Вы находитесь на странице: 1из 1

Nuestro gozo, oraciones y agradecimiento a Dios no debieran fluctuar con podemos sentirnos agradecidos a Dios por su presencia y por

por lo bueno
nuestras circunstancias o estados de ánimo. Obedecer estos tres que puede darnos a través del sufrimiento.
mandamientos –

estad siempre gozosos,

orad sin cesar y


18. en todo—aun en lo que parezca adverso; porque en realidad nada lo
dad gracias en todo- es (véase Rom 8:28; Eph 5:20). Véase el ejemplo de Cristo (Mat 15:36;
Mat 26:27; Luk 10:21; Joh 11:41). ésta—que “nos gocemos siempre,
generalmente va contra nuestra inclinación natural. Cuando hacemos una
oremos sin cesar, y demos gracias en todo”, “es la voluntad de Dios en
decisión consciente para hacer lo que Dios dice, empezamos a ver a la
Cristo Jesús (como el Mediador y Revelador de aquella voluntad,
gente desde una nueva perspectiva. Cuando hacemos la voluntad de Dios,
observada por los que están en Cristo por fe, véase Phi 3:14) con
descubrimos que es fácil estar gozoso y ser agradecido.
vosotros”. La voluntad de Dios es la ley del creyente. Lachmann
correctamente lee comas al fin de cada uno de los tres preceptos (vv. 16,
17, 18), haciendo que “ésta” se refiera a los tres.
5.17 No podemos pasar todo el tiempo sobre nuestras rodillas, pero es
posible asumir una actitud de oración todo el tiempo. Esta actitud se
construye sobre el reconocimiento de nuestra dependencia de Dios,
tomando en cuenta que está con nosotros y con la determinación de
obedecerle en todo. Luego hallaremos que es natural orar con frecuencia,
espontaneamente, oraciones cortas. Una actitud de oración no debe
sustituir al tiempo dedicado a la oración en sí, sino que debiera ser una
consecuencia del mismo.

5.18 Pablo no enseña que debemos dar gracias a Dios por cada cosa que
nos sucede sino en todo. Lo malo no viene de Dios, por lo tanto, no
debiéramos agradecerle por lo malo. Pero cuando lo malo nos ataca,

Вам также может понравиться