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Arely del Carmen Migoni Barbosa

Román Eduardo Maldonado Reyes


Grupo: 1351

El matrimonio, la sexualidad y sus instituciones en la Roma antigua.


La sexualidad y su desarrollo en Roma, tiene un largo camino que compete a un estudio que
profundice todos sus detalles con minuciosidad. Sin embargo, el presente trabajo, debido a su
límite, se centra en la sexualidad desde la perspectiva jurídica y social. Así mismo, también se
abordará sobre las múltiples disciplinas en las que se estudio y desarrolló la sexualidad romana
y el matrimonio, desde los conceptos de la Roma anitgua. Con el fin de destacar y contrastar
las instituciones y la sociedades que conformaron los conceptos previamente mencionados, con
los conceptos que nos atienen en la modernidad. Es menester mencionar que, debido a su
extensión, no será posible abordar con totalidad todos los temas, pero sí se podrá en algunos
temas en específico.
El pudor y el honor en la antigua Roma
En la Antigua Roma, el hombre, tiene como función primordial resguardar el honor de su
familia y hacer que su nombre pase a la historia; la mujer, por su parte, jurídicamente, al igual
que sus hijos, dependía de la autoridad de su padre o esposo. La pudicitia1es a la mujer lo que
el honor al hombre.
Era el hecho de casarse lo que daba a la mujer el estatuto de mater familias, por su
parte, un hombre era “padre” a condición de ser heredero de su ascendiente masculino, goza
del derecho de la vida y la muerte sobre todos los miembros de su familia. Las hijas pueden ser
o no admitidas en el seno familiar.2 La mujer era la que mandaba sobre los esclavos y educaba
a los niños.
Era impensable que una joven quedara soltera3. La edad legal para contraer matrimonio
era a partir de los doce años en la mujer y catorce en el varón. Los sentimientos no se
involucraban en el matrimonio, sólo era un asunto de interés entre dos familias.4
Virtud, impudicia, homosexualidad y prostitución.

1
Pudicitia, ae, f: pudicicia, castidad. Algunas figuras ilustres o condenables por haber preservado o no su castidad
son Tarpeya, Horatia, Clelia, Lucrecia, Verginia, entre otras. Todas estas mujeres fueron sacrificadas a la grandeza
de Roma y, por su sacrificio, simbolizan la gloria romana. (Arangio-Ruiz, Vicente. Lex Iulia de Maritandis
Ordinibus. Historia del derecho humano. Madrid. Biblioteca Jurídica de actores españoles y extranjeros. Instituto
Editorial. 1963)
2
Una de las determinaciones dictadas por Rómulo establece la preservación íntegra del linaje masculino de una
familia, en cuanto a las herederas femeninas, podían optar por conservar únicamente la primogénita. Algunas
niñas portaban solamente el apellido único del padre, sin nombre ni apodo, en el caso de dos hijas dentro de la
familia, se les agregaba major o minor a su apellido.
3
Una joven que a los dieciséis o diecisiete años estuviera soltera, era preocupante en cuanto a su porvenir como
esposa.
4
Matrimonio, proviene del latín matrimonium que, a su vez, deriva de matrem (madre) y monium (calidad de). El
matrimonio refleja la unión entre marido y mujer. Los matrimonios por obligación sólo afectaban a los ciudadanos
libres y no necesitaba consumarse para existir jurídicamente.
Virtus: Indica la virilidad del hombre en su potencia sexual. El ciudadano romano ha nacido
para dominar.
El hombre, tiene prohibido su dominio sexual sobre los niños, los hombres y mujeres
de nacimiento libre, los ciudadanos e hijos de ciudadanos, a excepción de su legítima mujer.

Como tal, la homosexualidad es un termino reciente y, dicho esto, no figuraba en la


sociedad romana, pues era el hombre romano bisexual y su deseo no tropezaba con alguna
prohibición sexual, sino con su estatuto social.
La ley Escantinia condena ciertas relaciones homosexuales: En la relación entre un
adulto y un niño, sólo el adulto debería ser castigado; en la relación entre dos adultos, sólo el
hombre pasivo, el impudicus5, merecía castigo6. Esta ley no condena como tal a la
homosexualidad, pues, como ya se había dicho antes, el hombre romano era bisexual.
El hombre no se detiene por la exigencia de la pureza de sangre 7, ya que el donante y
su cuerpo no corren el riesgo de ser mancillados, salvo que sea una relación homosexual pasiva.
La prostitución no era considerada infame en Roma8, incluso, actuaban a favor de la
salud pública. Las mujeres declaradas meretrix, es decir, la que gana dinero comerciando con
su cuerpo, se libraba de los castigos acarreados por el adulterio o estupro9. Esto causó que
muchas mujeres empezaran a registrarse con los ediles10 como prostitutas, para así librarse del
cargo de estupro. Las mujeres trabajaban de prostitutas en burdeles, taberna y baños públicos.
Niñas abandonadas, hijas vendidas o mujeres capturadas de otros pueblos conformaban, en su
mayoría, este sector.
Debido al cambio que sufrió el matrimonio, las prostitutas también obtuvieron un
relevante papel para la sociedad romana, ya que, se encargaban de resguardar las pasiones en
los hombres.

5
Impudicita: pasividad sexual; en un hombre libre es un crimen, en un esclavo es una obligación y en el liberto
es un servicio. (Arangio-Ruiz, Vicente. Lex Iulia de Maritandis Ordinibus. Historia del derecho humano. Madrid.
Biblioteca Jurídica de actores españoles y extranjeros. Instituto Editorial. 1963)
6
En el primer caso el castigado era el activo, pues transgredía la prohibición que protegía a los niños; en el
segundo, el pasivo, porque su actitud era deshonrosa para la sangre romana.
7 Refiriéndose a la preservación del linaje romano.
8
El primer significado en latín de lupa no fue loba, sino prostituta. Bajo la creencia de ser la loba, Luperca la
criadora de Rómulo y Remo, fundadores de Roma, y siguiendo el significado primigenio de lupa, se puede decir
que, la madre de Roma era una prostituta.
9
Struprum: mantener relaciones ilícitas. A ningún hombre se le estaba permitido tener relaciones sexuales con
una mujer soltera o viuda de clase alta, pero sí podía tenerlas con una prostituta. (Pomeroy, Sarah. Diosas,
rameras, esposas y esclavas. Mujeres en la antigüedad clásica. Madrid. Akal. 1999) (Arangio-Ruiz, Vicente. Lex
Iulia de Maritandis Ordinibus. Historia del derecho humano. Madrid. Biblioteca Jurídica de actores españoles y
extranjeros. Instituto Editorial. 1963)
10
Magistrados cuyas obligaciones incluían la supervisión de los mercados y comercios. (Pomeroy, Sarah.
Diosas, rameras, esposas y esclavas. Mujeres en la antigüedad clásica. Madrid. Akal. 1999)
· Formas de matrimonio:
1. cum manu: la ceremonia era un acto privado, en donde la joven pasaba de la autoridad
del padre a la autoridad del marido.
2. sine manu: la mujer conservaba su libertad jurídica.
3. confar Reatio: requería la presencia del pontífice máximo y del flamen de Júpiter. La
solemnidad de este rito hacía la unión indisoluble.
4. coemptio: venta ficticia, tenía un carácter económico.
5. usus: toda persona que hubiera disfrutado de forma notoria de un bien (en este caso, de
la mujer) durante un año, se convertía en propietaria de este. Sólo la ausencia de la
mujer durante tres noches consecutivas podía romper esta unión.
Plutarco en su tratado Erótico11, establece tres motivos para la separación del matrimonio, a
petición del hombre:
1. Envenenamiento de niño12
2. Sustracción de las llaves13
3. Adulterio14
Causas y consecuencias de la herencia helénica en la sociedad romana
Fue en la segunda guerra púnica donde los romanos, al ver la amenaza del pueblo cartaginense
y del macedónico, se lanzaron hacia la conquista del Mediterráneo occidental, ayudando así a
los griegos de la opresión hegemónica de Filipo V. Esto derivó a los romanos a asumir la
herencia helénica, debido a la auténtica admiración que profesaban los romanos por la cultura
griega. Por otra parte, estas decisiones causaron cierto revuelo entre algunos miembros de la
clase política romana, como el censor Catón15, quien asumió que esta apropiación de la cultura
helénica llevaría a la misma cultura romana a perder su identidad.
En menos de medio siglo, los romanos eran prácticamente dueños de la Grecia, lo que
suscitó que Roma se convirtiera en los nuevos dueños del dinero y el lujo. Fue por esto por lo

11
Plutarco. Erótica. Obras morales y de costumbres: Moralia, X. Madrid. Gredos. 2003
12
Entiéndase por aborto. La falta estaba en abortar contra la voluntad de su marido.
13 La esposa romana es la señora de la casa, poseedora de todas las llaves de esta, excepto la de la bodega, llave

resguardada por su marido, con la finalidad de la restringir a la mujer al vino, ya que, beberlo, supondría para una
mujer casada efectuar la misma mezcla prohibida que en el adulterio.
14 El hombre es dominante en el ámbito sexual, este deposita en la sangre de la mujer su esperma, mezclándose

así ambos fluidos. Si la mujer engaña a su marido, mezcla su sangre con la de un extraño, provocando de esta
manera un crimen contra su familia. En caso del adulterio, el esposo tenía la opción de dar muerte a su rival sin
enfrentarse a las penas previstas en caso de homicidio.
15
234 a. C- 149 a. C Marcus Porcius Cato, político, escritor y militar romano. Asciende como censor en 184 a.
C.
que las ciudades se convirtieron en los principales lugares para satisfacer sus placeres, donde
se prefería el ocio sobre cualquier otra actividad.
También se dio un cambio en la moral, que, se enriqueció del pensamiento griego sin
que se perdiese la concepción romana del virtus. A esto se le nombró el milagro romano16,
según Jean-Nöel Robert..
La sexualidad, el matrimonio y las mujeres.
A partir de la segunda guerra púnica, las mujeres, sobre todo las matronas, obtuvieron una gran
importancia a causa de la falta de hombres y las elevadas pérdidas que sufrió el ejército, así
como los cambios ocurridos en las costumbres debido a las conquistas de Oriente; dándoles
una mayor libertad y poder.
Por otra parte, el matrimonio sufrió un cambio radical, lo importante ya no era el amor,
sino el dinero y el poder que con este se podía conseguir. Es gracias a esto que, la mujer se
pudo librar del dominio total que el esposo ejercía sobre ella, pues podía ausentarse en su hogar
y acudir a la casa del padre, sin perder la dote17, conservando así su herencia. También la mujer
romana, sobre todo las matronas, descubrieron una manera de independizarse a través del
matrimonio forzado, por la autoridad paterna, y un primer divorcio, para convertirse en dueña
de sus bienes. Es esta riqueza la que liberó a la mujer, en las clases altas de la sociedad y le
procuró una independencia que, hasta ese momento, era desconocida. Aun así, con esta
independencia, la mujer siguió teniendo un fin instrumental para el Estado, ya que, sólo servía
para procrear futuros ciudadanos.
La sexualidad y las leyes.
El Emperador Augusto18, como heredero de Julio César, tenía firmes intenciones de continuar
con una visión de la política idealizada que tenía de la Roma republicana y para eso llevó a
cabo todo un proceso de reconstrucción del Estado. Uno de esos sectores que pretendía
reformar fue la moral y todos aquellos valores tradicionales, como las ceremonias de
matrimonios y su práctica que, caía cada vez más en el olvido y el libertinaje, para ello se apoyó
en los exponentes intelectuales y literarios de la época; Virgilio, Ovidio, Horacio, Propercio,
etc.

16
La capacidad de asimilación de unos principios extranjeros en poco tiempo, sin renunciar a los propios valores
17
Donación especial que se hace al marido, de parte del padre de familia de su mujer, con la finalidad de contribuir
a las cargas económicas derivadas de la celebración del matrimonio
18
63 a. C.- 14 d. C. Primer emperador de la Dinastía Julio-Claudia. Asciende al senado como emperador 27.a.C
Sin embargo, Ovidio, autor del manual erótico "El arte de amar", se contraponía en su
obra a la visión conservadora de Augusto, anteponer el placer individual al servicio de la patria;
posiblemente haya sido la causa del exilio de Ovidio a la ciudad de Tomi.
"Cuando describe el amor, da testimonio de la sensualidad de sus contemporáneos, de un
pueblo que se libera moralmente y que no puede resignarse a ver en el amor una falta." (Jean
Noel, 2009, 196 pp).
La propagación del adulterio y la degeneración en el Estado, fueron causas suficientes
para que Augusto interviniera directamente en la vida privada de los ciudadanos,
implementando leyes referentes al matrimonio y el adulterio, con propósitos de incentivar el
matrimonio, castigar el adulterio y fomentar la natalidad: Lex iulia de maritandis ordinibus,
Lex iulia de adulteriis coercendis y Lex papia poppaea19, esta última es la más importante.
Al final de su reinado las reformas moralizantes de Augusto carecían de la eficiencia deseada
y bajo el imperio de Tiberio dichas leyes son mitigadas.
La sexualidad y la medicina.
El pensamiento médico romano se perfeccionó bajo las ideas de los médicos griegos, y en
general todo el pensamiento médico de Roma se basó sobre todo en la medicina hipocrática,
donde la teoría de los cuatro humores equilibraba todo lo referente al cuerpo de los hombres20.
En cuanto al acto sexual, muchos médicos, entre ellos Galeno21 y Areteo22, lo
consideraban "violento" y sus síntomas, tanto antes del acto, como durante y después; eran
comparados como si de una enfermedad se tratase.
Los médicos romanos asimilaban el acto sexual a la fatiga y al desequilibrio vital del
cuerpo y, aunque no era considerada un mal, se tenía que tomar en cuenta una condición óptima
física, por ello se tenían diversas teorías sobre si era conveniente su práctica o no para la salud,
se argumentaba en contra que la fatiga por el acto sexual enfriaba el temperamento y esto a su
vez daba caracteres afeminados al hombre y a su favor que era un acto natural y sobre todo que
su propósito principal era la procreación, por lo que el placer paso a un segundo término.

19
Ley que exige el matrimonio a solteros, viudos y divorciados y además tener hijos, todos en un plazo de tiempo
dependiendo la situación civil. De no cumplirse se recurrían a infracciones, así como en el adulterio, que iban
desde la privación de la herencia hasta castigos físicos y pena de muerte en caso del adulterio.
20
La medicina no era la misma en las mujeres, pues estas no eran consideradas semejantes al hombre ni en alma,
ni en anatomía, por lo tanto, su medicina era cuestión de las "sabias mujeres".
21 129 d.C- 201/216 d.C. Fue un médico, cirujano y filósofo griego del imperio romano. Considerado uno

de los más importantes investigadores médicos de la antigüedad.


22 Siglo I. Notable médico griego de época imperial romana, de cuya vida se conocen pocos datos
Por ser el propósito principal la procreación los médicos romanos daban importancia a
circunstancias externas a la pareja como las estaciones, el día, la hora, la alimentación, etc.
Todo era considerado seriamente por los médicos para garantizar un progenitor digno.

En conclusión, la sexualidad y la moral, tan íntimamente ligadas en la Roma antigua, se centra


en un sentido de libertad que, precisa en exhortar, un esquema de pensamiento limitado, visto
en el estudio de las prácticas sexuales y la ideología moral, donde nos reconocemos como seres
temperamentales, ya sea por herencia o por naturaleza. Así mismo, hemos visto que las
instituciones jurídicas tuvieron un gran papel en el desarrollo de la sexualidad y el matrimonio
romano, desarrollada por hombres como Cesar Augusto, Plutarco, Galeano y Areteo. La
sexualidad tuvo un papel importante para el desarrollo de la sociedad romana, por ejemplo, las
leyes que se estipularon para prohibir ciertas conductas o cultos sexuales, como la ley
Escantinia. Así mismo, es pertinente mencionar que muchos de estos conceptos siguen
repercutiendo en las sociedades modernas, en el ámbito de lo jurídico.

Bibliografía
 Ana María y Fabio Bourbon. Roma Antigua; Grandes civilizaciones del pasado.
Barcelona: Ediciones folio, S.A. 2005
 Jean-Noël Robert. Eros romano: sexo y moral en la Roma antigua. España: Editorial
Complutense. 2009
 Gonzales, Marta e Iriarte, Ana. Entre Ares y Afrodita: Violencia del erotismo y erótica
de la violencia en la Grecia antigua. España: ABADA Editores. S.L. 2010
 Plutarco. Erótica. Obras morales y de costumbres: Moralia, vol.X. Madrid. Gredos.
2003
 Arangio-Ruiz, Vicente. Lex Iulia de Maritandis Ordinibus. Historia del derecho
humano. Madrid. Biblioteca Jurídica de actores españoles y extranjeros. Instituto
Editorial. 1963
 Pomeroy, Sarah. Diosas, rameras, esposas y esclavas. Mujeres en la antigüedad clásica.
Madrid. Akal. 1999
 Schulz, Frutz. Derecho Romano. Barcelona, Bosch. 1960.

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