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Erosión Eólica

1. Formas de Relieve Eólicas.


La erosión eólica se manifiesta de tres maneras:
Abrasión o corrasión, acción natural del golpeteo de la arena soplada por el viento.
Deflación, levantamiento y remoción del material suelto de la superficie de la tierra.
Atrición, desgaste mutuo de las partículas acarreadas por el viento.

Yardangs.
La abrasión del viento puede cooperar al moldeado de algunos de los detalles de las formas
mayores, pero de por si incapaz de producir caracteres de gran extensión areal.
Posiblemente la única forma topográfica que se puede atribuir a la abrasión del viento es el
‘‘Yardang’’. Se refieren a surcos o canales. Generalmente son alargados en el rumbo de los
vientos predominantes y están casi siempre tallados en materiales relativamente débiles.
La abrasión puede actuar únicamente cerca del suelo por la impotencia del viento para
levantar la arena más de unos pocos metros.
La abrasión del viento se revela por a) pulimiento o picaduras, b) acanalamineto, c) tallado
y facetación.
Sin embargo, importa reconocer que el pulimiento es un efecto natural de la abrasión o
acción de golpeteo. Porque muchos bloques y superficies grabadas que carecen de
pulimiento y que han sido atribuidos a la erosión eólica es más probable que sean el
resultado de la erosión diferencial antes que la erosión eólica.
La erosión eólica es responsable de la creación de estructuras mucho mayores,
denominadas yardangs (de la palabra turca. yar, que significa.). Un yardang es una cresta
aerodinámica esculpida por el viento con una orientación paralela a la del viento
predominante. Suele tener el aspecto de un casco de barco al revés. Cada yardang suele
medir menos de 10 metros de altura y unos 100 metros de longitud, suelen aparecer en
grupos y parecen limitados a zonas desérticas especialmente secas con una cubierta
vegetal mínima y fuertes vientos que soplan predominantemente desde una dirección.
Ventifactos.
La abrasión eólica puede formar ventifactos, los cuales muestran una o más caras
facetadas y pulidas, pero estos son relativamente raros, porque para su mejor formación,
son esenciales vientos fuertes, abundancia de arena y ausencia de vegetación.
Formas menores, tales como oquedades y nichos en las paredes rocosas a veces
denominadas cuevas de viento, en parte pueden a ver resultado de la abrasión eólica
cuando están en la base de un acantilado, pero más comúnmente son producto de la
meteorización diferencial y lavaje pluvial o de la deflación. Algunas superficies con
estructuras de enrejado o alveolares, denominación dada a la superficie de rocas
intricadamente piadas, han sido atribuidas a la abrasión eólica, pero es probable que la
abrasión haya desempeñado un papel menor en comparación con la meteorización
diferencial y la disolución.
El viento también erosiona mediante abrasión (ab = fuera; ardere = raspar). En las regiones
secas, así como a lo largo de las playas, la arena transportada por el viento corta y pule las
superficies rocosas expuestas. A veces, la abrasión crea rocas de formas muy interesantes
conocidas como ventifactos. La cara de la roca expuesta al viento predominante es
sometida a abrasión, dejándola pulida, picada y con bordes angulosos. Si el viento no sopla
constantemente de la misma dirección, o si el canto se reorienta, puede tener varias
superficies facetadas.

Rocas Pedestal.
Ciertas formas topográficas, comúnmente denominadas rocas pedestal, que constan de
masas residuales de roca débil con un capuchón de roca más dura, han sido explicadas
como si se debieran a la acción de la abrasión eólica. Es dudoso que este proceso haya
contribuido eficazmente a su formación. Por lo común resultaran de la meteorización
diferencial con cooperación del lavaje pluvial. Posiblemente la responsable de la roca
pedestal haya sido la deflación, especialmente en las que se han acumulado detritos.
Ejemplo montículos tabulares o cerros en la playa Danby, que está compuesta por
materiales lacustres y coronados con una película de selenita groseramente cristalina, la
cual ha demostrado ser más resistente a la deflación que las arcillas y limos subyacentes.
Cuencas de Deflación.
La deflación, según opina la mayoría, es responsable de la formación de muchas
depresiones denominadas cunecas de deflación. Por lo general se encuentran en áreas de
acumulación de arena, donde constituyen cubetas pequeñas o dentro de médanos y otros
tipos de acumulación de arena. Las cunecas de deflación también se pueden formar en
áreas donde debajo de la superficie se hallan materiales no endurecidos o pobremente
endurecidos.
Miles de hoyos pandos se presentan en la región del oeste de los Grandes llanos. Se le ha
atribuido diversos orígenes: 1) Hundimiento provocado por solución en profundidad, 2)
Compactación diferencial de sedimentos terciarios pobremente endurecidos, 3) remoción
de materiales superficiales por animales (revolcaderos de búfalos) y remoción de materiales
por deflación, particularmente durante tempos interglaciales secos.
Es una depresión que aparece en un ecosistema de dunas arenosas (psammoserie)
causada por la eliminación de los sedimentos por el viento. Estas depresiones ocurren en
campos dunares o dunas parcialmente vegetadas. Se forma una depresión cuando se
pierde un parche de vegetación protectora, permitiendo que los fuertes vientos se lleven la
arena y formen una depresión. Aunque por lo general permanecen pequeñas, algunas
depresiones pueden ampliarse hasta llegar a tener kilómetros de tamaño y hasta
alrededor de 70 m de profundidad.
El resultado más destacable de la deflación en algunos lugares es la aparición de
depresiones superficiales denominadas depresiones de deflación (Figura DESVIE-10). En
la región de las grandes llanuras, del norte de Texas a Montana, son visibles miles de
depresiones de deflación en el paisaje. Oscilan entre pequeños agujeros menores de 1
metro de profundidad y 3 metros de ancho a depresiones que se aproximan a 50 metros de
profundidad v varios kilómetros de diámetro. EI factor que controla las profundidades de
estas cuencas (es decir que actúa como nivel de base) es el nivel freático local. Cuando las
depresiones de deflación descienden hasta el nivel freático, la tierra húmeda y la vegetación
impiden la deflación posterior.
Los depósitos residuales.
En el proceso de remoción de la arena y de las partículas de tamaño menor por la deflación,
hay una selección del material, e acuerdo con el tamaño quedando, los materiales más
gruesos. Estas concentraciones de guijarros y bloques han sido denominadas depósitos
residuales. Localmente constituyen caracteres notables en la superficie de los desiertos. A
menudo se le designa como pavimento de desierto o armadura de desierto. Tales
superficies caracterizan a las bammadas y a los regs del Shara que son áreas de desierto
rocoso en contraste con las áreas de acumulación de arena o ergs.

En determinadas zonas de muchos desiertos. La superficie es una capa muy empaquetada


de cantos gruesos demasiado grandes para ser movidos por el viento. Este revestimiento
rocoso, denominado pavimento desértico, se crea a medida que la deflación reduce la
superficie eliminando la arena y el limo hasta que prácticamente sólo queda una capa
continua de granos gruesos (Figura DESVIE-l l).Una vez que se ha establecido el pavimento
desértico, un proceso que puede durar centenares de años, la superficie queda protegida
de la ulterior deflación si no se perturba. Sin embargo, dado que la capa tiene un grosor de
tan sólo uno o dos granos, los vehículos o los animales pueden desalojar el pavimento y
exponer de nuevo a la deflación el material de grano fino situado por debajo.
Depósitos Eólicos.
Los materiales al ser transportados por el viento, son sometidos a un avenamiento que da
lugar a dos tipos distintos de depósitos eólicos: acumulaciones de arena y depósitos de
limo y arcilla conocidos como loess.
Ambientes en el cual se encuentran los depósitos eólicos: los depósitos eólicos tanto,
de origen como de emplazamiento, de ningún modo se circunscriben en los desiertos. Los
loess se encuentran en regiones húmedas o subhúmedas, sino que los depósitos de arena
también son comunes en diversos ambientes no desérticos. Los cuatro ambientes no
desérticos donde se pueden encontrar depósitos de arena son: a) a lo largo de las líneas
de costa, b) a lo largo de los cursos de los ríos en regiones semiáridas, c) áreas donde las
areniscas débilmente cementadas se han desintegrado formando arena, y d) en áreas de
conos de transición glaciarios.
Transporte del viento: El viento tiene poder para levantar y transportar partículas de polvo
por distancias largas, pero el grueso probablemente tenga lugar dentro de los 2 m del suelo.
Los tres tipos de movimientos involucrados en el transporte de arena: suspensión, saltación,
y reptación superficial.
Suspensión carece relativamente de importancia porque raras veces el viento logra
velocidades verticales requeridas para levantar partículas tamaño arena. Resulta
principalmente del flujo turbulento del aire en contrate con el flujo laminar o aerodinámico
es importante en el transporte de polvo. Las corrientes ascendentes hacen posible la
suspensión de las partículas de tierras más finas y las puede mantener en alto por
distancias considerables.
La saltación es un movimiento a saltos que resulta del choque rebote e la arena por el
viento.
La reptación de la superficie es producida por el choque de los granos de arena que se
mueven por saltación. Una parte de la energía que produce la saltación es retenida por los
granos que se mueven a saltos y continúan sus movimientos, pero algo de ella se disipa en
su fricción contra la superficie sobre la que caen los granos de arena.
Acumulación por el viento: la acumulación d los materiales soplados por el viento puede
producirse de tres maneras:
La sedimentación: tiene logar cuando los granos transportados por el aire en movimiento
lento caen con fuerza insuficiente para seguir por si mismos hacia adelante por saltación o
mover otros granos hacia adelante por reptación. La mayor parte de material en suspensión
acarreado es depositado de esta manera.
La acumulación por acreción resulta cuando los granos que están en movimiento por
saltación golpean contra la superficie con tanta fuerza que algunos continúan su movimiento
hacia adelante como reptación de superficie, pero más son lo que se detienen que los que
continúan su movimiento.
La acumulación por avance ocurre cando la superficie sobre la cual se va produciendo la
deposición no es lisa, a causa de haber surgido un impedimento, tal como una subida o una
caída brusca. Las partículas que se mueven por reptación superficial quedan detenidas.
Depósitos eólicos de arena:

A) Formas e escala pequeña: ondulas y crestas pequeñas en superficies de arena, con


poca importancia geomórfica.
B) Formas en escala grande
1. Vestigios de arena: Un vestigio de arena es una acumulación a sotavento y al reparo de
un obstáculo, tal como es un bloque, un arbusto, o un acantilado, que interfiere el flujo
aerodinámico y disminuye la velocidad del viento. La arena se acumula a sotavento de un
obstáculo hasta que su pendiente frontal logra el ángulo límite de reposo de 34 grados.
Entonces la arena se deslizara por el frente del depósito que avanza a lo largo de lo que
se denomina cara de deslizamiento. Los vestigios de arena se pueden formar donde el
viento barre arena sobre un acantilado o escarpa. Tales depósitos se llaman aludes de
arena.
Montones de arena: se forman a sotavento de una abertura entre dos obstáculos. Esta
abertura actúa como un embudo por el cual la arena pasa a sotavento.
2. Médanos verdaderos: se definió al médano como una acumulación de arena móvil cuya
existencia es independiente tanto de la forma del terreno como de los obstáculos fijos.
Los médanos se encuentran típicamente en los desiertos, a lo largo de las costas y de los
ríos. La humedad y la vegetación generalmente interfieren en su crecimiento e impiden el
desarrollo ordenado, como también limitan sus dimensiones.
a) Médano barján o media luna: es un médano en forma de media luna con sus cuernos
tendidos a sotavento, haciendo este lado cóncavo en el plano, y al lado del barlovento
convexo. Los barjanes tienden a disponerse en cadenas que se extienden en la dirección
de los vientos efectivos.
b) Seif o médano longitudinal: en vez de ser transversal al viento al viento predominante es
paralelo a él. Entre los Seif adyacentes puede haber aberturas o corredores en los cuales
aflora el piso denudo del desierto. Se cree que la altura y el ancho se forman por la acción
de vientos cruzados y se cree que la longitud se da durante periodos en que el viento
predominate es paralelo es paralelo a la dirección de la cadena del Seif.
3. Lomos de ballena o albardones de arena: son crestas de arena con la parte superior
plana que se extienden paralelamente a los vientos dominantes, pero carecen de los frentes
de desbordamiento, que caracterizan a los seifs. Un lomo de ballena puede tener longitud
de 160 km, un ancho de 3,5 km y una altura de 45m.
4. Ondulaciones: son depósitos de arena algo similares en naturaleza a los lomos de
ballena, pero son más cortas y carecen de forma definida. Constituyen formas ondeadas
entre seifs y lomos de ballena.
5. Mantos de Arena: son las áreas de arena caracterizada por una superficie
extremadamente plana y ausencia a cualquier relieve topográfico, salvo ondulas muy
pequeñas.
6. Clasificación empírica de los médanos:
-Médanos transversales: incluyendo el barján común, casi siempre esta libres de
vegetación. Las puntas de un médano transversal se extienden hacia sotavento.
- Médanos Parabólicos: fueron definidos como huecos largos en forma de cucharas o
parábolas de arena con sus puntas disminuyendo hacia barlovento y con una pendiente a
barlovento mucho más suave que a sotavento. Este tipo de médano parece estar siempre
asociado con una cubierta de vegetación.
-Médanos Longitudinales: las crestas alargadas que se extendían paralelamente al rumbo
dominante del viento.

Estructura Interna de los depósitos de arena:


La estratificación entrecruzada: es de esperarse como resultado de muchos cambios de la
dirección el viento y también por las variaciones de los ángulos de acumulación a lo largo
de la cara de un médano, asimismo en su lado de barlovento.
La laminación no siempre será visible, pero lo será si se permite que se infiltre agua. Las
láminas individuales representan capas sucesivas que se depositaron por sucesión. Debido
a la variación de los vientos durante el tiempo en que se acumularon las capas por acreción,
es común una variación ligera en las texturas de las láminas individuales.

Loess:

En algunas partes del mundo la topografía superficial está cubierta por depósitos de limo
transportado por el viento, denominado loess. Durante períodos de quizás miles de años,
las tormentas de polvo depositaron este material.

Cuando el loess es atravesado por corrientes de agua o cortado para hacer carreteras,
tiende a mantener una estructura vertical y carece de estratos visibles. La distribución del
loess en el mundo indica que hay dos fuentes principales de este sedimento: los depósitos
desérticos y las llanuras de aluvión glaciares. Los depósitos de loess más gruesos y más
extensos de la Tierra se encuentran en el oeste y el norte de China. Fueron transportados
por el viento aquí desde las extensas cuencas desérticas de Asia central. Acumulaciones
de 30 metros son comunes y se han medido grosores de más de 100 metros. Es este
sedimento fino de color de ante el que proporciona al río Amarillo (Huang Ho) su nombre.

A diferencia de los depósitos de China, que se originaron en los desiertos, el loess de


Estados Unidos (y de Europa) es un producto indirecto de las glaciaciones. Su origen se
encuentra en los depósitos de derrubios glaciares estratificados. Durante la retirada de los
glaciares de casquete, muchos valles de los ríos fueron bloqueados con sedimento
depositado por el agua de fusión. Fuertes vientos que soplaban en dirección oeste
barriendo a través de las desnudas llanuras de inundación, levantaron el sedimento más
fino y lo dejaron caer como una manta sobre las laderas orientales de los valles. Este
origen es confirmado por el hecho de que los depósitos de loess son los más potentes y
groseros en el lado de sotavento de desbordamientos de drenaje glaciar principal, como
los de los ríos Mississippi e Illinois y rápidamente se hacen más finos al aumentar la
distancia de los valles. Además, los granos angulosos mecánicamente meteorizados que
componen el loess son esencialmente los mismos que los del suelo de roca producidos
por la acción de molienda de los glaciares.
2. Formas de relieve de las regiones áridas

Blackelder (1911) ha recalcado que las llanuras y planicies son los caracteres más
comunes de los desiertos. Estimó que en el oeste árido de los Estados Unidos, donde
las montañas de bloque son caracteres notables, las planicies estructurales
comprenden más de las tres cuartas partes del área total. Reconoció cinco tipos de
llanuras y planicies: llanuras fluviales aluviales, planicies estructurales, playas, bajadas
y pedimentos.
Las llanuras fluviales aluviales son relativamente raras en los desiertos, porque los ríos
permanentes no son comunes.
Las planicies estructurales o pendiente estructural suave, son caracteres notables en
áreas tales como las mesetas de Colorado; pero, donde las rocas son ígneas o
metamórficas, o donde las capas sedimentarias han sido falladas y plegadas de modo
complejo, probablemente las planicies estructurales no sean amplias.
El Bolsón, se aplica el término bolsón a una cuenca más o menos circundada por
montañas. El bolsón se caracteriza por su desagüe centrípeto, y en su centro, o cerca
de él, generalmente hay una llanura plana, o playa, que marca la ubicación de un lago
actual o antiguo. La mayoría de las playas son secas, salvo después de ocasionales
lluvias del desierto, y sus superficies a menudo están cubiertas con precipitados de
sales relumbrantes originarias de los lagos efímeros que suelen formarse en ellas.
Tales superficies cubiertas con sal se denominan llanos alcalinos.
En las regiones áridas, las montañas están comúnmente delimitadas por pendientes
suaves de pie de monte, que se extienden hacia abajo de las cuencas vecinas.
Anteriormente se creía que una pendiente de pie de monte era enteramente originada
por agradación, pero ahora se sebe que en realidad consta de dos partes: una inferior,
originada por la agradación, denominada bajada, y una superior, que, en realidad es
una superficie erosionada de roca firme, aunque por lo común está cubierta por una
película de aluvión. Aunque se han surgido varios nombres para la porción del sustrato
de una pendiente de pie de monte, ahora generalmente se denomina pedimento.
Las pendientes del pedimento y de las bajadas son relativamente suaves, variando
entre 1/2 grado y alrededor de 7 grados, mientras que los frentes de montañas contra
los cuales chocan son mucho más empinado, variando desde los 15 grados hasta
hacerse casi vertical. El resultado es un nítido corte o ruptura de la pendiente en el lugar,
donde un pedimento encuentra a un frente de montaña.
Una bajada verdadera consta de una serie de conos aluviales coalescentes, formados
por ríos que desembocan en una pendiente de pie de monte y esparcen radialmente
sus detritos hacia afuera de las puertas de los valles de montaña.

La superficie de una bajada es de carácter ondulatorio cuando es atravesada


paralelamente al frente de la montaña. Por el contrario la superficie de un pedimento es
casi plana o levemente cóncava cuando es mirada perpendicularmente al frente de la
montaña delimitante. Un pedimento puede o no tener una delgada cubierta delgada
aluvial, pero básicamente es una superficie de roca firme, aunque puede haberse
desarrollado sobre depósitos aluviales más antiguos.
Los pedimentos adyacentes a la montaña pueden o no tener un delgada cubierta de
grava, pero lejos de las montañas van desapareciendo más y más bajo los depósitos
de las bajadas y pasan a ser pedimentos encubiertos, entonces es difícil distinguirlos
de las bajadas, salvo que se dispongan datos de perforaciones. Aun donde se hallan
ocultos, se cree que un pedimento es más típicamente una superficie convexa de roca
que buza debajo de la bajada que lo oculta. En el punto donde los valles de montaña
desembocan en una pendiente de pie de monte, los pedimentos pueden ensancharse
y formar pedimentos coalescentes, los que con el tiempo prácticamente pueden hacer
desaparecer una masa montañosa.

Otras definiciones
Otros autores sostienen que los pedimentos son las superficies de ocas duras al pe de
la montaña que se continúan erosionando y que se conectan a la montaña a través de
una ruptura de pendiente que se conoce como Knick y hacia la base de la montaña se
conecta de una forma poco notoria con una zona de acumulación de detritos,
denominada bajada. Los materiales que poco a poco se van acumulando en el nivel de
base de la montaña van a conformar una zona aplanada de la montaña, formando un
pediplano en el cual puede haber formas de relieve antiguo como el inselberg.
Lugo (1989) Define al piedemonte como una superficie marginal a las montañas de las
que se distingue por una pendiente y alturas considerablemente menores, también
agrega que existen varios términos que definen tipos específicos de piedemonte:
bajada, glacis, pedestal de las montañas y pedimento. García y Lugo (2004) dicen que
el piedemonte se presenta como un cambio brusco de pendiente de una ladera
montañosa hacia su base y pasa aun plano inclinado constituido por los materiales
arrancados de las laderas, por acción de la gravedad, el viento, agua etc.

Problemas geomorfológicos relacionados con zonas áridas.

Problema del pedimento.


En cualquier intento por explicar lo pedimentos se deben considerar dos problemas
interrelacionados: 1) Que proceso o procesos son los responsables de su formación y
2) cual es la explicación de la ruptura aguda entre en el frente de montaña y la pendiente
de piedemonte adyacente. Por lo menos se han surgido tres procesos geomorfológicos
que pueden actuar en la formación de pedimentos, ellos son; erosión de mantos
crecientes o lavaje en mantos, aplanamiento lateral por ríos y meteorización
retrocedente.
Teoría de los mantos de creciente: McGee (1897) reconoció planicies de erosión en
la base de las montañas que presentan una ligera cubierta de materiales aluviales, pero
que esencialmente eran planicies rocosas, y las atribuyó a la erosión de mantos de
creciente. Creyó que los mantos de creciente tienen gran poder corrosivo por
abundancia de sus elementos y altas velocidades. Los pedimentos así formados
tenderán a avanzar sobre las montañas por medios no aclarados por McGee.
Teoría de la aplanacion lateral:
Paige (1912) llego a la conclusión de que los procesos de erosión interfluvial y lateral
de los bordes de los conos aluviales producirían una superficie aplanada elaborada en
el sustrato, la que hacia el centro de la cuenca seria sepultada bajo un manto de grava
que iría creciendo progresivamente hacia la montaña, a medida que la superficie de la
roca elaborada se ensanchaba a expensas de la montaña. Se creía que el frente
abrupto de la montaña contra el cual choca el pedimento era un producto pasible de
erosión lateral de los ríos.
Johnson (1932) considera a la erosión lateral como el proceso dominante en la
formación del pedimento. Decía que en la región árida, donde las montañas lindan con
cubetas intermontanas o las rodean, hay tres zonas bastantes diferenciadas: a) una
zona interna que consta principalmente de montañas y en el cual domina la
profundización vertical de los ríos, b) una zona extrema, corresponde al área cubierta
por una bajada, en el cual prevalece la agradación y c) una zona intermedia entre las
dos y que rodea el frente montañoso, en el cual el transporte y la erosión lateral de los
ríos son muy importantes. El creía que los pedimentos evolucionan a partir de
caracteres que denominó abanicos rocosos. Los abanicos rocosos los definió como
superficies de rocas en forma de abanico que tiene su ápice en el punto donde los ríos
se vuelcan en una pendiente de pie de monte. Admitió que los abanicos de rocas están
cubiertos u ocultados por depósitos aluviales.
Entre las objeciones más serias a la teoría de Johnson sobre la erosión lateral se
cuentan:
La mencionada escases de afloramientos de abanicos de rocas y es difícil explicar la
rectitud tan comúnmente por el frente montañoso si su retroceso es producido por
erosión fluvial lateral. Parecería que el frente montañoso debe ser sinuoso o recortado
con entradas mayores donde los ríos principales se desprenden de la montaña. Si la
erosión lateral es importante debería patentizarse con la teoría de Davis denominado
recortamiento basal de la cara abrupta de la montaña donde a sido socavada por la
erosión lateral y por tal motivo las protuberancias residuales o muñones rocosos que a
menudo son observables en pedimentos difícilmente parecen comparatibles con la
aplanacion lateral. Estas objeciones motivan para aceptar a la erosión lateral como un
factor predominante en la formación de los pedimentos.
Teoría compuesta:
La teoría compuesta de la formación de pedimentos atribuye a estos a una combinación
de procesos principalmente de tres: meteorización retrocedente, erosión de mantos de
lavaje o manto de crecientes y aplanacion lateral, diversos autores combinan estos
procesos en proporciones variables pero lo esencial reside en la combinación de
procesos y no en el predominio de uno de ellos.

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