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Gabriela Hernández Soberanis

Irving Juárez Gómez

Literatura Mexicana

25 de marzo 2019

FUNCIÓN DEL PERSONAJE ESTEREOTIPO EN LA NOVELA PERIQUILLO SAR-

NIENTO DE JOSE JOAQUÍN FERNANDEZ DE LIZARDI

Hablar de funciones, personajes y estereotipos para analizar una obra literaria parece

el principio lógico del cual se debe partir para desmenuzar y llegar a las entrañas de lo que

un escritor nos quiere decir. Lo primero que quiero plantear en este trabajo es sobre si el

utilizar personajes estereotipos en esta novela sirve para el fin y época en la que se escribió.

Se ha escrito mucho sobre creación de personajes y la importancia de no caer en clichés o

fórmulas fáciles que alejen al lector de la trama, es uno de los principios que se enseñan en

los talleres literarios o en las escuelas para escritores. Crear personajes redondos, con una

psicología lo más completa posible y que sus acciones sean congruentes, es importante para

que las páginas de una novela o cuento sean digeridas con avidez y al final podamos sumer-

girnos en la ficción planteada y se cumpla el pacto entre lector y autor de verosimilitud.

Tener ojos para disfrutar una obra es encontrar lo importante de un texto; los críticos

literarios sirven mucho para quitarnos la inocencia de la primera lectura y nos invitan a re-

flexionar sobre estructuras, motivos, funciones, actantes y un sinfín de conceptos que aportan

una mirada profunda y analítica del ser y quehacer de la palabra escrita —siempre hay más

de lo que se puede leer a primera vista—, retomo el concepto de “importante”, porque para

cada lector lo importante es diferente, sin embargo entender sobre el porqué el escritor utiliza
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ciertas herramientas creativas para comunicarnos algo puede enriquecer nuestra vida, al fin

de cuentas de eso se trata el arte, enriquecer de manera sublime o terrible o hasta como en

este caso: moralizante, nuestra perspectiva sobre lo que somos en un tiempo y sociedad de-

terminada.

La novela El Periquillo Sarniento, fue publicada por primera vez en 1816, la obra se

divide en tres tomos, el último se publicó en 1830, después de la muerte de su autor. Lizardi

fue un escritor con ideas liberales, sus primeros trabajos fueron poemas y fábulas. Fundó El

Pensador Mexicano en donde se manifestaba su interés en la libertad de prensa ya que creía

que con ello muchos males de la nación podían ser remediados si la población conocía sus

derechos (Cervantes-virtual). La corona española había convertido al pueblo de México en

una masa de castas oprimida, con poca oportunidad a la reflexión Emma Ramírez en su ar-

tículo sobre Ilustración y dominación: El periquillo Sarniento bajo el siglo de las luces nos

comenta lo siguiente:

En primera instancia está el proyecto educativo del autor, cimentado en la educación

ilustrada de la sociedad: educar, enseñar, ilustrar–para que el pueblo sea un partícipe

activo del progreso dela nación–, con la sátira, la picaresca y la literatura didáctica

neoclásica, como las tradiciones literarias con las cuales el texto producirá sus propias

tensiones ideológicas. (Ramírez, 66)

Con estos datos afirmo que la novela Periquillo Sarniento tiene toda la intención de

ofrecer educación que por el contexto histórico y creencias del pueblo mexicano del siglo

XVIII, parece a veces que el tono moralizante puede tomarse como excesivo si lo compara-

mos con las categorías morales de nuestra actualidad; sin embargo si tomamos en cuenta la

sociedad de esa época ((hay que recordar que en durante el periodo colonial se había prohi-

bido la lectura y escritura de novelas en la Nueva España, ya que se creía que distraía de la
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fe y llenaba de ideas vanas a los habitantes de la colonia) la obra se enriquece con el tono

picaresco y a través de aventuras encierra una crítica social profunda de los comportamientos

de las diferentes capas sociales.

Después de analizar el contexto histórico y el quehacer del autor, voy hablar sobre la

función de los personajes en esta novela. Para un lector del siglo XX a veces es difícil enten-

der la forma en que se presenta esta narración, al principio puede parecer que los intermina-

bles discursos sobre lo que se debe o no hacer cortan la acción de los personajes y se torna

difícil o más bien tropezada la lectura no entendemos a los personajes que parecen planos y

sin matices, pero al analizar el contexto y a quienes estaba dirigida la obra se entiende por

qué el autor crea sus personajes de esa manera. Si tomamos en cuenta que para el siglo XVIII

en donde la mitad de la población no sabía leer (INEGI), el autor utiliza personajes que pue-

dan ser identificados por la mayoría de sus lectores y aprovecha esta manera de presentarlos

para que sin muchas explicaciones de su comportamiento se desenvuelvan las acciones y se

muestren las consecuencias de ellas. Me refiero que al presentar a un jugador, todos tenemos

una imagen de un jugador: personas adictas que no miden las consecuencias, que son livianos

de moral y además no temen a nada. Si construyo un personaje con una psique más profunda

en el que muestro su historia, cómo piensa; la atención se desvía hacia los motivos del per-

sonaje de hacer lo que hace. Hay que recordar que Lizardi quería mostrar consecuencias, no

principios. Los principios ya estaban dados: la sociedad necesitaba ser educada porque había

estado sumergida en la ignorancia.

Un estereotipo es definido por la RAE como una imagen estructurada que representa

a un colectivo. La novela tiene como personaje principal a Pedro Sarmiento que recibe su

sobrenombre por su manera de vestir y a su alrededor varios personajes: Su padre, madre,

profesores, el barbero, padre provincial, Chanfaina, Luisa, doctor purgante, Mariana, Roque,
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Januario, el ciego, Don Antonio, Don Anselmo, y otros personajes que cumplen la función

de dar motivos de acción, para que las aventuras se vayan sucediendo. Estos personajes se

presentan como motivos para que el personaje principal vaya de un lado a otro recorriendo

un mundo de aventuras en donde cada personaje se muestra con errores específicos a su pro-

fesión o lugar en la sociedad. Para aclarar esta visión de estereotipo en la novela voy a poner

el ejemplo de la madre de Pedro Sarmiento. El personaje lo presenta como una mujer sobre-

protectora que por su conducta hace que el personaje principal no entienda en tiempo lo que

es la vida, lo consiente tanto que hace de él un inútil para la sociedad, presenta el amor

incondicional de madre como un estorbo para un desarrollo integral de su hijo y como una

mujer que manipula al padre para que El periquillo siempre haga su voluntad de holgazanear.

Voy a céntrame en este personaje para explicar la función de los estereotipos en esta novela.

El autor está englobando, bajo un estereotipo, a la madre amorosa que echa a perder a los

hijos y los cría de manera irresponsable, por lo tanto hay que fijarse en esas conductas para

que no se repitan. De seguro conocemos mujeres que bajo el principio de que el amor mater-

nal es incondicional y se debe evitar a toda costa que el hijo sufra, es un molde que conoce-

mos y que aún perdura hasta nuestros días. No es que la madre lo haga por maldad consiente,

más bien porque no tiene claro las consecuencias de ejercer una maternidad sobreprotectora

sin visión de un futuro, fuera de cumplir las convenciones sociales y el rol que se le ha de-

signado en una sociedad. Como lo explica el mismo personaje del periquillo:

Bastaba que yo manifestara deseo de alguna cosa para que mi madre hiciera por po-

nérmela en las manos, aunque fuera injustamente. Supongamos: quería yo su rosario,

el dedal con que cosía, un dulcecito que otro niño de casa tuviera en la mano, o cosa

semejante, se me había de dar en el instante, y cuenta como se me negaba, porque


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aturdía yo el barrio a gritos; y como me enseñaron a darme cuanto gusto quería porque

no llorara, yo lloraba por cuanto se me antojaba para que se me diera pronto. (91).

Dentro de la descripción de su madre usa adjetivos como: bonita, cándida, supersticiosa, que

no le gustaba incomodarse. Está describiendo a una mujer sometida a una clase en donde lo

que le ocupa es criar a los hijos sin mucho trabajo, ser esposa y nada más. Un estereotipo de

mujer acomodada en el confort de una clase en donde ella tiene el lujo de no trabajar. Refleja

una parte de la sociedad, un estrato y al utilizar este estereotipo no tiene que describir nada

más, no es necesario una psicología completa para que el lector identifique a alguien cercano

a él con este tipo de conductas o mejor aún, verse reflejado.

Los estereotipos funcionan, quizá sea una manera muy simplista porque reducen el

comportamiento humano a un molde, pero funcionan para comunicarnos de manera efectiva

y con significado para una comunidad o sociedad. Andrea Fernández-Montesinos en su ar-

tículo: “Los estereotipos: definición y funciones” explica cómo funciona:

En el estereotipo se aúnan dos funciones sociales estrechamente ligadas; por un lado,

la que ayuda a la cohesión interna del grupo y, por otro, la que es fuente de praxis al

encontrarse en la base misma de la acción humana; este factor pragmático guía la

acción de los individuos al influir en la relación con los demás y especialmente en la

interacción con el “otro”. (62)

La misma autora hace referencias a tres funciones del estereotipo: cognitivo, social y litera-

rio. En el que se puede observar que estas funciones en resumen dan coherencia a una socie-

dad ya que puede mostrar una conducta normalizada y a partir de mostrase se puede tener

una visión negativa o positiva, creo que está función se puede observar claramente en la

novela, la madre cumple una función que sirve para dar un sustento primordial a lo que le

sucede al personaje principal: si no fuera por este tipo de madre quizá el periquillo no hubiera
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pasado por tanta desventura por ser una persona sin oficio y entonces no habría una historia

que contar. No es necesario, como lo mencioné antes, desviar la atención del lector en los

porqués la gente es como es, sino tomar moldes de personas y avisar que de seguir ese camino

se obtendrán ciertas consecuencias.

Los personajes estereotipos funcionan para cierto sector de lectores, logran su función

de comunicar de manera global ciertas actitudes humanas, queda en el escritor usarlos con

un fin específico como en esta novela.

REFERENCIAS

1. Biblioteca Virtual Miguel de Cervantes. "Vida y obra de Lizardi. Biblioteca Ameri-

cana. consulta 22 marzo,2019. http://www.cervantesvirtual.com/portales/fernan-

dez_lizardi/apunte_biobibliografico/.

2. Fernández-Montesinos, Andrea. "Los estereotipos: definición y funciones." Univer-

sidad Complutense. pp.53-63. Consultado 22marzo, 2019 http://iberical.paris-sor-

bonne.fr/wp-content/uploads/2017/02/Pages-from-Iberic@l-no10-automne-2016-

Final-4.pdf.

3. INEGI. "Analfabetismo en México: una deuda social. "Realidad, datos y espacio re-

vista internacional de estadística y geografía. 2012. INEGI. Consultado: 22

marzo2019 https://www.inegi.org.mx/rde/2012/09/15/analfabetismo-en-mexico-

una-deuda-social/.

4. Ramírez, Emma. "Ilustración y dominación: El Periquillo Sarniento bajo el Siglo de

las Luces". Revista de Humanidades: Tecnológico de Monterrey, no. 21, 2006, pp.

65-103. Editorial Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey.


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5. José Joaquín Fernández de Lizardi, 1816. Editor original: Molcajete Salsero (v1.0 a

v1.x) ePub base v2.0 Ilustraciones y edición digital basadas en la 4a. edición de los

cuatro tomos de la Librería de Galván, México, 1842.

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