LA OTRA EDUCACIÓN

El hombre consiente, autentico, sano y equilibrado, al conocimiento esotérico, siempre reservado a las
minorías, intelectual y espiritual capaz de realizar grandes sacrificios.

Privilegiado de convertirse en un hombre Real, trascender los limites estrechos de la mente, para
encontrar el premio a su esfuerzo: su Yo, su ser.

La educación consiste básicamente en dar y guiar, dos acciones en la práctica se traduce en la transición
del conocimiento y habituación del comportamientos, respectivamente. Educar se refería al proceso de
estimular el desarrollo de las potencialidades del niño y del adolecente.

Educar es ayudar, facilitar el libre proceso de desarrollo del espíritu, y los llamados métodos pedagógicos
no son más que instrumentos más o menos adecuados, educando sin rigidez.

Su mejor expresión, el “sacar fuera” rescatar el saber oculto en la mente; es sacar desde adentro, es decir,
habituar a ver dentro de nosotros ; escucharnos , porque dentro del corazón está la verdad.

“La otra educación” corresponde a la iniciática o esotérica. Opera como un proceso de desarrollo y
transformación, de la misma forma que una semilla se convierte en planta. En el simbolismo iniciático el
hombre es una semilla que “muere” para “nacer” como una nueva planta. El resultado debe ser el
hombre perfeccionado.

Alcanzar la libertad y disciplinas férreas, como han recurrido algunos santos y místicos (privaciones,
plegaria, meditación)

El Yoga reconoce siete cuerpos: físico, etérico, astral, menta, casual, cósmico, y nirvánico. También afirma
que el hombre posee una energía muy poderosa concentrada en la base de la columna vertebral, energía
pránica y según Osho, su naturaleza es más psíquica que física.

La activación es una metodología secreta y demanda una preparación intensiva en el cuerpo físico
(purificaciones, dieta, gimnasia, posturas, control de la respiración); en la mente (concentración y
meditación); en las emociones (control de los deseos). Dominio sobre las leyes de la naturaleza y poderes
extraordinarios (telepatía, levitación, clarividencia, cariaudiencia, viajar en cuerpo astral, invisibilidad,
ubicuidad, telekinesis, crear objetos, curar enfermos, etc. )

Los poderes taumatúrgicos los demostró por ejemplo, Moisés ante el Faraón y Jesús en sus muchos
milagros.

La educación convencional ha fracasado en su intento de un desarrollo integral y urge una alternativa.

Lamentablemente, la “otra educación” se ofrece como una utopía; además, generalmente aparece
distorsionada por ciertas fraternidades esotéricas.

Sería necio pretender que la educación esotérica sustituye la convencional. La educación convencional es
necesaria para formar los profesionales y técnicos que demanda el aparato productivo. Su rol es preparar
profesionales idóneos con cierto nivel de cultura y solvencia moral.

La educación iniciática es aún un tabú en occidente, pero sería un grave error ignorarla subestimarla.
 LA PUERTA ESTRECHA

JESÚS EL INICIADO

Un error grave del cristianismo ha sido desconocer que Jesús el cristo fue un representante más. No solo
eso también se afirma que Jesús fue uno de los cristos que han encarnado, en diferentes épocas y
latitudes, con una misión.

Sus poderes, sapiencia y desarrollo de su espiritualidad lo caracterizan como un gran maestro iluminado
que logro la experiencia de la verdad, la conciencia individual, le permitió decir: “Mi padre y yo somos
uno”, “yo soy la verdad, el camino”.

Jesús conocido por su vida disciplinada, la práctica diaria de la oración y el cultivo de una moral estricta,
diferenciaba de otras sectas (fariseos, saduceos, escribas).

LA ENSEÑANSA OCULTA

Jesús el cristo vino, a ofrecer un método para la evolución de la conciencia, un camino para la salvación
antológica. Un mensaje comprendido por las grandes mayorías, los hombres de buena voluntad, los pocos
capaces de intuir la verdad detrás de las palabras.

Jesús ofrecía dos tipos de enseñanza: una exotérica, mediante parábolas, y la esotérica o interna
exclusivamente para sus discípulos y gente escogida. La metodología implicaba tres ideas fundamentales:
el arrepentimiento, el reino de los cielos o de Dios y la vigilia.

EL ARREPENTIMIENTO

Consiste en un cambio radical en la manera de comprender la vida. Donde la voluntad de Dios se cumple
aquí, en la tierra con todos sus bienes y desgracias, premios y castigos.

Esta palabra “arrepentimiento”, es una especie de sentimiento de culpa por los pecados cometidos
(errores y debilidades) que se necesita olvidar o borrar para empezar una nueva vida.

EL REINO DE LOS CIELOS

Dios de manifiesta diariamente, el reino de los cielos (o de Dios) es una concepción teológica bastante
ingenua.

“El reino de los cielos, el reino de dios significa esoterismo, es decir, el círculo interno de la humanidad, y
también el conocimiento y las ideas de este círculo” es una metáfora.

-“Y él dijo: A vosotros conocer los misterios del reino de Dios” (Lucas 8.10)

-“Arrepentíos que el reino de los cielos se acerca” (Mateo 3.2)

El conocimiento esotérico, la renuncia a todo para merecer el reino de los cielos (el estado de supra
conciencia).
VELAD

El estado de alerta o de conciencia despierta, la plena autorrealización humana, un nuevo estado de

conciencia: “El sabio”, “El iluminado”, “El despierto”, “” El perfecto. “Velad”, como sinónimo de estado de
alerta, de conciencia despierta:

-“Velad y orad para que no estéis en tentación”. (San Mateo 26.41)

-“Mirad, velad y orad: porque no sabéis cuando será el tiempo. ” (Marcos 13.33)

En los evangelios dos pasajes enfatizan la importancia del estado de alerta en la enseñanza de Jesús.
 EL RETO DE LA REVOLUCION ANTERIOR

La inteligencia ha demostrado ser eficiente para aplicarla en el mundo físico, pero parece no importarle
mejorar la calidad del hombre.

El hombre está enfermo, la sociedad está enferma y la humanidad corre peligro de desaparecer.

Un hombre así, desequilibrado y sin aspiración, ha generado una sociedad inminentemente materialista,
desacralizada, errática, frívola y conflictiva.

La causa del mal está en el hombre y la curación en el mismo. La esencia de los evangelios se resume en
una invitación de Jesús a todos los hombres interesados en su evolución interior: “Sed, pues vosotros
perfectos, como vuestro padre que está en los cielos es perfecto”. (San Mateo 5.48)

El paso del hombre al superhombre no puede producirse mecánicamente, sino con resultado de trabajo
consiente y necesariamente relacionada con el ideal del conocimiento oculto o esotérico; asimismo, con
nuevas categorías de pensamiento: la cuarta dimensión, el tiempo, el infinito, la eternidad, el misterio del
universo.

No cabe duda de que la mayoría de personas vive, ya sea física intelectual o moralmente en un círculo
muy restringido de su ser potencial. El neurocirujano Warren había descubierto que el cerebro humano
funciona únicamente el diez por ciento de su capacidad total.

La conciencia es un constructor selectivo de nuestras percepciones. El cerebro evita información inútil.

La conciencia ordinaria ofrece tres características: casualidad, tiempo lineal y lenguaje. Su finalidad es la
supervivencia fisiológica; la conciencia ampliada, en cambia asume la realidad libre de estos
condicionantes.

-La función de la meditación es la de conducir a un estado de “único objetivo” o “claridad” (también

llamado “oscuro o vacío”).

En efecto, el hombre vive en un sótano, a pesar que dispone de docenas de aposentos lujosos; nos ha
hecho suponer que estamos condenados a la chatura intelectual y moral.

El futuro del hombre va a depender del paso evolutivo de la inteligencia a la conciencia; de lo que se haga
para activar su potencial latente, la autorrealización, el fundamento dela corriente humanista de Abraham
Maslow:

Un hombre demuestra en su propia naturaleza, hacia una actualización más perfecta de su condición
humana, exactamente en el mismo sentido naturalista, para lograr el cambio a la conciencia objetiva, “la
paz que trasciende del entendimiento”. La alternativa es: evolución o involución; continuar o
desaparecer.
 LA CONQUISTA DE LA CONCIENCIA

La conciencia normal que adquirimos al despertar, existen formas potenciales de conciencia totalmente
distinta.

La inteligencia racional ha sido muy eficiente para sobrevivir, construir edificios, inventar la bomba
atómica y la cibernética, pero inútil para frenar la violencia y la degradación moral que amenaza con
destruir la especie y el planeta.
Nuestra inteligencia funciona bien cuando se trata de operaciones abstractas (el lenguaje, las
matemáticas), y resolver cuestiones prácticas, sin embargo ha fracasado cuando se necesita comprender
y, sobre todo, practicar los valores de la convivencia.

El salto de la inteligencia requiere de un giro radical en el objeto de la actividad cognitiva. Solo la

meditación, de un observador de nuestro cuerpo, pensamientos, emociones y entorno permitía distinguir
sus meditaciones y en qué medida son autogeneradas. Entonces sobreviene la paz, el sosiego, la
liberación, la bienaventuranza.

La meditación es el aporte extraordinario de Oriente. Influencia a través del cristianismo y maestros de la

tradición.

KRISHNAMURTI: LA VERDAD ES DEL HOMBRE

La creatividad solo podrá ser el resultado de una mente fresca, pura, liberada del pasado y de todos los
condicionamientos sociales.
El pensamiento nuevo surge cuando el pensador se conoce así mismo. Es decir, si no me conozco así
mismo, mi acción, mi pensamiento, no tiene fundamento alguno. Por lo tanto el conocimiento de uno
mismo es el comienzo de la meditación. La meditación es el principio del conocimiento propio, y sin
conocimiento de uno mismo no hay meditación.

Su meditación consiste en estar alerta a todo. Inmersos en el aquí el ahora, libres de la carga de la
memoria. La mente debe ser clara, sin movimiento, y a la luz de esa claridad se revela la intemporalidad.

GURDJIEFF: GUERRA AL SUEÑO SICOLÓGICO

La situación psicológica del hombre – la violencia, los conflictos, la intolerancia- Gurdjieff recurría a una
concepción cosmológica que él denomina el rayo de la creación. Apoyándose en la hipótesis cosmológica,
que el hombre nace, vive y muere “dormido”.

Hablamos trabajamos, convivimos, pero en un estado de seminconsciencia. El hombre-máquina es solo

un conjunto de hábitos, de automatismos, de recepciones y, como está dormido, nunca advierte sus
errores. El hombre-máquina, al carecer de libertad, carece de conciencia moral y de responsabilidad.

Un hombre “dormido” no puede despertar por su propio esfuerzo: necesita que alguien lo despierte.
Aceptar su condición de dormido y ser capaz de desplegar su esfuerzo extraordinario para alcanzar lo que
el llamábale nivel de conciencia objetiva.
BHAGWAN SHREE RAJNNESH (OSHO): MÁS ALLÁ DE LA MENTE

La sociedad graba en el cerebro, una concepción política, religiosa, un sistema de valores, según su
orientación e interés. “La mente está dentro de ti, pero en la realidad es la proyección de la sociedad
sobre ti. ¡No es tuya!”.

La mente es inevitable conflictiva, inquieta, confusa, parlanchina, astuta y codiciosa.

La mente y el ego se reflejan en lo que se conoce como personalidad, esa necesidad de ser “alguien” en el
mundo para gozar de bienestar, aceptación y reconocimiento.

Los pensamientos, los deseos son espejismos, imágenes de un sueño de la mente, un reflejo de lo que la
filosofía védica llama “maya” (ilusión). La autoobservación, la meditación, es medio para trascender la
mente y alcanzar la no-mente.

LA MEDITACION LA GRAN MEDICINA

Para Osho, la meditación es el camino que permite restaurar la salud del hombre:
la curación para esa enfermedad que es ser hombre, es la meditación.

La meditación relaja, aumenta el rendimiento intelectual y la capacidad creativa; inclusive, el carisma, ese
milagro personal que tanto aprecia la cultura intelectual. La meditación cambia tu conciencia.
Inicialmente destruye la barrera existente entre tu consiente y tu inconsciente. Te vuelves más flexible.

No hay poder más grande que el poder de la no-mente. Ningún daño se puede hacer a esa persona. No
apego, no ambición, no envidia, no cólera, nada puede surgir de él. No mente es absolutamente un puro
cielo sin ninguna nube.

EN LA MITAD DEL CAMINO

Los estados de conciencia han sido conocidos hace años, especialmente en las culturas religiosas.

Tres ordinarios: sueño, onírico y vigilia; y cuatro superiores: la autoconciencia, conciencia cósmica,
conciencia divina y conciencia de la unidad o iluminación (fusión del yo individual) con el yo universal,
integración con el todo, en mundo entero se convierte en una proyección de nuestro ser, la liberación
final.
 ESBOZO PSICOLÓGICO DEL HOMBRE TOTAL

El hombre total completo, auto realizado, “superhombre” – ha existido siempre, algunas de sus
características psicológicas imprescindibles son las siguientes.

DESPIERTO

Significa haber trascendido la mente, su subjetividad y los condicionamientos que distorsionan la

realidad: recuerdos, fantasías, deseos. Alcanzar el “despertar” o la “iluminación” permite ver la realidad.

Vive el aquí y el ahora con totalidad. Siempre alerta, atento, autoconsciente, vive todo instante con
plenitud absoluta. En cualquier actividad, por sencilla que sea, sus sentidos, su inteligencia y su ser:
“comer, caminar, hablar, dormir” cada acto es único irrepetible y eterno. El hombre despierto es
compasivo, porque sabe que yo soy tú y tú eres yo.

REVELDE

Inevitablemente se convierte en una amenaza para la sociedad. Su única consigna es actuar según los
dictados de su conciencia. Nunca sigue huellas ajenas; camina solo, según su propia ley. Es un hombre
esencialmente libre. No aspira a dominar a nadie, pero jamás acepta imposiciones ni se rebaja a
concesiones. Como la sociedad no puede someterlo ni domesticarlo, se toma su desquite: la
incomprensión, el rechazo, el castigo, la muerte.

ÉTICO

Nunca puede ser tramposo, hipócrita, mentiroso, deshonesto. Al actuar desde su ser, siempre demuestra
una perfecta coherencia entre pensamiento, palabra acción. Su único compromiso es con la verdad, en
cualquier circunstancia y las últimas consecuencias.

EQUILIBRADO

Es consciente de que ejerce una profesión, ser padre, esposo y pertenecer a un club corresponde a las
exigencias de la vida ordinaria y el desempeña su rol sin escandalo; mantiene su autonomía, su libertad.
El único pecado es vivir en un solo lado y rechazar supuestamente por malo el otro.

Se trata más bien, de asumir la vida como una totalidad: no rechaza nada, porque para el hombre
interesado en evolucionar todas las experiencias son necesarias, realizarlas con conciencia, totalmente.

A este tipo humano, despierto y equilibrado, que está en el mundo pero no es esclavo del mundo, los
sufíes le denominan “místico con patas peludas”.
RELIGIOSO

Solo u hombre despierto puede ser religioso; y la experiencia a la conciencia superior. La religión es la
vigencia de la unidad del alma individual con el alma universal.

La experiencia religiosa El éxtasis y el despertar transforman al hombre. Totalmente consiente,

desacondicionado, libre, recién está realmente vivo, es decir ontológicamente activo. Eso lo llena de una
alegría parecida a una embriaguez, a una locura.

Un místico nunca está serio, triste, apesadumbrado. Siempre está disfrutando de la vida aquí y ahora,
cada instante como si fuera el último. Prefiere reír, cantar o bailar.