Los tratados de paz que dieron por finalizada la Gran Guerra no resolvieron los conflictos
en Europa. Se produjo una rápida y, al mismo tiempo, ficticia recuperación económica
posbélica (los "felices años 20"), con avances técnicos y desarrollo del capitalismo,
seguida de su mayor crisis, la gran depresión de los años 30.
En este contexto se gestó la crisis del modelo económico y político liberal, los
totalitarismos y la Segunda Guerra Mundial. Se divide el periodo de entreguerras en cuatro
etapas:
- De 1919 a 1924: Época marcada por las tensiones derivadas del Tratado de
Versalles (Alemania debe pagar indemnizaciones a los países vencedores y
conflictos territoriales entre este país y Francia). Alemania decidió suspender los
pagos y Francia ocupó militarmente la cuenca del Ruhr.
- De 1925 a 1929: El Tratado de Locarno de 1925 da paso a un periodo de
cooperación internacional. Los EE.UU., Alemania y la URSS ingresan en la
Sociedad de Naciones. Por medio del Plan Dawes se recortan las indemnizaciones
que Alemania tiene que pagar y los créditos internacionales permiten la
recuperación de la crisis económica.
- Año 1929: Las expectativas se truncaron por el crack de la Bolsa de Nueva York, La
quiebra de la economía norteamericana supuso una crisis sin precedentes y afectó
al mundo entero. Las consecuencias de la crisis (ruina, paro, conflictos sociales)
fueron las causas para la aparición del fascismo. La crisis económica del
capitalismo liberal fue producida por la sobreproducción y especulación.
- Entre 1929 y 1939: Regresaron las tensiones de la posguerra, los nacionalismos
beligerantes y el proteccionismo para superar la crisis. El descontento de los países
vencidos en la Primera Guerra Mundial dio lugar a estados totalitarios con Hitler (en
Alemania), Mussolini (en Italia) y Franco (en España).
GLOSARIO
Cuenca:
Crack:
Fascismo:
EL FASCISMO EN ITALIA
En esta situación de crisis apareció la figura de Benito Mussolini que creó en 1919 los
Fasci italiani di combattimento (fasces italianas de combate), llamados "camisas negras"
que buscaban frenar el movimiento obrero.
Benito Mussolini
(1883-1945)
GLOSARIO
Irredentismo:
Elite:
EL ASCENSO DEL NACIONALSOCIALISMO ALEMAN
Estos dos grandes partidos de izquierda estaban más ocupados en pelearse entre ellos
sobre la línea política y social a seguir para llegar al poder que en combatir a la extrema
derecha, que nunca consideraron formalmente como una amenaza real a la revolución
social que parecía inminente.
Las elecciones de noviembre dieron una mayoría simple al NSDAP y una coalición de la
izquierda socialista y comunista habrían sido suficientes para cerrarle el pase al poder
nazi, Pero el entendimiento de las fuerzas de izquierda no se produjo en 1933 Hindenburg
llamó a Adolf Hitler para formar gobierno, con la aprobación de las fuerzas de centro liberal
y conservadoras, y la pasividad de los partidos de izquierda,
Una vez en el poder, Hitler cerró el Reichstag y tomó el control del Estado. A la muerte del
canciller Hindenburg, asumió los cargos de Presidente de la República y Presidente del
Gobierno, autoproclamándose Führer (guía) del Reich alemán.
GLOSARIO
Nazi:
Gregario:
Reich:
ADOLFO HITLER
Adolfo Hitler nació en Braunau am Inn, Austria, el 20 de abril de 1889. Ingresó al ejército
alemán en 1914 y luchó en la Primera Guerra Mundial donde fue herido en 1916. En 1 923
intentó un golpe de estado, pero fracasó y fue encarcelado durante nueve meses. En
prisión escribió Mi Lucha, donde expuso sus ideas nacionalistas, racistas y
anticomunistas.
Al terminar la guerra, mientras los rusos tomaban Berlín, Hitler se suicidó antes de ser
capturado el 30 de abril de 1945.
GLOSARIO
Aria:
Antisemita:
URSS:
SEGUNDA GUERRA MUNDIAL: CAUSAS Y CONSECUENCIAS
Ante la política agresiva de los regímenes autoritarios de Mussolini (en Italia) y Hitler (en
Alemania), los países democráticos no intervinieron en los problemas del mundo,
practicando una política de apaciguamiento con Alemania. La Sociedad de Naciones fue
incapaz de propiciar un clima de entendimiento entre sus miembros.
Para llevar a la práctica estas ideas, Hitler preparó un ejército potente y estimuló el
desarrollo de la industria bélica. Tampoco faltó el apoyo financiero de los grandes
industriales alemanes, propietarios ricos de fábricas de acero, que vieron en Hitler y en el
partido nazi una barrera contra el comunismo.
En 1936, Alemania firmó una alianza con Italia conocida como el Eje Roma-Berlín.
Posteriormente, en mayo de 1 939, esta relación se convertiría en el denominado Pacto de
Acero que finalmente integraría también Japón.
Hitler remilitarizó la región de Renania. En marzo de 1938 Alemania anexionó a su
territorio a Austria y, más tarde, ocupó Checoslovaquia con el pretexto de que en la región
de los Sudetes habitaba población alemana. El Führer consiguió unificar un gran espacio
geográfico que denominó el Tercer Reich.
A fin de evitar que la Unión Soviética se aliara con el Reino Unido o con Francia y ayudase
a Polonia, Hitler firmó un tratado secreto con Stalin para evitar que se atacaran
mutuamente. El paso siguiente para reunificar el espacio germánico consistía en la
ocupación del corredor de Danzig, el cual separaba Alemania de la Prusia Oriental desde
el Tratado de Versalles.
El conflicto enfrentó, en un principio, a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón) con
los aliados (Francia, Gran Bretaña y URSS), pero en total participaron 72 estados de todo
el mundo.
GLOSARIO
Eslavo:
Remilitarizar:
LA OFENCIVA ALEMANA (1939-1941)
La primera fase del conflicto se caracterizó por la iniciativa alemana de una "guerra
relámpago", ataques sorpresa que les permitió avanzar con rapidez. Primero ocupó
Polonia en un mes, país que se repartieron con la URSS; este último aprovechó la ocasión
para ocupar Letonia, Estonia y Lituania. Alemania intentó tomar Finlandia, pero este país
se resistió con éxito.
Una vez ocupada Polonia los esfuerzos bélicos de los alemanes se dirigieron hacia
Dinamarca y Noruega a fin de salvar el suministro de hierro sueco. En abril de 1 940
Dinamarca y Noruega, a pesar de ser países neutrales, fueron invadidos prácticamente sin
ningún tipo de resistencia.
El 10 de junio, deslumbrada por la fácil victoria alemana, Italia declaró la guerra a Francia
y Gran Bretaña con la esperanza de obtener parte del botín de las colonias. Desde ese
momento los dos fascismos -el Eje Roma-Berlín- quedaron vinculados para el resto de la
guerra.
Los nazis implantaron un régimen de violencia y terror por medio de la Gestapo y las SS,
especialmente sobre los opositores y los judíos que fueron trasladados en masa a campos
de concentración.
En 1941 Hitler quería atacar la Unión Soviética, ya que creía que el espacio vital que
Alemania necesitaba debía ser a costa de los eslavos. Pero antes, relanzó una ofensiva
sobre Yugoslavia y llegó hasta la isla griega de Creta.
GLOSARIO
Mariscal:
Ultranza:
LA EXPANSION DEL CONFLICTO (1941-1943)
El 22 de junio de 1941 las tropas alemanas se lanzaron contra la Unión Soviética. Para
Hitler el pacto que había hecho con los soviéticos era solo temporal y ahora estaba
decidido a eliminar al régimen bolchevique y apropiarse de los recursos soviéticos. Las
tropas alemanas avanzaron desde Polonia y entraron en Rusia.
En un primer momento el avance alemán fue fácil, pero se atascó en la línea formada por
las ciudades de Leningrado (hoy San Petersburgo), Moscú y Rostov. Con la llegada del
invierno, a 320 bajo cero, la ofensiva se tuvo que parar. La URSS no había sido tan fácil
de vencer como esperaban los mandos alemanes. Mientras que los japoneses, con su
política de expansión, habían invadido Indonesia, Malasia y Birmania. Los
estadounidenses se opusieron a esta expansión y exigieron a los japoneses que se
retiraran de los territorios ocupados.
Ataque a Pearl Harbour (Hawai, EE. UU.) por la Carro de combate del Afrika Korps
Armada Imperial Japonesa el domingo 7 de diciembre
de 1941
Durante el año 1 942 se reanudó la ofensiva alemana sobre la URSS. Los alemanes
consiguieron llegar al Cáucaso, pero se detuvieron definitivamente en la ciudad de
Stalingrado (actual Volgogrado). En esta ciudad los soviéticos resistieron heroicamente y
terminaron derrotando a los alemanes (enero de 1943).
También en el norte de África los alemanes comenzaron a sufrir derrotas. La campaña del
general Rommel y el Afrika Korps para ocupar el Canal de Suez se vio detenida en El-
Alamein por las tropas británicas, comandadas por el general Montgomery. En noviembre
de 1 942 los aliados desembarcaron en África. Las tropas de Rommel fueron vencidas
definitivamente en Túnez (mayo de 1943).
GLOSARIO
Flota:
LA DERROTA DEL EJE Y EL FIN DE LA GUERRA (1943-1945)
En julio de 1 943 se produjo el desembarco aliado en Sicilia, con la decisiva ayuda de las
tropas estadounidenses. Desde esta isla se preparó el asalto sobre el sur de Italia. El
avance aliado provocó una crisis en el gobierno fascista que hizo caer a Mussolini y la
Italia del sur firmó el armisticio. Además, los aliados utilizaron dos nuevos tipos de
acciones que hicieron disminuir mucho las fuerzas alemanas: a) Se generalizaron los
bombardeos sobre ciudades alemanas; b) Las acciones de la resistencia en los territorios
ocupados por los nazis se intensificaron y ayudaron en gran medida a desorganizar y
desmoralizar a los alemanes.
Entrada del ejército aliado a Roma Devastación tras la explosión de la bomba atómica en
Hiroshima
A partir de 1 944 las tropas aliadas se lanzaron al asalto definitivo contra las potencias del
eje. Desde el sur de la península italiana los aliados comenzaron a avanzar hacia el norte.
En 1944 ingresaron a Roma, Mussolini fue capturado y fusilado por los partisanos
(resistencia italiana) en abril de 1945.
Solo quedaba el frente del Pacífico, donde vencer a Japón era algo muy costoso y podía
durar mucho tiempo. Se inició una serie de ofensivas y los norteamericanos, con el
general MacArthur, ocuparon las islas Marshall/ las Marianas, Filipinas y Okinawa, desde
donde comenzaron a bombardear Japón.
GLOSARIO
Resistencia:
Bunker:
CONSECUENCIAS DE LA GUERRA
Además de Canadá y Australia, únicamente los Estados Unidos, al no sufrir daños en sus
territorios, pudieron beneficiarse haciendo préstamos a los estados aliados europeos (Plan
Marshall).
GLOSARIO
Aliado:
Colonia:
GUERRA FRIA
CAUSAS Y CONSECUENCIAS
La guerra fría, que tuvo su inicio poco después de la Segunda Guerra Mundial
(1945) y la extinción de la Unión Soviética (1991) es la designación atribuida al período
histórico de disputas estratégicas y conflictos indirectos entre Estados Unidos y la Unión.
A pesar de que luchaban junto a los países del Eje Alemania, Italia y Japón durante la
Segunda Guerra Mundial, fueron tensas relaciones entre los Estados Unidos y la Unión
Soviética.
Los diferentes sistemas económicos y políticos adoptados por los dos países eran
antagónicos y competidores. Por un lado, el capitalismo estadounidense y su sistema
político democrático; el otro, el comunista soviético bajo el gobierno autoritario de Stalin
desde 1922.
Con el fin de la guerra aproximándose, la relación entre los dos países era cada vez más
complicada y, cuando el conflicto de hecho terminó, ya era evidente que la colaboración
entre las dos potencias también había llegado a su fin.
El enemigo común, el nazismo, fue lo que mantuvo al lado del otro y, una vez derrotado,
cada país trató de hacer frente a sus propios intereses políticos, económicos y territoriales.
Al final de las negociaciones entre los vencedores de la Segunda Guerra Mundial, Europa
quedó dividida en dos partes. Estas correspondían al límite del avance de tropas
soviéticas y americanas durante la guerra.
En poco tiempo, los partidos comunistas locales, apoyados por la URSS, pasaron a
ejercer el poder en esos países. Establecer las llamadas democracias populares en
Albania, Rumania, Bulgaria, Hungría, Polonia y Checoslovaquia.
Mientras los Estados Unidos, la otra potencia mundial, defendía la expansión del sistema
capitalista, basado en la economía de mercado, sistema democrático y propiedad privada.
Alemania, por su parte, se adhirió al Plan Marshall para restablecer, lo que hizo que la
Unión Soviética bloqueara todas las rutas terrestres que daban acceso a Berlín. De esta
forma, Alemania, apoyada por Estados Unidos, abastecía su parte de Berlín por vías
aéreas provocando mayor insatisfacción soviética y lo que provocó la división de
Alemania en Alemania Oriental y Alemania Occidental.
En 1949, Estados Unidos junto con sus aliados crearon la OTAN (Organización del
Tratado del Atlántico Norte) que tenía como objetivo mantener alianzas militares para
que éstos pudieran protegerse en casos de ataque. En cambio, la Unión Soviética firma
con sus aliados el Pacto de Varsovia que también tenía como objetivo la unión de las
fuerzas militares de toda Europa Oriental.
La Segunda Guerra Mundial terminó en 1945. Las tropas de los países del ejército ruso
llegaron al territorio alemán. El Ejército Rojo, como era conocido, dominó la capital, Berlín
y, consecuentemente, Alemania se rindió. El líder nazi, Adolf Hitler, se suicidó tras el
suceso. A partir de ahí, Estados Unidos, Francia, Reino Unido y la Unión Soviética,
dividían el territorio en regiones administrativas:
Por un lado, Alemania Occidental, dominada por las naciones capitalistas; de otro, la
Alemania Oriental, dominada por la Unión Soviética. La capital de Berlín también se ha
dividido y se creo el muro de Berlín.
En él, afirmaba que Estados Unidos se posicionaría a favor de las naciones libres que
desearan resistir a los intentos de dominación.
Los comunistas alineados a la URSS, como la Alemania del Este, Bulgaria, Hungría,
Polonia, Checoslovaquia y Rumania el 14 de mayo de 1955 no tardaron en hacer un
levantamiento del mismo tipo y se creó el Pacto de Varsovia.
GUERRAS INDIRECTAS
Fue una disputa entre las dos superpotencias de la época: los Estados Unidos (EEUU) y
la Unión Soviética (URSS). Este período de intensa hostilidad comenzó en 1947 y fue
hasta 1989, y no contó con un conflicto armado directo entre las dos potencias.
El hecho de que ambas potencias tenían la bomba atómica fue fundamental para que un
conflicto directo no ocurriera entre ellas, pues se sabía que una vez iniciada una guerra de
hecho, esa no acabaría sin la destrucción total del enemigo y tal vez de buena parte del
planeta.
Los invasores tenían un material humano que llegaba a 70 mil combatientes, mientras que
los norteamericanos venían con el doble de ese ejército, sumando 140 mil soldados. Las
tropas de las Naciones Unidas retiraron las tropas rivales de Corea del Sur, en un
acontecimiento que pudo haber sido el más brutal de la historia de Corea.
Vietnam, así como Corea, estaba siendo dividido entre los dos polos económicos, el
capitalismo y el socialismo. La parte sur del país estaba actuando en conjunto con
Estados Unidos, ya la del norte con el líder Ho Chi Minh. Él quería transformar Vietnam
en un solo país, sin fragmentación.
Los sureños eran adeptos del capitalismo, en contrapartida, los vietnamitas del norte, eran
comunistas. Los vietnamitas habían sido liberados del poder francés. Los
estadounidenses comenzaron a enviar las tropas en 1965, para apoyar el lado sur de
Vietnam.
La batalla contra los vietnamitas del Norte era muy desigual. Los norteamericanos
atacaban las bases enemigas con armamentos pesados, que envolvían desde
aviones guerrilleros hasta armas químicas, como el Agente Naranja, Él posee
sustancias cancerígenas y, en la guerra de Vietnam, acarreó deficiencias en las personas
que nacieron en la región.
Pero Estados Unidos falló en su misión. Las tropas estadounidenses tuvieron que retirarse
de Vietnam y ese evento se considera una vergüenza nacional para Estados Unidos. La
derrota de los norteamericanos influenció en la cultura americana, principalmente en el
cine. La película Rambo habla sobre la guerra de Vietnam, que terminó el 30 de abril de
1975, con la victoria de los vietnamitas del Norte.
Por otra parte, En octubre de 1962, la tensión entre los dos países ha aumentado en el
episodio llamado crisis de los misiles en Cuba, tuvo su origen en la pretensión
soviética de instalar bases y lanzar misiles en Cuba. Esto sería una amenaza
constante para los Estados Unidos.
LA CARRERA ARMAMENTISTA
Al final de la Segunda Guerra Mundial, los dos polos representantes del capitalismo y
del socialismo, contaban con un enorme arsenal bélico.
Pero una de las dos potencias necesitaba hacerse soberana, debido al gran poder que
tenía. Por eso, iniciaron una carrera armamentista, con la construcción de máquinas de
destrucción masiva.
Estados Unidos creció tanto, hasta el punto de que en 1960 tenía un poder militar
capaz de devastar a cualquier nación. De esta forma, se estableció como potencia más
poderosa en tecnología bélica del mundo. Sin embargo, la Unión Soviética también
logró un armamento super potente. Las dos naciones, a esa altura, si entraban en un
conflicto directo, con sólo una parte de su material bélico, serían capaces de destruir el
planeta.
Sputnik fue el primer satélite en el espacio. La tecnología soviética sirvió para progresos
en el campo científico, lo que abrió horizontes para las investigaciones espaciales.
En noviembre de 1957, los soviéticos mandaron otro artificio al espacio. Ahora, una
segunda versión del Sputnik. Estaba a bordo del Sputnik II, el primer ser vivo a entrar en
órbita, fue la perra Laika.
Los americanos, fueron los primeros en la llegada del hombre a la luna. El Apolo 11,
con Neil Armstrong y Edwin Aldrin, pisaron y caminaron, según los estadounidenses,
en suelo lunar. El presidente estadounidense, Ronald Reagan, creó una estrategia anti-
guerra, la cual denominó “guerra en las estrellas”; sin embargo, los soviéticos fueron los
únicos en colocar una aeronave provista de armas nucleares en el espacio, Polyus
FIN DE LA GUERRA FRIA
La Guerra Fría llegó a su fin en noviembre de 1989, con las negociaciones establecidas
por Ronald Reagan y Gorbachev Mikhail, después de un período de 42 años que
determinan las relaciones internacionales.
Con reformas económicas, acuerdos con Estados Unidos y cambios políticos, el sistema
se ha debilitado. Era el final de un período de embates políticos, ideológicos y militares. El
capitalismo victorioso, poco a poco, iba a ser implantado en los países socialistas.
La caída del Muro de Berlín fue un marco que simbolizó la muerte de los regímenes
socialistas en el Este europeo. En octubre de 1990 las dos Alemanias fueron finalmente
unificadas. Igualmente, la desintegración de la Unión Soviética inauguró un nuevo período
en la historia mundial.
1952-1964
LA REVOLUCION NACIONAL
Muchas veces se ha usado en nuestra historia la palabra Revolución para explicar desde
un motín cuartelero, hasta un golpe de estado, pasando por un levantamiento masivo
violento. Es necesario precisar con claridad que el único momento en el que la palabra
Revolución cuadra realrnente es en 1952. Las razones son las siguientes: Este proceso
representó un desplazamiento de clases a nivel de las decisiones en el seno del gobierno
y en el conjunto de la sociedad. La minúscula clase dominante que dirigía el país fue
sustituida por una "clase media" (difícilmente definible sociológicamente) que además
afectó severamente los intereses de la elite al expropiar las grandes minas y los
latifundios. La emergencia campesina en el agro y de trabajadores mineros y fabriles en
ciudades y centros mineros a través de organizaciones con poder real, modificó
radicalmente los estamentos de poder. Por eso se habla de una Revolución.
Finalmente, la cultura recibió un impulso pocas veces visto en épocas anteriores, surgió
una fuerte corriente indigenista y nacionalista que desarrolló intenso trabajo en todos los
campos. La idea al crear el concepto de un estado nacional poderoso, fue la de establecer
una nación unida por una cultura mestiza y uniformada por el idioma castellano. Esta idea
se fue modificando como resultado del acceso a la educación y a las decisiones de
sectores del mundo aimara y quechua, que propugnaron un criterio de respeto a la
diversidad que se fue acentuando al final de la segunda mitad del siglo.
En América Latina se han desarrollado entre 1900 y 1960, tres grandes procesos
revolucionarios con resultados diferentes y con una importancia también distinta, de
acuerdo a la dimensión de cada país: La Revolución mexicana (1910), la Revolución
boliviana (1952) y la Revolución cubana (1959).
México ha institucionalizado los cambios producidos en las primeras décadas del siglo,
que se llevaron a efecto bajo el principio de «la tierra es para quien la trabaja». Instauró
una continuidad de partido (el PRI) que gobernó el país por más de 60 años y que entró en
una grave crisis al final del siglo, Cuba, que comenzó una revolución progresista
democrática, se transformó en una nación socialista en 1962, alineada en la órbita de la
Unión Soviética. Esa opción llevó al país a una encrucijada muy seria cuando se
desmoronó el socialismo a partir de la caída del muro de 13erlín en 1989. Bajo el liderazgo
de Castro, Cuba mantuvo su posición socialista intransigente como uno de los pocos
países que se mantuvieron en esa línea después de 1989, en medio de un aislamiento
creciente.
De este modo se puede ver la ligazón del fenómeno boliviano con el desarrollado
contemporáneamente en otras naciones del continente. En muchos aspectos la
Revolución boliviana vanguardizó las posiciones radicales con medidas como la
destrucción del ejército y la creación de uno nuevo, el control obrero con derecho a veto
en las minas, las milicias campesinas y mineras armadas y los ministros obreros en el
gobierno.
Bolivia inició, especialmente entre 1952 y 1956, una serie de cambios profundos, pero el
proceso no llegó a su plenitud. Su repercusión internacional fue relativa dado el escaso
desarrollo del país, su aislamiento y su mediterraneidad. Sin embargo en los primeros
años de gobierno del MNR varios intelectuales, economistas y estudiosos progresistas de
todo el mundo visitaron el país interesados por la experiencia. En abril de 1953, primer año
de la Revolución, se reunió en La Paz un grupo destacado de intelectuales
latinoamericanos. Particularmente la reforma agraria ha sido estudiada en sus virtudes y
defectos para casos similares que se desarrollaron posteriormente en América Latina.
Víctor Paz Estenssoro es quizás la figura política más relevante del siglo XX en Bolivia. Su
papel en las transformaciones radicales de Bolivia en 1952 primero y 1985 después, lo
convierten en un referente imprescindible para comprender la política boliviana
contemporánea.
Nació en Tarija el 2 de octubre de 1907. Hizo estudios escolares en el colegio San Luis de
Tarija y Bolívar de Oruro. Se recibió de abogado en la Universidad Mayor de San Andrés
en La Paz en 1927. Comenzó su carrera como ayudante en la oficina Nacional de
Estadística. En 1929 era ya redactor de la cámara de diputados. En la guerra del Chaco
fue interventor general de la contraloría en el primer cuerpo de ejército (1932) y marchó
luego al frente donde combatió en la batería «Seleme».
Ha sido Presidente de Bolivia en cuatro ocasiones, entre 1952 y 1956, entre 1960 y 1964;
en 1964 elegido por un tercer período que no concluyó al ser derrocado por su
vicepresidente René Barrientos y finalmente en 1985 elegido por cuatro años. Es el
Presidente que ha gobernado Bolivia por más tiempo (doce años y seis meses). Entre
1956 y 1958 fue embajador de Bolivia en Inglaterra.
Exiliado entre 1964 y 1971 regresó a Bolivia para colaborar con el gobierno de Hugo
Banzer (entre 1971 y 1973). En 1974 fue exiliado nuevamente.
Por los propios acontecimientos del 9 de abril y por las propuestas de su programa de
gobierno, el Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR) tenía un compromiso que
determinó inicialmente el co-gobierno (1952-1956) entre el partido y la Central Obrera
Boliviana (COB) que tenía como líder máximo a Juan Lechín Oquendo. Esa alianza
determinó que el poder sindical, en las decisiones más importantes del gobierno, fuera
muy amplio.
Las principales medidas del gobierno de Paz Estenssoro fueron la nacionalización de las
minas, la reforma agraria, el voto universal y la reforma educacional. Estos cuatro puntos
fueron el motor que comenzó la transformación de toda la economía y la sociedad
boliviana contemporáneas.
Estos cambios trajeron consigo una serie de problemas que afectaron en plazo inmediato
al consumidor. Así, se produjo un nivel de inflación elevado como consecuencia de una
devaluación permanente del signo monetario. Se produjo también el ocultamiento y la
especulación de productos de primera necesidad, cuyo control pasó a manos de miembros
del MNR, que aprovecharon para sí la situación de crisis al controlar los «cupos» de
alimentos, artefactos domésticos, divisas y el contrabando.
El 17 de abril de 1952, seis días después del triunfo revolucionario se fundó la Central
Obrera Boliviana. Era la culminación de un largo, doloroso y heroico proceso de
construcción de un movimiento proletario que representara a la totalidad de los
trabajadores bolivianos. Desde las etapas embrionarias de principios de siglo hasta esta
instancia, se había logrado una conciencia de clase y madurez política que hizo posible la
coincidencia entre la Revolución y la creación de este instrumento de lucha que unificó a
los sindicatos bolivianos. Entre 1952 y 1958 la COB fue totalmente controlada por el poder
hegemónico del MNR. Juan Lechín fue elegido secretario ejecutivo, cargo que desempeñó
hasta 1987.
LA REFORMA AGRARIA
Para la administración de las minas del estado se creó la Corporación Minera de Bolivia
(COMIBOL) que comenzó su gestión con graves desventajas, escaso capital de operación
y sobre todo maquinaria ya obsoleta y muchas vetas en franco descenso de producción o
simplemente agotadas. La consecuencia lógica fue un altísimo costo de producción que
hacía poco competitiva la exportación estañífera boliviana.
Los precios del estaño bajaron considerablemente entre 1951 y 1955 lo que determinó una
sensible disminución de la producción que descendió de 26.000 toneladas anuales (1952)
a 22.400 toneladas (1956). En el período 1952- 1964, la producción pasó de 32.472
toneladas a 24.412. El mejor año fue 1953 con 35.384 y el peor 1958 con 18.013. En 1952
nuestra producción representaba el 18,7 % de la producción mundial, en 1964
producíamos el 16,5 % de la producción mundial.
Es evidente, sin embargo, que el control de la minería por parte del Estado evitó la
desmedida fuga de divisas y permitió recuperar el beneficio íntegro de la producción
minera para el país. Lamentablemente no se llevó a efecto la inmediata creación de
hornos de fundición que rompiera la dependencia de las fundiciones extranjeras
(básicamente de Patiño), con la consecuente pérdida del valor agregado al exportar el
mineral prácticamente sin procesar.
La euforia de un proceso político inédito y la posibilidad real de parte del sector obrero del
control directo de la más importante fuente de la economía nacional, trajo consigo los
lógicos desajustes de un cambio estructural tan profundo. La inexperiencia administrativa
por una parte y la forzosa aquiescencia a presiones sindicales por otra, determinaron un
alto nivel de burocratización, (imputable también el partido gobernante) y un incremento
excesivo de trabajadores y funcionarios especialmente en «exterior mina» (se inició en
1952 con 28.900, en 1955 habían ya casi 35.000). De acuerdo a un precepto
constitucional se pagó a las empresas afectadas una indemnización de 21.000.000 $us.
entre 1953 y 1961, que obviamente salió de la propia producción.
Con todo, la administración directa de las minas permitió que importantes recursos se
dedicaran a actividades de diversificación económica, muy especialmente para el
desarrollo de la agropecuaria y la agroindustria en los llanos orientales y a la capitalización
de YPFB, lo que potenció a la empresa del petróleo haciéndola rentable y exportadora.
EL VOTO UNIVERSAL
Hasta las elecciones de 1951 (que ganó el MNR) el voto era restringido. No podían votar
ni los analfabetos ni las mujeres (que habían votado por primera vez en los años cuarenta
pero sólo en las elecciones municipales).El concepto de ciudadanía estaba restringido
además a quienes podían demostrar una renta mínima.
El voto universal fue una consecuencia lógica en el marco de una Revolución de corte
policlasista e integradora. Se concedió el derecho a voto (decreto del 21 de julio de 1952)
a todos los bolivianos mayores de 21 años (de 18 años siendo casados) cualquiera sea su
sexo, instrucción, ocupación o renta. De este modo se dio acceso a la decisión política a
más del 70% de la población, marginada hasta entonces del proceso democrático.
El otro ingrediente negativo fue que a la par que la universalización del voto, se sofisticó
una maquinaria de fraude ya existente en el período oligárquico que hizo poco creíbles los
resultados. El MNR tenía indudable mayoría de respaldo en el país, pero forzaba las cosas
para controlar la casi totalidad del Parlamento, dejándole a la oposición apenas un margen
mínimo de representación. El modelo mexicano de partido único con sistema de voto
abierto se seguía casi al pie de la letra.
LA REFORMA EDUCATIVA
La reforma tenía que ver con el esfuerzo por masificar la educación y ese fue sin duda el
resultado más evidente del cambio revolucionario. La explosión de las escuelas rurales fue
muy significativa aunque no hubo una correlación entre número y calidad. En su conjunto,
la reforma educativa que modificó el currículo e intentó inyectar un contenido de
reforzamiento de la identidad nacional a los procesos educativos, se enfrentó a un sistema
de escuelas normales incapaz de formar maestros de buen nivel. La masificación devino
en un bajo rendimiento académico, una inadecuada supervisión y un proceso de
sindicalización que, politizado como estaba, no dio preeminencia a los rangos de exigencia
académica. Los bajos salarios del magisterio fueron también un talón de Aquiles del
sistema, dando como resultado muchos maestros mal pagados y una educación por
debajo de los estándares indispensables.
EL VIEJO Y EL NUEVO EJÉRCITO.
Por primera vez en la historia del país un gobierno tocó la estructura más profunda del
ejército. La tesis era que un estado revolucionario debía contar con un nuevo ejército
revolucionario (los modelos soviético y mexicano, en diversa medida, inspiraron en parte
esta decisión). La estrepitosa derrota militar a manos de los revolucionarios en abril de
1952, condujo a la idea de que había que destruir la raíz "oligárquica" de las FF.AA. Las
dos medidas básicas que se tomaron fueron por una parte la clausura del colegio militar y
por la otra la separación de filas de altos oficiales -la mayoría fueron al exilio-, de oficiales
intermedios y el licenciamiento de los cadetes del colegio. Junto a estas decisiones que
afectaron a más de 500 uniformados, se detuvo a muchos militares de alta y baja
graduación que fueron trasladados a prisión. En Curahuara por ejemplo, entre 1953 y
1955 había más de 50 militares presos.
Desde la creación de YPFB hasta el comienzo de los años cincuenta, la empresa estatal
languideció con un nivel de producción mínimo. Entre 1940 y 1950 se produjeron entre
1.000 y 2.500 barriles día. El advenimiento de la Revolución significó un impulso
consciente de la producción de hidrocarburos como una alternativa de diversificación
económica, pues surgió la posibilidad de exportar crudo una vez cubierta la demanda
interna.
Fue el trabajo de José Paz Estenssoro el que hizo posible el crecimiento notable de YPFB,
que tuvo su verdadero nacimiento como parte esencial de nuestra economía en la década
de los años cincuenta. Entre 1952 y 1964 la producción pasó de 2.500 a más de 10.000
barriles día como promedio, además comenzó a explotarse el gas natural. Al comienzo de
los años sesenta Bolivia producía alrededor de 20 millones de pies cúbicos por día, lo que
impulsaría el crecimiento espectacular que se dio en los años setenta.
Este salto se hizo posible con una inversión que en parte significativa salió de una
transferencia de recursos de COMIBOL a YPFB que permitió la explotación del área de
Sanandita, la perforación de pozos, el impulso de Camiri como centro vital de la
producción de crudo y la construcción de ductos de transporte de crudo de los centros
productivos al altiplano y posteriormente a Arica para la exportación (este oleoducto fue
terminado en 1958).
Fue precisamente en el ámbito del petróleo que el gobierno del MNR dio una muestra
evidente de que sus concepciones estatistas no sólo tenían matices, sino que apostaban a
la necesidad de inversión externa y una política liberal en este campo. El código del
petróleo preparado por el bufete estadounidense de abogados Davenport y Schuster se
aprobó como decreto en 1955 y por si hubieran dudas, se ratificó en el Parlamento en
1956 ya como ley promulgada por el gobierno de Siles Zuazo. El código otorgaba amplias
facilidades a los inversionistas, a cambio de una regalía del 11 % al estado que podía
reducirse según el caso y un impuesto sobre utilidades del 30 %.
Es indudable que el punto de partida del vertiginoso desarrollo de Santa Cruz y por
extensión de una importante zona del oriente, no se podría explicar sin el proyecto de
diversificación encarado por el primer gobierno de la Revolución. La inauguración, el 25 de
agosto de 1954, de la carretera asfaltada Cochabamba-Santa Cruz marcó el hito básico.
En la práctica el MNR hizo suyo el plan de diversificación propuesto por el economista
estadounidense Marvin Bohan en 1942 y que en buena parte Wálter Guevara aplicó a su
proyecto económico publicado en 1955. La oligarquía terrateniente cruceña pasó a ser
burguesía agraria, al ser reconocidas por la reforma agraria las empresas agrícolas,
beneficiadas además por la ayuda norteamericana, las divisas fiscales y el uso de capital
generado por COMIBOL. Otro dinamizador de la economía fueron los ingenios azucareros.
El Estado construyó el ingenio de Guabirá, comenzado en los años cuarenta. Guabirá no
fue el único de los ingenios cruceños. La ciudad de Santa Cruz pasó de tener una
población de 42.746 h. en 1950 a 254.682 h. en 1976.
Esta decisión del gobierno de la Revolución fue clave pues marcó un giro fundamental en
la historia boliviana. La vertebración de occidente y oriente a través del eje cruceño,
impulsado de una manera impresionante por la producción petrolera, llevó a un progresivo
desplazamiento del eje de poder económico lo que se vio de manera muy evidente a
finales del siglo XX. La dinámica económica de Bolivia pasó de las alturas andinas a los
llanos a través del desarrollo de la agroindustria.
Se abría así una confrontación política electoral entre MNR y FSB como principal fuerza
opositora, bloqueada por la real popularidad movimientista y por la máquina de fraude del
gobierno. En 1956 el ejecutivo no necesitó manipular la votación, pues su popularidad
estaba aún en un punto muy alto. La izquierda había perdido todo chance, en la medida en
que el MNR encarnaba los cambios más radicales que había vivido Bolivia. El sustento
electoral básico del MNR era el gran caudal de votantes campesinos que beneficiados por
la reforma agraria mantuvieron su lealtad de voto a los movimientistas durante casi toda la
segunda mitad del siglo XX.
HERNÁN SILES ZUAZO (1913-1996)
Hernán Siles Zuazo nació en La Paz el 19 de marzo de 1913, hijo del también Presidente
de la República Hernando Siles Reyes (1926-1930). Estudió en el Instituto Americano, se
graduó como abogado en la Universidad Mayor de San Andrés, destacándose como
importante dirigente universitario. Fue funcionario del ministerio de Hacienda y director de
la biblioteca del congreso. Desde 1940 fue diputado por La Paz en tres legislaturas. En
1941 fundó el MNR junto a Víctor Paz y otros destacados intelectuales, partido del que fue
sub-jefe hasta su escisión en 1964. Fue jefe del movimiento revolucionario de abril de
1952 que instrumentó la Revolución Nacional. Entre 1952 y 1956 ocupó la Vicepresidencia
de la República. En 1956 fue elegido Presidente del país, cargo que ejerció hasta agosto
de 1960. Entre 1960 y 1962 fue embajador de Bolivia en el Uruguay. Ante la decisión de
Paz de ir a la reelección rompió con la jefatura del partido y apoyó al Gral. Barrientos quien
derrocó a Paz Estenssoro y al MNR. Poco después fue exiliado. En 1969 organizó el MNR
de Izquierda, partido con el que hizo política hasta su nuevo acceso a la presidencia. Se
opuso al golpe de 1971 lo que determinó su ruptura definitiva con Paz Estenssoro.
En 1978 Siles retornó a Bolivia y tras organizar, junto a dirigentes del MIR y el Partido
Comunista, la Unidad Democrática y Popular (UDP), se presentó como candidato
presidencial en los tres procesos electorales de la reapertura democrática ( 1978-1980).
Cuando su triunfo por mayoría relativa (1980) hacía suponer una votación congresal que lo
ungiera Presidente, el golpe de estado de julio de 1980 lo forzó a tomar el camino del
exilio. Tras el triunfo popular que obligó al ejército a convocar al parlamento de 1980, fue
elegido y ungido Presidente constitucional en 1982, cargo que ejerció sólo hasta 1985,
pues se vio forzado a renunciar a un año de su mandato como emergencia de la grave
crisis económica que vivía el país.
El Dr. Siles participó en 4 elecciones como candidato a la presidencia, ganó 3 (1956, 1979
y 1980) y ocupó el segundo lugar en la restante (1978), aunque en este caso la magnitud
del fraude electoral hace presumir que también ganó esas elecciones. En 1985 se retiró
definitivamente de la actividad política. Se trasladó a Montevideo donde residió I últimos
años de su vida. Murió en la capital uruguaya el 6 de agosto de 1996 a los 83 años de
edad.
PRIMER GOBIERNO SILES ZUAZO 1956-1960
La reapertura del Congreso abrió la polémica, sobre todo en sectores radicalizados que
consideraban que un gobierno de las características del MNR no podía retornar a la
práctica de la democracia burguesa y por tanto no debía contar con un parlamento. Los
hechos definieron la posición del MNR. La legislatura de 1956 aprobó todos los decretos y
leyes de la gestión 19521956 y particularmente el famoso código «Davenport» del
petróleo.
En política monetaria se siguió las líneas del plan de estabilización de 1956. Se creó en
1962 el peso boliviano que estaba entonces a 12 pesos por dólar. La estabilidad lograda el
56 fue de tal importancia que el signo monetario no varió el tipo de cambio hasta 1972, un
nivel de estabilidad que duró 16 años. También se incrementaron las medidas de
seguridad social (viviendas, cuota mortuoria, etc.) en favor de empleados y trabajadores.
Se impulsó con CONAVI la vivienda social, también se crearon las mutuales de ahorro y
préstamo, insertando al país en criterios básicos con miras al impulso del ahorro interno,
que no pudo consolidarse a pesar de estos esfuerzos.
En las minas y en las fábricas se prolongó una fiebre de huelgas iniciadas en el anterior
período. La huelga se convirtió en algo cotidiano, perdiendo su verdadera fuerza y sentido.
El propio Lechín criticó duramente las huelgas utilizadas hasta por los motivos más
banales. En el campo se produjeron frecuentes enfrentamientos entre campesinos. Los
acontecimientos de Cliza y Ucureña son los más destacados de la violencia en el agro en
esos años.
En 1963 el ala izquierda del partido (dirigida por Lechín y Chávez) creó el Partido
Revolucionario de Izquierda Nacional (PRIN). Hernán Siles Zuazo se declaró opositor a
ultranza de lo que denominaba como «prorroguismo», igual decisión tomó Wálter
Guevara. La convención era un hervidero de alas y facciones. Se proclamó a Paz y al
controvertido ex-miniitro de gobierno Federico Fortún. La fuerte oposición interna obligó a
Paz a eliminar a Fortún ydesignar a René Barrientos, jefe de la «célula militar»,
reconociendo así la influencia cada vez mayor del ejército en la vida política del país.
El 31 de mayo se realizaron las elecciones; era en la práctica una fórmula única. Ganó
Paz por mayoría aplastante, 1.114.717 (98%), la oposición se abstuvo en su conjunto.
EL MOMENTO HISTÓRICO
El golpe de estado de 1964 forzó una modificación en la política global en relación a los
sectores populares y el cambio esencial de un gobierno civil a otro detentado casi
exclusivamente por militares, pero la orientación estatista y de capitalismo de estado no
varió sustancialmente, por el contrario, en la década de los años setenta se incrementó
significativamente. De los 18 años que median entre noviembre de 1964 y octubre de
1982, fecha de la definitiva reapertura democrática, sólo por un año y tres meses Bolivia
tuvo tres presidentes civiles y sólo cuatro años de gobiernos democráticos. Fue una época
protagonizada por el ejército como fuente y protagonista del poder político.
Al poco tiempo se produjo la ruptura con Siles Zuazo y luego con Juan Lechín,
determinando el exilio de ambos. FSB, el PSD, el PIR y el PRA asumieron la
representación civil de las fuerzas de apoyo a Barrientos, aunque el primer gabinete fue
casi exclusivamente militar. De él salieron varios mandatarios y figuras importantes de la
política inmediatamente posterior. Juan José Torres (Hacienda), Hugo Banzer
(Educación), Rogelio Miranda (Agricultura), Joaquín Zenteno (Relaciones Exteriores),
René Bernal (Asuntos Campesinos), Juan Lechín Suárez (COMIBOL).
Aunque la cúpula de la junta militar la constituían Barrientos y Ovando, por el problema del
5 de noviembre, el mando lo ejercía sólo el Gral. de aviación. Ante muestras de
descontento en sectores militares que apoyaban a Ovando y para evitar la susceptibilidad
de éste, Barrientos creó el 26 de mayo de 1965 una nueva figura en el ejecutivo sin
precedentes en el mundo, la co-presidencia. Así, durante siete meses, el país tuvo
simultáneamente dos presidentes.
Alfredo Ovando Candia y René Barrientos Ortuño, copresidentes en
1965. Fue la única vez en nuestra historia en que se dio esta figura
jurídica en el mando del país (Lucio Flores, 1965).
Tras los acontecimientos de mayo se produjo una de las medidas más drásticas referidas
a los sectores laborales, particularmente las minas. Como medidas de reordenamiento de
COMIBOL se dispuso la rebaja general de salarios, descongelamiento de artículos de
pulpería, congelamiento de sueldos por un año, prohibición de huelgas y desconocimiento
de las direcciones sindicales. Esta actitud ante los obreros fue una constante del gobierno
de Barrientos, que, como producto de la doctrina de seguridad nacional, tenía una actitud
frontalmente anticomunista. El Co-presidente asumía que los trabajadores en su conjunto
estaban manejados por comunistas a los que había que combatir y doblegar sin
miramientos.
En la segunda mitad de ese año el gobierno convocó a elecciones para julio de 1966.
Barrientos renunció a la co-presidencia habilitándose como candidato.
LA CONSTITUCIÓN DE 1967
El Ché es la figura no boliviana que más ha influido en nuestra historia interna en el siglo
XX. Su Incursión en Bolivia, a pesar de no haber tenido una real significación militar y a
pesar de su fracaso, reflejó uno de los momentos más notables de la utopía continental y
la esperanza en un cambio radical de la sociedad nacional. Más allá de sus ideas, el Ché
simbolizó un tipo de hombre idealista y coherente con su prédica que caló muy hondo en
la juventud del país.
Entre el 4 de noviembre de 1966, llegada de Ernesto Guevara a La Paz con otra identidad
(Adolfo Mena González), y el 9 de octubre de 1967 a su muerte, se desarrolla un
movimiento guerrillero de corte castrista que estalló en los primeros enfrentamientos con el
ejército boliviano en marzo de 1967.
La idea básica del Ché, más que la toma del poder, era la creación de un foco de
irradiación continental, una especie de nuevo Vietnam contra el imperialismo. Siguió el
modelo foquista (guerrilla rural) de la experiencia cubana. No contó con el apoyo del
partido comunista boliviano que le retiró la ayuda, nt logró reclutar campesinos bolivianos
en su campaña. La izquierda del país, con pocas excepciones, criticó la guerrilla. El
comandante argentino-cubano olvidó un gran detalle, que Bolivia había vivido una
Revolución radical en 1952 cuyos principales beneficiarios fueron los campesinos. El otro
elemento fue su desconocimiento del quechua, idioma que hablaba una parte significativa
de los campesinos con los que se cruzó a lo largo de su campaña.
El ejército boliviano conoció los aprestos guerrilleros el 6 de marzo de 1967 cuando el civil
Epifanio Vargas denunció la existencia del grupo guerrillero. Alfredo Ovando era el
comandante de las FF.AA. y el Gral. David Lafuente Soto comandante del ejército. Dos
divisiones fueron encomendadas para combatir a los guerrilleros, la IV al sur del río
Grande al mando del Cnel. Antonio Reque Terán y la VIII al norte del río Grande al mando
del Cnel. Joaquín Zenteno Anaya. El total del contingente guerrillero fue de 52 efectivos, 8
de ellos fueron categorizados por el propio Guevara como no combatientes. La mayoría
eran bolivianos (29) y cubanos (16), los siete restantes eran de otras nacionalidades.
Oficiales del ejército boliviano en la campana de Ñancahuazu.
El escenario de los combates fueron los provincias Cordillera, Vallegrande y Florida del
departamento de Santa Cruz, en el valle marcado por el río Grande en una serranía
subandina de clima templado, con temperaturas moderadas a altas en el día y frescas y
aún bajas en la noche. Dependiendo la zona la vegetación era abundante y de altura
mediana. La caza era dificultosa y las presas pequeñas. Las poblaciones más importantes
eran Vallegrande, Samaipata y Camiri (mucho más al sur).
Un pequeño grupo dc cinco guerrilleros bajo la Jefatura de Inti Peredo logró romper el
cerco militar y llegar a Cochabamba. En enero de 1968 salieron del país
clandestinamente.
Casi seis meses después de la muerte del Che, Antonio Arguedas, ministro de Gobierno
de Barrientos, tomó contacto con Víctor Zannier Valenzuela y le Pidió que mediante el
partido comunista hiciera llegar una fotocopia del diario de Guevara a Fidel Castro.
Zannier la entregó a militantes socialistas chilenos que a su vez se la entregaron en mano
propia a Castro, lo que le permitió a éste publicar el diario antes que el gobierno boliviano
y la editorial estadounidense con la que había negociado. Arguedas fue descubierto en
julio de 1968, pero logró huir a Chile. Tras un extraño y largo periodo intercontinental
volvió a Bolivia y se entregó; sus explicaciones sobre los móviles de esa acción nunca
fueron claras. Dijo ser militante comunista y fue también vinculado como doble agente (con
contactos en la CIA). En 1969, ya libre, tras sufrir un atentado que lo hirió, Arguedas que
tenía en su poder las manos formolizadas del guerrillero y su mascarilla mortuoria se los
entregó también a Zannier, quien dando el habitual rodeo de esos años por países
socialistas, llegó a La Habana y le entregó en persona las manos y la máscara a Fidel
Castro. Tras estos episodios, Arguedas tuvo una vida azarosa y murió en sugestivas
circunstancias cuando una bomba que llevaba le estalló en las manos en febrero del 2000
en una plaza de La Paz.
En 1984 la casa subastadora inglesa «Sotheby» puso a remate los originales del diario del
Ché, hecho que reveló que los originales del diario habían sido robados de los archivos de
las FF.AA. bolivianas que lo conservaban desde 1967. El escándalo del robo no se
esclareció, aunque miembros del gobierno de García Meza y el propio ex-presidente
fueron involucrados directamente en la sustracción. Bolivia recuperó los originales que hoy
forman parte del patrimonio histórico de la nación.
En 1995 el gobierno de Sánchez de Lozada autorizó la búsqueda de los restos del
guerrillero, tras la afirmación de Mario Vargas Salinas de que su cadáver no había sido
incinerado. Tras un año y medio de trabajo técnicos cubanos, argentinos y bolivianos
encontraron en junio de 1997 al Ché junto a otros guerrilleros en la pista de aterrizaje de
Vallegrande. Sus huesos fueron repatriados a Cuba donde hoy reposan.
La guerrilla del Ché Guevara tuvo profunda influencia en toda una generación y reflejó la
radicalización política de varios sectores del continente impactados por la revolución
cubana y desencantada por la política norteamericana de EE.UU. en Vietnam.
MUERTE DE BARRIENTOS
Barrientos se caracterizó por su permanente interés en visitar todo el país. Su afición a los
viajes por aire en naves que piloteaba personalmente, terminó en una tarde dramática en
Arque, pequeño pueblo de Cochabamba. El helicóptero que lo conducía chocó en su
ascenso con cables de alta tensión, cayó y se incendió. La muerte de Barrientos impactó
mucho al país. Su entierro fue multitudinario. Hasta hoy se especula sobre si el deceso del
Presidente fue producto de un accidente o de un atentado criminal. La desaparición del
general dejó un vacío político muy grande. Su gobierno, si bien era formalmente
constitucional, estaba teñido con una fuerte dosis de autoritarismo y se manejaba de
manera vertical y personalista. Se especuló mucho sobre una eventual decisión del
Presidente de declararse dictador el 1º de mayo de 1969. La muerte del primer mandatario
se había producido el 27 de abril, tres días antes de esa fecha. Quedaba claro que el
hombre fuerte del país, tras esta trágica desaparición, era el general Alfredo Ovando que
había compartido en medio de fuertes tensiones el poder político y militar con Barrientos
desde el golpe de noviembre de 1964.
Siles Salinas nació en la Paz el 21 de junio de 1925, hijo del Presidente Hernando Siles
Reyes y hermano por padre de Hernán Siles Zuazo. Estudió el bachillerato en Chile.
Estudió filosofía en Lima, luego en la UMSA y se graduó como abogado en 1949 en la
Universidad de San Francisco Xavier de Sucre. Realizó el doctorado en Madrid. Desarrolló
una importante labor como catedrático universitario en Bolivia, Ecuador y Estados Unidos.
Fue líder del Partido Social Demócrata, se postuló a la vicepresidencia en 1966, ejerció
ese importante cargo entre 1966 y 1969. Tuvo un papel preponderante como Presidente
de la Asamblea Constituyente que promulgó la Constitución de 1967. En 1969 sucedió
constitucionalmente a Barrientos, tras la trágica muerte de éste. Ese mismo año fue
derrocado por el Gral. Ovando. Promovió la creación de la Universidad del Beni. Durante
el gobierno del Gral. Banzer desarrolló una importante labor como presidente de la
comisión de Justicia y Paz en defensa de los derechos y libertades en el país. Creó la
Asamblea de DD.HH. de Bolivia. En 1979 apoyó la candidatura de la UDP y en 1980 fue
candidato presidencial de una coalición de partidos de centro y algunos grupos de
izquierda. Apoyó el movimiento organizado en 1981 contra la dictadura de García Meza.
Fue miembro de la Corte Interamericana de Derechos Humanos. Entre 1982 y 1985
embajador de Bolivia en España. Fue nombrado magistrado de la Corte Suprema de
Justicia. Retirado a la vida privada y tras una larga enfermedad, murió en La Paz el 19 de
octubre de 2005 a los 80 años.
Una de las preocupaciones mayores del nuevo mandatario fue la legalidad y la absoluta
sujeción a la constitución. Todos los métodos violentos y represivos fueron eliminados (se
disolvió el FURMOD, encargado de seguridad del estado), se acabó con destierros, presos
y persecuciones políticas, gobernando en el marco de una democracia plena.
Entre las obras destacadas de su gobierno se pueden mencionar la financiación para la
fundición de bismuto de Telamayu, los cinco proyectos camineros en Pando, Beni, La Paz
y Santa Cruz, la creación de la Caja Social del Chofer, y la autorización a las
universidades para programas empresariales que permitan su autofinanciación. Se creó la
Corporación de Desarrollo Rural y en términos generales se mantuvo un equilibrio
razonable de la deuda pública.
Uno de los hitos más importantes para la comunicación de masas en Bolivia fue la
instalación de la Televisión Boliviana, inaugurada el 30 de agosto de 1969, en un polémico
contrato con la empresa española INELEC. Si bien toda la gestión fue hecha durante el
gobierno de Barrientos, le tocó a Siles su inauguración. La llegada de la televisión integró
a Bolivia a un medio que desde la década de los años cincuenta había capturado la
atención de millones de seres humanos en el mundo. Bolivia fue uno de los últimos países
latinoamericanos en contar con TV La existencia de un solo canal propiedad del estado
por muchos años, convirtió a la televisión en un poderoso instrumento de manipulación
política en manos del gobierno. Esta realidad sólo se quebró en 1984 con el nacimiento de
los canales privados.
La proximidad del fin del mandato constitucional (1970) despertó el ambiente político.
Las mejores perspectivas se daban para el Gral. Armando Escóbar Uria (alcalde de La
Paz) y el Gral. Ovando (comandante en jefe de las FF.AA.) que recibió el respaldo
campesino a través del mecanismo del pacto militar campesino.
Camarógrafo de Televisión Boliviana, Canal 7, en los primeros meses de trabajo del canal
estatal que comenzó sus emisiones en 1969 (Lucio Flores)
ALFREDO OVANDO CANDIA (1918-1982)
A pesar de sus posibilidades en los comicios que debían realizarse en 1970, Ovando
decidió el derrocamiento de Siles Salinas. El 26 de septiembre de 1969 se produjo la
proclama que a través de un «mandato revolucionario de las FF.AA.» cambiaba el mando
de la nación. El golpe determinó un radical cambio de rumbo en los destinos del país. Era
un intento de retomar la línea originada en 1952 en el contexto de una política nacionalista
de defensa de los recursos naturales y desarrollo de los medios de producción que
permitieran consolidar una mayor independencia económica. En su documento central
hablaba de asegurar la soberanía, diversificar la industria minera, planificar la economía,
reorganizar el comercio exterior, proteger la industria nacional, elevar sueldos, fomentar
las cooperativas rurales y sostener relaciones con todos los países del mundo.
LA NACIONALIZACIÓN DE LA GULF
Pasó de 8.000 barriles día a casi 40.000, fue el segundo nivel más alto de producción de
la historia. La producción de gas trepó de 25 millones de pies cúbicos día en 1965 hasta
más de 75 millones en 1969. Era el antecedente de una etapa de bonanza que tuvo su
pico mayor en los años setenta.
Después del fracaso de la guerrilla del Che, el ELN se reorganizó al mando de Inti Peredo
y reapareció en Bolivia en julio de 1968, mientras cuadros de la organización se
entrenaban en Cuba. Su línea política de inspiración guevarista defendía la lucha armada
y la guerrilla rural como mecanismo de toma del poder. Entre 1968 y 1970 realizó atracos
a diferentes empresas para conseguir fondos. En 1969 asesinó a Honorato Rojas que
había colaborado al Ejército en Ñancahuazú. A la vez se vivieron confusos y oscuros
episodios en los que murieron en circunstancias extrañas o fueron ejecutados por el propio
ELN, militantes de esa organización acusados de traición.
En ese periodo ingresaron al ELN, sobre todo desde las universidades, militantes de la
Democracia Cristiana Revolucionaria, jóvenes marxistas independientes, disidentes del
PCB y cristianos independientes vinculados a la teología de la liberación que Influyeron en
el pensamiento de sus compañeros en la guerrilla.
El 9 de septiembre de 1969 el aparato de seguridad del Estado descubrió una casa donde
se refugiaba Inti y lo ultimó. Tomó el relevo en la jefatura de la organización su hermano
Oswaldo Chato Peredo, quien organizó un nuevo movimiento guerrillero.
Hasta finales de septiembre el Ejército había aniquilado a toda la columna que iba al norte.
El destino de los insurrectos quedó sellado. Tras penosa caminata 8 integrantes del grupo
del sur lograron evadir el cerco del Ejército.
En este trágico episodio de la historia se perdieron, entre otros Jóvenes brillantes, las
vidas de Néstor Paz Zamora revolucionario cristiano (autor de un dramático y hermoso
diario de guerrilla firmado bajo el seudónimo de Franciscano, que muestra la fortaleza
espiritual a la vez que la indefensión y total inexperiencia de los bisoños combatientes), el
folklorista Benjo Cruz, los hermanos Quiroga Bonadona, Raúl y Alberto Revollo, entre
otros.
Torres, tras lograr el respaldo explícito de la fuerza aérea, controló la situación en unas
horas, bajó a la ciudad y juró la Presidencia ante el pueblo reunido en la Plaza Murillo. Era
la primera vez que un Presidente decidía hacer su juramento ante la multitud y no en una
ceremonia en palacio o el Congreso delante de una Biblia. Ante la plaza llena dijo que los
pilares fundamentales con los que gobernaría serían los obreros, los militares, los
universitarios y los campesinos.
JUAN JOSÉ TORRES GONZÁLEZ (1921-1976)
Juan José Torres Gonzáles saluda a los manifestantes después de haber jurado a la presidencia
en el balcón principal del Palacio de Gobierno en 1970 (Lucio Flores).
El Gral. Torres nació en Sacaba (Cochabamba) en 1921. De origen humilde tuvo que
trabajar desde su infancia para contribuir a su familia. Ingresó en el colegio militar. Como
capitán participó en un movimiento rebelde de FSB contra el Presidente Urriolagoitia. Fue
agregado militar en Brasil, ministro de Hacienda y Estadística de Barrientos y comandante
en jefe de las Fuerzas Armadas. Entre 1970 y 1971 fue Presidente de la República. Tras el
golpe del Gral. Banzer partió al exilio, a Chile primero y a la Argentina después. El 2 de
junio de 1976 fue secuestrado y brutalmente asesinado en Buenos Aires por un grupo
terrorista que no pudo identificarse, cuando tenía 55 años.
La línea iniciada por el gobierno Ovando se profundizó pero sin un proyecto político ni una
idea clara de la significación y proyecciones del esquema. Las fuertes y permanentes
presiones de sectores de izquierda y extrema izquierda, el creciente recelo militar y el
descontento en la empresa privada, hicieron que el gobierno Torres, carente de fuerza y
definiciones claras, estuviera en permanente estado de emergencia. En principio el
Presidente propuso una suerte de co-gobierno, con participación obrera. Los trabajadores
querían más que un gobierno a medias, quería todo el poder o quizás prefirieron no asumir
ninguna responsabilidad, lo cual era más práctico y cómodo, en consecuencia pidieron el
51 %, el ejecutivo contraofertó el 50 %, ni siquiera el MNR revolucionario de 1952 había
llevado a cabo una idea tan arriesgada. Tras ardua deliberación la COB aceptó, pero el
camino de desencuentros entre políticos y sindicalistas ante las temas presentadas,
terminó por desbaratar la opción. Se formó así un gabinete de intelectuales y militares.
Pero la COB le presentó al Presidente un documento de veinte puntos que contaba entre
los más salientes: Expulsión del país de militares y civiles "fascistas" y misiones y
agencias "imperialistas", reposición salarial a los mineros, reversión de mina Matilde, no a
la indemnización a la Gulf, reposición del control obrero con derecho a veto, control fiscal
de divisas extranjeras y monopolio estatal del comercio exterior.
El país vivía una euforia revolucionaria sin precedentes, el gobierno intentó estar a la
altura de las expectativas de los sectores más progresistas y tomó medidas concretas.
Decretó la reposición salarial de los trabajadores mineros, la rescisión del contrato de mina
Matilde que pasó a control del Estado, asegurando además la comercialización del zinc
que la mina producía. El gobierno expulsó de Bolivia a los voluntarios del «Cuerpo de paz»
norteamericano y pasando por alto una sentencia judicial liberó a Regis Debray y Ciro
Bustos que abandonaron Bolivia el mismo día de su libertad. Se dio luz verde para una
serie de acciones de hecho que amenazaron y provocaron un desquiciamiento de todo
control sobre la situación. Los periodistas sindicalizados intervinieron y forzaron la
cooperativización de El Diario, los estudiantes universitarios tomaron y confiscaron los
edificios del Centro Boliviano Americano y de IBEAS (Instituto de Estudios Sociales).
En el norte cruceño Óscar Zamora del partido Comunista Marxista Leninista (escindido en
1966 del PCB y de tendencia pro china) con el nombre de guerra de comandante Rolando
organizó un grupo de lucha armada para la toma directa de tierras, bajo el denominativo
de Unión de Campesinos Pobres (UCAPO). Tras algunas acciones aisladas, UCAPO
desapareció. En 1979 Óscar Zamora reapareció como senador de la República apoyando
al MNR y en 1993 como candidato vicepresidencial del Gral. Hugo Banzer. Las cosas
llegaron a su punto más extremo cuando un comando universitario asaltó un motel de La
Paz y expulsó en paños menores a las parejas que se encontraban allí en el momento de
la toma.
Pero el gobierno, a pesar de todo, tuvo tiempo de terminar y desarrollar algunas obras.
Inauguró la planta de fundición de Estaño de Vinto, una de las aspiraciones más caras del
país durante décadas, culminando la iniciativa tomada por Ovando en 1966. Se crearon
las primeras corporaciones de desarrollo departamental (La Paz y Tarija) que cumplieron
un destacado rol de desarrollo regional hasta 1995. Se trabajó en el proyecto de una
nueva Constitución que nunca llegó a discutirse.
Mientras en Lima se producía el pacto de unidad del MNR entre Víctor Paz E. y Hernán
Siles Z. (que se rompió al apoyar Paz el golpe de Banzer), en La Paz se crearon dos
partidos políticos de gravitación fundamental en las últimas décadas del siglo. El que
influyó más en la política boliviana fue el Movimiento de la Izquierda Revolucionaria MIR
que nació el 26 de abril de 1971 en pleno gobierno de Torres, (aunque su fecha oficial de
fundación es el 7 de septiembre de 1971), formado sobre todo por universitarios y sectores
radicalizados de la democracia cristiana el grupo Espartaco, sectores del MNRI y
marxistas independientes. Pasó de una postura basada en el marxismo y en algunos
sectores en una tesis foquista apoyada en la lucha armada, a una postura democrática
entroncada a la Revolución de 1952 a partir de 1977. Lo fundaron, entre otros, Antonio
Aranibar, Jorge Ríos Dalenz, Jaime Paz Zamora y Óscar Eid. El MIR encarnó a una nueva
generación que esperaba opciones nuevas distintas del movimientismo y el marxismo
tradicionales.
En mayo de 1971 se fundó el Partido Socialista, inspirado por Marcelo Quiroga Santa
Cruz, que con los años fue su líder indiscutido. Postulaba la marcha al socialismo y la
conquista del poder por un gobierno popular de esencial raíz obrera. Lo formaron
unificando a UNIR, APB, FARO y FLIN. Fundaron el PS, Quiroga Santa Cruz, Guillermo
Aponte Burela, Mario Miranda y Alberto Bailey. La figura de Quiroga le dio un gran impulso
al PS, obteniendo notables resultados electorales en el período 1978-1980. En 1979 se
dividió en dos alas, la más vigorosa denominada PS-1 bajo el liderazgo de Quiroga. Tras
la muerte de su líder entró en un período de franca decadencia hasta su desaparición.
La profunda debilidad del régimen del Gral. Torres determinó su inevitable caída. Sectores
de derecha, la empresa privada, una gran parte de las FF.AA. y la participación de FSB y
el MNR, confluyeron en la organización del golpe que se originó en Santa Cruz. El
movimiento estuvo liderizado por el Cnl. Banzer que fue arrestado el mismo día del
levantamiento (19 de agosto). Banzer había irrumpido en el escenario político de esos días
al enviar junto al Cnl. Edmundo Valencia, siendo comandante del colegio militar, una dura
carta a Juan Lechín (9 de diciembre de 1970) en la que lo desafiaba a un debate público
sobre el futuro de las FF.AA., a las que Lechín criticaba sin cesar, el debate nunca se
realizó. En enero de 1971 Banzer fue destinado a Curahuara de Carangas, En esos días
(11 de enero) protagonizó un frustrado intento de golpe de estado fue dado de baja y
exiliado a la Argentina.
Jóvenes combatientes en la colina de Laikakota de La Paz, enfrentan el golpe
militar de 1971 (Lucio Flores).
El golpe fue gestado en una combinación de dos sectores, el militar y el civil. El militar
estuvo encabezado por el mayor Humberto Cayoja. Entre los altos oficiales se encontraba
el Gral. Remberto Iriarte y también el Cnl. Hugo Banzer que logró importante ascendiente
tras su acción subversiva de enero de 1971 desde el colegio militar. El sector civil tenía
como cabeza a Mario Gutiérrez jefe de FSB, Ciro Humbolt y Raúl Lema como
representantes de Paz Estensoro a la sazón exiliado en Lima.
El Gral. Torres salió al exilio, al igual que dirigentes como Lechín, su gabinete y el mayor
Rubén Sánchez, ultimo bastión de la defensa gubernamental. A pesar de las aspiraciones
personales de Iriarte y Mendieta que apelaban a su mayor jerarquía en el escalafón militar,
Banzer llegó a palacio el 21 de agosto y juró a la presidencia basada en el liderazgo que
había asumido claramente al comenzar ese mes. Inmediatamente se clausuraron las
actividades de la COB y los partidos de izquierda. El nuevo régimen fue particularmente
duro con los universitarios que tanto en La Paz como en Santa Cruz resistieron hasta
después del mismo 21. El saldo de esas tres jornadas fue 98 muertos y 560 heridos.
Su primer gobierno es uno de los cuatro más prolongados de la historia de Bolivia. Tras
las frustradas elecciones generales de 1978 fue derrocado por su ex-ministro del Interior
Juan Pereda Asbún en ese mismo año. En 1979 se presentó como candidato presidencial
de la ADN (Acción Democrática Nacionalista) partido del que fue fundador y jefe. Ocupó el
tercer lugar. También en 1979 afrontó un juicio de responsabilidades por sus actos de
gobierno. En 1980 volvió a candidatear y ocupó nuevamente el tercer lugar. A partir de
1982 pasó a ser opositor frontal del gobierno de la UDP desde posiciones de derecha.
En 1985 ganó las elecciones presidenciales por mayoría relativa (33% frente al 30% de
Paz E.), pero fue derrotado por Paz en la elección congresal. En octubre del mismo año
firmó el Pacto por la Democracia con Paz apoyando su gobierno. Nuevamente candidato
en 1989, obtuvo el segundo lugar detrás de Gonzalo Sánchez de Lozada, pero sus votos
en el parlamento fueron decisivos para hacer Presidente a Jaime Paz con quien se alió y
co-gobernó entre 1989 y 1993 en una coalición denominada Acuerdo Patriótico. Volvió a
postular a la presidencia en 1993 y perdió otra vez frente a Sánchez de Lozada. Fue
opositor al gobierno del MNR en el período 1993-1997. Ganó por estrecho margen (22 %)
las elecciones de 1997 que permitieron que el congreso lo ungiera Presidente
constitucional del país. Murió en Santa Cruz el 5 de mayo de 2002 a los 74 años.
Banzer fue seis veces candidato presidencial, ganó dos elecciones (1985 y 1997), obtuvo
dos segundos lugares (1989 y 1993) y dos terceros (1979 y 1993).
Bolivia había llegado en 1971 a una polarización que dividió la nación en dos de manera
irreconciliable. Por un lado, quienes creían que había llegado la hora del cambio sin
contemplaciones. Por el otro, la izquierda que atravesaba una etapa de euforia
revolucionaria sin precedentes. La clase media asustada se aferró a la salida de una
derecha también radical que no estaba dispuesta a ver tocados sus intereses. El
anticomunismo era una bandera también intransigente. En un punto histórico como éste,
no era posible pensar en una solución por la vía del diálogo. El contexto internacional
hacía imposible un giro a la izquierda al estilo de la UP chilena. Los gobiernos de
Argentina y Brasil, presididos por militares de derecha, no querían ni pensar en un vecino
revuelto por la revolución. Estados Unidos apoyaba sin restricción alguna al militarismo de
derecha. Torres y la asamblea popular estaban condenados, pero pelearon antes de caer
definitivamente derrotados.
De los ocho gabinetes del gobierno Banzer se pueden mencionar como ministros
importantes de su administración a Mario Gutiérrez (Relaciones Exteriores), Andrés Selich
(Interior), Ciro Humboldt (Trabajo), Carlos Valverde Barbery (Salud), Carlos Serrate Reich
(Minas y Metalurgia), Alfredo Arce (Interior), Alberto Natusch (Agricultura y Asuntos
Campesinos), Juan Pereda (Industria e Interior), René Bernal (Defensa), Juan Lechín
Suárez (Planeamiento y Coordinación), Waldo Bernal Pereira (Educación), Carlos Calvo
(Finanzas) y Guido Vildoso (Salud).
LA VIOLENCIA EJERCIDA DESDE EL GOBIERNO
Las dependencias policiales al lado del edificio del Congreso y la prisión de Chonchocoro
en La Paz rememoraron el concepto de los campos de concentración del I\INR,
Centenares de Jóvenes universitarios, dirigentes políticos y sindicales pasaron por sus
celdas y fueron vejados y torturados en ellas. Los ministros del Interior más duros de este
periodo fueron Andrés Selich Chop y Mario Adett Zamora. Manejaban el servicio de
inteligencia del Estado y fueron directos responsables de tortura y malos tratos a decenas
de detenidos el col. Rafael Loayza, cnl. Ernesto Cadima y el cap. Carlos Mena. Dirigián el
DOP en La Paz Guido Benavides, en Cochabamba Abraham Baptista y Ernesto Morant.
Una comisión redactó la ley fundamental de la Universidad que, mediante la creación del
CNES (Consejo Nacional de Educación Superior), eliminó el co-gobierno paritario, no
permitió el desarrollo de actividades políticas a los universitarios y suprimió la autonomía.
DESARROLLO ECONÓMICO
Durante este período de gobierno se produjo una etapa de bonanza económica sin
precedentes, fundamentalmente por los precios favorables de nuestras principales
materias primas d exportación (1974 - 1975). Baste mencionar que el estaño llegó a
cotizarse en casi 8 dólares po libra fina a mediados de los años setenta (record histórico
que nunca más se volvió a repetir) el gas llegó a venderse a 4,4 dólares por millar de pies
cúbicos (1976). Era además el tiempo dc los créditos internacionales fáciles, frescos y
rápidamente disponibles. Esta situación impulsé el crecimiento económico del país que,
sin embargo, no fue canalizado hacia un crecimiento integral y estructural, lo que
determinó un «boom» artificial de consecuencias negativas con el paso de los años.
Este fue un período en el que se gobernó con la aprobación de varios decretos-ley que
sustituían las leyes aprobadas por el poder legislativo, clausurado en Bolivia desde 1969.
Se aprobó una ley de inversiones que varios sectores calificaron como entreguista, de un
tenor sumamente liberal para fomentar la presencia de inversionistas extranjeros. Se logró
una afluencia sin precedentes en la historia de créditos del más diverso tipo, lo que
permitió llevar a cabo varios proyectos de desarrollo y comunicaciones. La consecuencia a
mediano plazo fue el endeudamiento del país que pasó de una deuda de 460 millones de
US$ en 1971 a casi 3.000 millones de US$ entre los préstamos recibidos y deuda
contratada en 1978. Un número apreciable de los créditos fueron canalizados en
inversiones no productivas que frecuentemente se malversaron.
La industria de la construcción fue una de las más beneficiadas en estos años. Por un lado
se produjo un crecimiento multiplicado de la vivienda de propiedad horizontal en La Paz, el
más alto en la historia de la ciudad. Santa Cruz registró un crecimiento proporcional
superior Se desarrollaron importantes proyectos camineros, como la vinculación del norte
de La Paz y el Beni, la autopista La Paz-El Alto que fue denunciada por su astronómico
costo (3.5 millones de US$ el Km.). Se renovó el equipo ferroviario nacional y se impulsó
el crecimiento del LAB a través de la adquisición de varios jets y la ampliación de su
servicio internacional. Banzer modernizó la flota de jets del LAB adquiriendo un 727-100,
dos 727-200 de gran autonomía y un 707 de carga. ENTEL también entró en un proceso
de modernización y vinculación con la era del satélite al instalarse la primera estación
terrena del país, la estación Tiahuanacu en La Paz (1978).
Boeing 727 CP-861 del Lloyd Aéreo Boliviano con el que se inició la era del jet en la
aviación civil boliviana en 1970.
Por varios años se había mantenido una paridad artificial que ponía en riesgo a la
economía. El rezago cambiario obligó a una medida radical que trajo como respuesta un
intenso movimiento popular de protesta, manifestaciones, etc., con los consiguientes
enfrentamientos.
En 1974 un paquete de nuevos correctivos económicos volvió a generar protesta popular.
Los acontecimientos más graves se vivieron en el valle de Cochabamba, el ejército
movilizó efectivos y tanques para controlar la situación, En las localidades de Tolata y
Epizana las manifestaciones fueron respondidas con disparos, dejando un saldo de
algunos muertos y varios heridos. Estos hechos fueron bautizados como «masacre de
Tolata.
EL GAS
EI caso del petróleo es ilustrativo. Bolivia había pasado (años 50) a ser país exportador en
pequeñísima escala. En este gobierno llegó al máximo de su capacidad (1975) con una
exportación de 2.105.302 1113. A partir de entonces se produjo una reducción hasta
prácticamente cesar de exportar y mantener años después un difícil abastecimiento del
mercado interno. YPFB, tradicionalmente una de las pocas empresas estatales solventes,
entró en una espiral preocupante de pérdidas. Hay que mencionar también el nuevo
código de Hidrocarburos que permitió a más de 15 empresas extranjeras iniciar trabajos
de prospección en Bolivia con el sistema de contratos de operación y explotación con
YPFB. La producción petrolífera del período 1971-1978 fue, como dijimos, la mayor de la
historia de YPFB. En 1971 se produjeron casi 40.000 barriles día, en 1973 se tocó el pico
más alto con una producción de casi 48.000 barriles, para terminar en 1978 con una
producción diaria de alrededor de 28.000. Estas cifras incluyen la producción combinada
de YPFB y las empresas contratistas. En los años posteriores el país pudo abastecer su
consumo y lograr incrementos que mantuvieran equilibrada la curva ascendente de
consumo con la de producción, pero no se pudo pensar más en la exportación de petróleo
crudo. Pero lo grave de esa etapa fueron las falsas expectativas que se generaron en el
país y las inversiones desmesuradas en refinerías e instalaciones que se
sobredimensionaron.
En ese contexto los minerales fueron cada vez menos importantes como rubro de
exportación, hasta la crisis radical de 1985 que convirtió al gas en nuestro primer ingreso
de exportación. Esto fue posible porque en la década de los años setenta se confirmó que
Bolivia es un país con reservas de gas mucho más que de petróleo. Nuestro subsuelo
poseía varios trillones de de gas que, racionalmente consumidos internamente y sobre
todo exportados, significan una importante y creciente fuente de ingresos.
La inicial ilusión de ser productores de petróleo para la exportación fue sustituida por la
realidad de ser una nación con buenas reservas de gas, que colocaron a Bolivia en
posición ventajosa, sobre todo por el alto nivel de consumo de nuestros dos vecinos más
grandes, Brasil y la Argentina. La producción boliviana de gas natural creció notablemente
de 1964 (algo tenemos de 20 millones de Ples cúbicos día) a 1971 (150 millones de pies
cúbicos día). Esto permitió la suscripción de un importante convenio de venta de gas a la
Argentina que Barrientos firmó con su colega Juan Carlos Onganía el 2 de julio de 1968,
que establecía un compromiso de venta por veinte años al precio de 0,225 dólares por
millar de pies cúbicos y un volumen de 141 millones de Ples cúbicos día. En su mejor
momento (1976) Bolivia recibió un pago de 4,46 dólares por millar de Ples cúbicos
exportados, luego el precio fue declinando hasta que en los años noventa cayó por debajo
de un dólar por MPC. Bolivia inició la exportación el 29 de abril de 1972 en el gobierno de
Banzer una ve: que se terminó la construcción del gasoducto que nos unía con Buenos
Aires.
La importancia del gas en la economía nacional fue creciendo hasta superar el 50 % del
total de nuestros ingresos por exportaciones en la primera mitad de los años ochenta. En
ese momento el país recibió más divisas por el gas que por nuestros minerales. Esa
situación volvió a cambiar y el gas declinó en importancia, siempre en relación estrecha
con el precio internacional, tanto del gas como de los minerales. Pero desde los años
setenta se convirtió en un componente esencial de nuestra economía exportadora. En
1972 producíamos 195 millones de pies3 día, en 1978 llegamos a una producción de 225
millones de pies3 día.
La inyección económica que representó la venta de gas a la Argentina llevó al gobierno a
iniciar una negociación con el Brasil un consumidor potencial mucho mayor que nuestro
vecino del sur. El 22 de mayo de 1974 los presidentes Hugo Banzer de Bolivia y Ernesto
Geisel del Brasil, suscribieron un acuerdo de cooperación y complementación en
Cochabamba. Lo más importante del documento era el compromiso de Bolivia de vender
al Brasil 240 millones de pies3 día por veinte años, a cambio de la instalación de un
complejo industrial en el sudeste del país con una planta siderúrgica, una petroquímica y
una fábrica de cemento. Pero tan ambicioso proyecto se frustró, la razón fundamental fue
una cerril oposición interna liderizada por los grupos más recalcitrantes de izquierda
nacional que acusaron a Banzer de entreguista, sosteniendo que el gas boliviano debía
usarse íntegramente en el desarrollo interno. El Presidente, a pesar de su poder casi
omnímodo, no se atrevió a insistir (aunque en 1977 volvió a firmar un acuerdo ratificatorio
con Geisel). Probablemente las tensiones internas del gobierno fueron obstáculos
mayores que la propia oposición. Sectores políticos y militares del gobierno estaban
fuertemente influidos por las ideas nacionalistas de los años cincuenta. Tampoco ayudó la
subida espectacular de los precios del petróleo, que desanimaron al Brasil de empeñarse
en la concreción del convenio. El hecho es que esa frustrada venta fue uno de los
mayores fracasos del gobierno de Banzer en su gestión y postergó las posibilidades reales
de un gr n crecimiento económico del país.
El comienzo de la integración del oriente, lograda hacia 1954 con el camino Cochabamba-
Santa Cruz, se impulsó en gran medida en este período. Como hemos visto Santa Cruz
pasó de 42.000 habitantes en 1950 a más de 350.000 en 1980. Un crédito de más de 60
millones de US$ se destinó al algodón, el resultado fue un fracaso por el uso inadecuado y
muchas veces deshonesto de los créditos. Pero, a pesar de estos elementos negativos,
hubo otros aspectos. Se incrementó la vivienda y se produjo una intensificación de la
ganadería. Las regalías departamentales a través del gas y el petróleo fueron
multiplicadas debido a los precios favorables, En conjunto se produjo un intenso
movimiento económico que convirtió a Santa Cru: en un polo de desarrollo de contrapeso
con La Paz, pero en ambos casos en desmedro del resto de la nación. Poco a poco la
región fue generando un crecimiento económico notable, que terminó por colocarla como
la primera del país al final del siglo, El crecimiento cruceño superó tanto demográfica como
económicamente tasas del 7 % a lo largo de más de un década de modo sostenidos El
crecimiento de la agroindustria y la ganadería fueron, junto a los hidrocarburos, los
factores más importantes de este despegue que colocó a Santa Cruz a la vanguardia
económica del país y que arrastró procesos migratorias que cambiaron poco a poco la
proporción de población en la zona andina (80 % en 1950) y en la zona de los llanos. Al
final de siglo más del 35 % de la población vivía por debajo de los 2.500 mts.
Tras la gravedad de acontecimientos, como el asesinato del CIII. Andrés Selich ex-ministro
del Interior (1971-1972), que fue brutalmente golpeado por funcionarios de seguridad del
gobierno hasta matarlo, forzaron la renuncia del ministro Alfredo Arce Carpio. Paz
Estenssoro fue exiliado del país ante su creciente distanciamiento y críticas al régimen, se
produjeron además dos intentos de golpe de estado con la participación de militares
institucionalistas y el MIR, y el deterioro del esquema del FPN que se hizo muy evidente,
Por eso Banzer determinó anular la vigencia de los partidos y proclamó el receso total de
actividad política y sindical y comenzó un período dictatorial abierto con respaldo de las
FF.AA., a partir del 9 de noviembre de 1974, lo que implicó un evidente endurecimiento del
gobierno. Esto le permitió gobernar con más comodidad, sin la presión de los grupos
civiles representados en los partidos que lo apoyaron hasta entonces. El programa original
de esta fase de la dictadura era gobernar hasta 1980 y luego llamar a elecciones. No pudo
ser, la presión interna y externa y algunos asuntos emocionales que afectaron al
Presidente adelantaron forzadamente la fecha de convocatoria electoral.
Durante 1976 la opinión pública se vio estremecida por el asesinato del exiliado ex-
presidente Torres en Buenos Aires, que fue secuestrado, acribillado sin piedad y
abandonado bajo un puente en la provincia de Buenos Aires. En mayo había sido
asesinado el general Joaquín Zenteno Anaya en París mientras se desempeñaba como
embajador en Francia. Ambos actos terroristas nunca fueron esclarecidos. Los sectores de
oposición al gobierno atribuyeron ambos asesinatos a la mano del gobierno en
combinación con la dictadura militar argentina. En los hechos, durante esos años, se
desarrolló un sistema llamado «Operación Cóndor» que vinculó a las dictaduras del cono
sur (Bolivia, Chile, Argentina, Uruguay, Paraguay y Brasil) que no sólo era una comunidad
de inteligencia, sino que actuó en la detención, tortura y aún muerte de ciudadanos de la
región que actuaban en grupos insurgentes y clandestinos con el objetivo de derrocar a los
militares. Con frecuencia fueron desaparecidas personas inocentes.
EL ABRAZO DE CHARAÑA
En la primera mitad de 1976 se habló de que el proceso implicaría un canje territorial para
compensar el espacio que cedería Chile y se dejó entrever que el gobierno boliviano
estaba dispuesto a aceptar esa opción. La idea fue rotundamente rechazada por la opinión
pública b liviana y en 1977, oficialmente, fue desechada por el Presidente boliviano.
El proceso de diálogo desarrollado entre Chile y Bolivia desde fines de 1976 estaba ya
condenado por la nota chilena al Perú. Tras algunos intentos estériles en meses
posteriores, el 17 de marzo de 1978 Bolivia rompió relaciones diplomáticas con Chile.
Esta fue sin duda la negociación más importante que se llevó a cabo entre los dos países,
y el compromiso más explícito de Chile para lograr una solución a nuestra mediterraneidad
forzada, frustrado una vez más por el propio gobierno chileno.
En 1977 Banzer convocó a elecciones, casi tres años antes de su propio cronograma. La
evidencia de que la bonanza económica se terminaba y abría paso a una severa crisis y la
presión de la nueva administración estadounidense presidida por Jimmy Carter y
obsesionada por el respeto a los derechos humanos, impulsaron al gobierno a tornar la
decisión, Pero el verdadero factor de inflexión surgió del seno del país. Una huelga de
hambre iniciada por cuatro mujeres mineras (entre ellas la célebre Domitila Chungara) que
en pocos días se hizo masiva, forzó a Banzer a conceder una amnistía irrestricta. La
debilidad del régimen se puso en evidencia, el agotamiento salió a la luz a la par que se
debilitaban las barreras de la censura y las restricciones político-sindicales que el país
había sufrido por más de un lustro.
Piquete de huelga de hambre en La Paz: Luis Espinal (1º izq.), Xavier Albó (3º) y
Domitila Chungara (6º) (Anónimo 1977)
El 9 de julio de 1978 se realizaron elecciones. Ganó el candidato oficial Gral. Juan Pereda
de la (UNP) (985.140 votos, 51%), obtuvo el segundo lugar Hernán Siles Zuazo de la
Unidad Democrática y Popular (484.383 votos, 25%) y el tercero Víctor Paz Estenssoro del
MNR (213.662 votos, 11 %). Las elecciones fueron anuladas al denunciarse y
comprobarse un gigantesco fraude. El gobierno no calculó el impresionante margen de
votos de la UDP que representaban el apoyo a una propuesta de izquierda y una
respuesta nacional en contra de la dictadura v la larga saga de gobiernos militares. El
tamaño del engaño fue tal que el número de votos emitidos superó en un 3,49% al número
de ciudadanos inscritos para votar. Se desató la crisis. Pereda y su gente no estuvieron
dispuestos a aceptar la pérdida del poder. El delfín acabó por volcarle la espalda a su
superior y mentor y decidió dar el golpe. El 21 de julio el Gral. Banzer abandonó el palacio
en medio de lágrimas, sin tener la satisfacción de entregar el mando al ganador en las
urnas.
INESTABILIDAD POLITICA (1978 – 1982)
EL MOMENTO HISTÓRICO
Bolivia, igual que el resto de los países latinoamericanos (unos antes que otros) se vio
ante la disyuntiva del cambio. La dictadura militar había agotado sus postulados, la
sociedad estaba cansada de tres lustros de gobiernos militares de diferente cuño y
esperaba ansiosa la apertura total de las compuertas de la democracia. Pero ocurría que
el modelo del Estado del 52 parecía mantener todavía su vigor. El capitalismo de Estado
había sido seguido al pie de la letra por los militares y probablemente Banzer había sido el
Presidente que más empresas estatales creó desde las históricas medidas de 1952. Los
militares habían organizado a su vez mecanismos internos que los tenían convencidos que
su rol histórico era planificar el Estado, gobernarlo y garantizar su futuro (se tomaban
absolutamente en serio aquello de que eran "la institución tutelar de la patria"). Esa lógica
tardó varios años en romperse, además de la evidencia de que el poder traía consigo
prebendas y ventajas personales que derivaban en una marcada corrupción.
La sociedad civil por su parte seguía debatiéndose en la antinomia que había marcado la
dramática ruptura nacional en 1971. Las posiciones de izquierda marxista parecían más
vigorosas que nunca, en tanto los defensores de ideas económicas liberales parecían
arrinconados y solos en los estamentos empresariales más poderosos que, por ello
mismo, ejercían fuerte presión. Las profundas tensiones ideológicas alentadas por una
retórica incendiaria de ambos bandos, no contribuían a un clima de diálogo. A este
contexto se sumaba la lógica avidez del pueblo por gozar de los derechos del ejercicio de
la libertad que habían sido suprimidos por tantos años. Libertad de pensar, expresarse en
privado y en público, de asociarse, de apoyar a partidos políticos de toda tendencia y
expresarse a través de sus organizaciones sindicales y gremiales. Esta compleja realidad
sumada a la falta de práctica política y democrática, abrió las puertas a una etapa
dramática y desquiciada como probablemente no se vivió en Bolivia en toda nuestra
historia republicana.
La caída del general Banzer abrió el período de mayor inestabilidad política de la historia
de Bolivia. Por un lapso de cuatro años (desde el 21 de julio de 1978 hasta el IO de
octubre de 1982), el país se vio sacudido por dislocamientos violentos de su estabilidad y
su continuidad política. En ese período contamos nueve gobiernos (ocho presidentes y
una junta militar). De ellos siete fueron de facto y sólo dos constitucionales, además cuatro
de esos nueve se cuentan entre los diez más breves de toda nuestra historia. Eso implica
un promedio de un gobierno cada cinco meses y medio. Nunca antes Bolivia había sido
sacudida por tal índice de inestabilidad.
Juan Pereda nació en La Paz el 17 de junio de 1931. Se graduó como subteniente piloto
en el colegio militar de aviación, Siguió estudios de especialización en Italia y en la
Argentina en escuelas de estado mayor. Fue comandante del colegio militar de aviación y
comandante en jefe de la Fuerza Aérea, Formó parte del gobierno de Hugo Banzer corno
ministro de Industria y Comercio y luego como ministro del Interior. Fue candidato a la
presidencia de la Republica en 1978 en elecciones nacionales que fueron anuladas al
comprobarse un gigantesco fraude en su favor. Dos días después de la anulación organizó
un golpe de estado contra el Gral. Banzer a quien derrocó (21 de julio). Ejerció la
Presidencia por algo más de tres meses cuando contaba con 47 años. En noviembre de
1978 fue derrocado por el Gral. Padilla. Desde entonces se retiró de la vida pública. Se vio
afectado por desórdenes de comportamiento en los últimos años de su vida. Murió en
santa Cruz el 25 de noviembre de 2012 a los 81 años.
Pereda llegó al poder con escaso sustento político e incluso militar. Fue apoyado por
algunas fracciones que habían crecido en el gobierno de Hugo Banzer y en particular por
una organización creada para respaldarlo en tiempo electoral, que fue integrada por
jóvenes próximos al Banzerismo bajo el denominativo de CUN (Consejo de Unidad
Nacional), una de cuyas figuras generacionales más destacadas era Ronald MacLean.
La tensión política creció en pocas semanas. Los partidos y frentes más importantes
(UDP, MNRA y PS-I) expresaron permanentemente su deseo de que la apertura
democrática pasara de las palabras a la acción. En noviembre, la UDP anunció una gran
concentración en La Paz que el gobierno intentó prohibir. La concentración nunca se
realizó; en la fecha prevista (24 de noviembre) se produjo un incruento golpe de estado
que desplazó a Pereda sin resistencia alguna por parte de éste o sus seguidores. De ese
modo llegaba al gobierno una figura militar casi totalmente desconocida, el general David
Padilla Arancibia.
El primer decreto del nuevo gobierno fue la convocatoria a elecciones para el 1º de junio
de 1979. La decisión bajó automáticamente la tensión social y política y permitió al
gobierno una administración relativamente normal de los asuntos de Estado.
El país paralizó actividades por cinco minutos y en memoria del infausto suceso se
escucharon campanas y sirenas en todo el territorio. Bolivia llegaba a esta fecha en medio
de una aguda crisis política y en la antesala de la peor crisis económica de su historia en
tiempo de paz. Su debilidad en relación a Chile (desde el punto de vista de su crecimiento
demográfico, poder económico y militar) era mayor que en 1879, y su política internacional
para recuperar el mar carecía de la coherencia necesaria, La amarga experiencia del
«Abrazo de Charaña- quedaba como lección para el futuro en la búsqueda de reparar una
usurpación que hiere la consecuencia latinoamericana.
Hay que decir sin embargo, que sostener coherencia diplomática para Chile siempre fue
un ejercicio muy sencillo, desde la cómoda posición del país vencedor que usurpo, detentó
y se benefició económicamente de los territorios arrebatados, lo único que Chile que decir
a lo largo de Cien años es NO. Y lo dijo siempre sin el menor escrúpulo.
La posición del Gral. Banzer tras la apertura democrática era muy delicada. Fuertes
corrientes populares se estrellaban contra su pasado gobierno y la izquierda, a través del
PS-I, anunciaba la instalación de un juicio de responsabilidades contra su gestión nada
más iniciarse las actividades del Congreso que se elegiría en julio de 1979. A los
colaboradores del ex-presidente se les ocurrió que la única respuesta posible era la
creación de un partido político que le sirviera de paraguas en el mismo Parlamento. Así, el
23 de marzo de 1979 en el cine Esmeralda de La Paz se creó Acción Democrática
Nacionalista (ADN).
El proceso electoral tuvo esta vez un carácter de mayor libertad dada la neutralidad del
poder Ejecutivo. El clima electoral tenso se caracterizó por el encono y las acusaciones
entre las diversas candidaturas. Además de los nombres centrales de Siles (UDP) y Paz
(MNR) se perfilaron dos contendientes de peso, el primero Hugo Banzer que surgía a la
vida política después de su larga presidencia con un nuevo partido fundado en enero de
1979, Acción Democrática Nacionalista (ADN) de tendencia conservadora de derecha. El
otro candidato era Marcelo Quiroga Santa Cruz del Partido Socialista 1 (PS-I) que había
obtenido un pálido resultado en 1978 pero que ahora subía en el favor electoral. El
resultado final (1 0 de julio de 1979) fue el de un virtual empate. Hernán Siles obtuvo
528.696 votos (35.99%) contra 527.184 (35,89%) de Víctor Paz. Banzer logró 218.587,
logrando un sorpresivo y notable tercer lugar y Quiroga 70.765, nueve veces más que en
1978. Las acusaciones de fraude contra el MNR surgieron después de la etapa de
recuento de votos, en la que se anularon centenares de mesas por cualquier detalle, bajo
el amparo de una ley electoral que lo permitía.
El virtual empate entre Siles y Paz, dada la mínima diferencia de 1512 votos entre el
primero y el segundo abrió las puertas para una batalla intransigente en el legislativo. Al
no obtener la mayoría absoluta ningún candidato, la decisión final le tocó al Parlamento
que, tras siete votaciones entre el 4 y el 5 de agosto, no pudo lograr la mayoría para
ningún candidato (a Paz le faltaron cuatro votos que no pudo obtener a pesar de su
mayoría congresal). Fueron dos jomadas de alta tensión y con la sombra del golpe
rondando sobre los parlamentarios. Las posturas eran tan intransigentes que en las siete
votaciones los 25 parlamentarios andinistas votaron en blanco y los 5 del PS-I anularon
sus votos, En esos días era impensable un acercamiento del MNR o UDP a cualquiera de
esas dos fuerzas para lograr una solución al entrabamiento y un proyecto de
gobernabilidad. Esta experiencia traumática que fue saludada por dos sangrientos golpes
de estado en meses ulteriores, y la que vivió la UDP, condujeron por fin a los políticos a
soluciones razonables y de diálogo, inauguradas en 1985 con el pacto por la democracia
firmado entre Paz y Banzer.
Fue diputado y senador en varias oportunidades. Es autor entre otros libros de ensayo del
célebre Manifiesto a los ciudadanos de Ayopaya (1946) considerado fundamental para
explicar el programa del MNR. Embajador en Francia, Venezuela y Naciones Unidas. Fue
ministro Secretario (Villarroel), Relaciones Exteriores (Paz, primer gobierno, Siles, primer
gobierno v Barrientos, tercer gobierno) y Gobierno (Siles, primer gobierno).
En 1960 rompió con el MNR y fundó el Partido Revolucionario Auténtico del que fue
candidato presidencial, obteniendo el segundo lugar en las elecciones de ese año. En
1964 participó en el golpe que derrocó a Paz Estenssoro. En 1978 fue candidato
vicepresidencial de Paz. En 1979, en su calidad de Presidente del senado, fue designado
por el congreso como Presidente constitucional interino de la República cuando contaba
con 67 años. Menos de tres meses después fue derrocado por el Cnl. Natusch. En 1980
terció en las elecciones como candidato presidencial. Salió exiliado del país tras el golpe
de García Meza. A partir de 1982 y durante el gobierno de la UDP fue embajador en
Venezuela. Reintegrado plenamente al MNR, en 1989, fue candidato vicepresidencial de
Gonzalo Sánchez de Lozada. La fórmula ganó las elecciones pero no logró el poder en la
votación congresal. Retirado de la actividad política, murió en La Paz el 20 de junio de
1996 a los 84 años.
La gestión del Dr. Guevara se encuentra entre las más breves de nuestra historia, lo cual
le impidió desarrollar un trabajo administrativo importante. Desde el primer momento el
Presidente expresó que en un año era imposible establecer medidas económicas y llevar
adelante el proceso electoral que le fue encomendado por el Congreso. Esta posición fue
interpretada por algunos sectores políticos y parlamentarios como un deseo prorroguista
del primer mandatario. A la distancia parece evidente que se hacían necesarios ajustes
económicos de fondo en un momento en que la crisis todavía no se había
desencadenado. Por otra parte, en una postura que retrata muy bien la época de enconos
e inflexibilidad que se vivía, el congreso que lo había designado no apoyó al gobierno y lo
dejó huérfano. Por esa razón a Guevara no le quedó más remedio que conformar su
gabinete con ministros independientes, lo que le restó fuerza política y capacidad
negociadora. En octubre se produjo el primer amago de golpe con un levantamiento en
Trinidad que no era más que un globo de ensayo. El Presidente se puso sobre aviso y,
advertido de un movimiento subversivo en marcha, decidió a fines de ese mismo mes el
relevo de algunos mandos militares claves. Esta decisión precipitó los acontecimientos y
provocaron el golpe de estado. Guevara optó por la transparencia y la inflexibilidad en sus
decisiones, a pesar de su dramática debilidad.
Nada más comenzar la legislatura de 1979 (la primera después de diez años), el líder del
PS-I Marcelo Quiroga Santa Cruz inició un juicio contra el ex-presidente Banzer tanto por
delitos económicos como por violación de libertades esenciales de los bolivianos. En una
exposición de casi doce horas Quiroga Santa Cruz ratificó sus brillantes condiciones como
parlamentario y estableció una densa acusación contra lo que a su juicio no podía
calificarse sino como una dictadura. La defensa del acusado insistió en que lo que se
pretendía en realidad era juzgar a las Fuerzas Armadas y no a Banzer, generando una
gran susceptibilidad militar que le daba argumentos a las FF.AA. proclives a un nuevo
golpe de estado. La interrupción del proceso democrático provocó que el juicio fuese
archivado primero y olvidado después.
El rasgo más destacado del gobierno de Guevara fue, sin duda, el relativo a la cuestión
marítima, Por primera vez la Asamblea General de la OEA se realizó en nuestro país, a
ella como es tradicional asistieron los ministros de Relaciones Exteriores de todas las
naciones americanas.
Oficial del ejército delante de un tanque que bloquea el ingreso al Palacio Legislativo
(Román Cordero, 1979).
Llegó a Bolivia incluso el secretario de Estado de los Estados Unidos Cyrus Vance. El
objetivo fundamental de Bolivia fue el de conseguir respaldo continental a nuestra
reivindicación marítima. Las gestiones del canciller Gustavo Fernández culminaron en la
resolución 426 del organismo multilateral que expresaba en su parte más saliente: "Que
es de interés hemisférico permanente encontrar una solución equitativa por la cual Bolivia
obtenga un acceso soberano y útil al Océano Pacífico". Nunca antes la OEA había
expresado un criterio de esta naturaleza en relación a la causa boliviana que, en teoría,
obligaba a Chile a un cambio de postura y permitía un mayor margen de juego negociador
para Bolivia. El éxito, sin embargo, fue empañado por el golpe militar que estalló en la
madrugada posterior a la clausura de la Asamblea cuando aún muchos cancilleres se
hallaban en La Paz. Esto provocó el espectáculo lamentable de los ministros extranjeros,
llegando al aeropuerto escoltados por tanques del ejército. Chile por su parte celebró un
golpe que le permitió al representante chileno ante la OEA decir que Bolivia no era un
interlocutor válido para tratar ni el tema del mar ni tema alguno.
Mediante un golpe de estado asumió la presidencia que ejerció apenas por 16 días.
Contaba entonces con 46 años. En 1981 protagonizó un golpe de estado contra el Gral.
García Meza, obligando a este a renunciar a la presidencia. Tras una larga y penosa
enfermedad murió en Santa Cruz el 23 de novimbre de 1994 a los 61 años
El Cnl. Natusch protagonizó el tercer gobierno más corto de nuestra historia después del
de Pedro Blanco (seis días) y el de Eusebio Guilarte (diez días). Durante su efímera
gestión por supuesto no pudo desarrollar labor alguna.
El golpe de estado del 10 de noviembre fue gestado por sectores militares en alianza con
algunos parlamentarios del MNR y del IVfNRl (partido integrante de la UDP). Las cabezas
militares además de Natusch fueron el Gral. Edén Castillo Galarza, el Gral. Luis García
Meza, el Cnl. Carlos Mena Burgos, el Gral. Oscar Larraín, el Gral. Jaime Niño de Guzmán
y el Contralmirante \Válter Nuñez. Entre los civiles del MNR Guillermo Bedregal y José
Fellman Velarde y del NINRI Edil y Willy Sandóval Morón y Abel Ayoroa Argandoña.
El presidente Walter Guevara Arze acompañado por los ministros Jorge O`Connor,
Guido Hinojosa y Ana Romero en una conferencia de prensa clandestina tras el golpe
de noviembre de 1979 (Lucio Flores).
El golpe fue una de las mayores expresiones de irracionalidad de nuestra historia, no sólo
porque interrumpió brutalmente el proceso democrático, sino porque se hizo a pocas horas
de la clausura de la Asamblea de la OEA y dejó un resultado sangriento. La
argumentación para justificarlo fue la supuesta intención prorroguista del Presidente
Guevara y la idea de que una propuesta revolucionaria que emparentara al nuevo
gobierno con el nacionalismo revolucionario de 1952 iba a lograr respaldo popular. Los
golpistas que tuvieron que adelantar el movimiento para evitar la destitución de los
cabecillas militares, esperaban que el MNR y el MNRI apoyaran el golpe y forzaran al
parlamento a darle el visto bueno. Se especuló mucho sobre la participación de Paz
Estenssoro en este movimiento. Nunca se pudo probar, a pesar de que dos de sus más
estrechos colaboradores fueron las cabezas civiles más visibles de los golpistas. Paz
desaprobó el golpe una vez consumado y algunos de sus parlamentarios como Sánchez
de Lozada fueron de los más enérgicos opositores al movimiento subversivo.
La repulsa al golpe fue total. La COB decretó huelga general indefinida. La Confederación
de Campesinos (CSUTCB) decretó bloqueo de caminos que se realizó en toda la nación.
El congreso se reunió de urgencia y comenzó una larga y tensa negociación que incluyó a
la COB y a las Fuerzas Armadas.
Tras 16 días se llegó a un acuerdo. La COB se retiró de las negociaciones y las FF.AA.
aceptaron la renuncia de Natusch a condición de que Guevara no volviera al gobierno (él y
su gabinete mantuvieron todos esos días al gobierno legítimo en la clandestinidad). De
ese modo el congreso designó a Lidia Gueiler, Presidenta de la cámara de diputados,
como Presidenta constitucional interina.
Lidia Gueiler nació en Cochabamba el 28 de agosto de 1921. Desde muy joven militó en el
MNR, partido del que fue destacada dirigente femenina. Organizó en 1951 una huelga de
hambre en protesta por la anulación de las elecciones que había ganado Paz Estenssoro.
Fue cónsul en Alemania Federal y representante de Bolivia ante la Comisión
Interamericana de Mujeres. Fue diputada en las legislaturas 1956-1960 y 1960-1964. En
1963 se unió al PRIN de Juan Lechín y militó en ese partido hasta los años setenta en que
se separó con una fracción propia y volvió a aliarse con Paz Estenssoro. Diputada de la
Alianza del MNR en 1979 fue elegida presidenta de la cámara de diputados y en esta
condición Presidenta constitucional interina de la República cuando tenía 58 años.
Derrocada por García Meza fue exiliada del país. En 1982 fue nombrada embajadora en
Colombia. En 1989 se unió a la Nueva Mayoría del MIR y fue elegida senadora y
embajadora en Venezuela. Murió en La Paz el 9 de mayo de 2011.
CRISIS GOBIERNO-FF.AA.
A los pocos días de ascender al mando la Presidenta tuvo que enfrentarse al grupo «duro»
de las FF.AA. encabezado por Luis García Meza quien exigió la destitución del
comandante del ejército Gral. Rocha. Tras tres días de acuartelamiento, el gobierno cedió
a las presiones. En los hechos fue un mini-golpe que demostró quien detentaba realmente
el poder. García Meza, violando las propias leyes militares, volvió a ocupar el cargo de
comandante del ejército que había detentado en el golpe de 1979. El nombramiento se
produjo el 18 de abril.
En mayo el jefe de seguridad de la guardia presidencial Tte. Cnl. Terrazas intentó agredir
a la Presidenta en la propia residencia presidencial. La prepotencia había llegado a
oficiales dc menor rango que desafiaban así el poder civil que en los hechos estaba
secuestrado por las armas de las FF.AA. a cuyos mandos habían llegado jefes sin el
menor pudor y el menor interés por respetar la constitución.
Durante todo el gobierno constitucional el Gral. García Meza amenazó al proceso, a los
viejos líderes políticos, a la izquierda y a sus cabezas más prestigiosas como Marcelo
Quiroga a quien amenazó públicamente.
LA VIOLENCIA DESESTABILIZADORA
Durante la primera mitad de 1980 grupos y personas allegadas a los militares golpistas,
iniciaron una ola de violencia que cobró varias víctimas. El 22 de marzo fue brutalmente
asesinado después de ser torturado el sacerdote, periodista y crítico de cine Luis Espinal,
una de las personalidades más respetadas de la cultura boliviana. Casi 70.000 personas
asistieron a su entierro en señal de repudio al crimen y a los golpistas.
El 2 de junio una avioneta que trasladaba al candidato vicepresidencial Jaime Paz Zamora
y cuatro dirigentes de la UDP, se precipitó a tierra en circunstancias no esclarecidas.
Todos los ocupantes murieron a excepción de Paz Zamora que sufrió graves quemaduras.
La avioneta siniestrada pertenecía a una compañía de taxis aéreas de Luis Arce Gómez.
Dos días antes de las elecciones una manifestación de la UDP que marchaba por el Prado
de La Pa: fue atacada por terroristas que lanzaron una granada de mano; el saldo fue de
dos muertos y trece heridos. El mensaje estaba claro, las posiciones progresistas de
personas y partidos no eran toleradas por los militares más reaccionarios y los grupos
civiles que los secundaban.
Una vez más el Congreso tenía que decidir el ganador al no haber obtenido ningún
candidato mayoría absoluta. La realidad era, sin embargo, dramática. El país entero sabía
que el golpe de estado llegaría, lo único que quedaba como interrogante era cuando. Los
militares se jactaban de su poder y de que interrumpirían el proceso en cualquier
momento, lo hacían en privado y en público. El gobierno estaba absolutamente inerme
para evitar esa situación y simplemente apostaba a durar lo más que le fuera posible. En
esas condiciones, el 17 de julio, 18 días después de las elecciones, se produjo el golpe de
García Meza.
Luis García Meza nació en La Paz el 8 de agosto de 1929. Se graduó en el colegio militar
de ejército. Fue profesor de la escuela de comando y estado mayor. Comandante de la
escuela de armas de la VI división del colegio militar y del ejército. Distanciado del
gobierno Banzer estuvo durante esa gestión en cargos en fronteras ya como general.
Participó directamente en el golpe del I e de noviembre de 1979. Fue el cabecilla del golpe
del 17 de julio de 1980. Se hizo del poder cuando contaba con 50 años. Se vio obligado a
renunciar por presión militar en agosto de 1981. Vivió en la Argentina entre 1982 y 1986.
En abril de 1986 el Congreso sustanció un juicio de responsabilidades contra él y su
gobierno en la Corte Suprema de Sucre a donde se trasladó para afrontarlo. En 1988,
acusado del robo de los diarios del Ché, abandonó Sucre y fue declarado prófugo. El juicio
continuó en su ausencia y en 1993 fue declarado culpable y condenado a 30 años de
cárcel sin derecho a indulto. En marzo de 1994 fue apresado en Brasil donde vivía con
identidad falsa. El 15 de marzo de 1995 fue extraditado a Bolivia y entró a la prisión de
Chonchocoro (La Paz) donde comenzó a cumplir su condena.
Quiroga Santa Cruz representó uno de los liderazgos más lúcidos y honestos de la política
boliviana de la segunda mitad de siglo, Su excepcional inteligencia y sus notables dotes de
orador se combinaron con una particular mística que lo convirtió en uno de los símbolos de
la izquierda boliviana.
Marcelo Quiroga Santa Cruz
Nació en Cochabamba en 1931 Originalmente estuvo próximo a FSB, fue en una fórmula
de ese partido que accedió al parlamento durante el gobierno de Barrientos. Su
interpelación por la masacre de San Juan le costó la cárcel. Fue ministro de Minas y
Petróleo del gobierno de Ovando desde donde la nacionalización de la Gulf. En 1971
fundó el Partido Socialista. Fue exiliado por Banzer. Ejerció la cátedra universitaria en
México. A su retorno como jefe del escindido Partido Socialista 1, fue candidato a la
presidencia en tres oportunidades (1978-1979 y 1980). Obtuvo un notable cuarto lugar con
más de 100.000 votos en 1980. En 1979 inició un juicio de responsabilidades contra el ex-
presidente Hugo Banzer.
Ejerció el periodismo en los años sesenta y setenta. Fundó el efímero periódico “EI Sol" y
la revista "Clarín Internacional". Fue columnista en la prensa mexicana, sus columnas más
importantes fueron recopiladas en el libro Hablemos de los que mueren. Incursionó en el
cine con un cortometraje El combate (1959). Pero su obra de creación más destacada se
dio en la narración. Los deshabitados (1959) es ya un clásico de la literatura moderna de
Bolivia. Con carácter póstumo se publicó su segunda novela Otra vez marzo. Sus escritos
políticos más importantes son El saqueo de Bolivia (1972) y Marcelo Quiroga Santa Cruz.
Oleocracia o patria (1976).
Es sin duda uno de los gobiernos más nefastos que ha tenido el país en su historia.
Protagonizado por la violencia y la intolerancia, fue un ejemplo de abuso atrabiliario e
irresponsable del poder. Durante este gobierno se hicieron diversos negociados, se
cortaron radicalmente las libertades ciudadanas y se estableció un sistema de
amedrentamiento y abuso contra la población, en el contexto de derechos políticos y
sindicales suspendidos.
El alto mando militar y el gabinete estaban conformados entre otros por: Gral. Waldo
Bernal Pereira (Comandante de la Fuerza Aérea), Ramiro Terrazas y Oscar Pammo
(sucesivamente comandantes de la Armada), estos cuatro últimos formaron junto al Gral.
García Meza la junta de comandantes, Cnl. Luis Arce Gómez (Interior), Gral. Arruando
Reyes Villa (Defensa), Gral. Oscar Larraín (Planeamiento), Cnl. Ariel Coca (Educación),
Fernando Palacios (Informaciones), Cnel. Mario Escobari (Secretario), Mario Rolón Anaya
(Relaciones Exteriores), Gral. Celso Torrelio (Interior), Jorge Tamayo Ramos (Finanzas),
Cnel. Rolando Canido (Trabajo), Marcelo Galindo (Secretario) y Enrique Crespo
(Informaciones),
Está probado documentalmente que Hugo Banzer y su partido ADN apoyaron al gobierno
de García Meza entre julio y abril de 1981 cuando se produjo una ruptura pública de
Banzer con García Meza.
El 15 de enero de 1981 se reunió la dirección clandestina del MIR en Bolivia para analizar
un paquete económico que había lanzado el gobierno, que determinó el alza de varios
productos de la canasta familiar. El grupo fue delatado y el ministerio del Interior, dirigido
por Arce Gómez, organizo un operativo de aniquilación que culmino con el asesinato de
ocho de los nueve presentes en la reunión en una casa de la calle Harrington de La Paz.
Fueron masacrados Luis Suárez Guzmán, Arcil Menacho, José Reyes, Ramiro Velásco,
Artemio Camargo, Ricardo Navarro, Jorge Baldivieso y Gonzalo Barrón. Milagrosamente
se salvó la dirigente Gloria Ardaya que fue torturada después de los hechos y enviada
posteriormente al exilio. Poco tiempo antes Arce había advertido que todos los bolivianos
debían ir con su testamento bajo el brazo. Para quienes estuvieran contra el régimen el
ministro del Interior dijo: "No va haber perdón" y cumplió su amenaza sin misericordia.
LAS PIEDRAS SEMIPRECIOSAS DE LA GAIBA
El gobierno García Meza fue acusado y condenado en la Corte Suprema por varios
negociados, entre otros el de los vidrios rayban de la piscina Olímpica de La Paz que
fueron usados en casas particulares de algunos oficiales de alta graduación, la adquisición
fraudulenta de maquinaria para YPFB, la compra sobrevaluada de carritos de agricultura
de origen argentino y otros. Pero el más grave de ellos fue el de la firma de un contrato
privado entre la junta de comandantes (García Meza, Waldo Bernal y Ramiro Terrazas) y
una empresa brasileña (Rummy Ltda.) para la explotación de piedras semipreciosas en la
zona de La Gaiba, que forma parte de las reservas fiscales de la nación. El hecho fue
valientemente denunciado por el periódico «Meridiano» de La Paz en pleno gobierno de
García Meza. La investigación periodística posterior de Antonio Miranda demostró que
cada envío ilegal y directo desde la Gaiba al Brasil era de un valor superior a los 10.000
dólares y se hacían varios por semana.
EL NARCOTRÁFICO
Si bien este fenómeno comenzó a darse al comienzo de los años setenta, tiempo en el
que comenzaron a crecer los grupos que conformaron verdaderas mafias, fue realmente
en los años ochenta y particularmente durante el gobierno de Luis García Meza, cuando
se produjo la verdadera expansión del negocio, protegido Incluso por el poder ejecutivo.
Varios organismos internacionales y miembros del propio congreso de los acusaron
formalmente a Luis Arce Gómez ministró de García Meza cle estar involucrado en
operaciones de tráfico de drogas. Otros ministros y funcionarios (caso Ariel Coca y
Norberto Salomón) fueron también implicados en casos de narcotráfico.
El cultivo tradicional de coca en la zona de los Yungas de La Paz para consumo tradicional
de campesinos y mineros, comenzó a expandirse por esos años al norte de Santa Cruz, al
departamento del Beni y, finalmente (a mediados de los ochenta), a la zona del Chapare
en Cochabamba. Se estima que en Bolivia se producían en 1985 más de 100.000
toneladas de coca, más del 80% destinadas a la fabricación de cocaína. Cerca a 200.000
personas estaban involucradas en el narcotráfico, ya sea por cultivo, pisado para
fabricación de pasta básica, o directamente narcotráfico. Se calcula que casi un 10% de la
población estaba directa o indirectamente vinculada a la economía del narcotráfico, que de
acuerdo a estimaciones variables movía en 1985 entre 600 y 3.000 millones de dólares al
año.
En 1950 había en Bolivia 2.929 productores de hoja de coca para el consumo tradicional
(Yungas). En 1987 ese número se había incrementado a 61,641 productores, siendo
evidente que la evolución del consumo tradicional no determinó crecimiento alguno que no
fuera el vegetativo. En 1960 la superficie cultivada de coca en Bolivia era de 3.300
hectáreas.
La protección que se le dio al narcotráfico en este período consolidó una industria ilegal
que creció incesantemente hasta bien avanzados los años noventa. Fue recién a partir de
1993, que las políticas de erradicación comenzaron a dar algunos resultados. En este
período los productores bolivianos se aliaron con los carteles de Colombia, que en algún
momento controlaron el circuito de producción desde Bolivia hasta Estados Unidos.
El problema del narcotráfico fue, sin duda, uno de los más agobiantes y graves que afrontó
el país, pues minó su estructura moral, incrementando vertiginosamente la corrupción.
Influyó además de modo importante sobre nuestra economía. Se estima que en 1980 la
coca representaba el 12 96 del PIB, ese porcentaje cayó en 1993 al 2,7 % del PIB, lo que
marca una disminución progresiva del impacto de la economía ilegal de la coca sobre la
economía global del país. El problema adicional con el que se cerraba el círculo negativo
fue el espacio abierto para el consumo interno que comenzó a ser peligroso en los años
ochenta y noventa.
A pesar de que al principio casi todas las FF.AA. apoyaron el golpe de estado, a medida
que pasaban los meses el malestar interno se expresó con intensidad. Los excesos de
este gobierno superaron incluso los criterios más "flexibles" que habían tenido
determinados sectores de la fuerza armada del país en el pasado. Algunas normas
básicas de convivencia interna y códigos elementales de honor fueron alterados por la
dictadura que terminó siendo repudiada por la propia institución que la llevó al poden
Finalmente el 3 de agosto se levantaron en Santa Cruz Alberto Natusch y Luis Añez, con
el apoyo del ex-presidente Luis Adolfo Siles. Fue el asalto final. La mediación de la Iglesia
evitó que los sublevados hicieran gobierno y dio paso a una efímera Junta Militar. García
Meza que en julio había expresado su deseo de mantenerse en el mando y que meses
antes dijo que su gobierno abría una nueva época de por lo menos veinte años, no tuvo
más remedio que presentar su renuncia a la presidencia en una tensa y desagradable
ceremonia en el palacio de gobierno.
La caída de García Meza fue formalmente adornada como renuncia y dio lugar a una junta
de gobierno integrada por los tres máximos comandantes de las FF.AA., Celso Torrelio
Villa del ejército, Waldo Bernal Pereira de la aviación y Oscar Pammo Rodríguez de la
Armada. Mientras Torrelio tuvo un ascenso fulgurante durante el gobierno dictatorial, los
otros dos comandantes se mantuvieron en sus cargos como para demostrar que el poder
garciamezista se mantenía intacto. La junta ejerció sus funciones por sólo un mes, entre el
4 de agosto y el 4 de septiembre de 1981, hasta que se decidió darle al ejército
nuevamente el control de la nación, designándose a Celso Torrelio como Presidente de la
República.
Signado por la mediocridad el gobierno de Celso Torrelio no fue otra cosa que la
continuidad de la dictadura de Luis García Meza, Con menos dureza que el gobierno
anterior, en esta administración comenzó a cristalizarse una aguda crisis política que se
vislumbraba ya desde tiempo atrás y que se hacía inevitable. El Presidente carecía de
capacidad alguna para mantener por más tiempo una situación que para las FF.AA. se
hacía poco menos que insostenible. Aunque el Presidente dijo que gobernaría con la
Constitución en la mano, los mecanismos de coerción, si bien suavizados, se mantenían
intactos, sobre todo el aparato de represión del estado. Las FF.AA. se encontraban con la
realidad de su desmoronamiento y descomposición. Menos de un año después tuvieron
que dar el impulso final a la reapertura democrática, lo que exigía un cambio de titular en
la presidencia que permitiera un mínimo de credibilidad casi totalmente perdida por la
dictadura y por el propio Torrelio que la representaba.
La sucesión no fue fácil, las FF.AA. vivían una curiosa dinámica de "democracia" interna a
través de reuniones o consultas a los comandantes de grandes y pequeñas unidades que
no sólo opinaban, sino que también votaban en relación a sus preferencias por uno u otro
candidato. Entre el 19 y el 2 1 de julio de 1982 se produjo un intenso cabildeo. Quien
aspiraba con más vigor a ser el Presidente de la transición era Faustino Rico Toro que, sin
embargo, no pudo inclinar la balan:a a su favor. Finalmente, la institución optó por un
hombre de transacción sin mayor ascendiente, el Gral. Guido Vildoso.
LA FLOTACIÓN DEL PESO BOLIVIANO. COMIENZA LA HIPERINFLACIÓN
A Vildoso quien asumió el mando el 21 de julio de 1982, le tocó cerrar el largo período de
administración militar iniciado en 1964 y que tuvo apenas cuatro años de interregno
democrático. Después de esos largos 1 8 años, las FF.AA., habían llegado a un grado de
desgaste y corrupción muy graves para su propia estabilidad interna, A su vez estaban
profundamente desprestigiadas de cara al país y a la opinión internacional, además de
hallarse bastante divididas internamente. Se veían incapaces de administrar la crisis
económica que comenzaba a acelerarse y se enfrentaban a una heroica lucha del pueblo
boliviano por recuperar las libertades básicas y el proceso democrático. Ante esta realidad
primó el sentido común. Vildoso, tras un intento fallido de convocatoria-a elecciones y un
paquete de correctivos económicos que no pudo aplicarse por falta de un mínimo
consenso nacional, se dio cuenta de que lo único que quedaba era retomar la realidad
política que había sido interrumpida violentamente en 1980.
EL CONGRESO DEL 80
1982-1997
Los tres triunfos electorales sucesivos de la Unidad Democrática y Popular (UDP) (el de
1978 no reconocido en las cifras oficiales), una coalición que reunía al Movimiento
Nacionalista
El gobierno comenzó, sin embargo, debilitado por las diferencias internas que se habían
generado en el período del exilio y clandestinidad entre 1980 y 1982, lo que condujo a
desinteligencias y tensiones que repercutieron en la administración del poder. La UDP
demostró además carecer de un programa serio que permitiera superar una crisis que en
1982 era ya muy grave. Los puntos de vista diferentes sobre cómo encarar la crisis y cómo
distribuir las cuotas de poder, terminaron por hacer inviable la coalición que se fracturó
totalmente antes de terminar el período.
Hernán Siles Zuazo y su vicepresidente Jaime Paz Zamora celebran la recuperación de la democracia el 10 de octubre
de 1982. Los acompañan Guillermo Capobianco, el ex presidente Guido Vildoso, el Presidente de Costa Rica José
Figueres, Franz Barrios, el presidente de senado Julio Garrett Ayllón y Gasto Encinas.
El Presidente prometió una mejoría económica en los primeros 100 días de gobierno, lo
que no pudo cumplir. El MIR dio muy pronto muestras de su falta de madurez, decidiendo
retirarse del gobierno (enero de 1983) a sólo tres meses de haber comenzado la gestión.
Volvió luego en abril de 1984 y volvió a irse en diciembre de 1984. El PCB, por su parte,
dejó el gobierno en octubre de 1984. El primer mandatario tuvo que apelar al término de
su gobierno a ministros independientes y a la Democracia Cristiana (PDC), dispuesta a
subirse al carro ganador.
La inestabilidad interna se expresó de modo muy claro en los cambios ministeriales. Siles
designó siete gabinetes y 80 ministros en menos de tres años de gobierno; el promedio de
cambios más alto de toda la historia. Tuvo, sin embargo, ocasión de emprender o concluir
importantes obras de infraestructura. En 1983 inauguró el aeropuerto internacional de
Viru-Viru en Santa Cruz, la obra aeroportuaria más importante de Bolivia, que se convirtió
en el nudo de la aviación del país. También inauguró el tramo carretero asfaltado Chimoré-
Yapacaní, parte de la nueva carretera Cochabamba-Santa Cruz. Con esta obra se abrió
un período de intensas construcciones de caminos, que no se interrumpió durante los
sucesivos gobiernos democráticos.
Entre abril y octubre de 1984 nacieron en Santa Cruz y La Paz los primeros canales de
televisión privada, canal 13 de Santa Cruz (luego Red UNO) y los canales 2 (luego Unitel)
y 9 de La Paz (luego ATB). Su creación pasó por alto la legislación vigente y su presencia
se impuso ante la flagrante debilidad del gobierno de la UDP. La televisión privada cambió
dramáticamente el impacto de este medio en la historia boliviana reciente.
Pero, sin duda, el mayor aporte histórico del gobierno de Hernán Siles Zuazo es la
defensa a ultranza del sistema democrático, el respeto escrupuloso de los derechos
ciudadanos y de sus libertades. La vocación democrática del Presidente permitió que, en
medio de los agudos problemas económicos y sociales, el país se diera cuenta de que la
libertad conquistada con tanto sacrificio era uno de nuestros bienes más preciados. Esa
fue la voluntad obsesiva del gobernante que prefirió sacrificarlo todo antes que ceder a la
tentación del autoritarismo. El respeto escrupuloso a los derechos de todos los ciudadanos
fue una lección que permitió la proyección de la democracia a largo plazo.
Las cosas llegaron a un punto crítico cuando el 30 de Junio de 1984 un grupo armado
(compuesto por policías, militares y civiles) secuestró en La Paz al Presidente Siles y lo
mantuvo en su poder por 10 horas en una casa en construcción en el barrio de Miraflores
de La Paz. Un operativo militar logró dar con el paradero del mandatario y liberarlo sano y
salvo después de negociar el asilo de los secuestradores en la embajada de Venezuela.
La imposibilidad de resolver la crisis condujo al Dr. Siles a una medida desesperada, una
huelga de hambre que cumplió por cuatro días en palacio para intentar sensibilizar a los
partidos y a la COB y exigir que le dejen gobernar. La mediación de la Iglesia permitió la
suspensión de la medida que no conducía a una solución razonable. El Presidente aceptó
en cambio una reunión de todos los partidos políticos con representación parlamentaria
para encontrar una salida. Tras arduas negociaciones entre oficialismo y oposición, en el
edificio del colegio Inglés Católico (que simbolizaba la mediación de la iglesia católica), se
llegó al acuerdo de pedirle al Presidente que renuncie a un año de mandato constitucional
(que debió concluir el 6 de agosto de 1986) y convoque a elecciones para mediados de
1985. El renunciamiento patriótico de Siles Zuazo permitió la solución, el mandatario
aceptó el pedido e hizo ambas cosas, renunció a un año de su mandato y convocó a
elecciones.
Por prescripción constitucional, el parlamento tuvo que decidir la elección. Por primera vez
en la historia de Bolivia el Congreso eligió al segundo, Víctor Paz Estenssoro por 94 votos
contra 51 de Banzer. El fuerte componente antibanzerista de los partidos de izquierda, las
heridas todavía muy frescas de la dictadura y la decisión del MIR, contribuyeron al triunfo
de Paz E, que se consagró así por cuarta vez como Presidente de Bolivia, acompañado en
la vicepresidencia por Julio Garrett Ayllón.
En Agosto de 1985 Bolivia atravesaba una de las crisis más graves de toda su historia. La
economía estaba totalmente fuera de control y en proceso de decrecimiento, la
hiperinflación amenazaba llegar al 25.000 % a fin de año, el aparato productivo estaba
desmoronado y el poder adquisitivo de los salarios en su punto más bajo (7 dólares
mensuales era el salario mínimo nacional).
Pocos gobiernos en nuestra historia tuvieron que encarar un desafío de esta magnitud. El
país requería respuestas inmediatas y efectivas a una crisis que por momentos parecía
terminal en la economía con el desmoronamiento social consiguiente. No había mucho
tiempo ni para las soluciones graduales, ni para la expectativa y beneficio de la duda que
le otorgaba la ciudadanía al nuevo poder ejecutivo
BOLIVIA SE NOS MUERE.
La redacción del decreto fue un trabajo contra reloj que tuvo que encararse en menos de
un mes. Participaron en su diseño Sánchez de Lozada, Fernando Romero, Juan Cariaga
(que originalmente fue asesor del programa de gobierno de Banzer, lo que llevó a los
adenistas a pretender una paternidad sobre el 21060), Eduardo Quintanilla y Francisco
Muñoz. Participó como asesor, una vez aprobado el decreto, el norteamericano Jeffrey
Sachs que ganó prestigio internacional por cstc apoyo al proyecto estabilizador boliviano.
La medida provocó una huelga general de la COB que duró quince días (uno menos que
el récord nacional que soportó Siles Zuazo). El Presidente tomó una drástica decisión,
decretó el estado de sitio y confinó a más de 150 dirigentes en el norte del país, entre ellos
al propio Juan Lechín. Esta medida fue histórica por dos razones, permitió la aplicación del
decreto y marcó una nueva etapa de la COB, el fin del liderazgo indiscutido de Lechín y el
comienzo de una crisis y debilidad del sindicalismo que no pudo adaptarse a los nuevos
vientos políticos y económicos.
El 21060 se puede resumir en seis puntos: l. Reducción del déficit fiscal con
congelamiento de salarios, aumento del precio de la gasolina (YPFB cubrió así más del 50
% de los ingresos del TON) y reducción de gastos del estado. 2. Cambio real y flexible de
la moneda (desapareció el peso y renació el boliviano, con la reducción de seis ceros del
viejo peso), creación del «bolsín» controlado por el Banco Central. 3. Libre contratación,
racionalización de la burocracia, en la práctica la llamada «relocalización» fue despido
masivo de trabajadores. 4. Liberalización total del mercado, libertad de precios y libre
oferta y demanda, arancel único de importaciones. 5. Fomento de las exportaciones. 6.
Reforma tributaria.
El mecanismo del bolsín fue una de las medidas más ingeniosas y acertada de la
estabilización, permitió una combinación entre el libre juego de oferta y demanda de
dólares en el mercado subastados en el Banco Central y el control ejercido por éste a
través de un respaldo permanente en divisas que fijaba diariamente el precio del dólar.
Este sistema sustituyó las traumáticas devaluaciones periódicas y la insuficiencia de la
flotación.
La reforma tributaria fue clave en este proceso pues redujo más de 400 impuestos a sólo
siete básicos, entre ellos el IVA (impuesto al valor agregado), con lo que logró recuperar
ingresos por impuestos que del I % del PIB pasaron a casi el 10% en un cuatrienio. La
disciplina tributaria y la recuperación de los ingresos por este concepto al erario fueron un
paso muy importante para generar en el ciudadano responsabilidad con su país a través
del mecanismo de impuestos. Por primera vez en cuarenta años el ejecutivo presentó el
presupuesto general de la nación a consideración y aprobación del Congreso, respetando
las prescripciones constitucionales en este aspecto.
Una de las ideas incorrectas sobre el 21060 es que marcó una lógica de
desmantelamiento del estado. En realidad el Título V referido a las empresas, planteaba la
descentralización de YPFB y COMIBOL, pero en ningún caso su debilitamiento o
desmantelamiento. Disolvió en cambio la Corporación Boliviana de Fomento (CBF) y la
Empresa Nacional del Transporte (ENTA).
En Febrero de 2006 en una conferencia de prensa, Paz E. predijo que este decreto y la
nueva política que representaba, duraría veinte años dadas las características de la
economía mundial. Tenía razón. La crisis política de 2003 dio lugar al cambio de políticas
y la derogación de partes del 21060 se comenzó a hacer en 2006, aunque las líneas
macroeconómicas no se tocaron.
EL PACTO POR LA DEMOCRACIA
El pacto marcó el comienzo de una nueva modalidad de acuerdos políticos que comenzó a
romper el encono y las posiciones excluyentes que llevaron al país al desastre en 1979 y
19821985. La lección fue aprendida y se tomó como norma en las siguientes gestiones
gubernamentales, en las que lo primero que se hizo fue la búsqueda de acuerdos políticos
que hicieran viable la gobernabilidad. Este mecanismo se desmoronó en 2003 con la caída
de Sánchez de Lozada.
Victor Paz Estenssoro y Hugo Banzer Suárez suscriben el pacto por la Democracia en 1985 (Antonio Torrico)
EL COLAPSO DEL ESTAÑO Y LA MARCHA POR LA VIDA
El 21060 fue diseñado sobre la idea de un precio promedio de 5.5 dólares por libra fina de
estaño. En octubre de 1985 el mercado de Londres (el más importante de este mineral) se
desplomó, dejando sin cotización al estaño. En 1986 el promedio bordeó los 2,5 dólares
por libra fina. Esto obligó a la adopción de medidas radicales. Las pérdidas acumuladas de
COMIBOL superaban los 750 millones de dólares en los últimos diez años y el costo de
producción en algunas minas quintuplicaba su cotización internacional.
En este contexto, y ante una circunstancia exógena que modificó todas las previsiones, se
decidió la relocalización (léase despido) de 23.000 mineros de una planta de 30.000 que
tenía COMIBOL, lo que provocó la denominada «Marcha por la vida». Los trabajadores -
varios miles marcharon de Oruro a La Paz para exigir su permanencia en la empresa. Era
la medida de despido masivo más radical que había tomado gobierno alguno en toda la
historia republicana. El gobierno decretó el segundo estado de sitio (agosto 86) y envió al
ejército a detener la marcha en Calamarca (a 60 km. de La Paz). Tras largas horas de
tensión y amargura de los trabajadores, se llegó a un acuerdo que evitó un derramamiento
de sangre de imprevisible magnitud. Los mineros fueron devueltos a Oruro y el plan del
gobierno continuó. Ese episodio marcó el punto de inflexión que determinaba el fin de una
era de poder sindical. Pocas semanas antes Juan Lechín había dejado para siempre el
liderazgo de la COB y la FSTMB, que había detentado ininterrumpidamente desde 1946.
Su renuncia ratificaba el carácter simbólico de este momento.
El esfuerzo más significativo del gobierno del MNR para paliar esta dramática realidad, fue
la creación del Fondo Social de Emergencia dirigido por Fernando Romero, que ejecutó
más de 1.000 proyectos con una inversión de más de 150 millones de dólares, resolviendo
de manera parcial el problema de mano de obra, ya que estos proyectos tenían como
objetivo precisamente un uso intensivo de mano de obra (empedrado de caminos,
alcantarillado, etc.).
Por iniciativa de partidos de izquierda, el MBL y el MIR, y con aceptación de la mayoría del
país, el Congreso inició en 1986 un juicio de responsabilidades contra el ex-dictador Luis
García Meza y sus colaboradores. El juicio se siguió en la Corte Suprema de Justicia.
García Meza compareció inicialmente ante ese tribunal pero se dio a la fuga cuando el
congreso ordenó su detención por su supuesta implicación en los robos del diario del
«Ché». El juicio concluyó en abril de 1993 con la condena, en ausencia de García Meza y
Arce Gómez, a 30 años de cárcel sin derecho a indulto. Fueron condenados por ocho
grupos de delitos entre los que se destacan: asesinato, genocidio, sedición, alzamiento
armado, organización de grupos armados irregulares y delitos económicos. Uno de los
gestores fundamentales de este proceso fue el abogado de la parte civil Juan del
Granado.
NARCOTRÁFICO. HUANCHACA. LEY 1008 Y DESARROLLO ALTERNATIVO
Las relaciones con Estados Unidos, como ya dijimos, estuvieron condicionadas al tema y
la presión de Washington obligó al gobierno a aceptar la presencia, durante tres meses, de
160 soldados estadounidenses en el departamento del Beni en operaciones contra el
narcotráfico, que bajaron sólo temporalmente el precio de la coca. El gobierno planteó
entonces la necesidad de una política de desarrollo alternativo que hiciera énfasis en la
transformación económica de las regiones productoras, en vez de ocuparse
exclusivamente de la represión. La presentación de esta propuesta cambió la posición
boliviana, permitiendo una acción menos subordinada y más beneficiosa para los sectores
de producción ilegal (Chapare). El concepto de desarrollo alternativo, con sus virtudes y
defectos, permitió un avance importante de la región cocalera que recibió electrificación,
construcción de caminos e inversión para la producción agropecuaria. Pero la contraparte
cobró la factura. El Congreso aprobó la llamada ley 1008, específicamente destinada a los
temas de producción de coca, narcotráfico y consumo de drogas. La ley era el instrumento
más duro que se haya aprobado para el combate contra las drogas, tanto que en algunos
aspectos pasaba por encima de la constitución del país con tribunales especiales y
fiscales de narcóticos casi omnipotentes. Aunque en contrapartida incorporaba el concepto
de desarrollo alternativo y reconocía áreas de producción de coca legal para el consumo
tradicional.
En 1988 se desató un escándalo al conocer el Congreso unos videos que mostraban a
dos altos dirigentes de ADN (Alfredo Arce y el Gral. Mario Vargas) en conversaciones
secretas con Roberto Suárez, narcotraficante de gran poder condenado a quince años de
cárcel, que fue detenido y encarcelado poco después de conocerse los videos. La
defenestración de los dirigentes adenistas trajo consigo una respuesta de ADN. El senador
de ese partido, Juan Luzio, presentó unas fotografías de Jaime Paz con Isaac Chavarría
acusado de narcotráfico. Años después, ese episodio abriría uno de los escándalos más
graves sobre la relación entre el narcotráfico y los políticos bolivianos.
El partido de Fernández nunca tuvo un programa ideológico claro y se apoyó sobre todo
en el prebendalismo para lograr respaldo popular. Obtuvo resultados muy interesantes en
las elecciones, sobre todo en las municipales. Su mejor votación la consiguió en las
municipales de 1991 con el 23 % de los sufragios y el tercer lugar. En 1993 se alió al MNR
y MBL para la gestión gubernamental 1993-1997, en Carlos Palenque Avilés. 1997 con
Banzer y en 2002 con
Imagen de la ciudad de El Alto a fines de los años ochenta del siglo XX (Tony Suárez)
Entre 1950 y 1980 La Paz creció hasta el límite de su capacidad geográfica en el valle de
Chuquiago y comenzó a crecer en la planicie altiplánica a partir de la llamada "ceja del
Alto" a 4.100 mts. sobre el nivel del mar. Por esa razón esta zona creció en proporción de
9 a 1 con respecto a la llamada "hoyada". En 1985, un grupo de parlamentarios, con la
aquiescencia del Presidente del Congreso Julio Garrett, propusieron y aprobaron la
creación de una ciudad jurídicamente separada y distinta de La Paz con el nombre de El
Alto. La fecha de fundación de la nueva urbe fue el 6 de marzo de 1985, rompiendo la
unidad lógica de la ciudad y abriendo un nudo de problemas al crear la ciudad más pobre
y con el mayor crecimiento demográfico del país. Este absurdo jurídico abrió las puertas al
enfrentamiento entre La Paz y El Alto por el presupuesto y por la evidencia de que El Alto
carecía inicialmente de la capacidad económica y administrativa para superar los
problemas de aguda pobreza e insuficiencias básicas para acoger la migración altiplánica
que llegaba incesantemente. La mayor migración campesina era de origen aymara,
convirtiendo a la ciudad en una marmita cultural del mundo indígena.
El censo de 2001 registró una población de 647.350 habitantes contra 95.455 de 1976. El
complejo urbano La Paz-El Alto sumaba en 2001 1.447.304 (incluyendo Achocalla), el más
grande del país. Si aceptamos la artificial división, El Alto era la cuarta población de Bolivia
en 2001.
JAIME PAZ ZAMORA (1939)
El ascenso de Paz Zamora generó en principió dudas y escepticismo, por el mal recuerdo
que había dejado en lo económico el gobierno de la UDP del que fue vicepresidente, Sin
embargo, en pocos meses logró devolver la confianza en el sistema al mantener la
estabilidad monetaria inalterable, Esto hizo que los depósitos en la banca pasaran de 900
a más de 1.800 millones de dólares en su gestión, En enero de 1990 hizo conocer el
decreto 22407 que intentó sustituir al 21060, pero en realidad fue sólo su implementación.
En líneas generales el gobierno siguió la política monetaria y de apertura de mercados de
su antecesor, a pesar de que Paz Zamora insistió durante su campaña electoral en que
iba a "relocalizar" el decreto 21060.
El desafío básico de esta gestión era el crecimiento, la ampliación del aparato productivo y
una política social más justa, meta que consiguió a medias, con su punto mayor en 1991
con 5,11 % de crecimiento del PIB, el más alto entre 1982 y 2005, además de una
modesta mejora en nuestros indicadores sociales. El proceso de privatización comenzó
algo tarde y se logró encaminar en las empresas de las corporaciones de desarrollo, pero
fracasó, o no se comenzó en las empresas realmente importantes (LAB, ENTEL, ENFE,
etc.), El proceso privatizador «e empañó además con acciones poco transparentes en el
caso de la hotelería. En la atracción dc inversión externa se concretaron algunos
esfuerzos privados importantes en minería (Inti Rayrni y COMSUR) con una inversión
superior a los 200 millones de dólares; la más importante inversión en minería desde la
nacionalización de las minas, pero fracasó en un proyecto-imagen muy importante, el
contrato de explotación del litio en el salar de Uyuni, Después dc varias idas y venidas la
empresa norteamericana Lithium Co. desistió de invertir en cl país ante cl rechazo del
comité cívico potosino y sectores políticos conservadores a los que el gobierno no sc
atrevió a enfrentar. Se avanzó en la infraestructura caminera, comenzando trabajos que sc
habían licitado en el anterior gobierno y licitando otros nuevos. El LAB pasó a los aviones
dc cabina ensanchada con la compra y alquiler, con opción de compra dc dos Airbus-300
para su flota. Las comunicaciones rurales entraron en una nueva etapa al integrarse al
satélite Domsat. Se instalaron teléfonos en centenares de poblaciones intermedias y
rurales y se comenzó la digitalización de ENTEL y las cooperativas. La televisión estatal
accedió al satélite en 1991. Para fin de siglo siete cadenas de televisión privadas
transmitían por este medio. Al comenzar la década de los noventa llegó la telefonía celular
al país, la empresa pionera fue TELECEL. Para el año 2000 el país tenía más de 420 mil
de estas líneas en operación.
Una de las críticas mayores contra este gobierno fue el alto nivel de corrupción de algunos
de sus funcionarios y los varios negocios irregulares que se denunciaron y comprobaron
en esta administración, lo que deterioró seriamente la imagen de credibilidad del Acuerdo
Patriótico y contribuyó a su contundente derrota electoral. Problemas comprobados en
ENFE con la otorgación ilegal de terrenos de la empresa en varios puntos del país,
expulsión del Presidente de YPFB por irregularidades en sus funciones, denuncia y pedido
de desafuero del diputado Hugo Lozano acusado de malversación en el Fondo de
Desarrollo Campesino, denuncia de venta ilegal de tierras y juicio de responsabilidades
contra el ministro de Educación Hedim Céspedes y acusaciones de beneficio ilícito en la
liquidación de LINABOL contra el Alte. Sáenz Klinsky ministro de Defensa. A esto se sumó
el caso de los narcovínculos denunciado un año después del fin de esta gestión de
gobierno.
En junio de 1990 el empresario Jorge Lonsdale, una de las figuras más importantes y
prestigiosas del sector privado boliviano, fue secuestrado por el grupo terrorista Comisión
Néstor Paz Zamora (CNPZ), liderada por el italiano Miguel Northuster. En noviembre el
gobierno descubrió a los autores y el 5 de diciembre tomó por asalto la casa donde estaba
el secuestrado. El saldo fue trágico, la muerte de Lonsdale y tres de los terroristas, El
operativo fue calificado como un fracaso y se acusó al ministerio del Interior de violencia
innecesaria y asesinato de los secuestradores. La falta de profesionalismo y el
apresuramiento dejaron un saldo terrible y una sensación muy amarga en el país que vio
con preocupación la posibilidad de una escalada violenta que finalmente no se produjo.
Foto Polaroid como testimonio de vida de Jorge Lonsdale, enviada al periodista Carlos D. Mesa
Gisbert de PAT, por los miembros del grupo terrorista Comision N´éstor Paz Zamora, en
diciembre de 1990, un par de días antes de su muerte.
En 1991 apareció el grupo terrorista Ejército Guerrillero Tupac Katari (EGTK), en la línea
del Grupo Zárate Wilka que fue destruido en 1989. Allí militaban dos personas que se
convirtieron en figuras nacionales en la primera década del siglo XXI, Felipe Quispe que
fundo el Movimiento Indígena Pachakuti (MIP) y Alvaro García Linera quien como parte del
Movimiento al Socialismo (MAS), llegó a la vicepresidencia de la República. El EGTK
protagonizó más de media docena de atentados terroristas con un saldo de algunos
muertos, heridos y graves daños materiales, pero fue desmantelado, esta vez sin
violencia. Sus principales cabecillas, Quispe y los hermanos García Linera y otros, fueron
encarcelados, para salir unos años después, sin que su proceso hubiese concluido.
A pesar de las condiciones de extrema pobreza y marginalidad de varias zonas del país,
las intentonas de violencia a través de grupos al estilo de Sendero Luminoso, no
prosperaron. La receta no prendió en ninguna organización con posibilidades de éxito y
demostró que el colchón de la Revolución de 1952 era todavía amplio para paliar estos
estallidos.
MEDIO AMBIENTE. MARCHA POR EL TERRITORIO Y LA DIGNIDAD. LA CRISIS DEL
CONSEJO DE REFORMA AGRARIA
Marcha por el Territorio y la Dignidad protagonizada por indígenas de los llanos en 1990 (La Razón)
En Septiembre de 1990 etnias del oriente boliviano (guaraníes, mojeños, chimanes, etc.),
protagonizaron una marcha desde Trinidad a La Paz bajo el denominativo de «por la
dignidad y el territorio», para concientizar al país de su existencia y sus derechos. Como
consecuencia de ese movimiento, Paz Zamora reconoció los territorios ancestrales de
estas etnias para su administración y control en el departamento del Beni. Era la primera
vez que el Estado boliviano reconocía a los indígenas del oriente como interlocutores
válidos y le reconocía el derecho a la propiedad y administración de territorios que
ancestralmente habían sido suyos. En esa marcha se planteó por primera vez la
necesidad de realizar una Asamblea Constituyente, que fue uno de los temas más
importantes de la sociedad boliviana al despuntar el siglo XXI.
Jaime Paz sumó 40 viajes internacionales durante su mandato. Los más importantes
fueron a la I Cumbre de jefes de estado de Iberoamérica en Guadalajara, a Argentina para
el acuerdo de «borrón y cuenta nueva» de deudas con ese país y una regularización del
contrato de venta de gas, que en términos generales fue desventajoso para Bolivia por la
reducción de volumen y precio.
Alberto Fujimori y Jaime Paz, tras la firma de los acuerdos de Ilo en 1992
El otro viaje importante fue al Perú. En 110 firmó un acuerdo con su colega Alberto
Fujimori que concedió a Bolivia una zona franca, acceso al uso y administración del puerto
y cinco kilómetros de playa denominada «Boliviamar». Fue una medida inteligente que
coincidió con los 200 años del nacimiento del mariscal Andrés Santa Cruz. Paz Zamora
logró una alternativa real de acceso al océano y una carta de negociación importante en
nuestra difícil relación con Chile. Lamentablemente, el país no aprovecho tan importante
oportunidad al no desarrollar ni a nivel estatal ni privado inversiones que justificaran el
esfuerzo diplomático realizado por el gobierno.
Los viajes de Paz Zamora contribuyeron a un flujo adecuado de créditos y a que
continuase el proceso de recompra de la deuda externa que se saldó totalmente con la
banca privada internacional. El Presidente abría así una nueva era en las relaciones
internacionales del país, de diplomacia directa intensa presencia del mandatario en
reuniones multilaterales y bilaterales que se convirtieron en moneda corriente en los años
noventa. La diplomacia ya no podía concebirse como en los viejos tiempos, se servía de la
nueva tecnología de comunicaciones tanto físicas como electrónicas.
Gonzalo Sánchez de Lozada nació en La Paz el 1 g de julio de 1930. Desde muy pequeño
vivió en los Estados Unidos, de donde le quedó la particular pronunciación "agringada" del
castellano. Estudió filosofía y letras en la Universidad de Chicago.
Volvió a Bolivia a principios de los años cincuenta. Entre 1952 y 1958 trabajó como
productor de cine en la empresa Telecine que él mismo fundó. Produjo películas tan
destacadas como Los que nunca fueron (1954), Un poquito de diversificación económica
(1955) y Voces de la tierra (1956). Trabajó en una empresa de servicios petroleros y, a
principios de los sesenta, creó COMSUR (Compañía Minera del Sur), una de las empresas
mineras más poderosas de Bolivia. A través de COMSUR, Sánchez de Lozada amasó una
importante fortuna personal.
En 1979 a los 49 años, comenzó su actividad política, elegido como diputado por el MNR.
Fue reelecto en 1980. En 1985 fue elegido senador y Presidente de esa Cámara. En 1986
el Presidente Paz Estenssoro lo nombró ministro de Planeamiento y Coordinación. Desde
ese cargo contribuyó a la exitosa política de estabilización económica post-hiperinflación.
Fue además uno de los gestores del famoso decreto 21060. En 1988 fue nominado por su
partido como candidato presidencial. Ganó por mayoría relativa las elecciones de 1989,
pero perdió la presidencia en el congreso ante la alianza del segundo (Banzer) y el tercero
(Paz Zamora), que llevó a la presidencia a este último.
En 1993 a los 63 años de edad, volvió a ganar las elecciones sobre Hugo Banzer.
Gobernó entre 1993 y 1997 aplicando el llamado Plan de Todos, un ambicioso programa
de reformas estructurales. En 1997 volvió a la oposición. En 2002 fue elegido Presidente
por segunda vez. Un año y tres meses después, en medio del repudio popular y tras
violentas jornadas, se vio obligado a renunciar al cargo, abandonar el país y autoexiliarse
en los Estados Unidos. En 2004 el Congreso abrió un juicio de responsabilidades en su
contra por los sucesos de octubre de 2003.
Víctor Hugo Cárdenas fue el primer vicepresidente indio en la historia de Bolivia. De origen
aimara, nació en la comunidad de Achica Bajo (a orillas del lago Titicaca) en el
departamento de La Paz el 4 de junio de 1951.
Estudió literatura y pedagogía en la Universidad Mayor de San Andrés, carreras de las que
egresó en 1977. Fue profesor de esta universidad. Participó como consultor en el diseño
de la reforma educativa que defendió y apoyó como Vicepresidente de la nación.
En 1978 fue fundador y militante del Movimiento Revolucionario Tupac Katari (que en
1985 aumentó a su sigla la L de Liberación). En esa misma línea, fue parte de los
creadores, junto a Genaro Flores, de la Confederación Sindical Única de Trabajadores
Campesinos de Bolivia (CSUTCB), que jugó un rol fundamental en el proceso sindical y
político boliviano ulterior.
En 1985 fue elegido diputado por su partido. En 1989, ya jefe del MRTKL, fue candidato a
la presidencia y en 1993 hizo alianza con el MNR, postulándose como candidato
vicepresidencial de Gonzalo Sánchez de Lozada. Ejerció el cargo (al que accedió a los 42
años) entre 1993 y 1997. En 1994 fue elegido Presidente del Parlamento Andino y recibió
el premio Internacional Bartolomé de Las Casas por sus contribuciones a la causa
indígena del continente.
PRIMER GOBIERNO SÁNCHEZ DE LOZADA 1993-1997
El primer paso fue la coalición que surgió del voto parlamentario que lo hizo Presidente.
Bajo el férreo manejo personal del primer mandatario, se sumaron al MNR el MRTKL del
Vicepresidente Cárdenas, el Movimiento Bolivia Libre que fue el socio más leal y que más
ideas aportó en la aplicación del plan de gobierno. Antonio Aranibar, presidente de ese
partido, fue el único ministro (RR.EE) que ocupó el cargo durante los cuatro años y Miguel
Urioste jefe en ejercicio del MBL, fue el principal articulador en la coalición. Fue también
socio, aunque errático, UCS de Max Fernández que se retiró y volvió al gobierno más de
una vez. En noviembre de 1995 Fernández murió trágicamente en un accidente aéreo.
Causó también conmoción nacional la muerte en accidente de aviación del empresario,
político adenista y dirigente deportivo, Mario Mercado también víctima de un accidente de
aviación.
El Presidente propuso al país un plan de gobierno que denominó "Plan de Todos", cuya
base eran tres pilares: la capitalización, la participación popular y la reforma educativa. La
ecuación que buscaba resolver era uno de los puntos más polémicos del denominado
modelo neoliberal, su capacidad para conjugar la aplicación clara e inequívoca de una
economía de mercado sin restricciones, con una política social adecuada a los
requerimientos de una nación pobre y con graves brechas socio - económicas.
El primer paso para emprender los cambios fue la ley del poder ejecutivo. Con ella el
gobierno cedió inexplicablemente al legislativo la potestad del Presidente de establecer el
número y funciones de sus ministros. La ley redujo el número de ministerios de 17 a 12; 10
con función permanente y dos sin cartera (uno dedicado a la Capitalización y el otro a
Desarrollo Económico). La gran innovación fue la creación de tres "superministerios", el de
Desarrollo Humano que integró educación y salud e hizo énfasis en las etnias y la mujer,
dos sectores claramente desatendidos y discriminados en el pasado; el de Hacienda y
Desarrollo Económico que muy pronto tuvo que desdoblarse ante la imposibilidad de
controlar su gigantesca estructura y el de Desarrollo Sostenible y Medio Ambiente; un
salto de Bolivia a una nueva concepción del crecimiento y un lugar de jerarquía para el
tema de la protección ambiental, clave en este final de siglo. Como otras muchas reformas
parecidas, este modelo no sobrevivió la gestión de su creador.
La obra caminera más importante (continuidad de un contrato logrado por la gestión Paz
Zamora) fue la carretera Patacamaya - Tambo Quemado que une por primera vez por vía
asfaltada al país con el Océano Pacífico. Se empezó la ejecución de Cotapata -Santa
Bárbara para unir La Paz con el norte del país y Brasil, y la carretera también asfaltada La
Paz - Desaguadero, para unir Bolivia con el Puerto de 110. También se completó el asfalto
de la vía La Paz - Cochabamba.
En 1995 se desató una crisis bancaria con la caída, intervención y quiebra de tres bancos
privados: el Sur, el de Cochabamba y el Boliviano Americano Internacional. Entraron en
prisión varios banqueros entre ellos Guillermo Gutiérrez, Jorge Córdoba y Marita Siles
acusados de malos manejos y malversación de fondos de los depositantes. La crisis fue
superada por el Estado en medio de una polémica sobre la legitimidad del respaldo oficial
a operaciones irregulares del sistema financiero.
El empresario y dirigente político Samuel Doria Medina fue secuestrado por militantes del
Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) del Perú. Tras varias semanas de
cautiverio, su familia pagó el rescate pedido (cuya cifra nunca fue revelada) y él recuperó
su libertad. Ese dinero se usó para organizar la toma de la embajada de Japón en Lima.
Poco después, el gobierno apresó a los secuestradores de Doria. En 1996, el embajador
de Bolivia en Perú, Jorge Gumucio fue secuestrado junto a centenares de invitados en la
embajada Japonesa por el MRTA, El secuestro terminó con el rescate exitoso de los
rehenes y la muerte de todos los secuestradores.
CAPITALIZACIÓN Y BONOSOL
El gobierno capitalizó entre 1995 y 1996 las cinco empresas estatales más grandes del
país: Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Empresa Nacional de
Telecomunicaciones (ENTEL), Empresa Nacional de Electricidad (ENFE), Lloyd Aéreo
Boliviano (LAB) y Empresa Nacional de Ferrocarriles (ENFE), solo quedó pendiente por
falta de proponentes la Empresa Nacional de Fundiciones (ENAF). Para aplicar el plan se
aprobó la ley de capitalización (1994 y leyes complementarias como la de
telecomunicaciones, hidrocarburos y electricidad.
El gasoducto Bolivia-Brasil tiene una extensión de 1.970 kms. de Río Grande (Bolivia) Sao
Paulo y otros 1.180 kms. de Sao Paulo a Porto Alegre. 557 kms. se extienden en territorio
boliviano. La construcción del ducto de 32 pulgadas, costÓ 2.200 millones de dólares. Los
presidentes Banzer y Cardoso inauguraron el gasoducto en 1999. En julio de ese año
comenzó a operar. En 1999 se exportaron 2,4 mmcd. y en 2001 se superaron los 10
mmcd. Esto dio como resultado en 2001 un ingreso de 225 millones de dólares. El mayor
ingreso anual por exportación de gas a la Argentina fue el de 1982 con un total de 381,6
millones de dólares.
Las gigantescas reservas de gas del país plantearon muy rápidamente la necesidad de la
apertura de nuevos mercados que permitieran un ingreso adicional. La opción más
atractiva era la de exportar gas natural a México y Estados Unidos. Otro de los temas que
se puso en el debate fue el de la posibilidad de darle un valor agregado al gas, con la
construcción de plantas petroquímicas que permitiera mejores ingresos. Paradójicamente,
este potencial energético no se había traducido en el desarrollo de una nueva matriz
energética boliviana basada en el gas y una expansión de las redes urbanas de gas
natural que cubrieran los requerimientos de consumo de una población dependiente del
gas licuado, el kerosen o la leña en el área rural.
Y ELECCIONES PRESIDENCIALES (1997)
Las elecciones municipales de fines del 93 ratificaron la mayoría del MNR. Lo más
destacado fue el mal resultado para el MIR (9,3 %) y la ADN (11,4%), al punto que el jefe
adenista Hugo Banzer renunció a la jefatura de su partido un mes antes del proceso
electoral, previendo el resultado. Se pensó que sería el retiro definitivo de Banzer, pero los
hechos políticos lo desmintieron. Por el contrario, en 1997 fue elegido Presidente
Constitucional.
Los elementos básicos del neoliberalismo son los siguientes: a) Fortalecer el mercado
para distribuirse el poder y la riqueza; b) El Estado no funciona en el derecho social; c) El
derecho social detiene los planes de desarrollo que estimulan a los ricos; d) La división
internacional del trabajo elimina el derecho social; e) El libre comercio consume el derecho
social; f) El mercado de capitales frena el derecho social; g) Capital disponible para ganar
más y pagar salarios bajos; h) La especulación contra el derecho social; i) La
desocupación elimina los obstáculos para la empresa privada.
GLOSARIO
Tasa:
Descentralización:
CONSECUENCIAS DE LAS POLÍTICAS NEOLIBERALES
GLOSARIO
Precarización:
Parcelación:
LOS GOBIERNOS DE SÁNCHEZ DE LOZADA (2002-2003)
Gonzalo Sánchez de Lozada (La Paz, 1 de julio de 1930) fue presidente de Bolivia en dos
ocasiones (1993-1997; 2002-2003). En las elecciones de 1989, ganó por mayoría relativa,
pero perdió la presidencia en el Congreso ante la alianza del segundo (Hugo Banzer) y el
tercero (Jaime Paz Zamora), que llevó a la presidencia a este último.
En el 2002 Sánchez de Lozada gana las elecciones seguido muy de cerca por su rival
imprevisto Evo Morales. Sin embargo, no consigue la mayoría absoluta y la elección del
Presidente debe realizarse en el Congreso Nacional entre los dos candidatos con mayor
votación. En este sentido, con apoyo del MIR y NFR, Sánchez de Lozada es elegido
presidente constitucional hasta el 2007.
En su segundo mandato quiso continuar con su política neoliberal que fue mal por varios
sectores de la población, organizaciones sociales y políticas. Esto produjo que se
realizaran dos huelgas generales de los sectores asalariados. Sin embargo, el paro y
protesta cívico-vecinal organizado en la ciudad de El Alto, que comenzó el 8 de octubre,
en rechazo a las intenciones del gobierno de vender el gas natural a EEUU y México por
un puerto chileno, pusieron al gobierno en un callejón sin salida. Sánchez de Lozada lejos
de atender esta demanda popular, ordenó al ejército reprimir duramente todas estas
movilizaciones. Esta medida dio lugar a disturbios y a una verdadera insurrección popular
que esta vez exigía su renuncia. Ante las dimensiones de la revuelta, que produjo
divisiones en el ejecutivo, Sánchez de Lozada dimitió el 1 7 de octubre de 2003 y huyó del
país rumbo a los Estados Unidos, haciéndose cargo del gobierno el vicepresidente Carlos
Mesa.
GLOSARIO
Privatización:
CARLOS D. MESA, PRESIDENTE INTERINO (2003-2005)
Carlos D. Mesa Gisbert (La Paz, 1 2 de agosto de 1953) es un político boliviano que fue
elegido vicepresidente de Bolivia durante el segundo período de Gonzalo Sánchez de
Lozada (2002-2003). Después de que el presidente fuera obligado a dejar el cargo, el 1 7
de octubre de 2003, Mesa fue nombrado presidente interino de la República,
Durante su mandato Carlos Mesa disfrutó de gran popularidad (62 % de promedio), que se
mantuvo por sus promesas de convocar una Asamblea Constituyente llevar a cabo un
referéndum sobre los hidrocarburos. También impulsó la elección directa de prefectos,
ahora gobernadores.
Después de un resurgimiento en las protestas del gas, tras semanas de nuevas protestas
callejeras de las organizaciones sociales que acusaban a Carlos Mesa de ceder a los
intereses de Estados Unidos, el presidente ofreció su renuncia al Congreso (6 de marzo
de 2005), pero fue rechazada por unanimidad. El 6 de junio Mesa ofreció su renuncia
definitiva, debido a la presión de sectores tanto de izquierda corno de derecha, que pedían
la elección inmediata de asambleístas constituyentes, la realización del referéndum
autonómico y la nacionalización del gas.
GLOSARIO
Interino:
Asamblea Constituyente:
Referéndum:
EL MOVIMIENTO COCALERO
Bloqueo en una carretera. Evo Morales, Felipe Quispe y sus Manifestación de las federaciones productoras de coca
seguidores emplearon el bloqueo de caminos como medida de del Chapare, Cochabamba.
presión contra los gobiernos de turno. Esta práctica ocasiona
malestar en la población y grandes pérdidas económicas para
distintos sectores productivos del país.
El sector cocalero es uno de los componentes más dinámicos de la lucha social en Bolivia
y uno de los que más contribuyó a revitalizar y fortalecer el movimiento sindical
campesino. La base social de este movimiento está formada por migrantes quechuas,
aymaras y extrabajadores mineros. Estos últimos fueron obligados a emigrar hacia el
trópico cochabambino debido a la caída de los precios del estaño en 1985 y la
promulgación del decreto 21060, que determinó el cierre de las minas y la relocalización
de miles de trabajadores.
A inicios del siglo XXI su participación alcanzó una mayor importancia, ye que su lucha
estuvo marcada por conflictos violentos a fines del 2001 parte del 2002 ante el
agravamiento de las políticas del Estado de militarizar las zonas de cultivo de coca no
tradicional (Trópico de Cochabamba). Sin embargo, en el 2002 pasaron de las acciones
violentas de confrontación con el Estado a optar por una confrontación por vía de la
política institucionalizada a través de un partido político propio: el Movimiento al
Socialismo (MAS).
Los bloqueos de caminos fueron las acciones colectivas más utilizadas por el movimiento
cocalero del Chapare. Estas acciones tuvieron éxito porque tenían la capacidad de
incomunicar a la región andina con el oriente boliviano, El bloqueo de la carretera troncal
Cochabamba-Santa Cruz suponía grandes pérdidas económicas al sector empresarial, así
como el desabastecimiento de las principales capitales del país.
Otra de las prácticas eficaces utilizada por los cocaleros, como mecanismo de
sensibilización, han sido las marchas de grandes grupos de población. La huelga,
considerada como una acción convencional consistente en dejar de trabajar con el objetivo
de conseguir ventajas laborales o sociales, fue utilizada como una medida de
reforzamiento a los bloqueos y las marchas cocaleras.
GLOSARIO
Erradicación:
Relocalizar:
LA GUERRA DEL AGUA EN COCHABAMBA
La llamada Guerra de/ agua es el primer conflicto del ciclo de movilizaciones contra la
globalización y en defensa de los recursos naturales en Bolivia. En 1997, durante el
gobierno de Bánzer, el Banco Mundial impuso la privatización del agua en la ciudad de
Cochabamba como condición para la ayuda financiera, Los derechos se entregaron a la
compañía Aguas del Tunari, subsidiaria de la corporación transnacional Bechtel.
La Ley 2029, promulgada en octubre de 1999, establecía el mercado de aguas que en los
futuros cinco años dejaría de ser un bien común e ingresaría a la libre oferta y demanda.
Esta norma fue analizada por agricultores y campesinos, quienes manifestaron su rechazo
total. En noviembre se llevó a cabo el primer bloqueo campesino y de regantes en las vías
de acceso a la ciudad de Cochabamba. Posteriormente, se organizó la Coordinadora
Departamental del Agua y la Vida, con la participación de la FEDECOR, el Comité de
Defensa del Agua, organizaciones de trabajadores, estudiantes, maestros, organizaciones
vecinales, ambientales, etc.
En enero del año 2000, Aguas del Tunari incrementó las tarifas un 200 % y controlaba
todos los sistemas de agua, las cooperativas de los barrios y las fuentes de riego. Cuando
los vecinos comenzaron a recibir las facturas de agua se comenzó a generalizar la
protesta y la Coordinadora impugnó la concesión, saliendo a las calles de Cochabamba
para protestar. El gobierno del general Hugo Banzer mandó capturar a los dirigentes de la
Coordinadora, decretó el estado de sitio de la ciudad durante noventa días y la ciudad fue
ocupada militarmente.
E! movimiento reunió a más de medio millón de personas que salieron a las calles a
protestar, pero esto ocasionó una represión desmedida por parte de la policía. El
enfrentamiento causó decenas de heridos y muchas personas quedaron inválidas de por
vida a causa de los golpes y al gas lanzado por las fuerzas policiales.
GLOSARIO
Oferta:
Demanda:
Rescindir:
LA GUERRA DEL GAS: OCTUBRE NEGRO
El movimiento social más reciente en Bolivia fue la denominada Guerra del gas, que
fueron jornadas de lucha y movilización del pueblo por el recurso del gas que tuvieron
lugar desde mediados de septiembre hasta octubre de 2003.
GLOSARIO
Indiscriminada:
Inflexión:
Estipula:
DE LÍDER COCALERO A DIPUTADO NACIONAL
Juan Evo Morales Ayma fue elegido en 2005 como el sexagésimo quinto Presidente del
Estado Plurinacional de Bolivia, político y líder del movimiento cocalero boliviano, nació en
Orinoca, departamento de Oruro, el 26 de octubre de 1 959. En la historia de Bolivia es el
primer indígena de origen aymara que alcanza la jefatura del Estado.
A principios de los años 80 emigró con su familia hacia el este de Bolivia estableciéndose
en la zona del Chapare, trópico de Cochabamba, donde se dedicó a la agricultura. Durante
los años 90 comenzó a tomar parte de las luchas de los cocaleros contra el gobierno del
presidente y exdictador Hugo Banzer Suárez, que intentó la erradicación de estos cultivos
bajo la supervisión de los Estados Unidos sin lograr resultados importantes. Morales formó
parte de una federación de campesinos cocaleros que defendía el cómo cultivo de esta
planta como parte de la cultura ancestral de los indígenas.
Cuando Sánchez de Lozada asume su segundo mandato en agosto del 2002 debe
enfrentar con una crisis social y económica heredada del anterior gobierno, que lo llevarán
a tomar medidas impopulares cuyo resultado definitivo sería su renuncia y huida del país
el 17 de octubre del 2003, Este levantamiento popular fue aprovechado por el MAS y por
el Movimiento Indígena Pachakuti.
GLOSARIO
Erradicación:
Ancestral:
Federación:
Sindicato:
Coalición:
Escaño:
Gremio:
Vehemencia:
Instigar:
Comicios:
PRESIDENCIA DE EVO MORALES AYMA (2006-2020)
Estas elecciones las ganó Evo Morales con un 54 % de apoyo a nivel nacional. El 22 de
enero de 2006 fue posesionado como el primer presidente indígena de Bolivia, Desde esa
fecha hasta enero del 2020 será el mandatario que más años gobernará Bolivia, 14 años
en total, tres mandatos consecutivos.
1. Contundentes triunfos: Morales hizo historia desde el mismo día en que ganó las
elecciones el 2005 al obtener el 54 % de los votos, convirtiéndose en el primer presidente
en democracia en lograr mayoría absoluta. También promovería otros procesos
electorales y los ganaría todos. En 2008 se impuso en el referéndum revocatorio con el 67
% de los votos; en 2009 volvió a ganar las elecciones generales con el 64 % y en 2014
triunfó con el 61% de los sufragios.
4. Lucho autonómica o Intento de golpe cívico prefectural: El 2008 el país estuvo en vilo
porque las regiones opositoras, agrupadas entonces en la denominada “media luna”,
protagonizaron protestas para exigir al gobierno de Morales más autonomía y recursos
económicos. Convocaron a referendos autonómicos que fueron declarados ilegales por el
Gobierno central. La situación se tornó incontenible cuando los autonomistas empezaron a
tomar las instituciones regionales, se produjeron enfrentamientos violentos y detenciones,
El punto culminante de esta feroz confrontación ocurrió en Porvenir, Pando. El saldo fue
fatal en el que murieron 1 1 campesinos y dos funcionarios prefecturales.
8. Elecciones judiciales y fracaso de reforma judicial: Uno de los grandes fracasos del
gobierno de Morales es la reforma judicial. En octubre de 201 1 Bolivia se convirtió en el
primer país del mundo en elegir, por voto directo, a los altos magistrados del Poder
Judicial, lo que no redujo la extrema corrupción de este órgano del Estado.
9. Lo llegada del Papa y los choques con la Iglesia: En julio del 2015 el papa Francisco
llega al país produciendo una euforia nacional pocas veces vista. Pero, tal vez, lo más
importante de esta excepcional visita fue disminuir el enfrentamiento del Gobierno con la
Iglesia Católica de Bolivia.
10. Los medios y ONG: Morales declaró a los medios de comunicación como sus
enemigos y su gobierno encaró una estrategia de cooptación, compra accionaria, presión
a través de impuestos y otro tipo de controles estatales a los medios independientes,
Promovió la redacción de leyes limitativas de la libertad de expresión. La misma suerte de
los medios corrieron las fundaciones, ONGs, y otras organizaciones independientes que
fueron declaradas contrarias a la línea gubernamental.
GLOSARIO
Hito:
Referéndum
Revocatorio:
Bonanza:
Recinto:
Vilo:
Quiebre:
Componente:
Cooptar:
ONGs: