Análisis del objeto

Configuración material

El zapato de baile, es un objeto volumétrico de ocho partes construido generalmente con

diversos tipos de cuero. Al someter la piel a ciertos tratamientos químicos es posible cambiar
su apariencia, logrando así acabados distintos. Los que se usan en el calzado son; cuero curtido
(exterior del zapato), serraje (forma parte de la suela) y nubuk (presente en la plantilla y
forrado interno).

Los distintos tipos de cuero, le bridan al calzado una textura táctil suave. Respecto a sus
dimensiones, tanto en el largo como en el ancho varían según el talle. Para el análisis se tomó
como ejemplo un talle 31 con un tacón de 4cm .Respecto al tacón, los hay de diferentes
tamaños (de 3 a 10 cm) y la elección del mismo depende de la edad de la bailarina y de su nivel
de conocimiento (se recomienda menos de 5cm para quienes recién se inician con el objetivo
de controlar la altura del tacón y la estabilidad del cuerpo, durante el proceso de aprender a
girar, desarrollar destreza en los pies, así como fortalecer tobillos y gemelos.

Respecto a los colores del calzado, generalmente se utiliza negro para todos los bailes de tipo
español (folklore, tango, flamenco), a excepción del flamenco donde existe la variante del
calzado rojo (se obtiene sometiendo al cuero a un proceso de teñido con acrílicos)

Función

Dicho objeto fue diseñado para la función pragmática de ser un calzado adecuado para
bailes españoles. Para cumplir con dicha función, se realiza la articulación de sus ocho
componentes, los cuales tienen sus atributos particulares: sobre el arqueo se apoya el
empeine (realizando el arco longitudinal correspondiente). El contrafuerte protege al talón y lo
sujeta. La puntera contiene a los dedos de los pies sin presionarlos, mientras que la suela
protege la planta del pie y proporciona tracción y mayor fricción para evitar caídas. El tacón,
por su parte se encuentra unido a la parte posterior de la suela. Su función principal es actuar
como soporte al talón, mientras que su función estética es aportar altura. La pulsera o correa
funciona como cierre o sujeción. En la cara interna del zapato, hallamos al forro que es
pequeño y sencillo y, está en contacto directo con el pie, motivo por el cual es especialmente
suave para permitir la transpiración. Como último componente nos encontramos con la
plantilla, la cual es el elemento superior de la suela, el más cercano a la planta del pie y sirve
para el montado, debe ser de material transpirable y flexible y de textura suave.

Usuario y contexto.

Para hacer un análisis ergonómico e interpretar las formas de uso, es necesario realizar un
análisis de la relación sujeto (bailarín)- objeto (zapato)- contexto (escenario). Los bailarines
profesionales están sometidos a grandes exigencias físicas que pueden originar lesiones.
Durante el zapateo, el pie sufre constantes impactos de altísima intensidad, Esto lo convierte
en un posible foco de lesiones a nivel cutáneo, ungueal (uñas) y estructural. Las lesiones en
pies de deportistas y bailarines, suelen estar asociadas a una incorrecta alineación corporal-
anatómica, una pobre preparación física, una incorrecta o pobre técnica de ejecución, las
grandes exigencias coreográficas, o factores ambientales como la temperatura, la superficie, y
en el caso del flamenco, también a las características del zapato de baile y la altura del tacón.
El pie es el punto inicial de contacto con el suelo y desempeña un papel fundamental en el
movimiento humano, actuando como base de apoyo y palanca de locomoción. Si este apoyo
no se realiza sobre una correcta colocación, se pueden desencadenar lesiones al no ser
absorbidos los impactos de forma eficiente, reduciéndose así su capacidad amortiguadora. Las
lesiones en pies y tobillos son susceptibles de aparecer cuando no se siguen los requerimientos
naturales de movimiento de las articulaciones, y no se reparten las cargas uniformemente. Si
el baile no sigue las reglas dictadas por la lógica articular y la actividad muscular normal, se
reduce la capacidad amortiguadora y acaba afectando a las articulaciones del pie y del tobillo,
pero también al resto de la cadena cinética (sistema de articulaciones y eslabones óseos
interconectados de tal manera que crean un movimiento controlado como respuesta a un
estímulo).

Respecto al contexto de uso, el calzado suele ser utilizado en escenarios de madera (ya sea en
salas de ensayo o teatros). Aunque a veces, es posible ver bailes en otros sitios como: shows
de tango en Caminito (La Boca)

Significación

Roland Barthes expuso que el sentido de un objeto es un hecho de cultura (producto de una
cultura) y el significado del mismo es tomado como natural, aunque fue constituido social y
culturalmente. Tomando esto como punto de partida, al analizan al objeto como signo, es
posible establecer que el mismo denota pertenencia a un ambiente particular (la danza),
según el taco (y el gasto de la suela) denotara experiencia en la misma. Respecto a su
significación connotativa, la misma es mucho más amplia ya que es posible percibir: cierto
status económico- según el material con el que este confeccionado el calzado- , apela a un
factor emocional – ya que en nuestro país convergen diversas culturas europeas-las diversas
variante de calzado (marcas, modelos) nos connotan como se desarrolló la industria y
desemboco en una sociedad de consumo, ya que comparativamente hay mucha más oferta
actualmente que hace años.

Lamina 2: evolución histórica del objeto

A primera vista, los zapatos son indicadores del gusto y el estilo de quien los usa. Pero si se
miran cronológicamente, son un indicador de los avances tecnológicos y los cambios sociales.
Sin duda, son un signo de los tiempos.

La historia del zapato comenzó en el año 10,000 a.C. Pinturas de esa época en cuevas de

España y Francia hacen referencia al uso del calzado. En tumbas egipcias, fueron descubiertas
pinturas que representan los diferentes estados del cuero para la elaboración de los zapatos.

En Mesopotamia eran comunes los zapatos de cuero crudo, amarrados a los pies por tiras del
mismo material. Los coturnos eran símbolos de alta posición social.

Los griegos llegaron a lanzar moda como la de modelos diferentes para el pie izquierdo y
derecho.

En Roma el calzado indicaba la clase social y, los cónsules por ejemplo usaban zapatos
blancos, los senadores zapatos marrones prendidos por cuatro cintas negras de cuero atadas
con dos nudos, y el calzado tradicional de las legiones eran los botines que descubrían los
dedos

Edad media: Se dejan de lado los significados simbólicos y empieza a imperar el gusto por la
moda estética.

Sobre el S XV cuando Se hace casi imprescindible que el calzado masculino disponga de unos
tacones necesarios para que el pie, encaje mejor en los estribos de los caballos. El mundo de la
equitación y los zapatos de tacón han ido siempre íntimamente unidos.

en 1660 un zapatero llamado Nicolás Lestage, le obsequio un par de zapatos al rey Luis XIV ,
quien, firmó un edicto donde enunciaba que solo los miembros de su corte podían calzar
zapatos con tacones altos y de color rojo. Y cuánto más alto mejor, puesto que una de las
mejores maneras de tener estatus social era a través de costumbres imprácticas.

Finales del siglo XVII : Las modas marcaban que los tacones de los hombres debían ser más
bajos y más cuadrados. Mientras que el calzado de las mujeres era ya más esbelto y curvo.

Desde el siglo XVIII Se difundió el zapato moderno, con una suela cosida y tacos de distinto
tamaño

La Revolución Francesa Termina con todos los símbolos de la aristocracia, pero durante el
Imperio de Napoleón Bonaparte los zapatos recuperan sus adornos: botas con botones, botas
atadas, nuevos materiales y zapatos acordes con diferentes tipos de actividades.

La Revolución Industrial Trae consigo la numeración y la producción en serie del calzado.

A principios del siglo, se empezaron a diseñar zapatos diferentes para el pie derecho y el
izquierdo. Si bien la producción aún era artesanal, en 1890 ya se había mecanizado en Europa
y en EEUU. A mediados del mismo comienzan a aparecer las máquinas para auxiliar en la
confección de los calzados, pero solamente la máquina de costura pasó a ser más accesible.

A partir de la cuarta década del siglo XX, grandes cambios comienzan a sucederse en las
industrias del calzado; como el cambio de cueros por gomas y también materiales sintéticos,
principalmente en los calzados infantiles y femeninos
La diversificación que han tenido los zapatos de baile (y el calzado en general). Esto responde,
en gran medida, a la globalización. La misma, es uno de los fenómenos del capitalismo y es
generada por la necesidad de la dinámica del capitalismo para formar una aldea global que
permite mayores mercados a los países desarrollados.

Cabe destacar que el desarrollo de la industria desemboca en la actual sociedad de consumo.

La aceleración en los procesos productivos y el consiguiente excedente de producción
promueven la existencia abrumadora de objetos y mensajes.

Considerando que en los Procesos Proyectuales se entrelazan los condicionantes externos, las
intencionalidades del diseñador y los referentes históricos, culturales, disciplinares o de la
naturaleza y que en todo proceso de configuración objetual, se recuperan y resignifican
experiencias anteriores, es posible establecer ciertos condicionantes involucrados en las
transformaciones de los zapatos lo largo del tiempo.

Respecto a los condicionantes relativos a su uso , apropiación y consumo ; es necesario

destacar que en cuanto a su principal significado, el zapato es un cimiento, un objeto que nos
ayuda a plantarnos firmemente en el suelo. Basándonos en la experiencia primitiva humana, el
zapato representa sobrevivencia.

También representa acción y movimiento. Por eso no es casualidad encontrar en la mitología

griega a la figura del dios griego Hermes, quien portaba un par de zapatos alados, los cuales
dan un claro ejemplo de este simbolismo.

Por su estética y estilo, los zapatos refuerzan la identidad de quienes los utilizan; motivo por el
cual no es azaroso que ciertos diseños de zapatos nos gusten más que otros. Cada elemento,
forma, textura, color contiene un significado, y en conjunto emite un solo mensaje sobre
nosotros mismos, sobre nuestro modo de ser, acciones, ideales y preferencias.

Simbólicamente, los zapatos denotan femineidad, ya que los mismos están asociados en el
imaginario colectivo a las mujeres.

Respecto los condicionantes relativos a su producción, la diversificación de materiales con los

que se confeccionan los zapatos, están íntimamente relacionados con los factores
económicos, ya que depende del costo de producción disponible. El cuero de animal es
sumamente costoso (además pasa por varios procesos de curtido), mientras que el cuero
ecológico es más accesible porque es sintético.