Вы находитесь на странице: 1из 33

Universidad Rafael Landívar

Facultad de Humanidades
Estrategias Básicas de Investigación

Razones de uso de cigarros electrónicos en la población


guatemalteca entre 18 y 25 años.

Reina Márquez
2491717
Rocío Montenegro
1287605
María Fernanda Sequén
1131518
Nidya Lemus

Guatemala de la Asunción, noviembre de 2018


Campus Central
Índice
I. Introducción ............................................................................................................. 3

1.1 ¿Qué es el cigarrillo electrónico? ...................................................................... 9

1.3 Desventajas .................................................................................................... 12

1.4 Cómo se comparan los cigarrillos electrónicos con los tradicionales .............. 12

II. Planteamiento del problema ................................................................................. 14

2.1 Objetivos ......................................................................................................... 15

2.1.1 Objetivo general........................................................................................ 15

2.1.2 Objetivos específicos ................................................................................ 15

2.2 Variables ......................................................................................................... 16

2.3 Definición de variables .................................................................................... 16

2.3.1 Definiciones conceptuales ........................................................................ 16

2.3.2 Definiciones conceptuales ........................................................................ 16

2.4 Alcances y Límites .......................................................................................... 17

2.3 Aporte ............................................................................................................. 17

III. Método ................................................................................................................ 18

3.1. Sujetos ........................................................................................................... 18

3.2 Instrumento ..................................................................................................... 18

3.3 Procedimiento ................................................................................................. 19

3.4 Tipo de Investigación, diseño, y análisis estadístico. ...................................... 19

IV. Presentación y análisis de resultados ................................................................. 21

VI. Conclusiones ...................................................................................................... 29

VI. Recomendaciones .............................................................................................. 30

2
I. Introducción

Los cigarrillos electrónicos, también llamados e- cigs, vaporizadores

electrónicos o sistemas electrónicos de administración de nicotina, creados en

China en el año de 2004, utilizan una pequeña batería para calentar una solución

líquida y convertirla en vapor. En la actualidad existen más de 460 marcas

diferentes algunos de los más comunes son: e-cig, narguile electrónico o e-hookah,

hookah bolígrafo, vapeador, bolígrafo vapeador, mods (vaporizadores más

poderosos que se pueden ajustar a las preferencias personales).

La mayoría de los cigarrillos electrónicos están conformados por cuatro

elementos: un cartucho que contiene la solución líquida, un elemento calentador,

una fuente de energía y una boquilla por la cual se inhala.

Se han vuelto demasiado populares entre los adolescente y actualmente son

la forma más común de consumo de nicotina entre los jóvenes, especialmente en

Estados Unidos.

Algunos de los factores que han contribuido a su popularidad es la facilidad

con que se pueden obtener en el mercado, su atractiva publicidad y la variedad de

sabores de líquidos que pueden ser aplicados. Se han planteado algunos problemas

debido al uso de este artefacto ya que puede ser la principal causa para consumir

otros productos de tabaco, como el cigarrillo, en un futuro.

Los efectos que causan los cigarrillos electrónicos son instantáneos, debido a

que cuando una persona lo usa, la nicotina contenida en el líquido se absorbe

rápidamente por el torrente sanguíneo, esta estimula las glándulas suprarrenales

para que liberen la hormona de epinefrina, comúnmente conocida como adrenalina

(National Institute on Drug Abuse, 2018); esta estimula el sistema nervioso central y

aumenta la presión arterial, el ritmo respiratorio y la frecuencia cardiaca. La NIH

3
afirma que la nicotina aumenta los niveles de dopamina, la cual afecta las áreas del

cerebro que controlan la recompensa, es decir, el placer generado por conductas

generales. Pueden ser menos dañinos que los cigarrillos debido a que contiene

menos químicos, pero en periodos largos causará los mismos daños que los

cigarrillos. En los diferentes estudios que han elaborado a nivel mundial todavía no

se ha determinado que los cigarrillos electrónicos sean un instrumento efectivo para

dejar el cigarrillo por completo, aunque a algunas personas, les ha funcionado

paulatinamente.

Para la presente investigación, se buscaron diferentes estudios relacionados

al consumo de vaporizadores para sentar la base de la misma. Debido a que el uso

de los vaporizadores (o cigarros electrónicos) es un fenómeno relativamente

reciente, no se han conducido muchas investigaciones a nivel nacional, sin

embargo, a continuación, se presentan aquellas que se han llevado a cabo en

Guatemala y que son relevantes al tema.

Arriaza realizó una investigación mixta en 2016, que tuvo como objetivo

describir las características, patrón y razón de uso de los cigarros electrónicos en

Guatemala como amenaza para el control del tabaco durante los años 2014 y 2015.

La muestra la comprendieron 39 empresas a quienes se les aplicó una lista de

cotejo para observación de distintos elementos del negocio, así como entrevista

semiestructurada gestionada a cuatro expertos en el tema; la información obtenida

se analizó a través de porcentajes y frecuencias. Este estudio encontró que las

características de estos productos atraen a jóvenes y nuevos fumadores y son

utilizados principalmente por personas comprendidas en el rango de edad entre 18 a

25 años, de estrato socioeconómico medio-alto, con una frecuencia de consumo

menor a una vez al mes. El autor recomendó al Ministerio de Salud Pública y

4
Asistencia Social, al Congreso de la República, Organización Panamericana de la

Salud y activistas en el control del tabaco priorizar la regulación y el control de los

cigarros electrónicos en la agenda política como medida precautoria para evitar

riesgos a la salud de la población y socavar las estrategias para el control del

tabaco.

De la misma manera, Florián, Reneau, Girón y Hernández (2017) buscaron

establecer los conocimientos y las actitudes relacionadas al uso del cigarrillo

electrónico en estudiantes de la Universidad de San Carlos de Guatemala (USAC)

durante el período entre abril y mayo de 2017. Su estudio de carácter descriptivo

transversal tomó como muestra a 227 estudiantes de las facultades de Ciencias

Médicas, Ciencias Químicas y Farmacia, Odontología y Escuela de Ciencias

Psicológicas de la USAC mayores de 18 años y de género diverso a los cuales se

les administró una encuesta. Los datos se sometieron a un análisis estadístico por

medio de porcentajes y frecuencias para llegar a la conclusión de que los

estudiantes de las facultades mencionadas anteriormente poseen conocimientos

insatisfactorios con relación al uso del cigarrillo electrónico y presentan una actitud

inadecuada hacia el consumo de los mismos. Se recomendó informar a los

estudiantes sobre los riesgos que conlleva el uso del cigarrillo electrónico y realizar

investigaciones posteriores relacionadas al cigarrillo electrónico con énfasis en

factores de riesgo que aumentan su accesibilidad y utilización.

En resumen, ambos estudios realizados en Guatemala encontraron que la

población consumidora de los cigarros electrónicos son personas jóvenes que

presentan pocos conocimientos de los riesgos que estos dispositivos presentan.

A continuación, se presentarán las investigaciones internacionales acerca de

los cigarrillos electrónicos, compensando la poca información nacional con respecto

5
al tema.

El estudio de Oliva y Conejo (2014) fue una investigación fenomenológica,

que tuvo como objetivo describir las exposiciones a cigarrillos electrónicos por

medio de consultas telefónicas al centro antitóxico de España; los involucrados

fueron sujetos que estuvieron expuestos al producto CE (tóxico que contiene los

cigarrillos electrónicos) de los cuales un 77% de ellos fueron niños y un 23%

adultos. La información se obtuvo por medio del centro de llamadas telefónicas a

esa institución, para lo cual se analizó el contenido de manera que se pudiera

generar la información solicitada. Los resultados obtenidos indicaron que se ha

producido un rápido incremento de consultas telefónicas por intoxicación por

exposición al producto CE, por lo que se recomendó vigilar este fenómeno y

colaborar estrechamente con las autoridades sanitarias.

La siguiente investigación por Martínez-Sánchez (2015) se propuso describir

el conocimiento y la percepción de la nocividad de los cigarrillos electrónicos en la

población de Barcelona, España en los años 2013 a 2014. Para esta investigación

de enfoque cuantitativo con diseño transversal, se tomó una muestra de 736

personas que fueron parte del estudio dCOT3 de diverso género que fueran

mayores a 18 años de edad, a quienes se les administró una encuesta y el test de

Fagerström (para calcular el nivel de dependencia de la nicotina). Luego de diversos

análisis de porcentajes y frecuencias, se encontró que la mayoría de los sujetos

consideraban a los cigarrillos electrónicos menos nocivos que el cigarrillo

convencional. Se recomendó regular la publicidad de los cigarrillos electrónicos en

los medios de comunicación debido a la escasa evidencia científica sobre su utilidad

y sus potenciales efectos adversos.

La investigación de tipo transversal realizada por Tarrazo et al. (2015) en

6
Galicia, España, tuvo como objetivo estudiar de forma detallada el consumo de

cigarrillos electrónicos en la población gallega del 2007 hasta el 2015; los sujetos

que se involucraron en esta investigación fueron un grupo de fumadores del ámbito

urbano a los cuales se les sometió a una observación descriptiva la cual dio como

resultado que en el año 2015 un 0.7% optó por el uso de cigarros electrónicos, por

lo cual se concluyó que el uso de cigarrillos electrónicos es bajo y más frecuente

entre los fumadores, más no exclusivo.

Otra investigación relevante es la de Wagoner et al. (2016) que pretendió

explorar las percepciones de adolescentes y adultos jóvenes acerca de los Sistemas

de Distribución Electrónica de Nicotina (ENDS por sus siglas en inglés) y el lenguaje

usado para describir sus productos en Carolina del Norte, Estados Unidos. Este

estudio cualitativo fenomenológico utilizó una muestra de 77 personas de diversas

etnicidades y géneros de diferentes, con edades entre 13 y 25 años, los cuales

fueron divididos en diez grupos focales para realizar un foro semiestructurado. Se

realizó un análisis factorial de los datos para determinar las tendencias de los

términos y llegar a la conclusión que estos grupos tienen más percepciones

positivas que negativas acerca de los ENDS. Se recomendó hacer esfuerzos

preventivos para resaltar los aspectos negativos de estos productos para disuadir el

uso y la experimentación en personas no usuarias jóvenes.

En el mismo tema, Kozlowski, Homish y Homish (2017) evaluaron los roles

de la percepción de la satisfacción, la percepción del peligro y el tipo de productos

vaporizadores en correlación con el uso frecuente de productos vaporizadores en

Estados Unidos. Esta investigación cuantitativa correlacional tuvo una muestra de

105 adultos entre 18.5 y 44.9 años de edad parte del programa Soldados y Familias

Sobresalientes a través de los Años (STUDY por sus siglas en inglés) compuesto de

7
una diversidad de etnicidades y géneros, a los cuales se les administró una

encuesta en línea. Se realizaron diferentes análisis correlacionales para concluir que

el uso de los cigarrillos electrónicos tiene una correlación positiva con la percepción

de satisfacción y una correlación negativa con la percepción de peligro a

comparación de los cigarrillos. Se recomendó a futuros estudios emplear medidas

de satisfacción y de percepción de peligro, además del tipo de producto que se usa

para determinar el uso de los cigarrillos electrónicos.

Continuando este tema, Rhoades et al. (2017) exploraron el uso de los

cigarrillos electrónicos en un grupo de jóvenes indios americanos en Oklahoma,

Estados Unidos. Este estudio cuantitativo de diseño exploratorio tomó como

muestra a 181 jóvenes entre 11-17 años que se identificaron como indios

americanos en Oklahoma, administrándoles un cuestionario de 78 preguntas acerca

de su uso de Sistemas de Distribución Electrónica de Nicotina tales como los

cigarros electrónicos y otros productos de tabaco. Se usó un análisis estadístico

usando porcentajes y frecuencias para concluir que el uso de cigarrillos electrónicos

es altamente prevalente entre estos grupos juveniles, incluyendo a aquellos que

nunca habían fumado tabaco, lo cual indica que estos dispositivos están a su

disposición. Se recomendó implementar políticas que hagan a los cigarrillos

electrónicos menos atractivos para la juventud india americana.

Iqbal et al. (2018) buscó determinar los conocimientos, el consumo y la

percepción hacia los cigarros electrónicos de estudiantes de medicina en Sindh,

Pakistán. Para cumplir con este objetivo, decidieron hacer un estudio cuantitativo

con un diseño transversal, aplicando una encuesta estructurada autoadministrada a

500 estudiantes de género indistinto, estudiantes de medicina en cinco

universidades diferentes en la provincia de Sindh, Pakistán. Para analizar los datos,

8
se utilizaron diferentes análisis de porcentajes y frecuencias para encontrar que la

mayoría de los encuestados consideraban que los cigarrillos electrónicos son

relativamente más seguros y demostraban mayores probabilidades de uso de los

vaporizadores en conjunto con el consumo de cigarrillos y otros productos de

tabaco. Se recomendó aprobar leyes en contra de su promoción y que prohíban que

se publiciten como alternativas más seguras sin antes tener evidencia definitiva que

demuestre sus beneficios.

Muchas de estas investigaciones llegaron a conclusiones similares acerca del

tipo de consumidores de los cigarros electrónicos, especialmente que tenían

percepciones de riesgo mucho menor al de los cigarros convencionales, a pesar de

que no hay mucha información que respalde esta afirmación. También

recomendaron restringir la manera en la que se publicitan los e-cigarrillos hasta que

se tenga más información acerca de ellos.

A continuación, se presentarán diferentes investigaciones relacionadas con las

variables de estudio.

1.1 ¿Qué es el cigarrillo electrónico?

Los cigarrillos electrónicos son básicamente aparatos que evaporan una

solución líquida que contiene nicotina (opcional) y saborizantes, la cual es inhalada

por el usuario. Es conocido por muchos nombres, tales como e - cig, narguiles

electrónicos o e – hookahs, mods, pluma de vapor, vapeadores, vapes, sistemas de

tanques, entre otros, y se han vuelto muy populares en cuestión de pocos años

entre adultos jóvenes e incluso menores de edad. Su popularidad ha explotado tanto

que algunos los han modificado para suministrar otras sustancias que son ilegales

en algunos lugares, como es en el caso de la marihuana (Centro Nacional para la

9
Prevención de Enfermedades Crónicas y Promoción de la Salud [NCCDPHP],

2017).

Estos dispositivos constan esencialmente de un tanque donde se contiene el

líquido, una boquilla, un atomizador y una batería. Todos estos elementos tienen

diferentes variaciones y combinaciones, lo que hace que se categoricen como

mods, plumas de vapor, vapeadores, etc. Estos elementos funcionan en conjunto

para que la batería active una serie de alambres de cobre (recubiertas en una fibra

absorbente), las cuales evaporan el líquido de manera que pueda ser inhalado a

través de la boquilla (National Institute on Drug Abuse [NIH], 2018).

Los líquidos usados para los vaporizadores constan de cuatro componentes

principales: propilenglicol, glicerina vegetal, saborizantes y nicotina (opcional)

(McMillen, 2015). El propilenglicol es el componente que resalta los saborizantes y

da el “golpe” en la garganta; también es usado en algunos refrigerantes para

hacerlos menos tóxicos, en productos de belleza, pasta dental, comida para

mascotas, productos médicos, entre otros. Algunas personas reportan alergias a

este químico. La glicerina vegetal, por otro lado, es lo que le da la densidad al humo,

ya que es más espeso que el propilenglicol, y agrega un sabor ligeramente dulce;

puede ser usado como edulcorante y se encuentra en productos de belleza, comida

de mascotas, comida, cremas medicinales, pasta dental, entre otros. La glicerina

vegetal es menos alergénica que el propilenglicol (Vaping360, 2018). Los

saborizantes normalmente son los que se usan en las comidas, incluyendo

saborizantes artificiales. Estos no son regulados por ninguna entidad en específico,

por lo que se encuentran grandes discrepancias de ingredientes en los mismos

sabores de diferentes marcas. Sin embargo, se ha encontrado que hay algunos

saborizantes que son tóxicos tras una exposición prolongada, como, por ejemplo,

10
cinamaldehído, o-vanillin, diacetilo y pentanodiona (Hess, 2018).

· 1.2 Ventajas

El cigarrillo electrónico se introdujo en Estados Unidos en el 2007 como una

opción menos perjudicial para la salud a comparación de los cigarrillos

convencionales. Como ha sido descrito anteriormente, el aspecto de algunos

vaporizadores o cigarrillos electrónicos puede ser muy similar, pero tienen

mecanismos internos diferentes. Los fabricantes de los vaporizadores ofrecen

muchas ventajas sobre el humo del cigarrillo, ya que es, en teoría, menos perjudicial

para la salud, tanto para el que lo consume de forma directa como para las

personas que llegan a consumirlo de forma indirecta (Cremades y Vicente 2014).

En la actualidad una de las mayores amenazas para la salud pública es el

tabaco. Por esta razón es evidente que el consumo de cigarrillos electrónicos o

vaporizadores ha aumentado en los últimos años alrededor del mundo

comprobando que es un método efectivo para la deshabituación tabáquica. A su

vez, reduce el número de cigarrillos consumidos, disminuyendo la contaminación del

medio ambiente producido por el humo combustible y las colillas desechables. En el

ámbito de la salud pública también prueba ser más ventajoso, ya que el cigarrillo

electrónico contiene menos cantidades de Nitrosamina, lo cual es menos perjudicial

para los fumadores de segunda mano. Una de las mejores ventajas es que, aparte

de ser un método de sustitución tabáquica, no es tan drástico a comparación de

otros métodos que pueden tener un impacto psicológico en la persona y pueden ser

utilizados en espacios cerrados sin afectar a las personas indirectamente con los

componentes químicos que contiene un cigarrillo convencional (Ariño 2015).

Lee et. al (Como se citó en Ayesta, García y Rodríguez 2013)

Lo que podía ser no más que una moda pasajera se está consolidando en

11
muchos países desarrollados: a partir del 2010 las ventas y consumos han

realizado un despegue vertical y han empezado a ser consumidos por

jóvenes, adultos jóvenes y por población que no busca la cesación. (p.2)

1.3 Desventajas

Los cigarrillos electrónicos no producen humo por combustión, sino que

vaporiza un líquido especial. No obstante, eso no significa que no sea dañino. El

vapor producido por estos dispositivos presenta posibles complicaciones de salud,

especialmente en los saborizantes que no han sido evaluados por su exposición

prolongada. Los investigadores de la escuela de TH Chan de Salud Pública de la

Universidad de Harvard (EE. UU) dieron a conocer que el diacetilo, un saborizante

usado para los sabores mantecosos, provoca complicaciones respiratorias graves,

tales como “pulmón de palomitas”, además de incrementar las probabilidades de

contraer cáncer. Asimismo, el químico que contiene los diferentes saborizantes que

existen, como el de algodón de azúcar, es un potencial bastante atractivo para los

jóvenes, cuyos cerebros todavía están en desarrollo. Además, no hay mucha

información acerca de las posibles consecuencias del consumo prolongado de estos

dispositivos, por lo que no se es posible determinar las consecuencias del consumo

a largo plazo. (Pinheiro ,2018) “Aunque teóricamente sean más seguros que los

cigarrillos normales, no hay ninguna evidencia científica que apoye esta supuesta

seguridad. Esta es la razón por la cual países como Brasil, Argentina, Austria,

Canadá y Colombia no permiten su comercialización. Otros, como Australia,

Dinamarca, Bélgica solamente permiten la venta de cigarrillos electrónicos sin

nicotina. “

1.4 Cómo se comparan los cigarrillos electrónicos con los tradicionales

12
Las campañas publicitarias para adquirir los cigarrillos electrónicos cada día

son más notables, hay una gama increíble de diseños y estilos diferentes. Nos

venden la idea de que estos son menos dañinos para la salud. Pero, ¿será cierto?

¿Qué es lo que los hacen menos nocivos para la salud?

Los cigarrillos electrónicos son dispositivos que fueron diseñados con el fin

primordial que las personas dejen de fumar, ya que contiene distintas cantidades de

nicotina, que es la sustancia más conocida dentro de los cigarrillos y que el principal

problema es que genera dependencia en la persona que lo consume, lo cual

produce adicción. Sin embargo, también existen los «vapeadores», que no

contienen nicotina y en cambio utiliza glicerina vegetal.

Los cigarrillos electrónicos resultan un poco más higiénicos en el ámbito

bucal debido a que no existe una combustión, porque no se quema nada, entonces

no saca humo sino vapor, que es el resultado del calentamiento de las sustancias

que este posee. Lo contrario a los cigarrillos convencionales que con el paso del

tiempo causan muchas tonalidades de color amarillento en los dientes. También

resulta ser menos dañino para el ambiente y no deja los malos olores que se

penetran en las prendas de vestir, asociados al cigarrillo convencional.

No se ha podido demostrar que el vapor que producen los cigarrillos

electrónicos no afecta a terceros, porque para las industrias que los producen, es un

inconveniente para su producción.

La Organización Mundial de la Salud (OMS) dice el informe que estos

dispositivos están dirigidos a las personas que quieren dejar de fumar y no para

jóvenes o no fumadores , por ello se busca impedir su promoción. Otra de las

recomendaciones es “minimizar los posibles riesgos sanitarios”. Existe mucha

polémica en torno a que las empresas de cigarrillos electrónicos no dan toda la

13
información a sus usuarios sobre los componentes y riesgos que conllevan.

Mientras que el tabaco, no es más que un rollo de muchas hojas prensadas

revueltas con más de 4,000 sustancias tóxicas, dañinas para la salud como

amoniaco, arsénico, cadmio, algunas de estas aumentan las probabilidades de

padecer cáncer.

El tabaco afecta a muchas partes del cuerpo. Según el neumólogo Mauricio

Montaño, son a nivel de sistema respiratorio (pulmones, garganta, bronquios) y

cardiovascular (el corazón y todo el sistema circulatorio). La combustión de los

químicos tóxicos afecta a los bronquios y pulmones. Una de las enfermedades más

comunes relacionada con el tabaquismo es la Enfermedad Pulmonar Obstructiva

Crónica (EPOC); esta puede producir bronquitis crónica o enfisema, que es una

afectación de las bolsas de aire de los pulmones llamados alvéolos, según redactó

(Vivanco 2015) en el Periódico “El Comercio”.

II. Planteamiento del problema


El aumento de popularidad de los ENDS está creciendo de manera

exponencial, prometiendo ser una alternativa más segura a los cigarrillos

convencionales. Sin embargo, no hay estudios longitudinales contundentes (debido

al poco tiempo que han estado en el mercado) sobre los efectos que pueden tener

estos sobre la salud. Muchas personas han dejado los cigarrillos a un lado y los han

cambiado por estos dispositivos, causando conflictos con las empresas tabaqueras,

sin en realidad saber si va a ser de beneficio para su salud. Los miles de sabores y

presentaciones atractivas de los cigarrillos electrónicos también presentan un

atractivo fuerte para la población joven, la cual puede verse iniciada en el hábito de

fumar y con más apertura hacia la nicotina. En Guatemala hay pocas

investigaciones sobre el consumo de estos dispositivos, en especial las razones de

14
uso de estos. Además, no hay legislación que regule el uso de estos,

probablemente debido a la carencia de información que hay sobre el tema.

La presente investigación proveerá información sobre los cigarrillos

electrónicos y los conocimientos que hay acerca de ellos en diferentes poblaciones

del mundo. Asimismo, la información recolectada dará un marco para crear

programas de concienciación para disuadir a los jóvenes de usar estos dispositivos,

que en muchos casos contienen nicotina.

Por lo cual surge la siguiente interrogante:

¿Cuáles son las razones de uso de cigarrillos electrónicos en la población

guatemalteca entre 18 y 25 años?

2.1 Objetivos

2.1.1 Objetivo general

Identificar las razones de uso de cigarrillos electrónicos en la población

guatemalteca entre 18 y 25 años.

2.1.2 Objetivos específicos

● Determinar si el estado de salud es una razón para el uso de los cigarros

electrónicos.

● Establecer si la moda es un factor para potencializar el uso de los cigarrillos

electrónicos.

● Definir si el consumo del cigarrillo electrónico tiene mayor conveniencia para

el usuario.

● Evaluar si los cigarrillos electrónicos cumplen un efecto placentero en las

personas que lo utilizan.

15
2.2 Variables

Razones de uso de los cigarrillos electrónicos.

2.3 Definición de variables

2.3.1 Definiciones conceptuales.

Razones de uso.

Según el Diccionario de la Lengua Española razón es “el argumento o

demostración que se aduce en apoyo de algo” (párr. 4). Asimismo, el “motivo, causa

o causante de alguna acción” (párr. 5).

Cigarrillo electrónico.

Según Córdoba (2014), el cigarrillo electrónico (e-cig) es un dispositivo con

forma de cigarrillo convencional que libera determinadas dosis de vapores de

nicotina a través de un proceso de calentamiento electrónico.

2.3.2 Definiciones conceptuales.

Razones de uso.

Para la presente investigación se entenderá como razones de uso como los

motivos por los cuales los jóvenes utilizan cigarrillos electrónicos, medido a través

de indicadores:

● Salud

● Moda

● Conveniencia

● Placer

Cigarrillos electrónicos.

Para nuestra investigación podemos definir al cigarrillo electrónico como

16
vaporizador, el dispositivo que funciona a base de calor liberando un vapor de

diferentes aromas y sabores que vienen en diferentes clases, tamaños colores y

sabores. Además, se están excluyendo aquellos dispositivos que contienen tabaco

(por ejemplo, los dispositivos marca iQUOS).

2.4 Alcances y Límites

Los resultados obtenidos serán aplicables únicamente para jóvenes de 18 a

25 años, residentes de la ciudad capital con acceso a estos dispositivos. Ya que la

muestra no es probabilística, no es representativa de la población guatemalteca y no

podrá ser extrapoladas a otras poblaciones.

2.3 Aporte

A los usuarios de los cigarrillos electrónicos: conocer un poco más sobre los

dispositivos que consumen y los posibles riesgos de salud que estos plantean.

A la Universidad: proveer una base sólida para poder tomar acción sobre esta

nueva tendencia y poder educar a los jóvenes sobre la misma.

A la sociedad en general: esclarecer las razones por las cuales las personas

se ven impulsadas a empezar a usar estos dispositivos.

17
III. Método

3.1. Sujetos

Este estudio se realizó en la Ciudad de Guatemala. Para la recolección de


información, se contó con la participación de 55 jóvenes de la Ciudad de Guatemala,
fue fundada en 1776 se extiende en un valle rodeada de volcanes, es llamada
también la ciudad de la eterna primavera, cuenta con una variedad de climas que se
pueden disfrutar en sus espectaculares sitios turísticos.

En un rango de edad entre 18 y 25 años de edad género indistinto. El


muestreo de la investigación es no probabilístico el cual según Hernández,
Fernández y Baptista (2013) pueden ser llamadas también muestras dirigidas y son
las que suponen un procedimiento de selección informal; así como un muestreo por
conveniencia donde los sujetos son seleccionados dada la conveniente
accesibilidad y proximidad de los sujetos para el investigador (Hernández. et. al.
2013)

3.2 Instrumento

Para el desarrollo del trabajo de campo de la presente investigación, se


utilizaron dos instrumentos: un cuestionario y una entrevista elaborados por Lemus,
N., Márquez, R., Sequén, M. y Montenegro, R. (2018).

La encuesta está compuesta por una sección primera que permitirá recolectar
datos demográficos de la muestra, tales como el género, edad, carrera que estudia
o estudió, entre otros. La segunda parte está integrada por las preguntas acerca del
tema de investigación. Cada pregunta va dirigida a medir cada uno de los
indicadores (salud, moda, conveniencia y placer), por lo que a cada respuesta será
asignado un valor positivo, negativo o neutral con base en la relación que tenga
dicha respuesta con el indicador. Al final, se sumará un total de todos los valores
que hay por indicador y este indicará qué tan relevante es ese indicador como razón
de uso de los cigarrillos electrónicos. La última pregunta se analizará por medio de
frecuencias y porcentajes.

18
Para el cuestionario proveerá respuestas más extensas acerca del
razonamiento de los sujetos al momento de usar un cigarrillo electrónico, se estará
usando un cuestionario que consta con 9 preguntas y una encuesta con 12
preguntas. Se hará una estructuración de ideas para poder analizar las razones más
recurrentes y hacer una profundización sobre estas razones.

3.3 Procedimiento

Para llevar a cabo la investigación se efectuaron los siguientes pasos:

● Se definió el tema de investigación

● Se determinó el objetivo general de la investigación y luego los objetivos

específicos.

● Se solicitó la autorización de los encuestados para llevar a cabo el estudio.

● Se investigaron antecedentes relacionados al presente estudio.

● se recolectó información como parte del marco teórico acerca del uso de los

cigarrillos electrónicos en jóvenes de 18 a 25 años.

● Se estructuraron dos instrumentos para la recolección de datos una

entrevista y una encuesta que fueron resueltos por los jóvenes de 18 a 25

años que utilizan los cigarrillos electrónicos.

● Se extrajeron los resultados y se les analizó para llegar a las conclusiones

presentadas.

3.4 Tipo de Investigación, diseño, y análisis estadístico.

Para el desarrollo del trabajo se realizó una investigación mixta, la cual

consiste en utilizar varios métodos para la obtención de los resultados, en este caso

utilizamos una metodología cuantitativa con un análisis estadístico descriptivo y una

metodología cualitativa con una estructuración de ideas según Hernández, et al.

19
(2013). Así mismo se utilizó un diseño descriptivo - fenomenológico para poder

hacer el estudio y comprender la percepción de la gente respecto a los cigarrillos

electrónicos.

Para el análisis de la información en lo cuantitativo será analizada por medio de

gráficas elaboradas a través de Google Forms y para los cualitativos por medio de

análisis de contenido.

20
IV. Presentación y análisis de resultados
A continuación, se presentarán los resultados obtenidos por medio de las

encuestas y cuestionarios distribuidos a los 55 sujetos de nuestra muestra.

Gráfica 1: género

En esta gráfica circular podemos observar que la muestra se dividió en dos

géneros únicamente. El 54% de los sujetos se identificaron como mujeres, mientras

que los sujetos que se identificaron como hombres conformaron el 46%.

21
Gráfica 2: Edad

En esta gráfica se puede observar la distribución de edad de los 55 sujetos

de la muestra. Las personas que tenían 18 años conforman un 12% de la muestra,

seguido por los de 19 años, quienes tomaron casi una cuarta parte de la muestra

con 24%. Continúa con los sujetos de 20 años, quienes conformaron el 6% de los

usuarios; luego, los de 21 años con un 8%; siguiente, los de 22 con un 16%;

después, los de 23 con un 12%; seguidamente, los de 24 con un 6%; y, por último,

los de 25 con un 16%. En base con esto, se puede inferir que las personas de 19

años de edad conforman una gran parte de los consumidores de los cigarrillos

electrónicos.

22
Tabla 1: estadísticos de edades

Esta tabla sirve para complementar la gráfica 2 para indicar la descripción de

la misma. El rango de edades fue de 7, con un mínimo de 18 años y un máximo de

25 años. La media de edad fue de 21.35, con una desviación estándar de 2.367.

23
Gráfica 3: Universidades

Aquí se puede apreciar la variedad de universidades en las que estudian o

estudiaron los participantes. La mayoría está conformada por estudiantes de la

Universidad Rafael Landívar, quienes toman el 52% de los participantes, seguida

por los estudiantes de la Universidad Mariano Gálvez con un 12%. El 10% de los

participantes no atendieron a ninguna universidad, y el 8% fueron de la Universidad

San Carlos. Siguiente, está la Universidad InterNaciones con un 6% de la muestra.

En penúltimo lugar está la Universidad Francisco Marroquín y la Universidad del

Istmo, ambos con un 4% de participación. Por último, están la Universidad del Valle

y la Universidad Panamericana con 2%.

Gráfica 4: Estatus socioeconómico

24
El último demográfico que se midió fue el estatus socioeconómico, cual fue

determinado en base a los ingresos que reciben mensualmente. El 36% de los

participantes fueron ubicados en la categoría de medio-bajo, seguidos por el estrato

medio con un 26%. Curiosamente, el estatus bajo ocupa el tercer lugar con el 18%

de los participantes, y luego el medio-alto con el 14%. Por último, los sujetos que

pertenecían al estatus socioeconómico alto solo ocuparon el 6% de los

participantes.

25
Tabla 2: descripción de puntajes de indicadores.

Esta tabla resume todos los resultados de los puntajes que se le asignaron a

los indicadores de la encuesta.

El indicador de salud tenía una puntuación mínima de -1 y una puntuación

máxima de 3, lo que le da un rango de 4 puntos. Tuvo una media de 1.34 y una

desviación estándar de 1.154, lo cual indica que los resultados estuvieron cercanos

a un valor intermedio de relevancia para los sujetos. Además, la moda de este

indicador fue de 1, la cual indica que el valor que más prominente entre los sujetos

fue de 1. A pesar de no mostrar una influencia muy significativa en los resultados

cuantitativos, el 60% de los participantes en los cuestionarios consideran que los

cigarrillos electrónicos fueron una buena decisión para su salud. Sin embargo,

parecen mostrar pensamientos contradictorios al respecto, como fue indicado por el

sujeto S1, “Es mucho mejor que fumar tabaco, pero es mejor no fumar nada.

También hay que comprar líquidos de calidad para no sufrir daño innecesario a

causa de un mal líquido”, y el sujeto S2, “Se que tampoco es la opción más sana,

pero ayuda mucho”.

26
El puntaje de conveniencia tuvo una puntuación mínima de 0 y una máxima

de 3, lo cual produce un rango de 3 puntos. Su media fue de 2, con una desviación

estándar de .990, por lo que se puede asumir que los valores que recolectaron los

sujetos no tuvieron gran diferencia entre ellos. El valor que más se repitió entre los

participantes, la moda, fue de 2. Esto podría indicar que este factor tiene cierta

relevancia al momento de adquirir o usar uno de estos dispositivos; sin embargo, los

resultados del cuestionario son un poco vagos y contradictorios. Por ejemplo, el

sujeto S4 opinó que “Es ventajoso de cierta manera, ya que uno puede fumar donde

quiera y no pueden tomar acción legal en su contra. Sin embargo, hay gente que se

pasa de verga y le fuma a la gente en la cara y eso es solo mala onda. Además,

creo que estos productos deberían estar regulados por ley, ya que al final es un

dispositivo del cual no se sabe tanto”, mientras que el sujeto S5 solo indicó que

tenía “Poca información”. Con referencia a la ventaja económica que estos pueden

representar, el sujeto S4 dijo que “Antes me compraba dos cajetillas a la semana, lo

cual me salía en aproximadamente en Q60 semanales. Si hay cuatro semanas en

un mes, son Q240 al mes. El dispositivo es una inversión de una sola vez (por lo

menos el mío que se puede recargar), las resistencias en Q50 al mes y los líquidos

me salen en Q300. Sin embargo, el líquido me dura tres meses o más, lo que

dejaría un gasto mensual de Q100 o menos, más los Q50 de las resistencias para

un total de Q150. Son casi Q100 que me ahorro al mes, los cuales hacen una gran

diferencia para mí. En resumen, gasto menos usando los cigarrillos electrónicos que

cuando fumaba cigarros”, pero el sujeto S5 afirmó que no lo benefició “de ninguna,

gasto mas que usando cigarrillos”.

Para el indicador de placer, el mínimo fue de 0 y el máximo de 3, dándole un

rango de 3. La media para este indicador fue de 2.08 y una desviación estándar de

27
0.922, lo cual indica que este indicador tampoco tuvo mucha varianza entre los

resultados. La moda para este indicador fue de 3, el cual es el valor máximo que se

podía sacar para este indicador. Estos resultados parecen afirmar que el placer es

un factor decisivo para usar un cigarrillo electrónico. Para apoyar esto, el sujeto S2

tuvo una buena primera impresión de estos, diciendo que “con unos amigos que

compraron, me permitieron probar y me gusto”. Además, estas experiencias hicieron

que se sintiera “relajada” (S1) o que “Me dieron ganas de seguir probando” (S2).

El puntaje del indicador de moda tenía un mínimo de 0 y un máximo de 4,

consecuentemente creando un rango de 4 puntos. Tuvo una media de 1.74 y una

desviación estándar de 1.065, lo cual indica que la mayoría de los resultados

estuvieron en un rango bajo. La moda para este indicador fue de 2, el cual es un

valor intermedio. Muchos conocen de estos dispositivos a través de amigos, los

cuales pueden tener gran influencia sobre el sujeto, como indicó el sujeto S2 al decir

que “Un cuate me los mostró”. Otros fueron expuestos a ellos por medio del

“Internet” (S1), una red masiva de información. Esta exposición también fue positiva

y promovió a los sujetos a continuar el uso, ya que el sujeto S5 dijo “Me llamaron la

atención”.

28
VI. Conclusiones
Con base en los resultados obtenidos en la presente investigación, se llega a

las siguientes conclusiones:

● Las razones de uso del cigarrillo electrónico en la población guatemalteca

entre 18 y 25 años son principalmente el placer y la conveniencia, mientras

que los factores de salud y la moda de estos pasan a tomar un segundo

plano.

● Con base en los resultados cuantitativos y cualitativos, la importancia de la

salud no es decisiva al momento de consumir estos dispositivos.

● La moda y novedad de los cigarrillos electrónicos no parecen tener una

influencia significativa en la decisión para adquirir uno de estos dispositivos o

continuar su uso.

● La conveniencia que proveen los vapeadores al fumar puede presentar un

fuerte atractivo para los potenciales usuarios de los cigarrillos electrónicos.

● El placer que causan los vaporizadores en sus usuarios potencializa la

continuación del uso de estos.

29
VI. Recomendaciones
● Realizar un programa de concienciación para dar a conocer estos

dispositivos, debido a que en Guatemala no existe aún una cultura de

conocimiento acerca de los beneficios, daños y uso de los cigarrillos

electrónicos en los entes educativos o laborales.

● Crear leyes que promuevan la regularización de estos dispositivos para evitar

que las personas hagan mal uso de los vapeadores en lugares públicos y

penalizar la venta de los mismos a los menores de edad.

● Que las empresas productoras de estos dispositivos realicen más

investigaciones

● La información acerca de los cigarrillos electrónicos debe ser administrada

institucionalmente por las autoridades locales, asegurándose que las

personas propensas a adquirir el hábito de utilizar un vaporizador tengan

información actual y confiable constantemente.

● Realizar sondeos, y estudiar con mayor detalle el comportamiento y los

patrones del ambiente de los sujetos que se evaluarán, para saber más

claramente que los lleva a fumar un cigarrillo electrónico y con qué

frecuencia.

30
VII. Referencias

Ariño, S. (2015). Eficacia del cigarrillo electrónico en la deshabituación tabáquica.

Recuperado de: http://eugdspace.eug.es/xmlui/handle/123456789/220

Ayesta, G. y. (2013). Cigarrillos electrónicos: toxicidad, adictividad y potencial

utilidad terapéutica. Recuperado de:

http://www.comsor.es/pdf/comunicados/Arti_culo%20Infonova%20ecigs.pdf

Centro Nacional para la Prevención de Enfermedades Crónicas y Promoción de la

Salud. (2017). Los cigarrillos electrónicos y los jóvenes: Una preocupación de

salud pública. Recuperado de

https://www.cdc.gov/spanish/especialescdc/cigarrilloselectronicos/index.html

Córdoba (Ed.). (2014). El desafío de los cigarrillos electrónicos. Science Direct, 46

(6), 307-312. recuperado de:

https://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0212656714000602

Cremades, O., Vicente L. (2014). Emisiones de los cigarrillos electrónicos y su

posible impacto sobre la salud. Recuperado de:

https://upcommons.upc.edu/handle/2117/24440

Florián, J., Reneau, J., Girón, M., Hernández, J. (2017). Conocimientos y actitudes

de estudiantes universitarios respecto al uso de cigarrillo electrónico.

Recuperado de: http://biblioteca.usac.edu.gt/tesis/05/05_10587.pdf

Hernández, Fernández y Baptista. (2013). Metodología de la Investigación (5ta ed.).

DF, México: Mc Graw Hill.

Hess, P. (2018). Scientists Identify 3 Very Toxic Vape Juice Flavors [Mensaje en un

blog]. Recuperado de https://www.inverse.com/article/40751-vape-juice-

chemical-flavors-white-blood-cells.

Iqbal, N., Khan, Z. A., Anwar, S. M. H., Irfan, O., Irfan, B., Mushtaq, A., … Khan, J.

31
A. (2018). Electronic cigarettes use and perception amongst medical

students: a cross sectional survey from Sindh, Pakistan. BMC Research

Notes, 11(1). doi.org/10.1186/s13104-018-3303-z

Kozlowski, L. T., Homish, D. L., y Homish, G. G. (2017). Daily users compared to

less frequent users find vape as or more satisfying and less dangerous than

cigarettes, and are likelier to use non-cig-alike vaping products. Preventive

Medicine Reports, 6, 111–114. doi.org/10.1016/j.pmedr.2017.02.026

McMillen, M. (2015). What’s in Your E-Cigarette?. Recuperado de:

https://www.webmd.com/smoking-cessation/news/20150218/e-cigarette-

ingredients#1

Martínez-Sánchez, J., Fu, M., Ballbè, M., Martín-Sánchez, J., Saltó, E., y Fernández,

E. (2015). Conocimiento y percepción de la nocividad del cigarrillo electrónico

en población adulta de Barcelona. Recuperado de: Gaceta Sanitaria, 29(4),

296–299. doi.org/10.1016/j.gaceta.2015.01.014

National Institute on Drug Abuse. (2018). Electronic Cigarettes (E-cigarettes).

Recuperado el 20 de octubre, 2018 de:

https://www.drugabuse.gov/publications/drugfacts/electronic-cigarettes-e-

cigarettes

Oliva y Conejo (2014). Exposiciones a cigarrillos electrónicos: consultas telefónicas

al centro antitóxico de España. Recuperado de: Revista Española de

Medicina Legal, 40 (4), 146-149.

Real Academia Española y la Asociación de Academias de la Lengua Española.

(2017). Diccionario de la lengua española (23.a ed.). Obtenido de:

http://dle.rae.es/

Rhoades, D., Wagener, T., Beebe, L., Ding, K., Dvorak, J., Hopkins, M., y Doescher,

32
M. (2017). Electronic Cigarette Use among American Indian Youth.

Recuperado de: Tobacco Regulatory Science, 3(3), 315–324.

doi.org/10.18001/trs.3.3.7

Tarrazo, M., Pérez-Ríos, M., Santiago-Pérez, M. I., Malvar, A., Suanzes, J., y

Hervada, X. (2017). Cambios en el consumo de tabaco: auge del tabaco de

liar e introducción de los cigarrillos electrónicos. Recuperado de: Gaceta

Sanitaria, 31(3), 204–209. doi.org/10.1016/j.gaceta.2016.06.002

Vaping360. (2018). PG vs VG: What They Are and How to Use Them [Mensaje en

un blog]. Recuperado de https://vaping360.com/best-e-liquids/vg-vs-pg/.

Wagoner, K. G., Cornacchione, J., Wiseman, K. D., Teal, R., Moracco, K. E., y

Sutfin, E. L. (2016). E-cigarettes, Hookah Pens and Vapes: Adolescent and

Young Adult Perceptions of Electronic Nicotine Delivery Systems.

Recuperado de: Nicotine & Tobacco Research, 18(10), 2006–2012.

doi.org/10.1093/ntr/ntw095.

33

Вам также может понравиться