Вы находитесь на странице: 1из 3

En los últimos años las actividades extractivas en el Perú han enfrentado conflictos de

diversa magnitud con las comunidades locales del área de influencia de un proyecto

minero. Por lo que, varias poblaciones se han opuesto radicalmente al desarrollo de las

actividades mineras. Así, por ejemplo: Rio blanco en Piura, la Zanja, Tambo Grande y

Cerro Quillish y otros como en el departamento del Cusco, en los cuales se han producido

enfrentamientos con altos costos materiales, inclusive, la pérdida de vidas humanas,

lesiones graves a la integralidad física o destrucción de la propiedad pública y privada.

Una posible explicación de lo que viene ocurriendo es que importantes factores sociales

que van más allá del cumplimiento de la ley han alcanzado un alto protagonismo, hasta

convertirse en componentes determinantes de la viabilidad efectiva de un proyecto

minero. Estos factores pueden ser englobados en un concepto utilizado cada vez con

mayor frecuencia, «licencia social», que consiste en la obtención de un consentimiento

de las poblaciones aledañas como condición para la puesta en marcha de toda actividad

extractiva.

El caso del proyecto Las Bambas es paradigmático en ese sentido. Desde que fue

concesionado, en el año 2004, se han registrado una serie de discrepancias y episodios

conflictivos que han involucrado a las empresas que se han sucedido como titulares de

los derechos, a las autoridades gubernamentales y a diversos sectores de la población.

Varias son las causas que explican estos hechos, que se han activado debido a las

demandas de diversos sectores de la población para participar de los beneficios

(sobreestimados o no) de la actividad minera. Reducir la problemática de Las Bambas a

preocupaciones por: el caso Las Bambas la afectación del ambiente impediría comprender

la complejidad del proceso que se ha ido configurando en la zona.


El proyecto las Bambas fuera de ser un problema ambiental también ha producido

problemas sociales según el diario LA REPUBLICA desde el 2006 hasta la fecha

(06/10/2015) las muertes por conflictos socioambientales suman 131 fallecidos.

Para Ormachea (presidente de la asociación civil ProDialogo) nos dice que desde un

momento las comunidades deseaban ser parte de la toma de decisiones y constantemente

cuestionaban el mecanismo de fidecomiso; refiriéndose donde negocian los alcaldes, el

gobierno y la empresa; luego el fidecomiso fue cambiado a “Fondo social las Bambas”,

lo cual permitió una mejor agilización, pero las poblaciones que seguían sin ser incluidas

pedían una rendición de cuentas.

“La voz permanente de las comunidades era 'queremos saber cómo está el proyecto,

cuáles son los avances en cuanto al desarrollo a partir de este fondo social y cómo nosotros

queremos participar”

Para el experto el mecanismo del Estudio de Impacto Ambiental (EIA) debería ser

diseñado pues tiene muchas inconsistencias en su estructura que generan problemas con

las comunidades.

"Conga, Tía María, este caso [Las Bambas] que no tienen que ver con la aprobación sino

con la modificación del EIA demuestra que este instrumento no está funcionando. No es

participativo, no tiene credibilidad, no tiene legitimidad social. Quien lo realiza es una

consultora contratada por la empresa y quien lo aprueba es la entidad que promueve la

inversión minera", aclara.

Asimismo, es necesario afianzar los mecanismos de participación ciudadana para incluir

a las comunidades afectadas y no solo dialogar con autoridades con mínima

representatividad.
"Las modificaciones al proyecto Las Bambas se difundieron, se entregaron panfletos y

hubo reuniones, pero en realidad esos no son procesos de participación ciudadana, sino

procesos de difusión. De comunicación más unilateral. Yo creo que esto mereció

realmente una reunión importante con las comunidades. Aquí debería haberse aplicado el

derecho a la consulta previa", afirma.

Finalmente, la clave para resolver los conflictos sociales incluye la decisión del gobierno

para entregar la información a las mismas comunidades, para prevenir antes de lamentar.

"Debe haber una mayor disposición de todos los actores, desde el Estado hasta la

empresa, por transparentar esta información y evitar que se genere la desconfianza(...)

Habría que generar un mecanismo de mayor apertura para que las comunidades tengan

mayor representación en estos espacios"

Вам также может понравиться