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Biografia de Goar Mestre

Goar Mestre nació el 25 de diciembre de 1912 a una familia aristocrática en Santiago de


Cuba. Fue enviado a Estados Unidos donde estudió economía en Yale. Inteligente desde
joven, fue empleado como jefe de marketing en una firma de pilas y linternas en Argentina.
Sus estudios en Estados Unidos causaron que años después, luego de la revolución
cubana, se lo llame "esbirro del imperialismo yanqui" desde los micrófonos que él mismo
hizo instalar...

En su país natal, formó parte de la resistencia guerrillera en contra del dictador Batista, ya
que este, mediante una ley de radiodifusión, pretendía quitarle la posición dominante en los
medios que tenían Goar y sus hermanos Abel y Luis Augusto.

Esta posición aventajada era dada por sus compañías Mestre y Godoy (agencia de
publicidad) y Circuito CMQ (poderosa cadena integrada por 7 estaciones de TV, 9 de radio y
30 empresas diversas). Esta última fue expropiada por el Estado, y hoy en día es el medio
oficial de comunicación del gobierno.
Esta empresa nació como una adquisición familiar de una emisora radial venida abajo, y
que rápidamente se convirtió en imperio.

El hecho de haber formado parte de la guerrilla castrista no le garantizo una buena relación
con Fidel Castro, por lo que huyó de Cuba en 1959 al ser su empresa expropiada,
aprovechando las políticas de Frondizi que favorecian a los empresarios como el.
Esta huida significó entregar el gran imperio que había creado en Cuba para empezar de
nuevo en otro país.

Goar mismo dijo que consideraba injusta la posición de su familia en los medios de
comunicación cubanos, y admitió que de no haber sido Castro, alguien más los hubiera
echado debido al gran poder de la compañía -el 92 por ciento de las señales televisivas
estaban generadas por ellos.- Más tarde en su vida se convirtió en un hombre muy en
contra de los monopolios.
Goar había estado acá en 1948 como miembro de la Asociación Interamericana de
Radiodifusión con el objetivo de evitar la privatización de medios de comunicación por parte
de Juan Domingo Perón. Este ataque contra el gobierno le saldría caro más adelante...

El señor Mestre no perdió tiempo con sandeces al llegar a la "París de Sudamérica": volvió
al negocio de la TV uniéndose a la sociedad Río de la Plata Televisión, luego convertida en
Proartel, que adquirió la licencia de Canal 13.

Así es como se convirtió en socio y director del canal, donde a pesar de la inestabilidad
política logró crecer enormemente siguiendo una fórmula de combinar calidad con rating,
hasta logrando incluir programas culturales, lo que influenció mucho la televisión en años
posteriores (hasta los primeros años de los noventa). Su estilo de programación, apuntado a
la clase media, también estaba integrado por comedias, musicales y humorísticos.

Al llegar al país y fundar el canal, el magnate cuya fortuna estaba entre las más grandes de
Cuba puso una escuela de producción audiovisual para formar empleados. También trajo
reglas morales como que todos paguen lo mismo por un anuncio, que previamente era algo
visto como imposible en Argentina. Esto revolucionó la conducta comercial del negocio.
Esta ética la aprendió de su familia y de sus estudios en EE.UU.

Esta manera de hacer televisión, con contenido de calidad, rentable e independientemente,


fue la base sobre la que la mayoría de los canales latinoamericanos, y en especial los
argentinos, hicieron su modelo de negocios. Su gran influencia en la industria audiovisual
del continente le ganaron los títulos de "Rey de la TV argentina" y "Padre de la televisión
latinoamericana".
Su habilidad para los negocios y la publicidad convirtió sus desarrollos en referentes
mundiales, admirados y estudiados.

Aquellos títulos jocosos no fueron la única forma en la que la industria reconoció el genio y
la creatividad de Goar, sino que también se lo homenajeó con:
● El premio Donatello de Oro
● El nombramiento de Caballero de la Orden al Mérito (Italia)
● Gran Cruz de la Orden del Mérito Civil (España)
● Un Emmy
● Un Founders Award
● La creación de los Premios Goar Mestre por Fund TV

Como bien sabemos, no todo es un cuento de hadas, y Goar se dio cuenta de esto en 1974
cuando su canal fue estatizado por el gobierno peronista. A pesar de que la animosidad
contra los medios de comunicación no era tan fuerte como en el gobierno de la década del
‘40, el antecedente antiperonista del que hablamos anteriormente no había sido olvidado, y
el revanchismo que dominaba en los altos cargos estatales causó la expropiación del canal.

Mestre todavía no se había rendido, y quería permanecer en el negocio de los medios. En


1980 se asoció con la familia Macri para fundar Teleinde, sociedad que producía
telenovelas para tanto el mercado local como la enteridad del hispanohablante.
Unos años más tarde, en 1989, se volvió a asociar con los Macri para presentarse en la
licitación de los Canales 11 y 13 decidida por el Gobierno de Carlos Menem. Este proyecto
se canceló al disolverse la sociedad gracias a las diferencias entre Mestre y el Grupo Macri.

Ya habiendo revolucionado por siempre el negocio audiovisual, y convirtiéndose en uno de


los mayores exponentes en su área, Goar pasó los últimos años de su vida de forma plácida
en Punta del Este, manteniéndose al tanto del negocio de Teleinde.

Goar pasó sus últimos momentos con su familia, hasta que murió a causa de un cáncer en
un sanatorio de Buenos Aires, donde había sido trasladado por una indisposición cardíaca.
Hoy es recordado como un personaje esencial en la industria y como un hombre que
mantuvo su humildad por sobre el orgullo de su gran obra.

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