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Paniagua Estévez, Manuel Eusebio.

Gastroenterología y hepatología clínica/ Manuel Eusebio


Paniagua Estévez, Felipe Neri Piñol Jiménez.-- La Habana:
Editorial Ciencias Médicas, 2014.
386 p. : il., tab. (Gastroenterología).

Enfermedades Gastrointestinales, Hepatopatías, Diagnóstico


Clínico, Técnicas y Procedimientos Diagnósticos

Piñol Jiménez, Felipe Neri coaut.

WI 141

Edición: Ing. José Quesada Pantoja


Diseño de cubierta: D.I. José Manuel Oubiña González
Diseño interior: Ing. José Quesada Pantoja, Téc. Yamilé Hernández Rodríguez,
D.I. José Manuel Oubiña González y Lic. María de los Ángeles Pacheco Gola
Ilustración de cubierta: Marcos Rubén Ramos Mesa
Ilustraciones: D.I. Yodanis Mayol González, Téc. Yamilé Hernández Rodríguez e Ing. José Quesada Pantoja
Emplane: Lic. María de los Ángeles Pacheco Gola

© Manuel Eusebio Paniagua Estévez y Felipe Neri Piñol Jiménez, 2014


© Editorial Ciencias Médicas, 2014

ISBN 978-959-212- Tomo III


ISBN 978-959-212-933-7 Obra completa

Editorial Ciencias Médicas


Centro Nacional de Información de Ciencias Médicas
Calle 23, No. 654 entre D y E, El Vedado
La Habana, 10400, Cuba
Correo electrónico: ecimed@infomed.sld.cu
www.ecimed.sld.cu
Al profesor Dr. C. Raimundo Llanio Navarro,† eminencia
de las ciencias médicas, profesor de mérito y de la gastroenterología
cubana y universal, ejemplo de hombre de ciencia, que con su apoyo
incondicional, su superación constante permitió enriquecer a todos sus
discípulos los conocimientos de la gastroenterología
bajo su dirección y a su vez ponerlo al servicio de nuestro
pueblo y de toda la humanidad.

Padre de la Gastroenterología Cubana.


Autores principales

Dr. C. Manuel Eusebio Paniagua Estévez


Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de I Grado en Medicina Interna.
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profesor Titular y Consultante de Gastroenterología.
Investigador Auxiliar. Presidente de la Sociedad Cubana de Gastroenterología.
Hospital Universitario Enrique Cabrera.

Dr. C. Felipe Neri Piñol Jiménez


Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado en Gastroenterología.
Profesor Titular. Investigador Titular. Máster en Enfermedades Infecciosas.
Hospital Universitario Calixto García. Instituto de Gastroenterología.

Autores

Dra. C. Vivianne Anido Escobar Dra. C. Lissette Chao García


Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra- Doctora en Ciencias Médicas. Especialista II Grado
do en Gastroenterología. Profesora Auxiliar. Investi- en Gastroenterología. Profesora Auxiliar. Investiga-
gadora Auxiliar. Hospital Universitario Calixto Gar- dora Titular. Máster en Urgencias Médicas. Centro de
cía. Centro de Cirugía de Mínimo Acceso. Investigaciones Médico-Quirúrgicas.

Dr. C. Enrique Arus Soler Dr. C. Bienvenido Gra Oramas


Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de I en Me- Doctor en Ciencias Médicas. Especialista II Grado en
dicina Interna. Especialista de II Grado en Gastroen- Anatomía Patológica. Profesor Titular y Consultante.
terología. Profesor Titular. Investigador Titular. Aca- Investigador Titular. Hospital Universitario Calixto
démico Titular. Hospital Universitario Calixto García. García. Instituto de Gastroenterología.
Instituto de Gastroenterología.
Dra. María Elena González López
Dr. Jesús Barreto Penié
Especialista de II Grado en Microbiología. Profesora
Especialista II Grado en Medicina Interna. Profe-
sor Auxiliar. Máster en Nutrición en Salud Pública. Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Máster en Infectolo-
Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Hermanos gía y Enfermedades Tropicales. Hospital Universita-
Ameijeiras. rio Calixto García. Instituto de Gastroenterología.

Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla Dr. C. Miguel González-Carbajal Pascual


Doctor en Ciencias Médicas. Especialista II Grado Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
Gastroenterología. Profesor Titular. Investigador en Gastroenterología. Profesor Titular. Investigador
Auxiliar. Hospital Universitario Calixto García. Cen- Auxiliar. Hospital Universitario Dr. Joaquín Albarrán
tro de Cirugía de Mínimo Acceso. Domínguez.
Dra. Nery González Lazo sor Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- Hermanos Ameijeiras.
sora Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Instituto de On-
cología y Radiología. Dr. C. Julián Francisco Ruiz Torrez
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
Dra. Amada Belkis Palomino Besada en Gastroenterología. Profesor Auxiliar. Investigador
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- Auxiliar. Hospital Universitario Calixto García. Cen-
sor Auxiliar. Máster en Educación Médica Superior. tro de Cirugía de Mínimo Acceso.
Hospital Universitario Militar Dr. Carlos J. Finlay.
Dra. Lidunka Julia Valdés Alonso
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Asistente.
Dr. Roberto Pérez Menéndez
Investigadora Agregada. Máster en Infectología. Institu-
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- to de Medicina Tropical Pedro Kourí.

Coautores

Dr. C. Anselmo Antonio Abdo Cuza Dra. Mónica Álvarez Mesa


Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado Especialista de II Grado en Dermatología. Profesora
en Medicina Intensiva y Emergencia. Profesor Titular. Auxiliar y Consultante. Máster en Enfermedades In-
Máster en Urgencias Médicas. Centro de Investiga- fecciosas. Hospital Universitario Calixto García.
ciones Médico-Quirúrgicas.
Dr. Jorge Luis Álvarez Álvarez
Dra. Gladys Abreu Suárez Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
Especialista de II Grado en Pediatría. Profesora sor Auxiliar. Investigador Agregado. Universidad de
Auxiliar. Máster en Atención Integral al Niño. Hos- Ciencias Médicas de Pinar del Río.
pital Universitario Calixto García. Hospital Docente
Dr. Francisco de Jesús Aguilar Martínez
Pediátrico Centro Habana.
Especialista de II Grado en Coloproctología. Profesor
Dr. Carlos Zenen Acanda Gálvez Auxiliar. Hospital Univeristario Clínico-Quirúrgico
Especialista de I Grado en Microbiologia. Asistente. Hermanos Ameijeiras.
Máster en Infectología y Enfermedades Tropicales. Dra. Gloria Astencio Rodríguez
Hospital Universitario Calixto García. Instituto de Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
Gastroenterología. sora Auxiliar. Máster en Bioética. Hospital Universi-
tario Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras.
Dr. Pedro Almirall Carbonell
Especialista de I Grado en Medicina Interna. Máster Dr. Alejandro Areu Regateiro
en Epidemiología. Centro Municipal de Higiene, Epi- Especialista de I Grado en Medicina Interna. Especialista
demiología y Microbiología. Hospital Universitario de II Grado en Medicina Intensiva y Emergencia. Pro-
Manuel Fajardo. fesor Auxiliar. Máster en Urgencias Médicas. Hospital
Univeristario Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras.
Dr. Jordi Alonso Soto
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Dr. Juan Francisco Bandera Tirado
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- Especialista de II Grado en Microbiología. Profesor
sor Auxiliar. Investigador Agregado. Centro de inves- Auxiliar. Investigador Agregado. Máster en Infectolo-
tigaciones Médico-Quirúrgicas. gía. Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí.
Dr. C. Javier Ernesto Barreras González Dra. C. Marlen Ivón Castellanos Fernández
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
en Cirugía General. Profesor Auxiliar. Investigador do en Gastroenterología. Profesora Titular. Investiga-
Auxiliar. Hospital Universitario Calixto García. Cen- dora Auxiliar. Hospital Universitario General Calixto
tro de Cirugía de Mínimo Acceso. García. Instituto de Gastroenterología.

Dra. Lisset Barroso Márquez Dr. Juan Carlos Cala Solozabal


Especialista de II Grado en Gastroenterología. Ins- Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
tructora. Investigadora Agregada. Centro de Investi- Especialista de I Grado en Medicina Interna. Asisten-
gaciones Médico-Quirúrgicas. te. Máster en Educación Médica. Máster en Urgen-
cias Médicas en Atención Primaria de Salud. Hospital
Dra. Natacha Jessika Berland de León Universitario General Calixto García.
Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de II Grado en Imaginología. Profesora Dr. Mauro Cuba de la Cruz
Auxiliar. Máster en Procedimientos Diagnósticos en Especialista de I Grado en Medicina General Inte-
Atención Primaria de Salud. Hospital Univeristario gral. Especialista de II Grado en Nefrología. Profesor
Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. Auxiliar. Máster en Urgencias Médicas. Hospital Lu-
cía Iñiguez, Holguín.
Dra. Ibis Beltrán Pérez
Dr. C. Roberto Cañete Villafranca
Especialista de I Grado en Coloproctología. Profesora
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
Auxiliar. Hospital Universitario Salvador Allende.
do en Microbiología. Profesor Titular. Investigador
Dr. C. Miguel Blanco Aspiazú Titular. Máster en Parasitología. Centro Provincial de
Higiene, Epidemiología y Microbiología, Matanzas.
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
en Medicna Interna. Profesor Titular. Investigador Ti- Dr. Raúl Chávez Vega
tular. Máster en Educación Médica. Hospital Univer- Especialista de II Grado en Medicina Interna. Profesor
sitario Militar Dr. Carlos J Finlay. Auxiliar. Máster en Longevidad Satisfactoria. Hospi-
tal Universitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez.
Dr. Julián Brown León
Especialista de I Grado en Medicina Interna. Asis- Dr. Jorge Miguel Correa Padilla
tente. Hospital Universitario Dr. Joaquín Albarrán Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Domínguez. Especialista de II Grado en Anestesiología. Profesor
Auxiliar. Máster en urgencias Médicas. Centro de In-
Dr. Luis Calzadilla Bertot vestigaciones Médico-Quirúrgicas.
Especialista I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de I Grado en Gastroenterología, Máster Dra. Lilia de la Torre Navarro
en Infectología. Hospital Universitario General Calix- Especialista de II Grado en Dermatología. Profesora
to García. Instituto de Gastroenterología. Auxiliar. Máster en Enfermedades Infecciosas. Hos-
pital Universitario General Calixto García.
Lic. Yulia Clark Feoktistova
Licenciada en Bioquímica. Investigadora Agregada. Dra. C. María de la Caridad Montalvo Villalba
Máster en Bioquímica. Centro Nacional de Genética. Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
do en Inmunología. Asistente. Investigadora Titular.
Dra. Dania Camejo Orozco Máster en Ciencias. Instituto de Medicina Tropical
Especialista de I Grado en Microbiología. Profesora Pedro Kourí.
Auxiliar. Hospital Universitario Enrique Cabrera.
Dra. Hilev de las Mercedes Larrondo Muguercia
Dr. Carlos Castañeda Guillot Especialista de I Grado en Medicina Interna. Espe-
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Pro- cialista de II Grado en Medicina Intensiva. Profeso-
fesor Auxiliar y Consultante. Investigador Auxiliar. ra Auxiliar. Máster en Infectología y Enfermedades
Hospital Universitario General Calixto García. Insti- Tropicales. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico
tuto de Gastroenterología. Hermanos Ameijeiras.
Dra. C. Licel de los Ángeles Rodríguez Lay Dra. Trini Fragoso Arbelo
Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra- Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
do en Microbiología. Profesora Titular. Investigadora sora Auxiliar y Consultante de Pediatría. Investigadora
Titular. Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí. Titular. Máster en Enfermedades Infecciosas. Hospi-
tal Universitario Pediátrico Pedro Borrás Astorga.
Dra. María del Carmen Dorvigny Scull
Especialista de I Grado en Medicina Interna. Asistente. Dr. Eduardo Frei Morera
Máster en Infectología. Instituto de Medicina Tropical Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Pedro Kourí.
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Hospi-
Dra. María del Pilar Escobar Capote tal Universitario Enrique Cabrera.
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Asisten-
te. Investigadora Auxiliar. Hospital Universitario Ge- Dr. C. Enrique Galbán García
neral Calixto García. Instituto de Gastroenterología. Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
en Epidemiología. Profesor Titular. Investigador Titu-
Dra. Angelina Díaz Bustelo lar. Académico Titular. Hospital Universitario General
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Especialista de I Grado en Coloproctología. Asistente.
Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Coman- Dra. Narmys García Casanova
dante Manuel Fajardo. Especialista I Grado en Gastroenterología. Instruc-
tora. Investigadora Agregada. Máster en Longevidad
Dra. Ingrid Doménech Cañete Satisfactoria. Hospital Universitario General Calixto
Especialista de II Grado en Microbiología. Profesora García. Instituto de Gastroenterología.
Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Instituto de Medici-
na Tropical Pedro Kourí. Dr. Jorge Luis García-Menocal Hernández
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Asis-
Dra. Janet Domínguez Cordovés
tente. Hospital Universitario General Calixto García.
Especialista de II Grado en Cirugía General. Profeso-
ra Auxiliar. Investigadora Agregada. Centro de Inves- Centro de Cirugía de Mínimo Acceso.
tigaciones Médico-Quirúrgicas.
Dra. Elsa García Bacallao
Dra. Zaily Dorta Guridi Especialista de II Grado en Gastroenterología. Pro-
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. fesora Auxiliar. Investigadora Agregada. Máster en
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Asisten- Educación Médica. Hospital Universitario General
te. Investigadora Agregada. Máster en Enfermedades Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Infecciosas. Hospital Universitario General Calixto
García. Instituto de Gastroenterología. Dra. Elsy Valentina García Jordá
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Instruc-
Dra. Gladys Escalante Collazo tora. Hospital Universitario General Calixto García.
Especilalista de I Grado en Microbiología. Asistente. Centro de Cirugía de Mínimo Acceso.
Hospital Universitario Miguel Enrique.
Dr. Wladimiro Francisco García Pérez
Dr. Ángel Arturo Escobedo Carbonell Especialista de I Grado en Pediatría. Especialista de II
Especialista de II Grado en Microbiología. Profesor
Grado en Gastroenterología. Profesor Auxiliar. Más-
Auxiliar. Máster en Epidemiología. Máster en Cien-
ter en Atención Integral al Niño. Hospital Universita-
cias de la Comunicación. Hospital Universitario Pe-
diátrico Pedro Borrás Astorga. rio Pediátrico Wiliam Soler.

Dra. Anayda Fernández Naranjo Dra. Martha María Gámez Escalona


Especialista de II Grado en Anatomía Humana. Profe- Especialista de II Grado en Anatomía Patológica. Pro-
sora Titular. Universidad de Ciencias Médicas de La fesora Auxiliar y Consultante. Máster en Enfermedades
Habana. Infecciosas. Universidad de Ciencias Médicas de Hol-
guín. Facultad de Ciencias Médicas Mariana Grajales.
Dra. Aniuska Gigato Díaz Dr. C. Julio César Hernández Perera
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Asis- Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
tente. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Co- do en Medicina Interna. Profesor Titular. Investigador
mandante Manuel Fajardo. Titular. Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas.
Dr. José Ángel González Valdés Dr. Héctor Ruben Hernández Garcés
Especialista de II Grado en Pediatría. Especialista de Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
II Grado en Administración de Salud. Profesor Titular
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
y Consultante. Máster en Atención Integral al Niño.
Hospital Docente Pediátrico Centro Habana. sor Auxiliar. Investigador Auxiliar. Máster en Enfer-
medades Infecciosas. Hospital Universitario General
Dr. C. Juan Rafael González Cansino† Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
en Gastroenterología. Profesor Titular y Consultante. Dra. Mayte Hernández Domínguez
Investigador Auxiliar. Centro de Investigaciones Mé- Especialista de I Grado en Gastroenterología. Instruc-
dico-Quirúrgicas. tora. Máster en Procedimientos Diagnósticos en la
Atención Primaria de Salud. Clínica del MININT.
Dra. Licet González Fabián
Especialista de II Grado en Anatomía Patológica. Pro- Dra. Norma Ivet Hondal Álvarez
fesora Auxiliar. Investigadora Agregada. Máster en Especialista de I Grado en Pediatría. Instructora. Más-
Ateroesclerosis. Hospital Universitario General Ca- ter en Atención Integral al Niño. Hospital Universita-
lixto García. Instituto de Gastroenterología.
rio Pediátrico Wiliam Soler.
Dr. Maximino Juan González Torres
Dra. C. Mirtha Infante Velázquez
Especialista de I Grado en Medicina General Inte-
gral. Especialista de I Grado en Gastroenterología. Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
Instructor. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico do en Gastroenterología. Profesora Auxiliar. Inves-
Hermanos Ameijeiras. tigadora Auxiliar. Hospital Universitario Militar Dr.
Luis Díaz Soto.
Dr. Pedro Pablo González Rojas
Especialista de II Grado en Imaginología. Profesor Dr. Narciso Argelio Jiménez Pérez
Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Especialista de I Grado en Medicina Interna. Especia-
Hermanos Ameijeiras. lista de II Grado en Medicina Intensiva y Emergen-
cias. Profesor Auxiliar. Máster en Infectología y En-
Dr. Jorge Alberto Grass Baldequin fermedades Tropicales. Instituto de Medicina Tropical
Especialista de I Grado en Cirugía General. Instructor.
Pedro Kourí.
Máster en Urgencias Médicas. Hospital Universitario
General Calixto García.
Dr. Rafael Latour Ramos
Dra. Olga Marina Hano García Especialista de II Grado en Medicina Interna. Asis-
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- tente. Máster en Ciencias. Hospital Universitario Dr.
sora Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Máster en Nutri- Joaquín Albarrán Domínguez.
ción de Salud Pública. Hospital Universitario General
Calixto García. Instituto de Gastroenterología. Dra. Deyanira la Rosa Hernández
Especialista de I Grado en Inmunología. Asistente. In-
Dr. Hanoi Hernández Rivero vestigadora Agregada. Hospital Universitario General
Especialista de I Grado en Cirugía General. Instructor. Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas.
Dr. Jean Le’Clerc Nicolás
Dr. Hermidio Hernández Mulet
Especialista de II Grado en Cirugía General. Profesor
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Profe-
sor Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgi- Auxiliar. Máster en Urgencias Médicas. Hospital Uni-
co Hermanos Ameijeiras. versitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez.
Dra. Anely Rosalia León Columbié Dra. Elizabeth Montes de Oca Mejías
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Ins- Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
tructora. Máster en Procederes Diagnósticos en Aten- Especialista de I Grado en Gastroenterología. Asis-
ción Primaria de Salud. Hospital Provincial Saturnino tente. Máster en Procedimientos Diagnósticos en la
Lora Torres, Santiago de Cuba. Atención Primaria de Salud. Hospital Universitario
General Calixto García. Centro de Cirugía de Mínimo
Lic. Adlín López Díaz Acceso.
Especialista en Física Médica-Nuclear. Instructora.
Investigadora Agregada. Hospital Universitario Clíni- Dra. Sheyla Moret Vara
co-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de I Grado en Cirugía General. Instruc-
Dr. Francisco Fidel Llorente Llano tora. Investigadora Agregada. Centro de Investigacio-
Especialista de II Grado en Coloproctología. Profesor
nes Médico-Quirúrgicas.
Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico
Comandante Manuel Fajardo. Dr. C. Agustín Meinardo Mulet Pérez
Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Gra-
Dr. Guillermo Llanes Díaz
Especialista de I Grado en Coloproctología. Máster en do en Gastroenterología. Especialista de II Grado en
Infectología. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgi- Medicina Interna. Profesor Titular. Máster en Enfer-
co Hermanos Ameijeiras. medades Infecciosas. Máster en Medicina Natural y
Tradicional. Hospital Universitario Vladimir Ilich Le-
Dr. Juan Antonio Más Páez nin, Holguín.
Especialista de II Grado de Gastroenterología. Pro-
fesor Auxiliar y Consultante. Hospital Universitario Dra. Daisy Naranjo Hernández
Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras. Especialista de II Grado en Fisiología Normal y Pato-
lógica. Investigadora Auxiliar. Universidad de Cien-
Dr. Rolando Martínez López cias Médicas de La Habana. Hospital Universitario
Especialista de II Grado de Gastroenterología. Profe- General Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
sor Auxiliar. Investigador. Máster en Enfermedades
Infecciosas. Hospital Universitario General Calixto Dr. Yoel Navarro Garvey
García. Centro de Cirugía de Mínimo Acceso. Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de I Grado en Coloproctología. Instruc-
Dra. Ludmila Martínez Leyva tor. Hospital Universitario Salvador Allende.
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Ins-
tructora. Hospital Universitario Militar Dr. Carlos J. Dr. Guillermo Noa Pedroso
Finlay. Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Asis-
Dra. Yadina Martínez Pérez
tente. Máster en Procedimientos Diagnósticos en la
Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Atención Primaria de Salud. Hospital Universitario
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Máster
en Enfermedades Infecciosas. Investigadora Agrega- Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras.
da. Hospital Universitario General Calixto García.
Dr. Amauri Lázaro Noda Albelo
Instituto de Gastroenterología.
Especialista de I Grado en Inmunología Clínica. Es-
Dra. Rosa Luisa Medina Aguilar pecialista de II Grado en Pediatría. Profesor Auxiliar.
Especialista en I Grado en Gastroenterología. Instruc- Máster en Infectología y Enfermedades Tropicales.
tora. Máster en Enfermedades Infecciosas. Hospital Máster en Atención Integral al Niño. Hospital Pediá-
Universitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez. trico Eliseo Noel Caamaño.

Dr. Juan Carlos Millán Marcelo Dr. Pablo Orlando Nodarse Pérez
Especialista de II Grado en Medicina Interna. Profe- Especialista de II Grado en Gastroenterología. Pro-
sor Auxiliar y Principal de la Maestría Infectología fesor Auxiliar y Consultante. Investigador Auxiliar.
y Medicina Tropical. Consultor OPS/ OMS TB y Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Hermanos
TB/ VIH. Instituto de Medicina Tropical Pedro Kourí. Ameijeiras.
Dra. Minerva Nogueira Sotolongo Dra. Zoe Robaina Jiménez
Especialista de II Grado en Histología. Profesora Ti- Especialista de II Grado en Genética Clínica. Asisten-
tular. Máster en Ciencias. Universidad Médica de La te. Centro Nacional de Genética.
Habana.
Dra. Adelaida Rodríguez de Miranda
Dra. Margarita Emilia Oduardo Franco Especialista de II Grado en Nutrición. Instructora.
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Ins- Investigadora Auxiliar. Máster en Nutrición en Salud
tructora. Máster en Procedimientos Diagnósticos en la Pública. Hospital Universitario General Calixto Gar-
Atención Primaria de Salud. Universidad de Ciencias cía. Instituto de Gastroenterología.
Médicas. Hospital Pediátrico Juan Manuel Márquez.
Dra. Martha Rodríguez Acuña
Dra. Marlen Pérez Lorenzo Especialista de II Grado en Medicina Interna. Profe-
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- sora Auxiliar. Hospital Universitario Dr. Joaquín Al-
sora Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Hospital Uni- barrán Domínguez.
versitario Militar Dr. Luis Díaz Soto.
Dr. Lester Rodríguez Paleo
Dr. Roberto Pérez Menéndez Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- Especialista de I Grado en Medicina Interna. Depar-
sor Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgi- tamento de Medicina Nuclear. Hospital Universitario
co Hermanos Ameijeiras. Clínico-Quirúrgico Hermanos Ameijeiras.
Dra. Rosquelina Pérez Llorente Dra. Maylin Rodríguez Pérez
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe- Especialista de I Grado en Microbiología. Instructora.
sora Auxiliar y Consultante. Máster en Enfermedades Máster en Parasitología. Hospital Universitario Mi-
Infecciosas. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgi- guel Enrique.
co 10 de Octubre.
Dr. C. Miguel Ángel Rodríguez Allende
Dr. Frank Pérez Triana Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. en Imaginología. Profesor Titular. Investigador Titu-
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Máster lar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico Herma-
en Enfermedades Infecciosas. Hospital Universitario nos Ameijeiras.
General Calixto García. Centro de Cirugía de Mínimo
Acceso. Dr. José Ángel Rosales Carrazana
Especialista de I Grado en Medicina Interna. Profesor
Dr. C. Rolando Pereiras Costa
Auxiliar. Máster en Urgencias Médicas. Hospital Uni-
Doctor en Ciencias Médica. Especialista de II Grado
versitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez.
en Imaginología. Profesor Titular. Investigador Titu-
lar. Académico Titular. Hospital Universitario Clíni- Dr. Alejandro Roque Valdés
co-Quirúrgico Comandante Manuel Fajardo. Especialista de I Grado en Medicina Interna. Más-
ter en Infectología. Centro de Investigaciones Médi-
Dr. Rafael Pinilla González
co-Quirúrgicas.
Especialista de II Grado en Cirugía. Profesor Auxiliar.
Máster en Ciencias. Hospital Universitario Dr. Joa-
Dra. Caridad Ruenes Domech
quín Albarrán Domínguez.
Especialista de I Grado en Medicina General Inte-
Dr. Hansell Quesada Carvajal gral. Especialista de I Grado de Gastroenterología.
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Pro- Profesora Auxiliar. Investigadora Agregada. Máster
fesor Auxiliar. Máster en Enfermedades Infecciosas. en Educación Médica. Hospital Universitario General
Hospital Universitario Salvador Allende. Calixto García. Instituto de Gastroenterología.

Dr. C. Luis Lázaro Rivera Reimon Dra. C. Marcia Samada Suárez


Doctor en Ciencias Médica. Especialista de II Grado Doctora en Ciencias Médicas. Especialista de II Grado
en Gastroenterología. Profesor Titular. Hospital Uni- en Gastroenterología. Profesora Titular. Investigadora
versitario Militar Dr. Carlos J. Finlay. Titular. Centro de Investigaciones Médico-Quirúrgicas.
Dr. Yoan Antonio Sánchez Rodríguez Dr. Rodolfo Valdés Landaburo
Especialista de I Grado en Medicina General Integral. Especialista de II Grado en Gastroenterología. Pro-
Especialista de I Grado de Gastroenterología. Instruc- fesor Auxiliar. Máster en Atención Integral al Niño.
tor. Investigador Agregado. Hospital Universitario Ge- Universidad de Ciencias Médicas de Villa Clara.
neral Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Dr. Héctor Vega Sánchez
Dr. Saúl Segundo Armenteros Terán Especialista de II Grado en Bioquímica Clínica. In-
Especialista de II Grado en Medicina Interna. Profe-
vestigador Auxiliar. Hospital Universitario General
sor Auxiliar. Máster en Educación Médica. Hospital
Calixto García. Instituto de Gastroenterología.
Universitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez.

Dr. César Emilio Silverio García Dra. Cira Juana Velasco Elizalde
Especialista de I Grado en Medicina General Inte- Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
gral. Especialista de I Grado en Gastroenterología. sora Auxiliar. Investigadora Auxiliar. Máster en Cien-
Instructor. Hospital Universitario Pediátrico William cias. Hospital Universitario Enrique Cabrera.
Soler.
Dr. Pedro Evelio Velbes Marquetti
Dra. Raquel Lázara Toledo Padilla Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
Especialista de II Grado en Gastroenterología Pediá- sor Auxiliar. Hospital Univeristario Clínico Quirúrgi-
trica. Asistente. Hospital Universitario Julio Trigo. co Hermanos Ameijeiras.
Dra. Ana Luisa Torres González Dr. Asbel Alfredo Vicente de la Cruz
Especialista de I Grado en Gastroenterología. Máster Especialista de II Grado en Cirugía General. Profesor
en Enfermedades Infecciosas. Investigadora Agrega- Auxiliar. Máster en Urgencias Médicas. Hospital Uni-
da. Hospital Universitario General Calixto García.
versitario Dr. Joaquín Albarrán Domínguez.
Instituto de Gastroenterología.
Dr. C. Eduardo Vilar Gómez
Dr. Boris Luis Torres Cuevas
Especialista de II Grado en Imaginología. Profesor Doctor en Ciencias Médicas. Especialista de I Gra-
Auxiliar. Hospital Universitario Clínico-Quirúrgico do en Medicina Interna. Especialista de II Gra-
Hermanos Ameijeiras. do en Gastroenterología. Asistente. Investigador
Auxiliar. Hospital Universitario General Calixto Gar-
Dra. María Elena Trujillo Toledo cía. Instituto de Gastroenterología.
Especialista de II Grado en Gastroenterología. Profe-
sora Auxiliar. Investigadora Asistente. Máster en Pro- Dr. Oscar Manuel Villa Jiménez
cedimientos Diagnósticos en la Atención Primaria de Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Salud. Hospital Universitario Pediátrico Juan Manuel Especialista de I Grado en Gastroenterología. Inves-
Márquez. tigador Agregado. Máster en Enfermedades Infeccio-
sas. Hospital Universitario General Calixto García.
Dr. C. José Carlos Ugarte Suárez
Instituto de Gastroenterología.
Doctor en Ciencias. Profesor Titular. Investigador Ti-
tular. Académico Titular. Centro de Investigaciones
Dr. Alí Abdel Yasells García
Médico-Quirúrgicas.
Especialista de I Grado en Medicina General Integral.
Dra. Dayana Ugarte Moreno Especialista de I Grado en Gastroenterología. Máster
Especialista de II Grado en Imaginología. Profesora en Atención Integral al Adulto Mayor. Máster en Infec-
Auxiliar. Centro de investigaciones Médico-Quirúrgicas. tología. Hospital Universitario General Calixto García.
Prólogo

Tenemos el placer de prologar la primera edición del libro Gastroenterología y


hepatología clínica por autores cubanos, el que contribuirá a la formación de la
nueva generación de especialistas en ese país y en todo el continente.

Cuando los estimados amigos Manuel Paniagua y Felipe Piñol me solicitaron


que escribiera este prólogo, me sentí verdaderamente muy honrado y acepté
gustoso. La idea de editar un libro sobre gastroenterología y hepatología clínica
en un formato “manual” por vez primera en Cuba, respondió a dos objetivos
fundamentales: dar respuesta a una necesidad docente mediante un proyecto
elegido por la Sociedad Cubana de Gastroenterología y proporcionar, además,
a todos los médicos residentes en la especialidad, una información actualizada
y eficiente, sobre las condiciones clínicas que con mayor frecuencia sitúan al
paciente en una situación delicada o amenazante para la vida.

Siguiendo el mismo patrón que caracteriza el programa cubano de formación en


gastroenterología, esta obra está estructurada en varios tomos, donde prestigio-
sos autores repasan los temas más importantes de la especialidad.

El libro proporciona información sobre otras condiciones ajenas al aparato di-


gestivo que pueden ser el origen de síntomas gastroenterológicos. Esta es la
razón por la que se incluyen capítulos dedicados a enfermedades sistémicas,
embarazo y problemas vasculares, entre otros de gran interés. A tenor del em-
pleo de las nuevas tecnologías diagnósticas y terapéuticas, se incluye, además,
un capítulo de anestesia y sedación.

El espíritu del texto permitirá que se convierta en un libro de consulta, con un


formato sencillo, de manejo fácil, donde se encuentren rápidamente los temas
de interés en un momento dado.

Todos los capítulos han sido redactados por autores con acreditada experien-
cia en el tratamiento de las diferentes condiciones tratadas. Esto ha permitido
ofrecer un equilibrio bien ponderado entre las pautas de diagnóstico clínico y
terapéutico, basadas en la mejor evidencia científica, y el juicio clínico que solo
la madurez y la experiencia proporcionan con los años.

No podemos dejar de mencionar que la publicación de este libro es el mejor


homenaje que sus discípulos compatriotas pueden hacer al profesor y maes-
tro de la Gastroenterología Americana, fundador de la especialidad en Cuba,
Raimundo Llanio Navarro.†
Por último, dos palabras sobre los autores: su esfuerzo es digno del mayor elo-
gio, hacer una obra como la que se publica en este momento es una tarea titánica
en cualquier país de nuestra América Latina, pero hacerlo en Cuba, sometida a
bloqueo externo y a limitaciones internas muy dolorosas, la convierten en un
acto de amor por sus colegas y por la sociedad en que viven.

Dr. Henry Cohen


Profesor de Gastroenterología
Secretario General de la Academia Nacional de Medicina
Past Presidente de la Organización Mundial de Gastroenterología
Maestro de la Gastroenterología Americana
Prefacio

La formación de gastroenterólogos en Cuba requiere de un texto básico que


facilite a los residentes la adquisición de conocimientos y la actualización de
los que ya poseen, lo que constituye la principal motivación para la edición de
Gastroenterología y hepatología clínicas, primer proyecto docente elegido por
la Sociedad Cubana de Gastroenterología.

De acuerdo con el programa de la especialidad, la obra fue estructurada en va-


rios tomos que se dedican a la gastroenterología clínica y a la hepatología clíni-
ca. Por razones de carácter editorial, cada tomo consta de varias partes con sus
respectivos capítulos, acompañados estos de la bibliografía consultada.

Se han incorporado temas muy novedosos (medios diagnósticos: ecoendosco-


pia, magnificación, cromoendoscopia, anestesia y sedación endoscópica, entre
otros) y se han reordenado otros (esófago de Barret, Helicobacter pylori y en-
fermedades gastroduodenales, hepatitis virales, cánceres digestivos, tratamiento
de las enfermedades biliares y pancreáticas, trasplante hepático, entre otros). Al
actualizar los contenidos, también se han uniformado los capítulos y se le ha
dado mayor relevancia al diagnóstico: cuadro clínico, exámenes complementa-
rios, terapéutica, pronóstico y alternativas futuras. De igual modo, siempre que
fue posible y según las evidencias científicas disponibles, se han incluido las
experiencias de los autores cubanos.

Se ha considerado de interés proporcionar información sobre otras condiciones


ajenas al aparato digestivo que pueden originar síntomas digestivos, elaborada
por autores de todo el país, con acreditada experiencia en el tratamiento de las
diferentes condiciones tratadas.

La mayoría de los autores son especialistas, profesores, investigadores, doctores


en ciencias médicas, másteres, y también participó un elenco representativo de
especialistas jóvenes, por su experiencia, prestigio profesional e implicación
con la Sociedad Cubana de Gastroenterología.

La obra es fruto de una exhaustiva revisión bibliográfica de la literatura nacional


e internacional, lo que permitió encontrar y ofrecer un equilibrio bien ponde-
rado entre las pautas de diagnóstico clínico y terapéutico basadas en la mejor
evidencia científica, y el juicio clínico que solo la madurez y la experiencia
proporcionan.
Se ha evadido de descripciones extensas y disertaciones innecesarias, buscando
la síntesis y los objetivos prácticos. El espíritu del texto es que sea un libro de
aprendizaje y a su vez de consulta, con un formato sencillo, de fácil manejo,
donde se encuentre rápidamente la información requerida. Al propio tiempo,
que resulte de interés para la actualización de internistas, cirujanos, médicos
generales integrales, entre otros.

Esta edición impresa estará disponible en versión electrónica en la página web


www.infomed.sld.cu/ / gastroenteología.sld.cu, a cargo de la Dra. C. Mirtha
Infante. Nuestro reconocimiento y gratitud por todo lo que ha ayudado con el
rigor y el entusiasmo que impone a su trabajo informático.

Agradecemos a la Editorial de Ciencias Médicas todo su apoyo para la pre-


sente edición, tanto impresa como en la versión electrónica, que ha permitido
alcanzar uno de los objetivos más importantes de la Sociedad Cubana de Gas-
troenterología y este colectivo de autores: dar continuidad a la obra emprendida
en la década de los 60 del siglo xx por quien indiscutiblemente fue el Padre de
la Gastroenterología Cubana: el Profesor de Mérito y Dr. C. Raimundo Llanio
Navarro.†

Dr. C. Manuel Eusebio Paniagua Estévez


Dr. C. Felipe Neri Piñol Jiménez
Contenido general

Parte I. Células, hormonas, neuropéptidos y sistema inmune del aparato digestivo

Parte II. Semiología en gastroenterología

Parte III. Métodos especiales de diagnóstico en gastroenterología

Parte IV. Nutrición en gastroenterología

Parte V. Enfermedades sistémicas en enfermedades digestivas

Parte VI. Sida y manifestaciones digestivas

Parte VII. Esófago

Parte VIII. Estómago y duodeno

Parte IX. Intestino delgado

Parte X. Enfermedad inflamatoria crónica del intestino

Parte XI. Intestino grueso

Parte XII. Parasitismo intestinal

Parte XIII. Hepatología clínica

Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Parte XIV. Páncreas


Contenido

Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares/ 1 Capítulo 179. Secreción biliar y circulación
enterohepática de los ácidos biliares/ 44
Capítulo 176. Anatomía, histología y fisiología Composición y formación de la bilis/ 44
de las vías biliares y la vesícula/ 1 Secreción biliar/ 45
Vías biliares/ 1 Metabolismo de los ácidos biliares/ 45
Vesícula biliar/ 7 Circulación enterohepática
Bibliografía/ 9 de los ácidos biliares/ 47
Función de la bilis/ 49
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas Trastorno de la circulación enterohepática/ 49
de la vesícula biliar y de las vías biliares Colestasis/ 52
extrahepáticas/ 10 Algoritmo diagnóstico de colestasis/ 57
Anomalías congénitas de la vesícula biliar/ 10 Bibliografía/ 59
Anomalías congénitas de vías biliares
extrahepáticas/ 11 Capítulo 180. Litiasis biliar/ 60
Afecciones del árbol biliar y de la vesícula biliar Epidemiología/ 60
en la edad pediátrica/ 12 Patogenia/ 62
Trastornos de las vías biliares extrahepáticas/ 15 Clasificación/ 64
Perforación espontánea del colédoco/ 20 Diagnóstico clínico/ 65
Síndromede taponamiento biliar Colecistitis aguda/ 67
(Bile Plug Syndrome)/ 21 Colecistitis crónica/ 67
Síndrome de la bilis espesa 2Colecistitis gangrenosa/ 68
(Inspissated Bile Syndrome)/ 21 Colecistitis enfisematosa/ 68
Colangitis esclerosante primaria Perforación vesicular/ 68
en lactantes y niños/ 21 Vesícula en porcelana/ 69
Quistes del colédoco/ 23 Adenocarcinoma vesicular/ 69
Dilatación congénita de los conductos biliares Colesterolosis/ 69
intrahepáticos (enfermedad y síndrome Colédocolitiasis o litiasis coledociana/ 69
de Caroli)/ 26 Síndrome de Mirizzi/ 74
Escasez de conductos biliares interlobulares Colangitis agudas/ 76
no sindrómica/ 27 Fístulas biliares por colelitiasis/ 77
Síndrome de escasez de conductos bilares Bibliografía/ 85
interlobulares (síndrome Alagille o displasia
arteriohepática)/ 28 Capítulo 181. Síndrome poscolecistectomía/ 87
Colelitiasis/ 31 Métodos quirúrgicos y exploratorios durante
Colecistitis calculosa/ 32 la excéresis de la vesícula biliar/ 87
Colecistitis acalculosa/ 33 Epidemiología/ 87
Hidropesía aguda de la vesícula biliar/ 33 Clasificación/ 87
Bibliografía/ 34 Etiología/ 88
Fisiopatología/ 88
Capítulo 178. Trastornos de la motilidad Diagnóstico clínico/ 91
de la vesícula y de vías biliares/ 36 Exámenes complementarios/ 92
Clasificación/ 36 Complicaciones/ 92
Bibliografía/ 42 Tratamiento/ 94
Prevención y pronóstico/ 94 Tumores de la vía biliar principal/ 132
Bibliografía/ 95 Colangiocarcinoma de las vías biliares/ 132
Bibliografía/ 138
Capítulo 182. Colecistitis alitiásica/ 97
Colecistitis alitiásica/ 97 Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores
Bibliografía/ 103 de la vesícula biliar y de las vías biliares.
Otras causas de obstrucción biliar/ 140
Capítulo 183. Colangitis esclerosante primaria/ 104 Pólipo de la vesícula biliar/ 140
Epidemiología/ 104 Adenomas y papilomas/ 140
Clasificación/ 104 Pólipos de colesterol/ 141
Etiología/ 105 Pólipos inflamatorios/ 142
Patogenia/ 105 Pólipos misceláneos/ 142
Diagnóstico clínico/ 106 Pólipo y cáncer vesicular/ 143
Exámenes complementarios/ 107 Adenomiomatosis/ 144
2Diagnóstico histológico/ 108 Colesterolosis/ 146
Diagnóstico diferencial/ 109 Tumores biliares benignos de las vías biliares/ 147
Complicaciones y enfermedades asociadas/ 109 Adenoma biliar (colangioadenoma,
Tratamiento/ 109 colangioma benigno)/ 148
Bibliografía/ 110 Papilomatosis biliar/ 148
Hamartoma biliar (complejo de Meyemburg)/ 148
Capítulo 184. Estenosis benignas de las vías
Tumor de células granulares/ 148
biliares/ 112
Otras causas de obstrucción biliar/ 148
Etiología/ 112
Clasificación/ 112 Hemorragia que drena por las vías biliares/ 149
Estenosis inflamatorias primarias/ 112 Pancreatitis crónica/ 149
Estenosis secundarias/ 113 Parasitosis/ 149
Estenosis biliares poscirugía Cirrosis biliar secundaria/ 149
a excepción del trasplante hepático/ 114 Bibliografía/ 150
Etiología/ 114
Capítulo 188. Parasitismos biliares/ 151
Estenosis biliares postrasplante hepático/ 115
Epidemiología/ 151
Clasificación/ 115
Clasificación/ 151
Colangiopatia asociada al sida/ 115
Clonorchiasis y Opistorchiasis/ 152
Estenosis biliares secundarias
a pancreatitis crónica/ 116 Fasciolasis/ 154
Odditis o esfinterítis esclerorretráctil/ 116 Ascaris lumbricoide/ 156
Tratamiento/ 117 Estrongiloidosis/ 157
Bibliografía/ 120 Criptosporidiosis/ 158
Bibliografía/ 159
Capítulo 185. Colangitis/ 121
Clasificación/ 121 Parte XV. Páncreas/ 161
Colangitis agudas/ 121
Capítulo 189. Páncreas/ 161
Colangitis recurrentes/ 124
Embriología/ 161
Bibliografía/ 125
Factores de crecimiento y marcadores/ 162
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares Anatomía/ 163
extrahepáticas/ 126 Estructuras ductales/ 165
Clasificación/ 126 Circulación/ 167
Tumor de la vesícula biliar/ 127 Drenaje linfático/ 167
Metástasis a la vesícula/ 128 Inervación/ 168
Carcinoma ampular/ 128 Histología/ 168
Patogenia/ 129 Bibliografía/ 171
Capítulo 190. Métodos exploratorios Diagnóstico clínico/ 228
de la función pancreática/ 172 Hallazgos al examen físico/ 230
Fisiología y secreción pancreática/ 172 Exámenes complementarios/ 231
Anatomía funcional/ 172 Complicaciones/ 234
Composición de las secreciones exocrinas/ 173 Pronóstico/ 237
Funciones de las principales enzimas digestivas/ 175 Tratamiento/ 237
Síntesis de la enzima digestiva y el transporte/ 176 Pancreatitis autoinmune/ 244
Regulación de síntesis de proteínas/ 177 Pancreatitis esclerosante linfoplasmocitaria/ 245
Regulación celular de la secreción enzimática/ 177 Pancreatitis tropical/ 249
Fisiología del páncreas/ 178 Bibliografía/ 249
Bibliografía/ 184
Capítulo 194. Insuficiencia pancreática exocrina/ 251
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas Clasificación/ 251
del páncreas en la infancia/ 185 Etiología/ 251
Agenesia pancreática/ 185 Fisiopatología/ 251
Hipoplasia pancreática/ 186 Diagnósticoclínico/ 252
Páncreas divisum/ 186 Exámenes complementarios/ 253
Páncreas aberrante o heterotópico/ 187 Diagnóstico diferencial/ 253
Quistes congénitos/ 187 Complicaciones/ 253
Anomalías anatómicas de la unión Tratamiento/ 253
pancreático biliar/ 188 Bibliografía/ 254
Síndrome de Shwachman-Diamond/ 188
Síndrome de Johanson-Blizzard/ 190 Capítulo 195. Tumores de páncreas/ 255
Síndrome de Jeune/ 190 Lesiones precursoras del cáncer pancreático/ 255
Síndrome médula-páncreas de Pearson/ 190 Etiología/ 256
Síndrome de Iverson/ 191 Diagnóstico clínico/ 257
Pancreatitis en el niño/ 191 Exploración física/ 258
Pancreatitis hereditaria/ 194 Exámenes complementarios/ 258
Pancreatitis familiar/ 194 Bibliografía/ 274
Pancreatitis tropical/ 194
Defectos enzimáticos aislados del páncreas/ 195 Capítulo 196. Tumores quísticos del páncreas/ 276
Seudoquiste pancreático/ 196 Epidemiología/ 276
Bibliografía/ 196 Clasificación/ 276
Etiología/ 277
Capítulo 192. Pancreatitis aguda/ 197 Exámenes complementarios/ 277
Etiología/ 197 Diagnóstico clínico/ 279
Clasificación/ 200 Tratamiento quirúrgico de las neoplasias
Fisiopatología/ 201 quísticas pancreáticas/ 283
Diagnóstico clínico/ 203 Bibliografía/ 284
Exámenes complementarios/ 204
Predicción de pancreatitis aguda severa/ 206 Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos
Complicaciones/ 209 del páncreas/ 286
Tratamiento/ 210 Epidemiología/ 286
Seguimiento/ 213 Etiopatogenia/ 287
Bibliografía/ 213 Genética/ 287
Clasificación/ 288
Capítulo193. Pancreatitis crónica/ 216 Insulinoma/ 288
Etiología/ 216 Glucagonoma/ 290
Clasificación/ 216 Somatostatinoma/ 292
Fisiopatología/ 217 Vipoma/ 294
Anatomía patológica/ 226 Grfoma/ 296
Estadificación/ 300 Patogenia/ 309
Evaluación pronóstica/ 300 Diagnóstico clínico/ 310
Tratamiento/ 302 Exámenes complementarios/ 313
Bibliografía/ 306 Diagnóstico diferencial/ 314
Tratamiento/ 314
Capítulo 198. Fibrosis quística/ 309 Bibliografía/ 315
Clasificación/ 309
Etiología/ 309
Vesícula biliar y vías biliares Parte
XIV
Capítulo 176
Anatomía, histología y fisiología
de las vías biliares y la vesícula
Dra. Narmys García Casanova

Vías biliares los conductos biliares intrahepáticos mayores, están


implicados en la secreción ductal de bilis regulado
Anatomía por la secretina (Fig. 176.1).Correspondientemente, el
Las vías biliares se inician en forma de diminutos receptor de secretina y de ácidos ribonucleicos mensa-
canalículos biliares formados por los hepatocitos ad- jeros (ARNm) intercambiador de cloruro-bicarbonato
yacentes. Estas estructuras revestidas de microvellosi- se han detectado en las grandes unidades de conductos
dades coalescen progresivamente formando conducti- biliares intrahepáticos.
llos, conductos biliares interlobulillares y conductos
hepáticos mayores. Por fuera de la porta hepática, el
conducto hepático principal se une al conducto cístico
que procede de la vesícula biliar para formar el colé-
doco, el que drena en el duodeno.
El hígado humano adulto tiene más de 2 km de
conductos y conductillos biliares. Imágenes tridimen-
sionales asistidas por computadoras, han estimado que
el volumen de todo el sistema de conductos del hígado
humano es aproximadamente de una media de 20,4 cm3.
En estos estudios la superficie interna media se calcula
sea de 398 cm2 ya que se magnifica aproximadamente
5,5 veces, por la presencia de microvellosidadesy
cilios en la superficie apical de los colangiocitos que
tienen una función importante en la regulación de sus
funciones. Estas estructuras están lejos de ser canales
inertes, son capaces de modificar el flujo biliar y la
composición de manera significativa en respuesta a las
hormonas tales como la secretina.Una característica
general de estos conductillos biliares es su intimidad
anatómica con la sangre portal y los vasos linfáticos,
que potencialmente permiten el intercambio selectivo
de materiales entre sus compartimentos. No se han
observado diferencias ultraestructurales importantes
existentes entre los colangiocitos que recubren los
conductos biliares pequeños y los grandes, pero las
propiedades funcionales son heterogéneas, por ejemplo, Fig. 176.1. Anatomía del sistema biliar intrahepático.
2 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

La secreción de bilis comienza a nivel delos ca- La bilis fluye de las células lobulares centrales hacia
nalículos biliares, la rama más pequeña del árbol las tríadas portales (de la zona 3 a la zona 1 del acino
biliar. Sus límites están formados por una membrana hepático). Los conductillos biliares terminales se cree
especializada en los polos adyacentes apicales de las que proliferan como consecuencia de la obstrucción
células del hígado. Los canalículos forman una malla crónica del conducto biliar extrahepático.
poligonal de canales entre los hepatocitos con muchas Los conductos biliares interlobulares formar una red
interconexiones anastomóticas (Fig. 176.2). ricamente anastomosada que rodea estrechamente las
Los conductos transportan bilis del hígado al duo- ramas de la vena portal. Estos conductos biliaresson
deno donde hay una presión (100 mm H2O a 150 mm inicialmente de 30 µma 40 µm de diámetro y están
H2O), inferior a la presión secretora del hígado. revestidos por una capa de epitelio cuboidal o columnar
La presión y el volumen de bilis dentro del sistema que muestra una arquitectura microvellosa en su super-
biliar están controlados por tres factores: ficie luminal. Las células tienen un prominente aparato
– Velocidad del flujo de bilis del hígado a las vías de Golgi y numerosas vesículas, microfilamentos,
biliares. microtúbulos, filamentos intermedios que participan
– Grado de funcionamiento vesicular. en el intercambio de sustancias entre el citoplasma,
– Actividad del esfínter de Oddi. bilis y el plasma a través de los procesos de exocitosis
y endocitosis (Fig. 176.3).
La bilis atraviesa los canales terminales pequeños Estos conductos aumentan de calibre y poseen fibras
(canales de Hering), que tienen una membrana basal y musculares lisas dentro de sus paredes a medida que
están alineados en parte por los hepatocitos y en parte se acercan al hilio hepático. El componente muscular
por los colangiocitos. Los canales de Hering forma- proporciona la base morfológica para el estrechamiento
nun conducto a través del que la bilis puede atravesar de los conductos a este nivel, como puede observarse
la placa limitante de los hepatocitos para entrar en el en la colangiografía. Además, como los conductos se
conducto perilobulilareso intralobulillares mayores. vuelven progresivamente más grandes, el epitelio se
Estos midenmenos de 15 µma 20 µmde diámetro con vuelve más grueso, crece la capa circundante de tejido
lumen revestida por células epiteliales cuboidales. En conectivo que contiene muchas fibras elásticas. Estos
el nivel más proximal, una o más células ductulares conductos se anastomosan posteriormente para formar
con forma fusiforme pueden compartir un lumen cana- los conducto intrahepáticos hiliares, que miden de 1
licular con un hepatocito, gradualmente, los conductos mm a 1,5 mm de diámetro y dan lugar a los conductos
ductulares se alinean por dos a cuatro células epiteliales hepáticos principales (conducto hepático derecho e
cuboidales a medida que se aproximan al canal portal. izquierdo).

Fig. 176.2. Secreción de la bilis.


Capítulo 176. Anatomía, histología y fisiología de las vías biliaresy la vesícula 3

Fig. 176.3. Aparato secretor de la bilis. Diagrama de la ultraestructura del canalículo biliar (C), citoesqueleto y orgánelos
(N) núcleos.

Losconductos hepáticos derecho e izquierdo, cada Cuando los conductos hepáticos derecho e izquierdo
uno mide alrededor de 0,5 cm a 2,5 cm de largo, se unen dejan la porta hepática, se dispone dentro de las dos
para formar el conducto hepático común. La confluencia capas serosas del ligamento hepatoduodenal. Esta fun-
de los conductos hepáticos derecho e izquierdo están da de tejido fibroso une los conductos hepáticos a los
fuera del hígado en aproximadamente 95 % de los ca- vasos sanguíneos adyacentes. En el adulto, el conducto
sos;poco frecuentemente, los conductos emergen del hepático común mide 3 cm de longitud.
interior del hígado o los conductos hepáticos derecho El conducto cístico se une con el hepático común,
e izquierdo no se unen hasta que el conducto cístico generalmente en su lado derecho, para formar el con-
se una al conducto hepático derecho. Los conductos ducto colédoco o conducto biliar común.
biliares intrahepáticos drenan en los conductos biliares La longitud y el ángulo de unión del conducto
principales derecho e izquierdo que convergen para cístico con el conducto hepático común son variables
formar al conducto hepático común, y este se sitúa por (Fig. 176.5). El conducto cístico entra en el conducto
delante de las ramas derecha e izquierda de la vena hepático común directamente en 70 % de los pacientes,
porta y a la derecha de la arteria hepática (Fig. 176.4). como alternativa, el conducto cístico puede situarse

Fig. 176.4. Los conductos biliares intrahepáticos drenan en los conductos biliares principales derecho e izquierdo que con-
vergen para formar al hepático común, y se sitúan por delante de las ramas derecha e izquierda de la vena porta y a la derecha
de la arteria hepática.
4 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 176.5. Variantes del cístico.

anterior o posterior a la vía biliar y en espiral alrededor La porción proximal del hepático común está fijo al
de este antes de unirse al conducto biliar en su lado hígado, mientras que la porción terminal del colédoco
medial. El conducto cístico puede también evolucionar lo está al páncreas.
paralelo con el conducto hepático común durante 5 cm
a 6 cm y entrar en este después de ubicarse posterior a
la primera porción del duodeno (Fig. 176.6).El cístico
se une al hepático común a una altura variable para
formar el colédoco, que evoluciona por detrás de la
primera porción del duodeno (Fig. 176.7).
En los seres humanos, los grandes conductos intra-
hepáticos del hilio (1 mm a 1,5mm de diámetro) tienen
muchas ramas laterales irregulares y bolsas (150 µma
270 µm de diámetro) que están orientados en un plano
y se corresponden anatómicamente a la fisura transver-
sal. Igualmente pueden observarse pequeñas bolsas en
las ramas laterales secundarias. Muchas de estas ramas
secundarias terminan como bolsas ciegas, pero otras,
principalmente en el hilio, se comunican entre sí. En la
bifurcación, las ramas laterales secundarias de varias
vías biliares principales se conectan para formar un
plexo. La importancia funcional de estas estructuras no
se conoce. Las bolsas ciegas puede servir para almacenar Fig. 176.6. La fecha indicala ubicación del conducto císti-
o modificar la bilis, mientras que el plexo biliar propor- coque evoluciona paralelo con el conducto hepático común
ciona anastomosis, lo que puede permitir el intercambio durante 5 cm a 6 cm y entrar en este después de ubicarse
de material entre los grandes conductos biliares. posterior a la primera porción del duodeno.
Capítulo 176. Anatomía, histología y fisiología de las vías biliaresy la vesícula 5

Fig. 176.7. Unión del conducto cístico con el hepático común y forman el conducto colédoco.

El colédocomide alrededor de 7 cm de longitud, el llenado de la vesícula. Se ha comprobado que los


discurre entre las capas del epiplón menor y se sitúa agentes coleréticos como la grasa hacen que el colédoco
por delante de la vena porta y a la derecha de la arteria mantenga su calibre o lo disminuya ligeramente, se
hepática. Su diámetro es de unos 0,5 cma 1,5 cm. debe realizarla medición entre los 45 miny 60minde la
En su posición terminal (intrapancreática), el co- ingestión de una comida rica en grasa.
lédoco tiene un curso posterior y ligeramente lateral Hay una variación considerable en esta estructura
para terminar junto con el conducto pancreático en la (esfínter de Oddi), pero normalmente se compone de
porción posterolateral de la cabeza del páncreas, a nivel varias partes:
del ámpula de Váter. Variantes normales del colédoco – Esfínter del colédoco: compuesto por fibras mus-
distal y conducto pancreático (Fig. 176.8) culares circulares que rodean la porción intramural
El colédoco pasa retroperitonealmente detrás de la del colédoco, inmediatamente antes de su unión con
primera porción del duodeno en una muesca en la parte el conducto pancreático. El esfínter del colédoco
posterior de la cabeza del páncreas y entra en la segunda estrecha el lumen de la vía biliar y por lo tanto evita
parte del duodeno. El conducto pasa oblicuamente a el flujo de bilis.
través de la cara posterior medial de la pared duodenal y – Esfínter pancreático: presente en aproximadamente
se une al conducto pancreático principal para formar la un tercio de las personas y rodea la porción intra-
ampolla de Váter. La protuberancia mucosa provocada duodenal del conducto pancreático antes de su unión
por la ampolla forma una eminencia, la papila duodenal. con la ampolla.
En aproximadamente10 % a 15 % de los pacientes, – Fascículos longitudinales: compuesto por haces
el conducto colédoco y pancreático desemboca por musculares longitudinales que se extienden a inter-
separado en el duodeno. El colédoco se estrecha hasta valos entre los conductos biliares y pancreáticos. La
un diámetro de 0,6 cm o menos antes de su unión con contracción de los fascículos longitudinales acorta
el conducto pancreático. A medida que pasan por la la longitud de la vía biliar y por lo tanto promueve
pared duodenal los conductos colédoco y el pancreá- el flujo de bilis al duodeno.
tico son revestidos por un engrosamiento de las capas – Esfínter de la ampolla: compuesto por fibras mus-
longitudinales y circulares de músculo liso del esfínter culares longitudinales que rodean la capa poco
de Oddi (Fig. 176.9). densa de fibras circulares alrededor de la ampolla
La contracción del esfínter de Oddi aumenta la pre- de Váter. La contracción del esfínter de la ampolla
sión entre 120 mm H2O y 160 mm H2O, lo que permite acorta esta y acerca sus pliegues para prevenir el
6 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 176.8. Variantes normales del colédoco distal y conducto pancreático.

Fig. 176.9. Representación esquemática de la unión de conducto colédoco-pancreático. Ampolla de Váter y esfínter de Oddi
(ampolla o hepato-pancreática).
Capítulo 176. Anatomía, histología y fisiología de las vías biliaresy la vesícula 7

reflujo del contenido intestinal hacia los conductos duodenales irrigan al conducto colédoco. La porción
biliares y pancreáticos. Sin embargo, cuando ambos supraduodenal del conducto es irrigada por los vasos
conductos terminan en la ampolla, la contracción del que corren a lo largo de su pared inferior desde la arteria
esfínter puede causar reflujo de bilis en el conducto retroduodenal y en la parte superior de la arteria hepáti-
pancreático. ca derecha. Cualquier lesión de estos vasos sanguíneos
puede provocar estenosis del conducto biliar.
Histología
El examen histológico de la sección sagital de la pla- Inervación
ca hiliar revela abundante tejido conectivo, incluyendo Las arterias y venas intrahepáticas, los conductos
fibras nerviosas, vasos linfáticos, pequeños capilares biliares y los hepatocitos están inervados por nervios
y pequeños conductos biliares. Los conductos biliares adrenérgicos y colinérgicos. En el sistema nervioso
en esta placa corresponden a los conductos biliares autónomo, hay un número de péptidos reguladores
extrahepáticos y sus longitudes son variables para cada tales como el neuropéptido tirosina (NPY), el péptido
segmento. relacionado con el gen de calcitonina, la somatostatina,
Tanto el intestino como el conducto cístico, los el polipéptido intestinal vasoactivo (VIP), la encefalina
conductos hepático común y biliares poseen mucosa, y la bombesina. Los nervios NPY positivas presentes
submucosa y capa muscular. Estos están revestidos en los conductos biliares extrahepáticos pueden servir
por una sola capa de epitelio cilíndrico. Las glándulas para regular el flujo de bilis por mecanismos autocrinos
tubulares secretoras de moco se encuentran a intervalos o paracrinos.
regulares en la submucosa, con aberturas a la superficie
de la mucosa. Linfáticos
La pared de las vías biliares extrahepáticas está for-
mada por una capa de tejido conectivo con una mezcla Los vasos linfáticos del conducto biliar de la porción
ocasional de fibras de músculo liso. El componente del proximal, cístico y hepáticos drenan en los ganglios del
músculo liso es visible solo en el cuello de la vesícula hilio del hígado. El drenaje de los linfáticos de la parte
biliar y en el extremo inferior del colédoco. No hay inferior del conducto biliar lo hace en los ganglios cerca
fibras musculares en los conductos biliares, por lo de la cabeza del páncreas.
que estos se expanden con el aumento de la presión
intraductal. Se calcula que hay un ciclo de aproxima- Vesícula biliar
damente 10 contracciones y relajaciones por minuto
del esfínter distal, resultando una salida episódica de Anatomía
bilis en el duodeno. La vesícula biliar es un saco alargado de alma-
cenamiento que permite que los ácidos biliares sean
Irrigación vertidos de manera controlada hacia el duodeno en
La irrigación arterial de los conductos biliares alta concentración, para la solubilización de los lípidos
deriva principalmente de la arteria hepática derecha. provenientes de la dieta. Se ubica en una depresión
Un extraordinario rico plexo de capilares rodea los (fosa) localizada en la cara inferior del lóbulo derecho
conductos biliares a medida que pasan a través de los del hígado.
espacios porta. La sangre que fluye a través de este Esta estructura tiene forma de pera, mide 3 cm de
plexo peribiliar desemboca en las sinusoides hepáticas ancho y 7 cm de largo en el adulto y tiene una capacidad
a través de las ramas interlobulares de la vena portal. El de 30 mL a 50 mL.
plexo peribiliar puede modificar las secreciones biliares La vesícula biliar posee numerosos pliegues promi-
mediante el intercambio bidireccional de proteínas, nentes que aumentan su superficie de absorción, está
iones inorgánicos y los ácidos biliares entre la sangre cubierta en su parte anterior por una adventicia que se
y la bilis. Debido a que la sangre fluye en la dirección fusiona con la cápsula del hígado y en su parte posterior
opuesta a la del flujo de bilis (desde los mayores hacia y apical por el peritoneo visceral.
los pequeños conductos) el plexo peribiliar presenta un Las partes de la vesícula biliar son (Fig. 176.10):
flujo en contracorriente de sustancias biliares reabsor- – Fondo.
bidas de los hepatocitos. – Cuerpo.
Una abundante red anastomóticas de vasos san- – Infundíbulo vesicular o porción de Hartmann.
guíneos de las ramas de las arterias hepática y gastro- – Cuello.
8 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 176.10. Partes de la vesícula.

La parte anterior del fondo se encuentra a nivel del choff son invaginaciones de la superficie del epitelio
borde lateral derecho del músculo recto abdominal y el que pueden extenderse a través de la capa muscular.
noveno cartílago costal. La región posterior del fondo Estas estructuras pueden ser una fuente de inflamación,
y el cuerpo se encuentran cerca del colon transverso y muy probablemente como resultado de la proliferación
del duodeno, respectivamente. Así, en la perforación de bacteriana y el estasis dentro de las invaginaciones. Los
la vesícula biliar, los cálculos biliares pueden penetrar conductos de Luschka se pueden observar a lo largo
fácilmente en estas estructuras. de la superficie hepática de la vesícula biliar y abrir
El infundíbulo es un área estrecha entre el cuerpo y directamente en los conductos biliares intrahepáticos
el cuello. La bolsa de Hartmann es un abombamiento en lugar de en la cavidad de la vesícula biliar. Estas
de la superficie inferior del infundíbulo que se encuen- estructuras se cree que representan una anomalía del
tra cerca del cuello de la vesícula biliar. Los cálculos desarrollo, y cuando están presentes en el lecho de la
biliares pueden impactarse en la bolsa de Hartmann, vesícula biliar puede ser una fuente de una fuga biliar
obstruye el conducto cístico y provocan una colecistitis. después de la colecistectomía. La vesícula biliar está
La inflamación considerable de la bolsa de Hartmann conectada en su cuello con el conducto cístico, que
puede conducir a la obstrucción del conducto hepático desemboca en el colédoco. El conducto cístico tiene
común adyacente (síndrome de Mirizzi). aproximadamente 4 cm de largo y mantiene la conti-
nuidad estructural con epitelio cilíndrico de superficie,
Histología la lámina propia, la muscular y la serosa de la vesícula
La vesícula biliar está revestida por una mucosa biliar. La membrana mucosa del cuello de la vesícula
con múltiples crestas y pliegues y se compone de una biliar forma la válvula espiral de Heister, que regula el
capa de células epiteliales columnares. La pared de la flujo de entrada y salida de la vesícula biliar.
vesícula biliar está formada por una mucosa, lámina
propia, túnica muscular y serosa. La túnica muscular
Irrigación
es gruesa e investida de una matriz entrelazada de La vesícula biliar es irrigada por la arteria cística,
fibras musculares longitudinales y espirales lisas. Las que generalmente surge de la arteria hepática derecha.
glándulas tubuloalveolares se encuentran en la región La arteria se divide en dos ramas cerca del cuello de
del cuello de la vesícula biliar y están involucrados en la vesícula biliar: una rama superficial que irriga la
la producción de moco. Los senos de Rokitansky-As- superficie serosa y una rama profunda que lo hace a las
Capítulo 176. Anatomía, histología y fisiología de las vías biliaresy la vesícula 9

capas interiores de la pared vesicular. Las variaciones Bibliografía


en el origen y el curso de la arteria cística son comunes.
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rogastroenterol Motil, 17(Suppl. 1), 31-40.
Los linfáticos submucosos y subserosos desembocan en
un ganglio linfático cerca del cuello de la vesícula biliar.
Capítulo 177
Anomalías congénitas y adquiridas
de la vesícula biliar y de las vías
biliares extrahepáticas
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Anomalías congénitas Hipoplasia de la vesícula biliar


de la vesícula biliar La hipoplasia de la vesícula biliar se ha descrito, en
particular en pacientes con fibrosis quística.
Se han descrito una serie de anomalías estructurales
de la vesícula biliar. La mayoría de estos defectos son Tejidos heterotópico
de poca importancia clínica, pero de vez en cuando la
vesícula biliar anormal puede ser un factor predispo- El tejido heterotópico que puede aparecer en la
nente para la estasis biliar, inflamación y formación de pared de la vesícula biliar incluye el de hígado, mu-
cálculos biliares. cosa gástrica e intestinal, páncreas, glándula adrenal
La mayoría de estas son raras y con escasa repercu- y folículos tiroideos. El tejido hepático heterotópico
sión clínica, pero es necesario conocerlas para evitar es el más frecuente y generalmente se localiza en la
confusiones con las técnicas de imagen. serosa. En la mayoría de los casos la mucosa gástrica
heterotópica aparece en el cuello o adyacente al con-
Tipos de anomalías congénitas ducto cístico como un nódulo intramural bien definido,
de la vesícula biliar menor que 2,5 cm.
Las anomalías congénitas de la vesícula biliar Duplicación de la vesícula biliar
incluyen agenesia, hipoplasia, tejido heterotópico,
La vesícula biliar doble es otra malformación rara,
duplicación, triplicación, bilobulada, divertículos, mul-
que ocurre en aproximadamente de uno a cinco por
tiseptación, malposición y deformidad (gorrofrigio).
cada 10 000 personas en la población general. Las dos
Agenesiade la vesícula biliar vesículas biliares pueden compartir un único conducto
cístico, formando un canal con forma de Y o cada uno
Es la ausencia congénita de la vesícula. Puede ser
puede tener un conducto cístico distinto que entra en
una anomalía aislada o estar asociada a otras malfor-
maciones congénitas. el conducto colédoco por separado.
La anomalía tiene una frecuencia en autopsias de Triplicación de la vesícula biliar
0,04 % a 0,13 %.
La agenesia de la vesícula biliar generalmente se La triplicación de la vesícula biliar es otra anomalía
asocia con atresia biliar y, en ocasiones, con atresia congénitapoco frecuente. Muchas de estas vesículas
duodenal. La colelitiasis es frecuente. se descubren por presentar litiasis biliar, barro biliar,
La ausencia de la vesícula biliar refleja la falta de colecistitis o neoplasia.
desarrollo de la yema de la vesícula biliar o el fracaso
Vesícula bilobulada y los divertículos
del proceso normal de vacuolización. La vacuolización
de la vesícula biliar
incompleta del cordón sólido endodérmico durante el
desarrollo puede resultar enestenosis congénitas de La vesícula bilobulada y los divertículos de la vesí-
la vesícula biliar (atresia) o del conducto cístico. La cula biliar son otras anomalías raras. Los divertículos y
atresia biliar se asocia comúnmente con una vesícula tabiques de la vesícula biliar pueden promover la estasis
biliar ausente o atrésica. biliar y formación de cálculos biliares (Fig. 177.1).
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 11

cubierta completamente con el peritoneo y suspendida


desde la cara inferior del hígado por el mesenterio a la
vesícula biliar o conducto cístico; la vesícula biliar es
anormalmente móvil y propensa a la torsión. Raramen-
te, las vesículas biliares se han encontrado en la pared
abdominal, ligamento falciforme y retroperitoneal.
Deformidad de la vesícula biliar
Se han descrito varias formas de vesículas “plega-
das”. En una variante, el fondo parece estar doblado,
dando la apariencia de un “gorro frigio”. La vesícula
biliar normalmente se encuentra en una posición retro-
serosa y la anomalía se cree que resulta del plegamiento
aberrante de la vesícula biliar en la fosa embrionaria.
El plegado aberrante de la fosa embrionaria durante las
fases de desarrollo tempranas puede causar torsión entre
Fig. 177.1. Imagen ultrasonográfica de una vesícula biliar el cuerpo y el infundibulum de la vesícula biliar. La
multitabicada (flechas amarillas indican los tabiques). deformidad en “gorro frigio” representa la inversión del
fondo en el cuerpo del órgano y puede adherirse a este.
Multiseptación de la vesícula biliar En la punta del fondo invertido aparece con frecuencia
Una vesícula biliar puede ser dividida por tabiques un área localizada de adenomiomatosis.
longitudinales en múltiples cámaras, probablemente se- Las vesículas biliares torcidas probablemente no
cundaria a vacuolización incompleta de la yema sólida presentan síntomas clínicos, pero pueden ser una fuente
de la vesícula biliar durante la morfogénesis. de confusión en la interpretación de estudios de imagen.
La multiseptación puede ser congénita o adquirida. La
forma adquirida, más frecuente, presenta un tabique cons- Anomalías congénitas de vías
tituido por tejido fibroso o hiperplasia adenomiomatosa. biliares extrahepáticas
La adenomiomatosis es un proceso no inflamatorio
de la pared vesicular caracterizado por hiperplasia y Conductos biliares accesorios
engrosamiento de la mucosa y la capa muscular, y por Los conductos biliares accesorios son conductos
la presencia de los senos de Rokitansky-Aschoff, en aberrantes que drenan los segmentos individuales del
forma de divertículos. La lesión puede ser focal, por lo hígado, estos pueden drenar directamente en la vesícula
general localizada al fondo, segmentaria en forma de en- biliar, en el conducto cístico, en los conductos hepáticos
grosamiento anular en el cuerpo de la vesícula, o difusa. derecho e izquierdo o en el colédoco. En raros casos,
Malposición de la vesícula biliar el conducto hepático derecho puede desembocar en la
vesícula biliar o en el conducto cístico. Estas anomalías
En raras ocasiones la vesícula biliar se encuentra deben ser reconocidas en la colangiografía para evitarla
debajo del lóbulo izquierdo del hígado, a la izquierda sección accidental o ligadura de los conductos biliares
del ligamento falciforme. Este defecto probablemente durante la cirugía.
es el resultado de la migración de la yema embrionaria
a partir del divertículo hepático a la izquierda en vez de Duplicación del colédoco
a la derecha. Algunos investigadores han propuesto que
la segunda vesícula biliar puede desarrollarse de forma La duplicación completa del colédoco ocurre rara-
mente. En la mayoría de los casos, los lóbulos derecho
independiente desde el conducto hepático izquierdo
e izquierdo drenan en los dos colédocos por separados
con regresión de la estructura normal en la derecha.
que se abren en el duodeno.
En otros casos, la yema caudal que avanza más lejos
que la yema craneal puede llegar a ser enterrada dentro
Variación en el drenaje o duplicación
de la estructura craneal, creando una vesícula biliar
intrahepática. Se cree que si la yema caudal se retrasa
de cístico
durante el movimiento de la yema craneal, se produce La variación en el drenaje y el curso del conducto
una vesícula flotante. En este ajuste, la vesícula biliar es cístico es común. La duplicación del conducto cístico
12 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

también puede ser encontrada. El conducto cístico está – Divertículos y tabiques de la vesícula biliar.
ausente en la mayoría de los casos de agenesia de la – Ubicación anormal de la vesícula biliar.
vesícula biliar, solo rara vez el conducto puede estar – Vesículas biliares “plegadas” (gorro frigio) o
ausente y la vesícula biliar vacía directamente en el torcidas.
conducto hepático común. b) Enfermedades adquiridas:
– Colecistitis acalculosa.
– Colecistitis aguda.
Afecciones del árbol biliar y de la – Hidropesía aguda.
vesícula biliar en la edad pediátrica – Colelitiasis.
La enfermedad colestásica del hígado resulta de los – Colecistitis crónica.
procesos que interfieren con formación de la bilis por – Tumores.
los hepatocitoso con el flujo de la bilis a través del árbol
biliar intrahepático y extrahepático.
Aspectos generales a tener en cuenta
en la colestasis de la edad pediátrica
Etiología Se hace un énfasis particular en las colangiopatías
Varios de estos desórdenes resultan de una ontogéne- neonatales y en los aspectos básicos de las enfermeda-
sis defectuosa, así como de un fracaso de la adaptación des biliares en el niño mayor.
posnatal al ambiente extrauterino. Los rasgos generales de muchas enfermedades del
hígado colestásico del neonato son similares y un pro-
Se presenta una lista de los desórdenes que afectan
blema central de la hepatología pediátrica es diferenciar
el árbol biliar en la edad pediátrica:
las colestasis intrahepáticas de las extrahepáticas. En
1. Enfermedades del árbol biliar:
tal sentido, se describen las causas de colestasis en
a) Anomalías congénitas:
el recién nacido según la frecuencia reportada por la
– Atresia biliar.
literatura internacional:
– Síndrome Alagille y sus variantes.
– Hepatitis neonatal idiopática.
– Fibrosis hepática congénita. – Atresia biliar extrahepática.
– Enfermedad y síndrome de Caroli’s. – Déficit de α-1-antitripsina.
– Estenosis biliar debida a fibrosis quística. – Síndromes de cholestasis intrahepáticas (síndrome
– Quistes congénitos del colédoco. Alagille, enfermedad Byler, entre otros).
– Ausencia de conductos biliares intrahepáti- – Hepatitis (citomegalovirus, rubeola, virus herpes
cos. simple, entre otros).
– Estenosis biliares benignas. – Malformación quística del colédoco.
b) Enfermedades adquiridas: – Sepsis bacteriana.
– Síndrome de taponamiento biliar (Bile Plug – Endocrinopatias (hipotiroidismo y panhipopituita-
Syndrome). rismo).
– Síndrome de la bilis espesa del recién nacido – Galactosemia.
(Inspissated Bile Syndrome). – Otras enfermedades metabólicas.
– Colangitis esclerosante primaria.
– Obstrucción biliar por infestación parasitaria. El tratamiento de enfermedades metabólicas o in-
– Coledocolitiasis. fecciosas del hígado y el tratamiento quirúrgico de las
– Estenosis benignas biliares. anomalías biliares requieren un diagnóstico temprano.
– Tumores intrínsecos y extrínsecos de conduc- Aun cuando el tratamiento eficaz no es posible, neo-
tos biliares. natos y niños mayores con enfermedad progresiva del
– Complicaciones en el conducto biliar común hígado se benefician con un soporte nutricional óptimo
después del trasplante hepático. y un tratamiento médico de la enfermedad crónica del
– Perforación espontánea del colédoco. hígado antes de que se remitan para el trasplante de
– Enfermedad por rechazo del hospedero. hígado.
2. Enfermedades de la vesícula: A causa de la inmadurez de la función hepatobiliar,
a) Anomalías congénitas: el número de distintos desórdenes que provocs ictericia
– Agenesia de vesícula biliar. colestásica puede ser mayor durante el periodo neonatal
– Vesícula biliar doble o triple. que en cualquier otra edad.
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 13

La disfunción del hígado en el lactante, sin tener en errores innatos del metabolismo. Además, el éxito de
cuenta la causa, comúnmente tiene que ver con el fraca- procedimientos quirúrgicos para aliviar la obstrucción
so de la secreción biliar y el íctero colestásico. Aunque biliar por atresia biliar o por un quiste coledocal depen-
la causa de la colestasis puede ser encontrada a nivel de del diagnóstico temprano y la cirugía.
del hepatocito o del tracto biliar, en la práctica puede El enfoque de la evaluación de un niño con enfer-
haber una superposición considerable entre desórdenes medad colestásica del hígado es:
en los sitios iniciales y subsecuentes de la lesión, por – Anamnesis y examen físico:
ejemplo, el daño al epitelio biliar a menudo es un rasgo • Antecedentes familiares de hepatopatía, evolu-
prominente de la hepatitis neonatal que resulta de la ción del embarazo, presencia de anormalidades
infección del citomegalovirus. La obstrucción mecánica extrahepáticas y color de las heces.
del tracto biliar invariablemente provoca la disfunción – Pruebas para establecer la presencia y severidad de
del hígado y en el neonato puede estar asociado con enfermedad hepática:
anormalidades del parénquima hepático, como la • Análisis fraccionado de bilirrubina sérica.
transformación de células gigantes del hepatocito. Se • Análisis bioquímicos hepáticos (aspartato amino
desconoce si las células gigantes, una manifestación transferasa, alanina amino transferasa), fosfatasa
frecuente, no específica del daño del hígado neonatal, alcalina, gamma glutamil transpeptidasa y 5’nu-
reflejan los efectos nocivos de la obstrucción biliar o si cleotidasa.
los hepatocitos y el epitelio biliar son dañados por un • Análisis de función hepática (tiempo de protrom-
agente común durante la ontogénesis, tal como un virus bina, tiempo parcial de tromboplastina, factores
con trofismo para ambos tipos de células. Además, otra de la coagulación, albumina sérica, colesterol y
variable histológica común que a menudo acompaña la glucemia).
colestasis neonatal es la falta de bilis a nivel ductular – Pruebas para detectar signos de infección:
o una disminución en el número de conductos biliares • Hemograma con diferencial.
interlobulares. Este descubrimiento puede tener im- • Hemocultivo, urocultivos y cultivos de otros
portancia primordial en pacientes con el síndrome de sitios si existen evidencias de colecciones.
falta de conductos biliares intrahepáticos, pero también • Cultivos virales.
puede ocurrir como un rasgo ocasional de muchos otros • Paracentesis si hay ascitis y estudio del líquido.
desórdenes, incluyendo la hepatitis neonatal idiopática, – Estudios metabólicos:
infección congénita por citomegalovirus y deficiencia • Niveles de α-1-antripsina y fenotipos si esta
disminuida.
de α-1-antitripsina. Las biopsias de hígado consecutivas
• Estudio metabólico de aminoácidos séricos, uri-
por lo general muestran una disminución progresiva en
narios y presencia de ácidos orgánicos en orina.
el número de dúctulos biliares por el tracto portal, con
• Actividad en eritrocitos de la actividad de la
una cantidad variable de inflamación asociada.
galactosa-1-phosphate uridyl-transferase.
• Pruebas serológicas de HBsAg, virus de la
Diagnóstico clínico
hepatitis C, TORCH (toxoplasmosis, rubeola,
En la mayor parte de los niños con enfermedad citomegalovirus y herpes virus), serología para
colestásica del hígado los signos clínicos aparecen du- sífilis y virus Ebstein-Barr.
rante las primeras semanas de vida. Es fundamental la • Niveles de hierro sérico y ferritina.
diferenciación entre la presencia de hiperbilirrubinemia • Estudio de electrolitos en el sudor.
conjugada de la no conjugada, el íctero fisiológico del • Estudio de hormona tiroidea y de hipopituitaris-
recién nacido o la ictericia prolongada asociada con la mo cuando esté indicado.
lactancia materna extensa. La posibilidad de padecer • Estudio sérico y urinario de ácidos biliares y sus
una enfermedad del hígado o del tracto biliar se debe precursores.
considerar en cualquiera recién nacido mayor de 14 – Estudios de imaginología.
días con ictericia. Las heces de un paciente con atresia • Ultrasonido de hígado y vías biliares (lo primero).
biliar bien establecida son acólicas, sin embargo, en la • Resonancia magnética nuclear de vías biliares
evolución temprana de la obstrucción biliar incompleta (colangiorresonancia).
o que se desarrolla, las heces pueden parecer normales o • Estudio gammagrafía hepática.
solo pigmentadas intermitentemente. Pueden constituir • Estudio radiográfico de huesos largos y cráneo
amenazas para la vida, pero tratables y se deben excluir para detectar infección congénita y de tórax para
afecciones tales como la infección bacteriana y varios estudio de pulmón y silueta cardiaca.
14 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

• Colangiografía endoscópica o percutánea si está representada por una masa fibrótica cónica craneal a la
indicada. vena portal, parece ser un hallazgo ultrasonográfico es-
– Procedimientos: pecífico en el diagnóstico temprano de atresia biliar. La
• Cultivos de fibroblastos en piel para detectar vesícula biliar “fantasma”, definida como una vesícula
enfermedad por almacenamiento. biliar con una longitud menor que 1,9 cm, la carencia
• Intubación duodenal para el estudio del conteni- de pared mucosal ecogénica completa o delgada, con
do biliar. una pared imprecisa e irregular o contornos lobulares,
• Biopsia de hígado para examen microscopia de se ha propuesto como criterios adicionales para atresia
luz, electrónica, estudio enzimático y de depó- biliar. La tomografía computarizada proporciona in-
sito, cobre, hierro, entre otros formación similar a lo obtenido por la ultrasonografía,
• Exploración laparoscópica y colangiográfica. pero es menos conveniente en pacientes menores de dos
años debido a la exposición a la radiación, la falta de
Exámenes complementarios grasa intraabdominal para el contraste y la necesidad
La evaluación inicial debe establecerse inmediata- de sedación profunda o anestesia general.
mente en cuanto la ictericia está presente y valorar la La colangiopancreatografía por resonancia magné-
seriedad de la disfunción del hígado. Una investigación tica, realizado con técnica T2, es ampliamente usada
más detallada se puede requerir y debe ser dirigida para evaluar el tractus biliar en todas las categorías de
según el cuadro clínico del caso. Todas las pruebas diag- edad. Muestra alta sensibilidad y especificidad de la
nósticas relevantes disponibles no tienen que realizarse colangiopancreatografía por resonancia magnética para
en cada paciente. Por ejemplo, la ultrasonografía puede el estudio de los conductos biliares y vesícula biliar
establecer un diagnóstico de un quiste coledocal en un en recién nacidos normales. En algunos pacientes con
recién nacido con ictericia y así evitar la necesidad de atresia biliar, la no visualización del conducto biliar y
excluir causas infecciosas y metabólicas de enfermedad demostración de una pequeña vesícula biliar son deta-
hepática. Numerosas pruebas bioquímicas especializa- lles característicos en la colangiopancreatografía por re-
das y de rutina, así como procedimientos de imágenes, sonancia magnética. Un estudio reciente encontró que la
se han propuesto para diferencias las colestasis intra- colangiopancreatografía por resonancia magnética tiene
hepáticas de las extrahepáticas en niños y así evitar una exactitud diagnostica del 82%, una sensibilidad
la exploración quirúrgica innecesaria. Las pruebas del 90%y una especificidad de 77% para diagnosticar
bioquímicas estándares del hígado por lo general mues- la atresia biliar extrahepática. La diferenciación entre
tran elevaciones variables en el suero de bilirrubina colestasis intrahepática severa de la atresia biliar puede
directa, amino transferasas, fosfatasa alcalina y lípidos. ser difícil porque la capacidad de la colangiopancrea-
Lamentablemente, ninguna prueba sola tiene el valor tografía por resonancia magnética de delinear el árbol
discriminatorio satisfactorio, porque al menos el 10 % biliar extrahepático depende del flujo biliar.
de los niños con colestasis intrahepática que tienen un El uso de agentes radionucleótidos de contraste
trastorno en la secreción biliar, pueden confundirse con hepático tal como el derivado del ácido iminodiacético
los resultados de las pruebas diagnósticos sugestivos
99m
Tc puede ser provechoso en la diferenciación de la
de atresia biliar. La presencia del pigmento biliar en atresia biliar extrahepática de otras causas de ictericia
las heces a veces se cita como pruebas de atresia bi- neonatal. Aunque en un estudio realizado en 1997
liar, pero la coloración de las heces con secreciones y mostró que 50% de pacientes que tenían ausencia de
células epiteliales que se han eliminado por el paciente conductos biliares interlobulares y ninguna obstrucción
colestásico puede ser engañosa. extrahepática, la excreción biliar del radionucleótido
La ultrasonografía puede ser usada para medir el estaba ausente. El 25% de los pacientes que tenían
tamaño y la ecogenicidad del hígado. Incluso en re- hepatitis idiopática neonatal también mostró ninguna
cién nacidos, la ultrasonografía de alta frecuencia y de excreción biliar. Sin embargo, la modalidad permanece
tiempo real por lo general puede definir la presencia y útil para evaluar la permeabilidad del conducto cístico
tamaño de la vesícula biliar, descubrir litiasis y barro bi- en pacientes con una hidropesía de la vesícula biliar o
liar en los conductos biliares y vesícula biliar, así como colelitiasis.
demostrar obstrucciones del cístico y del árbol biliar. La colangiopancreatografía transhepática percutá-
Las anomalías extrahepáticas también se pueden identi- nea puede ser de valor en la visualización del árbol biliar
ficar por este examen. Un cordón triangular o una banda en pacientes seleccionados, pero la técnica es más difícil
de ecogenicidad periportal (3 mm o mayor de grosor), de realizar en niños que en adultos porque los conductos
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 15

biliares intrahepáticos son pequeños y la mayor parte Algunos autores describen una mayor prevalencia en
de las afecciones que ocurren en niños no causan la países asiáticos con respecto a población occidental y
dilatación del árbol biliar. La colangiopancreatografía una leve diferencia entre ambos sexos, es mayor para la
retrógrada endoscópica puede ser útil en la evaluación población masculina con una relación de 1:1,27. Por otra
de niños con obstrucción biliar extrahepática y se ha parte en otro estudio de casos-control realizado entre 1997
realizado con éxito en un pequeño número neonatos con y 2002, señala que los bebés nacidos de madres negras no
colestasis. Se requiere considerable maestría técnica por hispanas estaban en el mayor peligro que madres blancas
parte del médico especialista actuante para este proce- no hispanas. La concepción durante la primavera y el
dimiento en niños, por lo que su uso es muy limitado. consumo alimenticio bajo de vitamina E, cobre, fósforo
La biopsia del hígado percutánea es valiosa en la y betatocoferol fueron factores de riesgo adicionales.
evaluación de pacientes colestásicos y se puede realizar
hasta en los niños más pequeños con solo sedación y Etiología
anestesia local. Un diagnóstico de atresia biliar extrahe- La causa de atresia biliar es desconocida. La enfer-
pática se puede hacer sobre la base de criterios clínicos medad no se hereda y hay varios informes de gemelos
e histológicos en 90 % a 95 % de los pacientes. Cuando homocigóticos y dicigóticos discordantes de atresia
la duda sobre el diagnóstico persiste, la permeabilidad biliar.
del árbol biliar puede ser examinada directamente por Se supone una destrucción inflamatoria progresiva
un minilaparotomía y colangiograma intraoperatorio. del árbol biliar tras el nacimiento, debido a isquemia,
tóxicos, infecciones (citomegalovirus, reovirus tipo 3,
Trastornos de las vías biliares Epstein-Barr, rubéola y rotavirus del grupo C), sobre
extrahepáticas los conductos pancreatobiliares alterados.

Los trastornos más frecuentes de las vías biliares Clasificación


extrahepática son la atresia biliar, el quiste coledocia-
Se han descrito dos fenotipos clínicos asociados a
no, la coledocolitiasis, la colangitis ascendente y la
esta enfermedad:
colangitis esclerosante, algunos guardan una estrecha
– Fenotipo aislado: le corresponde70 % a 80 % de los
relación con el carcinoma de vías biliares:
casos, no se asocia a otras alteraciones y los sínto-
– Atresia biliar. mas tales como ictericia y acolia aparecen desde la
– Quiste coledociano segunda semana de vida.
– Coledocolitiasis – Fenotipo asociado a otras malformaciones: corres-
– Colangitis ascendente ponde el 15 % a 30 % restante, se asocia a otras
– Colangitis esclerosante malformaciones tales como anomalías de la vena
porta y del bazo, mal rotación, situs inverso, car-
Atresia biliar diopatía congénita y atresias intestinales.
La atresia de vías biliares es una enfermedad poco
frecuente, que corresponde a una colangiopatía obstruc- Patogenia
tiva neonatal. Se caracteriza por un cambio obstructivo En su patogénesis se postulan diversas teorías. Se
progresivo inflamatorio de etiología desconocida que han descrito diversos mecanismos involucrados, donde
afecta tanto la vía intrahepática como extrahepática, la mayoría de los autores concluye que en la generalidad
lo que conlleva a una fibrosis y obliteración del tracto de los casos la lesión se inicia en el tejido ductal como
biliar con obstrucción del flujo biliar, lo que puede llevar consecuencia de un proceso inflamatorio y esclerosante,
a la cirrosis biliar secundaria e incluso ser fatal en un que posteriormente compromete la vía extrahepática.
corto periodo de tiempo. No hay pruebas de que la atresia biliar resulta de
un fracaso en la morfogénesiso recanalización del
Epidemiología conducto biliar durante el desarrollo embrionario.
Esta afección ocurre en uno de cada 10 000 a 15 000 Las características clínicas apoyan el concepto que en
nacidos vivos y explica aproximadamente un tercio de mayoría de los casos la lesión biliar ocurre después
los casos de ictericia neonatal colestásica. Es la causa del nacimiento.
de muerte más frecuente por enfermedad hepática y de Los mecanismos involucrados en la patogénesis de
remisión para el trasplante de hígado en niños (aproxi- la atresia de vías biliares se señalan factores asociados
madamente 50 % de todos los casos). a virosis perinatales, genéticas e inmunológicas.
16 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Virosis perinatales diferenciarse de la ictericia fisiológica del recién nacido


La teoría de una infección perinatal con posterior de presentación al nacer. Además, se puede acompañar
afección secundaria al proceso inflamatorio dado por de signos de obstrucción de la vía biliar tales como
una respuesta inmune, se perfila como el de mayor acolia y coluria. Sus manifestaciones clínicas son:
importancia. La infección por virus colangiotrópos – Peso al nacimiento adecuado, sin antecedentes ges-
es el factor desencadenante del daño en el conducto tacionales de interés.
biliar, tras lo que la respuesta inflamatoria perpetuaría – Ictericia: a partir de las dos semanas de vida no debe
el daño y la subsecuente obstrucción. Entre los virus considerarse fisiológica.
más estudiados están el reovirus tipo 3, rotavirus C y – Hipoclia o acolia: en algunos casos las deposiciones
citomegalovirus que actúan y provocan esta agresión. son acólicas desde el nacimiento, pero por lo general
se observará en las siguientes semanas.
Genéticos – Coluria: en la exploración abdominal, la hepatome-
En ciertos estudios se han detectado antígenos del galia constituye el signo más constante y precoz.
sistema de histocompatibilidad HLA B12, A95, A9, B5, Esta es dura y firme.
A28 y B35 como factores asociados.
Al examen físico la hepatomegalia constituye el
Inmunológicos signo más precoz y constante, junto con la consistencia
Estos pacientes presentan un cierto grado de vulne- dura y firme del hígado. En el caso de estar asociada a
rabilidad inmunológica que los hace más susceptible otras malformaciones como la poliesplenia, se puede
a la progresión descrita ya que se ha visto también detectar la esplenomegalia, esta es un signo de hiper-
asociada con extensiones oligoclonales de células T, tensión portal de aparición más tardía. De progresar la
CD4+ y CD8+ dentro del hígado y tejidos remanentes enfermedad existe retraso del crecimiento pondoesta-
del conducto biliar extrahepático, lo que indica la pre- tural y la tendencia a una coloración ictérico-verdínica
sencia de células T activadas que reaccionan al estímulo de la piel.
antigénico específico. En todo niño con ictericia que sobrepase los 14 días
También las infecciones congénitas se han implicado de vida debe investigarse la presencia de bilirrubina
con citomegalovirus, el virus del sarampión, herpes directa en sangre y orina, y pensar en primer lugar
virus humano 6 y papiloma virus. en la atresia de vías biliares, ya que es una causa de
Un aumento significativo del antígeno del leucocito colestasis neonatal en la que el diagnóstico precoz es
humano (HLA) B12 se ha encontrado entre pacientes fundamental para indicar una intervención quirúrgica
con atresia biliar que no tenían anomalías asociadas. temprana y obtener un pronóstico favorable.
Los haplotipos HLAA9, B5, A28 y B35 se han encon-
trado con una mayor frecuencia. Exámenes complementarios
El descubrimiento de la sobreexpresión del os- No existe ningún estudio bioquímico patognomóni-
teopontin y γ-interferón indica un papel potencial co. Al inicio del cuadro, los hallazgos más habituales
del tipo 1 T helper (Th1) unido a las citoquinas en la
son variados.
patogénesis.
La atresia biliar está asociada con extensiones oligo- Estudio de la función hepática
clonales de células T CD4+ y CD8+dentro del hígado
– Hiperbilirrubinemia: existe elevación de la bilirru-
y tejidos remanentes del conducto biliar extrahepático,
bina conjugada o directa (mayor que 2,0mg/dl o
lo que indica la presencia de células T activadas que
superior al 15% de la bilirrubina total). También se
reaccionan al estímulo antigénico específico.
puede determinar la existencia de pigmentos biliares
Las anomalías extrahepáticas ocurren en 10 % a
en el examen de orina.
25 % de pacientes e incluyen defectos cardiovasculares,
mal rotation, situs inversus, y atresias intestinales. – Enzimas hepáticas: al inicio de la enfermedad se
aprecia una elevación discreta, pero que a medida
Diagnóstico clínico que el daño hepático progresa se elevan ambas
(alanina amino transferasa y aspartato amino trans-
Es la principal causa de colestasis neonatal, su pre- ferasa), alertando sobre la intensidad del lesión.
sentación varía en entre los 60 y 120 días, lo más fre- – Enzimas de colestasis: marcada elevación de la
cuente es la detección de ictericia tardía, generalmente gamma glutamil transpeptidasa desde el inicio del
después de las dos semanas de vida, por lo que debe cuadro hasta tres veces el valor normal de referencia.
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 17

Elevación de los ácidos biliares, la fosfatasa de tres a cinco días (5mg/ kg/día) para optimizar la
alcalina y alfafetoproteína excreción biliar.
– Estudio de la síntesis hepática: existen evidencias de Colangiografía por resonancia magnética nuclear
disminución en la síntesis hepática: hipoalbumine-
mia y disminución de los factores de coagulación. Realizado con técnica T2, es ampliamente usada
Existe déficit de absorción de vitaminas liposolubles para evaluar el tracto biliar en todas las categorías
(vitamina A, E, D y K) y puede verse trombocito- de edad. Tiene una exactitud diagnostica del 82 %,
penia debido al hiperesplenismo secundario a la sensibilidad del 90 % y especificidad del 77 % para
hipertensión portal. Todos estos estudios a lo largo diagnosticar la atresia biliar extrahepática.
de la evolución de la enfermedad se elevan aún más. La diferenciación entre colestasis intrahepática
– Estudio de virus: los estudios virales del virus de la severa de la atresia biliar puede ser difícil porque la
hepatitis A, B, C, VPH, citomegalovirus, incluyendo capacidad de la colangiopancreatografía por resonan-
virus de inmunodeficiencia humana, puede ayudar cia magnética de delinear el árbol biliar extrahepático
a determinar la causa de los problemas hepáticos. depende del flujo biliar.

Estudio de imágenes Colangiografía percutánea transhepática


El ultrasonido de hemiabdomen superiores el exa- Es una técnica de gran valor para la visualización
men imaginológico de elección para el diagnóstico del árbol biliar en pacientes con dilatación de conduc-
de esta enfermedad. La pared abdominal en niños es tos, pero la técnica es muy difícil en niños porque los
relativamente delgada, por lo que la inspección ultra- conductos biliares intrahepáticos son pequeños y la
sonográfica es bastante representativa, además de ser mayor parte de los pacientes tienen el tipo de afección
no invasiva y más económica. Permite diferenciar la que no causan la dilatación del árbol biliar.
atresia de vías biliares de otras causas de colestasis,
Colangiopancreatografía retrógrada
como quiste de colédoco, litiasis, entre otras.
endoscópica
Signos ultrasonográfico de la atresia:
– Signo de la cuerda triangular (sensibilidad de 85 % Puede ser útil en la evaluación de niños con obstruc-
y especificidad cercana al 100 % en el diagnóstico). ción biliar extrahepática y se ha realizado con éxito en
Este se observa como un cono fibrótico de forma un pequeño número de neonatos, se requiere de gran
triangular o tubular, hiperecogénico a nivel del área maestría técnica y de equipamiento apropiado para este
de la porta. tipo de pacientes.
– La ausencia o hipoplasia de la vesícula biliar, su Las características anatómicas de la atresia de los
forma irregular y su falta de contractilidad son cri- conductos biliares extrahepáticos son muy variables.
terios para el diagnóstico, que debe ser realizados Kasai propuso una clasificación útil de las variantes
tras un periodo de ayuno. anatómicas. Los tres tipos principales se han definido
– El eco-doppler puede ser complementario al evi- sobre la base del sitio de la atresia:
denciar signos secundarios de hipertensión portal. – Tipo I: es una atresia del conducto biliar con con-
– Además, se pueden observar signos indirectos, tales ductos proximales evidentes.
como hepatomegalia, parénquima hepático irregular – Tipo II: implica el conducto hepático con dilatación
e hiperecogénico. quística de los conductos biliares en el sistema
porta hepática. Se subdivide en atresia IIa, donde
Gammagrafía hepatobiliar el conducto biliar y el cístico son evidentes, mien-
Estudio con radioisótopos marcados con tecnecio tras que en el tipo IIb de atresia estas estructuras
(derivados del ácido diisopropil iminodiacetico-99mTc). también se dañan. Estas formas de atresia biliar se
Sensibilidad de 82% y especificidad del 91%. Los casos han llamado “quirúrgicamente corregibles”, pero
falsos negativos generalmente son por mal empleo de lamentablemente acontecen en menos de 10 % de
la técnica. todos los casos.
Se inyecta el isótopo levemente radioactivo en la – Tipo III: presente en 90% o más de los pacientes,
vena del niño. Si el radioisótopo atraviesa el hígado y que implica la obstrucción del hepático común y
llega al intestino, los conductos biliares están permea- el conducto cístico sin dilatación quística de los
bles y el niño no tiene atresia biliar. Previamente al conductos biliares. El área perihilar entera está en
estudio se debe administrar fenobarbital por un periodo un cono de tejido fibroso denso. La vesícula biliar
18 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

se implica hasta cierto punto en aproximadamente transformación a células gigantes de los hepatocitos en
80 % de los pacientes. La variante del tipo III se ha un mayor grado que el observado comúnmente en la
caracterizado como “no corregible” ya que no existe hepatitis neonatal. Los dúctulos biliares pueden asumir
ninguna evidencia de conductos biliares dilatados una configuración de una placa ductal que sugiere que
que se pueden usar para anastomosis bilio-entérica la enfermedad interfirió en el proceso de remodelación
(Fig. 177.2). ductular que ocurre durante el desarrollo prenatal. La
cirrosis Biliar puede estar presente al principio o puede
evolucionar rápidamente durante los primeros meses
de la vida, con o sin la restauración del flujo de la bilis.

Complicación
En los niños en los que el diagnóstico se ha retrasado
o en los que la cirugía no ha conseguido restablecer el
flujo biliar hay una marcada progresión de la disfun-
ción hepática con el desarrollo de una cirrosis biliar
secundaria. Clínicamente, los pacientes presentan un
estancamiento pondoestatural derivado de la malab-
sorción y una coloración ictérico-verdínica. Ocasional-
mente puede aparecer prurito, en ocasiones refractario
al tratamiento médico convencional como otro signo
de colestasis. En la exploración abdominal destaca la
hepatomegalia de consistencia dura y la esplenomegalia
como signo de hipertensión portal.

Tratamiento
El tratamiento de elección es la hepatoportoente-
rostomía, mediante la técnica de Kasai, la que permite
restablecer el flujo biliar y prevenir el desarrollo de
cirrosis y posterior disfunción hepática. Este proce-
Fig. 177.2. Principales tipos de atresia biliar. dimiento se puede realizar mediante cirugía abierta
convencional, y últimamente el desarrollo de la técnica
Estudio histológico laparoscópica ha demostrado ventajas. La eficacia de
La biopsia hepática permite confirmar el diagnóstico la corrección quirúrgica, está en directa relación con la
en 97 % a 98 % de los casos. Los hallazgos histopato- precocidad de su realización. Los mejores resultados se
lógicos en muestras obtenidas por biopsia del hígado obtienen antes de los dos meses de vida, y es óptimo
al comienzo de la afección son de gran importancia en antes de los 45 días.
el tratamiento de pacientes con atresia biliar. Al inicio,
la arquitectura hepática generalmente esta conservada, Tratamiento de las complicaciones posquirúrgica
con un grado variable de proliferación ductular biliar, La principal complicación asociada a la corrección
canalicular, de estasis biliar en los canalículos, fibrosis quirúrgica son los cuadros de colangitis, ya sea aislados
portal, edema del tracto portal y transformación gigan- o recurrentes, los que pueden empeorar la disfunción
tocelular, menos intensa que en la hepatitis neonatal a hepática. Pueden ocurrir en el posoperatorio inmediato
células gigantes. La presencia de tapones biliares en o bien en forma tardía. Es importante en estos casos
las tríadas portales es muy sugerente de la obstruc- el diagnóstico y tratamiento precoz, sospechándolo en
ción de conductos mayores. Además, los dúctulos casos de fiebre asociado a colestasis, eritrosedimenta-
biliares muestran daños variables en el epitelio biliar, ción elevada y eventualmente signos ecográficos de
incluyendo edema, vacuolización y hasta descama- dilatación de la vía biliar.
ción de las células en el lumen. Los tractos portales En la mayoría de los casos está implicado un ger-
pueden estar infiltrados con células inflamatorias y en men gramnegativo, pero debe intentarse identificar el
aproximadamente 25% de los pacientes puede existir agente causal.
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 19

El tratamiento inicial consiste en antibioticoterapia de etiología diversa, si bien no parece estar directa-
con excreción preferentemente por vía biliar como mente relacionado con las concentraciones séricas de
amoxicilina-ácido clavulánico, las cefalosporinas de ácidos biliares. Varios estudios señalan que no hay
tercera generación combinada con un aminoglucósido una correlación estricta entre niveles de sales biliares
son una buena opción en espera del antibiograma. Se e intensidad del prurito y tampoco hay una respuesta
puede usar el trimetoprim-sulfimetaxazo con cobertura completa al tratamiento con coleréticos o resinas, que
para gramnegativos y posteriormente ajuste según el al bloquear su absorción disminuyen el reservorio total
antibiograma. En los casos refractarios o ante la sos- de estos ácidos. Otros estudios asocian el picor con un
pecha de abscesos es necesario el drenaje quirúrgico. aumento en la neurotransmisión mediada por opioides
en el sistema nervioso central. Este en los pacientes con
Tratamiento nutricional. atresia puede aparecer de manera precoz, cuando no se
Hay que evitar el desarrollo de un estado de malnu- ha conseguido restablecer el flujo biliar o ser refractario
trición. Se debe aportar 125 % a 150% de las necesida- al tratamiento farmacológico, lo que puede incidir de
des energéticas, según las recomendaciones de aporte manera negativa en la calidad de vida de los niños.
dietético, representando los lípidos 35 % a 45% de las El rascado persistente puede determinar enrojeci-
calorías, con 30 % a 50% en forma de triglicérido de miento, pápulas urticariales lineales, excoriación de
cadena corta. pápulas preexistentes, fisuras y costras alargadas en las
En casos de colestasis irreversible prolongada se ad- líneas de rascado, que pueden dificultar la valoración
ministran generalmente dosis suplementarias de calcio de la enfermedad subyacente. El rascado y el frota-
y vitamina D, pero su efecto de retardar la afectación miento prolongados pueden provocar liquenificación e
ósea metabólica es decepcionante. Los suplementos hiperpigmentación. En algunas ocasiones los pacientes
de vitamina A evitan la deficiencia de esta vitamina refieren un prurito intenso y generalizado, pero no
liposoluble y la esteatorrea grave se puede minimizarse muestran apenas signos de rascado o roce.
mediante la sustitución parcial de la grasa de la dieta Si fuera posible se debe evitar la ropa irritante
con triglicéridos de cadena media. (lana) o estrecha. El baño debe ser corto, ya que puede
agravar un prurito generalizado, sobre todo cuando se
Tratamiento colerético asocia con piel seca, en el baño se debe emplear agua
El objetivo es favorecer la excreción biliar tras la tibia (no caliente). Los emolientes como la vaselina
cirugía y mejorar el pronóstico de la enfermedad. Lo blanca u otros preparados oleosos resultan adecuados
más utilizados son: para su aplicación después del baño como hidratantes,
– Ácido ursodesoxicólico: ejerce un efecto estabiliza- mientras la piel permanece todavía húmeda (se debe
dor sobre la membrana del hepatocito (citoprotector) secar el exceso de agua).
junto con su efecto colerético. La dosis habitual es La colestiramina es la terapéutica más eficaz en
de 10 mg/kg/día a 20 mg/kg/día, repartido en tres dosis de 6 g/díaa 12 g/día vía oral en dosis fraccionadas.
a cuatro tomas. Se acepta su utilización de forma Otros tratamientos son fenobarbital, andrógenos,
sistemática tras la corrección quirúrgica. rifampicina (efecto adverso: elevación de la alanina
– Resinas de intercambio iónico (resincolestiramina): amino transferasa y aspartato amino transferasa, fo-
disminuye el reservorio de ácidos biliares al inter- tosensibilidad y exantema cutáneo), antagonistas de
ferir su absorción intestinal. Dosis de 0,5 g/kg/día a los opiáceos como naloxona, nalmefene y naltrexona,
1 g/kg/día diluida en tres o cuatro dosis, es el fármaco aunque es reducida la experiencia en pediatría. También
de mayor eficacia, pero es mal tolerado por su sabor. se recomienda la perfusión extracorpórea con carbón
– Colestipol: a dosis de 5 g/día a 20 g/día. activado y fototerapia con rayos ultravioletas A y B.
– Fenobarbital (15 mg): ejerce un efecto colerético, El uso del ondansetron dado a su efecto antago-
actúa como inductor enzimático a nivel hepático. nista de los receptores de la serotonina también se ha
La dosis es de 3 mg/kg/día a 5 mg/kg/día. Durante utilizado por vía oral, a dosis de 0,8 mg/kg/día. Como
el tratamiento debe evaluarse su efecto sedante y la efectos adversos se señalan la anorexia y molestias
alteración del metabolismo del calcio y el fósforo. gastrointestinales leves.
En los casos de prurito refractario e intenso se su-
Tratamiento del prurito giere el tratamiento combinado farmacológico y la in-
El prurito colestático es muy frecuente y está asocia- dicación de una diálisis hepática con el sistema MARS
do a procesos que evolucionan con ictericia obstructiva (recirculación de absorbentes moleculares) de reciente
20 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

desarrollo, sistema que permite una diálisis selectiva tores. Por lo tanto, los niños con atresia biliar sacan
de las moléculas que circulan en la sangre unidas a la ventaja a largo plazo de la hepatoportoenterostomía,
albúmina, como los ácidos biliares, bilirrubina y otras aunque mayoría tenga alguna disfunción del hígado
no identificadas, y ha demostrado una alta eficacia en persistente. La cirrosis biliar progresiva puede causar la
la disminución del prurito, cuyo beneficio puede pro- muerte o la necesidad del trasplante de hígado a pesar
longarse tras una única sesión durante varias semanas de la restauración del flujo de la bilis.
o incluso meses.
Tratamiento de la hipertensión portal Perforación espontánea del colédoco
No existe un tratamiento eficaz para controlar y La perforación espontánea del colédoco es una
evita su aparición, las técnicas de imágenes (ecografía afección colestásica diferente y rara de la infancia. La
Doppler, tomografía axial computarizada o angio-re- perforación por lo general ocurre en la unión del cístico
sonancia magnética nuclear) junto con la endoscopia, con los conductos biliares.
son útiles en el diagnóstico y seguimiento. No existe
ningún estudio controlado del uso de betabloqueadores Etiología
en la edad pediátrica. Los episodios de sangramiento La causa es desconocida, pero existen evidencias
se controlan con embolización o escleroterapia de las de obstrucción en el extremo distal del colédoco, se-
varices. Si se prevé un trasplante a mediano plazo debe cundario a estenosis o espesamiento de la bilis. Se ha
desestimarse la realización de derivaciones portosis- señalado también que puede existir una debilidad con-
témicas. génita en el sitio de la perforación y lesión provocada
por una infección.
Tratamiento de la hipoprotrombinemia
La hipoprotrombinemia suele mejorar tras la ad- Diagnóstico clínico
ministración de fitonadiona (vitamina K1), 5 mg/día a Los signos clínicos, incluyen ictericia, heces acóli-
10 mg/día por vía subcutánea durante dos a tres días. cas, coluria y ascitis, que típicamente ocurren durante
Transplante hepático los primeros meses de vida. El niño también puede
presentar vómitos y falta de ganancia de peso. La dis-
En los casos en que fracasa la hepatoportoenteros- tensión abdominal progresiva es un rasgo habitual y se
tomía (hasta 60 % según algunas series), el transplante puede observar coloración ictérica del fluido dentro de
hepático es la solución e incluso en los pacientes en que hernias umbilicales o inguinales.
la cirugía consiguió restablecer el flujo, pueden requerir
de un trasplante en la segunda o tercera década de vida. Exámenes complementarios
Es típico observar hiperbilirrubinemia conjugada de
Pronóstico ligera a moderada con elevación mínima de los niveles
El pronóstico de la atresia biliar no tratada es muy de amino transferasas en el suero.
malo, la muerte por fallo hepático ocurre por lo general La paracentesis abdominal revela líquido ascítico
dentro de dos años. En un informe del 2003 del Registro ictérico, que por lo general es estéril.
de Atresia Biliar japonés, 1381 pacientes se habían La ultrasonografía revela ascitis o liquido localizado
incluido desde 1989. Tuvieron la ictericia resuelta en57 en el cuadrante superior derecho, el árbol biliar no está
% de los pacientes después de la operación de Kasai y dilatado.
entre los cinco y los 10 años de seguimiento las tasas Los estudios con radioisótopos hepatobiliares
de supervivencia eran de 75,3 % y 66,7 %, respectiva- demuestran acumulación libre del isótopo dentro de
mente. En el momento del informe, 57 de 108 pacientes la cavidad peritoneal. Se requiere una colangiografía
habían sobrevivido durante 10 años sin el trasplante de transoperatoria para demostrar el sitio de la perforación.
hígado. En otra serie de pacientes con atresia biliar en
Francia seguidos por un periodo de 10 años (1986 a
Tratamiento
1996), la tasa de supervivencia total de los tratados con El tratamiento quirúrgico puede implicar el simple
la operación de Kasai y con trasplante hepático fue de drenaje de la ascitis biliosa y reparación del sitio de la
68 %. La tasa de supervivencia de 10 años en pacientes perforación, o si la perforación está asociada con la obs-
con sus hígados natales era 29 %, una cifra similar, trucción del conducto de biliar, se debe realizar entonces
31 % compilado de 750 casos publicados por los au- un drenaje a través de una colecistoyeyunostomía.
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 21

Síndromede taponamiento biliar Tratamiento


(Bile Plug Syndrome) Por lo general, el tratamiento de la enfermedad sub-
yacente con antibioticoterapia conduce a la resolución
Es una condición rara de obstrucción biliar provo-
gradual.
cada por un espesamiento de la bilis que produce un
tapón grueso de mucosidad obilis espesa.
Colangitis esclerosante primaria
Etiología en lactantes y niños
Aunque se han visto afectados niños sanos, esta
Es una enfermedad poco frecuente, crónica y progre-
condición es más común en prematuros enfermos,
siva del tracto biliar que se caracteriza por inflamación
que no pueden ser alimentados y requieren nutrición
y fibrosis de los conductos biliares intrahepáticos y
parenteral prolongada.
extrahepáticos que conducen finalmente a la cirrosis
Patogenia biliar secundaria. En grandes estudios de series de
niños afectados de colangitis esclerosante primaria se
La patogénesis puede implicar la estasis biliar, describe una frecuencia mayor en varones. Desde la
el ayuno, la infección y un aumento de la carga de década de los 80 su diagnóstico se ha incrementado en
bilirrubina. La colestasis asociada con una hemólisis los servicios de neonatología dado al uso de las técnicas
masiva o el síndrome de bilis espesa, puede ser una modernas de imaginología.
variante del síndrome de taponamiento biliar, pero es
poco frecuente, con el advenimiento de las medidas para Etiología
prevenir y tratar las incompatibilidades sanguíneas Rh
y de los grupos ABO. La colangitis esclerosante primaria representa un
proceso fibroinflamatorio del árbol biliar, debido a
Diagnóstico clínico múltiples causas, que puede desencadenar colestasis
crónica, cirrosis biliar secundaria e insuficiencia he-
Puede asemejarse al de atresia biliar. El paciente
pática. Pueden afectarse tanto los conductos biliares
presenta ictericia, anemia y hepatomegalia.
intrahepáticos como extrahepáticos.
Exámenes complementarios
Clasificación
La ecografía puede mostrar dilatación de los con-
ductos biliares intrahepáticos. La colangitis esclerosante primaria se divide en
La laparotomía exploradora y la colangiografía primaria y secundaria.
operatoria usualmente se requieren para el diagnóstico. La colangitis esclerosante primaria es de origen
desconocido y puede afectar a todo el árbol biliar. Los
Tratamiento criterios para su diagnóstico son:
– Engrosamiento generalizado y difuso de la pared
La simple irrigación de la vía biliar es curativa. con estenosis del árbol biliar.
– Ausencia de cálculos y tumores.
Síndrome de la bilis espesa – Ausencia de cirugía del tracto biliar y de cirrosis
(Inspissated Bile Syndrome) biliar primaria.

El síndrome de la bilis espesa en una afección que se La pared de los conductos extrahepáticos está muy
presenta en los recién nacidos con sepsis grave, a menu- engrosada y la luz disminuida. Con frecuencia existen
do asociadas con la prematuridad, fibrosis quística, daño adherencias fibrosas y los ganglios regionales están
hepatocelularo alimentación parenteral total, donde aumentados de tamaño.
existe un espesamiento de la bilis y su sedimentación La colangitis esclerosante secundaria no es frecuente
contribuye a la obstrucción biliar e ictericia.
en niños, puede ser provocada por una estenosis cicatri-
cial quirúrgica y menos frecuente por colelitiasis. Tam-
Diagnóstico clínico
bién se han descrito obstrucciones por Cryptococcus y
Íctero persistente del recién nacido con anemia Candidas en niños inmunodeprimidos (tanto celular
hemolítica y elevación de bilirrubina indirecta y directa como humoral). En niños con síndrome de inmuno-
acompañando a una sepsis grave de cualquier origen. deficicencia humana y enfermedad fibroinflamatoria
22 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

biliar asociado a infecciones por Criptosporidios, estar presentes en algunos pacientes. Se puede detectar
Mycrosporidium, citomegalovirus y Mycobacterium anticuerpos citoplasmáticos antineutrófilos.
avium complex.
Imaginológicos
Patogenia El diagnóstico de la colangitis esclerosante primaria
La colangitis esclerosante primaria es un proceso se establece por colangiografía.
patológico que ocurre en ausencia de coledocolitiasis La coloangiopancreatografía retrograda endoscó-
o de historia de cirugía del conducto biliar. pica es el método de elección para la visualización de
La colangitis esclerosante primaria puede presen- los conductos biliares intrahepáticos y extrahepáticos.
tarse de manera poco común en el periodo neonatal, Sin embargo, en la actualidad los resultados de la co-
pero puede presentarse más tarde con características langiograía por resonancia magnética son similares a
autoinmunes, a menudo en asociación con la enferme- la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica en
dad inflamatoria del intestino (colitis ulcerosa, 50 % a la correcta identificación de los cambios que ocurren a
80 % de los niños) o puede ocurrir con otros trastornos, nivel de los conductos biliares. Se observan irregulari-
incluyendo histiocitosis X (células de Langerhans), dades de los conductos intrahepáticos y extrahepáticos,
soriasis, inmunodeficiencia y fibrosis quística. incluyendo estenosis, alternando con áreas de dilatación
que provocan una apariencia perlada. La participación
Diagnóstico clínico de los conductos biliares intrahepáticos predomina en
pacientes cuya condición aparece después del periodo
La ictericia colestásica y heces acólicas pueden neonatal. En ocasiones se encuentran estenosis do-
presentarse en el periodo neonatal en las dos prime- minantes de los conductos extrahepáticos o estenosis
ras semanas de vida. Las características clínicas de papilar.
presentación pueden ser idénticas ala atresia biliar La colecistografía percutánea revela un sistema bi-
extrahepática. En los recién nacidos no se asocia con liar evidente con rarefacción de las ramas segmentarias,
la enfermedad inflamatoria intestinal. estenosis y dilatación focal de los conductos biliares
En los niños mayores, la presentación clínica es intrahepáticos.
más variable, los síntomas más comunes son dolor
abdominal, ictericia y diarrea crónica. Histológicos
El examen físico algunas veces muestra hepatome- En las muestras de biopsia hepática, la histología
galia, que puede estar asociada con esplenomegalia, puede sugerir la enfermedad, pero por lo general no
ictericia conjuntival y rara vez ascitis. son diagnósticos. La fibrosis características concéntrica
periductal (“piel de cebolla”) puede estar presente más
Exámenes complementarios adelante en la evolución de la enfermedad, pero más
No existe una prueba diagnóstica definitiva para la a menudo solo se encuentra proliferación neoductular
colangitis esclerosante primaria. y fibrosis.
El diagnóstico se basa en una combinación de Microscópicamente se observa una marcada fibrosis
datos bioquímicos, inmunológicos, imaginológicos e de la pared con denso infiltrado inflamatorio crónico
histológicos. de predominio linfocítico, que forman agregados y
folículos linfoides activados, por esto se ha planteado
Bioquímicos su posible origen autoinmune, común a la de otras
La concentración sérica de fosfatasa alcalina está a patologías a las que con frecuencia, se asocia: CU,
menudo elevada en los niños y los niveles séricos de EC, tiroiditis de Riedel, fibrosis retroperitoneal y me-
amino transferasas pueden estar ligeramente elevados, diastínica, seudotumor orbitario, síndrome de Sjögren
aunque pueden presentar un nivel normal de fosfatasa y linfadenopatía angioinmunoblástica.
alcalina en su inicio.
La hiperbilirrubinemia es vista en menos de la mitad Diagnóstico diferencial
de los pacientes pediátricos. La diferenciación de la colangitis esclerosante
primaria con la hepatitis autoinmune, en particular en
Inmunológicos presencia de circulación de autoanticuerpos no órgano
Los autoanticuerpos en suero, incluyendo anticuer- específicos y las características hepática en muestras de
pos antinucleares y anticuerpos de músculo liso, pueden biopsia de hígado, puede ser difícil. En 25 % y 30 % de
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 23

los casos puede ocurrir un síndrome de superposición Quistes del colédoco


en niños con resultados de las pruebas hepáticas séricas
de colestasis hepática y con características histológicas Los quistes coledocianos son dilataciones anorma-
de hepatitis autoinmune y colangitis esclerosante prima- les del árbol biliar extrahepático e intrahepático cuyo
ria. Los hallazgos serológicos incluyen la presencia de origen se considera como congénito, más frecuente en
anticuerpos antinucleares, anticuerpos de músculo liso, niñas (relación hombre/mujer de 1:3), normalmente
anticuerpos citoplasmáticos antineutrófilos y anticuerpo menores de 10 años de edad.
tipo 1 anti-microsoma-hígado-riñón (anti-LKM-1).
Epidemiología
Complicaciones Según reportes internacionales la incidencia mues-
El colangiocarcinoma es una complicación que no tra una distribución geográfica variable, oscilando de
se ha descrito en niños. 1/13 000 a 1/1 000 de nacidos vivos.
En las poblaciones occidentales los quistes cole-
Pronóstico docianos son raros, ocurriendo en 1 de cada 100 000
a 150 000 nacidos vivos y son más frecuentes en las
En los niños es reservado. La evolución clínica de poblaciones de Asia. En 40 % a 90 % de los casos es-
esta afección es variable y generalmente progresiva. tán asociados a anomalías de los conductos pancreato
El tiempo de supervivencia media desde el inicio de biliares.
los síntomas es de aproximadamente 10 años, similar
a la reportada en adultos. El análisis de los factores de Clasificación
supervivencia en la presentación indica que la edad
Múltiple son las clasificaciones utilizadas, las de
avanzada, la presencia de esplenomegalia y un tiempo
Alonso-Lej y colaboradores fueron las primera en
de protrombina prolongado predice un mal pronóstico.
1959, que describieron tres tipos de quistes biliares
La aparición de ictericia después del periodo neonatal
extrahepáticos:
con un nivel de persistencia de la bilirrubina sérica de
– Tipo I: dilatación quística segmentaria del colédoco.
más de cinco veces el valor del límite superior normal,
– Tipo II: divertículo solitario del colédoco.
también se asocia a un mal pronóstico. El carcinoma
– Tipo III: dilatación bulbosa de la porción más distal
hepatocelular también puede presentarse, pero el colan-
del colédoco en la ampolla de Váter (coledococele).
giocarcinoma, una complicación importante del adulto,
no se ha reportado en niños.
Este sistema de clasificación fue posteriormente
modificado por varios autores, incluyendo a Longmire
Tratamiento
y colaboradores, en 1971 y Todani y colaboradores, en
En los niños es poco satisfactoria. No hay informes 1977 (Fig. 177.3).
publicados de ensayos controlados que hayan demos- Las modificaciones de Todani a la clasificación de
trado de manera convincente que cualquier tratamiento Alonso-Lej constituyen el sistema más ampliamente
farmacológico mejora las características histológicas y usado en la actualidad, aunque algunos autores han
prolonga la supervivencia. Experiencias sin control han cuestionado su validez. Estas modificaciones incluyen
sugerido algún beneficio para la terapia inmunosupre- una subdivisión de los quistes de tipo I (80 % a 90 %
sora con prednisona y azatioprina en pacientes con el de los casos) en:
síndrome de superposición. – Ia. Sacular.
El tratamiento con ácido ursodesoxicólico en los adul- – Ib. Segmentaria.
tos y en un número limitado de niños ha llevado a una – Ic. Difuso.
mejora en los síntomas clínicos y en las alteraciones de las
pruebas hepáticas, pero no se ha demostrado un beneficio Además de los tipos I, II y III, Todani también
a largo plazo del tratamiento sobre la supervivencia. incluyó:
El trasplante hepático es una opción importante – Tipo IV: dilatación intrahepática y extrahepática. Se
para los pacientes que experimentan progresión de subdivide en dos tipos.
la enfermedad hepática hacia una fase terminal y el • IVa. Múltiples quistes en los conductos biliares
resultado a largo plazo en los niños parece ser bueno. intrahepáticos y extrahepáticos.
Sin embargo, la recurrencia detrás el trasplante se ha • IVb. Múltiples quistes localizados únicamente
reportado en niños. en la vía biliar extrahepática.
24 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

– Tipo V: quistes en la vía biliar intrahepática que pue- Pero hasta 30 % de los quistes coledocales no poseen
den ser únicos o múltiples (enfermedad de Caroli). un canal biliopancreático común alargado, por lo que se
ha intentado formular otras teorías para explicar la for-
Los coledococeles, o quistes de tipo III de Todani, mación de los quistes. Por otro lado, algunos pacientes
son el tipo más raro, comprendiendo solo 1 % a 4 % con un conducto común largo no tienen quiste coledocal
de todos los casos reportados. asociado. Algunos autores sugieren que las anormali-
dades de la unión biliopancreática solo es responsable
Patogenia de los quistes tipo I y IV. En otros casos se ha invocado
La causa de los quistes coledocianos es desconocida, la existencia de factores hereditarios, infecciones por
no obstante, la teoría más aceptada basada consiste en virus o la reducción de las células ganglionares en la
la existencia de una anomalía de la unión biliopancreá- pared de la vía biliar.
tica, consistente en la formación de un largo conducto Como en todos los tipos de quistes coledocianos, la
común en ese nivel. Esto permite el reflujo del jugo etiología de los coledococeles (tipo III) no está clara.
pancreático hacia la vía biliar, con la consecuente in- Sin embargo, en contraste con la naturaleza congénita
flamación, denudación epitelial, adelgazamiento de la de los otros cuatro tipos de quistes coledocianos, va-
pared ductal y evolución hacia la formación quística. rios investigadores han sugerido que los coledococeles

Fig. 177.3. Clasificación de quistes del colédoco según Todani y colaboradores.


Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 25

pueden ser adquiridos. Los coledococeles pueden estar crónico. La luz del quiste se halla tapizada por epitelio
tapizados con mucosa duodenal y se reporta que su cilíndrico con glándulas dispersas en la pared. Varios
potencial de malignidad es más bajo que en los otros autores han descrito cambios hiperplásicos, metaplási-
tipos de quistes coledocianos. Este riesgo disminuido cos (tipo intestinal) y displásicos, estos últimos sugieren
de enfermedad maligna biliar y su ubicación anatómica una relación con el desarrollo de carcinoma.
ha llevado a un cambio en el tratamiento de los coledo-
coceles, desde la terapia quirúrgica a la endoscópica. Complicaciones
Puede ocurrir perforación espontánea de un quiste
Diagnóstico clínico de colédoco, particularmente cuando el flujo biliar está
La forma infantil de la enfermedad por quiste del obstruido. También puede provocar lesión hepática
colédoco debe distinguirse de otras formas de enfer- progresiva durante los primeros meses de vida como
medad hepatobiliar del recién nacido, en particular de resultado de la obstrucción biliar causada por enlente-
la atresia biliar. La enfermedad suele aparecer durante cimiento del flujo de bilis, barro biliar, tapones de pro-
los primeros meses de vida y 80 % de los pacientes teínas y cálculos compuestos de ácidos grasos y calcio.
presentan ictericia colestásica y heces acólicas. Suele Los quistes del colédoco predisponen a la formación
acompañarse de vómitos, irritabilidad y retraso del de cálculos, a la estenosis o estrechamiento, a la pan-
crecimiento. creatitis y a complicaciones biliares obstructivas. De
El examen físico revela hepatomegalia y una masa 2 % a l8 % de los pacientes con quistes del colédoco
abdominal palpable en aproximadamente la mitad de desarrollan carcinoma de vías biliares, el adenocarci-
los pacientes. La presencia de ictericia intermitente y la noma bien diferenciado es el patrón morfológico más
fiebre puede ser consecuencia de episodios recurrentes frecuente.
de colangitis. La triada clásica de dolor abdominal,
ictericia y una masa abdominal palpable se observa en Pronóstico
menos de 20 % de los pacientes. Los coledococeles parecen ser una enfermedad
distinta de los quistes coledocianos tipos I, II, IV y V
Exámenes complementarios de Todani. Los pacientes con coledococeles tienen más
El diagnóstico de un quiste de colédoco se puede probabilidad de llegar ser adultos y hombres, se pre-
establecer mediante ecografía. sentan más frecuentemente con pancreatitis en vez de
La ecografía prenatal puede ser utilizada para de- ictericia y colangitis, tienen más a menudo un pancreas
tectar un quiste de colédoco en el feto. Secuenciales divisum concomitante y son usualmente tratados endos-
ecografías han permitido el estudio de la evolución de cópicamente. Basado en este análisis y en la literatura,
los quistes de colédoco durante el embarazo. diversos autores creen que los coledococeles no deben
En el niño mayor, la colangiografía transhepática ser clasificados como quistes coledocianos.
percutánea o la colangiopancreatografía retrógrada
endoscópica pueden ayudar a definir las características Tratamiento
anatómicas del quiste, su sitio de origen biliar, la dispo- El reconocimiento y tratamiento de los quistes co-
sición de la unión biliopancreática, y la extensión de la ledocianos es necesario porque estos pacientes tienen
enfermedad intrahepática y extrahepática, incluyendo un riesgo significativamente aumentado a lo largo de
la presencia de estenosis intraductal y cálculos. su vida, de desarrollar enfermedades malignas biliares
La colangiopancreatografía por resonancia magnéti- letales.
ca nuclear se está utilizando cada vez más para evaluar El tratamiento de elección es la exéresis quirúrgica
la extensión del quiste y los defectos dentro del árbol del quiste con la reconstrucción de las vías biliares ex-
biliar y detectar las anomalías de la unión del conducto trahepáticas. El drenaje biliar se realiza normalmente
biliopancreático y es menos eficaz que la colangiopan- mediante un coledocoyeyunostomía con una anastomo-
creatografía retrógrada endoscópica para la detección sis Roux en Y. La escisión del quiste reduce la estasis
de anormalidades ductales menores y coledococeles biliar y el riesgo de colangitis y colangiocarcinoma.
pequeños en los adultos. La descompresión simple y el drenaje interno deben
En la biopsia la pared es de grosor variable (2 mm a hacerse solo cuando las características anatómicas
10 mm) y está constituida por tejido fibroso con escasas complicadas no permiten la extirpación completa.
fibras elásticas, músculo liso e infiltrado inflamatorio El seguimiento a largo plazo es fundamental porque
26 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

la colangitis recurrente, la litiasis, la estenosis de la dilatación sacular o fusiforme de la vía biliar predispone
anastomosis y la pancreatitis pueden desarrollarse años a un estancamiento de la bilis que lleva a la formación
después de la cirugía inicial. de barro biliar y la litiasis intraductal. La fiebre y la ic-
tericia intermitente pueden ocurrir durante los episodios
Dilatación congénita de los conductos de colangitis bacteriana.
Al examen físico la hepatoesplenomegalia se en-
biliares intrahepáticos (enfermedad cuentra en los casos relacionados con fibrosis hepática
y síndrome de Caroli) congénita, los pacientes afectados pueden presentar
sangrado por las várices esofágicas y pueden palparse
La dilatación no obstructivas acular o fusiforme de
riñones poliquísticos.
los conductos biliares intrahepáticos es una enfermedad
El dolor abdominal se presenta por la dilatación de
congénita rara.
las vías biliares, el íctero puede iniciar el cuadro clíni-
co y la fiebre secundaria al daño de los conductos y la
Clasificación
retención de bilis que puede evolucionar a la colangitis.
Existen dos formas de presentación:
– Enfermedad de Caroli: es una anomalía congénita Exámenes complementarios
muy rara caracterizada por una dilatación quística de
Las pruebas bioquímicas hepáticas pueden tener
las vías biliares intrahepáticas sin obstrucción biliar
resultados normales o mostrar elevaciones ligeras a
y frecuentemente asociada a infección (colangitis
moderadas de los niveles de la bilirrubina sérica, fos-
bacteriana recurrente), absceso hepático y litiasis.
fatasa alcalina y de las amino transferasas.
Las vías biliares extrahepáticas son normales. Por
La función de síntesis hepática está bien conservada,
lo general afecta a solo un segmento hepático o a
pero los episodios repetidos de infección y obstrucción
un lóbulo (frecuentemente el izquierdo). En 7 % de biliar en los conductos biliares quísticos eventualmente
los casos se complica con un colangiocarcinoma. pueden conducir a la insuficiencia hepática.
El parénquima hepático es normal, aunque puede La prueba de función renal anormal es el hallazgo
aparecer inflamación y fibrosis alrededor de las más frecuente, elevaciones variables de nitrógeno, de
zonas dilatadas como consecuencia de la infección. urea en sangre y creatinina sérica refleja la gravedad
Esta enfermedad puede ser aislada o acompañarse de la enfermedad renal subyacente.
de fibrosis hepática congénita, quistes del colédoco
y malformaciones renales. Imaginología
– Síndrome de Caroli: el tipo más común, se asocia La ecografía, la colangiopancreatografía por reso-
con una lesión del tracto portal típico de fibrosis nancia magnética y la tomografía computarizada son
hepática congénita. La dilatación de los conductos de gran valor para demostrar la dilatación quística
biliares extrahepáticos (quistes de colédoco) tam- de los conductos biliares intrahepáticos. Es típico el
bién puede estar presente. hallazgo de ramas de la porta rodeadas por conductos
biliares dilatados.
La enfermedad renal se presenta en las dos formas, la En la gammagrafía hepática con isótopos radioacti-
ectasia tubular renal ocurre con la enfermedad de Caroli vos, se observan áreas “frías” en etapas tempranas de
y ambas condiciones pueden estar asociadas con la en- la excreción hepatobiliar con retención y concentración
fermedad renal poliquística autosómica recesiva o, rara- del contraste en los conductos dilatados.
mente, con la enfermedad renal poliquística autosómica La colangiografía retrógrada endoscópica está in-
dominante. Las mutaciones del riñón poliquístico y el dicada solamente en los casos que se sospeche litiasis
gen 1 de enfermedad poliquistica hepática (PKHD1) biliar por la presencia de colangitis.
se han identificado en pacientes con enfermedad renal La colangiografía percutánea o endoscópica por
poliquística autosómica recesiva. lo general demuestra un conducto biliar normal con
dilataciones segmentarias, sacular de los conductos
Diagnóstico clínico biliares intrahepáticos.
Durante la infancia y la adolescencia los pacientes Los quistes renales o la hiperecogenicidad de las
suelen buscar atención médica a causa de dolor ab- papilas pueden ser detectados.
dominal y hepatomegalia. El trastorno aparece en el En raras ocasiones el proceso puede estar limitado
recién nacido como enfermedad renal o colestasis. La a un lóbulo del hígado.
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 27

Biopsia colangitis crónica con deterioro rápido y progresivo


Los quistes sintrahepáticos se encuentran en conti- de la función hepática. La existencia de un lago biliar
nuidad con el tracto biliar y revestido por un epitelio infectado, puede requerir antibióticos por vía paren-
hiperplásico que pueden ulcerarse. Los quistes pueden teral de forma prolongada, otra posible complicación
contener bilis espesa, cálculos y material purulento. es la formación de un absceso, tributario de drenaje
Las muestras de biopsia del hígado pueden revelar quirúrgico. Ambas situaciones se identifican mediante
tejido normal o características de colangitis aguda o estudios ecográficos.
crónica. Pueden estar presentes edema del tracto portal Los cálculos con frecuencia se desarrollan dentro de
y fibrosis. En los casos relacionados con fibrosis hepá- los conductos biliares dilatados y pueden complicar el
tica congénita, se puede encontrar malformación de la tratamiento de la colangitis.
placa ductal, el lumen del conducto biliar portal forma La eliminación de cálculos por medio de cirugía,
un epitelio revestido circular hendido que rodea a un endoscopia o litotricia generalmente no es factible.
núcleo central de tejido conectivo vascularizado o una La resección hepática está indicada para la enfer-
serie de lúmenes de conductos biliares dispuestos en un medad limitada a un solo lóbulo.
círculo alrededor de un núcleo de tejido fibroso central. Los procedimientos quirúrgicos de drenaje por lo
general no son efectivos y se pueden complicar después
Complicaciones del trasplante hepático.
La evolución clínica se caracteriza por episodios El tratamiento con ácido ursodesoxicólico se ha
recurrentes de colangitis donde puede ocurrir sepsis y utilizado con éxito para disolver los cálculos intrahe-
abscesos hepáticos. Los pacientes que tienen una litiasis páticos.
intrahepática pueden experimentar dolor abdominal El trasplante hepático es una opción en pacientes
intratable. con enfermedad extensa y complicaciones frecuentes,
El colangiocarcinoma se puede desarrollar dentro como la colangitis refractaria.
de los conductos biliares anormales. La hipertensión
portal y la hemorragia por varices pueden predominar Escasez de conductos biliares
en los pacientes con fibrosis hepática congénita y la interlobulares no sindrómica
enfermedad de Caroli.
Se desarrolla enfermedad renal en etapa terminal La escasez de los conductos biliares interlobulares se
en los pacientes a los que se asocia una enfermedad ha definido como una relación del número de conductos
renal poliquística. biliares interlobulares con el número de tractos portales,
menor que 0,4. Por lo menos 10 espacios porta deben ser
Pronóstico examinados en una muestra de biopsia de hígado para
El pronóstico en el contexto de una infección per- estar seguros en que la escasez de conductos biliares
sistente o recurrente es malo. está presente.
La anomalía estructural también se ha referido como
Tratamiento atresia biliar intrahepática o hipoplasia biliar intrahe-
pática, sin embargo, este término implica una visión
El tratamiento consiste fundamentalmente en el uso
más clara en la patogénesis de la escasez ductular que
de antibióticos para controlar o prevenir la colangitis
prevalece actualmente.
secundaria, ascendente, aislada o recurrente, que agra-
van la disfunción hepática ya existente. Se recomiendan
Etiología
antibióticos con eliminación preferente por vía biliar
como la amoxicilina más ácido clavulánico, la combi- Puede ser un hallazgo aislado y sin explicación
nación de un aminoglucósido con una cefalosporina de en lactantes y niños con colestasis idiopática o una
tercera generación como la ceftriaxona es igualmente característica de un grupo heterogéneo de trastornos
una buena opción en espera del antibiograma, a la do- que incluyen infecciones congénitas con rubéola,
sis de 50 mg/kg/día a 70 mg/kg/día en dos dosis y la citomegalovirus y trastornos genéticos tales como la
amikacina a 10 mg/kg/día que han demostrado buenos deficiencia de α-1-antitripsina y los errores innatos
resultados. del metabolismo de los ácidos biliares. También se ha
La falta de respuesta al tratamiento o un tratamien- observado en algunos casos de síndromes de Williams
to no adecuado puede conducir a una situación de y de Noonan.
28 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Puede ocurrir sin anomalías de desarrollo asociadas para el conocimiento de la función del gen Jagged 1
y sin una infección intrauterina documentada o trastorno en el crecimiento y desarrollo de los ductos biliares,
genético, sin embargo, esta forma idiopática no sindró- que puede ser relevante en niños que no presentan
mica de escasez de conducto de la bilis es probable que enfermedad hepática aparente, así como en la relación
sea heterogénea en su causa con características clínicas fenotipo-genotipo.
y pronósticos muy variables. Las mutaciones en el Jagged 1 de genes se han
identificado en aproximadamente 94 % de los pacientes
Diagnóstico clínico afectados e incluyen supresiones totales de genes, así
La colestasis normalmente se desarrolla temprano como proteínas truncadas, empalmes, y mutaciones
en la infancia y puede estar asociada con enfermedad erróneas.
hepática progresiva. El trastorno puede afectar únicamente a un miembro
de la familia, en tales casos puede representar mutacio-
nes espontáneas del gen Jagged 1. Alternativamente es
Síndrome de escasez de conductos posible que la variabilidad en la expresión génica, sea
bilares interlobulares (síndrome tan grande que afecta mínimamente a miembros de la
Alagille o displasia arteriohepática) familia y no se diagnostican.

El síndrome de escasez de conductos biliares interlo- Diagnóstico clínico


bulares (síndrome de Alagille o displasia arteriohepática
Los signos de colestasis crónica de diversa gravedad
o paucidad de vías biliares intrahepática sindrómica)
afecta 95 % de los pacientes. La presencia de ictericia y
es la forma más frecuente de colestasis intrahepática
heces fecales de color de arcilla se pueden observar du-
familiar.
rante el periodo neonatal y se manifiestan en la mayoría
Se caracteriza por colestasis crónica, una disminu-
de los pacientes durante los primeros dos años de vida.
ción del número de conductos biliares interlobulares y
El prurito intenso puede estar presente a los seis meses
una variedad de malformaciones congénitas.
de edad. Frecuentemente existe hepatoesplenomegalia.
Patogenia Durante los primeros años de vida aparecen xan-
tomas en las superficies de extensión de los dedos y
Una alteración en el cromosoma 20 fue detectado en los pliegues de las palmas y zonas poplíteas. Estos
en algunos pacientes y condujo a la identificación del pacientes se reconocen por una facies distintiva duran-
gen del síndrome de Alagille. te la infancia (facies dismórfica) que se vuelven más
La enfermedad se hereda con carácter autosómico característica con la edad. En estos la frente es típica-
dominante, con penetrancia incompleta, pero con mente ancha, los ojos están hundidos y muy separados
una alta variable expresión. El locus responsable se y la mandíbula es un poco pequeña y puntiaguda, que
encuentra en el brazo corto del cromosoma 20, obser- imparte un aspecto triangular a la cara. La eminencia
vándose en algunos pacientes una delección intersticial malar se aplana y las orejas son prominentes. Se han
en esta área. Se estima entre 15 % a 50 % de nuevas descrito anomalías extrahepáticas con este síndrome,
mutaciones. pero la expresión fenotípica varía considerablemente.
Más recientemente dos grupos independientes de Puede presentarse colestasis en 96 %, soplo cardiaco
investigadores han descubierto una serie de mutaciones en 97 %, vértebras en mariposa en 51 %, embriotoxon
en el gen humano Jagged 1 como defecto básico del posterior (disgenesia mesodérmica del iris y la córnea)
síndrome de Alagille. en el 78 %, y la facies característica en 96 % de los
El Jagged 1 es el homólogo humano del gen Jagged pacientes. La estatura pequeña es una característica
1 de las ratas, que codifica un ligando de Notch 1, que es regular, pero atribuido solo en parte a la gravedad de
uno de los cuatro miembros de una familia de proteínas la colestasis crónica. La insensibilidad de la hormona
transmembranarias con factor de crecimiento epidérmi- del crecimiento asociado con elevados niveles circu-
co (EGF)-like. La expresión de Notch 1 y su ligando se lantes de la hormona de crecimiento unida a la proteína
relaciona con muchos de los órganos potencialmente se ha descrito en estos pacientes. El 15 % a 20 % de
afectados en el síndrome de Alagille (corazón, riñón los pacientes presentan un ligero a moderado retraso
e hígado fetal). Las mutaciones conllevan proteínas mental. En la mayoría de los pacientes se observa una
inactivas, no se puede compensar con la expresión del enfermedad cardiaca congénita y estenosis pulmonar
gen residual. Estos descubrimientos abren las puertas periférica. También pueden estar presentes malfor-
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 29

maciones vasculares sistémicas. Las anormalidades escasez de conductos biliares. La escasez de conductos
óseas observadas en estos pacientes incluyen una edad biliares interlobulares suele ser evidente después de
ósea disminuida, acortamiento variable de las falanges tres meses. También puede estar presente leve fibrosis
distales y defectos en el arco vertebral (por ejemplo, periportal, pero la progresión a cirrosis no es frecuente.
mariposa vértebras, hemivértebras, y una disminución Los conductos biliares extrahepáticas están presentes,
en la distancia interpedicular). El examen oftalmo- pero por lo general estrechos o hipoplásicos. Estudios
lógico puede revelar anomalías oculares incluyendo ultraestructurales han demostrado la acumulación de
embriotoxon posterior, la pigmentación de la retina y pigmento biliar en el citoplasma cerca de los lisosomas
las hebras del iris. Por último, también se han descrito y vesículas en el espacio convexo exterior del aparato de
anomalías renales e hipogonadismo. Golgi. Los canalículos biliares más a menudo parecen
ser estructuralmente normal, pero en algunos casos
Exámenes complementarios puede parecer estar dilatados con acortamiento de las
Existe alteración del patrón de colestasis. Los ni- microvellosidades.
veles de fosfatasa alcalina sérica, la gamma glutamil A manera de resumen la enfermedad se caracteriza
transpeptidasa y la 5’-nucleotidasa pueden ser muy por una serie de manifestaciones consideradas como
altos y se correlacionan poco con el grado de colestasis. mayores:
Los exámenes de laboratorio muestran una eleva- – Paucidad: más de la mitad de espacios porta sin
ción de los niveles de bilirrubina sérica total (por lo ductus biliares o ausencia de ductos biliares intra-
general mayor que 11 mmol/L) durante la infancia y hepáticos en la biopsia hepática que se manifiesta
de forma intermitente en el futuro. Aproximadamente como colestasis crónica.
50 % de la bilirrubina total en suero es conjugada. – Facies peculiar: hipertelorismo, frente abombada,
Los niveles séricos de amino transferasas están de mentón prominente, ojos hundidos y nariz en silla
ligero a moderadamente aumentados. o recta.
El colesterol del suero puede estar elevado al igual – Anomalías vertebrales: vértebras en mariposa.
que las concentraciones de triglicéridos. – Embriotoxon ocular posterior.
Las concentraciones séricas de ácidos biliares son – Cardiopatía congénita: principalmente estenosis
marcadamente elevadas, pero el perfil de los ácidos arterial pulmonar periférica.
biliares en el suero, la orina y bilis no difieren cua- Pueden existir otras anomalías, consideradas como
litativamente de los observados en otros trastornos menores:
colestásicos. – Xantomas secundarios a hipercolesterolemia.
– Malnutrición.
Biopsia hepática – Infecciones pulmonares recurrentes.
La característica histológica de esta afección es la – Insuficiencia pancreática e hipotiroidismo.
escasez de conductos biliares interlobulares. La escasez – Anomalías vasculares: enfermedad de Moya Moya,
puede definirse como una relación significativamente alteraciones de los radicales venosos portales in-
disminuida del número de conductos biliares portal trahepáticos, anomalías vasculares cerebrales con
interlobulares a los de los espacios porta (menor que riesgo de hemorragia intracraneal.
0,4). Las características histológicas durante los pri- – Anomalías neurológicas: neuropatía periférica se-
meros meses de vida pueden semejar con los de la cundaria a déficit de vitamina E.
hepatitis neonatal, en los que puede haber dilatación de – Hipogonadismo y pubertad retrasada.
los hepatocitos, colestasis variable, inflamación portal – Retardo mental.
y transformación de células gigantes. A menudo el – Voz atiplada-ronca.
número de conductos biliares interlobulares no dismi- – Alteraciones renales: nefrolitiasis, defectos en la
nuye en las muestras iniciales en la biopsia de hígado, concentración, hipoplasia, duplicidad y quistes.
pero las lesiones del conducto biliar que consiste en la
infiltración celular de tríadas portales contiguos a los El diagnóstico se basa en la presencia de al menos
conductos biliares interlobulares, la infiltración linfo- tres criterios mayores (forma incompleta) o de cuatro
cítica y picnosis de epitelio biliar y fibrosis periductal, (forma completa). La facies típica puede no ser evi-
pueden ser evidentes. Diversos fragmentos de biopsia dente en los primeros meses de vida y la colestasis
de un paciente pueden inicialmente mostrar la prolife- se manifiesta en 45 % de los casos en los primeros
ración de conductos biliares, seguido más tarde por la tres meses de vida, mientras que en 75 % restante
30 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

se presenta entre los cuatro meses y los tres años de Tratamiento nutricional
edad, típicamente la colestasis suele ser periódica con La malnutrición proteico-calórica conduce a la falta
episodios intercurrentes de remisión. Evolutivamente de crecimiento y es una consecuencia inevitable de la
(a partir del sexto mes) 85 % presenta prurito, que suele enfermedad hepática crónica en 60 % de los niños. La
ser persistente. En los primeros meses de vida puede esteatorrea es común en niños con colestasis, como
no ser evidente la escasez ductular biliar y mostrar le- resultado de la alteración de la lipólisis intraluminal, la
siones de colestasis intrafamiliar o hepatitis neonatal. solubilización y la absorción intestinal de triglicéridos
Es aconsejable realizar estudios para descartar posibles de cadena larga. Los triglicéridos de cadena media no
malformaciones vasculares cerebrales y advertir a la requieren solubilización por las sales biliares antes de
familia la posibilidad de poder presentarse evolutiva- la absorción intestinal y por lo tanto pueden proporcio-
mente una hemorragia cerebral. nar las calorías necesarias cuando se administran por
vía oral en una de las diversas fórmulas comerciales o
Pronóstico suplementos de aceite.
En las primeras series publicadas por Alagille
Tratamiento de déficit de vitaminas liposolubles
se sugería un relativo buen pronóstico con 85 % de
supervivencia, refrendado por otras series como la de Debido a la insuficiencia biliar, estos pacientes
Deprettere con 75 % de supervivencia, aunque con deben recibir suplementos de vitaminas liposolubles
más morbilidad entre los supervivientes. Sin embar- (vitamina A, D, E y K).
go, en estas series se incluían los familiares de los La enfermedad ósea metabólica se manifiesta como
afectados también con la enfermedad, que presentan raquitismo y fracturas patológicas y puede ser con-
formas menos severas de la enfermedad o incompletas secuencia de la deficiencia de vitamina D. Esta debe
y por tanto con mejor pronóstico. Así se han descrito ser proporcionados como D2 (5 000 U/día) o como
en supervivientes en la edad adulta, complicaciones 25-hidroxicolecalciferol (3 µg/kg/día a 5 µg/kg/día).
como hepatocarcinoma, insuficiencia pancreática, Los suplementos de calcio elemental (50 mg/kg/día a
insuficiencia hepatocelular y renal, hipotiroidismo y 100 mg/kg/día) y fósforo (25 mg/kg/día a 50 mg/kg/día)
retraso mental. Otros autores como Hoffenberg, estu- también puede ser necesaria. La masa ósea se reduce
diando a los pacientes con la enfermedad en los que en los niños colestásicos incluso con suero normal de
las manifestaciones comenzaron en la infancia y donde 25-hidroxivitamina D, posiblemente relacionadas con el
no se incluyen familiares, solo encuentran 50 % de deterioro del factor I de crecimiento ligado a la insulina,
supervivencia a la larga en pacientes que no recibieron producida por el hígado.
trasplante hepático, indicando un peor pronóstico que La xeroftalmia, ceguera nocturna y el engrosamien-
to de la piel se han reportado en pacientes que tienen
en las series anteriores.
deficiencia de vitamina A. A estos se debe administrar
El pronóstico a largo plazo depende de la grave-
suplementos orales de vitamina A, de 5 000 U/día a
dad de la enfermedad hepática y las malformaciones
25 000 U/día.
asociadas.
El déficit de vitamina K y la coagulopatía asociada
puede ser tratado inicialmente con un suplemento oral
Tratamiento
soluble en agua administrado en dosis de 2,5 mg a 5
No existe cura para este síndrome, por lo que el mg dos veces por semana hasta 5 mg al día. Los niños
tratamiento es principalmente sintomático. que no responden o que tienen un sangrado significativo
La enfermedad colestásica en los niños afecta su requieren inyecciones intramusculares de vitamina K.
estado nutricional, el crecimiento y desarrollo, lo que La deficiencia crónica de vitamina E puede provocar
contribuye al aumento de la morbilidad y la mortali- una discapacidad, el síndrome degenerativo neuromus-
dad en edades tempranas. En un niño con enfermedad cular caracterizado por arreflexia, oftalmoplejía, ataxia
colestásica crónica y progresiva, los esfuerzos deben cerebelar, neuropatía periférica y disfunción columnar
estar dirigidos a promover el crecimiento y el desarrollo posterior. Su inicio puede ser observado dentro de los
y reducir al mínimo las molestias. primeros dos años de vida.
El tratamiento consiste en la provisión de una in-
gesta calórica adecuada, prevención o corrección de Tratamiento del cantoma y prurito
deficiencias de vitaminas liposolubles y las medidas Los xantomas y el prurito pueden causar moles-
sintomáticas para aliviar el prurito. tias considerables. El prurito puede ser observado
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 31

a los tres meses de edad. El éxito de la terapia para La supervivencia y la candidatura para el trasplante
el prurito depende de la presencia de los conductos de hígado pueden estar limitadas por la gravedad de las
biliares permeables que permiten que los ácidos bi- anomalías cardiovasculares asociadas.
liares y otros constituyentes biliares lleguen a la luz
del intestino. Algunos fármacos son utilizados para Colelitiasis
mejorar el flujo biliar y reducir el prurito: ácido urso-
deoxicólico, hidroxizina, colestiramina, rifampicina y Epidemiología
fenobarbital, que han tenido cierto grado de eficacia en
La colelitiasis es poco frecuente en niños sanos y
el tratamiento sintomático. La derivación biliar se ha
por lo general se presenta en pacientes que tienen una
utilizado como una alternativa de éxito para aliviar el
condición predisponente.
prurito intratable en algunos pacientes con colestasis
intrahepática. Un estudio ultrasonográfico realizado en 1 570
El antibiótico rifampicina y el ácido biliar ácido ur- personas (entre 6 a 19 años) detectó cálculos biliares
sodesoxicólico se utilizan para el tratamiento del prurito en solo dos pacientes del sexo femenino, de 13 y 18
con diversos grados de éxito. Debido a la evidencia años. La prevalencia de la enfermedad biliar fue de
de que un componente del prurito puede ser de origen 0,13 % (0,27 % en pacientes femeninos). La mayoría
neurogénico central mediado por un sistema receptor de los casos salen a la luz cerca de la época de la
de opiáceos, los antagonistas de los receptores opioides pubertad, pero los cálculos biliares se han reportado
como la naltrexona son eficaces en algunos pacientes a cualquier edad, incluso durante la vida fetal. Los
que no responden a otros agentes, sin embargo, los cálculos biliares pigmentados predominan en lactan-
efectos secundarios, los síntomas de abstinencia y la tes y niños.
falta de experiencia en niños limitan el uso de estos
medicamentos. Etiología
La colestiramina, resina de intercambio de anio- Una causa subyacente de la colelitiasis puede ser
nes no absorbible se puede usar para unirse a ácidos identificada en más de la mitad de los niños con co-
biliares, colesterol y presumiblemente otros agentes lecistitis litiásica. Existen condiciones asociadas con
potencialmente tóxicos en el lumen intestinal. Este colelitiasis en niños y su relativa frecuencia acorde
medicamento puede reducir los niveles de lípidos en con la edad:
suero y se unen a las sustancias que intervienen en la – Cero a 12 meses:
patogénesis del prurito. Una dosis de 0,25 g/kg/día a • Cirugía abdominal.
0,5 g/kg/día se administra antes del desayuno o en dosis • Nutrición parenteral total.
divididas antes de las comidas para aliviar el prurito • Sepsis.
severo y los xantomas.
• Displasia broncopulmonar.
La colestiramina es relativamente difícil de degustar
• Enfermedad hemolítica.
y conlleva riesgos para obstrucción intestinal, causada
• Malabsorción intestinal.
por espesamiento de las heces que provoca el medica-
• Enterocolitis necrotizante.
menteo y la acidosis hiperclorémica. El prurito también
• Enfermedad hepatobiliar.
se ha tratado con la exposición a la luz ultravioleta B.
– Uno a cinco años:
La morbilidad puede resultar del prurito, xantomas
• Enfermedad hepatobiliar.
cutáneos y síntomas neuromusculares relacionados con
• Cirugía abdominal.
la deficiencia de vitamina E.
La cirugía se aplica en caso de alteraciones cardiacas • Válvula cardiaca.
severas. Además, debido a la estenosis de las arterias • Malabsorción.
pulmonares, es frecuente realizar procedimientos con – Seis a 21 años:
el fin de dilatar las arterias (procedimientos similares • Embarazo.
a la angioplastía o incluso el uso de stent). • Obesidad.
El trasplante de hígado es una alternativa viable en • Enfermedad hemolítica.
el caso de insuficiencia hepática severa. La derivación • Cirugía abdominal.
biliar parcial externa puede ser eficaz para tratar el • Malabsorción intestinal.
prurito severo e hipercolesterolemia en pacientes sin • Enfermedad hepatobiliar.
cirrosis que no responden a la terapia médica. • Nutrición parenteral total.
32 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Patogenia En pacientes asintomáticos sin anormalidades


bioquímicas en los exámenes complementarios, el tra-
En la patogenia de los cálculos biliares se pueden
tamiento debe ser expectante. En pacientes que tienen
presentar algunos factores que asumen una mayor
enfermedades asociadas como, por ejemplo, las ane-
importancia durante la infancia y la niñez. Se reporta
mias hemolíticas y enfermedades ileales debe evaluarse
en recién nacidos prematuros sometidos a un periodo
el riesgo-beneficio que conlleva la operación, al igual
de ayuno prolongado sin estimulación frecuente de
que en pacientes que presenten enfermedades hepáticas
la contracción de la vesícula que requieren periodos
crónicas, obesidad o fibrosis quística que presenta un
de nutrición parenteral prolongada un aumento en la
alto riesgo para la cirugía.
frecuencia de colecistitis litiásica. Muchos de estos
pacientes tienen evoluciones médicas complicadas que
incluyen transfusiones de sangre frecuentes, episodios Colecistitis calculosa
de sepsis, cirugía abdominal y el uso de diuréticos y La colelitiasis puede estar asociada con un cuadro
analgésicos narcóticos. En estos casos se han demos- de inflamación aguda o crónica de la vesicular biliar.
trado la presencia de cálculos mixtos de bilirrubinato
de calcio y colesterol. En el niño críticamente enfermo Patogenia
puede existir una vesícula biliar agrandada, distendida,
llena de lodo biliar para el eventual desarrollo de la La colecistitis aguada ocurre por la impactación
colelitiasis. de un cálculo en el conducto cístico, lo que provoca
un incremento progresivo de la presión intravesicular
Diagnóstico clínico secundaria al acúmulo de la bilis, la presencia de litia-
sis, el efecto irritante de los ácidos biliares que lleva
La generalidad de los pacientes son asintomáticos y progresivamente a la inflamación, congestión y com-
la litiasis se descubre durante estudios por otra afección promiso vascular. Puede ocurrir isquemia, gangrena y
o durante pesquizajes realizados a pacientes con alto perforación de la vesícula. La proliferación de bacterias
riesgo de colelitiasis. Se puede presentar dolor inter- en esta vesícula obstruida contribuye al proceso y des-
mitente abdominal de variable severidad, localizado encadena la sepsis biliar.
mayormente en el cuadrante superior derecho en niños
mayores, pero mal definido en niños pequeños. Diagnóstico clínico.
Los hallazgos al examen físico usualmente son po-
bres. Un malestar a la palpación en el cuadrante superior En el cuadro agudo el dolor en el hipocondrio de-
derecho, puede existir vesícula palpable si el cálculo ha recho es un hallazgo constante en la colecistitis aguda.
El dolor en niños esta pobremente localizado. Existen
migrado al cuello y obstruye el cístico. El niño muestra
náuseas y vómitos frecuentes. Los niños pueden pre-
irritabilidad, ictericia y heces acólicas.
sentar ictericia con mayor frecuencia que los adultos.
Exámenes complementarios. El paciente puede parecer severamente enfermo con
respiración superficial, febril y sudorosa. La reacción
Los resultados de los análisis bioquímicos del peritoneal con signo de Murphy está presente, con dolor
hígado usualmente son normales. El ultrasonido del exquisito en el cuadrante superior derecho donde puede
abdomen como técnica de imagen es considerado la palparse la vesícula.
de mayor sensibilidad y especificidad diagnóstica. Se El cuadro de colecistitis crónica es generalmente
muestra una imagen ecogénica con sombra acústica. indoloro. La evolución clínica puede estar marcada
por episodios recurrentes de malestar en el hipocondrio
Tratamiento derecho.
La colecistectomía laparoscópica es el tratamiento El examen físico puede ser totalmente negativo o
de elección actualmente en este tipo de afección en presentar solo ligeras molestias en el cuadrante superior
pacientes sintomáticos. La exploración y colangiografía derecho.
intraoperatoria está indicada en base a los hallazgos en-
contrados en los exámenes de laboratorio y de imagen. Exámenes complementarios
Si existe una litiasis coledociana se puede realizar una En la colecistitis aguda los leucocitos están elevados
esfinterotomía endoscópica con extracción del cálculo con predominio de los polimorfonucleares. Los niveles
por colangiopancreatografía retrógrada endoscópica. de la bilirrubina sérica y fosfatasa alcalina pueden estar
Capítulo 177. Anomalías congénitas y adquiridas de la vesícula biliar y de las vías biliares extrahepáticas 33

elevados. Los valores de amino transferasas pueden ser Exámenes complementarios.


normales, pero pueden elevarse ligeramente en la fase
Existen leucocitos en el examen de sangre. Los exá-
aguda de la obstrucción aguda del conducto biliar o
menes de laboratorios revelan elevación en el suero de
cuando hay enfermedad hepática asociada. En pacien-
los niveles de fosfatasa alcalina y bilirrubina conjugada.
tes con colecistitis crónica, los análisis completos de El ultrasonido abdominal muestra una vesícula biliar
sangre y bioquímicos del hígado usualmente están en alargada, con imagen de doble contorno, que puede
valores normales. estar distendida con barro biliar, pero sin observarse
El ultrasonido abdominal es extremadamente útil en imagen de litiasis.
revelar la presencia de litiasis en la vesícula y, además,
puede demostrar dilataciones del árbol biliar secundario a Tratamiento
la obstrucción por cálculos. La resonancia magnética nu-
clear puede demostrar resultados similares, pero requiere Algunos pacientes responden al tratamiento médico
de anestesia general en recién nacidos y niños pequeños. con aspiración nasogástrica, fluidos intravenosos y
antibióticos. La colecistectomía puede ser requerida
Tratamiento en algunos casos asociados con incremento de la dis-
tensión vesicular, del doble contorno y persistencia del
El cuadro agudo debe tratarse con fluidos intraveno- material ecogénico sin sombra acústica o barro biliar
sos, analgésicos y antibióticos de amplio espectro. Una y la presencia de líquido perivesicular. Usualmente
vez resuelto el cuadro se debe realizar colecistectomía hay que realizar colecistectomía abierta o laparotomía
laparoscópica, que es una técnica actualmente bien con drenaje por colecistostomía por la posibilidad de
establecida para el tratamiento de esta afección una gangrena vesicular o absceso vesicular. Algunos niños
vez controlado el episodio agudo y es el tratamiento de presentan síntomas crónicos de dolor en el cuadrante
elección en la colecistitis crónica calculosa. superior derecho acompañando de náuseas y vómitos.
Los exámenes de sangre y bioquímicos resultan usual-
Colecistitis acalculosa mente normales. Estos pacientes generalmente tienen
inflamación crónica de la vesícula que llegan a requerir
La colecistitis acalculosa es una inflamación aguda colecistectomía.
de la vesicular sin cálculos. Esta afección no es frecuen-
te en niños, pero puede verse asociado con infecciones
o enfermedades sistémicas.
Hidropesía aguda de la vesícula biliar
Es una distensión aguda no calculosa, no infla-
Patogenia matoria de la vesícula que puede ser observada en
Los gérmenes patógenos capaces de provocar este recién nacidos y niños. La vesícula no está inflamada
tipo de afección incluyen Streptococos grupo A y B, y los cultivos de la bilis son estériles. La ausencia de
Leptospira interrogans, organismos gramnegativos inflamación vesicular y buen pronóstico distingue la
tales como especies de Salmonella y Shigella y Es- colecistitis aguda acalculosa de la hidropesía aguda de
cherichia coli, infecciones parasitarias con especies la vesícula biliar.
de Ascaris o Giardia lamblia. En pacientes inmunode-
Etiología
primidos, gérmenes patógenos como la Isospora belli
y citomegalovirus, Cryptosporidium, Aspergillus y La colecistitis acalculosa puede ocurrir en niños
especies de cándida. Puede verse también en pacientes con nutrición parenteral prolongada. En otros casos la
con vasculitis sistémica que incluyen la periarteritis nu- causa no es identificada.
dosa, lupus eritematoso sistémico y el nódulo linfático
mucocutaneo (enfermedad de Kawasaki). Patogenia
Esta puede ocurrir por una adenitis mesentérica
Diagnóstico clínico generalizada de ganglios linfáticos cerca del conducto
Los hallazgos clínicos incluyen dolor epigastrio o en cístico sin compresión mecánica. Existe una relación
el cuadrante superior derecho, náuseas, vómitos, fiebre temporal con otras infecciones que incluyen la fiebre
y ocasionalmente ictericia. El malestar en el cuadrante escarlata y la leptospirosis. Igualmente se ha asociado
superior derecho y la vesícula dolorosa a la palpación con la enfermedad de Kawasaki y la púrpura de Shön-
puede estar presente. lein-Henoch.
34 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Diagnóstico clínico Bonnard, A., Seguier-Lipszyc, E., Liguory, C. (2005). Laparoscopic


approach as primary treatment of common bile duct stones in
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estar ligeramente elevados. El conteo de leucocitos Pediatr Gastroenterol Nutr, 46, 111-112.
también puede estar elevado. Algunos de estos resul- De Albuquerque Taveira, A. T., Fernandes, M. I., Galvao, L. C.
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Capítulo 178
Trastornos de la motilidad
de la vesícula y de vías biliares
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

La vía biliar recibe la bilis producida por el hígado y colecistectomizados, pero también la pueden presentar
regula su flujo al duodeno. El desarrollo de esta función los que conservan íntegro el árbol biliar. La disfunción
depende de la actividad motora tanto de la vesícula pancreática del esfínter de Oddi puede encontrarse en
biliar como del esfínter de Oddi. pacientes con pancreatitis aguda recidivante de causa
La ingesta es el estímulo natural para la contracción desconocida.
vesicular (mediada por la colecistoquinina) que provo- La disfunción del esfínter de Oddi es una anomalía
ca la excreción de bilis al duodeno, necesaria para la motora, que por lo general resulta en un esfínter hi-
digestión. Durante el periodo interdigestivo (ayuno), pertónico y que provoca una obstrucción benigna no
la vesícula también presenta contracción (mediada calculosa al flujo de jugo biliar o pancreático a través
por motilina) que provoca el vaciamiento parcial de la de la unión pancreatobiliar, la que se puede manifestar
vesícula, lo que evita la hiperconcentración de la bilis clínicamente por dolor abdominal crónico, episodios de
y su precipitación formando microcristales. pancreatitis o pruebas bioquímicas de función hepática
El acoplamiento funcional que existe entre la anormal.
contracción vesicular y la relajación del esfínter de Tanto la disfunción vesicular como la del esfínter
Oddi garantiza el acceso normal de la bilis vesicular de Oddi predominan en mujeres y tienen una expresión
al duodeno. clínica similar caracterizada por dolor abdominal de
El esfínter de Oddi (Fig. 178.1) constituye una ba- presentación episódica que por su semiología sugiere
rrera que se opone al tránsito libre bidireccional entre origen en el árbol biliopancreático. El dolor se presume
el colédoco y el duodeno. Es la barrera fisiológica para que es consecuencia de la obstrucción para el flujo bilio-
el flujo pancreático. El perfil motor de este esfínter es pancreático. Puede acompañarse de náuseas y vómitos,
característico, sobre una presión basal mayor que la tener irradiación a la espalda, a la región interescapular,
del duodeno y la de los conductos excretores biliar y presentarse después de una comida, durante la noche y
pancreático, se sobreimponen ondas de contracción de mejorar en posición engatillada en caso de disfunción
presentación fásica. pancreática del esfínter de Oddi.
Múltiples son las evidencias para aceptar la existen- El diagnóstico de disfunción biliar se establece a
cia de situaciones patológicas, con expresión clínica, partir de un síndrome clínico compatible en ausencia
relacionadas con trastornos motores de la vesícula de anomalía orgánica que lo justifique y se hace formal
biliar o del esfínter de Oddi. Ambas disfunciones se les al evidenciar trastorno motor vesicular o del esfínter
reconocen como enfermedad patológica propia, lo que de Oddi (pueden encontrarse asociados en un mismo
constituye un grupo específico de trastorno funcional paciente).
digestivo en el que se integra la disfunción vesicular y
la disfunción del esfínter de Oddi. Clasificación
La peculiaridad anatomofuncional que tiene el es-
fínter de Oddi explica que en su disfunción se pueda Disfunción vesicular
afectar el segmento biliar del esfínter, el pancreático o La ultrasonografía abdominal es la prueba de pri-
ambos simultáneamente. La disfunción biliar del es- mera elección, de indicación imperativa, para excluir
fínter de Oddi se sospecha, por lo común, en pacientes litiasis o barro biliar. El estudio microscópico de la bilis
Capítulo 178. Trastornos de la motilidad de la vesícula y de vías biliares 37

Fig. 178.1. Anatomía del esfínter de Oddi.

es necesario para descartar microlitiasis. La endoscopia retrógrada endoscópica se ha desarrollado por Hogan
digestiva alta es una prueba opcional que se indica, se- y Geenen para pacientes con sospecha de disfunción
gún las características del cuadro clínico, para investigar del esfínter de Oddi de tipo biliar (Tabla 178.1) y pan-
la patología del tracto digestivo superior. creática (Tabla 178.2). Ambos sistemas de clasificación
La colecistogammagrafía es la prueba más fiable biliar y pancreática se han modificados para facilitar su
para identificar la disfunción vesicular, expresada por aplicación en la práctica clínica, desechando los tiempos
una disminución del vaciamiento estimulado con un de drenajes tanto biliares como pancreáticos, conocida
colecistoquinético: perfusión endovenosa de colecisto- también como clasificación de Milwaukee.
quinina. Se considera anormal una fracción de eyección
vesicular inferior al 40 %. Fisiopatología
La patogénesis de la disfunción del esfínter de Oddi
Disfunción del esfínter de Oddi se señala como una obstrucción pasiva del esfínter de
Dado que a menudo es imposible distinguir a los Oddi causada por fibrosis o inflamación, o una obs-
pacientes con discinesia del esfínter de Oddi de los que trucción activa originada por espasmo del músculo
presentan estenosis, el término disfunción del esfínter del esfínter. Estos dos mecanismos de obstrucción
de Oddi se ha utilizado para incorporar a los dos gru- del esfínter de Oddi no son excluyentes entre sí, pues
pos de pacientes. Una variedad de términos como la pueden aparecer aislados o al unísono.
estenosis papilar, estenosis ampular, disquinesia biliar Así se señala que la disfunción del esfínter de Oddi
y síndrome poscolecistectomía, figuran en la literatura es causa posible de tres condiciones clínicas.
médica para describir esta enfermedad. Este último es – Dolor de tipo biliar recurrente o persistente después
un término inapropiado, ya que la disfunción del esfín- de la colecistectomía en ausencia de anormalidades
ter de Oddi puede ocurrir con una vesícula biliar intacta. estructurales.
En un intento por hacer frente a esta confusión, – Episodios de pancreatitis aguda idiopática.
basado en las tres estructuras que componen la anato- – Dolor de tipo biliar en pacientes con vesicular intac-
mía del esfínter de Oddi, un sistema de clasificación ta sin cálculos: la menos estudiada y la asociación
clínica, de laboratorio y de la colangiopancreatografía clínica más controversial.
38 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Tabla 178.1. Tipos de disfunción biliar del esfínter de Oddi (Hoogan-Geenen, 1989)
Parámetros Disfunción del esfínter Disfunción del esfínter Disfunción del esfínter
de Oddi I de Oddi II de Oddi III
Dolor tipo biliar Sí Sí Sí
Elevación enzimas Sí 1o2 No
Diámetro del colédoco > 12 mm No
Eliminación del contraste > 45 min No
Presión basal esfínter de Oddi mayor que 70 % a 85 % 50 % a 55 % 10 % a 30 %
40 mmHg

Tabla 178.2. Tipos de disfunción pancreática del esfínter de Oddi (Hoogan-Geenen, 1989)
Parámetros Disfunción del esfínter de Disfunción del esfínter de Disfunción del esfínter de
Oddi I Oddi II Oddi III
Dolor tipo pancreático Sí Sí Sí
Elevación enzimas Sí 1o2 No
Diámetro del conducto pancreático No
principal:
Cabeza > 6 mm
Cuerpo > 5 mm
Eliminación del contraste > 10 min No
Presión basal esfínter de Oddi mayor que 90 % 58 % 35 %
40 mmHg

La disfunción del esfínter de Oddi también se ha quirúrgicas en pacientes con disfunción del esfínter de
descrito en pacientes a los que se les realizo trasplante Oddi, que tenían evidencia histológicas de inflamación,
hepático. hipertrofia muscular, fibrosis o adenomiomatosis en
La disfunción del esfínter de Oddi es causa conocida aproximadamente 60 % de los pacientes. El restante
de dolor por la dificultad al flujo de bilis y jugo pancreá- 40 % tenían una histología normal, lo que suponía
tico al duodeno a través del orificio papilar, resultando un trastorno de tipo motor. En otro reporte similar,
en una hipertensión ductal en el conducto pancreático Ponchon colaboradores realizo biopsia a 69 pacientes
principal de Wirsung y sus ramas. Esta puede estar con- sospechosos de disfunción del esfínter de Oddi y se
dicionada por una obstrucción anatómica, contracciones encontró que la papila fue normal macroscópicamente
espásticas y por hipersensibilidad de los esfínteres. en 30 pacientes. El orificio papilar de aspecto inflama-
Los cambios morfológicos del esfínter como edema, torio fue observado en 21 pacientes y un infundibulum
inflamación, hipertrofia y fibrosis son muy frecuentes (ectropión) prominente fue visto en 18 pacientes. Se
en la mayoría de los pacientes con estenosis papilar tipo tomaron de tres a 10 muestras de biopsias en cada estu-
I. Es concebible, pero especulativo, que una función dio. En tres de los 69 pacientes se encontró que tenían
nerviosa alterada del músculo papilar es la responsable un adenocarcinoma intraampular, 36 de estos tuvieron
de la dismotilidad vista en pacientes con el tipo III. resultados histológicos normales, 27 tenían cambios
Para los pacientes con disfunción del esfínter de inflamatorios y tres presentaron cambios fibróticos.
Oddi tipo I y II, el dolor puede ser debido a una obs-
trucción relativa del flujo biliar y pancreático, con Etiología
una subsecuente elevación de la presión intraductal.
Disfunción del esfínter de Oddi en pacientes
Algunos pacientes con disfunción del esfínter de Oddi
con enfermedad de la vesícula
tipo III pueden tener un problema sensorial llamado
“hiperalgesia visceral”. Este nuevo concepto compuesto La enfermedad litiasica de la vesícula biliar y la dis-
por factores fisiológicos parece ser muy frecuente en quinesia se han propuesto como posibles enfermedades
este grupo de pacientes. Anderson y colaboradores causantes de disfunción del esfínter de Oddi.
reportaron en un estudio realizado en muestras de biop- En un estudio de disfunción del esfínter de Oddi ma-
sia del esfínter de Oddi obtenida por esfinteroplastias nométricamente documentada en pacientes antes de la
Capítulo 178. Trastornos de la motilidad de la vesícula y de vías biliares 39

colecistectomía realizado por Guelrud y colaboradores, y tumores fueron excluidos del análisis. Cincuenta y
en 121 pacientes con cálculos biliares sintomáticos y nueve de 115 pacientes (51 %) mostraron aumentos
un diámetro del conducto biliar común normal (medido de la presión basal del esfínter de Oddi superior a 40
por ecografía abdominal) antes de la colecistectomía mm Hg. Estos pacientes fueron clasificados según los
se detectó un aumento de la presión basal del esfínter criterios de Hogan-Geenen de disfunción del esfínter
en 14 pacientes (11,6 %). Se diagnosticó una disfun- de Oddi (Tablas 178.1 y 178.2). La frecuencia de ma-
ción del esfínter de Oddi en 4,1 % de los pacientes nometría anormal de un segmento del esfínter solo fue
con una fosfatasa alcalina sérica normal (4 de 96) y en del 86 % de los pacientes para el tipo I, 55 % para el
40 % con una elevación de la fosfatasa alcalina sérica tipo II y 28 % del tipo III.
(10 de 25). En otro estudio Ruffolo y colaboradores
evaluaron a 81 pacientes con síntomas sugestivos de Diagnóstico clínico
enfermedad biliar, colangiopancreatografía retrógrada El diagnóstico de la disfunción del esfínter de Oddi
endoscópica normal y sin cálculos en la vesícula por es una verdadero reto para los especialistas que en-
ecografía abdominal, se midió la fracción de eyección frentan a este tipo de pacientes, aun contando con los
vesicular por centellografía y manometría del esfínter recursos tecnológicos modernos, pues ninguno de estos
de Oddi por endoscopia. El 53 % de los pacientes te- está exento de riesgos para el paciente. No obstante, se
nían disfunción del esfínter de Oddi y 49 % tenían una debe tener en cuenta una serie de consideraciones tanto
fracción de eyección vesicular anormal. La disfunción clínicas como anatomofisiológicas para su definición:
del esfínter de Oddi ocurrió con una frecuencia similar – Disfunción del esfínter de Oddi en el esfínter
en pacientes con un resultado anormal de la fracción biliar o pancreático, o ambos: la verdadera frecuen-
de eyección vesícula biliar (50 %) y una fracción de cia de la disfunción del esfínter de Oddi por lo tanto
eyección normal (57 %). depende de si uno o ambos esfínteres son estudiados.
La microlitiasis (pequeños fragmentos de cálculos Eversman y colaboradores realizaron manometría del
biliares de 1 mm a 2 mm de diámetro) y los cristales de esfínter biliar y pancreático en 360 pacientes con dolor
colesterina que forman el barro biliar solo visibles por de tipo pancreatobiliar. En esta serie, 19 % presentaron
examen microscópico, en su paso a través del esfínter alteración de la presión basal del esfínter pancreático
pueden ocasionar daño en este y ser causa de una dis- anormal en ambos segmentos en 19 % de los pacientes.
función del esfínter de Oddi. Hallazgos similares fueron reportados por Aymerich
y colaboradoress, en una serie de 73 pacientes con
Disfunción del esfínter de Oddi
sospecha de disfunción del esfínter de Oddi, donde las
después de la colecistectomía
presiones basales fueron normales en ambos segmentos
La frecuencia de diagnósticos de disfunción del en 19 % de los pacientes, anormales en los dos segmen-
esfínter de Oddi en las series publicadas varía conside- tos en 40 % y anormal en un segmento, pero normal
rablemente con los criterios de selección de pacientes, en la otra en 41 %. El valor predictivo negativo de la
la definición de la disfunción del esfínter de Oddi y las presión basal normal del esfínter biliar en la exclusión
herramientas de diagnóstico empleado. En un informe de disfunción del esfínter de Oddi fue de 0,42 y cuando
británico realizado por Neoptolemos y colaboradores, la la presión basal del esfínter del páncreas era normal, el
disfunción del esfínter de Oddi fue diagnosticada en 41 valor predictivo negativo fue de 0,58. Estos dos estudios
(9 %) de 451 pacientes evaluados consecutivamente con sugieren que siempre que sea factible se debe estudiar
dolor poscolecistectomía. Roberts-Thomson y Toouli, por manometría del esfínter de Oddi, tanto la vía biliar
evaluaron a 431 pacientes colecistectomizados y encon- como el conducto pancreático a la hora de evaluar el
traron disfunción del esfínter de Oddi en 47 (11 %). En esfínter de Oddi.
un grupo de esos pacientes con colangiopancreatografía – Disfunción del esfínter de Oddi y pancrea-
retrógrada endoscópica normales (con los conductos titis: la disfunción puede ocurrir en la porción del
biliares dilatados el 28 %) y con dolor recurrente de conducto pancreático y ser la causa de pancreatitis
duración superior a los tres meses, fue diagnosticado recurrente. Se ha desarrollado un sistema de clasifica-
disfunción del esfínter de Oddi en 68 %. Sherman y ción de disfunción del esfínter de Oddi del páncreas
colaboradores utilizaron manometría del esfínter de (Tabla 178.2), pero no se ha utilizado ampliamente.
Oddi para evaluar 115 pacientes con dolor de origen Manométricamente la disfunción del esfínter de Oddi
pancreatobiliar con y sin alteraciones de las pruebas de de tipo pancreática se ha reportado en 15 % a 72 % de
función hepática. Los pacientes con cálculos biliares los pacientes con pancreatitis recurrentes, previamente
40 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

etiquetados como idiopática. Después de la evaluación – Valores elevados de amilasa/lipasa en la disfunción


inicial, los pacientes suelen clasificarse en función al del esfínter de Oddi pancreática.
sistema de clasificación de Milwaukee (Tablas 178.1
y 178.2). Los pacientes con disfunción del esfínter de Como los síntomas de disfunción del esfínter de
Oddi biliar puede presentarse con dolor típico de cólico Oddi y disfunción vesicular no puede ser separados
biliar en hipocondrio derecho con irradiación a hombro de forma fiable, el diagnóstico de esta se realiza casi
y espalda, acompañado de vómitos y elevación de en- siempre después de la colecistectomía o con menos
zimas de colestasis y los que presentan disfunción del frecuencia después que se han excluido anomalías
esfínter de Oddi de origen pancreático suelen presen- orgánicas o funcionales de la vesícula biliar.
tarse con dolor típico de páncreas (cuadrante superior
izquierdo del epigastrio o radiante a la parte posterior) Exámenes complementarios
con elevación de enzimas pancreáticas o episodios de
Manometría del esfínter de Oddi
pancreatitis recurrente. La disfunción del esfínter de
Oddi puede existir en presencia de una vesícula intacta. La manometría del esfínter de Oddi es el único
método disponible para medir la actividad motora del
Criterios de Roma III esfínter de Oddi directamente. Aunque esta se puede
Recientemente en un simposio sobre trastornos realizar durante la intervención quirúrgica y por vía
funcionales del páncreas y el árbol biliar se estable- percutánea, es más comúnmente realizado durante la
cieron los criterios de Roma III de diagnóstico para la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.
disfunción del esfínter de Oddi. La manometría del esfínter de Oddi es considerado
Los criterios se satisfacen durante los últimos tres por la mayoría de los investigadores el estándar de oro
meses y los síntomas están presentes cuando menos para evaluar la disfunción del esfínter en los pacientes
seis meses antes del diagnóstico. con sospecha de esta afección. La utilidad de la ma-
Los criterios diagnósticos deben incluir episodios de nometría para detectar trastornos de la motilidad del
dolor localizado en el epigastrio o cuadrante superior esfínter de Oddi es similar a su uso en otras partes del
derecho y todos estos: tracto gastrointestinal. Sin embargo, la manometría
– Episodios con una duración de 30 min o más. del esfínter de Oddi es técnicamente más exigente y
– Síntomas recurrentes que se presentan a diferentes peligrosa, con tasas de complicación (pancreatitis en
intervalos (no diariamente). particular) tan altas como hasta 30 %. Aún quedan
– El dolor va aumentando hasta alcanzar un nivel preguntas sobre si estas observaciones a corto plazo
constante. (10 min, dos grabaciones en cada registro) reflejan la
– El dolor es de intensidad moderada hasta llegar a ser fisiopatología del esfínter en 24 h. A pesar de algunos
lo suficientemente severo como para interrumpir las problemas, la manometría del esfínter de Oddi está ga-
actividades diarias del paciente o inducir una visita nando más confianza para su utilidad clínica en centros
a la sala de urgencias. especializados.
– El dolor no se alivia con las evacuaciones.
– El dolor no se alivia con el cambio de postura. Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
– El dolor no se alivia con antiácidos. La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
– Exclusión de otra enfermedad estructural que pu- se realiza generalmente inmediatamente antes de la
diera explicar los síntomas. manometría del esfínter de Oddi para excluir otras
posibles causas de los síntomas del paciente. Durante
El dolor puede estar presente con uno o más de estos: esta se puede observar el diámetro de los sistemas de
– Náuseas y vómitos asociados. conductos, tanto biliar como pancreático y si existe
– Dolor que se irradia a la espalda o región subesca- retardo en la evacuación del contraste. Un aspecto
pular derecha. radiológico a detectar es la terminación de la porción
– Dolor que despierta al paciente cuando duerme. ampular del colédoco “en punta de lápiz” que muchas
– Valores elevados de amino transferasas, fosfatasa veces caracteriza la imagen fluoroscópica. La ventaja
alcalina o bilirrubina conjugada, temporalmente de este procedimiento es la posibilidad de realizar
relacionados con al menos dos episodios de dolor. terapéutica sobre el esfínter en el momento de su diag-
– Valores normales de amilasa/lipasa en la disfunción nóstico, resolviendo el cuadro clínico, pero no debe
del esfínter de Oddi biliar. sobreutilizarse, pues no está exento de complicaciones.
Capítulo 178. Trastornos de la motilidad de la vesícula y de vías biliares 41

Colangiorresonancia magnética nuclear presión basal elevada (superior a 40 mm Hg) tiene valor
La colangiorresonancia magnética nuclear se ha diagnóstico de disfunción del esfínter de Oddi, bien
desarrollado en los últimos años como una herramienta por estenosis o por discinesia (espasmo). La respuesta
positiva a la administración de un miorrelajante (dis-
diagnóstica de gran valor en el estudio de la obstruc-
minución de la actividad motora del esfínter de Oddi)
ción de la vía biliar tanto benigna como maligna. Para
es diagnóstica de discinesia, mientras que la falta de
algunos es el primer examen a realizar en este tipo de
respuesta lo es de estenosis.
pacientes donde se sospeche una disfunción del esfínter
La gammagrafía es la alternativa a la manometría.
de Oddi. Su posibilidad para el diagnóstico del nivel
Recientemente se ha confirmado la fiabilidad de esta
de localización de estas obstrucciones está en 90 % a
técnica, realizando una prueba de provocación con mor-
91 % comparado con 83 % a 90 % por colangiopan- fina para identificar pacientes con disfunción que pue-
creatografía retrógrada endoscópica. den ser candidatos para ser tratados con esfínterotomía
Tomografía axial computarizada y al tener la presión basal del esfínter de Oddi elevada.
ultrasonografía abdominal
Tipos de disfunción del esfínter de Oddi
En muchos lugares la dificultad de contar con este
recurso hace que se utilicen otras exámenes de imáge- La existencia de alteraciones bioquímicas que
nes, como la tomografía axial computarizada simple sugieren obstrucción al flujo (elevación al doble de
o contrastada y el ultrasonido abdominal, que aunque lo normal de amino transferasas, fosfatasa alcalina,
de poco valor funcional, la presencia de dilatación del bilirrubina o amilasa y lipasa) detectadas durante los
episodios de dolor y las características de la vía excre-
sistema de conductos tanto biliar como pancreático, la
tora (calibre y tiempo de eliminación del material de
ausencia de imágenes de litiasis u otro tipo de causa de
contraste) se han utilizado para distinguir tipos clínicos
obstrucción, en presencia de cuadro clínico de dolor y
de disfunción del esfínter de Oddi. La posibilidad de
elevación de enzimas puede hacer sospechar la posibi-
encontrar elevada la presión basal del esfínter de Oddi
lidad de disfunción del esfínter de Oddi.
como prueba formal para el diagnóstico de disfunción
La ultrasonografía abdominal es la prueba más
varía según el tipo.
simple para excluir lesión orgánica, en especial cole-
docolitiasis, pero su rendimiento diagnóstico es muy Diagnóstico diferencial
inferior al que consigue la resonancia magnética y la
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica. Esta El diagnóstico diferencial de la disfunción del esfín-
tiene el inconveniente de ser una prueba invasiva que ter de Oddi debe de realizarse con todas las afecciones
no está exenta de riesgo y la ventaja de que permite capaces de provocar síntomas y signos atribuibles a la
practicar estudio manométrico del esfínter de Oddi y esfera biliopancreática, como son:
esfinterotomía cuando se considera el tratamiento in- – Litiasis biliar.
dicado. Además, evalúa dos parámetros: calibre de la – Disquinesia vesicular.
vía excretora y velocidad de eliminación del material – Lesión posquirúrgica de la vía biliar.
de contraste de esta, que se usan para diferenciar los – Pancreatitis aguda de cualquier etiología.
tipos clínicos de disfunción del esfínter de Oddi con – Pancreatitis crónica.
– Gastritis aguda de cualquier etiología.
aplicación para la estrategia diagnóstica y la toma de
– Duodenitis aguda.
decisiones terapéuticas.
– Úlcera duodenal.
Sugieren disfunción biliar del esfínter de Oddi un
– Dispepsia no ulcerosa.
colédoco de más de 12 mm de diámetro y una elimi-
nación del material de contraste superior a 45 min con
Tratamiento
el paciente en decúbito.
Para la disfunción pancreática del esfínter de Oddi Tratamiento de la disfunción vesicular
los valores son un calibre del conducto pancreático ma- No existe opción de tratamiento farmacológico que
yor de 5 mm y un tiempo de eliminación del contraste haya mostrado eficacia. El tratamiento de los episodios
superior a 10 min. agudos es sintomático, al igual que las crisis de cólico
La manometría que se practica durante la colangio- hepático causadas por colelitiasis, con espasmolíticos
pancreatografía retrógrada endoscópica, es la prueba y analgésicos. La colecistectomía ha demostrado ser
idónea para estudiar el patrón motor del esfínter de eficaz en varias series, alguna de estas aleatorizando a
Oddi, pero no carece de morbilidad. El hallazgo de una los pacientes para disponer de un grupo control.
42 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

La estrategia recomendada en pacientes que cum- al tratamiento endoscópico: pancreatitis, perforación


plen criterios de disfunción vesicular es, una vez duodenal, hemorragia y colangitis.
demostrada la ausencia de anomalía orgánica, indicar La pancreatitis puede ser causada por la inyección
colecistogammagrafía para evaluar el vaciamiento ve- del contraste, manipulación o traumatismo del esfínter
sicular. Si es anormal se debe plantear la oportunidad mediante el catéter de canulación o manometría y des-
de practicar colecistectomía, preferentemente por vía pués de la esfinterotomía. La mayoría de los estudios
laparoscópica. Si el vaciamiento vesicular es normal se indican que los pacientes sometidos a esfinterotomía en-
debe investigar la existencia de microlitiasis mediante doscópica por disfunción del esfínter de Oddi tienen ta-
estudio microscópico de la bilis y si esta es normal, debe sas de complicaciones de dos a cinco veces mayores que
considerarse la posibilidad de disfunción del esfínter de los pacientes sometidos a esfinterotomía endoscópica
Oddi como responsable del cuadro clínico. por cálculos ductales. Es la complicación más frecuente
y se presenta hasta en 30 % de los pacientes en algunas
Tratamiento de la disfunción del esfínter de Oddi
series. Un reciente estudio prospectivo, multicéntrico,
En los pacientes tipo I, el estudio manométrico es examinando los factores de riesgo para pancreatitis
opcional, se puede realizarse directamente la esfintero- poscolangiopancreatografía retrógrada endoscópica
tomía. En los pacientes tipo II, se indica esfinterotomía identifica los sospechosos de disfunción del esfínter
cuando se demuestra por manometría disfunción con de Oddi como un factor independiente en análisis
patrón de estenosis o existen síntomas mantenidos multivariado. Una sospecha de disfunción del esfínter
que no mejoran a pesar del tratamiento médico con de Oddi triplica el riesgo después del procedimiento
miorrelajantes. En los pacientes tipo III, en los que el para una pancreatitis con una frecuencia de 20 % a
riesgo de la esfinterotomía es mayor y la eficacia parece 27 % encontrada en recientes estudios prospectivos.
inferior, pueden ensayarse fármacos miorrelajantes y de Otras técnicas endoscópicas sobre el conducto pan-
no ser efectivos se puede considerar la esfinterotomía, creático se están desarrollando como, por ejemplo, la
en función de la gravedad del cuadro clínico. colocación de stents combinado con la esfinterotomía
Cuando el diagnóstico es disfunción por discinesia para limitar las complicaciones. Otras complicaciones
(espasmo) tipo III, se deben probar fármacos miorre- del uso de la esfinterotomía pueden ser la perforación
lajantes como los bloqueadores del calcio (nifedipino), duodenal, la hemorragia y la colangitis debida a la ma-
fármacos anticolinérgicos (buscapina) y la inyección nipulación de los instrumentos dentro del árbol biliar y
local de toxina botulínica, sin embargo, ninguno ha del duodeno, así como la presencia o no de litiasis biliar.
mostrado efectividad en la terapia a largo plazo. Más
recientemente se ha ensayado el uso de antidepresivos
tricíclicos a baja dosis, como la amitriptilina o escita-
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Capítulo 178. Trastornos de la motilidad de la vesícula y de vías biliares 43

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Capítulo 179
Secreción biliar y circulación
enterohepática de los ácidos biliares
Dr. C. Felipe Neri Piñol Jiménez
Dra. Yadina Martínez Pérez

Composición y formación de la bilis (cloro: 88 mEq/L a 115 mEq/L, bicarbonato: 27 mEq/L


a 55 mEq/L y calcio: 2,5 mEq/L a 6,4 mEq/L).
La producción de la bilis por los hepatocitos es una La bilis es esencial para la digestión y absorción
de las funciones principales del hígado. de lípidos, la homeostasis del colesterol y la excreción
A pesar de grandes variaciones en su composición, la de xenobióticos, fármacos y metales pesados solubles
bilis es una solución micelar compleja, rica en lípidos,
en lípidos.
isotónica respecto al plasma,y su osmolaridad refleja
El volumen de la secreción biliar hepática se estima
la plasmática.
en 500 mL a 600 mL diarios.
Está compuesta por agua, electrolitos inorgánicos
El proceso de formación de bilis depende de la
y solutos orgánicos como son los lípidos biliares:
síntesis hepática y la secreción canalicular de ácidos
ácidos biliares conjugados (67 %) o sales biliares que
biliares, los aniones orgánicos predominantes en la bilis
constituyen el soluto cualitativa y cuantitativamente
y el mantenimiento de la formación hepática de bilis
más importante de la bilis; fosfolípidos (22 %), so-
bre todo lecitina, y colesterol no esterificado (4 %). es esencial para el funcionamiento normal del hígado.
En menor cantidad contiene bilirrubina conjugada La bilis se forma en la membrana canalicular como
(0,3 %) y también concentraciones muy bajas de proteí- producto de secreción de las células hepáticas. En la
nas (4,5 %), en particular albúmina e inmunoglobulina actualidad se acepta que el motor del flujo biliar es
A, aparte de los eventuales metabolitos de hormonas y el transporte activo de solutos, al crear un gradiente
fármacos. La concentración total de solutos orgánicos osmótico que favorece el movimiento pasivo de agua
varía mucho según se trate de bilis hepática o bilis y otros solutos.
concentrada de la vesícula biliar y oscila entre 1 g/dL Los ácidos biliares son el soluto cualitativa y cuan-
y 30 g/dL, la composición porcentual, sin embargo, es titativamente más importante de la bilis, y su secreción
relativamente constante. activada por los hepatocitos es el determinante principal
La concentración biliar de cationes inorgánicos es del flujo biliar, estos se sintetizan a partir del colesterol
proporcional a la del líquido intersticial, el sodio es el en el hígado. Son secretados activamente a través de la
catión dominante. Los ácidos biliares conjugados son membrana canalicular hacia la bilis e inducen la secre-
ácidos relativamente fuertes y están disociados al pH ción de otros constituyentes biliares. Estos descienden
de la bilis, por lo que se requieren cationes inorgánicos a lo largo del árbol biliar y son almacenados en la ve-
para equilibrar la carga total de aniones orgánicos (áci- sícula. Después de una comida, la vesícula se contrae
dos biliares) e inorgánicos. Además, ya que los ácidos y vacía su contenido en el duodeno, donde facilita la
biliares se agregan en complejos polimoleculares o absorción del colesterol y las vitaminas liposolubles.
micelas, con escasa actividad osmótica, la concentra- Los ácidos biliares son escasamente absorbidos en
ción total de cationes debe ser superior a la del plasma el intestino delgado proximal, pero casi totalmente
para que la bilis sea isotónica. Así, la concentración de absorbidos en el íleon terminal. De aquí, son transpor-
sodio en la bilis humana oscila entre 146 mEq/L y 165 tados nuevamente al hígado por la circulación portal,
mEq/L y la de potasio entre 2,7 mEq/L y 4,9 mEq/L. La absorbidos en forma activa en la membrana sinusoidal
concentración de aniones inorgánicos es más variable del hepatocito y resecretados hacia la bilis.
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 45

Secreción biliar síntesis del colesterol. Además, puesto que la absorción


del colesterol de la dieta depende de la presencia de
El flujo biliar está especialmente condicionado por sales biliares en la luz intestinal, estas controlan también
la secreción de sales biliares y electrolitos (flujo biliar de forma indirecta la síntesis al determinar la canti-
dependiente de las sales biliares). Las sales biliares que dad de colesterol intestinal que se absorbe y alcanza
se encuentran en la bilis en forma de micelas tienen pro- finalmente el hígado. El colesterol hepático se destina
piedades osmóticas, por lo que son capaces de influir en a la incorporación en la estructura de las membranas
mayor o menor grado sobre la excreción biliar de agua. celulares hepáticas, al catabolismo de las sales biliares,
Asimismo se ha comprobado que el flujo biliar puede a la excreción por la bilis y a la esterificación para su
estar regulado parcialmente (flujo biliar independiente almacenamiento como colesterol esterificado.
de la secreción de sales biliares) por la “bomba de so-
dio” situada en el polo biliar de la célula hepática. Las Tabla 179.1. Composición de la bilis hepática
sustancias que aumentan el flujo biliar actuando en la
“bomba de sodio” son fundamentalmente los esteroides Componente Concentración
y el fenobarbital. Los coleréticos, al ser eliminados por Electrolitos
la bilis, originan un aumento del flujo biliar a través de Na+ (mmol/L) 141 a 165
un mecanismo de acción osmótica. K+(mmol/L) 2,7 a 6,7
En el dúctulo, el flujo biliar se modifica por la Cl– (mmol/L) 77 a 117
adición de una secreción activa de cloruro sódico y HCO3 (mmol/L) 12 a 55
bicarbonato, con el consiguiente aumento del aporte Ca2+ (mmol/L) 2,5 a 6,4
de agua (flujo ductular). Mg2+ (mmol/L) 1,5 a 3,0
Pero no solo existe una secreción activa, sino que Aniones orgánicos
también ocurren fenómenos de absorción debidos al Ácidos biliares (mmol/L) 3 a 4,5
comportamiento peculiar de los dúctulos biliares en Bilirrubina (mmol/L) 1a2
los que, al igual que en otras membranas orgánicas, el Lípidos
transporte de sustancias se origina en ambos sentidos. Lecitina (mg/dL) 140 a 810
Esta secreción ductular está regulada por la secretina. Colesterol (mg/dL) 97 a 320
Proteínas (mg/dL) 2 a 20
Metabolismo de los ácidos biliares Péptidos/aminoácidos
Glutatión (mmol/L) 3a5
La bilis normal contiene en solución acuosa tres
Glutamato(mmol/L) 0,8 a 2,5
especies lipídicas con estructura química y propiedades
Aspartato (mmol/L) 0,4 a 1,1
físicas distintas: el colesterol, los ácidos biliares y la
Glicina (mmol/L) 0,6 a 2,6
lecitina. Al mismo tiempo contiene electrolitos, aniones
orgánicos, lípidos y proteínas (péptidos y aminoácidos)
(Tabla 179.1). Los ácidos biliares son sintetizados a partir del coles-
El colesterol es un compuesto aromático claramente terol en los hepatocitos pericentrales. En este proceso,
hidrofóbico, por lo que es insoluble y precipita en forma el colesterol, un compuesto lipofílico, es convertido en
de cristales romboides característicos en medio acuosos. un producto soluble en agua.
Si bien todas las células del organismo son capaces Los ácidos biliares son primarios y secundarios: de
de sintetizar colesterol, el hígado y, en menor cuantía el los primarios el prototipo es el ácido cólico, que es un
intestino, son los órganos que producen la mayor parte. ácido biliar con tres grupos hidroxilo en las porciones
El colesterol se forma a partir del acetato, la enzima C-3, C-7 y C-12, que tienen una estructura molecular
limitante en la cadena sintética es la hidroximetilglu- en la que se equilibran las porciones hidrófoba e hidró-
taril-CoA-reductasa, que está sujeta a un servocontrol fila de la molécula, es decir, se trata de un compuesto
que depende, por una parte, de la cantidad de colesterol anfipáticos y, por tanto, hidrosoluble y con capacidad
que llega al hígado procedente del intestino y, por otra detergente. Está muy relacionada con el grado de hi-
parte, del colesterol endógeno captado por los hepa- droxilación de la molécula, les permite formar micelas
tocitos. Asimismo, el colesterol es el único sustrato a y solubilizar en la bilis la lecitina y el colesterol. El otro
partir del que se forman los ácidos biliares, por lo que ácido biliar primario es el ácido quenodesoxicólico,
las necesidades de sales biliares modulan en parte la un ácido biliar con dos hidroxilos en las posiciones
C-3 y C-7.
46 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

En la actualidad se reconocen en el ser humano la las grasas. Un ejemplo de esto es la malabsorción de


existencia de dos vías para la síntesis de los ácidos vitaminas liposolubles con esteatorreas dada la exis-
biliares a partir del colesterol: una denominada vía tencia de un trastorno hereditario de la conjugación de
neutra “clásica” (la vía de la colesterol 7-α-hidroxilasa), los ácidos biliares.
que favorece la formación del ácido cólico, que es la La mayoría de los ácidos biliares conjugados
considerada cuantitativamente la más importante y la secretados al intestino delgado son absorbidos de
otra segunda vía, la vía ácida “alternativa” (la vía de manera intacta. En su paso por el intestino los ácidos
la oxisterol 7-α-hidroxilasa) que favorece la formación biliares primarios son transformados por la microbiota
del ácido quenodesoxicólico. Esta última es la vía más intestinal. Un 15 % aproximadamente de estos son
compleja e involucra al menos tres oxisterolhidroxilasa desconjugados por las bacterias a nivel del intestino
microsómicas distintas y es la más importante en los distal (íleon), estos ácidos desconjugados se absorben
neonatos, como se aprecia en la enfermedad hepática de manera pasiva o activamente en el íleon y pasan al
severa en niños con defecto congénito en la oxisterol hígado nuevamente utilizando la circulación enterohe-
7-α-hidroxilasa de la vía ácida. pática, donde son reconjugados y mezclados con los
Ambas vías difieren del paso inicial e indica la par- ácidos biliares secretados de novo para ser resecretados
ticipación de enzimas esterol 7-α-hidrolasa que suman hacia la bilis. Este proceso de desconjugación intestinal
un grupo de hidroxilo esencial en la posición C-7 del y de reconjugación hepática forma parte normal del
anillo esterol. Este proceso abraca al menos 20 enzimas metabolismo de los ácidos biliares.
diferentes divididas en dos grupos: un primer grupo Los ácidos biliares que pasan al colon también son
son las encargadas de modificar la estructura del anillo atacados por la acción de la 7-α-deshidroxilasa de las
esterol y el segundo grupo modifica la cadena lateral del bacterias anaeróbicas del colon lo que origina los ácidos
esterol. En la vía clásica (biosíntesis del ácido cólico), biliares secundarios. Así, 7-α-deshidroxilación del
las modificaciones del anillo esterol preceden a las ácido cólico produce el ácido desoxicólico, un ácido
modificaciones de la cadena lateral, mientras que en biliardihidroxilado con un grupo hidroxilo en C-3 y
la vía ácida ocurre a la inversa o de manera conjunta C-12 y la del ácido quenodesoxicólico origina el ácido
(biosíntesis del ácido quenodesoxicólico). litocólico, un ácido monohidroxilado con un grupo
El colesterol es el precursor obligado de los ácidos hidroxilo en la posición C-3. Esta deshidroxilación de
biliares. Los que se forman en el hígado ya sea por la los ácidos biliares primarios a secundarios hace que
vía clásica o la alternativa se denominan ácidos biliares estos últimos sean bastante insolubles en el pH del
primarios, estos son el ácido cólico y el ácido queno- ciego y el ácido litocólico sea insoluble a la temperatura
desoxicólico. Una vez formados en el hígado, antes de corporal. De manera tal, que el colon absorbe el 50 %
pasar a los canalículos biliares, ambos son conjugados del ácido desoxicólico formado y una pequeña fracción
a través de su grupo carboxilo al grupo amino de la de ácido litocólico. Una vez que el ácido desoxicólico
taurina o la glicina. Esta conjugación favorece las ca- es reabsorbido, este es reconjugado en el hígado con
racterísticas hidrofílicas del ácido biliar y el poder ácido la taurina y la glicina y circula con los ácidos biliares
de la cadena lateral, convirtiendo un ácido débil (Pka primarios. Una modificación bacteriana adicional es la
5,0) en un ácido fuerte (Pka 3,9 para el conjugado de epimerización del grupo hidroxilo C-7 del ácido que-
glicina y Pka 2,0 para el conjugado de taurina). nodesoxicólico para formar el 3-α ,7-β-dihidroxi ácido
La principal función que tiene la conjugación, ya sea biliar, el ácido ursodesoxicólico. Este ácido es conjuga-
con taurina o glicina, es disminuir la difusión pasiva do en el hígado, circula con el pool de ácidos biliares
de ácidos biliares a través de las membranas celula- primarios y constituye al menos el 5 % de los ácidos
res durante el tránsito a lo largo del árbol biliar y el biliares primarios. Como resultado los ácidos biliares
intestino delgado. Los ácidos biliares conjugados son primarios siempre recirculan con ácido desoxicólico y
absorbidos y transportado solamente si el transporta- ácido ursodesoxicólico, todos de manera conjugada, los
dor específico de membrana está presente. Los ácidos ácidos biliares secundarios en el colon circulan todos
biliares conjugados son más solubles en pH ácidos y de manera desconjugadas mezclados con las heces.
más resistentes a la precipitación que los no conjugados Como modificación terciaria de los ácidos biliares
correspondientes en presencia de altas concentraciones se describe la síntesis de estos a nivel hepático y por
de calcio. El efecto más importante de la conjugación las bacterias intestinales a partir de los ácidos biliares
es mantener altas concentraciones de ácidos biliares secundarios. Estas reacciones comprenden la sulfata-
conjugados para facilitar la digestión y la absorción de ción y la hidroxilación hepática de ácido litocólico y la
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 47

reducción del 7-oxo-litocolato a ácido quenodesoxicó- En tal sentido, para comprender la circulación ente-
lico o su epimero 7-β-ácido ursodesoxicólico. rohepática hay que conocer sus componentes anatómi-
El control de la síntesis hepática de ácidos biliares cos: el hígado, la vía biliar, el intestino, la circulación
se ejerce mediante un mecanismo de retroalimenta- venosa portal, el colon, la circulación sistémica y el
ción por el flujo transhepático de los ácidos biliares riñón.
transportados por la porta, actuando sobre la enzima La circulación enterohepática de los ácidos biliares
limitante colesterol 7-α-hidroxilasa. El aumento de debe ser concebida como una serie de reservorios o
las concentraciones intrahepáticas de ácidos biliares cámaras de almacenamiento (vesícula biliar e intes-
inhibe su propia síntesis, mientras que su reducción la tino delgado), de válvulas (esfínter de Oddi y válvula
estimula, este es el mecanismo clave de la regulación íleocecal), bombas mecánicas (canalículos, tracto biliar
de la circulación enterohepática de los ácidos biliares. e intestino delgado) y de bombas químicas (hepatoci-
La lecitina es el fosfolípido principal en la bilis, tos, colangiocitos e ileocitos). En la actualidad a esto
tiene una solubilidad limitada y “se hincha” en el agua se suma la identificación de unas series de proteínas
para formar agregados polimoleculares de estructura transportadoras que contribuyen a mantener la circu-
cristalina. lación enterohepática.
El concepto actual es que la lecitina destinada a la La vesícula biliar tiene una capacidad de alrededor
bilis se sintetiza en el retículo endoplásmico liso y es de 40 mL y se llena rápidamente de bilis, cuya produc-
“reclutada” hacia el aparato de Golgi y el canalículo ción es de unos 600 mL/día, si no fuera por su notable
biliar junto con colesterol intracelular por el flujo capacidad absortiva. La mucosa vesicular reabsorbe
alrededor de 90 % del agua y de los electrolitos pre-
transhepático de ácidos biliares (a modo de disolución
sentes en la bilis hepática y también parte del colesterol
de membranas intracelulares), excretándose en forma
biliar. El efecto sobre la concentración total de solutos
de vesículas unilamelares por exocitosis, mientras
orgánicos es aumentarla desde 2 % en la bilis hepática
que los propios ácidos biliares son secretados por un
a alrededor de 20 % en la bilis vesicular.
transportador específico de la membrana canalicular.
La vesícula biliar almacena y concentra la bilis du-
Numerosas observaciones apoyan la teoría vesicular
rante el ayuno. El llenado vesicular es favorecido por
de la secreción de lecitina y colesterol a la bilis, estas
la contracción tónica del esfínter de Oddi. Durante el
vesículas se han aislado y caracterizado en bilis huma- ayuno, alrededor de la mitad de la bilis producida por
na sobresaturada con colesterol. A medida que la bilis el hígado penetra en la vesícula y el resto pasa direc-
se concentra a su paso por el árbol biliar, los ácidos tamente al duodeno. Mientras que después del ayuno
biliares y las vesículas unilamelares interaccionan de nocturno la mayoría de los ácidos biliares son secues-
modo variable: en las bilis insaturadas en colesterol, las trados en la vesícula, lo que explica los bajos niveles
vesículas desaparecen al solubilizarse la lecitina y el de ácidos biliares en el intestino, vena porta, suero e
colesterol en micelas formadas por los ácidos biliares, hígado. En respuesta a la comidas, en el vaciamiento de
mientras que en la bilis sobresaturada coexisten micelas la vesícula biliar intervienen mecanismos colinérgicos
mixtas y vesículas cargadas de colesterol, a partir de las y hormonales. La estimulación neurológica depende
que precipita eventualmente el colesterol en los estadios de la inervación vagal, pero desempeña una función
iniciales de la formación de cálculos. menor en comparación con la fuerza de la contracción
vesicular inducida por la colecistocinina liberada por
Circulación enterohepática la mucosa duodenal al inicio de la digestión. La cole-
cistocinina facilita también el vaciamiento vesicular al
de los ácidos biliares estimular su contracción y también mediante la relaja-
Se denomina circulación enterohepática al trayecto ción del esfínter de Oddi. Por otra parte, la llegada de
recorrido por los ácidos biliares desde su secreción ácido clorhídrico al duodeno estimula la liberación de
en el canalículo biliar hasta su captación en el polo secretina por parte de la mucosa duodenal, que induce
sinusoidal del hepatocito. Los procesos implicados, la secreción activa de electrolitos (principalmente
en secuencia ordenada son: síntesis y secreción biliar, bicarbonato) y agua por el epitelio de los conductos
almacenamiento en la vesícula biliar y paso al intestino biliares. Este estímulo colerético acelera el paso de la
durante la digestión, tránsito por el intestino, absorción bilis a la luz intestinal.
intestinal, transporte por la vena porta, captación hepá- La solución concentrada de micelas mixtas (ácidos
tica y secreción de nuevo en la bilis. biliares, fosfolípidos y colesterol) de la bilis vesicular
48 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

es volcada desde la vesícula hacia el intestino delga- mente en su forma conjugada por el intestino delgado y
do, donde las micelas mixtas facilitan la absorción de experimentan circulación enterohepática. En el hombre
grasa mediante la estimulación de la acción de la lipasa adulto, la circulación enterohepática mantiene una
pancreática sobre los triglicéridos, la solubilización de reserva de ácidos biliares de 50 µmol a 60 µmol por
productos hidrolíticos y el traslado de lípidos solubles kilogramo de peso corporal, lo que corresponde aproxi-
en grasa hacia la superficie mucosa. Es importante se- madamente a 2 g a 4 g. El pool de ácidos biliar recorre
ñalar que los procesos fisicoquímico de la formación el ciclo dos o tres veces por comida, y esto representa
de las micelas mixtas requieren de una concentración 6 a 10 ciclos por día. El intestino delgado de esta ma-
intraluminal de ácidos biliar adecuada superior a 1,5 nera reabsorbe entre 10 g a 30 g de ácidos biliares por
mmol/L. La concentración más alta se encuentra en las día. Aproximadamente 0,2 g a 0,6 g de ácidos biliares
vías biliares (20 mmol/L a 50 mmol/L) y en la vesícula eluden la reabsorción y son eliminados con la materia
biliar (50 mmol/L a 200 mmol/L). fecal cada día. La conversión hepática de colesterol en
Durante una comida copiosa la vesícula permanece ácido biliar equilibra la excreción fecal.
contraída y los ácidos biliares secretados por el hígado Tras la absorción intestinal, los ácidos biliares circu-
no entran a la vesícula y pasan directamente al duodeno, lan por la vena porta hasta el hígado, unidos a proteínas
llegan a alcanzar una concentración intraluminal de plasmáticas donde son captados por un eficaz mecanis-
ácidos biliares entre 5 mmol/L a 10 mmol/L. Después mo de transporte activo similar al del íleon. Esta unión
de la comida, el esfínter de Oddi se contrae y la vesícula con las proteínas plasmáticas hace que disminuya su
se relaja, lo que permite que la bilis secretada por el filtrado glomerular y reduce su excreción urinaria. En
hígado ingrese a la vesícula para su almacenamiento. En su paso por el hepatocito, los ácidos biliares regulan su
este sentido el reciclado de ácidos biliares se incrementa propia síntesis por el mecanismo de retroalimentación,
durante la digestión y disminuye entre las comidas y con lo que se mantiene la homeostasia de la circulación
en el ayuno nocturno. Otro elemento a tener en cuenta enterohepática en la persona sana. La secreción activa
que en el síndrome poscolecistectomía, este ritmo de en el canalículo biliar de los ácidos biliares recirculantes
secreción de ácidos biliares se mantiene y son alma- y una pequeña parte procedente de la síntesis endógena
cenados en la luz del intestino delgado proximal, que reinicia el ciclo.
son movidos durante la comida hacia el íleon donde La masa total de ácidos biliares primarios y se-
son nuevamente reabsorbidos activamente. cundarios presentes en la circulación enterohepática
En su tránsito intestinal, los ácidos biliares ejercen constituye el reservorio (pool) de ácidos biliares. Su
una función detergente en la solubilización micelar de la tamaño es esencialmente constante, alrededor de 50
grasa ingerida, lo que facilita la absorción de los lípidos mg/kg de peso en el varón (3 g a 5 g), compensándose
de la dieta y las vitaminas liposolubles. En el intestino las pérdidas fecales (0,5 g/día) por la síntesis hepática
distal y en ciertos estados patológicos en el proximal, de una cantidad equivalente. El reservorio de ácidos
los ácidos biliares están sometidos a la acción bacte- biliares es “secuestrado” en gran parte en la vesícula
riana, se producen ácidos biliares secundarios y libres. biliar durante el ayuno: al comer y descargarse el con-
La absorción intestinal de los ácidos biliares tiene tenido de la vesícula se inicia el ciclo, el cual se repite
lugar principalmente en el íleon terminal por un me- unas tres veces durante cada comida (mientras dura la
canismo de transporte activo dependiente del sodio digestión). De este modo la reserva de ácidos biliares
(transportador apical de sodio y ácidos biliar, símbolo circula unas 10 veces al día, con lo que se obtiene
genético SLC10A2). Se ha localizado el gen de este una tasa secretora 10 veces superior a la cuantía del
receptor y se han detectado mutaciones asociadas a reservorio, es decir, de unos 30 g/día a 40 g/día. La
malabsorción de ácidos biliares. Aunque de menor tasa secretora de lípidos biliares varía en función de la
importancia cuantitativa, existe también un mecanismo intensidad de la contracción vesicular y del tiempo de
de absorción pasiva de ácidos biliares por difusión no tránsito intestinal: ambos factores tienen importancia
iónica, operativo tanto en el yeyuno-íleon como en el en la génesis de la litiasis biliar.
colon. En este sentido, cuando ocurre una resección del La notable economía de la circulación enterohe-
íleon terminal sobreviene la malabsorción intestinal de pática permite mantener concentraciones adecuadas
los ácidos biliares y por tanto disminuye su concentra- de ácidos biliares en los espacios anatómicos donde
ción intraluminal a nivel proximal del intestino. deben cumplir su función de solubilización de lípidos
De todos los aniones conjugados secretados hacia (vía biliar y luz intestinal). La integridad del circuito
la bilis, solo los ácidos biliares son absorbidos activa- impide que el efecto detergente de los ácidos biliares se
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 49

ejerza en otros sitios donde podría ser nocivo: para esto – Quinto: los ácidos biliares ligan calcio y evitan la
son esenciales los dos potentes sistemas de extracción formación de cálculos de calcio en la vesícula y de
localizados en el íleon (evita que los ácidos biliares se oxalato en el riñón.
viertan al colon) y en el hígado (impide que pasen a la
circulación sistémica). Entre estas “bombas”, un servo- Trastorno de la circulación
mecanismo preciso, el control de la síntesis, mantiene
la constancia del círculo enterohepático. enterohepática
Los trastornos de la circulación enterohepática se
Función de la bilis clasifican generalmente en cuatro categorías:
– Defectos en la formación de ácidos biliares (síntesis
La formación de bilis cumple importantes funciones y conjugación).
en la economía del organismo: – Defectos en el transporte de membrana de ácidos
– Primero: es esencial para la excreción de varios biliares (captación y secreción).
productos catabólicos, como los pigmentos biliares – Alteraciones de la transformación bacteriana (des-
y los metabolitos de hormonas esteroides y también conjugación y deshidroxilación).
el vehículo para la eliminación de muchos fármacos – Trastornos del movimiento a través de diferentes
y toxinas. Induce el flujo biliar y la secreción de órganos o entre estos (circulación de ácidos biliares).
lípidos biliares (fosfolípidos y colesterol).
– Segundo: el transporte activo de ácidos biliares hacia Defectos en la formación de ácidos biliares
los canalículos biliares mediado por transportadores (síntesis y conjugación)
genera un flujo osmótico de agua que es el principal
factor regulador de la formación y secreción bilia- Para poder mantener un contenido estable de ácidos
res. Este proceso influye sobre la secreción de los biliares en la circulación enterohepática es necesario
componentes primordiales de la bilis: bilirrubina, una síntesis estable de estos a partir del colesterol.
colesterol y fosfolípidos. Los defectos hereditarios de la biosíntesis de ácidos
– Tercero: los ácidos biliares participan en la digestión biliares no son frecuentes, estos solos sirven para poder
de la grasa dietética, cuya solubilización micelar ilustrar su importancia en la función hepática normal.
facilita la absorción intestinal. Son esenciales para Recientemente se han descrito una serie de errores
la absorción intestinal de colesterol y vitaminas lipo- innatos en la síntesis de ácidos biliares, de origen genéti-
solubles (vitaminas A, D, E y K). En este sentido las co con carácter autosómico recesivo, que se manifiestan
alteraciones de la circulación enterohepática pueden como colestasis. Se ha sugerido que estos trastornos
llevar a deficiencias de las vitaminas liposolubles. La pueden suponer el 2 % a 5 % de las enfermedades
bilis aporta también inmunoglobulina A al intestino. colestácicas idiopáticas de la infancia.
– Cuarto: tanto la formación de la bilis en los hepato- Deficiencia de 3-α-hidroxi-C27-esteroide
citos como la circulación enterohepática de ácidos deshidrogenasa/isomerasa
biliares desempeñan una función fundamental en
la homeostasia del colesterol del organismo y en el La enzima 3-α-hidroxi-C27-esteroide deshidroge-
trofismo celular del intestino grueso. Por un lado, nasa/isomerasa es la segunda enzima en la síntesis de
aumentan el ingreso de colesterol al facilitar la ab- ácidos biliares de la vía clásica (neutra).
sorción intestinal del colesterol biliar y de la dieta. El mecanismo de la lesión hepática es desconocido
Por otro lado, actúan a través de varios mecanismos en la actualidad, presuponiéndose toxicidad hepática
para promover la eliminación de colesterol. La con- por los metabolitos anómalos.
versión del colesterol en ácidos biliares constituye la Su déficit se manifiesta con colestasis extrahepática
principal vía catabólica (eliminación del colesterol sin prurito (a veces de inicio en los primeros días de
del organismo por vía fecal), su excreción biliar vida o posteriormente), progresiva y acumulación de
representa un papel básico en el metabolismo he- ácidos biliares anormales. Al examen físico se palpa
pático y sistémico del colesterol. Al mismo tiempo hepatoesplenomegalia y se observa heces grasientas.
promueve la secreción hepática de colesterol hacia En la bioquímica se observan niveles normales de
la bilis, al inducir el flujo de bilis y solubilizar el gamma glutamil transpeptidasa, niveles séricos bajos
colesterol biliar, y de esta manera permite que el de colesterol, vitamina E y ácidos biliares.
colesterol finalmente pase al hepatocito a la luz El diagnóstico se establece al detectar en orina por
intestinal para su eliminación. cromatografía especial, metabolitos específicos (áci-
50 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

dos biliares C24 con estructura 3-α-hidroxi-esteroide) hepatitis neonatal a células gigantes. Las manifes-
secundarios al bloqueo enzimático. taciones clínicas consisten en ictericia, esteatorrea,
En los pacientes tratados con ácido quenodeoxicó- prurito y retardo del crecimiento. En los exámenes
lico o ursodeoxicólico se logra la excreción biliar y, complementarios se aprecia una bilirrubinemia no
por tanto, la reversión de la enfermedad evitándose la conjugada, niveles elevados de amino transferasa
cirrosis y descompensación hepática. séricas, colesterol sérico elevado, niveles de gamma
glutamil transpeptidasa normales y ácidos biliares
Deficiencia de α-4-3-oxosteroide 5-α-reductasa séricos bajos. Enfermedad que mejora con trata-
La α-4-3-oxosteroide 5-α-reductasa es una enzima miento con ácido quenodeoxicólico, cólico y ácido
citosólica que interviene en los primeros estadios de ursodesoxicólico, al revertirse las anormalidades
conversión de colesterol en los ácidos cólico y queno- bioquímicas y puede salvar la vida.
deoxicólico.
Los niños afectados pueden presentar colestasis se- En todos estos trastornos es de suma importancia
vera y coagulopatía o sugerir hemocromatosis perinatal. el diagnóstico precoz, ya que generalmente la terapia
Los ácidos biliares séricos se encuentran elevados. precoz previene la lesión hepática, aunque existes
Los metabolitos anómalos producidos por el déficit diferencias entre los distintos subtipos (Tabla179.2).
enzimático pueden ser hepatotóxicos.
El tratamiento con ácido ursodeoxicólico y cólico Defecto en el transporte de membrana
es muy beneficioso en los pacientes sin sobrecarga de de ácidos biliares
hierro.
Las enfermedades causadas por defectos heredita-
Otros trastornos de síntesis rios de los genes de los transportadores que afectan la
circulación enterohepática van en aumento. Incluyen
– Xantomatosis cerebro-tendinosa: es una enfermedad una variedad de enfermedades hepáticas e intestinales
hereditaria no frecuente causada por mutaciones en como la colestasis intrahepática familiar progresiva tipo
la enzima mitocondrial esterol C 27-hidroxilasa. 1 y 3, la fibrosis quística, el síndrome de Zellweger, la
En esta enfermedad la vía alternativa (ácida) está adrenoleucodistrofia, el síndrome de Dubin-Johnson
bloqueada y la síntesis de ácidos biliares dismi- y la malabsorción primaria de ácidos biliares (Tabla
nuye, pero no es abolida. Esta enfermedad no se 179.3).
acompaña de afectación hepática y si de trastornos
neurológicos progresivos, aterosclerosis progresiva, Alteraciones de la transformación bacteriana
cataratas y xantomas tendinosos. El tratamiento con
(desconjugación y deshidroxilación)
ácido quenodesoxicólico suprime las anormalidades
bioquímicas de la xantomatosis cerebrotendinosa y La desconjugación de los ácidos biliares se efectúa
retarda la evolución de la enfermedad. en la luz del intestino delgado distal por acción de
– Deficit de la 24,25-dihidroxi-colanoico: se ha bacterias que pasan a través de la válvula ileocecal. En
constatado lesiones hepáticas compatibles con los pacientes con estasis intestinal o sobrecrecimiento

Tabla 179.2. Diferencia entre los subtipos de trastornos enzimáticos de la síntesis de ácidos biliares
Enzima Localización celular Características Tratamiento
3-α-hidroxi-C27- esteroide Retículo endoplásmico Hepatitis neonatal severa, gamma Ácido ursodesoxicólico, ácido
deshidrogenasa/isomerasa glutamil transpeptidasa normal, quenodesoxicólico, ácido cólico,
ácidos biliares séricos bajos y no ácido quenodesoxicólico y ácido
prurito ursodesoxicólico
α-4-3-oxosteroide Citoplasma Colestasis severa, coagulopatía y Ácido ursodesoxicólico y ácido
5-α-reductasa ácidos biliares séricos elevados cólico
24,25-dihidroxi-colanoico Retículo endoplasmático Hepatitis severa a células gigantes, Ácido quenodesoxicólico y ácido
gamma glutamil transpeptidasa cólico
normal, colesterol elevado y ácidos
biliares séricos bajos
C27-hidroxilasa Mitocondria Xantomatosis cerebro-tendinosa y
no enfermedad hepática -
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 51

Tabla 179.3. Trastornos de la circulación enterohepática: defectos hereditarios o de los transportadores


Fenotipo Defectos de transporte Transportador Aspectos característicos
defectuoso (gen)
Defecto del transporte
canalicular hepático
Colestasis intrahepática Amino fosfolípidos canaliculares FIC1 (ATP881) Colestasis progresiva, prurito, y signos
familiar progresiva tipo 1 de malabsorción. Ácidos biliares
séricos elevados, gamma glutamil
transpeptidasa normal
Colestasis intrahepática Ácidos biliares canaliculares BSEP (ABCB11) Colestasis progresiva, ausencia de
familiar progresiva tipo 2 proliferación de conductos biliares,
fibrosis lobulillar y portal. Gamma
glutamil transpeptidasa normal
Colestasis intrahepática Fosfatidilcolina canalicular MDR3 (ABCB4) Colestasis, extensa proliferación de
familiar progresiva tipo 3 conductos biliares, fibrosis periportal.
Gamma glutamil transpeptidasa elevada

Colestasis intrahepática Fosfatidilcolina canalicular MDR3 (ABCB4) Colestasis en el tercer trimestre del
del embarazo embarazo, asociada con pérdida fetal y
parto prematuro
Síndrome de Dubin- Aniones orgánicos conjugados MRP2 (ABCC2) Hiperbilirrubinemia conjugada
Johnson canaliculares
Defectos en el transporte
intestinal
Malabsorción primaria de Ácidos biliares del ribete en Transportador apical Diarrea crónica, esteatorrea,
ácidos biliares cepillo ileal de sodio y ácidos biliar malabsorción de vitaminas liposolubles.
(5LC10A2)

bacteriano la desconjugación de los ácidos biliares Trastornos del movimiento a través


ocurre también en el intestino proximal. Los ácidos de diferentes órganos o entre estos
biliares no conjugados son absorbidos de manera pasiva (circulación de ácidos biliares)
y la importante desconjugación bacteriana disminuye la Resección ileal
concentración intraluminal de ácidos biliares y altera la
formación de micela en el intestino delgado. (Ver “Ca- La interrupción de la circulación enterohepática
pítulo 98. Síndrome de sobrecrecimiento bacteriano”). mediante derivación del íleon o ingestión de resinas de
En el colon los ácidos biliares son desconjugados y intercambio aniónico estimula la conversión del coles-
luego 7-deshidroxilados, lo que contribuye a la forma- terol en ácidos biliares, aumentando su catabolismo y
ción normal de los ácidos biliares secundarios. Sin em- determinando un balance favorable (disminución) de
bargo, los pacientes con litiasis vesicular de colesterol el colesterol. Además, la excreción biliar de colesterol
ácido cólico sufre una rápida 7-deshidroxilación, y estos es un mecanismo de protección ante una sobrecarga
pacientes presentan un aumento de ácido desoxicólico de este esteroide, así el aumento de la excreción biliar
en la bilis. El incremento de ácido desoxicólico se rela- de colesterol en la obesidad o ante una dieta alta en
ciona con el aumento del tiempo de tránsito colónico y colesterol evita una hipercolesterolemia exagerada al
compromete múltiples mecanismos. En tal sentido los precio de aumentar el riesgo de litogénesis.
pacientes con litiasis vesicular presentan en el colon: Por otro lado la resección del íleon terminal causa
– Tránsito colónico lento malabsorción de ácidos biliares (ver “Capítulo 114.
– Concentración elevada de bacterias grampositiva. Síndrome del intestino corto”). Si la resección es corta,
– Incremento de la actividad de la 7-α-hidrolasa, lo el efecto sobre el metabolismo de los ácidos biliares
que aumenta la formación de ácido desoxicólico. es mínimo porque el aumento de la biosíntesis con-
– El incremento del pH en el colon distal inducido trarresta el incremento de la eliminación fecal. Con
por el tránsito lento aumenta la solubilidad del resecciones más amplias, la síntesis hepática aumenta
ácido desoxicólico y por tanto se incrementa su en forma sustancial para compensar el incremento de
absorción. la pérdida.
52 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Los ácidos biliares no absorbidos entran en el colon Colestasis


en cantidades importante e inhiben la absorción de agua
o inducen su secreción y de esta manera se pone de Se entiende por colestasis la existencia de un blo-
manifiesto las diarreas (acuosas, amarillas, con cólicos, queo o supresión del flujo biliar que impide, total o par-
espumosas, explosivas y con sensación de ardor anal). cialmente, la llegada de bilis al duodeno. Clínicamente
Estas mejoran con la ingestión de celulosa microcris- la colestasis puede manifestarse únicamente por prurito,
talina y el ácido ursodexocicolico. pero cuando es más expresiva hay ictericia, coluria e
Cuando la resección del íleon es mayor que 100 cm hipocolia o acolia. En el suero se detecta un aumento
e incluye la válvula íleocecal, la secreción de ácidos de las sales biliares, de la bilirrubina conjugada, la
biliares disminuye porque la capacidad de biosíntesis fosfatasa alcalina, la gamma glutamil transpeptidasa
es inferior a la tasa de secreción hepática normal. En y la 5’nucleotidasa, así como del colesterol total y
esterificado.
este sentido, la disminución de ácidos biliares, la falta
de micelas y la pérdida de superficie de mucosa intes-
Clasificación
tinal llevan a la malabsorción de grasa. Estos a su vez
inhiben la absorción de agua y electrolitos, que trae Según la localización la colestasis se clasifica como
como consecuencia diarreas severas. intrahepática o extrahepática y según la duración en
aguda y crónica.
Colecistectomía
Se considera que una colestasis es crónica si dura
En ausencia quirúrgica de la vesícula biliar, el pool más de seis meses.
de ácidos biliares es almacenado en el intestino delgado La colestasis intrahepática puede ser debido a defec-
proximal durante el ayuno. Después de la ingestión tos funcionales a nivel del hepatocito o del colangiocito
de comida se dirige hacia el íleon terminal donde son o a lesiones obstructivas distales de los canalículos
absorbidos activamente y retornan al hígado por la biliares y de las vías biliares de mayor tamaño. La
circulación portal. En un grupo de pacientes colecistec- colestasis también puede ser debido a enfermedades
tomizados, al incrementarse el pool de ácidos biliares sistémicas o a un proceso linfoproliferativo.
en la luz intestinal y verse su absorción algo compro-
metida se provoca la diarreas explosivas, amarillentas, 3Diagnóstico clínico
transitorias, fétidas, asociadas a cólicos y sensación de
El diagnóstico de los pacientes con colestasis se
quemazón anal. Estos pacientes responden bien con la
dirige en primer lugar a distinguir si se trata de una
ingestión de celulosa microcristalina.
colestasis obstructiva, generalmente extrahepática o
Los ácidos biliares séricos están confinados casi
de una colestasis intrahepática, y en segundo lugar
por completo en la circulación enterohepática, por lo
a determinar su causa. La realización de una historia
que en condiciones normales solo pequeñas cantidades
clínica y de una exploración física meticulosa son los
escapan al mecanismo de captación hepática y pasan a
dos aspectos primordiales para el diagnóstico.
la circulación general. En ayunas, cuando la circulación
enterohepática es inactiva, se hallan las concentraciones Etiología de la colestasis intrahepática
plasmáticas, determinadas por radioinmunoanálisis, – Aguda:
más bajas (0,50 mmol de ácido cólico), y esta cifra • Hepatitis viral.
aumenta después de las comidas (2,0 mmol de ácido • Hepatitis tóxica.
cólico, 2 h después de la ingesta). • Colestasis pura por fármacos.
Los ácidos biliares séricos están elevados en todas • Colestasis benigna postoperatoria asociada a
las hepatopatías difusas, y este aumento es más intenso infecciones bacterianas.
en los periodos posprandiales, en especial si existen – Crónica del adulto:
anastomosis portosistémicas espontáneas o quirúrgicas. • Cirrosis biliar primaria.
Las concentraciones más elevadas se alcanzan en los • Hepatitis autoimune (forma colestásica).
síndromes colestásicos. • Colangitis esclerosante.
La determinación de los ácidos biliares o de sus • Colangiocarcinoma.
sales trihidroxiladas y dihidroxiladas tiene interés en – Crónica infantil:
el diagnóstico y seguimiento de las enfermedades he- • Atresia biliar.
páticas que cursan con lesión hepatocelular. • Déficit de α-1-antitripsina.
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 53

• Displasia arteriohepática. Cuando el prurito es muy intenso y duradero puede


• Enfermedad de Caroli. acompañarse de una hiperpigmentación y un engrosa-
• Enfermedad de Byler. miento de la piel, atribuido a las excoriaciones repetidas
– Otras: por la acción del rascado. La ictericia es el signo más
• Recurrente del embarazo. característico de la colestasis y se debe a la incapacidad
• Idiopática recurrente benigna. para eliminar la bilirrubina que se ha conjugado en el
– Causas menos frecuentes: hepatocito. La ictericia puede detectarse a nivel conjun-
• Sarcoidosis. tival, cuando los niveles circulantes de bilirrubina son
• Enfermedad de Hodgkin. todavía relativamente bajos de menos de 2,5 mg/dL. En
• Insuficiencia cardiaca. casos de colestasis muy prolongada e intensa la ictericia
• Amiloidosis. adquiere un tinte verdínico. La ictericia colestásica se
– Coledocolitiasis: asocia a hipo o acolia y coluria. En la mayoría de los
• Neoplasia de cabeza de páncreas. casos la coluria precede a la ictericia.
• Neoplasia de vías biliares. En las colestasis crónicas de larga evolución pueden
– Lesiones inflamatorias de los conductos biliares: detectarse xantomas y xantelasmas. En estos casos
pancreatitis. también puede existir esteatorrea con heces pastosas y
– Causas menos frecuentes: brillantes. La esteatorrea puede llegar a ser muy intensa,
• Hemobilia. si además existe un bajo aporte de enzimas pancreáticos
• Parásitos. al intestino, debido a la obstrucción del Wirsung o en
• Quiste de colédoco. los casos en los que se asocia una insuficiencia pancreá-
• Divertículo duodenal tica. Los pacientes con colestasis crónica pueden tener
manifestaciones de desnutrición de intensidad variable
Etiología de la colestasis extrahepática y ciertas deficiencias vitamínicas. La falta de absorción
– Coledocolitiasis: de vitamina D y de calcio debido a la malabsorción
• Neoplasia de cabeza de páncreas. intestinal es uno de los que contribuye a la patología
• Neoplasia de vías biliares. metabólica ósea, generalmente una osteoporosis. La
• Lesiones inflamatorias de los conductos biliares. osteomalacia es excepcional. Menos frecuentemente
• Pancreatitis. el paciente manifiesta una hemeralopia o alteraciones
– Causas menos frecuentes: cutáneas secundarias al déficit de absorción de vita-
• Hemobilia. mina A. Puede existir una diátesis hemorrágica por
• Parásitos. una deficiente síntesis de factores de coagulación en
• Quiste de colédoco. el hígado debida a la carencia de vitamina K. También
• Divertículo duodenal. se han descrito alteraciones neurológicas secundarias a
una falta de vitamina E en niños con colestasis intensa
El síndrome colestásico se identifica por unos sín- muy prolongada. Estos trastornos son excepcionales en
tomas que reflejan la incapacidad para la excreción de adultos con colestasis crónica.
sales biliares, bilirrubina conjugada y demás componen- La anamnesis y exploración son primordiales en el
tes de la bilis. Puede presentarse con ictericia, coluria, diagnóstico de las colestasis porque sugieren siempre,
acolia y prurito. Debido a la disminución o inexistencia aseguran algunas veces y orientan sobre la causa intra-
de sales biliares en el intestino hay esteatorrea cuando la hepática o extrahepática. También puede orientar sobre
colestasis es muy intensa y prolongada. La falta de ab- la etiología benigna o maligna del síndrome colestásico.
sorción de grasas, vitaminas liposolubles y de algunos La asociación de dolor agudo en hipocondrio derecho
minerales es la responsable de los cuadros deficitarios o epigastrio apunta la obstrucción del colédoco por
que pueden asociarse a las colestasis crónicas. litiasis, más probable si hay antecedentes de cólicos
El primer paso diagnóstico es la realización de una biliares. El uso de fármacos debe hacer sospechar una
historia clínica y una exploración física minuciosa. El hepatitis tóxica colestásica (Tabla 179.4). Cuando hay
prurito es un síntoma frecuente en los pacientes con el antecedente de ingesta de fármacos debe evaluarse la
colestasis, particularmente en algunas enfermedades relación cronológica entre la toma de este y la aparición
como la cirrosis biliar primaria y la colestasis gravídi- de enfermedad colestásica, así como la exclusión de
ca. Su presencia, cuando no hay una patología cutánea otras alteraciones. La historia de hepatopatía crónica,
intrínseca, debe hacer pensar siempre en una colestasis. en cuya evolución aparece ictericia asociada a hepato-
54 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

megalia, sugiere el diagnóstico de hepatocarcinoma. laparoscopia para el diagnóstico de la colestasis tiene en


Si hay una disminución o desaparición de la ictericia la actualidad poco interés, pero la biopsia hepática, sin
coincidente con una hemorragia digestiva debe sospe- embargo, es una técnica imprescindible para establecer
charse un tumor de la ampolla de Váter. La anorexia la etiología de algunos tipos de colestasis intrahepática.
con adelgazamiento, insomnio y síntomas depresivos Las principales determinaciones analíticas que tie-
hace pensar en colestasis por un tumor pancreático. La nen interés para el diagnóstico de la existencia y de la
asociación de urticaria e ictericia con prurito o sin este, etiología de la colestasis son:
orienta al diagnóstico de quiste hidatídico comunicado – Generales:
con la vía biliar, que se observa en áreas endémicas de • Aspartato amino transferasa.
esta zoonosis. Se debe interrogar sobre antecedentes • Alanino amino transferasa.
que puedan indicar una infección viral, tales como • Fosfatasa alcalina.
transfusiones, consumo de drogas por vía parenteral y • Gamma glutamil transferasa.
relaciones sexuales de riesgo con pacientes afectados de • Bilirrubina total y conjugada.
hepatitis. En caso de cirugía previa abdominal o de las – Indicadores de hepatopatía crónica:
vías biliares es obligado excluir la colestasis extrahepá- • Albuminemia.
tica por estenosis u otras alteraciones posquirúrgicas del • Tasa de protrombina.
árbol biliar. La exploración física puede revelar algunos • Gamma globulinemia.
signos específicos como la palpación de una vesícula – Pruebas específicas:
distendida, perceptible como tumoración a veces dura • Anticuerpos antimitocondriales M2.
(signo de Courvoisier). Una historia familiar de enfer- • Anticuerpos antinucleares.
medad hepática colestásica sugiere la posibilidad de un • Inmunoglobulinas.
trastorno hereditario. • Serologías virus hepatitis A, B y C.

Tabla 179.4. Fármacos asociados a colestasis En cualquier tipo de colestasis ocurren alteraciones
Colestasis hepatocelular Colestasis ductular
biológicas que reflejan el aumento en el plasma de
los productos que normalmente son eliminados por la
Hormonas sexuales Alopurinol
Carbamacepina Amoxicilina-clavulánico bilis. Así, puede detectarse un aumento de la fracción
Clorpromacina Azatioprina conjugada de la bilirrubina. Hay un incremento de
Amoxicilina-clavulánico Barbituricos los niveles de fosfatasa alcalina y de gamma glutamil
Trimetroprim-sulfametoxazol Captopril transpeptidasa. Los niveles de corte de la fosfatasa
Eritromicina Carbamacepine
Claritromicina Clorpropamida
alcalina y gamma glutamil transpeptidasa que se requie-
Nitrofurantoina Clindamicina ren para el diagnóstico de colestasis son una fosfatasa
Clorpropamida Fenitoina alcalina superior a 1,5 veces el límite normal y una
Azatioprina Sulpirida gamma glutamil transpeptidasa superior a tres veces la
Ciclosporina Trimetroprim- normalidad. El aumento exclusivo de gamma glutamil
Propafenona sulfametoxazol
Nifedipina Hierbas medicinales transpeptidasa no suele ser suficiente para el diagnóstico
Antiinflamatorios no ya que puede ser debido a una inducción enzimática
esteroideos ocasionada por el consumo crónico de alcohol o por el
Nimesulida consumo de fármacos. El aumento exclusivo de fosfa-
Hierbas medicinales
tasa alcalina se observa en enfermedades colestásicas
poco comunes como la colestasis intrahepática familiar
Exámenes complementarios progresiva 1 y 2, y ciertos defectos de la síntesis de
Las determinaciones de laboratorio son de una gran ácidos biliares, pero también puede ser consecuencia
ayuda para confirmar la presencia de colestasis, así de un rápido crecimiento de los huesos (por ejemplo,
como en algunos casos la etiología de esta. Por otra en niños), en patología ósea como la enfermedad de
parte existen una serie de exploraciones incruentas Paget y en la osteomalacia o el embarazo. Las amino
como la ecografía, la colangiorresonancia, la tomo- transferasas están generalmente poco elevadas cuando
grafía axial computadorizada y la ecoendoscopia, y de se trata de una colestasis pura. Sin embargo, en casos de
exploraciones invasivas como la colangiopancreatogra- hepatitis tóxica o hepatitis viral puede haber un aumento
fía retrógrada endoscópica y la CTP que permiten vi- importante de las amino transferasas, ya que la colesta-
sualizar directamente las vías biliares. La función de la sis se asocia a una necrosis celular más intensa. En la
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 55

obstrucción aguda y transitoria del colédoco por un cál- nucleares y los anticuerpos antimúsculo tienen interés
culo puede haber un aumento importante de las amino para el diagnóstico de síndromes de solapamiento de
transferasas y confundirse con un cuadro citolítico. La enfermedades colestásicas crónicas como la cirrosis
5’nucleotidasa es otra enzima que se halla elevada en biliar primaria y la colangitis esclerosante primaria con
los pacientes con colestasis y que tiene el mismo patrón una hepatitis autoinmune.
de sensibilidad y especificidad que la fosfatasa alcalina También tiene interés la determinación de gam-
y la gamma glutamil transpeptidasa. Cuando hay una maglobulinas y de las fracciones de inmunoglobulinas,
colestasis crónica también puede hallarse un aumento especialmente para el diagnóstico de la cirrosis biliar
del colesterol y de los lípidos circulantes. primaria y de formas colestásicas de hepatitis autoin-
La positividad del antígeno de superficie del virus mune. Recientemente, se ha descrito una colangitis
de la hepatitis B, del anticuerpo frente al virus de la autouinmune asociada a IgG4, con trazos colangio-
hepatitis C y del ARN viral o de anticuerpos IgM frente gráficos indistinguibles de la colangitis esclerosante
al virus de la hepatitis A apoya el diagnóstico de hepati- primaria que frecuentemente afecta a las vías biliares
tis viral. En estos casos generalmente hay una citolisis extrahepáticas y se asocia a pancreatitis autoinmune.
notable. También tiene interés la determinación del Esta enfermedad es más frecuente en varones adultos,
tiempo de protrombina, si persiste disminuido a pesar responde generalmente al tratamiento con inmuno-
de la administración parenteral de vitamina K apoya el supresores y conlleva a un aumento de los niveles
diagnóstico de insuficiencia hepatocelular. circulantes de IgG4.
Las determinaciones inmunológicas tienen uti-
Métodos de imagen
lidad para establecer el diagnóstico y la causa de la
colestasis. En este sentido deben considerarse los Ecografía
anticuerpos antimitocondriales M2, los anticuerpos Debido su sencillez y escaso costo la ecografia
antinucleares, especialmente si tienen un patrón anular hepatobiliar es la técnica básica para el diagnóstico de
alrededor del núcleo, y los anticuerpos anticitoplasma las colestasis. Permite visualizar la estructura tanto del
de los neutrófilos. Los anticuerpos antimitocondriales hígado como de las vías biliares y, por tanto, aporta una
son característicos de la cirrosis biliar primaria y se información clave en el diagnóstico. Se puede observar
detectan en más de 90 % de los casos, con una espe- si hay una dilatación de las vías biliares intra hepáti-
cificidad superior a 95%. Generalmente se detectan casy extrahepáticas, así como la presencia de cálculos
por inmunofluorescencia indirecta y se consideran en el trayecto de estas vías y de la vesícula biliar. Un
positivos los títulos superiores a 1/40, pero también colédoco con un diámetro superior a 7 mm es sugesti-
existen otros procedimientos inmunoenzimáticos con vo de una colestasis extrahepática, aunque es posible
proteínas recombinantes, que elevan la sensibilidad y observar un colédoco normal en las primeras fases de
la especificidad de la prueba. Los anticuerpos antinu- una obstrucción, en los tumores infiltrativos difusos
cleares pueden hallarse hasta en 30 % de pacientes con del colédoco y en la colangitis esclerosante primaria.
cirrosis biliar primaria y los dirigidos frente a proteínas La ecografía también informa acerca de las estruc-
de la envoltura nuclear (anti-gp210) o a componentes turas del hígado y la presencia de procesos expansivos
del núcleo (anti-SP100) son altamente específicos para intrahepáticos, quistes y dilataciones saculares de las
esta enfermedad (mayor que 95 %) y tienen especial vías biliares intrahepáticas. La ecografía permite, en
interés diagnóstico en pacientes sin anticuerpos antimi- caso de obstrucción, apreciar en más de 95 % de los
tocondriales. Los autoanticuerpos frente al citoplasma casos una dilatación de las vías biliares intrahepáticas
de los neutrófilos, los anticuerpos antinucleares y los a nivel del hilio y, ocasionalmente, también de la vía
anticuerpos antimúsculo pueden hallarse en la colangi- biliar principal e incluso a veces ofrece datos acerca de
tis esclerosante primaria. El patrón de autoanticuerpos la etiología de la colestasis, enfermedad pancreática o
frente al citoplasma de los neutrófilos en la esta última litiasis. Estos resultados tan buenos, sin embargo, solo
enfermedad es “atípico,” ya que el antígeno responsable se obtienen con equipos de gran calidad y exploradores
de la positividad se localiza en el núcleo en lugar de con mucha experiencia. Cuando no se cumplen estas
en el citoplasma. Además de hallarse en la colangitis condiciones la sensibilidad de la ecografía para el diag-
esclerosante primaria, se observan con frecuencia en nóstico de la colestasis puede disminuir hasta situarse
la colitis ulcerosa y en la hepatitis autoinmune, por lo entre 60 % y 70 %, por tanto, la ecografía no siempre
que tienen una baja especificidad para el diagnóstico de es suficiente para excluir la obstrucción de una vía de
colangitis esclerosante primaria. Los anticuerpos anti- gran tamaño de manera fiable y está indicado realizar
56 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

otras exploraciones. La parte final del colédoco y del El método también puede revelar cambios dentro de las
páncreas no se observan suficientemente bien con la paredes del conducto biliar y afección del parénquima
ecografía. hepático, así como en otros órganos. Sin embargo, los
Tomografía axial computadorizada casos de colangitis esclerosante primaria inicial sin di-
latación de las vías biliares pueden pasar desapercibidos
Esta técnica es complementaria de la ecografía en con la colangiorresonancia y en consecuencia se debe
el diagnóstico de las colestasis y no debe ser la primera ser cauteloso antes de excluir una colangitis esclerosante
exploración a realizar ya que es mucho más cara. Tiene primaria inicial, basados en una colangiorresonancia nor-
interés cuando la ecografía no es posible técnicamente mal. Esta exploración también es útil para el diagnóstico
o si se sospecha una enfermedad pancreática ya que de la enfermedad de Caroli que muestra las dilataciones
proporciona mejores imágenes de este órgano que la quísticas de los conductos biliares intrahepáticos.
ecografía. La precisión de la tomografía axial compu-
tarizada para el diagnóstico de las colestasis es similar
a la ecografía, pero en algunas ocasiones, cuando se
trata de enfermedades hepáticas crónicas o de procesos
expansivos intrahepáticos, puede ser más resolutiva
que la ecografía.
Colangiorresonancia
La colangiorresonancia permite evaluar de forma
muy precisa el estado del árbol biliar intrahepático y
extrahepático, así como obtener imágenes pancreáticas
tanto normales como patológicas. Visualiza las vías bi-
liares intrahepáticas y extrahepáticas normales en más de
90 % de los casos y, además, se observa con precisión las
variantes anatómicas. La presencia de obstrucción biliar
se observa en más de 85% de los casos, aunque no se dis-
tingue con tanta precisión entre lesiones benignas y ma-
lignas. Los cálculos de la vía biliar principal se detectan a Fig. 179.1. Colangiorresonancia de un paciente afectado de
partir de 4 mm, aunque a veces no pueden distinguirse de colangitis esclerosante primaria. Se observa una dilatación
un coágulo de sangre, barro biliar o de algunos parásitos. del conducto hepático común y zonas de las vías biliares
Cuando hay una dilatación de la vía biliar principal la intrahepáticas dilatadas y otras estenóticas, aspecto caracte-
sensibilidad para diagnosticar una litiasis superior a 4 rístico de esta enfermedad.
mm es de 90 % a 95 %, en comparación con la colangio- Ecoendoscopia
grafía retrógrada endoscópica. La colangiorresonancia
también es útil para el diagnóstico de las neoplasias de Esta técnica tiene la ventaja de colocar el transductor
vías biliares y del colangiocarcinoma. En este último en íntimo contacto con la zona a explorar y, en conse-
caso se han descrito valores predictivos positivos de 86 cuencia, elimina las interferencias ocasionadas por la
% y negativos de 98%. La prueba permite visualizar grasa abdominal o el gas intraluminal. La sensibilidad
los conductos biliares preestenóticos y posestenóticos y especificidad de esta técnica es similar a la de la co-
y evaluar las características de la tumoración. También langiopancreatografía endoscópica retrógrada para el
aporta notable información sobre las tumoraciones que diagnóstico de cálculos coledocianos. A pesar de esto,
afectan al hilio hepático. La colangiorresonancia es útil al tratarse de una técnica parcialmente invasiva y que
para el diagnóstico y establecer la extensión de la colan- no permite una intervención terapéutica, su función
gitis esclerosante primaria (Fig. 179.1) y esta prueba ha en el diagnóstico de la litiasis coledociana es poco
desplazado a la colangiopancreatografía retrógrada en- trascendente. La técnica tiene mucho más interés para
doscópica con una sensibilidad y especificidad de 80 % y visualizar la ampolla de Váter, con una elevada sensibi-
87 %, respectivamente. Los estudios que han comparado lidad y especificidad para el diagnóstico del carcinoma
la colangioresonancia con la colangiopancreatografía de la ampolla. Se ha postulado que la ecoendoscopia
retrógrada endoscópica han demostrado una exactitud se debe tener presente cuando hay dificultades o con-
diagnóstica similar, aunque la visualización de los con- traindicaciones para realizar una colangiopancreato-
ductos biliares puede ser más pobre con la resonancia. grafía retrógrada endoscópica o este procedimiento
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 57

se ha realizado sin conclusiones. La ecoendoscopia es nistrados por vía oral o por vía endovenosa ha perdido
equivalente a la colangiorresonancia en la detección de su utilidad y prácticamente han desaparecido. Tanto la
cálculos del conducto biliar y las lesiones que causan colecistografía oral como la colangiografía endovenosa,
la obstrucción extrahepática. se utilizan en la actualidad en casos muy específicos,
Colangiografía retrógrada endoscópica y generalmente relacionados con aspectos terapéuticos
y colangiografía transhepática percutánea como la colecistectomía laparoscópica o la litotricia.
El estudio gammagráfico con trazadores derivados del
Estas dos exploraciones son complementarias y su ácido iminodiacético es otra técnica que puede tener
realización depende de las posibilidades de acceso y de interés en situaciones muy especiales.
la disponibilidad y experiencia del operador. Ambos pro-
cedimientos permiten la visualización directa de las vías Biopsia hepática
biliares, tienen una sensibilidad y especificidad superio-
Es el procedimiento recomendable aunque no
res al 95 % y suelen definir con exactitud la localización
obligatorio para establecer el diagnóstico de algunas
y la naturaleza de la lesión. El principal problema es que
colestasis intrahepáticas según las más recientes guías
son procedimientos invasivos y, por tanto, comportan
de diagnóstico y tratamiento de las enfermedades coles-
un mayor riesgo que la ecografía convencional y que la
tásicas. Tiene especial interés en las colestasis crónicas
colangiorresonancia. En la actualidad estas técnicas se
intrahepáticas de probable etiología autoinmune como
aplican casi exclusivamente con fines terapéuticos, ya
la cirrosis biliar primaria sin anticuerpos antimitocon-
que la aparición de nuevos procedimientos no invasi-
drilaes, las formas de colangitis esclerosante primaria
vos sensibles como la colangioresonancia ha reducido
de pequeñas vías biliares y la hepatitis autoinmune
notablemente su utilización con fines diagnósticos. La
tasa de complicaciones de la colangiopancreatografía colestásica. También es esencial para el diagnóstico de
retrógrada endoscópica, incluso en manos expertas, es las enfermedades ductopénicas del adulto y enferme-
elevada: pancreatitis en 3 % a 5% de los casos, cuando dades granulomatosas que pueden evolucionar con un
se combina con esfinterotomía una tasa de sangrado patrón bioquímico de colestasis como la sarcoidosis,
en 2 % y de colangitis en 1 %. La tasa de mortalidad así como algunas formas de amiloidosis. La biopsia
relacionada con el procedimiento es de 0,4 %. también puede ayudar en el diagnóstico de hepatitis
La colangiografía retrógrada endoscópica puede colestásicas por fármacos, y en casos poco frecuentes
emplearse cuando es posible el acceso endoscópico a la puede sugerir la presencia de un proceso colestásico
ampolla de Váter. Aunque depende de la habilidad del extrahepático crónico que haya pasado inadvertido a
operador, el porcentaje de éxitos suele ser superior a 90 las técnicas de imagen habituales.
% y la principal complicación es la colangitis. La co-
langiografía retrógrada endoscópica puede practicarse Algoritmo diagnóstico de colestasis
incluso en casos de trastornos de coagulación o ascitis.
Se puede visualizar el polo inferior de la obstrucción y Se exponen los pasos para el diagnóstico (Fig.
permite realizar una esfinteretomía en caso necesario. 179.2), que se basa en una cuidada anamnesis y ex-
La colangiografía transhepática percutánea median- ploración física, y en la realización de pruebas com-
te el empleo de una aguja fina es un procedimiento plementarias que incluyen determinaciones analíticas
diagnóstico y terapéutico en las colestasis. Cuando las para confirmar la colestasis y para eliminar o sugerir
vías biliares están dilatadas la opacificación se consigue posibles etiologías, y una batería de pruebas de imagen
en 100 % de los casos, y si no lo están entre 70 % y para conocer la localización, extensión y causa de la
90 % de los casos, dependiendo de la experiencia del colestasis. Se debe realizar de forma secuencial una
operador. La presencia de ascitis o de notables trastor- ecografía abdominal y proseguir con las demás pruebas
nos de la coagulación contraindica esta técnica, porque dependiendo de los datos que aporten esta exploración
son más frecuentes las complicaciones en forma de inicial y las pruebas de laboratorio. Sin embargo, las
hemorragia o coleperitoneo. exploraciones de imagen no son recíprocamente exclu-
yentes y en consecuencia en algunos pacientes pueden
Otras técnicas para la visualización ser complementarias para llegar al diagnóstico.
de las vías biliares
Cuando la ecografía sea indicativa de una litiasis
Desde la aparición de las nuevas técnicas de imagen coledociana, el siguiente paso es realizar una colan-
y especialmente de la ecografía, la opacificación de las giografía retrógrada endoscópica, cuyo objetivo, más
vías biliares mediante la utilización de contrastes admi- que confirmatorio del diagnóstico, tiene finalidades
58 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 179.2. Algoritmo diagnóstico de las colestasis.

terapéuticas para proceder a una esfinterotomía y ex- función de la colangiografía percutánea transhepática
tracción de los cálculos. Es conveniente recordar que la para el diagnóstico de las colestasis es irrelevante y
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica es un este procedimiento queda relegado, en general, a pro-
procedimiento invasivo, que debe evitarse en pacientes cesos terapéuticos específicos, ya sea la dilatación de
con sospecha de una enfermedad colestásica crónica una estenosis biliar intrahepática mediante balón o la
con posibilidad de sobreinfección bacteriana. En este colocación de una prótesis endobiliar.
sentido, la colangiografía retrógrada debe realizarse lo Cuando ninguna de las exploraciones anteriores
menos posible en pacientes con sospecha de enferme- es indicativa de afección de las grandes vías biliares
dad de Caroli y en la colangitis esclerosante primaria, extrahepáticas o intrahepáticas, el siguiente paso en
ya que en la actualidad se dispone de la colangiorreso- el proceso diagnóstico es la realización de una biopsia
nancia, que es un procedimiento no invasivo. hepática por vía percutánea y en algunos casos por vía
Cuando la ecografía no es concluyente el siguiente transyugular.
paso en el proceso diagnóstico es la realización de una Las guías clínicas de la European Association for
colangiorresonancia, así como las pruebas de labora- the Study of the Liver recomiendan estos pasos para el
torio, particularmente la determinación de anticuerpos diagnóstico de las enfermedades colestásicas:
antitisulares, ya que la presencia de anticuerpos antimi- – Una historia clínica y un examen físico minuciosos.
tocondriales es diagnóstica de cirrosis biliar primaria. – Ecografía como primer procedimiento de imagen
Según la sospecha diagnóstica puede ser más apropiada que no es invasivo, para distinguir entre colestasis
la realización de una ecoendoscopia o incluso de una intrahepática y extrahepática.
colangiografía retrógrada. Esta exploración también – Determinación de anticuerpos antimitocondriales
está indicada si se pretende obtener material para el en los pacientes adultos con una colestasis crónica
análisis histológico mediante escobillado o biopsia. La intrahepática.
función de la tomografía computadorizada es menor – La colangiorresonancia es el siguiente paso que debe
desde la aparición de la colangiorresonancia, si bien realizarse en pacientes con colestasis inexplicable.
puede tener interés cuando la sospecha inicial sea un – La ecoendoscopia es una alternativa a la colangio-
proceso neoformativo a nivel hepático o bien en los rresonancia para la evaluación de una obstrucción
centros que no disponen de resonancia magnética. La del tracto biliar distal.
Capítulo 179. Secreción biliar y circulación enterohepática de los ácidos biliares 59

– La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica Bangarulingam, S. Y., Gossard, A. A., Petersen, B. T., Ott, B. J.,
diagnóstica debe reservarse para casos muy selec- Lindor, K.D. (2009). Complications of endoscopic retrograde
cholangiopancreatography in primary sclerosing cholangitis.
cionados. Cuando no se prevé una maniobra terapéu- Am J Gastroenterol, 104, 855-860.
tica es preferible realizar una colangiorresonancia Berstad, A. E., Aabakken, L., Smith, H. J., Aasen, S., Boberg, K.
o una ecoendoscopia debido a la morbilidad y la M., Schrumpf, E. (2006). Diagnostic accuracy of magnetic res-
mortalidad relacionadas con la colangiopancreato- onance and endoscopic retrograde cholangiography in primary
sclerosing cholangitis. Clin Gastroenterol Hepatol, 4, 514-520.
grafía retrógrada endoscópica. Bjornsson, E., Olsson, R., Bergquist, A., Lindgren, S., Braden, B.,
– La biopsia hepática debe considerarse en pacientes Chapman, R.W., et al. (2008). The natural history of small-duct
con colestasis intrahepática de origen incierto y en primary sclerosing cholangitis. Gastroenterology, 134, 975-980.
Chazouilleres, O., Wendum, D., Serfaty, L., Rosmorduc, O., Poupon,
los pacientes con anticuerpos antimitocondriales
R. (2006).Long term outcome and response to therapy of primary
negativos. biliary cirrhosis–autoimmune hepatitis overlap syndrome. J
– También se debe considerar realizar estudios ge- Hepatol, 44, 400–406.
néticos para detectar mutaciones de los genes que EASL Clinical Practice Guidelines. (2009). Management of choles-
tatic liver diseases. J Hepatol. 51:237-67.
codifican a los diferentes transportadores biliares,
Etzel, J. P., Eng, S. C., Ko, C. W., Lee, S. D., Saunders, M. D.,
cuando se pueda disponer de estos. Estas pruebas Tung, B. Y., et al. (2008). Complications after ERCP in patients
son especialmente interesantes en pacientes con una with primary sclerosing cholangitis. Gastrointest Endosc, 67,
histología compatible con cirrosis biliar primaria y 643-648.
Ghazale, A., Chari, S. T., Zhang, L., Smyrk, T. C., Takahashi, N.,
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liver disease. Clin Gastroenterol Hepatol, 5, 776-782.
Capítulo 180
Litiasis biliar
Dr. Javier Ernesto Barreras González

La litiasis biliar se define como la presencia o llega a alcanzar 50 %. La prevalencia de la colelitiasis


formación de cálculos en las vías biliares, que pueden es netamente inferior en África y los países orientales,
estar localizados tanto en el interior de la vesícula bi- hasta el extremo de la tribu Masai en África Oriental,
liar (colelitiasis o litiasis vesicular) (Fig. 180.1), como donde la colelitiasis es desconocida.
en el interior de los conductos biliares intrahepáticos En Cuba ocupa el segundo lugar como causa de
(litiasis que se localizan proximalmente a la confluen- cirugía mayor electiva. A pesar de que no es un pa-
cia de los conductos hepáticos derecho e izquierdo) o decimiento con alta morbimortalidad, su prevalencia
extrahepáticas (colédocolitiasis o litiasis coledociana es elevada la que condiciona un notable consumo de
es la presencia de cálculos en el colédoco). recursos sanitarios.
En Cuba se desconoce de estudios estadísticos sobre
la frecuencia de litiasis vesicular en la población en
general, no obstante, la enfermedad se reporta como una
de las primera causa de hospitalización por enfermeda-
des digestivas en los hospitales de La Habana, al igual
que se reporta un alto número de pacientes operados
cada año en los hospitales clínico-quirúrgicos por tal
afección. Otros autores reportan que se manifiesta en
un 6,2 % de un grupo poblacional supuestamente sano.
En general la prevalencia es variable y se han
demostrado diferencias según el país y la población
estudiada. Estas dependen de varios factores de riesgo
Fig. 180.1. Litiasis múltiple de la vesícula biliar. como son (Fig. 180.2):

Epidemiología
La litiasis biliar es una afección extendida en el
mundo, algunos investigadores reportan que afecta 10
% a 20 % de la población mundial.
Constituye un problema de salud por su elevada
morbilidad en los países de Europa y el hemisferio Fig. 180.2. Factores de riesgo de la litiasis biliar.
Occidental (5 % a 22 %). Se conoce que aumenta con la
edad y que es mayor en mujeres (15 % a 25 %) que en – Sexo: los estrógenos tienen un rol definido en el
varones (7 % a 15 %), en una proporción de 4:1; aunque metabolismo hepático del colesterol incrementando
tal diferencia tiende a disminuir con la longevidad. la saturación de la bilis. Esto en combinación con
La incidencia en Estados Unidos se reporta 25 % en cambios en el metabolismo de los lípidos, los pig-
mujeres y 12 % en hombres alrededor de los 60 años mentos, y en general de la saturación del colesterol
de edad, mientras que en países como Suecia y Chile predisponen a la formación de cálculos.
Capítulo 180. Litiasis biliar 61

– Edad: la prevalencia de litiasis biliar se incrementa – Factores genéticos: estudios epidemiológicos han
de manera notable con la edad. En las personas demostrado similar prevalencia entre varios grupos
mayores de 50 años, la prevalencia en Europa es étnicos probablemente relacionados con factores
de 15 % y en Suramérica de 30 %, comparado con ambientales, hábitos dietéticos y factores gené-
2 % en las personas entre 18 a 31 años. ticos que determinan la producción de cálculos.
– Obesidad: es un factor independiente que multiplica La litiasis biliar es frecuente en algunos indios de
por tres el riesgo de colelitiasis. El obeso produce Norteamérica (indios Pima), en Chile y Suecia. Las
bilis sobresaturada de colesterol, con el incremento enfermedades de la vesicular biliar, incluyendo el
de la formación de cálculos. Personas con un índice cáncer de vesícula, son endémicas en Bolivia y
de masa corporal mayor que 30 kg/m2, tienen una Chile relacionado en parte por la presencia de de-
mayor producción de colesterol. En las personas terminados tipos de genes. La baja prevalencia de
con índice de masa corporal mayor que 25 kg/m2 litiasis biliar se puede observar entre los japoneses
existe mayor prevalencia de litiasis biliar que en las y se relaciona con sus hábitos alimentarios pobres
personas con índice de masa corporal menor que en grasas.
25 kg/m2 (13 % vs. 7 %). Los pacientes obesos que – Historia familiar: la incidencia de litiasis biliar se
experimentan una rápida pérdida de peso debido a incrementa en los pacientes con historia familiar
la instauración de dietas o después de cirugía ba- de padecer esta enfermedad. En las personas donde
riátrica, presentan un elevado riesgo de desarrollar existe el antecedente de que ambos padres hayan
litiasis biliar. presentado litiasis biliar, la prevalencia es 14 %,
– Embarazo: la multiparidad aumenta el riesgo de mientras que es 12 % en los que existe el antecedente
litiasis biliar, debido a que los cambios hormonales de uno solo y 6 % en los que no existe antecedentes
y metabólicos que suceden durante el embarazo, familiares.
incrementan la secreción y saturación del colesterol – Dieta: una dieta con alto contenido de grasa puede
junto con una disminución de la contracción de la incrementar la secreción biliar de colesterol y la
vesícula biliar. Todos estos cambios son conse- saturación de este en la bilis, una dieta rica en grasas
cuencia del incremento de los niveles de estrógeno no saturadas y en fibras puede disminuir la presencia
y progesterona los que se normalizan después del de litiasis biliar.
parto. La gestación facilita la formación de litiasis – Tratamientos sustitutivos con hormonas: tratamien-
intrahepática por causas concurrentes y distintas tos con estrógenos en humanos y en animales de
entre estas: experimentación han incrementado la incidencia de
• Aumento de colesterol en la sangre y de su litiasis biliar al alterar la saturación del colesterol
eliminación por la bilis, lo que incrementa la en la bilis.
formación de cálculos. – Cirrosis hepática: se ha documentado bien como
• Eliminación de pigmentos biliares está aumenta- factor de riesgo para desarrollar litiasis vesicular. En
da como consecuencia de la continua hemólisis estos pacientes con enfermedad hepática crónica los
que se produce con el aumento de la renovación cálculos son en general asintomáticos y por lo tanto
de la sangre. la cirugía no es requerida. Cuando existen síntomas
• Eliminación de ácidos biliares en la gestación o complicaciones (colecistitis) la cirugía implica un
está también aumentada porque estos son el alto riesgo de morbimortalidad. La prevalencia de
eslabón metabólico final de los esteroides hor- litiasis en la cirrosis hepática es 1,2 a 3 veces más
monales, cuya hiperproducción en el embarazo que la población general. El riesgo de desarrollar
es bien conocida. una litiasis vesicular está relacionado al tiempo de
• Aumento de producción de bilis con sus tres evolución y severidad de la enfermedad hepática más
principales componentes, pero además esta que a la etiología de esta. Los cálculos pigmentados
bilis es evacuada en condiciones desfavorables, son los más frecuentes, los negros ocurren solo en
en primer lugar porque las alteraciones neuro- la vesícula, son pequeños (3 mm) y más frecuentes
vegetativas del embarazo crean un estado de en la enfermedad hepática crónica y enfermedad he-
discinesia vesicular que contribuye en gran parte molítica, mientras que los pardos ocurren en el árbol
a las dolencias de la vesícula biliar. biliar, asociados a infección bacteriana y parasitaria.
• Compresión por el útero crea circunstancias – Otros factores: la litiasis biliar se incrementa tam-
favorables para la formación de la litiasis biliar. bién en la diabetes mellitus tipo II, en la fibrosis
62 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

quística, en algunas dislipidemias, en la nutrición del proceso de iniciación del cálculo, la formación de
parenteral prolongada, en pacientes con vagotomía, cristales de colesterol monohidratado. En la bilis de la
síndrome de intestino corto, enfermedad de Crohn vesícula con propiedades litogénicas, es decir, propensa
y colitis ulcerosa y en desórdenes sistémicos como a la formación de cálculos, existe una sobresaturación
la hemolisis. de colesterol y una nucleación relativamente rápida
de los cristales de colesterol. La interacción dinámica
Patogenia de las fuerzas en favor y en contra de la nucleación y
el crecimiento de cristales de colesterol en la vesícula
Prácticamente todos los cálculos biliares se forman biliar, comprenden las acciones de proteínas o apopro-
en la vesícula biliar, pero pueden formarse en el con- teínas específicas, el contenido de mucina y el estasis
ducto biliar después de una colecistectomía o detrás de de la vesícula biliar.
una estenosis como consecuencia de estasis. La bilis es una secreción exocrina compuesta por
Los cálculos de bilirrubinato se originan por una agua, ácidos biliares, colesterol, fosfolípidos, pigmentos
anomalía del metabolismo de la bilirrubina, mientras biliares, proteínas y electrolitos que se mantienen en
que los de colesterol son causados por una concatena- solución. Cuando la bilis está sobresaturada de coles-
ción de alteraciones fisiopatológicas cuyo mecanismo terol o pigmentos biliares pueden formarse cálculos
desencadenante es la excreción excesiva de colesterol mediante un proceso de precipitación, cristalización y
biliar. Ambos tipos de cálculos están compuestos por agregación de estos componentes.
sustancias virtualmente insolubles en agua. El proceso inicial en la formación de cálculos bi-
Los cálculos pigmentarios contienen cantidades liares consiste en un cambio físico de la bilis, que se
apreciables de bilirrubinato cálcico y otros pigmentos transforma de solución insaturada en solución en la
derivados del catabolismo de la hemoglobina, mientras que precipitan los elementos sólidos. La patogenia es
que los cálculos de colesterol están formados casi distinta según el tipo de cálculos.
exclusivamente por cristales de este lípido insoluble;
existen cálculos mixtos que contienen a la vez Cálculos pigmentarios
pigmentos biliares y colesterol, pero por lo común Los cálculos pigmentarios comprenden alrededor
predomina el colesterol, por lo que pueden considerarse de 20 % de la litiasis biliar en los países occidentales,
como una variante de la colelitiasis del colesterol. donde su incidencia aumenta con la edad y en las
El colesterol, principal componente de la mayoría de vías biliares sujetas a estasis o infecciones repetidas.
los cálculos biliares, es sumamente insoluble en agua Estos cálculos se subdividen en dos categorías, sobre
y el colesterol de la bilis es solubilizado en las micelas la base de diferencias epidemiológicas, clínicas y de
de sales biliares y fosfolípidos y en las vesículas de composición.
fosfolípidos, lo que aumenta considerablemente la Los cálculos pigmentarios negros suelen ser peque-
capacidad transportadora de colesterol en la bilis. Las ños, de forma irregular y de aspecto amorfo al corte.
micelas de sales biliares son agregados de estas en los Se forman en la vesícula y están compuestos por bili-
que las regiones hidrosolubles (iónicas) de la molécula rrubinato cálcico, polímeros de bilirrubina, carbonato
están orientadas hacia fuera, hacia la solución acuosa, cálcico y fosfato cálcico.
mientras que los núcleos esteroideos insolubles (no Los cálculos pigmentarios ocres (cálculos de
polares) están orientados hacia el interior de la micela. bilirrubinato cálcico) poseen capas alternantes de
El colesterol es soluble en el interior de estas micelas bilirrubinato cálcico y sales cálcicas de ácidos grasos.
esferoidales y la capacidad que tienen para transportar Pueden formarse en la vesícula o los conductos biliares.
colesterol es potenciada aún más por la lecitina, un Abundan en pueblos orientales, donde se asocian a
fosfolípido polar. La cantidad de colesterol transportada infecciones biliares repetidas. En las culturas occiden-
en micelas y vesículas varía con la tasa de secreción tales se encuentran sobre todo en el colédoco, donde
de sales biliares. se forman de novo tras la colecistectomía.
La sobresaturación del colesterol en la bilis es un La sobresaturación de la bilis por bilirrubina libre
factor necesario, pero no único, en la formación de cál- desempeña una función central en la formación de los
culos biliares de colesterol, porque la sobresaturación es cálculos pigmentarios. Si bien el hígado excreta en la
frecuente en la bilis de personas en ayunas que no tienen bilis casi exclusivamente bilirrubina conjugada, existe
cálculos biliares. El otro factor crítico en la determina- también una pequeña fracción de bilirrubina libre, inso-
ción de si se forman cálculos biliares es la regulación luble en agua, que está aumentada en la bilis de pacientes
Capítulo 180. Litiasis biliar 63

con colelitiasis. Existen tres mecanismos posibles que – La hipomotilidad vesicular: favorecida por un
explican el exceso de pigmento insoluble en la bilis: aumento del colesterol biliar, conduce a la estasis
– Aumento de la excreción hepática de bilirrubina y retención prolongada de la bilis en la vesícula,
libre: como ocurre en las enfermedades hemolíticas. lo que favorece la precipitación del colesterol. La
– Deficiencia de factores solubilizadores de la bilirru- importancia de la disfunción de la vesícula biliar
bina libre: si bien se desconocen en gran parte, se en la litogénesis se hace patente en situaciones
ha sugerido que el defecto crónico en la secreción clínicas en las que la falta de contracción de la
biliar de ácidos biliares que caracteriza a la cirrosis vesícula conduce a la formación de barro biliar, un
puede explicar la predisposición a la colelitiasis estadio intermedio entre los cristales microscópicos
pigmentaria demostrada en esta enfermedad, en la y la litiasis establecida (Fig. 180.3). Los factores
que la tasa de incidencia anual de cálculos biliares de riesgo de barro biliar por estasis vesicular, casi
es cercana a 5 % y se relaciona directamente con el siempre relacionada con ayuno prolongado, inclu-
estadio evolutivo. yen, además de la nutrición parenteral prolongada,
– Desconjugación de la bilirrubina en la bilis: las la cirugía abdominal, la duración de la estancia en
bacterias coliformes producen β-glucuronidasa, una una unidad de cuidados intensivos, el sida y el em-
enzima que transforma la bilirrubina conjugada en barazo (por una inhibición de la contracción de la
libre. Las infecciones repetidas de las vías biliares musculatura lisa causada por los progestágenos). La
explican la alta incidencia de colelitiasis pigmen- administración de somatostatina para el tratamiento
taria en zonas rurales de Asia donde son comunes de la acromegalia también inhibe la contracción de
las infecciones parasitarias y bacterianas de la vía la vesícula biliar y favorece la formación de barro o
biliar, pero su existencia como factor etiológico de cálculos biliares. Los agentes procinéticos promue-
la colelitiasis pigmentaria en Occidente es dudosa. ven la contracción vesicular y aceleran el tránsito
Por otra parte, este mecanismo explica la formación intestinal, por lo que pueden ser útiles para prevenir
de capas pigmentarias en cálculos de colesterol, que el barro biliar en estas situaciones. En alrededor de
corresponderían a periodos de infección biliar. 20 % de los casos, el barro evoluciona a la formación
de cálculos macroscópicos.
Cálculos de colesterol – La hiperproducción de mucina por la mucosa ve-
La hipótesis más aceptada incrimina cuatro defectos sicular: otra consecuencia de la bilis litogénica,
simultáneos: puede contribuir al aumento de la resistencia al
– La hipersecreción biliar de colesterol con sobresa- flujo del cístico al mismo tiempo que proporciona
turación de la bilis, cuya homeostasis es regulada el medio idóneo para la precipitación del colesterol,
por el hígado, es el factor crítico en la formación de aposición de cristales y crecimiento de los cálculos.
cálculos de colesterol y se debe a diversas causas La disfunción vesicular favorece un fenómeno
(Tabla 180.1). terciario característico del estado litogénico: la

Tabla 180.1. Etiología de la hipersecreción biliar de colesterol


Mecanismos bioquímicos Causas
Incremento en la síntesis endógena de colesterol debido al Como ocurre en la obesidad y en las dislipemias que evolucionan
aumento de la actividad de la HMG-CoA reductasa con hipertrigliceridemia
Incremento en la actividad de receptores hepáticos para las Esto ocurre por efecto de los estrógenos endógenos o exógenos
lipoproteínas (principalmente lipoproteínas de baja densidad y en el sexo femenino y durante la pérdida rápida de peso en obesos
remanentes de quilomicrones), lo que determina que ingrese más por cirugía bariátrica o dieta muy hipocalórica, circunstancia que
colesterol en los hepatocitos y aumente su excreción biliar favorece la movilización de depósitos de colesterol del tejido
adiposo
Reducción de la conversión del colesterol en ácidos biliares Ocurre en el envejecimiento y el sedentarismo
por la enzima 7-α-hidroxilasa, lo que parece ser el mecanismo
subyacente del aumento de la saturación del colesterol biliar y de
la prevalencia de colelitiasis
Disminución de la esterificación del colesterol libre hepático por Debido a un aumento de secreción endógena o administración
hipofunción de la acetilcoenzima A-colesterol-aciltransferasa exógena de progestágenos, que son potentes inhibidores de la
enzima o de fibratos
64 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

de la litogénesis de colesterol, con la función central


de la hipersecreción biliar de colesterol y los de-
fectos secundarios que conducen a la perpetuación
del círculo vicioso y la formación de cálculos (Fig.
180.4). Tras su nucleación, los cristales de colesterol
son retenidos en un gel de mucina en la vesícula
biliar ectásica, se aglomeran y son retenidos por el
mal vaciamiento vesicular, y finalmente cohesionan
y crecen hasta originar cálculos macroscópicos,
un proceso que puede tardar meses o años tras la
cristalización inicial.

Clasificación
Fig. 180.3. Barro biliar (flecha). Los cálculos son de diferente tipo porque responden
a una etiología distinta. Las sustancias que los integran
están presentes en la bilis o son sales derivadas de estas,
reducción del capital circulante de ácidos biliares y
aunque en proporción variada.
su enriquecimiento en ácido desoxicólico. Esto es
así por la posición central de la vesícula biliar en Existen dos clases de cálculos biliares: pigmentarios
la circulación enterohepática: la estasis vesicular y de colesterol.
determina a la vez el secuestro en la vesícula biliar Las características de estos cálculos son importantes
de una parte importante del pool de ácidos biliares y porque sus diferencias condicionan la mayor o menor
que una fracción mayor de la bilis hepática se vierta posibilidad de eliminarlos por disolución o por tritura-
directamente al intestino en vez de a la vesícula. ción. Se distinguen y se denominan según la sustancia
– La cristalización acelerada del colesterol biliar a predominante en su composición (Tabla 180.2).
partir de la bilis sobresaturada, con la consiguiente El 80 % a 90 % de los cálculos biliares están com-
inestabilidad y precipitación de vesículas fusionadas puestos fundamentalmente de colesterol y 10 % a
repletas de colesterol. Se resume esta teoría unitaria 20 % restante por pigmentos biliares.

Fig. 180.4. Teoría unitaria de la litogénesis de colesterol.


Capítulo 180. Litiasis biliar 65

Tabla 180.2. Características de los cálculos biliares


Tipos Colesterol puros o mixtos Pigmentarios
Negros Pardos
Predominio geográfico Países desarrollados Mundial Oriente
Origen Vesicular Vesicular Vesícula y vía biliar
principal
Condiciones asociadas Obesidad Hiperhemolisis Estasis biliar
Embarazo (primaria o adquiridas) Infección biliar
Historia familiar de colelitiasis Cirrosis
Rápida pérdida de peso Abuso de alcohol
Diabetes/hipertrigliceridemia Ancianos delgados
Nutrición parenteral total
Tratamiento sustitutivo de estrógeno
Concentraciones bajas de colesterol
lipoproteínas de alta densidad
Radiología 50 % aproximadamente 50 % aproximadamente No
Recurrencia tras cirugía Posible No Frecuente

Los cálculos pigmentarios pueden ser negros, con Los cálculos pueden situarse en cualquier punto
una elevada proporción de bilirrubinato cálcico, o del sistema biliar, aunque lo más frecuente está en la
pardos, formados por precipitados de bilirrubina no vesícula biliar: 85 % de las veces como localización
conjugada y sales cálcicas de ácidos grasos. única y 15 % restante, acompañado de litiasis en el
Los cálculos de colesterol y los pigmentarios negros colédoco. Inversamente, la presencia de cálculos en el
se originan en la vesícula (colelitiasis) y si son de peque- colédoco se acompaña en 95 % de las veces de cálculos
ño tamaño pueden migrar a la vía biliar (colédocolitiasis en la vesícula biliar, es decir, solo 5 % de los que tienen
secundaria). Por el contrario, los cálculos pigmentarios cálculos en el colédoco no presenta cálculos también
pardos se originan en la vía biliar cuando esta se encuen- en la vesícula biliar. De las personas de más de 65 años
tra colonizada por bacterias (colédocolitiasis primaria). que tienen hecha una colecistectomía previa, hasta
Una única circunstancia, la fístula biliobiliar, co- 20 % desarrollan litiasis en el colédoco. En algunos
nocida como síndrome de Mirizzi, puede alojar un casos excepcionales los cálculos se sitúan en las vías
cálculo grande de colesterol y pigmentarios negros en el intrahepáticas, pero para esto han de coexistir con este-
colédoco, es decir, los grandes cálculos en el colédoco nosis de los conductos que originen estasis biliar, bien
adquirida o en determinadas enfermedades congénitas
prácticamente siempre son pigmentarios pardos y en
como la de enfermedad de Caroli.
estos destaca su fragilidad, por lo que pueden disgre-
garse mecánicamente, sin excesiva dificultad.
Cuando los cálculos son descubiertos en el colédoco Diagnóstico clínico
después de realizada la colecistectomía, se clasifican La expresión clínica de la colelitiasis es variada.
en retenidos, residuales o recurrentes. Aunque existen Muchos casos permanecen asintomáticos durante lar-
autores que solamente los clasifican en residuales (in- gos periodos de tiempo. La obstrucción intermitente
cluyen los retenidos más los residuales) y recurrentes. del conducto cístico puede causar cuadros dolorosos
Cuando la colédocolitiasis es identificada en un autolimitados (cólicos biliares) que con frecuencia
periodo corto de tiempo después de la colecistectomía determinan inflamación crónica de la vesícula biliar (co-
se consideran retenidos, porque estos cálculos se en- lecistitis crónica) o bien, si la obstrucción persiste, una
contraban en el momento de la colecistectomía y no se inflamación aguda de la vesícula (colecistitis aguda). La
identificaron. Para los que se diagnostican más tarde expulsión de un cálculo al colédoco (colédocolitiasis)
(menos de dos años después de la colecistectomía) y puede causar dolor, ictericia, colangitis o pancreatitis.
con la misma composición de los que tenía la vesícula La erosión de la pared vesicular por un cálculo puede
biliar, el término usado es el residual. perforarla y abrirla al intestino, lo que provoca un tipo
Se reserva el término de recurrente para los que se poco frecuente de obstrucción intestinal (íleo biliar).
originan dentro del colédoco o se diagnostican más de Por último, la colelitiasis se considera un factor etioló-
dos años después de la colecistectomía. gico importante de carcinoma de vesícula biliar.
66 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

En este sentido, la colelitiasis tiene varias formas región escapular, porción media de la columna verte-
de presentación clínica. bral, región precordial, y con menos frecuencia hacia
la región izquierda del tórax o hipocondrio izquierdo.
Litiasis biliar asintomática Puede durar menos de 6 h, aunque en ocasiones puede
Los casos asintomáticos se diagnostican de forma extenderse hasta 24 h. Puede ceder de 1 h a 4 h después
accidental durante la realización de una prueba de ima- de la administración de fármacos espasmolíticos u otros
analgésicos. Suele acompañarse de náuseas y vómitos
gen abdominal, generalmente una ecografía.
desde el comienzo y no alivian el cuadro, además de
La litiasis biliar permanece asintomática en 80 % de
agitación y ansiedad.
los casos con un riesgo anual de inicio de los síntomas
A la exploración física existen pocos signos, solo
de 1 % a 4 %, y es poco frecuente (menor que 0,5 % por
dolor a la palpación en la zona de hipocondrio derecho,
año) que estos pacientes desarrollen complicaciones sin
en algunos pacientes la maniobra de Murphy es positiva
haber tenido antes un periodo sintomático sin complica-
y un número pequeño tiene vesícula palpable. No debe
ciones. Los estudios realizados sobre población libre de
existir defensa muscular abdominal ni fiebre ni coluria
molestia, en los que se descubren cálculos en la vesícula,
ni ictericia, y la presencia de alguno de estos síntomas
demuestran que menos de 20 % presentan síntomas en
anuncia una complicación.
periodos largos de seguimiento (15 a 20 años).
Este dolor es ocasionado por la obstrucción temporal
Se calcula que aproximadamente 2 % anual en los
del conducto cístico por un cálculo, que provoca un
primeros cinco años tienen dolor biliar y ese porcenta-
estiramiento o distensión del árbol biliar con aumento
je disminuye en años sucesivos. Rara vez desarrollan
de su presión o por tensión anormal de la musculatura
complicaciones y casi siempre son precedidas de episo-
biliar (espasmo) o por contracción enérgica de la vesí-
dios de cólico biliar simple. Por tanto se concluye que
cula biliar. El impulso doloroso se dirige por las fibras
los cálculos biliares asintomáticos causan síntomas o
sensitivas viscerales en los nervios esplácnicos simpá-
complicaciones en cifras que varían de 10 % a 50 %
ticos, en conexión con los segmentos dorsales séptimo
dentro de los 10 a 20 años posteriores al diagnóstico.
a décimo de la médula y es percibido en el epigastrio.
El carcinoma de vesícula se asocia en más de
Como resultado de la actividad motora en el sistema
85 % de las veces con colelitiasis. Sin embargo, el ries-
biliar y los cambios consecutivos a la presión el dolor
go anual acumulado de padecer esta grave complicación
se manifiesta intermitente a tipo cólico. La distensión de
es de 0,02 % en personas con colelitiasis mayores de
la vesícula causa que los impulsos sensitivos viscerales
60 años. se refieran y aparezcan en segmentos somáticos y da
el dolor en hipocondrio derecho, zona infraescapular y
Litiasis biliar sintomática
zona subesternal, y además en el hombro derecho por
Los síntomas aparecen cuando un cálculo obstruye la conexión nerviosa con el nervio frénico.
alguno de los puntos críticos del sistema biliar: el na- No han fructificado los intentos realizados para
cimiento del cístico o el extremo distal del colédoco. atribuir a la colelitiasis síntomas tales como eructos, dis-
El principal síntoma de esta enfermedad es el dolor tensión abdominal, plenitud posprandial, intolerancia a
abdominal el que se presenta en dos variantes: primero grasas, halitosis, lengua saburral, entre otros, integrando
un dolor de intensidad ligera a moderada, localizado la llamada dispepsia biliar. Actualmente se estima que
en el epigastrio o hipocondrio derecho, que se irradia deben desterrarse estos síntomas no específicos como
a la espalda a la región escapular y al hombro derecho, justificación para tratamiento de la colelitiasis ya que
este dolor no es constante, se puede aliviar espontánea- no son exclusivos de la litiasis biliar y se conoce que
mente o necesitar algunos medicamentos, casi siempre un gran número de los pacientes con estos síntomas no
aparece luego de comidas copiosas ricas en grasas; la le desaparecen luego de ser tratados quirúrgicamente
otra forma de dolor es la intensa denominada también (colecistectomía).
“cólico biliar”, definido por un dolor que se inicia al- No ocurre igual con la litiasis vesicular demostrada
gunas horas después (30 min a 3 h) de haber ingerido tras un cólico biliar, pues su evolución es distinta. En
una comida copiosa rica en grasas y se caracteriza por casi un 40 % el cólico se repete dentro del primer año.
un dolor intenso a tipo cólico y de comienzo súbito a El riesgo de desarrollar complicaciones puede ser de
menudo nocturno que suele despertar al paciente del hasta 3 % anual y permanece constante. Sin embargo, en
sueño, localizado en la zona de epigastrio o hipocon- 30 % no vuelve a repetirse el cuadro doloroso en cinco
drio derecho, y que se irradia hacia el hombro derecho, años. En estos pacientes sintomáticos la probabilidad
Capítulo 180. Litiasis biliar 67

de recurrencia clínica en los dos primeros años es de Aparte de la fiebre los signos que se pueden en-
65 % y la incidencia anual de complicaciones de 1 % contrar al examen físico son: paciente que evita mo-
a 2 %. Estudios longitudinales amplios de pacientes vimientos bruscos, incremento del dolor con la tos o
con cálculos biliares sintomáticos revelan que de 58 % con la inspiración profunda, dolor a la palpación en
a 72 % presenta síntomas y complicaciones en curso. hipocondrio derecho con cierto grado de contractura
muscular a dicho nivel, el signo de Murphy positivo
Complicaciones de la litiasis biliar (interrupción de la respiración durante la palpación
La litiasis biliar es una afección digestiva de carácter profunda del hipocondrio derecho), vesícula palpable,
benigno, pero cuando se complica eleva notablemente dolor a la percusión en la zona de hipocondrio derecho,
su morbimortalidad. Las complicaciones que se des- ictericia leve por inflamación grave pericolecística de-
criben son la colecistitis aguda o crónica, colesistitis bida a la impactación de un cálculo de gran tamaño en
gangrenosa, enfisematosa, colédocolitiasis o litiasis la bolsa de Hartmann (síndrome de Mirizzi) y cuando
coledociana, síndrome de Mirizzi, pancreatitis aguda, la ictericia es franca puede sospecharse la presencia de
colangitis aguda, fístulas colecistoenteríca, impacto un cálculo en el colédoco.
del cístico, íleo biliar, peritonitis biliar, perforación
vesicular, abscesos hepáticos, cáncer de vesícula y más
Exámenes complementarios
raramente cirrosis biliar. Su diagnóstico es ultrasonográfico donde se observa
una vesícula biliar con paredes engrosadas, edemato-
Colecistitis aguda sa, la presencia de litiasis en su interior o en el cístico
(Fig. 180.5) y sus complicaciones: colesistitis cróni-
Es una complicación inflamatoria de la colelitiasis ca, gangrenosa, enfisematosa, perforación vesicular,
que afecta a la vesícula de gravedad variable en depen- vesícula en porcelana, adenocarcinoma vesicular y
dencia de su forma clínica de presentación. Se presenta colesterolosis.
en 10 % a 20 % de los pacientes con litiasis vesicular
sintomática.
Colecistitis crónica
Patogenia Hay un número de pacientes con colelitiasis que
Como en el cólico biliar, el acontecimiento inicial tienen antecedentes de múltiples episodios de cólico
de la colecistitis aguda es la obstrucción del conducto biliar o incluso de colecistitis aguda, en los que no se ha
cístico por un cálculo impactado. Aunque la aparición y realizado la colecistectomía. Como resultado, presentan
el carácter del dolor son similares al asociado al cólico una vesícula con paredes engrosadas y fibróticas.
biliar, este no se remite y puede persistir durante varios
días. En un número limitado de casos, el conducto
Patogenia
cístico permanece obstruido y pueden desarrollarse La presencia de cálculos en la vesícula biliar origina
las complicaciones de la colecistitis aguda tales como cambios inflamatorios y cicatrizales, que reciben el
el empiema vesicular, gangrena vesicular, perforación nombre de colecistitis crónica.
libre o contenida de la vesícula con formación de
abscesos. Diagnóstico clínico
Estos pacientes pueden presentar cuadros de dolor
Diagnóstico clínico biliar más leve atribuibles a esta situación. No obstante,
Los síntomas son similares a los del cólico biliar también pueden presentar las complicaciones asociadas
pero más graves. Los síntomas se localizan en hipo- a la colelitiasis como pancreatitis, colédocolitiasis y
condrio derecho o en epigastrio y el dolor es de tipo colangitis.
constante a diferencia del intermitente del cólico biliar. El cólico biliar es el resultado de una obstrucción
La progresión del proceso inflamatorio da lugar a la pasajera del conducto cístico por un cálculo y, excepto
irritación del peritoneo parietal y los pacientes perma- si aparece colecistitis aguda, no tiene por qué provo-
necen sin moverse para evitar incremento del dolor. car cambios inflamatorios en las fases iniciales de la
La mayoría de los pacientes presentan manifestaciones enfermedad, más tarde, sin embargo, es posible que
sistémicas como taquicardia, anorexia, náuseas, vómi- no haya síntomas a pesar de que exista una vesícula
tos, fiebre y escalofríos. escleroatrófica.
68 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 180.5. Colesistitis aguda. Litiasis vesicular (flechas).

3Examen complementario Colecistitis enfisematosa


El estudio imaginológico es la regla de oro, la vesí- La colecistitis enfisematosa es una variante atípica
cula se muestra engrosada y de aspecto escleroatrófica. de la colecistitis aguda, en la que la radiografía simple
de abdomen revela gas de origen bacteriano en la luz
2Colecistitis gangrenosa vesicular o los tejidos adyacentes.

En el estudio ultrasonográfico se aprecia necrosis de Diagnóstico clínico


la pared, perforación y pus intravesicular apreciándose
ecos intraluminales groseros, membranas en la luz y Su semiología es idéntica a la de las formas habi-
marcada irregularidad focal de la pared (Fig. 180.6). tuales, con excepción de la mayor gravedad del cuadro
clínico. Los varones se afectan con mayor frecuencia,
alrededor de 30 % de los pacientes son diabéticos y en
la mitad de los casos se trata de una colecistitis “ali-
tiásica”. Los microorganismos responsables suelen ser
Clostridium, pero también pueden causarla Escherichia
coli, Streptococcus y otras bacterias intestinales.

Examen complementario
En el ultrasonido se muestra la presencia de gas
que provoca focos hiperecoicos con una sombra difusa
(Fig. 180.7). La cirugía urgente es perentoria en esta
enfermedad.

Perforación vesicular
Es una complicación de la colecistitis gangrenosa
con formación de un absceso localizado alrededor de
la vesícula o una verdadera peritonitis biliar.

Diagnóstico clínico
Fig. 180.6. Colesistitis gangrenosa (flecha). Existen dos tipos de perforación:
Capítulo 180. Litiasis biliar 69

Fig. 180.7. Colecistitis enfisematosa. Aire en su interior Fig. 180.8. Vesícula perforada. Colección (flecha).
(flechas).

– Perforación localizada: que determina la formación profiláctica para evitar el desarrollo subsecuente de car-
de un absceso perivesicular por adherencia de las cinoma, el cual se produce hasta en 20 % de los casos.
vísceras vecinas que impiden la propagación del
proceso al peritoneo libre. El paciente suele presen- Examen complementario
tar fiebre elevada y dolor intenso, y la palpación del
Es fácilmente diagnosticable en la radiografía sim-
hipocondrio derecho revela signos de peritonismo y
ple de abdomen.
una masa mal definida. Está indicado el tratamiento
quirúrgico urgente para impedir la progresión del
proceso séptico. Adenocarcinoma vesicular
– Perforación libre: origina una peritonitis biliar o El adenocarcinoma de vesícula biliar suele ser un
coleperitoneo, con una mortalidad muy elevada. tumor de pacientes ancianos con colelitiasis de larga
La mayoría de los pacientes presentan un cuadro duración. La mayoría de los pacientes con cáncer de la
clínico de abdomen agudo sin signos específicos vesícula biliar tienen cálculos biliares y los datos epi-
de localización, por lo que es difícil efectuar un demiológicos muestra una importante relación entre la
diagnóstico correcto antes de la laparotomía. dos enfermedades. El riesgo es mayor mientras mayor
sea el cálculo.
Examen complementario
La ecografía muestra una colección bien definida Colesterolosis
vecina a la vesícula con ecos internos o una masa
hipoecoica mal definida que borra los bordes de la Alrededor de 5 % de los pacientes litiásicos inter-
vesícula (Fig. 180.8). venidos presentan colesterolosis de la pared vesicular,
causada por la acumulación en la submucosa de macró-
fagos cargados de colesterol esterificado. La superficie
Vesícula en porcelana mucosa tiene en estos casos un aspecto característico
Se define como la calcificación intramural de la (vesícula en fresa). La vesícula puede ser colestero-
pared vesicular. lótica en ausencia de cálculos, en este caso suele ser
asintomática.
Diagnóstico clínico
Es una complicación rara, pero de pronóstico in- Colédocolitiasis o litiasis coledociana
cierto, por su frecuente asociación al desarrollo de un
Cuando los cálculos se originan en la misma vía
carcinoma de vesícula. Está indicada la colecistectomía
biliar se denomina colédocolitiasis primaria, mientras
70 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

que el término de colédocolitiasis secundaria se utiliza de válvula que puede ejercer este cálculo. Los síntomas
para designar a una de las complicaciones de la litiasis pueden desaparecer por el paso espontáneo del cálculo
vesicular que consiste en la migración de cálculos al al duodeno o ser progresivos, como cuando se observa
colédoco desde la vesícula, presentándose esta última aumento de la ictericia por la presencia de un cálculo
entre 4 % y 15 % de los pacientes sometidos a colecis- completamente impactado que provoca una obstrucción
tectomía por litiasis vesicular sintomática. Otros autores total del colédoco (íctero obstructivo). La tríada clásica
plantean que de forma general la incidencia es de 5 % de dolor en el cuadrante superior derecho del abdomen:
a 18 % y la correlación con los grupos de edades es fiebre, escalofríos e íctero, es conocida como la tríada
5 % en pacientes menores de 60 años, 15 % con 60 a de Charcot y está presente en 50 % a 75 % de los pa-
79 años y 35 % en mayores de 80 años. cientes con colangitis aguda. Cuando estos pacientes
De los pacientes que presentan colédocolitiasis, presentan hipotensión y confusión mental en adición
95 % tiene también cálculos en la vesícula y se puede a la tríada, se le conoce como la pentada de Reynold y
observar colédocolitiasis en 6 % a 15 % de los pacientes presenta una elevada mortalidad de 30 % a 50 %.
con colecistitis.

Factores de riesgo
Los factores de riesgo de aparición de colédocolitia-
sis más importantes son la litiasis vesicular de pequeño
tamaño, la evolución prolongada de la litiasis vesicular,
que guarda relación con la edad del paciente, y aspectos
anatómicos de la vía biliar.

Diagnóstico clínico
Los cálculos en el colédoco logran permanecer
asintomáticos por años, en estas situaciones influye
su tiempo de permanencia, pueden pasar espontánea-
mente al duodeno o más frecuentemente presentarse
con dolor abdominal, ictericia y fiebre o como una de
sus complicaciones. Fig. 180.9. Colesistitis abscedada por litiasis coledociana.
La colédocolitiasis puede ser asintomática y ser
descubierta accidentalmente por ultrasonido. Puede Exámenes complementarios
ocasionar obstrucción completa o incompleta y ma-
nifestarse con el cuadro clínico de dolor abdominal En los pacientes con litiasis biliar no complicada no
similar al de un cólico biliar o de sus complicaciones existen investigaciones específicas.
como la colangitis, colesistitis abscedada (Fig. 180.9) El leucograma y la eritrosedimentación pueden estar
y pancreatitis aguda. elevados en los procesos inflamatorios. Los exámenes
El dolor se manifiesta como ataques discretos que complementarios que miden la función hepática pueden
pueden durar de 30 min a varias horas y es indistin- ser anormales en presencia de colédocolitiasis, por lo
guible del dolor causado por el impacto de un cálculo que debe realizarse una analítica de forma rutinaria
en el conducto cístico, salvo que con frecuencia su ante cualquier paciente con colelitiasis. La existencia
localización es en la zona de epigastrio, se presenta de obstrucción al flujo biliar se refleja en forma de
a cualquier hora del día y sin estar necesariamente elevación de las denominadas enzimas de colestasis:
relacionado con la ingestión de alimentos. Las náu- gamma glutamil transpeptidasa y fosfatasa alcalina,
seas y los vómitos con frecuencia acompañan al dolor y con menor frecuencia de la bilirrubina. En casos de
abdominal y, además, puede existir fiebre, escalofríos, colestasis prolongada o colangitis, el daño celular he-
coluria e íctero. El examen físico puede ser normal o pático determina una elevación asociada de las amino
encontrarse íctero con dolor a la palpación en la zona transferasas. Estas alteraciones no son específicas y
de epigastrio o hipocondrio derecho. Los síntomas pueden aparecer en el contexto de cualquier afección
pueden ser intermitentes causados por el impacto de que provoque obstrucción biliar. En la fase aguda de la
un cálculo temporalmente en la papila o por el efecto enfermedad, la elevación de las cifras de amilasa y lipa-
Capítulo 180. Litiasis biliar 71

sa sérica puede traducir la presencia de una pancreatitis mayores de 4 mm. Los cálculos de menor tamaño son
asociada. Sin embargo, solo 60 % de los pacientes con más difíciles de visualizar, pero suelen ser múltiples,
litiasis en el colédoco (incluyendo los asintomáticos) lo que facilita su diagnóstico sonográfico.
tienen una o más enzimas alteradas. Por el contrario, Cuando la sospecha clínica de colecistolitiasis es alta
un porcentaje sustancial de pacientes con alteración y la ecografía transcutánea es negativa puede emplearse
enzimática no tienen colédocolitiasis. Se estima que la ecoendoscopia, que ha demostrado una sensibilidad
tan solo entre 10 % a 20 % de los pacientes con coleli- de 96 % y una especificidad de 86 % en el diagnóstico
tiasis y alteraciones de la analítica de función hepática de colelitiasis oculta.
se confirma la colédocolitiasis como único parámetro. Sin embargo, su sensibilidad en el diagnóstico de la
colédocolitiasis se sitúa solo 25 % (14 % a 55 %) mien-
Ecografía tras que en 35 % de los pacientes con colédocolitiasis
Es la exploración radiológica más utilizada de forma no existe dilatación del colédoco. La especificidad suele
preoperatoria para determinar si existe una litiasis biliar. ser más alta (94 % a 100 %) y con un valor predictivo
Permite valorar la vesícula, el grosor de su pared, su negativo de 95 % a 96 %. El valor normal del diámetro
contenido y las vías biliares intrahepática y extrahepáti- del colédoco es de 3 mm a 6 mm y va aumentando con
ca. Al estudiar el colédoco por ultrasonografía, se puede la edad del paciente. Una dilatación mayor que 8 mm
detectar colédocolitiasis en su interior (signo directo), en los pacientes que no han sido colecistectomizados
que se observa como una imagen hiperecogénica con usualmente es indicativa de obstrucción biliar, mien-
sombra acústica posterior o la existencia de una dila- tras que si esta dilatación se acompaña de ictericia y
tación de la vía biliar extrahepática, que se considera dolor tipo cólico biliar es altamente sugestivo de la
un signo indirecto de la presencia de colédocolitiasis presencia de colédocolitiasis. En los pacientes con gas
al provocar obstrucción al flujo biliar (Fig. 180.10). en duodeno, los cálculos en los conductos biliares solo
son visibles en 50 % de los casos. En la colecistitis
aguda constituye la técnica diagnóstica de elección. Los
hallazgos más característicos son el signo de Murphy
ecográfico (hipersensibilidad vesicular focal bajo el
transductor), el engrosamiento de la pared vesicular por
encima de 4 mm y el aumento del tamaño de la vesícula.
Pueden verse cálculos vesiculares, con especial espe-
cificidad si se observa alguno impactado en el cuello
vesicular o en el cístico. Otros hallazgos son el nivel de
ecos intraluminales o las colecciones perivesiculares.
Radiografía simple de abdomen
Solo permite visualizar, a nivel del hipocondrio
derecho, los cálculos radioopacos, pero como en un
alto porcentaje son radiotransparentes, este examen es
de poca utilidad en la litiasis biliar.
Tomografía axial computarizada abdominal
Fig. 180.10. Litiasis coledociana (flecha). Se trata de una exploración más sensible que la
ecografía en el diagnóstico de la colédocolitiasis, con
Aunque se trata de un examen en el que influye una precisión en torno a 75 % a 80 % en caso de obs-
de forma destacada la experiencia del explorador, trucción (100 % en cálculos pigmentarios y 80 % de
la ecografía es una exploración no invasiva, rápida, colesterol), y permite identificar el colédoco dilatado en
económica, fácil de realizar e inocua para el paciente, 90 % de los casos. Su principal indicación es el estudio
pues evita la irradiación y los medios de contraste. Por y diagnóstico diferencial de la ictericia obstructiva para
este motivo, debe ser la primera exploración comple- descartar tumoraciones de la cabeza del páncreas y del
mentaria a realizar ante la sospecha de litiasis biliar. La colédoco distal, aunque también es útil en el estudio
ecografía tiene una fiabilidad de 95 % en el estudio de de la litiasis intrahepática. Las nuevas generaciones de
la colelitiasis para la detección de cálculos vesiculares tomografía axial computarizada helicoidales pueden
72 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

mejorar el rendimiento de la exploración en el futuro, la litiasis de la vía biliar, principalmente en la zona de


pero no se considera una prueba de elección en la de- la papila e intrapancreática. No obstante, es una prueba
tección primaria de la colédocolitiasis. que requiere tecnología de punta, entrenamiento y ca-
pacitación específica, por lo que no puede considerarse
Colangiorresonancia magnética nuclear actualmente una prueba útil para el cribado.
La resonancia nuclear magnética permite estudiar
órganos y sistemas con fluidos en movimiento sin Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
necesidad de administrar ningún tipo de contraste Desde su implantación, la colangiopancreatografía
oral o intravenoso. Se trata de un método no invasivo retrógrada endoscópica se ha convertido en una ex-
que permite visualizar la vía biliar con una muy alta celente técnica para el estudio preoperatorio de la vía
sensibilidad y especificidad, se puede realizar en poco biliar, con una sensibilidad y especificidad diagnóstica
tiempo, no es una técnica dependiente del explorador, próxima a 100 %. Permite, mediante un endoscopio de
no requiere sedación, radiación ni medios de contraste visión lateral, canular la papila y opacificar la vía biliar
y no se ve modificada por alteraciones en la secreción inyectando contraste. Además, la ventaja sobre todas las
biliar. Proporciona una imagen de la vía biliar intra- demás exploraciones es que permite el tratamiento de
hepática y extrahepática de gran resolución, incluso la colédocolitiasis en el mismo acto mediante esfintero-
superior a la colangiografía obtenida con la colangio- tomía endoscópica y extracción de los cálculos, si bien
pancreatografía retrógrada endoscópica, lo que permite algunos pacientes requieren varias sesiones terapéuticas
detectar alteraciones anatómicas de la vía biliar. Por sus y la utilización de técnicas adyuvantes a la esfintero-
características la convierten en una prueba ideal. Está tomía endoscópica como la litotricia. Aunque pueden
limitada en los pacientes obesos y en los portadores de existir dificultades anatómicas (papila en divertículo
marcapasos y su sensibilidad disminuye en el estudio duodenal, pacientes con gastrectomía tipo Billroth
de las litiasis de pequeño tamaño (64 % en menores de II) que impidan en ocasiones una correcta colangio-
3 mm), aunque se espera que mejore en el futuro con pancreatografía retrógrada endoscópica diagnóstica o
los avances tecnológicos. La presencia de parásitos, terapéutica, los resultados de la colangiopancreatografía
coágulos, aerobilia, contracción del esfínter, tortuosidad retrógrada endoscópica mejoran en función de la ex-
del colédoco o pequeños tumores intraductales, pueden periencia del explorador. En la actualidad no existen
confundirse con cálculos. La expulsión espontánea del métodos preoperatorios fiables, no invasivos y baratos
cálculo antes de la confirmación mediante colangiopan- que permitan determinar con certeza qué pacientes son
creatografía retrógrada endoscópica puede justificar portadores de una colédocolitiasis. Con los criterios
también un importante número de falsos positivos. En clásicos de sospecha de colédocolitiasis (clínica, analí-
ocasiones, la claustrofobia puede limitar el empleo de tica y ecografía), la colangiopancreatografía retrógrada
la colangiorresonancia magnética nuclear, que no tiene endoscópica preoperatoria no manifiesta litiasis en la
otras contraindicaciones que las propias de la resonan- vía biliar principal en 45 % a 60 % de los pacientes.
cia magnética nuclear (clips vasculares intracraneales y El espectacular aumento de las indicaciones de colan-
marcapasos). Está por aclarar la posible función de la giopancreatografía retrógrada endoscópica diagnóstica
colangiorresonancia magnética nuclear en una selección como método de detección previo a la colecistectomía
más estricta de pacientes con sospecha elevada, que se laparoscópica ha derivado en un considerable número
benefician de una esfinterotomía endoscópica. Por otro de colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
lado, su elevado precio hace que su disponibilidad sea normales y, por tanto, innecesarias. Lógicamente, esta
escasa en los países en vías de desarrollo, por lo que no baja incidencia de asociación litiásica y teniendo en
puede ser considerada actualmente como una técnica cuenta que se trata de una exploración invasiva con
de primera elección. complicaciones potencialmente muy graves como la
pancreatitis, la perforación y el sangramiento (tasa de
Ecoendoscopia complicaciones de 6 % a 10 %) y que no está exenta de
Consiste en la aplicación de sondas de ecografía mortalidad (0,7 % a 1 %), el objetivo en la actualidad
de alta frecuencia en el duodeno con la ayuda de un debe ser que la colangiopancreatografía retrógrada
endoscopio, lo que permite evaluar con gran precisión endoscópica preoperatoria se realice únicamente con
posibles lesiones en la ampolla de Váter, páncreas y co- finalidad terapéutica, por lo que no resulta iadecuado
lédoco distal. Se trata de una técnica que ha demostrado que a todos los pacientes con algún grado de sospecha
su alta sensibilidad y especificidad en el diagnóstico de de colédocolitiasis se le proponga colangiopancreato-
Capítulo 180. Litiasis biliar 73

grafía retrógrada endoscópica previa a la colecistecto- Colangiografía intraoperatoria


mía. Es por esto que todos los esfuerzos deben dirigirse Consiste en el estudio radiológico de la vía biliar
entonces a identificar qué pacientes con litiasis vesicular tras la inyección de contraste en su interior a través de
tienen mayor riesgo de litiasis de la vía biliar principal. la vesícula, del conducto cístico o el colédoco. Permite
El desarrollo y abaratamiento de otras pruebas de de- obtener un mapa anatómico exacto de la vía biliar,
tección, como la colangioresonancia magnética nuclear, tanto intrahepática como extrahepática, por lo que está
deben facilitar este objetivo. considerada como la “regla de oro” para valorar la vía
Colecistografía oral biliar. Durante años, al realizar una colecistectomía
convencional por colelitiasis se practicó una colangio-
Constituyó el principal medio diagnóstico hasta la grafía intraoperatoria transcística de forma rutinaria
aparición de la ecografía. Consiste en la ingestión de para descartar la presencia de una colédocolitiasis,
tabletas de ácido iopanoico, que a las 10 h a 12 h se visualizar el árbol biliar y prevenir lesiones quirúrgicas
eliminan por la bilis y que al concentrase en la vesícula de la vía biliar. Desde su introducción por Mirizzi en
permiten diagnosticar los cálculos radiotransparentes y 1931, persiste la controversia sobre si debe practicarse
opacos. Ha perdido su protagonismo en el diagnóstico de forma rutinaria, selectiva o nunca. La aplicación de
de la colelitiasis por dificultades tales como tiempo de la colangiografía intraoperatoria en forma conjunta con
realización, necesidad de radiografía y menor eficacia la manometría introducida por las escuelas de Caroli y
diagnóstica. Prácticamente su uso ha quedado reservado Mallet-Guy, fueron adoptadas en forma sistemática por
para los casos en que se planteen determinados trata- la escuela francesa de cirujanos y redujo el número de
mientos, cuya aplicabilidad depende de la permeabilidad exploraciones negativas de la vía biliar principal de 66
del cístico (los disolutivos y la litotricia con ondas de % a 5 %, posteriormente se suma la escuela alemana
choque). Es conocido que si la vesícula se contrasta con con una monografía de Hess. La introducción de la
este método, no hay obstrucción del cístico. Sin embar- fluoroscopia en 1978 le brindó al cirujano una imagen
go, cuando no se contrasta, no siempre hay obstrucción, dinámica de la vía biliar principal y desde entonces la
lo que reduce la especificidad de la técnica. Además, colangiografía intraoperatoria se aceptó como rutina
algunos pacientes tiene alergia al iodo y algunos cálculos durante una colecistectomía. La introducción de la co-
pequeños tampoco se ven en esta investigación. langiopancreatografía retrógrada endoscópica y la cole-
Colangiografía endovenosa cistectomía laparoscópica han reavivado esta discusión
entre realizar la colangiografía intraoperatoria de forma
Se trata de un método sencillo y económico que rutinaria o bajo criterio selectivo, afortunadamente solo
permite la exploración radiológica de la vía biliar unos pocos optan por no realizarla. Los argumentos para
utilizando contrastes intravenosos. No obstante, esta realizar la colangiografía intraoperatoria selectivamente
exploración no consigue opacificar el árbol biliar en son el considerable número de exploraciones normales,
3 % a 10 % de los casos y presenta un porcentaje de los falsos positivos (2 % a 16 %), por ejemplo, burbujas
falsos negativos relativamente importante. A pesar de de aire que obligan a exploraciones quirúrgicas inne-
que los nuevos contrastes han disminuido la incidencia cesarias de la vía biliar principal, la prolongación del
de reacciones adversas, las limitaciones de la técnica (el tiempo operatorio, el aumento del costo, la evidencia
contraste no se excreta en los pacientes con obstrucción de que la lesión quirúrgica de la vía biliar suele ocurrir
biliar) y la falta de resultados hacen que no se emplee con anterioridad a la colangiografía intraoperatoria, la
de forma rutinaria. incidencia baja de la colédocolitiasis insospechada (2 %
4Colangiografía transparietohepática a 5 %), y el hecho de que pequeñas litiasis asintomáticas
pueden pasar al duodeno sin provocar complicaciones.
Es también llamada colangiografía percutánea En 5 % a 10 % de las ocasiones, la imposibilidad técni-
transhepática y consiste en la punción directa de un ca de canular el cístico (que pudiera generar su lesión)
conducto biliar intrahepático dilatado para inyectar o la no disponibilidad del equipamiento de radiología
contraste de forma percutánea. Se trata de una prueba adecuado en el quirófano, motiva que la intervención
cruenta y existe riesgo de hemorragia o coleperitoneo se alargue de forma considerable o que incluso la co-
por fuga biliar pospunción, por lo que su aplicación langiografía intraoperatoria no pueda practicarse. Otros
en el estudio de la colédocolitiasis está reservada a inconvenientes son las reacciones a los contrastes ioda-
casos excepcionales en los que otras exploraciones no dos y los posibles efectos indeseables de las radiaciones,
permitan el diagnóstico. lo que la contraindica en pacientes embarazadas. No
74 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

obstante, existen criterios generales que recomiendan canular el conducto cístico ni utilizar contraste (con
la realización de la colangiografía intraoperatoria tales lo que no existen reacciones adversas), tampoco pre-
como la sospecha preoperatoria de colédocolitiasis sin cisa realizar placas radiográficas, por lo que es más
habérsele realizado colangiopancreatografía retrógrada económica. Los inconvenientes de esta exploración
endoscópica, en la colecistitis aguda y cuando en el derivan básicamente de la necesidad de formación en
transoperatorio se encuentra un cístico dilatado, un el tratamiento de la ecografía y la interpretación de las
colédoco dilatado o una anatomía biliar no precisa. Los imágenes, y en Cuba de la disponibilidad del recurso.
autores que defienden el uso rutinario de la colangio- Los resultados de la ecografía por laparoscopia en di-
grafía intraoperatoria argumentan que mediante esta se ferentes estudios prospectivos son equiparables a los
pueden diagnosticar las colédocolitiasis no sospechadas de la colangiografía intraoperatoria y demuestran que
por los estudios preoperatorios (clínicos, analíticos y es una excelente técnica para la valoración intraopera-
ecográficos), permite definir la anatomía biliar, contri- toria de la vía biliar principal y la detección de CdL.
buye a evitar las lesiones iatrogénicas de la vía biliar La colangiografía intraoperatoria y la ecografía por
principal y posibilita su diagnóstico transoperatorio y laparoscopia no son exploraciones incompatibles sino
tratamiento precoz, y detecta otros problemas insospe- complementarias, ya que la sensibilidad y especificidad
chados (10 %) tales como cáncer de vesícula y páncreas, de ambas exploraciones combinadas es de 100 %, la
estrecheces, quistes y parásitos. La determinación de ecografía es la técnica ideal para ser utilizada de forma
realizar la colangiografía intraoperatoria rutinaria o rutinaria lo que, además, aumenta la experiencia de
selectiva depende de la calidad de la evaluación preope- los exploradores. La colangiografía intraoperatoria se
ratoria que se disponga, la experiencia acumulada en reserva para completar el estudio en los casos dudosos
la colecistectomía laparoscópica, la posibilidad de un o en los que la ecografía no pudo realizarse.
equipamiento adecuado de rayos X en el quirófano y la
accesibilidad de la colangiopancreatografía retrógrada Complicaciones
endoscópica-esfinterotomía endoscópica. La obstrucción biliar extrahepática prolongada
Ecograsonografía por laparoscopia puede causar una cirrosis biliar secundaria, esta es
más frecuente en las obstrucciones completas de
En los últimos años la ecografía intraoperatoria se origen maligno. Una vez iniciada la cirrosis biliar, la
ha convertido en una herramienta imprescindible en evolución suele ser progresivao hacia la insuficiencia
cirugía hepática y su difusión facilita su aplicación hepática o hipertensión portal con hemorragia por
en otras intervenciones hepatobiliopancreáticas. La varices esofágicas.
posibilidad de estudiar la vía biliar mediante sondas
laparoscópicas que se introducen a través de trócares
estándar se ha convertido en una opción muy atractiva Síndrome de Mirizzi
para el diagnóstico intraoperatorio de la colédocolitia- El síndrome de Mirizzi es una complicación rara
sis. Estas sondas pueden aplicarse directamente sobre de la colelitiasis de larga data, caracterizado por el
los órganos a estudiar sin interposición de gas ni cos- estrechamiento del conducto hepático común o del
tillas, lo que posibilita la utilización de transductores colédoco, causado por compresión mecánica, inflama-
de ultrasonidos de alta frecuencia. De este modo se ción o ambas, debidas a un cálculo biliar impactado
obtienen imágenes de muy alta resolución y se detec- en el conducto cístico o en la bolsa del Hartmann de la
tan incluso litiasis de 1 mm. También permite medir vesícula (cuello de la vesícula).
de forma exacta el tamaño de la vía biliar y explorar La primera descripción de una obstrucción biliar
posibles lesiones hepáticas o pancreáticas asociadas. extrínseca benigna debida a cálculos biliares, fue rea-
La opción del Doppler o incluso el Doppler a color lizada por Kehr en 1905 y Ruge en 1908. Mirizzi en
incorporado al transductor es una ventaja adicional 1948, revisó y destacó esa condición.
que permite reconocer mejor las diferentes estructuras La prevalencia del síndrome de Mirizzi en pacientes
anatómicas. La fácil identificación de vasos sanguíneos sometidos a colecistectomía es baja y su rango oscila
y conductos incluidos en el interior del tejido graso entre el 0,06 % y 2,7 %. La poca frecuencia del síndro-
permite, por ejemplo, realizar disecciones más seguras me de Mirizzi y la escasa habilidad para diagnosticar
en la vía biliar principal. La ecografía por laparoscopia confiadamente esa condición preoperatoriamente,
es rápida e inocua y evita ciertos inconvenientes de imposibilitan una experiencia individual sustantiva de
la colangiografía intraoperatoria, ya que no requiere los cirujanos.
Capítulo 180. Litiasis biliar 75

Clasificación pruebas anormales de funcionalismo hepático). El grado


de anormalidades en las pruebas de funcionamiento
Con el advenimiento de la colangiopancreatografía
hepático es mayor en los pacientes con síndrome de
retrógrada endoscópica, la descripción de la anatomía
Mirizzi de tipo I y el intervalo desde los síntomas ini-
relevante del tracto biliar condujo a la clasificación del
ciales hasta la colecistectomía fue más largo para los
síndrome de Mirizzi en dos tipos básicos:
pacientes con síndrome de Mirizzi de tipo II (Tablas
– Tipo I: limitado a la compresión externa del con-
180.3 y 180.4). Hallazgos que están justificados dado
ducto hepático común, por un cálculo impactado en
que se requiere más tiempo e inflamación crónica para
el conducto cístico o en la bolsa de Hartmann.
desarrollar una fístula.
– Tipo II: se asocia con una fístula entre la vesícula
y el conducto común, por la inflamación y erosión
Exámenes complementarios
del cálculo impactado.
Independientemente del índice de sospecha clínica,
Se ha propuesto una clasificación adicional del la presentación clínica no específica impide un diag-
subtipo II del síndrome de Mirizzi para enfocar la nóstico preoperatorio confiable. Similares limitaciones
extensión de la erosión del conducto biliar y la fístula diagnósticas son evidentes con las imágenes del tracto
colecistoentérica asociada. biliar. No existe una mejor técnica por imágenes para
el diagnóstico del síndrome de Mirizzi. La ecografía
Diagnóstico clínico es la modalidad más comúnmente usada para el diag-
nóstico de litiasis, sin embargo, tiene una sensibilidad
El diagnóstico clínico de síndrome de Mirizzi es
limitada (48 %). La tomografía computarizada no es
difícil, porque no hay un patrón patognomónico de
empleada frecuentemente en el escenario clínico para
presentación. Aunque el dolor abdominal, ictericia
la investigación de la enfermedad litiásica, a menos que
y pruebas séricas anormales de la función hepática
la ictericia impulse la consideración de malignidad. La
apoyan el diagnóstico de síndrome de Mirizzi, menos
tomografía computarizada puede mostrar dilatación de
de los dos tercios de los pacientes presentan dolor
los conductos intrahepáticos y extrahepáticos con la
abdominal e ictericia (75 % de los pacientes tienen

 Tabla 180.3. Características clínicas del síndrome de Mirizzi


Hallazgos clínicos  Síndrome de Mirizzi tipo I (n = 19)  Síndrome de Mirizzi tipo II (n = 16) P
Años de edad (media ± DE) 59,3 ± 17,3 66,3 ± 16,2 0,21
Femenino (%) 53 43 0,71
Índice de masa corporal (media) 38,2 ± 10,3 28,7 ± 5,6 0,07
Dolor abdominal (%) 65 63 0,88
Ictericia (%) 60 44 0,33
Náusea/vómito (%) 25 25 1
Fiebre (%) 20 25 0.72
Anorexia (%) 15 13 0.83
Asintomático (%) 15 25 0.45
Días desde la presentación hasta la 28,4 ± 34,7  129,4 ± 172,6  0,04
operación (media ± DE) 

Tabla 180.4. Valores de laboratorio en la presentación inicial del síndrome de Mirizzi


Valores de laboratorio  Síndrome de Mirizzi Tipo I (n=19)  Síndrome de Mirizzi Tipo II (n=16) P
Recuento de glóbulos blancos 9,8 ± 1,0 7,4 ± 1,2  0,10
(x 109/L)
Alanino amino transferasa (U/L) 263,7 ± 55,2 81,6 ± 61,8 0,03
Aspartato amino transferasa (U/L) 286,3 ± 47,3  85,5 ± 58,9 0,01
Bilirrubina total (mg/dL) 6,9 ± 5,1 2,0 ± 2,3 0,001
Bilirrubina directa (mg/dL) 5,0 ± 0,6 1,2 ± 0,7 0,0004
76 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

presencia de cálculos en el árbol biliar, no obstante, la son frecuentes las Pseudomonas, los anaerobios y los
sensibilidad es baja (42 %). La colangiopancreatografía gérmenes multirresistentes.
retrógrada endoscópica (Fig. 180.11) es la modalidad
de diagnóstico por imágenes con mayor sensibilidad Diagnóstico clínico
(50 % a 100 %) y es usada frecuentemente en el esce- El diagnóstico se basa en la asociación de signos y
nario clínico, preoperatoriamente en pacientes ictéricos, síntomas de infección con los propios de una obstruc-
que pueden tener un síndrome de Mirizzi. ción biliar. La presentación clásica es la aparición de
La exclusión de una neoplasia biliar mediante la dolor en hipocondrio derecho o epigastrio junto a fiebre
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica es muy e ictericia (tríada de Charcot). Si se añade confusión
difícil, aun con la atención enfocada en el contorno de mental y choque (péntada de Reynolds) suele asociarse
la estenosis o en la presencia de una fístula. a una colangitis supurada grave.
La colecistectomía puede ser efectuada una vez que
los signos clínicos de la pancreatitis hayan desaparecido Exámenes complementarios
y, a ser posible, durante la misma hospitalización. Esta
conducta previene la recurrencia de la pancreatitis y El laboratorio muestra hallazgos de obstrucción
acorta la duración de la enfermedad. Debe efectuarse biliar con elevación variable de la bilirrubina y enzimas
una colangiografía intraoperatoria para excluir la po- de colestasis, así como leucocitosis con desviación
sibilidad de cálculo residual. izquierda.
Entre las técnicas de imagen la ecografía es de elec-
ción para detectar la existencia de obstrucción biliar
Colangitis agudas por su elevada eficacia y versatilidad, se pude detectar
La colangitis aguda puede definirse como el sín- también su causa y ciertas complicaciones como el
drome caracterizado por signos y síntomas de infec- absceso hepático.
ción sistémica con origen en el árbol biliar. Ocurre La mortalidad global se sitúa en 10 % a 30 %
por la presencia de bacterias en la bilis junto con un (2,5 % a 65 %), aunque se pueden distinguir unas for-
aumento de la presión intrabiliar por una obstrucción, mas leves, generalmente de buen pronóstico, y unas
la colédocolitiasis es la causa más frecuente. Los gér- formas graves donde se concentra la mayor parte de la
menes causales más habituales son Escherichia coli, mortalidad. Los dos factores que determinan esta dis-
Klebsiella, Enterococcus y Enterobacter. En colangitis tinción son la aparición de fallo orgánico y la respuesta
posoperatorias o tras manipulaciones instrumentales, al tratamiento médico.

Fig. 180.11. Síndrome de Mirizzi.


Capítulo 180. Litiasis biliar 77

Complicaciones El íleo biliar suele presentarse en mujeres mayores


de 70 años, en ausencia de hernias externas o cirugía
Si la colangitis es grave o prolongada puede originar
abdominal previa, debe sospecharse siempre este diag-
complicaciones supurativas como la formación de abs-
nóstico frente a una obstrucción mecánica del intestino
cesos hepáticos. La impactación temporal de un cálculo
delgado en este grupo de edad. El tratamiento consiste
en la ampolla de Váter puede desencadenar un ataque
en la extracción quirúrgica del cálculo enclavado a
de pancreatitis aguda por obstáculo al flujo pancreático.
través de una pequeña enterotomía. El síndrome de
Profilaxis Bouveret puede resolverse mediante litotricia endoscó-
pica. No es aconsejable intentar la colecistectomía y la
La colangiografía directa en un árbol biliar obstruido
extirpación de la fístula biliar durante la intervención,
conlleva riesgo de provocar colangitis, principalmente
pues esta maniobra la alarga considerablemente en un
cuando hay una obstrucción completa, una estenosis
paciente por lo común senil y con mal estado general.
compleja o cuando no se obtiene un drenaje satisfactorio
Tras la operación, la mayoría de los pacientes permane-
tras la repleción biliar. Se recomienda el tratamiento an-
cen asintomáticos y la fístula se cierra espontáneamente
tibiótico a todo paciente con obstrucción que no quede
dejando una vesícula escleroatrófica y sin cálculos.
correctamente drenada tras la colangiopancreatografía
retrógrada endoscópica, continuándolo hasta lograr un
Exámenes complementarios
drenaje biliar completo. Más controvertida es la utilidad
de la dosis única previa. Parece claro que, en cualquier El diagnóstico es sugerido por la evidencia radio-
caso, solo está justificada en pacientes con ictericia obs- gráfica (rayos X de abdomen simple) de neumobilia y
tructiva o signos de obstrucción biliar significativa. La confirmado por estudios de contraste gastrointestinal
pauta puede incluir una ureidopenicilina, cefalosporinas alto o bajo. Aparte del patrón radiológico abdominal de
o ciprofloxacino. oclusión mecánica, es menos frecuente la observación
del cálculo en la parte baja del abdomen.
Fístulas biliares por colelitiasis
Pronóstico
Esta rara complicación deriva de los procesos infla-
matorios-adherenciales que puede provocar la litiasis La mortalidad del íleo biliar es alta, alrededor de
vesicular, que al erosionar la pared culmina con la 20 %, debido al grupo de edad en que incide esta com-
necrosis de las paredes de la vesícula y del órgano a plicación y, en gran parte, al retraso en el diagnóstico,
que se adhiere. al evolucionar a menudo con síntomas de oclusión
intestinal intermitente determinadas por enclavamien-
Tipos de fístulas tos momentáneos del cálculo en partes más altas de
intestino delgado.
Cuando este es la vía biliar principal, se origina el
síndrome de Mirizzi y un cálculo habitualmente grande
Diagnóstico diferencial de la litiasis vesicular
se aloja en su interior con el riesgo de que el cirujano
interprete el colédoco como el cístico que está desapa- – Úlcera péptica gastroduodenal: aunque provoca do-
recido y pueda provocar una lesión iatrogénica de este. lor en epigastrio y síntomas dispépticos similares, las
En otras ocasiones puede establecerse una fístula características de ritmo y periodicidad, la relación de
bilioentérica entre la vesícula y el duodeno (síndrome de su alivio con la ingestión de alimentos y antiácidos
Bouveret) o el colon. El punto más común de entrada al y su irradiación, lo hacen diferentes. Se asocia a la
intestino es el duodeno, seguido por el ángulo hepático litiasis biliar en un gran número de pacientes.
del colon, el estómago y el yeyuno. Si el cálculo es – Enfermedad de reflujo gastroesofágico: la presencia
de suficiente tamaño, puede impactarse y ocluir la luz de pirosis, regurgitaciones y el alivio de la sinto-
intestinal (íleo biliar) en cualquier tramo, si bien tiende matología con la administración de inhibidores de
a hacerlo en duodeno proximal (síndrome de Bouveret), la bomba de protones distinguen esta patología.
íleon terminal o sigma. Se asocia a la litiasis biliar en un gran número de
pacientes.
Diagnóstico clínico – Trastornos funcionales intestinales: se manifiestan
Los síntomas son inicialmente similares a los de la con dolor abdominal que se alivia con la defecación
colecistitis agua, aunque en ocasiones el cálculo pasa o la expulsión de gases por el recto en ausencia de
al intestino y es expulsado sin dar origen a síntomas. signos de alarma como astenia, anorexia, pérdida de
78 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

peso, sangramiento digestivo, signos de anemia o colesterol en la bilis y que no solo consiguen impedir
masas palpables que sugieren trastornos orgánicos la aparición de litiasis, sino que pueden también disol-
intestinales. ver los cálculos ya formados. Son muy útiles en los
– Dolores de origen musculo-esquelético: dolor pacientes que no pueden ser sometidos a tratamiento
precipitado por la tos, risa o movimientos. Signos quirúrgico. Se utilizan el ácido quenodesoxicólico
específicos en el examen físico. (15 mg/kg/día) y su isómero, el ursodesoxicólico
– Costocondritis: dolor en hipocondrio o margen (10 mg/kg/día). Existen varias condiciones que son
costal que se agrava al incorporarse para sentarse imprescindibles para indicar este tratamiento: que la
(signo de Carnett). Signos específicos en el examen vesícula sea funcionante y el cístico permeable (lo
físico. que puede asegurarse con una colecistografía oral o
– Pancreatitis crónica: la sintomatología es muy pare- con una ecografía), que los cálculos sean menores que
cida, pero el dolor es diferente en su localización y 2 cm, fundamentalmente de colesterol y con escasa
características y suele acompañarse de esteatorrea. cantidad de carbonato cálcico, porque los pigmentarios
– Dolor de origen cardiovascular: el dolor suele no se disuelven (para comprobar este último hecho ha
localizarse en epigastrio, pero la irradiación y los de exigirse que sean radiotransparentes y ayuda que
síntomas acompañantes son diferentes. en el aspirado duodenal se encuentren cristales de
– Cólico nefrítico: la localización y la irradiación del colesterol y no de sales de calcio), no se puede indicar
dolor son diferentes y se acompañan de síntomas este tratamiento en las embarazadas, debe controlarse
urinarios. el tratamiento mediante ecografía abdominal cada seis
meses, y durante el tratamiento deben evitarse medi-
Tratamiento camentos que aumenten la saturación de la bilis con
Una vez demostrada la presencia de la litiasis y colesterol (píldoras anticonceptivas y clofibratol). El
atribuido a esta los síntomas dolorosos del paciente, el 70 % de las personas con colelitiasis no reúnen criterios
objetivo principal es eliminarlos y prevenir que no re- de tratamiento disolutivo, y en los que integran el grupo
curran, pues la gran mayoría se producen en la vesícula de los que puede intentarse el tratamiento, la eficacia es
biliar, por lo que la colecistectomía cumple estos objeti- baja y la recurrencia frecuente, tras dejar los fármacos,
vos. Sin embargo, el conocimiento que se ha adquirido 30 % a 50 % a los cinco años.
de la historia natural y de la patogenia de la colelitiasis, Los efectos secundarios: diarrea, aumento de amino
unido a que la colecistectomía es un método quirúrgico transferasas y aumento de la colesterolemía, son mayo-
que tiene riesgos menores, lo que ha llevado a precisar res cuando se administra el ácido quenodesoxicólico,
las indicaciones y a desarrollar métodos alternativos de y la eficacia disolutiva menor, pero a cambio es más
tratamiento. Su utilización ha de llevarse a cabo buscan- barato que el ursodesoxicólico. Se ha propuesto su uso
do el propósito universal de todo tratamiento: “el menos combinado a la mitad de dosis de cada uno, porque
invasor, más eficaz y menos costoso”. sus mecanismos de acción son distintos, con lo que se
potencia la eficacia y parece que se reducen los efectos
Tratamiento higiénico-dietético secundarios del ácido quenodesoxicólico administrado
Va dirigido a evitar los episodios dolorosos y algunas en solitario.
de las complicaciones de esta afección, se basa en una Se han ensayado otros fármacos que mostraron efec-
dieta pobre en grasas y de alimentos que contribuyen a to sobre la fisiología de la vesícula y de la formación
estimular la contracción vesicular. Se deben mantener de la bilis, como los inhibidores de la actividad de la
en un régimen alimenticio que les prevenga la obesidad, enzima hidroximetil glutaril coenzima A reductasa,
con alimentos ricos en residuos, comer lentamente y tales como la sinvastatina y lovastatina, que reducen
masticar bien los alimentos, realizar las comidas a horas el índice de saturación del colesterol, el rowachol, que
regulares, hacer la comida principal al mediodía, si es contiene una mezcla de plantas terpénicas en aceite de
posible, y evitar el sedentarismo realizando ejercicios oliva que estimula la secreción biliar y disminuye la
ligeros y deportes no violentos. síntesis de colesterol, o incluso, los antiinflamatorios no
esteroides, que tienen efectos procinéticos vesiculares
Tratamiento medicamentoso y reducen la formación de glucoproteína biliar. Hasta
Desde mediados de la década de los 70 se aplica el momento no hay datos que permitan aconsejar el
en terapéutica humana el conocimiento de que los uso de estos tratamientos solos o asociados a los ácidos
ácidos biliares modifican la saturación y secreción del biliares, en la terapéutica de la colelitiasis sintomática.
Capítulo 180. Litiasis biliar 79

Tratamiento extracorpóreo con ondas para la litiasis biliar, con buenos resultados en cuanto a
de choque (litotricia) morbimortalidad, pero la aparición de la cirugía mínima-
Se introdujo en Europa a mediados de la década de mente invasiva ha hecho que se cuestione la necesidad
los 80 (10 años después de la terapéutica oral con ácidos de la laparotomía. No obstante, constituye una opción
biliares). Aplica iguales fundamentos que la litotricia técnica correcta y permanece vigente entre las posibili-
renal y en la colelitiasis se utiliza con dos fines: como dades terapéuticas actuales. La indicación para utilizar
coadyuvante al tratamiento oral con ácidos biliares, por- la colecistectomía convencional se ha restringido a los
que aumenta la relación superficie/volumen y hace los que precisan reconversión y otros que tengan indicación
cálculos más susceptibles a la disolución, o bien como de colecistectomía y hayan de hacerse una laparotomía
triturador, ya que puede reducir los cálculos a menos de 3 por otra causa. La técnica quirúrgica consiste en realizar
mm de diámetro, situación en la que son evacuables por una incisión en la pared abdominal, extirpar la vesícula y
vía natural al intestino. Lógicamente, esto exige la misma realizar una colangiografía intraoperatoria para descartar
condición de vesícula funcionante y cístico permeable la presencia de litiasis coledociana. Al final de la inter-
que ha de asegurarse por los métodos ya descritos. Para vención se coloca un drenaje en el lecho vesicular que
algunos también se precisa una capacidad de vaciamiento se exterioriza a través de una pequeña incisión separada
vesicular superior a 60 % del volumen de ayunas medido de la principal (por contrabertura) y se cierra por planos
con ecografía o con medicina nuclear. Además, la técnica la incisión de la pared abdominal.
necesita de instalaciones complejas y las ondas han de Colecistectomía laparoscópica
propagarse a través del agua. Los generadores son elec-
Constituye el tratamiento de elección de la colelitiasis
trohidráulico (el primero y más usado), piezoeléctrico
sintomática y es la operación laparoscópica más frecuen-
o electromagnético. Para dirigir la onda se utilizan los
temente realizada en todo el mundo, como consecuencia
ultrasonidos. En las mujeres ha de asegurarse la ausencia
de las ventajas del abordaje mínimamente invasivo:
de embarazo y los factores de coagulación deben ser co-
menos dolor, rápido retorno a las actividades, menor
rrectos por la posibilidad de provocar hemorragia. De los
estancia hospitalaria, evita complicaciones tempranas y
pacientes que presentan indicación, un tercio presentan
uno o más cólicos biliares posteriores, 2 % pancreatitis tardías de las incisiones, mejor resultado estético, tiene
y casi 1 % precisan esfinterotomía endoscópica para menos complicaciones generales y permite la realización
evacuar fragmentos litiásicos de la vía biliar principal. ambulatoria del procedimiento con el inherente ahorro
Otro efecto conocido es la hematuria (4 %). Todos estos económico. Conlleva un índice de complicaciones algo
hechos condicionan que la aplicabilidad del método en superior a la colecistectomía abierta, a expensas de la
el momento actual sea escasa. lesión iatrógena de la vía biliar principal. Sin embargo, en
manos de cirujanos con experiencia, la incidencia actual
Tratamiento percutáneo es comparable a la de la vía abierta. La técnica quirúrgica
Reúne dos modalidades que son la disolución por consiste en realizar varias pequeñas incisiones (5 mm
contacto y la extracción instrumental de los cálculos de y 10 mm) en la pared abdominal, extirpar la vesícula y
la vesícula. Ambas exigen introducir en el órgano bien realizar una colangiografía intraoperatoria para descartar
una sonda, para aplicar el disolvente, o instrumentos la presencia de litiasis coledociana. Al final de la inter-
que trituren y extraigan los cálculos. La vesícula se vención, salvo casos muy específicos, no se coloca un
aborda percutáneamente y es recomendable que sea drenaje en el lecho vesicular. Las contraindicaciones son
por vía transhepática (interponiendo una lengüeta de las generales del abordaje laparoscópico (la contraindica-
hígado) guiada por ultrasonidos o radiología (fluoros- ción para la anestesia general, pacientes con alteraciones
copia/tomografía axial computarizada). Lógicamente graves de la coagulación no corregibles), el cáncer de
estos métodos son de aplicación en el reducido grupo la vesícula biliar y la cirrosis hepática en las descom-
de pacientes que tengan un riesgo prohibitivo para una pensadas por el riesgo de hemorragia incontrolable.
anestesia general y se haya de actuar sobre una litiasis La colecistectomía laparoscópica es un procedimiento
vesicular que tenga complicaciones mayores. seguro, eficaz, de poca complejidad técnica, rápido y con
un bajo índice de conversión a laparotomía.
Tratamiento quirúrgico
Litiasis biliar asintomática
Colecistectomía convencional (método abierto)
Debido a que la mayoría de las colelitiasis son asin-
La cirugía clásica a través de una laparotomía se con- tomáticas, y lo seguirán siendo aproximadamente en
sideró durante muchos años el tratamiento de elección 80 % de los casos, el descubrimiento incidental de
80 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

cálculos en la vesícula no debe justificar terapéuticas está muy extendido el uso de N-butilbromuro de hios-
específicas. No ocurre lo mismo cuando lo que se cina (buscapina), un ámpula endovenosa, que puede
demuestra son cálculos en la vía biliar principal de repetirse antes de una hora si no se ha conseguido alivio.
manera casual, porque tienen elevada posibilidad de Se aconseja, además, permanecer en reposo, en ayunas
complicarse y esto obliga a su tratamiento. Los cono- (administrando solo líquidos acalóricos orales, si no
cimientos que se acumulan en la historia natural de la existen vómitos) y pueden necesitarse antieméticos.
colelitiasis son insuficientes para dictar normas, pero Tras la presentación de un primer episodio de dolor
han servido para identificar situaciones especiales que se debe proponer la realización de una colecistectomía
aun siendo asintomáticas, deben ser tratadas con la ya que existe un riesgo definido de desarrollar compli-
colecistectomía, tales como: caciones.
– Vesícula con pared vesicular calcificada (en porce- No es preciso indicar la colecistectomía con carácter
lana) que en 25 % se asocia a cáncer vesicular. urgente, pues no aporta beneficio sobre la colecistecto-
– Grupos étnicos con alta incidencia de cáncer vesi- mía electiva y supone un mayor consumo de recursos,
cular. pero la intervención tampoco debe demorarse más
– Presencia de colédocolitiasis. de lo que obliguen las necesidades de programación
– Pólipos mayores que 1 cm. quirúrgica. No hay recomendaciones concretas en la
– Cálculos asociados a pólipos. bibliografía basadas en un análisis riesgo-beneficio
– En los jóvenes con anemia drepanocítica, en los para definir claramente este intervalo. Varios estudios
que los cuadros dolorosos abdominales de esta en- han establecido plazos de demora máxima de 120 días,
fermedad son difíciles de diferenciar de los cólicos pero más como un “criterio de calidad” influido por
biliares y de las colecistitis. cuestiones de autoexigencia o previsión de demanda.
– Cálculos mayores que 3 cm (indicación relativa). En las pacientes con colelitiasis sintomática en el
– Pacientes diabéticos (indicación relativa). embarazo, el tratamiento inicial debe ser conservador.
– Pacientes que no tendrán acceso garantizado a los Si no hay respuesta, la colecistectomía laparoscópica
servicios de salud en un periodo de tiempo (indica- es segura, aunque la morbilidad es mayor que en no
ción relativa). embarazadas y se recomienda su realización en el se-
– Colecistectomía previa a cirugía de transplante o gundo trimestre del embarazo.
cardiaca (dada la elevada mortalidad de la colecis-
Colecistitis aguda
titis aguda postoperatoria en estos casos).
– Pacientes con patologías que necesiten de tratamiento El tratamiento terapéutico debe contemplar un trata-
médico prolongado con drogas colecistoquinéticas. miento médico de soporte y la resolución de la enferme-
– Colecistectomía incidental en el curso de otra inter- dad vesicular, generalmente mediante colecistectomía.
vención abdominal. Las medidas generales deben incluir ayuno absoluto,
sueroterapia, antibioticoterapia y alivio del dolor. El
Litiasis biliar sintomática tratamiento antibiótico debe tener en consideración los
A los pacientes con cálculos biliares sintomáticos, se gérmenes causales más habituales, así como la gravedad
les recomienda que reciban colecistectomía para aliviar del cuadro clínico. Los organismos más frecuentes son
los síntomas de dolor y prevenir complicaciones como Escherichia coli, Enterococcus y Klebsiella. En las
la colédocolitiasis, colecistitis, pancreatitis y colangitis. colecistitis leves basta con una monoterapia cefalos-
En los casos de crisis de dolor ligero o moderado porinas o penicilinas semisintética (piperacilina). En
y en el cólico biliar, se usan medicamentos antiespas- las formas graves se debe recurrir a cefalosporinas de
módicos (papaverina y espasmoforte), analgésicos o tercera generación o un aminoglucósido añadiendo me-
bloqueos nerviosos en dependencia de la intensidad tronidazol frente a gérmenes anaerobios. El tratamiento
del dolor y sin que exista componente inflamatorio definitivo de elección es la colecistectomía.
que requiera otras medidas. Los antiinflamatorios no Clásicamente hay dos corrientes de actuación: la
esteroideos consiguen un rápido alivio del dolor y al colecistectomía precoz (en las primeras 72 h) y la
reducen el riesgo de progresión del cuadro hacia una co- colecistectomía diferida tras un periodo de seis a 12
lecistitis aguda. No deben utilizarse los opiáceos como semanas. La colecistectomía laparoscópica precoz
la morfina por su acción contráctil sobre el esfínter de ha demostrado en numerosos estudios que ofrece una
Oddi. Puesto que el dolor se origina en una obstrucción reducción significativa de la estancia hospitalaria y de
temporal de los conductos (habitualmente el cístico) los costos en relación con el tratamiento diferido, así
Capítulo 180. Litiasis biliar 81

como una recuperación más rápida. Tanto las tasas de nóstico en el preoperatorio o si se establecía durante la
reconversión como las complicaciones son similares en intervención. Clásicamente, el patrón de comparación
ambas formas de tratamiento. Además, en 17,5 % de con las sucesivas técnicas es este abordaje por sus re-
los casos sometidos a tratamiento diferido ocurre una sultados satisfactorios durante décadas. Tras disecar el
readmisión durante el periodo de espera que obliga a colédoco y levantar el duodeno (maniobra de Kocher)
una intervención urgente, lo que comporta unas altas puede practicarse sin dificultad una coledocotomía y
cifras de reconversión que llegan al 45 %. En la cole- extraer las litiasis mediante una pinza de Randall, la
cistitis localmente complicada la intervención por vía realización de un lavado a través de una sonda en el
laparotómica puede ser también de elección, siempre colédoco, mediante una sonda de Dormia o un catéter
tomando en consideración la experiencia del cirujano y de Fogarty. El advenimiento de la cirugía mínimamente
las condiciones del escenario quirúrgico. Hay pacientes invasiva ha hecho replantear las indicaciones de la ci-
que se presentan con un fallo orgánico y requieren trata- rugía laparatómica, no obstante, en el momento actual
miento intensivo o que tienen elevado riesgo quirúrgico es aceptable convertir una laparoscopia a laparotomía
y no responden al tratamiento conservador inicial. En ante el diagnóstico intraoperatorio de una colédoco-
estos casos la colecistostomía percutánea es una alter- litiasis si no se dispone de suficiente experiencia en
nativa eficaz, con una eficacia para la resolución de cirugía laparoscópica o el material del que se dispone
la sepsis superior a 80 %. Consiste en la introducción es inadecuado para una exploración laparoscópica del
de un catéter en la vesícula, bajo control ecográfico, colédoco.
a través del que se procede al drenaje continuado del En los comienzos de la cirugía laparoscópica, el
contenido. La recurrencia a largo plazo sin intervención procedimiento que con más frecuencia se utilizó para
posterior oscila entre 10 % y 50 %. Se debe realizar el diagnóstico y tratamiento de la colédocolitiasis,
colangiografía intraoperatoria a todo paciente que se fue la colangiopancreatografía retrógrada endoscópi-
somete a una colecistectomía con el diagnóstico de ca-esfinterotomía endoscópica preoperatoria seguida
colecistitis aguda porque en estos pacientes existe de colecistectomía laparoscópica con tasas de éxito
15 % de probabilidad de colédocolitiasis asociada. en la extracción de cálculos del colédoco por encima
Colédocolitiasis de 90 %, pero luego con el desarrollo de la cirugía la-
El tratamiento de la colédocolitiasis secundaria paroscópica del colédoco, se dudó de la conveniencia
consiste en la extracción de cálculos con la limpieza del de realizar rutinariamente la colangiopancreatografía
colédoco, a la que debe asociarse una colecistectomía retrógrada endoscópica-esfinterotomía endoscópica
para tratar la colelitiasis concomitante. Si bien no exis- preoperatoria que no está exenta de complicaciones. Se
ten datos concluyentes en cuanto a cuál es la secuencia plantea que la tasa de complicaciones de la colangio-
idónea para el diagnóstico y posterior tratamiento de la pancreatografía retrógrada endoscópica-esfinterotomía
litiasis del colédoco, existen varias opciones terapéuti- endoscópica preoperatoria puede llegar a 10 % con 1
cas aceptadas en la actualidad: % de mortalidad por lo que no se justifica su uso de
– Exploración convencional del colédoco más cole- manera rutinaria. En la actualidad, en los diferentes
cistectomía abierta. algoritmos, solo se utiliza la colangiopancreatografía
– Colangiografía retrógrada endoscópica con esfinte- retrógrada endoscópica-esfinterotomía endoscópica
rotomía endoscópica preoperatoria más colecistec- preoperatoria con fines terapéuticos en un grupo bien
tomía laparoscópica. seleccionado de pacientes (cuadros agudos de colan-
– Exploración laparoscópica del colédoco más cole- gitis, pancreatitis o presencia de íctero obstructivo), a
cistectomía laparoscópica. los que se le realiza colecistectomía laparoscópica en
– colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- las primeras 24 h a 48 h después del procedimiento,
ca-esfinterotomía endoscópica intraoperatoria más lo que disminuye la incidencia de colecistitis aguda
colecistectomía laparoscópica. poscolangiopancreatografía retrógrada endoscópica
– Colecistectomía laparoscópica más colangiopan- o tratarla precozmente si apareciera en ese periodo de
creatografía retrógrada endoscópica-esfinterotomía tiempo. El tratamiento exclusivamente endoscópico
endoscópica postoperatoria. de la colédocolitiasis sin realizarse la colecistectomía
laparoscópica, solo debe considerarse en pacientes con
La exploración convencional del colédoco se con- inaceptable riesgo quirúrgico.
sideró durante muchos años el tratamiento de elección Si bien la colecistectomía laparoscópica es una téc-
para la litiasis del colédoco, tanto si se conocía el diag- nica ampliamente difundida para el tratamiento de la
82 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

colelitiasis, la exploración laparoscópica del colédoco acceso a la papila, así como el precorte del esfínter. Esto
requiere cirujanos expertos en cirugía mínimamente redunda en la aparición de menos pancreatitis aguda al
invasiva para que este abordaje sea seguro y eficaz y compararse con la colangiopancreatografía retrógrada
sus resultados sean comparables a los de las demás endoscópica-esfinterotomía endoscópica preoperatoria,
alternativas terapéuticas. Sin embargo, para el paciente de menos colecistitis aguda al realizarse la colecistec-
presenta las ventajas de un único acto anestésico y de tomía laparoscópica en el mismo tiempo quirúrgico y,
un único procedimiento. Las opciones de tratamiento a su vez, menos estancia hospitalaria. Aunque puede
laparoscópico son el abordaje transcístico y el transcole- considerarse como una técnica ideal, su realización
dociano. La ventaja que ofrece el uso de la exploración no es factible en la mayoría de los hospitales, ya que
transcística es que se preserva la integridad, tanto del requiere un entrenamiento adecuado y presenta las
colédoco como del esfínter de Oddi, lo que la hace desventajas de un tiempo operatorio más prolongado, la
de especial interés en pacientes jóvenes o de mediana necesidad de los cambios de posición del paciente y una
edad. Está demostrado que la exploración transcoledo- mayor dificultad en la realización de la colecistectomía
ciana es muy útil cuando existe fallo en la extracción laparoscópica tras la insuflación, desventajas que en
de cálculos de la colangiopancreatografía retrógrada equipos quirúrgicos expertos se minimizan. Las tasas de
endoscópica-esfinterotomía endoscópica preoperatoria éxito en la extracción de cálculos en este procedimiento
e intraoperatoria, principalmente en los pacientes que se encuentran por encima de 95 %.
existe una desproporción entre el diámetro del colédoco Si bien parece existir consenso en cuanto a que
proximal y distal al cálculo. Otras indicaciones de la la colédocolitiasis debe resolverse antes o durante
exploración transcoledociana son: cuando el abordaje la colecistectomía, existe la posibilidad de practicar
transcístico no es posible o bien fracasa, en caso de una colangiopancreatografía retrógrada endoscópi-
litiasis del conducto hepático común, colédoco con ca-esfinterotomía endoscópica postoperatoria tras
un diámetro igual o superior a 8 mm, lo que evita su una colecistectomía laparoscópica con diagnóstico
estenosis tras la sutura, y las litiasis de cualquier tama- transoperatorio de colédocolitiasis. De este modo se
ño únicas o múltiples. Estudios de eficacia muestran evita una laparotomía y se preservan las ventajas de
tasas de extracción de cálculos del colédoco mediante la cirugía mínimamente invasiva. Los resultados de
la exploración laparoscópica del colédoco que oscilan este abordaje son esperanzadores. En estos casos es
entre 75 % a 98 % (91 %) y una morbilidad de 5 % a aconsejable colocar un drenaje o guía a través del
9 % (8,4 %). cístico que atraviese la papila para facilitar la canula-
Se ha descrito la posibilidad de realizar durante el ción de la papila y la esfinterotomía endoscópica en el
acto quirúrgico de la colecistectomía laparoscópica postoperatorio, además, al drenar la vía biliar se evitan
una colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- las fugas biliares por el cístico debido al aumento de
ca-esfinterotomía endoscópica intraoperatoria o una presión intracoledocal secundaria a la presencia de la
esfinterotomía endoscópica anterógrada, introduciendo colédocolitiasis. El principal inconveniente de esta
el esfinterótomo por el conducto cístico y mediante técnica es la posibilidad de fracaso en la extracción de
visualización directa con duodenoscopia se realiza la los cálculos durante la colangiopancreatografía retró-
sección del esfínter. Presenta las ventajas de que al grada endoscópica posoperatoria, lo que motiva que el
estar precedida por una colangiografía intraoperatoria paciente deba someterse a una segunda intervención.
transcística que confirma el diagnóstico, se reduce el En centros con gran experiencia, la canulación del
número de colangiopancreatografía retrógrada endos- colédoco se consigue casi en 100 % de los pacientes
cópica preoperatorias innecesarias, se pueden realizar en que se indica la esfinterotomía endoscópica, pero el
los procedimientos en un mismo acto operatorio, en éxito en la canulación disminuye a 80 % en centros que
caso de fallo de la colangiopancreatografía retrógrada no mantienen una actividad continuada.
endoscópica permite una exploración laparoscópica Ninguna de las opciones de tratamiento citadas ante-
del colédoco o la conversión a cirugía abierta en un riormente se acepta de manera universal como la “regla
mismo tiempo anestésico y cuando se utiliza la técnica de oro” o tratamiento ideal para la colédocolitiasis,
de rendez-vous en la que se canula el conducto cístico por lo que su tratamiento es objeto de debate. Todavía
con una guía que se introduce hasta el duodeno, se no existe consenso en cuanto al tratamiento diagnós-
previene la opacificación del conducto de Wirsung tico y terapéutico de la colédocolitiasis. La estrategia
mediante los medios de contraste, el daño y la mani- diagnóstica y terapéutica de esta enfermedad, depende
pulación de la papila, el uso de técnicas riesgosas de actualmente fundamentalmente de la disponibilidad de
Capítulo 180. Litiasis biliar 83

equipamiento y tecnología, así como de la experiencia claramente identificado, puede ser ligado con varios
y habilidad de cada grupo de trabajo. métodos, dependiendo de su tamaño y del grado de
reacción inflamatoria. Las técnicas laparoscópicas han
Tratamiento del síndrome de Mirizzi
progresado sustancialmente desde la conversión rutina-
La presencia de cualquier tipo de síndrome de ria a laparotomía, cuando se hallan adherencias severas
Mirizzi en pacientes con cálculos en el tracto biliar, durante la colecistectomía. La ligadura simple con clips
complica el tratamiento operatorio. o una ligadura del infundíbulo del conducto cístico,
En las últimas dos décadas, la colecistectomía después de la remoción del cálculo, es una opción la-
laparoscópica ha evolucionado para ser el abordaje paroscópica para el síndrome de Mirizzi tipo I, como lo
quirúrgico de elección, para el tratamiento de los pa- son la ligadura por sutura o el cierre engrampado en los
cientes con litiasis vesicular sintomática. Aunque la lúmenes más grandes. La apertura de la vesícula para
colecistectomía laparoscópica fue inicialmente usada remover el cálculo impactado y para evaluar mejor la
selectivamente para la colecistitis crónica asociada posición del conducto cístico e identificar la presencia
con los cálculos, en la actualidad se la emplea para de una fístula, puede ser una maniobra quirúrgica útil.
prácticamente todo el espectro clínico de la patología Los procedimientos más complejos, incluyendo el by
vesicular. Los datos sobre el tratamiento laparoscópico pass bilioentérico para el síndrome de Mirizzi tipo I y
del síndrome de Mirizzi son limitados. La baja inciden- II, pueden ser considerados si el cirujano laparosco-
cia del síndrome de Mirizzi, el reconocimiento preope- pista tiene la destreza apropiada para realizarlos con
ratorio limitado de su presencia y el hecho de que la seguridad. La colangiografía operatoria, aunque usada
colecistectomía laparoscópica es ampliamente realizada con poca frecuencia en la experiencia de los autores,
por la mayoría de los cirujanos generales, impiden una puede ser útil para definir si la compresión del conducto
experiencia sustantiva institucional e individual; por lo biliar se resolvió, después de haber separado el cálculo
tanto, su tratamiento todavía es controvertido. del conducto extrahepático y para detectar una lesión
biliar no sospechada. La estenosis persistente del con-
El tratamiento quirúrgico del síndrome de Mirizzi
ducto biliar determina si es necesaria la descompresión
depende del tipo y del grado de inflamación biliar en-
del mismo. La remoción completa de la vesícula y la
contrado operatoriamente. Es importante enfatizar que
ligadura del muñón del conducto cístico pueden no ser
el síndrome de Mirizzi se presenta en realidad como un
factibles ante fibrosis severa, independientemente del
espectro de enfermedad más que como tipos distintos
abordaje abierto o laparoscópico.
fácilmente tratados mediante estrategias quirúrgicas La cuestión técnica más importante para el síndro-
uniformes. Las mayores cuestiones quirúrgicas en el me de Mirizzi de tipo II es el cierre de la fístula. La
síndrome de Mirizzi de tipo I son la separación del extensión y el grado de inflamación en el síndrome de
cálculo impactado del conducto hepático común y Mirizzi tipo II ha impedido la colecistectomía laparos-
la identificación distal del conducto cístico para su cópica. Una vez que la fístula es expuesta, el conducto
ligadura. El grado de inflamación periductal, tamaño es debridado y el tamaño y consistencia del conducto
del cálculo impactado y longitud de la fusión entre el proximal y distal a la fístula son evaluado, el cierre
infundíbulo y el conducto cístico con el conducto ex- primario sobre una coledocostomía con tubo en T es
trahepático, afectan la disección operatoria. factible para las fístulas pequeñas con dilatación del
La colecistectomía laparoscópica es factible si la conducto biliar común distal.
“visión crítica” puede ser demostrada. Técnicamente Si la inflamación local impide el cierre del conducto
la habilidad para tomar el infundíbulo conteniendo sobre un tubo en T, una rama yeyunal en Y de Roux es
el cálculo impactado, para permitir la disección en el anastomosada a la fístula, para el cierre del conducto.
triángulo de Calot, es un desafío mayor para el ciru- En los pacientes con marcada inflamación en el sitio de
jano laparoscopista. Es útil una estrategia de disecar la fístula o en los que tienen conductos biliares comu-
inicialmente proximal al cálculo, alrededor del cuerpo nes distales pequeños, la continuidad bilioentérica se
de la vesícula y luego proceder distalmente hacia el establece por medio de una hepaticoyeyunostomía en Y
conducto cístico, en lugar de disecar inicialmente el de Roux por encima de la fístula. En esos pacientes la
conducto cístico para identificar a la arteria cística y fístula puede ser aislada mediante ligadura del conducto
al conducto cístico para una ligadura segura. Algunas distal. Aunque se han propuesto muchas opciones para
veces el conducto cístico puede ser ordeñado hacia el el tratamiento de la fístula, el cierre seguro de esta de-
infundíbulo, haciendo mucho más fácil la disección pende de la reconstrucción biliar del conducto proximal
de la vesícula. Una vez que el conducto cístico es por encima del sitio de inflamación.
84 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

La tasa de conversión de colecistectomía laparoscó- anatómica y la necesidad frecuente de procedimientos


pica a cirugía abierta es alta (67 %). La mayoría de las de drenaje bilioentérico.
conversiones se deben a síndrome de Mirizzi de tipo
Tratamiento de la pancreatitis
II, en donde la inflamación y la distorsión anatómica
por cálculo en el colédoco
desempeñan una función importante en el cambio del
abordaje operatorio. El consenso actual es recomendar En algunos pacientes con pancreatitis grave y cál-
aún la cirugía abierta en pacientes con síndrome de Mi- culo en el colédoco puede estar indicada una esfintero-
rizzi de tipo II, teniendo en cuenta que, con el tiempo, tomía endoscópica precoz (24 h a 48 h desde el inicio
un porcentaje cada vez mayor es tratado laparoscópi- de la pancreatitis) para extraer el cálculo.
camente ante una mayor experiencia laparoscópica y Tratamiento de la colangitis aguda
una mejor instrumentación.
La frecuencia de síndrome de Mirizzi es muy baja. Se basa en la combinación de la administración de
Es necesario un alto índice de sospecha para ayudar al antibióticos y el drenaje biliar como se describe en el
cirujano a elegir el abordaje más apropiado antes de rea- algoritmo (Fig. 180.12). Las formas leves responden a
lizar la colecistectomía. La experiencia en los pasados un tratamiento conservador con reposición hidroelec-
23 años se ha afectado por la rareza de este síndrome trolítica y antibióticos. Aunque en presencia de obstruc-
y la experiencia limitada resultante de la mayoría de ción biliar la eliminación biliar de los antibióticos está
los cirujanos generales, aún en un centro mayor de reducida o anulada, su administración permite alcanzar
referencia. Desde la introducción de la colecistectomía valores plasmáticos que contrarrestan los efectos del
laparoscópica, esta se ha vuelto un método alternativo reflujo colangiovenoso. El tratamiento antibiótico debe
para tratar ese síndrome, sin embargo, en la actualidad iniciarse lo más pronto posible tras la extracción para
es aplicable solo en pacientes seleccionados con síndro- hemocultivos. El régimen a emplear viene determinado
me de Mirizzi de tipo I. El abordaje quirúrgico abierto por su actividad frente al tipo de gérmenes causales,
es el método estándar para el síndrome de Mirizzi de la gravedad del cuadro y la presencia de fracaso renal.
tipo II, a causa de las densas adherencias, distorsión La pauta más aceptada actualmente como monotera-

Fig. 180.12. Algoritmo para el manejo terapéutico de la colangitis.


Capítulo 180. Litiasis biliar 85

pia es el uso de ureidopenicilinas o de piperacilina, considerablemente en un paciente por lo común senil


principalmente en asociación con un inhibidor de la y con mal estado general. Tras la operación, la mayoría
betalactamasa como tazobactam (4/0,5 g endovenosos de los pacientes permanecen asintomáticos y la fístula
cada 8 h). Otras alternativas son ampicillina/sulbactam, se cierra espontáneamente dejando una vesícula escle-
las cefalosporinas de tercera generación (cefotaxime roatrófica y sin cálculos.
1 g endovenosos cada 8 h), y las quinolonas (cipro- Tratamiento de los cálculos durante el embarazo
floxacina 200 mg endovenosos cada 12 h). Ante la
sospecha de participación de gérmenes anaerobios, se Durante mucho tiempo se ha pospuesto la cirugía
aconseja asociar metronidazol. Aproximadamente 80 % durante los embarazos, porque se relacionaba con
a 85 % de los episodios se resuelven con tratamiento mayores tasas de aborto y de partos pretérmino. Con
médico, permitiendo una evaluación etiológica y un el perfeccionamiento de las técnicas anestésicas, en
administración electiva similar a los casos de ictericia especial la introducción de los métodos tocolíticos, se
sin colangitis. Sin embargo, en un 15 % de los casos ha reducido mucho esta morbilidad, y cada vez parece
la evolución es progresiva a pesar del tratamiento y es más segura la colecistectomía en esta situación. Se
obligado el drenaje biliar precoz. Ante una colangitis mantiene cierta prevención sobre la vía de abordaje
grave o por falta de respuesta al tratamiento antibiótico laparoscópico por el riesgo de daño instrumental del
de una colangitis inicialmente leve, la cirugía urgente útero y por desconocerse el efecto que en la circulación
comporta un elevado riesgo, por lo que se recomienda fetal pueda tener el neumoperitoneo. En general se
el drenaje no operatorio. El drenaje endoscópico es recomienda intentar postergar la cirugía mientras que
más eficaz que el quirúrgico y está gravado con una la colelitiasis, aun sintomática, no se haya complicado.
menor morbimortalidad. Tanto la inserción de un catéter
nasobiliar como la colocación de un stent son medidas Bibliografía
suficientes para lograr un adecuado drenaje biliar. La Azary, S. Y., Kalbasi, H., Setayesh, A., Mousavi, M., Hashemi,
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Capítulo 181
Síndrome poscolecistectomía
Dr. C. Felipe Neri Piñol Jiménez

Intervención quirúrgica donde se practica la excé- computarizada de escaneo, helicoidal o espiral, la co-
resis de la vesícula biliar, como método para tratar las langiografía por resonancia magnética, la ecografía del
distintas patologías que pueden afectar a la vesícula sistema hepatobiliar es la más accesible y económica
biliar. en la mayoría de las instituciones.
El resultado de la colecistectomía es bueno, habi- Otros procedimientos considerados invasivos uti-
tualmente, según reportes de la literatura los síntomas lizados en la actualidad han resultados ser útiles para
desaparecen completamente en 90 % de los pacientes, definir la anatomía biliar incluyendo la colangiografía
mientras que otros aparecen, se agudizan o se hacen percutánea transhepática y la colangiopancreatografía
crónicos la presencia de los síntomas, lo que se conoce retrógrada endoscópica.
como síndrome poscolecistectomía. Este término fue
descrito por primera vez en 1947 por Womack y Crider Epidemiología
y aún continúa en estudio.
La frecuencia del síndrome poscolecistectomía es
Métodos quirúrgicos y exploratorios muy variable de un estudios a otro. Se reporta que se
encuentra entre 5 % a 30 % de los pacientes con una
durante la excéresis de la vesícula biliar variable entre 10 % a 15 % de manera más razonable.
Dos son los métodos quirúrgicos actuales que per- Otros estudios como los de Mc Hardy reportan que
miten llevar a cabo tal intervención tales como la más 7,5 % de los pacientes con síndrome poscolecistectomía
antigua e invasiva colecistectomía abierta y la más requieren ser hospitalizados.
moderna la laparoscopia endoscópica.
En la década de los 60 del siglo xix la colecistecto- Clasificación
mía fue un método quirúrgico común para tratar a enfer-
mos de la vesícula biliar, llegó a convertirse en rutina En la actualidad este síndrome y su clasificación
unos 20 años más tarde y demostró ser el tratamiento se han renovado y aún más esclarecidos a medida que
de éxito para mejorar el cólico biliar y la colecistitis los medios de diagnósticos son más exactos (ultraso-
en 80 % a 95% de los pacientes con litiasis, mientras nido abdominal) en precisar la existencia tanto previa
que cuando las litiasis no estaban presentes, la tasa de como posterior a la colecistectomía de anormalidades
fracaso llegaron alcanzar 40%. orgánicas y funcionales en el tracto digestivo y en el
En la década de los 20 del siglo xx, la colecistogra- sistema hepatobiliar.
fía oral fue una gran ayuda preoperatoria al permitir En este sentido, el síndrome se ha clasificado en dos
la detección de cálculos o mal funcionamiento de la grupos según los síntomas:
vesícula. Desde entonces, una gran variedad de técni- – Pacientes dependientes de trastornos funcionales u
cas de imagen no invasiva han demostrado ser útiles orgánicos del tracto digestivos, por ejemplo: esofa-
en la evaluación preoperatoria de la vesícula biliar en gitis, gastritis alcalina y colitis biliar.
la actualidad: ecografía, gammagrafía hepatobiliar con – Pacientes dependientes de trastornos funcionales
tecnecio marcado Tc 99m, iminodiacetic ácido, también u orgánicos del sistema hepatobiliar, por ejemplo:
conocido como ácido hepatoiminodiacetic, tomografía disfunción de esfínter de Oddi.
88 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Otros autores como Spiro y colaboradores, lo divi- el sistema biliar, especialmente la vesícula biliar. En
den teniendo en cuenta su forma de aparición en: alrededor de 5% de los casos la causa es desconocida.
1. Agudo: Algunas anomalías en el flujo y la circulación de
a) Trastornos digestivos menores. la bilis son una causa común de síndrome poscolecis-
b) Complicaciones de la operación. tectomía.
2. Crónico: Sin embargo autores como Peterli, reportan que el
a) Enfermedades del colédoco: síndrome poscolecistectomía es causado por trastornos
– Coledocolitiasis. funcionales en 26 % de los pacientes, la enfermedad
– Estenosis coledociana. ulcero péptica en 4 %, el dolor en la herida en 2,4 %,
– Estenosis esfinteriana. la presencia de cálculos residuales en 1 %, la presencia
b) Conducto cístico residual: de líquido subhepático en 0,8% y la hernia incisional
– Colecisto “reformado”. en 0,4%. Schoenemann reporta que los trastornos
– Litiasis. funcionales son la causa más común de síndrome pos-
c) Disquinesia biliar: colecistectomía.
– Estenosis papilar. No obstante, se resume las posibles etiologías del
– Papilitis. síndrome poscolecistectomía teniendo en cuenta la
– Odditis. anotomía del sistema digestivo (Tabla 181.1).
– Estenosis del esfínter de Oddi y otros.
d) Síntomas originales no vesiculares: Fisiopatología
– Colon irritable.
– Enfermedad pancreática. Se postula que la bilis es la causa del síndrome pos-
– Enfermedad hepática. colecistectomía en pacientes con síntomas leves como
– Hernia hiatal, entre otras. reflujo gastroduodenal o diarrea y que la eliminación de
la función de depósito de la vesícula biliar altera el flujo
y la circulación enterohepática de la bilis sea la causa
Etiología
de los síntomas crónicos de los operados de la vesícula.
En general 50 % de casos de síndrome poscolecis- En este sentido, se proponen diversas teorías sobre
tectomía son causados por enfermedades que afectan bases científicas, históricas y epidemiológicas, que

Tabla 181.1. Etiología del síndrome poscolecistectomía según anatomía del sistema digestivo
Anatomía Etiología
Vesícula biliar y el remanente del Residual o reformar la vesícula biliar, colelitiasis y neuroma
conducto cístico
Hígado Esteato hepatitis no alcohólica, cirrosis hepática, ictericia idiopática crónica, enfermedad de
Gilbert, síndrome de Dubin-Johnson, hepatolitiasis, colangitis esclerosante y quiste hepático
Vías biliares Colangitis, adherencias, traumas, quistes de colédoco, obstrucciones benignas (coledocolitiasis)
o malignas (colangiocarcinoma), dilataciones sin obstrucción, disquinesias y fístulas
Periampular Disquinesia del esfínter de Oddi, espasmos, hipertrofia o estrechez del esfínter de Oddi,
papiloma y cáncer.
Páncreas Pancreatitis, litiasis y cáncer de páncreas
Esófago Aerofagia, hernia diafragmática, hiatal y acalasia
Estómago Gastritis alcalina, enfermedad ulceropéptica y cáncer gástrico
Duodeno Divertículos y úlcera duodenal
Intestino delgado AHernia incisional y síndrome de intestino irritable
Colon Estreñimiento, diarreas, hernia incisional y síndrome de intestino irritable
Vascular Angina intestinal y coronaria
Nervio Neuroma, neuralgia intercostal, lesión del nervio espinal, desequilibrio simpático, neurosis y
ansiedad
Hueso Artritis
Otro Cáncer suprarrenal, tirotoxicosis, 20 % de órganos que no sean hepatobiliar o de páncreas,
cuerpos extraños, incluidos los cálculos biliares y clips quirúrgicos
Capítulo 181. Síndrome poscolecistectomía 89

tratan de explicar como un paciente con antecedente


de ser colecistectomizado puede desarrollar lesiones
en la mucosa gastrointestinal y estas manifestarse de
variadas formas en la clínica.
La bilis es una secreción digestiva y algunos de sus
componentes como los ácidos biliares y los aniones
orgánicos, desempeñan una función clave en la diges-
tión y la absorción de los lípidos. También se considera
como un líquido excretor porque el colesterol, la bilirru-
bina, los metales pesados y muchos aniones y cationes
orgánicos se eliminan a través de esta.
El componente principal de la secreción biliar lo
constituyen los ácidos biliares, sintetizados en el hígado
(en los hepatocitos pericentrales), a partir del colesterol
por un proceso de deshidrogenización y reducción de su
núcleo, como consecuencia de una acción de hidroxila-
ción catalizada por la enzima colesterol 7-a-hidroxilasa, Fig. 181. 1. Circulación enterohepática de los ácidos biliares.
que produce los ácidos biliares primarios: quenodesoxi-
cólico (dihidroxilado) y cólico (trihidroxilado), ambos De todo lo anterior se deriva que los ácidos biliares
representan 90 % del total de los ácidos biliares conte- constituyen uno de los factores intraluminales que mo-
nidos en la bilis. Dentro de la propia glándula hepática, dulan la actividad proliferativa del epitelio digestivo,
estas sustancias se conjugan con la glicina (3/4 partes) y por lo que es importante que se mantenga un balance
la taurina (el resto), y constituyen las sales de glicolato adecuado en la producción de estos para evitar sus
y taurocolato, respectivamente, que son más solubles en efectos dañinos sobre la mucosa intestinal.
pH ácido y más resistentes a la precipitación por iones En la práctica se desconoce la predisposición de la
de calcio que los ácidos biliares no conjugados. Desde el persona para padecer de síndrome poscolecistectomía.
punto de vista biológico, la conjugación incapacita a los Por lo tanto, con todo lo anterior, se pudiera inferir que
ácidos biliares para atravesar las membranas celulares. el control de la producción de ácidos biliares en el or-
Los ácidos biliares primarios son secretados hacia el ganismo contribuye a que no aparezcan lesiones, inde-
intestino delgado y la mayor parte (85 %) se absorbe en pendientemente de la existencia de una predisposición.
el íleon de forma intacta y de manera pasiva retornan al Es evidente la acción tóxica de los ácidos biliares
hígado, a través de la circulación enterohepática, donde sobre la mucosa intestinal. El aumento de estos en la
se reconjugan (Fig. 181.1). El resto (15 %) comienza a luz del órgano desencadena una respuesta inflamatoria
desconjugarse en el íleon y pasa al colon donde completa que, de acuerdo con su intensidad y persistencia, puede
la desconjugación, por acción de las bacterias anaerobias traer como consecuencia el desarrollo de lesiones que
colónicas, lo que conduce a la formación de los ácidos transitan desde pequeñas alteraciones a nivel de mucosa
biliares secundarios: litocólico, a partir del ácido que- (lesiones mínimas) hasta el cáncer con el decursar de los
nodesoxicólico, y desoxicólico, a partir del ácido cólico. años. Cuando este incremento es de forma transitoria,
Este último se absorbe en la mucosa colónica y regresa se desencadena una respuesta inflamatoria aguda de la
al hígado, se reconjuga y forma parte del ciclo total mucosa con activación del sistema inmunológico, ca-
enterohepático del metabolismo de los ácidos biliares racterizada, fundamentalmente, por un infiltrado infla-
y el litocólico se excreta a través de las heces fecales. matorio con predominio de neutrófilos, los que liberan
Los ácidos biliares son capaces de “desnudar” la diferentes mediadores químicos (citoquinas, radicales
mucosa de su capa hidrofóbica protectora, por su acción libres, eucosanoides, entre otros) que amortiguan este
detergente sobre el soporte lipídico de las membranas proceso y favorecen la reparación tisular, al estimular la
celulares. Todo esto acarrea la renovación de la mucosa, proliferación celular como ocurre en la fase aguda de los
inducida por un incremento de la actividad prolifera- colecistectomizados. Macroscópicamente este proceso
tiva a nivel de mucosa que, a la larga, puede terminar se traduce en una mucosa eritematosa y edematosa,
ejerciendo, según su intensidad, su persistencia y la la que, una vez eliminado el agente agresor, recupera
presencia de una predisposición genética en la persona, su aspecto normal, por ejemplo: esofagitis, gastritis
un efecto promotor tanto inflamatorio como de tumo- secundaria a reflujo biliar y colitis biliar. Cuando la
rogénesis en el peor de los casos. elevación de estos es mantenida o de manera crónica,
90 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

la respuesta inflamatoria se caracteriza por un infiltrado meses siguientes a la intervención. El diagnóstico se


con predominio de linfocitos que transita por diversos efectúa por ultrasonido, colangiografíapercutánea o
grados de intensidad, desde lesiones mínimas de la endoscópica y representa para el paciente una nueva
mucosa hasta lesiones severas. intervención, a menos que el tubo en T todavía no
Los procesos por los que evolucina estas modi- se haya retirado o se usen sustancias litolíticas. Se
ficaciones obedecen a una respuesta inmunológica hace extracción de los mismos en manos expertas ya
exagerada, no controlada, mediada por sustancias quí- sea a través del tubo o por medio de una papilotomía
micas liberadas por las células del sistema inmune, que endoscópica.
amplifican y perpetúan la respuesta inflamatoria. Todo Las estenosis de los conductos biliares (coledociana
este proceso conlleva un incremento de la proliferación o esfinterianas) si bien no son predecibles se presentan
celular con alta probabilidad de mutaciones del ADN, por manipulación excesiva de las mismas o reacciones
desactivación de genes supresores de tumor y activación al material de suturas y su curación aún representa un
de oncogenes, que favorecen el crecimiento celular y reto a la técnica operatoria de las vías biliares.
la aparición de lesiones más severas como displasia El conducto cístico residual ocurre cuando no se
en diferentes grados, de acuerdo con la intensidad y la extirpa el cístico muy cerca del colédoco, por lo que
persistencia del factor agresivo celular (bilis), traducido la porción residual del cístico puede dilatarse y pre-
morfológicamente por inflamación y, en el peor de los disponer a la formación de cálculos, a esto se le ha
casos, por la presencia de úlceras, adenomas y cáncer. denominado vesícula biliar o colecisto “reformado”
Independiente de todo lo anterior y teniendo en y es una complicación bastante rara que en ocasiones
cuenta la clasificación de síndrome de poscolecistec- se acompaña de neuroma en el tejido cicatricial. En
tomía según sus formas de presentación en aguda y este sentido, en la actualidad se recomienda no ligar el
crónica se expone los mecanismos de cada una. cístico más de 5 mm de distancia del colédoco.
El conducto cístico residual se asocia a menudo
Poscolecistectomía aguda con la presencia de cálculos en el colédoco, aunque
puede ser por mala técnica quirúrgica inicial, Glenn
Los trastornos digestivos menores se presentan en encontró cálculos en la evolución de coledectomías
las primeras semanas de operado, son de intensidad en casi la mitad de 44 pacientes con conducto cístico
variable y no requieren, excepto en casos extremos, residual, lo que no se ha corroborado por otros autores
de ingreso en un centro asistencial. Se describe como en la actualidad.
síntomas más frecuentes las diarreas o heces blandas La disquinesia biliar tiene interpretaciones diferentes
que representan al periodo de adaptación del árbol biliar desde el punto de vista del médico general, radiológico
a la falta del reservorio que representa la vesícula biliar, y gastroenterológico, para el primero es una explicación
aunque otro limitado número de pacientes sufren de para todo paciente que se queja de dispepsia grasa y en
estreñimiento, que lo más seguro es que está condicio- quien no se le ha comprobado litiasis vesicular tenga o
nado por la inactividad y limitaciones en la dieta que no dolor, para el radiólogo es una falta de contracción
algunos cirujanos preconizan. de la vesícula después de la comida de prueba y para
Las complicaciones atribuidas a la operación misma el último es una incoordinación motora (arritmia) entre
son cada vez más raras en la actualidad, y dentro de la vesícula, conductos biliares, y el esfínter de Oddi,
estas se destacan las colangitis posoperatorias, las este- y en este grupo se debe incluir la estenosis ámpular
nosis biliares, las pancreatitis traumáticas, las calculosis que tiene como sinónimos estenosis papilar, papilitis,
residuales del conducto común y la sección de colédoco, Odditis, estenosis del esfínter de Oddi y otros. La idea
todas reducidas a un mínimo, por las depuraciones de fisiopatológica es, sin embargo, la misma y es la obs-
las técnicas quirúrgicas, uso de antibióticos y de la trucción del flujo normal de bilis, ya sea en forma activa
colangiografía transoperatoria, usándose en algunos como espasmo o la presencia de fibrosis o inflamación
casos la coledocoscopia con aparatos ópticos de fibra de que representan una forma pasiva. Estas anormalidades
vidrio. No obstante, a pesar de las precauciones la co- funcionales son en la actualidad diagnosticadas por
ledocolitiasis en el posoperatorio inmediato se observa medio de presiones manométricas transendoscópicas y
en 1 % a 3,3 % en series globales de la Clínica Mayo. la papilotomía a través del mismo endoscopio resulta
el tratamiento de elección.
Poscolecistectomía crónica Una serie de enfermedades no relacionadas con la
La coledocolitiasis en forma crónica se presenta vesícula biliar pueden dar origen al síndrome posco-
cuando los síntomas se inician dentro de los veinticuatro lecistectomía y son indicativos de que el paciente fue
Capítulo 181. Síndrome poscolecistectomía 91

intervenido erróneamente, aunque puede haber existido – Duración de los síntomas antes de la cirugía: menos
una colelitiasis asintomática. Las hepatopatías, hernia de un año (15,4 % de los pacientes desarrollaran
hiatal y enfermedades crónicas del páncreas lo mismo poscolecistectomía), si es de uno a cinco años
que el colon irritable con su variante de síndrome del (21 % desarrollaran poscolecistectomía), y si están
ángulo hepático, deben siempre ser considerados antes entre seis a 10 años el 31 % y en caso de más de 10
de efectuar una colecistectomía y aunque existieren años el 34 %.
cálculos obvios debe hacérsele saber al paciente que – Si la colecistectomía se asocia a una coledocotomía,
después de la operación algunos de los síntomas pudie- el síndrome aparecen en 23 % y si esta no se realiza
ran no ser curados con la operación, aunque el efecto solo se presenta en 19 %.
placebo en algunos pacientes es difícil de valorar, – Otros autores reportan que la incidencia del síndro-
tomando además en cuenta que se ha ncomprobado me poscolecistectomía es el mismo para pacientes
trastornos siquiátricos en 43 % de los pacientes en series con síntomas típicos o atípicos preoperatorios.
grandes de síndrome poscolecistectomía. – Estudios relacionados con la edad y el sexo como
el de Freud, reportan diferencias en cuanto a la
Diagnóstico clínico aparición del síndrome poscolecistectomía según
la edad y el sexo. Pacientes con edades compren-
Aproximadamente 10 % a 15 % de las personas que didas entre 20 a 29 años la incidencia de síndrome
se han extirpado la vesícula biliar desarrollan síntomas. poscolecistectomía es de 43 %, los comprendidos
Esto llega a unos 50 000 nuevos casos de síndrome entre 30 a 39 años (27 %), de 40 a 49 años (21 %),
poscolecistectomía en un año. El síndrome poscole- de 50 a 59 años (26 %), y de 60 a 69 años (31 %).
cistectomía a veces es difícil de diagnosticar debido a Sin embargo, los pacientes de 70 años y más no
que los signos y síntomas pueden ser muy sutiles. Es un se reporta el síndrome. En cuanto al sexo, es más
diagnóstico orgánico o funcional que se establece en la frecuente en las mujeres (28 %) que en los hombres
mayoría de los pacientes colecistectomizados después (15 %).
de una evaluación clínica completa. – Los pacientes con trastornos siquiátricos en la fase
Varios artículos establecen que una completa evalua- peroperatoria ya tiene una causa orgánica de síndro-
ción preoperatoria es esencial para reducir al mínimo me poscolecistectomía, mientras que los pacientes
este síndrome y que los pacientes deben ser advertidos sin trastorno siquiátrico la causa orgánica de síndro-
de la posibilidad de síntomas en el posoperatorio, que me poscolecistectomía solo lo tienen 23 %.
pueden comenzar en cualquier momento desde el po-
soperatorio inmediato a décadas más tarde (al año, dos, Se reporta que 65% de los pacientes colecistecto-
cinco incluso a los 20 años de operado de vesícula). mizados son asintomáticos, 28 % presentan síntomas
Otros estudios se han realizado en un intento de leves, 5 % síntomas moderados, y 2 % síntomas graves
identificar los pacientes que están en mayor riesgo de que en muchas veces requieren de ingreso hospitalario.
sufrir un síndrome poscolecistectomía y de desarrollar El cuadro clínico se caracteriza por dolor abdominal
un método de estratificación de riesgo, pero no han recurrente, difuso, tipo cólico (93 %), interdigestivo o
resultado del todo factibles, dado que una gran parte espontáneo, que puede incrementarse o aliviarse con
de los datos son inconsistente de estudio a estudio, sin diferentes tipos de alimentos, de duración variable, casi
embargo, el consenso de opinión sostiene que mientras nunca nocturno, y que generalmente evoluciona por
más seguro sea el diagnóstico preoperatorio, menor crisis. Las diarreas (73 %) son de tipo altas, biliar, abun-
es el riesgo de síndrome poscolecistectomía, y en dantes, amarillas, espumosas con flemas, en ocasiones
este sentido sugieren algunas consideraciones con el con sangre, flotan en el servicio sanitario, explosivas
objetivo de estratificar el riesgo de sufrir un síndrome que llegan a manchar todo el servicio, se agudizan con
poscolecistectomía tales como: . la ingestión de alimentos y dejan sensación de ardor
– La cirugía de urgencia coloca a los pacientes a un o quemazón en el ano. La constipación crónica es de
riesgo mayor. duración de tres a cinco días, de consistencia dura,
– Si la cirugía fue para la extracción de cálculos el flotan en el servicio sanitario.
10 % a 25 % de los pacientes desarrollaran posco- Otros se aquejan de síndrome dispéptico rebelde a
lecistectomía. Si los cálculos no estaban presentes la terapéutica convencional y en algunos casos sufren
en la cirugía el 29 % de los pacientes desarrollaran de síndrome de malabsorción intestinal, de esofagitis
síndrome poscolecistectomía. y gastritis alcalina.
92 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Exámenes complementarios Otros estudios recomendados son los de medicina


nuclear que pueden demostrar la existencia de fugas
Los estudios complementarios son muy variable, la biliares en el posoperatorio. Los estudios nucleares
mayoría de los pacientes se deben realizar una serie de no tienen resolución para determinar la existencia de
exámenes con el objetivo de identificar la causa espe- dilatación ni de estrechez de los conductos biliares. Sin
cífica de los síntomas y excluir complicaciones graves embargo, un retraso de más de 2 h o prolongada del
de la poscolecistectomía. Todos son indicados según la contraste ayuda a identificar el esfínter de Oddi como
clínica del paciente. causa potencial del síndrome poscolecistectomía, pero
Los estudios hematológicos están encaminados a no puede diferenciar la existencia de una estenosis o
descartar anemias, leucocitosis por infección (forma disquinesia.
aguda), perfil hepático para descartar disfunción hepáti- La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
ca o daño estructural: alanina amino transferasa, aspar- es inigualable en la visualización de las ampollas y
tato amino transferasa, gamma glutamil transpeptidasa, conductos biliares y pancreáticos. Al menos 50% de
bilirrubina, coagulograma, albúmina y proteínas totales los pacientes con síndrome poscolecistectomía tienen
y también se indican pruebas funcionales tiroideas, alguna enfermedad biliar y la mayoría son funciona-
pancreáticas, entre otras. les en su naturaleza. Un experimentado endoscopista
puede confirmar este diagnóstico en la mayoría de
Estudios de imaginología estos pacientes y también proporcionar más estudios
Para detectar enfermedades de pulmón, diafragma de diagnóstico como la manometría.
y mediastino se deben realiza radiografía de tórax, Durante la colangiopancreatografía retrógrada en-
junto con las radiografías abdominales en la mayoría doscópica se pueden realizar maniobras terapéuticas
de los casos. como la extracción del cálculo, dilatación de la esteno-
En los pacientes donde el síntoma principal sea sis o la esfinterotomía lateral interna para la disquinesia
el dolor en hipocondrio derecho se debe realizar ul- o estenosis del esfínter de Oddi.
trasonido o radiografía con bario con el objetivo de La manometría biliar se realiza en pacientes sedados
evaluar el tracto digestivo superior y detectar esofagitis, sin estupefacientes con un catéter de perfusión, una reti-
incluyendo la enfermedad por reflujo gastroesofágico rada a través de la técnica se utiliza para la manometría
y la enfermedad ulcerosa péptica. Estos estudios no del esfínter. El esfínter es 5 mm a 10 mm de largo y las
siempre se realizan debido a que es más confiable la presiones son normales a menos de 30 mm Hg.
endoscopia digestiva alta en la identificación de estas Se debe realizar angiografía a pacientes sospechosos
enfermedades y la visualización directa de la ampolla de trastornos vasculares y coronarios, como angina de
de Váter. El estudio ultrasonográfico de la región per- pecho o intestinales.
mite evaluar el hígado, vías biliares, páncreas y otros Los estudios endoscópicos superior e inferior cons-
órganos adyacentes. La observación de una dilatación tituyen la prueba a la realizar después de la ecografía
entre 10 mm a 12 mm del conducto biliar común es abdominal con el objetivo de apreciar las lesiones en la
normal, mientras que si la dilatación es mayor de 12 mucosa del tracto digestivo tanto superior como infe-
mm hace sospechar la existencia de una obstrucción rior. La cápsula endoscópica y la enteroscopia son útiles
distal por litiasis residual, estrechez o estenosis de la en los pacientes donde los síntomas no se explican por
ampolla de Váter. la ausencia de lesiones en esófago, estómago y colon.
La tomografía computarizada puede ser útil en la Durante las endoscopias superiores e inferiores se
identificación de pancreatitis crónica o seudoquiste puede tomar biopsias de la mucosa o de íleon terminal
en pacientes con alcoholismo o aquellos con antece- y revelar la existencia de lesiones microscópicas.
dentes de pancreatitis. En aquellos casos donde no se
puede realizar una colangiopancreatografía retrógrada Complicaciones
endoscópica o una endoscopia superior, se sugiere la
tomografía axial computarizada helicoidal o la colan- La propuesta de que los ácidos biliares por encima
giopancreato resonancia. de sus valores fisiológicos son agentes carcinogéni-
Cuando el dolor es en abdomen bajo o pélvico y cos data desde los principios de 1939 a 1940, donde
se asocia a constipación o diarreas, se debe indicar un existía pocas evidencias de su efecto cancerígeno en
colon por enema con bario, para descartar patología el tracto gastrointestinal, no obstante, en la actualidad
colónicas como diverticulosis, diverticulitis, colitis u varios estudios han puesto en evidencia que los ácidos
otras lesiones. biliares son considerados como agentes endógenos
Capítulo 181. Síndrome poscolecistectomía 93

de la carcinogeneis y por ende están implicados en la En tal sentido, los estudiosos del tema han revisado
génesis del cáncer en el trato gastrointestinal: esófago, diversas evidencias, de los efectos dañinos de los ácidos
estómago, intestino delgado, hígado, páncreas colon y biliares sobre los órganos del tracto gastrointestinal, que
recto, apoptosis y daño del ADN celular. parte de la inducción de la producción de radicales de
Numerosos son los efectos dañinos que ejerce la oxígeno y de nitrógeno, estos inducen daño de ADN
exposición mantenida de los ácidos biliares sobre la celular, mutación y apoptosis (retarda la apoptosis
mucosa intestinal que los hace considerar como agentes cuando la exposición es mantenida o crónica), reduce
carcinógenos: la capacidad de mantener una adecuada apoptosis (la
– Inducen la formación de radicales libres de oxígeno apoptosis es un proceso beneficioso para la reparación y
y especies reactivas de nitrógenos. sustitución de las células del cuerpo aún más cuando se
– Provocan daño del ADN celular. daña el ADN celular) y esto puede conllevar o generar
– Estimulan la aparición de mutaciones. una mutación que es irreparable, al reducir la apoptosis
– Inducen la apoptosis (aceleran o retardan). se ve incrementada la mutagénesis.

Las evidencias actuales apuntan cada vez más la Esófago


existencia de una incrementada asociación entre la ex-
Los dos tipos histológicos más frecuente de cáncer
posición mantenida de los ácidos biliares con el riesgo
de esófago son el adenocarcinoma y el carcinoma de
de cáncer en la población humana, aún más cuando
células escamosos. La metaplasia de Barrett es una
existe una susceptibilidad genética. En este sentido,
condición predisponerte importante del cáncer.
se han confeccionados distintos modelos que explican
Una de las tanta teorías que explica la génesis de
como los ácidos biliares ejercen este efecto cuando sus
estos tumores y especial la génesis de la metaplasia
concentraciones son altas y mantenida en la luz del
de Barrett está involucrado la existencia mantenida
tracto digestivo provocando daño celular.
y persistente del reflujo duodeno-gástrico-esofágico,
Los niveles altos de ácidos biliares en la luz gastroin-
que origina una exposición mantenida de la mucosa
testinal obedecen a un gran número de problemas, pero
del esófago, tanto a los ácidos biliares provenientes
el más importante está relacionado en personas que in-
gieren dietas ricas en grasas y los colecistectomizados. del duodeno como al ácido clorhídrico proveniente
Un efecto rápido sobre las células expuestas a del estómago (jugo gástrico). De estos dos elementos
alta concentraciones de ácidos biliares es la genera- el contenido biliar es considerado el más agresivo al
ción de radicales de oxígeno y de nitrógeno, los que ser un compuesto alcalino, de acción corrosiva al faci-
incrementan el daño del ADN y la mutación celular litar la ruptura de la membrana celular y favorecer la
(ver “Capítulo 130. Pólipos colónicos y síndrome de retrodifución de hidrogeniones y otras sustancias, así
poliposis”). La producción de los radicales de oxígeno como ser un compuesto que al penetrar al tejido daña
y de nitrógeno seguido de la exposición de los ácidos directamente a las células. Esto desencadena un pro-
biliares ocurre como consecuencia de la ruptura de ceso inflamatorio que según la persistencia del agente
la membrana celular y de la membrana mitocondrial. agresor (ácidos biliares) evoluciona hacia la metaplasia
Este proceso, cuando la exposión es de duración corta y en el peor de los casos a un cáncer.
de los ácidos biliares, induce la apoptosis y algunas de Estudios recientes reportan la expresión de pro-
las células dañadas mueren mientras que otras logran teínas transportadoras de ácidos biliares de manera
reparar el daño del ADN y sobreviven, otras mantienen incrementada en la mucosa del esófago de Barrett, lo
con cierto grado de resistencia y se conserva con su que sugiere que la génesis de la metaplasia del esófago
estructura celular normal. Cuando este pool de ácidos Barrett puede ser un mecanismo de adaptación para
biliares se mantiene de manera constante, abundante proteger las células del daño de los ácidos biliares. En
y persistente como ocurre en los pacientes colecistec- este sentido, la progresión del esófago Barrett hacia
tomizados, este ejerce un efecto mayor, que implica adenocarcinoma está fuertemente influenciada por la
más daño del ADN, de las mitocondrias, la activación exposición mantenida de los ácidos biliares, al inducir
de oncogenes y retarda la apoptosis, en este sentido se estrés oxidativo, daño del ADN celular, mutación y
incrementa la proliferación celular con un alto grado apoptosis (retardan la apoptosis) y finalmente al cáncer.
de probabilidad de mutaciones, que se expresa como Otros estudios han logrado identificar y poner en
lesiones premalignas como son los pólipos, estos siguen evidencia que los ácidos biliares incrementan la produc-
creciendo, con mayor número de mutaciones y por ende ción de radicales de oxígeno en las células del esófago,
se transforma en cáncer. incluyendo las que forman parte del esófago Barrett,
94 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

estos son ácido glicocolico, taurocolico, quenodexo- aún más la excreción de ácidos biliares secundarios y
cicolico y dexocicolico, como también son capaces su exposición sobre la mucosa colónica, lo que pro-
de inducir la producción de radicales de oxígeno en mueve trastornos colónicos, tal como se ha demostrado
biopsias de esófago Barrett en humanos. por estudios experimentales en animales donde se ha
Esto también se ha visto en el carcinoma escamoso inducido esta acción químicamente. Que teniendo en
del esófago, aún más cuando hay déficit de cinc. Estos cuenta el modelo (véase capítulo 130: Pólipos colónicos
hallazgos sugieren que los ácidos biliares inducen al y síndrome de poliposis), que explica como los ácidos
daño del ADN, por lo que también incrementa la fre- biliares dañan la célula y esta se transforma en malig-
cuencia de mutación al dañar la replicación del ADN na, constituye el fundamento para dar explicación a la
dañado. También induce la apoptosis en las células existencia de muchas de las lesiones observadas en la
esofágicas la retardan (denominado criterio de selección mucosa colónica en un operado de vesícula.
de resistencia de apoptosis celular).
En tejido de pacientes con esófago normal, con eso-
Tratamiento
fagitis, esófago Barrett y adenocarcinoma, se estudió la
apoptosis y se encontró que esta estaba inhibida desde El tratamiento debe ser condicionado por el diagnós-
la primera etapa de la secuencia displasia-carcinoma, tico específico y debe ser llevado a cabo lo más pronto
existe una sobreexpresión de las proteínas anti-apop- posible y de acuerdo con la severidad de los síntomas.
tótica, por ejemplo interleucina-6, lo que favorece a la Si el diagnóstico no queda claro, el paciente debe ser
mutagenesis de las células. tratado en forma conservadora y en ocasiones el apoyo
En resumen, las evidencias indican que las células siquiátrico es imprescindible.
y el tejido esofágico, expuestos por periodos cortos Se debe tratar la esofagitis y la gastritis alcalina, por
con los ácidos biliares inducen la producción de radi- reflujo duodeno gástrico con fármacos procinéticos,
cales de oxígeno, daño oxidativo del ADN, mutación citoprotectores y celulosa microcristalina.
y apoptosis. Sin embargo, la exposición por periodos La cirugía debe ser considerada como un último
prolongados hacen que los ácido biliares este impli- recurso, está indicada cuando existe una causa iden-
cados en el desarrollo de resistencia de la apoptosis y tificable de síndrome poscolecistectomía como, por
eventualmente desarrollan adenocarcinoma. ejemplo, litiasis residual, tumor y estenosis postrau-
Un mecanismo similar al del esófago explica la pro- mática que responden bien a la cirugía. La cirugía
ducción de radicales de oxígeno y de nitrógeno por la exploratoria es un último recurso en el paciente sin
acción de los ácidos biliares en el estómago, e intestino un diagnóstico y cuya condición resulta refractaria al
delgado, donde los tumores son menos frecuentes, en la tratamiento médico.
ampolla de Váter, en el hígado, vías biliares, páncreas
y colon.
Prevención y pronóstico
Varios estudios realizados en diferentes partes del
mundo reportan que los pacientes colecistectomizados El síndrome poscolecistectomía puede ser prevenido
son considerados un grupo de alto riesgo para el cáncer reduciendo los factores de riesgo tales como:
de colon. Se proponen diversas teorías sobre bases – No tener un diagnóstico certero antes de extirpar la
científicas, históricas y epidemiológicas que tratan de vesícula.
explicar como un paciente con antecedente de ser cole- – Haber eliminado de forma urgente la vesícula biliar.
cistectomizado puede desarrollar lesiones en la mucosa – Haber presentado largo tiempo presentando sínto-
del colon y algunas de estas evolucionar hacia el cáncer mas antes de extirparle la vesícula biliar.
de colon. Existen evidencias cada vez más numerosas – Los pacientes más jóvenes en general presentan un
de una relación entre los trastornos del metabolismo mayor riesgo de desarrollar síndrome poscolecis-
de los ácidos biliares y el carcinoma colorrectal como tectomía.
ocurre en los pacientes con colelitiasis, pues en estos – Las mujeres tienen un mayor riesgo de desarrollar
pacientes se observa una mayor proporción de ácidos bi- síndrome poscolecistectomía que los hombres.
liares secundarios en la luz del colon, y a su vez, mayor – La salud mental alterada también constituye un
absorción colónica de estos. De manera similar ocurre factor de riesgo.
en los pacientes colecistectomizados que por diversas – En los pacientes mayores de 70 años no se encontró
causas presentan y mantienen la alteración del metabo- tendencia a desarrollar síndrome poscolecistecto-
lismo de los ácidos biliares y, por tanto, se incrementa mía.
Capítulo 181. Síndrome poscolecistectomía 95

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Capítulo 182
Colecistitis alitiásica
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla
Dr. C. Julian Francisco Ruiz Torres

Colecistitis alitiásica Menos frecuente, la colecistitis puede ocurrir en


ausencia de trauma, en los pacientes ancianos puede
La colecistitis aguda alitiásica es un síndrome coexistir con enfermedades vasculares, en los recep-
clínico caracterizado por una inflamación severa de la tores de trasplantes de médula ósea, en pacientes que
pared vesicular, en ausencia de cálculos. Suele estar reciben drogas citotóxicas por vía de la arteria hepática,
asociada a un mal vaciamiento de la vesícula biliar, y en aquellos con el síndrome de la inmunodeficiencia
como sucede en la inanición, la nutrición parenteral, adquirido. En un 50 % de los pacientes con colecistitis
la cirugía mayor y los traumatismos. También puede alitiásica pueden demostrarse gérmenes en la bilis o en
aparecer en relación con vasculitis sistémicas como la la pared vesicular, pero ello se considera una infección
panarteritis nodosa o el lupus eritematoso sistémico, secundaria. En algunos casos, pueden identificarse
o en asociación con infecciones virales, parasitarias causas infecciosas específicas, como Salmonella,
y bacterianas en pacientes inmunodeprimidos, pero Staphylococcus aureus, citomegalovirus en pacientes
también en inmunocompetentes. inmunodeprimidos, y virus de Epstein-Barr en niños.
Fue reportada por primera vez por Duncan en 1844 En las vasculitis sistémicas como la poliarteritis nodosa
en un caso fatal, como complicación en un paciente y el lupus eritematoso sistémico pueden presentarse por
con una hernia encarcelada. Es causa de 5 % a 10 % de la lesión isquémica en la vesícula. La colecistitis aguda
todos los casos de colecistitis aguda aproximadamente alitiásica, por otra parte, se está reconociendo cada vez
y está asociada con la morbilidad más seria y una tasa más en personas saludables sin factores de riesgo.
de mortalidad superior (10 % a 50 %) que la originada
por colecistitis calculosa (1 %). El hallazgo usual en Fisiopatología
los estudios de imagen es una vesícula sin cálculos,
La fisiopatología de las colecistitis alitiásicas es
distendida, de paredes gruesas (mayor que 3 mm a 4 aún más oscura, pero probablemente es multifactorial.
mm) con o sin signos de pericolecistitis. Se piensa que la causa principal de esta enfermedad es
Representa 47 % de todas las colecistitis en el po- debido a la estasis de la bilis y a su litogenicidad. El
soperatorio y ocurre en pacientes críticos, con una alta epitelio de la vesícula, aunque normalmente un tejido
mortalidad. robusto, es continuamente expuesto a uno de los agentes
más nocivos del cuerpo: una solución concentrada de
Etiología ácidos biliares detergentes. Durante un día normal, la
Se observa con mayor frecuencia en pacientes gra- vesícula vacía la bilis concentrada varias veces y se
vemente enfermos, pacientes ventilados, con sepsis, llena con bilis hepática diluida y probablemente menos
en quemados graves, politraumatizados complejos, nociva. Con el ayuno prolongado, la vesícula no se
pacientes con nutrición parenteral total prolongada, y estimula por la colecistoquinina para vaciarse y la bilis
en la infección del virus de inmunodeficiencia humana. concentrada se almacena en el lumen de la vesícula.
Además, la colecistitis alitiásica está asociada con una Además, el epitelio de la vesícula tiene relativamente
incidencia mayor de gangrena y perforación comparada altos requerimientos metabólicos de energía en el or-
a la litiásica. den de absorber los electrolitos y agua de la bilis. En
98 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

pacientes inmóviles, ayunando con vasoconstricción de náuseas y vómitos. La palpación manual durante la
esplácnica (resultado frecuente del choque séptico en inspiración profunda provoca dolor y cese inspiratorio
un paciente en la unidad de cuidado intensiva), puede (signo de Murphy). También suele haber fiebre que con
ocurrir la lesión isquémica y química al epitelio de la frecuencia no supera los 39 oC.
vesícula. En los pacientes críticos, sedados, obnubilados o en
Un estudio que comparó la microcirculación de coma, ingresados en unidades de cuidados intensivos,
vesículas extirpadas por litiasis biliar o colecistitis ali- puede ser difícil la identificación del cuadro clínico
tiásica aguda mostró los escasos llenados capilares en la típico. Esto contribuye a retrasar el diagnóstico y a
colecistitis alitiásica, indicando esto que un trastorno de elevar la mortalidad de estos pacientes (30 % a 50 %).
la microcirculación desempeña una función importante Por esta dificultad se debe sospechar la existencia de
en su patogénesis. una colecistitis aguda cuando en un paciente con esas
Los pacientes extremamente enfermos son los características se encuentre fiebre de etiología desco-
más predispuestos, debido a la viscosidad de la bilis nocida, sepsis o alteraciones analíticas hepatobiliares
aumentada producida por la fiebre y deshidratación y que la sugieran.
a la ausencia prolongada de alimento oral que provoca El examen físico puede revelar fiebre y dolor en el
una disminución o ausencia de la secreción de colecis- cuadrante superior derecho con o sin signos de irrita-
toquinina. La isquemia de la pared vesicular que ocurre ción peritoneal.
debido a una disminución del flujo debido a la fiebre,
deshidratación o deficiencia cardiaca también puede Exámenes complementarios
desempeñar una función en la patogénesis de esta. La leucocitosis evidencia signos de infección.
La isquemia originada durante los periodos hipo- En los hemocultivos los microorganismos que más
tensivos puede condicionar algunos casos, en especial comúnmente se descubren son: Escherichia coli, Kleb-
en ancianos. En los politraumatizados, así como en siella pneumoniae, Enterococo faecalis y Enterobacter
los sometidos a cirugía muy agresiva y en los trata- spp. En los casos más graves pueden encontrarse también
dos con fármacos inotropos por hipotensión arterial, anaerobios, tales como el Clostridium perfringens, Bac-
el aumento del tono vascular puede desempeñar una teroides fragilis o pseudomonas. La Salmonela typhi se
función patogénica. En algunos casos se ha atribuido descubre en ancianos, diabéticos y portadores de litiasis
a una hipersensibilidad a los antibióticos, en otros a la biliar. En la colecistitis enfisematosa los gérmenes impli-
estasis biliar determinada por el ayuno prolongado, la cados son los Clostridium spp (45 %) y, eventualmente,
alimentación parenteral, el aumento de la viscosidad estreptococos anaerobios y Escherichia coli (33 %).
biliar (transfusiones masivas, deshidratación) o el Puede existir aumento de amino transferasas, fos-
espasmo del esfínter de Oddi (analgésicos opiáceos). fatasa alcalina y amilasa, aunque en concentraciones
También en estos casos se supone que la litogenici- moderadas. La ictericia está presente en 20 % de los
dad de la bilis desempeña una función importante. La pacientes, con concentraciones de bilirrubina habi-
infección bacteriana es, en general, secundaria, pero, tualmente menores que 4 mg/dL. Cifras más elevadas
cuando ocurre, favorece la formación de una colecistitis sugieren la presencia de otras complicaciones, princi-
gangrenosa (50 %) o enfisematosa. palmente coledocolitiasis.
Los resultados de cultivo de bilis son negativos en
Diagnóstico clínico casi 50 % de pacientes en esta, probablemente debido
La colecistitis alitiásica tiene un predominio ligero a la terapia antibiótica coexistente en estos pacientes.
en el sexo masculino, diferente a la calculosa que tiene La radiología simple de abdomen puede ser de gran
un predominio al sexo femenino. Puede ocurrir a cual- ayuda para descartar otras causas de dolor abdominal
quier edad, pero se reporta con una mayor frecuencia agudo (perforación de vísceras huecas u obstrucción
después de la cuarta década y en personas ancianas. intestinal) o de complicaciones de la colecistitis agu-
Su cuadro clínico es de valor limitado. A menudo, da alitiásica (aire en la pared vesicular o en las vías
muchos pacientes están muy enfermos (posiblemente biliares).
con ventilación mecánica) y no puede comunicar los El estudio de imágenes (ultrasonido abdominal y
síntomas. tomografía axial computarizada) muestran en los estu-
El principal síntoma es el dolor abdominal agudo dios una vesícula sin cálculos, distendida, de paredes
que se localiza en el cuadrante superior derecho, con gruesas (mayor que 3 mm a 4 mm) con o sin signos de
hipersensibilidad de la zona y que suele acompañarse pericolecistitis.
Capítulo 182. Colecistitis alitiásica 99

Los signos ecográficos de la colecistitis alitiásica la formación de abscesos, la perforación de la vesícula


(Fig. 182.1): biliar o el colédoco o una pancreatitis.
– Engrosamiento de la pared: expresado por aumento La tomografía axial computarizada helicoidal y
de su espesor (mayor que 4 mm) y por la presencia la colangiografía con resonancia magnética pueden
de banda intermedia, continua o focal e hiperecogé- resultar útiles como una forma no invasiva de excluir
nica, es más específico si aparece en la cara anterior. cálculos coledocianos.
– Dilatación vesicular: mayor que 5 cm. Se presenta un resumen de los criterios diagnósticos
– Colección tabicada perivesicular. (clínico y de laboratorio) para la colecitistis alitiásica
– Ecos intravesiculares sin sombra por pus, fibrina o aguda:
mucosa desprendida. – Examen clínico:
– Membranas intraluminales por destrucción de la • Dolor en hipocondrio derecho es útil si está
mucosa. presente, pero no se observa en la tercera parte
– Gas intramural en forma de áreas muy reflexógenas de los casos.
con sombra posterior. • Fiebre inexplicable, leucocitosis o hiperamila-
– Ausencia de cálculos. semia es frecuentemente el único hallazgo.
– Dolor selectivo a la presión sobre la vesícula (signo – Ultrasonografía:
de Murphy ecográfico). • Engrosamiento de la pared vesicular (mayor que
4 mm) en ausencia de ascitis e hipoalbuminemia.
• Presencia de signo de Murphy ultrasonográfico
(dolor al colocar el transductor en el sitio de
localización de la vesícula.
• Colección de líquido perivesicular.
– Tomografía axial computarizada:
• Engrosamiento de la pared vesicular (mayor que
4 mm) en ausencia de ascitis e hipoalbuminemia.
• Presencia de líquido perivesicular, edema sub-
seroso (en ausencia de ascitis) presencia de gas
intramural o desprendimiento de la mucosa.
• El mejor examen para excluir otras afecciones
abdominales, pero requiere movilizar al paciente.
– Gammagrafía hepática:
• No visualización de la vesícula con la excreción
normal de radionucleótido en el conducto de
biliar y el duodeno indica un resultado positivo
para la colecistitis aguda.
• Los resultados en los pacientes extremamente
enfermos, inmovilizados pueden dar falsos po-
Fig. 182.1. Signos ecográficos de la colecistitis alitiásica. sitivos debido a la bilis viscosa.
Pared engrosada (flechas). • Prueba de morfina positivo.

La tríada: litiasis, Murphy ecográfico y edema de Diagnóstico diferencial


la pared vesicular, es un signo muy sugerente de co-
lecistitis aguda alitiásica (valor predictivo positivo de El cuadro clínico descrito debe sugerir la existencia
más de 90 %). El líquido perivesicular, las membranas de una colecistitis aguda alitiásica, pero se debe dife-
intraluminales y el engrosamiento irregular de las renciar del causado por úlceras pépticas perforadas,
paredes con halo hiperecogénico en su espesor deben apendicitis aguda, obstrucción intestinal, pancreatitis
sugerir la existencia de gangrena vesicular. El hallazgo agudas, cólico renal o biliar, colangitis aguda bacteria-
de sombras mal definidas que proceden de la pared vesi- na, pielonefritis, hepatitis aguda, hígado congestivo, an-
cular sugiere el diagnóstico de colecistits enfisematosa. gina de pecho, infarto de miocardio, rotura de aneurisma
La tomografía axial computarizada es una prueba aórtico, tumores o abscesos hepáticos, herpes zóster y
excelente para la detección de complicaciones como síndrome de Fitz-Hugh-Curtis, entre otras.
100 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Complicaciones o como rescate administrar meperidina parenteral,


75 mg a 100 mg cada 3 h.
La necrosis, la perforación, la gangrena de la vesí-
– Administrar sueros salinos guiados por el grado de
cula y formación de absceso perivesicular se reportan
deshidratación y el ionograma. Esta medida es es-
como las complicaciones más frecuentes y mortales
que en la colesistitis litiásica. pecialmente importante en pacientes con colecistitis
El aumento de presión dentro de la vesícula dificulta complicadas, insuficiencia prerrenal o inestabilidad
el flujo de sangre a través de sus paredes, lo que provoca hemodinámica.
su necrosis (gangrena vesicular) y perforación (10 %). – Se aconseja el empleo de antibióticos desde el
Como consecuencias de esto último se puede generar: primer momento, antes de la confirmación del
– Peritonitis local o generalizada (irritación difusa diagnóstico, ya que está demostrado que disminuye
peritoneal, taquicardia y taquipnea, hipotensión, las complicaciones supurativas (empiema vesicular
choque y distensión abdominal. y colangitis ascendente) y las infecciosas posqui-
– Absceso local. rúrgicas. A pesar de la alta frecuencia de las infec-
– Fístula colecistoentérica (0, 1 % a 0, 2 %), la forma- ciones de las vías biliares, existen pocos estudios
ción de esta última suele seguirse del cese de toda prospectivos controlados que permitan recomendar
sintomatología, por lo que su hallazgo puede ser unas pautas concretas de antibióticos. La elección
casual por la presencia de aire en las vías biliares o del antibiótico se suele basar en la gravedad del
el paso a estas de contraste radiológico, en ocasio- cuadro clínico, las características de los pacientes
nes pueden originar episodios de colangitis aguda y la flora bacteriana que más comúnmente se halla
(fístulas biliocolónicas) o malabsorción intestinal o en cada situación.
diarrea. La infección bacteriana parece desempeñar Si el cuadro clínico no es especialmente grave, el
una función secundaria, ya que en el momento de la paciente se encuentra estable, no es un anciano ni
cirugía se logran cultivos positivos solo en 50 % a diabético ni padece alguna otra enfermedad debi-
70 % de los casos. A pesar de esto, la sobreinfección litante, se deben administrar antibióticos activos
puede condicionar la formación de un empiema frente al Escherichia Coli, Klebsiella pneumoniae,
vesicular (2, 5 %), en especial en los ancianos y en Enterobacter y Enterococcus spp. Son varias las
los diabéticos (suele haber dolor, aunque la fiebre opciones posibles:
o la masa abdominal solo se hallan en la mitad de – Cefalosporinas de tercera generación:
los casos. En casos raros, preferentemente también • Cefotaxime a dosis de 1 g a 2 g cada 8 h por vía
ancianos y diabéticos, se originan colecistitis enfi- endovenosa lenta disuelta en 100 mL de suero
sematosas. salino a lo largo de 50 min a 60 min.
• Ceftriaxone vía intramuscular o endovenosa, en
Tratamiento dosis única diaria de 1 g a 2 g.
El objetivo principal es administrar antibióticos de Estas cefalosporinas son activas frente a grampo-
amplio espectro para gérmenes patógenos entéricos sitivos y gramnegativos, pero poco frente a los
y biliares. El paciente con diagnóstico de colecistitis anaerobios y Entorococus fecalis.
aguda alitiásica debe ingresar en la sala de cirugía y, – Amoxicilinaclavulámico: dosis de 1 g a 2 g, vía
previa valoración del estado general: endovenosa cada 8 h.
– Indicar dieta absoluta y control de constantes y – Piperacilina-tazobactan: dosis de 4, 5 g, vía endo-
diuresis. venosa cada 8 h. Es activa frente a la mayoría de
– Cateterizar vía venosa periférica para fluidoterapia los gérmenes que habitualmente se encuentran en
endovenoso y extracción sanguínea para hemogra- las colecistitis agudas no complicadas. Es la opción
ma, gasometría, ionograma, bilirrubina, amilasa, más empleada en la actualidad.
amino transferasas y fosfatasa alcalina, hemoculti- – Cuando existe hipersensibilidad a betaláctamicos,
vos y sistemático de orina. los antibióticos mencionados se pueden sustituir por
– Colocar sonda nasogástrica que evite el estímulo quinolonas de segunda generación (ciprofloxacina
de la contracción vesicular, el íleo paralítico y la 200 mg a 400 mg cada 12 h por vía endovenosa)
dilatación gástrica. u ofloxacino (200 mg a 400 mg cada 12 h por vía
– Controlar el dolor con analgésicos como el meta- endovenosa), en caso de insuficiencia renal, las dosis
mizol a dosis de 2 g cada 8 h por vía endovenosa, deben ser disminuidas y adaptadas. Estudios con-
Capítulo 182. Colecistitis alitiásica 101

trolados han demostrado que las quinolonas tienen al riesgo alto de deterioro rápido o perforación de la
la misma eficacia curativa que la combinación de vesícula.
ceftazidima (1 g cada 12 h) con ampicilina (0, 5 g En los pacientes con colecistitis quirúrgicos de alto
cada 6 h) y metronidazol (0, 5 g cada 8 h). riesgo, la esfinterotomía endoscópica de la papila por
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica y colo-
Cuando el cuadro clínico es grave: fiebre mayor cación de endoprótesis en la vía biliar se ha informado
que 38,5 oC, ictericia, signos de peritonitis, leucocitosis como un tratamiento paliativo eficaz.
mayor que 14000/mL, bilirrubina mayor que 3 mg/dL, Establecido el diagnostico de colecistitis aguda
amilasa mayor que 500 U/mL, inestabilidad hemodi- alitiásica, está indicada la colecistectomia, si bien se
námica, líquido peritoneal, gas en su vesícula o en su debe decidir el momento y la forma.
pared y dilatación de las vías biliares, además, se trata
Colecistectomía de urgencia
de un anciano, diabético o existe alguna otra enferme-
dad debilitante, lo más probable es que la flora biliar Debe ser realizada tan pronto como lo permita la
sea mixta y que en esta participen microorganismos situación hemodinámica del paciente.
anaerobios, incluyendo el Clostridium perfringens, Los criterios que indican esta actitud son:
Pseudomonas aeruginosa y el Bacteroide fragilis. En – Clínicos y analíticos:
estos casos, las combinaciones de antibióticos antes • Evidencia de peritonitis generalizada o de em-
mencionadas pueden no ser suficientes. En estos casos piema.
existen también varias opciones: • Estado tóxico.
– Piperacilina-tazobactan: dosis de 4, 5 g cada 6 h por • Aumento del dolor.
vía endovenosa y aminoglucósido (gentamicina 3 • Fiebre superior a 39 oC.
mg/kg/día a 5 mg/kg/día). • Leucocitosis de 20 000/mL o mayor.
– Imipenem-cilastatina: dosis de 0, 5 g 1 g cada 6 h • Aparición de masa abdominal.
por vía endovenosa. • Tensión sistólica menor de 90 mm Hg.
– En caso de hipersensibilidad a los betaláctamicos, • Obstrucción intestinal.
se recomienda emplear quinolonas (ciprofloxacino • Ictericia.
u ofloxacion 400 mg cada 12 h por vía endovenosa) – Ecográficos:
asociadas con metronidazol (1 g cada 12 h por vía • Líquido perivesicular.
endovenosa) y, eventualmente, con gentamicina • Gas en pared o luz vesicular.
(3 mg/kg a 5 mg/kg cada 8 h). • Edema de pared vesicular.
• Líquido libre abdominal.
Estos tratamientos antibióticos se deben mantener
tras la cirugía durante otros dos a siete días, guiados Cuando está indicado el tratamiento de urgencia,
por la evolución de los parámetros clínicos (fiebre y pero se considera que el riesgo quirúrgico de la colecis-
leucocitosis). tectomía es muy elevado, se debe valorar la posibilidad
Aproximadamente 70 % a 75 % de los pacientes de realizar una colecistectomía abierta o percutánea
responden a este tratamiento a lo largo de las primeras bajo anestesia local o un drenaje transparietohepático
24 h a 48 h. Sin embargo, este tratamiento no elimina de la vesícula dirigido por ecografía/tomografía axial
la causa de la enfermedad ni interrumpe los mecanis- computarizada.
mos que provocan las complicaciones ni evita que la Colecistectomía antes de las 72 h
enfermedad se reactive de forma recurrente. Por esta
Si en el paciente no se hallan criterios de urgencia,
razón, el tratamiento definitivo de este proceso requiere
se debe proseguir con el tratamiento médico general,
la cirugía o de otras medidas invasivas.
concluir los estudios iniciados y realizar la colecistec-
Tratamiento quirúrgico tomía antes de las 72 h del comienzo del cuadro clínico.
La colecistectomía realizada en ese tiempo reduce la
Para los candidatos quirúrgicos, realizar la cole-
estancia hospitalaria y las recidivas y facilita la disec-
cistectomía abierta o laparoscópica. Para pacientes
ción de las vías biliares.
que no son candidatos quirúrgicos, puede realizarse
colecistostomía percutánea. Colecistectomía a las seis a ocho semanas
Cuando el diagnóstico de colecistitis alitiásica se Si cuando se atiende al paciente por primera vez
establece, la intervención inmediata se indica debido o se llega al diagnóstico han transcurrido más de 72
102 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

h, entonces se debe proseguir el tratamiento médico con gangrena. Por esto, si no existen evidencias de litia-
iniciado y esperar la inactivación del proceso (“enfria- sis, se recomienda la colecistectomía percutánea. Si hay
miento”). Pasadas esas primeras 72 h, la extensión de evidencias de litiasis, se debe indicar la colecistectomía
la inflamación dificulta la disección de las vías biliares antes de las 24 h, colangiografía peroperatoria y, si es
y aumentan las complicaciones quirúrgicas. Si la evo- necesario, la exploración de las vías biliares.
lución es favorable el paciente puede ser dado de alta
Ancianos
y la colecistectomía se realiza sexis a ocho semanas
más tarde. Si la evolución del paciente no es favorable En estos pacientes las colecistitis agudas tienen
(reaparece el dolor, fiebre, leucocitosis y toxicidad mayor riesgo debido a las enfermedades asociadas, a
sistémica) se indica la colecistectomía de urgencia sin la tendencia a las complicaciones (empiema, gangrena
esperar a que pasen las seis semanas. y perforación) y al retraso en el diagnóstico. Por lo que
está indicado el tratamiento antibiótico combinado
Tipos de colecistectomías:
(piperacilina-tazobactan y aminoglucósido) profilaxis
– Colecistectomía abierta: con toma de bilis para cul- tromboembólica y colecistectomía temprana. Si la
tivo y colecistografía sistemática, excepto cuando la situación del paciente es muy grave, está justificada la
situación del paciente sea muy grave. Mantener los colecistectomía o eventualmente otras intervenciones
antibióticos entre dos y siete días, con adaptación menos agresivas (colecistectomía parcial, minicole-
de los resultados bacteriológicos del antibiograma. cistectomía).
– Colecistectomia laparoscópica: con toma de muestra
de bilis y colangiografía laparoscópica, con extrac- Colecistitis alitiásica
ción vía endoscópica retrógrada de los cálculos La mortalidad asociada a esta forma de colecistitis
coledocianos que hubiere y si fueran de gran tamaño oscila entre 30% y 70 %, debido a la edad de los pacien-
empleando el coledoscopio flexible o convirtiendo tes, las enfermedades asociadas, las complicaciones que
la técnica en abierta, otras causas de conversión en origina y al retraso en el diagnóstico. La colecistectomía
colecistectomia abierta serían: múltiples adheren- precoz es el tratamiento de elección, ya que reduce la
cias, perforación vesicular, rotura de la arteria cística mortalidad de los pacientes 5 % a 10 %. En los últimos
o conductos biliares, no visualización de la unión años se han publicado éxitos similares con la colecis-
cístico-hepático común, cirugía previa en hemiab- tectomía percutánea, pero se necesita más experiencia
domen superior o más de 72 h de evolución. Se ha para conocer su eficacia real. En estos casos puede no
convertido en la actualidad en la técnica de elección, ser necesaria la colecistectomía.
sin embargo, para su realización se requiere la dispo-
nibilidad de un cirujano con experiencia demostrada Empiema
en colecistectomía laparoscópica y capacitado para Es una indicación de colecistectomía de urgencia,
convertirla en abierta si fuera preciso. pero se han comunicado buenos resultados con la cole-
– Otras técnicas: cistostomía percutánea y con la colocación de prótesis
• Colecistostomia abierta o percutánea, en pacien- en el cístico por vía endoscópica peroral transpapilar.
tes con elevado riesgo quirúrgico o cuando en También, en este último caso, la experiencia es muy
el curso de la colecistectomía, la disección de la limitada.
vesícula es difícil y es alto el riesgo de lesionar
Gangrena
las vías biliares.
• Otras técnicas publicadas, pero con recomenda- La única opción terapéutica es la colecistectomía
ciones e indicaciones muy poco experimentadas, total o parcial de urgencia.
serían: prótesis y drenaje del cístico por vía Colecistitis enfisematosa
endoscópica transpapilar, colecistostomia lapa-
roscópica, minicolecistectomía y colecistectomía Requiere la resucitación enérgica mediante sueros
parcial. hidrosalinos intravenosos y la colecistectomía de ur-
gencia.
Tratamiento en situaciones especiales
Perforación
Niños Está indicada la laparotomía urgente con colecis-
Su presentación a esta edad es rara. En más de 30 % tectomía y limpieza peritoneal, previa resucitación
de los casos son alitiásicas y es raro que se compliquen enérgica.
Capítulo 182. Colecistitis alitiásica 103

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Capítulo 183
Colangitis esclerosante primaria
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Es una enfermedad hepática colestásica crónica, Se señala que 70 % de los pacientes son varones,
idiopática, de causa desconocida, caracterizada por una la edad media al diagnóstico es de 30 a 40 años. Entre
inflamación y fibrosis de las vías biliares intrahepáticas 62 % a 83 % de los pacientes tienen diagnóstico de
y extrahepáticas que provoca constricciones y ectasia enfermedad inflamatoria intestinal, de estos entre 80
generalizadas del tracto biliar. De evolución clínica % a 90 % presentan colitis ulcerosa. La colitis ulcerosa
muy variable, en la mayoría de los pacientes causa habitualmente es extensa, con actividad leve, puede no
una obliteración irregular de los conductos y progresa comprometer el recto y tiene un riesgo incrementado
hasta originar una cirrosis biliar, hipertensión portal e de cáncer de colon. Los familiares de pacientes con
insuficiencia hepática. colangitis esclerosante primaria tienen un riesgo in-
Frecuentemente se asocia a una enfermedad infla- crementado de padecer la enfermedad de nueve a 40
matoria intestinal, especialmente a la colitis ulcerosa, veces mayor y de colitis ulcerosa de ocho veces, en re-
enfermedades fibrosantes sistémicas o enfermedades lación a la población general. Se reporta que de 3,3 % a
de patogenia autoinmune como el lupus eritematoso 36,4 % desarrolla un colangiocarcinoma. La mitad de
sistémico o la artritis reumatoide. estos se presentan dentro del primer año del diagnós-
El término primario se utiliza para distinguirlo de tico de colangitis esclerosante primaria y tienen riesgo
otras enfermedades que también ocasionan alteraciones aumentado de cáncer de vesícula y de colon.
colangiográficas similares, como la colangitis bacteria- La colangitis esclerosante primaria es una de las
na crónica en pacientes con estenosis de las vías biliares enfermedades colestásicas más frecuente del adulto
o coledocolitiasis, las lesiones isquémicas de las vías y es diagnosticada cada vez con mayor frecuencia en
biliares provocadas por agentes como formol, alcohol niños y adolecentes.
o fluoxuridina, la colangiopatía infecciosa asociada al
sida, la cirugía previa de las vías biliares, así como las Clasificación
neoplasias del tracto biliar.
– Colangitis esclerosante primaria “clásica”: caracte-
rizada por estenosis multifocales, cortas y anulares,
Epidemiología
alternadas con vía biliar normal. Puede afectar
La tendencia global de incidencia de colangitis cualquier sector del árbol biliar, incluyendo la vesí-
esclerosante primaria es limitada debido a una falta cula. La distribución no es uniforme y puede existir
de datos epidemiológicos de los países en desarrollo. afectación de vía biliar intrahepática y extrahepática
Un estudio poblacional ha establecido una incidencia (menor que 25 % afectación vía biliar intrahepática
de 0,9 casos por 100 000 personas/año y una preva- solamente).
lencia de 13,6 casos por 100 000 habitantes, con tasas – Colangitis esclerosante de pequeños conductos: es
de incidencia y prevalencia superiores en varones. una forma exclusivamente intrahepática de la enfer-
Una metaanálisis más reciente que comprende ocho medad, que representa aproximadamente 5 % de los
estudios, estiman la incidencia de colangitis esclero- casos y que se define como colangitis esclerosante de
sante primaria en América del Norte y Europa de 0,77 pequeños conductos. En estos pacientes únicamente
(rango de 0,45 a 1,09) por 100 000 personas por año, hay cambios histológicos de la enfermedad y la
los que se están incrementando con el tiempo. colangiografía retrógrada o la colangiorresonancia
Capítulo 183. Colangitis esclerosante primaria 105

no muestran las lesiones típicas en las vías biliares para esta situación en la que predominan cambios
intrahepáticas y extrahepáticas. Tiene una evolución de hepatitis autoinmune, conocida como colangitis
más benigna, los pacientes raramente desarrollan esclerosante autoinmunitaria. La colangitis escle-
un colangiocarcinoma y únicamente una mínima rosante primaria puede aparecer en pacientes que
proporción progresa a colangitis de grandes con- han presentado una hepatitis autoinmune previa y
ductos. Esta variante tiene respuesta al tratamiento en este caso, el síndrome no se corresponde con un
con corticoides. solapamiento de ambas enfermedades, sino que son
– Colangitis esclerosante infantil: en los niños y dos procesos secuenciales.
adolescentes la enfermedad suele presentarse con
sintomatología inespecífica, como astenia, anorexia Etiología
y pérdida de peso. El prurito y la ictericia son menos
frecuentes que en los adultos. Los rasgos clínicos La causa de la enfermedad es desconocida.
más frecuentes, además del aumento de las enzimas
de colestasis, son la presencia de una hepatomegalia Patogenia
o una esplenomegalia. La bioquímica tiene cambios
mixtos de inflamación y colestasis y en muchas Se han propuesto diferentes mecanismos:
ocasiones, remeda una hepatitis autoinmune, por lo 1. Autoinmunitaria:
a) Alteraciones de la inmunidad humoral con pre-
que el diagnóstico solo puede establecerse mediante
sencia en el suero de niveles elevados de inmu-
colangiografía.
noglobulinas IgG e IgM, así como la presencia de
– Colangitis asociada a aumento de IgG4: es una en-
autoanticuerpos antinucleares, antimúsculo liso y
fermedad biliar de etiología desconocida, descrita
especialmente los anticuerpos anticitoplasma de
recientemente, que tiene características bioquímicas
los neutrófilos. También se ha descrito un infil-
y colangiografía indistinguibles de la colangitis
trado inflamatorio por linfocitos T con aumento
esclerosante primaria. Se caracteriza por existir una
de la expresión del factor de necrosis tumoral
sobre expresión de linfocitos T cooperadores y T
alfa (factor de necrosis tumoral alfa) y cambios
reguladores. Hay un aumento sérico de IgG4 y un
en los colangiocitos que expresan interleuquinas
infiltrado de células plasmáticas IgG4 positivas en
proinflamatorias y profibrogénicas y moléculas
los conductos biliares y el tejido hepático. Predo- de adherencia, así como la expresión aberrante
mina en varones y la edad media de diagnóstico es de antígenos de histocompatibilidad de clase II.
de 60 años. Frecuentemente afecta las vías biliares b) Mayor frecuencia de HLA B8, DR3 (HLA-
extrahepáticas, responde al tratamiento antiinflama- DRB1*0301) y DRW52a al igual que lo que
torio, suele asociarse a pancreatitis autoinmunitaria ocurre en otras enfermedades autoinmunitarias.
y otras enfermedades fibrosantes. El tratamiento de c) Asociación con el HLA-DR6, que la presencia
elección se basa en la administración de corticoides. de HLA-DR4 tiene un efecto protector.
Se puede asociar azatioprina (hasta 2 mg/kg/día) en d) Heterocigosidad de DR3 y DR2 se asocia a un
los casos con estenosis proximal e intrahepática y peor pronóstico de la enfermedad.
tras una recaída durante y después del tratamiento e) La susceptibilidad genética puede estar determi-
con corticoides. nada por polimorfismos del factor de necrosis
– Síndrome de solapamiento (overlap) colangitis es- tumoral alfa, lo que implica una mayor suscep-
clerosante primaria/hepatitis autoinmunitaria: esta tibilidad para la enfermedad, pero relacionado
combinación se reporta en hasta 6 % de los pacientes con el haplotipo B8-DR3.
con hepatitis autoinmune. Tiene especial interés este f) Polimorfismos del alelo MICA, con resultados
solapamiento en la infancia, ya que se ha descrito variables en relación con mayor susceptibilidad
que hasta 30 % de los pacientes pediátricos con o protección para el desarrollo de colangitis
colangitis esclerosante primaria tiene rasgos histo- esclerosante primaria y del promotor de la es-
lógicos de esta y la enfermedad se manifiesta con tromelisina se ha asociado a mayor gravedad de
una importante hipergammaglobulinemia. Su diag- la enfermedad y quizá a fibrosis, así como a una
nóstico se basa en criterios clínicos e histológicos, cierta protección del polimorfismo de la molécula
apoyados por los cambios en la colangiorresonancia de adhesión intercelular.
o en la colangiopancreatografía retrógrada endoscó- La patogenia autoinmunitaria se cuestiona por la
pica. Se ha propuesto una denominación específica ausencia de algunas características:
106 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

– Mayor prevalencia de colangitis esclerosante ha propuesto, quizá generada en mayor magnitud


primaria en varones, al contrario de lo que por la enfermedad inflamatoria intestinal.
ocurre en las enfermedades consideradas de 3. Lesión isquémica de los conductos biliares: se
patogenia autoinmunitaria. sustenta en la observación de lesiones idénticas en
– Falta de respuesta terapéutica de la enferme- pacientes con traumatismos hepáticos con dismi-
dad a fármacos inmunomoduladores. nución del flujo arterial hepático, en pacientes tras-
– Ausencia de autoanticuerpos específicos, plantados y en pacientes con infusión intraarterial
generalmente asociada con múltiples anti- de fluoxiuridina o alcohol.
cuerpos no órgano-específicos que incluyen 4. Hipótesis de una mutación genética: basada en
autoanticuerpos antinucleares, antimúsculo reportes que señalan la observación de ratones
liso, anticardiolipina, antineutrófilo cito- deficientes en el transportador hepatobiliar Mdr2
plasmático, anticuerpos antitiroperoxidasa y (que se corresponde con el transportador MDR3
factor reumatoideo. humano) desarrollan espontáneamente una colan-
2. Agentes infecciosos: gitis esclerosante.
a) La inflamación crónica del colon puede favorecer Vierling ha propuesto una hipótesis que engloba
el paso de bacterias intestinales o de moléculas casi todos los mecanismos propuestos para entender
originadas en el colon directamente al tracto la patogenia de la colangitis esclerosante primaria
portal y en consecuencia, ocurre una inflamación (Fig. 183.1).
crónica de las vías biliares que da lugar a la en-
fermedad colestásica (asociación entre colangitis Diagnóstico clínico
esclerosante primaria y colitis ulcerosa).
b) Bacteriemia portal en pacientes con colitis ulce- La mayoría de los pacientes con colangitis escle-
rosa. rosante primaria son asintomáticos en el momento
c) Asociación con Helicobacter pylori y anticuer- del diagnóstico y se evalúan ante la existencia de un
pos anti-Chlamydia. aumento de fosfatasa alcalina, habitualmente en el con-
d) La función de los ácidos biliares tóxicos proce- texto de una enfermedad infamatoria intestinal (formas
dentes del intestino es otra de las hipótesis que se asintomáticas).

Fig. 183.1. Patogenia de la colangitis esclerosante primaria.


Capítulo 183. Colangitis esclerosante primaria 107

Los síntomas más comunes de inicio son la fatiga y – En 60 % de los casos la bilirrubinemia es normal en
el prurito. Cuando la enfermedad progresa el paciente el momento del diagnóstico, así como la albúmina
tiende a desarrollar ictericia, malestar abdominal, pér- y el tiempo de protrombina. Puede observarse un
dida de peso, síntomas de colestasis crónica y de hiper- aumento de las inmunogobulinas en 61 % de los
tensión portal. Puede presentarse episodios de colangitis casos, preferentemente de la IgG y la presencia de
bacteriana caracterizada por fiebre, escalofríos, dolor autoanticuerpos del tipo antinuclear, antimúsculo
en cuadrante superior derecho y elevación de enzimas liso y frente a los neutrófilos (p-anticuerpos antici-
hepáticas, predominantemente los niveles de fosfatasa toplasma de los neutrófilos).
alcalina. La enfermedad suele presentarse en varones – La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
(70 %) de alrededor de 40 años que, además, tienen una es el procedimiento de mayor fidelidad diagnósti-
colitis ulcerosa. Generalmente transcurren unos cuatro ca de la enfermedad. Los hallazgos radiológicos
años desde la primera alteración bioquímica hasta que son característicos con estenosis difusas y zonas
con dilataciones saculares que adoptan un aspecto
se confirma el diagnóstico.
arrosariado de los conductos biliares intrahepáticos
Otros pacientes tienen síntomas inespecíficos e
y extrahepáticos (Fig. 183.2).
intermitentes más o menos notorios de hepatopatía
– En la actualidad se considera que la colangiorreso-
crónica. En estos casos puede haber signos de co- nancia magnética (Fig. 183.3) es la técnica inicial
lestasis, concretamente prurito, y muy raramente a utilizar para el diagnóstico de la afección y que
ictericia como primera manifestación. En ocasiones solo debe realizarse el procedimiento invasivo
la enfermedad se diagnostica cuando ya hay una hi- (colangiopancreatografía retrógrada endoscópica)
pertensión portal, con ascitis o hemorragia digestiva cuando se contempla una actuación terapéutica.
por varices esofágicas. Esta exploración invasiva a pesar de que tiene una
exactitud diagnostica similar a la colangiorresonan-
Exámenes complementarios cia magnética se asocia a una tasa no despreciable
de complicaciones infecciosas y pancreatitis.
– Presencia de patrón de colestasis con aumento de – La ecografía tiene escaso valor para el diagnóstico
la fosfatasa alcalina y de la gamma glutamil trans- de colangitis esclerosante primaria, no obstante, se
ferasa. observan dilataciones y estenosis variables, segmen-
– Aumento moderado de las amino transferasas. tarias o difusas de las vías biliares (Fig. 183.4).

Fig. 183.2. Colangitis esclerosante primaria. Estenosis difusas y zonas con dilataciones saculares que adoptan un aspecto
arrosariado de los conductos biliares intrahepáticos y extrahepáticos (flechas).
108 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Fig. 183.3. Colangioresonancia magnética. Imágenes de estenosis y dilataciones de las vías biliares intrahepática
y extrahepática (flechas).

Fig. 183.4. Ecografía de las vías biliares. Colangitis esclerosante primaria. Dilatación prestenotica (flecha).

2Diagnóstico histológico y para el estadiamiento de la enfermedad. La lesión


histológica es una colangitis fibrosa obliterante, defi-
No se considera necesario utilizarla de rutina para el nida por una intensa fibrosis concéntrica alrededor de
diagnóstico en pacientes con hallazgos colangiográficos los conductos biliares, que conducen a la obstrucción
típicos, tiene especial utilidad cuando la enfermedad progresiva y a la sustitución de los conductos biliares
afecta a los pequeños conductos biliares intrahepáticos por tejido conjuntivo (Fig. 183.5).
Capítulo 183. Colangitis esclerosante primaria 109

En la enfermedad inflamatoria intestinal por el


incremento del riesgo al cáncer colorrectal se propone
realizar colonoscopia con biopsia al diagnóstico de
colangitis esclerosante primaria y seguimiento cada
uno a dos años por colonoscopia.
Para la prevención de varices peristomales se pre-
coniza realizar anastomosis en bolsa íleo-anal en los
pacientes que requieren proctocolectomía.
Se debe sospechar colangiocarcinoma en pacientes
con deterioro del estado clínico y enzimas hepáticas.
Se debe considerar estudios de imagen anual y Ca 19-9.
Si hay presencia de estenosis importantes en vía
biliar, realizar terapia endoscópica por colangiopancrea-
tografía retrógrada endoscópica con citología y biopsia
para excluir cambios histológicos de malignidad.
Fig. 183.5. Colangitis fibrosa obliterante. Para la detección de neoplasia vesicular, efectuar
ultrasonido anual para detectar lesión de tipo masa
Se han descrito cuatro estadios: en vesícula y realizar colecistectomía siempre que
– Estadio I: se caracteriza por un aumento del tejido se detecte un pólipo vesicular por su potencial de
conectivo con agrandamiento de los espacios porta. malignizarse.
– Estadio II: el tejido conectivo aumenta en la zona Para la enfermedad metabólica ósea se debe realizar
periportal y hay cambios inflamatorios mínimos. estudio óseo, evaluar la densidad mineral cada dos a tres
– Estadio III: hay formación de septos fibrosos en el años y prescribir suplementos de calcio y vitamina D.
parénquima hepático. En el prurito debe excluirse la posibilidad de este-
– Estadio IV: aparece una cirrosis hepática de origen nosis de vía biliar importante si el prurito empeora con
biliar. evidencia de colestasis.
Las complicaciones de la hipertensión portal con el
Las recientes guías clínicas proponen que la biopsia desarrollo de ascitis, encefalopatía hepática y hemorra-
hepática solo debe indicarse en los pacientes que no gia por varices esofágicas son de esperar en un grupo de
tienen evidencias colangiográficos de lesión de grandes pacientes que llegan al estadio final de la enfermedad
vías biliares o cuando hay sospecha de un síndrome de hepática. Además, un pequeño número de pacientes con
solapamiento colangitis esclerosante primaria/hepatitis colangitis esclerosante primaria pueden desarrollar una
autoinmune. hipertensión portal en un estadio precirrótico debido a
un significativo componente presinusoidal.
Diagnóstico diferencial
Se debe realizar siempre que exista una estenosis Tratamiento
benigna de las vías biliares con estenosis malignas o El tratamiento específico de la colangitis esclero-
traumáticas. sante primaria consiste en administrar ácido ursodeoxi-
cólico, aunque en la dosis habitual de 13 mg/kg/día a
Complicaciones y enfermedades 15 mg/kg/día no aumenta la supervivencia ni retrasa
asociadas la progresión histológica de la enfermedad. Existen
resultados favorables con dosis de 20 mg/kg/día.
Existe una serie de afecciones reportadas asociadas La administración de ácido ursodeoxicólico en
con la colangitis esclerosante primaria, pero no están dosis de 15 mg/kg/día, además, disminuye de forma
muy claros los mecanismos involucrados. Dentro de significativa el riesgo para desarrollar displasia o car-
estas están la enfermedad inflamatoria intestinal y el cinoma colorrectal en los pacientes con colitis ulcerosa
incremento de cáncer colorrectal, el colangiocarcino- y colangitis esclerosante primaria. Se ha publicado que
ma, desórdenes autoinmunes como la diabetes mellitus el tratamiento combinado de ácido ursodeoxicólico
insulino dependiente, las enfermedades del tiroides, la con metronidazol (600 mg/día a 800 mg/día) durante
enfermedad celiaca y las pancreatitis. tres años se asocia a una disminución significativa del
110 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

índice pronóstico de la Clínica Mayo e histológica, Bibliografía


si se compara con la administración única de ácido
Bangarulingam, S. Y., Gossard, A. A., Petersen, B. T., Ott, B. J.,
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Capítulo 183. Colangitis esclerosante primaria 111

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Capítulo 184
Estenosis benignas de las vías biliares
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla
Dr. C. Julián Francisco Ruiz Torres

Las estenosis benignas de las vías biliares represen- • Parasitarias: Ascaris, Fasciola, Clonorchis si-
tan un problema de difícil solución terapéutica, debido nensis y Opisthorchis viverrini.
a la frecuencia de recidiva tras el tratamiento, que pude • Lesiones residuales a traumatismo hepático.
dar lugar, si no se soluciona adecuadamente, a colangitis – Otras:
de repetición y en ocasiones a cirrosis biliar secundaria. • Neoplasias hepáticas benignas, anillos vascula-
Con anterioridad, la cirugía suponía la única opción res, hígado poliquístico y radioterapia.
terapéutica en este tipo de pacientes, si bien en los • Congénitas: quiste coledocal o anomalía de la
últimos años las técnicas percutáneas y endoscópicas unión biliopancreática.
han permitido la resolución de gran número de casos • Aneurisma y anillos vasculares.
mediante actuaciones menos agresivas. • Cirrosis biliar focal en pacientes con fibrosis
Las estenosis benignas de las vías biliares, implican quística.
una disminución de la luz biliar de mayor o menor
calibre, de longitud y morfología variables, únicas o Clasificación
múltiples, que puede afectar a cualquier segmento de
la vía biliar, y que provoca una obstrucción al flujo de – Estenosis inflamatorias primarias:
la bilis hacia el duodeno. • Difusas.
• Localizadas.
– Estenosis secundarias:
Etiología • Por colédocolitiasis.
La etiología de estenosis benignas de las vías bi- • Por afecciones e intervenciones gastroduodenales.
liares son múltiples. La heterogeneidad de sus causas • Traumatismos operatorios.
y la variabilidad de las características de las estenosis – Estenosis dobles.
determinan pautas de tratamiento diferentes: – Odditis o esfinterítis esclerorretráctil.
– Cirugía:
• Colecistectomía abierta, colecistectomía la- Estenosis inflamatorias primarias
paroscópica, trasplante hepático, anastomosis
biliodigestivas, cirugía de hidatosis hepática y Para que pueda considerarse estrictamente primitiva
resecciones hepáticas. es necesario que se desarrolle en ausencia de cualquier
– Compresiones extrínsecas: agresión quirúrgica o traumática accidental y que no
• Pancreatitis crónica, fibrosis retroperitoneal, esté asociada a cálculos, lesiones del duodeno o pán-
adenopatías, sarcoidosis y quistes hepáticos. creas. Frecuencia: raras.
– Colangitis esclerosante:
• Secundaria: a sustancias químicas (infusión de Diagnóstico clínico
5-fluorouracilo por arteria hepática) y a isquemia. Más frecuente en el hombre que en la mujer. Afecta a
• Infecciosas/inflamatorias: sida, criptosporidiasis la edad media de la vida. El paciente refiere en ocasiones
y citomegalovirus, colangitis purulenta, colan- antecedentes de fiebre tifoidea, disentería, hepatitis. Los
gitis recurrente, infecciones pericoledocales síntomas clásicos son ictericia y signos de infección y
(abscesos subhepáticos) y colédocolitiasis. fiebre a repetición.
Capítulo 184. Estenosis benignas de las vías biliares 113

Exámenes complementarios – Factores predisponentes como la tendencia indivi-


dual a la esclerosis y trastornos de la irrigación.
Los estudios imaginológicos son los imprescindibles
– Malformaciones congénitas.
para el diagnóstico definitivo como el ultrasonido, la
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica y
colangiorresonancia. Estenosis secundarias
Anatomía patológica (biopsia) Etiología
– Engrosamiento parietal localizado o difuso. – Estenosis secundaria a cálculos en el colédoco: no
– La luz del conducto esta disminuida, irregular, el son tan poco frecuentes. Es una estenosis debida a
calibre exterior es normal. La mucosa esta total o un traumatismo, un cálculo que llega a producir ul-
parcialmente destruida y conducto un tracto fibroso. ceración y necrosis de la mucosa, con la subsiguiente
– En fases precoces, inflamación: fibrosis y retracción.
• Hiperemia. – Estenosis del colédoco secundarias a intervenciones
• Edema. gastroduodenales:
• Infiltración celular. • Ulceras duodenales, ulceras pépticas que pueden
• Ulceración. evolucionar al colédoco y en su cicatrización
• Más adelante fibrosis. pueden provocar estenosis.
Este proceso puede afectar los conductos intrahe- • Estenosis en la desembocadura del duodeno,
páticos. debido a un muñón duodenal exuberante.
– En el hígado: lesiones de colestásis, inflamación • Traumatismo del conducto pancreático que
pericolangítica, pero sin gran distensión de las vías puede dar lugar a un seudoquiste pancreático
proximales a la estenosis, debido a la difusión del y luego una retracción del colédoco de origen
proceso inflamatorio que las hace rígidas, lo que esclerorretráctil.
– Estenosis por traumatismo operatorio: es el grupo
impide su dilatación.
de mayor importancia en las intervenciones sobre
el aparato biliar y después de las colecistectomía.
Algunos plantean dos variante: inflamatoria y fibro-
sa, pero parece ser que pertenecen al mismo proceso,
Diagnóstico clínico
en diferentes estadios de su evolución.
Por su localización pueden ser: Las manifestaciones clínicas de una estenosis benig-
– Difusa: afecta el hepatocoédoco, que acaba en un na delas vías biliares suelen ser dolor en hemiabdomen
cordón fibroso, filiforme, englobado en un bloque superior, ictericia o colangitis, asociándose en algunos
inflamatorio, que tiende a la fibrosis, por lo que su casos prurito.
disección es difícil, a veces imposible. El cuadro clínico induce a sospechar la presencia
– Localizada: retracción localizada en el hepático. de una ictericia obstructiva, pero el diagnóstico de que
Se sitúa en la confluencia de ambas ramas y puede la causa es una estenosis solo se puede sugerir cuando
afectar su origen. El resto de la vía es normal. concurren ciertas circunstancias: el antecedente reciente
de cirugía biliar o cuando la colestásis aparece en el
Otras veces afecta todo el hepático, una o las dos contexto de ciertas enfermedades, como la enfermedad
ramas o la región del cístico: inflamatoria intestinal o el sida.
– Estenosis segmentaria hepática.
– Estenosis segmentaria coledociana: en la parte baja Exámenes complementarios
del colédoco, siendo retropancreática. Coexiste con Siempre existe un aumento persistente de las enzi-
inflamación del páncreas. mas hepáticas de colestásis, pero, a veces, la progresión
– Estenosis hiliar: en la región yuxtahepática. de la enfermedad es insidiosa y subclínica, y es el
La etiopatogenia es dudosa. Puede asociarse a: hallazgo de las alteraciones analíticas el motivo de con-
– Colangitis crónica. sulta, que puede existir en el momento del diagnóstico
– Estenosis inflamatoria primaria postoperatoria a una cirrosis biliar secundaria ya establecida.
intervenciones biliares. Los métodos diagnósticos de imagen aportan
– Reflujo duodenal. información más o menos útil, dependiendo del tipo
– Irritación química. de estenosis, especialmente de su número (único o
114 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

múltiple) y de su topografía. La ecografía percutánea – Sutura del hepático común o derecho (confusión
permite observar una dilatación de la vía biliar por en- con cístico).
cima de la obstrucción, pero no es capaz de identificar – Mala colocación del clip metálico.
la estenosis. Tiene su máxima rentabilidad diagnóstica – Uso excesivo de cauterización.
en la evolución inmediata de una iatrogenia quirúrgica – Reacción inflamatoria a suturas.
grave de la vía biliar, en cuyo caso con frecuencia se – Desvascularización.
acompaña de la presencia de líquido libre en el espacio – Inflamación local tras fuga biliar.
subhepático, como consecuencia del desarrollo de una – No reconocimiento de anomalías congénitas de la
fístula biliar. vía biliar.
El diagnóstico de estenosis múltiples que interesan
a los conductos intrahepáticos es muy difícil, y hasta 3Diagnóstico clínico
hace poco tiempo el método de elección era la opacifi- La sospecha clínica es fácil cuando la obstrucción es
cación directa del árbol biliar, bien por vía endoscópica completa o casi completa, ya que los síntomas aparecen
o percutánea. Actualmente se prefiere practicar una en el posoperatorio inmediato.
colangiorresonancia magnética, que añade a su alto Cuando la estenosis es parcial, la sintomatología
rendimiento diagnóstico en las alteraciones biliares, la suele aparecer tardíamente, con frecuencia después de
posibilidad de explorar el parénquima hepático y estruc- los dos a tres años de la cirugía, y los síntomas pueden
turas vecinas, y realizar posteriormente exploraciones sugerir la presencia de una colédocolitiasis:
invasivas, como la colangiopancreatografía retrógrada – Ictericia (78 %).
endoscópica o la colangiografía transparietohepática, – Dolor en hipocondrio derecho (57 %).
cuando se precise la toma de muestras de tejido para – Malestar general (33 %).
estudio citológico e histológico o por sus vertientes – Menos frecuencia fiebre, prurito.
terapéuticas. La resonancia magnética ayuda a decidir – Si no se trata el paciente puede presentar ascitis,
cuál de estas dos técnicas es la idónea y a planificar de hemorragias por varices esofágicas como compli-
antemano el tratamiento óptimo. cación de una cirrosis biliar secundaria.

Estenosis biliares poscirugía El diagnostico se sospecha frente a un paciente con


antecedentes de cirugía biliar u órganos vecinos.
a excepción del trasplante hepático
Más de la mitad de las estenosis benignas de las vías 3Exámenes complementarios
biliares son consecuencia de: En elaboratorio se determina bilirrubina elevada y
– Lesión iatrogénica en la evolución de una colecis- las enzimas colestácicas.
tectomía, con una tasa en torno a 0,5 % en la cirugía El diagnóstico se confirma con el concurso de la
abierta. ecografía y la colangiopancreatografías retrograda
– Identificación incorrecta de las estructuras anatómi- endoscópica, que permite, además, drenar el líquido
cas, por la presencia de anomalías congénitas de la libre peritoneal por punción percutánea y la vía biliar
vía biliar. con la inserción de una prótesis, excepto si la lesión de
– Reacciones inflamatorias graves. la vía biliar es completa.
– Procesos isquémicos. En la colangiopancreatografías retrograda endoscó-
– Su número se ha incrementado en los últimos pica y colangiorresonancia magnética se detecta:
años debido a la gran difusión que han tenido la – Dilatación del árbol biliar, descartar si la estenosis
colecistectomía laparoscópica (hasta un 2,7 %), es completa.
el trasplante hepático y las reacciones de lesiones – En caso de transección completa se indica una colan-
hepáticas benignas y malignas. giografía transhepática percutánea con colocación
de drenaje, para definir anatomía y descomprimir el
Etiología árbol biliar.

Las causas más frecuentes de estenosis posquirúr- La colangiopancreatografías retrograda endoscópi-


gica de la vía biliar: ca aporta información de la localización, calibre más
– Traumatismo accidental. extensión de la estenosis. Permite, además, valorar la
Capítulo 184. Estenosis benignas de las vías biliares 115

papila y el páncreas y la toma de muestra en caso que La incidencia de estenosis anastomóticas se estima
se sospeche origen maligno. en 3 % a 10 % de los pacientes adultos sometidos a un
trasplante de hígado de donante cadáver, muy inferior
Estenosis biliares postrasplante al 25 % a 40 % referido en la mayoría de series de
trasplante hepático de donante vivo. Aunque controver-
hepático tido, se ha señalado que el uso de tubos en T aumenta
Aparece en 2 % a 19 % de los pacientes transplan- la incidencia de complicaciones biliares, incluidas las
tados como una complicación más frecuente, de estas estenosis.
las fugas y estenosis son las más comunes y graves.
Diagnóstico clínico
Epidemiología Suelen manifestarse en los primeros meses del
A pesar de que su incidencia ha disminuido gracias a posoperatorio y son consecuencia de isquemia local a
la mayor experiencia de los cirujanos y a la estandariza- nivel de la anastomosis o a suturas inadecuadas, pero
ción de las técnicas quirúrgicas y ser baja la mortalidad, también pueden aparecer tardíamente por alteraciones
el riesgo de pérdida del injerto se aproxima a 1 % a 3 %. en la cicatrización o irrigación de la anastomosis.

Exámenes complementarios
Clasificación
El diagnóstico se confirma con el concurso de la
Las estenosis biliares pueden clasificarse: ecografía y la colangiopancreatografías retrograda
– Anastomosis. endoscópica.
– No anastomóticas.
Colangiopatia asociada al sida
En los primeros dos a cuatro meses después del
trasplante o tardíamente, al cabo de varios meses e Clasificación
incluso años.
Se presentan varios tipos de estenosis de las vías
Las estenosis no anastomóticas con frecuencia
biliares en pacientes con sida:
son secundarias a fenómenos isquémicos durante el
– Estenosis de la papila.
trasplante, suelen ser múltiples, afectando a la zona de
– Colangitis esclerosante de vías biliares intratrahe-
la confluencia y a las ramas intrahepáticas y extrahe- páticas o extrahepáticas.
páticas, es obligada la revisión de la arteria hepática. – Forma mixta (estenosis papilar y colangitis escle-
Cuando su aparición es precoz puede provocar una rosante).
necrosis biliar difusa, complicación rara, pero muy – Estenosis biliar largas (mayores que 1 cm a 2 cm).
grave, cuyo tratamiento es con frecuencia un retras-
plante urgente. Etiología
En las tardías es necesario excluir, además de la
trombosis arterial, otras causas como la recurrencia Es desconocida, aunque multifactorial.
de colangitis esclerosante o de colangiocarcinoma – Agentes oportunistas: citomegalovirus, Criptospo-
en pacientes cuya indicación de trasplante fue una de ridium, Microsporidia, Enterocytozoon y septata
estas enfermedades y otras menos frecuentes, como la intestinales (50 %).
aparición de enfermedad inmunoproliferativa a nivel – Inmunosupresión.
local. Su respuesta al tratamiento endoscópico o radio- – Predisposición genética.
lógico es pobre y frecuentemente precisan tratamiento – Virus de inmunodeficiencia humana.
quirúrgico. – Edad media: 36 años.
Se han invocado varios factores para explicar el
Diagnóstico clínico
compromiso vascular-isquemia o estenosis:
– Trombosis de la arteria hepática. Dolor en hipocondrio derecho, fiebre y colestásis.
– Rechazo celular crónico.
– Incompatibilidad sanguínea tipo ABO. Exámenes complementarios
– El tiempo de isquemia fría del órgano superior que Realizar tomografía axial computarizada, ecografía,
10 h a 15 h. valorar dilatación de vías biliares, en este caso colan-
116 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

giopancreatografías retrograda endoscópica. Toma de – Litiasis coledociana.


muestra para histología y cultivo. – Inflamaciones de vísceras vecinas, tales como:
En la colangiopatia asociada al sida revela: • Ulceras gastrododenales.
– Se afecta el árbol izquierdo, presentando aspecto • Duodenitis.
arrozariado, que implica infiltración de la submu- • Pancreatitis.
cosa y edema. • Colitis.
– Los ductus intrahepáticos son irregulares, presen- • Diverticulos duodenales o vaterianos.
tando saculaciones y amputaciones dístales – Procesos disquinéticos reflejos
– Colédoco estenótico de forma irregular, estenosis
cortas de 4-5mm de calibre. Clasificación etiológica
La odiditis se clasifican según:
Estenosis biliares secundarias – En antiguos operados por litiasis.
a pancreatitis crónica – De evolución paralela a una colecistitis calculosa.
– Coexistente con una enfermedad del páncreas.
El colédoco distal transcurre por la cara posterior – Aislada, rara.
del páncreas antes de entrar al duodeno, por lo que pro-
cesos como cáncer, seudoquistes o pancreatitis crónica Fsiopatología
pueden afectar la porción más distal de la vía biliar.
Se calcula 30 % de pacientes con pancreatitis crónica Son diversos los factores que interviene:
desarrollan una estenosis biliar y, de estos, la cuarta – Inflamatorio.
parte presentan síntomas. La estenosis puede ser tran- – Disquinético reflejo.
sitoria, sin que se conozcan factores predictivos que – Mixto inflamatorio reflejo.
puedan identificar su reversibilidad. – Bioquímico o endocrino.
– Otros.
Diagnóstico clínico
Diagnóstico clínico
Es similar al resto de las estenosis benignas de las
vías biliares, evolucionan con colangitis. La ictericia Se presenta por lo general en mujeres de más de 30
puede resolver espontáneamente, puede estar causa por años, operadas o no de vías biliares (colecistectomía),
edema o compresión cuando se exacerba su pancreatitis. portadoras o no de cálculos. Los síntomas principales
son pesadez pospandrial, acidez que no se calma con
Exámenes complementarios alcalinos, dolor abdominal tipo pancreático (en barra),
dolor a la palpación en el punto de Chauffard, náuseas
La fosfatasa alcalina se aprecia muy elevada con
y vómitos en fase avanzada, pérdida de peso, íctero
cifras de bilirrubina alta de manera intermitente, que
(poco frecuente) y hepatomegalia dolorosa.
cuando se comportan de manera persistente sugiere
Formas clínicas:
desarrollo a una cirrosis biliar.
– Biliar: síntomas igual a la colédocolitiasis y coléli-
La colangiopancreatografías retrograda endoscópica
tiasis.
define el diagnóstico.
– Angiolítica: dolor, fiebre e íctero.
– Ictericia: igual a la litiasis coledociana.
Complicaciones
– Pancreática: delgadez, toma del estado general,
La colestásis persistente lleva colangitis recurrente, dolor en barra, acompañado de diabetes, signos bio-
cirrosis biliar secundaria, que puede desarrollarse en lógico de sufrimiento pancreático. El estado general
un periodo de seis a 12 meses, incluso sin ictericia ni muy afectado y con intenso adelgazamiento.
síntomas de colangitis.
Exámenes complementarios
Odditis o esfinterítis esclerorretráctil En la colangiografía endovenosa se observa:
– Dilatación del hepatocolédoco.
Etiología
– Persistencia anormal de la opacidad hepatocoledo-
Múltiples son las causas que se invocan en el origen ciana.
de la odditis tales como: – Débil opacificación duodenal.
– Litiasis vesicular. – Imágenes terminales anormales.
Capítulo 184. Estenosis benignas de las vías biliares 117

En la colangiopancreatografías retrograda endos- Elección del tratamiento


cópica se observan:
Las dos opciones terapéuticas de una estenosis be-
– Signos indirectos:
nignas de las vías biliares son su resección quirúrgica y
• Dilatación del colédoco.
la dilatación del segmento estenosado, seguida o no de
• Reflujo hacia la vía biliar intrahepática.
la inserción de una prótesis, bien por vía endoscópica
• Retardo en la evacuación del colédoco.
o por vía percutánea.
• Reflujo intrapancreático.
El tratamiento debe ser siempre individualizado,
– Signos directos:
puesto que no existen estudios controlados compa-
• Terminaciones romas.
rativos que avalen la mejor opción terapéutica. Hay
• Imágenes afiladas en punta de lápiz o desfiladero.
factores que determinarán la elección (Tabla 184.1). A
• Imágenes de estenosis suprapapilar.
estos se añade, además, la experiencia que en el centro
• Falsas imágenes.
se tenga en cirugía biliar, radiología intervencionista y
endoscopia terapéutica.
Tratamiento
Modalidades terapéuticas
Tratamiento de las estenosis benignas
de las vías biliares Técnicas quirúrgicas
Se recomienda una conducta que se ha de seguir en En las estenosis benignas de las vías biliares únicas
el tratamiento de las estenosis benignas de la vía biliar y localizadas en la porción extrahepática, la técnica
(Fig. 184.1). quirúrgica que ofrece mejores resultados es la resec-

Fig. 184.1. Conducta que se ha de seguir en el tratamiento de las estenosis benignas de la vía biliar.
118 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

ción del segmento estenosado y una anastomosis tipo tas actuales de tratamiento seguidas en algunas de las
coledocoyeyunostomía o hepaticoyeyunostomía en Y estenosis benignas de las vías biliares que con mayor
de Roux termino lateral. El éxito a largo plazo se estima frecuencia se dan en la práctica clínica.
en 85 %, gravado por la mortalidad de 0 % a 8 % y con
una tasa de recidiva de 10 % a 30 %. 3Tratamiento de las estenosis biliares
Cuando la estenosis interesa a los conductos intra- poscirugía a excepción del trasplante hepático
hepáticos, puede obligar a intervenciones más agresi-
El tratamiento quirúrgico se ha considerado como
vas, como una segmentectomía o una lobectomía, que
la opción más definitiva a largo plazo. Sin embargo,
incrementan la morbimortalidad. En algunos casos la
numerosos estudios han comunicado resultados con el
única opción es el trasplante hepático.
tratamiento endoscópico comparables a la cirugía con
Tabla 184.1. Factores que determinan la elección menor morbimortalidad. Se presenta el algoritmo a
del tratamiento en las estenosis benignas de la vía biliar seguir ante una estenosis biliar postcirugía (Fig. 184.2).
Los datos actuales sugieren que la inserción endos-
Paciente sin riesgo Pacientes con riesgo cópica secuencial (cada tres meses y hasta un año) de
quirúrgico quirúrgico (edad avanzada, prótesis de calibre progresivamente mayor o de múl-
cirrosis y enfermedades
graves)
tiples prótesis plásticas, en pacientes seleccionados,
puede alcanzar 81 % a 83 % de éxitos terapéuticos a
Tipo de estenosis única, Múltiple
extrahepática única, largo plazo con baja morbilidad.
extrahepática alta o
intrahepática media y baja
Etiología Experiencia en cirugía biliar,
radiología intervencionista y
endoscopia terapéutica

Técnicas no quirúrgicas
El tratamiento no quirúrgico de las estenosis be-
nignas de las vías biliares puede aplicarse por vía
endoscópica o vía percutánea. En ambas modalidades
se practica una dilatación del segmento estenosado,
bien con bujías y balones hidrostáticos, seguida de la
inserción de un drenaje para mantener patente la luz. Su
inconveniente es la necesidad de recambios periódicos,
cada tres a seis meses, por la alta frecuencia con que se
obstruyen. Es obligado realizar un seguimiento clínico
y bioquímico riguroso del paciente.
La selección de la vía de acceso depende de la
topografía de la lesión. Se aconseja el tratamiento
endoscópico cuando la estenosis está por debajo de la
confluencia de los intrahepáticos, en presencia de una
cirrosis hepática o cuando existe una coagulopatía. Si
la estenosis se sitúa por encima de la confluencia es
preferible el acceso percutáneo, a menos que la afec-
tación sea difusa o que las ramas intrahepáticas estén
poco dilatadas. La vía percutánea está indicada, ade-
más, cuando existan alteraciones anatómicas, bien por
una cirugía previa o una estenosis del tracto digestivo
alto que dificulten o impidan el acceso endoscópico a
la papila. En ocasiones es necesario combinar ambos
procedimientos para obtener los mejores resultados.
La etiología influye de forma importante en la deci- Fig. 184.2. Algoritmo de tratamiento de las estenosis be-
sión terapéutica. Se comentan brevemente las conduc- nignas de las vías biliares posquirúrgicas.
Capítulo 184. Estenosis benignas de las vías biliares 119

No se recomienda el uso de prótesis metálicas au- El trasplante hepático está indicado cuando los
toexpandibles en las estenosis benignas por su limitada tratamientos endoscópico o radiológico fracasan y la
permeabilidad a largo plazo y la dificultad de retirar- función hepatocelular está deteriorada, pero está contra-
las, salvo en pacientes con altísimo riesgo quirúrgico indicado cuando se tiene constancia de la existencia de
o enfermedades terminales. La inserción de prótesis un colangiocarcinoma y cuando exista, además, cirrosis
biodegradables se considera la opción del futuro. biliar secundaria.
El beneficio del tratamiento percutáneo a largo
plazo se estima en las mejores series en torno 60 % a Tratamiento de las estenosis biliares
90 %, con una tasa de complicaciones del 33 %, de tipo secundarias a pancreatitis crónica
hemorrágico o séptico.
Aunque no existe acuerdo en cuanto a la elección Se debe valorar adecuadamente la indicación de
de tratamiento en los pacientes sin riesgo quirúrgico, drenaje biliar, que está indicado en pacientes con ic-
la tendencia actual es ofrecerles como primera opción tericia o colangitis, cuando existe una dilatación biliar
las modalidades no quirúrgicas, por la alta tasa de re- significativa proximal a la estenosis o cuando cifras de
cidiva que puede condicionar la práctica de repetidas fosfatasas alcalinas superiores a tres veces los valores
laparotomías, con disminución del porcentaje de éxitos normales se mantengan seis meses o más. Se presenta
y la morbilidad que ello conlleva. el algoritmo de control de las estenosis biliares por
pancreatitis crónica (Fig. 184.3).
Tratamiento de las estenosis biliares
postrasplante hepático
Los estudios realizados confirman que pueden ser
tratadas con éxito por vía endoscópica o percutánea,
dependiendo del tipo de anastomosis y su accesibilidad.
Al igual que en las estenosis benignas de las vías
biliares poscolecistectomía, la inserción endoscópica de
prótesis plásticas, preferiblemente múltiples, consigue
una tasa de éxitos a largo plazo de 42 % a 90 %, con
pocas complicaciones y bajo número de recurrencias.
En las estenosis tardías los resultados son dispares. La
respuesta al tratamiento radiológico es similar (40 %
a 85 %).

Tratamiento en la colangiopatía
asociada al sida
Las dilataciones seguidas o no de inserción de pró-
tesis por vía endoscópica o percutánea constituyen una
buena alternativa terapéutica en estos pacientes. Tienen
su indicación cuando existe una estenosis dominante
extrahepática y una función hepatocelular conservada,
alcanzando un buen resultado inicial en 46 % a 75 %
de los casos. Se indica como una medida temporal en
los pacientes con prurito, ictericia o colangitis.
Se ha sugerido, además, que el tratamiento endoscó-
pico exitoso puede mejorar la supervivencia y posponer
el trasplante hepático.
El tratamiento quirúrgico se debe evitar por su alta
morbilidad y por dificultar la realización de un poste-
rior trasplante. Es importante excluir la presencia de
un colangiocarcinoma, que se da hasta en 18 % de los
pacientes, con toma para citología y biopsias y deter- Fig. 184.3. Algoritmo de control de las estenosis biliares por
minación serológica de CEA y CA 19-9. pancreatitis crónica.
120 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

El drenaje biliar no solo evita la lesión hepática creatitis: the good, the bad, and the ugly. J Clin Gastroenterol,
sino que consigue la regresión parcial en la mitad de 38(2), 96-98.
Cahen, D. L., Van Berkel, A. M., Oskam, D., et al. (2005). Long-
los casos. term results of endoscopic drainage of common bile duct
La inserción de prótesis de plástico por vía endoscó- strictures in chronic pancreatitis. Eur J Gastroenterol Hepatol,
pica ha demostrado ser una buena opción para resolver 17, 103-108.
el problema obstructivo agudo, pero su eficacia a largo Draganov, P., Hoffman, B., Marsh, W., et al. (2002). Long-term
outcome in patients with benign biliary strictures treated endos-
plazo es tan solo de 10 % a 32 %. La presencia de una copically with multiples tents. Gastrointest Endosc, 55, 680-686.
pancreatitis calcificante predice una mala respuesta al Dumonceau, J. M. (2006). Systematic appraisal of the role of
tratamiento endoscópico, al menos cuando se utilizan metallic endobiliary stents in the treatment of benign bile duct
prótesis plásticas. stricture. Ann Surg, 244(1), 164-165.
Kahaleh, M., Brock, A., De La Rue, S.A., et al. (2005). Temporary
El uso de prótesis autoexpandibles mejora estos placement of covered self expandable metal stents (SEMS) in
resultados (50 % a 75 %), con el inconveniente de un benign biliary strictures: preliminary data. Gastrointest Endosc,
incremento de procedimientos por disfunción de estas. 61, AB208.
Aunque no existen estudios controlados que compa- Morelli, J., Mulcahy, H. E, Willner, I. R., et al. (2003). Long-term
out comes for patients with post-liver transplant anastomotic
ren la cirugía y el tratamiento endoscópico, se acepta biliary strictures treated by endoscopics tentplacement. Gas-
que la cirugía es el tratamiento de elección, reservando trointest Endosc, 58, 374-379.
el endoscópico como tratamiento inicial y para los Nuzzo, G., Giuliante, F., Giovannini, I., et al. (2005). Bile duct
pacientes no candidatos a la cirugía. El tratamiento en- injury during laparoscopic cholecystectomy: results of an
Italian national survey on 56 591 cholecystectomy. Arch Surg,
doscópico puede ser una buena medida terapéutica de 140, 986-992.
las estenosis cortas. Por el contrario, cuando son largas, Siriwardana, H. P., Siriwardena, A. K. (2005). Systematic appraisal
los resultados son mediocres y solo se aconseja en espera of the role of metallic endobiliary stents in the treatment of
del tratamiento quirúrgico o en pacientes con riesgo. benign bile duct stricture. Ann Surg. 242(1):10-19.
Van Berkel, A. M., Cahen, D.C., Van Westerloo, D. J., et al. (2004).
Self-expanding metal stents in benign biliary strictures due to
Bibliografía chronic pancreatitis. Endoscopy, 36, 381-384.
Vazquez-Sequeiros, E., Baron, T. H., Clain, J. E., et al. (2002).
Baron, T .H. (2004). Endoscopic therapy with multiple plastic Evaluation of indeterminate bile duct strictures by intraductal
stents for benign biliary strictures due to chronic calcific pan- US. Gastrointestinal Endoscopy, 56, 372-379.
Capítulo 185
Colangitis
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Se refiere a cualquier proceso inflamatorio que afec- Patogenia


te a los conductos biliares, secundario a un cuadro de
La mera aparición de gérmenes en un árbol biliar
infección sistémica cuyo punto de partida se encuentra
no obstruido, conocida como bacterbilia, no tiene,
en el árbol biliar. No se consideran situaciones como co-
por lo general, significación patológica. Los gérmenes
langitis esclerosante, colangiopatía del sida, entre otras,
pueden llegar a la vía biliar por dos caminos: de forma
que pueden provocar, a veces, cuadros de colangitis en
ascendente, desde el duodeno, y por vía portal, por un
el sentido expuesto, con connotaciones muy diferentes.
mecanismo de traslocación bacteriana, la primera es
la más habitual.
Clasificación La causa más frecuente de colangitis es la coledoco-
Según el contexto clínico de la colangitis se clasifica litiasis, aunque puede ser manifestación de otras situa-
en aguda y recurrente. ciones como estenosis benignas, hidatidosis abierta a la
La colangitis es supurada o no supurada si la bilis en vía biliar o disfunción de derivaciones biliodigestivas.
la vía biliar está contaminada o es purulenta, los gérme- Las neoplasias biliares o pancreáticas evolucionan rara
nes más frecuentes involucrados son Escherichia Coli vez con colangitis aguda, en gran medida por el carácter
(50 %), Klebsiella, Estreptococo faecalis, Enterobacter, progresivo y acentuado de la obstrucción, que impide
pseudomona, bacteroides y Clostridium. el reflujo duodeno biliar de material con flora intesti-
nal. Sin embargo, tras manipulaciones instrumentales,
generalmente por colangiografía directa endoscópica o
Colangitis agudas percutánea, una vía biliar obstruida por una neoplasia
La colangitis aguda es la infección severa de la se infecta con frecuencia y provoca colangitis graves
bilis dentro de los conductos biliares intrahepáticos responsables de una alta mortalidad, si no se drena
y extrahepáticos. Provocada por la existencia de convenientemente. Los gérmenes más frecuentemente
bacterias en la bilis, en una situación de obstrucción presentes en la bilis son Escherichia coli, Klebsiella,
biliar, como consecuencia de la obstrucción del flujo Enterococcus y Proteus. Tras manipulaciones instru-
biliar, ocurre un aumento en la presión intraductal que mentales suelen aparecer otros como Pseudomona y
favorece el paso de gérmenes a la circulación portal y Enterobacter. Los gérmenes anaerobios más habituales
linfática, lo que origina episodios de bacteriemia con son Bacteroides fragilis y Clostridium. Frecuentemente
o sin septicemia. las infecciones son polimicrobianas. En sangre, los
hemocultivos resultan positivos en torno de 40 % a
Etiología 50 % de los casos, la Escherichia coli y Klebsiella son
los gérmenes que más se aíslan.
Su etiología se debe a enfermedades concomitantes
(colangitis primarias: coledocolitiasis en 70 %, para-
¡Diagnóstico clínico
sitosis, estenosis, quistes de colédoco, enfermedad de
Caroli, colangitis esclerosante y tumores) o por actua- Desde el punto de vista clínico se caracteriza por
ciones directas o indirectas, diagnosticas o terapéuticas, la conocida tríada de Charcot (presente en el 70 % de
sobre el hígado o la vía biliar (colangitis secundarias). los casos): dolor en hipocondrio derecho o epigastrio,
122 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

puede ser leve y transitorio y a menudo se acompaña cifra el diagnóstico puede pasarse por alto. La fosfatasa
de escalofríos (90 %) asociado a fiebre (95 %), gene- alcalina, la gamma glutamil transpeptidasas y las amino
ralmente alta e ictericia (80 %). tranferasas (alanina amino transferasa y aspartato amino
Cuando se añade confusión mental, hipotensión, transferasa) suelen estar elevadas.
letargo, delirio y choque séptico (15 % de los casos) Se deben realizar estudios de nutrición e inmunidad
se denomina pentada de Reynolds, que se observa con de forma programada.
menor frecuencia, pero habitualmente se asocia con Los hemocultivos suelen ser positivos, en especial
una colangitis supurada grave y estos son sugestivos durante los escalofríos o los picos febriles, y dan lugar
de una bacteriemia grave. al desarrollo de al menos dos microorganismos en la
Sin embargo, la correlación entre la clínica típica, las mitad de los pacientes.
formas atípicas y la presencia de pus en la vía biliar es
pobre y en muchos casos de colangitis, faltan algunos de Estudios imaginológicos
estos rasgos. Algunos pacientes, principalmente los an- La ecografía es la técnica de elección para detectar la
cianos, pueden tener confusión mental o choque sin fiebre existencia de obstrucción biliar por su elevada eficacia
o existir una leucocitiosis con desviación izquierda como (sensibilidad y especificidad), se pueden detectar tam-
única manifestación de la infección, por lo que se debe bién complicaciones de la colangitis como el absceso
sospechar la existencia de una colangitis subyacente. hepático. Permite el diagnóstico de la colelitiasis (95
No obstante, desde el punto de vista clínico para % de los casos), colecistitis aguda, coledocolitiasis
el diagnóstico de una colangitis es importante que el (sensibilidad de solo 50 % a causa de la proximidad
médico tenga esta valoración inicial: del duodeno, aunque la presencia de un cálculo puede
– Antecedentes: deducirse a partir de un colédoco dilatado mayor que
• Patología conocidas: colelitiasis, colecistitis 6 mm en pacientes no colecistectomizados), dilatación
aguda, coledocolitiasis, tumores hepatobiliares de la vía biliar (quística o no), absceso hepático, enfer-
o próximos, metástasis, absceso hepático y pa- medad parasitaria de la vía biliar, tumor hepatobiliar o
rasitosis hepatobiliares. pancreático y ayuda, además, a dirigir la punción para
• Intervenciones previas: colangiopancreatografías la colangiografía transparietohepática y drenaje.
retrograda endoscópica, colangiografía transpa-
rietohepática, colecistectomía y estenosis de vía Tomografía axial computarizada
biliar, derivación biliodigestiva, papiloesfintero- En cuanto al tracto biliar su principal uso no radica
tomía, drenajes o prótesis en la vía biliar y cirugía en el diagnóstico de una coledocolitiasis sino más bien
de la hidatidosis. en la detección de complicaciones de la litiasis biliar
– Valoración de la situación clínica general y cons- tales como el líquido pericolecisitico en los pacientes
tantes fisiológicas. con una colecistitis aguda, el gas en la pared de la
– Identificación de síntomas y signos de colangitis: vesícula en los pacientes con una colecistitis enfise-
tríada de Charcot, los pacientes con factores de matosa, gas intraportal, la perforación de la vesícula y
riesgo (mayores de 70 años, diabéticos y alérgicos) la formación de abscesos; igualmente discrimina más
debutan en ocasiones solo con fiebre, sepsis inex- que la ecografía en la patología del colédoco terminal
plicable o confusión mental. y tumoral biliopancreática. Por lo tanto, estos estudios
son útiles para determinar que pacientes requieren una
Exámenes complementarios intervención quirúrgica urgente y quienes pueden ser
Se observa leucocitosis con desviación izquierda en tratados con medidas de sostén y sometidos a cirugía
80 % de los casos, por lo general las cifras más altas son electiva más adelante.
de 20 000 leucocitos por mililitro, reflejo de las formas Colangiopancreatografías retrograda endoscópica
más graves, pero el resto puede tener un recuento de y colangiografía transparietohepática
leucocitos normal con formas en banda como único
hallazgo hematológico. Se realizaran pruebas de hemos- Muestran imágenes precisas de la vía biliar intra-
tasia y coagulación que muchas veces están alteradas. hepática y extrahepática (los cálculos coledocianos
El laboratorio muestra hallazgos de obstrucción aparecen como defectos de replección y pueden ser
biliar con aumento variable de la bilirrubina y enzimas detectados con una sensibilidad de 95 %) y tienen
de colestasis. La bilirrubina es de más de 2 mg/dL en implicaciones terapéuticas (drenajes, extracción de
80 % de los pacientes, pero cuando es menor que esta cálculos, esfinterotomias de papila, prótesis y biopsias).
Capítulo 185. Colangitis 123

Se indica la colangiopancreatografías retrograda En sepsis se debe realizar un mayor aporte energé-


endoscópica en las obstrucciones parciales o subtotales tico (soluciones equilibradas de principios inmediatos
de la vía biliar, principalmente distales. que superen las 2 000 kcal/día).
La colangiografía transparietohepática se emplea en El régimen antibiótico a emplear viene determinado
las obstrucciones proximales y las totales. La ecografía por el tipo de gérmenes hallados habitualmente en estas
previa señala el sector dilatado y ayuda en la elección situaciones. Su elección se guía, si es posible, por el
de una u otra técnica colangiográfica. En ocasiones son antibiograma, pero de no poderse contar con este, debe
consecutivas. atenderse a la flora que probablemente provoca la in-
fección. En ausencia de manipulaciones instrumentales
Pronóstico previas, esta es de tipo entérico.
La asociación de ampicilina o amoxicilina (1 g
Dentro de la colangitis se pueden establecer unas
por vía endovenosa cada 8 h) con un aminoglucósido
formas leves, generalmente de buen pronóstico y unas
(gentamicina de 1 mg/kg por vía endovenosa cada 8 h o
formas graves, donde se concentra la mayor parte de la
tobramicina de 1,5 mg/kg por vía endovenosa cada 12 h)
mortalidad. Las primeras se manifiestan como cuadros
es la pauta generalmente recomendada, aunque su em-
febriles sin signos de afectación sistémica que se au-
pleo debe ser cauteloso por el efecto nefrotóxico de es-
tolimitan espontáneamente o bajo tratamiento médico
tos últimos. La terapia más aceptada actualmente como
en 24 h a 48 h. Las formas inicialmente graves son las
monoterapia es el uso de ureidopenicilinas (piperacilina
que asocian confusión mental, hipotensión, choque o
de 4 g por vía endovenosa cada 8 h), principalmente
fracaso renal. La edad es un factor constante de aumento
en asociación con un inhibidor de la betalactamasa
de la morbimortalidad.
como el tazobactam (4,5 g por vía endovenosa cada
8 h), que son activas frente a la mayoría de los patóge-
Tratamiento
nos biliares. Las cefalosporinas de tercera generación,
El tratamiento de la colangitis aguda se basa en la como la cefotaxime (1 g por vía endovenosa cada 8 h)
combinación de la administración de antibióticos y y las fluoquinolonas, como el ciprofloxacina (200 mg
el drenaje biliar. En todos los casos se deben corregir por vía endovenosa cada 12 h) son otras alternativas,
las alteraciones hidroelectrolíticas y mantener una al igual que los aminoglucósido (gentamicina 240 mg
adecuada hidratación por la tendencia al fracaso renal por vía endovenosa cada 24 h, tobramicina 100 mg
de los casos graves, así como ordenar la realización de por vía endovenosa cada 12 h o amikacina 500 mg por
hemocultivos. vía endovenosa cada 12 h), aunque deben usarse con
Si el paciente no presenta alteraciones hemodinámi- precaución por el efecto nefrotóxico de estos últimos.
cas se ingresa por problemas digestivos si existen datos En los casos graves y si se trata de colangitis tras
de sepsis/choque se indica valoración por unidad de exploraciones instrumentales o cirugía complicada,
cuidados intensivos y cirugía. Ante todo paciente con un debe tenerse en cuenta la infección por seudomona y por
cuadro clínico sugerente, debe hacerse una evaluación anaerobios. Ante estos casos se aconseja metronidazol
de la gravedad y ordenarse la realización de hemocul- (500 mg por vía endovenosa cada 8 h), activo frente a
tivos para adecuar posteriormente la pauta antibiótica. bacteroides asociada a ureidopenicilina o cefalosporina
Debe ser precoz, monitorizándose la tensión arterial, de tercera generación con aminoglucósido.
temperatura, frecuencia cardiaca, diuresis, e incluso En los primeros días, principalmente, se debe rea-
presión venosa central en casos graves. lizar una monitorización estrecha de la respuesta no
Las formas leves responden a un tratamiento con- solo clínica, con desaparición de la fiebre y normalidad
servador con reposición hidroelectrolítica (con glucosa- de constantes como presión arterial y diuresis, sino
lino 1 500 mL y salino isotónico 1 500 mL, en 24 h) y también bioquímica, con reducción de la leucocitosis
antibióticos. Aunque en presencia de obstrucción biliar y normalidad de los parámetros de función renal. Si la
la eliminación biliar de los antibióticos está reducida respuesta es satisfactoria, la duración del tratamiento
o anulada, su administración permite alcanzar concen- se aconseja que sea de siete a 10 días, aunque el régi-
traciones plasmáticas que contrarrestan los efectos del men antibiótico se puede modificar eventualmente en
reflujo colangiovenoso (controlar la bacteriemia). Una función de los resultados del hemocultivo.
vez restablecido el flujo biliar se recupera su excreción, En 85 % de las colangitis se resuelve con esta pauta
primero pasiva, en las primeras 24 h y más tarde la y se puede proceder al tratamiento definitivo de la co-
secreción activa. ledocolitiasis por vía quirúrgica o endoscópica, según
124 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

proceda. En el 15 % restante el cuadro progresa persis- 3Profilaxis


tiendo la fiebre y otros signos de infección, a lo que se
La realización de una colangiografía directa en un
puede añadir el fracaso renal o el choque séptico si no
árbol biliar obstruido conlleva riesgo de provocar una
se descomprime la vía biliar obstruida. Se ha visto que colangitis que está gravada con una elevada mortali-
los pacientes que presentan una colangitis persistente dad. La frecuencia con que ocurre esta complicación
con fiebre mantenida durante tres o más días tienen una varía con la población objeto de estudio, y puede
mayor morbimortalidad que los que responden con ra- alcanzar cifras cercanas a 20 % cuando se realiza una
pidez a los antibióticos, lo que lleva a la recomendación colangiografía meramente diagnóstica en presencia de
de realizar drenaje biliar precoz si no hay una rápida ictericia obstructiva, o ante obstrucciones complejas,
respuesta (24 h a 48 h) al tratamiento médico. como las provocadas por tumores hiliares. Los factores
Drenaje biliar precoz asociados con una mayor incidencia son la presencia
de una obstrucción completa, naturaleza neoplásica
Aunque el tratamiento clásico ha sido el drenaje de esta, existencia de fiebre o leucocitosis previas a
quirúrgico (colecistectomía, coledocotomía, extracción su realización y, principalmente, la falta de un drenaje
de cálculos, lavados, y drenaje biliar trancístico o en T satisfactorio tras la repleción de la vía biliar. Por esto,
de Kher, acompañado o no de un drenaje interno de la siempre que en esas situaciones se realice una colan-
vía biliar), su elevada mortalidad en presencia de sepsis giografía directa, se debe proceder al drenaje inmediato
y los buenos resultados del drenaje no quirúrgico han de la vía biliar para evitar ese riesgo. Se ha recomen-
declinado la balanza a favor de estos últimos. Tanto el dado también llevar a cabo una profilaxis antibiótica
drenaje percutáneo (colangiografía transparietohepá- para contrarrestar el riesgo de bacteriemia durante las
tica) como el endoscópico (colangiopancreatografías maniobras de drenaje. No parece que una dosis única
retrograda endoscópica) son alternativas eficaces al administrada a todos los pacientes que van a ser some-
quirúrgico, pero se prefiere este último por sus meno- tidos a colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
res complicaciones y porque permite habitualmente el sea más eficaz que el placebo, aunque en los estudios
tratamiento definitivo de la coledocolitiasis. evaluados no siempre se han seleccionado pacientes con
El drenaje endoscópico precoz presenta una tasa ictericia obstructiva o sospecha de obstrucción biliar.
de complicaciones y mortalidad significativamente Debe recomendarse el tratamiento antibiótico a todo
inferiores al quirúrgico, por lo que actualmente se paciente con obstrucción que no quede correctamente
considera de elección en el tratamiento de la colangitis drenada tras la colangiopancreatografía retrógrada en-
aguda grave (colecistectomía diferida, electiva, por vía doscópica, continuándolo hasta lograr un drenaje biliar
laparoscópica). Si el estado de la coagulación lo permite completo. Más controvertida es la utilidad de la dosis
se realiza la técnica habitual con esfinterotomía y ex- única previa, parece claro que, en cualquier caso, esta
tracción de los cálculos. Pero incluso con alteraciones solo estaría justificada en pacientes con ictericia obs-
de la coagulación se puede colocar un catéter nasobiliar tructiva o signos de obstrucción biliar significativa. La
o una endoprótesis sin hacer esfinterotomía, demorando pauta puede incluir el empleo de 4 g por vía endovenosa
un tratamiento más definitivo para cuando mejoren las de piperacilina, 1 g por vía endovenosa de cefotaxime,
condiciones del paciente. 1 g por vía endovenosa de cefazolina o 1,5 g por vía en-
dovenosa de cefuroxime administradas 0,5 h a1 h antes
¡Tratamiento quirúrgico de otras causas de la exploración. La quimioprofilaxis con 750 mg de
ciprofloxacina por vía oral se ha mostrado igualmente
– Parasitosis: quistoperiquistectomías totales o parcia-
eficaz con una mejor relación costo-beneficio. En la
les, drenajes externos y exploración de la vía biliar.
colangiografía percutánea se ha observado también
– Estenosis: dilataciones o derivación biliodigestiva.
un mayor riesgo de colangitis, principalmente tras su
– Quiste de colédoco: exéresis y derivaciones bilio-
realización en pacientes con obstrucción maligna, por lo
digestivas.
que en estos casos se aconseja una profilaxis antibiótica
– Enfermedad de Caroli: segmentectomías, lobecto-
similar a la realizada en la colangiografía retrógrada.
mías y trasplante.
– Colangitis esclerosante: colangioyeyunostomía
intrahepática y trasplante. Colangitis recurrentes
– Tumores biliares o pancreáticos: resección y deri- En algunas circunstancias en que existe un com-
vación o drenaje. promiso anatómico o funcional del árbol biliar, los
Capítulo 185. Colangitis 125

episodios repetidos de colangitis pueden suponer un – En una colangitis grave que no responde al tra-
problema de difícil solución. Estas situaciones son, tamiento conservador debe indicarse el drenaje
en unos casos, secuelas de intervenciones sobre la endoscópico urgente (1b A).
vía biliar, como portoenterostomía por atresia biliar, – No parece haber ventajas significativas de unos
hepaticoyeyunostomías, coledocoduodenostomías, métodos de drenaje endoscópico sobre otros en
esfinterotomías o esfinteroplastias. En otros casos más relación con la resolución de la colangitis (2b B).
infrecuentes se deben a otros procesos, como la enfer- – Ante el fracaso del drenaje endoscópico, se reco-
medad de Caroli o la colangitis esclerosante. Varios mienda el drenaje percutáneo antes de considerar
ensayos han valorado el efecto de la antibioterapia de la cirugía urgente (4 C).
mantenimiento en la prevención de estos episodios. En – La profilaxis antibiótica en pacientes con obstruc-
estas circunstancias, considerar la excreción biliar de los ción biliar reduce la incidencia de colangitis poste-
antibióticos a la hora de su elección es más importante rior. Siempre debe seguirse del drenaje endoscópico
que en la colangitis aguda, ya que no hay una obstruc- y debe continuarse en caso de drenaje incompleto
ción significativa asociada y no existe disminución en su hasta que sea satisfactorio (1a A).
eliminación. Como normas generales, los antibióticos – En colangitis recurrentes, la administración cíclica
empleados deben ser activos frente a los patógenos de antibióticos permite reducir la frecuencia de las
biliares habituales, deben ser poco tóxicos, empleados crisis (4 C).
a largo plazo y estar disponibles para administración
por vía oral, entre estos el trimetoprim-sulfametoxazol Bibliografía
(160 mg de trimetoprim y 800 mg de sulfametoxazol
por vía oral cada 12 h), las fluoquinolonas (ciprofloxa- Pang, Y. Y., Chun, Y. A. (2006). Predictors for emergency biliary
descompression in acute cholangitis. Eur J Gastroenterol He-
cina de 500 mg por vía oral cada 12 h) y la asociación patol, 18, 727-731.
amoxicilina-clavulánico (500 mg de amoxicilina y Tanaka, A., Takada, T., Kawarada, Y., et al. (2007). Antimicrobial
125 mg de clavulánico por vía oral cada 8 h) son los therapy for acute cholangitis: Tokio guidelines. J Hepatobiliary
que mejor cumplen estos preceptos y se han mostrado Pancreat Surg, 14, 59-67.
Valsangia, C. P. (2004). Lesiones quirúrgicas de la vía biliar, análisis
eficaces. Se recomienda realizar un tratamiento de tres actual de la terapéutica. Monografía de Graduación en Cirugía
a cuatro meses de duración para posteriormente evaluar Clínica Quirúrgica 3. Universidad de la República. Facultad de
si pueden ser retirados sin que reaparezcan las crisis, Medicina Hospital Maciel, Uruguay.
reinstaurando la terapia en caso contrario. Williams, E. J., Green, J., Beckingham, I., Parks, R., Martin, D.,
Lombard, M., British Society of Gastroenterology. (2008).
Guidelines on the management of common bile duct stones
Resumen de las recomendaciones terapéuticas (CBDS). Gut, 57, 1004-1021.
con nivel de evidencia
científica y grado de recomendación
– En la colangitis aguda se recomienda el tratamiento
con antibióticos eficaces frente a los gérmenes cau-
sales más habituales, especial menteflora entérica
(1c A).
Capítulo 186
Tumores de las vías biliares extrahepáticas
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla
Dr. C. Julián Francisco Ruiz Torres

Los carcinomas biliares son tumores malignos poco K-ras, p21 y factor de crecimiento alfa se sobreexpresan
frecuentes, pero no excepcionales, cuyo pronóstico en el primero y no en el segundo.
es generalmente ominoso a corto plazo por un doble
motivo: su carácter clínicamente silencioso hasta fases Clasificación
avanzadas de invasión tumoral y su extensa invasión
local en áreas de difícil abordaje quirúrgico como el Para facilitar la comprensión terminológica del
hilio hepático y la zona pancreática duodenal. La obs- diagnóstico y los tratamientos a aplicar en los tumo-
trucción al flujo biliar es la consecuencia principal de res del árbol biliar, se acepta que se dividan según su
su desarrollo en estas localizaciones anatómicas y su localización en:
resolución suele mejorar la calidad de vida y prolongar – Tumores de la vesícula biliar.
la supervivencia aun en ausencia de resección tumoral. – Tumores de la ampolla de Váter.
Alrededor de 50 % de los casos de obstrucción – Tumores de la vía biliar principal, que se subdivide
biliar extrahepática tienen una causa no calculosa, los en tres tercios:
más frecuentes son tumores malignos. La mayoría de • Tercio superior: en la convergencia de los canales
los tumores se originan en la cabeza del páncreas, a biliares derechos e izquierdos con el conducto
través de la que discurre normalmente el colédoco hepático común, justo hasta la inserción aparente
distal. Tumores menos frecuentes pueden originarse del conducto cístico. Se han utilizado muchos
en la ampolla, el conducto biliar, la vesícula biliar o el sinónimos para referirse a estos: colangiocarci-
hígado. Menos frecuente todavía es que los conductos nomas, cánceres de la confluencia biliar superior,
se obstruyan por tumores metastásicos o ganglios estenosis maligna de la confluencia, tumor de
de un linfoma. Los tumores benignos, generalmente Klatskin, cáncer del hilio, entre otros.
papilomas o adenomas vellosos, se presentan también • Tercio medio: hasta la cabeza del páncreas.
en los conductos biliares y pueden causar obstrucción. • Tercio distal: segmento intrapancreático hasta la
Aunque ni hay evidencias de una susceptibilidad ampolla de Váter.
familiar a los tumores biliares ni se han descrito alte-
raciones genéticas que predispongan a su desarrollo, En Estados Unidos y otras naciones occidentales,
los estudios de biología molecular y celular en tejido las neoplasias biliares son poco comunes. Sin em-
tumoral revelan datos sobre su oncogénesis, y parece bargo, sus tasas de prevalencia son elevadas, porque
que algunos pueden tener valor pronóstico, por ejemplo, son las principales causas de muerte por cáncer. En
las mutaciones del codón 12 del oncogén K-ras en los Cuba se comportan de manera similar que en el resto
cánceres epiteliales digestivos y casi universales en del mundo. Los cánceres biliares son muy agresi-
el de páncreas, solo se detectan en 50 % de tumores vos con pronósticos sombríos. A menudo estos son
malignos biliares, pero les confieren un pronóstico peor diagnosticados en una etapa avanzada y, en general,
que cuando están ausentes. Por otra parte, los estudios son resistentes a la quimioterapia. Los avances en la
inmunohistoquímicos en tejido tumoral revelan que el comprensión de su patogénesis molecular ha permi-
cáncer de vesícula y el de vías biliares tienen un origen tido el desarrollo de nuevos modelos experimentales
molecular distinto, pues ciertas proteínas como la p39, y terapias dirigidas.
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 127

Tumor de la vesícula biliar en caso de hallarse el tumor. Esta es la forma de


mejor pronóstico, pues el tumor se ha manifestado
El cáncer de la vesícula biliar es la neoplasia más precozmente al ocluir el cístico o se ha descubierto
frecuente de las vías biliares y la quinta más común de modo casual en una vesícula extirpada por en-
del tubo digestivo. El 80 % de los pacientes con car- fermedad litiásica.
cinoma de vesícula biliar tienen colelitiasis, lo que – Colecistitis crónica: cerca de la mitad de los pa-
sugiere una relación etiológica entre la presencia cientes con cáncer de vesícula tienen antecedentes
de cálculos y la posterior degeneración maligna del de colecistitis crónica. En general existe un cambio
epitelio vesicular. sintomático reciente, con aumento del dolor y apari-
ción de nuevos síntomas como ictericia y síndrome
Epidemiología
tóxico.
Su prevalencia en material de autopsia es 0,5 % y – Obstrucción maligna de las vías biliares: uno de
su incidencia anual es de 2,5 a 4,4 casos por 100 000 cada tres pacientes con cáncer de vesícula presenta
personas. Se encuentra cuatro veces más en mujeres ictericia y síndrome tóxico.
que en varones, en concordancia con la frecuencia – Síndrome tumoral: un porcentaje reducido de pa-
relativa de colelitiasis en ambos sexos. Su prevalencia cientes presentan un síndrome tóxico inespecífico
es también mayor en los grupos de población con ele- o sobreañadido a manifestaciones específicas de la
vada incidencia de colelitiasis, como las tribus indias extensión del tumor a órganos adyacentes (hígado,
del sudoeste norteamericano y los chilenos. Para el estómago, duodeno, colon, y peritoneo).
paciente con colelitiasis, sin embargo, el riesgo de
degeneración maligna de la vesícula es pequeño, con Exámenes complementarios
una incidencia de 1 %. Por razones desconocidas,
Los datos de laboratorio pueden demostrar anemia
este riesgo es sustancialmente mayor en pacientes
y evidencia de colestasis o lesión hepática ocupante
con vesícula calcificada (vesícula de porcelana), por
de espacio (elevación de las fosfatasas alcalinas y de
lo que en este grupo está indicada la colecistectomía
la gamma glutamil transpeptidasa, con o sin hiperbili-
profiláctica. La edad media de presentación clínica
rrubinemia conjugada). Con frecuencia los antígenos
oscila alrededor de los 70 años.
tumorales CEA y CA 19-9 están elevados.
La ecografía (Fig. 186.1) puede revelar el tumor
Diagnóstico clínico
de vesícula. Entre 70 % y 80 % coexisten con litia-
La falta de semiología específica impide la detección sis y colecistitis crónica, calculándose que 25 % de
del carcinoma de vesícula en un estadio precoz y, por las vesículas con cálculos en porcelana presentan un
tanto, resecable quirúrgicamente. adenocarcinoma asociado. Se resumen los aspectos
El cuadro clínico suele ser superponible al de la ecográficos que definen la existencia de un tumor en
colelitiasis y solo cuando aparecen manifestaciones la vesícula biliar:
claramente tumorales puede sospecharse el diagnóstico – Tumor sólido que ocupa y sustituye a la vesícula
correcto, este se obtiene solo en una minoría de casos (40 % a 65 %).
antes de la cirugía. – Masa polipoidea focal que protruye en la luz (15 %
El síntoma más frecuente es el dolor (75 %), segui- a 20 %).
do de síndrome tóxico (40 %) e ictericia (35 %). La – Engrosamiento focal o difuso de la pared vesicular
exploración física puede revelar una masa dolorosa (5 % a 30 %).
en el hipocondrio derecho, en cuyo caso la lesión es – Presencia de cálculos (76 %).
indefectiblemente irresecable en el acto quirúrgico. – Infiltración hepática vecina (73 %).
El cáncer de vesícula biliar se manifiesta en general – Metástasis hepática a distancia (70 %).
con uno de estos cuatro síndromes clínicos: – Linfoadenopatía portal (28 %).
– Colecistitis aguda: la presentan 15 % de los pacien- – Linfoadenopatías peripancreáticas (23 %).
tes. Es causada por obstrucción tumoral o litiásica – Ascitis (6 %).
del cístico. El tumor puede pasar inadvertido en
el acto quirúrgico si no se abre e inspecciona la Datos similares pueden obtenerse con la tomografía
vesícula extirpada, lo que es importante para poder axial computarizada. El diagnóstico de certeza, sin em-
revisar el lecho de la vesícula y los ganglios hiliares bargo, es muy difícil antes de la intervención quirúrgica.
128 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Tratamiento
Excepto en los casos con enfermedad neoplásica
avanzada y estado general precario, los pacientes con
neoplasia de vesícula son operados con el diagnósti-
co de colecistitis aguda, ictericia obstructiva o masa
abdominal, efectuándose por lo común el diagnóstico
correcto en la intervención. Los casos potencialmente
curables por resección son escasos: se limitan a tumores
contenidos en la vesícula o que se extienden solo a áreas
extirpables. En pacientes con enfermedad localizada,
el procedimiento de elección es la colecistectomía con
resección en cuña del lecho vesicular y de los ganglios
pericoledocales, la hepatectomía reglada asociada con-
lleva una alta mortalidad, pero es curativa en algunos
casos. En el caso de ictericia tumoral, el drenaje biliar
Fig. 186.1. Tumor de vesícula biliar (flecha roja). mediante catéter endoscópico es el método paliativo
de elección.
Diagnóstico histológico Existe poca experiencia con la radioterapia o la
quimioterapia, pero su utilidad parece limitada.
El aspecto macroscópico del carcinoma de vesícula
suele consistir en el engrosamiento difuso de la pared
del órgano (70 % de los casos), con infiltración de las Metástasis a la vesícula
estructuras adyacentes, la forma polipoide con protru- Las metástasis alcanzan a la vesícula por vía hemá-
sión en la luz de la vesícula es menos frecuente (30 %). tica a partir de tumores del páncreas, hígado, colon,
El tipo histológico más común es el adenocarcinoma. ovario, riñón, mama y melanoma (Figs. 186.2 y 186.3).
El cáncer de vesícula es un tumor de crecimiento Su diagnóstico es por ecografía, donde se aprecian
rápido que, cuando ocasiona manifestaciones clínicas, estos signos:
ya ha invadido extensamente los tejidos contiguos en – Engrosamiento focal de la pared.
la mayoría de los casos. La neoplasia tiende a invadir – Masa intraluminal.
localmente, apareciendo metástasis a distancia solo – Pérdida de la definición de la pared vesicular.
en las fases tardías de la enfermedad. La extensión – Casi nunca se asocia a litiasis.
se realiza por vía linfática a los ganglios pericísticos
y pericoledocales, los que pueden crecer lo suficiente
para comprimir la vía biliar principal y causar ictericia
Carcinoma ampular
obstructiva, por vía intraperitoneal se extiende local- Los carcinomas del ampulla de Váter pertenecen
mente al hígado, vísceras huecas, mesenterio o pared a la familia de los carcinomas periampulares. Esta fa-
abdominal, y por vía intraluminal, solo en la minoría de milia incluye el carcinoma del duodeno, el carcinoma
tumores de tipo polipoide, puede causar síntomas por del ámpula de Váter, el carcinoma del conducto biliar
obstrucción del cístico en una fase precoz, lo que de- distal y de páncreas.
termina una mayor resecabilidad en el acto quirúrgico. Los carcinomas ampulares son la segunda forma
Debido a la extensa invasión local, la mayoría de más común de carcinomas periampulares después del
estos tumores son irresecables. Los pacientes presentan cáncer de cabeza de páncreas. La distinción entre las
grandes masas con invasión del hilio hepático, metás- diferentes formas es importante porque este tipo de
tasis regionales y carcinomatosis peritoneal. afección a menudo se diagnostica antes que los demás
y por lo tanto en una etapa resecable, resultando así un
Pronóstico mejor pronóstico.
El pronóstico del cáncer de vesícula es desfavorable.
La mortalidad operatoria es elevada (15 %) y la supervi-
Epidemiología
vencia a los cinco años es solo de 4 %, y ha fallecido el Los carcinomas ampulares son raros, acontecen en
90 % de los pacientes al cabo de un año del diagnóstico. menos de 1 % de todos los cánceres gastrointestinales
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 129

dencia hispana y asiática. Los afroamericanos tienen


tasas de incidencia baja en Estados Unidos.

Etiología
Aunque la etiología de este tipo de carcinomas
sea desconocida en la mayoría de los casos, varias
condiciones han tenido que ver con esta malignidad,
mostrados principalmente en informes de reportes de
casos o en pequeñas series. La poliposis adenoma-
tosa familiar es un factor de riesgo importante para
el desarrollo del carcinoma ampular, con un riesgo
relativo de 124.
El carcinoma periampular es la segunda causa
más común de muerte después del cáncer del colon
en pacientes con poliposis adenomatosa familiar. Por
Fig. 186.2. Metástasis en la vesícula biliar por carcinoma lo general este tumor surge más tarde que el carcino-
de mama. ma colorrectal en este grupo de paciente, pero más
temprano en comparación con carcinomas ampulares
esporádicos. El pesquisaje de las lesiones gastrointes-
tinales superiores (pólipos o carcinoma) con intervalos
regulares de seis meses a cuatro años, según el nivel
de poliposis duodenal se recomienda en pacientes con
poliposis adenomatosa familiar.
Del mismo modo, las tasas elevadas de este car-
cinoma se han descrito en pacientes con el síndrome
de Gardner, una variante de poliposis adenomatosa
familiar. El cáncer colorrectal hereditario no polipoideo
no parece predisponer al carcinoma ampular. Otras
enfermedades genéticas reportadas que predisponen al
desarrollo de este cáncer incluyen la neurofibromatosis
tipo I y el síndrome de Muir-Torre. En lo que respecta
al colangiocarcinoma, se ha reportado que la infección
crónica del hígado es un factor de riesgo para el carci-
noma ampular.

Clasificación
Macroscópicamente los carcinomas ampulares se
clasifican en los tres subtipos:
– Protruido intramural (intraampular).
– Protruido extramural (periampular).
Fig. 186.3. Metástasis en la vesícula biliar por melanoma. – Ampular ulcerado: por lo general se diagnostica en
una fase avanzada y tiene los niveles más altos de
y 4 % a 8 % de los carcinomas periampulares. La in- metástasis de ganglios linfáticos.
cidencia anual se ha estimado que es de 0,6 por 100
000 habitantes. Patogenia
La incidencia pico ocurre en la séptima década de
El ámpula de Váter es un área anatómicamente
la vida. Hay un leve predominio masculino, con una
compleja que consiste en el canal común pancreático
proporción masculino-femenino de 1,48:1. Se ha ob-
biliar, el conducto biliar distal y el conducto pancreático
servado heterogeneidad racial, la gran mayoría de los
pacientes son blancos, seguido de pacientes de ascen- principal (Fig. 186.4).
130 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

por lo tanto, es mayor en el momento del diagnóstico.


Los pacientes no ictéricos pueden presentarse con
colangitis de tipo bacteriana. Raramente los pacientes
tienen heces blanquecinas a consecuencia de la com-
binación de heces acólicas que resultan de obstrucción
del conducto de la bilis y hemorragia del tumor. Cuando
la colangitis obstructiva se sospecha, la evaluación
diagnóstica es similar a las de otras neoplasias biliares.

Exámenes complementarios
Por lo general los carcinomas ampulares son diag-
nosticados por la endoscopia sobre la base de su aspecto
macroscópico y resultados en muestras de biopsias. Las
pruebas diagnósticas deben ser dirigidas hacia una eva-
luación de la resecabilidad y la búsqueda de metástasis.
En cuanto a otros carcinomas biliares y periampula-
Fig. 186.4. Áreas anatómicas complejas de la ámpula de res, las técnicas radiológicas como la tomografía axial
Váter. computarizada y la resonancia magnética nuclear se
usan comúnmente en este sentido. En la colangioreso-
La mayoría de los carcinomas ampulares siguen una nancia magnética nuclear, el carcinoma ampular por
secuencia adenoma-carcinoma. En 30 % a 91 % de los lo general se ve como una discreta masa hipodensa
carcinomas ampulares, se encuentra tejido adenomatoso en imágenes T2. A veces el tumor puede presentarse
residual. Aunque las lesiones precursoras se pueden como un engrosamiento irregular alrededor del con-
desarrollar tanto del tejido del tipo intestinal como del ducto de la bilis o abultamiento en el duodeno. Con
pancreático biliar, los carcinomas del tipo intestinal frecuencia se observa la dilatación tanto del conducto
típicamente se desarrollan de adenomas, mientras que biliar como de los conductos pancreáticos (“signo del
los pancreáticos biliares y los carcinomas que se ulceran doble conducto”) o solo es observado el conducto de
a menudo carecen de una lesión precursora. biliar, la dilatación solo del conducto pancreático se
En el nivel molecular, una frecuencia aumentada de ve raramente.
mutaciones K-ras se ha observado en 24 % a 47 % de La ecoendoscopia se usa en la evaluación preope-
los tumores y es más común en el tipo intestinal que ratoria. Su exactitud para descubrir la invasión de ór-
en el tipo pancreático biliar. También la sobreexpresión ganos contiguos es de 80 % a 90 %, y su sensibilidad
p53 se ha observado en 46 % de los tumores y se piensa y precisión para descubrir la invasión vascular son
este asociado con los carcinomas ampulares ulcerados. 73 % y 90 %, respectivamente.
En estudios inmunohistoquímicos realizados se ha ob-
servado expresión aberrante de los reguladores del ciclo Diagnóstico histológico
celular (p21WAF1/CIP1, p27Kip1, p16INK4, cyclin
Consecuente con su heterogeneidad anatómica, el
D1, el tipo 8, y cyclin E y la proteína retinoblastoma
ámpula incluye varios tipos diferentes de histología ce-
[pRb]).Estos cambios son similares a los vistos en los
lular, tales como epitelios del canal común pancreático
carcinomas colorrectales y los carcinomas pancreáti-
biliar, conducto biliar, conducto pancreático o mucosa
cos. Son necesarias más investigaciones para entender
duodenal, glándulas de Brünner y acinis pancreáticos
el desarrollo de estos tumores en un nivel molecular.
aberrantes en la pared del conducto biliar.
El sitio más común de atipia celular se encuentra
Diagnóstico clínico
en el área del canal común pancreático biliar, seguido
Como otras neoplasias malignas biliares y periam- del conducto pancreático principal, epitelio duodenal y
pulares, el carcinoma ampular se presentan inicialmente en las glándulas de Brunner. El 75 % de las neoplasias
con ictericia de tipo obstructiva en 70 % a 82 % de los ampulares son adenocarcinomas, el 20 % son adenomas
casos. A causa de su posición anatómica, la colestasis se benignos y el 5 % tumores neuroendocrinos, el resto
desarrolla en una etapa más temprana que en otro tipo de incluye tipos extraños como los mucinosos, los de célula
tumor biliar o pancreático y el grado de resecabilidad, en anillo de sello y carcinomas indiferenciados. Histopa-
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 131

tológicamente 90 % de los adenocarcinomas ampulares Se demostró que el estadiamiento T era predictivo


se puede clasificar en los tipos pancreático biliar o tipos de la supervivencia en un análisis univariado, pero no
intestinales. Por estudios inmunohistoquímicos, los dos en un análisis multivariado. Los predictores indepen-
tipos pueden ser distinguidos por una expresión elevada dientes de la supervivencia por el análisis multivariado
de citokeratin 7 y una carencia de apomucina intestinal aleatoria fueron la invasión linfovascular, la invasión
en el tipo de pancreático biliar y en el tipo intestinal perineural, el estadio III o mayor y el subtipo pancreáti-
la citokeratin 20, así como expresión de la apomucina co biliar. Varios estudios han confirmado el significado
intestinal. Las frecuencias de los dos tipos histológicos, de la participación ganglionar en la predicción de la
así como su correlación con la invasión, metástasis gan- supervivencia.
glionar y pronóstico, difieren en varios estudios, algunos
indican que la frecuencia es más alta y el pronóstico es Tratamiento
peor para el tipo pancreático biliar, mientras que otros Al igual que las otras neoplasias malignas biliares,
estudios que encuentran resultados opuestos. la resección quirúrgica es el único tratamiento curativo
El análisis inmunohistoquímico ha mostrado expre- para los carcinomas ampulares. Sin embargo, 77 % a
sión alta de antígeno carcinoembrionario y CA 19-9 88 % de este tipo de carcinomas son resecables en el
en el tumor. momento del diagnóstico.
En los carcinomas periampulares relativamente lo-
Pronóstico calizados puede intentarse la pancreatoduodenectomía
El pronóstico del carcinoma de las vías biliares es radical (operación de Whipple), que se trata de una
malo, con una supervivencia global a los cinco años intervención notablemente agresiva y que se acompaña
que no supera 5 %. El poco frecuente adenocarcinoma de una considerable mortalidad, por lo que solo es acon-
duodenal es el que tiene más posibilidades de resección sejable en casos seleccionados y con finalidad curativa.
curativa, con una supervivencia a los cinco años de Aunque los resultados son excelentes en ausencia de
23 %. El grado de diferenciación histológica del tumor metástasis ganglionar, con tasas de supervivencia de
también es importante, en las lesiones bien diferen- cinco años de 68 % a 78 %. En presencia de metástasis
ciadas como el carcinoma esclerosante, no es rara la ganglionar, el pronóstico se empeora considerablemen-
supervivencia prolongada. te, con tasas de supervivencia de cinco años de 16 % a
El pronóstico se evalúa según el estadiamiento del 25 %. Se reporta que la participación ganglionar es un
tumor. factor pronóstico adverso y se recomienda el análisis
Los carcinomas ampulares se clasifican según la inmunohistoquímico de los ganglios resecados.
clasificación TNM: En los tumores irresecables de esta zona, que son
– Tx: el tumor primario no puede ser. la mayoría, tradicionalmente el cirujano se ha limitado
– T0: no evidencia de tumor primario. a restablecer el flujo de bilis al intestino mediante una
– Tis: carcinoma in situ. coledocoenterostomía y a prevenir o paliar la obstruc-
– T1: tumor limitado al ámpula de Váter o al esfínter ción duodenal con una gastroenterostomía. También es
de Oddi. poco frecuente la resección curativa en los tumores de
– T2: tumor que invade la luz duodenal. los segmentos medio y superior, donde la técnica qui-
– T3: tumor que invade al páncreas. rúrgica de drenaje es la anastomosis de la bifurcación
– T4: tumor que invade la grasa peripancreática y de los conductos hepáticos al intestino: hepaticoyeyu-
órganos o estructuras vecinas. nostomía en el primer caso y la colangioyeyunostomía
– N0: no metástasis ganglionar regional. intrahepática o canulación con un catéter protésico
– N1: hay metástasis en ganglios linfáticos regionales. interno en el segundo.
– M0: no existe metástasis a distancia. El propósito del tratamiento paliativo es descom-
– M1: eExiste metástasis a distancia. primir el árbol biliar y restablecer el flujo de bilis al
– Grupos estadiamiento: intestino. La rápida resolución de la ictericia y del
• Estadio I: T1 N0 M0. prurito que sigue a la institución del drenaje biliar suele
• Estadio II: T2 N0 M0. acompañarse de una notable mejoría clínica durante los
• Estadio IIIA: T3 N0 M0. pocos meses de vida que le quedan al paciente.
• Estadio IIIB: T4 N0 M0. La experiencia de los últimos 20 años en el empleo
• Estadio IIIC: cualquier T N1 M0. de técnicas no quirúrgicas para descomprimir las vías
• Estadio IV: cualquier T, cualquier N M1. biliares mediante prótesis de drenaje externo o interno,
132 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

introducidas por vía transhepática, o de drenaje interno Existe, sin embargo, un tipo tumoral muy diferenciado
colocadas por vía transendoscópica, ha llevado a la y con un gran componente desmoplásico, difícil de
conclusión de que los catéteres (stents) de drenaje in- distinguir de la estenosis benigna de las vías biliares,
terno colocados por vía endoscópica son el tratamiento en que no son raras las supervivencias prolongadas sin
paliativo de elección. resección si se consigue paliar la obstrucción biliar.
La canulación endoscópica de la vía biliar tumoral Se han descrito varios factores etiológicos posibles
tiene una mortalidad nula y una morbilidad inmediata en general. La asociación del carcinoma de las vías
mínima en comparación con las prótesis transhepáticas biliares con la colelitiasis es menor (30 %) que en el
y la derivación quirúrgica. Sin embargo, su morbilidad cáncer de vesícula y la incidencia es similar en ambos
tardía es considerable porque los catéteres de plástico sexos, por lo que es menos probable que exista una
tienden a obstruirse y con frecuencia tienen que ex- relación causal.
traerse para colocar uno nuevo más de una vez en la La infestación parasitaria de las vías biliares, fre-
corta sobrevida que tienen estos pacientes (de uno a cuente en Oriente, se asocia a una elevada frecuencia de
seis meses en general). Este problema se obvia en gran cáncer biliar. La incidencia de estos tumores aumenta
parte con el uso de prótesis metálicas autoexpandibles, en la colitis ulcerosa, donde puede presentarse en
cuyo costo es mucho mayor y solo deben insertarse si edades más tempranas. También se ha descrito su aso-
se espera una supervivencia de al menos seis meses. ciación a enfermedad inflamatoria del intestino, quistes
La papilectomía endoscópica limitada se reporta congénitos de las vías biliares y antecedente laboral
como nueva modalidad terapéutica, pero no se reco- de trabajo con disolventes orgánicos, principalmente
mienda, porque las tasas de recidiva son más altas que tricloroetileno. La diabetes y el tabaquismo duplican el
con la pancreatoduodenectomía. riesgo. Aunque en la mayoría de casos no hay un factor
No existen datos concluyentes de que la radioterapia etiológico demostrable, existe una elevada prevalencia
paliativa, sea irradiación externa o interna con iridio de anomalías de la unión coledocopancreática, lo que
intraductal, pueda prolongar la supervivencia. Por otra sugiere que el reflujo pancreático puede ser importante
parte, existe poca experiencia con quimioterapia en los en la carcinogénesis.
tumores biliares. La quimioterapia y la radioterapia Los tumores se originan en el colédoco o conducto
no se han evaluado en pruebas controladas aleatorias. hepático común y, rara vez, en el cístico. En la dis-
Unos estudios han usado 5-fluorouracil y radiación tribución de los tumores según su localización en las
como terapia adyuvante en pacientes con la metástasis vías biliares predominan los del hepático común y
ganglionar y se han reportado una mejor supervivencia. de la bifurcación. Sin embargo, en muchos casos es
El tratamiento paliativo se debe dirigir al alivio de imposible determinar su origen debido a la extensa
complicaciones asociadas por el tumor con el objetivo infiltración del hilio hepático que lo caracteriza. Los
de optimizar la calidad de vida del paciente. La coles- tumores son casi siempre adenocarcinomas, algunos
tasis obstructiva es una causa principal de morbilidad contienen escasas células tumorales en el seno de una
y puede ser, por lo general, tratada paliativamente por intensa reacción desmoplásica, por lo que es difícil
la colocación endoscópica o percutánea de prótesis efectuar el diagnóstico histológico, incluso con múl-
biliares o por derivaciones quirúrgicas similares a las tiples biopsias. Estos casos de carcinoma esclerosante
realizadas para otras neoplasias malignas biliares. pueden ser indistinguibles de la estenosis benigna. En
ausencia de cirugía previa de las vías biliares, toda es-
Tumores de la vía biliar principal tenosis focal del árbol biliar es sospechosa de neoplasia
y debe tratarse como tal.
A pesar de que su incidencia es inferior a la del car-
cinoma de vesícula, los tumores malignos de las vías
Colangiocarcinoma de las vías biliares
biliares extrahepáticas no son tan poco frecuente (preva-
lencia en autopsias de 0,4 %), y debe considerarse en el Es un carcinoma epitelial con características diferen-
diagnóstico diferencial de toda ictericia colestásica que ciadas del epitelio biliar que surge del árbol intrahepá-
se presenta sin fiebre a partir de los 50 años de edad. Al tico y biliar extrahepático. Es el tumor más común de
igual que el cáncer de la vesícula biliar, los tumores de los conductos biliares y la segunda neoplasia hepática
las vías biliares tienden a invadir extensamente los teji- maligna primaria más común (después del carcinoma
dos adyacentes en fases precoces de la enfermedad, por hepatocelular). Desde 1970, la incidencia ha aumentado
lo que el tratamiento quirúrgico raras veces es curativo. considerablemente en las sociedades occidentales.
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 133

Epidemiología colangiocarcinoma son masculinos. A nivel mundial,


el promedio de edad al diagnóstico es superior a los
El colangiocarcinoma es un cáncer poco común
50 años. En los países occidentales industrializados la
que representa menos de 2 % de todas las neoplasias
mayoría de los casos se diagnostican en torno a los 65
malignas. Es la novena malignidad gastroenterológica
años y es raro antes de los 40 años, excepto en pacientes
más común y la segunda malignidad primaria hepática
con colangitis esclerosante primaria.
y biliar más frecuente. Las enfermedades malignas
hepatobiliares representan 13 % y 3 % del total de
Clasificación
mortalidad por cáncer en el mundo y en Estados Uni-
dos 10 % a 20 % de estas muertes son causadas por La clasificación del colangiocarcinoma de los tipos
colangiocarcinoma. intrahepático y extrahepático se basa en las diferencias
Las tasas mundiales de incidencia de colangiocar- en la anatomía, etiología, patogenia, características
cinoma son heterogéneas. La mayor incidencia se ob- moleculares y tratamiento.
serva en el sudeste de Asia, con tasas de hasta el 96 por Los conductos biliares de segundo orden son el
100 000 habitantes y la incidencia más baja se obser- margen anatómico para la distinción entre estos dos
va en Australia, con tasas tan bajas como del 0,1 por subgrupos.
100 000 habitantes. En Estados Unidos las tasas de Los colangiocarcinomas extrahepáticos acontecen
incidencia son del 0,95 por 100 000 habitantes para el en 80 % y 90 % de estos cánceres y pueden subdividir-
colangiocarcinoma intrahepático y del 0,82 por 100 000 se en cánceres biliar hiliar y del conducto biliar distal
para el colangiocarcinoma extrahepático. Las diferen- (colédoco).
cias étnicas en la incidencia de colangiocarcinoma se El colangiocarcinoma hiliar, también referido como
han observado con las tasas más altas en los pacientes tumor de Klatskin, se describe clínicamente de acuerdo
de origen hispano y la más baja en los afroamericanos. con la clasificación de Bismuth-Corlette en los tipos I
Desde la década de los 80 del siglo xx, las tasas de a IV (Fig. 186.5):
incidencia ajustadas por edad del colangiocarcinoma – Tipo I: el tumor implica el conducto hepático común
intrahepático han aumentado, mientras que las del por debajo de la unión de los conductos hepáticos
colangiocarcinoma extrahepático se han mantenido derecho e izquierdo.
estables, la causa del aumento global de la incidencia – Tipo II: el tumor implica la unión o confluencia de
es desconocida. De 52 % a 54 % de los pacientes con los conductos hepáticos derecho e izquierdo.

Fig. 186.5. Clasificación de Bismuth-Corlette del colangiocarcinoma hiliar (Klatskin).


134 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

– Tipo III: el tumor implica el hepático común o la colangiocarcinoma, mientras que la colangitis piógena
unión de los conductos hepáticos derecho e iz- recurrente lleva 10 % de riesgo para el desarrollo de un
quierdo, si se extienden hasta el conducto hepático colangiocarcinoma. La colangitis bacteriana recurrente
derecho se clasifica IIIa y si se extienden hasta el en el transcurso de los procedimientos de drenaje bi-
conducto hepático izquierdo se denomina tipo IIIb. liar-entéricos también se ha asociado con el desarrollo
– Tipo IV: el tumor es de tipo multifocal e implica la de colangiocarcinoma. Los carcinógenos tales como el
confluencia biliar y se extienden hasta los conductos thorotrast (usado como un agente de contraste radioló-
hepáticos derecho e izquierdo. gico en el pasado) y las dioxinas se han asociado con
un mayor riesgo de colangiocarcinoma. La hepatitis C
La evolución natural del colangiocarcinoma es y cirrosis se consideran también posibles factores de
agresiva, con una supervivencia media de menos de 24 riesgo para el colangiocarcinoma.
meses después del diagnóstico. El único tratamiento po-
tencialmente curativo es la cirugía. Desafortunadamente,
la mayoría de los pacientes son diagnosticados en una Patogenia
etapa avanzada donde la cirugía curativa no es efectiva. Las asociaciones etiológicas, así como datos experi-
mentales, proporcionan evidencia de que la inflamación
Etiología y los ácidos biliares son factores claves en la patogé-
La etiología de colangiocarcinoma es desconocida. nesis molecular del colangiocarcinoma.
Varios factores de riesgo se han identificado: La inflamación proporciona un microambiente que
– Procedimientos de drenajes bilio-entéricos. promueve la transformación maligna de la vía biliar
– Enfermedad de Caroli. asociada a células, tales como los colangiocitos, las
– Quistes del colédoco. células madre biliares o las células epiteliales dentro
– Cirrosis. de las glándulas peribiliares. En un nivel molecular,
– Infección con Clonorchis sinensis. el aumento de las concentraciones tisulares de inter-
– Hepatitis C. leuquinas, ácidos biliares y factores de crecimiento
– Colangitis piógena recurrente (hepatolitiasis). puede conducir a la inactivación funcional de genes de
– Infección con Opisthorchis viverrini. reparación del ADN y genes supresores de tumores y
– Colangitis esclerosante primaria. promover la expresión de los protooncogenes.
– Sustancia de contraste thorotrast. Las interleuquinas estimulan la expresión inducible
– Toxinas: dioxinas, clorhidrato de polyvinyl, aflato- de la sintetasa del óxido nítrico en las células epiteliales,
xinas, nitrosaminas entre otras. lo que resulta en aumento de los niveles intracelulares de
óxido nítrico y especies reactivas de óxido de nitrógeno.
– Fumar.
El óxido nítrico y las especies reactivas de óxido de ni-
– Portadores crónicos tifoideos.
trógeno interactúan con el ADN celular y las proteínas y
por lo tanto dar lugar a mutaciones en el ADN y roturas
Estos factores de riesgo se caracterizan por su aso-
de la cadena, con la inactivación de las proteínas de repa-
ciación con la inflamación y la colestasis. La colangitis
ración del ADN. Una variedad de diferentes mutaciones
esclerosante primaria es uno de los factores de riesgo
oncogénicas se han descrito en el colangiocarcinoma
más comunes. En pacientes con colangitis esclerosante
(Tabla 186.1). Sus frecuencias difieren, dependiendo de
primaria, el índice de frecuencia anual de colangiocar-
la localización anatómica, etapa, el tipo y la etiología del
cinoma es 0,6 % a 1,5 %, y la tasa de prevalencia global
tumor y el origen étnico de la paciente.
del colangiocarcinoma es 5 % a 15 %. En la mayoría de
los pacientes con colangitis esclerosante primaria en el Diagnóstico clínico
que se desarrolla un colangiocarcinoma, el diagnóstico
se hace dentro de los seis meses y dos años del diagnós- La primera manifestación clínica del cáncer de las
tico de la colangitis esclerosante primaria. Los factores vías biliares es la ictericia obstructiva (90 % a 98 %),
de riesgo de colangiocarcinoma incluyen infecciones que puede ir precedida de prurito. Suele coexistir un
biliares con Opisthorchis viverrini y Clonorchis sinen- síndrome tóxico. El cólico biliar y la colangitis son
sis, los que son endémicos en Asia oriental. poco frecuentes, por lo que se trata generalmente de
Las malformaciones biliares tales como la enfer- una ictericia indolora y que evoluciona sin fiebre. Sin
medad de Caroli y los quistes del colédoco se asocian embargo, no es raro que exista algún tipo de dolor sordo
con un riesgo de 10 % a 15 % para el desarrollo de un e inespecífico en el hemiabdomen superior.
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 135

Tabla 186.1. Variedad de diferentes mutaciones notable de la fosfatasa alcalina y de la gamma glutamil
oncogénicas descritas en el colangiocarcinoma transpeptidasa y mínima hiperbilirrubinemia durante
largos periodos. La clínica sugiere una colestasis intra-
Mecanismo Vías y gen causante en la
patogénico disregulación maligna
hepática e incluso la laparotomía puede inducir a error,
al descubrirse una vía biliar principal y una vesícula
Proliferación. Interleuquina-6, interleuquina-6 receptor
(gp130) colapsadas y sin señales de tumor por estar este escon-
Factor de crecimiento de hepatocito/c- dido en el hilio hepático. La palpación del hilio puede
Met revelar solo una pequeña estenosis focal del conducto
ErbB2 hepático común o de uno de los dos hepáticos, sin
K-ras
BRAF
evidencia externa de neoplasia. Si bien estos tumores
son en general extirpables, la supervivencia puede ser
Evasión de la Ciclooxigenasa-2
apoptosis Caspase-9 prolongada con tratamiento paliativo.
Mcl-1 En la exploración física hay ictericia y con fre-
bcl-2 cuencia se palpa una hepatomegalia de consistencia
Bcl-XL aumentada, lisa e indolora. No hay esplenomegalia,
Evasión senescente Telomerase excepto si la obstrucción biliar ha persistido durante
Desregulación del Cyclin D1 un tiempo suficiente para causar una cirrosis biliar
ciclo celular p21waf1/cip1 secundaria. En la obstrucción tumoral del colédoco,
p27kip1 habitualmente existe distensión de la vesícula biliar,
pRb que puede ser palpable (signo de Courvoisier). Este es
p53
mdm-2
un signo fiable de obstrucción neoplásica de las vías
DCP4/Smad4 biliares, pero su ausencia no la descarta: la vesícula
p16INK4a puede ser de localización subhepática y, por tanto,
Metástasis/invasión E-cadherin inaccesible a la palpación, o bien el cístico puede estar
α/β-catenin ocluido por otras causas. Además, los tumores del con-
Aspartyl (asparaginyl) β-hydroxylase ducto hepático común no distienden la vesícula biliar.
WISP1v
Matrix metalloproteinases
Exámenes complementarios
Angiogénesis. Factor de crecimiento del endotelio
vascular Las pruebas de laboratorio de colestasis indican
Factor de crecimiento transformador beta obstrucción biliar, la fosfatasa alcalina, la bilirrubina
total y directa, la gamma glutamil transpeptidasa y las
En estadios avanzados puede presentarse con sínto- amino transferasas pueden estar en cifras normales o
mas diversos como anorexia, astenia, pérdida de peso, muy ligeramente elevadas. Si la obstrucción es muy
dolor en hipocondrio derecho, sudoración nocturna y prolongada puede existir déficit en la absorción de
hepatomegalia. Los tumores del colédoco provocan un vitaminas liposolubles (A, D, E y K) con prolongación
cuadro clínico similar al del carcinoma de la cabeza del tiempo de protrombina, reducción de la albumina,
del páncreas, el carcinoma de la ampolla de Váter y el hemoglobina y la lactasa deshidrogenasa. Existe au-
adenocarcinoma duodenal. Estas cuatro lesiones cons- mento de la secreción de productos tumorales (marca-
tituyen los denominados carcinomas periampulares, dores tumorales). Los marcadores tumorales tienen un
que pueden ser imposibles de distinguir antes de la interés limitado los más usados son el CEA, Ca 19-9,
intervención quirúrgica. La intensidad de la ictericia CA 50, Ca 125 y recientemente la mucina Muc5AC.
puede fluctuar en los estadios precoces de los tumo- La alfafetoproteina es importante en el diagnóstico
res de colédoco y ampulomas, mientras que suele ser diferencial con el carcinoma hepatocelular.
gradual y progresiva en las lesiones de la cabeza del
páncreas. Las heces contienen con frecuencia sangre Imaginología
oculta en los ampulomas y los carcinomas de duodeno. Enn relación con los estudios de imágenes, el ultra-
El carcinoma de la bifurcación de los conductos sonido abdominal con Doppler debe ser el método diag-
hepáticos (tumor de Klatskin) tiene un comportamien- nóstico de elección inicial, porque en manos de expertos
to clínico distinto. Los tumores de esta localización puede identificar o localizar la obstrucción biliar y la
suelen crecer lentamente y dan un cuadro clínico de afectación vascular (arteria hepática y vena porta) con
obstrucción biliar indolora y prolongada con elevación una sensibilidad de 93 % y una especificidad de 99 %.
136 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Por ultrasonido se pueden observar las tres varie-


dades del tumor:
– La forma periférica o intrahepática (10 %).
– El tumor de Klatskin en la unión de los conductos
principales biliares derecho e izquierdo y que pro-
voca obstrucción de ambos.
– La variedad extrahepática es la más frecuente
(65 %). Hay estenosis y obstrucción del colédoco
y puede verse una masa polipoidea intraductal en
el 5 % de los casos.
En el ultrasonido se observa:
– Lesiones de pequeño tamaño (menos de 3 cm) cuan-
do provoca el cuadro obstructivo. El tumor se ve
como una masa de ecogenicidad variable, en el sitio
de la obstrucción, a veces como un engrosamiento
nodular de la pared del conducto o como una masa
polipoidea intraductal (Fig. 186.6). A
– En los tumores de Klatskin pocas veces se ve la
lesión tumoral bien definida, pero hay dilatación de
las vías biliares por encima del tumor (Fig. 186.7).

La tomografía computarizada helicoidal aporta in-


formación importante sobre las lesiones intrahepáticas,
las vías biliares dilatadas y las adenopatías locales.
Permite determinar el tamaño del tumor, la existencia
de metástasis hepáticas, adenopatías perihiliares y a
distancia. La precisión para definir la localización de la
obstrucción es de 100 % y para el diagnóstico etiológico
de 78 %. Determina resecabilidad en 60 % de los casos
e irresecabilidad en 56 %.

B
Fig. 180.7. A. Tumor de Klatskin (puntos naranjas). B. Ima-
gen ultrasonográfica y colangiopancreatografía retrógrada
endoscópica.

La resonancia magnética se trata de un estudio no


invasivo que permite la visualización de las vías bilia-
res intrahepáticas y extrahepáticas y de las estructuras
vasculares. La resonancia magnética con colangiografía
(colangiorresonancia) aporta información sobre la ex-
tensión de la invasión biliar, la afectación de los vasos
hiliares y la presencia de metástasis hepáticas. Con una
sola prueba se puede realizar un diagnóstico radiológico
completo cuando se sospecha un colangiocarcinoma.
La tomografía por emisión de positrones muestra
una sensibilidad de 92,3 % y una especificidad de 92,9
% para el diagnóstico de colangiocarcinoma. Hasta
Fig. 186.6. Tumor del conducto hepático derecho (flechas la actualidad puede ser útil para realizar diagnóstico
naranjas). diferencial con la colangitis esclerosante.
Capítulo 186. Tumores de las vías biliares extrahepáticas 137

El ultrasonido endoscópico tiene como principal – Adenocarcinoma papilar.


indicación el estudio y estadificación del colangiocar- – Adenocarcinoma de tipo intestinal.
cinoma extrahepático, puesto que permite detectar la – Adenocarcinoma mucinoso.
infiltración de las paredes de la vía biliar, la compresión – Adenocarcinoma de células claras.
o invasión vascular y también las adenopatías adya- – Carcinoma a células en anillo de sello.
centes. EL ultrasonido endoscópico ofrece imágenes – Carcinoma adenoescamoso.
detalladas de la región sospechosa y permite realizar – Carcinoma a células escamosas.
punciones con aguja fina para obtener material para – Carcinoma células pequeñas (carcinoma células de
estudio histológico. avena).
La ecografía intraductal con minisondas sugiere el – Carcinoma indiferenciado.
diagnóstico con criterios ecográficos, pero no permite
realizar biopsias ni estudios citológicos. Permite de- Otros tipos histológicos incluyen el adenocarcinoma
mostrar la invasión de la vena porta en 100 % de los tipo intestinal, el adenocarcinoma de células claras, el
casos, pero cuando se trata de la arteria hepática solo carcinoma en anillo de sello, el carcinoma adenoesca-
lo hace en 18 %. El ultrasonido endoscópico y la eco- moso, el carcinoma de células escamosas y el carcinoma
grafía intraductal no permiten establecer diagnóstico de células pequeñas. El adenocarcinoma intraductal
diferencial de tumores benignos y malignos. papilar se extiende superficialmente a lo largo de la
La colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- mucosa biliar sin invasión profunda de la capas de la
ca es de gran ayuda en el diagnóstico y tratamiento pared fibromuscular y tienen un mejor pronóstico que el
paliativo de los tumores malignos de la vía biliar ya cáncer papilar. Las metástasis a los ganglios linfáticos
que permite: regionales y peripancreática se observan con frecuencia
– Confirmar el diagnóstico de ictericia obstructiva en en este tipo de crecimiento.
pacientes con sospecha de tumor biliar.
– Obtener tejido para diagnóstico histológico. Pronóstico
– Establecer el nivel exacto de la obstrucción.
– Drenaje y descompresión del árbol biliar. Para evaluar el pronóstico se tiene en cuenta el
– Facilitar la terapia paliativa. estadiamiento del cáncer del conducto biliar (excluido
el carcinoma periampular) según la clasificación TNM
La colangiopancreatografía retrógrada endoscópi- (Tabla 186.2).
ca en el diagnóstico radiológico no puede distinguir
enfermedad benigna de maligna. En este sentido, la Tabla 186.2. Clasificación TNM del cáncer del
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica tam- conducto biliar
poco parece tener signos específicos para estenosis Categorías del Estadios
benigna puesto que en seguimientos a largo plazo se crecimiento tumoral
ha encontrado malignidad. T1a: mucosa del conducto I T1 N0 M0
El colangiocarcinoma es un tumor paucicelular biliar
muy desmoplásico. Macroscópicamente, se puede
T1b: capa muscular del II T2 N0 M0
describir de acuerdo con sus características de creci- conducto biliar
miento como formando masa de infiltración periductal
o papilar intraductal. Los colangiocarcinomas forman T2: tejido conectivo III T1/2 N1 M0
periductal
típicamente una masa, mientras que los carcinomas
ductales pueden presentarse en cualquiera de las tres T3: invasión de vasos u IVA T3 Nx M0x
órganos vecinos
formas de crecimiento.
M1: metástasis a distancia IVB Tx Nx M1
Biopsia (hígado, peritoneo)
El 90 % de los colangiocarcinomas son adenocar- N1a: ganglios linfáticos
cinomas. positivos a nivel hepáticos,
cístico, conducto hepático
Los carcinomas de los conductos biliares extrahe- común y ligamento
páticos según la Organización Mundial de la Salud se hepatoduodenal.
clasifican en:
N1b: ganglios linfaticos
– Carcinoma in situ. positivos a distancia
– Adenocarcinoma.
138 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

Tratamiento terapéutica la vía percutánea es una alternativa con


menor porcentaje de éxito y mayores complicaciones.
Cirugía
En relación con la controversia de drenaje unilateral
La única terapia curativa es la extirpación quirúrgica o bilateral en la obstrucción del hilio hepático existen
o el transplante hepático, pero desafortunadamente la diversos trabajos con resultados de éxito utilizando
mayoría de los pacientes se presenta con una enfer- diversos métodos. Lo más fisiológico y seguro es
medad avanzada la que no es susceptible de terapias primero realizar una colangiorresonancia y con estos
quirúrgicas. datos radiológicos realizar canulación selectiva sin uso
La cirugía solo resuelve a una minoría de pacientes de contraste para evitar contaminación y colocación de
portadores de colangiocarcinoma. El 9 % a 18 % de prótesis única, preferiblemente metálica autoexpansible
sobrevida a los cinco años en las lesiones proximales la que puede aportar en 80 % de los pacientes buena
del conducto biliar y de 20 % a 30 % en las lesiones paliación y una segunda prótesis debe reservarse si no
distales: es suficiente o falla la primera.
– El tumor del conducto biliar puede ser multifocal Otras técnicas de paliación endoscópica son la
en 5 % de los pacientes. terapia con radiación y la terapia fotodinámica intra-
– Los ganglios linfáticos comprometidos están pre- ductal. Esta última consiste en la administración de un
sentes en 50 % de los pacientes. fotosensibilizador tipo hematoporfirina (Photofrin ® II
– Las metástasis peritoneales y a distancias están y 5 AZA) por vía endoscópica, el que tiene preferencia
presentes en 10 % a 20 % de los pacientes. para acumularse en las células tumorales activándose
Para los tumores de Klatskin la clasificación de al aplicar láser liberando oxígeno reactivo que provoca
Bismuth es una guía para el tratamiento quirúrgico, necrosis tumoral. Estudios publicados en 2001 mostra-
siguiendo la regla de tener como mínimo el margen ron resultados controversiales debido a la importante
libre de tumor mayor que 5 mm: toxicidad asociada a la fotosensibilidad que ocurre en
• Tipos I y II: resección en bloque del conducto 20 % a 40 % de los pacientes. La colangiopancreato-
biliar extrahepático, la vesícula, linfadenectomía grafía retrógrada endoscópica permite, además, aplicar
regional y hepaticoyeyunostomia en Y de Roux. braquiterapia mediante la colocación de una fuente
• Tipo III: como arriba más hepatectomía derecha radioactiva dentro de la estenosis maligna.
o izquierda. Quimioterapia
• Tipo IV: como arriba más hepatectomía exten-
El colangiocarcinoma es relativamente quimosen-
dida derecha o izquierda.
sible a la administración del 5-fluoracilo con un grado
– El segmento 1 del hígado es asiento frecuente de en-
de respuesta parcial 10 % a 20 % como simple agente
fermedad metastásica del colangiocarcinoma hiliar
citostático. Existe también respuesta parcial a la ad-
y su resección debe considerarse en los estadios II
ministración de gemcitabine de 20 % a 30 % cuando
y IV.
se utiliza como único agente citostático y varia hasta
– El colangiocarcinoma distal es tratado por pancrea-
20 % a 40 % cuando ambos se utilizan combinados. La
toduodenectomía como el cáncer ampular y de la gemcitabine en combinación con el cisplatin muestra
cabeza del páncreas. respuestas parciales de hasta 50 %.
– La variante intrahepática del colangiocarcinoma
es tratado por resección del segmento del lóbulo
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Capítulo 187
Tumores benignos y seudotumores de la vesícula
biliar y de las vías biliares. Otras causas
de obstrucción biliar
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Los tumores benignos son raros con predominio de comprobar la existencia de 7 % de falsos positivos y
origen epitelial (adenomas y papilomas). 10 % de falsos negativos de la ecografía, en este último
La popularidad de la ecografía en el estudio de los caso por estar los pólipos enmascarados por litiasis
pacientes con sospecha de litiasis biliar hace que se biliar concomitante.
detecten casualmente otras lesiones de la vesícula biliar, Se presenta una clasificación general de los pólipos
genéricamente denominadas pólipos, en alrededor de de la vesícula biliar teniendo en cuenta el tipo y sus
5 % de exploraciones. características macroscópicas y microscópicas (Tabla
187.1).
Pólipo de la vesícula biliar
Adenomas y papilomas
El termino pólipo de la vesícula biliar se utiliza para
describir cualquier protrusión mucosa dentro de la luz Se trata de verdaderos tumores epiteliales benignos.
vesicular. La gran mayoría de los pólipos vesiculares Son consideradas lesiones precancerosa y se encuentra
son el resultado de depósitos lipídicos o inflamación, en 1 % de las colecistectomías.
más que neoplasias. Debido a que la naturaleza del
pólipo no puede ser definida sin evaluación histológica, Epidemiología
sin embargo, los médicos deben decidir si la preocu- Teniendo en cuenta la elevada frecuencia de pólipos
pación de malignidad es suficiente como para realizar adenomatosos en el tracto gastrointestinal, los adeno-
colecistectomía basada en informaciones indirectas, mas de vesícula biliar son poco comunes, su frecuencia
tales como las características ecográficas y radiográficas en vesícula biliar resecadas es de 0,15 %.
del pólipo, las demográficas del paciente y los síntomas Los adenomas son típicamente solitarios, masas
que presenta. pedunculadas de 5 mm a 20 mm de diámetro, aunque
Aunque la actual prevalencia es desconocida se la mayoría de las veces son múltiples entre dos a cinco
reporta la frecuencia de pólipos vesiculares, definida pólipos. Pueden ocurrir en cualquier parte de la vesí-
tanto por patología como por imaginología, rangos entre cula biliar.
0,3 % a 12 %. Frecuentemente, los pólipos de vesícula
son hallazgos durante una colecistectomía. Clasificación
Histológicamente se clasifican como:
Clasificación – Papilares: consisten en una ramificación de tejido
Los pólipos vesiculares incluyen a los pólipos conectivo cubierta con células columnares altas.
verdaderos (papilomas), tumores polipoides como los – No papilares: consisten en una proliferación de
adenomas y lesiones seudotumorales, que pueden ser glándulas revestidas por un estroma fibroso.
pólipos inflamatorios (adenomiomatosis) o acúmulos
de macrófagos cargados de lípidos en situación suben- En raras ocasiones, toda la mucosa vesícula biliar
dotelial, denominados pólipos de colesterol. En series puede sufrir una transformación adenomatosa que se
que han correlacionado los hallazgos ecográficos con traduce en innumerables pequeños pólipos mucosos
los de la colecistectomía subsiguiente se ha podido denominándose papilomatosis multicéntrica.
Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores de la vesícula biliar y de las vías biliares... 141

Tabla 187.1. Clasificación de los pólipos de la vesícula biliar: neoplásicos y no neoplásicos


Hallazgos diagnósticos
Tipo Macroscópicos Microscópicos Prevalencia
(%)
No neoplásicos: 90
– Colesterol De 1 mm a 15 mm, amarillo, blando, múltiple, Proyecciones mucosas con numerosos 50 a 90
pediculado macrófagos cargados de lípidos
– Hiperplásico/ Menor que 5 mm, gris parduzco, sésil o Proliferación nodular, más frecuente 25
metaplásico pediculado, granular o velloso, múltiple glándulas, de tipo pilórico, hiperplasia
frecuente papilar focal
– Adenomioma De 5 mm a 25 mm, en fondo, en capa Glándulas, con dilataciones quísticas 15 a 25
muscular, superficie de corte blanco grisácea inmersas en bandas de músculo liso
– Inflamatorio De 3 mm a 15 mm, rojo o gris parduzco, Tejido de granulación; estroma edematoso 15
único y sésil frecuente fibroso
– Linfoide Menor que 5 mm, nodulos redondos y pálidos, Folículos linfoides hiperplásicos (colecistitis 0-5
múltiples folicular)
Neoplásicos 10
Adenoma De 3 mm a 25 mm, pardo rojizos, únicos Arquitectura tubular (frecuente glándulas, 10
(67 % a 90 %), sésil o con pequeño pedículo, tipo pilórico) o papilar (tipo intestinal) con
superficie lisa o papilar displasia ocasional, metaplasia escamosa
ocasional, carcinoma invasivo raro en
pólipos menor que 10 mm
Miscelánea Variable Heterotopias, leiomiomas, tumor de células Menor que 1
granulares, entre otras

A diferencia del colon, en la que los adenomas pequeñas lesiones ecogénicas dependientes de la pared
son mucho más comunes que los adenocarcinomas, la vesicular y sin sombra acústica (Fig. 187.1).
vesícula biliar se ve menos afectada por los adenomas
que por carcinomas. Pólipos de colesterol
La frecuencia de la progresión de adenoma a adeno-
carcinoma no está bien definida. Existe una controversia Conocidos como papilomas de la vesícula, aunque
sobre la evolución de adenoma a carcinoma en la vesí- este término debe ser abandonado, es el tipo de póli-
cula biliar. Se han descrito lesiones adenomatosas con po vesicular más común. Son variantes benignas de
transformación focal en adenocarcinoma y en algunos colesterolosis que resultan de infiltración de la lámina
casos se ha podido observar mediante ecografías seria- propia con macrófagos cargados con material lipídico.
das un crecimiento acelerado de un pólipo a un cáncer
de vesícula biliar. Fisiopatología
En una serie de más de 1 600 colecistectomías Los pólipos de colesterol son típicamente pequeños
consecutivas, 18 de los pacientes operados se encontró (menor que 10 mm), pólipos pedunculados que se ad-
que tenían adenomas de la vesícula biliar y siete de los juntan a la mucosa por un tallo fino. Con frecuencia,
adenomas contenían focos de carcinoma. En la misma diminutos pólipos de colesterol se encuentran flotando
serie se encontraron 79 casos de carcinoma invasivo, en la bilis de la vesícula cuando se abre en la sala de
en 15 (19 %) de las lesiones había tejido adenomatoso operaciones. A pesar de que pueden ser solitarios en
residual de cáncer, lo que sugiere que la lesión inicial 20 % de los casos, el número medio de pólipos de co-
puede haber sido un adenoma. Todos los adenomas que lesterol presentes en una serie fue de ocho.
contenían focos de carcinoma eran más grandes que 12 El pólipo es una masa sólida, fija a la pared ve-
mm, un hallazgo que sugiere que los grandes adenomas sicular y que protruye en la luz (Fig. 187.2). Solo se
pueden representar lesiones premalignas. diagnostica con ecografía cuando miden entre 2 mm y
Los adenomas son lesiones asociadas generalmen- 10 mm. Provoca una imagen hiperecoica uniforme en la
te a colelitiasis, y que aparecen en la ecografía como pared que a veces se desprende y cae en la luz. Suelen
142 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

coexistir con cálculos y aparecen en la ecografía como Su causa más frecuente es la colesterolosis, debe
engrosamientos focales de la pared vesicular, en gene- diferenciarse de otras enfermedades capaces de deter-
ral múltiples, de pequeño tamaño e hiperecogénicos minar pólipos únicos o múltiples (adenomiomatosis,
debido a su contenido lipídico, sin sombra, pero con adenoma, papiloma, tumor carcinoide, carcinoma, me-
interferencia acústica posterior. tástasis, quistes de retención y pólipos inflamatorios).
Cuando se detectan en una vesícula sin cálculos,
es difícil precisar si los eventuales síntomas del pa-
ciente les son atribuibles y si la colecistectomía será
beneficiosa.

Pólipos inflamatorios
Los pólipos inflamatorios son lesiones sésiles pe-
queñas que consisten en tejido fibroso infiltrado y de
granulación con linfocitos y células plasmáticas. El
tamaño medio es de 5 mm a 10 mm. Un pólipo solitario
se detecta en 50 % de los casos y de dos a cinco pólipos
se encuentran en el resto. Cuando se descubre en el
momento de la colecistectomía, un pólipo inflamatorio
es casi siempre un hallazgo fortuito.

Pólipos misceláneos
Aunque una amplia variedad de lesiones benignas
puede manifestarse como pólipos en la vesícula biliar,
estas lesiones son raras. Fibromas, leiomiomas y lipo-
mas de la vesícula biliar son extraordinariamente raros,
especialmente teniendo en cuenta lo que comúnmente
se encuentran en otras partes del tracto gastrointestinal.
Los neurofibromas, carcinoides y las glándulas gástricas
heterótopica ocurren incluso con menos frecuencia.
En su conjunto, la frecuencia combinada de pólipos
neoplásicos no adenomatoso de la vesícula biliar es
considerablemente inferior al 1 por 1 000.
Fig. 187.1. Imagen de adenoma en la vesícula biliar. No hay Diagnóstico clínico
sombra acústica y no se mueve con los cambios de posición,
aunque puede cambiar de forma. Se puede ver el pedículo. Los pólipos de la vesícula biliar por lo general no
causan síntomas. A menudo se observan como un ha-
llazgo durante la colecistectomía por cálculos biliares
o por estudios de imagen realizados para otras indica-
ciones. En el caso excepcional de que un pólipo (sin
cálculos) es identificado por ecografía o radiográfica
debido a los síntomas, la sintomatología clínica puede
ser similar a la de dolor biliar, aunque las características
clásicas, por ejemplo, intenso dolor en el hipocondrio
derecho o epigastrio, de comienzo repentino, aumen-
tando en intensidad durante un período de 15 min y
continuando en meseta estable durante varias horas an-
tes de remitir lentamente, puede estar ausente. En raras
ocasiones se han atribuido colecistitis alitiásica aguda
Fig. 187.2. Pólipos múltiples de la vesícula biliar. e incluso hemobilia a los pólipos vesiculares benignos.
Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores de la vesícula biliar y de las vías biliares... 143

Exámenes complementarios años de seguimiento, presentaron síntomas suficientes


como para justificar la cirugía en menos de 10 % de los
Los tipos histológicos de pólipos de la vesícula bi-
pacientes y ninguno de estos tenía evidencia de cáncer
liar no se pueden distinguir clínicamente por sí solos.
de vesícula biliar.
Tampoco hallazgos ecográficos y colecistográficos
Un grupo de investigadores realizó una ecografía
predicen confiablemente la histología. La sensibilidad
anual o semestral por un periodo de cinco años en 109
de la ecografía convencional puede ser alta (80 %) para
pacientes con pólipos de menos de 10 mm. Durante este
detectar pólipos mayores que 10 mm de diámetro, pero
tiempo no se desarrolló en ningún paciente cáncer de la
su precisión en la caracterización del tipo de pólipo
vesícula biliar y el pólipo no exhibió crecimiento en más
puede ser tan baja como de 20%. La ecografía endos-
de 88 % de los pacientes. En sentido general, se sugieren
cópica es un método más sensible y específico para el
que aunque la mayoría de los pólipos vesiculares son
diagnóstico de los pólipos vesiculares. Un estudio que
benignos, los pólipos de alto riesgo a menudo tienen
comparaba la ultrasonografía endoscópica convencio-
una característica identificable, tal como el tamaño más
nal y se ha encontrado que la exactitud diagnóstica de
grande y la edad mayor de 60 años.
la ultrasonografía endoscópica para la diferenciación
de tipos de pólipos superó 90 %. Tratamiento
Varios estudios han demostrado que un sistema de
puntuación ecográfica endoscópica que incorpora el ta- Los pacientes que son sintomáticos con dolor biliar
maño, número, forma, la ecogenicidad de los pólipos y y tienen evidencia ecográfica de pólipos y cálculos en
los márgenes de los pólipos puede predecir el potencial la vesícula biliar deben ser sometidos a colecistectomía
neoplásico de pólipos de la vesícula biliar. electiva. La decisión es más complicada para los pacien-
tes en los que se descubren pólipos en la vesícula sin
cálculos simultáneos, para estos pacientes la decisión
Pólipo y cáncer vesicular de operar depende de la gravedad de los síntomas, la
Las posibilidades de que un pólipo vesicular sea certeza del médico que los síntomas son de origen
canceroso aumentan en pacientes de más de 60 años biliar y las características ecográficas, en particular, el
de edad, si hay litiasis biliar asociada y, sobre todo, en tamaño del pólipo.
lesiones superiores a los 10 mm de tamaño, circunstan- La probabilidad de malignidad se correlaciona con
cia en la que hay acuerdo en indicar la colecistectomía. el tamaño del pólipo. Los pólipos menores que 10 mm
La presencia de cálculos biliares concurrentes también de diámetro son poco probable que sean malignos y
se asocia con un mayor riesgo de malignidad. En póli- generalmente no requieren la intervención en ausencia
pos individuales y pólipos sintomáticos puede ser más de síntomas. Debido a que los pólipos mayores que
probable su etiología maligna que pólipos múltiples y 10 mm tienen una mayor probabilidad de que sean
pólipos asintomáticos, respectivamente. neoplásicos, la colecistectomía laparoscópica electiva
Evidentemente, estos son los casos de cáncer de debe ser considerada en los candidatos quirúrgicos
vesícula biliar detectados precozmente y con buenas aceptables. En un paciente que tiene un elevado riesgo
posibilidades de curación. El seguimiento ecográfico quirúrgico con un pólipo de más de 10 mm, el control
hasta seis años de pacientes con pólipos vesiculares periódico del crecimiento del pólipo, con el ultrasonido
revela que 85 % no se modifican, 4 % disminuyen de o ecografía endoscópica, puede ser razonable cada seis
tamaño y 12 % crecen, estos últimos son claros candi- a 12 meses. Los pólipos de más de 18 mm en diámetro
datos a colecistectomía. presentan un riesgo significativo de malignidad y deben
resecarse, si es posible. Se considera que las lesiones
Historia natural de la enfermedad de este tamaño a menudo contienen cáncer avanzado,
invasivo, que implica la superficie serosa de la vesícula
Los pocos estudios que han tratado de definir la biliar y requiere una disección más extensa, que la que
historia natural de los pólipos vesiculares no tratados, puede lograrse por laparoscopia. Como resultado, los
destacan la naturaleza benigna de la mayoría de estos investigadores defienden la colecistectomía abierta para
y el apoyo al enfoque de “observar y esperar” en la estos grandes lesiones polipoides de la vesícula biliar.
mayoría de los casos. Sobre la base de los registros de Debido a la incertidumbre sobre el potencial neo-
la Clínica Mayo, en un estudio de 200 pacientes en los plásico de los pólipos, la práctica común es ofrecer
que la colecistografía demostró pólipos vesiculares y no colecistectomía a cualquier buen candidato quirúrgico
se realizó colecistectomía de inmediato. Después de 15 con un pólipo mayor que 10 mm de diámetro. Los
144 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

pacientes deben ser advertidos, sin embargo, que los con la edad. No se describen diferencias étnicas ni
resultados falsos positivos para lesiones polipoides en la geográficas.
ecografía son comunes y que los pólipos no se pueden
encontrar en todas las vesículas resecadas. Clasificación
La regla de cirugía para el seguimiento de los Se trata de una lesión poco frecuente que puede ser
pólipos vesiculares de 10 mm no puede aplicarse a focal, por lo general localizada al fondo, segmentaria
los pacientes con colangitis esclerosante primaria, en en forma de engrosamiento anular en el cuerpo de la
quienes el riesgo de malignidad en lesiones polipoides vesícula, o difusa, proporcionando una imagen caracte-
de la vesícula biliar puede llegar a ser hasta de 60 %. rística en la ecografía como en el caso de otras lesiones
En la población de alto riesgo, la colecistectomía para polipoides, es poco clara la relación entre la anomalía
los pólipos menores que 10 mm puede ser justificable. vesicular y los síntomas del paciente.
En poblaciones de bajo riesgo, como los pacientes
asintomáticos con pólipos pequeños, presumiblemente Fisiopatología
benignos, puede ser prudente la vigilancia periódica
para el crecimiento de pólipos. En general se recomien- La patogénesis de la adenomiomatosis es descono-
da una evaluación ecográfica convencional cada tres a cida. La adenomiomatosis de la vesícula biliar tampoco
seis meses en el periodo posdiagnóstico inmediato para es un auténtico proceso tumoral, sino que se trata de una
excluir un tumor de crecimiento rápido, pero menos lesión reactiva secundaria a la inflamación y a litiasis,
frecuentes o ninguna investigación después de uno a caracterizado por hiperplasia y engrosamiento de la
dos años de estabilidad en el tamaño del pólipo. mucosa y la capa muscular, y por la presencia de los
senos de Rokitansky-Aschoff, en forma de divertículos.
Consiste en músculo liso hiperplásico mezclado con
Adenomiomatosis cavidades epiteliales, sin potencial cancerígeno alguno.
La adenomiomatosis de la vesícula es una lesión hi- El incremento de la presión intraluminal en la
perplástica adquirida caracterizada por la proliferación vesícula por mecanismos obstructivos (cálculos, obs-
excesiva de invaginaciones en la superficie del epitelio trucción a nivel del cístico o septum congénito) se ha
hacia el interior de la muscularis o más profundamente. postulado que provoca una dilatación quística de los
A pesar del prefijo adeno, la lesión es generalmente senos de Rokitansky-Aschoff, una subsecuente hiper-
benigna y no está relacionado con los epitelios adeno- plasia de la capa muscular y la adenomiomatosis. Otros
matosos de otros sitios del tracto gastrointestinal. La investigadores han propuesto que la adenomiomatosis
adenomiomatosis simple no siempre tiene potencial es consecuencia de una inflamación crónica, pero esta
para la transformación maligna. no siempre está presente, en particular cuando la lesión
Diferentes términos se han utilizado para describir asienta en el fondo, y finalmente otro grupo la reporta
esta afección, en la literatura se describen 18 denomi- asociada a anomalías en la unión ductal pancreatobiliar.
naciones para estas por diferentes especialidades, el Una revisión de la arquitectura histológica normal
más común es el de adenomiomas (utilizado cuando de la vesícula y de los senos de Rokitansky-Aschoff,
la lesión se encuentra en el fondo de la vesícula), es útil para comprender la patología de la adenomio-
diverticulosis de la vesícula (ignora la hiperplasia), matosis. Diferente al intestino delgado, la vesícula no
colecistitis glandular proliferante (enfatiza la función de tiene muscularis mucosae y la lámina propia se asienta
la inflamación), senos de Rokitansky-Aschoff (familiar, directamente en la capa muscular. En el niño la capa
pero anatómicamente incorrecto), adenomiosis e hiper- epitelial está incluida dentro de los pliegues y soportada
plasia adenomiomatosa. Algunos de estos utilizados por por la lámina propia. Con los años en la vesícula las ele-
radiólogos, otros por anatomistas, pero ninguno es de vaciones de la capa epitelial pueden profundizarse hasta
uso del gastroenterólogo. penetrar dentro de la capa muscular y forma los senos de
La prevalencia de la adenomiomatosis de la vesícula Rokitansky-Aschoff. Estos son lesiones adquiridas que
varía de acuerdo con los criterios utilizados para su están presentes en 90 % de las vesículas resecadas. Si
diagnóstico y si la vesícula fue resecada o analizada estos se profundizan, se ramifican y son acompañados
en autopsias. Shepard y colaboradores reportaron una por engrosamiento (hiperplasia) de la capa muscular,
prevalencia de alrededor de 1 % en una serie de más puede ser realizado el diagnóstico de adenomiomatosis.
de 10 000 colecistectomías. La lesión es más común en La adenomiomatosis puede envolver totalmente la
la mujer que el hombre (3:1) y la prevalencia aumenta vesícula (adenomiomatosis difusa o generalizada) o
Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores de la vesícula biliar y de las vías biliares... 145

más comúnmente localizada en el fundus, en cuyo caso el grosor de las paredes vesiculares, detectar los senos
la lesión se denomina con el término adenomioma. En de Rokitansky-Aschoff dentro del grosor de la pared
raras ocasiones el proceso puede estar limitado a un vesicular y proliferación de la grasa subserosa.
segmento anular del cuerpo vesicular (adenomiomatosis
segmentaria) estrechando la luz a este nivel (aspecto
de vesícula doble). En todos los casos la pared toma
un grosor de 10 mm o más y la capa muscular es de
tres a cinco veces su grosor normal. En secciones de
cortes existen dilataciones quísticas de los senos de
Rokitansky-Aschoff que pueden estar llenos de pig-
mentos o cálculos.

Diagnóstico clínico
La adenomiomatosis, al igual que la colesterolosis,
usualmente no causan síntomas y es típico su hallazgo
accidental en autopsias y resecciones quirúrgica. Se
ha notado litiasis temprana en más de la mitad de las
vesículas resecadas quirúrgicamente, en estos casos los
síntomas se han atribuido a la litiasis.

Exámenes complementarios
Fig. 187.3. Adenomiomatosis focal.
La adenomiomatosis frecuentemente se diagnostica
después de una resección quirúrgica, sin embargo, di-
versos signos radiológicos y ultrasonográficos pueden
sugerir su diagnóstico preoperatorio. En una colecisto-
grafía oral el divertículo intramural constituidos por los
senos de Rokitansky-Aschoff pueden llenarse y provo-
car una imagen típica redondeada radiopaca paralela al
margen vesicular. En la afección localizada en el fondo
la adenomiomatosis puede manifestarse como defectos
de llenos y en la segmentaria aparece un estrechamiento
circunferencial que divide el cuerpo vesicular.
El aspecto ecográfico de la adenomiomatosis se
presenta:
– En la variedad focal se ve una masa que protruye
en el fondo (Fig. 187.3).
– En las formas segmentarias y difusas la pared apa-
rece engrosada (mayor que 4 mm), con la misma
visualización de los divertículos intramurales, con
focos anecoico o pueden contener material litógeno Fig. 187.4. Adenomiomatosis difusa.
en su interior que muchas veces se corresponden con
pequeños cálculos en su interior (imagen ecoica con
Complicaciones
sombra acústica) (Fig. 187.4).
– Presencia frecuente de litiasis vesicular. En raras ocasiones se ha encontrado adenocarcino-
ma de vesícula en asociación con adenomiomatosis,
El ultrasonido endoscópico puede mostrar múltiples sin embargo, las lesiones malignas detectadas no se
imágenes microquísticas correspondientes a la prolife- encuentran localizadas en el área de adenomiomatosis.
ración de los senos de Rokitansky-Aschoff. Existen investigadores que reportan la potencialidad
La tomografía axial computarizada y la resonancia maligna de la adenomiomatosis segmentaria. En otro
magnética muestran imágenes que permiten identificar reporte se informa la presencia de citología con atipia
146 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

en muestras de resecciones vesiculares con adenocar- reportado es una muchacha de 13 años) y presenta una
cinoma y adenomiomatosis. marcada predilección para las mujeres mayores de 60
Cuando una adenomiomatosis simple de la vesícula años. No se ha descrito ninguna diferencia racial, étnica
es descubierta incidentalmente, la lesión debe ser toma- o geográfica en su prevalencia, aunque si la similitud
da como benigna. Ahora bien, si a través de un estudio con la enfermedad por cálculo biliar de colesterol está
radiológico existe sospecha de lesión de masa asociada, extendida, se espera que el predominio sea superior en
particularmente mayor que 10 mm o si es una adeno- Occidente. La obesidad también parece ser un factor
miomatosis segmentaria, entonces debe considerarse de riesgo para la colesterolosis, una frecuencia de 38%
la colecistectomía. se ha reportado en las vesículas resecadas durante las
cirugías de obesidad mórbida.
Tratamiento
En ausencia de síntomas de la vía biliar la adeno- Clasificación
miomatosis no requiere tratamiento. Si el paciente La colesterolosis está patológicamente definida
presenta cólico biliar y radiográficamente o ultrasono- por la acumulación de lípidos (esteres del colesterol y
graficamente existen evidencias de adenomiomatosis triglicéridos) dentro de la mucosa de la vesícula. Los
con cálculos, está indicada la colecistectomía. El mayor cuatro modelos de depósitos lípidos son:
problema es cuando un paciente esta sintomático, hay – Difusa: el lípido está distribuido a lo largo del
sospecha de adenomiomatosis, pero no hay cálculos. revestimiento epitelial de la vesícula y termina
En esos casos la evaluación clínica individual a través abruptamente en el conducto cístico. Este modelo
de los diferentes estudios de imágenes, pueden sugerir corresponde a 80 % de todos los casos.
el beneficio del tratamiento quirúrgico. – Pólipos de colesterol: el exceso de lípidos se limita a
una o más áreas del epitelio que en el futuro forman
Colesterolosis excrecencias dentro el lumen de la vesícula. Los
pólipos de colesterol aislados en ausencia de coles-
La colesterolosis es una anormalidad histológica terolosis difusa corresponden aproximadamente a
adquirida del epitelio de la vesícula caracterizada 10 % de los casos.
por la acumulación excesiva de ésteres de colesterol – Colesterolosis difusa combinada y pólipos de coles-
y triglicéridos dentro de los macrófagos epiteliales. terol: los pólipos de colesterol ocurren en un fondo
Generalmente se detecta la lesión como un hallazgo de colesterolosis difusa. Este modelo corresponde
patológico incidental después de la resección quirúrgica aproximadamente a 10 % de casos.
de la vesícula, aunque el diagnóstico puede sospecharse – Colesterolosis focal: el exceso de depósito de lípidos
en ciertos pacientes antes de la cirugía. se limita a un área pequeña de la mucosa.
Esta afección, así como la adenomiomatosis de
la vesícula, se ha clasificado como una de las cole- Patogenia
cistosis hiperplásticas, término introducido en 1960
para describir varias enfermedades de la vesícula por La causa de la acumulación de ésteres del colesterol
compartir rasgos comunes de hiperplasia mucosal, hi- y triglicéridos en la colesterolosis es desconocido. Se
perconcentración e hiperexcreción del opacificante en postula que el mecanismo de origen del colesterol es el
la colecistografía, y ausencia de inflamación. que se deriva de la sangre o que los factores mecánicos
Aunque la colesterolosis se ha reconocido como que impiden el vaciado de la vesícula es la que conduce
una enfermedad anatomopatológica característica por al depósito local de lípidos. Los datos han mostrado in-
más de un siglo, su actual prevalencia es desconocida. equívocamente que el epitelio de la vesícula es capaz de
Dependiendo del criterio microscópico que se usa para absorber el colesterol de la bilis, como puede esperarse
el diagnóstico, la frecuencia de colesterolosis en los en un epitelio que es embriológicamente e histológi-
resultados de autopsias se ha reportada de 5 % a 40 %. camente similar a las células absortivas intestinales.
La epidemiología de la colesterolosis es similar a la Además, el colesterol en la bilis de la vesícula ya está en
enfermedad por cálculos biliares de colesterol, la que se el estado físico ideal para la absorción (micela mixta).
origina en grupos de personas con predisposición a esto, La pregunta permanece acerca de por qué, algu-
sin embargo, las dos lesiones ocurren independiente- nos pacientes, que reabsorben el colesterol biliar es
mente y normalmente no coexisten en la misma persona. esterificado y guardado en los macrófagos como en
Como en la enfermedad por cálculos biliares, la co- la colesterolosis. Como los cálculos de colesterol, la
lesterolosis es rara en los niños (el paciente más joven colesterolosis es frecuentemente, pero no siempre se
Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores de la vesícula biliar y de las vías biliares... 147

encuentra en vesículas expuestas a bilis que están so- la apariencia gruesa de la mucosa de la vesícula vista a
bresaturadas de colesterol. través de la superficie translúcida de la serosa.
En las dos afecciones (la colesterolosis y enferme- Cuando la vesícula se abre, la mucosa tiene caracte-
dad litiásica) lo que lleva a la acumulación ectópica de rísticamente rayas lineales pálidas, amarillas que corren
colesterol probablemente sean mecanismos patogénicos longitudinalmente, dando lugar a al termino vesícula
comunes como la secreción de bilis anormal, pero que en fresa (aunque la mucosa normalmente es de bilis
progresan independientemente en un paciente dado, manchada en lugar de rojo). Cuando la colesterolosis
dependiendo de otros factores como la presencia de se diagnostica en el momento de la resección quirúrgica
proteínas nucleadoras en la bilis y la proporción de de la vesícula, los cálculos biliares pueden también
esterificación mucosal del colesterol. La colesterolosis estar presentes en 50% de los casos. Si el diagnóstico
no está asociada con altos niveles de colesterol sérico. de colesterolosis está hecho en la autopsia, las piedras
están presentes en solo 10 %, demostrando que los dos
Diagnóstico clínico procesos de la enfermedad son independientes cada
La colesterolosis normalmente no causa síntomas, uno de estos.
como es evidente por qué frecuentemente en piezas La hiperplasia de la mucosa esta invariablemente
de autopsia muestren la lesión en pacientes que nunca presente y se describe como marcada en 50 % de los ca-
tenían síntomas biliares. En ocasiones, los pacientes sos. Normalmente, la hiperplasia es del tipo velloso. El
tienen un malestar vago en cuadrante superior derecho rasgo más destacado es una abundancia de macrófagos
o dolor epigástrico que se asemeja al dolor biliar y se dentro de un villi largo. Cada macrófago se llena con
encuentra la colesterolosis sin cálculos o inflamación las gotas del lípido y tiene una apariencia característica
de la vesícula después de la colecistectomía. De los de una célula en espuma (foam cell).
pacientes que sufren colecistectomía por cólico biliar En los casos más ligeros, las células en espuma se
alitiásico, el dolor se resuelve probablemente más los limitan a las puntas del villi (correspondiendo a las rayas
que se encuentra en el examen anatomopatológico de lineales vistas en el examen macroscópico), cuando la
la vesícula la colesterolosis incidental que en los que infiltración es más severa, las células en espuma pueden
no se encuentra. llenar el villi entero y pueden difundirse por encima
de la submucosa subyacente. Aunque el depósito ex-
Exámenes complementarios tracelular de lípido es raro, se pueden ver flotando de
vez en cuando en la bilis pequeñas partículas amarillas
La colesterolosis difusa (constituye 80 % de los
(corpúsculos lipídicos) que representan masas aisladas
casos) solo es raramente perceptible por ultrasonografía
de células en espuma (foam cell).
o colecistografía oral.
En la forma polipoidea, sin embargo, los pólipos de
Tratamiento
tamaño suficiente tienen una apariencia característica
en la ultrasonografía, solos o múltiples, y emiten ecos Como la colesterolosis solo se diagnostica raramen-
fijos que se proyectan en el lumen de la vesícula. La te antes de la resección de la vesícula, el tratamiento
mayoría de los pólipos son pequeños (2 mm a 10 mm). normalmente no está indicado. En el raro caso de coles-
Los pólipos pueden identificarse con precisión como los terolosis polipoidea diagnosticado por ultrasonografía
de colesterolosis por ultrasonografía endoscópica que o colecistografía, la ausencia de síntomas en el tracto
demuestra una agregación característica de manchas biliar defiende contra cualquier intervención quirúrgica.
hiperecoicas. Si el paciente tiene síntomas consistentes con dolor
En la colecistografía oral, los pólipos aparecen ra- biliar o pancreatitis, la colecistectomía está indicada.
dioopalecentes, pequeños, redondos en el lumen de la No hay terapia médica para colesterolosis.
vesícula opacificada y se demuestran mejor, después
que la vesícula ha vaciado parcialmente y se realice Tumores biliares benignos
compresión abdominal.
de las vías biliares
Diagnóstico histológico Los tumores benignos no son muy frecuentes. En
Cuando la vesícula se inspecciona visualmente en el general, son pequeños aunque con frecuencia provocan
momento de una laparotomía o laparoscopia, el diag- obstrucción. La localización más habitual es el colédo-
nóstico puede hacerse en 20 % de los casos en base a co, sin embargo, 25 % se localizan en el hilio hepático
148 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

y dificulta su exéresis quirúrgica, aproximadamente de las vías biliares (quiste del colédoco y la enferme-
75 % son adenomas. dad de Caroli), la hemobilia, la pancreatitis crónica,
algunas parasitosis y la cirrosis biliar primaria, consti-
Adenoma biliar (colangioadenoma, tuyen causas poco comunes de obstrucción coledocal.
Aún más raras son las obstrucciones de los conductos
colangioma benigno) biliares mayores causadas por compresión a partir
Es un tumor generalmente solitario, no encapsula- de adenopatías neoplásicas o inflamatorias o por la
do, de pequeño tamaño (1 mm a 22 mm de diámetro). localización duodenal de la enfermedad de Crohn. Al-
Se forman por proliferación compacta de estructuras gunas enfermedades poco comunes como la colangitis
ductulares que contienen mucina y con apariencia tor- esclerosante primaria, causan ictericia obstructiva, por
tuosa o tubular. Pueden ser únicos o múltiples, sésiles afección de todo el árbol biliar la primera y de las vías
o pediculados, con patrón histológico tubular, tubulo- biliares intrahepáticas la segunda. Por último, la colan-
papilar o papilar. Pueden presentar diferentes grados de giohepatitis oriental es un tipo de colangitis recidivante
displasia como los de la vesícula biliar. El 15 % de los común en países orientales, donde se asocia a cálculos
cistadenomas hepatobiliares se localizan en los conduc- pigmentarios distribuidos en forma difusa por todo el
tos biliares extrahepáticos. Pueden ser multicéntricos y árbol biliar, relacionado posiblemente con infestación
afectar también al hígado. Se diagnostica generalmente parasitaria de las vías biliares (Clonorchis sinensis).
de forma incidental en mayores de 40 años.
Anomalías estructurales
Papilomatosis biliar Tanto el quiste del colédoco como la enfermedad
de Caroli, pueden ser anomalías estructurales que dan
Es muy rara. Hay múltiples masas polipoideas que origen a íctero obstructivo.
crecen en el árbol biliar intra y extrahepático. Clínica- El quiste del colédoco puede causar dolor biliar,
mente provoca íctero obstructivo. ictericia o colangitis y suele manifestarse en pacientes
jóvenes. Como otras anomalías estructurales de la unión
Hamartoma biliar (complejo coledocoduodenal, el quiste coledocal es un factor de
riesgo de cáncer de las vías biliares. El diagnóstico
de Meyemburg)
puede sospecharse en la ecografía, la tomografía axial
Malformación del desarrollo, colección anómala computarizada o la gammagrafía hepatobiliar y debe
de conductos biliares rodeados de abundante estroma confirmarse mediante colangiografía instrumental o por
fibroso. Su hallazgo generalmente es incidental. Pueden resonancia magnética.
ser únicos o múltiples, generalmente asintomáticos. El tratamiento es quirúrgico, con extirpación del
Pueden asociarse a otras enfermedades poliquísticas quiste, seguida de coledocoyeyunostomía en Y de Roux.
hepáticas y pueden experimentar transformación ma- La enfermedad de Caroli es una enfermedad poco
ligna como colangiocarcinomas. frecuente, pero no excepcional, que puede asociarse al
quiste coledocal y consiste en una dilatación sacular de
Tumor de células granulares los conductos biliares intrahepáticos que se manifiesta
con cólicos biliares o episodios colangíticos debidos
Es la neoplasia benigna no epitelial más frecuente a obstrucción ductal segmentaria por barro o litiasis
del árbol biliar. intrahepática en jóvenes o adultos de ambos sexos entre
Otros tumores no neoplásicos que se pueden obser- los 15 y 50 años de edad, aunque también hay casos
var son los pólipos de colesterol, tumor miofibroblástico pediátricos. Las pruebas hepáticas suelen mostrar un
inflamatorio y heterotopias (pancreática, gástrica y patrón colestásico. Existen dos formas de la enfer-
duodenal). medad, una en la que solo hay dilataciones quísticas
biliares y otra en la que se asocian fibrosis hepática
Otras causas de obstrucción biliar congénita y ectasia pielocalicial renal. En el segundo
tipo las complicaciones de la hipertensión portal suelen
En los países occidentales, la inmensa mayoría de preceder la ictericia o colangitis. El diagnóstico puede
los cuadros de ictericia obstructiva extrahepática son sospecharse en la ecografía o la tomografía axial com-
causados por colelitiasis o por oclusión tumoral de las putarizada si se consigue visualizar las dilataciones
vías biliares. Sin embargo, las anomalías estructurales saculares o la litiasis intrahepática. Las fases tardías
Capítulo 187. Tumores benignos y seudotumores de la vesícula biliar y de las vías biliares... 149

de la gammagrafía hepatobiliar pueden ser diagnósti- Diagnóstico clínico


cas al revelar cúmulos focales de radiocontraste en el
Desde el punto de vista clínico se manifiesta con
parénquima hepático. La demostración de cristales de
la tríada de ictericia fluctuante (por obstrucción biliar
colesterol en el sedimento biliar obtenido por intuba- por coágulos), hemorragia digestiva alta por salida de
ción duodenal confirma la naturaleza litiásica de las sangre al duodeno a través de la ampolla de Váter (me-
imágenes intrahepáticas observadas en la ecografía lenas, hematemesis, anemia) y dolor en el hipocondrio
o tomografía axial computarizada. La colangiografía derecho.
instrumental revela las anomalías biliares con nitidez,
pero debe evitarse porque entraña un gran riesgo de Tratamiento
infección biliar. La coledocolitiasis obstructiva por
cálculos emigrados desde las vías biliares más proxi- Si no cesa espontáneamente, el tratamiento es qui-
males, con frecuencia en gran número, constituye rúrgico mediante ligadura de la arteria hepática.
una excepción, pues en esta situación está indicada la
colangiopancreatografía retrograda endoscópica con Pancreatitis crónica
esfinterotomía y eliminación exhaustiva de cálculos,
El englobamiento de la porción intrapancreática del
para lo que pueden ser muy útiles la coledoscopia y colédoco por el tejido cicatrizal pancreático o su com-
la litotricia endoscópica con láser. También puede presión por un seudoquiste adyacente causa ictericia
utilizarse con este fin la coledoscopia percutánea obstructiva prolongada en una minoría de pacientes
transhepática. En casos precoces de enfermedad de con pancreatitis crónica. El diagnóstico diferencial
Caroli con litiasis intrahepática, el tratamiento con con el cáncer de cabeza de páncreas puede ser difícil
ácido ursodesoxicólico puede detener el crecimiento en pacientes sin un diagnóstico previo de pancreatitis
de los cálculos y reducir notablemente la frecuencia de crónica: incluso en la laparotomía el cirujano puede
cólicos biliares. Una vez establecida la colangitis, es errar el diagnóstico al palpar un páncreas endurecido
muy difícil erradicarla con tratamiento antibiótico, que por la proliferación desmoplástica de ciertos tipos de
a lo sumo controla temporalmente la sepsis biliar. El pancreatitis crónica.
drenaje quirúrgico de los segmentos biliares afectados La colestasis anictérica prolongada es mucho más
puede ser útil en casos de colangitis intratable, pero la frecuente que la ictericia franca en la pancreatitis
curación definitiva solo es posible mediante lobecto- crónica. La obstrucción parcial persistente de la vía
mía en pacientes con enfermedad limitada a un lóbulo biliar principal puede conducir insidiosamente a una
hepático o mediante el trasplante hepático en los casos cirrosis biliar secundaria, por lo que, al igual que en
de enfermedad difusa. La colangitis supurativa con la forma ictérica, está indicada la cirugía para drenar
formación de abscesos hepáticos y sepsis refractaria las vías biliares mediante coledocoduodenostomía o
o la degeneración del epitelio biliar intrahepático en colecistoyeyunostomía.
colangiocarcinoma suelen causar la muerte de los pa-
cientes con enfermedad de Caroli avanzada tras meses Parasitosis
o años de colangitis recidivante.
Un quiste hidatídico intrahepático puede perforar-
se en las vías biliares y causar dolor biliar, ictericia y
Hemorragia que drena colangitis. Idénticas manifestaciones clínicas puede
por las vías biliares causar la invasión del colédoco por Ascaris lumbri-
coide, Fasciola hepática o por filarias, parásitos con
Etiología tropismo biliar.

La causa más frecuente son los traumatismos he-


páticos, roturas de aneurismas de la arteria hepática
Cirrosis biliar secundaria
en la vía biliar, procedimientos intervencionistas en La cirrosis biliar secundaria resulta de la obstrucción
la vía biliar y en el hígado, litiasis (coledocolitiasis) biliar extrahepática prolongada.
o cáncer de vías biliares, abscesos hepáticos y ruptura Las causas principales son la atresia congénita de
de un aneurisma de la arteria hepática. La hemobilia es las vías biliares, la coledocolitiasis, la estenosis biliar
una complicación poco frecuente de la biopsia hepática posquirúrgica, los carcinomas de vías biliares o pán-
percutánea. creas, la pancreatitis crónica y la colangitis esclerosante.
150 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

La hipertensión biliar con colangitis o sin esta deter- proceder a una técnica de descompresión portal antes
mina, con el tiempo, fibrosis periductal y periportal con de actuar sobre las vías biliares, con lo que se evita el
proliferación de conductos biliares, en fases avanzadas riesgo de hemorragia y se facilita la ulterior cirugía
la fibrosis se extiende a partir de los espacios porta biliar. El tratamiento médico en las fases avanzadas
y aparecen nódulos de regeneración. Existe siempre es el habitual de las complicaciones de la cirrosis de
evidencia histológica de colestasis. Pueden obliterarse cualquier etiología. Las principales causas de muerte
y desaparecer los conductos biliares en los estadios fi- son la insuficiencia hepática, la hemorragia por varices
nales, con lo que el cuadro histológico es indistinguible y la infección intercurrente.
del de la cirrosis biliar primaria.
El tiempo necesario para que se desarrolle la cirro- Bibliografía
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Capítulo 188
Parasitismos biliares
Dra. Elizabeth Montes de Oca Megías

Es la infestación de la vía biliar por parásitos en su las ocasiones, dentro de los parásitos propios de la vía
forma adulta ya sea por ser su medio habitual o por biliar solamente se ha reportado la Fasciola hepática
migración errática, dando origen a manifestaciones (ver “Capítulo 142. Parasitismo intestinal”).
clínicas obstructivas. Hay varios parásitos que son De manera general, el tratamiento oral de estos pa-
los más frecuentes en la vía biliar ya sean propios o rásitos en la vía biliar ha demostrado ser costo-efectivo
erráticos (Fig. 188.1). y en ocasiones puede prevenir las complicaciones. Este
debe ir combinado con medidas higiénico-dietéticas.
Epidemiología Además debe manejarse la orientación y el cumpli-
miento de medidas preventivas para evitar la infección
Los países tropicales y subtropicales tienen la inci- por estos, ya sea de forma individual, así como brotes
dencia más alta de infecciones parasitarias del tracto epidémicos.
biliar y es una causa frecuente de obstrucción en estos
segmentos en áreas endémicas, aunque su distribu-
Clasificación
ción geográfica pudiera hacerse más extensa, por el
movimiento de viajeros y el comercio internacional Se clasifican en dos grupos:
de comidas (vegetales y pescados crudos infestados). – Parásitos hospederos habituales (propios) de la vía
El diagnóstico del parasitismo biliar en Cuba es biliar:
poco frecuente, constituye un hallazgo en la mayoría de • Clonorchis sinensis.

Fig. 188.1. Parásitos de la vía biliar: propios o erráticos de la vía biliar.


152 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

• Opisthorchis viverrini. de unos días en el músculo del pescado las cercarias


• Opisthorchis filineus. se enquistan como metacercarias. Los seres humanos
• Fasciola hepática. adquieren la infección al ingerir peces infectados crudos
Estos son tremátodos que residen en los conductos o insuficientemente cocidos, se desenquistan las meta-
biliares y en la vesícula biliar. cercarias en el duodeno y migrar a través de la ampolla
– Parásitos erráticos de la vía biliar. de Váter a los conductos biliares, donde maduran hasta
convertirse en gusanos adultos, aproximadamente en
Clonorchiasis y Opistorchiasis 25 días (ver “Capítulo 142. Parasitismo intestinal”).
EL adulto habita en el tracto biliar, por lo general
La Clonorchiasis y opistorchiasis es la infestación dentro de los conductos biliares intrahepáticos de
crónica de las vías biliares por tremátodes hepáticos, mediano y pequeño tamaño y, en ocasiones en los
de la familia Opisthorchiidae: clonorchis sinensis, conductos biliares extrahepáticos, la vesícula biliar y el
opistorchis viverrini y opistorchis felineus. conducto pancreático. Esto conlleva a una obstrucción
mecánica, reacción inflamatoria, hiperplasia adenoma-
Ciclo de vida tosa y fibrosis periductal, pueden sobrevivir allí durante
Estos tres parásitos tienen ciclos de vida, fisiopato- más de 20 años, lo que explica la persistencia de la
logía y manifestaciones clínicas similares, se encuen- infección de larga duración y que constituyan un factor
tran en estrecha relación y solo difieren un poco en su de riesgo para el desarrollo del colangiocarcinoma.
distribución geográfica:
– Clonorchis sinensis: Patogenia
• Noreste de China. Una vez en las vías biliares estos parásitos provocan
• Corea. un estado inflamatorio crónico que conlleva una serie de
• Taiwan. alteraciones: hiperplasia adenomatosa, fibrosis periduc-
• Vietnam tal, dilatación y bilis espesa (ya que también las células
– Opistorchis viverrini: epiteliales se transforman en células productoras de
• República Democrática de Lao. mucina). Los conductos mayormente afectados son los
• Tailandia. intrahepáticos, con mayor preferencia de los afluentes
– Opistorchis felineus: más periféricos. Muchas veces la infección ocurre en
• Europa oriental. la infancia y permanece hasta después de tres décadas,
• Algunas áreas de la antigua Unión Soviética. provocan un daño acumulativo, aparecen entonces
• Sudeste de Asia. manifestaciones clínicas de enfermedad avanzada,
Estos tremátodos tienen un tamaño que oscila desde como ictericia obstructiva, hepatomegalia, colecistitis,
8 mm hasta 15 mm de largo por 1,5 mm a 4 mm de colangitis, cirrosis biliar y colangiocarcinoma, actual-
ancho, con un grosor de 1 mm, lo que le confiere un mente estos parásitos son clasificados carcinógenos del
aspecto aplanado, son alargados, en forma de hoja, que grupo 1 por la Agencia Internacional de la Organización
en su extremo anterior son cónicos y en el posterior Mundial de la Salud para la Investigación del Cáncer.
presentan una forma algo redondeada. Ante esta irritación persistente, se desencadena
Los huéspedes definitivos de los parásitos son el una respuesta inmunológica por el huésped con la
hombre y otros mamíferos piscívoros. Los huevos de producción de una serie de mediadores como: factores
los gusanos adultos son depositados en el árbol biliar de crecimiento y citoquinas fibrogénicas, que a su vez
de la persona infectada, entran en el intestino y salen también constituyen irritantes persistentes y contribu-
por las heces fecales al exterior. Al llegar el agua, los yen al daño hepatobiliar, estos estimulan la deposición
huevos son ingeridos por los caracoles (especies del de tejido conectivo, los que progresivamente remode-
género prosobranquios gasterópodo Bitinia), estos son lan y destruyen la arquitectura del tejido normal del
el primer huésped intermediario. Dentro del caracol, los epitelio biliar, con aumento gradual y acumulación de
huevos se transforman en esporocistos que se reprodu- tejido fibrótico. La severidad de la fibrosis periductal
cen asexualmente por cuatro a cinco semanas, después se correlaciona con la duración de la infección, la carga
de lo que se desprenden cercarias en el agua. Estas de parásitos y la susceptibilidad genética del huésped.
formas que nadan libremente penetran en la piel entre Este proceso de deposición fibrótica se limita solo
las escamas de los peces de agua dulce (en su mayoría a los conductos biliares y no al hígado en general,
cyprinoids), segundo huésped intermedio. Después puede ser diagnosticada por ultrasongrafía, existen
Capítulo 188. Parasitismos biliares 153

criterios para el diagnóstico de fibrosis periductal retrógrada endoscópica, en un drenaje percutáneo de


avanzada, la que no resulta de granulomas alrededor la vía biliar o durante el acto quirúrgico o en el hígado
de los huevos de tremátodos, a pesar de que los hue- post mortem se considera el “estándar de oro” para el
vos a menudo están presentes en el conducto biliar diagnóstico.
y se detectan en la ecografía. También la fibrosis El examen de heces fecales es el método de rutina,
periductal avanzada es probablemente mediada por dado la aceptación, facilidad, carácter no invasivo y
una red de citoquinas proinflamatorias mediadas por bajo costo, puede realizarse con técnicas de concen-
interluquina 6 y factor de necrosis tumoral alfa y no tración de formalina-éter, Kato frotis Katz de espesor,
a través de citocinas Th2. y la dilución de Stoll, técnica de recuento de huevos.
A pesar de que inicialmente la infestación tiene una Las pruebas serológicas se han desarrollado con
evolución asintomática, pueden aparecer tempranamen- el objetivo de llegar a un diagnóstico con mayor
te cambios inflamatorios importantes en el hígado, los sensibilidad y especificidad que los exámenes fe-
que son detectados por ultrasonido u otras modalidades cales, sin embargo, no pueden distinguir entre una
de imagen, donde se observa ampliación del lóbulo infección pasada o actual. Estos incluyen la prueba
hepático izquierdo y la vesícula biliar, pérdida de la intradérmica, inmunoelectroforesis, hemaglutinación
contractilidad de esta última, presencia de lodo y au- indirecta, la prueba de inmunofluorescencia directa e
mento de la fibrosis periductal. indirectos mediante ensayo inmunoenzimático (ELISA
Al comenzar la infección tempranamente, persistir indirecto).
por periodos de tiempo tan prolongados y conocién- Los estudios genéticos moleculares han identificado
dose el potencial carcinogénico de estos parásitos, a genes que codifican varias proteínas que son específicas
muchos personas de zonas endémicas se les diagnostica de la etapa, son candidatos potenciales en forma recom-
un colangiocarcinoma, afectándose más hombres que binante para el serodiagnóstico. Para métodos basados​​
mujeres, al detectarse esta neoplasia el paciente presenta en ADN, una sonda de focalización ADN repetitivo se
un mal pronóstico, con posibilidades de vida muy des- ha utilizado para la detección de huevos. La reacción en
favorable, pues la muerte por lo general ocurre dentro cadena de la polimerasa basada en un par de cebadores
tres a seis meses después del diagnóstico. complementarios al ADN diana ha demostrado utilidad
para la detección de huevos fecales.
Diagnóstico clínico
Hallazgos de la ultrasonografía, tomografía axial
Inicialmente la infección tiene una evolución si- computarizada y resonancia magnética
lenciosa. Pueden aparecer síntomas ocasionales como
fiebre, dolor abdominal y diarrea. Las manifestaciones Los parásitos dentro de las vías biliares suelen ser
difíciles de visualizar por ultrasonido o tomografía axial
crónicas se correlacionan con la carga de parásitos don-
computarizada. Con las nuevas técnicas de alta resolu-
de prevalecen manifestaciones hepatobiliares: fiebre,
ción ecográfica y tomografía axial computarizada, estos
dolor en cuadrante superior derecho, hepatomegalia
tremátodos se observan como focos ecogénicos, sin
y eosinofilia. Si existe un alto grado de infestación de
sombra acústica dentro de los conductos biliares. Sin
largo tiempo de evolución, puede aparecer signos cró-
embargo, cuando ocupan la vesícula biliar son muchos
nicos o intermitentes de obstrucción biliar con grados
más fáciles de observar, se muestran como focos ecogé-
variables de intensidad: donde igualmente aparece
nicos flotantes, discretos y sin sombra acústica dentro
íctero, prurito, dolor más clínica secundaria a colelitia-
de la luz, los que cambian de posición en respuesta a
sis, colecistitis y colangitis piógena recurrente. Debe
un golpe de luz con el transductor. Ocasionalmente se
sospecharse el desarrollo de un colangiocarcinoma
observan en movimiento espontáneo.
en personas infectadas con pérdida de peso, ictericia, Se observa, además, la dilatación difusa y uniforme
epigastralgia y masa abdominal palpable. de los conductos biliares intrahepáticos pequeños, con
dilatación mínima o nula de los conductos biliares gran-
Exámenes complementarios des y sin lesiones focales que correspondan a la posible
Las pruebas bioquímicas revelan fosfatasa alcalina etiología obstructiva. Puede hacerse evidente también
y niveles de bilirrubina elevados. el engrosamiento de la pared del conducto biliar.
Demostración de huevos en las heces, bilis o líquido La fibrosis periductal avanzada persistente constitu-
duodenal o la recuperación de los tremátodos durante ye un factor de riesgo para el desarrollo del colangiocar-
la implantación del stent en la colangiopancreatografía cinoma, esta puede detectarse por ultrasonografía. Las
154 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

imágenes muestran los conductos periféricos biliares endoscópica de los parásitos del árbol biliar, la inserción
dilatados y engrosados, con nódulos ecogénicos con del tubo nasobiliar o prótesis endoscópicas biliares
un centro libre de eco. Existen criterios ultrasonográ- ha proporcionado la descompresión del árbol biliar
ficos para el diagnóstico y seguimiento de la fibrosis obstruido. La instilación de fármacos a través de tubo
periductal avanzada: nasobiliar puede ser eficaz. La pancreatitis secundaria a
– Fibrosis periductal avanzada se define como dos o los parásitos también evoluciona hacia la resolutividad
más nódulos ecogénicos en más de un segmento del después de la extracción del gusano.
hígado. Todos los pacientes con clonorchiasis u opisthor-
– Fibrosis periductal avanzada no persistente define chiasis deben recibir praziquantel a 75 mg/kg dividido
la no existencia de nódulos ecogénicos 12 meses en tres dosis en un día.
después del tratamiento con praziquantel. Cuando existe un alto grado de infestación, los pará-
– Fibrosis periductal avanzada persistente se define sitos muertos pueden causar obstrucción biliar, se hace
como dos o más nódulos ecogénicos en dos o más necesario el drenaje por vía endoscópica o quirúrgica.
segmentos del hígado y de nuevo 12 meses después
del tratamiento con praziquantel.
Fasciolasis
Cuando los parásitos viven en conductos biliares Véase “Capítulo 146.Trematodos.
periféricos de pequeño y mediano tamaño, se traduce
en una obstrucción incompleta de larga data, no son Epidemiología
visibles en las imágenes porque son muy delgadas, solo En América Latina se reportan alta incidencia de
en los casos de alto grado de infestación se muestra infestación en humanos en países como Cuba, Chile,
imagen de múltiples pequeños defectos de lleno de Perú y Bolivia.
baja intensidad en la colangioresonancia o tomografía
La infección humana en Cuba se encontró por pri-
axial computarizada.
mera vez en 1931 con un caso autóctono reportado por
En casos de infestaciones severas el páncreas puede
Kourí. En los últimos 10 años no se han reportado brotes
estar afectado, observándose en el pancreatograma tanto
epidémicos, pero sí se continúan diagnosticando casos
por resonancia magnética o colangipancreatografía
esporádicos anuales, particularmente en el occidente y
retrograda endoscópica los conductos de ramificación
centro del país.
difusamente dilatados en la cola del páncreas, sin es-
tar comprometidos el conducto pancreático principal Ciclo de vida
y sus afluentes en la cabeza y el cuerpo. A veces, los
pequeños defectos de lleno que pueden ser causados​​ Véase “Capítulo 146. Trematodos”.
por tremátodos adultos, se observan en el conducto
pancreático principal. Diagnóstico clínico
La colangiografía muestra varios defectos de La sintomatología que presenta el paciente depende
llenos alargados, lineales, redondos, filamentosos, de la fase o estadio del ciclo evolutivo de los parási-
como arroz, oval o elípticos, con tamaño que varían tos, así como el número de estos. El periodo inicial o
desde pocos milímetros hasta 10 mm de longitud, en agudo corresponde con la migración de los dístomas
correspondencia con la forma adulta del parásito, así inmaduros y la invasión hepática y comienza al cabo
como la dilatación de los conductos intrahepáticos de dos a tres semanas de la comida infestante. El perio-
que alternan con estenosis, simulando a la colangitis do de estado o crónico, después de unos tres a cuatro
esclerosante, que es más pronunciada en los afluentes meses posinfección, se divide en una fase latente que
de las zonas periféricas. corresponde con el establecimiento de los larvas en los
conductos biliares y que puede durar de meses a años,
Tratamiento y la fase obstructiva crónica la que es consecuencia de
Antes para el tratamiento de este tipo de parásitos la inflamación de los conductos biliares intrahepáticos
en la vía biliar se tenía que recurrir a la cirugía. Actual- y extrahepáticos, así como la hiperplasia provocada
mente con el desarrollo de la colangipancreatografía por los parásitos adultos. Las manifestaciones clínicas
retrograda endoscópica, esta se ha recomendado como y hemoquímicas de cada fase son:
la primera línea diagnóstica y terapéutica para estas – Fase aguda:
afecciones, la papilotomía endoscópica, la extracción • Fiebre.
Capítulo 188. Parasitismos biliares 155

• Dolor en epigastrio e hipocondrio derecho. Fase crónica


• Nauseas, vómitos, diarreas y hiporexia. Existe eliminación de huevos al exterior y son iden-
• Mialgias y artralgias. tificados mediante:
• Urticaria fugaz. – Examen de las heces fecales, mostrando mayor
• Hepatomegalia dolorosa. utilidad diagnóstica la realización métodos de con-
• Esplenomegalia (25 % de los casos). centración, dentro de los que se encuentran la técnica
• Dermatografía ocasional. de la copa cónica, método de Ritchie y técnicas de
• Ictericia rara. cuantificación como el Kato-Katz y por sedimenta-
• Leucocitosis con desviación a la izquierda. ción, ya que la excreción de los huevos puede ser
• Anemia. irregular, baja e inexistente cuando la infestación
• Eosinofilia (excede en 80 % a los leucocitos). es escasa, crónica o errática, incluso pueden existir
– Fase latente: falsos negativos en caso de personas que hayan
• Puede aparecer fiebre. ingerido hígado infectado de ganado.
• Síntomas gastrointestinales vagos. – Aspirado de bilis o frotis duodenal: en esta fase
• Persiste eosinofilia. también los métodos de imágenes apoyan el diag-
– Fase crónica: nóstico, tal como lo hace la ultrasonografía donde
• Sintomatología obstructiva biliar intermitente: se visualizan los parásitos adultos en movimiento
dolor abdominal, náuseas, vómito, ictericia de dentro de los conductos biliares y vesícula. En la to-
tipo obstructivo, hepatomegalia blanda y fiebre. mografía axial computarizada de hígado después de
• Episodios de colangitis y colelitiasis. la administración de medio de contraste, es frecuente
• Cirrosis biliar y colangitis esclerosante secunda- observar lesiones hipodensas pequeñas de 2 mm a
ria (infestación intensa y duradera). 10 mm de diámetro, microabscesos distribuidos con
• Nódulos migratorios pruriginosos con intensa patrón radial o ramificado, lesiones subcapsulares y
eosinofilia (son raros y ocurre en parasitismo hemorragias, engrosamiento de la cápsula hepática.
errático). En los conductos biliares o vesícula biliar se busca
• Frecuente anemia secundaria a pérdida sanguínea. la forma adulta. Igualmente en la resonancia mag-
• Hemobilia rara. nética se observan las formas adultas y brinda deta-
• Bioquímica con enzimas alteradas que indican lles acerca de las alteraciones morfológicas a nivel
obstrucción biliar. hepatobiliar. La colangipancreatografía retrograda
endoscópica es un procedimiento que brinda op-
Exámenes complementarios ciones diagnósticas y terapéuticas ya que identifica
Ante un paciente con fiebre prolongada, dolor ab- defectos de lleno en conductos biliares o vesícula
dominal, diarrea, hepatomegalia dolorosa y eosinofilia y permite recolectar las formas juveniles o adultas
importante, debe considerarse la posibilidad de una del parásito (Fig. 188.2), para esto último también
infección por fasciola, principalmente si existen ante- puede recurrirse a la colangiografía percutánea.
cedentes epidemiológicos de residir o haber viajado a
un área endémica o que existan familiares o brotes de También es necesaria la indicación de las pruebas
la infestación. Cuando se diagnostica la fasciolasis en funcionales hepáticas. Otros estudios que también se
una persona debe evaluarse a todos los miembros de indican son la detección de coproantígenos y la reacción
la familia. en cadena de la polimerasa para la identificación de
especie de fasciola hepática.
Fase aguda Los hallazgos histológicos hepáticos incluyen la
En esta etapa aún no existe salida de huevos al necrosis y granulomas con infiltrado eosinofílico y
exterior, por lo que el diagnóstico se realiza mediante cristales de Charcot-Leydens. El abceso eosinofílico,
métodos serológicos de detección de anticuerpos por la hiperplasia del conducto biliar y la fibrosis periportal
hemaglutinación indirecta, ELISA e inmunofluores- pueden ser observados.
cencia indirecta. También en esta etapa existe anemia,
leucocitosis con desviación a la izquierda, eosinofilia
Tratamiento
importante que excede en 80 % a los leucocitos e hi- El fármaco de elección es el triclabendazol, 10 mg/kg
perganmaglobulinemia. una sola vez al día. Otro medicamento potencialmente
156 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

eficaz es el bitionol que en fases agudas se utiliza a Ciclo de vida


razón de 25 mg/kg/día y en la fase crónica 40 mg/kg/
Véase “Capítulo 144. Helmintos”.
día, en ambas durante 40 días y si existiera recurrencia
repetir a los dos o tres meses, pero al igual que la eme-
Diagnóstico clínico
tina tiene poca eficacia para las formas migratorias del
parásito y desencadenan efectos adversos. La dosis y Generalmente esta parasitosis evoluciona de forma
tiempo de duración de la emetina es 60 mg/kg/día y de asintomática. La aparición de síntomas depende de la
la dihidroemetina 90 mg/kg/día ambos por 10 días. El fase en la que se encuentre, el número de parásitos o la
praziquantel, mebendazol y albendazol no son efectivos existencia de localizaciones erráticas. Cuando existen
en la fascioliasis. grandes infestaciones los parásitos asientan en sitios
ectópicos, dentro de estos se describe la migración a
través de la ampolla de Váter a los conductos biliares,
vesícula y conductos pancreáticos. El tamaño de los
parásitos (machos de 10 cm a 30 cm y las hembras
de 20 cm a 49 cm) y su movilidad, hacen que su pre-
sencia a este nivel funcione como un obstáculo, con
manifestaciones de un síndrome obstructivo biliar
de comienzo agudo: dolor abdominal a tipo cólico
biliar, nauseas, vómitos y fiebre. También puede
ocurrir ictericia obstructiva, colangitis recurrente,
colecistis acalculosa y pancreatitis aguda. Además,
la liberación de sustancias de desechos y tóxicas por
el helminto en el árbol biliar, provoca irritación a
este nivel que predispone también a la aparición de
colangitis. Los parásitos en ocasiones entran y salen a
través de la papila y provocan síntomas intermitentes
y alteraciones fluctuantes de los exámenes de
laboratorio. El embarazo puede predisponer al
Fig. 188.2. Fasciola hepática extraída de la vía biliar mediante desarrollo de la migración del gusano a la vía biliar y
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica. el desencadenamiento de las manifestaciones clínicas.
En los conductos biliares las hembras adultas pueden
depositar huevos y alcanzar el parénquima hepático,
La colangipancreatografía retrograda endoscópica
ocasionando granulomas, cuerpos extraños y abcesos.
es llevada a cabo en la fase crónica cuando los parási-
Los huevos y fragmentos de parásitos pueden constituir
tos asientan en la vía biliar, ha mostrado gran eficacia,
el núcleo para la futura formación de cálculos.
principalmente en pacientes con colangitis aguda, ya
que permite la extracción de los dístomas adultos. La Exámenes complementarios
esfinterotomía y la extracción con balón rápidamente
mejoran la sintomatología. El diagnóstico se realiza mediante la identificación
Los parásitos erráticos de la vía biliar son los pará- de sus formas adultas eliminados por el recto u otros ori-
sitos que migran a la vía biliar, provienen de intestino ficios corporales y el hallazgo de huevos en exámenes
delgado solo se hace referencia a algunas conside- fecales, son de preferencia los coproparasitoscópicos de
raciones de su comportamiento en la vía biliar y sus concentración cuantitativos, aunque pueden realizarse
traducciones: observaciones en fresco.
En el caso particular de la migración errática a la
vía biliar, los parásitos pueden detectarse mediante la
Ascaris lumbricoide realización de estudios radiológicos como el ultrasonido
El Ascaris lumbricoides, es un nemato de amplia de la vía biliar como tiras ecogénicas largas, lineales
distribución mundial, con mayor prevalencia en países que no emiten sombra acústica, a veces con una línea
en vías de desarrollo y malas condiciones higiénico-sa- ecolibre central longitudinal que representa el tracto
nitarias, pero principalmente en regiones tropicales, gastrointestinal del gusano. La colangiopancreatografía
subtropicales y otras áreas húmedas. retrógrada endoscópica también permite el diagnóstico
Capítulo 188. Parasitismos biliares 157

de las formas adultas, las que se observan como un Ciclo de vida


defecto de lleno tubular largo en el conducto de la bilis
Véase “Capítulo 144. Helmintos”.
o vesícula y además brinda opciones terapéuticas. La
colangioresonancia puede mostrar los gusanos intraduc-
Diagnóstico clínico
tales como un defecto de lleno lineal de baja intensidad
en los conductos biliares. En huéspedes inmunocompetentes la estrongiloido-
sis suele ser asintomática o provoca escasas molestias.
Tratamiento Cuando estas se presentan, la sintomatología suele
En los casos de áscaris en las vías biliares se ha ser por trastornos cutáneos, pulmonares y digestivos,
demostrado que el tratamiento con albendazol es poco acompañados de hipereosinofilia y altos niveles de IgE
eficaz porque tiene poca absorción y concentración en específica, sin embargo, la ausencia de una respuesta
la bilis. El albendazol paraliza los gusanos incapaces de inmunológica capaz de eliminar o contener la infec-
atravesar el esfínter de Oddi. Deben tratarse los pacien- ción parasitaria da lugar a una hiperinfección donde
tes con ascariasis biliar por varios días con albendazol se comprometen órganos que normalmente no están
porque estos solo son sensibles cuando emigran fuera involucrados como: hígado, tracto biliar, páncreas,
del conducto biliar. glándulas adrenales, tiroides, ganglios linfáticos, ce-
En el caso de colangitis aguda, ictericia obstructiva rebro y vías urinarias, incluso se relaciona con inferti-
aguda o pancreatitis aguda, se requiere colangipan- lidad en el hombre. En el tracto digestivo, además del
creatografía retrograda endoscópica emergente con la intestino delgado, puede existir compromiso colónico
extracción de los gusanos de los conductos mediante ba- semejando una colitis ulcerosa o enfermedad de Crohn,
lón, cesta o fórceps, preferentemente sin esfinterotomía, e incluso íleo paralítico.
ya que esta última permite el acceso más fácil de los Las formas filariformes se han asociado a enferme-
parásitos a los conductos biliares y puede incrementar dad biliar aguda, con un cuadro de ictericia obstructiva,
el riesgo de afectación pancreática y biliar recurrente con elevación de la fosfatasa alcalina y bilirrubinas
secundaria a ascaridiasis. Algunos autores han preconi- séricas que se relaciona con un proceso inflamatorio
zado la instilación de piperazina en la vía biliar. duodenal, junto con la propia infección por Strongyloi-
Independientemente a la terapéutica endoscópica des, sin embargo, constituye una forma de presentación
debe realizarse tratamiento antiparasitario, con la fina- poco frecuente. También se han descrito masas pan-
lidad de la eliminación de parásitos a nivel de intestino creáticas en relación con la infestación, que pueden
y otros sitios erráticos: también provocar estenosis biliar e ictericia obstructiva
– Albendazol: 400 mg dosis única. secundaria, esta es poco frecuente.
– Mebendazol: 100 mg cada 12 h por tres días.
– Pamoato de pirantel: 11mg/kg en una sola dosis, sin Exámenes complementarios
exceder de 1 g en 24 h.
– Piperazina: 75 mg/kg (máximo 3,5 g en adultos o Debe realizarse un examen microscópico minucio-
2,5 g en niños entre 2 a 12 años). so en todos los pacientes que provenientes de áreas
endémicas, que estén en situación de riesgo por in-
munosupresión o por tratamiento con corticoides. La
Estrongiloidosis eosinofilia puede ser un dato sugestivo en los pacientes
La estrongiloidosis es una infección parasitaria inmunocompetentes.
ocasionada por el Strongiloides stercolaris, cuyas ma- El diagnóstico de laboratorio se basa fundamental-
nifestaciones clínicas dependen del estado inmunoló- mente en la búsqueda de larvas del parásito en materia
gico de su hospedero, puede presentarse con síntomas fecal y en contenido dudoenal. Para aumentar la sensibi-
digestivos (cuando se encuentran en su hábitat natural) o lidad se pueden utilizar métodos de concentración como
generalizados (en correspondencia con la diseminación el de Baermann y Harada Mori y métodos de cultivo
del parásito a otros sitios). en placas de agar. También puede lavarse la superficie
El Strongyloides stercolaris es un nemátodo intesti- del agar con solución formolada, que se centrifuga y el
nal, endémico en países de clima tropical y subtropical, sedimento se analiza microscópicamente.
como el sudeste de Asia, América latina, África subsa- Debido a que es necesario efectuar múltiples exá-
hariana y algunas partes del sudeste de Estados Unidos. menes de materia fecal para realizar un diagnóstico
Puede encontrarse en otras zonas en relación con via- correcto, es importante remarcar que la falta de hallazgo
jeros e inmigrantes provenientes de áreas endémicas. de larvas no es indicación de ausencia de infección.
158 Parte XIV. Vesícula biliar y vías biliares

En los casos de hiperinfección con diseminación, las Diagnóstico clínico


larvas pueden buscarse en esputo, lavado broqueoal-
Generalmente las personas son asintomáticas sobre
veolar, líquido pleural, líquido cefalorraquídeo, orina,
todos donde existe una buena respuesta inmune o se
entre otros.
presentan manifestaciones digestivas como diarreas
Se han desarrollado pruebas de inmunodiagnóstico
acuosas que pueden se autolimitadas o ser graves o
que incluyen pruebas cutáneas, inmunofluorescencia
profusas con cólico abdominal, fiebre y vómitos, en
indirecta, ELISA, métodos de aglutinación, entre otras.
ocasiones los cuadros diarreicos evolucionan a la cro-
La sensibilidad y especificidad es muy variable, ade-
nicidad. Cuando existe inmunodeficiencia aparecen
más, no se puede distinguir entre una infección pasada
y una actual. signos de malabsorción, así como manifestaciones
En el caso particular de la migración a vía biliar la extraintestinales con afectación de vía biliar: colecistitis
ecografía del abdomen muestra dilatación de los con- alitiásica, colangitis, pancreatitis y hepatitis.
ductos intrahepáticos y extrahepáticos, pero no cálculos
o masas. En la colangiopancreatografía por resonancia Exámenes complementarios
magnética y la colangipancreatografía retrograda en- El diagnóstico se basa en la identificación en las he-
doscópica también se observan la alteraciones anterio- ces fecales de los huevos de los parásitos, tienen mayor
res y algunos autores han descrito el “signo del doble sensibilidad y especificidad si se realizan métodos de
conducto”, que traduce la afectación de los conductos concentración como el Sheather, Kinyouno tinción con
extrahepático y pancreático dilatados. fucsina básica (Ziehl-Neelsen modificado o safranina).
Cuando se sospecha compromiso intestinal es oportuno
Tratamiento buscarlo en la bilis o esputo.
Opciones terapéuticas: Los exámenes inmunohistoquímicos son útiles como
– Ivermectina: 200 mg/kg cada día en dos días. ELISA, la identificación de coproantígenos e inmu-
– Tiabendazol: 25 mg/kg cada 12 h por vía oral. nofluorescencia. Entre las técnicas moleculares cabe
– Albendazol: 400 mg cada12 h, en tres días. mencionar algunas técnicas de reacción en cadena de
– En caso de síndrome de hiperinfección el tratamiento la polimerasa y otros métodos basados en la detección
se tiene que prolongar durante dos a cuatro semanas. de ADN.
Cuando existe migración a la vía biliar los exámenes
imaginológicos como la ultrasonografía, la tomografía
Criptosporidiosis axial computarizada y resonancia magnética nuclear
Es la infestación provocada por un protozoario muestran alteraciones a este nivel: dilatación biliar in-
oportunista denominado Cryptosporidium parvum, trahepática o extrahepática, irregularidades sugestivas
sus manifestaciones clínicas están en dependencia del de colangitis esclerosante, entre otras.
estado inmunológico del paciente (Véase “Capítulo La colangioresonancia y la colangiopancreatografía
143. Protozoos” y “Capítulo 63. Sida”. retrógrada endoscópica igualmente muestran las alte-
Esta es una enfermedad cosmopolita, con mayor raciones biliares antes descritas, pero además puede
incidencia en zonas con clima tropical o templado, y se distinguirse estenosis papilar, en este caso la colangio-
presenta con frecuencia en pacientes con sida, así como pancreatografía retrógrada endoscópica permite llevar
otras condiciones que provocan inmunodeficiencia. En a cabo la realización de medidas terapéuticas.
países en desarrollo, en los que prevalece una sanidad
deficiente y hacinamiento, constituye una zoonosis de Tratamiento
mayor importancia. Cuando existe obstrucción biliar con estenosis pa-
Este tiene una trasmisión oro-fecal, a través de la pilar en paciente con cristopsoridiasis la papilotomía
ingestión de quistes infectantes mediante alimentos, mediante colangiopancreatografía retrógrada endoscó-
agua u objetos fómites contaminados. La trasmisión pica es de utilidad para el alivio de los síntomas.
directa también puede ocurrir en las prácticas sexuales Ninguna terapia medicamentosa ha demostrado ser
en las que haya contacto oro-anal. óptima. Lo primero es tratar y compensar la causa de
la inmunosupresión, sin embargo, se reserva la posi-
Ciclo de vida
bilidad de indicar nitazoxanida 1 000 mg dos veces al
Véase “Capítulo 143. Protozoos” y “Capítulo 63. día por dos semanas o más, también otra alternativa
Sida”. es la paramomicina 500 mg cada 6 h durante 14 días
Capítulo 188. Parasitismos biliares 159

(con resultados no muy alentadores), en ocasiones se Favennec, L., Ortiz, Jave. J., Gargala, G., Lopez, C. N., Ayoub,
combina esta última con azitromicina. A., Rossignol, J. F. (2003). Double-blind randomized placebo
controlled study of nitaxozanide in the treatment of fascioliasis
En el caso de pacientes con virus de inmunodefi- in adults and children from northern Peru. Aliment Pharmacol
ciencia-sida y criptosporidiasis lo más importante es Ther, 17, 265-270.
una terapia antirretroviral, ya que en realidad la infes- Huston, C. D. (2010). Intestinal Protozoa. En: Feldman, M., Fried-
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Páncreas Parte
XV
Capítulo 189
Páncreas
Dr. C. Juan R. González Cansino
Dr. Jordi Alonso Soto
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Embriología Ambos páncreas primitivos contienen un conducto


axial. El conducto dorsal asciende directamente de la pa-
El páncreas fue uno de los últimos órganos en el red duodenal y el conducto ventral asciende del conducto
abdomen en recibir la atención crítica de anatomistas, biliar común. En la fusión de los componentes ventrales
fisiólogos, médicos, y cirujanos. Fue inicialmente re- y dorsales, el conducto ventral se anastomosa con el
ferido como “el dedo del hígado” en el Talmud, escrito dorsal, formando el conducto pancreático principal. El
entre 200 años a.C.y200 d.C. Galeno también lo men- fin proximal del conducto dorsal se convierte en el con-
ciona en sus escritos y pensó que el páncreas servía de ducto accesorio de Santorini en el adulto y está presente
soporte y protección de los vasos sanguíneos. Vesalius en 70 % de las piezas anatómicas. La conexión común de
consideró el órgano como un cojín para el estómago. salida del conducto de la bilis y el conducto pancreático
Solo existía una breve información sobre este órgano observada en la mayoría de los adultos es el resultado del
hasta que Wirsung demostró los conductos pancreáticos origen común del conducto biliar y el páncreas ventral.
de humanos en 1642 y de Graaf descubrió la secreción Los acinos pancreáticos aparecen en el tercer mes de
pancreática a través de una fístula pancreática de un gestación como derivadas de los conductos laterales y
perro en 1664. terminales de los conductos primitivos. El resto de los
La primera parte del páncreas aparece en embrio- acinos se conectan al conducto pancreático mayor por
nes de aproximadamente 4 mm en la cuarta semana dúctulos secretorios pequeños. El páncreas primitivo
de gestación. Las yemas de la capa endodérmica del está compuesto de células epiteliales relativamente indi-
duodeno se desarrolla en este momento: el páncreas ferenciadas similares en la morfología de las células del
ventral y el páncreas dorsal (Fig. 189.1). El páncreas conducto. El tejido mesenquimal en el que la glándula
crece, provee una cápsula de tejido conectivo delgado
dorsal crece más rápidamente y a la sexta semana de
y divide la glándula en lóbulos.
gestación, es una estructura nodular alargada exten-
Existen diferencias bien definidas en la morfología,
diéndose en el mesenterio dorsal, dentro del que su
contenido de enzimas y la capacidad secretoria entre
crecimiento continúa. El páncreas ventral permanece
el páncreas embrionario y el páncreas de adultos. En
más pequeño y es llevado fuera del duodeno por su etapas tempranas del desarrollo, el páncreas no tiene
conexión con el conducto común de la bilis (Fig. gránulos de zimógeno y retículo endoplásmico granular
189.2).Los dos primordios se colocan en aposición pequeño. En humanos, el páncreas está compuesto de
por el crecimiento disparejo del duodeno, y se funden células epiteliales indiferenciadas a la novena semana
a la séptima semana de gestación (Fig. 189.3). La cola, de gestación. Durante la subsiguiente diferenciación
el cuerpo y parte de la cabeza del páncreas se forman celular, la actividad específica de las enzimas diges-
por el componente dorsal, el resto de la cabeza y el tivas se incrementa una algunos miles y los gránulos
proceso uncinado se derivan del páncreas ventral. Estas aumentan de tamaño y vienen a ocupar la mayor parte
relaciones primitivas son todavía distinguibles en el del citoplasma de las células, incluyendo las regiones
páncreas para adultos. basolaterales.
162 Parte XV. Páncreas

A las doce semanas de gestación en humanos, los


gránulos de cimógenos son los primeros detectados en
la microscopía electrónica. Las células también con-
tienen un complejo de Golgi y retículo endoplásmico
granular en pequeñas cantidades. A las veinte semanas
de gestación se ven gránulos cimógenos grandes típicos
del adulto. Cada enzima digestiva tiene un grado carac-
terístico de acumulación y aumenta en concentración
en momentos diferentes. Al nacimiento, los gránulos
encontrados en el páncreas en animales de laborato-
rio son normalmente grandes, aproximadamente seis
veces el volumen de los gránulos del adulto. En este
Fig. 189.1. Páncreas ventral y dorsal en la cuarta semana tiempo, la capacidad para la estimular la excreción esta
de gestación. lograda. La diferenciación del páncreas continúa más
allá del nacimiento respecto al tamaño de los gránulos
del cimógeno, así como también la enzima contenida
en el tejido.
El páncreas endocrino se diferencia en apenas al
mismo tiempo que la porción exocrina, y la aparición
de islotes de hormonas también precede la aparición de
gránulos de secreción en las células. En humanos, las
células endocrinas son observadas primero individual-
mente o en grupos pequeños a lo largo de la porción
basolateral de las células acinar indiferenciadas (novena
a décima semanas), pero entre las doce a las dieciséis
semanas pueden ser observados islotes bien definidos en
diversas etapas de complejidad. El desarrollo de islotes
en las regiones ricas en polipéptidos pancreáticos que-
da aisladas ligeramente detrás de las regiones ricas en
Fig.189.2. Páncreas ventral y el páncreas dorsal en la sexta glucagón. La cantidad de células de insulina aumentan
semana de gestación. continuamente con la edad, mientras que la de células
de glucagón se incrementa durante la vida fetal y luego
decrecen en infantes y adultos. El número de células de
somatostatina es elevado en etapas fetales y del infante,
mientras que las células polipéptidos pancreáticos son
menos abundantes durante estas etapas.

Factores de crecimiento y marcadores


El desarrollo pancreático está influenciado por una
variedad de factores de transcripción y marcadores.
Los factores de señalización (marcadores) se originan
en el mesenquima rodeando los tejidos y estructuras
vasculares. El conocimiento profundo de la regulación
pancreática por estas vía ofrece un entendimiento pro-
fundo en la función autocrina, insuficiencia endocrina
y exocrina, cáncer pancreático, quistes pancreáticos,
y pancreatitis crónica con potenciales opciones diag-
nósticas y terapéuticas. La importancia de estas vías
Fig.189.3. Páncreas ventral y el dorsal en la séptima semana
de gestación.
es que ofrecen explicaciones para enfermedades que
Capítulo 189. Páncreas 163

incluyen el páncreas anular, el páncreas divisum, y la ración no controlada, vista en neoplasias pancreáticas
heterotopia pancreática. se ha asociado con el marcador hedgehog anormal. El
Las proteínas hedgehog (en erizo) son moléculas hedgehog sonic normalmente no es encontrado en el
marcadoras que regulan varios aspectos de la morfo- páncreas adulto, a distinción del hedgehog indio y del
génesis, incluyendo la diferenciación y proliferación tipo desierto, los que están normalmente expresados.
celular. Hay tres genes hedgehog en mamíferos: el El cáncer pancreático es asociado con la expresión de
sonic, el desierto y el indio, los que codifican pro- genes hedgehog sonic y la regulación del gen hedge-
teínas secretadas que se provocan como respuestas hog indio. Altos niveles de expresión de gen hedgehog
dependientes en la concentración de células diana. sonic se ve en grados avanzados de atipia. Las lesiones
Las proteínas hedgehog,son proteínas extracelulares tipo neoplasia pancreática intraepitelial se ven tam-
que actúan como marcador interactuante. Los parches bién en ratones transgénico con sobreexpresión genes
de los receptores transmembrana y smoothenedestán hedgehog sonic. Las lesiones neoplasia pancreática
regulados a través de esta interacción. El parche de los intraepitelial están asociadas con la neoplasia mucinosa
receptores transmembrana es un regulador negativo papilar intraductal) del páncreas y puede progresar al
de la función smoothened. Cuando el gen hedgehog adenocarcinoma.
está unido a parches de los receptores transmembrana,
smoothened es liberado de los efectos inhibitorios. Anatomía
Esto conduce a la activación de factores transcrip-
cionales. El páncreas es una glándula suave, alargada, aplas-
La proteína hedgehog india estimula el crecimiento tada, con 12 cm a 20 cm de largo. En adultos pesa entre
pancreático. En contraste, la expresión de la proteína 70 g y 110 g. Es un órgano retroperitoneal y tiene una
hedgehog sonic inhibe el desarrollo pancreático y es ex- estructura lobular. Este está cubierto por un tejido con-
cluida del tejido pancreático en desarrollo. Los ratones juntivo fino, pero no tiene una cápsula verdadera. Su ca-
transgénicos que sobreexpresan la proteína hedgehog beza esta hacia el lado derecho y dentro de la curvatura
sonic demuestran reducciones marcadas del tejido exo- del duodeno. El cuello, cuerpo y la cola del páncreas se
crino y endocrino pancreático. La proteína hedgehog dirigen oblicuamente en el abdomen posterior, con la
india está bloqueada en los modelos animales, conduce cola extendiéndose hasta la superficie gástrica del bazo
a una reducción en el tamaño pancreático y deteriora el (Figs. 189.4 y 189.5). La segunda y tercera curvaturas
desarrollo de la célula endocrina en ratones. Además, la del duodeno están alrededor de la cabeza del páncreas.
inactivación homocigótica de los geneshedgehog indio La superficie anterior de la cabeza del páncreas está
en ratones dio como resultado el desarrollo de un pán- adyacente al píloro, la primera parte del duodeno y el
creas anular en 42 % de los ratones. La inactivación de colon transverso. La superficie posterior esta sobre el
la proteína hedgehog sonic también se ha asociadocon hilio y el borde medial del riñón derecho, la vena cava
desarrollo pancreático anular. Un modelo de páncreas inferior y los vasos renales derechos, la vena gonadal
divisum en ratones incluye genotipos heterocigóticos derecha y la crura derecha del diafragma.
para los alelos nulos de gen hedgehog sonic e indio El proceso uncinado es una prolongación de tejido
y deficiente Smad2. Las mutaciones genes hedgehog pancreático de forma y tamaño variable. Se proyecta
sonic en humanos son asociadas con malrotación del fuera de la parte inferior de la cabeza del páncreas,
intestino y ano imperforado, y con páncreas anular. extendiéndose hacia arriba y a la izquierda. El proceso
El gen hedgehog sonic también funciona para inhibir uncinado está anterior a la aorta y la vena cava inferior
formación de páncreas ectópico en el estómago, duo- y cubierto superiormente por los vasos mesentéricos
deno y hígado. La inhibición del marcador hedgehog superiores que emergen debajo del cuello del páncreas.
en embriones de pollos conduce al brote ectópico de Hay muchas variaciones del proceso uncinado, que
estructuras pancreáticas en estómago y duodeno, esto puede aún estar ausente.
ofrece una potencial explicación de la heterotopia pan- El cuello del páncreas es una parte circunscrita de la
creática (restos pancreáticos). glándula que se extiende de la cabeza del páncreas hacia
La función de células indiferenciadas y su control izquierda, uniendo esta con el cuerpo del páncreas. Es de
en el desarrollo pancreático se vuelve pertinente en 1,5 cm a 2,0cm largo y 3,0cm a 4,0cm de ancho. En la
adultos cuando estos mismos mecanismos influyen en parte posterior del cuello del páncreas está la confluencia
la reparación, reemplazo y regeneración. La prolife- de la vena porta con la mesentérica superior y las venas
164 Parte XV. Páncreas

Fig. 189.4. Relaciones anatómicas del páncreas. Vista anterior.

Fig. 189.5. Relaciones anatómicas del páncreas. Vista posterior.

esplénicas. En su porción anterior está cubierta en parte contra la aorta por el peritoneo. La superficie anterior
por el píloro y el peritoneo. El cuello se extiende hacia del cuerpo está cubierta por el peritoneo de la bursa
la derecha hasta la arteria pancreaticoduodenal antero- omental que separa el estómago del páncreas. El cuerpo
superior, rama de la arteria gastroduodenal. en su porción anterior contacta con el antro, el cuerpo
El cuerpo del páncreas está hacia el lado izquierdo del estómago y el mesocolon transverso. Posterior al
y anterior a la aorta. Es retroperitoneal y es sujetado cuerpo del páncreas está la aorta, el origen de la arteria
Capítulo 189. Páncreas 165

mesentérica superior, la crura izquierda del diafragma, anastomosis de los conductos que drenan los lóbulos de
el riñón izquierdo, la glándula adrenal izquierda y la la glándula. Se distribuye de izquierda a derecha y se
vena esplénica. La línea media del cuerpo yace encima amplían por conductos adicionales en el interior de la
de la columna lumbar, lo que hace esta área del páncreas glándula (conductos secundarios). A través de la cola
más vulnerable al trauma abdominal. y el cuerpo, el conducto está situado en el medio, entre
El cuerpo pasa lateralmente y se anexa con la cola los márgenes superior e inferior y ligeramente posterior.
del páncreas sin un punto perceptible de su unión. La El conducto principal se vuelve caudal y posterior al
cola es relativamente móvil y su punta usualmente al- alcanzar la cabeza del páncreas. A nivel de la papila
canza el hilio esplénico. Con la vena y arteria esplénica, mayor, el conducto se ubica horizontalmente para aso-
la cola está contenida entre las dos capas del ligamento ciarse usualmente con el conducto biliar común. Este
esplenorenal. El ligamento esplenocólico adjunta la segmento común pequeño es el ámpula del conducto
flexión esplénica del colon al bazo y la coloca cerca biliar, la cual termina en la papila duodenal o de Váter.
de la cola del páncreas. La relación del conducto biliar común y el conducto
La porción distal final del conducto biliar común, el de Wirsung en la papila es compleja. Los conductos
duodeno y la cabeza del páncreas forman una unidad. pueden abrirse separadamente en la ampolla y pueden
El conducto biliar común está ubicado a la derecha tener un septum interpuesto o un canal común. Un canal
de la arteria gastroduodenal en la pared posterior del común para la secreción biliar y pancreática se forma
duodeno. El conducto biliar común (colédoco) atraviesa ordinariamente por la ausencia de un septum entre los
el tejido de la cabeza pancreática para asociarse con el conductos biliares y pancreáticos cuando se acercan al
conducto pancreático principal para en alguna distancia ámpula de Váter. En adultos estudiados por colangio-
alcanzar la papila duodenal (Fig. 189.6). pancreatografía retrógrada endoscópica, la longitud
promedio del canal común es 4,5 mm de diámetro, con
un rango del 1 mm a 12mm. En varias series publicadas,
más de dos tercios de los pacientes tuvieron un canal
común. En una serie grande de autopsias, 74 % de los
pacientes tuvo un canal común, 19 % mostraron aber-
turas separadas, y 7 % tuvieron un septum interpuesto
(Fig. 189.7).
El conducto pancreático accesorio de Santorini está
frecuentemente presente y usualmente se comunica
con el conducto principal de Wirsung (Fig. 189.6).
El conducto accesorio está anterior al conducto biliar
y usualmente drena en la papila menor, la que está
próxima al ámpula de Váter en la segunda porción
del duodeno. El conducto accesorio está presente en
70 % de las muestras de autopsia. Alrededor de 10 %
de los pacientes no tienen conexión entre el conducto
accesorio y el conducto principal. En los dos conductos
pancreáticos se pueden encontrar diversas variaciones.
El máximo diámetro del conducto pancreático princi-
pal está en la cabeza del páncreas y este gradualmente
se afina mientras progresa para la cola del páncreas
(Fig. 189.8). El conducto principal mide de 3,1 mm
a 4,8mm en la cabeza del páncreas y se afina de 0,9
Fig. 189.6. Relaciones anatómicas del conducto biliar y mm a 2,4mm en la cola. Los límites de normalidad de
pancreático. diámetro específicos para el conducto pancreático en
la cabeza (4 mm a 5 mm), el cuerpo (3 mm a 4 mm) y
Estructuras ductales la cola (2 mm a 3 mm) son generalmente aceptados.
Sin embargo, varios estudios han reportado un aumento
El conducto pancreático principal o de Wirsung, de diámetro del conducto pancreático con la edad y
comienza cerca de la cola del páncreas. Se forma de las enfermedad pancreática.
166 Parte XV. Páncreas

Fig. 189.7. Unión pancreático-biliar normal y variantes de uniones anómalas pancreático-biliares.

Fig. 189.8. Estructura del conducto pancreático normal.


Capítulo 189. Páncreas 167

Circulación la confluencia detrás del cuello del páncreas. La vena


porta está por detrás del páncreas y delante de la vena
El páncreas tiene una rica circulación derivada de las cava inferior con el conducto biliar común a la derecha
ramas de las arterias celiaca y mesentérica superior. La y la arteria hepática a la izquierda. La vena esplénica
cabeza del páncreas y el duodeno circundante son irri- se origina en el hilio del bazo y detrás de las curvas de
gados por dos arcadas arteriales pancreaticoduodenales. la cola del páncreas y debajo de la arteria esplénica,
Están formadas por las arterias pancreaticoduodenales a la derecha y a lo largo de la superficie posterior del
superiores anterior y posterior de la rama hepática de páncreas. Las venas pancreáticas drenan la sangre del
la arteria celiaca que unen un segundo par de arterias cuello, el cuerpo y la cola del páncreas y unen a la vena
pancreaticoduodenales inferiores anterior y posterior. esplénica (Figs. 189.4 y 189.5).
La arteria gastroduodenal asciende fuera de la rama Las venas pancreaticoduodenales están cerca de
hepática común de la arteria celiaca. Se divide para sus arterias correspondientes y drenan en las venas
formar la arteria pancreaticoduodenal superior anterior esplénicas o portal. Por la relación anatómica cercana
y posterior. La arteria pancreaticoduodenal anterosu- de la vena esplénica con el páncreas, las enfermedades
perior descansa sobre la superficie del páncreas. Esta inflamatorias o neoplásicas del cuerpo pancreático y la
provee las ramas a la superficie anterior del duodeno, cola pueden conducir a la oclusión de la vena esplénica.
el yeyuno proximal y el páncreas. La arteria entra en Esto a su vez puede resultar en un drenaje venoso retró-
el parénquima del páncreas y en la superficie posterior grado hacia el hilio esplénico y luego, por vía del flujo
se une a la arteria pancreaticoduodenal anteroinferior a través de las venas gástricas cortas y gastroepiploicas
rama de la arteria mesentérica superior. La arteria izquierdas, se puede crear varices gástricas.
pancreaticoduodenal anteroinferior surge de la arteria
mesentérica superior por el margen inferior del cuello
pancreático. La arteria pancreaticoduodenal posteroin-
Drenaje linfático
ferior surge de la arteria gastroduodenal, es visible en Los linfáticos, en general, drenan la red superficial
la superficie posterior del páncreas y sus ramas pueden de linfa hacia los ganglios regionales que están forma-
unirse a ramas de la arteria gastroduodenal o a una rama dos cerca de los vasos sanguíneos mayores. Los vasos
de la arteria pancreática dorsal. Esta pasa posterior a la linfáticos superiores se disponen a lo largo del borde
porción pancreática del conducto biliar. En el cuello, la superior del páncreas estrechamente con los vasos
arteria pancreática dorsal usualmente surge de la arteria sanguíneos esplénicos. Estos en la cara izquierda del
esplénica, de esta una rama derecha irriga la cabeza y cuerpo y la cola drenan en los ganglios situados en el
usualmente se une en la arcada posterior. También emite hilio esplénico. Los otros en la cara derecha del cuerpo
uno o dos ramas izquierdas que atraviesan el cuerpo y y el cuello pancreático drenan en ganglios ubicados
la cola del páncreas, a menudo haciendo conexiones cerca del borde superior de la cabeza. También reci-
con ramas de la arteria esplénica y más distal conexión ben tributarias de las superficies pancreáticas anterior
con la esplénica o la arteria gastroepiploica izquierda. y posterior. Los vasos linfáticos inferiores corren con
Todas las arterias principales están posteriores a los la arteria pancreática inferior, los que drenan el lado
conductos (Figs. 189.4 y 189.5). izquierdo inferior del cuerpo y los de la cola drenan
El curso de la arteria esplénica es posterior en el hacia los ganglios en el hilio esplénico y las demás
cuerpo y la cola y forma lazos arriba y debajo del regiones del cuello y el cuerpo drenan hacia la derecha.
margen superior del páncreas. Emite la arteria pancreá- El drenaje de los vasos linfáticos de la cabeza pan-
tica dorsal, la que usualmente une una de las arcadas creática está compuesto de un sistema anterior y otro
superiores posteriores después de emitir la arteria posterior. Estos vasos generalmente ocupan los surcos
pancreática inferior. La arteria pancreática caudal surge entre la cabeza del páncreas y el duodeno, cerca de los
de la arteria gastroepiploica izquierda o de una rama vasos sanguíneos pancreaticoduodenales. Cada sistema
esplénica en el bazo. Se une a las ramas de las arterias de drenaje (anterior y posterior) también tiene sistemas
esplénicas, pancreáticas mayores y otras arterias pan- de drenaje superiores e inferiores. Además, un grupo de
creáticas. linfáticos colocados sobre su borde superior, drena la
En general, el drenaje venoso del páncreas es simi- porción superior de la cabeza del páncreas. El drenaje
lar al suministro arterial de sangre. Desemboca en el linfático de la cabeza del páncreas y el duodeno desem-
sistema venoso porta, el que se forma por la unión de boca en los grupos de ganglios linfáticos mesentéricos
la vena mesentérica superior y las venas esplénicas en superiores y celiacos. Los linfáticos de la cola drenan
168 Parte XV. Páncreas

en los ganglios del hilio esplénico. Los linfáticos del Moldes de silicona del lumen del conducto formado por
cuerpo pasan por los ganglios pancreaticoesplénicos inyección retrógrada señala que las porciones tubulares
que se encuentran a lo largo del borde superior, los que de los ácinis son extensas y que las celdas exocrinas
drenan en los ganglios celiacos. Los linfáticos de la están organizadas fundamentalmente curvadas, en tú-
porción superior de la cabeza del páncreas pasan a tra- bulos ramificados que se anastomosan y terminan en
vés de los ganglios subpilóricos. En su porción inferior fondo ciego (Fig. 189.9).
los linfáticos drenan en los ganglios retropancreáticos
y pancreáticos anteriores, los que luego drenan en los
ganglios mesentéricos superiores.

Inervación
La inervación visceral eferente del páncreas es a
través de los nervios vagos y esplácnicos por vía de
los plexos hepáticos celiacos. Las fibras eferentes de
los nervios vagos atraviesan estos plexos sin sinapsis
y terminan en los ganglios parasimpáticos encontrado
en el septus interlobular del páncreas. Las fibras pos-
ganglionares inervan los ácinos, islotes y conductos.
Los cuerpos de las neuronas de los nervios eferentes
simpáticos se originan en la substancia gris lateral de
la médula espinal torácica y lumbar. Los cuerpos de las
neuronas simpáticas posganglionares están ubicados
en los grandes plexos del abdomen. Sus fibras pos-
ganglionares inervan solo vasos sanguíneos. Las fibras Fig. 189.9. Esquema de un acini pancreático.
autonómicas, eferentes y aferentes, están ubicadas en
la proximidad de los vasos sanguíneos del páncreas. Se El lumen del acinis es el origen del conducto se-
conoce poco acerca de la distribución de las fibras efe- cretorio y contiene celdas centroacinares, las que son
rentes viscerales en humanos, probablemente atraviesan únicas para el páncreas. Estas celdas están pálidas
a través de los nervios esplácnicos hasta los troncos coloreadas en secciones histológicas y pequeñas que
simpáticos y ramas comunicantes y a través de los son las células acinares. El lumen del acinis forma los
nervios espinales directos y ganglios. Los nervios va- conductos interlobulares, los que están cubiertos por
gos también llevan algunas fibras aferentes viscerales. bajas células epiteliales columnares similares en la
apariencia a las células centroacinares. Estos conduc-
Histología tos son no estriados y se anastomosan para formar los
conductos interlobulares, los que están cubiertos por un
El páncreas es una glándula compuesta, finamente epitelio columnar. Las células Goblet y ocasionalmente
nodular aproximadamente similar a las glándulas sali- las células argentafines también están presentes. Los
vales. Está rodeado de un tejido conjuntivo fino, pero conductos interlobulares se anastomosan para formar
no tiene una cápsula de tejido fibrosa. Los lóbulos son el conducto pancreático principal. Los conductos ma-
visibles al examen visual y están conectados por septus yores tienen una pared algo gruesa consistente en fibras
de tejido conectivo que contienen los vasos sanguíneos, de tejido conjuntivo y elásticas. Las células acinares,
nervios, linfáticos, y conductos excretorios (constituye ductales y los islotes pueden ser distinguidos por anti-
acerca de 18 % de este órgano). La glándula es un órgano cuerpos monoclonales reactivos específicamente con
mixto exocrino (cerca de 80 %) y endocrino (cerca de 2 estos tipos de células.
%).La porción endocrina consiste en los islotes de Lan- Las células acinares son altas, piramidales o epite-
gerhans, los que son grupos esféricos de células que se liales columnares, con sus bases anchas en una lámina
tiñen con la luz esparcidas a todo lo largo del páncreas. basal y sus ápices convergiendo en un lumen central
La porción exocrina consta de numerosos ácinis de (Fig. 189.10). En el estado de reposo numerosos grá-
color negro compuestos de masas de células tubulares nulos cimógenos eosinófilos llenan la porción apical
y esféricas, las que son las subunidades del lóbulo. de la célula. La porción basal de las células contienen
Capítulo 189. Páncreas 169

uno o dos núcleos esféricos centralmente localizados, y Las células adyacentes están unidas en la superfi-
un citoplasma sumamente basófilo. El complejo Golgi cie apical por uniones intercelulares electrónicamente
está situado entre el núcleo y lo gránulos cimógenos densas. Las uniones apretadas forman una banda como
y puede verse como un claro, en una región no teñida. un cinturón alrededor del final apical de la célula y
son producidos por la aposición de los fascículos de la
membrana externa de las células vecinas. Estas uniones
impiden el reflujo de sustancias secretadas del conducto
en el espacio intercelular. Las aberturas de las uniones
están distribuidas en las membranas celulares laterales
y se forman por la aposición de placas de membranas
discoides largas. Estas permiten la comunicación entre
las células. Debajo de las uniones, los bordes laterales
de la célula están relativamente derechos y tienen unas
pocas interdigitaciones pequeñas. Las membranas de
las células laterales pancreáticas exhiben determinantes
antigénicos únicos que no se encuentran en las mem-
branas de las células apicales.
El núcleo usualmente es esférico, mide cerca de 6
μm de diámetro, con uno o más nucléolos en el inte-
rior y parches de heterocromatina densa a lo largo del
interior de la membrana nuclear. Los numerosos poros
nucleares están localizados en regiones donde está li-
geramente coloreado de eucromatina y hace contacto
con la membrana nuclear. Estos poros probablemente
Fig. 189.10. Representación esquemática de una célula son los sitios dónde los ácidos ribonucleicos de transfe-
acinar. rencia y mensajeros son transportados fuera del núcleo
hacia el citoplasma. Las células binucleadas también
Las células acinares experimentan cambios cíclicos se ven ocasionalmente.
en su morfología en respuesta a la alimentación y la Las mitocondrias son estructuras cilíndricas elon-
digestión. Después de una comida grande, el gránulo gadas que pueden dar la apariencia de estar ovales en
zimógeno contenido en las células se vacía. Esto apa- sección transversal y puede contener cristales bien
rentemente ocurre por una disminución en el tamaño y desarrollados y muchos gránulos en su interior. Estas
el número de gránulos. Después de la depleción de los están a todo lo largo del citoplasma, entre el retículo
gránulos, el aparato Golgi puede ser observado en el endoplásmico granular o gránulos de cimógenos y
ápex de la célula y aparece más amplio que en el estado adyacente al borde de la célula basolateral. El interior
de reposo. Las reducciones en el tamaño y el número del citoplasma ocupa acerca de 45 % del volumen de
de gránulos evolucionan con un incremento sustancial la célula.
en la secreción de la enzima pancreática. El retículo endoplásmico granular ocupa cerca de
La estructura subcelular de las células acinares 20 % del volumen de la célula y ocupa más la región
puede ser visualizada al microscópico electrónico. La basal de las células acinares, aunque también pueden
célula acinar tiene varias microvellosidades pequeñas, verse en menor cantidad en la región apical adyacente
delgadas, de alrededor de 0,2 μm de longitud que se y entre los gránulos de zimógeno. Este retículo está
extienden en el lumen del acinis. El lumen típicamente compuesto de numerosas membranas cisternas paralelas
contiene material denso electrónicamente, floculan- y cubiertas con espacios estrechamente sujetos a los
te, lo que probablemente son las enzimas digestivas ribosomas, dando a las estructuras una apariencia gra-
secretadas. Los filamentos delgados forman el eje de nular. En base a estudios con animales de laboratorio,
las microvellosidades, así como una red debajo del en los ribosomas del retículo endoplásmico granular se
plasmalemma apical. Estos microfilamentos aparente- ha encontrado el sitio de síntesis de proteína.
mente desempeñan una función estructural porque su El complejo de Golgi está localizado entre el nú-
interrupción causa expansión del lumen del acinar y la cleo y la masa de gránulos cimógenos presentes en el
pérdida de microvellosidades. resto de la glándula. Consiste en sáculos membranosos
170 Parte XV. Páncreas

aplastados, como también vesículas pequeñas o vacuo- Las células centroacinares y las del conducto tienen
las que contienen material floculante denso electróni- citoplasma electrónico-radiante conteniendo pocos
camente. Los sáculos de Golgi se distinguen de otras organelos citoplasmáticos o especializaciones. Típica-
vesículas intracelulares por enzimas citoquímicas y por mente contienen ribosomas libres y pequeños y mito-
inmunohistoquímica usando anticuerpos antienzima y condrias redondas. No contienen virtualmente retículo
antireceptor. El complejo de Golgi se cree desempeña endoplásmico granular y por consiguiente no están en
una función importante en el transporte de proteínas activos en la síntesis de proteínas para la secreción. Más
secretorias y en la formación de gránulos de zimógeno. allá debajo de los conductos, las células contienen más
Los mecanismos por los que estos procesos ocurren no mitocondrias, pero nunca asociadas con las invagina-
están todavía resueltos. ciones de la superficie basolateral como ocurren en el
Los gránulos secretorios del páncreas usualmente epitelio ductal transportador de las glándulas salivales.
están divididos en dos tipos: vacuolas condensadoras Ambas células, centroacinar y del conducto, secretan
electrónico-radiantes y gránulos de zimógeno electró- bicarbonato y agua. La anhidrasa carbónica, enzima
nicamente densos. Las vacuolas condensadoras son responsable para la formación de bicarbonato, se ha
típicamente vistas en las cercanías del complejo de demostrado en el epitelio.
Golgi y en base a datos radiográficos se cree es precur- Los islotes de Langerhans se estiman cerca de 1
sor de los gránulos del zimógeno. Son vesículas unidas millón en el páncreas humano y consiste en cordones
a membranas ligeramente mayores que los gránulos de células endocrinas poligonales que se anastomosan.
de zimógeno y mucho menos numerosos, ocupando Cada islote tiene alrededor de 0,2 mm de diámetro,
solo alrededor de 2 % del citoplasma. Los gránulos de mayor que un acinis, y separado del tejido exocrino
cimógeno también son vesículas unidas a membranas, circundante por fibras de tejido conectivo fino, los que
esféricas, ligeramente menor que 1 mm de diámetro, son continuos con esa glándula exocrina.
llenado de material electrónicamente denso que aparen- Cada islote está rodeado y penetrado por una rica red
temente representa las enzimas digestivas. de vasos capilares revestidos por un endotelio fenestra-
Los estudios de la composición química de los do. Los vasos capilares son ordenados en un sistema
gránulos de zimógeno han demostrado que contienen portal que transporta sangre de los islotes para células
acerca de 12 a 15 enzimas digestivas diferentes, lasque acinares. Este sistema portal insular-acinar contiene
hacen cerca de 90 % de la proteína granular. Cada grá- arteriolas aferentes que entran en el islote, forman un
nulo aparentemente contiene el complemento entero de glomérulo capilar y dejan el islote como vasos capilares
las enzimas digestivas secretadas, porque anticuerpos eferentes pasando por el interior del tejido exocrino. Un
marcados para varias enzimas diferentes se han ubicado sistema arterial paralelo suministra sangre directamente
sobre gránulos cimógenos individuales de células di- al páncreas exocrino y este sistema portal permite la
ferentes. Los gránulos cimógenos individuales pueden acción local de las hormonas del islote, especialmente
diferir notablemente en la concentración de enzimas de la insulina en el páncreas exocrino. Las células
digestivas específicas contenidas dentro de los gránulos. acinares que rodean los islotes de Langerhans, lla-
Las enzimas digestivas dentro de los gránulos no están mados acinis peri-insulares, son morfológicamente y
en solución o suspensión, pero si en un estado sólido bioquímicamente diferentes de los acinis situados más
conjunto, lo que hace ostensible uniones específicas lejanos (los acinis tele-insulares). Los acinis insulares
entre las enzimas mismas y entre las enzimas de la peri-insulares tienen células grandes, núcleos y regiones
membrana del gránulo. Los gránulos de zimógeno con gránulos de zimógeno y diferentes proporciones de
aislados son estables y con pH ligeramente ácido, en enzimas digestivas específicas.
pH alcalino sueltan sus enzimas en la solución. Este Aunque la célula acinar secreta varias enzimas di-
comportamiento puede dar razón de la solubilización gestivas diferentes en el páncreas exocrino, cada tipo
de las enzimas digestivas dentro del lumen alcalino de célula en el páncreas endocrino parece secretar una
del conducto. A lo largo de la superficie basal de las hormona sola. Los cuatro tipos principales de células
células acinares, pero no extendiéndose entre las células encontradas son: células B, células A, células D y células
adyacentes, hay una lámina basal delgada, debajo de del polipéptido pancreático. Las células B (células β),
las que hay fibras de colágeno y una rica red capilar. las más numerosas (50 % a 80 %), secretan insulina.
Las fibras del nervio eferente, derivado de los sistemas Las células A o células α (5 % a 20 %) secretan gluca-
simpáticos y parasimpáticos, penetran en la lámina gón. Las células PP (10 % a 35 %) secretan polipéptido
basal y terminan adyacentes a las células acinares. pancreático. Las células D (5 %) secretan somatostatina.
Capítulo 189. Páncreas 171

Otros tipos raros de células existen en los islotes. En Hebrok, M., Kim, S. K., St., Jacques, B., et al. (2000). Regulation
humanos los islotes está subdividido en unidades, cada of pancreas development by hedgehog signaling. Development,
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Capítulo 190
Métodos exploratorios
de la función pancreática
Dr. C. Julián Francisco Ruiz Torres
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Fisiología y secreción pancreática dante retículo endoplásmico rugoso para la síntesis de


proteína La región apical de la célula contiene gránu-
El páncreas es un órgano exocrino y endocrino. los de cimógeno, el depósito de enzimas digestivas.
En este capítulo se aborda todo lo relacionado con el La superficie apical de la célula acinar también posee
páncreas exocrino. microvellosidades, que se dirigen hacia la luz del con-
El páncreas exocrino es de considerable interés ducto (Fig. 190.2).
para fisiólogos y científicos desde hace algún tiempo, Dentro de las microvellosidades y subyacente al
de hecho, la primera comprobación de la acción de citoplasma la membrana apical tiene un capilar filamen-
una hormona fue realizada en el páncreas, alrededor toso de actina que está involucrado en la exocitosis del
de comienzos del siglo xx. El páncreas es el principal contenido de los gránulos del cimógeno. Los empalmes
órgano utilizado para demostrar los mecanismos de apretados entre células acinares forman una banda al-
síntesis y transporte por proteínas transportadoras, así rededor de la zona apical de las células y actúan como
como también las vías fisiopatológicas complejas en la una barrera para impedir el paso de moléculas grandes
secreción de proteínas reguladoras. como son las enzimas digestivas. Los complejos de
unión también posibilitan el paso paracelular de agua
Anatomía funcional y los iones.
La unidad funcional del páncreas exocrino está
compuesta de un acinis y su conducto de drenaje (Fig.
190.1). El epitelio ductal se extiende hacia el lumen
del acinis con la célula centroacinar situada entre el
epitelio ductal y el acinis. La función de la célula cen-
troacinar no está establecida, pero puede desempeñar
la función de proporcionar células precursoras para las
distintos tipos de células pancreáticas. Los dúctulos
drenan en los conductos interlobulares (intercalados),
los que de vuelta drenan en el conducto pancreático
principal.
El acinis (del término latino “bayas en grupos”)
puede ser esférico o tubular, como se muestra en la
ultraestructura de la célula acinar (Fig. 190.2) o puede
tener alguna otra forma irregular. Las células acinares
están especializadas para sintetizar, almacenar y se-
cretar enzimas digestivas. En la membrana basolateral
están los receptores para hormonas y neurotransmisores
que estimulan la secreción de las enzimas. El aspecto
de la célula muestra el núcleo, así como también abun- Fig. 190.1. Unidad funcional del páncreas exocrino (acinis).
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 173

Fig. 190.2. Ultraestructura de la célula acinar. A. Célula acinar. B. Célula del conducto.

Otra conexión intercelular entre las células acinares incoloro, alcalino e isotónico con el plasma. La tasa
es el espacio entre las uniones. Esta área especializada de flujo aumenta de un promedio de 0,2 mL/min a 0,3
de membrana de plasma entre las células adyacentes mL/min en estado de ayunas (interdigestivo) a 4,0 mL/
hace de poro para darle paso a moléculas pequeñas min durante la estimulación posprandial. El volumen
(peso molecular de 500 Da a 1 000 Da) entre las células. diario total de secreción es de 2,5 L. La osmolaridad
El espacio entre las uniones permite la comunicación del jugo pancreático es independiente de la tasa de
química y eléctrica entre las células. flujo. Sin embargo, cuando el páncreas es estimulado
El epitelio del conducto consta de células que son de por la secretina (el mediador principal en el pico mayor
cuboidales a piramidales y contiene abundantes mito- de volumen), el bicarbonato y las concentraciones de
condrias, necesarias para producir la energía necesitada cloruros cambian recíprocamente.
para el transporte de iones (Fig. 190.2). Las células del La secretina estimula la excreción por medio de su
conducto, así como también las células centroacinares receptor en la célula acinar activando a la adenilciclasa
contienen anhidrasa carbónica, importante por su ca- y aumentando el monofosfato de adenilciclasa en la
pacidad para secretar bicarbonato. célula ductal. La acetilcolina lo hace igualmente por
medio de su receptor subiendo las concentraciones
intracelulares de calcio. Los eventos iniciales invo-
Composición de las secreciones lucran la activación de los canales de cloruros (Cl–)
exocrinas dependientes de calcio (Ca2+) y los dependientes del
monofosfato de adenilcicla en la membrana luminal,
Componentes inorgánicos
así como también la activación de los canales de
Los componentes inorgánicos principales de las potasio (K+) en la membrana basolateral. El canal de
secreciones pancreáticas exocrinas son agua, sodio, cloruros dependiente de monofosfato de adenilcicla
potasio, cloruros y bicarbonato. El objetivo del agua y es el regulador de conductancia transmembrana de la
las secreciones de iones es entregar las enzimas diges- fibrosis quística.
tivas al lumen intestinal y ayudar a neutralizar el ácido Se ilustra el transporte del ion responsable para
gástrico vertido en el duodeno. El jugo pancreático la secreción de bicarbonato (NaHCO3) por la célula
secretado durante la estimulación con secretina es claro, pancreática del conducto (Fig. 190.3). El hidróxido de
174 Parte XV. Páncreas

Fig. 190.3. Transporte de iones por la célula del conducto pancreático.

carbono (HCO3–) es liberado en la secreción final por HCO3– es probablemente la conductancia transmembra-
dos mecanismos: en uno el dióxido de carbono difu- na de la fibrosis quística. En la superficie basolateral
sible en la membrana es catalíticamente convertido a de la célula del conducto hay un antiportador de sodio,
HCO3– y hidrógeno (H+) por la acción de la anhidrasa hidrógeno y un cotransportador de HCO3– y sodio, así
carbónica, la que hidrata al dióxido de carbono, por como también ATPasas (Na+, K+-ATPasa, H+-ATPasa)
consiguiente formando H2CO3, que luego se disocia y canales de potasio. En combinación, estos transpor-
en del HCO3– y H+. La célula del conducto es rica tadores facilitan la secreción de HCO3– en la superficie
en anhidrasa carbónica. El otro es el sodio (Na+), y el apical, así como también mantienen el pH intracelular.
HCO3 cotransportados por la membrana basolateral. El sodio y el agua son secretados en el sistema del duc-
El HCO3– está luego disponible para la secreción api- tal para antagonizar las fuerzas eléctricas y osmóticas
cal por el regulador de conductancia transmembrana resultantes de la secreción del HCO3– .
de la fibrosis quística y el cambio del anión cloruro y
HCO3. El sodio y el agua son liberados en el lumen a Componentes orgánicos
través de las uniones intercelulares. El hidrógeno es El páncreas humano tiene una gran capacidad para
removido de la célula por un antipuerto basolateral de sintetizar proteínas (mayormente enzimas digestivas).
sodio, hidrógeno y una ATPasa-H+ para mantener un Estas son las enzimas proteolíticas, amilolíticas, lipo-
pH intracelular constante. La secreción es activada por líticas y las proenzimas digestivas:
la permeabilidad aumentada de los canales apicales de – Proenzimas:
cloruros y HCO3– y los canales basolaterales de pota- • Tripsinógeno catiónico.
sio a través de agonistas (secretina y acetilcolina) que • Tripsinógeno aniónico.
incrementan el AMP cíclico celulares (monofosfato de • Mesotripsinógeno.
adenilcicla) y las concentraciones de calcio. • Quimotripsinógeno (A, B).
La activación de ambos canales por el monofosfato • Kallireinógeno.
de adenilciclas dirige la secreción de cloruros en el – Proteolíticas:
lumen. La concentración elevada de cloruros en el lu- • Procarboxipeptidasa A (1, 2).
men está acoplada al antiportador de cloruros-(HCO3-), • Procarboxipeptidasa B (1, 2).
resultante de un cambio de cloruros por HCO3– en el • Proelastasa.
lumen. Nuevas evidencias también sugiere que los cana- • DNasa.
les del HCO3– en la superficie apical están involucrados • RNasa.
en la secreción del HCO3– y que esta conductancia del – Amilolítica: amilasa.
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 175

– Lipolítica: amilasa son maltosa y maltotriosa (dos a tres molécu-


• Carboxilesterasa. las con uniones α-1,4, respectivamente) y α-dextrinas
• Esterolesterasa. que contienen uniones 1,6-glucosídicas, porque estas
• Lipasa. uniones 1,6-glucosidicas en el almidón no pueden ser
• Profosfolipasa. hidrolizadas por la amilasa. Las enzimas de los bordes
en cepillo completan la hidrólisis de los productos de
Algunas de las proenzimas están presentes en más la digestión de la amilasa en glucosa. El producto final,
de una forma, por ejemplo, tripsinógeno catiónico, trip- la glucosa, es transportada a través de la célula epitelial
sinógeno aniónico y mesotripsinógeno. Las proenzimas absortiva intestinal por un transporte acoplado al sodio.
que puede digerir el páncreas se almacenan en este y son
secretadas en el conducto pancreático como una forma
precursora inactiva. La activación de estas proenzimas
tiene lugar en la luz intestinal, donde una glicoproteína
peptidasa del borde en cepillo de los enterocitos, una
enteroquinasa activa el tripsinógeno eliminando, por
hidrólisis, un fragmento del hexapéptido N-terminal de
la molécula Val-Asp Asp-Asp-Asp- Lys (Fig. 190.4).
La forma activa, tripsina, cataliza luego la activación
de las otras proenzimas inactivas.
Además de las enzimas digestivas, la célula acinar
secreta un inhibidor de la tripsina, el inhibidor secreto-
rio pancreático de tripsina (PSTI). Este 56-aminoácido
péptido, inactiva la tripsina formando un complejo
relativamente estable con la enzima cerca de su sitio
catalítico. La función del inhibidor es inactivar la
tripsina de forma autocatalítica en el páncreas o en el
jugo pancreático, lo que impide así afecciones como Fig. 190.4. Sitio de activación de las proenzimas.
la pancreatitis.
Lipasa
Funciones de las principales enzimas El páncreas secreta tres lipasas: lipasa o lipasa trigli-
digestivas cérido, fosfolipasa A2 y carboxilesterasa. La fuente más
importante de estas lipasas, en contraste a la amilasa, es
Amilasa
el páncreas. Las lipasas salivales (lingual) y gástricas
La amilasa humana es secretada por el páncreas y también contribuyen a la digestión de las grasas, pero
las glándulas salivales. Estas enzimas digieren el almi- en una cuantía menor.
dón y el glucógeno de la dieta. Las amilasas salivales La lipasa pancreática hidroliza una molécula de
y pancreáticas humanas tienen idénticas actividades triglicérido en dos moléculas de ácidos grasos liberados
enzimáticas. Sin embargo, difieren en el peso molecular, en los carbonos 1 y 3 y un monoglicérido con un ácido
contenido de carbohidrato y movilidad electroforética. graso esterificado a glicerol en el carbono 2. La lipasa
La amilasa salivar inicia la digestión en la boca y puede se une a la interfaz de agua-aceite de la gota de aceite
asimilar una porción significativa de la digestión de del triglicérido, donde actúa para hidrolizar el triglicé-
almidón y de glucógeno porque esta es transportada con rido. Los ácidos biliares, así como también la colipasa,
la comida dentro del estómago y el intestino delgado, son importantes para la actividad completa de la lipasa.
donde continúa teniendo actividad. En el estómago, la Los ácidos biliares ayudan en la emulsificación de los
actividad de la amilasa es protegida del ácido gástrico triglicéridos al ampliar el área de la superficie para la
secretado por la acción buffer de la comida y protegido acción de la lipasa, formando micelas con ácidos gra-
por el medio alcalino de la saliva y el mucus gástrico. sos y monoglicéridos, los que a su vez remueven estos
La acción de la amilasa salivar y pancreática es hidro- productos de la interfaz de agua-aceite. Se cree que la
lizar las uniones 1,4-glucosídicas en cada unión entre el colipasa forma un complejo con la lipasa y las sales
carbón 1 y el oxígeno. Los productos de digestión de la biliares. Este complejo ternario fija la lipasa y permite
176 Parte XV. Páncreas

que actúe en un ambiente más hidrófilo en la superficie (Fig. 190.2). El mecanismo para traslación del ARN
hidrófoba de la gota de aceite. mensajero de la célula en proteína exportable está
explicado por esta hipótesis: las subunidades ribo-
Fosfolipasa A2 somales se adhieren al ARN mensajero e inician la
síntesis de una secuencia de “señal” hidrófoba en
La fosfolipasa A2 cataliza la hidrólisis de la unión en
el NH2-terminal de las proteínas nacientes. Este
el éster del ácido graso en el carbono 2 de la fosfatidil-
complejo luego se adhiere a la superficie exterior del
colina. Esta conduce la formación de lisofosfatidilcolina
retículo endoplásmico y la secuencia de señal marca la
y ácido graso libre.
proteína existente sintetizada en el lumen del retículo
endoplasmático rugoso.
Carboxilesterasa
Las proteínas recién sintetizadas pueden experimen-
La carboxilesterasa tiene una especificidad amplia y tar modificaciones en el retículo endoplásmico, inclu-
divide los ésteres de colesterol, los ésteres de vitaminas yendo formación de puentes de disulfuro, la fosforila-
líposolubles, triglicéridos, diglicéridos, y monoglicé- ción, la sulfación y la glicosilación. Los cambios con-
ridos. Las sales biliares son también importantes para formacionales dan como resultado estructuras terciarias
la actividad completa de esta enzima. y cuaternarias de la proteína y también toma lugar en el
retículo endoplásmico. Las proteínas procesadas en el
Proteasas retículo endoplásmico rugoso son transportadas hacia
el complejo de Golgi donde luego ocurre modifica-
El páncreas secreta una variedad de proteasas
ción postraslacional (glicosilación) y concentración.
(proenzimas) que son activadas en el duodeno por
Importantes especificidades conformacionales son
la tripsina. La tripsina, quimotripsina y elastasa son
requeridas para la función apropiada y el transporte de
endopeptidasas que dividen uniones de péptidos espe-
proteínas entre compartimientos. Estas especificidades
cíficos adyacentes a aminoácidos específicos. También
conformacionales son facilitadas por proteínas llamadas
contenidos en el jugo pancreático están las carboxipep-
“acompañantes” y “plegadas”, entre otras. Cuando hay
tidasas, que son exopeptidasas que dividen las uniones
una demanda aumentada en el retículo endoplásmico
peptídicas en el terminal carboxílico de las proteínas.
rugoso para la síntesis de proteína o cuando hay un
Las acciones combinadas de las proteasas pancreá-
estrés de la célula que da lugar a el despliegue de pro-
ticos y la pepsina del estómago dan como resultado la
teínas, el retículo endoplásmico rugoso responde con
formación de oligopéptidos y aminoácidos libres. Los incremento de la síntesis de proteínas acompañantes y
oligopéptidos son posteriormente digeridos por las de las plegadas, cese de la síntesis de las proteínas y de-
enzimas del borde en cepillo. Los aminoácidos libres y grada las proteínas desplegadas usando los mecanismos
oligopéptidos son transportados a través de la mucosa de respuesta de proteína desplegada. Para guardar las
intestinal por un grupo de transportadores acoplado al proteínas en su conformación apropiada, la respuesta
sodio e hidrógeno. Es interesante que solo ciertos ami- de proteína desplegada mantiene el transporte normal
noácidos (en su mayor parte los aminoácidos esenciales) de proteínas entre compartimientos de la celda.
pueden ser medidos en el lumen durante la digestión, El complejo de Golgi también sirve para la impor-
señalando que la acción combinada de las proteasas no tante función de ordenar y marcar las proteínas recién
es aleatoria y que los productos resultan de las espe- sintetizadas en diversos compartimientos celulares.
cificidades combinadas de las proteasas individuales. Las enzimas digestivas son transportadas en los grá-
Estos aminoácidos tienen mayores efectos en la secre- nulos de cimógeno. Las hidrolasas lisosomales son
ción pancreática estimulada, inhibiendo el vaciamiento ordenados por el lisosoma. Para esta vía lisosomal, los
gástrico, regulando la motilidad del intestino delgado y grupos mannose-6-fosfato son adicionados a cadenas
causando saciedad. Así, el patrón específico de la acción de oligosacáridos en la proteína durante su presencia
de las proteasas está dirigido a la regulación fisiológica en el complejo de Golgi. Los grupos mannose-6-fos-
de varios órganos en el tracto gastrointestinal. fato sirven como un sitio de reconocimiento para un
receptor específico. La interacción de la enzima liso-
Síntesis de la enzima digestiva somal mannose 6-fosfato con su receptor conduce a la
formación de vesículas que transportan este complejo
y el transporte por el lisosoma, entregando la enzima. En el lisosoma la
La síntesis de enzimas digestivas tiene lugar en enzima se desvincula del receptor, que a su vez recicla
el espacio interno del retículo endoplásmico rugoso de regreso al complejo de Golgi.
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 177

La secreción de las enzimas digestivas ocurre por Regulación celular de la secreción


exocitosis. La exocitosis consiste en el movimiento enzimática
del gránulo secretorio de la superficie apical, el re-
conocimiento de un sitio de la membrana plasmática El mecanismo de estimulación neurohumoral de la
para la fusión y la escisión en el sitio de la membrana célula acinar se ha demostrado con el uso de prepara-
plasmática-membrana del gránulo después de la fusión. ciones in vitro de células acinares dispersas y acinis de
Estudios recientes demuestran las funciones de la acti- animales pequeños. Los estudios que implican el uso
na-miosina, las proteínas SNARE (el factor sensitivo de tejidos humanos son pocos.
soluble N-ethyl maleimide anexo al receptor de proteí- Con el uso de radioisótopos marcados, antago-
nas), y proteínas unidas al trifosfato de guanosina en nistas específicos, receptores para colecistoquinina,
estos procesos. Las señales intracelulares generadas por acetilcolina, péptido liberador de gastrina, sustancia
receptores agonistas tan discutidos siguen interactuando P, péptido intestinal vasoactivo y secretina se han
con estas enfermedades para mediar en la secreción identificado en preparaciones de varias especies. Ade-
de las enzimas digestivas por vía de exocitosis de los más, la estructura molecular para cada uno de estos
gránulos de cimógeno. tipos de receptores se ha dilucidado por clonación y
secuenciada. Cada uno es un receptor acoplado a una
Regulación de síntesis de proteínas G-proteína con siete dominios hidrófobos que se creen
son segmentos de membrana cruzadas. Los receptores
Los mecanismos involucrados en la regulación de están en la membrana plasmática basolateral de la
la expresión de las enzimas digestivas en el páncreas célula acinar.
exocrino se han aclarado a medias. Las investigaciones Los receptores de las células acinares se han di-
se han dirigido a estas dos preguntas: primero, ¿qué vidido en dos categorías según el modo de acople de
importancia tiene la expresión específica de enzimas secreción-estímulo (Fig. 190.5). En una categoría están
digestivas en el páncreas? Y en segundo lugar ¿cómo el péptido intestinal vasoactivo y la secretina. La inte-
las alteraciones en los nutrientes dietéticos cambian la racción de estos agentes con la célula acinar conduce
síntesis de enzimas digestivas específicas? Los genes a la activación de la adenil-ciclasa y una elevación en
para las enzimas digestivas como la amilasa, quimo- el monofosfato de adenilciclas celular, lo cual a su vez
tripsina, y elastasa contienen regiones realzadas en la
activa la secreción de la enzima a través de la protein-
secuencias del nucleótido 5’ flanqueador que regulan
kinasa A monofosfato de adenilciclas-dependiente. En
la transcripción de sus ANR mitocondirales, llamado
la otra categoría están la acetilcolina, péptido libera-
elemento de consenso del páncreas. Un factor de trans-
dor de gastrina, la sustancia P, y los receptores para
cripción, factor-1 de transcripción del páncreas, está
colecistoquinina. Las acciones de estos receptores
presente selectivamente en el páncreas exocrino, unido
agonistas incluyen la estimulación del metabolismo
a esta región y es esencial para la expresión de estas
celular de fosfoinositides de la membrana y las con-
enzimas digestivas. Así, el factor-1 de transcripción
centraciones crecientes de calcio libre intracelular por
del páncreas representa al menos uno de los factores
movilización de los almacenes intracelulares. Especí-
reguladores-diferenciación que da razón a la expresión
ficamente, la interacción de los receptores agonistas
de las enzimas digestivas en el páncreas.
Numerosos estudios han demostrado que las tasas conduce a una hidrólisis mediada por la fosfolipasa C
de síntesis relativas de enzimas digestivas específicas del fosfatidilinositol 4,5-difosfato a 1,2-diacilglicerol
cambian en función de la dieta que se ingiere, por e inositol 1,4,5-trifosfato, este último, a su vez, libera
ejemplo, una dieta rica en carbohidratos da como re- calcio de los almacenes del retículo endoplásmico. El
sultado un incremento en la síntesis de amilasa y una calcio liberado hacia el interior del citosol origina una
disminución en la de quimotripsinógeno; una dieta rica subida rápida en la concentración de calcio libre que es
en lípidos realza la expresión de la lipasa, y un régimen necesario para la respuesta secretoria. La liberación de
rico en alcohol disminuye la expresión de amilasa. Los calcio en el citosol es también mediada por receptores
mecanismos responsables para esta adaptación son del rianodine y da señales interactuando con el receptor
parcialmente comprendidos. La regulación ocurre en de rianodina, como el calcio y la coenzima A de los
el nivel de transcripción del gene en muchas de estas ésteres de ácidos grasos. Otras moléculas relacionadas
condiciones. Diversos estudios también han demostrado con la liberación intracelular de calcio es el difosfato
que la expresión del gene de amilasa está regulada por cíclico de adenosina y el fosfato dinucleotido adenosin
la insulina y la dieta. del ácido nicotínico y ribosomal.
178 Parte XV. Páncreas

Fig. 190.5. Receptores de las células acinares.

El mecanismo por el que se incrementa la secreción de la ingestión de una comida (digestivo). El patrón
mediada de calcio libre no está establecido, pero re- interdigestivo de la secreción comienza cuando el tracto
quiere de las proteinkinasas calmodulin-dependientes gastrointestinal superior es evacuado de comida. En una
e interacciones de actina-miosina, proteínas SNARE y persona que come tres comidas al día, el patrón diges-
proteínas unidas a trifofato de guanosina. La estimu- tivo comienza después de desayuno y continúa hasta
lación continuada de secreción de enzimas por estos fines del día, después de que la comida de la noche sea
agentes también depende de la influencia del calcio evacuada del tracto gastrointestinal superior.
extracelular. Esta es mediada por cambios en óxido
nítrico y el monofosfato cíclico de guanosina. Los Secreción interdigestiva
componentes del flujo del canal se han determinado.
El patrón secretorio pancreático interdigestivo es
El mecanismo intracelular de la secreción de
cíclico y sigue el patrón del complejo mioeléctrico mi-
enzimas también puede estar regulado por el 1,2-dia-
gratorio. Los patrones recurre cada 60 min a 120 min,
cilglicerol y la proteinkinasa C, así como también del
la salida rápida de la secreción las enzimas esta tempo-
ácido araquidónico. La fosforilación específica y des-
ralmente asociada con los periodos de incremento de la
fosforilación de proteínas celulares también ocurren
actividad motora en el estómago y el duodeno (fase II
con agonistas monofosfato de adenilciclas y agonistas
y III). Además de la secreción de enzimas pancreáticas
calcium-fosfoinositide. Las funciones exactas de estos
está incrementada la secreción de bicarbonato y bilis
acontecimientos en la secreción no están establecidos.
(secundaria a la contracción parcial de la vesícula biliar)
La respuesta secretoria enzimática de la célula acinar
en el duodeno durante las fases II y III del complejo
por una combinación de un agonista que actúa a través
mioeléctrico migratorio. El mecanismo subyacente
del monofosfato de adenilciclasa y un agonista que
requiere del sistema nervioso colinérgico. La motilina
actúa a través de los cambios en el calcio es mayor que
y el polipéptido pancreático están también involucrados
la suma de las dos respuestas individuales. Un ejemplo
en la regulación del complejo mioeléctrico migratorio.
de esta combinación es el péptido intestinal vasoactivo
o la secretina con la acetilcolina. El mecanismo exacto La secreción pancreática durante la fase interdigestiva
de esta respuesta potencializada no es conocido, pero integra la función de gobierno del complejo mioeléc-
probablemente funciona fisiológicamente por cantidades trico migratorio.
significativas de secreción evolucionan con una combina-
ción de pequeños incrementos de agonistas individuales.
Secreción digestiva
Como la secreción gástrica, la secreción pancreática
Fisiología del páncreas exocrina con la ingestión de una comida está dividida
en tres fases: cefálica, gástrica, e intestinal.
La excreción pancreática exocrina humana ocurre Los nervios vagos median la fase cefálica de la
durante el estado de ayuna (interdigestivo) y después secreción exocrina. La extensión de la estimulación
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 179

cefálica de la secreción pancreática exocrina en hu- procesos gástricos: la secreción de ácido, pepsina y
manos se ha evaluado a través de medidas de las se- lipasa; la digestión, y el vaciamiento, están fuertemente
creciones exocrinas estimuladas por la falsa apariencia acoplados a los mecanismos de la fase intestinal de la
de alimentarse (masticando y escupiendo la comida). secreción pancreática.
Un estudio señaló que la alimentación falsa estimuló La fase intestinal comienza cuando la primera parte
la secreción pancreática de enzimas en hasta 50 % de del quimo entra en el intestino delgado del estómago.
la tasa secretoria máxima, sin incremento en la secre- Es mediada por hormonas y reflejos vagovagales en-
ción de bicarbonato cuando las secreciones gástricas teropancreáticos.
se le imposibilitaron entrar en el duodeno. Cuando las El mediador principal del ion de hidrógeno, estimu-
secreciones gástricas fueron permitidas entrar en el lado por la secreción de agua y bicarbonato es la secreti-
duodeno, la tasa de secreción pancreática de enzimas na. La secretina es liberada de la mucosa duodenal por el
aumentó aproximadamente el 90 % de la tasa máxima ácido gástrico, con un umbral de pH de 4,5. La cantidad
y el bicarbonato fue también secretado. Estos resultados de secretina así como el volumen de secreción pancreá-
sugieren que la estimulación cefálica específicamente tica depende de la carga de ácido titulable entregado al
estimula la secreción acinar y que un pH bajo en el duodeno. La immunoneutralización de secretina con el
duodeno (por el ácido gástrico) aumenta esta secreción, anticuerpo específico antisecretina disminuye alrededor
así como también causa excreción de bicarbonato. de 80 % la secreción de bicarbonato y el volumen de
Los resultados de investigaciones del mecanismo de secreción pancreática estimulado por el alimento. El
neurotransmisión durante la estimulación cefálica son anticuerpo antisecretina también inhibe la secreción
controversiales. La acetilcolina es ciertamente el princi- de la enzima estimulada por la comida en 50 %, lo que
pal neurotransmisor requerido porque los antagonistas sugiere que esa secretina también tiene una función en
colinérgicos reducen grandemente y en algunos casos la secreción enzimática, posiblemente potencializando
neutraliza la secreción pancreática estimulada por la la acción de agonistas como la acetilcolina.
falsa apariencia de alimentación en humanos. Se han Si la secretina exógena es infundida para reproducir
identificado en el páncreas terminaciones nerviosas que las concentraciones plasmáticas de secretina durante
contienen los péptidos intestinal vasoactivo, péptido una comida, la producción de bicarbonato pancreático
liberado de gastrina, receptores para colecistoquinina, es menor que la de bicarbonato observada con una
y encefalinas. Los datos soportan que la función de comida. La respuesta del bicarbonato a la secretina
estos péptidos en la fase cefálica de la secreción sean también depende del aporte colinérgico porque la
más fuertes para péptido intestinal vasoactivo y pép- atropina inhibe parcialmente la respuesta estimulada
tido liberador de gastrina. Ambos son liberados en la por la secretina exógena. Así, la respuesta completa
corriente venosa pancreática con la estimulación del estimulada por la comida resulta de una combinación
vago en animales. Además, las células acinares tienen de mediadores.
receptores para péptido liberador de gastrina y pépti- Durante la fase intestinal, la secreción de enzimas
do intestinal vasoactivo que median la secreción de digestivas es mediada por ácidos grasos intraluminales
las enzimas. El epitelio ductal también responde para de más de ocho carbonos de largo, los monoglicéridos
péptido intestinal vasoactivo con la secreción de agua de estos ácidos grasos, péptidos, aminoácidos y en
y bicarbonato. una extensión pequeña, la glucosa. Los más potentes
La fase gástrica de secreción pancreática resulta de aminoácidos para la secreción estimulante en humanos
estímulos de la comida actuando en el estómago. El son la fenilalanina, valina, metionina y triptófano. La
estímulo principal es la distensión gástrica, la que causa respuesta para péptidos y aminoácidos están relaciona-
predominantemente excreción de enzimas con poca dos con la carga total liberada en el intestino más que
secreción de agua y bicarbonato. La distensión de un la concentración.
balón ya sea en el fundus gástrico o el antro da como Los mediadores de la respuesta secretoria enzimáti-
resultado un volumen bajo de una secreción rica en en- ca del estímulo intestinal son neurales y humorales. La
zimas por vía de un reflejo vagovagal gastropancreático. vagotomía troncal y la atropina inhiben notablemente
Cuando el jugo gástrico y los contenidos de una las respuestas enzimáticas y del bicarbonato a cargas
comida entran en el duodeno, una variedad de estimu- en el intestino delgado de aminoácidos y ácidos grasos,
lantes intraluminales pueden actuar sobre la mucosa así como también a la infusión de concentraciones
intestinal para estimular la secreción pancreática a fisiológicas de receptores para colecistoquinina. Estos
través de mecanismos neurales y humorales. Tres resultados señalan que los reflejos vagovagales median
180 Parte XV. Páncreas

la secreción enzimática y aumentan la secreción de páncreas puede exacerbar la severidad de la enfer-


bicarbonato estimulada por la secretina. medad, en la pancreatitis crónica la estimulación del
Los receptores para colecistoquinina son el principal páncreas puede exacerbar el dolor.
mediador humoral de la secreción enzimática estimula- La investigación en esta área ha delineado efectos de
da por la comida durante la fase intestinal (Fig. 190.6). tipos diferentes de nutrientes, así como la localización
La concentración circulante de receptores para cole- en la respuesta secretoria pancreática. Los estudios en
cistoquinina se encuentra- aumentada con una comida voluntarios humanos normales compararon el efecto
y la principal forma circulante tiene 58 aminoácidos de cantidades equicalóricas de triglicéridos de cadena
de tamaño (receptores para colecistoquinina-58). Los larga y triglicéridos de cadena media, perfundidos en
receptores para colecistoquinina son liberados por la el yeyuno en los niveles plasmáticos de receptores para
mucosa intestinal superior por la acción de los produc- colecistoquinina, la secreción pancreática y la contrac-
tos de la digestión grasa y proteica y, en menor grado, ción de la vesícula biliar. Los triglicéridos de cadena
por productos de la digestión de almidón. media no condujeron a ninguna de estas respuestas,
Experimentos adicionales señalan que los receptores pero los triglicéridos de la cadena larga estimularon
para colecistoquinina activan neuronas aferentes en la cada una de las respuestas. Así, en relación con la
mucosa duodenal. Estas neuronas aferentes activan un administración yeyunal, los triglicéridos de la cadena
reflejo vagovagal que causa la secreción de enzimas media pueden usarse para proveer una fuente de energía
pancreáticas (Fig. 190.6). sin significativo estímulo del páncreas.
Los elementos del mecanismo secretorio durante Otros estudios en voluntarios sanos comparó los
la fase intestinal de una comida son activados cuando efectos de infusiones duodenales de una dieta líquida
los nutrientes estándares entran en el duodeno. Las compleja con un régimen dietético elemental con
investigaciones se han realizado para determinar si la contenido bajo de grasa. Notable fue el descubri-
administración de nutrientes alternativos o la entrega miento de una significativa menor secreción pan-
de nutrientes para el yeyuno en vez del duodeno puede creática con el régimen elemental que con la dieta
dar como resultado menos activación de la respuesta líquida compleja. Desde el punto de vista clínico, los
secretoria pancreática. Esta información es decisiva en resultados de estos estudios señalan que el tipo de
la estrategia para proveer los nutrientes a los pacientes nutriente administrado en el lumen intestinal es el
con desórdenes pancreáticos como la pancreatitis aguda factor más importante en la regulación de la respuesta
o crónica. Con pancreatitis aguda la estimulación del secretoria pancreática.

Fig. 190.6. Los receptores para colecistoquinina estimulan la secreción enzimática pancreática por vías neurales y hormonales.
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 181

Regulación retroactiva (feedback) secretagogos. Los exámenes indirectos de la función


secretoria pancreática incluyen la medición de enzimas
En animales así como en humanos, el desvío de
pancreáticas en muestras duodenales después de la
jugo pancreático del intestino da como resultado un
ingestión de nutrientes, la medición de productos de la
aumento de la secreción pancreática. La secreción
acción digestiva de las enzima o substratos ingeridos,
enzimática aumentada es mediada por un aumento
la medición de enzimas pancreáticas en las heces y la
de la circulación de receptores para colecistoquinina.
medición de la concentración plasmática de hormonas
Ambos, el incremento de los receptores para colecis-
u otros marcadores que están alterados en estados de
toquinina y la secreción enzimática consecuentes del
insuficiencia pancreáticas.
desvío del jugo pancreático pueden ser inhibidos por
El examen de la función pancreática que debe ser
el reabastecimiento intraluminal de tripsina y otras
usado depende de la pregunta clínica, las características
enzimas digestivas. Es hipótesis que durante una co-
y la disponibilidad de la prueba. El páncreas exocrino
mida, cuando la tripsina está ocupada por las proteínas
tiene una reserva funcional muy grande. La maldiges-
de la comida, la secreción pancreática esta aumentada
tión y malabsorción no ocurren hasta que la capacidad
porque la tripsina no está disponible en la superficie de
funcional medida por la secreción de enzimas digestivas
las células epiteliales intestinales para causar inhibición
estimuladas por los receptores para colecistoquinina
retroactiva. Después de la comida, la tripsina está libre
está reducida de 5 % a 10 % de lo normal. Así, muchas
e inhibe la liberación intestinal de receptores para cole-
pruebas confinadas en la conversión de un substrato
cistoquinina y la secreción enzimática pancreática. Se
ingerido por enzimas digestivas para un producto men-
han descrito los factores liberadores de receptores para
surable son insensibles en la enfermedad pancreática a
colecistoquinina intraluminal que median este efecto de
menos que esté presente una insuficiencia pancreática
la tripsina: uno es una proteína llamada péptido monitor,
moderada o severa. Por consiguiente, la medida de
que es secretado por el páncreas, otro es el llamado
enzimas digestivas duodenales después de la adminis-
factor liberador de receptores para colecistoquinina
tración intravenosa de secretagogos pancreáticos provee
intraluminal. El péptido monitor y el factor liberador
la máxima sensibilidad y especificidad. La principal
de receptores para colecistoquinina intraluminal causan
desventaja de las pruebas directas es el requisito de in-
la liberación de receptores para colecistoquinina de la
tubación duodenal y el hecho de que muy pocos centros
célula enteroendocrina de receptores para colecistoqui-
son competentes para realizar los estudios correctamen-
nina (célula I) en la sangre. Estos factores liberadores
te. Las técnicas de imagen mejoradas para diagnosticar
son mediadores probables del mecanismo fisiológico
enfermedad pancreática han disminuido grandemente
de información retroactiva para la secreción enzimáti-
el uso de estas pruebas. En algunas ocasiones, sin
ca. Se cree que los efectos de la tripsina se deben a la
embargo, las pruebas de función pancreáticas son ne-
degradación de los factores liberadores de receptores
cesarias para diagnosticar la enfermedad pancreática.
para colecistoquinina por la tripsina cuando no está
Más recientemente se ha descrito, una prueba directa
unida a las proteínas de la comida.
usando endoscopia y colección rápida. Los exámenes
Se ha descrito un mecanismo de información re-
de función pancreáticas descritos permiten apreciar la
troactiva similar que involucra al factor liberador de
utilidad diagnóstica relativa de cada prueba
secretina (un péptido intraluminal), que regula la li-
beración de secretina de la célula enteroendocrina que Exámenes directos
contiene la secretina del intestino.
Las pruebas directas proveen un estándar de oro
Exámenes de función secretoria pancreática para medir la función pancreática. La estimulación de
la secreción se ha descrito comúnmente con la secretina,
Varios exámenes se han ideado para medir la los receptores para colecistoquinina o las dos combina-
función secretoria del páncreas en el orden de diag- das. La combinación provee la información completa
nosticar afecciones como la pancreatitis crónica y el acerca de las secreciones de la célula ductular y acinar.
cáncer pancreático (Tabla 190.1). Los exámenes de De hecho, es aceptado que son las pruebas directas
la función están en dos categorías generales: directos más sensitivas que las técnicas actuales de imagen
e indirectos. Los exámenes directos de la función en el diagnóstico de enfermedad pancreática precoz.
secretoria pancreática requieren colección de las se- En la descripción clásica, el estómago y el duodeno
creciones pancreáticas después de la administración son intubados. La intubación gástrica es requerida
intravenosa de un secretagogo o una combinación de para eliminar las secreciones gástricas que interfieren
182 Parte XV. Páncreas

Tabla 190.1. Exámenes de la función secretoria pancreática


Exámenes Descripción Ventajas Desventajas Indicaciones clínicas
Exámenes directos
Secretina Medidas de secreción y volumen de Provee las Requiere intubación Detección de
bicarbonato en el duodeno después de mediciones duodenal y disfunción pancreática
secretina intravenoso más sensibles administración exocrina ligera,
Colecistoquinina Medidas de cantidades duodenales de y específicas intravenosa moderada o severa
amilasa, tripsina, quimotripsina y lipasa de la función de hormonas;
después de colecistoquinina intravenoso pancreática no disponible
exocrina ampliamente
Secretina y Medidas de secreción y volumen de
colecistoquinina bicarbonato y enzimas después de secretina
y colecistoquinina intravenoso
Exámenes indirectos que requieren intubación duodenal
Comida de Medidas de concentración duodenal de No requiere Requiere intubación La detección de
prueba de Lundh tripsina después de la ingestión de una administración IV duodenal, una disfunción pancreática
comida de prueba de hormonas comida de prueba exocrina moderada
y anatomía normal, o severa cuando
incluyendo la mucosa una prueba directa
del intestino delgado, no puede hacerse
no disponible (por ejemplo, la
ampliamente disponibilidad limitada
de la prueba)
Exámenes indirectos sin intubación
Grasa fecal Medidas de grasa en heces después de Provee una Requiere suficiente Detección de
ingerir comida con una cantidad conocida medida ingestión de grasa en disfunción pancreática
de grasa cuantitativa de la la dieta y colección exocrina severa y
esteatorrea de heces, solo esteatorrea
detecta disfunción
pancreática severa
Quimotripsina Medida de quimotripsina o elastasa 1 fecal No requiere vía Insensible para Detección de
fecal intravenosa, detectar disfunción disfunción pancreática
Elastasa 1 Fecal tubaje, o ligera o moderada exocrina severa
administración de
sustratos orales
N-benzoyl-L- Ingestión oral de N-benzoy l-L-tyrosyl- Provee medidas No detecta disfunción Detección de
tyrosyl- ácido ácido P-aminobenzoico o dilaurato de simples para ligera o moderada, disfunción pancreática
P-aminobenzoico fluoresceína con una comida, seguido por la disfunción los resultados pueden exocrina severa
Dilaurato de las medidas de ácido P-aminobenzoico o pancreática ser anormales
fluoresceína fluoresceína en suero u orina severa en pacientes con
enfermedad de la
mucosa del intestino
delgado

con la capacidad para medir la secreción de agua y de y la secreción enzimática están relacionados con la masa
bicarbonato del páncreas. El pH bajo también puede funcional del páncreas. Históricamente la prueba de la
alterar la actividad de las enzimas pancreáticas. La son- secretina (administración intravenosa de secretina, con
da duodenal sirve para suministrar un marcador poco medición de bicarbonato y volumen) primero proveyó
absorbible y la colección de secreciones pancreáticas. información acerca de la función del páncreas en diver-
El uso de un marcador poco absorbible como la cobala- sos eventos clínicos. La administración de receptores
mina o el polietilenglicol permiten la cuantificación de para colecistoquinina y la medición de la secreción de
las secreciones sin necesidad de la aspiración completa enzimas digestivas también se han usado exitosamente
de secreciones. para demostrar la insuficiencia pancreática. Debido a
Los exámenes de función directa están basados en el que la administración combinada de secretina y recep-
principio que la secreción máxima de agua, bicarbonato tores para colecistoquinina provee una estimulación
Capítulo 190. Métodos exploratorios de la función pancreática 183

de ambas unidades funcionales del páncreas exocrino, Así, la medición de grasa en las heces coleccionadas en
es la más comúnmente usada. Los receptores para co- 72 h en un paciente ingiriendo un régimen adecuado en
lecistoquinina son mejores administrado por infusión grasa (70 g/día a 100 g/día) es considerado una manera
intravenosa constante. La dosis para el octapéptido efectiva de diagnosticar esteatorrea. Normalmente 7 %
sintético de receptores para colecistoquinina (receptores o menos de la grasa ingerida aparecen en las heces. Un
para colecistoquinina: Squibb, Princeton, Nueva Jersey) simple examen microscópico cualitativo para aceite de
es 40 µg/kg/h. La dosis de secretina sintética (SecroFlo, las heces es casi tan sensible como la medición cuanti-
Repligen, Needham, Mass) es 0,2 μg/kg inyectado tativa para grasa. Porque la esteatorrea evoluciona solo
en 1 min. Las medidas, corregidas para el porcentaje en la enfermedad pancreática avanzada, la medición de
de recuperación del marcador no absorbible, son por grasa fecal no es útil en el diagnóstico de enfermedad
los fluidos y las concentraciones de bicarbonato y de ligera o moderada ni es la esteatorrea específica para
proteína y la actividad de enzimas digestivas durante la enfermedad pancreática.
las colecciones sobre periodos de 15 min hasta 1 h. La Medición fecal de quimotripsina y elastasa 1
amilasa, tripsina, quimotripsina y lipasa son las enzimas
Las mediciones de quimotripsina en heces se han
digestivas más comúnmente medidas.
usado como pruebas indirectas de función pancreática
La prueba tiene 83 % de sensibilidad y 89 % de
durante años, especialmente para establecer insufi-
especificidad. Los resultados falsos positivos pueden
ciencia pancreática en pacientes con fibrosis quística.
ocurrir en pacientes con enfermedad celiaca y diabetes
Estas mediciones tienen aproximadamente 85 % de
mellitus.
sensibilidad en la disfunción pancreática avanzada y
Una adaptación de prueba secretoria directa por
relativamente insensible en la enfermedad pancreática
endoscopia superior también se ha descrito. En el
de ligera a moderada.
tiempo de la endoscopia, ya sea secretina, receptores
La elastasa pancreática-1 puede ser medida en
para colecistoquinina o la combinación de ambas, es
las heces usando un anticuerpo monoclonal contra la
administrado por vía intravenosa y son coleccionadas elastasa humana-1. Esta prueba, como otras pruebas
las secreciones pancreáticas a través del endoscopio indirectas, no es sensible en detectar enfermedad pan-
situado en el duodeno. creática ligera a moderada.
Exámenes indirectos Otros exámenes
Comida de prueba de Lundh La prueba de la bentiromida es una prueba indi-
El paciente ingiere una comida de prueba líquida de recta sin intubación en la que el péptido sintético del
300 mL compuesta de leche descremada, aceite vegetal ácido P-aminobenzoico-N-benzoyl-L-tyrosyl es es-
y dextrosa (6 % de grasa, 5% de proteína y 15 % de pecíficamente dividido por la quimotripsina en ácido
carbohidrato). Después de la ingestión de esta comida, P-aminobenzoico y N-benzoyl-L-tyrosyl. El ácido
las muestras son aspiradas del duodeno intubado a inter- P-aminobenzoico es luego absorbido en el intestino,
valos para la medición de la concentración de enzimas conjugado en el hígado y excretado en la orina. El me-
digestivas. Usualmente es medida solo la actividad de tabolito del ácido P-aminobenzoico puede ser medido
la tripsina, sin embargo, la determinación adicional de ya sea en suero u orina. Previo a la cirugía gástrica,
lipasa o la amilasa puede mejorar la sensibilidad del la enfermedad del intestino delgado, la enfermedad
examen. La prueba no es válida en pacientes con enfer- del hígado y la insuficiencia renal, pueden interferir
medad de la mucosa intestinal (por ejemplo: la enfer- con las medidas. También el uso de varias drogas (el
acetaminofén, fenacetina, cloranfenicol, benzocaína,
medad celiaca) o la anatomía alterada gastroduodenal
lidocaína, procaína, sulfonamidas, sulfonilureas, y
(por ejemplo: después de una vagotomía y piloroplastia
tiazidas) y la ingestión previa de ciertas comidas (las
o una gastrectomía Billroth II). Las comparaciones de
ciruelas y los arándanos).
la comida de prueba Lundh con la prueba de secreti-
Un amplio rango de sensibilidades se ha reportado
na-receptores para colecistoquinina demuestran que la
para la prueba N-benzoyl-L-tyrosyl- ácido P-amino-
última es más sensible para detectar etapas leves de la
benzoico. En pacientes con insuficiencia pancreática
enfermedad pancreática, mientras que las pruebas son
severa y malabsorción, la sensibilidad es del 80 %
comparables en etapas más avanzadas.
al 90 %. En aquellos con daño ligero a moderado,
Medición de grasa fecal la sensibilidad de la prueba es baja, en el 40 %.
La esteatorrea ocurre cuando la salida de lipasa esti- Para mejorar la especificidad del examen, han sido
mulada desciende menos de 5 % al 10 % de lo normal. ideadas varias modificaciones de la prueba N-benzo-
184 Parte XV. Páncreas

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y menor para la enfermedad ligera o moderada. tive crossover study comparing secretin-stimulated endoscopic
and Dreiling tube pancreatic function testing in patients evalu-
Varias pruebas indirectas sin intubación se han ated for chronic pancreatitis. Gastrointest Endosc, 67, 458-466.
creado en un esfuerzo para mejorar la sensibilidad para Stevens, T., Conwell, D. L., Zuccaro, Jr. G., et al. (2008). A prospec-
identificar formas ligeras de disfunción pancreática exo- tive crossover study comparing secretin-stimulated endoscopic
crina. Estas incluyen pruebas del aliento a triglicéridos and Dreiling tube pancreatic function testing in patients evalu-
ated for chronic pancreatitis. Gastrointest Endosc, 67, 458-466.
y colesterol, pruebas del aliento a dióxido de carbono e Steward, M. C., Ishiguro, H., Case, R. M. (2005). Mechanisms of
hidrógeno, la prueba dual marcada de Schilling, y las bicarbonate secretion in the pancreatic duct. Annu Rev Physiol,
mediciones plasmáticas de polipéptido pancreático y 67, 377-409.
Sutton, R., Petersen, O. H., Pandol, S. J. (2008). Pancreatitis and
aminoácidos. Sin embargo, ninguna de estas pruebas calcium signaling: Report of an international workshop. Pan-
ha mostrado tener mayor sensibilidad que las pruebas creas, 36, e1-e14.
indirectas sin intubación descritas previamente. Además, Whitcomb, D. C., Ermentrout, G. B. (2004). A mathematical model
of the pancreatic duct cell generating high bicarbonate concen-
muchos de estos requieren de isótopos radiactivos o equi- trations in pancreatic juice. Pancreas, 29, e30-e40.
pos muy caros, lo que hace su utilidad menos deseable. Whitcomb, D. C., Lowe, M. E. (2007). Human pancreatic digestive
La gran cantidad de pruebas de función pancreática enzymes. Dig Dis Sci, 52, 1-17.
sugiere que la prueba ideal no se ha desarrollado. Las Williams, J. A. (2001). Intracellular signaling mechanisms activated
by cholecystokinin-regulating synthesis and secretion of digestive
pruebas directas permanecen el estándar de oro y deben enzymes in pancreatic acinar cells. Annu Rev Physiol, 63, 77-97.
usarse para detectar insuficiencia ligera y moderada Williams, J. A. (2006). Regulation of pancreatic acinar cell function.
pancreática. Para la detección de insuficiencia severa Curr Opin Gastroenterol, 22, 498-504.
Wright, E. M., Martin, M. G., Turk, E. (2003). Intestinal absorption
produciendo esteatorrea, muchas de las pruebas descri- in health and disease-sugars. Best Pract Res Clin Gastroenterol,
tas tienen una sensibilidad adecuada. 17, 943-956.
Capítulo 191
Anomalías congénitas y adquiridas
del páncreas en la infancia
Dra. Elsa García Bacallao

Salvo las malformaciones congénitas y la fibrosis Patogenia


quística se puede decir que los trastornos del páncreas
Hay aproximadamente unos 10 casos descritos en
en la infancia no se observan con mucha frecuencia, sin
la literatura médica.
embargo, algunos autores expresan que la frecuencia de
En su patogenia se involucran factores genéticos
su diagnóstico se ha incrementado, al seguir programa
como son la dilección homocigótica de nucleótidos en
de pesquisaje de anomalías congénitas durante el em-
el gen PDXI y la mutación del gen homeobox HLXB8.
barazo, no obstante, el pensamiento del médico debe
Una mutación relacionada en el gen de desarrollo
estar encaminado en su búsqueda para poder establecer pancreático (factor de transcripción α-1 del páncreas
el diagnóstico precoz. se ha asociado también con el desarrollo de agenesia
Las funciones de las alteraciones genéticas en las pancreática, pero en estos casos también aparece
pancreatopatias en la infancia cada vez se hacen más agenesia cerebelar al igual que la ausencia del tubo
evidentes de forma tal que el descubrimiento de estas endodérmico intestinal.
ha revolucionado los conceptos y enfoque de muchas
enfermedades del páncreas en los niños. Diagnóstico clínico
Las enfermedades del páncreas en la infancia se di-
viden dos grandes grupos: por trastornos morfológicos Se caracteriza por una disminución del desarrollo
a consecuencia de un desarrollo embrionario anormal fetal intrauterino, donde predominan las manifesta-
o trastornos del funcionamiento endocrino o exocrino. ciones secundarias a la función endocrina como la
Una vez estudiado los aspectos anatómicos y em- diabetes neonatal insulina dependiente. En muchos
briológicos del páncreas esto permite comprender los casos también existe una insuficiencia exocrina, que
defectos del desarrollo del órgano (ver “Capítulo 183. se caracteriza por un síndrome de malabsorción con
Páncreas”). diarreas esteatorreicas asociadas a trastornos en la ab-
En relación con los trastornos en la formación del sorción de las proteínas que origina una disminución
páncreas (anomalías congénitas) se han descrito varias de las proteínas totales que se expresa por edemas
enfermedades que involucran a la formación del órga- generalizados.
no en su totalidad y otras que incluyen solamente su Puede asociarse a otras malformaciones congénitas
sistema de conductos. como son la anencefalia, acárida y agenesia de la vesí-
Entre las que involucran el órgano en su totalidad cula biliar. Es causa de muerte en el periodo neonatal,
se encuentran: agenesia pancreática, hipoplasia pan- aunque puede lograrse la supervivencia si el diagnóstico
creática, páncreas anular, páncreas divisum y páncreas es sospechado a tiempo e instaurado un tratamiento
adecuado.
aberrante.
3Exámenes complementarios
Agenesia pancreática
Desde el punto de vista diagnóstico se caracterizan
Es la ausencia anatómica del páncreas, considerada porque el péptido C y el glucagón son indetectable en
una enfermedad rara. el suero y páncreas no visible en estudios de imágenes.
186 Parte XV. Páncreas

Diagnóstico diferencial También se ha reportado asociado a otras malforma-


ciones congénitas como son la fístula traqueoesofágica,
Se realiza con la diabetes transitoria del recién
atresia del esófago, membranas duodenales, ano inper-
nacido y otras causas de insuficiencia pancreática en
forado y megacolon agangliónico. Existen evidencias
la infancia como son la fibrosis quística, el síndrome
de que en su patogenia pueden estar involucrados fac-
Shwachman-Daimond y síndrome Johanson-Blizzard.
tores genéticos como es la mayor incidencia en gemelos
idénticos y hermanos, además de su asociación a otras
Pronóstico
malformaciones congénitas. Se han descrito errores en
La supervivencia es posible si se establece el diag- los genes involucrados en la organogénesis del páncreas
nóstico prenatal o posnatal y un tratamiento apropiado.
Diagnóstico clínico
Tratamiento
La manifestación clínica más frecuente es el vómito,
El tratamiento se basa en la insulinoterapia y la que pueden comenzar desde la lactancia hasta la edad
reposición de enzimas pancreáticas adulta en pacientes vomitadores habituales, asociado o
no a dolor abdominal. Se reporta la existencia de una
Hipoplasia pancreática estenosis en la segunda porción del duodeno con un
cuadro de vómitos más aparatoso.
Es un trastorno genético limitado a una porción de
páncreas. Exámenes complementarios
Es de gran utilidad la radiología contrastada del estó-
Fisiopatología
mago y duodeno donde se observan defecto de llenado
La base hereditaria de este trastorno se descubrió en forma de anillo a nivel de la segunda porción del
por el caso de dos hermanos con bajo peso al nacer duodeno con dilatación simétrica del duodeno proximal,
con diabetes mellitus insulinodependiente de comienzo peristaltismo inverso del segmento duodenal proximal
temprano e insuficiencia pancreática. al anillo y el signo de la doble burbuja provocado por
Presenta características clínicas semejantes a la la presencia de aire en el estómago y primera porción
agenesia, pero de una forma más leve y de aparición del duodeno (Fig. 191.1)
más tardía. También el diagnóstico se puede sospechar me-
diante el ultrasonido abdominal. En adultos se puede
Clasificación diagnosticar mediante tomografía computarizada y la
colangiopancreatorresonancia, aunque es más común-
Existen dos variedades:
mente utilizada la colangiopancreatografía retrógrada
– Agenesia dorsal: de la que hay descrito aproxi-
endoscópica. En ocasiones el diagnóstico se realiza
madamente 15 casos en la literatura y cuyas bases
mediante laparotomía.
genéticas se desconocen y que puede presentarse
como obstrucción del colédoco
Tratamiento
– Agenesia ventral: se considera una variedad muy
rara que se relaciona con el síndrome de Cumming El tratamiento es quirúrgico con la realización de
que es un trastorno autosómico recesivo raro que una duodenoduodenostomía que se considera la técnica
afecta la lateralidad y se asocia con numerosas de elección en los niños y en algunos adultos y otras
anomalías del desarrollo. técnicas quirúrgicas más complejas se utilizan en el
adulto. Se reporta que en el adulto existe un riesgo
Páncreas anular incrementado de desarrollo de neoplasia pancreatobiliar
En el páncreas anular hay un defecto en la regresión
del botón pancreático ventral izquierdo de forma que Páncreas divisum
el páncreas rodea al duodeno a nivel de la segunda El páncreas divisum ocurre debido a un fallo de la
porción. Esta enfermedad se puede asociar a otras mal- fusión del páncreas dorsal y ventral durante el periodo
formaciones congénitas y se ha visto con una incidencia de embriogénesis con una desembocadura indepen-
de 0,03 por cada 1 000 nacidos vivos, aunque es más diente de los conductos. De esta manera la secreción
frecuente cuando se asocia al síndrome de Down. exocrina pancreática debe drenar a través del conducto
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas del páncreas en la infancia 187

dorsal de Santorini y la papila menor, relativamente


pequeños, más que por el conducto ventral de Wirsung
y la papila mayor.
La canulación del ámpula de Váter muestra un seg-
mento corto del conducto pancreático cervical y la del
ámpula menor, el conducto de Santorini en continuidad
con el conducto del cuerpo y la cola. En ocasiones solo
existe división parcial de la cola (cola bífida) (Fig.
191.2). A veces se asocia a pancreatitis a repetición.
En los pacientes que desarrollan manifestaciones
clínicas con dolor abdominal y pancreatitis a repetición
puede haber mejoría como esfinterotomía de la papila
menor

Páncreas aberrante o heterotópico


Se conoce como páncreas aberrante a la localización
de tejido pancreático en otro órgano. Se han publicado
aproximadamente 30 casos de cáncer pancreáticos en
tejido ectópico.
Las localizaciones más frecuentes son antro gástri-
co, duodeno, yeyuno, ombligo, árbol biliar, esófago y
divertículo de Meckel (Fig. 191.3).

Diagnóstico clínico
Es más frecuente en varones con una proporción de Fig. 191.1. Representación esquemática de páncreas anular.
2:1. Desde el punto de vista clínico puede ser asinto-
mático, aunque los síntomas más frecuentes son dolor
abdominal, vómitos intercurrentes y sangramiento di-
gestivo alto cuando se ulcera la mucosa. Puede ser causa
de invaginación intestinal y obstrucción del colédoco.

Exámenes complementarios
Desde el punto de vista endoscópico se caracterizan
por nódulos submucosos bien definidos, firmes, amari-
llos de un tamaño de 2 mm a 4 cm, depresión central,
por la que en ocasiones logra visualizarse la salida de
secreción pancreática.

Tratamiento
El tratamiento depende de las manifestaciones clíni-
cas que provoquen, puede ser quirúrgico con exceresis
del tejido pancreático aberrante

Quistes congénitos
Los quistes congénitos del páncreas son raros y
pueden ser diagnosticados a cualquier edad, pueden ser
solitarios o múltiples y se distinguen del seudoquiste Fig. 191.2. Representación esquemática de variantes del
pancreático por la presencia de revestimiento epitelial. páncreas divisum.
188 Parte XV. Páncreas

Fig. 191.3. Representación esquemática de páncreas heterotópico. A. Esquema de la ubicación de tejido ectópico pancreá-
tico en antro gástrico (en azul). B. Estudio baritado gastroduodenal, las flechas pequeñas blancas indican relieve de tejido
pancreático ectópico.

Diagnóstico clínico del colédoco y es posible la aparición de neoplasias


en la edad adulta, dentro de estas las más frecuentes
Pueden presentarse clínicamente como una masa
son el cáncer de vesícula biliar, debido a que tienen un
abdominal, vómitos, obstrucción biliar o pancreatitis
incremento en la actividad celular proliferativa de la
aguda o simplemente ser un hallazgo en la realización
mucosa vesicular, incluso en los niños, por lo que al-
de alguna prueba de imágenes. Los quistes múltiples
gunos autores han propuesto la realización de resección
se asocian a enfermedades sistémicas o riñones poli-
de la vesícula y del conducto biliar con la realización de
quísticos. Se localizan con frecuencia en el cuerpo y
hepaticoyeyunostomía Existen diferentes variables de
cola del páncreas.
anatómicas en las anomalías de la unión biliopancreática
en dependencia del sitio exacto en que se unen ambos
Tratamiento
conductos (Fig. 191.4).
Su tratamiento es quirúrgico, aunque cuando están
localizados en la cabeza se puede realizar el drenaje
por vía endoscópica o quirúrgica.
Síndrome de Shwachman-Diamond
El síndrome de Shwachman-Diamond es la segunda
Anomalías anatómicas de la unión causa de insuficiencia pancreática exocrina en el niño,
es una enfermedad genética rara, que se trasmite de
pancreático biliar forma autosómica recesiva, debida a una mutación
Las anomalías de la unión pancreático biliar es en el gen SBDS, del que se han identificado unas 14
una malformación congénita de la confluencia de los mutaciones, que se caracteriza por una insuficiencia
conductos pancreáticos y biliares mediante el que un pancreática exocrina, asociada a alteraciones hematoló-
canal común drena la bilis y la secreción pancreática gicas (anemia, neutropenia, leucopenia y pancitopenia),
con ausencia de una pared entre ambos conductos, de anormalidades esqueléticas (disostosis metafisiaria,
esta manera se produce reflujo de la secreción pancreá- defectos de los huesos largos y distrofia torácica) y baja
tica exocrina dentro del sistema biliar. Estos pacientes estatura, evoluciona con electrolitos en sudor normal
tienen riesgo elevado de padecer pancreatitis, quistes lo que la diferencia de la fibrosis quística.
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas del páncreas en la infancia 189

Fig. 191.4. Unión pancreático-biliar normal y variantes uniones anómalas pancreático-biliares.

La neutropenia puede evolucionar de forma cíclica y El gen de la enfermedad se mapeó en el cromosoma


es el hallazgo más constante que aparece en este síndrome. 7q, cerca del centrómero.
Otros hallazgos reportados son retardo mental y Existen diversas hipótesis que tratan de explicar este
sicomotor, disfunción tubular renal, diabetes mellitus, defecto genético tales como: defectos moleculares en la
anomalías dentarias, anomalías miocárdicas, anomalías reparación del ADN, en el procesamiento o la secreción
en las pruebas de funcionamiento hepático fundamental- de proteínas, microtúbulos o microfilamentos del cito-
mente las amino transferasas, hepatomegalia, entre otros. esqueleto, factores de unión nucleares o un síndrome
La insuficiencia pancreática exocrina y las anoma- de ruptura cromosómica.
lías de uno o más elementos celulares de la médula ósea, El defecto genético afecta tanto a la médula ósea
parecen ser los únicos hallazgos contantes. como las placas de crecimiento. El trastorno hemático
Un tercio de los niños desarrollan síndrome mie- parece afectar el desarrollo celular y afecta las células
loproliferativo y leucemias agudas. Los casos graves precursoras y la estroma de la médula ósea necesaria
se presentan en la infancia con malabsorción, falta del para el buen funcionamiento de la hematopoyesis.
desarrollo e infecciones recurrentes, mientras que en Las anomalías de los huesos largos obedecen al mal
los casos leves el diagnóstico de estas complicaciones procesamiento de proteínas en el retículo endoplasmá-
puede demorarse. Debido a la falta de criterios de diag- tico rugoso de los condricitos del cartílago (40 %), no
nósticos precisos o de marcadores genéticos, en muchas obstante, este hecho no está del todo esclarecido.
ocasiones el diagnóstico de la afección se hace difícil.
La incidencia y prevalencia se desconoce, pero apa- Diagnóstico clínico
rece reportada en la literatura como la segunda causa de La forma más frecuente de presentación en la in-
insuficiencia pancreática exocrina en el niño. fancia es como una insuficiencia pancreática exocrina
y neutropenia, la que puede determinar infecciones a
Fisiopatología repetición asociada a baja estatura, que generalmente ya
El defecto molecular del síndrome de Shwach- son evidente en el primer año de vida. Se han realizado
man-Diamond se desconoce. El daño pancreático diferentes estudios de correlación genotipo-fenotipo
parece provocar una falta de desarrollo de los ácinos que pueden definir las manifestaciones clínicas más
pancreáticos in útero. importantes relacionadas con cada mutación.
190 Parte XV. Páncreas

Exámenes complementarios muy marcada. Existen algunos reportes con hormona


de crecimiento con resultados satisfactorios en relación
Las alteraciones hematológicas (anemia, neutrope-
con el tratamiento de la baja estatura.
nia, leucopenia y pancitopenia) se pueden evidenciar
tanto por el estudio de sangre periférica como en la
médula ósea. Síndrome de Johanson-Blizzard
En los estudios imaginológicos el páncreas es de
Es un síndrome raro, se describe un patrón dismór-
tamaño normal o pequeño y de aspecto graso, dado
fico craneofacial que se caracteriza por la presencia de
que el tejido acinar se ha sustituido por tejido graso,
hipoplasia del ala nasal, microcefalia, defectos del cuero
lo que se expresa por un aumento de la ecogenicidad.
cabelludo en la línea media posterior, cabello escaso y de
El sistema de conductos (pancreático principal y los
ubicación frontal, ausencia de algunos dientes permanen-
islotes) son normales.
tes e hipoplasia de los transitorios, puede observarse en
En la biopsia lo más importante es el remplazo graso
ocasiones estrabismo, hipotiroidismo primario, aquilia
del tejido de los ácinos pancreáticos de manera extensa.
pancreática, anemia y sordera congénita. El desarrollo
En los rayos X óseo se aprecian alteraciones a nivel
mental va desde el retardo mental severo hasta una in-
de los huesos largos, dado por la afectación genética de
teligencia normal Puede asociarse a ano imperforado,
las placas de crecimiento.
anomalías vaginales criptorquidia, micropene y fístula
rectovaginal, anomalías cardiacas, entre otras menos fre-
Complicaciones
cuentes. Se hereda de forma autosómico recesivo, se debe
En los pacientes con neutropenia severa, las infec- a una mutación del gen en la ubiquitin ligasa E3 (UBR1).
ciones recurrentes a repetición pueden ser la causa de Hay aproximadamente unos 100 casos diagnosticados
la muerte de estos niños, las más frecuentes son otitis, y se caracteriza, además, por retardo en el crecimiento
neumonías a repetición, infecciones urinarias, osteo- desde la etapa prenatal y transformación lipomatosa
mielitis, infecciones cutáneas, entre otras, sin embargo, del páncreas. Se mantiene secreción pancreática ductal
muchos se benefician con el uso de factor estimulador conservada de líquidos y electrolitos. Los niveles séri-
de colonias de granulocitos. cos bajos de tripsinógeno hacen plantear que existe un
El retardo del crecimiento en estos pacientes aparece defecto primario de las células acinares.
tan tempranamente como en el momento del nacimien- Desde el punto de vista histológico se caracteriza por
to y se mantiene durante los primeros meses de vida, conductos pancreáticos y los islotes conservados, pero
fundamentalmente. están rodeados por tejido conectivo y ausencia total de
Todas estas complicaciones hacen que la supervi- acinos y transformación lipomatosa del páncreas. Se
vencia de estos pacientes se calcule alrededor de los 30 caracterizan por tener una disminución de la secreción
años, aunque es menor en algunos estudios. de tripsina, lipasa y colipasa.

Pronóstico Síndrome de Jeune


Los pacientes que presentan pancitopenia tienen
Este es un desorden raro que se trasmite de forma
un peor pronóstico. Un porcentaje elevado de estos
autosómica recesiva, caracterizado por anomalías
pacientes desarrolla enfermedades mieloproliferativas
esqueléticas del tórax y las extremidades, usualmente
Tratamiento asociado a distress respiratorio en la infancia, se re-
porta la presencia de distrofia torácica y deficiencia
El tratamiento está encaminado fundamentalmente pancreática exocrina. También existe un caso reportado
a tratar la insuficiencia pancreática exocrina mediante de fibrosis pancreática.
la utilización de enzimas pancreáticas, para disminuir
la esteatorrea y lograr una nutrición adecuada, también
es necesario la administración de vitaminas liposolu-
Síndrome médula-páncreas de Pearson
bles y se utilizan triglicéridos de cadena media para Se trata de un síndrome raro caracterizado por ane-
garantizar un aporte calórico adecuado. Por otro lado, mia sideroblástica refractaria al tratamiento y vacuoli-
cuando hay infecciones intercurrentes es necesaria la zación de los precursores de la médula ósea y disfunción
utilización de antibióticos específicos, en algunos es- pancreática exocrina. Puede relacionarse también con
tudios se ha utilizado el factor estimulador de colonias anemia macrocítica que hace a los pacientes depen-
de granulocitos, sobre todo cuando la neutropenia es dientes de transfusiones a repetición, respeta el resto
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas del páncreas en la infancia 191

de las líneas celulares de la médula ósea. Se debe a tipo necrotizante. El primero suele tener una evolución
una delección del par 4977 del ADN mitocondrial que leve y autolimitado, con una tasa de mortalidad de 2 %,
rodea las porciones de los genes que codifican la NADH mientras que el tipo necrotizante se caracteriza por una
deshidrogenasa, la citocromo oxidasas, y la adenosin evolución clínica fulminante y rápidamente progresivo,
fosfatasa. Actualmente se identificó una variedad de con dolor intenso, fallo renal, colapso circulatorio y
defectos mitocondriales que parecen estar flanqueados posible evolución fatal en horas o días, con una mor-
por repeticiones de nucleótidos. Se hereda de forma au- talidad elevada (50 %).
tosómica dominante. En todos los casos se encuentran Deben identificarse las pancreatitis agudas graves ya
mitocondrias anormales y puede concomitar con daños que requieren una estrecha vigilancia y un tratamiento
importantes a nivel de hígado, riñón, piel e intestino. de sostén agresivo.
La insuficiencia pancreática parece ser debido a fibro- Se define la pancreatitis como una enfermedad
sis pancreática y al reemplazo de las células acinares inflamatoria del páncreas exocrino, causada por la
por grasa. Con frecuencia es fatal en la infancia y los activación, liberación intersticial y autodigestión de
pacientes que sobreviven pueden desarrollar hallazgos la glándula por sus propias enzimas. Clínicamente la
de otras enfermedades mitocondriales.
pancreatitis aguda aparece como un inicio brusco de
dolor abdominal asociado con la elevación de enzimas
Síndrome de Iverson digestivas en la sangre y orina. Esto ocurre cuando se
Se caracteriza por trastornos del desarrollo del riñón activa de forma prematura el tripsinógeno que provoca
el hígado y el páncreas. Puede asociarse a riñón, hígado en primer lugar un edema intersticial con necrosis de
y páncreas quístico, que le confiere al páncreas aspecto la grasa peripancreática, situación considerada como
irregular. Los conductos pancreáticos están rodeados leve, y a continuación desarrollarse la forma grave con
de áreas de fibrosis y atrofia del parénquima. la presencia de una intensa necrosis de la grasa intra-
pancreática y peripancreática y necrosis del parénquima
pancreático con posterior aparición de hemorragia.
Pancreatitis en el niño La forma edematosa suele tener una evolución leve
Desde el segundo Simposio Internacional celebrado y autolimitada, con una tasa de mortalidad baja, mien-
en Marsella en 1984, la pancreatitis debe clasificarse tras que la forma necrotizante se caracteriza por una
como aguda y crónica, eliminando los términos de evolución clínica fulminante y rápidamente progresiva,
pancreatitis aguda recidivante y pancreatitis crónica con dolor intenso, fallo renal, colapso circulatorio y
recidivante. Con posterioridad han salido nuevas cla- posible evolución fatal en horas o días, con una mor-
sificaciones, la última el consenso de Atlanta de 2013. talidad elevada. Esta forma grave requiere una estrecha
La pancreatitis crónica es una patología muy poco vigilancia y un tratamiento agresivo, ya que tienen una
frecuente en la edad pediátrica. Es un proceso inflama- alta incidencia de sepsis y disfunción multiorgánica con
torio crónico, como consecuencia de la destrucción del muerte. En general se considera que la prevalencia de
tejido pancreático exocrino, fibrosis y en algunos casos pancreatitis aguda en el niño está aumentando.
pérdida de la función endocrina.
En este simposio se definieron tres tipos morfoló- Etiología
gicos de pancreatitis:
– Aguda ligera (edematoso-intersticial): sin necrosis Las causas son diversas, las más frecuentes la
grasa peripancreática, sin complicaciones ni fallo traumatismos, que pueden preceder incluso en se-
orgánico y con solo edema interticial. manas la aparición de los síntomas; enfermedades
– Moderadamente severa: donde hay complicaciones multisistémicas como síndrome de Reye, síndrome
locales y fallo orgánico menor de 48 h. hemolítico urémico, lupus eritematoso sistémico; dro-
– Severa (necrótico-hemorrágica): existe intensa gas, infecciones, la pancreatitis hereditaria, idiopáticas
necrosis grasa intrapancreática y peripancreática, y anomalías congénitas del sistema pancreaticobiliar
necrosis del parénquima pancreático y hemorragias (páncreas divisum). Las causas de pancreatitis pueden
y disfunción orgánica. ser mecánicas o estructurales (30 %), por enfermedades
sistémicas (20 %), idiopáticas (25 %), por fármacos
Desde el punto de vista clínico, el objetivo diagnós- (15 %), infecciones (10 %) o hereditarias (5 %):
tico más importante en los pacientes con pancreatitis – Traumáticas.
aguda es la diferenciación entre el tipo intersticial y el – Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.
192 Parte XV. Páncreas

– Medicamentosas: • Pancreatitis juvenil tropical.


• Metildopa. • Enfermedad de Kawasaki.
• Azatioprina. • Úlcera perforada.
• Eritromicina. • Lupus eritematoso sistémico.
• Furosemida. – Idiopática.
• Glucocorticoides.
• Infusiones IV de lípidos. Diagnóstico clínico
• Isoniacida. Los síntomas más frecuentes de la pancreatitis aguda
• Lamivudina. son dolor abdominal intenso, la ingesta de alimentos
• Metronidazol. puede aumentar el dolor y provocar vómitos. El dolor
• Mesalacina. a la palpación abdominal en epigastrio, disminución
• 6- mercaptopurina. o ausencia de ruidos intestinales o rigidez de la pared
• Rinfampicina. abdominal, son los datos más sobresalientes del examen
• Sulfasalazina. físico. Se pueden presentar síntomas de compromiso
• Sulfonamidas. sistémico. La pancreatitis aguda grave puede acom-
• Tetraciclina. pañarse de derrame pleural, ascitis, choque, síndrome
• Ácido valproico. de distress respiratorio, coagulación intravascular
– Infecciones: diseminada, hemorragia digestiva masiva e infección
• Acaris lumbricoides. sistémica e intraabdominal.
• Virus Coxsackie B. En la pancreatitis crónica predominan los episodios
• Echovirus. recurrentes de pancreatitis aguda.
• Enterovirus-
• Virus de Epstein Barr. Exámenes complementarios
• Virus de la hepatitis A.
• Herpes virus. Para efectuar un diagnóstico de certeza es necesaria
• Influenza A. la combinación de síntomas y signos clínicos, pruebas
• Leptospirosis. de laboratorio y técnicas de imagen: rayos X simple de
• Malaria. abdomen, ecografía abdominal, tomografía axial com-
• Sarampión. putarizada o resonancia magnética. El estudio persigue
• Mycoplasmosis. confirmar el diagnóstico y determinar la causa en los
• Rabia. casos que sea posible.
• Rubéola. Pruebas bioquímicas
• Fiebre tifoidea.
– Infecciones asociadas al sida: Desde el punto de vista bioquímico se realiza do-
• Criptosporidim. sificación de enzimas pancreáticas las que deben estar
• Citomegalovirus. en un valor al menos tres veces por encima de su valor
• Mycobacterium avium. normal, la magnitud de su elevación no indica la seve-
• Mycobacteriun tuberculosis. ridad ni predice el pronóstico:
• Toxoplasma gondii. – Lipasa: tiene mayor sensibilidad y especificidad
– Enfermedades de las vías biliares: (95 %) que la amilasa y se mantiene elevada por más
• Páncreas divisum. tiempo (aproximadamente de una a dos semanas).
– Enfermedades metabólicas: – Amilasa: algunos pacientes pueden tenerla dentro
• Fibrosis quística. de cifras normales (10 % a 15 %) Tiene una sen-
• Hipercalcemia. sibilidad y especificidad que varía entre 80 % a 90
• Hipertrigliceridemia. %. Se puede elevar en otras patologías tales como
• Malnutrición proteicocalórica. parotiditis, trastornos de la alimentación, peritonitis,
• Síndrome de Reye. apendicitis, obstrucción intestinal, insuficiencia renal,
– Miscelánea: quemaduras, fármacos (morfina), acidosis metabólica
• Lipodistrofia congénita. (diabetes, choque). La amilasa permanece alta durante
• Cetoacidosis diabética. cuatro a seis días. La amilasa urinaria se mantiene
• Púrpura de Schonlein Henoch. elevada durante un periodo mayor que la sérica.
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas del páncreas en la infancia 193

La medición de ambas enzimas aporta una sensibi- esta no aumenta la secreción pancreática, es bien tole-
lidad y especificidad entre 90 % a 95%. rada y se asocia a una significativa menor incidencia
La tripsina catiónica inmunoreactiva, la elastasa de infecciones y menor estadía hospitalaria. En general
pancreática I y la fosfolipasa A2 son enzimas séricas se aportan fórmulas altas en proteínas y bajas en grasa
que tienen mayor sensibilidad que la amilasa y la lipasa hasta que pueda reiniciarse la ingesta oral. La alimen-
y sus valores sí se han correlacionado con la severidad tación enteral no debe utilizarse si se sospecha íleo
de la enfermedad. paralítico, lo que obliga al uso de nutrición parenteral.
El ultrasonido abdominal, sin tener una alta sensibi- El dolor es un síntoma importante dentro de esta
lidad por la mala visualización del páncreas en 25 % a enfermedad en ocasiones solamente con la utilización
50 % de los casos, puede aportar al diagnóstico inicial de la sonda nasogástrica, en presencia de retención
al visualizar edema, litiasis, masas, colecciones líquidas gástrica se reduce este síntoma.
y abscesos. El páncreas puede observarse normal en Los opiáceos son altamente eficaces en el control
los casos leves. del dolor pancreático, principalmente la petidina y la
La tomografía axial computarizada tiene mayor metadona ya que no provocan espasmo del esfínter de
valor en la clasificación de gravedad al permitir evaluar Oddi, a diferencia de la morfina que está contraindicada.
la extensión del proceso inflamatorio y la existencia de No hay evidencia que la profilaxis antibiótica tenga
necrosis macroscópica o compromiso vascular. beneficio en el tratamiento de la pancreatitis aguda
La colangiopancreatografía retrograda endoscópica leve edematosa, por lo que en estos pacientes no se
se hace en forma urgente dentro de los primeros tres recomienda. La reducción en la mortalidad se limita a
días de iniciado el cuadro cuando se demuestre litiasis los pacientes con pancreatitis aguda grave con necro-
o exista colangitis, ictericia o dilatación del conducto sis pancreática o en casos de sospecha o confirmación
biliar común. En los casos de pancreatitis recurrente de infección. El diagnóstico de infección pancreática
inexplicable o episodios prolongados donde se sos- se debe tener en cuenta frente a un paciente presenta
pecha una malformación o alteración del conducto se deterioro marcado de su cuadro clínico.
recomienda realizar colangiopancreatografía retrograda En general se recomiendan las cefalosporinas de
endoscópica en forma diferida, la que permite realizar segunda y tercera generación en asociación con el
en el mismo momento tratamiento ya que se puede metronidazol, está contraindicado el uso de ceftriaxone
realizar remoción de cálculos. por la posibilidad de provocar barro biliar. En los casos
La colangiorresonancia es útil para buscar litiasis y que no responden a las cefalosporinas se puede utilizar
anomalías ductales. vancomicina o meropenen.
La ecografía endoscópica no es de uso habitual El tratamiento quirúrgico está indicado en los casos
y se recomienda en casos complejos para descartar de pancreatitis necrótica infectada y en las pancreatitis
patología ductal. con patología biliar concomitante.
El estudio genético está indicado cuando existen En el tratamiento farmacológico se han utilizado
evidencias de pancreatitis hereditaria por la presencia drogas como los inhibidores de proteasas pancreáticas,
de otros familiares afectos o cuando hay episodios de dentro de estos el más estudiado es el gabexato mesilato,
pancreatitis aguda a repetición en la infancia que actúa antagonizando la tripsina pancreática activada.
Sin embargo, no existe evidencia suficiente que avale su
Tratamiento uso en la edad pediátrica. Los inhibidores de la secreción
El tratamiento de la pancreatitis aguda es principal- pancreática como la somatostatina o su análogo sintético,
mente de soporte: ingreso a una unidad de cuidados in- el octreotide, se han utilizado en el tratamiento de estos
termedios o intensivos según la gravedad inicial donde pacientes. El octeotride inhibe la motilidad gastrointes-
pueda garantizarse una observación estricta. tinal, la secreción de ácidos gástricos, pepsina y factor
Desde el punto de vista nutricional en la pancreatitis intrínseco, la secreción de enzimas pancreáticas, el flujo
aguda leve la realimentación oral ocurre en un plazo sanguíneo esplácnico y la contractilidad de la vesícula.
máximo de una semana, no se ha demostrado beneficio El octeotride tiene una vida media más larga cuando se
nutricional parenteral. Se recomienda iniciar régimen administra en forma subcutánea, comparado con la de
líquido entre 48 h a 72 h de evolución. En los casos gra- la somatostatina. En la actualidad no hay evidencias
ves el inicio de la alimentación oral no se recomienda suficientes que avalen su indicación terapéutica o profi-
a corto plazo, se prefiere el uso de alimentación enteral láctica para pancreatitis aguda y en pediatría no existen
mediante la utilización de sonda nasoyeyunal, ya que estudios controlados respecto a su uso.
194 Parte XV. Páncreas

Existe la posibilidad de que la suplementación con ya que se ha encontrado una relación directa entre el
agentes antioxidantes puede ser beneficiosa debido a número de ataques de pancreatitis aguda y la fibrosis
la asociación entre el estrés oxidativo y la activación pancreática. Finalmente aparecen las manifestaciones
del tripsinógeno. Existen estudios en que se ha demos- de insuficiencia pancreática exocrina como resultado
trado déficit de antioxidantes en niños con pancreatitis de la destrucción del órgano.
hereditaria. La destrucción del páncreas determina la aparición
Las enzimas pancreáticas están indicadas inicial- de diabetes mellitus en estos pacientes, aunque se in-
mente en la pancreatitis crónica, pero no se ha demos- vocan otros factores ambientales y genéticos.
trado su beneficio en los brotes de pancreatitis aguda Se ha reportado que estos pacientes tienen un riesgo
En conclusión, los objetivos del tratamiento son incrementado de padecer cáncer del páncreas que gene-
controlar el dolor que es prioritario, reposición hi- ralmente aparece de 30 a 40 años después del comienzo
droelectrolítica, aspiración gástrica solo en casos de de la pancreatitis, sin que se conozcan con exactitud las
vómitos o íleo, reposo pancreático con ayuno hasta causas de esta incidencia elevada.
que ceda el dolor y se normalice la amilasemia, la El diagnóstico de este tipo de pancreatitis es fun-
nutrición enteral es mejor que la parenteral, y está damentalmente clínico, principalmente si se tiene en
indicada cuando el ayuno se prolonga más de 72 h. No cuenta los antecedentes familiares, independientemente
son útiles los antibióticos profilácticos. Administración de que el estudio del gen del tripsinógeno catiónico
de inhibidores de la acidez (anti H2 o inhibidores de (PRSS1) ofrece la posibilidad de establecer el diagnós-
la bomba de protones) para prevención de la úlcera tico molecular en la mayoría de los casos.
de estrés. La administración de enzimas pancreáticas El tratamiento es similar al de otros tipos de pan-
creatitis.
puede emplearse en casos de pancreatitis crónica con
insuficiencia del páncreas exocrino.
Pancreatitis familiar
Pancreatitis hereditaria El término de pancreatitis familiar se refiere a la
pancreatitis de cualquier causa, que ocurre con una inci-
Es un síndrome que evoluciona con cuadros de
dencia superior a la reportada en el resto de la población
hepatitis aguda a repetición, e incluso como hepatitis
en una familia determinada, de esta manera, este tipo
crónica de carácter familiar y que se hereda de forma
de pancreatitis puede o no ser causada por trastornos
autosómica dominante, la causa es la mutación del
genéticos. Al parecer la etiología de la pancreatitis fa-
gen del tripsinógeno catiónico (PRSS1) ubicado en el
miliar típica incluye una condición hereditaria de forma
cromosoma 7. Se plantea que los hallazgos clínicos
autosómica recesiva del gen CFTR y del SPINK1, de
son más severos en los pacientes en los que se han en-
forma homocigótica o heterocigótica, interactuando con
contrado las mutaciones genéticas más frecuentemente otros desordenes genéticos y factores ambientales. Se
descritas R122H (un cambio de arginina por histidina en ha asociado con otras alteraciones genéticas como son
la posición 117) y N291, principalmente en la primera. la hipertrigliceridemia o hiperparatiroidismo.
En los pacientes que desarrollan pancreatitis aguda Los síntomas iniciales ocurren antes de los 20 años
la severidad es variable y pueden aparecer las complica- con una edad media de aparición de 13 años y no tiene
ciones descritas en cualquier otra causa de pancreatitis. predilección el sexo femenino o masculino.
La pancreatitis hereditaria afecta ambos sexos y
se describe que la edad de comienzo de los síntomas,
es menor que en cualquier otra causa de pancreatitis, Pancreatitis tropical
se reporta que en los pacientes que tienen la mutación Es una forma de pancreatitis crónica idiopática de
R122H los síntomas pueden comenzar antes de los cin- comienzo temprano generalmente caracterizada por
co años de edad y en los que tienen la mutación N291 dolor abdominal recurrente cálculos pancreáticos y dia-
un poco más tardíamente. Al parecer el comienzo de la betes mellitus, que ocurre más frecuentemente en niños
enfermedad puede estar también influenciado por facto- y adultos jóvenes que viven en países en desarrollo,
res ambientales y por la presencia de otras mutaciones. aunque no existe consenso en los criterios diagnósticos
Estos pacientes pueden evolucionar a la pancreatitis que la distingan de otros tipos de pancreatitis.
crónica debido a los episodios a repetición de pancrea- Se plantea que la edad de comienzo es más tardía que
titis aguda que provocan destrucción inflamatoria del en los casos reportados inicialmente, tal vez por mejoría
parénquima normal del páncreas con fibrosis progresiva de las condiciones ambientales en muchos países.
Capítulo 191. Anomalías congénitas y adquiridas del páncreas en la infancia 195

El hallazgo más importante de este tipo de pan- Déficit de enteroquinasa


creatitis es su evolución al desarrollo de diabetes
La enteroquinasa se produce en la mucosa duodenal
mellitus, que comienza antes de las manifestaciones
y su función fundamental es la activación del tripsinó-
de insuficiencia pancreática exocrina, con aparición geno pancreático.
de calcificaciones y gran dilatación del conducto pan- El primer caso fue descrito por Hadorn y colaborado-
creático principal y atrofia pancreática que se debe, res en 1969, presenta un patrón de herencia autosómica
en parte, a la obstrucción del conducto pancreático recesiva. Se demuestra ausencia completa de la actividad
principal por cálculos. proteolítica del páncreas, las fundamentales manifestacio-
El dolor abdominal es el síntoma cardinal que obliga nes clínicas de la enfermedad son la presencia de diarreas
al paciente a dejar de alimentarse, puede asociarse a graves, malolientes y voluminosas, esteatorreicas, asocia-
presencia de vómitos, la diabetes se desarrolla precoz- da a retardo del crecimiento. Al no existir una adecuada
mente, unos 10 años después del comienzo del dolor actividad proteolítica se observa una hipoproteinemia se-
abdominal vera que se manifiesta desde el punto de vista clínico con
Desde el punto de vista clínico el dolor es similar al la presencia de edemas. El diagnóstico se realiza mediante
observado en otros tipos de pancreatitis y evoluciona la demostración de ausencia de actividad trípsica en el
de forma recurrente. jugo pancreático con determinación de amilasa y lipasas
En otros pacientes predomina el cuadro de insu- normales. El tratamiento está basado la administración
ficiencia endocrina con un dolor más ligero y van a de enzimas pancreáticas.
consulta como causa de la diabetes mellitus. Existen
casos reportados con una atrofia pancreática severa. Déficit de tripsinógeno
Inicialmente se invocó la desnutrición proteica El tripsinógeno secretado por el páncreas es activado
calórica como un factor involucrado en su etiología, por la enteroquinasa para formar enzimas proteolíticas
pero parece que es la causa primaria de la pancreatitis pancreáticas activas. Se han descrito muy pocos casos,
tropical, por lo que se ha asociado con algunos factores se caracteriza porque hay déficit de enzimas proteolí-
genéticos como la mutación SPINK1. ticas pancreáticas, por lo que se provoca edemas por
El tratamiento es similar a otras causas de pancrea- hipoproteinemia. Otros síntomas son diarrea, anemia,
titis con suplementos de enzimas pancreáticas en los vómitos y retardo del crecimiento y su diagnóstico se
estadios iniciales de la enfermedad y controlar y mejorar realiza demostrando la ausencia de enzimas proteolíti-
los síntomas secundarios a la diabetes mellitus. cas en la secreción pancreática estimulada que aparecen
tras la adición de tripsina.
Defectos enzimáticos aislados
Déficit congénito de lipasa pancreática
del páncreas
Se trata de un trastorno raro que afecta fundamen-
Además de los trastornos morfológicos, existen una talmente la absorción de los lípidos, se plantea que
serie de disfunciones enzimáticas que comienzan en tiene una herencia posiblemente autosómica recesiva
edades precoces y provocan malabsorción de diferentes y el defecto genético se localiza en el brazo largo del
nutrientes indispensables para el buen desarrollo pondo cromosoma 10
estatural de los niños. Es un síndrome grave con déficit congénito de lipasa
pancreática, aunque también es escasa la producción
Déficit proteolítico y lipolítico de tripsina y amilasa.
del páncreas exocrino Las manifestaciones clínicas incluyen heces estea-
Se debe a un déficit selectivo de tripsina, quimio- torreicas que manchan los pañales, puede asociarse a
tripsina, carboxipeptidasa y lipasa pancreática, aunque incontinencia anal. No hay retardo del crecimiento ni
la amilasa es normal. distensión abdominal.
Las manifestaciones clínicas incluyen retardo gra- El tratamiento se basa en dieta pobre en grasas con
ve del crecimiento, retraso mental, anemia crónica y suplementos de enzimas pancreáticas.
edemas secundarios a hipoptoteinemia severa. Puede
asociarse a ano imperforado. Los electrolitos en sudor
Déficit congénito de colipasa
normales lo que permite el diagnóstico diferencial con Se ha descrito en la descendencia masculina de ma-
la fibrosis quística trimonios con consanguinidad, se sugiere que el defecto
196 Parte XV. Páncreas

genético está localizado en el brazo largo del cromo- El seudoquiste pancreático se ha descrito en un niño
soma 6. Clínicamente se caracteriza por deposiciones de 14 meses, los autores plantean que una hipótesis sobre
laxas y esteatorrea, cuando los niveles disminuyen la etiología del seudoquiste en este paciente es que pudo
1 % a 2 % de la producción de la enzima. ser la consecuencia de una pancreatitis aguda que no fue
diagnosticada, muy probablemente durante su estancia
Déficit aislado de amilasa en la unidad neonatal de cuidados intensivos. La pan-
creatitis puede asociarse a infecciones como la neumonía
Es extraordinariamente raro. Se plantea que desde
y a medicamentos como los esteroides, el acetaminofén,
el punto de vista clínico no provoca manifestaciones
la furosemida o los diuréticos tiacídicos, que pudieron
severas por la presencia de la amilasa salival, por lo que
ser utilizados en este paciente. Otras posibles etiologías
el diagnóstico se hace generalmente después del primer
pueden ser sepsis, choque, trauma o causas idiopáticas.
año de vida. Las manifestaciones clínicas son diarreas
Los exámenes que pueden ayudar a diagnosticar
espumosas con heces ácidas después de la ingestión de
el seudoquiste pancreático son fundamentalmente la
almidón y su diagnóstico se sospecha cuando no hay
ecografía abdominal, la tomografía axial computarizada
aumento de la glucemia después de la administración y la resonancia magnética, la que demuestran la lesión
de 50 g de almidón y se realiza demostrando ausencia quística en el páncreas, se debe realizar el diagnóstico
de amilasa en secreciones pancreáticas. diferencial con otras enfermedades capaces de causar
lesiones similares en este órgano
Seudoquiste pancreático
Dentro de las lesiones adquiridas del páncreas en la Bibliografía
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es el seudoquiste pancreático, generalmente secundario Integrada, 1(5), 341-350.
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una reacción inflamatoria que se traduce en la formación A., Nayyar, S., et al. (2002). Acute pancreatitis in children. Am
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únicos, el volumen de líquido que contienen es muy Revert, L. F., Pérez, M. E., Pereda, P. A., (2006). Hipertransaminase-
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miento es quirúrgico. revision. Rev Col Gastroenterol, 26(1), 58-64.
Capítulo 192
Pancreatitis aguda
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

La pancreatitis aguda es un proceso inflamatorio dentes de abuso de alcohol (agudo o crónico). En un


agudo del páncreas con participación variable de este, 10 % más se identifica alguno de los restantes factores
tejidos regionales a su alrededor o sistemas y órganos etiológicos propuestos:
distantes. La evolución clínica puede variar de una in- – Biliar: litiasis biliar.
comodidad ligera con inflamación pancreática mínima a – Tóxico: abuso de alcohol (agudo y crónico).
una pancreatitis necrotizante severa, complicada por un – Fármacos.
fallo de sistema multiórgano y la muerte. Las etiologías – Metabólicas:
más comunes son la litiasis en la vesícula y el alcoho- • Hipertrigliceridemia.
lismo. La historia natural está en dependencia del grado • Deficiencia de C II apoproteína.
de inflamación y necrosis. Después de un ataque agudo, • Hipercalcemia.
usualmente hay recuperación completa de la función si – Infecciones:
el agente ofensivo es identificado y eliminado. • Virus: parotiditis y hepatitis vírica
Es una de las enfermedades más comunes del tracto • Otros virus: Coxsackievirus y echovirus.
gastrointestinal, que provoca una tremenda carga emo- • Ascaridiasis.
cional, física, financiera y humana. En Estados Unidos, • Micoplasma.
en 2009, fue el diagnóstico de gastroenterología más • Salmonella.
frecuente con un costo de 2,6 billones de dólares. • Campylobacter jejuni.
Los estudios recientes de la incidencia de pancrea- • Sida (multifactorial).
titis aguda difieren entre 4,9 y 73,4 casos por 100 000 – Malformaciones congénita del páncreas:
en todo el mundo. Un incremento en la incidencia • Divertículos.
anual se ha observado en estudios más recientes. Datos • Quistes del colédoco.
retrospectivos epidemiológicos de 1988 a 2003 por la • Páncreas dividido.
Encuesta de Hospitales Nacionales en Estados Unidos • Pancreatitis hereditaria.
mostró que las admisiones de hospital para pancreatitis – Disfunción de las vías biliares: disfunción del es-
aguda aumentaron de 40 por 100 000 en 1998 a 70 por fínter de Oddi.
100 000 en 2002. Aunque la tasa de mortalidad por – Traumatismos (sobre todo abdominales no pene-
caso para pancreatitis aguda ha decrecido con el paso trantes).
del tiempo, la tasa global de mortalidad demográfica – Manipulación quirúrgica o instrumental
ha permanecido inalterada. • Posoperatoria (abdominal, by pass aortocoronario).
• Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica.
Etiología – Tumores pancreáticos:
• Adenocarcinoma.
Se han involucrado numerosas causas, aunque • Primarios o metastásicos.
para muchos de estas las evidencias epidemiológicas, • Idiopáticas.
fisiopatológicas e incluso experimentales son confusas – Renal:
o carecen de suficiente solidez. El 60 % a 85 % se • Insuficiencia renal.
presentan en pacientes con litiasis biliar o con antece- • Trasplante renal (multifactorial).
198 Parte XV. Páncreas

– Embarazo. genos pancreáticos. Una hipótesis alternativa propone


– Colagenosis: que, favorecido por el paso de cálculos a través de la
• Trastornos del tejido conectivo con vasculitis. ampolla de Váter, el reflujo del jugo duodenal hacia el
• Lupus eritematoso sistémico. conducto de Wirsung es el responsable del inicio del
• Angeitis necrotizante. proceso, debido a su contenido en enzimas y a su rique-
• Púrpura trombocitopénica trombótica. za en bacterias. Tampoco esta hipótesis tiene respuesta
– Obstructiva o perforación: para ciertas críticas. Finalmente, la teoría obstructiva
• Ulcera péptica penetrante. supone que la emigración de los cálculos a través de la
• Obstrucción de la ampolla de Váter. vía biliar provoca un bloqueo transitorio del esfínter de
– Enfermedad inflamatoria intestinal: Oddi o por compresión extrínseca de la porción final
• Enfermedad de Crohn. del conducto de Wirsung con aumento de la presión
• Divertículo duodenal. en el árbol pancreático. Tal hiperpresión favorece
– Pancreatitis aguda idiopática. tanto el paso de jugo pancreático al intersticio como
hipersecreción pancreática, hechos que conjuntamente
Finalmente, en una proporción que oscila entre desencadenan la activación enzimática. En cualquier
8 % a 24 % de los casos no se encuentra ninguna ex- caso, el mecanismo íntimo de la lesión celular está aún
plicación causal. por explicar.

Litiasis vesicular Alcohol


La relación de la litiasis biliar y el alcohol con la Aunque se acepta que a mayor ingesta alcohólica,
pancreatitis aguda está claramente evidenciada, aunque mayor riesgo de padecer una pancreatitis aguda, la
se desconocen los mecanismos íntimos por los que se cantidad de alcohol necesaria para el desarrollo de la
activan las enzimas pancreáticas. enfermedad es muy variable de unas personas a otras,
La litiasis biliar es la causa más frecuente de pan- se llega al extremo de que consumos dentro de los
creatitis aguda en Cuba, y esta a su vez, con la colecis- rangos socialmente aceptados como normales pueden
titis aguda, es la complicación más frecuente de la co- causar pancreatitis aguda. Como aproximación, el
lecistolitiasis. Se asocia frecuentemente con obesidad. consumo de aproximadamente 90 g de alcohol diarios
El riesgo relativo de que un paciente con litiasis biliar es equivalente a la presencia de colelitiasis en términos
desarrolle una pancreatitis aguda es de 6,7 % (95 % CI de riesgo de padecer una pancreatitis aguda y el daño
3,8 a 11,8). La recurrencia de pancreatitis aguda en el crónico sobre la glándula que conduce al desarrollo de
contexto de colelitiasis es inversamente proporcional pancreatitis crónica.
Se han propuesto diferentes vías por las que el al-
al tamaño de los cálculos de forma que varía de 20 % a
cohol induciría la pancreatitis aguda:
1% según se trate de microlitiasis o de cálculos mayores
– El etanol o sus metabolitos, fundamentalmente el
que 20 mm respectivamente.
acetaldehído, actúan por acción tóxica directa sobre
Tras un episodio de pancreatitis aguda es posible ha-
la célula pancreática.
llar en las heces cálculos biliares de pequeño tamaño en
– El alcohol provoca hipersecreción, aumento de
84 % a 94 % de los casos, proporción muy superior a los
presión en el conducto pancreático por espasmo o
encontrados en la litiasis biliar sola (aproximadamente
edema del esfínter de Oddi e incluso por obstrucción
11 %). Comparados con los pacientes operados única-
debida a precipitados proteicos, mecanismos que
mente por litiasis biliar, en los que han intervenido de
causan la disrupción de los conductillos pancreáticos
esta enfermedad tras sufrir una pancreatitis aguda se ha
y el paso de enzimas al intersticio glandular.
encontrado mayor incidencia de anomalías anatómicas – Las alteraciones de los lípidos secundarias al al-
en la vía biliar, cálculos comparativamente más peque- coholismo dan lugar a altas concentraciones en el
ños y numerosos y una frecuencia unas cuatro veces páncreas de ácidos grasos libres que lesionan las
superior de reflujo de bilis hacia el conducto pancreático. células por acción tóxica directa.
Se ha invocado que el reflujo biliar provocado por
la impactación temporal o permanente de un cálculo a 3Fármacos
nivel del esfínter de Oddi pone en marcha el proceso de
autolisis pancreática. Sin embargo, esta teoría presenta Múltiples fármacos se han asociado al desarrollo de
ciertas objeciones y no parece que la bilis, salvo que esté pancreatitis aguda, pero la mayor parte de las asociacio-
previamente infectada, sea capaz de activar los cimó- nes se sustentan sobre la base de casos clínicos puntuales
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 199

sin evaluación tras reexposición. Esto ha hecho que se aguda leves y entre los agentes con mayor asociación
clasifiquen los fármacos implicados en tres grupos: etiológica destacan virus (sarampión, parotiditis epi-
– Fuerte asociación: démica, Coxsachie B, echo y hepatitis B) y bacterias
• Ácido valproico. (salmonella, Campylobacter y micoplasma), que actúan
• Azatrioprina. por daño celular directo.
• Estrógenos.
• Furosemida. Malformaciones congénitas del páncreas
• 6-mercaptopurina.
El páncreas divisum, malformación congénita
• Penatamidina.
resultado de una ausencia de fusión entre el sistema
• Sulfonamidas.
ductal dorsal y ventral del páncreas, desde hasta hace
• Tetraciclina.
– Asociación probable: poco tiempo es un factor etiológico indudable en la
• Asparaginasa. pancreatitis aguda aunque en estudios recientes se
• Corticoides. cuestiona su función etiológico. Lo que es indudable
• Metronidazol. es que el riesgo de pancreatitis aguda es superior que
• Salicilato. en la población general. La presencia de dilatación del
• Tiazidas. conducto pancreático ventral por disfunción de la papila
• Rifampicina. menor apoya este diagnóstico etiológico.
• Opiáceos. Existe un creciente interés en los factores genéticos
– Asociación dudosa: implicados en el desarrollo de pancreatitis aguda, fun-
• Anfetaminas. damentalmente en formas recurrentes. Se han descrito
• Cimetidina. varias mutaciones genéticas, pero la que hasta la actua-
• Ciproheptadina. lidad se ha involucrado en mayor medida es la del gen
• Colestiramina. que codifica el tripsinógeno catiónico, así como la del
• Histamina. gen asociado a fibrosis quística (CFTR).
• Isoniazida. La influencia de defectos genéticos, como la mu-
• Propoxifena. tación del tripsinógeno catiónico, SPINK, o mutación
CFTR, se ha reconocido progresivamente que puede
Si bien parece claramente establecida para la aza- causar pancreatitis aguda.
tioprina y los estrógenos, y con menor seguridad, con
diversos diuréticos (tiacídicos, furosemida y ácido Disfunción de las vías biliares
etacrínico), corticosteroides, sulfonamidas y otros
La disfunción del esfínter de Oddi suele ser causa
fármacos de uso menos frecuente.
de pancreatitis aguda recidivante y puede expresarse de
dos formas: tipo I (dilatación y estenosis intrapapilar
Metabólicas
del Wirsung) o tipo II (presión basal del esfínter mayor
La hiperlipidemia, fundamentalmente la hipertri- de 40 mm Hg sin dilatación del Wirsung).
gliceridemia, es una causa relativamente frecuente de
pancreatitis aguda. La importancia clínica de la pan- Traumatismo
creatitis aguda hiperlipidémica se basa en su frecuente
En la edad pediátrica la pancreatitis aguda puede
gravedad, de forma que se asocia a necrosis pancreática
en 50 % de los casos. estar asociada a trauma abdominal, fibrosis quística,
La incidencia de pancreatitis aguda es sensiblemente síndrome hemolítico urémico, enfermedad de Kawasaki,
mayor en los pacientes con hiperlipoproteinemia tipo V paperas, síndrome de Reye, diversas enfermedades
que en la población general, hecho constatado también virales y algunos medicamentos
para los tipos I y IV, aunque en menor grado. La hiper-
calcemia, sobre todo la debida a hiperparatiroidismo, Manipulación quirúrgica o instrumental
se reconoce también como causa de esta enfermedad. Entre las causas menos frecuentes se destacan las
llamadas pancreatitis secundarias, debidas a la mani-
3Infecciosos pulación quirúrgica o instrumental (pancreatografía y
El páncreas se puede ver afectado por diversos esfinterotomía endoscópicas) del área peripancreática
agentes infecciosos. Suelen tratarse de pancreatitis o la vía biliar, que guardan una íntima relación pato-
200 Parte XV. Páncreas

génica con las causadas por traumatismos o heridas La pancreatitis aguda leve está definida por la au-
abdominales penetrantes. sencia de fallo orgánico y necrosis pancreática. Por 48
h después de la admisión, estos pacientes típicamente
Tumores pancreáticos y divertículos han mejorado sustancialmente y se comienza a reali-
mentar. Se han identificado dos fases bien definidas de
La obstrucción del conducto pancreático, por
pancreatitis aguda severa: temprana (dentro de primera
ejemplo, secundaria a adenocarcinoma pancreático,
semana), caracterizada por el síndrome de respuesta
divertículo duodenal, infección por helmintos, es una
inflamatoria sistémico (síndrome de respuesta infla-
causa poco habitual de pancreatitis aguda, pero que
matoria sistémico) y fallo orgánico y la tardía (más de
debe ser reconocida para un adecuado tratamiento
una semana), caracterizada por complicaciones locales.
clínico del paciente.
Es decisivo reconocer la importancia capital del fallo
orgánico en la determinación de la severidad de la en-
Otras causas de pancreatitis
fermedad. Las complicaciones locales están definidas
Un conjunto de alteraciones yuxtapancreáticas como colecciones fluidas peripancreáticas, necrosis
(divertículos periampulares, pólipos, obstrucción del pancreática y peripancreática (estériles o infectadas),
asa aferente, entre otras) se han señalado como con- seudoquistes y necrosis tabicada (estéril o infectada).
diciones asociadas a pancreatitis aguda, para las que
se invocan mecanismos similares a los indicados en la Tabla 192.1. Clasificación de Atlanta revisada 2013
pancreatitis biliar. Clasificación de Atlanta Revisión de Atlanta (2013)
(1993)
Pancreatitis aguda idiopática Pancreatitis aguda ligera: Pancreatitis aguda ligera:
Es definida como una pancreatitis sin etiología esta- – Ausencia de fallo – Ausencia de fallo orgánico
orgánico – Ausencia de complicaciones
blecida después que las pruebas iniciales de laboratorio – Ausencia de locales
(incluyendo niveles de calcio y lípidos) y los exámenes complicaciones locales
de imágenes (ultrasonido abdominal y tomografía axial Pancreatitis aguda severa: Pancreatitis aguda
computarizada) muestran signos de inflamación pan- – Complicaciones locales. moderadamente:
creática. En algunos pacientes puede ser encontrada una – Fallo orgánico: – Complicaciones locales
etiología eventualmente, pero en otros ninguna causa • Hemorragia digestiva – Fallo orgánico transitorio
(más de 500 mL en (menos que 48 h)
definitiva queda establecida. Los pacientes con pancrea- 24 h)
titis aguda idiopática deben ser evaluados en centros • Choque (presión
de tercer nivel enfocando la atención en la enferme- sistólica menor que
dad pancreática, mediante servicios de endoscopia de 90 mm Hg)
• PaO2 menor que 60 %
avanzada y una atención multidisciplinaria combinada.
• Creatinina mayor que
Los pacientes con pancreatitis aguda idiopática y una 2 mg/dL
historia familiar de enfermedades pancreáticas deben Pancreatitis aguda severa:
ser referidos para asesoramiento genético formal. – Fallo orgánico persistente
(mayor que 48 h)
Clasificación
La necrosis extrapancreática aislada está también
Han ocurrido importantes cambios en la definición incluida bajo el término de pancreatitis necrotizan-
y la clasificación de la pancreatitis aguda desde la cla- te, aunque estos resultados unidos al fallo orgánico
sificación de Atlanta, 1993. Durante las últimas décadas persistente, la necrosis infestada y mortalidad de esta
se han reconocido varias limitaciones en cada una de enfermedad es vista más a menudo en la necrosis
las clasificaciones propuestas, pero sirven como guía a pancreática parenquimatosa cuando es comparado con
un grupo de trabajo, los que hicieron una revisión con la pancreatitis intersticial. Actualmente se describe un
el objetivo de crear el consenso de 2013 (Tabla 192.1). tercer grado intermedio de severidad, la pancreatitis
La mayoría de episodios de pancreatitis aguda son aguda moderadamente severa, esto está caracterizado
leves y autolimitados, necesita solo hospitalización por complicaciones locales en ausencia de fallo orgá-
breve. nico persistente. Los pacientes con pancreatitis aguda
La pancreatitis se clasifica en leve, moderada y seve- moderadamente severa pueden tener fallo orgánico
ra según la revisión en 2013 de los criterios de Atlanta. transitorio, durando menos de 48 h. La pancreatitis
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 201

aguda también puede exacerbar una enfermedad comór- Eventos en la célula acinar
bida, pero está asociado con una baja mortalidad. La
Las células acinares pancreáticas forman aproxi-
pancreatitis aguda severa actualmente está definida ab-
madamente 95 % de la masa exocrina. En respuesta
solutamente en presencia de fallo orgánico persistente.
a injuria inicial, la célula acinar desencadena tres res-
puestas patológicas claves:
Fisiopatología – Activación del cimógeno intracelular.
La patogénesis de la pancreatitis aguda implica – Inhibición de la secreción pancreática.
discretos acontecimientos intracelulares que prematu- – Generación y liberación de mediadores proinflama-
ramente activan los gránulos de zimógeno intraacinar torios y proapoptotico (Fig. 192.1).
y generan la liberación de mediadores proinflamatorios
Activación del cimógeno y la inhibición
(interleuquinas) y proapoptóticos.
La comprensión de la historia natural y los papeles de la secreción
específicos de estas interleuquinas pueden ayudar a La mayor parte de las enzimas digestivas pan-
desarrollar terapias que pueden alterar la evolución de creáticas, incluyendo las proteasas, son sintetizadas y
la pancreatitis severa y pueden disminuir sus compli- almacenadas como proenzimas o cimógenos inactivos.
caciones. En los primeros minutos o horas de desarrollada la pan-
El síndrome de pancreatitis aguda representa una creatitis aguda, los cimógenos comienzan a activarse
serie de acontecimientos patológicos. La patología dentro de la célula acinar pancreática. Posteriormente,
inicial implica la célula acinar o el flujo sanguíneo los cimógenos que se han escapado en el intersticio
reducido. Así una vez iniciado el proceso puede invo- también pueden ser activados.
lucrar el órgano en su totalidad, tejidos circundantes y Los mecanismos celulares responsables de la acti-
originar una reacción sistémica que afecta al resto de vación de los cimógenos contenidos en la célula acinar
los órganos. Debido a que el material patológico está no se han definido totalmente, sin embargo, existen
raras veces disponible en la pancreatitis aguda precoz, modelos experimentales donde se han podido identificar
mucha de la información es obtenida de estudios en varios de estos mecanismos. Uno de los mecanismos
animales experimentales. propuestos viene dado por el incremento del calcio

Fig. 192.1 Eventos en la célula acinar (generación y liberación de interleuquinas (citoquinas, quimoquinas y neuroquinas)
implicadas en la disfunción orgánica en la pancreatitis aguda.
202 Parte XV. Páncreas

citoplasmático, el que actúa como cofactor o mediador La célula acinar tiene varios mecanismos de segu-
de muchas de las reacciones fisiológicas en el interior de ridad para evitar los efectos dañinos de las enzimas
la célula acinar, para regular los estímulos neurohumo- intracelulares activas. Dentro del gránulo de cimógeno
rales. En tal sentido, se plantea que los niveles altos de está el inhibidor secretorio pancreático de tripsina. Se
calcio citoplasmático constituye un componente clave estima que la cantidad de inhibidor es suficiente para
de la respuesta inflamatoria de la célula acinar frente bloquear el 15 % de la actividad de la tripsina dentro
a un insulto. Estas se han asociado a la activación de de la célula acinar. Así, los niveles considerables de
cimógenos, pero la base de esta asociación es descono- activación pueden saturar el inhibidor de tripsina. El
cida. Una explicación posible es que el calcio excesivo valor bajo del pH del gránulo de cimógeno y la con-
origina fusión entre las diferentes clases de orgánelos y densación del contenido de proteínas también pueden
de esta manera genera nuevos orgánelos que soportan limitar la actividad de la enzima. Cuando estos meca-
las condiciones para la activación del cimógeno. nismos protectores son saturados las enzimas activas
En estado normal, los cimógenos son activados de se liberan de los orgánelos unidos a la membrana, de-
manera secuencial en la luz del intestino delgado. Las gradan las proteínas celulares y causan la muerte de la
enzimas localizadas en el borde en cepillo, como la célula. Este proceso se ha llamado “autodigestión,” que
enteroquinasa, convierte el tripsinógeno en tripsina, y también involucra la liberación de muchas sustancias
luego esta activa al resto de los cimógenos. Como el perjudiciales.
páncreas no contiene enteroquinasa, otro mecanismo Aunque la sangre tiene numerosos inhibidores de
debe ser responsable para la activación de los cimó- proteasas efectivos, algunas enzimas activas pueden
genos en su interior. En tal sentido, se proponen la alcanzar y dañar otros tejidos. La liberación de tripsina
activación del tripsinógeno por la acción de las enzimas en el intersticio puede tener una función única en causar
lisosomales como la catepsina B o la autoactivación el dolor severo asociado con la pancreatitis aguda. La
del tripsinógeno. tripsina puede estimular los receptores de las proteasas
Diversos mecanismos se han propuesto para ex- activadas en los nervios que llevan la sensación del
plicar la activación del tripsinógeno por la catepsina dolor. Debido a que la activación del cimógeno parece
B al mezclarse con esta. Primero, aunque las enzimas ser una característica precoz de la enfermedad, el uso
lisosomales son usualmente separadas de los zimó- terapéutico de inhibidores de proteasa puede ser limi-
genos digestivos en el complejo de Golgi, cuando tado a la profilaxis (por ejemplo, pancreatitis inducida
el páncreas secreta su contenido exocrino a través por colangiopancreatografía retrógrada endoscópica).
del compartimiento secretor, este siempre lleva en sí La importancia de la activación del cimógeno en la
algunas enzimas lisosomales. En segundo lugar, los patogenia de la pancreatitis está acentuada por la obser-
orgánelos contienen las dos familias de enzima que vación que algunas formas de pancreatitis hereditaria,
pueden fundirse dentro de estos. la que se origina al existir diversas mutaciones del trip-
Sin embargo, este mecanismo de activación del sinógeno catiónico que puede prolongar su activación
tripsinógeno por las enzimas lisosomales por sí solo o su actividad.
no explica el inicio del daño de la célula acinar, sino
también se plantea la existencia de una disminuida Generación de citoquinas y quimoquinas
secreción de proteínas por las células acinares, desde Dos características claves de la pancreatitis aguda
comienzos de la pancreatitis, lo que tiene una fun- son la inflamación y la muerte celular. La activación
ción crítico en la enfermedad. La secreción reducida y la incorporación neutrofílica son características
de proteínas puede ser resultado de la alteración del tempranas de la enfermedad y se correlacionan con
citoesqueleto actino apical, lo que se explica porque la severidad de enfermedad. Los factores solubles,
cuando las condiciones que originan la activación del como el factor de necrosis tumoral alfa y el factor de
cimógeno pero se mantiene la secreción intacta de activación plaquetaria, son generados por las células
proteínas estas no originan lesión de la célula acinar acinares y estimulan la inflamación. La expresión
o pancreatitis, lo que explica el efecto protector de la endotelial de adhesión intracelular molecular-1 y las
secreción proteica para mantener la integridad celular. selectinas promueven la adhesión celular inflamato-
Así, la activación de las enzimas y retención de estas ria. Las neuroquinas, unidas a la sustancia P también
en la célula acinar con disminución de la secreción tienen una función clave en la enfermedad. Aun en la
proteica pueden ser mecanismos necesarios para iniciar enfermedad aguda, las células mononucleares pueden
la enfermedad. contribuir a la lesión. Las interleuquinas generadas
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 203

por la célula acinar (por ejemplo, factor de necrosis estructuras glandulares conocidas como “complejos
tumoral alfa) pueden inducir y acelerar la muerte celular tubulares.” Tal respuesta puede proveer un escalón para
programada (apoptosis). La liberación de estos factores la regeneración rápida. De modo semejante, los niveles
solubles del páncreas también puede ser responsable altos de proteína asociada a pancreatitis y la proteína
de la lesión pulmonar asociada con la pancreatitis litiásica pancreática generada durante los días iniciales
severa. Las múltiples citoquinas liberadas durante el de la pancreatitis aguda pueden tener una función en la
proceso inflamatorio originan patrones bien definidos reconstitución. Generalmente la estructura endocrina y
de lesión, lo que hace improbable que la inhibición de exocrina y la función se recuperan completamente des-
una sola pueda conllevar un tratamiento efectivo de la pués de un episodio de pancreatitis aguda. Sin embargo,
enfermedad (Fig. 192.1). con la enfermedad severa puede ser detectada alguna
deficiencia en la función durante un año.
Eventos pancreáticos y peripacreáticos
Eventos sistémicos
Edema
Dos procesos principales conducen a la muerte en
La permeabilidad capilar aumentada y la presión la pancreatitis aguda: las muertes tempranas se deben
oncótica del tejido potencialmente aumentada conducen al fallo multiórgano y las muertes tardías por el fallo
temprano al edema pancreático. Tales cambios pueden orgánico o las necrosis infectadas.
contribuir a disminuir el flujo de sangre pancreático por El síndrome de respuesta inflamatoria sistémica está
la compresión de estructuras vasculares y el volumen asociado con la pancreatitis severa. Los pulmones son
intravascular decreciente. en particular sensibles a esta lesión y el desarrollo de
Cambios vasculares y generación síndrome de distress respiratorio del adulto a menudo
de radicales libres indica enfermedad severa. El síndrome de respuesta
inflamatoria sistémico y el fallo orgánico pueden
La lesión endotelial, el vasoespasmo y la trombosis estar presentes en la admisión, pero es a menudo re-
vascular pueden ocurrir en la pancreatitis aguda. Los versible. Aunque la presencia de algún fallo orgánico
cambios en la perfusión pancreática pueden tener dos o síndrome de respuesta inflamatoria sistémica en la
consecuencias fatales. El vasoespasmo a medida que se admisión tiene un peor pronóstico, la mortalidad más
incrementa en la circulación conduce a la perfusión-le- alta es observada entre los pacientes con deterioro de la
sión reperfusión y a la generación de radicales libres. función orgánica o síndrome de respuesta inflamatoria
La isquemia y la pérdida de la perfusión conducen a la sistémica persistente. Estos efectos sistémicos se deben
muerte celular. Aunque hay una base experimental y a la liberación de citoquinas inflamatorias, quimoquinas
teórica fuerte para implicar a los radicales libres en la y neuroquinas.
pancreatitis aguda, esto es un soporte clínico pequeño
para el uso de terapia antioxidante.
Diagnóstico clínico
Cambios en la permeabilidad de la célula
Los pacientes con pancreatitis aguda presentan
y paracelular
típicamente dolor epigástrico o del cuadrante superior
La pérdida de las estructuras celular que forma sellos izquierdo. El dolor es usualmente descrito como cons-
apretados, conocido como uniones cerradas”, puede tante con radiación para la espalda, el pecho o flancos,
ocurrir en las células acinar y del conducto. Este acon- pero esta descripción es poco específica. La intensidad
tecimiento temprano (primeros 30 min) está asociado del dolor es usualmente severa, pero puede ser variable.
con la ruptura del citoesqueleto de actina, un ancla para La intensidad y posición del dolor no se correlacionan
las “uniones cerradas”. Estas disrupciones permiten el con la severidad. El dolor descrito como sordo, cólico
paso del contenido de los conductos pancreáticos al o localizado en la región abdominal inferior no es con-
filtrarse hacia el espacio intersticial. Estos cambios con- sistente de pancreatitis aguda y sugiere una etiología
tribuyen a un rápido incremento de los niveles séricos alternativa. El estudio de imagen abdominal puede ser
de las enzimas pancreáticas y a la disminución rápida de ayuda para determinar el diagnóstico en pacientes
de la secreción pancreática observada a comienzos con presentaciones atípicas. El dolor se acompaña
de la enfermedad. Además, los cimógenos que entran de vómitos mucosos o biliosos, náuseas, sudoración
en el espacio intersticial pueden experimentar activa- profusa e incluso estados de choque hipovolémico en
ción. Estos acinis salen llenos con células aplanadas, casos muy severos.
204 Parte XV. Páncreas

Exámenes complementarios • Úlcera péptica complicada (perforada o


penetrada).
Amilasa sérica – Ginecológicas:
Por limitaciones en la sensibilidad, la especificidad • Embarazo ectópico roto.
y el valor predictivo positivo y negativo, la amilasa • Quiste de ovario.
sérica sola no puede ser usada como fuente fidedigna • Salpingitis.
para el diagnóstico de pancreatitis aguda, por lo que se – Respiratorias: neumonía.
prefiere la lipasa sérica. – Renal: fallo renal.
La amilasa sérica en pacientes con pancreatitis – Otras:
aguda se eleva pocas horas después del comienzo de • Macroamilasemia.
los síntomas y regresa a valores normales dentro de • Pancreatitis idiopática.
tres a cinco días, sin embargo, puede quedar dentro del
rango normal en sus inicios en una quinta parte de los Lipasa sérica
pacientes. Comparada con la lipasa, la amilasa regresa Parece ser más específica y permanece elevada
más rápidamente a los valores por debajo del límite más tiempo que la amilasa después de la presentación
superior de la normalidad. Las concentraciones de la de la enfermedad. A pesar de las recomendaciones de
amilasa sérica pueden ser normales en la hipertriglice- investigaciones previas y guías para el tratamiento de
ridemia y en la pancreatitis aguda inducida por alcohol. la pancreatitis aguda que enfatiza la ventaja de la lipasa
Las concentraciones de amilasa pueden ser altas sin sérica, existen problemas similares con el valor predic-
pancreatitis aguda en la macroamilasemia (un síndrome tivo en ciertas poblaciones de pacientes, que incluyen
caracterizado por la formación de complejos molecu- la existencia de macrolipasemia. La lipasa también se
lares grandes de amilasa e inmunoglobulinas anorma- encuentra elevada en una variedad de enfermedades
les), en pacientes con la tasa de filtración glomerular no pancreáticas como la enfermedad renal, apendicitis,
disminuida, en enfermedades de las glándulas salivales, colecistitis, entre otras. Además, un límite superior de
y en las enfermedades abdominales extrapancreáticas normalidad mayor de tres a cinco veces pueden ser
asociadas con inflamación, que incluyen la apendicitis necesarias en diabéticos que parecen tener una media
aguda, colecistitis, obstrucción intestinal o isquemia, central de lipasa más alta comparados con pacientes
la úlcera péptica y enfermedades ginecológicas. Las no diabéticos por razones desconocidas. Las causas de
causas de elevación de amilasa sérica de origen no elevación de lipasa sérica de causa no pancreática son:
pancreática son: – Enfermedades abdominales extrapancreáticas:
– Cardiovascular: aneurisma aórtico abdominal. • Colecistitis aguda.
– Trastornos nutricionales. • Cetoacidosis diabética.
• Anorexia nerviosa. • Hepatitis.
• Bulimia. • Infarto intestinal.
– Traumatismos: • Obstrucción biliar extrahepática
• Quemaduras. • Obstrucción intestinal.
• Trauma cerebral. • Parotiditis.
– Medicamentos: • Perforación intestinal.
• Ácido valproico. • Síndrome poscolecistectomía.
• Azatioprina. • Úlcera péptica (complicada perforada o
• Furosemida. penetrada).
• Sulfonamidas. – Renal: fallo agudo renal.
• Tetraciclinas. – Traumatismo:
– Enfermedades abdominales extrapancreáticas: • Fractura ósea.
• Apendicitis aguda. • Embolismo graso.
• Cetoacidosis. • Síndrome de aplastamiento.
• Colecistitis litiásica y no litiásica. – Trastornos nutricionales: hiperlipoproteinemia tipo
• Enfermedad de glándulas salivares. I y IV.
• Hepatitis.
• Infarto mesentérico. Aunque la mayoría de los estudios muestran una
• Peritonitis. eficacia diagnóstica con valores por encima de 3 a 5
• Perforación intestinal. veces el límite superior de la normalidad, los médicos
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 205

deben considerar la condición clínica del paciente al Cuando existe duda para el diagnóstico de pancreati-
evaluar las elevaciones de amilasa y lipasa. tis aguda, el estudio por imagen abdominal, es recomen-
dado, preferentemente tomografía axial computarizada.
Triglicéridos séricos El estudio por imagen abdominal es útil para con-
Deben ser determinados cuando la etiología de pan- firmar el diagnóstico de pancreatitis aguda.
creatitis es incierta y se sospecha un suero lipémico.
La hidrólisis de triglicéridos por la lipasa pancreática y
Tomografía axial computarizada simple
la formación de ácidos grasos libres inducen cambios Es más sensible y específica que el ultrasonido abdo-
inflamatorios que son señalados como premisa para la minal para el diagnóstico de pancreatitis aguda y necro-
fisiopatología de esta forma de pancreatitis. Aunque sis pancreática. No todos los pacientes con pancreatitis
nunca se ha demostrado, los niveles de triglicéridos aguda, precisan tomografía axial computarizada, ya que
circulante por encima de 1000 mg/dL (11,3 mm/L) se la indicación se hace en función de la gravedad.
cree desencadena una pancreatitis.
Tomografía axial computarizada
Proteína C reactiva con contraste
Es el mejor marcador disponible de suero para La tomografía computarizada con contraste propor-
evaluar la severidad del cuadro agudo de pancreatitis ciona una sensibilidad y especificidad de 90 % para el
aguda. Mayor que 150 mg/L es aceptado como un diagnóstico de pancreatitis aguda (Fig. 192.2). El uso de
pronosticador de severidad. Sin embargo, los niveles rutina de la tomografía computarizada con contraste en
deben ser monitoreados después de la admisión en el pacientes con pancreatitis aguda es injustificado, cuan-
hospital porque alcanza su valor máximo a las 48 h a do el diagnóstico es aparente en muchos pacientes y la
72 h de comenzado el proceso inflamatorio. mayoría tienen una evolución ligera, no complicado.
Sin embargo, cuando en un paciente no mejora después
Nitrógeno ureico de 48 h a 72 h (por ejemplo, dolor persiste, fiebre,
La urea al ingreso mayor que 60 mmol/L constituye náusea e incapaz para la alimentación oral), estudios
un indicador de mal pronóstico. de imagen como la tomografía computarizada con con-
traste o resonancia magnética son recomendados para
Elastasa polimorfo nuclear evaluar la existencia de complicaciones locales como
la necrosis pancreática o seudoquiste.
Valores elevados en las primeras horas son de mal
pronóstico.

Hemograma
La presencia de una leucocitosis de moderada in-
tensidad hasta encontrarse reacciones leucemoides es
indicativo de inflamación severa.
La hemoglobina y el hematocrito, en los estadios
iníciales de la inflamación son elevados y posteriormen-
te en relación con la reposición de líquidos, se puede
encontrar niveles inferiores.

Química sanguínea
Se determina la presencia de hiperglucemia, hipocal-
cemia (un descenso constituye un marcador e indicador
de mal pronóstico), hiperamilasemia e hiperbilirrubi-
nemia (en los casos graves y en obstrucción vía biliar).
Fig. 192.2. Tomografía axial computarizada con contraste
Prueba urinaria de aclaramiento de amilasa de páncreas contrastado. Las flechas señalan extensa área
Para detectar amilasa pancreática en orina ha de- de necrosis evidenciada por el contraste administrado
mostrado una sensibilidad de 97 %. intravenoso.
206 Parte XV. Páncreas

Resonancia magnética y colangiopancreatografía información pequeña adicional al clínico en la evalua-


por resonancia magnética ción de pacientes.
Aunque las pruebas de laboratorio como el hema-
La tomografía axial computarizada y la resonancia
tocrito y el nitrógeno ureico de sangre pueden ayudar,
magnética son comparables en los inicios de la valora-
ninguna prueba de laboratorio está prácticamente dis-
ción de pancreatitis aguda. La colangiopancreatografía
ponible o es consistentemente preciso para predecir la
por resonancia magnética tiene la ventaja de detectar
severidad en pacientes con pancreatitis aguda. Incluso
coledocolitiasis hasta 3 mm e interrupción del conducto
el reactante de fase aguda proteína C reactiva, el mar-
pancreático mientras proporciona imágenes de alta
cador inflamatorio más estudiado mundialmente, no es
calidad con el propósito de evaluar el diagnóstico y
práctico como se requiere en 72 h.
severidad. La resonancia magnética es de ayuda en pa-
La imagen por tomografía axial computarizada con
cientes con alergia al contraste y con insuficiencia renal
contraste o resonancia magnética también de fuente
donde las imágenes ponderadas a T2 sin contraste de
fidedigna no puede determinar la severidad en etapas
gadolinio pueden diagnosticar la necrosis pancreática.
tempranas de la evolución de la pancreatitis aguda,
como la necrosis, que usualmente no está presente al
Rayos X simple abdomen
inicio y puede desarrollarse después de 24 h a 48 h. Así,
Ofrece datos para diagnóstico de pancreatitis a falta de cualquier prueba disponible para determinar
(presencia de calcificación a nivel de los conductos, severidad, son cruciales para evaluar pérdidas fluidas
presencia de litiasis en vesícula o vías biliares) y por tempranas, el choque hipovolémico y los síntomas
otro lado ayuda en el diagnóstico diferencial con otros sugestivos de disfunción orgánica.
procesos (perforación víscera hueca). En vez de depender de un sistema de evaluación
para predecir severidad de pancreatitis aguda, los clí-
Rayos X de tórax nicos necesitan darse cuenta de los factores de riesgo
Ofreces datos que sugieren complicación o reper- intrínsecos relacionados con el paciente, incluyendo los
cusión de la pancreatitis en otros sistemas como el del laboratorio y factores de riesgo de imagen para el
derrame pleural la atelectasia, entre otros. desarrollo de enfermedad severa. Estos incluyen la edad
del paciente, problemas de salud comórbidas, índice de
Ultrasonido abdominal masa corporal, la presencia de síndrome de respuesta
inflamatoria sistémico, signos de hipovolemia como un
Es la técnica de elección para diagnóstico de litiasis nitrógeno elevado y un hematocrito elevado, presencia
biliar y para detección y seguimiento de los seudo- de derrame pleural e infiltrados, estado mental alterado
quistes pancreáticos que surgen como complicación y otros factores:
del proceso necroinflamatorio del páncreas. Permite – Características del paciente:
visualizar el páncreas en 60 % a 70 % correctamente. • Edad: mayor que 55 años.
No existe relación entre los hallazgos ecográficos y la • Obesidad: índice de masa corporal mayor que
gravedad clínica 30 kg/m2.
• Alteración del estado mental (encefalopatía).
Predicción de pancreatitis aguda severa • Enfermedades comórbidas.
• Tabaquismo.
Hasta la actualidad se ha hecho difícil para los
– Síndrome de respuesta inflamatoria sistémica: pre-
clínicos predecir por la clínica cuáles pacientes con
sencia de más de dos de estos criterios:
pancreatitis aguda pueden evolucionar a enfermedad
• Frecuencia pulso radial: mayor que 90 pulsacio-
severa. En este sentido, los sistemas de puntuación de
nes/min.
severidad son difíciles, típicamente requieren de 48 h
• Frecuencia respiratoria: mayor que 20/min o
para su precisión, y cuando el puntaje demuestra enfer-
PaCO2 mayor que 32 mm Hg.
medad severa, la condición del paciente es diferente a
• Temperatura corporal: mayor que 38 oC o menor
pesar del puntaje. Los sistemas nuevos de evaluación,
que 36 oC.
como el BISAP, no han demostrado ser más precisos
• Leucograma: mayor que 12 000 células/mm3 o
que los otros sistemas de predicción. En general, los
menor que 4 000 células/mm3 o mayor que 10 %
sistemas de evaluación de pancreatitis aguda específicos
de neutrófilos inmaduros.
tienen un valor limitado, como es el de suministrar una
– Laboratorio clínico:
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 207

• Balance nitrogenado: mayor que 20 mg/dL o – Glasgow modificado: mayor o igual que 3 en las
elevación. primeras 48 h.
• Hematocrito: mayor que 44 % o elevación. – Imrie: mayor o igual que 3 en las primeras 48 h.
• Creatinina elevada. – Ranson: mayor o igual que 3 en las primeras 48 h.
– Hallazgos radiológicos: – Urea en admisión: mayor que 60 mmol/L.
• Derrame pleural. – Proteína C reactiva: mayor que 150 U/L en las pri-
• Infiltración pulmonar. meras 72 h.
• Colecciones extrapancreáticas extensa o múltiple.
Criterios pronósticos de Ranson
La presencia de fallo orgánico o necrosis pancreática Son los más utilizado a nivel internacional para la
define la pancreatitis aguda severa. enfermedad biliar y la no biliar durante las 48 h de ad-
Durante la fase precoz de la enfermedad (dentro de misión del paciente con sospecha de pancreatitis aguda
la primera semana), la muerte ocurre como resultado (Tablas 192.1 y 192.2).
del desarrollo, persistencia y naturaleza progresiva de
la disfunción o fallo orgánico. Tabla 192.1. Criterios de Ranson para la pancrea-
El desarrollo del fallo orgánico parece estar relacio- titis biliar
nado con el desarrollo y la persistencia del síndrome
de respuesta inflamatoria sistémica. El revertir el fallo Biliar al ingreso Biliar a las 48 h
orgánico precoz ha mostrado ser importante impi- Edad mayor que 70 años Descenso hematocrito
diendo la morbilidad y mortalidad en pacientes con mayor que 10%
pancreatitis aguda. Aunque la presencia de síndrome Leucocitosis menor que Aumento balance
de respuesta inflamatoria sistémica durante las 24 h 18 000/mm3 nitrogenado mayor que
iniciales tiene una alta sensibilidad para predecir fallo 5 mg/dL
orgánico y mortalidad, la presencia de este no tiene Glucemia mayor que Calcio mayor que 8 mg/dL
especificidad para enfermedad severa (41 %). La falta 220 mg/dl
de especificidad se debe al hecho que su presencia no Lipoproteínas de alta PO2 mayor que 60
es tan importante como su persistencia. Por esta razón, densidad mayor que
los pacientes con síndrome de respuesta inflamatoria 400 U/L
sistémica persistente, en particular esos que tienen Tolerancia oral a la glucosa Exceso bases mayor que
taquifigmia o taquicardia, deben ser ingresados en una mayor que –5 mEq/L
unidad de cuidados intensivos o unidad similar para 250 U/L
hidratación intravenosa agresiva y monitoreo estricto. Secuestro líquidos mayor que
5 mL
Predictores de gravedad
Tabla 192.2. Criterios de Ranson para la pancreatitis
Ante el fallo orgánico persistente en las primeras no biliar
24 h está indicado utilizar predictores clínicos de se-
veridad. No biliar al ingreso No biliar a las 48 h
En la práctica de urgencias los criterios de Ranson y Edad mayor que 55 años Descenso hematocrito
Apache II, con los criterios radiológicos de Balthazar, mayor que 10 %
son los más útiles como predictores de gravedad, en Leucocitosis menor que Aumento balance
relación a establecer la severidad de las pancreatitis. Se 16 000/mm3 nitrogenado mayor que
mencionan los marcadores más utilizados en la práctica 5 mg/dL
clínica y los hallazgos asociados con una evolución se-
Glucemia mayor que Calcio menor que
vera mediante evaluación inicial de riesgo del paciente
200 mg/dL 8 mg/dL
en la pancreatitis aguda:
Lipoproteínas de alta PO2 menor que 60
– APACHE II: mayor o igual que 8 en las primeras 24 h.
densidad mayor que
– BISAP (B: niveles de nitrógeno ureico, I: injuria
350 U/L
pulmonar, S: síndrome de respuesta sistémica, A:
Alteración del estado mental o encefalopatía, P: Tolerancia oral a la glucosa Exceso bases mayor que
mayor que 250 U/L – 4 mEq/L
niveles sanguíneos de plaquetas (la presencia de
Secuestro de líquidos mayor
cada uno de ellos se valora 1 punto y su ausencia
que 6 mL
es 0: mayor o igual que 3 en las primeras 24 h.
208 Parte XV. Páncreas

Teniendo en cuenta estos criterios se estima un pro- pacientes con necrosis estériles y necrosis infectadas
nóstico según el número de criterios presentes a las 48 h: pueden desarrollar fallo orgánico.
– Desde cero hasta igual a dos criterios: mortalidad Las necrosis extrapancreáticas aisladas están
menor que 1 %. también incluidas bajo el término de pancreatitis
– Tras a cuatro criterios: mortalidad de 15 %. necrotizante. Esta enfermedad, inicialmente poco es-
– Cinco a seis criterios: mortalidad de 40 %. pecífica, se ha vuelto mejor caracterizada y se asocia
– Más de siete criterios: mortalidad de 100 %. con resultados adversos como el fallo orgánico y el
fallo orgánico persistente, pero estos resultados son
Criterios de Balthazar menos frecuentes. La necrosis extrapancreáticas es
Ofrece una información pronostica y mejor método más a menudo vista durante la cirugía que identifica-
para detectar necrosis pancreática una vez que se utiliza da en estudios de imagen. Aunque la mayoría de los
la tomografía axial computarizada contrastada (Tabla radiólogos fácilmente pueden identificar la necrosis
192.3). pancreática parenquimatosa, a falta de la intervención
Las necrosis pancreáticas son definidas como áreas quirúrgica, las necrosis pancreáticas son a menudo
difusas o focales de parénquima pancreático poco viable menos observadas.
mayores que 3 cm en el tamaño o mayor que 30 % del
páncreas. Las necrosis pancreáticas pueden ser estériles Marcadores serológicos de severidad
o infectadas. A falta de necrosis pancreáticas, en la en- Dos parámetros definen la necrosis:
fermedad leve el páncreas edematoso es definido como – Proteína C reactiva mayor que 120 mg/L a las
pancreatitis intersticial. Aunque hay algo de correlación 48 h.
entre la infección, necrosis pancreáticas, la duración – Elastasa polimorfo nuclear (valores elevados en
de la estadía hospitalaria, y el fallo orgánico, ambos las primeras horas).

Tabla 192.3. Marcadores de índice de severidad de la tomografía axial computarizada para pancreatitis

Grado Hallazgos de la tomografía axial computarizada Puntuación

A Páncreas normal 0
Aumento difuso o focal del páncreas, contornos irregulares, atenuación heterogénea,
B 1
no hay inflamación peripancreática
C Grado B más inflamación peripancreática 2

D Grado C más colección liquida única 3


E Grado C más múltiples colecciones líquidas o gas 4
Necrosis presente en la tomografía axial computarizada (%) Puntuación
0 0
Menor que 33 2
33 a 50 4
Mayor que 50 6
Índice de severidad = puntuación de grados + % de necrosis
Índice de
Morbilidad Mortalidad
severidad
0a3 8% 3%

4a6 35 % 6%

7 a 10 92 % 17 %
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 209

Complicaciones sistémicas: – Acidosis metabólica: suela aparecer en los casos


– Fiebre, más de 38,5 ºC, con leucocitosis mayor muy graves con fallo general multisistémico.
que 20 000/mm3. – Otras complicaciones: la hemorragia digestiva, la
– Creatinina mayor que 1,4 durante hospitalización. encefalopatía pancreática, la tetania o graves tras-
– Hipotensión, tensión arterial sistólica menor que tornos de la coagulación, son menos frecuentes.
80 mm de Hg más de 15 min.
– PO2 menor que de 60 mm Hg (precisando oxi- Locales
genoterapia más de 24 h). La infección de la necrosis pancreática y de las
Fallo orgánico estructuras vecinas constituye la complicación con
mayor mortalidad de la pancreatitis aguda, tanto por
Se ha definido como presencia de signos de cho- su gravedad intrínseca como por la elevada incidencia
que (tensión arterial sistólica menor que 90 mm Hg), de sepsis que conlleva. Es detectable en alrededor de
insuficiencia pulmonar (PaO2 menor que 60 mm Hg), 20 % de los casos en la primera semana de evolución
fallo renal (creatinina mayor que 2 mg/dL, después de y supera 50 % en la segunda. Se desencadena por gér-
rehidratación) y hemorragia gastrointestinal (mayor que menes emigrados (translocación bacteriana) desde el
500 mL de pérdida de sangre en 24 h). tubo digestivo y debe sospecharse ante la persistencia
de leucocitosis, fiebre o dolor abdominal o cuando se
Complicaciones asiste al deterioro progresivo del estado general. La
tomografía axial computarizada es incapaz de dis-
Se clasifican en sistémicas y locales. tinguirla de la necrosis no infectada y su diagnóstico
debe asegurarse mediante el estudio bacteriológico del
Sistémicas material obtenido por punción aspirativa guiada por
Son de aparición temprana y expresan la implicación tomografía o ultrasonidos.
multisistémica de las formas graves de la enfermedad: El absceso pancreático es una colección de pus cer-
– Choque hipovolémico: es generalmente debido a cana al páncreas cuyo contenido en tejido necrótico es
la hipovolemia causada por los vómitos y, sobre muy escaso o nulo. Suele aparecer más tardíamente en
todo, al secuestro de líquidos en el tercer espacio la evolución de la enfermedad, generalmente pasadas
(retroperitoneo por la inflamación pancreática y luz las dos primeras semanas, con una incidencia que oscila
intestinal debido a su hipomotilidad). En su génesis entre 1 % a 4 %. Se identifica bien por ultrasonidos y,
contribuyen también las sustancias vasoactivas deri- sobre todo, por la tomografía, técnicas que contribuyen,
vadas de la necrosis pancreática y la activación del además, a completar el estudio bacteriológico dirigien-
sistema cinina-calicreína. Cuando aparece pasada do la punción aspirativa con aguja fina.
la fase inicial de la enfermedad suele ser de origen El seudoquiste pancreático está constituido por una
séptico o multifactorial. colección líquida estéril, rica en enzimas, restos de teji-
– Insuficiencia respiratoria: es probablemente la do necrótico y sangre, delimitada por una red de tejido
complicación más frecuente y una de las más graves de granulación y fibrótico bien definida. Aparece gene-
de la pancreatitis. Su patogenia es mal conocida y ralmente a partir de las cuatro semanas de evolución y
en esta se imbrican el desarrollo de cortocircuitos debe distinguirse de las llamadas colecciones líquidas,
izquierda-derecha, la destrucción del surfactante mucho más frecuentes y precoces, que carecen de pared
pulmonar por las enzimas lipolíticas, sobre todo y se resuelven habitualmente de forma espontánea.
la fosfolipasa A2, y la presencia de atelectasias o Tanto la tomografía como el ultrasonido abdominal
derrames pleurales. Su comienzo suele ser insidioso son sensibles y específicos para su diagnóstico, pero
y en su detección precoz está determinada por la estos últimos constituyen el procedimiento de elección
práctica de gasometrías seriadas. para seguir su evolución, debido a sus ventajas en
– Insuficiencia cardiaca: tampoco es bien conocida su costo, versatilidad y ausencia de radiación. La ruptura
patogenia, por lo que se han invocado la presencia y la hemorragia constituyen graves complicaciones
de factores con efecto inotrópico negativo. del seudoquiste, sobre todo la hemorragia que a veces
– Insuficiencia renal: es siempre de origen prerrenal es grave. Afortunadamente son complicaciones poco
y puede prevenirse o tratarse con éxito mediante frecuentes y que pueden prevenirse mediante un segui-
una reposición adecuada de fluidos basada en el miento adecuado. Asimismo, los seudoquistes pueden
control estricto de la función renal y del balance sufrir sobreinfecciones secundarias, situación que no
hidroelectrolítico. debe confundirse con el absceso.
210 Parte XV. Páncreas

Tratamiento hidratación intravenosa agresiva temprana, se basa


en opinión de expertos, experimentos de laboratorio,
Alrededor de 75 % de la pancreatitis aguda son evidencias clínicas indirectas, estudios epidemiológi-
episodios leves que evolucionan favorablemente con cos y ensayos clínicos retrospectivos y prospectivos.
la única ayuda de medidas de soporte general. La justificación razonada para la hidratación agresiva
El tratamiento queda limitado al ayuno con repo- temprana en la pancreatitis aguda proviene de la ob-
sición hidroelectrolítica adecuada y al tratamiento del servación de la hipovolemia frecuente que ocurre por
dolor, con analgésicos como la petidina o el diclofenaco múltiples factores en pacientes con pancreatitis aguda,
sódico, aunque rara vez son necesarios. incluyendo vómitos, reducción de la vía oral, salida
Estas medidas se mantienen hasta que el paciente se de fluidos al tercer espacio, aumento de las pérdidas
encuentre asintomático, momento en el que se inicia la respiratorias y diaforesis.
realimentación de forma progresiva y cuidadosa. Además, se señala que una combinación de efectos
En estos casos no han demostrado ninguna utilidad microangiopáticos y el edema del páncreas inflamado
medidas como la profilaxis antibiótica inespecífica, la disminuyen el flujo sanguíneo, lo que conduce al au-
supresión de la secreción pancreática, la administración mento de la muerte celular, necrosis y liberación de
de inhibidores enzimáticos ni la aspiración gástrica. enzimas pancreáticas, activando numerosas cascadas.
Esta última solo está indicada en caso de vómitos re- La inflamación también aumenta la permeabilidad
iterados o íleo paralítico, con el objetivo fundamental vascular, conduce al incremento de las pérdidas de
de aliviar los síntomas. fluido en el tercer espacio y empeora la hipoperfusión
Además de lo mencionado para los casos leves, en pancreática que conlleva al aumentado de la necrosis
los casos moderados o severos es necesario monitorizar del parénquima pancreático y muerte de la célula. La
las constantes hemodinámicas, los gases en sangre y el hidratación intravenosa agresiva temprana provee un
balance hidroelectrolítico. En estos casos, la depleción mantenimiento de la microcirculación y macrocircu-
de líquidos puede requerir una rápida y cuantiosa repo- lación para impedir complicaciones serias como la
sición, asegurando después el mantenimiento adecuado necrosis pancreática.
de la volemia. Aunque hay datos prospectivos limitado sobre que
Si es preciso, deben corregirse las funciones res- la hidratación intravenosa agresiva puede ser moni-
piratoria y cardiaca con las medidas necesarias para toreada o guiada por marcadores del laboratorio, son
garantizar una oxigenación lo más correcta posible. ampliamente recomendados el uso del hematocrito,
La nutrición por vía parenteral está indicada cuando balance nitrogenado y creatinina como los marcadores
es previsible un largo periodo de ayuno, situación casi para la hidratación exitosa. Aunque ninguna de las re-
habitual en la pancreatitis necrótica. comendaciones ha estimado números absolutos, puede
Tampoco en las formas graves de pancreatitis han ser beneficiosa el punto de disminuir el hematocrito
probado ser eficaces la administración de antiproteasas, (demostrando hemodilución) y el balance nitrogenado
ni el intento de frenar farmacológicamente la secreción (aumentando la perfusión renal) y manteniendo una
pancreática. En este último sentido, solo la somatosta- creatinina normal durante el primer día de hospitali-
tina administrada precozmente parece aportar ligeros zación.
beneficios que no se han encontrado con su análogo el En una prueba prospectiva aleatorizada bien dise-
octreótido. ñada, la hidratación con solución Ringer lactato parece
A diferencia de los estudios previos con otros anti- ser más beneficiosa, resultando en un menor número
bióticos, la administración de carbapenémicos como el de pacientes que desarrollaron síndrome de respuesta
imipenem recientemente ha demostrado que disminuye inflamatoria sistémica en comparación con pacientes
significativamente la incidencia de sepsis en la pancrea- que recibieron solución salina fisiológica (0,9 %). El
titis necrótica y, aunque no parece afectar las tasas de beneficio de utilizando la solución de Ringer lactato se
mortalidad, justifica su uso profiláctico en estos casos. ha mostrado en otras enfermedades para inducir a un
mejor balance electrolítico.
Hidratación agresiva temprana Aunque ambas son soluciones cristaloides isotónicas,
A pesar de docenas de pruebas aleatorizadas, ningu- la solución salina fisiológica dada en volúmenes grandes
na medicación ha sido mostrada para ser efectiva para puede conducir al desarrollo de una acidosis metabólica
el tratamiento de la pancreatitis aguda. Sin embargo, hiperclorémica. Es importante reconocer que la hidra-
una intervención efectiva ha estado bien descrita: la tación agresiva temprana requiere cautela para ciertos
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 211

grupos de pacientes, como las personas de edad, o los antibióticos puede impedir complicaciones infecciosas
que tienen con una historia de enfermedad cardiaca o en pacientes con necrosis estéril, ensayos clínicos
enfermedad renal, para evitar complicaciones como subsiguientes, mejor diseñados, han fracasado consis-
recargo de volumen, edema pulmonar y síndrome com- tentemente en confirmar esa ventaja.
partimental abdominal. La medida de la presión venosa Por la consistencia de la necrosis pancreática, pocos
central por catéter es comúnmente usada para determinar antibióticos penetran cuando son administrados por
el estado del volumen en este contexto. Sin embargo, vía intravenosa. Los grupos de antibióticos mostrados
los datos señalan que el índice de volumen sanguíneo para penetrar y usados en ensayos clínicos incluyen
intratorácico puede tener una mejor correlación con el carbapenémicos (imipenem), quinolonas (lomefloxa-
índice cardiaco que con la presión venosa central. cino), metronidazol y dosis alta de cefalosporinas de
La medida del índice de volumen sanguíneo intrato- tercera generación.
rácico, por consiguiente, puede permitir una valoración La prevención de infecciones micóticas en estos
más precisa del estado del volumen de los pacientes pacientes no es recomendada. Aunque fue sugerido que
que se tratan en la unidad de cuidados intensivos. Los esta infección puede ser una causa común de mortalidad
pacientes no respondedores a la hidratación intravenosa en la pancreatitis aguda, estudios posteriores no han
temprana (dentro de 6 h a 12 h) pueden no beneficiarse confirmado este señalamiento y debe reservarse su uso
de la hidratación agresiva continuada. a los resultados de los cultivos de los distintos fluidos
La nutrición enteral disminuye el crecimiento ex- y colecciones.
cesivo bacteriano en el intestino delgado por un efecto Una de las medidas terapéuticas más importantes es
positivo en la motilidad del intestino, lo que limita el la hidratación parenteral con corrección de electrolitos
crecimiento excesivo bacteriano intraluminal y por para reponer la volemia. La cantidad de volumen a in-
un efecto positivo en la función de la barrera mucosa fundir se evalua en cada caso, si el estado del paciente
intestinal que disminuye la translocación bacteriana. es grave o tiene alguna enfermedad subyacente se
Esta cascada de acontecimientos puede conducir a debe monitorizar la presión venosa central o colocar
una disminución en complicaciones infecciosas (la un catéter de Swan-Ganz en la arteria pulmonar para
sobreinfección por bacterias entéricas introducidas controlar la reposición de volumen. La hidratación se
en la circulación sistémica). Como prevención de realiza con suero salino isotónico y suero glucosado al
pancreatitis severa, se debe iniciar la nutrición enteral 5 % con adición de cloruro potásico.
por sonda nasoyeyunal si no se espera que el paciente Otra medida importante es la analgesia. El dolor
reanude un régimen normal de alimentación dentro de que presentan los pacientes con pancreatitis aguda es
aproximadamente tres días. muy intenso, principalmente durante los primeros días.
La nutrición parenteral total debe ser evitada en Uno de los analgésicos más utilizados es la pentazocina
pacientes con pancreatitis aguda ligera y severa. La en dosis de 30 mg cada 6 h, a pesar de ser un opiáceo,
infusión continua es preferida sobre la administración casi no causa espasmos en el esfínter de Oddi. También
en bolo o cíclica del alimento. deben corregirse las alteraciones metabólicas como la
El cambio de paradigma y la controversia sobre hiperglucemia, que se trata con insulina rápida cada
usar antibióticos en la pancreatitis aguda ha girado al- 6 h, cuando la glucemia basal supere los 200 mg/dL, y
rededor de la necrosis pancreática. Cuando se compara la hipocalcemia, que se corrige con la administración
pacientes con necrosis estéril, los pacientes con necrosis de gluconato cálcico.
pancreática infectada tienen una tasa de mortalidad Otra medida incorporada al tratamiento es la inhibi-
superior (media 30 %, rango 14 % a 69 %). Por esta ción de la secreción gástrica mediante un bloqueante de
razón es importante la prevención de la infección en la los receptores H2, como la ranitidina en dosis de 50 mg
necrosis pancreática. cada 4 h en perfusión continua intravenosa. Si bien no
Aunque se conceptúo previamente que las compli- se ha demostrado su efectividad en la evolución de la
caciones infecciosas ocurren al final de la evolución pancreatitis, es útil en la prevención de la hemorragia
de la enfermedad, una revisión reciente encontró que digestiva que a menudo presentan estos pacientes.
27 % de todos los casos de necrosis infectadas ocurren La utilización de antibióticos con fines profilácticos
dentro de los primeros 14 días, en otro estudio casi la no es eficaz en los pacientes con pancreatitis aguda
mitad de todas las infecciones parece ocurrir dentro de ligera.
los siete días de admisión. Aunque ensayos clínicos no Existen ya suficientes evidencias de su utilidad en
ciegos tempranos sugirieron que la administración de la disminución de la incidencia de infecciones en la
212 Parte XV. Páncreas

pancreatitis necrotizante. El antibiótico de elección árbol biliar en pacientes con pancreatitis aguda debe
es el imipenem, 500 mg cada 8 h por vía intravenosa. reducir el riesgo de desarrollar estas complicaciones.
En la pancreatitis de origen biliar con sospecha La esfinterotomía endoscópica precoz para la des-
de cálculo enclavado, para evitar la sepsis de origen compresión de la vía biliar, a través de la práctica de
biliar, los antibióticos de elección son la asociación una colangiopancreatografía retrógrada endoscópica, es
amoxicilina-ácido clavulánico, en dosis de 2 g cada 8 h muy útil. La esfinterotomía endoscópica está indicada
por vía intravenosa, y la cefoxitin, en dosis de 2 g cada en las pancreatitis de origen biliar con cálculo enclavado
4 h también por vía intravenosa. (ictericia, fiebre y elevación de tolerancia a la glucosa
oral al ingreso) o en las pancreatitis severa en las que
Tratamientos específicos se sospecha un origen biliar.
La inhibición de la secreción pancreática mediante
Tratamiento de las complicaciones sistémicas
glucagón, somatostatina o su análogo, el octreótido,
es el método para conseguir el reposo absoluto de la – Insuficiencia respiratoria: de elevada incidencia en
glándula. la pancreatitis severa, debe controlarse mediante
El glucagón es una medicación ya abandonada, la determinación frecuente de gases sanguíneos y
los estudios realizados no han demostrado un efecto la práctica de la radiografía de tórax. El derrame
beneficioso. pleural se trata con toracentesis evacuadora y la
Aún no se ha definido el efecto de la somatostatina hipoxia con oxigenoterapia. En ocasiones la dificul-
en dosis de 250 mg/h en perfusión continua intrave- tad respiratoria que presentan estos pacientes debe
nosa o del octreótido en dosis de 200 mg cada 8 h por tratarse con ventilación mecánica.
vía subcutánea en la pancreatitis severa, se requieren – Insuficiencia renal: es consecuencia de una mala
más estudios controlados antes de incorporarlos en el perfusión renal, se trata con la reposición de la vo-
tratamiento sistemático. lemia, mediante hidratación parenteral. Si en durante
Otra forma específica de tratamiento es la inhibición la evolución de la pancreatitis el paciente presenta
de las enzimas proteolíticas mediante la aprotinina o una insuficiencia renal aguda, el tratamiento es la
el mesilato de gabexato. Ambos se han utilizado en hemodiálisis.
diferentes dosis y por varias vías, pero no se ha podido – Sepsis: es la complicación más grave de la pancrea-
demostrar su efecto beneficioso en la pancreatitis titis aguda. Después de haber detectado su origen
severa. La administración de plasma fresco para aportar (biliar, pancreático o urinario) se procede a instaurar
el tratamiento antibiótico de elección. Si la sepsis es
antiproteasas, tampoco ha resultado útil en la pancrea-
de origen biliar, los antibióticos de elección son la
titis severa.
amoxicilina-ácido clavulánico en dosis de 2 g cada
Función terapéutica de la colangiopancreatografía 8 h por vía intravenosa y la cefoxitin a dosis de 2 g
cada 4 h por vía intravenosa, además, se realiza una
retrógrada endoscópica en la pancreatitis
esfinterotomía endoscópica para extraer el cálculo.
aguda Si la sepsis es de origen pancreático, el antibiótico se
Está relacionado con el tratamientop de la coledo- establece de acuerdo con el germen encontrado (te-
colitiasis. Aunque esta puede ser usada para identificar niendo en cuenta que el imipenem y el metronidazol
la disrupción pancreática del conducto en pacientes con son los antibióticos que mejor penetran en el tejido
pancreatitis aguda severa, en reuniones de consenso se pancreático) indicándose, además, el tratamiento
ha estimado que la colangiopancreatografía retrógrada quirúrgico.
endoscópica nunca debe ser utilizada rutinariamente
con este propósito. Tratamiento de las complicaciones locales
Afortunadamente, la mayoría de los cálculos en la – Infección del tejido pancreático necrosado: en la
vesícula que causan pancreatitis aguda pasan fácilmente actualidad se considera la mayor causa de morta-
al duodeno y se pierden en las heces. Sin embargo, lidad en la pancreatitis aguda, requiere tratamiento
en una minoría de pacientes la litiasis del colédoco quirúrgico, el objetivo es eliminar el tejido necrótico
persistente puede provocar obstrucción del conducto y drenar las áreas de infección. La técnica más em-
pancreático u obstrucción del árbol biliar, lo que con- pleada actualmente es la necrosectomía. La necrosis
duce a una pancreatitis aguda severa o colangitis. La estéril del tejido pancreático, por sí sola, no tiene
extracción de la litiasis y solución de la obstrucción del indicación quirúrgica.
Capítulo 192. Pancreatitis aguda 213

– Seudoquiste pancreático: requiere, en principio, tra- Bakker, O. J., Van Santvoort, H., Besselink, M. G., et al. (2012). Ex-
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Capítulo193
Pancreatitis crónica
Dr. C. Juan Rafael González Cansino†
Dr. Jordi Alonso Soto

La pancreatitis crónica es un proceso inflamatorio Pero solo un mínimo de bebedores (5 % a 15 %) pa-


progresivo e irreversible del tejido pancreático el que es decen pancreatitis.
destruido y reemplazado por fibrosis, que con el tiempo,
conduce a un marcado deterioro de la función exocrina Etiología
y endocrina de la glándula, clínicamente expresado por
una desnutrición y diabetes mellitus. La susceptibilidad del páncreas al alcohol es extre-
En general, el síntoma principal de la pancreatitis madamente variable entre las personas, de forma que,
crónica es el dolor, el que se presenta como ataques que aunque el riesgo de desarrollar la enfermedad aumenta
imitan a la pancreatitis aguda o como un dolor constante de forma proporcional a la cantidad de alcohol ingerida,
y discapacitante. A pesar de décadas de investigación, no es necesaria la presencia de abuso alcohólico para
el tratamiento de la pancreatitis crónica es todavía padecer una pancreatitis crónica.
empírico en la mayoría de los pacientes, lo que motiva Existen otros factores ambientales o genéticos que
repetidas internaciones y diversos procedimientos. Esta explican su asociación con la génesis de la pancreatitis
falta de progresos en el tratamiento es un signo de la crónica como es la dieta rica en grasas o proteínas, la
incertidumbre acerca de cómo se identifican los factores deficiencias de oligoelementos o de antioxidantes que
causales que llevan a la enfermedad. cada día se reportan más evidencia a lo que se suma el
En Europa y Estados Unidos, la enfermedad es poco hábito de fumar que acompaña en un elevado porcentaje
común, en Francia la prevalencia es de 26 por cada al consumo de alcohol.
100 000 personas. Esta prevalencia no es muy dife- Como otras causas de pancreatitis crónica menos
rente a la media de tres estimaciones de Japón, pero es frecuente se reportan la obstrucción del conducto de
considerablemente inferior a la cifra de 114 a 200 por Wirsung, la hipercalcemia, la pancreatitis crónica he-
cada 100 000 en el sur de la India. reditaria, autoinmune y la idiopáticas.
El uso abusivo del alcohol es a nivel mundial la El 90 % a 95 % de los pacientes adultos con pan-
causa más frecuente de pancreatitis crónica alcanzando creatitis crónica, a excepción de los que padecen de
entre 70 % a 90 %, del que Cuba tiene similar com- fibrosis quística, tienen una enfermedad alcohólica o
portamiento. En las sociedades occidentales la causa idiopática. Las causas infecciosas son raras. La rela-
más común de la pancreatitis crónica es el consumo ción entre la pancreatitis crónica y los fármacos (por
excesivo de alcohol (80 %). ejemplo, el valproato) es principalmente anecdótica.
El riesgo tiene una progresión logarítmica con el Estudios realizados en Italia, China y Japón informan
incremento del consumo de alcohol, pero no se puede de una asociación con los cálculos biliares en 30 % de
hablar de un umbral por debajo del que no se presenta los pacientes.
la enfermedad.
En países con alto consumo de alcohol no es fácil
Clasificación
determinar con certeza si la enfermedad se debe a esto
u otros factores. Se habla de no menos de cinco años La pancreatitis crónica se ha clasificado de manera
con ingesta importante del tóxico que exceda de unos diferente de la pancreatitis aguda, ya que este última
150g/día para que se desarrolle pancreatitis crónica. se caracteriza por la renovación a la normalidad de
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 217

la histología pancreática, después de la recuperación Una forma distinta de la pancreatitis crónica se re-
clínica completa. fiere a la pancreatitis crónica obstructiva caracterizada
Sin embargo, la pancreatitis aguda, la pancreatitis por dilatación del sistema ductal proximal debido a la
aguda recurrente y la pancreatitis crónica, son con- oclusión del conducto principal por tumor o cicatriz con
sideradas como una enfermedad continua. Existen atrofia difusa del parénquima acinar y fibrosis difusa
varias razones para este cambio: la pancreatitis aguda uniforme, sin calcificaciones.
recurrente puede convertirse en pancreatitis crónica, Una tercera forma de pancreatitis crónica, es la
hay una superposición de factores causales, tanto llamada pancreatitis inflamatoria que muestra pérdida
genéticos como ambientales, los protocolos experi- del parénquima y reemplazamiento por fibrosis e infil-
mentales pueden ser modificados para inducir a cada trado difuso de células mononucleares que representan
una de estas condiciones y el ataque de pancreatitis es lesiones de diferente origen y necesitan de nuevas
estereotipado, los pacientes tienen dolor abdominal investigaciones.
severo y un aumento creciente de la amilasa, la lipasa Actualmente se utiliza la clasificación del sistema
y el tripsinógeno en sangre. TIGAR-O, que se correlaciona con los factores etioló-
La clasificación de Marsella revisada en Roma 1984 y gicos asociados al desarrollo de pancreatitis crónica:
1988 definió claramente los términos de pancreatitis agu- – Tóxico-metabólica:
da y pancreatitis crónica desde el punto de vista clínico: • Alcohólica.
– Pancreatitis aguda: se caracteriza por dolor abdo- • Cigarro.
minal, aumento de enzimas pancreáticas en sangre • Hipercalcemia.
y orina, generalmente tiene una evolución benigna, – Hiperlipemia (poco frecuente y controvertido).
los ataques severos pueden provocar choque, insu- – Insuficiencia renal crónica.
ficiencia renal o pulmonar que pueden evolucionar – Medicamentos:
hacia la muerte. La pancreatitis aguda puede ser un • Fenacetinas.
episodio único o puede repetirse (ver “Capítulo 192. • Valpoato.
Pancreatitis aguda”). • Tiazidas.
– Pancreatitis crónica: clínicamente se caracteriza por • Estrógenos.
dolor abdominal recurrente o persistente aunque a • Azatioprina.
veces puede ser indolora, signos de insuficiencia – Idiopática (de inicio precoz o tardío).
como esteatorrea o diabetes pueden estar pre- – Genética (dominante, recesiva):
sentes. Morfológicamente la pancreatitis crónica • Mutación del gen del tripsinógeno catiónico.
está caracterizada por una esclerosis irregular con • Mutación del gen regulador de la conductancia
destrucción y pérdida permanente del parénquima transmembrana en la fibrosis quística.
exocrino que puede ser focal, segmentario o di- • Mutación del gen SPINK1, PRSSI, quimiotrip-
fuso. Estos cambios se asocian con varios grados sina C.
de dilatación de segmentos del sistema ductal. La • Déficit de α-1-antitripsina.
dilatación del ducto principal (Wirsung) o sus ramas – Autoinmune:
pueden ocurrir a la vez o independientemente. La • Pancreatitis crónica autoinmune aislada.
causa de la dilatación no es obvia, pero a menudo • Pancreatitis crónica autoinmune asociada a otras
está asociada a estenosis u obstrucción por grumos enfermedades: Sjögren, enfermedad inflamato-
de proteínas o calcificaciones. Puede haber todo ria intestinal, cirrosis biliar primaria, colangitis
tipo de células inflamatorias en diferentes grados, esclerosante primaria e hiperparatiroidismo.
así como edema o necrosis focal, quistes o seudo- – Recurrente y graves: posnecrótica, vascular, radio-
quistes con o sin infección, comunicantes o no con terapia y pancreatitis aguda recurrente.
los conductos, son frecuentes. Comparados con la – Obstructiva:
destrucción acinar, los islotes de Langerhans están • Disfunción del esfínter de Oddi.
relativamente conservados. Basados en los cuadros • Obstrucción ductal, traumática y congénita.
estructurales predominantes se puede utilizar estos
términos descriptivos: Fisiopatología
• Pancreatitis crónica con necrosis focal.
• Pancreatitis crónica con fibrosis segmentaria o El conocimiento de la patogénesis de la pancreatitis
difusa. crónica ha tenido grandes avances en los últimos años,
• Pancreatitis crónica con o sin calcificaciones. respecto a la descripción de los mecanismos fisiopato-
218 Parte XV. Páncreas

lógicos responsables de la fibrosis (un rasgo constante manera que, por razones inciertas, facilita los depósitos
de la pancreatitis crónica) que sigue a los repetidos de proteína que son los precursores de los cálculos de
ataques del proceso necroinflamatorio (el concepto carbonato de calcio:
necrosis-fibrosis). – Hay un aumento precoz de la secreción de enzimas
Actualmente se acepta que en las células estrelladas y calcio, pero una disminución del inhibidor de la
radica el inicio de la fibrosis, cuando son activadas proteasa serina tipo Kazal 1 (SPINK 1), bicarbonato
directamente por tóxicos como el alcohol o sus me- y citrato.
tabolitos o por el estrés oxidativo. También en años – Las concentraciones de los productos de oxidación
recientes se han realizados investigaciones importantes de los radicales libres aumentan en los fluidos pan-
en anormalidades genéticas que pueden predisponer a la creáticos, lo que sugiere la progresión del estrés
pancreatitis crónica tanto en la de etiología alcohólica electrofílico y en un aparente intento de compensa-
como en la tropical o la llamada pancreatitis idiopática. ción, aumentan las concentraciones de los antioxi-
La historia natural de la pancreatitis crónica es difícil dantes naturales lactoferrina y mucina.
de caracterizar debido a su variabilidad de presentación – Están alteradas las concentraciones de dos proteí-
y la inaccesibilidad relativa del páncreas para el estudio nas de estrés: aumento de la proteína asociada a
histológico. Sin embargo, varios estudios de grandes la pancreatitis [PAP]/regIII, la que se activa por el
series de casos médicos y quirúrgicos han aportados estrés electrofílico, y concentraciones variables de
algunos puntos de vistas importantes. la proteína de piedra pancreática [PSP]/reg, antes
Desde la década de los 50 del siglo xx, los estu- denominada litoastina, la que tiende a formar un
dios experimentales han demostrado que un ataque de enrejado fibroso a la digestión parcial por la tripsina.
pancreatitis comienza como pancreastasis, es decir, el – Hay un aumento de la GP-2, un componente secre-
bloqueo de la exocitosis apical de las células acinares tado por la membrana del gránulo de cimógeno.
pancreáticas. La célula acinar rápidamente libera una – Las concentraciones de enzimas lisosómicas au-
nueva enzima sintetizada por la membrana basolateral mentan en el fluido ductal y aparecen trazas de
en los vasos linfáticos a través del intersticio y pasa tripsina. Por otra parte, la vía del metabolismo de
directamente al torrente sanguíneo. Algunos gránulos la metionina permanece fracturada.
de cimógeno también liberan sus enzimas almacena-
das en la porción basolateral, estos eventos provocan Desde el punto de vista histológico, la definición de
inflamación. Los resultados de estudios clínicos pros- la tríada de enfermedad estable (independientemente de
pectivos coinciden con esta secuencia de pancreasta- las causas principales o la ubicación) incluye la pérdida
sis-pancreatitis. de los acinos, la infiltración de células mononucleares
El trabajo experimental ha identificado una explo- y la fibrosis. Las primeras lesiones se distribuyen en
sión de especies de radicales libre de oxígeno como parches, por lo tanto, el aspecto normal en el material
el disparador de la llamada pancreastasis y como extraído con aguja no es confiable. Se ha identificado
potenciadora de la inflamación, debido a la activación una forma inusual de la denominada pancreatitis del
de la cascada de señalización que convierte a la célula surco (paraduodenal). Cada ataque inflamatorio puede
acinar dañada en una fábrica de quimiocinas y citocinas. causar focos de necrosis grasa que parecen dar lugar
Los radicales libre de oxígeno poseen varias funciones tanto a los seudoquistes como a la fibrosis. Los nervios
fisiológicas como la señal de traducción, pero un exceso muestran rupturas del perineuro adyacente a los focos
de radicales libre de oxígeno en comparación con la inflamatorios, al mismo tiempo que se produce una
capacidad antioxidante (estrés electrofílico) es poten- mayor expresión de sustancias químicas en las termi-
cialmente muy perjudicial. El bloqueo de la exocitosis naciones nerviosas nociceptivas.
parece estar causado por la interrupción de la vía de la La inmunocitoquímica da información valiosa
transulfuración de la metionina que produce residuos sobre el desarrollo de la pancreatitis crónica. Las cé-
metilos y tioles esenciales (principalmente el glutatión). lulas acinares, que al principio de la enfermedad están
Este problema también ocurre en la pancreatitis aguda hiperplásicas, expresan una gran cantidad de monooxi-
o en la pancreatitis aguda cronificada. genasas del citocromo P450, al igual que los islotes de
En los pacientes que desarrollan pancreatitis crónica Langerhans proliferados y los hepatocitos. En su origen,
de los conductos grandes (tipo 1), los estudios en la las enzimas del CYP se encuentran principalmente en
fase de reposo de la enfermedad muestran que la com- el hígado. El citocromo P450 metaboliza los productos
posición de los fluidos del páncreas cambian de una químicos lipofílicos (xenobióticos) del medio ambiente.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 219

En la primera fase, la enzima utiliza los radicales libres una influencia causal de dos factores: el aumento de los
de oxígeno para hidroxilar el sustrato, el que, en general, productos de peroxidación de los lípidos causado por
luego se somete a las reacciones de conjugación de la un exceso de radicales libre de oxígeno en los acinos
segunda fase, a menudo con glutatión, y es catalizado adyacentes y la liberación de los productos de desgra-
por la glutatión transferasa. La denominada inducción nulación de los mastocitos, en particular el factor de
enzimática puede estar acompañada por la expansión crecimiento transformador beta 1. Los dos factores
del retículo endoplásmico, para que, al menos ini- están vinculados en cuanto a que las radicales libre de
cialmente, la célula segregue más de sus productos oxígeno y sus productos de oxidación son activadores
normales. Sin embargo, esta reacción de defensa falla naturales de los mastocitos. La activación de las célu-
si el proceso de la primera fase (por ejemplo, CYP2E1, las estrelladas está aumentada por las citocinas de los
CYP1A e isoformas CYP3A1) produce un metabolito leucocitos infiltrantes y las células acinares dañadas.
xenobiótico reactivo. Las lesiones de la célula dependen La etapa final de la pancreatitis crónica se identifica
de si existen o no medios de defensa suficientes para los por la pérdida de todo el tejido secretor, la desaparición
radicales libres de oxígeno y las especies reactivas xe- de las células inflamatorias y la intensa fibrosis. Esta
nobióticos: enzimas antioxidantes (incluida la glutatión progresión se asemeja a la de la hepatitis crónica activa
peroxidasa selenio-dependiente), glutatión transferasa, en su transformación a hígado cirrótico.
glutatión y ácido ascórbico (la forma biológica activa Se resumen las características histológicas de la
de la vitamina C, que puede sustituir a la glutamina). pancreatitis crónica común en comparación con las
La inmunoquímica muestra que estos mecanismos de características de tres variantes en las que las lesiones
defensa no son suficientes para satisfacer el aumento de son difusas (Tabla 193.1). En la fibrosis quística, la
la carga oxidante en las células acinares, por lo tanto, lesión pancreática es una forma difusa de la pancreatitis
muestran signos de estrés electrofílico como el exceso crónica, donde los signos inflamatorios desaparecen al
de lipofucsina y la microvesiculación citoplasmática. nacer, excepto en los pacientes con mutaciones leves
La fibrosis es un signo de que en la pancreatitis en el gen regulador de la inductancia transmembrana
crónica las células estrelladas intersticiales están ac- (regulador de la conductancia transmembrana en la
tivas, estas células representan una parte importante fibrosis quística), que pueden tener ataques recurrentes.
en la progresión de la enfermedad, ya que controlan la Las lesiones uniformes también ocurren proximales a
síntesis y la degradación de las proteínas de la matriz la obstrucción ductal y en la pancreatitis autoinmune.
extracelular. Los resultados de la histoquímica sugieren Esto último puede involucrar a la totalidad o parte de

Tabla 193.1. Principales características histológicas de los subtipos de pancreatitis crónica


Fibrosis
 Características  Común* Fibrosis quística Fibrosis autoinmune
obstructiva
Lesiones:
En parches Difusa Difusa Difusa
Distribución
Variable  Total  Total  Total o focal
Extensión
Sistema ductal Suavemente
Irregularmente dilatado Mínimamente dilatado Estrechado
conducto principal dilatado
Tapones proteicos Todos los conductos Intralobular e interlobular No No
Tendencia calcificante Si No No No
Destrucción epitelial Pancreatitis del surco No No Si (tipo 2)
Neutrófilos  No No  No No
Células inflamatorias  Mononucleares  No No Plasmolinfocíticos
Principalmente Perilobular, Perilobular, intralobular,
Fibrosis Perilobular, intralobular 
perilobular  intralobular  periductal
Seudoquiste Frecuente  No No No

* No incluye la variante de pequeños conductos (como en al menos el 30 % de los casos) en la que lo característico es el daño focal de las
células acinares y los complejos tubulares. La pancreatitis del surco es similar a la forma común, a excepción del predominio de destrucción
del epitelio ductal y los quistes. Las primeras lesiones ocurren en el útero. Las lesiones difusas ocurren proximales a la obstrucción.
220 Parte XV. Páncreas

la glándula y tiene dos subtipos. Las características de los posibles defectos subyacentes. Actualmente se
de la pancreatitis autoinmune tipo 1 más común es sugiere que varias mutaciones del tripsinógeno catió-
un infiltrado linfoplasmocítico denso con predominio nico están asociadas con la pancreatitis hereditaria.
de células IgG4+, esclerosis periductal en remolino En el tripsinógeno aniónico PRSS2,debido a activi-
y venulitis obliterante. El tipo 2 se caracteriza por la dad proteolítica aumentada causada por la mutación del
destrucción ductal, con grupos de neutrófilos infiltrados PRSS1, se pensó que las mutaciones del pepsinógeno
en la pared del conducto, acompañados por linfocitos aniónico pueden influir en la génesis de la enfermedad,
y células plasmáticas. contrariamente las mutaciones estudiadas parecen pro-
teger la aparición de pancreatitis crónica.
Pancreatitis crónica genética
Serina proteasa inhibidora Kazal tipo 1 SPINK 1
Por primera vez hace 50 años fue reconocido que
Se piensa que es un potente inhibidor de activación
la pancreatitis crónica puede agruparse en familias
intrapancreático de la tripsina. La posible patogenia
seleccionadas, sugiriendo una enfermedad hereditaria,
de las mutaciones de SPINK1 fue el resultado del
no obstante, por más de cuatro décadas permaneció
conocimiento de que un significativo número de pan-
oscuro el defecto genético subyacente. En ese primer
creatitis hereditarias no mostraba mutación del PRSS1
reporte se informaba “la pancreatitis crónica heredi-
indicando que otros genes pueden estar involucrados en
taria no representa señales distintivas que le permitan
la patogenia como la pérdida de la función de inhibidor
distinguir de otras pancreatitis crónicas no hereditarias. pancreático de la tripsina. Se encontró mutación en
Entre 10% a 30 % de pacientes con pancreatitis crónica SPINK1 en 18 de 96 pancreatitis pediátricas no relacio-
no aparecen causas subordinadas incluyendo herencia. nadas, que se han confirmado posteriormente y en 15
Investigaciones recientes indican que un porcentaje % a 40 % de pacientes con las pancreatitis idiopáticas.
significativo de esta llamada pancreatitis idiopáticas Últimamente en estudios de ingeniería genética en
puede tener una base genética para su aparición. Se modelos animales, la expresión transgénica de SPINK-
señalan los diferentes genes involucrados en la pato- 1quellevan a un aumento de la capacidad inhibidor en
génesis de la pancreatitis hereditaria o idiopáticas, el un 90 % reducen la severidad de la pancreatitis inducida
impacto de esos descubrimientos genéticos sobre otros por alcohol, mientras que la destrucción dirigida de
tipos de pancreatitis crónicas como los relacionados SPINK3, el homólogo murino del SPINK1 humano
con el alcohol, la pancreatitis calcificante tropical y sus resistente en degeneración autofágica de las células
implicaciones en la patogénesis. acinares, regeneración deprimida y muerte dentro de
dos semanas de nacido. En el último modelo la acti-
Tripsinógeno catiónico (PRSS1)
vidad tríptica aumentada fue detectada en los acinos
Ya en 1896 se postuló que la pancreatitis resulta de pancreáticos un día después del nacimiento.
la autodigestión de la glándula. Se propuso que una En resumen, normalmente, cuando el tripsinógeno
conversión inapropiada de los cimógenos pancreáticos a se activa antes de tiempo en el páncreas, es inhibido por
enzimas activas dentro del parénquima pancreático ini- la SPINK1 para luego autodestruirse o ser degradado
ciaba el proceso inflamatorio. Una importante función por las proteasas activadas por la tripsina, si todo lo
se atribuye a la activación del tripsinógeno a tripsina demás falla, se cuenta con la potente acción inhibidora
convirtiendo todas proenzimas proteolíticas en su forma del glutatión. La pancreatitis hereditaria es una enfer-
activa. Se han descrito tres tipos de tripsinógenos en el medad rara causada por una mutación de la función de
jugo pancreático humano y designados según su movi- ganancia (autonómica dominante, penetración de 80
lidad electroforética: tripsinógeno catiónico (PRSS1), %) en el gen del tripsinógeno catiónico PRSS1, el que
tripsinógeno aniónico (PRSS2)y mesotripsinogeno produce una forma resistente a la degradación de la
(PRSS3) comparado con el aniónico el pepsinógeno tripsina, esta relación se ha demostrado en un modelo
catiónico se activa más fácilmente y es más resistente de ratón transgénico de lesión pancreática crónica. La
a la autolisis. mutación de PRSS1 no se asocia con la pancreatitis
Por análisis de enlaces, varios grupos localizaron un crónica alcohólica ni con la pancreatitis tropical. Por
gen para la pancreatitis hereditaria en el brazo largo del el contrario, una mutación de pérdida de función de
cromosoma 7 (7q35) subsecuentemente una mutación SPINK1 se asocia estrechamente con la forma idio-
en el gen del tripsinógeno catiónico referida también mática de la enfermedad, pero se piensa que es más
como una serina proteásica fue identificada como uno un factor predisponente o modificador que una causa
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 221

directa. También se han descrito mutaciones en otros brana en la fibrosis quística, pero solo algunos fueron
genes que pueden aumentar la amenaza de la tripsina, heterocigótico. Por lo que la pancreatitis crónica idiopá-
como puede ser la mutación de pérdida de función del tica, actualmente puede representar fibrosis quística
gen PRSS2 (codifica el tripsinógeno aniónico), que “atípica” causada por la combinación de dos ligeras o
protege contra la pancreatitis. de una ligera y una severa mutación de regulador de
la conductancia transmembrana en la fibrosis quística.
Regulador de la conductancia transmembrana Varios pacientes con pancreatitis crónica, no obs-
en la fibrosis quística tante, fueron transheterocigóticos para alteración del
La regulador de la conductancia transmembrana en regulador de la conductancia transmembrana en la
la fibrosis quística es un canal de cloruro de la mem- fibrosis quística y una variante SPROK1 o PRSS1 acla-
brana apical necesario para el fluido y secreciones en rando la importancia de las combinaciones de mutación
el tracto respiratorio y digestivo. en diferentes genes en patogénesis de la enfermedad.
En el páncreas se localizan en centro acinares y En resumen, la pancreatitis idiopática crónica
ductos proximales y regula la secreción ductal de se asocia con una mutación del gen regulador de la
bicarbonato. La función anormal del regulador de la conductancia transmembrana en la fibrosis quística.
conductancia transmembrana en la fibrosis quística Los pacientes pueden tener un alelo recesivo anormal,
como resultado de mutación del gen está asociada con pero la posesión de dos confiere 40 veces más riesgo
fibrosis quística, una enfermedad autosómica recesiva de desarrollar una pancreatitis crónica idiopática, el
caracterizada por disfunción pulmonar e insuficiencia que se eleva a 500 veces en los pacientes que también
pancreática. Una minoría de pacientes con fibrosis tienen una mutación del SPINK1. Algunos pacientes
quística sufren de pancreatitis recurrente. En 1998 dos con pancreatitis idiopática crónica con mutaciones del
estudios describieron una asociación entre la pancrea- regulador de la conductancia transmembrana en la fibro-
titis crónica idiopática y mutaciones en el gen del regu- sis quística tienen una forma atípica de fibrosis quística.
lador de la conductancia transmembrana en la fibrosis Recientemente se han revisado tres aspectos de la fun-
quística. Un estudio que investigó 134 pacientes con ción del regulador de la conductancia transmembrana
pancreatitis crónica, incluyendo 60 con idiopática y 71 en la fibrosis quística. El regulador de la conductancia
con pancreatitis alcohólica para 22 mutaciones en 18 transmembrana en la fibrosis quística está en el polo
pacientes (13,4 %) incluyendo 12 con idiopática (20 %) luminal de las células acinares en las que puede facilitar
fueron heterocigóticos para mutación del regulador de el reciclado de membrana y la exocitosis, como lo hace
la conductancia transmembrana en la fibrosis quística. en otros lugares. El regulador de la conductancia trans-
La frecuencia de mutaciones en pancreatitis crónica membrana en la fibrosis quística transporta bicarbonato
alcohólica fue dos veces mayor que lo esperado y en y glutatión, lo que facilita la solubilidad de las mucinas
pancreatitis idiopática cuatro veces mayor. En el otro en las secreciones, a través de la membrana luminal de
estudio 17 mutaciones de regulador de la conductancia las células ductales adyacentes al espacio centroacinar.
transmembrana en la fibrosis quística en 27 pacientes El regulador de la conductancia transmembrana en la
con pancreatitis crónica idiopática fueron estudiados. fibrosis quística es activado por el estrés electrofílico,
Siete pacientes (25,9 %) tuvieron al menos una muta- pero es protegido por los tioles y el ácido ascórbico.
ción del regulador de la conductancia transmembrana en Por otra parte, en los pacientes con pancreatitis crónica,
la fibrosis quística y un paciente fue heterocigótico. La el regulador de la conductancia transmembrana en la
frecuencia de mutación del regulador de la conductancia fibrosis quística está mal localizado en el citoplasma de
transmembrana en la fibrosis quística en pancreatitis las células ductales, en la enfermedad autoinmune esta
crónica idiopática fue seis veces mayor de lo espera- mala localización se corrige por la acción de los este-
do. Sin embargo, ambos estudios solo investigaron la roides, que también reducen la inflamación, restauran
más común de las aproximadamente 1000 mutaciones la secreción del bicarbonato y las enzimas, y regenera
del regulador de la conductancia transmembrana en la las células acinares.
fibrosis quística que actualmente se describen. Estudios Las mutaciones del regulador de la conductancia
subsecuentes analizando la secuencia codónica com- transmembrana en la fibrosis quística y SPINK1
pleta de regulador de la conductancia transmembrana también se han descrito en los pacientes con hiper-
en la fibrosis quística, así como la PRSS1 ySPINK1 en trigliceridemia o hiperparatiroidismo que desarrollan
pancreatitis idiopáticas encontraron 25 % con al menos pancreatitis. En la actualidad en 10 % de las pancreatitis
una mutación regulador de la conductancia transmem- crónicas alcohólicas y en casi 50 % de todos los casos
222 Parte XV. Páncreas

en general, se ha identificado un déficit molecular que es un reto en los años recientes con una opinión actual
contribuye a la pancreatitis crónica. favorable a la hipótesis necrosis-fibrosis de que en la
pancreatitis alcohólica comienza como un proceso agu-
Pancreatitis alcohólicas do que progresa a daño crónico irreversible al repetirse
El alcohol se ha considerado como la causa principal los ataques agudos (Fig. 193.1).
pancreatitis crónica en Europa, Estados Unidos, Brasil, La pancreatitis crónica inducida por alcohol usual-
México y Sudáfrica, pero también actualmente se lo mente se desarrolla después de un periodo prolongado
considera como causa principal en Australia y Corea de consumo fuerte de alcohol y no aparece después de
del Sur. Sin embargo, en un estudio italiano multicén- una ingesta aislada fuerte. En un estudio realizado en
trico reciente y en una auditoría en Estados Unidos, el el 2005 de una serie de 345 pacientes con pancreatitis
exceso de alcohol fue el factor predominante en solo 34 crónica, 265 con pancreatitis alcohólica, 57 idiopática
% y 44 % de los casos de pancreatitis crónica, respec- y 11 con pancreatitis hereditaria, la media de comienzo
tivamente. Otro estudio mostró que los afroamericanos de la pancreatitis crónica alcohólica fue de 36 años,
se encuentran particularmente en algo riesgo. No está la hereditaria tan temprano como a los 10 años, la
claro si estos datos nuevos reflejan las diferencias en la idiopática mostró dos formas clínicas de presentación:
definición de enfermedad por bebidas alcohólicas o un un comienzo temprano (juvenil) con una edad media
cambio genuino en la causa de la pancreatitis crónica. de 23 años y una tardía con una edad media de co-
Tradicionalmente se ha pensado que la pancreatitis mienzo a los 62 años (senil). La pancreatitis tropical
crónica alcohólica desde su comienzo se caracteriza se caracteriza por un comienzo temprano (promedio 22
por una evolución marcada de crisis de exacerbacio- años), progresión rápida y daño pancreático severo, en
nes agudas. Esta noción surgió de la observación de ausencia de consumo alcohólico o patología biliar. Por
hallazgos histológicos y radiológicos en el páncreas de otra parte la pancreatitis autoinmune ocurre a una edad
pacientes con pancreatitis crónica en el tiempo de los tardía con una edad promedio de 59,4 años.
primeros ataques de pancreatitis, además las autopsias Los estudios experimentales han demostrado que
mostraron fibrosis pancreáticas en pacientes alcohólicos aunque el páncreas procesa el etanol en forma eficiente
sin clínica de pancreatitis. Sin embargo, este concepto (a través de una vía no oxidativa que produce ésteres

Fig. 193.1. Papel de las enzimas digestivas en la pancreatitis.


Capítulo 193. Pancreatitis crónica 223

etílicos de los ácidos grasos y por la oxidación por la “agotado o quemado”, otros no lo confirman. Un factor
vía acetaldehído), in vitro, sus metabolitos dañan las también importante en la evolución de dolor y de la in-
células acinares y activan las células estrelladas. Sin suficiencia es la abstinencia del alcohol, se reporta que
embargo, el consumo prolongado de etanol no induce facilita el tratamiento del dolor y enlentece la aparición
la pancreatitis crónica, por lo tanto, el hallazgo de un de la insuficiencia comparada con los pacientes que no
intervalo latente de 15 años o más en los pacientes que suprimen el alcohol.
consumieron 150 g o más de etanol por día, como se El riesgo de aparición de cáncer es significativamen-
comprobó recientemente en la India, es sorprendente. te más alto en los pacientes con pancreatitis crónica
Por otra parte, menos de 10 % de las personas que que en la población general. En pancreatitis crónica
beben alcohol en exceso desarrolla la enfermedad. alcohólica se considera hasta 15 veces más alto y en
En conjunto, estos hallazgos sugieren que hay otros pancreatitis tropical es de una cinco veces mayor que
factores que interactúan para aumentar la toxicidad en la población general, mientras que en la pancreatitis
del etanol in vivo. hereditaria puede alcanzar hasta 40 %.
En los modelos animales, las dosis pequeñas de En cuanto a la mortalidad por pancreatitis crónica
etanol inducen el CYP2E1, lo que aumenta la toxicidad alcohólica en particular es un tercio mayor en relación
de otras sustancias químicas a las que a la vez es ex- con edad y sexo que en la población general. No obs-
puesto el animal. Estos resultados pueden racionalizar tante, solamente una quinta parte de esa mortalidad se
la vieja observación de que no hay un umbral para la debe a la pancreatitis crónica, directamente la mayoría
toxicidad pancreática del etanol, pero datos obtenidos muere por el efecto del alcohol o el tabaco sobre el
recientemente sugieren que existe un umbral de 60 g hígado, el pulmón o procesos degenerativos.
por día. Por otra parte, el CYP2E1 es la vía principal El concepto de necrosis-fibrosis está sustentado por
que metaboliza el etanol durante la ingestión excesiva datos clínicos y experimentales. Un estudio prospectivo
crónica, pero esta vía libera radicales libres de oxígeno. extenso reportó que las manifestaciones clínicas de la
El tiempo promedio del desarrollo de la insuficiencia pancreatitis crónica (disfunción exocrina y endocrina)
pancreática después del inicio de la pancreatitis depende aparecieron más en alcohólicos con repetidos ataques
del tipo de pancreatitis, bajo esta consideración se cla- agudos. Además, en estudios posmorten de pacientes
sifica en alcohólica y en idiopática de comienzo tardío, con pancreatitis fatal en un 53 % no había evidencia
la insuficiencia se desarrolla antes que en la pancreatitis de cambios crónicos pancreáticos.
idiopática de inicio temprano. Estudios experimentales han demostrado que este
En la pancreatitis alcohólica puede aparecer hasta a concepto de necrosis-fibrosis no solo se observa en la
los seis años de comienzo y la insuficiencia endocrina pancreatitis crónica alcohólica sino que recientemente
a los ochos años comparados con los 27 años en la se ha observado en otras no pancreatitis alcohólicas
pancreatitis idiopática de comienzo temprano. como la pancreatitis crónica hereditaria que también
En la pancreatitis tropical tanto la insuficiencia se presentan con ataques agudos recurrentes de necro-
exocrina como endocrina aparece muy tempranamente inflamación, usando modelos animales experimentales
a menudo como forma de presentación en la mayoría inhibiendo la superóxido dismutasa o administrando
(70 %) de los pacientes. dosis suprafisiológicas de ceruleina con o sin otras
Respecto a la progresión de la insuficiencia pan- medidas como administración de alcohol u obstruyendo
creática en el tiempo hay datos contradictorios, unos el ducto pancreático.
investigadores no señalan cambios o ligeras mejorías El mecanismo molecular responsable de la fibro-
en el transcurso del tiempo y otras en seguimientos sis pancreática después de la necroinflamación se
hasta de 16 años reportan un deterioro progresivo, las conoce mejor desde que se caracterizaron las células
causas de estas diferencias pueden estar relacionadas que desempeñan una función definitoria en el pro-
con los diseños de estudios, la duración del seguimiento ceso fibrogénico, las llamadas células pancreáticas
o de la sensibilidad de las pruebas usadas en valorar estrelladas.
la función pancreática. La evolución del dolor en la En la injuria pancreática inducida por alcohol, de
pancreatitis crónica es impredecible en un paciente las posibilidades actuales de usar modelos animales
individual, no obstante, se ha reportado que el dolor disponibles, se estudian los efectos tóxicos del alcohol
mejora o desaparece con la instalación de la insufi- directamente sobre las células acinares que favorece
ciencia de la mayoría de los pacientes hasta en 95,6 % la aparición de procesos necroinflamatorios, se han
en pancreatitis alcohólicas, el síndromes de páncreas derivado dos observaciones importantes:
224 Parte XV. Páncreas

– El daño es proporcional a la dosis de alcohol recibida. Efecto del alcohol sobre la célula acinar
– Solo un mínimo de alcohólicos desarrollan pancrea- En las tres décadas anteriores la investigación en la
titis, por lo que debe haber factores adicionales o de pancreatitis alcohólica se cambia de los conductos hacia
susceptibilidad para disparar la enfermedad.
la célula acinar. Las células producen gran cantidad de
Efecto constante del alcohol sobre el páncreas enzimas (6 g/día a 20 g/día) con el potencial de causar
El efecto del alcohol sobre el conducto principal considerable daño tisular. La célula acinar está protegida
(inspirado en las observaciones de Opie) en relación normalmente contra su autodigestión por sintetizar la
con los mecanismos responsables de la pancreatitis por mayoría de los cimógenos como precursores inactivos
litiasis biliar, expresados hace muchos años, planteaba almacenando en orgánelos cubiertos de membrana y por
que el efecto de alcohol sobre el Wirsung y el esfínter autoproteasas intracelular la disrupción de este meca-
favorecía el reflujo biliopancreático, duodenopancreá- nismo normal de protección resuelta en activación pre-
tico y la teoría de estimulación obstrucción al alterar matura de las enzimas lleva al daño por autodigestión.
la motilidad del esfínter de Oddy. Más tarde esta teoría El tripsinógeno puede ser activado por las enzimas
no ha podido ser mantenida. lisosomales catepsin B. La tripsina activa a su vez puede
Efectos sobre los pequeños conductos activar otras enzimas y disparar una cascada autodi-
gestiva dentro de la célula. La evidencia que sustentan
En la década de los 70 del siglo xxla investigación la función de las enzimas digestivas en la pancreatitis
se cambió hacia los conductos pequeños como conse-
proviene de varios estudios in vitro e in vivo, pero hay
cuencia de los trabajos de Sarles, quien planteó que
evidencias más completas que sustentan esta teoría
la secreción de proteínas pancreáticas dentro de los
aportada por la identificación de la mutación del gen
conductos se precipitaba conduciendo a atrofia acinar
del tripsinógeno catiónico en pacientes con pancreatitis
y fibrosis. Esta teoría decayó por la falta de evidencia
de que había precipitación de proteínas dentro de los hereditaria. También se ha invocado una función de
conductos que precedían el daño acinar. Sin embargo, mutación genética en los pacientes relacionados con
investigaciones recientes reportan asociación entre la hipercalcemia.
las mutaciones del gen regulador de la conductancia Efectos del alcohol sobre las enzimas pancreáticas
transmembrana, gen que afecta la función de la célula
Varios estudios han demostrado que la administra-
ductular y el riesgo de desarrollar pancreatitis crónica
ción crónica de alcohol provoca cambios en las células
idiopática ha renovado el interés en el posible función
de la disfunción ductular en el daño pancreático. acinares que favorece la activación prematura de las
Hay algunas evidencias que sugieren que el con- enzimas.
sumo de alcohol facilita la formación de tapones de Está demostrado que el marcador de ARN mensaje-
proteínas dentro de los conductos pancreáticos, esto ro y el contenido de proteínas de las enzimas digestivas
incluye: tripsinógeno, quimotripsinógeno y lipasa, así como
– Aumento total de concentración de proteínas del la enzima lisosomal catepsin B está aumentada en el
jugo pancreático en alcohólicos. páncreas de ratas alimentadas con alcohol. Esto se
– Una capacidad aumentada de sintetizar litostatina acompaña de aumento de la fragilidad de los orgánelos
con la exposición al alcohol (la litostatina es un que contienen esas enzimas (gránulos de cimógenos
constituyente especie de los tapones de proteína con y lisosomas). Este efecto está mediado por los esteres
una propensión a la precipitación). del colesterol y los ácidos grasos ethilesteres que se
– Una disminución del alcohol inducidor de la glico- acumulan en el páncreas después del consumo de al-
proteína GP2, posiblemente debido a un aumento de cohol. En los gránulos la fragilidad es poco clara, pero
secreción en el jugo pancreático. Esta proteína tiene se considera que se debe a la disminución de la GP2
una propiedad única de agregación propia y es un en la membrana de los gránulos, el estrés oxidativo
importante constituyente de los tacos de proteínas. desencadenado por el alcohol puede ser otro factor que
influye en la desestabilización de la membrana de los
Es posible que el bloqueo de los ductos pequeños lisosomas y de los gránulos de cimógenos.
intralobulares por las proteínas precipitadas dañe la
secreción de la célula acinar, bloqueando el destino de Metabolismo del alcohol por la célula acinar
las enzimas digestivas y predisponiendo a la célula a Los estudios sobre toxicidad inducida por alcoholen
la autodigestión. el hígado postulan que el alcohol puede ser metaboliza-
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 225

do por las células pancreáticas para generar metabolitos pancreatitis aguda, indicando que debe haber otros
que median cambios en los orgánelos mencionados factores requeridos para precipitar un ataque crónico
antes. Estudios muestran conscientemente que el de pancreatitis como es el factor/cofactor/susceptibi-
páncreas metaboliza el alcohol por vía oxidativa o no lidad ha recibido numerosos candidatos en las últimas
oxidativa generando los metabolitos acetilaldehido y dos décadas.
ácidos grasos etil ester sintetasa. Se incluye dieta, cantidad y tipos de alcohol consu-
En el páncreas se han identificado las enzimas de midos, el patrón de consumo, hiperlipidemia y hábito
oxidación, alcohol deshidrogenasa citocromo P4502E de fumar, además, se han valorado factores genéticos,
y catalasa y no oxidativas ácidos grasos etil ester a pesar de muchos estudios permanece desconocido el
sintetasa. verdadero factor o los factores que confieren suscepti-
Además el estrés oxidativo se ha demostrado que bilidad a la pancreatitis.
ocurre en páncreas humano y de ratas, después de la Experimentalmente se ha investigado la acción de la
exposición al alcohol debido a la producción de especies hormona secretina colecistoquinina y las endotoxinas
reactivas de oxígeno (conocidas como productos de bacterianas. Se reporta que altos niveles de colecistoqui-
la oxidación alcohólica) y disminución de la defensa nina en roedores sensibilizan al páncreas para el efecto
antioxidante. del alcohol, lo que no se ha demostrado totalmente.
Las endotoxinas representan un factor más plausible
Efectos de los metabolitos tóxicos del alcohol
y relevante como disparador de pancreatitis alcohólicas,
El acetilaldehido, los ácidos grasos etil ester esto se debe a:
sintetasa y radicales de oxígeno se ha demostrado que – Aumento de la permeabilidad con traslocación de
causan daño sobre las células acinares pancreáticas. El bacterias gramnegativa como la Escherichia Coli,
acetilaldehido ocasiona cambios morfológicos al pán- a través de la barrera mucosa tanto en animales de
creas de rata y perros e inhibe la secreción estimulada experimentación como en humanos.
de acinos pancreáticos aislados. El estrés oxidativo – Aumento de los plasmoliposacaridos (lipopolisa-
provoca desestabilización de los gránulos decimó- caridos una endotoxina que es componentes de las
genos y lisosomas en ratas alimentadas con alcohol células de la pared bacteriana) con niveles muy altos
ácidos grasos etil ester sintetasa dañan el páncreas y tantos en bebedores crónicos como después de una
los orgánelos. ingesta alcohólica comparados con los no bebedores.
En ratas los ácidos grasos etil ester sintetasa en la – La endotoxemia es predictiva de la severidad de los
infusión conducen a edema pancreático, vacuolización derivados de la pancreatitis aguda (independiente
acinar y activación del tripsinógeno y a incrementar los de la causa). Es interesante las observaciones de
niveles de proteínas de la matrix celular, lo que puede algunos autores sobre el importante efecto ne-
tener relación con el desarrollo de la fibrosis. croinflamatorio del páncreas por la inyección de
lipopolisacaridos en ratas alimentadas con alcohol
Efectos del alcohol en la microcirculación
y más importante la aparición de daño progresivo
pancreática
con aparición de fibrosis en ratas bajo inyecciones
La microcirculación de la glándula es un aspecto repetidas de lipopolisacaridos.
de la fisiología pancreática que todavía permanece
olvidado respecto a la patogénesis de la pancreatitis Progresión de pancreatitis aguda
inducida por alcohol. Estudios recientes demostraron a pancreatitis crónica
que la administración aguda o crónica de alcohol en
ratas disminuye significativamente la perfusión pan- Actualmente se acepta que el desarrollo de la
creática. Este efecto estuvo asociado con el aumento de pancreatitis crónica es el resultado de daño progre-
la actividad leucocitaria y de la adhesión de moléculas sivo (acumulado) después de episodios repetidos de
y citoquinas en el páncreas. necroinflamación pancreática. Hace unos años Seh-
nider y Whitcomb propusieron el evento “centinela”
Sensibilidad individual para pancreatitis alcohólicas de pancreatitis aguda como hipótesis para explicar la
El alcohol ejerce efectos directos constantes y tó- progresión a pancreatitis crónica. Señalaron que un
xicos sobre el páncreas que predispone a la glándula ataque de injuria pancreática aguda hace a la glándula
a la autodigestión y a la necroinflamación lo que ma- particularmente vulnerable, en la fase de recuperación
yormente se observa en los bebedores crónicos. Pero a insultos adicionales como alcohol, estrés metabólico
no está claro porque solo una ingestión desarrolla y estrés oxidativo.
226 Parte XV. Páncreas

Se han realizados esfuerzos de investigación para crónica y fibrosis en áreas de obstrucción ductal y la
aclarar el mecanismo molecular de la pancreatitis aparición de precipitación concéntrica y lamelar de
crónica, especialmente la fibrosis pancreática tomó un proteínas en los ductos mayores que también se calci-
gran impulso con la identificación, aislamiento y carac- fican posteriormente.
terización de las células estrelladas en elpáncreas. Las La presencia de estas concreciones conjuntamente
células estrelladas pancreáticas son morfológicamente con la formación de estenosis debido a la fibrosis pe-
similares a las células estrelladas hepáticas. riductal, eventualmente conduce a la ectasia ductular
Actualmente está establecido que las células estre- que se observa en los estudios pancreatográficos. Por
lladas activadas desempeñan una función importante el contrario, la obstrucción extrínseca del conducto
en el proceso fibrogénico en pancreatitis crónica por pancreático principal a nivel o cerca de la papila por
su habilidad de síntesis y degradación de la matriz un tumor lleva a dilatación menos pronunciada de
extracelular de proteínas que conforman el tejido las ramas sin la presencia de tacos y la fibrosis por
fibroso. Se han encontrado células estrelladas acti- detrás de la obstrucción es más uniforme. Los tacos
vadas en fibrosis pancreática inducida por alcohol en calcificados contienen principalmente carbonato de
humanos. In vitro se demostró activación de las células calcio, mientras que las calcificaciones focales menos
estrelladas directamente por la acción del etanol y del frecuentes del parénquima y del tejido adiposo consis-
acetaldehído. ten en hidroxiapatita, una mezcla de fosfato de calcio
De todos los experimentos realizados, es aparente y carbonato de calcio.
que durante el consumo prolongado de alcohol, las El proceso inflamatorio puede extenderse a los
células estrelladas son activadas por vías operativas in órganos vecinos, causando constricción del duodeno
vivo: el proceso necroinflamatorio vía citoquinas y en proximal, antro, colédoco o colon transverso.
vía no necroinflamatoria (efecto directo del etanol y Desde hace varias décadas la función de los repeti-
sus metabolitos y el estrés oxidante). dos de inflamación aguda y necrosis en el desarrollo de
la pancreatitis crónica es motivo de controversia y se
piensa que puede ser un proceso insidioso de esclerosis
Anatomía patológica análogo a la patogénesis de la cirrosis hepática. Ac-
Los cambios patológicos en la pancreatitis crónica tualmente, debido a los adelantos en diferentes ramas,
explican mucho aunque no todos los del cuadro clínico, se plantean respuestas a muchas de las interrogantes.
particularmente lo referido a la de insuficiencia exocrina
y endocrina. Pancreatitis idiopática
La pancreatitis crónica alcohólica sirvió de modelo El 60 % a 70 % de los casos de pancreatitis crónica
para la descripción de los aspectos patológicos de la en la India y China se catalogan como idiopáticos, así
enfermedad. Los cambios histológicos consisten fun- como la mitad de los casos en Japón. La pancreatitis
damentalmente en fibrosis de distribución irregular, tropical es una forma de pancreatitis idiopática que
número reducido y disminución variable de los acinos e afecta a personas jóvenes y propende a la diabetes y
islotes de Langerhans y obstrucción variable de ductos la formación de cálculos grandes. La enfermedad es
pancreáticos de diferentes grosores. La proliferación reportada principalmente en los países en desarrollo
de fibroblastos, fibras colágenos, colecciones de linfo- de Asia, África y América Central, donde intervienen
citos y células plasmáticas alrededor de uno o grupo la desnutrición grave y los glucósidos cianogénicos de
de acinos (fibrosis intralobular). Los ductos muestran la cassava (yuca o mandioca). La descripción clásica
estructura fibrótica, metaplasia escamosa de su capa de la pancreatitis tropical proviene de Kerala, al sur de
epitelial y disrupciones pequeñas alrededor de áreas la India, sin embargo, las estadísticas de ingresos al
de necrosis o espacios quísticos. hospital revelaron que la enfermedad disminuyó seis
La reconstrucción tridemensional de los ductos veces desde 1962 hasta 1987 sin cambios en el consumo
pancreáticos en la pancreatitis crónica asociada al de yuca. En cambio, la disminución coincidió con la
alcohol sugieren esta secuencia de eventos: la preci- introducción en esa provincia de la electricidad, lo que
pitación en los ductos lobulares e intralobulares como elimina la dependencia de la iluminación tradicional (a
manifestación inicial lleva a la formación de tacos que base de kerosén). Actualmente en la India, la incidencia
se calcifican por agregación superficial, el desarrollo de pancreatitis tropical corresponde a 3,8 % de los casos
de focos de ectasia acinar, atrofia acinar, inflamación de pancreatitis crónicas.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 227

Pancreatitis autoinmune dice que hay los acinos son dañados en forma repetida.
Esta última teoría es la más popular e incorpora la idea
La pancreatitis autoinmune (2 % a 4 % de los ca-
de que la necrosis recurrente conduce a la fibrosis peri-
sos) puede ser parte de una enfermedad multisistémica
ductal. Se considera que el primer ataque de pancreatitis
(tipo 1) o puede afectar solo al páncreas (tipo 2). La
corresponde a la autodigestión causada por la actividad
expresión del antígeno DR-1 de los leucocitos humanos
de la tripsina no regulada en las células acinares. Si este
aberrantes en las células ductales del páncreas puede
ataque es suficientemente grave como para atraer a los
presentar autoantígenos a los linfocitos. Los antígenos
macrófagos (hipótesis de la pancreatitis aguda centine-
pancreáticos específicos propuestos son la lactoferrina,
la), el daño posterior de la glándula (por el alcohol o
la anhidrasa carbónica, la SPINK1 y un péptido pre-
el estrés electrofílico) conduce a la fibrosis a través de
sente en las células acinares que tiene homología con
las células estrelladas estimuladas por los macrófagos.
las secuencias de aminoácidos de la proteína de unión
del plasminógeno de Helicobacter pylori (que puede
Teoría del estrés electrofílico
representar mimetismo molecular) y también de la
proteína ubiquitina ligasa, un cofactor de los receptores La teoría del estrés electrofílico es el equivalente
de hormonas esteroides y un péptido importante para la en el páncreas de la hepatotoxicidad por paracetamol
vía de degradación de la proteína intracelular. o tetracloruro de carbono, que resulta de la protección
Una vez expuestos los mecanismos que explican la insuficiente del glutatión contra el ataque electrofílico
génesis de los diferentes tipos de pancreatitis crónica, (vía CYP) sobre las principales macromoléculas, no por
se exponen, a manera de resumen, las diferentes hipó- esto menos, las enzimas de las vías de transulfuración
tesis sobre la patogenia de la enfermedad, las que se de lametionina hacia el glutatión. Sin embargo, el estrés
dividen en cinco categoría principales: teoría ductal, electrofílico de la pancreatitis crónica por metabolitos
acinar, dos del daño, del estrés electrofílico y la de tóxicos y, por lo tanto, la pancreastasis recurrente, se
causas múltiples. desarrolla a lo largo de muchos años como resultado de
la repetición de la exposición a múltiples xenobióticos.
Teoría ductal La insuficiencia previa del consumo de micronutrientes,
especialmente metionina y ácido ascórbico, facilitan la
Una hipótesis sugiere que el foco principal de la
aparición del problema. Los diferentes productos de
enfermedad son los conductos: la teoría se centra en
oxidación de los radicales provocan la desgranulación
la predominancia de la calcificación de los depósitos
de los mastocitos en el intersticio, causan inflamación,
de proteínas (hipótesis de los tapones proteicos), el
activación de los reflejos axónicos nociceptivos y fi-
estancamiento de los jugos pancreáticos, el reflujo de
brosis. El hecho de saber que en la pancreatitis crónica
los jugos biliares y duodenales nocivos (facilitado por
subyace la alteración de la disponibilidad de metilos
el pasaje de cálculos biliares) y el ataque autoinmune
y tioles (glutatión) ha permitido extender el concepto
primario.
del estrés electrofílico a la pancreatitis crónica que se
Teoría acinar asocia con mutaciones de los genes. Así, se considera
que la exposición diaria de las células acinares a los
Otra hipótesis sugiere que el foco principal son los restos de tripsina en las personas con mutaciones de
acinos: se piensa que el alcohol daña en forma directa PRSS1 o SPINK1 agotan las reservas de glutatión. Cabe
a las células acinares (hipótesis del metabolito tóxico) destacar que los que tienen mutaciones del regulador de
o mediante el aumento de la sensibilidad celular a la conductancia transmembrana en la fibrosis quística
la colecistoquinina o a través del CYP2E1, también son vulnerables no solo a la pancreastasis sino también
se atribuye a la activación de las células estrelladas, a la calcificación de los tapones proteicos (enfermedad
principalmente en presencia de una endotoxina. Otra de los conductos grandes) cuando la proteína residual
sugerencia es que la enfermedad es causada por la del regulador de la conductancia transmembrana en
toxicidad del cianuro en el páncreas. la fibrosis quística queda inmovilizada por el estrés
electrofílico.
Dos teorías del daño
Hay dos teorías del daño que se proponen como Teoría de las causas múltiples
causa de la enfermedad: las variaciones incluyen una Esta hipótesis final establece que diferentes factores
secuencia de conducto a acinos y viceversa o, la que causales conducen al daño a través de diferentes vías:
228 Parte XV. Páncreas

este concepto incorpora las otras teorías al tiempo que en personas mayores con enfermedad idiopática o en
destaca que la isquemia del páncreas puede agravar la pacientes con pancreatitis autoinmune, que pueden
enfermedad. presentarse con esteatorrea, diabetes o ictericia. Es de
comienzo caprichoso, diferente de un episodio a otro,
Diagnóstico clínico relacionándose en ocasiones con trasgresiones dietéticas
ricas en grasas y en pacientes que consumen alcohol de
El diagnóstico de pancreatitis crónica se realiza manera discontinua o paroxística (bebedores sociales
bajo la sospecha clínica, la presencia de cambios mor- o de fin de semana) aparecen en un periodo posterior
fológicos de la glándula y por las pruebas funcionales. de 12 h a 36 h. Con menor frecuencia el dolor aparece
La pancreatitis alcohólica crónica se presenta en la poco después de comenzar a comer semejando un angor
cuarta o quinta décadas de la vida y afecta principal- abdominal. El dolor es agotador y ocurre en episodios
mente a los hombres. La enfermedad idiopática tiene que duran aproximadamente una semana, pero también
una forma de comienzo precoz (segunda década) y otra puede ser constante. La ingestión incrementa el dolor
de inicio tardío (sexta década), con similar distribución disminuye el apetito y el consumo de alimentos, lo que
en ambos sexos. La enfermedad hereditaria se manifies- contribuye a la pérdida de peso y a la “situfobia”. El
ta hacia los 10 años y la pancreatitis tropical entre los dolor a menudo es de aparición nocturna. Se inicia en el
20 y los 30 años, mientras que el tipo más común, una epigastrio y se irradia hacia la espina dorsal o se localiza
forma de enfermedad autoinmune, afecta a los hombres en el hipocondrio izquierdo, irradiándose a la región
en la sexta década de la vida. infraescapular izquierda. Inicialmente comienza como
La pancreatitis crónica suele presentarse de cuatro simple molestia abdominal con sensación de distención
maneras diferentes: pancreatitis aguda manifiesta o para progresar en unos minutos o en unas horasa intenso
pancreatitis aguda recurrente (el diagnóstico verdadero dolor, profundo y penetrante y en ocasiones se asocia a
de pancreatitis crónica se sospecha cuando los ataques náuseas y vómitos. El dolor puede ser tan intenso que
de pancreatitis se repiten después de la colecistectomía); los pacientes temen ingerir alimentos y bajan de peso
dolor constante, síntomas y signos de complicaciones y los obliga a recurrir con frecuencia a la administra-
locales de la enfermedad (por ejemplo, seudoquis- ción de analgésicos mayores, lo que reduce la calidad
tes, compresión de los órganos vecinos o trombosis de vida, pérdida de la sensibilidad y posibilidad de
vascular), o trastornos que sugieren una insuficiencia adicción a los narcóticos. Es de larga duración (12 h a
pancreática exocrina o endocrina o ambas, en la que es 24 h) lo que lo diferencia del cólico biliar. Su irradiación
frecuente la presencia de cálculos pancreáticos. Estas transfixiva posterior induce al paciente al cambio de
características constituyen la base para la clasificación posición para su alivio sentándose inclinado hacia ade-
más reciente. lante o apoyándose hacia adelante, al asumir la posición
En la enfermedad alcohólica, el intervalo entre el genupectoral sobre un lado o al sentarse en cuclillas y
primer ataque y la esteatorrea (que significa la pérdida apretar las rodillas contra el tórax o al aplicarse calor
de 95 % de los acinos) es de alrededor de 13 años, un local o revulsivos, sobre todo en la espina dorsal o el
lapso considerablemente más corto que en la enferme- epigastrio. Su evolución se caracteriza en los estadios
dad idiopática de reciente comienzo o la pancreatitis iniciales por un carácter agudo recurrente en el 75 % de
hereditaria (mayor que 26 años). Los cálculos pancreá- los pacientes con pancreatitis alcohólica, en 50 % de las
ticos aparecen más temprano en las pancreatitis de las pancreatitis crónicas idiopáticas de presentación tardía
zonas tropicales y antes en la enfermedad alcohólica que y en todas de presentación precoz, con intervalos libres
en la idiopática. La diabetes puede comenzar antes que de dolor. Con la progresión de la enfermedad el dolor
la enfermedad, al mismo tiempo o después de iniciada puede hacerse casi constante para desaparecer en 85 %
la esteatorrea. de los casos en un tiempo medio de 17 años. El dolor
Se resumen los cuatros síntomas clínicos que hacen crónico y permanente se asocia en más de la mitad de
sospechar una pancreatitis crónica: dolor abdominal, los casos con complicaciones locales.
esteatorrea, `pérdida de peso y diabetes mellitus. Aunque los mecanismos patogénicos del dolor no
están totalmente esclarecidos se han postulados unas
Dolor abdominal series de teorías que pueden estar inducidos por infla-
Es el síntoma fundamental de la enfermedad mación pancreática aguda, presión intrapancreática
(10 % a 15 %) y es el problema clínico más grave en aumentada, alteraciones de los nervios pancreáticos,
los pacientes con pancreatitis crónica. Suele presentarse además de otras causas de dolor.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 229

Inflamación pancreática aguda 1. Causado por la enfermedad: inflamación activa:


En la evolución de una pancreatitis crónica pueden a) Alteración nociceptiva:
ocurrir episodios superpuestos de pancreatitis aguda, el – Inflamación neurogénica.
mecanismo por el que se produce no está esclarecido, – Sensibilización nerviosa visceral.
pero se puede inducir isquemia tisular, aumento de la – Sensibilización nerviosa central.
presión en los conductos pancreáticos o del parénquima, – Sicológica.
inflamación neural o retroperitoneal. El primer ataque b) Hipertensión: colecistoquinina aumentada vía
clínico de pancreatitis aguda que complica una crónica ductal o tisular.
es el más grave, los episodios siguientes disminuyen c) Isquemia del tejido.
de gravedad de forma gradual. 2. Causada por complicaciones
a) Masa inflamatoria de la cabeza del páncreas.
Presión intrapancreática aumentada b) Obstrucción de la vía biliar o el duodeno.
El aumento de la presión dentro del conducto o del c) Seudoquiste.
parénquima pancreático es un factor importante en la d) Cáncer de páncreas.
génesis del dolor. El mecanismo por el que aumenta 3. Causados por el tratamiento: opiáceos, gastroparesia
la presión y puede causar dolor es especulativo, pero o estreñimiento
puede relacionarse con la isquemia de tejido pancreático 4. Causados por problemas relacionados:
que empeora por la estimulación secretoria del pán- a) Úlcera péptica.
creas. Aunque esta hipótesis se muestra atractiva, no se b) Cálculos biliares.
observa un aumento de las presiones de los conductos c) Isquemia mesentérica.
y de los tejidos pancreáticos en todos los pacientes d) Estenosis del intestino delgado.
con pancreatitis crónica dolorosa. Tampoco hay una e) Somáticas, por ejemplo, cicatriz y cirugía.
correlación predecible entre la presión de conducto
pancreático y su aspecto, ni entre el aspecto del con- Los productos de desgranulación de los mastocitos
ducto pancreático y los síntomas clínicos. y el sulfuro de hidrógeno son mediadores potenciales.

Alteraciones de los nervios pancreáticos Esteatorrea


Varios estudios en pacientes con pancreatitis La esteatorrea ocurre en los pacientes con pan-
crónica demostraron un aumento del diámetro y el creatitis crónica cuando la secreción enzimática está
número de nervios intrapancreáticos, focos de células reducida hasta 90 % o más, por tanto, está presente
inflamatorias asociadas con los nervios y ganglios, y en estos pacientes cuando tienen un estadio avanzado
daños de la vaina perineural. Esta ruptura del perineu- de la enfermedad, las células acinares están dañadas
ro puede permitir que los mediadores inflamatorios o destruidas, pero se puede observar también cuando
alcancen los elementos neurales. Otros estudios de- existe un bloqueo total del conducto pancreático que
mostraron un aumento de la sustancia P y del péptido impide la secreción.
relacionado con el gen de la tirocalcitonina (CGRP) En los pacientes afectados de pancreatitis crónica en
en los fascículos interlobulillares e intralobulillares estadios avanzado pueden presentar una mala digestión
en pacientes con pancreatitis crónica, por lo que estos a las grasas, proteínas y carbohidratos, que se manifiesta
dos neurotransmisores pueden estar involucrados en con diarreas caracterizadas por heces voluminosas,
la transmisión del dolor. fétidas o incluso la eliminación de verdaderas gotas
de aceite, lo que la diferencia de otras enfermedades
Otras causas de dolor.
asociadas con malabsorción en que las diarreas son
En los pacientes con pancreatitis crónica con dolor acuosas acompañadas con abundantes gases y cólicos
intenso y sobre todo en los que este empeora deben abdominales. Esto puede deberse a la mejor absorción
considerarse complicaciones que son contribuyentes al de los carbohidratos que está conservada en los pacien-
dolor de la pancreatitis crónica. Entre estas se incluyen tes con pancreatitis crónica e insuficiencia exocrina,
el seudoquiste pancreático, la obstrucción mecánica del no así en las patologías como la enfermedad celiaca.
colédoco o del duodeno, el desarrollo de un adenocar- La mala digestión de las grasas es más grave que
cinoma pancreático y la gastroparesia. la de los carbohidratos y las proteínas, por unas series
Se resumen los mecanismos que explican el dolor de mecanismo que explica esta. La digestión de las
en la pancreatitis crónica: grasas depende en su mayoría de la lipasa y la colipasa
230 Parte XV. Páncreas

pancreáticas, donde la excreción de lipasa pancreática creatitis crónica de largo tiempo de evolución. Cuando
disminuye antes y en forma más marcada a medida aparece la diabetes en los pacientes con pancreatitis
que progresa la pancreatitis crónica respecto a otras crónica es provocada por una destrucción de la células
enzimas propiamente segregadas por el páncreas. La β productora de insulina, así como de las células alfas
lipasa es mucho más sensible a la destrucción ácida productoras de glucagón, mecanismo patogénico dife-
que otras enzimas pancreáticas y ocurre también que rente al de la diabetes mellitus tipo 1, donde ocurre una
queda inactivada cuando el pH duodenal disminuye destrucción selectiva de la células β. La deficiencia de
secundario a la disminución de la producción de bicar- insulina y glucagón en la pancreatitis crónica lleva a un
bonato que se observa en los pacientes con pancreatitis tipo inestable de diabetes. Esta enfermedad y la estea-
crónica; además las sales biliares precipitan e impiden la torrea son frecuentes en las personas con pancreatitis
formación de micelas mezcladas e interfieren aún más crónica avanzada.
con la digestión y absorción de los lípidos. La lipasa Se resumen las manifestaciones clínicas de la pan-
pancreática es más sensible a la digestión y degradación creatitis crónica, donde se incluyen las consecuencias
que otras enzimas digestivas por las proteasas pancreá- de la insuficiencia pancreática endocrina y exocrina
ticas. Además, la lipasa gástrica es capaz de hidrolizar (Fig. 193.2).
menos de 20 % de la grasa alimentaria.
Todos estos mecanismos explican la importancia
clínica que predomina la esteatorrea en estos pacientes.
Se considera que el tiempo promedio en que puede
aparecer la insuficiencia exocrina es prolongado.
Las deficiencias vitamínicas liposolubles que pue-
den ser secundario a la esteatorrea en estos pacientes
es raro, al igual que las deficiencias de vitaminas hi-
drosolubles y otros micronutrientes y de forma general
cuando ocurre se debe a consecuencias propias de la
ingestión inadecuada de alcohol.

Pérdida de peso
La pérdida de peso puede o no estar presente o
suele ser mínima a pesar de la mala digestión en los
pacientes afectados de pancreatitis crónica. En general
los pacientes como mecanismo compensatorio por
las pérdidas ocasionadas por las heces aumentan la
ingestión calórica. El peso se mantiene a pesar de que
el consumo de energía en reposo está aumentado en los
pacientes con pancreatitis crónica. La pérdida de peso
se observa en la evolución de los episodios dolorosos
que impide una alimentación adecuada provocada por
el mismo dolor, las náuseas y los vómitos. El desarrollo
de una enfermedad simultanea justifica una pérdida de
peso en los pacientes con pancreatitis crónica como un
Fig. 193.2. Manifestaciones clínicas de la pancreatitis cró-
sobrecrecimiento bacteriano en el intestino delgado o nica.
lo más complicado, la presencia de un tumor maligno
ya sea de origen pancreático o extrapancreático por lo
que ante una perdida excesiva deben realizarse explo- Hallazgos al examen físico
raciones en búsqueda de esta enfermedad. No es muy manifiesto y carece de elementos que
sean diagnóstico o específicos de pancreatitis cróni-
Diabetes mellitus ca. En las personas que son alcohólicas crónicas con
La insuficiencia endocrina con diabetes secundaria enfermedad avanzada pueden observarse signos de
ocurre tanto como la exocrina en los pacientes con pan- desnutrición y pérdida de peso o signos de hepatopa-
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 231

tías alcohólicas crónicas coexistentes. Al igual puede una elevación crónica de amilasa sérica en pacientes
aparecer en las personas alcohólicas crónicas con asintomáticos o con síntomas inespecíficos es habitual-
pancreatitis crónica ictericia que puede ser provocada mente no atribuible a la presencia de una enfermedad
por la hepatopatía avanzada o por una compresión del pancreática. La determinación de niveles de isoenzimas
colédoco dentro de la cabeza del páncreas. Se puede de amilasa en estos pacientes, incluyendo en algunas
palpar menos frecuentemente el bazo en los casos de series de pacientes con alcoholismo, han demostrado
trombosis de la vena esplénica como consecuencia de que el aumento en la amilasa sérica es usualmente el re-
la pancreatitis crónica. Las manifestaciones pueden sultado de un exceso de amilasa salival tipo isoenzima.
aparecer secundarias a las complicaciones que desa- Algunos pacientes con pancreatitis crónica muestran
rrollan la enfermedad. niveles deprimidos circulantes de isoenzimas de ami-
Ocasionalmente están presentes necrosis subcutánea lasa pancreáticas, así como otras enzimas pancreáticas
distante, ascitis pancreática o íctero. Una masa epigás- como la tripsina. En un estudio en el que la concentra-
trica palpable puede ser un seudoquiste pancreático. En ción de las enzimas séricas fueron comparadas en una
contraste con la malabsorción debido a enfermedad de prueba de función secretora, las enzimas deprimidas
intestino delgado usualmente están presentes signos estuvieron asociadas con pérdida de la función pan-
de deficiencias de vitaminas liposolubles en la piel y creática exocrina a menos de 20 % de lo normal, no
el esqueleto o sistema neuromuscular. obstante, no todos los pacientes con disminución de la
función exocrina a ese grado tuvieron una disminución
Exámenes complementarios de la concentración de enzimas séricas. A pesar del fácil
tratamiento y el costo relativamente bajo de la medición
Los estudios complementarios por lo general expre- de las enzimas séricas, esto no tiene un grado de sensi-
san los cambios morfológicos pancreáticos que ayudan bilidad o especificidad especialmente en la pancreatitis
a confirmar la sospecha clínica. crónica temprana o discreta para ser de utilidad en el
Actualmente las pruebas directas de funcionamiento sentido diagnóstico.
pancreático y la imaginología son los indicadores más
positivos de pancreatitis crónica Bilirrubina sérica y fosfatasa alcalina
Pueden estar elevados debido a un daño hepático
Pruebas hematológicas y uroanálisis
concomitante, no obstante una elevación de la fosfatasa
El examen hematológico rutinario que incluye el alcalina por encima de cinco veces su límite normal,
conteo sanguíneo completo es usualmente normal a aun sin hiperbilirrubinemia, que persiste por más de
menos que la paciente presente diabetes y glucosuria. Si cuatro semanas es una fuerte indicación de estenosis
el paciente se ha diabetizado la glucemia en ayunas está del colédoco causada por la fibrosis que circunda el
elevada y la tolerancia a los carbohidratos es anormal. colédoco distal. Este tipo de íctero obstructivo afecta
La protrombina y el tiempo parcial de tromboplastina de 5 % a 10 % de los pacientes con pancreatitis crónica.
son normales a menos que el paciente tenga un daño Los niveles de bilirrubina sérica son usualmente ligeros
hepático importante. o moderadamente elevados de 3 mg/dLa 10 mg/dL.
Mayores evidencias de obstrucción se obtienen por el
Medición de enzimas pancreáticas en sangre ultrasonido o tomografía computarizada y la confirma-
y orina ción requiere colangiografía retrograda endoscópica
La amilasa y lipasa sérica pueden ser normales o colangiopancreatografía por resonancia magnética.
entre los ataques de dolor, esto se explica por varios
factores: la inflamación aguda puede ser leve y por esto Estimulación exógena
la destrucción acinar puede ser mínima, la entrada de La prueba de secretina más colecistoquinina o su
hidrolasas extracelulares en el torrente sanguíneo o análogo ceruleína es sustancialmente mejor para la
linfático puede estar restringida por fibrosis periacinar detección de la enfermedad de los pequeños conductos:
y periductal y la masa de células acinares puede dis- – Constituye el “prueba de oro”.
minuir a medida que el proceso progrese (inflamación – Sensibilidad y especificidad elevada mayor que
latente en una glándula quemada). Aunque los niveles 90%.
elevados de enzimas están ocasionalmente sostenidos – Invasivo y molesto para el paciente.
por la presencia de seudoquistes o ascitis pancreática, – Largo tiempo de realización.
232 Parte XV. Páncreas

– Costo elevado. para el diagnóstico de pancreatitis severa, comparada


– Uso restringido a centros especializados. con la prueba de estimulación de secretina y cuando se
comparan una con otra.
La aspiración y el análisis del contenido duodenal En pacientes con insuficiencia renal, enfermedades
después de la inyección de secretina se mantienen intestinales yhepática, diabetes mellitus, cirugía gástri-
como la prueba de más valor de la función pancreá- ca, la prueba de bentiromida y la prueba de pancreo-
tica exocrina (“prueba de oro”). Se inyecta secretina lauryl pueden ser falsamente anormales, también previo
por vía endovenosa o subcutánea para estimular la el uso de ciertos fármacos (acetaminofen, benzocaina,
secreción de agua y bicarbonato y se aspira el con- cloranfenicol, lidocaína, fenacitina, sulforamida, tia-
tenido duodenal continuamente, se mide el volumen zidas),así como algunos alimentos (ciruela)que deben
y la concentración de bicarbonato. La inyección de evitarse antes de la prueba. Todo esto se debe a que
colecostoquinina sola con secretina se utiliza para en ambas pruebas las sustancias implicadas deben
determinar las enzimas digestivas, por ejemplo, ami- absorberse en el intestino, metabolizarse en el hígado
lasa, tripsina, lipasa en el jugo duodenal, además del y excretarse por la orina.
volumen y la concentración de bicarbonato. A pesar
de estas modificaciones de la prueba básica de la 3Otras pruebas
secretina, no han demostrado un significativo valor Numerosas pruebas indirectas sin intubación se
en la seguridad diagnóstica. La sensibilidad de la han creado intentando mejorar la sensibilidad para
secretina con o sin colecistoquinina se ha reportado determinar formas más leves de disfunción pancreática
hasta 90 %en algunas series y en otras solo hasta exocrina. Se incluyen la prueba de triglicéridos y coles-
60 %. La prueba de secretina es costosa y depende terol en aliento, la de hidrógeno y dióxido de carbono
técnicamente de intubación duodenal bajo pantalla en aliento, la prueba de Schillingcon doble marcado y
fluoroscópica con personal calificado. Debido a esta las mediciones en plasma de polipéptido pancreático
limitante y al desarrollo de técnicas de imagen en el y aminoácidos. Ninguna mostró superioridad a las
páncreas, la prueba de secretina es raramente usada indirectas. Además muchos requieren isótopos radiac-
en muchos centros. La medida directa de la prueba de tivos o equipamientos muy costosos que disminuyen
secretina en jugo pancreático obtenida por canulación su utilidad.
del conducto pancreático mediante la colangiografía Todo lo anterior sugiere que la prueba ideal de fun-
retrógrada endoscópica no es superior en su evaluación cionamiento pancreático todavía está por desarrollar,
respecto a la intubación duodenal. La prueba de secre- las pruebas directas son aún las de preferencias para
tina puede tener un número significativo de resultados precisar insuficiencia pancreática leve y moderada.
falsos positivos, resultado anormal en ausencia de Para determinar insuficiencia grave con esteatorrea,
enfermedad pancreática identificable. En pacientes muchas tienen sensibilidad apropiada. En esta situación
con enfermedad celiaca, diabetes mellitus primaria, la bentiromida y la pancreolauryl son preferidas debido
gastrectomía Billroth II, cirrosis y probablemente en a su simplicidad.
una variedad de otros desordenes biliares. En los pacientes con sospecha de pancreatitis cróni-
ca, los análisis de laboratorio de rutina pueden revelar
Prueba indirecta, sin intubación, de función diabetes incipiente, hiperlipidemia tipo 1 o hipercal-
secretora cemia. Si hay sospecha de enfermedad autoinmune
Varias pruebas se han desarrollado para evaluar la tipo 1, la serología muestra una concentración elevada
función secretora pancreática sin necesidad de intuba- de γ-globulina, IgG (predominantemente IgG4), y
ción duodenal. Desafortunadamente ninguna ha mos- varios anticuerpos, incluyendo antilactoferrina, an-
trado sensibilidad importante excepto en los pacientes tianhidrasa carbónica, factor reumatoideo y anticuerpo
con daño pancreático muy avanzado con pérdida mayor antinúcleo. Un hepatograma anormal puede evidenciar
que 90 % de la capacidad secretora de la glándula. Estas enfermedad hepática alcohólica, esteatohepatitis no
pruebas incluyen la prueba de bentiromida (NBT-PA- alcohólica, colangitis esclerosante, metástasis de un
BA), la prueba de pancreolauryl (fluorocein de laureato) cáncer de páncreas superpuesto, cálculos biliares o,
y la medición al azar de quimotripsina en muestra de más comúnmente, constricción de los conductos biliares
heces fecales. Son pruebas no invasivas y relativamente intrapancreáticos, lo que ocurre al principio de la pan-
poco costosas, tienen una sensibilidad de 80 % o más creatitis autoinmune.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 233

Malabsorción en pancreatitis crónica: La ecografía endoscópica, permite identificar le-


insuficiencia clínica siones parenquimatosas y de los conductos (criterios
de Rosemont), pero que es observador dependiente y
El diagnóstico de malabsorción debido a insuficien-
tiende a sobrediagnosticar la enfermedad.
cia pancreática exocrina, depende primordialmente de
La resonancia magnética ponderada por difusión
la medición directa de la excreción fecal aumentada
y la tomografía por emisión de positrones no se han
de grasa. Ni la pérdida de peso ni la evidencia de
evaluado adecuadamente en la pancreatitis crónica,
reducción en la secreción de enzimas, constituyen un
mientras la función de la ecografía endoscópica sigue
indicador de insuficiencia debido a la enorme reserva
adquiriendo cada vez más valor, de manera que la
de la glándula, se debe perder aproximadamente 90
ecografía tradicional ha quedado totalmente obsoleta.
% de la función para que se presente la malabsorción
solamente, la cantidad de grasa perdida en las heces Rayos X de abdomen simple
establece definitivamente la esteatorrea y sirve como
Han perdido su lugar en el diagnóstico moderno de
indicador para medir la respuesta a la terapia. Para
pancreatitis crónica, no obstante, en algunos casos las
medir la esteatorrea se recogen heces durante 72 h,
calcificaciones en un rayo X simple de abdomen cuando
aunque puede hacerse en 24 h o 40 h solamente si el
se asocia con esteatorrea, pueden afirmar el diagnós-
paciente tiene frecuentes movimientos intestinales. El
tico y obviar la necesidad de realizar investigaciones
paciente consume 70 g a 100 g de grasas por día. La
adicionales más extensivas. La radiografía abdominal
expulsión de grasa en las haces debe ser de 5 mg a 7 mg
puede mostrar los cálculos del páncreas en 30 % (casi
por días, si hay insuficiencia pancreática se aumenta
100 % de especificidad) de todos los pacientes y en la
en un amplio margen.
mayoría de los pacientes con pancreatitis tropical.
Si el paciente presenta heces grasas después de una
larga historia de ataques de dolor pancreático, este Ultrasonografía transabdominal
enfoque por etapas es innecesario. En este caso, pro-
Es una técnica barata que representa el primer
bablemente cualquiera de estas pruebas sea suficiente
procedimiento usualmente realizado en pacientes con
para el diagnóstico: esteatócrito ácido en materia fecal
sospecha de pancreatitis crónica. Las calcificaciones
(de alto valor), con el que se evita la necesidad de la
ductales y quistes son detectados con alta sensibilidad.
prueba tradicional de tres días); la elastasa fecal (baja);
Otras complicaciones de la pancreatitis como distensión
la recuperación en el aire espirado del C13 proveniente
duodenal o gástrica o dilatación del colédoco también
de una carga de triglicéridos mixtos marcados con C13
puede demostrarse en pacientes con abundantes gases
(baja) o, el tripsinógeno sérico (bajo). Sin embargo,
abdominales o pancreatitis asociadas con cálculos en
para identificar el tipo de enfermedad es necesaria la
el íleo. La visión es a veces limitada lo que hace que el
tomografía computarizada.
procedimiento dependa de la pericia del investigador.
Procedinientos de imágenes Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
No hay pruebas no invasivas que sustituyan a la Se cataloga como la prueba de oro para la determi-
prueba hormonal para el diagnóstico de pancreatitis nación de pancreatitis crónica. Las alteraciones típicas
crónica, por el contrario, se han desarrollado métodos de los conductos pancreáticos en la colangiopancreato-
de imagen sofisticados como la tomografía computa- grafía retrógrada endoscópica son dilatación, estenosis
rizada, la tomografía computarizada multidetector; la y anormalidades de las ramas laterales. La estructura
resonancia magnética y la colangiopancreatografía por ductal también puede usarse para estudiar la enferme-
resonancia magnética, las que proporcionan imágenes dad de acuerdo con la clasificación de Cambridge. Sin
de excelente calidad de los conductos pancreáticos embargo el estadio 1 es a menudo cuestionado como
principales, pero no siempre detectan las alteraciones indicador confiable de pancreatitis crónica. La función
de las ramas colaterales como lo hace la colangiopan- más importante de la colangiopancreatografía retrógra-
creatografía por resonancia magnética y la mejorada por da endoscópica es la identificación de anormalidades
secretina, que también muestra el llenado duodenal por estructurales como estenosis del conducto, cálculos o
las secreciones pancreatobiliares y esta última es más quistes que pueden ser tributarios de tratamientos y, la
segura que la colangiopancreatografía por resonancia exclusiva, si es posible de un cáncer pancreático. Debe
magnética estándar para identificar la enfermedad en señalarse que la colangiopancreatografía retrógrada
los conductos pequeños. endoscópica puede ser eventualmente sustituida por
234 Parte XV. Páncreas

una alternativa no invasiva como la colangiopancrea- Un criterio mayor o tres o más criterios menores son
tografía por resonancia magnética para el diagnóstico considerados diagnósticos.
de la pancreatitis crónica. No hay ningún algoritmo de investigación adecuado
en todo el mundo para el diagnóstico de pancreatitis
Ultrasonido endoscópico crónica, porque en gran parte depende de los recursos
Su función en el diagnóstico temprano de la pancrea- disponibles y de la experiencia, pero no se recomien-
titis crónica no está totalmente definido. La técnica está da utilizar una batería de pruebas para el diagnóstico
considerada como el procedimiento más sensible para presuntivo de pancreatitis crónica porque puede dar
detectar la enfermedad. Hay tres criterios que permiten muchos resultados falsos positivos y generar gran an-
definir la pancreatitis crónica por este medio: siedad en el paciente. 
– Engrosamiento aumentado o reducido del páncreas.
– Aumento de las lobulaciones pancreáticas. Complicaciones
– Alteraciones de conductos pequeños y gruesos.
Entre las complicaciones de la pancreatitis crónica,
Se acepta que la ausencia de estos criterios descarta las más importantes son:
una pancreatitis crónica, mientras que si están presentes – Seudoquiste pancreático.
indican fuertemente el diagnóstico. El valor de menos – Hemorragia.
de dos criterios es poco confiable. Independiente de – Seudoaneurisma.
la variabilidad de los observadores hay que tener en – Trombosis de la vena porta o esplénica.
cuenta que el hecho de la ecoestructura no homogénea – Obstrucción del colédoco.
no es un signo específico de pancreatitis crónica y puede – Obstrucción duodenal.
– Fistulas pancreáticas.
verse también en un páncreas normal especialmente en
– Cáncer pancreático.
la edad avanzada.
– Dismotilidad.
Diagnóstico de cáncer pancreático
Seudoquiste pancreático
en la pancreatitis crónica
Los seudoquistes son consecuencia de la digestión
Los pacientes con pancreatitis crónica tienen un
enzimática y ocurren en alrededor de 25 % de pacien-
riesgo aumentado de desarrollar cáncer pancreático. tes con pancreatitis crónica. Son muy frecuentes en la
Concretamente ningún procedimiento de imagen pancreatitis crónica alcohólica.
puede detectar un cáncer en pacientes con pancreatitis El seudoquiste tiene como síntoma principal la
crónica. Un estudio reciente reporta que 2-(18)F fluo- presencia de dolor abdominal, presente en 70 % a
ro-desaxy-D-glucosa positiva puede diferenciar cáncer 90 % de los pacientes. Con frecuencia hay presentación
pancreático de proceso inflamatorio con una sensibili- de una masa palpable acompañada de náuseas y vómitos
dad de 91 % y especificidad de 87 %. por compresión del estómago y el duodeno, íctero por
Se resumen los criterios mayores y menores para el compresión del colédoco.
diagnóstico de pancreatitis crónica: En la mitad aproximada de estos pacientes se apre-
– Criterios mayores: cian elevaciones de los niveles séricos de amilasa, cerca
• Calcificaciones. de 50 % de los casos y una elevación persistente de
• Cambios histológicos típicos (fibrosis en biopsia la amilasa puede ser un indicio de la presencia de un
quirúrgica). seudoquiste. El diagnóstico se estable, por lo general,
– Criterios menores: con el uso de las imágenes como ecografía, tomografía
• Dolor abdominal típico en paciente enolista. axial computarizada o resonancia magnética, e incluso
• Ultrasonido endoscópico/tomografía axial com- como endoscopia. Con la tomografía axial computa-
putarizada compatible. rizada puede verse claramente la cápsula que orienta
• Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica sobre la madurez del seudoquiste y su relación con el
/colangioresonancia magnética nuclear compa- estómago o con el duodeno, información que puede ser
tible. útil para elegir el tratamiento.
• Insuficiencia exocrina. No es necesario el uso de la colangiopancreatografía
• Insuficiencia endócrina. retrógrada endoscópica para fines diagnósticos aunque
• Respuesta al reemplazo enzimático. un alto porcentaje de los seudoquistes tienen comuni-
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 235

cación con el conducto. La colangiopancreatografía de forma espontánea hacia el intestino o alcanzar el


retrógrada endoscópica tiene la posibilidad de provocar duodeno a través del conducto (hemosoccus pancreá-
infección del seudoquiste, por lo que no debe realizarse tico), los sangrados de vasos pequeños generalmente
sin la administración previa de antibiótico. La evolución son de poco volumen.
de los seudoquistes que complican la pancreatitis cónica,
no está totalmente definida. En general se habla de com- Seudoaneurisma
plicaciones en 5 % a 40 % de los casos. En diferentes Como consecuencia de la digestión enzimática y las
estudios se reporta un tratamiento conservador en cerca presiones ejercidas por un seudoquiste se forman aneu-
de la mitad, lo que estuvo en relación con el tamaño del rismas en la pared de una arteria. Estos pueden romperse
seudoquiste, los que sobrepasan los 6 cm de diámetro en el seudoquiste o en una visera vecina, la cavidad
con frecuencia requieren de tratamiento quirúrgico o peritoneal o el conducto pancreático. Los sangrados
endoscópico por complicaciones propias. En los de ta- provenientes de seudoaneurismas pueden complicar
maño inferior y asintomáticos o con síntomas mínimos, hasta 100 % de todos los casos de pancreatitis crónica
generalmente se hace tratamiento conservador con con seudoquiste y observarse en un alto porcentaje de
seguimiento apropiado. Al contrario de lo que sucede pancreatitis crónica sometido a angiografía. Pueden
con las colecciones que se observan en las pancreatitis involucrarse varias arterias, pero generalmente se afecta
agudas, los seudoquistes de la pancreatitis crónica ya es- la arteria esplénica. Este sangrado por seudoaneurisma
tán maduros en el momento del diagnóstico y tienen una es de una alta mortalidad, puede ser lento o intermitente
cápsula visible en la tomografía axial computarizada. o agudo y masivo. Se traduce por dolor abdominal, au-
Los seudoquistes representan 90 % de las acumu- mento del seudoquiste, anemia sin causa aparente, si es
laciones quísticas asociadas con el páncreas, pero no sangrado masivo hay presencia de sangre abundante. La
todo lo que se visualiza en la tomografía axial com- tomografía axial computarizada es útil en la definición
putarizada son seudoquistes. Otras acumulaciones del origen del sangrado por la visualización de material
quísticas pueden simular el aspecto, en particular las de alta densidad dentro del seudoquiste.
neoplasias quísticas que deben sospecharse cuando un
estudio imaginológico por otras causas no sospechadas Trombosis de la vena porta o esplénica
de pancreatitis o falta de riesgo para esta. Se aprecia
una imagen de acumulación quística generalmente en El sangrado por várices puede complicar los pacien-
mujeres asintomáticas de mediana edad, la visualiza- tes con pancreatitis crónica debido a cirrosis alcohólica
ción de nodulaciones o tabique internos en la imagen con trombosis de la vena esplénica más frecuente que
quística es una probabilidad que sugiere, en gran me- la trombosis de la porta.
dida, una neoplasia maligna quística, muchas de las
que son curables por extirpación. Los seudoquistes Obstrucción del colédoco
complicados requieren tratamiento principalmente si La porción distal del colédoco en su trayecto por
aumentan de tamaño. la cara posterior de la cabeza pancreática, los cuadros
inflamatorios y fibróticos y los seudoquistes que en esta
Hemorragias porción de la glándula pueden comprimir el colédoco y
La hemorragia en la presencia de una pancreatitis ocasionar alteraciones de las pruebas de funcionamiento
crónica puede deberse a múltiples causas, algunas no hepático, ictericia, dolor biliar o colangitis. Aproxima-
relacionadas directamente con la pancreatitis crónica, damente en 10 % de los casos de la pancreatitis crónica
como el desgarro de Mallory-Weis, esofagitis alco- se presenta la obstrucción del colédoco.
hólica, ruptura de várices esofágicas en una cirrosis En el diagnóstico diferencial del compromiso biliar
concomitante, otras si se deben directamente al proceso de la pancreatitis crónica debe tenerse en cuenta que
pancreático como son la hemorragia intraquística, un ni las pruebas de la función hepática ni la presencia de
seudoaneurisma o una trombosis de la vena porta o íctero son específicas, porque estos pacientes con fre-
esplénica. cuencia son alcohólicos y pueden tener daño hepático
El sangrado puede originarse en la pared del seudo- (cirrosis concomitante), e incluso las alteraciones ra-
quiste por lesión de los vasos (venas, arterias y capi- diológicas pueden ser relacionadas con otras patologías
lares), lo que aumenta el tamaño del seudoquiste y la intrínsecas de los conductos como son las neoplasias.
expansión agrava el daño de los vasos. La sangre puede Salvo las colangitis, las pautas para el tratamiento no
permanecer dentro del seudoquiste o descomprimiese están definidas.
236 Parte XV. Páncreas

Es importante el uso de la colangiopancreatografía tratamiento endoscópico es más eficaz cuando la fistula


retrógrada endoscópica como diagnóstico para definir sienta en la cabeza o el cuerpo del páncreas, que en los
las características de la estenosis que puede ayudar a situados en la cola.
descartar la naturaleza maligna.
Cáncer pancreático
Obstrucción duodenal
En la pancreatitis crónica hay un factor de riesgo
Es una complicación que se observa en cerca de importante para la aparición de un adenocarcinoma.
5 % de los pacientes con pancreatitis crónica. El pro- Este riesgo existe por todas las formas de pancreatitis
ceso fibrótico progresivo, principalmente de la cabeza crónica y se decide que en general fluctúan en 4 %. En la
pancreática se extiende al duodeno. En su mayoría son pancreatitis hereditaria es mucho mayor y puede llegar
pancreatitis de causa alcohólica. Aparecen síntomas hasta 40 % de los casos. Todavía en la actualidad no hay
como náuseas, vómitos, dolor abdominal y pérdida de una forma confiable para diferenciar una pancreatitis
peso, puede coincidir con la obstrucción del colédoco. crónica de una complicada con un cáncer. Los síntomas
En estos casos el estudio barritado gastrointestinal alto clínicos pueden ser similares, las imágenes pueden
tiene un valor óptimo e incluso superior a la endosco- ayudar: ultrasonido, tomografía axial computarizada,
pia para precisar el grado de estenosis. A veces mejora colangiopancreatografía retrógrada endoscópica, pero
con la resolución por cese de la inflamación, por lo que suelen ser incapaces de diferenciarlo. El ultrasonido
puede ser útil un ensayo terapéutico medicamentoso. endoscópico puede ser superior a la tomografía axial
En caso de persistir se requiere tratamiento quirúrgico, computarizada, en precisar lesiones menores de 2cm,
ya sea por drenaje con gastroyeyunostomía que puede y la posibilidad de tomar biopsia de una lesión sospe-
acompañarse de drenaje del colédoco o del pancreático chosa. Algunos marcadores tumorales como el CA19.9,
(pancreatoyeyunostomía lateral). En presencia de una suele usarse para el adenocarcinoma pancreático y está
masa inflamatoria grande puede, en casos seleccionados, elevado hasta en 70 % de los casos. No obstante, la
resecarse la cabeza pancreática, respetando el duodeno. obstrucción biliar y la colangitis también pueden alterar
los niveles de este marcador. También en un elevado
Fistula pancreática externa porcentaje están elevadas las mutaciones del K-ras,
Generalmente ocurren como consecuencia del tra- aunque su utilidad está disminuida por la existencia de
tamiento quirúrgico o percutáneo de una pancreatitis mutaciones similares en la pancreatitis crónica. A veces
crónica o de un seudoquiste. En algunos casos se logra es necesaria la laparotomía para precisar presencia o
el cierre de la fistula con supresión de vía oral por ausencia de carcinoma pancreático coexistente.
nutrición parenteral. En casos necesarios se utiliza un Se han señalado la presencia de canceres extrapan-
tratamiento endoscópico o quirúrgico. También se ha creáticos en asociación con la pancreatitis crónica. Debe
utilizado la octreotide de forma prolongada antes de tenerse en cuenta que los pacientes con pancreatitis cró-
decidir tratamiento quirúrgico. nica tienen factores de riesgo importantes por el abuso
de alcohol y tabaco. Se reportan canceres en particular
Fistula pancreática interna los de aparato digestivo y pulmones.
En el transcurso de una pancreatitis crónica pueden
Dismotilidad
aparecer fistulas internas como consecuencia de la
ruptura de un seudoquiste. El líquido puede alcanzar La gastroparesia y la dismotilidad antroduodenal
la cavidad peritoneal, provocar ascitis pancreática o se encuentra con frecuencia en la evolución de la
en el espacio pleural y provocar derrame pleural pan- pancreatitis crónica. En esto puede estar relacionado
creático ocasionando distensión abdominal o síntomas la inflamación perigástrica, los cambios hormonales,
respiratorios. Casi siempre aparecen en la pancreatitis como por ejemplo, la colecistoquinina y también el
crónica avanzada, pero a veces y en particular en los efecto colateral del uso de analgésicos narcóticos.
alcohólicos puede no haber antecedentes bien definidos. Clínicamente la paresia gástrica es la más importante
En el líquido se hallan niveles muy elevados de amilasa, porque genera síntomas, a veces indistinguibles de los
lo que es un dato importante en el diagnóstico. El tra- de la pancreatitis crónica e interferir con el empleo de
tamiento conservador implica nutrición parenteral con las enzimas. La presencia de síntomas como repletura,
supresión de la vía oral, paracentesis o toracocentesis y náuseas, vómitos y pérdida de peso pueden relacionarse
uso de octreótido con resultado eficaz en ocasiones. El con una gastroparesia.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 237

Pronóstico un carcinoma pancreático. También puede sugerir una


obstrucción duodenal o del colédoco, aunque a veces
La pancreatitis crónica común tiene una alta mor- es necesario radiología alta baritada gastrointestinal o
talidad, con una tasa cercana a 50 % dentro de los 20 la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica para
a 25 años del comienzo de la enfermedad, como resul- definir estos procesos. La tomografía axial computari-
tado de las complicaciones de un ataque, coexistiendo zada puede brindar ayuda importante para identificar
enfermedad o el efecto del alcoholismo. Los pacientes alteraciones de la estructura como es la dilatación
con pancreatitis crónica tienen mayor riesgo de cáncer del conducto. Precisar si hay pancreatitis crónica con
de páncreas, responsable de 3 % de las muertes. Aun- conducto dilatado (conducto grande) o no, es muy im-
que el riesgo de cáncer de páncreas es especialmente portante, para elegir el tratamiento del dolor.
elevado en los pacientes con pancreatitis hereditaria, no Si no se identifican estas complicaciones especí-
tienen un riesgo mayor de mortalidad que la población ficas el clínico decide opciones terapéuticas menos
general. La pancreatitis autoinmune tampoco afecta la específicas:
supervivencia a largo plazo. – Se decide administrar analgésicos con o sin agentes
auxiliares, por ejemplo, antidepresivos.
Tratamiento – Suspender ingestión de alcohol.
– Disminuir la presión intrapancreatica.
Objetivos terapéuticos
– Suprimir la secreción pancreática: enzimas pancreá-
Los objetivos terapéuticos para la pancreatitis cróni- ticas sin cubierta entérica o junto con supresión del
ca son el alivio del dolor agudo y crónico, la detención ácido gástrico y octeótrido.
del proceso patológico para evitar la repetición de los – Aliviar la obstrucción del conducto: colocación de
ataques, la corrección de las consecuencias metabólicas stents, retiro de cálculos y descompresión quirúrgica.
como la diabetes y la malnutrición y, el tratamiento de – Modificar la trasmisión nerviosa.
las complicaciones y los problemas sicosociales. El – Bloqueo del plexo celiaco.
tratamiento endoscópico, la cirugía o ambos, solo son – Esplecnisectomía torascoscópica.
necesarios cuando el tratamiento médico óptimo no – Eliminar parénquima pancreático.
alivia el dolor ni consigue tratar las complicaciones – Resección de la cabeza pancreática (técnica de Frei,
específicas. Berger o Whipple), pancreatectomía total o subtotal.
Es importante el apoyo emocional del paciente, en
particular si sufre el primer ataque. Se les debe acon- Analgésicos
sejar el abandono del alcohol y los cigarrillos, aunque La mayoría de pacientes con pancreatitis crónica
no hay evidencia de que estas medidas hagan más requieren algunos tipos de analgésicos utilizados para
lenta la progresión de la enfermedad. También puede el dolor según su intensidad:
ser necesario derivar al paciente a sicopatología. Es – Leve: antiinflamatorios no esteroideos:
importante la continuidad del tratamiento para ganar la • Paracetamol.
confianza del paciente y minimizar el riesgo de adicción • Dipirona.
a los narcóticos. • Diclofenaco
• Ibuprofeno.
Dolor abdominal • Inhibidor Cox2.
El objetivo primordial del tratamiento al dolor ab- – Moderado: opioides débiles:
dominal es disminuir la hipertensión ductal y disminuir • D-propoxifeno.
la secreción pancreática. • Codeína.
Al evaluarlo inicialmente debe tratarse de indivi- • Tramadol.
dualizar las causas que tienen tratamiento específico – Severo: opioides fuertes:
como son: el seudoquiste pancreático, la compresión • Buprenorfina.
del duodeno o del colédoco, el carcinoma pancreático • Morfina.
superpuesto y otros menos frecuentes como la gastro-
paresia. El método de imagen utilizado para este fin Los pacientes con ataques esporádicos no requieren
es la tomografía axial computarizada ya que permite la administración regular de analgésicos, la que debe
identificar acumulaciones de líquidos, seudosquistes seguir los lineamientos de la Organización Mundial
y lesiones ocupantes que pueden ser compatibles con de la Salud.
238 Parte XV. Páncreas

Algunos pacientes se tratan con paracetamol o los escape a su desnaturalización y estos resulten en mayor
antiinflamatorios no esteroideos o ambos, aunque la liberación de niveles más altos de colecistoquinina en
mayoría requiere agentes más potentes incluso opiá- plasma, lo que estimula fuertemente la secreción pan-
ceos, alrededor de 10 % a 30 % hacen adicción, pero creática, lo que provoca dolor por aumento de la presión
no deben evitarse estos riesgos. Si el dolor es intenso y o por penetración de las enzimas en el intersticio si hay
ser está obligados a calmarlo, esto debe controlarse por una obstrucción del conducto. Administrando enzimas
tratamiento médico específico que controle las recetas, por vía oral, puede restablecerse la supresión normal
la dosis y con consultas periódicas. por retroalimentación de la secreción pancreática al
A veces es necesario utilizar opiáceos menos proporcionar proteasas de serina activadas al duodeno
potentes como propoxifeno o el tramadol que tienen que provocan desnaturalización del péptido liberador
buenos resultados como analgésicos y menos efectos de colecistoquinina.
colaterales con menos probabilidad de crear abuso y Numerosos trabajos apoyan o le restan valor a estos
dependencia. Cuando es necesario usar agentes más conceptos, y algunos consideran que la magnitud del
potentes como la morfina o el buprenorfina debe aumen- efecto sobre la secreción puede variar de una perso-
tarse la dosis de forma gradual para lograr un control na a otra. También hay ensayos a dobles ciego para
aceptable del dolor, en lugar de obtener alivio completo. determinar la efectividad de las enzimas por vía oral
Es de notar que estos pacientes con frecuencia están para aliviar el dolor. Se observó mejor resultado con
deprimidos con un umbral del dolor muy bajo y el uso enzimas sin cubierta entérica, posiblemente porque la
de antidepresivos tricíclicos tiene efectos beneficiosos porción sensible a la retroalimentación del intestino
directos sobre el dolor y aumentan la potencia de los
delgado sea la porción proximal y las preparaciones
opiáceos. Se reporta también que estos fármacos pueden
con cubierta entérica se adhieren fundamentalmente en
empeorar el dolor mediante la inducción de la desgra-
la porción distal del intestino delgado. Una forma para
nulación de los mastocitos y por otra parte, causar una
tener mejores resultados es administrar la supresión de
paresia gástrica con constipación.
ácido para evitar la degradación de los preparados sin
Se han hecho varios estudios para precisar la dosis
cubierta entérica, por el ácido gástrico.
más efectivas y valorando su eficacia contra placebo.
Se ha planteado que con una dosis de 200 µg por vía Octeótrida
subcutánea tres veces al día, se logró un alivio del dolor
de 60 % a 65 % como promedio comparado con 40 % Los análogos sintéticos de la hormona somatostati-
de promedio obtenido con placebo. na disminuyen la secreción pancreática y reducen los
niveles de colecistoquinina en plasma.
Supresión de la secreción pancreática Se piensa en que en los pacientes con enfermedad
La supresión de la secreción pancreática como un de los conductos pequeños, las células acinares del
método para reducir el dolor presupone que hay un páncreas están bajo el estímulo constante de la cole-
aumento de la secreción o de una secreción normal o cistoquinina, debido a que la liberación de proteasas
subnormal en algún grado de obstáculo al flujo lo que pancreáticas en el duodeno permite mejorar la super-
provoca un aumento de la presión intraductal o del vivencia de un péptido liberador de colecistoquinina en
parénquima, hay evidencia en modelos animales y en la mucosa duodenal. Sobre esta base, se han probado
humanos que el aumento de la presión del conducto o tratamientos con enzimas pancreáticas orales (sin cu-
de esos tejidos se asocia con dolor y también de que bierta entérica), octreotide subcutánea y, un antagonista
la reducción de la presión provoca disminución del del receptor de colecistoquinina-A, la loxiglumida. Sin
dolor. Hay varios tratamientos incluida la supresión de embargo, este tema se presta al debate, la explicación
la secreción que tienen como objetivo la reducción de de que estas medidas permiten el “reposo” del pán-
la presión pancreática. creas se contradice con el hallazgo de que el aparato
de exocitosis está casi paralizado en los ataques. Otras
Enzimas pancreáticas explicaciones pueden ser que tales tratamientos actúan
Hay estudios que demostraron que las proteasas atenuando el efecto de la colecistoquinina sobre las vías
pancreáticas presentes en el duodeno pueden suprimir del dolor en el sistema nervioso central o aminorando
la secreción pancreática. La falta de liberación de pro- el estrés electrofílico.
teasas de serina en el duodeno permite que una mayor Estas personas pueden lograr los mismos efectos que
cantidad de péptidos liberador de colecistoquinina el uso de las enzimas para el alivio del dolor.
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 239

Los ensayos con enzimas pancreáticas para alivio ricos en antioxidantes, teniendo la precaución de
del dolor son escasos. Se usan dosis altas de enzimas, no desnaturalizarlos con cocciones a temperaturas
sin cubierta entérica equivalentes a 30 000 U de lipasa elevadas. Es esencial el monitoreo sanguíneo para
en las comidas y por la noche lo que representa cuatro a asegurar que la concentración de glutatión plasmático
nueve píldoras cuatro veces al día. En los estudios con y eritrocíticos no aumente y las concentraciones de
mayor efectividad en el alivio del dolor se comprobó micronutrientes prescritos no sean excesivas, porque
que los efectos fueron más beneficiosos en los pacientes pueden comprometer la función fisiológica de los
con pancreatitis crónica menos avanzada (pancreatitis radicales libres de oxígeno. Las concentraciones de
crónica de conducto pequeño sin esteatorrea), las mu- homocisteína y de vitaminas B6, B12 y ácido fólico,
jeres y en los que tienen pancreatitis crónica idiopática. que sirven como cofactores enzimáticos reguladores
En las pancreatitis crónicas avanzadas de conducto de la eliminación de homocisteína, ya que facilitan su
ancho, en especial la pancreatitis alcohólica avanzada, transmetilación posterior a metionina o aseguran su
no se han reportado éxitos en el tratamiento con enzimas transulfuración con retorno a la metionina. Se destaca
para alivio del dolor. el aumento de homocisteína hallado en personas de
Soweto (Sudáfrica) bebedores de 100 g de alcohol por
Supresión de alcohol día durante muchos años, un grupo tradicionalmente
No está demostrado firmemente que el abandono del considerado como de alto riesgo de pancreatitis crónica.
alcohol mejore el dolor. El uso continuado del alcohol  Se recomienda hacer el tratamiento durante 10 semanas
acelera la disfunción pancreática, pero ni la abstinencia antes de optar por cualquier procedimiento invasivo
completa evita la progresión. En algunos estudios se para atenuar el proceso patológico. Suele ser necesa-
reportan mejorías, en otros no se confirman. Algunos rio un tratamiento completo de seis meses, seguido
hablan de mejoría y disminución de las recidivas. de una reducción gradual de la dosis, basado en los
datos bioquímicos y la sintomatología del paciente.
Antioxidantes El 10 % de los pacientes no responde al tratamiento,
El daño provocado por los radicales libres de generalmente debido al incumplimiento (por ejemplo,
oxígeno se piensa que puede ocasionar dolor en la pacientes alcohólicos) o a la presencia de un quiste o
pancreatitis crónica y muchos pacientes como los al- seudoquiste de gran tamaño, por lo demás, se logró el
cohólicos pueden tener deficiencias de micronutrientes control de los síntomas mediante el suplemento con co-
y oligoelementos considerados como antioxidantes. Se lina para aumentar el aporte de metilo. Por otra parte, el
ha reportado beneficio en el uso de selenio, β caroteno, tratamiento con micronutrientes no tiene efectos sobre
vitaminas C y E, y metionina, pero estos ensayos nece- otras condiciones dolorosas que puedan dar lugar a un
sitan más confirmación. diagnóstico erróneo de pancreatitis crónica (inédito),
Este tratamiento está destinado a aportar los me- una vez validados estos hallazgos, pueden ser la base de
tilos y tioles esenciales para la exocitosis y al mismo un ensayo terapéutico con pacientes cuyo diagnóstico
tiempo protegerla contra el ataque electrofílico, como todavía es dudoso después de completar los estudios.
los radicales libres de oxígeno derivadas del CYP o Por último, cada vez hay más pruebas que apoyan la
las especies de xenobióticos activos. Seis trabajos han idea de que el suplemento diario de micronutrientes
demostrado que los micronutrientes controlan el dolor puede abortar el desarrollo de una pancreatitis crónica
y los ataques en los pacientes con pancreatitis crónica. en grupos o aún en poblaciones en situación de riesgo
Los estudios de Manchester, en Reino Unido, de contraer la enfermedad.
comprobaron que las formulaciones con microonu- El tratamiento con micronutrientes es mejor para
trientes deben incluir metionina, vitamina C y selenio controlar el dolor y mejorar la calidad de vida que los
(evaluado según las concentraciones en sangre). La tratamientos convencionales. Por otra parte, a largo
vitamina E (necesaria hasta la detención de la estea- plazo, este tratamiento puede frenar la progresión de
torrea) y el betacaroteno fueron estudiados, pero no la enfermedad. Excluyendo a la pancreatitis autoin-
están disponibles en preparaciones comerciales. La mune típica, que puede ser tratada con esteroides, el
combinación de todos estos factores ha mejorado el tratamiento con micronutrientes es efectivo, indepen-
número de ataques, las internaciones y periodicidad dientemente de la causa (incluyendo las mutaciones en
del dolor. Este tratamiento no tiene efectos secundarios PRSS1, regulador de la conductancia transmembrana
importantes pero el betacaroteno tiende a suspenderse en la fibrosis quística y SPINK), la duración de la
por razones estéticas. Se recomiendan los alimentos enfermedad o la anatomía crónica (calcificación de
240 Parte XV. Páncreas

los conductos grandes o enfermedad de los conductos requieren una operación, en comparación con casi
pequeños) y también cuando existe una masa inflama- 25 % de los pacientes seguidos a largo plazo por
toria calcificada. Por el contrario, los estudios clínicos el médico especialista clínico. El tratamiento con
han comprobado que los antioxidantes alopurinol y micronutrientes parece reducir sustancialmente la
curcumina no son efectivos en la pancreatitis crónica. necesidad de cirugía. Los objetivos de la cirugía son
Están en vías de ejecución dos ensayos multicéntricos la descompresión de los conductos obstruidos (para
de una formulación del Reino Unido que contiene los aliviar el dolor) y la preservación del tejido pancreático
micronutrientes mencionados. y los órganos adyacentes (para preservar la función),
al mismo tiempo que se reconoce que la cabeza del
Dieta en el tratamiento del dolor páncreas es el marcapasos de la pancreatitis crónica.
El dolor en la pancreatitis crónica es fundamental- En muchos pacientes, la operación más simple, la
mente inducido por una dieta grasa y el abuso alcohó- pancreaticoyeyunostomía lateral, proporciona un ali-
lico. Muchos pacientes con dolores recurrentes tienen vio inmediato del dolor, pero este tiende a reaparecer
afectaciones sociales y disminución de calidad de vida. con el paso del tiempo. La pancreatectomía distal, al
Las guías de la Asociación Americana de Gastroentero- igual que la pancreaticoyeyunostomía, aborda el pro-
logía recomiendan una dieta baja en grasa, analgésica blema de la enfermedad en la cabeza del páncreas, la
y narcótica, y supresión del alcohol para el tratamiento que puede continuar deteriorándose. Por otra parte, la
del dolor. Los japoneses informan de mejoría en dos pancreatectomía distal puede provocar la eliminación
casos de pacientes con pancreatitis crónica calcificante de la parte funcionalmente más activa de la glándula.
alcohólica que tuvieron dolor considerados como intra- La pancreaticoduodenectomía brinda un buen alivio
tables que requirieron tratamiento quirúrgico debido a del dolor, pero es una operación de gran envergadu-
seudoquiste y calcificaciones, que requirieron bloqueo ra. Se indica en la pancreatitis del surco, cuando hay
del plexo celiaco y gastroyeyunostomía en un caso, y obstrucción duodenal o cuando no se puede excluir la
recepción de la cola en otro y al recidivar el dolor y los neoplasia antes de la operación.
cálculos, los que tuvieron alivio del dolor con una dieta La resección de la cabeza del páncreas con preserva-
oral ambulatoria basada en una fórmula comercial die- ción del duodeno, combinada cuando es apropiado con
tética elemental de aminoácidos, muy escasa cantidad la pancreaticoyeyunostomía lateral ha hecho grandes
de grasa, vitaminas, oligoelementos y dextrina como progresos: solo 8,7 % de los pacientes continuó con
fuente de energía. Al cabo de una semana de tratamiento dolor de páncreas a una mediana de seguimiento de 5,7
desapareció el dolor. años, 93 % de estos pacientes tenía dolor pancreático
antes de la operación. La operación se ha simplificado
Tratamiento de la esteatorrea y la diabetes por el tallado de un cono invertido de la cabeza del
El tratamiento de la esteatorrea de la pancreatitis páncreas, lo que permite que la cavidad y el conducto
comienza con 30000 U de lipasa por comida en una pre- distal drenen en un asa yeyunal, se elimina así la masa
paración enzimática ácido resistente. En los pacientes compleja de conductos obstruidos y de tejido infla-
que no responden, están indicados una dieta hipograsa matoria que suelen hallarse dentro de la cabeza de la
(50 g/día a 75 g/día) con aumentos paulatinos del con- glándula. Posteriormente se agregó otra simplificación,
tenido graso, inhibidores de la bomba de protones o adecuada para los pacientes en los que hay poco para
una combinación de estos. Es conveniente constatar el hacer en relación con la dilatación del conducto: se
estado de las vitaminas liposolubles. El objetivo prin- extrae una porción de la cabeza del páncreas con un
cipal en el tratamiento de la diabetes en pacientes con instrumento semejante a una cuchara de helado, para
pancreatitis crónica es evitar la hipoglucemia causada dejar un borde delgado de páncreas, lateral y posterior.
por la deficiencia de glucagón, se prefieren los regíme- El dolor mejoró en 55 % de los pacientes después de
nes con insulina corriente. 41 meses de seguimiento.
La evaluación precisa de los méritos de estas opera-
Tratamiento quirúrgico ciones para la pancreatitis crónica con dolor es entorpe-
cida por la ausencia de consenso sobre las indicaciones
El tratamiento de la pancreatitis crónica fue exclu- quirúrgicas, los detalles de las técnicas operatorias
sivamente quirúrgico durante largo tiempo. y los métodos utilizados para medir los resultados.
Históricamente, casi 50 % de los pacientes con Sin embargo, no hay duda de que la seguridad de las
pancreatitis crónica referidos a las clínicas de cirugía operaciones conservadoras (por ejemplo, la pancreati-
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 241

coyeyunostomía lateral combinada con la extirpación esplacnicectomía toracoscópica puede proporcionar


limitada de la cabeza del páncreas) ha mejorado: la un buen alivio del dolor inicial, pero en 50 % de los
mortalidad operatoria, de casi el 5 % con la resección pacientes el dolor se repite a los 15 meses.
tradicional de la cabeza del páncreas, ha caído al 0 % La terapia endoscópica necesita de un team work
a 3 % y la morbilidad se ha reducido a la mitad. Parece que incluye operador, anestesista para realizar la colan-
que la ventaja que se obtiene con la pancreatectomía giopancreatografía retrógrada endoscópica, equipo de
total con trasplante de islotes es poca o nula. rayos X con posibilidad de fluoroscopia y magnificación
de imágenes, duodenoscopio de canal ancho(4,2 mm)
Tratamiento endoscópico que permite la inserción de prótesis de alto calibre(-
10FR), así como una amplia variedad de instrumentos
Recientemente la terapia endoscópica se ha usado
auxiliares: guía metálica, hidrofílica, esfinterótomos,
ampliamente como una opción primaria en la tera-
cesta de dormía, balones dilatadores y bujías dilata-
péutica, utilizada inicialmente para drenaje de quistes
doras(5r11.5fr) y también guías no muy finas(0,025
pancreáticos y seudoquistes, se ha adaptado a las es-
pulgadas), esfinterótomos punteros y extractores de
tenosis biliares y pancreáticas. El acceso a los ductos
Sohedra. La extracción de los cálculos impactados
pancreáticos mediante la esfinterotomía pancreática
en el conducto pancreático necesita fragmentación
fue la primera reportada. Posteriormente, la coloca- con litotricia antes de la extracción endoscópica. El
ción de prótesis biliares, la extracción de cálculos de tratamiento endoscópico también necesita drenaje
la vía biliar se extendió a los ductos pancreáticos. El mesopancreático y prótesis pancreática de polietileno
fallo en la extracción de litiasis pancreáticaen algunas o teflón, usualmente se utilizan prótesis rectas con flaps
ocasiones obligó a buscar nuevos procedimientos y proximales y distales para evitar migraciones externas
así surgió la aplicación de la litotricia extracorpórea o internas, otras prótesis con pigtail simples o dobles
en páncreas, la dilatación de las estenosis pancreáticas también pueden usarse.
se mejoró forzando con un nuevo dispositivo. El uso
de la endosonografía permitió guiarse para el bloqueo Esfinterotomía pancreática endoscópica
celiaco, la gastrocistostomía, la duodenocistostomía y La esfinterotomía pancreática es el primer paso para
la pancreatogastrostomía. A pesar del uso cada vez más acceder al conducto pancreático, se hace generalmente
frecuente del tratamiento endoscópico sus indicaciones una esfinterotomía corta (5 mm a 6 mm) orientada a las
son todavía debatidas. 13 h con un corte limpio. Las estenosis del conducto
De las muchas indicaciones potenciales para el justifican el uso de guías finas (0,025 pulgadas) y es-
tratamiento endoscópico de la pancreatitis crónica, dos finterótomos especiales. No es indispensable realizar
son indiscutibles: en primer lugar, la esfinterotomía pan- esfinterotomía biliar, como se hace habitualmente al
creática endoscópica se puede utilizar para facilitar el inicio, porque se demostró que la esfinterotomía pan-
drenaje transmural de los seudoquistes que no están co- creática sola no provoca estenosis biliar secundaria.
nectados al conducto pancreático, los stents colocados Las complicaciones de la esfinterotomía pancreática
en el conducto a través de la papila por vía endoscópica ocurren entre 4,2 % y 12,6 % de los casos. La morbili-
son útiles cuando el escape de líquido del conducto dad está en dependencia de la realización de otros pro-
lleva a la ascitis pancreática o el derrame pleural, y en cedimientos como dilataciones o colocación de prótesis.
segundo lugar, la colocación de stents endoscópicos en Al mismo tiempo la esfinterotomía pancreática no es
la vía biliar es una medida de utilidad temporal en los ni más ni menos peligrosa que la esfinterotomía biliar,
pacientes con estenosis del conducto distal. que se estima con una morbilidad de 5,4 % a 9,8 % de
Los escasos datos comparativos sugieren que la los casos, la morbilidad de la esfinterotomía pancreática
cirugía es más efectiva y de efecto analgésico más es más baja cuando usa drenaje nasopancreático o se
duradero que la dilatación endoscópica o la colocación deja una prótesis. Cuando hay obstrucción distal del
de un stents en el conducto pancreático. Un ensayo conducto en la cabeza a veces es posible acceder al
clínico aleatorizado mostró que a los dos años de conducto del cuerpo a través de la papila menor.
la litotricia extracorpórea por ondas de choque con
o sin guía endoscópica de los fragmentos de piedra Tratamiento de la estenosis del conducto
fue igualmente efectiva para reducir el dolor en los pancreático por dilatación e inserción de prótesis
pacientes con cálculos intraductales pero, en ocasiones, Con una guía metálica hidrofílica de 3 mm a 4 mm
la litotricia puede precipitar la pancreatitis aguda. La de longitud se accede al conducto principal para dilatar
242 Parte XV. Páncreas

una estenosis mediante un balón o dilatador y dejar Endoscopia y drenaje pancreático


insertada una prótesis de (5c10fr) con una longitud de de quistes y seudoquistes
3 cm a 12 cm en dependencia de la anatomía pancreá- El drenaje de un quiste pancreático se realiza a través
tica. La prótesis se sitúa más allá del área estenótica. de la pared gástrica (grastrocitostomía) o de la pared
A veces es muy difícil porque la estenosis es producto duodenal (duodenocitostomía) en caso de transmural:
de la fibrosis circundante. En ocasiones se logra dilatar drenaje o a través de la papila transpapilar. La vía trans-
utilizando el extractor de Sohedra, que se utiliza para
mural se dedica a drenar quistes dentro del estómago
retirar prótesis emigrada y deslizándola sobre una guía
o duodeno, se realiza un procedimiento determinado.
en movimiento de rotación se logra dilatar y sobrepasar
Perpendicular en el sitio de máxima protrusión después
la estenosis, generalmente no hay sangrado porque se
se inserta un catéter en la cavidad del quiste se toman
actúa sobre un área fibrosa.
muestras del contenido del quistes para estudios bac-
Las prótesis plásticas pueden obstruirse por preci-
teriológicos, citoquímicos y bioquímicos. Se introduce
pitado de proteínas, carbonato de calcio o por películas
una guía metálica para dejar varias asas, entonces se
de material biológico de bacterias alrededor de cuatro
realizan incisiones de 5 mm a 8 mm con papilótomo.
a seis meses después de insertada, lo que requiere
Una incisión muy amplia está relacionada con hemo-
retirarlas y cambiarla solo si recurre el dolor. Algunos
rragia. Luego se dejan una o dos prótesis tipo pigtail. Si
utilizan prótesis metálicas aunque estas pueden obs-
hay infección o abundante tejido necrótico que puede
truirse completamente por granulación intraluminal
ocluir las prótesis se deja un catéter nasopancreático
inflamatoria con el riesgo de sepsis, la morbilidad está
para lavar.
en relación con el tiempo de inserción, antes de los 30
El drenaje transpapilar se usa en quistes comunican-
días la complicación más frecuente es la pancreatitis
tes, se cánula selectivamente el conducto pancreático,
aguda (5 % a 40 %), de tipo ligera, edematosa, y benig-
se inserta una guía metálica, se hace esfinterotomía pan-
na que ceden espontáneamente, en escasas ocasiones
creática, se dilata el trayecto entre el ductos pancreático
ocurren abscesos pancreáticos o colangitis. Después
y el quistes (casi siempre hay estenosis asociada), se
de los 30 días puede haber migración de la prótesis u
inserta la prótesis dentro del ductos pancreático tratando
oclusión. En ocasiones se provoca lesión de las pare-
de puentear el área de comunicación entre el sistema
des del conducto, dadas por dilatación e irregularidad,
ductal y el quiste. El tiempo promedio del drenaje es
asociadas con lesiones parenquimatosas visualizadas
alrededor de dos meses para que desaparezca el quiste,
endográficamente. En general, estas lesiones regresan
varios meses después de retirar las prótesis. en caso de coexistencia de lesiones de ductos es nece-
sario dejarlo más tiempo para prevenir la recurrencia.
Extracción de cálculos y litotricia extracorpórea
Ultrasonografía endoscópica
La extracción de los cálculos pancreáticos requiere
esfinterotomía previa. Como casi siempre están im- La ultrasonografía endoscópica es particularmente
pactados detrás de una estenosis, la extracción es más interesante en tres situaciones: tratamiento del dolor
difícil que en cálculos biliares. por neurolisis celiaca, drenaje de seudoquiste y drenaje
Cuando por su tamaño o la presencia de estenosis pancreático transgástrico. El bloqueo celiaco se asocia
no pueden ser retirados, puede utilizarse la litotricia a escasa morbilidad, sobre todo diarreas en 35 % de
extracorpórea para triturarlos, al igual que se realiza los casos. El tratamiento de seudoquistes guiado por
con los cálculos biliares y renales. Generalmente la ultrasonografía endoscópica se utiliza en casos que el
litotricia no tiene mayor morbilidad que cualquier otro quiste no se proyecte en el tracto. En caso de obstruc-
procedimiento endoscópico, en ocasiones provoca dolor ción completa de conducto pancreático se puede hacer
abdominal y ataque de pancreatitis aguda. La eficacia pancreatograstrostomía guiada por ultrasonografía
está en relación con la posición de los cálculos y el endoscópica.
tamaño, los yuxtapapilares son más fáciles de extraer Resultados e indicaciones del tratamiento
que los localizados en la cola, en las ramas laterales. Los endoscópico
cálculos de mayor tamaño son más visibles y facilitan
su fragmentación. Los fragmentos se retiran con nueva El objetivo del tratamiento endoscópico es me-
colangiopancreatografía retrógrada endoscópica usando jorar el dolor. El análisis de la literatura se dificulta
balón extractor con cesta. A veces es necesario dejar un debido a la variabilidad del dolor en el tiempo y entre
drenaje nasopancreático durante 48 h. paciente, el dolor en la pancreatitis es multifactorial:
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 243

hipertensión ductal o intersticial, infiltración inflama- técnica inicial. En tres casos hubo recurrencia que se
toria perineural (neuritis pancreática) o seudoquistes. resolvieron con tratamiento endoscópico.
Otras complicaciones de la pancreatitis crónica pueden Los resultados con la técnica transpapilar en la serie
estar asociadas con dolor como la estenosis duodenal, desde 1991 a 1995 incluyendo 125 quistes mostraron
estenosis biliar o úlcera duodenal, además en métodos ausencia de síntomas en un 87 % y curación del quistes
endoscópicos, asociación de esfinterotomía biliar y en 84 %. Se observó recurrencia en 9,2 % y mortalidad
tiempo de permanencia de la prótesis (dos meses o más) de 10,8 %.
número de prótesis, de hecho hay numerosos métodos
de tratamiento para obtener un drenaje satisfactorio de Tratamiento endoscópico de la estenosis biliar
conducto pancreático o biliar. El resultado a largo plazo de la inserción de prótesis
para el compromiso biliar de la pancreatitis crónica ha
Tratamiento del dolor pancreático tenido resultados variables en distintas series. En tres
El drenaje del conducto pancreático se reporta en series que incluyeron 102 pacientes, aunque se reportó
muchos artículos. Se reportan éxitos en 85 % de los mejoría inicial en el 100 % de los casos, el promedio
casos (58 % a 96 %). El retiro de la prótesis es varia- de pacientes libres de síntomas disminuyó a 17,5 % al
ble en el tiempo (dos meses o indefinido). El alivio cabo de 10 meses de seguimiento. Más aun el 68 % de
del dolor se reporta en periodos cortos en 81 % de los los pacientes requirieron derivación quirúrgica. Las
casos. Al cabo de 30 meses el éxito decrece a 61 %. prótesis plásticas mejoran temporalmente la colestasis,
Sorpresivamente la atenuación del alcohol no parece pero no son útiles para la dilatación del conducto. En
modificar los resultados del tratamiento endoscópico. contraste con lo anterior cuando se dilata con balón
De todas formas debe suprimirse el alcohol porque la antes de situar la prótesis se obtienen mejores resultados
morbilidad en la pancreatitis crónica es más atribuible a hasta 83 % de los casos en seguimiento de 13 meses.
los hábitos tóxicos (alcohol y tabaco) que la pancreatitis
crónica por sí misma. Tratamiento endoscópico de las fistulas
pancreáticas
Tratamiento de los quistes y seudoquistes Varias series incluyeron 39 pacientes que presenta-
Debe hacerse una evaluación previa con el uso de las ron fistulas pancreáticas después de pancreatitis aguda
imágenes: ultrasonido, tomografía axial computarizada, n=19y asociada con pancreatitis crónica n=12, fueron
resonancia magnética o ultrasonografía endoscópica, analizadas en 1991 y 1995. El tratamiento consistió
para valorar los dos riesgos mayores del tratamiento en drenaje transpapilar del ducto pancreático en 31
endoscópico que son la hemorragia y la perforación. La casos asociados con un drenaje transmural de un quiste
hemorragia depende de la presencia de vasos periquís- en cuatro casos. El índice de éxito fue de 92 %, con
ticos o peridigestivos, hipertensión portal segmentaria complicaciones en siete casos. Las complicaciones
y del contenido hemorrágico del quiste. La perforación incluyeron principalmente pancreatitis aguda y sepsis.
depende de la distancia entre la pared digestiva y los Siete pacientes recibieron tratamiento 11 a 16 meses
quistes que no debe exceder de 10 mm. Hay reportes después del tratamiento endoscópico. Pocos casos ais-
de drenajes transmural en varias series entre 1989 y lados de fistula pancreático-pleural se han reportado
1992 incluyendo 191 quistes, el promedio de curación, como exitosos con drenaje endoscópico. También se
fallo y recurrencia fue respectivamente 78 %, 5,5 % y ha reportado drenaje transpapilar como exitosos para
6,5 %, se necesitó cirugía en el 14,9 %, la morbilidad fistula pancreático-peritoneales.
fue de 15,5 % con índice de frecuencia de hemorragia,
perforación o infección, hubo más hemorragia en la Tratamiento de la función pancreática
derivación gástrica que en la duodenal, solo hubo una exocrina y endocrina
muerte en un paciente que presentaba cirrosis con Aunque la mayoría de la función exocrina y endo-
hipertensión portal asociada con ascitis hemorrágica y crina se descarta en serie quirúrgica, esto es a veces
el seguimiento en tiempo vario mucho hasta unos 30 reportado en serie endoscópica. Probablemente debido
meses lo que hace difícil evaluar los resultados. a la dificultad de una exploración correcta de la función
Otros reportes informan buenos resultados en exocrina y también el aspecto tiempo del seguimiento
34 pacientes seguidos 46 meses con 62 % de casos evolutivo en series endoscópicas comparadas con series
(reintento de tratamiento) con solo 71 % de éxito en la quirúrgicas. Se ha reportado una mejoría temporal de
244 Parte XV. Páncreas

la diabetes en 10 casos después del tratamiento endos- Clasificación


cópico mientras que en 12 % se reportó agravamiento.
Hay grandes evidencias de que existen dos patrones
Aunque otras series reportaron hasta 26 %, la mayoría
clínicos e histológicos de pancreatitis autoinmune:
de las series no informa de mejoría. De esto se despren-
– Tipo I: parece ser la manifestación pancreática de
de que la diabetes no es una indicación para tratamiento enfermedad autoinmune sistémica llamada enfer-
endoscópico de la pancreatitis crónica. medadIgG4 asociada sistémica que afecta no solo
La evaluación del tratamiento endoscópico del dé- el páncreas sino otros órganos, incluyendo el árbol
ficit exocrino se menciona a veces. Algunos estudios biliar, retroperitoneo, riñones, nódulos linfáticos y
refieren una ganancia de peso, pero esto probablemente glándulas salivales.
se debe a la disminución del dolor que a la mejoría de – Tipo II: es una forma de pancreatitis crónica
la función exocrina. Se ha reportado 50 % a 60 % de idiopática que también se presenta con íctero obs-
mejoría de la función mediante la prueba de función tructivo y se caracteriza por una histología distinta
con C14 expirado después del tratamiento endoscópico. denominada pancreatitis destructiva ductular, no
alcohólica, pancreatitis idiopática centroductal o
Pancreatitis autoinmune pancreatitis con lesión granulocitica epitelial po-
sitiva. En esta forma de pancreatitis autoinmune
Es una forma de pancreatitis crónica idiopática los neutrófilos son a veces tan numerosos que se
asociada con dolor mínimo, ictericia obstructiva e hi- observan microabcesos en el lóbulo y en el ductos.
pergammaglobulinemia, fue primeramente descrita por Usualmente toda la pared del ducto está infiltrada
Searle en 1961, que sospechó un proceso autoinmune. por neutrófilos, linfocitos y plasmocitos y el lumen
Posteriormente casos de pancreatitis involucradas en se encuentra obliterando y destruido el epitelio. Esta
otras enfermedades autoinmunes fueron reportados, lesión ductal característica es llamada lesión gra-
principalmente síndrome de Sjögren y colangitis es- nulocitica epitelial positiva. La flebitis obliterante
clerosante primaria. que es característica de la pancreatitis esclerosante
En 1995, Yoshida y colaboradores reportaron un linfoplasmocitario es frecuente en la pancreatitis
caso de 68 años, femenina, con íctero obstructivo, pán- idiopática centroductal y se observan escasas células
creas difusamente aumentado con estenosis irregular linfoplasmocitarias IgG4 positivas.
difusa del conducto pancreático, hipergammaglobu-
linemia y fibrosis en biopsias con aguja. La manifes- Con los conocimientos actuales se reporta en la lite-
tación clínica y radiológica de la enfermedad resolvió ratura importantes diferencias clínicas e histológicas en
con seguimiento de terapia esteroidea. Observando su cada tipo que justifican su denominación (Tabla193.2).
paralelo con la literatura de la hepatitis autoinmune le Los estudios de imágenes muestran alteraciones
acuñó el nombre de pancreatitis autoinmune. diferentes en la pancreatitis autoinmune tipo I.

Tabla193.2. Comparación entre tipo I y tipo II de pancreatitis autoinmune


Parámetro Tipo I Tipo II
Edad media Sexta década de la vida Cuarta década de la vida
Género Predominante en hombres Predominante en hombres
Patrón histológico Pancreatitis esclerosante linfoplasmocitaria Pancreatitis destructiva ductal
Sello histológico Infiltrado periductal, fibrosis en remolino y flebitis Infiltrado plasmocitario, lesión epitelial
obliterativa granulocitica con obstrucción ductular parcial o
completa
Células IgG4 Moderada a severa 98 % Inusualmente ausente
inmunohistoquímica
Niveles séricos de IgG4 Elevados Normales.
Toma de otros órganos Sialoadenitis crónica esclerosante IgG4, Enfermedad inflamatoria intestinal
colangitis, fibrosis retroperineal, nefritis túbulo
intersticial
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 245

Tanto la ecografía como la tomografía computariza- posteriores demostraron que es característico pero no
da multidetector normalmente muestran agrandamiento diagnóstico de pancreatitis autoinmune (sensibilidad
de la glándula, con forma de “salchicha”. 75 % y especificidad 93 %). En la clínica se han reportado
Las imágenes características del tipo 1 de pancrea- 7 % a 10 % de pacientes con cáncer pancreático y colan-
titis autoinmuneen tomografía axial computarizada o giocarcinoma mayor de 10 % no debe usarse solo para
resonancia magnética incluyen un aumento difuso del hacer diagnóstico. Los niveles de IgG4 sérico mayor
páncreas de forma de “salchicha” con pérdida de las que dos veces lo normal son altamente específicos de
lobulaciones y ensanchamiento irregular del borde. En pancreatitis autoinmune. Estos marcadores serológicos
la pancreatografía una estenosis difusamente irregular, vistos en pancreatitis autoinmune tipo I no encuentran
estreches del conducto pancreático o múltiples estreche- en pancreatitis autoinmune tipo II. No se ha identi-
ces sin presencia de dilatación es altamente sugestiva ficado ningún marcador específico para pancreatitis
de pancreatitis autoinmune. Este cuadro típico está autoinmune tipo II.
presente en casi la mitad de los pacientes. Puede verse
también masas o estrecheces y muestran evidencias de Pancreatitis esclerosante
pancreatitis agudas o calcificaciones, raramente una
masa de baja densidad con conducto dilatado o atrofia
linfoplasmocitaria
pancreática retrógrada es inusual en la presentación Es el tipo ajustado a descripción clásica de la en-
aguda de pancreatitis autoinmune (aunque esto puede fermedad reportada en Japón y asociada con un patrón
ocurrir en recaídas de presentación tardía) y pueden histológico caracterizado por tres cuadros dominantes:
tratarse como cáncer pancreático mientras no se de- – Denso infiltrado periductal linfoplasmocitario.
muestre lo contrario. – Fibrosis en remolino.
La colangiopancreatografía retrógrada endoscópica – Flebitis obliterante.
muestra las estrecheces largas o múltiples de los con-
ductos pancreáticos y a veces una estrechez larga en Su sello serológico es la elevación de niveles séricos
el conducto biliar distal o una colangitis esclerosante. de inmunoglobulinas G4 (IgG4) positiva y el infiltrado
Si todavía existe la duda diagnóstica (como en un linfoplasmocitario es rico en células IgG4 positivas.
paciente con enfermedad de tipo II, para la que no exis-
ten marcadores séricos) pueden requerirse una prueba Fisiopatología
terapéutica con esteroides o la histología de una muestra Es enteramente evidente que la pancreatitis au-
de biopsia o quirúrgica o ambas.  toinmune es una forma de pancreatitis crónica distinta
En el ultrasonido endoscópico los aspectos típicos clínica, morfológica, serológica e histológica que la
durante la presentación aguda incluye un aumento di- distingue de la forma usual de pancreatitis crónica.
fuso hipoecoicolobular glandular con bordes suavesy El hallazgo histológico de abundante infiltrado histo-
un ducto pancreático pequeño, puede verse una cáp- plasmocitario y la respuesta dramática al tratamiento
sula como un aro alrededor de la glándula. Los ductos esteroideo sugieren una etiología autoinmune para la
biliares muestran un engrosamiento difuso, suave, enfermedad. Hay información limitada en este sentido
concéntrico que se extiende bien en los ductos biliares (Tablas 193.3).
extrapancreáticos. Cuando es posible en la glándula
engrosada se puede realizar biopsia guiada por ultra- Factores genéticos en pancreatitis autoinmune
sonido endoscópico. La susceptibilidad humana en pancreatitis autoin-
mune puede asociarse al sistema de histocompatibilidad
Estudios serológicos mayor. Esto varía en diferentes etnias y regiones geográ-
El tipo I de pancreatitis autoinmune está asociado ficas, lo que orienta que la susceptibilidad es selectiva
a una variedad de anomalías serológicas que incluyen en antígenos endógenos que favorecen la adquisición.
título elevados de gammaglobulinas IgG y su subtipo En Japón se reporta la asociación de pancreatitis autoin-
IgG4, así como factor reumatoideo, de antianhidrasa mune con haplotipo (HLA) DRB1*0405-DQB1*0401,
carbónica, antilactoferrina y anticuerpos antinucleares pero no se encuentran en pacientes coreanos.
en forma variable. Recientemente se reportan antígenos citotóxicos
Sin embargo, el marcador más singular es la ele- asociados a linfocitos (CTLA 4) actuando como regu-
vación de niveles de IgG4. Algunos autores inicial- lador negativo de la respuesta Tcell originando HLA
mente lo daban como patognomónico, pero estudios como un factor susceptible de pancreatitis autoinmune
246 Parte XV. Páncreas

Tabla 193.3. Factores de autoinmunidad observados en pancreatitis autoinmune


Características Características Comentario
en pancreatitis
autoinmune
Respuesta autorreactivas a antígenos Posible Lactoferrina, anhidrasa carbónica II, α-fodrin y PSH son
definidos autoantígenos sugeridos en la pancreatitis autoinmune
Predisposición femenina No Predisposición masculina
Antígeno leucocitario humano asociación Posible Antígeno leucocitario humanoDRB1*0405-DQB1*0401
en población japonesa
Inducción de la enfermedad con Posible En ratas neonatas timectomizada, inmunidad con
sensibilización con autoantígenos anhidrasa carbónica II, lactoferrinay CD4. Las células
Th1 están muy mal involucradas en el desarrollo
temprano de pancreatitis autoinmune murina
Respuesta a terapia inmunosupresora Sí
Producción de enfermedad por transferencia Posible Transferencias adoptivas de células T CD4 y amilasa
adoptiva de células autorreactivas o específicas confieren pancreatitis a animales sin genes
anticuerpos
Modelos animales espontáneos con Posible Mientras un modelo animal espontáneos es disponible el
especificad antigénica idéntica autoantígeno no se ha identificado
Adultos y niños afectados No
La distribución de antiantígeno marca la Si Anhidrasa carbónica II y lactoferrina está distribuido
distribución de la enfermedad en las células de varios órganos exocrinos, páncreas,
glándulas salivales, ductos biliares y túbulos renales
distales. La distribución de la enfermedad es altamente
restricta

en la población taiwandesa. Se cree que genes adicio- células IgG4 positivas puede representar una respuesta
nales no HLA relacionado intervienen en el desarrollo secundaria a un no identificando blanco primario del
de la enfermedad autoinmune. proceso inflamatorio en la pancreatitis autoinmune.
4Inmunidad humoral y antígenos blancos 4Inmunidad celular y células efectoras
Aunque el autoantígeno definitivo para la pancrea- Las células efectoras de la pancreatitis autoinmune
titis autoinmune todavía no está totalmente definido, la todavía no están establecidas. Las CD4 y CD8 células
coexistencia de pancreatitis con toma de otros órganos activadas existen en HLA DR y CD45RO están aumen-
en la pancreatitis autoinmune tipo I sugieren blancos tadas en los linfocitos de sangre periférica, así como
comunes en el páncreas y otros órganos exocrinos, en el páncreas de pancreatitis autoinmune, comparadas
glándulas salivares, tracto biliar y túbulos renales. con pancreatitis alcohólicas o litiasis relacionadas. Las
La antilactoferrina y anticarbonica anhidrasa II o IV células CD4 se dividen en células auxiliadoras T (Th1
son los anticuerpos más detectados en la pancreatitis y Th2) en la población sobre la base de la producción
autoinmune. de citoquinas: la población de células T se regulan
También se han encontrado niveles elevados de mutuamente la Th1 produce interleuquina 2, factor de
otros autoantígenos como el α-fodrin en pancreatitis necrosis tumoral e interferón. Estas células intervienen
autoinmune como se encontró en un gran número de en la inmunidad celular activando los macrófagos, cito-
síndromes de Sjögren y pancreatitis autoinmune. toxicidad y producen células B de opsoninas y fijación
Recientemente se informa de la presencia de autoan- de anticuerpo del complemento. Una desviación hacia
ticuerpo contra el inhibidor pancreático de tripsisna en una línea u otra de Th1 y Th2 es significativa en la pa-
30 % a 40 % de pacientes con pancreatitis autoinmune. togenia de los desórdenes autoinmunes. Las citoquinas
Aunque la elevación sérica de la IgG4 es una ca- Th1 son esenciales en la producción y mantenimiento
racterística típica de la pancreatitis autoinmune tipo 1 del síndrome de Sjögren mientras la citoquina Th2
actualmente se discute si la constante elevación de las está envuelta en la progresión de la enfermedad en
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 247

la activación de células B. Similarmente la citoquina tracción durante la recaída es inversa a la expansión


Th1 es esencial a la inducción y mantenimiento de la y contracción de la población de células reguladoras
pancreatitis autoinmune y la Th2 por la progresión de T inflamatorias (Th1 o Th2) durante estas fases. Así
la enfermedad. que las células reguladoras T pueden participar en la
actividad de enfermedad autoinmune a niveles de la
Infección microbiana modulación de Th1 y Th2.
El mimetismo moleculares un posible mecanismo
usado por las bacterias para eludir la tolerancia inmune. Pancreatitis autoinmune experimental
El concepto subyacente es que un agente infeccioso en modelos animales
cambia uno o más epítopes con varios componentes Actualmente se han descrito varios modelos de pan-
propios. Una hipótesis alternativa en que los agentes creatitis autoinmune incluyendo inflamación extraglan-
infecciosos causan una activación relativa de la célula dular. Hay similitud entre las clasificaciones propuestas
inmune con su potencial antiagresivo. La Helicobacter y los dos modelos de pancreatitis autoinmune. El primer
pylori está asociado con úlcera péptica y autoinmunidad modelo se refiere a la transferencia adoptiva de amilasa
gástrica. Los pacientes infectados con esta bacteria específica (un antígeno localizado principalmente en las
poseen autoanticuerpos que reaccionan cruzadamente células acinares) CD4 de células reguladoras T y que
con antígenos expresados en la mucosa gástrica. Así resulta en pancreatitis. La lesión histológica de este
como en el caso de la pancreatitis autoinmune por Heli- modelo simula la reacción inflamatoria lobulocentrica
cobacter pylori puede asociarse por vía del mimetismo en el tipo 1. El modelo experimental de pancreatitis
molecular de la estructura del hospedero, por sus cons- autoinmune fue caracterizado histológicamente con cé-
tituyentes con la misma condición autoinmune, lo que lulas plasmáticas ocasionales, neutrófilos y células ce-
incluye cirrosis biliar primaria, colangitis esclerosante badas. La destrucción de tejido acinar y la inflamación
primaria, hepatitis autoinmune y la enfermedad hepática ductular fueron cuadros comunes, con menos toma de
relacionada con el virus C que ocasiona una secuela los conductos mayores. El análisis histoquímico reveló
autoinmune. Guarnen y Colegest mostraron una homo- la presencia de grandes números de CD4+de células
logía significativa entre el CA-II humano y el α CA del reguladoras T, así como CD8+decélulas reguladoras
Helicobacter pylori una enzima fundamental para la su- T, macrófagos y células dendríticas. La expresión of
pervivencia bacteriana y su proliferación en el entorno MHC1 y MHCII adicionalmente están aumentada en
gástrico más aun los segmentos homólogos contienen el sitio de la lesión.
el mismo ligazón con DRB1*0405. La posición notable Un modelo desarrollado por inmunización de ratas
de los genotipos HLA DRB1*0405-DQB1*0401 con- timectomizadas neonatalmente con CA (un antígeno
fieren un riesgo de desarrollar pancreatitis autoinmune. localizado principalmente en el epitelio pancreático)
Esto sugiere que la infección por Helicobacter pylori y más tarde la transferencia de linfocito CD4+ resulta
puede disparar pancreatitis autoinmune en personas en un patrón ductal central de pancreatitis recordando
genéticamente susceptibles. el tipo 2 de pancreatitis autoinmune.
Papel de las células reguladoras T (tregs)
Dignóstico clínico
Las células reguladoras que se originan en el timo
se distinguen en células CD4+, CD25+ y T, que desem- Espectro clínico de la pancreatitis autoinmune
peñan una importante función en la supresión inmune La pancreatitis autoinmune tipo 1 es una enferme-
a través de la transformación del factor de crecimiento dad de personas de avanzada edad, más de 80 % de
inmune y T110 y su ligación a CTLA-4, estas células los pacientes son hombres y tienen más de 50 años.
reguladoras previenen las enfermedades mediadas por En la tipo 2 reportes recientes la señalan en pacientes
CD4. Sin embargo, el incremento de la prevalencia jóvenes sin predominancia en género masculino como
de CD4+ y CD25+ a niveles similares en periferia se se observa en la tipo 1.
observa en artritis reumatoide con síndrome de Sjögren La pancreatitis autoinmune tipo 1 tiene variedad de
comparados con controles. Así la prevalencia reduci- presentaciones, la más importante conocida es la aguda
da de células reguladoras T circulantes puede no ser con íctero obstructivo y agrandamiento pancreático si-
un hallazgo general en pacientes con enfermedades mulando cáncer pancreático. Estos pacientes presentan
autoinmunes. En la enfermedad inflamatoria intestinal pérdida de peso y comienzo de diabetes reciente, es
expresión de CD4+ y CD25+ en la remisión y su con- bastante difícil marcar la distancia entre pancreatitis
248 Parte XV. Páncreas

autoinmune y cáncer. Menos frecuentemente se puede El diagnóstico de la pancreatitis autoinmune puede


presentar con cuadro de pancreatitis aguda con dolor hacerse por tres aspectos de LPSP (infiltrado linfo-
abdominal y elevación de enzimas pancreáticas y plasmocitario denso a menudo rodeando los ductos
raramente complicaciones como seudoquiste. La pan- pequeños), fibrosis en remolino y flebitis obliterativa
creatitis autoinmune llama la atención clínica cuando en biopsia), el diagnóstico puede hacerse por Hisort
evoluciona la enfermedad debido a una masa persistente criteriussi esta muestra el cuadro clásico de infil-
un páncreas atrófico con o sin calcificaciones o debi- trado linfoplasmocitario denso a menudo rodeando
do a una esteatorrea pancreática no filiada. Estas son los ductos pequeños, fibrosis en remolino y flebitis
las manifestaciones pancreáticas que pueden simular obliterativa en biopsia LPSP que está presente en 20
cáncer pancreático, pancreatitis aguda, pancreatitis no % de las biopsias o por IgG4 inmunotinción si hay
dolorosa crónica, en otros órganos pueden observarse más de 100 % de células IgG4 positivas por campos
simultáneamente, precediéndolas o tardíamente años de alto poder. Se han descrito falsos IgG4 positivos en
después. presencia del cáncer.
La pancreatitis autoinmune tipo 2 se presenta con La pancreatitis autoinmune responde consistente-
íctero obstructivo aunque también se ha descrito en mente y a menudo dramáticamente a la terapia esteroi-
pacientes con estenosis pancreática idiopática con o sin dea aun en apenas una semana de tratamiento la hin-
masa visible como es una enfermedad recientemente chazón pancreática decrece y la estenosis biliar mejora.
nueva todavía su espectro completo no está totalmente El tratamiento esteroideo como prueba diagnóstica se
definido. incluye en los criterios de Hisort, el criterio coreano y
en el más reciente criterio de consenso asiático.
Exámenes complementarios En el diagnóstico de pancreatitis autoinmune tipo
Se han propuesto un número de criterios diagnóstico 2, los criterios van dirigidos al tipo 1. Uno puede
que definen el paciente que tiene pancreatitis autoin- sospechar pancreatitis autoinmune tipo 2 en pacientes
mune tipo 1. Provienen de la sociedad japonesa del jóvenes con coloración obstructiva (con investigaciones
páncreas JPSI y JPSII, la Clínica Mayo (Hisort Crite- de cáncer negativas) que son seronegativas y no tienen
rius) y de Corea del Sur. Recientemente el consenso otras tomas de otros órganos, solamente la enfermedad
asiático de criterios diagnósticos fue propuesto por los inflamatoria intestinal.
investigadores japoneses y coreanos. Existen dos problemas diagnósticos difíciles de
resolver. El primero es ¿cómo se puede distinguir
Imagen típica, serología o histología compatible entre una masa inflamatoria de una pancreatitis cró-
Todos los criterios están de acuerdo que en pacientes nica común, una enfermedad autoinmune focal y un
con imagen típica (una combinación de aumento difuso adenocarcinoma pancreático con pancreatitis crónica
en “forma de salchicha” de la glándula y una estenosis proximal? El aumento de las concentraciones de IgG4
irregular del conducto pancreático, una elevación de la puede ocurrir en los tres cuadros y los marcadores
IgG4 sérica o histología compatible, es diagnóstico de tumorales existentes no son suficientemente especí-
pancreatitis autoinmune. En los pacientes con marcado- ficos para distinguir entre estos, aunque otros nuevos
res serológicos menos específicos como títulos altos de se están desarrollando. Para confirmar la pancreatitis
ANA y factor reumatoide pueden usarse si no se cuenta autoinmune, las células tumorales pueden ser identifi-
con IgG4 sérica. El criterio difiere en la necesidad de cadas mediante la ecoendoscopia, la biopsia guiada por
un pancreatograma endoscópico (consenso) contra tomografía computarizada multidetector o la biopsia
pancreatograma por resonancia magnética nuclear con aguja simple. La PET/tomografía computarizada
(Corea del Sur). con F18-fluorodesoxiglucosa facilita la identificación
del cáncer, pero el aumento de la recaptación también se
Diagnóstico histológico/inmunotinción observa en la pancreatitis autoinmune (como la mayor
recaptación de galio). Como prueba diagnóstica final
La histología de la pancreatitis autoinmune es única se puede usar una muestra de pancreatectomía, para
y suficiente para hacer diagnóstico y fue inicialmente confirmar la presencia de tumor mucinoso papilar in-
propuesta por Hisort criterius. Posteriormente fue in- traductal en un paciente con sospecha de enfermedad
cluida en consenso de criterios asiáticos, sin embargo, idiopática de los conductos grandes. El segundo pro-
el criterio asiático solo acepta cuando el diagnóstico se blema diagnóstico se refiere a si el clínico debe realizar
hace con la pieza resecada no con muestra de biopsia. un estudio de las mutaciones genéticas. Una revisión
Capítulo 193. Pancreatitis crónica 249

reciente brinda evidencia valiosa. La prueba de la junto con la desnutrición, predispone a la enfermedad,
mutación del gen PRSS1 es aceptable en los pacientes también se ha valorado el consumo de la dieta a base
jóvenes sintomáticos o en los que tienen antecedentes de yuca (mandioca) ya que su incidencia se observa
familiares de pancreatitis, si el resultado es positivo se con mayor importancia en zonas de alto consumo.
requiere el consejo y el seguimiento médico. No existen La yuca contiene cianógenos que pueden provocar
pruebas para la mutación del gen SPINK ni tampoco reacción oxidativa en el contexto de una deficiencia de
hay pruebas confiables para la mutación del regulador micronutrientes. Pero también la pancreatitis crónica
de la conductancia transmembrana en la fibrosis quística tropical en zonas donde no se consume este tubérculo
en el contexto de la pancreatitis aislada. En su lugar, y poblaciones con consumo alto como en África Occi-
cuando se sospecha la fibrosis quística atípica se puede dental no desarrolla la enfermedad.
utilizar la prueba del sudor. Cuando la concentración de
cloruro es borderline (40 mmol/L a 59 mmol/L) o anor- Diagnóstico clínico
mal (mayor que 60 mmol/L), los pacientes deben ser Propio de la juventud y madurez temprana, más
derivados al especialista. Sin embargo, la vulnerabilidad de 90 % de los casos se desarrollan antes de los 40
del regulador de la conductancia transmembrana en la años. En algunos estudios se habla de prevalencia de
fibrosis quística al estrés electrofílico puede explicar 0,12 % (1 en 830) con edad promedio de inicio de 24
tanto los resultados positivos falsos de la prueba del años. Se presenta con dolor abdominal, desnutrición
sudor como las diferencias en los resultados de los po- grave e insuficiencia exocrina y endocrina. La es-
tenciales nasales en diversas condiciones, por ejemplo, teatorrea es rara debido a que ingresa poca grasa. La
malnutrición grave. insuficiencia endocrina es una consecuencia inevitable
de la pancreatitis tropical y se clasifica con frecuencia
Tratamiento como una causa específica de la llamada diabetes fibro-
calculosa pancreática. En más de 90 % de los pacientes
En la pancreatitis autoinmune, el tratamiento con se observan cálculos pancreáticos. En la anatomía
esteroides se asocia con un alivio rápido de los sín- patológica lo característico es la presencia de cálculos
tomas. La dosis inicial es de 30mg/día a 40 mg/día intraductales de gran tamaño, marcada dilatación del
de prednisolona, la que se debe ir disminuyendo a lo conducto principal y atrofia de la glándula.
largo de tres meses mientras se monitorea la concen-
tración de IgG sérica y los signos en las imágenes. Para Bibliografía
prevenir las recaídas se recomienda el tratamiento de
mantenimiento prolongado con 5,0 mg/día a 7,5 mg/día Ahmed, S. A., Wray, C., Rilo, H. L., et al. (2006). Chronic pan-
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250 Parte XV. Páncreas

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Capítulo 194
Insuficiencia pancreática exocrina
Dr. C. José Ángel González Valdés

La insuficiencia pancreática exocrina es un síndrome c) Resección pancreática previa.


clínico provocado por diversas causas, que aparece d) Kwasshiorkor.
cuando el tejido pancreático glandular está dañado y e) Deficiencia aislada de lipasa.
la secreción pancreática de lipasa disminuye al 90 % f) Atrofia pancreática por envejecimiento.
de las necesidades. g) Atrofia pancreática primaria.
h) Diabetes mellitus.
Clasificación 4. Obstrucción del conducto pancreático:
a) Tumor de páncreas o duodeno.
La insuficiencia pancreática exocrina puede ser: b) Enfermedad de la ampolla de Váter.
– Primaria: cuando su origen está en el propio tejido c) Estenosis del canal pancreático de cualquier
pancreático glandular. origen.
– Secundaria: cuando obedece a obstrucciones del 5. Estimulación disminuida de secreción pancreática:
conducto pancreático, lo que impide la salida y a) Enfermedad celiaca.
llegada de las enzimas pancreáticas a la luz intesti- b) Operaciones del tracto digestivo superior:
nal o cuando existen enfermedades, resecciones o – Gastrectomía total y parcial.
anastomosis intestinales que afecten la acción de las – Gastroyeyuno anastomosis.
enzimas del jugo pancreático y por ende conlleva a – Esófagoyeyuno anastomosis.
una malabsorción intestinal intraluminal. 6. Mezcla defectuosa, secreción pancreática asincró-
nica en operaciones del tracto digestivo superior:
Etiología a) Gastrectomía total y parcial.
b) Gastroyeyuno anastomosis.
Los procesos que afectan de forma primaria el pán- c) Esófagoyeyuno anastomosis.
creas son los más frecuentes, como la fibrosis quística
en el niño y la pancreatitis crónica en el adulto:
1. Déficit congénito de lipasa y colipasa.
Fisiopatología
2. Déficit de enterocinasa. El páncreas normal produce más de 2 L diarios de
3. Producción deficiente de enzimas: secreción rica en proteínas y bicarbonato. La mayoría
a) Pancreatitis crónica. de estas proteínas son enzimas indispensables en la
b) Enfermedades hereditarias: digestión intraluminar de las tres principales clases de
– Pancreatitis hereditaria, familiar y esporádica. alimentos: proteínas, carbohidratos y grasas.
– Mutaciones del gen del tripsinógeno catiónico El resultado de un déficit importante de estas enzi-
(PRSS1). mas es la digestión parcial de estos alimentos, presencia
– Mutaciones del gen inhibidor pancreático de de grandes partículas y una absorción disminuida, lo
la secreción de tripsina (SPINK1). que lleva al paciente a un estado nutricional deficiente.
– Fibrosis quística. La digestión óptima y la absorción de nutrientes
– Síndrome de Schwachman-Diamond. requieren una compleja interacción entre las funciones
– Síndrome de Johanson-Blizzard. motoras y secretoras del tracto gastrointestinal. La di-
252 Parte XV. Páncreas

gestión de macronutrientes es un prerrequisito para la De forma similar, en ausencia de amilasa pancreá-


absorción y ocurre por la vía de la hidrólisis. En este tica, la digestión se retarda, pero es realizada por la
contexto las enzimas pancreáticas, en particular lipa- amilasa salival y las oligosacaridasas. Por otro lado,
sa, amilasa, tripsina y quimotripsina, desempeñan la una considerable proporción de carbohidratos es me-
función más importante, pero también participan otras tabolizada por la flora colónica.
enzimas pancreáticas y extrapancreáticas. Los alimentos parcialmente digeridos en el íleon
Desde el punto de vista clínico la esteatorrea re- distal activan mecanismos neurohumorales que inhiben
presenta el signo más prominente de la insuficiencia aún más la secreción pancreática y aceleran el vacia-
pancreática exocrina y se desarrolla antes de la malab- miento gástrico, lo que incrementa la maldigestión y
sorción de proteínas. Está asociada con malabsorción favorecen además el sobrecrecimiento bacteriano.
de vitaminas liposolubles como A, D, E y K. En el niño la causa más frecuente es la fibrosis
La malabsorción de las grasas es causada por varios quística y la insuficiencia pancreática exocrina ocurre
mecanismos que interactúan: de forma muy temprana, porque predomina la obstruc-
– La capacidad del páncreas de sintetizar y secretar ción ductal. En el adulto la pancreatitis crónica es la
lipasa en la evolución de la pancreatitis crónica y más común, pero la insuficiencia pancreática exocrina
otras enfermedades se afecta de forma más tempra- se manifiesta en estadios avanzados de la enfermedad,
na y severa que en relación con las otras enzimas. cuando el daño del parénquima pancreático afecta más
Teóricamente es necesaria una disminución de lipasa de 90% de la función pancreática.
de 90% para que un paciente presente esteatorrea,
mientras que la disminución de 90% de la secreción Diagnósticoclínico
de proteasas no es suficiente para que ocurra la ma-
labsorción de proteínas. La principal manifestación clínica es la malnutri-
– La secreción pancreática de bicarbonato, que sirve ción. El adelgazamiento y la no ganancia de peso pue-
para proteger las enzimas pancreáticas de la “desa- den ser los únicos o primeros síntomas de insuficiencia
turación” por acidez gástrica, puede estar también pancreática exocrina.
disminuida en la insuficiencia pancreática exocrina. La esteatorrea clínicamente se manifiesta por au-
En la pancreatitis crónica, el proceso inflamatorio mento en la frecuencia y volumen de las heces, las
crónico no solo destruye los acinis, sino también el cuales son blandas, “flojas”, frecuentemente con restos
tejido ductal, lo que impide la secreción de bicar- alimentarios. Pueden ser grasientas, difíciles de limpiar.
bonato. La lipasa es muy susceptible de destrucción A veces no son evidentes si el paciente disminuye el
por el pH ácido intraduodenal (50 % de actividad consumo de grasas. La maldigestión de las grasas se
con un pH de 7, comparado con un pH de 9 y se in- traduce en una desnutrición calórica, pérdida de peso,
activa con pH de 4). Además, los ácidos biliares son déficit de vitaminas liposolubles y molestias abdomi-
precipitados por niveles de pH bajos en duodeno, lo nales por sobrecrecimiento bacteriano. El abdomen
que compromete aún más la absorción de lípidos. es prominente y globuloso con un aspecto típico del
– Las enzimas lipolíticas extrapancreáticas contribu- síndrome de malabsorción.
yen poco a la digestión de lípidos. La lipasa gástrica El dolor abdominal se manifiesta como simple
se incrementa en la insuficiencia pancreática exocri- molestia abdominal, caprichosa y aumenta con las
na, pero no lo suficiente como para suplir la acción comidas copiosas, especialmente con mucha grasa. A
de la lipasa pancreática. veces comienza después de las comidas y el paciente
– La secreción biliar es susceptible de afectarse o refiere una sensación de distensión o flatulencia. Puede
inhibirse en presencia de insuficiencia pancreática asociarse a náuseas y vómitos. Todo este cuadro puede
exocrina. ser recidivante y de larga duración, puede durar días.
En la pancreatitis crónica, causa principal de insufi-
Una actividad lipolítica disminuida no es compensa- ciencia pancreática exocrina en el adulto, puede referirse
da por otros mecanismos. Por el contrario, la actividad este dolor con mucha frecuencia, de irradiación transver-
proteolítica en la insuficiencia pancreática exocrina se sal, a veces de presentación aguda. Puede ser el primero
mantiene por la acción de las proteasas gástricas y las y único síntoma en pacientes con pancreatitis crónica.
péptidasas del borde en cepillo intestinal, que pueden Otras manifestaciones presentes son las ocasionadas
mantener la digestión de proteínas muy cerca de lo por la insuficiencia pancreática exocrina. En la historia
normal. clínica son importantes los antecedentes del paciente.
Capítulo 194. Insuficiencia pancreática exocrina 253

Investigar historia de enfermedades como fibrosis métodos también utilizados. La toma de muestra por vía
quística y pancreatitis, alcoholismo, intervenciones qui- endoscópica permite el estudio del fluido pancreático
rúrgicas del tracto gastrointestinal, tumores o quistes. y estudios biópsicos.

Exámenes complementarios Diagnóstico diferencial


La evaluación funcional del páncreas exocrino El diagnóstico diferencial se hace con otras causas
es importante para el diagnóstico de la insuficiencia de síndrome de malabsorción intestinal y esteatorrea.
pancreática exocrina. Su función más relevante es
la detección de insuficiencia pancreática primaria o Complicaciones
secundaria en pacientes con enfermedades pancreáticas
o después de cirugía gastrointestinal. Permite indicar la Las complicaciones para muchos forman parte
terapia sustitutiva con enzimas y monitorear su eficacia: del cuadro clínico, como la malnutrición severa y sus
1. Pruebas directas: consecuencias. Otras complicaciones se deben al tra-
a) Secretina. tamiento con enzimas pancreáticas.
b) Colecistocinina.
c) Secretina y colecistocinina. Tratamiento
2. Pruebas indirectas con intubación duodenal:
a) Comida de prueba de Lunch. Hay cuatro medidas básicas en el tratamiento de la
insuficiencia pancreática exocrina:
3. Pruebas indirectas sin intubación duodenal:
– Eliminación o control de la enfermedad que provoca
b) Pruebas fecales:
la insuficiencia pancreática exocrina.
– Grasas totales en heces (Van de Kamer)
– Mejorar el estado nutricional.
– Esteatócrito
– Tratamiento sustitutivo con enzimas pancreáticas.
– Determinación de quimotripsina fecal
– Alivio de los síntomas acompañantes.
– Determinación de elastasa
c) Pruebas orales.
La solución de la causa de la esteatorrea no es
d) Prueba NBT PABA.
posible en la mayoría de las afecciones. Cuando el
e) Dilaurato de fluoresceína.
mecanismo es obstructivo, con solución endoscópica
o quirúrgica, si la capacidad funcional del páncreas no
La cuantificación del coeficiente de absorción de
está dañada permanentemente, no es necesario adminis-
grasa por la prueba clásica de Van de Kamer es el trar tratamiento sustitutivo. La eliminación del alcohol
estándar de oro para el diagnóstico de la maldigestión. u otras sustancias nocivas en las pancreatitis crónicas o
Los estudios imaginológicos revisten gran importan- el tratamiento multidisciplinario en la fibrosis quística,
cia porque contribuyen al diagnóstico de la insuficiencia son otros ejemplos de tratamiento causal.
pancreática exocrina y pueden orientar en las distintas Clásicamente, la principal medida en pacientes
causas que la provocan. con insuficiencia pancreática exocrina consiste en la
El ultrasonido permite evaluar en forma sencilla restricción de las grasas en la dieta para disminuir
las características del parénquima pancreático, tamaño la esteatorrea. Esta medida, sin embargo, conllevaba
y forma de la glándula, identifica colecciones paren- a la disminución de vitaminas liposolubles, las que
quimatosas, edema, quistes, tumores, calcificaciones, son también malabsorbidas y menor aporte calórico.
además de apreciar los conductos y otras alteraciones. Actualmente está demostrado en modelos experimen-
La tomografía axial computarizada es el método por tales en animales que la digestión es mayor cuando el
imagen de elección en el estudio del páncreas, visua- suplemento enzimático es administrado con dietas de
lizándose las estructuras pancreáticas. La tomografía alto contenido graso, comparado con dietas con poca
axial computarizada helicoidal o de alta resolución, aso- grasa. La ingesta frecuente de grasas de origen vegetal
ciada a contraste identifica más elementos diagnósticos. preferiblemente, debe asegurar el 30 % a 40% del aporte
La resonancia magnética nuclear es también una calórico, siempre acompañado de enzimas pancreáticas
excelente técnica aunque no supera a la tomografía en dosis adecuadas.
axial computarizada. De acuerdo con la valoración del estado nutricional
El diagnóstico endoscópico, a través de la ultrasono- hay que diferenciar el tratamiento dietético en pacien-
grafía endoscópica y la colangiografía endoscópica son tes con esteatorrea y desnutrición y los que padecen
254 Parte XV. Páncreas

esteatorrea no complicada con afectación nutricional. – Controlar la sintomatología


Para esto deben utilizarse las tablas de referencia para – Normalizar las deposiciones.
la población cubana, tanto para adultos como niños, – Disminuir la esteatorrea al mínimo.
y se pueden utilizar indicadores como índice de masa – Conseguir una nutrición y un desarrollo pondoesta-
corporal. tural normal.
En pacientes con desnutrición, el tratamiento die-
tético inicial debe ser más agresivo, con mayor aporte Las enzimas pancreáticas se administran en forma
calórico (40 kcal/kg a 45 kcal/kg de peso), en los pa- de microesferas con cubierta entérica, con individua-
cientes con estado nutricional aceptable será de 30 kcal/ lización de la dosis diaria de cada paciente.
kg a 35 kcal/kg de peso. Son recomendadas comidas En el niño se puede llegar a administrar hasta 10 000
frecuentes de poco volumen y libre de alimentos de U de lipasa por kilógramo de peso. En el adulto se puede
difícil digestión. Una dieta rica en fibras incrementa la aportar de 25 U a 50 000 U de lipasa por comida, que
secreción de lipasa pancreática, pero inhibe la actividad puede asegurar que la actividad de lipasa posprandial
de la enzima en 50%, por lo que, aunque discutido, no alcance 40 U/mL a 60 U/mL. Con estas dosis el estado
se recomienda. nutricional mejora rápidamente, si no hay respuesta al
Los triglicéridos de cadena mediana, que son di- tratamiento deben descartarse enfermedades asociadas.
rectamente absorbidos por la mucosa intestinal, son En algunos pacientes pueden asociarse antagonistas
muy buenos para ofrecer un aporte calórico extra en de los receptores H2 (cimetidina, ranitidina, famotidina)
pacientes con bajo peso y reducir la esteatorrea en los para disminuir la acidez gástrica. También los inhibi-
que tienen poca respuesta al tratamiento con enzimas. dores de la bomba de protones aumentan la eficacia de
La restricción de carbohidratos en la dieta solo es las enzimas.
necesaria en pacientes diabéticos. Pueden presentarse efectos colaterales como náuseas
Finalmente, como complemento de la dieta, los y vómitos que se controlan con reducción de la dosis. Se
pacientes requieren suplementos con vitaminas liposo- ha descrito además alergia a proteínas e hiperuricemia.
lubles administradas por vía oral o parenteral. El efecto colateral más severo es una lesión esteno-
La terapia con sustitución de enzimas idealmente sante irreversible del colon, conocida como colonopatía
restablece los patrones fisiológicos de la secreción fibrosante, que se observa en pacientes que han reci-
exocrina pancreática. Se utilizan no solo para eliminar bido altas dosis, muy superiores a las recomendadas.
los síntomas relacionados con la maldigestión sino prin- Requiere tratamiento quirúrgico.
cipalmente para mantener un estado nutricional normal. Debe considerarse también en estos pacientes, el
La terapia sustitutiva está indicada principalmente tratamiento de los síntomas asociados como dolor
en: abdominal, náuseas, vómitos, entre otros.
– Pacientes que tienen bajo peso.
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Rojo, C. M. (2007). Fibrosis quística o mucoviscidosis. En: De la
Los objetivos del tratamiento con enzimas pancreá- Torre, E., González, J., Gutiérrez, J., Jordán, J. Pediatría. Tomo
ticas son: III. La Habana: Editorial Ciencias Médicas, pp. 1012-1054.
Capítulo 195
Tumores de páncreas
Dr. Héctor Rubén Hernández Garcés

El cáncer de páncreas es una afección en la que las cular y se conocen en forma bastante precisa muchos de
células malignas se forman en los tejidos del páncreas. los eventos moleculares que se presentan en el epitelio
El 95 % de los tumores malignos procede de su parte ductal normal hacia su transformación a hiperplasia,
exocrina y el adenocarcinoma ductal es el tipo histoló- displasia y carcinoma in situ e invasivo.
gico más diagnosticado. El 5 % restante tiene su origen En 1999, se unificó la nomenclatura para clasificar
en el páncreas endocrino (insulinoma, glucagonoma, las lesiones precursoras del cáncer pancreático denomi-
gastrinoma, entre otros). nadas como “neoplasias pancreáticas intraepiteliales”.
Actualmente no hay pruebas que ayuden a detectar Estas se presentan dentro del páncreas en forma paralela
con precisión los casos de cáncer en las etapas iniciales, a la del carcinoma invasivo, así también se encuentran
puesto que este tipo de neoplasia no suele dar síntomas adyacentes a la neoplasia infiltrante. Se han demostrado
hasta alcanzar estadios avanzados. alteraciones genéticas en las neoplasias pancreáticas
El adenocarcinoma de páncreas es el tumor más intraepiteliales que son parecidas a la del carcinoma
frecuente que asienta en esta glándula. A pesar de los invasor.
avances de la medicina actual, su pronóstico es sombrío La clasificación considera cuatro grupos que reflejan
debido al diagnóstico tardío, que hace que solo entre los cambios histológicos progresivos desde el epitelio
10 % y 25 % de estos tumores sean subsidiarios de normal hasta terminar en carcinoma.
tratamiento quirúrgico y que la tasa de supervivencia El primer grado neoplasias pancreáticas intraepite-
a los cinco años sea inferior al 10 %. Según un estudio liales1, se divide en 1A lesión plana, y 1B lesión papi-
realizado en 2008, su coeficiente muerte/incidencia se lar, en este estadio hay ausencia de atipia o polaridad
acerca al 0,98 y se considera la cuarta causa de muerte nuclear. Las neoplasias pancreáticas intraepiteliales2,
relacionada con el cáncer y la segunda de cáncer di- además de elementos papilares, tiene evidencia de
gestivo. atipias nucleares con infrecuentes mitosis y las neopla-
En la Unión Europea el cáncer de páncreas supone sias pancreáticas intraepiteliales3 tienen pérdida de la
la sexta causa de muerte por cáncer, tanto en mujeres polaridad, atipias nucleares y mitosis frecuentes, esta
como en varones, la incidencia en España se sitúa apro- lesión también se ha denominado carcinoma in situ.
ximadamente en ocho casos por 100 000 habitantes/año. Desde el punto de vista genético está ampliamente
El pico de incidencia se sitúa en las últimas décadas aceptado que las neoplasias pancreáticas intraepiteliales
de la vida, así 80 % de los pacientes tienen más de 60 es la lesión precursora inicial del cáncer de páncreas,
años. Afecta predominantemente al sexo masculino y la cada estadio de neoplasias pancreáticas intraepiteliales
proporción varón:mujer es de 1,7:1, aunque esta razón está asociado a modificaciones progresivas en oncó-
disminuye conforme se incrementa la edad. genes y genes supresores tumorales tales como K-ras
(90 % a 100 %), p16 (90 % a 95 %), p53 (50 % a 85 %),
Lesiones precursoras del cáncer DPC4/SMAD4 (50 %) y BRCA2 (10 %). Se ha encontra-
do que la progresión del tumor requiere que esté alterado
pancreático el K-ras en combinación con el Ink4, debido a que el Ink4
El cáncer de páncreas es actualmente uno de los y p53 frenan la progresión de neoplasias pancreáticas
tumores mejor estudiados desde el punto de vista mole- intraepiteliales a cáncer de páncreas (Fig. 195.1).
256 Parte XV. Páncreas

Fig. 195.1. Lesiones pancreáticas precursoras y eventos genéticos involucrados en la progresión del adenocarcinoma de
páncreas.

Etiología – Síndrome heredado de cáncer de mama y ovario,


causado por mutaciones en el gen BRCA2.
No se conoce la etiología del adenocarcinoma de – Síndrome de Gardner.
páncreas, pero probablemente es multifactorial. Se han – Síndrome de Peutz-Jeghers, causado por defectos en
descrito factores de riesgo ambiental y genético, estos el gen STK1, también se ha asociado con pólipos
últimos son los más importantes: en el tracto digestivo y otros tipos de cáncer.
– Pancreatitis hereditaria, causado por mutaciones en – Síndrome de melanoma familiar atípico con molas
el gen PRSS1. múltiples, causado por mutaciones en el gen p16.
– Fibrosis quística. – Síndrome de Von Hippel-Lindau, causado por mu-
– Cáncer colorrectal hereditario no poliposo, en la taciones en el gen VHL, lo que puede derivar en un
mayoría de los casos riesgo aumentado de cáncer de páncreas y carcinoma
– causado por un defecto en el gen MLH1 o el gen de la ampolla de Váter.
MSH2. Al menos otros cinco genes también pueden – Neoplasia endocrina múltiple tipo 1, causada por
causar este cáncer: MLH3, MSH6, TGBR2, PMS1, mutaciones en el gen MEN1, lo que deriva en un
y PMS2. Este trastorno también se conoce como riesgo aumentado de tumores de la glándula para-
síndrome Lynch. tiroides, la glándula pituitaria y las células de los
– Poliposis adenomatosa familiar. islotes del páncreas.
Capítulo 195. Tumores del páncreas 257

– Ataxia-telangiectasia. do o tercer grado afectados. En este último grupo se


– Pancreatitis crónica. aconseja efectuar cribado de cáncer precoz o lesiones
– Pancreatitis crónica tropical. precursoras.
– Cáncer de páncreas familiar.
– Diabetes mellitus. Diagnóstico clínico
– Tumor mucinoso intraductal.
El carácter inespecífico de muchos de los síntomas
Entre los factores ambientales que predisponen al del cáncer de páncreas es la causa de su diagnóstico
cáncer de páncreas cabe mencionar la edad avanzada, tardío y, por tanto, de su mal pronóstico. Las formas
el sexo masculino, la raza negra, la ascendencia judía, más habituales de presentación de este tumor son:
dietas ricas en grasa animal, sustancias carcinógenas – Síntomas sugestivos de enfermedad biliar, que in-
relacionadas con la industria petroquímica y el consumo cluso pueden haber llevado a la realización previa
de tabaco. de una colecistectomía.
La obesidad y la actividad física, las personas con – Pérdida de peso importante y progresiva, habitual-
mucho sobrepeso (obesas) son más propensas a desa- mente acompañada de un dolor abdominal tenue
rrollar cáncer de páncreas exocrino, al igual que las que e inespecífico. Desarrollo de diabetes mellitus no
tienen poca actividad física. insulinodependiente en ausencia de historia familiar
Entre los grupos de riesgo se encuentran los pa- de diabetes.
cientes con pancreatitis crónica de larga duración. La – Dolor abdominal seudoulceroso, sin alteraciones
incidencia de la neoplasia está especialmente elevada endoscópicas.
en los pacientes con pancreatitis crónica tropical.
Los pacientes con diabetes mellitus tienen el doble El dolor abdominal es el síntoma más prevalente,
de riesgo que la población normal de padecer cáncer de que típicamente se trata de un dolor abdominal locali-
páncreas. Por otra parte, cuando el trastorno endocrino zado en epigastrio o en hipocondrio derecho, continuo,
aparece en unapersona mayor de 50 años, sin antece- sordo, que se irradia en cinturón o hacia la espalda y
dentes familiares de diabetes, hay que considerar la mejora en sedestación con el tronco hacia delante y
posibilidad de que se trate de una manifestación precoz empeora con el decúbito supino. Con frecuencia ini-
del adenocarcinoma de páncreas. cialmente no se trata de un dolor muy intenso, por lo
En los últimos años se ha identificado un tipo de que pueden transcurrir semanas o meses antes de que
neoplasia, el tumor mucinoso papilar intraductal, que se realicen exploraciones diagnósticas.
se asemeja a una pancreatitis crónica y que debe con- La pérdida de peso es otro síntoma frecuente, que se
siderarse como una lesión premaligna por la elevada acompaña habitualmente de anorexia, que contribuye
frecuencia con que se presenta cáncer invasor. de forma decisiva a la disminución ponderal, la pérdida
Hasta en 10 % de los pacientes existe algún tipo de peso puede verse influida en parte a la presencia de
de síndrome hereditario asociado, estos síndromes malabsorción subclínica. Es más frecuente en tumores
incluyen la pancreatitis hereditaria, el cáncer de mama de cuerpo y cola de páncreas, y su intensidad es paralela
hereditario (genes BRCA1 y BRCA2), un subgrupo de al estadio de la enfermedad.
pacientes con síndrome del melanoma familiar atípico La ictericia es el síntoma más frecuente de los tu-
con molas múltiples y mutación germinal p16 y la mores situados en la cabeza del páncreas, acompañada
poliposis de Peutz-Jeghers. de prurito, coluria y acolia y se debe a la obstrucción
Por otra parte, se sabe que aproximadamente 10 (infiltración) del colédoco a su paso por esta zona,
% de los pacientes con cáncer de páncreas tienen uno también puede aparecer en tumores de cuerpo y cola,
o más familiares de primer o segundo grado que han en este caso, en relación a la compresión biliar por
padecido esta enfermedad. Los estudios en familias con adenopatías en el hilio hepático o a la presencia de me-
esta predisposición, en las que se habían dado múltiples tástasis hepáticas. Típicamente se trata de una ictericia
casos de la enfermedad, han identificado de manera indolora, lo que ayuda a diferenciarla clínicamente de
uniforme una transmisión autosómica dominante. Se la ictericia por coledocolitiasis.
considera que el riesgo es moderado (cinco a diez veces) De 15 % a 20 % de los pacientes comienzan con
cuando hay dos familiares de pr imer grado afectados, una diabetes mellitus o intolerancia a los hidratos de
mientras que se considera alto (mayor de diez veces) carbono y hasta 80 % llega a desarrollarla a lo largo
cuando existen tres o más familiares de primero, segun- de la enfermedad. La aparición de diabetes parece
258 Parte XV. Páncreas

ocurrir por la estimulación de las células beta de los La tomografía axial computarizada multicorte se
islotes pancreáticos por las células tumorales para que está convirtiendo en la modalidad de imagen de elec-
secreten la amilina o polipéptido amiloide, lo que inhibe ción para el tamizaje de pacientes de alto riesgo. Los
a la extracción de glucosa por el hígado y el músculo hallazgos que deben de hacernos sospechar una lesión
esquelético. Este polipéptido se encuentra aumentado neoplásica son cambio en la densidad del parénquima
en pacientes con cáncer de páncreas y diabetes, pero o masa focal, con o sin dilatación ductal o la presencia
no en diabéticos sin cáncer, ni en canceres sin diabetes. de dilatación ductal aislada con transición abrupta.
La depresión es un síndrome que aparece en 50 %
de los casos en el momento del diagnóstico del tumor. Marcadores tumorales
Probablemente sea reactiva ante el retraso del diagnós-
Los marcadores tumorales pueden clasificarse en
tico y en el empeoramiento progresivo del paciente.
“específicos del tumor” o “asociados al tumor”. En la
Digestión incompleta de grasa, si el cáncer bloquea
actualidad no se conocen marcadores tumorales especí-
el paso del jugo pancreático al intestino, el paciente
ficos para el cáncer de páncreas, los estudios informados
puede tener problemas para digerir alimentos ricos
en la literatura corresponden a marcadores “asociados
en grasas, lo que puede dar lugar a heces de color
al tumor” y pueden agruparse en varias categorías.
pálido, gruesas, grasosas y que flotan en el excusado
(esteatorrea). Antígenos asociados a células tumorales
Aparecen náuseas y vómitos si el tumor comprime la
La mayor parte corresponden a glucoproteínas
parte distal del estómago o infiltra el duodeno, causando
complejas detectadas por anticuerpos monoclonales que
un bloqueo parcial, estos síntomas empeoran tras las
reaccionan con la mucina de las células pancreáticas
comidas.
malignas, entre estos se encuentran: Ca 19-9, Ca 125,
Ca 242, TAG-72 (Ca 72-4), Ca 494, Ca 50, Span-1 y
Exploración física DUPAN-2. El Ca 19-9 se considera el estándar de oro
Al inicio de la enfermedad la exploración del pacien- de los marcadores tumorales del cáncer de páncreas y
te suele ser normal y no se encuentran datos sugestivos su utilidad se ha evaluado en varios estudios de diag-
de la dolencia, la exploración debe centrarse en el ab- nóstico y vigilancia de la evolución de esta neoplasia.
domen, en busca de masas o de acumulación de signos. Otras proteínas incluidas en esta categoría de antígenos
En ocasiones la obstrucción de la vía biliar hace que la vinculados a tumores son las denominadas oncofetales,
vesícula aumente de tamaño, y esta distensión puede como el antígeno carcinoembrionario que se ha usado
palparse. En otras ocasiones las sustancias secretadas ampliamente para identificar neoplasias digestivas y el
por las células cancerígenas pueden hacer que se formen antígeno pancreático oncofetal.
coágulos de sangre en las venas o anormalidades del El antígeno Ca19-9 es un monosialogangliósido,
tejido graso subcutáneo. Cuando el cáncer se propaga al se expresa en las membranas de células epiteliales
territorio ganglionar, los ganglios aumentan de tamaño tumorales e incluso en las normales del páncreas,
y se pueden palpar a través de la piel. vesícula, vías biliares y estómago, por tanto, aunque
se encuentran niveles elevados en la mayor parte de
los adenocarcinomas pancreáticos, también se pueden
Exámenes complementarios elevar en otras neoplasias, como las originadas en vías
Puede plantearse en los grupos asociados a mayor biliares, estómago y colon, lo mismo ocurre en algu-
riesgo de cáncer de páncreas. De estos la asociación nas patologías benignas como pancreatitis, hepatitis
más elevada es con la pancreatitis crónica, sobre todo la y obstrucción de la vías biliares, principalmente en la
de origen hereditario. Un grupo especial lo constituyen colangitis aguda y cirrosis hepática, aunque la elevación
las personas con antecedentes familiares de cáncer de ocurre con menor frecuencia y magnitud.
páncreas. No está establecida cual es la pauta de detec- La sensibilidad y especificidad de este antígeno séri-
ción más recomendable, pero la determinación anual co para establecer el diagnóstico de adenocarcinoma de
de Ca 19-9 junto a una técnica de imagen (ecografía, páncreas dependen del valor de corte utilizado y de la
tomografía axial computarizada o ecoendoscopia) es extensión de la neoplasia, así como de las poblaciones
una actitud razonable. En caso de cáncer de páncreas controles que se estudian.
familiar, parece prudente iniciar el cribado entre los 45 El antígeno Ca 19-9 puede ser útil para evaluar la
y 50 años o 15 años antes de la edad del familiar afec- respuesta al tratamiento neoadyuvante, para detectar en
tado más joven, con periodicidad no bien establecida. forma temprana las recurrencias posoperatorias, incluso
Capítulo 195. Tumores del páncreas 259

mucho tiempo antes que los métodos de imagen, para de pacientes con cáncer de páncreas, tiene amplios
predecir la respuesta a quimioterapia y para establecer el límites, que van desde 50 % hasta alcanzar 100 % en
pronóstico posoperatorio, pues se ha informado que hay algunas series publicadas, en tanto que en los casos de
mejor sobrevida en pacientes en quienes se normalizan pancreatitis crónica se encuentra baja frecuencia de
los niveles de Ca 19-9 después de la cirugía. mutación de K-ras.
Además de detectar mutaciones en jugo pancreá-
Antígeno carcinoembrionario tico, sangre periférica y bilis, también pueden encon-
Es una proteína que puede encontrarse en el lado trarse en heces mediante la técnica de la reacción en
apical de la mucosa intestinal de tejido normal adul- cadena de la polimerasa en pacientes con pancreatitis
to, cuya polaridad se pierde en las células malignas, crónica o carcinoma pancreático, colangiocarcinoma
secretándose antígeno carcinoembrionario al espacio y neoplasias colónicas. Desde el punto de vista clínico
extracelular y se puede detectar como un elevado mar- esta mutación se ha relacionado con disminución en
cador tumoral en la sangre periférica. Este marcador la sobrevida.
tumoral se ha utilizado en diferentes neoplasias gas-
trointestinales, en especial en el carcinoma colorrectal, Familia de genes Erb
sin embargo, se ha encontrado en otros carcinomas Esta familia es conocida como HER oErb B tiene
como el pancreático y el gástrico, incluso en canceres cuatro receptores. El tipo 2 (HER-2/neu), también
extradigestivos como mama y pulmón, y puede haber conocido como ErbB2 se ha encontrado en lesiones
niveles altos en enfermedades inflamatorias benignas precancerosas y tumores bien diferenciados. El factor
como pancreatitis crónica. de crecimiento epidérmico, también pertenece a esta
Este antígeno tiene sensibilidad y especificidad limi- familia.
tadas (58 % y 75 %, respectivamente) en el diagnóstico Los factores de crecimiento unidos a estos recepto-
de adenocarcinoma del páncreas, por lo que se ha dejado res promueven y activan el crecimiento y la diferencia-
de usar en forma sistemática y solo se propone cuando ción celular. La amplificación de estos protoncógenes
se determina en el jugo pancreático. En caso de tumo- lidera una proliferación incontrolada de las células. Se
res pequeños tiene una exactitud diagnostica mayor de encuentran presentes entre 16 % a 65 % de cáncer de
80 %, que aumenta más de 90 % cuando se usa en com- páncreas, no se ha encontrado relación con el pronóstico
binación con estudio citológico del jugo pancreático. y la sobrevida.
Otro factor descrito en el cáncer de páncreas es el
Genes factor de crecimiento endotelial que facilita el creci-
El avance reciente en el estudio de la oncogénesis miento vascular en la progresión tumoral.
ha permitido identificar varios marcadores moleculares El factor de crecimiento transformante beta gene-
de neoplasias pancreáticas asociados a mutaciones que ralmente es considerado como un supresor normal de
pueden aparecer desde que existen lesiones precursoras. la proliferación celular, sin embargo, sus vías de señal
dan ventaja al crecimiento tumoral mediante sus efectos
K-ras sobre el depósito de matriz extracelular, la promoción
Abreviación Kirsten Rat Sarcoma virus oncogen, es de marcadores mesenquimales, alteraciones del siste-
un protoncógeno localizado en el cromosoma 12p12.1, ma inmune y la angiogénesis. El factor de crecimiento
pertenece a la familia ras que tiene tres protoncógenes transformante beta se ha encontrado sobreexpresado
H-ras, K-ras, N-ras. Están localizadas en la membrana en cáncer de páncreas al igual que su receptor. Adicio-
plasmática. nalmente se ha documentado una cooperación directa
La mutación de este gen de la familia ras de onco- e indirecta con las vías de señal del ras.
genes ocurre hasta en 95 % de los adenocarcinomas
Notch 1 y Hedgehog
pancreáticos, pero no en otro tipo de tumor humano.
Se ha demostrado que en presencia de alteraciones Se ha encontrado activación de algunas vías que
ductales, tal vez precursoras del cáncer pancreático, se normalmente participan en el desarrollo del cáncer
observan mutaciones de K-ras con frecuencia mayor pancreático. En los mamíferos existe una familia de
que 50 %, por lo que se ha supuesto que esta mutación proteínas de señal secretora denominada Hedgehog,
representa un factor fundamental y temprano en el que agrupa tres clases denominadas Sonic, Indian y
desarrollo de la neoplasia. Desert (Shh, Ihy, Dhh), tienen como función regular el
La frecuencia en la literatura, en cuanto a la detec- crecimiento y el desarrollo durante la vida embrionaria
ción de mutaciones de K-ras en el jugo pancreático de muchos órganos incluyendo el páncreas. La vía He-
260 Parte XV. Páncreas

dgehog posteriormente se mantiene inhibida por una es un evento temprano y una de las principales causas
proteína supresora de tumor denominada Patched (PTC). de pérdida de la función de genes supresores de tumor y
Otra vía es el Notch1, que es un protoncógeno lo- oncógenes. En la mayoría de los casos esta inestabilidad
calizado en 9q34.3. Esta vía es importante en dirigir el genómica es eliminada por la activación de la proteína
destino y la proliferación celular durante el desarrollo p53, pero cuando hay mutaciones que afectan la p53
embrionario. En etapas posteriores esta vía mantiene estos dos defectos cooperan en la génesis del cáncer
un balance entre la proliferación, la diferenciación y en múltiples tejidos incluyendo el cáncer de páncreas.
la apoptosis.
Metaloproteinasas de matriz extracelular
Estudios recientes han demostrado que la desregula-
ción de una o más de estas vías y sus genes relacionados Las metaloproteinasas de matriz extracelular, per-
pueden iniciar cáncer en las células madre y la génesis tenecen a una familia de por lo menos 20 miembros,
tumoral. Tanto el Notch como el Hedgehog se han actúan como enzimas dependientes de zinc. Las más
encontrado relacionados con el cáncer de páncreas por conocidas son las colagenasas, estromelisinas y gela-
inducción de actividad de células asesinas (NF-KB) que tinasas. Su principal función es la degradación de los
está presente en la mayoría de los tumores de páncreas. componentes de la matriz extracelular, participan en la
Algunos investigadores han encontrado activación remodelación y la cicatrización de los tejidos así como
de estas vías tanto en fases tempranas como avanzadas del desarrollo embrionario.
y metástasis de este tumor, adicionalmente la vía del Varias citoquinas, factores de crecimiento y factores
Notch regula la neovascularización en el cáncer de de estrés mecánico pueden inducir la estimulación de la
páncreas. Es probable que exista una comunicación producción de metaloproteinasas de matriz extracelular.
entre las vías del K-ras activado y las vías de señal Shh Estas sustancias son de crucial importancia en la
cooperando para preservar la apariencia de la lesiones carcinogénesis porque además degradan la membrana
de neoplasias pancreáticas intraepiteliales; las fallas en basal y los componentes de la matriz extracelular lo
esta asociación conducen a la formación de un tumor que favorece los procesos de invasión tumoral y de
indiferenciado de características mesenquimales. metástasis. Favorecen también la expresión de facto-
res proangiogénicostales como factor de crecimiento
Genes supresores de tumores endotelial y bFGF, que contrarrestan los inhibidores
P16/ink4 angiogénicos tales como las trombospondinas, angios-
tatinas e interferones.
El gen p16, también conocido como INK4, CDKN-
Debido a estas propiedades la inhibición de las
2MTS1, gen supresor de tumor tipo 1 se encuentra loca-
metaloproteinasas de matriz extracelular es un blanco
lizado en el cromosoma 9p21, inhibe la interacción de
importante en el desarrollo de quimioterápicos contra
la cíclica D con la CDK4 y la CDK6, frena la división
el cáncer de páncreas.
celular en la fase G1; las mutaciones en este gen pro-
mueven la proliferación celular y se encuentran en 27 % Enzimas y hormonas
a 96 % del cáncer de páncreas. Desde el punto de vista
Algunos autores has propuesto la determinación de
clínico su relación con la sobrevida no es consistente.
diversas enzimas (elastasa, ribonucleasa, amilasa, lipa-
DPC 4 o Smad4 sa, telomerasa eisoenzima II de galactosiltransferasa)
Este gen supresor se encuentra en el cromosoma como los marcadores más útiles de tumor pancreático,
18q. Es uno de los genes con más frecuencia mutados sin embargo, los resultados son controvertidos y su baja
en el cáncer de páncreas hasta en 55 %. La inactivación especificidad ha limitado su uso.
de este gen es relativamente específica del cáncer de Las hormonas producidas por el páncreas como
páncreas, es de baja incidencia en otros tumores pan- insulina, gastrina yglucagón, tienen utilidad para de-
creáticos y extrapancreáticos. Se han utilizado inmuno- tectar las neoplasias endocrinas pancreáticas, pero no
marcadores que muestran la pérdida de este gen por su los tumores exocrinos.
especificidad como diagnóstico incluyendo el estudio Recientemente se postuló que la amilina, polipéptido
de metástasis con sospecha de origen pancreático. amiloide producido en las células beta de los islotes,
puede ser un marcador de adenocarcinoma de páncreas,
Acortamiento de los telómeros ya que esta aumentado en pacientes diabéticos.
Esta alteración puede ser la mayor causa de inestabi- La alteración del metabolismo de los andrógenos
lidad cromosomal en los tumores de páncreas, al parecer en pacientes con neoplasias pancreáticas exocrinas ha
Capítulo 195. Tumores del páncreas 261

llevado a proponer la relación sérica de testosterona: Estudios con bario


dihidrotestosterona como marcador tumoral específico En la actualidad no se utiliza para el diagnóstico
para cáncer de páncreas. Sin embargo, a pesar de su uti- del cáncer de páncreas. Sin embargo, en ocasiones
lidad clínica, incluso en tumores pequeños en estadios puede ser el primer estudio en el que se diagnostique
iniciales, la aplicación de esta prueba tiene limitaciones, la neoplasia, por ejemplo, cuando se realiza por otro
pues solo es válida para varones. motivo como dolor abdominal. Por esto es importante
conocer sus signos radiológicos.
Imaginología El carcinoma de cabeza de páncreas puede provocar
Los métodos de radiología e imaginología para in- desplazamiento, efecto de masa y signos de invasión
vestigar la existencia de tumores en el páncreas tienen del duodeno, el arco duodenal puede estar ensanchado y
dos objetivos fundamentales: presentar el “signo del tres invertido” de Forstberg, pero
– Realizar el diagnóstico preciso. en ocasiones es pequeño, como en algunos carcinomas
– Evaluar la extensión del tumor (estadificación). difusos. La reacción desmoplásica que acompaña al tu-
mor ocasiona alteraciones del patrón mucoso: en forma,
Estas técnicas se encuentran en continua evolución, la anchura, el tamaño y la dirección de los pliegues con
lo que modifica a menudo sus alcances y limitacionesy aspecto “en cepillo”, fijación, divergencia o alarga-
por tanto sus indicaciones. El clínico, el endoscopista miento y formación de seudodivertículos (Fig. 195.2).
y el radiólogo deben conocerlos y mantener la comu-
nicación necesaria para su empleo en forma juiciosa y
benéfica para cada paciente.
Las técnicas de imagen, por su parte, han mejorado
significativamente y pueden ayudar a detectar lesiones
cada vez más pequeñas, por lo que ocupan un lugar
relevante en la atención del paciente:
– Radiología convencional:
• Radiología simple.
• Estudios con bario.
– Ultrasonido (ecografía):
• Transabdominal.
• Doppler en color, Doppler de potencia.
• Intraoperatoria.
• Endoscópico.
• Intraductal.
– Tomografía axial computarizada:
• Multicorte.
• Helicoidal.
• Por emisión de positrones.
– Resonancia magnética.
– Colangiografía y pancreatografía: Fig. 195.2. Radiografía con bario en paciente con neoplasia
• Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica. de cabeza de páncreas. Alteraciones del patrón mucoso
• Colangiopancreatografía por resonancia magnética. del marco duodenal: en forma, la anchura, el tamaño, y la
• Colangiografía percutánea. dirección de los pliegues con aspecto “en cepillo”, fijación,
– Medicina nuclear. divergencia o alargamiento.
– Radiología convencional.
Los tumores de la cabeza y el cuerpo pueden com-
Radiografía simple primir la parte posterior e inferior del antro gástrico, en
tanto que los del cuerpo y cola pueden invadir el ángulo
Su función se limita a situaciones excepcionales,
duodenoyeyunal y no pocas veces, cuando son grandes,
como demostrar signos indirectos de obstrucción del
invaden el colon transverso y el ángulo esplénico por
duodeno de invasión por continuidad, obstrucción
diseminación a lo largo del mesocolon transverso y los
intestinal por carcinosis peritoneal o detección de
ligamentos esplenorrenal y mesocólico.
metástasis óseas.
262 Parte XV. Páncreas

Ultrasonido o ecografía – Obstrucción biliar: frecuente en los tumores cefáli-


En la actualidad existen múltiples técnicas para cos y que se reconoce en las obstrucciones recientes
explorar el páncreas por medio del ultrasonido. por dilatación de los conductos extrahepáticos (ley
de Laplace de los cilindros) y conforme avanza se
Ultrasonido transabdominal hace general, con mayor calibre y dilatación del
Por su inocuidad y bajo costo, suele ser la primera colédoco desde la porción intrapancreática hasta las
técnica que se realiza ante los síntomas que presentan ramas intrahepáticas e incluso de la vesícula biliar.
estos pacientes. – Dilatación del conducto de Wirsung: que termina en
La identificación del páncreas depende en gran forma abrupta hacia el tumor, con bordes biconcavos
medida del hábito corporal del paciente. Es un método y cuyo diámetro puede ser mayor que 6 mm.
adecuado en pacientes delgados, en los que la glándula – Invasión vascular: utilizando la ecografía con Do-
puede observarse casi en su totalidad, sin embargo, en ppler se puede obtener información sobre la afecta-
personas obesas o con abundante gas intestinal, el es- ción de grandes vasos como la arteria mesentérica
tudio resulta muy difícil e incluso a veces no es posible superior y las ramas del tronco celiaco, rodeadas
la identificación del páncreas. La sensibilidad y espe- por tejido neoplásico.
cificidad de esta técnica para el diagnóstico del cáncer – Metástasis hepáticas: que pueden ser múltiples, por
de páncreas es de 76 % y el 75 %, respectivamente. lo general hipoecoicas, a veces hiperecoicas o mixtas.
El tumor se visualiza como una masa hipoecoica,
homogénea, de contornos definidos, aunque tiene capa- Otros datos pueden ser adenopatías peripancreáticas,
cidad para detectar pequeños tumores por la diferente seudoquiste secundario y ascitis.
ecogenicidad con el parénquima normal, de ordinario La ecografía aumenta su rendimiento cuando es
cuando se descubre frecuentemente mide de 2 cm a utilizada intraoperatoriamente para valorar pequeños tu-
3 cm (Fig. 195.3). mores, metástasis o afectación vascular (Fig. 195.4).Las
El tumor también da lugar a varios signos secunda- metástasis aparecen como nódulos únicos o múltiples,
rios que son valiosos para el diagnóstico: pequeños o grandes, hipoecoicos, bien delimitados y

A B

Fig. 195.3. Ecografía del páncreas, adenocarcinoma ductal. A. Dilatación del colédoco desde la porción intrapancreática hasta
las ramas intrahepáticas. B. Corte transversal a nivel del epigastrio, donde se ve una masa tumoral sólida en la región de la
cabeza (flechas naranjas), de contornos mal definidos por infiltración de los tejidos vecinos, engrosamiento difuso de todo el
órgano y dilatación del conducto pancreático.
Capítulo 195. Tumores del páncreas 263

muchas veces reproducen el patrón del tumor de origen. ciones como el hecho de no estar disponible en todos los
Conocer la existencia de un tumor primario ayuda en centros, su carácter discretamente invasivo que requiere
el diagnóstico. sedación y monitorización del paciente, el elevado costo
La ecografía es útil y debe emplearse siempre que y el ser dependiente del operador. Las complicaciones no
existan masas cuya etiología no pueda determinarse en son frecuentes (1 % a 2 %), pero potencialmente graves,
la tomografía computarizada, ya que la demostración de como la perforación duodenal y la pancreatitis aguda.
ecogenicidad en el área de una masa en la tomografía Desde un punto de vista práctico, se utiliza en pa-
axial computarizada evita biopsias innecesarias. cientes con sospecha de neoplasia de páncreas resecable
no diagnosticada por tomografía axial computarizada o
para confirmar la resecabilidad del tumor previamente
a indicar una cirugía con intención curativa.

Fig. 195.4. Ultrasonografía laparoscópica para la evaluación


de metástasis hepática.

Ultrasonografía endoscópica
La ultrasonografía endoscópicaproporciona una ima-
gen de alta resolución por la proximidad del transductor
a la glándula pancreática, por lo que permite detectar Fig. 195.5. Adenocarcinoma de cabeza de páncreas. Ultra-
lesiones de muy pequeño tamaño (hasta de 2 mm a 3 sonido endoscópico que muestra masa hipoecogénica de
mm). Esta técnica ha demostrado un alto valor predictivo márgenes irregulares y contornos multilobulados en cabeza
de páncreas.
negativo, de forma que si no detecta masa en el páncreas
el diagnóstico queda prácticamente descartado. Tiene
una sensibilidad y especificidad para el diagnóstico de Ultrasonido intraductal
este tumor cercano al 95 %, que disminuye sensible- Con esta técnica el transductor se coloca dentro de
mente si el tumor asienta sobre una pancreatitis crónica. los conductillos pancreáticos, se emplea un transductor
Además, permite una correcta estimación de resecabili- de alta frecuencia, con gran resolución espacial, su
dad en 80 % de los casos, con una eficacia diagnostica función está limitada a pequeños carcinomas.
de invasión ganglionar de 73 % y vascular de 90 %,
por lo que desde el punto de vista teórico, es la mejor Ecografía tridimensional
técnica para el correcto diagnóstico y estadificación del La ecografía tridimensional tiene gran valor para el
adenocarcinoma de páncreas (Fig. 195.5). estudio de las características de los tabiques y la pared.
De todas formas, la ventaja más importante de la
ultrasonografía endoscópica es la posibilidad de realizar Tomografía axial computarizada
punción-aspiración con aguja fina guiada en tiempo real, La tomografía axial computarizada permite el diag-
es decir, visualizando la aguja por ecografía durante todo nóstico de tumores superiores a 2 cm de diámetro, así
el procedimiento. Tanto la sensibilidad como la especifi- como el estado de la vía biliar y pancreática, retrope-
cidad de esta técnica para esta indicación son muy altas ritoneo, grasa peripancreática, adenopatías, metástasis
(mayor que 95 %). No obstante, existen algunas limita- hepáticas, peritoneales y ascitis (Fig. 195.6).
264 Parte XV. Páncreas

Fig. 195.6. Tomografía computarizada. A. Fase arterial. Muestra lesión en cabeza de páncreas (flecha). B. Fase venosa portal.
Muestra ausencia de infiltración del plano graso alrededor de la vena porta (flecha).

Tomografía axial computarizada helicoidal Resonancia magnética


Es la técnica más utilizada en el diagnóstico y La resonancia magnética detecta tumores superiores
estadificación del cáncer de páncreas. Tiene muy alto a 3 cm, aunque no deformen el contorno pancreático.
rendimiento para el diagnóstico de invasión vascular, Por lo demás no supera el rendimiento diagnóstico de la
con una eficacia diagnostica para el tumor resecable de tomografía axial computarizada, excepto en la detección
90 % y para el tumor irresecable de casi 100 %. de pequeñas metástasis. Puede ser de utilidad en casos
Tomografía axial computarizada multicorte de sospecha de tumor pancreático no confirmado por
tomografía axial computarizada, como confirmación de
Supone una mejora sustancial en la calidad de la la resecabilidad del tumor previamente a la cirugía, en el
imagen y ofrece múltiples ventajas en el estudio de la
diagnóstico diferencial de la pancreatitis crónica y en la
patología pancreática, aunque su sensibilidad dismi-
investigación de la recidiva posquirúrgica (Fig. 195.8).
nuye significativamente cuando se analizan tumores
menores de 2 cm. Colangiopancreatografía por resonancia magnética
Tomografía por emisión de positrones Es la técnica de elección actualmente para la evalua-
18F-fuorodeoxiglucosa con tomografía axial ción inicial de la ictericia obstructiva, reemplazando a
computarizada la colangiopancreatografía retrógrada endoscópica. Al
La captación elevada de 18F-fluorodeoxiglucosa igual que esta no es útil para la estadificación tumoral
en la mayoría de los tumores se debe a la expresión pero, por el contrario, no permite la obtención de ma-
incrementada del número de proteínas transportadoras terial citológico (Fig. 195.9).
de glucosa y de enzimas intracelulares como hexoquina-
Colangiopancreatografía retrógrada endoscópica
sas o fosfofructoquinasa, que promueven la glucólisis.
El páncreas normalmente no es visualizado por En la actualidad hay consenso en el hecho de que la
tomografía por emisión de positrones 18F-fuorodeoxi- colangiopancreatografía retrógrada endoscópica solo se
glucosa con tomografía axial computarizada, así que la debe efectuar con intención terapéutica (colocación de
presencia de un área hipercaptante debe de considerarse prótesis) en estos pacientes. Tiene una gran utilidad para
anormal. El carcinoma de páncreas sobreexpresa Glut- localizar pequeños tumores que alteren la vía biliar o pan-
1, lo que permite distinguir diferencias metabólicas creática, con una sensibilidad y especificidad de alrededor
entre el parénquima normal y el neoplásico (valor pre- de 95 %, se pueden tomar muestras citológicas de estos.
dictivo positivo de 91 % y de valor predictivo negativo Los pacientes referidos al endoscopista por ictericia
de 64 %). En la detección de metástasis a distancia al obstructiva, tal vez de origen maligno, forman un grupo
hígado, ganglios retroperitoneales u otros sitios. Ade- heterogéneo de posibles patologías y en ninguno se
más tiene una sensibilidad de 81 % y especificidad de tiene un diagnostico histológico de certeza, por lo que
100 % (Fig. 195.7). siempre se deben considerar las posibles causas.
Capítulo 195. Tumores del páncreas 265

A B
Fig. 195.7. Paciente con adenocarcinoma de páncreas, en el que se realizó estudio de tomografía por emisión de positrones
18F-fuorodeoxiglucosa con tomografía axial computarizada para descartar la presencia de lesiones hepática. A. Presencia
de lesión neoplásica hipercaptante en la cabeza del páncreas (flecha). B. Lesión focal en el segmento IVA del hígado, con
incremento de la captación de la fuorodeoxiglucosa (flecha), la que se corresponde a metástasis hepática.

Los hallazgos que sugieren malignidad van desde la


presencia de varices gástricas por invasión y trombosis
de la vena esplénica, hasta deformidad y presencia de
masas que erosionan la mucosa del antro, píloro, bulbo
duodenal y segunda porción del duodeno. En estos
casos es importante realizar biopsias de estas lesiones,
ya que se puede obtener un diagnóstico histológico
certero en gran parte de los pacientes.
Los hallazgos en la colangiopancreatografía retró-
grada endoscópica son sugerentes y no diagnósticos de
cáncer de páncreas, y siempre se deben tener presentes
las patologías de naturaleza inflamatoria, como pancrea-
titis crónica, traumatismo pancreático y seudoquiste
Fig. 195.8. Adenocarcinoma de páncreas. El tumor es típi- pancreático.
camente ecogénico en la fase pancreática (flecha). Como la mayor parte de los tumores malignos de
páncreas se derivan de los conductos, el pancreatogra-
ma invariablemente es anormal y pueden observarse
distintos patrones (Fig. 195.10):
– Estenosis de longitud variable con dilatación dis-
tal del conducto pancreático y ausencia de ramas
colaterales. Estas estenosis suelen ser irregulares,
nodulares, excéntricas y a medida que progresa el
tumor se observa amputación o adelgazamiento
progresivo del conducto con una imagen conocida
como “cola de rata”.
– Obstrucción brusca de contornos irregulares del
conducto pancreático.
– Estenosis irregular y excéntricas del colédoco intra-
pancreático.
– El signo del “doble conducto” es uno de los datos
Fig. 195.9. Colangiopancreatografía por resonancia magné- endoscópicos más específicos y se debe a la in-
tica, paciente con neoplasia de cabeza de páncreas. vasión de un tumor en la cabeza del páncreas con
266 Parte XV. Páncreas

afectación simultánea del segmento intrapancreático adenocarcinoma de páncreas teóricamente resecable


del colédoco y del conducto pancreático, lo que se (Figs. 195.12 y 195.13).
manifiesta por dilatación de ambos conductos.

Fig. 195.10. Colangiopancreatografía retrógrada endoscópi-


ca. Neoplasia de cabeza de páncreas, estenosis del conducto
colédoco y del conducto pancreático principal con dilatación Fig. 195.11. Drenaje biliar externo en paciente con neoplasia
de vías biliares intrahepáticas. Signo del “doble conducto”. de cabeza de páncreas. Se observa la presencia del catéter
dentro de la vía biliar opacificada con presencia de dilatación
El cáncer de páncreas puede sufrir necrosis central, del colédoco y vías biliares intrahepáticas desde su porción
lo que se demuestra por la presencia de una cavidad retropancreática.
irregular que se llena de medio de contraste.
Colangiografía trasparieto hepática percutánea
Es útil para obtener imágenes del hígado y de los
conductos biliares. También permite realizar procedi-
mientos terapéuticos de drenaje de bilis al intestino del-
gado o a una bolsa fuera del cuerpo. Se realiza cuando
no puede llevarse a cabo la colangiopancreatografía
retrógrada endoscópica (Fig. 195.11).
Angiografía digital
Utilizada para la valoración de invasión vascular,
ha perdido utilidad en la práctica clínica actualmente
debido a los avances en la tomografía axial computa-
rizada y la aparición de la ecoendoscopia.
Laparoscopia
La presencia de pequeñas metástasis en la superficie
hepática o en el peritoneo puede pasar inadvertidas
en todas las técnicas descritas previamente. Dado que Fig. 195.12. Imagen laparoscópica de vesículadistendida,
estas lesiones suponen la irresecabilidad del tumor, es voluminosa, en paciente con neoplasia de cabeza de pán-
conveniente la realización de una laparoscopia explo- creas. Hígado de aspecto cirrótico y colangitis esclerosante
radora previa a la laparotomía en todo paciente con secundaria.
Capítulo 195. Tumores del páncreas 267

Fig. 195.13. Laparoscopia. A. Presencia de pequeñas metástasis en la superficie del peritoneo. B. Placas blanquecinas en
peritoneo.

Diagnóstico histológico – Cistoadenocarcinoma mucinoso (no invasivo


El páncreas presenta tres tipos de células epiteliales: o invasivo).
– Células acinares, que ocupan 80 % del volumen de – Carcinoma intraductal papilar mucinoso (no
la glándula. invasivo o invasivo).
– Células ductales, que comprometen 10 % a 15 %. – Carcinoma de células acinares.
– Islotes de células endocrinas, 1 % a 2 % de la glán- b) Pancreatoblastoma:
dula pancreática. – Carcinoma seudopapilar sólido.
– Carcinomas misceláneos.
Más de 95 % de las neoplasias malignas del páncreas Aspecto macroscópico
derivan de los elementos exocrinos de la glándula (duc-
tal y células acinares) y son adenocarcinomas. La morfología de las lesiones es variable, en su
La Organización Mundial de la Salud ha propuesto forma clásica, los tumores son indurados, no encapsu-
esta clasificación de los tumores primarios exocrinos lados, de límites precisos y de color que va desde el gris
del páncreas: blanquecino al amarillo claro. Entre 60 % y 80 % de los
1. Benignos: casos se originan en la cabeza del páncreas, en el cuerpo
a) Cistoadenoma seroso. se asientan entre 15 % y el 20 % y 10 % restante aparece
b) Cistoadenoma mucinoso. en la cola, en el momento del diagnóstico el tamaño
c) Adenoma intraductal papilar mucinoso. varia de 1,5 cm a 10 cm, con un promedio de 3 cm.
d) Teratoma quístico maduro. Los tumores de cabeza por lo general están en íntimo
2. Borderline (potencial maligno incierto): contacto con el conducto pancreático principal y con el
a) Tumor quístico mucinoso con moderada displasia. colédoco distal, y con frecuencia los invaden y ocluyen,
b) Tumor intraductal papilar mucinoso con mode- obstruyendo el flujo y esto conduce a pancreatitis cró-
rada displasia. nica, atrofia exocrina pancreática y colestasis.
c) Tumor seudopapilar sólido.
Aspecto microscópico
3. Malignos:
a) Adenocarcinoma ductal: Histológicamente su morfología varía desde los bien
– Tumor de células gigantes de tipo osteoclás- diferenciados hasta los poco diferenciados (pleomórficos
tico. de células fusiformes y gigantes), estos últimos son los
– Cistoadenocarcinoma seroso. más frecuentes y se asocian a proliferación acentuada del
268 Parte XV. Páncreas

tejido conectivo (desmoplasia). En los bien diferenciados Confirmación citológica


hay estructuras ductales, a veces microquistes, que en En la actualidad la confirmación citológica del
ocasiones se mezclan con ductos remanentes normales cáncer de páncreas es indispensable en todos los casos
y estructuras acinares. Están compuesto por glándulas de tumor irresecable, donde la pieza quirúrgica no está
productoras de moco, semejantes a las de los conductos disponible, antes de iniciar cualquier tratamiento con
pancreáticos, incrustadas en el interior de un estroma radioterapia o quimioterapia. Cuando se trata de un tu-
fibroso. Las glándulas neoplásicas están revestidas por mor resecable, la necesidad de disponer de confirmación
células cuboides y columnares que a menudo producen citológica antes de la cirugía es un tema controvertido.
mucina. Cuando el tumor está muy bien diferenciadosue- La presencia de lesiones focales del páncreas, sub-
le ser muy difícil la distinción con pancreatitis crónica, sidiarias de tratamiento médico (linfoma, metástasis y
asociada a fibrosis y regeneración epitelial. pancreatitis autoinmune) y con aspecto morfológico
Los carcinomas moderadamente diferenciados similar al cáncer de páncreas, es una razón indiscutible
reemplazan por completo el tejido acinar, forman glán- a favor de la confirmación citológica rutinaria en las
dulas más irregulares con atípia mayor. Los carcinomas lesiones focales del páncreas antes de efectuar cualquier
poco diferenciados forman nidos sólidos y cordones sin tratamiento.
estructura glandular, en estos puede ocurrir diferencia- La elección de una u otra técnica para la obtención
ción epidermoide. del material citológico depende de la disponibilidad
Los tumores también pueden invadir a las estructu- y experiencia de cada centro. De todas formas, en la
ras adyacentes, como el ámpula de Váter, la pared del actualidad una técnica rentable y segura para el pacien-
duodeno, colon o bazo, así comovasos sanguíneos y te es la ultrasonografía endoscópica con punción por
linfáticos, extendiéndose a los ganglios linfáticos re- aspiración con aguja fina. En pacientes sometidos a
gionales. El carcinoma pancreático puede diseminarse colangiopancreatografía retrógrada endoscópica, con el
por vía hematógena a hígado, pulmones, glándulas desarrollo de instrumentales adecuados, como cepillos
suprarrenales, riñones, hueso, cerebro y piel. Hasta para citología con guía incorporada, pinzas para biop-
10 % de los pacientes con adenocarcinoma pancreáti- sias miniaturizadas, catéteres de doble luz con salidas
co experimentan fenómenos tromboembólicos como laterales anguladas que permiten pasar cepillos, pinzas
embolia pulmonar, trombosis venosa y trombosis de para biopsias y agujas para aspiración, se ha logrado
la vena porta. mejorar la obtención de material para estudio citológico
El adenocarcinoma pancreático tiende a invadir el con buena sensibilidad (18 % a 80 %) y especificidad
espacio perineural del páncreas, debido a su localiza- (100 %).
ción retroperitoneal puede diseminarse a través del
retroperitoneo y fijarse a los vasos. Diagnóstico de extensión
El adenocarcinoma ductal debe ser diferenciado
de otros tumores del páncreas exocrino, así como el La clasificación TNM, es la más utilizada para
cistoadenoma mucinoso, el tumor quístico mucinoso, establecer la extensión tumoral y poscriterios de rese-
el tumor mucinoso papilar intraductal, el tumor seudo- cabilidad del tumor desde el punto de vista terapéutico
papilar sólido y el carcinoma de células acinares. (Tabla 195.1):

Tabla 195.1. Estadiaje de acuerdo con el TNM

Estadio TNM Comentario Descripción

I T1 o T2 + N0 + M0 Sin diseminación extrapancreática ni vascular Resecable

II T1 o T2 + N1 + M0 Ganglios regionales afectados, no encasillamiento Tipicamenteresecable


T3 + N0 o N1 + M0 de arteria mesentérica superior o tronco celiaco
III T4 + N0 o N1 + M0 Ganglios regionales afectados involucro tronco No resecable
celiaco o arteria mesentérica superior
IV T (cualquiera) + N Metástasis hepáticas, +M1 pulmonares, No resecable
(cualquiera) peritoneales
Capítulo 195. Tumores del páncreas 269

– Tumor resecable: tumor limitado al páncreas, sin 3. Encamado más de 50 % del tiempo diurno.
evidencia de afectación vascular, extensión linfática 4. Permanentemente encamado.
ni metástasis a distancia.
– Tumor localmente avanzado: extensión tumoral a 4Índice de Karnofsky
duodeno, conducto biliar, tejido retropancreático o a 1. Capacidad para realizar una actividad normal y no
ganglios linfáticos (pilóricos, pancreatoduodenales, son necesarios cuidados especiales:
adyacentes a arteria hepática común, cuerpo pan- a) Actividad normal:100
creático o al hilio esplénico), pero sin otra extensión b) Actividad normal, signos mínimos de evidencia
linfática ni metástasis a distancia. de enfermedad: 90.
– Tumor metastásico: extensión del tumor a estóma- c) Actividad normal con esfuerzo y algunos signos
go, colon, bazo, epiplón, mesocolon, grandes vasos de evidencia de enfermedad: 80.
arteriales o venosos, otros territorios ganglionares 2. Incapacidad para el trabajo, permanece en su domi-
o metástasis a distancia. cilio y requiere una diversa variedad de asistencia:
a) Se cuida por sí mismo, pero no puede llevar a
Estadificación del cáncer pancreático: cabo actividad normal otrabajo: 70.
– Tumor primario (T): b) Requiere asistencia ocasional y es capaz de cui-
• Tx: tumor primario de tamaño indeterminado. dar de sus propiasnecesidades: 60.
• T0: sin evidencia de tumor primario. c) Precisa considerable asistencia y frecuente asis-
• T1: tumor menor que 2 cm. tencia médica: 50.
• T2: tumor mayor que 2 cm confinado al páncreas. 3. Incapacidad para cuidar de sí mismo, requiere
• T3: tumor con extensión local más allá del pán- cuidados del hospital y la enfermedad puede ser
creas. rápidamente progresiva:
• T4: tumor que involucra las arterias celiaca o a) Incapacidad importante, precisa cuidados espe-
mesentérica superior. ciales: 40.
– Nódulos linfáticos (N): b) Incapacidad importante, se precisa hospitaliza-
• Nx: nódulos linfáticos regionales indeterminados. ción: 30.
• N0: sin metástasis linfáticas regionales. c) Gravemente enfermo: 20.
• N1: metástasis en linfáticos regionales. d) Moribundo: 10.
– Metástasis (M):
• Mx: presencia de metástasis indeterminada. Tratamiento
• M0: sin metástasis distantes. Sin dudas el tratamiento actual del cáncer de pán-
• M1: metástasis distantes. creas es responsabilidad de un equipo multidiscipli-
nario, interesado en un punto en común,el paciente
Al igual que en todas las neoplasias digestivas, el enfermo. Por eso intervienen todos los médicos y
estudio de extensión a distancia (básicamente para paramédicos necesarios para evaluar y tratar mejor, es
metástasis hepáticas) suele llevarse a cabo mediante los decir en forma más experta, este problema. El endosco-
estudios imaginológicos, sin embargo, la detección de pista es parte indispensable del equipo, al igual que el
carcinomatosis peritoneal es una limitación importante cirujano, los que deciden en conjunto el diagnóstico y
para la estadificación tumoral. tratamiento oportuno. El oncólogo es otro especialista
Porotra parte, es necesario valorar el grado de ac- extraordinario en esta patología, y puede mejorar la
tividad física del paciente, ya que influye en la actitud extensión y calidad de vida de los pacientes. También se
a tomar en determinadas situaciones clínicas. Esta se requieren estudios de imagen por parte del radiólogo, y
cuantifica mediante el performance status o en el índice en ocasiones para realizar terapéutica intervencionista.
de Karnofsky. El algólogo o experto en medicina del dolor, representa
el coordinador del equipo que se ocupa de controlar el
Niveles de performance status
dolor y solicitar las interconsultas necesarias con otros
Los niveles se clasifican de 0 a 4: miembros del equipo interdisciplinario como enferme-
0. Actividad normal. ría, sicología o siquiatría, trabajo social y nutricionista,
1. Presencia de síntomas relacionados con la enferme- así como la asistencia al domicilio del paciente para
dad, pero que no limitan la actividad habitual. atender los cuidados paliativos en general y en especial
2. Encamado menos de 50 % del tiempo diurno. los de fase terminal por el médico de la comunidad.
270 Parte XV. Páncreas

La experiencia, habilidad y tratamiento en equipo El tratamiento del cáncer de páncreas está claramen-
son de gran utilidad para determinar la conducta y te diferenciado según el estadio en que se encuentre
seguimiento a corto, mediano y largo plazo en estos la enfermedad, ya sea un tumor resecable, localmente
pacientes (Fig. 195.14). avanzado o metastásico.
4Tratamiento preventivo Preparación prequirúrgica
Los factores de riesgo del cáncer de páncreas Es necesario evaluar las funciones cardiacas, pulmo-
no están bien delimitados todavía, por lo que las nares y renales aplicando el tratamiento adecuado cuan-
posibilidades de prevención primaria de este tumor do sea necesario. Si el estado nutricional es deficitario,
son escasas. De los factores ambientales asociados, especialmente si la tasa de albúmina es inferior a 3 g/
el consumo de tabaco (hábito de fumar) es el único di o la cirugía se difiere varias semanas, debe indicarse
claramente definido. nutrición enteral suplementaria.
La única posibilidad de curación que tiene un pa- En caso de que el tumor provoque insuficiencia
ciente con adenocarcinoma ductal de páncreas es la exocrina por obstruir el conducto pancreático principal,
resección quirúrgica completa, eventualmente acompa- hay que administrar tratamiento enzimático sustitutivo.
ñada de radioterapia o quimioterapia. Por este motivo La ictericia obstructiva puede causar alteración en
debe insistirse en la necesidad de un diagnóstico precoz la función hepática, renal y en el sistema inmune, sin
que permita aplicar el tratamiento en una fase en que embargo, los estudios sobre el beneficio de las prótesis
el tumor este todavía localizado. biliares preoperatorios no muestran una reducción de

Fig. 195.14. Algoritmo de la actitud diagnóstica y terapéutica ante un adenocarcinoma de páncreas.


Capítulo 195. Tumores del páncreas 271

la mortalidad y morbilidad posquirúrgicas, no obs-


tante, cuando la cirugía vaya a prolongarse por varias
semanas, es razonable la colocación de endoprótesis
biliar para reducir la colestasis y minimizar el riesgo
de colangitis. Las prótesis autoexpandible metálicas
deben reservarse para pacientes con tumores irrese-
cables.
Tumor resecable
Se considera solo en los pacientes sin metástasis y
con un tumor localizado (estadio 1), los que son can-
didatos a realizar una intervención con fines curativos.
Solo 10 % a 20 % de los pacientes con tumor lo-
calizado en la cabeza pancreática tienen enfermedad
resecable. La mediana de supervivencia tras la resección
quirúrgica es de 18 a 20 meses y la supervivencia global
a los cinco años es de entre 15 % y 20 %, los factores
asociados a una mejor supervivencia son:
– Tamaño del tumor.
– No invasión de ganglios linfáticos.
– Bordes de resección libres del tumor.
Fig. 195.15. Pancreatoduodenectomía (técnica estándar de
Whipple).
La tasa de recidiva posquirúrgica es muy alta y
puede llegar a 80 % a los cinco años y 80 % de las
Por otro lado, la duodenopancreatectomía total
recidivas acontece en los primeros dos años tras la
debe considerarse solo en pacientes con sospecha
resección quirúrgica.
preoperatoria de multicentricidad del cáncer cuando el
En la actualidad se recomienda proceder al tra-
margen de resección pancreática en el transcurso de una
tamiento quirúrgico aun sin disponer de una biopsia
duodenopancreatectomía cefálica es positivo, cuando
preoperatoria o perioperatoria del tumor primitivo
dado que no altera la decisión de resecar el tumor. Si el tumor está localizado en el cuello del páncreas y en
el tumor no es la causa de los síntomas, el diagnóstico casos de páncreas muy friable (difícilmente tratable
más probable es el de una pancreatitis crónica, situación y con altas posibilidades de fístula pancreática) o de
en que la pancreatectomía es también un tratamiento páncreas atrófico con diabetes ya establecida.
adecuado. La duodenopancreatectomía total implica, además,
Actualmente, debido a las continuas mejoras en la la exéresis de todo el páncreas con o sin esplenectomía
técnicas quirúrgicas y en los cuidados perioperatorios, y de los ganglios regionales de la arteria esplénica y del
las resecciones pancreáticas son procedimientos segu- hilio esplénico. La linfadenectomía estándar incluye los
ros que presentan una mortalidad baja (menor que 5 ganglios pancreatoduodenales anteriores y posteriores,
%) y una morbilidad aceptable (30 % a 40 %). Existe pilóricos, de la vía biliar, y los suprapancreáticos e
una estrecha correlación entre el volumen de pacientes infrapancreáticos (N1) y debe ser el procedimiento de
(por centro y por cirujano) y los resultados de la cirugía, elección como tratamiento quirúrgico del cáncer de
tanto en términos de morbimortalidad posoperatoria páncreas.
como de supervivencia a largo plazo. Actualmente en centros especializados en cirugía
El tratamiento estándar actual del cáncer de páncreas pancreática la resección vascular venosa, con o sin
localizado en la cabeza es la duodenopancreatectomía utilización de injertos, no añade una mayor morbilidad
cefálica (técnica de Whipple), que consiste en la re- ni mortalidad ni se asocia a una peor supervivencia. De
sección de la cabeza pancreática y el duodeno junto hecho, en los centros de alto volumen de pancreatecto-
con una gastrectomía distal, colecistectomía, resección mías, la resección vascular es necesaria hasta en 20 %
de la vía biliar principal hasta por encima del cístico, de las duodenopancreatectomía cefálica. Para esto es
yeyuno proximal y resección en bloque de los ganglios imprescindible una adecuada selección de pacientes ba-
regionales (Fig. 195.15). sada fundamentalmente en las imágenes de alta calidad.
272 Parte XV. Páncreas

La quimioterapia adyuvante, con 5-fluorouracilo/ frente a PS 1 y PS 2) y el estadio (localmente avanzado


leucovorina y con gemcitabina, han demostrado un frente a metastásico) son los dos factores que influyen
beneficio significativo. Para mejorar los resultados de en la supervivencia de los pacientes.
la cirugía se han propuesto también nuevas estrategias En los últimos años se han evaluado múltiples
entre las que figura el tratamiento neoadyuvante con pautas de combinación de gemcitabina con fármacos
quimioterapia y radioterapia. citotóxicos. Sin embargo, ninguna pauta de tratamiento
con fármacos asociados a gemcitabina con derivados
Tumor localmente avanzado del platino, 5-fluoracilo, pemetrexed o inhibidores de
El 10 % a 15 % de los pacientes con cáncer de topoisomerasa, ha demostrado eficacia en el cáncer de
páncreas son diagnosticados en estadio localmente páncreas frente a gemcitabina en monoterapia.
avanzado, definido por la invasión del eje celiaco o El avance en el conocimiento de las alteraciones
una infiltración mayor de 180º de la arteria mesentérica moleculares ha permitido desarrollar múltiples agentes
superior. La supervivencia mediana de estos pacientes dirigidos a vías moleculares alteradas. Hasta la fecha
es de 10 a 12 meses. los fármacos testados, inhibidores del sistema reni-
El tratamiento estándar son las combinaciones de na-angiotensina (tifartinib), inhibidores del factor de
gemcitabina o 5-fluoracilo con radioterapia concomi- crecimiento epidérmico (cetuximab), anticuerpos mo-
tante. noclonales contra el factor de crecimiento epidérmico
Menos de 5 % de los pacientes son posteriormente (matuzumab) e inhibidores del factor de crecimiento
candidatos a cirugía de rescate. Dado el pobre pro- endotelial vascular (bevacizumab y axitinib) no han
nóstico de estos pacientes y los resultados modestos incrementado la supervivencia de forma significativa.
con los tratamientos disponibles, es recomendable su El único fármaco aprobado por la FDA es el erlotinib
inclusión en ensayos clínicos de nuevas estrategias de (inhibidor de la tirosincinasa del factor de crecimiento
tratamiento. epidérmico). La supervivencia mediana fue de 6,2 me-
Recientemente se ha identificado un subgrupo de ses con erlotinib y gemcitabina frente a 5,9 meses con
pacientes dentro del cáncer de páncreas considerados gemcitabina (hazard ratio: 0,82 (intervalo de confianza
clásicamente como irresecable, denominados borderli- de 95 %: 0,69 a 0,99).
ne o en el límite de la resección, este subgrupo supone
menos de 5 %. Se trata de pacientes en los que el tumor Tratamiento paliativo de los síntomas
engloba un segmento corto de la arteria hepática sin que Entre 15 % y 20 % de pacientes con tumores lo-
se extienda al tronco celiaco, contacta con la arteria calmente avanzados o metastáticos son candidatos
mesentérica superior afectando a menos de 180º de la únicamente a tratamiento de soporte o paliativo de los
circunferencia, u ocluye el tronco venoso mesentérico síntomas, por deterioro del estado general (soporte/
portal, y es posible la realización de una derivación o paliativo mayor que 2) o edad avanzada y criterios de
injerto vascular. fragilidad, con una mediana de supervivencia inferior
Aunque la experiencia es muy limitada, los escasos a dos meses. Estas medidas de soporte deben realizarse
estudios efectuados recomiendan llevar a cabo trata- también en los pacientes candidatos a tratamiento activo
miento neoadyuvante con quimioterapia-radioterapia, con quimioterapia.
ya que ha permitido realizar resecciones R0 en 35 % a
40 % de los casos. Tratamiento del dolor.
El cáncer de páncreas se asocia con frecuencia a
Enfermedad metastásica intenso dolor que requiere el uso de diferentes tipos
El 70 % a 75 % de los pacientes presentan enfer- de analgésicos: antiinflamatorios no esteroideos y
medad metastásica en el momento del diagnóstico. En opiáceos. En ocasiones, el control del dolor no es sa-
estos casos es fundamental recoger en la anamnesis de tisfactorio, ya sea por efecto insuficiente, intolerancia
los pacientes los requerimientos analgésicos y evaluar o presencia de efectos secundarios provocados por
el dolor mediante escalas analógicas. También se debe esos fármacos. En estos casospueden plantearse como
conocer si se ha producido pérdida de peso y diferen- alternativas la neurólisis percutánea del plexo celiaco
ciar a los pacientes que presentan una pérdida de peso y la esplacnicectomía química transtorácica (alcohol
superior o inferior al 10 %. al 50 %).
La capacidad funcional del sujeto o performance En los pacientes con dolor visceral con espasmo
status de la Eastern Cooperative Oncology Group (PS 0 frecuente de los conductos pancreáticos, biliares, del
Capítulo 195. Tumores del páncreas 273

duodeno, entre otros, leve o moderado, se recomienda bloqueo esplácnico o celiaco para controlar mejor el
utilizar metamisol ya que este antiinflamatorio no este- dolor y disminuir la frecuencia y potencia de los anal-
roideo, tiene propiedades de relajación del músculo liso gésicos, tratando de obtener una mejor calidad de vida.
(antiespasmódico), la vía oral siempre es preferible y las Para la selección del tipo de bloqueo, esplácnico o
dosis recomendadas son de 500 mg cada 6 ho el doble celiaco, se considera importante el estado general del
si el caso lo amerita y el fármaco es bien tolerado, en paciente, sus condiciones hemodinámicas, respiratorias
casos selectos con poca o nula toleranciaoral, se puede y nutricionales, así como la presencia de ascitis. Ade-
emplearla vía intramuscular, endovenosa o rectal. más del análisis clínico, son importantes los estudios de
Si la intensidad del dolor es mayor, está indicado imagen, pues ayudan a conocer la presencia o ausencia
el uso de opiáceos débiles como dextropropoxifeno, de actividad ganglionar retroperitoneal, periaórtica y las
tramadol y codeína, a las dosis recomendadas de 65mg, modificaciones de la anatomía. Por esto ante la presen-
50 mgy 30 mg, cada 6 h, respectivamente, más rescate: cia de ganglios periaórticos se decide el bloqueo de los
dosis intercaladas entre cada horario, con una toma nervios esplácnicos y si no hay condiciones adversas se
extra en caso de dolor fuerte. aplica bloqueo del plexo celiaco con diversas técnicas.
Si empeora se recomienda seguir combinando me- Los bloqueos tienen duración variable, entre uno y
tamizol, solo que se incrementan las dosis de opioides tres meses, y pueden repetirse, aunque es raro que esto
por vía subcutánea, usando tramadol 50 mg (1mL) cada ocurra por el rápido avance de este tipo de neoplasia
6 h, más rescate, hasta la dosis tope de 400 mg/día. maligna.
En este momento es posible controlar el dolor por un
tiempo, pero si no es posible hay que iniciar con otros Tratamiento de la obstrucción biliar
opiáceos más potentes (Tabla 195.2). Luego de realizar las técnicas de diagnóstico, la
Si predomina el dolor somático o se asocia a otro obstrucción biliar (ictericia y sus complicaciones)
tipo de dolor, se recomienda usar antiinflamatorios no y que no son candidatos a resección curativa puede
esteroideos, en especial indometacina a dosis oral de resolverse de manera eficaz con poca morbimortali-
50mg cada 8h o por vía rectal 100 mg cada 12h y si dad y estancia hospitalaria de corta duración. Aunque
la intensidad del dolor empeora, entonces se asocia primero se desarrollaron las técnicas de drenaje por
con alguno de los analgésicos opiáceos débiles antes radiología (vía transhepática), en la mayor parte de los
mencionados. centros hospitalarios el método endoscópico mediante
Si el paciente mejora y está bien controlado, debe colangiopancreatografía retrógrada endoscópica es el de
continuar con la vigilancia necesaria en consulta exter- primera elección. En cuanto al tratamiento quirúrgico
na, pero si empeora debe recurrir al uso concomitante con anastomosis bilioentérica, se prefiere el método
de opiáceos intermedios o más potentes e indicar el endoscópico.

Tabla 195.2. Tratamiento con analgésicos opiáceos.


Nombre genérico Dosis recomendada Presentación
Agonistas
Sulfato de morfina (liberación rápida) 15 mg a 30 mg cada 6 h Tabletas de 15mg, 30 mg y 60 mg
Sulfato de morfina 10 mg a 40 mg cada 4 h Ámpulas de 10 mg
Sulfato de morfina (liberación lenta) 15 mg a 30 mg cada12 h Tabletas de 15 mg, 30 mg y 60 mg
Oxicodona 10 mg a 40 mg cada12 h Cápsulas de15 mg, 30 mg y 60 mg
Fosfato de codeína 30 mg a 60 mg cada4 h Tabletas de 10mg, 20 mgy 40 mg
Dextropropoxifeno 65 mg a 130 mg cada4 h Tabletas de 30 mg
Meperidina 50 a 100 mg cada 4 h Cápsula de 65 mg
Fentanil 0,25 g/h a 100 g/h Ámpula de 100 mg
Ámpula de 0,050 mg/mL
Parche transdérmico 2,5mg, 5mg, 7,5 mg y 10 mg
Agonistas parciales
Buprenorfina 0,4 mg a 0,8 mg cada 4 h Tableta sublingual de 0,4 mg
Tramadol 0,15 mg a 0,3 mg cada 4 h Ámpula de 0,3 mg
10 mg a 50 mg cada 4 h) Cápsula de 50 mg
100 mgcada 8 h Ámpula de 100mg
274 Parte XV. Páncreas

Las prótesis utilizadas para el tratamiento endos- Seguimiento


cópico de la obstrucción biliar varia en su estructura
Se recomienda determinar los valores séricos de
(plásticas o metálicas autoexpandibles), diámetro y
Ca 19-9 al mes de la operación y luego cada tres meses
forma, factores que desde el punto de vista físico pue-
en caso de elevación de este marcador, aparición de
den afectar su capacidad de flujo. Bajo condiciones
sintomatología sospechosa o comprobación de recidiva
fisiológicas, la bilis tiene flujo laminar y se comporta
local mediante ecografía o tomografía axial computa-
como fluido newtoniano. Este flujo es directamente
rizada, el paciente debe ser reevaluado en cuanto a la
proporcional al diámetro interno de la prótesis elevada a
extensión para aplicar tratamiento adecuado.
la cuarta potencia y a la diferencia de presiones a través
de la prótesis, e inversamente proporcional a la viscosi- En los pacientes con estadios II, III y IV, habitual-
dad de la bilis y la longitud de la prótesis. Esto permite mente se realizan controles clínicos y analíticos cada
entenderporqué pequeños incrementos en el diámetro dos o tres meses, dependiendo de su evolución o de las
de la prótesis, se traducen en aumento significativo de pautas establecidas en los protocolos de tratamiento.
la capacidad de flujo.
El mayor problema con la colocación de prótesis Bibliografía
por vía endoscópica en el árbol biliar es la obstrucción Ardengh, J. C., Lopes, C. V., Campos, A. D., Pereira de Lima, L.
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Capítulo 195. Tumores del páncreas 275

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Capítulo 196
Tumores quísticos del páncreas
Dr. C. Raúl Antonio Brizuela Quintanilla

Un quiste es una cavidad cerrada y rellena de lí- quísticas del páncreas son hallazgos frecuentes, con una
quido, habitualmente rodeada por una membrana o incidencia dependiente de la edad y se puede observar
cápsula. Los quistes del páncreas pueden ser benignos, de hasta 25 % en las personas de edad avanzada según
potencialmente malignos o malignos. El más frecuente la estimación de resultados de autopsia y de las técnicas
es el seudoquiste pancreático (90 %), una acumulación actuales de imagen. Este espectro de lesiones neoplá-
localizada de líquido segregado por el páncreas, rodeada sicas benignas y malignas o potencialmente malignas
de una pared fibrosa, sin revestimiento, generalmente debe diferenciarse de los seudoquistes pancreáticos que
como complicación de una pancreatitis aguda o cró- son un hallazgo residual después de una pancreatitis
nica, o tras un traumatismo. Menos frecuentes son los crónica o aguda recurrente.
verdaderos tumores quísticos pancreáticos (10 %), Los quistes pancreáticos se pueden clasificar en
los principales son el cistoadenoma seroso (siempre seudoquistes y quistes verdaderos. Los seudoquistes
benigno), el cistoadenoma mucinoso (potencialmente pancreáticos están rodeados de tejido fibroso y de
maligno), el cistoadenocarcinoma mucinoso (maligno) tejidos de granulación y se asocian con la pancreatitis
y la neoplasia mucinosa papilar intraductal (con distinta aguda o crónica. Los quistes pancreáticos verdaderos
capacidad de malignización según su localización). están revestidos por epitelio y se subdividen en quistes
no neoplásicos y neoplásicos.
Epidemiología
Clasificación
Los quistes pancreáticos no son una enfermedad
médica rara. Se observa en cerca de 2,6 % de adultos Las neoplasias quísticas del páncreas se clasifican
asintomáticos y en más de 8 % de las personas de edad según la Organización Mundial de la Salud en: tumo-
por encima de 80 años a los que se les realiza una to- res serosos quísticos, neoplasias quísticas mucinosas,
mografía axial computarizada. La prevalencia de los neoplasia mucinosa papilar intraductal y neoplasias
quistes pancreáticos se ha informado en alrededor de seudopapilares sólidas. Además, los tumores sólidos
25 % en series de autopsias. de páncreas, por ejemplo, los tumores neuroendocrinos
Los quistes pancreáticos son muy variables en pancreáticos neuroendocrinos y los adenocarcinomas
términos de su potencial maligno. Algunos de estos de páncreas, pueden sufrir degeneración quística y se
son lesiones benignas y pueden ser tratados de manera presentan como una masa sólido-quística.
segura con expectación y seguimiento por técnicas de La clasificación de Atlanta de 1993 y 2013 para el
imagen y algunos otros son lesiones premalignas o diagnóstico de los seudoquistes distingue los agudos
malignas y por lo general requieren la resección quirúr- de los crónicos, la definición de cronicidad se basa, en
gica en el diagnóstico o seguimiento estrecho. Por otro la enfermedad causal.
lado, la resección quirúrgica de los quistes pancreáticos – Colecciones líquidas agudas: son las que ocurren
(particularmente de los situados en la cabeza del pán- pospancreatitis aguda y aún no tienen pared de quiste.
creas) se asocia con una morbilidad significativa, por – Seudoquistes agudos pancreáticos: secuelas de la
lo tanto, atender a un paciente con quiste pancreático pancreatitis aguda o un trauma, pared compuesta
plantea un gran desafío para los médicos. Las lesiones de tejido de granulación y matriz extracelular.
Capítulo 196. Tumores quísticos del páncreas 277

– Seudoquistes crónicos pancreáticos: secuelas de – Quiste enterogenous (duplicación congénita).


pancreatitis crónica, están rodeados por una pared. – Quiste endometriósico.
– Abscesos pancreáticos: colecciones intraabdominal – Quiste linfoepitelial.
de pus inmediatamente adyacente al páncreas, sin – Quiste escamoso o de los conductos pancreá-
un área grande de necrosis. ticos.
2. Quistes neoplásicos (60 % a 70 %):
Las clasificaciones más utilizadas internacional- a) Con pared verdadera:
mente son: – Mucinosos (30 %).
– D’Egidio y Schein (1991): definen tres tipos según • Neoplasia mucinosa papilar intraductal
su etiología, anatomía y comunicación con el con- (20 %).
ducto pancreático principal : • Neoplasia quística mucinosa (10 %).
• Tipo I o seudoquiste posnecrótico agudo: rara – Serosos (20 %).
vez se comunica con el conducto pancreático • Cistoadenoma seroso (microquístico y
principal. oligoquístico).
• Tipo II o seudoquiste posnecrótico: pancreatitis • Quiste pancreático asociado al síndrome
aguda sobre una pancreatitis crónica, a menudo de Von Hippel-Lindau.
comunicación del conducto con el seudoquiste. • Cistadenocarcinoma seroso.
• Tipo III o seudoquiste de “retención”: ocurren – Escamosos (menor que 1 %):
en la pancreatitis crónica, asociado con estenosis • Quiste epidermoide con bazo accesorio
del conducto y hay comunicación del conducto intrapancreático.
con el seudoquiste. • Quiste dermoide.
– Nealon y Walser (2002): proponen una clasificación – De la celula acinar (menor que 1 %):
basada en la anatomía del conducto pancreático • Cistadenoma de la célula acinar.
principal de Wirsung: • Cistadenocarcinoma de la célula acinar.
• Tipo I: conducto normal, sin comunicación con – De la pared endotelial (menor que 1 %):
el quiste. • Linfangioma
• Tipo II: conducto normal con comunicación del – Tumores sólidos con cambios quísticos (5 %):
conducto-quiste. • Tumor seudopapilar sólido.
• Tipo III: conductos casi normales, con esteno- • Adenocarcinoma ductal con cambios
sis del conducto y no hay comunicación con el quísticos.
quiste. • Tumor neuroendocrino con cambios quís-
• Tipo Ⅳ: conductos casi normales, con estenosis ticos.
del conducto y comunicación con el quiste. • Otros carcinomas invasivos con cambios
• TipoⅤ: conducto casi normal seccionado. quísticos.
• Tipo Ⅵ: pancreatitis crónica, sin comunicación b) Sin pared (menor que 1 %):
del conducto-quiste. – Neoplasias mesenquimales con cambios
• Tipo VII: pancreatitis crónica con comunicación quísticos.
del quiste del conducto.
Exámenes complementarios
Etiología Estudios de imagen para el diagnóstico de los
Las lesiones quísticas del páncreas pueden ser: quistes pancreáticos
1. Quistes no neoplásicos (30 % a 40 %): El diagnóstico preoperatorio preciso de los quistes
a) Sin pared: pancreáticos impide la resección quirúrgica innecesaria
– Seudoquiste inflamatorio. de muchas lesiones quísticas benignas (por ejemplo,
– Quiste del conducto paraduodenal. seudoquiste y cistoadenoma seroso). La precisión del
– Quiste relacionado con infecciones. diagnóstico de la tomografía axial computarizada y la re-
b) Con pared verdadera: sonancia magnética en el estudio de los quistes pancreáti-
– Quistes mucinosos no neoplásicos (mucoce- cos son comparables. La exactitud de la tomografía axial
les y quistes de retención). computarizada multicorte y la resonancia magnética para
– Hamartoma quístico. hacer el diagnóstico correcto en los quistes pancreáticos
278 Parte XV. Páncreas

van desde 40 a 60 %. La resonancia magnética puede La citología del líquido del quiste proporciona una
funcionar mejor que la tomografía axial computarizada alta especificidad, pero es de moderada a baja sensi-
multicorte en la predicción de la comunicación ductal en bilidad para diferenciar quistes mucinosos de quistes
los quistes pancreáticos y para diferenciar la neoplasia no mucinosos o para el diagnóstico de lesión quística
mucinosa papilar intraductal de otras lesiones. maligna.
Además, la identificación de los detritus celulares Asimismo, la realización de punción aspirativa con
internos mediante resonancia magnética puede ayudar aguja fina de la pared del fondo del quiste guiado por
a distinguir los seudoquistes de quistes pancreáticos ultrasonido abdominal o tomografía axial computariza-
neoplásicos. Tanto la resonancia magnética y la tomo- da (llamado punción pared del quiste) puede aumentar
grafía axial computarizada multicorte se desempeñan el rendimiento del ultrasonido endoscópico-punción
mejor en la clasificación de quistes mucinosos o no aspirativa con aguja fina guiada por ultrasonido endos-
mucinosos que en la determinación de un diagnóstico cópico para el diagnóstico del quiste mucinoso.
específico. La precisión de la resonancia magnética y El antígeno carcinoembrionario del líquido del
la tomografía axial computarizada multicorte tiene un quiste es la prueba más precisa para determinar el
rango de 70 % a 85 % en la diferenciación mucinosa quiste como mucinoso. Utilizando el valor de corte de
de las lesiones quísticas no mucinosos. Además, de 192 ng/mL. El antígeno carcinoembrionario tiene una
una buena precisión de 70 % a 80 % se ha informado sensibilidad de 73 % y una especificidad de 84 % para
que la tomografía axial computarizada multicorte y la diferenciación mucinosa de las lesiones quísticas
la resonancia magnética pueden diferenciar lesiones no mucinosas. Cabe señalar que la determinación del
benignas de malignas. Una tomografía axial computari- antígeno carcinoembrionario en el líquido del quiste
zada o resonancia magnética sugestivos de malignidad, no es lo suficientemente precisa para diferenciar los
incluyen tamaño de las lesiones de más de 30 mm, la quistes mucinosos malignos de los quistes mucinosos
dilatación del conducto pancreático principal de más no malignos. Además, el antígeno carcinoembrionario
de 8 mm, la dilatación del conducto biliar común, la no puede diferenciar cistoadenoma mucinoso del neo-
presencia de nódulo mural, la presencia de componente plasia mucinosa papilar intraductal, ya que es elevada
sólido, la pared irregularmente engrosada del quiste y en todos los quistes mucinosos.
se presencia de linfadenopatías. La amilasa del líquido del quiste es elevada cuando
El ultrasonido endoscópico proporciona excelentes el quiste tiene una comunicación con el conducto pan-
imágenes de los quistes pancreáticos. Sin embargo, la creático. La amilasa del líquido del quiste de menos
morfología por sí sola tiene una capacidad limitada de 250 U/L excluye prácticamente al seudoquiste.
para la diferenciación mucinosa de lesión quística no Sin embargo, hay que señalar que los altos niveles de
mucinosa. El ultrasonido endoscópico tiene una tasa amilasa del líquido del quiste no pueden confirmar el
de precisión de 40 % a 93 % para el diagnóstico de diagnóstico de seudoquiste o excluir lesión quística
neoplasias frente a las lesiones quísticas no neoplásicas. mucinosa. Los altos niveles de amilasa del líquido del
quiste también se observan en pacientes con neoplasia
Análisis del líquido del quiste mucinosa papilar intraductal cuando el quiste tiene
El líquido del quiste puede ser aspirado a través de la comunicación con el conducto pancreático.
punción aspirativa con aguja fina guiada por ultrasonido
endoscópico. Existen numerosos estudios que evalúan
Marcadores moleculares
el valor del análisis de fluido quístico para diagnosticar Los marcadores moleculares en el líquido del quiste
el tipo de quiste pancreático. El líquido del quiste pue- se están estudiando cada vez más en los últimos años.
de ser evaluado para citología, marcadores tumorales El potencial diagnóstico de los patrones de expresión
(antígeno carcinoembrionario, entre otros), enzimas de la proteína en el líquido del quiste se ha investigado
(amilasa) y los marcadores moleculares. extensamente. Los marcadores del tumor más alen-
La citología puede ayudar para la diferenciación tadores incluyen al antígeno carcinoembrionario (Ca
mucinosa de quistes no mucinosos a través de la iden- 19-9) y al antígeno del carbohidrato 125 (CA125). De
tificación de células productoras de mucina. También estos, el antígeno carcinoembrionario de 200 ng/mL,
la citología puede diagnosticar lesiones quísticas ma- es el más frecuentemente usado para distinguir entre
lignas (cistoadenocarcinoma) mediante la demostración quistes que producen mucina (neoplasia mucinosa
de células malignas o células con atipia de alto grado papilar intraductals y neoplasias quísticas mucinosas)
(displasia) en el líquido del quiste. y los no mucinosos.
Capítulo 196. Tumores quísticos del páncreas 279

Los marcadores tumorales antígeno carcinoem- aumento concentración de lactato sérico o demos-
brionario y Ca 19-9 pueden ser útiles en la evaluación tración radiológica de compresión vascular.
clínica de las neoplasia mucinosa papilar intraductal. – La presencia de compresión del estómago o del
Un aumento en suero del Ca 19-9 muestra un nivel duodeno con presencia de síntomas clínicos.
razonable bueno de correlación con carcinomas in situ – La estenosis del conducto biliar común o el deterioro
e invasivos de neoplasia mucinosa papilar intraductal. del flujo biliar con colestasis.
Además del tratamiento de las neoplasia mucinosa papi- – Infección del quiste o hemorragia dentro del quiste.
lar intraductal en si, deben ser consideradas las neopla- – Una fístula pancreático-pleural.
sias extrapancreáticas y buscadas en los pacientes con
neoplasia mucinosa papilar intraductal. Según estudios
recientes, los pacientes con neoplasia mucinosa papilar
intraductal no solo pueden desarrollar adenocarcinomas
pancreáticos sincrónicos (aproximadamente 10 % de
todos los pacientes), sino también tumores malignos
extrapancreáticos, como el de mama, gástrico, colo-
rrectal, pulmón y cáncer de próstata, a una tasa mayor
(hasta 30 %) que en la población general. Estos órganos
en riesgo deben ser evaluados en la vigilancia global de
pacientes con neoplasia mucinosa papilar intraductal.
Fig. 196.1. Seudoquiste de la cabeza del páncreas, imagen
Diagnóstico clínico por ultrasonido endoscópico.

Seudoquiste pancreático 3Cistoadenoma seroso


Los pacientes con seudoquiste de páncreas general- Es una lesión quística benigna y responsable de
mente tienen antecedentes de pancreatitis aguda o cró- aproximadamente un tercio de los quistes pancreáticos.
nica. Los seudoquistes son ligeramente más comunes La edad media de aparición es alrededor de los 60 años
en hombres que en mujeres. Estos son en su mayoría y el 75 % de las personas afectadas son mujeres. El
unilocular o menos probable oligolocular y no tienen 44 %, aproximadamente, de las lesiones se localizan
ningún o pocos septos, además, por lo general tienen en el cuello, cabeza o proceso uncinado del páncreas y
una pared fina y uniforme. En el ultrasonido endoscópi- 56 % se encuentran en la región del cuerpo o la cola. La
co algunos seudoquistes son uniformemente anecoicos característica típica por ultrasonido endoscópico incluye
y otros contienen grandes cantidades de detritos (Fig. agregados de varios quistes pequeños de 3 mm a 5 mm
196.1). El líquido del quiste es de color amarillo a ma- cada uno, separados por tabiques delgados haciendo un
rrón. Los seudoquistes infectados pueden contener pus. aspecto en panal de abeja (Fig. 196.2). Los agregados
El líquido del quiste contiene bajo niveles de antígeno de pequeñas lesiones quísticas pueden ser confundidos
carcinoembrionario y elevados niveles de amilasa. El como una masa sólida en la tomografía axial computari-
seudoquiste pancreático en un paciente asintomático zada. La característica cicatriz calcificada central que se
puede ser tratado con expectación, sin embargo, un llama “apariencia del resplandor solar” puede ser vista
gran seudoquiste en un paciente sintomático requiere mejor en la tomografía axial computarizada hasta en
intervención quirúrgica, que incluye el drenaje en lugar 30 % de los pacientes. El cistoadenoma seroso puede
de la resección y puede llevarse a cabo a través de en- tener una apariencia oligoquistica o macroquística en
doscopia, radiología o abordaje quirúrgico. El drenaje hasta 10 % de los pacientes y se puede confundir con
guiado por ultrasonido endoscópico se está convirtiendo el cistoadenoma mucinoso.
en una forma segura y efectiva para el tratamiento de En la punción aspirativa por aguja fina guiada por
los seudoquistes pancreáticos. ultrasonido endoscópico, el líquido del quiste es in-
¿Cuándo hay una indicación de tratamiento quirúr- coloro o teñido de sangre y contiene bajos niveles de
gico, intervención radiológica o endoscópica? amilasa y antígeno carcinoembrionario. Los quistes
– Cuando existe compresión de grandes vasos con que son mayores que 4 cm tienen más probabilidades
manifestaciones clínicas: dolor isquémico, sangre de ser sintomático. Además, la tasa de crecimiento de
oculta positiva, motilidad intestinal perturbada, las lesiones mayores que 4 cm es significativamente
280 Parte XV. Páncreas

mayor que las lesiones más pequeñas. Por lo tanto, se ultrasonido endoscópico se puede detectar con 75 % de
recomienda que los pacientes con lesión sintomática o sensibilidad y 83 % de especificidad y por tomografía
con lesiones mayores que 4 cm se sometan a resección axial computarizada con valores aproximados de 24 %
quirúrgica. de sensibilidad y 100 % de especificidad.
Los pacientes asintomáticos con cistoadenoma La presencia de flujo Doppler a color o la falta
seroso pequeños (por ejemplo, menos que 4 cm de de movilidad con el cambio de posición favorecen la
tamaño) se pueden tratar con un seguimiento periódico detección de un nódulo mural. Estas características
por ultrasonido abdominal o ultrasonido endoscópico. favorecen la diferenciación por imágenes mediante
ultrasonido endoscópico de la presencia de mucina en
lugar de nódulo mural: ser hipoecoica con un borde
hiperecoico, tener un borde liso, movimiento con la
posición o el lavado de solución salina, se mueve con
la punta de la aguja durante la aspiración con aguja fina.
La punción aspirativa por aguja fina guiada por
ecoendoscopia es útil para hacer el diagnóstico preope-
ratorio de las neoplasias quísticas mucinosas. Normal-
mente, el líquido del quiste es incoloro y transparente,
tiene una alta viscosidad y contiene alta niveles de
antígeno carcinoembrionario y bajos niveles de amilasa.
El 10 % aproximadamente de las neoplasias quísticas
Fig. 196.2 Lesiones microquísticas a nivel de la cabeza del mucinosas tienen cáncer invasivo en el momento de
páncreas con aspecto en panal de abeja. la resección
Como son lesiones premalignas o en límites de
malignidad, deben ser resecados en los pacientes aptos
Neoplasias quísticas mucinosos quirúrgicamente. Las neoplasias quísticas mucinosas
Las neoplasias quísticas mucinosas se clasifican en benignas no vuelven a ocurrir generalmente después
cistoadenoma mucinoso y cistoadenocarcinoma muci- de la resección quirúrgica.
noso. Estas neoplasias están caracterizadas patológica- En los últimos años se han ensayado diversos méto-
mente por tener producción de mucina, revestimiento dos no invasivos para la ablación de lesiones quísticas
epitelial y estroma de tipo ovárico. El cistoadenoma mucinosas del páncreas, el lavado de etanol guiado
mucinoso es una lesión premaligna y puede progresar por ultrasonido endoscópico se reporta disminuye el
a carcinoma in situ o cistoadenocarcinoma mucinoso tamaño del quiste pancreático en comparación con una
invasivo. Son vistos casi exclusivamente en mujeres. solución salina de lavado en un tercio de los pacientes,
Más de 90 % de las lesiones se localizan en el cuerpo o comprobado por tomografía axial computarizada.
la cola del páncreas. Representa un precursor potencial El lavado de etanol guiado por ultrasonido endos-
de cáncer de páncreas y muestran una transformación cópico seguido de la inyección de paclitaxel se reporta
maligna a través de una secuencia adenoma-carcinoma una resolución completa de los quistes en 62 % de los
en hasta 30 % a 50 % de todos los casos. Debido a que pacientes. Cabe señalar que la ablación de quistes guia-
están asociados con una estimulación hormonal que aún da por ultrasonido endoscópico, es todavía un enfoque
no se comprende bien, se observan casi exclusivamente de investigación y no se puede considerar fuera de los
en las mujeres de 50 a 70 años de edad (99 %). ensayos clínicos o su realización en centros especiali-
En el ultrasonido endoscópico, la lesión suele ser zados con experiencia en estos procedimientos.
unilocular o oligolocular, contiene seis o menos lóculos
cada uno de los que es superior a los 2 cm. Puede haber
Neoplasia mucinosa papilar intraductal
calcificación periférica en menos de un cuarto de los Descrita por primera vez en 1982, cada vez se
pacientes. No tienen comunicación con el conducto incrementa más su diagnóstico, de modo que es el
pancreático. La presencia de paredes gruesas, nódulo tipo más común de quistes pancreáticos resecados
mural o lesión de masa asociada plantea la sospecha en los últimos años. Los pacientes con esta afección
de cáncer invasor superpuesta. son generalmente mayores que los que padecen de
Diferenciar un nódulo mural de mucina puede ser neoplasia quística mucinosa (69 años vs. 51 años, res-
difícil en una lesión quística mucinosa. Mediante el pectivamente). Patológicamente se caracteriza por la
Capítulo 196. Tumores quísticos del páncreas 281

proliferación de las células mucinosas derivadas de los papilar intraductal sea más difícil. Esta tiene su evolu-
conductos principales o ramas secundarias del conducto ción natural más indolente que la neoplasia mucinosa
pancreático. Así que se clasifica en neoplasia mucinosa papilar intraductal del conducto principal, existe el ries-
papilar intraductal del conducto principal, neoplasia go de recurrencia después de la resección quirúrgica de
mucinosa papilar intraductal de conductos o ramas la neoplasia mucinosa papilar intraductal de conductos
secundarias y mezcla de ambas. Este último implica o ramas secundarias, y los pacientes con este tipo de
tanto el conducto principal y las ramas secundarias. La lesión de las ramas secundarias que involucran todo el
neoplasia mucinosa papilar intraductal puede progresar páncreas puede requerir pancreatectomía total que se
de adenoma a carcinoma in situ y finalmente a carcino- asocia con significativa morbilidad a largo plazo.
ma invasor. El neoplasia mucinosa papilar intraductal
del conducto principal afecta a ambos sexos por igual,
mientras que la neoplasia mucinosa papilar intraductal
de conductos o ramas secundarias es más común en las
mujeres. Alrededor de 70 % de la neoplasia mucinosa
papilar intraductal del conducto principal y 60 % de la
neoplasia mucinosa papilar intraductal de conductos o
ramas secundarias se encuentran en la cabeza, cuello o
proceso uncinado del páncreas. Un tercio de los neopla-
sia mucinosa papilar intraductal del conducto principal
albergan cáncer invasor en el momento de la resección.
Aunque la evolución natural de la pequeña neoplasia
mucinosa papilar intraductal de conductos o ramas se-
cundarias en personas asintomáticas no está bien claro,
alrededor de 14 % de los neoplasia mucinosa papilar
intraductal de conductos o ramas secundarias tienen un
cáncer invasivo en el momento de la resección.
En el ultrasonido endoscópico, la neoplasia muci-
nosa papilar intraductal del conducto principal presenta
dilatación difusa del conducto pancreático principal con Fig. 196.3. Neoplasia mucinosa papilar intraductal del con-
nódulos ductales murales y defectos de lleno intralumi- ducto pancreático principal.
nal (Fig. 196.3). La neoplasia mucinosa papilar intra-
ductal de conductos o ramas secundarias se presentan Por lo tanto, una pequeña neoplasia mucinosa papi-
con múltiples (menos probables individuales) lesiones lar intraductal de conductos o ramas secundarias en una
quísticas en el páncreas que tienen comunicación con persona asintomático puede ser tratada con la estrategia
el conducto pancreático. El conducto pancreático prin- de vigilancia mediante resonancia magnética periódica
cipal es de tamaño normal o ligeramente dilatado en o ultrasonido endoscópico. Sin embargo, la presencia de
la neoplasia mucinosa papilar intraductal de conductos cualquiera de las características de alto riesgo mencio-
o ramas secundarias. El líquido del quiste es general- nados antes exige la resección quirúrgica de la lesión.
mente incoloro y transparente y contiene altos niveles En pacientes con neoplasia mucinosa papilar intra-
de antígeno carcinoembrionario y amilasa. ductal tipo mixto, el tratamiento es idéntico al neoplasia
Características de alto riesgo en las neoplasia muci- mucinosa papilar intraductal del conducto principal
nosa papilar intraductal incluyen la presencia de nódulo como determinante principal de la transformación
mural o lesión de masa, el tamaño del quiste más de 3 maligna. El diagnóstico y la vigilancia de las lesiones
cm de diámetro, conducto pancreático principal mayor quísticas del páncreas generalmente se hacen ya sea por
que 5 mm, la citología del líquido del quiste sospechoso ultrasonido endoscópico, con tomografía computarizada
o positivo para malignidad, y la presencia de ictericia con contraste o la resonancia magnética. Debido a que
obstructiva. el ultrasonido endoscópico requiere experiencia y es
La conducta principal a tomar con la neoplasia mu- altamente dependiente del investigador, esta técnica no
cinosa papilar intraductal del conducto principal incluye se puede realizar en todas partes con una calidad repro-
la resección quirúrgica, sin embargo, hay varios puntos ducible, sin embargo, ofrece la oportunidad de adquirir
que hacen que el tratamiento de la neoplasia mucinosa el líquido del quiste, citología, e incluso las biopsias para
282 Parte XV. Páncreas

ayudar a determinar el tipo de lesión quística cuando se trata puede invadir órganos adyacentes y los grandes
hay cualquier duda del tipo de lesión quística; en manos vasos. El tratamiento incluye la resección quirúrgica.
experimentadas, aunque un examen más invasivo para
el paciente, ofrece la ventaja de una imagen detallada Tumores neuroendocrinos quísticos
local sin ninguna exposición a la radiación. Los tumores neuroendocrinos pancreáticos suelen
Además de todas las modalidades de imagen, los presentarse como una sólida y homogénea lesión de
marcadores tumorales antígeno carcinoembrionario y masa con un margen bien definido en ultrasonido en-
Ca 19-9 pueden ser útiles en la evaluación clínica de doscópico. Sin embargo, aproximadamente 10 % de los
las neoplasia mucinosa papilar intraductal. Un aumento tumores neuroendocrinos son quísticos. Las lesiones
en suero del Ca 19-9 muestra un nivel razonable bueno pueden presentarse de forma mezclada quística-sólida y
de correlación con carcinomas in situ e invasivos de quística pura. El líquido quístico tiene típicamente bajos
neoplasia mucinosa papilar intraductal. Además del niveles de antígeno carcinoembrionario y amilasa. La
tratamiento de las neoplasias mucinosas papilares in- citología del líquido del quiste o el componente sólido,
traductal en sí, deben ser consideradas las neoplasias muestra grupos cohesivos de células plasmocitoides con
extrapancreáticas y buscadas en los pacientes con núcleos redondos a ovalados, ligeramente agrandados.
neoplasia mucinosa papilar intraductal. Según estudios La tinción con inmunohistoquímica es positiva para
recientes, los pacientes con neoplasia mucinosa papilar sinaptofisina y cromogranina (Fig. 196.4)
intraductal no solo pueden desarrollar adenocarcinomas
pancreáticos sincrónicos (aproximadamente 10 % de
todos los pacientes), sino también tumores malignos ex-
trapancreáticos como el de mama, gástrico, colorrectal,
pulmón y cáncer de próstata, a una tasa mayor (hasta
30 %) que en la población general. Estos órganos en
riesgo deben ser evaluados en la vigilancia global de
pacientes con neoplasia mucinosa papilar intraductal.
Aunque las guías basadas en la evidencia no están
actualmente disponibles, varios grupos recomiendan la
colonoscopia, rayos X de tórax, cuidado ginecológico
y evaluaciones urológicas durante el estudio inicial del
paciente con neoplasia mucinosa papilar intraductal y
también de forma regular durante la vigilancia futura.
A
Neoplasia sólida seudopapilar
La neoplasia sólida seudopapilar generalmente
ocurre en mujeres jóvenes. Alrededor de 70 % de las
lesiones se localizan en la región del cuerpo/cola del
páncreas. Se presenta como una masa sólida quística
con márgenes bien definidos en las imágenes. El tumor
puede ser sólido en aproximadamente 50 %, mezcla
sólido-quística en 39 %, y quístico en 11 % vista en
las imágenes de ultrasonido endoscópico. La punción
aspirativa por aguja fina guiada por ecoendoscopia es
diagnóstica aproximadamente en 75 %, típicamente
muestra grupos cohesivos de células pequeñas unifor-
mes en ramificación y estructuras papilares. La tinción
con inmunohistoquímica en las células tumorales es B
positiva para vimentina y CD 10. Fig. 196.4. A. Imagen por tomografía axial computarizada de
Las neoplasias seudopapilares sólidas se diagnosti- un tumor neuroendocrino quístico en una mujer de mediana
can con frecuencia en personas asintomáticas. Sin em- edad. B. Ultrasonido endoscópico de un tumor neuroendocri-
bargo, las lesiones más grandes pueden presentar dolor no quístico, se muestra la lesión como una masa sólida que
abdominal. Tienen una evolución indolente, aunque si no contiene componente quístico en su parte central.
Capítulo 196. Tumores quísticos del páncreas 283

Quistes pancreáticos no neoplásicas raros requieren resecciones oncológicas formales, que inclu-
ye linfadenectomía, son adecuados enfoques locales
El quiste linfoepitelial, es un quiste raro no neo-
menos extensos para las lesiones quísticas benignas
plásico, benigno del páncreas. Es más común en los
seleccionadas.
hombres y se distribuye uniformemente por todo el
páncreas. La mayoría de las lesiones se descubren de
Cistoadenoma seroso
manera incidental en las imágenes abdominales. Como
está lleno de gran cantidad de detritus celular, la lesión Generalmente no se asocian con un riesgo sig-
aparece como una masa sólida bien definida que aparece nificativo de malignidad, aunque se han descrito
hipoecoica y heterogénea en ultrasonido endoscópico. variantes malignas de tumores quísticos serosos, son
El líquido del quiste es de color lechoso y la citología extremadamente raros. La mayoría de los pacientes
muestra células escamosas, detritus queratinosos y cé- con cistoadenoma seroso no requieren la resección a
lulas linfoides. Las lesiones asintomáticas son tratadas menos que cause complicaciones mecánicas debido
de manera conservadora, sin embargo, la resección al tamaño (generalmente mayor que 4 cm) o muestra
quirúrgica está indicada si el paciente esta sintomático una tendencia de crecimiento de más de 2 mm a 10
o si el diagnóstico es dudoso. mm por año, por lo tanto, la mayoría de los pacientes
El quiste epitelial benigno, también llamado quiste solo requieren de vigilancia por estudio de imágenes,
simple es un quiste no neoplásico poco frecuente. Los a menudo a intervalos de dos a tres años.
estudios de imágenes suele mostrar un quiste unilocular
con una pared delgada y sin nódulo mural. Está aso- Neoplasia quística mucinosa
ciada con la enfermedad renal poliquística autosómica De acuerdo con las directrices de consenso interna-
dominante. La lesión puede someterse a una resección cionales de 2006, la mayoría de las neoplasias quísticas
quirúrgica si no puede excluirse un quiste neoplásico. mucinosas deben ser tratadas como unas neoplasias
En el quiste hidatídico del páncreas, la hidatidosis potencialmente malignas. Este enfoque implica una re-
es causada por la fase larvaria de la Taenia echinococ- sección oncológica, incluyendo pancreatoduodenectomía
cus granulosus. El hígado es el sitio más común de parcial o pancreatectomía distal y linfadenectomía como
infección. En raras ocasiones el páncreas es el único se describe en el cáncer de páncreas. Un estudio más
órgano afectado El quiste hidatídico tiene características reciente, publicado en 2008, sin embargo, ha redefinido
variables en ultrasonido abdominal o ultrasonido endos- esta recomendación, y a pesar de que la resección se sigue
cópico dependiendo de la etapa de la enfermedad. En recomendando, este informe sugiere la cirugía resectiva
las primeras etapas aparece como un quiste unilocular. local (por ejemplo, enucleación, pancreatectomía central
Pueden ser vistos en el interior del quiste varios focos o pancreatectomía distal con preservación del bazo), que
ecogénicos debido a la arena hidatídica. La pared del puede ser apropiada en una pequeña neoplasias quísticas
quiste generalmente aparece como líneas ecogénicas mucinosas sin sospecha de malignidad.
dobles separados por una capa hipoecoica. En etapas
tardías de la enfermedad, la lesión se manifiesta como Neoplasia mucinosa papilar intraductal
quistes multivesiculares y multiseptados. Los septos Las neoplasias mucinosas papilares intraductales
representan las paredes de quistes hijos. En las etapas del conducto principal suelen ser lesiones extensas
finales del quiste se desarrolla una pared de espesor cal- que pueden involucrar la cabeza, el cuerpo o la cola
cificada. Esta rara enfermedad debe ser considerado en del páncreas, pero de vez en cuando (15 % a 20 %)
pacientes con lesiones quísticas pancreáticas que tienen implican gran parte de toda la glándula. Después de
condiciones tales como vivir en o haber emigrado de que se hace el diagnóstico, la resección quirúrgica
las zonas endémicas, serología positiva para el quiste debe ser realizada en la mayoría de los pacientes En
hidatídico y la presencia de características ecográficas una neoplasia mucinosa papilar intraductal del con-
correspondientes. El tratamiento incluye la terapéutica ducto principal, bien localizado, los procedimientos
médica con albendazol y la resección quirúrgica. adecuados son una pancreatoduodenectomía parcial
oncológica o una pancreatectomía distal formal; para
Tratamiento quirúrgico de las la pancreatectomía distal se realiza esplenectomía, así
como asegurar la separación adecuada de la cadena
neoplasias quísticas pancreáticas ganglionar peripancreática. En todas las situaciones, el
Las técnicas quirúrgicas para las neoplasias quísticas estudio por congelación de la sección intraoperatoria
son diferentes para los tumores con bajo y alto riesgo debe ser rutinario para confirmar la limpieza de los
potencial de malignidad. Mientras que estos últimos márgenes de resección. Es esencial para incluir el borde
284 Parte XV. Páncreas

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Capítulo 197
Tumores neuroendocrinos del páncreas
Dr. Guillermo Noa Pedroso

Los tumores neuroendocrinos comprenden un grupo – Existencia de diferentes tipos celulares dentro de un
múltiple de tumoraciones que aparecen en diferentes mismo tumor.
áreas del organismo derivadas de células neurohor- – Presencia de distintos tumores funcionantes en el
monales que comparten características estructurales y marco de una neoplasia endocrina múltiple tipo 1 o
funcionales similares. tipo 2.
Pueden aparecer en pulmón, timo, diferentes glán-
dulas del sistema endocrino y especialmente en el Una vez determinado al carácter funcionante de la
aparato gastrointestinal. Los tumores neuroendocrinos tumoración, esta se clasifica de acuerdo con el predo-
de esta zona se generan a partir de células neuroendo- minio de la sustancia producida por la neoplasia y que
crinas localizadas en el páncreas y la mucosa del tracto es la responsable de los síntomas clínicos del paciente.
gastrointestinal. Son tumores poco frecuentes, pero no Este aspecto es esencial, pues es imposible diagnosticar
raros y que han aumentando en incidencia en las últi- un tumor neuroendocrino del páncreas funcionante sin
mas décadas, probablemente en relación al desarrollo que ocurran manifestaciones clínicas típicas en relación
vertiginoso en el diagnóstico de estas neoplasias. con una actividad hormonal específica.
Este complejo tema que concierne a diferentes En los tumores neuroendocrinos del páncreas no
especialidades médicas se divide clásicamente para su funcionantes, una parte importante de estos producen
estudio en: alguna sustancia, como el polipéptido pancreático,
– Tumor y síndrome carcinoide. por lo que en realidad el término no funcionante no es
– Síndrome de Zollinger-Ellison. totalmente correcto, la diferencia con el grupo funcio-
– Los tumores endocrinos del páncreas. nante está en que estas sustancias no generan síntomas
– Los síndromes de neoplasia endocrina múltiple. clínicos por sí mismas y las manifestaciones de este
grupo de tumores dependen del crecimiento intrínseco
No se abordan los tumores carcinoides ni el síndro- de la masa o de sus metástasis.
me de Zollinger-Ellison, temas ya tratados.
Los tumores neuroendocrinos del páncreas com- Epidemiología
prenden una serie de tumores poco comunes que crecen
de manera exclusiva o predominantemente en este Los tumores neuroendocrinos del páncreas son
órgano, derivados fundamentalmente de las células de neoplasias poco frecuentes, pero la incidencia exacta
los islotes de Langhergans, aunque el origen celular de no es conocida, se estima que representan menos de 3
estos tumores es actualmente motivo de controversias % del total de los tumores pancreáticos. Su incidencia
e investigaciones. Se clasifican en funcionantes cuando anual en la población de Asia, Europa y Norteamérica
generan síntomas derivados de la producción de sus- es menor que 1 por cada 100 000 habitantes por año, los
tancias con actividad hormonal y síndromes clínicos no funcionantes son los más frecuentes y los que con
específicos. Esta categoría de funcionante puede ser mayor frecuencia se encuentran en la práctica clínica.
por la producción deuna sola hormona o menos fre- Los insulinomas y los gastrinomas que son los tumores
cuentemente por la producción y liberación de varias neuroendocrinos del páncreas funcionantes más frecuen-
sustancias activas, lo cual ocurre en dos situaciones: tes tienen una incidencia de 1 por millón de habitantes,
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 287

en cambio los glucagonomas y somatostatinomas, que Por último, otros resultados y propiedades de los
son más raros tienen una incidencia de 1 por cada 20 tumores neuroendocrinos del páncreas sugieren que
millones y 1 por cada 40 millones de habitantes, res- sus precursores son células que conforman el sistema
pectivamente. En piezas necrópsicas se ha informado su endocrino difuso, llamado también sistema entero-
presencia hasta en 10 % del total de fallecidos, además cromafín. Este sistema comprende una red de células
que cerca de 19 % del total de las lesiones pancreáticas neuroendocrinas distribuidas por todo el organismo y
de este tipo se diagnostican accidentalmente durante la especialmente en el aparato gastrointestinal. Se han
realización de una tomografía axial computarizada, da- reconocido al menos 14 tipos de células que producen
tos que sugieren la naturaleza benigna y comportamiento diferentes hormonas peptídicas, aminas biogénicas y
silente de muchas de estas lesiones. otras sustancias bioactivas, incluyendo los factores de
Suele tener un ligero predominio en hombres sobre crecimiento, cada una de estas se desarrolla y diferencia
las mujeres y aunque puede aparecer a cualquier edad, a partir de células pluripotenciales de acuerdo con el
su mayor frecuencia de aparición es entre la quinta y órgano o sistema donde está localizada desarrollando
sexta década de vida. Curiosamente los pacientes con una función específica.
tumores neuroendocrinos del páncreas, especialmente Se ha demostrado que este tipo de células comparten
los no funcionantes y los gastrinomas, tienen una mayor determinadas características histológicas y funcionales
incidencia de otras neoplasias malignas que la población comunes con las células de los tumores neuroendo-
general, asociándose fundamentalmente a cáncer de crinos del páncreas, por lo que se postula el origen de
ovario, endometrio, mama, vesícula, próstata y esófago. estos tumores a partir de células inmaduras del sistema
endocrino difuso y que sufren cambios genéticos que
Etiopatogenia conllevan a la génesis del tumor como son:
– Captan y descarboxilan a los precursores de aminas,
En etapas iniciales se planteaba que los tumores por lo que se llaman células APUD (Amine Precur-
neuroendocrinos del páncreas se derivaban de las cé- sors Uptake and Descarboxilation).
lulas de los islotes de Langhergans, dado que en este – Producen hormonas peptídicas y aminas bioactivas.
se concentra la producción de diferentes hormonas – Presentan receptores para somatostatina.
relacionadas con estos tumores como la insulina, el – Comparten marcadores de células neuroendocrinas:
glucagón y la somatostatina; sin embargo, en este grupo • Cromograninas.
se encierran otras neoplasias que producen diferentes • Enolasa neuroespecífica.
sustancias que normalmente son liberadas en otras áreas • Sinaptofisina.
del organismo, como el péptido intestinal vasoactivo, la
hormona adrenocorticotrópica (ACTH) y la hormona
Genética
del crecimiento (GH), además de una serie de péptidos
sin una función determinada. Esto sugiere que el origen Los cambios genéticos que promueven el desarro-
de los tumores neuroendocrinos del páncreas es de llo de los tumores neuroendocrinos del páncreas son
algún tipo de célula madre pluripotencial. poco conocidos y difieren de los trastornos asociados
Esta célula inmadura con la capacidad para diferen- a otros tumores en el hombre. La activación de los
ciarse pudiera tener dos orígenes: oncogenes clásicos no ocurre frecuentemente en los
– Epitelio ductular del páncreas. tumores neuroendocrinos del páncreas, por lo que la
– Sistema endocrino difuso. implicación en la patogénesis de este tumor es pobre,
como también la actividad de los genes supresores
Diferentes hechos han proporcionado datos que tumorales habituales.
hacen pensar la posibilidad que los tumores neuroendo- Se ha determinado un trastorno genético en el gen
crinos del páncreas deriven de una célula pluripotencial supresor MEN1 localizado en cromosoma 11q13. Este
inmadura proveniente de los ductus pancreáticos: el ne- gen sintetiza una proteína denominada MENIN, que
sidioblasto que en su diferenciación puede evolucionar interactúa con el factor nuclear kB regulando la acti-
hacia una célula de los conductos pancreáticos o hacia vación transcripcional.
una célula endocrina parte del islote de Langhergans. La pérdida de la heterocigosidad de este alelo está
Avalan esta teoría la estructura a veces en cordones involucrada en la aparición de tumores neuroendocri-
tubulares y la producción de otras hormonas que no se nos del páncreas de trasmisión familiar y esporádica,
sintetizan habitualmente en el páncreas. reportados en más de un tercio de estos últimos.
288 Parte XV. Páncreas

La enfermedad de Von Hippel Lindau se origina La Organización Mundial de la Salud propone una
por una alteración del gen supresor localizado en el clasificación de estos tumores neuroendocrinos del
cromosoma 3p. La pérdida de la heterocigocidad del páncreas según el grado de diferenciación y el com-
cromosoma 3p se ha descrito también en casos de tu- portamiento de estos:
mores neuroendocrinos del páncreas esporádico, aún – Tumor endocrino bien diferenciado:
en ausencia de este síndrome. • Comportamiento benigno: confinado al páncreas,
La delección homocigótica o la hipermetilación diámetro menor que 2 cm, dos o menos mitosis
del extremo 5´ de los genes supresores p16/MTS1 por campo de mayor aumento, Ki-67 positivo
o p16INK4a del cromosoma 9p21 se ha demostra- en menos de 2 % de las células y no invasión
do fundamentalmente en gastrinomas, no así en los vascular o perineural.
insulinomas u otros tipos celulares de tumores neu- • Comportamiento incierto: confinado al páncreas
roendocrinos del páncreas, a pesar de que en los casos más uno o más de estos siguientes hallazgos:
investigados se ha reportado hasta 30 % de pérdida de diámetro mayor que 2 cm, más de dos mitosis
heterocigocidad del cromosoma 9p. Esto sugiere que por campo de mayor aumento, Ki-67 positivo en
otro gen supresor ubicado en este mismo cromosoma más de 2 % de las células e invasión vascular o
participa en la génesis de los tumores neuroendocrinos perineural.
del páncreas y que la mutación del p16/MTS1 o p16 – Carcinoma endocrino bien diferenciado.
INK4aes poco frecuente y exclusivamente relacionada – Bajo grado de malignidad invasión local o metástasis
con los gastrinomas. o ambas.
La región promotora CpG, la metilación de 12 – Carcinoma endocrino pobremente diferenciado.
genes potencialmente implicados en la génesis de los – Alto grado de malignidad.
tumores neuroendocrinos del páncreas, que incluyen – Más de 10 mitosis por cada campo de mayor
el p14, p16, el receptor de estrógenos, el receptor β-2 aumento.
del ácido retinoico, O6-metil-guanunemetiltransferasa,
MEN1 y la ciclooxigenasa. También se han reportado Insulinoma
una alta frecuencia de metilación de la familia de genes
1A asociados al Ras: RASSF1A, p16, O6-metil-guanu- Los insulinomas son tumores neuroendocrinos
nemetiltransferasa, el receptor β-2 del ácido retinoico que causan un aumento de la secreción de la insulina
y hHMLH1. y por consiguiente manifestaciones clínicas debido
Los tumores neuroendocrinos del páncreas bien a la hipoglucemia. Estos se originan mayormente en
diferenciado muy raramente expresan mutaciones del las células betas de los islotes de Lagerhans, aunque
gen TP53. La pérdida de heterocigocidad del TP53 en se han descritos localizaciones raras como duodeno,
el cromosoma 17p13 se ha reportado en menos de 25 % íleon y pulmón.
de los casos y siempre asociado a signos de malignidad, Estos son los tumores neuroendocrinos del páncreas
por lo que la sobreexpresión de la mutación de este más frecuentes, por lo general son de pequeño tamaño
gen se observa en tumores pobremente diferenciados, con una media entre 0,5 cm a1 cm, se distribuyen in-
agresivos y en estadios avanzados de la enfermedad. distintamente en la glándula pancreática y suelen ser
En este sentido también se reconoce que el número únicos; cuando son múltiples se asocian a la neoplasia
total de cambios genómicos aparecen relacionados con endocrina múltiple tipo 1 o síndrome de Wermer.
el tamaño del tumor y el estadio de la enfermedad, por Alrededor de 10% de estos son malignos, diagnosti-
ejemplo, la mayor cantidad de alteraciones genéticas cándose en su mayoría cuando han hecho metástasis,
ocurren en pacientes con metástasis. principalmente en hígado y ganglios linfáticos y suelen
ser entonces de mayor tamaño.

Clasificación Diagnóstico clínico


Los tumores neuroendocrinos del páncreas se cla- Los insulinomas se presentan en cualquier etapa
sifican según diferentes ejes. Según la producción de de la vida, con una edad promedio entre 40 y 50 años,
una sustancia específica capaz de generar síntomas aunque se reportan edades tan tempranas como los 20
característicos, estos se clasifican en funcionantes y años o tan tardías como los 75 años, transcurriendo en
no funcionantes, a su vez los primeros se subdividen ocasiones entre el inicio de los síntomas y su diagnós-
según la sustancia que produce este tumor. tico hasta tres años o más.
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 289

Los síntomas clínicos son dependientes de la hipo- el tratamiento con glucosa. Luego de la administración
glucemia, aparecen en episodios de crisis, relacionados de glucosa la sintomatología y la bioquímica deben ser
con el ayuno, cuando se prolonga o se omite alguna normales. Algunas escuelas exigen para el diagnóstico
comida, durante la noche o con el ejercicio físico. de insulinoma niveles elevados del péptido C y de
Estas manifestaciones desaparecen con la ingestión de proinsulina en suero o un cociente insulina/glucosa
alimentos, lo que explica el incremento de peso en los mayor que 0,3.
pacientes. Durante periodos de intercrisis los pacientes El diagnóstico morfológico del tumor puede
no aquejan sintomatología alguna, por lo que son raros realizarse en el preoperatorio mediante ultrasonido
síntomas crónicos como el deterioro del estado mental, abdominal o ultrasonido endoscópico, también puede
la memoria y los cambios de personalidad. Los sínto- llevarse a cabo con la tomografía axial computarizada
mas neuroglucopénicos son los fundamentales, estos o resonancia magnética nuclear, de preferencia con
están relacionados con la insuficiente concentración de contraste, que brinda mayor precisión. La tomografía
glucosa en el cerebro: trastornos visuales, somnolencia, axial computarizada con emisión de positrones y el
irritabilidad, amnesia, desorientación, confusión, hasta ultrasonido de alta resolución han mostrado buenos
formas más graves como convulsiones y coma. También resultados no solo en la localización topográfica del
pueden aparecer síntomas adrenérgicos secundarios a tumor, sino también en el diagnóstico diferencial con
la liberación de catecolaminas en respuesta a la hipo- otros tumores neuroendocrinos del páncreas. La cente-
glucemia como son sudoración, temblor, palpitaciones, llografía con somatostatina es positiva en 46 % de los
ansiedad, debilidad y fatiga. insulinomas benignos y los malignos muestran una so-
bre expresión para los receptores de somatostanina tipo
Exámenes complementarios 2/5. Otro método diagnóstico es la estimulación arterial
Antiguamente se utilizaba la triada de Whipple, esta selectiva percutánea con calcio y cateterización de la
incluía los síntomas de hipoglucemia, la determinación vena porta. El diagnóstico también puede realizarse en
de esta en suero y el alivio de los síntomas luego de la el transoperatorio mediante ultrasonido intraoperatorio
administración de dextrosa, pero estas condiciones no con 100 % de sensibilidad.
eran específicas para esta enfermedad.
El diagnóstico se basa en la demostración de hipo-
Tratamiento
glucemia en ayunas (menor que 2,2 mmol/L), acom- La terapéutica para los insulinomas se basa en dos
pañada de hiperinsulinemia relativa(insulinemia mayor pilares:
que 6 mU/l), lo que cobra mayor valor en el diagnóstico – Medicamentos para el control de los síntomas de la
si estos parámetros pueden ser demostrados durante el hipoglucemia.
episodio de crisis. – Tratamiento quirúrgico para la extirpación del tumor.
Existen algunas condiciones que constituyen falsos
positivos como son el uso inadvertido o subrepticio También existen modalidades de tratamiento para
de insulina o agentes hipoglucemiantes orales, en la la enfermedad metastásica utilizando quimioterapia y
primera situación se puede determinarlos niveles de otras alternativas de tratamiento.
péptido C en suero donde es negativo el resultado, Los síntomas de hipoglucemia en ocasiones pueden
pues el preparado comercial no lo contiene y para controlarse solo con tratamiento dietético, se reco-
el insulinoma se detectan niveles paralelos en suero mienda la ingestión de alimentos varias veces al día,
a la insulinemia; en el segundo caso solo se realiza no se aconseja consumir solamente alimentos ricos en
el diagnóstico diferencial con la determinación del carbohidratos pues pueden causar la estimulación a la
fármaco en sangre, pues en ambos casos se detecta el liberación de insulina por el tumor. Debe mantenerse
péptido C en plasma. También las hepatopatías graves, un régimen dietético con carbohidratos que se absor-
el alcoholismo, la nutrición deficiente y otros tumores ban lentamente como el almidón, la papa, pan y arroz
extrapancreáticos pueden dar falsos positivos. y en los episodios de crisis, carbohidratos de rápida
En ocasiones se hace necesario la realización de una absorción como jugos de frutas con glucosa o sacaro-
prueba de estimulación del ayuno para objetivizar los sa, aunque en crisis severas el paciente puede llegar a
síntomas y signos bioquímicos. Se realiza una ayuna necesitar la administración parenteral de glucosa.
de hasta 72 h y determinar glucosa, insulina, péptido C El medicamento más efectivo para el control de los
cada 4 h a 8 h y cuando se desencadenen los síntomas, síntomas de hipoglucemia es el diazoxide, con 50 % a
realizar estas mismas determinaciones antes de imponer 60 % de respuesta beneficiosa. Este es un análogo no
290 Parte XV. Páncreas

diurético benzotiazídico, que actúa inhibiendo directa- En tumores mayores de más de 2 cm que se sospe-
mente la liberación de insulina por las células betas del cha malignidad se sugiere igualmente su enucleación,
páncreas, estimula a los receptores alfa adrenérgicos, esplenectomía, así como linfoadenectomía y resección
logra un efecto hiperglucemiante potente; este mismo de las metástasis hepáticas en caso de existir y de ser
efecto lo consigue también por un mecanismo extra- posible. En la enfermedad sistémica, incluso cuando
pancreático que estimula la glucogenólisis, controlando las metástasis hepáticas no son resecables, está justi-
mediante todo este andamiaje la hiperinsulinemia. El ficada la extirpación del tumor para el control de los
diazoxide se utiliza entre 150 mg/día a 200 mg/día di- síntomas, también cuando estos son de gran volumen
vidido en dos o tres dosis, pero puede utilizarse hasta y para incrementar la sobrevida del paciente.
600 mg a 800 mg diarios en dependencia de los efectos Otras alternativas terapéuticas a utilizar en la en-
adversos. Entre estos se encuentra la retención sódica fermedad metastásica avanzada para el tumor es la
por lo que debe asociarse a un diurético tiazídico que utilización de procedimientos como la ablación con
potencie a su vez el efecto hiperglucemiante, también radiofrecuencia, la crioterapia y la quimioembolización
se describen trastornos gastrointestinales como las transarterial.
náuseas, se sugiere ingerir con alimentos, y otro efecto
adverso es el hisurtismo. Otros medicamentos que pue-
Glucagonoma
den utilizarse son el verapamilo, la difenilhidantoína y
los glucocorticoides. Los glucagonomas son tumores neuroendocrinos
Los análogos de la somatostatina de acción prolon- del páncreas que pueden presentarse a cualquier edad y
gada como el octreótido y lantreótido tienen eficacia sexo, que causan liberación incrementada de glucagón,
en 40 % a 50% de los pacientes con insulinomas no cuya expresión clínica se traduce en la aparición de un
metastásicos, pero deben utilizarse con mucho cuidado, rash cutáneo patognomónico, intolerancia a la glucosa,
pues inhiben la secreción de la hormona de crecimiento, pérdida de peso y anemia.
alteran los niveles de glucagón en plasma y empeoran La enfermedad fue descrita por primera vez en la
la hipoglucemia de forma paradójica. década de los 40 del siglo xx por Becker y colabora-
En la enfermedad metastásica avanzada otra opción dores, asociando la existencia de un tumor pancreático
es la quimioterapia sistémica con estreptozotocin solo o endocrino con rash cutáneo; luego en 1966 McGarvany
combinado con doxorubicin. También se reporta el uso colaboradores reportaron un caso con niveles elevados
de temozolomide administrado solo o en combinación de glucagón en ayunas, dermatitis, diabetes y tumor
con capecitabine, son aceptados cualquiera de los dos pancreático endocrino; posteriormente en 1973 Wilson
esquemas, pues no existen estudios de eficacia que den describe el exantema como eritema necrolítico y en
más fortaleza a uno u otro indistintamente. 1974 Mallison y colaboradores establecen la verdadera
Investigaciones más recientes en pequeños grupos asociación entre el exantema y tumores pancreáticos
de pacientes con isulinomas metastásicos han mostrado productores de glucagón.
un control de la hipoglucemia con el uso de los mTOR Estos tumores son en su mayoría intrapancreáticos,
(mammalian target of rapamycin inhibitors), en este ocupan en mayor porcentaje la parte caudal de la glán-
caso el everolimus. De la misma forma se están desa- dula, aunque de forma poco frecuente pueden aparecer
rrollando otras líneas investigativas de medicamentos en el duodeno proximal. Cuando se diagnostican tienen
con actividad antitumoral con el uso de vascular como un tamaño promedio entre 5 cm a 10 cm, con un rango
son: bevacizumab, sunitinib y sorafenib. de 0,4 cm a 35 cm, suelen ser únicos, aunque10% de
El otro pilar es la cirugía, que es curativa cuando estos se asocian al neoplasia endocrina múltiple tipo
se logra la extirpación del tumor localizable, principal- 1. Alrededor de 50 % a 80% de estas neoplasias tienen
mente en los que tienen menos de 2 cm, para los que diseminación metastásica y los sitios más frecuentes
se recomienda la enucleación por la vía convencional son hígado, ganglios linfáticos, huesos y en menor
o laparoscópica. La pancreatectomía central o distal medida mesenterio.
parcial puede requerirse en algunas situaciones anató- La fisiopatología del síndrome del glucagonoma
micas como en tumores que estén muy cercanos o en se relaciona con las acciones conocidas del glucagón.
contacto con el conducto pancreático o cuando estos El glucagón estimula la glucogenólisis, la gluconeo-
están asociados a la neoplasia endocrina múltiple tipo génesis, la cetogénesis, la lipólisis y la secreción de
1, donde se recomienda además de forma profiláctica insulina, así como tiene efectos sobre la secreción in-
la esplenectomía. testinal e inhibe la secreción pancreática, gástrica y la
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 291

motilidad gástrica. La hiperglucemia es consecuencia dizas. La histopatología suele ser tan variada como la
del aumento de la glucogenólisis y la gluconeogénesis presentación clínica, las lesiones tempranas muestran
hepática. Dado que el glucagón también aumenta la edema intercelular e intracelular de la epidermis con
secreción de insulina, que evita la lipólisis y mantiene hiperacantosis y para queratosis en su superficie.
las concentraciones normales de ácidos grasos libres, La hipoaminoacidemia está presente en 26 % a 100 %
en general no se desarrollan cetonemía y cetoacidosis. de los pacientes y se piensa está en estrecha relación con
La pérdida de peso se ha atribuido a los efectos cata- las afecciones dermatológicas, los aminoácidos gluco-
bólicos del glucagón. No está clara la fisiopatología génicos como alanina y glicina son los más afectados.
del exantema, se piensa que esté en relación con la La intolerancia a la glucosa aparece en 40 % a
hipoaminoacidemia inducida por el glucagón ya que 90 % de los pacientes y puede estar acompañada o no
está presente en la mayoría de los pacientes y además de diabetes mellitus manifiesta, la que se controla en
el trastorno dermatológico evoluciona hacia la resolu- la mayoría de los casos con régimen dietético e hipo-
ción, sin variar los niveles plasmáticos de glucagón, glucemiantes, aunque en un pequeño porcentaje de
con la corrección del déficit de aminoácidos. También pacientes es necesaria la utilización de insulinoterapia.
se postula que su desarrollo es de origen multifactorial, Otra manifestación clínica es la pérdida de peso, que
pues lesiones similares se han observado en pacientes en ocasiones puede ser pronunciada y estar relacionada
con déficit de cinc y también en algunos pacientes el o no con anorexia. Los fenómenos tromboembólicos
exantema se ha resuelto con la rehidratación y la ad- pueden ocurrir en 11 % a 24 % de los casos, aparece
ministración de glucosa. trombosis venosas, incluso embolismos pulmonares,
En cuanto a los fenómenos hematológicos que ocu- letales en su mayoría. Así mismo la anemia se reporta
rren en este síndrome, se sabe el glucagón interfiere en en 33 % a 85 % de los pacientes, la que es normocítica
el proceso de la eritropoyesis lo que explica la anemia con valores de hierro, folatos y vitamina B12 normales.
y también afecta los parámetros de la coagulación, pero Otros síntomas descritos son los trastornos siquiátri-
no se conoce a ciencias ciertas su relación directa con cos, pero en realidad son poco frecuentes, la depresión
los eventos tromboembólicos. es la más común. También se ha informado la presencia
de dolor abdominal inespecífico, así como diarreas con
Diagnóstico clínico esteatorrea severa con biopsia yeyunal normal o dis-
Las manifestaciones dermatológicas están presentes creta hipertrofia de los pliegues, esta última es la más
en casi la totalidad de los pacientes y en la mayoría de frecuente cuando existe metástasis y está acompañada
estos suelen preceder con un promedio entre ocho a de hepatomegalia y pérdida de peso, aunque la diarrea
10 años al diagnóstico. Las lesiones en la piel suelen también puede ser consecuencia de la liberación de
ser polimorfas, comienzan como una zona eritematosa otras hormonas por el tumor. También han descritos la
en áreas periorificiales y de intertrigos como la ingle, hipercolesterolemia y la glucosuria renal como signos
nalgas, muslos o perineo y después se diseminan late- del efecto directo del glucagón sobre el riñón.
ralmente ocupando abdomen, extremidades, incluso la
cara en dependencia de la localización; luego estas se
Exámenes complementarios
elevan y después se forma una ampolla central super- El diagnóstico del glucagonoma requiere de la
ficial, la que suele despegarse o romperse, se erosiona demostración de niveles plasmáticos de glucagón ele-
y en ocasiones llega a la necrosis, formando posterior- vados (valores normales menores que 150 pg/mL) en
mente costra. Las lesiones tienden ir hacia la resolución presencia de las manifestaciones clínicas de la enfer-
curando en el centro, mientras los bordes continúan medad. Los niveles de glucagón en plasma son mayores
diseminándose con un límite costroso, dejando cica- que 1 000 g/mL en 90 %, de entre 500g/mL y 1 000 g/
trices pigmentadas. Estas evolucionan por brotes, con mL en 7 % y menor que 500 g/mL en 3 % de los casos.
duración de aproximadamente de dos semanas y en Un nivel plasmático de glucagón mayor que 1 000 g/L
ocasiones, mientras unas curan, aparecen otras nuevas, se considera diagnóstico de glucagonoma.
mostrando un patrón mixto con alteraciones cutáneas Existen otras enfermedades que provocan un incre-
y piel sana. También se presenta con pulpitis digital mento del glucagón plasmático, pero nunca más de500
fisuraría y de intertrigo peribucal duro, doloroso y a g/L (excepto en la cirrosis), estas sonla hiperglucago-
menudo infectado. En ocasiones también puede apa- nemia familiar, la insuficiencia renal, la pancreatitis
recer glositis, estomatitis y queilitis angular. Además, aguda, el hipercortisolismo, la insuficiencia hepática,
algunos desarrollan distrofia ungular con uñas quebra- acromegalia, cetoacidosis diabética, el ayuno prolon-
292 Parte XV. Páncreas

gado, septicemia, quemaduras graves y estrés severo el riesgo quirúrgico, igualmente es oportuno realizar
(traumatismo y ejercicio físico). la profilaxis de los eventos tromboembólicos. También
Las pruebas de provocación con el uso de secretina la restauración de aminoácidos a altos niveles tiene un
para causar un aumento paradójico de liberación de efecto sobre la mejoría de las lesiones dermatológicas,
glucagón o una comida mixta o rica en hidratos de car- así como la administración de las sales de cinc para
bonos no han demostrado confiabilidad para discernir evitar el empeoramiento de estas.
del incremento de niveles plasmáticos de glucagón por Los análogos de la somatostatina de acción pro-
glucagonoma o por otras enfermedades. longada, como el octreótido o el lanreótido, tienen un
Los exantemas del glucagonoma junto al resto efecto sobre la disminución de los niveles plasmáticos
de las manifestaciones clínicas hacen sospechar el de glucagón, mejoran el exantema cutáneo y con fre-
diagnóstico, no obstante las lesiones cutáneas suelen cuencia pueden mejorar la pérdida de peso, el dolor y
confundirse con pénfigo foliáceo, además, se descri- la diarrea, pero no tienen acción alguna sobre la into-
ben otras enfermedades que pueden evolucionar con lerancia a la glucosa, ni la diabetes mellitus.
eritema necrolítico migratorio como son la celiaquía, En la enfermedad sistémica avanzada la quimiotera-
enfermedades hepáticas, otras causas de malabsorción, pia es una opción a utilizar con estreptozotocin y 5-fluo-
enfermedades malignas y pancreatitis. También alrede- racilo solo o combinado con doxorubicin. La terapia
dor de 20 % de los glucagonomas tienen un síndrome con receptores de radionúclidos polipéptidos también
de Zollinger-Ellison y 13 % a 17% se asocian a una puede ser usada si el tumor muestra alta captación en
neoplasia endocrina múltiple tipo 1. la centelleografía con somatostatina.
El diagnóstico imaginológico del tumor se realiza La cirugía curativa es el tratamiento ideal, esta se
mediante ultrasonido abdominal o ultrasonido endoscó- realiza cuando el tumor está confinado primariamente
pico, también puede ser por tomografía axial computari- en el páncreas o cuando las metástasis hepáticas tienen
zada o resonancia magnética nuclear, así como la tomo- posibilidades de ser resecadas, sin existir invasión lin-
grafía axial computarizada con emisión de positrones fovascular y a distancia. La linfoadenectomía se lleva
y el ultrasonido de alta resolución. La centelleografía a cabo en caso de sospechar malignidad. Es importante
con somatostatina también es útil para el diagnóstico. lograr el control de la hipersecreción hormonal previo
Otro método diagnóstico es la estimulación arterial al tratamiento quirúrgico.
selectiva percutánea con calcio y cateterización de la La cirugía paliativa con la extirpación del tumor
vena porta. El diagnóstico también puede realizarse en para el control de los síntomas también está justificada,
el transoperatorio mediante ultrasonido intraoperatorio. además, existen otras modalidades terapéuticas locales
citoreductivas sobre el tumor como la ablación con
Tratamiento radiofrecuencia, la crioterapia y la quimioembolización
La terapéutica ideal para los glucagonomas es la transarterial. El trasplante hepático puede ser indicado
cirugía curativa con la extirpación del tumor, pero la en casos selectos como cuando se ha excluido enferme-
mayoría de estos tumores ya se han diseminado en el dad extrahepética o refractariedad de los síntomas tras
momento del diagnóstico, por lo que la resección del agotar todas las posibilidades de tratamiento.
tumor y de las metástasis hepáticas tienen una finalidad
paliativa, a lo que se le suman otras modalidades tera- Somatostatinoma
péuticas para el control de la enfermedad metastásica
y tratamiento del tumor. Otro aspecto importante en Los somatostinomas son tumores neuroendocrinos
el tratamiento de la enfermedad es el control de los raros, descritos por primera vez en 1977, que se originan
síntomas, de la hiperglucemia y la restauración del mayormente en el páncreas, fundamentalmente en la
estado nutricional. cabeza y los extrapancreáticos, denominados carcinoi-
El efecto catabólico del glucagón, la intolerancia a la des no enterocromafines, que se localizan en el intestino
glucosa y la diabetes afectan el estado nutricional de los siguiendo en orden de frecuencia ampolla de Váter,
pacientes, además, muchos de estos presentan anemia, duodeno, yeyuno y cístico. Estos pueden asociarse a la
por lo que es de suma importancia la administración enfermedad de Von Recklighausen o a una neoplasia
de transfusiones y suplementos de hierro, así como endocrina múltiple tipo 2, que tienen la característica
una dieta hiperproteica y administración de aminoá- de ser no secretantes. Estos tumores contienen cuerpos
cidos para mejorar el balance nutricional y lograr un de psammoma y se presentan mayormente en mujeres
control de los síntomas preoperatorios y así disminuir entre los 40 y 60 años de edad, con un tamaño promedio
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 293

de 4,9 cm y un rango entre 1,5 cm a 10 cm de longitud Los síntomas de hipoglucemias también se hacen
y el 89 % de estos, son solitarios y hacen metástasis, manifiestos, aunque son leves y pueden llegar a es-
fundamentalmente en hígado, ganglios linfáticos y tablecerse falsos diagnósticos de la presencia de un
huesos. Se caracterizan por ser grandes productores insulinoma. Estos síntomas se controlan con tratamiento
de somatostatina (producida por las células D) y sus dietético e hipoglucemiantes orales y pequeñas dosis
efectos fisiológicos traen por consecuencia la aparición de insulina.
de un síndrome humoral caracterizado por diabetes La enfermedad vesicular se hace evidente con la
mellitus, enfermedad vesicular, diarreas con esteatorrea presencia de litiasis a cualquier nivel de la vía biliar,
y pérdida de peso. pero en ocasiones estas no se hacen manifiestas y solo se
La definición del síndrome del somatostinoma no observa dilatación de la vía biliar e ictérica obstructiva,
es uniforme, pues algunos prefieren utilizan el término debido a la invasión local del tumor.
de somatostinoma para el tumor endocrino que tiene Las diarreas con esteatorrea predominan en los
inmunorreactividad para la somatostatina solamente y pacientes con tumores de localización pancreática, son
usan el término de síndrome para los que tienen el tumor abundantes, malolientes y en número de tres a 10 en el
y el síndrome funcional acompañante como resultado día y están en correspondencia con la evolución de la
de la liberación ectópica de somatostatina. enfermedad, por lo que son peores en la enfermedad
La fisiopatología del síndrome del somatostinoma avanzada y mejoran con la resección del tumor.
está en relación con las acciones de la somatostatina, La hipoclorhidria es otra de las manifestaciones
donde tiene un efecto inhibidor potente sobre la libe- del síndrome funcional, también se describe la pérdida
ración de múltiples hormonas gastrointestinales, la de peso que varía según el paciente y la presencia en
secreción ácida, la secreción intestinal y pancreática, así algunos casos de anemia ligera. Alrededor de 50 % de
como la absorción intestinal de aminoácidos, azúcares las somatostinomas se asocian a la neoplasia endocrina
y calcio. También se describen efectos tanto inhibito- múltiple tipo 1 y neoplasia endocrina múltiple tipo 2.
rios como estimuladores de la motilidad intestinal e
inhibitoria sobre la contracción vesicular. Los efectos Diagnóstico clínico
inhibitorios sobre la liberación de insulina y la sustitu- Los síntomas clínicos más el hallazgo en plasma
ción de tejido pancreático por el tumoral pueden expli- de altas concentraciones de somatostatina revelan el
car el desarrollo de diabetes mellitus y la enfermedad somatostatinoma, sin embargo, en ocasiones los niveles
vesicular tiene relación por el efecto inhibitorio de la incrementados en plasma de esta hormona no ocurre
hormona sobre la contractilidad vesicular, que predis- hasta etapas avanzadas y la gama de síntomas que tam-
pone a la aparición de litus y barro biliar. La diarrea y bién es similar a las de otros tumores neuroendocrinos
la estetorrea son consecuencia de la acción inhibitoria del páncreas hacen difícil su diagnóstico. Muchas veces
de la somatostatina sobre la secreción pancreática de el diagnóstico suele realizarse durante una colecistec-
enzimas y bicarbonato, la motilidad vesicular y la ab- tomía o exámenes radiológicos como estudio de un
sorción de lípidos. La hipoclorhidria es el resultado de síndrome diarreico o dolor abdominal. Existen otros
la acción inhibitoria de la secreción gástrica ácida basal procesos que pueden evolucionar con niveles elevados
y la pérdida de peso por la malabsorción. de somatostatina en plasma como el carcinoma medular
del tiroides, cáncer de pulmón de células pequeñas,
Manifestaciones clínicas feocromocitomas y otras catecolaminas que provocan
Son dependientes del tumor, así como de la libera- para gangliomas extrasuprarrenales. También en los so-
ción de la somatostatina. Las manifestaciones funda- matostinomas intestinales pueden ser normales o pocos
mentales son litiasis vesicular, diarrea con esteatorrea, elevados los niveles de somatostinoma, lo que obliga
diabetes mellitus, dolores abdominales, pérdida de a realizar pruebas de provocación con tolbutamida y
peso e ictericia por obstrucción tumoral. En algunas pentagastrina combinada con perfusión intravenosa de
ocasiones se diagnóstica el tumor en la evolución de calcio, pero estas pruebas son inespecíficas.
una colecistectomía o una laparotomía exploratoria en El diagnóstico suele establecerse con la extirpación
un pacientes con dolor abdominal crónico inexplica- del tumor e identificarlas características histológicas
ble, al que se le suma diarreas y diabetes mellitus. Al con aumento de células D en los exámenes de inmu-
examen físico puede palparse una tumoración o una histoquímica.
hepatomegalia, en relación directa con el tumor o su Algunas pruebas complementarias pueden orientar
metástasis. hacia el diagnóstico cuando informan normoclorhidria
294 Parte XV. Páncreas

o hipoclorhidria gástrica, disminución de las secrecio- de cólera pancreático en alusión a la semejanza de la


nes pancreáticas, malabsorción de D-xilosa y valores diarrea y alteraciones hidroelectrolíticas que produce
plasmáticos bajos de glucagón e insulina. el Vibrio cholera. Otra acepción es el síndrome WDHA
EL diagnóstico imaginológico del tumor se realiza (Watery Diarrea, Hipokalemia And Achlorhydria),
mediante ultrasonido abdominal o ultrasonido endoscó- descrito por primera vez en 1967. Independientemente
pico, también puede llevarse a cabo con la tomografía de la cronología, no es hasta1983 que se confirma la
o resonancia magnética nuclear, de preferencia con presencia de niveles elevados de péptido intestinal
contraste, que brindan mayor precisión, todos estos vasoactivo en sangre capaces de producir diarreas en
métodos, además, permiten localizar, estadiar el tumor personas con tumores pancreáticos, no obstante exis-
y conocer la presencia de metástasis hepática. La tomo- ten algunas discrepancias en cuanto a llamar a estos
grafía axial computarizada con emisión de positrones y tumores por Vipomas, ya que se ha visto que estos
el ultrasonido de alta resolución han mostrado buenos liberan otros mediadores peptídicos, en asociación con
resultados no solo en la localización topográfica del el péptido intestinal vasoactivo o en ausencia de este,
tumor, sino también en el diagnóstico diferencial con como somatostatina, glucagón, polipéptido pancreáti-
otros tumores neuroendocrinos. La centelleografía con co, insulina, gastrina, secretina, polipéptido inhibidor
somatostatina también es útil para el diagnóstico. El gástrico, prostaglandinas y péptido histidina metionina,
diagnóstico también puede realizarse en el transopera- pero lo que sí está bien establecido es que la presencia
torio mediante ultrasonido intraoperatorio con 100 % de inmunoreactividadal péptido intestinal vasoactivo es
de sensibilidad. un diagnóstico muy sugestivo de Vipomas, pues muy
raramente este es detectado en otro tumor endocrino
Tratamiento pancreático.
Al igual que otros tumores, en el momento del Estos tumores pueden aparecer en cualquier edad de
diagnóstico este ya se encuentra en una etapa avanzada. la vida, con preferencia por el sexo femenino, aunque se
Aunque lo ideal es la extirpación curativa del tumor, reporta una edad promedio entre 40 a 50 años de edad;
la opción quirúrgica en la mayoría de los casos queda sin embargo, puede aparecer en niños menores de 10
como una alternativa paliativa. Antes de la cirugía es años y cuando esto sucede se debe a la existencia de un
necesaria la corrección del déficit nutricional, pues ganglioneuroma o ganglioneuroblastoma. El 80 % a 90
son pacientes severamente desnutridos y es necesario % los Vipomas se localizan en el páncreas, mayormente
también el control de la diabetes con dieta, hipogluce- en la cola, los restantes son feocromacitomas produc-
miantes orales y dosis bajas de insulina. Para la mejoría tores de péptido intestinal vasoactivo, carcinoides
de los síntomas como la diarrea y la diabetes, y la dismi- intestinales o carcinomas bronquiales. Muy raramente
nución de las los niveles plasmáticos de somatostatina, se han reportado casos de Vipomas extrapancreáticos
puede utilizarse los análogos de la somatostatina con en hígado, retroperitoneo, esófago e intestino delgado.
cierto control de la clínica. Por lo general son tumores solitarios, grandes, de más
En la enfermedad avanzada son aplicables para este de 3 cm y la mayoría de estos han metastizado en el
tumor el resto de las opciones terapéuticas paliativas momento del diagnóstico, los sitios más frecuentes son
son tanto terapéuticas locales para el tumor, como la hígado, ganglios, huesos, peritoneo y ovarios.
quimioterapia y las técnicas biológicas en ensayo clíni- La fisiopatología del síndrome está en relación con
co ya mencionadas en el insulinoma y el glucagonoma. las acciones del péptido intestinal vasoactivo (péptido
de 28 aminoácidos) sobre el sistema digestivo, se han
encontrado receptores para este mediador en la células
Vipoma epiteliales intestinales, estimulando la secreción de lí-
Los Vipomas son tumores endocrinos responsables quido, cloro y otros electrolitos por el intestino delgado,
de un síndrome que se caracteriza por diarrea secretora actuando sobre la contractibilidad del músculo liso,
profusa, hipocalemia y aclorhidria, los que son el re- inhibiendo la secreción ácido gástrica y provocando
sultado de la liberación excesiva del péptido intestinal un efecto vasodilatador, describiéndose también un
vasoactivo. Esta gama de manifestaciones clínicas es efecto sobre la mucosa vesicular, la glucorregulación y
llamada también síndrome de Verner-Morrison, en ho- la calcemia, resultando de todos estos eventos las mani-
nor a estos investigadores que lo describieron en 1958, festaciones clínicas de este síndrome. Los efectos sobre
sin embargo, se había descrito desde el año anterior por el intestino delgado trae consigo la aparición de una
Priest y Alexander. También es conocido por el nombre malabsorción con una hipersecreción hidroelectrolítica,
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 295

con aumento de la secreción de cloro, que estimula la una diabetes manifiesta o intolerancia a la glucosa, así
corriente del circuito corto y activa el sistema de la ade- como hipercalcemia e hipomagnesemia secundaria a
nilciclasa y el monofosfato cíclico de adenosina en las la diarrea, esta última es responsable de algunos casos
células intestinales que aumenta la secreción intestinal, raros con tetania.
lo que trae consigo la aparición de la diarrea secretora.
La hipopotasemia se debe a las pérdidas fecales, así Exámenes complementarios
como al hiperaldosteronismo secundario, consecuente
La demostración de niveles elevados en plasma del
a la liberación de renina, estimulado por la acción del
péptido intestinal vasoactivo ante una diarrea secretora
péptido intestinal vasoactivo. Por su parte el mecanis-
profusa de gran volumen (siempre más de 700 mL/
mo de la hipercalcemia no está bien establecido, pero
día), que no cede con el ayuno hace el diagnóstico de
se piensa sea consecuencia de la acción del péptido
vipomas. Mediante el ayuno se pueden excluir otras
intestinal vasoactivo sobre la actividad osteolítica. La
enfermedades que producen una diarrea secretora de
hiperglucemia es consecuencia de la acción glucogé-
gran volumen con características clínicas similares a
nica del péptido intestinal vasoactivo en el hígado y
las del vipoma y por lo que se les ha denominado sín-
el flushing que aparecen en ocasiones debido al efecto
drome del seudovipoma, entre estas se encuentran el
vasodilatador, y la hipoclorhidria y aclorhidria al efecto
gastrinoma, el abuso crónico de laxantes, el síndrome
inhibitorio de la secreción ácida gástrica.
carcinoide, la mastocitosis generalizada, menos certero
el cáncer medular del tiroides, la diarrea del diabético
Diagnóstico clínico
y el sida, por lo que se hace necesario la medición
La característica fundamental de este síndrome confiable del péptido intestinal vasoactivo en plasma
es una diarrea secretora profusa episódica, es decir, mientras el paciente tenga diarrea. Tampoco debe ser
que evoluciona por brotes, con remisiones parciales o considerado como diagnóstico elevaciones aisladas del
completas, con un volumen de más de 1 L/día, incluso péptido intestinal vasoactivo, porque otras afecciones
puede llegar a3 L/día, es un criterio de exclusión de la como el ayuno, la enfermedad inflamatoria intestinal,
enfermedad que estas sean de menos de 700 mL/día, la resección del intestino delgado, la enteritis actínica
no ceden con el ayuno, son heces acuosas, describién- o insuficiencia renal crónica pueden provocar incre-
dose la apariencia del líquido como un “té diluido”, mentos ocasionales del péptido intestinal vasoactivo
contienen una gran carga de electrolitos (potasio, sodio, en plasma. En ocasiones se hace necesario la objeti-
cloro y bicarbonato), lo que le confiere la osmolaridad vización de una secreción hidroelectrolítica yeyunal,
característica (la suma de las concentraciones de sodio principalmente cuando tampoco se ha confirmado el
y potasio multiplicada por dos), no es frecuente la tumor, realizándose la perfusión electrolítica de una
esteatorrea. solución parecida a la del plasma, observándose la
La deshidratación con desequilibrio hidroelectrolí- alteración del transporte hidroiónico yeyunal, lo que
tico, es otra de las manifestaciones clínicas que surge no se comprueba en ninguna otra afección que no sea
como consecuencia de la diarrea secretora severa con el vipomas.
la pérdida de electrolitos, lo que también puede estar Los estudios del laboratorio clínico, además, reve-
favorecido por la ocurrencia de una nefropatía hipo- laran hipopotasemia, hipocloremia,hipercalcemia y de
potasémica, que explica también la insuficiencia renal una forma más leve hiperglucemia, incluso ha llegado
funcional, la hipopotasemia y la acidosis metabólica. a reportarse hipomagnesemia.
También son resultado de los trastornos hidroelectrolí- Es necesaria también la confirmación del tumor, la
ticos los vómitos, las manifestaciones neurosiquiátricas que se facilitad por su tamaño e hipervascularización. El
y la pérdida de peso. diagnóstico morfológico del tumor se realiza mediante
El flushing, fundamentalmente a nivel de la cabeza, las técnicas ya descritas en las generalidades y tumores
cara y tórax, así como el dolor abdominal, la presencia ya referidos.
de una masa epigástrica palpable y hepatomegalia debi-
do a las metástasis hepática, forman parte de la gama de Tratamiento
manifestaciones clínicas de este síndrome. También se
reporta hipoclorhidria y aclorhidria a pesar de existir un La terapia inicial debe basarse en la corrección del
examen histológico normal de las glándulas fúndicas, desequilibrio hidroelectrolítico y ácido-básico, con una
condición que desaparece con la extirpación tumoral. reposición adecuada de líquidos y electrolitos. Muchas
Los pacientes pueden evolucionar con síntomas de veces se hace necesario hasta la reposición de 5 L/
296 Parte XV. Páncreas

día de líquidos y más de 350 meq/L de potasio, por lo – Asintomático: el diagnóstico ocurre de manera in-
que la reposición debe ser monitorizada ya que se han cidental cuando aparece el hallazgo de una lesión
reportado eventos de insuficiencia cardiaca congestiva. tumoral en un estudio de rutina o realizado por otra
El otro paso importante es el control de la diarrea y afección no relacionada con el tumor.
el resto de los síntomas, se han descrito algunos medi- – Síntomas inespecíficos: los elementos clínicos de-
camentos de utilidad para lograr este objetivo, basados penden más del crecimiento del tumor o la progre-
en el principio de que estos aumentaban la absorción de sión de la enfermedad maligna y no a la producción
sodio a nivel del intestino delgado proximal o inhibían de una sustancia específica. Puede presentarse como
su secreción como la prednisona (60 mg/día a 100 mg/ un síndrome general con astenia, anorexia y pérdi-
día), la clonidina, la indometacina, las fenotiazinas, la da de peso, es frecuente la referencia de dolor en
loperamida, la lidamidina, el litio, el propanolol y la hemiabdomen superior irradiado en forma de barra,
metoclopramida, angotensina II y norepinefrina. Sin que incrementa gradualmente su intensidad, man-
embargo, el tratamiento de elección actualmente son
tenido, con resistencia creciente a los analgésicos
los análogos de la somatostatina de acción prolongada
habituales, que suele asociarse a trastornos dispép-
como el octreótido o lantreótido logrando una mejoría
ticos importantes como saciedad precoz, digestiones
del cuadro cercano a 90% de los casos y pueden ser
utilizados antes de la intervención quirúrgica o a largo lentas, náuseas y vómitos, estos últimos son más
plazo cuando la resección es imposible o incompleta, frecuentes si hay compresión del marco duodenal
con dosis manejables desde 50 µg por vía subcutánea por parte del tumor. Puede también presentarse como
cada 12 h hasta 500 µg cada 8 h. un íctero colestásico por compresión de la vía biliar
El tratamiento ideal es la resección quirúrgica del con prurito, hipocolia o acolia, coluria y elevación de
tumor, logrando la curación de la enfermedad, pero en las enzimas de colestasis. También suele detectarse
la mayoría de los casos la enfermedad se encuentra en una masa epigástrica palpable cuando el tumor al-
una etapa avanzada en el momento del diagnóstico. canza grandes dimensiones o como una hemorragia
En la enfermedad metastásica avanzada otra opción digestiva de manera más infrecuente.
es la quimioterapia sistémica con estreptozotocin y – Síntomas específicos: estos síntomas se deben a la
5-fluoracilo o adriamicin, así como interferón alfa en producción de hormonas específicas que generan
combinación con el uso de análogos de somatostatina. síntomas típicos que se han detallados al describir
También se utilizan terapias locales para el tumor como los diferentes tumores neuroendocrinos del páncreas
la ablación con radiofrecuencia, la crioterapia y la qui- funcionantes. Para su mejor integración y compre-
mioembolización transarterial. También son aplicables sión se describen las características esenciales de
la utilización de las terapias biológicas referidas en los cada uno de estos tumores (Tabla 197.1).
otros tumores endocrinos pancreáticos, que al igual- – En el marco de una neoplasia endocrina múltiple
mente son líneas investigativas aún en ensayos clínicos. tipo 1: los tumores neuroendocrinos del páncreas
se asocian a la neoplasia endocrina múltiple tipo 1,
Grfoma por lo que en pacientes con este tipo de alteración
genética debe estudiarse el páncreas por la alta fre-
Los grfomas son tumores endocrinos que secretan
cuencia con que aparecen estos tumores.
hormona liberadora del factor de crecimiento, los que
fueron descritos por primera vez en 1982.Estos se
3Exámenes complementarios
asientan en el páncreas en 30% de los casos, aunque
en realidad se encuentran con mayor frecuencia a nivel
de los bronquios pulmonares, (alrededor de 50% de 4Marcadores tumorales
los casos,) y también se han descrito algunos casos Los tumores neuroendocrinos producen determina-
con menor porcentaje (aproximadamente8%de los das sustancias, las que medidas en sangre o localizadas
pacientes) a nivel del intestino delgado, con un caso en tejido a través de técnicas de inmunohistoquímica
raro reportado en la literatura de localización en la son útiles para diagnosticar el carácter de estas lesiones.
glándula suprarrenal. Cuando producen una sustancia específica con activi-
dad hormonal determinada, la sola detección de altos
3Diagnóstico clínico niveles en sangre son suficientes para el diagnóstico,
Los tumores neuroendocrinos del páncreas pueden tal es caso de los tumores neuroendocrinos del páncreas
tener cuatro formas de presentación (Tabla 197.1): funcionantes.

Tabla 197.1. Características generales de los tumores neuroendocrinos pancreáticos


Asociación al
Localización
Tumor Hormona Incidencia* Manifestaciones clínicas neoplasia endocrina Malignidad
pancreática
múltiple 1

Insulinoma Insulina 1a2 Antigua triada de Whipple > 97 % 5 % a 10 % < 10 %


Síntomas de hipoglucemia

Gastrinoma Gastrina 0,5 a 1,5 Síndrome de Zollinger-Ellinson: epigastralgia 25 % a 60 % 20 % a 30 % 60 % a 90 %


ulcerosa, diarreas, disfagia y pirosis

Glucagonoma Glucagón 0,01 a 0,1 Eritema necrolítico migratorio,pérdida de peso, > 95 % 1 % a 20 % 50 % a 80 %


diabetes mellitus y diarreas

Somatostinoma Somatostatina Raro Colelitiasis, diarreas, esteatorrea, pérdida de peso 55 % 45 % a 50 % > 70 %


y diabetes mellitus

Vipoma Péptido intestinal 0,05 a 0,2 Síndrome de Verner-Morrison (diarrea secretora > 90 % 6% 40 % a 70 %
vasoactivo profusa, hipocalemia y aclorhidria)

Grfoma Factor de liberación Desconocido Acromegalia y dolor abdominal 30 % 16 % > 30 %


hormona de crecimiento

Acthoma Hormona adenocortico- Raro (4 % a 16 %) Síndrome de Cushing´s ectópico 4 % a 16 % Raro > 90 %


trópica

Ppoma Polipéptido pancreático 1a2 Efecto de masa: ictericia, hemorragia y dolor 100 % 8% 60 %

Neurotensinoma Neurotensina Raro Hipocalemia, pérdida de peso, diabetes mellitus, 100 % - -


cianosis, hipotensión y flushing

* Casos nuevos/años/millón de habitantes.


Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 297
298 Parte XV. Páncreas

Marcadores inespecíficos tado aproximadamente en 80 % de estos tumores y en


Cromogranina A la mitad de los pacientes con tumores carcinoides, la
ghrelina, una hormona gastrointestinal que se eleva en
La cromogranina A es el marcador inespecífico más pacientes con tumores neuroendocrinos, la adrenome-
importante para el diagnóstico de los tumores neuroen- dulina, una hormona polipeptídica involucrada en la
docrinos del páncreas. En las neuronas y en las células angiogénesis y la vasodilatación que puede constituirse
neuroendocrinas las hormonas peptídicas, las aminas en un marcador de progresión tumoral.
biógenas y los neurotransmisores son acumulados en La localización de los tumores neuroendocrinos del
vesículas conjuntamente con proteínas acídicas solubles páncreas ocurre fundamentalmente mediante métodos
denominadas graninas. La familia de las “graninas” está por imágenes.
formada por la cromogranina A, la cromogranina B y
las secretograninas ll a Vl. Ecografía abdominal
La cromogranina A es detectable en los tejidos con Es el primer estudio como acercamiento a los tu-
inmunohistoquímica y es un marcador sensible y es- mores neuroendocrinos del páncreas, su sensibilidad
pecífico para develar la naturaleza neuroendocrina de para detectar es baja, pero se incrementa a medida
un tumor, aunque al ser inespecífico no diferencia el que el tumor aumenta de tamaño, por eso los insu-
subtipo tumoral. La cromogranina A es liberada en el linomas que suelen ser pequeños en el momento del
proceso de exocitosis y, por lo tanto, puede ser medida diagnóstico escapan a su visualización, en cambio los
en sangre o plasma y se ha convertido en un marcador tumores neuroendocrinos del páncreas no funcionantes
tumoral útil en todos los pacientes con tumores neu- suelen tener mayores dimensiones y ser más fácilmen-
roendocrinos del páncreas tanto para el diagnóstico te diagnosticados mediante este examen. También el
como para el seguimiento. ultrasonido abdominal permite evaluar la presencia de
El nivel circulante de cromogranina A se halla en metástasis hepáticas y ganglionares y cuenta con la
la mayoría de los tumores neuroendocrinos del pán- ventaja adicional de su bajo costo, fácil de reproducir
creas está muy por encima del rango normal, por lo y con el mismo se puede realizar una toma de mues-
que existen pocos falsos positivos y negativos, aun tra de las lesiones sospechosas para su confirmación
así determinadas condiciones pueden confundirse con citohistológica.
tumores neuroendocrinos del páncreas, como son la
insuficiencia renal crónica, la insuficiencia hepática, la Tomografía axial computarizada
gastritis atrófica, la enfermedad inflamatoria intestinal y Es un examen necesario ante la sospecha de tumores
los consumidores crónicos de inhibidores de la bomba neuroendocrinos del páncreas, actualmente se reco-
de protones. mienda la tomografía axial computarizada helicoidal,
Otro dato interesante de este marcador es que sus la que permite reconocer tumores de pequeño tamaño.
niveles se correlacionan con la magnitud del tumor y las La sensibilidad varía entre 34 % a 90 %, esta depende
presencia de metástasis. Las determinaciones seriadas fundamentalmente del tamaño del tumor, los tumores
de cromogranina A son indispensables para evaluar la no funcionantes, vipomas y glucagonomas suelen tener
respuesta terapéutica en el seguimiento a largo plazo. mayor tamaño y ser fácilmente detectables, contrario
Durante la administración de análogos de somatostatina al insulinoma. La fase arteriales importante en esta
el incremento de cromogranina A es un marcador de enfermedad debido a que los tumores neuroendocrinos
progresión de enfermedad. del páncreas son muy vascularizados, por lo que se
Enolasa neuronal específica localizan más fácilmente en esta fase.
Está presente en las neuronas, en las células neu- Resonancia magnética nuclear
roendocrinas y en los tumores que se originan en estas,
por lo que puede ser un marcador útil en los tumores Es otro estudio útil para la detección de los tumores
neuroendocrinos del páncreas. Su elevación no es tan neuroendocrinos del páncreas, muestra una sensibilidad
frecuente como el de la cromogranina A. ligeramente superior a la tomografía axial computariza-
da, aunque es más costosa y menos accesible. Es mejor
Otros marcadores inespecíficos para la detección de metástasis hepáticas y óseas. Se
Algunas sustancias se han estudiado como posibles indica tanto para la localización del tumor como para
marcadores de tumores neuroendocrinos del páncreas, el estadiaje, valoración preoperatoria y evolución de
entre estos el polipéptido pancreático, que está aumen- la enfermedad.
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 299

Ultrasonografía endoscópica en los tumores con un alto índice de proliferación y


El desarrollo de la ultrasonografía endoscópica revo- pobre diferenciación. El uso de otros sustratos como
lucionó el diagnóstico de los tumores neuroendocrinos 11C-5-hidroxitriptofano o el 68-Gallium DOTA-octreo-
del páncreas, susensibilidad oscila sobre el 90% y la tide muestran una mayor sensibilidad que el OctreoScan
especificidad supera el 98 %, sobre todo en lesiones y el resto de los estudios convencionales.
localizadas hacia la cabeza y el cuerpo del páncreas. Estudios angiográficos
Esta técnica permite detectar hasta tumores de 3 mm
y su exactitud diagnóstica mejora al incorporarle la En algunos tumores neuroendocrinos del páncreas
citología por aspiración con aguja fina, esta propiedad de pequeño tamaño, cuando no se ha logrado localizar
por métodos tradicionales se utiliza la inyección arterial
la convierte en un estudio esencial en el diagnóstico de
selectiva de un secretagogo, es un procedimiento inva-
los insulinomas. Actualmente las nuevas tecnologías
sivo y complejo que muestra sus mejores resultados en
como el uso de contrastes y la elastografía incrementan
el diagnóstico del gastrinoma y del insulinoma.
la capacidad diagnóstica de este procedimiento. Su
Para el diagnóstico del gastrinoma se utiliza la ino-
limitante está en los costos y la alta calificación del
culación de secretina a una dosis de 2 U/kg de peso, la
personal necesario para su aplicación.
medición de los niveles de gastrina a través de un catéter
Centellografía del receptor de la somatostatina en las venas hepáticas confirma la presencia de este
(OctreoScan) tumor cuando los niveles hormonales se incrementan
a más de 100 pg/mL. Hay que tener en cuenta algunas
Este estudio se argumenta en la sobreexpresión de
causas de falsos positivos, que en este caso son otros
los receptores tipo 2 y tipo 5 de la somatostatina que
estados que evolucionan con hipergastrinemia, funda-
tienen los tumores neuroendocrinos del páncreas, los
mentalmente la gastritis atrófica.
que muestran alta afinidad por los análogos de la so-
Para el diagnóstico de insulinoma se utiliza un pro-
matostatina, como son el octreótide y el lanreótide. Se
cedimiento similar la administración de calcio
utiliza un radioisótopo unido al análogo de la somatos-
tatina, una vez que este complejo se une al receptor de Ultrasonido intraoperatorio
la célula tumoral libera este radioisótopo y se ofrecen
Durante el acto quirúrgico la localización del tu-
las imágenes que permite identificar tanto el tumor
mor primario y de sus metástasis regionales a través
primario como las metástasis.
de equipos de ultrasonido muestran valores altos de
El OctreoScan identifica entre 50 % y 70 % de
sensibilidad y especificidad, en algunas series llegan-
los tumores neuroendocrinos del páncreas primarios,
do a ser del 100 % para ambos casos, por lo que con
aunque este porcentaje disminuye a menos de 25 % en
la disposición de este recurso la localización de estos
los insulinomas, esto tumores muestran una pobre o
tumores y sus metástasis alcanzan la mayor relación
nula expresión de los receptores tipo 2 y 5 de la soma-
costo-efectividad.
tostatina. Es la prueba de elección para la detección de
metástasis hepáticas, donde alcanza una sensibilidad Diagnóstico histopatológico
mayor a 90 %, superior al resto de los estudios por
imágenes, también permite detectar metástasis distantes La anatomía patológica es esencial en la confirma-
como las óseas. ción de los tumores y tiene valor como herramienta
Sus indicaciones precisas son la localización del pronostica. El acceso a estos tumores puede ser de
tumor primario y las metástasis, evaluación pronóstica forma directa hacia el tumor primario a través de una
de la respuesta terapéutica, monitorización del trata- aguja gruesa (Tru-cut o Menghini) o puede ser tomada
miento quirúrgico, la quimioterapia o radioterapia o la de una metástasis a distancia que sea accesible para
selección de pacientes tributarios de tratamiento con la toma de muestra, si se accede mediante cirugía la
análogos de la somatostatina y radionúclidos. extracción completa de la pieza ofrece mejores posi-
bilidades diagnósticas.
Tomografía por emisión de positrones Clasificación histológica de los tumores neuroen-
Este examen ha llamado la atención en los últimos docrinos del páncreas según la Organización Mundial
tiempos en relación con el diagnóstico y localización de la Salud según el tipo de tumor:
de los tumores neuroendocrinos del páncreas, el uso 1. Tumores neuroendocrinos puros.
de la18-fuorodeoxiglucosa ha mostrado utilidad solo a) Tumores neuroendocrinos bien diferenciado:
300 Parte XV. Páncreas

– Comportamiento benigno: grado I. establecer el diagnóstico de certeza. La presencia de


– Comportamiento incierto: grado II. una tinción positiva con CgA, la sinaptofisina o enolasa
b) Carcinoma neuroendocrino bien diferenciado: neuronal específica son altamente específicas de este
– Potencial maligno bajo: grado III. tipo de tumor.
c) Carcinoma neuroendocrino pobremente diferen-
ciado: Estadificación
– Potencial maligno alto: grado IV.
2. Tumores neuroendocrinos mixtos o tumores mixtos Una vez localizado el tumor de forma precisa debe
endocrinos/exocrinos procederse a su estadificación para definir el pronós-
a) Anficrinos. tico que tiene el paciente y optimizar el tratamiento
b) Colisión. adecuado.
3. Según el patrón histológico: El reciente sistema de estadificación para los tumo-
a) Tipo I: sólido/nidos/insular. res neuroendocrinos del páncreas toma en cuenta el
b) Tipo II: trabecular/giriforme/en cintas, anasto- tamaño del tumor, T1 para tumores menores de 2cm, T2
mosantes. con tamaño entre 2 cm y 4 cm, T3 para los que superan
c) Tipo III: glandular/ tubuloacinar/rosetoide. los 4 cm pero no invaden estructuras vecinas y el T4
d) Tipo IV: pobremente diferenciado (células pe- para los tumores que se extienden a órganos vecinos.
queñas y células grandes y patrones atípicos). Los otros elementos que se toman en cuenta son la
e) Tipo V: tumores mixtos. presencia o no de metástasis ganglionares (N0 y N1)
4. Según rasgos citológicos y las metástasis a distancia (M0 y M1) (Tabla 197.2).
a) Células: redondas/ovoides. Aunque el sistema TNM para el estadiaje de los
b) Citoplasma: granular eosinófilo. tumores neuroendocrinos del páncreas es similar que
c) Núcleo: con patrón cromatínico disperso (“sal y para el adenocarcinoma de páncreas, el pronóstico es
pimienta”), amoldamiento nuclear, nucléolo dis- diferente entre ambas enfermedades. Mientras que el
cernible, glóbulos hialinos intracitoplasmáticos, adenocarcinoma de páncreas avanzado o metastásico
seudoinclusiones nucleares y calcificaciones. tiene una supervivencia de pocos meses, la media de
d) Variantes citológicas: oncocítica/oxifílica, fuso- sobrevida en pacientes con tumores neuroendocrinos
celular, células claras, pleomórfica y rabdoide. del páncreas en este estadio es de 24 meses, con 30 %
5. Según inmunohistoquímica: a 40% de los pacientes con una expectativa de vida que
a) Marcadores de diferenciación neuroendocrina alcanza hasta los cinco años.
de uso habitual: sinaptofisina, cromogranina,
enolasa neuronal específica, CD56, CD57 y PGP Evaluación pronóstica
9.5.
b) Marcadores hormonales específicos. Diferentes aspectos de la naturaleza biológica de
c) Otros marcadores expresados en tumores estos tumores y comportamiento clínico tiene implica-
neuroendocrinos: citoqueratinas de bajo peso ciones pronósticas y se toman en cuenta en diferentes
molecular (CK8, CK18, CK19), ghrelina, re- paneles para establecer el pronóstico y decidir qué tipo
ceptores de SST, TTF-1, CD99 y Ki-67 (índice de tratamiento beneficia en mayor medida al paciente.
proliferativo). Se han estudiado múltiples signos clínicos, humo-
6. Microscopia electrónica: gránulos secretores de rales e histopatológicos para predecir el futuro com-
núcleo denso y tamaño variable. portamiento de estos tumores, los que han mostrado
resultados disímiles. En los tumores neuroendocrinos
Histológicamente se caracterizan por estructuras del páncreas benigno la supervivencia a los cinco años
lineales o láminas homogéneas de células redondeadas es del 92 % frente al 50 % de los malignos. También
pequeñas con núcleos y citoplasmas uniformes, no son se obtienen mejores resultados en los tumores neu-
comunes las figuras mitóticas, pero a medida que dis- roendocrinos del páncreas funcionantes que en los no
minuye el grado de diferenciación estas suelen ser más funcionantes.
frecuentes y la estructura histológica del tumor suele ser Los pacientes con tumores neuroendocrinos del
indistinguible de otros procesos como el adenocarcino- páncreas de alto grado de malignidad, pobremente
ma exocrino del páncreas. Esto obliga a la aplicación diferenciados, presentan una media de supervivencia
de técnicas de inmunohistoquímica que contribuyen a de apenas 10 meses. En los análisis multivariados de
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 301

Tabla 197.2. Clasificación TNM para tumores neuroendocrinos/ carcinomas de páncreas


Estadios Sociedad Europea del Tumor Neuroendocrino Unión Internacional del control del Cáncer.
Clasificación TNM
TX Tumor primario no puede ser evaluado Tumor primario no puede ser evaluado
T0 No evidencia de tumor primario No evidencia de tumor primario
T1 Tumor limitado al páncreas y menor de 2 cm Tumor limitado al páncreas y menor de 2 cm
T2 Tumor limitado al páncreas y de 2 cm a 4 cm Tumor limitado al páncreas y de 2 cm a 4 cm
T3 Tumor limitado al páncreas y mayor que 4 cm o Tumor limitado al páncreas y >4 cm o infiltrando a
infiltrando a duodeno o conducto biliar duodeno o conducto biliar
T4 Tumor que invade órganos adyacentes (estómago, bazo, Invasión vascular invasión (tronco celiaco y/o arteria
colon o glándula adrenal) o vasos arteriales (celiaca o mesentérica superior)
mesentérica superior)
N
NX Nodos linfáticos regionales que no pueden ser evaluados Nodos linfáticos regionales que no pueden ser evaluados
N0 Nodos linfáticos no regionales metastásicos Nodos linfáticos no regionales metastásicos
N1 Nodos linfáticos regionales metastásicos Nodos linfáticos regionales metastásicos
M
MX Metástasis a distancia que no pueden ser evaluados Metástasis a distancia que no pueden ser evaluados
M0 No metástasis a distancia No metástasis a distancia
M1 Metástasis a distancia Metástasis a distancia
Estadios clínicos
I T1 N0 M0
IIa T2 N0 M0
IIb T3 N0 M0
IIIa T4 N0 M0
IIIb Cualquier T N1 M0
IV Cualquier T Cualquier N M1

factores pronósticos en tumores neuroendocrinos del las características histológicas. El índice de prolifera-
páncreas, los tumores con pobre grado de diferencia- ción celular (Ki 67) es una técnica inmunohistoquímica
ción y metástasis a distancia fueron los factores pro- prácticamente obligada en el diagnóstico completo de
nósticos más negativos. Algunos autores describen las los tumores neuroendocrinos del páncreas. Cuando este
metástasis hepáticas como el peor índice pronóstico en marcador es positivo en menos de 2% de las células tu-
estos pacientes, principalmente la extensión de estas, morales y se asocia a un tumor bien diferenciado, gene-
cuando abarcan ambos lóbulos hepáticos y cuando son ralmente tiene un comportamiento benigno, lo contrario
múltiples. ocurre cuando las células se tiñen positivamente en más
La supervivencia de los tumores neuroendocrinos de 2% del volumen tumoral. A medida que este valor se
del páncreas sin metástasis hepáticas es de 95 % a los hace mayor indica un rápido crecimiento del tumor y
cinco años, 90 % a los 10 años y 83 % a los 15 años, mayor agresividad, estos valores tiene peor pronóstico
pero incluso con enfermedad maligna, la supervivencia cuando superan 15% de las células tumorales.
a cinco años puede ser alta de 77 % a 95 %, cuando se Los factores pronóstico identificados en pacientes
efectúa un tratamiento agresivo con resección primaria con tumores neuroendocrinos del páncreas son:
del tumor y terapia adyuvante. – Factores que inciden en un peor pronóstico:
Un aspecto importante al evaluar el pronóstico de los • Tamaño del tumor primario mayor que 2 cm.
pacientes con tumores neuroendocrinos del páncreas son • Localización tumoral.
302 Parte XV. Páncreas

• Tumor primario desconocido. hacia el control de los síntomas de secreción hormonal


• Presencia de metástasis hepáticas y ganglionares. específica, se resumen las medidas descritas anterior-
• Extensión de las metástasis hepáticas. mente según el tipo de tumores neuroendocrinos del
• Presencia de metástasis óseas. páncreas funcionante.
• Resección incompleta del tumor. El segundo escalón de tratamiento es el tratamiento
• Invasión vascular y neural. específico antitumoral que incluye varias opciones.
• Invasión a órganos vecinos.
• Alto índice de crecimiento: Ki 67positivo en Cirugía
más de 2% de las células tumorales y más de
La piedra angular del tratamiento ideal curativo es
dos mitosis por campo de mayor aumento.
la extirpación quirúrgica de la masa neoplásica total.
• Aneuploidía.
La decisión depende de la investigación preoperatoria
• Atipia celular.
o, si esta es insuficiente, de la exploración quirúrgica
• Sobreexpresión de los genes p53 y Ha-ras.
apoyada por la imaginología (Fig. 197.1).
– Factores que inciden en un mejor pronóstico:
La vía quirúrgica puede ser convencional o laparos-
• Cirugía curativa.
cópica, según las condiciones que muestre el paciente
• Tumor neuroendocrino funcionante.
• Tumor bien diferenciado. y la experiencia quirúrgica del equipo de cirujanos.
• Presencia de neoplasia endocrina múltiple. En centros especializados se realizan un grupo impor-
tante de abordajes quirúrgicos por mínimo acceso que
Otro aspecto es el número de mitosis por campo muestran excelentes resultados, específicamente en
de mayor aumento. Las mitosis expresan la tasa de tumores del cuerpo y cola del páncreas. La resección
crecimiento del tumor, cuando estas superan más de laparoscópica es también preferible en tumores peque-
10 porcada campo de mayor aumento el pronóstico ños, benignos, mientras que una exploración a cielo
es desfavorable. La combinación de estos métodos ha abierto se recomienda para los tumores que tienen un
permitido clasificar a los tumores neuroendocrinos del alto riesgo de ser malignos. La resección incluye la
páncreas en grados, con una escala creciente de agre- extirpación total del tumor con márgenes negativos. En
sividad (Tabla 197.3). tumores localmente avanzados la resección concurrente
de órganos adyacentes, tales como riñón, hígado, bazo,
Tabla 197.3. Clasificación general en grados para estómago, colon o la vena cava.
tumor endocrino del páncreas- GEP Medidas terapéuticas específicas según el tipo de
tumores neuroendocrinos del páncreas:
Grado Índice mitótico (10 Índice Ki-67 (%)
campos de mayor
1. Gastrinoma
aumento) a) Si no es tumor primario: observación.
G1 <2 ≤2 b) Si es tumor menor o igual que 5cm y no invasivo:
G2 2 a 20 3 a 20 – Opción 1: observación.
G3 > 20 > 20
– Opción 2: enucleación más duodenectomía
más ganglios periduodenales ± pancreatec-
Diferentes aspectos se relacionan con un pronóstico tomía distal.
malo, tamaño tumoral mayor que 2 cm, presencia de c) Si es tumor mayor que 5cm o invasivo: proce-
invasión vascular o perineural, infiltración de la cápsula dimiento de Whipple más disección ganglionar
pancreática, la diferenciación histológica (pobremente periduodenal.
diferenciado), la atipia celular, la presencia de metás- d) Si es tumor distal: pancreatectomía distal o
tasis linfáticas y óseas, la funcionalidad y la existencia enucleación, duodenectomía (preservación del
o no de neoplasia endocrina múltiple. También los bazo).
niveles de CgA altos se asocian a pobre supervivencia, 2. Insulinoma:
así como la edad avanzada. a) Se debe estabilizar niveles de glucosa y diazóxide
u octreotide.
b) Pancreatectomía subtotal más enucleación en
Tratamiento tumor de cabeza de páncreas más ultrasonido
El tratamiento de los tumores neuroendocrinos del intraoperatorio.
páncreas tiene diferentes ejes, existe un tratamiento 3. Glucagonoma:
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 303

Terapia general para el Síndrome carcinoide


síndrome hormonal – Flushing:
• Evitar factores pre- Otros síndromes
Análogos de la somatostatina cipitantes (alcohol, hormonales:
(octreodile y lanreolide) ejercicios, ciertos fár- – Insulinoma:
Estrategia macos o alimentos) • Suplementos de
terapéutica • Agentes seroloninér- glucosa
Interferón alfa gicos (ondanselron,
– Síntomas • Diazóxide y glu-
Síndrome cripoheptadina)
– Características cagón
de terapia – Diarrea:
patológicas – Gastrinoma:
hormonal Terapia locorregional • Loperamida
– Estadio tumoral • Omeprazol
(metástasis de hígado) • Difenoxilalo
– OdreScan • Gastrectomía
Cirugía debuking • Agentes antiseroloni- – Vipoma:
Terapia sistémica (agentes nérgicos • Hidratación
citotóxicos o agentes – Broncoespamos: • Opioides
novedosos) • Broncodilatadores – Somatostatinoma:
Terapia de radionucleóticos: (salbutamol) • Insulina y hor-
50Y-octreodile – Cardiopatía carcinoide: monas pancreá-
177Lu-octreodile • Diuréticos
Terapia antitumoral ticas
50Y-lanreolide • Cirugía de sustitución • Colecistectomía
133HMBG valvular
– Profilaxis pelagra:
• Considerar suplemen-
tos de nicolinamida

Cirugía Terapia locorregional Terapia sistémica Otras terapias


– Enfermedad resecable: tumor Predominantemente metástasis en Enfermedad no – Radioterapia en me-
primario y metástasis el hígado: resecable avanzada tástasis cerebrales o
– Enfermedad no resecable: – Embolizacióny quimioemboliza- o enfermedad huesos
• Tumor primario: considerar ción metastásica: – Trasplante de híga-
cirugía para prevenir compli- – Radioembolización – Tumor bien diferen- do, que puede ser
caciones locales (obstrucción – Terapia ablativa local: radiofre- ciado o grado 1 o 2- considerado en pa-
o isquemia) cuencia ablativa, embolización QT (CDDPMP-16) cientes jóvenes con
• Metástasis de hígado: con- y crioterapia – Tratamiento experi- tumores con buen
siderar cirugía debuking sin mental si está dispo- grado de diferencia-
síndrome refractario hormonal nible ción y no enferme-
a la terapia médica (resección dad extrahepática
de más del 90 % del tumor
para una paliación efectiva)

Fig. 197.1. Estrategia terapéutica general y específica ante los tumores neuroendocrinos del páncreas. Unidad funcional del
Tumores, Hospital Hermanos Ameijeiras

a) Estabilizar con dieta y anticoagulante periope- a) Estabilizar glucosa y tratamiento con octreotide
ratorio. (considerar nutrición parenteral total) y corregir
b) Opción 1: exéresis del tumor más disección desbalance electrolítico (potasio, magnesio y
ganglionar peripancreática. bicarbonato).
c) Opción 2: pancreatectomía distal más disección b) Exéresis del tumor más disección ganglionar
más esplenectomía. peripancreática o procedimiento de Whipple más
Nota: Si el tumor es irresecable y se considera disección ganglionar peripancreática.
tratamiento con octreotide y debe realizarse cole- 5. Ppoma: resección más disección ganglionar.
cistectomía profiláctica. 6. Somatostatinoma: resección más disección gan-
4. Vipoma: glionar.
304 Parte XV. Páncreas

Tratamiento sistémico de la supervivencia con pocos efectos adversos


generalmente no intensos.
Incluye tres modalidades.
– Tratamiento quimioterápico oncológico. Tratamiento con análogos de la somatostatina
– Tratamiento con análogos de la somatostatina.
Los tumores neuroendocrinos del páncreas se carac-
– Tratamiento con interferón.
terizan por tener una alta densidad de receptores para la
Tratamiento quimioterápico oncológico somatostatina, esto además de las ventajas que ofrece
en el campo diagnóstico, permite el tratamiento de es-
El tratamiento oncológico se utiliza fundamental- tos tumores, excepto el insulinoma que tiene una baja
mente en pacientes con enfermedad oncológica avan- densidad para estos receptores. Basan su principio en
zada que hayan llevado o no cirugía, con estos criterios: la acción inhibitoria que ejercen sobre el tumor dismi-
índice Ki-67 mayor que 10o gran masa tumoral o nuyendo su tasa de crecimiento, incluida las metástasis.
progresión de la enfermedad. Diferentes fármacos se El octreotide se indica en el tratamiento de urgencia
han utilizado en el tratamientoantitumoral con disímiles de las crisis agudas desencadenadas como resultado
resultados. de operaciones y maniobras quirúrgicas en pacientes
Agentes quimioterápicos tradicionales con tumores neuroendocrinos del páncreas, como tra-
tamiento paliativo en pacientes inoperables, pacientes
El uso de estos agentes ha tenido buena respuesta clí-
con metástasis hepáticas y en la enfermedad metastásica
nica en los tumores neuroendocrinos del páncreas bien
en progresión.
diferenciado. Se usan esquemas con estreptozotocina (1 Se pueden administrar por vía subcutánea o intra-
g/m2/día intravenosa en ciclos de cinco a siete días cada muscular cada día o cada siete, 14 y 30 días, a dosis que
seis semanas), asociada a 5-fluoracilo, o doxorubicina, oscilan entre 100 mcg/día a 1500 mcg/día en dos o tres
estos esquemas provocan remisiones que oscilan entre veces subcutáneamente. En el caso de la administración
39 % a 60 % con una media de supervivencia de 37 intramuscular la dosis es de 20 mg 30 mg cada siete,
meses. En pacientes con tumores neuroendocrinos del 14 y 30 días, según la respuesta, inclusive 20 mg cada
páncreas pobremente diferenciado se recomienda el uso mes intramuscular. Se pueden utilizar solos o asociados
de cisplastino y etopósido, con buena tasa de respuesta, al interferón, donde muestran mejores resultados con
pero de corta duración. menos efectos secundarios.
La limitante de estos medicamentos son los efectos No provocan regresión (3 % a 14 %), pero sí esta-
adversos asociados a la citotoxicidad, la pobre calidad bilización tumoral de 36 % a 70 %, y disminución de
metodológica y el poco reclutamiento de pacientes en los parámetros clínicos (más de 50 %) y bioquímicos
los ensayos clínicos que han evaluado estas terapias lo (43 %). Los efectos secundarios más importantes
que ha traído resultados muy heterogéneos. del tratamiento son los síntomas abdominales en
Nuevos agentes antitumorales aproximadamente un tercio de los pacientes (náuseas,
dolor, diarrea con esteatorrea y flatulencia), dolor o
Se ha ensayado con la temozolomida con resul- eritema en el punto de inyección, hiperglucemia o hi-
tados similares a la estreptozotocina, la que puede poglucemia leve y cálculos biliares tras uso prolongado.
ser utilizada en regímenes solitarios a asociada a
capecitabina: 4Tratamiento con interferón
– Vascular Endothelial Growth Factor Pathway In- El interferón alfa2b muestra un efecto antitumoral en
hibitors: los tumores neuroendocrinos del páncreas los pacientes con tumores neuroendocrinos del páncreas
son muy vascularizados y el uso de sustancias en dosis subcutáneas, que oscila entre 2 millones y 6
específicas dirigidas a bloquear este receptor han millones de unidades diarias y tres veces por semana.
tenido resultados alentadores en las investigaciones En el caso del interferón pegilado se puede utilizar
preclínicas y los ensayos clínicos. En este grupo se una sola dosis semanal con mejor respuesta y menos
incluyen el sunitinib, sorafenib y bevacizumab. efectos adversos.
– Mammalian Target of Rapamycin Inhibitors Los efectos adversos son frecuentes y se dividen en
(mTOR): es un grupo de medicamentos en el que simples como la fiebre, mialgias, leucopenia, cefalea,
se encuentra el everolimus que bloquean la acción síndrome seudogripal, depresión, astenia, anorexia,
de serintreoninquinasa con efecto estimulador sobre entre otros, y efectos adversos graves cono enfermedad
la proliferación celular y la angiogénesis. Una dosis tiroidea, activación de enfermedades autoinmunes,
diaria de 10 mg por vía oral muestra un incremento instinto suicida y toxicidad hepática.
Capítulo 197. Tumores neuroendocrinos del páncreas 305

Tratamiento de las metástasis hepáticas Los criterios de selección de pacientes para tras-
plante hepático son:
Las metástasis hepáticas representan uno de los
– Tumores de baja malignidad, tumor carcinoide con
factores de peor pronóstico en la evolución de estos
Ki-67 bajo (en lo posible menor que 2 %).
pacientes, sin embargo, existen condiciones que permi-
– Tumor primario resecado en forma completa y que
ten realizar una cirugía hepática con intención curativa
pertenezca al drenaje venoso portal.
siempre y cuando cumpla con estos criterios:
– Enfermedad estable durante por lo menos seis me-
– Enfermedad hepática resecable de tumor bien dife-
ses.
renciado.
– Compromiso del parénquima hepático menor o igual
– Ausencia de metástasis extraabdominales. que 50 %.
– Ausencia de carcinomatosis peritoneal difusa. – Pacientes menores de 55 años.
– Ausencia de insuficiencia cardiaca derecha. – Ausencia de enfermedad extrahepática.
Se realiza cirugía con intención paliativa en los que Embolización de la arteria hepática:
cumplan con el criterio de resección quirúrgica mayor quimioembolización
que 90 % de la enfermedad metastásica. Esta es una modalidad de tratamiento paliativo, pue-
Con esta cirugía se logra disminuir la sintomatología de utilizarse sola, combinada con otra técnica paliativa
asociada al tumor así como mejora la supervivencia a asociada a la cirugía. En algunos pacientes puede ser
Si el paciente tiene estas condiciones descritas puede utilizada para disminuir el tamaño de las metástasis con
realizarse la intervención, si cumple los criterios de vistas a una cirugía.
resecabilidad. El principio para su uso se basa en que las metás-
– Criterios de resecabilidad: tasis hepáticas de los tumores neuroendocrinos del
• Tumor completamente extirpable. páncreas son muy vascularizadas y dependen de ramas
• Dos segmentos adyacentes. de la arteria hepática. Si se logra comprometer el riego
• Adecuado flujo portal y arterial, además de con- sanguíneo a la zona tumoral este sufre una necrosis y
veniente drenaje suprahepático y biliar. disminuye su tamaño. Su principal indicación es lograr
– Criterios absolutos de irresecabilidad: una citorreducción para disminuir la sintomatología o
• Afectación extensa del hígado mayor que seis para hacer operable una metástasis inoperable, puede
segmentos y menor que30 % de volumen hepá- ser utilizada como método conjunto a la cirugía.
tico residual. La embolización se realiza con bloqueo del flujo
• Tres venas suprahepáticas. arterial hepático utilizando partículas como espongos-
• Adenopatías positivas del tronco celiaco si no se tan,o microesferas o embosphere (BioSphere), mientras
pueden extirpar. que en la quimioembolización se pueden utilizar agen-
• Insuficiencia hepática: cirrosis grado B-C Child. tes quimioterápicos como: 5-fluracilo, doxorrubicina,
estreptozotocina (bajo anestesia general), mezclados
En casos de enfermedad limitada o unilobar (algo con una sustancia oleosa tipo lipiodol. Es recomendable
poco frecuente), el tratamiento es la resección hepática. tratar solo un lóbulo de inicio, y realizar a las cuatro
Las lesiones bilobares o metástasis complejas deben a seis semanas el tratamiento del lóbulo contralateral.
ser evaluadas por cirujanos experimentados para de- Se pueden presentar efectos adversos con frecuen-
terminar la mejor opción terapéutica. Habitualmente cia como dolor abdominal intenso, náuseas, vómitos,
se utiliza combinación de tratamientos como resección/ fiebre e hipertransaminasemia, lo que se conoce como
radiofrecuencia, pero también se puede recurrir a la síndrome posembolización.
embolización arterial preoperatoria para reducir tamaño
y luego resecar. En otros casos se recurre a la emboliza- Ablación con radiofrecuencia y crioablación
ción portal y cirugía en dos tiempos. Si las metástasis Estas son modalidades paliativas de tratamiento de
son irresecables, se recomienda buscar el tumor prima- las metástasis hepáticas que tiene un principio similar
rio. Luego se procede a transformar las metástasis no a la embolización y quimiembolización, pero aplicando
resecables en resecables mediante tratamiento médico otros métodos físicos, más novedosos y menos cruentos.
multimodal, embolización o radiofrecuencia. En última Sin embargo, no se han ensayado lo suficiente como
instancia se puede realizar un trasplante hepático, solo para ser indicados formalmente en el tratamiento de
en pacientes cuidadosamente seleccionados. las metástasis de los tumores neuroendocrinos del
306 Parte XV. Páncreas

páncreas. Deben ser reservados para ensayos clínicos Cepero, V. M., Hernández, R. H., Ugarte, M. D., Chao, G. L.,
y centros donde cuenten con esa experiencia. Cepero, N. M., Ramos, P. C. (2011). Utilidad de la ecografía
intraoperatoria para la resección de un insulinoma en la cabeza
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Capítulo 198
Fibrosis quística
Dra. C. Gladys Abreu Suárez

La fibrosis quística es una afección crónica multi- En cualquiera de los tres tipos pueden aparecer otras
sistémica, de origen genético, la primera descripción manifestaciones clínicas.
data de 1936 por Dorothy Andersen. Aunque provoca
considerable morbilidad y reducción de la expectativa Etiología
de vida, en la actualidad ha dejado de ser una enfer-
medad exclusiva de la infancia, con una supervivencia Es una enfermedad autosómica recesiva, con muta-
entre 30 a 40 años en países desarrollados. ción en el gen CFTR (Cystic Fibrosis Transmembrane
Afecta fundamentalmente a la población caucá- Conductance Regulator) que se identificó en 1989, en
sica, con una incidencia en Estados Unidos y norte el brazo largo del cromosoma 7. La proteína codificada
de Europa de 1 por cada 2 500 a 4 000 nacimientos. por el gen CFTR es designada como el regulador de
En poblaciones negras se reporta 1 por cada 10 000 a transmembrana de la fibrosis quística.
17 000 nacimientos. Las mutaciones del CFTR afectan a los órganos
En Cuba, realizando pesquisa neonatal con BM-Test con tejido epitelial, con modificación en la cantidad
de meconio, se reportó en la década de los 70 una in- y composición de los fluidos epiteliales. La mutación
cidencia aproximada de 1 por cada 5 000 nacimientos. más frecuente se debe a la pérdida del aminoácido
En un estudio más reciente, del periodo 2001 a 2007, fenilalanina en el codon 508 (F508del).
solo se diagnosticaron 90 pacientes, para una incidencia Se describen más de 1400 mutaciones, además de
de 1 por cada 9 862 nacidos vivos, lo que parece ser existir genes modificadores, factores ambientales y
expresión de la mezcla étnica de la población cubana. relacionados con los cuidados de salud, que influyen en
la evolución y características de cada paciente, por lo
que no existe una correlación directa genotipo-fenotipo.
Clasificación
Las mutaciones más severas se asocian generalmente a
De acuerdo con sus principales manifestaciones insuficiencia pancreática. El estudio de las mutaciones
clínicas, la International Cystic Fibrosis Medical As- en pacientes fibroquísticos cubanos en 2007, también
sociation propone esta clasificación, aprobada por la describe una mayor frecuencia de F508del (37 %),
Organización Mundial de la Salud: seguida por la G542X (5,8 %).
– Fibrosis quística típica:
• Enfermedad sinobroncopulmonar típica, con Patogenia
insuficiencia pancreática.
• Enfermedad sinobroncopulmonar típica, sin La proteína CFTR es un canal de cloro regulado por
insuficiencia pancreática. AMPc, que requiere, para su funcionamiento, adeno-
– Fibrosis quística no típica: síntrifosfato y la fosforilación del dominio regulador.
• Bronquitis crónica y sibilancias recurrentes, con Se localiza en la membrana de las células epiteliales
o sin insuficiencia pancreática. regulando el flujo de electrolitos y agua.
– Fibrosis quística otros tipos: En las glándulas sudoríparas no se produce reab-
• Poca o ninguna afectación respiratoria, con o sin sorción de cloro ni de sodio través de la membrana
insuficiencia pancreática. apical de las células del conducto glandular, por lo
310 Parte XV. Páncreas

que aumenta la concentración de cloro y sodio en el Debido a la comunicación que existe entre los con-
sudor. Esta anomalía es la base del diagnóstico de la ductos biliares intrahepáticos, el bloqueo de algunos
fibrosis quística, a través de la cuantificación de estos de estos no provoca un cuadro de colestasis completa,
electrolitos en el sudor. por lo que ocurre una fibrosis portal, sin signos clí-
En el epitelio respiratorio la ausencia de CFTR nicos ni bioquímicos de alteración hepática, que en
disminuye el volumen líquido periciliar, lo que afecta algunos pacientes progresa y llega a ocurrir la atrofia
el movimiento ciliar y la aclaración de partículas; tam- del parénquima hepático con una cirrosis multilobular.
bién disminuye la actividad antimicrobiana de algunas La retención de los ácidos biliares hidrófobos también
proteínas (lisozima y lactoferrina). La aparición de contribuye al daño hepático.
macrófagos y neutrófilos para combatir las bacterias Se ha sugerido que la alteración del canal CFTR es
conduce a un proceso inflamatorio endobronquial la causa de la esterilidad masculina debido al tapona-
crónico, con predominio de polimorfonucleares. Las miento de los conductos deferentes.
proteasas liberadas por los polimorfonucleares con-
ducen a daño tisular, fibrosis y empeoran el transporte Diagnóstico clínico
mucociliar. Su muerte libera ADN en cantidades que
incrementan aún más la viscosidad de las secreciones El diagnóstico se basa en las manifestaciones clíni-
y los fenómenos obstructivos. cas de enfermedad típica, u otras manifestaciones que
En la membrana apical de los conductos pancreáti- sugieran la sospecha de fibrosis quística, en los ante-
cos, los canales de cloro y cloro-HCO3– funcionan en cedentes familiares y en la realización de electrolitos
paralelo. El HCO3– es liberado en el lumen produciendo en el sudor.
una secreción alcalina que hidrata y solubiliza las secre- Existe un espectro muy amplio de manifestaciones
ciones acinares de enzimas (amilasa, proteasa y lipasa). clínicas, que varían de un paciente a otro y en depen-
En la fibrosis quística las secreciones inadecuadamente dencia de la edad:
alcalinizadas y espesas obstruyen los conductos, ocurre 1. Manifestaciones respiratórias:
una insuficiencia pancreática por no llegar las enzimas a) Lactantes o prescolares:
al intestino, con mala digestión y malabsorción intes- – Polipnea.
tinal caracterizada por esteatorrea. La lipolisis de los – Tos crónica.
triglicéridos se afecta por la menor tasa de lipasa, así – Síndrome tos ferinoso.
como por el medio ácido intraduodenal que la inactiva. – Bronquiolitis prolongada.
Hay afectación de la formación de micelas, en parte por – Bronquitis recurrente.
la disminución de colipasa, pero en gran medida por las – Sibilancias recurrentes y atelectasias.
alteraciones del pool de las sales biliares. A largo plazo – Neumonías.
ocurre destrucción de la arquitectura pancreática, con – Otitis media.
cambios quísticos y fibróticos, que son patognomónicos – Clubbing.
de la enfermedad. En etapas posteriores, generalmente b) Escolares y adolescentes:
la adolescencia o la adultez, puede presentarse daño – Polipnea y tos crónica.
secundario de las células de los islotes, con diabetes – Atelectasias recurrentes.
relacionada con la fibrosis quística. – Bronquitis recurrente, colonización por Pseu-
De forma similar, la alteración de los canales de domonas aeruginosa.
cloro, sodio y potasio en el intestino, son la causa de la – Neumonías.
deshidratación y compactación de las heces, que pueden – Pansinusitis, poliposis nasal y mucoceles en
ocasionar íleo meconial al nacimiento y síndrome de senos maxilares.
obstrucción intestinal distal en etapas posteriores de – Clubbing.
la vida. – Hemoptisis yneumotórax.
A nivel del hígado, el gen CFTR anómalo se en- – Corpulmonale crónico.
cuentra fundamentalmente en la membrana apical de 2. Manifestaciones digestivas y nutricionales:
las células epiteliales de los conductos biliares intrahe- a) Recién nacido:
páticos y en los hepatocitos. Se acumula bilis espesa en – Ileo meconial.
los conductillos, lo que origina altas concentraciones – Íctero prolongado.
de ácidos lipofílicos que pueden lesionar las células de b) Lactantes y prescolares:
los conductillos, lo que conduce a la fibrosis. – Edema nutricional con anemia severa.
Capítulo 198. Fibrosis quística 311

– Síndrome de malabsorción intestinal. De inicio aparecen las bacterias comunes en los


– Fracaso en el crecimiento. niños y posteriormentela colonización por Pseudo-
– Deficiencias vitamínicas y anemia ferropénica. monas aeruginosa es característica en estos pacientes.
– Reflujo gastroesofágico. Actualmente se reportan, además, gérmenes emergentes
– Prolapso rectal. como micobacterias ambientales, Stenotrophomonas
c) Escolares y adolescentes: maltophilia, Bulkholderiacepacia, entre otros.
– Síndrome de mal absorción intestinal.
– Fracaso en el crecimiento y ferropenia. Manifestaciones digestivas y nutricionales
– Pancreatitis crónica o recurrente. La primera manifestación clínica puede ser el íleo
– Hepatomegalia, esteatosis hepática. meconial en las primeras 48 h de vida, con historia
– Cirrosis biliar focal. de polihidramnios en 50 %. Puede complicarse con
– Síndrome de obstrucción intestinal distal. vólvulos, perforaciones, peritonitis meconial, entre
– Invaginación intestinal. otras. El estudio radiológico del abdomen muestra asas
– Ulcus péptico. distendidas, sin niveles hidroaéreos, con apariencia
– Colecistitis, litiasis vesicular. granular, en el área del íleon terminal, que indican la
3. Otras manifestaciones: mezcla de burbujas de aire con meconio. El enema de
a) Deshidratación hiponatrémica aguda y alcalosis bario muestra un microcolon de desuso.
metabólica hiponatrémica crónica. En etapas posteriores puede aparecer el síndrome
b) Intolerancia a los hidratos de carbonoy diabetes. de obstrucción intestinal distal, antiguamente conocido
c) Azoospermia obstructiva con ausencia congénita como equivalente del íleo meconial. Se caracteriza
de vasos deferentes (hombres). por obstrucción parcial o completa de íleon terminal
d) Fertilidad reducida e incontinencia urinaria (mu- o colon ascendente, de forma aislada o recurrente, en
jeres). niños mayores. La radiología de abdomen muestra asas
e) Cáncer de tracto biliar extrahepático, intestino delgadas dilatadas, con apariencia granular, en burbujas,
delgado, colon, hígado y páncreas. en ciego e íleon, que corresponde a heces y material
muco feculento retenido.
De acuerdo a la fisiopatología descrita se pueden La manifestación más importante está dada por el
estudiar como: síndrome de malabsorción intestinal debido a la insu-
– Manifestaciones respiratorias. ficiencia pancreática exocrina que se observa en 85 %
– Manifestaciones digestivas y nutricionales. de los pacientes y puede provocar una gran afectación
– Alteraciones de las glándulas sudoríparas. nutricional (Fig.198.1). Se caracteriza por deposiciones
– Manifestaciones génitourinarias. voluminosas, semipastosas, muy fétidas, con grasa, po-
– Otras manifestaciones. bre o no ganancia de peso, pérdida de grasa subcutánea
y músculo, con el aspecto fenotípico de un síndrome de
Manifestaciones respiratorias malabsorción. Puede acompañarse de prolapso rectal.
En los lactantes con destete temprano se describe una
Estas son muy importantes, ya que la severidad de forma nutricional grave con edema por hipoproteinemia
la afectación del aparato respiratorio es la que va a y anemia severa. Pueden observarse manifestaciones
determinar la evolución y el pronóstico del paciente de deficiencia de vitaminas liposolubles en niños con
(Fig. 198.1). Muchas veces la enfermedad comienza insuficiencia pancreática.
en los primeros meses de la vida como un síndrome Por otro lado la pancreatitis aguda, recurrente o
tos ferinoso, una bronquiolitis prolongada, cuadros de crónica se observa en 20 % de los pacientes suficientes
sibilancias, atelectasias o neumonías recurrentes. En las pancreáticos.
formas típicas suelen presentar una tos crónica, produc- El íctero neonatal prolongado por espesamiento de la
tiva, con esputos purulentos y un deterioro respiratorio bilis, puede durar varios meses, con un hígado grande y
insidioso, caracterizado por exacerbaciones de la infec- firme. El pronóstico es bueno, aunque en algunos casos
ción pulmonar crónica. En etapas más tardías pueden evoluciona a la cirrosis.
aparecer manifestaciones de sinusitis, poliposis nasal La enfermedad hepática focal no es frecuente y
y mucocele, bronquiectasias, hemoptisis, neumotórax tiene unaevolución subclínica, aparece generalmente
y finalmente sobreviene el cor pulmonar crónico. Son en la infancia. Puede progresar a cirrosis multilobular,
característicos los dedos en “palillo de tambor” y “uñas hipertensión portal con várices esofágicas, ascitis y
en vidrio de reloj”. fallo hepático.
312 Parte XV. Páncreas

igual que la invaginación intestinal, que es 10 veces


más frecuente en los pacientes con fibrosis quística
que en losque presentan síndrome de obstrucción
intestinal distal. Aunque el apéndice muestra daño
histológico y obstrucción, no es frecuente la apen-
dicitis.
Con el uso de preparaciones de enzimas en altas
dosificaciones y por tiempo prolongado, se ha descrito
una complicación conocida como colonopatía fibrosan-
te, con síntomas de obstrucción, diarrea sanguinolenta,
ascitis quilosa y pérdida de peso, que afecta fundamen-
talmente el colon ascendente.
Se ha reportado una incidencia mayor de la esperada
de enfermedad de Crohn en niños fibroquísticos. La
enfermedad celiaca se asocia con menos frecuencia,
pero se recomienda que debe descartarse cuando no hay
respuesta al reemplazo con enzimas en la insuficiencia
pancreática.
De forma general, el espectro de manifestaciones
digestivas de la fibrosis quística es tan amplio que
la presencia de un cuadro doloroso abdominal en un
A B paciente plantea un desafío diagnóstico.

Fig. 198.1. A. Paciente con enfermedad bronquial leve, Alteraciones de las glándulas sudoríparas
episodios de deshidratación hipotónica y dolor abdominal
recurrente con gastroduodenitis. No presentaba esteatorrea La pérdida masiva de sal por la sudoración, duran-
característica, pero se observa abdomen prominente, con te el verano, puede producir postración por el calor:
aspecto de malabsorción intestinal. Dos electrolitos en sudor deshidratación hiponatrémica aguda con hipotensión
elevados, se diagnostica fibrosis quística y se inician enzimas. o alcalosis metabólica hiponatrémica crónica carac-
B.Paciente dos años después con el reemplazo enzimático terizada por apatía, irritabilidad, vómitos, rechazo al
desaparece el dolor y la postura de malabsorción. Se con- alimento y no ganancia de peso.
cluye como una fibrosis quística atípica con Insuficiencia
pancreática.
Manifestaciones génitourinarias
Los hombres presentan azoospermia obstructiva con
La esteatosis también se ha descrito con frecuencia ausencia congénita de vasos deferentes. En las mujeres
en pacientes con fibrosis quística, generalmente asocia- hay fertilidad reducida por mucus cervical espeso y
do a desnutrición severa o a déficit nutricionales espe- pueden presentar incontinencia urinaria.
cíficos de ácidos grasos esenciales, carnitina o colina.
La vesícula no es funcionante en 25 % de los pa- Otras manifestaciones
cientes y pueden observarse anomalías anatómicas.
Aunque se describen casos de colecistitis y cálculos La intolerancia a los hidratos de carbono o la
radiolucentes, principalmente en insuficiencia pancreá- diabetes se asocia a IP, con reducción del número de
tica, la mayoría son asintomáticos. células beta y resistencia periférica a la insulina. El
El reflujo gastroesofágico es frecuente, de causa riesgo de aparición aumenta con la edad. Debuta de
multifactorial, favorecido por las posiciones de la modo insidioso, precedida por empeoramiento de la
fisioterapia respiratoria, la insuficiencia del esfínter función pulmonar. A largo plazo hay complicaciones
esofágico inferior por el atrapamiento de aire y el microvasculares.
aplanamiento de los diafragmas, así como el uso de En estudios retrospectivos en Europa se describe
algunos medicamentos. incidencia superior a la esperada de cáncer de tracto
El ulcus péptico, favorecido por la hipersecreción biliar extrahepático, intestino delgado, colon, hígado
ácida, es más frecuente que en la población general, al y páncreas.
Capítulo 198. Fibrosis quística 313

Exámenes complementarios – Alteraciones respiratorias: radiología torácica


simple con atrapamiento de aire, atelectasias y
La demostración de niveles elevados de tripsina neumonías. En etapas posteriores elementos de
inmunorreactiva en sangre, en las cuatro primeras fibrosis y bronquiectasias, que pueden confirmarse
semanas de vida, ha permitido el pesquisaje neonatal, con una tomografía computarizada, con un patrón
con 10 % de falsos positivos y negativos. Requiere heterogéneo: áreas de parénquima normal y afecta-
confirmación posterior con prueba del sudoro estudio do. La radiología de senos paranasales muestra una
genético. El diagnóstico más temprano, en niños asin- pansinusitis en los casos típicos, en la adolescencia
tomáticos, se plantea que puede mejorar el pronóstico pueden aparecer pólipos (Fig.198.2). Las pruebas de
a largo plazo. función respiratoria como la espirometría muestra
En familias portadoras de fibrosis quística se puede un patrón obstructivo, con poca o ninguna respuesta
realizar diagnóstico prenatal con biopsia de vellosida- a broncodilatadores, evolutivamente aparecen cam-
des coriónicas. bios restrictivos. En los estudios microbiológicos de
La cuantificación de electrolitos en el sudor, a través secreciones respiratorias aparece colonización con
del método de iontoforesis con pilocarpina es la prueba seudomonas que apoyan el diagnóstico y por otro
de elección para el diagnóstico, debe realizarse en un lado ensombrecen el pronóstico del paciente.
laboratorio confiable y con muestras que tengan un peso – Alteraciones digestivas: la imaginología es importan-
de sudor superior a 100 mg. Cifras de cloro superiores a te en el diagnóstico del íleo meconial y el síndrome
60 mmol o 60 mEq/L se consideran diagnósticas, entre de obstrucción intestinal distal, así como en las
40 mmol y 60 mmol, son consideradas como dudosas, complicaciones quirúrgicas digestivas. La ultrasono-
pueden corresponder a mutaciones menos severas y grafía puede detectar, además, cambios pancreáticos,
deben valorarse con los datos clínicos, en estos casos alteraciones de la glándula hepática, que pueden
puede realizarse determinación de diferencia de poten- preceder a las anomalías bioquímicas, así como de
cial nasal, que es mayor en los fibroquísticos. la vesícula. Con menos frecuencia pueden ser útiles
Los estudios genéticos son caros y hay descritas nu- estudios colangiográficos percutáneos o resonancia
merosas mutaciones, deben realizarse solo en pacientes magnética con colangiopancreatografía. En la cirrosis
confirmados por la clínica y los electrolitos en el sudor biliar la biopsia hepática muestra esteatosis, áreas
o en casos de diagnóstico prenatal o por pesquisaje al focales de enfermedad del tractus portal, con tapones
nacimiento. biliares con material eosinofílico, proliferación de
Para el estudio de las diferentes manifestaciones ductos biliares y colangitis. El laboratorio clínico
clínicas se describen: puede mostrar evidencia de los trastornos nutricio-

A B

Fig. 198.2.A. Radiología torácica de paciente con fibrosis quística que muestra atrapamiento de aire, fibrosis y dilataciones
bronquiales. Paciente fibrosis quística de 21 años, en etapa avanzada de la enfermedad con marcada. B. Hiperinsuflación,
lesiones fibrosas, quísticas y dilataciones bronquiales y bilaterales con predominio derecho.
314 Parte XV. Páncreas

nales, incluyendo determinación de albúmina y pro- cal es la prueba de elección. La endoscopia digestiva
teínas totales, vitaminas liposolubles, ácidos grasos está indicada ante la sospecha de ulcus péptico, en
esenciales, hierro sérico, entre otras. Las pruebas de pacientes con reflujo gastroesofágico y en general en
función hepática deben realizarse sistemáticamente. los cuadros dolorosos abdominales recurrentes.
Las amino transferasas pueden elevarse de forma
intermitente entre 1 y 2,5 veces los rangos normales, Otras alteraciones
pueden ser normales en la enfermedad hepática dada El desarrollo de intolerancia a los hidratos de car-
la naturaleza focal del proceso. La determinación de bono (de 5,6mmola 6,9 mmol en la glucemia en ayunas
amilasa es útil cuando se sospecha pancreatitis. o de 7,8 mmola11 mmol en la posprandial) o diabetes
(mayor que 7 mmol/en la glucemia en ayunas o mayor
Estudios de función pancreática que 11 mmol en la posprandial) es insidioso, por lo que
Métodos directos debe seguirse sistemáticamente el estado glucémico de
los pacientes, por lo menos una vez al año y en episodios
La prueba de colecistoqinina-secretina tiene alta de exacerbación. Puede realizarse, además, hemoglo-
sensibilidad y especificidad. Es una prueba invasiva, bina glucosilada y respuesta a la insulina.
incómoda de realizar y no está estandarizada en niños. El ionograma y la gasometría son importantes en
Métodos indirectos los desequilibrios hidroelectrolíticos.

Son menos invasivos y más económicos:


– Determinación de enzimas pancreáticas en suero o
Diagnóstico diferencial
heces: Se describen otras afecciones con mutaciones en el
• Prueba de elastasa fecal con técnica de Elisa, gen CFTR, que presentan de forma aislada azoospermia
mediante anticuerpos mono o policlonales: la obstructiva, colangitis esclerosante, bronquiectasias
elastasa-1 en heces inferior a 200 mcg y valores diseminadas, pancreatitis crónica o recurrente, entre
inferiores a 15 mcg denotan insuficiencia pan- otras. En estos casos no existen otras manifestaciones,
creática severa. Puede ser falsamente positiva en los electrolitos son normales y no se considera que
la enfermedad celiaca, diarrea aguda y en otras presenten enfermedad fibrosis quística.
causas de atrofia de las vellosidades. Se impone el diagnóstico diferencial con los cuadros
• Determinación de tripsina inmunorreactiva se obstructivos bronquiales como el asma bronquial y
utiliza como pesquisaje neonatal en sangre del otras neumopatías crónicas, así como con otras causas
talón, con valores por debajo de 140 ng/mL. de malabsorción intestinal.
– Prueba NBT-PABA: asesora la absorción de mar-
cadores que son hidrolizados por enzimas pancreá-
Tratamiento
ticas y después aparecen en orina, refleja actividad
intraluminal de la quimotripsina. El seguimiento debe realizarse en centros especia-
– Análisis de componentes de alimentos no digeridos lizados, con un enfoque multidisciplinario, dirigido
y no absorbidos: a todos los problemas que presenten los pacientes y
• Excreción de grasa fecal en 72 h: esteatorrea leve garantizando una adecuada nutrición:
de 6 g a10 g de grasa en 24 h, moderada de 10 – Manifestaciones respiratorias:fisioterapia respirato-
g a 20 g de grasa en 24 h y severa con más de ria, ejercicios físicos, terapia de sustancias inhaladas
20 g de grasa en 24 h. Un coeficiente de absorción para disminuir la viscosidad en las vías aéreas,
menor que 93 % se puede utilizar para definir la antibióticos por vía oral, parenteral o inhalada en
esteatorrea. exacerbaciones infecciosas, cirugía de mínimo acce-
• Esteatócrito y tinción de Sudán en heces. so de senos maxilares y trasplante corazón pulmón.
– Análisis de productos de oxidación de grasa no di- – Manifestaciones digestivas, nutricionales y de las
gerida en el aire expirado: la prueba estándar es la glándulas sudoríparas:
cuantificación de la excreción de grasa fecal en 72 h • Tratamiento médico con acetilcisteína del íleo
(prueba de van de Kamer), por ser la esteatorrea el meconial y el síndrome de obstrucción intesti-
síntoma clínico relevante en la insuficiencia pancreá- nal distal, sino resuelve es quirúrgico. Además,
tica, aunque es muy engorrosa su realización. Algunos dieta hipercalórica, con vitaminas liposolubles
autores plantean que la determinación de elastasa fe- y aumentar aporte de sal.
Capítulo 198. Fibrosis quística 315

• Tratamiento de la hiponatremia: enzimas pan- Cuando existen criterios clínicos, imaginológicos,


creáticas, antiácidos si no hay respuesta a las bioquímicos o histológicos de enfermedad hepática
enzimas, tratamiento del reflujo gastroesofágico. se utiliza el ácido ursodesoxicólico a dosis elevadas:
• Tratamiento de la pancreatitis aguda: uso pre- 20 mg/kg de peso por día, con disminución de amino
coz de ácido ursodesoxicólico en enfermedad transferasas, mejoría del patrón histológico, la excre-
hepática. Trasplante de pulmón-páncreas y tras- ción biliar e incluso el patrón alterado de ácidos gra-
plante hígado-páncreas. sos. No se recomienda de forma rutinaria en todos los
– Diabetes relacionada con la fibrosis quística:dieta y pacientes confibrosis quística y no es útil en la cirrosis
uso de insulina. biliar establecida. En la cirrosis biliar con hipertensión
portal puede ser necesaria la ligadura de várices o la
La terapia génica es lo ideal, pero hasta ahora no han implantación de shunts intrahepáticos por vía transyu-
tenidoéxito las investigaciones en este sentido. gular (TIPS). La esplenectomía está indicada en el
Para las manifestaciones de obstrucción respira- hiperesplenismo secundario.
toria se utilizan las técnicas activas de fisioterapia Se puede realizar además trasplante de pulmón-pán-
respiratoria, apoyadas por ejercicios físicos, asociadas creas y trasplante combinado hígado-páncreas.
a una terapia de sustancias inhaladas para disminuir la
viscosidad en las vías aéreas. Bibliografía
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