Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
en los estudios
de género
Volumen 2
Diseño de la colección:
Estudio Sagahón/Leonel Sagahón y Marcela Morales
Cuidado de la edición:
Cecilia Olivares Mansuy
Corrección de estilo y de pruebas:
Alberto Alazraki, Alejandra Tapia, Romina M. Dávila
Imagen de portada:
Rosana Mesa Zamudio
Formación, interiores y forros:
Alina Barojas Beltrán
Primera edición
abril de 2018
Esta edición y sus características son propiedad de la UNAM. Prohibida la reproducción total
o parcial por cualquier medio sin la autorización escrita del titular de los derechos patrimoniales.
7 Introducción
Hortensia Moreno y Eva Alcántara
15 Aborto
Marta Lamas
31 Autonomía
Alethia Fernández de la Reguera
47 Cuerpo y política
Marta Lamas
65 Dignidad
Amneris Chaparro
81 Equidad a debate
Ana Buquet Corleto
97 Estudios de género
Ana María Tepichin Valle
123 Heterosexualidad
Zenia Yébenes Escardó
137 Identidad
Estela Serret
151 Intersexualidad
Eva Alcántara
169 Masculinidades
Salvador Cruz Sierra
183 Memoria
Helena López
233 Performatividad
Hortensia Moreno y César Torres Cruz
265 Pornografía
Antoine Rodríguez
321 Sexualidad
Eva Alcántara y Ana Amuchástegui
Hortensia Moreno
Eva Alcántara
aquello que le dio origen, los debates que lo conforman y su potencia trans-
formadora quedan ocultos bajo la superficie. Los conceptos no son verdades
acabadas, prescripciones o ideas platónicas. Adorno escribió: “La tarea de
un tratamiento filosófico de la terminología filosófica no puede ser otra cosa
que reavivar la vida coagulada en los términos, en las palabras” (1976: 15).
Porque las palabras —contenedores de vida coagulada— son el vehículo por
excelencia de las ideas, pero solo se realizan en el vértigo incontenible de esa
vida que quieren expresar.
En los estudios de género se elaboran, proponen y discuten conceptos
que son, sobre todo, herramientas de trabajo. Nos interesa evocar la imagen
de esa caja de herramientas de la que habló Deleuze, una teoría que no tiene
nada que ver con el significante: “Es preciso que sirva, que funcione, y que
funcione para otros, no para uno mismo. Si no hay personas que se sirvan
de ella, comenzando por el propio teórico, es que la teoría no vale nada, o
que aún no llegó su momento. No se dan vueltas y más vueltas a una teoría
pasada, se hacen otras, quedan otras teorías por hacer” (Foucault y Deleuze
2010: 435). Más que dar cuenta de una “realidad”, pensamos que los textos
muestran el irremediable desfase respecto de la dinámica de la vida. Porque
la vida, antes que la teoría, se multiplica continuamente (Foucault y Deleuze
2010: 435).
La multiplicidad, entonces, es característica de todos los conceptos,
que se mueven de manera simultánea en distintos planos (Foucault y
Deleuze 2010). En el plano teórico, se entretejen con la red significante y
abren conexiones que posibilitan la tarea hermenéutica de cualquier campo
de estudio. En el plano práctico, abren o cierran posibilidades de visibili-
dad de problemáticas específicas, señalan prioridades e indican posibles
rutas de acción. En el plano político, las conexiones entre teoría y práctica
atraviesan territorios de poder y favorecen la develación de relaciones
imperceptibles, la lucha por establecer criterios de verdad, y la validación
y legitimización de algunas certezas.
Los textos que conforman este libro muestran que la adopción de
una construcción teórica no es un acto trivial, ya que al mismo tiempo se
adscriben —incluso cuando no lo reconocen— a una serie de compromi-
sos epistemológicos, metodológicos, sociales, éticos, políticos. Los estudios
de género producen conexiones múltiples en torno a los problemas que
se intenta analizar; por ello los ensayos que presentamos muestran un
a los efectos centralizadores del poder del discurso, a las jerarquías que pos-
tulan verdades sostenidas en su propia obviedad o en posiciones dogmáticas
que desconocen que la transformación social es inevitable en la historia
de la humanidad. La exploración de estos territorios persigue “romper el
sometimiento de los saberes históricos y liberarlos […], hacerlos capaces de
oposición y lucha contra la coerción de una discurso teórico unitario, formal
y científico” (Foucault 2002: 21-24).
En el centro de esta lucha se pone la relación de poder y no la relación
de sentido (Foucault 1999: 44), porque va más allá de la legitimidad del dis-
curso o del sujeto autorizado para emitirlo. Lo que está en juego es la vida,
los cuerpos, las intimidades y las posibilidades de existencia; la definición
de lo humano y de cómo la humanidad está atravesada históricamente por
los marcadores simbólicos del sexo-género, la raza-etnia, las oportunidades
en función de clase social, edad, variaciones corporales, prácticas eróticas.
Lo que está en juego es qué consideramos salud y qué enfermedad, qué es
legal o ilegal, normativo o abyecto; y con ello, quiénes pueden decidir y qué
es posible desear.
Se trata entonces de las posibles maneras de nacer, vivir y morir. De quié-
nes pueden legítimamente casarse, fundar una familia, tener descendencia.
De cómo se organiza el deseo, el erotismo y el placer, es decir, el fundamento
de la vida y la muerte. Todo ello en el presente, pero sobre todo en el futuro.
Para concluir, queremos agradecer la iniciativa de la doctora Helena
López, quien nos propuso originalmente la organización de este proyecto,
y el constante apoyo de la doctora Ana Buquet en su realización. La buena
disposición del Comité Editorial del entonces Programa Universitario de
Estudios de Género y ahora Centro de Investigaciones y Estudios de Género
para acogerlo. El trabajo de Cecilia Olivares en el área de Publicaciones. Las
valiosas aportaciones de dos dictaminadoras anónimas. Y, por supuesto, la
colaboración de todas y cada una de las personas que investigaron, escribieron
y revisaron las entradas que constituyen este libro.
Referencias