Вы находитесь на странице: 1из 17

Material

Pedagógico 15.
Perspectivas
Noviembre, 2017 feministas
sobre las
Relaciones
Internacionales

Documento pedagógico elaborado como parte


de un Proyecto de Innovación Docente de la
Universidad de Santiago de Chile para la
Carrera de Estudios Internacionales.
PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

El presente documento se enmarca en el Proyecto de Innovación Docente “Debate Conceptual y casos de


estudio sobre seguridad en los estudios internacionales: Materiales de Enseñanza” de la Universidad de
Santiago de Chile. El objetivo principal del proyecto es el desarrollo de una página web que contenga
recursos didácticos y actividades de aprendizaje centradas en los análisis de caso que permitan la
comprensión profunda de los temas de seguridad en el marco de los Estudios Internacionales.

Debido a las limitaciones de la literatura disponible en español, los documentos didácticos recogen
elaboraciones teóricas de la literatura más actual especialmente anglosajona. Así, los contenidos no tienen
por objetivo proponer un trabajo original sino más bien permitir el acceso a los estudiantes de pregrado
de carreras vinculadas con los Estudios Internacionales1.

1. Antecedentes2
Desde que la teorización feminista entró en el campo de las Relaciones Internacionales, ésta corriente ha
proliferado en formas mensurables como nuevo enfoque. Durante la primera década de este siglo, las
presentaciones de panel para el ámbito de la Teoría Feminista y Estudios de Género de la Asociación de
Estudios Internacionales han aumentado; las publicaciones de revistas, libros y otras derivaciones
académicas, reflejan lo siguiente:

 Una mayor participación de las mujeres en la disciplina.

 Un mayor interés en las cuestiones de género.

Los indicadores de que la disciplina de las Relaciones Internacionales ha llegado a tomar en serio al
feminismo, se pueden encontrar en el creciente reconocimiento de la erudición feminista como un enfoque
paradigmático de las Relaciones Internacionales (Maliniak, Oakes, Peterson & Tierney, 2009), aumentando
la inclusión de la sapiencia feminista en textos introductorios en el ámbito de las Relaciones Internacionales
(Goldstein & Pevehouse, 2010; Steans, Pettiford & Diez, 2005; Baylis, Smith & Owens, 2007; Weber,
2009).

El desarrollo de la teorización feminista en la disciplina es simultáneo a la creciente preocupación con


cuestiones relativas al género en la política global y la economía global. Respecto a ello, el Consejo de
Seguridad de las Naciones Unidas (Basu, 2009), el Instituto Internacional para la Democracia y La
Asistencia Electoral (IDEA) (Tremblay, 2008) y Human Rights Watch3, se han embarcado en proyectos
sustanciales para promover la equidad de género, donde el mensaje colectivo de estas organizaciones
internacionales, a través de los ámbitos de seguridad, democracia, economía política y derechos humanos,
es cada vez más claro: la igualdad de género debe ser una prioridad política no solo porque es un fin
importante en sí mismo.

1El presente documento ha sido elaborado para el Proyecto de Innovación Docente de la USACH por los
asistentes de investigación Erika Celsi y Luciano Herrada bajo la coordinación de la Profesora Lucía Dammert.
2 El presente documento ha sido elaborado en base a “Perspectivas feministas sobre las Relaciones
Internacionales” - Laura Sjoberg & J. Ann Tickner (2013).

3 Para más información: https://www.hrw.org/es

pág. 1 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

A pesar de todos estos notables acontecimientos sobre los derechos sociales de las féminas, las mujeres
aún siguen estando sub-representadas en la disciplina de las Relaciones Internacionales, una disciplina que
todavía está fuertemente influenciada por hombres y por normas asociadas con la masculinidad (Sjoberg,
2008), especialmente en los niveles superiores (Maliniak, Oakes, Peterson & Tierney, 2008).

La teoría feminista de las Relaciones Internacionales se ha preocupado por sacar a la luz estas
inequidades, ayudándonos a comprender las causas, y reflexionando en cómo ponerles fin a
estas prácticas.

2. Teorización feminista y el significado de género


Las teorías feministas son multidisciplinarias; se basan en las ciencias sociales y naturales, así como en las
humanidades y la filosofía. Esta teoría incluye una amplia variedad de enfoques epistemológicos y
metodológicos, con la finalidad de darle explicación a la subordinación de las mujeres o la asimetría
injustificada entre la posición social y económica de las mujeres con respecto a los hombres, y buscar una
manera para terminar con injusticia. Las y los feministas están en desacuerdo sobre lo que creen que
constituye la subordinación de las mujeres, así como sobre cómo explicarlas y superarlas.

El enfoque feminista se ha concebido de diversas maneras como: liberales, marxistas, radicales, socialistas,
psicoanalíticas, de punto de vista, poscoloniales y posmodernas (Tong, 2008).

Generalmente comprometidos con una epistemología positivista, los feministas liberales


creen que la eliminación de los obstáculos legales puede superar la subordinación de las
mujeres.

Las tradiciones psicoanalíticas buscan las causas de la subordinación de las mujeres en las prácticas de
socialización de la infancia, por otro lado, las corrientes radicales, marxistas y socialistas, buscan
explicaciones en las estructuras del patriarcado que “naturalizan” la subordinación de las mujeres, o en el
mercado laboral con sus discriminaciones de género y divisiones entre el trabajo público (pagado) y
privado (no remunerado/doméstico). Más recientemente, el feminismo poscolonial y posmoderno han
enfatizado la necesidad de tomar en cuenta una variedad de estructuras de opresión asociadas con la
raza y la clase, así como el género.

Mientras que muchos teóricos de las relaciones internacionales piensan en el “género” como una categoría
descriptiva, para la mayoría del movimiento feminista es una herramienta analítica. Si se percibe el “sexo”
como en las categorías biológicas “masculino”, “femenino” u “otro”, el género es la característica esperada
asociada con la membresía percibida en esas categorías, entendidas como “masculinidades” y
“feminidades”. Los feministas, por otro lado, definen el género como un conjunto de características
variables, pero construidas social y culturalmente.

Aquellos como el poder, la autonomía, la racionalidad, la actividad y el público están


asociados estereotipadamente con las masculinidades.

pág. 2 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

El género, entonces, es un sistema de significados simbólicos, donde el “simbolismo de género” describe la


forma en que lo masculino/femenino, asigna diversos comportamientos estereotipados, que genera varias
dicotomías que organizan el pensamiento occidental (Wilcox, 2007). Diferentes feministas tienen diferentes
interpretaciones de la operación del simbolismo de género en la política global: como una construcción
social (Locher & Prugl, 2001), un mecanismo performativo (Butler, 2006), sociobiológico (Fausto-Sterling,
2005) o sistémico (Sjoberg, 2012), pero los académicos feministas, generalmente, están de acuerdo en
que el género es conceptual, empírica y normativamente esencial para estudiar política global. La
jerarquía social de género es, en términos feministas, una “característica estructural de la vida política y
social... que configura profundamente nuestro lugar en el mundo y su visión del mismo” (Wilcox, 2007).

Las características asociadas con el género varían en el tiempo y la cultura, pero sirven para apoyar el
poder masculino y la subordinación femenina en la mayoría de las sociedades (Connell, 1995, Hooper,
2001, Zalewski & Parpart, 1998, 2008).

3. Relaciones Internacionales feministas, el final de la Guerra Fría y el


“tercer debate”
Los intentos feministas de hacer que el género en las Relaciones Internacionales sea visible, comenzaron a
fines de los años ochenta y a principios de los noventa, en el contexto de un cambio más amplio en la
disciplina. Después del final de la Guerra Fría, hubo un momento en las Relaciones Internacionales, donde
existió un cambio en la disciplina, llamado “tercer debate”, el cual proclamó el comienzo de una “era
pospositivista” en las Relaciones Internacionales; basándose en el trabajo interdisciplinario de la sociología,
la historia y la filosofía política. Los post-positivistas comenzaron a cuestionar la búsqueda de explicaciones
objetivas y universales (Lapid, 1989; Wendt, 1999; Walker, 1993).

El trabajo de los académicos sobre el lado crítico del tercer debate abrió el espacio para las
perspectivas feministas.

4. Metodologías y métodos feministas en las Relaciones Internacionales


El objetivo de la investigación feminista es, “hacer visible lo invisible, llevar la vida de las mujeres al centro,
hacer que lo trivial sea importante, destacar a las mujeres como actores competentes y entender a las mujeres
como sujetos en lugar de objetos” (Reinharz, 1992).

El enfoque feminista estudia los discursos de la política global (Mohanty, 2003, Naples, 2003); silencios
en estos discursos políticos globales (Kronsell, 2006; Charlesworth, 1999); material de entrevistas del
trabajo de campo (Kleinman, 2007); y arte y otras representaciones de política (Sylvester, 2009; Heeg,
2010).

Los feministas afirman que no existe un estándar único de corrección metodológica para la
investigación (Reinharz, 1992), y no lo consideran deseable de construir.

Independientemente de los métodos y perspectivas metodológicas que elijan, el enfoque feminista coincide
en que, el género importa en lo que estudiamos, por qué estudiamos y en cómo estudiamos la política
global (Ackerly, Stern & True, 2006). Un objetivo importante para la investigación feminista es, desafiar

pág. 3 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

y repensar lo que queremos decir con “conocimiento”, dicho conocimiento construido en términos de
distinciones binarias tales como: racional/emocional, objetivo/subjetivo, global/local y público/privado,
donde el primer término es privilegiado y asociado a las masculinidades, automáticamente devalúa ciertos
tipos de conocimiento.

Los feministas son profundamente escépticas acerca de las pretensiones de universalidad


del conocimiento que, en realidad, se basan en gran medida en las vidas de ciertos hombres
y las experiencias de los hombres.

Las metodologías feministas, buscan descubrir las limitaciones de los enfoques que no consideran el género
al hacer afirmaciones de objetividad. Afirmando que todo el conocimiento es situado y, por lo tanto,
política, muchas feministas creen que luchar por la objetividad tiene consecuencias importantes y a menudo
negativas para la investigación.

La mayoría de las feministas de las relaciones acuerdan que, los cientistas sociales son parte del mundo
que intentamos comprender, y que ese mundo siempre cambia y se ve afectado por la forma en que lo
estudiamos (Ackerly & True, 2010).

Los académicos argumentan que, la diferencia entre los y las académicas feministas y otros académicos
de las relaciones internacionales es que, los movimientos feministas son explícitos acerca de los compromisos
políticos en sus estudios (Brown, 1988; Tickner, 2001). Estos compromisos políticos incluyen la emancipación
de género, la transformación de las relaciones desiguales de poder y la comprensión del mundo desde la
perspectiva de los márgenes políticos (Whitworth, 1994; Tickner, 2001).

Varias académicas feministas han sugerido que la crítica feminista de la disciplina sobre
los límites epistemológicos debe ir acompañada de una reformulación conceptual y
metodológica.

(Steans, 1998; Sjoberg, 2006; Tickner, 2005).

5. Revisión de las preguntas del campo de las Relaciones Internacionales


Una pregunta inicial para las feministas es, “¿dónde están las mujeres?”.

Las y los feministas no solo han buscado el rol de la mujer en diferentes ámbitos, por ejemplo, dentro del
poder estatal, en asuntos relacionados con la “alta política”, sino también en los movimientos sociales
(Naples, 2009), políticas migratorias, negociaciones de paz (Confortini, 2009), políticas ambientales
(Sapra, 2009; Detraz, 2009), tecnología de la información, problemas de salud global y organizaciones
terroristas (Alison, 2009; Sylvester & Parashar, 2009; Sjoberg, 2009; Sjoberg & Gentry, 2007).

¿Qué tipo de evidencia podría promover la afirmación de que las prácticas de la política internacional
tienen un género? ¿A través de qué mecanismos se perpetúan los tipos de poder necesarios para mantener

pág. 4 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

en pie las estructuras desiguales de género? ¿Hay alguna diferencia en el comportamiento de los estados
que sus políticas extranjeras y de seguridad a menudo se legitiman a través de apelar a varios tipos de
masculinidad hegemónica? Estas son preguntas empíricas que solo pueden responderse con referencia a
instancias históricas concretas, teniendo en cuenta que las mujeres están ubicadas de manera diferente en
términos de raza, clase y nacionalidad.

Para responder a las interrogantes anteriores, la investigación feminista mira hacia arriba y hacia abajo
(Sylvester, 1996):

- Mirar hacia arriba, permite investigar cómo se crean, mantienen y legitiman las estructuras del
poder político y económico, así como las formas dominantes de conocimiento.

- Mirar hacia abajo, implica investigaciones basadas en las vidas de aquellos que normalmente no
son considerados portadores de conocimiento; este tipo de investigación puede implicar buscar en
lugares extraños, para poder acceder a personas y datos, entre otras.

Dado este tipo de preguntas y objetivos de investigación, las perspectivas feministas sobre la seguridad y
la economía global van a ser bastante diferentes de los estudios de seguridad nacional convencionales y
la Economía Política Internacional.

6. Seguridad de Género
Al cuestionar el papel de los Estados como proveedores adecuados de seguridad, muchas feministas han
adoptado un enfoque de seguridad multidimensional y multinivel.

El objetivo emancipatorio de poner fin a la subordinación de las mujeres es consistente con una definición
amplia de seguridad que toma como punto de partida al individuo, situado en estructuras sociales más
amplias. Las feministas buscan comprender cómo la seguridad de individuos y grupos se ve comprometida
por la violencia, tanto física como estructural, en todos los niveles.

Considerando el género como una categoría de análisis, las feministas investigan cómo las estructuras
sociales desiguales tienen un impacto negativo en la seguridad de las personas y los grupos. Aludiendo a
que el comportamiento de los Estados en búsqueda de seguridad se describe en términos de género, las
feministas han señalado la masculinidad del discurso estratégico y cómo esto puede afectar la comprensión
y las prescripciones de la seguridad.

Al reconsiderar la naturaleza de la seguridad, las feministas han analizado conceptos y teorías


tradicionales y han “demostrado el sesgo de género en los conceptos básicos de seguridad, como el Estado,
la violencia, la guerra, la paz e incluso la seguridad misma, instando a la redefinición a la luz de ese sesgo”
(Sjoberg, 2009, Tickner, 2001; Peterson, 1992; Pettman, 1996). Las académicas feministas, también han
introducido nuevos conocimientos empíricos y teóricos sobre el tema al analizar los diversos roles de las
mujeres y el género en los conflictos, y en los procesos de resolución de conflictos.

7. Desafiando el mito de la protección


Se trata del mito de que las guerras se libran para proteger a las mujeres, los niños y otros,
estereotípicamente vistos como “vulnerables”. Las feministas señalan el alto nivel de bajas civiles en las
guerras contemporáneas. A pesar del mito generalizado de que las guerras son libradas, principalmente
por hombres, para proteger a las personas “vulnerables”, una categoría a la que generalmente se asignan

pág. 5 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

mujeres y niños, las mujeres y los niños constituyen una proporción significativa de muertes en las guerras
recientes. Como Young (2003) explica, “el rol del protector masculino coloca a aquellos protegidos,
paradigmáticamente mujeres y niños, en una posición subordinada de disciplina y obediencia”.

En situaciones de conflicto, las mujeres a menudo adquieren nuevos roles, y un mayor grado de
independencia que, con frecuencia, deben abandonar cuando finaliza la guerra. Algunos de los nuevos
roles que las mujeres adquieren durante la guerra, son: los de soldado, insurgente, terrorista o criminal de
guerra: volviéndose participes en los actos bélicos. Los estudios feministas sobre la complejidad de los roles
de las mujeres en la guerra y los impactos de la guerra en ellas ayudan a iluminar la interdependencia
conceptual y práctica de los conceptos de guerra y género.

8. La naturaleza de género, de la guerra y la paz


Las feministas argumentan que, el género puede vincularse sobre el significado, las causas y las
consecuencias de la guerra que enfatiza diferentes factores causales, diferentes niveles de análisis y
diferentes épocas en la historia al mostrar la continuidad del género como una variable, una fuerza
constitutiva y una categoría analítica. La asociación entre la masculinidad y la guerra ha sido central en
las investigaciones feministas.

En su crítica de género a la disciplina, las feministas de las Relaciones Internacionales han examinado las
historias sobre el realismo y neorrealismo, basando sus explicaciones y prescripciones para el
comportamiento de seguridad nacional de los Estados. No es solo en la cuestión de quién y qué género
está luchando en una guerra; las feministas ven muchos componentes de la guerra, tanto conceptualmente
como en la práctica. Como género las definiciones de guerra como acción estatal omiten muchos problemas
que conciernen a las mujeres y otros miembros feminizados del Estado (Sylvester, 2002). Las feministas
llaman la atención sobre el sufrimiento que el análisis de seguridad normalmente ignora, incluidos los
impactos de la guerra en las vidas de mujeres y hombres.

Si bien las mujeres han sido excluidas en gran medida de los ejércitos del mundo, ellas han estado
representado una variedad de movimientos por la paz. Los grupos de paz de mujeres solían recurrir a las
imágenes maternalistas para retransmitir su mensaje (El-Bushra, 2007). Ejemplos de ello son: los
Movimientos como la Huelga de Mujeres por la Paz (Swerdlow, 1990); el Campamento de Mujeres por la
Paz en Greenham Common (Kirk, 1989); Madres de la Plaza de Mayo (Hernández, 2002); el Comité de
Madres de Soldados en Rusia (Gerber & Mendelson, 2008); y Otra madre para la Paz en los Estados
Unidos (Gibbons, 2007). Estas organizaciones o agrupaciones han dibujado explícitamente las imágenes
maternas o femeninas para elaborar sus estrategias. La asociación de los hombres con la guerra y las
mujeres con la paz refuerza las jerarquías de género y las falsas dicotomías que contribuyen a la
devaluación de las mujeres y la paz. Esto permite a los hombres mantener el control y continuar dominando
la agenda de la política mundial, mientras que las voces de las mujeres, a menudo, se consideran poco
auténticas en asuntos de Política Exterior.

La investigación feminista sobre la paz ha tendido a alejarse de una posición esencialista que asume el rol
de las mujeres con la prosecución de la paz, para estudiar las formas en que las características
tradicionalmente asociadas con la feminidad pueden ser utilizadas por mujeres y hombres para reducir el
conflicto en la política global. Los estudios feministas de paz, pacificación y mantenimiento de la paz, han
analizado la inclusión en los procesos de paz (Hudson, 2009; Youngs, 2008; McEvoy, 2009), la
implementación de la Resolución 13254 del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas sobre Mujeres,

4 Para más información: http://www.acnur.org/t3/fileadmin/Documentos/BDL/2006/1759.pdf

pág. 6 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Paz y Seguridad (Basu, 2009; Cohn, Kinsella y Gibbings, 2004), la Liga Internacional de Mujeres por la
Paz y la Libertad (Confortini, 2009), la cuestión de la naturaleza de género de los impactos persistentes
del conflicto después de la paz (Walsh, 2009), el género en la justicia transicional (Campbell, 2007; Bell
& O'Rourke, 2007) y las dimensiones de género de la reconstrucción posconflicto (MacKenzie, 2009).

9. Redefiniciones feministas de seguridad


Las feministas desconfían de las ontologías estatistas que definen la seguridad en términos de suma cero
asociados con las distinciones binarias entre anarquía y orden. Muchas feministas definen la seguridad
ampliamente, en términos multidimensionales y multinivel, como la disminución de todas las formas de
violencia, incluidas las físicas, estructurales y ecológicas (Peterson & Runyan, 1999; Pettman, 1996; Sharoni,
1993; Tickner, 1992).

Según Christine Sylvester (1994), la seguridad es esquiva y parcial e implica lucha y


contención; es un proceso en lugar de un ideal en el que las mujeres deben actuar como
agentes en la provisión de su propia seguridad.

Aunque las feministas abordan la seguridad desde una serie de perspectivas diferentes, el enfoque
feminista sobre la seguridad puede verse como una serie de principios comunes (Sjoberg, 2009):

1) Las feministas tienen una comprensión amplia de lo que cuenta como un problema de seguridad y
de a quién se debe aplicar el concepto de seguridad.

2) Las feministas comparten una comprensión de la naturaleza de género de los valores apreciados
en el ámbito de la seguridad internacional.

3) Los académicos de la corriente feminista consideran que el género desempeña un papel amplio y
diverso en la teoría y la práctica de la seguridad internacional, como causal variable y un factor
constitutivo en la creación y perpetuación de la seguridad internacional.

4) Las feministas argumentan que, la omisión de género de la investigación convencional en la


seguridad internacional no significa que este trabajo sea neutro desde el punto de vista del
género; significa que está descuidando la dinámica de género existente.

El género y otras jerarquías sociales tienen efectos, no solo en cuestiones de seguridad nacional, sino
también en el funcionamiento de la economía global y la distribución desigual de recompensas económicas
que también afectan la seguridad individual, particularmente la seguridad de quienes están al margen de
la política global.

10. Género de la Economía Política Global


Hay enormes diferencias en el estatus socioeconómico de las mujeres según su raza, clase, nacionalidad y
ubicación geográfica. Además de ello, la mayoría de las mujeres comparten cierta similitud, en el sentido
de que están desproporcionadamente ubicadas en el nivel más bajo de la escala socioeconómica en todas
las sociedades.

pág. 7 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

El silencio sobre el género se produce porque es invisible como los conceptos utilizados para el análisis, las
preguntas que se formulan y la preferencia por los niveles de análisis de la Economía Política Internacional
convencional (Marchand, 1996). En lugar de tratar de entender en qué condiciones la cooperación
económica entre los Estados es más o menos probable, las feministas buscan explicar las causas de las
diversas inseguridades económicas de las mujeres y otros grupos marginados, y las condiciones bajo las
cuales podrían aliviarse.

Las feministas han examinado cómo las estructuras jerárquicas de clase, raza y género se intersecan con
las fronteras nacionales, así como los efectos interactivos de estas jerarquías en el funcionamiento de la
economía global (Krause, 1996; Peterson, 1996). La erudición feminista en economía política ha rastreado
la naturaleza de género del desarrollo, ha analizado la división del trabajo por género a nivel mundial e
intentó reformular la comprensión de la globalización basada en los principios de la teoría feminista.

11. Desarrollo de género


Las cuestiones relacionadas con el género en el desarrollo, comenzaron a ser reconocidas en el mundo de
las políticas internacionales en la década de los setenta, con la participación y presión de instituciones
internacionales, como por ejemplo: las ONG’s de mujeres, con el objetivo de centrar la atención en el rol
de las mujeres, tanto dentro de la ONU como al interior de sus Estados miembros, la Asamblea General
de la ONU declaró en 1975 el año Internacional de la Mujer, año que marcó el inicio del Decenio de las
Naciones Unidas para Mujeres (Pietila, 2007). A partir de ese año, se celebraron tres Conferencias de las
Naciones Unidas sobre la Mujer durante el Decenio (en 1975, 1980 y 1985). Para tener una mejor idea
de la desigualdad y la discriminación contra las mujeres, la ONU solicitó a los gobiernos que brinden datos
desglosados por sexo (Pietila, 2007).

Las organizaciones internacionales comenzaron a construir proyectos para integrar mejor a las mujeres en
el proceso de desarrollo. Inicialmente, aparecieron problemas de género en la agenda de políticas bajo
la etiqueta “Mujeres en el Desarrollo” o WID (Woman In Development). Woman In Development, clasificó
los proyectos de desarrollo bajo tres enfoques:

a) El enfoque de bienestar, que fue diseñado para ayudar a las mujeres en sus roles como madres y
amas de casa.

b) El enfoque antipobreza, que apuntaba a reducir la pobreza de las mujeres centrándose en las
necesidades básicas.

c) El enfoque de eficiencia, que busca integrar de manera plena a las mujeres en la economía como
trabajadoras (Tickner, 2001).

La mayoría de las feministas preocupadas por el desarrollo ven una espada de doble filo:
la pobreza que afecta desproporcionadamente a las mujeres exacerba la desigualdad y la
desigualdad de género inhibe el desarrollo.

Muchas feministas han notado que existen numerosas dificultades para implementar políticas sensibles al
género. Si bien los efectos de la pobreza en las mujeres son claros, los efectos de las estrategias de
desarrollo sobre las mujeres (ya sea que estén directamente dirigidas a ayudarlas o no) están plagadas
de contradicciones que minan el desarrollo.

pág. 8 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

12. Una división del trabajo globalizada y basada en el género


A medida que buscan explicar la representación desproporcionada de las mujeres en la parte inferior de
la Escalas socioeconómicas en todas las sociedades, las feministas llamaron la atención sobre una división
del trabajo por género que tuvo sus orígenes en la Europa del siglo XVII, cuando las definiciones de
hombres y mujeres se polarizaron de manera adecuada a la creciente división entre trabajo y hogar
requerida por el capitalismo temprano (Beneria, 2003). La noción de “ama de casa” comenzó a colocar
el trabajo de las mujeres en la esfera doméstica privada, en oposición al mundo público del mercado
habitado por el hombre económico racional (Peterson, 2009; Beneria, 2007).

Cuando las mujeres ingresan al mundo laboral, están desproporcionadamente representadas en las
profesiones de cuidado o en industrias manufactureras “livianas”, vocaciones u ocupaciones que se eligen,
no solo sobre la base de la racionalidad del mercado y de la maximización de los beneficios, como lo
asume la teoría económico-liberal, sino debido a los valores y expectativas que a menudo se enfatizan en
la socialización femenina (Browne & Braun, 2008).

Las feministas socialistas en particular han enfatizado cómo las ideologías y estructuras de género, así
como las fuerzas del mercado, conducen a bajos salarios y cargas dobles. La mayoría de las feministas
creen que las mujeres continúan estando en desventaja con respecto a los hombres por esta división global
del trabajo que las relega desproporcionadamente a tareas de subsistencia y domésticas no remuneradas
o a salarios bajos, roles que responden a las nuevas demandas de mano de obra flexible pero que
efectivamente están subsidiando capitalismo.

Sobre los argumentos universales sobre la racionalización económica, las feministas afirman que, los efectos
negativos de la división del trabajo por género no pueden entenderse sin un análisis de las complejas
relaciones sociales en las que se integran las vidas de todos los individuos. Muchas feministas creen que la
subordinación de las mujeres es causada, no solo por las fuerzas impersonales del mercado, sino por
procesos que resultan de decisiones políticas, económicas y sociales conscientes, decisiones que a menudo
se basan en suposiciones sobre el género.

13. Reinterpretaciones feministas de la globalización


El movimiento feminista, ha realizado una serie de observaciones críticas y empíricas que contribuyen a la
reformulación de la comprensión convencional de la globalización. Las feministas han ofrecido una imagen
alternativa de la globalización, la que describen como “reestructuración global”, un proceso que está
(parcialmente) descomponiendo un viejo orden e intentando construir uno nuevo (Marchand & Runyan,
2000). Varias académicas feministas han utilizado estas observaciones de la globalización basadas en el
género como la base de nuevas teorías sobre economía política. Las feministas han argumentado que,
además de descuidar a las mujeres en general, la economía política convencional ha subestimado las
diferencias entre las mujeres y las agencias de mujeres en la globalización (McCracken, 2011; Gibson-
Graham, 2006; Bergeron, 2001).

Estas reinterpretaciones de la economía política global han llevado a académicos feministas a buscar
lugares no convencionales para su conocimiento, incluidos, entre otros, el hogar individual, los flujos de
migración y tráfico humano y el comercio sexual (Pettman, 1996; Beeks & Amir, 2006). Las feministas han
combinado análisis ascendentes (por ejemplo, Bakker & Gill, 2003) con teorización estructural (por
ejemplo, Peterson, 2003) para argumentar que el análisis de género e incluso interseccional es crucial para
obtener una comprensión adecuada de la economía y la política de la globalización.

pág. 9 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

14. Los Muchos Feminismos En Ir y los Desafíos de la Investigación Mirando


Hacia el Futuro
Hasta este punto, se ha hablado sobre las direcciones generales del programa de investigación feminista
en las Relaciones Internacionales, señalando sus divergencias, pero centrándose en sus puntos en común.
Siguiendo el entendimiento de John Hoffman (2001) de que los feminismos divergentes en las Relaciones
Internacionales se ven mejor no en tensión o en conflicto, sino como un “concepto de momento”: diferentes
corrientes del mismo río fluyendo en la misma dirección, buscando terminar la jerarquía de género en la
disciplina de las relaciones internacionales y en la política global en general.

Si bien la dirección general del trabajo feminista es crítica de la subordinación de género, los diversos
tipos de feminismos realizan esa misma crítica de maneras muy diferentes, que a veces producen tensiones
entre las mismas teorías feministas. Por ejemplo, los feminismos liberales a menudo buscan corregir la
subordinación de género a través del activismo o la legislación sobre derechos de las mujeres, buscando
definiciones liberales occidentales de las necesidades de las mujeres para lograr esos objetivos (por
ejemplo, Caprioli & Boyer, 2001; Inglehart & Norris, 2003). Por otro lado, los movimientos feministas
poscoloniales (por ejemplo, Chowdhry & Nair, 2002), argumentan que esta no es solo una forma estrecha
y problemática de entender la subordinación de género, sino que, en ciertas partes del mundo, existe
violencia “justificada” por los valores y culturas occidentales. De otro modo, el movimiento post-
estructuralista, y los feminismos críticos son, a menudo conscientes de la falta de representatividad de las
nociones dicotómicas de género, y las diferencias entre sexo y género (por ejemplo, Steans, 1998,
Shepherd, 2008, Sylvester, 2002).

Comprender cómo el género se relaciona con otros ejes de jerarquía y discriminación a través de los niveles
de análisis en la política global, en un escenario internacional cada vez más complejo y diverso, será otro
desafío para la investigación feminista de las relaciones internacionales en el futuro.

15. Conclusión
Hay muchos feminismos en la disciplina de las Relaciones Internacionales, y junto con ello, una serie de
preocupaciones ontológicas y epistemológicas diferentes, que se enfrentan a una serie de desafíos a
medida que las Relaciones Internacionales con enfoque feminista continúan desarrollándose como un
programa de investigación.

Los eruditos feministas, han argumentado que, la teorización feminista de las Relaciones Internacionales es
necesariamente una disciplina y una transformación del mundo. Marysia Zalewski (2007), ha identificado
al feminismo como una fuerza desestabilizadora para las Relaciones Internacionales. Sarah Brown (1988),
explica que, esto se debe a que el enfoque feminista de las Relaciones Internacionales busca desarrollar
una comprensión que amenace la división del conocimiento que actualmente define la disciplina.

Es importante que las feministas de las Relaciones Internacionales permanezcan conectadas a la disciplina,
particularmente en un momento en que, existe una preocupación creciente con los temas de género en el
mundo de la política global. El enfoque feminista proporciona a los académicos de las Relaciones
Internacionales, una perspectiva través de la cual se pueden ver nuevos problemas de nuevas maneras.

Avanzar hacia una política global construida sobre bases donde el género, ya no es un sistema de opresión,
es una meta a la que dicho conocimiento puede contribuir.

pág. 10 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

16. Bibliografía
Ackerly, B & True, J (2010) Doing Feminist Research in Political and Social Science. New York: Palgrave
Macmillan.

Ackerly, B; Stern, M; & True, J (2006) Feminist Methodologies for International Relations. Cambridge:
Cambridge University Press.

Alison, M (2009) Women and Political Violence: Female Combatants in Ethno-National Conflict. New York
and London: Routledge.

Bakker, I & Gill, S (2003) Power, Production and Social Reproduction: Human In/ security in the Global
Political Economy. London and New York: Macmillan-Palgrave.

Basu, S (2009) “Security through Transformations: The Case of the Passage of UN Security Council Resolution
1325 on Women and Peace and Security,” Ph.D. Dissertation, University of Wales, Aberystwyth

Baylis, J; Smith, S & Owens, P (eds.) (2007) The Globalization of World Politics. Oxford: Oxford University
Press.

Beeks, K & Amir, D (2006) Trafficking and the Global Sex Industry. Lanham, MD: Lexington Books.

Bell, C & O’Rourke, C (2007) “Does Feminism Need a Theory of Transitional Justice? An Introductory Essay,”
International Journal of Transitional Justice, 1 (1): 23–44.

Beneria, L (2003) Gender, Development, and Globalization: Economics as if All People Mattered. London:
Routledge.

Beneria, L (2007) “Globalization, Gender, and the Davos Man,” in Nancy Cook, (ed.), Gender Relations in
Global Perspective: Essential Readings. Cambridge, MA: Canadian Scholars’ Press.

Bergeron, S (2001) “Political Economy Discourses of Globalization and Feminist Politics,” Signs: Journal of
Women in Culture and Society, 26 (4): 983–1006.

Brown, K (2008) “The Promise and Peril’s of Women’s Participation in UK Mosques: The Impact of
Securitisation Agendas on Identity, Gender and Community,” British Journal of Politics and International
Relations, 10 (3): 472–491.

Brown, S (1988) “Feminism, International Theory, and International Relations of Gender Inequality,”
Millennium: Journal of International Studies, 17 (3): 461–475.

Butler, J (2006) Precarious Life: The Powers of Mourning and Violence. London: Verso.

Campbell, K (2007) “The Gender of Transitional Justice: Law, Sexual Violence and the International Criminal
Tribunal for the Former Yugoslavia,” International Journal of Transitional Justice, 1: 411–432.

Caprioli, M & Boyer, M (2001) “Gender, Violence, and International Crisis,” Journal of Conflict Resolution,
45 (4): 503–518.

pág. 11 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Carlsnaes, W., Risse-Kappen, T., Risse, T., & Simmons, B. A. (Eds.). (2013). Handbook of international
relations. Sage.

Charlesworth, H (1999) “Feminist Methods in International Law,” American Journal of International Law, 93
(2): 379–394.

Chowdhry, G & Nair, S (eds.) (2002) Power, Postcolonialism, and International Relations: Reading Race,
Gender, and Class. New York: Routledge.

Cohn, C; Kinsella, H & Gibbings, S (2004) “Women, Peace and Security: Resolution 1325,” International
Feminist Journal of Politics, 6 (1): 130–140.

Confortini, C (2009) “Links Between Women, Peace, and Disarmament: Snapshots from the

Connell, R. W (1995) Masculinities. Berkeley, CA: University of California Press.

Detraz, N (2009) “Environmental Security and Gender: Necessary Shifts in an Evolving Debate,” Security
Studies, 18 (2): 345–369.

El-Bushra, Judy (2007) “Feminism, Gender, and Women’s Peace Activism,” Development and Change, 38 (1):
131–147.

Fausto-Sterling, A (2005) “Bare Bones of Sex: Part I, Sex and Gender,” Signs: A Journal of Women in Culture
and Society, 30 (3): 1491–1527.

Gerber, T. P. & Mendelson, S E (2008) “Public Experiences of Political Violence and Corruption in
Contemporary Russia: A Case of Predatory Policing?,” Law and Society Review, 42 (1): 1–44.

Gibbons, M. K (2007) “Essentially Powerful: Political Motherhood in the United States and Argentina,” Ph.D.
Dissertation, University of Maryland.

Gibson-Graham, J. K (2006) A Postcapitalist Politics. Minneapolis: University of Minnesota Press.

Global Security. New York: Columbia University Press.

Goldstein, J. S. & Pevehouse, J. C (2010) International Relations. New York: Longman.

Heeg, Jennifer (2010) Securing the State. Ph.D. Dissertation, Georgetown University.

Hernandez, V. M. A. (2002) “The Mothers of La Plaza de Mayo: A Peace Movement,” Peace and Change, 27
(3): 385–411.

Hoffman, J. (2001) Gender and Sovereignty. London: Palgrave.

Hooper, C. (2001) Manly States: Masculinities, International Relations, and Gender Politics. New York:
Columbia University Press.

Hudson, H (2009) “Peacebuilding through a Gender Lens and the Challenges of Implementation in Rwanda &
Cote d’Ivoire,” Security Studies, 18 (2): 287–218.

Inglehart, R & Norris, P (2003) Rising Tide: Gender Equality and Cultural Change. Cambridge: Cambridge
University Press.

pág. 12 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Kirk, G (1989) “Our Greenham Common: Feminism and Nonviolence; Not Just a Place but a Movement,” in
A. Harris and Y. King (eds.), Rocking the Ship of State: Toward a Feminist Peace Politics, Boulder, CO:
Westview Press, ch. 6.

Kleinman, S (2007) Feminist Fieldwork Analysis. Los Angeles, CA: Sage Publications.

Krause, J (1996) “Gender Inequalities and Feminist Politics in Global Perspective,” in E. Koffman and G. Youngs
(eds.), Globalization: Theory and Practice. London: Pinter, pp. 225–237.

Lapid, Y. (1989) “The Third Debate: On the Prospects of International Theory in a Post-Positivist Era,”
International Studies Quarterly, 33: 235–254.

Locher, B & Elisabeth P (2001) “Feminism and Constructivism: Worlds Apart or Sharing the Middle Ground?,”
International Studies Quarterly, 45 (1): 111–129.

MacKenzie, M (2009) “Securitization and Desecuritization: Female Soldiers and the Reconstruction of Women
in Post-Conflict Sierra Leone,” Security Studies, 18 (2): 241–261.

Maliniak, D; Oakes, A; Peterson, S & Tierney, M. J (2008) “Women in International Relations,” Politics and
Gender, 4 (1): 122–144.

Marchand, M (1996) “Selling NAFTA: Gendered Metaphors and Silenced Gendered Implications,” in Eleonore
Kofman and Gillian Youngs (eds.), Globalization: Theory and Practice. London: Pinter.

Marchand, M H. & Runyan, A. S (eds.) (2000) Gender and Global Re-structuring: Sightings, Sites, and
Resistances. London and New York: Routledge.

McCracken, A (2011) “Princess Dresses, Booty Dances, and Eyeshadow: The Construction of a Global Political
Economy of Beauty,” in J. Ann Tickner and Laura Sjoberg (eds.), Feminist International Relations: Conversations
about the Past, Present, and Future, London and New York:Routledge.

McEvoy, S (2009) “Loyalist Women Paramilitaries in Northern Ireland: Beginning a Feminist Conversation
about Conflict Resolution,” Security Studies, 18 (2): 262–286.

Mohanty, C. T (2003) Feminism without Borders: Decolonizing Theory, Practicing Solidarity. Durham and
London: Duke University Press.

Naples, N (2003) Feminism and Method: Ethnography, Discourse Analysis, and Activist Research. New York:
Routledge.

Naples, N (2009) “Crossing Borders: Community Activism, Globalization, and Social Justice,” Social
Problems, 56 (1): 2–20.

Peterson, V. S. (1996) “The Politics of Identification in the Context of Globalization,” Women’s Studies
International Forum, 19 (1–2): 5–15.

Peterson, V. S. (2009) “Interactive and Intersectional Analytics of Globalization,” Frontiers, 30 (1): 31–40.

Peterson, V. S. (ed.) (1992) Gendered States: Feminist (Re)visions of International Relations Theory. Boulder,
CO: Lynne Rienner Publishers.

Peterson, V. S.(2003) A Critical Rewriting of Global Political Economy. New York: Routledge.

pág. 13 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Pettman, J. J (1996) Worlding Women: A Feminist International Politics. London: Routledge.

Pietila, H (2007) The Unfinished Story of Women and the United Nations. New York: United Nations.

Reinharz, S (1992) Feminist Methods in Social Research. Oxford: Oxford University Press.

Sapra, S (2009) “Gender and the Environment,” in Robert Denemark, (ed.), International Studies Compendium,
New York: Wiley-Blackwell.

Sharoni, S (1993) “Middle East Politics through Feminist Lenses: Toward Theorizing International Relations
from Women’s Struggles,” Alternatives, 18: 5–28.

Shepherd, L (2008) Gender, Violence, and Security: Discourse as Practice. London: Zed Books.

Sjoberg, L & Gentry, C (2007) Mothers, Monsters, Whores: Women’s Violence in Global Politics. London:
Zed Books.

Sjoberg, L & J. Tickner, A (2013). Interstate War and Peace. En W. Carlsnaes, T. Risse, & B. A. Simmons,
Handbook of International Relations. SAGE.

Sjoberg, L (2006) “Gendered Realities of the Immunity Principle: Why Gender Analysis Needs Feminism,”
International Studies Quarterly, 50 (4): 889–910.

Sjoberg, L (2008) “Why Just War Needs Feminism Now More Than Ever,” International Politics, 45 (1): 1–
18.

Sjoberg, L (2009) “Feminist Interrogations of Terrorism/Terrorism Studies,” International Relations, 23 (1):


69–74.

Sjoberg, L (2009) “Introduction to Security Studies: Feminist Contributions,” Security Studies, 18 (2): 183–
213.

Sjoberg, L (2012) “Gender, Structure, and War: What Waltz Couldn’t See,” International Theory 4 (1): 1–
38.

Steans, J. (1998) Gender and International Relations: An Introduction. New Brunswick, NJ: Rutgers University
Press.

Steans, J; Pettiford, L & Diez, T (2005) Introduction to International Relations: Perspectives and Themes.
Harlow: Longman Publishing Group.

Swerdlow, A (1990) “Motherhood and the subversión of the military state: Women Strike for Peace confronts
the House Committee on Un-American Activities,” in Jean Bethke Elshtain and Sheila Tobias (eds.), Women,
Militarism, and Wars. Lanham, MD: Rowman & Littlefield.

Sylvester, C & Swati P (2009) “The Contemporary ‘Mahabharata’ and the Many ‘Draupadis’: Bringing Gender
to Critical Terrorism Studies,” in Richard Jackson, Marie Breen Smyth, and Jeroen Gunning (eds.), Critical
Studies on Terrorism: A New Research Agenda, London: Routledge.

Sylvester, C (1994) Feminist Theory and International Relations in a Postmodern Era. Cambridge: Cambridge
University Press.

pág. 14 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Sylvester, C (1996) “The Contributions of Feminist Theory to International Relations,” in Steve Smith, Ken
Booth, and Marysia

Sylvester, C (2002) Feminist International Relations: An Unfinished Journey. Cambridge: Cambridge University
Press.

Sylvester, C (2009) Art/Museums: International Relations Where We Least Expect It. New York: Paradigm
Publishers.

Tickner, J. Ann (1992) Gender in International Relations: Feminist Perspectives on Achieving

Tickner, J. Ann (2001) Gendering World Politics. New York: Columbia University Press.

Tickner, J. Ann (2005) “What is Your Research Program? Some Feminist Answers to IR’s Methodo logical
Questions,” International Studies Quarterly, 49 (2): 1–21.

Tong, R. P (2008) Feminist Thought: A More Comprehensive Introduction. Boulder, CO: Westview Press.

Tremblay, Manon (2008) “Des Femmes Candidates dans des Circonscriptions Competitives: L’exemple du
Quebec,” Swiss Political Science Review, 14 (4): 691–714.

Walker, R. B. J (1993) Inside/Outside: International Relations as Political Theory. Cambridge: Cambridge


University Press.

Walsh, D (2009) “Citizenship, Gender and Civil Society in South Africa,” in Hannah Britton et al (eds.),
Women’s Activism in South Africa: Working across Divides. Scottsville: University of Kwa-Zulu Natal Press,
pp. 43–72.

Wayland, G (2006) “You Still Don’t Understand: Why Troubled Engagements Continue between Feminists and
(Critical) IPE,” Review of International Studies, 32: 145–164.

Weber, C (2009) International Relations Theory: A Critical Introduction, 3rd edn. London and New York:
Routledge.

Wendt, A (1999) Social Theory of International Politics. Cambridge: Cambridge University Press.

Wilcox, L (2007) “Gendering Offense-Defense Theory,” paper presented at the Annual Meeting of the
International Studies Association. WILPF,” in Laura Sjoberg (ed.), Gender and International Security: Feminist
Perspectives. London: Routledge.

Young, I. M (2003) “The Logic of Masculinist Protection: Reflections on the Current Security State,” Signs:
Journal of Women in Society, 29 (1): 1–25.

Youngs, G (2008) “From Practice to Theory: Feminist International Relations and “Gender Mainstreaming”,”
International Politics, 45 (4): 688–702.

Zalewski M. & Parpart, J (eds.) (1998) The Man Question in International Relations. Boulder, CO: Westview
Press.

Zalewski, M & Parpart, J (eds.) (2008) Re-Thinking the Man Question: Sex, Gender, Violence in International
Relations. London: Zed Books. Zalewski, (eds.), International Relations Theory: Positivism and Beyond,
Cambridge: Cambridge University Press. Sylvester, Christine.

pág. 15 Material Pedagógico 15


PERSPECTIVAS FEMINISTAS SOBRE LAS RELACIONES INTERNACIONALES

Zalewski, M (2007) “Do We Understand Each Other Yet? Troubling Feminist Encounters with(in) International
Relations,” British Journal of Politics and International Relations, 9 (2): 302–312.

pág. 16 Material Pedagógico 15

Вам также может понравиться