Capitulo 20. La ópera y la música vocal al inicio del periodo clásico.

Contexto Histórico

Muchos definen el inicio del periodo clásico a mediados del siglo XVIII donde las
revoluciones Francesa y Norteamericana provocaron un cambio político en Europa
y América. El movimiento intelectual que fue la principal causa del cambio en el
ámbito cultural, artístico y científico fue la ilustración. El cambio del pensamiento
político y social fue radical, ya que se vio enfocado al uso de la razón y la
observación en busca de la resolución de problemáticas sociales y políticas a través
de la experiencia además de aplicarse al estudio de las emociones. Todo lo
mencionado provocó que el hombre se enfocara en la moral y el individuo como tal
y por ende la iglesia se vio afectada en el poder político que ejercía, además de que
el Estado era visto como una institución que tiene como finalidad mejorar la
condición humana. En este periodo se buscaba cada vez más la igualdad social y
la educación universal. Gracias a esto, las actividades y recursos de las que gozaba
la clase alta eran promovidas a los sectores bajos de la población tales como la
música y la medicina. La filosofía, la ciencia, la literatura y las artes eran dirigidas
en mayor medida a un público universal.

Características musicales

En esta época, los músicos dependían cada vez más del apoyo del público. Los
conciertos dirigidos al pueblo en general empezaron a ser más comunes, por ende,
la música que se componía cambió un poco su lenguaje y empezó a ser más simple,
con la finalidad de que fuera entendible y que todo aquel que la escuchara pudiera
disfrutar de ella. Gracias a esto, los grupos de músicos aficionados se vuelven más
comunes y los editores musicales obtienen un nuevo público al cual vender
versiones simples de piezas musicales para su fácil interpretación y ejecución.
Las cualidades del estilo clásico son el uso de la simplicidad, el equilibrio, la
perfección formal, la diversidad dentro de la unidad, los contrastes expresivos, y la
carencia del uso de ornamentos excesivos, complejidad contrapuntística y melodía
prolongada.

De los estilos de la época clásica los principales son:

 Estilo galante: Cantable y homofónico, característico de gestos cortos y

repetitivos, organizado en frases de 2, 4 ó 6 compases, con un acompañamiento
ligero de armonía simple, con cadencias frecuentes las cuales definían el término
de cada frase.
 Estilo empfindsamer: Se caracteriza por el uso de armonía con giros
sorprendentes, el cromatismo, ritmos nerviosos y una melodía rapsódica, libre y
cercana al discurso.

Los rasgos del estilo clásico se originan en la imitación de la ópera. Los recursos
expresivos y de contraste en la obra eran una representación de las emociones
humanas. Estos se emplearon tanto en la ópera seria como cómica.

Opera cómica:

Se caracteriza por la variedad de estilos nacionales, puesto que era dirigida al

público universal, y eran escritas en el idioma local, además de ser influenciadas
por las tradiciones de cada lugar. La música resaltaba las expresiones
idiomáticas.

Existen dos tipos principales de ópera cómica:

 Ópera Buffa: obra de grandes dimensiones, con 6 o más personajes que

se cantaba por entero, en donde el personaje principal era de carácter
serio quien se veía envuelto en intrigas amorosas y situaciones que
caricaturizaban a la sociedad.
 Intermezzo: se representaba en 2 ó 3 secciones entre los actos de una
ópera u obra teatral seria. Los argumentos solían presentar dos o más
 personas en situaciones cómicas, mientras la acción transcurría e una
alternancia de recitativos y arias.

Ópera seria

Obra en la cual se trataban asuntos serios sin escenas ni personajes cómicos.

Se usa la alternancia de Arias y Recitativos entre los 3 actos para ya sea

expresar sentimientos de los acontecimientos o describirlos mediante
monólogos respectivamente.

Cada nación tuvo su versión de ópera cómica, por ejemplo: Francia con la opéra
comique, Inglaterra con ballad opera, y Alemania y Austria con el Signspiel.

La ópera seria a diferencia de la cómica, no diferenciaba en estilos o nacionalidad.

En cambio, a través de la reforma de la ópera impulsado por la filosofía de la
ilustración, buscó unificar los estilos nacionales y mantener un diseño más flexible,
más expresivo, y más natural (reducción de uso de ornamentos). Se reintrodujeron
los coros y la orquesta ganó más importancia. Uno de los mayores exponentes que
dio uso a la reforma fue C.W. Gluck.

En la música profana, la canción fue el “género” predominante, del cual el Lied

(canción alemana) se volvió muy importante. Las cualidades de este estilo eran el
uso de un acompañamiento sencillo, el uso de la guitarra o el teclado se volvieron
los instrumentos más recurrentes, y una melodía simple y expresiva.

Los nuevos estilos se inspiraron en la música vocal, creando un nuevo concepto de

la melodía y la forma. El anhelo de alcanzar y entretener a un público diverso
condujo a la simplificación de los medios y a un esfuerzo por una expresión más
efectiva y naturalista.