Las buenas costumbres

Marco Antonio Maximiliano Acuña Cárcamo

Curso de negociación y ética profesional
Profesor Claudio Pavéz
 Índice
Introducción……………………………………………..….…….03
Definición de buenas costumbres …….……………………….03
Qué son las buenas costumbres ………………………………04
Buenas costumbres y el código penal …………...…………….06
Las buenas costumbres como fuente del derecho penal ….…07
Opinión personal …………………………………………..…….07
Bibliografía ……………………………………………………….08

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 Introducción

El presente trabajo tiene por objetivo explicar en que consiste

la expresión “buenas costumbres”, siendo necesario hacer la relación
entre la moral y la ética, ya que comparten una esencia similar.
El concepto de buenas costumbres se moldea fuertemente por la
sociedad, de hecho difícilmente podríamos aplicar el termino de
buenas costumbres a alguien que vive completamente aislado, ya
que nuestro propio juicio se ve influenciado por lo que entendemos
por tal. Otro ejemplo, si alguien extraño a una determinada cultura
presta observancia a sus actividades podría considerar que tales
prácticas son completamente inmorales y/o reprochables.
También será necesario tratar el tema respecto a como lo aborda
nuestro ordenamiento jurídico, pero en particular el Código Penal
analizando ciertos tipos penales de una forma paralela a las
costumbres del día de hoy, resultando a primera impresión que tales
normas no tienen mayor cabida al contexto social actual, pero que
surgieron en su debido momento como una reacción a determinadas
conductas. Y que junto a ello la consideración a si la costumbre forma
o no parte de las fuentes del Derecho Penal.

Definición de buenas costumbres

Es menester comenzar por lo que se entiende por costumbre.
Según la Real Academia de la Lengua Española es entendida en su
primera acepción como “manera habitual de actuar o comportarse”,
y en segundo lugar “práctica tradicional de una colectividad o de un
lugar”. Junto a ello es imprescindible hacer una relación con la

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palabra griega “ethos” y la latina “mores” que tratan el mismo
concepto de costumbre, pero de la primera origina la palabra ética,
esta como parte de la filosofía es una ciencia, que estudia el
comportamiento humano, pero también es una forma de actuar del
se humano, y esa forma proviene de los valores que se tenga, de tal
manera que la ética es interna, es propia de cada persona. Los
valores se originan en la familia, educación, en el compartir social y
en los instintos.
De “mores” deriva la palabra moral, corresponde a la opción que
tienen las personas para determinar u opinar que es lo bueno y lo
malo. Acto seguido dicta normas de conducta que no son leyes
penales aún, en que todos son partidarios de una u otra posición. Si
alguien por ejemplo rompe esas normas morales es objeto de la
presión moral de la comunidad. La moral es el conjunto de la
sociedad a diferencia de la ética.

Qué son las buenas costumbres

Conforme al párrafo anterior, se puede advertir que las buenas
costumbres son maneras de comportamientos propios de las
personas inmersas en una vida en sociedad determinada. Pero
también sirven para diferenciarse de otro conjunto de personas,
formando de esta manera una especie de identidad ciudadana
determinada que se encuentra en una época y lugar determinada. Y
cuando lo anterior perdura y es algo característico llegamos al
Folklore, entendiendo por tal según la RAE como el “Conjunto de
costumbres, creencias, artesanías, canciones, y otras cosas de
carácter tradicional y popular”.

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 Ahora bien, una de las cosas importantes de lo que se entiende
por buenas costumbres, es que sirve como un marco regulador de la
conducta, cuyo objeto es el respeto mutuo entre las personas para
que así cada uno se pueda desarrollar y cumplir su rol en la sociedad
de una manera pacífica. Y para este cometido el ordenamiento
jurídico extrae y entiende que comportamientos son reprochables y
cuales no, manifestándose posteriormente en la ley.

Las buenas costumbres y el código penal

La legislación Chilena recoge la frase de buenas costumbres
plasmándola en varios códigos, pero en esta oportunidad es
menester hacer énfasis en el código penal que comenzó a regir en el
año 1875. Y es aquí donde esta lo interesante, evidentemente lo que
se entendía por buenas costumbres en esa época es muy distinto a
lo de hoy. El articulo 373 que señala “Los que de cualquier modo
ofendieren el pudor o las buenas costumbres con hechos de grave
escándalo o trascendencia (…) “ La ley no indica en ninguna parte
qué es lo que se entiende por tal, siendo un concepto jurídico
indeterminado y en consecuencia quedando a una interpretación muy
amplia, lo que a mi juicio quiebra en cierto sentido el principio nullum
crimen nulla poena sine lege. Lo que nos daría mayor certeza es
otorgarle un carácter taxativo por medio de una enumeración al
mismo artículo, o bien proceder a su derogación, ya que claramente
no se ajusta al dinamismo que tiene la sociedad. En este sentido, es
dable mencionar que el proyecto de ley del 2 de septiembre del año
2008 que derogaba el articulo 373 del código penal mencionaba a
varios países que derogaron o se encuentran en vías a suprimir las
penas contra la moral o que digan relación con las buenas
costumbres, como es el caso de Alemania por ejemplo. Junto a ello

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podemos encontrar varios términos que se encuentran en desuso
como por ejemplo la agravante del hurto cometido contra bienes del
“amo” señalado en el articulo 447 numeral primero “1° Si el hurto se
cometiere por dependiente, criado o sirviente asalariado, bien sea en
la casa en que sirve o bien en aquella a que lo hubiere llevado su
amo o patrón” otro ejemplo es el no tocar campanas para iniciar
alzamientos del pueblo, el artículo 123 del Código dice: “Los que
tocaren o mandaren tocar campanas u otro instrumento cualquiera
para excitar al pueblo al alzamiento (…)”. También encontramos la
figura de batirse a duelo en el articulo 404 del mismo código “La
provocación a duelo será castigada con reclusión menor en su grado
mínimo”. Sin duda era una práctica recurrente en distintas partes del
mundo y que lo sanciona nuestro código penal, pero que al día de
hoy difícilmente (pero no imposible) tal hazaña se lleve a cabo, dado
que en estos días se solucionan los conflictos de una manera más
civilizada, pero al fin y al cabo como sabemos, las leyes no se
derogan por desuso sino que por medio de un proceso similar a como
fueron creadas.

La costumbre como fuente del derecho penal

Respecto a la costumbre también es necesario hacer mención
si es que esta puede ser considerada como fuente de la ley penal. Si
bien es cierto que puede ser reconocida como tal en otras ramas del
derecho siempre que la ley se remita a ella, no es así en el caso del
derecho penal, ya que esencialmente para todos los efectos no hay
mas fuente que la ley, de este modo se refuerza el principio de
legalidad, recordando por tal que no hay delito ni pena sin ley previa.

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Sin embargo, al respecto hay una postura que señalan que la
costumbre permite o ayuda a interpretar. Ellos entienden que la ley
debe ser aplicable a la realidad social actual y que no pueden haber
leyes antiguas cuyo fundamento valórico es distinto al actual, y que
los cambios se manifiestan en las costumbres de la sociedad. Por lo
tanto al interpretarse y aplicase la norma debe entenderse que se
hace conforme a los conceptos actuales. Señalan como ejemplo al
que con escándalo quebranta el pudor, siendo necesario distinguir
entre el pudor al contexto que entro en vigencia la norma y la realidad
actual. De todas maneras la interpretación que se realice a estos
preceptos podremos entenderlos a cabalidad leyendo la
correspondiente sentencia del juez donde plasmara el razonamiento
lógico con su fundamentación respectiva de la ley. Sin perjuicio de lo
anterior Etcheberry señala que “no puede desconocerse, sin
embargo, que la costumbre social o jurídica influye en la vigencia o
en la modalidad de aplicación del derecho”.

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Opinión personal

Queda de manifiesto los constantes cambios que sufren las

buenas costumbres, y esta dinámica es producida por una serie de
factores como lo es por ejemplo la globalización, la inmigración,
ideologías que se apoderan fuertemente en el ámbito político, como
lo fue la aprobación de la ley de aborto, lo más probable es que con
el paso del tiempo se vea como una práctica más naturalizada,
situación que hace un par de años anteriores seria tema innecesario
de discusión. Otro ejemplo, en el año 2017 en Arabia Saudita, se les
otorgo a las mujeres el derecho a algo tan simple como lo es
conducir, acto que dentro de sus costumbres tenían lo tenían
estrictamente prohibido (junto con muchas otras), y ahora según lo
señalado en la prensa pueden conducir motocicletas. Estas
libertades entregadas (junto con muchas otras espero), con el paso
del tiempo se irán homogenizando dentro de sus costumbre y al paso
del tiempo será algo completamente natural. Hay que comprender
que las costumbres cambian de una época a otra, de este modo lo
que al día de hoy se puede considerar inmoral, mañana podía no ser
tal. Otro ejemplo es algo tan usual como el divorcio, tiempo atrás
sufría un reproche considerable, la valoración que poseía la
institución del matrimonio se ha visto disminuida con el paso del
tiempo.
Y si bien es cierto que los tipos penales surgieron como una
reacción a lo que se vivía en una sociedad y época determinada, no
es menos cierto en mi opinión que el derecho se debe ajustar a las
necesidades y al contexto actual, para que no se aplique de umanera
inexacta y quede en cierto modo a la libre interpretación de un
tercero.

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 Bibliografía

https://www.bcn.cl

http://www.rae.es

Informe de la comisión de constitución, legislación y justicia recaidó

en el proyecto de ley que deroga el artículo 373 del código penal.
Boletín n° 5565-07

Código Penal Chileno

Derecho Penal parte general Tomo I Etcheberry