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Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio

comparativo preliminar entre esquizofrenia y síndrome de Asperger

Article  in  Psiquiatria Biologica · January 2004

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2 authors, including:

Lydia Gayubo
Hospital Universitario Puerta de Hierro-Majadahonda.
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ORIGINALES
Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría
de la mente: estudio comparativo preliminar entre
esquizofrenia y síndrome de Asperger
A. Vírseda Antoranz, M. Portela Vicente, L. Gayubo Moreo y A. García Recio
Servicio de Psiquiatría. Hospital La Princesa. Madrid. España.
INTRODUCCION: Los pacientes con trastornos
generalizados del desarrollo y con esquizofrenia se
han relacionado mediante un déficit en la teoría de la
mente. El objetivo del presente estudio es comparar
el déficit en la realización de tareas de la teoría de la
mente entre ambos y su posible relación con los
déficit neuropsicológicos.
MÉTODOS: Participan en el estudio 30 sujetos
adultos (trastornos generalizados del desarrollo,
esquizofrénicos y trastorno afectivo bipolar, según los
criterios del DSM-IV y/o el CIE-10), explorados
mediante tareas de la teoiría de la mente de primer y
segundo orden, tiras cómicas y baterías WAIS y
Luria-DNA.
RESULTADOS: Entre los 3 grupos de pacientes
únicamente se encuentran diferencias
estadísticamente significativas en la realización de
viñetas de segundo orden.
CONCLUSIONES: Los resultados apuntan hacia la
relación entre el déficit en la teoría de la mente y
otros déficit neuropsicológicos, aunque hacen falta
más estudios para obtener datos sobre las diferencias
entre ambos grupos de pacientes.
Palabras clave:
Esquizofrenia. Trastornos generalizados del desarrollo. Teoría de la
mente. Síndrome de Asperger. Exploración neuropsicológica.
La esquizofrenia y los trastornos generalizados del
desarrollo se han relacionado de 2 maneras diferentes:
primero, a través del concepto de autismo1 y, ahora, a
través del concepto de la teoría de la mente (ToM). El
primero en relacionar de nuevo ambos trastornos ha si-
do, en el marco de la neuropsicología cognitiva, Frith,
Correspondencia: Dra. A. Vírseda Antoranz.
Servicio de Psiquiatría. Hospital La Princesa.
Diego de León, 62. 28006 Madrid. España.
Correo electrónico: aliciavirseda@ozu.es
79.552
Neuropsicological evaluation and déficit in
theory of mind in schizophrenia and
Asperger syndrome
INTRODUCTION: Patients with pervasive
developmental disorders (PDD) or schizophrenia
have been suggested to show a theory of mind deficit.
The aim of the present study was to compare
impairments in the performance in theory of mind
tasks between both groups and their possible
association with neuropsychological deficit.
METHODS: Thirty adult subjects (PDD,
schizophrenia and bipolar affective disorder
according to DSM-IV and/or CIE-10 criteria)
participated in the study. The subjects were
administered first- and second-order theory of mind
tasks, comic strips and WAIS and Luria-DNA tests.
RESULTS: Among the three groups of patients,
statistically significant differences were found only in
the performance of second-order tasks.
CONCLUSIONS: The results suggest an association
between theory of mind deficit and other
neuropsychological deficits. Further studies are
required to obtain data on the differences between
both groups of patients.
Key words:
Schizophrenia. Pervasive developmental disorders. Theory of mind.
Asperger’s syndrome. Neuropsychological tests.
que intenta dar cuenta de los síntomas y los signos de la
esquizofrenia a través de un déficit en la ToM2. Propone
que las personas con esquizofrenia se parecen a las au-
tistas en que también tienen dañado el mecanismo que
les permite mentalizar, y explica las diferencias clínicas
existentes entre autistas y esquizofrénicos por la distinta
edad de aparición. El traslado del déficit en la ToM del
campo de los trastornos generalizados del desarrollo
(TGD) al de la esquizofrenia pone en un primer plano
un déficit común en el área de la “cognición social”3. El
uso de esta herramienta que ha dado tantos frutos en el
Psiq Biol 2004;11(6):219-26 219
Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger
campo de los TGD, en la investigación sobre la esquizo-
frenia recuerda lo ocurrido con el concepto de autismo4,
que se traspasó del campo de la esquizofrenia al de los
TGD en las primeras descripciones del síndrome en los
años cuarenta. Kanner y Asperger sugirieron un trastor-
no del contacto afectivo y destacaron las peculiaridades
de la comunicación, las dificultades de interacción so-
cial, los movimientos estereotipados y las capacidades
intelectuales aisladas de estos pacientes5,6.
La primera investigación clínica que utilizó el escenario
experimental diseñado por Wimmer y Perner para explo-
rar el déficit en la ToM respondía a la pregunta: “does the
autistic child have a theory of mind?”7. En el campo de
los TGD la investigación sobre el déficit en la ToM ha
aportado resultados bastante concluyentes, incluso entre
TGD de alto funcionamiento, con desarrollo lingüístico
verbal8. Se ha puesto en relación el déficit en la capacidad
de mentalizar con un déficit en la coherencia central, inde-
pendiente de la capacidad intelectual9 y que explica la tría-
da sintomática del autismo: deficiencias en relaciones so-
ciales, en la comunicación y en la capacidad de crear jue-
go de ficción10. El hecho de que un déficit en la ToM
(incapacidad de atribuir estados mentales a otros) se pueda
probar empíricamente y generar una predicción sobre el
trastorno social en los TGD, ha convertido a la ToM en
una herramienta útil para estudiar el “desarrollo de la cog-
nición social”11 en pacientes esquizofrénicos.
En la última década se ha generado investigación cre-
ciente en torno a este déficit en los pacientes esquizofré-
nicos, en general, sin resultados tan satisfactorios y con-
cluyentes12. En los primeros estudios se consideraba el
déficit en la ToM una variable de estado (aparición sólo
si existe reagudización psicótica) y se ponía en relación
con determinados síntomas; los esquizofrénicos con al-
teraciones del pensamiento y síntomas negativos presen-
taron con mayor frecuencia alteración en las pruebas de
la ToM13-16, y tan sólo en uno de estos estudios15 se
controló el cociente intelectual (CI) como variable de
confusión. Estudios más recientes señalan la relación de
los déficit en esta área con determinados clústeres sinto-
máticos: desorganización y pobreza psicomotora17, este
abordaje se basa en la clasificación de Liddle18. Desde
el punto de vista de la rehabilitación y de la utilidad de
las tareas de la ToM para desarrollar programas que re-
duzcan el deterioro social en pacientes esquizofrénicos,
otros estudios hacen hincapié en la relación de este défi-
cit con el funcionamiento social19,20.
Sólo se encuentra un estudio que compare el rendi-
miento en las tareas de la ToM en pacientes con TGD y
esquizofrenia: los participantes en dicho estudio eran ni-
ños, se utilizaron para la exploración tareas de falsa cre-
encia de primer y segundo orden, y se controló el CI21.
El resultado de este estudio concluía que los esquizofré-
nicos tenían dificultad en la realización de tareas de la
220 Psiq Biol 2004;11(6):219-26
ToM pero menos que los autistas. Hay pocos estudios
que comparen los déficit neuropsicológicos en ambos
grupos de pacientes; en un estudio reciente se comparó
la puntuación obtenida en “semejanzas” y “compren-
sión” (subescalas de la batería WAIS) y se comprobó
que la puntuación obtenida por los TGD era superior en
“semejanzas” con respecto a los esquizofrénicos de su
muestra22 y que la puntuación de los esquizofrénicos era
superior en “comprensión”.
Uno de los aspectos que se destaca en investigaciones
recientes es la relación de la ToM con capacidades lin-
güísticas pragmáticas23. Resulta interesante este punto
de reencuentro entre los TGD y las capacidades seman-
ticopragmáticas, estudiadas desde perspectivas de neu-
rodesarrollo,24 y también en el ámbito de la neuropsico-
logía infantil mediante la batería Luria-DNI25; sin em-
bargo, esta investigación no se ha extrapolado al ámbito
de la esquizofrenia, donde clásicamente se han descrito
trastornos del lenguaje más groseros26.
El objetivo principal del presente estudio es comparar
pacientes con TGD (con desarrollo lingüístico verbal y sin
retraso mental) y esquizofrenia en su competencia social
(habilidades en tareas de la ToM, capacidades semánticas o
pragmáticas). Existe un conjunto de homogeneidades que
dan un aire de familia a estos pacientes, vinculados por el
concepto de autismo. Pretendemos ver que existen diferen-
cias no explicadas por un fallo metacognitivo común, con
un distinto momento de aparición. Cierto grupo de pacien-
tes que podrían diagnosticarse de TGD se parecen en la su-
perficie de su comportamiento a cierto tipo de pacientes es-
quizofrénicos (sobre todo, esquizofrenia subtipo desorgani-
zada o pobreza psicomotora). Este parecido en la superficie
es el resultado de una trayectoria muy diferente que necesi-
ta ser reconstruida para que se aprecien los diferentes mo-
dos de llegar a un comportamiento socialmente extraño27.
Como complemento y parte de la reconstrucción por la que
se llega al diagnóstico pueden utilizarse estudios neuropsi-
cológicos que ayuden a matizar las deficiencias y las dife-
rencias en las capacidades lingüísticas expresivas (produc-
ción del habla, inclusión de palabras en una secuencia par-
ticular, función nominativa y generalizadora del lenguaje,
función narrativa) y receptivas; en capacidad de compren-
sión de mensajes de forma pictórica y/o verbal, capacidad
de síntesis, deductiva, comprensión de metáforas, etc. Usa-
mos para este cometido baterías WAIS y Luria-DNA. Nos
planteamos en este estudio también si existen diferencias,
como sugiere la bibliografía revisada17, entre los pacientes
esquizofrénicos de nuestra muestra clasificados según los
criterios de Liddle tanto en el déficit en la ToM como en
las exploraciones neuropsicológicas realizadas. Sería inte-
resante, además, ver si existe alguna correlación entre el fa-
llo en tareas de la ToM con los déficit neuropsicológicos
explorados, con independencia del diagnóstico de los pa-
cientes de la muestra.
 Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
TABLA 1. Descripción demográfica y clínica de los participantes en el estudio
Grupos TGD
Sexo (mujeres: varones)1 6 (0:6)
Edad (años) 25,5 (4,96)
Nivel socioeconómico (medio:bajo)2 6 (6:0)
Nivel de educación (básicos:superiores)3 6 (5:1)
Situación laboral (activo:desempleado)4 6 (1:5)
Estado civil (casado:soltero)5 6 (0:6)
GAF 41,66 (10,32)
CIT 95,16 (22,17)
CIM 87,5 (28,34)
CIV 102,16 (14,66)
TGD: trastornos generalizados del desarrollo; TAB: trastorno afectivo bipolar; GAF: Escala de Evaluación Global del Sujeto; CIT: cociente intelec-
tual total; CIM: cociente intelectual medio; CIV: cociente intelectual verbal.
MÉTODOS
Sujetos participantes
Han participado 3 grupos de pacientes adultos diagnostica-
dos en un contexto clínico (evaluación clínica por dos psiquia-
tras entrenados) y previamente a la realización del estudio. La
muestra ha sido extraída del Área Asistencial 2 de la Comuni-
dad de Madrid de pacientes atendidos en los últimos 5 años y
que han requerido hospitalización en, al menos, una ocasión.
El primer grupo incluye a 6 pacientes con TGD, subtipo sín-
drome de Asperger. Los criterios de inclusión para este grupo
se ajustan a los establecidos por Gillberg y Gillberg28, CIE-
1029 y DSM-IV30 para dicho trastorno. El número de pacientes
seleccionados es más reducido, como corresponde a la baja
prevalencia de dichos trastornos31. El segundo grupo incluye a
18 pacientes con esquizofrenia, según los criterios estableci-
dos por CIE-1029 y DSM- IV30. Todos los sujetos tomaban
neurolépticos, y la dosis media era equiparable32. Siguiendo el
modelo tridimensional de Liddle18 hemos clasificado a los pa-
cientes con esquizofrenia en 3 subgrupos: 6 con esquizofrenia
del tipo distorsión de la realidad, 6 del tipo desorganización y
6 del tipo pobreza motora. Como veíamos más arriba, hemos
realizado esta subclasificación, dado que en los estudios pre-
vios se ha encontrado una mayor asociación de un déficit me-
tarrepresentacional con determinados subtipos de esquizofre-
nia (desorganización y pobreza psicomotora)17. El tercer gru-
po incluye a 6 pacientes con trastorno afectivo bipolar (TAB),
según la CIE-1029 y el DSM-IV30; se ha seleccionado a este
grupo porque es equiparable al previo respecto a los criterios
de gravedad y de tratamiento, como grupo control, estabiliza-
dos en el momento del estudio.
Material y métodos
Las exploraciones llevadas a cabo se detallan a continua-
ción. Se realizaron a todos los pacientes, y fue un requisito in-
dispensable su estabilización clínica. Todos estaban en trata-
miento y presentaron una actitud colaboradora en la realiza-
ción de éstas.
1. Para medir la habilidad en la ToM se utilizaron 2 tipos de
herramientas: las viñetas de primer y segundo orden, y las tiras
cómicas. En una historia de primer orden9, un personaje tiene
una creencia errónea sobre el estado del mundo. En una histo-
y síndrome de Asperger
Esquizofrenia TAB
18 (8:10) 6 (3:3)
29,55 (5,3) 29,16 (6,11)
18 (15:3) 6 (4:2)
18 (14:4) 6 (6:0)
18 (14:4) 6 (6:0)
18 (0:18) 6 (2:4)
49,16 (14,16) 61,66(21,36)
100,88 (15,49) 96,66 (23,11)
95,88 (18,19) 93,16 (22,52)
104,83 (13,62) 102,16 (19,29)
ria de segundo orden17, un personaje tiene una creencia erró-
nea sobre la creencia de otro personaje. Para la realización de
estas tareas, el texto narrado se acompaña de imágenes (“viñe-
tas”) que facilitan su comprensión. Se realizan preguntas de
control para cerciorarse de que el posible fallo no sea debido a
falta de atención o a un fallo en la retención de la historia. La
puntuación para las viñetas fue de 1 si era correcta o de 0 si
era incorrecta o incompleta. Las tiras cómicas (comic strips)
son una serie de 28 láminas de viñetas que alternan dichas his-
torias de primer y segundo orden16. Para analizar los datos de
las tiras cómicas se han utilizado 2 variables: una cuantitativa
(número de fallos) y otra dicotómica; el punto de corte se esta-
blece en 8 fallos. Se requiere una buena capacidad deductiva
de los diferentes estados mentales de los personajes para com-
prender los argumentos de las historias, que son el resultado
de falsas creencias o de engaños intencionados. Se considera
fallo grave en la ToM cuando el paciente presenta dificultades
en ambos tipos de tareas, y menos grave si sólo presenta difi-
cultades en tareas de segundo orden17.
2. Se realizó una evaluación neuropsicológica mediante 2 ti-
pos de baterías: WAIS y Luria-DNA. El WAIS resulta de inte-
rés, ya que en estudios previos en este campo se ha señalado el
cociente intelectual como variable de confusión15,33. En el Lu-
ria-DNA destaca su carácter cualitativo y la importancia que
da a los aspectos lingüísticos, ya que hace hincapié en la pre-
sencia o no de dificultades de comprensión, y manejo de con-
ceptos y expresión de éstos con un lenguaje predicativo nor-
mal. La detección de estas alteraciones tiene como consecuen-
cia la imposibilidad de realizar conexiones lógicas que
permitan ordenar el pensamiento y adaptarse a la realidad y la
relación interpersonal; los ítems 27-31 de esta batería valoran
dichos aspectos, por este motivo la puntuación en estos ítems
se ha reflejado en resultados en un apartado individual. La pre-
sencia de este déficit es propia de la disfasia semántica, y su
relación con el síndrome de Asperger ha sido descrita por va-
rios autores25,34.
Análisis estadístico
Para el análisis multivariable se utiliza el programa infor-
mático G-STAT. El test ANOVA se usó para comparar las va-
riables sociodemográficas, la información clínica y la evalua-
ción de la ToM y neuropsicológica. El test de Bonferroni se
empleó para las comparaciones múltiples. Para el análisis de la
relación entre los déficit en tareas de la ToM y los déficit neu-
Psiq Biol 2004;11(6):219-26 221
Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger
100
TGD 83,33
80 Esquizofrenia
TAB
60
38,89
40
33,33
16,67 16,67
20
0
0 Fig. 1. Proporción de pa-
Viñetas de primera Viñetas de segundo
orden orden
ropsicológicos se utilizó la prueba de la t de Student. Tanto la
batería WAIS como la Luria-DNA siguen una distribución
normal en la población general, lo que nos permitió el uso de
pruebas paramétricas35,36.
RESULTADOS
No se encontraron diferencias estadísticamente signi-
ficativas entre los 3 grupos de pacientes (TGD, esquizo-
frénicos y TAB) en edad, sexo, nivel socioeconómico,
nivel de educación, situación laboral, Escala de Evalua-
ción Global del Sujeto (GAF) y cociente intelectual
(medio [CIM], verbal [CIV] y total [CIT]). Sí hay dife-
rencia entre los 3 grupos en cuanto al estado civil, ya
que todos los pacientes esquizofrénicos y TGD estaban
solteros, en contraste con los diagnosticados de TAB.
Los datos sociodemográficos se muestran en la tabla 1.
Resultados al comparar los 3 grupos de
pacientes
En la realización de tareas de la teoría de la mente
No se encontraron diferencias estadísticamente signi-
ficativas en la realización de tareas de falsa creencia de
primer orden ni en la realización de tiras cómicas. La
media del número de fallos en tiras cómicas (total 28)
en pacientes esquizofrénicos fue de 2,8 ± 2,5; en pacien-
tes con TGD, 5,3 ± 2,3, y en pacientes con TAB, 5 ±
2,5. Se encontraron diferencias en la tasa de fallos en la
tarea de falsa creencia de segundo orden entre pacientes
con TGD y TAB (F-valor: 5,51, p < 0,01) y no se halla-
ron entre esquizofrénicos y TAB. Las proporciones de
los pacientes que fallaron en las tareas de ToM se mues-
tran en la figura 1.
222 Psiq Biol 2004;11(6):219-26
66,67
33,33
16,67
Tíras
cómicas cientes que falla en la rea-
lización de las tareas de la
teoría de la mente.
En la realización de exploración neuropsicológica
Luria-DNA
No se encontraron diferencias estadísticamente signi-
ficativas entre los 3 grupos de pacientes en la realiza-
ción del test de Luria, tanto en puntuación total como al
comparar uno a uno los diferentes subtests que lo com-
ponen. Sin embargo, se observa, en general, que tanto la
puntuación total como algunas puntuaciones escalares
obtenidas son menores en pacientes TGD (40 ± 17,6 en
el total; 48,16 ± 15,7 en habla expresiva, 40 ± 17,6 en
memoria lógica, 28,33 ± 5 en dibujos y textos y 45,83 ±
5,3 en actividad conceptual) que las puntuaciones de es-
quizofrénicos. La diferencia más notable es en el subtest
de dibujos y textos, donde la puntuación de los TGD es
de 28,33 frente a 49,41 de los esquizofrénicos y 46,2 de
los pacientes con TAB. A su vez, las puntuaciones de
pacientes esquizofrénicos son inferiores a las de los
TAB en la mayoría de las subescalas. Los resultados de
dicho test se muestran en la tabla 2.
Comparaciones entre los pacientes con
esquizofrenia (subtipos de Liddle)
En la realización de tareas de la teoría de la mente
Al comparar a los 3 subgrupos de pacientes con esqui-
zofrenia no se encuentran diferencias estadísticamente
significativas (fig. 2). Los pacientes con esquizofrenia
del tipo distorsión de la realidad son los que más fallan
al realizar la tarea de falsa creencia de segundo orden
(66,67%). Los pacientes con esquizofrenia desorganiza-
da presentan una tasa de error del 33,33% en la realiza-
ción de todas las tareas de la ToM. La media del número
de fallos en tiras cómicas (total 28) en pacientes esqui-
zofrénicos con subtipo pobreza psicomotora fue de 3,3
 Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger

TABLA 2. Resultados del test neuropsicológico de Luria (media y desviación típica)

Grupos TGD Esquizofrenia TAB

Total 40 (17,6) 45,27 (14,7) 47,5 (18,09)
Ítem 27-31 6,5 (3,27) 6,77 (2,62) 7,16 (2,56)
Percepción visual 47 (9) 48,75 (13,2) 38,1 (15,7)
Orientación 46,66 (18,8) 47,88 (13,7) 45,83 (18,8)
Habla receptiva 46,33 (18,2) 42,22 (14,6) 49,5 (6,5)
Habla expresiva 48,16 (15,7) 58,72 (13,9) 61,66 (9,3)
Memoria inmediata 51 (8,9) 48,61 (17,2) 53,33 (12,9)
Memoria lógica 40 (17,6) 51,77 (14,7) 56,33 (25)
Dibujos y textos 28,33 (5) 49,41 (6,2) 46,2 (6,7)
Actividad conceptual 45,83 (5,3) 45,83 (8,2) 49,83 (21,5)
Control atencional 53,33 (9,8) 52,22 (10) 52 (14,8)
TGD: trastornos generalizados del desarrollo; TAB: trastorno afectivo bipolar.

± 2,7, en pacientes con subtipo desorganizada fue de 3,3
± 3,3 y en pacientes con subtipo distorsión de la reali-
dad fue de 1,8 ± 1,4.
En la exploración neuropsicológica
Tampoco se encuentran diferencias estadísticamente
significativas entre los tres subtipos de esquizofrenia. Se
observan mejores resultados en los esquizofrénicos del
subtipo de distorsión de la realidad que en los otros 2
subtipos de esquizofrenia, donde las puntuaciones tie-
nen una tendencia más parecida a los TGD. En el sub-
test de dibujos y textos donde los TGD tienen una pun-
tuación media de 28,33 ± 5, los esquizofrénicos del tipo
pobreza psicomotora tienen una puntuación media de
38,33 ± 10,8, frente a los esquizofrénicos tipo distorsión
de la realidad cuya puntuación media es de 54,16 ± 17,1
y los de tipo desorganización, cuya puntuación es 55,75
± 16,3. En el substest de habla expresiva también son
los pacientes esquizofrénicos del tipo pobreza psicomo-
tora los que más se acercan a la puntuación obtenida por
los TGD (51,66 ± 21,1 y 48,16 ± 15,7, respectivamen-
te). En el subtest de habla receptiva y, en concreto, en
los ítems 27-31 que exploran relaciones logicogramati-
cales, los esquizofrénicos de los tipos pobreza psicomo-
tora y desorganizada puntúan por debajo de los TGD, y
los esquizofrénicos distorsión de la realidad por encima
(tabla 3).
Relación entre el déficit en tareas de la
teoría de la mente y défict neuropsicológicos
Existen diferencias en la puntuación obtenida en los
ítems 27-31 del Luria-DNA entre los pacientes de la
muestra que fallan y los que realizan bien las viñetas de
primer orden, con una p < 0,06. La puntuación media en
los que fallan las viñetas de segundo orden en el subtest
de actividad conceptual del Luria-DNA (41,25 ± 4,82)
es inferior a los que realizan bien la tarea (50,22 ±
15,15) con una p < 0,06. Existen diferencias estadística-

100

E Pobreza
80 E. Desorganizada
E. Distorsión 66,67

60

40 33,33 33,33 33,33

20 16,67 16,67 66,67

0 0
0 Fig. 2. Proporción de pa-
Viñetas de primera Viñetas de segundo Tíras cientes esquizofrénicos
orden orden cómicas que fallan en las distintas
tareas de la teoría de la
mente
Psiq Biol 2004;11(6):219-26 223
Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger

TABLA 3. Resultados del test neuropsicológico de Luria en los subgrupos de pacientes con esquizofrenia

Esquizofrenia con pobreza Esquizofrenia con distorsión

Grupos Esquizofrenia desorganizada
psicomotriz de la realidad
Total 36,6 (11,6) 52,5 (13,6) 46,66 (16,3)
Ítem 27-31 6 (3,5) 6 (2) 8,33 (1,6)
Percepción visual 40,83 (14,6) 55,4 (8,7) 50 (13,4)
Orientación 44,16 (15,9) 53,66 (12,1) 45,83 (13,1)
Habla receptiva 34,16 (17,1) 39,16 (11,2) 53,33 (8,7)
Habla expresiva 51,66 (21,1) 62,83 (4,7) 61,66 (10,3)
Memoria inmediata 37 (17,2) 59,66 (9,8) 49,16 (17,7)
Memoria lógica 48,66 (10,7) 62,5 (8,2) 44,16 (18,2)
Dibujos y textos 38,33 (10,8) 55,75 (16,3) 54,16 (17,1)
Actividad conceptual 48,33 (14,3) 44,16 (4,9) 45 (6,3)
Control atencional 48,33 (14,3) 55,83 (2) 52,5 (9,8)

mente significativas entre los pacientes de la muestra
que fallan los tiras cómicas y los que los realizan correc-
tamente en las puntuaciones obtenidas en: la subescala
“Historietas” del WAIS (5,33 ± 3,16 y 9,09 ± 3,04, res-
pectivamente), con una p < 0,05; en la puntuación total
del Luria-DNA (35 ± 12,24 y 48,8 ± 15,32), con una p <
0,03, y en el subtest de “Dibujos y textos” del Luria-
DNA (31,94 ± 19,83 y 49,9 ± 17,42) con una p < 0,02.
DISCUSIÓN
El principal propósito de este estudio ha sido compa-
rar la habilidad en la ToM y las capacidades semántico-
pragmáticas entre esquizofrénicos y TGD. Si un fallo
metacognitivo común, independiente de otras funciones
neuropsicológicas, pudiese explicar ambos trastornos
como se recoge en la bibliografía2 no se deberían encon-
trar diferencias estadísticamente significativas en la rea-
lización de tareas de primer orden, de segundo orden, en
las tiras cómicas y en la exploración neuropsicológica.
Los pacientes de nuestra muestra no presentan dife-
rencias estadísticamente significativas en las tareas de
primer orden ni en las tiras cómicas. En cambio, encon-
tramos diferencias en la tasa de fallos en las tareas de
falsa creencia de segundo orden entre los pacientes con
TGD y los pacientes con TAB, y no así entre pacientes
con esquizofrenia y TAB. Estos resultados son concor-
dantes con los hallados en niños. Pilowsky et al también
encuentran que los niños con esquizofrenia tienen difi-
cultad en tareas de ToM, pero menos que los niños au-
tistas21. El hecho de que un porcentaje de pacientes con
TAB falle tareas de la ToM plantea dudas acerca de la
especificidad del déficit; se recoge en trabajos previos la
existencia de déficit en ToM en pacientes bipolares y se
plantea la posibilidad de un factor “psicosis” inespecífi-
co común al TAB y la esquizofrenia37 o bien por un dé-
ficit cognitivo secundario a la enfermedad bipolar38.
En general, los autores que han explorado el déficit en
la ToM en pacientes esquizofrénicos explican las dife-
rencias clínicas de éstos con los TGD por un distinto
momento de aparición de un mismo fallo
metacognitivo17,39. Los primeros trabajos no controla-
ron el CI13,14,16, y se ha señalado como una posible va-

TABLA 4. Resultados al comparar la realización de tareas de la teoría de la mente (ToM) con las puntuaciones
obtenidas en la exploración neuropsicológica (Luria)

Realización de las tareas Viñeta 1 Viñeta 2 Tiras cómicasa

de la TOM Bien (n = 24) Mal (n = 6) Bien (n = 18) Mal (n = 12) Bien (n = 21) Mal (n = 9)
Luria totalb 46,45 (14,85) 37,50 (18,09) 46,94 (16,55) 41,25 (14,16) 48,8 (15,32) 35,0 (12,24)
Ítem27-31 7,25 (2,72) 5,0 (1,41) 7,0 (2,99) 6,50 (2,15) 7,19 (2,76) 5,88 (2,26)
Percepción visual 45,5 (14,75) 49,41 (4,0) 44,55 (14,66) 48,87 (11,14) 45,92 (13,13) 47,11 (14,58)
Orientación 48,62 (14,37) 41,66 (18,88) 49,83 (16,35) 43,33 (13,2) 48,42 (14,57) 44,44 (17,40)
Habla receptiva 46,33 (13,63) 37,16 (15,03) 43,44 (13,66) 46,08 (15,32) 46,42 (14,35) 40,0 (13,36)
Habla expresiva 57,79 (12,58) 54,83 (19,85) 58,16 (14,03) 55,75 (14,34) 59,14 (13,35) 52,66 (15,09)
Memoria inmediata 49,83 (16,20) 50,83 (8,61) 52,27 (16,76) 46,66 (11,34) 52,19 (16,87) 45,0 (7,07)
Memoria lógica 50,83 (16,4) 48,33 (24,63) 52,22 (17,85) 47,5 (18,27) 50,71 (19,45) 49,44 (14,45)
Dibujos y textosb 46,06 (16,84) 38,33 (29,77) 46,97 (19,6) 40,83 (20,09) 49,9 (17,42) 31,94 (19,83)
Actividad conceptual 47,25 (13,22) 44,16 (11,58) 50,22 (15,15) 41,25 (4,82) 48,76 (13,08) 41,66 (11,18)
Control atencional 52,79 (11,24) 50,83 (8,61) 51,50 (12,13) 53,75 (8,29) 53,42 (10,05) 50,0 (12,24)

aVariable dicotómica de tiras cómicas. bDiferencias estadísticamente significativas (p < 0,05) en el resultado del Luria total y en la realización del
subtest de dibujos y textos, entre pacientes que fallaron o que hicieron bien las tiras cómicas.

224 Psiq Biol 2004;11(6):219-26

 Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger

TABLA 5. Resultados al comparar la realización de tareas de la teoría de la mente (ToM) con las puntuaciones
obtenidas en la exploración neuropsicológica (WAIS)

Realización de las tareas Viñeta 1 Viñeta 2 Tiras cómicasa

de la TOM Bien (n = 24) Mal (n = 6) Bien (n = 18) Mal (n = 12) Bien (n = 21) Mal (n = 9)
CIV 103,83 (14,12) 103,50 (17,61) 102,94 (15,64) 105,00 (13,3) 105,14 (14,62) 100,55 (14,7)
Información 11,33 (3,14) 11,83 (2,4) 10,88 (3,44) 12,25 (1,95) 11,19 (3,05) 12,0 (2,87)
Comprensión 10,45 (3,12) 10,16 (4,57) 10,50 (3,18) 10,25 (3,76) 11,0 (3,30) 9,0 (3,27)
Aritmética 9,37 (2,81) 8,33 (3,14) 9,55 (3,18) 8,58 (2,27) 9,52 (2,76) 8,3 (3,04)
Semejanzas 12,16 (2,79) 12,50 (3,39) 11,66 (2,78) 13,08 (2,87) 12,23 (2,75) 12,22 (3,27)
Dígitos 10,54 (3,4) 11,0 (4,51) 10,05 (3,65) 11,5 (3,39) 11,0 (3,52) 9,77 (3,73)
Vocabulario 11,2 (2,39) 11,5 (2,34) 11,0 (2,47) 11,66 (2,18) 11,33 (2,49) 11,11 (2,08)
CIM 94,37 (18,36) 90,83 (30,61) 93,33 (18,95) 94,16 (24,1) 97,8 (20,58) 87,0 (19,78)
Clave de números 9,2 (3,1) 9,33 (3,61) 9,0 (3,36) 9,58 (2,90) 9,66 (3,42) 8,22 (2,22)
Figuras incompletas 9,7 (3,43) 9,16 (4,26) 9,66 (3,43) 9,50 (3,84) 10,04 (3,54) 8,55 (3,50)
Cubos 9,29 (3,77) 7,66 (2,87) 9,44 (3,85) 8,25 (3,27) 9,19 (3,74) 8,44 (3,46)
Historietas2 8,29 (3,39) 6,6 (3,93) 8,33 (3,44) 7,41 (3,65) 9,09 (3,04) 5,33 (3,16)
Rompecabezas 8,33 (3,11) 7,0 (2,89) 8,44 (3,07) 7,50 (3,11) 8,38 (3,12) 7,33 (3,0)
CIT 99,5 (16,47) 96,83 (25,07) 98,27 (18,15) 100,0 (18,58) 102,09 (17,65) 91,66 (17,68)
aVariable dicotómica de tiras cómicas. bDiferencias estadísticamente significativas (p < 0,05) en los resultados del subtest de historietas, entre pa-
cientes que fallaron o que hicieron bien las tiras cómicas.
CIV: cociente intelectual verbal; CIM: cociente intelectual medio; CIT: cociente intelectual total.

riable de confusión17. En los trabajos en los que se tiene
en cuenta el CI de pacientes esquizofrénicos15,20,33,40 no
se encuentran diferencias estadísticamente significativas
con los grupos de control. En nuestra muestra de pacien-
tes tampoco hallamos diferencias estadísticamente signi-
ficativas entre los grupos de pacientes respecto al CI. En
la exploración con el Luria-DNA tampoco se encuentran
diferencias estadísticamente significativas, aunque la
tendencia es que los TGD obtengan una puntuación me-
nor que los esquizofrénicos, y éstos, menor que los TAB
en los subtests de habla expresiva, memoria lógica, acti-
vidad conceptual y, sobre todo, dibujos y textos. No he-
mos encontrado estudios comparativos entre TGD y es-
quizofrenia que utilicen esta batería, quizá por su carác-
ter cualitativo. Este carácter es el que nos ha interesado
de cara a resaltar la relación entre el déficit en la ToM y
algunos aspectos neuropsicológicos. El subtest de dibu-
jos y textos, por ejemplo, explora la comprensión de
mensajes transmitidos de forma pictórica y verbal. Su
significado se aclara como resultado de una actividad
analiticosintética. Los dibujos sólo pueden interpretarse
después de la síntesis de una serie de detalles y una vez
hechas ciertas deducciones. Los textos de las historias
tienen una estructura gramatical simple, expresan un te-
ma complejo, y para captar su esencia se requiere un
cuidadoso análisis de éstos y de sus relaciones internas.
La comprensión de las metáforas indica que el sujeto
traspasa los límites de la función nominativa del habla y
es capaz de asignar una significación sutil a determina-
das expresiones en una situación dada35. Nos parece re-
levante, por tanto, que la puntuación en los TGD sea
menor en este subtest.
Comparando los resultados obtenidos entre los 3 sub-
tipos de pacientes esquizofrénicos en nuestra muestra no
encontramos diferencias estadísticamente significativas
en la realización de tareas de la ToM. Este resultado di-
fiere de los hallazgos obtenidos por Mazza et al17 y es
similar a los obtenidos por Pylowsky et al21 en su mues-
tra de niños. En la exploración neuropsicológica tampo-
co hallamos diferencias estadísticamente significativas
con el WAIS ni con el Luria-DNA. El subtipo distorsión
de realidad, en el que existe un mayor número de fallos
en tareas de la ToM (viñetas de segundo orden), es el
que obtiene, en general, mejores resultados en la explo-
ración neuropsicológica. Los subtipos de esquizofrenia
desorganizada y pobreza psicomotora presentan un ma-
yor déficit semanticopragmático.
Utilizando toda la muestra de pacientes, sin tener en
cuenta el diagnóstico, encontramos una relación entre el
déficit semanticopragmático y fallo en viñetas de primer
orden, así como entre la puntuación en la subescala acti-
vidad conceptual del Luria-DNA y el fallo en viñetas de
segundo orden. También encontramos relación entre el
fallo en tiras cómicas y la puntuación obtenida en las
historietas del WAIS, en el subtest dibujos y textos, y en
la puntuación total del Luria-DNA.
El tamaño de la muestra analizado en este estudio pre-
liminar no permite garantizar que los resultados obteni-
dos en las correlaciones no sean debidos al azar, por lo
que no podemos rechazar la hipótesis sobre el déficit en
la ToM como un déficit metacognitivo común a ambos
trastornos e independiente de otras funciones neuropsi-
cológicas. A pesar de las limitaciones, los resultados
descritos apuntan hacia la no independencia de la ToM
de las funciones semanticopragmáticas del lenguaje y
otras funciones neuropsicológicas y nos alientan en la
búsqueda de diferencias entre ambos grupos de pacien-
tes. Es necesaria la realización de más estudios sobre el
Psiq Biol 2004;11(6):219-26 225
 Vírseda Antoranz A, et al. Evaluación neuropsicológica y déficit en teoría de la mente: estudio comparativo preliminar entre esquizofrenia
y síndrome de Asperger
déficit en la ToM y su correlación con otros déficit neu-
ropsicológicos para obtener datos que nos ayuden a re-
construir la trayectoria que recorre cada uno de los pa-
cientes y la manera en que tienen restringido el acceso
al transcurrir cotidiano de la vida en sociedad41.
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