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Asociacion BENGHALENSI y otros C/ Ministerio de Salud y Accion Social

– Estado Nacional s/ amparo ley 16.986:

Hechos:

Un grupo de entidades no gubernamentales que desarrollan actividades contra la


epidemia del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida, promovieron acción de
amparo a fin de obligar al Estado Nacional a cumplir con la asistencia,
tratamiento, rehabilitación y suministro de medicamentos a los enfermos que
padezcan aquella dolencia. Contra la decisión de la Cámara que, al confirmar la
del a quo hizo lugar a lo solicitado, interpuso el Estado nacional recurso
extraordinario. La Corte Suprema de Justicia de la Nación, por mayoría, confirmó
la sentencia apelada.

Puntos claves:

1. Si bien los gastos que demanda el cumplimiento de la ley de Lucha contra el


SIDA 23.798 deben ser solventados por la Nación y por las provincias, ello no
supone que el Estado federal haya delegado la responsabilidad del cumplimiento
del mencionado régimen -en el caso, no se suministraron los medicamentos en forma
oportuna-, declarado expresamente de interés nacional (del dictamen del
procurador general que la Corte hace suyo).

2. Aunque los medicamentos para los enfermos de SIDA -de acuerdo a la ley de
Lucha contra el SIDA 23.798 se distribuyan a través de los gobiernos locales, el
Estado Nacional es el responsable del cumplimiento de la ley frente a terceros,
sin perjuicio de la responsabilidad que cabe a las jurisdicciones provinciales o
instituciones privadas (del dictamen del procurador general que la Corte hace
suyo).

3. La responsabilidad del Estado, en su condición de autoridad de aplicación que


diseña el plan de distribución de los medicamentos para los enfermos de SIDA -
ley de Lucha contra el SIDA 23.798, no se agota con las entregas, sino que debe
velar por su correcto cumplimiento, asegurando la continuidad y regularidad del
tratamiento médico (del dictamen del procurador general que la Corte hace suyo).

Fallo Campodónico de Beviacqua, Ana Carina c/ Ministerio de Salud y


Acción Social - Secretaría de Programas de Salud y Banco de Drogas
Neoplásicas s/ Recurso de Hecho:

El 26 de junio de 1996 nace un niño cordobés llamado Adelqui S. Beviacqua con un


grave padecimiento en su médula ósea que disminuye sus defensas inmunológicas
llamado enfermedad de Kostman o neutropenia severa congénita cuyo tratamiento
depende de una medicación especial cuyo nombre comercial es Neutromax 300. Esta
droga le fue suministrada sin cargo por el Banco Nacional de Drogas
Antineoplásicas dependiente del Ministerio de Salud y Acción Social hasta el día
2 de diciembre de 1998, fecha en que ese organismo puso de manifiesto a sus
padres que entregaba el fármaco por última vez. Frente al peligro de la
interrupción del tratamiento médico, la madre del actor interpone un recurso de
amparo que llega por la vía del recurso de hecho a la Corte Suprema. Tanto en
primera instancia como en la Cámara Federal de Apelaciones de Córdoba se condenó
al Estado Nacional con el argumento de que hacer recaer esta responsabilidad en
la obra social o en la autoridad pública local resultaba incompatible con las
obligaciones primarias puestas a cargo del Estado Nacional como "garante" del
sistema de salud.
Como dato de hecho es necesario aclarar que la obra social OSPEDYC. A la que
pertenece la actora se encontraba en convocatoria de acreedores y por esta razón
la Asociación de Clínicas y Sanatorios del Sur de Córdoba (ACLISA.) había
suspendido el convenio que tenía con ella y la entidad privada "Córdoba
Farmacéutica Coop. Ltda." que a su vez había rescindido su contrato con esta
última, por lo que sus afiliados (entre ellos el actor) se encontraban sin la
debida cobertura médica y asistencial. En base a estos hechos la Corte Suprema
de Justicia afirma que "el principio de actuación subsidiaria que rige en esta
materia se articula con la regla de solidaridad social, pues el Estado debe
garantizar una cobertura asistencial a todos los ciudadanos, sin discriminación
social, económica, cultural o geográfica (art. 1 ley 23661, y ello impone su
intervención cuando se encuentra superada la capacidad de previsión de los
individuos o pequeñas comunidades... Frente a la actuación deficiente de la
entidad médica sindical, la situación de precariedad laboral y económica de la
familia y el estado de extrema urgencia que reviste el suministro del remedio
requerido, es el Estado Nacional -mediante el ministerio demandado- el que debe
intervenir subsidiariamente para dar adecuada tutela a los derechos del menor,
sin perjuicio de que efectúe los trámites necesarios para lograr que esa
asistencia sea realizada de modo regular y efectivo por los organismos que
correspondan -Del voto de la mayoría-".

Fallo ZOFRACOR S.A. C/ ESTADO NACIONAL S/ AMPARO:

Hechos:

La firma Zofracor S.A., concesionaria de la Zona Franca ubicada en la Provincia


de Córdoba, interpuso acción de amparo contra el Estado Nacional y solicitó la
declaración de nulidad absoluta e inconstitucionalidad del decreto 285/99 del
P.E.N., de "necesidad y urgencia". Resultó adjudicataria de la licitación de esa
área franca y el 31 de julio de 1998 firmó el contrato de concesión, aprobado
por el MEyOSP, autoridad de aplicación de la ley 24.331. Cuando se hallaba a
punto de iniciar sus actividades y de concretar su plan de ventas se dictó el
reglamento impugnado, por el cual se otorgó un tratamiento especial a la Zona
Franca La Pampa, situación que le causa daño y abre un interrogante sobre la
concreción de sus perspectivas de ingresos y gastos y de recupero de lo invertido.
El decreto impugnado concede a la Zona Franca La Pampa prerrogativas ausentes en
la legislación aplicable a la materia o prohibidas por ella, abarcando temas
tributarios, aduaneros y de la seguridad. Adujo que este reglamento era contrario
a lo establecido en el art. 591 del Código Aduanero, de la ley 24.331 de Zonas
Francas y que, al versar sobre materia tributaria, el Poder Ejecutivo está
impedido de dictarlo por el inc. 3° del art. 99 de la C.N.
Además, expuso que resultaba lesivo de derechos adquiridos por concesionarios de
otras zonas francas del país, del principio de igualdad ante la ley, de la
libertad de comercio y la libre concurrencia (arts. 14, 16, 18 y 43 de la Carta
Magna).

Cuestiones principales:

La ratificación legislativa de un decreto de necesidad y urgencia -en el caso,


la del decreto 285/99 (Adla, LIX-B, 1527), que concede ciertas franquicias de
índole fiscal a una zona franca situada en la Provincia de La Pampa- carece de
efectos retroactivos cuando la norma ratificada es insanablemente nula en razón
de su inconstitucionalidad original -violación al principio de legalidad en
materia tributaria-, por lo que su contenido, de ser compatible con los principios
constitucionales, comienza a regir a partir de dicha ratificación.
No obstante la nulidad insanable del decreto de necesidad y urgencia 285/99
(Adla, LIX-B, 1527), en cuanto otorga ciertas franquicias de carácter fiscal a
una zona franca situada en la Provincia de La Pampa, por contrariar la prohibición
expresa del art. 99 inc. 3° de la Constitución Nacional, su ratificación por ley
25.237 (Adla, LX-A, 92) hace que aquél rija válidamente a partir de la entrada
en vigencia de esta última, pues resulta clara la intención del legislador de
adoptar y conferir rango legal a las disposiciones del citado decreto.
El decreto de necesidad y urgencia 285/99 (Adla, LIX-B, 1527), en cuanto concede
ciertas preferencias en materia tributaria a una zona franca situada en la
Provincia de La Pampa, es inconstitucional por no haber mediado una urgencia
especial que tornara incompatible el trámite regular previsto en la Constitución
para sancionar las leyes ni razones de fuerza mayor o impedimento alguno para la
reunión de las cámaras del Congreso (del voto de los doctores Belluscio y
Bossert).
Es insanablemente nulo el decreto de necesidad y urgencia 285/99 (Adla, LIX-B,
1527), que concede a una zona franca de la Provincia de La Pampa ciertas
franquicias aduaneras, impositivas y de la Seguridad Social, pues traduce el
ejercicio de atribuciones exclusivas del Congreso -arts. 4°, 17 y 75 incs. 1° y
2°, Constitución Nacional-, vedado al Ejecutivo por aplicación del principio de
legalidad tributaria aun en las condiciones excepcionales que podrían justificar
el dictado de decretos de necesidad y urgencia -art. 99 inc. 3°, Ley Fundamental-
(del voto del doctor Boggiano).

Caso “Verbitsky, H. s/ hábeas corpus” (Resuelto el 3/05/05).

La Corte reconoció al Centro de Estudios Legales y Sociales legitimación


colectiva para interponer un habeas corpus correctivo y colectivo a favor de las
personas detenidas en las comisarías bonaerenses y ordenó al Gobierno de la
Provincia de Buenos Aires que revirtiera las condiciones inhumanas de
confinamiento existentes.

Hechos:

El Centro de Estudios Legales y Sociales interpuso un habeas corpus en


representación de todas las personas detenidas en prisiones y comisarías de la
Provincia de Buenos Aires. Relató que los detenidos, incluidos mujeres y menores,
padecían condiciones de superpoblación y hacinamiento porque los calabozos
estaban en un estado deplorable de conservación e higiene.
El Tribunal de Casación Penal de la provincia de Buenos Aires rechazó el hábeas
corpus, al considerar que debía analizarse cada caso en concreto.

La actora interpuso recursos extraordinarios de nulidad y de inaplicabilidad de


ley, que fueron declarados inadmisibles por la Suprema Corte de Justicia de la
Provincia de Buenos Aires.

Contra ese pronunciamiento interpuso un recurso extraordinario, que fue denegado


y dio lugar a un recurso de queja.

Decisión de la Corte:

La Corte consideró que la presencia de adolescentes y enfermos en establecimientos


policiales y/o en comisarias superpobladas de la Provincia de Buenos Aires era
susceptible de configurar un trato cruel, inhumano o degradante u otros análogos
y generar responsabilidad del Estado Nacional, con flagrante violación a los
principios generales de las Reglas Mínimas para el tratamiento de reclusos de
las Naciones Unidas.

Por este motivo, sostuvo que, dado que dicha situación ponía en peligro la vida
y la integridad física del personal penitenciario y policial y generaba
condiciones indignas y altamente riesgosas de trabajo, debía instruirse a la
Suprema Corte de Justicia de la Provincia de Buenos Aires y a los demás tribunales
de dicha provincia para que hicieran cesar urgentemente el agravamiento o la
detención misma. Por otra parte, reconoció legitimación al Centro de
Estudios Legales y Sociales para interponer el hábeas corpus colectivo a pesar
de que la Constitución Nacional no menciona en forma expresa el hábeas corpus
como instrumento deducible en forma colectiva.

En consecuencia, fijó los estándares de protección de los derechos de los presos


que los distintos poderes provinciales deben respetar para cumplir con el mandato
de la Constitución Nacional y con los pactos internacionales de derechos humanos
que tienen jerarquía constitucional.

También ordenó a la justicia provincial a verificar y remediar las condiciones


indignas de detención de los presos detenidos a su disposición así como disponer
la inmediata libertad de los adolescentes y enfermos detenidos en comisarías.

Por último, exhortó a los poderes ejecutivos y legislativos provinciales a


revisar la legislación que regula la excarcelación y la ejecución penitenciaria
y a tomar como parámetro la legislación nacional en la materia.

Para asegurar una solución efectiva y sólida a esta situación, la Corte recomendó
que se conformara una mesa de diálogo en la que intervinieran las autoridades
provinciales y las organizaciones de la sociedad civil y retuvo el poder de
controlar la adopción de las medidas ordenadas en el fallo.(voto de los jueces
Petracchi, Maqueda, Zaffaroni, Highton de Nolasco y Lorenzetti. El Dr. Boggiano
votó en disidencia, mientras que los magistrados Fayt y Argibay votaron en
disidencia parcial).El Dr. Boggiano consideró que el hábeas corpus interpuesto a
favor de la totalidad de las personas detenidas alojadas en establecimientos
policiales y comisarías bonaerenses importaba una impugnación genérica al sistema
carcelario provincial, pero que no le competía a los jueces hacer declaraciones
generales o abstractas, por lo que excedía las facultades jurisdiccionales de la
Corte

“BADÍN, RUBÉN Y OTROS C/PROVINCIA DE BUENOS AIRES S/DAÑOS Y


PERJUICIOS”CSJN,19/10/1995

1.-) HECHOS:

Rubén Badín inicia demanda contra la Provincia de Buenos Aires (PBA), quien lo
hace en su carácter de padre de Darío Badín Monti. Relata que su hijo de 29 años
de edad, cumplía una condena en la cárcel de Olmos, cuando en horas de la tarde
del día 05/05/1990 se produjo un incendio que produjo la muerte de 35 reclusos
entre los cuales se encontraba su hijo.
Adjunta la documental correspondiente para demostrar su vínculo familiar, y
asimismo, manifiesta que la responsabilidad de la PBA resulta evidente, por la
carencia de medios materiales, capacitación del personal presente, y el uso de
elementos extremadamente combustibles. Por lo cual, estableciendo el marco
jurídico que considera aplicable al caso concreto, solicita que se indemnice a
los padres por los daños materiales y morales producidos por ese hecho.
Seguidamente, contesta demanda la PBA, realizando una negativa de carácter
general de los hechos expresados en la demanda. Sostiene que Darío Badín Monti
tuviese los conocimientos mínimos e indispensables para realizar las tareas
enumeradas, y que no existe ningún tipo de constancia de recibo de sueldo o
antecedente laboral previo su paso por el complejo penitenciario. Destaca sus
antecedentes penales.

2.-) SENTENCIA DE CSJN:

Por intermedio de un recurso originario a la CSJN, se determinó que conforme el


art. 19 de la CN, no se habían dado las condiciones mínimas y necesarias para
asegurar la seguridad de los internos. Los hechos acontecidos importan la omisión
de los deberes primarios y constituyen una irregular prestación del servicio a
cargo de la autoridad penitenciaria.
Posteriormente de realizar numerosos interrogatorios al personal penitenciario,
elaborar los informes pertinentes por las entidades oficiadas y la documentación
adjunta, la CSJN llega a la conclusión de que –incluso por carencias
presupuestarias- el Estado de Derecho, el cumplimiento de los principios de la
CN y los convenios internacionales deben prevalecer por encima de cualquier
circunstancia que hubiese dado origen al hecho relatado.
De este modo, se lleva a admitir que la PBA, por su notoria falta de cumplimiento
de los fines constitucionales y las obligaciones que generan, se le debe imponer
la obligación de reparar los daños ocasionados

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