Como administrar el conflicto Ético

La fuente del conocimiento es la prueba más exacta para pensar que el hombre
puede forjar destino en torno a sus necesidades y su revisionismo existencial. Tal es
así que la reflexión de sus acciones hace delimitar cuestiones propias a su entorno,
muchas veces encomendando reflexiones críticas y accionando sobre ellas. Como
afirmo, el dialogo es el instrumento mundial para el desarrollo del dialogo y a través del
mismo podemos confrontar realidad de perjuiciososas que suscriben nuestro entorno.

Por lo tanto, el florecer de ciertos grupos sexistas y racistas, necesitan una

especial atención no solo para eliminar estas prácticas aberrantes; sobre ellos
fraccionar ese pensamiento y actuar sobre el foco del problema. Problematizando
este dilema, lleva en consecuencia reestructurar estas herencias hacia nuevos
paradigmas; donde la fragmentación de la ética, la cultura, de un pensamiento propio
en base a una necesidad real y una Nación. La cultura no es una cosa, sino una
visiones una visión; “la cultura habla muy poco de sí mismo, ya que habla de una
generalidad de todos y de todo lo que nos hace” (1939)

Pues la educación es una herramienta fundamental para un giro de las miradas,

un giro de 360 grados nos promueve la reelaboración de un pensamiento netamente
social. Esto nos lleva a la reestructuración subjetiva y la autoreflexión para una praxis
de liberación.

Es más que lógico, afirmar que las escuelas en todos sus niveles y las
universidades tienen un rol de interpretar las potenciales problemáticas,
contextualizarlas para accionar y socorrer a los vulnerables y reinterpretar,
interpelar sobre el lugar que nos pertenece y nos intentan arrebatar. El arrebato
simbólico y material.

Los currículos en base a objetivos, de planeamiento; pierde contextualización, es

decir que el saber es recortado de la realidad. A esto se le suma que la producción del
saber, se crea en redes descontextualizadas, asentando aun más la asimetría por
competencia de un mundo globalizado. La globalización propone el falicitarismo que
es en muchos aspectos el logro prometido de la humanidad; está en nuestra ética
aplicar el inmediatismo resolutivo comprensivo o lograr un trabajo enfatizado sobre
factores que aplique la comprensión analítica de los problemas que acarrea una
globalización excluyente. Así, logramos entender que educar es igualdad de
oportunidades que conlleva el derecho humano, capacidad de aprender siempre.
“nadie puede despertarse una mañana y decir: Soy culto” (Cortázar, Esencia y mision
del maestro, 1939).

Educar no solo es tramitar saberes, es indagar sobre ellos, actual con ellos y
finalmente irrumpir contra el corporativismo neoliberal para impedir la legitimación
contra fundente de ideas contrahegemonicas.

La reflexión es la punta del conocimiento en sentido de pertenencia, ya que los

derechos humanos son enseñables y se puede trasmitir como un conocimiento para
recurrir a la comprensión del momento socio-histórico-cultural.

En la actualidad, la colonización deja de ser una práctica de adhesión de

territorios. La colegialización de la actualidad es de carácter socio-político-cultural;
que embarra las mentes de los hombre con prácticas genéricas que se elaboran en
torno a funciones neoliberales. El desplazamiento de sentir de pensar y hacer de la
vida, destierra la pluralidad histórica social del hombre a tal punto de sentirse obtuso
en su propio ser. En decir enajena su propia naturaleza, forzando al desplazamiento
de su propia subjetividad natural. Nadie elije ser pobre, o sub desarrollado, ni nadie
elije ser etiquetado como insurgentes sociales o marginales. Pero, acaso la educación
¿Todo lo puede? La pregunta es más que recurrente a la necesidad metodológica que
literal.

Pues así, para muchos el conformismo demagógicamente hablando es la

antesala del colonialismo pedagógico para llegar a las mentes de docentes. Si se
coloniza a la pedagogía, al intelectual, al grito de las voces calladas es más que fácil
quebrar con realidades visibles; pero esto no quiere decir que las visiones reales y
necesarias se aplaquen. “reflexión sobre los ejes del ser, del saber y del
poder”****Pues esta colegialización marco a sangre y fuego al “necesitado” ,
imponiendo metodologías y pedagogías que liman el pensamiento, la política y la
ética. La necesidad asimétrica, busca el cambio de estructuras de poder que cada día
aparecen con más frecuencias. Pues la batalla entre las posturas construye una
verdadera y transgresora locación de derrota o triunfo.

Hasta aquí he entendido que la revisión de las acciones conlleva a querer actuar
sobre diversos pilares políticos y sociales. Pero los Estados Naciones no brindan una
total ayuda desde sus vastos escritorios. La cosmovisión moderna ha configurado
progresiva y coyunturalmente los modos de sociedad, política y manera neutral que
ver las cosas. O eso por lo menos intenta, haciendo que el hombre desconozca su
legado natural para impedir una emancipación para “no dejar ser”, “lo que uno
realmente es”.. …

Los intereses de mercados corrompen al mismo hombre, débil de ética y de

esencia de su función. Es por eso que afirmo que las categorías educación, política
educativa, sociedad, cultura y Estado Nación; son los responsables del
reconocimiento histórico que nos representa. La historia olvidada y pisoteada para así
poder, disciplinar y construida un control para lograr subalternos.

La idea de reconstruir no se aboca solo en el poder de ideas sueltas, sino que

responde a ideas sociales en base a nuevas teorías que despierta el interés de un
nuevo pensamiento. Dejar de ser “la cosa”, y reconocernos como seres autónomos es
la clave para tener un principio orientativo y como docente implantar “la semilla de la
duda”, trasgrede lo impuesto haciendo conocer nuevas realidades. Diríamos entonces
que generar nuevas propuestas y nuevas prácticas educativas nos ayuda a replantear,
sobre aquellos escenarios donde nos manejamos, descubriendo una multiplicidad
cultural pero con necesidad única. En consecuencia, a geografía y la historia acorta
espacio y tiempo para tener una lectura más palpable aun.

Bibliografía