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I. PROBLEMA DE INVESTIGACION
Debemos ubicar a la mujer dentro del contexto globalizado, en una sociedad donde
ha logrado alcanzar un status y reconocimiento de sus derechos. Este
reconocimiento de derechos le permite desenvolverse con más seguridad y, en aras
del reconocimiento de esas libertades, queda a potestad de la mujer comportarse
conforme o no a derecho.
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1.1 FORMULACION DEL PROBLEMA:
3
II. JUSTIFICACIÓN E IMPORTANCIA DE LA INVESTIGACIÓN
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III. OBJETIVOS DEL ESTUDIO
Investigar cuáles son los tipos de delitos que cometen las mujeres y darles
una explicación científica
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IV. MARCO TEÓRICO
Durkheim afirmaba que la criminalidad es un hecho social, que debe ser explicado
sociológicamente, por ello se pasó del estudio individual a un tema social, así se
establece un equilibrio entre valores y normas y los medios institucionalizados para
alcanzarlos, de lo contrario se impulsa la conducta desviada.
Es de tener en cuenta que por influjo de la escuela clásica del Derecho penal y el
positivismo psicobiológico, ha sido frecuente considerar el fenómeno de la
delincuencia como una realidad exclusivamente individual; sin embargo,
actualmente la mayoría de los criminólogos afirman que la delincuencia es un
fenómeno estrechamente vinculado a cada tipo de sociedad y es un reflejo de las
principales características de la misma, por lo que, si se quiere comprender el
fenómeno de la delincuencia resulta imprescindible conocer los fundamentos
básicos de cada clase de sociedad, con sus funciones y disfunciones.
6
4.2. ANTECEDENTES: CRIMINALIDAD DE LA MUJER A LO LARGO DE LA
HISTORIA
Como resultados se identifican dos clases de mujeres: las mujeres buenas y las
mujeres malas. Alrededor de esta asunción se asumía también que “el crimen era
resultado de la voluntad individual, de una elección individual”; por lo tanto, las
mujeres eran libres para elegir la no delincuencia, invalidando la influencia del
mundo social, económico y político.
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poco, estas han sido socializadas para aceptar su situación y valorar su castidad
como una inversión. Las mujeres de clase baja no se han socializado de esta
manera, no han sido socializadas para suprimir su necesidad de seguridad y por lo
tanto delinquen por deseo de excitación y nuevas experiencias.
Las mujeres reciben un trato diferente en las justicia porque seducen a los jueces y
policías y, en consecuencia, estos se muestran mas benévolos con ellas que con
los hombres, lo que hace que las cifras de sus crímenes se escondan. El y muchos
otros teóricos pioneros, explicaron los crímenes económicos femeninos por motivos
sexuales de base psicológica y fisiológica. No consideró que las mujeres
delincuentes suelen ser pobres o que han dejado de lado definiciones de roles de
mujer chovinistas, clasistas y racistas.
8
hijos y parejas, son más duramente condenadas que los hombres, por el mismo tipo
de delitos.
Es en el siglo XVII, producto de la ruina del sistema feudal (lo que provocó el
nacimiento de la burguesía con un nuevo orden económico) y la contrarreforma
religiosa que convirtió el orden social en un orden moral inflexible, se produjo un
cambio de pensar y ejecutar con referencia al problema delictivo de la mujer; se
crean las cárceles específicas para las féminas a las que se les denominó “Galeras
de mujeres”1.
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El resultado de los estudios de Lombroso indicó que las mujeres asesinas tienden
a tener más características degenerativas; ya que en sus crímenes, ellas
demuestran una crueldad excesiva aplicada a algún tipo de tortura que imputan
sobre sus víctimas.
Según Proal, el hecho de que la mujer cometiera menos delitos que el hombre se
debía a que la mujer era superior al hombre moralmente. Por otro lado Bean
comparando los cerebros de distintas razas, de hombres y mujeres, llegó a la
conclusión de que la mujer poseería una inteligencia inferior a la del hombre, teoría
que por razones obvias no es cierta.6
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Una de las tesis más resaltantes fue la de Van de Warker, quien afirmó que la
relación entre la mujer y el crimen estaban ligadas a condiciones sociales y
sexuales. Para él los delitos del hombre son motivados por la pobreza o por un
agravio previo en cambio la mujer los comete por desequilibrios mentales.
En la actualidad, las mujeres desempeñan los mismos roles o trabajos que los
hombres; sin embargo en cuanto a la criminalidad femenina, hay un bajo índice de
ésta comparado a la que realiza el hombre: ¿por qué?, ¿cuál es el elemento que los
diferencia?
A pesar que en un primer momento se piense que deba existir algún rasgo biológico
o de personalidad femenina que las diferencie de la criminalidad masculina; lo cierto
es que no lo hay, pues lo único que se puede notar son las diferencias cuantitativas
(estadísticas) y no las cualitativas. Ello a pesar de tener la misma base para incurrir
en delitos que los hombres: fracaso escolar, el control social y la falta de
oportunidades para integrarse a la sociedad.8
11
este movimiento han intentado poner de relieve los problemas que lleva consigo la
delincuencia femenina.
Los estudios de género han abierto una nueva perspectiva para el estudio de la
delincuencia femenina, como superación de las explicaciones puramente sexuales,
de carácter biológico, de la delincuencia. Analizamos la delincuencia femenina
partiendo de la diferenciación de géneros, que los distinguen por la conjunción de
una serie de factores psicológicos y sociales, y no biológica y natural, que hará que
se desprenda de las teorías clásicas sobre las causas de la delincuencia femenina
y sobre la justificación de su bajo volumen.
12
Ni siquiera los pronósticos del movimiento feminista de liberación de la mujer se han
cumplido acerca del aumento de la delincuencia femenina, con la igualdad de
oportunidades entre el hombre y la mujer y su equiparación en la vida socio laboral.
Lo que vino a demostrar que no era suficiente una igualdad de oportunidades entre
el hombre y la mujer para que ésta cometiera el mismo número de delitos que los
hombres.
Tenemos que buscar otras causas para explicar las bajas cifras de delincuencia
femenina, que no se justificaban, exclusivamente, por la desigualdad de
oportunidades.
13
La equiparación hombre-mujer ante el delito no solamente supondría cuestionarse
la igualdad en todos los campos, sino también terminar con los valores que le han
sido impuestos tradicionalmente a la mujer en la estructura social.
14
Sin embargo, esa misma socialización actualmente, por los roles, ámbitos de vida
social y laboral; se ha modificado a tal punto que ha cambiado de alguna manera a
la delincuencia femenina; pues ahora ésta ha aumentado en su participación en
faltas contra la salud pública, tráfico ilegal de drogas y delitos violentos. No obstante,
la criminalidad de la mujer no ha podido igualar a la del hombre; a pesar de que
ambos gocen de paridad en ámbitos laborales, educativos y sociales.11
Por eso, en este ciclo, la perspectiva para estudiar la delincuencia femenina se dará
a través del análisis del papel o rol que cumple la mujer en la sociedad actual y del
nuevo estatus que ejercerse en la misma.12
El aborto.
Infanticidio
Homicidios cometidos por el cónyuge. Normalmente están motivados a una
historia de violencia acumulada en los cuales la víctima pasa de ser la víctima
para convertirse en victimario
Hurtos en los supermercados
Prostitución.
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la manera y forma de delinquir, puede superar a un hombre, varia la criminalidad,
delitos como:
Robo
Homicidio
Tráficos de drogas
Estructuras mafiosas
Familias del crimen organizado
Otro factor que interviene es la envidia que pueda sentir la mujer, los tipos de caso
que se pueden dar son: dentro de su familia, la atención que puedan recibir otros
miembros de esta puede llevar a la mujer a sentirse rechazada y por lo tanto la hará
sufrir de depresión y podría generar el odio.
Pero sin duda, son los crímenes de pareja los más constantes y cometidos por
mujeres, ya que algunas al ser engañadas por su pareja toman decisiones en el
momento y sin pensar, se obnubilan y realizan los crímenes. Por lo tanto pueden
llegar a asesinar no solo a su pareja sino también a la persona con la que tiene otra
relación.14
16
hacen investigaciones para este caso, pues los factores que llevan a una fémina a
realizar un crimen en muchos casos inexplicables.
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Uno de los factores importantes que tienen probabilidad de poner en marcha el
mecanismo que puede llevar a una mujer a ser delincuente, es la baja categoría en
el sistema de las clases sociales, la deficiencia en la educación, la pobreza, un
ambiente familiar inadecuado o perturbado, la residencia en un mal vecindario y la
pertenencia a una familia numerosa. Así, los factores adversos tienden a
presentarse todos juntos y a actuar recíprocamente hasta el punto de crear una
situación que puede inducir a un individuo a cometer conductas ilícitas.
Otro de los factores, es la desigualdad que continúa siendo un eje central del
diagnóstico sobre la vigencia de los derechos. A pesar de ello, no es una cuestión
que ocupe un espacio destacado en las políticas públicas de los Estados. Si bien
durante los últimos años se consolidó un proceso de recuperación económica y en
algunos países se redujeron los indicadores de pobreza e indigencia, siguen
existiendo millones de personas que confrontan problemas de desempleo
estructural, marginación social e inaccesibilidad a servicios sociales básicos.
Tampoco ha variado la situación de desigualdad fáctica y jurídica que afecta a las
mujeres así como a grupos tradicionalmente discriminados.
Es de advertir que los índices de criminalidad se han disparado en las últimas dos
décadas que han preocupado a los organismos internacionales como el Banco
Mundial y la Organización Mundial de la Salud. En un estudio realizado por el Banco
Mundial a algunas capitales de América Latina, dentro de las que se encuentra Lima
como una ciudad que incrementa su criminalidad femenina.16
Entre las teorías más conocidas que intentan explicar la desproporción cuantitativa
que siempre ha existido entre la criminalidad masculina y la femenina, señalan:
18
teniendo en cuenta características fisiológicas y alguna psicológica. Su obra fue muy
criticada ya que rasgos físicos que asociaba a mujeres delincuentes también los
tenían mujeres no delincuentes. Sin embargo, hubo otros autores que siguieron
compartiendo sus ideas.
Nuestro grado de impulsividad tiene que ver en parte, del nivel de serotonina
en el cerebro.
Nuestro grado de agresividad depende del nivel de testosterona en
circulación en los varones.
19
La paleopsicología, nos explica otra manera del comportamiento agresivo, en la que
la regresión a un nivel de funcionamiento más primitivo anula el poder de
socialización. Todas estas personas no pueden controlarse, es por ello que actúan
por su propia fuerza interior, la cual es innata e irresistible. Carecen de poder inhibir
su comportamiento, ya que cuando cometen sus crimines se vuelven como
primitivos. En cierto sentido estos individuos se convierten en “victimas” de sus
propios impulsos porque no pueden controlarlos, y también debido a una difusión
neurobiológica.19
Bailey (1987) reconoce en los seres humanos crónicamente violentos los mismos
patrones de acción fijos que tienen los animales depredadores: acechar, atacar,
matar.20
20
4.5.2. FACTORES Y TEORÍAS SOCIOECONÓMICAS
Las mujeres desde pequeñas ya tienen una marcada distinción familiar, la cual se
asienta en la educación, para luego recibir una carga histórica de control doméstico
y tienen limitada su movilidad social y acceso a diversos derechos, desde las ideas
que el hombre es de la calle y la mujer de la casa, siendo todas aquellas
circunstancias que hayan generado una mala superioridad del hombre frente a la
mujer de ahí la violencia de género. Muchos espacios se perdieron en la práctica
las mujeres por estos paradigmas mal fundamentados.
Una de la razones que se dan para explicar que exista menos delincuencia femenina
que masculina es que la mujer está sometida a un mayor control social informal que
el hombre y este control reprime, impide y excluye y limita a las mujeres24. La forma
de socialización es distinta en los hombres que en las mujeres y también es
diferente dependiendo la clase social. Ambos presentan características diferentes,
por ejemplo: la mujer es supervisada más de cerca que el hombre por la familia, se
las educa para ser sumisas y pasivas, mientras que a los del género masculino se
les socializa para que sean más independientes, agresivos, ambiciosos y
luchadores. Por este motivo, los delitos que comete la mujer se dan con menor
violencia a comparación de los hombres.
21
4.5.2.2. Teoría sociológica de la liberación femenina: Entre otros factores que
contribuyen con la criminalidad tenemos las asociadas: a la mayor libertad de la
mujer, los movimientos de liberación femenina, el cambio de oportunidades en el
contexto social debido al incremento de posibilidades para que participe en
sociedad, esto le ha hecho acercarse a otro tipo de personas, medios y
comunidades y así cometer delitos que antes no cometía; así como, los cambios
sociales, provocados por el crecimiento económico entre otros.
Uno de esos movimientos activos fue el de las mujeres. Ellas lideraron una lucha
por el reconocimiento de su identidad, sus derechos y un lugar en la sociedad. La
búsqueda de la identidad “es un cambio tan poderoso como la transformación tecno-
económica en el curso de la nueva historia”.
A. Teoría del Rol: Estos tienen como objetivo la socialización que difiere entre
hombres y mujeres a la hora de desempañar sus respectivos roles y por lo tanto de
explicar su conducta.25
22
La explicación del estudio de la delincuencia femenina e investigada desde el punto
de la diferenciación social de los roles sexuales es uno de los primeros intentos de
analizar el fenómeno de la delincuencia femenina en términos distintos a los
enfoques biológicos y psicológicos.26
Teoría de la reversión del rol: Estos estudios consideran que la mujer, como
consecuencia de su ruptura con su rol sexual tradicional, poco a poco ira
aproximando su delincuencia al prototipo de la masculina, virilizando y asumiendo
el rol del hombre.28
26FULLER, Norma. “La perspectiva de género y la criminología: Una relación Prolífica”, en revista
Tabula Rasa, Bogotá, No. 8, 2008, pp 97-110
27 LIMA MALVIDO, María. Criminalidad femenina: Teorías y reacción social, México: Porrúa, 2003
28 DOLORES SERRANO, Tárraga, VÁSQUEZ GONZÁLES, Carlos, (2012), Delincuencia femenina
29 DOLORES SERRANO, Tárraga, VÁSQUEZ GONZÁLES, Carlos, (2012), Delincuencia femenina
30 SAIFILDIN STANLEY, Manuel. “Introducción básica al estudio de la Criminología”
23
Por lo tanto en el momento en el que la mujer incursiona o cumple un papel de
igualdad de oportunidades que el hombre, se suponía que también se presentarían
más probabilidades que ésta pueda delinquir, sin embargo esto no ocurre porque el
acceso de la mujer al mundo laboral no da como resultado que ésta cometa la
misma cantidad de delitos o de la misma gravedad que los varones.
Concluyendo:
En las mujeres delincuentes apreciamos que concurren los mismos factores que
determinaron a los hombres a cometer delitos, entre los que destacan el fracaso
escolar, el control social y la falta de oportunidades para integrarse en la sociedad.
La mujer debe corresponderse con el papel social que se le atribuye y debido a los
24
casos en los que delinque, se entiende que ello se debe al padecimiento de alguna
anormalidad biológica o psicológica, que se manifiesta en su conducta, que genera
un virilización de la misma impropia de su sexo.
33COOPER MAYR, Doris. Criminología y delincuencia femenina en Chile, Santiago: Editorial LOM,
2002.
34 LIMA MALVIDO, María. Criminalidad femenina: Teorías y reacción social, México: Porrúa, 2003
35 MEZA Daniel, " Rosa María Cifuentes se sumerge en el perfil psicológico de las mujeres asesinas
25
Siempre que se hacen estudios acerca de las razones del porqué una mujer llega
al extremo de matar, se encuentran problemas personales que ésta pudo padecer,
y los cuales derivan en problemas psicológicos, y por esa razón, es que también
muchas terminan convirtiéndose en asesinas en serie, porque ya pierden el sentido
de la realidad y se vuelven frías, y aparentemente sin sentimientos.
26
Trastorno esquizotípico de la personalidad: consiste en un patrón de malestar
interno en las relaciones personales, distorsiones cognoscitivas o
perceptivas y excentricidades de comportamientos.
Así mismo, el perfil psicológico de la mujer peruana varía, ya que no todas presentan
las mismas características, sin embargo en líneas generales podemos decir que
tienen problemas para manejar el dolor, traición, desamor, el rechazo o abandono,
y en algunos casos suelen ser ambiciosas es decir tener todo para ellas y acceder
a su objetivo a como dé lugar no importándoles asesinar a sangre fría quienes se
27
pongan en su camino. No obstante el detonante en la mayoría de casos suele ser
una pena o miedo que no la supieron controla o manejar.38
Esta periodista tomó un tiempo muy largo para investigar, indagar y hacer una
recopilación acerca de los asesinatos más importantes que han ocurrido en nuestro
país, y afirma que son varios los motivos por los cuales las mujeres cometen este
tipos de crimen, explica que a diferencia del hombre, va perdiendo el control se sus
propias emociones, por ende reacciona por estímulos. Mata por odio, miedo,
venganza o por poder, y peor aun cuando es víctima de una infidelidad, ya que
comienza todo un proceso emocional donde finalmente acaba en la muerte segura
de sus parejas hasta inclusive de sus propios hijos. Hay casos donde luego de
acabar con ellos, la madre se termina suicidándose, porque no puede creer de lo
que hizo y comúnmente son estos tipos de historias las que aparecen en espacios
informativos como noticieros entre otros.40
Más adelante, la escritora clasifica en forma bastante genérica los tipos de asesina,
mujeres de la sierra y de la costa. Afirma que las primeras son muy violentas,
28
despiadadas, su modalidad de cometer un asesinato es muy fuerte, utilizan hasta
un hacha para ejecutar su cometido y que después de haber realizado al crimen,
estas mujeres siguen su vida como si nada hubiera pasado, clara característica que
las hace distintas de otras asesinas. Las de la costa utilizan objetos más artesanales
como cuchillos, navajas o en algunos que otros casos, pistolas, matan por desamor,
por infidelidad, pero estas si tienden a presentar trastornos psicológico y depresión
en un futuro. Sin embargo la modalidad de usar veneno para asesinar no ha
cambiado, hoy en día se sigue utilizando pero con otro nombre, es decir lo que antes
era Folidol, ahora es Racumín por ejemplo.
Al finalizar la periodista afirma que cualquier persona que no puede controlar sus
emociones puede terminar asesinando a alguien, pues esto no solo le puede pasar
a una mujer sino a cualquiera.41
De todo lo anterior debemos deducir que no todas las mujeres homicidas tienen el
mismo perfil psicológico; el grado de violencia es también una característica para
poder diferenciar los distintos niveles. Unas presentan trastornos y les remuerde la
conciencia después de haber cometido el crimen y otras no, siguen con su vida de
lo más normal.
41MEZA Daniel, " Rosa María Cifuentes se sumerge en el perfil psicológico de las mujeres asesinas",
Entrevista El Comercio
29
sin embargo, no se incluyen en esta selección, crímenes perpetrados por personas
con diagnósticos psiquiátricos.42
Los once casos que la Periodista redactó y que se encuentran en su libro, son un
reflejo del como la mujer peruana homicida ha ido cambiando con el pasar del
tiempo (Siglo XX y XXI), a pesar de que algunas historias se repitan. El móvil
muchas veces es el dolor que se diversifica en: odio, miedo, venganza y poder.
En cuanto a diferencias con el hombre criminal, se puede ver que este es más
violento que la mujer, por lo tanto actúa más rápido, en cambio la mujer realiza una
planificación del acto criminal y se demora en tomar una decisión.
Rosa María Cifuentes también afirma que el Perú es un país machista, situación
que se da más en los sectores más pobres de nuestro país, y que la mujer es
anulada laboralmente por el hombre. La mujer que no se valora y sufre de
depresión, es una mujer peligrosa.43
42 CIFUENTES CASTAÑEDA, Rosa María (2008) “Asesinas”, Editorial, Editora Mesa Redonda
E.I.R.L.
43 MEZA Daniel, " Rosa María Cifuentes se sumerge en el perfil psicológico de las mujeres asesinas"
30
La periodista no presenta eso como una justificación, pero interpreta que cualquier
ser humano que no maneja sus emociones o su dolor puede convertirse en asesina,
además el tema del machismo se presenta en muchos casos de su libro.
Según los resultados del Censo Nacional 2007 (INEI) el Perú tiene una población
de 28’220,764 habitantes. Las regiones más pobladas son Lima, Piura, La Libertad,
Cajamarca y Puno. Estas cinco regiones concentran el 52,5% de la población
nacional (INEI 2008). La región con mayor población es Lima, que concentra el 30,8
% del total.
Respecto a la composición por sexo, existe una proporción casi paritaria entre la
población femenina y masculina, aunque con mayor porcentaje de mujeres. “Según
el censo del 2007, la población masculina del Perú es 13 millones 622 mil 640
hombres, que representan el 49,7% de la población censada, y la población
femenina fue 13 millones 789 mil 517 mujeres, es decir el 50,3%” (INEI – 2008).
31
procurar el bienestar familiar, lo que resalta la tendencia de un equilibrio de hombres
y mujeres en lo que vendría a ser como un empoderamiento de la mujer respecto a
las obligaciones del hogar; situación que podría traer como explicación diversas
situaciones sociales, como: el abandono, divorcios, separaciones, maltratos que
conllevan a que la mujer tendría que afrontar la responsabilidad de criar a los hijos;
lo que genera insatisfacciones en su persona y verse obligada a procurar la
manutención de los hijos.
La tasa de ocupación presentó poca diferencia por sexo, es así que, el 95,9% de la
PEA masculina se encontró en calidad de ocupado, mientras que la PEA ocupada
femenina fue de 93,9%. Es decir, que de cada 100 personas que conforman la PEA
masculina, 96 estuvieron realizando actividades productivas y 4 se encontraban
buscando empleo y en el caso de las mujeres 94 estuvieron realizando actividades
productivas y 6 se encontraban buscando empleo.
Por otro lado a setiembre del 2011, las estadísticas revelaron que a nivel nacional
la población en edad de trabajar (PET), es decir las personas que tienen edad para
desempeñar una actividad económica, constituyeron casi tres cuartas partes del
total de la población para cada sexo. Así, por el lado de la población masculina en
un 72,0%, mientras que la población femenina en un 72,9%.
32
Pero otra problemática asociada es el aborto. “Cada año alrededor de 115 mil
adolescentes resultan embarazadas, mientras que el 20% de los abortos y el 25%
de las muertes por complicaciones en el parto o el puerperio (periodo posterior al
parto) que ocurren en nuestro país, corresponden a este grupo poblacional”.
Los resultados y el impacto de las políticas son distintos para hombres y mujeres
debido a que las mujeres tienen menos acceso a los recursos económicos, sociales
y culturales y sus condiciones materiales de vida son más precarias y de menor
calidad debido a los roles que les asigna la sociedad, que con frecuencia terminan
sobrecargando a las mujeres en su jornada diaria y afectando su salud.
SE TIENE QUE:
La tasa de actividad económica es, para los hombres 82.3% y para las
mujeres 64.8%. La tasa de actividad de la mujer en el área urbana alcanza
el 63.0% y de la mujer del área rural, 74.1%.
33
El 67% de las mujeres frente al 53% de los hombres, trabajan en el sector
informal. Por cada 100 hombres hay 108 mujeres en pobreza extrema.
34
5.2. INDICES DE LA MUJER ENCARCELADA: ESTADÍSTICAS DEL INPE
46 http://www.seguridadidl.org.pe/libros/yepez/leccion03.pdf
35
Con la finalidad de responder a este objetivo, hemos tomado información brindada
por el Consejo Nacional Penitenciario, el cual presenta informes Estadísticos luego
de transcurridos seis meses del año en curso. En este informe, se describen las
variables más representativas de la población penitenciaria tanto intramuros como
extramuros.
Se puede decir que desde los 18 años de edad hasta los 29 años de edad, las
personas están en condición de capacitarse y producir activamente; así tenemos
que este grupo está conformado por el 36% del total de internos, datos que son muy
importantes para evaluar los programas de políticas preventivas encaminadas a
cambiar la conducta delictiva.
36
La población de mujeres es de 3,264 internas y constituye el 4% de la población
total.
37
5.2.2. POBLACION PENAL FEMENINA POR SITUACION JURÍDICA
POBLACIÓN PENAL FEMENINA POR SITUACIÓN JURÍDICA SEGÚN OFICINAS
REGIONALES (Junio-2012) 47
38
En este cuadro podemos observar la situación jurídica de las mujeres en las
distintas provincias del Perú. Observamos que Lima se presenta como la zona
donde más población penitenciaria existe y, a la vez, en cuanto a la situación
penitenciaria, observamos que, en éste distrito, existen más mujeres procesadas y
sentenciadas que en las demás provincias. En segundo lugar tenemos la Región de
Huánuco como el lugar con mayor población penitenciaria femenina con procesados
y sentenciados.
En muchos casos, las mujeres detenidas y privadas de libertad son madres de niños
menores de tres años que solicitan el ingreso del menor para su cuidado, teniendo
el INPE que brindar a dicho niños albergue, alimentación, educación y otros
servicios en cumplimiento de la normatividad establecida, en otros casos, las
internas son recluidas cuando se encuentran en gestación y cuando dan a luz, sus
hijos forman parte de la población de niños a cargo del sistema penitenciario. Por
último, se tiene el caso de las internas que estando recluidas se embarazan al recibir
su visita conyugal. En el mes de febrero, el INPE tuvo a su cargo a 188 niños: 102
varones y 86 mujeres, y la mayor parte son menores de un año (68 entre hombres
y mujeres). La mayor cantidad de niños se encuentra en el establecimiento
penitenciario de mujeres de Chorrillos y Anexo Chorrillos.
39
5.2.4. POBLACION PENAL POR SITUACIÓN JURÍDICA Y SEXO
(DISTRIBUCIÓN-PORCENTUAL POR REGIONES)
La distribución porcentual por estado civil de la población penal muestra una mayor
concentración en la categoría “conviviente” con un 43%, mientras que el de
“solteros” llega al 42%. Asimismo, la composición de la población penal por su
estado civil presenta características similares entre hombres y mujeres.
40
De los 51,055 internos varones, el 44% (22,440) son convivientes, el 41% (21,089)
son solteros y el 12% (6,361) casados. En el caso de las mujeres, de un total de
3,264 internas, el 27% (871) son convivientes, mientras que las solteras alcanzan
el 53% (1,733) y las casadas el 12% (377). Quedando otras categorías con menor
porcentaje como los “separados”, “divorciados” y “viudos”. Estos indicadores se
pueden adoptar para establecer políticas de tratamiento al privado de libertad que
tendrá el concepto de unidad familiar como un factor para su reinserción a la
sociedad.
23,311 22,822
6,738
630
502
316
41
El Establecimiento Penitenciario del Callao albergó anteriormente a la mayoría de
los internos extranjeros (actualmente cuenta con 329 internos), pues al ser
detenidos en su mayoría en el Aeropuerto Internacional “Jorge Chávez”, le
correspondía la jurisdicción de la Corte Superior del Callao. Actualmente, por
motivos de sobrepoblación y hacinamiento, son recluidos en el Establecimiento
Penitenciario Ancón II, que alberga a 422 ciudadanos extranjeros. En cuanto al
centro de detención de las mujeres extranjeras, el Establecimiento Penitenciario de
Mujeres de Chorrillos continúa albergando a su mayoría de extranjera (161
internas).
52,849
peruanos extranjeros
42
posibles causas o factores de riesgo de estas conductas en poblaciones específicas
como el sector femenino. Pese a que en las últimas décadas, la tasa de delincuencia
femenina ha tenido un crecimiento mayor en comparación con otros países del
mundo, donde está el Perú incluido.
Otro aspecto a resaltar resulta el hecho que recientemente, las mujeres se han visto
involucradas en nuevas conductas delictivas como son asalto a banco, secuestro,
extorsión y delitos contra la salud en todos estos hechos también actúan siempre
como nexo importante entre los que lideran la delincuencia por lo que tanto en la
Justicia penal como en la Policía, reconocen que la aparición del sexo femenino en
el ámbito delictivo se encuentran en incremento permanente.
Mientras que el restante 17.5 % de delitos cometidos por las mujeres se esparcen
en todos los demás delitos del Código Penal.
Es interesante observar que en lo relativo a los delitos contra la salud, más que
consumir drogas la mujer actúa en el tráfico de drogas como micro
comercializadoras consciente y justificándose que: (no consigo trabajo, no tengo
qué dar de comer a mis hijo, mi esposo y/o compañero me abandono o está en la
cárcel por lo m ismo, etc.) proyectado una falta de sensibilidad social y sus
dificultades a nivel de la integración a la sociedad.
43
Los Roles Laborales contraculturales son los siguientes.
(2) Moreras (os), rol que consiste en robar casas o fábricas, en lo posible sin
moradores. Los Monreros de alto status, roban sólo dinero y joyas en barrios altos
de clase alta. Los Monreros de menor Status, roban más bien electrodomésticos y
ropa en barrios de clase media.
(3) Los Lanzas, donde se distinguen tres subtipos, como las y los Lanzas montados
(en metro, buses, micros), las y los Lanzas de Mano y las y los Lanzas a Chorro. El
Lanza tiene en términos excepcionales un extraño status bivalente, porque es
rotulado categóricamente además de SAPO, es decir transgrede habitualmente el
valor de NO SAPEAR es decir, no delatar.
(4) Las Tenderas, rol especialmente femenino, que consiste en trabajar hurtando al
interior de grandes tiendas o supermercados, utilizando muchas veces fajas
elasticadas en el cuerpo siendo este tipo de delito la que más se ha incrementado
en Perú.
44
CONCLUSIONES.
Podemos concluir entonces, que las mujeres participan actualmente de los mismos
roles laborales de Ladrones tradicionalmente exclusivamente masculinos, aunque
el rol de tenderas y de micro comercializadoras de droga es preferencialmente
femenino, e integran en consecuencia una Estratificación social Contracultural
alternativa a la normativa, conjuntamente con los Varones.
Las penas impuestas más frecuentes son las de prisión condicional y la de multa.
Las penas privativas de libertad efectiva son solo 2 por ciento del total de las penas
impuestas en el caso de los hombres.
45
En el presente año ya han sido diversos los casos de mujeres utilizadas como
señuelos, aprovechando sus encantos físicos, su natural coquetería y hasta sus
feromonas para cautivar y trasladar a sus ingenuas e ilusionadas víctimas del sexo
masculino, “papeándolos” o no, a parajes solitarios en donde les esperan sus
cómplices que terminan despojándoles de sus celulares, vehículos, motos y otras
pertenencias. Especialmente los cuarentones y casados son los que en escasas
ocasiones se resisten a esas tentaciones.
46
VI. CONCLUSIONES
47
VI. BIBLIOGRAFIA
CORSI Jorge “Una mirada abarcativa sobre el problema de la violencia familiar”. En:
Violencia Familiar.
MEZA Daniel, " Rosa María Cifuentes se sumerge en el perfil psicológico de las
mujeres asesinas ", Entrevista El Comercio.
48