Вы находитесь на странице: 1из 3

Cómo usar un densímetro

El densímetro, invento atribuido a Hipátia de Alejandría, es un instrumento


que permite conocer la densidad relativa de líquidos sin necesidad de
medir su masa y su volumen.

Formado por un bulbo que contiene el peso en su extremo y un vástago


con la escala graduada, flota libremente en posición vertical cuando se
introduce en un líquido cuya densidad esté en su rango de medida. Esta
es la primera consideración importante: debemos usar un densímetro
adecuado a la densidad del líquido, si es poco denso se hundirá por
completo y si es demasiado denso flotará fuera de escala.
La referencia más importante es la densidad del agua destilada (1.0
g/cm3); con esta referencia básica tendremos líquidos con densidades
inferiores (alcohol, gasolina…) y líquidos con densidades superiores
(agua con solutos como sales o azúcares). Los densímetros pueden
abarcar rangos amplios con precisión menor para situaciones de
densidad desconocida (densímetros de búsqueda) o tener su escala
graduada para procesos y líquidos de densidades conocidas que
queremos controlar.
Usando un densímetro
Los densímetros de inmersión necesitan una muestra de líquido
suficiente para poder sumergir el densímetro, de tal manera que pueda
flotar libremente sin tocar ni el fondo del recipiente ni las paredes.
Normalmente se utiliza una probeta de tamaño adecuado y de material
transparente para facilitar la lectura. Al añadir el líquido a la probeta
debemos tener en cuenta el volumen que desplazará el densímetro al
sumergirse para evitar que desborde.
La temperatura del líquido es un factor a tener muy en cuenta porque los
densímetros están calibrados a temperaturas determinadas (15ºC ó
20ºC) y es a esa temperatura donde proporcionan la medida más
precisa. Si realizamos la medida a una temperatura diferente a la de
calibración deberemos corregir el dato con las tablas apropiadas.
1. Introducir la muestra a ensayar en la probeta
2. Agitar con una varilla para homogeneizar densidad y temperatura
3. Coger el densímetro limpio ¡por encima de la escala!
4. Introducir el densímetro en el líquido con suavidad, si lo soltamos muy
rápido puede hundirse y romper en el fondo.
5. Dejar que el densímetro se equilibre sin tocar las paredes de la probeta.
6. Hacer la lectura en la escala del densímetro (en la base del menisco)
7. Comprobar la temperatura y corregir si es diferente a la de calibración.

Escalas
La escala de un densímetro puede estar graduada en valores de
densidad (g/cm3, kg/m3) y también en escalas especiales adaptadas a
procesos y/o líquidos concretos como Baumé, Gay-Lussac o Brix.
Cuando presentan estas escalas, los densímetros suelen tener nombres
específicos como aerómetros, alcohómetros, sacarímetros.
La densidad de los líquidos depende de la temperatura, por esta razón
los densímetros tienen marcada la temperatura a la que han sido
graduados. Las medidas realizadas a temperatura diferente deben
corregirse.

Escala estándar
Unidades de densidad (g/cm3, kg/m3), temperatura de referencia habitual
de 20ºC y con diferentes rangos y divisiones de escala. Fabricados y
graduados para densidades menores y mayores que la del agua y
múltiples aplicaciones.
Escala Baumé
Unidades en grados Baumé (ºB ó ºBe). El agua destilada tiene 0ºB y la
escala puede estar graduada para líquidos más densos que el agua o
menos densos que el agua. Entre los graduados para líquidos más
densos tenemos los pesa ácidos, pesa sales, pesa jarabes, pesa leches…; con
diferentes escalas desde 0ºB hasta los 70ºB (ácidos concentrados). Entre
los menos densos tenemos por ejemplo los pesa éteres.
Como esta escala proporciona grados de concentración y no valores de
densidad, si queremos conocer la densidad debemos hacer la conversión
siguiente:
Para líquidos más densos que el agua: d=145/(145-ºB)

Para líquidos menos densos que el agua: d=140/(130+ºB)

Escala Brix
Unidades en grados Brix (ºBx). Un grado Brix corresponde a una
disolución de 1 gramo de sacarosa en 100 gramos de solución (1% en
peso). Por utilizarse habitualmente para medir el contenido de azúcar en
zumos y jugos azucarados también se les llama sacarómetros.
Escala Gay-Lussac
Es una escala volumétrica que mide el contenido de alcohol como un
porcentaje en volumen. A cada unidad de porcentaje le corresponde un
grado de graduación alcohólica, por ejemplo un vino de 13º tiene un 13%
de alcohol (de cada 100 mL, 13 ml son alcohol). Por este uso también se
les llama alcohómetros. En algunos modelos se incluye una segunda
escala (grados Cartier), que tiene una calibración diferente (0 para el
agua destilada y 44 para el 100% de alcohol).
Como aplicaciones típicas de los densímetros tenemos el control de los
procesos de fermentación de líquidos azucarados (mostos, zumos…). Un
mosto o zumo tiene una densidad superior a la del agua, a medida que
progresa la fermentación la densidad disminuye. Los azucares
desaparecen del líquido que fermenta convirtiéndose en alcohol, que es
menos denso que el agua. Las medidas de densidad nos permiten
conocer el contenido de azucares inicial, durante el proceso y finalmente
el contenido de alcohol en vinos o cervezas.

Вам также может понравиться