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De acuerdo con los autores mencionados y la investigación al respecto,

podemos describir las aulas disfuncionales e inferir la característica predomi_
nante del patrón de aprendizaje en ellas.

Aulas enmarañadas
Así, en un continuum de cohesión, que se entiende entre una muy alta o
mucha cohesión a baja o ninguna cohesión, denominamos un aula enmarañada,
a aquella que se caracteriza por poseer una cohesión alta, intensa, extrema, con
confusión de roles y/o jerarquías entre los miembros y fronteras demasiado
celTadas respecto del sistema mayor, escuela. En este estilo de interacción las
lealtades al grupo son excesivas, hay poco espacio para lo personal, lo diferen-
te, la autonomía. Hablar de un patrón enmarañado implica frecuentemente una
sobreinvolucracion del docente en todas las actividades del aula y/o con fre-
cuencia de los padres en las tareas escolares. Predomina en este patrón una
lealtad, implícita o explícita, firmemente establecida. Las negociaciones se
dirimen en función de las lealtades. Los compañeros de este tipo de aulas pue-
den jugar unos con otros durante el recreo, comer todos juntos durante el
almuerzo y/o encontrarse fuera de la escuela durante los fines de semana, casi
únicamente con sus compañeros de clase. Sus fronteras están cerradas a la
interacción con otros sistemas.
Desde la perspectiva teórica de aprendizaje que asumimos, este patrón no
favorecería la emergencia de puntos de vista diferentes entre los miembros,
más bien facilitaría una pauta de sometimiento a un solo punto de vista, consi-
derando la lealtad por sobre el conflicto cognitivo o controversia. La plurali-
dad de perspectivas, que permite a los alumnos progresar cognitivamente rea-
lizando aprendizajes significativos, quedaría limitada. El solo hecho de trabajar
juntos, demasiado juntos en este caso, no garantiza una genuina construcción
colectiva, hace falta un verdadero y eficaz aprendizaje cooperativo que implica
una distancia óptima entre personas con aceptación de las diferencias, sin te-
mor a quedar excluido, o ser ridiculizado o criticado por adoptar posiciones
distintas.
 Funcionanncntoy clona sociorrclacional del cada. Una Perspectiva S'isténnca

Xillasdesconectadas
El evtremo opuesto es un aula desconectada, en la cual a la inversa de la
enmarañada,hay poco o muy escaso apego emocional entre sus miembros.
El aprendizaje en ellas, parecería correr más por cuenta individual de cada
con pocos espacios para la cooperación-colaboración que podrían re-
dundaren una construcción cognitiva rica de conjunto, que no se producina
con tan escaso apego emocional.
La motivación sería predominantemente intrínseca de cada uno y la me-
diacióndocente, desconectada, escasa o pobre. A semejanza de lo que ocurre
en un sistema familiar desconectado, "cada uno hace lo suyo" a pesar de con-
vivirdiariamentedurante varias horas en un mismo espacio común
Tanto sistemas enmarañados como sus opuestos, desconectados, pueden
combinarse con un estilo caótico o rígido, de flexibilidad

Aulascaóticamente enmarañadas
Un aula caótica, que corresponde a uno de los extremos de la dimensión
de flexibilidad,es aquella en la cual no hay una clara jerarquía del docente, es
decir una jerarquía docente diferenciada de la de los alumnos. Las pautas de
interacción podrían considerarse caóticas al no ser permanentes, ni continuas,
ni sostenidas en el tiempo. Si se combina con el estilo enmarañado, de excesiva
cohesión, cercanía extrema entre sus miembros, el patrón resultante es un aula
caóticamente enmarañada.Esta tiene como característica la confusión genera-
lizada,ya que los miembros no saben claramentea qué atenerse, pues las pau-
tas varían continuamente(sea en aspectos de disciplina-ordeno de aprendiza-
je)
Por su lado, la excesiva exigencia de lealtad entre los miembros, lo enma-
rañado, impide la autonomía y crecimiento personal
Podríamos suponer que el aprendizaje dentro de este patrón de funciona-
miento, quedaría teñido de las características mencionadas de desorganización,
caos, fragmentación, sin una estructura firme, ni mediación docente que sos-
tenga o "andamie" los aprendizajes. La posible falta de nexos entre los conteni-
dos, por discontinuidades,podría producir una excesiva incertidumbre en los
alumnos con claras incidenciassobre el rendimientoescolar

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 BAEZA

En una situación caótica es poco probable que los aprendizajes resulten

significativos, y podrían esperarse dudas - o por lo menos ambivalencias- tren
te a las expectativas de metas y parámetros de rendimiento de los alumnos,s

Aulas caóticamente desconectadas

La combinación del patrón de funcionamiento caótico con un funciona _
miento desconectado (caóticamente desconectada) suele ser aquella aulaenla
cual nadie está a cargo, hay escaso apego emocional entre sus miembrosy dela
cual muchos docentes ajenos a ella, presentan quejas por su nivel de desorgani_
zación, ruidos y comportamientos no aceptables dentro del contexto escolar
El aprendizaje en estas aulas de características caóticas y con escasoape-
go entre sus miembros, probablemente carecería de continuidad, sostén docen-
te y de pares, con escasas posibilidades de trabajos cooperativos a lo largodel
tiempo.

Antas rígidamen{e ennzarañadas

Las aulas rígidamente enmarañadas muestran un docente de estilo autori-
tario, que explícitamente exige/demanda absoluta lealtad y usa estrategiaspara
mantener esta lealtad. Puede inducir a los miembros de la clase a encontrarun
enemigo común o hablar mal en clase de otros docentes, o de estudianteso
directivos que no pertenecen a esa clase.
El excesivo liderazgo adulto puede ser un factor inhibitorio en el aprendi-
zaje, cuando el docente controla o monitorea la actividad escolar predominan-
temente a través de órdenes y respuestas, que no den lugar a la curiosidad,
duda o necesidad de pregunta y de error del alumno.
El aprendizaje en estas aulas podría suponer una demanda de rendimient o
elevado, dada la sobreinvolucración del adulto (docente o padre) si es de tipo
perfeccionista, y podria generar ansiedad por rendimiento.

Antas rígidamente desconectadas

El estilo de füncionamiento de un aula rígida/desconectada, también muestra
un estilo autoritario centrado en el docente pero con escaso apego emocional'

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 Funcionamiento y clima sociorrelacional del aula. Una Perspectiva Sistémica.
El docente puede exigir (autoritariamente) a sus alumnos perrnanecer quie-
tosen sus asientos, responder sólo cuando se los interroga y trabajar indivi-
dualmentecon poca o ninguna ayuda de sus compañeros.
El esquema predominante de obediencia a la jerarquía (rigidez) puede
la autonomía individual y dejar sin soporte afectivo a los alumnos (des-
coartar
conectada).En estas aulas hay una hipoinvolucración del docente y de los alum-
nos,por Io cual frecuentemente no hay seguimiento, supervisión o actividades
deenriquecimiento extra. Podríamos suponer que en lo que se refiere al apren-
dizaje,los aspectos de contenido no serían valorados, y predominaría cierta
indiferenciarespecto de los logros.
El patrón de aprendizaje en esta forma de funcionamiento, al estar teñido
depoco apego emocional, sería de poca motivación y probablemente escasa, si
alguna,significatividad en los aprendizajes. Tampoco en ellas se darían situa-
cionesde aprendizaje cooperativo-colaborativo entre miembros al subordinar-
se excesivamente a la jerarquía y obediencia al docente.

Desvíoscomunicacionales
Respecto de la comunicación, que ha sido analizada en un apartado ante-
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rior,en relación con el aprendizaje, vale la pena citar estudios (Doanne, 1978)'
enrelacióncon lo que se denominan desvíos en la comunicación, que demues-
franestarmuy relacionados con trastornos en el aprendizaje y bajo rendimiento
general (Jay-Green, 1989) 79.
Para caracterizar los desvíos comunicacionales que pueden darse acom-
pañandocualquiera de los estilos mencionados, citamos las modalidades más
frecuentes:
a) el que habla crea confusión en el que escucha respecto del significa-
do del discurso o acerca de un tema en particular, estos desvíos
incluyen problemas de compromiso, es decir, que quien habla no se
compromete o involucra con una idea definida,
b) problemas de referencia, en el cual el que habla deja al otro pregun-
tándose de qué se está hablando,
c) anomalías lingüísticas, en las cuales el que habla construye frases o
usa palabras en forma confusa o bien emplea términos cuyo signifi-
cado no está claro,

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SILVIA BAEZA

d) se dan rupturas en el discurso o comportamientos no verbales que

son irrelevantes o tangenciales al tema en cuestión,
e) se producen secuencias contradictorias, el que habla ofrece ideas
incompatibles, se retraen o niegan las ideas ofrecidas.

Dicho en otras palabras, los estilos confusos, desviados y desorientadores

de la comunicaciónse reflejan en procesosde pensamientosconfusos y
desorientadores en el aula y en el proceso de aprendizaje en general.