ENFRENTANDO SU VIDA DIARIA

1. Empiece el día con oración. Acérquese con confianza a Dios para pedir su ayuda y socorro. Más o menos empiece
a orar de la siguiente manera:
“Padre mío, Dios de misericordias y de toda bondad, me acerco ante ti por la sangre de Jesús para rogarte que inclines
tu oído hacia mí y oigas mi oración. Si mis labios hablan con hipocresía, ven y enderézame. Enséñame rectitud y
cámbiame. Dios mío, te necesito. Te pido que visites mi vida, porque no quiero estar destruido y alejado de Ti. Quiero
ofrecerte un cantico, pero mi corazón esta frio y apagado. Ven y renuévame.
No quiero pedirte nada, solo quiero adorarte y bendecir tu nombre. Derrite este corazón con el calor de tu amor y de tu
presencia porque quisiera entonar esta canción:
//Tu amor por mí es más dulce que la miel y tu misericordia es nueva cada día//
//Es por eso que te alabo es por eso que te sirvo es por eso que te doy todo mi amor//
¡Dios maravilloso, que dulce es estar en tu presencia! ¡Quiero empezar este día con gozo y alegría!
Padre de gracia y amor, te pido que venga tu reino en el corazón de cada uno de mis familiares que no te conocen.
Prometiste salvar a mi familia y ellos no han venido todavía a tus pies. ¡Sálvalos, Padre de misericordia y amor! Haz tu
obra en ellos y se rindan a tus pies.
¡Hágase tu voluntad mi Dios! Que mis Pastores, tu Iglesia y todos aquellos que te sirven crezcan en amor y sabiduría,
porque esta es tu voluntad.
¡Derrama tu Espíritu Santo sobre tu Iglesia porque esta es tu voluntad!
Concede dones a tus hijos para que Tu Iglesia sea ministrada y beneficiada con esos regalos que vienen de ti.
Levanta obreros para que sirvan en tu obra y tu Palabra sea anunciada y haya gran salvación. Tú, mi Señor y mi Dios
haz dicho que no quieres que nadie se pierda… Levanta más Pastores y Siervos tuyos para que el mundo te conozca.
Restaura las familias de tu Iglesia para que vivan en unidad y paz.
Da salud, sanidad, y bendición a tu Iglesia porque esta es tu voluntad.
Amantísimo Dios, se haga la voluntad de Dios en la tierra como se hace en el cielo. Que no se haga tu voluntad
permisiva; sino tu voluntad perfecta.
Danos el pan de cada día, Señor nuestro. Danos el trabajo para conseguirlo. Tu haz dicho, Señor amado que tienes
cuidado de nosotros. ¡Has prometido nunca abandonarnos! Confío que eres Bueno, Grande y Todopoderoso para
proveernos de todo aquello que necesitamos.
Padre mío, perdona mis pecados, así como también yo perdono a quienes pecan contra mí. Padre mío, ten misericordia
de mí, y perdona mis pecados y los de mi familia. No puedes negarte a darme perdón. Tu gran misericordia he conocido
y sé que me perdonaras y limpiaras. Aquí estoy Señor buscando tu rostro para que me limpies. Déjame entonarte un
himno:
ENTERA CONSAGRACION
QUE MI VIDA ENTERA ESTÉ
CONSAGRADA A TI, SEÑOR;
QUE A MIS MANOS PUEDA GUIAR
EL IMPULSO DE TU AMOR.

CORO
LÁVAME EN TU SANGRE, SALVADOR,
LÍMPIAME DE TODA MI MALDAD;
TRAIGO A TI MI VIDA PARA SER, SEÑOR,
TUYO POR LA ETERNIDAD.

QUE MIS PIES TAN SÓLO EN POS

DE LO SANTO PUEDAN IR;
Y QUE A TI, SEÑOR, MI VOZ
SE COMPLAZCA EN BENDECIR.
QUE MI TIEMPO TODO ESTÉ
CONSAGRADO A TU LOOR;
QUE MIS LABIOS AL HABLAR
HABLEN SÓLO DE TU AMOR.

TOMA ¡OH DIOS!, MI VOLUNTAD,

Y HAZLA TUYA NADA MÁS;
TOMA, SÍ, MI CORAZÓN,
POR TU TRONO LO TENDRÁS.

TOMA TÚ MI AMOR, QUE HOY

A TUS PIES VENGO A PONER;
¡TOMA TODO LO QUE SOY,
TODO TUYO QUIERO SER!

Señor guárdame en este día de toda tentación y líbrame del mal. No quiero pecar contra Ti. Has prometido darme la
salida para poder resistir la tentación. Ayúdame Señor mío. Te entrego mi vida para que la guardes en este día. Gracias
Señor. Amen”.

2. Hable con amabilidad con todos los que se encuentre. Cuando salga de compras o salga a hacer algún trabajo
sea amable. Cuando vaya a estudiar o a comer sea amable. En todo momento sean gratas sus palabras. Sepa felicitar
y reconocer lo que otros hacen. Aprenda a decir: “Gracias”, “me gustó mucho su trabajo”, “hizo un delicioso almuerzo”,
“eres muy bueno en tu trabajo”, etc.

3. No ande preocupado (a). Deje que Dios lo sorprenda con su bondad. Todo el tiempo medite en la bondad de Dios
y toda preocupación se ira porque un Dios bueno no puede abandonar a sus hijos. Debe esperar que Dios le sorprenda
con alguna buena noticia en el día.

4. Este gozoso y alegre todo el tiempo. Sonría a todos. Si Dios esta con usted entonces el gozo debe inundarlo.
Seguramente algunas veces la tristeza vendrá aun sobre los hermanos más consagrados, pero busque a Dios y toda
aflicción se ira de su corazón. Las personas que no tienen gozo no son buen testimonio para el mundo. Si esta gozoso
cantara y glorificara a Dios sin avergonzarse.

5. Comparta el evangelio con una persona por lo menos. Dios nos ha llamado a predicar su Palabra a todos porque
no quiere que nadie se pierda, y seamos o no Pastores, tenemos la responsabilidad de predicar el evangelio. Dios nos
pedirá cuentas a todos. Mayormente a los Pastores. Trate de buscar una oportunidad para predicar el evangelio a una
persona. No solo entregar un tratado evangelistico; sino esforzarse por llevarlo a la rendición y tomar su número de
celular para llamarlo y traerlo al culto.

6. Este alerta para no caer en tentación. El enemigo quiere incitarlo a tomar malas decisiones. Sea cuidadoso.
Algunas veces le incitara a hacer algo que le puede hacer daño a su salud. Otras veces a hacer un trabajo o un contrato
que solo le llevara al lamento. Algunas veces buscara que trabe una amistad con personas que solo le harán alejarse
de los planes de Dios para su vida.

7. Antes de dormir, ore y lea la Biblia. Aunque solo ore y lea 20 minutos, será importante para Dios. Es bueno oír
también predicas y enseñanzas por radio o Televisión. Si tiene un libro de algún autor cristiano también léalo y aprenda
lo que allí se enseña.