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Universidad Técnica “Luis Vargas Torres “

Esmeraldas – Ecuador

Carrera de Ingeniería Química.


Termodinámica II.

5to Ciclo Paralelo “A”

Trabajo de Investigación
TEMA:
Termodinámica de las Soluciones
INTEGRANTES:
Arboleda Mecías Jonathan Alex

Spin Intriago Jefferson Arturo

Mayorga Batioja Josselyn Carolina

Ortiz Julio

Mercado Barbosa Dayana

Hurtado Ibarra María José

DOCENTE:
ING. Erick Mosquera.
Termodinámica de las Soluciones.

Según Juan E. y Joffré E. en su Libro Termodinámica Metalúrgica se puede definir


una solución como una fase homogénea, compuesta por diferentes substancias
químicas, cuyas concentraciones pueden variar sin que ocurra la precipitación de una
fase de una nueva fase.
En sí es una mezcla homogénea de dos o más sustancias las cuales pueden estar en
estado sólido, líquido o gaseoso.
Componentes de una solución:
 Soluto: Es la sustancia que se encuentra en menor cantidad, aquella que se
disuelve en la mezcla Una solución puede contener varios solutos, con
frecuencia cambia de estado
 Solvente: También llamado disolvente es la sustancia que se encuentra en
mayor cantidad, aquella en la que se disuelve el soluto y no cambia de estado.

Tipos de soluciones según el nivel de mezcla


Estas son las soluciones que se dividen en: homogéneas y heterogéneas.
Homogéneas:
Son aquellas mezclas en donde los compuestos que se ligan no se pueden diferenciar
el uno del otro. Esto es porque el soluto y el solvente se junta de manera tal que la
sustancia final no se puede distinguir en qué posición están sus compuestos.
Heterogéneas:
Son aquellas soluciones que se puede distinguir el solvente del soluto, esto es porque
ambos componentes no se juntan como tal y se ven por separado, un claro ejemplo
es el agua y el aceite frio, el alcohol y la arena, entre otros.
Tipos de soluciones según su carga eléctrica
Dependiendo la carga eléctrica los componentes de una solución se pueden
diferenciar o no, existen los siguientes tipos:
Soluciones no electrolíticas:
Son aquellas que es nula su capacidad de transmitir electricidad y se caracteriza por
que le soluto se disgrega casi hasta su esta molecular.
Soluciones electrolíticas:
Este tipo de soluciones sí transmiten electricidad y se les puede llamar iónicas.
Tipos de soluciones según su concentración
En este tipo las soluciones se pueden clasificar de dos maneras: según la cantidad
de soluto presente en la solución (concentración), y según el tamaño o diámetro de
las partículas del soluto, suspensiones, soluciones coloidales y soluciones
verdaderas.
Soluciones saturadas:
Una solución saturada es una solución química que contiene el máximo de
concentración de soluto disuelto en un solvente. El soluto adicional no se disolverá
en una solución saturada y aparecerá en una fase distinta, ya sea un precipitado si
es un sólido en líquido o una efervescencia si es un gas en un líquido

Soluciones insaturadas:
Es cuando hemos disuelto una cantidad de soluto menor a la cantidad máxima que
podemos disolver. Ten presente que la cantidad máxima de soluto que podemos
disolver en un determinado solvente es algo que mantiene a la solución sin
saturaciones y en un equilibrio.

Sobresaturadas:
Son aquellas en las que se ha añadido más soluto del que puede ser disuelto en el
solvente, por tal motivo, se observa que una parte del soluto va al fondo del recipiente.
La solución que observamos está saturada (contiene la máxima cantidad de soluto
disuelto), y el exceso se va al fondo del recipiente. La capacidad de disolver el soluto
en exceso aumenta con la temperatura: si calentamos la solución, es posible disolver
todo el soluto.

No saturadas:
Es aquella en la que la concentración de soluto es menor que la concentración de una
disolución saturada bajo las mismas condiciones.
La concentración de una solución indica la cantidad de soluto contenida en una
cantidad de disolvente o disolución.
 Concentración

Estos vasos, que contienen un tinte rojo, demuestran cambios cualitativos en la


concentración. Las soluciones a la izquierda están más diluidas, comparadas con las
soluciones más concentradas de la derecha.
La concentración es la magnitud físico-química que nos permite conocer la proporción
entre el soluto y el disolvente en una disolución. Cada sustancia tiene una solubilidad
que es la cantidad máxima de soluto que puede mantenerse en disolución, y depende
de condiciones como la temperatura, presión, y otras substancias disueltas o en
suspensión. En química, para expresar cuantitativamente la proporción entre un
soluto y el disolvente en una disolución se emplean distintas unidades: molaridad,
normalidad, molalidad, formalidad, porcentaje en peso, porcentaje en volumen,
fracción molar, partes por millón, partes por billón, partes por trillón, etc. También se
puede expresar cualitativamente empleando términos como diluido, para bajas
concentraciones, o concentrado, para altas.

Molaridad
La molaridad (M), o concentración molar, es el número de moles de soluto por cada
litro de disolución. Por ejemplo, si se disuelven 0,5 moles de soluto en 1000 mL de
disolución, se tiene una concentración de ese soluto de 0,5 M (0,5 molar). Para
preparar una disolución de esta concentración habitualmente se disuelve primero el
soluto en un volumen menor, por ejemplo 300 mL, y se traslada esa disolución a un
matraz aforado, para después enrasarlo con más disolvente hasta los 1000 mL.

Es el método más común de expresar la concentración en química, sobre todo cuando


se trabaja con reacciones químicas y relaciones estequiométricas. Sin embargo, este
proceso tiene el inconveniente de que el volumen cambia con la temperatura.
Se representa también como: M = n / V, en donde "n" son los moles de soluto y "V"
es el volumen de la disolución expresado en litros.

Molalidad
La molalidad (m) es el número de moles de soluto por kilogramo de disolvente (no de
disolución). Para preparar disoluciones de una determinada molalidad, no se emplea
un matraz aforado como en el caso de la molaridad, sino que se puede hacer en un
vaso de precipitados y pesando con una balanza analítica, previo peso del vaso vacío
para poderle restar el correspondiente valor.

La principal ventaja de este método de medida respecto a la molaridad es que como


el volumen de una disolución depende de la temperatura y de la presión, cuando éstas
cambian, el volumen cambia con ellas. Gracias a que la molalidad no está en función
del volumen, es independiente de la temperatura y la presión, y puede medirse con
mayor precisión.
Es menos empleada que la molaridad pero igual de importante.
Masa por volumen
Se pueden usar también las mismas unidades que para medir la densidad aunque no
conviene confundir ambos conceptos. La densidad de la mezcla es la masa de la
disolución dividida por el volumen de ésta, mientras que la concentración en dichas
unidades es la masa de soluto dividida por el volumen de la disolución. Se suelen
usar gramos por litro (g/l) y a veces se expresa como «% m/v».

Porcentaje en masa
Se define como la masa de soluto (sustancia que se disuelve) por cada 100 unidades
de masa de la disolución:

Por ejemplo, si se disuelven 20 gramos de azúcar en 80 ml de agua, el porcentaje en


masa será: 100•20/(80+20)=20% o, para distinguirlo de otros porcentajes, 20% p/p
(en inglés, w/w).
Porcentaje en volumen
Expresa el volumen de soluto por cada cien unidades de volumen de la disolución.
Se suele usar para mezclas líquidas o gaseosas, en las que el volumen es un
parámetro importante a tener en cuenta. Es decir, el porcentaje que representa el
soluto en el volumen total de la disolución. Suele expresarse simplificadamente como
«% v/v».

Por ejemplo, si se tiene una disolución del 20% en volumen (20% v/v) de alcohol en
agua quiere decir que hay 20 ml de alcohol por cada 100 ml de disolución.
La graduación alcohólica de las bebidas se expresa precisamente así: un vino de 12
grados (12°) tiene un 12% (v/v) de alcohol.
Normalidad

La normalidad (N) es el número de equivalentes (n) de soluto (sto) por litro de


disolución (sc). El número de equivalentes se calcula dividiendo la masa total por la
masa de un equivalente: n = m / meq, o bien como el producto de la masa total y la
cantidad de equivalentes por mol, dividido por la masa molar: .
La Fracción Molar:

La Fracción Molar es una forma de medir la concentración que expresa la proporción


en que se encuentra una sustancia respecto a los moles totales de la disolución.

La Fracción Molar de una disolución viene determinada por la siguiente fórmula:

La Fracción Molar es una unidad de concentración adimensional. La suma de todas


las fracciones molares de las sustancias presentes en una disolución es igual a 1.
Densidad
Si bien la densidad no es una forma de expresar la concentración, ésta es
proporcional a la concentración (en las mismas condiciones de temperatura y
presión). Por esto en ocasiones se expresa la densidad de la disolución en
condiciones normales en lugar de indicar la concentración; pero se usa más
prácticamente y con disoluciones utilizadas muy ampliamente. También hay tablas de
conversión de densidad a concentración para estas disoluciones, aunque el uso de la
densidad para indicar la concentración es una práctica que está cayendo en desuso.
 Teoría de las soluciones
Es natural pensar que es insuficiente conocer acerca de los fluidos puros, únicamente.
Atendiendo a esa expectativa, una vez dominado el uso de los principios básicos en
el estudio de las sustancias puras, se pasa a generalizar los conceptos a los sistemas
fluidos de más de un componente en ausencia de reacciones químicas. Usualmente
la generalización comienza de a poco y típicamente se comienza por un caso muy
sencillo pero muy útil y común: el sistema aire - vapor de agua. A ese estudio se le
llama psicrometría y es de enorme utilidad práctica en tecnologías como el
acondicionamiento de aire y el secado (que es una operación unitaria y está fuera del
alcance de la termodinámica).
Al estudio del aparato teórico que permite calcular la distribución de las especies en
las diferentes fases en equilibrio de un sistema fluido de múltiples componentes, se
le suele llamar Teoría termodinámica de las soluciones. Se trata de uno de los
contenidos más extensos y profundos en termodinámica, en donde se aplican los
conocimientos de la química acerca de cómo interactúan diferentes moléculas y cómo
esos comportamientos en la micro escala tienen serias consecuencias en cómo se
comportan cantidades de material muy grandes y de interés industrial.
Lo que hace tan importante estudiar, entender, cuantificar, y explicar con teorías el
por qué las sustancias se comportan de esa manera, es que en ese comportamiento
se halla el fundamento de esa tecnología tan antigua, y que hoy por hoy resulta
emblemática para la ingeniería química: la destilación.
Se trata de una operación unitaria que consume aproximadamente el 3% de toda la
energía consumida en todo el mundo (Soave, G.; Feliu, J. A., Saving energy in
distillation towers by feed splitting. Applied Thermal Engineering 2002, 22, (8), 889.).
Cerca de un 90% de todas las operaciones de recuperación y purificación en la
industria son destilaciones, lo cual convierte a la destilación en una de las operaciones
unitarias más estudiadas en toda la historia de la ingeniería química. Sólo en Estados
Unidos existen más de 40.000 columnas de destilación en funcionamiento
(Humphrey, J., Separation processes: playing a critical role. Chemical Engineering
Progress 1995, 91, (10), 43-54.).
La utilidad de la teoría termodinámica de las soluciones se pone de manifiesto
trayendo a colación la segunda ley de la termodinámica: no todo es posible y lo que
es posible, tiene un límite y tiene un costo.
Lo posible: la teoría permite conocer si determinado proceso de separación es
termodinámicamente factible o no.
Lo que es posible tiene un límite: en caso de factibilidad afirmativa, sirve para conocer
cuál es el grado máximo de separación que se puede lograrse.
Y finalmente, lo que es posible tiene un costo: Sin la teoría sería imposible poder
estimar qué tecnología o equipo es necesario para determinada operación, o conocer
cuánta energía demanda realizarla.
De hecho, diseñar un aparato de separación (campo de estudio de la Transferencia
de Masa y de las Operaciones Unitarias) sin la termodinámica que describe la
distribución de los componentes en las diferentes fases, es una empresa imposible.

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