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3ro Polimodal
Economía y Gestión de las Organizaciones
Año 2008
Profesora: Amado, María Luján
Pág.
Introducción……………………………………………………………………….. 3
Capítulo 1: El gobierno, la marihuana y las drogas en la sociedad…... 4
1.1 Sociedad………………………………………………………………………………. 4
1.2. Cultura………………………………………………………………………………… 4
1.3 El Gobierno…………………………………………………………………………… 5
1.4 Ley……………………………………………………………………………………… 5
1.5 Droga…………………………………………………………………………………... 6
1.5.1 Drogadependencia……………………………………………………………….. 6
1.5.2 Las drogas en la sociedad……………………………………………………... 7
1.5.3 El narcotráfico…………………………………………………………………….. 8
1.6 Marihuana…………………………………………………………………………….. 8
1.6.1 Generalidades…………………………………………………………………….. 9
1.6.2 Caracteres botánicos…………………………………………………………….. 9
1.6.2.1 tallo………………………………………………………………………………… 9
1.6.2.2 Hojas………………………………………………………………………………. 9
1.6.2.3 Flores……………………………………………………………………………… 9
1.6.2.4 Fruto……………………………………………………………………………….. 10
1.6.3 Historia………………………………………………………………………………. 10
1.6.4 Principios activos………………………………………………………………… 11
1.6.5 Efectos de la marihuana en el organismo……………………………………. 12
1.6.5.1 Sistema nervioso central……………………………………………………….. 12
1.6.5.2 Memoria…………………………………………………………………………… 13
1.6.5.3 Trastornos Psiquiátricos……………………………………………………….. 14
1.6.5.4 Uso potencial terapéutico……………………………………………………… 15
1.6.6 Subcultura de la marihuana…………………………………………………….. 16
Capítulo 2: La marihuana en la cultura de nuestro país…………………… 18
2.1 La Tolerancia de la sociedad frente a la marihuana………………………….. 18
2.2 Iniciación a la marihuana………………………………………………………….. 19
2.3 Efecto adictivo de la marihuana…………………………………………………… 21
2.4 El daño que produce la marihuana en el organismo………………………… 22
2.5 Rehabilitación de la adicción a la marihuana………………………………….. 24
2.6 Debate por el uso medicinal de la marihuana. ………………………………… 25
2.7 La influencia de los medios masivos sobre el tema de la despenalización 27
2.8 Narcotráfico y autocultivo………………………………………………………….. 28
Capítulo 3: Despenalización de la marihuana en Argentina……………….. 30
3.1 Leyes sobre drogas en argentina………………………………………………... 30
3.2 Las causas de la despenalización……………………………………………….. 31
3.3 Pautas de la nueva Ley de despenalización……………………………………. 32
3.4 Tras la despenalización…………………………………………………………….. 33
Conclusión…………………………………………………………………………. 34
Bibliografía………………………………………………………………………….. 36
Apéndice……………………………………………………………………………. 37
2
Introducción
1
Ministro de seguridad, justicia y derechos humanos de la nación.
3
Capítulo 1: El gobierno, la marihuana y las drogas en la sociedad
1.1 Sociedad2
2
CHINOI, Ely; LA SOCIEDAD, UNA INTRODUCCION A LA SOCIOLOGIA; CULTURA
ECONOMICA; México D.F.; 1996; Pág. 45.
3
EGGERS-BRASS, Teresa; GALLEGO, Marisa; “Cultura y comunicación”; Maipue; Buenos Aires;
2004; Págs. 11-12.
4
1.3 El Gobierno4
Formas de Gobierno:
Aristóteles Clasificaba las formas de gobierno en:
1. MONARQUIA o gobierno de uno solo.
2. ARISTOCRACIA o gobierno de los mejores.
3. DEMOCRACIA o gobierno del pueblo.
Dichas formas eran consideradas como puras, por lo cual su mal ejercicio
podía hacerlas degenerar en las llamadas formas impuras, entre las que se
encuentran:
a. TIRANIA como forma impura de la monarquía, en el cual el monarca
(tirano), gobierna para su propio interés olvidando el interés común.
b. OLIGARQUIA como forma impura de la aristocracia, en la cual una
minoría asume el poder y atiende únicamente a su propio beneficio.
c. DEMAGOGIA como forma impura de la democracia, cuyo origen griego
(demagogo) se traducía como “orador que conduce al pueblo”, o sea la dominación
tiránica de la masa. También solía llamarse “oclocracia”, del griego “ochlos” (turba,
multitud) y “Kratem”, dominar.
1.4 Ley5
4
GARCIA Apolinar; GARCIA Cesar; INSTRCCION CIVICA; SAINTE CLAIRE; Buenos Aires; 1994;
Pag. 77.
5
GARCIA Apolinar; GARCIA Cesar; INSTRCCION CIVICA; SAINTE CLAIRE; Buenos Aires; 1994;
Págs. 144 - 145.
5
2) Un sentido amplio referido a toda norma jurídica elaborada por ciertos
procedimientos estatuidos por una comunidad.
O sea toda norma jurídica cuyo contenido se refiere y regula una multiplicidad de
casos, haya sido o no dictada por el órgano legislativo. Es lo que se llama Ley en
un sentido material (decretos reglamentarios, edictos policiales, ordenanzas
municipales, etc.).
El Código Civil Argentino comienza con sus disposiciones estableciendo que
las leyes son obligatorias para todos los que habitan el territorio de la República,
sean ciudadanos o extranjeros, domiciliarios o transeúntes.
Las características de la Ley son las siguientes:
1) Obligatoriedad: Las leyes son obligatorias después de su publicación y
desde el día que ellas determinan.
2) Generalidad: Son dirigidas a todos aquellos que se encuentren en
situaciones semejantes y legislan sobre casos análogos.
3) Estabilidad: Pues son normas jurídicas dictadas para regir durante un
lapso más o menos largo.
1.5 Droga6
1.5.1 Drogadependencia7
6
MANCUSO, Miguel; “Salud y adicciones, EL ABORDAJE DE LAS ADICCIONES DESDE LA
REALIDAD ÁULICA”;VOCACION DOCENTE; Pág. 19
7
MANCUSO, Miguel; “Salud y adicciones, EL ABORDAJE DE LAS ADICCIONES DESDE LA
REALIDAD ÁULICA”;VOCACION DOCENTE; Pág. 20
6
1.5.2 Las drogas en la sociedad8
8
MALDONADO, Roberto F. Del V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?; DUNKEN; Buenos Aires;2004; Págs.
11-15
9
LSD: dietilamida de ácido lisérgico, droga psicodélica muy potente.
10
El tolueno (metilbenceno; C6H5CH3) es la materia prima a partir de la cual se obtienen derivados
del benceno, el ácido benzoico, el fenol, la caprolactama, la sacarina, medicamentos, colorantes,
perfumes, TNT y detergentes.
7
1.5.3 El narcotráfico11
1.6 Marihuana12
11
MALDONADO, Roberto F. del V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?; DUNKEN; Buenos Aires;2004; Pág. 29
12
GRINSPOON, Lester; “MARIHUANA, La medicina prohibida”; PAIDÓS; España; 1997; Pág. 25-26.
8
más fuerte que el bhang; la diferencia es semejante a que pueda haber entre la
cerveza y un buen güisqui escocés. Charas es la resina pura, conocida también
como hachís en Oriente Medio. Cualquiera de estos preparados puede ser fumado,
comido o mezclado en las bebidas.
1.6.1 Generalidades13
1.6.2.1 tallo
1.6.2.2 Hojas16
1.6.2.3 Flores
13
GRINSPOON, Lester; “MARIHUANA, La medicina prohibida”; PAIDÓS; España; 1997; Pág. 25-26.
14
Ver apéndice, Imágenes; Imagen Nº 5 ; Pág. 81
15
CAGLIOTTI, Carlos N.;”PROYECTO Y METODOLOGIA PARA LA INVESTIGACION DE LA
MARIHUANA”;CONATON;1975; Págs. 3-4
16
Ver apéndice, Imágenes; Imagen Nº 6 ; Pág. 81
9
éste último contiene un solo óvulo. Completan el aparato genital femenino dos
estigmas finos y alargados.
1.6.2.4 Fruto
1.6.3 Historia19
17
Aquenio: Fruto seco e indehiscente que proviene de un único carpelo, con una sola semilla y con
pericarpio no soldado a ella, como el de la castaña y el girasol.
18
Bráctea: Hoja pequeña que nace del pedúnculo de las flores de ciertas plantas, situada entre las
hojas normales y las hojas florales.
19
GRINSPOON, Lester; “MARIHUANA, La medicina prohibida”; PAIDÓS; España; 1997; Pág. 27-46
10
productos del cáñamo no son solubles en agua y en consecuencia no pueden ser
inyectados. Hacia finales del siglo XIX, el desarrollo de drogas sintéticas como la
aspirina, el hidrato de coral y los barbitúricos, que fueron consideradas
químicamente más estables y por consiguiente más confiables que la marihuana.
En 1937 se creó la Ley de impuestos a la Marihuana. Esta ley fue la
culminación de una campaña organizada por la Oficina Federal de Narcóticos, por
la cual el público fue inducido a pensar que la marihuana creaba adicción y era
causa de crímenes violentos, psicosis y deterioro mental. En virtud de esta Ley
cualquier uso de esta droga para propósitos industriales o médicos debía ser
obligatoriamente declarado y se debía pagar una tasa de un dólar por 30 gramos.
Cualquier persona que utilizara esta droga para cualquier otro propósito debía
pagar un impuesto de 100 dólares por 30 gramos. En caso de no cumplirse esta
Ley estaban expuestos a importantes multas o períodos de cárcel.
En 1945, “Newsweek” informa que más de 100.000 americanos usan el
cannabis.
A partir de la década del 60´, El cannabis comienza a ser mundialmente
conocido y utilizado. Empezaron a aparecer anécdotas sobre su utilidad médica,
generalmente no en literatura médica sino en forma de cartas a revistas populares
como Playboy. Mientras tanto, las preocupaciones legislativas por el uso recreativo
aumentaron, y en 1970 el congreso aprobó la Ley de sustancias controladas. Esta
ley asignaba las drogas psicoactivas a 5 programas y colocó al cannabis en el
Programa 1, el más restrictivo, el cual incluye las drogas que no tienen utilización
médica, tienen un gran potencial de abuso, y no pueden ser utilizadas ni siquiera
bajo supervisión médica.
Es hasta la actualidad esta Ley se mantiene y es discutida mundialmente la
despenalización de la marihuana, ya sea para fines médicos o recreativos. En los
últimos años, algunos países han decidido modificar sus leyes de prohibición. En
1976 Holanda adopta una política de tolerancia hacia los consumidores de
cannabis. Se legaliza, bajo ciertas condiciones, su cultivo, venta y consumo. En
1978 Nuevo Méjico se convierte en el primer Estado americano en permitir el uso
médico del cannabis. En 1994 Alemania se descriminaliza la posesión de
pequeñas cantidades de cannabis para su uso ocasional. Este mismo año el
gobernador de California Pete Wilson veta la legislación que permitiría el uso
medicinal del cannabis en su Estado. Sin embargo en aquellos países donde se
encuentra despenalizado o legalizado el consumo de marihuana, este no deja de
ser discusión sobre si se debe retroceder en la punibilidad de su uso, así como en
países como Argentina y chile se discute su despenalización.
20
GRINSPOON, Lester; “MARIHUANA, La medicina prohibida”; PAIDÓS; España; 1997; Pág. 26.
11
que gobierna el pensamiento superior y el hipocampo, donde está localizada la
memoria.
Efecto analgésico: este efecto es con dosis altas. Esta acción farmacológica
también desarrolla tolerancia con relativa rapidez.
21
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires;2004; Págs.
99-128.
22
Locuacidad exagerada, flujo verbal inagotable y desordenado. Se manifiesta sobre todo en los
estados maníacos y, en ocasiones, en algunas afasias sensoriales.
12
Capacidad verbal: hay deficiencia de un adecuado vocabulario en relación con la
edad cronológica (memoria semántica), dificultad de expresarse a sí mismo, de
encontrar la palabra exacta para expresarse, dificultad de comprender lo que otras
personas quieren decir, de transformar un pensamiento abstracto en concreto. Esta
capacidad depende de la memoria episódica y su correlato consciente. Todo esto
hace sentir al consumidor incomprendido y solitario.
1.6.5.2 Memoria
Memoria a corto plazo: provee una integración temporal, permite por ej.: leer
libros a gusto. Esta función se ve alterada no recordando fechas, promesas o
reuniones. También la memoria prospectiva se ve afectada, por ejemplo en la
capacidad de mantener el tema de una historia.
Memoria a largo plazo: se altera produciendo un recuerdo pobre del pasado que
lleva a dudar de su identidad. Altera el tiempo subjetivo que se extiende hacia el
futuro lo que hace que sea impactante.
13
Capacidad analítica-sintética: con el consumo se dificulta la posibilidad de
clasificar la información de una forma correcta, comprendiendo las variaciones de
significados y la capacidad de discriminar partes de un todo. Esto hace sentir al
consumidor diferente y único, porque interpreta y analiza la información con nuevas
visiones y valores que difieren con el observado en el estado normal de no
intoxicación. Esto se llama “patrón cannabis”, donde los conceptos, puntos de vista
y opiniones creados bajo esas circunstancias no pueden ser cuestionados debido a
la falta de flexibilidad, capacidad lógica analítica-sintética que le permita realizar un
examen crítico. Para el consumidor esto llega a ser verdadero, cuanto más tiempo
es el consumo más fuerte es la identidad.
Efecto metabólico: estimula el apetito, con especial apetencia a los dulces, se han
observado trastornos de la glucemia y del metabolismo de los hidratos de carbono.
14
Efecto sobre la reproducción: la ginecomastia en los varones está relacionada
con el uso crónico. Estaría dado por la disminución del nivel de testosterona. En
cuanto a la función testicular, hay inhibición en forma reversible de la
espermatogénesis, impotencia fecundantis, con disminución del número e
incremento de espermatozoides anómalos afectando fundamentalmente a
personas en edades prepuberales, puberales y en pacientes con trastornos
preexistentes del funcionamiento sexual. Esto plantea la posibilidad de una
anomalía genéticamente transmitida si un espermatozoide viable con disminución
de la información genética fecunda un óvulo
En una mujer hay trastornos del ciclo menstrual e incluso ciclos anovulatorios,
acortamiento de la fase lútea y disminución del ciclo fértil.
Como el THC pasa la barrera placentaria se describen en la descendencia bajo
peso al nacer, parto prematuro, parto con meconio y malformaciones.
15
Controlar el dolor: La nocicepción es el mecanismo mediante el cual los estímulos
periféricos dañinos son transmitidos al SNC (sistema nervioso central). Los
receptores periféricos más importantes son fibras C no mielínicas cuyas terminales
responden a estímulos térmicos, mecánicos, químicos y poseen sus terminales en
capas superficiales del asta dorsal de la médula espinal y según el mecanismo del
control de compuerta transiten el mensaje al SNC.
El sistema por el cual el cannabis ejerce su acción analgésica está mediado por el
receptor CB123, y en interacción con el sistema opioide endógeno. La actuación de
los cannabinoides sobre la vía de transmición implicaría un componente
supraespinal en el que está comprometido el receptor CBI, y otro espinal en el que
aparecen estar implicados el propio receptor CBI así como el receptor opioide
kappa y su ligado endógeno, la dinorfina.
Este efecto analgésico ya fue bien conocido en la antigüedad usándose para
dolores de parto, dolores menstruales o en dolores por cáncer.
23
CB1 Receptor cannabinoide 1( conocido como CB1), se identificó por primera vez en 1990 en roedores.
Los receptores CB1 se encuentran en la membrana de las células del cerebro, la médula espinal y el sistema
nervioso periférico. Recientemente se descubrió que aparecen repeptores CB1 también en el tejido adiposo y
las células musculares.
24
VAUDAGNA, ELISA; “Subcultura adolescente y adicciones” ; PAIDOS; Buenos Aires; 2002; pág. 5-14
16
descriptivo de tipo cualitativo tomándose 30 entrevistas en profundidad a
adolescentes escolarizados entre 15 y 20 años de edad de la ciudad de Córdoba
del estrato socioeconómico alto y bajo seleccionados mediante un muestreo
intencional. Se tomaron: escuelas públicas ubicadas en proximidad a un
asentamiento marginal, las privadas con una cuota no menor a $250, enseñanza
bilingüe y/o doble escolaridad.
Los resultados fueron: en el nivel alto, el alcohol es el que les permite el acceso a
un estado de alienación deseado mientras que, para los del nivel bajo, se suman el
de las drogas ilegales, cocaína, marihuana y pegamentos. Ambos estratos
sostienen que el alcohol es la principal causa que los conduce a una falta de
prevención en la conducta sexual, exaltación, agresión, violencia y pérdida de la
capacidad volitiva.
En el nivel alto, el alcohol y las drogas ilegales son utilizadas para experimentar
nuevas sensaciones, también sirven como signos de pertenencia a un grupo, para
escapar a la presión de sus pares y reforzar la identidad. Racionalizan su propia
práctica de consumo de alcohol afirmando que “no es un vicio”, dejando entrever,
que se excluyen del consumo aún refiriendo que ingieren bebidas alcohólicas, “los
otros consumen, los otros son violentos, los otros se desinhiben”. El consumo se
rige a través de códigos que jerarquizan y diferencian las experiencias. La
condición social y las diferencias se manifiestan y se consolidan con los consumos:
se puede beber alcohol pero no ser un “drogadicto”, las prácticas adictivas las
ejecutan los otros, “los pobres”, “los que no se cuidan”, los que están “fuera de la
norma”. Para incursionar en la práctica adictiva del sector popular, es necesario
interiorizarse en la cotidianeidad del ámbito institucional representado por el
colegio. En este lugar, el cigarrillo que fumado a escondidas en el baño era un
estandarte de audacia para otras generaciones, para la actual, la transgresión a la
norma, la constituye el consumo de cualquier sustancia adictiva. Los sucesos de
agresiones entre alumnos y padres, patentizan la carencia cotidiana en la que se
desenvuelven estos adolescentes y sus familias, la exclusión, la situación de
vulnerabilidad social. Para ambos grupos el acceso a bebidas alcohólicas es
inmediato y se encuentran las mismas condiciones para el consumo de sustancias
altamente adictivas. Estas se popularizaron en alto grado entre los jóvenes del
sector popular, tendencia que comienza a penetrar rápidamente en el otro grupo.
La práctica adictiva se ha “naturalizado” al punto tal que no sorprende a los adultos
ni a los jóvenes para quienes las sustancias adictivas son parte de la cotidianeidad.
Los motivos para la aceptación de las sustancias adictivas en ambos estratos son:
la curiosidad, situaciones conflictivas, el ideal “light” de nuestra cultura y las
“bondades” anorexígenas de la droga, los efectos benéficos en el cuerpo, tales
como mayor rendimiento físico, deportivo e intelectual, desinhibirse, pertenecer.
Para ambos grupos de jóvenes la incorporación de las sustancias en los normas,
valores y códigos grupales, una identidad en plena formación, la presión de los
pares, la necesidad de afirmación de sí mismo, la carencia de un medio
comprometido o la búsqueda de nuevas experiencias, entre otros, son los
iniciadores en el consumo de drogas. Cabe agregar que la imbricación de estos
factores con la naturalización con que se asume el uso de sustancias perjudiciales
para la salud predice las dificultades y el desafío que supondrá la prevención de las
adicciones.
17
Capítulo 2: La marihuana en la cultura de nuestro país
18
paco) se pedía ordenarlas numéricamente por orden de nocividad , de las personas
encuestadas un 4% ubicó a la marihuana en el 2do puesto, un 4% en el 3ro, un
10% en el 4to, un 53% en el 5to, 12% en el 6to y un 17% en el 7mo puesto34; es
decir, un 17% de los encuestados marcó a la marihuana como la droga menos
nociva de todas, aún menos que el cigarrillo y el alcohol, y si tenemos en cuenta
que el cigarrillo y el alcohol fueron ubicados mayormente por los encuestados en
los puestos 6to y 7mo35, podemos decir que un 82%36 de los encuestados ubica a
la marihuana entre las tres drogas menos nocivas, junto con el cigarrillo y el
alcohol.
Esta naturalización social del consumo, sumada a fallos que, cada vez más,
tienden a evitar que los consumidores caigan en las redes del sistema penal,
fueron el primer paso hacia lo que en muchos ámbitos se denuncia como una
despenalización de hecho de la tenencia de marihuana para consumo personal. 37
Ramón José Granero38 explica el aumento constante del consumo de marihuana
por la mayor producción y, consecuentemente, mayor oferta proveniente de
Paraguay. Pero el crecimiento en la demanda también lo atribuye a la tolerancia
social, cercana a la del alcohol. En una nota para el Diario La Nacion, describe:
"Cuando vos le decís a un padre que su hijo está en un grupo de chicos que
consumen, ellos responden: escuchame, un porro..., no pasa nada. Es la droga de
mayor accesibilidad, está de moda; los pibes se fuman un porro como si se
tomaran un vaso de agua".
Quizá por eso Alberto Rey, que dirige la comunidad terapéutica del Programa
Delta39, y que hace más de 20 años se dedica al tratamiento de las adicciones,
observa: "Hoy no tenés pibes que fumen porro porque se separaron los papás. Hoy
tenés chicos que fuman marihuana porque, para ellos, es lo mismo que una
gaseosa o una cerveza. Hay padres que vienen acá y me dicen: mi hijo toma
cocaína; si por lo menos se fumara un porro... " 40
Las razones por las cuales una persona comienza a consumir marihuana son muy
diversas y personales, sin embargo podemos hacer una lista de las razones mas
comunes que motivan al consumo del estupefaciente41:
• Para modificar un estado de ánimo
• Por curiosidad
• Por los amigos
• Para evadirse de la realidad
• Por conflictos familiares
34
Ver apéndice, Gráficos, Gráfico nº 7f; Pág. 43
35
Ver apéndice, Gráficos, Gráfico nº 7a y 7b; Pág. 42
36
Esta cifra es la suma de los tres porcentajes que ubican a la marihuana en los últimos puestos.
Esta resolución es tan sólo una aproximación.
37
Ver apéndice, Recortes periodísticos, recorte periodístico nº 3, Pág. 68
38
Dr. José Ramón Granero. Secretario de Estado de la Secretaría de Programación para la
Prevención de la Drogadicción.
39
Comunidad Terapéutica. Rehabilitación de droga dependientes. Programa Delta es una
Asociación Civil sin fines de lucro dedicada a la prevención y asistencia de adicciones.
40
Ver apéndice, Recortes periodísticos, recorte periodístico nº 3, Pág. 68
41
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires; 2004; Pág.
195.
19
• Para mejorar el auto concepto.
• Sin motivos.
En una encuesta realizada Durante el 2008, un 44% de los encuestados
aseguraron que la causa por la cual un individuo se inicia en las drogas es por
curiosidad, mientras que un 41% contestó que consumen estos estupefacientes
para poder integrarse a un grupo social. 42
Lorena Pérez43 nos advierte acerca de las edades en las cuales generalmente los
usuarios de marihuana comienzan a consumir esta droga. Según sus palabras, hoy
en día Se comienza a consumir esta droga desde una temprana adolescencia, en
un rango que va desde los 14 a los 16 años, y en un caso muy extremo en el que
puede llegar iniciarse a los 11 años.44 Con el agravante que cuanto más temprano
se comienza a consumir un estupefaciente, más rápido el cuerpo se acostumbra al
mismo y más difícil es luego rehabilitarse.
Según Lorena Pérez, poco tienen que ver las clases sociales en este tema: “Nivel
cultural ya no existe, digamos la droga ya no es para la gente de bajos recursos
sino también para gente profesional. Toda clase de personas, ya no tiene que ver
la clase social”45
Debido a que el uso de drogas se instala en diferentes estructuras psicopatológias
y por múltiples motivaciones podemos encontrar países en donde la carencia de
oportunidades tanto laborales como de desarrollo puede desencadenar en el uso
de drogas para paliar la sensación de fracaso o impotencia. De igual modo en
países donde reina la abundancia económica el uso de drogas intenta suplir el
vacío existencial. Es decir que factores antagónicos pueden producir el mismo
síntoma.46
Entre los ambientes mas comunes donde inició el consumo de marihuana47, se
pueden contar:
• Cambio en el ambiente habitual (Ej.: cambio de escuela)
• Inicio de nuevas actividades
• Habitar en un barrio crítico con altos índices de consumo de drogas.
Las razones por las cuales un consumidor de marihuana utiliza esta droga son
básicamente las mismas por las cuales se inician a esta droga. Estas son:
• Desinhibición
• Autoconcepto
• Evadir problemas o sentimientos
42
Ver apéndice, Gráficos, Gráfico Nº 6; Pág. 41
43
Lorena Pérez: Psicóloga que trabaja en un Centro de prevención y asistencia de adicciones.
44
Ver apéndice, Entrevistas, entrevista Nº 2; Pág. 49
45
Ver apéndice, Entrevistas, entrevista Nº 2; Pág. 49
46
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires; 2004; Pág.
227.
47
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires; 2004; Pág.
198.
48
Apéndice; Gráficos, Grafico Nº 5; Pág. 41
20
En la entrevista realizada Andrés Rolando49, Cuando se le preguntó la razón de su
consumo, respondió: “Porque algo hay que consumir y prefiero que sea sano.
Porque prefiero elegir consumir marihuana y no televisión o alguna revista de moda
o algo que es igual de nocivo, o más, porque de última la marihuana no es nociva,
depende cual, ¿no? Pero… la marihuana no es nociva, pero hay cosas que si,
como el trabajo.”50 En esta respuesta podemos ver una clara relación con el
subtema desarrollado anterior, con respecto a la pérdida de la percepción del daño
que produce la marihuana.51
Uno de los organismos oficiales con que cuenta la Sedronar para armar sus
estadísticas del consumo es el Observatorio Argentino de Drogas y su director,
Diego Alvarez, informa: "Medimos el nivel de tolerancia social y la percepción del
riesgo del consumo de marihuana. Lo que sucede es que ha disminuido la
percepción, ha aumentado la tolerancia y, simultáneamente, su consumo", y
agrega que la cuarta parte de todas las personas que pidieron tratamiento por
alguna adicción ingresaron por la marihuana, en una sociedad que cree que la
marihuana no es adictiva.52
Si bien la adicción provocada por el consumo de marihuana aún se discute,
un informe sostiene que algunos consumidores frecuentes de la droga pueden
desarrollar una significativa tolerancia a la misma, por adaptación en el sistema
nervioso central.
La marihuana es adictiva y la interrupción de su consumo puede presentar
cuadro de abstinencia caracterizada por irritabilidad, alerta, nerviosismo, temblor de
las manos, angustia, anorexia, alteraciones en el sueño, depresión, pérdida de
peso y tendencia a fumar tabaco de forma impulsiva y exagerada. Estos síntomas
se presentan entre los 18 y 25 días después de dejar de fumar dado que es una
droga de “release” (descarga o catabolización) lenta, ya que es bastante
liposoluble.53
Otro informe dice que el síndrome de abstinencia no es referido con
frecuencia por los consumidores de cannabis probablemente porque en general es
suave y no lo reconocen como tal. En un estudio sólo manifestaron síndrome de
abstinencia el 4,8% de la muestra, con mayor frecuencia en los consumidores más
habituales.
Pero así como el consumo de marihuana produce una dependencia física
poco relevante, produce, eso si una gran dependencia emocional, con la
consecuente disfunción social y psicológica. Entre un 30-50% de los que consumen
cannabis a diario perderán el control de su consumo y usarán la droga para
afrontar los problemas que creen que son causados o exacerbados por su
consumo.54
49
Andrés Rolando, consumidor crónico activo de marihuana
50
Ver apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 1. Pág. 46
51
Ver capítulo 2, 2.1 “La tolerancia de la sociedad frente a la marihuana”, Pág. 18
52
Ver apéndice, Recortes periodísticos, recorte periodístico nº 3, Pág. 68
53
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?; DUNKEN; Buenos Aires;2004; Pág.
41
54
LOBO, Ortiz A.; “Cannabis, ¿Medicina o droga?; 6/11/98 en http://www.dinarte.es/salud-
mental/pdf106/106deba.pdf.
21
En la entrevista realizada a Lorena Pérez55, cuando se le preguntó si la marihuana
provoca drogadependencia, contesto: “Sí, provoca doga dependencia. La
marihuana sola provoca droga dependencia, pero después de que un paciente
empieza a consumir marihuana empieza a probar otras cosas, empieza a probar la
cocaína, empieza a probar los psicofármacos, el LSD, el éxtasis, todo ese tipo de
drogas, entonces la marihuana queda como una droga secundaria, pero es la
droga principal por ser la primera que probaron.” 56 Algo importante que señala
Lorena Pérez en su respuesta es que la marihuana es la puerta de entrada hacia
otras drogas más duras como el LSD o la cocaína. Esta afirmación aún se
encuentra en duda y se sigue debatiendo. Mientras que Andrés Rolando, durante
su entrevista, contesta rotundamente que la marihuana no es la puerta de entrada
hacia drogas más duras57, Lorena Pérez contesta que la marihuana efectivamente
sí lo es, con excepción del paco: “Sí. Como la cocaína sí, lo que sucede con el
paco es otra cosa distinta, digamos el paco ya se consume reemplazando un poco
a la marihuana. El que empieza a consumir marihuana cuesta que siga
consumiendo después paco, pero como el paco esta en este momento muy barato,
hay mucha gente que directamente empieza a consumir el paco, y que tiene otro
tipo de consecuencias”.
A este respecto, la explicación más plausible es que hay dos procesos: el mayor
reclutamiento al consumo precoz de adolescentes inconformistas que tienen
propensión a usar todo tipo de drogas ilícitas y su socialización con grupos que
proporcionen la oportunidad y la motivación de consumirlas.58
55
Lorena Pérez: Psicóloga que trabaja en un Centro de prevención y asistencia de adicciones.
56
Ver apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 2. Pág. 49
57
Ver Apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 1. Pág. 46
58
LOBO, Ortiz A.; “Cannabis, ¿Medicina o droga?; 6/11/98 en http://www.dinarte.es/salud-
mental/pdf106/106deba.pdf.
59
Ver apéndice; Gráficos, gráfico Nº 8; Pág. 44
60
Ver Capítulo 1;1.6.5 “Efectos de la marihuana en el organismo” , Pág. 12
22
Las consecuencias sobre la salud mental del uso diario del cannabis durante años
y décadas permanece incierta y así permanecerá muchos años por las dificultades
para investigarlo.
La mayoría de los efectos adversos asociados al consumo crónico no son
perceptibles a simple vista y se precisan análisis de grandes muestras y la
aplicación de métodos de examen muy sofisticados y de alta tecnología para
ponerlos en evidencia a diferencia del deterioro cognitivo encontrado en alcohólicos
crónicos. El significado personal y social de estos hallazgos y el grado en que son
reversibles con la abstinencia quedan todavía por determinar. Por los resultados de
algunos estudios longitudinales, parece que el consumo regular de cannabis
contribuye a empobrecer la evolución psicosocial entre adolescentes y jóvenes
adultos 61
En la entrevista realizada a Andrés Rolando62, cuando se le preguntó que
pensaba acerca del daño que la marihuana infringía en su salud, respondió:” Yo
creo que depende de cada cuerpo ¿entendés? O sea, para mi tiene beneficio, si
no, no la consumiría, pero depende… hay gente que le debe hacer mal como todo
¿entendés? Hay gente que la leche le hace mal ¿o no? O sea vos decís: ¿como
puede ser?, o sea, o el queso, cosas que son “sanas” teóricamente y les hace mal,
que se yo. Me parece que es así. Al estar investigada, al no tener dosis letal, al no
haber casos de muerte o afición por consumo de marihuana, entonces viste… es
como que ya te vas dando cuenta de que… se le puede dar un poco de margen
positivo al tema. Así que vos… que se yo… decís: bueno, yo ya se que el tabaco
hace mal, que el alcohol hace mal, la marihuana… de última, en caso de descreer
en los estudios, porque todavía no esta comprobado que haga mal.”63
Otro estudio más arriesgado hace denotar los cambios a largo plazo en el
comportamiento de un consumidor de marihuana64:
• Cambio en la conciencia hacia la pasividad, irreflexión y obtusidad
acostumbrándose gradualmente el usuario al que será su nuevo
estado normal de conciencia.
• Déficit de actividad y humor bajo la forma de indiferencia identificado
como “síndrome deficitario” o “síndrome amotivacional”. Este déficit
de actividad se manifiesta en el área escolar y laboral aislando al
consumidor.
• Cambio en el funcionamiento intelectual con pensamiento abstracto,
vago, estereotipado, con problemas de memoria y concentración y
pobreza en la introspección psicológica.
• Indiferencia afectiva como resultado de la disminución del campo
relacional de comunicación.
Entonces, ¿es el consumidor de marihuana una persona violenta o con un
comportamiento que pueda llegar a perjudicar a un tercero, tanto bajo el estado
psicoactivo de la marihuana o bajo un estado de abstinencia de la misma?, en
otras palabras, ¿produce la marihuana problemas en la conducta de la sociedad,
causando anormalidades en la misma?
61
LOBO, Ortiz A.; “Cannabis, ¿Medicina o droga?; 6/11/98 en http://www.dinarte.es/salud-
mental/pdf106/106deba.pdf.
62
Andrés Rolando, consumidor crónico activo de marihuana
63
Ver Apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 1. Pág. 46
64
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires;2004; Pág.
172
23
Estudios Longitudinales sobre el consumo de marihuana por parte de jóvenes por
parte de la edad universitaria indican que los usuarios tienen menor rendimiento
que los no usuarios, mayor aceptación de comportamientos anormales, mayor
comportación delincuente y agresión, mayor rebeldía, relaciones más dificultosas
con sus padres y mayores asociaciones con amigos delincuentes y que consumen
drogas.65
Con respecto a esto, Andrés Rolando nos cuenta: “el comportamiento de un
consumidor de marihuana es igual que el de cualquier persona…o sea te genera
un relajo, o sea, es una sustancia que te estas metiendo al cuerpo… convengamos
que genera un relajo mas que un acto violento, pero… no, eso depende de la
persona, hay gente que también se pone eufórica, entonces, viste, depende mucho
de la persona”66
65
MALDONADO, Roberto F. DEL V.; “MARIHUANA ¿LIBRE?;DUNKEN; Buenos Aires;2004; Pág.
172
66
Ver Apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 1. Pág. 46
67
Lorena Pérez: Psicóloga que trabaja en un Centro de prevención y asistencia de adicciones.
68
Centro de prevención y asistencia de adicciones.
69
Ver Apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 2. Pág. 49
24
• Se realizan citas semanales con los psicólogos voluntarios que trabajan en
los CPA, con quienes hablan de las causas y los problemas que lo llevaron a
consumir el estupefaciente, llevando al paciente a la reflexión y a la
concientización de los problemas que acarrea su adicción sobre su persona
y sobre sus allegados.
En el centro Andenes se realiza una variante del proceso de rehabilitación de la
marihuana. Este tipo de tratamiento para dejar la marihuana utiliza una
metodología cognitiva simple y de proyección lógica; sin embargo, al actuar
directamente sobre la mente humana, debe ser constantemente adaptada durante
el proceso, en función de las características y evolución de cada individuo para
dejar la marihuana.
En la primera etapa del tratamiento para dejar la marihuana, se orienta a la
persona a reflexionar sobre la comprensión de la gravedad de su adicción a la
marihuana y acepta su enfermedad. Una vez que el paciente acepta su adicción a
la marihuana y contando ya con una clara convicción al deseo de controlarse, el
programa de recuperación para dejar la marihuana sigue con sus siguientes pasos
en los cuales las terapias individuales y de grupo tratan al paciente en los tres
niveles: mente, cuerpo y espíritu70. Este tratamiento se encuentra basado en lo que
se llama “Modelo Minessota”71.
70
ANONIMO; “COMO DEJAR LA ADICCION DE LA MARIHUANA”; en
http://www.andenes.org/como-dejar-adiccion-marihuana.htm
71
Modelo de ayuda al alcohólico creado en el Estado de Minessota, EEUU, el cual luego fue
adaptado para diferentes adicciones.
72
LOBO, Ortiz A.; “Cannabis, ¿Medicina o droga?; 6/11/98 en http://www.dinarte.es/salud-
mental/pdf106/106deba.pdf.
25
por el principio hipocrático "Primero no dañar, después curar”. Se está intentando
abogar por el uso de la marihuana sólo en base a "testimonios" de miles de
pacientes y es una hipocresía que aquéllos que defienden el uso de la marihuana
por su eficacia en el tratamiento de las náuseas, glaucoma, dolores de cabeza,
fatiga o depresión niegan admitir que la preferencia por ésta es debida a su
principal efecto, la euforia.
26
opiáceos el margen entre dosis terapéutica y dosis letal es estrecho y con la
marihuana no existe riesgo alguno de muerte por sobredosis y es hipócrita también
demandar evidencia científica de la eficacia terapéutica si las sensaciones nocivas
que experimentan los pacientes son extremadamente difíciles de cuantificar en
experimentos controlados. Lo que realmente importa para un tratamiento es si un
enfermo grave siente alivio como resultado de una intervención.
Aún así, el uso medicinal de la marihuana aún se encuentra en estado de
investigación y no se encuentra demasiado difundido entre la sociedad. En una
encuesta realizada durante el 2008, cuando se les pregunto a los encuestados
cuáles serían las razones por las cuales un consumidor de marihuana utiliza esta
droga, tan sólo el 3% contestó que eran para uso medicinal, mientras que las
respuestas más usadas fueron la evasión de la realidad (45%) y como recreación
(35%).75
75
Ver apéndice, Gráficos, Gráfico Nº 5.Pág. 41
76
Ver apéndice; Imagen Nº 3, Pág. 80
77
Ver Capítulo 2; 2.1 “La Tolerancia de la sociedad frente a la marihuana”; Pág. 18
78
Lorena Pérez: Psicóloga que trabaja en un Centro de prevención y asistencia de adicciones
79
Ver apéndice; Entrevistas; Entrevista Nº 2; Pág. 49
80
CANESSA, Martin; “MARIHUANA, NARCOTRÁFICO Y OBRAS PÚBLICAS”; 29/05/2008 en
http://clandestino.bligoo.com/content/view/199154/MARIHUANA_NARCOTRAFICO_Y_POLITICAS_
PUBLICAS.html
27
2.8 Narcotráfico y autocultivo
81
CANESSA, Martin; “MARIHUANA, NARCOTRÁFICO Y OBRAS PÚBLICAS”; 29/05/2008 en
http://clandestino.bligoo.com/content/view/199154/MARIHUANA_NARCOTRAFICO_Y_POLITICAS_
PUBLICAS.html
82
Andrés Rolando, consumidor crónico activo de marihuana.
83
Ver apéndice; entrevistas, entrevista nº 1; Pág. 46
28
Al preguntarle a un individuo que participó en la marcha por la
despenalización de la marihuana realizada en junio del 200884 opinó: “Si bien es un
avance, no alcanza con despenalizar la tenencia. Es lo que pasa en Uruguay, todo
bien, pero igual voy a tener que comprarla en el circuito ilegal…Quiero plantar,
quiero tener mis plantas”. Dice un policía. “Yo no pagaría un prensado paraguayo”,
dice H., una de las personas que más sabe sobre autocultivo. “Hay transas que
cultivan, y si bien el cogollo se vende fortuna, el negocio no les cierra: para ellos es
más fácil hacer pasamano, comprar el prensado y venderlo, que cultivar”.85
La demanda por marihuana en Argentina se ha comportado a lo largo de los
años de manera más bien inelástica, por lo que podemos concluir que el 5,6% de
los argentinos entre 16 y 64 años que actualmente consumen marihuana en
Argentina no dejará de hacerlo.
La libertad de un individuo de consumir una droga o no, es un tema de arduo
debate, en el que difícilmente se podrán encontrar las comuniones necesarias para
legislar acerca del tema. Sin embargo, el como lograr algunos resultados
esperados, como la disminución del narcotráfico y su delincuencia y tráfico de
armas asociado, es un asunto en el que si se pueden lograr consensos, en base a
la experiencia de otros países y la lógica económica de los incentivos y
desincentivos.86
84
Ver apéndice; Imágenes, Imagen Nº 8; Pág. 82
85
DI GENOVA, Facundo; “Legalización de la marihuana y lucha contra los narcos”; 8/5/08 en
http://www.igooh.com/notas/legalizacion-de-la-marihuana-y-lucha-contra-los-narcos/
86
CANESSA, Martin; “MARIHUANA, NARCOTRÁFICO Y OBRAS PÚBLICAS”; 29/05/2008 en
http://clandestino.bligoo.com/content/view/199154/MARIHUANA_NARCOTRAFICO_Y_POLITICAS_
PUBLICAS.html
29
Capítulo 3: Despenalización de la marihuana en Argentina
El 10 de marzo del 2008 fue la fecha en la que el ministro del interior Aníbal
Fernández anunció un discurso en el que defendió el proyecto oficial que prevé no
castigar el consumo de drogas en el país al tiempo que negó que se esté pensando
en despenalizar los estupefacientes y que se vaya de dejar de combatir el
narcotráfico. Según Fernández, el 60% por ciento de las causas tramitadas en la
justicia federal están relacionadas con narcotráfico y de ellas sólo el 4% termina en
condena. El ministro indicó que el proyecto es el resultado de un trabajo de mucho
tiempo realizado en forma conjunta por las carteras de Justicia, Salud y Educación.
De acuerdo con el ministro, la legislación actual mostró en estos casi 20 años de
vigencia que no es efectiva y por ese motivo consideró necesario hacer una
revisión profunda. En ese sentido, Fernández manifestó que la despenalización del
consumo permitirá actuar en forma más eficiente en el combate del narcotráfico. 87
Así fue como comenzó este gran debate el cual tiene como gran interrogante:
¿Despenalizar o no?
• Ley 20.71189
Esta ley fue dictada en el año 1974, durante el gobierno de Isabel Perón,
condenaba el mero consumo de drogas con penas de 1 a 6 años de prisión, bajo la
justificación de que el consumidor pone en riesgo a la sociedad.
• Caso Bazterrica
Durante 1986, el músico, miembro del conjunto “Los Abuelos de la Nada” Gustavo
Bazterrica fue detenido por tenencia de estupefacientes para consumo propio. En
la entrevista realizada a Héctor García Blanco90, habla del tema: “…hubo en el 86
un caso conocido, el caso de Bazterrica que había sido encontrado en tenencia de
marihuana para su propio consumo y que el juez declaró que era inconstitucional la
pena por tenencia para consumo propio. Esto lo había dicho basándose en el art.
19 de la constitución nacional, que dice que toda acción privada que no ofenda a
un tercero se encuentra exenta de autoridad de los magistrados.
Yo no se si esta resolución se vio favorecida por el hecho de que Gustavo
Bazterrica era un músico famoso, pero en todo caso el juez tuvo mucha razón de
todos modos.”91
87
ANÓNIMO; “No se trata de despenalizar así porque sí”; 11/03/08 en
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=994665
88
ELIASCHEV, Tomas; ARGENTINA NO ES UN PAÍS CARETA"; THC; Nº9, Pág.16-23; Buenos
Aires; 01/04/08
89
Ver apéndice, Leyes, Ley 20.711; Pág. 54
90
Héctor García Blanco, abogado que trabaja en un centro de prevención y asistencia de adicciones
91
Ver apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 3, Pág. 52
30
• Ley 23.73792
Hacia 1989, mediante esta ley se vuelve a criminalizar la tenencia para consumo,
con la opción de cumplir la pena mediante una rehabilitación (en casos de
consumo personal).
• Caso Montalvo93
Durante 1990, a raíz del caso Montalvo, en el cual Ernesto Montalvo había sido
detenido con 2,7 gramos de marihuana para consumo propio, la “mayoría
automática” de la Corte menemista vuelve a declarar la inconstitucionalidad de la
persecución del consumo, con la justificación de que se pone en riesgo al individuo
y a la sociedad.
92
Ver apéndice, Leyes, Ley 23.737; Pág. 56
93
Ernesto Ángel Montalvo, artista, pintor ecuatoriano.
94
Héctor García Blanco, abogado que trabaja en un centro de prevención y asistencia de adicciones
95
Ver Capítulo 2; 2.1 “La Tolerancia de la sociedad frente a la marihuana”; Pág. 18
96
Ver Apéndice, Entrevistas, Entrevista Nº 3, Pág. 52
31
frontera norte hacia aeropuertos o puertos marítimos de salida hacia Estados
Unidos y Europa.
Para evaluar la cantidad de droga que es transportada o comercializada
internamente se usa como referencia para evaluarla el monto decomisado en los
operativos policiales. Las estadísticas de la Secretaría de Programación para la
prevención de la Drogadicción y la Lucha contra el Narcotráfico (SeDroNar)
muestran un fuerte aumento de los decomisos desde comienzos de la década del
noventa hasta 1997, luego una caída seguida de estancamiento y un nuevo
aumento a partir de 2003. En 2005 el decomiso de droga llegó a un récord,
superando el pico de 1997. Los números pueden reflejar una mayor eficiencia de
los operativos, pero las propias autoridades estiman que se debe, también, a un
incremento de la actividad del narcotráfico.
El tránsito de drogas es de por sí, un grave problema, porque implica el desarrollo
de organizaciones delictivas que pueden llegar a tener gran poder económico y
capacidad para corromper funcionarios civiles y de las fuerzas de seguridad. Pero,
como señalan los expertos en el tema, el ingreso de drogas suele estar
acompañado de una mayor difusión en el mercado local.
Los relevamientos oficiales también dan cuenta de este fenómeno. Una reciente
encuesta del SeDroNar muestra, precisamente, un aumento en el consumo de
drogas ilícitas entre chicos de escuelas secundarias. Se trata de un dato
inquietante, considerando los graves problemas sanitarios, sociales y hasta de
seguridad que ocasiona la drogadicción entre los jóvenes.97
Habla el abogado Héctor García Blanco98: “esto es algo que todavía no se termina
de aclarar, pero básicamente se trata de despenalizar, que no es lo mismo que
legalizar, aclaremos. Es decir, la tenencia de drogas, ya sea para consumo propio,
va a seguir siendo ilegal, pero al estar despenalizada no habrá pena para el
infractor, es decir, si se encuentra a un individuo en posesión de drogas, se le
confiscaría el estupefaciente pero no se le detendría ni se le cobraría ninguna
multa.” 99 Así como lo dijo Héctor García Blanco, se trata de despenalizar la
tenencia de marihuana para consumo propio, aunque esto no deje de ser
formalmente ilegal, es decir, lo que se hará será quitarle punibilidad. Por tanto no
habrá más detenciones por tenencia de marihuana para consumo propio,
defendido éste por el artículo 19100 de la Constitución Nacional Argentina.
No obstante, aún no se conocen los límites que fijará el máximo tribunal sobre la
cantidad que sería aceptada como “tenencia para consumo personal” y no con
fines de comercialización.
Lo que se busca es, mediante la mayoría de los votos de los 7 ministros que
integran la Corte para declarar la inconstitucionalidad del artículo 14 de la Ley
27.737.101
97
ANONIMO; “Aumento del narcotráfico”; 07/02/2006 en
http://www.clarin.com/diario/2006/02/07/opinion/o-01137431.htm
98
Héctor García Blanco, abogado que trabaja en un centro de prevención y asistencia de adicciones
99
Ver apéndice; Entrevistas; entrevista Nº 3; Pág. 52
100
Art. 19:Las acciones privadas de los hombres que de ningún modo ofendan al orden y a la moral
pública, ni perjudiquen a un tercero, están sólo reservadas a Dios, y exentas de la autoridad de los
magistrados
101
Ver Apéndice; Leyes; Ley 27.737, art. 14; Pág. 58.
32
La posición que asumirían los jueces es concordante con la línea que sigue el
Poder Ejecutivo, que en los últimos meses se expresó a favor de la
despenalización a través del ministro de Justicia, Seguridad y Derechos Humanos,
Aníbal Fernández, quien propuso en reiteradas ocasiones “no penalizar a los
consumidores, sino tratarlos en el sistema de salud” y había prometido el fallo para
antes de fin de año .
Una Comisión Especial de académicos, fiscales, jueces, funcionarios y psicólogos
trabaja sobre un proyecto oficial de ley para despenalizar el consumo y
considerarlo una enfermedad que debe ser tratada.102
102
BANKI, Federico; “Consenso para una nueva ley de drogas”; 27/12/08 en
http://www.nocturnabsas.com.ar/forum/discusiones-generales/232122-corte-cerca-de-despenalizar-
tenencia-de-droga-personal.html
103
Ver apéndice, Gráficos, Gráfico Nº 10, Pág. 45
104
Andrés Rolando, consumidor crónico activo de marihuana
105
Ver apéndice, Entrevistas, entrevista Nº 1; Pág. 46
106
Lorena Pérez: Psicóloga que trabaja en un Centro de prevención y asistencia de adicciones.
107
Ver apéndice, Entrevistas, entrevista Nº 2; Pág. 49
108
Ver apéndice, Entrevistas, entrevista Nº 3; Pág. 52
33
Conclusión
34
inocuidad de la marihuana y conseguir desarrollar medicinas en base a los
compuestos de la misma, es decir, aislando y sintetizando los compuestos útiles
para estos fines para lograr así suprimir aquellos que producen efectos adversos
en el organismo.
Por último, en el aspecto psicológico, podemos decir que la alta tolerancia social de
la marihuana desinhibe los prejuicios o temores asociados al consumo de drogas,
presentándose al mercado como la droga de inicio de preferencia junto al alcohol y
al tabaco. La combinación del consumo de marihuana con las dos drogas legales
de mayor consumo hace desestimar la idea de que la despenalización frenará el
consumo. En este orden de cosas los programas de prevención y tratamientos
requieren de un abordaje interdisciplinario y con compromiso tanto político de las
autoridades en materia de Salud Pública.
Entonces: ¿produciría la despenalización de marihuana una evolución en la
sociedad argentina o más bien una involución? Basándonos en los estudios
médicos psicológicos descriptos anteriormente podemos decir que los efectos del
consumo de marihuana en nuestro organismo, tanto en el momento del consumo
como tras su reiterado uso a través del tiempo, producen un déficit en nuestro uso
del pensamiento y la razón. Es por eso que la despenalización de una droga que
limita nuestra libertad de pensamiento y uso de la razón no puede ser considerada
como una evolución de la sociedad sino más bien como una involución. Pero
entonces cabe preguntarnos: ¿por qué la sociedad (o al menos parte de ella), en
especial la juventud, valora y defiende el uso de las drogas? Sucede que el
discurso general de nuestra sociedad es contrario a cualquier esfuerzo que no
reporte un beneficio inmediato constante y sonante. Esta idea que no solo está
instalada en los medios de comunicación y en la publicidad mercantil sino en la
juventud, en los padres de esa juventud. Las drogas solo son una rama que parte
de esta idea, por la cual cada vez gana mayor terreno, mientras que el estudio o
cualquier actividad que requiera un esfuerzo mayor para un beneficio distante
pierde cada vez más terreno.
Si bien revertir este pensamiento social cultural llevará generaciones, la manera de
hacerlo es instalando en la sociedad una serie de recursos que nos permitan
utilizar la mente, como por ejemplo lo es la buena alimentación. También es
necesario sembrar a fuerza de realidades y sucesos la idea de que el esfuerzo es
redituable.
35
Bibliografía
36
APÉNDICE
37
Modelo de encuesta
Con esta encuesta se busca una visión general del pensamiento colectivo de la
sociedad argentina, por lo cual esta encuesta será totalmente anónima e
impersonal, de esta manera se garantiza al encuestado que ningún dato aportado
afectará a su vida privada.
Sexo:
• Masculino
• Femenino
Edad:
Clase social:
• Alta
• Media
• Baja
1) ¿Usted consume o consumió alguna vez marihuana?
• Si
• No
5) ¿Por qué razones cree que el consumidor de marihuana utiliza esta droga?
• Recreación
• Uso medicinal
• Evasión de la realidad
• Otros
• NS/NC
38
6) ¿Cuáles cree que son las razones por las cuales una persona comienza a
consumir marihuana?
• Curiosidad
• Necesidad de integrarse en un grupo social
• Otros
• NS/NC
10) ¿Cree usted que la cantidad de consumidores de esta droga aumentara tras
su despenalización?
• SI
• NO
• NS/NC
11) ¿Cree usted que el consumo de marihuana en el país esté ligado al tema de la
inseguridad?
• Si
• No
• NS/NC
12) ¿Por qué razones cree que el gobierno ha impulsado la ley de despenalización
del consumo de marihuana?
• Búsqueda de una solución frente a la saturación de cárceles de
consumidores de marihuana.
• Para poder rehabilitar al consumidor en lugar de detenerlo.
• Para así lograr disminuir el narcotráfico.
• NS/NC
39
Gráficos
Gráfico nº 1
35%
Si
65%
No
Gráfico nº 2
6%
17%
Si
77% No
NS/NC
Gráfico nº 3
31% 23%
A favor
En contra
46%
Neutral
40
Gráfico nº 4
15% 41% Si
44% No
NS/NC
Gráfico nº 5
Recreación
11% 6%
35%
Uso medicinal
Evasión de la realidad
45%
Otros
3% NS/NC
Gráfico nº 6
41
Gráfico nº 7 a
Gráfico nº 7 b
Gráfico nº 7 c
42
Gráfico nº 7 d
Gráfico nº 7 e
Gráfico nº 7 f
Grado de nocividad de la
marihuana según los encuestados
4% 4% Grado 1 (más nocivo)
17% 10% Grado 2º
11% Grado 3º
Grado 4º
54% Grado 5º
Grado 6º
Grado 7º (menos nocivo)
43
Gráfico nº 7 g
Gráfico nº 8
No beneficia ni perjudica
la salud
Gráfico nº 9
44
Gráfico nº 10
Gráfico nº 11
10% 36% Si
54% No
NS/NC
Gráfico nº 12
45
Entrevistas
Entrevista nº 1
Andrés Rolando: Porque algo hay que consumir y prefiero que sea sano. Porque
prefiero elegir consumir marihuana y no televisión o alguna revista de moda o algo
que es igual de nocivo, o más, porque de última la marihuana no es nociva,
depende cual, ¿no? Pero… la marihuana no es nociva, pero hay cosas que si,
como el trabajo.
Andrés Rolando: Y si… porque la gente ya te genera un prejuicio y hay gente que
tiene un prejuicio para bien y gente que tiene un prejuicio para mal, entonces ya
desde el momento que genera prejuicio hay gente que le caes bien y hay gente
que le caes mal por un acto privado ¿no? Que ahí es donde uno dice: bueno me
importa un carajo si cae bien o mal. La discriminación pasa por otro lado, o sea por
el tema de decir: no hay que discriminar, porque de última es un acto privado que
no tiene consecuencias a terceros ¿entendés?
Andrés Rolando: Y… eso es por una cuestión social ¿no? Porque bueh, primero
al margen del negocio que obvio que hay, es el punto que la sociedad tampoco la
tolera todavía ¿entendés? Hay gente que esta a favor y hay gente que todavía no
y… que se yo, lo siente como algo malo y lo pone al mismo nivel de una droga
como la heroína o la cocaína. Entonces como hay ignorancia sobre el tema, la
gente no tiene tolerancia.
46
bueno, yo ya se que el tabaco hace mal, que el alcohol hace mal, la marihuana…
de última, en caso de descreer en los estudios, porque todavía no esta
comprobado que haga mal.
German Moroni: Esta pregunta deviene porque hay gente que piensa que un
consumidor de marihuana es una persona violenta…
Andrés Rolando: No, convengamos que genera un relajo mas que un acto
violento, pero… no, eso depende de la persona, hay gente que también se pone
eufórica, entonces, viste, depende mucho de la persona.
German Moroni: ¿Cree que la marihuana sea la entrada hacia otras drogas mas
duras como lo son la cocaína o el paco?
Andrés Rolando: No
Andrés Rolando: Y que… qué se yo… es un tema que uno no quiere estar ni
cerca, o sea, uno como consumidor justamente no quiere ser parte de eso
tampoco, entonces no es que uno esta de acuerdo y dice: “Si aguante”; no, al
contrario, estas diciendo: “loco, o sea, regularicen todo, o sea, denme mas salud”.
German Moroni: ¿Cuál cree que es la mejor manera de mantenerse alejado del
narcotráfico?
47
Andrés Rolando: Cultivando.
German Moroni: ¿Por qué razón cree que el gobierno debería despenalizar el
consumo de marihuana en nuestro país?
48
Entrevista nº 2
Esta entrevista fue realizada Lorena Pérez, una psicóloga que trabaja
voluntariamente, de manera gratuita en el barrio de Wilde en un CPA (centro de
prevención y asistencia de adicciones) y que ha accedido a respondernos algunas
preguntas acerca de su trabajo en el centro, sobre cómo son métodos de
asistencia que se ofrecen en estos lugares, la marihuana en la sociedad y el
impacto que puede llegar a provocar la despenalización en la misma.
Lorena Pérez: Yo conocí el lugar por una amiga que trabajaba acá, y en un
momento ella tuvo que dejar su trabajo y yo me quede en el lugar de ella. Y
después de ahí yo estudié el curso de operador socio terapéutico en adicciones
para como, mas o menos, también poder ayudar, dar una mano a los Psicólogos, y
bueno, yo trabajo en la parte administrativa.
49
muchos años de consumir y con mucho deterioro, entonces lo que hacen es
medicarlo para que el paciente pueda soportar la abstinencia.
German Moroni: ¿Los pacientes vienen por su cuenta o son traídos por los
familiares?
Lorena Pérez: Los pacientes, muchos vienen por su cuenta, muchos son traídos
por sus familiares, hay muchos pacientes que los trae la policía o vienen
judicializados.
German Moroni: ¿A qué edad las personas comienzan a consumir esta droga?
Lorena Pérez: Generalmente los que consumen sólo marihuana, que es con lo
que empiezan y después pueden consumir otro tipo de drogas, lo hacen desde
adolescentes, desde muy chicos.
Lorena Pérez: Sí, provoca doga dependencia. La marihuana sola provoca droga
dependencia, pero después de que un paciente empieza a consumir marihuana
empieza a probar otras cosas, empieza a probar la cocaína, empieza a probar los
psicofármacos, el LSD, el éxtasis, todo ese tipo de drogas, entonces la marihuana
queda como una droga secundaria, pero es la droga principal por ser la primera
que probaron.
German Moroni: ¿Es cierto que la marihuana es la entrada hacia drogas mas
duras como la cocaína o el paco?
Lorena Pérez: Sí. Como la cocaína sí, lo que sucede con el paco es otra cosa
distinta, digamos el paco ya se consume reemplazando un poco a la marihuana. El
que empieza a consumir marihuana cuesta que siga consumiendo después paco,
pero como el paco esta en este momento muy barato, hay mucha gente que
directamente empieza a consumir el paco, y que tiene otro tipo de consecuencias
¿no?
Lorena Pérez: Bueno, se hace una entrevista de orientación donde se hace una
primera escucha y a partir de ahí se ve qué dispositivo el paciente necesita. Si
necesita una internación urgente porque el paciente tiene peligrosidad para sí y
para terceros, o si necesita tener un tratamiento ambulatorio o una casa de día.
Igualmente se siguen teniendo otras entrevistas con el paciente, sobre todo si al
50
paciente lo van a internar. El paciente empieza a venir más seguido. Acá las
entrevistas son una vez a la semana, cuando es el proceso ambulatorio, si no,
empiezan a venir un poquito más seguido para contener al paciente y que trate de
estar el mayor tiempo posible en abstinencia, y después, cuando sale una cama
(como este es un lugar público cuesta que salga una cama para internación) se
interna el paciente.
Lorena Pérez: Son psicólogos los que trabajan, y bueno, puertas adentro del
consultorio lo que hace el paciente es mayoritariamente hablar de lo que le pasa;
es un tema personal de cada uno, no hay, digamos, algo estadístico que diga que
el paciente consume por tal cosa. Pueden ser problemas familiares, puede ser
porque tiene amigos que consumen y se tienten a probar… no hay algo estipulado.
Lorena Pérez: Yo, esto te lo digo desde lo personal, no estoy de acuerdo con la
despenalización de la marihuana porque creo que empezaría como a tener una
libertad mayor el consumo de drogas. Si la marihuana esta despenalizada para el
consumidor, les abre una puerta para seguir consumiendo otro tipo de drogas, el
consumidor de marihuana solo nunca se queda con la marihuana nada más, esto
abre una puerta para que después se despenalice la cocaína y que después de
despenalicen el resto de las drogas y esto llevaría que tengamos una mayor
población de adictos.
German Moroni: ¿Qué opina del consumo de marihuana para usos medicinales?
Lorena Pérez: Hay muchos pacientes que son pacientes duales. Nosotros
llamamos pacientes duales a los pacientes que tienen una base psiquiátrica que
los pacientes compensan con el consumo de marihuana. Muchas veces esto es
favorable. Lo que se hace es tratar que el paciente reduzca gradualmente el
consumo de marihuana.
Lorena Pérez: Yo creo que los medios no están bien informados con respecto a lo
que tiene que ver con las adicciones en general, salvo ahora que se esta viendo un
poco mas el tema del paco, no están informados, entonces lo que hacen es hablar
sin tener mucha razón y si puede parecer una apología al consumo de marihuana.
Ahora lo que tiene que ver ya con lo judicial, bueno, creo que es más que nada
problemas políticos que tienen que ver. En este sentido los medios también se
meten con lo político.
51
Entrevista nº 3
Esta entrevista fue realizada a Héctor García Blanco, un abogado que trabaja en
un CPA (centro de prevención y asistencia de adicciones), entre otros lugares, y
que ha accedido a compartir con nosotros su mirada optimista hacia la nueva ley
de despenalización y a aclararnos de que se trata este proyecto y cómo se llevará
a cabo.
Héctor García Blanco: Bueno el primer problema es que no existe una vigencia
sociológica de esta ley en la sociedad, hoy en día la sociedad no ve a la marihuana
mucho mas peligrosa que el alcohol o el cigarrillo. Por otro lado, el gobierno,
mediante la ley vigente, ha gastado un gran esfuerzo y un gran presupuesto en
atrapar en atrapar a todo el que encontrara en posesión de drogas. No digo que
esté mal, está bien, es lo que debe hacerse, pero el problema es que se han
llenado cárceles de drogadictos, que no son la causa del tráfico de drogas sino la
consecuencia… de esta gran red que es el narcotráfico e incluso se sabe que la
gran mayoría de los que son encarcelados por tenencia de drogas para consumo
propio, al salir vuelven a consumir. Entonces con esta ley de prohibición no se está
solucionando nada ¿ se entiende?
Por eso yo creo que la mejor manera de combatir las drogas es… ante todo la
prevención… la prevención, la comunicación, es decir prevenir a un futuro
consumidor, y por otro lado… contener, asistir, ayudar al drogadicto en vez de
aislarlo en una cárcel, hablar con el, hacerlo cambiar de opinión… y en este sentido
estoy de acuerdo con el proyecto de ley del gobierno.
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Yo no se si esta resolución se vio favorecida por el hecho de que Gustavo
Bazterrica era un músico famoso, pero en todo caso el juez tuvo mucha razón de
todos modos.
Héctor García Blanco: Bueno supongo que era de esperarse que no todos
estuvieran de acuerdo con respecto a la nueva ley. No estoy seguro si todos
comprenden bien de que se trata y que fines busca esta ley, ya que los medios
siempre tienden a tergiversar estas cosas, pero igualmente es interesante que se
discutan estos temas, porque yo creo que la discusión siempre enriquece a la
comprensión.
Héctor García Blanco : Lo dudo mucho. No creo que suban los números, esto es
algo que ya está premeditado. De por si la cantidad de usuarios de drogas
aumenta cada año, esto lamentablemente es algo normal, aunque es remediable.
Yo no creo que estas cifras se disparen tras la despenalización, justamente la idea
de esta ley es revertir la situación actual, pero va a ser un largo proceso. Es asi la
lucha contra las drogas es algo que nunca se va a terminar, básicamente lo que se
intenta con esta ley es cambiar la estrategia.
Héctor García Blanco: Bueno justamente esa es la idea y espero que así se
cumpla.
53
Leyes
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diez días de recibida la comunicación, el tribunal que la expidió no enviare personal
autorizado para proceder al traslado del detenido.
Sin perjuicio de lo dispuesto en el párrafo precedente, el juez requerido
podrá autorizar el traslado del detenido por intermedio de la policía local.
Art.5. Tratándose de condenados, la detención podrá extenderse hasta
sesenta días o el tiempo menor que le faltare cumplir, siempre que el tribunal que
hubiere ordenado la captura confirmara la subsistencia de ésta dentro del señalado
plazo de siete días.
Art.6. La incomunicación de la persona detenida no podrá, en caso alguno,
exceder del término de diez días, ni del plazo menor que establezca la Constitución
de la provincia en que se produjo la detención.
Art.7. Si al producirse la detención estuvieren en poder del capturado objetos
que el juez a cuya disposición se encuentra considerase que puedan tener relación
con el delito en virtud del cual se ha librado la orden procederá a remitirlos al
tribunal de la causa, previa consulta con éste, que deberá efectuar al tiempo de
cursar el pedido de informe previsto en el artículo 3.
Art.8. Los funcionarios policiales de cualquiera de las partes signatarias,
provistos de documentos que los acrediten como tales, que persiguiesen desde su
territorio y sin solución de continuidad un imputado, condenado o autor de flagrante
delito, que se internare en territorio de la otra parte, podrán continuar la
persecución y proceder a su detención cuando la policía local se encuentre
materialmente imposibilitada por la celeridad de los hechos para cumplir
eficientemente su cometido de aprehender al perseguido, debiendo
inmediatamente entregarlo a la autoridad policial local, con expresión por escrito de
las causas del procedimiento.
La autoridad policial local pondrá de inmediato al detenido a disposición del
juez de instrucción de turno del lugar de la aprehensión, quien procederá según lo
disponen los artículos anteriores.
Si se persiguiese a un condenado por un delito de competencia federal, el
detenido deberá ser puesto directamente a disposición del juez federal con
competencia territorial en el lugar de la aprehensión, quien procederá en igual
forma.
En caso de flagrante delito, el magistrado pondrá al detenido a disposición
del juez competente, observando lo prescripto en los artículos 4 a 7.
Art.9. Quedan derogadas todas las disposiciones legales o reglamentarias
que se opongan al presente convenio.
Art.10. Este convenio será sometido por las partes signatarias a la
aprobación legislativa, y entrará en vigencia a los treinta días a contar desde la
fecha de publicación de la última ley que lo apruebe.
Art.11. Podrán adherir al presente convenio todas las provincias, sin
perjuicio de las reservas que consideren conveniente efectuar respecto del artículo
8 mediante la sanción de la ley aprobatoria correspondiente, rigiendo respecto de
ellas a partir de los treinta días contados desde la fecha de publicación de dicha
ley.
Art.12. Todos los plazos previstos en el presente convenio se computarán en
días corridos.
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Ley 23.737 TENENCIA Y TRAFICO DE ESTUPEFACIENTES
Artículo 1º. Reemplázase el artículo 204 del Código Penal por el siguiente
texto:
Art. 204: Será reprimido con prisión de seis meses a tres años el que
estando autorizado para la venta de sustancias medicinales, las suministrare en
especie, calidad o cantidad no correspondiente a la receta médica o diversa de la
declarada o convenida, o sin la presentación y archivo de la receta de aquellos
productos que según las reglamentaciones vigentes no pueden ser
comercializados sin ese requisito.
Artículo 2º. Incorpórase como artículo 204 bis del Código Penal el siguiente texto:
Art. 204 bis: Cuando el delito previsto en el artículo anterior se cometiere por
negligencia, la pena será de multa de trescientos australes a seis mil australes.
Artículo 3º. Incorpórase como artículo 204 ter del Código Penal el siguiente texto:
Art. 204 ter: Será reprimido con multa de seiscientos australes a doce mil australes
el que teniendo a su cargo la dirección, administración, control o vigilancia de un
establecimiento destinado al expendio de medicamentos, omitiere cumplir con los
deberes a su cargo posibilitando la comisión de alguno de los hechos previstos en
el artículo 204.
Artículo 4º. Incorpórase como artículo 2 04 quater del Código Penal el siguiente
texto: Art. 204 quater: Será reprimido con prisión de seis meses a tres años el que
sin autorización vendiere sustancias medicinales que requieran receta médica para
su comercialización.
Artículo 5º. Será reprimido con reclusión o prisión de cuatro a quince años y multa
de dos millones doscientos cincuenta mil a ciento ochenta y siete millones
quinientos mil australes el que sin autorización o con destino ilegítimo:
a) Siembre o cultive plantas o guarde semillas utilizables para producir
estupefacientes, o materias primas, o elementos destinados a su producción o
fabricación.
b) Produzca, fabrique, extraiga o prepare estupefacientes.
c) Comercie con estupefacientes o materias primas para su producción o
fabricación o los tenga con fines de comercialización, o los distribuya, o dé en
pago, o almacene o transporte.
d) Comercie con plantas o sus semillas, utilizables para producir estupefacientes, o
las tenga con fines de comercialización, o las distribuya, o las dé en pago, o las
almacene o transporte.
e) Entregue, suministre, aplique o facilite a otro estupefacientes a título oneroso. Si
lo fuese a título gratuito, se aplicará reclusión o prisión de tres a doce años y multa
de tres mil a ciento veinte mil australes.
Si los hechos previstos en los incisos precedentes fueren ejecutados por
quien desarrolla una actividad cuyo ejercicio dependa de una autorización, licencia
o habilitación del poder público, se aplicará, además, inhabilitación especial de
cinco a quince años.
En el caso del inciso a), cuando por la escasa cantidad sembrada o cultivada
y demás circunstancias, surja inequívocamente que ella está destinada a obtener
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estupefacientes para consumo personal, la pena será de un mes a dos años de
prisión y serán aplicables los artículos 17, 18 y 21.
En el caso del inciso e) del presente artículo, cuando la entrega, suministro o
facilitación fuere ocasional y a título gratuito y por su escasa cantidad y demás
circunstancias, surgiere inequívocamente que es para uso personal de quien lo
recepta, la pena será de SEIS (6) meses a TRES (3) años de prisión y, si
correspondiere, serán aplicables los artículos 17, 18 y 21.
Artículo 6º. Será reprimido con reclusión o prisión de cuatro a quince años y multa
de dos millones doscientos cincuenta mil a ciento ochenta y siete millones
quinientos mil australes el que introdujera al país estupefacientes fabricados o en
cualquier etapa de su fabricación o materias primas destinadas a su fabricación o
producción, habiendo efectuado una presentación correcta ante la Aduana y
posteriormente alterara ilegítimamente su destino de uso.
En estos supuestos la pena será de tres a doce años de reclusión o prisión,
cuando surgiere inequívocamente, por su cantidad, que los mismos no serán
destinados a comercialización dentro o fuera del territorio nacional.
Si los hechos fueren realizados por quien desarrolle una actividad cuyo ejercicio
depende de autorización, licencia o habilitación del poder público, se aplicará
además inhabilitación especial de tres a doce años.
Artículo 7º. Será reprimido con reclusión o prisión de ocho a veinte años y multa
de once millones doscientos cincuenta mil a trescientos treinta y siete millones
quinientos mil australes, el que organice o financie cualquiera de las actividades
ilícitas a que se refieren los artículos 5º y 6º precedentes.
Artículo 8º. Será reprimido con reclusión o prisión de tres a quince años y multa de
dos millones doscientos cincuenta mil a ciento doce millones quinientos mil
australes e inhabilitación especial de cinco a doce años, el que estando autorizado
para la producción, fabricación, extracción, preparación, importación, exportación,
distribución o venta de estupefacientes los tuviere en cantidades distintas de las
autorizadas; o prepare o emplee compuestos naturales, sintéticos u oficinales que
oculten o disimulen sustancias estupefacientes, y al que aplicare, entregare, o
vendiere estupefacientes sin receta médica o en cantidades mayores a las
recetadas.
Artículo 9º. Será reprimido con prisión de dos a doce años y multa de un millón
ciento veinticinco mil a dieciocho millones setecientos cincuenta mil australes e
inhabilitación especial de uno a cinco años, el médico u otro profesional autorizado
para recetar, que prescribiera, suministrare o entregare estupefacientes fuera de
los casos que indica la terapéutica o en dosis mayores de las necesarias. Si lo
hiciera con destino ilegítimo la pena de reclusión o prisión será de cuatro a quince
años.
Artículo 10. Será reprimido con reclusión o prisión de tres a doce años y multa de
un millón ciento veinticinco mil a dieciocho millones setecientos cincuenta mil
australes el que facilitare, aunque sea a título gratuito, un lugar o elementos, para
que se lleve a cabo alguno de los hechos previstos por los artículos anteriores. La
misma pena se aplicará al que facilitare un lugar para que concurran personas con
el objeto de usar estupefacientes. En caso que el lugar fuera un local de comercio
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se aplicará la accesoria de inhabilitación para ejercer el comercio por el tiempo de
la condena, la que se elevará al doble del tiempo de la misma si se tratare de un
negocio de diversión.
Durante la sustanciación del sumario criminal el juez competente podrá decretar
preventivamente la clausura del local.
Artículo 11. Las penas previstas en los artículos precedentes serán aumentadas
en un tercio del máximo de la mitad del mínimo, sin que las mismas puedan
exceder el máximo legal de la especie de pena de que se trate:
a) Si los hechos se cometieren en perjuicio de mujeres embarazadas o de
personas disminuidas psíquicamente, o sirviéndose de menores de dieciocho años
o en perjuicio de éstos;
b) Si los hechos se cometieren subrepticiamente o con violencia,
intimidación o engaño;
c) Si en los hechos intervienen tres o más personas organizadas para
cometerlos;
d) Si los hechos se cometieron por un funcionario público encargado de la
prevención o persecución de los delitos aquí previstos o por un funcionario público
encargado de la guarda de presos y en perjuicio de éstos;
e) Cuando el delito se cometiere en las inmediaciones o en el interior de un
establecimiento de enseñanza, centro asistencial, lugar de detención, institución
deportiva, cultural o social o en sitios donde se realicen espectáculos o diversiones
públicos o en otros lugares a los que escolares y estudiantes acudan para realizar
actividades educativas, deportivas o sociales;
f) Si los hechos se cometieren por un docente, educador o empleado de
establecimientos educacionales en general, abusando de sus funciones
específicas.
Artículo 12. Será reprimido con prisión de dos a seis años y multa de doscientos
veinticinco mil a cuatro millones quinientos mil australes:
a) El que preconizare o difundiere públicamente el uso de estupefacientes, o
indujere a otro a consumirlos;
b) El que usare estupefacientes con ostentación y trascendencia al público.
Artículo 14. Será reprimido con prisión de uno a seis años y multa de ciento doce
mil quinientos a dos millones doscientos cincuenta mil australes el que tuviere en
su poder estupefacientes.
La pena será de un mes a dos años de prisión cuando, por su escasa
cantidad y demás circunstancias, surgiere inequívocamente que la tenencia es
para uso personal.
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Artículo 16. Cuando el condenado por cualquier delito dependiera física o
psíquicamente de estupefacientes, el juez impondrá, además de la pena, una
medida de seguridad curativa que consistirá en un tratamiento de desintoxicación y
rehabilitación por el tiempo necesario a estos fines, y cesará por resolución judicial,
previo dictamen de peritos que así lo aconsejen.
Artículo 18. En el caso del artículo 14, segundo párrafo, si durante el sumario se
acreditase por semiplena prueba que la tenencia es para uso personal y existen
indicios suficientes a criterio del juez de la responsabilidad del procesado y éste
dependiere física o psíquicamente de estupefacientes, con su consentimiento, se le
aplicará un tratamiento curativo por el tiempo necesario para su desintoxicación y
rehabilitación y se suspenderá el trámite del sumario.
Acreditado su resultado satisfactorio, se dictará sobreseimiento definitivo. Si
transcurridos dos años de tratamiento, por falta de colaboración del procesado no
se obtuvo un grado aceptable de recuperación, se reanudará el trámite de la causa
y, en su caso, podrá aplicársele la pena y continuar el tratamiento por el tiempo
necesario, o mantener solamente la medida de seguridad.
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Artículo 20. Para la aplicación de los supuestos establecidos en los artículos 16,
17 y 18 el juez, previo dictamen de peritos, deberá distinguir entre el delincuente
que hace uso indebido de estupefacientes y el adicto a dichas drogas que ingresa
al delito, para que el tratamiento de rehabilitación en ambos casos, sea establecido
en función de nivel de patología y del delito cometido, a los efectos de la
orientación terapéutica más adecuada.
Artículo 23. Será reprimido con prisión de dos a seis años e inhabilitación especial
de cuatro a ocho años, el funcionario público dependiente de la autoridad sanitaria
con responsabilidad funcional sobre el control de la comercialización de
estupefacientes, que no ejecutare los deberes impuestos por las leyes o
reglamentos a su cargo u omitiere cumplir las órdenes que en consecuencia de
aquéllos le impartieren sus superiores jerárquicos.
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Artículo 26. En la investigación de los delitos previstos en la ley no habrá reserva
bancaria o tributaria alguna. El levantamiento de la reserva sólo podrá ser
ordenado por el juez de la causa.
La información obtenida sólo podrá ser utilizada en relación a la investigación de
los hechos previstos en esta ley.
Artículo 27. En todos los casos en que el autor de un delito previsto en esta ley lo
cometa como agente de una persona jurídica y la característica requerida para el
autor no la presente éste sino la persona jurídica, será reprimido como si el autor
presentare esa característica.
Artículo 29 bis. Será reprimido con reclusión o prisión de uno a seis años, el que
tomare parte en una confabulación de dos o más personas, para cometer alguno
de los delitos previstos en los artículos 5º, 6º, 7º, 8º, 10 y 25 de la presente ley, y
en el artículo 866 del Código Aduanero.
La confabulación será punible a partir del momento en que alguno de sus
miembros realice actos manifiestamente reveladores de la decisión común de
ejecutar el delito para el que se habían concertado.
Quedará eximido de pena el que revelare la confabulación a la autoridad
antes de haberse comenzado la ejecución del delito para el que se la había
formado, así como el que espontáneamente impidiera la realización del plan.
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permita desbaratar una organización dedicada a la producción, comercialización o
tráfico de estupefacientes.
La reducción o eximición de pena no procederá respecto de la pena de
inhabilitación.
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de las fuerzas de seguridad en actividad, actuando en forma encubierta:
a) Se introduzcan como integrantes de organizaciones delictivas que tengan entre
sus fines la comisión de los delitos previstos en esta ley o en el artículo 866 del
Código Aduanero
b) Participen en la realización de alguno de los hechos previstos en esta ley o en el
artículo 866 del Código Aduanero.
La designación deberá consignar el nombre verdadero del agente y la falsa
identidad con la que actuará en el caso, y será reservada fuera de las actuaciones
y con la debida seguridad.
La información que el agente encubierto vaya logrando, será puesta de inmediato
en conocimiento del juez.
La designación de un agente encubierto deberá mantenerse en estricto secreto.
Cuando fuere absolutamente imprescindible aportar como prueba la información
personal del agente encubierto, éste declarará como testigo, sin perjuicio de
adoptarse, en su caso, las medidas previstas en el artículo 31 quinquies (nota).
63
pertinentes, debiendo comunicar las medidas dispuestas al juez del lugar. Además,
las autoridades de prevención deben poner en conocimiento del juez del lugar los
resultados de las diligencias practicadas, poniendo a disposición del mismo las
personas detenidas a fin de que este magistrado controle si la privación de la
libertad responde estrictamente a las medidas ordenadas.
Constatado este extremo el juez del lugar pondrá a los detenidos a disposición del
juez de la causa.
Artículo 34. Los delitos previstos y penados por esta ley serán de competencia de
la justicia federal en todo el país, excepto para aquellas provincias y la Ciudad
Autónoma de Buenos Aires, que, mediante ley de adhesión, opten por asumir su
competencia en las condiciones y con los alcances que se prevén a continuación:
1. Artículo 5º incisos c) y e), cuando se comercie, entregue, suministre o facilite
estupefacientes fraccionados en dosis destinadas directamente al consumidor.
2. Artículo 5º penúltimo párrafo.
3. Artículo 5º Ultimo párrafo.
4. Artículo 14.
5. Artículo 29.
6. Artículos 204, 204 bis , 204 ter y 204 quater del Código Penal. (texto conforme
ley N° 26.052)
Artículo 34 bis. Las personas que denuncien cualquier delito previsto en esta ley o
en el artículo 866 del Código Aduanero, se mantendrá en el anonimato.
Art. 18 bis: En todos los casos en que una mujer embarazada diera a luz en el
transcurso del proceso o durante el cumplimiento de una condena por infracción a
la ley de estupefacientes, la madre deberá, dentro de los cinco días posteriores al
64
nacimiento someter al hijo a una revisación médica especializada para determinar
si presenta síntomas de dependencia de aquéllos.
La misma obligación tendrá el padre, el tutor y el guardador.
Su incumplimiento será penado con multa de cuarenta y cinco mil a trescientos
treinta y siete mil quinientos australes y el juez deberá ordenar la medida omitida.
Artículo 37. Reemplázese los artículos 25 y 26 de la ley 20.655 por los siguientes:
Art. 25: Será reprimido con prisión de un mes a tres años, si no resultare un delito
más severamente penado, el que suministrare a un participante en una
competencia deportiva, con su consentimiento o sin él, sustancias estimulantes o
depresivas tendientes a aumentar o disminuir anormalmente su rendimiento.
La misma pena tendrá el participante de una competencia deportiva que usare
algunas de estas sustancias.
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Recortes Periodísticos
Sociedad
ENVIAR IMPRIMIR
P R O Y E C T O D E L E Y E N E L
C O N G R E S O
Gabriel Giubellino
ggiubellino@gmail.com
La diputada nacional Diana Conti presentó un proyecto de ley para que se autorice el uso de
marihuana con fines médicos o para la investigación de su posible eficacia terapéutica o de
control de síntomas. Conti, como senadora, presentó en agosto de 2004 un proyecto para
despenalizar la tenencia de drogas para consumo personal.
Levanta dos argumentos. Por un lado, los antecedentes que revelan los resultados positivos de
compuestos cannabinoides y químicos de tetrahidrocannabinol (THC) en el tratamiento de
algunas enfermedades. Cita al neumólogo Aquiles Roncoroni y al ministro de Salud Ginés
González García, quien declaró que "para uso medicinal no debe ser prohibida". No olvida que en
estados de Estados Unidos, Canadá, Holanda y en Cataluña, España, se permite la venta de
marihuana con fines medicinales.
También entiende que este uso no debería estar castigado por la ley penal porque "el usuario se
encontraría amparado por un estado de necesidad justificante". Se apoya en un fallo de la Sala II
de la Cámara Federal. "Muchos jueces en la provincia de Buenos Aires se están pronunciando en
este sentido", agrega a Clarín.
—Seguramente tiene una buena mirada, pero el Sedronar, que depende de Presidencia, tiene una
política que no está en esta línea.
——No me parece correcto, pero no debería ser punible. La Constitución Nacional dice que todo lo
que hagas sin dañar a terceros forma parte del derecho a la intimidad. En la Argentina la
autolesión no es delito. Hay que educar para que se sepa el daño que una adicción causa, no
penarlo.
109
GIUBELLINO, GABRIEL; “Proponen el uso de marihuana con fines médicos”; 12/04/06 en
http://www.clarin.com/diario/2006/04/12/sociedad/s-03901.htm
66
Recorte periodístico Nº 2110
La posible despenalización de la
tenencia de drogas reavivó la polémica
19:48
La Asociación Antidrogas sostuvo que un fallo de la Corte favorecería a los vendedores
minoristas. Pero el comité que asesora al Ministerio de Justicia afirma que lo que es
funcional "al negocio de la droga" es la ley actual.
La confirmación de que la Corte Suprema de Justicia está cada vez más cerca de despenalizar la
tenencia de drogas para consumo personal reavivó la polémica. Desde la Asociación Antidrogas salieron
a cuestionar el posible fallo –que saldría eventualmente en febrero- como una decisión que favorecerá a
los vendedores minoristas de estupefacientes. Pero el comité de expertos que asesora al Ministerio de
Justicia insistió en que es la actual ley, que penalizó la tenencia, la que es "funcional al negocio de la
droga".
Seis de los siete miembros del Suprema Tribunal están a favor de la despenalización. En lugar del
castigo penal, quieren impulsar la asistencia médica. El tema ya tuvo varias idas y vueltas a lo largo de
los años en la propia Corte Suprema. La postura actual coincide con la del Gobierno.
En declaraciones a radio Mitre, el titular de la Asociación Antidrogas, Claudio Izaguirre, sostuvo que si la
Corte falla como se prevé le hará "un enorme favor a los vendedores minoristas". La despenalización,
opinó, "es una decisión que va a traer gravísimos problemas y lo que va a suceder es que se va a volver
a un régimen muchísimo más duro por las consecuencias que va a generar".
Con una mirada totalmente contrapuesta, la fiscal Mónica Cuñarro, coordinadora del comité de expertos
convocado por el Ministerio de Justicia para actualizar la legislación vinculada a la droga, descartó
categóricamente que el proyecto para despenalizar la tenencia para consumo personal favorezca el
narcotráfico. "Lo que ha sido funcional al negocio de la droga es la ley que está vigente", le dijo a la
misma emisora.
"Despenalizar, no criminalizar a una persona que tiene un problema con sustancias prohibidas, no es lo
mismo que legalizar, no es lo mismo que droga libre", argumentó la fiscal. "Una persona con un problema
de adicciones no debe ser discriminada y tiene derecho a una asistencia, a que una prepaga lo cubra y a
políticas públicas que garanticen prevención", agregó.
Izaguirre, en cambio, sostiene que la asistencia va a empeorar. "Hasta ahora –afirmó- el adicto que
llegaba a un tribunal por tenencia de una pequeña cantidad era mandado a un centro de rehabilitación y
el Estado pagaba el tratamiento. (Si se despenaliza la tenencia para consumo) el adicto lamentablemente
no va a tener posibilidades de atenderse salvo que cuente con el dinero suficiente para hacerlo".
110
ANONIMO; “La posible despenalización de la tenencia de drogas reavivó la polémica”; 27/12/08 en
http://www.clarin.com/diario/2008/12/27/um/m-01829473.htm
67
Recorte periodístico Nº 3111
Sociedad
Marihuana:
la tolerancia
social y los
riesgos
En sólo dos años, la percepción del daño que provoca fumar marihuana se redujo a la
mitad en los adolescentes de entre 13 a 17 años, según los últimos datos oficiales. Y así
como su aceptación social es cada vez más alta --tanta que, en poco tiempo más, la
percepción del riesgo puede llegar a desaparecer-- también se habla de una "legalización
de hecho", más allá de la renovada discusión sobre la despenalización: los jueces ya casi
no condenan el consumo
Por Victoria Pérez Zabala
111
ZABALA PÉREZ; “Marihuana: la tolerancia social y los riesgos”; 20/04/08 en
http://www.lanacion.com.ar/nota.asp?nota_id=1005711
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Foto: Enrique Villegas / Diseño de tapa:
Mariana Trigo Viera y Marina Vagliente
María entra en el local y, con voz baja y pausada, pide un talle medium de la remera con la leyenda "fumar yerba
hace bien al mate", que se exhibe en la vidriera. En el negocio "Mundo Rasta" de Villa del Parque también se ofrecen
pipas, "seda" (papel para armar cigarrillos) y picadores de marihuana. Confundido entre los artículos para fumadores,
un pequeño cartel anuncia: "No vendemos marihuana hasta que la legalicen". Lo primero que se distingue desde la
entrada es la imagen sonriente del jamaiquino Bob Marley con un grueso cigarrillo apretado entre los dientes, ubicada
en lo alto de la pared del fondo.
El olor a marihuana se siente en distintos lugares de la ciudad; se huele, sube y se cuela entre los balcones, las
persianas de las casas, ya no sólo en las plazas o en los rincones más escondidos en el resguardo que ofrece la
noche. Hoy, un millón doscientos
tos mil argentinos fuman marihuana y dos millones y medio han pasado por esa
experiencia alguna vez; y aunque no la aprueban explícitamente, tanto la sociedad como el sistema penal, según
admiten fuentes judiciales, toleran esta práctica, pese a los riesgos
riesgos de adicción que no todos quienes empiezan a
consumir logran controlar.
Casi la mitad de los adolescentes (46,2%) entre 12 y 17 años admite tener al menos un amigo que consume
marihuana, según una encuesta de alcance nacional realizada en 2007 por la Secretaría
Secretaría de programación para la
prevención de la drogadicción y la lucha contra el narcotráfico (Sedronar) que se dio a conocer en estos días. En sólo
dos años -advierte el estudio-,, la percepción del daño que provoca fumar marihuana ocasionalmente se redujo
redu a la
mitad en los adolescentes de entre 13 a 17 años. En 2005, más del 30 % consideraba que era un gran riesgo el
consumo de cannabis, pero para 2007, esta cifra descendió a la mitad. Actualmente, sólo un 14,7% de los
adolescentes conoce los riesgos, lo que augura un pronóstico cada vez más proclive hacia la tolerancia social, tanto
que, en sólo un par de años, la percepción del riesgo puede llegar a desaparecer. Uno de los organismos oficiales
con que cuenta la Sedronar para armar sus estadísticas del consumo
consumo es el Observatorio Argentino de Drogas y su
director, Diego Alvarez, informa: "Medimos el nivel de tolerancia social y la percepción del riesgo del consumo de
marihuana. Lo que sucede es que ha disminuido la percepción, ha aumentado la tolerancia y, simultáneamente, su
consumo", y agrega que la cuarta parte de todas las personas que pidieron tratamiento por alguna adicción
ingresaron por la marihuana, en una sociedad que cree que la marihuana no es adictiva.
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que excluya a los consumidores como sujetos de persecución penal-, parece estar más cerca la despenalización del
consumo de estupefacientes, algo que divide aguas tanto en el ámbito legal como sanitario, además del social.
Más consumo
La gran oferta de cannabis proveniente de Paraguay, que alcanza las dos mil toneladas, se refleja en la inocultable
demanda: un 7% de la población argentina consume marihuana, según la última encuesta de hogares realizada por la
Sedronar. Quienes lideran las estadísticas de consumo son los jóvenes de 18 a 24 años.
"Estamos en un nivel de consumo cercano al de Chile, que, desde siempre, fue el país latinoamericano de mayor
consumo", alerta Ramón José Granero, titular de la Sedronar, desde su despacho en Sarmiento al 500, en pleno
microcentro porteño. Granero explica el aumento constante del consumo de marihuana por la mayor producción y,
consecuentemente, mayor oferta proveniente de Paraguay. Pero el crecimiento en la demanda también lo atribuye a
la tolerancia social, cercana a la del alcohol. "Cuando vos le decís a un padre que su hijo está en un grupo de chicos
que consumen, ellos responden: escuchame, un porro..., no pasa nada. Es la droga de mayor accesibilidad, está de
moda; los pibes se fuman un porro como si se tomaran un vaso de agua", describe.
Quizá por eso Alberto Rey, que dirige la comunidad terapéutica del Programa Delta, y que hace más de 20 años se
dedica al tratamiento de las adicciones, observa: "Hoy no tenés pibes que fumen porro porque se separaron los
papás. Hoy tenés chicos que fuman marihuana porque, para ellos, es lo mismo que una gaseosa o una cerveza. Hay
padres que vienen acá y me dicen: mi hijo toma cocaína; si por lo menos se fumara un porro... "
Claudio Izaguirre, director de la Asociación Antidrogas que, desde 1999, promueve la lucha contra la drogadicción y el
narcotráfico, no cultiva las medias tintas. Apoyado sobre una de las paredes de su oficina, en donde un gran ataúd de
madera con la leyenda "el paco mata" da la bienvenida, dice: "En otra época, aparecía uno en el grupo con cigarrillos
mentolados y convidaba; hoy, la marihuana aparece con la misma naturalidad. En la Capital, solamente, tenemos 500
bocas de expendio de droga. Tenemos más quioscos de drogas que paradas de taxi, producto de lo que está
sucediendo", afirma, y datos y cifras salen de su boca como disparos que buscan dar con el responsable.
Lo cierto es que tanto la tolerancia social como el hecho de que sea cada vez más fácil conseguir marihuana son los
factores que alimentan el aumento del consumo de cannabis en la Argentina.
La luz entra a través de una gran ventana ubicada en el tercer piso de la comunidad terapéutica Aylén, en Vicente
López. Carlos Souza, director de la fundación y dedicado desde 1994 a la rehabilitación de los jóvenes que acuden a
él en busca de la recetada desintoxicación, dice que el 70 por ciento de los adolescentes consume, experimenta o
está rodeado de marihuana. Souza hace esos cálculos a partir de su experiencia institucional. "Antes de empezar
cada reunión, yo pido a los presentes que, si conocen a alguien que consume marihuana, levanten la mano. Más de
la mitad lo hace. Hoy no hay evento que involucre a jóvenes donde no aparezca la marihuana. Es como una mancha
de aceite en el agua, que se va expandiendo", dice.
Las historias que relatan los consumidores no hacen más que confirmar, desde el otro lado de la experiencia, las
palabras de Souza. "Como mi mamá se toma un ansiolítico, yo me fumo un porro", comenta Jacquie, de 22 años, que
consume marihuana todos los días. "Me gusta fumar a la noche, cuando puedo relajarme", recuerda, e incluye en sus
anécdotas a una tía, de 65 años: "El otro día fumé con ella", dice entre risas. Es que para Jacquie, que tiene una vida
ocupada entre la facultad y una intensa actividad física, que incluye tenis y pilates tres veces por semana, "no existe
la adicción a la marihuana porque no te quita la posibilidad de ser". Julia es un año mayor que Jacquie y fuma para
distraerse y relajarse. "En mi ambiente es normal que alguien se prenda un porro; nadie se alarma", cuenta Julia, que
estudia periodismo en la Universidad de La Plata. "Ahora es mucho más fácil acceder a la marihuana en la facultad y
en los boliches", dice.
Souza, dedicado desde 1994 a la rehabilitación de los jóvenes que acuden a él en busca de la recetada
desintoxicación, entiende que la tolerancia social hacia la marihuana es un hecho que no se puede negar."Nosotros
vivimos un cambio social, la tolerancia llegó más fuertemente en los años 90. Antes, que la gente fumara marihuana
era noticia: Fumata en barrio Norte, se encontró a cuatro jóvenes consumiendo picadura de marihuana . Hoy ya no
podría aparecer así, a nadie le llamaría la atención".
Quien festeja la naturalización del consumo de cannabis es Sebastián Basalo, director de THC , la primera revista
argentina que, a partir de títulos como "ceda el faso" y "autocultivo: paso a paso, beso a beso", brinda información
sobre la marihuana, sobre cómo consumirla y cultivarla. "La masividad hace que sea cada vez más difícil ir en contra
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de esta costumbre. Estamos ante una gran etapa de cambio. Hay un tabú que necesariamente se está rompiendo por
los mismos hechos y por la información que empieza a circular del tema", afirma. "Quizás el mismo hecho de que
existamos hable de una mayor tolerancia", reflexiona el cerebro detrás de THC, " de la cultura cannábica ", que desde
que salió a la venta, a principios del 2007, sólo provocó una denuncia por apología del delito, inmediatamente
desestimada por el juez federal porteño Sergio Torres.
En el departamento de Humahuaca al 3000, en la zona del Abasto, donde se escribe la revista, Basalo defiende lo
que llama "la bandera de la marihuana", para él, una sustancia que sobrevivió a siglos de ignorancia y tabúes "sin
causar ninguna muerte". "Existen fuertes vínculos de pertenencia entre los consumidores. Hoy se ve en los foros de
internet y se vio en la Cannabis Parade , donde más de 500 personas se juntaron a fumar en Villa Alpina, un pueblo
de montaña cordobés", cuenta, y agrega que el consumo de marihuana lleva a una cierta sociabilidad. "Pasar un
porro en una ronda es como deslizar el mate de mano en mano", describe. Son las 7 de la tarde y los redactores de la
revista bautizada THC en honor al tetra-hidro-cannabinol -el principio activo que provoca los efectos psicológicos de
la marihuana- se toman un descanso y fuman lo que predican.
Gonzalo, que atiende en el local "Mundo Rasta", donde predominan los artículos para los fumadores de cannabis, es
otro consumidor diario y describe el ritual como una experiencia casi mágica. "Es la única droga que podés pilotear .
Cada vez menos gente piensa en nosotros como marginales. Quizá por la cantidad de gente que fuma; nuestra
clientela se duplicó este año con respecto al anterior. Acá entran y compran familias, gente grande, de más de 60
años y mayores de 15. En Villa del Parque, podemos fumar en la plaza; los canas nos ven y no nos dicen nada. Ya
nos conocen", cuenta Gonzalo, y luego se dedica a atender a los clientes que, cada cinco minutos, abren la puerta del
negocio.
"No me da miedo fumar en la calle, si la policía por poco viene y te pide un porro", cuenta Julia, que consume,
generalmente, los fines de semana, cuando "por suerte, siempre alguien tiene". Julia se ríe ante la mención de los
riesgos de la marihuana y dice: "Es un planta natural. ¿Qué te puede hacer?".
De hecho
Que la policía se haga la distraída no es novedad para Izaguirre. "¿Qué juez va a mandar a la cárcel a una persona
por consumo? No existe, no hay ni una sola causa. El 70 por ciento de los vendedores de drogas son puestos en
libertad desde Tribunales. ¿Cuál es el motivo de que vendedores de drogas queden en libertad y desde Tribunales?:
se hacen pasar por adictos. Salen a la calle con poca cantidad para justificar la tenencia de drogas para consumo
personal", se pregunta y se responde. "La policía y los jueces, del primero al último, se hacen los distraídos".
Es que lo que resulta de la tolerancia social hacia la marihuana es su derrame hacia otros ámbitos, como el judicial.
Los jueces, sensibles a este humor social favorable, han aprovechado la coyuntura para liberar sus juzgados de las
causas por tenencia para consumo, de las cuales reciben entre 700 y 800 detenidos en sus quince días de turno que,
a lo sumo (y sólo unos pocos), culminarán con un tratamiento terapéutico.
La ley 23.737, que pena la tenencia de marihuana para consumo personal con un mes a dos años de prisión, se ha
vuelto un desafío para quienes, desde el sector médico-asistencial, piden que se endurezca el castigo, y una
pesadilla para los jueces, que repiten hasta el hartazgo que se trata de un problema sanitario, ajeno a la órbita penal.
"A lo que llega la Justicia es a una milésima parte de lo que hay en la calle. No podemos pretender que a través del
Poder Judicial se solucione así este problema. La Justicia de ejecución penal no da abasto con la cantidad de gente
que hay encausada, entonces el seguimiento no se cumple", reconoce el defensor oficial Gustavo Kollmann, desde su
escritorio cubierto por expedientes. Se refiere a que más de la mitad de las causas penales que se inician en el año
son por tenencia para consumo.
El sistema judicial no sabe qué tipo de respuesta dar. Entonces, interpreta la realidad según criterios propios. "De ahí
ese porcentaje fluctuante de jueces que liberan y mandan a sus casas a los consumidores y ese otro, un 30%, que se
atiene a la ley", dice Carlos Souza. Esto genera un clima de lo más incierto y azaroso para los consumidores, porque
ante la misma situación y la misma cantidad de marihuana incautada, un juez puede fallar en dos sentidos
dramáticamente opuestos.
Lo cierto es que, a la tolerancia social hacia el consumo de marihuana se le suma ahora el apuro del Gobierno por
sacar la ley de despenalización. " Debemos dejar de ser hipócritas: los jóvenes también se enferman por el consumo
de alcohol y las pastillas, a las que acceden libremente, y los criminalizamos por la tenencia de un cigarrillo de
marihuana", dijo Aníbal Fernández en el foro de la ONU.No es la primera vez que él se expide en este sentido, pero sí
la primera en que lo hace en nombre y por iniciativa de la Presidenta Cristina Fernández de Kirchner.
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"Es una pavada atómica detener a un pibe sólo por un porro. Significa abrirle un sumario penal que, en definitiva, no
conduce a nada, porque va a terminar con un tratamiento curativo que al final no se va a realizar; se hace uno cada
500, y los que los cumplen son la milésima parte de la gente que anda en las calles fumando marihuana", dice
Gustavo Kollmann desde la Defensoría Oficial, por donde han desfilado miles de causas por tenencia de marihuana
para consumo personal.
Wilbur Grimson, que dirigió la Sedronar hasta agosto de 2004, es uno de los que critica la marcada tendencia hacia la
despenalización. "La ley es mejor que las conductas que adoptan los jueces que cajonean los expedientes. Yo he
visto a un juez federal decirle a un adolescente: ´González, no lo quiero ver más fumando porro en los baños de
Unicenter . ¿Qué le pasa por la cabeza a ese chico?: Me fumo un porro, total, lo único que pasa es que el juez me
reta", enfatiza, y agrega que los jueces no entienden la multidimensionalidad del problema y su afectación social.
La polémica, por lo pronto, está lejos de resolverse, no sólo en el ámbito legal, sino también en el sector médico-
asistencial, donde muchos especialistas temen que los vientos liberales conduzcan hacia la despenalización en un
país que, aseguran los más críticos, no tiene un sistema sanitario preparado para eso.
Mientras tanto, las señales del Gobierno en favor de la despenalización, se hacen sentir en la Justicia. "Ya han tenido
algún efecto en algunos jueces y camaristas y, probablemente, lo tengan en la Corte", destaca Kollmann. ...l, como un
70% de los jueces que adhieren a la postura más flexible frente a la tenencia de marihuana para consumo, espera el
fallo de la Corte que ponga fin a la incertidumbre jurídica. "Es la única que puede hacerlo. Hasta que no dicte un fallo
que tenga la fuerza necesaria para generar doctrina en la materia, la cosa va a seguir igual", sostiene.
Ajeno al debate y la polémica, el tabú, que alertaba sobre -y protegía de- los riesgos de la marihuana, se diluye lenta
y, para muchos, inexorablemente. Todo indica, además, que la corriente antiprohibicionista ha cobrado un nuevo
impulso, lo que lleva a imaginar un futuro en el que -para satisfacción de unos y preocupación de otros- la
despenalización emerge en el horizonte del sistema penal y social con fuerza incontenible.
Pero para Juan Dobón, psiquiatra especializado en adicciones, hay más matices que definiciones categóricas a priori.
"La marihuana -dice- es una sustancia compleja porque tiene 350 alcaloides. No está probado que tenga receptores
específicos, pero podría tenerlos dentro de esos 350 alcaloides que ingresan al organismo. No es lo mismo consumir
una sustancia que tiene receptores específicos que una que no. Cuantos más tenga, más adictiva es. La marihuana
está en esa zona gris porque no está probado que genere una dependencia física tan clara; el tabaco sí".
Según la OMS, adicto es aquel que tiene una relación con una sustancia que ha pasado por tres niveles: consumo,
dependencia psíquica y dependencia física, tolerancia y síndrome de abstinencia. "Hay una diferencia entre los
consumidores y los adictos. Hay gente que es consumidora y no es adicta. Un consumidor tiene grados de
compromiso con una sustancia, que pueden devenir en una subjetividad adictiva. No es lineal, no todo consumidor es
adicto", recalca.
Wilbur Grimson, ex director de la Sedronar, que, hasta el día de hoy, continúa atendiendo a pacientes con problemas
de adicción, disiente: "Todos los que llegan al tratamiento dicen que creían que la manejaban; esto es mentira, la
verdad es que nunca lo hicieron. No hay forma de hacerlo; ese tipo va a vender la bicicleta del hermanito para
conseguir los fondos que le permitan seguir drogándose. La marihuana tiene, más que nada, un efecto de
dependencia psicológica. El marihuanero crónico es un tipo que se estropea la vida. Deja de trabajar, fuma cuatro o
cinco veces por día, deja de estudiar; si está haciendo cine, deja de hacer cine. Durante una etapa le resulta muy
creativo, se inspira, dice que está soñando. Cuando empieza a depender, empieza el proceso inverso. Comienza a
dejar otras cosas por el consumo; deja de estudiar".
Grimson asegura que la marihuana que se consigue actualmente es veinte veces más adictiva y agrega: "Cattani
[Horacio Cattani, juez de la Sala II de la Cámara Federal en lo Criminal y Correccional] no conoce los riesgos de
salud, no ha visto a los marihuaneros crónicos. El proceso hace que la gente pierda trabajo y familias". Es terminante
cuando dice: "No hay droga blanda, es todo lo mismo: la marihuana, el éxtasis...".
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Como si estuviera sentado del otro lado de la mesa, Horacio Cattani responde: "El que es prohibicionista y
fundamentalista no quiere hacer ninguna distinción entre las sustancias. Parten de la base de que es como la peste,
te toco y ya está. ¿Por qué la marihuana está prohibida cuando la farmacopea argentina de principios de siglo 20 la
recomendaba para la tos? Si agarrás Caras y Caretas , encontrás que estas drogas eran de venta al público; se
vendían cigarrillos de cannabis contra el asma".
Es que a pesar de que fueron entrevistados por separado, tras tantos años de polémica y debate, los argumentos
prohibicionistas y los que tienden a una mayor flexibilidad ya son conocidos y las respuestas brotan como ensayadas
para la réplica.
"No es un porro y ya está, es un adicto. Puede aparecer un período de experimentación que no merece intervención.
Esto salió de una construcción social, pero no necesariamente tiene que ser así. Antes se pensaba: empieza con
marihuana y termina tomando cocaína. Eso era antes. Hay cantidad de chicos que fuman marihuana y si les mostrás
la cocaína se niegan. Hoy, el alcohol reemplazó la sustancia de puente con otras sustancias más pesadas", dice
Carlos Souza, que desde hace 14 años trabaja en la rehabilitación de adictos.
En una postura también más liberal, desde su lugar de trabajo en el Instituto Gino Germani, Victoria Ranguni,
investigadora y socióloga que colabora con Intercambios, una asociación civil para el estudio y atención de problemas
relacionados con las drogas, sostiene: "Cada vez más usuarios transmiten la experiencia de que es mejor fumar
marihuana que tomar tantas pastillas, aunque sean de venta legal". Ranguni adhiere a la política de reducción de
daños, que prioriza la asistencia a los consumidores, brindándoles información sobre el uso y consecuencias de las
drogas, por sobre la abstención.
En cambio, Ana Viscarra, directora terapéutica de la fundación del Programa Delta y médica psiquiatra, observa: "Hay
muchas personas que fuman marihuana y no tienen una dependencia. Consumen los fines de semana, trabajan y no
presenta problemas de adicción. Ellos son los malos ejemplos, porque hay muchos que así comienzan y después
terminan con sustancias más pesadas. El consumidor esporádico que viva feliz, pero para nosotros es un mal
ejemplo porque recibimos a los adictos".
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Recorte periodístico Nº 4112
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BASALO,SEBASTIÁN; "¿OKTUBRE VERDE?"; THC; Nº 11, Pág. 28-29; Buenos Aires;
01/08/08
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Canciones con referencia a la marihuana
Legalícenla.
Legalícenla.
Legalícenla.
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Y una china pal canuto de hachís ¡HACHÍs!
Saca ya la china, "tron", ¡Venga ya esa china, "tron"
Quémame la china "tron", ¡NO HAY CHINAS!
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
Legalegalización ¡CANNABIS!
De calidad y barato
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Legalegalización ¡CANNABIS!
Basta de prohibición
¡CANNABIS!¡CANNABIS!¡CANNABIS!
¡LEGALEGALIZACION!
¡CANNABIS!¡CANNABIS!¡CANNABIS!
Legalegalización
Yo te quiero Marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
yo te quiero marihuana
¡LEGALIZA!
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Imágenes
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Imagen Nº 3; Diego Capusotto, Humorista, en la portada de la revista
THC, haciendo apología del consumo de marihuana.
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Imagen Nº 5: Planta Cannabis Sativa
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Imagen Nº 7: Andrés Rolando
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