Вы находитесь на странице: 1из 5

5 claves

para

mantener la calma
cuando tu hijo se enfada
1- Crea tu talismán.
Un talismán es una imagen, una palabra, una
emoción a la que pones nombre, incluso puede ser
un objeto. Puede ser cualquier cosa que a ti te sirva
para recordar lo que realmente sientes por tu hij@.
Un talismán tiene la función de conectar con
nuestras emociones, aquellas que realmente
deseamos que afloren al relacionarnos con nuestros
seres más queridos, sobre todo en aquellos
momentos en los que nos enfadamos con ellos.

2- Sitúate a la altura de sus ojos


Cuando nos comunicamos, no lo hacemos
únicamente con las palabras. Nuestro cuerpo emite
muchísima información que es captada por todos
nuestros sentidos, sobretodo la vista. Por eso
necesitamos establecer contacto visual con la
persona que queremos que reciba el mensaje.
Cuando nuestro hij@ está enfadado o necesita
explicarnos algo que le angustia, es importante que
tenga clara nuestra presencia y para ello nuestros
ojos deberán estar, en la medida que sea posible, a
la altura de los suyos. De este modo, les estaremos
expresando que estamos ahí, no sólo físicamente,
sino también con toda nuestra atención, que es lo
que en ese momento más necesita.
3- Conoce sus necesidades reales
Es importante ser conscientes que nuestros hij@s no
se enfadan “porque sí”. Hay un motivo que,
aunque a nosotras nos parezca superfluo, para
ellos es importante. Tienen una necesidad que no
pueden cubrir y eso les despierta una emoción.
Si deseas conectar con tu pequeñ@, es importante
hacerlo partiendo de aquello que necesita y
empatizar con sus emociones, verbalizando qué
necesidad tiene y cómo se siente. Este proceso
ayudará también a tu hij@ a ir poniéndole nombre
a todo lo que le ocurre, y que la falta de
experiencia y su cerebro en proceso de desarrollo,
no le permiten hacerlo sol@.
Pero cuidado, en ese camino, es muy importante
no juzgar, ya que no queremos posicionarnos en si
esa necesidad es válida o no. Para ayudarnos,
podemos usar la estructura siguiente:
Se siente ___________ porque necesita _____________

4- Tus emociones, tus necesidades


De igual modo que a tu hij@, una situación concreta
también te despierta una emoción. La conexión
contigo misma cuando quieres comunicarte es muy
importante para que sea efectiva.
Para eso, saber qué necesitas y cómo te sientes, sin
juzgar si eso es válido o no, va a ser también
necesario y te ayudará a entender por qué pierdes
el control cuando tu hij@ tiene una rabieta, por
ejemplo. Verbalizar esa conexión en voz alta o
mentalmente, dependerá de la situación y de lo
que tú quieras y/o necesites comunicar, de la edad
de tu hij@...
Para empatizar contigo, puedes usar la siguiente
estructura:
Yo me siento ________ porque yo necesito __________

Fíjate que he resaltado el “yo” expresamente y hay


una razón muy importante. Cuando conectes
contigo misma, es básico no usar el pronombre “tú”
en ningún momento. Tus emociones y necesidades
son sólo tuyas, mímalas y conócelas.

5- Haz una propuesta y abre tu


corazón
La conexión con nuestr@ hij@ y con nosotras mismas
es muy útil para entender qué está ocurriendo
realmente. Pero eso no soluciona el conflicto que
tenemos. El paso siguiente es generar una propuesta
de acción, es decir, dar una posible solución que
termine con el conflicto. Dependiendo de la edad,
la propuesta la haremos nosotras o se la pediremos
a nuestro hij@.
Una propuesta puede tener dos posibles respuestas:
sí y no. Debemos estar preparadas para las dos. Una
es la que esperamos y zanja el conflicto. La otra lo
continua, pues nos indica que no hay consenso. En
ese caso, nuestra actitud es básica en dos aspectos.
En primer lugar, un no como respuesta a nuestra
petición nos puede generar una nueva emoción.
Volver a conectar con nuestr@ hij@ y con nosotras
nos permitirá seguir siendo conscientes de cuáles
son las necesidades de ambos que necesitan
encontrar un punto en común.
En segundo lugar, un no nos da pie a generar otra
propuesta de acción. Pero debemos analizar si la
nueva solución que proponemos, no es la misma
pero formulada con otras palabras, puesto que, a
veces, estamos tan convencidas que nuestro punto
de vista es el válido, que tenemos dificultad para
ceder y encontrar la solución que satisfaga a las dos
partes.

Вам также может понравиться