Elche, arte del espacio £1 empleo sstemitico del plano fo por parte de ala recur de coma Orton Welle ‘cones detamato © del desplaz gin tempo que al cine sriento de ness ena superici de lapantala puede ser objeto de una atencén rigurosa Pr el contra, la evolucisn del cine hasta e 2 podria caractrizar por el debiltamiento de cierto sentido dels pac que no habia que cenfund con un seniido dela imagen 0 on una mera sensiblidad visual. Es notable que esta evoivcién slo empezara ase verdacera és del descubrimiento del monte, Si el nacimiento del cine como arte data de a paca en que “el panteador imaging a dv ‘én da lato en plans’, ello no se debe, como afma André Mal a moul sea un medio de reproc 10 de cada uno de .e exoresion, sino mis bin a que la técnica or slempl, al hacer parceptbies algunos movinsentos de no a extension dl campo visual. As, l espacio cinemtoge je vibe como por la extension dl ugar dela ez dela supe To tatoo que el eal ja totaiad det espacio or de cada uno de los panos,Semin 9 firrado: en £1 maquina ea Genera (The General, 1926) Bus- ter Keaton, el movimiento dia y eta del ten corresponde a una cobssesion espaccl muy precisa, Esta atoncién ala expresin espacial apaecis, PUES, muy pron- to on a histora det cin, y cata preguntarse, afin y a cabo sia Hicroterepi fatéstca(Hycrotiraoie fantatique, 1909] de Mélés| Po 8 tan puraronto cnemtogrfies com tal ocual moots cons- Cente de os afos 1925-1990. En primar lugar hstricamente, pero también lgicament,s se purse decir as, poria logics de un ate ‘que, siondo el arte del movimiento por exceleneia, ha de erganizar 4 cdi de signifleacion de acuerdo con una cancepcion general tanto del tempo como de espct, sin que haya de antorano rin ‘una razon para que el iempo desempere aqui un papel privilegla- do, £1 espacio, por et contrao, parece ser Ia forma general de sensibildad que lo es mas esencil en la medida an que ol cine es Ln arte de la mirada. También as obras alas que en general secon cede el nombre de cine puro —aspaliclas de vanguaria—sehan ‘upado ante todo de problemas de expresién plastica, dea crea cin dena “cineplistica” del gesto.* Advitamos, sin embargo, que Certo nimero de alias —es ol caso de Le sang aun poste [1920 do Cocteau 0 de Un pero andaliz (Un chien andau, 1928] de Bu- ‘et revelan un mado de signleacin que est més vincuado a concepcionesieraraso plctéricas que alas verdaderamente cine ‘matogéficas: cirtamento no es por su grado de absraccén que se pdr deteminar el grado de pureza de una petcula, sno por la ‘espectcidad des medios que emple, ‘Aquino se trata, pues, de mostrar una vex més co algunos realzadores an sido inluidos por ia esttca dee pntra —bus ccando una ‘defrmacién” andloga ala que ee pus encontrar en Ln cuatro de Paolo Uccello 0 dal Greco, 0 parla de la danza —ompasando los movimlentos de lo actores como los los personajes de un ballet—, sine de indear en qué media el cine peste, en este dbf, usar mesos de exprasion qo Ie Son pro= en Crain ae, te ee ap sins (Seca Heta etc crane ae pos. La naturalza misma de la pantala espacio rectangular ‘entaramente leno que ocupa una percion rlavamente estrech {dl campo vsusi—condiciona una pisica del gesto muy cere tee aquela a a que nos habtuaren as ates escéricas. Por ee plo, ese movimiento del brazo, tan familiar en e actor de a Spee, ‘que utlizan los pereonaes de las potas de Mis, encuentra ms facmente su razon de sr en el espacio eecénico, a vez fo €Indeterminado, queen interior de un ectanguo cuyos bordes| estén claramentssefaiadesy que soo ccunscribe de forma provi sonal una poreldn mas 0 menos extensa de la superficie en que transcure la acc, El gesto dal actor de cne no solo se hizo pro: ‘resivamente més discret, sino mas “encogido, deormado, por asi deco, por la proximidad del borde de la pantalla, leservarse 2 ealzador la posiolidad de iterumpito en of momento mismo en que vole ese equi pistica cwya consecucion puede sor tan riqurosamente buscada como en una pintura © un fesco. Por ‘tra parte, por paraddlco que pueda parecer, espacio de a pan- tala ha sido, antes incluso dela utiizaionsistemitica de la pro- funded de campo, un espacio timensional, migntras quo o ‘espacio eseénico muy a menudo tane sélo dos dimensiones por- ‘que a stuacin eevada del excenario en olacion con una parte a ‘menos de los espectadores commie en inoxpresvo el movimiento desde delante hacia ais. Los mas grandes realzadores, por el contravia, shan preocupado de suges esta profunciad do la que ‘en realidad a pantala carece: noes ua simple coincidencia que et ‘motivo visual dela espral aparezca en obras como El gabinete del actor Cag (as Kabnett des Dr. Caliga, 1919} ~elsecuesto e Li Dagover— Nesteat, el vampiro [Nosteatu, ene Sinphonia es Grauane, 1922} el “ocho” del coche one! pais de los fantas- mmas-—, Lo wi yo nuevo [Stacie noveie, 1923] —el ten de ca- rretas en las curvas dela carretera, La dama de Shangai [The Lady from Shanga, 1947] la clda en el tobogn. En doit las| formas de expresion espacial deboran concordar con los modos generales de expresion dal tiempo utlizades en la pelicula, y toda ‘deformacsén del espacio se acompariara con una deformacion del tiempo (enlentacimiento a acelracién) I montae, con ol estable- cimianto de su propo me —en el que se intograro ito partcular de cada plano— pod mostcarsingulamente el cardcter lexpresivo de un movimento dterinado, ‘Asi, contrariamente ao que pea parecer Ye entrada, una pe cul estaré mas expuesta a i seusaion de eateticismo cuanto ‘menor sea su grado de pureza:curno la volurtad de estilo de e3- lzador no log determinar con siiinte rigor el contenido, de acuerdo con e modo de expresién adoptado. Sam Is obras cuyo tema es mas rico en potencia emotvaarecta las que con mayor di ‘icultadlogranqutarse de encinala tvaidad visual: al Considerar 1 cardcter expesivo de plano séle come un elemento parasai, '@ busca la blleza de la imagen por si misma, Desde nuestra pun to de vista, as paticulas mis validas no gon las que cuentan con fa fotogratia mas bela, y ls colaboracién de un operacor genie no oda conseguir que aque nos impusieran una visi del mun do ofgina. Una geometia dol comiciéad Por lo, escogeremos nuestros primeres ejemplos entre las obras ‘menos sospechosas de estticismo: ls pleas cémicas, Yao a \demosrado que en las pou de Chapin habia una comprension| pefecta de as exigencias dea Optica cinematogrticay de lao rencia existent entre la pantalla y el espacio asérco. Sin embar- ‘0, no pueden sor consideradas como tipicas de un are do ‘expresion espacial capaz de velar un universoenel que los mov: ents y los gests adquieran, mas allt de su sigiicacion emot- ‘a un sentido en certo modo mis esancal a su raturaleza movi Una imestigacion de este género parece incompatbe incluso con elcardeter humano de su arte, Akgunos gags vsises como o de cartot perseguido por el cain dela carina (Laquiera de oro [Me gold rush, 1925), Charot junto al montacangs (Di de papa [Pay Day, 1922), Charlot persequides por l paca fa fg de Char ket{Mevitmey Elopement, 1915), tester, gon paibassufcentes del gonio puramente cinomatogrtico de Chaplin. No obstate, et ‘sto, I actu, despazamiento sole adquern sgniacion en relacion con la serie dos estados de conciencia ola intnciones| ‘que poco a poco van descubvendo: el lengua dea palabra 0 de la mimica as remplazade por un moda de expresién “aksvo", me es convencional que el primero, mas sutly mas co que a se- ‘undo, pare cwo valor depende de fa eacion que establecemes| ‘entre signe yl signifleacion, no del carctarnecesario que con- ‘ire a signo su presencia eno interior do un espacio dotominad, ‘Algunas voces, 2 claro, en los moments ens quela emocien es ras intonsa —aleria 0 espanto, embarazo o trunlo—, el gosto ‘acaba por desnudarse de toda sgniicaion precisa y se desanota ‘segun un ritmo quo le es propio. Estos momentos, que consttuyen| lama del art de Chaplin Chariot amenazado pore rector del almacén en Char, encargaco de bazar [Te Flocewaker, 1916 Charlot batindose en duelo en Carmen (Carmen, 1916), Charlot ‘estipando la almohada en La quimera el oro, no pueden ser Ccensidorados, sn embargo, como los ejemplos mas caractrsticos de una comic pura de movimiento, pues surgen de una emo- cl excesva, que ransfguran al expesala, pero dela que extraen| an su somo Esto vale ne sélo para Chaplin, sino pare tds los que han su frido su intueneia. René Cla, por ejemplo, con una ligica mas - ‘gua aunque con algo menos de geno, supe hacer evolucionar a us personajes ena interior de un univers en el que sus ms min- ‘mas intenciones stadia inmediatamente en lengua espacial Li elaccion misma dal ecorade en Catorce de lol peste con {ar su historia. con ol mer iy venir dela cimara de un lado a otro en cate: aqui el espacio es mas un medio comodo de signicar {que un elemento creador de signitiados. Pore cotrao, un cine ‘menos refinado, basado en ura concep menos psicolgica de a comicdad, se acerca mucho mas @ un arte puro del movimiento: la isa, sa intensa aunque menos "ieigonte”, nace de la mera ‘confrontacin de dos clmenslones, dela epeticion mecénica de un geste. Se posian encontrar muchos ejemplos en las pliclas de Mack Sennett y en los primeres burlesques nerteamericanes. El ‘burlesque de los hermanos Mary, incluso en sus momentos més