QUEBRADA DE DIABLO.

Durante mayo y junio del año 2017, TECHO-Chile actualizó su Catastro Nacional de
Campamentos y los resultados de esta actualización señalan que, a la fecha, existen 702
campamentos en los que viven 40.541 familias.

Con el fin de reflejar la realidad dinámica de esta problemática, la organización determinó

que al mismo tiempo que se cierran campamentos, otros nuevos emergen. De hecho,
entre 2016 y 2017 se cerraron 45 campamentos, pero se abrieron 87 más. A nivel país,
por cada dos familias que salieron de campamentos, llegaron tres más a vivir en esta
situación.(Techo-Chile.org)

Las razones que llevan a una familia a vivir en un campamento, o en situación de toma,
son muy diversas. Desde una enfermedad catastrófica, que afecte la salud de un
integrante de la familia, e involucre el hecho de tener que vender la vivienda familiar, para
costear los gastos del tratamiento, o el hecho de no contar con una vivienda propia, y
tener que arrendar, perteneciendo a los primeros tres quintiles, ya que, en el contexto del
negocio inmobiliario, dentro de la realidad local, el precio promedio del arriendo de una
propiedad famiiar, oscila entre los $ 250.000 a 300.000. “La mediana de ingresos de las
familias que viven en campamento es de doscientos treinta mil pesos, entonces si tengo
mi vivienda propia la puedo arrendar en trescientos, hasta cuatrocientos mil pesos, tengo
que elegir entre vivir en una vivienda propia con doscientos treinta mil pesos o vivir en el
campamento con quinientos o seiscientos mil pesos. La elección es compleja. Lo que
quiero decir es que la situación no es tan simple y juzgar que es gente floja. Yo veo gente
de trabajo, que quieren sacar a sus niños adelante, con dificultades con el agua potable,
no tienen electricidad de forma regular y hacen pozos negros para sus necesidades".(
Juan Cristóbal Beytía 2016)

Pareciera ser, que la realidad que viven más de 40.000 familias chilenas viviendo en
campamentos, a medida que pasa el tiempo, aumenta, Y en tiempos de crisis mundial, en
donde muchos migrantes, eligen nuestro país como destino, con el fin de mejorar las
condiciones económicas y situación familiar, terminan aumentando las cifras, al tener que
optar por esta solución habitacional.
Antes de la experiencia vivida, en el contexto de la intervención, en el taller,
Responsabilidad social del psicólogo, nunca tuve la posibilidad, o la iniciativa y motivación
de observar y compartir con una comunidad en una toma. Lo cierto es que la experiencia
de conocer el campamento quebrada del diablo, fue muy enriquecedora e inspiradora.
Fuera de los roles logísticos, asistencialistas y de apoyo en víveres, que a mi juicio
resultaron un éxito, lo verdaderamente gratificante y exitoso para mí, fue ver sonreír a las
personas disfrutando con extraños, con nosotros, extraños que poco podían hacer para
solucionar las problemáticas de base a las que se ven expuestas, pero se entregaban
dispuestos a escucharlas, mirándolas a la cara, haciéndolas sentir que alguien se
preocupaba por ellas y interesándose por sus realidades, haciéndolas sentir escuchadas
con respeto, haciéndolas participar de un improvisado teatro, haciéndolas sentirse vivas,
haciéndolas sentir personas, y es que es ese, efectivamente el componente con el que
me quedo, el respeto, por la gente, por su historia, por sus vidas y sueños, es el respeto
por el otro, que lo valida, es el componente superior del ser humano y de quien quiere
ejercer con pasión y vocación el ejercicio de esta profesión tan hermosa.

Es necesario implementar y promover el respeto universal, tal vez asi logremos vencer la
pobreza multidimensional, la exclusión y la vulnerabilidad de tantos niños que se forman
en ambientes agrestes, porque en tiempos de capitalismo neoliberal, en donde las
condiciones son determinadas por el mercado, surgen las especulaciones, como “la
escases de terrenos” donde el precio aumenta para el comprador particular, y se hace
inaccesible si es pobre, se crean condiciones de pobreza, pero para los privados se
ofrece, licita y facilita, para el Fisco se hace negocio concesionar terrenos a empresarios
pero muy difícil construir un conjunto de viviendas sociales y se hace más fácil mandarlas
a vivir a la punta del cerro.

Basándose en datos del Servicio de Impuestos Internos , el informe realizado por Ramón
López, Eugenio Figueroa y Pablo Gutiérrez, concluye que la distribución del ingreso del
país resulta ser mucho más concentrada que lo que habitualmente se señala. “El real
problema de distribución en Chile está en lo más alto de la distribución y no tanto dentro
del grueso de la población (90% o aún 99% de ella) donde la distribución tiende a ser
relativamente pareja. Es realmente en el 1% más rico y sobretodo en el 0,1% y 0,01%
más rico donde se concentra el ingreso.”
Responsabilidad Social del Psicólogo

Profesora: Carol Millan.

Alumno: Rodrigo Solar.