Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
5
Curso de Radiestesia
Curso de Radiestesia
6
Curso de Radiestesia
Ingresando en el mundo
de la
7
Curso de Radiestesia
Reina Luis XIII y Richelieu ejerce su astuta diplomacia, letal más allá de todo
almibarado romanticismo. Aquellos dos nobles, con consentimiento del
monarca, descubren más de ciento cincuenta minas... Y para ello se ayudan
nada menos que con extrañas varillas de diversos compuestos. Fueron ricos
pero les duró poco. Las intrigas palaciegas pudieron más que el entusiasta
escudriñar de aquellos radiestesistas de alma. Murieron en prisión; dejaron
escritos; Apenas subsiste de ellos un título: "La Restitución de Platón",
materialmente escrito por Martina...
De manera más bien intuitiva, los estudiosos se afanan con tesón realmente
encomiable. Transcurre un siglo. La mayor parte de las proposiciones son meras
sospechas pero algo queda en pie: la relación directa existente entre las varillas,
los fenómenos del magnetismo y las corrientes eléctricas. Hay un personaje
importante: Thouvenel. Su profesión es la medicina y fácil es advertir que, para
perpetuar su capacidad en "Memoria Física y Médica", París, 1781, supo refinar
sus conocimientos radiestésicos a la luz de su propia experiencia y de los logros
alcanzados por Bleton, en su país de origen, Francia.
8
Curso de Radiestesia
Para esa misma época, un italiano, Anfosi, también cobró singular prestigio
con sus prospecciones, y ello en tal medida que mereció la particular referencia a
su personalidad por parte del insigne físico Amoretti en su obra "De la
Rabdomancia a la Electrometría Animal", Milán, 1796.
Entre 1834 y 1843 el abate Parmenelle rastrea los más insólitos rincones de
Francia en busca de agua. El resultado de sus prospecciones es estimulante.
Frente a 1000 napas de agua computadas como aciertos, hay apenas una docena
de fiascos. El hecho da que pensar. Parmenelle es, sin duda, algo más que un
señor de suerte. Es un rabdomante hecho y derecho, y con títulos más que
suficientes como para dar a la estampa su "Arte de Descubrir Vertientes" ...
9
Curso de Radiestesia
Y para no ser menos, emulando aunque más no sea el afán publicista, el abate
Carrié, cura de Barbaste, da a conocer su "Hidroscopia y Metaloscopia" o "Arte de
Descubrir las Aguas Subterráneas y los Yacimientos Metalíferos por Medio del
Electromagnetismo". Por supuesto, Carrié tiene sus pautas. Según él, tanto el
agua como los distintos minerales proyectan emanaciones cuyo contacto con la
superficie terrestre genera cargas electromagnéticas.Como la varilla del
radiestesista guarda en sí misma una corriente de igual significación, es natural
que se establezca entre operador y medio prospectado una suerte de relación
física, con el consiguiente movimiento del elemento detector.
El siglo XIX toca a su fin. Queda, sin embargo, el recuerdo de otros dos
dotados: Chiabrera, italiano, que se destaca por sus prospecciones hídricas en
Piamonte, y el Hermano Arconse, francés, que hace lo propio en el sector del
Ródano. Ambos superan con creces el millar de hallazgos de vertientes. Todo un
"record" de esa época.
10
Curso de Radiestesia
Los contactos entre los especialistas son cada vez más estrechos. Por ello no
resulta sorprendente que en 1913 la Sociedad de Psicología Experimental de
Francia, con la participación del Ministerio de Agricultura de ese país y
periodistas, organice el Primer Congreso Internacional de Rabdomancia. Su sede
es París. Sus objetivos son sustancialmente prácticos, de modo que la concreción
de un certamen de destreza es el corolario más pintoresco de esa reunión.
Una década después, el Padre Bouly inventa el vocablo que ahora emplearnos:
"Radiestesia", sancionado por el Congreso celebrado en Aviñón en 1933. Al año
siguiente créase la Asociación Internacional de Médicos Radiestesistas y la
Sección Radiestesia Médica dependiente de la Academia de Medicina de París.
11
Curso de Radiestesia
12
Curso de Radiestesia
LA RADIESTESIA
Sobre la radiestesia parece que ya está todo dicho, y lo cierto es que hay una
abundante bibliografía de consulta para iniciarse en el tema., el que quiera
dedicarse a la investigación radiestésica tiene que recorrer un largo camino.
Hay quien dice que hay que «tener un don», que el que tiene aptitudes para saber
manejar bien un péndulo es porque tiene capacidades innatas para ello.
Lo cierto es que, si bien hay individuos que sin haberse entrenado previamente
tienen facilidades radiestésicas naturales, la radiestesia se aprende.
Con un poco de perseverancia, cualquier persona puede captar las ondas y las
vibraciones emitidas por los cuerpos circundantes.
Es evidente que ese chico posee un don extraordinario, pero todo el mundo puede
recobrar sus facultades perdidas, y para ello de poco sirven los diplomas que se
tengan.
13
Curso de Radiestesia
14
Curso de Radiestesia
15
Curso de Radiestesia
16
Curso de Radiestesia
Es muy fácil hacer un péndulo de improviso: un anillo atado a un hilo, una llave
atada a un hilo, etc.; su peso puede variar según la utilización requerida. Por
ejemplo, los principiantes pueden emplear un péndulo de más peso, para poder
sostenerlo mejor.
Estos péndulos también son muy útiles para resistir al viento en los casos de
búsqueda al aire libre.
17
Curso de Radiestesia
Al empezar es esencial estar totalmente relajado, para que así pueda darse
una completa neutralidad.
18
Curso de Radiestesia
Si el péndulo oscila sobre determinada parte del cuerpo de una persona enferma,
es indicación de que en esa parte se halla el centro del mal. Haciéndolo oscilar
sobre diversas medicinas, será medicamento adecuado aquel en que oscila en la
misma forma que osciló en la parte enferma.
19
Curso de Radiestesia
2. Los compuestos pueden ser: una pelotita de avellano, cargada con arena
magnética o azogue; una plomada de avellano, pintada de rojo la parte
inferior; de amarillo, la media, y de azul, la superior; una esfera hecha
con tres metales o tres maderas distintas, etcétera.
3. Los específicos podrían ser: un aro de metal diamagnético, con una aguja
imantada a cada lado, que pueda situarse en distinta dirección; una
plomada de cobre con carga fija de azogue y un hueco para introducir
distintas muestras (testigos) de metales y minerales, según la
investigación que se desee llevar a cabo.
20
Curso de Radiestesia
21
Curso de Radiestesia
La/s varilla/s
Se puede utilizar tanto un péndulo como una varilla, si bien los principiantes
manejarán el péndulo con más facilidad.
Desde tiempo inmemorial las varillas han estado en uso con fines radiestésicos.
Exigen el empleo del material que se reseña en cada figura que acompaña al
texto.
22
Curso de Radiestesia
FIG. 18. Esta varilla parece más bien tosca, y en realidad lo es. Su
aptitud depende de la congenialidad del propio operador.
Son dos varas separadas y atadas con un material no conductor, que
puede ser hilo sisal, plástico, etc.
Procure que las dos ramitas sean de diámetro y longitud similares, y
bien pulidas. El detalle importante consiste en que el material con que
se las ate no debe tener agregados y ha de seguir circundando
naturalmente un extremo.
23
Curso de Radiestesia
24
Curso de Radiestesia
25
Curso de Radiestesia
26
Curso de Radiestesia
27
Curso de Radiestesia
Se puede usar una sola varilla, pudiendo tener un movimiento hacia la derecha o
hacia la izquierda, dándonos una respuesta de si o no dependiendo del movimiento
que se experimente.
Las varillas profesionales de manifactura industrial suelen tener un mango que les
permite girar con mucha facilidad, por lo que pueden girar en sentido de las agujas
del reloj para indicar un si y en sentido contrario para un no.
28
Curso de Radiestesia
Ejemplos:
Las vibraciones que emite el objeto son recibidas por el organismo y transmitidas
mediante la varilla o el péndulo. Jean Auscher ideó un «scriptopéndulo», o
péndulo provisto de un pincel mojado en tinta china, con el que obtenía un dibujo
que luego interpretaba. A partir de ahí, emitía brillantes diagnósticos
que concordaban con los de los médicos.
29
Curso de Radiestesia
La orientación mental
Louis Chouteau dice: «Quiero volverme sensible sólo a las radiaciones del sujeto
o de la cosa a examinar, con exclusión de cualquier otra radiación».
La convención mental
30
Curso de Radiestesia
31
Curso de Radiestesia
Los formatos y dimensiones son variables. Sin embargo, los que aquí
incluimos dan una idea aproximada de sus características más notables.
32
Curso de Radiestesia
El electrotesoroscopio,
el magnetómetro de minerales,
orómetro sensitivo,
33
Curso de Radiestesia
Fig. 4 Fig. 5
34
Curso de Radiestesia
Fig. 6 Fig. 7
35
Curso de Radiestesia
Fig. 8 Fig. 9
36
Curso de Radiestesia
37
Curso de Radiestesia
38
Curso de Radiestesia
39
Curso de Radiestesia
Como se puede ver los movimientos del péndulo son muy precisos, es
preferible que el péndulo termine en forma de punta, porque puede servir de
apuntador de precisión para los cuadrantes auxiliares, que nos permite obtener
muchos y muy exactos resultados.
40
Curso de Radiestesia
Debe usarse sentado en un escritorio o mesa que sea firme, apoye su codo
en la mesa y doble su mano de forma que el péndulo quede a una altura
conveniente sobre la superficie de la mesa. No intente mover la mano, mientras
más firme esté, el péndulo se moverá mejor, éste suele moverse solo.
En esa forma se pude apuntar el péndulo al cuadrante que se desee
usar, para obtener la lectura adecuada, localice el cuadrante para que el
péndulo quede en una posición adecuada y la visión permita definir
correctamente dónde apunta la punta del instrumento.
Uso de Testigos
El testigo es un elemento usado para relacionar el instrumento
radiestésico con la persona o cosa que se quiera investigar, en la figura
siguiente se puede ver como usar los mismos. Puede ser una foto, una prenda,
material o mineral buscado.
41
Curso de Radiestesia
42
Curso de Radiestesia
"Campo" es una región del espacio que, por una razón cualquiera, se
encuentra en estado de tensión. A veces nuestros sentidos son influidos por la
presencia del campo.
Una llama, por ejemplo, crea un campo luminoso que nuestros ojos ven, y un
campo de calor que afecta a nuestro sentido del tacto. No obstante, el hombre es
insensible a muchos otros campos.
Por ejemplo, el campo magnético que, alrededor de los polos de un imán, hace
moverse a las limaduras de hierro. Lo mismo sucede con el campo que recorren
las ondas de radio, que solamente se hacen sonoras por intermedio de un aparato
especial.
43
Curso de Radiestesia
Entre los solenoides está fijado el cuerpo central en su base (2). Contiene un
anillo formado por un hilo de cobre aislado, enrollado en forma de espiral (8)
cuyos polos van conectados a un condensador fijo.
Dicha aguja asegura, por sus desviaciones, la orientación normal del operador.
Un botoncito móvil permite sujetar la aguja y mantenerla inmóvil, cuando el
aparato no está funcionando.
La punta azul de esta aguja indica siempre el Norte, es luminosa como también
el cuadrante, y resulta muy útil cuando se opera de noche.
44
Curso de Radiestesia
La firma que patrocina este ingeniosísimo dispositivo afirma que, junto con el
aparato, se incluyen ciertos medios de control a fin de poder verificar la exactitud
de las primeras observaciones, esto es: profundidad, cantidad, sentido de la
corriente y naturaleza de lo descubierto.
45
Curso de Radiestesia
46
Curso de Radiestesia
DESPLAZAMIENTO
DE PENDULOS Y VARILLAS.
POLARIDAD. SELECCION
La apta relación de estas respuestas, del largo del soporte, de la posición corporal
adecuada, y de la concentración y los reflejos del operador, dará por consecuencia
la correcta "sintonía" radiestésica y, eventualmente, su interpretación justa.
47
Curso de Radiestesia
48
Curso de Radiestesia
Ejercicio nº 1
49
Curso de Radiestesia
Ejercicio nº 2
La antena radiestésica
Al girar un poco sobre uno mismo, con el brazo izquierdo siempre tendido pero
sin señalar ya el objeto en cuestión, el péndulo dejará de girar y oscilará.
50
Curso de Radiestesia
En cada caso anotará los desplazamientos del péndulo. Hará esta prueba en
distintas ocasiones, procurando en todo momento una actitud mental
independiente, libre de toda autosugestión.
Serán, por supuesto, un hombre y una mujer. Uno u otra extenderán su mano.
El operador no sabrá de quién se trata.
51
Curso de Radiestesia
Para esto hará que un tercero cubra el elemento con un papel fino,
preferentemente verde, por considerarse que éste es un color neutro en el orden
radiestésico.
Es más que probable que las señales obtenidas varíen entre un operador y otro.
Por ello conviene que tome cuidadosamente sus notas, recordando que su cotejo
con otros radiestesistas puede arrojar notables diferencias. Esto no deberá
descorazonarlo. La radiestesia habrá cobrado importante impulso y
trascendencia el día en que realmente sea universalizada a través del intercambio
de información clara, fidedigna y pormenorizada de las experiencias efectuadas
en diversas partes del mundo.
Los papeles de colores son también utilísimos en ese sentido. El examen por
separado tendrá que ser muy minucioso. La experiencia se documentará en cada
caso, cuidando de que no exista sugestión.
52
Curso de Radiestesia
Cuando llegue el tiempo de nacimiento del ave, realizará sus cotejos, con el
consiguiente cómputo de aciertos y fallas. Este experimento sensibilizará mucho
al operador.
Estos son sólo unos pocos ejemplos de cuanto puede hacerse para ir
ductilizando la propia facultad radiestésica.
53
Curso de Radiestesia
En el caso de agua, minerales, etc., el operador debe estar al tanto de una serie
de detalles específicos que le ayudarán beneficiosamente en su búsqueda.
54
Curso de Radiestesia
En el caso que nos ocupa es de primerísima importancia saber juzgar por las
apariencias. Habrá que estudiar, para una detección correcta, las características
del terreno en que se habrá de operar, efectuando un análisis de su topografía que,
a su vez, delatará el lugar cuya exploración será más adecuada.
El agua es posible hallarla en todas partes, pero hay algo que debe
primar: la sensatez. Cavar para hallarla debe imponer una tarea ajustada a
las posibilidades. Por ello, alumbrar fuentes hídricas implica detectar
lugares donde la explotación de aquéllas es bastante económica en cuanto al
uso de aparatos y al tiempo insumido para lograr extraerla.
Las plantas hidrófilas incluyen: menta acuática, junco, cicuta, hepática de las
fuentes, aliso, saúco, berro, chopo, sauce y mimbre, si tomamos como referencia
la vid y el trigo, sabremos que en los lugares donde éstos germinan y crecen no
hay humedad constante.
55
Curso de Radiestesia
56
Curso de Radiestesia
Ondómetro pendular;
Aparato de radarcosmia;
Magnetoscopio de Rutter;
Radiómetro de Descry;
57
Curso de Radiestesia
Brújula doble;
Electro-testigos de Charloteaux;
58
Curso de Radiestesia
Ejemplo: Péndulo
Suspensión: ¿Cadena?
¿Cabello?
¿Plástico?
¿Hilo de seda?
¿Cerda?
¿Alambre? (En este caso, detallar diversos metales.)
59
Curso de Radiestesia
Disco de Selección
60
Curso de Radiestesia
¿Hay que precaverse contra algo en especial o estar alerta ante ciertos hechos
a fin de que la evaluación o prospección radiestésica no resulte errónea?
3. Un péndulo cuyo peso resulta excesivo puede demostrar tan sólo torpeza en
cuanto a la captación de "ondas" radiestésicas más bien flojas o débiles.
4. Una serie de líneas de fuerza, que corran paralelas, pueden significar una
desorientación suplementaria que el operador habrá de superar con
paciencia y mucho don de observación e inferencia. En tal sentido
téngase muy en cuenta lo que se relaciona con napas, vetas metalíferas,
yacimientos petrolíferos, etcétera.
7. El color del péndulo puede guardar muy estrecha relación con los cuerpos
motivo de investigaciones.
61
Curso de Radiestesia
8. El operador, por más que haya sido sometido a pruebas de suficiencia por
parte de un experto radiestesista, es posible que esté atravesando un
período de insensibilidad. En tales circunstancias, por más que se
esfuerce, obtendrá resultados imprecisos, discordantes o erróneos. No
siempre el continuo ejercido da por consecuencia una mejor graduación
de sensibilidad; a veces, un buen relax será más que suficiente para
elevar el nivel de rendimiento y seguir luego adelante con un progreso
mucho más pronunciado.
12. Quizá haya que estar prevenido muy en especial contra ciertas veleidades
personales. A veces, como resultado de una reunión social y un
comentario imprudente sobre las virtudes de la radiestesia, el operador es
lanzado a una suerte de demostración de su capacidad, o mejor dicho, a
concretar un "show". El gran peligro consistirá en que tal vez en ese
momento no esté preparado, en que hubo una copiosa ingestión de
viandas y/o libaciones, y en que cierta mal entendida vergüenza lo
impulse a representar una sesión radiestésica más bien con la intención
de adquirir renombre que patentizar probidad. En tales circunstancias, lo
más correcto es excusarse, pues dedicarse a esa labor en pésimas
condiciones, además de, desacreditar una práctica seria, generará mucha
desconfianza cuando más de un espectador descubra que los "aciertos"
del operador fueron simples triquiñuelas de saltimbanqui.
62
Curso de Radiestesia
63
Curso de Radiestesia
20. La presencia de objetos metálicos sobre el cuerpo del operador o entre sus
ropas, y el uso de calzado con suela de goma, especialmente en
experiencias al aire libre, pueden significar trastornos en el campo de la
captación radiestésica.
64
Curso de Radiestesia
26. La radiestesia es una práctica sana, jamás una “idea fija”. Quien así no lo
entienda y no sea capaz de dominar sus tendencias, además de una suerte
de desubicación insalubre, sufrirá los perniciosos efectos de una
anulación progresiva de sus facultades que luego, insensible, irremisible
y hasta inconscientemente, irá reemplazando con fantasía, alucinación,
autoengaño y... quizá locura.
27. El apresuramiento jamás será buen consejero del radiestesista. Habrá que
avanzar con sosiego, extraer conclusiones con intuición y lógica, y convalidar
los hallazgos con otros hallazgos concomitantes que servirán de ratificación
adicional de cada aserto. Es decir, luego de ubicarse varios indicios ciertos y
concordantes, se los irá asociando y correlacionando debidamente hasta lograr el
fin buscado.
28.Confundir los rayos es error común de casi todos los principiantes. No resulta,
por tanto, extraño, que se tome al rayo luminoso por el rayo testigo, y viceversa.
Esta equivocación sólo es corregible mediante mucha práctica y autoanálisis.
65
Curso de Radiestesia
31. Jamás habrá que descuidar el largo de suspensión del péndulo. Muchas
fallas de “sensibilidad” responden únicamente a una inexactitud en este
aspecto.
32. Es posible que estén dadas todas las condiciones ideales a la captación
radiestésica de un elemento dado y, sin embargo, los resultados son
nulos. Esto se corrige sólo con perseverancia pues no es desechable el
hecho de que el operador se encuentre ante un caso típico de "bloqueo".
Es entonces cuando deberá poner en juego toda su capacidad y
disposición, pues ese fenómeno se origina, en la generalidad de los casos,
en que otro elemento oficia de "aislante" entre lo buscado y el operador.
Si existe prolijidad y minuciosidad, amén de espíritu de indagación
indeclinable, es posible llegar a lo que se busca.
66
Curso de Radiestesia
39. El hecho de que la utilización del propio péndulo o varilla por parte de
terceros modifique sus cualidades es aceptado por unos expertos y negado por
otros. Ante la duda... tal vez lo mejor sea abstenerse de prestarlo.
67
Curso de Radiestesia
(figura n 1)
68
Curso de Radiestesia
69
Curso de Radiestesia
De todos modos debe hacerse, al parecer de según oler tos autores, una
excepción si se trata de oro, cuyas radiaciones, por ser particularmente intensas,
harían que se pudiese encontrar poco tiempo después de haber sido enterrado.
70
Curso de Radiestesia
UTILIZACIÓN RADISETISICA
71
Curso de Radiestesia
1 La naturaleza del objeto y el sitio que ocupa son conocida, falta determinar a
qué profundidad se encuentra.
72
Curso de Radiestesia
EJERCICIO I
Sea un objeto de cobre que se ha enterrado en un punto marcado por una estaca;
es preciso Indicar a qué PROFUNDIDAD del suelo se encuentra.
Ni que decir tiene que el operador ha convenido consigo mismo por medio de la
CONVENCIÓN MENTAL, que las oscilaciones se conviertan en giros en el
punto de emergencia de las radiaciones de 45 ó en el punto equidistante de la
estaca en la misma longitud que está el objeto enterrado en el subsuelo.
73
Curso de Radiestesia
EJERCICIO II
Sea el mismo objeto de cobre del cuál se ignora el sitio en que se encuentra y la
profundidad a que yace enterrado.
Tras haber pronunciado tres veces seguidas la expresión del deseo con diez
segundos de intervalo entre cada expresión, teniendo el péndulo puesto en
oscilaciones, empieza muy lentamente a dar la vuelta sobre sí mismo, mientras
pronuncia la interrogación: ¿El objeto de cobre está enterrado en esta dirección?
(La indicada por la mano izquierda extendida en forma de antena).
74
Curso de Radiestesia
(figura 2.)
En toda operación radiéstesica hay que proceder con las máximas precauciones.
75
Curso de Radiestesia
EJERCICIO III
Después de repetir cinco o seis veces la interrogación, a razón de una vez por
minuto, con la correspondiente espera, si las oscilaciones continuas sin convertirse
en giros sacan la conclusión de que el objeto enterrado no es de naturaleza
metálica.
76
Curso de Radiestesia
77
Curso de Radiestesia
EJERCICIO IV
Por los ejercicios anteriores uno puede darse cuenta de la sencillez del método
de las interrogaciones y de la seguridad de sus resultados; para ello as necesario
que no se olvida nada en el proceso de las operaciones: estado pasivo de espera,
expresión del deseo, INTERROGACIONES, conformándose exactamente a las
prescripciones indicadas en nuestro CURSILLO ELENTAL y en el presente
trabajó.
78
Curso de Radiestesia
La primera reacción no indica la presencia del agua bajo los pies del operador,
pero le previene que entra en la ZONA DE INENOIA del agua.
(figura n 3.)
79
Curso de Radiestesia
80
Curso de Radiestesia
81
Curso de Radiestesia
Así, pues, tras el estado pasivo expresar su deseo en los siguientes términos
"Deseo hacerme sensible a las radiaciones verticales del agua corriente que se
deslice en el subsuelo, a una distancia cualquiera, y deseo ser insensible a todas
las demás radiaciones", y después al ponerse en marcha, interrogará: Esta aquí el
agua?".
82
Curso de Radiestesia
83
Curso de Radiestesia
Siendo sus radiaciones mucho más débiles que las de las aguas corrientes,
resultan más difíciles de discernir y por este motivo el operador debe reforzar sus
medios, de acción: Estado pasivo de espera y atención voluntaria. Además las
aguas durmientes se encuentran, a veces, en cavidades que emiten radiaciones
particulares.
LAS BÚSQUEDAS de agua deben hacerse con mucho cuidado, ya que puede
ciar origen a trabajos costosos, que en casos de error serian motivo de una pérdida
total.
84
Curso de Radiestesia
(figura 4.)
De todos modos no se debe fijar demasiado en una regla tan sencilla, ya que en
ciertos casos se reveló capaz de dar valuaciones a menudo erróneas y esto sucede,
sobre todo, cuando varia a corrientes de agua circulan poco más o menos
paralelamente y están separadas por pequeñas distancias. Para averiguar la
profundidad, entre todos los métodos, los más seguros son los que ponen en juego
un inconsciente bien entrenado.
(figura 5.)
85
Curso de Radiestesia
LOS TERRENOS
LOS TERRENOS que tienen más o menos hendiduras, general mente dan las
distancias B, C, y D, E, desiguales y más débiles que las que corresponderían a su
profundidad real, ya que las radiaciones emitidas por las corrientes están
desviadas o refractadas contra las irregularidades del suelo. En los terrenos
arenosos o arcillosos la difusión de las radiaciones en los elementos finamente
divididos .3. suelo es tal que en la evaluación de la profundidad se ven obligados a
añadir el espesor de los bancos de arcilla, para compensar los errores debidos a su
presencia.
86
Curso de Radiestesia
87
Curso de Radiestesia
(figura 6)
Este método no es más que una variante del de los 45, siendo su uso muy
extendido.
En un principio se creyó que las radiaciones del agua se extendían por el hilo
metálico en idéntica distancia a la profundidad a que aquella se encontraba.
Este hecho, carente de todo fundamento científico y que fue el motivo de que
muchos operadores aislasen cuidadosamente el hilo de todas las estacas menos
de la primera para establecer un hipotético contacto, quedó seriamente
desvirtuado cuando algunos operadores empezaron a emplear un hilo de
cáñamo en vez de cobre, puesto que mal se podía pretender mantener la
existencia de radiaciones de las que el cáñamo fuese un buen conductor.
88
Curso de Radiestesia
Que el hilo de profundidad puede ser empleado para valuar profundidades muy
superiores a su longitud. Es suficiente admitir por convención mental que tal
fracción de longitud del hilo corresponde a tal profundidad; esta consideración
demuestra bien cual es su verdadero Carácter radiestésica.
89
Curso de Radiestesia
Hay operadores que han notado que para una determinada corriente, la
baqueta daba un numero determinado de golpes, bajando y levantándose
alternativamente y el péndulo un numero fijo de oscilaciones invariables sobre
todo el recorrido de la corriente.
Sobres la evaluación del caudal hay que ser muy prudentes, realizando muchos
ejercicios prácticos de comprobación antes de atreverse a dar un diagnóstico
exacto, en una búsqueda real.
Hay que tener presente que, como que entre un estudio radiéstesica y la
terminación de la perforación de un pozo pueden transcurrir bastante tiempo,
90
Curso de Radiestesia
Mas, lo que hay que tener siempre presente es que en radiasteis, al igual que en
todas las actividades humanas, los más espléndidos éxitos se consiguen solamente
tras una cuidadosa especialización. Es por ello que el operador radiestésica, que
verdaderamente quiera destacar en este bello y apasionante arte, debe
especializarse únicamente en uno, a lo más dos generes de búsquedas
determinadas.
91
Curso de Radiestesia
La concordancia existe pero habrá que advertir de manera terminante que sólo
en el orden subjetivo.
Cada operador obtendrá sus propios resultados que, para él, serán precisos, pero
que no hallarán, en muchísimos casos, correspondencia alguna con otros
radiestesistas.
92
Curso de Radiestesia
Color R.P. J.A. De Tureni Voilau Lacr Mellin Ioffe Mauri Gerard
Marie Duclo Franc ne me oix cio L´Ermit
Bernard ut e Flamm te
el
93
Curso de Radiestesia
duras,
sílex
Blanco Calcáre Alcali Plomo Sodio Cobre
os,
electrici
dad,
estaño,
radiacti-
vidad,
oro
Negro Diama Mercu Agua Nitróg Rocas Potasi Petróle
nte, rio conta eno, calcáre o o
petróle m., sílice as
o
Indigo Tiza Plata Arcilla Cromo Plata
Gris Silicio Plomo Mercu Volfra Níquel
rio mio
94
Curso de Radiestesia
TELE-RADIESTESIA
Asimismo, Mermet localizó agua desde Francia, en Puerto León, isla de Tule.
Otro hecho interesantísimo es el experimentado por Andrés Capron, quien
descubrió importantes reservas mineras en Hamond River, Alaska, consultando un
plano de la región en una aldea francesa.
95
Curso de Radiestesia
96
Curso de Radiestesia
- No siempre será menester utilizar sólo el rayo mental para detectar una cosa
dada. A veces es posible emplear un testigo apropiado, que de esa manera
facilitará el encauzamiento de la búsqueda.
97
Curso de Radiestesia
(figura 7)
98
Curso de Radiestesia
99
Curso de Radiestesia
Los ejercicios por medio del Estenoscope deben llevarse a cabo estando
solos, pues la presencia de espectadores dificulta, cuando no imposibilita
totalmente, la obtención del fenómeno. Para llevar a cabo éste, debe operarse
en las mismas condiciones que en una operación radiestésica, sin olvidar nunca
el ESTADO PASIVO Y LA CONCENTRACIÓN.
100
Curso de Radiestesia
Los cuadrantes
Cartulinas impresas que nos permiten el uso del péndulo con forma
puntiaguda para la obtención de resultados exactos y precisos.
Puede ser que el cuadrante este invertido apuntado al sur en vez del norte, para
verificar que está en dirección correcta, llevamos la punta del péndulo al centro de
cada una de las líneas circulares con una flecha en la punta, el instrumento debe
rotar en la forma en que lo indica la flecha en cada una de ellas, si esto no es así
rotemos el cuadrante en 180 grados.
101
Curso de Radiestesia
102
Curso de Radiestesia
103
Curso de Radiestesia
104
Curso de Radiestesia
105
Curso de Radiestesia
106
Curso de Radiestesia
Antes de usarlo mentalmente fije los valores, por ejemplo que porcentaje del
trabajo realizado el va a marcar 50 sies el 50%, cuantos días, meses, años faltan,
se puede asumir 10, 100, 1000, etc para la totalidad del cuadrante, si la cantidad es
mayor el puede sobrepasar el final y seguir girando, por ejemplo cuantas botellas
hay en esa caja y hay mas de cien; el llega a cien, luego sobrepasa y se detiene
marcando abajo la cantidad equivalente, si hay 150 el se detendrá marcando
debajo del 50.
107
Curso de Radiestesia
108
Curso de Radiestesia
*********************************************************