Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
EL MISTERIO DE LA FE
Antonio Escohotado
La CUP siente que Puigdemont ha "traicionado el mandato popular, claro y rotundo, del
referéndum", así como a "los millones de heridos" que la iniciativa ha producido. No
hay duda, pues, de que considera fiables los cálculos ofrecidos el propio día 1 por el
portavoz del Govern, según el cual los opuestos a la independencia rondaban el 9%, y
los favorables el 90%. Tampoco hay duda de que sus aliados políticos en "el proceso"
están dispuestos a creer dichos porcentajes de voto, si bien prefieren la traición a seguir
adelante.
Entretanto acabo de hablar con mi hija Claudia, de 18 años, becada este curso en una
universidad de Missouri, y por ella compruebo que todos los foráneos –entre ellos unos
60 latinoamericanos de ambos sexos– están indignados por los millones de heridos, y
apoyan la "liberación de Cataluña". Que los votantes en el referéndum hayan sido
2.286.217, según la Generalitat, no modifica su propensión a creer que quizá todos ellos
–e incluso alguno más– ha padecido una crueldad policial dirigida contra "la
democracia".
Ahora bien, ¿qué hacer o decir cuando en plena noche algunos se ponen gafas de sol,
sintiéndose agredidos por la inclemencia solar? Innumerables ejemplos documentan la
valiente reacción de la fe ante el imperio de los falaces sentidos, y creer antes de ver
viene reclamándose desde el santo Abraham, que solo suspendió el degüello de su hijo
cuando vino a impedirlo un ángel, pues "la voz interior" se lo había ordenado. ¿Cómo es
posible que en el siglo XXI la realidad prosaica siga siendo rechazada por la convicción
íntima con idéntica firmeza, cuando nada resta en el entorno de aquella vida pastoril?
Siete días antes, el diario gubernamental La Verdad (Pravda) publicó una nota
de Lenin digna también de cita textual:
Cada ciudad y pueblo decidirá cómo limpiarse de sus alimañas, bien
encarcelándolas, obligando a que porten distintivos amarillos como
las rameras, ordenando que limpien letrinas o matando a una de
cada diez, pues el resto será útil en campos de trabajo forzado.
¿Qué opina la CUP al respecto? Este martes su diputada Anna Gabriel propuso "un
nacionalismo sin fronteras", enunciando algo tan curioso como un libre comercio
reforzado por aduanas a cada legua, porque a la chita callando el discurso llamado
posmoderno compensó la caída del Muro, y la implosión de la URSS, con un asalto al
concepto de la verdad como realidad de las cosas. Tras ese concepto, explicará entre
otros Pierre Bourdieu, se cobija la "violencia simbólica" del orden capitalista, y llega
la hora de lanzar una verdad acorde con el sentimiento de los oprimidos, esa "inmensa
mayoría" harta de falacias como la renta per cápita, que reclama libertad para su
expresión y censura de cualquier otra.
Sus colegas Althusser y Derrida publicaron diarios póstumos casi idénticos, pues la
precoz vocación de ambos a la alta docencia topó con una incapacidad para leer textos
distintos de los suyos –intensa hasta el punto de inducir ataques de angustia en caso de
seguir leyendo–, y sus vidas discurrieron bajo el temor a verse denunciados por fraude.
Althusser, por ejemplo, logró ser considerado máxima autoridad mundial sobre Marx,
aunque desde 1960 alternase las clases y conferencias con sesiones de electroshock en
el psiquiátrico, aterrorizado porque nunca logró terminar el Manifiesto comunista de
1848, y mucho menos el resto de la obra marxista, como confiesa en El porvenir dura
mucho (1992), donde tiene la gentileza de detallar también cuántas páginas
de Spinoza, Kant y Hegel fue capaz de leer.
Contando con eso, solo resta recordar qué pensaba Lenin sobre el sufragio universal. En
1894, con 24 años, redacta uno de sus escritos más extensos –Quiénes son los amigos
del pueblo– y alterna allí minúsculas con mayúsculas al afirmar:
¡La RUPTURA COMPLETA Y FINAL con la ideas de los
demócratas es INEVITABLE e IMPERATIVA!.