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Mercantilismo

Se denomina mercantilismo a un conjunto de ideas políticas o ideas económicas de


gran pragmatismo que se desarrollaron durante los siglos XVI, XVII y la primera
mitad del siglo XVIII en Europa. Se caracterizó por una fuerte intervención del
Estado en la economía, coincidente con el desarrollo del absolutismo monárquico.
Consistió en una serie de medidas que se centraron en tres ámbitos: las relaciones
entre el poder político y la actividad económica; la intervención del Estado en esta
última; y el control de la moneda. Así, tendieron a la regulación estatal de la
economía, la unificación del mercado interno, el crecimiento de población, el
aumento de la producción propia —controlando recursos naturales y mercados
exteriores e interiores, protegiendo la producción local de la competencia extranjera,
subsidiando empresas privadas y creando monopolios privilegiados—, la
imposición de aranceles a los productos extranjeros y el incremento de la oferta
monetaria —mediante la prohibición de exportar metales preciosos y la acuñación
inflacionaria—, siempre con vistas a la multiplicación de los ingresos fiscales. Estas
actuaciones tuvieron como finalidad última la formación de Estado-nación lo más
fuerte posible.
El mercantilismo entró en crisis a finales del siglo XVIII y prácticamente desapareció
para mediados del XIX, ante la aparición de las nuevas
teorías fisiócratas y liberales, las cuales ayudaron a Europa a recuperarse de
la profunda crisis del siglo XVII y las Guerras Revolucionarias Francesas.
Se denomina neomercantilismo a la periódica resurrección de estas prácticas e
ideas.
El mercantilismo marca el final de la forma clásica de entender la economía en
la Edad Media (la crematística), inspirada en Aristóteles y Platón, que rechazaba la
acumulación de riquezas y los préstamos con interés (vinculados al pecado
de usura) debido a que la práctica totalidad de la actividad económica estaba
basada en la agricultura, siendo el comercio muy limitado y reducido a nivel local.
Esta nueva corriente económica surge como un derivado del capitalismo iniciado en
la Italia renacentista (siglo XIV) y en una época en la que las incipientes monarquías
europeas deseaban disponer del máximo dinero posible para sus cuantiosos
gastos. Las teorías mercantilistas buscaban satisfacer esa demanda, y
desarrollaron una dialéctica basada en el enriquecimiento. Esta corriente se basaba
en un sistema de análisis de los flujos económicos muy simplificado en el que, por
ejemplo, no se tenía en cuenta el papel que desempeñaba el sistema social.
Fue la teoría predominante a lo largo de toda la Edad Moderna (desde el siglo
XVI hasta el XVIII), época que aproximadamente indica el surgimiento de la idea
del Estado-nación y la formación económico social conocida como Antiguo
Régimen en Europa Occidental. En el ámbito nacional, el mercantilismo llevó a los
primeros casos de intervención y significativo control estatal sobre la economía, y
fue en este periodo en el que se fue estableciendo gran parte del
sistema capitalista moderno. Internacionalmente, el mercantilismo sirvió
indirectamente para impulsar muchas de las guerras europeas del periodo, y sirvió
como causa y fundamento del imperialismo europeo, dado que las grandes
potencias de Europa luchaban por el control de los mercados disponibles en el
mundo.
Como agente unificador tendente a la creación de un Estado nacional soberano, el
mercantilismo tuvo en contra dos fuerzas: Una, más espiritual-jurídica que política-
económica, fueron los poderes universales: la Iglesia y el Imperio, la otra, de
carácter predominantemente económico fue el particularismo local, con la dificultad
que produce a las comunicaciones y la pervivencia de la economía natural (en
determinadas zonas los ingresos del Estado eran en especie y no en dinero);
mientras que la pretensión mercantilista es que el mercado cerrado sea sustituido
por el mercado nacional y las mercancías como medida de valor y medio de cambio
sean remplazadas por el oro. El mercantilismo ve la intervención del Estado como
el medio más eficaz para el desarrollo económico.
Otra tendencia del mercantilismo era robustecer hacia el exterior el poder del
Estado, subordinando la actividad económica hacia ese objetivo, e interesándose
por la riqueza en cuanto sirva de base para ella. El liberalismo considerará a la
riqueza como preciosa para el individuo, y por ende, digna de ser alcanzada como
fin en sí misma: si el particular no debe pensar más que enriquecerse, es un hecho
puramente natural e involuntario que la riqueza de los ciudadanos contribuya a
aumentar la riqueza del Estado. En cambio, para los mercantilistas, la riqueza
privada es simplemente un medio, y como tal se subordina al Estado y a sus fines
de dominio.
Fisiocracia
La fisiocracia o fisiocratismo era una escuela de pensamiento económico del siglo
XVIII fundada por François Quesnay en Francia. Afirmaba la existencia de una ley
natural por la cual el buen funcionamiento del sistema económico estaría asegurado
sin la intervención del Estado. Su doctrina queda resumida en la expresión laissez
faire.
El origen del término fisiocracia proviene del griego y quiere decir "gobierno de la
naturaleza", al considerar los fisiócratas que las leyes humanas debían estar en
armonía con las leyes de la naturaleza. Esto está relacionado con la idea de que
sólo en las actividades agrícolas la naturaleza posibilita que el producto obtenido
sea mayor que los insumos utilizados en la producción surgiendo así un excedente
económico.
Los fisiócratas calificaron de estériles las actividades como la manufactura o el
comercio donde la incautación sería insuficiente para reponer los insumos
utilizados.
La fisiocracia surge como una reacción de tipo intelectual a la común concepción de
la mente intervencionista del pensamiento mercantilista. Insistían que la
intervención de intermediarios en varias etapas del proceso de la producción y
distribución de bienes tiende a reducir el nivel total de prosperidad y producción
económica. Ejemplos de estas intervenciones eran muchas pero los fisiócratas se
fijaban en los controles gubernamentales tales como los monopolios, impuestos
excesivos, burgueses parasitarios y el feudalismo Europeo. Estas prácticas estaban
asociadas con el corporativismo comercial o el énfasis desmesurado en el
crecimiento industrial, los cuales estaban y están basados en el restrictivo interés
privado. Y para ahondar más las diferencias, estudiaron los fondos, por lo que
propugnaban el impuesto único sobre la tierra y sugerían la anulación de todos los
establecidos por los mercantilistas. La tendencia general de los fisiócratas es
el Librecambismo. La tarea del economista se reduce a descubrir el juego de las
leyes naturales. La intervención del Estado es inútil, pues no haría otra cosa que
interferir ese orden esencial. El interés de los fisiócratas se concentraba en gran
medida en la definición de una estrategia macroeconómica de desarrollo que
incluyera políticas coherentes. Es el primer movimiento que adopta un acercamiento
sistemático a la teoría económica. Se creía que si esta ley era estudiada y
enmendada, derivaría en condiciones armoniosas y beneficiosas para toda la
humanidad. Fisiocracia se aplica al concepto total de un gobierno, no
necesariamente a la actividad económica solamente. Porque los padres de esta
teoría política veían el progreso económico como inseparable del progreso social,
argumentando que gracias a la incrementada prosperidad natural, las rivalidades
entre grupos oponentes van a disminuir porque al final del día va a costar más de lo
que vale.(Magill).
Tierra y trabajo como fuentes de producción. Los autores del siglo XVII y principios
del XVIII estimaban la tierra y el trabajo como los agentes o factores causantes de
la producción. Esta opinión fue puesta en boga por el filósofo Thomas Hobbes. Al
estudiar en su Leviatán, el aspecto económico de la comunidad o estado, dice:
"En cuanto a la abundancia de materias, está limitada por la naturaleza a aquellos
bienes que, manando de los dos senos de nuestra madre común la tierra y el mar,
ofrece Dios al género humano, bien gratuitamente, bien a cambio del trabajo."
(Hobbes)
Para los fisiócratas, en oposición al mercantilismo, la riqueza de una nación
procedía de su capacidad de producción y no de las riquezas acumuladas por el
comercio internacional. Y consideraban que la única actividad generadora de
riqueza para las naciones era la agricultura. Cantillon comienza su Ensayo sobre la
naturaleza del comercio, en general diciendo que, "La tierra es la fuente o materia
donde toda riqueza se produce. El trabajo del hombre es la forma que la produce: y
la riqueza en sí no es nada, sino el sustento, comodidades y superfluidades de la
vida."
Turgot, padre de la fisiocracia, resume esta noción con el dicho, "El agricultor es la
única persona cuyo trabajo produce algo más que el salario de su trabajo. Es, por
lo tanto, la única fuente de toda riqueza." Y agrega: "La tierra le paga directamente
el precio de su trabajo, aparte de cualquier otro hombre o convenio. La naturaleza
no le regatea para obligarle a sostenerse con lo que es de todo punto necesario. Lo
que le concede no está proporcionado ni a sus necesidades ni a una valuación
contractual del precio de su día de trabajo. Es el resultado físico de la fertilidad del
suelo, y de la sabiduría, mucho más que de la laboriosidad, de los medios que ha
empleado para hacerla fértil.
Escuela Clásica y capitalismo

La escuela clásica es considerada por muchos como la primera escuela moderna


de economía. Existe un consenso generalizado que indica que la economía
moderna surge con la publicación en 1776 de la “Riqueza de las Naciones”porque
ofrece un análisis sistemático y diferencial del estado de la problemática económica
de su época. Una característica interesante de esta Escuela es el matiz moral, que
indicaba que el egoísmo de los agentes sociales proveía a la economía en su
conjunto de efectos positivos.
Los economistas clásicos intentaron y en parte lograron explicar el crecimiento y el
desarrollo económico. Crearon sus “dinámicas de crecimiento” en una época en la
que el capitalismo se encontraba en pleno auge tras salir de una sociedad feudal y
en la que la Revolución Industrial provocaba enormes cambios sociales. Estos
cambios también dieron lugar a la cuestión de si se podría organizar una sociedad
alrededor de un sistema en el que cada individuo buscara simplemente su propia
ganancia (económica).
Algunos postulados de esta escuela son: el estado no debe intervenir en el
funcionamiento de los mercados, ya que los agentes económicos en su acción
individual, como por medio de una “mano invisible”, son dirigidos al equilibrio y a la
eficiencia. Este es el laissez faire. En consecuencia, las políticas fiscales,
monetarias y los subsidios obstaculizan el funcionamiento del mercado[39].
La producción ofrecida por las empresas viene determinada por el nivel de pleno
empleo (a través de la función de producción). Por tanto, la oferta domina sobre la
demanda. La curva de oferta es vertical y es la que determina el nivel de producción
y por lo tanto de equilibrio; variaciones en la demanda tan sólo producen variaciones
en los precios.
Fue desplazado en gran parte por escuelas marginalistas de pensamiento (tal como
la escuela austriaca), que desde su perspectiva el valor deriva de la utilidad marginal
que los consumidores encuentran en un bien antes que en el costo de los insumos
que componen el producto.
la iniciación de la escuela clásica parte de la aparición de la famosa obra de Adam
Smith “La Riqueza de las Naciones”, publicada en 1776, está catalogada como el
compendio de enseñanzas económicas mejor organizado y como una obra filosófica
amplísima, en la cual se examina con gran visión, los problemas del ser humano y
de la sociedad.
“La Riqueza de las Naciones” es el tratado de economía que ha ejercido más
influencia en su estudio, no solo en el desarrollo de su pensamiento sino en las
políticas de muchas partes del mundo. Su objeto principal fue el de acelerar el
derrocamiento del sistema económico que prevalecía en su época. Para la mayoría
de los historiadores económicos, “La Riqueza de las Naciones” es la “Biblia de la
economía clásica”.

ANTECEDENTES: la Escuela Clásica llamada también Escuela Liberal, le siguió al


sistema fisiocratico, acogiendo conceptos como libertad de producción y libertad del
mercado, tiene sus antecedentes en las investigaciones, ideas y tesis de sus
representantes más destacados, dentro de las distintas etapas del desarrollo y la
evolución de la escuela. Una serie de economistas destacados complementaron sus
teorías con concepciones constructivas y aportes de gran significado. Por eso surgió
una ideología dispersa y a veces contradictoria, que con frecuencia hace dudar de
la unidad interna del sistema. Sin embargo, esta es una apreciación equivocada
porque todos sus principios se fueron abriendo paso con mucha claridad y
consistencia.
El capitalismo es un orden o sistema social y económico que se encuentra en
constante movimiento, derivado del usufructo de la propiedad privada sobre
el capital como herramienta de producción, que se encuentra mayormente
constituido por relaciones empresariales vinculadas a las actividades de inversión y
obtención de beneficios, así como de relaciones laborales, tanto autónomas como
asalariadas subordinadas libres, con fines mercantiles.1
En el capitalismo, los individuos y las empresas usualmente representadas por los
mismos, llevan a cabo la producción de bienes y servicios de forma privada e
interdependiente, dependiendo así de un mercado de consumo para la obtención
de recursos.
socialista
El socialismo es un sistema social y económico caracterizado por el control por
parte de la sociedad, organizada con todos sus integrantes, tanto de los medios de
producción como de las diferentes fuerzas de trabajo aplicadas en los mismos.12 El
socialismo moderno es, en primer término, por su contenido, fruto del reflejo en la
inteligencia, por un lado, de los antagonismos de clase que imperan en la moderna
sociedad entre poseedores y desposeídos, capitalistas y obreros asalariados, y, por
otro lado, de la anarquía que reina en la producción. 1La RAE define así el término
socialismo: «Sistema de organización social y económica basado en la propiedad y
administración colectiva o estatal de los medios de producción y distribución de los
bienes».3 El socialismo implica, por tanto, una planificación y una
organización colectiva consciente de la vida social y económica.
Subsisten sin embargo criterios encontrados respecto a la necesidad de
la centralización de la administración económica mediante el Estado como única
instancia colectiva en el marco de una sociedad compleja,56 frente a la posibilidad
de formas diferentes de gestión descentralizada de la colectividad socialista, tanto
por vías autogestionarias como de mercado, así como mediante el empleo de
pequeñas unidades económicas socialistas aisladas y autosuficientes. 78El primer
acto en que el Estado se manifiesta efectivamente como representante de toda la
sociedad: la toma de posesión de los medios de producción en nombre de la
sociedad, es a la par su último acto independiente como Estado.
Existen también discrepancias sobre la forma de organización política bajo el
socialismo para lograr o asegurar el acceso democrático a la sociedad socialista a
clases sociales o poblaciones,10 frente a la posibilidad de una situación autocrática
por parte de las burocracias administrativas.11 Las formas históricas de la
organización social de tipo socialista pueden dividirse entre determinadas
evoluciones espontáneas de ciertas civilizaciones de carácter religioso y las
construcciones políticas establecidas por proyectos ideológicos deliberados. De
estas se destacan, respectivamente, el Imperio inca12 y la Unión Soviética.

Al parecer la palabra socialismo fue empleada por primera vez por el monje
Ferdinando Facchinei en 1766 para referirse a la doctrina de los que defendían el
contrato social como el fundamento de la organización de las sociedades humanas.
Veinte años más tarde, otro autor italiano, Appiano Buonafede, volvió a utilizarla.
Sin embargo, la palabra socialismo, en el sentido moderno del término, no aparece
hasta 1830 en Gran Bretaña y en Francia, casi simultáneamente, para designar las
ideas de los seguidores de Robert Owen y de Henri de Saint-Simon. El primer uso
preciso del neologismo se suele atribuir al sansimoniano francés Pierre Leroux
quien en el número de octubre-diciembre de 1833 de la Revue encyclopédique
publicó un artículo titulado Del individualismo y del socialismo, aunque en él criticaba
ambas doctrinas por considerarlas el resultado de la exageración de la idea de
libertad, la primera, y de la idea de asociación, la segunda.13 Sin embargo, en una
nota añadida a la reimpresión del artículo años más tarde escribió:
Desde hace algunos años, nos hemos acostumbrado a llamar socialistas a todos
los pensadores que se ocupan de reformas sociales, a todos los que critican y
reprueban el individualismo… y en este aspecto yo mismo, que siempre he
combatido el socialismo absoluto, soy designado hoy como socialista. […] Soy
socialista sin duda, si se quiere entender por socialista la doctrina que no sacrifica
ninguno de los términos de la fórmula Libertad, Fraternidad, Igualdad, Unidad, sino
que todos los aúna.

Entre agosto de 1836 y abril 1838 Louis Reybaud publicaba en la Revue des deux
mondes tres estudios bajo el título de Socialistas modernos dedicados a Saint-
Simon, a Charles Fourier y a Robert Owen, y en los que confirmaba que el término
socialismo, en su sentido moderno, había surgido hacia 1830.

Como ha destacado Jean-Paul Thomas, toda «palabra nueva, responde a


realidades nuevas. Las doctrinas sociales no surgen casualmente a principios del
siglo XIX. Tienen como origen inmediato la revolución industrial y la miseria que le
acompaña… Contraponen a la búsqueda egoísta del provecho la visión de una
comunidad de productores ligados unos a otros por una solidaridad fraternal».
Según este autor las raíces del socialismo hay que buscarlas en las propuestas
igualitarias de los grupos «radicales» de la Revolución Francesa, como la del enragé
Jacques Roux que escribió en 1793, denunciando los acaparamientos de los bienes
de subsistencia: «los productos de la tierra, como los elementos, pertenecen a todos
los hombres. El comercio y el derecho de propiedad no pueden consistir en hacer
morir de miseria y de inacción a nuestros semejantes».
escuela noclásica
Teoría económica neoclásica, economía neoclásica o escuela neoclásica es
un concepto utilizado en economía para referirse a un enfoque económico que
intenta integrar al análisis marginalista algunas de las percepciones provenientes
de la economía clásica.123
Entre otras, estas tentativas incluyen: La consideración tanto de la oferta como
la demanda en la determinación de los precios. Segundo: los neoclásicos otorgan
gran importancia al papel del dinero en asuntos económicos. Tercero, los
neoclásicos extendieron el análisis económico a otras situaciones consideradas
tanto por los clásicos como los marginalistas, es decir, examinaron no solo
situaciones de monopolio, duopolio y competencia perfecta, sino también
situaciones de competencia imperfecta. (op. cit)
Se podría agregar que los neoclásicos reintroducen el estudio de los grupos o
agregados.4
El término generalmente se emplea en dos acepciones: para referirse a los
desarrollos en el pensamiento económico entre 1870 y 1920 y -más o menos
críticamente- a lo que se considera el pensamiento económico ortodoxo o
dominante (mainstream) en la actualidad.5 En las palabras de E. Roy Weintraub:
"Todos somos neoclásicos ahora, incluso los keynesianos, porque lo que se enseña
a los estudiantes, lo que es la economía principal (mainstream), es economía
neoclásica"6
El economista neoclásico por excelencia es Alfred Marshall, quien es considerado
el fundador de una de las grandes aproximaciones de la escuela (ver Equilibrio
parcial). Otra de las grandes figuras es Léon Walras, fundador de otra de las
grandes aproximaciones (ver Teoría del equilibrio general).- Otros neoclásicos de
gran importancia incluyen Knut Wicksell e Irving Fisher (ver Monetarismo); Arthur
Pigou y Vilfredo Pareto (ver Economía del bienestar) etc.
Como lo anterior sugiere, la escuela neoclásica ejerció gran influencia en los
desarrollos posteriores del pensamiento económico durante el siglo XX, por
ejemplo, a través de la conocida La síntesis clásico-
keynesiana o Neokeynesianismo,7 e incluso en el presente, a través de los nuevos
clásicos
La escuela neoclásica se originó a partir de una crítica (a veces implícita) a los
marginalistas9 quienes, a su vez, buscando introducir rigurosidad y
una metodología que se asemejara más a las de las ciencias físicas, habían ya
criticado los conceptos y métodos utilizados por la economía clásica (o economía
política); crítica que los neoclásicos hicieron, a grandes rasgos, suya.10
Mucho de la crítica neoclásica se centró en tentativas de formalizar y extender tanto
el concepto de la teoría del valor subjetivo como el de individualismo metodológico.
Los neoclásicos reintroducen a la disciplina el estudio de grupos tanto de fenómenos
económicos como de individuos, no ya como "clases" sino bajo la forma de
agregados estadísticos y/o promedios,, etc. Lo neoclásicos son responsables de las
formalizaciones lógicas (Marshall) y matemáticas (Walras, Pareto11) que
caracterizan la disciplina en el presente.9
El término “neoclásico” mismo se originó en una crítica global de Thorstein Veblen12
- fundador de la escuela institucionalista (norte)americana- quien lo utilizó para
referirse a quienes el consideraba compartían las percepciones no científicas de la
escuela clásica, especialmente la utilización de la teoría del valor, incluyendo la
tentativa marginalista de reemplazarla con la teoría del valor subjetivo y la
percepción que “más es necesariamente mejor”. Esto incluye a quienes son
generalmente considerados marginalistas.13
El término se generalizó para referirse a los seguidores de la "economía
marshalliana". El proyecto de Marshall —también llamada síntesis marshalliana14
15— puede ser visto como una tentativa de sistematización y formalización de la

“economía clásica”,16 lo que lo sitúa en el centro específico de la crítica de Veblen.


La visión de Marshall y sus seguidores -llamados inicialmente marginalistas
ingleses o marshallianos- es lo suficientemente distinta de otros marginalistas
como para constituir una percepción distintiva, a pesar de las raíces comunes en el
marginalismo.17
Además otros marginalistas -por ejemplo, Wicksell y Carl Menger- se consideran
fundadores de escuelas (escuela sueca o de Estocolmo y escuela
austríaca respectivamente). Walras es generalmente estudiado -junto a Francis
Edgeworth - entre los matematizadores de la economía, pero a veces incluido con
Pareto como representando la Escuela de Lausanne18 Y sería conducente a error
sugerir que solo Marshall y sus seguidores son marginalistas.19
Bibliografía

https://es.wikipedia.org/wiki/Mercantilismo
https://es.wikipedia.org/wiki/Fisiocracia
https://es.wikipedia.org/wiki/Capitalismo
https://es.wikipedia.org/wiki/Socialismo
https://es.wikipedia.org/wiki/Socialismo
Introducción

Con el concepto de escuelas económicas se hace referencia a agrupaciones de


ideas o concepciones de la economía, que tienen ciertas características en común
y que las distinguen de otras escuelas económicas. Cada una de estas escuelas
usualmente tiene ideas diferentes del comportamiento de las personas, las
empresas, o los agregados, lo que los lleva a formular diferentes recomendaciones
de política económica.
Afirmaban la existencia de una ley natural por la cual el buen funcionamiento del
sistema económico estaría asegurado sin la intervención del gobierno. La palabra
"fisiocracia" proviene del griego physis, naturaleza, y significa el gobierno del orden
natural el cual da origen a la felicidad y la armonía.
Las leyes naturales que rigen la vida es lo que ellos llaman el orden natural. Su
doctrina queda resumida en las expresiones Laissez Faire , Laissez Passier, y Le
monde Lui meme; significando estas en su orden Dejar Hacer, Dejar Pasar y El
Mismo Mundo.
Conclusión

La economía es la ciencia social que estudia la forma en que las sociedades asignan
sus recursos escasos a la producción de los bienes y servicios que van a satisfacer
sus necesidades. Las cuestiones económicas han preocupado a muchos
intelectuales a lo largo de los siglos. En la antigua Grecia, Aristóteles y Platón
disertaron sobre los problemas relativos a la riqueza, la propiedad y el comercio. La
economía, como ciencia moderna independiente de la filosofía y de la política, data
de la publicación de la obra Investigación sobre la naturaleza y causas de la riqueza
de las naciones (más conocida por el título abreviado de La riqueza de las naciones,
1776), del filósofo y economista escocés Adán Smith. El mercantilismo y las
especulaciones de los fisiócratas precedieron a la economía clásica de Smith y sus
seguidores del siglo XIX. Bueno y así las escuelas aparecieron siendo una
necesidad para mejorar o ir en contra de un sistema económica o a favor de ella
estas se complementaron con el pensamiento económico del momento y también
se unieron a ellas empresarios economistas para mejorar sus teorías y aportes ala
sociedad.
Colegio Privado Mixto Nuestra Señora del Carmen
Mazatenango, Suchitepéquez.

Curso: Economía
Docente: Amilcar Genaro Menéndez Gonzalez
Grado: 4to. Perito Contador
Sección “A”

Tema:
Escuelas Económicas

Estudiante:
Kevin Elí Vásquez Santos

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