al discurso per- discursivas y unidades narrativas
suasivo"~ o interpretativo"' (en el (la «destripción» por Ja que comien·
caso de la dimensión cognoscitiva) za La ctteÍ-da de Maupassant, por
y, por último, desde el punto de ejemplo, corresponde, a nivel na·
vista de · 1os vertimientos semánti· rrativo, a lt, construcción del ac·
cos, al discurso figurativo"' o no tante"' colectfyo);· etc. Así pues, final·
figurativo. mente, semej::úue tipología, bien lle·
vada, desc1nbocada, · probablemen- ·
9. Este breve inventario de crite-
te, en una tipología de los discur·
rios de clasificación y definición de sos.
unidades discursivas no tiene la -+ Df:SEMBR.<1.GUE, E.\JBRACllE.
pretensión de ser exhaustivo: sólo
quisiera sugerir la posibilidad de UNILATERAL (PRESUPOSICION
una nu..:va diniensión para los estu· -). Fr. pré'SUpposition unilatérale,
dios discursivos (en el sentido res- ing. unilateral presttpposition. - La
tringido de este término}. Así, nos presuposición se dice que es unUa·
contentaremos con dar en este dic- teral (o sir;1ple) cuando Ja prescn·
cionario algunas definiciones de uni- da"' de W1 iénnine>'·· es necesaria
dades bien conocidas, tales como para la de <Jiro, pero no recíproca-
.
UNILATERAL (presup. -)- UNIVERSALES 424
mente. En la termihalógía de L. biertos» o ainventados» p9r el se-
Hjel.msiev se denomina selección*. miótic;o-, no se puede· ·dejar de
-> PRESUrcisICIÓN. percibir el vínculo estrecl10 entre,
por una parte, las condiciones ne-
UNIVERSALES. Fr. universaux, cesarias y suficientes paiá la exis-
ing. universals. . tencia de una semiótica·. {que se
l. En lingüística se entieride, ge. supone encontrar · «observa·ndo:o el
neralmente, por universales los con· objeto de conocimiento) y~ :por otra,
ceptos, categorías o rasgos, consi· los conceptos de que nos ·:Servimos
derados comunes· a todas las len- durante la construcción d~ la teo--
guas riaturales existentes. Esta defi.- ria semiótica {o lingillstiCa). Así,
nici6ri parte de una: interpretación los generativistas se· ven llevados a
errónea del principio de exhaustivi· constatar, en su práctica, ·'que sólo
dad* ·.y, por lo · tantQ, no es satis· puede hablarse de universáles a ni-
factoría: las aproximadamente 3.000 vel de Jas estructuras piofundas*,
lenguas conocidas nó han sido des· mientras que el análisis de Ja.1; es-
critas· en su totalidS:d ni según los tructuras de superficie invita a re-
mismos métodos; Por. lo demás, tal conocer especificaciones cada vez
corpus no comprende las lenguas más numerosas y diferenciá.s entre
desaparecidas ni aQ.uellas :que se las lenguas (incluso tan próximas
constituirán en el futuro. Sin em- sintácticamente una de oti:-a como
bargo,. las investigaCiones dedicadas el francés y el inglés} cada;:vez más
1
a establecer las características ccr
munes de las lengua$:. naturales no
son inútiles, aunque ·~.ólo pretendan
notables. La aparición de Ji semán.-.
tica* generativa es, desde '<lste pun-
to de vista, doblemente significati·
¡
la generalización*, ·Si.6. poder afir· va: en el plano teórico, es_f:a nueva
mar ta universalida4 .de uno u otro aproximación postula. un nivel pro--
elémento. . .. . fundo, de naturaleza lógicO~sl'.!mán·
. 2.. El problema. de los Universa- tica (garante de su univei'i>alidad) ·
les se plantea ya· dé otra mane.ra y, en el plano práctico, organiza
con la llegada de la semiótica, pues la actividad lingüística cOino una
ella establece una distinción ehtre especie de búsqueda (constatación)
los unlversat.!s de lenguaje -comu- de los universales.
nes a todas las semióticas, tanto 4. La cuestió"n de los universale.o;
lingüísticas como ·no . lingüísticas-, se presenta, entonces, como· un pro·
y los ·universales de l~ lenguas na- blema de metalenguaje*. Responder
turales que, ··adem~s. de las propie· a las siguientes preguntas: cómo,
dades comunes, tienen característi- con qué materialcs 1 qué je:rarqufa.s
. cas propias (como la doble articu- y qué certezas han construido un
lación*, la linealidad* de la cadena metalenguaje, es diseñar yli la con·
si~ta~ática, etc.). figuración general de los universales
3. A la vez que sé trata de su- semióticos. De esta manera; cuando
perar la problemática relativa al N. Chomsky propone disti~guir los
carácter inmanente* o construido* universales formales (concernientes
de las estructuras semióticas -a sa- a Ios tipos de relaciones Y reglas)
ber, si los universales son «descu- de los universales sustantivos {re-
425 UNIVERSALES

feridos a los elc!mentos y las cate- lo contradice-, los universales son


gorías}, hace dos cosas a la vez: establecidos· por declaración axio-
sitúa Correctamente el problema de matizan.te; esto deja en suspenso
los universales como un problema el problema de los "meta-universa·
especifico del metalenguaje formal*, les» {tales co,no aserción/negación)
y pla.T)tea implícitamente la necesi- que implica cl acto axiomático.
dad de un 1<meta-metalenguaje» ca- 6. La tarea dé la semiótica gene-
paz de analizar el metalenguaje; ral es doble.;: construir la teoria se-
puede .hacer esto, pues el criterio miótica -para .lograrlo, debe dete-
que le autoriza a reconocer dos ner en un roorilento dado {lo más
clases P.e universales (identificados abstracto y profundo que sea posi-
por nosotros con la categoría reta· ble) el andamiaje meta11ngüístico-
cidn/t~rmino, que consideramos co- y buscar JoS «meta~univcr.sales:ri,
mo universal) es jerárquicamente obligación d\! la que no ·puede e.xi··
superior· al nivel metalingüístico en mirse. Así se explica la aparente
que él sitúa los universales. paradoja de los universales: en
S. Todo sucede como si el meta- cuanto "objetos» sobre los que se
lenguaje, lugar de permanencia de ejerce el enfoque semiótico, son de
los universales uÜlizados por esta naturaleza semántica (por ello, sus-
o aquella teoría semiótica (o por ceptibles de ser sometidos al aná·
este o aquel lenguaje formal, lógi- lisis semántico); pero,· al mismo
co o matemático), estuviera domi- tiempo, pueden ser considerados
nado por un «meta-meta.lenguaje.. como formáles (desemantizados) y
(o mt~talógica) capaz de examinar- servir, por lo tanto, de materiales
los, reducirlos eventualmente a ca· a las construcciones sintácticas y
tegorle.s más .simples y probar su lógicas.
coherencia*. Sin embargo, los lo&i· 7. Siguiendo en esto a Hjelmslev,
cistas· polacos han mostrado, de cabe considerar que el análisis se.:
modo . suficiente, que semejante ar· mántico de un metalenguaje eón~
quiteclUra de «meta-metalenguajes», siste en defullr cada concepto para
puede . proseguirse -teóricamente- luego descomponerlo en cierto nú·
hasta el infinito. En consecuencia, merQ de conceptl)S constitutivos
resulta forzoso detenerla en un mo- más abstractos: la definición de ca.
mento. dado con un trabajo rudo- da uno de estos nuevos conceptos,.
mático*. Es curioso constatar que seguida por desconiposiciones más
L. Hjelmslev {cuyo constructivismo profundas. y. ll).ás abstractas, consti·
se hallaba atemperado -por estar ·. tuye, pues, .1Jna jerarquía conce¡r
vinculado al principio de empiris· tual que nc~csariamente culmina, en
roo*) ha podido decir que <1una un ·momento dado, con el recono-
operación con un resultado es lla· cimiento dé los· últimos conceptos
mada universal, y sus resultados no definibles. El inventario episte·
universales, si se afirma que una mológico* de los :indefinibles (tales
operación puede ser efectuada sobre coffio ~relación», <eOperación:ri) equi·
no importa qué objeto» (Prolegó- vale a una primera lista de univer~
menos, Definición 32). Así pues, den· sales semánticos. - Señalaremos, a
tro de una teoría -y Chomsky no título de P.jemplo, que t~ es el
lj
UNJYERSALES·UNIYERSO 426 !
procedimiento utilizado ·por nos· 2. En semiótica, se dehominará
otros para establecer. el marco de universo semántico a la i9talidad*
la estructura,¡. elemental de la sig· de las significaciones, postulada co-
nificación; solamente en un segun- 1no tal anteriormente a. SU articu-
do tiempo, mediante un nuevo pro- lación* (cf. la unebulosa» ·.-de Saus- 1
j
ceder y tras haber obtenido una sure). Tal universo· 'está dotado de
tipologia de las relaciones elemcn· . una existencia* semiótica·; · 10 que !
tales (relaciones «y... ~ y .i:o ..• o», excluye todo juicio ontoló_gico, e
contrariedad; contradicción, com- implica, por el contrario, st..i· inscrip· .
p!ementariedad), hemos considerado ción -en cuanto que es énfocado
1
a est!lS relaciones .y·. operaciones como objeto- en la :estruciUra que 1
(aserción/negación) i5omo, universa- une al sujeto cognoscente' con el 1
les, a.briendo así la yía para una objeto de conocimiento. Df¡~de este
formalización ulteriQr. punto de vista, se distin~µirán el
8. Al seguir el deSii.rrotlo de uno universo Individual y el :.ÍJniverso
u otro componenU: de la teoría se- colectlvo. ::
miótica, el semiótico puede ser con- 3. En un sentido más res.tringido,
dUcido a declarar (con mayor o el universo semántico puede ser de-
menor certeza* -pu~ ésta ·es gra- finido como un conjunto de siste-
duabl~ ·y no catego~1) corno uni· mas de valores•. Al no ¡x;]der ser
versales,. ciertas categ~rías u opera- aprehendido como significaTite sino
ciones, propias del cO.mponente en merced a las articulaciones i:diferen~
cuestión• Así, R. Jakob'son ha podi- ciadoras, el universo semáó..1:ico nos
do proponer que se ~flsidere como obliga a postular, a título Cié hipó-
universales fonológi~S~ a una do- tesis, estructuras* axiológi~ ele-
cena de cate~orías fémicas binarias. mentales que, en su calidad-! de uni~
De igual modO, a· fui. Cie estimular versales*, permiten empreoder la,
la operativida.d del_. componeD.te se- descripción*: así pues, el Úniverso
mántic'o. conSideramos universales individual es articulable, en"!:su ins-
ad hoc a las categorías vida/muerte tancia ah quo, según la categoría*
y cultura/natu~a. juzgándolas aptas vida/ muerte, mientras que" el uni-·
para servir como punto de partida verso colectivo Jo es según la de
al análisis de los universos* semán- natura / cultura. Estos dos tipos de
ticos. lllliversos siguen siendo abstractos*
a ese nivel: son susceptible~ -de ser
UNIVERSO. Fr. univers, ing. uni- figtirativizados*, homologando una
verse. . . ·. · . · · . u otra de sus categorías fundamen-
· i. En seUtido general, universo tales con Ja estructura fi&urativa
designa «el conjunto de· todo lo que elemental (que nosotros d~nimos
existei>, En e"Sta acep,ción, el con- como la proyección en el .Cuadro*
cepto de universo inCluye el de semiótico de los cuatro uetenientos,,
mundo que comprende ·Un mínimo de la naturaleza: fuego, ai~. agua,
de propiedades enunciadas (cf. el tierra). ·
mundo* natural): el conjunto de 4. Los dos universos, individual
mundos posibles constituye el uni- y colectivo, figurativizados <-o no,
verso. son susceptibles de ser as*;midos,
427 UNIVERSO- UNIVOCIDAD

interpretados y articulados de ma· suposicion<:s · sintácticas. Finalmen-


nera particular, ya sea por un indi· tC, ruientraS el univt;rso di! iliscurso
viduo o por una sociedad. El resul· comporta las refcreO.ciaS al mundo
tado de tales producciones selecti· «exterior», ·el n1icrouniverso es au·
vas y restrictivas* se denominará, tosuñciente y sólo admite las inter-
en el primer caso, unlvt!rso idlolec. textualidadés* y los sincretismos
tal* {y corresponderá a lo que ge- semióticos.
ncral.Jnente se entiende por «Perso- -.:; TOrAUDJ.O, ES1RUCTURA (elemen·
nalidad») y, en el segundo, universo tal}, lOlOLEC:TO, SOC!·JLECro, MICROUNI•
soclolectal* (correspondiente a tal VERSO, PSICOSilMiónCA.
o cual «cultura»). Estas definiciones
se sitüan en el nivel semántico pro- UNIVOC!DAD. Fr. univocité, ing.
fundo y pueden servir de punto unequivocal¡wss.
de partida para análisis semánticos l. Opues~a a la equivocidad o a
ulteriores que utilizarán, por ejem- la ambigüedad"", la unJvocldad es,
plo, el concepto operatorio de epis.- en sentido corriente, la caracterls·
temc* (definido como una jerarquía tica de unn denominación*° cuando
axiológica clausurada). ésta_ no tiene sino una sola acep-
5. Como es imposible que el aná- ción, cualquiera que sea el contex-
lisis examine el universo sem3.ntico to"' en que figure. En semiótica, y
en su totalidad, por cuanto éste considerando la dicotomía signifi#
equivale a una lengua dada (y, de. cante/significado*, se hablará, pues,
bído a este hecho, es coextensívo de la bi·univocldad propia de los
al concepto de cultura*), la prácti~ términos monosemémicos*: es una
ca semiótica ha sustituido el con. de las condiciones indispensables
cepto de universo por el de rnkro- para la buena construcción de un
unfvcrso* semántico, considerado metalenguaje* y, más generalmen-
comq" englobante y productor de te, de, todo discurso científico.
una clase de discurso. La noción de 2. En !a- medida. en ciue se reco-
microuniverso es comparable a la noce, frente a un lengu<tje dado,
de universo de discurso (de origen que sus dos plar.tls* (expresión y
lógico), aunque no se identifica.con contenido) tienen la misma tstruc#
ella: se considera que el microuni. tura y pÍ'esentan una relación uní·
verso da cuenta de Ja organización voca (según la cual, en el sentido
semántica del discurso, mientras usual del término, un elemento aca·
que el universo de discurso repre- rrea siempre el mismo correlativo)
senta la legítima preocupación por entre las funciones,., y los términos
constituir la contextualidad global de un pla."lo con !os del .otro, cabe
(tanto paradigmática como sintag. entonces afii-mar la conformidad*
mática) de un enunciado (cuyas de los dos planos y el estar en pre-
diincnsiones son las de la frase*), sencia de una sr.miótica manopla·
El Ínicrouniverso es el lugar de na* (juego'. de ajedrez, álgebra); de
ejercicio tan sólo del componente lo contrario, se trata de una semió-
sen1ántico; por su parte, el univer- tica biplaua* (por ejemplo, la len·
so de discurso contiene, al mismo gua natural) o pluriplana*.
tie1npo, las implicaciones y las pre. -+ MONOSEMlA, SEMIÓTICA.
iPiCO (es~acio -} 428
· . USO . usage, int. use. les que ella es capaz· de ·~roducir
··.l. L. Hjelmslev, tratando de pre- constituyen el esquema de ·ese uni-
cisar la dicotomía sat.issurlana len· verso; mientras que las expresiones
·· gua/habla, ha propue"Sto denominar efectivamente realizadas y inanifes~
á la lengua esquema lingüístico, y tadas corresponderán a su: uso: el
designar, mediante usos IJngiifsticos, esquema será llamado entonces
ciertos aspectos ese!J.ciales del con- abierto, por oposición al uso que
cepto de habla*" (eb. er que los here- es; en este caso, la clausura.
deros de Saússure han visto tanto ~ ESOUEMA, BABI.A•
.el eje sintagmático def lenguaje co--
mo las manifestaciones estilísticas UT<lPICO (ESPACIO -).'·Francés
individuales).· El uso; lingüístico es pace utopique, ing. utopii:. spa.ce.
considerado como el conjunto de Sub-componente del espació tópico
hábitos lingüísticos de una socie- y opuesto al espacio pariltópico*
. dad · dada; se encuentra entonces (donde se adquieren las competen·
definido como la sustancia* (de la cias*), el espacio utópico es en el
expresión*.. y, a la vez, del conteni." que el héroe* accede a la Victoria:
do*) que manifiesta el esquema lin· es el lugar donde se realli:an las·
güfstico (o ta: lengua). performances* (lugar que, .en los
· 2. Si es posible articular un uni· relatos míticos, es a menudo sub-
vei-so* · semántico Cualquiera con terráneo, celeste o subacuático).
ayuda de las reglas de una c.oinbi- ~ TÓPICO (espacio -), LOCALIZACIÓN
natorla*, puede considerarse que el ESPACIO-TEMPORAL.
conjunto de las expres.iones* virtua·
V

VALIDACION. Fr. validation, iog. probar que el sentido no reside sino


validation. - Se entiende por van. en las dif(Ji-encias aprehendidas ·en·
daclóÚ el resultado positivo de loS tre las palabras, plantea el proble-
pro<:e.dimientos de verificación•, es ma de la $Ígoificación* en términos
decir, cuando se comprueba que las de valores relativos· que mutuamenw
hlpótcsis• de trabajo o el modelo" te se deternünan. Ello ha permitido
elaborado están conformes con los elaborar el ccncept•J de formas* del
datos de la experiencia; en este sen· contenido*. (L. Hjelmslcv) e inter-
tido, el término es sinónimo de ade- pretarlo como un conjunto de ar-
cuación*. Para L. Hjelmslev -que ticulacion<'.s* sémic.as. Desde enton~
privilegia la empresa deductiva*-, ces, en lingüística;· el valor puede
no habría validación a nivel de la identificarse con el sema* tomado
teoría*, pues ésta no depende de la en una CBt~gorla* semántica (y re-
experiencia: el ~dato:io confirma (o presentable C-On ayuda del cuadro*
invalida) solamente la apl.j.cabilidad semiótico). - El término valor se
de la teoría. emplea en. estética ·(crítica pictórlw
-> VI!lUFlCA.CIÓN, ADECUACIÓN. ca) en un sentido ·relativamente
aprotimad,o. a su acepción lingüis..
'VALOR. Fr. valeur, ing. value. tica. - La expresión \lalor de ver-
l. El término valo~ se emplea, dad, utiliiaida en lógica para desig·
con acepciones muy variadas, en nar el ca..-icter que posee un enun-
diferentes disciplinas: en lingüística, ciado de ser verdadero o falso, debe
en lógica, en economía política, en interpretars~, en el mismo sentido,
axiologfa, en estética, etc. La teoría · como una organización de valores•
semiótica quisiera reunir las .dife.. en forma de categoría semántica.
rentes definiciones y conciliarlas, No obstailte, es muy restringida,
atribuyéndoles posiciones apropia· pues sólo se aplica a las ·modalidaw
das en su economía general. des verldictorlas* y no considera el
2. A F. de Saussure le cabe el desauollo de las lógicas ·modales;
mérito de haber introducido el oon· de hecho, toda lógica está determi·
cepto de valor l.lngUútlco; al como nada por Ja elección apriorística de
VALOR-VA~lABLE.

una categoríf:I. modaf (deóntica*, alé· función* de G. Duméz.il, lOS segun-


tica*, etc.) que le s'irve de morfo- dos dependen de la probiemática
logía* de base. · de las dos grandes funciones de
. 3. Una ca'tegoría &emántica, re- soberanía. Los valores ddcriptivos
presentada con ayuda del cuadro pueden divic.tirse, a su vez, •en valo·
semiótico, corresponde al estado res subjetivos* {o «esenciales,., uni·
neutro, descriptivo, de los valores dos frecuentemente con e1 sujeto
vertidos: respecto a su modo de -en las lenguas naturaléS- me-
existencia*, se dirá que se tratai en diante la cópula <>:Ser») y; 'valores·
ese .i;tlvel, de valores virtuales*.· Su objetivos* (o .caccidentales»,: atribui·
axiolQg¡zaciótl"' no aparece sino con dos por Jo general al sujeto con
el vettimiento complementario de ayuda del verbo .ctener» º¡·' de sus
la categoría ti.mica*\ que COIUlOta parasin6nimos). · ?
como , eufórica la deíxis* positiva, S. El reconocimiento d~.: progra-
y como disfórica la deixis negativa. mas* narrativos complejos'.~.ha con·
Por ser esta categoiía de orden ducido a la semiótica narrativa a
propioceptivo*, el vé"rtimiento tími· distinguir los valores de uso de Jos
co sólo es concebible en la medida valores de base: el plát~no que
en qué uno u otro ·:ialor -articu· el mono .trata de alcanzar es un
Jada por el cuadro--5. ·está en rela· valor .de base, mientras que el palo
. ción con el sujeto*,\ Es decir, los que irá a buscar para ejecutar ·ese
valores resultan axioÍogizadoS (y, de programa, no tendrá para_! él sino
virtuales, devienen valores actualf. un valor de uso, · :\
z:ados*) únicamente Cuando se les 6. El discurso narrativo;· se pre- ,
vierte dentro de IoS'''. marcos pre- senta comúnmente en formá de cir-
vistos para ellos en :i.ls estructuras culación de objetos de vri.lor: su
narrativas de.super.ficlé"" y, más pre- organización puede entonce$ descri·
cisamente, cu,ando s~; lés vierte en birse como una serie de transferen-
los aqtantes .:objeto*=;. qe los. enun· cias* de Valores. Un modo .·')?articu7 ·
ciados· de esfado*.__. En" esta 'instan- lar y complejo de transferencia eS
cia, Jos valores permanecen actuales el ciel intercambio"' de valores. Tal·
mientras se hallan disjuntos de los operación implica, si los valores in-
sujetos que no son, .entonces, sino tercambiados no son idénticos, su
sujetos según ··e1 querer*: la conjun· 'evaluación previa; un contrato fidu·
ción* con el objeto de valor, efec- ciario* se establece así eritre los
tuada· en provecho del~sujeto, trans· ~ujetos que participan en el ínter~
forma el .valor actual ·en valor rea•. cambio, contrato que :fija ·,~ valor
1

lhado*. ~ ., · de intercambio de los valores en


1· ~eden · .distinmili:se, 3,demás, juego.
· dos grandes ·c1ases. de valores: los
valores descriptivos (objetos consi.r VARIABLE. Fr. variable,:·.ing, va-
mibles y atesorables, placeres y «es- riable. - Se llama varlabl.lf al tér-
tados de·ánimo&1 etc.)' y los valores mino cuya presencia* no es condi-
modales* (querer, poder, deber, sa· ción necesaria para la preSencia de
ber ~ser /hacer): mientras que los otro término, denominado fuvarlan·
primeros dependen de Ja tercera te (o constante), con el que:.~tá en
43:1 VARIABLE. VERBAL

rclución*, En .::ste sentido, se puede t!n gramática "(donde· se dice que


rcconoCl'"...f que el térraino variable las variantes cómbinatorias están en
es el término presupo.o.iente, mien- distribución* complementaria), fue-
~ras que el invariante es el término ron generalizadas por Hjelmslev,
presupuésto. quien insistió ::;obre su aplicabilidad
~ INVÁiUAN.!E, I'RESUPOSlCIÓN. al análisis de l;\S figuras* del con·
tenido*: ios se-memas .::le un le.i:ema,
V.AB.IANTE. F.1:. va:riante, ing. yá· por ejemplo, podrlan ser considera~
riant. dos como variantes combinatorias.
l. De modo general, variantes son En una perspectiva generativa, las
las magrútudes* que, apareciendo unidades lingüísticas, al tendf".r ha~
en un mismo texto, se juzgan idén- cia la manifes~clón•, procederían
ticas una respecto de la otra (intui- primero a una dispersión en vaiian~
tivamente, se dice que se trata, en- tes combinatorias para luego. re.ali·
tonces, de una <1tnisma• palabra o zarse en variahtes libres.
de una ~misma» frase}, La identifi- ~ CLASE, UNtQ:AD.
cación*. de las variantes depende,
así pu~. del procedimiento de re- VENGANZA. Fr. vengeance, ing.
ducción* que permite c;onstruir, a vengeance, - Tal como la justicia*,
partir de las ocurrencias*, unidades
la vengaw:a es un.a fomia de retrl·
lingüístícas (o, más generalmente, bución* negativa (o castiio), ejerci·
semióticas) en tanto que clases*. da sobre la dimensión pragmática*,
En principio, las variantes se reco- dotada de un poder-hacer absoluto;
nocen Cuando su sustitución* en sin embargo, ·ambas se diferencian
uno de los planos* del lenguaje no por requerir, la primr.ra, un Desti·
provoca .cambios en el otro. nador social y, la segunda, un Des-
2. Se distinguen dos tipos de va· tinador individual.
riantes: :: las variantes combinato- "-> CASTIGO, ·s.llic16N".
rias ( .. <fontex.tuales" o «ligadas..)
-Hjelmslev propone llamarlas va·
rledadea-, que son magnitudes que VERBAL. Fr. verbiil, ing. verba!.
·contraen una relación de presupo- 1. Complementarlo y opuesto al
sición* recíproca con aqt.iellas otras. hacer pragmático* qu.e c.oncierne a
situadas en la misma cadena sin· las relaciones del hombre con los
tagmática; las variantes libres (lla~ objetos del mundo, el hacer* comu·
madas también «estilísticas.11), denc>- nicativo atañe! a las . relaciones in·
IDi.nadas varia clones por Hjelmslev, tersubjetivas y Pone ·. en juego ya
que no están ni ligadas al contexto, sea objetos Pragmáticos, ya objetos
ni sori presuponientes ni presupuC:s· cognoscitivos"'.: En este último caso,
tas. y según ·el éanal utilizado, tomará
3. Estas distinciones -Y los pro- la forma verbat ··o la forma somá.ti·
cedimientos que las soportan- han ca (gestos, mímicas, actitudes, etc.).
sido elaboradas por -primera vez en A su vez, el hacer comunicativo
fonolo&{a (donde han provocado, en· verbal se stibdivide en oral y es--
tre otros, un debate sobre la neu· cito, segán ei signift.cantc (fonético
traliz.ación*); introducidas después o. gráfico) en,.i)1e:ado.
VERBAL· VERlD1CCióN 432
2. : Eri los· disc~os nariativos, puede interpretarse, a·nte- ·todo, co. :·
el plano' ·verbal que toma forma, mo la inscripción (y la l~tura) de
por ejemplo, en et. :wáloio* podrá las marcas de veridicción, gracias
ser·con~derado Co~ó una expresión a las cuales el discurso-enunciado·
figurativa* de la d.ünensión cognos-- se exhibe comet verdadero- o faJso,'
citiv"a*, · · :·.: · mentiroso o secreto. Este· dispositi· .
:--+ sowTiro, HACER."· .. vo verldictorio, aurique asegura ·en·
dicho plano cierta coher~cla dis··.
VERDAD: Fr. vbité, ing.· truth.- cursiva, no garantiza de :ningún m()-
La verdad designa al térmiDo coril· do la transmisión ·de la v~rdad que
plejo* compuesto P,oi- l6s térrilinos depende exclusivamente de los me·
ser y parecer situados en el 'interiOr canismos epistémicos* dispuestos
del cuadro semiótico de las modall~ sobre los dos extremos de: la cadena
dad~s verldictorias, en el eje·. de !Os de comunicación, en las:'.'-lnstanclas ··
contrarios*~· Es títil subrayar que lo del enunciador* y del en,;mciatario,
«Ver~adero• está ·situado en el seno o mejor ·a<m, de Ja coordinación
mismo del· discurso,. pues es el re- conveniente de esos · m'ikanismos.
sultado de las operáciones de verl· Ciertamente, el creer· v~rdad del
dicción, con lo que se excluye toda enunciador no basta P3#. la trans-
relación (o toda hofu.ologación) con misión de la verdad; el eiiunciador,"
un referente* externo. . por más que diga «Sé,., :~estoy se-
-)- VBRIDICTORIAS (modalidades -), guroxi, «es evidente• cort respecto
VERIDICCIÓN, ~ADRO ma6Ticri. al objeto de saber que ·.comunica, l
no le garantiza el ·ser recafdO por el l
VERIDICCióN. Fr. véridiction, in· enunciatario: un creer-verdad debe
glés veridiction. instalarse en los dos ext*emos del.
1. La teoría clásica de Ja comu· canal de la comunicación· y a este
nicaclón* se ha irit~esado·· siempre equilibrio más o menos j!Stable, a ·
por · 1a transmisióÚ, «correctai> de este entendimiento" tácitó de dos ·
los mensajes*, por' la conformidad cómplices más o menos cOnscientes, '.
del mensaje recibi9.o· con el mensa· lo denominamos contrato* de verl··
je emitido, pues et pÍ'oblema de su dlcclón (o contrato enunCívo). '
t
verda(I no era otro que el de su 3. Sin embargo, el buen funcio-
adecuación .en relación con lo que namiento de. este coiltrato: depende, t
ellos no son, es decir, con su refe- en definitiva, de la instancia del t
rente*; Al postul~ 13. autonomía, el enunciatario para quien todo men-
carácter inmanente*' de todo len· saje recibido ·-sea cual ·,fuere su 'd
guaje y, al mismo 1,tiempo, la impo- modo veridictorio- .se présenta co--
sibilidad de recurrir.. a un referente mo una manifestación*, a ..partir tle · ·
exter:no, ·1a teoría s..~ussurl3na obli· la cual le otorga tal o cua'.I estatuto
gó a. la semiótica · ~ 'inscribir entre a nivel de la inmanenci~:" (estatu-.
sus preocupaciones _l¡p ya el proble- yéndoio sobre su ser o m· no-ser). d
ma de Ja verdad, sfu.o el de decir· Aquí aparecen diversas actitudes e
verdad: el de la vérldJ.cclón. epistémfcas colectivas, cultura1men; e
2. Integrar la prbbiemátiea de la te relativizadas, concerni~tes a 'Ja.;. e
verd~d en :el discuiso enunciado jnterpretación veridictorl~. · de los ·
433 VER!DlCClóN·

discursos - signos. Así es como cier· en el primer caso··se supone que el


t~s soCiedades aprovechan, por lenguaje se ciñe inocentemente a
ejemplo, la. materialidad del signi· las cosas, en el s.et;undo, que cons·
ficante* para señalar el carácter tituye un simulacro .engañoso des--
aoagógico. y verdadero del significa· tinado a ocultar una realidad y una
do"' (la recitación, canto llano, de verdad subyaceni~s.
los textos ·sagrados, la distorsión 4. ·Frente a este +·~lativismo cul-
rítmica de IÓs. esquemas de acentua- tural que engendra diversos siste-
ción, por ejemplo, insinúan la exis- mas de connotaciones* verldtctodas1
tencia subyacente de otra voz y de se e.Sboza una reformulación de la
un discurso <i:verdadero• que ella problemática de ~ «verdad11: al no
sostiene). Por otro lado, la reifica- ser considerado ya como represen·
ci<>n del :¡;ignificado (por ejemplo, tacióxl de una veriiad que le sería
cLmndo en el discurso jurídico se e..'Cterlor, el discurso no puede CQn·
constituye el referente* interno im· tentarse tampoco con la simple ins-
plícito, esto produce la impresión cripción fle las marcas de· veridic·
de que las normas jurídicas están ción. La ·«Verdad», para ser dicha
fundadas en una «realidad:r>} se pre- y asumida, debe desplazarse hacia
senta como un riiedio para valori- las instancias del enunciador y del
zar el deCir -verdad del discurso. enunciatario. El .enunciador ya no
Otros prc;>Cedimientos discursivos es considerado productor de· cliscur·
q:>ntribuyeu también a producir el sos' verdaderos, sino de discursos
mismo efecto: así, el diálogo* inser-
qti.e producen un efecto de sentido
·tado en un discurso narrativo dado «verdad11: desde éste pu.rito de vis·
referencial!7..a a este último, mien· ta, 'la producci6a' d:c Ja -verdad CO·
tras que el relato «ficticio» descm·
bragado* a partir de este diálogo,
.rresponde al ejt·rcicio di: un hacer
cognoscitivo particular,· el hacer pa·
hace .,real», la situación del diálogo.
Como se ve, la creación de las ilu·
reccr verdad, que puede ser deno-
:;iones referenciales sirve siempre
minado, sin ning;ín maiiz peyora-
rativo, hacer :persuasivo"".
para producir los efectos* de sen·
ti do «verdad... - Lo que ·es verdad S. Ei hacer persuisivo,. ejercido
pai;:a el significante y el significado por el enuncladqr, tiene. una :;ola
tomados por separado, lo es tam· finalidad: buscar la adl1esi6n · del
bién cufiltdo se trata de la inter· enunciatario, co~diciona~a por . ,el
pretaciótÍ metasemiótica de la ver· hacer interpretativo* que éste, a su
dad de los signos* mismos. Asf, vez, ejerce•. La construcción del si·
las aproximaciones denotativa (N. mulacro de verdad; tarea esencial
· Chomsky) . o connotativa (R. Bar· del enunciador, está al mismo tiem-
thes) del le.nguaje descansan en dos po tan ligada a .su propio universo
'~mitologías,. y dos interpretaciones a:dológico como ru del enunclatario
diferentes de la. relación reconocida y, sobre todo, a.,Ja rel)resentación
entre el lenguaje como manifesta· que éste se hace ciel universo del
ción (o eventualmente, «representa· enunciador. Se comprende entonces
ción»} y la inmanencia (el referente que, en tales <:ond,iciones, el con·
.. verdaderoJ>) por él manifestada: cepto de verdad, se encuentra <".ada

;>!>MIÓTlCA. - 28
VERIDICCION • VERIFICACION 434
vez más sustituido ~ la reileX:ión actorial. un solo sujeto del: la enun·
epistemológica- pal"." el de eficacia*. ciaclón* -<:ansiderado conlo actor*
6. No obstanfe,·,··seria erróneo que sincretiza e integra a l9s actan·
vincular el problema. de la veridic· tes enunciador* y enunciatario-
ción con el de la estructura de la. cumple con intermitencia:' los dos
.comunicación intersubjetiva. Para actos productores. .; .. . . . ..
nosotros,· el enuncia:aor y el enur.· 2. Al predicado modal j :-el ser .
ciatario. Son acta.nieS* sintácticos del ser-, considera_do como la far·
que Pueden Ser -y .í9 son a menu· ma dCsembragada* del s0:b.er·ser1
do- ·compr,endidos· .:s?i<.?I'éticámente puede tratársele como una categ<r
·'por un soló' actor, ~l··sujeto de la rfa* modal y ·proyectársele. en tf
enunciación _.(o el· sú.jeto hci.blante). cuadro* semiótico: ·
La Persuasión y la'"--interpretación
(el hacer.. creer y el creer verdad) · verdad · ·J•.
son procedimientos .sintácticos ca·
paces de dar cuenta"·de· u.tia «bús·
queda interior de la verdad>, de
.¡¡ {
~
serxparecer},g
. . , B
una· <$;reflexión dialéc#ca> qtie pue- ~ tuJ-parecer no-~.~ a·
de o no manifestarse en· 'forma de
discursos. e<jil prOp?sito , cientffico, falsedad "
filosófico o .poético.. .
~ VERIDicroRIAS (:0:i.odalldades -), Como se ve, la categoría de Ja ,
EPISTáacAs (modalidades -), PER· veridJcclón está. constituida por la
SUASIVO (hacer -), ;.INTERPRETATIVO puesta en cottelación de 4t1s esque- :
(hacer -). COMUNICACIÓN, SOCIOSE.\!:IÓ- mas•: el esquema parecer/ no· pa·
Tlc.\. recer es llamado manifC-Stáción* y
el de ser/ no-ser, 1nmanen~ia*. En·
VERIDICTORIAS (MODALIDA· tre estas dos dimensiones de la ex.is·
DES-). Fr. modalités véridictoites, tencia se cumple el «jueio de la
ing. veridiatory (neol.) modalities. verdad:.: inferir la existenéia de. la
l. Cuando· un enunciado de esta 4
inmanencia a Partir de la .manifes· · ·
do• puede determinar Y modificar tación es estatuir sobre el ser del · ..
a otro enunciado de: estado, el pri· ser. ,
mero corresponde a· un enunciado · 3. La categoría de la veridicción
modal: su predicado .existencial no se presenta, as!, como e1
marro
se refiere al «estado;.. de cosas:. des· donde se ejerce la activi~ad cog-
ctito ·por el segundo ·enunciado, sino noscltiv'a de naturaleza ePistémica*
únicamente a la v3lidez de su pre- que, mediante· diferentes::' progra·
dicado que es la re.ración de jun· mas modales, trata de alcanzar una
ción*. En el plano actancial es ne-- posición verldietorla, capaZ de ser
cesarlo distinguir; pira cada enun~ sancionada por un juicio épistémi·
ciado,· dos sujetos ).ndependientes: co definitivo. · ¡..·
un sujeto modal y Un sujeto de es- ~ MODALIDAD, VERIDICCióN.:·,
tado (el sujeto productor del enun.-
ciado de estado lo sOi:nete a la san· VERIFICACióN. Francés ·vtrifica·
ci6n ~e. otro sujeto).,, En .el plano tion~ ing. verification.
435 VERIF!CACION ·VEROSIMILITUD

l. Condición sine qua non de así es como la verificación de la


toda teoría* (de tipo hipotético-de- coherencia* podrá efectuarse en el
ductivo}, la· verificación es el con- nivel epistemológico*.
junto de. procedimientos por los -+ ADECUACIÓN, J:"ALSACIÓN, VALIDAClÓN.
que las·. hipótesis* de trabajo son
confrontadas con los datos de la VEROSIMILITUD. Francés vrai-
experiencia. Así, en el dominio de semblable, ing. -verisiniilitude.
las ciencias de la naturaleza, la 1. En semiótiCa literaria*, la no-
experimentación, a la que se recu· ción de vetoslmillt:u.d refleja la pro-
rre frecuentemente para observar blemática general de la veridicclón*
Ja conformidad o la no-conformidad (del decir verdad} discursiva. La
eO.tre la ~eorí¡:i. y el 4:dato~, permite teoría no cieniliica de la literatura
confirmar~ invalidar o corregir los · la incluye en su aparato co!lcep- .
inodelos* establecidos. tual para explicar ·1as producciones
2. En las llamadas ciencias hu· literarias euro9.eas de la edad mo-
manas, la verificación se muestra a derna; pero, desde este-último pun-
:nenudo problemática, y más cuan- to de Vista, su utilización, iedu·
do ciei:tc:is modelos resultan difícil- cida al anál.isi" de los discursos
mente verificables; de ahí, a veces, literarios de este determinado con-
la sobreabundancia de modalizacio- texto cultural, · debe rechazarse co-
nes epistémicas* en el discurso con mo la expresión de un euro· cen-
propósito científico. En el mejor de trismo inadmisible. En efecto, el
los casos, deberemos contentamos emplea de la noción de verosimili-
con el principio de adecuación"' que tud en este c;1ntexto cultural es
rige la relación entre la teoría y su previsible solz.niente tras una rede-
aplicación: en el peor de los casos, finición que la sitúe como una va-
estaremos limitados a los procedi- riable tipolót~ka en el marco del
mientos· de falsación (cf. los con· modelo general de la verificación
tracjemplos que salpican los dis· discursiva. :· .. -.
cursos de los generativistas}. 2. La verosimilitud, en cuanto
3. En semiótica, y desde un pun- concepto intra-<:.ultural, está vincu-
to de vista operatorio*, la verifica- lada a la ccncepción del discurso
ción puede . realizarse ya sea por (y, de modo Inás general, a la del
saturación del modelo (cuando una lenguaje en Sl,1 conjunto) como :re-
parte del corpus* ha servido para presentación más o menos confor..
elaborar el modelo, la otra sirve roe con la «realidad» socio-cultural.
para confirmarlo), o por sondeos Esta .actitud que adopta una cultu..
(donde· se retienen, de la segunda ra con respecto a sus propios signas
parte del corpus, sólo algunos trcr -actitud metasemiótica ..de . orden
zos juzf:adas intuitivamente* repre- connotativo*- es considerada por
sentativos). algunos como uno .de los princip~
4. La· verificación puede versar les parámetros que penniten prever
no solalnente sobre la relación de la elaboración de una tipolog(a de
lo «construido» can lo «dado», sino las culturas*. La verosimilitud con- .
también sobre la organización in· cierne, entouccs, más Cspecfficamen-
tPrna de una teoría ya elaborada: . te a la organiza.ció~ sintagmática
VEROSIMILITUD· VIDA 436
de los discursos, en ctianto que procedimiento en sentido · inverso:
esta última «rep.íes'6lta• los enca- a partir de las estructuras~ prOfun·
denamientos '. estereotjpados -y es- das y abstractas, se conci~e el re-
perados por· el entin:ciatario*- de · conido generativo*. como '.·campo;-·.
los acontecu'.oientos y :de las aCcio- tando, en cada instancia o· nivel de
nes, de sus fines Y de sus medios. profundidad, estructuras sintáctica$
Dentro de esta conce~ción, la ·vero- y vertimientos semánticos : que les.
·similitud sirve de criterio veridic· sean paralelos y conformes~· .
torio para evaluar lo~ discursos na- 2. La noción de carga semántica,
rrativoS de carácter figurativo (y no que determina un estado, ·es próxi-
'sólo los discursos literarios), exclU· ma a la de vertimiento (quC· designa
yendo los discursos normativos (ju. una opeiación). En partí~, se
rídico, estéti&, et~.), Jos discursos notará un hecho lleno de
conse-
científicos Y/más ·generalmente, los cuencias, Ja distribución d~igual de
discursos donde pNdomina lo no la carga semántica en el··; interior
figurativo y abstracto (discurso fi. del enunciado: la carga pUCde con·
losófico, económico, .etc.). Por otra densarse tanto sobre el suj~to* («el
parte, se ve que en esta perspectiva 2apatero trabaja:.) como ·Sobre el
el discurso verosúnil no · es sola· predicado~ (.aél hace zapatos•), etc.,
mente una representación· «corree· lo que permite distinguir ios con-
ta,. de Ja realidad socio· cultural, tenidos semánticos, propiamente di· ·
sino también un simulacro montado chas, de las categorías* semánticas
para hacer parecer verdad, y que utilizadas como categorías grama.ti•
depende, por ello, de la clase de los cales, y, al :mismo tiempo,.. proyec-
discursos persuasivos*~ tar una distribución diferente de la
~ ~DICCIÓN". · carga semántica al construir, por
ejemplo, roles temáticos* .o proce-
VERTIMIENTO SEMANTICO (o sos tematizados que, ellos solos;
INCORPORACióN SEMANTICA). reúnen todas las propiedades se.
Fr. investissement sirriántique, ing, mánticas del enunciado.
semantic investment.:' -+ CARGA S2MÁNTJ:CA,
1. El vertimlento semántico es un
procedimiento por el · cual a una VIDA. Fr. vie, ing. life.
estructura sintáctica Qada se le atrl· l. Vida es el término positivo*
buyen valores* Seillánticos ·previa· de Ja categoría* semántica vi.da/
mente definidos. El añálisis de W1 · muerte que proponemos CQDsiderar
enunciado (frase o discurso) permí· como hipotética-universal, P9r esti·
te reconocer, determinar y organi· mar que puede suministrar µna prl·
zar ·unidades s~tiéas de cual· mera articulación del universo* se-
quier ·dimensión (seriµs, sememas, mántico individual (correspondiente
temas, etc.) y; en coriSecuencia,'ha· a la categoría cultura / natura dél
blar de un componerite sero.á.ntico U.lliverso semántico social. j!_n este
autónomo; r~Iativamente indePen· sentido, vida/ muerte, ·CU:YO. :eje* s&
diente del compoD.eriti! sintáctico. mántico puede denominarse· «exis-
De ahí que también, ci:i la perspe<::· tencia•, es considera.da como una·
tiva generativa, Pueda preverse un estructura* elemental temát;lca.
437 VJDA-VOCABUI.ARIO
2. La categoría vida /muerte es VlRTUEMA. Fr. virtueme, iDglés
susceptible de ser connotada por la virtueme. - En la terminología de
categoría túnica*. Su homologación B. Pottier, el s~mem.a* -equivalen-
·canónica consiste en emparejar los te a nuestro lexema*- comprende:
térn1inos positivos vida + euforia y a) en el planC:. denotativo, sernas..
los negativos n1uerte + disforia; el específicos (o seinantemas*) y sernas
asumir i<liolectalme.nte,,. estas cate· genéricos (o clasemas~);
gorías pc•mitc considerar una com·
b) en el plano connotativo, el
binatoria . de homologaciones posi·
vlrtuerna, que es defi..nido como eJ
bles (vida + disforia o vida + afo·
conjunto de los semas connotativos ·
ria, por ejemplo) que determinará
propios de un individuo, de un gru-
la originalidad* semántica.
-?- UNIVOlSO, ESTRUCTIJRA, tJNlVE.RSA• .
po social o de una sociedad.
LES, TfMICA (categoría -), OR.lCINALI· Esta distribución nos parece es·
DAD SEMÁtirICA. pcciatmente dificultosa, pues presu-
pone que el problema de la deno-
VlRTUALIZACION, Fr. virtualisa. tación* y de la connotación* esté
tion, ing,¡ virtualfa:ation. ya resuelto y que, correlativaxr,ente,
1. En ..C.1 marco de los modos de estén ya disponibles los · pr~­
existencia" semiótica, la categoría· mientos de anáij.sis quC permitan el
virtual/ actual permite caracterizar reconocimiento-te (nó sólo intuitivo)
la relación del sistema* con et pro- de a.n:ibos niveles· del lenguaje.
c-eso•, de la lengua* con el habla te. ' -'> SBMA, SE.MEMA, Dfil:l'.OTACIÓN, CON•
En oposición a la existencia actual, NOTACIÓN:.
propia d~l eje sintagmático del len·
guaje, l<Í exlstencta :virtual caracte- VOCABtJLAIUO. Fr. vocabulaire,
riza al aje paradigmático: se trata jng. vocabutary . ....:. El vcca.bularlo es
de una existencia in absentia. la Üsta exhauspva d.e las palabras*
2. De~de et punto de vista de la de un Corpus"' (o de un texto), por
semiótica narrativa (que ha susti- oposición al léxico entendido como
tuido la pareja virtualiza.ción/actua· el inventario de todas las lexías"
· lización por la articulación ternaria de un estado de lengua natural. No
yirtualización / a.ctualitación / rea· obstante, el término «palabra• (re-
litación), la virtuallzaclón consiste emplazado, a ·veces, por vocablo)
en plantear sujetos* y objetos* an· permanece ta.d.~via ?mbiguo, inde-
tes de toda junción*, o inversamen· pendientemen-te '~ las dificultades
te, en suprimir pura y llanamente que provoca ,~u definición. Por esta
esta relación: a la función* -sólo razón, el vccabulario puede ser,
en el marco de los enunciados de o bien la su.nin. de todas las pala·
estado*..:._ le cabrá operar la actua· bras ·ocurrencias de un texto, o
lización de sujetos y objetos por bien la suma de las clases de OCU·
medio de la disjunción*, y su rea- r.renclas* (que reún~n todas las
lización.,,. mediante la conjunción*. ocurrencias jdeotificables), o por
-+- ACTUALIZACIÓN, 'EXISIBNClA SEMI(}. último, el coI!junto de las palabras..
TICA, VALOR, etiquetas, que ..:.omprenden todas tas
VOCABULARIO·VS 438
formas gramaticalés (por ejemplo, convencio.nal utilizado pafa designar1.
•ir», •iré,., •va:.), la relación de oposición'\ cuando
-'>" l..tx!co, r..md.A, -·~Al.AllRA. ésta todavía no se encueiitra deter- ·
minada. En el mismo ·!sentido y
VS. - Abreviación del latín ver- más frecuentemente, también se em-
sus (=contra), vs·.es un símbolo* plea la harta oblicua! 1: .

zo
tique
po d
tuido
(alre<
sus l
zon J
dad~
ta ce
lació1
z
ZOOSEMlóTICA. Fr. zoo· sétnio- por ejemplo), como p;:::radigmática
tique, ing. zoo·semiolics.-El cam- (en las_ abejas). Al integrar los estu·
po de 1a :z.oosemiótlca está consti- dios sobre la organizl!ción de las
tuido por los lenguajes animales sociedades animales ton los concer-
(alrededor de 600) que, aunque en nientes al aprendizaje del simbolis-
sus forn1as primitivas se caracteri- mo en los primates, la Zoasemióti-
zan por una comunicación con ayu- ca está llamada a cdnfigurar un
da de señales*, pueden alcanzar cier- verdadero dominio st;miótico, auti)..
ta complejidad, tanto en su articu- nomo y prometedor.
lación sintagmática (en los pájaras, ~ LENGUAJE.
Gre
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fNDICES
!NDICE DE ENTRADAS

Abstracto, 21. Antonimia, 36.


Acción, 21. Antropomorfa (sintaxis -), 36.
Aceptabilidad, 21. Antropónimo, 37.
Acronía, 22. Apertura, 37.
Actanclal (rol, estatuto -). 23. Apropiación, 37.
Actante, 23. Arbit.rariedad, 37.
Acto, 25. Arbol (o gráfica arborescente), 38.
Acto de le11guaje, 25. Archilex.ema, 39.
hctor, Z'/. Armazón, 40.
Actorlalizaclón, 28. Articulación, 40.
Actualización, 29. As,emanticldad, .<O.
A<iecuaclón, 29. Aserción, 41.
Adquisición, 30. Aspect•Jalización, 41.
Adyuvantt>:, 30. Attibuclón, 43.
Afirmación, 30. Ausencia, 43.
Aforla, 31. Autómata, 43.
Agramaticalidad, 31. Autonomía, 44.....
Agresor, 31. Autorización, 44.
,Uéticas (modalidades -). 31. Auxiliante, 44.
Alfabeto, 32. Axiolog{a, 44.
Algoritmo, 32. Axiomática, 44,
Alteridad, 33.
Ambigüedad, 33.
Anáfora, 33. Base, 46.
Análisis, 33. Binaridad, 46.
A11alogfa, 34. Biplana (semiótica -), 47.
A.oclaje, 3S. Búsqueda, 47.
Anterioridad, 35.
Anti-destinador, 35.
Anti-donador, 35. Cadena, 48.
Antífrasis, 35. Calificación, 48. ·
Antítesis, 35. Calificante (prueba -). 48.
SEMlóTICA ·DICCIONARIO
46
Campo semántico, 49. Confrontación, 80.
Camuflaje, 49. Conjunción, 80.
D•
D
Canal, 49. Conjunto, 81.
D
Carencia, SO. Conmutación, 81.
Con.notación, 82.
rJ
Carga semántica, 50.
D
Castigo, 50. · Consecuencia, 83.
Constante, 84. D
Catáfora, 50.
D
Catálisis, 51. Constitucional (mode1o -) •.84.
Categoría, 51. Constituyente, 84. e
Categorización, 52. Construccl6n, 84. B
Certeza, 53. Contenido, 85.
Científica {semiótica -). 53. Contexto, 86. l
Cientificidad, 53. · · Contingencia, 87. r
Cierre, 54. Continuo, t'/. l
¡
Clase, 55. Contradicción, 87.
Clasema, 55. Contrariedad, 87. ¡
Clasificación, 56. Contraste, 88. ¡
Codificación (cf. [En}-cociificación), 57. Contrato, 88. 1
Conversión, 90. ¡
Código, 'Sl.
Coerción, 58. Ca-ocurrencia, 91. l
Cognoscitivo, 59. Co-referencia, 91. ·
Coherencia, 61. Corpus, 92.
Colectivo, 62. Correlación, 93.
Combinación, 62. Cosmológico, 93.
Combinatoria, 63.. Creatividad, 94.
Comentn.rio, 64. Creer, 95.
Comparada (lingüístjca -) , 64. Cronónimo, 95. .
Comparada (mitología -) , 65. Cuadro (o cuadrado) semiótico, 96.
Comparatismo, 66. Cultura, 99.
Compatibilidad, 67.
Competencia, 67.
Complejo (término -). 70. Deber, 101.
Comple1nentariedad, 70. Decepción, 102.
Componencial (análisis -). 71. Deceptor, 103.
Componente, 71. · Decisión, 103.
Comprensión, 71. Decisiva (prueba -), 103.
ComtUticación, 72. Deducción, 104. ·
Conativa (función .,-), 75. · Definición, 104.
Concepto, 75. Deíctico, 105.
Concomitancia, 76. Deixis, 106.
Concreto, 76. Delegación, 106.
Condensación, 76. Demarcador, 106.
Condición, 77. , Denegación, 106.
Conector de isotoPfas, n. Denominación, 106.
Configw-ación, 77. Denotación, 107,
Conformidad, 79. Densidad sémica, 108.
INDICE DE ENTRADAS

Deónticas (modalidades -). 108. Economía, 135.


r:eontologío., 109. Efecto de sentid<J, 135.
nenvación. 109.' Efic3.cia, 136.
D\:sambiguaroiento, 110. Eje, 136.
Dfuscaliñcación, 110. Ejecución, 136.
Descodi.fia\ción, 110. Elasticidad del :iiscurso, 136.
:descripción, 110. Ele.mental, 137.
qescriptivo, 111. Ele.mento, 137.
'Oescubritniento (procedimiento de Eliminación, 13l!.
!-·), 112•.. Elipsis, 138.
Emb~gue, 138.
Dcsem.antización, 112.
Desembrague, 113. Emisivo (hacer -·), 141.
Deseo, 116. Emisor, 141.
Desequilibrio, 117. Empirismo, 141.
Designación, 117. Encajadura, 142.
Encatalizar, 142.
Desposeimiento, 117.
(En)codificacióu, 142.
Oestinador/destinatarlo, 117.
Desviación, 119. Enfasis, 142.
acronía, 120. Engaño, 143.
Engendramiento, 143.
E 'á!ogo, 121.
iccionario, 121.
Dícotonúa, 12:.
Entidad lingüú;Hca, 143.
Entonación, 143.
Enunciación, 144.
j}iégesis, 122.
Enunciado, 146.
f)ifcrencia, 122.
Enunciador/enlmciatarlo, 148.
Dimensión, 112. Episteme, 148.
Dimensionalidad, 123.
Epistémicas (m::.dalidades -), 149.
Piscontinuo, 124. Epistemología, 150.
·-Piscreto .(-a), 124. Equilibrio, 150.
Discriminatoria, 125. Equivalencia, 151 •
.biscursivización, 125. Escritura, 151.
Discurso.' 126. Espaciali?.ación, 152.
Disforia, 130. Espacio, 153.
Disjunci6n, 130. Esquema, 154.
Distcnsivida<l, 131. · Estado, 155.
·Distinción., 131. Estar/ser (cf. Ser/estar), 155.
Distintivo (·a), 131. Estilística, 155.
Distribución, 132. Estilo, 156.
División, 132. Estrategia, 157.
Dominación, 132. Estructura, 157.
Dominancia, 133. Estructuración. 163.
Don, 133. Estructuralismo, 163.
Donador, 133. Etiqueta, 164.
Duplicación, 134. Etnosenliótica, 164.
Duratividad, 134. Euforia, 166.
SEM!OTICA - D!CclONARIO

Evento, 166. Glorificante (prueba -). :2cx>. 47


Evidencia, 167. Glosemática, 200.
Exhaustividad, 167. Gramática, 200. In
Existencia semiótiCa.• 167. GramaticaUdad, 201. fo
Expansión, 168. Gramema, 202. Ir
Expectativa, 169. fr
Explícito, 169. Ir
Expresión, 169. Habla, 203. Ir
Expresiva (función .•,,-.), 170. Hacer, 204. h
Extensión, 170. Hermenéutica, 20S. J¡
Exteroceptividad, 170, Héroe. 205. Ir
Extracción, 171. Heterogeneidad, 206. . !1
Heterotópico (espado -.}. 206. ¡,
Heurística, 206. :. !.
Factitividad, 172. Hiponfmico (·a) / hiperon!lll.ico (~a)~ I
Falsación, 173. 206. . l
Falsedad, 173. HiPotáctica/hipertáctiéa, .··w. l
l
Fática (acth'idad, función -), 173. Hipótesis, 2(f/. ,·
Feina, 174. Historia, · 208. I
Fenoménica, 174. Histórica (gramática -).LlO'J. l
Fiduciario (·a) (contrato, relación Homogeneidad, 200. · I
-l. 174. Homologación, 209. I
Figura, 175. Homonimia, 210. 1
Figurativizaci6n, 176. I
Figurativo, 178.
Filología, 178. !conicidad, 211.
FocaUzación, 179. Identidad, 212. J
Fonema, 179. Ideología, 213. J
Fonéticn, 181. Idiolecto, 214.
Fonología, 181. Ilocución, 214.
Forma, 182. Imagen, 214.
Formal, 183. Imbricación, 215.
Formalismo, 184. Imperfectividad, 215.
Formalización, 184. · Implicación, 215.
Formante, !SS. Implícito, 215.
Fragmentación, 185. Imposibilidad, 217.
Frase, 186. Improbabilidad, 217.
Función, 186. Incertidwnbre, 217.
Incoatividad, 218.
Incompatibilidad, 218.
Generación, 190. Indicador (o marcadOr) sintagmá..
Generalización, 191 •. tico, 218.
Generativa (gramátiCa -), 191. ltídice, 218.
Generativo (reconido '-), 194. Individual, 219.
Género, 197. Indh1dualizad6n, 219.
Gestualidad, 198. Inducción, 220.
471 INDICE DE ENTRADAS

Información, 220. Macrosemiótica, 250.


Info1·mador, 221. Magnitud, 250.
IrJormativo (hacer -), 221. Manifestación, 250.
Injuri.ción, 222. Manipulación, 251.
In1nancncia, 222. Marca, 253.
Inserción, 223. Materia, 254.
In.otancin, 223. Matriz, 254.
Intención, 224. Mensaje, 254.
Intercalación, 224. Mentira, 255.
Intcn.::.ambio, 224. Metáfora, 255.
Ini....rlocutor/interlocutario, 225. Metalenguaje, 257.
Interoceptividad, 225. Metasaber, 259.
Interpretación, 225. Metasemema, 259.
Interpretativo (hacer -), 2Zl. Metascmiótica, 259.
Intertextualidad, 227. Metatérmino, 259.
Intuición, 228. Método, 260.
Invariante, 228. Metonimia, 260.
Inventario, 228. Mkrouniverso, 260.
Isoglosa, 229. Mítico (discurso, nivel -), 1.61.
Isomorfismo, 229. Mitología, 261.
IsotoP!a, 229. Modalidad, 262.
Iter;.tividad, 232. Modelo, 264.
Monema, 265.
Monoplana, 265.
Jerarquía, 233. Monosememia (o monoseroia), 265.
Junción, 233. Moralización, 265.
Justicia, 234. Morfema, 266.
Morfología, 266.
Motivación, U7.
Lector, 235. Motivo, 'UJ9.
Lectura, 235. Movimiento, Z!O.
LenJua, 236. Muerte, 270.
Lenguaje, 237. Mundo natural, 270.
Lexema, 239.
Lexía, 240.
L-'!(icalización, 241. Narrador/narratario, 272.
Léxico, 241. Narratividad, X/2.
Lexk.ograffa, 242. Narrativo (esquema-), XIS.
Lexicología, 242, Narrativo (recorrido -), 278.
Linealidad, 242. Natural (semiótica -), 280.
Lingüística, 244. Naturaleza (o natura), 280.
Literaria (se1niótica -), 245. Necesidad, 281.
Liti:raridad, 2%. Negación, 2&1.
Loc;ilización espacio-temporal, 246. Negativo (-a) (téradno, dcl::ds -) 1
Lo.Cución, 24~. 281.
Locutor, 24~. Neutralización, 28~.
~EMlúTICA -DlCCIONARlO

Neutro, 282, .Periodización, .30Z,


Nivel, 282. Perlocución, 303.
No científica (semi6tica -), 284. P!:!rmisión, 303.
No-conformidad, 285. Permutación, 303.
No lingúística {semiótica -), 285. Personaje, 303.
Nomenclatura, 285. Personificación, 303.
NoológicO, 2&5. Perspectiva, 304.
Norma, 286.. Persuasivo (hacer -), 304.
Notación simbólica, 286. Pertinencia, 305.
No-terminado, 287. Pivote narrativo, 3o6. ·.
N'ouménico, 287. Planada (semiótica -), 306.
Núcleo, W. Plano, 307.
Nudo, 287. Pluri·isotopía, 307. >tt.
Pluriplana (semiótica -)} 307.
Poder, 3f17. .1 •
Objetivo, 288. Poética, 309.
Objeto, 288. Polémico (·a), 310. · .. . :
Observador, 289. Polisememia (o, tradicionalmente,.
Ocultamiento, 290. ··· polisemia), 311.
Ocurrencia, 290. Posibilidad, 311.
Onomasiología, 291. Posición, 311.
Onomástica, 291. · Positivo (·a) (término, deixis -),
Operación, 291. 3U.
Operatorio (u operacional), 292. Posterioridad, 312.
Oponente, 292. Prácticas semióticas, 312~·
Oposición, ·292. Práctico, 313.
Optimización, 293. Pragmático (·a) 1 313.
Orden, 293. Predicado, 314.
Orientación, 294. Predominio, 315.
·Originalidad semántica, 294. Prescripción, 315.
Oyente (o auditor). 295. Presencia, 315.
Presuposición, 316.
Privación, 317.
Palabra,· 296. Probabilidad, 317.
Paradigma, 297. Proceder estilfStko, 317. ::.
Paradigmático, '291. Procedimiento, 317.
Paráfrasis, 298. Proceso, 3t8.
ParaJexema, 299. · Producción, 318.
. Paralingü.ística, 299: Profunda (estructura -),- 319.
Parasinonimia, 299. Programa narrativo, 320::
Para.tópico, 299. Programación espacio-temporal, 322.
Parecer, 300. Prohibición, 323.
Parentización, 300. Propioeeptividad, 324.
Perfectlvídad, 300. Proposiclón, 324.
Performance, 300. Prosodia, 324.
Performativo (verbo -). 302. Protoactante, 325.
tNDICE·DE ENTRADAS
473
Secreto, 347.
Proxémica. 325. secuencia, 347. "
Prueba, 326. Segmentación, 317.
Psicosemiól.ica. 3Z/. Selección, 348.
Punto de vista. 329.
Sema, 348.
Puntualidad, 329.
Scmantema, 350.
Semántica, 351.
Querer, 330. Semántica discursiva, 353.
Semántica fundamental, 355.
Realización, 331. Sem:íntlc~ generativa, 356.
Receptivo, 331. Semántica nar1·ativa, J56.
'Receptor, 331. Semanticidad, 35í.
Recíproca (presuposición -), 332. Semántico (inventario, nivel-), 357.
Recompensa, 332. · Seroantismo, 358.
Reconocimiento, 332. Semasiología, 358.
· Recorrido, 333. Semejanza, 358.
Recurreocia, 333. Semeroa, 358.
Recursividad, 333. Sémico (análisis -), 359.
Reducción, 334. Semiología, 361.
Reduccionisro.o, 334. Semiológico (niv'!l -), 364.
Redundancia, 335. Semiosis, 364.
Reescritura (sistema de -), 33S. Semiótica, 364.
Referencia, 335. Señal, 372.
Referente, 33S. Sentido, 372.
:Reflexividad, 338. Ser/co.tar, 373.
Registro, 338. Shlfter, 373.
Regla, 338: Significación, 3n.
Reificación, 339. Significado, 374.
B,elación, 339. Significante, 375.
Relato, 340. , Signo, 376.
Renuciaci6n, 340. Súnbolo, 378.
Representaclóo, 340. Simplicidad, 379.
Rcpresentatividad, 341. Simulada {prueba -), 379.
Resemantizaci6n, 341. Sincronía, 380.
Restricción, 341. Sincretismo, 380.
R.etótiea, 341. Sinonimia, 380.
Retribución, 342. Sintagma, 381.
P.etrolectura. 342. Sintagmática, 382.
Revalorización, 343. Sintaxis, 3&3.
Rima, 343•. Sintaxis discursl"hl, 385.
Ritmo, ?A-3. Sintaxis lundan.=tnl, .l&S.
Rol, 343. Sintaixs narrati\'a de superficie, 386.
Ruido, 344. Sintaxis 1<Xtual, 389.
Síntesis, 389.
Sistemn, 389.
Saber, 345. Sodo!ecto, 390,
Simción, 546.
SEM!OT!CA ·DICCIONARIO 474

Sociosemiótica, 391. Transferenéia, 415.


Solidaridad, 394. Transformación, 415.
Somático, 394. Transfrásico, 418.
Subcontrariedad, 394. Transitividad, 418.
Subjetivo (valor-), 394. Trascendencia, 419.
Sujeto, 395. Triplicación, 419.
Superficie (estructura de -). 397. Tropo, 419.
Süprasegm,ental, 398 •
. Supresión, 398.
Suspensión, 398. Unidad, 420. .
Sustancia, 398, Unilateral (presuposición -), 423.
Sustitución, 399. Universales, 424.
Sustituida (prueba -), 400, Universo, 426.
Univocidad, 4Z1.
Uso, 428. . :
Taxonomía, 401. Utópico (espacio -), 428.
Teatral (semiótica -), 402. ·
Tema, 404.
Temático (-a}. 404. Validación, 429.
Tematización, 405. Valor, 429.
Temor, 405. Variable, 430.
Temporalización, 4-05; Variante, 431.
Tener, 406. Venganza, 431.
Tensividad, 406. Verbal, 431.
Teoría, 406. Verdad, 432.
Terminado, 408. Veridicci6n, 432.
Terminal, 4-08. Veridietorlas (modalidades -), 434.
Termina"tividad, 408. Verificatj.ón, 434.
Término, 408. Verosimilitud, 435.
Terminología, 409. Vertimiento semántico·. (o incorpo-
Texto, 409. ración semántica), 436.
Textualización, 410. Vida, 436. .
Timica (categoría -), 412. Virtualización, 437.
Tipología, 412. Virtuema, 437.
Tópico (espacio -). 413. Vocabulario, 437.
Topónimo, 413. Vs., 438.
Totalidad, 413,
Traducción, 414.
Traidor, 415. Zoosemiótica, 439•.
Transcodificación, 415.
INDICE GENERAL

Pdgs.

Prefacio ........................ 7
l. Presentación ... ... ... 7
2. l'or qué un diccionario ... ... ... ... ... ... ... •.. ... ... •.. .•. ••• 8

3. Un d!ccionarlo razonado ... ... ... •.. ... ... •.. ... .•. ... ... ..• 9
4. Bricolage lexicográfico ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 10
5. Lagunas ....................... . 11
6. i!.Modo de empleo> ... ... .. .... 13
'
7. AgÍadecimientos ... ... ... ... ... ... .•. ... ... ... ... ... ... ... ... 14

Nota a la Cdición en len.gua española .. ... ... ... ... ... ... ... ... .. ... 17

[T e.xto del Dicci'onario] ... •.. ... ... . .. •.. •.• .•• ... ••• ••. ••• ••• ••• ••• ••• 21

Bibliografía. referenci.al ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 441
Obras· de los autores ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... 441
Obras de otros autores ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... ... .•. 445

t11dice de entradas ... ... ... ... ... ... ... ... •.. ... ... ... ... ... ... ... ... 467

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