Вы находитесь на странице: 1из 9

REFLEXIONES DEL LIDER DE HOY

INTRODUCCIÓN

Es necesario que tengamos un modelo que pueda servirnos en estos tiempos


en que, hechizados por las propuestas del liderazgo, hemos sucumbido ante
un lenguaje humanista que esconde una despreocupación real por los seres
humanos, centrado principalmente en los resultados. Detrás del lenguaje de
‘excelencia’, ‘calidad total’, ‘reingeniería’ o ‘eficacia’, se esconde una nueva
forma de utilización de las personas en función de los objetivos institucionales.

En consecuencia, necesitamos tomar distancia de ese modelo de líder que


maneja formar parecidas a las del líder cristiano, pero cuyo contenido y fondo
es radicalmente diferente.

En 1 Timoteo 3 encontramos desarrollado el modelo del obispo. De allí


obtenemos los siguientes elementos para la construcción de la identidad del
líder.

1. El líder es un “super-visor”

Literalmente obispo significa ‘supervisor’, ‘veedor del rebaño’. Hay


coincidencia en afirmar que presbítero, anciano y obispo tenían las mismas
responsabilidades ministeriales: enseñar, juzgar y gobernar.

El sentido literal aplicado de las tareas de enseñar, juzgar y gobernar nos da un


modelo nuevo de supervisión. Bajo esta perspectiva
El líder tiene que ser a la vez:
a. un maestro,
b. un pastor,
c. un juez,
d. un gobernador

Ésta es su forma de super-mirar a la organización.

El líder no sólo tiene que ver sino super-ver a la organización. Esto nos lleva
a las preguntas:

a. ¿Cómo estamos viendo?


b. ¿Qué estamos viendo?
c. ¿Para qué?
d. ¿Qué hacemos con lo que vemos? Incluso tenemos que preguntarnos:
e. ¿Realmente vemos? O estamos ciegos, porque hemos perdido contacto
con la realidad, o solo vemos lo que queremos ver.

Tenemos en Jesús y en Pablo dos ejemplos de cómo ver. Nos cuenta el relato
bíblico (Mt. 9:35-38) que Jesús «al ver las multitudes, tuvo compasión de
ellas; porque estaban desamparadas y dispersas como ovejas que no tienen
pastor». Pablo, al ver la idolatría de la ciudad de Atenas, sintió que su
corazón se enardecía (Hch. 17). Entonces encontramos que el verdadero «ver»
tiene dos características básicas: no es delegable (nadie puede «ver» por
nosotros) y nos conmociona

2. El líder tiene que anhelar serlo


«Quien anhela ser líder desea en realidad Ser un trabajador incansable
que buscará producir buenos frutos y que escogerá medios tan altos
como sus fines». Visto así, es probable que disminuyan los candidatos.

Es «palabra fiel», es decir, fuera de toda duda, que el que anhela ser obispo
«buena obra desea» (1 Ti. 3:1). Aquí nos habla de los anhelos y de las
aspiraciones. El problema no está en anhelarlo sino en descubrir qué estamos
deseando exactamente.

3. El líder tiene rasgos especiales

No cualquiera puede serlo. Se necesitan ciertos rasgos. Y no sólo al momento


de ser nombrado, sino que se cultiven a lo largo de la vida.

El líder, siendo consciente de su llamado, busca en humildad que el Señor


lo santifique, porque sabe que sin ello no podrá ser fiel

a. La integridad

La integridad es la nota distintiva de todo cristiano y, fundamentalmente,


de un líder. La base de la integridad es el agradar al Señor. Y a partir de
allí se es íntegro en todo

b. Honestidad

La honestidad le lleva al líder a gobernar bien su casa y la organización,


algo nada fácil pero necesario

Además de las ganancias deshonestas en el plano económico, podemos


encontrar otras ‘ganancias deshonestas’: poder, comodidad, seguridad y
satisfacción emocional indebida

Otra ‘ganancia deshonesta’ en la obra es, paradójicamente a lo que se podría


pensar, la comodidad. Nuestras organizaciones tienden a ser informales y muy
flexibles

c. La sabiduría

La aptitud para enseñar se refiere a la cualidad de "saber" por la que el


líder tiene que «ser sabio».

d. La mesura
El carácter de la mesura no nos libra de enfrentar las situaciones difíciles,
provocando en nosotros una conducta evasiva, sino que nos da el
equilibrio para reaccionar

e. La sobriedad

La sobriedad es el revestimienlo de la coraza del Señor que nos permite


tener una postura frente a las tormentas de la vida.

f. La prudencia

La prudencia es la capacidad de pensar antes de reaccionar

g. El decoro

Éste es un rasgo sorprendente. Proviene de la palabra griega cosmios, por lo


que se refiere a la persona educada, pulida, que sabe moverse en el
mundo y que no reduce su visión a su región

FORMACIÓN DE UN LÍDER
«Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado...» (Ez. 22:30).

Cabe mencionar que de generación en generación, Dios se ha valido de líderes


para orientar este mundo y darle destino y, sobre todo, para guiar a su iglesia
por el camino en que Él ha querido llevarla.

CACIQUE O LIDER

El cacique es un personaje típico y folclórico que acapara todo, dicta órdenes y


se perpetúa en el poder, controlando la política, los negocios, las finanzas y
hasta la religión. Cuando este personaje ve amenazado su control por algún
líder predispuesto a quitarle el poder, lo hace desaparecer, porque para él
existe un solo objetivo: continuar en el poder y no compartirlo con nadie.

CANDIDATOS

En primer lugar, el profeta Isaías era un hombre común que habitaba rodeado
de una sociedad pecadora e inmunda, llena de maldad

En segundo lugar, tenía labios inmundos: «...de la abundancia del corazón


habla la boca» (Lc. 6:45).
«Después oí la voz del Señor, que decía ¿A quién enviaré, y quién irá por
nosotros? Entonces respondí yo: Heme aquí, envíame a mí» (Is. 6:8).

LA CLAVE PARA FORMAR LÍDERES

Dios no comienza su programa con una organización impersonal sino con el


hombre. «Hubo un hombre enviado de Dios, el cual se llamaba Juan» (Jn. 1:6).
«Y busqué entre ellos hombre que hiciese vallado y que se pusiese en la
brecha delante de mí, a favor de la tierra, para que yo no la destruyese» (Ez.
22:30).

La persona transformada es el instrumento de Dios para bendecir a otros. El


líder espiritual es el método de Dios para evangelizar al mundo, formar líderes
y guiar a la iglesia a hacer su santa voluntad en la tierra.

Dios busca líderes espirituales que permitan que Él los prepare, obedientes a
su voz, con un amor sobrenatural por su obra, humildes —producto de estar en
su presencia—, y con una fe inquebrantable. La relación es una
interdependencia: Dios busca al hombre y éste necesita a Dios.

EL MODELO PARA EL LÍDER DE HOY


I. Visión. El líder puede ver lo que otros no ver y hacer lo que se debe
hacer con la visión requerida para lograrlo.
II. Valor. El líder cristiano necesita mucho valor para la toma de
decisiones finales, sabiendo que éstas afectarán a otros positiva o
negativamente.

III. Decisión. Es necesario ser diligente tanto en las pequeñas como en


las grandes acciones.

IV. Disciplina. Se debe estar dispuesto a disciplinarse a sí mismo. Esto


requiere autocontrol y sacrificio personal.

V. Sabiduría. Es la combinación del conocimiento y la habilidad. Como


líderes debemos estar seguros de estar capacitados para llevar a
cabo las responsabilidades que se nos encarguen.

VI. Motivación. El líder efectivo es el que puede inspirar y estimular a


otros a entrar en acción. Debe ser entusiasta para comunicar sus
ideas y contagiar a los demás.

VII. Habilidades ejecutivas. El líder debe estar dispuesto a desarrollar


sus habilidades ejecutivas y a alimentarse constantemente con
buenas lecturas, seminarios , cursos y especialmente, con el estudio
de la Palabra de Dios.

Nuestra responsabilidad como líderes en la obra de Dios sobre esta


tierra se acrecienta, especialmente en la tare específica de ser:

 Siervos de la persona de Dios


 Administradores de sus recursos

 Pastores de su grey

EL LIDER Y LA OPOSICIÓN
1. Un líder hace frente a la oposición

a. El ridículo: Es la primera táctica que suelen escoger nuestros


enemigos.

El mundo no creyente ridiculiza continuamente a la iglesia.


El ridículo es constante, y es eficaz porque ataca a nuestra
autoestima.

¿Has notado alguna vez cómo la gente negativa tiende a juntarse? Hay
algunos cuyo único propósito en la vida parece ser oponerse a los
demás.

b. La fatiga:. Un cuerpo cansado puede causar un espíritu agotado


y desalentado. Descansa cuando puedas, para evadir este
paralizador de proyectos.

c. La frustración: En realidad, los montones de escombros van


disminuyendo, pero si seguimos viendo escombros esto es
abrumador. Si nos limitamos a seguir adelante podremos vender.

d. El fracaso: Cuando estas agotado, todo te parece imposible.

e. El temor: Una de las tácticas principales del enemigo consiste en


inducir al miedo.

Los enemigos siempre tienen dos metas: Estorbar a la Palabra de Dios y


detener la obra de Dios.

Cuando te estén ridiculizando Apóyate en Dios. Admítelo todo delante de El.


“Dios mió, estamos confiados en que tu nos vas a defender”
Si alguien te esta ridiculizando, no le contestes. Si lo haces, no vas a ser mejor
que aquel que se esta burlando de ti. Apóyate en Dios y ora.

Mientras mayor sea la hostilidad, mas necesitaras confiar en Dios. La oración


es tu gran aliada cuando te están atacando.

Cada vez que te ataquen, lo primero que hacer es llevarle a Dios la situación.
Ora.
Algunas veces basta con ignorar la hostilidad.

Cuando te ridiculicen, no te enfrentes a la gente; convérsalo con Dios

2. No subestimes a tus oponentes

“Confía en Dios y mantén seca la pólvora” Una petición sin precaución es una
presunción

En la Biblia se usa una y otra vez la expresión “Estén alerta y oren” Jesús la
dijo. Pablo la dijo. Juan la dijo. Pedro la dijo. “Estar alerta” es la parte
humana: ponerse en guardia. “Orar” es la parte divina: confiar en Dios.
Estamos alerta cuando cerramos nuestra puerta; oramos cuando le decimos a
Dios que confiamos en él. Haz ambas cosas.

3. Refuerza tus puntos débiles

Los buenos líderes saben en cuáles puntos son vulnerables, y refuerzan


esos lugares.

La meta de toda hostilidad es obstaculizar tu trabajo hasta paralizarlo. El


enemigo quiere que renuncies. Entonces es cuando hay que decir: “¡De
ninguna manera!”, y seguir trabajando, pase lo que pase.

 Los líderes son modelo de perseverancia

 La raíz de los conflictos internos y la discordia siempre está en el


egoísmo

 Trabajar con gente es la mayor satisfacción para un líder y también


su mayor frustración

 Cuando estamos peleando entre nosotros, nuestro equipo se


destruye
 Tu papel como líder es el de proteger la armonía

 Hay una clase de ira correcta y otra incorrecta. Ser líder consiste en
conocer la diferencia entre una y otra

 El líder necesita tener fuego en sus huesos

 Tómate tu tiempo para reflexionar: Piensa antes de hablar

 Cuando estamos enojados, nuestra primera reacción suele ser


equivocada

 Cuando nosotros nos enojamos, actuamos para vengarnos.


Cuando nos enojamos con la ira de Dios, actuamos con justicia

 Enójate con la ira de Dios y no con la tuya propia

 La ira impulsiva siempre te mete en problemas

 Reflexione antes de hablar

 Los problemas que se ignoran no mejoran

 Los líderes deben tener el valor para confrontar

 El enfrentamiento es una tarea de los líderes

 Cuando una iglesia se gana la reputación de que en ella hay


divisiones, pierde su eficacia

 El egoísmo es la fuente de todos los conflictos

 Los organizaciones tienen menos conflictos cuando sus líderes


llevan una vida generosa y son modelo de desprendimiento

 Si dos personas están de acuerdo en todo, entonces una de ellas


está de sobra

 Juntos podemos causar un impacto

 Juntos, somos una fuerza que es necesario tener en cuenta

 Ama lo suficiente como para enfrentar. Di la verdad con amor.


 El poder corrompe, y el poder absoluto corrompe de manera
absoluta

TENTACIONES DEL LIDERAZGO


1. Te sentirás tentado a hacer mal uso de tu posición

2. Te sentirás tentado a abusar de tu poder

3. Te sentirás tentado a sacar ganancia de tus privilegios

 El liderazgo no es señorío

 Si tu amas de veras a la gente, no abusas de ella ni haces


mal uso de ellas

 Mientras más alto llegas en el liderazgo, menos libertad


tendrás

 El liderazgo exige mucho

 Los líderes eficaces se centran en sus responsabilidades y


se olvidad de sus derechos

 Si no hay responsabilidad tampoco hay autoridad

 Dios no nos llama al éxito. Nos llama a la felicidad

 Los ascensos vienen de Dios, y no de la gente.


Alguien dijo en una ocasión: “No hace falta conocer a los
hombres clave, si se conoce al hombre que tiene las llaves”

Вам также может понравиться