Revisiones sobre energía renovable y sustentable.

Recuperación de aceite mejorada con microbios, una revisión crítica sobre los
ensayos de campo implementados en todo el mundo en diferentes países.
ABSTRACT
En los últimos años, cuando el precio del petróleo se ha convertido en un tema
crítico en la industria petrolera, la recuperación microbiana mejorada de petróleo
(MEOR) es uno de los principales temas de interés en las investigaciones
energéticas como una tecnología de tratamiento respetuosa con el medio ambiente
y de bajo costo de operación. Por consiguiente, podría considerarse una alternativa
adecuada a las técnicas convencionales de EOR. El impacto positivo de la
tecnología MEOR en la mejora de la recuperación de petróleo está establecido tanto
en yacimientos de arenisca como de carbonato con las características de flujo
diferente implementadas en todo el mundo. Desafortunadamente, a pesar de sus
enormes ventajas, MEOR todavía no está muy por debajo de la inversión debido a
la falta de datos suficientes. Este artículo presenta la actualización completamente
detallada de los ensayos de campo de MEOR que investigan exclusivamente el
desempeño de la historia de campo de MEOR en diferentes países. Esta
investigación incluye 47 casos de ensayos de campo en 21 países en los que se
ilustran totalmente las tecnologías correspondientes, los nombres de reservorio /
formación, microorganismos, nutrientes y efectos específicos de cada caso.
Además, los bioproductos microbianos y los parámetros de los criterios de selección
están ampliamente demostrados. También se presenta una categorización única de
los biosurfactantes MEOR. Además, se examina el conjunto de experimentos
llevados a cabo sobre biosurfactantes junto con sus efectos sobre IFT y la
recuperación de petróleo residual. De hecho, esta revisión confirma la credibilidad
de MEOR que crea fuertes perspectivas para avanzar hacia una mayor inversión en
este método.
Introducción
Típicamente, el 35-55% del petróleo crudo se deja atrás en el yacimiento después
de recuperaciones primarias y secundarias que deberían ser extraídas mediante
técnicas mejoradas o mejoradas de recuperación de petróleo como la inyección de
gas miscible, métodos de inundación de polímeros y EOR térmico. En los últimos
años que el precio del petróleo ha disminuido a su valor mínimo, la selección del
método de recuperación óptima es influenciada de manera significativa por
cuestiones económicas. En consecuencia, el desarrollo de tecnologías de coste
que aporten el máximo de reservas de petróleo a la producción es uno de los
principales temas de interés en las investigaciones energéticas actuales. La
recuperación microbiana mejorada de petróleo es potencialmente una técnica de
bajo precio en la cual los microorganismos y sus productos metabólicos están
convencidos de explotar el petróleo atrapado en el yacimiento. MEOR es
ampliamente aplicable en yacimientos de arenisca y carbonato con crudo ligero/
pesado y permeabilidades bajas/medias y altas. Los resultados satisfactorios de las
pruebas implementadas llevan a considerar MEOR como una alternativa adecuada
para otras tecnologías IOR/EOR.
El concepto de emplear microorganismos para lograr la máxima La recuperación de
petróleo fue propuesto por Beckham, quien estableció la posibilidad de utilizar
enzimas bacterianas en la recuperación de petróleo. En 2007, Saikrishna
Maudgalya. Investigaron el éxito o fracaso de 407 ensayos reportados MEOR en
yacimientos de arenisca y carbonato donde los tremendos resultados positivos
fueron un gran establecimiento en la aplicabilidad de esta técnica. En 2014, Biji
Shibulal. Presentaron una revisión sobre las bacterias termófilas formadoras de
esporas como microorganismos resistentes a condiciones muy extremas de
depósito de petróleo. El desarrollo de modelos precisos para simular la salinidad, el
control de la movilidad, la temperatura, los bioproductos producidos y otros
parámetros necesarios es extremadamente vital para elegir los mejores candidatos
para el proceso MEOR, que contribuye a la máxima recuperación final. De hecho,
la complejidad de proponer un modelo integral para interpretar todos los aspectos
de MEOR es un tema crítico. En 2015, Jay Patel. Revisaron los doce modelos
publicados con enfoques diferentes para interpretar los procesos MEOR.
En 2007, Lazar presentó una revisión sobre la experiencia mundial de los ensayos
MEOR field durante los últimos 40 años. En su estudio, se introdujeron las
tecnologías, microorganismos y nutrientes utilizados en cada país, así como el
correspondiente impacto positivo o negativo en la producción incremental de
petróleo, pero no hubo información sobre el nombre del yacimiento/formación y los
efectos detallados de cada caso. Además, la información relacionada con todos los
casos de cada país se presentó de forma conjunta, sin ninguna especificación de
cada caso. En el presente estudio se presentan las causas judiciales MEOR,
actualizadas y totalmente detalladas, que incluyen 47 causas judiciales en 21 países
diferentes. En esta investigación se presentan exclusivamente las tecnologías,
nombre del reservorio/formación, microorganismos, nutrientes y efectos detallados
de cada caso específico realizado en cada país.
Procesos MEOR
Los procesos MEOR están básicamente relacionados con dos categorías de
mecanismos in situ y ex situ. En el mecanismo in-situ, la generación de ciertos tipos
de productos como gases, ácidos, biopolímeros, etc. se produce mediante la
estimulación de bacterias autóctonas en condiciones de reservorio adecuadas. Por
el contrario, el mecanismo ex-situ implica la remoción selectiva de los bioproductos
generados de la superficie por actividades metabólicas microbianas para ser
inyectados en el reservorio. La Tabla 1 presenta los procesos MEOR junto con sus
problemas de producción y el tipo de microorganismos utilizados. Cabe señalar que
MEOR tiene algunas ventajas sobre los métodos convencionales de EOR que
hacen que se consideren como una opción notable para la inversión en la industria
petrolera. Por otra parte, algunas limitaciones como la complejidad del proceso y las
limitaciones de supervivencia de los microorganismos podrían considerarse como
las razones de la falta de inversión en esta técnica. Para ilustrar los diferentes
aspectos de este tema, en la Tabla 2 se enumeran las ventajas y desventajas de
MEOR.
Bioproductos microbianos
Especificaciones completas de los bioproductos
En MEOR, unas variedades de metabolitos drásticamente beneficiosos son
producidos por microorganismos que aumentan la recuperación final del petróleo.
Existen enfoques específicos en los que la propagación de bioproductos
microbianos afecta significativamente las propiedades físicas de los reservorios,
incluyendo la porosidad, permeabilidad y humectabilidad, así como características
como la viscosidad, IFT, etc. En general, los bioproductos podrían clasificarse en
siete grandes grupos, como biosurfactantes, biopolímeros, gases, ácidos,
disolventes, biomasa y emulgentes. Los biosurfactantes tienen un impacto en la
alteración de la humectabilidad como resultado de su potencial para reducir las
tensiones superficiales e interfaciales. Los biopolímeros podrían ayudar a mejorar
la recuperación del petróleo mediante la permeabilidad y la reducción de la
viscosidad, lo que lleva a una alteración de la relación de movilidad. Los gases son
producidos por algunos tipos específicos de bacterias que contribuyen a la
represurización del yacimiento y a la mejora de la recuperación del petróleo. Los
ácidos y disolventes tienen un enorme potencial para disolver partes de roca, lo que
resulta en una mejora de la porosidad y la permeabilidad y, en consecuencia, en
una reducción del aceite atrapado. La biomasa podría ser mucho más eficiente en
la mejora de la recuperación de petróleo mediante el taponamiento selectivo de los
medios porosos que finalmente canalizan el agua de la inundación hacia el petróleo
disponible. La emulsificación de aceite se puede lograr bajo producción de
emulsionantes por una amplia variedad de microorganismos donde se forman
emulsiones estables con hidrocarburos (comúnmente aceite en agua). La Tabla 3
muestra una lista completa de los bioproductos generados por diferentes
microorganismos junto con sus principales efectos, problemas de producción y los
mejores candidatos para el proceso MEOR. Cabe señalar que entre todos los
bioproductos, los biosurfactantes han sido mucho más atractivos para ser
investigados por muchos investigadores como consecuencia de sus enormes
propiedades, entre las que se incluyen la biodegradabilidad, la estabilidad, la baja
toxicidad y el considerable impacto en la alteración de la humectabilidad, que mejora
significativamente la recuperación final del petróleo. A este respecto, en las dos
secciones siguientes se exponen la breve introducción y la descripción detallada de
los biosurfactantes, así como los experimentos realizados al respecto.
Biosurfactantes
Clasificación de los biosurfactantes
Los biosurfactantes son uno de los productos metabólicos de la recuperación
microbiana mejorada de petróleo que tienen efectos potencialmente significativos
sobre las tensiones superficiales e interfaciales, la emulsificación, la solubilidad, etc.
En consecuencia, son extremadamente importantes como consecuencia de su
biodegradabilidad, baja toxicidad, actividad de emulsificación y estabilidad en
diferentes ambientes. Este hecho diferencia a los biosurfactantes de los
surfactantes químicos debido a estas ventajas. Basados en la carga del grupo de
cabeza polar, los biosurfactantes se dividen en cuatro grupos: catiónicos, aniónicos,
no iónicos y zwitteriónicos. En la Tabla 4 se clasifican en detalle cinco tipos
principales de biosurfactantes producidos por microorganismos, lo que también
representa el tipo de biosurfactante específico microbios junto con cada categoría.
Experimentos con biosurfactantes
Diferentes experimentos establecen la alta aplicabilidad de los biosurfactantes en la
recuperación de aceites residuales de sistemas porosos a altas salinidades y
temperaturas. En particular, los lipopéptidos tienen una menor concentración en
comparación con otros tipos de biosurfactantes como los ramnolípidos. En
experimentos de Das y Mukherjee en columnas llenas de arena, se confirmó una
recuperación del 50-60% del aceite residual y una reducción de la tensión superficial
en los casos en que dos cepas termófilas de Bacillus subtilis con cáscaras de patata
produjeron biosurfactantes lipopéptidos como soporte nutricional. Joshi llevó a cabo
otro experimento en columnas llenas de arena que contribuyó a la recuperación de
aceite residual del 25-33% y a la reducción de la tensión superficial mediante el uso
de las cepas 20B, B. licheniformis K51, B. subtilis R1 y B. cepa HS3 de Bacillus
subtilis. El resultado positivo de este proceso se debió a la producción de
biosurfactantes lipopéptidos. Wang produjo rhamnolípidos mediante ingeniería
genética de Escherichia coli y Pseudomonas en columnas de arena. Sayyouh
realizó una serie de experimentos utilizando microorganismos aislados de los
yacimientos petrolíferos de Egipto y Arabia Suadi, que dieron como resultado la
producción de biosurfactantes y la mejora de la recuperación del petróleo, así como
la alteración de la humectabilidad de las rocas y la reducción de la IFT. Peihui utilizó
anaerobios facultativos del yacimiento petrolífero de Daqing en un experimento
anaerobio de inundación del núcleo que dio lugar a la producción de biosurfactantes.
Como resultado, la IFT, PH y la viscosidad del aceite disminuyeron y se registró un
aumento notable en la propagación del alcano ligero. En este experimento, la
recuperación de aceite residual aumentó un 10%. Kowalewski utilizó bacterias
mesófilas aeróbicas degradadoras de hidrocarburos en un experimento de
inundación del núcleo, donde el biosurfactante producido alteró la humectabilidad y
redujo el IFT. El experimento de Nourani en micro modelos de vidrio y roca
carbonatada con o sin fractura dio como resultado la reducción de la IFT y de la
humectabilidad donde se emplearon microorganismos de yacimientos persas.
Además, los microorganismos autóctonos de los yacimientos persas a 45 °C fueron
probados en un experimento de inundación del núcleo que dio como resultado una
recuperación de aceite residual del 14,3% debido a la producción de biosurfactantes
de lipopéptidos. La producción de surfactantes glicolípidos y fosfolípidos por la cepa
Pseudomonas se estableció en Okpokwasili y en experimentos de Ibiene en
columnas de arena, lo que aumentó la recuperación de petróleo residual en un 52%.
El experimento de Johnson se basó en la adsorción a carbonatos mediante el uso
de microorganismos de B. subtilis, lo que contribuyó a la producción de
biosurfactante de la superficie y, en consecuencia, a la adsorción de la superficie y
a la alteración de la humectabilidad. De hecho, los biosurfactantes parecen tener un
enorme potencial para mejorar la recuperación del aceite residual, la reducción de
IFT y la alteración de la humectabilidad, lo que los convierte en uno de los temas de
investigación más importantes en el campo MEOR.
Criterios de selección
Hay algunos factores que deben tenerse en cuenta que influyen drásticamente en
los resultados del proceso MEOR, tales como las propiedades del yacimiento,
incluyendo temperatura, presión, salinidad, PH y aspectos económicos. La
temperatura puede ser considerada como el factor más importante entre las
situaciones de prerrequisitos en el MEOR debido a su significativa influencia en la
supervivencia de los microorganismos, su crecimiento y sus productos metabólicos.
Por ejemplo, temperaturas demasiado bajas pueden ralentizar el proceso de
transporte. Por otro lado, temperaturas demasiado altas podrían potencialmente
alterar las enzimas y proteínas al interrumpir las actividades vitales de las células.
La presión también es reconocida como un parámetro importante debido a su papel
esencial en el MEOR. Para ilustrar su efecto, las altas presiones hidrostáticas tienen
efectos contradictorios sobre el crecimiento bacteriano. Sin embargo, su impacto en
la supervivencia de las bacterias es insignificante. Además, el aumento de la presión
aumenta el potencial redox de gases como el dióxido de carbono y aumenta la
solubilidad del gas, que es la consecuencia de encontrar profundidades más
profundas. La salinidad es otro parámetro crucial que depende tanto de la
temperatura como de la presión y tiene un efecto notable en la reducción de la
viscosidad. La concentración de salmuera de los reservorios se encuentra en un
rango de 100 mg/L a más de 300 g/L de acuerdo a la profundidad correspondiente,
lo cual afecta dramáticamente el proceso MEOR debido a las condiciones de
tolerancia de los microorganismos. Una buena ilustración de este hecho podría
considerarse como una ralentización de la tasa de generación metabólica de
biosurfactantes, gases, alcoholes y ácidos en altas salinidades. Además, se
necesita una menor cantidad de tensioactivos ex situ para reducir la tensión
superficial debida a la reducción del CMC como efecto positivo de la salinidad.
También hay otros parámetros efectivos involucrados en el éxito o fracaso de los
procesos MEOR, como el PH, la permeabilidad y el tamaño de los poros, que
influyen sustancialmente en la eficiencia de la recuperación microbiana mejorada
de aceite. Por ejemplo, el PH afecta la carga superficial y las actividades
enzimáticas. Otro ejemplo podría ilustrarse como el impacto del tamaño de los poros
en la reducción de la permeabilidad, que tiene un efecto negativo en el proceso de
transporte.
Clasificación de microorganismos y MEOR
En cuanto al compromiso de los microorganismos para la mejora de la recuperación
en diferentes ensayos de campo, basados en el estudio de caracterización de
yacimientos, es necesario activar algunos mecanismos para alcanzar los resultados
deseados. La selección de los microorganismos apropiados es un tema crítico que
debe ser investigado con exactitud para lograr este objetivo. En consecuencia, la
clasificación de los microorganismos y los efectos resultantes de la utilización de
cada grupo son las cuestiones principales que deben considerarse en la ejecución
de los proyectos MEOR.
Diferentes enfoques de clasificación
Básicamente, en los procesos MEOR los microorganismos se dividen en dos
grupos: indígenas y exógenos. Las perspectivas futuras de la tecnología MEOR
parecen basarse en la inyección y estimulación de microorganismos autóctonos en
lugar de exógenos debido a su mayor capacidad de adaptación a las condiciones
de los yacimientos. Además, el desarrollo in situ de cultivos de microorganismos,
junto con una evaluación precisa de su proceso de producción, es mucho menos
sofisticado. Desde otro punto de vista, los microorganismos podrían clasificarse
según los rangos de temperatura y presión en los que la situación es adecuada para
su supervivencia, crecimiento y producción de los productos requeridos, tal como
se presenta en el Cuadro 6. El tipo de respiración es otro aspecto según el cual los
microorganismos pueden dividirse en tres grupos. En el Cuadro 7 se presentan las
categorías de microorganismos y sus productos. Por otra parte, la clasificación de
la recuperación mejorada de aceite microbiano podría establecerse sobre la base
del tipo de microorganismos y los mecanismos de recuperación. Esta clasificación,
junto con los efectos específicos de cada caso, se muestra en la Tabla 8. Se debe
tener en cuenta que las bacterias reductoras de sulfato y nitrato ayudan a mejorar
la recuperación de petróleo en un comportamiento de otros tipos de
microorganismos. De hecho, en lugar de generar los siete grupos principales de
bioproductos, se supone que los NRBs activan los mecanismos que ayudan a
controlar los fenómenos de acidez y los SRBs tienen la capacidad de reducir la
viscosidad y la tensión interfacial mediante la producción de hidrocarburos alifáticos
y aromáticos. En este sentido, la siguiente sección se centra exclusivamente en la
introducción de estas bacterias.
Bacterias reductoras de sulfato y nitrato
Las bacterias reductoras de sulfato (SRB) son una clase de microorganismos que
potencialmente podrían formar un sistema de emulsión estabilizada con petróleo
crudo, así como disminuir las tensiones superficiales e interfaciales mediante la
generación de productos metabólicos como los hidrocarburos alifáticos y
aromáticos. Desulfotomaculum nigrificans, Thermodesulfobacterium mobile,
Archaeoglobus fulgidus, Desulfovibrio longus y Desulfobacterium cetonicum son
buenos ejemplos de bacterias reductoras de sulfato. Las actividades de la OSR
podrían conducir a un fenómeno de acidez. Las bacterias reductoras de nitratos
(NRB) son otra clase de microorganismos que juegan un papel clave como agentes
de control del ácido acetilsalicílico por medio de mecanismos que incluyen:
- actuando como donantes de electrones;
- sulfide oxidación;
- Inhibición de SRB por nitrito y aumento del potencial redox.
En la Tabla 9 se presentan algunos ejemplos de uso de nitratos para controlar la
producción de sulfuro de hidrógeno (H2S) en yacimientos.
Nutriente
Aunque la utilización de los microorganismos apropiados es muy importante en la
implementación exitosa de las pruebas de campo MEOR, el suministro de la
cantidad adecuada y suficiente de nutrientes es considerablemente vital para la vida
y el crecimiento de los microorganismos, lo que contribuye a mejorar la recuperación
del petróleo. Como resultado, la introducción y clasificación de diferentes tipos de
nutrientes para su utilización en ensayos de campo MEOR parece ser beneficiosa.
La tasa de crecimiento y la concentración de nutrientes se relacionan sin problemas
entre sí. En otras palabras, la disponibilidad de la cantidad de nutrientes junto con
la composición adecuada es el parámetro clave para obtener los bioproductos
requeridos y, en consecuencia, un proceso MEOR exitoso. En 1981, Jenneman
empleó el aceite in situ como nutriente, lo que redujo la tasa de producción de
bioproductos. De hecho, estas bacterias consumen hidrocarburos como fuente de
alimento al degradar largas cadenas de alquilos, lo que resulta en una mejora del
precioso y ligero petróleo crudo. La clasificación de los nutrientes para fines de
MEOR es la siguiente:
- Sólo melaza;
- Hidrocarburos in situ (petróleo crudo);
- Melaza y sales de nitrógeno y fósforo;
- Nutrientes varios.
Ensayos de campo
Durante las últimas cinco décadas, un notable número de pruebas de campo
microbianas han sido implementadas en diferentes países para evaluar la
aplicabilidad de esta dramática tecnología. Las pruebas exitosas y fallidas
presentadas por Maudgalya se presentan en la Tabla 10. Estas pruebas de campo
se basan en la permeabilidad del yacimiento, temperatura, salinidad, tipo de
mecanismo de recuperación y tipo de prueba en diferentes yacimientos de arenisca
y carbonato. Las pruebas de campo de recuperación de petróleo mejorada con
microbios, que incluyen 47 casos en 21 países diferentes, se presentan en forma
elaborada en la Tabla 11, la cual incluye los países, las tecnologías, el nombre del
yacimiento/formación, los microorganismos utilizados, los nutrientes y los efectos
obtenidos relevantes para cada caso. En 1954, la primera prueba de campo se llevó
a cabo en el campo petrolero de Lisboa, Condado de Union, Arkansas, EE.UU.,
donde se utilizó el microorganismo C. acetobutylicum junto con la inyección de
melaza como apoyo nutricional. Los mecanismos predominantes fueron la
producción de gas, ácido y surfactante, así como la reducción de la viscosidad, lo
que contribuyó a un tremendo aumento de la recuperación del 250% del petróleo.
En 1991, Wang presentó resultados documentados exclusivos que confirmaron la
aplicación de MEOR en los yacimientos petrolíferos de China. En China, las pruebas
de campo administradas por la China National Petroleum Company (CNPC)
mostraron un aumento en la producción de petróleo donde el proceso de agua
microbiana fue el enfoque más predominante. Además, cientos de pozos
individuales fueron investigados en el campo petrolero de Shengli para mejorar la
producción de petróleo y reducir el corte de agua, lo que mostró resultados
satisfactorios. En el campo petrolero de Daqing, el agua microbiana flooding resultó
en la eliminación del taponamiento del polímero mediante la limpieza de los
depósitos de polímero. Dagang Kongdian, Xinjiang Liuzhongqu, Jilin, Fuyu y Huabe
Baolige son otros ejemplos de campos petroleros en China para los cuales se
obtuvieron resultados maravillosos con la recuperación mejorada de petróleo
microbiano. De hecho, China es uno de los líderes en estudios de campo
microbianos debido a su notable éxito en los últimos años. En Estados Unidos, se
realizaron varias pruebas de campo MEOR en el Instituto Nacional de Investigación
del Petróleo y la Energía del condado de Nowata con un coste mínimo. Los
resultados de campo establecieron el aumento de la producción de petróleo en un
13%, 42%, 79%, 230%, 250% y 350% en diferentes casos, así como una
considerable reducción del corte de agua. En Rusia, la estimulación de la microbiota
autóctona se realizó utilizando oxígeno, algunas sales y melazas como nutrientes,
lo que contribuyó a aumentar la recuperación del petróleo. En la década de 1960,
los esfuerzos de la Unión Soviética (ahora Rusia) se orientaron hacia la tecnología
MEOR. Se realizó un tratamiento de pozo único en el aceite de Sernovodek field
donde se inyectaron cultivos bacterianos mixtos y solución de melaza, lo que resultó
en un ligero aumento en la producción de aceite. A continuación, se examinó la
aplicabilidad potencial del método MEOR en el yacimiento petrolífero de Tataryia,
basándose en la experiencia de Wagner. En 1993, otro proyecto MEOR se llevó a
cabo en el yacimiento petrolífero de Vyngapour en Siberia occidental, convenciendo
a la tecnología de inundación nutricional. En este proyecto, se probaron bacterias
autóctonas del reservorio que mostraron resultados positivos en la producción de
petróleo. En Rumania, se examinaron con éxito los estímulos de pozo único y las
tecnologías de recuperación de inundaciones microbianas en diferentes
yacimientos petrolíferos, que establecieron un aumento de la producción de petróleo
de un promedio del 100% y del 200% en varios casos. En Argentina, seis pozos en
el campo petrolero Piedras Coloradas fueron probados utilizando microorganismos
facultativos anaeróbicos degradadores de hidrocarburos. Se registró un aumento de
la producción de petróleo entre 25,8% y 110% y el corte de agua disminuyó en
39,1%, 59,5%, 55,6%, 72,8%, 58,7% y 40% en diferentes pozos. Además, la
viscosidad del aceite se redujo en todos los pozos. Otra prueba de campo en
Argentina se llevó a cabo en la fuerte formación de Papagayos en el campo
petrolero de Vizcacheras mediante el uso de microorganismos facultativos
anaeróbicos degradadores de hidrocarburos con soporte de nutrientes adaptables,
lo que finalmente condujo a la mejora de la recuperación del petróleo. En Malasia,
se seleccionaron tres pozos en el campo Bokor offshore para el proceso microbiano,
lo que contribuyó a la reducción del corte de agua y al aumento de la producción de
petróleo en un 15%, 36% y 120% en diferentes pozos. Además, el factor piel y la
permeabilidad disminuyeron en dos pocillos [84-87]. En 2010, se llevó a cabo una
recuperación mejorada de petróleo microbiano en cinco pozos en un campo en tierra
en Brasil para taponar zonas de alta permeabilidad en el yacimiento mediante la
producción de biomasa y biopolímeros. La perspectiva de este ensayo fue la de
involucrar a las bacterias autóctonas, lo que finalmente resultó en el taponamiento
de zonas de alta permeabilidad y en la mejora de la eficiencia del barrido vertical.
En la India, algunas pruebas de campo fueron realizadas por la Corporación de
Petróleo y Gas Natural (ONGC), el Instituto de Energía y Recursos (TERI) y el
Instituto de Estudios de Reservas (IRS). Estos ensayos de field se basaron en la
recuperación cíclica microbiana y en la recuperación selectiva de tapones
microbianos, lo que condujo a un aumento de la producción de petróleo. En
Australia, la producción de petróleo aumentó en el yacimiento de Alton al desarrollar
un nuevo concepto de estimulación de microorganismos indígenas presentado por
Sheehy. En Alemania, los intentos de implementación de los proyectos MEOR se
renovaron a partir de 1982 y en los años siguientes se llevó a cabo una prueba
MEOR field en un yacimiento de carbonatos con características de formación
complejas. En ese ensayo se utilizaron especies de Clostridium y melazas, lo que
redujo el corte de agua del 802% al 60% y aumentó la producción de aceite de 50
a 150 t por día. En Noruega, se llevó a cabo una prueba de campo en offshore bajo
un proceso microbiano utilizando bacterias NRB con apoyo de nutrientes
compatibles que finalmente mostraron resultados negativos. En Polonia,
Karaskiewiz realizó 18 ensayos de campo entre 1961 y 1969 utilizando cultivos
mixtos de los géneros Arthrobacter, Clostridium, Mycobacterium, Peptococcus y
Pseudomonas. En 1958, se llevó a cabo un experimento de taponamiento selectivo
en los Países Bajos, donde la producción de aceite aumentó significativamente y se
detectó la reducción de la relación agua/aceite como resultado de la inyección de
microorganismos de Betacoccus dextranicus. En un estudio completo, Sayyouh
investigó la aplicabilidad del MEOR en yacimientos árabes, donde se seleccionaron
300 formaciones de siete países árabes (Arabia Saudita, Egipto, Kuwait, Qatar,
Emiratos Árabes Unidos, Irak y Siria) para el análisis de datos con el objetivo de
mejorar la recuperación de petróleo. La anticipación de estos esfuerzos era de un
30% de recuperación de petróleo residual bajo condiciones de yacimientos árabes.
Las pruebas de campo realizadas en Trinidad and Tobago Oil Company (TRINTOC)
mostraron resultados negativos, pero las investigaciones continúan buscando una
manera apropiada de hacer que MEOR sea práctico a escala de campo. En 2012,
se realizó un experimento sobre inundaciones en la Universidad del Sultán Qaboos
en Omán para investigar la aplicabilidad del MEOR en rocas carbonatadas
fracturadas mediante un mecanismo de recuperación de taponamiento selectivo de
biomasa. En el experimento, se utilizaron cepas de Bacillus licheniformis con
fuentes de nitrógeno, extracto de levadura, peptona y urea como soporte nutricional.
El prometedor resultado del 27-30% de recuperación de petróleo en final confirmó
el potencial MEOR en yacimientos fracturados mediante el uso de biomasa
microbiana para la recuperación selectiva de taponamientos.
En 2007, Saikrishna Maudgalya clasificó cuatrocientas siete pruebas de campo
MEOR que fueron reportadas en la literatura. Esta clasificación se basó en siete
categorías: litología, tipo de prueba, mecanismo de recuperación, microorganismo,
nutrientes y propiedades del reservorio. En esta investigación se realizaron 314 y
89 ensayos en yacimientos de arenisca y carbonato, respectivamente. Las especies
de Clostridium fueron los microorganismos más utilizados en todas las pruebas.
Además, la melaza se utilizó en la mayoría de los ensayos como apoyo nutricional.
La Tabla 10 es una representación del estudio de Maudgalya que enumera el
número de pruebas de campo exitosas y fallidas basadas en la permeabilidad del
yacimiento, temperatura, salinidad, tipo de mecanismo de recuperación y tipo de
prueba en diferentes yacimientos de arenisca y carbonato. El último estudio histórico
de los ensayos de campo MEOR fue presentado por Lazar, donde resumió varios
ensayos de campo en diferentes países con la introducción de las tecnologías,
microorganismos y nutrientes utilizados. La Tabla 11 presenta la historia
completamente detallada y actualizada de los diferentes casos de ensayos de
campo MEOR con los correspondientes efectos cualitativos y cuantitativos de la
EOR microbiana en cada caso. Además, la tecnología utilizada, el nombre del
reservorio/formación, los microorganismos y los nutrientes se demuestran por
separado para cada caso, lo que diferencia ampliamente esta tabla de todas las
tablas presentadas en diferentes documentos. En la Fig. 1 se presenta el mapa
ampliado de los países en los que se destacan los países que tienen antecedentes
en la ejecución de proyectos MEOR. Para ilustrar gráficamente los diferentes
aspectos de esta tecnología, la Fig. 2 presenta el número de proyectos de campo
implementados en los diferentes países que se reportan en este estudio. Esta cifra
establece el hecho de que gran parte de los intentos hacia la tecnología MEOR se
realizan en los Estados Unidos. Cabe señalar también que China ha tenido un
notable desarrollo en el enfoque de recuperación microbiana en los últimos años.
La eficiencia de la tecnología MEOR en cuanto a tener impactos positivos o
negativos en los campos implementados se muestra en la Fig. 3, lo que crea
exclusivamente una visión para invertir en este método debido a los notables efectos
positivos confirmados. Para ilustrar los impactos positivos de esta tecnología
excepcional, en la Fig. 4 se muestran algunas mejoras en los factores de
recuperación numérica que se registraron en diferentes ensayos. La Fig. 5 muestra
la abundancia promedio de las tecnologías utilizadas en todos los estudios de caso
microbianos presentados en este documento, que establece el hecho de que la
Recuperación Microbiana por Inundación (MFR), la Recuperación Microbiana
Cíclica por Inundación (CMR) y la Recuperación por Taponamiento Selectivo de
Microbianos (MSPR) son las tecnologías más efectivas, entre otras, lo que crea
perspectivas sólidas para la inversión.
Conclusiones
La recuperación microbiana mejorada del petróleo es una tecnología de bajo precio
y respetuosa con el medio ambiente que podría aumentar potencialmente la
recuperación final del petróleo. Desafortunadamente, a pesar de las drásticas
ventajas de esta tecnología, aún no está totalmente soportada debido a la falta de
datos de pruebas de campo y a la percepción de la complejidad del proceso. Los
tremendos resultados positivos de MEOR realizados en diferentes campos que se
presentan en este estudio son un establecimiento sobre la credibilidad de esta
técnica. De hecho, se deben realizar más esfuerzos de colaboración para analizar
específicamente los fenómenos en MEOR. Esto lleva a la representación de
interpretaciones pre y post proceso precisas y confiables que preparan la situación
adecuada para la inversión en este método en yacimientos que razonablemente
cumplan con los parámetros de los criterios de selección necesarios. En este
estudio, se discutieron detalladamente los microorganismos, bioproductos,
nutrientes, tecnologías utilizadas, parámetros de criterios de selección y, en
consecuencia, los efectos de los proyectos MEOR en varios campos en diferentes
países, pero toda esta información proporcionada es sólo un incentivo para la
inversión en este campo y las compañías petroleras deberían investigar diferentes
aspectos de esta tecnología de manera más exhaustiva y, finalmente, más hacia la
implementación de más proyectos MEOR a escala de campo. En conclusión, las
perspectivas futuras de la industria petrolera se perciben como sustancialmente
dependientes de la recuperación mejorada de petróleo microbiano como
consecuencia de aspectos técnicos y económicos, así como de cuestiones
ambientales.