Академический Документы
Профессиональный Документы
Культура Документы
En efecto, en la actualidad existe una variada gama de títulos valores que no son
"necesarios" en los términos pretendidos por la ley y la doctrina, para ejercitar los
derechos consignados en ellos. Un claro ejemplo de ésta situación, lo constituyen
los CETES, que son títulos valores que de acuerdo con el decreto de su creación
deben permanecer en todo tiempo depositados en el Banco de México, por lo que
en realidad tales documentos no son "necesarios" para que sus titulares puedan
ejercitar los derechos consignados en ellos.
Los títulos valores son cosas mercantiles, cuya emisión, expedición, endoso, aval
o aceptación, y las demás operaciones que en ellos se consignan, son actos de
comercio de los calificados como absolutamente mercantiles, es decir, que
siempre se regirán por la legislación comercial las relaciones jurídicas que en su
virtud se entablen (art. 1º LGTOC).
12
a las disposiciones del Código Civil Federal, aplicable en toda la República en
materia federal, como lo es la mercantil (art. 2º LGTOC).
1.3.- LA DENOMINACIÓN
Una buena parte de la doctrina, y la ley misma, llama a los documentos objeto de
nuestro estudio "títulos de crédito". Nosotros consideramos que es más propio
denominarlos "títulos valores."
En efecto, el término "crédito", puede ser apreciado desde dos puntos de vista,
fundamentalmente, y así, se afirma que etimológicamente (del latín créditum),
significa "confianza". Dar crédito a una persona se traduce así en tener confianza
en que la conducta esperada habrá de producirse oportuna y espontáneamente.
Desde el punto de vista jurídico, la doctrina es unánime al sostener que consiste
en la transferencia de bienes que se hace en un momento dado por una persona
a otra, para ser devueltos a futuro, dentro del término señalado y generalmente
con el pago de un interés 2.
Ahora bien, no todos los títulos valores implican la existencia de un crédito como
elemento fundamental, como en los casos de los cheques o de las acciones de
sociedades mercantiles, por lo que no puede argumentarse validamente que sea
el crédito el común denominador de tales títulos. En cambio, sí es rasgo general a
los documentos en cuestión, la circunstancia de que todos ellos encierran un
valor, sea económico, corporativo o mixto, por lo que es en consecuencia más
afortunada la locución "títulos valores" para designar a éste concepto 3.
Otra parte de la doctrina se inclina por sostener como atingente la locución "Título
de Crédito" para referirse a los documentos de que tratamos, basándose
fundamentalmente en el argumento de la consagración legal del término,
situación que nos indica que sus conclusiones están fundadas en una
interpretación literal del texto de la Ley, que no es siempre la más conveniente
para desentrañar la naturaleza íntima de las instituciones jurídicas 4.
1.4.- CARACTERÍSTICAS
1.4.1.- LA INCORPORACIÓN
2
Cfr. Instituto de Investigaciones Jurídicas. UNAM. Diccionario Jurídico Mexicano. T. I. Pág. 772.
3
En el mismo sentido: Joaquín Garrigues, Joaquín Rodríguez Rodríguez, Roberto Mantilla Molina y Felipe
de J. Tena.
4
Esta segunda postura es adoptada por autores como el Dr. Raúl Cervantes Ahumada y Carlos Dávalos
Mejía.
13
El título valor es una cosa mercantil que lleva incorporado el derecho que
contiene, de manera que para reclamar el derecho es necesario poseer
materialmente el documento. Tal se desprende del articulado de la LGTOC, cuyo
artículo 17 establece que para ejercitar el derecho consignado en el título es
menester exhibirlo, en forma tal que, quien carece del documento, carece también
del derecho, toda vez que al no poder exhibirlo no puede ejercitar los derechos
que incorpora.
1.4.2.- LA LEGITIMACIÓN
"No basta poseer de cualquier modo un título de crédito para poder ejercitar el
derecho que representa. Quien exhibe el título no se ostenta por ello como titular
del derecho. Para que, invocando tal investidura, pueda ejercitar su derecho, es
preciso que haya adquirido el título con arreglo a la ley que norma su circulación,
ley que es diversa según se trate de títulos nominativos, de títulos a la orden o de
títulos al portador.6"
14
obligación pagando la prestación consignada en el título a quien aparezca
legitimado activamente.
Cuando el título fuere al portador bastará para tener la posesión del documento
para que su tenedor se considere legitimado, habida cuenta que, como veremos
en su oportunidad, la transmisión de éstos se realiza mediante la simple entrega
del título.
1.4.3.- LA AUTONOMIA
Algunos ejemplos nos permitirán comprender con mayor claridad éste elemento
del título valor:
15
incapacidad, la obligación de C es plenamente válida, pues la misma es
autónoma, independiente de la de A.
1.4.4.- LA LITERALIDAD
Desde otro punto de vista la ley destaca la importancia de éste carácter de los
títulos al establecer que tales documentos sólo producirán los efectos previstos
por la ley cuando contengan las menciones y requisitos establecidos por la misma
y que ésta no presuma expresamente, menciones y requisitos que podrán ser
satisfechos por quien en su oportunidad debió llenarlos, hasta antes de la
presentación del título para su aceptación o su pago. (arts. 14 y 15 LGTOC).
Recordemos que el articulo 1 de la LGTOC enseña que los títulos valores son
cosas mercantiles. Su emisión, expedición, endoso, aval o aceptación y demás
operaciones que en ellos se consignen, son actos de comercio, y estos solo
producirán los efectos previstos por dicho ordenamiento cuando contengan las
7
Cervantes Ahumada, Raúl. Obra citada. Pág. 11.
8
Ibídem.
16
menciones y llenen los requisitos señalados por la ley y que esta no presuma
expresamente (art. 14)
Son elementos esenciales de los títulos valores, aquellos que permiten subsumir
el documento jurídico de que se trate, en una categoría jurídica concreta, de las
previstas por la ley. En ausencia de cualquiera de ellos, podrá hablarse de
cualquier documento, pero no de un titulo valor.
Así, a modo de ejemplo diremos que de los requisitos que señala la ley para la
letra de cambio, son esenciales los contenidos en las fracciones I, II, III, IV, VI y
VII del artículo 76 de la ley cartular, pues la ausencia de cualquiera de ellos da
lugar a que el documento respectivo no se considere como titulo valor. En
cambio, es elemento natural de dicho documento, el contenido en la fracción V
del mismo precepto, pues en caso de que el titulo no consignare el lugar y la
época de pago del importe del documento, cobran aplicación los artículos 77 y 79
del ordenamiento en cita, que suplen la omisión. En el pagare, encontramos que
son esenciales los requisitos previstos por las fracciones I, II, III, V y VI del
articulo 170 de la ley en comento, y natural el exigido por la fracción IV del mismo
numeral. En estos documentos podemos encontrar como cláusula accidental, la
estipulación de intereses ordinarios cuenta habida de que la misma no es
esencial para la existencia del titulo y su ausencia no la suple la ley.
17
La deficiente redacción del precepto, da lugar a dos interrogantes de grave
trascendencia:
(Jurisprudencia 221. Sexta Época. Pag. 710. Vol. 3a. Sala. Cuarta Parte. Apéndice
al Semanario Judicial de la Federación 1917-1975).
18
del artículo 6o. transitorio de la reforma de tal fecha, este tribunal suspende en un
aspecto dicha jurisprudencia para sentar en su lugar la que exprese, que una letra de
cambio en blanco, es un acto jurídico inexistente, porque consentimiento y objeto, son
elementos de los que supedita la obligación crediticia y que tal excepción personal sólo
puede invocarse cuando el título de crédito no ha circulado o habiéndolo hecho quien
ejercita la acción es el propio beneficiario. Cosa distinta es, que el documento haya
circulado y que quien ejercita la acción sea un endosatario al cual no puede oponérsele
tal excepción. Razonar en contrario, implicaría que el Poder Judicial Federal soslaye y
permita que el agio nacional o internacional unilateralmente y a su antojo determine el
objeto de la obligación, llenando con la cantidad que quisiere el concepto de suerte
principal e intereses, lo que es inadmisible en un estado de derecho que busca y
pretende la buena fe en las operaciones crediticias para que los deudores cumplan con
la obligación pactada, pero nunca el exigirles el cumplimiento de lo que no fue pactado.
Este principio, sin embargo debe sucumbir en aras de la autonomía de los títulos de
crédito cuando se ha trasmitido por endoso a un tercero que desconocía la irregular
conducta del beneficiario endosante, pues en este caso la ley que da a los títulos de
crédito el carácter de autónomos desvinculados de su causa, impide que el aceptante
oponga excepciones personales al endosatario”.
(Primer Tribunal Colegiado en Materias Civil y de Trabajo del Segundo Circuito. Novena
Época. Apéndice 2000. Tomo IV, Civil, P.R. TCC. Página: 812.)
19
En este orden de ideas, tenemos que la tesis jurisprudencial precitada no
resuelve el problema de fondo que se plantea, y que se presta a la comisión de
abusos que desafortunadamente son practica cotidiana en esta materia.
20
establecido que es el tenedor del titulo quien esta legitimado para llenar las
omisiones presentes en el titulo. Al respecto, debemos advertir que ni el Supremo
Colegio Judicial, ni el jurisconsulto mencionado, aducen razones que apoyen esa
conclusión y, a nuestro juicio, siguiendo a la diversa corriente doctrinaria,
corresponde solo al creador del titulo llenar las menciones o requisitos de que
carezca, en atención a lo pactado merced al negocio subyacente que dio lugar a
la emisión del documento (pues solo a aquel corresponde determinar la extensión
y limites de la obligación que asume), convención que puede comprender, desde
luego, la autorización del suscriptor para que sea el tenedor quien satisfaga los
requisitos omitidos. Luego, no es exacto que sea dicho tenedor quien, por si y
ante si pueda satisfacer los elementos no esenciales del documento en estudio.
Por consiguiente, el precepto en análisis alude al suscriptor del titulo, cuando
señala que los requisitos y menciones omitidos podrán ser satisfechos por quien
en su oportunidad debió llenarlos, y la tesis jurisprudencial transcrita, que legitima
al tenedor del documento para llenar los huecos (no esenciales según se indico),
debe entenderse en el sentido de que aquel adquiere tal derecho solo en el caso
de que hubiere sido autorizado para ello expresamente por el creador del titulo, y
siempre que lo haga conforme a lo convenido en el negocio que dio lugar a su
emisión.
Conforme al artículo 3º de la LGTOC, todos los que tengan capacidad legal para
contratar pueden suscribir títulos valores. Sabemos que la capacidad es la regla y
que sólo de manera excepcional la ley declara inhábiles a ciertas personas para
la realización de actos jurídicos.
21
invalidan las obligaciones derivadas del título en contra de las demás personas
que lo han firmado (art. 11 LGTOC) y esto es así en razón del principio de
autonomía que ya estudiamos, en cuya virtud, cada signante adquiere derechos y
obligaciones propios e independientes de los que los demás suscriptores
pudieran tener. Así, por ejemplo, si un título ha sido suscrito por cinco personas y
una de ellas carece de capacidad, aquel surte todos sus efectos contra quienes si
fueron capaces al suscribirlo, pero no contra el inhábil cuya obligación está
afectada de nulidad precisamente por su incapacidad.
Asimismo, cuando alguna persona haya dado lugar, con actos positivos o con
omisiones graves, a que se crea, conforme a los usos del comercio, que un
tercero está facultado para suscribir en su nombre títulos valores, no podrá
negarse a cumplir las obligaciones consignadas en aquellos ante tenedores que
adquirieron el título de buena fé, es decir, ignorando los vicios en la
representación.
22
LGTOC). Esta norma debe interpretarse restrictivamente, es decir, limitada
precisamente a las letras de cambio.
a) La letra de cambio;
b) El pagaré;
c) El cheque;
d) Las obligaciones y los cupones adheridos a ellas;
e) Los certificados de participación;
f) El certificado de depósito y el bono de prenda.
Otras leyes y decretos han creado títulos valores distintos a los anteriores, como
son los CETES, los certificados de depósito bancario de dinero, el papel
comercial o las aceptaciones bancarias. En tal virtud, la enumeración propuesta
no tiende a ser exhaustiva, sino meramente enunciativa a partir de los títulos de
mayor utilización.
Algunos autores, cuyo criterio compartimos, llaman “nominados” a los títulos que
tienen un nombre propio, como la letra de cambio, y típicos, a los que están
regulados por la ley. Por tanto, serían nominados los que tienen nombre, y típicos
los que están reglamentados por la legislación.
23
CUANDO CONTENGAN LAS MENCIONES Y LLENEN LOS REQUISITOS
SEÑALADOS POR LA LEY Y QUE ÉSTA NO PRESUMA EXPRESAMENTE.
24
de la causa por la que fué creado y surte sus efectos en los términos de su
literalidad. Ejemplo de los segundos son las acciones de una Sociedad Anónima,
cuya eficacia está subordinada al contenido de la escritura social, que influye
sobre la vida misma del título.
Desde el punto de vista del título, estos pueden ser de crédito u obligacionales,
personales o corporativos y representativos o reales.
25
Son títulos seriales aquellos que necesariamente han de emitirse en masa, en
una serie o conjunto de títulos para poder cumplir sus fines. Tal es el caso de las
acciones y de las obligaciones, entre otros.
Los primeros son aquellos que generan a sus tenedores un rendimiento cierto y
normalmente previsible, como en los casos de los pagarés con interés liquidable
al vencimiento. Los títulos especulativos no dan esa seguridad de obtener
rendimientos, y su titular puede ganar o perder en su inversión, como en los
casos de las acciones cuyo valor en el mercado puede subir o bajar, originando
ganancias o pérdidas a su tenedor, según el comportamiento de mercado
accionario y el mayor o menor éxito económico de la empresa emisora. En tales
casos, la pérdida o utilidad no es previsible con certeza, y solo puede especularse
sobre tales cuestiones.
Son títulos nominativos aquellos que, estando expedidos en favor de una persona
cuyo nombre se consigna en el texto mismo del documento, su titular se
encuentra inscrito en un registro especial que al efecto lleva la persona que lo
creó, requiriéndose para su transmisión, del endoso del documento, su entrega
material al adquiriente y el registro del traspaso ante la persona que emitió el
documento. Tal es el caso de las acciones, cuya transmisión implica la necesidad
de inscribirla en el registro de la sociedad emisora para que ésta reconozca a su
tenedor como titular del documento. (v. arts. 23, 24 y 26 LGTOC y 129 LSM) 11
26
sucesivo transmitirse por endoso sino únicamente en la forma y con los efectos de
una cesión ordinaria, con las consecuencias que implican las diferencias entre
ambas figuras, y que más adelante se estudian. (art. 25 LTGOC)
Los títulos valor que contengan la obligación de pagar una cantidad de dinero,
sólo pueden expedirse al portador cuando la ley lo autorice expresamente. (art. 72
LGTOC)
1.9.1.- EL ENDOSO
Los títulos valores pueden ser transmitidos conforme a las reglas generales del
Derecho Civil o a las especiales del Derecho Mercantil.
Que el endoso sea una cláusula escrita, significa que no puede hacerse en forma
verbal; que sea una cláusula accesoria significa que no es necesario para la vida
del título, el cual puede existir con todos sus efectos jurídicos sin aquel, que sólo
se presentará cuando el título haya de circular. Que tal cláusula sea inseparable
del título significa que debe constar en el texto mismo del documento o en hoja
adherida a él, de manera que una transmisión hecha en documento separado del
título no puede tener la calidad de endoso. El acreedor cambiario o endosante no
es otra persona que el titular del documento que mediante el endoso pone a otra
(que será del nuevo acreedor cambiario o endosatario) en su lugar, con efectos
plenos, sin limitaciones, cuando el título es transferido en propiedad, y con
efectos limitados en los demás casos.
Además de constar en el título o en hoja adherida a él, el endoso debe llenar los
siguientes requisitos:
27
a) El nombre del endosatario, que es la persona que recibe el título valor
mediante el endoso. Si se omite éste requisito cualquier tenedor puede
llenar con su nombre o el de un tercero el endoso, o transmitir el título sin
llenar el endoso. (arts. 29 fr. I, 30 y 31 LGTOC)
En el primer caso el endoso debe ser hecho por persona capaz, y por las
personas morales firmarán sus representantes. En tales supuestos, debe
indicarse el carácter con el que se ostenta el representante (apoderado,
gerente, administrador, etc.), y expresarse la denominación o razón social
la persona moral endosante (Semanario Judicial de la Federación. 3a.
Sala. Séptima Época. Vol. 175-180. Cuarta Parte. Pag. 98).
Por cuanto a la firma rogada, una persona firma a ruego de otra, cuando
siendo capaz se halla en la imposibilidad fáctica de suscribir el documento,
como en los casos en que la persona que debe firmar no sabe escribir o
28
cuando sabiendo hacerlo se encuentra físicamente imposibilitada para ello,
sea por hallarse lesionada o por cualquier otra causa.
Ahora bien, sabemos que el que endosa un título valor, al firmarlo queda obligado
a responder de su pago en virtud del principio de la autonomía de los derechos y
obligaciones consignados en el documento, no obstante lo cual el endosante
puede librarse de esa obligación consignando en el endoso la CLÁUSULA "SIN
MI RESPONSABILIDAD" u otra equivalente que haga constar claramente su
voluntad de no obligarse en los términos del título de que se trate. (art. 34
LGTOC)
29
endosante y los obligados en el título, de manera que el endosatario en éste
evento es un mero representante del titular del documento.
El endoso con las cláusulas "en garantía" "en prenda" u otra equivalente, atribuye
al endosatario todos los derechos y obligaciones de un acreedor prendario
respecto del título endosado y los derechos a él inherentes, comprendiendo las
facultades que confiere el endoso en procuración. En ésta clase de endosos el
endosatario tiene un interés propio y autónomo sobre el título que representa para
él la garantía de que el endosante habrá de cumplir con la obligación en cuya
virtud se dió el título en prenda, por lo que los obligados en el documento no
pueden oponerle las excepciones que tuvieren contra el endosante.
Previsto por la Ley del Mercado de Valores (art. 67), el endoso en administración
tiene como única finalidad justificar la tenencia de los valores y el ejercicio de las
funciones atribuidas a la institución para el depósito de valores.
Esta clase de endoso sólo puede hacerse en los títulos que se depositen en
alguna institución para el depósito de valores, títulos que normalmente se cotizan
en bolsa, como acciones, obligaciones, petrobonos, etc.
Veamos así que los títulos que se cotizan en bolsa de valores deben ser
depositados en la institución y endosados a ésta en administración, y desde ese
instante desaparece, aunque sea en forma temporal, la característica de la
INCORPORACIÓN, y tomando la de la LEGITIMACIÓN un sentido totalmente
distinto al estudiado anteriormente. Es preciso pues, tener presente que los títulos
valores cotizados en bolsa no participan de los elementos comunes a la
generalidad de los documentos cambiarios.
30
En principio, el endoso debe llenar todos los requisitos mencionados por el
artículo 29 de la LGTOC. Cuando falta alguno de ellos nos encontramos ante un
endoso incompleto; cuando solo aparece la firma del endosante estaremos en
presencia del endoso en blanco.
"Habrá cesión de derechos cuando el acreedor transfiere a otro los que tenga
contra su deudor." (art. 2029 C.C.)"
La cesión producirá efectos legales con respecto al deudor, desde que le sea
notificada ante dos testigos. El cedente solo responde de la legitimidad del
crédito y de la personalidad con que hizo la cesión (Arts. 390 y 391 C.Co).
31
habida cuenta que puede ser civil o comercial
atendiendo a las cirunstancias. Si la cesión se
efectúa sobre un título valor, será mercantil
por el objeto.
3.- Puede hacerse en un documento separado del 3.- Debe constar en el título o en hoja adherida a
titulo él.
5.- Es aplicable a cualquier derecho transmisible. 5.- Solo pueden endosarse los títulos valores.
6.- Para que puedan ejercitarse los derechos 6.- No es necesario informar el deudor sobre las
contra el deudor, es necesario notificarle la transmisiones que se efectúen por endoso.
cesión.
7.- Puede cederse parcialmente un derecho. 7.- El endoso no puede ser parcial (art. 31
LGTOC).
8.- Puede sujetarse a condición. 8.- Debe ser incondicional (art. 31 LGTOC).
9.- Si la cesión es gratuita, el cedente no será 9.- El endosante responde en todo caso de la
responsable para con el cesionario ni de la existencia del crédito y de la solvencia del
existencia de crédito ni de la solvencia del obligado principal de manera que si éste no
deudor. Si fuere onerosa responde sólo de la paga, deberá hacerlo el endosante.
existencia del crédito más no de la solvencia
del deudor.
10. Es un acto consensual, que se perfecciona 10.- Es un acto real que se perfecciona con la
con el consentimiento de las partes. entrega del título al endosatario.
Entendidas las diferencias que distinguen a ambas figuras, nos queda solamente
reiterar que el endoso en propiedad hecho en fecha posterior a la de vencimiento
del título surte efectos de cesión ordinaria (art. 37 LGTOC)
En tales casos, la firma del juez deberá ser legalizada. (art. 28 LGTOC)
32
responsable del mismo, puede transmitírselo al que hizo el pago por medio de
recibo en los términos apuntados, produciéndose dos efectos fundamentales:
a) El que paga, al recibir el título, puede hacerlo efectivo contra los signatarios
anteriores; y,
Sabemos que la regla es que las leyes mexicanas rigen a todas las personas que
se encuentren en la República, así como los actos o hechos ocurridos en su
territorio o jurisdicción y aquellos que se sometan a dichas leyes, salvo cuando
éstas prevean la aplicación de un derecho extranjero, y salvo además lo que al
respecto prevean los tratados y convenciones de que México sea parte. (art. 12
C.C.)
Colígese de lo anterior:
33
determinación el juez podrá allegarse la información necesaria del texto, vigencia,
sentido y alcance de dicho derecho, que se aplicará en lo sustantivo salvo
excepciones derivadas del derecho internacional o cuando artificiosamente se
pretendan evadir principios fundamentales del derecho mexicano y cuando las
disposiciones del derecho extranjero sean contrarias a principios o instituciones
fundamentales del orden público mexicano. (arts. 14 y 15 C.C.)
Tales criterios generales son confirmados expresamente por los artículos 252 al
254 de la LGTOC, cuyo tenor literal es el siguiente:
Ahora bien, el derecho extranjero está sujeto a que lo prueben las partes, de
conformidad con lo dispuesto por el artículo 1197 del Código de Comercio, el cual
no señala la forma idónea para tal efecto, por lo que, atendiendo a lo establecido
por el artículo 86 bis del Código Federal de Procedimientos Civiles, que podemos
utilizar como parámetro que nos permita obtener la conclusión buscada, podemos
afirmar que el derecho extranjero en éstos casos puede acreditarse mediante los
informes oficiales que sobre el particular rinda el Servicio Exterior Mexicano, el
que hará constar que el documento de que se trate fué emitido conforme a la ley
extranjera correspondiente, y que en el país donde se celebró el acto, dicho
documento tiene el carácter de título valor.
34
éstas y que son aplicables al caso. La comprobación de la existencia de la ley
extranjera debe hacerse no necesariamente mediante la exhibición del Código o
del ejemplar que la contenga, pues basta que se compruebe de un modo
auténtico el texto de la ley en que se apoya el derecho controvertido, siendo
incuestionable que tal comprobación se logra con el informe que sobre el
particular rinda la Secretaría de Relaciones Exteriores.
35
26. Indique tres títulos que no se encuentren regulados por dicha legislación.
27. Explique que son los títulos nominados y los llamados innominados.
28. Explique las razones por las que se estima que en México no existen los
títulos innominados.
29. Cuales son los títulos principales y accesorios? Ejemplifique.
30. Cuales son los títulos causales y los abstractos? Ejemplifique.
31. Cuales son los títulos de crédito, personales y los representativos?
Ejemplifique.
32. Cuales son los títulos singulares y cuales los seriales o expedidos en masa?
Ejemplifique.
33. Distinga entre los títulos de inversión y los de especulación.
34. Distinga entre los títulos públicos y los privados.
35. Explique que son y como se transmiten los títulos nominativos. Ejemplifique.
36. Explique que son y como se transmiten los títulos a la orden. Ejemplifique.
37. Explique que son y como se transmiten los títulos al portador. Ejemplifique.
38. Explique que es un título “no a la orden” o “no negociable”.
39. Enumere las formas en que los títulos valores pueden transmitirse.
40. Explique que es el endoso y cuales son los requisitos que exige la ley.
41. De tales requisitos, indique cuales son esenciales y cuales naturales.
42. Enumere las clases de endosos previstas por las leyes.
43. Explique que es un endoso en propiedad. Elabore un formato.
44. Explique que es un endoso en garantía. Elabore un formato.
45. Explique que es un endoso en procuración. Elabore un formato.
46. Explique que es y cual ley regula el endoso en administración, así como su
utilidad.
47. Explique que es un endoso en blanco o incompleto.
48. Explique la forma en que pueden cancelarse los endosos plasmados en un
título valor.
49. Explique que es la cesión ordinaria de títulos endosables, y cuales son las
formalidades que deben cumplirse para que sea valida y surta efectos.
50. Enumere las diferencias que encuentre entre el endoso y la cesión de
derechos.
51. Explique que es y como se formaliza la transmisión por recibo de un título
valor.
52. Explique cuales son los requisitos para la eficacia en México de un título valor
expedido en el extranjero, analizando las diversas hipótesis que pueden
presentarse (idioma, ley conforme a la cual se elaboró y lugar de pago)
53. Explique como se hace valer ante los tribunales, la acción de cobro de un
título valor emitido en el extranjero, en idioma extranjero y pagadero en
México.
36