San Miguel arcángel cúbrelo con tus alas, Virgen María cúbrelo con tu manto, Jesús séllalo con

tu sangre, guíalo a ese camino de luz verdad y vida.

Nosotros nos quedamos tranquilos porque lo hemos puesto a tus pies y tú eres el amigo que
nunca falla. Amen. Hacerle tres cruces en la frente diciendo interiormente por el Padre, por el
Hijo y por el Espíritu Santo.