Вы находитесь на странице: 1из 24

jjmik Lmá $L

Ilustración de una versión árabe de la obra "/Je materia medica</<•/ médico griego del siglo I l'edanio Dioscórides, en que
aparecen dos musulmanes preparando una pócima medicinal con sustancias vegetales (Museo del Louvre, París).

La ciencia árabe.
Avicena, Algazel y Averroes
M i e n t r a s e n el O c c i d e n t e el p a p a y el m o s q u e el I s l a m , c o n su califa e n D a m a s c o
e m p e r a d o r e s f o r z á b a n s e e n d a r Forma a la o en B a g d a d , se e x t e n d í a d e s d e los P i r i n e o s
o r g a n i z a c i ó n social d e los n u e v o s p u e b l o s h a s t a el H i m a l a y a , y las p r o v i n c i a s m á s ricas
c r i s t i a n o s , e n el o r i e n t e i s l á m i c o la g r a n del I m p e r i o r o m a n o , Á f r i c a , E g i p t o , Sicilia
o l e a d a del p e n s a m i e n t o a v a n z a b a y s u b i a y Siria, e r a n m u s u l m a n a s . M á s allá d e M e s o -
c o m o e n las h o r a s m á s críticas d e la H u m a - p o t a m i a , P e r s i a h a b í a t e n i d o q u e a c e p t a r el
n i d a d . H e m o s d i c h o el o r i e n t e i s l á m i c o y la C o r á n , y las tierras casi v í r g e n e s d e B o k h a -
f r a s e n o es e x a c t a : en t o d o c a s o , el O r i e n t e r a , S a m a r k a n d a , M e r v y Balj p a r t i c i p a b a n
l l e g a b a e n t o n c e s h a s t a el A t l á n t i c o . R e c o r d e - d e la vida del I s l a m c o n u n a r d o r d e n e ó f i t o .

173
LOS N U M E R A L E S
Pocos descubrimientos humanos tienen indias o árabes no radica en sus formas, numero indorum, expuso las reglas nece-
una historia tan clara y a la vez tan intrin- que son múltiples, sino en que tienen sarias para operar c o n dicho sistema de
cada c o m o el de los numerales que hoy valor de posición. numeración; en esa misma época los
conocemos c o m o árabes. Y en primer lu- Las cifras modernas son utilizadas en árabes darían forma al cero, signo que
gar está el de la terminología. t o d o el Occidente con una forma unifor- desde el Próximo Oriente pasó a China y
En el occidente islámico se designaba me (1, 2, 3...). Es evidente que éstas de- al- Andalus. La llegada de la obra juwariz-
c o m o huruf gubar ("letras de polvo"; el rivan conceptualmente (valor de posición) miana a Córdoba cabe suponer que no se
mismo n o m b r e recibe un tipo de caligrafía de las indias, aunque formalmente pueda haría esperar, sobre t o d o si tenemos
árabe occidental) los signos que se tra- no ser así. en cuenta la rapidez con que llegó a al-
zaban en una mesa de polvo o arena Por consiguiente, aquí nos interesa, Andalus su Astronomía.
para efectuar operaciones, "guardándose" más que el estudio de la evolución formal No es excesivo suponer que a mediados
(término de los textos matemáticos) de las llamadas cifras indias, el de la in- del siglo ix Occidente ya conocía el siste-
únicamente los resultados parciales o troducción del concepto de valor de posi- ma de numeración de posición. Prueba
totales. Signos gubar serían hoy los que ción en Occidente. Esta idea genial parece parcial de ello es que en el misceláneo
trazamos en el encerado y cuyos valores haber sido gestada en la India, según lo ovetense de El Escorial (R. II, 18), restau-
" g u a r d a m o s " al borrar, para poder con- que nos dicen autores árabes en general rado por San Eulogio (muerto en 8 5 9 ) y
tinuar con el cálculo. Woepcke, seguido tan bien informados c o m o al- Masudí llegado a Oviedo en 8 8 4 , se encuentran
por Gandz, creyó poder dar a estos signos, (muerto en 9 5 6 ) y al- Biruní. Y, en efecto, ya numerales indios, el cero incluido. El
cuyas formas desconocemos en la mayo- en la astronomía de Aryabhata (siglo v) problema radica en saber si la nota margi-
ría de los casos, un origen romano o tal se encuentra ya empleado este sistema en nal en que éstos figuran (fol. 55) es de
vez más r e m o t o aún. la extracción de raíces cuadradas y cúbi- un mozárabe cordobés y, por tanto, ante-
cas, aunque el cero tenga sólo una exis- rior al 8 8 4 o de otro refugiado en Ovie-
Ápices, t a m b i é n llamados ápices de
tencia implícita, ya que en rigor bastaba do con posterioridad.
Boecio, se denominaban nueve fichas
con dejar "vacío" el lugar en que debía es-
marcadas con las letras del alfabeto Datación más segura, pero posterior,
cribirse dicho guarismo, para poder ope-
griego o cualquier o t r o signo distintivo es la del códice Albeldense (El Escorial d
rar con seguridad. Este sistema se co-
(incluso cifras "árabes", que en este caso I, 2), escrito por el monje Vigila y termina-
noce en el Próximo Oriente alrededor del
no tienen valor " n u m é r i c o " en general) do en el 9 7 6 . En él figuran los nueve nú-
año 6 6 0 , pues Severo Sabojt, obispo de
empleadas para hacer operaciones c o n el meros indios, que fueron conocidos a
Quinnesrin (junto al Éufrates), lo cita. Por
dispositivo llamado abaco (ya no la tabla través de textos árabes desde el m o m e n t o
tanto, los árabes desde el m o m e n t o de la
de arena) y cuyo origen es posterior a en que se escriben de izquierda a derecha.
conquista pudieron optar - y o p t a r o n -
Boecio (muerto en 524) y anterior a ¿Dónde consultó Vigila esos manuscritos
entre dos sistemas de numeración: el de
Gerberto (muerto en 1003), puesto que árabes? Destombes cree, por motivos
los notarios, para la administración (y era
Guillermo de Malmesbury (muerto en estilísticos, que fue en Ripoll, en donde
lógico que fuera así, puesto que los ome-
1 1 4 2 ) nos dice que aquél fue "el pri- durante el siglo x se hicieron las traduc-
yas adoptaron buena parte de los mé-
mero en t o m a r el ábaco a los sarracenos ciones más antiguas que conocemos del
todos de la administración bizantina), y
y en establecer las reglas de su uso, que árabe al latín. Sin embargo, la argumen-
el indio, cero incluido, para los textos cien-
sólo alcanzan a entender los abacistas tación de Destombes no es completamente
tíficos.
con el sudor de su frente". convincente y por el m o m e n t o no cabe
afirmar más que la transmisión de las
Las cifras de los notarios derivan pro- Fue al- Juwarizmí (de su nombre proce-
cifras hacia Occidente se realizó por
bablemente del alfabeto minúsculo grie- den nuestras voces guarismo y algoritmo)
intermedio de al- Andalus.
go o del copto, cuyo uso estaba muy quien en el libro cuyo original se ha perdi-
extendido y codificado. do, pero del que se conserva la versión to-
La importancia de las llamadas cifras ledana bajo el nombre de Aigoritmi de J. V.

En los s i g l o s IX y x el c o n t r a s t e n o era R e n a c i m i e n t o . Y t o d o e s t o , si n o a b a s e d e l
entre el occidente latino y el imperio de C o r á n , a lo m e n o s c o n el i n t e n t o d e a r m o n i -
Constantinopla, sino q u e ambos, griegos y zar con él e l pensamiento filosófico. Pero
latinos, e s t a b a n e n p u g n a con los m u s u l m a - el h e c h o d e q u e e l I s l a m n o t e n g a m a g i s t e r i o
nes. P o r q u e e n esa é p o c a los á r a b e s n o sólo jerárquico f a c i l i t ó e l q u e la f i l o s o f í a d e los
t u v i e r o n u n a c u l t u r a m á s m o d e r n a q u e la del árabes, c o m o explicación del m u n d o , tuviera
Occidente, sino que además la conocemos u n sentido m u y a u t ó n o m o . N o hay u n a Igle-
m e j o r . M i e n t r a s los m o n j e s latinos n o s han sia q u e p u e d a decidir en concilio, ni existe
d e j a d o s ó l o c r o n i c o n e s c o n listas m o n ó t o n a s t a m p o c o n a d i e e n el I s l a m q u e e s t é i n v e s t i d o
d e sucesos y los retóricos griegos d e Bizancio de autoridad doctrinal decisiva.
no escribieron más que comentarios de que- Y n o es q u e los p r o b l e m a s q u e l l a m a r í a -
rellas ya caducas, los p e n s a d o r e s del Islam
mos dogmáticos no preocuparan a los m u -
volvieron a proponerse los p r o b l e m a s del
s u l m a n e s ; al c o n t r a r i o , la t e o l o g í a y el d e r e -
o r i g e n d e la m a t e r i a , d e la c r e a c i ó n directa
cho son las d o s únicas especulaciones que
d e las cosas p o r Dios, p o r sí m i s m o o por
los "creyentes" consideran dignas d e p o n e r en
medio de agentes suyos, del p o r q u é d e las
e l l a s t o d a s u a t e n c i ó n . L a t e o l o g í a y la m í s -
causas y l o s s e c r e t o s d e la v i d a , d e l origen
tica e n s e ñ a r á n cómo podremos ascender a
del bien y del mal, o r g a n i z a n d o sus conoci-
D i o s , m i e n t r a s q u e l a t r a d i c i ó n (Hadiz) y el
mientos en tratados sistemáticos q u e conti-
Corán nos muestran cómo proceder recta-
nuaban la c i e n c i a a n t i g u a y anticipaban el
mente con nuestros semejantes. Causa sor-

174
U N EJEMPLO DE LA O B R A C I E N T I F I C A DE LA C I V I L I Z A C I O N I S L A M I C A :
EL " A L M A G E S T O " DE T O L O M E O

Y compendio del si le Claudio Tolomeo (siglo 11


V expone un sistema en el que la Tierra, e
El nombre griego de la obra, "Matematike syntaxis". es decir. Compendio rr ¡s" (Gran Compendio
o Compendio), que con la adhesión del articulo árabe (Al-) da | U q¡

OBSERVACION ASTRONOMICA

- de los métodos e instrumental tolemaicc

a de investigación a

xiii. no contará apenas con otro instrumental que el


naico. llegando, sin embargo, a interesantes conclu-
3S, Cabe destacar la medición de un arco de meridia-

zada con notable


magesto" icido del griego
y Gerai
de Cremona lo traduce del árabe al latin
en Toledo en 1175. Era tal el prestigio de
la fuente árabe o de la escuela de Toledo,
que la traducción indirecta de 1175 des- Antes de 1187. Gerardo de Cremona ha traducido "La rectificación",
de Yabir ibn Aflah. en un momento en que la obra es todavía una no-
plazó a la directa de 1160. vedad en los circuios islámicos.

«U^LU-J.U^.U.^J^UU.

/MÍ

Dos páginas de un " A l m a g e s -


/o" del siglo XV que se con-
serva en la Hiblioteca Nacional
de París.

175
l!n azud o noria de tradición
árabe en Ia provincia de Cór-
p r e s a q u e la f u e n t e d e estas ciencias f u n d a - b e , se c o m p r e n d e q u e lo p r i m e r o q u e d e b í a
m e n t a l e s p u e d a e n c o n t r a r s e en u n l i b r o t a n h a c e r p e n s a r a los m u s u l m a n e s sería el
p o c o o r d e n a d o c o m o el C o r á n , p e r o m á s p r o b l e m a d e la s a l v a c i ó n . M a h o m a h a b í a
s o r p r e s a c a u s a q u e la " t r a d i c i ó n " a t r i b u y a a d i c h o e n el C o r á n : " E s t a vida es u n s u e ñ o ,
M a h o m a estas p a l a b r a s : "Al q u e b u s c a c o - d e s p e r t a m o s c u a n d o m o r i m o s " ( s u r a 50,
n o c i m i e n t o , Dios le m u e s t r a el c a m i n o del 21). C o n v e n í a , p u e s , p r e o c u p a r s e del d e s -
P a r a í s o . E s t u d i a r es u n a c t o d e p i e d a d . La p e r t a r . ¿ E s Dios q u i e n n o s salva o s o m o s
t i n t a del s a b i o es m á s s a n t a q u e la s a n g r e n o s o t r o s los q u e , p o r la p i e d a d y la c a r i d a d ,
d e los m á r t i r e s " . P a r e c e c o m o si a veces a l c a n z a m o s la s a l v a c i ó n ? Y sin d e m o r a
M a h o m a se d o l i e r a d e la i g n o r a n c i a d e su v e m o s en el I s l a m r e p e t i r s e , e n c i e r t o m o d o ,
p u e b l o , d e la q u e él e r a t a m b i é n v í c t i m a .
la c o n t r o v e r s i a d e la p r e d e s t i n a c i ó n y el l i b r e
Es d u d o s o q u e M a h o m a s u p i e r a leer y escri-
a l b e d r í o , q u e h a b í a n d i s c u t i d o d o s siglos
b i r ; d e c o n t i n u o m u e s t r a su a m a r g u r a p o r
a n t e s San A g u s t í n y Pelagío. P o d r í a m o s ci-
c o n o c e r s ó l o a m e d i a s lo q u e s a b í a n "los
t a r c e n t e n a r e s d e t e x t o s del C o r á n en los
p u e b l o s d e la E s c r i t u r a " , o sean c r i s t i a n o s y
q u e Dios d e c l a r a o b r a r c o m o u n m o n a r c a
judíos.
a b s o l u t o , q u i e n d e c i d e a r b i t r a r i a m e n t e el
D a d o el f a t a l i s m o o r i g i n a l d e la raza á r a - c u r s o d e los a c o n t e c i m i e n t o s ; p e r o en la

176
Representación, en un ylobo
celeste musulmán ile Jlnes tlel
siglo XIII, de las estrellas y
constelaciones del firmamen-
to (Museo Capodimonte, Ñá-
pales).

m a y o r p a r t e d e las o c a s i o n e s , la v o l u n t a d d e p a r a los m u s u l m a n e s , y t a m b i é n si e m p e z a -
Dios p a r e c e s e r la ley d e la n a t u r a l e z a , y p o r r á n i n m e d i a t a m e n t e d e s p u é s d e la m u e r t e o
a ñ a d i d u r a h a y t a m b i é n textos c o m o éste: el día del J u i c i o , c o m o p a r e c e significar el
"El q u e se p i e r d e es r e s p o n s a b l e d e su e r r o r " C o r á n . E n estos d o s p u n t o s se d i v i d i e r o n
( s u r a 10, 108). Era, p u e s , i n e v i t a b l e q u e sin t a m b i é n las sectas m u s u l m a n a s . P o r fin p r e -
u n a a u t o r i d a d q u e estableciera un criterio d o m i n ó la idea d e q u e u n d í a u o t r o a c a b a -
d o g m á t i c o , el I s l a m se d i v i d i e r a e n e s t e p u n - r á n los castigos d e los creyentes q u e h a n
to en tantas o p i n i o n e s c o m o matices son p o - pecado, pero no apostatado, de manera que
sibles e n t r e los d o s e x t r e m o s : p r e d e s t i n a c i ó n el i n f i e r n o v i e n e a ser c o m o u n p u r g a t o r i o
y libre albedrío. Aquellos q u e sentían mayor p a r a los q u e m u e r e n fieles al I s l a m .
a p a s i o n a m i e n t o p o r esta s e g u n d a s o l u c i ó n El s e g u n d o p r o b l e m a q u e c o n t r i b u y ó
l l e g a r o n a d e c i r : "Si e s t a m o s p r e d e s t i n a d o s a d i v i d i r a los m u s u l m a n e s f u e el del a n -
d e a n t e m a n o a p e c a r , Dios es t a n p e c a d o r t r o p o m o r f i s m o d e D i o s , o s e a si Dios t e n í a
c o m o nosotros y cómplice de cada pecado figura h u m a n a y a t r i b u t o s . El C o r á n h a b l a
que cometemos". del t r o n o d e Dios y d e sus m a n o s , e n c o m i a
U n c o r o l a r i o d e este p r o b l e m a d e la sal- m i l veces su p o d e r , su b o n d a d , su g r a n d e z a ,
v a c i ó n es s a b e r si los castigos s e r á n e t e r n o s su f u e r z a . P e r o ya el califa Alí, s e g ú n la tra-

177
d i c i ó n , h a b í a d i c h o : " D i o s n o se p a r e c e a
n a d a d e l o q u e p u e d e c o n c e b i r la inteligen-
cia h u m a n a ; n o p u e d e i n c o r p o r á r s e l e n i n g ú n
a t r i b u t o q u e t e n g a el m e n o r p a r e c i d o a n i n -
g u n a c u a l i d a d q u e p o d a m o s p e r c i b i r e n los
o b j e t o s m a t e r i a l e s . . . N a d i e p u e d e ver a Dios.
N o o c u p a l u g a r , t i e m p o ni m e d i d a , etc.".
P a r e c e d u d o s o q u e estas p a l a b r a s , a t r i b u i -
d a s a Alí, s e a n a u t é n t i c a s , p e r o p o r l o m e -
n o s d e m u e s t r a n q u e la secta q u e d e él d e r i v a ,
o sea la d e los chiitas, se inclina ya a c o n d e -
n a r a m b a s cosas: predestinación y a n t r o -
p o m o r f i s m o . Sin e m b a r g o , o t r a s escuelas
m u s u l m a n a s , i n f l u i d a s p o r la filosofía grie-
g a , d i s c u t i e r o n las p r o p i e d a d e s y r e a l i d a d d e
los a t r i b u t o s d e Dios. A l g u n a s l l e g a r o n hasta
a a f i r m a r la existencia i n d e p e n d i e n t e d e las
ideas d e B o n d a d , Fuerza, A m o r , S a b i d u r í a . . .
y a Dios se le l l a m a C a u s a d e las C a u s a s . En
c a m b i o , o t r a s o b j e t a r o n q u e la p e r s o n i f i c a -
c i ó n d e las ideas, o a t r i b u t o s d e D i o s , e n t r a -
ñ a b a el p e l i g r o d e d e s t r u i r la u n i d a d d e la
esencia d i v i n a ; si las I d e a s f o r m a n p a r t e d e
Dios, el Ser S u p r e m o t i e n e p a r t e s y n o es
ú n i c o e indivisible.
P o r fin, d e n t r o del o r d e n t e o l ó g i c o , la
tercera g r a n c o n t r o v e r s i a del I s l a m f u e la d e
la e t e r n i d a d del C o r á n . N a d i e d i s p u t a la

Cerámica decorada de Soma-


rra, de la primera época de
la dominación musulmana en
Oriente (Museo de! Estado,
Berlín).

Una vista moderna de Kag-


dad, la ciudad t/ue en el si-
glo IX fue el centro de la vida
cultural islámica y mundial.

178
r e v e l a c i ó n del L i b r o , n a d i e vacila e n a f i r m a r
q u e f u e D i o s q u i e n lo reveló a M a h o m a ,
p e r o s u b s i s t e la d u d a d e si el C o r á n e s t a b a ,
p a l a b r a p o r p a l a b r a , e n la m e n t e d e Dios
" d e s d e los siglos d e los siglos", y si rio será
sacrilegio l e e r l o t r a d u c i d o .
Estas p r i m o r d i a l e s c u e s t i o n e s t e o l ó g i c a s
e m p e z a r o n ya a ser d e b a t i d a s e n M e d i n a p o r
los " c o m p a ñ e r o s " del p r o f e t a . La l l a m a d a
e s c u e l a d e M e d i n a es el p u n t o inicial d e t o d a
la ciencia i s l á m i c a ; d e s p u é s , d u r a n t e los cali-
f a t o s d e los o m e y a s , el c e n t r o intelectual del
I s l a m n o f u e D a m a s c o , s i n o Al- R u f a , la
c i u d a d - c a m p a m e n t o del delta del E u f r a t e s .
Los o m e y a s e r a n p u r o s á r a b e s y, e n m a t e r i a s
de n o r m a d e c o n d u c t a y salvación, comple-
t a m e n t e fatalistas. N o m o s t r a r o n g r a n inte-
rés e n e l u c i d a r la n a t u r a l e z a d e Dios o la
e t e r n i d a d del C o r á n : l o ú n i c o q u e les a p a - oípmt iwifr - «S> i nfaluf» fiiW.t^'Bllfl^^lM I S B
s i o n ó f u e la p o e s í a . Y n o h a y d u d a q u e este
d e s d é n p o r las e s p e c u l a c i o n e s teológicas, ''ftlmt^itW iV.u :ít - ...-O (.!••? 'iV
c o n el r e c u e r d o d e su c r i m e n inicial, el m a r -
tirio, e n K e r b e l a , d e l s e g u n d o h i j o d e Alí,
m »V £ •.•>«*•• >> }> .T. _ • »"*'»V
a c a b ó p o r h a c e r tan i m p o p u l a r e s a los o d i a - le Ilinnwvwrtlluv AwÍMf.f'fÍMtK 4IHWl<l»?91Mfc
/LII^.IUA'.IU^^ Úqpvnmort-I^^
d o s o m e y a s , q u e se h i z o inevitable u n c a m b i o
d e dinastía.

La r e v o l u c i ó n la p r e p a r a r o n los d e s c e n -
d i e n t e s d e Abu-1- A b b a s , u n t í o del p r o f e t a .
A b b a s n o a c e p t ó el C o r á n h a s t a q u e e r a in-
m i n e n t e la c o n q u i s t a d e La M e c a p o r M a h o -
m a , p e r o los h i j o s d e A b b a s f u e r o n m a -
h o m e t a n o s d e c o r a z ó n y a d i c t o s a su p r i m o
Alí, q u i e n los inició e n el C o r á n y e n los
p r o b l e m a s de jurisprudencia y teología de
la escuela d e M e d i n a . Las r e l a c i o n e s d e los
a b b a s i d a s c o n los d e s c e n d i e n t e s d e Alí y d e
F á t i m a , o s e a n los a l i d a s , se m a n t u v i e r o n
a m i s t o s a s p o r varios siglos. P o r e s t o , c u a n d o ,
d e s p u é s d e casi u n siglo d e d e s p o t i s m o o m e -
ya, los a b b a s i d a s e m p e z a r o n a c o n s p i r a r , lo
h i c i e r o n c o m o p a r i e n t e s d e Alí y se m a n i f e s -
Página de un manuscrito del
t a r o n c o n t r a r i o s a las i d e a s d e p r e d e s t i n a c i ó n siglo XIII t/ue contiene el libro
y a n t r o p o m o r f i s m o divino que parecían "Al- 'l'asrif", miscelánea mé-
sólo una capital m á s céntrica q u e Damasco,
p r e f e r i r los o m e y a s d e D a m a s c o y sus p a r - dica escrita por el quirurgo
s i n o q u e a d e m á s r e c o g i ó la h e r e n c i a d e las
tidarios. musulmán Abulcasis (Biblio-
a n t i g u a s civilizaciones del Asia, q u e h a b í a n
teca Laurenziana, Florencia).
C o m o e n t o d a s las r e v o l u c i o n e s , los p r i - a c a b a d o p o r r e f u g i a r s e e n Persia. En las Se trata del más famoso y
m e r o s f r a c a s o s p r e p a r a r o n los e s p í r i t u s , y f r o n t e r a s d e Persia h a b í a c o m e n z a d o la r e v o - autorizado tratadista de ci-
p o r Pin, los a b b a s i d a s t r i u n f a r o n el a ñ o 127 l u c i ó n q u e d i o el c a l i f a t o a los a b b a s i d a s ; rugía del mundo islámico,
d e la h é g i r a (año 749 d e J . C.). El g o l p e d e e r a , p u e s , d e e s p e r a r q u e la n u e v a d i n a s t í a que vivió en el siglo X y prin-
e s t a d o se c o n c e r t ó en M e s o p o t a m i a , p e r o sería m á s a b i e r t a , m e n o s e s t r i c t a m e n t e se- cipios del XI.
e s t a l l ó e n el O r i e n t e , e n M e r u , e n t r e Persia m í t i c a q u e la d e los o m e y a s .
y el T u r q u e s t á n . P r o n t o Al- K u l a , c o n sus ve- M i e n t r a s los o m e y a s d e D a m a s c o , b e -
t e r a n o s t e ó l o g o s , se d e c l a r ó c o n t r a los o m e - b i e n d o vino c o m o renegados, h a b í a n cruci-
yas d e D a m a s c o e h i z o su c a í d a inevitable. f i c a d o a los q u e n e g a b a n la p r e d e s t i n a c i ó n
Así es q u e e n Al- K u f a se a c l a m ó p o r califa o la e t e r n i d a d del C o r á n , los a b b a s i d a s d e
a Abu-1- A b b a s , el p r i m e r o d e los a b b a s i d a s . B a g d a d p u b l i c a r o n d e c r e t o s , c u y o t e x t o se
Su h e r m a n o Al- M a n s u r , q u e le s u c e d i ó el c o n s e r v a , a c o n s e j a n d o n o insistir s o b r e la
a ñ o 136-754, ya n o se c o n t e n t ó c o n la v i d a e t e r n i d a d del l i b r o s a n t o , " p o r q u e e n t o n c e s
casi d e c a m p a m e n t o q u e se llevaba e n Al- (dicen] e s t a b l e c e r í a m o s la i g u a l d a d e n t r e el
K u f a y f u n d ó B a g d a d , la n u e v a c a p i t a l , e n C o r á n y Dios".
la r i b e r a del Tigris.
D u r a n t e m á s d e u n siglo, B a g d a d p a r e c i ó
B a g d a d , p a r a la c u l t u r a islámica, n o f u e ser n o s ó l o la m e t r ó p o l i d e la c u l t u r a islá-

179
s e r m á s c a p a c e s d e r e c o n o c e r la v e r d a d . La
m a y o r g l o r i a y el m a y o r p e l i g r o p a r a los
p e n s a d o r e s á r a b e s es el m i s t i c i s m o , q u e sin
d u d a les e s p e r a al final d e sus d í a s y al q u e
llegarán repitiendo millares y millares d e
veces los n o m b r e s d e los a t r i b u t o s d e Dios
o los s u r a s del C o r á n . Este, e m p e r o , n o les
p r i v ó d e leer a Aristóteles y o t r o s f i l ó s o f o s
griegos, a u n q u e en malas traducciones, y
p a r a m a y o r desgracia, tratados apócrifos
a c a b a r o n d e d i f i c u l t a r la c o m p r e n s i ó n d e los
originales.

Avicena, p o r e j e m p l o , dice q u e tuvo q u e


leer la Metafísica d e A r i s t ó t e l e s c u a r e n t a ve-
ces p a r a llegar a c o m p r e n d e r l a , y c o n f i e s a
q u e p a r a él l ú e u n l i b r o d i f i c i l í s i m o d e e n -
tender. Por otra parte, también nos dice que,
c u a n d o e n sus e s t u d i o s h a l l a b a a l g u n a d i -
ficultad grave, i b a a la m e z q u i t a y iras u n a
a b l u c i ó n se p o s t r a b a d o s veces, r o g a n d o a
Alá q u e le i l u m i n a r a s o b r e a q u e l p u n t o d u -
d o s o . H o y c r e e r í a m o s m á s b i e n q u e el a g u a
fresca c o n q u e Avicena se l a v a b a , e n el p a t i o
•.¿¿11*1 J" d e la m e z q u i t a , y a c a s o el e j e r c i c i o h e c h o
p a r a llegar hasta ella s e r í a n los m e d i o s d e
q u e se v a l d r í a Alá p a r a d e s p e r t a r la inteli-
g e n c i a del filósofo. Y q u e d a la d u d a d e si
t a m b i é n p e n s a b a así Avicena, p u e s , p e s e a
e s t a r a l g o i n c l i n a d o al m i s t i c i s m o , le g u s t a b a n
la b u e n a vida y el v i n o , del cual a f i r m a b a
. . '• • '.íi*'¿li<A-¡>t£t '.íi-j ¿ I J Í U M lu3.~ivrr° q u e le e s t i m u l a b a el p e n s a m i e n t o .

N a c i ó Avicena e n la r e g i ó n d e B o k h a r a , el
a ñ o 3 7 0 d e la h é g i r a . Su p a d r e e r a el g o b e r -
n a d o r del l u g a r y p u d o d a r l e al m u c h a c h o
u n m a e s t r o , q u e h a s t a los q u i n c e a ñ o s le e n -
s e ñ ó el C o r á n y la p o e s í a . D e s p u é s , e n a q u e l
r i n c ó n d e O r i e n t e , Avicena c o n t i n u ó sus es-
t u d i o s , c o n la Lógica d e Aristóteles, la Geo-
• d S ^ i & á p * , ¿ J metría d e E u c l i d e s y la Geografía d e T o l o m e o .
Probablemente p a r a tener una profesión con
q u e s u s t e n t a r s e , Avicena se d e d i c ó a la m e -
d i c i n a . Su r e p u t a c i ó n d e m é d i c o le h i z o
Manuscrito atribuid o a Al- v i a j a r , y h a s t a e j e r c i ó el c a r g o d e visir, o
Farabi, filósofo árabe del si- p r i m e r m i n i s t r o , del e m i r d e H a m a d á n . F u e
glo A', f / i r ir adujo a Aristó- e n esta é p o c a d e p r o s p e r i d a d c u a n d o e m p e -
m i c a , s i n o u n l u g a r d e e s t u d i o ú n i c o e n el
teles y trató de conciliar su zó a c o m p o n e r sus g r a n d e s o b r a s , p e r o ya ni
m u n d o . Ya a n t e s los á r a b e s se h a b í a n h e c h o
doctrina con la ortodo.ria la d e s g r a c i a ni las p e r s e c u c i o n e s q u e s u f r i ó
t r a d u c i r , p o r c o p t o s y sirios, a l g u n o s d e los
mahometana (Biblioteca del después p u d i e r o n detener aquella mente.
m á s i m p o r t a n t e s l i b r o s d e la filosofía g r i e g a ;
Monasterio de El Escorial). H a c i a el final d e su v i d a , Avicena f u e a c o g i -
tenían, pues, materiales p a r a trabajar. Con
Al- farahi es considerado el d o p o r el e m i r d e I s p a h á n , a f i c i o n a d o t a m -
ideas aristotélicas y neoplatónicas t r a t a r o n
fundador de la filosofía poli- b i é n a e s t u d i o s filosóficos. Avicena m u r i ó
tica árabe. d e i n t e r p r e t a r el C o r á n , o m á s b i e n , d e c o -
y e n d o d e viaje, p r o b a b l e m e n t e del tifus, el
m e n t a r la filosofía g r i e g a , sin e x c l u i r p o r
a ñ o 1050 d e J e s u c r i s t o ; t e n í a c i n c u e n t a y
c o m p l e t o el l i b r o s a n t o . D e s d e l u e g o , e n t r e
o c h o a ñ o s y d e j a b a u n a c o l e c c i ó n d e escri-
los á r a b e s h u b o e s c é p l i c o s y a t e o s , p e r o n i n -
tos q u e a s o m b r a n t o d a v í a ; t r a t a en ellos d e
g u n o d e sus g r a n d e s p e n s a d o r e s m o s t r ó s e
t o d a s las m a t e r i a s i m a g i n a b l e s , d e s d e D i o s
i m p í o . P o r e j e m p l o , c u a n d o el C o r á n h a b l a
h a s t a los á t o m o s ; su e s t i l o es c l a r o , p r e c i s o ,
d e l t r o n o d e Dios, p a r a los m á s a v a n z a d o s
c o n t u n d e n t e , sin filigranas r e t ó r i c a s . El l i b r o
q u e r í a d e c i r la m a t e r i a p r i m a , p a r a o t r o s e r a
m á s p o p u l a r d e Avicena e n O c c i d e n t e f u e el
la v o l u n t a d d i v i n a , p a r a o t r o s , n o t a n a t r e v i -
Canon, o t r a t a d o d e m e d i c i n a . Se t r a d u j o
d o s , e r a el firmamento, el ú l t i m o cielo o es-
p r o n t o al latín y h a s t a h a c e p o c o m á s d e u n
fera l u m i n a r . T o d o s insistieron e n las d e v o -
siglo s e g u í a e s t u d i á n d o s e e n la f a c u l t a d d e
c i o n e s c o r á n i c a s p a r a m e j o r a r el i n t e l e c t o y

180
m e d i c i n a d e M o n t p e l l i e r . E n el siglo x v i se
i m p r i m i ó o c h o veces, e n V e n e c i a , P a d u a ,
Basilea y R o m a .
Avicena n o c r e e en la p o s i b i l i d a d del va-
cio a b s o l u t o y t a m p o c o c r e e q u e el u n i v e r s o
sea i n f i n i t o ; existe u n p u n t o e n q u e se a c a b a
la m a t e r i a , m á s allá hay el n o ser, q u e n o es
e x a c t a m e n t e el v a c í o . A u n q u e n o lo d i c e
b i e n c l a r o , Avicena c r e e q u e el m u n d o es
e t e r n o y existe p o r n e c e s i d a d ; D i o s d a f o r -
m a a las cosas, las a n i m a y s o s t i e n e , p e r o
p o r u n i n t e r m e d i a r i o , la i n t e l i g e n c i a , q u e
h o y l l a m a r í a m o s e s p í r i t u . El C o r á n Facilita
esta s o l u c i ó n c u a n d o d i c e q u e " l o p r i m e r o
q u e Dios c r e ó es la I n t e l i g e n c i a " , y d e ella
se d e r i v a n , p a r a A v i c e n a , casi m a t e m á t i c a -
m e n t e t o d a s las c o s a s .
Las o p i n i o n e s d e Avicena y d e o t r o s "fi-
lósofos" p r o d u j e r o n una generación más
t a r d e la r e p l i c a d e u n g r a n t e ó l o g o m u s u l -
m á n , el f a m o s o Algazel. Este n a c i ó en la
villa d e T h u s (Persia) el a ñ o 4 5 0 d e la h é g i r a
(1072 d e J . C.). El p a d r e d e Algazel era h i -

Cara anterior y posterior del astrolabio


de Ibraliim ben Said Assahlí,
en el apogeo de la civilización islámica
(Museo .Arqueológico, Madrid).
¡•',n el Medioevo, el astrolabio era
mi instrumento esencial ¡tara estudiar
los movimientos de los planetas
con Jiues científicos o simplemente
para hacer los horóscopos
que pedían todos, sin excepción.

l a d o r d e l a n a , y d e a q u í su n o m b r e , d e r i v a d o
d e gazala, q u e q u i e r e decir hilar. Algazel
a p r e n d i ó los p r i n c i p i o s del D e r e c h o e n su
villa n a t a l y los l u g a r e s vecinos, e j e r c i t á n d o s e
t a m b i é n e n la lógica y la dialéctica, q u e t a n t o
le s i r v i e r o n d e s p u é s p a r a r e f u t a r a los "filó-
s o f o s " . Algazel d e m u e s t r a u n c o n o c i m i e n t o
p r o f u n d o d e los a u t o r e s g r i e g o s ; n o los cita
d e o í d a s , s i n o q u e se ve q u e los ha e s t u d i a -
do y comprendido mejor que muchos otros
d o c t o r e s d e su r a z a . El 485 d e la h é g i r a ,
Algazel f u e n o m b r a d o p r o f e s o r d e la Aca-
demia o escuela de Bagdad.
Allí n o e n s e ñ ó m á s q u e u n o s tres a ñ o s .
El 488 se veía r o d e a d o d e d i s c í p u l o s q u e le
q u e r í a n y gozaba de una reputación envidia-
b l e , p e r o a q u e l g r a n d o c t o r del Islam a b a n -
d o n ó Bagdad pretextando una peregrinación
a La M e c a , a u n q u e , en r e a l i d a d , p a r a e s c o n -
d e r s e d o n d e p u d i e r a m e d i t a r sin n i n g ú n tes-
tigo. P r i m e r o fue a encerrarse en u n a torre
d e la m e z q u i t a d e D a m a s c o . D e s p u é s hizo lo
filósofo árabe m i s m o e n la m e z q u i t a d e O r n a r , •
representado en el l é n , y, p o r fin, e n H e b r ó n , e n el l u g a r d o n d e
i de unu obra del la t r a d i c i ó n s e ñ a l a el s e p u l c r o d e A b r a h a m .
siglo XVI como rey de la me- C o n estas m o r t i f i c a c i o n e s , Algazel se sintió
dicina de la Edad Media
p r e p a r a d o p a r a e f e c t u a r la visita a los l u g a -
(Archivo Bettmann, Nueva
res s a n t o s d e M e d i n a y La M e c a . Al r e g r e s a r
York).
d e Arabia pasó a Egipto, d o n d e pensaba
e m b a r c a r s e p a r a M a r r u e c o s , p e r o f u e invi-
t a d o p o r el califa a r e s t i t u i r s e a B a g d a d y
c o n t i n u a r s u s e n s e ñ a n z a s . H a c i a el final d e
su vida, Algazel volvió a T h u s , su p u e b l o
n a t a l , d o n d e f u n d ó u n a escuela d e D e r e c h o
y u n h o s p i t a l p a r a p e r e g r i n o s . M u r i ó allí
a los c i n c u e n t a y c i n c o a ñ o s , el 505 d e la
hégira.

Algazel n o s h a d e j a d o sus " c o n f e s i o n e s "


e n el l i b r o Al-munquid, o Preservativo del error,
i d e las m á s p r e c i o s a s a u t o b i o g r a -
s q u e c o n s e r v a la h u m a n i d a d . E n ella n o s
e x p l i c a q u e , ya e n su j u v e n t u d , le p r e o c u p ó
el ver q u e las g e n t e s c r e í a n lo q u e se les e n -
s e ñ a b a , sin m o l e s t a r s e , p o r su p a r t e , e n ave-
r i g u a r la v e r d a d . L o s h i j o s d e los c r i s t i a n o s
e r a n c r i s t i a n o s p o r q u e s u s p a d r e s los h a c í a n
c r i s t i a n o s , c o m o los j u d í o s h a c í a n j u d í o s a sus
h i j o s , listo c o n c u e r d a c o n lo q u e , s e g ú n la tra-
d i c i ó n , ya M a h o m a h a b í a d i c h o q u e t o d o s los
h o m b r e s n a c e n m u s u l m a n e s ; s o n los p a d r e s
los q u e e s t r o p e a n a sus h i j o s . Esta v e r d a d
n a t u r a l , la v e r d a d i n n a t a al h o m b r e , y q u e
p a r a M a h o m a e r a el C o r á n , e r a lo q u e p r e o -
c u p a b a a Algazel. ¿ C ó m o e n c o n t r a r l a ? N o
c o n los s e n t i d o s ; la s o m b r a p a r e c e fija y, al
c a b o d e u n r a t o , v e m o s q u e se h a m o v i d o ; las
LA T R A N S M I S I O N A OCCIDENTE DE LA C I E N C I A G R E C O A R A B E

LA CIENCIA La escuela de Salerno. fundada según I;


GRECOARABE
EN OCCIDENTE, y un árabe, traduce y difunde algunas obras im-
SIGLOS X-XII ¡ción isidoriana y la cultura árabo. Sus escrito: portantes de medicina árabe. Constantino el Afri-
a conocer a Europa el ábaco. tabla de cálcul) cano. médico de Cartago. traslada a Sálenlo una
ida en las cifras árabes, y parte de su rica biblioteca de manuscritos médicos
árabes (siglo xi).

LA CIENCIA 1100, Savasorda, judio de Barcelona, tradu- Las Cruzadas tienen poca
GRECOARABE hebreo numerosos escri
EN OCCIDENTE. i que Platón de Tivoli trai directas del
SIGLO XII

que destaca Gerardo de Cremona, a quien se


debe la traducción del árabe de científicos griegos
como Arquimedes, Apolonio. Tolomeo y Aristóte-
les, y científicos árabes como Avicena. Rhazésy
Al-Farabi.

o sistemático por la traducción completa do


is árabes de los manuscritos griegos co-
nocidos en la corte de Federico II en Sicilia (1194-
1250) y en la Escuela de Toledo de Alfonso X el
Sabio (1250-1284).

estrellas p a r e c e n p u n t i t o s d e luz, y l a g e o m e -
tría n o s dice q u e s o n m a y o r e s q u e la T i e r r a .
A l g a z e l b u s c a la c e r t e z a e n l o s e n t e s d o t a d o s
^totntv no\vflUr £ j:
d e r a z ó n y le o c u r r e lo m i s m o : " ¿ A c a s o lo
q u e v e m o s y p e n s a m o s en sueños, no cree-
m o s ser tan cierto c o m o dos y dos son cua-
m<ui? mqi <t 3
tro?...". Y aquí sigue u n párrafo maravilloso
que c o p i a r e m o s p a r a enseñar al lector
espíritus pueden
qué
e n c o n t r a r s e e n t r e los m a -
tu tttutttn* -— k
hometanos,
fin,
alma
para
recobró
entender
a veces tan d e s p r e c i a d o s :
Dios m e curó de mi escepticismo, y mi
la s a l u d y la p a z
"Por

necesarias
la v e r d a d ; é s t a n o v i n o con
m
p r u e b a s , s i n o c o n u n r a y o d e luz q u e D i o s
e n v i ó a m i c o r a z ó n . T a l es la luz, llave d e l
conocimiento, y el q u e cree q u e la p u e r t a
p u e d e abrirse con discursos, e m p e q u e ñ e c e a
Dios. Cuando preguntaron a Mahoma qué

Fragmento con inicial miniada


de un manuscrito del siglo XIII
con una
obra de Constantino el Africano
(Biblioteca Nacional, Ñapóles).
Fue éste un médico arabista del siglo XI
que se dedicó a traducir
las obras de medicina árabes
y con ellas introdujo en Occidente
las técnicas médicas
empleadas por los sabios musulmanes.
q u e r í a significar la p a l a b r a abrir en el ver- p o r fin, los místicos, quienes a s e g u r a b a n
sículo del C o r á n : 'Aquel a quien Dios guía, q u e ellos llegaban a la presencia de Dios y
a b r e su corazón al Islam', r e s p o n d i ó : 'Abrir tenían una directa e inmediata percepción
quiere decir hacer luz en el corazón'. Y cuan- de la verdad.
d o le p r e g u n t a r o n : ' ¿ C ó m o vamos a cono- Algazel, cosa extraña, se afilió a estos úl-
cer esta luz? 1 , r e s p o n d i ó : ' D e j a n d o el lugar timos, d e j ó en paz a teólogos y alegoristas, y
d e e n g a ñ o y volviendo a la eterna realidad '. e m p l e ó t o d a s las energías q u e le d e j a b a n sus
La verdad f u n d a m e n t a l está d e n t r o de noso- éxtasis y enseñanzas p a r a combatir a los filó-
tros, y si buscamos lo q u e ya tenemos, n o sofos. Su libro Tehafut, o Destrucción de los
sólo n o lo e n c o n t r a r e m o s , sino q u e lo p e r - filósofos, es la refutación d e veinte p r o p o s i -
deremos. El q u e busca esta verdad, q u e n o ciones c o m o éstas: 1.a Falsedad de la o p i n i ó n
se debe buscar, n o p u e d e quejarse si n o en- de los filósofos acerca d e la eternidad del
cuentra lo q u e busca". m u n d o . 2. a Falsedad d e las o p i n i o n e s sobre
A continuación, Algazel nos dice q u e la p e r p e t u i d a d de la materia, del t i e m p o y
observó q u e los buscadores de la verdad se del movimiento, e n las q u e se p r o p o n e sobre
dividían e n c u a t r o clases: la p r i m e r a , los t o d o c o m b a t i r a Avicena y Aristóteles. Pero
teólogos, q u e se decían guiados p o r la fe y otras son de carácter más m u s u l m á n , c o m o
la razón. Después venían los "alegoristas", q u e Dios n o tiene c u e r p o , q u e Dios n o se
q u e se creían en posesión de u n secreto sen- conoce a sí m i s m o , q u e n o h a b r á juicio
tido q u e les había revelado un ser infalible. final, etc. Algazel presenta bien claras, a
H a b í a después los filósofos, q u e decían veces excesivamente, las o p i n i o n e s q u e otros
a c e p t a r sólo p r u e b a s lógicas y absolutas, y, h a n e n u n c i a d o con salvedades, y q u e él se

184
LA A S I M I L A C I O N DE LA C I E N C I A G R I E G A POR LOS A R A B E S

los conocimientos griegos

El Imperio b
base de su civilización, c<
punciones alejnndriniis, p
que la filosofía y la ciencii

1
IA CIENCIA GRIEGA EN ORIENTE:
EL ESTADO SASANIDA
Coincidiendo con la crisis religiosa que enfrenta el monofisismo Los herejes nestorianos expulsados por los bizantinos de sus te-
or Siria y Palestina a la ortodoxia bizantina, la cultura rritorios, profesores y teólogos en su mayoría, difunden la culturu
o-orientnl so desheleniza y retrocedo ol uso del griego, griega en Persia. El cierre de la Escuela de Atenas por Justiniano en
remplazado por las lenguas nacionales, hebreo y arair>oo:se multi- el año 525 obliga a los intelectuales todavía paganos a exilarse y
plican las traducciones de obras clásicas a los idiomas orientales. muchos do ellos se refugian tambión en el estado sasánida. Jundis-
hapur os uno de los principales centros de difusión de U
griega en Oriente.

Por sus conquistas, los árabes entran en contacto con el pensamiento griego en Per-
sia, Siria, Palestina y Egipto. Los profesores y las escuelas de Jundishapur son
protegidos por el califa do Bagdad y en aquella población persa empieza la gran tarea
de traducción de los libros griegos al árabe, en parto facilitada por la existencia de

Dn la ciencia medieval europea, parte de un


la ciencia griega y de una comprensión y
a los sabios árabes a los más ilustres alejan-

La obra cumbre d En la parte occidental del Imperio


1
sólo existen traducciones parcia-
la matemática de su tiempo, tanto los les al latin de la obra euclidiana.
hallazgos del propio Euclides como todo
ol saber matemático de sus predeceso-
res. que él había recopilado v sistemati-
zado pacientemente. Los Elementos' En Oriente, los árabes tr
a su lengua y comentan los
in clasificarse "Elementos".
la geometría Primera mitad del siglo ix: tra-
en abstracto ducción de Al-Hayyay ibn Yusuf
is de Al-Kindi y Mu-
)ro VI aplica
plano; los libros VII. Segunda mitad del siglo
nprenden la teoría de los s de Al-Mahani, .
y Tabít ibn Qurra,
finalmente, los
libros XI. XII y XIII tratan de la geome- Primera mitad del siglo x: traduc-
tría del espacio. Todo este gran edificio ción de los comentarios al libro X
de los "Elementos", de Pappus.
sabio alejandrino.
Segunda mitad del siglo x y pri-
mera mitad del xi: nueva traduc-
ción del libroX por IMasif ibn Yumn
y estudios de Abu Ya'faral-Hozim
para Euclides e y Muhaminad ibn' Abd al-Baqi
al Bagdadí.
segundos.)

Hasta el siglo x
Occidente manuscritos que reco-
gían la formulación de los teore-
mas de Euclides, pero no sus
demostraciones. No existia nin-
guna traducción completa de los
"Elementos".

185
d i s p o n e a c o m b a t i r . Su p r i n c i p a l e n e m i g o ,
p a r a él el m á s p e l i g r o s o d e los " f i l ó s o f o s " ,
es Avicena. H e a q u í , p o r e j e m p l o , a l g u n o s
d e los a r g u m e n t o s d e Algazel e n el Tehafut.
La c u e s t i ó n d e la e t e r n i d a d d e la m a t e r i a
lá resuelve v a l i é n d o s e d e la m i s m a o p i n i ó n
d e Avicena, q u e el m u n d o es l i m i t a d o e n es-
p a c i o . "Si, s e g ú n Avicena, hay u n lugar d o n -
d e n o hay n a d a , t a m b i é n p u d o h a b e r u n
tiempo e n q u e n o h a b í a n a d a . " Algazel n o
n o s c o n v e n c e , p e r o p o r lo m e n o s d e s c u b r e
u n p u n t o flaco d e las ideas d e Avicena. Si
sus a d v e r s a r i o s le d i c e n q u e d e este m o d o
Dios p o d í a c r e a r al m u n d o u n o , d o s , tres,
varios a ñ o s a n t e s , Algazel r e s p o n d e q u e sí,
y q u e p o d í a h a b e r l o h e c h o u n a , d o s , tres ve-
ces m á s g r a n d e . E s t o t r a e n a t u r a l m e n t e el
g r a n p r o b l e m a d e l o p o s i b l e y l o real, q u e
t a n t o h a b í a p r e o c u p a d o a los m u s u l m a n e s .
S e g ú n los filósofos, lo p o s i b l e ya es p a r a
D i o s , y h a s t a ya es p a r a la i n t e l i g e n c i a ; p o r
t a n t o , si este m u n d o p o d í a s e r m á s viejo y
más grande, debe serlo p a r a Dios y también
p a r a la i n t e l i g e n c i a . " O s e q u i v o c á i s - d i c e
Algazel—; y o n o p u e d o i m a g i n a r u n a c o s a d e
c o l o r b l a n c o o n e g r o , y es p o s i b l e q u e la
c o s a sea n e g r a o b l a n c a , p e r o el n e g r o , o el
b l a n c o , sin la cosa, n o s o n p o s i b l e s . " S e g ú n
Algazel, los " f i l ó s o f o s " r e p l i c a b a n : "Y si to-

El filósofo árabe Averroes


en un detalle de una tabla de
/'ra Angélico que representa
la escuela de Santo Tomás
de Aquino (Galería Antigua y
Moderna, Florencia).' /la-
sándose en sus predecesores,
Averroes reelaboró los postu-
lados de la Jilosofía clásica y
les dio un carácter islámico.

Mapamundi de al- Edrisí,


geógrafo árabe del siglo A'//.
En él se hallan representadas
Europa, Asia y Africa; las
zonas oscuras corresponden
a las cadenas montañosas
(Biblioteca Nacional, París).

186
d o s los h o m b r e s m u r i e r a n , y la inteligencia p o d r á d e c i r s e lo m i s m o d e los a t r i b u t o s d e
q u e p i e n s a estas p o s i b i l i d a d e s d e s a p a r e c i e r a , f u e r z a , p o d e r , b o n d a d , justicia, belleza, etc.,
¿ c r e é i s q u e d e s a p a r e c e r í a n las ideas d e b l a n - q u e le s u p o n e m o s .
co y n e g r o ? " . Algazel r e s p o n d e c o n u n sí r o - P o r fin, Algazel se p r o p o n e r e f u t a r a los
t u n d o : " L a s ideas g e n e r a l e s s ó l o existen e n el filósofos e n esta c u e s t i ó n s i e m p r e c a n d e n t e :
espíritu, c o m o posibilidades, y necesitan d e C u e s t i ó n 17. Q u e es i m p o s i b l e p r o b a r q u e
u n o b j e t o p a r a i n c o r p o r a r s e e n él". A u n el a l m a del h o m b r e sea u n a s u s t a n c i a e s p i r i -
p e n s a d o r c o m o Algazel el p r o b l e m a d e los t u a l y q u e subsiste sin el c u e r p o . Las r a z o -
atributos d e Dios n o había de arredrarle. n e s q u e d a Algazel s o n t r a d i c i o n a l e s e n la
Algazel n o se e s p a n t a d e la m u l t i p l i c i d a d d e filosofía á r a b e : el a l m a es indivisible, n o
c u a l i d a d e s q u e la inteligencia h u m a n a d e s - p u e d e s e r u n c u e r p o ; e n c a m b i o , el c u e r p o
c u b r e e n D i o s ; éstas n o le d e s h a c e n e n p a r - es divisible h a s t a el i n f i n i t o . E n c u a r e n t a
tes, su u n i d a d es e s p i r i t u a l , n o g e o m é t r i c a a ñ o s n o q u e d a ni u n a p a r t í c u l a del c u e r p o
y divisible. H a s t a Avicena r e c o n o c i ó q u e q u e n a c i ó d e la m a d r e ; los s e n t i d o s n o se
Dios c o n o c e la c r e a c i ó n , su p r o p i a o b r a , y d a n c u e n t a d e sí m i s m o s , v e n , t o c a n , s i e n t e n ,
este c o n o c i m i e n t o ya es a l g o q u e n o es El p e r o n o se s i e n t e n ellos; e n c a m b i o , el c o -
m i s m o , e s t á e n El sin d i v i d i r l e ; p o r t a n t o , n o c i m i e n t o se c o n o c e a sí m i s m o . M á s t o d a -

•aÜA.^ W a r c W \ e & ítucs-^"


l j o é m&t<*
5 Vla6tucm|.

<FÍ<a
J p*5 3 * !

Una página de los "Cánones


de Al- Hatear, libro cientí-
fico fie un sabio musulmán,
í * í i m i t e reproducido en la España
cristiana del siglo XIII (Bi-
blioteca del Arsenal, París).
[V l i Á &
X
187
v- AffCf'-*- I l - |
LOS ARABES EN LA HISTORIA GENERAL DE LA CIENCIA

i árabo recoge elementos griegos, influencias iranias <


>s historiadores, al subrayar la importancia de uno u o
le la ciencia árabe y su papel en el progreso científicc

diferencia de los griegos, los ára


s no habrían rechazado 1a oxpe
íentación y la práctica; su cien

te el legado griego.

La adopción por los árabes de i Los médicos árabes, que se harán


dosarrollo de la trigonometría \
álgebra, desconocidas de los gi

Los enfermos son recogidos en


hospitalos costeados por el estado,
y la asistencia quirúrgica y farma-
cológica alcanza un nivel que
Europa 110 conocerá hasta el si-

Vista posterior de la mezqui-


ta de Isa-Bey en Efeso, Tur-
quía, construida en el si-
glo XIV. Esta pequeña ciudad,
famosa ya en tiempos de los
rom anos, tiene imponentes
ruinas que declaran su
larga pertenencia al poder
m usulm án.

vía, los " f i l ó s o f o s " d i c e n q u e el c u e r p o c a m -


b i a c o n t i n u a m e n t e ; e n c a m b i o , el a l m a sigue
s i e n d o la m i s m a . P e r o Algazel c r e e q u e la
d i f u s i ó n d e la m a t e r i a n u e v a e n la m a t e r i a
vieja d e j a s i e m p r e u n r e s i d u o d e lo o r i g i n a l .
A d e m á s , el a l m a se d a c u e n t a d e las ideas
u n i v e r s a l e s , d e c o n c e p t o s q u e n o s o n los
cuerpos m i s m o s ; verá una m a n o corta y
blanca, y una m a n o grande y negra, y ambas
le d a r á n la i d e a g e n e r a l d e los c i n c o d e d o s ,
c o n sus u ñ a s , d e la f l e x i b i l i d a d d e la m a n o ,
q u e n o es la l a r g a ni la c o r t a , etc.
M á s i m p o r t a n t e a c a s o q u e el Tehafut, d e
Algazel, es su g r a n t r a t a d o escolástico Ihya,
o Renovación de las ciencias religiosas, q u e f u e
p a r a los m u s u l m a n e s lo q u e la Sumiría Tlieolo-
gica, d e S a n t o T o m á s d e A q u i n o , f u e m á s
t a r d e p a r a los c a t ó l i c o s . L a Ihya incluye, en
r e a l i d a d , t o d o s los a s p e c t o s d e la v i d a reli-
g i o s a . P e r o Algazel n u n c a r e n e g ó d e la cien-
c i a : "El s a b i o - d i c e - es a q u e l q u e te a y u d a
c u a n d o le necesitas, y, e n c a m b i o , él n u n c a
n e c e s i t a a y u d a d e n a d i e " . P a r a Algazel, e n
sus p o s t r i m e r í a s , la v e r d a d e r a ciencia es la
d e los sujíes, o m í s t i c o s á r a b e s . H a c e u n a
g r a n d i s t i n c i ó n e n t r e el Imán, o p r á c t i c a s r e -
ligiosas, y el Islam, o e n t r e g a c o m p l e t a del
a l m a a D i o s . Algazel p a r e c e a c e p t a r la peli-
g r o s a división d e los creyentes e n d o s clases:
la d e los q u e p u e d e n llegar a c o n o c e r s ó l o
a l g u n a s v e r d a d e s e l e m e n t a l e s y r e c i t a r el
t e x t o del C o r á n l i t e r a l m e n t e , y la d e los q u e a d m i r a d o al j o v e n filósofo, cjue n o e s p e r a b a
p u e d e n p e n e t r a r c a d a vez m á s en las p r o f u n - encontrar tanta erudición en un gobernante
d i d a d e s d e la religión p r e d i c a d a p o r M a h o m a . d e t a n t a i m p o r t a n c i a . " O t r o d í a — a ñ a d e Ave-
A la m u e r t e d e Algazel, el I s l a m p a s a b a rroes-, Aben-Tofail m e llamó para decirme
p o r u n a crisis t e r r i b l e e n O r i e n t e . J e r u s a l é n q u e el e m i r se l a m e n t a b a d e la o s c u r i d a d
h a b í a s i d o ya t o m a d a p o r los c r u z a d o s . N o d e l t e x t o d e Aristóteles y d e sus c o m e n t a d o -
es d e e x t r a ñ a r , p u e s , q u e el q u e se a t r e v i ó a res. D e s e a b a q u e D i o s e n v i a r a a a l g u i e n q u e
d e f e n d e r a los " f i l ó s o f o s " c o n t r a los a t a q u e s p u d i e s e llegar a c o m e n t a r los l i b r o s d e Aris-
ele Algazel n a c i e s e ya e n E s p a ñ a , el a ñ o 1126 tóteles y e x p l i c a r su s e n t i d o , p a r a h a c e r l o s
d e n u e s t r a e r a ; éste n o es s i n o el f a m o s o a s e q u i b l e s a las g e n t e s . —Tú tienes la p r e -
I b n R o c h d , c o n o c i d o e n las escuelas cristia- p a r a c i ó n n e c e s a r i a p a r a h a c e r este t r a b a j o
nas c o n el n o m b r e e s p a ñ o l i z a d o d e A v e r r o e s . - d i j o A b e n - T o f a i l - ; yo quisiera hacerlo,
Su p a d r e y su a b u e l o h a b í a n s i d o cadíes, o p e r o m e l o i m p i d e n mi a v a n z a d a e d a d y la
jueces, d e C ó r d o b a y h a b í a n e s c r i t o o b r a s a t e n c i ó n q u e d e b o p r e s t a r al servicio del
i m p o r t a n t e s de Derecho. C o n estos antece- emir." Desde aquel m o m e n t o , Averroes n o
dentes.ya n o p u e d e s o r p r e n d e r q u e Averroes d e j ó d e d e d i c a r s e a la t a r e a q u e le h a b í a p r o -
estudiara teología, medicina y jurisprudencia. p u e s t o A b e n - T o f a i l , y d e a q u í sus c o m e n t a -
r i o s d e Aristóteles.
G o b e r n a b a e n t o n c e s la m a y o r p a r t e d e la
E s p a ñ a á r a b e el e m i r a l m o h a c l e Yusuf y e r a Esta a n é c d o t a da m á s i m p o r t a n c i a , a c a s o ,
g r a n a m i g o d e é s t e el filósofo A b e n - T o f a i l . a A b e n - T o f a i l q u e su p r o p i a n o v e l a del r o -
A v e r r o e s f u e p r e s e n t a d o al e m i r p o r A b e n - b i n s ó n m u s u l m á n a u t o d i d a c t o q u e ya l i e m o s
T o f a i l y la p r i m e r a p r e g u n t a q u e los d o s le m e n c i o n a d o . N o sólo Aben-Tofail s u p o des-
h i c i e r o n f u e si el cielo e r a c r e a d o o e t e r n o . c u b r i r a A v e r r o e s p a r a la o b r a gigantesca d e
A b e n - T o f a i l n o e r a ni u n a f i c i o n a d o ni u n c o m e n t a r a Aristóteles, s i n o q u e él m i s m o
aprendiz; había escrito p o c o antes un libro d i c e q u e se s e n t í a c a p a z d e h a c e r l o , y lo h u -
m í s t i c o - e n c i c l o p é d i c o e n el q u e c o n t a b a b i e r a h e c h o d e n o i m p e d í r s e l o sus a ñ o s y sus
c ó m o u n m u c h a c h o , a b a n d o n a d o e n u n a isla otras ocupaciones. Aben-Tofail contribuyó
d e s i e r t a , d e s c u b r í a p o c o a p o c o , sin a y u d a p r o b a b l e m e n t e a q u e el e m i r c o n f i a r a a Ave-
a j e n a , t o d a la ciencia, t o d o el s a b e r , h a s t a r r o e s el c a r g o d e juez d e Sevilla, q u e d e s e m -
las v e r d a d e s del C o r á n y las p r á c t i c a s d e los p e ñ ó del 1169 al 1171. A l g u n a o t r a m i s i ó n
sufíes. El e m i r , p a r a a n i m a r a A v e r r o e s , e m - oficial o b l i g a r í a p o c o d e s p u é s a A v e r r o e s a
p e z ó a d i s c u t i r la m i s m a c u e s t i ó n d e la e t e r - v i a j a r , p o r q u e el 1178 e s c r i b i ó en M a r r u e c o s
n i d a d d e los cielos c o n A b e n - T o f a i l , d e j a n d o u n o d e sus libros, el 1179 e s t a b a d e r e g r e s o

A saín blea ni tísico - literaria


en un jardín de las inmedia-
ciones de Bagdad, miniatura
de un manuscrito árabe del
sii/lo XIII (Biblioteca Nacio-
nal, París). Ajeno a esta vida
del espíritu, el campesino de
la parte superior aguija a los
bueyes que mediante la noria
sacan el agua que riega el

189
A V I C E N A Y LA I Z Q U I E R D A A R I S T O T E L I C A

Ernst Bloch, filósofo e historiador, estableciendo un paralelo con la posteridad de Hegel. ha elaborado la
distinción de una izquierda aristotélica, de una línea que de Aristóteles no conduce a la escolástica cris-
tiana y a Santo Tomás, sino a Giordano Bruno a través do los filósofos islámicos.

ARISTOTELES (384-322 a.de J. C.)


en sí, acoge pasivamente lo forma y se deja modelar
por ella, al igual que la cera. La forma es la única que
tiene un papel activo, y la forma suprema, el acto puro
totalmente inmaterial es el "nous". el Dios puramente
intelectual.

irrollo del estratonismo c

AVICENA (980-1037)

AVICEBRON (primera mitad del siglo Xl) Radicalización de la naturalización avicénica hasta

AVERROES (1126-1199) La materia está dotada do ui


tenor y uniformemente viva:
naturans". sin necesidad de

Miniatura de un tratado de GIORDANO BRUNO (1548-1600) Giro del teísmo hacia un materialismo panteísta y con-
astrología árabe con la repre- fecundada. una. infinita como el antiguo Dios, pero
sentación del signo del zodía- sin un más allá.
co Tauro y, debajo, los pla-
netas del sistema solar (Bi-
blioteca Nacional, París).

e n Sevilla y el 1182 p a s ó d e n u e v o a M a r r u e -
cos. Allí sirvió a Y u s u f c o m o m é d i c o d e cá-
m a r a , en l u g a r d e A b e n - T o f a i l . M á s t a r d e le
e n c o n t r a m o s ejerciendo de gran cadí de Cór-
d o b a . La b u e n a f o r t u n a d e A v e r r o e s d u r ó
h a s t a su vejez; c u a t r o a ñ o s a n t e s d e m o r i r ,
los r e a c c i o n a r i o s d e la c o r t e c o n s p i r a r o n
c o n t r a el g r a n p e n s a d o r y c o n s i g u i e r o n q u e
f u e s e d e s t e r r a d o a la villa d e L u c e n a . P e r o
A v e r r o e s , h a c i a el final d e su v i d a , r e c o b r ó
el f a v o r del e m i r Y a c u b - A l m a n z o r , h i j o d e
Yusuf, y regresó a M a r r u e c o s , d o n d e m u r i ó
el a ñ o 1198 (el 576 d e la h é g i r a ) .
C o m o se ve, A v e r r o e s es e s e n c i a l m e n t e
u n p e n s a d o r d e l I s l a m o c c i d e n t a l . T o d a su
vida d i s c u r r i ó e n t r e E s p a ñ a y M a r r u e c o s , y
ni a u n f u e a O r i e n t e p a r a e f e c t u a r la casi in-
d i s p e n s a b l e visita a los s a n t o s l u g a r e s . U n a
l e y e n d a se h a f o r m a d o s o b r e A v e r r o e s , q u e
lo p r e s e n t a c o m o h o m b r e i m p í o y p e l i g r o s o ;
los escolásticos, así c r i s t i a n o s c o m o m u s u l -
m a n e s , l o c o n s i d e r a r o n c o m o su m a y o r e n e -
m i g o . M u c h a s veces, e n la E d a d M e d i a , se
r e p r e s e n t ó a la T e o l o g í a c o m o u n a m a t r o n a
s e n t a d a q u e tiene a A v e r r o e s a p l a s t a d o b a j o
sus pies. U n o d e los p r i n c i p a l e s e s f u e r z o s
d e la escolástica f u e el c o m b a t i r el a v e r r o í s -
m o . La a c t i v i d a d i n t e l e c t u a l d e A v e r r o e s es
v e r d a d e r a m e n t e p a s m o s a . El "cadí d e C ó r -

190
Ilustración de un manuscrito
árabe del siglo XIV sobre His-
toria Natural (Biblioteca del
Monasterio de El Escorial).

d o b a " tuvo t i e m p o p a r a escribir u n centenar filósofos. " A u n a r i e s g o d e e x p o n e r n o s a la ira


d e l i b r o s y folletos, e n t r e los q u e hay t r a - d e los p e r s e g u i d o r e s d e n u e s t r a m a d r e , la
tados d e medicina, jurisprudencia y astrono- filosofía, v a m o s a d e s c r i b i r el v e n e n o e s c o n -
m í a . Sin e m b a r g o , l o m á s i m p o r t a n t e d e la d i d o e n el Tehafut d e Algazel", d i c e A v e r r o e s
o b r a d e A v e r r o e s s o n sus c o m e n t a r i o s s o b r e e n su p r ó l o g o . Y e s t o se t e n í a q u e p a g a r
Aristóteles, a q u i e n l l a m a "el m á s s a b i o d e c a r o ; a t a c a r a Algazel, en el I s l a m , e r a c o m -
los g r i e g o s ; el q u e D i o s h a p r e d e s t i n a d o a la b a t i r al m á s a l t o r e p r e s e n t a n t e d e s u t e o l o g í a
p e r f e c c i ó n ; el q u e D i o s h a e l e v a d o al m á s ortodoxa.
alto g r a d o de excelencia h u m a n a " . Averroes A v e r r o e s , c o m e n t a n d o a Aristóteles, rei-
dice q u e la d o c t r i n a d e Aristóteles es la ver- v i n d i c ó a l g u n a s d e las ideas d e Avicena q u e
d a d s o b e r a n a , y su i n t e l i g e n c i a el límite d e la h a b í a q u e r i d o " d e s t r u i r " Algazel. A u n q u e
i n t e l i g e n c i a h u m a n a , etc. A v e r r o e s n o s i e n t e p o r Avicena u n a g r a n
A v e r r o e s c o m e n t ó tres veces a Aristóteles, a d m i r a c i ó n , p u e s le e n c o n t r a r í a t í m i d o ,
e n los g r a n d e s c o m e n t a r i o s , los m e d i a n o s y t r a n s i g e n t e , a c o m o d a t i c i o c o n su mística
los p e q u e ñ o s . Su estilo, a veces a l g o d i f u s o , final, le sigue e n a l g u n a s d e sus o p i n i o n e s .
P a r a A v e r r o e s , c o m o p a r a A r i s t ó t e l e s y Avi-
tiene m u c h o s t o q u e s d e c a r á c t e r p e r s o n a l ;
c e n a , la m a t e r i a es e t e r n a . " S e g ú n A r i s t ó t e -
n o es el d i s c u r s o l a c ó n i c o , fibroso, d e Avice-
les - d i c e Averroes—, n a d a sale d e la n a d a .
na ni la c l a r i d a d e l e g a n t e d e Algazel, p e r o si
Si Dios p u d i e s e h a c e r p a s a r a l g o d e la n a d a
A v e r r o e s se lee c o n d i f i c u l t a d , se m e d i t a c o n
al ser, t a m b i é n h a r í a p a s a r las cosas del s e r
p r o v e c h o . T a m b i é n se h a a c u s a d o a A v e r r o e s
a la n a d a . " La m a t e r i a n o h a s i d o e n g e n d r a -
d e e s c o n d e r sus v e r d a d e r a s i n t e n c i o n e s p a r a
d a , es i n c o r r u p t i b l e ; si h u b i e s e s i d o c r e a d a ,
darnos, encubierta c o n u n r o p a j e de piedad
habría habido u n tiempo en q u e fuese posi-
c o r á n i c a , la d o c t r i n a del m á s c o m p l e t o es-
b l e q u e n o existiera. Y p a r a lo E t e r n o , t o d o
c e p t i c i s m o filosófico. P e r o e s t o n o es v e r d a d : l o p o s i b l e ya es. D i o s n o c o n o c e las c o s a s
A v e r r o e s p u d o ser u n h e r e j e , n u n c a u n h i p ó - p a r t i c u l a r e s , los i n d i v i d u o s ; c o n o c e s ó l o las
crita. Se l a n z ó a c o m b a t i r al g r a n Algazel c o n leyes g e n e r a l e s ; si c o n o c i e s e l o i n d i v i d u a l ,
u n t r a t a d o q u e l l a m ó Tehafut el-tehafut, o c o n o c e r í a el m a l d e c a d a u n o y sus c a m b i o s ;
Destrucción de la Destrucción, p a r a r e b a t i r el El c a m b i a r í a t a m b i é n . A v e r r o e s , c o m o Aris-
a t a q u e d e Algazel l l a m a d o Destrucción de los

191
LOS A R A B E S Y LAS C I E N C I A S N A T U R A L E S
La preocupación de los árabes por co- mán al- Nasir ( 9 1 2 - 9 6 1 ) . Éste recibió de en el Dioscórides y de los cuales aún no
nocer las ciencias de la antigüedad fue Romano ( 9 5 9 - 9 6 3 ) , emperador de Cons- conocían su equivalencia en árabe. El más
extraordinaria y no repararon en medios, tantinopla - c r e o que en el año 9 4 8 (s/c)-, interesado y diligente entre todos estos
con tal de hacerse con los textos origina- una carta acompañada de presentes de médicos era el judío Hasday ben Saprut,
les dé los principales pensadores que gran valor, entre los cuales se encontra- quien así procuraba complacer a A b d al-
les precedieron, prescindiendo de razas y ba el tratado de Dioscórides; estaba Rahmán al Nasir. El monje Nicolás pasó a
religiones. En la Bagdad del siglo x se iluminado con magníficas miniaturas ser para él la persona más íntima y apre-
tradujeron al árabe textos sánscritos, griegas y escrito en griego (igriqi), que es ciada. Así pudo comentar los nombres de
griegos, siríacos y latinos. Pero la traduc- la misma lengua que el jonio (yunani). Este los simples del libro de Dioscórides que
ción de textos científicos es normalmente envío contenía también la Historia de aún eran desconocidos. Fue el primero que
difícil y por ello esas primeras versiones Orosio relativa a los hechos pretéritos, a fabricó en Córdoba la teriaca llamada
fueron corregidas y revisadas varias veces. los antiguos reyes y a los acontecimientos faruq, d e t e r m i n a n d o las plantas que en-
importantes. El emperador Romano decía tran en su composición. En este tiempo
El ejemplo más célebre, a este respecto,
en su carta a al- Nasir: ' N o puede obtener- vivían en Córdoba otros médicos consa-
es el ocurrido con la Materia médica
se provecho del Dioscórides más que con grados a esclarecer los nombres de los
de Dioscórides, cuyos detalles conocemos
un traductor avezado en el griego y que simples que figuraban en dicho libro.
con precisión gracias al médico cordobés
conozca las propiedades de esas drogas. Entre ellos se encontraban M u h a m m a d ,
Ibn Chulchul. Este nos dice: "El tratado de
Si tienes en tu país a alguien que reúna conocido por al- Sachchar (el Herbolario);
Dioscórides fue traducido en Bagdad en la
estas dos condiciones, sacarás, o h rey, otro llamado al- Basbasí y Abu Utmán al-
época abbasí, bajo el reinado de Chafar
la mayor utilidad de este libro. En lo que Chazzar, apodado el Ibicenco; el médico
al- M u t a w a k k i l ( 8 4 7 - 8 6 1 ) , por Esteban,
se refiere al libro de Orosio, tienes latinos M u h a m m a d ben Said, A b d al- Rahmán ben
hijo de Basilio, del griego al árabe. Esta
en tus estados que pueden leerlo en su Ishaq ben al- Haytam y A b u Abd Allah al-
traducción fue corregida por el traductor
lengua original; si se lo entregas lo tradu- Saqillí (Siciliano), que hablaba griego y
Hunayn ben Ishaq (lohannitius, muerto en
cirán al á r a b e ' " . conocía las propiedades de las drogas".
8 7 7 ) , que la arregló y la hizo manejable.
Las palabras griegas que Esteban cono-
Ibn Chulchul sigue: "Entre los cristia- Termina Ibn Chulchul: "Todos ellos eran
cía en árabe las tradujo, pero aquellas
nos de Córdoba no había nadie capaz de contemporáneos del m o n j e Nicolás y los
que no sabía las transcribió en su forma
leer el griego, que es el jonio antiguo. En conocí al m i s m o t i e m p o que a éste, en la
griega, dejando en manos de Dios el que
consecuencia, el libro de Dioscórides se época del reinado de al- Mustansir ( 9 6 1 -
más tarde hiciera que encontraran alguien
quedó en la biblioteca de A b d al- Rahmán 9 7 6 ) . Yo era en esa época su amigo.
que las supiera y pudiera traducirlas al
al- Nasir sin ser traducido al árabe: estaba Nicolás murió al principio del gobierno de
árabe, ya que los nombres de los medica-
en al- Andalus, pero sus habitantes utiliza- este califa. Gracias a las investigaciones
mentos se deben a una convención de las
ban la traducción de Esteban procedente hechas por este grupo de módicos acerca
gentes de u n m i s m o país, que son quie-
de Bagdad. Cuando al- Nasir contestó a de los n o m b r e s de los simples del libro de
nes los conocen y les dan el nombre, bien
Romano, le pidió que le enviase a alguien Dioscórides, llegaron a conocerse en Cór-
por derivación, bien por un acuerdo tácito.
que hablara el griego y el latín, para que doba, y en t o d o al-Andalus, las verdaderas
Esteban dejó la sinonimia para quienes
enseñara estas lenguas a sus esclavos, propiedades de las plantas, desaparecien-
conocieran las drogas que él desconocía,
que así se transformaron en traductores. do las dudas que se tenían. Se supo exac-
pues así recibirían los nombres que les
El emperador Romano le envió entonces tamente de sus virtudes y el modo exacto
convinieran desde el instante en que
a un monje llamado Nicolás, que llegó a c o m o debía pronunciarse su nombre sin
fueran reconocidas".
Córdoba en el año 3 4 0 / 9 5 1 (s/'c). Había cometer errores, excepción hecha de un
entonces en esta ciudad una serie de mé- pequeño número, tal vez diez, lo cual ca-
Ibn Chulchul añade: "Esta traducción de dicos que investigaban, indagaban y bus- rece de importancia".
Esteban llegó a al- Andalus y fue utilizada caban con avidez el m o d o de determinar
tanto por los andaluces c o m o por los los nombres de los simples que figuraban
orientales hasta la época de A b d al- Rah- J. V.

t ó t e l e s , c r e e q u e las f o r m a s s o n el r e s u l t a d o había dado a Dios el c a l i f i c a t i v o d e Suma


d e l m o v i m i e n t o d e la m a t e r i a . E l m o v i m i e n - Inteligencia, y estas palabras, mal entendi-
to ocasiona el tiempo y las f o r m a s . Toda das por l o s á r a b e s , les l l e v a r o n a imaginar
c r e a c i ó n se r e d u c e a m o v i m i e n t o , y c o r n o el u n a p r i m e r a causa i n t e r m e d i a entre Dios y lo
m o v i m i e n t o es u n a s u c e s i ó n d e e s t a d o s , esta creado, que e s la I n t e l i g e n c i a , que conoce
s u c e s i ó n o r i g i n a e l t i e m p o . Si n o s e m o v i e - y mueve l a m a t e r i a . Y h e a q u í el i n e v i t a b l e
r a n a d a , n o h a b r í a t i e m p o , y así el g r a n a r - intermediario, casi como el V e r b o divino,
g u m e n t o d e A l g a z e l c o n t r a la e t e r n i d a d d e la q u e los m u s u l m a n e s t e n í a n t a n t o e m p e ñ o e n
materia cae por su base. Si la m a t e r i a es evitar... D i o s , la I n t e l i g e n c i a y las leyes del
e t e r n a , es e t e r n o el m o v i m i e n t o , y lo e s t a m - universo, como causas, encadenadas una
b i é n el t i e m p o p a s a d o y el t i e m p o p o r v e n i r . con otra, sin límite, sin fin..., mueven la
m a t e r i a y le d a n forma.
Falta todavía explicar c ó m o Dios da mo-
v i m i e n t o y, p o r t a n t o , f o r m a la m a t e r i a e t e r - Acostumbrados la m a y o r í a de nosotros
na. Para Aristóteles, Dios, alejado de la a la t e o l o g í a e s c o l á s t i c a , s e g ú n la c u a l Dios
C r e a c i ó n , es c o m o u n i m á n al q u e van, atraí- e s u n a r t í f i c e q u e c r e ó a l m u n d o d e la n a d a ,
d a s p o r e l a m o r , t o d a s las c o s a s . A El a s p i - se n o s hace difícil e n t e n d e r esta "creación
r a n , h a c i a Él se m u e v e n , las a t r a e sin c o n o - aristotélica" del cadí de Córdoba. Pero las
cerlas, es c o m o u n rey q u e d a ó r d e n e s sin g e n t e s d e la E d a d M e d i a , t a n t o musulmanes
conocer a sus subditos. Pero Aristóteles c o m o judíos, c o m o cristianos, eran m u y da-

192
d a s a la e s p e c u l a c i ó n , y n o se a r r e d r a b a n versal se h a r e u n i d o al u n i v e r s o y lo p a r -
p o r el d e s a r r o l l o l ó g i c o d e los p r o b l e m a s . t i c u l a r h a e n t r a d o e n la p a r t e . . . " , l o q u e ,
C o m o lo h a h e c h o n o t a r Asín, h a s t a S a n t o e n el v o c a b u l a r i o t e o l ó g i c o d e la é p o c a , sig-
T o m á s d e A q u i n o , e n su o p ú s c u l o De aeter- n i f i c a b a q u e el a l m a h a b í a i n g r e s a d o e n el
nitate mundi, r e c o n o c e q u e l ó g i c a m e n t e el u n i v e r s o , m i e n t r a s q u e el c u e r p o h a b í a s i d o
m u n d o p o d í a h a b e r s i d o e t e r n o , s i e n d o al d e v u e l t o a la t i e r r a .
m i s m o t i e m p o u n a o b r a d e Dios. Sólo se La a p o r t a c i ó n d e los m u s u l m a n e s a las
o p o n e a e l l o la r e v e l a c i ó n . P e r o A v e r r o e s , o t r a s ciencias f u e m u y s u p e r i o r a la d e las
q u e n o t e n í a este f r e n o , c o n s i d e r a la c r e a - g e n t e s d e O c c i d e n t e , a d o r m e c i d a s p o r esta
c i ó n d i r e c t a p o r D i o s t a n a b s u r d a q u e el e n - é p o c a . Ya se c o m p r e n d e q u e c o n sus f o r z o -
t e n d i m i e n t o la a c e p t a s ó l o p o r h á b i t o , c o m o s o s viajes a La Meca y el c a r á c t e r i n t e r n a c i o -
los q u e se a c o s t u m b r a n a u n a d r o g a p u e d e n n a l del Islam, los c o n o c i m i e n t o s g e o g r á f i c o s
s e g u i r t o m á n d o l a sin q u e les d a ñ e . Y p o r es- d e b i e r o n ser c o n s i d e r a d o s c o m o d e u t i l i d a d
tos c a m i n o s d e su e s p e c i a l e x p l i c a c i ó n del r e l i g i o s a . A d m i r a b a n los m a p a s e n c o l o r q u e
m u n d o , A v e r r o e s llegó a la tesis c e n t r a l d e a c o m p a ñ a b a n sus m a n u s c r i t o s a n t i g u o s y
su filosofía, el m o n i s m o del i n t e l e c t o h u m a - casi t o d o s los t r a d u j e r o n al á r a b e al c o m e n -
n o y la n e g a c i ó n d e la i n m o r t a l i d a d p e r s o - z a r el siglo III d e la h é g i r a .
n a l , e n t o r n o a la cual h u b o u n a d e las m á s
El m á s p o p u l a r d e los g e ó g r a f o s m u s u l -
g r a n d e s c o n t r o v e r s i a s d e la ciencia filosófi-
m a n e s es Al- Edrisí. N a c i d o e n C e u t a el
ca y e n q u e m á s se e s p a c i ó el g e n i o e s p e c u -
a ñ o 4 9 3 - 1 1 1 5 , v i a j ó p o r el O c c i d e n t e m á s
lativo d e la E d a d M e d i a .
q u e p o r el Asia y r e s u m i ó su s a b e r e n u n
C r e e m o s q u e el l e c t o r e s t a r á ya f a t i g a d o l i b r o q u e se t i t u l a Placer de los que desean,
d e t a n t a escolástica, y m á s si p o r a ñ a d i d u r a n o m b r e algo pintoresco para un tratado de Curta náutica árabe del si-
ésta es á r a b e . P e r o le h e m o s h e c h o gracia d e g e o g r a f i a . P e r o Edrisí se fijó ya en q u e las <//« xtv que detalla una parte
v a r i a s o t r a s sutilezas t e o l ó g i c a s e n las q u e <le las costas mediterráneas
A v e r r o e s d i o la n o t a definitiva p a r a los e s p í - y atlánticas.
r i t u s r a c i o n a l i s t a s d e t o d a s las e d a d e s ; p o r
e j e m p l o , A v e r r o e s c r e e q u e la r e l i g i ó n del
s a b i o d e b e ser el e s t u d i o y la c o n t e m p l a c i ó n
d e las leyes d e la n a t u r a l e z a . Si Dios es i n -
m ó v i l y n o c o n o c e s i q u i e r a lo c r e a d o , q u e se
a g i t a y t i e n d e h a c i a El, casi n o p u e d e e s p e -
r a r s e q u e el h o m b r e sienta l o q u e l l a m a r í a -
m o s a m o r hacia el S u m o Bien.

"El c u l t o m á s s u b l i m e q u e p u e d e d a r s e a
Dios - d i c e Averroes— es el c o n o c i m i e n t o d e
sus o b r a s , q u e n o s c o n d u c e a c o n o c e r l o e n
t o d a su r e a l i d a d ; é s t e es el m á s n o b l e d e los
a c t o s h u m a n o s , m i e n t r a s q u e el m á s vil sería
l l a m a r e r r o r y p r e s u n c i ó n al c u l t o del s a b i o ,
la m e j o r d e las r e l i g i o n e s . " A v e r r o e s distin-
g u e e n t r e la p a r t e d e r a z ó n y la p a r t e d e lo q u e
él l l a m a " p r o f e c í a " q u e c o n t i e n e n t o d a s las
r e l i g i o n e s . Esta s e g u n d a p a r t e , la " p r o f e c í a " ,
a p a r e c e en los ritos, las o r a c i o n e s y los sa-
crificios, y tiene p o r o b j e t o c o n d u c i r a las
g e n t e s a la p r á c t i c a d e la v i r t u d . P e r o si Ave-
r r o e s t r a n s i g e c o n esta r e l i g i ó n del v u l g o es
p o r q u e e s p e r a t a m b i é n q u e t r a n s i j a n c o n su
m i s t i c i s m o r a c i o n a l i s t a . Su m a y o r m é r i t o es,
p o r lo m e n o s , el h a b e r h a b l a d o c l a r o ; sería
g r a v e injusticia l l a m a r l e i m p o s t o r .

Las i d e a s d e A v e r r o e s f u e r o n t o m a d a s
m u y en s e r i o , casi c o m o u n a r e l i g i ó n . R e n á n
c o p i a u n a a n é c d o t a d e la Historia de los filó-
sofos, p o r Al- Kilti, m u y e x p r e s i v a e n este s e n -
t i d o . D o s filósofos, u n o j u d í o y o t r o á r a b e ,
a m b o s c o n t a m i n a d o s d e a v e r r o í s m o , se p r o -
m e t i e r o n q u e él q u e m u r i e r a p r i m e r o p r o c u -
r a r í a c o m u n i c a r al o t r o sus a v e n t u r a s d e
u l t r a t u m b a . El j u d í o m u r i ó , y el á r a b e le vio
e n t r e s u e ñ o s , o y e n d o q u e le d e c í a : " L o u n i -

193
S O C I E D A D . R E L I G I O N Y C I E N C I A E N EL M U N D O I S L A M I C O ( S I G L O S V I I I - X I I ) . s e g ú n E r n s t BLOCH

e Índole muy distinta al de la Europa clérico-


feudal. Y ello pi

urales del Próximo Oriente.

En el momento en que Europa volvía a estar ruralizada casi por catimada en seguidi
completo, triunfaba en Oriente el capital mercantil, la más
antigua forma de existencia libre del capital.

I
A diferencia de la temprana Edad Media europea, la árabe está En la época sasánida aún
cimentada sobre comerciantes cosmopolitas, sobre una flore-
ciente producción y una rica circulación de mercancias. en lugar
de fundarse sobre un estado semisalvaje. con castillos, pocas
ciudades y muchos conventos. podia prestar el hombre una
mejor ayuda al espíritu del
I bien en la lucha sostenida por (BLOCH. Ernst. "Avicena
De esta manera no sólo pudo hacerse la luz en el mundo árabe y la izquierda aristotéli-
de entonces antes que en la Europa occidental, sino que aquella ca". Madrid. 1966).
luz llegó a tener una mayor movilidad que la de las posteriores

i l
escuelas monacales europeas y las universidades que de ellas

u
En la Europa
Europi medieval, los filósofos con inclinaciones científico-n.
son tan infrecuentes como anormales (Roger Bacon y San Alberto Occidente islámicos, los abbasidas de Bagdad y los omeyas de Córdol
complacían en adornar su poderío.
es laa inversa.

L : irtodoxia. Hasta e
>l fundamento político-

jmiaba muy especialm


ial de la sociedad árabe, se hizo se

la ciencia árabe: su calidad de "Sciei


e la antigüedad "pagana", destacó J
m a r e a s o c u r r e n en las noches 14 y 15 de rigir la navegación, n o se encuentra m e n -
cada mes lunar. c i o n a d o p o r los escritores árabes hasta el
O t r o geógrafo, Abu-1- Feda, insiste en la siglo x m .
esfericidad de la T i e r r a : "Los a s t r ó n o m o s C o m o el Islam lindaba p o r O r i e n t e con
h a n d e m o s t r a d o q u e u n a m o n t a ñ a de tres la India y la China, n o es d e extrañar q u e los
mil m e t r o s de altura sería p a r a la Tierra árabes se interesaran p o r estos países leja-
c o m o u n g r a n o de a r e n a en una bola de u n n o s . Los viajes son casi una necesidad p a r a
c o d o d e d i á m e t r o " . Abu-1- Feda c o m p r e n d i ó los q u e h a n e m p e z a d o las peregrinaciones;
ya que, d a n d o la vuelta al m u n d o en la di- después de La Meca y de Medina se iba a
rección del Sol, se ganaría un día en el Kerbela y luego más lejos a ú n . Este es el
viaje. La m e d i d a de la Tierra p r e o c u p ó t a m - caso de Aben-Batuta, el Marco Polo de los
bién a los árabes. Se hicieron varias medicio- m u s u l m a n e s . Nació en T á n g e r el a ñ o 703-
nes de u n g r a d o de m e r i d i a n o p o r cuenta de 1325 y su viaje d u r ó veintinueve a ñ o s ; resi-
los califas de Bagdad; los resultados f u e r o n d i ó en La Meca t o d o u n a ñ o . Describió los
de 56 a 58 millas p o r g r a d o . G e n e r a l m e n t e m o n u m e n t o s de Egipto, las mezquitas de
se atribuye a los árabes la introducción de Damasco y Alepo; p a s ó a Tartaria, a la India
la b r ú j u l a en E u r o p a , p e r o las p r o p i e d a d e s y la China. De regreso en T á n g e r , n o p u d o
de las piedras magnéticas y su facultad de ya estarse quieto, q u i s o ir a T o m b u c t ú y al
c o m u n i c a r el m a g n e t i s m o a los metales p o r Níger, y sólo d e s p u é s dictó el relato de sus
c o n t a c t o eran ya conocidas desde los anti- viajes, q u e es m u c h o más a m e n o y más ins-
guos griegos. Se trata de u n f e n ó m e n o q u e tructivo q u e el d e Marco Polo.
n o p o d í a escapar a la atención de las gentes;
los chinos lo conocieron, y lo usaron p a r a G r a n viajero también fue Al- Biruni, a u n -
orientarse en sus viajes, desde el siglo n de q u e éste casi siempre viajaba con p r o p ó s i t o s
nuestra era. Sin e m b a r g o , el e m p l e o de la científicos. Era persa y recorrió toda la In-
aguja i m a n a d a f l o t a n d o en u n vaso, para di- dia, d o n d e dice q u e residió más de cuarenta
años. Al- Biruni atribuye la invención de

1 9 4
los n ú m e r o s q u e l l a m a m o s a r á b i g o s a los Un ciego en oración en las
h i n d ú e s , p e r o esta c u e s t i ó n n o p a r e c e t a n calles ile Marrakesh, símbo-
claramente resuelta hoy c o m o lo parecía hace lo vivo de la diferencia entre
el Islam actual del tercer
algunos años. Hasta hace poco creíamos que
mundo y la poderosa fuerza
O c c i d e n t e h a b í a a p r e n d i d o el u s o d e los n ú -
del estado musulmán medie-
m e r o s d e los á r a b e s d e E s p a ñ a , y se c i t a b a
val, siempre en vanguardia
al m o n j e G e r b e r t o , q u e m á s t a r d e f u e p a p a del mundo de su tiempo.
c o n el n o m b r e d e Silvestre II, c o m o el q u e
i n t r o d u j o las c i f r a s a r á b i g a s , d e s p u é s d e u n
v i a j e a C ó r d o b a . Estas c i f r a s a p a r e c e n ya e n
c ó d i c e s d e la a b a d í a d e R i p o l l , e n C a t a l u ñ a ,
m u c h o s a ñ o s a n t e s d e la v e n i d a d e G e r b e r t o
a E s p a ñ a . Es c i e r t o q u e los a n t i g u o s u s a r o n ,
p a r a sus c á l c u l o s , letras, q u e t e n í a n v a l o r
n u m e r a l , p e r o es p o s i b l e q u e h u b i e s e u n a
n o t a c i ó n e n O c c i d e n t e p a r e c i d a a los n u m e -
rales a r á b i g o s y u s a d a c o r n o t a q u i g r a f í a s ó l o
p o r a l g u n o s i n i c i a d o s . Boecio, en el siglo vi,
habla de cifras en u n p á r r a f o misterioso. N o
sería d e e x t r a ñ a r q u e f u e r a u n s e c r e t o d e los
d i s c í p u l o s d e P i t á g o r a s , n o d i v u l g a d o hasta
la E d a d M e d i a .

En á l g e b r a , los á r a b e s l l e g a r o n a resolver Es m a t e r i a l m e n t e i m p o s i b l e d a r c u e n t a ,
ecuaciones de segundo grado, c o m o ésta: e n u n l i b r o c o m o éste, d e sus i n n u m e r a b l e s
x2 + ax — b. Al- B i r u n i se o c u p ó e n el p r o - colecciones de sentencias y libros de historia
b l e m a d e ir d o b l a n d o los g r a n o s q u e se v a n y mística, q u e , p o r lo q u e l l e v a m o s d i c h o ,
p o n i e n d o en cada cuadro de un tablero de ya se c o m p r e n d e r á q u e s e r í a n los e s t u d i o s
a j e d r e z . El n ú m e r o d e g r a n o s d e c a d a c u a d r o p r e f e r i d o s d e los m u s u l m a n e s ; p e r o f u e r a
es igual a la s u m a d e los q u e h a y e n los c u a - injusticia i m p e r d o n a b l e n o m e n c i o n a r si-
dros anteriores, m e n o s uno. Por ejemplo: q u i e r a los Prolegómenos d e I b n J a l d ú n , q u e
1 + 2 + 4 + 8 + 16 + 3 2 = 63, o s e a n 6 4 - 1 . T a m - p r e c e d e n a su h i s t o r i a d e los m u s u l m a n e s del
b i é n d e b e m o s a los á r a b e s el u s o d e la le- Á f r i c a del N o r t e . I b n J a l d ú n n a c i ó e n T ú -
t r a x p a r a s i g n i f i c a r la i n c ó g n i t a . Viene d e nez, ya e n el siglo x i v , y v i a j ó p o r el O r i e n -
la p a l a b r a chei, q u e q u i e r e d e c i r " c o s a " . L o s te; es u n a p e r s o n a l i d a d r e f i n a d a , n o b l e , d o -
e s p a ñ o l e s la l e y e r o n xei, y p o r a b r e v i a c i ó n t a d a d e u n a c u r i o s i d a d a n á l o g a a la d e las
se e m p l e ó la x. gentes d e l R e n a c i m i e n t o i t a l i a n o . Los Prole-
gómenos f o r m a n u n v e r d a d e r o t r a t a d o d e fi-
E n g e o m e t r í a , los á r a b e s a p r e n d i e r o n d e
l o s o f í a d e la H i s t o r i a . I b n J a l d ú n se p r e -
los h i n d ú e s el seno y se p r e o c u p a r o n o t r a vez
g u n t a el p o r q u é d e la s u p e r i o r i d a d d e ciertas
del v a l o r d e 7t, o s e a la r e l a c i ó n d e la c i r c u n -
razas, la r a z ó n d e s e r d e las s o c i e d a d e s h u -
f e r e n c i a al d i á m e t r o . D u r a n t e la E d a d M e d i a
m a n a s , el l u g a r q u e o c u p a c a d a i n d u s t r i a e n
a l g u n o s m u s u l m a n e s y sus d i s c í p u l o s j u d í o s
la e c o n o m í a del e s t a d o , y analiza h a s t a las
f u e r o n r e p u t a d o s c o m o g r a n d e s m é d i c o s : ya
m á s e l e v a d a s e s p e c u l a c i o n e s del a l m a ; sus
h e m o s d i c h o q u e Avicena y A v e r r o e s se d e d i -
Prolegómenos a c a b a n s i e n d o u n e s t u d i o d e
c a r o n a esta p r o f e s i ó n . P e r o n o q u e r e m o s
p s i c o l o g í a , c o n sus r a m i f i c a c i o n e s h a c i a el
r e p e t i r sus c o n s e j o s ; la m e d i c i n a , e n reali-
h i p n o t i s m o , la i n s p i r a c i ó n p o é t i c a y t o d a la
d a d , n o e s t a b a m á s a t r a s a d a e n la E d a d M e -
variedad d e fenómenos q u e hoy llamamos
d i a q u e las d e m á s ciencias; s ó l o c a u s a m á s
psíquicos.
a n g u s t i a p o r q u e la v í c t i m a n o es el investi-
g a d o r , s i n o el p o b r e e n f e r m o . C o m o los á r a -
La c u l t u r a m u s u l m a n a sirvió d e i n t e r m e -
b e s t e n í a n los m i s m o s p r e j u i c i o s q u e los
d i a r i o e n t r e el O c c i d e n t e y las viejas litera-
a n t i g u o s a c e r c a d e la d i s e c c i ó n , n o es d e ex-
t u r a s o r i e n t a l e s . A l g u n a s d e las c o m p i l a c i o -
t r a ñ a r q u e c o m e t a n graves e r r o r e s e n m a t e -
nes d e r e l a t o s p r o d i g i o s o s d e la I n d i a y
ria d e a n a t o m í a y fisiología. S e g ú n Avicena,
Persia l l e g a r o n a E s p a ñ a p o r m e d i o del
la s a n g r e se f a b r i c a e n el h í g a d o ; en c a m b i o ,
I s l a m y se t r a d u j e r o n p r o n t o al latín. D e
s e g ú n Razes, el e n c é f a l o es el a s i e n t o d e la
esta m a n e r a llegó el f a m o s o l i b r o Kalila y
s e n s i b i l i d a d y el c e n t r o l o c o m o t o r .
Dimna, c o n f á b u l a s d e a n i m a l e s q u e e n c i e -
L o s á r a b e s t i e n e n e s c r i t o s especiales d e r r a n u n a filosofía p o p u l a r a n t i q u í s i m a . Las
a g r i c u l t u r a y su a f i c i ó n al a r t e d e la cetrería mil y una noches d e b i e r o n d e ser c o m p u e s t a s
les llevó a e s t u d i a r las c o s t u m b r e s d e los h a l - e n B a g d a d e n el siglo IX, p e r o t a m b i é n se
c o n e s y los p á j a r o s . P e r o c o m p i l a r o n ver- a p r o v e c h a r o n p a r a este l i b r o a p ó l o g o s z u r -
d a d e r o s t r a t a d o s d e h i s t o r i a n a t u r a l , descri- c i d o s c o n u n a t r a m a t a n sutil c o m o la
b i e n d o u n a p o r u n a las especies. historia de Scheherazada.

195
BIBLIOGRAFIA
B l o c h , E. Avicena y ta izquierda aristotélica, Madrid, 1 9 6 6 .

Corbin. H . Histoire de la Philosophie islamique, París, 1964.

Cruz H e r n á n d e z , M . Historia de la filosofía española. Filosofía hispano-


musulmana, Madrid, 1 9 5 7 .

Mieli, A. El mundo islámico y el occidente medieval cris-


tiano, Buenos Aires, 1 9 4 6 .

Millás. J. M . Assaig d'história de les ¡dees físiques i matemá-


tiques a la Catalunya medieval, Barcelona, 1 9 3 1 .
Estudios sobre historia de la ciencia española,
Barcelona, 1 9 4 9 y 1 9 6 0 .

Sánchez Pérez, J . A . Biografías de matemáticos árabes que florecieron


en España, Madrid, 1 9 2 1 .

S a r t o n , G. Introduction to the History of Science, Baltimore,


1927-1948.

T h o r n d i k e , L. History of magic and experimental Science,


Nueva York, 1 9 2 3 - 1 9 4 1 .

Vernet, J . Influencias musulmanas en el origen de la carto-


grafía náutica, Madrid, 1 9 5 3 .
La ciencia en el Islam y Occidente, Spoleto, 1 9 6 5 .

196

Вам также может понравиться