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HISTORIA DE LA CIVILIZACIÓN
Reservorio de consignas y preguntas para exámenes
Las características del feudalismo. ¿Cuáles fueron las relaciones económicas que se crearon bajo
este sistema?
Las principales características del feudalismo como sistema social, económico y político.
Las características del Renacimiento. ¿Qué relación encuentra con el Humanismo? Mencione al
menos tres representantes de este período y sus aportes.
Las monarquías nacionales: los factores para que surgieran en las áreas que recibieron el nombre
de Francia, Inglaterra y España.
Las causas de la conformación de los imperios coloniales español y portugués, sus objetivos y
funcionamiento.
Relación del Mercantilismo con la formación del Estado, el absolutismo real y la economía de la
modernidad.
¿Cuáles fueron los principales eventos de la Revolución Francesa entre 1789 y 1799?
Las consecuencias de la Revolución Industrial en la vida urbana, clases sociales y vida familiar.
Las condiciones políticas, sociales y económicas del Antiguo Régimen previas a la Revolución
Francesa, y los orígenes del proceso revolucionario.
Las distintas fases de la Revolución Francesa (1789-1792; 1792-1794; 1794-1799; 1799-1815). Los
grupos y actores involucrados, alianzas y conflictos, instituciones políticas, aspectos sociales y
económicos.
- Las causas que condujeron a la Revolución Industrial del siglo XVIII en Inglaterra.
En Gran Bretañ a coincidieron varios factores o condiciones que produjeron la primera Revolución
industrial. Uno de ellos fue la revolución agri ́cola del siglo xviii. Los cambios en los métodos de
cultivo y en la reproducción de ganado que caracterizaron esta transformación agri ́cola llevaron a
un incremento significa- tivo en la producción de alimentos. Ahora, la agricultura britá- nica podi ́a
alimentar a más personas a un costo más bajo y con menos esfuerzo. A diferencia del resto de
Europa, en Inglaterra incluso las familias ordinarias no teni ́an que gastar la mayori ́a de sus ingresos
para comprar comida; esto les daba la posibilidad de adquirir bienes manufacturados. Al mismo
tiempo, el rápido crecimiento de la población en la segunda mitad del siglo xviii creó un fondo de
excedente de trabajo para las nuevas fábricas de la naciente industria británica. Los trabajadores
rurales de las industrias artesanales también resultaron ser una fuerza laboral en potencia para las
empresas manufactureras.
Una de estas ideologías fue el liberalismo, la cual debía mucho a la Ilustración del siglo xviii y a las
revoluciones estadunidense y francesa. Por otro lado, esta doctrina se volvió incluso más importante
a medida que la Revolución industrial avanzaba a pasos agigantados, ya que la clase media industrial
en desarrollo la adoptó, en su mayor parte, como propia. Hubo divergencia de opiniones entre
personas calificadas como liberales, pero todo comenzó con la creencia de que la gente debi ́a ser
tan libre de restricciones como fuera posible. Esta idea es fundamental tanto en el liberalismo
económico como en el poli ́tico.
LIBERALISMOECONÓ MICO
También llamado economi ́a clásica, el liberalismo económico teni ́a como dogma principal el
concepto de laissez-faire, la creencia de que el Estado no debi ́a interrumpir el desempeñ o natural
de los impulsos financieros, en especial la denominada ley de la oferta y la demanda. El gobierno
no debi ́a restringir la libertad económica del individuo y también debi ́a limitarse a sólo tres
funciones primarias: la defensa del pai ́s, la protección policiaca de sus ciudadanos, la construcción
y el mantenimiento de obras públicas demasiado costosas para emprenderlas desde la iniciativa
privada. Según los liberales, si a las personas se les concediera libertad económica, ésta traeri ́a, a la
postre, el máximo bien para la mayori ́a y contribuiri ́a al bienestar general de la sociedad.
El argumento contra la interferencia del gobierno en asuntos económicos fue extraordinariamente
enriquecido por Thomas Malthus (1766-1834). En su principal obra, Ensayo sobre el principio de la
población, Malthus argü i ́a que la población, si no se controla, aumenta en una proporción
geométrica mientras que el suministro de alimentos lo hace en una proporción aritmética mucho
más lenta. El resultado seri ́a una sobrepoblación severa y, por último, la inanición para la especie
humana. Para el pensador inglés, la naturaleza impone una mayor restricción y agrava los siguientes
problemas: “Las ocupaciones malsanas, el trabajo severo y la exposición a las diversas condiciones
climáticas, la pobreza extrema, la mala nutrición en los niñ os, las grandes ciudades, los excesos de
todo tipo, toda la serie de enfermedades comunes y epidémicas, las guerras, las plagas y la
hambruna”. Por lo tanto, la miseria y la pobreza seri ́an simplemente el resultado inevitable de las
leyes de la naturaleza, y ningún gobierno o individuo deberi ́a interferir en esta operación.
Las ideas de Malthus fueron desarrolladas aún más por David Ricardo (1772-1823). En sus Principios
de economiá politica, ́ es- critos en 1817, Ricardo desarrolló su famosa “ley de hierro de los
salarios”. De acuerdo con Malthus, Ricardo argumentaba que un incremento de la población
significa más trabajadores; a su vez, más trabajadores causan que los salarios caigan por debajo del
nivel de subsistencia. El resultado es la miseria y la inanición que reduce la población. En
consecuencia, el número de trabajadores disminuye y los salarios aumentan otra vez por encima de
los niveles de subsistencia, lo cual, a su vez, alienta a las personas a tener familias grandes y el ciclo
se repite. Según el economista británico, aumentar los salarios arbitrariamente seri ́a inútil ya que
esto, aunque ayudara un poco, sólo lograri ́a perpetuar este ci ́rculo vicioso.
LIBERALISMO POLI ́TICO
En el ámbito poli ́tico, los liberales llegaron a tener todo un conjunto de creencias comunes. La más
importante entre ellas fue la protección de las libertades civiles o los derechos básicos de todas las
personas, que inclui ́an igualdad ante la ley, libertad de reunión, de expresión, de prensa asi ́ como
ante un arresto injustificado. Todos estos derechos debi ́an quedar garantizados en un documento
escrito, como la Carta de Derechos en Estados Unidos o la Declaración de los derechos del hombre
y del ciudadano en Francia. Además de la tolerancia religiosa para todos, la mayori ́a de los liberales
abogaba por la separación de la Iglesia y el Estado. El derecho a una oposición paci ́fica contra el
gobierno dentro y fuera del parlamento y la elaboración de leyes por una asamblea representativa
(legislatura) elegida por votantes calificados constitui ́an otras dos demandas. Entonces, muchos
partidarios de esta tendencia crei ́an en una monarqui ́a o en un Estado constitucional con li ́mites
sobre los poderes del gobierno que previnieran el despotismo y en las constituciones escritas que
ayudari ́an a garantizar estos beneficios.
Muchos liberales también abogaron por la responsabilidad ministerial, un sistema en el que los
ministros del rey eran responsables ante la legislatura en lugar de ante el monarca, lo que otorgaba
a la rama del poder parlamentario un control sobre el poder del ejecutivo. Además, en la primera
mitad del siglo xix, crei ́an en un sufragio limitado. Aunque a toda la gente le correspondi ́a igualdad
de derechos civiles, no teni ́a equidad de derechos poli ́ticos. El derecho al voto y a ocupar cargos
estaba abierto sólo a hombres que reunieran ciertos requisitos de propiedad. Como filosofi ́a
poli ́tica, el liberalismo estaba atado a los hombres de clase media, en especial de la clase media
industrial, que favoreci ́an la extensión del derecho de elección de manera que pudieran compartir
el poder con las clases terratenientes. Éstas teni ́an pocos deseos de permitir que las clases bajas
participaran en el poder. Pero los liberales no eran demócratas.
Uno de los más prominentes defensores del liberalismo del siglo xix fue el filósofo inglés John Stuart
Mill (1806-1873). Sobre la libertad, su obra más famosa, publicada en 1859, se considera una
manifestación clásica acerca de la libertad del individuo (véase el recuadro en la página siguiente).
Mill defendi ́a una “absoluta libertad de opinión y sentimiento en todos los temas”, que necesitaba
ser protegida tanto de la censura del gobierno como de la tirani ́a de la mayori ́a.
Mill fue también un instrumento en la expansión del significado del liberalismo al convertirse en un
entusiasta defensor de los derechos de la mujer. Cuando su intento de incluir a las mujeres en el
proyecto de ley de reforma del voto de 1867 fracasó, el filósofo publicó un ensayo titulado Sobre el
sometimiento de las mujeres que habi ́a escrito antes con su esposa Harriet Taylor. En el ensayo
argumentaba que “la subordinación legal de un sexo a otro” era una equivocación. Las diferencias
entre las mujeres y los hombres, afirmaba, no se debi ́an a diferentes naturalezas sino a prácticas
sociales. Con una educación igual, las mujeres podi ́an lograr lo mismo que los hombres. Sobre el
sometimiento de las mujeres se convertiri ́a en una importante obra del movi- miento del siglo xix a
favor de los derechos de la mujer.
En la primera mitad del siglo xix, las lamentables condiciones de los barrios bajos, las minas y las
fábricas de la Revolución industrial dieron lugar a otra ideologi ́a orientada al cambio que se conoce
como socialismo. El término, con el tiempo, se asoció con el análisis marxista de la sociedad humana,
pero el socialismo temprano era en gran medida el producto de todos los teóricos poli ́ticos e
intelectuales que queri ́an introducir la igualdad en las condiciones de existencia del hombre y crei ́an
que la cooperación humana era superior a la competencia visible en el temprano capitalismo
industrial. Para los marxistas, tales ideas fueron sueños poco prácticos y calificaron
desdeñ osamente a los teóricos como socialistas utópicos. Desde entonces, el término se ha
mantenido hasta hoy.
Los socialistas utópicos estuvieron en contra de la propiedad privada y del espiritu ́ competitivo
del naciente capitalismo. Al eliminar esto y crear un nuevo sistema de organización social pensaban
que se podi ́a alcanzar un ambiente mejor para la especie humana. De esta manera propusieron una
variedad de formas para llevar a cabo esta tarea.
FOURIER Un grupo de los primeros socialistas buscaba crear asociaciones voluntarias que
demostrari ́an las ventajas de la vida cooperativa. Charles Fourier (1772-1838) propuso la formación
de pequeñ as comunidades modelo llamadas falansterios. Los falansterios eran cooperativas
autosuficientes, cada una de las cuales integrariá idealmente 1620 personas. Alojados en forma
comunal, los habitantes viviri ́an y trabajari ́an juntos para su mutuo beneficio. Las asignaciones de
trabajo se rotari ́an con frecuencia para aliviar a los obreros de tareas indeseables. Sin embargo,
Fourier fue incapaz de obtener apoyo financiero para su proyecto y su plan permaneció sin
comprobarse.
OWEN Roberto Owen (1771-1858), británico y fabricante de algodón, también crei ́a que los
humanos revelari ́an su verdadera bondad natural si vivieran en un ambiente cooperativo. En Nueva
Lanark, Escocia, logró transformar una miserable fábrica de la ciudad en una saludable comunidad
floreciente. Pero cuando intentó crear una sociedad cooperativa autosuficiente en New Harmony,
Indiana, Estados Unidos, durante la década de 1820, las peleas dentro del lugar destrozaron su
sueñ o. Una de las disci ́pulas de Owen, una mujer rica llamada Frances Wright, compró esclavos con
el fin de desarrollar una comunidad modelo en Nashoba, Tennessee. El modelo fracasó, pero Wright
continuó trabajando por los derechos de las mujeres.
BLANC El francés Louis Blanc (1813-1882) propuso otro de los primeros enfoques socialistas para
una mejor sociedad. En La organización del trabajo sostuvo que los problemas sociales podri ́an
resolverse con la ayuda del gobierno. Al señ alar a la competencia como la causa principal de los
males económicos de su tiempo, pidió el establecimiento de talleres que fabricari ́an bienes para su
venta al público. El Estado financiari ́a estos talleres pero los trabajadores seri ́an los propietarios y
quienes los operari ́an.
MUJERES PARTIDARIAS Con sus planes para la reconstrucción de la sociedad, los socialistas utópicos
atrajeron a varias simpatizantes que crei ́an que sólo un reordenamiento social ayudari ́a a las
mujeres. Zoé Gatti de Gamond, una seguidora belga de Fourier, fundó su propio falansterio, que se
suponi ́a proveeri ́a a hombres y mujeres las mismas oportunidades educativas y de trabajo. Como
parte de una vida colectiva, los hombres y las mujeres compartiri ́an responsabilidades sobre el
cuidado de los niñ os y la limpieza del hogar. Las ideas del conde de Saint Simon, que combinaba
valores cristianos, pensamiento cienti ́fico y socialismo utópico, resultaron muy atractivas para las
mujeres que participaban en el creciente activismo poli ́tico femenino puesto en marcha durante la
Revolución francesa. El ideal de Saint-Simon de una sociedad cooperativa reconoci ́a el principio de
equidad entre géneros, y un grupo de simpatizantes de la clase trabajadora, que inclui ́a a Susana
Voilquin, Clara Démar y René Guindorf, publicó un periódico dedicado a la emancipación femenina.
TRISTÁ N Una socialista utópica, Flora Tristán (1803-1844), trató de impulsar una “si ́ntesis
utópica de socialismo y feminismo”.
Viajó por Francia predicando la necesidad de la liberación de las mujeres. Su obra Unión de
trabajadores, publicada en 1843, abogaba por la aplicación de las ideas de Fourier para reconstruir
tanto la familia como el trabajo:
Trabajadores, estén seguros de esto. Si tienen suficiente equidad y justicia para inscribir en su carta
los pocos puntos que acabo de esbozar, esta declaración de los derechos de las mujeres pronto
pasará a ser una costumbre, de costumbre se convertirá en ley y antes de que pasen 25 añ os ustedes
verán entonces, inscrito en la portada del libro de leyes que gobernará a la sociedad de Francia: la
igualdad absoluta del hombre y de la mujer. Entonces, hermanos mi ́os, y sólo entonces, se
constituirá la unidad humana.
Ella vislumbró esta igualdad absoluta como la única esperanza de liberar a la clase trabajadora y
transformar a la civilización.
Flora Tristán, como muchos otros teóricos del socialismo, fue ampliamente ignorada por sus
contemporáneos. Aunque criticados por su falta de sentido práctico, los socialistas utópicos al
menos sentaron las bases para los posteriores ataques al capitalismo que tendri ́an un resultado de
largo alcance. En la primera mitad del siglo xix, sin embargo, el socialismo permaneció como un
movimiento marginal eclipsado por el liberalismo y el nacionalismo.
UNIDAD IV: La realidad contemporánea. El largo siglo XIX
- La democracia de masas de fines del siglo XIX: causas, actores involucrados, conflictos,
ideas, consecuencias políticas.
- Las características del imperialismo: en qué consistió, objetivos, cuáles fueron los países
y grupos sociales involucrados, diversas interpretaciones sobre su surgimiento,
consecuencias políticas y económicas.
- Período de entre-guerras: ¿en qué consistió la crisis de 1929? ¿Qué efectos generó en la
economía mundial?
¿Qué regímenes totalitarios se desarrollaron después de la Primera Guerra? ¿Cuáles fueron sus
causas, ideas y políticas en el poder.
¿Cuáles son los antecedentes a la Primera Guerra Mundial? Explique las causas del conflicto y por
qué tantos Estados se ven involucrados en el mismo. ¿Cómo se resuelve el conflicto bélico?
Los principales acontecimientos de la Segunda Guerra Mundial. ¿Cómo finaliza el conflicto? ¿Cuáles
fueron sus consecuencias en el escenario internacional?
La República de Weimar: orígenes, grupos y actores sociales involucrados, ideas y objetivos, políticas
aplicadas, consecuencias económicas y políticas.
Las distintas etapas económicas de la URSS: comunismo de guerra; NEP (Nueva Política Económica);
planes quinquenales.
El régimen stalinista: objetivos, ideología, formas de ejercicio del poder, prácticas políticas, política
económica.
Los factores políticos, sociales, ideológicos y económicos que incidieron en el surgimiento del
nazismo en Alemania.
Los factores políticos, sociales, ideológicos y económicos que incidieron en el surgimiento del
fascismo en Italia.
El régimen nazi en Alemania: objetivos, ideología, formas de ejercicio del poder, prácticas políticas,
política económica y exterior.
El régimen fascista en Italia: objetivos, ideología, formas de ejercicio del poder, prácticas políticas,
política económica y exterior.
Las características del New Deal: orígenes, objetivos, ámbitos de aplicación, medidas aplicadas,
actores y grupos sociales involucrados, alcance y resultados.
Los factores económicos, políticos, sociales e ideológicos que dieron inicio a la Segunda Guerra
Mundial.
El proceso de descolonización de la segunda mitad del siglo XX: objetivos, ideas, grupos y países
involucrados, consecuencias económicas y políticas.
El período de auge económico del capitalismo entre 1945-1973: innovaciones técnicas, formas de
organización del trabajo, prácticas comerciales, rol del Estado, grupos y actores sociales
involucrados, alcance y resultados.
Las causas políticas, económicas e ideológicas de la caída del Estado de Bienestar en la década de
1970.
Los factores políticos, económicos, sociales e ideológicos que explican la caída del régimen soviético.