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Texto bíblico:
Salmo 127:1 “Si Jehová edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican”
¿Qué es edificar?
Según el diccionario de la lengua española: es construir un edificio. Dar buen ejemplo:
Edificio: obra construida para la habitación o uso análogos.
Alguna vez hemos pensado que nosotros cada día estamos edificando nuestros
hogares o lo estamos destruyendo.
¿Cuáles son esos valores que estamos construyendo en nuestra familia? ¿Qué
valores son? Valores: son convicciones fuertes que gobiernan nuestra vida y que
transmitimos a nuestros hijos sean buenos o malos.
Dios tiene un sistema de valores en su palabra. Feliz es la familia que los
practica. Los valores don creídos, vivimos y compartimos, son más doctrinas,
normas, prácticas, costumbres y leyes que unos a otros quieren imponer.
La familia se compone de relaciones que son producto de:
Los padres son los que dan identidad: Padre: identidad, Madre: seguridad; a sus
hijo. Los padres son agentes para bendecir a sus hijos o para maldecir. Los padres que
bendicen a sus hijos para ellos sean bendecidos en todo, finanzas, estudios, trabajo.
Jesús vio a redimir a la familia. El instrumento que Dios usa para impartir esa identidad
y ese destino es la familia.
Los niños aprenden y adquieren valores que acomodan sus vidas. Es importante que
estos valores que constituyen correctos, valores fuertes, valores cristianos en sus hijos,
valores bíblicos en medio de tantos (millones) de valores mundanos. Nosotros los
padres tenemos.
La obligación antes Dios de discipular a nuestros hijos siempre, sin importar su
edad, solteros o casados. Tenemos que luchar por construir una casa firme estable y bien
edificada.
La familia se relaciona a base de:
Actitudes: motivaciones internas del corazón
Comportamiento: conductas
Comunicación: forma de expresar, ideas, vestimentas, entre otras.
Desarrollo: valores para construir en la familia.
3) Vivir en familia
Colosenses 3: 18:25
Se nos desglosa todo lo que concierne a la vida en familia. Se nos habla del orden de
Dios en la familia.
Casadas, estad sujetas a vuestros maridos, como conviene en el Señor.
Los Maridos, amad a vuestras mujeres, y no seáis ásperos con ellas.
Los Hijos, obedeced a vuestros padres en todo, porque esto agrada al Señor.
Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.
Siervos, obedeced en todo a vuestros amos terrenales
POST-ENCUENTRO
Salmo 127: 3
He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre.
Los hijos son una herencia del Señor, los frutos del vientre son una recompensa
a) Una herencia se cuida, se protege, es de mucho valor. Porque ya son un regalo:
recompensa. Debe cuidarla, amar esa herencia para que no me sea quitada.
b) Nosotros somos como padres los llamados a ser maestros de nuestros hijos,
especialmente en la educación espiritual de ellos. No es la maestra de escuela
dominical, de iglesia de niños, ni la televisión, ni la niñera, empleada, la suegra
o abuelita. No son ellos los que van a enseñar el temor de Dios a sus hijos
porque esa responsabilidad se nos ha delegado a nosotros.
c) Dios exige de los padres que construyan a sus hijos con él en el centro de la
enseñanza.
Deuteronomio 6:6-7
“Y estas palabras que yo te mando hoy, estarán sobre tu corazón; y las repetirás
a tus hijos, y hablarás de ellas estando en tu casa, y andando por el camino, y al
acostarte, y cuando te levantes
d) El padre es el primer responsable por la instrucción de los hijos, Efesios 6:4 “Y
vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina
y amonestación del Señor.”
Proverbios 22:6
“Instruye al niño en su camino, Y aun cuando fuere viejo no se apartará de él.
El amor requiere disciplina (no a la opresión)
Hay un tipo de padre que es un agresor verbal, físico que daña emocionalmente a
sus hijos.
Pero Dios dice en su palabra
Proverbios 13: 24 “El que detiene el castigo, a su hijo aborrece; Más el que lo ama,
desde temprano lo corrige.”
No pretendas sacar de un árbol manzanas. No podemos tener un buen fruto de sus
hijos si lo que he sembrado son puras lágrimas, desprecios, rechazo, falta de perdón,
atención, hasta maltratos físico, abandono.
A una semilla le van pasando muchas cosas en el camino pero si es bien cuidada,
regada, da su fruto a su tiempo, sino debe ser podado desde sus raíces para que
pueda volver a dar fruto.
Proverbios 29:17
Corrige a tu hijo, y te dará descanso, Y dará alegría a tu alma.
La corrección es amor, es enseñar a no hacer lo incorrecto, es tener una buena
actitud para indicar lo malo pero ayudar y dar solución de cómo no volverlo a hacer.
La forma que podemos corregir es a través del amor y la misericordia. Es un proceso
que lleva tiempo y paciencia, no los desprecies, ni los maltrates.
Colosenses 3:21
“Padres, no exasperéis a vuestros hijos, para que no se desalienten.”
¿Tiene usted una palabra de amor, sabe usted expresar sus sentimientos con
ternura, sabe decir un te quiero, pedir perdón?. Las palabras ásperas general
contiendas.
Sabes, el niño necesita de papa y mama para estar bien, ni la mamá puede sustituir
la imagen paterna ni viceversa. Pero es muy importante la identidad de los niños
con esa imagen paterna: protección seguridad, confianza, una imagen que ha sido
distorsionada.
Muchas jóvenes solteras, embarazadas, mucho hogar destruido, por la
desintegración familiar.
Tú como padre debes gobernar bien tu familia y ver que tus hijos te obedezcan y
respeten. Respeten a las autoridades pero debes pagar el precio: mucha sucesión
de:
a) Hacer una decisión con todo tu corazón, no volver atrás (compromiso).
b) Disciplinar: sujetar esta carne y buscar de Dios
c) Perseverancia
“Si Jehová no edificare la casa, En vano trabajan los que la edifican”
1. Primero debe ser Cristo el señor de mi corazón
2. El de mi casa.
3. De mis hijos
(Relaciones Rotas)
POST-ENCUENTRO
Introducción
Actualmente nuestra sociedad está sufriendo una alta deficiencia en relación a la
identidad paterna y esto se refleja en elementos sencillos que están a la vista de todas las
personas.
Estas cosas han afectado en tal manera la familia que al no existir un
reconocimiento del Papá en el hogar no podemos conocer al Padre Celestial ni
identificamos con Él.
Este desequilibrio social nos ha afectado tanto que la cantidad de madres solteras y
madres con matrimonios desintegrados supera al número de familias consolidadas,
además que este ha sido el plan del enemigo para que no lleguemos a tener una relación
con nuestro Padres Celestial.
Fuimos creados por Dios y él nos hizo sus hijos por tanto siempre vamos a
necesitar la figura paterna para nuestra vida y para el desarrollo de la misma. Sin esta
figura paterna nuestro crecimiento humano, profesional, social, emocional, se verá
marcado y afectado.
El decir que una niña no ocupa a su padre por su género, se identifica más con su
madre es una falsa, y decir que una madre cubriría lo que el padre no le puede dar es
otra falsa, ya que cada persona padre o padre tiene un rol diferente dentro de la familia y
cada uno debe de aportar su parte para ser la familia completa.
El Padre agresivo
Agresor Físico:
Es aquel adre que ha dañado nuestra integridad física. A base de golpes, heridas
cicatrices, maltratos a la madre, a un familiar, a las personas. Pierden el control se
desesperan y su reacción es incontrolable.
Agresor verbal
El padre Alcahueta
El Padre Irresponsable.
Este tipo de padre es aquel que pos su mala manera de pensar no provee las
necesidades de las familias.
Trabaja cuando puede, no se preocupa por el sustento ni las necesidades básicas de
la familia. Nunca está presente en sus cumpleaños, ni los celebra pies nunca tiene dinero
para una festividad, una celebración navideña, un día de la madre, entre otros.
Este tipo de padre hace vivir a sus hijos como pobres, la rutina y la miseria
acompañan a la familia siempre y todo porque este tipo de padre no ahorra, no tiene
trabajo estable, nunca se ha proyectado, camino bajo el refrán de coyol quebrado, coyol
comido. Su herencia son deudas, vida dura, rencores, soledad, entre otros.
Este tipo de padre también mengua en la responsabilidad de instruirlos, criarlos,
compartir.
El padre ausente
El padre se caracteriza porque siempre esta físicamente pero no existe como padre.
Este tipo de padre puede que cumpla con todas las necesidades del hogar, nunca falta
sustento, comodidades no lujos pero si falta un abrazo una palabra de cariño (aunque no
dice palabras agresivas) no comparte estrechamente con la familia ni conoce a sus hijos
en nada.
Quizás sepa que su hija fue a la primaria o secundaria y que inclusive está en la
universidad pero no conoce como la pasa en el escuela, quien la ofendió en el colegio,
cuales son sus amigas y amigos.
Este tipo de padre hace sentir desprotegidos a sus hijos porque los mismos nunca
han tenido esa figura defensora, esa figura de cobertura que quizás por su ausencia en el
momento que un problema se presentó y se necesita la figura de poder, de carácter, y
fuerza para que saliera a su defensa, este nunca figuro.
Es el padre que prefiere ver televisor, antes de escuchar o estar en un trabajo, antes
de compartir un fin de semana en un lugar de recreación y se justifica dándole al hijo las
cosas que necesita para que él se divierta con otras personas menos con él.
El padre ausente no ha estado en mi graduación de la escuela, o colegio o
universidad. No estuvo en aquella presentación del Kinder cuando me vistieron de
florecilla, ni estuvo cuando la temperatura llego a 39 grados y lo quiera bien cerca.
El padre amoroso.
INT.: ST 3:10
EF. 1:.3-4 ROM 3:23/ 5:8; JUAN 3:16; EF. 2:8-9 1P 3:18
Domingo Pelayo.