El efecto lucifer y el manejo de las emociones.

Resolución de conflictos

Yudely Ordoñez Muñoz

Docente.

Elaborado Por:
Laura Marcela Moreno Betancourth
ID 490506

Corporación Universitaria Minuto de Dios

Facultad de Ciencias Humanas y Sociales.
Programa de Psicología
Bogotá
2.019
 El conflicto y como generar oportunidades

Teniendo en cuenta las lecturas el siguiente artículo pretende presentar experiencias

basadas en la lectura, opiniones y saberes tomados de las bases bibliográficas que se tuvieron en

cuenta para desarrollar la presente actividad.

Se debe tener en cuenta la construcción del significado de la palabra conflicto, que

vistodesde un punto de vista distinto al cual ya tenemos conocimiento, se puede ver como un

generador de nuevas oportunidades y que permite que las opiniones sean vistas desde múltiples

puntos de vista, en donde todo conocimiento se recibe y se tiene en cuenta, dejando de lado el

conflicto como problemática y se deja ver más de forma positiva que negativa.

Se quiere analizar los conflictos de relevancia mundial, presentados en los libros del

“efecto Lucifer” y darle un balance con los conceptos del libro “el manejo de las emociones” en

donde, las emociones se muestran como quienes juegan un papel fundamental e incluso el

manejo que a estas se les da, así como se ha notado o ha mostrado las situaciones conflictivas

tanto a nivel local, nacional o mundial.

Como conclusión se mostraran los aprendizajes obtenidos de cada una de las lecturas, y

que nos llevaran a tener un saber mas exacto y verdadero.

 Primero que todo dejemos claro el tema de conflicto de una forma diferente a lo que

comúnmente se conoce, desatenuar el concepto negativo y mostrar las capacidades positivas que

puede tener el conflicto en la sociedad, la palabra conflicto nos puede llevar a encontrar nuevas

oportunidades, en donde se pueden observar puntos de vista diferentes y aceptar diferentes

pensamientos o ideas innovadoras.

La discusión de diferentes puntos de vista llevan a consensos después de discutir,

argumentar diferencias y una apertura de enfrentamientos que terminan generando soluciones sin

rasgos de violencia o agresión en alguno de los casos que se puedan alcanzar. El manejo de

emociones a nivel teorico es mucho mas sencillo de entender que llegar a la practica , pero se

debe considerar siempre que en la mayor parte de los casos la falta de cultura o educación de los

implicados en los conflictos y la capacidad de quienes lideran para manipular las emociones y el

conocimientos de quienes participan en la discusión de diferentes propuestas o puntos de vista.

Como quedó demostrado en los casos presentados de conflictos, las situaciones se

presentan en fechas diferentes, lugares del mundo diferentes, con diferentes culturas, religiones,

costumbres, etc. Pero con algo particular, y es que en todos los casos se observan algunos de los

más bajos instintos que pueden llegar a ser despertados en los seres humanos, llevándolos a

cometer algunos de los actos más atroces, con efectos desastrosos para la raza humana.

La evolución continua de la raza humana nos ha llevado a preservar una cultura diversa

que se adapta a cada cambio del entorno que se pueda presentar , pero teniendo como prioridad

siempre sus necesidades de mejora de las condiciones de vida o fisicas. Lo que nos permite

actuar de una mejor manera es el nivel intelectual y las capacidades superiores , la posibilidad de

razonar antes de actuar instintivamente. Debemos analizar ¿Qué es aquello que nos hacen actuar

instintivamente? Es asi , estos mismos instintos permitieron a quienes en los inicios hicieron
parte del mundo sobrevivir y por tanto son inherentes a nuestro ser, y que, con las condiciones

adecuadas se logran activar. Estos instintos necesitan un adecuado trato para evitar que se inhiba

la razón a la hora de tomar decisiones importante, actuar mas con la razón que por acción.

Es por esto que la importancia de saber medir los instintos es vital, medir las emociones y

entender que se debe pensar con cabeza fría y no actuar por impulsos naturales de nuestra

especie.