Renacimiento económico en Europa siglo XI. Revisión del periodo anterior:
Mar importante: mediterráneo, imperio romano abarcó enteramente ese mar. Irrupción del Islam en la historia durante el siglo VII y conquista de zonas orientales, meridionales y occidentales. El mediterráneo se convierte en barrera. A partir de principios del siglo VIII el comercio europeo estuvo condenado a desaparecer, el mediterráneo ya no estaba en condiciones para ser vía de comercio. El equilibrio económico se derrumba ante la invasión del Islam. Parte occidental de Europa casi siempre en guerra con los “sarracenos”, no comercio. Del siglo IX al XI el occidente quedó bloqueado. Invasión islámica hace que decaiga el comercio por el cierre y control del mar mediterráneo. Durante el siglo VIII los mercaderes desaparecieron. La vida urbana que perduraba gracias a ellos también se derrumbó. Las ciudades romanas subsistieron. Gracias a los obispos que reunían a su alrededor un clero numeroso. Pero no tenían gran importancia económica. Se manifiesta un empobrecimiento genera. Se sustituyen monedas de oro por plata. Ruptura con la economía mediterránea. Danubio parecería ser una comunicación que se mantenía entre occidente y oriente, pero estaba rodeado de bárbaros, inseguridad permanente a lo largo de ese rio. A partir de S VIII, Europa occidental vuelve a ser región exclusivamente agrícola. Se vivía completamente de los productos del suelo, todas las clases sociales. Toda la existencia social gira entorno a la posesión de tierra. Por esto el sistema militar y la administración también se basaban en eso: en la posesión de la tierra. Sistema feudal: es la desintegración del poder público en manos de sus agentes. Jefe de estado desaparece de hecho. Aparición del feudalismo en Europa occidental en el curso del siglo IX es tan solo la repercusión, en el orden político, de la regresión de la sociedad a una civilización puramente rural. Importancia del Latifundio: antes de la desaparición del comercio, los latifundios producían bienes de consumo y eran consumidores de bienes manufacturados. Esta situación cambia con la desaparición del comercio. Dado que faltaba demanda por sus productos, el terrateniente tuvo que consumir sus mismos productos. ECONOMIA SIN MERCADOS EXTERIORES. Se buscaba subsanar la ausencia de comercio y de industria. En ocasiones por ejemplo de sequía los siervos iban por otros alimentos a otros latifundios, o a conseguir ciertas especias o a vender el excedente. Pero esto no representa una actividad comercial específica. Solo se hace por NECESIDAD. Mercados locales: servían para satisfacer el instinto de sociabilidad innato en todos los hombres. No era per se una actividad comercial. Judíos y el comercio: ellos mantenían un contacto superficial con las regiones orientales. Sólo ellos a partir del principio de la época carolingia (S VIII) practicaban con regularidad el comercio. Comercio de especias y telas preciosas. Su clientela es muy reducida. Su influencia sobre el orden social era mínima. Desde siglo IX el que posee tierra posee libertad y poder. El hecho esencial no es la condición política, sino la condición social. Dependientes, explotados y protegidos. IGLESIA: ocupa el lugar más importante en la escala jerárquica, es superior a la nobleza por su posesión de tierras. Solo ella posee la lectura y la escritura (instrumentos indispensables a toda cultura). Toda la administración durante el siglo IX y XI quedó en sus manos. Solo ellos tienen las herramientas para llevar registros, calcular ingresos etc. No solo tenía poder moral sino financiero. El objeto del trabajo según la iglesia no era enriquecerse, sino mantenerse en la condición en que cada cual ha nacido. Hacerse rico es prácticamente inmoral. Usura y lucro son una abominación, estaba prohibida a laicos. El comercio era también reprobable. La moral religiosa “condenó” las utilidades del comercio, de la productividad del capital y de los préstamos con intereses.
Capítulo 1 - Renacimiento del comercio
En el imperio bizantino, el avance del Islam no había interrumpido bruscamente la
evolución económica. La navegación marítima seguía fomentando un comercio importante y abastecía a ciudades pobladas de artesanos y mercaderes profesionales. En Europa occidental la tierra era todo y comercio nada y Venecia ciudad sin tierra vivía únicamente de su comercio. Mercaderes de Venecia empezaron desde el siglo IX a esbozar relaciones comerciales con África y Siria sin importar que esas dos estuvieran en poder del Islam (poco importaba la religión). Venecia comerciaba con esclavas, madera de construcción y hierro (países islámicos carecían de esto). Aunque el mismo papa reprobara este comportamiento en Venecia, allí se encontraba la reliquia de San Marcos que protege a venecia, sus mercaderes consideran que permitirse el comercio es una recompensa merecida de la veneración a este santo. VENECIA: toda la población se dedica al comercio y vive de él (en el continente los demás viven de la tierra). En Venecia no había servidumbre, solo había marineros, artesanos y mercaderes. El progreso económico se manifiesta en forma indiscutible por el empleo de la escritura, que es indispensable para cualquier movimiento de negocios. Expansión veneciana. Venecianos quedan exentos en el imperio bizantino de toda clase de tasas comerciales. Han monopolizado todo el tráfico marítimo en la parte oriental del Mediterráneo. Por su parte, en EL MAR DEL NORTE Y EN EL MAR BÁLTICO: caso parecido a Venecia: actividad maritima y comercial que ofrece un constrate manifiesto con la economía agrícola. “Vikings” son piratas normandos, esta piratería constituye la primera etapa del comercio. Desde fines del siglo IX cuando dejan de saquear, se convierten en mercaderes. Comercio escandinavo en Rusia: miel, pieles, esclavos. Comercio escandinavo en el mar Báltico: escandinavia desempeñò un papel de intermediario en los siglos X y Xi Pueblos nórdicos demostraron que tenían una energñia y un espíritu de empresa digno de los griegos de la época homérica. Pero eran escasos en número. RENACIMIENTO DEL COMERCIO: Iglesia seguía siendo reacia. Pero el odio por el Islam llevaban a querer recuperar territorios, luchar por ellos (cruzadas). Primera cruzada 1096: recupera el mar tirreno. Después de la toma de Jerusalén las relaciones con el Mediterráneo oriental se multiplican rápidamente. REAPERTURA DEL MEDITERRÁNEO al comercio occidental. Resultado duradero y esencial de las cruzadas: haber dado a las ciudades italianas y en menor grado a las de Porvenza y Cataluña, el dominio del Mediterráneo. Las cruzadas permitieron al comercio marítimo de la Europa occidental, no sólo monopolizar en provecho propio todo el tráfico desde el Bósforo y Siria hasta el estrecho de Gibraltar, sino desarrollar una actividad económica y capitalista. A partir del siglo XII termina la supermaciía del islam sobre el Mediterráneo oriental en el interior de las tierras. Se inicia una industria orientada hacia la exportación. Comercio de italia, ya las vías no estaban peligrosamente bloqueadas por “sarracenos”. Comercio al norte de los alpes. Fábricas de paños flamencos: aparece la industria. El aniquilamiento del comercio por las invasiones de los escandinavos interrumpió la exportación de estos paños. Pero en el siglo X vuelve. La fabricación de estos paños aumenta gracias a la creciente demanda. Fue tan próspero que se necesitó importar lana de Inglaterra. Se fundan aglomeraciones mercantiles en Flandes para producir paños. No solo había fábricas de paños en Flandes. El comercio de esto era prospero por que tal como las especias, tenían un elevado precio y eran fáciles de exportar. A medida que Flandes y Brabante se fueron industrializando, se fueron desinteresando del comercio marítimo, lo abandonaron a los marinos extranjeros.
Capítulo 2 – Las villas- Renacimiento de la vida urbana.
Desaparición de la vida urbana en el siglo VIII: a excepción de Venecia y otras pocas
ciudades italianas, la vida urbana desapareció. Materialmente subsistieron las ciudades, pero perdieron su población de artesanos y comerciantes. Ciudades Episcopales: fueron importantes desde el punto de vista religioso pero nulos desde el punto de vista económico. Estas ciudades subsistían solo gracias al campo. Burgos: Dadas las invasiones de normandos y del islam, la Europa occidental se cubre con castillos edificados por los príncipes feudales para servir de refugio a los hombres. Esos castillos eran llamados burgos. Estos burgos subsisten solamente gracias a la tierra, no tienen actividad económica propia. Primeras aglomeraciones mercantiles: Durante la segunda mitad del siglo X se ve la implicación de la reaparición del comercio. Los mercaderes se refugiaban alrededor de los burgos por protección. Les servía de paradero. El espacio que las ciudades y burgos ofrecían a esos advenedizos ya no basto para contener a tantos. Tuvieron entonces que establecerse a las afueras de la ciudad o agregar al burgo antiguo uno nuevo. ASÍ NACIERON AL LADO DE LAS CIUDADES ECLESIÁSTICAS O DE LAS FORTALEZAS FEUDALES AGLOMERACIONES MERCANTILES. Las personas allí tenían una vida muy diferente a la que llevaban los hombres al interior del recinto. La villa de la Edad Media y por consiguiente de la edad moderna, tuvo su cuna en el arrabal (burgos externos) de la ciudad o del burgo principal. Concentración de la industria en las ciudades: la fluencia de los mercaderes en los lugares favorables provocó a su vez la de los artesanos. Mercaderes y Burguesía: hipótesis acerca del origen señorial de la clase de los mercaderes: Mercaderes-Artesanos de las nacientes villas son diferentes a los a la sociedad en medio de la cual aparecen, pues su género de vida no está determinado por sus relaciones con la tierra. La actividad industrial y comercial es ejercida ahora por hombres nuevos. PREGUNTA: ¿Cómo se puede explicar que, dentro de una sociedad exclusivamente rural, en la que la servidumbre es la condición normal del pueblo, se haya podido formar una clase de mercaderes y de artesanos libres? Principales factores para lo anterior: o Aventureros y mercaderes: El comercio y la industria debieron tener su origen entre hombres desprovistos de tierra y que vivian al margen de una sociedad en la que solo la tierra garantizaba la existencia. Era gente libre que vagabundeaba por el país. Impulsados por el espíritu de aventura se engancharon en barcos venecianos y escandinavos o a los mercaderes que se dirigían a los puertos. Se formaban los “nuevos ricos”. o Primeras ganancias comerciales: Especulación, comprar grano barato y venderlo caro en algún otro lado. o Puede que algunos terratenientes hayan invertido parte de sus rentas en el comercio marítimo, se interesaron por el renacimiento económico. Pero esto fue un aporte muy muy pequeño. o Influencia de la navegación en el comercio: se da una migración de los campos a las nacientes villas. La tentación de migrar era demasiado fuerte para que muchos siervos no se resolvieran a huir para establecerse en las villas, ya sea como artesanos o como empleados de los ricos mercaderes cuya reputación se había difundido. Los señores los buscaban y perseguían pero cada que aumentaba la población de las villas, esto era más difícil.
Burguesía y sociedad agrícola: hubo incompatibilidad entre la naciente burguesía y una
sociedad dominada por los poseedores de los latifundios y desde el punto de vista espiritual por la Iglesia (que tenía aversión por el comercio). La burguesía no asume una actitud revolucionaria. No protesta. Libertad de la Burguesía: sin libertad de hacer contratos o de disponer de sus bienes no sería posible el comercio. El aire de la ciudad da la libertad. Transformación del derecho en las villas: La burguesía necesita más que un derecho consuetudinario, necesita instrumentos de prueba más rápidos y más independientes del azar, jueces estudiados capaces de resolver conflictos. Desde siglo XI se creó el jus mercatorum, un derecho mercantil embrionario internacional usado por mercaderes. Autonomía judicial y autonomía administrativa de las villas: al poco tiempo la jurisdicción ocasional se convierte en jurisdicción permanente reconocida por el poder público. La murallas urbanas: La más urgente de las necesidades nuevas de la burguesía luego de tener libertad, eran la de defenderse. Se construyeron entonces murallas urbanas. No existe villa alguna, en la Edad Media, que no haya sido fortificada. Finanzas urbanas: cada persona tenía que dar una cuota para procurarse protección, pero era muy diferente a las cuotas arbitrarias que imponían los señores feudales, esta nueva se relacionaba con las posibilidades de los contribuyentes y tenían como objetivo la utilidad general. EL IMPUESTO RECOBRA SU NATURALEZA PÚBLICA. Magistraturas urbanas: Ser necesitó elegir o dejar instala un consejo de magistrados para establecer y percibir los impuestos que empezaron a necesitarse más y más para construcción de puertos, muelles etc. Las villas y los príncipes: comercio igual seguia pagando alcabalas a los señores feudales, estos se beneficiaban de las villas. Los príncipes eclesiásticos fue diferente: La iglesia mirabaco recelo a la burguesía por ser mercaderes y comerciantes. Privilegios de la burguesía: Todos los que residen en el interior de la muralla urbana, con la única excepción del clero, participan en los privilegios de la burguesía. Estas nuevas ciudades se distinguen de las anteriores unicamente por la densidad de sus habitantes y la complejidad de su administración. Ciudades anteriores (burgos viejos) se derrumabaron ante los crecientes burgos nuevos en donde renacía el comercio y se imponía la burguesía. El territorio de la villa no resulta menos privilegiado que sus habitantes. Es un asilo de inmunidad que pone a quien se refugia en él a salvo de los poderes exteriores, tal como refugiarse en una iglesia. En una palabra, bajo todos conceptos, la burguesía es una clase excepción, si bies es preciso observar que es una clase sin espíritu general de clase. Cada villa forma una pequeña patria por sí sola, ansiosa de conservar sus prerogativas y en oposición a todas sus vecinas. Se favorecen intereses de los artesanos y mercaderes, la organización política y administrativa los favorece.
Capítulo 3 – La tierra y las clases rurales
Organización señorial y servidumbre: Las ciudades contenían a una minoría de la población.
Desde el siglo XII al XV la población urbana nunca fue muy superior a la décima parte del total de los habitantes. LA SOCIEDAD DE LA EDAD MEDIA ES ESENCIALMENTE AGRÍCOLA. Latifundios: Los latifundios no desaparecieron en muchos países hasta la primera mitad del siglo XIX. En el transcurso del siglo XII (cuando todavía no se había sentido alguna acción transformadora de las ciudades). Cada latifundio aproximadamente de 4000 hectáreas, pero sus tierras nunca están unidas, la dispersión es la regla. Cortes señoriales: aunque disperso, el latifundio poseía una organización muy fuerte. El centro del dominio era la residencia del dueño (iglesia catedral, abadía o fortaleza), de él dependían las distintas circunscipciones cada una abarcaba una o varias villas. Cada circunscripción estaba a su vez colocada bajo la jursdicción de un manor, en la que estaban reunidos los edificios de explotación (granjas, establos etc). Con excepción de los propietarios, todos los hombres que vivían en el territorio de una corte o de una villa eran siervos o semisiervos. Carácter patriarcal de la organización señorial: el latifundio no era sólo una institución económica, sino también una institución social. Se imponia a toda vida de sus habitantes. Estos eran mucho más que simples colonos de su señor: eran sus hombres en toda la fuerza del término. Señor: anciano cuyo poder se extiende sobre la familia que protege. La idea de ganancia y la misma posibilidad de realizar una utilidad son incompatibles con la situación del terrateniente medieval. El excedente solo sería un estorbo, pues no había cómo comerciarlo ni a quién venderlo. Régimen agrario: necesidad de trabajo en común. Amelga bienal o treinal, dejar sin cultivar una parte de la tierra, entonces tocaba distribuir lo otro entre todos. La actividad de cada cual depende de la actividad de todos. Derechos señoriales: los derechos señoriales eran otro obstáculo para la actividad individual. Los siervos no podían contraer matrimonio sin pagar una tasa ni casarse con una mujer ajena al dominio sin autorización. A la muerte del siervo, el señor rccibía su herencia.