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El Perú es un país multicultural y por eso tiene diversas festividades que se presentan a lo
largo del territorio nacional totalmente diferentes entre ellas. Las fiestas del Perú son
muestras de la fervorosidad de su pueblo y muchas veces están ligados a orígenes
religiosos y a combinaciones de las religiones autóctonas con la católica traída por los
conquistadores españoles. La más importante es la del Señor de los milagros.
Celebraciones:
SEÑOR DE LOS MILAGROS
El Señor de los Milagros de las
Nazarenas, más comúnmente
llamado Señor de los Milagros, es una
imagen de Jesucristo originalmente
pintada en una pared de adobe, ubicada
tras el Altar Mayor del santuario de Las
Nazarenas de Lima (Perú) y venerada
en Lima y diversas partes del mundo. La
imagen fue pintada durante el siglo XVII
por un esclavo originario de Angolaque
fue llevado al Perú. La festividad del
Señor de los Milagros es la principal
celebración católica en el Perú y una de
las procesiones más grandes del
mundo.
Su procesión es una tradición peruana,
considerada como la manifestación
religiosa católica periódica más
numerosa del mundo. La imagen original
del cristo fue pintada por un esclavo de
casta angoleña llamado Pedro Dalcón o
Benito, según Raúl Porras Barrenechea.
Posteriormente fueron añadidas las
imágenes de Dios Padre, María y María
Magdalena. Se le conoce como Cristo
Moreno debido a que, entre sus
creyentes, predominaba la gente negra.
Podría estar relacionado, según explica la historiadora María Rostworowski, con el culto
milenario al dios Pachacámac, tan solo por haber sido pintado en el Barrio de
Pachacamilla en el centro de Lima.
El 13 de noviembre de 1655 a las 14:45 horas, tuvo lugar un terrible terremoto que
estremeció Lima y Callao, derrumbándose templos, mansiones y las viviendas más
frágiles, dejando miles de víctimas mortales y damnificados. El terremoto afectó también al
pueblo de Pachacamilla y las viviendas igualmente se derrumbaron. Todas las paredes del
local de la cofradía se derrumbaron, produciéndose entonces el primer milagro: el débil
muro de adobe en donde se erguía la imagen de Cristo quedó intacto, sin ningún tipo de
resquebrajamiento
Procesión
El lienzo que mando a confeccionar
Sebastián de Antuñano es el que sale
en procesión en nuestros días. Este
lienzo fue restaurado el año 1991 por los
especialistas del Museo Pedro de Osma.
La procesión del Señor de los Milagros
se realiza tradicionalmente en el mes de
OCTUBRE. SALE EN PROCESIÓN
DESDE EL Monasterio de las
Nazarenas el primer sábado de octubre
rumbo a la Catedral de Lima y esta vez
regresa al Santuario de las Nazarenas al
día siguiente.
Posteriormente el Cristo de Pachacamilla recorre la ciudad de Lima los días 18, 19 y 28 de
Octubre
Finalmente su último recorrido procesional se realiza el 01 de noviembre en el que la
imagen sale del Santuario de las Nazarenas e ingresa al Monasterio hasta el próximo año.
Su defensa a lima
En 1615, buques
corsarios neerlandeses deciden atacar
la ciudad de Lima, aproximándose al
puerto de El Callao en días previos a la
fiesta de La Magdalena. La noticia corre
pronto hasta Lima y con ello la
proximidad y desembarco en el Callao,
lo que altera los ánimos de los
ciudadanos. Ante esto, Rosa reúne a las
mujeres de Lima en la Iglesia de Nuestra
Señora del Rosario para orar por la
salvación de Lima. Apenas llegada la
noticia del desembarco, la terciaria subió
al Altar, y cortándose los vestidos y
cosiendo los hábitos puso su cuerpo
para defender a Cristo en el Sagrario. Los ánimos del vecindario eran alarmantes, llegando
a huir muchos de Lima hacia lugares distantes. Misteriosamente el capitán de la flota
neerlandesa falleció en su barco días después, y ello supuso la retirada de sus naves, sin
atacar el Callao. En Lima todos atribuyeron el milagro a Rosa y por ello en sus imágenes
se le representa portando a la Ciudad sostenida por el ancla. En Argentina y Uruguay por
el mes de agosto ocurre la "Tormenta de Santa Rosa". La tradición atribuye a Rosa el
origen de este fenómeno natural que logró la huida de los enemigos de tierras peruanas.
Después de su muerte
Retrato póstumo de Santa Rosa, lienzo del
artista italiano Angelino Medoro. Fue pintado
pocas horas después del fallecimiento de la
santa limeña, el 24 de agosto de 1617.
Su entierro fue uno de los más notables que
vivió la ciudad de Lima. En la casa de la familia
De la Maza se formaron grandes multitudes para
contemplar a Rosa. El gentío hubo de esperar a
su traslado hacia la Iglesia del Rosario. Al
traslado acudieron el virrey, el Cabildo Secular y
Eclesiástico, las órdenes religiosas presididas
por la orden de Santo Domingo de Guzmán, los
oidores y personas notables.
Hubo de requerirse la fuerza de la guardia del
virrey para impedir que Rosa fuera desvestida
por los devotos que deseaban llevar alguna reliquia. A pesar de ello, tuvieron que
cambiarle tres veces los hábitos e incluso en el traslado algún irreverente seccionó uno de
sus dedos del pie.
En el lecho de muerte, Gonzalo de la Maza hizo retratar el rostro de Rosa. A su efecto
llamó al pintor italiano Angelino Medoro, quien realizó el primer testimonio de su apariencia
física.
La devoción del pueblo se excedió a tal punto, que en pocos años tuvieron que retirarla de
la Cripta y colocarla en la Iglesia del Rosario
Tradicionalmente la fiesta es el día 30 de agosto. A partir de las reformas al calendario
romano general introducidas a raíz del Concilio Vaticano II.
En la República del Perú es un día feriado y su imagen (descubierta el día de la
canonización en 1671, en la Catedral) recorre las calles de Lima. En el mes de agosto se
rinde culto solemne a la santa en el distrito de Barranco que culmina con el recorrido
procesional del día 30 de agosto.
Santa Rosa de Lima también aparece en los billetes de doscientos soles, el de mayor valor
en circulación.
Pronto la virtud del moreno dejó de ser un secreto. Su servicio como enfermero se
extendía desde sus hermanos dominicos hasta las personas más abandonadas que podía
encontrar en la calle. Su humildad fue probada en el dolor de la injuria, incluso de parte de
algunos religiosos dominicos. Incomprensión y envidias: camino de contradicciones que
fue asemejando al mulato a su Reconciliador. En 1603 le fue concedida la profesión
religiosa y pronunció los votos de pobreza, obediencia y castidad. Hombre de gran caridad,
unía a su incesante oración las penitencias más duras. Era mucho el amor, eran poco el
sueño y la comida, lo sostenía la oración, la infinita misericordia de Dios. Es muy probable
que haya conocido a Santa Rosa de Lima. El Señor tiene sus caminos, y los tuvo de dolor
y alegría para nuestro mulato. Así nos ama el Señor, como a su Madre.
La virtud del santo, su intensa vida espiritual, sostenían su entrega, pero sin duda alguna,
aquello que más recuerda el pueblo de Lima son sus numerosos milagros. A veces se
trataba de curaciones instantáneas, en otras bastaba tan sólo su presencia para que el
enfermo desahuciado iniciara un sorprendente y firme proceso de recuperación. Muchos lo
vieron entrar y salir de recintos estando las puertas cerradas. Otros lo vieron en dos
lugares distintos a un mismo tiempo. Todos, grandes señores y hombres sencillos, no
tardaban en recurrir al socorro del santo mulato: "yo te curo, Dios te sana" decía Martín
con grande conciencia del inmenso amor del Señor que ha gustado siempre de tocar el
corazón de los hombres con manos humanas.
Enfermero y hortelano herbolario, Fray Martín cultivaba las plantas medicinales que
aliviaban a sus enfermos. Su amor humilde y generoso lo abarcaba todo: su amabilidad
con los animales era fruto de su inmenso amor por el Creador de todas las cosas. El
pueblo de Lima venera hoy su dulce y sencilla imagen, con su escoba en la mano dando
de comer, de un mismo plato, a perro, ratón y gato.
Tras una vida de honda respuesta a la gracia de Dios, de intensa y perseverante entrega
vivida al calor de la caridad y el sacrificio, ya a los sesenta años de edad, Fray Martín cayó
enfermo y supo de inmediato que había llegado la hora de encontrarse con el Señor. El
pueblo se conmovió, y mientras en la calle toda Lima lloraba, el mismo virrey fue a verlo a
su lecho de muerte para besar la mano de quien decía de sí mismo ser un perro mulato, tal
era la veneración que todos le tenían. Poco después, mientras se le rezaba el credo,
besando el crucifijo con profunda alegría, el santo partió. Pero esta partida no lo alejó de
su pueblo quien esperanzado le reza a diario aguardando su tierna intercesión y
agradeciendo sus milagros. Fray Martín de Porres, el mulato "santo de la escoba" fue
canonizado el 6 de mayo de 1962 por el Papa Juan XXIII.
San Martín es recordado con la escoba, que es símbolo de su humilde servicio. Por ello,
San Juan XXIII al canonizarlo en 1962 dijo: “¡Ojalá que el ejemplo de Martín enseñe a
muchos lo feliz y maravilloso que es seguir los pasos y obedecer los mandatos divinos de
Cristo!”.
“Yo te curo y Dios te sana”, solía decir San Martín de Porres, el santo de la escoba y
patrono de los barberos, a los grandes señores y hombres sencillos que acudían en busca
de su ayuda. Su fiesta se celebra cada 3 de noviembre.
Patronazgos
Patrón de los enfermos
Protector de los pobres (junto a San
Vicente de Paul y San Camilo de Lelis)
Patrón de los barberos
Patrón de la intercesión de los animales
Patrón de la Hermandad de Caballeros de
San Martín de Porras y San Juan Macías
O.P en Lima Perú.
Patrón de los químicos farmacéuticos
Santo patrón de la Compañía de
Bomberos Voluntarios San Martín de
Porres Nº 65 del distrito del mismo
nombre en la ciudad de Lima, Perú
Santo patrono del Mercado Limoncillo en
el Rímac.
En recuerdo de aquel descubrimiento es que la Cruz se localiza en una gruta en una zona
peligrosa del cerro, de donde es bajada en el mes de agosto hasta el caserío Zapote,
seguida por los feligreses, para al día siguiente de iniciada la celebración (día 3) continúe
su recorrido procesional hasta Salitral para finalmente ser trasladada a Motupe, según el
pedido de su hacedor.
En estos primeros días en los que se realiza el recorrido de la cruz, es constante la
presencia de diferentes homenajes que hacen los pobladores, entre ellos la presencia de
las bandas de música, junto con también fuegos artificiales, además de misas en su honor.
Cuando esta realiza su ingreso a Motupe las campanas de la iglesia suenan en su honor y
el sonido de los fuegos artificiales se mezcla con los aplausos de los feligreses que la
reciben. El ambiente de fiesta se vive tanto por parte de las ceremonias religiosas que se
realizan como también por la presencia de las costumbres festivas de la región y, gracias a
las cuales, podemos ver ferias gastronómicas y artesanales, además de serenatas
artísticas a la cual asisten importantes músicos de la zona.
Al día siguiente de la llegada a Motupe las celebraciones continúan y la Cruz sale en
recorrido procesional tras la realización de una misa y la devoción de sus fieles. El
recorrido procesional se repetirá al día siguiente para descansar los posteriores en la
capilla de Motupe, gracias a lo cual pueden acudir a venerarla. La Santa Cruz volverá a
salir de Motupe el día 14 para realizar el recorrido inverso que la llevara hasta este
poblado y regresar a su ubicación en el cerro.