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PLANTA DANINHA V (2): 69-79, 1982 69

MANEJO INTEGRADO DE MALEZAS


O. A. FERNÁ NDEZ
Cent ro de Re curs os Natu ra le s Re no vable s de
la Zona Semiárida y Departamento de Ciencias
Agrarias, Universidad Nac ional del Sur, 800 0
Ba hia Blanca, Argentina.

Conferencia pronunciada en el simposio "Mane -


jo Inte grado de Pl an tas Dani nhas " real izado en
oc asi ón de l XI V Co ng re sso Bra sil eir o de
He rb i cid as e Er vas Dani nh as e VI Co ng re so
La ti n o-americano de Malezas, Campinas, SP. 1982.

Las plagas de los cultivos : malezas, cesidad de un enfoque holocenótico para


insectos, hongos, nematodes, vertebrados el control de las plagas asociadas al am-
y otros organismos, están en directa biente en que se desarrollan las plantas
competencia con los mismos por los re- cultivadas, integrando de maneira razo-
cursos ambientales y energéticos que am- nable el uso de los plaguicidas químicos
bos necesitan para su propia superviven- con otras formas de control y sustancial-
cia. Las plagas atentan contra un sistema mente con el estudio de los ciclos de vida
tecnológico que exige una alta eficiencia y ecologia de las mismas.
en la producción de alimentos y fibra para En 1963 la FAO muestra su interés
el consumo humano. por los peligros potenciales derivados del
Los sistemas de manejo integrado de uso intensivo de los agroquimicos en el
las plagas tie ne su ori gen en el contro l control de plagas, en 1965 se celebra el
de insectos perjudiciales. El uso abusivo primer simposio sobre el contr ol
e indiscriminado de los pesticidas quími- integ rado de plagas. Diez anos más tarde
cos a partir de la segunda guerra mundial se realize el primer simposio sobre control
creó preocupación debido a sus efectos integrado de malezas (Fryer y Matsunaka,
1977).
sobre el ambiente y la salud humana.
Actualmente existen numerosos ejem-
Los entomólogos a principios de la
plos de programas de sistema de manejo
déc ada del cin cue nta fue ron los pri me -
integrado de plagas (Van Huis, 1981 ;
ros en reconocer los problemas derivados
Blair y Parochetti, 1982), alguns hacien-
del empleo indiscriminado de los insecti-
do énfasis en el control de malezas.
das. El sector agropecuario observe ade-
más con preocupación, que el uso rutina-
rio de estos productos resultaba en la MALEZAS Y AGROECOLOGIA
aparición de poblaciones de insectos re-
sistentes a los mismos y de nuevas plagas Las malezas constituyen un factor a
que antes teni an caracter secundario o considerar en todo programa de produc-
se desconocían. La acción residual de los tividade agropecuaria. Las áreas en las
productos empleados se tradujo en mu- cuales causan perjuicios son muy varia-
chos casos en un agente de cont amina - das : cultivos, sistemas de regadio, cam-
ción ambiental, afectando a las poblacio- pos naturales, viveros, bosques, caminos,
nes de otros animales. etc. Las pérdidas económicas más signi-
ficativa s y los costos más elev ados para
Estos hechos se tradujeron en un su control ocurren asociadas a las áreas
cambio de mentalidad en la aplicación cultivadas, en donde compiten por nu-
rutinaria de los productos químicos, como tri ent es, agua, luz y espa cio . Asimis mo
medida casi exclusiva para el control de en dichas áreas, entorpecen las tareas de
los insectos perjudiciales. Se vió la ne- la cosecha, desvalorizan el producto final
70 O. A. FERNÁNDEZ

y lo encarecen dado que para su control La presencia de las malezas es casi


deben invertirse sumas importantes, siendo siempre una indicación de una etapa de
en consecuencia no solamente un problema sucesión secundaria. La tendencia cons-
para el productor sino que su presencia tante de las áreas cult ivadas de revertir
perjudica, en última instancia, al a un sistema de vegetación natural, lleva
consumidor. Los métodos que se utilizan
implícito el principio de que controlar las
para su control pueden afectar la calidad
malezas es una tarea inevitable para una
ambiental y son entonces de interés para la
sociedad. eficiente producción de alimentos.
LA ERA DE LOS HERBICIDAS
Es impor tan te par a todo aquel que
se enc uentra inv olucra do en los pro ble - El descubrimiento a medidas de la
mas derivados de la presencia de malezas y década del cuarenta de las propiedades
su ma ne jo, comprend er como prin cipio selectivas de los compuestos fenoxiacéti-
básico de acción, que las leyes que go- cos (M ar th y Mi tc he ll, 1944; Nutm an,
biernan las relaciones entre los cultivos et. al., 1945 ; Slade et. al., 1945 ), represen-
como organismos titiles y las malezas como tó el comienzo de una nueva etapa en los
organismos indeseables, son las mis-mas métodos de control de las malezas. En
que gobiernan todos los sistemas ecológicos pocos anos siguió un desarrollo explosivo
naturales. Así, la presencia de una maleza del uso de distintos tipos de herbicidas,
se identifica más bien con un fenómeno existiendo en la actualidad más de 400
natural relacionado a la adaptación formulaciones que contienen más de 100
ecológica y la evolución de dichos principios activos que están comercial-
organismos a ambientes modificados por la men te dis tri buí dos por tod o el mun do.
actividad humana, y sólo incidental-mente El potencial de estos nuev os productos
puede estar vinculada a la consideración de ha sido tal que ha significado una res-
que una especie sea indeseable o no puesta fácil para muc hos de los pro ble -
(Harlan y de Wet, 1965 ). Es conoc ida la mas ocasionados por las malezas de los
fr ase de Bai le y (189 5) qui en afirmó que cultivos. Es así que, en el transcurso de
"la Naturaleza no reconoce plantas como pocos anos, los sistemas agr opecuar ios
malezas". de todo el mundo han dependido más y
más del uso de los herbicidas como es-
Las prácticas agropecuaria s ofrecen
trategia casi exclusiva para resolver el
numerosas oportunidades para las especies
colonizadoras. Por ejem plo, el laboreo del problema que representa la presencia de
suelo provee una cam a lim pia y en las malezas.
general el agua y los nutrientes no fal-tan, Por otr o lad o, si bie n es cie rto que
especialmente durante los primeros el empleo extensivo de los herbicidas ha
estadios del cultivo. Algunas de estas es- significado el uso de una práctica agro-
pecies son capaces de adaptarse evoluti- pecuaria cuyas ventajas están fuera de
vamente a las nuevas situaciones (Fer- discusión, también lo es el que el proble-
nández, 1979 ), convirtiéndose en malezas ma de las malezas no ha desaparecido y
especializadas de un cierto cultivo, a tal en numerosos casos particulares puede
punto que frecuentemente son desplazadas decirse que se ha agravado. Además, en
por la vegetaci ón nati va del lugar si el forma similar como ha ocurrido anterior-
cu lt iv o de sa par ec e. Ra ra me nt e la s mente con los insecticidas, ha empezado a
pl an ta s cu lt iv ad as se ut il iz an si n qu e preocupar el impacto que puede tener
hayan sido sometidas a un proceso de sobre el ambiente el uso repetido o in-
"mejoramiento" y con frecuencia se cultiv an discriminado de estos productos.
en ambien tes que se hal lan fuera de su
óptimo ecológico. Como resultado son Un número de razones ha traído a un
pobr es competidor es, obteniéndose en primer plano decon sid era ción la bús que -
lugar de un monocultivo una comuni-da d da de alternativas más racionales para
com puesta por pla ntas cul tiv ada s más resolver el problema que representan las
malezas. malezas de los cultivos, en contraposición
MANEJO INTEGRADO DE MALEZAS 71

con una úni ca alt ern ati va, la quí mic a, tes y más dificiles de eliminar. Fre-
que se ha venido enfatizando durante los cuentemente sucede en estos casos
últimos treinta anos. Estas razones pue- que un problema que fue razonable-
den resumirse en 1 os siguientes cuatro mente simple de corregir por medios
puntos principales químicos es reemplazado por otro más
difícil. Plantas que antes eran
a) El uso ind isc rimin ado de los her bic i -
representantes menores de la flora
das puede causar perjuicios e inte-
regional, encuentran condiciones fa-
racciones en el mantenimiento de los
vorables y nichos ecológicos disponi -
ecosistemas naturales que deben ser
bles que colonizan con gran rapidez.
tomados en consideración y que se
Frecuentemente pueden evolucionar
hallan muy poco documentados.
dentro de los mismos dando lugar a la
Las malezas constituyen poblaciones formación de nuevos biotipos
dinámicas que interaccionan con su me- (Fernández, 1979).
dio. Como productores primarios juegan c) Otro motivo significativo es el costo
un papel signifi cativam ente importa nte creciente de los herbicidas, particu -
en rel aci ón con la fauna , mic roorg ani s - larmente a partir de la denominada
mos y otras plantas. Si bien es cierto que crisis energética de la década del se-
conjuntamente con la flora del lugar pue- tenta. El costo de los productos quí-
den hospedar organismos perjudiciales a micos para aplicar en situaciones es-
los cultivos, en otros casos representan pecíficas de numeroso s cultivos no
una contribución significativa al mante- está al alcance del productor medico
nimiento de poblaciones titiles de inse c -
de muchas regiones del mundo. Fre-
tos o otros animales (Blair y Parochetti,
cuentemente las cantidades limitadas
1982). Puede n ser valiosas por ejemplo,
que se necesitan de dichos productos
en el mantenimiento de insectos polini-
hace que no sefabriquen localmente,
zadores. En determinadas circunstancias
debiendo en consecuencia ser
su utilidad podria estar asociada a los
importados con el consiguiente enca-
momentos en que el cultivo no se encuen-
recimiento de los mismos.
tra en desarrollo.
d) A pesar del número elevado de her-
Más importante a largo plazo, quizás, bicidas existentes y la tecnologia mo-
es que la aplicación extensiva e indiscri- derna puesta al alcance del produc-
minada de los herbicida s estaria asocia - tor, el problema de las malezas per-
da a la destrucción de la reserva de ger- siste. Existen problemas serios a nível
moplasma de la flora nativa de cada re- de cada región y otros que pueden
gió n. El pot enc ial del con ten ido gén ito considerarse de nivel internacional.
de las especies silvestres es muy poco co- Una publicación reciente (Holm et.
nocido. Aún aquellas especies que en estos al., 1977) evalua la distribución mundial
momentos carecen de aparente valor de las malezas más importantes y los
económico, son depositarias de caracte- cultivos que infestan, resume infor -
rísticas heredables imposibles de recrear mación biológica sobre las mismas y pro-
una vez perdidas, y cuya utilidad futura no porcionan un caudal importante de refe-
se puede prever. rencias bibliográficas. Agropyron repens,
b) Un asp ect o imp ort ant e, responsab le Sorghum halepense, Avena fatua,
de la per sistencia del probl ema de Eichornia crassipes, Convulvulus
las malezas, es el reempleo del tipo arvensis, Cyperus rotundus, Imperata
de mal eza s com o con sec uen cia del cylindrica, Solanum elaeagnifo-lium y
uso de los herbicidas selectiv os. En Potamogeton sp., son algunas de las
la literatura existen numerosos ejem- malezas que debido a su capacidad com -
plos (Ennis, 1974, Soerjani, 1977; petitiva y estrategias de sobrevivencia
Böger y Vetter, 1978), en donde las constituyen problemas graves en varias
malezas susceptibles a los herbicidas partes del mundo.
son reemplazadas por otras toleran- bebido a nuestra incapacidad para
72 O. A. FERNÁNDEZ
anular la capacidad competitiva de las por varios autores (Ennis, 1977; Allen y
male za s, to dos los an os se re piten los Bath, 1980 ; Baldwin y Santelman, 1980 ;
costos elev ados necesar ios para su con - Blair y Parochetti, 1982) y otros enuncia-
tro l. Existe coinci dencia ent re los téc ni - dos en est e tra bajo, podemo s decir que
cos y científicos dedicados al estudio de un Sistema de Manejo Integrado de Ma-
este tipo de plantas, que se está aún lejos lezas (MI M) enf oca el pro blema utiliz an -
de una solución definitiva al problema de do en forma compatible con la calidad
las malezas de los cultivos en base a las ambie ntal, todas las técni cas adecuadas
y conocimientos existentes para reducir
metodologias existentes. De allí que un
nuevo enfoque hacia tales problemas se una población de malezas a niveles tales
que los perjuicios económicos que pro-
hace indispensable.
duz can se hallen por deb ajo de un um -
UN ENFOQUE MODERNO PARA EL bral, eco nómico acept abl e. En
CONTROL DE LAS MALEZAS "'ranchos casos puede incorporar métodos
físicos, químicos, mecá nicos, biológicos,
La presencia de una maleza en un
genéticos, conjuntamente con medidas
cultivo, en un canal de riego, en una pas - preventivas y estudios básicos sobre
tura, etc., deriva de una serie de aconte - biologia y ecologia de Ias malezas, así como
cimientos abióticos y bióticos que debido eI entrenamiento de técnicos y extensión a
a su interdependencia e interacción, pue- nível de los productores. No consiste sim-
den ser vistos como un suceso único. Esta plesmente en la aplicación de una o dos
forma de pensar, enfocan do como una medidas de control, sino que incluye el
unidad una serie compleja de facto res y estudio deI problema en forma interdis-
hechos que, en este caso determi -nan la cinaria, siendo en consecuencia holocenó -
abundancia de una planta inde-seable, ha tico por naturaleza.
llevado al estudio del manejo de las
malezas en su medio como un sistema. Es erróneo pensar que el MIM cons-
tituye una idea revolucionaria para los
En última instancia, la presencia de una
maleza en un lugar determinado es un sistemas de producción agropecuaria. An-
tes dei descubrimiento de los herbicidas
problema complejo de orden ecoló gico, y
modernos, el productor agropecuario es-
la ecologia se ocupa a muy distin tos
taba forzado a un enfoque integrado para
niveles del estudio de sistemas.
el contro l de las maleza s simpl esment e
El enfoque del manejo de las male zas por el hecho de que ninguna de sus tecno-
como un sistema, o si se quiere como un logias separadamente era suficiente para
subsistema se se está trabajando en el log rar el con trol des eado. Par tiendo de
marco de un programa de manejo in- los métodos más antiguos, todos de na-
tegrado de plagas, puede contribuir no- turaleza no química, tales como : aradas,
tablemente al desarrollo de modelos que carpidas, rotaciones, empleo de semilla
permitan más de una estrategia para re- limpia, fuego, inundación, manejo de
ducir su densidad. Es por su propria idio - pastoreo, cultivos de limpieza, época de
sincracia flexible y puede estar sujeto a plantado, uso de variedades resistentes,
una permanente evaluación y modifica- etc., todos son métodos válidos hoy. En
ciones. el control de malezas se puede decir que
nunca se llegó a aba ndo nar un mét odo
SISTEMA DE MANEJO INTEGRADO de combatirlas, simplesmente se han
DE MALEZAS agregado otros nuevos. El MIM viene a
retomar asi un concepto clásico en el que
Una definición de manejo integrado de
estamos de vuelta como si se cerrara un
plagas es difícil de establecer dado que su
ciclo. Nos vemos obli gados a revivirlo,
filosofia es amplia y esta en constante
ante el potencial descalabro ecológico que
evolución, o bien puede ser distinta para nos enfrenta el uso indiscriminado de
problemas diferent es. productos químicos y la falta de solución
Resumiendo los conceptos vertidos al problema de las malezas que persiste.
MANEJO INTEGRADO DE MALEZAS 73

En el fu tu ro , se rá ne ce sa ri o to ma r lo insectos perjudiciales afecta a las male-


mucho de favorable que ofrece el control zas, esta influencia también debería ser
quími co adaptándolo a los req ueri mien- conocida y evaluada. Los trabajos de in-
tos de preservación ambiental y compa- vestigación pueden encontrar soluciones
tibil iz arlo con la s nece si dades del pr o- para una plaga, sin embargo limitaciones
ductor. de orden institucional o sociales pueden
impedir su implement ación.
Enfoque integrado horizontal y El punto de vista de manejo integra do
vertical vertical se relaciona con todo tipo de
actividades que directamente pueden con-
Un análisis rápido de la complejidad
del MIM nuestra las ventajas de eval uar- tribuir a reducir la densidad de una po-
blación de malezas a niveles por debajo de
lo desde dos niveles de acción distintos,
los cuales se considera que sus perjui cios
que han sido denominados "enfoque in-
económicos son tolerables. Significa el
tegrado horizontal" y "enroque integrado
uso de todas las combinaciones apro-
vertical" (Soerjani, 1977). (Fig. 1).
priadas y tecnologicamente compatibles
para el control de malezas. Asímismo,
como se propone en este trabajo, abarca-
ria todos los estudios de caracter básico
sobre la biologia y la ecologia de las ma-
lezas que tienden a producir información
útil havia el objetivo fundamental de su
control.
La necesidad de una integración ho-
rizontal y vertical en un programa de
manejo integrado de plagas ha sido enfa-
tizada por otros autores (Allen y Bath,
1980 ).
FASES DE DESARROLLO DE UN
Fi gu ra 1. En fo qu e Ho ri zo nt al y Ve rtic al de un SISTEMA DE MIM
Si st ema de Ma ne jo In te gr ad o de Ma-
lezas. (Adaptado de Soerjani, 1977). Un sistema de MIM es en general un
largo camino a recorrer , que debe ser
El punto de vista de integración ho- programado cuidadosamente para evitar
rizontal abarca las relaciones interdisci- dilapidaciones de esfuerzos y tiempo. Un
plinarias inherentes a la presencia de la principio fundament al que debe ser ob-
plaga y su manejo. Considera a la male - servado por los técnicos responsables, es
za en su interrelación con otros compo- el de definir los objetivos de su programa y
nentes del ecosistema y las consecuencias diseñar sus experimientos y tareas a
que pueden derivar de cualquier acción ejecutar, con miras a alcanzar dichos
sobre el mismo. Un sistema de MIM en- objetivos en forma sistemática y al menor
fatiza un enfoque holistico del problema. tosto posible.
Así, si una práctic a de control de male - Un programa de este tipo depende de
zas afecta a los insectos, a los microorga- poder realizar decisiones de manejo y
nism os del su elo, a la fauna del lugar o control entre varios cursos de acción
al ser humano, este efecto debería ser posible. El cúmulo de información que se
evaluado y si es posible cuantificado, pa- posea dará mayor o menor riqueza al
sando a ser parte de la información del número de posibles alternativas o vias de
programa de manejo integrado. Por otro accíon.
lado, si una práctica de manejo agrope- Resulta prácticamente imposible dia-
cuario para controlar una enfermedad o gramar con detalle o dar normas de tra-
6 O. A. FERNÁNDEZ
bajo fijas, para el desarrollo de un pro- res Gostosos y la pérdida de tiempo muy
grama de MIM que cubra todas las situa- valioso. A veces, en un estado inicial de
ciones en que las malezas se hacen pre- una actividad agropecuaria puede redu-
sentes causando perjuicios. Depende del cirse el impacto de las malezas mediante
tipo de problema, de los objetivos desea- medidas preventivas imediatas o otras
dos, de la disponibilidad de medios y en decisiones tempranas de manejo.
última instancia de los conocimientos y El conocim ient o de la forma en que
visión de los respo nsabl es de su ejecu - se realiza el perjuicio puede dar indicios
ción. importantes para la reducción del mismo y
La Figura 2 pretende delinear a gran- debe for mar parte del análisis ini cial.
des rasgos las fases principales sobre las Por ejemplo en un programa de MIM de
cuales puede enfocar se el desarrollo de malezas en los canales de desague de la
un si st em a de MI M. En lo s tí tu lo s si - zona de regadio del Valle inferior del Rio
guientes se dan fundamentos básicos so- Col ora do al sur de la Pro vin cia de Bue -
nos Aires ( Lat. 62°37'O Long. 39°23'S ), el
bre cada una de ellas.
problema principal se identificó como la
obstaculización del flujo de agua de dre-
naje de tierras de cultivo que se traduce
en su inutilización por salinización de los
suelos. La causa de dicho problema se
ide ntifi có por la pre sencia de dos espe -
ci es ac uá ti ca s su me rg id as , Po tamo get on
str ia tu s y Ch ar a sp . Ot ra s ve ce s la ca us a
del perjuicio es por competencia por re-
cursos del medio, por producción de ale-
loquímicos o de sustancias tóxicas para
mam ífero s, por act uar com o res erv ori o
de org anismos que afec tan los cult ivos,
etc.

La identifi caci ón taxonómica corr ec ta


de la es pe ci e ó es pe ci es po rb le ma s
juega un papel impor tant e en el análi sis
de un progr ama de este tipo. Es curioso
el número de veces que se realizan trata-
mientos de control de malezas sin un co-
nocimiento exacto de lo que se trata. Una
mala identificación puede resultar en una
subest imación del prob lem a o en el uso
de medidas de control equivocadas.

Estudios sobre biologia, ecologia y


selección de métodos de control
Una de las limitaciones mayores que
existen para llevar a cab o un progra ma
de manejo integrado, es la falta de cono-
cimientos sobre la biologia y ecologia de
Análisis e identificación del malezas. La investigación básica es la que
problema puede proveer de la información necesa -
Es importante tener una idea lo más ria sobre las raz ones de la presencia de
exacta posible del prob lema derivado de las malezas, contribuyendo al hallazgo de
las estrategias adecuadas para su control.
la presencia de una o más malezas. La
definición correcta del mismo evita erro- Los estudios sobre biologia y ecolo-
MANEJO INTEGRADO DE MALEZAS 75

gí a, diri gi do s a aq uell os as pe ct os qu e puede significar un aumento, el algunos


hacen al objetivo final del manejo de la casos de caracter explosivo, como los que
plaga en relación al cultivo y a las medi- tienden a disminuirla. Ligeras variacio-nes
das de control apropiadas, deben ser una ambientales dentro del ecosistema pueden
par te fun dam ent al del enf oqu e ver tic al ser la causa de que ocurra uno o otro
del MIM . Est udios tal es como : lon gev i- fenómeno.
dad y mecanismos de dormición de las
Cada tipo de maleza puede constituir
semillas o outros diséminulos, tosto
un problema independiente, que puede
energético de la repr oduc ción comp etit i- variar con la región y del cultivo que se
va, dinámica de poblaciones, genecología, trate, a través de la aparición de biotipos.
mecanismos de invasión, etc., se encuen- De allí que, los hallazgos y conclusiones
tran dentro de este carácter. Se requiere para una región frecuentemente no son
más información sobre los estadios feno-
transferibles a otras, haciendo que difi-
lóg icos de las mal ezas y su suscept ibil i-
cilmente se pueda suplir la experiencia
dad en los mismos a determinadas medi-
local en el manejo de las malezas.
das de control.
Otro componente mayor, que puede
Si nuestro conocimiento sobre las
actuar como limitante principal, para en-
plantas perjudiciales se acercara al que
carar un programa de MIM, es la falta de
existe sobre las plantas de cultivo, seria
conocimiento sobre los métodos de control
po si bl e esta bl ec er mé to do s de co nt ro l
y la opción más adecuada para cada
más raci onal es. Por ejem plo, sin preten- circunstancia, lo que hace necesario la
der entrar en mayores detalles, es impor- realización de pruebas piloto en escala
tante un mejor conocimiento de los fac- limitada. Los requerimientos para la apli-
tores que determinan el fenómeno de dor- cación más eficiente de los herbicidas no
mición y su interrupción para las semillas se conocen bien ; por ejemplo, el modelo
almacenadas en el suelo, esto podría de distribución de un herbicida sobre la
llevarnos a prácticas de manejo o trata-
planta o el suelo son factores críticos para
mientos que indujeran a que todas o la
el buen éxito de un tratamiento. La
mayo rí a de la s se mill as ge rmin aram a
preparación de las formulaciones de estos
un mismo tiempo, o bien que impidieran
compuestos ofrece numerosas variables,
la germinación de las mismas.
capaces de modificar la actividad biológica
de un producto químico con respecto a
Cada componente ecológico deberia
susceptibilidad, persistencia y modo de
ser considerado en un proyecto del MIM.
acción. Una extraordinaria can-tidad de
Po r ej em pl o, la es tr at eg ia de l co nt ro l
esfuerzos están volcados hacia estos
(Ennis, 1974, 1977 ), puede incluir el aná-
temas, en forma tal que los cambios
lisis de las condiciones ambientales de
equilibrio que proveen nichos ecológicos tecnológicos sobre uso y aplicación de los
para ser colonizados por estas plantas, la herbicidas y métodos de control, se su-
búsqueda de métodos capaces de dismi- ceden aceleradamente en forma inin-
nuir la producción de propágulos o bien terrumpida (Hay, 1980 ).
limitar o int errumpir el flujo de los mis-
La interrelación existente entre los
mos de un lugar a otro.
compartimientos de "Estudios Sobre Bio-
En la práctica suele ocurrir que la logia y Ecologia" y "Selección de Métodos
rápida aparición de una maleza sea debi- de Control" de la Fig. 2 es muy estrecha,
da a un cambio climático o a una medida ambos se hallan a un nivel paralelo de
de ma ne jo de ntro de l ag ro ec os is te ma . ejecución. A medida que se va producien-
Los est udios sobr e ecologia de las male- do nueva información científica y técnica
zas son importantes para establecer los en cada uno de los mismos, dicha infor-
factores clav es o crít icos del ambi ente o mación debe ser evaluada en términos de
de manejo que pueden afectar la tasa de posibilidades de su empleo para el de-
crecimiento de una población. Interesa sarrollo de estrategias de control, siendo
conocer tanto aquellos cuya existência el flujo de información entre ambas li-
8 O. A. FERNANDEZ
nea s de trabajo fun dame ntal para la to- man y cuando debe hacerse un tratamien-
ma de decisiones con un crit erio lógi co. to para inhibir dicho proce so. Vicev ersa,
Por ejemplo, conociendo que uno de los si se conote el tipo de propágulos que
mé tod os de co nt ro l pr om is or io es me - produce una maleza y algo sobre su bio-
diante el empleo de un determinado pro- logia, se sabe donde ir a buscarlos y el
ducto químico, es importante la informa- comportamient o que se espera de ell os,
ción que pueda recogerse a través del es- las medidas de control pueden tomar Bi-
tudio de la correlación : producto-fenolo- ch os co no ci mi en to s co mo ba se de su
gía de la maleza, para identificar los es- acción. Es indudable, que los métodos de
tadios de su mayor susceptibilidad. Si lo control de malezas deben adaptarse a las
que se desea es inhibir la formación de características biológicas de estas y solo
propágulos subterráneos, es deseable el circunstancialmente puede ocurrir lo
conocimiento del momento en que se for- contrario.

Figura 3. Enfoque interdisciplinario utilizado para la selección de métodos de


control de Potamogeton striatus en canales de desague.

La Fig. 3 muestra el enfoque inter- mitar los perjuicios causados por Pota-
disci plinario que se le dio para esta fase mogeton striatus y Chara sp., en la zona
de un programa de MIM por parte de la de regadio del sur de la Provincia de
Universidad Nac ion al del Sur, la Com i - Buenos Aires mencionada anteriormente.
sión de Investigaciones Científicas de la
Provincia de Buenos Aires y la Corpora- El resultado luego de cinco anos de
ción de Fomento del Valle Inferior del trabajo es un valioso caudal de informa-
Colorado, en una acción común para li- ción sobre la biologia y la ecofisiología
}
MANEJO INTEGRADO DE MALEZAS 77

de las especies en estudio, y una serie de res ide en el aná lis is y eva lua ción per ió -
recomendaciones prácticas sobre manejo dica de las medidas que se utilizan y las
y control. consecuencias que estas pueden tener so-
bre el ecosistema. La elección del método
Im pl em en ta ci ón de l co nt ro l y usado para evaluar el control de las ma-
su evaluación lezas está gobernado por um número de
factores relacionado con la clase de per-
La selección de los mét odos de con -
juicio, el tipo de maleza, los métodos em-
trol y su implementación, es el resultado
pleados para su control y los objetivos
de la información recogida en la etapa
anterior. Es una situación dinámica que deseados. Es imposible dar directiv as fi j
puede ir cambiando a medida que el flujo as o det erm ina r un mét odo de eva lua -
de conocimientos va creando nuevas po- ción o vigilancia que cubra todas las cir-
sib ili dad es y alt ern ati vas . Los mét odo s cunstancias en que estas plantas causan
problemas, cada caso puede ser distinto en
que res ulten más aconsejables deberán
si mismo.
ser aceptables del punto de vista econó-
mico y de la preservació n de los equili - Un sistema de evaluación, que permita
brios ecológicos. el seguimiento de la dinámica poblacional
o el estado de salud de las malezas en
Frecuentemente dependerá de la pre-
relación a una medida de manejo o
paración e ingenio del técnic o, elabora r
control, es una herramienta importante
un program a experiment al de manejo y
en un programa de manejo integrado. En
su evaluación con un criterio razonable,
las condiciones más favorables, la den-
basado en la información experimental a
sidad de estas en áreas sujetas a estudio
su alcance y la que se va produciendo a
medid a que se avanza en el pro grama. puede ser realizada por el contacto direc -
Esta forma de actuar es muy distinta de to de las plantas, o bien estimada por el
la empírica de probar y ver que ocurre, muestreo representativo. Otras vetes el
desafortunadamente tan frecuentemente peso fresco o seco de las malezas o el cul-
tivo puede tener alta relevancia como
ensayada, con el consiguiente saldo de
evaluación en aquellos casos en que se
fracasos, pérdidas de dinero, tiempo y
mide competencia. Muchos otros tipos de
perjuicios sobre otros organismos.
evaluaciones pueden hacerse en base a
Para cada situación en que una ma- respuestas cuantitativa s, como ser, el nú-
leza se hace presente existe en el concep- mero de semillas producidas por las ma-
to de MI M, un ni ve l de to le ra nc ia de lezas, la inhibición del crecimiento, nú-
densidad de plantas, basado en los per- mero de macollos por plantas, etc. Fre-
jui cios econó mic os mín imo s ace pta dos cuentemente se emplean métodos que no
po r el pr od uc to r. En es ta fa se de de - comprenden mediciones en un sentido
sarrollo de un sistema de MIM es aconse- convencional, como ser el de realizar es-
jable aunque no siempre factible, definir cal as subjetivas de punt os, por ejem plo
los umbrales críticos tolerables de densi- de 0 a 10, que para ser titiles deben ex-
dad de maleza s, asi como los fa ct ores presar en forma adecuada lo que se ob-
claves del agroecosistema capaces de mo- serva a campo como resultado de los
dificar la tasa de crescimiento de la po- métodos empleados. En estos casos la re-
blación. Esto facilita actuar con medidas lación respuesta-punto debe ser cuidado-
de control en momentos oportunos y po- samente definida.
siblemente hacer predicciones a corto o
mediano plazo sobre la dinámica de la Manejo de malezas a largo plazo
población en cuestión. El mantenimiento
Un si st em a de MI M a la rg o re pr e -
de una densidad de individuos por deba -
senta un esfuerzo de caracter permanente.
jo de márgenes aceptables , es un esfuer-
Es un proceso en que interactúan un
zo permanente en un programa de este
número grande de disciplinas y pueden
tipo.
par ti ci par : bi ól og os, ec ól og os, agró no-
Una de las etapas más importantes mos, genetistas, químicos, físicos, inge-
O. A. FERNÁNDEZ
nieros,
10 etc., que en colaboración con ex- La existencia de nuevas tecnologias, el
tensionistas son los encargados de pre- cúmulo de conocimientos básicos sobre
parar paquetes tecnológicos que son pro- biologia y ecologia de las malezas, la com-
vistos al productor agropecuario. Un putación, el entrenamiento de técnicos, y
programa de esto tipo tiende a modificar la conciencia en el ser humano sobre la
los sistemas actuales de productividad necesidad de actuar con prudencia en los
agropecuaria, permitiendo visualizar mé- sist emas de cont rol de plagas, en forma
todos de control de malezas más eficien - que sea n ace pta ble s del pun to de vista
tes, más económicos y ecológicamente de la preservación de los equilibrios eco-
aceptables por la sociedad. lógicos sobre la tierra, son algunas de las
bases fundamentales sobre las que se
El diseñno de un MIM a largo plazo
asienta el éxito de un programa de MIM.
varia rá sus tancialment e seg ún el enfo -
Obviamente, la aplicación práctica de los
que y el objetivo final perseguido. Las si-
tuaciones serán muy distintas según que principios involucrados en un sistema de
se pretenda desarrollar sistemas de con- este tipo no es fácil de llevar a cabo. Sin
trol mediante agentes biológicos, que se embargo, se puede decir que existe en es-
acepten en los cultivos un cierto nivel de tos momentos como nunca ocurrió ante-
perjuicio, que se deban erradicar las male- riormente, un potencial de condiciones
favorables y una base de sustentación
zas por tratarse de cultivos intensivos de
científica de la que se carecia en el pasado,
alto valor económico, que se trate de ma-
como par a afro ntar la co mpleji da d de
lezas tóxi cas para el panado, o bien que
un estudio de esta naturaleza.
el problema que las mismas representan
se halle asociado a su capacidad de actuar
como reservorio de otros organismos AGRADECIMIENTO
patóg enos. Frecuentemente será necesa -
El autor desea expresar su agradeci-
rio el desarrollo de nuevo conceptos y
sistemas de manejo, que deberán ser en- miento a la Sociedade Brasileira de Her-
sayados en pruebas piloto. bic ida s e Ervas Dan inh as por la invita -
ción de dicha Sociedad, que le permitió
Un manejo equivocado, por error o participar en el XIV Congreso Brasileiro
desconocimiento, puede traducirse en el de Herbicidas e Ervas Daninhas e VI
recrudecimiento de los perjuicios ocasio- Congreso Latinoamericano de Malezas.
nados por las malezas. El programa de
control elaborado presenta en dichas cir- BIBLIOGRAFIA
cunstancias "falias" que deben ser iden-
tificadas y reparadas (Soerjani, 1977). Alle n, G.E. y J .E. Bath. The conce ptual and
Puede ser necesario en estos casos volver institutional aspects of integrated pest
a ias fuentes y revisar el sistema de ma- management. BioScience 10:658-664, 1980.
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Las ventajas económicas son una de Ba ld win, F.L. y P. W. Sa nt elm an . We ed Sc ie nce


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ias razones mayores por ias cuales los 10:675-678, 1980.
productores agropecuarios están dispues-
Bl ai r, B.D . y J. V. Pa ro che tt i. Ex te ns io n im pl e -
tos a aceptar los crit erios impuest os en mentation of integrated pest management
un sistema de MIM a largo plazo. La par- systems. Weed Sci. 10, Supplement 1:48-53,
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de proyectos y en ensayos pilotos es muy Böger, P. y H. Vetter. Herbicides in mode rn
recomendable, dado que crea conciencia c rop fa rm in g . Pl an t Res. an d Deve i .
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en la sociedad de la complejidad del pro-
blema, da confianza en los resultados ob- Enni s, W.B. In tegrat ion of weed control te chno -
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