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Resumen
Abstract
* Artículo adaptado del original: Folino J. Una subespecialización psiquiátrica: la psiquiatría forense. In: Manuel Suárez Richards,
et al. Introducción a la psiquiatría. 2nd. ed. Buenos Aires: Salerno; 2000. pp. 441-9. Publicado con autorización del autor.
1
Perito de la Asesoría Pericial, Departamento Judicial La Plata; profesor adjunto de Psiquiatría y director de la Maestría en
Psiquiatría Forense, Facultad de Ciencias Médicas, Universidad Nacional de La Plata; director del Programa Piloto de Eva-
luación de Riesgo de Liberados, Procuración General de la Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires,
Argentina.
Las revistas de los domingos apor- Ahora bien, ¿por qué la inmunohe-
tan informaciones que no suelen re- matología y la psiquiatría forense?
sultarnos muy tangibles. Mientras Porque se me ocurrió una adivinan-
estamos tomando mate, extasiados za y éste era el mejor medio para de-
por permanecer en la cama a las círsela a mucha gente a la vez: ¿en
diez de la mañana, leemos acerca qué se parecen la inmunohematología
del último modelo Ferrari que nun- y la psiquiatría forense? Si me con-
ca manejaremos, de las islas “piripi- testa que en nada, debo decir: acertó.
pí” en cuyas playas viven peces de Sin embargo, algo tienen en común y
colores diseñados por Dalí y tam- es bueno reconocerlo porque se trata
bién alguna noticia sobre cómo bai- de la trayectoria que siguen muchas
lan en el palacio del Loire —donde disciplinas a las que perseguiremos
nunca bailaremos— las damas y como el burro a la zanahoria.
caballeros con modelos de Ralph
Lauren que nunca nos dirán te quiero. Sí señor, en esta profusión de co-
nocimientos y aplicaciones que nos
El relato que sigue también tiene depara la época, muchos cuerpos
bastante de inaccesible. Si usted se teóricos se desprenden y derivan
dedica o planea dedicarse a operar unos de otros, con lo que adquieren
Psiquiatría general
Necesidad social-derecho
Psiquiatría forense
paz, para que no haga macanas en olvide el médico, diría Martín Fierro,
su propio perjuicio, y para que nin- ya ejerza psiquiatría o cualquier otra
gún vivillo, que nunca falta, se apro- destreza médica, que estará obliga-
veche de su vulnerabilidad. do a denunciar cuando encuentre
que un paciente incapaz es víctima
Aunque usted no lo crea, la justicia de alguna maniobra de este tipo o
está tan bien dispuesta con estas mal trato de otro tipo. Es lo mismo
personas que se pone bajo el ala, que que pasa con los niños. En ambas
a quienes no tienen recursos les situaciones, por estar involucrado
brinda un subsidio económico. ¿Qué un sujeto incapaz que puede ser per-
tal? Yo sé que no se lo esperaba. Es judicado, si la obligación del ciuda-
bueno que toda la sociedad lo sepa, dano común se agiganta para pro-
y, especialmente, usted que se mue- mover su protección, la del médico
ve con las artes de mantener la sa- más aún (34),(35).
lud. Si lo aprendió, asesore a quie-
nes le pregunten para que no vean Pensó usted alguna vez que si, en
todo esto como un castigo o un per- medio de la borrachera, el beodo
juicio judicializado; esto es nada más perdió en la ruleta, firmó la venta
ni nada menos que la institucionali- de su casa y cambió su reloj de oro
zación de la ayuda y protección que por la última ficha de cinco pesos,
le debe la sociedad a los que, por ¿podría merecer otra cosa que la
enfermedades mentales, no pueden extradición de la república familiar
arreglárselas solos (33). con las valijas llenas de soeces epí-
tetos? Aunque le parezca mentira,
En el fuero en lo civil, también se la justicia y la psiquiatría forense
suelen presentar litigios que pro- tienen una especie de asilo político
mueven preguntas a los expertos para cuando aquel gran productor
psiquiatras acerca de si alguien pa- de desdichas propias y familiares
dece una enfermedad mental que está enfermo de tal manera que, sin
altere su capacidad para casarse, llegar al supuesto de la incapacidad
hacer un testamento o ceder un po- comentada arriba, no puede dejar
der. Imagínese que nunca falta una de hacer semejante tipo de desati-
pitonisa que envuelva al anciano que nos. El remedio es un estatus legal
ya tiene mínima memoria, está de- de inhabilitado que le cuida el patri-
pendiente y no diferencia quién le monio y que lo limita para disponer
está encima como ángel de la guar- de sus bienes por actos entre vivos
da y quién como expectante halcón (36),(37).
dispuesto a tirarse en picada.
Querido lector, aún falta más. ¡Po-
Esto no es simplemente anécdota; cos quedan fuera de esta red que
tiene mucho de enseñanza. No se extiende el sistema psiquiátrico
forense para que los expertos no nos sos y deficitarios. La población que
quedemos sin trabajo! Hasta aquel toma contacto con el sistema a través
que de ninguna manera es vulne- de los fueros civil y criminal activa,
rable y que tampoco comete dolo aun sin saberlo, unos dispositivos
alguno puede quedar bajo la inspec- psiquiátrico forenses que son suma-
ción aguda del psiquiatra forense mente dinámicos, rápidos y que exi-
luego de ser víctima de algún tipo gen sólida formación en la técnica
de accidente o perjuicio. Ocurre que diagnóstica. A propósito de ello, le
nadie está a salvo de tales infortu- sugiero leer lo que viene.
nios y, cuando tiene la mala pata
de sufrir alguno, lo que legítima-
mente querrá es que se compense ¿Se puede clonar
el daño sufrido. En ese momento se a un psiquiatra forense?
da la intervención psiquiátrica.
El psiquiatra forense es un psiquia-
El demandante alega que sufrió un tra general que ha logrado especial
daño psíquico y pide que se evalúe conocimiento a través de entrena-
si es cierto y que se midan el daño y miento y experiencia en el campo de
los perjuicios. De esta manera, los interrelación entre la psiquiatría y el
siempre bien dispuestos expertos derecho. Su trabajo profesional pue-
psiquiatras acuden con todas sus de incluir actividades clínicas, edu-
habilidades a someterle a una serie cacionales y de investigación. La ta-
de pruebas para ver en qué parte del rea puede desenvolverse en litigios
alma le quedó la avería y usted, que en lo criminal, civil o laboral. Los
nunca pensó en vérselas con seme- lugares de trabajo incluyen hospita-
jante espécimen poseedor de cien- les, clínicas, oficinas periciales judi-
cias y apariencias, estará colaboran- ciales o de las instituciones peniten-
do con él, explicándole todo lo que ciarias, prisiones, otras instituciones
le ocurrió y cuidando que su inter- públicas o privadas. Como queda
locutor no se distraiga con ninguna claro, la sociedad estaría tristemente
inspiración extemporánea (38). desprotegida sin psiquiatras forenses.
Después de estas líneas, supongo Pero, si son tan buenos, ¿por qué no
que le habrá quedado claro que el clonarlos?, y, tal como harina de dis-
sistema psiquiátrico forense tiene tribución gratuita en Un mundo feliz,
una gran extensión que se encuentra ¿por qué esparcirlos generosamen-
subestimada en la opinión pública y te a lo ancho y a lo largo del gran es-
en la organización política. Se extien- feroide?
de a través de diversas instituciones
públicas y privadas, y comparte con No se clonan por cuestiones de se-
ellas variedad de aspectos beneficio- riedad y diversión: al clonar no se
puesta sexual a estímulos audi- nución del abuso sexual. Los médi-
tivos o visuales). cos pueden ofrecer recursos a los
jueces y contribuir con la seguridad
Aunque usted no vaya a trabajar pública (67), (68).
con medidas objetivas del interés
sexual, es importante saber que En lo concerniente al estudio de las
existen, pues ellas han contribuido víctimas del abuso sexual, el psi-
muy bien a la investigación de la quiatra forense estudia las secuelas
motivación sexual, de la preferencia psíquicas, orienta hacia el estable-
de género adulto y de intereses atípi- cimiento de la terapéutica apropia-
cos como el interés sexual hacia los da y contribuye a la medida del
niños. Las medidas objetivas tradi- daño. El diagnóstico de algunos de
cionales fueron la pletismografía los trastornos que quedan como
peniana para varones y la fotople- secuela, y su puesta en relación con
tismografía vaginal para mujeres. el conocimiento teórico general,
Recientemente, se comenzó a utili- puede contribuir, también, a la ex-
zar otro método que consiste en la plicación de determinadas conduc-
medida del tiempo de reacción vi- tas de las víctimas que, de otra ma-
sual ante determinada programa- nera, quedan como inexplicables y
ción de estímulos (64-66). hasta pueden dificultar la visión
judicial del caso. Así ocurre con
La comunidad científica ha recono- atrasos en la denuncia o con reac-
cido que la probabilidad de reinci- ciones anómalas o sentimientos am-
dencia es alta entre los que cometen bivalentes hacia los abusadores.
abusos sexuales y que los adecua-
dos tratamiento y supervisión dis- Usted podría sorprenderse con lo
minuyen la reincidencia. Por esos que sigue, pero a efectos de aumen-
motivos, resultan muy importantes tar su cultura general psiquiátrica
todos los esfuerzos que puedan ser forense, que es el objetivo del capí-
hechos desde la comunidad médica tulo, debo agregar que existe una
en general, ya sea evaluando, tra- faceta completamente diferente de
tando o, simplemente, estando aler- este fenómeno. El abuso infantil
ta para la detección de elementos también puede ser falsamente ale-
sospechosos de victimización sexual gado, especialmente, cuando exis-
en los pacientes en general y, muy ten conflictos intrafamiliares. Dada
especialmente, en los niños, pues semejante posibilidad, los jueces
son los más vulnerables. pueden pedir la colaboración psi-
quiátrica para evaluar si existe al-
Con un mayor aporte realizado por guna característica en el niño que
la comunidad médica, se obtendrá pueda promover la falsa alegación,
mayor impacto en favor de la dismi- lo que le facilita al psiquiatra reali-
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Correspondencia
Jorge Óscar Folino
Facultad de Ciencias Médicas
Universidad Nacional de La Plata
Calle 60 y 120 (1900) La Plata, Argentina
folino@atlas.med.unlp.edu.ar