Al observar la proceso terapéutica de la fundación HOGARES CREA, me doy
cuenta que existen otras técnicas terapéuticas (además de las plasmadas en el libro), que son efectivas para fomentar el bienestar emocional de los miembros de un grupo.
Realizar labores domésticas, terapia ocupacional, labores académicas y
actividades recreativas, ayudan a los miembros del grupo de dicha institución a encontrar en ellos el potencial necesario para superar sus problemas conductuales.
Otro aspecto que me llamo la atención sobre la dinámica grupal de HOGARES
CREA, es el hecho de que el líder del grupo no es exactamente un terapeuta certificado, sino que es un profesional que cuenta con alta inteligencia emocional, empatía y una eficiente capacidad de escucha. Dichas cualidades le sirven como herramientas para ayudar a los miembros a lidiar con sus problemas de manera sana y fomentar la responsabilidad en ellos. Esto me da a entender que además de los conocimientos académicos, es necesario contar con ciertas cualidades personales innatas, que nos permitan liderar eficientemente una terapia grupal.